DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina...

231
DIFÍCIL DEMOCRACIA

Transcript of DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina...

Page 1: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

DIFÍCIL DEMOCRACIA

Page 2: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Colección: El Estado de la Democracia en América LatinaDirigida por Bernardo Sorj (Centro Edelstein de PesquisasSociais) y Sergio Fausto (Instituto Fernando HenriqueCardoso)

Page 3: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

DIFÍCIL DEMOCRACIA

SERGIO FAUSTO(Comp.)

Traducción de los artículos en portugués al español:Mauricio Temerlin

Page 4: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Sergio Fausto4

Primera edición argentina, 2010© Sergio Fausto (compilador)© Centro Edelstein de Pesquisas Sociais/Instituto Fernando Henrique Cardoso

© SIGLO XXI EDITORA IBEROAMERICANA S.A.Av. Independencia 18601225 Ciudad Autónoma de Buenos Aires, ArgentinaTelefax: 4381-5708 / 5878

Diseño de tapa: Alejandra CortezDiagramación: Mari Suárez

Queda hecho el depósito que marca la ley 11.723Impreso en Argentina / Printed in Argentina

Todos los derechos reservados. Prohibida la reproducción total o parcial de estaobra por cualquier procedimiento (ya sea gráfico, electrónico, óptico, químico,mecánico, fotocopia, etc.) y el almacenamiento o transmisión de sus contenidos ensoportes magnéticos, sonoros, visuales o de cualquier otro tipo sin permiso expresodel editor.

ESPAÑAMÉXICOARGENTINA

Page 5: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Presentación 5

PRESENTACIÓN

Sergio Fausto

La colección “El Estado de la Democracia en América La-tina” busca reanudar el vínculo que se interrumpió entre elpensamiento académico acerca de la política y la sociedad, yla reflexión que hacen sobre ellas periodistas, políticos, líde-res de la sociedad civil etc.

No es tarea fácil, dado que la ciencia política y la sociolo-gía, al especializarse, se refugian en una atmósfera en la que ellenguaje cifrado y el formalismo de análisis y métricas, difi-cultan la comprensión y el indispensable placer de la lecturapor parte de los no iniciados. Amén de ello, prefirieron elestudio de objetos bien definidos, muchas veces demasiadoespecíficos como para el público letrado más amplio.

Otro de los hilos que la colección busca retomar es el deldiálogo dentro de América Latina, más intenso en los años

Page 6: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Sergio Fausto6

1960 y 1970 que en el presente. Por cierto, un diálogo abiertoa lo que está más allá de las fronteras de la región, pero atentoa las características que aquí adquieren ciertos desafíos y dile-mas universales acerca de la constitución de las sociedades yde los sistemas políticos democráticos.

En el intento de volver a conectar los mundos de la pro-ducción académica y de la formación de la opinión pública,optamos por la forma del ensayo, que alivia al autor de seguirlos cánones académicos de innúmeras citaciones y largas bi-bliografías. Ensayos cortos, agrupados en recopilaciones, acer-ca de temas generales y percibidos como relevantes para eldebate público.

Difícil Democracia: instituciones y cultura política en AméricaLatina trae cinco ensayos de respetados politólogos sobre losavances y las dificultades de arraigamiento de los estados re-publicanos y los regímenes democráticos en la región. Trespaíses —Argentina, Brasil y México— son examinados decerca, sin que los demás, sin embargo, escapen de la atenciónde los autores.

Hace aproximadamente treinta años, América Latina co-menzó a dejar atrás un largo período en el que regímenesautoritarios prevalecieron en la región. Hoy, en sentido es-tricto, ese título le correspondería solamente a Cuba. Duran-te ese tiempo, la democracia estuvo varias veces en jaque, bajoel impacto de crisis económicas y/o sociales y políticas, así comode la amenaza de la ingobernabilidad. Sin embargo, los regíme-nes democráticos no fueron sustituidos por regímenes auto-ritarios, como sucedió con los golpes militares en las décadasdel 1960 y del 1970, especialmente en América del Sur.

Page 7: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Presentación 7

Esta constatación aclara un aspecto esencial de la evolu-ción política observada en la región en los últimos treinta años,pero oscurece otros aspectos no menos relevantes, y al hacer-lo, nos impide ver con claridad los desafíos y dilemas no me-nores que aún están ante nosotros. En términos generales,ellos consisten en enraizar, en suelo latinoamericano, a lasinstituciones y los valores del liberalismo político y de la de-mocracia republicana, dos vertientes de diferentes orígeneshistóricos, que tardaron siglos en conjugarse en su cuna deorigen, Europa Occidental.

Sabemos que ese ideal normativo no ha sido plenamentealcanzado, ni aún en las mejores democracias del mundo. Peroes obvia la mayor distancia a que están de él los países latinoa-mericanos, como evidente es la heterogeneidad entre los pro-pios países de la región, a la luz de ese mismo ideal normati-vo. En muchos, el fin de los regímenes autoritarios y la am-pliación de la arena política —con la incorporación de actoressociales antes marginados— puso en movimiento dinámicaspolíticas, que paradójicamente alejan antes que acercan a és-tos países de aquel ideal normativo.

Tan importante como la disparidad de trayectorias de lospaíses de la región, es la divergencia conceptual acerca delsignificado mismo de la democracia. Ningunas de las corrien-tes políticas y gobiernos la rechaza —como el pensamientoprotofascista o fascista lo hizo en la América Latina de losaños 1930— pero las acepciones y modelos prácticos emplea-dos la califican de una manera muy diferente, cuando no an-tagónica. Todavía hay quienes ven a la democracia sustantivaen oposición a la democracia formal, y quienes defienden a la

Page 8: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Sergio Fausto8

democracia participativa como forma sustituta superior de lademocracia representativa. Esta es todavía una batalla abiertapor los corazones y las mentes en América Latina.

Los ensayos aquí reunidos abordan desde ángulos diver-sos, pero convergentes, la problemática presentada más arri-ba. Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visióngeneral del desempeño del presidencialismo en América La-tina en los últimos treinta años. Ambos discuten las relacio-nes entre el ejecutivo y los demás poderes en el nuevo marcodemocrático.

Melo parte de la observación de que no se confirmó eldiagnóstico de que habría una propensión congénita del pre-sidencialismo latinoamericano (generalización ciertamenteabusiva, que él no endosaría), a la generación de crisis políti-cas. Estas, no siendo, supuestamente, pasibles de solucióndentro de los límites de la legalidad institucional del presi-dencialismo, condenarían a la región a la inestabilidad y, tardeo temprano, al retroceso a formas autoritarias de gobierno.Aproximadamente, ese era el diagnóstico que informó a ladefensa de la sustitución del presidencialismo por el parla-mentarismo como sistema de gobierno, y que contó con adep-tos de peso político e intelectual en países como Brasil, don-de un plebiscito sobre el tema tuvo lugar a comienzos de losaños 1990.

El politólogo brasileño sostiene que el factor de ines-tabilidad del presidencialismo latinoamericano no estaríaen las características intrínsecas del régimen, sino en lainexistencia o debilidad de los adecuados mecanismos defreno y contrapesos entre los poderes. Países en los que el

Page 9: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Presentación 9

poder ejecutivo, con una amplia gama de poderes forma-les e informales, encuentra freno y contrapeso proporcio-nales, en legislativos no automáticamente obedientes ypoderes judiciales relativamente independientes, han de-mostrado en los últimos quince años, una significativa es-tabilidad política y eficiencia gubernamental. Es el caso deChile y Brasil, acota Melo, quien también señala, de paso,el papel desempeñado por el ministerio público y la pren-sa en el funcionamiento del engranaje político de frenos ycontrapesos. Los casos más agudos de inestabilidad —y fi-nalmente de colapso del sistema político-partidario vigen-te hasta entonces— se dieron en países en los que un po-der ejecutivo débil se enfrentó con un Congreso cada vezmás fragmentado y polarizado, como se comprobó en Bo-livia y Venezuela durante los procesos que desembocaronen las elecciones de Evo Morales y Hugo Chávez, respec-tivamente.

Cavarozzi toma el mismo tema de la inestabilidad políti-ca y de la construcción de condiciones para el ejercicio delgobierno, en el contexto de los regímenes presidencialistasde América Latina, pero le otorga un tratamiento diferente.Si Melo se concentra en el análisis de las instituciones forma-les, el politólogo argentino ahonda en la historia latinoameri-cana de los últimos sesenta años para dilucidar el desarrollode lo que él llama poderes para-constitucionales. Se entien-den por poderes para-constitucionales, los recursos de poder,no restringidos a las competencias constitucionalmente esta-blecidas, que un presidente puede manejar para, distribuyen-do premios y castigos materiales y simbólicos, añadir a la le-

Page 10: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Sergio Fausto10

gitimidad formal de su mandato la capacidad efectiva de con-trolar el juego político.

Entre los años 1940 y 1960, período democrático que an-tecedió a la subsecuente ola autoritaria, los presidentes de lamayoría de los países de la región, con variaciones que noescapan a la observación de Cavarozzi, dispusieron de trespoderes para-constitucionales básicos, con los que operardentro de un contexto socio político que Francisco Weffortcaracterizó como “estado de compromiso”. O sea, un esta-do de equilibrio político precario, que se generó en la tran-sición de sociedades típicamente oligárquicas y rurales, enlas que la política se circunscribía a disputas dentro de laselites propietarias, hacia sociedades que no obstante pre-sentar aún fuertes rasgos oligárquicos, se urbanizaban ypasaban a incorporar a las masas populares bajo el controldel estado, en el juego político y en la esfera de una aúnlimitada ciudadanía.

El primero de esos poderes para-constitucionales consis-tía precisamente en la capacidad presidencial, con mayor omenor mediación de partidos y sindicatos, de movilizar en sufavor, dentro del delicado equilibrio del estado de compro-miso, las lealtades políticas del nuevo actor de la escena polí-tica —las masas populares urbanas—. La amenaza de forzarlos límites del orden, jugando la carta de la movilización po-pular, servía como argumento para el chantaje, favorable alpresidente que tuviera credenciales creíbles para ello. Por otraparte, el control político de las masas populares, era un activopolítico apreciable frente al temor inflado o real de que estasfueran lideradas por movimientos y partidos de izquierda. El

Page 11: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Presentación 11

segundo recurso de poder para-constitucional descansabaen las fuerzas armadas, o mejor aún, en la posibilidad delpresidente de valerse de la intervención militar para resol-ver situaciones de impasse político. Entre la amenaza derecurrir a uno u otro actor, en un juego de opuestos, seabría un espacio de autonomía para que el presidente pu-diera operar dentro del universo político de las elites civi-les. El tercer recurso de poder para-constitucional se en-contraba en el manejo de los instrumentos de política ma-croeconómica y de fomento de la industrialización, paraarbitrar con relativa libertad ganancias y pérdidas entre gru-pos y sectores sociales locales, en un contexto de mayor,centralidad del estado y menor importancia relativa de losmercados.

Cavarozzi no ignora, que el hecho de que estuviesendisponibles, no significa que en todas las circunstancias,tales poderes para-constitucionales hayan sido, desde elpunto de vista presidencial, correctamente usados y pro-ducido prolongadas situaciones de estabilidad. Por el con-trario, no es difícil identificar en la historia de aquel perío-do, la torpe utilización de estos instrumentos en los episo-dios de crisis aguda, que acabaron por llevar al colapso a lamayoría de los regímenes democráticos de la región. Sinembargo, no está aquí el punto central del ensayo. La com-prensión del pasado le sirve al autor para demostrar quetales recursos de poder para-constitucional, vigentes en el“período democrático” de los años 1940 a 1960, ya no es-tán mas a disposición de los actuales presidentes latinoa-mericanos. Desaparecieron a raíz de dos procesos: el de la

Page 12: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Sergio Fausto12

transición a la democracia, después del largo “interludioautoritario”, que convirtió en no solamente ilegal, sino en ile-gítimo, el recurrir a la intervención militar con fines políti-cos; y el de las reformas estructurales y apertura de las econo-mías latinoamericanas, poco después de las transiciones de-mocráticas, que redujeron la autonomía de los estados nacio-nales y debilitaron las bases económicas y políticas de los tra-bajadores urbanos del sector formal.

Es en la superposición temporal de los procesos de tran-sición democrática y de transformaciones socioeconómicasestructurales que Cavarozzi identifica la raíz más profundade los desafíos a la gobernabilidad observados en los paíseslatinoamericanos desde los años 1990. En las respuestas a esosdesafíos, él identifica el diseño de tres modelos distintos deacción presidencial, aún no totalmente consolidados, y a par-tir de los cuales construye una tipología en la cual busca ubi-car a los principales países de la región. Más importanteaún, el autor analiza las características de cada uno de lostres modelos (presidencialismo de coalición, con o sinmayoría parlamentaria automática; presidencialismo débil;y presidencialismo hegemónico). Para Cavarozzi habría unmovimiento pendular entre el presidencialismo débil y elpresidencialismo hegemónico, generador de gran inesta-bilidad política. Ya el presidencialismo de coalición, mu-cho más estable, mostraría una tendencia a bloquear la in-novación política. Esta residiría en la capacidad de produ-cir nuevas respuestas, pues la región ya no vive más en elmundo de los años 1940-1960, al viejo desafío pendientede expandir e intensificar simultáneamente la ciudadanía

Page 13: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Presentación 13

política y la ciudadanía social, dentro del marco de un esta-do democrático de derecho.

La selección contiene tres ensayos dedicados al análisisde la problemática general, en países específicos. Hemos re-suelto considerar a tres de ellos: Argentina, Brasil y México.No solo por la evidente importancia que tienen en la región,sino también porque son países que se sitúan en una zonaintermedia entre los casos de consolidación democrática exi-tosa (Chile y Uruguay), y los casos más “problemáticos” (Bo-livia, Ecuador y Venezuela).

Bolívar Lamounier escribe acerca de Brasil, desde unaperspectiva innovadora, que ya se puede intuir en el título delensayo: “Populistas, Embusteros y Carbonarios: Tendencias Anti-institucionales en la Post Transición”. La perspectiva es inno-vadora por más de una razón. Desde luego por poner enduda la idea de que la modernización del país —con la cre-ciente racionalización económica y social resultante de ladisciplina de mercado— lo llevaría necesariamente a unademocracia modelo. Vale la pena citarlo por la caracteriza-ción que hace al respecto:

“En un nivel relativamente elevado de complejidadeconómica y social, las instituciones se consolidan; la se-paración de poderes se vuelve efectiva; el juego políticoelectoral arrastra a las principales fuerzas políticas hacia elcentro […]; del mismo modo que el electorado, la políti-ca pública se vuelve más comprensiva, amplia, universal,corrigiendo paulatinamente sus antiguos sesgos de grupoo clase social. El populismo, sin espacio, parece tener losdías contados.”

Page 14: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Sergio Fausto14

Lamounier no niega que el “prototipo de la moderniza-ción” como él dice, sirva como descripción pertinente de lastendencias generales en la reciente evolución sociopolítica delpaís. Trata no obstante, de mostrar su incapacidad para captarlas tendencias anti-institucionales que se insinúan en la con-trafaz de ese cuadro a primera vista muy auspicioso de la con-solidación de una democracia de alta calidad en Brasil. Para elautor, el “prototipo de la modernización” así como iluminaoscurece.

En su intento de iluminar el lado menos brillante de de laevolución sociopolítica brasileña reciente, coloca el foco so-bre el populismo, el clientelismo y el izquierdismo “carbona-rio”. Lejos de ser criaturas en extinción, aplastadas por la mar-cha inexorable de la modernización capitalista, tales fenóme-nos, considerados erróneamente como arcaicos e incapacesde reproducirse en “ambiente moderno”, asumen nuevasformas y alimentan las tendencias anti-institucionales que,en su opinión, desautorizan una visión ingenuamente opti-mista —“panglossiana” diría el autor— en relación al futurode la democracia en Brasil.

También de la supervivencia de prácticas políticas tradi-cionales, nos habla Osvaldo Iazzetta en su ensayo sobre larenovación de la tradición plebiscitaria en el ambiente post-transición en Argentina. Si desde esta perspectiva su texto dia-loga con el ensayo de Lamounier, desde otra conversa con elde Cavarozzi. Es que Iazzetta muestra cómo esa tradición esretomada en contextos de crisis aguda, como las que arreme-tieron contra aquel país a finales de los gobiernos, de Alfon-sín en 1989, y de De la Rúa en 2001, ambos finalizados antes

Page 15: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Presentación 15

de su término. Tales crisis, al hacer tangible el fantasma deldesorden social y la ingobernabilidad política, crean las con-diciones para el surgimiento de presidentes que reclaman yobtienen apoyo para la movilización y el ejercicio de ampliospoderes que, si no rompen abiertamente con los límites de lalegalidad constitucional, los fuerzan al punto de poner en ja-que, en la práctica, el sistema de frenos y contrapesos quecaracterizan al régimen democrático-liberal. Desde esa pers-pectiva, señala el autor, aunque de signos políticamente opues-tos, uno liberal y otro nacional-desarrollista, los gobiernos deCarlos Menem y el del matrimonio Kirchner presentaríaninsospechadas semejanzas.

Iazzetta sostiene que el estilo de liderazgo propiciado porla crisis, se mostró funcional a la superación de los estados deemergencia en que la Argentina se encontraba en el auge deldescontrol inflacionario, en 1989, y en los estertores del régi-men de la convertibilidad, en 2001. El problema reside en lacristalización o incluso en la exacerbación de ese estilo de li-derazgo, una vez reconquistadas las condiciones mínimas degobernabilidad política y social. Tal fenómeno, del cual elgobierno de Cristina Kirchner da elocuente testimonio, so-cava las bases de las instituciones y de la convivencia demo-crática. Iazzetta identifica las bases de este modelo recurrenteen la tradición política argentina, que se remonta al menoshasta los años 1940 con el surgimiento del peronismo. Tam-bién señala el hecho de que el caciquismo político continúapredominando en muchas provincias. Es en éstos laborato-rios, en los que la alternancia en el poder es antes la excep-ción que la regla, que Menem, oriundo de La Rioja, y los

Page 16: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Sergio Fausto16

Kirchner, de Santa Cruz, recibieron su formación política.¿De dónde podrían venir entonces, las fuerzas capaces demejorar la calidad de la democracia en Argentina, convir-tiendo al estado en más republicano, y a la política en me-nos dependiente del dominio personal de máquinas y re-cursos públicos? De una sociedad civil pluralista y dotadade espíritu cívico —la otra cara de la sociedad argentina—que no ha encontrado una expresión mayoritaria en el sis-tema político.

La selección concluye con un ensayo de Jesús Silva-Her-zog Márquez sobre México. Como observa el propio autor,aquel país recorrió un camino diferente al observado en lastransiciones de los regímenes autoritarios a la democracia. Apropósito, Cavarozzi, en su ensayo, hace una interesante re-ferencia a la distinción que Manuel Antonio Garretón esta-blece entre transiciones y fundaciones democráticas, típicasde los países sudamericanos aquellas, y de los países centro-americanos que arribaron a la democracia en los años 1990sin mayor experiencia previa, éstas últimas. México, no seencuadra en ninguna de ambas categorías. Se trata de un casosui generis, que duró desde los años 1930, un régimen en elque la observancia de los principios del orden democrático (li-bertad de prensa y de organización partidaria, elecciones, sepa-ración de poderes etc.) se subordinaba a la regla de oro según lacual, un partido dominante, el Partido Revolucionario Institu-cional, que controlaba al estado y se confundía con él, no podríaser desalojado del centro del poder, concentrado en la Presiden-cia de la República, limitándose a ceder espacios de poder peri-férico (gobiernos estaduales) y a tolerar un grado de disenso que

Page 17: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Presentación 17

no lo amenazara en el dominio del sistema político. No era unrégimen plenamente democrático, pero tampoco una dictadu-ra. En México, los militares no tuvieron que volver a los cuar-teles, por el simple hecho de que nunca habían salido de ellosbajo el régimen del PRI, creado en los años 1930 precisa-mente para poner fin a los conflictos armados entre las elitesciviles y desencadenados por la Revolución de 1917.

Es en ese contexto que el autor analiza las vicisitudes dela política mexicana en el período que se inicia en 2000, cuandoel PRI, casi 70 años después de su fundación, se ve finalmen-te obligado a ceder el centro del poder político del país, con laelección de Vicente Fox, en 2000. Silva-Herzog no minimizalos logros democráticos que resultaron del fin del reinado“priista”; para comenzar, el hecho de que las elecciones pasa-ron a ser efectivamente competitivas en el nivel federal, sinrecurrirse a fraudes como era de práctica en el período an-terior. Pero la alternancia en el poder, vino acompañadapor una especie de esterilización de la política como pro-ceso de deliberación y decisión acerca de los cambios enlas formas de organización y conducta del estado y la so-ciedad; de allí la expresión “democracia hechizada” que usael autor para caracterizar al actual régimen político deMéxico, donde todo cuanto se heredó del pasado pareceintocable: desde el monopolio del petróleo, al corporati-vismo de las grandes categorías del estado, pasando por laempleomanía que migró del nivel federal hacia los gobier-nos estaduales.

Vaciada de los poderes reales que manejaba el PRI, la in-geniería institucional heredada del régimen anterior no se

Page 18: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Sergio Fausto18

muestra capaz de generar mayorías con capacidad de gober-nar y voluntad de reformar la institucionalidad heredadadel pasado. México, de acuerdo a las palabras de un analis-ta citado por Silva-Herzog, habría invertido la secuenciahistórica, pasando de la monarquía al feudalismo. Con esaimagen, señala el hecho de que la anterior estructura depoder, articulada a partir de la presidencia, se fracturó enfeudos sectoriales y locales. En los huecos abiertos por lafragmentación, penetró el crimen organizado, hoy la prin-cipal amenaza a las instituciones y a la convivencia demo-crática en aquel país.

Los ensayos aquí reunidos no terminan con recetas paralas reformas institucionales que deberían ser adoptadas a laluz de de los desafíos y dilemas analizados. Es una eleccióndeliberada de los editores. No porque atribuyamos poca im-portancia al papel que las instituciones desempeñan en la es-trategia de los actores políticos y en los resultados de su inte-racción; sino porque entendemos que las instituciones sonproductos históricamente constituidos en procesos socio-políticos que van mucho más allá de la esfera de lo racio-nal legal, aún cuando en parte se codifiquen en él. Los pro-cesos en cuestión implican no solo los valores, creencias yprácticas que impregnan a las instituciones, sino tambiéna sus actores políticos, condicionando sus cálculos y op-ciones. Es esencial comprender estos procesos para que lasagendas de reformas institucionales sean algo más que es-tériles ejercicios intelectuales.

La construcción de la democracia en América Latina (in-completa e incierta), requiere la comprensión de cómo viejos

Page 19: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Presentación 19

males (el personalismo, la tradición plebiscitaria, el cliente-lismo, el patrimonialismo etc.) adquieren formas “modernas”que abierta o subrepticiamente le fijan límites, o incluso lavacían de contenido real, aún con la preservación de sus for-mas más evidentes, como la repetición periódica de eleccio-nes. Comprender estos procesos es, en nuestra opinión, fun-damental para fortalecer una cultura cívica que impulse y sos-tenga la aproximación de América Latina a la “utopía demo-crática”. Esta selección pretende ser una contribución, aúncuando modesta, en ésta dirección.

Page 20: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Sergio Fausto20

Page 21: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Presentación 21

ACCIÓN PRESIDENCIAL EN LA AMÉRICALATINA: ANTECEDENTES HISTÓRICOS Y

UNA TIPOLOGÍA DEL SIGLO XXI

Marcelo Cavarozzi

Un politólogo de la Universidad de Pittsburg, Pérez Li-ñán, ha postulado recientemente que América Latina se haenfrentado en las últimas décadas con un nuevo tipo de ines-tabilidad política. A raíz de la drástica disminución de las in-tervenciones militares, los desplazamientos de presidentesconstitucionales se producen generalmente como resultadode embates de los congresos en contra de los ocupantes delpoder ejecutivo. Estos cuestionamientos pueden ser decarácter activo —traducidos habitualmente en procesos deimpeachment que culminan, directa o indirectamente, en laremoción del incumbent— o pasivo, cuando los congresostoleran o canalizan movilizaciones sociales y presiones secto-

Page 22: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi22

riales que conducen a la caída del presidente en ejercicio(Pérez-Liñán 2007).1 En otros casos menos habituales,como los de Ecuador y Paraguay, las remociones de los pre-sidentes fueron el resultado de procesos judiciales, aúncuando estos no concluyeran en condenas al titular delpoder ejecutivo.

Concuerdo con Pérez Liñán en un sentido. Al utilizar elconcepto de “inestabilidad” para referirse a los desplazamien-tos presidenciales que estudia, él alude a un fenómeno queha quedado parcialmente invisibilizado por las interpretacio-nes simplistas de las recientes democratizaciones latinoame-ricanas. Efectivamente, el potencial empoderamiento de losparlamentos, asociado a su capacidad para jaquear eficazmentea los titulares del poder ejecutivo, no es necesariamente laexpresión de un novedoso balance de poderes más armónicoy más acorde con los principios republicanos. Por el contra-rio, en muchos casos los desplazamientos presidenciales mar-can la ausencia de una fórmula política estable que sea respal-dada mayoritariamente por las respectivas ciudadanías. Paraponerlo en blanco y negro, los desplazamientos presidencia-les de la etapa actual marcan un déficit de las democraciaslatinoamericanas que contribuye a generar un serio vacíopolítico.

1 Los ejemplos que el autor estudia son los de Fernando Collor de Mello(Brasil), Carlos Andrés Pérez (Venezuela), Ernesto Samper (Colombia),Abdalá Bucaram (Ecuador) y Raúl Cubas Grau y Luis González Macchi(Paraguay).

Page 23: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 23

El argumento que desarrollo en este artículo compartelas conclusiones de Pérez Liñán; sin embargo, pone un énfa-sis diferente. Es evidente que en la mayoría de los países de laregión, y particularmente en los de América del Sur, prevale-ció durante buena parte del siglo XX una suerte de inestabili-dad crónica que afectó a las prácticas democráticas y a los prin-cipios en que éstas se apoyan. Uno de los principales indica-dores, así como el detonador, de la inestabilidad era el reem-plazo violento, o al menos anticonstitucional, de los presi-dentes legalmente electos como resultado de golpes milita-res.2 El período de inestabilidad aguda se inició con el ocasode los regímenes oligárquicos y abarcó varias décadas asocia-do al fenómeno que Francisco Weffort caracterizó como el“estado de compromiso” (Weffort 1978).3 Más específicamen-te, y variando según el caso, el estado de compromiso cubrióel período extendido entre la Primera Guerra Mundial y los

2 Subrayo que el patrón descrito era especialmente aplicable en América delSur, porque lo cierto es que, con la excepción de Costa Rica, en México,América Central y el Caribe las prácticas democráticas no llegaron a fun-cionar, ni siquiera inestablemente, hasta fines del Siglo XX.

3 Si bien Weffort no define con precisión al “estado de compromiso”, desta-ca un rasgo contradictorio esencial de esa forma de dominación. La for-mación del estado de compromiso facilita el ingreso de las masas a lapolítica una vez producido el derrumbe del régimen oligárquico, pero, ala vez, genera nuevos dilemas. Es decir, es, simultáneamente, solución yproblema. Dejando de lado el sesgo clasista en la mirada de Weffort, pro-pio de la época, el sociólogo brasileño acierta al puntualizar que el carác-ter problemático del estado de compromiso era una cuestión política, queestaba vinculada a la precariedad de sus equilibrios.

Page 24: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi24

fines de la década del 1960. Ahora bien, sostener que en elestado de compromiso predominaba la inestabilidad institu-cional no debe velarnos la circunstancia de que, subyacente-mente, predominaban patrones persistentes y previsibles deacción política.

Poderes Para-Constitucionalesy Estado de Compromiso

Estos patrones alimentaron la otra cara de la política realque se desplegó con mayor intensidad en algunos casos queen otros. Brasil y Argentina fueron dos ejemplos arquetípicosde un fenómeno de articulación de una suerte de “presiden-cialismo para-constitucional” (en adelante PPC). El PPC fun-cionaba de acuerdo a reglas que se situaban fuera de los már-genes del ordenamiento constitucional, o incluso llegaban atransgredirlo. Pero al mismo tiempo, esas reglas eran relati-vamente conocidas e internalizadas por los diferentes acto-res. De todas maneras, dentro de esta fórmula política la de-mocracia a menudo aparecía planteada como un horizontedeseable; como una promesa, que incluso era enunciada re-tóricamente por los actores que la atacaban.

Las reglas del PPC estaban asociadas a un juego cuyas doscartas principales eran aparentemente contradictorias: una, laamenaza, explícita o no, de intervención militar y, la otra, losbluffs a los que recurrían los políticos y las elites económicas—es decir, los parceiros reais— utilizando como baraja al parcei-ro-fantasma, el pueblo, en la sugerente dicotomía que Weffort

Page 25: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 25

acuñó en 1963.4 Como resultado de ello, la efectividad de laparticipación electoral de las masas estaba fundamentalmen-te vinculada a su potencial disruptivo, y no a su contribucióna la legitimidad de los procesos de toma de decisiones o a lapromoción de la accountability de los funcionarios públicos elec-tos. En otras palabras, debajo de la inestabilidad institucional,operaban también regularidades de las conductas políticas,que a menudo entraban en contradicción, o al menos norespetaban, la constitución y las leyes. Dichas reglas ha-bían sido construidas a lo largo del tiempo, y ciertamenteinfluían y eran incorporadas en los cálculos de los actoresdel juego político. Y en dicho juego, el presidente era eleje; el funcionamiento de la política era regido por un sub-conjunto de reglas para-constitucionales centradas tantoen el rol presidencial, como en el desempeño concreto delincumbent que lo ocupaba.

Obviamente y como resultado de que durante el siglo XXen prácticamente toda la región funcionaron regímenes decarácter presidencialista, los cálculos y estrategias del ocupantedel poder ejecutivo nacional constituyeron uno de los com-

4 Una de las principales consecuencias de este complejo juego era que lospresidentes constitucionales, como así también muchos ocupantes delejecutivo con orígenes más vicarios, transitaban permanentemente porun estrecho desfiladero marcado, por un lado, por las demandas formu-ladas por los diferentes actores sociales y económicos, entre ellos el aludi-do parceiro-fantasma, y por el otro, por los límites, casi siempre implícitos,que las fuerzas armadas le fijaban a su acción. El artículo original de Fran-cisco Weffort es citado por él mismo en Weffort (1978).

Page 26: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi26

ponentes más significativos de la arquitectura de la política.Pero la centralidad presidencial, y las pautas de funcionamientode la presidencia, no sólo eran el resultado de las reglas cons-titucionales sino también, y quizás fundamentalmente, delfuncionamiento de reglas tanto formales como informa-les que, reitero, se pueden caracterizar de “para-constitucio-nales”. Dentro de esas reglas, e inspirado por las imágenesacuñadas por Weffort que ya cité, quiero explicitar la natura-leza de tres mecanismos de control y equilibrio político vin-culados estrechamente entre sí y que constituyeron parte esen-cial del núcleo de lo que defino en este texto como el PPC denaturaleza estado-céntrica. Sin desconocer las variacionesnacionales, este modelo se desplegó con mayor plenitud enlos casos de Brasil, Argentina, Chile y México, aunque eneste último país la desmilitarización del régimen revolucio-nario impulsada exitosamente por el general Lázaro Cárde-nas a fines de la década de 1930 introdujo una modificaciónimportante en sus patrones de funcionamiento. Estos meca-nismos fundamentales fueron:

a) La regulación de los mecanismos políticos de incorpo-ración de las masas a la arena política y al mundo del trabajorecurriendo tanto a mecanismos corporativos —esto es,la “ciudadanía regulada” conceptualizada por WanderleyGuilherme dos Santos— como a canales partidarios, cliente-lísticos y de identificación simbólica directa con el líder-pre-sidente. Un correlato esencial del funcionamiento de estosmecanismos de incorporación fue su utilización como armade chantaje político (Santos 1979).

Page 27: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 27

b) El manejo de las herramientas de política económica ysocial de expansión de la demanda agregada que estuvieronatados, como señala José Antonio Ocampo, a los movimien-tos cíclicos de la balanza de pagos; en esta fórmula la inflaciónse convirtió en un mecanismo de intermediación del Estadoque veló parcialmente los efectos redistributivos de las políti-cas públicas (Ocampo 2004).

c) El juego de presiones, golpes y chantajes que se esta-bleció sobre todo entre el presidente y los militares, pero quetambién incluía a otros actores políticos y económicos, entorno al mantenimiento, suspensión y/o manipulación de lasleyes que regulaban las elecciones, al funcionamiento plenoo limitado del congreso y a la ilegalización de los “partidospeligrosos”. De todos modos, un efecto paradójico de estejuego era que la democracia política, al ser periódicamentepostergada o bloqueada, quedaba ubicada, para las mayoríaspopulares, como una potente utopía, como una promesa deun futuro mejor.

En Brasil (1964), Argentina (1966 y 1976), Bolivia (1971)y Chile (1973) el funcionamiento del PPC atado al estado decompromiso arribó a un abrupto final con el triunfo de losrespectivos golpes militares. En otros casos, como México yVenezuela, su desarticulación fue más tardía y más gradual yaque su eclipse se produjo al compás, respectivamente, delprogresivo desmantelamiento del unicato priista y de la ex-plosión en etapas del sistema bipartidario integrado por Ac-ción Democrática y COPEI. En Colombia, a su vez, el desa-rrollo más débil y tardío del estado de compromiso implicó

Page 28: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi28

que el peso de los tres mecanismos constitutivos del modelode acción presidencial estado-céntrico tuviera menos impor-tancia, pues ellos fueron apéndices secundarios de las normasy prácticas de un régimen oligárquico y un estado débil, fórmu-la que persistió casi hasta fines del siglo XX. Finalmente, en Perúy Bolivia, durante los dos primeros tercios del siglo las frecuen-tes intervenciones de las fuerzas armadas en la política constitu-yeron ejemplos de estilos caudillísticos más propios de los pa-trones de militarización de la política de cuño decimonónico.

El viraje democrático

El curso de las presidencias en América Latina, como resultaobvio, experimentó un viraje decisivo con el despliegue de lastransiciones a la democracia de la década de 1980. Las transicio-nes fueron un fenómeno básicamente sudamericano, en la me-dida que fue en esa parte del continente donde en 1978 ochopaíses estaban sometidos a regímenes militares. En contraste,hacia principios de la década de 1990 la totalidad de la decena decasos ya era gobernada de modo más o menos democrático.5

5 Los que accedieron a la democracia durante esos años fueron Ecuador,Perú, Bolivia, Chile, Argentina, Uruguay, Paraguay y Brasil. Recurro a laimprecisa, y poco satisfactoria, expresión de “más o menos democrático”para aludir a la circunstancia que varios de los regímenes políticos lati-noamericanos están lejos de alcanzar niveles óptimos, o siquiera razona-bles, en las diferentes dimensiones de democraticidad, liberalismo polí-tico y republicanismo.

Page 29: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 29

Igualmente la ola democratizante también abarcó tras un brevelag a la mayoría de los países de Centro América y el Caribe ytambién a México. Sin embargo, en esos casos Garretón su-giere convincentemente que no cabe aplicar el concepto de“transiciones a la democracia”. Los procesos de paz de Gua-temala y El Salvador y el ocaso de los regímenes sultanísticosdel estilo de Trujillo y Somoza, condujeron, a través de itine-rarios sinuosos, y no exentos de inesperados desvíos como elde la Nicaragua sandinista, a desenlaces democráticos y sepueden caracterizar como episodios de fundación democrá-tica. A su vez, el fin del prolongado monopolio en el controlde la presidencia por parte del PRI mexicano constituye, másespecíficamente, un ejemplo de reforma democrática (Ga-rretón 2003).6

El viraje al que aludo implicó, para ponerlo gráficamente,que la democracia se convirtiera, salvo algunas excepciones,en the only game in town. El punto que quiero enfatizar, sinembargo, es que la circunstancia de que la región atravesaraesa crucial divisoria de aguas vinculada a la desaparición, o al

6 Garretón define a las fundaciones democráticas como procesos que ocu-rren en sociedades que no han tenido experiencias de regímenes demo-cráticos en el pasado, que están instalando democracias por primera vez,lo que implica construir un núcleo básico de instituciones democráticasdespués del colapso de una oligarquía o una dictadura patrimonialista,guerras civiles extendidas, movimientos guerrilleros y revoluciones. A suvez, las reformas democráticas consisten en procesos extremadamentecomplejos de creación e instalación gradual y progresiva de institucionesdemocráticas a partir de iniciativas que se generan dentro de un régimenno democrático.

Page 30: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi30

menos radical disminución, de las amenazas de intervenciónmilitar —y vinculadas a ello la remisión en la mayor parte delcontinente del terrible flagelo del terrorismo de estado— ge-neró una paradoja: la afirmación de las prácticas democráti-cas coincidió con la generación de un vacío producido por ladebilidad de las reglas para-constitucionales y el radical achi-camiento del Estado acaecido a raíz de la apertura de la eco-nomía, las privatizaciones y la desregulación de los mercados.Por ende, en un buen número de las nuevas democracias lati-noamericanas contemporáneas no se ha estabilizado un “mo-delo de acción presidencial” —alternativo al PPC, cuando lasdictaduras militares constituían una posibilidad verosímil—en el que coexistan de modo relativamente armónico reglasconstitucionales y para-constitucionales ancladas en un Esta-do medianamente efectivo.

Como resultado de las transiciones recientes —inmersasdentro de las transformaciones operadas en la geopolítica y laeconomía mundiales— las reglas formales de la democraciano enfrentan serios riesgos. Amén de no soportar amenazasverosímiles de intervención de las fuerzas armadas, los titula-res de los máximos escalones de los ejecutivos nacionales ocu-pan dichos cargos como corolario de elecciones que, en lamayoría de los casos, no son verosímilmente cuestionables, ypor ende, salvo excepciones como los comicios presidencia-les mexicanos de 2006, no son cuestionadas ni por los derro-tados ni por los ciudadanos. Sin embargo, esto no significaque se hayan generalizado pautas de comportamiento políti-co que normen estable e integralmente las interacciones en-tre los diferentes integrantes de la clase política ni los víncu-

Page 31: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 31

los de representación que se establecen entre dicha clase po-lítica y la ciudadanía. Quedan, por lo tanto, importantes fisu-ras a través de las cuales se filtran permanentemente accionesde los presidentes y de los otros actores políticos que erosio-nan la legitimidad de las reglas vigentes, aunque no lleguen aabolirlas. Reiterando lo señalado ut supra esta situación confi-gura un síndrome de inestabilidad en la que las reglas vigen-tes tienen escasa efectividad aunque no se desmoronan, sinque se lleguen a perfilar fórmulas alternativas.

De todos modos, el balance es mixto. En algunos casos,el desafío asociado a la consolidación de las instituciones de-mocráticas y el armado de un modelo de acción presidenciallegítimo y consensuado comienza a esbozar respuestas bas-tante efectivas; en otros casos los resultados son mucho me-nos satisfactorios ya que el juego resultante es una especie de“vale todo” que subyace a la subsistencia de las reglas forma-les. A modo de una ilustración heurística de esta hipótesis, enla segunda sección del artículo desarrollo un ejercicio de aná-lisis de tres casos —México, Venezuela y Chile— describien-do cuales son los rasgos de las respectivas modalidades de ac-ción presidencial, procurando explorar los factores que in-fluyen en el armado de una arquitectura política relativamen-te estable. Esta indagación exploratoria me lleva a plantear demodo especulativo tres direcciones, o rutas, alternativas queparecen perfilarse hacia el futuro en Sudamérica. La descrip-ción de los atributos de estas tres rutas, a su vez, me permiteelaborar una herramienta preliminar, una suerte de tipologíacomparativa que incluye a ocho países de América del Sur y aMéxico.

Page 32: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi32

Esta tipología procura tomar en cuenta los nuevos fenó-menos producidos a partir de la divisoria de aguas de comien-zos del nuevo siglo. Si bien el siglo XXI amaneció bajo la pro-funda crisis a la que se refiere José Antonio Ocampo —la“media década perdida” de 1998-2002— rápidamente las eco-nomías latinoamericanas tornaron a recuperarse y se suce-dieron cambios políticos significativos (Ocampo 2004). Paraanalizar estos cambios recientes resulta necesario proyectar-los sobre la etapa abierta con las transiciones a la democraciade la década de 1980 inauguradas con el abandono del poderpor parte de los militares peruanos en 1980. Como ya he plan-teado en otro artículo, las transiciones a la democracia vela-ron otros cambios que se desplegaron en América Latina apartir de aquella década. En buena medida, dichos cambiosse vinculaban a la crisis de la Matriz Estado-céntrica, y a las trans-formaciones que se estaban produciendo en la política y en laeconomía mundial por efectos del desordenamiento del “Capi-talismo Organizado” armado a partir de Bretton Woods, y delcrepúsculo del esquema bipolar asociado a la Guerra Fría.

En la década de 1980 la panacea democrática —y la con-comitante creencia en la supuesta omnipotencia de la voluntadpolítica— oscureció dos cuestiones: 1) que la construcción desistemas democráticos era una tarea extremadamente complejaque no se reduce a la remoción (o reforma radical) de los autori-tarismos previos y la estabilización de reglas electorales que res-peten el sufragio universal y 2) que por más irreprochablementeque operen esas reglas, el funcionamiento efectivo de la de-mocracia descansa, por un lado, en pautas de conducta quevan más allá de la aplicación de las reglas del juego electoral

Page 33: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 33

democrático, y, por el otro, en el funcionamiento efectivo deun Estado de derecho. En la década siguiente, una vez produci-do el desencanto al que alude Ludolfo Paramio, de la creencia enla omnipotencia se transitó a otra visión también simplificada dela política, aunque diferente de la anterior. Esta visión puramen-te instrumentalista presupuso que la América Latina de fines delsiglo XX se estaba convirtiendo en otro ejemplo de la supuestaconvergencia y plena armonía de la democracia política y la eco-nomía de mercado. En consecuencia, los políticos y técnicosneoliberales de esa etapa, y sus principales ejecutores políticos,esto es los hiperpresidentes, concibieron la política como un ejer-cicio limitado a una práctica periódica del voto, cuyo objetoprincipal era convalidar un proceso de repliegue del estado yde apertura de la economía implementado desde arriba, apo-yándose en consignas del estilo del “Déjenme hacer”.

A pesar de que partieron de premisas opuestas, ambaspanaceas, la democrática y la neoliberal, erosionaron no sólolas instituciones, sino también debilitaron la creencia en laefectividad de la política como herramienta para la transfor-mación social. Si bien la eficacia simbólica de ambas panaceasse ha reducido de manera significativa, sus efectos todavía nose han disipado plenamente.

En búsqueda de nuevos modelos de acciónpresidencial

Como ya adelanté, la media década perdida se cerró en2002-2003; su fin clausuró no sólo un período de caída del

Page 34: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi34

producto bruto y crecimiento de la desigualdad, sino tam-bién marcó el ocaso de la panacea neoliberal y el cierre de unturbulento quinquenio de la política latinoamericana. Peroesta vez, a diferencia de lo ocurrido diez años atrás, en la ma-yoría de los países las transformaciones políticas fueron másallá de un cambio de signo partidario en el poder.

En la segunda mitad de la década de 1980 se había produ-cido la debacle de muchos de los partidos o coaliciones queestaban en el gobierno; ellos terminaron siendo desalojadosdel poder al sufrir el impacto directo de la crisis de la deuda.En 1985 la precursora de estas difíciles experiencias fue laizquierdista Unión Democrática y Popular boliviana; estacoalición ya estaba deshecha cuando renunció anticipadamen-te a la presidencia el viejo líder Hernán Siles Zuazo. A estapoco recomendable lista se fueron agregando posteriormen-te la UCR argentina, el APRA peruano, el PMDB brasilero y,por último, la AD venezolana. En todos los casos, los desem-peños del partido del presidente en las respectivas derrotaselectorales fueron, en el mejor de los casos, mediocre, y enotros, absolutamente deplorable. Sin embargo, en todoslos países con la excepción del Perú, los recién llegados alpoder como así también sus partidos constituían parte delos elencos estables de la política nacional de cada país; enmuchos casos desde posiciones preeminentes como Víc-tor Paz Estensoro, Carlos Menem y Rafael Caldera, y enotros, desde espacios extremadamente marginales comoCollor de Mello.

En cambio, las transformaciones que tuvieron lugar en-tre 1998 y 2003 en la política latinoamericana fueron más ra-

Page 35: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 35

dicales; constituyeron verdaderas metamorfosis que incluye-ron, en algunos casos, quiebres con tradiciones políticasque eran incluso anteriores a las transiciones a la democra-cia —por ejemplo, el fin de la vigencia de sistemas bipartida-rios como los de Venezuela y Colombia o el virtual monopar-tidismo mexicano— y en otros, la consolidación de persona-jes cuyo ascenso político representaba, en cierto sentido, unaverdadera revolución social y cultural, como Lula y Evo Mo-rales. Con la excepción de Chile, el cambio de siglo produjograndes virajes; vale la pena enumerarlos:

• La primera derrota del peronismo ocupando el poderen 1999 —circunstancia que eliminó la última esclusaque impedía el derrumbe de la convertibilidad argen-tina— y la coda a Menem; es decir el gobierno de ladenominada Alianza (de la UCR y el FREPASO) queno hizo más que ser el testigo inerme de la catástrofepolítica y económica de 2001.

• El traumático fin del fujimorato, que sumado al cata-clismo en la Argentina, implicó la clausura de los doshiperpresidencialismos neoliberales más fuertes del finde siglo.

• El triunfo de Lula, evento que no sólo marcó la llega-da al poder del único partido societalista del siglo XXbrasilero, sino también el acceso a la presidencia deun líder sindical de origen popular proveniente de laregión más pobre de Brasil, el Nordeste.

• La victoria de Tabaré Vázquez y del Frente Ampliouruguayo que puso fin al duopolio bipartidista demo-

Page 36: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi36

crático de un siglo de duración, ya que había arranca-do cuando finalizó la guerra civil de 1904.

• El triunfo de Evo Morales que no sólo terminó con lacentralidad que había tenido el MNR en la vida polí-tica boliviana durante medio siglo, sino que ademássignificó el arribo a la presidencia de un aimara, es decirdel primer boliviano perteneciente a una de las etniasindígenas mayoritarias, sojuzgadas durante cinco si-glos por españoles y criollos.

• La derrota del PRI en México, que señaló el fin delsistema político de más larga duración y de más esta-bilidad de América Latina y, por último.

• El derrumbe de los dos sistemas partidarios que ha-bían demostrado uno de los más elevados niveles deestabilidad institucional desde fines de la década de1950, es decir, los de Venezuela y Colombia.

Como se desprende de los párrafos previos, las trayecto-rias políticas que se han desplegado en América Latina a par-tir del período 1998-2003 combinaron, por un lado, los efec-tos que los procesos económicos globales han tenido sobre laregión y, por el otro, los legados heredados en cada caso parti-cular del despliegue y agotamiento de las dos panaceas, la de-mocrática y la neoliberal. Uno de los corolarios de la primeradécada del Siglo XXI ha sido el de tornar evidente la ausencia,o al menos la debilidad, de las dimensiones, o reglas, para-constitucionales del régimen político. En esta sección analizotres casos cuyos rasgos específicos proporcionan pistas para la

Page 37: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 37

descripción de las rutas políticas que se están perfilando en laregión, ejercicio que me permite formular una taxonomía delos presidencialismos latinoamericanos.

Venezuela: la fusión del pueblo y las fuerzas armadasbajo el personalismo chavista

El colapso político de fines de siglo XX y el surgimientode Chávez como presidente/hombre fuerte tuvo como des-encadenante central al ocaso de los dos partidos que habíansostenido la democracia venezolana y de sus máximos diri-gentes; Carlos Andrés Pérez de Acción Democrática (partidoconvencionalmente caracterizado como social demócrata), yRafael Caldera, fundador y líder histórico de COPEI (Comi-té de Organización Político Electoral Independiente, al quese lo ubicó como social cristiano). En 1989, apenas asumidala presidencia Pérez (más conocido como CAP) fracasó en suintento de implementar un severo plan de ajuste y reformaestructural. El lanzamiento del plan no hizo más que provo-car el “Caracazo”; los extendidos saqueos que los sectores másempobrecidos protagonizaron en varias ciudades del país fren-te al ajuste fueron respondidos con una dura represión quecausó centenares de muertos. El gobierno de CAP nunca serepuso. Transcurridos un par de años, sendos golpes milita-res encabezados por oficiales nacionalistas y antiliberales li-derados por el teniente coronel Hugo Chávez fracasaron ensu objetivo de alcanzar el poder y sus protagonistas fueroncondenados y enviados a prisión. Pero le pusieron la lápida a

Page 38: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi38

la presidencia de CAP, quien, abandonado por su propio par-tido, fue sometido a impeachment por el parlamento y puestopreso. La remoción de CAP arrastró a su partido; AcciónDemocrática nunca se recuperó de esa caída. A partir de 1990,el partido que había puesto fin a la larga era de caudillismomilitar perdió su capacidad para disputar elecciones nacionalescomo un contendiente verosímil. Por su parte, en la siguientevuelta presidencial, la suerte del COPEI constituyó el reflejo es-pecular de la trayectoria de sus adversarios: mientras que en elcaso de AD la organización partidaria traicionó a su líder y, detal modo, selló su eclipse, en el COPEI el proceso fue el in-verso: intentando triunfar en las elecciones de 1994, el parti-do traicionó por segunda vez a Caldera al no entronizarlocomo candidato; el viejo líder se vengó ganando esas elecciones.

En el proceso electoral de 1993 COPEI optó por reiterarlo que había hecho cinco años antes rehusándose a apoyar aCaldera, quien ya había sido derrotado como candidato co-peyano en 1983. Pero esta vez, Caldera, en una decisión en laque tuvo en cuenta su avanzada edad, prefirió apartarse deCOPEI y creó una agrupación propia, denominada Conver-gencia. Sobre esta base, a pesar de obtener sólo el 30% de losvotos, resultó electo presidente sostenido por su aura de can-didato situado más allá de los partidos tradicionales. De todasmaneras, la baja votación obtenida por el candidato victorio-so ya sugería claramente que el sistema bipartidario venezo-lano se estaba deshaciendo; el triunfador fue apoyado pormenos de un tercio del electorado frente a otros tres candida-tos con votaciones significativas pertenecientes a los partidostradicionales y a la izquierdista La Causa Radical.

Page 39: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 39

La trayectoria de la presidencia de Caldera no hizo másque agudizar el vacío creado por su predecesor y abonar elterreno para el ascenso del militar golpista de principios de ladécada, Hugo Chávez. Éste, prontamente amnistiado porCaldera, se situó en la vereda opuesta a la ocupada por el con-junto del establishment partidario monopolizando el ventajosoespacio de la anti política.7 Los dos partidos históricos se autoinmolaron al enfrascarse en disputas que los aislaron vertigi-nosamente de los sectores más pobres de la sociedad venezo-lana, sectores a los cuales habían canalizado, de algún modo uotro, durante cuatro décadas. A su vez, al abortar el “paquete”de ajustes intentado por CAP, Venezuela quedó instalada enuna especie de limbo dentro del contexto de los cambios quese estaban produciendo en las modalidades de inserción deAmérica Latina en la economía mundial. La indefinición enmateria de políticas económicas implicó que ni se intentarareparar la estructura aceitada del destartalado estado rentísti-co que repartía subsidios, ni se avanzara en la reestructura-ción de la economía demandada por los ideólogos del Con-senso de Washington.

7 Un fenómeno que contribuyó decisivamente a desprestigiar aún más a lasinstituciones políticas, y sobre todo a los partidos, fue el desordenamien-to y grave pérdida de credibilidad de los organismos encargados de ges-tionar y supervisar las elecciones. Desde 1992 en adelante los procesoselectorales tornaron a ser percibidos por una mayoría de la ciudadaníacomo teñidos por el fraude y las manipulaciones. En 1996, según el Lati-nobarómetro el 85% de los venezolanos creía que las elecciones eran frau-dulentas.

Page 40: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi40

En la página que había quedado en blanco, tanto desde laperspectiva institucional como de modelo de sociedad, Chávezfue dibujando un nuevo diseño social y político en el quecombinó novedosamente diversas fórmulas —algunas resca-tadas de la vieja política latinoamericana: la apelación a losmecanismos de democracia directa, el llamado socialismo delsiglo XXI, la patria grande bolivariana, el personalismo y laidea de la unión del pueblo y las fuerzas armadas.

La democracia directa fue presentada como la palanca delcambio que dejaría atrás a la “partidocracia corrupta”.8 Pero,en realidad, la utilización de esos mecanismos, junto a la exi-tosa transformación de Chávez en un personaje de la políticalatinoamericana e incluso mundial, le permitió al militar man-tener un estilo de movilización callejera permanente que reen-cauzó la política venezolana clausurando, por una parte, elcaótico decenio inaugurado con el Caracazo y, por la otra,arrinconando a los partidos políticos, que fueron superadostanto en recursos simbólicos como materiales. Si bien se hahecho muy poco para desarrollar la estructura productiva delpaís y por modernizar la administración pública, las rentasdel petróleo le han permitido a Chávez repartir tanto planessociales para los pobres, como prebendas y cargos públicos alos militares; unos y otros se han transformado en las basesreales de su poder.

8 La constitución de 1999 convirtió a Venezuela en el único país latinoame-ricano en el cual los ciudadanos pueden revocar el mandato del presiden-te y en el cual el presidente tiene la potestad de promover reformas abro-gatorias (es decir de anulación de leyes vigentes).

Page 41: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 41

Asimismo, desde 1999 en adelante las manipulaciones delpresidente venezolano encontraron aliados inesperados en susprincipales opositores. Tanto el gran empresariado nacional ysus organizaciones corporativas, como el gobierno de Esta-dos Unidos no omitieron error por cometer en su obsesiónpor derribar a Chávez de cualquier modo. La conducta de laoposición descansó en un serio equívoco que por cierto fuecompartido, ingenuamente o no, por muchos analistas y ac-tores de diferentes linajes ideológicos; Chávez fue catalogadocomo la reencarnación de Fidel Castro después de cuatro dé-cadas. Este paralelismo le prestó una gran rentabilidad sim-bólica al presidente venezolano, al cimentar su imagen deadalid de los pueblos del “Tercer Mundo”.

La trama armada por Chávez al presentarse como el ideó-logo de un renovado antiimperialismo encontró un empeño-so partenaire en el propio gobierno estadounidense. El des-cabellado intento golpista de 2002, y el inmediato apoyo quele prestó el gobierno de George W. Bush, y las acciones pos-teriores de Estados Unidos le suministraron a Chávez muni-ciones para posicionarse frente a los estratos pobres de su paíscomo un paladín de la justicia social jaqueado por el imperia-lismo y los ricos, que, además, se convertía en un líder conti-nental con la capacidad de devolver golpe por golpe a los po-derosos del mundo. Esta última circunstancia fue favorecida,claro está, por la capacidad de Venezuela de conceder présta-mos y subsidios a países empobrecidos de la región.

A punto de concluir la primera década del siglo XXI,Chávez ha consolidado un presidencialismo personalista enel que su fuerza resulta permanentemente alimentada por la

Page 42: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi42

incompetencia de la oposición, o dicho de otro modo, por laincapacidad de los actores sociales y políticos del antichavis-mo para articular un mensaje político que apele al conjuntode la ciudadanía venezolana. Como en todos los presidencia-lismos hegemónicos de los cuales Venezuela constituye el casoparadigmático, el curso futuro de la política venezolana estáatado irremisiblemente a la suerte de su astro máximo y a suastucia política. Esto, en el presente, asegura un pronósticofavorable a su permanencia, pero al mismo tiempo constitu-ye su talón de Aquiles. La debilidad del régimen chavista tie-ne que ver con una circunstancia común a los presidencialis-mos hegemónicos; todos ellos tienen grandes dificultades paragenerar reglas verosímiles que, no solamente sus adversarios,sino también y fundamentalmente, sus propios aliados asi-milen y respeten cuando se enfrentan a situaciones de crisis.En otras palabras, a Venezuela, como a la mayoría de los pre-sidencialismos hegemónicos, le están prácticamente vedadaslas salidas que permanecen abiertas en sistemas políticos de-mocráticos más normales; por un lado una alternancia, por elotro, una sucesión ordenada en la cual surja una alternativadentro de la misma coalición oficialista. Desde ya que estosriesgos se verán incrementados si es que los ingresos petrole-ros disminuyeran significativamente.

Chile: la democracia “tímida”

La evolución del rol presidencial en la política chilena apartir del retorno de la democracia en 1990 debe situarse enel marco del fin de la única dictadura militar exitosa de la

Page 43: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 43

segunda mitad del siglo XX en América Latina. El prolonga-do régimen de Pinochet, por un lado, se propuso el arrasa-miento de un adversario político con el cual se sentía identi-ficada casi la mitad de la ciudadanía chilena y, en cierta medi-da, lo logró. Por el otro, tuvo la capacidad de promover unatransformación de la estructura socio-cultural y económicade Chile.9 A diferencia de los golpes contemporáneos de Uru-guay y Argentina, el derrocamiento de Salvador Allende en1973 fue una brutal contrarrevolución. Fue una revancha del“Chile de arriba” contra el “Chile de abajo”, dirigida a exter-minar a los actores sociales y políticos que, bajo el gobiernode la Unidad Popular, habían cuestionado, aunque siempremanteniéndose dentro de los marcos de la democracia repre-sentativa, las jerarquías del orden social tradicional. Nada se-mejante al bombardeo al palacio presidencial se presenció enlos otros golpes contemporáneos del Cono Sur. La devasta-ción de la Moneda y la muerte de Allende —quien había co-menzado su carrera política como ministro de salubridad delFrente Popular surgido en 1938— fue una metáfora de la des-trucción del Estado de compromiso instalado durante el me-dio siglo previo en Chile.

9 No debe olvidarse que en la última elección celebrada en democracia an-tes del golpe chileno, es decir en Marzo de 1973, la Unidad Popular obtu-vo el 44% de los votos a pesar de que la oposición se había unificado y elpaís estaba atravesando una grave crisis económica causada no sólo porlos desaciertos del gobierno, sino también por el orquestado sabotajeempresarial financiado, en parte, por fondos externos ilegalmente apor-tados por el gobierno estadounidense.

Page 44: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi44

Pero, además, el proceso de transformación desencade-nado por las políticas de la dictadura militar constituyó unaverdadera “revolución capitalista desde arriba”, que no se li-mitó a aplicar la mano dura a los sindicatos de trabajadores ya los partidos de izquierda, sino que también desencadenóprocesos que contribuyeron de manera decisiva a generar unanueva burguesía y a refundar la derecha política. En relaciónal empresariado nacional la imposición de disciplina en susfilas no sólo fue el resultado de la consistencia de las políticaseconómicas, sino también el efecto de la aplicación de unadosis significativa de arbitrariedad presidencial. Si bien desde1975 en adelante fueron los Chicago Boys —es decir, los discí-pulos de Friedman y Haberger— los únicos economistas quefijaron lineamientos programáticos de largo plazo, tambiénes cierto que los actores económicos y políticos más sagacespodían percibir que incluso esos lineamientos estaban, en úl-tima instancia, subordinados a las necesidades políticas estra-tégicas y tácticas del dictador, y en algunos casos a sus capri-chos y enojos,

La reflexión sobre la estructura de personalidad de Pino-chet me lleva a plantear una digresión sobre un tema que tras-ciende a la presidencia autoritaria chilena. La tiranía de Pino-chet perteneció al subgénero de regímenes antidemocráticosen los cuales la persona del líder autoritario se convierte en uningrediente esencial de la estructura y el desenlace del régi-men, como así también del curso que toma la política nacio-nal en las décadas posteriores a la transición. El poder despó-tico de la dictadura, manifestado tanto en la violencia ejercidacontra sus enemigos, como en la eliminación casi total de

Page 45: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 45

deliberación dentro del propio campo de sus aliados guardóun gran paralelismo con la personalidad de Augusto Pino-chet. Éste no se privaba de exhibir la saña y la crueldad conque trataba a los opositores, ni tampoco las humillaciones alas que podía llegar a someter a muchos de sus aliados; todoello enmarcado por el descaro con el que desplegaba esas ac-titudes en sus declaraciones públicas. Incluso, lo que tornabaespecialmente siniestro a Pinochet era que se deleitaba en di-chas exhibiciones, o al menos parecía hacerlo. Last but not least,la circunstancia de que Pinochet no se abstuviera de embestiren contra de individuos de alcurnia, de una origen social cla-ramente más elevado que el de él mismo, lo legitimó aún másentre sus partidarios de las clases bajas. Pinochet tuvo la habi-lidad de interpretar un componente de la subcultura políticapopular, reproduciéndolo y amplificándolo desde su posiciónde poder absoluto, recurriendo a un lenguaje amenazador,“barriobajero”. Este era el lado plebeyo del dictador que semanifestó, entre otros aspectos, por el hecho de que no vaci-ló al aplicar su poder arremetiendo ocasionalmente contra losricos. El discurso del dictador expresaba, por un lado, el re-sentimiento a los “rotos” —que los pinochetistas interpreta-ban habían sido “sacados de su lugar” por las prácticas de laUnidad Popular— y, por el otro, la aversión a los políticos, yespecialmente al conflicto asociado a la política partidaria.Detrás de estos sentimientos campeaba, ciertamente, la nos-talgia por un mítico orden perdido al que se refirió NorbertLechner, cuya vigencia había sido sacudido por las turbulen-cias de la etapa de la Unidad Popular. El estilo plebeyo dePinochet fue una de las razones de su appeal. La absoluta falta

Page 46: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi46

de inhibición para comportarse de manera grosera, recurrien-do a expresiones vulgares y soeces aplicadas a interlocutoresreales o personajes abstractos —incluidos algunos de los in-tegrantes conspicuos del patriciado chileno— y para mentir des-caradamente acerca de las acciones de la dictadura fue una razónde peso de la sintonía del dictador con segmentos significativosde los estratos populares y de la baja clase media chilena.

Los diecisiete años de autoritarismo dejaron dos legadosque moldearon decisivamente las conductas de los políticosde la Concertación que dirigieron la estrategia por el No enel plebiscito de 1988 y de cuyas filas surgieron los cuatro pre-sidentes que gobernaron Chile durante las dos décadas quesiguieron al fin de la dictadura.10 El primero de los legadosfue el propio Pinochet. A pesar que en 1988 el dictador nologró alcanzar su objetivo de máxima, es decir, la perpetua-ción en el poder presidencial prácticamente omnímodo quehabía disfrutado desde 1973, la constitución autoritaria le per-mitió mantenerse en el cargo de comandante en jefe del ejér-cito hasta Marzo de 1998. Pinochet utilizó esta prerrogativahasta el último día posible y, apoyándose en la lealtad sin fisu-ras del cuerpo de generales activos, chantajeó permanente-

10 La Constitución de 1980 dispuso que en 1988 se realizara un plebiscitopara ratificar o no la permanencia de Pinochet en la presidencia hasta1997. El No triunfó con el 57 por ciento de los votos. La Concertaciónestaba formada por el partido socialista, la democracia cristiana, el PPD(Partido por la Democracia) — una figura originalmente creada con finesinstrumentales para afrontar el plebiscito en previsión que la dictaduraproscribiera al socialismo — y varias agrupaciones menores.

Page 47: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 47

mente a los dos primeros presidentes democráticos, PatricioAylwin y Eduardo Frei (h), ambos provenientes de la Democra-cia Cristiana. No sólo durante esos ocho años sino por algúntiempo más, la democracia chilena no fue “tutelada” como pre-veía la constitución de 1980, sino limitada de hecho por las ame-nazas de insubordinación militar por parte de Pinochet.

En realidad la salida del cargo de comandante en jefe noimplicó una inmediata pérdida de influencia por parte de Pi-nochet. Su derrumbe político, más bien, tuvo que ver condos acontecimientos que no fueron promovidos por los go-biernos democráticos que lo sucedieron: la detención de 509días que sufrió en Londres a raíz de una demanda presentadapor el juez español Baltasar Garzón vinculada a las muertes ydesapariciones de ciudadanos de esa nacionalidad durante losaños de la dictadura y, cinco años más tarde, como resultadode la difusión de un informe de un comité del Senado de losEstados Unidos, que concluyó que el Banco Riggs —con sedeen la ciudad de Washington— había ayudado a Pinochet aesconder fraudulentamente varios millones de dólaresmientras estaba sometido a arresto en Londres.

Una vez transcurridas las dos primeras presidencias de-mocráticas, y ya iniciada la decadencia de Pinochet despuésde un cuarto de siglo de ejercicio de poder, los gobiernos dela Concertación comenzaron a variar tibiamente la línea desumisión a los vetos del ex dictador. Contribuyó a este giro elhecho que los siguientes presidentes, Ricardo Lagos y Mi-chelle Bachelet, provinieran del socialismo, que integraba jun-to al PPD el ala progresista de la coalición gobernante. Selogró así en el año 2006 enmendar la constitución autoritaria

Page 48: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi48

eliminando, por una parte, a los senadores designados comovitalicios, y, a la vez, restituyendo al poder civil la facultad deremover a los mandos de las fuerzas armadas y de la policíamilitar de carabineros, por otra. Estos cambios constituyeronun fuerte indicio de que la principal regla para-constitucionalque afectó a los dos primeros presidentes democráticos chi-lenos —esto es, el poder virtual de veto detentado por Pino-chet— se estaba disipando. De todos modos, tampoco du-rante la segunda década de la Concertación se logró desmon-tar un importante engranaje institucional legado por la dicta-dura, esto es el sistema electoral de circunscripciones bino-minales para las votaciones legislativas. Los redactores de laconstitución de 1980 habían ideado este sistema, único en elmundo, con dos objetivos: impedir la formación de una ma-yoría de la centro-izquierda con capacidad para reformar lasprincipales disposiciones de dicha constitución y bloquear elacceso del partido comunista al parlamento.

Pero, quizás, el legado para-constitucional más pesado queheredaron los cuatro presidentes de la Concertación fue eltemor a promover reformas que apuntaran a revertir las asi-metrías de clase que la dictadura había profundizado en elmundo laboral. La prudencia extrema en este terreno no sealteró ni siquiera en la década de los presidentes socialistas,Lagos y Bachelet: el Código Laboral de 1980 todavía conti-núa vigente en 2010. Y éste fue un código dictado y ejecutadoa sangre y fuego. Según su autor, el entonces ministro de Tra-bajo de la dictadura José Piñera, la reforma radical de la legis-lación laboral vigente buscaba “[…] restablecer la libertad ydemocracia sindical en Chile, introdu[ciendo] la negociación

Page 49: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 49

colectiva por empresa y retir[ando] al gobierno de los temassindicales”.11 Piñera, hermano del actual presidente, omitíaseñalar, claro está, que “el retiro del gobierno” del espaciosindical no fue completo: en realidad, el gobierno militar ha-bía intervenido sistemáticamente persiguiendo a todos losdirigentes sindicales opositores y asesinando a cientos de ellosde origen comunista, socialista y demócrata cristiano. El re-sultado fue el reinado de la más absoluta discrecionalidad pa-tronal en el lugar de trabajo. Este fenómeno es, sin duda unade las patas donde se apoyó, y por cierto continúa apoyándo-se, la conversión de la burguesía chilena en una de las clasesempresariales más dinámicas y expansivas de América Latina.Enfrentados a la cuestión de la legislación laboral, los cuatrogobiernos de la Concertación han tendido a sobrevalorar elcosto que resultaría de un conflicto con los empresarios y porende, no han cuestionado el statu quo.

Otro legado de la dictadura fue la refundación de la dere-cha partidaria. El proceso de refundación fue más allá de loscambios de nombres de los partidos tradicionales y la renova-ción de los elencos partidarios. A diferencia de lo que ocurriócon los partidos de centro e izquierda donde subsistieron lastres principales agrupaciones del período anterior al golpe—socialistas, comunistas y demócrata-cristianos— y ademásreaparecieron muchos de los dirigentes históricos, en el casode la derecha la vuelta a la actividad partidaria implicó la crea-

11 El corpus central de la legislación laboral fue sancionado entre 1932 y 1973,es decir el medio siglo de vigencia democrática que precedió al golpe mi-litar, bajo gobiernos de todos los signos políticos.

Page 50: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi50

ción de dos nuevos partidos, Renovación Nacional (RN) yUDI (Unión Demócrata Independiente) y la renovación casitotal de sus cuadros. Pero, en realidad, debajo de esos cam-bios, de por sí significativos, se produjo un fenómeno todavíamás trascendente, gestado en buena medida durante la etapapinochetista. Este cambio político-cultural permitió que laderecha —que cuando se produjo la primera ola de real am-pliación del sufragio en Chile entre 1950 y 1970 nunca habíasuperado el tercio de los votantes tanto en las elecciones pre-sidenciales como parlamentarias— comenzara a rozar el um-bral de la mayoría absoluta en el siglo XXI. ¿En qué consistióeste cambio?

Dicho de manera esquemática, el principal legado políti-co-cultural del pinochetismo fue la expansión de una corrientepoco significativa históricamente de la derecha y su confluen-cia con las otras dos grandes vertientes, cuya densidad social ycultural había sido mayor a lo largo del siglo XX. En parteeste fenómeno fue resultado del crecimiento y legitimaciónde la que se podría caracterizar como la derecha plebeya.Pinochet, recogió algunos de los ingredientes políticos de dosantiguos presidentes, Arturo Alessandri (1920-1924 y 1932-1938) y Carlos Ibáñez del Campo (1927-1931 y 1952-1958),quienes habían tenido la capacidad para apelar al populus conun lenguaje campechano y directo y fomentando la descon-fianza, y en el límite, el rechazo a los partidos políticos.

El pinochetismo, además, favoreció la gestación de unespacio unitario de la derecha, que además de la derecha ple-beya, integró a la derecha patronal tradicional, cuyas raí-ces se remontaban a las relaciones jerárquicas y patriarcales

Page 51: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 51

del modo de vida aristocrático rural, y a la derecha geren-cial tecnocrática, que si bien había acuñado filosofías y po-líticas de cuño estatista entre las décadas de 1920 y 1950, sehabía tornado militantemente anti estatista y pro mercadoplegándose a la blitzkrieg del neoliberalismo en el último ter-cio del siglo XX. La gestación de este espacio unitario fue unhito notable, pues le permitió a las fuerzas conservadoras chi-lenas presentarse como una alternativa democrática legítimadejando en la penumbra el apoyo que le había prestado a ladictadura y articulando un discurso integrador para ricos ypobres. Este discurso enhebró una visión del pasado —resca-tando los “éxitos” del gobierno militar como propios— conotra del futuro, postulándose como la herramienta políticamás apta para profundizar el modelo del “Chile-Isla de mo-dernidad capitalista” que la Concertación en sus veinte añosno llegó siquiera a cuestionar.

Y esta es la paradoja que quiero enfatizar con respecto alChile del presente: los partidos de la Concertación en defini-tiva gobernaron bien, pero fracasaron en perfilar y, menos aúnen consolidar, un estilo de liderazgo presidencial programáti-co. Este es el principal desafío con el que se enfrentan lospresidentes apoyados en partidos o coaliciones de signo pro-gresista no sólo en Chile, sino en todos los casos de presiden-cialismos coalicionistas; esto es, el de transitar adecuadamen-te el estrecho desfiladero que existe entre, por un lado, el com-plicado mantenimiento de los equilibrios macroeconómicospara evitar la desinversión empresarial y la fuga de capitales y,por el otro, el de implementar un programa que efectivamenteponga en la agenda de las políticas públicas la búsqueda de

Page 52: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi52

llenar el “casillero vacío” al que aludía Fernando Fajnzylber.12

Claro que en Chile la tarea para la coalición progresista haresultado aún más complicada porque se enfrenta a un con-tendiente conservador de gran consistencia político-culturaly que dispone de una formidable base electoral, como se haevidenciado nuevamente en 2010 con el triunfo del candida-to derechista Sebastián Piñera.

México: una engañosa vuelta al punto de partida

Durante la media década perdida, como los otros paísesmás grandes de la región, México experimentó una “rupturadentro de las instituciones” que marcó su historia política ysocial reciente. México cruzó un umbral de gran trascenden-cia en 2000, al ser derrotado por primera vez en su historia elPartido Revolucionario Institucional (PRI) en las eleccionespresidenciales de ese año. Se clausuró así un predominio inin-terrumpido de más de ocho décadas. Sus arquitectos habíansido los triunfadores en el sangriento proceso revolucionarioiniciado en 1910 y finalizado entre 1917 —cuando se sancio-nó la constitución todavía vigente en México y se produjo laderrota de la facción revolucionaria comandada por EmilianoZapata y Pancho Villa— y 1920 —con el asesinato del presi-

12 En la década de 1980 Fajnzylber acuñó la metáfora del “casillero vacío”para subrayar que en la historia de América Latina no se había dado nin-gún caso de crecimiento económico con un aumento de la equidad dis-tributiva (Fajnzylber 1992).

Page 53: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 53

dente Carranza—. A partir de 1920, entonces, los generalesde la Dinastía de Sonora, liderados por Álvaro Obregón y Plu-tarco Elías Calles, y sus herederos controlaron el poder y di-señaron, bajo la decisiva influencia del último militar pode-roso de origen revolucionario, Lázaro Cárdenas, la maquina-ria política del autoritarismo civilista que se mantuvo en elpoder hasta fines de siglo.

La herencia del proceso de construcción política gestadoentre 1920 y 1940 fue de enorme magnitud: derivó en la instau-ración del régimen político más estable de América Latina du-rante todo el siglo. El régimen del PRI estuvo basado en dospilares: 1) la inquebrantable mayoría absoluta que gozaba el pre-sidente de la república en el congreso, sustentada en el controlcapilar que ejercía el PRI en las regiones pobres urbanas y rura-les y en el fraude electoral selectivo y 2) la renuncia del presiden-te saliente a toda pretensión de continuidad personal o delegadaen el poder, pero reservándose la prerrogativa de escoger al “ta-pado”, es decir a su sucesor y a hacer luego que el aparato delpartido-gobierno asegurara el triunfo de su propuesta.13

Hasta principios de la década de 1990, la hegemonía priistano fue seriamente cuestionada. A pesar del comienzo tormen-toso de su período y de la grave situación de recesión infla-cionaria que enfrentaba México, Salinas pareció capaz de tor-cer el curso de un proceso que probablemente encaminaba al

13 Héctor Aguilar Camín apunta correctamente que Lázaro Cárdenas(1934-1940) y Adolfo Ruiz Cortines (1952–1958) fueron los dos presi-dentes que más contribuyeron al diseño e implementación del mecanis-mo sucesorio mexicano (Camín 1989).

Page 54: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi54

país a una dictadura abierta o a la democratización del siste-ma político. Dotado de una excepcional astucia política y deuna gran dosis de audacia, Salinas logró reequilibrar la eco-nomía, y lanzó dos iniciativas que resultaron decisivas pararecuperar el poder presidencial: un cambio del modelo eco-nómico semi-cerrado de México a través de la búsqueda deun acuerdo de libre comercio con Estados Unidos y Canadáque culminaría con la aprobación de un tratado en 1993 y laimplementación de un vasto plan de promoción social, el lla-mado Programa Nacional de Solidaridad (PRONASOL). Esteprograma descansó en la creación de un verdadero supermi-nisterio —la secretaría de Desarrollo Social— cuyo manejo,que incluyó cuantiosos fondos, y fue encargado al políticoque se transformaría seis años más tarde en el “destapado”para la sucesión, Luis Donaldo Colosio.

El éxito inicial de la estrategia del presidente se reflejó enla rápida gestación de una corriente “salinista” que desplazó alos denominados “dinosaurios” priistas, y en las victorias elec-torales del PRI en las elecciones de 1991 y 1994. Un engrana-je central de los logros de Salinas fue el rediseño del juegoelectoral en la dirección de lo que Aguilar Camín definió como“negociacionismo”. Salinas propició la creación del InstitutoFederal Electoral (IFE) como el organismo encargado de laadministración y gestión del voto sustraído del control presi-dencial, acción que generó una mejoría sustancial en la con-fiabilidad de los procesos electorales, si bien las impugnacio-nes a los resultados quedaron bajo la competencia del Tribu-nal Federal Electoral. Sin embargo, este avance no se tradujoplenamente en la celebración de elecciones libres tout court.

Page 55: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 55

En el plano subnacional, el presidente y los gobernadores delPRI no perdieron el control de resortes fraudulentos que lepermitieron torcer selectivamente resultados claves, en espe-cial en las elecciones de gobernadores. De ese modo, Salinasprocuró con bastante éxito arrinconar al Partido de la Revo-lución Democrática (PRD), es decir, a la oposición de izquier-da que había surgido del propio tronco del PRI y le habíadisputado la presidencia en 1988 presentando la candidaturade Cuauhtémoc Cárdenas, hijo de Lázaro. A su vez, el presi-dente no vaciló en conceder algunas gobernaciones al Partidode Acción Nacional (PAN), la oposición tradicional de dere-cha católica, recurriendo a procedimientos arbitrarios que elu-dían la legalidad sin transgredirla abiertamente. Salinas, deese modo fue el primer priista en reconocer el triunfo de laoposición en elecciones de gobernador.

Los tramos finales del mandato de Salinas parecieron co-ronar favorablemente sus empeños. A finales de 1993 el se-nado de Estados Unidos había aprobado el TLC que entró envigencia el 1º de enero de 1994 y seis meses más tarde el PRIganó cómodamente las elecciones presidenciales más limpiasde la historia del país. Pero en realidad en 1994 comenzó agestarse el fin de la prolongada hegemonía de los herederosde la Revolución Mexicana. El primer día de ese año probóque no todas serían venturas para el gobierno: un grupo gue-rrillero, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN),tomó cuatro municipios en regiones indígenas de Chiapas,uno de los estados más pobres del sur del país anunciandoque se proponía “marchar hasta la Ciudad de México”. Loque revelaría este episodio no sería la fortaleza política o mi-

Page 56: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi56

litar del EZLN, pues su objetivo era descabellado a todas lu-ces, sino la inesperada debilidad política del régimen priista.A pesar de que en cuatro días el ejército federal había retoma-do los municipios alcanzados por la rebelión, en los años quesiguieron el gobierno no se animó a avanzar y desalojar loscampamentos del EZLN que se transformaron en el foco dela peregrinación de políticos progresistas mexicanos, perio-distas y personalidades extranjeras. El alzamiento del EZLNfue sólo el comienzo; poco más de dos meses más tarde elcandidato del PRI y seguro triunfador de las elecciones quese avecinaban, Colosio, fue asesinado en circunstancias nun-ca aclaradas en Tijuana, tras lo cual Salinas se vio forzado anombrar como candidato de reemplazo a un político de se-gunda línea, pero de su supuesta máxima confianza, ErnestoZedillo. Bajo el tenso clima político de asesinatos, guerrille-ros encapuchados y acusaciones de complicidad en los crí-menes políticos que alcanzaron incluso al hermano de Sali-nas, la fácil victoria de Zedillo en los comicios presidenciales,en realidad no hizo más que encubrir la circunstancia de queMéxico se encaminaba hacia el precipicio. En Diciembre de1994, a sólo dos semanas de haberse hecho cargo Zedillo dela presidencia, en el contexto de desconfianza generado poruna voluminosa deuda externa y elevados déficit comercia-les, se desató una vertiginosa e incontrolable corrida en con-tra del peso mexicano. La corrida precipitó la devaluación delpeso y una violenta contracción de la economía que repercu-tió en toda América Latina. El “Efecto Tequila” interrumpióel flujo de inversiones extranjeras en la región que se habíareiniciado a principios de la década y presagió, aunque pocos

Page 57: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 57

lo advirtieron, la crisis de carácter global mucho más graveque se desataría a partir de 1997.

El sexenio de Zedillo, una vez superada la debacle inicial,transcurrió más sosegadamente. La economía mexicana seestabilizó durante 1995 y la rebelión del EZLN se fue apa-gando incluso como evento mediático, pero el nuevo presi-dente quedó mal encajado dentro de su propio partido, en lamisma medida que el PRI iba viendo como se erosionabanprogresivamente los resortes de su imbricación con el estadomexicano en los que se había apoyado durante décadas. Sibien Zedillo rompió abiertamente con el salinismo, o lo quequedaba de él, al no impedir el procesamiento judicial y elposterior encarcelamiento del hermano del ex presidente,acusado de malversación de fondos públicos y de ordenar elasesinato de otro priista, el presidente no consiguió discipli-nar o cooptar efectivamente a los sectores tradicionales delpartido que habían sido marginados por Carlos Salinas, quien,prudentemente, optó por emigrar.

La defenestración de Salinas no fue un simple pase a reti-ro. Tampoco fue, a pesar de que algunos actores y no pocosanalistas así lo interpretarían, el preludio de una transición ala democracia de “libro de texto”, es decir, un proceso en elcual un régimen autoritario de partido semi-único resultabagradual y pacíficamente reemplazado por una democracia re-presentativa asentada sólidamente en un sistema pluriparti-dista en el cual derecha, centro e izquierda aparecían nítida-mente representados y con opciones verosímiles de acceso ala presidencia de la nación. Esta interpretación se apoya enuna lectura lineal de la cronología electoral contemporánea

Page 58: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi58

que descansa en una circunstancia verdadera; las eleccionespresidenciales mexicanas a partir de 2000 se transformaronen disputas reales en las cuales al menos dos de los conten-dientes contaron con posibilidades efectivas de victoria. En el2000 ellos fueron los candidatos del PRI y del PAN, con el triunfodel opositor Vicente Fox, y en 2006 la competición enfrentó alcandidato panista, Felipe Calderón, y al representante del PRD,Andrés Manuel López Obrador, quien resultó derrotado por unadiferencia de menos del 1% del total de votos.

Sin embargo, el proceso inaugurado por el ascenso y caí-da del salinismo no fue, ni un nuevo episodio de reequilibra-miento del dominio del PRI, ni el ingreso en una democraciade partidos. El eclipse del PRI, en tanto partido eje de unsistema hegemónico, probó ser definitivo. Este resultado, sinduda, tuvo su lado positivo. Implicó que los mecanismos deíndole no democrática, formales e informales, en los que sehabía sostenido la hegemonía priista, y que en varias ocasio-nes habían incluido la eliminación física de adversarios y crí-ticos, se derrumbaron. Pero, a su vez, la desarticulación de lasmúltiples redes sociales enraizadas en el estado/partido go-bernante produjo un desgaste irreversible del control capilarque el PRI había ejercido sobre la sociedad mexicana durantemás de medio siglo. Este control capilar era bifronte; así comole facilitaba al gobierno detectar disconformidades o rebel-días para cooptarlas o reprimirlas, también les permitía a losciudadanos, incluso a los pobres, ejercer un cierto grado decontrol sobre los comportamientos más autoritarios y discre-cionales de los funcionarios públicos de nivel intermedio einferior. La desarticulación del partido-estado tuvo efectos de

Page 59: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 59

gran importancia: el control del PRI, la creación de empleosurbano-industriales y el congelamiento del orden agrario, unavez implementada la reforma que impulsó Lázaro Cárdenas,habían estructurado a México como sociedad moderna des-pués del derrumbe del régimen oligárquico y la destrucciónque acarrearon las guerras revolucionarias y pos-revolucio-narias entre 1910 y 1927. Durante la década de 1990 el Méxi-co moderno se resquebrajó seriamente, lo que llevó al soció-logo Sergio Zermeño a utilizar la sugerente imagen del “Méxi-co roto” para aludir a ese proceso.

La clave del proceso mexicano reciente reside precisamen-te en el fenómeno de una “sociedad construida desde la polí-tica” que ve desmoronarse los pilares sobre los cuales se habíaasentado. Si asimilamos el eclipse del PRI hegemónico a unproceso de destrucción política, el corolario que quiero enfa-tizar es que la política pos-priista no ha tenido la capacidad deestructurar a una sociedad mexicana golpeada por sucesivascrisis económicas y extraeconómicas y atravesada por una in-tegración bifronte y contradictoria con los Estados Unidos.El Estado movilizador, disciplinario y discrecional del perío-do 1930-1980, cuyo engranaje central era la presidencia mo-nárquica, no ha sido reemplazado por un Estado democráti-co de derecho dotado de una presidencia fuerte, pero a su vezrespetuosa de las normas republicanas. Más bien, diversospoderes fácticos han expandido su influencia tanto en la so-ciedad, como en los ámbitos nacionales y subnacionales deun Estado debilitado y colonizado. El Estado mexicano estácoronado por una presidencia que, a partir de los años deZedillo y más aún bajo Fox y Calderón —es decir, ya más de

Page 60: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi60

quince años— se ha revelado impotente para reorganizar lapolítica en torno a la implementación de acuerdos básicossobre el funcionamiento tanto de las instituciones represen-tativas a nivel federal y regional, como de los mecanismos degobierno necesarios para el ejercicio de la regulación de losconflictos sociales y el mantenimiento del orden público.

La evolución del régimen político mexicano a partir de lafinalización del período presidencial de Ernesto Zedillo se hacaracterizado por la precariedad producida por un progresivoproceso de desarticulación de la presidencia dominante, sinque ésta fuera reemplazada por un mecanismo alternativo.Por debajo de los dos triunfos consecutivos del PAN en laselecciones presidenciales se ha ido construyendo un sistemapolítico basado en la preeminencia de mecanismos de blo-queo y de veto. Este resultado es producto, en buena medida,de los fracasos reiterados para asegurar mayorías parlamentariasy el descentramiento de la presidencia. Una de las principalescausas de este fenómeno es la gravitación que ha mantenido elPRI en el congreso federal y en el control del mayor número degobernaciones estaduales —circunstancia que se dio en paraleloa su incapacidad para presentar candidatos convincentes a la pre-sidencia en 2000 y 2006— lo que le ha permitido oponerse prác-ticamente a todas las iniciativas generadas por el poder ejecutivoen materia de virajes estratégicos de la política económica.

El juego de bloqueos recíprocos en el que desembocaronel presidente Fox y la oposición priista entre 2000 y 2006,sumado a la insatisfacción de los sectores más empobrecidosde la población con la situación económica, abrió el espacioen 2006 para el ascenso de la candidatura presidencial de un

Page 61: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 61

político del partido que había quedado relegado a un lejanotercer puesto en las elecciones de 1994 y 2000, el PRD. Elperredista Andrés Manuel López Obrador ocupaba la jefatu-ra de gobierno del Distrito Federal y aparecía excelentemen-te posicionado para triunfar en 2006, ya que los otros dos par-tidos enfrentaban graves dificultades para presentar candida-tos fuertes. Este fenómeno trasuntaba, por su parte, la parale-la declinación del PRI y del PAN como identidades políticasy también como organizaciones partidarias efectivas.

En el PRI, una liga de gobernadores formó un movimientoopuesto a un ex gobernador de Tabasco acusado de corrup-ción, Roberto Madrazo, para impedir que éste accediera a lacandidatura. El TUCOM (Todos contra Madrazo), sin em-bargo, no logró su objetivo pues el precandidato que ellosapoyaban, Arturo Montiel, quedó rápidamente desacredita-do al comprobarse su involucración en procesos de… ¡ohsorpresa! corrupción. Sin embargo, ya oficializada su candi-datura y avanzada la campaña, el propio Madrazo no pudodespejar las acusaciones formuladas contra él, con lo que elPRI quedó, de hecho, fuera de la carrera presidencial por pri-mera vez en su historia.

A su vez, el PAN resultó seriamente afectado por los fra-casos y zigzagueos del presidente Fox frente a los desafíosque enfrentó, incluida la cuestión central de determinar quiensería el candidato oficial de su partido en las elecciones de2006. El primer revés de Fox fue cuando procuró instalar a suesposa, Marta Sahagún, como candidata a la sucesión. El in-tento, ya de por sí complicado tanto por el machismo mexi-cano como por la presunción de que se estaba buscando la

Page 62: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi62

continuidad de hecho del presidente, se vino abajo cuando secomprobaron las vinculaciones de Sahagún a los Legionariosde Cristo, y la utilización groseramente clientelista de unafundación manejada por ella y financiada con fondos públicos.El fracaso más sonoro, de todos modos, fue cuando Fox trató defavorecer a su secretario de Gobernación, Santiago Creel, en lalucha por la candidatura. Creel, al no contar con el apoyo de lossectores más conservadores del PAN, finalmente fue derrotadopor Felipe Calderón. En la campaña presidencial, Calderón, enparte ayudado por los errores que cometió el candidato del PRD,logró ubicar a López Obrador en la incómoda posición de “can-didato peligroso”, y pudo vencerlo ajustadamente, como ya veía-mos, en las elecciones de Julio de 2006.

La victoria de Calderón, que se apoyó en la formación deuna coalición implícita de “Todos contra López Obrador”,sólo agravó el síndrome de empate catastrófico que aquejó ala política mexicana a partir de la llegada de Fox al poder.Después de un par de años, y apoyado en la recuperación eco-nómica iniciada en 2003, Calderón pareció encaminarse a lareconstrucción de un poder presidencial relativamente sóli-do en coexistencia con un parlamento con mayoría oposito-ra, Sin embargo, esta reconstrucción de la política probó serun espejismo ante la declinación del apoyo del PAN al presi-dente y las evidencias cada vez más contundentes de la impo-tencia del estado mexicano, tanto a nivel federal como subna-cional, para sostener la seguridad interna frente a los clanesde narcotraficantes que se internaron en luchas intestinas deinusitada violencia, en las cuales se multiplican las pruebas dela corrupción de policías, jueces, políticos y funcionarios in-

Page 63: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 63

volucrados con esos clanes. La participación de las fuerzasarmadas en la lucha contra los narcotraficantes, que por aho-ra no alcanzado grandes éxitos, aumenta el riesgo de que tam-bién los militares terminen alcanzados por la corrupción.

El desmoronamiento de la presidencia de Calderón, y latransformación del jefe del ejecutivo en un lame duck con unpoder cada vez más diluido, terminó de materializarse con laaplastante victoria del PRI en las elecciones parlamentariasde 2009. En este contexto se afirma la posibilidad de lo queconstituiría una culminación paradójica de la transición mexi-cana: el regreso del PRI al sillón presidencial apoyado en lacontinuidad de sus poderes territoriales, el derrumbe de laizquierda y la incapacidad de los gobiernos panistas para redise-ñar un Estado a la deriva. Por cierto que, de concretarse esa alter-nativa, resulta prácticamente imposible que el antiguo partidodominante vuelva a disfrutar del poder casi ilimitado que le con-fería ocupar la cima de un sistema autoritario. El estado mexica-no, en sus diferentes niveles, está carcomido por la erosión, quese prolonga ya casi por tres décadas, de sus mecanismos de redis-tribución, inclusión y control capilar. Y ninguna de las tres fuer-zas políticas significativas parece capaz de revertir esa tendencia.

Una tipología de las presidencias

La exploración de los casos de Venezuela, Chile y Méxicocumple dos funciones en relación a los objetivos de este tra-bajo. La primera es que cada uno de ellos aparece como elejemplo paradigmático de los tres modelos de acción presi-

Page 64: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi64

dencial presentados en el Cuadro 1: el coalicionista, el débil yel hegemónico. La segunda función es plantear un conjuntode constataciones preliminares que sirven para sugerir proble-mas o dilemas para el análisis a realizar en el futuro próximo.

1) El “retorno” de la política. Durante el período 1980-2000, si bien la política fue “aplastada” por la economía, seprodujeron fenómenos que proveyeron el material políticoreprocesado por los cambios producidos a partir del comien-zo del nuevo siglo. Como vimos, las dos décadas iniciales delas nuevas democracias latinoamericanas, es decir el período1980-2002, se caracterizó por la escasa autonomía de la polí-tica a raíz de las severas restricciones que le impuso al activis-mo estatal el volumen, prácticamente impagable, de la deudaexterna y el comportamiento espasmódico del flujo de capi-tales. La centralidad de la política en el período de la MatrizEstado-céntrica se había basado, precisamente, en la capaci-dad del estado para redistribuir recursos, tanto materialescomo simbólicos. En la medida que el estado, sobre todo apartir de la crisis de la deuda de 1982, se convirtió en un me-canismo que en vez de “aportar”, extraía recursos de la socie-dad —o sea, asignaba costos y no beneficios— el funciona-miento de la política resultó radicalmente alterado. Se des-plegaron, entonces, las panaceas democrática y neoliberal y elconsiguiente predominio de diferentes modalidades de vo-luntarismo, en cierto sentido apolítico, en el cual la democracia yel mercado se convirtieron, para reiterarlo, en panaceas. Conel auge del neoliberalismo, el vaciamiento de la política comoactividad de interacción y responsabilización colectivas estu-vo asociado, no por accidente, al síndrome hiperpresidencial.

Page 65: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 65

Sin embargo, como sugiere el examen de los casos deChile, México, y Venezuela, a pesar del bajo grado de auto-nomía de la política, ésta se renovó durante las décadas de1980 y 1990, generando reservorios de prácticas y erosionan-do patrones establecidos.14 Tanto los nuevos estilos de acciónpolítica como los escombros de las etapas previas, permane-cerían como material disponible para los períodos posterio-res, y en particular para la coyuntura actual.

Como ya apunté, el cierre de la “media década perdida”en 2002 abrió una brecha que contribuyó al retorno de lapolítica, esto es a la recuperación de la capacidad de la polí-tica para generar cambios en la sociedad. En este contexto lacentralidad del rol presidencial cobró un nuevo sentido, sibien asumiendo nuevos ropajes y desplegándose en un con-texto mundial cada vez más turbulento, contexto en el que sedestacaron, entre otros fenómenos a) el debilitamiento de lahegemonía norteamericana b) la irresponsabilidad de las au-toridades monetarias y reguladoras de las principales poten-cias económicas y el consiguiente estallido de la actual crisiseconómica mundial y c) la recuperación de los precios inter-nacionales de las materias primas y los alimentos producidosen la región, especialmente en América del Sur. En este esce-

14 La erosión se vinculó, en primer lugar, a las diferentes dimensiones delproceso de desguase del estado, por ejemplo, el materializado a través delcierre o privatización de empresas públicas, y en segundo lugar al eclipse,en algunos casos más permanente y en otros menos, de partidos de ex-tensa trayectoria histórica, como el Aprismo en Perú, el liberalismo y elconservatismo colombianos, la Unión Cívica Radical en Argentina, yAcción Democrática y el COPEI en Venezuela.

Page 66: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi66

nario América Latina está presenciando el retorno de figuraspresidenciales fuertes que, en algunos casos, parecen reeditarlos patrones personalistas de antaño.

Ahora bien, afirmar que la política recuperó espacio, nosignifica prejuzgar acerca del contenido y sentido de los cam-bios que se están produciendo; más bien lo que quiero subra-yar es que la creatividad de la política se potencia. En partecomo resultado de ello, a partir de 2002 se han perfilado, to-davía coyunturalmente, trayectorias relativamente disímiles enAmérica Latina. Cabe preguntarse, entonces si es que no se esta-rán definiendo rutas históricas de más largo plazo.15 En el marcode esa pregunta se ubican los tres modelos de acción presiden-cial, que defino como coalicionistas, débiles y hegemónicos ycuyos rasgos fundamentales resumo en el Cuadro 1.

15 En el período 1980–2002 América Latina pareció encuadrarse dentro deuna trayectoria común y uniforme cuyos parámetros eran determinados,en gran medida, por el curso de un patrón de organización de la econo-mía en que el estado perdió la capacidad de “dirigir” a la que refería Ocam-po. Fuera por la impotencia de los gobiernos que pretendieron hacer per-durar a la Matriz Estado-céntrica, como los de Perú bajo Alan García, Ar-gentina durante la presidencia de Alfonsín y Brasil en el período de José Sar-ney —o fuera por diseño— es decir en los casos en los que se adoptaron, máso menos estrictamente, las recomendaciones del Consenso de Washington,esto es bajo el salinismo mexicano, el menemismo argentino y el fujimoratoperuano, los países de América Latina confluyeron en una ruta única. Estaafirmación es menos aplicable en los dos casos que no cayeron dentro lasalternativas polares apuntadas — es decir ni fueron gobiernos impotentesni gobiernos rigurosamente neoliberales: esto es, la Concertación chilenade 1990–2010, y la década de reencauzamiento político en Brasil condu-cido por Fernando Henrique Cardoso. Esta cuña se desplegó entre la des-titución de Collor y el triunfo de Lula.

Page 67: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 67

Cuadro 1. Modelos de acción presidencial

PRES IDENC IAL ISMOS

COAL IC ION ISTAS

Presidencias establecidas ensistemas bipartidarios o bi-coalicionales de estabilidadmedia o alta, en los cualeslas dos coalicionespredominantes cuentan conposibilidades efectivas deacceder a la presidencia.Estas presidencias estánasociadas a la existencia deacuerdos relativamenteestables en torno a las reglasdel juego político,incluyendo las de índolepara-constitucional.Intensificación de losprocesos de crecientedesprestigio de la laborparlamentaria y deconcomitante deterioro dela imagen de los miembrosdel parlamento dentro de laopinión pública.

Con altaprobabilidad degozar mayoríaspar lamentar ias

CHILE,URUGUAY

PRE S IDENC IAL I SMO S

D ÉB I L E S

Presidenciasestablecidas ensistemasmultipartidarios en loscuales la mayoría o latotalidad de lospartidos estánseriamentefragmentados. Losacuerdos sobre lasreglas del juego,cuando se producen,son efímeros.Vinculadas aliderazgos que nologran consolidarse yen los cuales losparlamentos oscilanentre la sumisión alincumbent y bloqueossistemáticos de lasiniciativaspresidenciales.

ARGENTINA,MEXICO,PERÚ

PRES IDENCIAL ISMOS

HEGEMÓN ICOS

Presidencias establecidasen sistemas de partido(coalición) dominanteen un contexto dedebilidad generalizadade los partidos.Oficialismo yoposición(es) seinclinan a favorecermodalidadesantagónicas deorganización del juegopolítico. Vinculadas aliderazgos personalesfuertes que tienden acolonizar a los podereslegislativo y judicial.Predominan tendenciasa la manipulación de lasreglas y procedimientoselectorales.

COLOMBIA,VENEZUELA

¿BOLIVIA?

Con bajaprobabilidad de

a lcanzarmayor ía s

par lamentar ias

BRASIL

Page 68: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi68

2) El movimiento pendular entre el modelo de presi-dencialismo hegemónico y el presidencialismo débil. Lamayoría de los casos ubicados en estas dos categorías tienden aoscilar entre un polo y el otro. A modo de hipótesis de carácterextremadamente preliminar, se podría sostener que las oscila-ciones pendulares responden a la debilidad de las reglas para-constitucionales en uno y otro modelo. En el caso de los presi-dencialismos hegemónicos, la ausencia de reglas es temporaria-mente tapada por el discrecionalismo presidencial y la abdica-ción ciudadana al ejercicio de la soberanía popular y al control delas elevadas dosis de autoritarismo del incumbent. A su vez, en lospresidencialismos débiles, la ausencia de reglas lleva a situacio-nes de ingobernabilidad de diferentes niveles de gravedad. Laingobernabilidad se manifiesta principalmente a través de la in-capacidad de los gobiernos para controlar la seguridad pública ydisminuir la corrupción de funcionarios, políticos y empresa-rios. Los ejemplos de Colombia y México, obviamente comocasos polares, proporcionan una evidencia contundente acercade cuan decisiva puede ser la cuestión de la seguridad pública enhacer o deshacer un presidente. La conversión de Álvaro Uribeen protagonista de un presidencialismo hegemónico ha estadoanclada en su habilidad para llevar adelante un programa políti-co militar de exterminio de la guerrilla de las FARC, agrupaciónque era percibida por la mayoría de la población colombiana comoel principal obstáculo para la eliminación de la violencia políticaurbana.16 Inversamente, la política de Felipe Calderón de invo-

16 La contrapartida en Colombia, claro está, es la falta de control del fenó-meno para-militar y su cara civil, la para-política. El significativo aumen-

Page 69: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 69

lucrar a las fuerzas armadas en la lucha contra el narcotráficoen México, y el incremento del nivel de violencia sin control,ha contribuido de manera significativa a la aceleración deldebilitamiento presidencial. Sin embargo, en otros países dela región, como Argentina y Venezuela la violencia urbanatambién se ha incrementado al compás del aumento del po-der de la delincuencia organizada en torno a las drogas, laspandillas juveniles, los “barrabravas” del fútbol y las mafiasque gobiernan de hecho a muchas cárceles públicas. El extre-mo de impotencia presidencial en este terreno se presenta enuna subregión no analizada en este texto, es decir AméricaCentral. En algunos países centroamericanos el poder de lasmaras, entre otras mafias, es prácticamente irrefrenable.

3) La tendencia de los presidencialismos coalicio-nistas a obstaculizar la innovación política. Este mode-lo de acción presidencial, que guarda un aire de familia conlas democracias consociativas analizadas por Arend Lijphart,es el que más se acerca al respeto sustantivo de las normasdemocráticas y republicanas y al establecimiento de un esta-do de derecho. Por lo tanto, el modelo refuerza la estabilidadpolítica. En el terreno para-constitucional el modelo coali-cionista descansa en un doble pilar: el ejercicio de self restraintpor parte del presidente en la utilización de las diferentes he-rramientas del clientelismo político con sesgos excesivamen-

to de la capacidad de fuego de los militares no se ha traducido, necesaria-mente, en un mayor profesionalismo y respeto a los derechos humanos,como lo demuestra el síndrome de los “falsos positivos”.

Page 70: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi70

te partidistas y la proclividad a acordar consensualmente en-tre las dos coaliciones las modificaciones a las reglas de la com-petencia electoral.

El talón de Aquiles del modelo coalicionista es relativa-mente previsible; resulta particularmente difícil modificar elstatu quo. Cuando, como en Chile, una de los rasgos de lasituación heredada por la democracia emergente es un pro-fundo proceso de desestatización previo, el resultado es ladificultad que enfrenta la coalición progresista para revertirsituaciones de desigualdad extrema a través de las políticaspúblicas. En Brasil, y sobre todo en Uruguay, las respectivasherencias autoritarias no habían mellado tan sistemática y ra-dicalmente las herramientas estatales. Por ello, sus coalicio-nes progresistas han tenido mayores posibilidades de imple-mentar con cierta efectividad políticas que apuntaron a au-mentar la equidad durante la primera década del siglo actual.

El plano para-constitucional en el Siglo XXI

Como analicé en la primera sección en la etapa estado-céntrica previa a 1980 —etapa en la que, como en la actual, sedefinieron en la región diferentes trayectorias político-eco-nómicas— las reglas para-constitucionales con eje en el rolpresidencial habían contribuido a moldear la dilucidación delos conflictos referidos a tres cuestiones centrales: la incor-poración política, la redistribución, intermediada por el esta-do, de los ingresos y la riqueza, y la involucración de las fuer-zas armadas en la política. Cabe preguntarse, por lo tanto,

Page 71: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 71

como se están conformando en esta etapa las reglas para-cons-titucionales que enmarcan la conversión de la democraciapolítica en the only game in town, y como se encuadra dentro dedichas reglas el rol presidencial.

No hace falta subrayar que toda construcción política, yparticularmente la del entramado de reglas para-constitucio-nales que constituye uno de los núcleos del sistema político,es un proceso de largo plazo. Dado que en el caso de AméricaLatina, los cambios que estoy analizando recién comenzarona producirse ya entrada la década que culmina en 2010, resul-taría aventurado postular que las reglas para-constitucionalesque conforman cada uno de los tres modelos de acción presi-dencial ya están nítidamente definidas. Pero, en todo caso deberesultar claro que los presidencialismos coalicionistas han al-canzado mayor estabilidad precisamente porque el entrama-do de reglas para-constitucionales es más sólido. Ahora, y paraconcluir, cabe preguntarse cuales serían los ejes de estructu-ración de un renovado conjunto de reglas para-constitucio-nales. O dicho de otro modo, cual sería el material para cons-trucción de un nuevo tejido para-constitucional.

El primer eje se articula en torno a la inclusión relativa-mente plena y estable en la sociedad capitalista y la expansiónde las múltiples modalidades, viejas y nuevas, de exclusión.La disminución de la centralidad de los conflictos inter-cla-sistas, y especialmente de las disputas obrero-patronales in-dustriales clásicas, ha reducido la importancia de los meca-nismos estatales de regulación laboral, que fueron tan decisi-vos para la construcción del estado de compromiso, especial-mente en México, Brasil, Argentina y Uruguay. En conse-

Page 72: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcelo Cavarozzi72

cuencia, el papel presidencial, y de las agencias estatales quedependían del ejecutivo, en esa área es menos relevante. Peroeso no significa una mengua de la centralidad del presidenteen la distribución de recursos; ahora está más vinculada a lospobres que a los trabajadores. Las capacidades presidencialespara distribuir subsidios a los pobres en la forma de planespara los sin trabajo, Bolsa Família, Fome Zero etc. está, en mu-chos casos, en expansión. Los subsidios presidenciales direc-tos como sucedáneos del salario, en todo caso, han sido másefectivos que los intentos de paliar otras dimensiones de laexclusión, especialmente los que tienen que ver con la locali-zación espacial y el acceso diferencial a la educación.

El segundo eje es la participación política. En este as-pecto se ha producido una transformación fundamental.Durante la etapa estado-céntrica la participación política noregulada de los pobres y de los trabajadores era concebidacomo un peligro por las clases propietarias. Los golpes de lasdécadas de 1960 y 1970 tuvieron entre sus objetivos el de dis-minuir, o incluso reprimir la activación popular, que se ma-nifestaba especialmente a través de la participación electoral.Los presidentes de la Matriz Estado-céntrica, tanto civilescomo militares, estaban a menudo sometidos a la tensión deampliar la participación electoral, y al mismo tiempo contro-lar los efectos no deseados —desde la perspectiva de las clasesdominantes— de dicha participación. En cambio a partir delas transiciones de la década de 1980, la participación política,y especialmente la canalizada a través del sufragio, ha dejadode ser percibida como un peligro. Pero al mismo tiempo, laparticipación política se ha devaluado desde la perspectiva de

Page 73: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Acción presidencial en América Latina: antecedentes... 73

las clases populares. Y en este nuevo tipo de juego es básica-mente el presidente el que tiene todavía algún margen paraactivar las palancas que pueden influir para que los ciudada-nos conciban la participación en la política como un recursoefectivo, y por lo tanto, atractivo.

Referencias

Camín, Héctor Aguilar. (1989). Después del milagro. Un ensayosobre la transición mexicana. México DF: Cal y Arena.

Fajnzylber, Fernando. (1992). “Industrialización en AméricaLatina. De la ‘caja negra’ al ‘casillero vacío’”. Nueva Socie-dad, n. 118, marzo-abril 1992.

Garretón, Manuel Antonio. (2003). Incomplete Democracy: Politi-cal Democratization in Chile and Latin America. Chapel Hill,NC: The University of North Carolina Press. pp. 42-3.

Ocampo, José Antonio. (2004). “La América Latina y la eco-nomía mundial en el largo siglo XX”. El Trimestre Econó-mico, vol. LXXI (4), n. 284, pp. 725-86.

Pérez-Liñán, Aníbal. (2007). Presidential Impeachment and theNew Political Instability in Latin America. Cambridge: Cam-bridge University Press.

Santos, Wanderley Guilherme dos. (1979). Cidadania e Justiça:A política social na ordem brasileira. Rio de Janeiro: EditoraCampus.

Weffort, Francisco. (1978). O Populismo na política brasileira.Rio de Janeiro: Paz e Terra.

Page 74: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo74

Page 75: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 75

EQUILIBRIO Y DESEQUILIBRIO DEPODERES EN AMÉRICA LATINA

Marcus André Melo

En América Latina, los años 1990 asistieron al nacimien-to de “democracias no liberales”, una combinación de elec-ciones relativamente libres con abusos del poder por partedel poder ejecutivo.1 Este malestar, producto del abuso delpoder presidencial, nos retrotrae a inquietudes que fuerondominantes en los 1970 y en los 1980, relativas a los presi-dencialismos latinoamericanos y sus inestabilidades caracte-rísticas. En efecto, los abusos del poder en Venezuela, Boliviay Ecuador, atrajeron la atención internacional.2 Numerosos

1 El término ha sido acuñado por Fareed Zakaria y ha sido investigado en elcontexto latinoamericano por Smith y Ziegler (2008).

2 Por nuevas consideraciones acerca de estos acontecimientos en los Andes,ver Mainwaring, Bejarano y Leóngomez (2007), Lehoucq (2008) y Co-rrales (2009).

Page 76: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo76

episodios nos ilustran acerca de éstos acontecimientos: enEcuador, el presidente Gutiérrez expulsó inconstitucional-mente a miembros de la corte suprema, mientras que el go-bierno de Venezuela reveló la identidad de votantes en el ple-biscito. En Bolivia, se denunció a Morales como habiendoalentado al bloqueo del acceso al edificio de la asamblea du-rante el tratamiento de importantes leyes. La norma en estospaíses consiste en que los presidentes imperiales imponen suvoluntad recurriendo a un repertorio de medidas constitu-cionales e inconstitucionales. La región andina y Venezuelahan sido indudablemente, lugares privilegiados para el desa-rrollo de estos acontecimientos, y han visto y experimentadoel colapso del sistema de partidos así como una dramática cri-sis de representación política.

Pero este no es el único modelo a lo largo de toda Améri-ca Latina. Como nos recuerda Walker “América Latina no esHugo Chávez, y Hugo Chávez no es América Latina” (Walker2008). El paisaje institucional de la región es marcadamenteheterogéneo. Chile y Brasil, por ejemplo, han sido muy ala-bados por estar en el camino del buen gobierno.

La concentración de autoridad a manos del ejecutivo cons-tituye la principal preocupación, pero también han salido a lapalestra otros problemas de gobernanza, incluyendo aquellosasociados a las violaciones a la libertad de prensa y a la co-rrupción sistémica, o los presuntos vínculos entre funciona-rios públicos y los carteles de la droga; pudiéndose agregarlos casos de presidentes que se han entrometido en el funcio-namiento interno de las supremas cortes de justicia y de laslegislaturas, extrapolando su rol constitucional. Algunos de

Page 77: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 77

los nuevos gobernantes de la región, han adoptado una retó-rica antisistema, haciendo llamamientos directamente a lasmasas.

Desde una perspectiva más amplia, el abuso de los pode-res presidenciales por parte del presidente no es novedoso,pero tampoco generalizado, como lo demuestran otros casosa lo largo de América Latina. En efecto, el nacimiento de lademocracia en América Latina en el siglo XX ha implicadouna lucha sin tregua por controlar los poderes presidenciales,así como el abuso de los poderes por parte de gobernantesautoritarios ha sido la regla más que la excepción. El motivode preocupación es que esto sugiere a muchos observadoresuna vuelta atrás en la expectativa por la consolidación de lademocracia en la región. La inquietud acerca de las perspecti-vas de la democracia en los albores de la tercera ola de demo-cratización en Latinoamérica, llevó, a algunos observadores aidentificar una particular forma de gobernanza —la demo-cracia delegativa— caracterizada por líderes plebiscitarios fre-cuentemente ajenos al sistema, sin experiencia previa en po-lítica y que adoptan prácticas autoritarias y un discurso con-trario a las instituciones políticas existentes, legitimadas porel proceso electoral. Este debate aún es actual y nos conducea una nueva inquietud acerca de la calidad de la democracia,evaluada mediante indicadores sociales y evaluaciones cuali-tativas de las instituciones políticas.

El centro en todas estas discusiones es el tema de la go-bernabilidad y de sus determinantes institucionales. Parecie-ra ser adecuado examinar qué es incorrecto —suponiendoque algo lo fuera— en lo concerniente a las instituciones po-

Page 78: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo78

líticas latinoamericanas. ¿Son las instituciones políticas adop-tadas, culpables del bajo rendimiento de la democracia en laregión? ¿Cuáles son las causas del desequilibrio de poderesen Latinoamérica?

Las divergentes trayectorias de los países latinoamerica-nos nos advierten sobre un problema genérico de las institu-ciones latinoamericanas. Efectivamente, resulta claro que losestilos presidenciales y las estrategias de manejo de las coali-ciones, son elementos clave para la gobernabilidad (AmorimNeto 2006a; Amorim Neto 2006b; Cheibub, Przeworski ySaiegh 2004; Colomer y Negretto 2005). Muchos conflictosque perjudican la cooperación entre los distintos poderespueden ser evitados, cuando las estrategias de coalición sonimplementadas acertadamente y existe un poderoso estadode derecho. Esta podría ser la receta de la buena gobernanzaen países como Chile y en alguna medida Brasil.

Dado que la democracia es esencialmente un mecanismode aprendizaje social, el manejo de las coaliciones requierenegociación y mutua tolerancia. Estos dos elementos estánintrínsecamente entrelazados. La negociación entre los acto-res sociales, en ausencia de estrictos frenos y contrapesos,puede llevar a la complicidad entre los actores sociales y losregímenes oligárquicos de exclusión. Los latinoamericanossaben muy bien que estas experiencias conducen a la inesta-bilidad sistémica y al déficit de legitimidad. La democraciarepresentativa adquiere contenido normativo, solamentecuando la dimensión republicana asociada al imperio de laley, es garantizada por instituciones fuertes.

Page 79: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 79

En efecto, la principal afirmación desarrollada en éste ar-tículo, es que la clave para una gobernanza efectiva y una es-tabilidad democrática en Latinoamérica, reside en la combi-nación de presidentes fuertes, y estrictos frenos y contrape-sos. En efecto, mientras que a comienzos de los 1990 el pro-yecto institucional de países como Bolivia y Venezuela fuevisto como más conducente a una buena gobernanza y ma-yor estabilidad democrática que el de Chile y Brasil, en losúltimos años 2000 resultó ser cierto lo opuesto. En los tem-pranos 1990, el proyecto institucional de Bolivia y Venezuelacombinó, débiles poderes presidenciales y fuertes liderazgospartidarios, en tanto que las estructuras constitucionales deBrasil y Chile descansaban sobre fuertes poderes constitu-cionales y débiles liderazgos partidarios. La principal leccióna ser extraída del análisis desarrollado en este artículo es quela clave para promover una democracia sustentable en la re-gión es el fortalecimiento de un amplio sistema de frenos ycontrapesos. Esto implica la promoción del pluralismo me-diático, el fortalecimiento del sistema judicial y la accountabili-ty horizontal tal como en los “tribunais de contas”, los “ombuds-man” e instituciones similares, del mismo modo que mejorarlos mecanismos de contralor parlamentario.

Abuso del poder presidencial en América Latina

En los 1980 y principios de los 1990 los sistemas presi-denciales latinoamericanos eran cuestionados debido a su pre-sunta inestabilidad interna. Esta interpretación fue sugerida

Page 80: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo80

como forma de explicar el derrumbe de la democracia y laaparición del poder militar en América Latina (Linz y Valen-zuela 1994). Este punto de vista fue, en efecto, muy influyen-te en círculos académicos, pero la crítica al presidencialismo la-tinoamericano —una expresión con fuerte tono negativo—se remonta a principios de siglo. El corolario del argumentoes que los sistemas presidencialistas difieren de los sistemasparlamentaristas en aspectos fundamentales, directamenterelacionados con la gobernabilidad. Los sistemas presiden-cialistas generan un sistema de mutua independencia —opues-to a la mutua dependencia de los sistemas parlamentaristas—entre la rama ejecutiva y la legislativa, permitiendo la apari-ción de poderes ejecutivos que no gozan de apoyo mayorita-rio. Debido a que los presidentes tienen un mandato prefija-do, si un presidente pierde apoyo, al permanecer el o ella enel cargo, sobreviene el impasse.

Donde los presidentes gozan de sustanciales poderes le-gislativos que les permiten emitir decretos con fuerza de ley,podrían verse tentados a eludir al congreso emitiendo decre-tos-leyes; donde no es así, podrían intentar cambiar unilate-ralmente las constituciones movilizando el apoyo directo dela población. Estas tentativas exacerban los conflictos y en mu-chos países en desarrollo provocan la intervención militar. Unescenario menos radical surge cuando los conflictos bloqueanla ejecución de políticas y el sistema político resulta incapazde generar decisiones colectivas. Estas inmovilizaciones sonmenos factibles en los sistemas parlamentarios a causa de lapresunta flexibilidad de los mismos: en caso que un presi-dente perdiese el apoyo por una moción de censura, el go-

Page 81: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 81

bierno caería. Por lo tanto, el presidencialismo es supuesta-mente más proclive a trabar la interacción entre los poderesy/o a la crisis (y por extensión a los golpes militares).3

Este punto de vista fue la verdad revelada en los últimos1980 y tempranos 1990, al proporcionar un explicación alquiebre de la democracia en Latinoamérica y prediccionesacerca de los problemas enfrentados por la consolidación delas democracias recientemente establecidas en la penínsulaibérica y en América Latina. El malestar institucional —des-de la caída de Allende hasta la impugnación de Collor deMello— fue visto como causado fundamentalmente por lasinestabilidades intrínsecas del sistema de gobierno.

En un examen más cuidadoso, los sistemas presidencia-les difieren entre sí en aspectos esenciales. Más específica-mente, las crisis de gobernanza y el abuso presidencial delpoder tienen lugar en situaciones específicas: donde los pre-sidentes tienen simultáneamente, un considerable poder pro-activo (presentación de legislación en áreas temáticas especí-ficas, poder de emitir decretos, poder de definición de agen-da) y poderes reactivos (veto), y donde el sistema de partidosaparece fragmentado y los presidentes reúnen escaso apoyopartidario. Hay en efecto, una gran variedad en lo que hace alos poderes legislativos de los presidentes en América Latinaen general, y en términos del equilibrio entre poderes proac-

3 Nuestro foco está puesto aquí en la relación entre sistema de gobierno ygobernabilidad. Para el reciente trabajo acerca del impacto del sistema degobierno en las políticas públicas ver Norris (2008).

Page 82: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo82

tivos y reactivos (ver Fig. 1). Los presidentes de Brasil, Chiley Colombia, están situados al tope de la lista de países confuertes poderes legislativos, en tanto que Bolivia, Nicaragua,y Paraguay, están al final. Venezuela fue la más atípica en tér-minos de poderes reactivos, sus presidentes —en la época pre-chavista— virtualmente no tenían poder de veto. México yVenezuela también figuran al final de la lista, junto con CostaRica. México y Paraguay que tenían regímenes autoritariosen los 1990, tienen presidentes débiles en términos de suspoderes legislativos.

Efectivamente, el apoyo partidario es fundamental parala gobernabilidad de un país. En primera instancia, este apo-yo es más fácil de lograr cuando el número real de partidos esmenor. Por lo tanto, cuando los países tienen dos o tres gran-des partidos, los presidentes debieran poder alcanzar conmayor facilidad una mayoría legislativa.4

Más aún, en los sistemas presidencialistas hay otras ca-racterísticas institucionales que son potencialmente impor-tantes para la buena gobernanza (Shugart and Carey 1992).En consecuencia, donde los dirigentes partidarios no tienencontrol sobre la selección del candidato, el sistema de vota-

4 La clave para la comprensión de la naturaleza de los sistemas de partidoses la clase de instituciones electorales adoptadas en la constitución o esta-tuto similar de un país. La creación de un gran número de partidos polí-ticos tiende a debilitar la representación proporcional del sistema de par-tidos, y a la inversa: los sistemas de mayorías, al disminuir el número departidos políticos efectivos a un pequeño conjunto, es esperable que pro-duzcan un sistema de partidos políticos vigoroso, lo que a su vez es ins-trumental en el apoyo a los presidentes.

Page 83: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 83

ción permite el voto de preferencia (lista abierta como enBrasil), y las elecciones no son simultáneas, el resultado seríaun sistema de partidos fragmentados con presidentes débiles.Esto es así porque se creyó que la falta de control sobre la

Fuente: UNDP 2005.

Figura 1. Poderes legislativos de los presidentes latinoamericanos

Page 84: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo84

selección del candidato, debilitaría la capacidad de los diri-gentes en asegurar la línea del partido. A su vez, las listas abier-tas en aquellos sistemas en que los votos no se agrupan deacuerdo a la afiliación partidaria, debilitan la influencia de lospartidos durante el proceso electoral, estimulando el indivi-dualismo en los legisladores, ya que dependen menos del par-tido para su éxito electoral. Es más, cuando las elecciones paralegisladores y presidente no son simultáneas, hay un desaco-ple en sus resultados electorales. Si para las elecciones delmedio término, un presidente se vuelve impopular, los votosa los miembros de la coalición se verán probablemente afec-tados, y el presidente perderá su base de apoyo. Estas particu-laridades micro institucionales afectan el desempeño de lossistemas presidencialistas.

Las crisis tienden a ocurrir de ésta manera en contextosde multipartidismo —particularmente en aquellos con un grannúmero de (indisciplinados) partidos— donde los presiden-tes tienden a no contar con el apoyo de una mayoría estable.Esto es cierto a fortiori si los presidentes cuentan con poderesconstitucionales significativos. Por lo tanto, es la combina-ción del nivel de los poderes partidarios de los presidentes — enqué medida ellos pueden contar con una mayoría estable — ysus poderes constitucionales, los que determinan la propensión alas crisis de gobernabilidad. Cuando los presidentes tienenescasos poderes constitucionales pero fuertes poderes parti-darios, la tendencia se ve significantemente disminuida.5

Este diagnóstico contuvo implícitamente la fórmula de la

5 Este argumento fue pioneramente defendido por Shugart and Carey (1992).

Page 85: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 85

terapia institucional, y fundamentó varias de las reformas de ins-tituciones electorales implementadas en la región. Bolivia, Méxicoy Venezuela introdujeron distritos miembros mixtos, tomandocomo modelo al sistema alemán, en tanto que otros países elimi-naron el límite de mandato para las elecciones presidenciales. Elcambio en las instituciones electorales, figura en el programa dereformas de muchos países de la región latinoamericana.

Sin embargo, se admite cada vez más que los estilos pre-sidenciales y las estrategias de gestión de la coalición consti-tuyen ingredientes fundamentales para la gobernabilidad(Amorim Neto 2006a; Amorim Neto 2006b; Cheibub, Pr-zeworski y Saiegh 2004; Colomer y Negretto 2005). Se pue-den evitar muchos de los conflictos que perjudican la coope-ración entre los poderes, si las estrategias de coalición sonimplementadas eficazmente. En los sistemas presidencialis-tas, las situaciones de bloqueo surgen en situaciones poco fre-cuentes, como cuando las preferencias de un presidente enminoría con fuertes poderes constitucionales y las de los po-tenciales partidos de coalición están muy separadas y más ale-jadas de las preferencias presidenciales que el statu quo. Ladinámica de la formación de coaliciones y su rol en la efecti-vidad de los regímenes presidenciales, es un ingrediente cla-ve del éxito. El manejo de la coalición en particular, surgecomo uno especialmente importante. Nombrando gabinetesmultipartidarios, los presidentes pueden, en efecto, imple-mentar sus estrategias de diseño político. Los presidentespueden decidir negociar con sus socios de coalición (“la es-trategia de gobernar por estatuto”), en cuyo caso ellos desti-nan portfolios ministeriales a partidos no presidenciales, o en

Page 86: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo86

lugar de ello, pueden optar por sus prerrogativas constitucio-nales (“estrategia basada en las prerrogativas del ejecutivo”).Aquella estrategia implica el nombramiento de un gabinetede mayorías, la selección de más ministros partidarios, y ma-yor proporcionalidad en la distribución de carteras entre lospartidos de la coalición.6 Donde prevalece esta estrategia—como en Chile y Brasil— los resultados de la gobernanzason efectivamente, muy superiores.

Frenos, contrapesos y buena gobernanza

Es cada vez más evidente que los frenos y contrapesosvan más allá de las tradicionales instituciones madisonianastales como las legislaturas y el poder judicial. La opinión pú-blica y los medios juegan un rol central en contener el abusode poder por parte de cualquier funcionario público. Delmismo modo, fiscales, “ombudsman”, controladores, y “tribu-nais de contas”, están en el centro de la accountability horizontal.

El mal funcionamiento de las democracias en América

6 Para Amorim Neto la decisión del presidente depende de sus preferenciasasí como también de de los incentivos institucionales y condiciones eco-nómicas. SI ellos son favorables a una forma de negociación, es más pro-bable que el presidente designe un gabinete de mayorías, elija más minis-tros partidistas, y distribuya ministerios entre los partidos de acuerdo auna base proporcional. Si el porcentaje de votos del partido del presiden-te es pequeño, y él es un extremista investido de amplios poderes consti-tucionales, el o ella tendrá más incentivos para usar sus prerrogativas pre-sidenciales y tenderá a no nombrar ministros partidistas ni a efectuar unadistribución proporcionalde los mismos (Amorim Neto 2006a; 2006b).

Page 87: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 87

Latina se manifiesta en el problema de la accountability y deimperfecciones en los mecanismos de representación políti-ca. En los 1990, la discusión de estos temas se centraba en lanoción de accountability horizontal. O’Donnell (1999) sostie-ne que las instituciones de frenos y contrapesos son débilesen América Latina y sugiere que la consolidación de la demo-cracia se ve socavada por la naturaleza incontrolada de la ges-tión presidencial en Latinoamérica y en otras partes del mun-do. Esta situación genera un modelo que él describe como de“democracia delegativa”. La debilidad de los frenos y contra-pesos en la región se manifiesta de diversas formas: poderesejecutivos controlando el proceso legislativo, legislaturas queaprueban sin cuestionar las decisiones del ejecutivo,7 de lasdecisiones del ejecutivo, poderes judiciales dependientes,medios manipulados y débil control sobre instituciones talescomo los ministérios públicos, tribunais de contas y contralorías.

Las primeras dos de éstas formas se pueden encontrar ensistemas parlamentarios sin que esto implique violaciones ala accountability democrática. De hecho, en estos sistemas, losparlamentos tienden a ser débiles y los gobiernos mayorita-rios de partido único se comportan como “dictadores parla-mentarios” (Przeworski 2001).8 El hecho de ser débiles enlos sistemas Westminster no se puede usar para indicar una falta7 “Rubber stamps” (sellos de goma) en el original.8 La capacidad de una legislatura se mide, en general, en términos del nú-

mero de comisiones permanentes activas en el parlamento, el poder ejer-cido por las comisiones incluyendo el poder de aprobar o archivar unapropuesta antes que llegue a sala, la calidad del asesoramiento técnicoproporcionado por un cuerpo de personal idóneo permanente, al igualque otros diferentes aspectos.

Page 88: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo88

de democracia sino como expresión de una forma particular dearquitectura constitucional, el diseño constitucional mayorita-rio.9 De hecho, la capacidad de los gobiernos para aprobar suprograma se puede defender por razones de eficacia política, osu decisividad , su capacidad de tomar decisiones rápidamente .

Sin embargo, en los sistemas de separación de poderes, seespera que las legislaturas participen activamente en las deli-beraciones legislativas y ejerzan un control sobre los gobier-nos examinando las iniciativas del ejecutivo y supervisando laimplementación de sus políticas. Existe una variación muyamplia en lo que hace al rol ejercido por las legislaturas a tra-vés de los distintos sistemas presidenciales (Morgenstern 2002;Cox y Morgenstern 2002; Morgenstern 2002; Saiegh 2009).En el extremo más proactivo de éste continuum, legislaturastales como el Congreso de los EE.UU. tienen la capacidad deelaborar propuestas legislativas, y de esta manera ejercer unrol clave en la fijación de la agenda política. Por el contrario, yen el otro extremo, las legislaturas pueden ser actores bastan-te marginales, sirviendo como sellos de goma de las propues-tas legislativas cursadas por el ejecutivo. Estas legislaturas tie-nen escasa capacidad para examinar los actos de gobierno. Enmedio de esta continuidad, hay casos en que las legislaturashan estado un tanto activas pero no alcanzan a influir efecti-vamente en el proceso legislativo ni en controlar al ejecutivo.

La mirada tradicional, asociada a las legislaturas de la región,

9 Las otras características relevantes de tales diseños incluyen, por ejemplo,a los estados unitarios y a la ausencia de control de la constitucionalidadde las leyes por una corte constitucional.

Page 89: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 89

es que ellas aprueban automáticamente las propuestas del ejecu-tivo. No obstante, esta es una mirada excesivamente simplista.De hecho, el porcentaje promedio de las recientes iniciativas delpoder ejecutivo aprobadas por las legislaturas está por debajo del50% en países tales como Perú, Costa Rica y Ecuador.10 Solo enMéxico y Paraguay este porcentaje está por encima del 80%, eincluso cuando son aprobadas, existe amplia evidencia de quelas propuestas del ejecutivo nunca salieron indemnes a los cam-bios introducidos por la legislatura. Las legislaturas débiles sonde dos tipos: aquellas que no tienen capacidades institucionalesy por lo tanto aprueban automáticamente las propuestas del eje-cutivo, y aquellas que a pesar de su debilidad institucional pue-den obstruir las propuestas del ejecutivo. Las de este último tipo—las “legislaturas recalcitrantes”— son particularmente proble-máticas y ellas son tal vez, más peligrosas para el proceso demo-crático que las primeras (Cox y Morgenstern 2002). Las legisla-turas del primer tipo pueden ser “legislaturas subordinadas” ovariedades “provinciales–venales”.11 En tanto que las subordi-nadas son totalmente dominadas por la presidencia —como lade México antes de 1998— en el caso de las provinciales, el apo-yo del legislador puede ser fácilmente captado recurriendo a pro-yectos clientelares.

Hay una serie de factores que afectan la capacidad de loslegisladores por influir en el proceso de formulación de polí-ticas y en supervisar la implementación de las mismas: el ni-

10 La información se refiere a distintos años desde los años 1980 hasta los2000 (IADB 2008).

11 “Parochial-venal” en el original (Cox y Morgenstern 2002). Los votos sonnegociados a cambio de bienes clientelísticos de varios tipos.

Page 90: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo90

vel de confianza que la legislatura inspira en los ciudadanos,la calidad técnica promedio de los legisladores, su experien-cia y antigüedad, y el número de comisiones en que participa,entre otros. Otros factores importantes influyen en la capaci-dad legislativa: la tasa de reelección de los legisladores y laimportancia del rótulo partidario. Los indicadores de capaci-dad de las legislaturas latinoamericanas difieren ampliamentedependiendo de varios factores: la confianza de la sociedaden la legislatura, la experiencia de los legisladores en sus car-gos y sus calificaciones, el número promedio de comisionesen las que participa, o el grado de efectividad de los cuerposencargados de legislar (ver Tabla 1).12

El grado de confianza varía significativamente según lospaíses, siendo muy alto en Uruguay y Chile, y muy bajo enEcuador y Guatemala, con Brasil en un lugar intermedio. Losíndices de reelección también varían mucho, mayormenteporque en países como México y Costa Rica los legisladorestienen mandatos limitados, y no les es posible postularse in-definidamente. Esto desalienta las carreras legislativas y con-duce a los legisladores a forjar alianzas con el ejecutivo a losefectos de asegurarse nombramientos posteriores al términode sus mandatos. La experiencia es mayor en Uruguay y en Chile,y menor en Costa Rica, México y Argentina. Sobre la base deestas medidas y otros indicadores tales como la fortaleza de las

12 La efectividad de los cuerpos legislativos está definida como la califica-ción promedio otorgada por ejecutivos de negocios a la pregunta: “¿Cuánefectivo es su parlamento nacional como institución generadora de leyesy de monitoreo del ejecutivo?” en la encuesta del Foro Económico Mun-dial 2004-2005.

Page 91: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 91

comisiones, la habilidad técnica de los legisladores, y la evalua-ción del congreso, como el lugar para desarrollar una carrera,IADB (2006) propuso una clasificación de las legislaturas lati-noamericanas. El cuadro está reproducido en la Tabla 2.

Tabla 1 Medidas de capacidad de los legisladores

Confianzaen el

Congreso(promedio)

Efectividadde losórganos

legislativos

Argentina 20,5 1,6 2,9 69,6 4,5

Bolivia 19,9 1,8 3,3 78,4 1,66

Brasil 24,9 3,1 5,5 54,0 0,92

Chile 36,0 3,7 8,0 79,4 1,95

Colombia 20,3 2,7 4,0 91,6 0,86

Costa Rica 29,9 2,2 2,6 80,4 2,09

Rep. Dominicana 2,0 3,1 49,6 3,54

Ecuador 13,3 1,7 3,5 83,1 1,26

El Salvador 27,7 2,1 3,9 64,0 2,44

Guatemala 19,9 1,8 3,2 68,4 3,24

Honduras 30,8 2,6 3,0 73,1 2,34

México 27,4 2,0 1,9 89,5 2,43

Nicaragua 23,1 1,6 3,5 85,6 1,96

Panamá 22,5 1,8 5,8 81,3 1,86

Paraguay 25,0 2,2 5,5 75,4 3,15

Perú 22,1 1,7 5,2 92,9 2,44

Uruguay 38,2 2,7 8,8 68,4 0,98

Venezuela 27,8 1,4 4,9 74,6 0,97

Experienciapromedio

de loslegisladores

(años)

%legisladores

coneducación

universitaria

Promedio decomisiones

porlegislador

Fuente: Saiegh 2009.

Page 92: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo92

Tabla 2. Capacidad legislativa y tipos de legislatura

Índice de capacidades del congreso

Fuente: Saiegh apud IADB (2006).

Las legislaturas latinoamericanas pueden ser clasificadas enla categoría reactiva, y ninguna en la proactiva (la que hipotética-mente corresponde al tipo de los EE.UU., donde los parlamen-tos generan legislación por su propia iniciativa). IADB (2006)identifica tres tipos de legislaturas reactivas: débiles, obstruccio-nistas y constructivas. Las legislaturas débiles pueden ser margi-nales al proceso político —como en Argentina desde 1989—.Las obstruccionistas no toman parte en el proceso de genera-ción de las leyes pero juegan el rol de veto players, bloqueando laspropuestas del ejecutivo. Las constructivas facilitan acuerdosinter-temporales y disponen de mecanismos de control sobrecambios mal concebidos en políticas. Esto supone una formida-

Tipo decongreso

Reactivolimitado

Reactivoobstruccionista

Reactivoconstructivo

Bajo

Argentina (1989–)Perú (1993–2000)

Argentina (1983–1989)Guatemala (1985–)Perú (2001–)

Medio

Panamá (1989–)Paraguay (1989-1993)Venezuela (1999-)

Bolivia (1982–)Ecuador (1979–)Nicaragua (1990–)Venezuela (1989-1998)

Costa Rica (1978–)México (1997-)Paraguay (1993-)

Alto

Brasil (1985–)Chile (1990–)Colombia (1991–)Uruguay (1985–)

Page 93: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 93

ble tarea para las legislaturas latinoamericanas. El tipo de legisla-tura enfrentado por los presidentes provee distintos incentivosal tipo de estrategia que ellos siguieron para negociar con losmismos y que van desde un modo de interacción negociada,hasta una forma más confrontativa basada en el uso de sus pre-rrogativas (Cox y Morgenstern 2002; Amorim Neto 2006a;2006b). La modalidad de negociación ha sido hasta hace pocoampliamente ignorada en la agenda pública. Ella representa unaimportante posición intermedia, y puede significar un modelode futuras relaciones ejecutivo-legislativo en la región. Ha sidocrecientemente reconocido que los presidencialismos latinoa-mericanos representan un punto intermedio entre un neto sis-tema de separación de poderes al estilo estadounidense y el par-lamentarismo europeo. Negociar implica concesiones en térmi-nos de política, proyectos clientelares, y nombramientos paracargos ministeriales. Cuando los costos de las transacciones po-líticas son bajos como resultado de una menor polarización, y laaplicación de una tecnología adecuada de enforcement de las nego-ciaciones ocupa su lugar —lo que está asociado con institucio-nes fuertes— os actores pueden obtener ganancias del intercam-bio,13 y se mejora el potencial y el alcance de la negociación.

Déficits en la accountability y crisis de representación

Recientes acontecimientos en América Latina nos seña-lan algunos retrocesos en la tendencia hacia la consolidación

13 “Gains from trade” en el original.

Page 94: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo94

de la democracia. Son particularmente agudos en la regiónandina y en Venezuela, aún cuando hay también señales alar-mantes en otros lugares. Este revés nos es revelado por una seriede acontecimientos. En primer lugar, el colapso del sistema departidos. En dos de los países en que los partidos eran más fuer-tes, se produjeron procesos de desintegración de los mismos. EnVenezuela, se desintegró el monopolio de la representación ejer-cido por COPEI y Acción Democrática.14 Similares aconteci-mientos tuvieron lugar en Perú — onde el voto por APRA (elpartido más antiguo del Perú y uno de los más antiguos de Amé-rica Latina)— cayó al 1,4% de los votos en el año 2000(Mainwaring, Bejarano y Leongomez 2006). En Bolivia, algu-nos de los partidos tradicionales casi desaparecieron, luego dehaberse encontrado evidencias de corrupción vinculadas al tratode drogas —el caso del MIR— o vieron declinar abruptamentesu porcentaje de votos, como sucedió con el MRN. En Argenti-na hubo un colapso del sistema de partidos, expresado por ejem-plo, en la desnacionalización de los mismos, y la proliferación departidos provinciales; y aún más importante, el virtual colapsode la Unión Cívica Radical, tras las experiencias desastrosas deAlfonsín y De la Rúa (Leiras 2007; Calvo y Escolar 2005). Laotra cara de la fragmentación del sistema de partidos, está dadapor el ascenso de personas ajenas al sistema político, quienes in-dividualmente o a través de sus partidos, han logrado un cre-ciente porcentaje de votos; son ejemplo de ello, Toledo en Perú,Chávez en Venezuela, y Morales en Bolivia.

14 Copei y AD apoyaron a un candidato independiente en las elecciones de1998, las que llevaron a la presidencia a Chávez.

Page 95: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 95

Otro síntoma de la desinstitucionalización en la región, es lacreciente importancia que cobran los movimientos sociales y lasmanifestaciones callejeras en acontecimientos políticos que con-ducen, frecuentemente, al derrocamiento de presidentes antesdel fin de sus mandatos. Son casos ilustrativos Mauad (2000),Sánchez de Losada (2003), Collor de Mello (1992), De la Rúa(2001), Pérez (1993), y Gutiérrez (2002), entre otros. En tantoque estos casos sugieren un modelo de “presidencialismo esta-ble, con presidentes inestables” (Pérez-Linán 2007, pp. 204-5),en el que los presidentes no culminan sus mandatos y no hayruptura democrática, estas crisis adoptan diversas formas: En al-gunos casos, el presidente es impugnado por la legislatura si-guiendo procedimientos establecidos constitucionalmente, enotros, debe abandonar el cargo en medio de masivas protestaspúblicas, generalmente acompañados por escándalos mediáti-cos, comprometidos en tramas de corrupción y/o probadas co-nexiones con los carteles de la droga. Frecuentemente, ambosaspectos están entrelazados. El papel desempeñado por la legis-latura varía, entre un rol marginal, con un predominio de lasprotestas callejeras, y uno proactivo, siguiendo denuncias efec-tuadas por los propios legisladores. En estos casos, los presiden-tes cuentan, invariablemente, con apoyos minoritarios y unadeclinante aprobación popular, al tiempo que intentan imple-mentar medidas económicas impopulares.15 Los primeros

15Las expresiones de indignación pública no terminan, necesariamente, ensistemas de control y balance más estrictos, pero son indicativos de losmecanismos de una rendición de cuentas espasmódica. Las legislaturasson capaces de sancionar ilícitos sin ser capaces de prevenir que sucedan(Pérez-Linán 2007, pp. 204-5).

Page 96: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo96

casos suscitan preocupación y sugieren que la legislaturaestá siendo sobrepasada en su rol constitucional de fiscali-zar los actos del ejecutivo.

¿Cuáles son las causas subyacentes a estos fenómenos quetienen lugar en los países andinos y Venezuela? Se han pro-puesto distintos tipos de explicación, que subrayan, respecti-vamente, a) deficiencias en la representación política; b) bajorendimiento en la acción de gobierno; c) incentivos a unacobertura mediática negativa, como consecuencia de una cre-ciente fragmentación y competencia política. Estos argumen-tos tienen algo de verdad, pero también importantes limita-ciones. El tipo de explicación sobre la deficiente representa-ción sugiere que un patrón subyacente de débil accountabilityvertical es la causa última de la crisis de representación. Laconexión electoral en América Latina, mediante la cual losciudadanos castigan o premian a los políticos de acuerdo a sudesempeño en el cargo, es defectuosa. Los ciudadanos des-confían de sus representantes, y los partidos son, desde estepunto de vista, no representativos. Se considera que la accoun-tability vertical16 está determinada, en primera instancia, porla calidad de la cadena de delegación existente entre la ciuda-

16 En un artículo muy conocido, O’Donnell describe una situación caracte-rizada por una carencia de rendición de cuentas horizontal, que él descri-be como “la existencia de agencias estatales legalmente habilitadas y fa-cultadas, que de hecho puedan y quieran tomar medidas que abarcan desdeuna supervisión de rutina hasta mínimas sanciones o el juicio político,relacionados con acciones u omisiones de otros agentes o agencias delestado, que podrían ser calificados de ilegales” (O’Donnell 1999, p.38).

Page 97: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 97

danía, como mandantes políticos, y los políticos como susagentes. Los alicientes para convertir a los agentes políticosen responsables de sus actos y castigar sus desmanes, estándeterminados por el funcionamiento de la cadena de delega-ción (Moreno, Shugart y Crisp 2003).

Para que funcionen los mecanismos de accountability ver-tical, es necesario que los políticos reflejen las preferencias delelectorado. Las normas electorales que fomentan la competen-cia intrapartidaria entre candidatos, como la representación pro-porcional de lista abierta con dimensión de gran distrito, debi-litan este vínculo, porque los políticos son alentados a respondera los intereses de grupos específicos y no a los deseos colectivosdel electorado. Del mismo modo, en los sistemas electorales enlos que la selección de los candidatos está concentrada enmanos de los jefes de partido, los legisladores responderán asus intereses más que a los de sus electorados. 17

Existen en América Latina dos modelos extremos: por unlado, partidos que están celosamente controlados desde arri-ba y son insensibles a las preferencias de los ciudadanos, como

17 El resultado de la discusión es que cuanto más débil es la conexión elec-toral, menos probable es que los gobiernos sean responsabilizados. Másespecíficamente, la rendición de cuentas depende esencialmente de cuáninstitucionalizados y representativos son los partidos políticos. En me-dios políticos altamente clientelísticos, y donde las normas electoralesalientan las conductas individualistas de los legisladores (como en el casode la representación proporcional de lista abierta), con el consiguientedebilitamiento de los partidos, la competencia política degenera en vola-tilidad electoral no relacionada al desempeño del titular. Ver Moreno, Crispy Shugart (2003).

Page 98: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo98

por ejemplo Venezuela en los 1970 y 1980; y por el otro, par-tidos altamente clientelísticos o hiperpersonalistas, como enel caso de Colombia o Ecuador. En ambos modelos, los parti-dos no desempeñan su rol básico de intermediación de inte-reses, y la desconfianza pública en el sistema político aumen-ta. A medida que la insatisfacción crece, cualquier escándaloo medida impopular por parte del gobierno puede desenca-denar una gran ola de protesta. Este defecto de la representa-ción política es, según este criterio, la causa última de unacrisis de representación.18 La solución a esta crisis está en elfortalecimiento del mecanismo de accountability vertical. Re-sulta indispensable la reforma de las instituciones electorales,legislación partidaria, legislación de la disciplina partidaria etc.,para mejorar este mecanismo. Esta es una propuesta plausi-ble y es bien recibida.

Por otra parte, el argumento acerca de la deficiente repre-sentación, afirma que el cambio social amplió la participaciónsocial y la ciudadanía.19 La fragmentación partidaria es tam-bién vista como producto del acrecentamiento de la ciudada-nía, siendo esto más visible en el caso de la región andina,donde se produjo una proliferación de partidos indígenas. Por

18 Crisp (2007) sugiere que este es el factor clave en la crisis de representa-ción (representatividad) en los Andes y Venezuela.

19 Chile experimentó un único déficit de representación, asociado a los di-versos incentivos al registro de votantes. La legislación electoral existenteimpone duras penalidades a aquellos registrados, pero ninguna para losno registrados, llevando a un problema de bajo registro de los votantesjóvenes. Para una excelente visión de conjunto del presidencialismo chi-leno desde una perspectiva comparativa, ver Altman (2008).

Page 99: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 99

ello es que oligopolios de representación por parte de parti-dos fuertes han causado desgaste a lo largo de dos décadas, y lospartidos étnicos han ocupado el consiguiente vacío político,modelo que produjo fragmentación política. Sin embargo, unamayor representación ha coexistido paradójicamente con unacrisis cada vez más profunda de representación democrática.

El segundo argumento para comprender la crisis de re-presentación en la región andina y Venezuela, sostiene quelas crisis recientes y aún en curso, son consecuencia de la frus-tración ciudadana frente al mal desempeño de los gobiernosen atender sus necesidades sociales. Desde este punto de vis-ta, la percepción individual respecto al bajo nivel de cumpli-miento del estado, provoca escasa confianza en las institucio-nes fundamentales de la representación democrática(Mainwaring 2006). La pobreza generalizada y los altos índi-ces de desigualdad crean grandes expectativas, que si no sonrespondidas, producen gran desencanto en la ciudadanía. Labase empírica de estos reclamos es que los niveles de descon-fianza en partidos y legislaturas aumentan cuando los indica-dores sociales (tales como ingreso real per cápita), empeoran.A la inversa, cuando el desempeño del estado mejora —o seaal ampliar la cobertura de los servicios públicos, disminuir lainflación, y aumentar el ingreso real— los niveles de confian-za del público también aumentan. El deterioro en el desem-peño durante los últimos 1980 y principios de los 1990, uni-do a profundas y frustradas reformas económicas, causó unprofundo desencanto con las instituciones democráticas.

Si bien la pobreza y la desigualdad afectan la calidad de lagobernanza de modo importante, y son sin duda, la fuente

Page 100: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo100

más importante del descontento, la explicación no tiene una únicacausa. Chile y Brasil son los países con mayor nivel de desigual-dad, y Argentina y la Venezuela pre Chávez tenían el mayor in-greso per cápita de la región, sin embargo muestran resultadosmuy distintos desde el punto de vista de la gobernanza.

El tercer argumento es que en América Latina la natura-leza de la competencia política contribuyó de modo directoal empeoramiento de la imagen pública de los partidos, debi-do al aliento a una cobertura mediática de los escándalos delas legislaturas y otros aspectos negativos de las mismas. Enmuchos países, estos estímulos se han producido como re-sultado de la fragmentación del sistema de partidos y de lacompetencia política. Estos tres factores —patologías de larepresentación, empeoramiento en el desempeño social y eco-nómico de los estados nacionales, y aspectos relativos a la cons-trucción social de las legislaturas como instituciones negati-vas— se han combinado para producir una crisis de repre-sentación en los países andinos y Venezuela (Mainwaring2006). En estos países, las instituciones representativas sonvistas como intentos fallidos de reproducción de modelosimportados de gobierno deslegitimados, y la opinión públicaestá fuertemente a favor de formas alternativas como la de-mocracia directa y/o modelos con escasas credenciales demo-cráticas como el socialismo bolivariano.

El diagnóstico para la región andina y Venezuela, basadoen los tres factores antedichos, ofrece interesantes perspecti-vas, y parte de esta argumentación puede ser extensible a otrospaíses; no obstante, se pueden poner de relieve varias adver-tencias : primero, que las deficiencias de representación pue-

Page 101: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 101

den ser encontradas en otras partes de América Latina, y queaisladamente, no pueden ser consideradas responsables porla profunda crisis de representación que afecta a la región an-dina y Venezuela. Del mismo modo que también pudo ha-llarse en otros lugares, un empeoramiento en las condicionessociales y económicas en los 1980 —la década perdida— y porlo tanto el argumento de su traducción directa a una crisis degobernabilidad en la región andina pierde fuerza.20 Si bien esválida como propuesta general, esta conclusión no se puedeconciliar con un problema simétrico: el impacto del mejora-miento en los ingresos del estado como consecuencia del augede los precios de los productos primarios en la última década.En efecto, en Venezuela, y muchos otros países con proble-mas de gobernabilidad, sucedió lo contrario. Beneficios ex-traordinarios provenientes del gas y del petróleo impulsarona los presidentes a embarcarse en prácticas populistas combi-nadas con retórica antisistema. Esto es precisamente lo quesucedió en Venezuela, Ecuador y Bolivia.21

20 Le cuadra bien al caso de Venezuela donde el colapso de los ingresos porel petróleo en los años 1980 produjo una importante crisis que llevó pos-teriormente al juicio político a Carlos Andrés Pérez.

21 También parecen haber desempeñado un rol importante legados históri-cos que no pueden ser ignorados. Países como Venezuela, Colombia, Ecua-dor, nunca tuvieron gobiernos populistas encabezados por figuras como Pe-rón, Vargas o Cárdenas, quienes promovieron políticas de inclusión que in-tegraron a los países simbólicamente. Por el contrario, en los dos primerospaíses, los arreglos corporativos para compartir el poder, puestos en prácticaen Colombia —el Frente Nacional (1958-1974)— y en Venezuela —el acuer-do de Punto Fijo (1958)— llamaban a la alternancia en el poder de las dosprincipales fuerzas políticas dominantes, excluyendo a la izquierda.

Page 102: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo102

Para finalizar, el argumento acerca de la influencia de losmedios no es totalmente convincente, porque oponiéndoseal mismo, también se puede sostener el rol de apoyo a la go-bernabilidad por parte de los medios (Pérez-Linán 2007). Enefecto, parece ser cada vez más evidente que la calidad delsistema ampliado de frenos y contrapesos en un país, revelaporqué presidentes poderosos — ales como el brasileño y elchileno— ejercen amplios poderes sin que el sistema caiga enabusos, logrando por el contrario un buen nivel de gober-nanza. Los presidentes ejercen el poder en espacios política-mente limitados. En los países como Venezuela y Bolivia, elabuso presidencial del poder está claramente asociado con losintentos de los presidentes, que están entre los constitucio-nalmente más débiles de América Latina, por ampliar sus po-deres presidenciales en contra de legislaturas recalcitrantes.

El rol del sistema extendido de frenos y contrapesos —que incluye a las Cortes Supremas, a los Tribunais de Contas yContralorías, al Ministerio Público, y a los medios22— puede pro-veer la clave para comprender el éxito del “presidencialismoexagerado.” De hecho los países que poseen las más indepen-dientes y eficaces instituciones judiciales y de auditoría, asícomo los medios de comunicación de carácter autónomo ypluralista, son los que sistemáticamente han tenido un mejordesempeño. Ciertamente, las medidas existentes de indepen-dencia judicial se basan en diferentes concepciones de la in-dependencia, y no proporcionan valores coherentes en todoslos países (Ríos-Figueroa y Staton 2008). Sin embargo, las

22 En Tribunales de Cuentas y Contralorías en América Latina, ver Melo (2008).

Page 103: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 103

mediciones existentes sugieren que Brasil y Chile se encuen-tran entre los mejores. Chile tiene la máxima puntuación encinco de los siete indicadores existentes compilados por Ríos-Figueroa y Staton (2008), mientras que Brasil ocupa el pri-mero o segundo entre seis de ellos.23 En el ampliamente cita-do indicador Feld y Voigt de Jure, Uruguay, Chile, Brasil yCosta Rica son los de mejor desempeño en términos de in-dependencia judicial (IADB 2006), cf. Gráfico 2.24 En el otroextremo del espectro, Venezuela, Bolivia, Argentina, y Ecua-dor son los peores.

En materia de eficacia de las instituciones nacionales deauditoría, los mejor clasificados son también los países queposeen las mejores instituciones de la región: Chile, Brasil,Costa Rica (Gráfico 3).25 También Colombia está bien clasi-ficada, obteniendo el mejor resultado de la región Andina, loque resulta coherente con su reciente desempeño general enmateria de gobernanza democrática. Es más, a pesar de la ines-tabilidad causada por el movimiento guerrillero, el país noexperimentó ninguno de los problemas de sus vecinos Ecua-

23 Omití el indicador de Henisz, que es en realidad una variable dummy,asumiendo los valores dependiente/independiente. Por esto es que Chiletiene el único poder judicial independiente de la región.

24 La cifra se refiere a la independencia judicial de jure — s decir, disposi-ciones destinadas a aislar a este tipo de instituciones de la influencia delpoder ejecutivo.

25 Los datos son para un índice de eficacia calculado por Santiso (2007)sobre la base de los puntajes asignados a la independencia, la credibilidad,la ejecución y la rapidez, y están disponibles para un pequeño número depaíses latinoamericanos.

Page 104: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo104

dor, Perú, Bolivia, o Venezuela. Amén de las instituciones ju-diciales y de auditoría, los medios de comunicación indepen-dientes son también fundamentales para explicar la buenagobernabilidad. Chile y Brasil cuentan con los medios másdiversificados e independientes de la región.

Figura 2. Independencia Judicial en América Latina

Fuente: IADB (2006).

Page 105: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 105

Figura 3. Eficacia de las Instituciones de Auditoríaen América Latina

Fuente: Santiso 2007.

Si instituciones tales como los organismos de auditoría yjudiciales parecen ser las claves para una buena gobernabili-dad, la cuestión clave gira entonces en torno a los factores deter-minantes de su independencia. La competencia de elites y la frag-mentación del poder son cruciales para el surgimiento de insti-tuciones autónomas en América Latina (Finkel 2004; Chavez2004; Helmke 2005; Melo, Pereira y Figueiredo 2009; Ríos-Fi-gueroa 2007; Pozas-Loyo y Ríos-Figueroa 2010).26 Estas son las

26 La fragmentación del poder se refiere a la desconcentración del poder y a laalternancia en el poder, y es distinta a la “fragmentación del sistema de parti-dos”, que implica el efectivo desmantelamiento de un sistema de partidos.

Page 106: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo106

condiciones políticas que llevaron al surgimiento de un po-der judicial independiente en las nuevas democracias. Es co-mún que surjan instituciones autónomas independientescomo resultado de la interacción estratégica de actores políti-cos en contextos competitivos. En consecuencia, cuanto máscompetitivo es un sistema político, más autónomo será elpoder judicial. Por ello los políticos delegan, al enfrentar si-tuaciones de intensa competencia, su independencia en lostribunales, ya que suponen que mientras estén en la oposi-ción, estarán mejor bajo instituciones independientes que bajotribunales pasibles de ser manipulados por sus rivales políti-cos. De éste modo, la incertidumbre política estimula la de-legación en estos organismos. Más aún, debido a que las ins-tituciones judiciales son usualmente reactivas —responden alas acciones de autores que solicitan su intervención— ma-yor competencia política induce a distintas partes a dilucidarsus controversias en la justicia, lo que redunda en mayor in-dependencia 27

El destacado rol de las cortes en Chile, Brasil, Uruguay,Argentina y Colombia constituye un fenómeno bienvenido,congruente con las tendencias internacionales hacia la judi-cialización de la política (Sieder, Angel y Schilolden 2005).En efecto, la elevada participación de los tribunales en la re-

27 Además, la fragmentación del poder también eleva los costos de coordi-nación en los poderes electos y se les vuelve más difícil atacar directa-mente a las instituciones judiciales y de control después de tomadas deci-siones que afectan sus intereses.

Page 107: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 107

gión, refleja simultáneamente la judicialización de la políticay la expansión del poder judicial como resultado del procesode democratización. Cuando los tribunales parecen estar in-miscuyéndose en los procesos legislativos, lo que ocurre enrealidad, es que emiten sentencias porque los poderes legisla-tivo y ejecutivo se abstienen de legislar por temor al costopolítico de alguna de esas decisiones. La reciente reafirma-ción del poder judicial, debe ser vista como un desarrollopositivo conducente a una desconcentración del poder delpresidencialismo.28

En suma, una configuración de factores que incluyan lacompetencia política y la alternancia en el poder, en un con-texto de medios libres e independientes, parece ser propiciapara la emergencia de instituciones autónomas, necesarias paracontrolar al poder judicial. Este argumento es, prima facie, cir-cular. Pero el punto clave es que medios abiertos y profesio-nales, reduciendo la asimetría informativa entre quienes ejer-cen el poder y los ciudadanos, así como el quiebre de losmonopolios políticos, resultan esenciales para el surgimientode un poder judicial independiente que tendrá el decisivo rolde controlar al gobierno.

Tal como sucede con los poderes ejecutivo y legislativo alo largo de América Latina, también hay una gran diversidadinstitucional dentro de las instituciones autónomas. Se nece-

28 En los sistemas parlamentarios Westminster, los tribunales no se dedicana la revisión judicial y desempeñan un papel mucho menos importanteque en los sistemas presidencialistas.

Page 108: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo108

sita más investigación para poder trazar el panorama institu-cional, y más importante aún, para descifrar los rigurososmecanismos de causalidad que vinculan los diferentes arre-glos institucionales con el buen gobierno. Es clave para com-prender éste vínculo, la interacción entre concentración po-lítica, independencia mediática, e instituciones autónomas.El incumplimiento de sus decisiones, constituye una amena-za importante al sistema judicial y a las instituciones autóno-mas. El poder ejecutivo controla gran parte de los medios deejecución, por lo que puede socavar la autoridad de éstas ins-tituciones. La fragmentación del poder, puede dañar las con-diciones de los ataques directos exitosos a estas instituciones,pero el apoyo de los medios a la corte es también crucial en lalucha contra la desobediencia (Staton, a ser publicado próxi-mamente).

Observaciones finales

La coexistencia de democracia electoral y abuso de poderen algunos países latinoamericanos sugiere la existencia deun problema más profundo en ciernes. El descontento con elactual funcionamiento de la democracia abre el camino a ladeslegitimación de la democracia representativa y al surgi-miento de recursos neo populistas y políticas plebiscitarias.Ahora parece estar claro que los problemas actuales no soncausados por la naturaleza de los sistemas presidenciales. Porun lado, hay presidentes que fueron removidos de sus cargossin ningún tipo de ruptura democrática (si bien el reciente

Page 109: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 109

golpe de estado en Honduras establece una excepción pre-ocupante y las perspectivas de los gobiernos bolivarianos con-vocan a la cautela), pero lo que es más importante, el paisajeinstitucional varía notablemente en los distintos países: entanto que varios de ellos han estado experimentando crisisque no parecen relacionadas a diseños institucionales, otrosparecen estar encaminados hacia una buena gobernanza. Entanto que la pobreza y la desigualdad ocupan un lugar pre-ponderante en el análisis de calidad de la gobernanza, las con-trastantes experiencias de Argentina y Chile muestran que laexplicación no es sencilla.

La buena gobernanza sólo es posible, donde los frenos ycontrapesos están firmemente establecidos. Aquí la referen-cia no se limita exclusivamente a los controles legislativos yjudiciales sobre los ejecutivos, sino a un sistema de frenos ycontrapesos ampliado, incluyendo a los medios y a las insti-tuciones de accountability horizontal — Ministério Público, Tri-bunais de Contas, Ombudsman. En contextos de fuerte polari-zación y débiles controles sobre el poder ejecutivo, surge elabuso del poder, como ejemplifica Argentina. Venezuela yBolivia, a su vez, ejemplifican casos en los cuales los presi-dentes gozaban de escasos poderes proactivos y reactivos, ylas legislaturas no estaban fragmentadas, creándose así unasituación de crisis que impulsó a los presidentes a aplicar laestrategia de ampliar unilateralmente los poderes presiden-ciales. Así, la combinación de presidentes débiles y legislado-res recalcitrantes generó explosivos conflictos de poderes.

Para que se pueda consolidar un sistema de frenos y con-trapesos, la competencia política y la fragmentación del po-

Page 110: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo110

der son fundamentales; la democracia representativa puedeflorecer únicamente donde hay fuertes controles sobre quie-nes ejercen el poder. Solo cuando se siente limitado y contro-lado, el poder ejecutivo se siente impulsado a negociar conotros actores sociales. Si no existe un sistema ampliado defrenos y contrapesos, la negociación puede degenerar en con-nivencia y poder oligárquico; de ahí su importancia. La prin-cipal lección a ser extraída del análisis desarrollado en esteartículo, es por lo tanto, que la clave para promover una de-mocracia sustentable en América Latina es el fortalecimientode un sistema extendido de frenos y contrapesos.

Sin embargo, la democracia no opera en un vacío social ynormativo. Son necesarias normas sociales de tolerancia por-que son ellas las que promueven la cooperación y la coordi-nación, si bien no debieran ser vistas únicamente como pre-rrequisitos del buen gobierno. La cooperación exitosa esti-mula por sí misma, y en un ciclo virtuoso, mayor tolerancia,y por lo tanto genera tolerancia. Los elementos normativos ylos arreglos institucionales son por lo tanto, ingredientes in-separables en la búsqueda de la gobernabilidad democrática.

Referencias

Altman, David. (2008). “Régimen de gobierno y sistema departidos en Chile”. En: Arturo Fontaine, Cristián La-rroulet, Jorge Navarrete e Ignacio Walker (eds.). Reformade los partidos políticos en Chile. Santiago de Chile: PNUD,CEP, Libertad y Desarrollo, Proyectamérica y Cieplan.

Page 111: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 111

Amorim Neto, Octavio. (2006). “A Reforma do Sistema deGoverno: Rumo ao Parlamentarismo ou ao Semipresi-dencialismo?”. In: Gláucio Ary Dillon Soares y LúcioRennó. (Org.). A Reforma Política: Lições da História Recen-te. Rio de Janeiro: FGV, 2006, p. 316-44.

Amorim Neto, Octavio. (2006a). Presidencialismo e Governabi-lidade nas Américas. Rio de Janeiro: Editora FGV.

Amorim Neto, Octavio. (2006b). “The Presidential Calcu-lus: Executive Policy Making and Cabinet Formation inthe Americas” Comparative Political Studies, v. 39, n. 4, p.415-40, 2006.

Calvo, Ernesto Calvo y Marcelo Escolar. (2005). La nuevapolítica de partidos en Argentina. Crisis política, realineamientospartidarios y reforma electoral, Prometeo libros.

Chavez, R. B. (2004). The Rule of law in Nascent Democracies:Judicial Politics in Argentina. Stanford: Stanford Universi-ty Press.

Chavez, R.; Ferejohn, J; and Weingast, B. (2003). “A theoryof the politically independent Judiciary”. Artículo pre-sentado ante el “Annual Meeting of the American Politi-cal Science Association”, Philadelphia.

Cox, Gary and Scott Morgenstern. (2002). “Latin America´sreactive assemblies and proactive presidents”, en ScottMorgenstern and Benito Nacif (eds.). Legislative politicsin Latin America, Cambridge University Press.

Cheibub, José Antônio. (2007). Presidentialism, parliamentarismand democracy, Cambridge University Press.

Colomer, Josep and Gabriel Negretto. (2005). “Can Presi-

Page 112: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo112

dentialism Work like Parliamentarism?”. Government andOpposition, 1, 60–89.

Corrales, Javier. (2009). “ For Chavez still more discontent”,Current History, February.

Crisp, Brian. (2007). “The nature of representation in An-dean legislatures and attempts at institutional reenginee-ring”, In Mainwaring, Scott, Ana Maria Bejarano and ELeongómez (eds.). The crisis of democratic representation inthe Andes, Stanford University Press.

Elgie, R. (2005). ‘From Linz to Tsebelis: three waves of presi-dential/parliamentary studies?’, Democratization, 12 (1). pp.106-22.

Elgie, R. & McMenamin, I. (2008). “Semi-presidentialismand democratic performance.” Japanese Journal of PoliticalScience, 9 (3). pp. 323-40.

Elgie, R. (2004). “Semi-presidentialism: concepts, consequen-ces and contesting explanations.” Political Studies Review,2 (3). pp. 314-30.

Finkel, J. (2004). “Judicial reform in Argentina in the 1990s:how electoral incentives shape institutional change.” LatinAmerican Research Review, 39 (3), 56-80.

Helmke, G. (2005). Courts under constraints: judges, generals andpresidents in Argentina. Cambridge: Cambridge Universi-ty Press.

Hochstetler, Kathryn. (2006). Rethinking Presidentialism: theChallenges of and Presidential Falls in Latin America.Comparative Politics, 38, 4, 401-18.

Inter-America Development Bank (IADB). (2005). The Poli-

Page 113: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 113

tics of Policies: Economic and Social Progress in Latina Ameri-ca, 2006 Report. David Rockefeller Center for Latin Ame-rican Studies.

Inter-America Development Bank (IADB). (2008). Policyma-king in Latin America. How Politics Shape Policies. DavidRockfeller Center for Latin American Studies.

Lehoucq, Fabrice. (2008). “Bolivia’s Constitutional Breakdown”,The journal of Democracy, 19, 4, 110–24.

Levitsky, Steven and Maria V Murillo. (2005). Argentine De-mocracy: the politics of institutional weakness, PennsylvaniaState University.

Linz, Juan and Arturo Valenzuela (eds.). (1994). The failure ofpresidential democracy: the case of Latin America. Baltimore:Johns Hopkins University Press.

Mainwaring, Scott. (2006). “State deficiencies, party compe-tition, and confidence in democratic representation inthe Andes”, en Mainwaring, Scott, Ana Maria Bejaranoand E Leongómez (eds.). The crisis of democratic representa-tion in the Andes, Stanford University Press.

Mainwaring, Scott and Christopher Welna (eds.). (2003).Democratic Accountability in Latin America, Oxford Univer-sity Press.

Melo, Marcus André. (2008). O Controle Externo na AméricaLatina. Tribunais de Contas e contralorías. pp. 56. UmaNova Agenda Econômica e Social para a América Latina.São Paulo: iFHC; Santiago de Chile: Cieplan.

Moreno, E, B Crisp and Shugart, M. (2003). “The accounta-bility deficit in Latin America”, in Mainwaring, Scott and

Page 114: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Marcus André Melo114

Christopher Welna, eds. (2003). Democratic Accountabilityin Latin America, Oxford University Press.

Morgenstern, Scott. (2002). “Explaining legislative politics inLatin America”, en Scott Morgenstern and Benito Nacif(eds.). Legislative politics in Latin America, Cambridge Uni-versity Press.

Norris, Pipa. (2008). Driving Democracy: Do Power Sharing Ins-titutions Work? Cambridge University Press.

O’Donnell, Guillermo. (1994). “Delegative democracy”, Jo-urnal of Democracy,

O’Donnell, Guillermo A. (1998). “Horizontal Accountability inNew Democracies”. Journal of Democracy, Volume 9,Number 3, July, pp. 112-26.

Pérez-Linan, Aníbal. (2007). Presidential impeachment and thenew political instability in Latin America, Cambridge Uni-versity Press.

Pozas Loyo, Andrea and J. Ríos Figueroa. (2010). “EnactingConstitutionalism. The Origins of Independent JudicialInstitutions in Latin America”. Comparative Politics.

Przeworski, Adam. (2001). “Accountability social en AméricaLatina y mas allá”, en Peruzzotti, E y C Smulovitz, Con-trolando la política: ciudadanos y medios en las nuevasdemocracias latino-americanas, Buenos Aires, TemasGrupo editorial.

Ríos-Figueroa, J. (2007). “The fragmentation of power and theemergence of an independent judiciary in Mexico 1994-2002” Latin American Politics and Society 49 (1): 31-57.

Ríos-Figueroa, J and J Staton. (2008). “Unpacking the rule of

Page 115: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Equilibrio y desequilibrio de poderes en América Latina 115

law. A review of judicial independence measures”. TheCommittee on Concepts and Methods Working Papers21, IPSA.

Saiegh, Sebastian. (2009). Active Players or Rubber-Stamps?An Evaluation of the Policy-Making Role of Latin Ame-rican, UCSD.

Santiso, Carlos. (2007). “Auditing for Accountability” The Poli-tical Economy of Government Auditing and Budget Over-sight in Emerging Economies”. Washington, DC: JohnsHopkins University, unpublished doctoral dissertation.

Shugart, Matthew and John Carey. (1992). Presidents and Ass-emblies: constitutional design and electoral dynamics, CambridgeUniversity Press.

Shugart, Matthew and Scott Mainwaring. (1997). “Presiden-tialism and democracy in Latin America: rethinking theterms of the debate” en Mainwaring, Scott and MatthewShugart (eds.). (1997). Presidentialism and democracy in LatinAmerica, Cambridge University Press.

Sieder, Rachel, Alan Angell, and Line Schjolden. (2005). TheJudicialization of Politics in Latin America. McMillan.

Staton, Jeffrey. (a ser publicado próximamente). Judicial Powerand Strategic Communication in Mexico. New York: Cam-bridge University Press.

Smith, P. and Melissa Ziegler. (2008). “Liberal and Illiberaldemocracy in Latin America”, Latin American Politics andSociety, 50, 1.

Walker, I. (2008). Democracy and Populism in Latin Ameri-ca, Kellogg Institute Working Paper.

Page 116: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta116

Page 117: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 117

LOS CLAROSCUROS DE LA DEMOCRACIAEN ARGENTINA: DEUDAS

Y ASIGNATURAS PENDIENTES

Osvaldo Iazzetta

En diciembre del 2008, la democracia argentina cumplió25 años de vigencia —la más extensa de su historia moder-na—, dejando atrás un ciclo marcado por la inestabilidad políti-ca y la constante presencia del poder militar.

El entusiasmo que rodeó a su recuperación se nutría dellegítimo deseo de apartarse del terror de la última experienciaautoritaria (1976-1983) y el hartazgo frente a esa violenciadespertó un profundo rechazo frente a toda tentativa de re-gresión autoritaria que actuó —y sigue actuando— como prin-cipal reaseguro para la continuidad de la democracia, pese asus múltiples asignaturas pendientes.

Las huellas de aquellos años generaron una revaloriza-ción de la democracia que condujo a una sociedad hasta en-

Page 118: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta118

tonces descreída de ella, a confiarle no sólo la misión de res-tablecer las libertades arrasadas durante la etapa autoritariasino también, la resolución de los enormes problemas socia-les y económicos que dejó abiertos.

No obstante ese optimismo inicial, el temor por una nuevaquiebra de la democracia aún resultaba verosímil y su conti-nuidad no estaba descontada de antemano. En efecto, el pri-mer gobierno democrático de Raúl Alfonsín (1983–1989)transcurrió bajo la permanente amenaza de actores ligados alpasado, como lo testimonian los alzamientos militares que sesucedieron a partir de 1987 y que se extenderían incluso has-ta el primer tramo del segundo gobierno democrático enca-bezado por Carlos Menem (1989-1995).

Con el correr de los años 1990, este riesgo fue alejándosedando paso a una gradual subordinación del poder militar alpoder civil que no reconoce antecedentes en la turbulentahistoria del país. En adelante, las principales acechanzas parala estabilidad democrática no provendrán de los tradicionalesactores anti-sistema (como las fuerzas armadas) sino de loscrecientes desafíos socioeconómicos domésticos, agravadospor un escenario internacional más complejo y globalizado.

En efecto, los retos más serios que pusieron a prueba sucontinuidad surgieron con las crisis socio-económica de 1989y 2001. En ambas circunstancias, la supervivencia de la de-mocracia se ponía diariamente en juego en el terreno ma-croeconómico y su suerte permanecía atada a las fluctuacio-nes de los índices de inflación, tipo de cambio y riesgo país.Cuando irrumpen situaciones límite como las señaladas, lademocracia enfrenta la exigencia de revalidarse cotidianamente

Page 119: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 119

ante la sociedad ofreciendo respuesta a sus problemas acu-ciantes. Dichas crisis crean una situación dilemática pues lacapacidad de decisión que es preciso reunir para superarla,puede comprometer la institucionalidad democrática si esarespuesta —justificada temporariamente— se convierte enpermanente. Aunque en esos contextos se vive con alivio larecuperación de cierto umbral de gobernabilidad, las accio-nes que permitieron tal mejora no pueden evaluarse sólo apartir de su efectividad para controlar la inflación, tipo de cam-bio etc., sino también, considerando su impacto sobre la cali-dad institucional de la democracia.

La aceptación social de liderazgos como los ejercidos porMenem y Kirchner, se funda en que ellos resultan insepara-bles del modo en que logró recobrarse cierta calma. Cuandolas instituciones crujen y no disponen de capacidad para con-tener la incertidumbre, esos liderazgos pueden cubrir un pa-pel decisivo para reanimarlas. Sin embargo, la misma socie-dad que demanda y tolera esos estilos en medio de la crisisexperimenta fatiga a medida que la situación se normaliza yaquello que poco antes fue juzgado como parte de la solu-ción, comienza a perder justificación al restablecerse la nor-malidad. De todas maneras, aferrarse a ese instante excepcio-nal y pretender eternizarlo es una tentación para cualquierlíder político que siente que ha contribuido a reponer certi-dumbre en un momento crítico. Esa auto-percepción de “sal-vador de la patria” se reflejó en el caso de Menem, en su ob-sesión por perpetuarse en el gobierno más allá de lo permiti-do por la Constitución, cuya reforma impulsó en 1994. Esamisma vocación se ha vuelto a manifestar algunos años des-

Page 120: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta120

pués en el liderazgo de Kirchner (2003–2007), quien si bienresignó sus legítimas posibilidades de aspirar a un segundomandato, retuvo resortes decisorios informales durante elgobierno de su esposa —quien lo sucedió en diciembre del2007—, proyectando una imagen que opaca y ensombrece laautoridad de la actual presidenta electa.

En suma, los mismos líderes que encarnaron la “solu-ción” frente a la crisis pueden convertirse en un “escollo” bajootras condiciones. A medida que cede la emergencia ganan im-portancia otras demandas más exigentes y complejas. Sin em-bargo, aunque muden las aspiraciones de la sociedad, dichos li-derazgos no siempre disponen de una elasticidad equivalente.Estas nuevas demandas tropiezan con la misma respuesta queéstos ofrecieron para enfrentar la crisis: fortalecer los mecanis-mos que aseguran la efectividad de las decisiones y subestimaraquellos destinados a promover mayor control sobre sus actos.

En efecto, una vez superado ese momento crítico, los go-biernos democráticos han mostrado serias dificultades para en-sayar otros estilos, acordes con las nuevas condiciones. Cómoresignar ese modo de ejercer el poder que resultó efectivo entiempos difíciles, cuando el contexto y las demandas de la socie-dad han variado, es un reto que aún aguarda una respuesta acep-table y creativa de los gobiernos democráticos argentinos.

Es indudable que las crisis económicas recurrentes sufri-das por el país brindan algunas claves para comprender sudinámica democrática. De todas maneras, aunque favorecie-ron la irrupción de liderazgos fuertes no bastan para explicarsu gestación. En todo caso, esas crisis activan y potencian unatradición política plebiscitaria ya arraigada en la sociedad que com-

Page 121: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 121

parten de manera indistinta, gobernantes y gobernados.1

Esto sugiere que si bien la debilidad de las institucionesno es ajena al excesivo y persistente protagonismo del Ejecu-tivo, también reconoce una raíz social que no es posible ig-norar. La tentación de los gobernantes por concentrar mayorcapacidad decisoria no lograría materializarse si no contaseademás, con una sociedad que tolera —y en ocasiones de-manda— ese modo de ejercer el poder, manteniendo unacompleja relación de doble mano con esos estilos de gobier-no. La misma sociedad que rechaza estas prácticas una vezsuperado el temor, abona permanentemente el terreno paraque sigan disponiendo de legitimidad y amparo al revali-dar, con sus múltiples y moleculares gestos cotidianos, undesapego por las normas que es la contracara inseparabledel que muestran sus representantes desde lugares más en-cumbrados.

Asimismo, es preciso aceptar que la naturaleza de los pro-blemas que enfrentó la democracia en este país no se circuns-cribe a los estrechos límites de la economía ni puede enten-derse invocando únicamente factores económicos y financie-ros. El persistente declive sufrido por esta sociedad pone enevidencia su enorme dificultad para aferrarse a normas e ins-tituciones que orienten la vida en común, dejando atrás unalógica social autodestructiva que comprometió duramente sudesempeño económico y democrático.

1 Esta interacción ha sido analizada por Guillermo O’Donnell en su reco-nocido trabajo sobre “democracia delegativa” (O’Donnell 1997).

Page 122: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta122

Que la democracia argentina haya cumplido un cuarto desiglo es un logro que merece celebrarse. De todas maneras,este legítimo reconocimiento no debe convertirse en com-placencia frente a los severos déficits que persisten. La reali-zación de elecciones periódicas y libres representa una nove-dad que no puede pasar inadvertida para una sociedad cuyaconstante ha sido la discontinuidad institucional. Sin embar-go, la mera estabilidad de la democracia no ha logrado asegu-rar que se gobierne democráticamente o evitar que la socie-dad se torne más desigual.

Sus principales problemas ya no radican en las elecciones—que ofrecen mayores garantías que en el pasado— sino enlo que sucede después de ellas. Sus retos hoy se originan en elmodo en que gobiernan los gobernantes una vez electos, enla capacidad que éstos revelen para compatibilizar la vigenciade la democracia con políticas de inclusión social y en el com-promiso activo de la ciudadanía para controlar a sus repre-sentantes entre una elección y otra.

La democracia y los liderazgos de crisis

Luego del optimismo reinante en los primeros años deexperiencia democrática sobrevino un marcado desencantoal advertirse que junto a las elecciones periódicas y libres per-sisten estilos decisorios que comprometen su calidad institu-cional. Se trata de regímenes híbridos en los que el compo-nente democrático —expresado en el origen electoral de susautoridades—, convive con estilos políticos que eluden el

Page 123: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 123

debate público y debilitan los mecanismos de control repu-blicano. Precisamente en los años 1990 aflora una nueva sen-sibilidad para juzgar el desempeño de la democracia, no sóloatenta a las garantías que rodean la realización de las eleccio-nes sino también, al modo en que los gobernantes ejercensus funciones una vez electos.

En esos años, una extensa literatura contribuyó a recono-cer la persistencia y arraigo de una manera singular de enten-der el ejercicio del poder —compartida por no pocas fuerzaspolíticas y amplios sectores de la sociedad— que se distinguepor su renuencia a aceptar límites y desconfiar de toda formade control sobre sus actos.

Durante la década en que gobernó Menem (1989–1999)fue habitual asociar ese estilo discrecional de gobierno consus reformas económicas neoliberales, presentándolas comodos caras de una misma moneda. Sin desconocer las fuertesafinidades que mantienen ambos rasgos, la experiencia de Kir-chner se encargó de mostrar pocos años después, que esa mismamanera de entender el ejercicio del poder no era incompatiblecon políticas de otro signo. Mientras en el gobierno de Menemesa concepción del poder constituyó la contracara de una moder-nización conservadora y de un furioso desmantelamiento del Esta-do, un estilo político similar mantuvo Kirchner pese a sus es-fuerzos por revertir aquellas políticas y recomponer las capaci-dades estatales desarticuladas por el anterior. Ambos compartenuna concepción común sobre el ejercicio del poder —que serefleja en sus estilos políticos—, más allá de las diferenciasobservables en las orientaciones de sus políticas públicas y enlos apoyos sociales y políticos que recibieron.

Page 124: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta124

Si el gobierno de Menem fue un espejo invertido de laspolíticas estatizantes y nacionalizantes impulsadas por Perónluego de la segunda posguerra, el de Kirchner representa unnuevo movimiento pendular que recupera ciertos rasgos fun-dantes de esa tradición, revalorizando todo aquello demoni-zado durante la gestión del primero. La reestatización de ser-vicios privatizados, el activo control de precios y tarifas, lavoluntad de reposicionar al Estado como instancia de regula-ción y los nuevos aliados escogidos en el escenario interna-cional, son una muestra de ello. En abierto contraste conMenem — que había asociado al PJ con grandes empresariosy partidos defensores del mercado —, Kirchner pronto vin-culó a su gobierno con políticos de centro-izquierda, intelec-tuales progresistas y organizaciones defensoras de los dere-chos humanos que le aportaron otra base social y política.

Este giro confirma la impresión que el peronismo dispo-ne de enorme plasticidad para ofertar los rostros y programasapropiados que acompañan los cambios en el clima de ideascircundante pues, así como el gobierno de Menem no repre-sentó un ensayo original y aislado en una región que en esosdías aplicaba homogéneamente las recetas pro-mercado re-comendadas por los organismos multilaterales de crédito (entodo caso se distinguió por sobreactuar su compromiso conesas ideas para contrarrestar la desconfianza que despertabasu pasado populista); tampoco resultó novedoso y solitario elgiro de Kirchner en una región en la que la revalorización delEstado y el retorno de las políticas de nacionalizaciones, ex-presa un nuevo clima de desencanto con las políticas neoli-berales aplicadas en la década anterior.

Page 125: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 125

Esta elasticidad del justicialismo para ofrecer una varie-dad de rostros le permite mantener una continuidad y unaperdurabilidad que distingue al sistema partidario argentinodel que fue configurándose en sus países vecinos durante estafase democrática.

En efecto, desde la reinstalación de la democracia en 1983,el Partido Justicialista fue el principal partido en el poder enArgentina. Desde 1989 —año en que asumió Menem— has-ta el 2011 —cuando finalice el actual gobierno de CristinaFernández de Kirchner— habrán transcurrido 22 años de vidademocrática, de los cuales 20 habrán sido bajo gobiernos delmismo signo partidario.

Por consiguiente, el PJ se ha comportado como un parti-do predominante en la medida que gobernó más de un períodoy permaneció en el gobierno nacional durante un lapso ra-zonablemente prolongado, disponiendo además, de unasólida base parlamentaria y de la mayoría de los gobiernosprovinciales.

Es preciso aclarar que su permanencia no se origina entrabas impuestas a los otros competidores sino que refleja ladistribución cuantitativa de las preferencias electorales de lasociedad en una contienda libre. No mediando restriccionespara la competencia, su persistencia revela tanto la capacidaddel partido triunfante para captar al electorado, como la incapa-cidad de la oposición para coaligarse y generar una alternativaconfiable y atrayente. Ese predominio tiene por consiguiente,un carácter relacional que no se explica unilateralmente por lavocación de un partido de retener el gobierno sino también, porlos déficits de la oposición para disputárselo con éxito.

Page 126: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta126

Este dato no puede resultar indiferente para quienes mues-tren interés por la calidad de una democracia pues ésta no sedefine únicamente por el desempeño del partido gobernantesino también, por la capacidad de la oposición para controlaral gobierno y ofrecer una chance razonable de alternancia.

Los rasgos comunes en los liderazgos emergentesdel 1989 y el 2001

Ambas crisis generaron condiciones de ingobernabilidadque dispararon demandas de orden. Pese a las diferencias quemantienen en muchos aspectos, Menem y Kirchner compar-ten un estilo proclive a explotar ese deseo de certidumbrepara maximizar su autonomía frente a los otros poderes degobierno, frente a su partido y ante el propio electorado. Conmatices, comparten una misma concepción sobre el ejerciciodel poder en democracia. Veamos a continuación algunos deesos rasgos comunes:

• Los dos gobiernos estuvieron precedidos por crisiseconómicas terminales: en primer término la hiper-inflación galopante de 1989; en segundo lugar la de-claración unilateral del default y la brusca devaluaciónregistradas entre fines del 2001 y comienzos del 2002.El descontrol de las principales variables macroeco-nómicas y la sensación de inseguridad pública creadapor estallidos y saqueos a comercios, disparan miedosque ponen a prueba la capacidad de la política y delEstado para restablecer certidumbre. En la sociedad

Page 127: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 127

se instala un impulso irrefrenable por recobrar la cal-ma a cualquier costo, que favorece la acumulación yautonomización de los poderes decisorios del Ejecu-tivo a expensa de los otros poderes del Estado.Aunque estos rasgos son típicos de un momento deexcepción, se refuerzan al conjugarse con una con-cepción sobre el ejercicio del poder que antepone ladecisión a la deliberación. En este sentido, ambos lide-razgos comparten una concepción de la política y elpoder fundada en la premisa de que “el ganador selleva todo” (Sarlo 2005), una interpretación que si bienno se reduce al peronismo, encuentra en esa tradiciónpolítica una referencia insoslayable.

• En suma, se trata de liderazgos fuertes que eluden laintermediación institucional y establecen un vínculodirecto con la ciudadanía en contextos de fuerte des-integración del sistema partidario. Ello se conjuga conuna dinámica política que favorece el predominio delpartido gobernante en un marco en que la oposiciónaparece inhabilitada para ejercer ese rol pues se la aso-cia con el fracaso en la anterior gestión y presentándo-la como responsable de la crisis que el nuevo gobier-no logró desactivar.

• Un aspecto paradójico que comparten ambos gobier-nos es que pese a disponer de cómodas mayorías par-lamentarias esa ventaja no les impidió abusar —pese aresultar innecesario— del empleo de instrumentosexcepcionales reservados al Ejecutivo, tales como los

Page 128: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta128

Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) o la dele-gación de funciones legislativas. Mientras este abusopodría constituir un signo de debilidad e impotenciaen un gobierno carente de mayoría parlamentaria —como sucedió en el período de De la Rúa— en estosdos casos representa un modo de ostentar poder puesla insistencia en eludir al Congreso Nacional se asien-ta sobre una sólida y perdurable coalición parlamen-taria. Menem rubricó 545 DNU en sus diez años degobierno en tanto Kirchner firmó 270 en sus cuatroaños y medio de gestión, mostrando un promedioanual superior al primero (Mindez 2008).

• Con la crisis como telón de fondo, estos liderazgos seafirman a partir de ciertos logros económicos que res-tablecen certidumbre y despiertan una sensación dealivio en la sociedad. Su fortaleza reside en la exitosaasociación que logran establecer con la economía. Sin embar-go, dado que su principal crédito depende del desem-peño de ciertas variables macroeconómicas (estabili-dad monetaria y cambiaria en el caso de Menem, cre-cimiento sostenido del PBI y superávit fiscal en el deKirchner), esa fortaleza puede tornarse en una poten-cial fuente de vulnerabilidad en caso de no sosteneresa expectativa. Su eficacia económica también lespermite disimular su desprolijidad en los procedimien-tos institucionales, pues la misma sociedad que de-manda certidumbre muestra una amplia toleranciafrente a sus transgresiones, anteponiendo sus cualida-des para controlar una situación de ingobernabilidad.

Page 129: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 129

• Asimismo, vale resaltar que ambos líderes provienende provincias periféricas en las que se han desempe-ñado previamente como gobernadores (Menem en LaRioja y Kirchner en Santa Cruz). Se trata de distritosgobernados por el PJ desde la recuperación de la de-mocracia que no han registrado alternancia y permi-ten la reelección consecutiva de sus gobernantes. Aun-que representan distritos pequeños por su número deelectores, ellos actúan como auténticos talleres en losque se aprende “el oficio de la hegemonía” (Botana2006), incubando prácticas que adquieren mayor visi-bilidad y proyección cuando los liderazgos forjados enesas condiciones se desplazan al ámbito nacional.

• Al concluir su gobierno en diciembre de 2007, Kirch-ner se convirtió en el segundo presidente que finalizó sumandato desde la recuperación de la democracia en1983, algo que no representaría un mérito en un paísnormal, pero sí dentro de la accidentada experienciainstitucional argentina. Al igual que Menem, amboscompletaron sus gobiernos precedidos por experien-cias traumáticas y entregas anticipadas del mando (Al-fonsín en el caso de Menem; De la Rúa y Duhalde enel caso de Kirchner). Al mismo tiempo, la legitimidadque obtuvieron al controlar una situación de emer-gencia económica los convirtió en los dos únicos presi-dentes en condiciones de aspirar a un nuevo mandato. Aun-que esta situación los emparenta, fue resuelta de ma-nera diferente: Menem obtuvo su reelección para unsegundo gobierno —que en vano intentó extender a

Page 130: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta130

un tercer período— en tanto Kirchner resignó suschances de reelección cuando su triunfo parecía des-contado, apelando a la candidatura de su esposa —lasenadora Cristina Fernández— para asegurar la con-tinuidad de la pareja presidencial por cuatro años más.Ello representó una riesgosa y original apuesta que loconvierte en el primer presidente del país —desde lainstauración de la democracia moderna en 1916— queresigna la oportunidad de una reelección consecutiva,estando habilitado para ella. Eludir la tentación reelec-cionista —pudiendo permanecer cuatro años más—no significa que haya abandonado el centro de la esce-na política nacional, aunque su nuevo rol sea ahorainformal y su antiguo lugar oficial sea hoy ocupadopor su esposa.

Los matices que introduce Kirchner

• Revisión del rol del Estado

Uno de los giros más significativos registrados bajo elgobierno de Kirchner se observa en la revisión del rol asigna-do al Estado durante los años 1990. La recuperación de he-rramientas de regulación antes cedidas al libre impulso delmercado y la reestatización de servicios que habían sido adju-dicados a grupos privados durante el gobierno de Menem,revelan una voluntad de devolver al Estado el protagonismoperdido durante aquella oleada privatista.

Page 131: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 131

En sintonía con ese cambio su gobierno mostró firmezaen la compleja y ardua renegociación de la deuda externa ybuscó ampliar sus márgenes de decisión autónoma —en uncontexto de extrema debilidad— como lo revela el pago ade-lantado de la deuda con el FMI, manteniendo —pese a esedesembolso— un razonable nivel de reservas que permitiósostener la capacidad de intervención del Banco Central en elmercado cambiario.

La llegada de Kirchner al gobierno no sólo significó elcomienzo de una inesperada recomposición de la autoridadpresidencial sino también, una recuperación de la iniciativapolítica que permitió generar nuevos escenarios y una cre-ciente sensación de alivio que acompañaba a la reactivacióneconómica iniciada en el 2002.

El fuerte crecimiento económico y del consumo, el des-censo gradual y sostenido del desempleo, pobreza e indigen-cia y la salida del default, fueron saldos favorables que certifi-can que la elección del 2003 no había sido parte y mera pro-longación de la crisis abierta en el 2001, sino el preludio de suresolución. La gestión de Kirchner (2003–2007) no sólo lo-gró sostener a lo largo de su mandato un crecimiento econó-mico a “tasas chinas” —ya iniciado en el gobierno anterior—sino también asegurar tres pilares económicos cruciales: altonivel de reservas en el Banco Central2 y superávit fiscal y co-

2 En marzo de 2008 las reservas ascendían a 50.000 millones de dólares, unnivel que quintuplicaba el que encontró Kirchner al iniciar su gobiernoen mayo de 2003.

Page 132: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta132

mercial.3 Estos logros han sido reconocidos incluso por quie-nes mantienen fuertes reparos sobre otros aspectos de su ges-tión al tiempo que representaron la principal plataforma paraasegurar el triunfo de su esposa, Cristina Fernández, en laselecciones presidenciales del 2007.

• Renovación de la Corte Suprema de Justicia

En el orden institucional, los primeros gestos del gobier-no de Kirchner expresaban una voluntad de innovación quefueron debilitándose a medida que logró afirmar su liderazgoy disponer de una base de sustentación política propia, espe-cialmente tras las elecciones legislativas del 2005. Entre esosgestos se destacan sin lugar a dudas, el procedimiento em-pleado para renovar a los miembros de la Corte Supremade Justicia de la Nación, dotando de mayor transparenciay publicidad la integración de ese cuerpo sobre el que re-caían fuertes sospechas por su papel durante el gobiernode Menem. No menos significativo resulta el perfil de al-gunos de los nuevos integrantes propuestos por el Ejecu-tivo, no sólo por ofrecer mayores garantías de indepen-dencia sino también, por acreditar una trayectoria que au-gura una renovación y actualización en el plano de la doc-

3 “En los cuatro años y medio que gobernó el presidente Néstor Kirchner,la pobreza cayó del 54% al 23,4%, la indigencia del 27,7% al 8,2% y ladesocupación del 17,8% al 7,7%. El índice de salarios creció el 89,4% y elalza en el consumo en los supermercados ya supera el 50%” (Galak 2007).

Page 133: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 133

trina jurídica. La actuación de esta nueva Corte revela quese trata de un cuerpo poco dispuesto a mantener la actitudcomplaciente que había mostrado durante el gobierno deMenem, ofreciendo reiteradas muestras de independenciafrente al gobierno de Kirchner.

Una iniciativa del mismo tenor se concretó a fines del2006 cuando se dispuso reducir de nueve a cinco, el nú-mero de miembros de la Corte Suprema de Justicia de laNación, evitando que el mismo gobierno —que ya habíadesignado a cuatro de sus nuevos integrantes— completa-ra las vacantes con jueces potencialmente afines. Ese nú-mero es el que originalmente contemplaba la Constitu-ción de 1853 hasta la reforma impulsada por Menem en1994 que lo elevó a nueve. Actualmente son siete los miem-bros de la Corte de modo que cuando se concreten los dospróximos retiros, esas vacantes no serán cubiertas, alcanzan-do así su número definitivo.

• Reactivación de los juicios por violaciones a los derechos humanos

También merece reconocerse la iniciativa que ha mostra-do al reactivar causas sobre violaciones de los derechos hu-manos que habían quedado clausuradas durante los anterio-res gobiernos democráticos. Vale recordar que al juzgamien-to y condena de las Juntas Militares realizado en 1985 bajo elgobierno de Alfonsín, le sucedieron luego las leyes impulsa-das por el mismo gobierno con el objeto de circunscribir elalcance de los juicios a los máximos responsables de la cúpula

Page 134: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta134

militar. Luego, al asumir el gobierno Menem, dispuso el in-dulto de los jefes militares condenados en los años de Alfon-sín, dejando sin efecto los juicios efectuados en los primerosaños de democracia. A partir del 2001 algunos fallos judicia-les comenzaron a declarar inconstitucionales las leyes sancio-nadas durante el gobierno de Alfonsín y especialmente con elarribo de Kirchner a la presidencia — a partir del 2003 —,cobró nuevo impulso la revisión de las leyes exculpatoriasdispuestas durante los anteriores gobiernos. Merced a su ini-ciativa, en agosto del 2003, el Congreso Nacional dispuso lanulidad de estas leyes y en septiembre del mismo año la justi-cia reabrió algunas causas que habían quedado archivadas.Finalmente, tras la renovación de la Corte Suprema de Justi-cia impulsada durante el mandato de Kirchner, este cuerpodeclaró nulas las leyes exculpatorias (en junio de 2005) y dis-puso la nulidad de los indultos firmados por Menem en 1990(julio de 2007).

Estos gestos le permitieron a Kirchner ampliar su basepolítica y social pues no sólo logró retener los apoyos tradi-cionales que dieron sustento a otros gobiernos justicialistasen el pasado (en especial la dirigencia sindical de la poderosaCGT), sino también sumar nuevas vertientes que han halla-do en sus políticas la expresión de un “posibilismo progresis-ta”. En efecto, Kirchner reveló eficacia al reunir a los sectoressindicalizados afines al justicialismo junto a sectores exclui-dos del mercado laboral (organizaciones sociales “piquete-ras”), y a prestigiosas entidades defensoras de derechos hu-manos que se habían mostrado renuentes a compromisos delmismo tenor con los anteriores gobiernos democráticos.

Page 135: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 135

• Signos de deterioro institucional

El temor inicial a un presidente débil e incapaz de garan-tizar condiciones mínimas de gobernabilidad (recordemos queKirchner llegó al gobierno habiendo obtenido el 22% de losvotos en la primera vuelta), pronto fue desplazado por untemor opuesto a medida que el gobierno se mostraba decidi-do a concentrar y ejercer los recursos que proporciona el ré-gimen presidencialista, actuando en ocasiones, al límite de loque permite la institucionalidad democrática.

Si bien algunos pasos iniciales — como la renovación delos miembros de la Corte — revelaban voluntad de avanzaren una línea de mayor calidad institucional, otros gestos pos-teriores insinuaron un rumbo opuesto. Tras el respaldo reci-bido en las elecciones legislativas del 2005 el gobierno impul-só iniciativas que desnudaron su propósito de concentrar re-cursos de autoridad en el Ejecutivo y aumentar su autonomíadecisoria. La reforma en torno a la composición del Consejode la Magistratura, la reglamentación de los DNU y la asig-nación de los denominados “superpoderes” al Jefe de Gabi-nete de Ministros, expresaban —a partir del 2006— una di-rección distinta a la anunciada por sus primeras acciones.

En esa línea, también merecen destacarse las interferen-cias del gobierno —desde comienzos del 2007— en los índi-ces oficiales elaborados por el sistema estadístico nacional (IN-DEC) restando confiabilidad a sus informes y mediciones. Eldesplazamiento de personal técnico de carrera y la alteraciónde los criterios empleados para la medición de los índices deprecios al consumidor, han sumergido a este organismo pú-

Page 136: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta136

blico en una crisis que persiste hasta el presente y que se hacemás notoria aún con el regreso de la inflación entre las pre-ocupaciones de la sociedad.

Este comportamiento no sólo resulta inconsistente con unaretórica oficial que invoca su voluntad de reconstruir el Estado,sino que priva a la sociedad de información económica y socialconfiable e impide a sus gobernantes, adoptar decisiones fun-dadas en un conocimiento objetivo de la realidad.4

Contar con un sistema estadístico oficial independientedel poder político de turno no es sólo parte de la construc-ción de capacidades estatales mínimas sino también, una ta-rea democrática. Ello es así por cuanto la información gene-rada por las agencias estatales representa un bien público queno puede quedar subordinado a los intereses cortoplacistasde ningún gobierno ni admite ser manipulado en función deun interés sectorial.

Balance del gobierno Kirchner

Cabe destacar que la recuperación de cierto margen demaniobra en el Estado luego de la crisis del 2001 y los nota-bles índices de crecimiento del PBI registrados desde 2003—a un ritmo superior al 8% anual— coexisten con una nota-ble brecha social que si bien no fue generada por el gobierno

4 Las mediciones privadas —que han cobrado auge con el descrédito delINDEC— ponen en duda la confiabilidad de los registros oficiales atri-buyéndoles una subestimación del aumento del costo de la vida, pobrezae indigencia y una sobreestimación del crecimiento del PBI.

Page 137: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 137

de Kirchner, puso a prueba su capacidad para traducir aquellamejoría en una reducción de ésta.5

Incluso quienes valoraron la audacia y ciertos gestos au-tónomos del gobierno en condiciones muy adversas, no handejado de señalar su mora en la promoción de una mayorequidad en los ingresos y en la implementación de reformasimpositivas que reviertan la concentración de la riqueza quese ha cristalizado en la sociedad argentina.

Néstor Kirchner asumió la presidencia proclamando la ne-cesidad de recrear las instituciones y construir un “país normal”,sin embargo, muchos gestos rescatables de los primeros dos añosde gobierno fueron sucedidos por un estilo marcado por unafuerte concentración del proceso decisorio en el Ejecutivo.

Que la calidad institucional resultó postergada durantesu gobierno lo confirma la confesión de su esposa, CristinaFernández, pocos días después de sucederlo en la presidencia:“El cambio institucional va en serio”, señaló entonces, prome-tiendo un “salto cualitativo” en esa materia (Obarrio 2007).

Vale recordar que la demanda por mayor calidad institu-cional ganó notoriedad en los años 1990 en medio de abru-madoras transgresiones institucionales y evidencias de corrup-ción acumuladas durante los dos gobiernos de Menem. Esereclamo se hizo más intenso luego del colapso institucionaldel 2001 y conserva vigencia como aspiración, aunque per-

5 En el primer trimestre del 2007 —último año del gobierno de Kirchner— el10% más rico del país ganaba 30 veces más que el 10% más pobre. Si bien ellorepresentaba una mejora con respecto a los datos de los años anteriores con-tinuaba mostrando un cuadro de fuerte desigualdad social (Stang 2007).

Page 138: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta138

manezca incumplido en el plano práctico. Desafiar esa co-rriente de opinión acarrearía costos para cualquier gobernan-te y ello explica que sea invocada por cada gobierno al iniciarsu gestión, aunque luego no mantenga consonancia con susprácticas y estilos políticos. Esa expresión ha pasado a formarparte del lenguaje corriente y resulta infaltable en cualquierdiscurso que aspire a ser considerado “políticamente correc-to” —desde la oposición al oficialismo.

Si bien el actual gobierno de Cristina Fernández mani-festó su compromiso por una mayor calidad institucional, éstaha pasado a ser una bandera casi excluyente de la oposiciónpara denunciar ciertas transgresiones y desprolijidades delEjecutivo Nacional. Desde el gobierno se alega que detrás deestos reclamos se oculta la defensa de las políticas implemen-tadas en los 1990, revisadas desde la llegada de Kirchner en el2003 y profundizadas durante el actual gobierno de su esposa.

Sin embargo, la legítima voluntad de impulsar la recons-trucción del Estado y una mejor redistribución del ingresoproclamada por el discurso oficial desde el 2003 a estos días,no autoriza a renunciar a que esa búsqueda también vengaacompañada de una mejor institucionalidad.

El capitalismo de amigos y sus límitespara la democracia

Si bien lo económico no determina linealmente las for-mas políticas, ciertos rasgos que el capitalismo adoptó en es-tos años no resultan indistintos para reconocer los límites de

Page 139: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 139

la democracia y del Estado y comprender los márgenes deinclusión de algunas políticas implementadas en este ciclo.

Conviene recordar que desde sus comienzos la democra-cia debió convivir con un nuevo poder económico gestado alabrigo del gobierno militar que expresaba un modelo de acu-mulación sustentado en la valorización financiera y la apertu-ra de los mercados y había provocado la ruina de la industrialocal y de los actores ligados a esta actividad. La desindustria-lización impulsada por el gobierno militar trastocó el perfilde la economía y la estructura social del país y sentó las basespara el despliegue de poderosos grupos económicos que aco-taron los márgenes de acción de los futuros gobiernos demo-cráticos. Éstos no sólo heredaron una pirámide económicamás concentrada sino también, una abultada deuda externaque reforzó la primacía de la lógica financiera, manteniendoactiva en democracia, la misma matriz económica destructivaque los militares habían impuesto, apoyados en una masiva yferoz represión.

Ese poder económico creció al amparo del Estado, priva-tizando en su beneficio amplias áreas de su aparato, ya seacomo proveedores o contratistas de obras públicas. La mez-cla de capitalismo asistido y Estado prebendalista forjada enlos años de autoritarismo, delineó un modo de vinculaciónque —con algunas variantes— mantuvo vigencia durante elciclo democrático, colonizando al aparato estatal y erosionandosu credibilidad y carácter público.

El gobierno de Alfonsín resultó jaqueado por esos pode-res y debió entregar de manera anticipada el gobierno acosa-do por un estallido hiperinflacionario y un descontrol cam-

Page 140: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta140

biario que inauguró una novedosa fuente de inestabilidad parala democracia, no originada en planteos militares —aunquetampoco faltaron—, sino en los llamados “golpes de mercado”.

La emergencia económica desatada por la hiperinflacióny la evaporación de las capacidades estatales que ella provocó,crearon condiciones para que los grandes grupos económi-cos favorecidos durante el régimen autoritario —holdingsnacionales, empresas transnacionales y banca acreedora—ampliaran su presencia accediendo, con las privatizacionesimpulsadas por Menem, al control de empresas y serviciosque este gobierno transfirió a manos privadas.

El ambicioso y veloz programa de privatizaciones ejecu-tado por Menem permitió a los antiguos proveedores del Es-tado que se habían beneficiado con sus licitaciones, adueñar-se de las empresas y servicios privatizados, convirtiéndolosde contratistas del Estado en titulares de sus activos (Portan-tiero 1995, p. 109).

Ese Estado ya estaba “privatizado” por esos mismos gru-pos que resultaron favorecidos por la venta de su patrimonio,de modo que el “exceso” de Estado invocado por el discursoneoliberal para justificar su reducción, en verdad encubría sudebilidad y falta de autonomía frente a esos intereses privados.

En tiempo récord (1990-1993) el gobierno de Menemtransfirió al sector privado 82 empresas y unidades de nego-cios, entregó 27 servicios en concesión y adjudicó 86 áreasdel sector petrolero. Es cierto que despojando al Estado desus empresas y servicios, las privatizaciones contribuyeron adesmontar las bases materiales del corporativismo estatal quehabía permitido a los contratistas usufructuar el gasto públi-

Page 141: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 141

co. Sin embargo, esa forma de colonización fue reemplazadapor un control directo sobre resortes macroeconómicos de-cisivos que otorgarían un poder económico y político super-lativo a un puñado de grupos privados muy concentrados.

En suma, las privatizaciones no fueron neutras en térmi-nos de poder y, especialmente en los casos en que los mono-polios estatales fueron reemplazados por monopolios priva-dos, ello se tradujo en un significativo aumento de la influen-cia y capacidad de negociación de los grupos económicos queobtuvieron su control, ampliando las asimetrías heredadas delperíodo autoritario.

Pese a que estas reformas invocaban el propósito de edifi-car una economía de mercado, ello no impidió que subsistie-ran rasgos de capitalismo político y asistido (Palermo y No-varo 1996, pp. 470-1), observables tanto en las ventajas mo-nopólicas otorgadas en la concesión de ciertos servicios, enciertos vacíos que mostraban sus marcos regulatorios o en lacooptación de los entes reguladores por sus nuevos prestata-rios, privando de protección a sus usuarios.

El proceso de privatizaciones eludió los ámbitos de deli-beración pública y privilegió el trato directo con los gruposinformales atraídos por la venta de los activos públicos. Lasgestiones y negociaciones con estos grupos privados adopta-ron un carácter semi-público —cuando no secreto— restan-do transparencia y visibilidad a un proceso en el que estabaen juego el patrimonio público acumulado durante las déca-das previas.

Esa trama secreta que rodeó al proceso de privatizacionesresultó congruente con las aspiraciones de las autoridades de

Page 142: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta142

ampliar su aislamiento y autonomía decisoria dando lugar auna “privatización en privado” —como sugirió un legisladoren esos años— que aseguró su celeridad, aunque no siempreacompañada de la prolijidad deseada.

La intimidad con grupos privados y las sospechas de co-rrupción que ensombrecieron la transferencia de estos acti-vos estatales echaron por tierra la promesa de moralizaciónpública anunciada por el discurso privatizador al presentar al“gigantismo estatal” como la principal fuente de corrupción aerradicar. Aunque no faltaron evidencias empíricas sobre ta-les vicios y transgresiones, ellas no acarrearon costos institu-cionales para las autoridades debido a la “politización” de lajusticia y de los órganos de control horizontal, que se mantu-vieron inactivos pese a las reiteradas denuncias de la oposi-ción y el periodismo independiente. Ello generó un debilita-miento de las instancias de control republicano que repercu-tió negativamente sobre la confianza depositada por la ciuda-danía en las instituciones democráticas instalando una sospe-cha que tendría efectos perdurables sobre la vida política delpaís.

La pasividad de la justicia y de los órganos de control es-tatal potenciaron el papel del periodismo —en especial el deinvestigación— como una nueva voz pública que fue ganan-do mayor respeto y credibilidad a medida que aumentaba eldesprestigio de las instituciones consagradas a esa labor.

En suma, las reformas económicas impulsadas en los años1990 mantuvieron fuertes afinidades con un estilo de gobier-no concentrado que no reservaba demasiado margen para eldebate público ni para procesar democráticamente decisio-

Page 143: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 143

nes cuyos efectos excedían largamente la década gobernadapor Menem. Esas políticas cambiaron el perfil del Estado y lasociedad y ocasionaron un severo deterioro de la institucio-nalidad democrática reflejada en el abuso de decretos de ne-cesidad y urgencia, la ausencia de independencia de los pode-res y abrumadores indicios de corrupción.

Los cambios registrados en esos años no sólo significaronuna monumental transferencia del patrimonio estatal al sec-tor privado, sino también una drástica retracción del Estadoen la provisión de bienes públicos (educación, salud, seguri-dad social etc.) que quedaron librados a la “responsabilidadindividual”. Ese descompromiso estatal no expresa solamen-te a una economía de mercado sino a una sociedad de merca-do en la que el acceso a ciertos bienes —antes consideradosderechos ciudadanos—, pasaba a depender de la desigual ca-pacidad de contratación de los particulares.

La crisis desatada en el 2001 promovió un cambio de per-cepción en la ciudadanía que se tradujo en un reclamo cre-ciente de reconstrucción e intervención del Estado. Ese des-encanto con las políticas neoliberales explica los posterioresesfuerzos de Duhalde primero, y más decididamente de Kir-chner después, por diferenciar a sus gobiernos de ese pasadoinmediato.

Desde la llegada de este último el Estado ha recuperadoun rol activo ya sea interviniendo en el control de precios,regulando las tarifas de servicios básicos (electricidad, gasy transporte), el comercio externo y el mercado cambia-rio. Sin embargo, ese giro se aprecia de manera especial enla sostenida reestatización de servicios privatizados en los

Page 144: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta144

años 1990 (Correos Argentinos, Aguas Argentinas, Ferroca-rriles, y recientemente Aerolíneas Argentinas) retomando elcontrol de áreas decisivas que habían sido transferidas a ma-nos privadas.

Conviene aclarar sin embargo, que incluso quienes apre-cian esta recuperación del rol del Estado mantienen reparospor el modo adoptado para devolverle un lugar central —comolo refleja la política desplegada para estabilizar los precios— opor su dudosa autonomía frente a empresarios “amigos” delgobierno, favorecidos por el reposicionamiento del Estado enla economía.

Si bien el gobierno de Kirchner manifestó interés en re-crear una “burguesía nacional” —arrasada por la desindus-trialización iniciada durante el régimen autoritario y la des-nacionalización que sobrevino en los años de Menem—, laintimidad que ha mantenido con muchos de los inversoresnacionales beneficiados por el cambio de manos en las em-presas privatizadas (caso Repsol-YPF), ha alentado las sospe-chas de un “capitalismo de amigos” que ha sido insistente-mente invocada por diversos referentes de la oposición.

De todas maneras, cabe señalar que la autonomía del Es-tado no sólo se ve comprometida cuando es colonizada porgrupos económicos privados que medran con los recursospúblicos, sino también cuando el propio partido gobernantegestiona lo público con un sentido faccional y particularista,politizando los órganos de control, partidizando los mediosde comunicación oficiales o bien imponiendo el interés sec-torial del gobierno en la administración de la informaciónpública (INDEC).

Page 145: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 145

La separación que los funcionarios electos deben mante-ner con los recursos públicos —comunes a todos— constitu-ye una precondición del Estado moderno que es también unaexigencia para la vida democrática. La partidización del Esta-do y la captura de fondos públicos para fines privados derri-ban esa frontera necesaria y socavan tanto la dimensión pú-blica del Estado como la credibilidad de las instituciones de-mocráticas.

Déficit y desafíos de la democracia argentina

En este cuarto de siglo transcurrido, las luces y sombrasse entremezclan confusamente, dificultando una evaluaciónecuánime que nos permita reconocer cuánta democracia falta cons-truir y cuál es el umbral conquistado que posibilitará nuevos avances.

De todas maneras, un balance histórico de largo plazo nopuede desconocer que la celebración de elecciones libres yperiódicas adquiere una dimensión que no puede menospre-ciarse, clausurando un largo ciclo en que lo “normal” era laalternancia entre gobiernos civiles y militares, en que las fuer-zas armadas eran aceptadas como un actor político más y elempleo de la fuerza era un instrumento legítimo y regular dela vida política.

Tras el entusiasmo inicial que acompañó a la recupera-ción de la democracia, un clima de extendido desencanto fueapoderándose de la sociedad al constatar que no basta tenerdemocracia para impedir el aumento de la desigualdad social ypara asegurar que se gobierne democráticamente.

Page 146: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta146

En efecto, la perdurabilidad de la democracia resulta en-sombrecida por la presencia de un déficit social e institucionalque pone de manifiesto sus límites para extender la democrati-zación más allá del momento electoral.6 El malestar originadoen el modo en que los representantes electos ejercen el poderen democracia y la impotencia de los gobiernos democráticospara evitar el aumento de la brecha social, delimita los desa-fíos a enfrentar y los temas de la agenda democrática pen-diente.

En virtud de lo expresado, la realización de elecciones li-bres y periódicas constituye una condición necesaria pero nosuficiente para juzgar la calidad de una democracia, pues sub-sisten otros frentes y dimensiones que también reclamannuestra atención y reconocimiento.

Déficit de ciudadanía y déficit de Estado

Es preciso destacar que la continuidad de la vida demo-crática ha convivido con un acentuado proceso de desiguala-ción social que priva a muchos argentinos del soporte mate-rial necesario para asegurar su autonomía como ciudadanos.La recuperación de los derechos políticos —a elegir y ser elegi-dos— coexiste con un marcado deterioro de los derechos socia-les y civiles que permiten asegurar una vida digna y un accesoigualitario a la justicia.

6 Ambos déficits han sido desarrollados en Quiroga y Iazzetta (1997).

Page 147: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 147

Mientras en 1980 la distancia entre los ingresos del 10%más rico y el 10% más pobre era de 13 veces, en el año 2003ascendía a 32 veces y sólo descendió a 30 veces en el primertrimestre del 2007, pese a la notoria recuperación económicaregistrada en los años previos. También sorprende la celeri-dad de ese declive: sólo entre los años de 2000 y 2003 se mul-tiplicó por más de tres la población que vivía por debajo de lalínea de pobreza (Downes 2005). En suma, la brecha de in-equidad distributiva se agravó sensiblemente durante la vi-gencia de la democracia y la sociedad argentina es hoy másdesigual e injusta que al momento de su recuperación.

La misma tendencia se refleja en los niveles de desem-pleo y pobreza registrados en ese lapso. En 1983 el primeroapenas rozaba el 4% de la población económicamente activaen tanto, menos del 10% de la sociedad estaba bajo la línea depobreza. Veinte años después, la tasa de desempleo alcanzabaal 22% de la población activa y más de la mitad de los argenti-nos llegó a estar bajo la línea de pobreza. Los índices de des-empleo, pobreza e indigencia fueron mejorando gradualmentea partir de la fuerte recuperación económica iniciada durantela segunda mitad del 2002, pero esas mejoras aún coexistencon una rígida matriz distributiva que no ha permitido alcan-zar logros sustantivos en la reducción de la desigualdad.

El deterioro de los ingresos y de su distribución no sóloadquiere dramatismo por la celeridad con que se produjo sinotambién por derribar la imagen de una sociedad que se dis-tinguía de otros países vecinos por sus niveles de homogenei-dad e integración social. Paradójicamente, la sociedad argen-tina se mantuvo más integrada durante el período en que la

Page 148: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta148

democracia resultó discontinua e inestable, que en las últi-mas dos décadas, en las que su permanencia ya no resultacuestionada. Si bien se trata de un vínculo complejo que ad-mite más de una interpretación, lo cierto es que los gobiernosdemocráticos no desmantelaron —y en períodos como el deMenem incluso profundizaron— los pilares del modelo so-cioeconómico destructivo edificado bajo el régimen autori-tario, manteniendo activos los mecanismos desigualadorespuestos en marcha entonces.

Es preciso aclarar que este fenómeno no es imputable a lademocracia sino que nos revela la incapacidad de los lideraz-gos democráticos y de los principales actores sociales y políti-cos para adoptar políticas que permitan revertir tales asime-trías. De todos modos, aunque la democracia no puede serjuzgada por sus resultados, esa sensación de fracaso no resultaindistinta para su legitimidad pues, una democracia que semanifieste impotente para impedir las desigualdades sociales,difícilmente resulte defendible por sus ciudadanos.

La desigualación social registrada en el período democrá-tico impone interrogarnos tanto sobre el signo de las políticaspúblicas implementadas en este último cuarto de siglo comotambién, sobre cuestiones impostergables que han permane-cido ausentes en la agenda de gobierno, en materia de políticasocial, reforma fiscal etc. Este aspecto es decisivo pues no sólodebe preocuparnos cómo deciden nuestros representantes unavez electos sino también, qué cuestiones ingresan o son exclui-das de su agenda decisoria.

El déficit de ciudadanía también nos revela un déficit del Esta-do para asegurar los derechos prometidos por la democracia.

Page 149: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 149

En efecto, la mera recuperación de ésta no asegura automáti-camente los derechos ciudadanos, precisa además, un Estadoque pueda tornarlos efectivos.7 Este aspecto es crucial para lademocracia, y la fortaleza o debilidad estatal no resulta indis-tinta para definir su calidad y perspectivas.

Desafortunadamente, el Estado que recibió la democra-cia fue desmantelado durante el régimen autoritario y se con-virtió en objeto de sospecha por su papel en ese oscuro perío-do. Ese legítimo sentimiento anti-autoritario fue confundién-dose muy pronto con un sentido común anti-estatal que abo-nó involuntariamente el terreno para aceptar un severo diag-nóstico sustentado en la idea de que “cuanto menos Estado,mejor”. Estas políticas, inspiradas en el influyente recetarioneoliberal, impulsaron desde fines de los años 1980 una re-ducción indiscriminada del Estado, privando a la nueva de-mocracia de su apoyo cuando ésta más lo necesitaba. Muchasvoces se alzaron para advertir que el Estado mínimo alentadopor el discurso neoliberal generaría democracias disminuidase impotentes para asegurar los derechos ciudadanos. Pocosaños después, las “ciudadanías de baja intensidad” retratadaspor Guillermo O’Donnell, no harán más que confirmar esostemores, cuando el desmonte del Estado ya mostraba sus pri-meros efectos sobre la vida pública y la calidad de las demo-cracias.

Desde entonces, el Estado ha sufrido constantes vaivenesque traducen climas políticos e ideológicos imperantes en la

7 Véase al respecto los trabajos reunidos por O’Donnell (2007).

Page 150: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta150

región y el mundo. Hoy el Estado está siendo revalorizado nosólo por su papel regulador en la economía sino también porconstituir un soporte ineludible para la democracia. Las polí-ticas impulsadas en Argentina desde 2003 a esta parte, tam-bién revelan una voluntad de recuperar herramientas y capa-cidades estatales que se reflejan en una mayor presencia e in-tervención en ámbitos antes relegados al mercado.

Resta saber si este reposicionamiento en la vida econó-mica logrará traducirse en un mayor compromiso por asegu-rar una ciudadanía efectiva a amplios sectores de la sociedadhoy empujados a un clientelismo y asistencialismo que me-noscaba su dignidad y autonomía. Ensanchar la democracia yexpandir la vida y deliberación públicas exige antes que nada,incluir a estos sectores hoy desprovistos de un umbral míni-mo de ciudadanía. La democracia permanecerá trunca e in-completa —siempre lo será en cierto modo— mientras serevele incapaz de extender los derechos ciudadanos de ma-nera homogénea.

Democracia electoral con déficit institucional

Desde el comienzo del actual ciclo democrático, Argen-tina ha realizado tantas votaciones políticas consecutivas paraelegir representantes en todos los niveles de gobierno que lademocracia pareciera haberse afianzado como democraciaelectoral. El legítimo reconocimiento de este logro no debeimpulsarnos a ignorar algunos puntos críticos que revelan cier-to déficit institucional en los niveles nacional y subnacional.

Page 151: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 151

En primer lugar, si bien es cierto que la democracia tuvocontinuidad, no todos sus gobiernos fueron estables y lograron com-pletar sus mandatos. El primer gobierno democrático, encabe-zado por el radical Raúl Alfonsín, debió anticipar cinco me-ses la entrega a su sucesor Carlos Menem —en julio de 1989—, desbordado por una hiperinflación galopante que lo despo-jó de recursos políticos mínimos y consumió sus ya escasascapacidades estatales. En diciembre de 2001, otro gobiernoencabezado también por un dirigente radical —Fernando dela Rúa— renunció dos años antes de completar su mandatoen medio de movilizaciones callejeras que expresaban des-contento por las medidas económicas impopulares adoptadaspor su gobierno. El colapso institucional que desató su re-nuncia instaló el triste récord de cinco presidentes en diezdías. Al comenzar el año 2002 Argentina tenía un nuevo pre-sidente interino, Eduardo Duhalde, elegido por la AsambleaLegislativa para completar el mandato para el que había sidoelecto De la Rúa. Aunque Duhalde debió entregar la ban-da presidencial a su sucesor en diciembre del 2003, tam-bién se vio forzado a anticipar la convocatoria a eleccionespresidenciales y la entrega del mando para el 25 de mayode aquel año.

Estos tres ejemplos revelan que si bien funcionaron losmecanismos sucesorios previstos constitucionalmente, sólodos presidentes lograron completar sus mandatos durante esteciclo democrático (Menem en dos ocasiones: 1989-1995 y1995-1999 y Kirchner entre el 2003-2007) y en ambos casosse ha tratado de presidentes provenientes del Partido Justi-cialista. En cambio, dos de los tres presidentes que no logra-

Page 152: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta152

ron completar sus mandatos provienen de la Unión CívicaRadical (Alfonsín y De la Rúa).

Estas experiencias sugieren que aunque caigan los presi-dentes, ellos no arrastran en su caída a la democracia comosucedía en el pasado. Desde luego sería preferible no atrave-sar situaciones de este tipo, pero no se puede ignorar que adiferencia de lo que sucedía en las décadas pasadas, estas cri-sis se procesan dentro de los canales institucionales sin darlugar a una intervención militar.

Si bien una de las principales novedades de este ciclo de-mocrático es haber asistido por primera vez a la alternanciade diferentes partidos en el gobierno nacional, ella se ha con-sumado parcialmente pues esa rotación no ha venido acom-pañada de similares chances para completar sus mandatos.

Pese a que la alternancia ha sido posible en el ordennacional en dos ocasiones8, aún existe un gran número deprovincias que no registran experiencias equivalentes des-de 1983. Tras la última renovación de autoridades provin-ciales realizadas en el 2007, un tercio de los 24 distritoselectorales del país (que integran 23 provincias y la Ciu-dad Autónoma de Buenos Aires) permanecen gobernadospor el mismo partido o coalición desde la recuperación de

8 La primera alternancia se produjo cuando Alfonsín entregó el mando aMenem en 1989 y luego cuando éste es sucedido por De la Rúa en 1999.Este logro no registra antecedentes pues en los períodos democráticosmás extensos del siglo XX existió rotación de presidentes de un mismopartido (con los gobiernos de la Unión Cívica Radical entre 1916-1930)o bien una reelección (Juan D. Perón entre 1946-1952 y 1952-1955), peronunca alternancia entre partidos.

Page 153: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 153

la democracia9, manteniendo una continuidad inquebrantadadesde entonces. A medida que descendemos al nivel provin-cial la tendencia hacia el dominio de un partido resulta másvisible que en el orden nacional, delineando un escenario másestático y rígido que revela la permanencia de viejos dirigen-tes y estructuras.

Asimismo, el abrumador predominio de algunos candi-datos oficialistas en algunas provincias permite poner en dudael carácter competitivo de algunas elecciones, ubicando a es-tos distritos al límite de lo que admite un régimen democrá-tico. Si como sugieren algunos autores, las reelecciones conmás del 70% de los votos no cubrirían las exigencias de unrégimen político competitivo, no son pocas las provinciasencuadradas en esa situación. Tal es lo que reflejan algunaselecciones provinciales del 2007 en las que resultaron reelec-tos los gobernadores de San Luis con el 82,8%; de Chubutcon el 74,3%; de Tucumán con el 78%, y de Santiago del Es-tero —a fines del 2008— con el 85%.

Como puede apreciarse, el nivel subnacional representaun refugio de poderes locales aferrados a prácticas no demo-cráticas y su persistencia constituye una de las principales asig-naturas pendientes que mantiene la democracia desde su re-cuperación. La ausencia de alternancia, la configuración desistemas de partidos predominante y la perpetuación de losoficialismos —favorecida por reformas constitucionales

9 De las ocho provincias sin alternancia, seis son gobernadas por el PartidoJusticialista, una por la Unión Cívica Radical y la restante por el Movi-miento Popular Neuquino.

Page 154: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta154

provinciales que permiten la reelección inmediata—, convier-ten a los partidos gobernantes en verdaderas agencias semi-esta-tales que fundan sus posibilidades de permanencia en su accesoprivilegiado a los recursos del Estado. Ello no sólo nos revela labaja calidad de sus regímenes políticos sino también la existenciade Estados privatizados que muestran serias dificultades para es-tablecer una clara demarcación entre lo público y lo privado.

Algunos de los déficit institucionales señalados aluden almomento electoral (bajas garantías de competitividad en laselecciones provinciales) o a dificultades enfrentadas por al-gunos gobernantes nacionales para completar sus mandatosuna vez electos. Sin embargo, otras manifestaciones de dete-rioro de la calidad institucional —no menos inquietantes—se originan en el modo en que los gobernantes ejercen susresponsabilidades tras imponerse en elecciones libres y com-petitivas. En especial, la concentración de poder y el abuso enel empleo de recursos excepcionales por parte del Poder Eje-cutivo (reflejada en el hiper-ejecutivismo y en el hiper-de-cretismo), no sólo desvirtúa el proceso decisorio como unmomento crucial de la representación democrática, sino tam-bién desjerarquiza otros espacios de deliberación y controlinstitucional, situándolos en un lugar subalterno.

Factores que podrían revertir el deterioroinstitucional

Las crisis económicas recurrentes que ha sufrido Argen-tina también han marcado de un modo singular su dinámica

Page 155: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 155

democrática, generando situaciones de excepción que favo-recieron la concentración de poder en los gobiernos que en-frentaron esas emergencias.

Las recaídas delegativas que acompañaron cada crisis tam-bién mostraron cierta propensión social a aceptar un tipo deejercicio del poder que no ha contribuido ciertamente al per-feccionamiento institucional de su democracia. Sin embargo,la complacencia ante esos estilos y prácticas gestados bajo cir-cunstancias excepcionales revela un rostro de esta sociedadtan innegable como su capacidad para bloquearlos ni bien lo-gra advertir sus implicancias.

Esta misma sociedad alberga en su seno un doble y con-tradictorio impulso a tolerar primero y a poner tope —mástemprano que tarde— a las pretensiones dominantes y dis-crecionales desatadas bajo aquellas condiciones. Aunque ini-cialmente dispuesta a aceptar atajos que restablezcan la “nor-malidad” a cualquier costo, esa sociedad mantiene reservaspara poner límites que obstaculizan la consolidación de esosestilos que consintió bajo contextos de emergencia.

La diversidad social y política y el propio juego de la opiniónpública, siguen constituyendo la última barrera y esperanza paracontener el riesgo de “muerte lenta de la democracia” al quealude Guillermo O’Donnell para designar la amenaza que re-presenta su deterioro institucional gradual y progresivo.10

10 O’Donnell sugiere que una vez superado el riesgo de “muerte súbita”representado por los golpes militares tradicionales, la amenaza para nues-tras democracias asume este carácter menos espectacular pero no por ellomenos preocupante.

Page 156: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta156

De modo que en Argentina conviven dos tendencias enconstante tensión: por un lado, una recurrente tentación do-minante apoyada en una tradición plebiscitaria y en una si-tuación de predominio partidario y por otro, una opiniónpública plural, cambiante y dotada de espíritu crítico.11

Ese choque entre ambos impulsos explica el voto ciuda-dano durante las elecciones legislativas de medio término quemarcaron el ocaso de Menem en 1997 (promediando su se-gunda presidencia) como en las más recientes del 2009 (pro-mediando el mandato de Cristina Fernández de Kirchner)que significaron un duro revés para el matrimonio Kirch-ner tras seis años de gobierno. Esto sugiere que en socie-dades complejas y muy diversificadas como la argentina,los estilos de gobierno gestados bajo condiciones de ex-cepción están expuestos a sufrir un costo creciente queaumenta a medida que se extiende la percepción social so-bre su discrecionalidad.12

Este comportamiento dual de la sociedad civil no se veri-fica únicamente en la actual etapa democrática. Tal vez con-venga recordar que la misma sociedad que asistió pasivamen-te a la instauración del régimen autoritario en 1976 engendróun vigoroso movimiento de derechos humanos que se ex-

11 Sobre este conflicto puede consultarse a Botana (1997). A su vez, IsidoroCheresky ha insistido recientemente en la emergencia de una ciudadaníamás independiente, informada y vigilante sobre los actos de los gober-nantes. Al respecto puede consultarse Cheresky (2009).

12 Véase la entrevista efectuada a Guillermo O’Donnell en el diario Perfildel 19/4/2009.

Page 157: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 157

presó autónomamente frente a esos poderes en condicionessumamente adversas. Aquella traumática experiencia nos re-cuerda los impulsos de una sociedad que al par de haber re-velado ingredientes antidemocráticos también mostró poten-cialidades para generar una cultura diversa y plural así comocapacidad para cuestionar estructuras ilegítimas y autoritarias(Cavarozzi 1983).

Ese mismo potencial se ha puesto de manifiesto en situa-ciones límite en las que la propia democracia enfrentó ame-nazas de regresión autoritaria. Si bien la sociedad ha sabidoresponder con madurez y prudencia en situaciones extrema-damente graves y espectaculares, en cambio no ha logradohallar un modo de expresión persistente y efectivo frente aotras manifestaciones de deterioro de la democracia en as-pectos más moleculares y cotidianos que corroen de manerano menos contundente su calidad y acentúan el desencantopor su desempeño.

El problema radica en que esa reserva cívica permaneceinactiva durante tiempos prolongados y sólo irrumpe espas-módicamente ante una amenaza seria. Desde luego sería másproductivo volcar esa energía y compromiso en aspectos co-tidianos de la vida pública, participando activamente en ladefinición y resolución de sus problemas comunes y ejercien-do un control sobre los actos de gobierno. Sin embargo, queello sea deseable no significa necesariamente que resulte pro-bable en el corto plazo.

La mejor garantía para evitar que tales controles no de-pendan de energías cívicas inestables, oscilantes y pendula-res, es cristalizar esas demandas en un amplio catálogo de re-

Page 158: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta158

formas políticas que permitan establecer nuevas y mejoresreglas y compromisos en los criterios de acceso y ejercicio delpoder democrático. Esa es una agenda democrática pendien-te que exige una nueva ingeniería institucional acorde con lasnuevas demandas que han sobrevenido tras la recuperaciónde la democracia y que permanecen inexplicablemente pos-tergadas desde fines del 2001, cuando el malestar ciudadanoexpresó un generalizado clamor de “que se vayan todos” queaún sobrevuela en el escenario político, aunque sin los nive-les de irritación y crispación de aquellos días.

Rasgos singulares y comunes de Argentinaen la región

El caso argentino posiblemente se destaque dentro de laregión por el acelerado declive socio-económico registradoen las tres últimas décadas, golpeado por crisis económicasque provocaron una caída persistente y alarmante de sus in-dicadores económicos y sociales.

Este declive no sólo persistió sino que se acentuó bajo lavigencia de un régimen democrático, derribando las expecta-tivas optimistas que acompañaron a su recuperación.

Las tensiones que anidan en este escenario son inoculta-bles: por un lado, la persistencia de la democracia estimulauna inclusión política que resultó negada durante la vigenciadel anterior régimen autoritario, sin embargo, esa corrienteconvive con una inesperada y sostenida exclusión social de vas-

Page 159: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 159

tos sectores que ven recortada su autonomía y resultan priva-dos de la chance de adquirir una ciudadanía plena.

El afianzamiento de la democracia como régimen políti-co coexiste por consiguiente, con la pérdida de una base so-cial homogénea e integrada como la que el país conoció cuandoaún existía un horizonte de amplia y sostenida movilidad so-cial ascendente que lo distinguía de otros países de la región.

Este proceso desentona con las oportunidades que la es-tabilidad democrática abrió en otros países de la región quehoy revelan modestas pero sostenidas mejoras en sus indica-dores sociales, sacando mayor provecho de las posibilidadesque ofrece un ambiente democrático para amortiguar y re-vertir desigualdades sociales extremas.

En el orden político e institucional hay claroscuros queno pueden pasar inadvertidos. El derrumbe del sistema parti-dario argentino —que ha logrado mantenerse en pie en paí-ses como Uruguay, Chile— convive con un predominio deljusticialismo como principal eje del sistema partidario queno mantiene parangón con la renovación y situaciones de al-ternancia vividas en esta etapa democrática por otros paísesvecinos. 13

13 En Brasil alternaron el gobierno partidos consolidados durante la etapademocrática. Los dos mandatos de Fernando Henrique Cardoso, del PSDB(Partido de la Socialdemocracia Brasilera) y de Luiz Inácio “Lula” da Sil-va, del PT (Partido de los Trabajadores), lo ilustran cabalmente. Lo mis-mo se puede señalar con respecto a Uruguay. El triunfo del Frente Am-plio el 31 de octubre del 2004 no sólo representó una quiebra del tradi-cional bipartidismo uruguayo sino la incorporación de un nuevo actor enla alternancia del poder.

Page 160: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta160

Asimismo, el patrón de inestabilidad institucional queexpresan los gobiernos nacionales que no pudieron comple-tar sus mandatos (Alfonsín, De la Rúa y Duhalde), es unaseñal de alarma que merece ser atendida, marcando un signode preocupación que reconoce otros antecedentes en el pasa-do inmediato de nuestra región (Ecuador y Bolivia).

De todas maneras, la experiencia democrática de estos añossigue revelando la voluntad unánime de la ciudadanía y de lasfuerzas políticas de aceptar a la democracia como el únicoámbito posible para seleccionar a sus gobernantes y dirimirlas divergencias.

Ese es un umbral modesto pero suficiente para marcarun punto de inflexión frente a las décadas pasadas en las quela democracia aún no constituía un valor compartido. Esedenominador común se puso de manifiesto en las situacio-nes de riesgo que vivió el país desde su recuperación, con losalzamientos militares primero, con la interminable sucesiónde presidentes provisionales tras la crisis del 2001, que en nin-gún caso llevaron a poner en duda su continuidad.

La preferencia de la ciudadanía por la democracia persis-tió incluso bajo condiciones adversas que, en otros contextoshistóricos, habrían desembocado en su quiebra.

La lealtad de la ciudadanía y de las fuerzas partidarias a lacontinuidad de la democracia constituye un piso invalorable queha logrado sostenerse aún en el marco de crisis institucionales yeconómicas que pusieron duramente a prueba su estabilidad.

El desafío que aún tiene por delante es cómo traducir esalealtad y compromiso en un renovado esfuerzo colectivo quepermita mejorar su desempeño, su contenido y su calidad.

Page 161: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 161

Breves conclusiones

Resulta decepcionante que la sociedad argentina sea hoymás desigual que en 1983 y que la brecha social haya aumen-tado con inédita celeridad durante esta etapa democrática. Unbalance de estas dos décadas y media revela logros incuestiona-bles que coexisten con retrocesos que ensombrecen el porvenirde la democracia. La renovada fe en el pluralismo y la conviven-cia democrática afirmada en estos años, convive paradójicamen-te, con un inquietante proceso de desigualación social que me-noscaba la condición ciudadana de millones de argentinos.

Una de las tareas prioritarias es superar esta deuda socialasumiendo que la reparación de esa brecha requiere mejoresinstituciones que eviten el clientelismo y paternalismo actual-mente dominantes. Es preciso avanzar hacia una visión queintegre el déficit social e institucional como tareas inseparablespues así como cualquier mejora institucional resultará insos-tenible dentro de una sociedad desigual e injusta, tampocologrará repararse esta deuda sin mejores instituciones quepermitan encauzar las respuestas.

La dura lección que arroja el persistente declive sufridopor este país sugiere que sin una mejora en la calidad de lasinstituciones, las políticas necesarias para enfrentar el déficitsocial pueden quedar condenadas al fracaso. En efecto, laimpostergable atención de las urgencias sociales no puedeconvertirse en una coartada para tomar atajos que compro-metan la calidad institucional. La experiencia democráticaabierta en 1983 revela lo dificultoso que ha resultado para susgobiernos conjugar progresismo social con calidad institucional.

Page 162: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Osvaldo Iazzetta162

Sin embargo, ello no debería impulsarnos a renunciar a esaaspiración, en especial si busca evitarse que el progresismo seconfunda con un incomprensible desdén por la instituciona-lidad. Traducir esa ecuación en políticas públicas audaces, esun desafío pendiente que, ni las recaídas socioeconómicas nilas persistentes emergencias invocadas por los gobiernos, ayu-daron a concretar. Aunque el progresismo no podría renun-ciar a fortalecer el Estado, recuperar su rol redistribuidor ypromover una mayor igualación, también comprende, y demanera no menos decisiva, una mejor institucionalidad quepermita disponer de mayores oportunidades de control sobrelos gobiernos electos.

Referencias

Botana, Natalio. (1997). “‘Hay liderazgos alternativos’”. Cla-rín, 30 de octubre del 1997.

Botana, Natalio. (2006). “Peligros del reeleccionismo”. LaNación, 3 de agosto del 2006.

Cavarozzi, Marcelo. (1983). Autoritarismo y democracia (1955–1983). Buenos Aires: Centro Editor de América Latina,Biblioteca Política Argentina.

Cheresky, Isidoro (Ed.). (2009). Las urnas y la desconfianza ciu-dadana en la democracia argentina. Rosario, Argentina: HomoSapiens.

Downes, Patricio. (2005). “Argentina, primera en desarrollohumano dentro de América Latina”. Clarín, 8 de septiem-bre del 2005.

Page 163: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los claroscuros de la democracia argentina... 163

Galak, Oliver. (2007). “Otra vez la economía”. La Nación, 21de octubre del 2007.

Mindez, Leonardo. (2008). “Cristina estrenó los decretos deurgencia para autorizar más gastos”. Clarín, 16 de sep-tiembre de 2008.

Obarrio, Mariano. (2007). “‘El cambio institucional va en se-rio’”. La Nación, 8 de diciembre del 2007.

O’Donnell, Guillermo. (1997). Contrapuntos. Ensayos escogidossobre autoritarismo y democratización. Buenos Aires: Paidós.

O’Donnell, Guillermo. (2007). Disonancias. Críticas democráti-cas a la democracia. Buenos Aires: Prometeo.

Palermo, Vicente y Marcos Novaro. (1996). Política y poderen el gobierno de Menem. Buenos Aires: Grupo Edito-rial Norma.

Portantiero, Juan Carlos. (1995). “Menemismo y peronismo:continuidad y ruptura”. In: Atilio Borón et al. Peronismoy menemismo. Avatares del populismo en Argentina. BuenosAires: Ediciones El Cielo por Asalto.

Quiroga, Hugo y Osvaldo Iazzetta. (1997). “Los consensosadquiridos y la nueva agenda democrática”. In: Quiroga,H. y O. Iazzetta (Eds.). Hacia un nuevo consenso democráti-co. Conversaciones con la política. Rosario, Argentina: HomoSapiens.

Sarlo, Beatriz. (2005). “‘Kirchner quiere demostrar que enArgentina el ganador se lleva todo’”. La Capital, 4 de di-ciembre del 2005.

Stang, Silvia. (2007). “El 10% más rico gana 30 veces más quela franja más pobre”. La Nación, 21 de junio del 2007.

Page 164: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier164

Page 165: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 165

POPULISTAS, EMBUSTEROSY CARBONÁRIOS: TENDENCIAS

ANTI INSTITUCIONALESEN LA POST-TRANSICIÓN

Bolívar Lamounier

Introducción

Un breve relevamiento del mapa político actual de Amé-rica Latina es suficiente para resaltar el excesivo optimismoacerca de la democracia que imperaba en la región hacen tresdécadas. Hoy en día, con mayor o menor razón, existe menorentusiasmo, y hasta cierta desilusión, con las presentes expe-riencias democráticas. Al lado de países como Brasil o Chile,generalmente considerados exitosos casos de consolidacióndemocrática, se distinguen casos de evidente retroceso auto-ritario, como la Venezuela de Hugo Chávez, así como otros,menos problemáticos, como Argentina, Bolivia y Ecuador.

Page 166: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier166

Incluso en el caso de los exitosos, no conviene subesti-mar la distancia que aún nos separa de una democracia decalidad aceptable e inmune a los retrocesos.

Nunca viene mal recordar que la democracia es un pro-ceso, y que la vida política, como toda construcción social,oculta contradicciones y conflictos. El problema es que lademocracia es al mismo tiempo un régimen de instituciones,como sugiere Walker (2009), o, si se quiere, un régimen ne-cesariamente republicano, delimitado por normas imperso-nales y reglas de juego a las que todos los participantes debenobediencia. Entre el proceso, siempre dinámico y contradic-torio, y las instituciones, que deben ser estables y en algunamedida restrictivas, existe una tensión inevitable. Es en estabrecha que surgen el populismo, el clientelismo, la corrup-ción, y no pocas veces, movimientos o partidos ideológica-mente confusos respecto a las reglas democráticas de repre-sentación política.

Observaciones preliminares

En Brasil, desde la transición, hubo momentos de im-portante decepción. Se debieron inicialmente a razones eco-nómicas objetivas, especialmente en el período 1985–94, cuan-do el país, habiendo salido mal de la crisis de la deuda y de larecesión de inicios de 1980, cayó en la trampa del bajo creci-miento asociado a la superinflación. Sobrevino en seguida lafrustración de expectativas en lo concerniente al control de lacorrupción y a la moralización de las prácticas políticas: al

Page 167: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 167

clamor nacional que llevó a la impugnación de FernandoCollor en 1992 siguió, ya en 1994, el escándalo de los “ena-nos del presupuesto”,1 que golpeó, de lleno, en el CongresoNacional.

Pero la sensación casi continua de desilusión que se ob-serva en toda América Latina, parece deberse también al re-sultado de insuficiencias precisamente conceptuales. Me re-fiero aquí a los “prototipos” o modelos cognitivos a los quelos formadores de opinión —políticos, periodistas, clérigos,académicos y otros— recurren para interpretar los aconteci-mientos y ordenar sus ideas en el día a día. Existe un pequeñonúmero de estos modelos que mantienen fuertes vínculoscon la historia y la cultura política, y, no es menos importan-te, se realimentan en el transcurso del propio debate público.Añádase que los objetos del mundo real sobre los cuales ellosinciden, no son de hecho susceptibles de aprehensión precisa—el lento proceso y los resultados a veces ambiguos de laconstrucción institucional, por ejemplo; la teodicea del clien-telismo y la corrupción; la mezcla de ilusión y verdad queexiste en toda producción ideológica.

En Brasil, como en casi todo el mundo latino, un prototipofundamental es el de la modernidad. La considero aquí en unsentido amplio, refiriéndome no solo a lo que la sociologíaacadémica denomina teoría de la modernización, sino también,

1 Diputados brasileños que a fines de los años 1980 y principios de los 1990 se vieronenvueltos en fraudes con recursos del presupuesto federal, hasta ser descubiertos einvestigados en 1993. Se caracterizaban por su baja estatura.

Page 168: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier168

o, sobre todo, al poderoso movimiento de ideas que tiene ori-gen en el iluminismo y que se manifiesta en corrientes filosó-ficas tan variadas como el marxismo, el positivismo de Au-gusto Comte, y la noción weberiana de la racionalización dela sociedad y la cultura. Subyacente a todas ellas, existe unacuriosa mezcla de pesimismo y optimismo: una visión de lasociedad como un cuerpo, por un lado casi incapacitado demoverse, o moviéndose con extrema lentitud debido al pesomuerto de su propio arcaísmo, pero condenado, por otro lado—y por fuerzas aún más poderosas— a moverse, diría hasta aalzar vuelo, rumbo a un futuro mejor que sería la verdaderanacionalidad, la verdadera civilización, la sociedad sin clases,etc. En este proceso, lo “viejo” comienza a ceder espacio a lo“nuevo”, y termina subyugado por este, sobreviviendo ape-nas en forma residual.

Aplicado a América Latina, este paradigma cuenta la his-toria de la democracia como un penoso proceso de supera-ción y supresión del oikos por la polis. Por siglos, las inci-pientes instituciones de la democracia se manifestaron in-capaces de evolucionar más allá de una mera pluralidadoligárquica y de emerger como una auténtica esfera públi-ca. En el plano de los intereses, el viejo molde del patri-monialismo, con su red de controles y favoritismos, as-fixia iniciativas y conductas guiadas por lineamientos eco-nómico-racionales de expansión y eficiencia. En las repre-sentaciones, creencias y valores relacionados al parentes-co, a la parroquia, a la región o a las corporaciones, frus-tran el desarrollo del pensamiento propiamente ideológi-co. En una competencia política, mientras que jefes oli-

Page 169: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 169

gárquicos y líderes modernos batallan, luchan entre ellos,el populismo —facilitado por el propio progreso económico,por la urbanización y por masas políticamente disponibles2—cobra volumen y se consolida como práctica política.

Otro paradigma o prototipo relevante es el que retrata ala política como una esfera aparte, diferenciada, existenteen todas las sociedades — y por lo tanto, “eterna”. En lavisión aristotélica, esa actividad diferenciada está, por de-finición, dedicada a fines nobles. ¿En qué consiste tal no-bleza? ¿Cómo explicar la presencia, en el mundo político,de tantos actores cuyas acciones nada parecen tener denobles? Reflexiones de éste orden comienzan generalmentepor la elaboración de tipologías, o sea, por la clasificaciónde diferentes tipos de actores políticos. De este modo, enla Vocación, Weber dirá que el (verdadero) político es aquelque vive para la política; los otros (el político convencio-nal, el clientelista, el simple operador), viven de la política,y existe aún, aquel otro, el político ideológico, sobre todoel militante, guiado por “fines últimos”, extramundanos;éste tampoco vive “para” la política: participa de ella, perono la valoriza como tal. En las huellas de Weber, Oakesho-tt añade, que el (verdadero) político se distingue del mili-tante ideológico en la medida en que persigue fines limita-dos (no “últimos”), y del simple operador o del clientelistaen las medida en que, para él, la política es self moved, auto-

2 “Disponibles” o “movilizadas” en el sentido utilizado por Huntington(1968).

Page 170: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier170

propulsada: una actividad que es autosuficiente, que en-cuentra en si misma su propio sentido (Weber 1919; Oakes-hott 1951).3

En la línea sugerida por el primer prototipo —la de la mo-dernización— la actual experiencia democrática brasileña, hasido objeto de calurosos y creo que merecidos loores. En unnivel relativamente elevado de complejidad económica y so-cial las instituciones se consolidan; la separación de poderesse vuelve eficaz; el juego político electoral arrastras a las prin-cipales fuerzas políticas hacia el centro, no obstante la perma-nencia de las diferencias ideológicas; el electorado se amplía,y la política pública se vuelve más inclusiva, universal, de modode corregir gradualmente sus antiguos prejuicios de grupo oclase social. Sin espacio, el populismo languidece.

El segundo prototipo, más bien político e institucional, ad-vierte del peligro de los avances logrados y la posible irrever-sibilidad de la democracia en Brasil. Basándome principal-mente en él, voy a tratar de describir algunas tendencias antiinstitucionales que me parecen haber ganado fuerza en el pa-sado reciente. Un rasgo fundamental del período posterior ala transición —o que se evidencia en ese período— es, en miopinión, una reconfiguración del espectro político-ideológico,señalando una atrofia tal vez prolongada del centro liberal y la

3 Obsérvese que Weber —al vez por caracterizar como “plebiscitaria” a casitoda la política electiva de las democracias y ver con buenos ojos el fenó-meno del carisma— y Oakeshott —aya a saber por qué razón no distin-guen el tipo populista, laguna inconcebible desde el punto de vista de loscientíficos sociales latinoamericanos—.

Page 171: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 171

consecuente hipertrofia de los sectores populistas, embusteros, y“carbonários”.4 Finalizados los regímenes militares y restable-cida la democracia, constatamos, en efecto, que los políticospor “vocación” escaseaban, siendo su espacio ocupado poraquellos que viven “de” y no “para” la política. La atrofia oencogimiento del “centro” se debe a varios factores, en com-binaciones variables de país en país, pero es, sin duda, causa yconsecuencia del empobrecimiento de la carrera política, en-tendida en el sentido liberal clásico, como actividad modera-dora de conflictos y servicio a la sociedad y el estado. Junto ala desaparición del centro, el colapso del marxismo y de loque restaba de las ideologías de extrema derecha, quedó elcampo abierto a un recrudecimiento del populismo, a un au-mento a primeras vista sorprendente del clientelismo (y de lacorrupción), así como al renacimiento de un nuevo actor—la izquierda “carbonária”.

Los tres planos de la construcción institucional

Supongo que algunos lectores, sobre todo los politólo-gos, se sienten incómodos con el lenguaje valorativo en elque se basa hasta aquí mi exposición. Espero disminuirles el

4 La reconfiguración mencionada parece haber ocurrido también en otrospaíses de América Latina, pero lo fue con mucha mayor claridad en elcaso brasileño. La expresión centro liberal, queda clara a continuación,con la ayuda de Max Weber; los conceptos de populista, embustero y “car-bonário” serán definidos en las partes pertinentes de este ensayo.

Page 172: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier172

malestar señalando que las cuestiones planteadas correspon-den a dilemas ampliamente discutidos por los estudiosos delproceso de construcción institucional de la democracia. Loque en efecto estoy sugiriendo, es que éste proceso implicapor lo menos tres focos problemáticos a saber:

1. La diferenciación y consolidación de las normas rela-tivas al régimen de estado y de gobierno; Este subpro-ceso implica de manera aguda el “sometimiento de locorpóreo por lo abstracto”, o sea, la construcción deinstituciones progresivamente capaces de neutralizarel mando personal y la arbitrariedad; a tal construc-ción se contrapone evidentemente, en América Lati-na, la actual recurrencia populista.

2. Autonomización del estado en su carácter específi-co de esfera pública, guardián por excelencia delinterés universal; a este sub-proceso se contrapo-nen el clientelismo y la corrupción, desgastando lasinstituciones políticas, sobre todo al poder legisla-tivo y a los partidos, comprometiendo la legitimi-dad de numerosos liderazgos y ahondando el des-gaste del centro.

3. La consolidación de las instituciones garantes de la li-bertad, del derecho de oposición y de la alternancia enel poder, o sea, la construcción de la figura de la oposi-ción legítima; en alguna medida ésta tiende a ser ero-sionada por el surgimiento de movimientos ideoló-gicos de extrema derecha o de extrema izquierda,incluyendo movimientos aparentemente no revo-

Page 173: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 173

lucionarios, más orientados por “fines últimos”, comoparece ser el caso, en el Brasil de hoy, del “izquierdis-mo carbonário”.

I. ¿EL FIN DEL POPULISMO?

¿Habrán alcanzado las sociedades latinoamericanas unestadio de modernización o un grado de madurez política quenos permita celebrar “el fin del populismo” —siendo figurascomo Chávez apenas un eco desafinado de tiempos pasados—o habrán en éste concepto elementos que trascienden a algúnmomento particular y apuntan a un fenómeno quizás “eterno”?

El término populismo aparece en la literatura sociológicay en el propio discurso político, con diversos significados, peroque se entrelazan en virtud de ciertos rasgos comunes. El re-ferente empírico es el mismo, pero existen distintas variacio-nes, dada la diversidad de los universos teóricos subyacentesa los múltiples enfoques. Por lo general, se trata de una formade poder fundado en la apelación directa del jefe a masas des-validas —ahora movilizadas o convertidas en “disponibles”por los procesos de modernización y urbanización— llama-do que en general, se reviste de una retórica o un simbolismosumamente demagógico.

En la vertiente marxista de esa idea básica, el populismose contrapone a una política estrictamente ideológica o de cla-se. Es una forma de liderazgo que recurre a la demagogia paraenturbiar los intereses de clase, amortiguando (pero a vecesexacerbando) reivindicaciones populares. En éste sentido,

Page 174: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier174

populistas serían los líderes que, manipulando categorías ge-néricas como “el pueblo”, “los pobres” o “la nación”, inten-tan oscurecer o retardar la maduración de la conciencia declase, en la medida en que mistifican el carácter de clase deuna formación estatal, o de determinada política económica,o del gobierno que la pone en práctica.5

Los economistas generalmente destacan la conducta fis-cal irresponsable, la caridad con el sombrero ajeno, un cultonostálgico del ideal de una economía autárquica etc.6

Por el momento, lo que importa es la suposición —co-mún a los enfoques mencionados— de que el espacio demaniobra del líder populista varía en sentido inverso al de lacomplejidad económica y social. Dicho de otra manera: elavance del proceso de modernización generará mecanismosauto correctivos, merced a los cuales el populismo se vol-verá no viable o inofensivo. En ésta línea, una nueva hipó-tesis que merece ser examinada, es la de que la sofistica-ción de los mecanismos políticos y del mercado financierode Brasil —en contraste, por ejemplo con Venezuela— han

5 A los efectos de un análisis de la literatura brasileña acerca del populismo,ver Lamounier (2005, pp. 140-3). Freidenberg (2007) ofrece una visiónactualizada del fenómeno en toda América Latina.

6 En la conferencia dada en mayo de 2010, en el Instituto Fernando Henri-que Cardoso (iFHC), Julio María Sanguinetti, ex presidente de Uruguay,subrayó que el líder populista necesita abundantes recursos financieros,pues es con dinero (público, evidentemente) que compra a políticos dis-puestos a debilitar al parlamento de adentro hacia afuera, y a los organiza-dores de masas, líderes sindicales y otros, para que lo hagan de afuerahacia adentro.

Page 175: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 175

funcionado con eficacia en el sentido de inhibir al popu-lismo. Al presentir inclinaciones populistas en el gobier-no, el mercado financiero fija online los precios a los quesu impacto pueda dar lugar, configurándose de éste modo,un movimiento preventivo que es, al mismo tiempo, unacontinua presión (antipopulista) en el sentido de la racionali-dad económica.

Naturalmente, las condiciones que favorecen la aparicióndel líder populista no le aseguran, necesariamente, éxito en laconquista y el ejercicio del poder. Liderazgos populistas pue-den incluso prosperar en estadios avanzados de moderniza-ción. Recordemos que la idea de modernización implica he-terogeneidad —un largo período histórico en el que lo mo-derno convive con lo arcaico, la riqueza con la miseria, etc.—.En tales condiciones, grandes agregados sociales pobres, peromovilizados, continúan funcionando como incubadoras depopulismo. Pero si esto crecerá hasta el punto de convertirseen un riesgo para la democracia representativa, ese es otroproblema.

La perspectiva institucional

De hecho, lo que parece faltar en los enfoques anterior-mente mencionados, es un foco explícito sobre los elemen-tos que convierten al típico ideal populista en una amenaza alorden constitucional de la democracia. Entre tales elemen-tos, se destacan, desde mi punto de vista, el personalismo y lapropensión plebiscitaria.

Page 176: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier176

En un artículo reciente, haciendo referencia a la onda neopopulista que ahora se observa en varios países de AméricaLatina, Fernando Henrique Cardoso va directamente al punto:

“El populismo es una forma insidiosa de ejercicio delpoder que se define esencialmente por prescindir de lamediación de las instituciones, del Congreso, de los par-tidos, y por basarse fundamentalmente en el vínculo di-recto del gobernante con las masas, fundado en el inter-cambio de dádivas.”

El aspecto puesto de relieve por Fernando Henrique, esla propensión del populista a agredir a las instituciones, a su-perponerse a ellas, a corromperlas haciéndolas postrarse a suspies. De hecho, según tengo entendido, la tendencia anti ins-titucionalista constituye indicio suficiente de una intrínsecaincompatibilidad entre el populismo y el estado democráti-co. Entre éstos hay de hecho una brecha insuperable, una vezque el líder populista infringe, por lo menos, tres condicio-nes esenciales del orden democrático: la impersonalidad, la le-galidad (el funcionamiento efectivo de las restricciones cons-titucionales) y la moderación, obligación legal (para esto existela separación de poderes), pero también moral a la que el go-bernante democrático está sujeto.

Lo abstracto y lo corpóreo

Señalemos sin embargo, que las tres condiciones ante-riormente mencionadas, no tienen en el mundo real, la deli-mitación precisa que el lenguaje jurídico vanamente les in-

Page 177: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 177

tenta conferir. En la vida política real, impersonalidad, legali-dad y moderación, se refieren a actitudes relacionadas al com-portamiento, o mejor dicho, a un flujo de posicionamientos(prácticos y simbólicos) dentro de los cuales el líder o gober-nante se sitúa a medida que va construyendo su identidadpública.

El flujo en cuestión puede ser imaginado como la distan-cia que separa lo abstracto de lo corpóreo. Para corroboraresta idea, lo ideal sería recuperar los numerosos y pertinentesarquetipos que la historia y la literatura nos ofrecen, pero unejercicio de este tipo nos apartaría bastante de los objetivos deeste texto. Partamos entonces, de la simple constatación deque el populismo reivindica una legitimidad de naturalezacarismática, no racional-legal; que la médula de todo popu-lismo es, por lo tanto, personalista, implicando un rechazovisceral a la vocación universal de las leyes, y la estabilidad y“exterioridad” de las instituciones. El gran guía, el conductorde masas, se considera legítimo porque se identifica con losconducidos; porque su relación con ellos es emotiva, caluro-sa, carnal, no porque acepte y respete las restricciones legalese institucionales. En términos típicos ideales, estamos, en-tonces, hablando de un flujo que va de un personalismo to-talmente anti institucional a un institucionalismo en el cualel gobernante como individuo se auto diluye y se presentacomo un simple intérprete de los fundamentos abstractos delorden político. En el plano de la creación artística, el trágicocuadro pintado por Shakespeare en Julio César (1601), resultainsuperable. Por un lado (escena II), el César que emerge delelogio fúnebre de Marco Antonio: el gobernante ideal que en

Page 178: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier178

el fondo se parece, en defectos y virtudes, en pasiones y en eluso de la razón, a cualquiera de los integrantes de la turbaamontonada en las escalinatas del senado; por otro, el idealde Bruto, un magistrado descarnado, sin ambiciones, que sesatisface con liderar una república fundada en principios einstituciones. Bruto amaba a César, pero lo mató, porque eramucho mayor su amor por Roma. En el polo institucionaldel flujo, Bruto declara, que las señales de que César se deja-ría embriagar por la ambición dictatorial, fueron las que mo-vieron su mano. Marco Antonio, se coloca en el polo opues-to. Desde su punto de vista, lo que importa, es la densidadindividual del líder. La valentía, la sabiduría y la bondad de unCésar, no la rectitud ascética del magistrado, que apenaspretende encarnar un orden institucional abstracto.

Es cierto que todo presidente, aún el de los EE.UU., esen cierta medida, “carismatizado” por el simple hecho de serelecto por una circunscripción electoral7 nacional. De manera si-milar, en los regímenes parlamentaristas, existe algún gradode consagración carismática de los líderes de partido, en lamedida en que compiten en la arena electoral por el apoyoque necesitan para convertirse en primeros ministros. El pro-blema en América Latina es la virulencia anti institucional aque tales disputas, por regla general, dan lugar.

Creo no exagerar si digo que en América Latina el siste-ma presidencialista es apreciado, no por la rígida separaciónde poderes que en forma abstracta lo caracteriza, sino por el

7 “Constituency” en el original.

Page 179: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 179

contrario, por la percepción de que en él, el poder de mandodel jefe de estado cobra de éste modo, un volumen en el quela separación de poderes se vuelve prácticamente inoperante.En nuestra región, por lo general, el presidente de la repúbli-ca, se ve y es visto como portador de una predominante legi-timidad, superior a la de los otros poderes. Dicho de otramanera, en nuestra cultura política, el sentido pleno de lamagistratura presidencial, se revela cuando el ocupante delcargo deja entrever o asume sin complejos la exuberancia per-sonalista y plebiscitaria que presupone el prototipo populista.La incompatibilidad entre esta concepción y la democraciarepresentativa es evidente. Para llevar a cabo su supuesta mi-sión de conducir al “pueblo” en contra de las “elites”, a la“nación” contra el “imperialismo”, etc., el presidente se agran-da como una entidad corpórea, no solo por encima del poderlegislativo y de los partidos políticos, sino que de toda la plu-ralidad social, contraria o en abierta refutación de las normasconstitucionales.8

En el seno del populismo existe, por lo tanto, una ten-dencia a agredir a la legitimidad considerada “abstracta” y “ané-

8 La amenaza del populismo hacia las instituciones no hace necesario que ellíder populista tenga realmente la intención de golpearlas; basta (alcanza)con el efecto de sus “bluffs” desencadenando reacciones de enfrentamien-to entre sus adversarios. Los conflictos estallan como un proceso de ex-pectativas encadenadas mutuamente (interlocking expectations). En la crisisbrasileña de 1961-1964, queriendo obligar a su cuñado Jango a corrersehacia la izquierda y a anticipar la elección presidencial prevista para 1965,Leonel Brizola subrayaba sus encendidos discursos con amenazas del tipo“Reforma agraria por la ley o por la fuerza” y “Yo cierro este Congreso”.

Page 180: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier180

mica” de todo y cualquier marco institucional; en el peor delos casos, una opción por un orden político des regulado, ape-nas sujeto al capricho del gobernante. Llevado a su conclu-sión lógica —y de esto hay ejemplos en situaciones de cri-sis— la ilusión populista de un orden rigurosamente verticalse aproxima a su opuesto, el desorden pretoriano, toda vezque no puede haber política donde no hay un mínimo razo-nable de regulación en la lucha por el poder.

En lo que se refiere a América Latina, las decisiones yconductas que intenté describir anteriormente como posi-cionamientos a lo largo de un flujo, deben ser analizadas enrelación al problema de la construcción institucional de lademocracia. Para construir las instituciones, el estadista de-mocrático deberá, en alguna medida, encarnarlas o corpori-zarlas. Le corresponde proveer, a su tiempo, la materia (prác-tica y simbólica) de la que se nutren las formas instituciona-les. Por el contrario, lo que hace el populista, es absorberlas,encubrirlas y bastardearlas. Haciendo uso de una retóricaambigua, mezclando respeto y burla, lo que hace es oscurecer elsentido de ellas, dado que su real objetivo es el de subordinarlasa sus intereses y tácticas de movilización plebiscitaria.

II. ¿QUE REPRESENTAN LOS EMBUSTEROS?

La idea de democracia, en el sentido manifestado al co-mienzo de este texto, implica la de un estado republicano, osea, la existencia de reglas claras, aplicadas con gran efectivi-dad y separando la esfera pública de la privada — en lo relati-

Page 181: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 181

vo al acceso, uso o apropiación de bienes y servicios. El esta-do no se apropia arbitrariamente de los patrimonios privadosy no permite que particulares —individuos, empresas, cor-poraciones— se apropien del patrimonio público. Base sinequa non de ciudadanía en el mundo moderno, la separaciónentre esas dos esferas tiene como fundamento una aplicaciónuniforme y rigurosa de la ley. Las conductas que los sociólo-gos denominan “patrimonialismo” y “clientelismo” consti-tuyen negaciones de este conjunto de principios.

No fue feliz el entonces candidato, hoy presidente, LuizInácio “Lula” da Silva, cuando declaró, en 1993, que no pasa-rían de embusteros al menos 300 de los 513 diputados fede-rales. Su célebre golpe reforzó seguramente cierto sesgo antipolítico (anti institucional) que es sabido que impregna a laopinión pública, pero en nada contribuyó a aclarar los con-ceptos de clientelismo y patrimonialismo, y mucho menos acomprender los importantes dilemas de la política represen-tativa a los que ellos remiten.

Partiendo de la realidad brasileña, uno de los dilemasmencionados es el de cómo conformar una mayoría confia-ble y legítima en el Congreso Nacional. No es de hoy, quepolíticos, periodistas, y politólogos, vienen señalando la dificul-tad de conformar una mayoría en el Congreso brasileño, dado elalto grado de fragmentación de nuestro sistema partidario. Entrenosotros, mayoría quiere decir una alianza multipartidaria, he-terogénea y poco sensible a llamamientos altruistas cuando eltema implica la adjudicación de recursos presupuestarios —osimplemente cuando determinada votación es percibida comocrítica para los intereses del poder ejecutivo.

Page 182: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier182

En un plano teórico más amplio, éste es un tema pocodiscutido, pero muy importante para la reflexión democráti-ca. Weber lo abordó descriptivamente en la Vocación, pero sindarle la debida relevancia a las implicancias valorativas quecontiene. La cuestión es, ¿para qué sirve, finalmente, el polí-tico parlamentario común? —los diputados federales y esta-tales, y los concejales que ocupan posiciones medias o bajasen sus respectivos ámbitos de acción—. Para el demócrataconvencido— aquel que respeta a las instituciones represen-tativas como un valor en sí mismo —tal búsqueda carece desentido, y hasta parece partir de una premisa antidemocráti-ca—. Finalmente, la política parlamentaria es la sustancia dela institución legislativa. Se puede entonces decir, que es coextensiva al sistema democrático; y tan es así, que los forma-dores de opinión generalmente cuidan que las denuncias deciertas enfermedades empíricamente comunes en el poderlegislativo —nuevamente el clientelismo, la corrupción, nosalpiquen a la institución como tal.

El parlamentario común, el político medio bajo, ¿repre-senta intereses? ¿Ayuda a administrar conflictos? ¿Suscribeleyes? Si, él desempeña estas funciones, pero parcialmente, ycuanto menos de lo que parece, más adelantadas y estables lasdemocracias. Lo que se puede afirmar con certeza, es que éldomina, es el personaje principal, la parte sumergida del ice-berg democrático representativo: aquel inmenso engranajeque emerge en los municipios, se agrega en los estados, y seestrecha en el plano federal.

Existen algunas preguntas para las cuales la ciencia políti-ca carece de respuestas satisfactorias. De arriba a abajo, pen-

Page 183: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 183

sando en el apoyo que la cúpula gubernamental necesita, ¿pue-de la democracia funcionar sin un engranaje de tal dimensión? Ysin él —de abajo hacia arriba— ¿quedarían bien atendidos loslegítimos intereses locales de millares de localidades y munici-pios que dependen de la ayuda federal para sobrevivir?

En el mundo real, el político medio bajo no es una cate-goría homogénea. Mínimamente, es necesario distinguir en-tre el operador “puro”, profesional, aquel que vive de la polí-tica, pero podría acomodarse a cualquier otro medio que leproporcionase beneficios comparables, y aquel que tambiénvive de la política, pero se acostumbra a ella y, en muchoscasos, hasta desaprende de vivir fuera de ella. El primero ac-túa en el medio político sin integrarse totalmente a él, el se-gundo lo adopta como una segunda naturaleza. En el día a díaperiodístico, ambos suelen ser designados como clientelistas,lo que es cierto comparado con el “verdadero” político webe-riano, pero sus motivaciones, remuneraciones y objetivospueden diferir bastante. A los primeros, la política les pro-porciona oportunidades de ganancia material, sea directamen-te, bajo la forma de una renta o de oportunidades empresa-rias, sea la de acceder a círculos deliberativos e informacio-nes, recursos convertibles en poder, y, después, indirectamen-te, en posibilidad de ganancias. A los segundos, lo que la po-lítica les proporciona, es una sensación de visibilidad y presti-gio, y tal vez, sobre todo, la recompensa sicológica de sentirse“agrupado” en un ambiente que de otro modo, nunca llega-rían a conocer.

Concretamente, como diría el Consejero Acácio, las mo-tivaciones y sus alteraciones en el tiempo, son más complejas

Page 184: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier184

que las sugeridas por el tipo abstracto. Es razonable suponerque una parte, tanto de los clientelistas propiamente dichoscomo de aquellos que aquí denomino operadores profesio-nales, poseen auténticas convicciones democráticas cuandoson electos, o que las adquieran on the job, siempre y cuandopermanezcan en carrera. En este sentido, el clientelismo—vuelvo aquí al sentido amplio, abarcando a los dos subtiposde antes— es ambiguo. Con respecto a la línea divisoria entrelo público y lo privado, es, por definición, deletéreo. La nor-ma en la esfera pública, es universalizar el acceso a bienes yservicios, y el del clientelismo es restringirlo a subgrupos —estén estos definidos por parentesco, por vínculos de apoyoelectoral o por cualquier otro criterio—. No obstante, la con-ducta, por definición restrictiva o particularista, no impideque políticos clientelísticos personifiquen y hasta se convier-tan en defensores de aquel consenso en cuanto a los procedi-mientos (procedural consensus), sin lo cual, la democracia nopuede funcionar satisfactoriamente. En éste sentido, los “em-busteros” de la teoría lulo-inaciana no se diferencian necesaria-mente de los verdaderos políticos imaginados por Weber y porOakeshott —los que ocupan la cúpula de la política nacionalo al menos el sector medio-alto de la política legislativa.9

Como nadie ignora, en la percepción del ciudadano co-mún, el político parlamentario es el Belcebú del sistema degobierno, el autor y beneficiario principal de expedientes, tra-

9 Creo que esta afirmación es válida para las democracias representativas demanera general, no solamente para la brasileña.

Page 185: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 185

moyas, desvío de recursos y sabe Dios qué más que corroe lalegitimidad de la política representativa, manteniéndola, porasí decir, en el mínimo nivel de viabilidad al borde del colapso.

Grave, obviamente, no es que el ciudadano se indignecon travesuras reales, es la facilidad con que él no ve más quefraudes donde solo hay un normal intercambio de apoyos, oque acepte como travesuras reales muchas que son puramen-te imaginarias —exagerando, de todos modos, el impacto detodas ellas y descreyendo cada vez más, de los mecanismosauto correctivos que la democracia es, en teoría, capaz de po-ner en acción en los tres poderes.

Pero, ¿donde terminan los compromisos y los intercam-bios inherentes al engranaje de apoyo —el toma y daca políti-co— y comienza la corrupción propiamente dicha? En Bra-sil, ésta es la pregunta que no se quiere callar, pues existen,efectivamente, indicios de que el clientelismo sufrió muta-ciones importantes —cambió de escala y de función— entre-lazándose con la corrupción mucho más estrechamente queen el pasado.10

De hecho, durante la segunda mitad del siglo XX, el ver-tiginoso crecimiento de la maquinaria del estado transformómiles de funciones públicas en palancas de poder y enrique-cimiento. La maquinaria pública alcanzó nuevos niveles en

10 El resto de esta sección recicla fragmentos de mi contribución a Raízes doBrasil, edición conmemorativa de los 70 años de la publicación del clásicode Sérgio Buarque de Hollanda (Hollanda 2006); agradezco a sus organi-zadores, Ricardo Benzaquen de Araújo y Lilia Moritz Schwartz, por per-mitirme la presente reproducción de este fragmento.

Page 186: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier186

términos de gigantismo y voracidad tributaria. Se transformóen un gran comprador de bienes y servicios, desde los mássimples materiales de limpieza hasta complejos servicios deinfraestructura, del simple mantenimiento de equipos, hastacaros y exquisitos servicios publicitarios. Gatillos rápidos, cien-tos de “empresarios clientelistas” rápidamente se pusieron enacción, para poder explorar este mundo de nuevas oportuni-dades, introduciéndose en el vasto laberinto de las licitacio-nes y de las contrataciones de servicios.

No menos grave, es que el más poderoso de los prototiposinterpretativos que circulan en América Latina, el de la mo-dernización, refuerza poderosamente la aludida percepcióndel ciudadano común. Creo que esto ocurre porque, en lamedida en que manejando herramientas analíticas inadecua-das, el paradigma de la modernización termina por instalar al100% del clientelismo en el pasado, o sea, en el polo arcaico,nos deja indefensos para entender porqué aumenta, cuandotodo indica que debería terminar.

Usando la propia terminología de la teoría de la moder-nización, mi sugerencia es distinguir dos tipos de clientelis-mo. Si el primero, tradicional, evoca el parentesco y la pe-queña comunidad, el segundo, moderno, tiene como escena-rio el conjunto del espacio económico. Si aquel es una exten-sión natural de los vínculos primarios, éste se basa en estrate-gias autónomas de ganancia y poder político. Si el clientelis-mo tradicional languidece —y existen buenas señales en esesentido— el moderno exuda vigor y juventud.

Sin duda declinó, desde la segunda post-guerra, el clien-telismo folklórico del “voto cautivo”, de la nominación de

Page 187: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 187

apadrinados para el empleo público, y de la carta de reco-mendación para becas de estudio. Esto de hecho pasó, se fir-mó, sin embargo, se exageró el clientelismo híbrido de co-rrupción de la época actual. Este no vive solamente en fun-ción del efecto invernadero electoral, y mucho menos deldeclinante electorado rural. Su locus nascendi es el proceso de-cisorio en sí; Tiende a aparecer donde quiera que exista in-certidumbre y posibilidades de arbitraje en el engranaje gu-bernamental, con sus tres niveles federativos, y en sus nume-rosas interfaces con el sector privado; donde quiera que unaasignación específica deba o pueda ser hecha, en lugar de apli-car una regla general. Su lógica es la de valerse de dificultadespara vender facilidades. Es lo que típicamente sucede en lacontratación de obras públicas, en la amplia gama de licita-ciones, en la planificación y ejecución de pagos, en los présta-mos amigos de los bancos oficiales, o en la contratación deactividades publicitarias, siempre llenas de especificidades.Moderno, complejo, high-tech, este clientelismo mezclado concorrupción, crece tanto más cuando la operación de la má-quina pública implica altos costos y valores no susceptiblesde estimación precisa.

III. “CONTRA TODO LO QUE ESTÁ ALLÍ”: LA TEORÍAPOLÍTICA DEL IZQUIERDISMO “CARBONÁRIO”

En América Latina, una característica notable del debatepúblico posterior a la transición, fue la admisión prácticamenteuniversal de la necesidad de reformas sociales. Desde enton-

Page 188: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier188

ces, las agendas políticas nacionales — respaldadas en éste as-pecto por un amplio movimiento de ideas en el mundo aca-démico y en organismos internacionales — llegaron a reco-nocer como indiscutibles la iniquidad y la insostenibilidad enel largo plazo de las condiciones existentes de pobreza y dis-tribución de la renta.

De este modo, por más difícil que se presentaba inme-diatamente después de la transición el cuadro de reivindica-ciones sociales y la lucha política, resultaba palpable el surgi-miento de un ámbito de convergencias, tanto en el plano ideo-lógico como en el de la formulación de políticas públicas. EnBrasil, este ámbito fue reforzado por la retracción del marxis-mo en sus formas políticamente más agresivas —consecuen-cia, por un lado, de la derrota de los movimientos de luchaarmada, y por otro, la debacle del socialismo del este euro-peo— y luego, por la reorientación del modelo chino en elsentido de un capitalismo de estado. En ésta situación, era deesperar que las disputas políticas y partidarias iban a ser enca-minadas por orientaciones más realistas, pragmáticas y mo-deradas, como por otra parte, sugería en los países más desa-rrollados, la creciente literatura sobre la “lucha de clases de-mocrática”.

Empero no fue esto lo que se verificó —indudablementeno en la primera década posterior a la transición (1985-95)—. En un primer momento, la novedad fue la aparición de unaizquierda con fuertes rasgos maniqueos y hasta mesiánicos,cuya organización básica, ya insinuada en los movimientosde base de la iglesia católica, se convertiría en el PT (Partidode los Trabajadores). Heterogénea, carente de una organiza-

Page 189: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 189

ción jerárquica rígida, y tal vez por ello, capaz de una capilari-dad social notable —esta nueva izquierda adoptó un discursode reforma social de un sabor bastante moralista y clara incli-nación anti constitucional—. Tal inclinación se hacía eviden-te, desde luego, en un ideal de participación “de base” y “asam-bleísta”, con una ambigüedad, por decir lo menos, respecto ala democracia participativa. Es a esta izquierda a la que mereferiré de aquí en más, con las expresiones “izquierdismo”,“movimientismo”, y “romanticismo carbonário”.11

No cabe hacer aquí una extensa exploración de los oríge-nes intelectuales y políticos del “izquierdismo carbonário”.Voy a hacer solamente una breve referencia a algunos de ellos.

Primero, lo que parece ser una paradoja brasileña: unaamplia difusión de la mencionada ideología, en diferentes sec-tores de la sociedad brasileña, en el preciso momento en quegrandes acontecimientos internacionales apuntaban en el sen-tido contrario. En nuestro caso, con el fin del comunismoocurrió que también el anticomunismo casi se terminó, sedesvaneció rápidamente,desapareciendo de éste modo, unade las grandes barreras ante la difusión del pensamiento deizquierda en todas sus formas. Consumado formalmente en1985 el retorno al régimen democrático y aproximándose in-

11 El adjetivo “carbonário” se remonta al siglo XIX, a los miembros de unasociedad secreta y revolucionaria, de principios libertarios, fundada enItalia alrededor de 1810 y con acción en Francia y Portugal durante lossiglos XIX y XX. Esto grupo de revolucionarios románticos se reunían enuna antigua mina de carbón.

Page 190: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier190

ternacionalmente el fin de la guerra fría, distintos factoresideológicos, culturales y de comportamiento, que antes res-tringían la difusión de las ideas de izquierda, perdieron fuer-za, con lo que tales ideas se volvieron, en un corto tiempo,“aceptables”, en ámbitos y entornos que hasta entonces leshabían sido refractarios. Más moralista que marxista, la ten-dencia “carbonária” fue con mucho la que más se benefició.

En éste contexto, resulta importante recordar la reorien-tación que se venía produciendo en la iglesia católica desdeMedellín. Despojándose del reaccionarismo a ultranza que lacaracterizaba en América Latina hasta los años 1960, la igle-sia, a través de sus pastorales así como de otras iniciativas,realizó un fuerte giro hacia un activismo reformista. La auto-ridad y experiencia políticas que ella adquiriera en la resisten-cia contra los regímenes de excepción del Cono Sur, amplia-ron, indudablemente, el alcance de tal reorientación. De éstemodo, directa o indirectamente, la iglesia fue por lo tanto,una poderosa fuente de estímulo y legitimación del “movi-mientismo” de izquierda como forma de compromiso en lalucha política.

Un tercer punto a considerar, es la conciencia, en aquelentonces creciente, del bajo grado de organización de la so-ciedad brasileña. Por motivos conocidos, relacionados contodo el modelo de nuestra formación histórica, la sociedadbrasileña carecía —como sucede hasta hoy— de “cuerpos in-termediarios”, sedimentados y autónomos. Fortalecer a la “so-ciedad civil” —entidad descubierta o inventada en el curso delas luchas contra el régimen militar— habría de ser, por con-siguiente, un punto clave en la agenda movimientista con vistas

Page 191: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 191

a la construcción de un nuevo modelo de democracia. Con elcorrer de los años, esta línea de pensamiento desembocaríaen una vaga concepción de “democracia directa”, cuyas uni-dades básicas no son los individuos, sino movimientos y cor-poraciones, como veremos más adelante. De este modo, enlas últimas tres décadas —con matices y especificidades queno resulta necesario recordar aquí—, el movimientismo atra-jo a grupos y organizaciones de diversas procedencias: rema-nentes de la extrema izquierda marxista, anteriormente com-prometidos con la lucha armada; el clero inspirado en la “teo-logía de la liberación”, en especial aquel vinculado a las pasto-rales — la Pastoral de la Tierra sería una influencia importan-te en el surgimiento del MST (Movimiento de los Trabaja-dores Rurales Sin Tierra); corrientes sindicales izquierdiza-das, cuyo principal ejemplo se convirtió en el CUT (CentralÚnica de los Trabajadores), además, por supuesto, de acadé-micos, estudiantes y profesionales liberales en búsqueda denuevas causas e identidades.12

Anteriormente hice referencia a cierto sustrato románti-co que me parece existir en ese izquierdismo movimientista

12 La izquierda “carbonária” también incluye un sector que tiene interés, notanto en el poder en sí, sino en las prebendas y sub productos pecuniariosa que él da acceso, y otra a la cual no son extrañas ciertas incursiones quelindan en lo ilícito. Tales conductas tienen relación con la movilidad so-cial a través de la política, fenómeno que Leôncio Martins Rodrigues hadescrito astutamente en sus trabajos. El riesgo de enfatizar el discursoideológico es el de tomar gato por liebre, olvidando que los mecanismospartidarios también son impulsados por los intereses materiales de susintegrantes, como lo remarcaran Weber, Michels y otros.

Page 192: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier192

“carbonário”. De hecho, sobre todo en sus principios, los gru-pos que se reunieron en esta corriente político-ideológica,tenían una actitud activista en común, una predisposición a laacción directa, y finalmente, una aprobación de la violenciacomo medio, todo ello vivido anticipadamente, o sea, román-ticamente, como la víspera de la gran redención: la creaciónde la igualdad y la justicia en un horizonte histórico casi visi-ble a simple vista. Y no hay como hablar acerca del horizontehistórico, sin señalar inmediatamente la total carencia de per-cepción histórica que caracteriza el imaginario movimientis-ta romántico.

Fiel descendiente de Rousseau y del romanticismo polí-tico, cuya aversión a los “convencionalismos” comparte, elmovimientismo se opone visceralmente a la institucionali-dad liberal-democrática. Para él, democrática es la voluntadgeneral, y del pueblo, el asumir colectiva y directamente elcontrol de las decisiones. Puesto que sin embargo, el ejerci-cio directo del poder social por parte de una junta de masasno pasa de una piadosa ficción literaria, los adeptos a la doc-trina terminan concediendo un descuento. Aceptan que lademocracia “directa” pueda ser ejercida por interpósita per-sona —o sea, indirectamente, por “movimientos populares”,organizaciones corporativas, entidades profesionales, clerica-les etc., que de esta manera se transforman en poseedores deuna especie de legitimidad primordial—. Desde éste puntode vista, sustituir o de alguna manera subordinar a represen-tantes electos, portadores de la legitimidad que únicamenteel voto libre e individual de todos los ciudadanos puede con-ferir, no llega a ser una dificultad. Quien decide acerca de la

Page 193: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 193

legitimidad de un sistema es él, el “pueblo”, la “sociedad or-ganizada”. El carácter, democrático o no, del sistema (repre-sentativo) existente, pasa así a depender de una evaluaciónsubjetiva a ser hecha por el “pueblo” —o sea, por quien searroga el derecho de hablar por él.

Como se puede ver, la democracia, en el discurso ideoló-gico que estoy intentando desenredar, no tiene nada que vercon conceptos “formales” como el imperio de la ley (rule oflaw), elecciones libres y periódicas, separación de poderes, etc.El modelo “movimientista” de estado —si cabe la expresión—es una “democracia directa” en la que los electores individua-les son sustituidos por movimientos organizados —y de nadasirve reflexionar, a la luz de numerosos ejemplos del sigloXX, que éstos serán a su vez, sustituidos por sus respectivasdirecciones, compuestas por burócratas, activistas profesio-nales y elementos de vinculación con el partido que los re-presenta en la arena política institucional.

En este contexto, la propia invocación de la idea de de-mocracia requiere de una reserva. En la visión movimientis-ta, las distinciones clásicas entre regímenes no tienen un pesocomparable al que tienen en la teoría política liberal demo-crática. El valor de un régimen depende de su capacidad dehacer justicia (en el sentido anteriormente señalado); por lotanto, la democracia, asociada históricamente al capitalismo,es un régimen permanentemente sub judice, o sea, aceptadocomo un mal menor, prescindible en caso de no parecer ade-cuado como vehículo para alcanzar dicho objetivo (la justi-cia). Por lo tanto, en el fondo, los regímenes políticos sonequivalentes, o dicho de otra manera, su valor solo puede ser

Page 194: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier194

comprobado en función de situaciones específicas y en tér-minos esenciales. Siendo por definición esencial, democracia“verdadera” es la que realiza justicia social; coincide por lotanto, en el límite, con el socialismo.

Hasta aquí, me esforcé por describir el discurso teórico:el conjunto de definiciones, premisas e imágenes valorativasque, sin demasiada dificultad, se pueden extraer del lenguajehabitual del PT, del MST y de otras entidades y movimientosque se autodefinen como el “campo popular”. Como otrascorrientes de pensamiento derivadas de Rousseau, el princi-pio de la historia es como un big bang, un súbito consensomediante el cual la sociedad, viéndose a sí misma como unaasamblea, instaura un régimen de democracia directa y pro-clama su propósito de buscar la inmediata realización de lajusticia real. Pero, como escribió el poeta, en medio del cami-no hay una piedra —y la piedra, en éste caso, es la realidad, elcarácter profundamente heterogéneo de la totalidad social, laexistencia de intereses e ideas contrapuestos— en una pala-bra, la historia. ¿Cómo llevar a cabo en la historia una con-cepción de justicia que finalmente es apenas la de un partido,la de una corriente de pensamiento? Sostener una concep-ción rousseauniana y sustantiva de justicia, y al mismo tiem-po, reconocer las “resistencias” que le antepone la historia,genera una dificultad no despreciable. La conciliación en eldilema —para acortar una argumentación bastante más lar-ga— sólo se puede dar en el plano de la escatología; será obradel fin de la historia, el advenimiento de la racionalidad, delmilenio, de la sociedad sin clases —y su exacta denominaciónno viene al caso—. El momento actual, el horizonte histórico

Page 195: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 195

que nos es dado develar, es por lo tanto, apenas una frase, unaetapa en una larga sucesión. Lo que importa (y afirma nuestracreencia), es que otros activistas y movimientos lucharon poresa idea de justicia antes que nosotros, y que otros continua-rán haciéndolo después nuestro, con la misma dedicación, lamisma pureza de alma, y, porqué no decirlo, con la mismaintransigencia.13

Una premisa fundamental de la teoría liberal-democráti-ca es la de que ningún partido ejerce la totalidad del poder.Para impedir ambiciones totalizadoras, existen mecanismosconsolidados, como la separación de poderes, el bicameralis-mo, el multipartidismo, y naturalmente, las garantías consti-tucionales de libertad de prensa y de asociación, entre otras.Para impedir el continuismo —la proyección de tales ambi-ciones en el futuro— existen, más allá de los mecanismosmencionados, las figuras político-jurídicas de la legítima opo-sición y de la alternancia. La permanencia de un partido en elpoder por más de un mandato, se vuelve legítima, obviamen-

13 Este pensamiento ha sido reiterado en virtualmente todas las asambleas yen todos los documentos relacionados al izquierdismo “carbonário”. Enuna parte del documento final del seminario realizado por el PT en Sal-vador, en 2007, en ocasión de su 27º aniversario, se puede leer lo siguien-te: “los ocho años del gobierno de Lula deben ser vistos desde una pers-pectiva estratégica de transformaciones económicas, sociales, políticas yculturales, amplias y duraderas. Los cambios que introducirá en nuestrasociedad y sistema político no pueden apenas ser una brecha progresistaen una historia conservadora, sino el comienzo de un largo ciclo de trans-formaciones iniciado por el mandato presidencial de un trabajador, por elPT, y por una coalición de partidos de izquierda y sus aliados democráticos”.

Page 196: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier196

te, en el caso de sucesivas victorias en elecciones libres y lim-pias.14 Pero la premisa fundamental, es la alternancia. El jue-go situación x oposición pertenece a la esencia del sistemademocrático. De ello se deduce que la concepción del tiem-po subyacente al estado democrático republicano es cíclica,pues refleja la centralidad teórica y ética de cortes temporalesrelativamente cortos: los mandatos electivos. Tal concepciónes evidentemente adversa a toda escatología que ve el cicloactual como un simple eslabón en un encadenamiento o “pro-yecto de poder” a largo plazo. Un punto de manifiesta in-compatibilidad tiene que ver con la equidad de los procesosdemocráticos. Imbuidos de la escatología anteriormente su-gerida, los adeptos a determinada corriente política puedenverse tentados a interpretar las reglas de juego de un modoauto indulgente o (self righteous), minimizando la gravedad desus eventuales infracciones a la ley comparado con el objeti-vo principal representado por la victoria electoral; e inclusoésta, comparada con el fin último que es la justicia, puede, enanálisis final, ser entendida como un simple medio dentro dela larga cadena a la que la historia nos obliga.

Las anteriores reflexiones me llevan a pensar que existeuna zona potencialmente muy conflictiva entre la concep-ción “carbonária” del mundo y algunas de las premisas cen-trales de la teoría liberal democrática. Los puntos en torno alos cuales se configura esa zona son, entre otros, la fantasía

14 En algunos países, como los Estados Unidos, esta precaución se haceextensiva a la persona que ocupa la presidencia, impedida de volverse acandidatear después de haber ejercido dos mandatos.

Page 197: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 197

rousseauniana de la totalidad social como una asamblea, enprincipio, unánime; la mal disfrazada atribución de legitimi-dad y de un poder enorme a corporaciones y movimientos enel modelo de una democracia denominada directa y —porúltimo, pero no menos importante— la visión escatológicaque supuestamente confiere una superioridad ética a tal con-cepción. En el plano de los principios, no me parece que que-pa duda en cuanto al carácter anti institucional y antidemo-crático de este conjunto de representaciones ideológicas.

Consideraciones finales

El hilo conductor que adopté en este texto fue que la ideageneral de democracia puede ser provechosamente analizadadesde el ángulo de la construcción de un sistema político “re-publicano”. Esto, a su vez, puede ser visto como parte de losprocesos históricos a los que se refiere el denominado paradig-ma de la modernización, especialmente si lo tomamos en unsentido histórico amplio, comprendiendo la formación del capi-talismo y del estado moderno, el advenimiento del liberalismo yde la doctrina de un estado moldeado y restringido por institu-ciones, etc. Bien entendido, el paradigma de la modernizaciónse remonta al iluminismo y mantiene relaciones importantes conel marxismo, el positivismo y otras filosofías relevantes.

Pero traté de ampliar o complementar el punto de vistaexpuesto en el párrafo anterior analizando la construcción dela democracia a través de opciones que los políticos se venforzados a tomar, de arquetipos por los cuales ellos, muchas

Page 198: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier198

veces, se orientan, y de dilemas organizacionales en los quese ven envueltos. Con estos instrumentos adicionales, piensohaber destacado con mayor eficiencia ciertos puntos en losque el populismo, el clientelismo y el movimientismo román-tico, se han convertido en potenciales si no realmente incom-patibles con los fundamentos de la teoría liberal de la demo-cracia representativa. Quiero creer que el ejercicio resumidoen el párrafo anterior ha arrojado alguna luz sobre las trestendencias anti institucionales que se han presentado en laexperiencia democrática latinoamericana en el último cuartode siglo: el “sometimiento de lo corpóreo por lo abstracto”,núcleo del proceso de construcción institucional, al cual seopone la recidiva populista, actualmente en curso en algunospaíses de la región; la indispensable autonomización del esta-do en su carácter específico de esfera pública y guardián delinterés universal y lo que parece ser un inesperado acrecenta-miento del clientelismo y de la corrupción; y, finalmente, enmedio de la convergencia política posterior a la transición,que no todo es indudablemente saludable, ciertas zonas detensión y hasta de incompatibilidad entre el izquierdismo “car-bonário” y los fundamentos innegociables de la teoría libe-ral-democrática.

Referencias

Bueno de Azevedo, Clóvis. (1995). A estrela partida ao meio:ambiguidades do pensamento petista. São Paulo: Entrelinhas.

Cardoso, Fernando Henrique. (2006). “Esquerda e Populismo

Page 199: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 199

na América Latina”. O Estado de S.Paulo, 5 de junho de2006.

Freidenberg, Flavia. (2007). La Tentación Populista. Madrid:Editorial Síntesis.

HollandA, Sérgio Buarque de. (2006). Raízes do Brasil. SãoPaulo: Companhia das Letras.

Huntington, Samuel P. (1968). Politics in Changing Societies.New Heaven, CT (USA): Yale University Press.

Lamounier, Bolívar. (2005). Da Independência a Lula: dois séculosde política brasileira. São Paulo: Editora Augurium.

Oakeshott, Michael. (1956). “Political education”. In: P. Laslett(Ed.). Philosophy, Politics, and Society. Oxford, UK: BasilBlackwell.

Schwartzman, Simon. (1982). Bases do Autoritarismo Brasileiro.Rio de Janeiro: Editor Campus.

Sigmund, Paul E. (1993). “Christian Democracy, LiberationTheology, and Political Culture”. In: Larry Diamond(Ed.). Political Culture and Democracy in Developing Countries.Boulder, CO (USA): Lynne Rienner Publishers.

Vásquez, Manuel A. (1998). The Brazilian Popular Church andthe Crisis of Modernity. Cambridge, UK: CambridgeUniversity Press.

Walker, Ignacio. (2009). “Democracia de Instituições”. In: F.H. Cardoso e A. Foxley (Eds.). América Latina, desafios dademocracia e do desenvolvimento: governabilidade, globalizaçãoe políticas econômicas para além da crise. Rio de Janeiro:Elsevier; São Paulo: Instituto Fernando HenriqueCardoso (iFHC).

Page 200: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Bolívar Lamounier200

Weber, Max. (1919). “Politics as a Vocation”. Conferenciapronunciada en la Universidad de Múnich en 1919. In:H. H. Gerth and C. W. Mills, From Max Weber: Essays inSociology. New York: Oxford University Press.

Page 201: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Populistas, embusteros y carbonarios... 201

INEFICACIA, CAPTURA Y HECHIZOS:MÉXICO, UNA DEMOCRACIA INMADURA

Jesús Silva-Herzog Márquez

Analizar la condición de la democracia mexicana y, enparticular, su vínculo con los intereses económicos, nos con-duce necesariamente al modo en que se condujo la el pasodel autoritarismo a la democracia y los límites del cambiopolítico en México. Es innegable que el país cambió de rostropolítico en unos cuantos lustros. Cambió su dispositivo electo-ral, terminó el imperio presidencial, ensanchó radicalmente losespacios de la crítica y descentralizó significativamente el poder.No ha logrado aún, conformar una democracia eficaz.

En esa extraña ciencia, pseudociencia o arte de la ‘transi-tología’, el caso mexicano es curioso. La naturaleza del ‘anti-guo régimen’ es confusa, las fechas de inicio y conclusión sonborrosas, el pacto transicional (si es que existió) difuso. Nopuede decirse que haya sido una transición modélica porque

Page 202: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Jesús Silva-Herzog Márquez202

el autoritaritarismo postrevolucionario tuvo característicaspeculiares. Nunca fue una dictadura militar basada en la re-presión. Durante muchos años se puso en duda su carácterautoritario. En el espacio latinoamericano, el régimen mexi-cano parecía una anomalía. Un régimen que mantuvo desde1934 una continuidad institucional sin interrupciones, queobservó estrictamente las formalidades constitucionales, ce-lebrando elecciones puntualmente en todos los rincones delpaís, manteniendo formalmente la separación entre los po-deres. El régimen postrevolucionario cuidó las etiquetas cons-titucionales pero, al mismo tiempo, instauró una política quele daba la espalda.

La pieza central del autoritarismo mexicano fue, sin duda,la presidencia. El ejecutivo federal fue el centro de la coali-ción política postrevolucionaria. La Constitución de 1917 for-taleció al Ejecutivo en relación a lo que disponía la ley liberalde 1857. En consonancia con la tradición presidencialista, hizodel presidente jefe de Estado y de gobierno, le dio la llaveexclusiva de su gabinete y sólidas protecciones frente a losposibles ataques del Congreso. Pero los poderes que ejercíael Presidente no eran sólo constitucionales. De hecho, podríadecirse que no eran fundamentalmente constitucionales. Elconstitucionalista Jorge Carpizo acuñó una expresión elocuen-te al hablar de los “poderes metaconstitucionales” del presi-dente mexicano (Carpizo 1987).1 Se refería al hecho de que

1 Una perspectiva valiosa sobre las fuentes del poder presidencial en Méxi-co se encuentra en Weldon (1997).

Page 203: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Ineficacia, captura y hechizos: México... 203

la posición ejecutiva era robustecida seriamente por el sitioque el presidente ocupaba dentro del sistema de partidos. Sien-do jefe de un partido hegemónico que era, además, discipli-nado, se convirtió en el gran legislador y en el gran árbitro dela política por encima de las instancias formalmente arbitra-les. Gobernó así por encima de los controles de la democra-cia pluralista. En efecto, como vio Giovanni Sartori en su es-tudio panorámico sobre los partidos políticos (Sartori 1980),el PRI mexicano era la pieza central de un sistema no compe-titivo de partidos que, sin embargo, reconocía la existencia deotras opciones partidistas. Existía oposición, recibía recono-cimiento oficial como oposición institucionalizada pero notenía expectativa de triunfo. Desde 1919, año de la fundacióndel Partido Nacional Revolucionario (abuelo del PRI) se en-tendió que las oposiciones eran indispensables para la legiti-mación del régimen. Oposiciones, se entendía bien, que de-bían permanecer en ese sitio.

El régimen se apoyaba también en una extensa coalicióncorporativa que incluía a las grandes centrales sindicales, lasgrandes agrupaciones campesinas y también en buena medi-da, a las asociaciones empresariales. Los espacios de la socie-dad civil fueron colonizados por el aparato de poder. Comoobservó el filósofo Carlos Pereyra (1990), el autoritarismose caracterizó por la penetración del aparato estatal en losespacios de la sociedad civil. De esta manera, el régimenmexicano postrevolucionario fue, en su trazo básico, unautoritarismo consensual, un autoritarismo basado antesen el consenso que en la represión; antes en la corrupciónque en la exclusión.

Page 204: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Jesús Silva-Herzog Márquez204

El presidente se convirtió en el árbitro supremo de lasdisputas políticas. Un efecto en la vida normativa tuvo estepredominio del poder presidencial. La constitución se echó adormir. Durante años, desde la consolidación del presiden-cialismo hegemónico, vivimos una siesta constitucional. Las nor-mas de control aparecían en la constitución, los dispositivosdel equilibrio y la moderación política estaban incrustados enla ley pero, sin la activación del pluralismo electoral, resulta-ban cotidianamente negadas.

El fin de la siesta constitucionaly la parálisis decisoria

La transición democrática en México tuvo naturalmentemuchas plazas —la apertura de los medios a la crítica, la pro-gresiva autonomía de las regiones— pero su plataforma esen-cial fue una sucesión de reformas electorales que liberaliza-ron primero el espacio político para terminar democratizán-dolo. En un primer momento se abrieron las puertas a la re-presentación de las minorías partidistas. Se modificaron lasreglas electorales para incluir la representación proporcional.Estos cambios no ponían en juego el núcleo del poder, tansólo institucionalizaban la disidencia. La crítica entró con ti-midez al Congreso mexicano. Tras esa apertura fueron suce-diéndose reformas para garantizar la equidad en la compe-tencia y la autonomía de los árbitros electorales. La acumula-ción de cambios liberalizadores tuvo finalmente signo demo-cratizador. Para 1994, el cambio crucial se verificó: el régi-

Page 205: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Ineficacia, captura y hechizos: México... 205

men soltó las riendas del proceso electoral, siendo ya incapazde revertir los resultados de la competencia electoral.

En 1997 México dio el salto decisivo a la democracia. Lafecha que se consagra como el símbolo del tránsito es el 2000,fecha que, además de tener la gracia de la triple redondezmilenaria, recoge la emotividad simbólica de la alternancia.Un candidato de oposición ganaba las elecciones y ocupabala presidencia. El evento era auténticamente histórico. Nun-ca antes en la historia mexicana se había verificado el trasladopacífico del poder de un partido a otro. El dato es relevante ymerece ser subrayado: México no había experimentado eseritual del traspaso pacífico de un partido político a otro. Pero,por simbólico que hubiera sido ese paso, la transformacióncrucial sucedió tres años antes. En 1997, el partido del presi-dente de México perdió la mayoría de los asientos en la Cá-mara de Diputados. Una cadena de transformaciones se su-cedió entonces. Desde ese momento el presidente dejó deser el nudo de las alianzas políticas nacionales, el gran árbitro,el autor de la ley, el jefe de del Congreso. Los árbitros delproceso electoral dejaron de ser sus subordinados; el bloquede poder era ya incapaz de revertir resultados adversos; elCongreso consolidó independencia; las regiones asumieronprogresivamente su autonomía; los medios de comunicaciónexpandieron su libertad crítica.

La transición electoral logró su cometido: institucionali-zó el pluralismo, dio cauce a la competencia partidista e insti-tucional en la vida mexicana. La novedad no solamente per-mitió la primera alternancia pacífica en la historia de México,también inauguró una compleja dinámica institucional. Méxi-

Page 206: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Jesús Silva-Herzog Márquez206

co entró al mundo de la incertidumbre democrática. Por su-puesto, esa incertidumbre no cubre solamente el episodioelectoral. Todo el proceso decisorio está marcado por la re-versibilidad: el federalismo; el reparto de responsabilidades,la revisión judicial. Todas esas prácticas que dormían en eltexto inerte de la constitución, cobraron vida poco a poco. Elgran problema de este salto exitoso fue que, con la desapari-ción del bloque gobernante y la ausencia de un sustituto detalante democrático, el régimen político ha sido incapaz decanalizar las diferencias e impulsar reformas indispensables.

Vale recordar que el partido hegemónico no funcionósolamente como una eficaz coalición electoral que competíaen elecciones para ganarlas (a la buena o a la mala). Era tam-bién una portentosa maquinaria gubernativa que permitía aquien ocupaba la silla del poder, decidir. El PRI garantizabaasí la existencia de una coalición gobernante sólida y eficaz.La transformación del PRI en minoría lanzó a México a losaprietos comunes de las democracias que saben bien que segana el poder con un tipo de coalición política y se ejerce elpoder con otro tipo de coalición. El drama mexicano es que,desde entonces, no se ha formado esta segunda acuerdo. Enefecto, desde 1997, México flota sin una auténtica coalicióngobernante. No es extraño así que, desde hace más de unadécada no ha vivido reformas sustanciales.

El eje electoral partidista del antiguo régimen fue la capaexterna del autoritarismo priista. Ese envoltorio fue decisivopara la permanencia del régimen. Renovaba periódicamentela legitimidad, permitía la circulación de los cuadros gober-nantes, mantenía la fachada del multipartidismo. La configu-

Page 207: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Ineficacia, captura y hechizos: México... 207

ración institucional y la distribución de recursos públicos da-ban al partido gobernante ventajas incompatibles con la com-petencia auténticamente democrática. Bien describió Giovan-ni Sartori aquel arreglo como “sistema de partido hegemóni-co”. No se trataba de un régimen de partido único porquehabía una diversidad de organizaciones partidistas. Pero noexistía ninguna equidad entre ellos, ni oportunidad auténticade competir por las posiciones claves del sistema. Un partidogozaba de todos los privilegios, el resto participaba en las con-tiendas sin esperanza alguna de asumir la responsabilidad elpoder. El partido hegemónico ocupaba todas las plazas dedecisión y era plenamente disciplinado al presidente.2 El eje-cutivo federal se convertía así en el jefe incuestionable de unacoalición política; supremo legislador; árbitro de todas las dis-putas; autor, incluso, de su propia sucesión.

Pero ésa no era la única sede de aquel autoritarismo. Elrégimen postrevolucionario no puede entenderse como unacáscara electoral suspendida en el vacío. El antiguo régimen,en efecto, echó raíces en muchos ámbitos de la sociedad civil.Me detengo en tres: la penetración en las asociaciones civiles(particularmente en las sindicales); la subordinación de losmedios de comunicación; y la perversión política de la ley.

El antiguo régimen se alimentó de sus corporaciones. Enla retórica de aquellos tiempos se aludía constantemente a unpacto histórico que no era el acuerdo de los individuos del

2 Jeffrey Weldon ha analizado esta configuración del viejo presidencialismoen México en Weldon (1997).

Page 208: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Jesús Silva-Herzog Márquez208

que hablaron los contractualistas, sino un pacto de clases conel Estado. Si las asociaciones civiles fueron, a juicio de Toc-queville, los gimnasios de la ciudadanía democrática en losEstados Unidos, en México, los sindicatos confederados seconvirtieron en la gran escuela del autoritarismo. Detengá-monos un instante en el análisis clásico de Tocqueville. En lasasociaciones está la enseñanza que produce una ciudadaníaapropiada para la república democrática. Ya no es observa elciudadano que se sacrifica por la causa nacional cancelandosu interés egoísta. Es, por el contrario, el ciudadano que en-cuentra en la organización social la plataforma para defender-se e impulsar sus intereses sirviendo al mismo tiempo (quizáde modo involuntario) al bien colectivo. Por nuestra parte, laorganización corporativa que emerge tras el conflicto arma-do, dictó una cátedra distinta. Atrapado en una estructura in-voluntaria en cuyas decisiones es incapaz de influir, el miem-bro de la corporación queda sumergido en duros vínculos desubordinación. No puede saber de qué manera se manejanlos recursos comunes, no participa en deliberación alguna, estestigo de la intimidación y de la violencia. Mientras en laestructura constitucional imperaba estrictamente el princi-pio de la no reelección, en la órbita sindical se perpetuabanlos liderazgos que lograban el control de sus agremiados y susubordinación al interés estatal. Los sindicatos se volvieronasí núcleos de la antidemocracia, el antiliberalismo, el anti-rrepublicanismo. Lo fueron porque las organizaciones no re-flejaban la voluntad de los miembros; porque no se sujetabana una normativa rigurosa; porque no se acostumbraba el rele-vo de los liderazgos.

Page 209: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Ineficacia, captura y hechizos: México... 209

La innovación institucional mexicana se concentró en elexpediente electoral. México cambió estructuralmente el edi-ficio electoral: nuevas formas de representación, nuevas con-diciones de competencia, árbitros imparciales y garantes ple-nos de la neutralidad. De este modo, un dispositivo que sola-mente incorporaba una fuerza política a los espacios de deli-beración y de decisión se transformó para integrar a una mul-titud de fuerzas políticas que ahora comparten poderes y res-ponsabilidades. La aparición de la competencia, terminó conla virtualidad constitucional. La constitución que antes erapuro símbolo, devino en norma, en pauta de legalidad y encauce de los poderes públicos. El fin de la siesta constitucionaldejó al descubierto la textura real de la normativa constitucional.Si bajo el régimen de partido hegemónico la constitución eramás un símbolo, el emblema de un proyecto, ahora es una piezade ingeniería y una norma: una estructura que despliega alicien-tes y amenazas y una regla que marca los contornos de lo ilícito.Me detengo en la parte estrictamente ingenieril.

Al desaparecer el taponadura del partido hegemónico,quedó al descubierto la relativa debilidad de la presidenciamexicana. De acuerdo a estudios contemporáneos recientes,la presidencia mexicana es una de las más débiles del conti-nente. El periodo presidencial es ciertamente muy largo. Seisaños sin posibilidad de reelección. México tiene, en ese sen-tido, la reglamentación más estricta contra las tentaciones re-eleccionistas que nuevamente campean en el continente. Elsexenio está partido por una elección intermedia que, desde1997 debilita en cada ocasión al presidente en turno. La com-binación de los dos mecanismos de representación (pista

Page 210: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Jesús Silva-Herzog Márquez210

mayoritaria y proporcional) dificulta la formación de una coa-lición mayoritaria. La presidencia es una institución hermética;el Congreso, una institución marcada por el amateurismo.

El Ejecutivo, en efecto, es un órgano hermético. Salvo laposición del Procurador General de la República, el presi-dente es libre de nombrar y remover a los funcionarios de sugabinete. El arreglo, lejos de fortalecerlo, lo aísla del repartodel poder en el Congreso, dificultando con ello el pacto y lacoordinación con la legislatura.

El Congreso, por su parte, es una asamblea de aficiona-dos. México tiene la extraña anomalía de trasladar el princi-pio de la no reelección al mismísimo Congreso. La medida,sensata en tiempos previos a la competencia, se vuelve clara-mente disfuncional al momento en que la legislatura recogeya la diversidad y asume a plenitud responsabilidades relevantes.

El régimen federal se ha transformado profundamente.Antes era un embudo que recogía demandas de todas las pun-tas de la república para concentrarlas en un breve foco de de-cisión. Ahora el régimen federal es, auténticamente, un foroque recoge poderes regionalmente autónomos. Si los gober-nadores en el antiguo régimen fungían prácticamente comodelegados del ejecutivo federal, ahora son gobernantes conenormes poderes, extensas facultades y cuantiosos recursosque, en muchas ocasiones, han llegado a reconstruir la anti-gua hegemonía partidista dentro de sus localidades. La au-sencia de controles locales los ha colocado por encima de laantigua disciplina autoritaria y por encima de la ley democrá-tica. En suma, puede decirse que el debilitamiento de la pre-sidencia bajo el pluralismo no ha sido compensado con el

Page 211: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Ineficacia, captura y hechizos: México... 211

fortalecimiento y la profesionalización de otras instancias delEstado democrático.

La captura del Estado

La descentralización del poder, la desarticulación de coa-lición política nacional, la activación de la competencia elec-toral oxigenó sin duda la política local. Nuevos espacios deautonomía para la política en las regiones que dejaron de serdelegaciones del poder central. Pero esta autonomía ha teni-do también efectos perversos. La desintegración de los meca-nismos tradicionales de control político han hecho más vul-nerables a los gobiernos locales a la corrupción y a la intimi-dación del crimen organizado primero y la penetración des-pués. La desaparición de la cuerda de disciplina partidista comovehículo de coordinación entre distintas autoridades abrió unespacio para el desacuerdo y el conflicto interburocrático quela criminalidad supo aprovechar con enorme astucia. La ato-mización del poder político, la inexistencia de una policíanacional, cierta ambigüedad en el reparto de las competen-cias jurídicas fue vulnerando significativamente la capacidaddel Estado para aplicar la ley en todo el territorio y combatircon eficacia a sus enemigos.

No es extraño que la llamada “guerra contra el narcotrá-fico”, emprendida por el Presidente Felipe Calderón al arran-que de su gestión, haya tenido como uno de sus flancos másdelicados el desarticular las conexiones entre los criminales ylas estructuras policíacas locales y nacionales. La guerra no

Page 212: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Jesús Silva-Herzog Márquez212

puede ser definida como una guerra del Estado contra el cri-men organizado; es, en buena medida, una guerra del Estadocontra sí mismo.

El Estado mexicano no es solamente presa de los intere-ses delincuenciales que se infiltran entre las fuerzas de segu-ridad para ganar protección, la debilidad del régimen demo-crático ha permitido también que una extensa red de intere-ses legítimos haya asentado sus reales dentro del poder públi-co para ganar ventaja y protección. Los órganos de la neutra-lidad estatal, los mecanismos regulatorios creados para velarpor los intereses nacionales han sido, en cierta medida se-cuestrados por agentes económicos y políticos. Los sindica-tos, por ejemplo, siguen confundiéndose con el poder públi-co. El pluripartidismo no ha modificado sustancialmente elantiguo arreglo corporativo. Los sindicatos han diversificado—eso sí— sus respaldos partidistas. Si bien la gran mayoríade los sindicatos siguen perteneciendo en su mayoría al Parti-do Revolucionario Institucional, también ha organizacionessindicales que han desplazado su lealtad hacia el izquierdistaPartido de la Revolución Democrática y otros que han sella-do alianza con el conservador Partido Acción Nacional, delarga tradición anticorporativa.

El régimen postrevolucionario, logró, sobre todo a partirde la época del general Lázaro Cárdenas, establecer la subor-dinación de las organizaciones sindicales a través de una grancentral que, a su vez, pertenecía al partido oficial. El sindica-lismo incorporó y subordinó a las organizaciones obreras. Unade las expectativas ilusas de la transición mexicana fue que laalternancia, en particular una alternancia encabezada por el

Page 213: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Ineficacia, captura y hechizos: México... 213

partido que nació para combatir el cardenismo, conduciría ala extinción del pacto corporativo. Acción Nacional, en efec-to, cuestionó desde su origen la intervención gubernamentalen el mundo sindical. Sin embargo, su llegada a la presiden-cia dejó intocado el antiguo pacto. Si el régimen autoritariose fundó en el consenso, la transición siguió la misma ruta:no alteró la distribución del poder; no combatió las estructu-ras corporativas ni desmanteló los reductos locales del auto-ritarismo. En el terreno de las corporaciones, no se ha verifi-cado ninguna transformación institucional en ese terreno; nose han impuesto desde el poder público federal dispositivosde democracia interna dentro los organismos sindicales, ni sehan transparentado las decisiones al interior. De este modo,el antiguo corporativismo que servía para el control políticodel mundo del trabajo, se convirtió en un corporativismo ca-paz de vetar cualquier decisión que pusiera en juego los inte-reses de las cúpulas sindicales. Antes, tentáculos del estado;ahora, corazas de intereses intocables.

Caso particularmente relevante y simbólico es el del sin-dicato de maestros. Se trata del sindicato más grande de Amé-rica Latina y una organización que se independizó del PRIpara formar una estructura política independiente que cuen-ta un partido político nacional dispuesto a coaligarse electo-ralmente con cualquiera de los partidos políticos nacionales.La fuerza electoral de esa organización, por supuesto, es mu-cho menor a su fuerza política. Desde los años ochenta seinició en México un proceso de descentralización educativa,cuyo propósito era desplazar a los estados competencias enmateria educativa. Y mientras la autoridad se descentralizó, el

Page 214: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Jesús Silva-Herzog Márquez214

sindicato permaneció como una estructura nacional que ac-túa no solamente como un representante de los maestrossino que se ha incrustado como autoridad. El sindicatoocupa así posiciones decisivas en la política educativa delpaís y controla los órganos encargados de seleccionar y pro-mover a los maestros. El segundo puesto de mayor impor-tancia de la Secretaría de Educación Pública federal es ocu-pado por un miembro directo del sindicato (y pariente polí-tico de la dirigente magisterial). Cerca de una veintena deestados (de un total de 32) ocupa la principal posición en elsector educativo.

Si la transparencia ha avanzado notablemente en el país,habiéndose establecido ya un instituto federal que pretendegarantizar el derecho de todos a la información pública, el sindi-cato de maestros (como el resto de las organizaciones sindicalesen el país) sigue siendo una entidad oscura, opaca, prácticamen-te impenetrable. Puede conocerse el uso de cada centavo de lapresidencia mexicana, pero no sabemos ni siquiera cuántos maes-tros están en la nómina de la Secretaría de Educación o a cuán-to asciende el patrimonio del Sindicato de maestros.

La cerrazón del corporativismo en un entorno electoral-mente pluralista ha puesto de cabeza al Estado. La prioridadde las agencias públicas parece ser la satisfacción de los inte-reses gremiales antes que la promoción del interés público.Los derechos del sindicato antes que los derechos de los estu-diantes, de los pacientes, de los consumidores, de los ciuda-danos. El Instituto Mexicano del Seguro Social ofrece a sustrabajadores derechos que no tienen los no afiliados a esa ins-titución y la empresa pública dedica cada día mayor porción

Page 215: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Ineficacia, captura y hechizos: México... 215

de sus ingresos a la manutención de sus empleados. José MaríaLuis Mora, uno de los más adelantados liberales mexicanosdel siglo XIX, habló en su tiempo de la “empleomanía”: elfuror con el que el nuevo Estado se disponía a crear y a mul-tiplicar los puestos públicos (Mora 1964). Frente a la tradi-ción colonial que reservaba la administración a una casta deprivilegiados, los gobiernos del país recientemente indepen-dizado se dedicaron a inventar cargos y aumentar dependien-tes. El Estado no se dirigía a procurar beneficios colectivos, aasegurar la ley o a proveer educación para los ciudadanos. Supropósito era otro: dar trabajo. Mora veía con horror esa prác-tica: económicamente era ruinosa, envenenaba la vida públi-ca y corrompía a los ciudadanos. La empleomanía era un re-curso político para extender el influjo de los gobiernos sobrela gente. Usar las arcas públicas para cultivar lealtades y grati-tudes: el que mucho da mucho manda. No había grandessecretos en el operativo: los dependientes se volverían incon-dicionales del benefactor. La empleomanía era una adicciónpolítica con terribles consecuencias económicas. Un Estadodedicado a generar empleo dentro de sí mismo, lo obstruyefuera. La mira no está en el resultado de la acción pública sinoen la multiplicación de los subordinados. Los empleos proli-feran sin consideración a su necesidad. Pronto el Estado se verepleto de empleos innecesarios que exigen enormes gastospúblicos y, en consecuencia, aumento de impuestos.

El vicio tenía, desde luego, un vínculo con la estructurapolítica. Útil a los jefes de partido, era devastador para la vidarepublicana. El nervio crítico de la ciudadanía quedaba anu-lado por la dependencia laboral. No se conformaba la admi-

Page 216: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Jesús Silva-Herzog Márquez216

nistración con un cuadro de talentos y capacidades sino conleales defensores del patrón. La empleomanía era moralmen-te perniciosa por hacer de la adulación el peldaño del éxito. Eladulador no tiene opinión propia ni palabra sincera; es unbulto de odio a quien amenace su tranquilidad. Es aquí don-de Mora, el liberal, hace una lectura republicana de los viciosde la empleomanía: cuando las instituciones públicas pierdende vista el interés general y se entregan a la tentación del bu-rocratismo, se carcome su esqueleto cívico. El liberal mexica-no concluye con acento romano: “la libertad es una plantaque no puede germinar sino en terreno vigoroso; el fango y lainmundicia son incapaces de nutrirla.”

No son muy distintas las desviaciones contemporáneas.En las alturas burocráticas y en las filas sindicales, la em-pleomanía campea. Partidos financiados jugosamente por elEstado, sindicatos que depredan la empresa pública. El Esta-do empleador convertido en sirviente de sus integrantes. Laempleomanía se ha convertido en la madre de una de las gran-des paradojas de nuestro tiempo: cobijado por la retórica es-tatista, envuelto en el discurso de la soberanía nacional es re-fugio de la nueva privatización del Estado.

La captura del Estado también tiene una dimensión em-presarial importante. Uno de los rasgos más notables de laeconomía mexicana sigue siendo el altísimo grado de con-centración y su tendencia monopólica. El economista mexi-cano Santiago Levy ha ubicado en ese renglón el gran obstá-culo del crecimiento económico del país (Levy 2008). En esemismo sentido, el Banco Mundial en su reporte “México 2006-2012: creando las bases para el crecimiento equitativo” apunta:

Page 217: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Ineficacia, captura y hechizos: México... 217

“La existencia de monopolios, algunos privados y otrosdel gobierno, en la prestación de servicios públicos (comotelecomunicaciones y energía eléctrica) genera costos al-tos desde una perspectiva internacional. Este hecho inhi-be la eficiencia productiva de las empresas que utilizanestos servicios.” (Banco Mundial 2007)

El Estado se ha convertido en protector de la concentra-ción. Si bien ha constituido órganos para la regulación de lastelecomunicaciones y para el fomento de la competencia, és-tos cuentan con pocas herramientas jurídicas de acción y conun marco de acción muy limitado. La comisión encargada deregular el mercado de las telecomunicaciones, por ejemplo,es un instituto débil y falto de autonomía. El marco jurídicomexicano permite a las grandes empresas monopólicas in-cumplir las resoluciones de la comisión a través del juicio deamparo, con lo que quedan convertidas en disposiciones irrele-vantes. Mientras las agencias internacionales recomiendan quelas determinaciones de los órganos reguladores sean irrecusa-bles, en México se encuentran detenidas en una compleja mara-ña de instituciones administrativas, legislativas y judiciales.

Los entes reguladores creados precisamente para normarsu operación no solamente son débiles sino que se han mos-trado con más frecuencia como instancias que protegen losintereses de los entes regulados, que como defensores de losintereses colectivos. Los órganos no han sido blindados efi-cazmente contra la penetración de esos intereses. De hecho,los integrantes de órganos como la Comisión Federal de Com-petencia estuvieron ligados directa y públicamente a las em-presas que hoy regulan. Así, la pretensión de autonomía ins-

Page 218: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Jesús Silva-Herzog Márquez218

titucional resulta negada: los órganos del Estado, además defrágiles, subordinados al interés particular.

La democracia hechizada

La democracia que se ha instalado en México ha sido unademocracia infructuosa, una democracia capturada, una de-mocracia encantada. Muy poco ha producido la democraciamexicana. Limitada su imaginación y menor aún su eficacia.El recuento de los lustros democráticos es la secuencia deproyectos frustrados. El hecho inequívoco es que ninguna delas grandes prioridades gubernamentales desde 1997 ha con-citado los respaldos necesarios para su aprobación. Todos lospresidentes desde 1997 han buscado una reforma fiscal y unareforma energética, una reforma laboral. Ninguno ha logra-do su propósito. Por supuesto, no todo es “culpa” de las ins-tituciones: las estrategias políticas cuentan tanto como los in-centivos estructurales. Pero uno de los nudos de la políticamexicana contemporánea se encuentra, sin duda, en un teji-do institucional no del todo apto para procesar la diversidad.

La democracia que se ha instalado entre nosotros es unademocracia capturada: un régimen político atrapado por fuer-zas e intereses parciales. Las estructuras corporativas son im-ponentes para bloquear cualquier cambio que vulnere susintereses; los grandes conglomerados empresariales imponencondiciones a la clase política; los poderes mediáticos ejercenun soberbio reinado de intimidación. El aprendizaje del nue-vo juego político ha resultado catastróficamente desigual. El

Page 219: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Ineficacia, captura y hechizos: México... 219

fin del viejo régimen requería un veloz adiestramiento de laclase política, una transformación de hábitos y reflejos: unsalto a una responsabilidad compartida. La aparición de lademocracia pedía una sociedad política propiamente demo-crática. Me refiero, más que a la mutación de valores, al sur-gimiento de nuevas ligas de responsabilidad, a nuevas formasde diálogo y a la aparición de una negociación constructiva.Nada de ello ha surgido: nuestra clase política sigue atrapadaen sus inercias, en sus atavismos, en pleitos antiguos y en suseternas disputas interiores. Otros sí han aprendido a jugar enel ámbito pluralista y, sobre todo, a sacarle provecho. Eso quelos norteamericanos llaman los “intereses especiales”, los po-deres fácticos han transformado exitosamente su comunica-ción con la órbita política. Si antes conversaban con las de-pendencias del Ejecutivo para cuidar sus intereses, hoy hanconformado oficinas de cabildeo, han contratado agentes decomunicación con el Congreso y han proyectado sus mensa-jes a través de los medios. No encuentro en esa transforma-ción nada condenable. Lo que resulta alarmante es que, fren-te a esa resolución, no se han levantado las compensacionesdel interés público. En otras palabras, el complejo instrumentalde la democracia fue descifrado antes por los actores econó-micos que por los políticos. No son los intereses de la clasepolítica los que han quedado mermados, sino aquel ámbitoque el poder público tiene la misión de cuidar el interés público.

Mientras los políticos siguen leyendo el instructivo, otrosconducen la nave. Será que el viejo Marx no ha envejecidotanto. Sus profecías no tendrán mucho influjo pero algunasde sus denuncias conservan filo. La democracia liberal puede

Page 220: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Jesús Silva-Herzog Márquez220

ser una pantalla de otro imperio: el señorío de los intereseseconómicos. Su diagnóstico no está lejos de la realidad: elegi-mos escuálidos, mientras los poderosos no son electos pornadie. La política, aunque aparente fuerza, cuelga de otroshilos. Servidumbres electivas; sumisiones con fuero y curul.Partidos, dirigentes, asambleas legislativas, organizaciones ci-viles rebasados cotidianamente por poderosos intereses eco-nómicos que logran imponer su fuerza sin encontrar resis-tencia. La clase política aparece de esta manera como brazoejecutor de un manojo de intereses económicos. La demo-cracia mexicana aparece como un esperpento: elecciones com-petidas, gobiernos fragmentados, poderes contrapuestos peroincapaces todos ellos de alumbrar el interés público, de de-fender esa vaga plataforma de la utilidad común. Izquierdas yderechas podrían coincidir en medidas fiscalmente sensatas ysocialmente benéficas. Pero el veto de los intereses mandaderrotando prudencias y sensibilidades. Tras la mantilla de-mocrática, vivimos un secuestro.

Las instituciones democráticas cargan, sin duda, buenaparte de la responsabilidad. Nuestras reglas explican el raptoy el eclipse del interés público. Si las instituciones son, comopensaba Bentham, dispositivos que distribuyen castigos y re-compensas, es claro que el trazo de las nuestras premia la sub-ordinación y reprime la promoción del interés público. Elcastigo del elector no resulta persuasivo. Quienes toman de-cisiones en el Congreso no tienen por qué imaginar su com-parecencia futura ante los electores. Pero sienten el duro pesode otras intimidaciones que los obligan a ignorar los llamadosdel interés público. El correctivo de los medios es fulminan-

Page 221: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Ineficacia, captura y hechizos: México... 221

te. La sanción de la tal “opinión pública” puede ser una ame-naza impalpable, mientras que el castigo de los poderes fácti-cos es inmediato y drástico.

Sea porque unos lograron adaptarse al ecosistema demo-crático mientras que otros siguen exhalando los aires de la eraprevia; sea porque los intereses económicos se han apodera-do de los dispositivos políticos; sea porque las institucionesaíslan a los políticos de sus electores, dejándolos a merced delos intereses especiales, el hecho es que la nueva democraciamexicana está lejos de estimular un diálogo que procure elalumbramiento del interés público. Por el contrario: nuestrademocracia le ha puesto la mesa a los intereses fácticos y sededica agasajarlos.

La entrada de México a la democracia fue el ingreso a unmundo encantado. Al cruzar la puerta entramos a un territo-rio de hadas, a una casa gobernada por espíritus: un universode prohibiciones, de palabras impronunciables, de efigies in-tocables, de tabúes. Nuestra transición estuvo tal vez en elfondo de un armario, en la espalda de un espejo, en el retornoa un tiempo muy antiguo. El pluralismo hechizó nuestromundo, lo fosilizó repentinamente. La aldea de nuestra de-mocracia es de piedra: sólido, pesado, invariable. Y al mismotiempo, las rocas parecen tener alma: actuar sobre ellas es las-timarlas y deshonrar el mundo. Todo nos ha sido legado conla encomienda de preservarlo tal y como nos fue heredadopor los ancestros. Nuestra misión es cuidarlo para los siglospor venir. Las órdenes de este mundo son claras: no debemostocar los árboles santos, no debemos acercarnos a la montañasagrada, no debemos pronunciar una larga lista de nombres

Page 222: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Jesús Silva-Herzog Márquez222

malditos. Nuestro deber es honrar y preservar las piedras queson los intereses, las instituciones, las costumbres. Las ame-nazas son terribles: si tocamos la hoja del árbol se secará lavida; si subimos la colina el pueblo se cubrirá de plagas; simentamos al innombrable caerá la maldición eterna. Teme-rosos de nuestra iniciativa, debemos caminar sin levantar pol-vo. Se nos enseña a adorar lo que tenemos y a mantenernoslimpios de la perversa tentación de la voluntad.

Nos arrullan con el cuento de que el equilibrio del mun-do es delicadísimo. Si algo se altera, si permitimos que sopleel viento, si nos atrevemos a mover una piedra caerá una te-rrible condena sobre nosotros, sobre nuestros hijos, sobre loshijos de nuestros hijos. ¡Ay de nosotros si alguien se atrevealterar lo imperturbable! Debemos reverenciar al mundo ycuidarlo frente a la amenaza del cambio. Vivimos por la gra-cia del río, por la generosidad de las grutas, por la simpatía delos cerros. A ellos les debemos la tranquilidad del suelo. Quienpretenda alborotar las aguas es un agente ingrato y peligroso:un desagradecido, un temerario que olvida nuestra vulnera-bilidad. El cuento nos dice que el soberbio que pretende al-gún cambio no se percata de su impotencia: quiere reacomo-dar la arena sin darse cuenta de que tarde o temprano regre-sará a su verdadera casa. El papel del hombre en el cuento esidéntico al del monte o el pasto. Acata su naturaleza, ocupa susitio y se calla. No tiene por qué trastornar el orden encantado.

Los votos en México no han abierto su mundo: lo hancerrado. Han conducido a la alternancia, es cierto. Que losvotos castigan y premian también es verdad. Pero debajo deese flujo de recompensas y escarmientos, se solidifica un ex-

Page 223: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Ineficacia, captura y hechizos: México... 223

tensísimo territorio inmutable. Bajo la sociedad abierta de losvotos, la sociedad cerrada de los intereses petrificados. La de-mocratización mexicana no ha ensanchado las posibilidadesde la política, las ha encogido sustancialmente hasta eliminarel nervio mismo de la voluntad. La democracia, en ese senti-do, ha reencantado a México. Por todos lados podemos escu-char a los brujos que nos amenazan: si pretendes modificareste arreglo, caerá la catástrofe; si combates tal poder la plaganos destruirá. El hechizo se origina en el nudo esencial denuestro cambio político: una Presidencia (panista) sin podery un poder (priista) sin responsabilidad. Esta tensión se haido apretando poco a poco hasta cancelar la opción de actuar.

Es entendible que la ruta de la decisión bajo el pluralismosea más trabajosa, más lenta, más resbaladiza de lo que es bajoel dictado unipersonal. No denuncio este hechizo de lo into-cable pensando que puede encontrarse una varita de mago.Pero no hablamos en el caso de México de un ajuste realistade la política a su circunstancia. Lo que contemplamos es laconsagración de la superchería y la consecuente abdicaciónde la política. El tabú se ha vuelto el domicilio de la democra-cia mexicana. Que no seamos ingenuos nos piden los brujos.Nos advierten que es imposible adelantar la salida del sol yabsurdo querer colorear la luna de rojo. Por eso nos llaman arespetar lo sagrado: la vaca del petróleo; los pactos ancestra-les; la coraza del Ejército; los intereses monopólicos. Las re-glas de nuestra convivencia han quedado bajo el hechizo delo intocable. Cuidado, nos advierten, si buscamos un nuevocamino todo se desmoronará.

Page 224: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Jesús Silva-Herzog Márquez224

Referencias

Carpizo, Jorge. (1987). El presidencialismo mexicano . México DF:Editorial Siglo XXI.

Banco Mundial. (2007). México 2006–2012: creando las basespara el crecimiento equitativo. Washington DC: Banco Mun-dial.

Levy, Santiago. (2008). Good Intentions, Bad Outcomes: SocialPolicy, Informality and Economic Growth in Mexico. Washing-ton DC: Brookings Institution.

Mora, José María Luis. (1964). “Discurso sobre los pernicio-sos efectos de la empleomanía”, en Ensayos, ideas y re-tratos. México DF: UNAM.

Pereyra, Carlos. (1990). “Estado y sociedad”. In: Carlos Pere-yra. Sobre la democracia. México DF: Cal y arena.

Sartori, Giovanni. (1980). Partidos y sistemas de partido. Madrid:Alianza Universidad.

Weldon, Jeffrey. (1997). “Political Sources of Presidencialis-mo in Mexico”. In: Scott Mainwaring y Mathew S. Shu-gart (Eds.). Presidentialism and Democracy in Latin America.New York: Cambridge University Press.

Page 225: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Ineficacia, captura y hechizos: México... 225

LOS AUTORES

SERGIO FAUSTO es politólogo y se desempeña como di-rector ejecutivo del Instituto Fernando Henrique Cardoso.Es codirector del proyecto Plataforma Democrática y de laColección El Estado de la Democracia en América Latina. Esmiembro del Grupo de Análisis de la Coyuntura Económica(Gacint) de la Universidade de São Paulo y articulista del dia-rio O Estado de S.Paulo. Fue asesor del Ministerio de Hacien-da y del Ministerio de Planificación entre 1995 y 2002, e in-vestigador del Centro Brasileiro de Análisis y Planificación(CEBRAP).

MARCELO CAVAROZZI, Ph.D. en Ciencia Política porla University of California at Berkeley, es profesor del pos-grado en Políticas Públicas y Gerenciamiento del Desarrolloy en Ciencia Política de la Universidad Nacional de San Mar-tín. Ha desempeñado como profesor en la Universidad deBuenos Aires, la Universidad Nacional de Córdoba, y la

Page 226: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Difícil democracia226

Universidad de Georgetown, y fue profesor visitante en laUniversidad Johns Hopkins, la Universidad de Maryland yel MIT. Fue consultor de PNUD, del Banco Mundial y delBanco Interamericano de Desarrollo. Ha publicado numero-sos artículos en periódicos académicos latino-americanos yestadunidenses. Entre sus libros se destacan: Autoritarismo yDemocracia (1955–2006), Editora Planeta, 2006; (coautor)América Latina en el siglo XXI: Hacia una nueva matriz sociopolíti-ca, LOM Ediciones, 2004; y El Capitalismo Político Tardío enAmérica Latina, Homo Sapiens, 1997.

MARCUS ANDRÉ MELO, Ph.D. en Ciencia Política porla Universidad de Sussex (Inglaterra), se desempeña comoprofesor en la Universidad Federal de Pernambuco. Fue Ful-bright Scholar en el Center for International Studies delMassachusetts Institute of Technology y Distinguished Visi-ting Scholar del Departamento de Ciencia Política de la YaleUniversity. Se desempeñó también como consultor delPNUD, UNRISD, Banco Mundial y BID. Entre sus librosse destacan Reformas Constitucionais no Brasil: instituições e pro-cesso decisório, Revan, 2002; (coautor) Against the Odds: politi-cians, institutions and the struggle against poverty, Columbia Uni-versity Press/Hurst (a ser publicado próximamente, 2010); yThe Political Economy of Fiscal Reforms in Brazil, IADB, 2010.Publica en periódicos académicos tales como Comparative Po-litical Studies, Legislative Studies Quarterly, Political Research Quar-terly, Latin American Politics and Society, International Political Scien-ce Review, y Quarterly Review of Economics and Finance.

Page 227: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los autores 227

OSVALDO IAZZETTA es Doctor en Ciencias Sociales(FLACSO/Sede Brasil y Universidad de Brasilia) y se des-empeña como profesor e investigador de la Facultad de Cien-cia Política y Relaciones Internacionales de la UniversidadNacional de Rosario (Argentina). Es profesor en diversos pro-gramas de posgrado y ha realizado investigaciones sobre laproblemática del estado y la democracia en la región latinoa-mericana. Entre sus publicaciones se destacan Las privatiza-ciones en Brasil y Argentina: Una aproximación desde la técnica y lapolítica (1996); Democracias en busca de estado: Ensayos sobre Amé-rica Latina (2007) y ha coeditado junto a Guillermo O’Donnelly Jorge Vargas Cullell el libro Democracia, Desarrollo Humano yCiudadanía: Reflexiones sobre la calidad de la democracia en AméricaLatina (2003).

BOLÍVAR LAMOUNIER, director de la Augurium Con-sultoria, es Bachiller en Sociología y Política por la UFMG(1964) y Ph.D. en Ciencias Políticas por la Universidad deCalifornia, Los Angeles (1974). Fue miembro de de la Comi-sión de Estudios Constitucionales (“Comissão Afonso Ari-nos”) nombrada por la Presidencia de la República en 1985para preparar el anteproyecto de la Constitución. Coordinóel programa de estudios sobre la revisión constitucional delInstituto de Estudios Avanzados de la USP (1992–1993); in-tegró el Consejo de Orientación Política y Social de la Fiesp –Federación de Industrias del Estado de São Paulo (1989–2001);y presidió el Consejo Directivo del Centro de Estudios deOpinión Pública de la Universidade Estadual de Campinas(1993–1999). Actualmente es miembro del Comité Acadé-

Page 228: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Difícil democracia228

mico Asesor del Club de Madrid. Escribe frecuentemente paralos más importantes medios de prensa brasileños. En 1997fue electo para la Academia Paulista de Letras. Es autor denumerosos estudios en Ciencias Políticas publicados en Bra-sil y en el exterior. Sus obras más recientes son: Da Indepen-dência a Lula: dois séculos de política brasileira, publicado en 2005por la Augurium Editora, y A Classe Média Brasileira: ambições,valores e projetos de sociedade, en coautoría con Amaury de Sou-za, por la Editora Campus, en 2010.

JESÚS SILVA-HERZOG MÁRQUEZ es licenciado enDerecho por la Universidad Nacional Autónoma de Méxicoy maestro en Ciencia Política por la Universidad de Colum-bia, en Nueva York. Es profesor del Departamento de Dere-cho del Instituto Tecnológico Autónomo de México. Ha sidoinvestigador invitado de la Universidad de Georgetown y delWoodrow Wilson Center for International Scholars. Entre suslibros destacan: El antiguo régimen y la transición en México (1996);Andar y ver (2005) y La idiotez de lo perfecto (2006). Es colabora-dor regular del periódico Reforma, de la Ciudad de México.

Page 229: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los autores 229

ÍNDICE

PRESENTACIÓN......................................................................5Sergio Fausto

ACCIÓN PRESIDENCIAL EN LA AMÉRICA LATINA:ANTECEDENTES HISTÓRICOS Y UNA TIPOLOGÍADEL SIGLO XXI ...................................................................... 21

Marcelo Cavarozzi

EQUILIBRIO Y DESEQUILIBRIO DE PODERESEN AMÉRICA LATINA ........................................................... 75

Marcus André Melo

LOS CLAROSCUROS DE LA DEMOCRACIAEN ARGENTINA: DEUDAS Y ASIGNATURASPENDIENTES ....................................................................... 117

Osvaldo Iazzetta

POPULISTAS, EMBUSTEROS Y CARBONÁRIOS:TENDENCIAS ANTI INSTITUCIONALESEN LA POST-TRANSICIÓN ................................................ 165

Bolívar LamounierIntroducción

Page 230: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Difícil democracia230

INEFICACIA, CAPTURA Y HECHIZOS:MÉXICO, UNA DEMOCRACIA INMADURA ................. 201

Jesús Silva-Herzog Márquez

LOS AUTORES ..................................................................... 225

Page 231: DIFÍCIL DEMOCRACIA - Plataforma Democrática · ... El Estado de la Democracia en América Latina ... Marcus Melo y Marcelo Cavarozzi ofrecen una visión ... poco después de las

Los autores 231