Edición especial Chávez Vive

R e v o l u c i ó n a D i a r i o MIÉRCOLES 5 DE MARZO DE 2014 / CIUDAD COJEDES CHÁVEZ VIVE 1R e v o l u c i ó n a D i a r i o

CHÁVEZ VIVE

R e v o l u c i ó n a D i a r i o2 CHÁVEZ VIVE CIUDAD COJEDES / MIÉRCOLES 5 DE MARZO DE 2014

Las sombras y los rostros tristes de la rebelión popular de 1989 con el olor a muerte que la mano opresora impri-mió a esa valerosa insurrección popular, aún rondaban las calles de la ciudad. Apenas tres años habían transcu-rrido y aquel Teniente Coronel criollo, confundido en-tonces entre las teorías sobre militares y dictaduras que aún merodeaban a América Latina, se levantó desde Ma-racay con la aspiración de recuperar el país que nos ha-bía sido robado.

La rebelión militar fracasó, pero aquella aparición en los medios asumiendo la responsabilidad por lo ocurrido fue un rotundo triunfo político: el primer discurso de un hombre seductor, intuitivo, improvisador, indomable, deslumbrante, con un talento sin igual para conectar con las masas y vibrar junto a ellas.

El primer discurso de un hombre que seis años des-pués irrumpía en la historia de Venezuela para cambiar su curso. El primer discurso del hombre al que la vida le ofrecía la oportunidad de salvar a su patria, quizás el dis-curso más corto y sencillo que le escuchamos en 22 años “por ahora…” pero de aquella lluvia repentina de pala-bras nos quedó la esperanza que en 162 años creímos perdida… una esperanza que se hizo pueblo y fue la al-borada de las nuevas páginas de la historia que había si-do usurpada con la muerte de Bolívar.

Las elecciones de 1998 abrieron una nueva etapa para nuestro país. Un candidato ajeno al status quo del poder, a las oligarquías, fue electo por millones de venezolanos ansiosos de cambios políticos, económicos, sociales y culturales; pero 1998 es más que eso… fue el comienzo de una leyenda de amor infinito entre el Teniente Coro-nel Hugo Chávez Frías y el pueblo que lo ascendió a Co-mandante Supremo.

El sentimiento de los pobres y los postergados por la historia hacia Chávez no surgió de la explosión de una granada de amor. Germinó de la esencia del pensamien-to de un hombre que tenía la certeza de que hacer traba-jo de masas es esencialmente ocuparse de su gente.

Este amor del que hoy les cuento es el más fundado de los amores escritos y contados, él restituyó el valor de la palabra, se convirtió en un canal de transmisión inme-diata por donde transitaba la verdad a borbotones, fue cada día inspiración para empeños, surcó con su vida una nación redimida, hizo realidad las quimeras e incor-poró el ideario bolivariano al torrente sanguíneo de una revolución popular.

Imposible no amar a quien llegó cuando el país cami-naba al revés, con un pasado maltrecho de sangre que brota y esperanza que se aferra; por eso se convirtió en el líder auténtico que cuidó de todos los nombres que tiene la libertad… en el novio de todas las niñas, en el amante de todos los soñadores, en el hermano de los humildes, en la esperanza de los que nunca esperaban nada, en la mano tendida de los que nunca tuvieron una mano que estrechar.

Por ese amor sempiterno tenemos patria y en tu nom-bre no cesará jamás la lucha. Ya la llamarada se hizo con-tinente, se hizo fuego sagrado. Por ese amor perpetuo el acecho del imperio sobre esta tierra, compendiado en el esfuerzo ingente de los medios de comunicación por de-rrocarnos, quedará como otro intento dilapidado en el estiércol de la historia. Por ese amor perenne, la “Opera-ción Salida” no tiene salida alguna.

Por ese amor estás salvado de la muerte, a todas horas te salvamos… y empiezas a crecer como el día, lloverás en el tiempo de lluvia, florecerás cuando todo florezca, porque tu huella está en la semilla, sobre las rocas, en el tatuaje de las sombras, en el esqueleto de la miseria que subyugaste, en el corazón de los árboles… y de tu pue-

blo. Te encontraremos siempre en la sonrisa de los ni-ños que juegan, en la mirada de los que luchamos por la vida, por la libertad, por la paz con justicia social; te encontraremos Jefe, en el corazón que late en el pecho

de la mujer venezolana que ama, ríe, sueña y trabaja, cultivando con orgullo la patria que nos heredaste.

Hasta la vida siempre, Comandante Eterno.

ERIKA FARÍAS PEÑAGOBERNADORA DEL ESTADO COJEDES

Seguimos viviendo, seguimos venciendo

Erika Farías PeñaSe desempeña actualmente como Gobernadora del Estado Bolivariano de Cojedes. Es miembro de la Dirección Nacional del PSUV y se ha desempeñado como Directora del Frente Francisco de Miranda, Ministra del Poder Popular para la Participación Social y Ministra del Poder Popular para las Comunas. Cercana colaboradora del Comandante Chávez; en dos ocasiones asumió como Ministra del Despacho de la Presidencia, en el año 2007 y en el período 2011-2012.

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Prometió consumirse de por vida al servicio del pueblo venezolano. FOTO WEB

“¡Ezequiel Zamora, en mis manos está tu llamarada!”, dijo Chávez en el 2009. FOTO CORTESÍA WEB

LA SIEMBRA DE CHÁVEZ: 2500 tractores fueron entregados en el 2013. FOTO CORTESÍA

» Sienten que Hugo Chávez les devolvió el valor y la confi anza que otros les habían quitado

Su piel no luce tan radiante y fres-ca como la de otros; el sudor corre por su frente y se desborda por to-da la cara y el cuerpo; sus manos están ásperas y agrietadas; su vesti-menta empolvada da cuenta que no ha habido pausa a lo largo del día; no tiene que ver con el sol o la lluvia; sabe perfectamente que su afán diario es el que permitirá que otros puedan alimentarse...

La importancia y el valor del agricultor o trabajador del cam-po fue apreciado por Hugo Chávez. Fue su anhelo que la jus-ticia, la igualdad y la solidaridad, estuvieran siempre de su lado.

“Ahí está el futuro, ahí está el más grande potencial para el de-sarrollo del país, a través de la agricultura; y no sólo para pro-ducir alimentos, sino para pro-ducir -y lo digo con Kléber- dig-nidad; y para producir -y lo digo con el Che- el hombre nuevo, la mujer nueva, la sociedad nue-va”. Así se expresó Hugo Chávez el 13 de Enero de 2009, durante el Mensaje anual ante la Asam-blea Nacional.

Diez años antes, 1999, cuando Chávez asumió la presidencia, ri-cas y abundantes extensiones de tierras estaban en manos del lati-fundio; eran improductivas. Au-nado al abandono y pobreza en la cual se encontraban los hombres y mujeres que trabajan la tierra; para estar a tono con el ideal bra-vío del General Ezequiel Zamora, Chávez también hizo su aporte para que la tierra fuera libre, y con ella, las manos incansables que la trabajan.

Así fue. El valor de su lucha se refleja en la reivindicación de 11 millones de hectáreas: 3 millo-nes y medio por la vía del rescate y 7 millones y medio a través de la regularización de la tenencia de la tierra.

De esta manera se cumple lo expresado por los agricultores que sienten y ven en Hugo Chávez a un “libertador del cam-po“. “Sin esta Revolución que ideó el presidente Chávez, yo no sabría dónde estaría el campesi-no; porque nosotros los campesi-nos antes no teníamos voz, y aho-ra, el campesino tiene voz, tiene voto y tiene decisiones propias, cosa que antes no pasaba”.

ERIKA BENÍTEZCIUDAD COJEDES

Objetivo Estratégico 1.4. Lograr la soberanía ali-

mentaria para garan-tizar el sagrado de-recho a la alimen-

tación de nues-tro pueblo. 1.4.1

Eliminar definitiva-mente el latifundio.

1.4.3 Afianzar un con-junto de políticas pú-

blicas de apoyo a la producción, orga-nización del sec-

tor rural y par-ticipación del

poder popu-lar campe-sino en la

planifi-cación.

* Con la Revolución se empezaron a rescatar grandes latifundios.

* Se introdujo la tecnología en el área agraria con destacadas maquinarias: 2 mil 500 trac-

tores fueron entregados a productores na-cionales en el 2013. El Gobierno Bolivariano

cuenta con 44 silos en el país. De éstos, 32 pertenecen a la Corporación

de Abastecimiento y Servicios Agrícolas (CASA).*Los campesinos cuentan con

una avanzada política demo-cratizadora del crédito: 86 millardos

de bolívares fue la inversión del Estado en producción agrícola en el año 2013. * Cuentan con el seguro social campesino.

Una siembra que no dejará de dar frutos* Se crearon nuevas instituciones y misiones para el sector. * Se sientan las bases para producir Gobierno-Movimiento Campesino y Gremios Productivos Nacionales comprometi-dos con el desarrollo y la producción.EN COJEDES: El Programa “Hugo Chávez Sembrador” contempla el fi nanciamiento para 88 productores de caña de azúcar, para el mantenimiento de 7 mil hectáreas de este rubro. Incluye además un proyecto para los pequeños y medianos productores de ganadería, ubicados en el asentamiento campesino “El Charcote”, municipio Rómulo Gallegos, y en otras zonas de la región.* En la Unidad de Producción Socialista (UPS) “La Chácara“, en el municipio Ricaurte, se instalarán 30 naves para la producción de hortalizas. La meta es producir aproximada-mente 3 millones de kilos anuales, entre pimentón, cebolla y tomate.

Dignifi có para siempre al campesino

Las infatigables horas de trabajo de los campesinos protagonizan tres momentos claves del día: de-sayuno, almuerzo y cena. En los 14 años al frente de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez lideró el apoyo al campesinado ve-nezolano. Su visión apasio-nada de la agricultura transcendió la en-trega de financia-miento y maqui-naria, y la recupe-ración de tierras. Se convirtió en una se-milla potente que ha de ser preservada por todos para que no de-je de dar frutos.

Así lo plasmó en el Plan de la

Patria


El socialismo de Hugo Chávez…» Debe nacer de las comunidades con sus consejos y organizaciones de base, asumiendo protagónicamente la responsabilidad comunal, e insiste en lo colectivo en todas sus áreas

De cómo comienza, cómo es y cómo debe ser el socialismo en cada país sabemos poco, aún cuando las teorías y la historia han escri-to mucho, siempre es un ejercicio reflexivo muy particular, es decir particular de cada gran pueblo que toma la responsabilidad co-lectiva de reescribir su propia versión.

Nuestro caso es el sueño de un pueblo, Chávez, precursor líder eterno de nuestro so-cialismo, comenzó a sentir y a mostrar un socialismo de piel curtida por las justicias au-sentes durante muchos años, se va susten-tando quizás en el escudriñaje de libros y teo-rías de como saldar algunas deudas con su pueblo, pero quizás más en el olfato propio que tiene la clase trabajadora del campo y de la ciudad, en una intuición sólo posible cuan-do se tiene claro la clase a la que pertenece.

Transparente como siempre fue, Chávez nos contó los cantos de sirena a los que fue sometido; y en esa narración nos enseñaba a lo que debemos estar siempre alerta, en cada encuentro con su pueblo mostró valores que en nuestros lejanos dirigentes no existían: la transparencia y la verdad con su pueblo, con-fesiones de clase, lecciones de maestro que vive con sus alumnos las penurias del barrio; la falta de agua potable, la escasez así como el remedio de lo colectivo en cada solución y siempre como nos lo dice, “ojo pelao”.

Nuestro socialismo reafirma las teorías científicas del socialismo científico pero desmonta los manuales de su construc-ción, así que nuestras prácticas generan nuestras propias teorías y mejoran las nue-vas prácticas, pero son las nuestras, vamos con Chávez buscando las referencias pro-pias y del mundo, él va escudriñando en su enseñanza campesina local, siendo lo lo-cal para él más amplio que nuestro mapa; el camino propio, el “inventando y erran-do” son herramientas fundamentales pa-

más valioso de los hallazgos y desprendido del vicio de la propiedad individual, comien-za a compartir con sus hermanos y herma-nas la importancia de restablecer esa armo-nía ancestral. El socialismo de Chávez es el restablecimiento del orden colectivo, de la paz y la armonía en el siglo XXI.

En 1999, encontramos el Estado impuesto hace quinientos años, reglas, normas y valo-res de uno de los imperios que buscaba su su-pervivencia en la explotación y expoliación de otros pueblos; el nuestro, nuestroamerica-no, le brindó, en contra de su voluntad, esa oportunidad de sobrevivir, los invasores im-pusieron su Estado por fuerza de la espada y la cruz, pero a pesar de eso, no pudieron bo-rrar una historia de miles de años.

El imperio español trajo de Europa no sólo la enfermedad, también abrió las puertas a ideas emancipadoras que se gestaban en su seno, rebeldes pensamientos que fueron combinándose con la resistencia de los pue-blos indígenas y que Chávez volvió a colocar en las mentes de hombres y mujeres de este nuevo siglo. Luego de un arduo trabajo de los sucesivos imperios por borrar términos que adujeran lo colectivo, el soldado puso sobre la mesa la vieja discusión, “la independencia y el socialismo”, allí radica todo, dijo; es la raíz, echó mano de los viejos libros y de los viejos nombres que habían sido ocultado, desem-polvó cuentos, historias y comenzó a repar-tirlos por los caminos de su Venezuela.

El socialismo de Chávez es el cuento ances-tral que se comienza a escribir otra vez en la piel de hombres y mujeres de los nuevos tiempos en cada rincón de la Venezuela boli-variana, es el inventar y errar de Simón Ro-dríguez, la tierra y hombres libres de Eze-quiel Zamora, es la fuerza espiritual e irrup-ción del continente Grancolombiano de Si-món Bolívar en el siglo XXI, toda una expre-sión de libertad y soberanía que se vuelve co-tidiana a pesar de la manipulación hueca de

ra la creación del nuevo mundo posible.Un sabio soldado debe siempre conocer el

terreno donde desarrolla su batalla, así dise-ña con detalle su estrategia, evalúa los pertre-chos con los que cuenta, establece bien sus objetivos, cuenta los hombres y las mujeres que estarán presentes y ubica claramente al enemigo, determina su fuerza, pequeña o grande que jamás subestima… con todo ese estudio Chávez supo cuándo iniciar, constitu-ción, leyes, misiones y transformaciones so-ciales, aún así el soldado debe ser ágil para sortear los imponderables y es cuando la ma-ña es vital, esa que se aprendió en el juego del caserío, en el trabajo infantil para cooperar con la economía casera, quizás en esto radica la diferencia del líder Chávez, su sorprenden-te capacidad de maniobra que sólo le dio su vivencia de niño pobre capaz de burlar las zancadillas que pone la pobreza y que le fue curtiendo la piel. De tal manera que estudio y maña ahora son atributos del guerrero que vence al adversario de clase en la construc-ción de esta nuestra versión de socialismo.

El socialismo de Chávez propicia un nue-vo lenguaje y en eso recuerda no utilizar las armas melladas del enemigo, este es un so-cialismo que se refugia en la comunidad, es decir, en el pueblo y en su vivencia común, la de comunidad, por eso la estudia desde los tiempos más antiguos y asume el lenguaje de lo común. Se esfuerza en conocer los va-lores de los forjadores de la vida comunita-ria más allá de la historia que nos contaron, y revive la comunidad de los indígenas y su relación con la pacha mama o madre tierra, va redescubriendo el respeto mutuo y la ar-monía entre hombre, mujer y madre tierra, ya no se entiende comunidad sino se ejerce la armonía entre ellos, y va más allá Chávez, descubre junto a su pueblo cada momento, cada batalla librada de generación en gene-ración por el restablecimiento de la armo-nía, entonces como cuando se descubre el

medios privados e intereses subalternos.Canciones, versos, poemas y cuentos es-

tán por escribirse, como siempre dijo, desde lo colectivo, con la organización ahora apo-yada en constituciones y leyes, el trabajo co-munitario, la unidad del pueblo e institucio-nes al servicio de la transformación y de su fuerza armada en defensa del bien común, deben escribir nuevas páginas. El socialismo de Chávez forja una idea comunitaria de transición al socialismo, debe nacer de las comunidades con sus consejos y organiza-ciones de base, asumiendo protagónica-mente la responsabilidad comunal, e insiste en lo colectivo en todas sus áreas, la política, económica y social, promueve estadios su-periores de organización y habla de la Co-muna, ya no como consigna, lo concibe co-mo unte ente vivo, histórico y nuevamente colectivo, capaz de gestionar política públi-ca, que crezca como una red, en alianza con las instituciones del Estado pero que presio-ne su transformación definitiva y propicie el advenimiento del Estado Comunal.

En este punto Chávez insiste en erradicar los viejos vicios de esos quinientos años, des-aparecer sus valores, el egoísmo, el indivi-dualismo, la usura y la explotación de los hombres y mujeres, sacudir al viejo edificio el burocratismo, obligar a que nazca el servi-dor público y con él y ella la nueva institucio-nalidad socialista, colocar todos los medios masivos de comunicación al servicio del na-cimiento del nuevo hombre y la nueva mu-jer, crear el maestro y maestra parteros de sueños de paz y justicia y con ellas y ellos la escuela pertinente con la nueva sociedad, el socialismo de Chávez la es construcción de la paz militante, del amor militante, del alba continental que soñó Bolívar y los libertado-res, el socialismo de Chávez es el trabajo te-sonero por la vida, el socialismo de Chávez es legado vivo y palpitante de presente y fu-turo por los siglos de los siglos.

FRANCISCO [email protected]


La última vez que el comandan-te Chávez piso tierra cojedeña fue el 1° de octubre del 2012 du-rante el acto de cierre de su cam-paña electoral en el marco de su recorrido de “Sabaneta pa’ Cara-cas”. Allí, en un San Carlos de bo-te en bote, cantó “Motivos llane-ros”, acompañado del conjunto de Amado Lovera. “Motivos lla-neros”, pieza de Angel Avila, fi-guró entre las preferidas que cantaba a dúo con Cristóbal Ji-ménez, junto a “Poesía, copla y sabana”, del cantautor elorceño Pedro Telmo Ojeda. El coman-dante también entusiasmó a los asistentes interpretando “Mis cantares”, una pieza de Germán Fleitas Beroes, compositor nati-vo de camaguán, en cuya letra se menciona que “La luna anoche traía una cara muy risueña pues de San Carlos venía de ver a la cojedeña” y que en su estrofa fi-nal refiere que “Por la llanura in-finita / florece el canto llanero / como las rosas marchitas / des-pués de los aguaceros”.

En ese mitin Chávez selló su compromiso de amor y fidelidad con Cojedes, tierra donde comien-za el llano en su vertiente centro occidental. Y ese amor fue mutuo porque el Comandante nunca per-dió una batalla en Cojedes como tampoco en todo el llano, como suele recordar Erika Farías, la ac-tual gobernadora cojedeña.

“Se oye un grito por la sabana, un grito recorre la sabana. ¡Desde Tinaquillo hasta el Cajón del Arau-ca!, ¡Desde San Juan de los Morros hasta el Capanaparo. Y ese grito di-ce así: gana Chávez el 7 de octu-bre”, señaló el Comandante Chávez, en el encuentro de San Carlos, con ese vozarrón y esa pa-sión que caracterizaba sus inter-venciones públicas.

Chávez le hablaba a las cojede-ñas y los cojedeños con la familia-ridad con que lo hacía en Apure, la tierra que tanto amó, en Barinas, su estado natal, o en Portuguesa y Guárico. En Cojedes se sentía tan llanero como en el río Arauca o en el estero de Camaguán.

MANUEL ABRIZO

Chávez lanzó en Cojedes la guerra al latifundio

Por eso cuando Chávez le preguntó a la multitud ¿Quién gana el 7 de octubre?, refiriéndose a las elecciones presidenciales, ya sabía la respues-ta. El nombre pronunciado por los miles de asistentes se escuchó clarito:

“¡Chávez!”.En su discurso el comandante refirió que Cojedes tenía un papel im-

portante en la tarea de convertir a Venezuela en un país potencia, ya que posee un gigantesco potencial agroalimentario que impulsaría la Revolu-ción Bolivariana.

Culminó su discurso como quien se siente en su propio patio: “¡Viva el llano!”, ¡”Viva la llanura!”, “¡Viva Cojedes!”.

A QUIEN SIGUEN LOS LLANEROSFue en Cojedes, en el 2005, cuando arrancó en el país la ofensiva contra el latifundio, una de las rémoras que azotaba a los pueblos llaneros y que Chávez estaba determinado a ponerle fin. En ese año el Inti, a través de su presidente Eliécer Otaiza, anuncia la interven-ción del hato Piñero, de 74.800 hectáreas, en manos de la familia Branger, y de otros predios como El Charcote, de 12.950 hectáreas, el hato Paraima, de 33 mil hectáreas.

Chávez visualizaba una gran zona de producción agrícola, sobre todo con arroz, al sureste del estado Cojedes, incluyendo a los estados fronte-rizos de Barinas y Guárico. También se imaginaba un tren que bajara por El Baúl, siguiera hasta Arismedi, y continuara hasta el estado Apu-re. Además de la expansión ganadera también impulsó la cría de búfa-los en tierras cojedeñas.

El comandante dio un gran impulso al desarrollo de Cojedes a través del rescate y entrega de tierras a los campesinos, la instalación de plan-tas procesadoras de alimentos, el programa de cría de cachamas en El Baúl, la construcción en Tinaquillo de un complejo industrial alimenti-cio. En Tinaquillo se montó las fábricas de “bicicletas atómicas”.

En el campo político hizo gala de su audacia, tino y olfato de estadis-ta, al encomendarle a Erika Farías, una de sus más fieles y principales colaboradoras, la responsabilidad de consolidar y profundizar la revolu-ción en Cojedes. Y Cojedes le dijo sí una vez más al Comandante: en di-ciembre del 2012, cuando convalecía en La Habana, las cojedeñas y los cojedeños eligieron a Erika Farías como gobernadora. Y en las eleccio-nes de diciembre del año pasado el estado amaneció rojo rojito con un triunfo arrollador en todas las alcaldías.

La estirpe llanera de Chávez se hizo sentir en cada uno de los pasos y actos que presidió mientras estuvo en Miraflores.

En el llano, especialmente en el estado Apure, como militar en

» A un año de su partida, en Cojedes como en el resto de los estados llaneros, se siente aún el vacío dejado por el Comandante. Fue precisamente en tierras cojedeñas donde se inició en firme en el 2005 la lucha contra el latifundio con la intervención de los hatos Piñero, Paraima, El Charcote

EN TIERRAS LLANERAS EL COMANDANTE SE ENCONTRÓ CON LA VENEZUELA PROFUNDA

Elorza, el hijo de Sabaneta se encontró con esa Venezuela profunda, con esa raza buena y noble, a la que prometió reivindicar algún día. Y lo cumplió.

Cristóbal Jiménez antes de interpretar la pieza “Poesía copla y saba-na”, de Pedro Telmo Ojeda, dijo en las honras fúnebres en memoria del presidente Chávez, “el hombre que cantaba con nosotros estas cancio-nes no está físicamente hoy con nosotros, pero su espíritu ya es un refe-rente espiritual en todo el mundo, la revolución bolivariana. Voy a in-terpretar este pasaje que cantamos juntos en tantas oportunidades, que

le traía recuerdos de Elorza, del río Arauca, de los llaneros que lo

seguimos, porque Chávez fue el hombre que después de Bolívar y Páez seguimos los llaneros y lo seguiremos por siempre”.


Chávez, una referencia inmortal» Chávez no ha muerto, en Chávez hay todo un legado y una referencia politica que guíay alimenta nuestras luchas para siempre

WILLIAM [email protected]

En Chávez como líder y conduc-tor de un proceso histórico, enca-ja perfectamente la frase de Alí Primera “los que mueren por la vida no pueden llamarse muer-tos” y parafraseándolo diríamos que los que mueren por la vida, por las causas justas de un pueblo, se hacen inmortales y son refe-rencias espirituales y filosóficas que sostienen las luchas de un pueblo. En Chávez hay todo un le-gado y una referencia política que guían y alimentan nuestras lu-chas. Al igual que con Bolívar, en sus discursos hay to-do un contenido y un marco político refe-rencial que nos inspi-ran y son nuestra me-jor arma filosófica y política. Chávez no ha muerto, al igual que Bolívar, Chávez es inmortal.

Los cambios y pro-cesos históricos de la humanidad han sido demandados por un pueblo y conducidos por un líder que desafía y rompe con viejos postulados. No cabe la menor duda que Jesucristo rom-pió con la doctrina religiosa judai-ca de sus padres, de sus ancestros y enfrentó al imperio más podero-so de la época, el Imperio Romano e hizo que cayera de manera siste-mática; así mismo, Bolívar desafió al imperio más poderoso de en-tonces, el Imperio Español, hasta derrotarlo por completo, rom-piendo con la tradición política fa-miliar. Es cierto que sus padres ha-bían muerto para el momento que inicia su lucha, pero la postura po-lítica que asume ante su hermana mayor, María Antonia, es un ejem-plo incuestionable que avala la ac-titud crítica de Bolívar, incluso an-te su mismo seno familiar. Chávez nace y pasa su infancia rodeado de unos preceptos que dominaban el ambiente político para la época, la filosofía adeco-copeyana. Así mis-mo se va a formar en una institu-ción militar signada a los patrones políticos hegemónicos del punto-fijismo, impuestos por la Escuela de las Américas, con los cuales rompe de manera categórica al irrumpir con su Rebelión Militar del 4 de Febrero de 1992, cuyo he-cho, impulsado por la rebelión po-pular del 27 de Febrero de 1989, cambiarían el rumbo de la histo-

ria de Venezuela para siempre. En esa época el pueblo venezolano demandaba un cambio y Chávez con un grupo de jóvenes militares patriotas que se venían formando desde la fundación del MBR-200, el 17 de diciembre de 1982, salió a responderle ese pueblo y sentar las bases de lo que sería la demo-cracia participativa y protagónica.

Jesucristo de carne y hueso rom-pió con una concepción religiosa y fundamentó los preceptos religio-sos de una religión que hoy a sus dos milenios mantiene su vigencia en el mundo, el Cristianismo. Bolí-var enfrentó y derrotó a los 300 años de dominio colonial y dio na-

cimiento a repú-blicas indepen-dientes en el con-tinente america-no, fundando la doctrina Boliva-riana y Chávez no solo acabó con los cuarenta años de democracia burguesa y pun-tofijista, sino que refundó la Repú-blica y dio origen a una nueva doc-

trina política, la “Revolución Boli-variana y Socialista” con indiscuti-ble proyección en América Latina y con marcada influencia en gran parte del mundo.

Tanto el 27 de Febrero de 1989 como el 4 de Febrero de 1992 cons-tituyeron un hito histórico en la ruptura de los 40 años de la demo-cracia burguesa, al provocar el 6 de diciembre de 1998, la primera de una serie de irreversibles derrotas propinadas a los gobiernos sumi-sos al imperio norteamericano, so-cios de las transnacionales y de los grupos económicamente podero-sos, que se llevaban la riqueza de la renta petrolera, la riqueza que per-tenece al pueblo. A estos represen-tantes del imperio enfrentará en los siguientes 14 años de lucha im-pulsadas por la revolución boliva-riana, producirá sistemáticas de-rrotas que convertirían al mismo tiempo, a nuestro líder, en un fe-nómeno electoral sin precedentes, que rompió records en la historia electoral de del continente ameri-cano y del mundo.

Chávez fue un fenómeno electo-ral de ascenso sistemático crecien-te e irreversible. Apoyado en ese entonces por el MVR obtiene 3.673.685 de votos para un 56,20%. Luego en la contienda electoral del domingo 30 de julio de 2000,

apoyado nuevamente por el MVR asciende a 3.757.773 de votos y proporcionalmente sube a 59,76%. En las presidenciales llevadas a ca-bo el domingo 3 de diciembre de 2006 experimenta un incremento vertiginoso tras casi duplicar su propia votación en los comicios anteriores, al lograr la cantidad de 7.309.080 votos que se traduce en 62,84%. Fenómeno que jamás ha sido logrado por político alguno en la historia electoral del mundo. Dicho incremento constituye un amplio margen de apoyo a su ges-tión de gobierno, a la inclusión so-cial, lo que ratifica su carisma, y su liderazgo. En el 2012, en su últi-ma participación terrenal en la ba-talla electoral, las elecciones presi-denciales del 7 de octubre de 2012, apoyado por el PSUV y partidos aliados, vuelve a subir su propio registro, tras alcanzar la cifra de 8.191.132 votos, para un 55,07%.

Luego de la partida física del co-mandante Chávez se han produci-do hasta ahora dos comicios elec-torales, las elecciones presidencia-les del 14 de abril de 2013 y los co-micios municipales del 8 de di-ciembre de 2013. Los dos procesos son apoyados por la imagen políti-ca de nuestro líder invicto y en am-bos la oposición recibe una aplas-tante derrota. Esta es la mejor muestra que confirma que Chávez no ha muerto, en Chávez hay todo un legado y una referencia política que guía y alimenta nuestras lu-chas por siempre. En todas las ba-tallas electorales por venir, no ca-be la menor duda que Chávez se-guirá derrotando a los fascistas. Chávez no ha muerto, al igual que Bolívar Chávez se hizo inmortal.

Pero Chávez, no sólo fue un fe-nómeno en el campo electoral, también despertó la conciencia de un pueblo y sentó las bases que nos llevan a sustituir los viejos pa-radigmas económicos e impulsó de los esquemas epistemológicos en el campo historiográfico, al propiciar la ruptura del neopositi-vismo como sostén filosófico del capitalismo, y gestar un movi-miento intelectual que está senta-do las bases teóricas y epistemoló-gicas de la nueva historia.

Si Jesucristo marcó un antes y un después para la lectura de la histo-ria mundial al patentar el AC (Antes de Cristo) y DC (Después de Cristo) y Bolívar como líder del proceso inde-pendentista con sus luchas y su pensamiento legó para la posteri-dad la periodización de la I, II y III República, para la interpretación

de la historia de Venezuela; el co-mandante Hugo Chávez Frías, es el eje motor de la interpretación de la historia contemporánea, al romper con la IV República, la República de la oligarquía, la República neolibe-ral, burguesa y bascista, y dar ori-gen a la V República, cuyo hito ha dado origen a los fundamentos po-líticos, culturales y sociales para la acuñación definitiva de esta nueva etapa, aun estudio por los historia-dores contemporáneos, quienes de-baten acerca de su terminología in-terpretativa. Entre ellos: la “Revolu-ción Bolivariana y Socialista” y “So-cialismo Bolivariano”, como doctri-nas políticas y como etapas tempo-ro-espacial de nuestra historia.

Como es natural, los procesos

de cambios en la historia de la humanidad han enfrentado fuertes reacciones que vienen del seno de los grupos que ven amenazados sus intereses, como el que vivimos actualmente. Pe-ro, pese a esas posturas ideológi-cas y políticas en decadencia, los procesos no tienen marcha atrás. Por mencionar algunos, la revolución religiosa emprendi-da por Jesucristo, la revolución independentista liderizada por Simón Bolívar y la Revolución Bolivariana gestada y conducida por el comandante Eterno Hugo Chávez, que logró sembrarse en la conciencia de la gran mayoría de los venezolanos para cambiar la historia de Venezuela.

Hombre hecho verbo» Millones cumplen su legado y llevan tatuado el nombre de Chávez en el corazón

365 días han transcurrido desde que en los medios de comunica-ción del país se oyó “Hoy 5 de marzo, luego de haber acudido a la reunión del consejo de minis-tros, nos dirigimos a las instala-ciones del Hospital Militar de Ca-racas, a seguir la salud de nues-tro comandante presidente. En momentos en que nos encontrá-bamos recibiendo el parte y acompañando a su hija, recibi-mos la información más dura y trágica que podamos transmitir a nuestro pueblo. A las 4:25 de hoy ha fallecido el Comandante Presidente Hugo Chávez Frías” de la voz del actual presidente de la República Bolivariana de Ve-nezuela Nicolás Maduro Moros.

Millones de venezolanos con-

JOSÉ GREGORIO ACOSTACIUDAD COJEDES mocionados por la triste noti-

cia, se volcaron a las calles con su llanto para expresar el infi-nito amor que sentían por el hombre que luchó incansable-mente por el amor, la verdad, la justicia, la equidad, y la espe-ranza a través del Socialismo Revolucionario que llevó como bandera durante toda su carre-ra política militar.

Muchas son los calificativos y consignas que nacieron en ese día de dolor para unos y para otros no tanto, pero que sin lu-gar a dudas surgieron de dife-rentes sentimientos encontra-dos, dándole al presidente Chávez un sitial en la historia de Venezuela, convirtiéndolo en palabra, sustantivo y verbo en todos los rincones América latina y el mundo.


Chávez: el camino del pueblo al poder» La burguesía necesita empequeñecer al pueblo para dominarlo

La presencia del Comandante de la última revolución del siglo pasado y la primera del presen-te siglo XXI en Nuestra América es una huella que va más allá de una presencia física. Significa una nueva aparición del pueblo venezolano en la historia de la cual hacía tiempo que las pode-rosas clases que dominaron du-rante más de un siglo a la Patria Bolivariana, habían excluido.

Al cumplirse un año del falle-cimiento de quien personificó ese despertar bolivariano del pueblo, vale la pena recordar; así sea en gruesos brochazos, de dónde viene esta resurrección

ELIO HERNÁ[email protected]

de un pueblo que en el pasado li-brara combates heroicos por su libertad y la de otros pueblos hermanos. Recordar la hermosa gesta libertaria que protagoni-zara la Patria es rendirle hono-res a esa pléyade de hermosos seres humanos que construye-ron una historia de sacrificio y dignidad en el combate sin cuar-tel por la independencia, no só-lo de lo que después constituye-ra la nación venezolana, sino lo que hoy constituye la Patria Grande.

Es esa historia, expresada en el Libertador Simón Bolívar, co-mo continuador y síntesis del esfuerzo emancipador la que nuestro Comandante rescata, y con ella irrumpe con fuerza el valor de un pueblo al que, quie-nes dirigieron la República, des-de la muerte del Libertador y la división de la Colombia miran-dina y bolivariana, hasta finales del siglo XX, se empeñaron en desaparecer de la historia: Vano esfuerzo porque aquella consig-na: “No hay pueblo vencido” es una dolorosa realidad.

En efecto, no hay pueblo ven-cido pero la supervivencia y lu-cha del pueblo hasta emerger victoriosamente es un duro ca-mino a lo largo del cual quedan regadas incontables víctimas cuya reivindicación sólo es posi-ble con la realización de sus sue-ños. Ese es el camino en el que se encontraron nuestro Coman-dante y su pueblo. Pudiéramos decir que estamos frente a un pueblo que se encuentra con su conciencia porque al final, Chávez es eso, la conciencia del pueblo.

Ese encuentro, un proceso he-cho evidente al calor de los suce-sos históricos del 27 y 28 de fe-brero, marca el impulso a otro

ritmo en el andar. No es sólo el proceso del encuentro del pue-blo y su conciencia, logrado en un batallar por la supervivencia de la Patria, puesta en peligro por la disposición a su entrega por parte de toda la sociedad pa-rásita que medraba en las sobras que le daban los imperialistas extranjeros que se habían adue-ñado del país. Ese encuentro es la configuración de otra rela-ción social, de otra manera de existir y vivir de la República. La Constitución de la República Bo-livariana de Venezuela ponía de manifiesto que, en lo adelante, el pueblo no sería un invitado mudo, ignorado, a la existencia de la República. La Constitución ponía, a lo largo de todo su mag-no texto, entre otras reivindica-ciones, la participación protagó-nica del pueblo, la corresponsa-bilidad, la existencia de un Esta-do social de derecho y de justi-cia y una descentralización en los cuales los recursos no se que-daran a medio camino sino que llegaran cada vez más a las co-

munidades, no sólo para su ad-ministración sino como medios para el diseño de sus políticas públicas y el ejercicio soberano de sus decisiones, y sentaba las bases para la elaboración de le-yes para el ejercicio del poder popular.

Todo ese proceso de descubri-miento del pueblo como prota-gonista de su vida, inspirado en la dirección estratégica del Co-mandante, permanente vigilan-te de que la revolución soñada en discursos, palabras y textos escritos no se quedara en la retó-rica y que lo que ya se hubiera plasmado en las leyes comenza-ra a ser realidad en la práctica del pueblo organizado y las insti-tuciones del Estado, se constitu-yó en una tremenda batalla del mismo pueblo, a cuya cabeza una vez más se puso el Coman-dante Chávez. Una y otra vez, el Comandante, como cualquier hijo de vecina, se manifestaba ante cualquier irregularidad de la cual tenía conocimiento y que aparecía en este otro duro bata-llar del pueblo por ejercer su so-beranía. Chávez comprendía y explicaba que la necesidad de que el pueblo se diagnosticara, planificara y se organizara era la única manera de que emergerá el poder popular.

Al mismo tiempo, nuestro Co-mandante tuvo la claridad acer-ca del carácter dominante del Estado, sobre todo de aquellas instituciones que tendían a su-plantar al poder popular en pro-ceso. Aleccionador ejemplo de su preocupación acerca del pa-pel de la organización popular convertida en gobierno es aquel Aló Teórico dedicado a las Co-munas y la reunión reciente del Gabinete denominada “Golpe

de Timón”. Definitivamente, Chávez no es sólo la conciencia, también es la organización del pueblo para ejercer el poder.

Esa conciencia y organización del pueblo que se expresaban en Chávez hicieron de él parte in-tegrante de su pueblo. Actual-mente, por razones que debe-mos conocer, entender, hay to-da una estrategia que persigue disminuir esa estatura de pue-blo que adquirió nuestro Co-mandante. Eso, repito, es com-prensible. La burguesía necesita empequeñecer al pueblo para dominarlo. Para ello utiliza to-dos los instrumentos de los que pueda hacer uso pero el mas va-lioso de todos es la ideología, es decir, los valores que se ha dedi-cad a cultivar por siglos.

Esa ideología, esos valores es-tán regados por todas partes con la finalidad de enfermar la mente y los corazones de inte-grantes de nuestro pueblo, de sus organizaciones. Sus agentes están en los medios de comuni-cación, en los servicios, en las instituciones públicas, del Esta-do y privadas. Su objetivo es ese: disminuir la dimensión del pue-blo, hacer que el pueblo decrez-ca, revertir el trabajo que la con-ciencia y la organización del Co-mandante han logrado y logran en el crecimiento de la organi-zación y la conciencia popular. El único antídoto contra esas in-tenciones es la organización y la conciencia del pueblo y el avan-ce del poder popular.

Nuestro Comandante, se fun-dió con nuestro pueblo y en la medida en que esa síntesis se de-sarrolle, y crezca, y sea poder; ambos, pueblo y Comandante serán inderrotables y Chávez, en verdad, ya no sólo será orga-nización y conciencia del pue-blo. Será su corazón.

Ese es el temor de todos aque-llos que en el pasado lograron mantener al pueblo sometido y ocultado ante la historia. Es un temor justificado y debemos conseguir que cada día tengan más temor. Que su temor sea tan grande como el tamaño de un pueblo convertido en poder, un pueblo tan gigante como Hu-go Chávez y un Hugo Chávez tan grande como nuestro pue-blo. Y que ese Gigante tenga un corazón como Hugo Chávez. Esa es la misión del poder popu-lar: ser imbatible. Ese es el ca-mino de la presencia perma-nente del Comandante del alma de la Patria.

Este singular califi cativo nace en su infancia cuando vivía con su abuela paterna, doña Rosa, quien le dio todos sus cuidados dentro de un ambiente campesino lleno de mucho amor y lo bello de la vida en el campo, “ella hacía unos dulces de lechosa con forma de araña exquisitos”, expresó el presiden-te de Venezuela en una oportunidad, para palear la decadencia económica y ayudar a su Mamá Vieja como él le decía, se dedicó a vender los dulces en la escuela y en las calles de Sabaneta de Barinas donde residían, inclusive inventaba dichos jocosos para venderlos, “arañas calientes pa’ las viejas que no tienen dientes”; por eso es llamado “El arañero de Sabaneta”, apodo que hoy por hoy toma fuerza y es ejemplo de trabajo para cualquier venezolano.

El arañero de Sabaneta


Chávez le dio poder al Pueblo

Chávez siempre rodeado de Niños. FOTO ARCHIVO

» “El pueblo es el que decide; es la comunidad la que decide”

Desde que nuestro amado Co-mandante Chávez no está física-mente entre nosotros, todos quienes compartimos sus ideas, de una u otra forma, de manera formal e informal, de manera explícita o tácita, hemos expre-sado que ÉL VIVE ENTRE NOSO-TROS, y por lo tanto, estamos comprometidos a defender su legado a seguir en la lucha de nuestros ideales como el mismo nos enseñó: “El pueblo es el que decide; es la comunidad la que decide; no somos nosotros no es Chávez el que va a decidir... Son ustedes los que deciden, es el po-der popular, es la Democracia di-recta, a través de la asambleas populares, a través de la partici-pación, del protagonismo popu-lar” (Hugo Chávez Frías, Teatro Teresa Carreño, Caracas,11 de junio de 2009)

Él nos dejó las herramientas ahora somos un pueblo libre.

Siendo que la mayoría del pueblo encontró al líder que pa-ró un “estado de cosas” que ya no soportábamos, líder que co-mo primera gran acción políti-ca de gobierno ofreció al pueblo venezolano LA CONSTITUCIÓN DE LA REPÚBLICA BOLIVARIA-NA DE VENEZUELA, una Consti-tución Revolucionaria, que des-

de el preámbulo dibuja el país que queremos. Líder que durante 14 años nos ofreció un gobierno de IN-CLUSIÓN SOCIAL.

Sin embargo, a pesar de todo lo anterior, debemos mantener en mente que los actos humanos nunca serán perfectos, pero si perfectibles. Por lo tanto, no de-bemos olvidar, que seguimos en transición ya que no hay nada más difícil de cambiar que las vie-jas costumbres. Por eso, como

muchas veces nos recordó nuestro amado Comandante: “lo nuevo no termina de nacer y lo viejo no termina de mo-rir”. En consecuencia, lo nuevo que está naciendo se puede contaminar, y de hecho se con-tamina, de lo viejo; por lo tan-to, debemos estar siempre vi-gilantes porque a cada nada surgirán desviaciones que con-fundirán, decepcionarán y ale-jarán a las masas.

Tomando en cuenta a las comunidades. FOTO ARCHIVO

SARA SANTOS CIUDAD COJEDES

“Chávez cam-bió nuestras vidas en el sentido que nos dio una ciu-dadanía, nos enseñó amar a

nuestro país. Con esta revolu-ción hemos obtenido muchos beneficios todos los venezolanos en general, los recursos petro-leros son distribuidos en favor de las mayorías a diferencia de antes, que era solo para las élites; tenemos el compromiso de mantener la patria que él nos dejó. “Somos sus hijos y segui-mos en pie de lucha”.

Milagro Abreu

“Sus hijos”

Rafael Chávez realmente sig-nificó y signifi-ca un hombre muy valioso para todo el país y para el mundo entero,

ya que en su legado nos abrió una brecha realmente a lo que es una revolución, a enseñarnos que el país nos pertenece y luchar por lo que realmente deseamos y lo que realmente tenemos. El legado más importante que él representa es la libertad que nos dio El Libertador Simón Bolívar y él nos hizo ver que la estába-mos perdiendo y que debíamos recuperarla.

Yenni Flores

“Un hombre muy valioso”

Chávez signifi-ca todo lo que hemos logrado el pueblo venezolano dentro de todo ese logro.

Él logro visibilizar la minoría, antes en la cuarta república, las minoría eran marginadas y subordinadas, hoy en día el pueblo tiene el poder y con ese poder que le otorga la cons-titución han logrado muchos beneficios tanto individuales como en las comunidades. El mayor legado que dejó nuestro comandante es el amor hacia el pueblo sin discriminación.

Francisco Contreras

“Amor hacia el pueblo”

“Gracias a Chávez estudié dos carreras: Soy Licenciada en Educación integral y TSU en adminis-tración de

empresa, crecí este proceso revolucionario con democracia, aquí todos pueden participar en las políticas públicas del país, todos estamos incluidos. Hoy siento mu-cha tristeza a un año de su partida, pero tenemos el compromiso de seguir su legado, no existirán voces dulces de la contrarrevolución que nos aparten del camino que nos trazó nuestro amado comandante Hugo Chávez.

Paola Sánchez

“Compromiso”

Hugo Chávez despertó a un pueblo que andaba sumido en un letargo con aquel “por ahora”, en la rebelión del

4 de febrero, de ahí todos nos incorporemos en esa lucha por un mejor país que concretó con su triunfó el 1998 y a lo largo de estos 15 años fuimos los incluidos tenemos voz, y nuestra mejor forma de continuar su legado es con la unidad de todos los revo-lucionarios por este proceso, por el cual tenemos miles de razones continúe avanzando hacia la emancipación definitiva del país.

Marcos Duarte

“Incorporados ”

“Mi familia es pobre, no podía estudiar una carrera universitaria. Soy de El Baúl, no había

universidad allá ,para hacerlo había que tener plata cosa que no tenía. Gracias a que llegó el Comandante y creó la Misión Sucre que se extendió por todo el territorio y llegó a mi municipio y me inscribí y hoy en día el soy Licenciado en Gestión Social. Nuestro mejor homenaje es seguir unidos impulsando esta revolución por la cual él dio su vida, somos motor de este proceso.

Reiner Santamaría

“Le agradezco”


Expresión que defi ne al Comandante Chávez, precursor del proyecto ideológico y social llamado Revolución Bolivariana que tiene como base exaltar el ideario del Libertador Simón Bolívar, en las doctrinas de Simón Rodríguez, quien proponía que Latinoamérica inventase su propio sistema político, y el General Ezequiel Zamora “Tierras y Hombres Libres” y “Horror a la Oligarquía”, quien defendía la tenencia de la tierra para los campesinos que la trabajaban. Todo esto se llevo a cabo mediante la reforma cons-titucional de 1999. Hoy día se recuerda una frase que marcó pauta hace 15 años al tomar posesión de su primer mandato presidencial y ofrecer su discurso ante el pueblo venezolano en el paseo Los Próceres, en Caracas y que todavía está en vigencia: “Celebramos el nacimiento de la Venezuela libre, de la Venezuela Bolivariana que siempre hemos soñado”.

Máximo líder de la Revolución Bolivariana

Él se volvió miles, se ha hecho millones, es niño, adolescente, hombre, mujer, anciano, está tatuado en millones de corazones encargados de llevar su fi gura nacional e internacional, libertadora de todos los pueblos a integrar y llevar la unidad de la América latina y El Caribe que tanto soñó el Libertador Simón Bo-lívar, “Chávez no murió, se multiplicó” es la consigna que quedó en la memoria de todos los que le dieron el último adiós al insigne líder y que hoy está más vigente que nunca con la ejecución de su legado.

Chávez no murió, se multiplicó

Chávez y el Plan de la Patria» “...No dogmatizarlo y hacer de él una plataforma teórica e ideológica de orientación para los procesos de gestión y construcción de la patria nueva”

El 11 de Abril de 2002, se pro-duce el golpe de estado planea-do meses atrás en las esferas del poder burgués-imperial con asesoría directa y partici-pación encubierta del gobier-no estadounidense.

Diversos documentos de abril de 2002 demuestran que en el golpe de Estado perpetrado por la derecha venezolana participa-ron representantes de medios, dirigentes empresariales, la cú-pula laboral y políticos de la opo-sición, quienes en el contexto ac-tual pretenden desligarse de su intervención en el hecho.

Pero entendiendo también que los pueblos hacen su histo-ria, todo 11 tiene su 13, el pue-blo venezolano comienza a exi-gir y demandar la presencia de Chávez. Sectores de la derecha política y militar se ven presio-nados ante la arremetida popu-lar en las calles.

Restituido el gobierno boliva-riano, era necesario reorganizar las fuerzas populares, neutrali-zar la oficialidad militar de dere-cha y profundizar la aplicación de nuevas leyes habilitantes fa-vorecedoras de un impulso de las fuerzas productivas. Se vislum-braba la necesidad de la unifica-ción del movimiento revolucio-nario y el llamado a la construc-ción del socialismo del siglo XXI.

En este contexto se plan-tea el Primer Plan Socia-lista: El Proyecto Na-cional “Simón Bolí-var” (2007-2013). Hubo la necesi-dad de profun-dizar las líneas estratégicas de desarrollo eco-nómico y so-cial y es donde el presidente Chávez, presen-ta al país en sep-tiembre de 2007, el gran proyecto.

Su objetivo es pro-fundizar los logros al-canzados por las líneas ge-nerales del Plan de Desarrollo Económico y Social 2001-2007. Con este proyecto Venezuela se orienta hacia la construcción del socialismo del siglo XXI, en siete líneas estratégicas: nueva ética socialista, suprema felicidad so-

JOSÉ MIGUEL [email protected]

cial, democracia protagónica re-volucionaria, modelo producti-vo socialista, nueva geopolítica nacional, potencia energética nacional y nueva geopolítica in-ternacional.

Decía Chávez, “Para avanzar hacia el socialismo, necesitamos de un poder popular capaz de desarticular las tramas de opre-sión, explotación y dominación que subsisten en la sociedad ve-nezolana, capaz de configurar una nueva socialidad desde la vi-da cotidiana, donde la fraterni-dad y la solidaridad corran pare-jas con la emergencia perma-nente de nuevos modos de plani-ficar y producir la vida material de nuestro pueblo.”

El cambio de relaciones socia-les, de producción y consumo son horizonte del proceso revo-lucionario, solo desde una nue-va relación humana se fundará una nueva sociedad, una nueva república.

En el mismo sentido proponía Chávez que “esto pasa por pul-verizar completamente la forma de Estado burguesa que hereda-mos, la que aún se reproduce a través de sus viejas y nefastas prácticas y darle continuidad a la invención de nuevas formas de gestión política.”

Es así como se concreta el Plan de la Patria 2013-2019, herencia histórica de nuestro comandante eterno y base política y filosófica del proceso revolucionario.

El comandante Chávez de-cía: una vez más las cir-

cunstancias me colo-can delante del pue-

blo para expresarle el compromiso decidido y reno-vado con la de-fensa de la Inde-pendencia Na-cional. Éste es el tiempo, como nunca antes lo hubo, de darle

rostro y sentido a la Patria Socialista

por la que estamos luchando. Este Pro-

grama de Gobierno para el período 2013-2019 res-

ponde a la consecución de dichos supremos objetivos.

Pero, qué significa el Plan Pa-tria y cuál es su importancia so-cio-histórica y cultural?.

La importancia de estudiar es-te Plan Nacional está determi-

nada por el actual momento histórico que viven Venezuela y Latinoamérica, pues los cam-bios coyunturales y estructura-les que se evidencian, deman-dan otras formas de hacer polí-tica en las que cada vez más el papel protagónico de los pue-blos es esencial.

Esta transformación forma parte de la corriente histórica de cambios que ha tenido aportes visionarios como los de Simón Rodríguez, insistiendo en que no había que copiar modelos.

El estudio del modelo, desde su génesis hasta su desarrollo, demuestra que tal estructura permanece inalterable y obede-ce a la misma disyuntiva de in-ventar nuevas instituciones para las nacientes repúblicas latinoa-mericanas o de errar el camino cayendo en el simplismo de co-piar modelos de otros tiempos, otras actitudes, otros hombres.

Son tiempos para expresarse, para construir aciertos colecti-vos, tiempos de consultas y con-vocatorias a decidir la vida. En el actual marco político y jurídico, es propicio el debate creador que desde la diversidad cultural que nos constituye, genere inte-ractuación, supere las retóricas políticas, haciendo posible el parto de un tiempo para los po-deres creadores del pueblo.

De allí que los grandes objeti-vos históricos del Plan de la Pa-tria, se resumen en: La Indepen-dencia Nacional; El Socialismo Bolivariano del siglo XXI; Vene-zuela como país potencia; Desa-rrollo de una nueva geopolítica internacional y Contribuir con la preservación de la vida en el planeta y la salvación de la espe-cie humana.

El presidente Chávez decía: “El contenido del Programa de la Patria intenta interpretar la vo-luntad de las mayorías popula-res, pero por más que hayamos podido plasmarla en el texto, sa-bemos que esto, no es para nada suficiente.

Es por ello que a partir de este día, 11 de Junio de 2012 y hasta el Diciembre próximo, quere-mos que sea objeto del más am-plio y desprejuiciado debate, pa-ra que se le agregue, suprima y corrija, para que se le comple-mente y enriquezca, para que el II Plan Socialista de la Nación que habrá de regirnos durante el próximo período de Gobierno

Bolivariano y Socialista sea obra genuinamente colectiva, como co-rresponde en tiempos de revolución”.

Para nada descabellada es la interpretación política que le ofrece nuestro comandante al debate público y constituyente al Plan de la Patria, para no dogmatizarlo y hacer de él una plataforma teórica e ideológica de orientación para los procesos de gestión y construc-ción de la patria nueva.

El Plan de la Patria debe ser en lo adelante, referencia obligada pa-ra todos los procesos de construcción política, académica, pedagógi-ca, social, comunal. Es decir, insertar su estrategia como principios éticos y revolucionarios que todo proceso de cambio exige.

Debe transversalizarse en cada acción gubernamental local, regio-nal, nacional. Todo plan, programa, proyecto, por más pequeño que parezca, debe llevar consigo el cómo se vincula con el Plan de la Pa-tria. Cada aspecto que se presente ante los espacios institucionales y comunitarios que el proceso bolivariano demanda, debe tributar con estos objetivos estratégicos.

Por eso, siendo fieles al legado del comandante supremo, decimos como Eusebio Leal (2013): Hoy todo el mundo le reconoce, los líderes latinoamericanos se refieren a Chávez como el mentor de la unidad necesaria, un maestro en la lucha contra las apetencias imperiales, por la posibilidad del pan y la justicia para los tradicionalmente des-pojados y desposeídos; el hombre que alcanzó la gran experiencia y ha logrado lo que pocos en la vida: vencer a la muerte.

Hasta la Victoria Siempre, comandante eterno.


El Comandante Chávez es un hombre de la cultura, ya porque desarrollo sus propios intentos expresivos, ya porque ha navega-do a profundidad el tiempo histó-rico que le ha tocado vivir, ya por su dialogo y contacto permanente con los artistas y cultores que se fue encontrando en el camino.

Se sumergió en la profun-didades de nuestra socie-dad buscando símbo-los, valores, ideas fuerza, principios constitutivos de nuestras identida-des y las trajo al campo de batalla. Con Florentino y el Diablo, nos hizo ver que nuestras culturas populares eran campos de re-sistencia y que allí es-taban las explicaciones y las fórmulas del presente y el futuro, sustancia necesaria pa-ra construir nuestro plan nacio-nal basado en las ideas de Bolívar, Robinson y Zamora. Siempre pre-sente el elemento cultural, histó-rico, identitario: “…no hay he-rramienta en verdad como la cul-tura para lograr esa recuperación de conciencia, resurrección de pueblos, profundización del quié-nes hemos sido, quiénes somos y quiénes podemos ser…”

Para el Comandante Chávez la

tros pues, terminando el siglo XX y comenzando el XXI, comenzar aquí una nueva era, me decía Fidel anteanoche despidiéndonos en La Habana: Bue-no Chávez esa llamarada… la llamarada se hizo continente, la llamarada, el fuego sagrado. Fue como una resurrección lo que hemos visto, lo que he-mos vivido. Aquí había un continente dormido, un pueblo dormido como muerto y llegó el Lázaro colectivo y se levantó, finales de los 80, los 90, los 90 terminando el siglo XX pues, se levantó aquí en Venezuela una Revolu-ción, se levantó un pueblo y nos ha tocado a nosotros, algunos de nosotros, a muchos de nosotros mujeres, hombres, asumir responsabilidades, asu-mir papeles de vanguardia, asumir papeles de dirección, de liderazgo por distintas razones civiles, militares y hemos confluido pues, distintas co-rrientes terminando el siglo y comenzando este siglo…”

Fue Chávez quien nos dijo y nos dirá siempre que esa llamarada que se hizo continente, la avivaron los elementos culturales y simbólicos de la Patria Suramericana, vivos hoy más que nunca en las profundidades del Alma de los Pueblos de la Patria Grande. Es por ello que “…nuestros pue-blos deben portar la bandera, la conciencia de que nosotros no somos va-rias naciones, de que nosotros no somos que si la nación venezolana, que si la nación brasileña, que si la nación argentina, que si la nación urugua-ya, o la colombiana, o la ecuatoriana… Somos una sola Nación”.

ANTONIO YUNIZ

Un Hombre de la Cultura cultura es un “proceso constituyente y creador de la historia huma-na”, historia que se desarrolla en un espacio geográfico y temporal de-terminado, definiendo la Nación, constituyendo la venezolanidad. “De la coherencia y la fortaleza cultural emergerán la autoestima, las identidades, la formación integral del ciudadano, la lealtad a la Patria y la valoración del trabajo y la familia…”.

El Comandante Chávez dejo claro que la Revolución Bolivariana es esen-cialmente un gran proyecto cultural, un gran suceso en el alma de los pue-blos. En el Discurso de presentación del Proyecto de Reforma Constitucio-nal ante la Asamblea Nacional del 15 de agosto de 2007 nos dice: “Ideolo-gía, ideología y más ideología es la superestructura. Una de las bases más

fuertes de la superestructura, que cuesta más para ir cambiando, las costumbres, el sentido común, es la ideología en todos sus nive-

les, como dice Gramsci y como dice Toni Negri… libros, libros y más libros. Ser cultos para ser libres. Esto nos va a obligar a

estudiar mucho sobre geografía, política, ciencia jurídica, ciencia histórica, ciencias sociales, poder popular…”

Esas costumbres, ese sentido común, de los que ha-bla Chávez no son nuestras tradiciones, no vienen de nuestra historia, de nuestro sentir, son más bien ex-presiones del pensamiento hegemónico dominante construido por el imperialismo, para, en primera ins-tancia desarraigarnos del territorio y por lo tanto disol-

ver nuestras identidades, con el único fin de tejer sobre el territorio que ya no sentimos nuestro, la red del impe-

rialismo neoliberal. Es por ello que la cultura debe conver-tirse en un proceso constituyente que investigue, amase, rea-

nime, promueva, difunda, proteja, valore los elementos cultura-les constitutivos de la venezolanidad y se trasforme en estrategia y táctica, para tejer una red que se apropie del territorio y saque de allí los elementos culturales que definen y construyen la hegemonía cul-tural del imperialismo neoliberal. Esa es la tarea para “…los que sen-timos la Patria hasta en las vísceras, como diría Augusto Mijares…”

El 8 de Diciembre del 2012 volvemos a oír su voz recordándonos el pro-yecto cultural que es la Revolución Bolivariana, Socialista y Chavista: “…a nosotros nos tocó retomar las banderas de Bolívar, las banderas desgarra-das, nos tocó retomar las banderas mancilladas, la bandera patria, ésta que aquí está, amarillo, azul y rojo y sus ocho estrellas, como mandó Bolívar desde Angostura, ocho estrellas, y más allá, las banderas del Pueblo, bande-ras mancilladas, desgarradas, pisoteadas durante, bueno, casi todo el siglo XIX después de la epopeya y durante casi todo el siglo XX y nos tocó a noso-

MARÍA A. GARCÍA

Al encuentro con Chávez Conmueve oír a Chávez. Sus “Aló Presidente” son un reto para cual-quier orador del Siglo XXI. Así fui-mos acercándonos a una personali-dad que atraía por su fuerza y con-vicción al decir lo que con solidez de pensamiento, ya había trazado para la obra del futuro. Mientras más ten-sión, más breves y fuertes sus oracio-nes, sin dejar de cantar el poeta que se encubría detrás de cada alocu-ción. ¿Cuándo sería el encuentro?

El 5 de marzo de 2013, lloré en tierra mexicana. Más lejos aún es-taba de mi quimera. Qué difícil entender que lo más lejos, puede ser lo más cerca.

Lo quise conocer personalmente, palparlo de tú a tú como a su pueblo. Él y muchos más lo hicieron posi-ble. Llegué a Venezuela y transité to-da Caracas, luego asciendo parte de la sierra cojedeña y desando el llano donde tantas batallas se han libra-do. ¡Que suerte! Habitar en los llanos que al decir de Hugo Chávez “está la esencia de la venezolanidad, pues en esta abierta sabana, en los vientos

libres que la acarician, en esa natura-leza bravía y en sus indómitas gen-tes se halla el núcleo profundo de la identidad venezolana”.

No podía ser diferente. Sus “gen-tes” siguen con él.

Cojedes, lo ha convertido en un símbolo superior a partir del 8 de di-ciembre de 2013. La felicidad se co-ronó cuando se supo que los nueve municipios cojedeños habían com-prendido la estrategia política y so-cial del Eterno Comandante. ¡Cha-vistas todos sus Alcaldes! .Testigo fui-mos desde este suelo, del duro bre-gar del triunfo. Él lo decía: “nada se-rá fácil, pero es posible”.

Ya lo conozco. Vivo dentro de su obra.

Es visible. Los niños con sus canai-mitas, los ancianos con sus pensio-nes, los jóvenes con acceso libre a los estudios universitarios, las arpas, violines y cuatro en manos de los cultores desde todos los escenarios. Los alimentos acercándose al pue-blo. Bus-Taguanes, aproximando la sierra al epicentro de Cojedes.

Caminando me sorprende Barrio Tricolor. Familias cuentan que tie-

nen lo que no tenían. Condición chavista de hacer justicia.

Sigo con el fervor acumulado de llegar al Comandante. Comprendí que estaba en el pueblo cuando las guarimbas de este febrero. Muy cer-ca lo tuve. La paz triunfó en las calles. La tranquilidad reinó cuando los ni-ños paseaban y reían, junto a su fa-milia por todas las calles de San Car-los en Carnavales de Paz y de Vida.

Seguiré junto a él; lo descubrí en semillas germinadas y diseminadas por doquier. La solidaridad triunfó.

Regreso al Cuartel de la Montaña, con la humilde flor amarilla que des-de el Caribe traigo para dar gracias al Comandante Eterno, Hugo Rafael Chávez Frías. No me despido porque la obra sigue y Chávez vive.

La grandeza del Soberano se resume en solo hombre Hugo Chávez quien luchó los la libertad y la unión de los pueblos, Comandante en jefe de la Fuerza Armada de la República Bolivariana de Venezuela y único militar que dedicó y sacrificó su vida por un pueblo lleno de esperanza.

Comandante Supremo

La apropiación colectiva de la excelsa figura que fue y es al Presidente Chávez, tal y como él lo anunció, “Chávez no soy yo, Chávez es un pueblo” se ha hecho realidad entre millones de compatriotas, y actualmente después de su desaparición física pareciera que esta tendencia se ha reforzado, pero obligatoriamente hay que rescatar los valores que conformaban a ese Gigante de nuestra historia llamado Hugo Rafael Chávez Frías, quien con sus ejemplos de vida, alma y corazón, fijo patrones que deberían ser modelados por todos nosotros.

Yo soy Chávez

Todos Somos ChávezTodos somos Chávez porque somos Revolucionarios, socialistas, bolivarianos, luchadores, honestos, trabajadores, solidarios, éticos, responsables, camara-das, respetuosos, amorosos, cumplidos, respetamos las Leyes, creemos en la humanidad, entre otras nuevas frases que podríamos continuar agregando y que hagan referencia al precursor del amor y la paz en la sociedad venezolana.

El pueblo está claro, Con Chávez todo, sin Chávez nada, los hijos de la Revo-lución bolivariana han demostrado el poder de esta consigna después de su desaparición física, levantado su voz en los dos últimos procesos electorales, fortaleciendo la nueva independencia y forjando las bases para la ejecución de su testamento político.

Con Chávez todo, sin Chávez nada

Edición especial Chávez Vive

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