Ee 31-32 Elogio de La Irreligion

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  • 7/21/2019 Ee 31-32 Elogio de La Irreligion

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    el escptico114

    ELOGIO DE LA IRRELIGIN

    John Allen Paulos

    Ttulo Original: Irreligion. A mahematician explains

    why the arguments for God just don't add up.Editorial Tusquets. Metatemas

    168 Pginas

    Los ateos, a diferencia de los creyentes en cualquier

    religin, son poco dados a hacer apostolado. Nunca

    llamar nadie a su puerta explicando la buena nueva de

    que Dios no existe. Nadie har una procesin sacando

    efigies de Dawkins o Russell. El proselitismo inherente a

    la mayora de confesiones no abunda en el atesmo.

    Pero eso no es bice para que de vez en cuando sepubliquen libros explicando qu significa ser ateo,

    denunciando las inconsistencias de las religiones o,

    como es el caso de Elogio de la irreligin, mostrando

    que los argumentos que defienden la existencia de Dios

    no tienen mucho sentido.

    John Allen Pauloses un matemtico conocido por sus

    libros de divulgacin cientfica. Su libro ms conocido es

    El hombre anumrico, en el que se destaca la necesidad

    de entender bien los conceptos matemticos incluso para

    el hombre de la calle. Con Un matemtico invierte enbolsademostr por experiencia propia que los mtodos

    para ganar en la bolsa no funcionan.

    En este libro intenta responder a una pregunta Hay alguna

    razn lgica para creer en Dios? Ms concretamente se

    sostiene algn argumento que defienda la existencia

    de Dios? Analizando cuanto argumento de peso ha

    encontrado e incluso algunos algo peregrinos la

    conclusin es obvia. Ninguno se sostiene, como ya saben

    casi todos los ateos y muchos creyentes. A Dios se llega

    mediante la fe, no mediante la razn.

    Pero como hay gente que cree que la existencia de Dios

    no slo es una cuestin de fe, sino que se puede probar,

    no est de ms que una persona con conocimiento,

    sentido comn, y un gran talento para la divulgacin,

    haya puesto manos a la obra. Con un tono ameno y

    nada prepotente (algo que lo diferencia de, por ejemplo,Dawkins) John Allen Paulos explica las debilidades de

    argumentos clsicos como el ontolgico, demuestra que

    no hay nada fiable en las supuestas profecas bblicas y

    destaca la poca probabilidad de intervenciones divinas

    en la actualidad.

    En Estados Unidos hay congregaciones cristianas que

    intentan defender el creacionismo o el diseo inteligente

    argumentando que es inconcebible que la complejidad de

    la vida haya aparecido de la nada. La respuesta del autor

    es la siguiente:

    Hasta aqu muy bien. Lo que resulta ms que curioso,

    sin embargo, es que algunos de los ms fervorosos

    oponentes a la evolucin darwiniana (como muchosJohn Allen Paulos (Temple University)

    Portada original (Editorial Drakontos)

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    Como matemtico no puede dejar de notar que los llama-

    dos milagrosno lo son tanto y, en cualquier caso, es muy

    arriesgado suponer que son una intervencin divina:

    Qu significa esta palabra? Si un milagro no es msque un suceso altamente improbable, entonces ocurren

    milagros a diario. Pregntesele a cualquier agraciado

    en la lotera o jugador de bridge. Cada mano de trece

    cartas tiene una probabilidad de una entre 600.000

    millones. Pero sera ms que estpido mirar las trece

    cartas y proclamar que ha ocurrido un milagro o, peor

    an, que la improbabilidad de esa mano en particular

    es una evidencia de que no ha podido darse por azar.

    []

    Hasta aqu ningn problema. Pero si se entiende que unsuceso milagroso indica alguna clase de intervencin

    divina, habra que hacerse algunas preguntas. Por

    ejemplo, por qu los medios de comunicacin se

    refieren tantas veces al rescate de unos pocos nios

    vivos tras un terremoto o tsunami como un milagro,

    y en cambio atribuyen la muerte de quiz cientos de

    otros nios en el mismo desastre a una causa geofsica?

    Parecera que ambos sucesos deberan ser o bien

    producto de una intervencin divina o bien consecuencia

    del deslizamiento de placas tectnicas.

    El libro termina con unas reflexiones muy interesantes

    acerca del movimiento brillante:

    [...] un trmino acuado por Paul Geisert y Mynga

    Futrell, quienes han fundado un grupo en Internet con

    intencin de incrementar su influencia. En su pgina

    declaran:

    En la actualidad, la visin naturalista del mundo tiene

    una expresin insuficiente en la mayora de culturas. El

    propsito de este movimiento es crear una circunscrip-

    cin de Internet que sirva de paraguas para individuos

    con reconocimiento y poder social y poltico. Hay unagran diversidad de personas con una visin naturalista

    del mundo. Bajo este amplio paraguas, como brillantes,

    esta gente puede ganar influencia social y poltica en

    una sociedad imbuida de sobrenaturalismo.

    No me gusta demasiado la propuesta. Encuentro

    preferibles las alternativas clsicas y ms honestas:

    ateo, agnstico y hasta infiel.Adems, no hace

    falta ser titulado en relaciones pblicas para esperar

    que la etiqueta de brillante le parezca a mucha gente

    pretenciosa o algo peor.

    Coincido con el autor, si queran sustituir 'ateo' por otra

    palabra que no tuviera connotaciones negativas, 'brillante'

    es una de las peores elecciones. Tampoco creo que sea

    necesario el cambio de nombre. Pero s me parece bien

    ampliar un concepto que ya tenemos, y que es 'laico'.

    Podra englobar no slo a las personas que no son

    religiosas y tienen esa concepcin naturalista del mundo,

    sino tambin a irreligiosos (testas no practicantes) y a

    los muchos creyentes que opinen que la religin es un

    terreno personal que no debera influir en consideracionessociales.

    Hasta que llegue el momento en el que ser ateo sea tan

    normal como ser creyente, libros como ste, divulgativos,

    no dogmticos, tolerantes, pero certeros en las crticas,

    son imprescindibles.

    Juan Pablo Fuentes