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MADRID

OCTUBRE 1959

N.° 20-59 H

Desinfección en secode semillas

Javier Salazar y Vigil de QuiñonesIngeniero Agrónomo.

Del Centro de Cerealicultura de Madrid (I. N. I. A.)

MINISTERIO DE AGRICULTURA

DIRECCION GENERAI DE COORDINACION, CREDITOY CAPACITACION AGRARIA • SECCION DE CAPACITACION

DfSINffCCION fN SfCO Df SfMILLAS

Si bien la desinfección de las semillas es una costumbrerelativamente antigua-pues se practica, al menos, desdemecíiados del sig-lo xviii-, en cambio la desinfección de lasemilla en .reco, por medio de productos en polvo, se ha en-sayado y puesto en práctica en nuestro siglo.

El desinfectante en polvo más antiguo es el carbo^ia,to decobre. Ln 1902 fué usado con éxito, en 111emania, contrael «tizón» del trigo, pero no se difundió en el comercio has-ta varios años después. Este producto atrajo poderosamentela atención de agrónomos y agricultores, pues, por vez pri-mera, un desinfectante no perjudicaba a la semilla, perma-neciendo sobre su superficie hasta después de efectuada lasiembra. Esta cualidad garantiza cierta protección de la se-n7illa contra los g-érmenes del ^uelo. Actual^nente sigue sien-do un proclucto típico para el tratamiento de la simiente deltrigo contra el «tizón». Posteriormente fueron empleados,con éxito, otros compuestos de cobre, y un adelanto impor-tante en su aplicación se consiguió al obtener productos conun alto grado de finura, lo qu^ aumenta su eficacia y dis-minuye la canticlací a emplear. Actualmente, entre los des-infectantes cúpricos, el más empleado es el o.ricl^^r^tiro decobre, en polvo impalpable.

La escasez mundial de cobre y su consiguiente encare-cimiento impulsó la investigación de nuevos productos encuya composición no entrase dicho metal. Como consecuen-cia de ello se obtuvieron diversos compuestos orgánicos,principalmente organomercúricos. El primer procíucto deeste grttpo ftté el cloro f enol r^tiercurio, ctryos primeros en-sayos fiter-on hechos en Alemania (años 1912 y 1913 ) parala prevención del «tizón» o«caries» cíel trigo y del «estria-do pardo» de la cebada (Helznintho_r^ori^^s^a gra^zineuyn).Más tarde fueron fabricados numerosos productos organo-mercúricos, entre los que merecen destacarse los compues-tos a base de cloru,ro y de f os f ato de etil rtaercatirio, cuyos

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COI"1'eS^0I1d1eI1teS n01111)I'eS re,^^lStradOS a^areClerOI1 ell 19 Ĝ%

y 1931, respectivamente. Ln ]os años sigttientes han sicíoobtenicíos numerosos productos orgánicos y organomercú-ricos cuya sinlple enuuleración se sale de los límites de esta^nlblicación.

Productos que se emplean para la desinfección en seco.

• CoMPUESTOS cúPRlcos.-Los más corrientes en el co-mereio son : carbonato de cobre, a^-icloyu^o de cobye, óxido^-^^^proso y sul f ato cú^rico b^zsico. Se venden en forma depolvo finamente divicíido y tienen la ventaja cíe ser menospeligrosos para las personas y semillas que los compuestos<le mercurio. Las semillas tratadas quedan protegiclas con-tra gorgojos y polillas.

• CoMPUESTOS ouc.^^NOMERCÚRICOS.-Ll más írecttente enel comercio, por ser de fabricación nacional, es el acetat,ode fenil-7nercurio (Criptosano, Hortesán, etc.). Menos co-rrientes son los desinfectantes a base de silica-to de ^neto"xi-etilyraercurio, diaciytidianaida de z^atietil-s^zercurio, etc., prodttc-tos importados y qtte, solos o combinados con insecticidas,se expencíen con diversos nonlbres registrados (Rubigama,l^ll}^1Sat10, etC. ^.

• ^_`OMPUESTOS ORGÁNICOS NO MERCÚRICOS. -- El máS CO-

mún es e] HCB (lae_raclor^atro de benceno), que se empleacontra el «tizón» del trigo. Tiene la ventaja de no afectarcl poder gernlinativo cle la semilla y de ser inr^fensivo parael hombre y los animales clomésticos, de manera qtte el so-brante de la semilla tratada puede comerla el ganado. F_1inconveniente es que no preserva del gorgojo.

Con estos hroductos es muy imllortante emhlear las dosisaconsejadas 1>or el fabricante, en cada caso; un exceso pne-<le ser l^erjudicial a la simiente; o, al menos, encarece eltratamiento y, en deíecto, la desinfección resttltaría ineficazo deficiente.

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Dosis necesaria.

Las dosis que debeil einple^lrse de estos pi-odttct^^s ^le-^)eii^lelt, eti pritner lugar, del tamaño cle la semilla que seha <le tratar y de la conlposicibn clel clesinfectante. C(^moI^ritilera incíicación ptteden ser útiles la^ ci i_1-as del sig^ttiell-tc rua^lr^>:

CL:1SE I)f? tilC\Ill,l.:\

('.an[idad de produc-tu por cad;i kg. de

semilla

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Tri^o, ccbada y avcna ................................. 2,0O^1aíz ........................................................ 1,00Judía y t;uisante .......................................... 1,?i

C;alabaza, espinaca, cebolla y r^tbano ^ ^ ^ • • • • • • • ^ • ^ ^ ^ 2, ^0Rcmolacha, ranahoria y lechuga • ^ • ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ 3,7i

:^rttll,ej<tnl^^s ^jtte sietlihl-e sc lean las incíicariune^, encuantu a<1(^si^ y^lem^ís 1)rec^nciones, ^iue figuran o ac(^m-l^añan en la etiqucta al etivase de cacla ^^r(^^iurt(t.

Enfermedades que se previenen con la desinfección en seco.

^'(tn los l^ul^^(^s rúpri^^^^s, q>ie c^^mc^ ^lijiin^^s i>ter^^ri los^n-imeramel)tc aplicados en la desiníección seca ^le la semi-lla, se c^mibatc eficazmente el «tizón» del trigo.

L^IS coulpuest<^s org-aiwmer^úric^^s tienen una acción másalill)liíl, que c(^m^^rende a la antel-iol- enfel-ine^lad }- a^li^-cr-sos hunñ^^s rtlyas esl^ol-as se halla>i en contacto c^)n la^ se-niillas, ( t estál) et) el suelo, ^^hie it^i ecta^) a las ^^lanta^ ^^lc^micnz^^ ^le su ^lesarrollo.

I^e^,eti<ltts ensayc^s, ei^ectua^los en clivers^^^ l^aíses, hanclem(I;tracl(t cj>le algttilos c^tllhtiest^^^s ^-^^látiles ur^-an^)merrí)-rir(^s (r+tln(t el cl^)rur(> rle etilmercuri^^ y otrOs) actúan eficaz-mei^te r(>ntra l^^s «carbones cubiert^^s» ^íe la ceba^la ^^ avena^- aun sobre al^un^^s cíe 1^)s «carbones clesnudos», I^re^^inien-^l^t a^lcl)iás ^^tras eniern^edacles.

Ca(la j^r(,<íuct(^, cle l^ts que hay un nttmer^^ ecrosi^lerableen el r(^merriO, artú^t^ s^^bre (leterminacl^s h^m^os, ^^ no

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Fig. 1.-Espigu cl<^ tri{;o «atizonada» , coq Itis glumas míis nl^i^^rtas dc lo nor-mal, clc^jando ^+ntmvcr los gr^^non at,iai,dos. (De Br:.vt.i_^^c^t.)

Fig. 2.-Granos de trigo «cariados», enteros o deshechos, mostrxndo las esporascontenidas e^n su interior, en form^^ de polvi]lo negro que hu^l^^ lo inismo que

ĉ l pescado podrido (a trimetilamina).

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debe creerse que su acción es universal, sirviendo ^lara to-clas las ^eniillas ti- hara toclas las enfermedades.

Fig. 3.-EI polvillo negro contenido en los granos cariados está formado porlas esporas que propagan la enfermedad al romperse aquéllos durante la trilla.En esta figura aparecen varias esporas en germinación, la cual es impedida porlos compuestos anticriptogámicos usados en la desinfección. (De BEn^i_i.octi.)

Fig. 4.-Sobre el grano, principalmente en el pincel y en el surco, se adhíerenlas esporas do tizón. A veces su número es tan grande que, como en la figura,se distingue el grano infectado a simple vista; otras veces las esporas son poconumerosas y sólo puede reconocerse la contaminación por medio de una lupa.

En todos lo, casos conviene desinfectar la semilla.

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Fig. 5.-lina de las enfermedades que puede precenirse con I;i desinfercción enseco es ]a que produce en la cebada estrías pardas como las de la figura ^Hel-minthosporium gyamineum). Para ello se aconsejan algunos compue^stos volátiles

organomercúricos. (De Ko^a^.eie.)

1_]1 cl prece^lente ^^uaclro 1-esumiln^», pol- ser ]nej<^r a^-noci^las, algunas de las enfermedacles de los cereales queInieden ^n-evenirse con éxito desinfectand^^ el g^ran^^ ^le siem-ura c<>li los procluctos que se indican .

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Normas para la aplicación de los productos en polvo.

Para <Itie la ar.cibn cle estc^s ^lesiiiiectantes ^ea eficaz ^1^-betl hallarse en esta<l^^ de Ix^lv^^ finan^^ente ^liviclicl^> ti- la mer-rla r^m la semilla ha ^lc llarei-se ^lel m^d^^ más l^eri^ect^^ ix>-^il^le, I^^ra ^lue rertihra l^icil to^la su stil^erficie.

^i se trata ^le sales cúl^ricas, coii^•iene em}^leai- las ^l^^si,n^íuim^is ac^msejadas, que en l^^s rereales ^uelen ser ^le200 ^;r^in^^^s Ix^r duintal métria^ (100 l:r;-.), al,r^^sinlacla-uletlte. L?n e^ces^^ cle ^le5iniect<lnte ^to j^c^i-j^rdi^^a a la set»i-lla, p^^rr^ c^ncnr^^ce^, inútiln^ente, el tratamieut^^. La semillatrata^la httccle conservarse sin inc^^nveniente t<^tl^^ cl tien^^^^^^jtte se quiera, Il^sta cl tn^m^ent^^ <le la siembra.

Cttancl^^ se usen s^iles inercíirica^ (s^^l.^re t^>^1^^ si ^^m v^^-1<ítiles), se ^leben calcular las ^l^^^is r^m c^actitud, Inies unexces^^ 1>erjuclica la i^acultad áermiiiativa ^le l^l seinilla, j^ti-^lieiicl^^ lleg^ar a clestruirla. La semill^l trata^la ^lebe l,erma-necer unas cuantas h^^ras antes cle la siemhra, en la5 pane-ras, sac^os ^> lug^ar de conservacibn. La siembra nc^ ^lehe re-trasarse m^ls de un mes si la sen^illa se ^le^in i^ectó c^m algunasal ^-^^látil ^ie inci-curi^^.

EI f^Cl3 (hexacl^^rttro de benrerl^^) n^> ^^erju^lica tl la se-milla, 1>er^> si una ^^ez tratacla se almac:ena ^llurh^ tieml,^^,l^iercle eficacia.

Aparatos mezcladores.

l'ara r.anticla^les I,^dueñas n^^ se r^ecesita ning^ítn al,^ra-t^^ es^^ecial: es suficiente inezclar la semilla ^^ el anti^:ril;t^^-;;^imir^^, en la cantida^í necesaria, y remo^-er el c^mjunt^, va-rias ver.es, r^^n la mano o h^r me^lio cle una p^la ha^ta ccm-seg^uir tlrla ^listribuci^ín perfecta del ^^rocluct^^.

I^n ^tros cas<^s, cc^ni^^ en el cle las peclueñas semillas ^lelas hlantas hoi-tícolas, ^e reúneii la seillilla ^- el ^lesiniectanteen ttna botella u otr^^ i-ecihiente, de vidri^^ ^^ metálico, ^lueciei-re bien, y deshués se ag^ita i-epeticlainente con 1^ manc^.

Para cantida^les iiaayores, como las partidas ^le cerealesnec.esarias en una pequeña expl^tación, jniede eu^plearse un

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saco cíe tej ido hien tupido, colno los usados para el trans-porte de la harina, que se llena cle semilla unos tres cuartusde su capacidad, añacliendo luego el l^olvo desinfectante, elcttal se distribuye danclo repetidas vueltas al saco. Se com-^>rende fácilmente que este método es impel-fecto ^^ que sól^>se consigue llna buella mezcla despltés de volteal- el sac^^uiuchas veccs.

Para el tratamiellto en seco de semillas en grandes ^^medianas cantidades se reqttieren a^^aratos especiales, sibien parte de ellos pueden ser improvisados por el agricul-t<^1-. Fstos a^>aratos se agl-upan en dos categ^orías, según qtlela mezcla de la semilla con el ^^r^xluct^^ se realice ^or rota-

ciós^t o f^or c^raveáaci'.

^ ^P:1RAT05 ROT^^TIVO^.

Entre l^^s aparatos del pl-inler tipo, los lnás económic^ls^- fáciles de improvisar son los formados por ttn recipiente(bidón de ^etróleo o gasolina, bocoy o barril, etc. ) que seh^.ce gil-ar sobl-e un eje dispuesto excéntricamente y cuy^^se^arenu^s se apo}-an en dos trípodes, que pueden sel- de ina-

Fig. 6.-Con un bidón puede improvisarse un aparato para la desinfección enseco. Para hacer mejor la mezcla conviene instalar una tabla atravesada en suinterior. El bidón sólo se llenará hasta la mitad y, después de bien cerrado,

se le hace girar lentamente durante unos minutos.

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<lera o cle hierro. A1 eje va unicío un manubrio capaz cíe im-l^rimir un movimiento giratorio ^je unas 40 vueltas por mi-nuto. La semilla y el cíesini:ectante se introducen por ttnatal^acíera que debe ajustar peri^ectamente, y que servirá cles-^nlés para su salida. La mezcla pue^le iavorecerse si se ins-tala un ag^itador en el interior clel biclón, late sólo debe lle-nal-se hasta la mitad o dos tercios cle su rabida, l^ara que lasemilla quecíe bien tratacla (fig-. 6).

A^aratos análogos al anterior son construídos en va-rias formas y por diversas marcas, los qtte, naturalmente,^on ^lc lna^^or dttración que los iml^rovisados. Los ha^^ en

FiR. 7.-llesinfe.ctadora «Puk», cuya forma especial hace que, al gicar, se corn-prima y extienda el grano alternativamente, para au más rápida y perfecta

mezcla con el producto desinfect.ante.

i urma cle tolva paralelepipécíica cttyo eje coincide con una^liag-onal. Otros, muy usados, adoptan la forma cle un tron-^^u ĉle cono rematado en otra figura análoga ; al girar, el gra-no se reúne y esparce, alternativamente, recubriénclose concl desinfectante (fig. 7).

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Ln cualquier caso, los anteri^^re^ al>aratos rotativos rc-^luieren sólc^ dos condicic^nes :

- c^ierre ^erfecto, para que n^^ se piercla el desini^ec-

tante;- j^^i^il li^raj^ie^a, para el ra^^^ cle qtte efectuem^^s trata-

mientos con productos distintos que pudieran scr in-c^^lnhatibles.

I^.l tiem^x^ emhleado en hacer la mezcla c^m estos aj^a-ratos ^lel^c ser cle unos dos a tres minut^^s, dw-ante el cual^e les hace ^irar lentamente.

^ A^I'^^Rn'I'Oti QUF, ACTÚAN PUR GI:AVEDAID.

Entre los aharatos cle este ti^x^ es nnt^- útil, hur ;ti ha-ratw-a, iac^ilidacl de construcción y rapidez en hacer la mez-rla, el rel^resent^clo en la fig^ura ^. Consta de d<^s j>artes,construídas t<^talmente en ma<Iera: uria caja horiz<^t^tal,abierta e>> su harte superior ^- clue, Ix^r medio de un tiraii-te ^- jx^lea, j>ue^le hacei-se g-irar casi en ángul^^ rect^^ i-es-

Fig. 8.-Aspecto gen^^rril de un 2parato p^ir^i 1^ti desinfección de somillas ^n secoconstruído de m<<dera. La caja horizontal tiene de dimension^s 175X25X2^ ce^^-Y,ímetros; los l^iturales del tubo mezclador a y b, 110X25 centícneiros, y la por-tezuela delantera, G6 centímetros de altura. Las tablillas interiores que efectúainla mezcl<^ están inclinadas 45^. (Modelo de la Estación Ekperimenta] A,^,rícola.

de Minnesota, EE. UU.)

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l^ect^^ al se^-uncl^ cuer^o, que se mantiene fij^^ verticahnente.En el I^ri^ner dehósito se coloca, en capas altel-nas, la se-

niilla ^^ el clesinfectante necesari<^. ^'ara hacei- la mezcla sevuelra s^^l^rc el se^;^undo de^^ósit^^ (fig. 9, B), que va provisto

l^ig. 9.-Dlan^•jo dc^l aI>ar,ilo descrit^^ c•n la fitiurri ant^.•ñor: A. I^isposici<in a^lter-n;itiva d^ una c^^pa do s<^inilla (a^f, <^tri con el pm^lucto desinf^,ctante en leti pro-Exirción com^c^ni^^ntc (bJ y otra ^^a^r,i do s<^milla ^Ic i^>ual cuant5a^ que la ^.-13. Lti r,úd^i de la mercla debe h,^.c^^rse con I^^niitud por ^n<^clio del tirinte cl.

cle cíi^^ersa^ ta1>lillas ^le Ina^lera (a^l<^sa^la^ a las I^^irecles y^^r^^^•ist^IS ^lc un uritici^^ rcntral), rtt}^^^s l^lan^^s cstán urien-

tacl^^s cti <listint^^s ^enticl^^s, jx^r me^li^^ ^le las rtiales se ^^btie-

ne una l^ucna ^nezrla dc la ^emilla ^ el clesinticrtante, eu el

rttrs^^ ^le la raí<la. l^;n el Í^,u^l^^ ^le cstc rttcrl^^, se rec^^^c la

tiCllllll^l COIl llll ti^1C(^ ll Oti'(^ 1'CCll)1CI1CC.

Otr^^ tijx, ^le e^ta clase ^ie má^luinas c^^nsi,te en ui^ ^;-ran^^ilili^lr^^, clisl^llest^^ vei-t^icaln^ente, ell c^tiy-^^ interi^^i- vall c^^l^^-ra^los alternativanlente embud^^^ cle chaha cle hiei-r^^ l^erf^^-r^I<la cn un^^s ^- lisa cll otr^^s. 1)ich^^s clilhucios, al^r^^siinad^^sj,^,r la hase, ^^ Ix^r cl ápice, c^blig-an a la senlilla ^^ al desinfer-tante ^^ne lc^ <lc^mll^aiia, a suirir nt^a ^>eriecta tnezcla (fig-tt-

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Fig. 10.-Apasato cilíndrico, provisto de conos para la mezcla de la semillay el producto desinfectante. A. Sección qne muestra sus diversas partes: a, depó-sito desmontable provisto de un cono sin perforar; b, pared del depósito cilín-drico; c y e, conos perforados que separan y mezclan la semilla con el des-infectante; d, cono sin perforar que reúne de nuevo la semilla.-B. Vista delaparato por su parte superior.-C. Perspectiva ;eneral del aparato.-D. Detallede uno de los conos perforados con orificios ( f J de 6 milímetros y distancia en-tre centros de 25 milímetros.-E. Sección de un cono, con los detalles de su

fijación. (Medidas en pulgadas: una pulgada equivale a 25'4 milímetros.)

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ra 10). Lste aparato es más eficaz que el anterior, si bielimás caro y nada fácil de iml^rovisar.

I?n maquinarias de mayor rendimiento se ha tlltI-Odtt-^^ido el criterio de cotnunicar a la semilla cierto grado dehumedad un l^oco antes de mezclarla con el producto enpolvo. lle este modo se consig^ue mayor adherencia del pol-vo a la semilla y, a su vez, éste sc dispersa menos en laatmósfera. La proporción cíe ag^ua necesaria es muy heque-ña, apro^imadamente el Inedio por ciento del peso de la se-milla.

Precauciones en el manejo de fungicidas.

.11 trabajar con productos fungicidas en polvo debe evi-tarse, en general, su inl.ialación y contacto con la l^iel. Losl^olvos cúpricos pueden producir náuseas si se resl^iran du-rante algím tiempo, hasta el extremo que, en algunos casos,llersonas de gran sensibilidad quedan inútiles para el tra-l^ajo durante algunos días.

M ás 1>eligrosos que los compuestos cúpricos son los demercurio, sobre todo los organomercúricos. Fstos, al ser res-l^irados, pueden causar jaquecas, trastornos bronquiales ydigestivos. ^demás, tengamos en cuenta que la arción tó-^ica del mercurio es acumulativa, por lo que los síntomasno se nlanifiestan en un principio, pero sí más tar<le, de notomar las debidas precauciones.

Los polvos organomercítricos producen quemaduras yíilceras en la piel análogas a las causadas por el contactocon un metal candente. Su acción cáustica es mayor si lal^iel se halla humedecida por el sud^^lr o por cualquier otracausa.

La desinfección de la semilla debe hacerse al aire libre,en un local con ventilación forzada. Cuando se hace en es-cala comercial se disponen asl^iradores en partes estratégi-cas para limpiar el aire. F_s siempre conveniente el uso deuna mascarilla protectora que cubra la nariz y la boca, y deguantes para evitar el contacto con la piel.

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I^n resumen, ías precauciones que se debeu tomar, usan-do cotnpuestos de cobre o de mercurio, son :

- Evitar la inhalación de polvos iatng^icidas.

- Tratar la semill^ en un local bien ventilado o al airelibre.

- Usar mascarilla protect^ra, cambianclo el filtro dia-riamente.

- witar la acumulación de los polvos mercúricos so-bre la piel húmeda.

- Lavarse las manos y car^ con frecuencia, secándolasnlu}^ bien.

- Las semillas tratadas no sirven para pienso y debeevit^rse due estén al alcance de los animales.

- Los recipientes usados para ía semilla tratada debenliinpiarse con esmero antes cle ser declica<los a ĉ^tr<>^tts^^^.

DN7POSITO LN7^GAL. M. 3.109 - 1958.(:k:\I'ICAS UGUITA - MADRID