POLÍTICA PÚBLICA DE PAZ

DOSSIER DE INFORMACIÓN

PROCESO

GOBIERNO DEL PRESIDENTE ALVARO URIBE VELEZ

EJERCITO DE LIBERACIÓN NACIONAL -ELN-

ENERO 9 DE 2008

Apoya

Contenido

PRESENTACIÓN......................................................................................3

DOCUMENTOS ELN ................................................................................6

LA PAZ ENMARAÑADA ................................................................................... 6

DECLARACIONES DEL ALTO COMISIONADO.......................................7

"LAS FARC QUIERE QUE NOS ENFRENTEMOS"................................................. 11 "EL ELN SACA EXCUSAS" ............................................................................. 15

OPINION...............................................................................................16

LA GRAN OBRA DE URIBE ............................................................................. 16 GOBIERNO-ELN: UN PROCESO QUE TIENE QUE DESPERTAR............................... 17 ESTÁ EL PRESIDENTE CHÁVEZ POR LA PAZ DE COLOMBIA?............................... 19 LUCHO GARZÓN: SOBRE LAS FARC Y EL ELN, ENTREVISTA TOMADA DEL LIBRO “LUCHO”................................................................................................... 21 EL ELN NO DEBE DILATAR EL PROCESO DE ACERCAMIENTO CON EL GOBIERNO, DICE BERNAL CUELLAR ................................................................................ 23 A PROPÓSITO DE LA NEGOCIACIÓN GOBIERNO – ELN: CINCO MENSAJES EN LA ÉPOCA NAVIDEÑA Y COMUNICADO DE LA COMISIÓN DE GARANTES “CASA DE PAZ”.......................................................................................................... 24

DESMOVILIZACION Y CAPTURA DE CABECILLAS DEL ELN.................27

“EL ELN PERDIÓ SU IDEOLOGÍA” .................................................................. 27 SE ENTREGAN CON NIÑO SEGUNDO AL MANDO DE FRENTE DEL ELN Y OTROS TRES REBELDES .................................................................................................... 29 CAPTURADO EN BOGOTÁ ALIAS 'PABLITO', MIEMBRO DEL COMITÉ CENTRAL DE LA GUERRILLA DEL ELN..................................................................................... 30 CAPTURAN IMPORTANTE MIEMBRO DEL ELN QUE SE OPONE A DIÁLOGO CON EL GOBIERNO.................................................................................................. 30

PRESENTACIÓN Se inicia el año 2008 y queremos presentarle a todos los lectores y las lectoras de este dossier

de información sobre los procesos de diálogos gobierno Colombiano y ELN, nuestro cordial

saludo, este es un año realmente decisivo para este proceso y no lo decimos de manera formal,

son reales los condicionamientos que implica un año en el que el gobierno del señor

presidente Álvaro Uribe Vélez cumple la mitad de su periodo, lo cual lo empieza a colocar

“con el sol a las espaldas” y va ser un punto que va a tener en cuenta en el proceso con el

ELN.

Luego de la fracasada facilitación del Presidente Chávez y la imposibilidad de realizar la

reunión acordada para Caracas entre gobierno y ELN, que había sido agendada para el 15 de

Diciembre, a la fecha no se conoce de contactos directos entre las partes, en la última semana

de Diciembre la comisión de garantes de “Casa de Paz”, enviaron una comunicación abierta al

gobierno Colombiano y al ELN, en la que propone una reunión en “Casa de Paz”, del Alto

Comisionado de Paz, Sr. Luís Carlos Restrepo, con los miembros de COCE y negociadores

del ELN, Pablo Beltrán y Antonio García, propuesta que es perfectamente viable y que puede

ser considerada por la partes.

Se inicia el año, con la continuidad de los “choques”, entre el Presidente Alvaro Uribe y el

Presidente Hugo Chávez, al momento de escribir esta presentación, se esta desarrollando el

duro intercambio por las afirmaciones hechas hoy viernes 11 de enero, ante la Asamblea

Nacional de Venezuela, en las que el Presidente Chávez, se reafirma en considerar a las

FARC y al ELN, como organizaciones insurgentes, con proyectos políticos, control territorial

y su solicitud de sacarlos de las listas de terroristas, haciendo explicita referencia a Europa.

El ELN, puede tomar varios caminos en este momento; mantener su silencio y distancia frente

al gobierno Colombiano, luego de la crisis con el Presidente Chávez, el la cual el ELN, valora

que es una acción unilateral, que en nada comparte y que ha criticado en sus

pronunciamientos, o puede escuchar y valorar propuestas como la del Grupo de Garantes de

Casa de Paz y su propuesta, que reproducimos de manera integra en este dossier.

Por experiencias anteriores, luego de cursada la operación de entrega por parte de las FARC

de las Señoras Consuelo de Perdomo y Clara Rojas, el ELN, puede asumir la iniciativa de

volver a la mesa y valorar la crisis de noviembre, en relación con la cancelación de la

facilitación del Presidente Chávez por parte del Gobierno Colombiano, en la medida en que

fue una acción unilateral, sobre la cual el ELN va a pedir en la mesa de alguna manera

“cuentas”, al considerarlo como ruptura de un acuerdo, sin previa consulta, esto puede sonar

desproporcionado, pero en la lógica del ELN, de asumirse como parte, considera que esta en

todo su derecho de plantearlo y tramitarlo en la mesa.

Lo deseable y esperemos que así suceda en las próximas semanas es que se vuelvan a retomar

los contactos entre gobierno Colombiano y ELN.

De nuestra parte, como institución comprometida con la búsqueda de caminos de paz, nos

mantendremos atentos a los pasos que se den en la dirección de fortalecer los mecanismos de

dialogo y negociación. Este dossier de información, hace parte del proyecto “POLITICA

PUBLICA DE PAZ”, que adelantamos con el apoyo de la “AGENCIA CATALANA DE

COOPERACIÓN AL DESARROLLO”, a quienes agradecemos su confianza y aporte.

LOS EDITORES

DOCUMENTOS ELN

La paz enmarañada

Revista Insurrección No. 092 – 24 de diciembre de 2007 La paz, que es la máxima aspiración de los colombianos y un mandato taxativo de la Constitución del 91 que obliga a los gobiernos a trabajar por ella, termina este año sin avances, más embolatada que antes y con el horizonte oscurecido. Los esfuerzos hechos en años anteriores y en el presente, no cuajan en resultados concretos a pesar de las manifestaciones de voluntad de la Insurgencia para buscar la solución política, de las expectativas de sectores importantes de la sociedad, en medio de la desesperanza y del apoyo de la comunidad internacional interesada en que se supere el conflicto interno. Los diálogos con el ELN llegaron a un punto muerto cuando el Gobierno quiso reducir el Acuerdo Base, considerado como un primer paso para generar un ambiente para la paz, a que la Guerrilla se pusiera en desventaja militar. Al tiempo que el Gobierno se negó al cese, con el argumento que las fuerzas gubernamentales no cometen hostilidades contra el pueblo. A lo anterior se suma el chantaje que con todo sigilo vienen tramando el Presidente con el gobierno de los Estados Unidos: la extradición de militantes del ELN bajo la acusación de captura de rehenes norteamericanos. Los acercamientos con las FARC sobre la propuesta de Acuerdo Humanitario, como antesala a un proceso hacia los diálogos de paz, no prosperan debido a la negativa del Gobierno, de permitir un espacio con las necesarias garantías para hacer el intercambio de prisioneros. En medio de la crisis de los diálogos y del Acuerdo Humanitario surge la propuesta del Gobierno para conferir facultades de facilitador al presidente Hugo Chávez y a la senadora Piedad Córdoba, iniciativa que fue recibida por ambas guerrillas como la posibilidad de desatrancar los procesos. Cuando avanzaba por buen camino y empezaba a dar frutos la gestión humanitaria de la facilitación, el presidente Uribe canceló de manera abrupta y grosera las facultades que días antes había conferido.

Editoriales

Revistas No. 093-094 - 31 de diciembre de 2007/ 8 de enero de 2008

Editoriales

MENSAJE DE AÑO NUEVO

Al finalizar el 2.007, enviamos un mensaje revolucionario y fraterno a todos los hombres y mujeres que en el país y el mundo, participan y animan las luchas del pueblo colombiano por paz, democracia y soberanía.

Somos solidarios con los miles de trabajadores colombianos que, en medio de sus angustiosas luchas, vieron privatizarse en avalancha neoliberal las más importantes empresas que aun eran patrimonio nacional como Ecopetrol, las electrificadoras y las de servicios públicos. Damos nuestro abrazo solidario a esos cientos de miles de mujeres y hombres, que ahora sin trabajo y con salarios de hambre constituyen parte del 63 por ciento de los pobres de Colombia.

A ellos y a sus organizaciones políticas y sociales, les reiteramos que juntos seguiremos en lucha contra los explotadores y opresores, llevando en alto las banderas por las que dieron la vida luchadores como Bolívar, Gaitán, Camilo Torres, Manuel Pérez, Luís Carlos Cárdenas, Omaira Montoya, Héctor Useche y tantos otros.

Sea el momento para destacar las luchas de indígenas, estudiantes y maestros que en medio de brutal represión gubernamental, colocaron arriba la resistencia y dignidad con que luchan los diversos sectores del pueblo colombiano.

Acompañamos la lucha de las víctimas de la guerra sucia estatal, en su esfuerzo por lograr verdad, justicia y reparación. Así mismo, hacemos nuestra la lucha por la dignidad y libertad de los millares de prisioneros políticos, confinados en las cárceles del régimen.

La solidaridad con los casi 3 millones de colombianos desplazados y la lucha por la superación de esta dantesca tragedia humanitaria, enlazó este año a muchos hombres y mujeres del país y el mundo, que denunciaron y condenaron con valor al Estado y gobierno colombianos así como al paramilitarismo, su aparato terrorista, que sigue enlutado a los colombianos humildes, encubierto con una grotesca manipulación de la que hace gala el propio gobierno encabezado por el Presidente.

Saludamos con agradecimiento a los pueblos y gobiernos de Cuba y Venezuela, quienes con toda generosidad y respeto facilitaron su territorio para desarrollar los diálogos con el gobierno del presidente Uribe, en los que el ELN se esforzó por concretar un proceso cierto de paz.

De igual manera nuestro saludo de año nuevo es para los gobiernos y pueblos de

España, Noruega y Suiza, que también nos han acompañado en los diálogos con el gobierno colombiano en el año que termina.

Otros gobiernos como Suecia y organizaciones de la comunidad internacional también ofrecieron su concurso en el proceso de diálogo, por lo que es el momento para dar a todos nuestros agradecimientos y decirles que seguimos requiriendo de su apoyo y solidaridad, porque no ahorraremos esfuerzos por lograr la paz con justicia social, así tengamos que vencer mil y un obstáculos.

A todos los compatriotas, como el Grupo de Garantes, la Comisión de Seguimiento de la Conferencia Episcopal, la Comisión de Facilitación Civil, al Consejo Nacional de Paz y demás organizaciones amigas de la Solución Política, les expresamos nuestro reconocimiento porque junto a ellos construimos caminos, que servirán para seguir avanzando en un esfuerzo porque la democracia, la soberanía y la paz con justicia y dignidad, se impongan sobre la injusticia, la exclusión y el belicismo de quienes hoy gobiernan en Colombia. Gracias a todos ustedes porque sin su ayuda y esfuerzos nuestra acción política no hubiera sido ni será posible en adelante, aun nos falta mucho y persistiremos por ese camino.

A todos los insurgentes colombianos, va nuestro abrazo sincero y nuestros deseos para que el 2.008, sea un año de superación de las dificultades, en el que avancemos en tratar con altura las dificultades y diferencias.

Confluimos con las aspiraciones de la humanidad por restablecer su equilibrio con la naturaleza y por superar la explotación productivista de ella.

Por último, también nos sentimos parte de las dignas luchas de varios pueblos del Caribe, Centro y Suramérica, que se yerguen valerosos ante las amenazas imperialistas, en su esfuerzo para desarrollar un camino de democracia, autodeterminación y socialismo.

Comando Central del ELN Montañas de Colombia Diciembre 31 de 2007

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VIGENCIA DEL ALZAMIENTO EN ARMAS

El ELN nació el 4 de julio de 1.964 y apareció públicamente el 7 de enero de 1.965 con la toma de la población de Simacota, en el Departamento colombiano de Santander.

Nuestra aparición pública dejaba claro que nos levantábamos en armas contra un régimen represivo, excluyente y explotador, responsable de la sangrienta guerra civil llamada "La Violencia", que dejó más de 300 mil muertos y alrededor de un millón de desplazados.

Ese abominable acontecimiento cuya responsabilidad es del régimen, quedó en la más completa impunidad. Del sacrificio de los muertos y desterrados se enriquecieron terratenientes y burgueses, quienes acrecentaron sus latifundios con la tierra de sus víctimas y consiguieron mano de obra barata para sus nacientes empresas.

El nivel represivo de la oligarquía no solo fue la llamada Violencia de los años 50, cuando asesinaron al dirigente popular Jorge Eliecer Gaitán, que les amenazaba el monopolio de su gobernabilidad, sino el posterior asesinato de estudiantes, obreros y campesinos que se atrevían a ejercer su derecho a denunciar, disentir o protestar ante la violencia oficial.

Colombia venía de la Masacre de las bananeras de 1.928, donde los trabajadores fueron asesinados por reclamar sus derechos. El régimen los mató para garantizarle los dominios a la misma empresa estadounidense, que recientemente fue condenada por financiar los paramilitares en el Urabá antioqueño.

Estos antecedentes históricos nos dieron del derecho a la rebelión, que mantenemos desde entonces y que continuamos defendiendo porque contrario a lo que piensan algunos, en Colombia hoy sigue siendo válido el levantamiento en armas, pues la esencia del régimen sigue siendo altamente represiva y excluyente. Además institucionalizó el terrorismo de Estado y cada día se hace más difícil encontrar una salida política al conflicto, esfuerzo que el ELN mantendrá a pesar de la estrechez que encuentra para desarrollarlo.

Nuestro caminar revolucionario en estos 43 años no ha estado exento de errores, los más graves los hemos reconocido en su momento y nos asiste la dignidad y coraje para seguirlos reconociendo cuando ocurran, al tiempo que reafirmamos la concepción humanista y altruista de nuestra causa.

Siempre hemos tenido claro que el objetivo o fin de nuestra lucha, no justifica el desborde de los medios y métodos para lograrlos, muy por el contrario nos debemos a una disciplina orientada en nuestros Estatutos y Reglamentos como guía de acción y nos inscribimos en el contexto del Derecho Internacional

Humanitario para el desarrollo de la actividad revolucionaria.

En nuestro ser Eleno caben el mundo, el futuro y un modelo de país, nación y sociedad donde la democracia, la soberanía y la justicia social se hagan realidad, porque en el capitalismo no caben estos valores.

El ELN tiene claro que lo que hoy rechaza el pueblo de la insurgencia no es la lucha, sino los errores cometidos. Estamos abiertos a los cuestionamientos, porque somos conscientes dónde hemos fallado y encontramos en la critica franca la manera sana de ver los errores y su causa, para corregirlos y seguir el camino.

El ELN al iniciar el 2.008, seguirá actuando de manera armoniosa sobre dos ejes de lucha, la resistencia armada revolucionaria y la acción política, así esta última tenga muchas limitaciones por el carácter terrorista y excluyente del régimen autoritario que enfrentamos.

Hoy con el caminar democrático y libertario de una parte importante de los pueblos del continente americano, los imperialistas del mundo expresan su inconformidad y amenazan estos jóvenes procesos. Es por este peligro, que nuestra condición insurgente es más válida que antes.

Estos pueblos y gobiernos demócratas y revolucionarios, pueden tener la seguridad que nuestra experiencia de 44 años en la guerra irregular y guerrillera, nuestras armas y nuestros hombres, tienen un espíritu internacionalista y están prestos a aportar sus modestos esfuerzos y dar la vida si es necesario, por ver realizado el sueño del Che y nuestro libertador Simón Bolívar.

Nicolás Rodríguez Bautista, Primer Comandante del ELN.

Enero 7 de 2.008.

DECLARACIONES DEL ALTO COMISIONADO

"Las FARC quiere que nos enfrentemos" EL UNIVERSAL DE CARACAS, 20 DE DICIEMBRE "Le reitero al presidente Chávez que no haya más comentarios contra el presidente Uribe y en contra de Colombia" "Le hago un llamado a Piedad Córdoba para que modere su lenguaje. Que denuncie quién busca asesinarla"Luis Carlos Restrepo Frank López Ballesteros Desde su despacho en el Palacio de Nariño, el alto comisionado de Paz de Colombia, Luis Carlos Restrepo, envía dos mensajes a las FARC y al ELN. Al primero le pide "que de manera inmediata concretemos el acuerdo humanitario. Lo que necesitamos es la lista de los presos que deseen que liberemos". Al ELN le sugiere "que avancen en la firma de ese acuerdo base y dejen las armas". Ante la anunciada liberación de tres rehenes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y su entrega al presidente Hugo Chávez, Restrepo asegura que por ahora no existe un "Plan B" ante el rechazo de las propuestas del Gobierno de Álvaro Uribe. -¿Existía un plan B ante una posible negativa por parte de las FARC a la propuesta hecha por el presidente Álvaro Uribe? -Nosotros conocemos la propuesta de las FARC. Estamos buscando una salida intermedia, razonable. Realmente las cartas las tenemos sobre la mesa y creemos que las cosas van por buen camino. -A punto de terminar el año, ¿Cuál podría ser el balance de su gestión? -En cuanto a las autodefensas estamos en el proceso de aplicación de la justicia y ellos respondiendo ante la ley. En cuanto al ELN, realmente no se ha podido dar un avance significativo, tenemos una propuesta. Es un buen texto, pero el ELN sigue todavía con duda de dar un paso de abandonar las armas, de integrarse a un propósito político. En el ELN hay bandos medios que se han endurecido porque están cada vez más comprometidos con el narcotráfico. -¿Las negociaciones seguirán en Caracas como se tenía previsto o hay un cambio? -La agenda de Caracas la agotamos porque lo que se planteó allí fue una reunión con el presidente Chávez que estuvo precedida por otros encuentros previos. Con Chávez se trataron de buscar fórmulas para verificar el cese de hostilidades. Sin embargo el ELN no tuvo una respuesta positiva. -Pero el ELN ha dicho que uno de sus malestares fue la salida del presidente Chávez de

las negociaciones… -Tanto el ELN y las FARC han tratado de aprovechar la circunstancias de la suspensión de la mediación para culpar al gobierno colombiano de no avanzar, eso es más un manejo político de parte de ellos que tratan de mostra al gobierno colombiano de intransigente y a su vez mostrarse más cercanos a los ideales de la revolución bolivariana por eso no incide mucho en el proceso mismo ya que el proceso no avanza por hay sectores que no avanzan porque buscan una unidad de acción política y militar con las FARC para fortalecerse en Colombia para también expandirse continentalmente. -Es positivo que estos movimientos compartan la misma ideología del presidente Chávez? -Nosotros lo hemos constatado como un hecho y se lo dije siempre al presidente Chávez: que ambos grupos ven en él un referente ideológico. Pero estos grupos prefieren jugar al desorden, se alimentan con el caos en la región. Ni el ELN ni las FARC están interesados en una buena cooperación entre ambos gobiernos porque ellos ganan más si nos ponen a pelear. -Ustedes han acusado al ELN de no deslindarse del narcotráfico, ¿Hasta dónde están implicados ellos en estos hechos? -En este momento el ELN deriva 75% de sus ingresos del narcotráfico y está muy comprometidos en zonas como Catatumbo, Turbe de Bolívar, Arauca, Nariño, Cauca y el Chocó. Cada vez más la dinámica del narcotráfico se hace fuerte en el ELN a pesar de que sus líderes se han distanciado, pero no deja de ser una posición ideológica que los caracteriza. Incluso han llegado a acuerdos con las FARC y la mafia colombiana para controlar rutas. -¿Existen ordenes de extradición por parte de EEUU para miembros del ELN? - Las que existen son por temas relacionados al secuestro. Ya en Colombia están procesados por delitos del narcotráfico y estas decisiones son inapelables. -¿Funcionará la Ley de Justicia y Paz a la hora de negociar un acuerdo con la guerrilla? Ellos han sido reticentes a aceptar esta propuesta. -El ELN y las FARC pretenden indultos por todos sus crímenes, han cometido delitos atroces. Nosotros no estamos obligados a cumplir eso por nuestra legislación nacional e internacional. Pero todavía falta mucho para llegar a ese debate. Yo no creo que ellos puedan pretender perdón por sus crímenes. -Recientemente un diario español publicó un trabajo sobre campamentos de las FARC en Venezuela e incluso se decía que Ingrid Betancourt podría estar en territorio venezolano, ¿su gobierno está al tanto de esto? -Esos son rumores persistentes. Nosotros tenemos evidencia de que grupos ilegales cruzan la frontera y esa información la tienen las autoridades venezolanos, pero esto tiene que ver con la gran frontera que compartimos. Yo lo prefiero ver desde este punto de vista. -¿Desde cuando percibieron el primer signo de que la mediación de Chávez estaba fallando? -Hay dos tipos de asunto: el primer tiene que ver con la expectativa de si las FARC iban a Caracas. Entonces inmediatamente ellos hablarían con Chávez Piedad o conmigo, pero eso en realidad no sucedió. Aunque yo planteé mi interés de estar en esa reunión, ellos (Piedad y Chávez) le solicitaron al presidente Uribe que no fuera y eso fue un grave error. Pues las FARC llegó con el mismo discurso, allí faltó claridad de los mediadores. Debieron exigirle a las FARC que no se retiraran hasta negociar el acuerdo humanitario.

Cuando nosotros abrimos el escenario para que mediara el presidente Chávez y Piedad Córdoba dejamos muy claro cuál era el objetivo. Además, hubo muchos problemas metodológicos. -¿Cómo cuáles? -Nosotros acordábamos cosas en las reuniones internas, después se nos empezaban a hacer solicitudes públicas que no correspondían con lo hablado. Nosotros aclaramos que el tema del despeje estaba cerrado, luego se comenzó a insistir en la reunión con Manuel Marulanda que implicaba un despeje militar, teníamos nosotros que sacar comunicados públicos diciendo que eso no correspondía a lo conversado. Cuando se suspendió la reunión en Caracas el 8 de octubre se salió a decir públicamente que el gobierno no había dado las garantías de seguridad y eso no correspondía a la realidad porque con nosotros no se nos había pedido eso. Eso se sumo a que no se entregaran las pruebas de vida en Paris y reveló parte de la conversación que se sostuvo en Santiago. -¿Esperaban una reacción del presidente Chávez de tal forma? -Nosotros supusimos que esto no iba a generar mayor trauma, entre otras cosas porque nosotros habías hablado con el presidente (Chávez) de que si esta mediación terminaba, no se fueran a afectar las relaciones entre los dos países. -¿Ya estaba advertido? -Sí claro, eso estaba muy claro, el presidente Uribe se lo había dicho y yo se lo reiteré. Incluso le dije que el interés de las FARC era que termináramos enfrentados. El presidente Chávez tiene claro que defendemos dos sistema políticos distintos, nunca lo hemos escondido. Queremos también que esto quede en su justo punto. Y aprovecho este momento para reiterarle al presidente Chávez que no hayan más comentarios ofensivos hacia el presidente Uribe, pues si hay un propósito humanitario en el medio las ofensas no ayuda. -Piedad Córdoba ha seguido una especie de agenda paralela tras su salida como facilitadora. ¿De qué forma afecta este discurso al proceso? -Las declaraciones que hizo Piedad Córdoba sobre su posible asesinato por un funcionario de nuestro gobierno son en nuestra opinión, irresponsables. Este tipo de faltas por parte de Córdoba tampoco ayudaron en su facilitación y menos ahora para generar un clima de convivencia entre ambos países. Le tenemos cariño por ser colombiana y la llamamos a denunciar quien la amenazo. Yo le hago un llamado a que modere su lenguaje. Que tenga una actitud más tranquila, que no confunda su rol de opositora con la tarea humanitaria que quiere adelantar. Esto también demuestra las decisiones que tomamos. La primera fórmula en todo esto es la prudencia, que le faltó mucho a los roles que otorgamos. -Sobre esa prudencia… el presidente Uribe ha hecho una comparación entre Hugo Chávez y Fidel Castro, ¿es bueno que los dos se parezcan? ¿Qué quiso decir con esa afirmación? -Se lo diré a usted como se lo dije al presidente Chávez: su liderazgo y su proyecto político resultan atractivos para las FARC, y eso lo veíamos como una fortaleza. Hay que mirar más esto desde un punto de vista positivo. -¿Pero es positivo pensar "si yo fuera las FARC", que Chávez controla el petróleo, impone gobiernos y puede llegar a poner un presidente en Colombia? -No quiero entrar a interpretar al presidente Uribe, pero sí expresar nuestra visión conjunta cuando recurrimos a Chávez: él tiene un proyecto político exitoso que la atrae a las FARC,

mirémoslo en esos términos. Pero en estos momentos tenemos unos destinos diferentes: defendemos una economía de libre mercado, insistimos mucho en un régimen de libertades, la separación de poderes, sobre todo el civil del militar, y bueno, Venezuela vive su propia dinámica. Lo mejor sería manejar con altura estas diferencias ideológicas. . -Por qué aceptar de nuevo la ayuda de la Iglesia, ¿es incapaz el gobierno colombiano de buscar un contacto directo con las FARC? - Nosotros hemos tenido un problema con las FARC y es que ellos se niegan a hablar con el gobierno porque piden dos zona desmilitarizadas, la misión del mediador era descarta esta opción. ¿Por qué no tomar el riesgo, cuál es el peligro? -Imagine entregar dos poblados cercanos a Caracas o Maracaibo con 110.00 habitantes. Que los grupos armados fusilen a quines estén en contra de ellos y que luego de ese control se siente a hablar. Es absurdo pedirle al gobierno que para entregar 50 secuestrados nosotros les entreguemos como rehenes a 110.000 personas con todos sus bienes. Eso se intentó y fracasó, ya conocemos la receta de ellos. -¿Cabe en la mentalidad colombiana unas FARC política y haciendo política? -¡Claro! no hay problema, se lo hemos ofrecido muchas veces. Pero la condición es que abandonen la violencia, ellos pretenden hacer política con las armas en mano. En Colombia habría un enorme apoyo sin las FARC y el ELN hacen político. -¿Cuáles son las intenciones del presidente nicaragüense Daniel Ortega cuando llama hermano a las FARC? -Esas afirmaciones le rememoran a él sus épocas de guerrillero cuando sentía una cercanía con las FARC. Tal vez el presidente Ortega no se da cuenta de que sus expresiones ofenden al pueblo colombiano. Puede ser una cuestión de perspectiva -El congreso de EEUU redujo el prosupuesto para el Plan Colombia. Afirman que no hay avances sustanciales en el tema de los derechos humanos, ¿qué nos puede decir? -Nosotros los colombianos estamos en medio de disputas entre los republicanos y los demócratas de Estados Unidos. Y nos pagan una cantidad de cuentas de cobro que, de alguna manera, ofenden a la dignidad nacional. EEUU tienen una gran deuda con Colombia porque nosotros llevamos el peso de la guerra contra las drogas y ellos son los principales consumidores. -Si las FARC y el ELN exigen como condición para negociar el regreso del presidente Chávez a la medición, ¿Habrá otra oportunidad? -Nosotros fuimos claros cuando invitamos al presidente Chávez, como cuando dimos por concluida su labor. La idea era un acuerdo con las FARC cuando fueran a Caracas, eso no se consiguió, así que esto es un camino cerrado. Si ellos quieren entregar a los secuestrados al presidente Chávez, pues que lo hagan, esto no es un asunto de vanidad, sino de humanidad. Creemos un clima favorable para eso. -¿Su mensaje para el ELN en vista del nuevo estancamiento? -Firmemos el acuerdo que tenemos discutidos en la mesa. Pongámoslo en marcha ya, no hay que agregarle una sola palabra y les abrimos el escenario de la política para que ellos avancen en la convocatorio de lo que ellos llaman la Convención Nacional. Ya no necesitamos más

facilitadores, ni mediadores. Ya tenemos todo listo porque está todo en un texto. Que dejen las dudas, sus armas y que aproveche este momento. El ELN tiene que comprender que esos cuatro fusiles no pagan. Ellos en vez de tomar la iniciativa esperaron los pasos que daban las FARC para actuar. -Los familiares de los rehenes del ELN criticaron que su gobierno no exigiera la liberación de los cautivos… A nosotros nos criticaron porque aceptamos negociar con el ELN sin condiciones de por medio. A los paramilitares se les exigió un cese al fuego y nosotros simultáneamente seguimos las operaciones militares contra ellos. Al ELN no se le ha pedido nada porque así lo solicitaron muchos sectores de la comunidad civil e internacional. -¿Estarían dispuestos a solicitar el regreso de Simón Trinidad y de Sonia si las FARC lo pide para ese acuerdo humanitario? -Ese asunto ya está concluido y nosotros somos respetuosos de la cooperación internacional. Le ofrecimos a las FARC- antes de la extradición de Trinidad- que se lo entregábamos si nos devolvían a los secuestrados y dijeron que "él era un tiro quemado".

"El ELN saca excusas" Diario de Occidente, 17 de diciembre 2007 El gobierno declaró ayer que la guerrilla del ELN utiliza cualquier excusa para no seguir adelante en el proceso de paz, después del más reciente comunicado de esa organización, donde manifiesta que la negociación está congelada tras la suspensión de la mediación del presidente Hugo Chávez. "Vemos que el ELN saca excusas para no continuar en este proceso de paz. Lamentamos que muchos de estos sectores dentro del ELN opten por tomar más el camino del narcotráfico que el camino de la paz", dijo Restrepo. Sin embargo el funcionario aseguró que todavía existen posibilidades para reiniciar los diálogos porque "hay un excelente texto de acuerdo base que ha sido discutido en la mesa. Bastaría con que esa organización guerrillera manifestara su voluntad de avanzar en un proceso de paz serio con el gobierno, para que le podamos dar una buena noticia a los colombianos."

OPINION

La gran obra de Uribe Diego L. Arias T EL TIEMPO. Diciembre 26 de 2007 Se le atribuye a la Política de Seguridad Democrática el objetivo central de derrotar militarmente a la guerrilla -y otros factores de violencia- y, por esa vía, lograr su sometimiento o disolución. Esta estrategia no niega, en el caso de las guerrillas, negociaciones políticas de paz, pero, salvo en el caso del tortuoso e incierto proceso con el Eln, el énfasis de la estrategia ha sido militar, sobre todo con las Farc. Lo de las Auc es otro asunto, a mitad de camino entre la negociación y el sometimiento a la justicia. El fracaso del Caguán fue de tal magnitud que cerró las opciones de una solución negociada, al menos por un buen tiempo, aunque algunos deseen que sea para siempre. De esta especie de "hecatombe" surgió la "seguridad democrática", la apuesta por la victoria militar e, incluso, la idea de que, en el contexto actual, el nuestro no es un conflicto armado, sino un ataque narcoterrorista. Esta perspectiva ha avanzando en medio de un apoyo público significativo (aunque no unánime), éxitos militares oficiales notables y un creciente deterioro ético y político de las guerrillas. Existe, además, una alta probabilidad de que, en términos militares, la confrontación esté en un punto de "inflexión", en el que, estratégicamente hablando, el Estado tiene cómo imponerse sobre la guerrilla. Cuando el proceso de paz se dio con las Farc, en tiempos de Pastrana, la situación era otra: un Estado en crisis y quebrantado militarmente; una sociedad que daba un mandato por la paz; y del otro lado, una guerrilla crecida militarmente, con iniciativa política, pero obnubilada con la idea no de negociar la paz, sino de tomarse el poder. La situación en relación con la correlación de fuerzas entre el Estado y la insurgencia es hoy otra. Y hay avances en muchos otros frentes, a pesar de la persistencia de la crisis en muchos ámbitos de la vida nacional. ¿Por qué entonces, con todos estos elementos, justo ahora, hablar de negociaciones de paz? Hay una argumentación que pasa básicamente por una consideración ética, otra militar y una más política. La primera siempre nos dice que es más humano y civilizado el diálogo que la guerra; la segunda, que la llamada "victoria" militar nunca será absoluta, y la consideración política plantea al buen gobernante un empeño supremo para buscar ganar primero la paz antes que la guerra. A mediados del año pasado, antes del funesto atentado contra la Escuela de Guerra, se escuchó del propio presidente Uribe hablar de una negociación de paz, luego del intercambio humanitario; se habló, incluso, de un nuevo marco jurídico, distinto del empleado para la desmovilización paramilitar, para hacerla posible. Pero han sido desconcertantes la indefinición y los ires y venires presidenciales en el tema, lo cual puede sugerir falta de claridad, de voluntad, de oportunidad, temor o todo junto.

Un reciente informe de un centro de pensamiento norteamericano le otorgó a Colombia avances y buena calificación en muchos frentes de lo institucional, la seguridad y la economía, pero anotó como "prioritaria" la búsqueda de una solución negociada de la confrontación interna. Se sabe también que la presión internacional (incluido Estados Unidos) y la interna (empresarios) para barajar "opciones políticas" viene en aumento. Quiéralo o no, a mediano plazo, si no antes, el Gobierno tendrá que tener una propuesta global para una negociación de paz. Y tiene cómo hacerlo si se percata de varias cosas: de que tiene el capital político suficiente y de que hacerlo no es debilidad; de que, a pesar de todo (narcotráfico, degradación y barbarie), este es un conflicto armado (que no es lo mismo que "guerra civil"), y de que negociar la paz implicará algo más que garantías y reinserción para las guerrillas. Una negociación de paz, además de reincorporación, puede versar también sobre cambios estructurales a condición que estos sean democráticos y aceptados por la sociedad. El gran aporte de las guerrillas en esta perspectiva será su renuncia al inalcanzable propósito de "tomarse el poder", aunque sí puede discutirse sobre la estructura de ese poder y los mecanismos de acceso al mismo. Entre una negociación improbable sobre llegar o compartir el poder y una desmovilización sin nada a cambio, está el campo de las reformas estructurales. En el caso del Eln, está en construcción, y con las Farc supondría hacer de la 'Agenda para la Nueva Colombia', acordada en el Caguán, su programa "máximo" y no mínimo, como la piensa hoy. Con "mano firme y corazón grande" también se puede llegar a ese punto; con más apertura para lo segundo, sin aflojar en lo primero. Ojalá el presidente Uribe tome la iniciativa y, en ese camino, el "intercambio humanitario" sea un factor de avance, no de obstáculo. Más temprano que tarde habrá que llegar a negociaciones de paz. La gran obra de Uribe será ganar la paz, no la guerra. Si no tiene éxito o no lo intenta será un esfuerzo que impondrán los demócratas de Estados Unidos cuando asuman el poder en 2008 o será la tarea histórica de un probable gobierno próximo de Ingrid Betancourt en el 2010.

Gobierno-Eln: un proceso que tiene que despertar Ricardo Correa, LA PATRIA. DICIEMBRE 2007 El país se ha olvidado de que existe un proceso de paz vigente. El Gobierno Nacional y el Ejército de Liberación Nacional-Eln, adelantan diálogos desde diciembre de 2005. Desde hace varios meses, en asuntos relacionados con el conflicto armado y la muy esquiva paz del país, la opinión pública sólo ha escuchado o leído sobre las Farc. La muerte de los diputados del Valle, la intervención y salida de Chávez, Sarkozy, las pruebas de supervivencia, la histórica imagen de Ingrid Betancur y ahora expectativa por entrega de Clara Rojas, Emmanuel y Consuelo González. Con las Farc hay sólo guerra, y dentro de este ambiente bélico, una pequeñísima ventana de alivio humanitario, que es empañada a diario por la guerrilla y por el Gobierno al insistir cada

uno en unas condiciones que hacen imposible el regreso de los secuestrados políticos a la libertad. El país se ha olvidado de que existe un proceso de paz vigente. El Gobierno Nacional y el Ejército de Liberación Nacional-Eln, adelantan diálogos desde diciembre de 2005, dos años ya. Este proceso ha sido subvalorado por la opinión y principalmente por el Gobierno. No se le presta el cuidado que merece. Parece que no existiera conciencia sobre la importancia que tiene llegar a un acuerdo de paz con esta guerrilla, que si bien no tiene el tamaño y la virulencia de las Farc, sí está activa y tiene posibilidades de sostenimiento y aún de crecimiento. El Eln tiene hoy entre 3.000 y 3.500 miembros en armas, vigencia en al menos diez departamentos y en algunas zonas ha sido capaz incluso de doblegar militarmente a las Farc. En cuanto al narcotráfico, si bien su consigna ha sido no entrar en él, el remolino del conflicto, la necesidad apremiante de dinero para sostenerse, su presencia en zonas de cultivo, lo han llevado a sucumbir a la tentación de mayores recursos. De aquí a involucrarse a fondo en este negocio la distancia no es mucha. Es claro que el Eln no representa un gran riesgo para la fuerza pública, y su nivel de agresión a la población civil es mucho menor que el de las Farc y los remanentes paramilitares. Pero todavía existe, y mientras exista como grupo armado, es un factor de inseguridad tanto para las personas como para las instituciones. No es conveniente hacer analogías históricas y pensar que si no se hace nada, es decir, un proceso de paz, el ejército y el tiempo acabarán con este grupo al igual que con el Epl. Tal vez, y contrario a esta evidencia histórica, lo que podríamos encontrar en unos años es un Eln fortalecido y recuperado, y con una capacidad de daño mayor. Y aún en el evento de su paulatina desaparición, lo que queda en el camino es sufrimiento y violencia que se pueden evitar. El proceso de paz entre el Gobierno y esta guerrilla es viable, es posible. Las dos partes tienen intención de adelantar la negociación bajo un cese al fuego con entrega de los secuestrados en poder de los “elenos”. Hay dificultades, pero se pueden sortear. El Gobierno había insistido siempre en que el cese al fuego se realizara con concentración de las tropas guerrilleras y con identificación de los combatientes. El 3 de diciembre cambió de parecer y a través del analista y ex miembro del Eln, León Valencia, envió un mensaje a la comandancia guerrillera desistiendo de su exigencia y pidiéndole que hiciera propuestas para un cese al fuego eficaz y confiable sin concentración, en el entendido de que la fuerza pública requiere combatir a los otros actores armados ilegales. Por el lado del Eln es entendible su temor a dar un paso tan importante como lo es dar fin a la organización y cambiar radicalmente de vida. Pensemos que su comandante Gabino lleva cuarenta años como guerrillero y no conoce otra forma de vida, y como él muchos otros. Es aquí donde tanto Gobierno como sociedad tienen que contribuir a mostrar un futuro más allá de la guerrilla, donde haya un sentido de vida para quienes dejen las armas.

Columnas básicas de este proceso son las víctimas de este grupo insurgente y la justicia que será menester aplicar. Los tiempos actuales no aceptan una paz sin estos elementos. Machuca, La María, el kilómetro 18, el avión de Avianca y centenares de víctimas individuales esperan una solución que respete su condición y sus derechos. Esta negociación debe incluir una salida digna para todos: Gobierno, Eln y víctimas. Unas reformas útiles para el país, planes de desarrollo especiales para ciertas regiones, miles de excombatientes por fuera de la guerra, son hechos que van más allá de lo visible y siembran una semilla de paz para una Colombia diferente a la que vivimos.

Está el presidente Chávez por la paz de Colombia?

LUIS EDUARDO CELIS EL TIEMPO, Enero 6 de 2008 El presidente Hugo Chávez es un personaje controversial en Colombia y en el mundo. Sin exagerar, 2007 fue un año especialmente sensible en las relaciones entre los presidentes Uribe y Chávez, y no fueron pocos los "platos rotos" que hubo entre los dos. Esto llevó a que la relaciones entre los dos países entraran en su peor momento histórico, a tal punto que hoy el embajador de Caracas en Bogotá, Pável Rondón, permanece en territorio venezolano, como señal inequívoca del profundo malestar que le provocó a Chávez la cancelación de su papel como facilitador para el intercambio humanitario. La gran pregunta que ronda en la sociedad colombiana, entre la oposición en Venezuela y en muchas capitales donde se mueve la diplomacia hacia la región andina, es si se le debe creer a Hugo Chávez cuando afirma que colabora para lograr la paz, o si, por el contrario, es un amigo incondicional de las guerrillas colombianas para sus propósitos de toma del poder por la vía armada, sumando a su proyecto bolivariano a los insurrectos con quienes comparte fobias antioligárquicas y sueños socialistas (por cierto, bien valdría la pena preguntarse cuáles son los contenidos en detalle). Esa es pues una pregunta muy pertinente, más cuando en su mensaje de año nuevo Chávez sacó el 'ramo de olivo' y le propuso a Uribe que le permitiera trabajar por el logro de la paz de Colombia y continuar sus labores como facilitador, frente a las Farc y al Eln, para conversaciones de paz. Hugo Chávez es un político nato, respira política desde su juventud. Nacido en 1954, en 1982 funda el Movimiento Bolivariano Revolucionario 200 (MBR-200), en alusión a los doscientos años del natalicio de Simón Bolívar, que se cumplirían un año más tarde. Esto lo hizo contando como núcleo básico a oficiales y suboficiales de las Fuerzas Armadas. Una década más tarde, en 1992, sería protagonista de primera línea de un fallido intento de golpe militar -que tuvo el 60 por ciento de opinión favorable- contra el gobierno de Carlos Andrés Pérez, con cien muertos, y por lo cual estuvo en prisión hasta 1994, cuando fue indultado por el presidente Caldera, quien así capitalizó el descontento.

Al salir de prisión, conforma el Movimiento V República, aglutina a buena parte de la izquierda y a otros sectores, y triunfa en las presidenciales de diciembre del 98. Procede entonces a reformar la Constitución en el 99, gana un referéndum de aprobación de la nueva constitución ese mismo año, convoca a nuevas elecciones para Presidente y Parlamento para un período de seis años y las gana. Sobrevive a un golpe de estado en abril de 2002, va a una revocatoria de mandato en agosto de 2004 y gana con el 59,06 por ciento de los votos por el No con (5.800.629), contra 40,64 por ciento (3.989.008) del Sí a la revocatoria. Como si fuera poco, en octubre del mismo 2004 ganó en 22 de los 24 estados y en el 90 por ciento de las municipalidades. En diciembre de 2005 se queda con todas las curules al Congreso, por el retiro de la oposición -con una abstención rondando el 75 por ciento- y gana nuevamente las elecciones para un segundo mandato. Luego de la constitución de 1999, con casi ocho millones de votos, había ganado ocho elecciones en línea. Perdió la ultima, la de reforma constitucional del pasado 2 de diciembre, con lo cual se dividió al país en casi partes iguales. Todo el recuento anterior para afirmar que el personaje controversial que gobierna en Venezuela ha jugado bajo las reglas de la democracia -después del atajo antidemocrático del 92-, por supuesto con muchos cuestionamientos sobre injerencias indebidas en el sistema electoral, monopolizando los organismos de control, además de otros cuestionamientos. Lo cierto, en últimas, es que el Presidente Chávez es un jugador de 'grandes ligas' en la política regional e internacional, por su condición de productor de petróleo, en un período en que el barril ha tenido los mejores precios en toda la historia. Chávez tiene además respaldo social en su país, con ideas y proyectos de transformación social en curso. Su alcance y sostenibilidad están por verse, porque hay en curso fuertes tensiones sociales, mientras aboga por una integración regional que pretende debilitar la supremacía de los Estados Unidos en la región, desde el Caribe hasta el Cono Sur. Y volviendo a la pregunta: ¿Se le puede creer a Chávez cuando afirma que su único interés con la guerrilla colombiana es apoyarla para procesos de negociación y paz? Eso les dijo a los dirigentes del Eln, Nicolás Rodríguez Bautista y Antonio García, en la reunión que sostuvieron a mediados de noviembre en Caracas: todo el apoyo para un proceso de negociación, ningún apoyo por fuera de una mesa de negociación. ¿Esto es posible? O, ¿acaso por debajo de la mesa hay una relación que fluye hacia el proyecto insurgente de las Farc y la resistencia armada que mantiene el Eln? Los que hacemos seguimiento a la situación del conflicto armado en la frontera colombo-venezolana, sabemos que la guerrilla tiene bases y redes de logística en aquel territorio. Allí, además, se aprovisiona de material bélico, recibe apoyo de importantes sectores chavistas, y se mueve con cierta facilidad en escenarios sociales y políticos de Venezuela. Esto no es nuevo, sino que viene desde los años ochenta; es la realidad con la que se encontró Chávez al asumir el poder, y es algo que no ha podido controlar, o no ha querido. Pero no hay pruebas de que desde el más alto nivel tenga una política de fortalecimiento de la guerrilla colombiana. Hay, sí, una decisión de neutralidad ante el conflicto. Es decir, no podemos esperar que el presidente Chávez los combata por convicción, sumado a que hay limitaciones, entre ellas que la guerrilla colombiana constituye sin duda un poder en muchos territorios de la frontera, y que la fragmentación de poderes es real y la ilegalidad campea en muchas instituciones del Estado, lo que hay en Venezuela son negocios, en donde la guerrilla Colombiana medra.

Si hablamos de 'convicción' para no combatirlos con las armas y aislarlos políticamente, hacemos referencia a que el presidente Chávez y el núcleo 'duro' del chavismo consideran a la guerrilla como actor político, con una agenda y motivaciones políticas que deben ser tramitadas en Colombia. Ellos estarían dispuestos a colaborar, pero la razón fundamental por la cual Chávez y su gobierno no apoyan de manera decidida los planes bélicos de la insurgencia es porque tienen la convicción de que su posibilidad de triunfo militar es nula. El exiguo respaldo ciudadano de entre 2 y el 5 por ciento no da para ninguna gran operación política. Si las Farc y el Eln tuvieran alguna posibilidad de triunfo militar, por remota que fuera, y su apoyo ciudadano rondara una cifra entre el 20 y el 30 por ciento, quizás el presidente Chávez reconsideraría su política de neutralidad. Pero (afortunadamente) esto no va a pasar. Por tanto, soy categórico al afirmar: al presidente Chávez hay que creerle cuando dice que sólo quiere contribuir a la paz de Colombia.

Lucho Garzón: Sobre las FARC y el ELN, entrevista tomada del libro “Lucho” Recientemente, Editorial "Aguilar", publico el libro: "Lucho", que es una entrevista realizada por Julio Sánchez Cristo a Lucho Garzón. Por considerarlas muy importantes para análisis e intercambios, transcribo tres respuestas en las que Lucho hace referencia a las FARC y al ELN. Julio Sánchez Cristo: Colombia eligió presidente a Pastrana por su sintonía en un posible

proceso de paz con las Farc -rechazando a Serpa injustamente por su relación y su lealtad con Samper-, y luego escogió a Uribe por lo contrario: porque abiertamente le declaró la guerra a las Farc. Ahí hubo un efecto pendular. ¿Usted a quién le va a declarar la guerra? Lucho Garzón: El péndulo no es como la gente piensa, no es algo automático. Creo que sí va a haber un escenario de acercamiento con relación a puntos de reconciliación. Pero uno con las Farc no puede esperar la negociación política porque, lo dije desde un comienzo, ellos no están en la negociación política, ellos están en la toma del poder por la vía armada, y mientras sigan así no hay más posibilidad que confrontación directa de este establecimiento contra lo que ellos representan, o viceversa, y uno tiene que prepararse para eso y asumirlo. En ese escenario no veo sino el proceso de un eventual acuerdo humanitario, que ojalá sea en este gobierno. No veo más alternativa, no veo escenarios posibles. O sea, el péndulo no vuelve a Caguanes ni a zonas de despeje; no lo veo así. El ELN es una pastoral social armada y sabe que tiene su oportunidad. Uno no puede estar solo pensando que es Cristo en la Tierra o el último Robín Hood. Ellos saben que pueden hacer una extraordinaria experiencia política si entran a un proceso de negociación; si no, seguirán siendo marginales en el tema de la propia confrontación. Entonces, en ese sentido, en temas de la paz, sí digo que con las Farc no hay posibilidad de abrir espacios de negociación hasta que ellos digan claramente que su objetivo no es la toma del poder por la vía armada. Tiene que ser negociación política y pensar en reformas; si no, no hay ninguna posibilidad, porque es perder el tiempo, es crear

la expectativa. Con las Farc hay posibilidad de un acuerdo humanitario que no necesariamente pase por definir territorio. Hay que buscar en qué condiciones se hace, pero hay que pensar en el contenido. (Paginas 150- 151). Julio Sánchez Cristo: Pero si la mano dura del Presidente, su política de seguridad

democrática, no se hubiera aplicado en los últimos cinco años, ¿que habría pasado en Colombia? Lucho Garzón: Frente a las Farc no queda más alternativa que la confrontación: no hay más posibilidad. Lo que pasa es que no lo acompañaría en las retenciones masivas ni en el lenguaje ni en la actitud. Yo haría una gran convocatoria para ver con qué reglas juega este establecimiento y con quién está el otro establecimiento. Eso es así, pero es evidente que, si el otro no quiere negociar, ¿usted que hace? Toca darle: no hay más alternativa. Y lo tiene que decir un hombre de la izquierda o de la derecha. Este establecimiento nuestro tiene que cambiar muchas cosas, tiene que entender que el otro no está pensando en negociación política. Y en cuanto al ELN, o deja el síndrome de complejo de culpa con relación a lo que dirán las Farc, o negocia. Y eso básicamente es lo que hay que hacer; si no, estamos jodidos y terminamos reproduciendo más de lo mismo. Nadie se va a aguantar en este momento que entremos a procesos estériles de negociación. (Paginas 153-154). Julio Sánchez Cristo: ¿Cómo ve el proceso con las Farc y los paras? Lucho Garzón: En relación con las Farc lo único que podría entusiasmar es un acuerdo humanitario, pero no veo la posibilidad de un proceso de paz. Mientras las Farc persistan e insistan en que la alternativa es alrededor de la toma del poder por la vía armada no hay posibilidad de ninguna negociación y todo será confrontación, es inevitable. Eso lo tiene que tener claro el Polo Democrático: con las Farc de hoy no solo está la confrontación a la lucha armada sino que es un proyecto ético, políticamente antagónico a lo que pensamos muchos. Alguien me dice que eso es ser converso, sería converso si hubiera sido de las Farc, pero yo nunca lo fui. Yo fui comunista y admiro a los comunistas por que son éticos, y si fuese anticomunista no admiraría ni a Neruda ni a Saramago ni a Alberto, entre otros muchos. El ELN, como ya lo he dicho, tiene toda la posibilidad de quitarse el síndrome y el complejo de que las Farc lo van a cuestionar, podría tomar la iniciativa política, seguir las tendencias de proyectos democráticos que hay en el mundo. El ELN tiene la opción de manejar una reforma política muy profunda y de tomar la iniciativa. En los paras hay que decantar qué fue paramilitar y qué narcotraficante, esa montonera ha afectado el proceso. Al narcotraficante hay que tratarlo como tal, y al paramilitar que se lucró del narcotráfico y de apoyos desde el Estado hay que tratarlo en el marco de lo que significa "verdad, justicia y reparación". (Paginas 159-160)

El ELN no debe dilatar el proceso de acercamiento con el gobierno, dice Bernal Cuellar

12/17/2007 - 07:43:00

Fuente: Caracol

El ex procurador general de la Nación, Jaime Bernal Cuéllar, dijo que no es el momento para que el ELN busque excusas, que dilaten los acercamientos que se adelantan con el gobierno nacional. En diálogo con Caracol Radio, Bernal Cuéllar sostuvo que se deben buscar alternativas para reanudar un diálogo directo, que permita la firma de un acuerdo base que marque el inicio formal de un proceso de paz. El ex funcionario advirtió que debe haber voluntad política del ELN para avanzar en los acercamientos con el gobierno nacional, y señaló que las gestiones de paz no pueden depender de los mediadores. Dijo que se deben estudiar formas para sacar adelante los diálogos, analizando una eventual zona de ubicación para los integrantes del ELN, mientras dure el proceso de paz, así como la participación de la sociedad civil en las conversaciones. Jaime Bernal Cuéllar destacó la actitud del gobierno, que ha cedido de manera importante en varios puntos, con el fin de buscar que el Comando Central del ELN firme un acuerdo base con el ejecutivo colombiano.

A propósito de la negociación Gobierno – ELN: cinco mensajes en la época navideña y Comunicado de la

Comisión de Garantes “Casa de Paz”

DESMOVILIZACION Y CAPTURA DE CABECILLAS DEL ELN

“El ELN perdió su ideología” Por: Perla Escandón Tovar Reportera de El País EL PAIS, DICIEMBRE 2007 Alias Julián, segundo cabecilla del Frente ‘Comuneros del Sur’, desertó junto a su esposa, su hijo, su cuñada y otro guerrillero del ELN. Tras doce años de cargar fusiles, de planear emboscadas, secuestros y atentados terroristas en el sur del país, el segundo cabecilla del Frente ‘Comuneros del Sur’ del Ejército de Liberación Nacional, ELN, decidió reintegrarse a la vida civil. Con algo de arrepentimiento por los actos perpetrados en Nariño, alias Julián o Polo, un tumaqueño de no más de 40 años, tomó la determinación de dejar atrás la clandestinidad y cambiar su vida, a través del Programa Nacional de Desmovilización. El jefe guerrillero, quien también era conocido como Compa o JJ, lo hizo junto con su compañera sentimental alias Luz Mery, su cuñada ‘Liliana’, su hijo de cinco años y otro integrante más llamado como Mauricio o Gatillo Loco. Estos últimos llevaban entre 7 y 8 años en la organización armada. Alias Luz Mery era enfermera y manejaba las comunicaciones de la Compañía Mártires de Barbacoas. Asimismo, tenía conocimientos en sistemas. Mientras que ‘Liliana’ era guerrilla rasa y de vez en cuando le colaboraba en las labores de enfermería. Por su parte, ‘Gatillo Loco’ era un guerrillero formado en tropas especiales del frente, donde quedaron aproximadamente 40 mujeres y niños.

Después de más de diez horas de viaje por tierra, alias Julián, su compañera ‘Luz Mery’ y ‘Mauricio’ arribaron el jueves pasado a la Tercera División y de manera voluntaria se acogieron al programa de desmovilización nacional. Perla Escandón I El País

El área de operación de los insurgentes eran los municipios de Samaniego, Barbacoas y La Llanada. Desde esas localidades, los cuatro adultos y el menor de edad arribaron el jueves pasado a la Tercera Brigada en Cali, donde manifestaron su intención de abandonar la guerrilla. La pareja también expresó su deseo de poder brindarle una vida diferente a su pequeño, quien nació en el monte. “Hace doce años ingresé a la guerrilla, estaba convencido de la ideología del ELN. Debido a mi disciplina y buen comportamiento llegué a ser segundo comandante del Frente ‘Comuneros del Sur’”, narró ayer a los medios de comunicación alias Julián. Su esposa ‘Luz Mery’, una mestiza que abraza a su niño mientras él juega con un carro, y ‘Mauricio’, de tez oscura, dejan que él tome la vocería y explique el porqué de esta decisión colectiva. “Yo me sentía aburrido, pedí traslado, pero no fue posible. Pienso que el Frente tiene un mal manejo, está desorganizado, no hay un mando único, no contaban conmigo, sino que yo era el último que me daba cuenta de las cosas. Por eso, determiné salirme del grupo y hace unos días inventé una llamada e invité a mi mujer a que nos fuéramos, le dije a un compañero que estuviera pendiente de todo y no regresamos”, agregó el recién desmovilizado de tez negra. Otro motivo que impulsó a los tres adultos a dejar las filas de la insurgencia fueron los vínculos con el narcotráfico. “En ‘Comuneros del Sur’ se perdió toda ideología y tienen relaciones con el narcotráfico. Hay dos personas que son las que reciben dinero de los narcos”, señaló. El ex guerrillero también aseguró que este brazo del ELN, se abastece de minas antipersonas y explosivos mediante una red de distribuidores proveniente del Ecuador. “Unas personas cruzaban la frontera ilegalmente y nos traían barras de pentolita y TNT encaletadas”, concluyó. Entre tanto, el general Justo Eliseo Peña, comandante de la Tercera División, destacó como valiosa esta entrega voluntaria de miembros del ELN. De acuerdo con la estructura del Frente, quedan ‘El abuelo Abelardo’ o ‘Nico’, quien es el cabecilla principal; ‘Reinaldo Camilo’, tercer jefe militar; ‘Jaime’ o ‘Paco’, encargado de las finanzas y ‘Francisco Montoya’, el cabecilla político. “Es importante que continúen los acercamientos del ELN con el Gobierno y se sigan dando las desmovilizaciones”, subrayó el general Peña. La semana pasada fue capturado ‘Mamajuana’, cabecilla de la Columna Móvil ‘Miller Perdomo’ de las Farc. Habría participado en el plagio de los ex diputados del Valle.

Prontuario delictivo • Según la Tercera División del Ejército, alias Julián sería responsable de actividades como retenciones ilegales de vehículos, quema y saqueo sobre la vía Pasto-Tumaco en el departamento de Nariño. • También se le sindica de hechos como atentados terroristas contra el oleoducto Trasandino en Nariño. • Secuestros de candidatos a las alcaldías de los municipios de La Llanada, Samaniego y Túquerres (Nariño). • Emboscadas y ataques contra las estaciones de Policías de las poblaciones de Guachavez, Ancuya, Sotomayor, Providencia, Consacá y Linares.

Se entregan con niño segundo al mando de frente del ELN y otros tres rebeldes

Univision.com, 28 de Diciembre de 2007, 06:50pm ET

Bogotá, 28 dic (EFE).- El segundo al mando de un frente de la guerrilla del ELN y otros tres insurgentes, dos mujeres y un menor de edad, se entregaron hoy a militares colombianos en Cali, adonde llegaron con un niño, informaron fuentes castrenses locales.

El jefe rebelde tenía los alias de "JJ", "Compa Julián" o "Polo", y desertó junto a "Liliana", "Luz Mery" y el menor "Mauricio", precisó en un comunicado la Tercera Brigada del Ejército, la unidad con sede en Cali, la capital departamental del Valle del Cauca.

Las identidades de los cuatro insurgentes no fueron facilitadas por la fuente, que indicó que los cuatro pertenecían al Frente Comuneros del Sur del Ejército de Liberación Nacional (ELN), segundo grupo insurgente del país, después de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

"JJ" tenía una trayectoria de quince años en el ELN y era el segundo cabecilla de la facción rebelde, destacó la brigada militar, y le atribuyó a él una serie de sabotajes en carreteras, atentados a un oleoducto, secuestro de políticos y ataques a puestos policiales.

Las acciones se centraron en Nariño, departamento de la frontera con Ecuador en el que centra su actividad el Frente Comuneros del Sur, según la fuente.

La brigada militar dijo que una de las mujeres, "Luz Mery", era cabecilla de escuadra del mismo reducto.

El niño con el que se entregaron estos rebeldes tiene 5 años, añadió la fuente, que no informó de si sus padres están entre el grupo de desertores. EFE

Capturado en Bogotá alias 'Pablito', miembro del Comité Central de la guerrilla del ELN

EL TIEMPO, Enero 8 de 2008 Carlos Marín Guarín fue detenido en una operación coordinada del CTI y el Ejército Nacional. Era el comandante de tres de los siete frentes del grupo insurgente. "Este cabecilla era el más beligerante dentro del ELN en contra del proceso de paz (...) era como el 'Negro Acacio' y 'El Mono Jojoy' juntos", dijo el ministro de Defensa Juan Manuel Santos en una rueda de prensa. El funcionario y los jefes de las Fuerzas Militares precisaron que 'Pablito' coordinaba en la capital colombiana la reorganización de los frentes del grupo guerrillero. La captura se produjo ayer en un lugar que no especificó el General Mario Montoya, quien informó que el guerrillero fue capturado junto con otras personas. Se le acusa del asesinato del obispo de Arauca y de haber dinamitado en más de 200 ocasiones el oleoducto Caño Limón - Coveñas. Marín Guarín era uno de los más acérrimos opositores a la negociación de un acuerdo de paz que el ELN viene realizando con el Gobierno.

Capturan importante miembro del ELN que se opone a diálogo con el gobierno RCN Enero 8 de 2008 El Ejército Nacional reportó la captura en Bogotá de alias “Pablito”, un importante miembro del Comando Central del ELN, que se encontrarían en la capital coordinando una reunión para aumentar las acciones ofensivas de por lo menos siete frentes del grupo guerrillero. El ministro de defensa, Juan Manuel Santos indicó que este sería uno de los mayores opositores a los diálogos entre el ELN y el Gobierno Nacional. De acuerdo con la información difundida por las autoridades, alias “Pablito” sería el cuarto miembro en importancia la estructura de esa guerrilla. El ministro Santos, dijo también que el capturado es “responsable de innumerables secuestros” y tomas armadas a municipios y guarniciones militares. Dentro de los hechos que se le sindican se suma la muerte del arzobispo de Arauca, Monseñor Jesús Ovidio Jaramillo, el 19 de mayo de 1992. Más de 200 atentados dinamiteros contra el oleoducto Caño Limón – Coveñas y el ataque a una base militar en el estado Venezolano de Apure, donde saquearon las armas, tras asesinar a 8 militares.