DWW - Reflexiones Sobre La Palabra Democracia - 1950

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Algunas reflexiones sobre el significado de la palabra "democracia" (Escrito para Human Relations, junio de 1950) Ante todo, permítaseme decir que sé muy bien que los comentarios que ofrezco aquí pertenecen a un tema que escapa a mi especialidad. Los sociólogos y quienes se dedican a la ciencia política experimentarán quizás al comienzo cierto fastidio ante tal impertinencia, pero me parece importante que cada tanto los profesionales traspasen los límites de su campo de acción específico, a condición de que tengan perfecta conciencia, como ocurre en mi caso, de que sus reflexiones resultarán inevitablemente ingenuas para quienes conocen la literatura pertinente y están acostumbrados a un lenguaje profesional que el intruso desconoce. La palabra "democracia" es muy importante en la actualidad. Se la emplea en innumerables sentidos, algunos de los cuales son los siguientes: 1. Un sistema social en el que el pueblo gobierna. 2. Un sistema social en el que el pueblo elige a su líder. 3. Un sistema social en el que el pueblo elige al gobierno. 4. Un sistema social en el que el gobierno otorga al pueblo libertad de pensamiento, de expresión y de empresa. 5. Un sistema social que, en circunstancias afortunadas, puede permitirse conceder a los individuos libertad de acción. Es posible estudiar: 1. La etimología de la palabra. 2. La historia de las instituciones sociales: griegas, romanas, etcétera. 3. El uso que se hace de esta palabra en diversos países y culturas de la actualidad: Gran Bretaña, Estados Unidos, Rusia, etcétera. 4. El abuso de esta palabra por parte de dictadores y otros; el engaño al pueblo, etcétera. En todo examen de un término, como el de democracia, evidentemente es esencial llegar a una definición, adecuada al enfoque particular que se ha elegido. Psicología del uso del término ¿Es posible estudiar el uso de este término desde el punto de vista psicológico? Aceptamos los. estudios psicológicos de otros términos difíciles tales como "mente normal", "personalidad sana", "individuo adaptado a la sociedad", y confiamos en que tales estudios resultarán valiosos en la medida en que otorgan a los factores emocionales inconscientes toda la importancia que tienen. Una de las tareas de la psicología consiste en

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Artículo de D. W. Winnicott

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  • Algunas reflexiones sobre el significadode la palabra "democracia"

    (Escrito para Human Relations, junio de 1950)Ante todo, permtaseme decir que s muy bien que los comentarios que ofrezco aqu pertenecen a un tema que escapa a mi especialidad. Los socilogos y quienes se dedican a la ciencia poltica experimentarn quizs al comienzo cierto fastidio ante tal impertinencia, pero me parece importante que cada tanto los profesionales traspasen los lmites de su campo de accin especfico, a condicin de que tengan perfecta conciencia, como ocurre en mi caso, de que sus reflexiones resultarn inevitablemente ingenuas para quienes conocen la literatura pertinente y estn acostumbrados a un lenguaje profesional que el intruso desconoce.La palabra "democracia" es muy importante en la actualidad. Se la emplea en innumerables sentidos, algunos de los cuales son los siguientes:

    1. Un sistema social en el que el pueblo gobierna.2. Un sistema social en el que el pueblo elige a su lder. 3. Un sistema social en el que el pueblo elige al gobierno. 4. Un sistema social en el que el gobierno otorga al pueblo libertad de pensamiento, de expresin y de empresa.5. Un sistema social que, en circunstancias afortunadas, puede permitirse conceder a los individuos libertad de accin.

    Es posible estudiar:

    1. La etimologa de la palabra.2. La historia de las instituciones sociales: griegas, romanas, etctera.3. El uso que se hace de esta palabra en diversos pases y culturas de la actualidad: Gran Bretaa, Estados Unidos, Rusia, etctera.4. El abuso de esta palabra por parte de dictadores y otros; el engao al pueblo, etctera.En todo examen de un trmino, como el de democracia, evidentemente es esencial llegar a una definicin, adecuada al enfoque particular que se ha elegido.

    Psicologa del uso del trmino

    Es posible estudiar el uso de este trmino desde el punto de vista psicolgico? Aceptamos los. estudios psicolgicos de otros trminos difciles tales como "mente normal", "personalidad sana", "individuo adaptado a la sociedad", y confiamos en que tales estudios resultarn valiosos en la medida en que otorgan a los factores emocionales inconscientes toda la importancia que tienen. Una de las tareas de la psicologa consiste en

  • estudiar y poner de manifiesto las ideas latentes que existen en el uso de tales conceptos, sin limitar su atencin al significado manifiesto o consciente.

    Aqu se hace un intento por iniciar un estudio de tipo psicolgico.

    Definicin operativa del trmino

    Parecera que resulta posible encontrar un significado latente y de importancia para este trmino, a saber, que una sociedad democrtica es "madura", esto es, que posee una cualidad que es afn a la de la madurez individual que caracteriza a sus miembros sanos.

    Por lo tanto, la democracia se define aqu como una "sociedad bien adaptada a sus miembros individuales sanos". Esta definicin coincide con el criterio expresado por R. E. Money-Kyrle (1).

    Lo importante para el psiclogo es la forma como la gente utiliza este trmino. Un estudio psicolgico se justifica si el trmino implica el elemento de madurez. Lo que sugiere aqu es que en todos los usos del trmino resulta posible encontrar implcita la idea de madurez o de madurez relativa, si bien resulta difcil, como todos admitirn, definir estos trminos de modo adecuado.

    Salud psiquitrica

    En trminos psiquitricos, cabe decir que es normal o sano el individuo maduro; de acuerdo con su edad cronolgica y su marco social, presenta un grado adecuado del desarrollo emocional. (En este razonamiento se presupone la madurez fsica.)Por ende, salud psiquitrica es un trmino que carece de un significado fijo. De la misma manera, el trmino "democrtico" no necesita tener un significado especfico. Utilizado por una determinada comunidad, puede significar lo ms y no lo menos maduro en la estructura de la sociedad. De esta manera cabra esperar que el significado congelado de la palabra fuera distinto en Gran Bretaa, Estados Unidos y la Unin Sovitica, y comprobar sin embargo que el trmino conserva su validez debido a que implica reconocer que madurez es sinnimo de salud.

    Cmo se puede estudiar el desarrollo emocional de la sociedad? Un estudio de este tipo debe estar estrechamente relacionado con el del individuo y ambos deben llevarse a cabo simultneamente.

    La maquinaria democrtica

    Es necesario tratar de determinar las cualidades aceptadas de la maquinaria democrtica. Tal maquinaria debe existir a los fines de la eleccin de los lderes a travs del voto libre, el voto realmente secreto. La maquinaria debe existir para que la gente pueda librarse de los lderes mediante el voto secreto, y tambin para la eleccin y eliminacin ilgicas de los lderes.

    La esencia de la maquinaria democrtica es el voto secreto, en la medida en que asegura la libertad del pueblo para expresar sentimientos profundos, al margen de los pensamientos conscientes (2).

    En el ejercicio del voto secreto, el individuo asume plena responsabilidad por esta accin, si es suficientemente sano. El voto expresa el resultado de un conflicto interno, pues la escena externa ha sido internalizada e interviene as en la interaccin de fuerzas en su propio mundo interno personal. Es decir, la decisin en cuanto a la manera de votar expresa la resolucin de un conflicto interno. El proceso parece ser ms o menos ste: la escena externa, con sus mltiples aspectos sociales y polticos, se vuelve personal para el individuo en el sentido de que ste se identifica gradualmente con todas las facciones que intervienen en la lucha. Ello significa que percibe la escena externa en trminos de su propio conflicto interno, y temporariamente permite

  • que esa lucha interna se libre en trminos de la escena poltica externa. Este proceso de ida y vuelta implica esfuerzos y lleva tiempo, y la maquinaria democrtica debe encargarse de asegurar un perodo de preparacin. Una eleccin repentina producira un agudo sentimiento de frustracin en el electorado. El mundo interno de cada votante debe convertirse en un campo de lucha poltica durante un perodo limitado.

    Si existe alguna duda en cuanto al carcter secreto del voto, el individuo, por sano que sea, slo puede expresar sus reacciones a travs de su voto.

    La maquinaria democrtica impuesta

    Resultara factible imponer a una comunidad la maquinaria correspondiente a la democracia, pero ello no implicara crear una democracia. Se necesitara que alguien continuara manteniendo la maquinaria (para el voto secreto, etc.), y tambin para obligar a la gente a aceptar los resultados.

    La tendencia democrtica innata (3)

    Una democracia constituye un logro, en un momento determinado de una sociedad limitada, esto es, de una sociedad que cuenta con algn lmite natural. De una verdadera democracia, tal como el trmino se utiliza hoy, cabe afirmar: en esta sociedad, y en este momento, existe suficiente madurez en el desarrollo emocional de una proporcin suficiente de los individuos que la integran como para que haya una tendencia innata a la creacin, recreacin y mantenimiento de la maquinaria democrtica.

    Sera importante saber qu proporcin de individuos maduros se requiere para que haya una tendencia democrtica innata. En otras palabras, qu proporcin de individuos antisociales puede contener una sociedad sin que desaparezca la tendencia democrtica innata.

    Hiptesis

    Si la Segunda Guerra Mundial, y el programa de evacuacin en particular, hubieran aumentado la proporcin de nios antisociales en Gran Bretaa, digamos, de un X por ciento, a un 5X por ciento, ello podra haber afectado el sistema de educacin, de modo que la orientacin educativa apuntara al 5X por ciento de antisociales, que reclaman mtodos dictatoriales, en lugar de estar dirigida al 100 - 5X por ciento de nios no antisociales.

    Una dcada ms tarde este problema se planteara de la siguiente manera: mientras que la sociedad podra manejar un X por ciento de criminales recluyndolos en las crceles, el 5X por ciento de antisociales tendera a provocar una reorientacin general hacia los criminales.

    Identificacin inmadura con la sociedad

    En una sociedad, en cualquier momento dado, si existe una cantidad X de individuos que muestran su falta de sentimiento social desarrollando tendencias antisociales, hay una cantidad Z de individuos que reaccionan frente a la inseguridad interna a travs de otra tendencia: la identificacin con la autoridad. Esto es malsano e inmaduro, porque no se trata de una identificacin con la autoridad que surja del autodescubrimiento, sino de algo as como un marco sin un cuadro, un sentido de la forma sin conservar la espontaneidad. Constituye una tendencia a favor de la sociedad que es anti-individual. Las personas que se desarrollan en esta forma pueden considerarse como "antisociales encubiertos".

    Los antisociales encubiertos no son "personas totales", como tampoco lo son los antisociales manifiestos, ya que necesitan encontrar y controlar la fuerza conflictual fuera del self, en el mundo externo. En cambio, la

  • persona sana, capaz de deprimirse, puede encontrar todo el conflicto dentro del self, y tambin percibir todo el conflicto fuera del self, en la realidad externa (compartida). Cuando las personas sanas se unen, cada una de ellas hace su aporte a un mundo total, porque cada una de ellas constituye una persona total.

    Los "antisociales encubiertos" proporcionan material para un tipo de liderazgo que es sociolgicamente inmaduro. Adems, este elemento aumenta enormemente en una sociedad el peligro que deriva de sus elementos antisociales manifiestos, sobre todo si se tiene en cuenta que las personas corrientes permiten fcilmente que quienes anhelan gobernar ocupen posiciones clave y, una vez en ellas, estos lderes inmaduros no tardan en obtener el apoyo de los antisociales manifiestos, quienes los acogen como sus amos naturales. (Falsa resolucin de la disociacin.)

    Los indeterminados

    Las cosas nunca son tan simples porque, si hay (X + Z) por ciento de individuos antisociales en una comunidad, no resulta valedero decir que 100 - (X + Z) por ciento de ellos son "sociales". Se deben considerar tambin los que ocupan una posicin indeterminada. Esto podra expresarse de la siguiente manera:

    AntisocialesIndeterminadosA favor de la sociedad, pero anti-individualesIndividuos sanos capaces de una contribucin socialTotalX por ciento Y por cientoZ por ciento

    100- (X + Y + Z) por ciento100 por ciento

    Todo el peso de la democracia recae sobre el 100(X + Y + Z) por ciento de individuos que estn madurando como tales, y que gradualmente se vuelven capaces de incluir un sentido social en su desarrollo personal firmemente establecido.

    Por ejemplo, qu porcentaje representa hoy da en Gran Bretaa el 100 - (X + Y + Z) por ciento? Quiz sea muy pequeo, digamos un 30 por ciento. Quiz, si hay un 30 por ciento de personas maduras, un 20 por ciento de individuos indeterminados estar sometido a una influencia suficiente como para que resulte factible considerarlos maduros, con lo cual el total asciende al 50 por ciento. Pero, si el porcentaje de individuos maduros desciende a un 20 por ciento, cabe esperar que se produzca una disminucin an mayor en el porcentaje de individuos indeterminados capaces de actuar en forma madura. Si un 30 por ciento de madurez en una comunidad influye sobre un 20 por ciento de indeterminados, es decir, abarca un total del 50 por ciento, quizs un 20 por ciento de madurez en una comunidad slo influya sobre un 10 por ciento de indeterminados, con lo cual el total ascendera al 30 por ciento.

    Mientras que un 50 por ciento podra indicar una tendencia democrtica innata suficiente para los fines prcticos, el 30 por ciento no lo sera para evitar ser vencidos por la suma de los antisociales (encubiertos y manifiestos) y de los individuos indeterminados que se veran llevados a asociarse con ellos por debilidad o temor.

    Sobreviene as una tendencia antidemocrtica, una tendencia a la dictadura, caracterizada al principio por un febril reforzamiento de la fachada democrtica (en el sentido de embaucamiento que puede encerrar este trmino).

    Un signo de dicha tendencia es la institucin correctiva, la dictadura localizada, el campo de prctica de los lderes personalmente inmaduros que son antisociales a la inversa (pro-sociales pero anti-individuales).

  • La institucin correctiva est peligrosamente cerca de la prisin y el hospital para enfermos mentales de una sociedad sana, y por tal razn los mdicos que tratan a criminales e individuos insanos deben mantenerse constantemente alertas par evitar que se los utilice, sin que ellos lo adviertan, como agentes de la tendencia antidemocrtica. De hecho, siempre hay un punto limtrofe en el que desaparece la distincin entre el tratamiento correctivo del opositor poltico o ideolgico y la terapia de la persona sana. (En ello radica el peligro social de los mtodos fsicos de terapia para los pacientes mentales, en comparacin con la verdadera psicoterapia o incluso la aceptacin de un estado de insana. En la psicoterapia el paciente es una persona que tiene una relacin de igual a igual con el mdico, con derecho a estar enfermo, y tambin a reclamar salud y plena responsabilidad por sus ideas personales polticas o ideolgicas.).

    Creacin del factor democrtico innato

    Si la democracia es madurez, y la madurez implica salud, y consideramos que esta ltima es algo deseable, entonces quisiramos establecer si es posible hacer algo para promoverla. Sin duda, de nada servir imponerle a un pas la maquinaria democrtica.

    Debemos volver al grupo de individuos que constituyen el 100 - (X + Y + Z), pues todo depende de ellos. Los miembros de este grupo pueden promover la investigacin.

    Comprobamos que en cualquier momento dado, no podemos hacer nada para aumentar la proporcin de este factor democrtico innato, cuya importancia sea comparable a lo que los padres y los hogares de esos individuos ya han hecho (o han dejado de hacer) cuando esos individuos eran nios y adolescentes.Con todo, podemos tratar de no comprometer el futuro. Podemos tratar de no inmiscuirnos en los hogares que estn en condiciones de manejar, y de hecho lo hacen, a sus propios nios y adolescentes. Estos buenos hogares corrientes (4) constituyen el nico marco en el que puede crearse el factor democrtico innato. Sin duda, se trata de una formulacin modesta de contribucin positiva, pero su aplicacin encierra un grado sorprendente de complejidad.

    Factores adversos al funcionamiento de un buen hogar corriente

    1. A la gente le resulta muy difcil reconocer que lo esencial de una democracia radica en realidad en el hombre y la mujer corrientes, y en el hogar comn y corriente.2. Aun cuando una poltica gubernamental adecuada otorgue a los padres libertad para manejar su hogar segn su criterio, no es seguro que los funcionarios que ponen en prctica la poltica oficial respetarn la posicin de los padres.

    3. Los padres corrientes necesitan efectivamente ayuda; requieren todo lo que la ciencia est en condiciones de ofrecer con respecto a la salud fsica, y a la prevencin y el tratamiento de la enfermedad fsica. Asimismo, necesitan adquirir conocimientos en cuanto al cuidado de los nios, y recibir ayuda cuando stos padecen trastornos psicolgicos o presentan problemas de conducta. Pero, si solicitan esa ayuda, cmo pueden estar seguros de que no se vern despojados de sus responsabilidades? Si ello ocurriera, dejaran de ser creadores del factor democrtico innato.

    4. Muchos padres no son lo que llamamos padres buenos corrientes, sino casos psiquitricos, o bien inmaduros, o antisociales en un sentido amplio y socializados en un sentido restringido, o bien no han contrado matrimonio, o tienen una relacin inestable o agresiva, o se han divorciado, etctera. Estos padres son objeto de la atencin de la sociedad debido a esos defectos. El problema aqu es el siguiente: puede la sociedad comprender que no debe permitirse que la orientacin con respecto a esos rasgos patolgicos

  • repercuta sobre la orientacin de la sociedad con respecto a los hogares sanos corrientes?

    5. De cualquier manera, el intento de los padres de proporcionar un hogar para sus hijos, en el que stos puedan crecer como individuos, y en el que cada uno de ellos adquiera gradualmente la capacidad de identificarse con los padres y luego con grupos ms amplios, comienza desde el principio, cuando la madre se adapta a su beb.Aqu el padre cumple la funcin de agente protector que asegura a la madre la libertad necesaria para consagrarse por completo a su beb.

    La importancia del hogar se reconoce desde hace mucho, y en los ltimos aos los psiclogos han aprendido mucho sobre las formas como un hogar estable no slo capacita a los hijos para encontrarse a s mismos y encontrarse mutuamente, sino que tambin los ayuda a convertirse en miembros de la sociedad en un sentido ms amplio.

    Este problema de la interferencia en la temprana relacin madre-hijo, sin embargo, requiere especial consideracin. En nuestra sociedad la interferencia en este sentido es cada vez mayor, y tambin la peligrosa creencia, aceptada por algunos psiclogos, de que al comienzo lo nico que importa es el cuidado fsico, lo cual slo puede significar que en la fantasa inconsciente de la gente en general, las ideas ms terribles se concentran en la relacin madre-hijo. La ansiedad inconsciente est representada en la prctica por:1. nfasis exagerado por parte de mdicos e incluso de psiclogos en los procesos y la salud fsicos.2. Diversas teoras que sostienen que la lactancia natural es perniciosa, que la educacin de esfnteres debe iniciarse no bien nace el beb, que las madres no deben manejar a sus bebs, etc., y (en el extremo opuesto) que se debe asegurar la lactancia natural, que debe evitarse todo tipo de educacin de esfnteres, que jams debe permitirse que los bebs lloren, etctera.

    3. La forma como, durante los primeros das posteriores al nacimiento, se le impide a la madre tener acceso directo a su beb y ser ella la primera en poner a su hijo en contacto con la realidad externa. Al fin de cuentas, esto constituye la base de la capacidad del recin nacido para llegar con el tiempo a relacionarse con una realidad externa cada vez ms amplia, y si se perjudica o se impide que la madre haga este aporte trascendental a travs de su consagracin al beb, no hay esperanzas de que el individuo pase alguna vez a formar parte del grupo 100 -(X + Y + Z), el nico capaz de engendrar el factor democrtico innato.

    Desarrollo de temas subsidiarios: La eleccin de personas

    Otro aspecto esencial de la maquinaria democrtica es que lo que se elige es una persona. Hay una enorme diferencia entre 1) votar por una persona, 2) votar por un partido con una tendencia determinada y 3) apoyar a travs del voto un principio claramente definido.

    1. La eleccin de una persona implica que los electores creen en s mismos como personas y, por ende, creen en la persona por la que votan. La persona elegida tiene la oportunidad de actuar como una persona. En tanto es una persona total (sana), tiene en su interior el conflicto total, lo cual le permite tener una visin, si bien personal, de situaciones externas totales. Desde luego, puede pertenecer a un partido y apoyar una tendencia determinada, no obstante lo cual, puede adaptarse en forma sensible a condiciones cambiantes; si modifica su tendencia principal puede presentarse como candidato para una reeleccin.

    2. La eleccin de un partido o de la tendencia de un grupo es relativamente menos madura. No requiere que los electores confen en un ser humano. Sin embargo, es el nico procedimiento lgico para las personas inmaduras, precisamente porque ellas no pueden concebir a un individuo verdaderamente maduro ni tener confianza en l. El resultado de votar por un partido o una tendencia, por una cosa y no por una persona, es una

  • visin rgida, que no permite reaccionar con sensibilidad frente a las situaciones. La cosa que se elige no puede amarse ni odiarse, y resulta conveniente para los individuos que tienen un sentido del self deficientemente desarrollado. Cabra afirmar que un sistema electoral es menos democrtico, porque es menos maduro (en trminos del desarrollo emocional del individuo), cuando el acento se pone en votar por un principio o un partido y no por una persona.

    3. El hecho de votar por un principio especfico est an ms alejado de la palabra democracia. Hay muy poca madurez en todo lo que se refiere a un referndum, aunque ste pueda adecuarse a un sistema maduro en ocasiones excepcionales. Como ejemplo de la forma como un referndum resulta intil podra citarse el que tuvo lugar en Gran Bretaa entre las dos ltimas guerras. El pueblo deba responder a una pregunta especfica: "Est usted a favor de la paz o de la guerra?". Gran nmero de personas se abstuvieron de votar porque saban que la pregunta era capciosa. Entre los que lo hicieron, gran nmero vot por la paz, aunque en realidad, cuando las circunstancias cambiaron, apoyaron la declaracin de guerra e intervinieron en la lucha. Lo importante aqu es que en este tipo de planteo slo hay cabida para la expresin del deseo consciente. No existe ninguna relacin entre el hecho de poner un tilde junto a la palabra paz en un referndum de este tipo y el de votar por una persona a la que se conoce por su tendencia pacifista, siempre y cuando la renuencia a luchar no signifique un cmodo abandono de las aspiraciones y responsabilidades y una traicin con respecto a los amigos.

    La misma objecin se aplica a gran parte de las encuestas Gallup y otros cuestionarios, aun cuando se hagan enormes esfuerzos por evitar precisamente este peligro. De cualquier manera, un voto con respecto a un problema especfico constituye sin duda un sustituto muy pobre del voto a favor de una persona que, una vez elegida, dispone de un perodo de tiempo durante el cual puede utilizar su propio criterio. El referndum no tiene nada que ver con la democracia.

    El apoyo a la tendencia democrtica: Resumen

    1. El apoyo ms valioso se presta en un sentido negativo, mediante la no interferencia organizada en la buena relacin corriente madre-hijo, y en el buen hogar corriente.2. Para un apoyo ms inteligente, incluso de este tipo negativo, se necesitan ms investigaciones sobre el desarrollo emocional del nio de todas las edades, as como sobre la psicologa de la madre durante los primeros meses de vida de su beb y de la funcin del padre en diversas etapas.

    3. La existencia de este estudio demuestra nuestra fe en el valor de la educacin dentro del proceso democrtico, la cual, desde luego, slo puede proporcionarse en la medida en que hay comprensin, y slo puede ser til para los individuos emocionalmente maduros o sanos.

    4. Otra importante contribucin de tipo negativo consistira en evitar los intentos por imponer la maquinaria democrtica a comunidades totales, ya que el nico resultado posible es un fracaso y un revs para el verdadero crecimiento democrtico. En cambio, lo valioso aqu es apoyar a los individuos emocionalmente maduros, por poco numerosos que sean, y dejar que el tiempo se encargue de lo dems.

    La persona: hombre o mujer?

    La cuestin que debe considerarse es si en lugar de la palabra "persona" puede utilizarse "hombre" o "mujer".Lo cierto es que los lderes polticos de casi todos los pases son hombres, aunque es cada vez ms frecuente ver a mujeres ocupando cargos de responsabilidad. Cabe quiz suponer que hombres y mujeres poseen igual capacidad en calidad de hombres y mujeres, o bien, dicho de otra manera, sera imposible afirmar que slo los hombres tienen capacidad para el liderazgo debido a sus condiciones intelectuales o emocionales para ocupar

  • los cargos polticos ms altos. No obstante, esto no significa que hayamos resuelto el problema. Al psiclogo le incumbe llamar la atencin sobre los factores inconscientes que con tanta facilidad se dejan de lado incluso en un estudio serio de este tema. Lo que se debe considerar es el sentimiento popular inconsciente con respecto al hombre o la mujer que se elige como dirigente poltico. Si existe alguna diferencia en la fantasa segn que se trate de un hombre o una mujer, es imposible ignorar este hecho, o hacerlo a un lado diciendo que las fantasas no deben tenerse en cuenta porque son "slo fantasas".

    En la labor psicoanaltica y en otros campos afines, se comprueba que todos los individuos (hombres y mujeres) experimentan cierto temor a la mujer .5 Algunos individuos experimentan este temor en mayor medida que otros, pero puede afirmarse que es universal. Esto no significa sostener que un individuo teme a una mujer en particular. Este temor a la mujer constituye un factor 5 No es ste el lugar adecuado para examinar detalladamente este problema, pero la idea bsica ser ms fcil de entender si se utiliza un enfoque gradual:

    I) temor a los padres en la temprana infancia;

    II) temor a una figura combinada, una mujer con la potencia del hombre (bruja);III) temor a la madre que detentaba un poder absoluto al comienzo de la vida del nio para proporcionarle, o para no hacerlo, los elementos esenciales para el temprano establecimiento del self como individuo peligroso de la estructura de la sociedad y es el responsable de que en muy pocas sociedades las mujeres tengan en sus manos las riendas del poder poltico, y de la enorme crueldad para con las mujeres que puede observarse en costumbres aceptadas por casi todas las civilizaciones.

    Se sabe que este temor a la mujer obedece al hecho de que en la historia temprana de todo individuo que ha tenido un desarrollo normal, que es cuerdo y que ha podido encontrarse a s mismo, existe una deuda con una mujer, la que se consagr a l cuando era nio y cuya devocin era absolutamente esencial para su desarrollo sano. La dependencia original ha cado en el olvido y, por ende, la deuda no se reconoce, excepto en la medida en que el temor a la mujer representa la primera etapa de este reconocimiento.Las bases de la salud mental del individuo se establecen desde el principio, cuando la madre est simplemente dedicada a su beb y ste depende doblemente de ella precisamente porque no tiene la menor conciencia de esa dependencia. La relacin con el padre jams exhibe esa cualidad, y sa es la razn por la que un hombre que en la esfera poltica ha alcanzado la cumbre puede ser apreciado por el grupo en forma mucho ms objetiva que una mujer que ocupara una posicin similar.Las mujeres a menudo afirman que si ellas controlaran el poder, no habra ms guerras. Existen motivos para dudar de la veracidad absoluta de esta afirmacin, pero, aun cuando estuviera justificada, ello no implicara que los hombres o las mujeres toleraran siquiera como principio general que estas ltimas ocuparan siempre las posiciones ms altas del poder poltico. (La Corona, por estar fuera o ms all de la poltica, no se ve afectada por estas consideraciones.)

    Como derivacin de todo esto tenemos la psicologa del dictador, que se encuentra en el polo diametralmente opuesto a todos los significados posibles de la palabra democracia. Una de las races de la necesidad de ser dictador puede ser la compulsin a manejar ese temor a la mujer, cercndola y actuando en lugar de ella. La curiosa costumbre de los dictadores de exigir no slo obediencia y dependencia absolutas sino tambin "amor" tal vez tenga este origen.

    Adems, la tendencia de ciertos grupos a aceptar e incluso a anhelar una dominacin real, nace del temor a verse dominados por una mujer que corresponde a la esfera de la fantasa. Dicho temor los mueve a buscar, e incluso a aceptar de buen grado, la dominacin de un hombre conocido, sobre todo cuando se trata de alguien que ha tomado sobre s la carga de personificar, y por ende limitar, las cualidades mgicas de la mujer

  • todopoderosa de la fantasa, con la cual se tiene una deuda tan inmensa. El dictador siempre puede ser derrocado, y a la larga morir, pero la figura femenina de la fantasa inconsciente primitiva no conoce lmites en lo que se refiere a su existencia o a su poder.

    La regresin progenitor-nio

    El marco democrtico implica tambin la provisin de cierto grado de estabilidad para los gobernantes electos; mientras puedan cumplir sus funciones sin perder el apoyo de sus electores, siguen adelante. De esta manera el pueblo les asegura cierto grado de estabilidad que no podra conseguirse a travs del voto directo con respecto a cada cuestin que surgiera, aun cuando ello resultara factible. Aqu la apreciacin psicolgica consiste en que en la historia de todo individuo existe una relacin progenitor-hijo. Aunque en la forma democrtica madura de vida poltica se supone que los electores son seres humanos maduros, no puede darse por sentado que no existe un residuo de la relacin progenitor-hijo, con sus evidentes ventajas. En cierta medida, en la eleccin democrtica las personas maduras eligen a progenitores temporarios, lo cual significa que tambin reconocen, hasta cierto punto, que los electores siguen siendo nios. Incluso los progenitores temporarios elegidos, los lderes del sistema poltico democrtico, son tambin nios fuera de su actividad poltica profesional. Si mientras manejan su auto exceden el lmite permitido de velocidad, sufren las consecuencias judiciales corrientes porque manejar un auto no forma parte de su tarea de gobernar. Como lderes polticos, y slo en su condicin de tales, son progenitores temporarios, y cuando han perdido una eleccin vuelven a ser nios. Es como si se comprobara que resulta conveniente jugar a los padres y los hijos porque las cosas resultan mejor de esa manera. En otras palabras, puesto que la relacin progenitor-hijo ofrece ciertas ventajas, se conserva parte de ella; pero para que tal cosa resulte posible, es necesario que una proporcin suficiente de individuos sea lo bastante adulta como para que no les moleste representar el papel de nios.

    Del mismo modo, se considera negativo que las personas que juegan a ser padres carezcan ellos mismos de progenitores. Dentro del juego, generalmente se piensa que debe haber otro conjunto de representantes frente a los cuales los gobernantes elegidos directamente por el pueblo debern dar cuenta de sus actos. En Gran Bretaa esa funcin incumbe a la Cmara de los Lores, que est constituida en parte por personas que poseen un ttulo hereditario y en parte por personas que han llegado a ocupar un lugar en ella por haberse destacado en diversas ramas de la actuacin pblica. Tambin aqu los "progenitores" de los "progenitores" son personas, y capaces de hacer un aporte positivo como seres humanos. Y tiene sentido amar u odiar, respetar o despreciar a personas. En una sociedad no pueden existir sustitutos para el ser o los seres humanos que estn en la cumbre, en tanto se evale a la sociedad conforme a su madurez emocional.

    Y, adems, en un estudio de la situacin social en Gran Bretaa, podemos observar que los Lores son nios en relacin con la Corona. Aqu, en cada caso encontramos a personas que ocupan su posicin por herencia, y tambin por el hecho de conservar el amor del pueblo debido a su personalidad y sus acciones. Sin duda es til cuando se da el caso de que el monarca reinante da un paso ms y proclama espontnea y sinceramente su fe en Dios. Aqu llegamos a dos temas interrelacionados: el del Dios Agonizante y el Monarca Eterno.

    La frontera geogrfica de una democracia

    Para lograr el desarrollo de una democracia, en el sentido de una estructura social madura, parecera necesario que exista alguna frontera geogrfica natural para esa sociedad. Evidentemente, hasta hace poco e incluso ahora, el hecho de que Gran Bretaa est rodeada por mar (exceptuando su relacin con Irlanda) ha contribuido en gran medida a la madurez de la estructura de nuestra sociedad. Suiza tiene lmites montaosos, que resultan menos satisfactorios. Hasta no hace mucho, Estados Unidos tena la ventaja de contar con una regin que se conoce como el Oeste que ofreca posibilidades ilimitadas para la explotacin, lo cual significaba que, si bien dichos estados se mantenan unidos por vnculos positivos, no comenzaron sino recientemente a experimentar a fondo los conflictos internos de una comunidad cerrada, unida a pesar del odio, as como a causa del amor.

  • Un Estado que carece de fronteras naturales no puede dejar hacer una permanente adaptacin activa a sus vecinos. En cierto sentido, el temor simplifica la situacin emocional, pues muchos de los Y indeterminados y algunos de los X antisociales menos severos pueden llegar a identificarse con el Estado sobre la base de una reaccin cohesiva frente a una amenaza de persecucin externa. Con todo, tal simplificacin va en detrimento del desarrollo tendiente a la madurez, el cual es un proceso difcil que implica el pleno reconocimiento del conflicto esencial y la renuncia a toda va de escape o todo rodeo (defensas). De cualquier manera, la base de una sociedad es la personalidad humana total, y la personalidad tiene un lmite. El diagrama correspondiente a una persona sana es un crculo (una esfera), de modo que todo lo que sea no-self puede describirse como ubicado dentro o fuera de esa persona. Las personas no pueden superar, en cuanto a la construccin de una sociedad, lo que pueden alcanzar en su propio desarrollo personal.

    Por tales motivos miramos con desconfianza el uso de trminos como "ciudadana del mundo". Quiz slo unos pocos hombres y mujeres realmente notables y de edad avanzada llegan alguna vez tan lejos en su propio desarrollo como para que se justifique que piensen en trminos tan amplios.Si nuestra sociedad abarcara el mundo entero, necesitara entonces deprimirse en determinados momentos (tal como ocurre inevitablemente con una persona) y tendra que estar en condiciones de reconocer plenamente el conflicto esencial dentro de s misma. El concepto de una sociedad global encierra la idea del suicidio del mundo as como la idea de la felicidad del mundo. Por tal motivo suponemos que los protagonistas militantes de ese Estado mundial son individuos que estn en la fase manaca de una psicosis manaco-depresiva.

    La educacin en la tradicin democrtica

    Cualquiera que sea el grado de tendencia democrtica que existe, es posible incrementarlo mediante un estudio de la psicologa de la madurez social e individual. Los resultados de dicho estudio deben presentarse en un lenguaje comprensible a las democracias existentes y a los individuos sanos de todas partes, de modo que stos puedan volverse inteligentemente autoconscientes. De otro modo no sabrn qu deben atacar y qu deben defender, ni podrn reconocer las amenazas a la democracia cuando stas se presenten. "El precio de la libertad es la vigilancia eterna": la vigilancia llevada a cabo por quines? Por dos o tres del 100 - (X + Y + Z) por ciento de individuos maduros. Los otros estn muy ocupados tratando de ser buenos padres corrientes y transfiriendo a sus hijos la tarea de crecer y de ser adultos.

    La democracia en guerra

    Debemos preguntar: es posible que haya una democracia en guerra? Sin duda, la respuesta no es decididamente afirmativa. De hecho, existen algunos motivos por los cuales, en poca de guerra, debera anunciarse la suspensin temporaria de la democracia debido al conflicto blico.

    Es evidente que los individuos sanos y maduros, que colectivamente constituyen una democracia, deberan estar en condiciones de ir a la guerra:

    1) para asegurar su crecimiento;2) para defender aquello que valoran, que ya poseen, etc., y3) para combatir las tendencias antidemocrticas en la medida en que haya personas dispuestas a defender dichas tendencias a travs de la agresin.

    Con todo, lo ms probable es que muy contadas veces las cosas hayan sido as. De acuerdo con la descripcin ofrecida, una comunidad nunca est compuesta por un 100 por ciento de individuos sanos y maduros. En cuanto surge una amenaza de guerra, se produce una reorganizacin de los grupos, de modo que cuando estalla la contienda los individuos sanos no son los nicos que participan en la lucha. Consideremos nuestros cuatro

  • grupos:

    Muchos de los antisociales, junto con los paranoicos leves, se sienten mejor debido a la realidad de la guerra, y acogen de buen grado la amenaza real de persecucin. Encuentran una tendencia pro social a travs de la lucha activa.

    De los individuos indeterminados, muchos hacen lo que se espera de todo ciudadano, quizs utilizando la lgubre realidad de la guerra para crecer en una forma que les habra resultado imposible de otra manera.

    De los antisociales encubiertos, probablemente algunos encuentran una oportunidad para ventilar su necesidad de dominar a travs de las diversas posiciones clave que crea la guerra.

    Los individuos sanos y maduros no responden necesariamente tan bien como los otros. No estn tan seguros como los otros de que el enemigo sea realmente malo; tienen serias dudas al respecto. Asimismo, experimentan mayor preocupacin por la cultura del mundo, por la belleza y la amistad, y no les resulta fcil creer que la guerra es necesaria. En comparacin con los individuos casi paranoicos, se muestran remisos en tomar un arma y apretar el gatillo. De hecho, suelen perder el mnibus que los lleva hasta el frente, aun cuando una vez all, constituyen los elementos ms confiables y los ms capaces para adaptarse a la adversidad.

    Adems, algunos de los individuos sanos en tiempos de paz se vuelven antisociales en tiempo de guerra (pacifistas por conciencia) no por cobarda sino a causa de una genuina duda personal, tal como los antisociales de los perodos de paz tienden a participar con valenta en las acciones blicas.

    Por estas y otras razones, cuando una sociedad democrtica se ve envuelta en una guerra, todo el grupo es el que lucha, y sera difcil que se diera el caso de una guerra en la que participan slo aquellos miembros de la comunidad que proporcionan el factor democrtico innato en tiempos de paz.

    Podra ocurrir que, cuando una guerra ha perturbado una democracia, resulte adecuado decir que en ese momento la democracia ha terminado, y que quienes prefieren esa forma de vida debern comenzar nuevamente y luchar dentro del grupo para restablecer los mecanismos democrticos, una vez finalizado el conflicto externo.

    Se trata de un tema muy amplio, que merece la atencin de personas de mentalidad igualmente amplia.

    Resumen

    El uso de la palabra "democracia" puede estudiarse desde un punto de vista psicolgico en tanto implica madurez. Ni la democracia ni la madurez pueden imponerse a una sociedad.

    La democracia es el logro de una sociedad limitada en un momento determinado.

    El factor democrtico innato de una comunidad deriva de la funcin que cumple el buen hogar corriente.

    La principal actividad para promover la tendencia democrtica es de tipo negativo: evitar toda interferencia en el buen hogar corriente. El estudio de la psicologa y de la educacin, por lo que se sabe, constituye una ayuda adicional.

    La devocin de la madre buena corriente por su hijo encierra particular significacin, dado que la capacidad para la madurez emocional constituye el resultado de esa devocin. La interferencia masiva en ese momento debilitara rpida y efectivamente el potencial democrtico de una sociedad, as como menguara la riqueza de su cultura. NOTAS:

  • (1) Congreso de Salud Mental, Bulletin, 1958.

    (2) En este sentido, la representacin proporcional, aun cuando sea secreta, es antidemocrtica porque interfiere en la libre expresin de los sentimientos, y slo resulta adecuada para situaciones especficas en las que personas inteligentes y educadas desean conocer las opiniones conscientes.

    (3) Por "innata" quiero expresar lo siguiente: las tendencia naturales en la naturaleza humana (hereditaria) florecen y se transforman en el estilo democrtico de vida (madurez social), pero ello slo se logra a travs del desarrollo emocional sano de los individuos, de los cuales slo una determinada proporcin en un grupo social han tenido la suerte de alcanzar la madurez y, por lo tanto, slo a travs de ellos puede realizarse concretamente la tendencia innata (hereditaria) del grupo a la madurez social.

    (4) El buen hogar corriente desafa toda investigacin estadstica. No tiene valor de noticia, no es espectacular ni provienen de l los hombres y las mujeres cuyos nombres son conocidos por pblico. Basndome en veinte mil historias clnicas redactadas personalmente durante un perodo de veinticinco aos, creo que esa clase de hogar es comn e incluso habitual dentro de la comunidad en que trabajo.