Cuidados básicos para el cultivo natural

de árboles frutales

El presente manual es producto de las diferentes experiencias y voces encontradas durante los talleres con los grupos del proyecto Empodera-miento femenino comunitario a partir del modelo de aprovechamiento integral de traspatios desarrollado por Tonelhuayotzin, Nuestra Raíz, A.C. en las comunidades de Santa María Cuquila, San Miguel del Progreso, Lázaro Cárdenas y San Pedro Tidaá, en la Mixteca Alta, y San José del Progreso en los Valles Centrales de Oaxaca.

La intención de compartir estas técnicas básicas es contribuir a la producción local de alimentos, así como promover una agricultura natural que preserve la salud y la vida en el campo.

Aquí podrás revisar algunas técnicas compartidas entre las compañeras participantes, además de otras desarrolladas por campesinas y campe-sinos de otras comunidades. A lo largo del manual podrás encontrar temas como la planeación del terreno, la siembra, la poda, el enraiza-miento de esquejes o codos, o bien cómo elaborar tus propios abonos y plaguicidas naturales.

Agradecemos a todas y todos los participantes en este proyecto por hacer de sus conocimientos saberes colectivos, por cultivar dignidad, por generar vida y luchar por formas de existir en armonía con otras personas y con la naturaleza.

Presentación

Contenido: Jorge Bolaños, Julio VegaIlustraciones: Francisco VegaDiseño: Lucero Vázquezwww.nuestraraiz.orgnuestraraiz@gmail.com

Impreso en México, 2016.

Índice

7.- Prevención y control de plagas y enfermedades

1.- Los árboles frutales

2.- El espacio de los árboles

3.- La siembra

4.- Esquejes o bracitos

5.- Poda

6.- Abonos

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1.- Los árboles frutales

La fruticultura es la forma en que tratamos a nuestros árboles frutales, a través de técnicas y consejos que nos ayudan a darles los mejores nutrientes y cuidados. Este amor a la larga se ve re�ejado en muchos frutos, además de estómagos y corazones contentos.

Las frutas aportan muchas vitaminas, �bras y minerales en nuestra alimentación, ayudando a tener una vida más saludable y duradera. De acuerdo a la necesidad del cuerpo, al día, las personas adultas deberían de comer en promedio entre 3 y 4 frutas y los niños entre 2 y 3 frutas. Las frutas nos ayudan para no enfermarnos, para tener una buena digestión, para mantener nuestros huesos, músculos y órganos en buen estado y para tener energía.

Pero ¿todas las frutas serán realmente saludables? La respuesta podría estar en casa… ya que hay muchas formas de hacer fruticultura, desde los pueblos que la practican en sus traspatios y parcelas, hasta la producción industrial a gran escala. El trato que se da a los árboles en cada una es muy diferente.

En algunos plantíos industriales o intensivos se ocupan agroquímicos (fungicidas, pesticidas y herbicidas), que son sustancias altamente peligrosas para la salud humana. Estos químicos también contaminan los suelos y acaban con miles de especies animales y vegetales, alterando el medio ambiente.

Algunas de las sustancias utilizadas en los cultivos de frutales son el binapacrilo que es tóxico para el hígado y el sistema nerviosos, el óxido de etileno que genera irritación muscular, diarrea, nausea, y el toxafeno que genera convulsiones y aceleración del ritmo cardiaco.A pesar de que se ocupan pequeñas cantidades y de que se recomien-da esperar un tiempo luego de su utilización para la venta de los productos, muchas veces los productores no esperan este tiempo de seguridad y cuando llega la fruta a nuestra mesa sigue teniendo estos tóxicos. Nuestro cuerpo va acumulando los químicos que comemos, lo cual afecta nuestra salud. Entre otras cosas, se ha relacionado su consumo con enfermedades crónicas y problemas del sistema inmune.

Por otra parte, hay plantíos naturales, libres de químicos, en los que se producen frutas de mejor calidad y valor nutritivo, más sabrosos y de mejor aroma. Además, las verduras y frutas naturales (orgánicas) tienen más antioxidantes lo cual ayuda a prevenir el cáncer.

Algunas de las ventajas de sembrar nuestros propios árboles frutales:

• No requiere grandes inversiones• Conocemos de donde vienen nuestros frutos• Podemos utilizar abonos naturales en lugar de químicos y por lo tanto no dañar a la madre tierra ni a nuestros cuerpos• Puede ayudar a nuestra economía, ya que no sólo ahorramos al no comprar, sino cuando nos sobra fruta, podemos vender o intercambiar.

En este manual, nos interesa compartir la fruticultura de los pueblos, un cultivo que fortalece nuestra alimentación y salud, mientras mantiene los ciclos naturales y no daña a la tierra. A continuación compartiremos algunos consejos en este sentido, pero antes de empezar, echemos un vistazo a las partes de nuestros árboles.

• La copa (brotes, yemas, hojas, flores y frutos)

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•El esqueleto (ramas, tronco y cuello)

•Sistema radicular (raíces principales, raíces secundarias y vellos radiculares)

2.- El espacio de los árboles

Para que tengamos más y mejores frutos, además de alimentar bien a los árboles, también debemos de procurar que cada árbol tenga un espacio cómodo y soleado para crecer para que no compitan entre los árboles por los nutrientes del suelo, el agua y el sol, así como para que sus ramas no se golpeen entre ellas lastimando o tirando a los frutos. Por ello es importante plani�car donde colocaremos nuestro frutales.

La distancia que debe de existir entre un árbol y otro, puede variar según el frutal que sembraremos, dependiendo de la extensión de sus raíces y el follaje. Por ejemplo, un árbol con raíces amplias como el aguacate o capulín puede crecer mucho por debajo de la tierra, quitándole agua a los árboles cercanos. O bien, un árbol como el mango o el mamey, puede crecer tanto en su follaje que puede tapar la luz a los árboles más chicos.

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Entonces ¿cuánto hay que dejar de distancia? No te preocupes, a conti-nuación te mostramos una pequeña tabla con estas recomendaciones:

Una vez que tenemos de�nidas nuestras distancias, también podemos colocar algunas plantas que acompañen a nuestros árboles. Sembrar estas plantas es importante, no sólo para tener más variedades medicinales y comestibles en nuestras parcelas o traspatios, sino que también ayudan a generar un mejor ambiente para nuestros árboles. Por ejemplo, sembrar cilantro, nos permite tener más insectos que polinizan las �ores de nuestros árboles, aumentando la posibilidad de tener más frutos; otro ejemplo, sería la siembra a la orilla de frijol o garbanzo, que nos ayuda a �jar nitrógeno a nuestros árboles (es un mineral que es como la Urea pero natural).

Árbol Distancia en metros

• Plátano• Durazno• Manzana• Membrillo• Ciruela• Guayaba.

• Guayaba• Limón• Naranja• Mandarina• Pera• Tejocote• Chabacano• Higo• Nona• Níspero.

• Aguacate• Mango• Tamarindo• Mamey• Capulín• Nogal• Almendro.

• Papaya

4-5 metros

5-8 metros

10-12 metros

1 metro

Planta BeneficiosDónde colocarla

Entre los arboles

Entre los arboles

Entre los arboles

Entre los arboles

Entre los arboles

Entre los árboles en los lugares soleados.

Entre los árboles en los lugares soleados.

Atrae a las abejas y mejora la cantidad de frutos

Atrae a insectos bené�cos y polinizadores.

Fortalece el crecimiento aporta calcio al suelo. Atrae a avispas bené�cas.

Repele hormigas y moscas blancas y atrae avispas bené�cas. Atrae los pulgones a sí misma en vez de a los árboles.

Fijan nitrógeno a la tierra y si se cortan en plena �or sirven de abono verde si se pican y se mezclan con la tierra del cultivo.

Atrae catarinas, las larvas de este insecto se alimentan de pulgones.

Repele pulgones y atrae avispas bené�cas.

Mira algunas formas de crearle compañía a tus árboles:

• Borraja

• Lavanda

• Manzanilla

• Capuchina o mastuerzo

• Eneldo e hinojo

• Frijol y garbanzo

• Cilantro

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3.- La siembra

Aunque a veces compremos o nos regalen frutales nuestros vecinos, también podemos germinar nuestros árboles. Para ello, debemos de recolectar semillas de frutos provenientes de árboles sanos y que hayan dado mucha fruta. Se recomienda guardar la semilla de 3 a 8 meses a una temperatura de 8 a 10ºC y en un lugar poco húmedo como nuestras cocinas. Antes de sembrar, se recomienda humedecer la semilla de 4 a 5 días.

Las semillas grandes como el aguacate o el mango pueden sembrarse directamente en la tierra, pero otras frutas como manzanas o duraznos, pueden ser menos resistentes durante los primeros meses de vida. Para proteger estos pequeños frutales, se puede germinar en semilleros.

Los semilleros son recipientes donde se germinan las semillas, garanti-zándonos humedad y mejor tierra para su etapa inicial. Los semilleros los podemos construir, armando un cajón de madera forrado por dentro con plástico, o también podemos reutilizar algunas charolas de plástico, cubetas u ollas viejas.

Una vez que tengamos nuestro semillero, lo rellenamos con una mezcla de tierra, arena y composta o abono. Las porciones deberán ser parejas, por ejemplo: por cada palada de tierra, tendré que echar otra palada de arena, y otra palada de abono.

Posteriormente se colocan las semillas. Si son grandes (durazno, anona) se colocan a 2 centímetros de profundidad, y si son pequeñas (manzana, pera), deberán de colocarse a 1 centímetro de profundidad. La distancia entre semilla y semilla debe ser entre 20 y 30 centímetros. Es importante que en todo momento el semillero se encuentre húmedo y libre de otras hierbas.

En el momento en que los árboles del semillero alcanzan una altura de entre 10 y 15 cm, es buen momento para trasplantarlos o colocarlos en bolsas. Cuando realicemos el trasplante, debemos de a�ojar la tierra cuando menos a 15 centímetros de nuestro brote. Al trasladarlo, no se debe de exponer la raíz (que no le dé la luz ni el aire), por lo que se recomienda dejar tierra apelmazada. Una vez trasplantado, hay que regar de forma abundante (sin encharcar).

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4.- Esquejes o bracitos

Los esquejes o bracitos, son ramas que cortamos de los árboles, y que, al ponerlas a enraizar en tierra o musgo, pueden convertirse en árboles totalmente nuevos. Esto permite sacar “hijitos” de los árboles que nos gustan o de frutales de los que no podemos sacar semilla. Otra ventaja de los esquejes, es que pueden ahorrar tiempo, al evitar los pasos de siembra y trasplante. Antes de comenzar a esquejar veamos cómo se preparan los enraizadores que necesitaremos.

Enraizador de Sauce: En un balde de 20 litros, se coloca al fuego la mitad de hojas de sauce y la otra mitad de agua. Una vez que hierve, lo retiramos de la lumbre. Cuando se ha enfriado, vaciamos el té en una cubeta de 20 litros y rellenamos con agua. Cubrimos el recipiente y dejamos reposar el té durante una noche. En la mañana, removemos el té durante cinco minutos.

Enraizador de leguminosas: Se puede utilizar el agua en la que se remojaron las lentejas o los frijoles antes de cocinarse, o bien dejar remojar un kilo de lentejas y frijol durante ocho horas. Notaremos que el agua de frijol o lenteja está lista, cuando ésta comience a sacar burbujas.

Tipos de esqueje:

Esqueje o acodo simple: Se corta una rama primaria (las que brotan del tronco) que no esté ni muy gruesa ni muy delgada en comparación con otras ramas primarias. Le quitamos las hojas. Se pone a remojar la base durante ocho horas en el enraizador. Una vez que han pasado las 8 horas, se prepara el cajete o agujero donde se colocará el esqueje, para ello se recomienda rellenarlo con una mezcla de tierra y arena (mitad tierra, mitad arena). Una vez que está listo nuestro cajete, debemos de sacar el esqueje del té, y enterrar la base en el cajete a una profundidad de 20-30 centímetros. Se recomienda hacer el corte durante la mañana, reposar el esqueje en sombra durante 8 horas en el enraizador, y después, en el atardecer, colocar nuestro esqueje en el cajete. Si no se hace el proceso en el momento, se recomienda dejar acosada la rama (horizontal) para que la salvia no se concentre sólo en un punto.

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Esqueje o acodo aéreo: Se realiza un corte de unos 2 centímetros en la parte cercana al tronco de una rama primaria (la que brota del tronco) para retirar la corteza. Después, se amarra una bolsa rellena con musgo alrededor del corte. Posteriormente se riega el musgo con enraizador, para después cerrar la bolsa, es importante regar al menos cada semana el musgo para que permanezca húmedo. Esta técnica tarda aproxima-damente dos meses, y nos daremos cuenta cuando el nuevo árbol esté listo para su separación, porque comenzarán a salir raíces al interior de la bolsa. Cuando notemos la presencia de raíces, cortamos la rama con el musgo y las raíces (realizando el corte entre la bolsa y el reto del árbol, con lo cual la rama con sus nuevas raíces queda lista para su siembra).

Para trasplantarlo, debemos de tener listo un cajete o agujero relleno de tierra y arena (mitad tierra, mitad arena). Se recomienda realizar esta técnica en época de lluvias y en luna nueva para que no sangre tanto el árbol.

Tanto en el esqueje simple como en el aéreo, se recomienda realizar los cortes en luna creciente o luna llena, ya que la savia circula más por el tallo, haciendo al árbol más fuerte al momento de cicatrizar y previnien-do infecciones en el esqueje.

5.- Poda

La poda es importante en la vida del árbol, ya que ayuda a controlar su crecimiento y promueve una mayor producción de frutos. Según la necesidad, elegiremos el tipo de poda, desde la que permite dar forma y control al tamaño; la que corta el follaje excesivo, quitando algunas ramas y dejando principalmente los frutos; o la de renovación, que consiste en quitar ramas y troncos viejos para que crezcan retoños nuevos en el árbol. Veamos a detalle estas podas:

Poda de formación : Consiste en realizar dos pasos durante los primeros 4 años de vida del árbol. El 1º consiste en cortar la punta del tronco principal para que no crezca mucho el frutal, la altura puede variar, pero se recomienda hacerlo cuando el frutal comienza a superar la altura de nuestros hombros. El 2º paso se debe realizar cuando el frutal haya desarrollado ya varias ramas, por lo que debemos cortar algunas, dejando al menos entre 3 y 4 ramas principales (ramas gruesas que brotan del tronco), éstas deben de tener un espacio de por lo menos 10 cm entre rama y rama, y deben de tener un ángulo de 45º, es decir estar en diagonal. Esta poda se recomienda que se realice a �nales de invierno o del verano.

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Poda de despunte: Cuando a los frutales les comienzan a brotar ramas por todas partes, es momento de despuntar. El despunte ayuda a concentrar la energía del árbol en la formación de �ores y frutos, además de darle más luz a las hojas (y posteriormente a los frutos). Consiste en quitar buena parte de las ramas secundarias (son las ramas que brotan de las ramas primarias, las más delgadas) así como algunos chupones (retoños que crecen en el inicio de las ramas primarias).

En la siguiente ilustración tenemos dos ejemplos: en el de la izquierda, se muestran las ramas principales y secundarias, indicando con trazos negros los cortes que debemos realizar en las ramas principales, en gris, están las ramas que estaríamos quitando. En la de la derecha, se muestran los cortes de los chupones, y de algunas ramas secundarias, nuevamente en gris, se muestran las ramas que debemos cortar.Se recomienda realizar este tipo de cortes durante el otoño o verano.

Poda de limpieza: Después de que ha dado frutos nuestro árbol, muchas ramas y hojas comenzarán a secarse, por lo que se recomienda retirarlas. En el caso de las hojas hay que quitar todas las que se encuentren secas o de color amarillo. En el caso de las ramas, podemos quitar las más delgadas, y también, aquellas que al doblarse crujen porque están secas. Esta limpieza ayudará a la regeneración de nuevos retoños en el frutal.

Es importante señalar la importancia de los ciclos lunares en las podas, ya que cada fase de la luna in�uencia a nuestros árboles. En luna creciente es el momento que más se recomienda para que se realice la poda, porque es cuando la savia circula por el tallo hasta las copas. Por otra parte, en la luna menguante no se debe tocar o cortar el frutal, ya que la savia se concentra en la raíz, dejando delicado al árbol ante plagas y enfermedades.

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6.- Abonos

Así como las personas requerimos del alimento para subsistir, también los árboles deben de alimentarse no sólo de sol, agua y aire, sino también de la propia tierra. La aplicación de abonos es una manera de regresarle al árbol los nutrientes y minerales que pierde cada vez que nos da un fruto. El abono de animales como la vaca, el pollo o el borrego son buenos para aumentar la fertilidad del frutal, se recomien-da mezclarlos con tierra y aplicarlos en un cajete alrededor del árbol. Además de estos abonos, a continuación compartimos otros abonos y caldos utilizados para los frutales en la agricultura natural.

BiofertilizanteEl Biofertilizante o Biol es un abono que se hace a partir de la fermenta-ción de piloncillo, ceniza y estiércol de vaca. Es una especie de tepache utilizado para fertilizar los suelos y las hojas de los árboles, aportando nutrientes minerales y microorganismos necesarios para el crecimiento. Para preparar este abono se requieren diversos materiales, pero sobre todo, ser cuidadosos en su preparación.

Materiales: Recipiente (bidón) de 20 litros con tapa o anillo hermético, niple con doble rosca, manguera de 1 pulgada, una cubeta, una botella de plástico, 15 litros de agua, 5 kg de estiércol de vaca (entre más freso mejor), media barra de levadura (o una jícara de pulque), media cabeza de panela (o dos piloncillos medianos o un litro de melaza), 1 kg de ceniza del fogón (es importante que no se hayan quemado plásticos), un agitador que puede ser cualquier palo.

Elaboración: En una cubeta mezclar un litro de agua con la media levadura y panela (preferentemente molida). Poner los 5kg de estiércol en el recipiente de 20 lts, y revolver con los 14 litros de agua restantes. Una vez que se haya disuelto el estiércol, agregar la ceniza y �nalmente la mezcla de levadura con panela.

Antes de tapar el fertilizante, es importante preparar la tapa del bidón, para ello realizaremos una perforación de 1 pulgada al centro de la

tapa. En este agujero colocaremos un niple doble o bien, un doble conector utilizado para el sistema de riego por goteo (que se puede conseguir en las tiendas especializadas en artículos de agricultura). Es importante que quede bien sellado el conector, ya que de lo contrario podría entrar aire y bacterias que afectarían gravemente a nuestro fertilizante.

Es importante que el bidón no quede completamente lleno, por lo que deberá de haber cuando menos 20 cm entre el nivel de la mezcla y el nivel de la tapa. Una vez que está lista nuestra mezcla, se debe de colocar la tapa, y de preferencia asegurarla con un anillo metálico o con cinta adhesiva para evitar las bacterias.

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7.- Prevención y control de plagas y enfermedades

Además de abonar, la prevención de plagas y enfermedades también es importante para la vida de los árboles. Una buena manera de prevenir, es mediante el uso de caldos minerales (Sulfocálcico, Bordelés y Bicarbonato) que como su nombre lo dice, se componen principal-mente de minerales que sirven para repeler algunos hongos e insectos, además de aportar nutrientes a nuestros frutales.

A continuación compartimos una tabla con algunas enfermedades, en las que se menciona que remedios utilizar según el tipo de plaga o enfermedad. Después encontrarás las recetas para elaborar tus propios caldos minerales.

Una vez sellado, colocaremos en el conector o niple una manguera, la cual deberá de tener el largo su�ciente como para caer a un lado del bidón. Es importante que el �nal de la manguera quede constante-mente sumergido en agua, por lo que recomendamos colocar una “trampa de agua” que no es más que una botella de plástico rellena a la mitad con agua amarrada a nuestro bidón, en la que se sumerge el �nal de la manguera.

Pasados los primeros minutos, notaremos que comienzan a salir burbujas en la trampa de agua, se trata de gases que nos están indican-do que se ha iniciado correctamente el proceso de fermentación. Si no podemos ver estas burbujas algo ha salido mal y hay que revisar que no haya fugas en nuestro sistema. El proceso de fermentación puede durar de 20 a 30 días, y nos daremos cuenta que ya terminó cuando la botella o trampa de agua deje de burbujear. Una vez que pase esto, debemos destapar el bidón, y notar un color café obscuro, así como un olor de estiércol. En caso de que el olor sea apestoso y su color sea verduzco, quiere decir que entraron bacterias y no quedó bien el Biofertilizante, por lo que habrá de repetirse el proceso y evitar fugas o entradas de aire.

Aplicación: Primero se recomienda colarlo. Posteriormente se disuelve un litro de Biol en 20 litros de agua. Su aplicación es foliar por lo que se recomienda colocar en una mochila de aspersión o en un atomizador pequeño y aplicar por atrás de las hojas hasta que hayamos cubierto casi todo el follaje. Se recomienda realizar estas aplicaciones una o dos veces al mes, en un horario entre las 6 y las8 de la mañana, o bien, entre 5 y 7 de la tarde.

Plaga Tratamiento y controlSíntomaHojas cubiertas por un polvillo blanco, los frutos se cubren de manchas circulares de color marrón.

Las hojas comienzan a arrugarse y toman una coloración rojiza

Formación de sacos de goma de color café obscuro que sacan la goma trasparente ligeramente amarillenta por heridas en el tronco y ramas. Debilita el árbol, en los frutos se manchan de color pardo.

Aplicación de caldo sulfocál-cico, té de cola de caballo ocaldo mineral de bicarbonato

Cortar y retirar la corteza infectada, después aplicar caldo sulfocálcico y azufre en el tronco y ramas afectadas. También se recomienda diluir en 20 litros de agua, medio kilo de cal y 250 gramos de sal y regar las zonas afectadas por la enfermedad.

Quitar las hojas que se encuentren totalmente rojizas. Aplicar caldo sulfocál-cico o té de cola de caballo en el resto de los tallos, ramas y hojas.

• Cenicilla

• Cáncer y gomosis

• Verrucosis

Tabla de plagas, enfermedades y tratamientos

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Plaga Tratamiento y controlSíntoma

Este insecto se alimenta chupando la salvia de las hojas y ocasiona vistoso enrollamiento de las hojas jóvenes y en brotes, trasmite varias enfermedades por virus y hongos

Eliminar frutos y brotes infestados.

Plantar entre arboles eneldo o hinojo para que atraigan a catarinas que son insectos que se alimentan de pulgones.

Aplicar una molienda de un manojo de albahaca por 3 litros de agua, dejar reposar una noche, colar y mojar la planta.

Machacar 20 chiles picosos (morronco (manzano), habanero) y 5 cabezas de ajo en 10 litros de agua. Dejar reposar a la sombra medio día, colar y mojar todo el árbol, en especial la parte afectada.

• Pulgón verde

Caldo BordelésvEs un caldo mineral compuesto de sulfato de cobre y cal hidratada, utilizado frecuentemente para prevenir hongos o ácaros (insectos pequeños que dejan telarañas). Aunque también puede utilizarse para atacar estas plagas, se recomienda aplicarlo constantemente como un cuidado preventivo.

Materiales: Cubeta de plástico, cal (100g) agua (10 lt), sulfato de cobre (100g) y un agitador que puede ser cualquier palo. El sulfato de cobre puede conseguirse en algunas tiendas especializadas en la agricultura.

Elaboración: Se realizan dos disoluciones, en la primera se disuelven 100 g de sulfato de cobre en 5 litros de agua revolviendo. En la segun-da, se disuelven los 100 g de cal en 5 litros de agua. Se dejan reposar 3 horas ambas disoluciones.

Posteriormente, verter la disolución de cobre en la de cal, ¡ojo! siempre debe ser “cobre sobre cal” y no al revés, ya que podrían generarse gases tóxicos. También es importante no ocupar baldes o cubetas de metal ya que podrían alterar nuestros caldos. Se recomienda ocupar recipientes de plástico.

Una vez que se encuentra perfectamente revuelto, podemos realizar la prueba del machete para saber si nuestro caldo está en su punto. Para ello se deberá de introducir un machete en nuestra mezcla, el cual debe salir normal. Si éste presenta oxidación quiere decir que nuestro caldo quedó acido, por lo que deberá de añadirse más cal.

Aplicación: Este caldo puede aplicarse directamente sin la necesidad de diluirse, aunque es importante colarlo antes para evitar que se tape la mochila aspersora o el atomizador donde se colocará. Se debe de agitar bien, y deberá aplicarse cubriendo todo el follaje del frutal.

Caldo Sulfo cálcicoAdemás de aportar nutrientes minerales a nuestros cultivos, ayuda a controlar las enfermedades ocasionadas por hongos, y la pasta que sobra en su elaboración, puede ser utilizada como un cicatrizador de las plantas que han sido dañadas por corte.

Materiales: Balde, agua (1 lt), azufre (1kg), cal viva (1/2 kg), un fogón, un agitador que puede ser cualquier palo. El azufre puede conseguirse en tiendas especializadas de agricultura, o bien, en algunas tlapalerías.

Elaboración: Se pone a calentar el litro de agua dentro del balde, una vez que comienza a hervir, vertimos el azufre y la cal. Revolvemos constantemente hasta que notemos que los ingredientes se han disuelto. Para comprobar que nuestro caldo está listo, debemos de notar que su color cambió a un tono ámbar o anaranjado.

Aplicación: Ahora que tenemos 1lt de caldo sulfocálcico, vamos a disolverlo en 40 lts de agua, para después colarlo y colocarlo en la mochila aspersora o el atomizador. Se deberá aplicar en todo el follaje al menos 1 o 2 veces al mes, pero deberá suspenderse su uso cuando aparezca la �oración, ya que los minerales podrían tirar las �ores.

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Manejo agroecológico de árboles frutales y forestalesCESTA 2001

Manual de fruticultura para una agricultura sostenible y soberanía alimentariaGrupo Vicente Guerrero AC 2012

Manual agronómico de Frutales, junioPROGRESA CATIE-Wilswerk-CE 2009

Poda de árboles frutalesInstituto Nacional de Tecnología Agropecuaria 2016

Proyecto para el Apoyo a pequeños Agricultores en la Zona OrientalCentro Nacional de Tecnología agropecuaria y Forestal 2012

Bibliografía consultadaCaldo de bicarbonatoEste caldo sirve para combatir enfermedades producidas por hongos como la cenicilla (presencia de una capa blanca y �na en las hojas) y la gomosis (presencia de goma amarillenta en tronco y ramas).

Materiales: para una cubeta de 20 lts. se ocupan 100 gr de bicarbona-to de sodio, 19 litros de agua y un palo para remover.

Elaboración: Se coloca el agua en la cubeta, después se agregan los 100 gr de bicarbonato de sodio y se mezclan bien con el removedor hasta disolverse.

Aplicación: No es necesario colar ni disolver en agua. Con ayuda de una mochila aspersora se aplica mojando todo el árbol asegurándose de mojar el reverso de las hojas.

Nota: Se recomienda aplicar los caldos minerales y fertilizantes antes de las 10 am y después de las 4 pm para evitar la quemadura del follaje por los rayos del sol.

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Este material se realizó con recursos de las Décima Quinta Emisión del Programa Proequidad del Instituto Nacional de las Mujeres, empero, éste no necesariamente comparte los puntos de vista

expresados por las(os) autores del presente trabajo.