Perlas y CicatricesPedro Lemebel

De Perlas y cicatrices es el tercer libro de Pedro Lemebel, que reúne relatos provenientes, en su mayoría, del programa radial “Cancionero”, donde -como dice el autor en el prólogo del título- “este puñado de crónicas se hicieron públicas en el goteo oral de su musicalizado relato”.

Dedicado a Violeta Lemebel, Pedro Mardones P. Paz Errázuriz, Soledad Bianchi, Jean Franco y a todas mis compañeras de Radio Tierra.

Las joyas del golpe

Y ocurrió en un sencillo país colgado de la cordillera con vista al ancho mar. Un país dibujado como una hilacha en el mapa; una aletargada culebra de sal que despertó un día con una metraca en la frente, escuchando bandos gangosos que repetían: "Todos los ciudadanos de ben guardarse temprano al toque de queda, y no exponerse a la mansalva terrorista".

Sombrío fosforecer

Las orquídeas negras de Mariana Callejas

Cuando en los aires crispados de la dictadura se escuchaba la música por las ventanas abiertas, se leía a Proust y Faulkner con devoción y un set de gays culturales revoloteaba en torno a la Callejas, la dueña de casa. Una diva escritora con un pasado antimarxista que hundía sus raíces en la ciénaga de Patria y Libertad.

El cura de la teleNo era necesario ser tan marxista para odiar su lengua de tridente picaneando a los milicos, azuzándolos a que se tomaran el poder y detuvieran la farra hereje de la U.P. La revuelta social de los años setenta donde el curita se creía el arcángel San Miguel liderando la cruzada derechista, declarando que la izquierda era un "vómito diabólico" que había que exterminar.

La visita de la ThatcherLo cierto es que Margaret, la isleña, se fue de bruces parando las patas frente a las cámaras. Y poco faltó para que viéramos sus blondas íntimas, sus encajes blindados con el almidón fálico que se tomó las Malvinas.

Gloria BenavidesLa Gotita era modelo de ternura, la niña virginal que cantaba en la matiné de los shows radiales, la simpatía adolescente iluminando la portada de revista Ritmo, cuando a los jóvenes coléricos los despeinó la ventolera del twist y el desatado rock and roll.

Lucía Sombra Los sombreros de la

Piñeiro

Las campanadas del once

Pa más recachas siempre hay un lindo día el once de septiembre, una mañana nacarada en el aire primaveral que contradice la nube tenebrosa de su recuerdo.

Palmenia Piza

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Dulce veleidad

La levaNunca más vi pasar a la chica de la moda bamboleando su hermosura, y hoy que miro la leva de quiltros babeantes alejándose tras la perra, pienso que la brutalidad de estas agresiones se repite impune mente en el calendario social. Cierto juicio moralizante avala el crimen y la vejación de las mujeres, que alteran la hipocresía barrial con el per fume azuceno de su emancipado destape.

El Gorrión de Conchalí

La Quintrala de Cumpeo

Camilo Escalona

El exilio fru-frú

Don FranciscoEl romance musical de los sesenta

De misses top, reinaslagartijas y otras acuarelas

Señora Mac Pato

Cecilia Bolocco

La tristeza de Bambi

Miriam Hernández

Martita Primera

Pudo solidarizar con las Madres

de los Detenidos Desaparecidos.

El exilio fru-frú

El Bim Bam Bum Las sirenas del café

Negocio erótico de los "Nuevos Tiempos".

Geraldine Chaplin

Del Carmen Bella Flor

"Sufro al pensar"

Claudia Victoria Poblete Hlaczik

La niña más joven que cierra aquella ronda de la muerte.

"Los cinco minutos te hacen florecer"

Carmen Gloria Quintana

Karin Eitel

Corpus Christi Ronald Wood

La Payita

El informe Rettig

“Río rebelde”“Súbanse al baile de los que sobran,nadie los va a echar jamás, nadie los quisoayudar de verdad.”(Cantan Los Prisioneros)

Quiltra luneraEsas locas preciosísimas, que contra todo y sobre todo,resistiendo un infierno totalizante que ni siquieraimaginamos, son como son valientemente, con una

dignidad,una fuerza y unas ganas de vivir, de las que yo y acasotambién el lector carecemos. Refulgentes ojosque da pánico soñar.(Función de medianoche, José J. Blanco)

Relamido Frenesí

Se despertó el bien y el mal,

la zorra pobre al portal,la zorra rica al rosal,y el avaro a las divisas(Canta J. Manuel Serrat)

Soberbia calamidad, verde perejil

Cuando los gallos cantan a deshora(Presagio popular)

Pedro Lemebel es seguramente el único escritor chileno que se maquilla y usa zapatos de taco alto, al menos en público. Maquillaje y tacones son parte de la propuesta contestataria de este escritor, que de ser un niño pobre criado a orillas de un basural y un artista travestido que usaba la provocación como herramienta de denuncia política, pasó a ser uno de los autores chilenos más comentados y exitosos de las últimas décadas.