CUENTO 02

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DON RAMÓN Y SU CABRITA En una pequeña pero acogedora casita en el campo, vivía junto a su familia un buen hombre cuyo nombre era Ramón, él era muy querido por todos sus vecinos ya que siempre estaba dispuesto a ayudarlos y a colaborar con cada uno de sus amigos. Don Ramón como cariñosamente le llamaban todos, tenía también un gran cariño por los animales que tenía en su granja: vacas, ovejas, cabras entre otros animalitos, a los cuales el cuidaba y alimentaba cada mañana y estaba siempre pendiente que sus animales estén siempre contentos y no les falte nada, pues siempre decía que también necesitaban cariño de todos nosotros los seres humanos. Al amanecer de cada día, Don Ramón, caminaba por la pradera húmeda y fría por la llovizna que había caído durante la noche. Al pasar por la hierba que estaba llena de gotas de agua se formaba un caminito, y junto a su querido perro Lalo, quien era su cómplice de muchas aventuras, se dirigían a revisar el rebaño de cabras y ovejas. A un costado, en otro corral tenía su vaca Filomena que acababa de parir un hermoso ternero de manchas negras; revisaba su rebaño y contaba uno por uno a sus animalitos. Pero de repente se asombró y exclamó con una voz ronca y fuerte: ¡Me falta un animal, seguro me lo han robado! Siguió buscando y de repente a un lado de la cerca aparecía un forado, entonces pensó y dijo: ¡Ah, seguro se ha escapado! Don Ramón junto a su fiel perro Lalo, que no lo dejaba nunca solo, emprendieron la búsqueda por los alrededores, CARHUAPOMA NEGRINI, José Addiel 5° grado de primaria

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DON RAMN Y SU CABRITAEn una pequea pero acogedora casita en el campo, viva junto a su familia un buen hombre cuyo nombre era Ramn, l era muy querido por todos sus vecinos ya que siempre estaba dispuesto a ayudarlos y a colaborar con cada uno de sus amigos.Don Ramn como cariosamente le llamaban todos, tena tambin un gran cario por los animales que tena en su granja: vacas, ovejas, cabras entre otros animalitos, a los cuales el cuidaba y alimentaba cada maana y estaba siempre pendiente que sus animales estn siempre contentos y no les falte nada, pues siempre deca que tambin necesitaban cario de todos nosotros los seres humanos.Al amanecer de cada da, Don Ramn, caminaba por la pradera hmeda y fra por la llovizna que haba cado durante la noche. Al pasar por la hierba que estaba llena de gotas de agua se formaba un caminito, y junto a su querido perro Lalo, quien era su cmplice de muchas aventuras, se dirigan a revisar el rebao de cabras y ovejas.A un costado, en otro corral tena su vaca Filomena que acababa de parir un hermoso ternero de manchas negras; revisaba su rebao y contaba uno por uno a sus animalitos.Pero de repente se asombr y exclam con una voz ronca y fuerte: Me falta un animal, seguro me lo han robado!Sigui buscando y de repente a un lado de la cerca apareca un forado, entonces pens y dijo: Ah, seguro se ha escapado!Don Ramn junto a su fiel perro Lalo, que no lo dejaba nunca solo, emprendieron la bsqueda por los alrededores, preguntaban a los dueos de otras chacras, pero nadie le daba razn alguna.Pasaron los das, Don Ramn estaba un poco triste, al no saber nada de su cabrita, lo nico que saba es que un leador le dijo que haba visto una cabrita color canela, un poco alejada de otro rebao que pastaba en las lomas alimentndose de algunas algarrobas y abrojos que caan de los diversos rboles que hay en el campo y que caan por los caminos.Don Ramn tuvo una gran esperanza de recuperar a su cabrita, tuvo mucha fe y junto al Leal Lalo decidieron ir a verla y comprobar si se trataba de la cabrita; y efectivamente era el peque animalito que al ver a su buen amo corri hacia l y daba grandes saltos de alegra que contagiaban al inquieto Lalo que atinaba a dar vueltas alrededor de Ramn y mover su cola demostrando as la felicidad que tambin senta.Don Ramn cual padre abraza fuertemente a su hijo, tom entre sus brazos a la cabrita y le acarici un buen rato, luego at una soga al cuello del animalito, teniendo cuidado de no lastimarla, y junto a su perro Lalo arre a su animalito hacia su casita, luego le dio de comer y beber hasta que el animalito saci su apetito.Inmediatamente tom a su caballo Ramiro y sali nuevamente hacia el campo a buscar algunos palos y troncos con los cuales poder cercar el corral y as evitar que otro animalito pueda escapar y alejarse de los dems animalesAl medioda regres Ramn siempre acompaado del fiel Lalo y traa consigo los materiales necesarios para realizar su trabajo de cercar el corralito de los animales; y lejos de mostrar cansancio comenz inmediatamente con su trabajo, el cual termin a las dos de la tarde.Cay la tarde y Don Ramn muy contento por lo que haba hecho decidi ingresar a su hogar sonriente y feliz por haber recuperado a su cabrita perdida, y a partir de ese momento l y el fiel guardin Lalo cuidaron an ms a cada uno de los animalitos.CARHUAPOMA NEGRINI, Jos Addiel 5 grado de primaria