CULTIVO DE SANDÍA

DICIEMBRE

2017

Características generales

La sandía, Citrullus lanatus, también llamada en otras partes de la región patilla, agua melón o melón de agua, es una fruta de la familia Cucurbitaceae originaria del norte de África, donde luego fue expandida al resto del mundo.

Es una planta herbácea de ciclo anual que presenta hábito de crecimiento rastrero (Foto Nº1), de textura áspera, con tallos pilosos provistos de zarcillos y hojas de cinco lóbulos profundos. Las flores son amarillas y grandes, coexistiendo en la planta flores masculinas y flores femeninas. Su fruto llamado pepónide, característico de la familia de las cucurbitáceas, es de tamaño grande, forma esférica, textura lisa y de color verde en dos o más tonos. La pulpa es carnosa, roja (por la presencia del pigmento licopeno), de sabor dulce y con alto porcentaje de agua (más del 90%). Posee numerosas semillas que pueden llegar a medir 1 cm de longitud, con color negro, marrón o blanco (cuando están en estado inmaduro).

Foto Nº1: Hábito rastrero de la planta de sandía

Propiedades nutricionales

Es una fruta muy apreciada por ser refrescante y rica en agua y sales. Se la considera importante para dietas de adelgazamiento por contener pocas calorías y alto porcentaje de agua. Las semillas son ricas en vitamina E, y se consumen de forma tostadas.

Entre las características mencionadas por múltiples fuentes, se destacan las siguientes:

• Previene el riesgo de enfermedades cardiovasculares

Por su elevado contenido de citrulina actúa como vasodilatador, además de tener poder antioxidante y estar involucrada en la elaboración de óxido nítrico. Éste último es una molécula de gas que estimula la dilatación y relajación de los vasos sanguíneos, lo que se traduce en una reducción de la tensión arterial y, por lo tanto, en un menor riesgo de enfermedades cardíacas.

• Disminuye la inflamación

Es una excelente fuente de licopeno, por lo que ayuda a combatir la inflamación por sus propiedades antiinflamatorias.

• Reduce el riesgo de enfermedades oculares

La sandía contiene una importante cantidad de vitamina A y provitaminas A como el betacaroteno y la betacriptoxantina, sustancias relacionadas con un menor riesgo de padecer enfermedades de la vista. Además contiene luteína y zeaxantina, dos sustancias con propiedades protectoras contra las cataratas y la degeneración macular.

• Previene enfermedades degenerativas

El elevado contenido de licopeno previene y reduce el estrés oxidativo que causan los radicales libres, una de las principales causas de las enfermedades degenerativas. El licopeno puede prevenir el cáncer que afecta a diferentes órganos y puede retardar el crecimiento de tumores. Además contiene betacaroteno y vitamina C que actúan como antioxidantes, protegiendo las células de los radicales libres, reducen la inflamación y disminuyen el riesgo de varios tipos de cáncer: esófago, estómago, próstata y páncreas.

• Hidratante

La sandía contiene más del 90% de agua, por lo que su consumo puede ser útil en prevenir y tratar la deshidratación.

Situación actual en Uruguay

La mayor parte de la producción de ésta fruta, históricamente, se ha desarrollado en el Norte del país, principalmente en la zona de Tranqueras en el Departamento de Rivera, con cultivo a campo (Foto Nº2). Además, existe otra zona de menor importancia en el Departamento de Salto con cultivo bajo invernáculo, adelantando la cosecha en el mes de noviembre tal como se observa en el gráfico de ingresos al Mercado Modelo (Figura N°1).

Foto Nº2: Cultivo de sandía a campo. Departamento de Rivera

El cultivo de sandía posee un umbral de temperatura para la producción relativamente alto (temperatura óptima para el crecimiento de la planta es de 25 a 35ºC durante el día y de 18 a 22ºC por la noche) por lo que se adapta bien a los suelos arenosos de Rivera, los cuales alcanzan estas temperaturas, con mayor rapidez. En el caso de Tranqueras, la forma de producción se realiza principalmente en campos arrendados con una rotación que determina que por lo general no se vuelva a instalar cultivo en el mismo campo hasta pasados 8 a 10 años. No se aplica riego sistematizado durante el crecimiento del cultivo, realizando riego solo al momento de la implantación. Es así que el rendimiento está influenciado, entre otros factores, por la cantidad de agua recibida de las precipitaciones, lo que lo hace un cultivo muy dependiente de las características del año y de resultados inciertos. Los productores riverenses realizan hasta tres fechas de siembra. La primera en el mes de julio, la segunda en agosto y la tercera en los meses de setiembre y octubre. La primera tiene como objetivo obtener fruta de forma temprana, la tecnología utilizada es la colocación de carpas de nailon con estructura de cañas sobre la planta para protegerla del frío (en la Foto N°2 tomada el 10 de noviembre se observa solo la estructura, ya que el nailon se retiró por haber cumplido su función de adelantar el cultivo). En la segunda y tercera siembra no se realiza ésta práctica. Los porcentajes de siembra son: 20% de la superficie de siembra de julio, 20% de siembra en agosto y

el 60% restante de siembra en setiembre y octubre. En la segunda y tercera fecha de plantación también se le coloca nailon sobre los canteros apretado con un terrón para que se mueva con el viento de manera de "espantapájaros" (Fotos N°3 y 4).

Foto Nº 3: Sandía sembrada a fines de octubre

El ciclo anual de la sandía representa una marcada estacionalidad de producción e ingresos de producto al Mercado Modelo. Es así que en los meses de verano se convierte en una de las principales frutas comercializadas y demandadas. Durante la zafra, los productores llegan al Mercado Modelo a vender su producto, donde se instalan hasta el fin de la zafra (Foto N°5).

Foto Nº 4: Detalle de Sandía sembrada a fines de Octubre con nailon a modo de "espantapájaros".

Plántula de sandía a pocos días de emerger

Foto N°3: Local de venta de sandía en el Mercado Modelo

Se estima que en la presente zafra hay una superficie sembrada de 400 has a 500 has., superficie sensiblemente inferior a la de la zafra pasada. Como se nombró anteriormente, el riego se realiza solamente al momento de la plantación, luego, durante el crecimiento del cultivo y fructificación, la única fuente de agua son las precipitaciones. Unos de los problemas que declaran los productores es la falta de agua, que se evidencia en marchitez de las plantas, quemado de la fruta y la posterior disminución del rendimiento. Actualmente, éste, está siendo un problema debido a las condiciones meteorológicas (sequía instalada). Como contrapartida, este año gracias a la poca humedad no se evidencian síntomas de enfermedades tanto en cultivo como en frutos.

El comienzo de zafra del presente año se situó a mitad del mes de noviembre con sandía procedente del departamento de Salto. Ya a comienzos del mes de diciembre la mayoría del producto es de origen riverense que irá en aumento hasta la llegada de los picos de ingresos hacia los meses de enero y febrero. En años anteriores los ingresos se extendieron hasta el mes de marzo, comportamiento que posiblemente ocurra también en la presente zafra.

Figura N°1: Ingresos de sandía por quincena al Mercado Modelo

Figura N°2: Precios de sandía por quincena en el Mercado Modelo

En cuanto a los precios, con las primeras partidas de mediados de noviembre, históricamente se sitúan por encima de los 25 pesos (Figura N°2) uruguayos para luego disminuir a medida que la oferta aumenta.

Los a nivel mayorista ya alcanzaron e incluso se encuentran por debajo de los valores de años anteriores para igual período del año.

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