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Antonio Lloret Bastidas, histo-riador, escritor y cronista vitalicio de Cuenca, en una de sus funda-mentadas referencias históricas sobre la fundación española de esta ciudad, señala que “el Virrey del Perú, marqués Andrés Hurtado de Mendoza, dispuso la fundación de una ciudad de españoles en las tierras de Tomebamba, y, mediante provisión (orden) firmada en Lima el 11 de septiembre de 1556, ordenó al Gobernador de Quito, capitán Gil Ramírez Dávalos, que person-almente viniese a Tomebamba, la recorriese, y luego de ello, es-cogiese el mejor sitio, y una vez escogido procediese a fundar la ciudad y que luego se llamó de Cuenca, en homenaje a la ciudad nativa del Marqués de Cañete, Virrey Hurtado de Mendoza, nativo de Cuenca, España, provincia de Castilla”

Esa fundación tuvo lugar entonces el 12 de abril de 1557, fecha desde la que han transcurrido 452 años. La histo-ria revela que en las jornadas de fun-dación estuvieron con Gil Ramírez Dávalos, personajes como Juan de Salinas y Loyola, Rodrigo Núñez de Bonilla, Andrés Pérez de Luna, Gon-zalo de las Peñas, Antón de Sevilla y los caciques Diego y Juan Duma, Luis y Hernando Leopulla, estos últimos nativos de la antigua ciudad de Tomebamba. El antiguo nombre de Cuenca, al amparo de la soberanía cañari, fue Guapodélig que significa “llanura grande como el cielo”“Escogido el sitio por Gil Ramírez Dávalos y efectuada la fundación en tierras de pan labrar –señala la historia-, de agua perpetua, maderas, minas de piedra y mármol, dibujado su plano, repartidos los solares y constituido su ayuntamiento”, Cuen-ca tuvo un armonioso nacimiento. Y Ramírez Dávalos, como reconoci-miento a su tarea fundacional, por disposición de Andrés Hurtado de Mendoza, recibió el título de Guar-da Mayor de la ciudad de Cuenca, a perpetuidad.

Semblanza de Núñez de BonillaEl conquistador Rodrigo Núñez de Bonilla, capitán español, quien, como queda explicado, intervino en la fun-dación de Cuenca, con cuyo nombre se identifica una avenida de esta ciudad, fue “vecino de Quito, Tesorero de la Real Audiencia, dueño de fincas y casas en Tomebamba, encomendero de in-dios. El plantó unos molinos de harina (en Todos Santos), los cuales fueron los primeros de la comarca”. El nombre de este español reviste importancia para Cuenca, en virtud de que, histó-ricamente, es conocido como que fue el primer industrial que tuvo Cuenca “antes de la fundación española”.

Andres Hurtado De Mendoza,virrey Del Perú En realidad, el visionario fundador de Cuenca, por intermedio de su delegado personal, el capitán Gil Ramírez, resulta ser el Virrey del Perú, Andrés Hurtado de Mendoza, el marqués de Cañete. Fue nativo de Cuenca, provin-cia de Castilla, España, “de sangre real, cercano al emperador Carlos V. Pues en 1556, Andrés Hurtado de Mendoza, mediante la respectiva providencia, instruye al Gobernador de Quito, Gil Ramírez Dávalos, para “que fundara un pueblo de españoles en los asientos de Paucarbamba, que están en la pro-vincia de Tumipamba”, se expresa.El delegado “cumple al pie de la letra el mandato del Virrey, junto con sus pro-lijas instrucciones... hasta cuando, en premio a sus servicios y lealtad, el Vir-rey Hurtado de Mendoza le nombra, en septiembre de 1556, Gobernador, Justi-cia Mayor y Alguacil de Quito, Guaya-quil, Loja, Puerto Viejo y Zamora”.La historia continúa y refiere que “po-cas ciudades del mundo nacieron tan armoniosas como Cuenca, a la que se dejó de hecho con su nombre de Santa Ana de los Ríos de Cuenca. Pues hubo pleno asentamiento de los caciques del lugar; se señalaron superficies ejidables para el pastoreo de ganados; se determinaron montañuelas para el aprovisionamiento de maderas y leña, y todo esto, sin arrebatar nada a nadie”.

Escogido el sitio, se efectuó la fundación en tierras de pan labrar –señala la historia-

Gil Ramírez Dávalos, fundador de Cuenca

RECORDACIÓN

Renace Paucarbamba

Siempre recurrimos a la historia para con-firmar acontecimientos de trascendencia que fueron parte de la fundación española de Cuenca, el 12 de abril de 1557, en tierras que fueron patrimonio de “la gran nación cañari”, en principio, y luego de la civilización incási-ca que avanzó desde el sur.De acuerdo con esta línea de procedimiento, “en 1534, a pocos años de que Atahualpa arra-sara la ciudad de Tomebamba, cuna de su pa-dre, pasan por allí las huestes de Sebastián de Benalcázar en persecución de Rumiñahui. Los cañaris, que guardan secreto rencor, se unen a los aventureros conquistadores y tien-den su diestra al español que los asombra y deslumbra. Allí es cuando piensan en fundar un asiento de españoles, en la comarca de Pau-carbamba”. Vienen entonces “don Diego de Sandoval, don Gonzalo Gómez de Salazar, don Alonso de Montenegro don Francisco de Campos, don Rodrigo de Salazar, don Pedro Márquez, don

Rodrigo Núñez de Bonilla, todos en condición de encomenderos o como pacificadores.Remigio Crespo Toral, al referirse a la funda-ción de Cuenca, expresa “que puede conside-rarse este hecho tan solo como una restaura-ción, o mejor renacimiento de Tumipamba, sin que por ello deje de considerarse memora-ble el acta de Gil Ramírez Dávalos, como los detalles de la distribución de la ciudad hispá-nica, con escudo de armas y pendón real, re-partimiento de solares y tierras entre vecinos españoles y con fueros para los pobladores y naturales, con ejidos propios y ordenanza de comunidad”.Luego de fundada la ciudad, el 18 de abril de 1557 se constituye el primer Cabildo, con la comparecencia de Gonzalo de las Peñas, An-drés Pérez de Luna y Nicola de Rocha, para to-mar posesión “por un año cumplido del oficio de Alcalde u Ordinario, el primero, y de Regi-dores, los segundos, con la obligación de tener a la ciudad en paz y justicia”.

Antecedentes de la fundación

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Relevante posición

Las universidades que cumplen labores académicas en Cuenca confirman la relevante posición que ostenta la educación superior, en esta ciudad y el resto del país. Entre las principales están la Estatal de Cuenca, la del Azuay, la Politécnica Salesiana y la Católica. Colegios de prestigio, institutos, escuelas y jardines, complementan el quehacer educati-vo de una ciudad en desarrollo.El Conservatorio de Música José María Rodríguez, academias e institutos destinados a cultivar el arte, la pintura, la música, la danza, el teatro y otras expresiones cultura-les, constituyen el amplio espacio en el que se sustenta la vida espiritual y recreativa de Cuenca. La Bienal Internacional de Pintura; las galerías de arte, los centros de exposición, los conciertos de música, la Orquesta Sinfó-nica de Cuenca y la permanente presentación de libros sobre literatura, temas científicos y de orden investigativo, político y económico,

conceden a Cuenca un sitial de honor en la vida nacional. En este contexto, la Municipa-lidad de Cuenca, para reconocer la trayecto-ria de los mejores exponentes de la pintura, escultura, agricultura, periodismo, magiste-rio, artesanías, la industria, la literatura y el deporte, entre otras actividades, tiene insti-tuidas las siguientes condecoraciones:Santa Ana de los Ríos de Cuenca, Municipa-lidad de Cuenca, Fray Vicente Solano, Virrey Hurtado de Mendoza, Benigno Malo, Gaspar Sangurima, Gil Ramírez Dávalos, Hermano Miguel, Abelardo J. Andrade y la insignia honorífica Al Mérito Deportivo.Las condecoraciones Santa de los Ríos de Cuenca, Virrey Hurtado de Mendoza, Gil Ra-mírez Dávalos, Hermano Miguel y Abelardo J. Andrade, se entregan el 12 de Abril. Mu-nicipalidad de Cuenca, Fray Vicente Solano, Benigno Malo y Gaspar Sangurima, el 3 de noviembre.

Cuenca, ciudad de jerarquía académica, artística, cultural literaria

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Un título o categoría que honra y dignifica a Cuenca, conferido por la UNESCO (Or-ganización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura), es el de Patrimonio Cultural de la Humanidad, de acuerdo con una resolución adoptada el 1 de diciembre de 1999.

Sin duda alguna, la UNESCO, para otorgar esta jerarquía especial a Cuenca, a través de sus áreas especializadas, realizó un estudio exhaustivo de sus antecedentes históricos, de sus valores culturales, sus testimonios arqui-tectónicos, de su entorno natural, sus museos e iglesias, casas y antiguos edificios. Este con-junto de atributos, más la firme gestión de la Municipalidad, representada en esa época por el alcalde Fernando Cordero, fueron los facto-res para que Cuenca sea reconocida por el or-ganismo mundial, como Patrimonio Cultural de la Humanidad.

HitoEn el Hemiciclo de las Banderas, frente a la

calle Sucre y al edificio de la Municipalidad, sobre un artístico pedestal, reposa una placa de bronce con letras de molde, cuyo texto con-firma lo señalado en líneas anteriores, tanto en Español como en Inglés. La versión de la declaratoria es la siguiente:

“EL COMITÉ DEL PATRIMONIO MUNDIAL INSCRIBIÓ, EL 4 DE DICIEMBRE DE 1999, AL CENTRO HISTÓRICO DE SANTA DE LOS RÍOS DE CUENCA, EN LA LISTA DEL PATRI-MONIO MUNDIAL CONFORME A LO ESTA-BLECIDO EN LA CONVENCIÓN PARA LA PROTECCIÓN DEL PATRIMONIO MUNDIAL, CULTURAL Y NATURAL (UNESCO, 1972). LA INSCRIPCIÓN EN ESTA LISTA CONFIRMA EL VALOR UNIVERSAL Y EXCEPCIONAL DE ESTE SITIO, QUE DEBE SER PROTEGIDO PARA BENEFICIO DE LA HUMANIDAD”.

El texto de la versión en Inglés señala:

“THE WORLD HERITAGE COMMITTE INS-CRIBED, IN DECEMBER 4, 1999, THE HISTO-

RIC CENTER OF SANTA ANA DE LOS RÍOS DE CUENCA, UPON THE WORLD HERITAGE LIST, ACCORDING TO THE CONVENTION CONCERNING THE PROTECTION OF THE WORLD CULTURAL AND NATURAL HERI-TAGE (UNESCO), 1972)” .“INSCRIPTION ON THIS LIST CONFIRMS THE EXCEPTIONAL VALUE OF THIS SITE, WHICH DESERVES PROTECTION FOR THE BENEFIT OF ALL HUMANITY”.

Este es uno de los méritos con que Cuenca lle-ga a conmemorar sus 452 años de fundación española. Un texto literario hace alusión a este acontecimiento, en estos términos: “La hueste ibérica, guarnecida de hierro, armada de ar-cabuces y albardas, bajo la conducta del caba-llero Don Gil Ramírez Dávalos, trajo la cruz y la espada. Con recias y sonoras voces caste-llanas, fundó la ciudad de Santa de los Ríos de Cuenca, el lunes santo del 12 de abril de 1557, fecha que se convirtió en signo y semilla de su profunda vocación por la vida del espíritu, sea religión, arte o pensamiento”.

La UNESCO otorgó esta jerarquía a la ciudad luego de un exhaustivo estudio

Cuenca, Patrimonio Cultural de la Humanidad

RECONOCIMIENTO

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Reflexión

“Es indispensable que cada uno de los cuencanos tengamos perfec-ta conciencia del significado de la expresión Cuenca Patrimonio Cul-tural de la Humanidad. Nuestra ciudad ha sido elegida entre los lu-gares del mundo que merecen este calificativo, por distintas razones, por ejemplo la forma armoniosa como se combinan en ella los ele-mentos naturales y la arquitectura de carácter colonial y republicano. ¿ Se han puesto a pensar ustedes en la belleza tan particular que tiene El Barranco, esa especie de ceja sobre el río Tomebamba, llena de casitas de atractiva construcción y materiales tradicionales, que miran tanto hacia la ciudad nue-va como hacia el casco antiguo ?”, pregunta el escritor Jorge Dávila Vázquez. “Es un privilegio de la naturaleza, que los cuencanos han sabido, des-de siempre, integrar a su vida y a su forma de construir su habitación. ¿ Y se han fijado en cómo las calles del Centro Histórico están trazadas

con una regla ? ¿Cómo desde el Par-que Calderón se mira la Iglesia de San Blas, el límite Este de la ciudad tradicional, y la de San Sebastián en el límite Oeste ? ¿ Y no han re-flexionado en que esta traza viene desde la fundación y refleja la idea de equilibrio, de claridad, de armo-nía que tenían los planificadores de la época del Renacimiento”, insiste en preguntar el escritor.“Y, por último, cuando vienen los españoles se enamoran del lugar y fundan una ciudad que tiene el mis-mo nombre de la Cuenca de España, que está también entre ríos y tiene un magnífico barranco...”, agrega.Cuenca, al cabo de 452 años de fun-dación, afronta los retos de la mo-dernidad, sin descuidar su pasado, en los ámbitos de la cultura, de pers-pectivas de desarrollo urbano, del turismo, la industria y el comercio. Cuenca luce moderna, dinámica y también antigua, corrientes que contribuyeron para que la UNES-CO lo declare Patrimonio Cultural de la Humanidad.

¿Por qué la declaratoria de la UNESCO?

Referentes

“En San Sebastián, uno de los barrios más caracteriza-dos de Cuenca, se encuentra el Museo de Arte Moderno, al que le cobija un inmueble de arquitectura tradicional, cuidadosamente restaurado: la antigua Casa de Tempe-rancia, donde en otra época se combatía, con disciplina férrea, la inclinación a la bebida, en particular de los miembros del clero”“Elementos arquitectónicos de los más modestos: teja, adobe, madera basta, han sido puestos en valor por los arquitectos que sienten como una de sus obligaciones el rescate amoroso del pasado, para integrarlo a la vida moderna, como sede de uno de los museos locales. Este centro de cultura recoge, des-de hace varios años ya, a la Bienal Internacional de Pin-tura de Cuenca y cuenta con una serie de cuadros donados por el pintor cuencano Luis Crespo, residente en Europa, y con una pequeña, pero im-portante, colección de obras

plásticas contemporáneas del Ecuador. Usualmente, en este escenario se presentan exposiciones temporales”“Situado en las calles Herma-no Miguel y Juan Jaramillo, ocupando parte del Monaste-rio de las Religiosas Concep-cionistas, se encuentra el Museo de las Conceptas. Este escenario permanece abierto al público desde hace muchos años y posee una importante colección de arte religioso, escultura y pintura, que se remite a los siglos 16-19; arte-sanías tradicionales, juguete-ría y piezas de mobiliario”“Destacan un retablo navi-deño en pan de oro y plata, lleno de figuritas que son muestras de la imaginería po-pular cuencana; un calvario manufacturado por Miguel Vélez, uno de los reconocidos escultores locales del siglo 19, conjunto en el que se destaca el Cristo, una de las obras maestras de este género en el país...” (Extractos del libro: Cuenca...una ciudad diferen-te).

Testimonios patrimoniales

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Alegre, el cielo es un manto

azul con nubes de armiño;

y hasta el Padre Sol del Inca

ríe feliz, como un niño.

Los bronces tañen solemnes

en los viejos campanarios,

cual si hablaran con las voces

de los cuatro centenarios

El eco de las trompetas

rueda en las siete colinas;

y los cuatro ríos cantan

con sus aguas cristalinas.

Por las luces brotan estrellas

en cirios y lampadarios;

y es la presencia divina

más divina en los Santuarios

El latido de cada pecho

es la nota de un cantar,

como el trino de las aves

es orquesta en el pinar.

En la campiña y el huerto,

retamas y capulíes,

han tejido una corona

de oro en flor de rubíes...

El 12 de abril en una versión poética

Autor: Ricardo Darquea Granda

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Contadas veces apareció su nombre en el diario que con pasión y esfuer-zo fundó y jamás estuvo en la por-tada de EL TIEMPO, salvo el día de su muerte, el 31 de agosto de 1998.

Así era Humberto Toral León (1909-1998), un personaje de vida austera, sen-cilla, alma diáfana y quehacer intacha-ble que llevó en sus venas la pasión por el periodismo, trabajando en las artes gráficas desde los 12 años.Se inició en el trabajo de la impresión a corta edad. En 1924 colabora con los hermanos Sarmiento Abad, en El Mercurio, hasta que más tarde pudo plasmar el sueño de contar con su pro-pio periódico, EL TIEMPO, que vio la luz el 12 de abril de 1955.Desde esa fecha Toral León se convirtió en parte inseparable del periodismo de Cuenca y el Ecuador del siglo XX, pues habiendo instaurado el diarismo en esta ciudad, a través de su periódico fue

testigo del acontecer local y nacional y reflejó las necesidades e intereses de la morlaquía, sin apasionamientos ni compromisos.

IniciosEn la calle Bolívar y Borrero, frente al Banco del Azuay funcionaba el modesto taller donde nació EL TIEMPO, el 12 de abril de 1955, que circulaba en sus primeros días los jueves y domingos. Humberto Toral, con el apoyo de su hermano Daniel comenzaron en con-diciones elementales, con una prensa Chandler trabajando en largas noches de vela, para luego de los años contar con el apoyo de sus hijos mayores.Jamás pecó de injusto, combatiendo la mentira y las vanidades que lo irrita-ban y siempre empeñado en el trabajo infatigable y para ello contó desde el inicio con un eficiente grupo de articu-listas y redactores a los que motivó en la defensa de los intereses de Cuenca

y de su gente. Luego de pocos años se trasladó a un local más amplio, en la misma calle Bolívar, frente a la iglesia de San Alfonso, desde donde pasaría más tarde a la Hermano Miguel y Bolí-var (hoy Mutualista Azuay) y luego a su edificio propio en la misma Hermano Miguel y Gran Colombia, junto al IESS, instalaciones que sirven en la actua-lidad como oficina central del Diario, pues la planta matriz funciona desde hace 12 años en la avenida Loja, sector de El Salado.

IndependenciaPero quizá uno de los mayores méri-tos del fundador de EL TIEMPO fue la independencia que imprimió en el Diario como valor absoluto, lo cual le permitió reclamar sin recelos, apegos o condescendencias a cuantos se oponían al progreso de su amada Cuenca.Fue un fiel portador de la opinión de la ciudad y el país, inspirado por un

profundo sentimiento de patria, sólo comprometido con los intereses de sus conciudadanos.Quienes lo recuerdan hasta hoy, sus compañeros de diarismo, familiares y amigos, lo tienen en la memoria como un caballero, de honestidad total, un trabajador sacrificado y ejemplo de perseverancia.Su actividad multifacética lo convirtie-ron en un considerado hombre público, siendo reconocido en varias oportu-nidades por el Congreso Nacional, Ministerio de Trabajo, Municipalidad de Cuenca, Cámaras de la Producción, gremios de periodistas nacionales y locales. Valga este nuevo aniversario, el 54, de EL TIEMPO, para recordar a la figura que hizo posible la circulación de este medio de comunicación, hoy una tradición de la cuencanía, que busca de forma permanente continuar con los principios e ideales que guiaron a su gestor.

Un camino de dedicación y esfuerzo recorrió su fundador Humberto Toral León

EL TIEMPO: Su nacimiento y su gestor

HOMENAJE

Apoyo

Su esposa Raquel Calle de Toral nació el 18 de junio de 1919, en Biblián, provincia del Cañar, estudió como interna en la escuela y colegio La Providencia de Azogues y llegó a Cuenca en 1935, a la edad de 16 años, acompañada de su padre Daniel Calle, que había enviudado y contrajo nupcias con la dama cuencana Isabel Agui-lera. Vivió una vida recatada, dedicada a los estudios y tareas del hogar, la costu-ra era su gran afición, hasta que a los 23 años contrajo matrimonio con Humberto Toral León. Con él procreó nueve hi-jos y compartió 55 años de matrimonio, hasta la muerte de su esposo en agosto de 1998. De sus hijos René, Mag-dalena, Marcelo, Iván, Mariana, Patricia, Fer-nando y María Augusta, tuvieron una descenden-cia de 23 nietos y diez bisnietos.Fue su gran puntal, cuando en abril de 1955, Humberto Toral decide fundar el EL TIEMPO, ella lo motivó e incenti-

vó para con la coopera-ción de sus hijos mayo-res impulsar la empresa familiar.Doña Raquel amanecía mirando al cielo, para ver si llovía o salía el sol, pues del clima depende-ría el éxito de la circula-ción del periódico.Muchas veces su temple se quebró cuando en épo-cas de persecuciones a la prensa, su esposo tuvo que alejarse del hogar para proteger su integri-dad, como en tiempos de dictaduras militares.Como esposa de perio-dista estuvo siempre atenta a los sucesos locales, nacionales e internacionales y ofre-cía su criterio sobre los mismos.Siempre obediente a los deseos de su esposo, le acompañó en todos los viajes que su cónyuge realizó alrededor del mundo, cumpliendo su sueño de niño y para ampliar sus conocimien-tos sobre otros países y en las artes gráficas, a través de ferias interna-cionales.Visitaron juntos todos los países del continente

americano y siempre recordaban con emoción los viajes que realizaron juntos a Europa, Asia y Africa, donde por varias oportunidades pisaron tierras exóticas y por demás extrañas, de las cuales trajeron numero-sas fotografías y recuer-dos que reposan en un museo que fue confor-mando a lo largo de los años y que luego de su muerte su compañera lo guardó con gran celo.Sin duda fue su apoyo moral, su principal consejera a la hora de tomar decisiones y la im-pulsora para cada reto que Humberto Toral iba asumiendo en EL TIEM-PO: de bisemanario a in-terdiario, luego a diario; de un local arrendado a un edificio propio, con la meta de adquirir equi-pos y maquinarias, que para la época resultaban impensables. Por todo ello, Raquel Calle de Toral fue apoyo fundamental en la vida de EL TIEMPO, reafir-mando lo dicho de que junto a un gran hombre siempre hay una gran mujer.

Su inseparable compañera

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12 de abril de

1955EL TIEMPO inicia sus actividades en un incipiente taller, donde se orde-naban uno a uno los tipos (letras) y se imprimía en una prensa manual, actividad titánica, hoy impensable. El taller estaba en la calle Bolívar y Bo-rrero. Humberto Toral León como di-rector, junto su hermano Daniel, que también laboró en las artes gráficas, como gerente, publican el periódico en una imprenta que disponía de una prensa manual Chandler, adquirida en Ohio, Estados Unidos, a un costo de 60 mil sucres. El tesón de Humber-to y su hermano Daniel permiten el inicio del periódico.En la planta de redactores estaban Ar-turo Salazar Orrego, Víctor Manuel Albornoz, Alberto Andrade Arízaga, Saúl Tiberio Mora, Manuel Muñoz Cueva y Luis Moscoso Vega.El primer tiraje fue de 600 ejemplares a un precio de 60 centavos de sucre, con 16 páginas, impresas en colores amarillo y rojo.En la primera portada se publica la perspectiva del edificio de la Casa de la Cultura, Núcleo del Azuay, cuya construcción comienza en esa época.

12 de abril de

1971 EL TIEMPO da un gran salto, de bisemanario se convierte en diario de la tarde, luego de varios años de circulación, junto a destacados periodistas que conformaron el cuerpo de redacción, entre ellos Hugo Ordóñez Espinosa, Manuel Ignacio Neira Carrión, Juan Viteri Durand, Marco Tello Espinosa, Rolando Tello Espinosa, Antonio Lloret Bastidas, siempre bajo la entusiasta conducción de Humberto Toral León.Se utiliza el sistema caliente para la elaboración del periódico, una prensa plana Heidelberg, tres intertipos y un taller de fotograbado.En la primera edición de EL TIEMPO como diario se concreta una misión al publicarse una edición de 28 páginas, en la que varias firmas comerciales saludan a Cuenca en su fecha de fun-dación en espectaculares impresiones en colores planos.Años después se suman otros colabo-radores como Galo Vázquez, Eliécer Cárdenas y Vicente Tello en la foto-grafía.

15 de abril de

1971 Se produce un hecho que vino a tras-tocar la historia de los cuencanos: el debut del Deportivo Cuenca, que revo-luciona la historia del deporte azuayo y cuyas incidencias EL TIEMPO las despliega con todo furor.En ese año el valor del ejemplar es de un sucre con 20 centavos.EL TIEMPO incluye el servicio de no-ticias internacionales provenientes de la Agencia Francesa de Prensa AFP, a través del teletipo, a un costo de 12.500 sucres mensuales, cuando el dólar se cotizaba en 25 sucres.

4 de febrero de

1980EL TIEMPO da un giro en su histo-ria al pasar del sistema caliente al sistema frío de offset y composición, dejando atrás toda la maquinaria que hasta entonces se utilizaba para la edición del periódico. Ello fue fruto de una meditada decisión que significó una fuerte inversión para los directi-vos del medio,Con los nuevos equipos se mejora la calidad e impresión del periódico y se consigue una mejor distribución de cada una de las páginas. Se comienza circulando con un promedio de siete mil ejemplares diarios.Se incorporan las fotocomponedoras Compugraphic, la cámara Robertson Corsair y la rotativa Harris B15A, provenientes de los Estados Unidos, que para la época significó una fuerte inversión.El ejemplar incrementa su costo a 2,50 sucres y circula con una edición de 20 páginas.

12 de enero de

1992El Diario adquiere modernos equipos de computación e impresoras láser con lo que cambia la presentación del periódico y de su revista La Pluma. Las computadoras se introducen en las artes gráficas.

8 de octubre de

1995Se inaugura la nueva y moderna planta de EL TIEMPO, situada en la avenida Loja y Rodrigo de Triana, sector de El Salado, dotada de los más modernos equipos de diagramación e impresión. Mediante una emotiva ceremonia se bendice e inaugura el edificio, que por sus características recibió el Premio Gil Ramírez Dáva-los que concede la Municipalidad de Cuenca, a la mejor edificación levan-tada en Cuenca, en ese año.

12 de abril de

1997EL TIEMPO cambia su tradicional formato tabloide por el estándar para estar acorde a las tendencias del momento, en cuanto al diarismo, a nivel nacional y mundial. La acogida ciudadana a la transformación resul-ta evidente.

31 de agosto de

1998EL TIEMPO está de luto, Humberto Toral León, su director-fundador fallece a los 89 años de edad, pese a su quebrantada salud visitó las instala-ciones del Diario pocos días antes de su muerte. Las banderas de Ecuador y de Cuenca lucen a media hasta frente a la planta del Diario. Su hijo René Toral Calle asume las funciones de director del Diario hasta la actualidad.

14 de enero de

2005Al aproximarse sus bodas de oro de fundación, EL TIEMPO festeja a lo grande y lo hace cambiando su horario de circulación a la mañana. El diario se convierte en matutino respondiendo a la solicitud de miles de lectores y anunciantes, quienes consideran necesario otro espacio pe-riodístico en Cuenca, abierto a todas las corrientes y opiniones.

12 de abril de

2005EL TIEMPO cumple cincuenta años al servicio de la cuencanía y para festejarlo sus directivos organizan una amplia y variada programación cultural, social, con la participación de diferentes actores y escenarios para celebrar este acontecimientoSe destacó la sesión solemne de aniversario a la que asistieron los directivos de los principales diarios del país.El Diario y sus directivos reciben infinidad de acuerdos y felicitacio-nes de parte de diferentes entidades y organismos, resaltando la Presea Santa Ana de los Ríos de Cuenca, máximo galardón que concede la I. Municipalidad a las instituciones más distinguidas en su compromiso con la comunidad. El director René Toral Calle recibió la condecoración.

Octubre-diciembre de

2007EL TIEMPO y todo su personal desa-rrollan un proceso de modernización de contenidos, procesos y reingenie-ría con la asesoría de la consultora internacional La máquina de ideas, bajo la dirección del experto mexi-cano Carlos Etcheverry para estar a tono con los avances en la edición de medios impresos en Latinoamérica, a fin de complacer los requerimientos editoriales y técnicos de los lectores contemporáneos.

Agosto de

2008EL TIEMPO en el ciberespacio. Siguiendo los avances de la ciencia y tecnología, EL TIEMPO ingresa a la información digital y crea su página web, con servicio ágil y de última hora, que ofrece en detalle la informa-ción diaria para ser visitada por miles de cibernautas del país y del mundo. Actualmente la página web www.eltiempo.com.ec registra un pro-medio de 6.000 visitas diarias prove-nientes principalmente de cibernau-tas de diferentes lugares del mundo, especialmente de Estados Unidos, España, Brasil, Israel y Australia. Uno de los links más visitados de la edición digital de EL TIEMPO es la revista dominical La Pluma, pero además la web de EL TIEMPO está en el top ten de Google, en el rango de noticias ecuatorianas de coyuntura. Desde su nacimiento, hace sólo ocho meses, hasta la actualidad, www.eltiempo.com.ec ha registrado un crecimiento del 191 por ciento.

12 de abril de

2009En una etapa de franca superación y consolidado como diario matutino, EL TIEMPO celebra hoy 54 años de fundación, basando su trabajo en la objetividad periodística y el pluralis-mo que lo ha caracterizado desde sus inicios. Con este sustento ha ganado en los últimos años un importante espacio en la colectividad de Cuenca y la región austral, avanzando día a día en su proyección nacional, para lo cual cuenta con oficinas para corresponsalía informativa y servicio publicitario, en Quito, Guayaquil y Azogues.

Nombres y hechos que han dejado huella

Hitos en la historia del Diario de Cuenca

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Cuenca. La mañana del 26 de julio de 1996 se con-virtió en el día más glo-rioso del deporte ecuato-riano. Por primera vez un deportista ecuatoriano conseguía una medalla olímpica, nada menos que una de oro, en un hito de la historia del deporte y un ejemplo de superación que perdurará en el país por mucho tiempo.

Un joven de orígenes hu-mildes, criado en las calles cuencanas con más ganas y amor propio que prepara-ción, logró lo que muchos otros deportistas del país soñaron. El himno del Ecua-dor se escuchó por todo lo alto en Atlanta y el mundo entero. Jefferson Pérez des-

bordó la alegría de millones de compatriotas al conver-tirse en el campeón olímpi-co de los 20 kilómetros mar-cha.

ReconocimientosTras la gloria llegaron los reconocimientos. Aquel hu-milde cuencano se convirtió en la figura más importante del país y con el transcurrir del tiempo su legado fue cre-ciendo. No se contentó con una medalla y como él ma-nifestó “empiezo una nueva carrera, tal vez la más difícil de mi vida… en busca de la excelencia”.Este constante deseo de su-peración de Pérez lo llevó a convertirse en el deportista más completo en la marcha a nivel mundial. Logró todo

título que se atravesaba en su camino y fue reconocido en todo el planeta por su des-empeño. Pero la evolución deportiva de Pérez vino junto a su desa-rrollo personal. Se convirtió en un orador muy particular, sin temor a decir lo que pien-sa. Cada declaración suya constituía un sacudón para sus seguidores, una invita-ción a despertar y superarse, a dejar a las diferencias a un lado y a buscar la excelencia en cada actividad, a emular su ejemplo… El canillita que vendía periódicos se convir-tió en campeón nacional, sudamericano, panamerica-no, mundial y olímpico, con el único estímulo de creer en sí mismo y en sus capacida-des.

El cuencano considerado el marchista más completo del mundo

“Jeff” cambió la actitud de nuestros deportistas

PERSONAJE

Luis ChochoENTRENADOR DE MARCHA

O P I N I O N ES

Francisco FernándezCAMPEÓN EUROPEO

“Jefferson siempre tuvo algo especial, él quería llegar lejos y para ello era capaz de entregar todo”.

“Jefferson Pérez fue mi mejor rival y mi gran amigo. La marcha ya no será la misma sin en él”.

Fútbol

Cuenca. Treinta y tres años debieron pasar para que el Deportivo Cuenca se pro-clamara campeón del fútbol ecuatoriano, desde 1971, cuando el equipo inició su participación en el balompié profesional, hasta el 2004, año en el cual levantó el trofeo por primera vez y su nombre sonó nuevamente en el ámbito internacional.

De aquel exitoso equipo que paralizó una ciudad ya quedan pocos nombres. Uno de ellos y el más representa-tivo para los cuencanos es el volante Pablo Arévalo, único morlaco entre la plantilla titular, para quien el título tuvo un sabor especial.

Cariño“El Cuenquita está en el corazón de todos los futbo-

listas locales, . Cuando uno empieza a jugar y abrirse espacios en esta profesión, uno de los anhelos es llegar a las filas del equipo”, comentó Arévalo.“El Cuenca es parte de la cultura de la ciudad. Los hinchas sufren en cada partido. La semana es mejor si su equipo gana y si pierde esperan que se termine lo más pronto posible para que llegue un nuevo partido. Eso les hace especiales. Son la hinchada más fiel del país, ya que está en los graderíos en los buenos y malos momen-tos”, agregó el volante. En su actual participación en Copa Libertadores el cuadro rojo está a un paso de escribir una nueva hazaña en su historia y clasificar a la tercera fase del torneo internacional.

Siempre busco la existencia en lo que hago y para mí no existen barreras ni límites para alcanzarla”.Jefferson Pérez Q.MEDALLISTA OLÍMPICO

D. Cuenca en el corazón de la hinchada

Cuenca. La historia cuenta que la primera vez que utili-zó unos zapatos especiales en una carrera le estorbaban. Se detuvo, se los quitó y termi-nó la competencia descalzo. Es así como el atleta cuenca-no Rolando Vera “El Chasqui de Oro”, empezó a escribir su historia en la calles de su ciudad natal y luego en Sao Paulo, en la célebre carrera de San Silvestre. Con apenas un metro y 57 centímetros de estatura, este atleta, nacido el 27 de abril de 1965, se convirtió por varios años en el referente del atletismo del Ecuador. Se mantuvo activo por casi dos décadas.Luchador por excelencia, se proclamó campeón de la carrera de San Silvestre en 1986. Fue el inicio de una serie de éxitos que incluye-ron dos campeonatos sud-americanos en 5.000 y 10.000 metros, tres participacio-nes olímpicas, así como el tetracampeonato consecutivo de la competencia brasileña (1986, 1987, 1988 y 1989).

TrayectoriaAl igual que la mayoría de

los atletas destacados de la ciudad, Vera tiene orígenes humildes. Una vez que brilló en el deporte, se catapultó a la política y a la dirigencia deportiva.Los cuencanos no olvidan que, durante cuatro años consecutivos, Rolando Vera les dio el mejor regalo de año nuevo. Por ello cada primero de enero resurge la esperan-za de que un nuevo “chas-qui” aparezca en las calles de la ciudad y tome la posta de aquel pequeño deportista que llenó de gloria a un país y especialmente a su ciudad natal.

Me quedé con una deuda pendiente con mi país, siempre desee entregarle una medalla olímpica y no lo conseguí”.

Rolando VeraEX ATLETA MARATON

Rolando Vera y su historia sobre el asfalto

El promotor y empresario

Ya retirado de la actividad competiti-va, y ahora en su papel de empresario, Jefferson Pérez auspicia a futuras promesas del atletismo ecuatoriano. Su fundación ayuda a niños de esca-sos recursos económicos para que accedan a educación y preparación deportiva. Por otro lado esta el Festival Atlético, mediante el cual busca situar a Cuen-ca como una de las paradas obligato-rias del calendario atletismo mundial. Se trata de un objetivo que requiere de esfuerzo y dedicación, condiciones que no son extrañas para Pérez, quien normalmente ha sabido remar contra corriente en busca de sus metas.

Los títulos de Jefferson

Atletismo

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E. Cuenca. El 30 de noviembre del 2004 fue un día que marcó un antes y después en la lla-mada fiesta brava en Cuenca. El Municipio de la ciudad, a través de una ordenanza, prohibió que los toros sean maltratados y sacrificados. Se trata de una actividad que es cuestionada en la mayoría de países del mundo y que, sin embargo, dentro del Ecua-dor solo ha sido vetada en la capital azuaya.

El Cabildo tomó la decisión basado en la ini-ciativa de la entonces consejala María Caridad Vásquez, quien lideró a un pequeño grupo de activistas que defendían los derechos de los animales. La edila, quien era parte de una mi-noría en el Consejo, logró convencer al resto de sus colegas para que la normativa sea apro-bada.Escaso ha sido el debate sobre el tema después de la ordenanza, en una ciudad sin una fuerte tradición taurina, a diferencia de lo que suce-de en la Sierra Central, con Riobamba y Amba-to, y en el norte de la Región Interandina, con Quito, según lo reconoce el escritor y aficiona-do a la tauromaquia, Eliécer Cárdenas, quien

es uno de los líderes visibles de la defensa de las corridas en Cuenca (ver recuadro inferior de esta página).

DebateMaría Caridad Vásquez, hoy titular en Azuay de la Secretaría Nacional de Planificación, Senplades, se desempeñaba en el momento que se aprobó la ordenanza como Presidenta de la Comisión Ambiental del Municipio. “El Alcalde era Fernando Cordero y no teníamos mayoría en el Consejo. Éramos tres contra doce, pero poco a poco logramos convencerlos de que la medida era oportuna y que no se oponía a las corridas, sino que estaba a favor de los animales”.Vásquez expresa que sí se debatió en la ciu-dad sobre el tema, sobre todo a nivel de me-dios de comunicación audiovisuales y dentro de universidades. Cárdenas, por su parte, sostiene que la discusión fue mínima. Con todo, una vez que se aprobó, las protestas o presiones para derogar la ordenanza no se caracterizaron por ser masivas.La consecuencia inmediata fue la cancelación

de la Feria Taurina de Cuenca, que llevaba nueve años consecutivos. La plaza Santa Ana, que es administrada por el Centro Agrícola Cantonal, pasó a recibir a diferentes tipos de actividades, distintas a las corridas: desde conciertos, pasando por desfiles de caballos de paso, hasta exhibiciones de motocross.“Hay que recordar que no se han prohibido totalmente las corridas. Pueden hacerse si los toros no son sacrificados. Lamentablemente no se han acogido iniciativas de ese tipo en la ciudad”, agrega Vásquez. La ex concejala sostuvo un diálogo con este Diario antes de que se concretara en la ciudad la realización de la llamada Corrida de Toros Incruenta, que debió realizarse ayer en la plaza Santa Ana.Lo cierto es que a cuatro años y medio de que Cuenca prohibiera sacrificar y torturar toros en las corridas, la ordenanza no es cuestio-nada por la gran mayoría de la población. Muchos ni siquiera la conocen. Cuenca lo-gró regular la actividad taurina de un modo que movimientos antitaurinos, sobre todo en Quito, han pretendido hace años.

Una ordenanza prohíbe matar a los toros. Es la única ciudad del país con esa ley

El olé no se oye en Cuenca desde el 2004

CONTROVERSIA

L A C I F R A

ferias taurinas se realizaron en Cuenca de manera consecutiva hasta que fue aprobada la ordenanza que im-pide matar a los toros, el 30 de noviembre del 2004.

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Mundo

María Caridad Vásquez dice que asistió una vez en su vida a una corrida de toros y nunca más quiso volver. Asegura que la ordenanza no tuvo dedicatoria alguna y que privilegió a los animales. A su criterio, Cuenca entró en una corriente internacional de repudio a la fiesta brava, que en el mismo 2004 se evi-denció con la prohibición de la actividad en Barcelona, en territorio español.Mariano Cruz, ex matador riobambeño y organizador de la corrida incruenta que de-bió realizarse ayer en la ciu-dad, reconoce la tendencia. Por ello tomó la iniciativa junto con el artista plástico Édgar Carrasco para ofrecer un espectáculo que no vio-le la ordenanza municipal. “Queremos privilegiar el arte y a nuestra medida también estamos de acuerdo con la or-

denanza”, acota Carrasco.En efecto, las manifestaciones antitaurinas fuera del Ecua-dor no son aisladas. España, cuna de la tauromaquia, re-gistra decenas de sitios en Internet contra las corridas. Organizaciones de defensa de animales suelen organi-zar dramatizaciones públicas e Europa y Estados Unidos para ridiculizarlas, con acti-vistas desnudos, cubiertos de sangre y tirados en el piso.Existe una página web del Movimiento Internacional contra las Corridas de To-ros, IMAB, por sus siglas en inglés, que tiene una página web, www.iwb.org, la cual está traducida a cinco idio-mas. En Quito, el movimiento roquero hizo se abanderó de la causa antitoros en los últi-mos años. Organiza marchas y plantones de rechazo, sobre todo en las fiestas de Quito.

Cuenca siguió una tendencia internacional en vigencia, que es de proteger a los animales”.Mariano CruzEX MATADOR DE TOROS

Una actividad que tiende a disminuir

Aficionados

Eliécer Cárdenas ve en el to-reo a una de las manifestacio-nes artísticas más llamativas a cargo del ser humano. No vacila en mostrar su enfado por la ordenanza municipal. “Deberían censurar toda acti-vidad. Que no se coma carne y no se mate a cualquier ser vivo, incluidos los insectos”, señala el escritor cañarense radicado en Cuenca desde su juventud.“A este paso deberíamos ser todos vegetarianos. Creo que tendríamos que dejar de lado la hipocresía”, añade Cárde-nas. El novelista ve en la or-denanza una imposición que pudiera obligar a las personas a ser una especie de “robots idiotas”. Señala que la huma-nidad necesita de actividades como la tauromaquia, no para matar o torturar a un animal, sino que en determinados momentos el mundo necesita de mitos para alimentar su imaginario. “El mundo no ha cambiado y Cuenca tampoco sin los toros”.Cárdenas, sin embargo, re-conoce que si el toreo quiere sobrevivir deberá dejar de

matar a los toros.Cáceres lideró a un grupo de aficionados a la fiesta brava que acudió al Municipio cuen-cano para pedir que se estudie la ordenanza. La solicitud no tuvo mayor eco. Iván Toral, también identifi-cado con los toros, cree que la ordenanza tuvo dedicatoria, porque en la ciudad el trato a los animales en general no ha mejorado, sobre todo el tema de los perros callejeros. Ma-ría Caridad Vásquez reconoce que el Municipio tiene pen-diente resolver este problema, que se ve a diario en las calles de la ciudad.

Respetamos la ley y por eso organizamos la corridas incruentas por las fiestas de fundación”.

Édgar CarrascoARTISTA

Los taurinos se oponen a la censura

O P I N I O N ES

Eliécer CárdenasESCRITOR

“Deberíamos volvernos todos vegetarianos por ley. Hay que dejar de lado la hipocresía”.

María Caridad VásquezEX CONSEJAL

“La ordenanza no se opone a las corridas, sino que está a favor de todos los animales”.

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La costumbre de haber estado 50 o 60 años con el sistema anterior cuesta cambiar a todos, incluidos a los accionistas, pocos aún se resisten”.Patricio SegarraPRESIDENTE DE LA CÁMARA DE TRANSPORTE

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Cuenca. La guerra del centavo se reflejaba en el correteo. Los buses competían y se rebasaban entre sí por subir más pasajeros. No respetaban las paradas. Todo eso pro-vocaba accidentes y ponía en riesgo la vida de quienes estaban en la vía pública a pie o en carro (público o particular). Ahora, con la caja común, les da lo mismo llevar “uno o mil pasajeros”. No se desesperan por competir, al menos entre socios de una misma compa-ñía; el correteo entre compañías persiste.

Los choferes ya no cobran el dinero de los pasajes. Los pasajeros meten las monedas en una caja cuyas llaves sólo las tiene la empresa que reparte equitativamente el dinero, entre los dueños de los buses, lo ganado en todos los vehículos. Los usuarios también pueden em-barcarse con la tarjeta Urbania (prepago).

LogrosEl objetivo es dar mejor servicio a los pasaje-ros aunque a corto plazo es difícil, el núme-ro de usuarios es alto. En promedio, 250.000 personas, el 70 por ciento de la población de la ciudad, se moviliza en buses. Son cifras ci-tadas por Patricio Segarra, presidente de la Cámara de Transporte. En Cuenca hay siete

compañías de buses, agrupadas en dos con-sorcios. El siguiente paso es implementar la caja común entre los mismos. Es decir, repar-tir entre los socios de ambas agrupaciones el dinero que se recaude en todas las rutas de la ciudad. Eso, a criterio de Segarra, eliminará el correteo en el Centro histórico, que por la estrechez de las calles hace más peligrosa la competencia. El respeto a las paradas ordena el tránsito. La presencia de delincuentes (carteristas) en los buses ha disminuido. Esos vehículos lle-van cámaras de video que permiten identifi-car la cantidad de pasajeros, el trato de cho-feres y ayudantes, y también la presencia de personas extrañas.

Dificultades“La costumbre de haber estado 50 o 60 años con el sistema anterior cuesta cambiar a to-dos, incluidos a los accionistas de las compa-ñías”, dice Segarra. La Cámara ha recibido denuncias de perso-nas que apenas recargan la tarjeta Urbania se les ha terminado el saldo en dos o tres pasa-jes. “Son casos aislados pero nos preocupan, no sabemos dónde queda el dinero, pero las tarjetas permite un historial de las mismas y

haremos un seguimiento para resolver el pro-blema”, explica.El trato a los usuarios es pésimo. Pese a que los buses ya no tienen la necesidad de compe-tir, gritan a los pasajeros para que se bajen al vuelo. Por ello, entre el 15 y el 20 de abril reci-birán capacitación.Otro problema ha sido la incógnita en el pasa-jero de si funcionará o no la nueva modalidad. El mayor inconveniente ha sido con los chofe-res “porque estaban acostumbrados a mane-jar el dinero de los pasajes”, según Segarra.

OrganizaciónPese a diferencias de criterios entre compa-ñías, la Cámara de Transporte se mantiene sólida y por ello funciona el sistema. En Ecua-dor sólo existen dos cámaras del ramo: la de Cuenca desde hace ocho años, y la de Quito desde hace poco. “En otras ciudades las com-pañías se ponen a pelear. Para ganar más pa-sajeros bajan el precio del pasaje, pero luego no tienen dinero para renovar la flota. Eso no se puede dar, tomando en cuenta que en el país el costo del pasaje no se ha incrementa-do desde hace varios años. La organización es clave para dar alternativas sin perjudicar al usuario”, dice el dirigente morlaco.

Cuenca es la única ciudad del país con un sistema de recaudación solidario en los buses

La caja común frena la guerra del centavo

HITO

O P I N I O N ES

Proceso

Cuenca. Los cambios en el servi-cio de buses de transporte público de la ciudad empezaron a finales de 1999 por iniciativa de sus due-ños, en conjunto con la UMT. Se redujo la flota, se la moderni-zó y se unificó el tamaño, color y otras características de los vehículos. Los buses actuales son relativamente nuevos en compa-ración con los de otras ciudades del país, tienen vida útil de cinco años.El sistema de recaudación que funciona desde finales del 2008 se empezó a planificar desde los últimos meses del 2002. A través de una convocatoria pública, tres empresas se interesaron por ma-nejar el sistema: Siemens (trans-nacional), Auto Track (quiteña) e Imagen Corporativa (cuencana). En el 2004 se firmó el convenio con Auto Track, pero el sistema no se implementó. El acuerdo

concluyó en el 2005 porque la empresa vendió el 70 por ciento de sus acciones a escondidas de la Cámara de Transporte, el contra-to prohibía transferir la propie-dad total o parcial de la misma.Finalmente, la Cámara inició diálogos con EB Corporation, empresa coreana que para esa fecha tenía ya un contrato con la Empresa Municipal de Transpor-te de Quito.Según Segarra, la nueva Constitu-ción establece un sistema de caja común para el transporte público en el país y cree que coinciden-cialmente la Cámara se adelantó en planificar la implementación de ese sistema en Cuenca. Aclara que no es nuevo, que funciona desde hace más de 30 años en Eu-ropa, Estados Unidos y en Brasil. Los dirigentes han tenido que invertir para viajar a esos sitios y adquirir experiencia.

Cambios en transporte empezaron hace 10 años

Cuenca. “Antes, al final del día todos tenían en los bolsillos el dinero que habían hecho (re-caudado). Pero unos tenían más, otros tenían menos. Ahora, todos al final del día tienen la misma cantidad indistintamente de la línea (ruta) o del número de pa-sajeros”, explica Segarra sobre la caja común. En el caso de la Compañía Cuencana, se suma el dinero que a la semana producen los 102 automotores y se lo divide en partes iguales para sus pro-pietarios.EB Corporation invirtió siete millones de dólares que los recu-perará en 10 años. Con ese dine-ro instaló un torniquete, un va-lidador, una caja monedera, una consola (cerebro) y dos cámaras de video en cada bus. A los due-ños de los vehículos no les costó nada, pero a cambio la empresa se lleva el 9.15 por ciento de la re-caudación diaria. Si en Cuenca hay 250.000 usuarios potenciales, el número de viajes o pasajes co-brado por lo menos se duplica. El dinero que arroja esa suma, descontado el porcentaje de EB Corporation, es repartido entre los dueños de los 475 buses de las siete compañias.El reparto se hace cada semana. Lo que se recauda de lunes a do-

mingo, se cierra caja el lunes y se lo entrega el viernes. Se estima que se suben 3.5 pasajeros por cada kilómetro recorrido.Diego Astudillo, director de la UMT, explica que los objetivos del sistema son romper la propiedad individual de los buses (pasan a ser parte de las compañías) e im-plementar tecnología para el re-parto equitativo de las ganancias. En seis meses más se instalará una central de monitoreo en la UMT y en la Cámara. Desde allí se controlará el número de pasaje-ros. En dos meses los dos consor-cios escogerán las troncales (con rutas diferentes) para ampliar la caja común.

Hay críticas, pero es un sistema que está en marcha, único en el país y que sin duda mejorará. Es un plan piloto para el resto del Ecuador”.

Diego AstudilloDIRECTOR DE LA UMT

El sistema recupera el valor de la solidaridad

Objetivos

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ConsorciosCon Cuenca agrupa a las compañías Trigales, Cuencana, Uncovía y Ricaurte. Metro Cuenca abarca a las compa-ñías Tomebamba, Diez de Agosto y Turismo Baños.

Tarjetas La tarjeta prepago Urbania azul sirve para los grupos de pasajeros que pagan12 centavos. La tarjeta Urbania roja es para quienes pagan 25 centavos.

CapacitaciónEntre el 15 y el 20 de abril, la Cámara de Transporte de Cuenca dictará cursos de capa-citación a conductores y ayudantes para que mejoren el trato a los pasajeros.

InversiónEB Corporation invir-tió siete millones de dólares en equipar a los buses para el sistema de caja común. Esa empresa coreana recu-perará la inversión (con ganancias) en 10 años.

L A C I F R A

Pasajes diarios suman los 475 buses de las siete compañías. El precio promedio del pasaje es de 20 cen-tavos si se toma en cuenta el subsidio del 50 por ciento a ciertos grupos.

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Cuenca. El Plan de Ordenamiento Territo-rial de 1983 preveía que el suelo urbani-zable de Cuenca para esta época bordee las 3.000 hectáreas, sin embargo se en-cuentra casi en las 9.000. Con esto se ha comprobado que su crecimiento ha sido desmesurado y descontrolado.

Así explicó Mauricio Moreno, director del Plan de Ordenamiento Territorial de Cuenca, quien además aseveró que este problema no es reciente sino de las últimas décadas. Inclu-so supera casi tres veces las expectativas de crecimiento. Una de las razones se debe a que en la dé-cada de los 80 toda ciudad latinoamericana crecía aceleradamente debido a una política de abandono del campo hacia la ciudad. “El fenómeno migratorio, que en cada caso es di-ferente, produce la expansión incontenible de los centros urbanos y Cuenca no ha escapado del fenómeno”, indica. Por ello parte de las parroquias rurales periféricas a la ciudad se encuentran dentro del área urbana. Es así que dentro del área urbana ya está

Challuabamba, parte de Ricaurte, eje Checa-Chiquintad, parte de Sinincay hasta Racar y Baños; esto por la cantidad de población. “El año anterior se aprobó el plan parcial de ur-banismo de Baños y de Challuabamba. Ade-más se está trabajando en otros planes para el tema de racionalidad”, aseguró.

PoblaciónEsta misma razón ha hecho que la ciudad tenga una densidad muy baja, no llega a 50 habitantes por hectárea. La densidad es la cantidad de gente que vive en un área defini-da, es decir, si se habla de 100 habitantes por hectárea en una cuadra de suelo viven 100 personas. El centro histórico de una ciudad normal puede albergar entre 150 y 200 habi-tantes por hectárea, sin que sea considerada alta densidad. Al tener una densidad muy baja, por la exten-sión del suelo, significa que los servicios bá-sicos de la ciudad también deben ampliarse a las nuevas zonas y con un costo más alto. En cambio en una ciudad planificada se em-pezaría a edificar junto a vías existentes y ya

con servicios básicos a un precio razonable. Moreno Indicó que en la actualidad el Plan de Ordenamiento Territorial tiene dos dilemas: el primero ir hacia atrás y resolver lo que no se ha resuelto o avanzar para ir planifican-do y que las futuras zonas que se vuelvan a incrementar se incorporen sobre suelos or-denados, con una adecuada previsión de ser-vicios. Actualmente la ordenanza se discute con el Colegio de Arquitectos, quienes serán los que construyan nuevas edificaciones regi-das al plan. Luego de eso pasaría al debate en el Concejo Cantonal para su aprobación. Cuenca es una tradición de planificación, mientras hay otras ciudades que están en cero. “Pero no hay mucho campo para la complacencia, al crecer y no resolver los pro-blemas se seguiría con el desorden”, agregó. Además sin orden puede pasar cualquier cosa, como el colapso del tránsito y el trans-porte. Por ello explicó que hacer un Plan de Orde-namiento Territorial en tres años de algo que no se ha hecho en 30 no es fácil, porque son cientos de temas que deben tratarse.

Los planes de ordenamiento territorial de la ciudad fueron deficientes

Cuenca creció tres veces más de lo calculado

REALIDAD

O P I N I O N ES

Nelly JaramaARQUITECTA

“Es mejor vivir dentro de la ciudad porque se tiene todos los servicios. Siempre ha existido un Plan de Ordenamiento, pero que la gente y el Municipio no hayan hecho cumplir la normativa es otra situación”.

Cambios

Cuenca. Debido a lo costoso que resulta construir una vi-vienda en el centro de la ciu-dad, la gente ha optado por movilizarse a sectores más alejados y ser parte de urbani-zaciones. Este es uno de los factores para el crecimiento de la urbe. Pero además los edificios de altura es otra de las tendencias que se aprecia en la ciudad.Según Oswaldo Cordero, sub-decano de la Facultad de Ar-quitectura y Urbanismo de la Universidad de Cuenca, este tipo de infraestructura se ob-serva en la plataforma baja de la ciudad en el área compren-dida entre los ríos Yanuncay y Tomebamba. Dijo que se se-guirá construyendo pero con las normas adecuadas para que luego no se vuelva un con-flicto. Sin embargo indicó este tipo

de construcciones ayudará a optimizar el uso del suelo. De su parte Mauricio Moreno, director del Plan de Ordena-miento Territorial de Cuenca, dijo que las edificaciones en altura, construida en lugares permitidos, ayudaría a man-tener la densidad de la pobla-ción.

OportunidadLa gente que vive en las peri-ferias asevera que es una opor-tunidad vivir en urbanizacio-nes o ciudadelas, debido a que ofrecen facilidades de pago en el plan habitacional. María Córdova vive en la Ciu-dadela Mutualista Azuay-Ra-car, comentó que el costo de las tierras y arriendos en el centro es demasiado alto y por ello deben optar por lo más econó-mico. Así no dudan dos veces en ir a un lugar alejado.

Urbanizaciones y edificaciones de altura

Cuenca. La modernización y expan-sión de la ciudad ha afectado principal-mente al patrimonio no solo arquitec-tónico sino paisajístico. Así afirma Manolo Salgado, técnico del Instituto de Patrimonio, quien además considera que se debe limitar la ocupa-ción por razones ambientales, ya que se requiere tener reservas paisajísticas para la permeabilidad superficial. “Si perdemos nuestras colinas parecería-mos a cualquier otra ciudad”, señaló.Para Salgado el hecho de la moderni-zación a más de que se está perdiendo la parte patrimonial también está des-ocupando el Centro Histórico. La gente prefiere vivir en las urbanizaciones y partes alejadas porque falta incentivo para mantener una casa patrimonial. Por ello dijo que las instituciones pú-blicas deben dar incentivos para que la gente permanezca en el Centro Históri-co y así devolver su habitabilidad. Así se solucionaría el déficit habitacional de la ciudad, la ocupación ya no sería de 40.000 personas sino de entre 60.000 y 70.000, dice Pero cree que no se puede preservar si la comunidad no está de acuerdo. Por lo que se debe dar un beneficio no solo para preservar la historia sino un be-neficio para que la calidad de vida sea mejor. Además, el patrimonio se sostiene cuando hay usos combinados entre lo comercial y habitable. Pero más aún

cuando esta ligada al paisaje. “Cuenca fue declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad por esa característica, su belleza paisajística”, acotó. Asimismo considera que hay que po-tencializar los diferentes estilos arqui-tectónicos, puesto que Cuenca tiene una mezcla republicana, n eoclásica, Ardercor y vernácula; y en ocasiones todo en un solo tramo. Además del es-calonamiento que tienen las casas pa-trimoniales. No le ve conflicto con la modernidad pero acota que debe ser apropiada y sobre todo aprovechar la capacidad artesanal y usos comerciales que tiene la urbe. Pero siempre y cuando se man-tenga la característica de la ciudad, de lo contrario en 20 a 30 años se converti-rá en una ciudad anónima sin ningún tipo de rasgos característicos.

El patrimonio debe ser preservado cuando se ponga en función y servicio de la gente. Cuando la gente vea que es una posibilidad económica”.

Manolo SalgadoTÉCNICO DEL INSTITUTO DE PATRIMONIO

La expansión de la ciudad acabaría los paisajes

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Se tiene que tener cuidado porque Cuenca no tiene las mismas cualidades y características de años anteriores”.Mauricio MorenoDIRECTOR DE PLAN DE ORDENAMIENTO TERRITORIAL

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El centro histórico de una ciudad normal, puede albergar entre 150 y 200 habitantes por hectárea.

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La posibilidad de una persona de adquirir una vivienda es reducida por los altos costos de los terrenos”.

Eduardo GarcésVICEPRESIDENTE DE ASOCOBIRA

Cuenca. Aunque es la tercera ciudad más grande del país, a muchos turistas les sor-prende observar construcciones, que en su mayoría no superan los tres pisos. Las casas de techo de teja son uno de los encantos de la capital azuaya, pero eso tiene un alto costo.

Cuenca, al haber sido declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad, se enfocó arqui-tectónicamente a que las nuevas edificacio-nes armonicen con el legado histórico. Eso se convirtió en una limitante para el desarrollo del área moderna, algo característico de una ciudad que quiere convertirse en cosmopoli-ta.Para Fernando Guzmán, gerente de Centau-ro Construcciones, el desarrollo de los edi-ficios en la ciudad depende del lugar, de las dimensiones del terreno, de la planificación territorial, de las ordenanzas municipales y de las rutas de los aviones.Guzmán destaca, que de acuerdo a las nor-mas municipales, la altura máxima que se puede construir es de 15 pisos en el sector del Hospital del Río. En sectores como el de la avenida Ordóñez Lasso es de 13 pisos, y por el Colegio Latinoamérica es de 12 pisos.“Nos regimos a una ordenanza. Nosotros

construimos hasta las alturas permitidas para que nos den los permisos de construc-ción”, afirma Guzmán.

Hacia la periferiaEduardo Garcés, vicepresidente de la Aso-ciación de Corredores de Bienes Raíces del Azuay, Asocobira, explica que la ciudad se está quedando pequeña en su área urbana. Por eso, Cuenca está creciendo hacia las áreas periféricas.Su queja se enfoca a que el departamento de Patrimonio del Municipio pone restricciones en el tema de construcción en altura. A eso se suma, el alto costo que tienen los terrenos urbanos porque son muy escasos. En algunos sectores, el precio promedia los 1.000 a 1.200 dólares el metro cuadrado.“Hay muchas restricciones en sectores como las riberas del río Tomebamba, de Santa Ani-ta, de la nueva Corte de Justicia, en la Remi-gio Crespo, en la Unidad Nacional. La razón que nos dan es para que el Centro Histórico no pierda su arquitectura tradicional. Está bien por una parte, pero no estamos en un país del primer mundo. La posibilidad de una persona de adquirir una vivienda es re-ducida por los altos costos de los terrenos”, señala Garcés.

Por eso, una de sus recomendaciones es im-pulsar la vivienda en edificios. Con eso, se reduciría el costo de la vivienda en la ciudad. Además sugiere que se utilice de forma más óptima los terrenos y se planifique de mejor forma.“Cambian cada dos meses los criterios de planificación, sin que los profesionales de la rama nos podamos atener a algo determina-do. Es una incertidumbre, se crea un perjui-cio a los inversionistas”, indica Garcés.

PlanMarco Vásquez, ex presidente del Colegio de Ingenieros Civiles del Azuay, CICA, indica que en múltiples ocasiones ha solicitado un nuevo plan de ordenamiento territorial que considere una mayor apertura en los usos de suelo con el fin de lograr un desarrollo armónico de las construcciones en el cantón Cuenca. Esto incluye la construcción de ejes viales para evitar la congestión vehicular. “Es necesario que se permita el crecimiento vertical de las edificaciones, ya que con esto se aprovecha la infraestructura existente de servicios básicos. De esa forma no existiría una mayor presión demográfica para cons-truir viviendas en otras zonas que no hay in-fraestructura”, explica Vásquez.

La capital azuaya se caracteriza por las edificaciones que no superan las tres plantas

Cuenca evoluciona hacia los edificios altos

CONSTRUCCIÓN

Marco VásquezEX PRESIDENTE DEL CICA

O P I N I O N ES

Hermel LópezPRESIDENTE DEL CICA

“Es necesario permitir el crecimiento vertical de las edificaciones, ya que se aprovecha la infraestructura disponible”.

“Hay que promover los edificios, ya que a futuro se puede conseguir viviendas más económicas”.

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L A C I F R A

dólares cuesta proveer de servicios básicos a un departamento, mientras que a una casa es de 67.000 dólares.

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Cuenca. Andrés Bernal es un ingeniero de civil de 29 años y reparte sus días entre su cuarto, su trabajo y la casa de sus padres. Hace tres meses rentó un dormitorio en una de las casonas republicanas de la Calle Larga y allí, de a poco, se acostumbra a vivir inde-pendientemente.

Freddy Parra, un comunicador social de 26 años, tomó la decisión de separarse de sus pa-dres hace algo más de un año para arrendar un departamento en la avenida Solano. Vive sólo.David Cañizares, músico de 28 años, se inde-pendizó a los 25. Vivió una temporada en Qui-to, otra en Cuenca y ahora está en Guayaquil. Son ejemplos de lo que ya es una tendencia en la ciudad. Los jóvenes cuencanos, varones y mujeres, buscan nuevos estilos de vida. Vivir con menos presiones familiares es un nuevo estilo que empieza a imponerse. Según el sondeo que este Diario aplicó en jóve-nes solteros de diferentes edades y estratos so-cio económicos, este modo de vida –más relati-vo a la sociedad contemporánea- se manifiesta con mayor ímpetu en jóvenes adultos. Lo que

más llama la atención es que se empiezan a ver casos en edades entre los 24 a los 29 años. A diferencia de países europeos, donde según un estudio de la Universidad de Valladolid cinco de cada 10 jóvenes se independizan ter-minado el bachillerato, en Cuenca, este estra-to de la población prefiere hacerlo con más garantías, es decir, una vez terminada la uni-versidad y con estabilidad económica.

¿Por qué?Las motivaciones son diversas. Por ejemplo, Andrés dice que su ritmo de vida le obligó a buscar un espacio donde pueda desplegar sus actividades con más tranquilidad. Durante el día, él trabaja como ingeniero civil en una empresa pública a cinco cuadras del edifico donde tiene su cuarto. En la noche, tres veces por semana, es anfi-trión de las reuniones de un grupo de estudios esotéricos. Además, conforma un grupo de música coral y dice que la paz de su habita-ción es el sitio adecuado para el ensamble de voces.Cuando terminan sus reuniones, generalmen-te entre las 23:00 y 23:30, toma dos horas de

estudio o lectura. “En mi espacio tengo la po-sibilidad de hacer mis cosas con tranquilidad y armonía, y además evito ir a la casa de mis padres tan tarde,” dice Andrés, que en prome-dio, duerme tres noches donde sus padres y cuatro en su habitación, por la cual paga 100 dólares mensuales.

FreddyFreddy Parra es comunicador social y tiene un ingreso mensual de 500 dólares. De ellos, cerca de 200 usa para pagar su departamento y alimentación. Él tomó la decisión de dejar la casa de sus pa-dres pues sintió la necesidad de fortalecer su carácter y prepararse para cuando sea el mo-mento de vivir en otro país: tiene el proyecto de estudiar un postrado en Argentina “Quiero acostumbrarme a estar sólo para cuando ten-ga que dejar el país. Además ahora dispon-go de mi tiempo y espacio con libertad y me he vuelto mucho más responsable,” cuenta Freddy, quien va al supermercado una vez por semana para comprar enlatados, leche y pan. Almuerza y cena en restaurantes y visita a su familia cada 15 días.

Cuencanos de 19 a 29 años ven en vivir solos una oportunidad de superación

Jóvenes optan por la independencia

SOCIEDAD

Estilo

No sólo los varones toman la deci-sión de independizarse. En la inves-tigación previa a este documento, también se pudo encontrar algunos casos de jóvenes cuencanas que op-taron por empezar una vida indepen-diente. Una de ellas es Ñusta Almeida, una empleada privada de 29 años. Ella al-quiló un departamento a los 19 años como una salida a los problemas fa-miliares; sin embargo, cuando estos se solucionaron, no quiso regresar. “Me acostumbré a disponer de mi es-pacio y tiempo con libertad. En esos meses madure mucho y entonces me di cuenta que era algo positivo para mi futuro” cuenta. Pero Ñusta no completó los 10 años sola: hace tres meses, dos de sus ami-gas le propusieron alquilar un depar-tamento más amplio y vivir juntas. Ñusta aceptó. Desde enero de este años comparte con Gabriela Toral de

26 años y Andrea Rivera de 30. Ellas aseguran que era el momento de ha-cer algo más para crecer como perso-nas y la etapa para experimentar la vida lejos de sus hogares. Aunque no están totalmente desliga-das de sus padres, pues almuerzan en sus casas con regularidad y el fin de semana duermen allí, Gabriela y An-drea dicen no tener la intención de regresar ya que el “paso dado” signi-fica algo importante en sus vidas.

Unión libreXimena Andrade y Susana Corde-ro, de 28 y 31 años, decidieron, hace dos y cuatro años, juntarse en unión libre con sus novios Francisco y Die-go. Dicen que sus padres no presen-taron oposición y no se percataron de los comentarios que se generaron. Aseguran vivir felices y sin la necesi-dad aún de contraer matrimonio. No lo consideran necesario, cuentan.

Mujeres cuencanas también se independizan

El comportamiento en este sector de la sociedad cuencana obedece al proceso de globalización y sus resultados, según dice el sociólo-go Humberto Chacón, catedráti-co de la Universidad de Cuenca. Chacón asegura que la nueva manera de pensar de los jóvenes se deriva del proceso de desarro-llo socio cultural que las socieda-des de países subdesarrollados experimentan. “Hay un cambio importante en la dinámica de la juventud. A diferencia de generaciones pa-sadas, ahora los chicos se mues-tran más acelerados y parecen haber caído en una suerte de bús-queda de identidad en la que asu-men un conjunto de modismos y prácticas de sociedades desarro-lladas,” profundiza. Chacón define ese deseo de liber-tad, de llevar una vida “light” sin demasiadas complicaciones y de perder el miedo al fracaso como actitudes postmodernas. “Claro que hay chicos que realmente lo hacen por desarrollar el sentido de responsabilidad, sin embargo el modelo es tomado de socieda-des europeas, norteamericanas,

argentinas o chilenas,” dice el ca-tedrático.

Motivaciones Para Catalina Figueroa, psicólo-ga del hospital Monte Sinaí, los jóvenes buscan independencia motivados por el deseo de expe-rimentar nuevas realidades en rechazo a los limitantes que la sociedad cuencana impone. “En muchos hogares los padres se im-ponen rígidamente sobre los hijos y sumado a que los jóvenes tienen una visión más amplia de la vida, se generan este tipo de comporta-mientos,” añade.

No son actitudes de rebeldía, más bien es una forma de tomar más responsablemente el proceso de maduración incluyendo una visión más amplia de la vida”.

Catalina FigueroaPSICÓLOGA

Actitudes generadas de la globalización

Análisis

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L A C I F R A

Dólares es el costo promedio de un depar-tamento de un dormi-torio con sala comedor y cocina en la ciudad.

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David CañizarezMÚSICO CUENCANO

O P I N I O N ES

Ñusta AlmeidaEMPLEADA PRIVADA

“Vivir sólo despierta el sentido de la responsabilidad y te hace ver la vida de otra forma”.

“Aprendí a gerenciar con responsabilidad mi dinero y a ser consciente que la vida es más que farras y diversión”.

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. Cuenca. Adoquín o asfalto. ¿Qué le conviene más a Cuenca? Esa es la pregunta que surgió desde hace algo más de una década entre diversos sectores sociales y que se reaviva entre los cuencanos cuando el Municipio emprende obras de readoquinado o arreglo de las calles, que obligaN a los transeúntes y conductores a alterar sus ritmos de vida, con las consiguientes molestias que esto ocasiona, por el polvo, el lodo, el ruido y otros factores. Patrimonio

Según la cuencana Francisca Moscoso, “el adoquinado es hermoso, es parte de nuestra identidad, por lo que no debería caber en el pensamiento de las autoridades de la ciudad cambiar los adoquines del Centro Histórico de Cuenca por calles asfaltadas o pavimentadas, porque se perdería la esencia de la ciudad”, dice. Señala que el Municipio debería planifi-car de mejor manera el mantenimiento cons-tante de las calles y aceras.Para Moscoso, existe una dualidad entre el adoquinado de las calles y las casas patrimo-

niales restauradas por sus propietarios, como la Casa de Coco, la Mansión Alcázar, la clínica Bolívar y otras, que le dan características úni-cas a Cuenca. “Todo este atractivo y encanto se perdería, como sucedió con la Plaza de las Flores, que era un espacio acogedor, pintores-co, donde los turistas venían a tomarse fotos”, acota, al agregar que “ahora es un espacio frío, sin identidad”.Edmundo Iturralde, técnico del Instituto Na-cional del Patrimonio Cultural, INPC, sostiene que la idea de cambiar los adoquines del casco histórico de la ciudad por pavimento o asfalto, “es una vieja polémica”. La declaratoria como Patrimonio Cultural de la Humanidad, abarca “no sólo las casas, los parques o ciertos ele-mentos, sino toda la ciudad, en su contexto”, resalta Iturralde, al destacar que incluso la forma en la que están distribuidos los elemen-tos, como las piedras y objetos decorativos, son parte del patrimonio. Piedra y mármol

Una de las características de Cuenca que la distinguen de la mayor parte de ciudades del

mundo es el adoquinado de sus calles con pie-dra trabajada y el mármol que existía en los bordes de las aceras, según el funcionario de INPC, pues, en la calzada, se evidencian pie-dras de color amarillento, las que antes de las intervenciones municipales formaban cuadrí-culas, formas que podían ser observadas desde el aire, “entonces esos elementos no estaban allí porque sí, tenían un propósito”, dice. “La suma de estos elementos es lo que llama-mos materialidad, la que, si está bien con-servada, trasmite la historia, la imagen, la esencia”, por ello, toda intervención debe ser previamente estudiada, planificada. “Con el máximo de respeto”, pues de lo contrario, se corre el riesgo de alterar el patrimonio, la his-toria.“Considero que el adoquín en las calles debe conservarse”, acota Iturralde, al sostener que hay alternativas técnicas para evitar el maltra-to de los vehículos que circulan por las calles de Cuenca, como la colocación de un soporte de pavimento en la base del adoquín, que per-mite brindar mayor regularidad a la calzada y un caminar suave.

Diversos criterios coinciden en la necesidad de mantener la calzada del Centro Histórico

Adoquín vs. asfalto. ¿Qué le conviene a Cuenca?

DEBATE

Cambios

El crecimiento poblacional que experimenta Cuenca es otro factor que incide en los cam-bios urbanísticos requeridos para facilitar el movimiento de las personas y de los vehícu-los, pues en los últimos cinco años la cifra subió de 446.457 a 487.901 habitantes, según Ro-drigo Segarra, director local del Instituto Nacional de Esta-dísticas y Censos. Este creci-miento repercute también en el incremento del número de vehículos que circulan por las estrechas calles de la ciudad, lo que provoca en las llamadas horas pico, grandes congestio-namientos vehiculares, con los consiguientes retrasos para las personas que van a clases, a sus trabajos o a cumplir sus actividades personales cotidia-nas. Parque automotor

Según el policía Densi Cabrera,

de la Jefatura de Tránsito del Azuay, hace cinco años el par-que vehicular de la ciudad era de 41.259 automotores, mien-tras que ahora circulan en Cuenca alrededor de 56.000 ve-hículos, de los 75.000 autos que tiene el Azuay, evidenciando un incremento de 14.741 automoto-res que circulan en Cuenca. Tranvía

Frente a estos cambios que se dan en la ciudad, los candidatos a la Alcaldía plantean diversas alternativas, como Paúl Gran-da, de la alianza PAIS-MED, listas 35- 76, quien sostiene la necesidad de un tranvía para Cuenca, que permita descon-gestionar las calles del Centro Histórico y librar a la ciudada-nía, monumentos, casas patri-moniales y otros elementos de la ciudad, de la contaminación provocada por la expulsión de gases de los vehículos.

Crecimiento humano e incremento de autos

Infraestructura

El crecimiento poblacional obli-ga al crecimiento urbanístico de la ciudad, pues la gente requiere de servicios básicos para atender sus necesidades vitales, de nue-vos sistemas de transportación, mercados, planteles educativos y otros espacios que procuren bienestar y permitan el desempe-ño de las actividades cotidianas. “No decimos que no se debe me-jorar, dar paso a la modernidad, lo que sostenemos es que se debe buscar soluciones alternativas y no arrasar con todo, como se hizo con el mercado Nueve de Octubre y otros tantos casos”, sostiene Edmundo Iturralde, al mencionar que en el caso del mercado, habían unas piedras trabajadas de gran tamaño, las que no se sabe a donde fueron a parar.

OpinionesSegún el taxista Enrique Fer-nández, de 70 años, para el gre-mio de la transportación urba-na de Cuenca sería ideal que se cambiara el adoquín de las calles por asfalto o pavimento, “como en Guayaquil”, porque así “ya no se golpearían tanto los carros ni se dañaría el sistema de suspen-

sión”, criterio que es compartido por Juan Carlos Orellana, direc-tor de la Comisión Provincial de Tránsito del Azuay, CPT. Sin embargo, tanto Fernández como Orellana, manifiestan que se debe respetar el criterio de la mayoría de los cuencanos, que se inclinan por la conservación de los elementos que hicieron posi-ble obtener la declaratoria de Pa-trimonio Cultural de la Humani-dad y conservar el adoquinado de las calles, aunque debe darse un adecuado mantenimiento para el bienestar de todos, acotaron.

Estoy de acuerdo que se mantenga el adoquín en las calles, por la declaratoria de Cuenca como Patrimonio de la Humanidad”.

Juan Carlos Orellana, DIRECTOR DE LA CPT- A

Expansión de la ciudad hacia la modernidad

Francisca MoscosoEMPRESARIA

O P I N I O N ES

Edmundo IturraldeARQUITECTO DEL INPC

“El adoquinado es hermoso, es parte de nuestra identidad. Si se cambia por asfalto todo el encanto se perdería”.

“Toda intervención en la ciudad debe ser planificadacon el máximo de respeto al sistema constructivo”.

E L D ATO

PolémicaEl cambio del adoquín por asfalto o pavimen-to en la calzada de las calles del Centro Histórico de Cuenca “es una vieja polémica”, según un funcionario del INPC del Azuay.

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