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La verdadera realidad es que Dios jams nos abandona, l siempre ha estado all en el mismo lugar de siempre, tan solo al alcance de una oracin. Lo que ocurre es que nosotros somos los que optamos por alejarnos poco a poco.Pero no lo vemos porque lo hemos dejado, nos hemos separado de l, poco a poco hemos ido hacia el camino equivocado y es all en donde solo encontraremos soledad

Lo bueno de todo es que Dios siempre est dispuesto a recibirnos, lo nico que tenemos que hacer es BUSCARLO. Y cuando decidimos buscarlo todo el panorama cambia, pareciera que nuestros ojos son abiertos y nos damos cuenta que l ha estado ms cerca de lo que creamos, que nunca nos abandon, que fuimos nosotros quienes con nuestras decisiones habamos optado por alejarnos. l siempre se mantuvo fiel a su Palabra estando all, tan cerca, tan lleno de amor y misericordia como siempre.

Te sientes solo o sola en este momento?, Sientes como si Dios te ha abandonado?, entonces seguramente necesitas reflexionar sobre qu tan cerca de l ests en este momento, Cmo est tu comunin con l?, Ests hablando con l?, Ests leyendo su Palabra?, porque si no lo ests haciendo seguramente es la causa por la que te sientes lejos de l.

Hoy quiero animarte a levantar tu cabeza, a buscar a Dios, a ir delante de l, a rendirte completamente y a permitir que sea l y nadie ms que l quien te ayude a solucionar esos problemas que posiblemente ests enfrentando

Nunca te olvides de buscarlo, an cuando pareciera que nada cambie, debes confiar, debes seguir creyendo, debes ir de la mano con l, porque cmo dice la Biblia: Yo soy la vid, vosotros los sarmientos; el que permanece en m, y yo en l, ste lleva mucho fruto; porque separados de m nada podis hacer.

No permitas que el sentimiento de soledad y abandono te ganen la partida, Dios no quiere que te sientas solo, Dios no quiere que te sientas abandonado, l es t Padre, y t Padre JAMS TE ABANDONAR..Visita: www.RenuevoDePlenitud.com

Toma esta Palabra como tuya:

As que s fuerte y valiente! No tengas miedo ni sientas pnico frente a ellos, porque el Seor tu Dios, l mismo ir delante de ti. No te fallar ni te abandonar