Descripción de la

página de un libro infantil.

Alumnas:

María de la Cruz Navas

Verónica Parejo

Clara Clemente

Sara García- Alcalá

Desireé Guerrero

Marta Gálvez

Caperucita roja:

El malvado lobo quería comerse a caperucita, pero no se atrevía porque había leñadores cerca y podían verle. Así que pensó: “correré a la casa de las tejas verdes y me comeré a la abuelita. Y cuando aparezca caperucita también me la comeré sin que nadie moleste”

En la página donde nos vamos a centrar y explicar, principalmente observamos un fragmento del cuento que se está narrando. Este fragmento explica que el lobo primero se quiere comer a la abuelita y después cuando aparezca se comerá a Caperucita.

El fragmento está escrito en una fuente que se asemeja a la escritura típica de los niños o de los libro de caligrafía que utilizan.

Asimismo, el autor combina pequeñas ilustraciones o pictogramas con el texto para narrar el fragmento. Con estas ilustraciones el autor pretende fomentar la lectoescritura y que los niños sean capaces de asociar las ilustraciones con la palabra correspondiente.

Las ilustraciones no son caricaturas sino que son dibujos dirigidos a niños puesto que son sencillos y todos tienen una apariencia amable y animada, que se aleja un poco de la realidad.

En la parte inferior encontramos ilustraciones en las que se combinan dibujos con imágenes reales, como por ejemplo, la imagen del césped. También encontramos, a la derecha, una ilustración del protagonista del fragmento, el lobo. Este personaje, a pesar de que el autor nos dice que es “malvado” aparece de una forma cómica, que permite un mayor acercamiento de los niños a la narración. Además, la boca del lobo aparece abierta y con saliva dando a entender que tiene hambre.

MENSAJE OCULTO

Lo primero que hay que destacar es que el personaje “malo” (el lobo) es de sexo masculino y no de sexo femenino. Esto da a entender que la fuerza, la bruteza y la maldad están relacionadas con el sexo masculino. Por otro lado, el autor del cuento atribuye características malas al lobo, cuando en realidad el lobo es un animal al que no se le pueden asignar características humanas (el lobo no piensa, el lobo no es malo, el lobo no habla…). Hay que dar a comprender a los niños que no se pueden categorizar a los animales como buenos o malos, sino por su naturaleza. El lobo necesita cazar para comer y poder sobrevivir pero no por ello es malo.