CUB DICIEMBRE 2011 - scj.es. Boletines y Revistas/A. El Reino/EL Reino... · 5 Felicitación...

52
diciembre 2011 - nº 754 Revista de formación cristiana

Transcript of CUB DICIEMBRE 2011 - scj.es. Boletines y Revistas/A. El Reino/EL Reino... · 5 Felicitación...

dic

iem

bre

201

1 - n

º 754

Revista de formación crist iana

La historia de los santos no termina aquí. Prosigue. Estoy con-vencido que el Señor sigue suscitando santos. Ahora nos toca a cadauno de nosotros, ser esa ‘sal’ santa en nuestras circunstancias con-cretas. Nadie tal vez se dé cuenta. No importa. El Señor sí que lo ve.Y la Iglesia lo nota. Porque como recordó en cierta ocasión Juan Pa-blo II: “La Iglesia renace cada mañana en sus santos”.

Intercalados entre las fechas importantes de la Historiauniversal, van las fechas de muerte, o nacimiento para elcielo, de los 56 “santos” escogidos como representantesde otros muchísimos, conocidos o anónimos, de nuestrotiempo. Entre paréntesis va su fecha de nacimiento parapoderlos situar mejor en su tiempo.

TRAMO 3.º (1960-2008)

1960.–Erección del muro de Berlín.1962.–Misiles soviéticos en Cuba: crisis con Estados Unidos.

28 abril, en Magenta (Italia): † Gianna Beretta (n. 1922).1963.–Junio: Pablo VI, Papa hasta 1978.

Noviembre: Estados Unidos, asesinato del presidente Kennedy.Pacto de amistad franco-alemana.3 marzo, en Valencia (España): † Faustino Pérez-ManglanoMagro (n. 1946).

3 junio, en Roma: † Juan XXIII (n. 1881).4 septiembre, en Scy Caselles (Francia): † Robert Schuman(n. 1886).

1964.–Viaje del Papa Pablo VI a Tierra Santa.Revolución de los “simbas” en el ex Congo belga.13 octubre, en Ivry (Francia): † Madeleine Delbrel (n. 1904).1 diciembre, en Isiro (Congo). † Clementina Anuarite Nenga-peta (n. 1939).

1965.–Diciembre: fin del Concilio Vaticano II.1967.–24 julio, en Lovaina (Bélgica): † Joseph Cardijn (n. 1882).1969.–Julio: llegada del hombre a la luna.1971.–3 noviembre, en Linares (Jaén): † Manuel Lozano (n. 1920).1973.–Golpe de estado de Pinochet en Chile.1974.–11 diciembre, en La Aldehuela (Madrid): † Maravillas de Jesús

(n. 1891).1975.–Noviembre. España: muerte de Franco.

Juan Carlos I, rey de España.22 enero, en París: † Claire de Castelbajac (n. 1953).

1977.–5 noviembre, en Florencia (Italia): † Giorgio La Pira (n. 1904).1978.–Agosto: Juan Pablo I, Papa durante 23 días.

Septiembre: Juan Pablo II, Papa hasta 2005.5 de noviembre, en Alicante, † Pedro Herrero (n. 1904).

1979.–El Frente de Liberación Nacional Sandinista triunfa en Nicara-gua.

1980.–Creación del sindicato Solidarnosc en Polonia.24 marzo, en San Salvador (El Salvador): † Óscar Romero (n.1917).29 noviembre, en Nueva York: † Dorothy Day (n. 1897).

1981.–Mayo 13, atentado contra Juan Pablo II.1985.–20 mayo, en Pamplona: † Eduardo Ortiz de Landázuri (n.

1910).1988.–La “perestroika” de Gorbachov en la URSS.1989.–Caída del muro de Berlín.

26 enero, en Spokane (Estados Unidos): † Segundo Llorente(n. 1906).

1990.–Reunificación alemana.1991.–Fin de la URSS.1993.–31 de julio, en Motril (España): † Balduino I (n. 1930).1994.–2 de abril, en París, † Jérome Lejeune (n. 1926).1996.–21 de mayo, en Tibhirine (Argelia): † Christian de Chergé

(n. 1937) y compañeros.1999.–14 octubre, en Londres: † Julius Nyerere (n. 1922).

P. José María Salaverri, SM

El mundo en el que les tocó vivir

✴ ✴ ✴ ✴ ✴ ✴

(Continúa en la pág. 51)

REVISTA DE FORMACIÓNCRISTIANA

Año LIX – Número 754Diciembre de 2011

DIRECCIÓN

José María Sánchez Cremades

Vicente Muñoz Pellín

Sacerdotes del Corazón de Jesús

Blasco Ibáñez, 55

46021 Valencia

[email protected]

REDACTORES-COLABORADORES

Ariel Álvarez Valdés (R. Argentina)

Victorio Almodóvar Arteaga (Torrejón)

Ángeles Linares Lorente (Madrid)

Artemio López Merino (Ecuador)

Evaristo Martínez de Alegría (Roma)

Eduardo Perales Pons (Valencia)

José María Salaverri (Valencia)

Jorge Sans Vila (Roma)

José Luis Segura Lacruz (Venezuela)

José Mª Suárez Campos (Madrid)

EDICIÓN

Editorial EL REINO

Sacerdotes del Corazón de Jesús

(Padres Reparadores)

ADMINISTRACIÓN

Victorio Almodóvar Arteaga

Apartado 112 - Tel. 91 675 15 36

28850 Torrejón de Ardoz (Madrid)

[email protected]

IMPRIME

GRÁFICAS DEHON

La Morera, 23-25

28850 Torrejón de Ardoz (Madrid)

Tel. 91 675 15 36 - Fax 91 675 24 98

Depósito legal: M. 1.176-58

DISEÑO Y MAQUETACIÓN

Francisco Antón Martínez

S umario

5 • Felicitación navideña

18 • Sociedad

7 • Desde la fe

NUESTRA PORTADAEn el Antiguo Testamento de la Biblia la Sabiduría –con mayúscula– es comoel anticipo del Logos o la Palabra de Dios en Jesús, “el Sol que nace de loalto” y de María virgen, su Aurora. En nuestro caso, la sabiduría es la sabrosaciencia de la Iglesia: la Teología, a la que dedicamos esta vez el Especial-ElReino, con dos textos del Prof. González de Cardedal y de S.S. Benedicto XVI.

4 Editorial José María Sánchez Cremades, scjÚltimo número de la revista

5 Felicitación navideña

7 Desde la fe Evaristo José Martínez de Alegría, scjUna fe sin límites

10 El espejo Vicente Muñoz Pellín, scjde los días En tono menor

14 Divulgación Ariel Álvarez Valdésbíblica ¿Cuántos viajes hizo Jesús

al extranjero?

18 Sociedad Eusebio Gómez Navarro, ocd– El juguete roto– La belleza está dentro

20 Javier García Ruiz de Medina, sjLa paz entre los pueblos medianteel conocimiento y el respeto mutuos

22 Clarisas: 800 añosde sus orígenes

23 ESPECIAL La Sabiduría de DiosEL REINO Olegario González de Cardedal

Carta abierta:

Joseph Ratzinger-Benedicto XVIQué es teología

31 Para pensar Eduardo Perales Pons, scjAutocrítica y rectificación

32 Ángeles Linares LorenteSúplicas a la Virgen

34 Objetivo, José María Salaverri Aranegui, smEducar - Patricio Pérez Palacios

- Dos poemas de amor

38 Un nuevo Jorge Sans VilaDiccionario La morada del ser

41 Desde la vida José Luis Segura Lacruz, scj- Santuario familiar- Bondad sin ruido

43 Entrevista Luz Sánchez-MelladoA Mons. Xavier Novell

46 Páginas ¿Qué piensan los niños de su mamá?sociales

48 Misión Artemio López Merino, scjy misioneros Adultos mayores con calidad de vida

50 Salud Mª Pilar Romero-Mapi BolumarLa chufa y la horchata

3el Reino

el Reinodel Corazón de Jesús

EDITORIAL

Al sacratísimo Corazón de Jesús, rey y cen-tro de todos los corazones, dedicamos el núme-ro final de la revista EL REINO como hicimos conla ayuda de Dios en el primer número de enerode 1952.

La revista ha cumplido 60 años en el ámbitode las publicaciones. La necesaria transforma-ción que indiqué en el editorial de septiembrepasado nos obliga a cerrar este número refirién-donos a ella. Más de cuatro directores han de-sempeñado su cargo, pero las circunstanciasnos han llevado a que yo, el iniciador de la pu-blicación, sea también el que asiste a su trans-formación.

Lo normal en situaciones como la nuestraes que mi pensamiento vuele hacia aquellas ab-negadas personas que, año tras año, han idocolaborando en la edición de los ejemplares conla diversidad de sus plumas, pero con la unani-midad de su afecto. Ellos han trabajado con ge-nerosidad, con constancia y adjuntando lo me-jor de sí en la perspectiva del bien de loslectores. No solo mi pensamiento sino mi grati-tud sea el mejor testimonio del aprecio a que sehan hecho acreedores. No puedo citarlos a to-dos, pero en la página del sumario encontrare-mos sus nombres.

Nuestra gratitud se extiende también a lossuscriptores que han contribuido con su aporta-ción a la continuidad de la publicación. Unamención especial merecen aquellas personasque con abnegada labor recogían una por unalas suscripciones de un pueblo o de un territorioy enviaban su importe a la administración, facili-tando así las tareas de recogida de dinero deabonados. A todas esas personas, mi afecto ygratitud.

Mi reconocimiento profundo a los técnicos ytrabajadores de la imprenta Gráficas Dehon quehan llevado el peso del diseño y edición de lapublicación con dedicación y empeño notables.Les deseo éxito en el futuro de sus tareas y

acierto en estos años de crisis. En verdad, la re-vista ha sido un medio de difusión de las doctri-nas de fe y costumbres a través de las edicio-nes de libros que han surgido a partir deartículos de los colaboradores, como en el casode Ciriaco Izquierdo, de Ángeles Linares y en elmío propio. Varios son los libros que han vistola luz pública desde las aportaciones a la revis-ta de estos escritores.

Mediante la correspondencia con los lecto-res, se ha podido comprobar con frecuencia elbien derivado de la lectura de las páginas de EL

REINO. Por lo que el padre León Dehon puedeverse complacido al constatar que se han idollevando a término los objetivos por él señala-dos, al iniciar la publicación de Le Règne, enfrancés, a finales del siglo XIX.

Damos por bien empleados los desvelos yesfuerzos por mantener una revista viva. Demodo insensible, se han ido dando pinceladasde acuerdo con los avances de las ciencias sa-gradas, como la teología dogmática, la moral ola sagrada escritura. De este modo hemos idorespondiendo a los deseos de la Iglesia respec-to a las orientaciones del Vaticano II, tratandode abrir las puertas a la realidad de la historiapresente para escuchar al hombre y atender asus problemas.

No ha sido mi ánimo el de alabar nuestratarea o ensalzarla, sino deciros que nos hemoscolocado ante la vida con el deseo de servir, deconformidad con las palabras del Señor que novino a ser servido, sino a servir hasta el extre-mo de dar su vida. Por ello hemos querido abrir-nos con sensibilidad a la mentalidad, sugeren-cias y necesidades de los lectores y delambiente general para programar nuestros nú-meros de conformidad con todo ello.Desde estas últimas páginas os deseo las me-jores bendiciones de Dios en adelante. ❦

José María Sánchez Cremades, scjDirector de la revista

Último número de la revista

4 el Reino

¡Felices

Navidades!

La Dirección de la revis-ta desea a todos sus colabora-dores sus amplias felicidadesen las fechas tan significativasde Navidad y Año Nuevo. Es-tas felicidades son la expresiónde nuestro sincero afecto y delos deseos de que las bendicio-nes del Señor se extiendan so-bre las personas y familias delos redactores, de los técnicos yobreros de Gráficas, de los sus-criptores de EL REINO y sobresus lectores, en general.

El año que termina ha lo-grado una conexión profunda dela Iglesia con los jóvenes, enocasión de la presencia del Papaen Madrid. Éste fue un paso no-torio para despertar la fe dormi-da de muchos de ellos y el co-

nocimiento de Dios yde Cristo por parte dequienes pudieron aban-donarlos. Que el próxi-mo año alcance algunainiciativa similar paraque la fe permanezcaviva en los creyentes yoferta válida para los deotras posturas religiosasno cristianas.

Una última palabrade aliento y fortalezapara esta época de crisis yde cambios.

La Dirección

5el Reino

FELICITACIÓN NAVIDEÑA

6 el Reino

FELICITACIÓN NAVIDEÑA

San José

Dice la oración del día de su fiesta(19 de marzo), tras la reforma litúrgica delConcilio Vaticano II –que cumple precisa-mente sus bodas de oro en 1012–: “Diostodopoderoso, que confiaste los primerosmisterios de la salvación de los hombres ala fiel custodia de san José, haz que, porsu intercesión, la Iglesia los conserve fiel-mente y los lleve a plenitud en su misiónsalvadora”.

Los mayores devotos de san José alo largo de la historia fueron sin duda Ma-ría, que conoció primero a este hombrejusto, y Jesús, que trataba a ambos comohijo; fuera de la historia, por descontado,la propia Santísima Trinidad. Todos lossantos lo sintieron cercano; de modo parti-cular, san Bernardino de Siena (1360-1444), santa Teresa de Jesús (1515-1582);y el beato Manuel Domingo y Sol (1936-1909) entre los recientes.

He aquí lo que nuestra santa Teresacuenta de san José en su Vida, entre otrosmuchos testimonios suyos: Es cosa queespanta las grandes mercedes que me hahecho Dios por medio de este bienaventu-rado santo, y los peligros de que me ha li-brado, así de cuerpo como de alma; que aotros santos parece que les dio el Señorgracia para socorrer en una necesidad;pero a este glorioso santo tengo experien-cia de que socorre en todas, y quiere elSeñor darnos a entender, que así como leestuvo sometido en la tierra, pues comotenía nombre de padre, siendo custodio, yle podía mandar, así en el cielo hacecuanto le pide.

Modelo de santidad modesta, es-condida, sencilla. Hizo lo que quizá esmás difícil: saber acompañar sin hacersenotar. Pero es evidente que Jesús, la Pala-bra [el Verbo de Dios] pronunciaba las pa-labras con el mismo tono de voz que el pa-dre que le enseñó a decir “Padre”. Y que,como la custodia guarda dignamente alSacramento, José custodió amorosamentea la Sagrada Familia y nos protege a noso-tros, la escogida descendencia de Jesu-cristo, a cada uno con perpetuo patrocinio(León XIII), para que a su ejemplo y sos-tenidos por su auxilio podamos santamen-te vivir y piadosamente morir y alcanzaren el cielo la eterna felicidad. ❦

Y el Verbo se hizo carneJosé María Suárez Campos

Eran los días en que el César, Roma,dictaba leyes para el orbe. Y erantambién los tiempos en que Dios queríadecir en nuestra carne su Palabra.Y María, doncella entre doncellas,

Cantar de los Cantares 1,1 narciso de Sarón, lirio en los valles,Lucas 1,38 oyó la Voz de Dios. Se dijo esclava.Lucas 1,42 Y fue bendito el fruto de su vientre

y ella misma bendita.

Cantar de los Cantares 6,9 ¿Quién es esaApocalipsis 22,1 que se alza como Aurora y va vestida

de sol, con las estrellas por su frente?

Eran los días en que el César quisomedir la magnitud de sus dominioscomo se mide el grano en la cosecha.Por los caminos ásperos subíael paso militar de las legionesde acero. Y los humildes peregrinosiban hacia la paz de sus aldeas.

Miqueas 5,12 Más tú, Belén fructífero, pequeñoentre los principados de Judá,de ti saldrá el Mesías que domineen Israel, antiguo por su origen.

Dios cumplió su Palabra y se hizo carneJuan (1,14) su Verbo y se hizo llanto y sangre y vida.

Iluminar desde Roma, desde el Vaticano, humilde entidadque desde hace dos mil años sigue viviendo y practicando,con sus períodos brillantes, grises y aun negros, su voca-

ción de enseñar a las gentes, “bautizándolas en el nombre delPadre, del Hijo y del Espíritu santo” seguros de la presenciadel Señor resucitado en medio de nosotros hasta el fin de lostiempos”, ni es ni ha sido fácil.

Y, sin embargo, en estos tiempos, con tantas celebraciones,aniversarios, jornadas de todo tipo, Benedicto XVI, ha pro-clamado el día de San Pedro, el 11 de octubre del 2011, unMotu Propio (es decir personalmente), titulado La puerta dela fe en el que se nos invita a unirnos a los pastores y a losfieles al sucesor de Pedro, para hacer memoria del don pre-cioso de la fe.

La importancia se palpa, observando los tiempos que nostoca vivir, la indiferencia de los compañeros de viaje, ya sehabla de los siete mil millones de habitantes, de los que unabuena parte de ellos andan por los distintos senderos del mun-do como ovejas sin pastor y a los que, el más allá, los clási-cos de dónde venimos, quiénes somos, dónde vamos, no tie-nen respuesta, o es tan incomprendida y edulcorada que nollegan a convencer.

Señala Benedicto XVI, son palabras de despedida, suyas y de losPapas precedentes, desde Pío XII, Juan XXIII, Pablo VII, Juan Pa-blo I, Juan Pablo, y brillando entre medio el gran y esperado Con-

cilio Vaticano II:“Queremos celebrar este Año de manera digna y profunda. Deberá

identificarse la reflexión sobre la fe para ayudar a todos los creyentes enCristo a hacer más consciente y a fortalecer su adhesión al Evangelio,especialmente en un momento de profundo cambio como el que la hu-manidad está viviendo. Tendremos la oportunidad de confesar nuestra feen el Señor resucitado en Catedrales e Iglesias de todo el mundo, ennuestras casas y familias, para que cada uno sienta la fuerte exigencia yconocer y manifestar mejor a las generaciones futuras la fe de siempre.Las comunidades religiosas como las parroquiales, como las realidadeseclesiales, antiguas o nuevas, encontrarán el modo en este Año, para ha-cer pública la profesión de fe del credo.

Adentrándonos un poco en lo que puede ayudarnos esta gran refle-xión, podemos volver la mirada al mundo que vivimos, y también a la

REFLEXIÓN SOBRE LA FE

7el Reino

DESDE LA FE

UNA FESIN LÍMITES Evaristo José Martínez de Alegría Oroquieta, scj

El papa Benedicto ha escritoun motu proprio sobre la fe

sección desde la fe que con otrostítulos desde 1975, con fatiga, haido llevando a vuestras casas uncontacto de mirada hacia los tiem-pos que corríamos juntos, tanto enlos cambios sociales y políticos,como en la experiencia cristianade nuestra sociedad, que yo creopoco preparada, ante la chaparradade apertura a los profundos y rápi-dos cambiamientos que han rotolos márgenes y las aguas a las queni la formación, ni la educacióncristiana han sabido encauzar.

La pastoral tradicional ha idomanteniendo la presencia cristianasin sobresaltos pero sin solventarel problema de tantas iglesias va-cías, el vapuleo constante de losmedios de comunicación desacra-

8 el Reino

DESDE LA FE

Ha sido declarado un año de la fe en 2012.Ha sido declarado un año de la fe en 2012.

modo más profundo, no solo los contenidos de la fe, sino también jun-to a estos, también el acto con el que decidimos confiarnos totalmentea Dios, con plena libertad.

Existe de hecho, una unidad profunda entre el acto con el que se creey los contenidos a los que asentimos. El apóstol Pablo nos permite en-trar en el interior de esta realidad cuando escribe: “Con el corazón... secree... y con la boca se hace la profesión de fe (Rom 10,10). El corazónindica que el primer acto con el que se viene a la fe es don de Dios yacción de la gracia que obra y transforma la persona hasta en lo más ín-timo”.

Hace unos días, participando en una convivencia neocatecumenal, tu-ve ocasión de ver por entero la llamada de Kiko Arguello a los partici-pantes del Camino, al día siguiente de la conclusión de la JMJ, en la pla-za de la Castellana, con el fondo del antiguo edificio monumental,restaurado, de correos y comunicaciones, y que algunos de mis acom-pañantes pensaron que era una iglesia.

La llamada al anuncio, al testimonio cristiano, como lo había sido to-da la JMJ fue evidente en la gran sorpresa del gran número de chicas ychicos que respondieron a la llamada.

Nuestra querida España, como siempre, aún en ambientes religiosos,se quedó admirada de la prontitud de respuesta de los miles de síes demuchachos y muchachas que se acercaron a recibir la bendición y suenvío a la misión, después de toda una fase de discernimiento poste-rior, no hay que olvidar que llevan en sus mochilas muchas horas deoración, catequesis, convivencias, Eucaristía y Biblia, Comunidad, eltrípode en que se apoyan los catecúmenos, a los que el Papa sigue yapoya, animando a evangelizar desde su carisma aprobado por la Igle-sia que, si al Señor le das la mano, para hacerlo presente, hasta en Chi-na, India, ambientes musulmanes, etc. él colmará rebosando la medi-da de tu corazón.

lizando todo, riéndose, pero quizásin darse cuenta que una sociedadsin Dios, sin riendas morales y po-líticas está provocando un mundonuevo de personas, de gente demuchas palabras y teóricamenteválidas pero sin fe abierta a la es-peranza, sin ganas de trabajar en laque, aún en medio de estos tiem-pos recios, todo les es debido. Elclientelismo a grande o pequeñaescala es una realidad milenaria yel parasitismo de los últimos tiem-pos se practica a grande y peque-ña escala con el sistema de lasayudas que permiten vivir a costade los demás.

En el número 10 de este do-cumento escribe BenedictoXVI, haciéndonos ver cómo

hemos de vivir nuestra fe hoy tes-timonio de esperanza: “Llegados aeste punto, quisiera trazar un reco-rrido que ayude a entender de un

LA PROFESIÓN DE FE

9el Reino

ELCRISTIANISMO, “CONDICIÓNOBLIGATORIA”PARAENTENDEREUROPA

Elcristianismoesunacondiciónobligatoriaparacomprenderconco-herencialahistoriaylaactualidaddenuestrospaíses.

Monseñor Salvatore Fisichella, presidente del Consejo Pontificiopara laPromociónde laNuevaEvangelización,hizoestaafirmaciónensuintervenciónenlaAsambleaPlenariadelConsejodelasConferenciasEpiscopalesdeEuropa(CCEE),celebradaenTirana(Albania)del29deseptiembreal2deoctubre.

Ensudiscurso,elpreladorecordó losdosSínodosquesehandedi-cadoaEuropa:elde1991yelde1999,dedondesurgió laExhortaciónApostólicaEcclesiainEuropa,del2003.

Europa

Paraelpresidentedeldicasteriovaticano,enEuropaseestádandouna situación paradójica evidente. En este sentido, recordó que en laépoca en la que esta vivía de valores compartidos, poseía una fuerteidentidadquelahacíafácilmentereconocible,noobstantelasfronterasterritoriales.

EstoseestádandoporquesequiereconstruirunaEuropa independientedelcristianismoy,enalgunosca-sos,encontradeeste.Incluso–recordó–,elcristianismoesunacondiciónobligatoriaparacomprenderdeunamaneracoherentelahistoriaylaactualidaddenuestrospaíses.

Laeleccióndelaneutralidadfrentealareligión,ideadayperseguidapormuchos,eselmétodomásdañinoquesepuedaimaginar.Noesmarginandoniexorcizandoelcristianismocomoseconstruyeunasociedadmejor.

Privadosdelapresenciasignificativadeloscatólicos,nuestrospaísesserían,encualquiercaso,máspobres,estaríanmásaisladosyseríanmenosatrayentes.

Noqueremosqueestosuceda;pidamos,portanto,serescuchadosypuestosapruebaparaverificarlarique-zadenuestrafeparaelgenuinoprogresodelasociedad.

Tenemoseldeberdeproducirunpensamientoqueseacapazdeponerlasbasesparaunaépocaquedéunaculturaimpregnadadefealasfuturasgeneraciones,permitiéndolesvivirenlagenuinalibertadporqueestaránproyectadashacialaverdad.Esteeselpensamientoquefalta.

Nuevaevangelización

Lanuevaevangelización,nodebereducirseaunafórmula,sinoquedebeexpresarrealmenteeldeseodepo-nerseencaminohaciaunapastoralquesehagacargodelosproblemasqueestánpresentesenlasociedadyportantoqueafectenaunacomunidadcristiana.

Monseñor Fisichella citó la Misión metrópoli, que en la próxima Cuaresma implicará a doce diócesis europeas“paraofrecerunsignoaEuropadequelaIglesiaviveenunidadyquepresentamomentosconcretosdeactuación”.

Compartiendoalgunas iniciativasy lacontemporaneidaddesudesarrollo,observósequiere“daraEuropaunsignorealquenopuedepasarinadvertido”. ❦

El beato papa Juan Pablo IIescribió en 2003

“Ecclesia in Europa”.

Yo creo, y tengo la esperanza que, hasta que no seamos capaces deabrirnos a estas nuevas realidades, los dones del Espíritu y el ca-risma no podrán llegar a renovar la faz de la tierra. La puerta de

la fe no solo debe estar abierta, como decía Juan Pablo II, hay que abrir-la de par en par, sin miedos de los portazos que puedan arrancar fallebasy cerrojos, aunque sean obras de arte del pensamiento y de la cultura.

La fuerza del Señor, poca cosa a los ojos de sus coetáneos, allá en

ABRIR LAS PUERTAS DE LA FEBelén, fue capaz de remover a supueblo y la paz de la tierra. La pazprometida a los hombres de buenavoluntad movió a ir buscándolahasta nuestros días. ¿Quién podríaimaginar que hasta ateos participa-ran en esta jornada, “buscadoresde Dios”, como tantos que se con-fiesan creyentes. Los 25 añostranscurridos de Asís, fueron unagracia para estos tiempos. ❦

Durante dieciséis años largos, es decir, desde el 8 deseptiembre de 1995 hasta hoy, he trabajado al lado delDirector de “El Reino”, P. José MaríaSánchez Cremades, como antes com-partí con él comunidad en Madrid oasiento en el gobierno de nuestraProvincia religiosa y en otros forosde ella; lo mismo que le ayudara enalgunos de sus años como Directorde ESIC-Valencia. Vaya a él, en pri-mer lugar, la expresión de mi gratitudporque siempre me ha tratado conamable atención, en lo profesionalcomo en lo personal.

En nuestra revista me he encarga-do, en particular, de la relación connuestros redactores habituales o es-porádicos, esparcidos a ambos ladosdel Atlántico, y a todos ellos deseomanifestarles nuestra gratitud desdemi puesto de subdirector. Ninguno hapercibido remuneración alguna, to-dos han sido, mes tras mes, de unaacendrada puntualidad en sus envíosy, gracias a ellos, “El Reino” se haido convirtiendo en una realidad cada vez más digna ypositiva –aunque no haya estado exenta de fallos–. Paradecirlo en dos palabras, han colaborado con cariño yhasta con ternura. Incluso, cuando uno u otro deseabaya el relevo, se han dejado convencer para seguir escri-biendo pie, attente ac devote.

LA REDACCIÓN DE “EL REINODEL CORAZÓN DE JESÚS”:

EVOCACIÓN DE UNA DILATADARELACIÓN PERSONAL

Baste citar los nombres de quienes en este momentocomponen el cuerpo de redactores: Ariel ÁlvarezValdés, apreciado biblista, desde Santiago del Estero(Argentina); Ángeles Linares Lorente, publicista y re-dactora durante décadas (Madrid); Artemio López Meri-no, de entre los re-fundadores de nuestra Obra SCJ enEcuador, residente en Quito; Evaristo José Martínez deAlegría Oroquieta, uno de los más veteranos redactores,

postulador de causas de canonizaciónen Roma; Eduardo Perales Pons, de-dicado durante años a la formaciónSCJ y, en especial, a la formaciónpermanente de religiosos (Valencia);José María Salaverri Aranegui, quefue muchos años Superior general delos Marianistas y postula la causa decanonización de su exalumno Fausti-no Pérez-Manglano también desdeValencia; Jorge Sans Vila, catedráticoemérito de Pedagogía en Salamanca,ocupado desde hace casi 60 años enla pastoral de las vocaciones y de lossubsidios para la misma (Roma);José Luis Segura Lacruz, que dejó elprofesorado de las Ciencias experi-mentales en España, para experimen-tar aún más el ministerio, especial-mente entre los pobres y losenfermos en Venezuela; además deellos, en estos últimos años, JavierGarcía Ruiz de Medina, jesuita Di-

rector general del Apostolado de la Oración (Madrid), yel carmelita descalzo Eusebio Gómez Navarro, vuelto aEspaña (Salamanca) tras décadas de servicio pastoral enUSA. Evidentemente, los redactores no agotan la tareade la revista, ni mucho menos, pero el título del presen-te apartado expresa su concreto alcance eucarístico.

10 el Reino

EL ESPEJO DE LOS DÍAS

EN TONO MENOR Vicente Muñoz Pellín, scj

Facsímil del número extraordinariode la revista correspondiente

al 50º aniversario de su fundación.

1.–Hace unas semanas he leído el anuncio de un In-forme del Consejo de Europa dirigido al Gobierno espa-ñol, en relación con la controvertida implantación en elsistema educativo de la Educación para la Convivencia.Es una noticia que me parece oportuno copiar para loslectores de “El Reino”:

EN QUE SE CONFIRMA LO DICHOCON ALGUNOS EJEMPLOS (y II)

“El Comité de Derechos Sociales del Consejo de Euro-pa ha comunicado a la asociación Profesionales por laÉtica que trasladará al Gobierno español un informe con-trario a Educación para la Ciudadanía (EpC). El docu-mento, realizado por Profesionales por la Ética y por elCentro Europeo para la Ley y la Justicia (ECLJ) fue pre-sentado el pasado mes de junio, informó la asociación.

El estudio demuestra que la polémica asignatura in-cumple varios tratados y acuerdos internacionales –comola Carta Social Europea y los Principios Orientadores

11el Reino

sobre la enseñanza de las religiones y creencias en las Es-cuelas Públicas de la OSCE–, así como algunas comuni-caciones del Comité de Derechos Humanos de NacionesUnidas. El informe concluye con una recomendación queinsta al Consejo de Europa a soli-citar del Gobierno español queatienda a los alumnos objetoresque no entran en clase de EpC.

La responsable de RelacionesInternacionales de Profesionalespor la Ética, Leonor Tamayo, lointerpreta como una pequeña vic-toria que sirve para recordar quelas asignaturas de EpC han pro-vocado un serio conflicto en lasociedad española, y que muchospadres siguen objetando y lu-chando contra esta forma deadoctrinamiento escolar. “El pri-mer hito –afirma-, fue la presen-tación de una demanda de 105 es-pañoles ante el Tribunal Europeode Derechos Humanos de Estras-burgo en marzo de 2010”. Re-cuerda que estas materias escola-res fueron denunciadas en ochoocasiones en diversos foros o ins-tituciones internacionales: el Par-lamento Europeo, en Bruselas enjunio de 2010; el Consejo de De-rechos Humanos de la ONU, enGinebra, en septiembre de 2010; la Asamblea de la Or-ganización para la Seguridad y Cooperación en Europa(OSCE), en Varsovia, en octubre de 2010; la Reuniónsobre Libertad de Religión o Creencia de la OSCE, enViena, en diciembre de 2010; la Cumbre de la OSCEen Kazajstán, en diciembre de 2010; la Agencia de De-rechos Fundamentales de la UE, en Viena, en abril de2011; el Comité Europeo de Derechos Sociales, delConsejo de Europa, en Estrasburgo, en junio de 2011; yel Congreso sobre Prevención y respuesta a los ataquescontra los cristianos de la OSCE, en Roma, en septiem-bre de 2011”.

2.–No olvido que, cuando se lean estas páginas, se ha-brán celebrado ya Las Elecciones generales anticipadas,y la suerte estará echada sobre la composición de lasCortes. Todos estos días de pre-campaña o campaña

electoral, ante mítines, declaracio-nes y posturas de periodistas, havenido recurrentemente a mi espí-ritu, pero sin derrotismo, la excla-mación de D. Miguel de Unamu-no: “¡Qué país, qué paisaje y quépaisanaje!”; también, sin condenaalguna formal al prójimo, puesnuestro único Maestro nos legóuna consigna nítida: “No conde-néis y no seréis condenados”; yporque es muy fácil caer en aque-llo que eventualmente criticamos.

Pero, con profunda tristeza, vi yescuché –por ejemplo– el víbrantemitin del candidato socialista en Ca-narias acerca de las a su juicio irre-versibles conquistas sociales de es-tos años: hablaba en esos momentosdel derecho al aborto, y era bastanteaplaudido: quiero pensar que máspor quienes son “un hombre al usoque sabe su doctrina”, que por quienaspira a ser “en el buen sentido de lapalabra, bueno” (A. Machado, en suAutobiografía).

Por eso, al margen del informereseñado en el n. 1 de este apartado y de otros que aclaranque no se puede obligar a ningún Estado a admitir el abor-to –ya que no se trata de ningún derecho–, acudo humil-demente no tanto al juramento hipocrático del siglo VIa.C. o a la carta a Diogneto del s. II d.C.; ni a las muchasdeclaraciones internacionales de las últimas décadas delmismo tenor, sino al sentido común y a la constatación dela realidad, que se refleja, por ejemplo, en el recuadro dela p. 47 de este número, en que una exhaustiva investiga-ción proclama que, de hecho, las familias con un hijo consíndrome de Down son abrumadoramente felices. Y esque –como se ha dicho– los hechos son tozudos.

En que se confirma lo dicho... Monumentoa Juan Pablo II. Abanderado del derecho

a la vida y a la educación en libertad,en el Paseo de la Castellana de Madrid.

Benedicto XVI, tras celebrar emotiva y gozosamente el60º aniversario de su ordenación sacerdotal, acaba de anun-ciar que en 2012 se iniciará en la Iglesia católica el año de laFe. Sabemos que la fe es un don, pero también una tarea.

PROFESIÓN DE FENo es algo innato al hombre, sino que viene por la escuchade la obligada y humilde predicación (es la fides ex auditude san Pablo: la fe que viene de la escucha). Pero, al igualque tantas veces la vocación y la misma profesión, se conta-gia con frecuencia de una persona a otra como un microbio.

La lectura orante de la Sagrada Escritura tiene muchoque ver con la fe. Siendo toda ella Palabra de Dios, pro-

12 el Reino

EL ESPEJO DE LOS DÍAS

clamada en su mayor parte en la liturgia de la Iglesia araíz del Concilio Vaticano II en todas las lenguas, cadauno podemos tener nuestros pasajes preferidos para ca-minar por la vida hacia Dios,nuestro Padre: de la mano deJesucristo, nuestro Señor e im-pulsados por el soplo del Espí-ritu; como concluye la plegariacentral de la misa: Por Cristo,con él y en él, a ti, Dios Padreomnipotente, en la unidad delEspíritu Santo, todo honor ytoda gloria por los siglos delos siglos.

Parecido fenómeno prefe-rencial suele darse en el ámbitode la cultura. Personalmentesuelo recalar en los pensamien-tos siguientes –entre otros, sinduda–, que expreso aquí sin or-den, pero con deseado concier-to: “Todo lo que asciende, con-verge” (Teilhard de Chardin);“Ser para los otros un caminoque se utiliza y se olvida”(Paul Claudel); “La libertad,Sancho, es uno de los más pre-ciosos dones que a los hombresdieron los cielos; …por la li-bertad, así como por la honra,se puede y debe aventurar lavida y, por el contrario, el cau-tiverio es el mayor mal quepuede venir a los hombres”(Miguel de Cervantes); “Una-nimidad en el pluralismo” (Roger de Taizé); “Ya poraquí no hay camino, que para el justo no hay ley” (Juande la Cruz); “Sorprenderse, extrañarse, es comenzar aentender”, o “La palabra es un sacramento de difícil ad-ministración” (Ortega y Gasset); “La paciencia todo loalcanza” (Teresa de Jesús); “Cuando Dios puso el Edén,pensó en América” (Nino Bravo); “Sólo se ve bien conel corazón; lo esencial resulta invisible para los ojos”(Saint-Exupéry). “La lectura es la academia de todo es-critor” (Vargas Llosa); “La vocación… es una amistad”(JSV); “Atempera tu velocidad sentándote y la tardanzalevantándote”; “La infancia acaba cuando nos converti-mos en padres de nuestros padres”.

Volviendo a la Biblia, tras atreverme a recomendarcomprar por Navidad la versión oficial de la Conferen-cia Episcopal Española, recién aparecida, enuncio aho-ra los pasajes con los que más me suelo identificar:

Ante todo, con las únicas palabras conocidas de Jesúsque no recogen los Evangelios: “Porque, como él mis-mo dijo, hay más gozo en dar que en recibir”. En se-

guida, el jóanico “porqueDios es amor”. Del Evange-lio, este pasaje: “Ya no os lla-mo siervos, porque el siervono sabe lo que hace su señor;a vosotros os llamo amigos…Venid a mí, todos los que es-táis cansados y agobiados, yyo os aliviaré. Cargad con miyugo...”. Luego, lo que dicesan Pedro en una de sus car-tas: “No habéis visto a Jesu-cristo, y lo amáis; no lo veis, ycreéis en él; y os alegráis conun gozo trasfigurado…”; o esaescueta biografía de Jesús:“Aunque era hijo aprendió,sufriendo, a obedecer”, y sucorrelato en la misma carta alos Hebreos (antes, en el sal-mo 39): “No quisiste sacrifi-cios ni ofrendas, pero me hasdado un cuerpo… Yo dije:Aquí estoy, para hacer tu vo-luntad”. Y, claro está, la res-puesta de María al arcángel:“Aquí está la esclava del Se-ñor, hágase en mí según tu pa-labra” (son, respectivamente,el Ecce venio y el Ecce ancillatan queridos al Padre Dehon,además del Sint unum -que to-

dos sean uno- y el Adveniat Regnum tuum –venga tuReino-). También, como un preludio, el mandato queElí da al niño Samuel en el templo: “Habla, Señor, quetu siervo escucha”. Y la humilde confesión (del salmo50 o Miserere) que rezamos cada viernes en el Oficio:“Yo reconozco mi culpa, tengo siempre presente mipecado… Los sacrificios no te satisfacen… Mi sacrifi-cio es un espíritu quebrantado; un corazón quebranta-do y humillado tú no lo desprecias”. Y, para concluircon paz: “Señor, tú me sondeas y me conoces…, todasmis sendas te son familiares… Te doy gracias, porqueme has escogido portentosamente” (salmo 138), o elbrevísimo salmo 130: “Señor, mi corazón no es ambi-cioso…, sino que acallo y modero mis deseos, comoun niño en brazos de su madre”, y la petición ya opor-tuna: “En la vejez y las canas, no me abandones, Diosmío” (salmo 70).

Dice Santiago en su carta: “Hablad y actuadcomo quienes van a ser juzgados por una ley delibertad, porque el juicio será sin misericordia

para el que no practicó la misericordia. Lamisericordia se ríe del juicio”.

13el Reino

Como se informó en el editorial de septiembre últi-mo, tanto la revista “El Reino” como los boletines parabienhechores de siete entidades reparadoras, se unirána partir del próximo mes de enero de 2012 para confor-mar la revista bimensual scj.es/Revista de la Familiadehoniana. En la p. 2 del número de muestra que acabade distribuirse en una reunión de los superiores localescon el Gobierno de nuestra Provincia religiosa apareceuna Carta abierta del Superior provincial, P. Jesús Val-dezate Soto, titulada Una nueva aventura. Por razón dela falta de espacio, reproduzco sólo sus primeras pala-bras: Damos comienzo a una revista dedicada básica-mente a la información eclesial y congregacional, conun contenido cristiano y espiritual que sirva de comu-nión pastoral con nuestros distintos colaboradores: fa-milias, comunidades educativas, bienhechores y ami-gos. Deseamos que sea un vehículo de comunicación…

ACOGIDA EN SCJ.ES/REVISTADE LA FAMILIA DEHONIANA

No sin deplorar la desaparición de “El Reino”, quecumple precisamente con este número 60 años comorevista autónoma, comprendemos bien que venía sien-do una empresa económicamente inviable su manteni-miento y nos decimos sinceramente lo que Juan elBautista dijo de Jesús: “Es preciso que él crezca y yomengüe”. Recibamos con interés y cariño la nueva re-vista SCJ, y colaboremos con ella voluntaria (pues notendrá un precio de suscripción prefijado) y tambiéngenerosamente.

Es verdad: me considero obliga-do en justicia y por gratitud a re-

comendar dos productos cierta-mente heterogéneos de sendosbeneméritos sacerdotes dioce-sanos. Con el primero estuveúnicamente una mañana, este

verano; con el segundo, en in-numerables ocasiones a lo largo

de muchos años.A don Antonio Romo –el primero– lo conocí con oca-

sión la las Jornadas de Formación permanente que reseñéen noviembre entre las noticias de nuestra Provincia Espa-ñola SCJ. Se trata de un sacerdote de Salamanca ya mayorque, aparte de regentar una parroquia rural y atender a unhospital público, se las arregla para llevar adelante una ex-plotación agrícola junto al Tormes y otra ganadera concentenares de ovejas en el término de Gomecello, dandorelativa ocupación (e incluso alojamiento) a algunos delos últimos de nuestra sociedad que llaman del bienestar,en su mayor parte inmigrantes. Fabrican con todas las ga-rantías sanitarias un exquisito queso que responde al nom-bre de “Mil caminos”. La dirección de D. Antonio: JuanManso, 21. Tl. 615 422 693. 37003 SALAMANCA.

El otro artículo es un libro que tiene prevista suaparición este mes en Ediciones Sígueme (García Te-

NOBLEZA OBLIGAjado, 23. 37007 SALAMANCA). Se titula “Santoral”y su autor es D. Jorge Sans Vila; se me ocurre ahoraque también le cuadraría el nombre de mil caminos,por cuanto trata, día tras día y a lo largo de todo elaño, del itinerario de los santos en sentido amplio, co-nocidos y desconocidos, que a lo largo de la historiahan mantenido frescas las huellas de Jesús, para quelos avatares de la historia de los hombres no desdibu-jaran su rastro. Su es-tilo cautivador ya loconocen los lectoresde “El Reino”, tantoporque muchas deestas minihagiografí-as fueron publicadasen la revista bajo elnombre de “El rostrode los santos”, comoporque D. Jorge seha encargado en ellade la sección “Unnuevo diccionario/Lamorada del ser”.Como la editorialprevé una amplia di-fusión, a pesar de sus800 páginas se pre-vé que su precio nosuperará los 40 eu-ros. ❦

Cabecera de la nueva revista.

Reproducción de la portadadel Santoral, remitida por

el director de EdicionesSígueme de Salamanca.

EL MAESTRO AMBULANTE

Jesús dijo una vez que Él habíavenido sólo a predicar a los ju-díos, no a los paganos (Mt

15,24). Y a sus discípulos les pidióque hicieran lo mismo (Mt 10,5;10,23). Sin embargo, el Evangeliode Marcos relata cuatro viajes de Je-sús al extranjero para predicar a lospaganos.

Si su misión era predicar única-mente a los judíos, ¿por qué apare-cen estos viajes en Marcos? ¿Cuálesson los lugares que visitó Jesús?¿Qué hechos sucedieron allí?

Los Evangelios, como sabemos,no son relatos estrictamente históri-cos de la vida de Jesús. El hecho,pues, de que Marcos lo presente tan-tas veces viajando fuera del territo-rio de Israel tiene una intención teo-lógica: mostrar el interés de Jesústambién por los paganos, y no sólopor los judíos.

¿Pero por qué Marcos necesitabarecalcar el aprecio de Jesús hacia lospaganos? Porque su Evangelio esta-ba dirigido justamentea una comunidad deorigen pagano; y suslectores no se habríansentido muy contentossi Marcos sólo hubieraexpuesto la preocupa-ción del Señor por losjudíos. En cambio alnarrar varias salidas deJesús fuera de Israel,dejó en claro que nohabía venido sólo asalvar a los judíos sinotambién a los extranje-ros.

UNA AVENTURAATERRADORA

El primer viaje de Jesús fuerade su patria, según Marcos, lohizo después de pronunciar el

sermón de las parábolas. Entoncesdijo a sus discípulos: “Pasemos a laotra orilla” (Mc 4,35).

La frase debió de haber sonadoaterradora. La “otra orilla” del lagode Galilea era tierra extranjera y pe-ligrosa, llena de paganos y de genteimpura, a la que ningún judío vir-tuoso habría osado ir. Pero a pesardel temor que sintieron, no pudierondecir que no. El sermón de las pará-bolas que acababan de escuchar losobligaba a salir de su comodidad pa-ra ir a sembrar, del otro lado delmar, la Palabra de Dios. De modoque subieron a la barca.

Ya el viaje comenzó mal. Apenassalieron se desató una terrible tor-menta que amenazó con hundir elbarco, y el pánico se apoderó de losdiscípulos (Mc 4,35-41). Pero Jesús,que iba con ellos, calmó la tormen-

ta, y así les mostró que mientras via-jaran con él jamás debían temer a lodesconocido.

Al desembarcar, en la ciudad deGerasa, les salió al encuentro un en-demoniado (Mc 5,1-21). Era unhombre violento, que vivía entre lossepulcros, con una fuerza extraordi-naria, capaz de romper las cadenascon que lo ataban, y que se automu-tilaba con piedras. Jesús se le acer-có, y luego de un breve diálogo conél lo curó de su enfermedad. Al ver-se sano, el ex endemoniado quisoquedarse con Jesús, pero él le orde-nó que volviera a su casa, y contaraallí lo que le había sucedido. Inme-diatamente Jesús emprendió el re-greso a su país.

UN ENDEMONIADOPREDICADOR

Este primer viaje, con la cura-ción del poseído, constituyeun precioso detalle del evan-

gelista Marcos para los paganos. Enefecto:

a) el primer milagroque Jesús había hechoen tierra judía, era jus-tamente la curación deun endemoniado (Mc1,23-28). Ahora, el pri-mer milagro que haceen tierra extranjera estambién la curación deun endemoniado;

b) el endemoniadojudío, al ver a Jesús loreconoce, entra en cri-sis y dialoga breve-mente con él. Tambiénel endemoniado paga-no al ver a Jesús lo re-conoce, entra en crisisy dialoga brevementecon él;

14 el Reino

DIVULGACIÓN BÍBLICA

¿CUÁNTOS VIAJES HIZO JESÚSAL EXTRANJERO? Ariel Álvarez Valdés

Jesús envíaa sus discípulos

a predicar.

c) después de curar al ende-moniado judío, la fama de Je-sús se extendió por toda la re-gión. Después de curar alendemoniado pagano, tambiénla fama de Jesús se extendiópor toda la región;

d) en territorio judío, la mi-sión de Jesús había sido pre-parada por un predicador(Juan el Bautista) que vivía enel desierto (Mc 1,2-5). En te-rritorio pagano, la misión deJesús también es ahora prepa-rada por un predicador (el exendemoniado) que vivía en eldesierto;

Marcos, pues, se basó en elprimer milagro de Jesús a unjudío, para componer el primermilagro a un pagano. Así podíamostrar que, para Dios, tantounos como otros eran objeto desu amor y de sus cuidados.

CUANDO EL MIEDOPARALIZA

El segundo viaje de Jesús al ex-terior lo realizó después demultiplicar los panes (Mc

6,45-53). Jesús ordenó a sus discí-pulos embarcarse “a la otra orilla”,a la ciudad de Betsaida, mientras élse quedaba en la costa rezando.

En cuanto partieron, se desató so-bre el lago un fuerte viento que im-pidió a los discípulos seguir reman-do. Entonces, en medio de laoscuridad de la noche, apareció Je-sús caminando sobre las aguas.Ellos se asustaron y empezaron agritar, creyendo que era un fantas-ma. Pero en cuanto Jesús subió a labarca con ellos, el viento se calmó.Y la barca terminó atracando en laciudad de Genesaret, es decir, otravez en territorio judío.

El segundo viaje, pues, terminóen un fracaso. La causa fue el mie-do, que paralizó a los discípulos.También en el primer viaje habíansentido miedo, pero al menos habíanrecurrido a Jesús. Esta vez ni si-

quiera lo reconocieron cuando ca-minó hacia ellos, ni le pidieron ayu-da. Marcos quiso enseñar así a suslectores, que la evangelización a lospaganos sin Jesús, es decir, sin susmétodos, su doctrina, su visión delmundo y del hombre, estaba conde-nada al fracaso.

LA MADRE QUE PIDE MIGAS

El tercer viaje al extranjero Je-sús lo hizo por tierra, y su pri-mera parada fue la ciudad de

Tiro (Mc 7,24), a 60 kilómetros deCafarnaúm. Al llegar allí, “no que-ría que nadie lo supiese”. Pero deimproviso se le presentó una mujerfenicia con su hijita enferma, y lesuplicó que la curara. Jesús se negó,explicándole que él había venido aayudar a los judíos, no a los paga-nos. Pero la mujer le replicó que elpan de Dios es abundante, y que al-canza para todos, incluidos los pa-ganos. Al escuchar estas palabras,Jesús aceptó curar a la niña.

Con este milagro, Marcosnuevamente quiso mostrar asus lectores la igualdad de ju-díos y paganos. En efecto, elsegundo milagro de Jesús entierra judía había sido la cura-ción de una mujer (Mc 1,29-31); también ahora, el segundomilagro a los paganos es enbeneficio de una mujer.

Pero hay más. La forma co-mo Marcos presenta el en-cuentro de Jesús y la fenicia esuna joya de la catequesis, yaque describe la actitud de laIglesia primitiva ante la evan-gelización de los paganos. Enefecto:

a) que Jesús y sus discípu-los fueran a Tiro de manera ve-lada, sin que nadie lo supiera,refleja la cautela con la que laIglesia primitiva empezó mo-viéndose en medio de los pa-ganos, como no queriendo des-pertar expectativas entre ellos;

b) la súplica del milagro que ha-ce la mujer fenicia, muestra la nece-sidad que tenían los paganos de re-cibir el Evangelio;

c) la negativa de Jesús, expresalas objeciones que los primeros cris-tianos ponían para no predicar a lospaganos: él había venido únicamen-te para los judíos;

d) la réplica de la mujer a Jesús,es el argumento en el que se basabala misión a los paganos: el Evange-lio alcanza para todos;

e) la curación de la niña por Je-sús, enseña que el mismo Jesús qui-so que su mensaje de salvación lle-gara a los paganos;

f) finalmente, la manera casi im-pensada en que la mujer se encuen-tra con Jesús, describe cómo laevangelización a los paganos, em-prendida por la Iglesia, no fue frutode un programa previamente calcu-lado, sino que los acontecimientosse desencadenaron de forma inespe-rada, y terminaron rompiendo lasbarreras que separaban a judíos depaganos.

15el Reino

Un milagro de Jesús.

SE MULTIPLICANLOS ANUNCIANTES

De Tiro, Jesús se dirige a laDecápolis, segunda etapa desu viaje. Le presentaron en-

tonces a un sordomudo. Este hom-bre simbolizaba de manera perfectala situación en la que se hallaban lospaganos en aquel tiempo: sin poderescuchar a Dios, ni hablar con él,porque no se les predicaba el Evan-gelio. Jesús tocó el oído del enfer-mo con sus dedos, le puso saliva enla lengua, y lo curó. Los acompa-ñantes, al ver semejante prodigio,salieron a predicar por todas partesla buena noticia de lo que Jesús ha-bía hecho (Mc 7,31-37).

Con esta nueva acción, Jesús vaabriendo progresivamente el terrenode la evangelización en territorioextranjero. El ex endemoniado deGerasa, curado en el primer viaje,había quedado en tierras paganaspregonando lo que Jesús había he-cho con él. Ahora ya no es sólo elenfermo curado, sino todos los com-pañeros y amigos del sordomudo,los que se vuelven predicadores.Han comprendido quién es Jesús, ysaben anunciarlo como aquél queabre los oídos para escuchar a Dios,y ofrece palabras para poder res-ponderle.

A ELLOSTAMBIÉN EL PAN

El último milagro de este tercerviaje es la multiplicación delos panes. Después de curar al

sordomudo, Jesús se vio rodeado poruna muchedumbre con hambre. Susdiscípulos sólo pudieron reunir 7 pa-nes. Jesús entonces hizo sentar a lagente en la hierba, dio gracias a Dios,y entregó los panes para que fueranrepartidos, junto con unos peces. Así,unas 4.000 personas pudieron comeraquella tarde, y hasta sobraron 7 ca-nastas con pan (Mc 8,1-10).

¿Qué sentido tiene este milagro?Marcos ya había contado una pri-

mera multiplicación de panes, peroen territorio judío (Mc 6,30-44). Ycomo este milagro simbolizaba laeucaristía, la Iglesia primitiva corríael peligro de pensar que sólo los ju-díos estaban invitados a ella. Poreso ahora el evangelista relata unasegunda multiplicación de panes,esta vez en territorio pagano, paraseñalar que también los paganos es-taban invitados a participar de la co-munión con Jesús.

Este tercer viaje al extranjero re-sulta, pues, de enorme importanciateológica para san Marcos. Porquemientras los paganos eran despre-ciados en el mundo judío, y miradoscon recelo en las comunidades cris-tianas, el evangelista Marcos enseñaa sus lectores que los paganos semerecen no sólo la salud (como la

niñita fenicia), y la palabra divina(como el sordomudo curado), sinotambién el pan de la eucaristía, sig-no y anuncio de la “comida de sal-vación”, a la que también ellos esta-ban invitados, para encontrarse conJesús.

Después de la multiplicación delos panes termina el tercer viaje, y

Jesús regresa con sus discípulos a laregión de Dalmanutá” (Mc 8,10).

DERRUMBANDOMENTALIDADES

Casi inmediatamente, Marcosrefiere el cuarto viaje. Diceque Jesús y sus discípulos

partieron de Dalmanutá y se fueron“a la orilla opuesta” (Mc 8,13).

De nuevo se encuentran los discí-pulos en la barca con Jesús. Peroahora no hay tormentas ni viento encontra. Esta vez el peligro se halladentro de la misma barca: los discí-pulos van preocupados. Es como sicada vez que viajaran hacia territo-rio pagano, les invadiera el miedo.Entonces Jesús aprovecha para dar-les una enseñanza: “Tengan cuidadocon la levadura de los fariseos y lalevadura de Herodes” (Mc 8,15).

Los discípulos no entienden es-tas palabras, pero los lectores sí en-tendemos: la levadura de los fari-seos es la mentalidad cerrada,opresiva, apegada a la Ley judía,propia de los grupos más conserva-dores de la Iglesia de aquel tiempo;y la levadura de Herodes es lamentalidad autoritaria, opresora,dominante, propia de algunos diri-gentes de aquella época. Si esamentalidad se mete en la barca dela Iglesia, dice Jesús, se puede es-tropear el pan de las dos multipli-caciones que él había realizado(Mc 8,19-21), es decir, el esfuerzode unir a los dos pueblos (judíos ypaganos) en uno solo.

UN MILAGROCON PACIENCIA

Cuando desembarcaron enBetsaida, le presentaron a Je-sús un ciego para que lo cu-

rara. Jesús lo llevó fuera de la aldea,le puso saliva en los ojos, impusosus manos y le preguntó: “¿Ves al-go?” El ciego respondió: “Sí, veo alos hombres como árboles que ca-minan”. Jesús volvió a poner sus

16 el Reino

DIVULGACIÓN BÍBLICA

Jesús cura a un enfermo.

manos sobre los ojos, y esta vez elciego quedó completamente curado(Mc 8,22-26).

Este milagro resulta muy extraño.Es como una curación en varias eta-pas, donde Jesús, con paciencia ycuidado, tuvo que imponer las ma-nos, preguntar, escuchar, volver aintentar, hasta que al final el ciegopudo ver bien.

Pero no es que a Jesús sus pode-res le hubieran funcionado mal.Marcos, con la genialidad que lo ca-racteriza, quiso mostrar el cuidadoque la Iglesia primitiva debió tenerpara recibir a los paganos en su se-no. Ellos no siempre estaban encondiciones de aceptar la fe inme-diatamente; por eso había que ense-ñarles con paciencia, escucharlos,preguntarles, hasta que pudieranabrir los ojos, descubrir a Cristo, ymirar la vida de otra manera. Así,curando al ciego de Betsaida, Jesúsvolteó el último prejuicio de separa-ción que quedaba con los extranje-ros: el del tiempo y la paciencia in-vertidos en ellos.

RECONOCERLO ENTRETEMPLOS VIEJOS

La segunda etapa de este cuartoviaje fue la ciudad de Cesareade Filipo, 25 kilómetros más al

norte. La localidad era famosa porel culto al dios griegoPan, protector de lospastores. Toda la ciudadestaba llena de recuer-dos de esta divinidad.Además, en la falda deun cerro cercano el reyHerodes había hechoconstruir en el año 19a.C. un templo al empe-rador Augusto, de 20metros de largo y altasmurallas. Y al orientedel templo se erguíaotro santuario, dedicado

a las ninfas, divinidades de los ríosy los bosques, porque cerca de allínacía el río Jordán. Una ciudad,pues, cargada de resonancias paga-nas.

Justamente en este lugar, diceMarcos, Jesús preguntó a sus discí-pulos mientras caminaban por lacalle: “¿Qué opinan ustedes demí?” Y Pedro respondió: “Tú eresel Mesías”.

Resulta sorprendente que aquí,en medio de tantos santuarios pa-ganos y recuerdos idólatras, Jesúsarrancara a Pedro su más grandeconfesión de fe. Un magnífico de-talle de Marcos, que pretende re-calcar cómo incluso en medio deun ambiente pagano, rodeado decultos extraños, es posible conser-var la fe y creer en Jesús. Los pa-ganos, aunque vivían en una tierraimpura, no por eso tenían una fecontaminada. Se puede confesar aJesús aun en tierra extranjera.

Fue el último gesto de Marcos ha-cia los paganos, a quienes les dedi-có con amor e inteligencia, su pre-cioso Evangelio.

LLEGAR A DONDENO SE LLEGÓ

En realidad, durante su vida Je-sús nunca predicó a los paga-nos. Todo su tiempo lo invir-

tió en su patria, y en la prédica a losjudíos. Pero después de su muerte elEvangelio empezó a anunciarsetambién a los paganos, que prontosintieron simpatía por el cristianis-mo.

Para ayudar a esta misión, unautor llamado Marcos compuso suEvangelio. Sin embargo, se diocuenta de que un Jesús encerradoen su país, y predicando sólo a ju-díos, no resultaría atractivo parasus lectores. Además, no habría he-cho justicia a las intenciones delmismo Jesús, quien de algún modoquiso también llegar con su prédi-ca a todos los hombres, aunque notuviera tiempo de hacerlo durantesu vida.

Por eso al componer su libro,Marcos presentó a Jesús rompiendolas fronteras del judaísmo y viajan-do al exterior para anunciar la Bue-na Noticia con sus milagros y ense-ñanzas. Mediante esta originalforma de presentar a Jesús, supoconquistar el corazón de los paga-nos, los excluidos del sistema reli-gioso y social, y hacerlos entrar enla Iglesia. Porque nunca dudó deque ésa era la voluntad original delSeñor.

Los cristianos deberíamos imitar aMarcos, y tomar conciencia de queDios también quiere llegar a cuantoshoy se sienten excluidos de la insti-

tución eclesial por di-versas razones. Ojalápronto abandonemos lacerrazón pastoral y bus-quemos nuevos cami-nos de acercamiento alos grupos consideradosdisidentes, heterodoxos,impuros o pecadores.Aunque suene inauditoy parezca sacudir nues-tros cimientos eclesia-les, la barca de Jesús espara eso. Para salir denuestro encierro ecle-sial, y marchar con élen nuevos viajes al ex-terior. ❦

17el Reino

La multiplicaciónde los panes.

Swami Dayánandyi Sráswati,maestro hindú, cuenta la paráboladel juguete roto: El niño lloraba

porque se había roto su juguete. Eranuevo, pero frágil, se había resbaladoentre sus dedos, en su primer contactocon la maravilla inesperada, y habíacaído al suelo donde había estalladoen mil pedazos, sin que pudiera ya re-conocerlo o repararlo. El padre conso-ló al niño: “Era solo un juguete, y erade barro. No valía mucho y, de todosmodos, habría acabado por romperse.Te traeré uno nuevo. No merece lapena llorar por eso...”. Pero el niñodecía entre sollozos que aquél era eljuguete que él quería, y no otro; y nada le sirvió de consuelo en su tragediainocente e infantil. Su padre lo dejó, se encogió de hombros y se dijo a sí mis-mo suavemente: ‘dejémoslo estar. Ya aprenderá cuando crezca...”.

Ese mismo padre del niño fue aquel mismo día a la oficina, y allí se enteróde que en el último ascenso su nombre había sido pasado por alto, y a otroslos habían ascendido, pero no a él. Fue a ver a su jefe y protestó ante él contoda la fuerza por la injusticia de la cual había sido objeto. Su jefe le escuchópacientemente, le explicó despacio las razones y las circunstancias que justifi-caban tal medida y aclaró que nada perdía con ello, pues todo tenía sus venta-jas si sabía verlas. Pero de nada sirvieron las explicaciones, y cuando el hom-bre se marchó hecho una furia, su jefe murmuró para sí: “No importa. Ya loverá cuando tenga más experiencia...”.

El jefe volvió a su casa tras aquel intenso día, y allí se encontró con unanota escrita en la que su mujer aludía a los enfrentamientos domésticos quehabían tenido últimamente y le informaba de que se marchaba para reflexionarpor su cuenta unos días, y que ya le informaría más adelante lo que decidiera.El jefe se hundió en la desesperación, se le cayó el mundo encima, y no supocómo reaccionar hasta que se le ocurrió ir a casa de sus padres a desahogarsecon ellos. Su madre le escuchó y le dijo: “No te preocupes, hijo mío. Tu padrey yo también tuvimos nuestras diferencias y, como ves, siempre se arreglaron.

No es para tanto. Ten un poco de pa-ciencia, y ya verás como todo vabien...”.

Cuando los otros reaccionan des-proporcionadamente a lo ocurrido,pensamos que exageran y tratamos deconsolarles diciendo que no es nada,que no hay que dar tanta importancia,que ya se pasará... Sin embargo, cuan-do nos toca a nosotros, las cosas cam-bian. Entonces, por cualquier cosita, elmundo se nos viene abajo y no sabe-mos cómo salir de esa gran tragedia.

Es la misma semilla la que lanza elsembrador. El fruto depende de la tie-rra, no tanto de la semilla, aunque éstatambién ayude o no. Una vez salió unsembrador a sembrar. Y al sembrar,unas semillas cayeron a lo largo delcamino; vinieron las aves y se las co-mieron. Otras cayeron en pedregal,donde no tenían mucha tierra, y brota-ron en seguida por no tener hondurade tierra; pero, en cuanto salió el solse agostaron y, por no tener raíz, se se-caron. Otras cayeron entre abrojos;crecieron los abrojos y las ahogaron.Otras cayeron en tierra buena y dieronfruto, unas ciento, otras sesenta, otrastreinta (Mt 13,4-9).

Se juzga de distinto modo el actuardel otro al modo de obrar de uno mis-mo. Para nosotros siempre tenemosdisculpas, por muy grandes que seanlos errores; para los otros, aunque seapequeña la falta, no hay justificación.¡Invirtamos, pues, este proceso!

18 el Reino

SOCIEDAD

EL JUGUETE ROTO Eusebio Gómez Navarro, ocd

LA BELLEZA ESTÁ DENTRO

Dormía, desde la muerte de su esposo, con un crucifijo apretado en elpuño y con el rosario en la otra mano.

Hace unos 30 años que llegó a Miami. Aunque sus padres y ella pasaronpor muchas dificultades al principio, pues tenían que vivir donde unos primos,

pronto pudieron salir adelante por símismos. Carmen pudo prepararsebien y se dedicó a cuidar ancianos.

Con emoción me relató varios ca-sos, pero me llamó la atención el de

Roberto, “su viejo de oro”, como de-cía ella. Escuchar la expresión “ereslinda” era para Carmen algo rutina-rio, pero aquel día le encontró unsentido diferente, alguien que nuncale ha visto, porque era invidente, sinoque sólo ha escuchado su voz y senti-

do sus manos le había dicho “tú sí eres linda”. Esas palabras la sorprendierony fue como un despertar. “¿Cómo sabe este hombre que soy linda si no me havisto, decía Carmen?”. Y su sorpresa fue mayor cuando escuchó “eres lindaporque siempre estás igual”. Ser linda, hasta ese momento, lo entendía comotodo lo exterior, esas cosas que nos hacen exclamar: ¡qué hermoso, qué lindo!Como la belleza física de una persona, el mar, las montañas, las flores..., peroaquel hombre había sido capaz de decirle que hay algo más, que la belleza no

es sólo eso, sino lo que se lleva dentro y se expresa. Una fra-se que parecía ser simple y vieja resultó ser un rayo de luz;aquel hombre hizo comprender a Carmen que hay una belle-za interior que sólo se percibe con el corazón.

“Siempre estás igual”, escuchar esto fue un flechazo quellegó al alma de aquella mujer. “¿Será cierto que siempre es-toy igual?”, se repetía la buena señora. No, no era cierto.Carmen tenía sus malos momentos, como todo mortal. Loque ocurría es que ella lo disimulaba muy bien, pues no que-ría contagiar a los demás con sus problemas, con sus subidasy bajadas. No tenía por costumbre encerrarse en su mundo,sabía animarse mirando a los otros, a los ancianos, a los en-fermos, a los pobres.

Aquel día fue de alegría para Carmen. Gracias a “su vieji-to de oro” comprendió que también las personas que no tie-nen luz en los ojos observan cada movimiento, cada expre-sión, cada palabra y califican el grado de entrega, de amorpor el trabajo. Hubo un tiempo en que lo que ahora alguienllamaba lindo, era horroroso y le dolía en el alma y se repro-chaba por la forma como actuaba. En un principio, cuandoempezó a trabajar como directora en aquella Residencia, sen-tía miedo, se sentía perdida. Cada vez que escuchaba decir“la jefa dijo, la jefa manda”, se sentía mal, se ponía de malhumor, y a veces, sin darse cuenta, respondía en un tono fue-ra de lo normal.

Carmen tenía una gran fuerza dentro de ella que le ayudó acambiar: Dios. Lo sentía dentro de ella, era la fuerza que lasostenía y ayudaba a superar todas las dificultades del día.

Carmen, gracias a la mirada de los otros y a la de su inte-rior, pudo descubrir la gran belleza que había dentro de todosu ser y la de los demás seres humanos, por muy arrugados yachacosos que estuvieran.

La felicidad, la fuerza, el poder está dentro de cada uno denosotros. Quien lo descubre, se maravilla de lo que puede ha-cer. Hay personas que tardan en descubrir su identidad y sumisión, pero en un momento se les abren los ojos y puedenver.

Y Carmen murió. El día de su funeral la iglesia estabaatestada hasta la calle. Juntos lloraron su muerte, abogados,médicos, catedráticos y el portero, el tendero, las Hermanitasde los Pobres, sus viejos... En la comunión tocaron la guita-rra y cantaron su canción favorita: “Tú... has venido a la ori-lla..., no has buscado ni a sabios ni a ricos, tan solo quieresque yo te siga...”. ❦

19el Reino

Hay una belleza interior,que sólo se percibe con el corazón.

Cuántas jornadas anuales venimos celebrando en favor de una paz que noparece llegar a hacerse presente de forma plena y satisfactoria. En cuán-tas ocasiones se ha propuesto al Apostolado de la Oración del mundo en-

tero, orar por esta intención. ¿Sin éxito? No podríamos afirmarlo sin más. Encualquier caso, a nosotros nos toca “orar sin desfallecer” (cf. Lc 18,1). Tenga-mos en cuenta que la paz y su obtención anidan en el interior del hombre,siempre tan misterioso y tan contradictorio. Precisamente el mensaje del Papapara la acostumbrada jornada del 1 de enero llevaba este título en el año 2007:“La persona humana, corazón de la paz”. Es particularmente iluminador.Adentrémonos en él.

DEFENDER LA LEY NATURAL

Los seres humanos hemos sido creados por Dios a su imagen (fundamentode nuestra dignidad como personas) y no vivimos en un mundo irracionalo sin sentido. Creemos que en el origen está el Verbo Eterno de Dios, la

Razón y no la Irracionalidad. Hay una lógica moral que ilumina la existenciahumana y hace posible el diálogo entre los hombres y entre los pueblos. Elconjunto de reglas de actuación individual y de relación entre las personas en

justicia y solidaridad, está inscrito enlas conciencias y en ellas se refleja elsabio proyecto de Dios.

En esta perspectiva, las normas delderecho natural no han de conside-rarse como directrices que se impo-nen desde fuera, como si coartaran lalibertad del hombre. Al contrario, de-ben ser acogidas como una llamada arealizar fielmente el proyecto univer-sal que Dios ha grabado en la natura-leza del ser humano. Por tanto, reco-nocer y respetar la ley natural es lagran base para el diálogo entre loscreyentes de las diversas religiones ytambién entre creyentes y no creyen-tes. Este es un gran punto de encuen-tro, presupuesto fundamental parauna paz auténtica.

Por otra parte, sabemos que, ennuestros tiempos, muchos niegan queexista una naturaleza humana especí-fica. Tienen una concepción relativis-ta de la persona. Ahora bien, unaconcepción relativista de la persona¿cómo podrá ser base firme de losderechos humanos? Ante las exigen-cias “incómodas” que tal o cual dere-cho impongan a los demás, existirá latentación de negar ese derecho o deno tenerlo en consideración. Sólo siestán arraigados en bases objetivasde la naturaleza que el Creador hadado al hombre, los derechos que sele han atribuido pueden ser afirma-dos sin temor de ser refutados. De locontrario, se termina por usar la ex-presión misma de “derechos huma-nos”, pero sobrentendiendo sujetosmuy diversos entre sí: para algunos,será la persona humana caracterizadapor una dignidad permanente y por

20 el Reino

SOCIEDAD

LA PAZ ENTRE LOS PUEBLOSMEDIANTE EL CONOCIMIENTOY EL RESPETO MUTUOS Javier García Ruiz de Medina, sj

Las normas del derecho natural,Dios la ha grabado en la naturaleza del ser humano.

derechos válidos siempre para todosy en cualquier lugar; para otros, unapersona con dignidad variable y conderechos siempre negociables.

DERECHOSFUNDAMENTALESQUE RESPETAR

La paz se basa en el respeto detodos. Consciente de ello, laIglesia se hace pregonera de los

derechos fundamentales de cada per-sona. En particular reivindica el res-peto a la vida y a la libertad religiosa.Por lo que se refiere al primero, espreciso denunciar el estrago produci-do por los conflictos armados, el te-rrorismo y diversas formas de violen-cia, como las muertes silenciosasprovocadas por el hambre, el aborto,la experimentación sobre los embrio-nes y la eutanasia. ¿Cómo no ver entodo esto un atentado contra la paz?

Respecto a la libre expresión de lapropia fe, hay un síntoma preocupan-te de falta de paz en el mundo, que semanifiesta en las dificultades que,tanto los cristianos como los segui-dores de otras religiones, encuentrana menudo para profesar pública y li-bremente sus propias conviccionesreligiosas.

Frecuentes tensiones que amena-zan la paz proceden de las muchas einjustas desigualdades que, trágica-mente, hay todavía en el mundo; porejemplo, en el acceso a bienes esen-ciales como la comida, el agua, lacasa o la salud. Y también desigual-dades entre el varón y la mujer en elejercicio de los derechos humanosfundamentales. Para la construcciónde la paz es primordial reconocer laigualdad esencial entre las personashumanas, que nace de su misma dig-nidad trascendente. Las gravísimascarencias que sufren muchas pobla-ciones, especialmente en el continen-te africano, originan reivindicaciones

violentas y son, por tanto, una tremenda herida causada a la paz.

La insuficiente consideración de la condición femenina provoca tambiénelementos de inestabilidad social: explotación de mujeres tratadas como obje-tos, y tantas formas de falta de respeto a su dignidad. Igualmente, en otro con-texto, mentalidades que todavía asignan a la mujer un papel de gran sumisiónal arbitrio del varón, con consecuencias ofensivas a su dignidad y al ejerciciode las libertades básicas. No se puede caer en la ilusión de que la paz está ase-gurada, mientras no se superen también estas formas de discriminación quehieren la dignidad personal, inscrita por el Creador en cada ser humano.

PARA NUESTRA CONSIDERACIÓN

La revista digital “Oración y Servicio”, publicada por el Apostolado de laOración (Roma), hace tres sugerencias para una reflexión individual ogrupal, a propósito de la Intención de este mes. Puede ser interesante te-

nerlas en cuenta:

–¿Qué hacemos o qué podemos hacer para favorecer la paz y la reconcilia-ción en nuestra familia y en la sociedad en que vivimos?

–Aplicar a nuestra familia, a nuestro barrio, a nuestro país, la frase del Bea-to Juan Pablo II: “No hay paz sin justicia, ni justicia sin perdón”.

–Comprometerse a algún gesto concreto, personal o comunitario, que sea sig-no y contribución concreta a la paz en algún ámbito donde esta sea necesaria. ❦

21el Reino

Las gravísimas carencias que sufren muchas poblaciones en el continenteafricano son una tremenda herida causada a la paz.

¿QUÉ ES UNA CLARISA?

La forma de Vida de laOrden de las Herma-nas Pobres, las Clari-

sas, instituida por el biena-venturado Francisco, esesta: guardar el Santo Evan-gelio de nuestro Señor Jesu-cristo, viviendo en obediencia, sin nada propio, en cas-tidad y clausura.

• VIVIR SEGUN LA PERFECCION DEL SANTO EVANGE-LIO. Cristo como único programa de nuestra vida. Esllevar a cabo lo que Él con su ejemplo de vida y pala-bras nos dejó.

• SIN NADA PROPIO no es una condición forzada devida, es una opción por amor. Viviendo sin nada pro-pio reconocemos un vacío que solo Dios es capaz dellenar, evitamos así el aferrarnos a cosas que nos pue-den centrar en un egoísmo que nos ocultará que Diosnuestro Padre cuida amorosamente de nosotras y quevivimos en la confianza de ser sus hijos.

• EN CLAUSURA. Vivimos la vida evangélica-con-templativa elegida por nuestra Madre santa Clara espe-rando al Esposo que llega en el silencio, a la espera deque pronuncie su Palabra, que se deje encontrar o quenos llame en cualquier momento. Y así nuestro vivirson continuos momentos de alabanza, de agradeci-miento, de petición, de adoración. Nuestra dedicaciónes Él, el Señor.

• EN SANTA UNIDAD. La fraternidad es para nuestraMadre santa Clara, uno de los ejes donde gira toda suforma de vida. Dios es tan bueno para con nosotrasque nos da la gracia de tener hermanas. La fraternidades la respuesta de Dios al perfecto desapropio. A cam-bio de lo que dejas, Dios te da el premio de la fraterni-dad. Tener hermanas a quien servir y manifestar enellas el amor que tienes a Jesucristo. Es Jesucristo quenos une en un único y mismo amor. Es encontrar a

Cristo en mis hermanas.Solo experimentando estacercanía por medio de estavida de santa unidad se sabelo que es vivir “con un solocorazón en la caridad y con-vivencia fraterna”. ❦

22 el Reino

SOCIEDAD

CLARISAS: 800 AÑOSDE SUS ORÍGENES

23el Reino

ESPECIAL EL REINO

LaSABIDURÍA deDIOSIntroducción

En los libros sapienciales del Antiguo Testamento, la sabiduría se identifica con la palabracreadora de Dios y con su espíritu que aleteaba sobre el caos primordial (Sagrada Biblia de laC.E.E.).

Al sobrevenir lo que san Pablo llama la plenitud de los tiempos, el Verbo de Dios se hizocarne –lo celebramos singularmente en la Navidad–: “nacido de mujer, nacido bajo la ley,para rescatar a los que estaban bajo la ley”.

El cántico de Zacarías (o “Benedictus”), proclamado por éste cuando María visita a su pa-riente grávida Isabel en las montañas de Galilea, se refiere al Sol que nace de lo alto, Jesucris-to –ver portada–, del que María es según la tradición la Virgen aurora que lo precede.

En el presente “Especial El Reino”, la sabiduría de Dios es el saber o la ciencia sobreDios, la teología. Dos reconocidos grandes teólogos nos acompañan en la aventura de cono-cerla: el profesor D. Olegario González de Cardedal, catedrático emérito de Teología dogmáti-ca en Salamanca y reciente Premio Ratzinger en su primera edición, del que publicamos unaCarta abierta; y Su Santidad Benedicto XVI-Joseph Ratzinger, del que ofrecemos el discursotitulado “Qué es teología”, pronunciado en Roma el 30 de junio de este año, con ocasión de laentrega del premio citado: a don Olegario, al profesor Simonetti y al padre Maximilian Heim.

Damos las gracias al profesor González de Cardedal por habernos remitido estos preciosostextos, que sin duda merecerán la atención y el interés de nuestros lectores.

Carta abierta

Queridos amigos, familiares, compañeros,alumnos, lectores:

Sois muchos los que me habéis escrito parafelicitarme por el premio J. Ratzinger-Bene-dicto XVI, creado por la Fundación del mis-mo nombre, que me ha sido entregado perso-nalmente por el Papa el pasado día 30 de ju-nio y que muchos han considerado como elNobel de la Teología.

Os aseguro que en este instante me veo enun real apuro interior. ¡Tantas cartas persona-lísimas, con tantos recuerdos de vida en co-munes tareas apostólicas y universitarias, enempeños cívicos y en textos literarios! Acada una de ellas hubiera debido responder

con la misma cercanía personal con que cadauno me habéis escrito. Comprended mi situa-ción y reconoced en estas líneas mi agradeci-miento inmediato y personal a cada uno.

D. Olegario González de Cardedal.

ESPECIAL EL REINO

He recibido el premio ofrecido a mi perso-na a la vez como un premio a España, a nues-tra lengua, a nuestra teología e iglesia, espe-cialmente a aquellas personas e institucionesque hicieron del Concilio Vaticano II su mi-sión de vida y la palanca divinamente ofreci-da para una modernización, reconciliación ydignidad de nuestra nación en todos los órde-nes. Y lo pensaron como alma para todos yno como arma contra nadie. Acoged, por tan-to, el premio como propio cada uno de losque habéis convivido conmigo y me habéisacompañado en la bella tarea de la teología.

Cada uno somos fruto de la confianza quese nos ha ofrecido y de la esperanza proyec-tada sobre nosoros. Yo he querido ser herede-ro de esa admirable nube de testigos de la fey de la razón, del Evangelio y de la Ilustra-ción, que nos han precedido en treinta siglosde revelación bíblica; intérprete de la espe-ranza de Dios para los hombres y de las espe-ranzas de los hombres ante Dios; testigo de lainsobornable dignidad del hombre que paraser en plenitud necesita pensar y creer, amary obrar, esperar y trascender.

Algunos me han preguntado qué teologíahe hecho. La teología es una en su raíz ytronco pero diversificada en sus ramas. Pre-tender ser original es fallar el tino desde elcomienzo. Se es original en la medida en queuno se acompasa con todo suser personal y dinamismos,intelectivos y volitivos, a lasrealidades que la revelacióndivina, la fe de la iglesia y laconciencia cristiana nos hantrasmitido. El intérprete de

Mozart es verdaderamente creador siendofiel a la partitura que debe interpretar. El teó-logo es original y creador siendo fiel a esasrealidades divinas y a esas esperanzas huma-nas, desapareciendo él para que aparezcan yse afirmen ellas. Dejar a Dios ser Dios, dejar-le decir su palabra y oírla pensándola hastasus últimas consecuencias, crea la máximaposibilidad y abre la máxima responsabilidadal hombre. Tal es su gloria.

Y me siguen preguntando por mi itinerarioteológico. Mi generación nació a una ilusiónrenovadora con la teología francesa del dece-nio 1950-1960, centrada en torno a la Biblia,la Liturgia y la Pastoral. Luego vinieron losdos decenios conciliares 1960-1980 en losque prevaleció de forma masiva la teologíaalemana: sistemática, fundamental, ecume-nismo, exégesis histórico-crítica, fundamen-tación metafísica. Entretanto la teología de laliberación había desencadenado nuevas ur-gencias y decisiones, especialmente para losespañoles, con Hispanoamérica como partede nuestra historia e iglesia (1980-2000).

Yo, una vez vividos desde dentro los hori-zontes de la catolicidad y acogidos los impe-rativos sagrados que llevaban consigo esosmovimientos renovadores, pensé que el teó-logo, una vez asentado en esa universalidadobjetiva, tiene que arraigar en una historia,

lengua, cultura e iglesia con-cretas. Por eso, intenté lograruna familiaridad de fondocon las grandes aportacioneshispánicas al pensamiento y ala iglesia. Aquí aparecen,como símbolo de una pléya-de, los cuatro grandes nom-bres del siglo XVI: Ignaciode Loyola, Teresa de Jesús,Juan de la Cruz y Fray Luisde León. Más cercanamente a

24 el Reino

Frente a la salmantina “Casa de lasConchas”, la sede central de la

Universidad Pontificia, en la queenseñó D. Olegario desde 1965

hasta su reciente jubilación.

nosotros en el siglo XX vienen las tres figu-ras filosóficas máximas: Unamuno, Ortega yZubiri. Luego están los historiadores y re-constructores de la historia de nuestra lengua:Menéndez Pelayo, Menéndez Pidal, DámasoAlonso. Y no en último lugar los poetas:Unamuno otra vez, Juan Ramón Jiménez, A.y M. Machado, la Generación del 28, hastallegar a nuestros días con tres nombres mayo-res: J. A. Muñoz Rojas, Claudio Rodríguez,Antonio Colinas.

La teología es esencial a la iglesia y a lasociedad, justamente por ser libres y para serlibres. Una iglesia sin pensamiento tan críticocomo fiel se verá tentada por la magia y elautoritarismo; una sociedad sin pensamiento(filosofía, teología, poesía, utopía) estará ten-tada, desde un lado, por la ideología que so-mete voluntades y se apropia dineros; y por

otro lado, por aquella trivialización malignaque reprime las necesidades humanas que nosabren a la trascendencia y al futuro.

Volviéndonos limpios y libres en el mundo.Con esto estoy respondiendo a quienes mepreguntaron por mi presencia no solo en insti-tuciones de iglesia sino también de la socie-dad y del Estado, de la cultura y de la prensa.

Yo he querido hacer en público y aportara la sociedad lo que soy en persona: indivi-duo, creyente, sacerdote, teólogo, ciudadano.Y desde esa compleja realidad he queridoaprender de mi pueblo y ser educador de mipueblo. Ya el día que ingresé en la Real Aca-demia de Ciencias Morales y Políticas mepregunté si era aquel un lugar apto para lateología. Y respondí analizando los tres luga-res posibles y necesarios de la teología: eltemplo, la academia, la plaza pública. Poreso, inmediatamente después de volver deRoma marcho a Santander (Monte Corbán)donde tenemos el curso de la Escuela de Teo-logía K.Rahner-H. Urs von Balthasar, quefundé hace más de un decenio, esta vez sobre“El hombre en alternativa: Posmodernidad ycristianismo en España”.

A la palabra de agradecimiento a quienesme han precedido y acompañado, quisiera uniruna palabra de aliento y apoyo a las nuevasgeneraciones para que emprendan ese belloservicio al Evangelio que es la teología: pensarla fe a la altura de la razón histórica y pensar larazón histórica desde la profundidad de la fe.No otra cosa dice el imperativo que nos dejó elNuevo Testamento: “Glorificad a Cristo Señoren vuestros corazones, y estad siempre prontospara dar razón de vuestra esperanza a todo elque os la pidiere” (1 Pedro 3,15).

El mejor saludo para todos de vuestro amigo

Olegario González de Cardedal

25el Reino

Columnata de Bernini, que circundala plaza de San Pedro en el Vaticano.

ESPECIAL EL REINO

¿Qué es Teología?

Discurso pronunciado en la entrega

del “Premio Ratzinger”

en su primera edición

J. Ratzinger-Benedicto XVI

Señores cardenales, venerados hermanosen el episcopado, distinguidos señores y

señoras:

Ante todo quiero expresar mi alegría y gra-titud por el hecho de que con la entrega de supremio teológico, la Fundación que lleva minombre reconoce públicamente la obra reali-zada a lo largo de toda una vida por dos gran-des teólogos, y a un teólogo de la generaciónmás joven le da un signo de estímulo paraprogresar en el camino emprendido.

Con el profesor González de Cardedal meune un camino común de muchos decenios.Ambos comenzamos con san Buenaventura ydejamos que él nos indicara la dirección. En

26 el Reino

El papa Benedicto XVI, Joseph Ratzinger, entregaa D. Olegario el premio que lleva su apellido,

en su primera edición.

Mosaico de las virtudes de fe, esperanza y caridad (o teologales) y de prudencia, justicia, fortaleza ytemplanza (cardinales o morales), en torno a la exclamación con que concluimos la proclamación evangélica:

“Gloria a ti, Señor Jesús”. Originario de Tierra Santa.

una larga vida de estudioso, elprofesor González ha tratadotodos los grandes temas de lateología, y eso no simplemen-te reflexionando y hablando deella desde un escritorio, sinotambién confrontándose siem-pre con el drama de nuestrotiempo, viviendo y tambiénsufriendo de una forma muypersonal las grandes cuestiones de la fe y, así,las cuestiones del hombre de hoy. De estemodo, la palabra de la fe no es algo del pasa-

do; en sus obras se hace verdaderamente con-temporánea a nosotros.

El profesor Simonetti nos ha abierto de unmodo nuevo el mundo de los Padres. Preci-samente mostrándonos desde el punto de vis-ta histórico con precisión y atención lo quedicen los Padres, ellos se vuelven personascontemporáneas a nosotros, que hablan connosotros.

El padre Maximilian Heim recientementeha sido elegido abad del monasterio de Hei-ligenkreuz en Viena –un monasterio rico entradición– asumiendo así la tarea de haceractual una gran historia y llevarla hacia elfuturo. En esto, espero que el trabajo sobremi teología, que él nos ha ofrecido, puedaser útil y que la abadía de Heiligenkreuzpueda desarrollar ulteriormente, en nuestrotiempo, la teología monástica, que siempreha acompañado a la universitaria, formandocon ella el conjunto de la teología occi-dental.

Con todo, no me corresponde a mí haceraquí una laudatio de los premiados, pues yala ha hecho el cardenal Ruini de manera com-petente. Ahora bien, la entrega del premiopuede brindar la ocasión para reflexionar porun momento en la cuestión fundamental de

27el Reino

El Papa felicita efusivamente al galardonado.

“La adoración eucarística fuera de la Santa Misaprolonga e intensifica lo que ha acontecidoen la celebración litúrgica, y hace posible

una acogida verdadera y profundade Cristo” (Benedicto XVI,

en la Santa Casa de Loreto).

ESPECIAL EL REINO

28 el Reino

qué es de verdad «teología». La teología esciencia de la fe, nos dice la tradición. Peroaquí surge inmediatamente la pregunta: real-mente, ¿es posible esto?, o ¿no es en sí unacontradicción? ¿Acaso ciencia no es lo con-trario de fe? ¿No cesa la fe de ser fe cuandose convierte en ciencia? Y ¿no cesa la cienciade ser ciencia cuando se ordena o incluso sesubordina a la fe?

Estas cuestiones, que constituían un serioproblema ya para la teología medieval, con elconcepto moderno de ciencia se han vueltoaún más apremiantes, a primera vista inclusosin solución. Así se comprende por qué, en laedad moderna, la teología en amplios sectoresse ha retirado primariamente al campo de lahistoria, con el fin de demostrar aquí su seriacientificidad. Es preciso reconocer, con grati-tud, que de este modo se han realizado obrasgrandiosas, y el mensaje cristiano ha recibidouna nueva luz, capaz de hacer visible su ínti-ma riqueza. Sin embargo, si la teología se reti-ra totalmente al pasado, deja hoy a la fe en laoscuridad. En una segunda fase se ha concen-trado en la praxis, para mostrar cómo la teolo-gía, en unión con la psicología y la sociología,es una ciencia útil que da indicaciones concre-tas para la vida. También esto es importante,pero si el fundamento de la teología, la fe, nose transforma simultáneamente en objeto delpensamiento, si la praxis se refiere sólo a símisma, o vive únicamente de los préstamosde las ciencias humanas, entonces la praxisqueda vacía y privada de fundamento.

Estos caminos, por tanto, no bastan. Pormuy útiles e importantes que sean, se con-vierten en subterfugios, si queda sin respuestala verdadera pregunta: ¿es verdad aquello enlo que creemos, o no? En la teología está enjuego la cuestión sobre la verdad, la cual es

su fundamento último y esencial. Una expre-sión de Tertuliano puede ayudarnos a dar unpaso adelante; él escribe: «Cristo no dijo ‘Yosoy la costumbre’, sino ‘Yo soy la verdad’(non consuetudo sed veritas)» (De Virginibusvelandis I,1). Christian Gnilka ha mostradoque el concepto consuetudo puede significarlas religiones paganas que, según su naturale-za, no eran fe, sino que eran «costumbre»: sehace lo que se ha hecho siempre; se observanlas formas culturales tradicionales y así se es-pera estar en la justa relación con el ámbitomisterioso de lo divino.

El aspecto revolucionario del cristianismoen la antigüedad fue precisamente la rupturacon la «costumbre» por amor a la verdad.Tertuliano habla aquí sobre todo apoyándoseen el Evangelio de san Juan, en el que se en-cuentra también la otra interpretación funda-

Santo Tomás, llamado “el más santo entre los sabios yel más sabio de los santos”, escribió: “Más he

aprendido orando ante el crucifijo que de los libros”.En la imagen, el beato Juan Pablo II, predecesor y

amigo de Benedicto XVI.

29el Reino

mental de la fe cristiana, que se expresa en ladesignación de Cristo como Logos.

Si Cristo es el Logos, la verdad, el hombredebe corresponder a Él con su propio logos,con su razón. Para llegar hasta Cristo, debeestar en el camino de la verdad. Debe abrirseal Logos, a la Razón creadora, de la que deri-va su misma razón y a la que esta lo remite.De aquí se comprende que la fe cristiana, porsu misma naturaleza, debe suscitar la teolo-gía; debía interrogarse sobre la racionabilidadde la fe, aunque naturalmente el concepto derazón y el de ciencia abarcan muchas dimen-

siones, y así la naturaleza concreta del nexoentre fe y razón debía y debe ser sondeadasiempre de nuevo.

Así pues, aunque el nexo fundamental entreLogos, verdad y fe se presente claro en el cris-tianismo, la forma concreta de ese nexo hasuscitado y suscita siempre nuevas preguntas.Es evidente que en este momento esa pregun-ta, que ha interesado e interesará a todas lasgeneraciones, no puede tratarse detalladamen-te, ni siquiera en grandes líneas. Yo sólo quie-ro proponer una pequeñísima nota. San Bue-naventura, en el prólogo a su Comentario alas Sentencias habla de un doble uso de la ra-zón, de un uso que es inconciliable con la na-turaleza de la fe y de otro que, en cambio, per-tenece propiamente a la naturaleza de la fe.

Existe –así se dice– la violentia rationis, eldespotismo de la razón, que se constituye enjuez supremo y último de todo. Este tipo deuso de la razón ciertamente es imposible en elámbito de la fe. ¿Qué entiende con ello sanBuenaventura? Una expresión del Salmo 95,9puede mostrarnos de qué se trata. Aquí diceDios a su pueblo: «En el desierto... vuestrospadres me pusieron a prueba y me tentaronaunque había visto mis obras». Aquí se aludea un doble encuentro con Dios: ellos «habíanvisto». Pero esto a ellos no les basta. Ponen«a prueba» a Dios. Quieren someterlo al ex-perimento. Por decirlo así, Dios es sometidoa un interrogatorio y debe someterse a unprocedimiento de prueba experimental.

Esta modalidad de uso de la razón, en laedad moderna, alcanzó el culmen de su desa-rrollo en ámbito de las ciencia naturales. La ra-zón experimental se presenta hoy ampliamentecomo la única forma de racionalidad declaradacientífica. Lo que no se puede verificar o fal-

Con esta artística reproducción del lienzode Nicoló La Piccola “Natività (1775) felicitó

Benedicto XV por Navidad en 2008, con estas palabrasde San Pablo a Tito: “Se ha manifestado la gracia

de Dios, que trae la salvaciónpara todos los hombres”.

30 el Reino

ESPECIAL EL REINO

sificar científicamente cae fuera del ámbitocientífico. Con este planteamiento, como sabe-mos, se han realizado obras grandiosas. Queese planteamiento es justo y necesario en elámbito del conocimiento de la naturaleza y desus leyes, nadie querrá seriamente ponerlo enduda. Pero existe un límite a ese uso de la ra-zón: Dios no es un objeto de la experimenta-ción humana. Él es Sujeto y se manifiesta sóloen la relación de persona a persona: eso formaparte de la esencia de la persona.

En esta perspectiva san Buenaventura aludea un segundo uso de la razón, que vale para elámbito de lo «personal», para las grandescuestiones del hecho mismo de ser hombres.El amor quiere conocer mejor a aquel a quienama. El amor, el amor verdadero, no hace cie-gos, sino videntes. De él forma parte precisa-mente la sed de conocimiento, de un verdaderoconocimiento del otro. Por eso, los Padres dela Iglesia encontraron los precursores y prede-cesores del cristianismo –fuera del mundo dela revelación de Israel– no en el ámbito de lareligión consuetudinaria, sino en los hombresque buscaban a Dios, que buscaban la verdaden los «filósofos»: en personas que estaban se-dientas de la verdad y por tanto se encontrabanen camino hacia Dios. Cuando no hay este usode la razón, entonces las grandes cuestiones dela humanidad caen fuera del ámbito de la ra-zón y desembocan en la irracionalidad.

Por eso es tan importante una auténticateología. La fe recta orienta a la razón a abrir-se a lo divino, para que, guiada por el amor ala verdad, pueda conocer a Dios más de cer-ca. La iniciativa para este camino pertenece aDios, que ha puesto en el corazón del hombrela búsqueda de su Rostro. Por consiguiente,forman parte de la teología, por un lado, lahumildad que se deja «tocar» por Dios; y, por

otro, la disciplina que va unida al orden de larazón, preserva el amor de la ceguera y ayudaa desarrollar su fuerza visual.

Soy muy consciente de que con todo estono se ha dado una respuesta a la cuestión so-bre la posibilidad y la tarea de la recta teolo-gía, sino que sólo se ha puesto de relieve lagrandeza del desafío ínsito en la naturaleza dela teología. Sin embargo, el hombre necesitaprecisamente este desafío, porque ella nos im-pulsa a abrir nuestra razón interrogándonossobre la verdad misma, sobre el rostro deDios. Por ello damos las gracias a los premia-dos, que en su obra han mostrado que la ra-zón, caminando por la pista trazada por la fe,no es una razón alienada, sino la razón queresponde a su altísima vocación. Gracias. ❦

Al P. Dehon se le reconoció siempre (y reprochóa veces) su espíritu romano y su adhesión al Papa.

Su célebre discurso educativo “Duc in altum” (Remamar adentro) es una continua protesta de adhesión

a la sede de Pedro: “Traemos a los pies del Papala docilidad amorosa de las ovejas por sus pastores.Sabemos que sólo Él nos conduce a buenos pastos”.

(La ilustración reproduce un cuadro del colegio“Fray Luis de León” de Madrid).

31el Reino

PARA PENSAR

Anadie le gusta sentirse cul-

pable. Cuando hay algo re-prochable en nuestra conduc-

ta, la voz interior de la conciencianos molesta, y para eliminar lamolestia tratamos de justificar loque hemos hecho. Para ello, dicenlos psicólogos que echamos manode un mecanismo de defensa lla-mado racionalización; es decir, te-niendo en cuenta que buena partede nuestros actos pueden tenermás de una motivación, escoge-mos aquella que puede justificarnuestra conducta, con lo que con-seguimos no sentirnos culpables yreducimos o eliminamos la ansie-dad provocada por nuestros actoscensurables. De este modo, no ve-mos exactamente la realidad de loinaceptable de nuestros actos yeliminamos cualquier motivo de autocrítica. Pero elhecho de que no veamos lo que hay de malo no lle-va consigo su desaparición, que sigue ahí, califican-do nuestra conducta.

Sorprende la facilidad con que acusamos al otro yexcusamos nuestra mala conducta. En el orden social,en el político, en el deportivo, en el personal, en elcivil y en el eclesiástico somos tan fáciles para laacusación ajena como para nuestra propia exculpa-ción. El libro del Génesis ya nos presenta a los pa-dres de la humanidad como buenos expertos en echarla culpa al otro, mientras ellos se declaran inocentes.Al preguntarle Yahvéh Dios si acaso había comidodel árbol del que le prohibió comer, Adán acusó in-mediatamente a su mujer y a Dios, que era quien sela había dado. Preguntó entonces a la mujer, y tam-bién ella se excusó y declaró inocente: la serpiente lahabía seducido y ella comió (cf. Gn 3,8-13). Y se-guimos la línea de conducta trazada por nuestros ma-yores: acusamos y nos excusamos.

El salmista afirma que ha examinado su camino pa-ra enderezar sus pies a los preceptos divinos. Quien noexamina atentamente su conducta, si en algún mo-mento se desvía del camino de la voluntad de Dios, de

aquello que es su bien, no advierteque se ha desviado. Y no enterado,no rectifica, prosigue meses, tal vezaños, por el sendero equivocado. Esde sabios detenerse de vez en cuan-do para examinar la bondad o ma-licia de los propios actos y, en el ca-so de detectar una desviación delrecto camino, poner remedio.Cuando están en juego los intereseseconómicos, los empresarios suelenestablecer tiempos de examen oanálisis de la marcha de la empre-sa, porque son conscientes que lesva mucho en ello. Se nos dice queen tiempos pasados se daba muchaimportancia al examen de concien-cia, al examen particular, etc. Hayquien afirma que en nuestra socie-dad falta autocrítica, al tiempo quesobra la crítica del otro.

Es urgente detenerse en el ritmo acelerado de nues-tra vida, hacer un alto en el camino y observar aten-tamente nuestra conducta, para detectar lo que nosconstruye y conduce a la plenitud de nuestro ser, ypotenciarlo. Y en el caso muy probable de que en-contremos factores de disolución, que nos impiden ellogro de nuestras aspiraciones más nobles, rectificary corregir el rumbo que, tal vez más inconsciente queconscientemente, estábamos siguiendo.

La autocrítica precede a la rectificación; sin aqué-lla no es posible ésta. Y la autocrítica requiere valory entereza para contemplar serenamente cuanto denegativo tiene nuestra realidad, sin dejarnos llevarpor la tendencia a someter a una operación de ciru-gía estética cuanto nos disgusta, y es innegable y evi-dente para quienes gozan de buena salud en la per-cepción de la realidad.

La persona capaz de autocrítica y rectificación dapruebas de buena salud afectiva. Percibir la realidadtal cual es y rectificarla cuando en ella se detectandesviaciones no tiene por qué hundir o abatir a nadie.Muy al contrario, quien goza de buena salud afronta-rá serenamente su situación, que verá como una eta-pa más de su vida siempre perfectible. ❦

AUTOCRÍTICAY RECTIFICACIÓN Eduardo Perales Pons, scj

“Señor, he examinado mi camino para enderezar mis pies a tus preceptos” (Sal 118,59).

Es urgente detenerse,hacer un alto en el caminoy observar atentamentenuestra conducta.

Es urgente detenerse,hacer un alto en el caminoy observar atentamentenuestra conducta.

32 el Reino

PARA PENSAR

“PREPÁRANOS EL CAMINO, PARA QUEGOCEMOS VIENDO A JESÚS”

Cuando hablamos con la Virgen y le suplica-mos o le decimos jaculatorias, siempre de unaforma o de otra la tratamos con mayor intimi-dad, le damos gracias, nos acercamos a ella.

En este año 2011 nuestras súplicas han sidopiropos y oración. Y al finalizar el año, en elque pedimos luz, ayuda, purificación y amor,solicitamos también que nos prepare para quegocemos viendo a Jesús.

Estamos mostrando nuestra fe en la vidaeterna. Le decimos a María que conocemoscual es nuestro fin, pero que nos ayude parallegar a esa meta: gozar de Dios, ver a Dios,estar con Dios por toda la eternidad.

El camino, también lo conocemos. Lo inicia-mos en el bautismo, cuando fuimos incorpora-dos a la Iglesia como hijos de Dios. Y a travésde los sacramentos (confirmación, penitencia,eucaristía y los demás) hemos ido recorriendoel camino.

Con la ayuda de Dios y de su gracia, que nonos falta ni nos faltará nunca, si librementecreemos en ella; le pedimos, la acogemos, lavivimos con intensidad dentro de la Iglesia,cumpliremos los mandamientos de Dios, y dela misma Iglesia.

También la santísima Virgen, madre de Diosy madre nuestra, lo es plenamente de la Iglesia.Y dentro de la Iglesia, la veneramos, y quere-mos que en todo momento nos ayude y nosguíe.

La Virgen recorrió el camino con fe, con es-peranza y con mucho amor, y de ella podemosy debemos aprenderlo todo. Porque su vida en-tera fue un sí al Señor, un cumplimiento libre ytotal de la voluntad de Dios sobre ella.

Tenemos que pensar que fue libre en todomomento. Y nosotros, que poseemos tambiénese don de la libertad, hemos de aprender a uti-lizarlo y a vivirlo adecudamente.

Lo mismo, la fe, la esperanza y la caridad,como las demás virtudes que debemos vivir y

SÚPLICASA LA VIRGEN Ángeles Linares Lorente

Imagen de la Virgen de la Almudena.

33el Reino

desarrollar con la gracia de Dios y el propio es-fuerzo, libre y consciente, no se nos imponennunca.

Ni la iglesia, ni los mandamientos del Señor,ni lo que es su voluntad para cada uno de noso-tros en nuestra vocación, en nuestras circuns-tancias concretas, nos vienen impuestos.

Tenemos libertad para acoger a Dios o re-chazarlo. Y tenemos libertad para decir sí o no,así como la gracia para corresponder y hacer lavoluntad de Dios con nuestra libre y plenaaceptación.

Si deseamos, junto a la santísima Virgen, very gozar del Señor, podemos ir caminando haciael encuentro con él, hacia la eternidad feliz. ElSeñor se nos da enteramente en la eucaristía.

Lo tenemos con nosotros, lo podemos comery tomar fuerzas para la lucha, unidos a Cristo,que es alimento y vida. Él se nos da en la santamisa, renovando el sacrificio del Calvario,siendo él mismo quién se entrega.

Debemos tratar de dar nuestra vida, nuestraspequeñeces, nuestros dolores y alegrías, nues-tro trabajo y nuestra lucha de cada día: darlotodo en la eucaristía, y pedirle a la Virgen quesea ella quien lo entregue como madre; quiennos ayude a darlo todo, con mayor amor.

Debemos tratar de luchar por ver a Dios enlos demás. Por ser conscientes de que en lavida corriente, en nuestros deberes pequeños,nos espera el Señor. Nos espera y nos acompa-ña, si lo dejamos. Y si vamos de la mano de laVirgen, iremos más directos a Dios. ❦

IntenciónMisionalPontificiaparadiciembrede2011QuelosniñosyjóvenesseanmensajerosdelEvangelio,yquesudignidad

seasiemprerespetadaypreservadadetodaviolenciayexplotación

1. El riesgo de la explotación y la violencia es mayor ymásgravecuandosetratadeniñosodejóvenes.Porqueesparticularmentegrandesuvulnerabilidad,necesitanmuchonuestraoración. Peroademáspedimosparaellos,cristianos,ponerenjuegosucapacidaddegenerosidadydealegría,es-pléndidamediacióndelagraciaparaquesedifundaelmen-sajedeJesús.

2. “¡Cuántosniñosnosonamadosniacogidosnirespe-tados!¡Cuántossonvíctimasdelaviolenciaydetodaformadeexplotaciónporpartedepersonassinescrúpulos!Quesereserve a los menores el respeto y la atención que se lesdebe: los niños son el futuro y la esperanza de la humani-dad” (Benedicto XVI, Visita al Niño Jesús de Praga, 26 deseptiembrede2009).

3. Señor Jesucristo, tú hablaste de tener cuidado conmenospreciaraaquellospequeñuelosqueseteacercaban.Másaún,dijistecosasmuydurascontralosquelesescanda-lizasen. Por el contrario, afirmaste que acogerlos en aten-ciónatieraacogerteatimismo.Quetodostengamosencuentaestarevolucionariapalabratuya,salidadetucorazónrebosantedeamoralosmásdébiles.Amén.

JavierGarcíaRuizdeMedina,sj

Que los niños y jóvenes sean mensajerosdel evangelio.

En marzo de 2009 más de mil especialistas en biología dijeron que esono es así. Copio un poquito de lo que se llamó la “Declaración de Ma-drid”.

“Existe sobrada evidencia científica de que la vida empieza en elmomento de la fecundación (...). El zigoto es la primera realidad cor-poral del ser humano. Tras la constitución del material genético delzigoto, procedente de los núcleos gaméticos materno y paterno, el nú-cleo resultante es el centro coordinador del desarrollo, que reside enlas moléculas de ADN, resultado de la adición de los genes paternosy maternos en una combinación nueva y singular”.

Pero me temo que a algunas personas eso les suena a música celestial. Apesar de que en otras ocasiones se les llene la boca con lo de “ciencia” y“científico”..., menos cuando va en contra de su ideología.

NO ALGO, SINO ALGUIEN

Don Patricio (o como se llame), desde el primer momento era un ser“nuevo y singular”. Nada de amasijo de células. La prueba es que Vd.

ha llegado a ser ejecuti-vo, abogado, trabajadorde la construcción... Talvez me replique que esodel zigoto, de los game-tos y de las moléculasdel ADN le importa po-co. Total: “amasijo decélulas”. Por eso vamosa dar un salto atrás en eltiempo. Hasta el momen-to en que sus padres loconcibieron.

Su madre no tiene laregla, se ha hecho unosanálisis, y le han dichoque está en estado debuena esperanza, comose decía entonces. Se en-

34 el Reino

OBJETIVO, EDUCAR

PATRICIO PÉREZPALACIOS José María Salaverri Aranegui, sm

cuentra con una vecina y le dice conilusión:

–Matilde, estoy embarazada.Matilde le mira y le dice:–Vaya, ¡pobre!, un grumo de cé-

lulas...Lo del “grumo” lo inventó una

escritora, de cuyo nombre prefieroolvidarme.

Imagínese la cara de su madre.–Matilde, por Dios, no te he di-

cho que tengo un cáncer. Espero unniño... o niña, no sé todavía.

Don Patricio, su madre sabía queno tenía “algo”, sino “alguien” alo-jado en su vientre. Que ya eran fa-milia: no eran dos, sino tres. No ne-cesitaba evidencias científicas (quenunca están de sobra), le bastaba susentido común. ¡Enhorabuena, donPatricio, porque no se le ocurriódesprenderse de su “grumo de célu-las”!

¿UN “PREJUICIO”CATÓLICO?

Estar a favor de la vida desde laconcepción no es propio del ca-

tolicismo. Es algo inscrito en lamisma naturaleza humana. Hipócra-tes de Cos, griego, llamado el “pa-dre de la medicina”, cinco siglosantes de Cristo, elaboró un jura-mento al que durante siglos se hanatenido los médicos. En él se pro-mete: “Me abstendré de suministrarpesarios o abortivos a las mujeresembarazadas”.

Alguien definía el abortocomo un grumo de células.

No sé si alguien se llama así. Me lo he inventado. Pero invito a quien me lea a poner, en vez de éstos, suspropios nombres y apellidos. Sobre todo se lo pido a quienes, con el cerebro lavado por lo políticamente co-rrecto, están convencidos que el embrión no es más que un “amasijo de células”. Son más de lo que parecey hasta se lo dicen a sus hijos, ¡qué disparate!

En el Corán se puede leer: ¡“Nomatéis a vuestros hijos por miedo aempobreceros! Somos nosotrosquienes les proveemos y a vosotrostambién. Matarlos es un gran peca-do” (17,31).

Un recuerdo personal: de visitaen Kyoto, la capital religiosa del Ja-pón, con sus cientos de templos. Ala entrada de un templo, shintoistacreo, vi que al pie de un árbol habíapiedras envueltas en pañales. “Losdejan mujeres que han abortado y sesienten culpables. Es su manera depedir perdón”.

¡Qué aliviado se queda uno cuan-to le quitan uno o varios tumores!Entonces ¿por qué esas mujeres pa-ganas no se quedaron aliviadascuando les quitaron el “amasijo decélulas”? ¿Por qué esa “sencillaoperación” deja un trauma? Espe-ranza Elena Puente cuenta su caso ypor eso ahora lucha por la vida.

“En estas clínicas las mu-jeres somos lo que menos im-

porta. A mí me dijeron que mi hijoera sólo un tejido, pero cuando aca-baron con mi intervención, el señorque la hizo se largó, la señorita quele acompañaba también y me deja-ron ahí; a mi lado, los restos de mihijo. Mi hijo tenía el tamaño de diezcentímetros, ya perfectamente for-mado y reconocible como un niño,y la sorpresa que me llevé es que mihijo estaba cortado en pedazos. Mefaltó la respiración... Mi hijo tendríaahora trece años”.

ABORTO A PLAZOS

Escuchemos a don Julián Marías, una delas mentes más lúcidas y libres que ha

tenido España en el siglo XX:“Una hipocresía, aún más refina-

da, es la que pone plazos. En losprimeros meses está muy bien; en elsegundo semestre es menos simpáti-co; para el último hay algunos repa-ros. Es exactamente como si se di-

jera que es lícito disparar contra una persona que se acerca a nosotrossiempre que esté a más de 20 metros; si está a menos de diez, hayque pensarlo un poco más; si ha llegado a sentarse en nuestra mesaes sumamente enojoso”.

Creo que fue Jérôme Lejeune, uno de los mejores genetistas del siglo XX,quien propuso a un grupo lo siguiente:

“El padre es sifilítico y la madre tuberculosa. Tienen ya cuatro hijos. Elprimero tuberculoso: Se anuncia un quinto embarazo. ¿Vds. aconsejarían su-primirlo?” El 95% respondió que sí. Respuesta de Jerome Lejeune:

–Han matado Vds. a Beethoven.Evidentemente los 120.000 que cada año se abortan en España no serán

Beethoven, pero sí personas dignas y útiles a la sociedad.

LO MÁS GRAVE DEL SIGLO XX

Muchas cosas más podría decirle, don Patricio. Una última reflexión: Vd.se escandaliza de que no hace tantos siglos hubiera esclavos. Efectiva-

mente, es una barbaridad. ¡Y casi toda la sociedad lo tenía asumido! Hoy conrazón nos parece algo inadmisible.

¿Qué pensarán de nosotros dentro de un siglo las generaciones que ha-brán comprobado la barbaridad de matar una vida en camino? Por algo di-ce Julián Marías: “Pienso que la aceptación social del aborto es lo más gra-ve que ha ocurrido, sin excepción, en el siglo XX”.

Don Patricio, que por lo menos puedan decir entonces que hubo muchagente valiente que supo ir a contracorriente. ¡Gracias! ❦

35el Reino

Para Julián Marías la aceptación social del abortoes lo más grave que ha ocurrido en el siglo XX

MADRIGAL

Así titula el primero, breve, que evoca la época del encuen-tro, del descubrir, del enamorarse:

Si al sol llamo sol, no es a él,sino a ti que sol te llamo.Si llamo luna a la luna,es que a ti te estoy llamando.Si llamo a la rosa rosa,sé que en la rosa te hallo.Si llamo amor al amor,es sólo porque te amo.

¿Cursiladas de enamorado? Pienso que no. Etapa necesariapara que el sol del amor haga brotar en el otro, en la otra, lo me-jor de sí mismo. ¿Espejismo? No. En un ser humano hay tanto

tesoro inédito que nunca seacaba de alumbrarlos todos.Con fiel paciencia, con olvidode sí, se irán descubriendo a lolargo de toda una vida. Eltiempo de noviazgo (¿se siguellamando así?) es tiempo delos descubrimientos básicos.Tiempo de conocerse, de saberlas raíces de cada cual, losgustos, las creencias –la fe so-bre todo–, la visión del mundo,las aficiones, las cualidades ylas limitaciones, los contrastesde caracteres... un mundo per-sonal que el amor, el cariño, elolvido de sí ayudarán a acep-tar. Porque de esas semillas através del tiempo irán desarro-llándose dos personalidadesque, poco a poco y con susmomentos de niebla, irán con-vergiendo, complementándose,al calor de un respeto y unamor mutuo cada vez más ma-duro. Por eso me dan penaquienes en ese tiempo de pre-paración se enredan en el sexoque, al crearles una falsa sen-sación de entendimiento y unailusoria promesa de amor eter-no, no tienen tiempo para unauténtico conocimiento mutuo.No, ese tiempo es tiempo para,con esos mimbres y la ayudadel Señor, elaborar un proyec-to común al que ser fiel.

36 el Reino

OBJETIVO, EDUCAR

DOS POEMASDE AMOR José María Salaverri Aranegui, sm

José María Souvirón (1904-1974) es un poeta olvidado. Los que rezamos el breviario, encontramos algunos vier-nes un precioso soneto suyo (“Voy por mi camino, pasajero...”). Como está allí anónimamente nadie sabe que esde él. Pero Souvirón ha sido sobre todo cantor del amor de un hombre por una mujer. Me gusta su poesía, ro-mántica dicen algunos, pero realista también. Se me ha ocurrido seleccionar dos poemas suyos para reflexión demis amigos –y amigas también– casados, al final de este año.

José María recita uno de los poemas de su último libro titulado“38 poemas de amor y desencanto para atardeceres de enamorados”.

VARIACIONES

Así titula José María Souvirón este segundopoema que os brindo. Es el poema de un

amor maduro y fiel que, a pesar de las perpleji-dades en que le han sumido las ‘variaciones’, haido contemplando, admirando y comprendiendoal otro; en este caso a la otra. ¿Romántico? ¿Re-alista? Las dos cosas a la vez. En el fondo, amorde verdad, del que dice san Pablo que “Todo loexcusa. Todo lo cree. Todo lo espera”... Os lobrindo sin comentarios. Lo podéis saborear,compartir y ver si es así...

Ella tenía unos nombres extraños, a mi antojo.

Unos días se llamaba cereza; era redonda y suave,

pequeña y reluciente. No venía en racimo,

sino única y asilada cereza de mi gusto.

Otros días se llamaba paloma,

y era tierna, plumosa, llena de arrullos lentos.

En libertad volaba sobre los altos pinos

para volver cansada a dormir en mis manos.

Otros días se llamaba fuente, y era un prodigio

cantar sosegado, de frescor y de luces.

Cuando yo le agitaba las alas, se reía

con ondas que tardaban un rato en aquietarse.

Otros días se llamaba albahaca, y olía

maravillosamente –sobre todo al crepúsculo–,

y era tan delicioso el aire de su aroma

que la ciudad entera parecía perfumada.

Otros días se llamaba lágrima, y daba pena

verla tan pequeñita, resbalando en tibieza

salada, melancólica, sin ganas de jugar

y pensando que sólo estaba por los suelos.

Otros días se llamaba cristal, y la veía

transparente y un poco avergonzada

de que yo la supiera del todo y sin secreto,

sin hablarle siquiera. Y era frágil y pura.

A veces se llamaba niebla, y era tristísimo

ver cómo todo en ella y en mí, se hacía invisible.

Andábamos a tientas uno en busca del otro,

pero no nos hallábamos y estábamos distantes.

Otros días se llamaba piedra, y era tan dura

que mis manos sangraban y el amor me dolía.

Cuando ella se llamaba piedra... (Mejor será

olvidar esos días minerales y oscuros).

Otros días se llamaba corazón. Daba gusto

verla tan incansable, tan tierna. No podía

casi acercarme a ella por miedo de dañarla,

pero estábamos juntos y nos decíamos cosas.

Otros días se llamaba arcángel. Se perdía

de mi alcance. De pronto yo me encontraba, trémulo,

a la vera de Dios. Todo brillaba tanto,

que pienso que en esos días comenzó mi locura.

¿Qué os parece?

37el Reino

“Los amantes”.

Jean Giraudoux (1882-1944) fue un escritor de laFrance. Novelista, dramaturgo. El día de su cumpleaños(29 de octubre) del año pasado un amigo mío que desdehace años vive en París me regaló es-tas 6 frases suyas:

* Compórtate con tu mujer comote comportarías con la de otro.

* Si un día decide mejorar elmundo, descubrirá que las dos arru-gas que el portero de su casa lleva enla cara se tornan tiernas mejillas parabesar.

* El secreto del éxito es la sinceri-dad.

* No tengo miedo de la muerte.Es el juego que uno acepta para po-der jugar el juego de la vida.

* El deporte delega en el cuerpoalguna de las virtudes más fuertes delalma: la energía, la audacia, la pa-ciencia.

* No hay mejor forma de ejercitarla imaginación que estudiar la ley.Ningún poeta ha interpretado la natu-raleza tan libremente como los abo-gados interpretan la verdad.

Hombre culto, conocedor de losclásicos griegos y latinos, para que elnúmero fuera perfecto, le contesté con esta frase tam-bién de Giraudoux.

* Rien n’est plus vieux que le journal du matin etHomère est toujours jeune. (Al caer el día, nada hay tanviejo como el diario de la mañana; nada tan joven comoHomero).

Que no me he atrevido a enviar a un par de periodis-tas «modernos» que conozco, no sea que entiendan queles llamo «viejos». Que lo son.

Repito la cita: «Rien n’est plus vieux que le journaldu matin et Homère est toujours jeune».

Al salir de mi conferencia, un adolescente me pre-guntó “de buena fe” por Homero. Le dije:

–Lee la Odisea. Y luego hablamos.–¿No me podría adelantar el argumento, hacerme un

resumen?Tentado estuve de despacharle con las palabras de

Unamuno: «¡Extractos! Pedir el extracto de ciertos dis-cursos es tan desatinado como pedir –y este desatino serepite en clases de literatura– el argumento de La Ilíada.

Y a las veces como pedir el extracto de una sinfonía».Pero su buena fe me ablandó.

–Homero cuenta la vuelta a Ítaca de Ulises, tras laguerra de Troya. Tarda diez años. Mientras, su hijo Te-lémaco y su esposa Penélope han de tolerar en su pala-cio a los pretendientes que le creían muerto. El astuto

Ulises consigue sortear todos loscontratiempos, que son muchísimos,hasta regresar a casa.

–Más, cuénteme más, por favor.Claudiqué, aunque consciente de

mi desatino.Llevo la Odisea en el corazón des-

de hace más de setenta años. [¿Serápor eso por lo que en una reunióncon antiguos alumnos de Pedagogía aprimeros de junio dijeron que me en-contraban joven?]

1. Atenea aboga por la vuelta delhéroe a su hogar, que lleva muchosaños en la isla de la ninfa Calipso.Ella misma –tomando la figura deMentor– aconseja a Telémaco queviaje en busca de noticias de su pa-dre; 2. Telémaco reúne en asambleaal pueblo de Ítaca; 3. Viaja a Pilospara informarse sobre su padre: 4. Ya Esparta; 5. Ulises marcha de la islade Calipso y llega a la isla de los fea-cios; 6. Ulises y Nausícaa; 7. Ulisesen el palacio de Alcínoo, el padre de

Nausícaa; 8. Los feacios agasajan a Ulises; [9. Lescuenta sus aventuras con los cicones, los lotófagos, loscíclopes, ¡Polifemo!; 10. La bolsa de piel de Eolo, quecontenía los vientos; la llegada a la isla de la hechiceraCirce; 11. Baja a la morada de Hades para consultar aladivino Tiresias; 12. Las sirenas. Escila y Caribdis. Laisla de Helios;] 13. Los feacios despiden a Ulises. Porfin, llega a Ítaca; 14. En la majada de su porquerizo Eu-meo; 15. Telémaco regresa a Ítaca; 16. Telémaco en-cuentra a su padre; 17. Ulises, disfrazado de mendigo,se dirige a su palacio. Sólo su viejo perro Argos le reco-noce; 18. Los pretendientes vejan a Ulises; 19. Euricleala esclava le reconoce; 20. La última cena de los preten-dientes; 21. Penélope les promete que se casará con elque consiga, con el arco de Ulises, pasar la flecha porlos ojos de doce hadas alineadas. Sólo Ulises lo consi-gue; 22. La venganza de Ulises; 23. Penélope reconocea Ulises; 24. Ulises va a casa de su padre. Para ser reco-nocido le muestra una vieja cicatriz y le recuerda los ár-boles que en su infancia le regaló Laertes. Los preten-dientes supervivientes piden venganza. Finalmenteinterviene Atenea, que anima a los itacenses a llegar aun pacto, para que juntos vivan en paz durante los añosvenideros.

HOMERO

VIEJOS Y JÓVENES

38 el Reino

UN NUEVO DICCIONARIO

LA MORADA DEL SER Jorge Sans Vila

Fotografía de M. Carrillo.

También «había que verle oír; verle, digo, porque oíahasta con los ojos». Me impresionó. Tanto que le regaléel ejemplar dedicado de la Ilíada (nova versió de hexà-metres catalans; 16.000 hexámetros nada menos) publi-cada en 1997 por el Dr. Manuel Balasch, mi antiguoalumnos, pequeño-gran niño, muerto a los 80 años.

Han pasado bastantes años. Me escribió el “de la bue-na fe” hace poco: «Le recuerdo, agradecido. Sigo joven,gracias a usted».

Moraleja: lea a Homero.

A las cuatro he salido con el Padre Evaristo, a mirarRoma, como hacemos algunos domingos. Primero el190, luego otro autobús nos ha dejado pegando a SantaMaría la Mayor.

Al acercarnos al templo he recordado que la vez ante-rior que vinimos compré aquí de nuevo un rosario gran-de-grande. Hace muchos años con Germán había com-prado uno igual, lo tengo en Salamanca. Me hacía dobleilusión por el recuerdo de él. No me acostumbro a nooírle. Y son ya semanas y meses desde el 14 de diciem-bre de 2008. Pasar las cuentas con esos granos grandes,paseando, rezando con costumbre de olvido ya...

(Escribo como haciendo tiempo, porque me va a re-sultar difícil explicarlo).

Al entrar en la Basílica, de la primera capilla a la iz-quierda salían melodías bizantinas, mansas, sonoras, se-renas. Hemos entrado. Y allí nos hemos quedado quizáveinte minutos. De pie. Emboba-dos, sumergidos en aquella litur-gia de cantos en los que alternabala voz grave del sacerdote con lasde los cristianos que respondían,con voces que brotaban sin esfuer-zo, de memoria, «par coeur» que-daría mejor, haciendo generosa-mente la señal de la cruz sobre supecho, con inclinaciones comoflores que se doblaban adorando ala Trinidad. Qué más me daba quelos tres sacerdotes oficiantes nosdieran la espalda. Todos todos to-dos sin mirarnos, frente al Infini-to, fuera del lugar, fuera del tiem-po. Cantando, alabando a Dioscon la naturalidad de los pájaros.(A ratos espiaba a la mujer que te-nía al lado, a las dos que quedabana mi derecha. Estaban allí, quizáno estaban). Sin papeles, sin di-rector de coro, ola tras ola, con su-bidas, con bajadas, deslizándosesiempre hacia un Invisible casitangible. Todos los que estabanallí, quizá no estaban). Sin pape-les, sin director de coro, ola tras

ola, con subidas, con bajadas, deslizándose siempre ha-cia un Invisible casi tangible. Todos los que estaban allí.Lo que decían sus voces –eran ucranianos– no me im-portaba no entenderlo, porque sentía el latir de sus almasorantes. Y de vez en cuando algo que se parecía al«Amén» ¿Hasta cuándo? En la eternidad no hay relojes.

Nuestro reloj... Saliendo recordé lo que contaba Ba-llarín de los católicos egipcios, que preferían ir a lamisa de los ortodoxos, porque encontraban las misasnuestras demasiado snak. Los enamorados tienen tiem-po.

Para encontrar algo remotamente parecido en mi vida,me viene el recuerdo del Trisagio cuando niño, los do-mingos, en la «función» de la tarde. Primero el Rosario.Después, aquel repetir: Santo, Santo, Santo, Señor Diosde los Ejércitos: llenos están el cielo y la tierra de vues-tra gloria. Alternando con: Gloria al Padre, gloria alHijo, gloria al Espíritu Santo. Terminando: Santo Dios,Señor fuerte, Santo inmortal; líbranos, Señor, de todomal. Ahora sé que al Padre, primero, nueve veces. AlHijo, nueve veces. Al Espíritu Santo, nueve veces. Unaeternidad para mi aguante de niño, con ganas de que ter-minara de una vez para salir a jugar. Pero que los mayo-res, mi padre y mi madre, repetían incansablemente, sinprisa. (¡Cómo para perder tiempo!) Sin pedir nada. Sóloalabar a Dios...

Y los confesonarios, a los lados de la basílica consus lucecitas encendidas. Le dije al Padre Evaristo:«Voy a aprovechar la ocasión, que hace un mes que nome he confesado». Confesonario en checo, confesona-rio en alemán, confesonario... en español. Ave María

purísima. El dominico confesortenía voz made in Spain bientimbrada. Lo que me dijo fue se-renante. Por penitencia: «Siénte-se ahí un rato con los ojos cerra-dos». Nunca me habían puestosemejante penitencia. ¿Peniten-cia? Le pregunté de dónde era.De Bilbao. Llevaba esta vez diezaños en Roma. Le dije mi nom-bre. «¡Que nos conocemos! Túestabas en Ediciones Sígueme.Yo estuve 30 años de biblioteca-rio en San Esteban». Sentado decara al altar, los ojos cerrados,todavía me llegaban los cantosde los ucranianos.

De vuelta, hablamos poco. EnGregorio VII, bajamos del 190delante de la parroquia. Y entra-mos en el Papagallos. De ida ha-bíamos visto en la puerta un grananuncio: «32 gusti di cioccolato».Quedamos que a la vuelta. 2,50 €una señora taza de cioccolato ar-diendo.

Buen final para una tarde dedomingo.

TARDE DE DOMINGO

39el Reino

Sören Kierkegaard.

JunioDios de amor,cuando te preguntamosqué esperas de nosotros,comprendemos que nos llamasa ser un reflejo de tu presencia.

JulioDios de la vida,bendícenos y bendicea quienes nos has confiado.Consérvanos en el espíritude las bienaventuranzas:la alegría, la sencillez, la misericordia.

AgostoEspíritu de Cristo Resucitado,Espíritu consolador,Espíritu de la alabanza,tu amor por todosy cada uno de nosotrosno desaparecerá nunca.

SeptiembreDios de amor,que nos llama a oraren la intimidad de nuestro corazón,con nuestras palabras o sin palabras,haznos buscadores apasionadosde comunión.

OctubreEspíritu Santo,tú estás en nosotros.En cualquier parte del mundodonde se ora,tú estás presente acompañandoa todo ser humano.

NoviembreSeñor Jesús,cuando nos esforzamospor seguirte comprendemosque, todavía y siempre,nos llamas a perdonar.La fidelidad a tu Evangelioencienda en nosotrosla pasión por el perdón.

DiciembreDios de compasión,tú quieres para nosotrosuna plenitud de vida.Concédenosque escuchemos tu palabray la pongamos por obraen la luz que transfiguranuestra humanidad. ❦

40 el Reino

UN NUEVO DICCIONARIO

El autor saluda afectuosamente a S. S. Benedicto XVI,con ocasión de un importante Congreso vocacional

celebrado en Roma durante el pasadomes de noviembre.

En agosto de 1940, con 25 años, el hermano Rogerllega a Taizé. Durante la guerra acoge a refugiados, so-bre todo judíos. Trata de crear una comunidad que seacomo una «parábola de comunión». A los dos años se leunen los primeros hermanos. La comunidad de hoy reú-ne a más de cien, católicos y de diversas denominacio-nes protestantes, de veinticinco naciones. Algunos deellos viven en pequeñas fraternidades en Asia, África oAmérica latina entre los pobres más pobres. Desde fina-les de los años cincuenta, decenas de millares de jóve-nes de todos los continentes recalan en Taizé. Encuen-tros intercontinentales de una semana les permiten rezar,reflexionar sobre los orígenes de la fe, buscar el sentidode su vida, prepararse para ser creadores de esperanza yreconciliación donde viven. Los encuentros europeos eintercontinentales en grandes ciudades son como etapasde la «peregrinación de la esperanza sobre la tierra» ani-mada por Taizé. En agosto de 2005, hace seis años, elhermano Roger fue asesinado y le sucedió como priorde la comunidad el hermano Alois.

Para saber más de Taizé: Communauté de Taizé, 71250Taizé - Francia. Tel +33 385 50 30 05. www.taize.fr

Del calendario señala-libros del año que está a puntode concluir, reproducimos la traducción del italiano deunas sabrosas oraciones correspondientes a verano, oto-ño e invierno.

TAIZÉ

Me encontré inesperada-mente con Ligia cuando salíade visitar a un enfermo.

“Mire, no se me vaya, medice. ¿Anda usted apurado?”

No se preocupe, Ligia, leatiendo con gusto. ¿Tiene al-gún problema?

“Sólo quería darle las gra-cias porque usted se portómuy bien en la última enfer-medad de mi difunta madre.Y también la señora Josefinaque le traía la comunión. Co-mo estamos cerca de mi ca-sa, ¿por qué no entra un mo-mento para que le enseñe micolección favorita?”

Entrando en muchos hoga-res, es normal que uno puedaconocer la preferencia de al-guna persona de la casa, quedisfruta coleccionando y en-señando varios objetos co-mo: figuritas de cerámica dedistintas clases de perros; bo-tellas de licores de variadasformas colocadas en estantespor orden de antigüedad;muñecas con el traje típicode regiones o naciones; potesmetálicos de bebidas populares;colecciones de estampillas de co-rreos; tarjetas postales de distintasciudades o países, etc.

Entrando ya en la casa con Li-gia, me concretó enseguida dequé colección se trataba. Ha sidoy es su “hobby” preferido y estáorgullosa de todo lo que ha idoconsiguiendo con el correr deltiempo.

“Cuando llegaba una fiesta, medice, o un cumpleaños, en tiempode Navidad o cuando alguno de sufamilia salía de viaje por Venezue-la o visitaba otros países, siempreles decía lo mismo: No anden pen-

sando qué me tienen que traer nianden comprando cosas raras ymuy caras. Tráiganme sólo unaimagen de la Virgen aunque no seamuy grande y procuren que no serepita con una de las que ya tengo.Los familiares y amigos se fijabanbien en las que ya tenía y me da-ban una gran alegría cuando metraían alguna distinta para ir au-mentando la colección”.

Como Ligia tiene espacio sufi-ciente en su casita porque vive so-

la, ha acomodado todas lasimágenes en estantes al fondode un salón, con adornos yluces. Tiene un cómodo sillóndelante y me dice: “Me sien-to aquí, me encomiendo a laVirgen y me lleno de paz”.

Casi no creía lo que teníaante mis ojos y lo que iba es-cuchando porque Ligia menombraba todas las imágenescon la advocación correspon-diente. Comprobé que, ade-más de las conocidas mun-dialmente por una extendidadevoción en la iglesia: Lour-des, del Carmen, Fátima, Ma-ría Auxiliadora, Inmaculada,Loreto, del Rosario, DivinaPastora, Dolorosa, etc., teníatambién numerosas imágenespopulares y más conocidas enVenezuela o Latinoaméricacomo Virgen del Valle, Coro-moto, Chiquinquirá, de la Re-gla, Consolación de Táriba,de la Corteza, Aparecida, Lu-ján, Guadalupe, Caridad delCobre, etc.

Uno lo sabe y Ligia tam-bién que, llamemos como

llamemos a la Santísima Virgen essiempre la misma, la Madre de Je-sús, la que nos trajo por su obe-diencia y humildad al Salvador delmundo, la bendita Madre de todoslos creyentes. Pero, ¿no les pareceadmirable que, en una época en laque parece que molestan los sím-bolos o imágenes religiosas en al-gunas sociedades y naciones, Li-gia se sienta orgullosa de todasesas imágenes que nos quiere en-señar?

Las puertas de su humilde casalas tendrá siempre abiertas paraquienes quieran contemplar su me-ritoria colección.

41el Reino

DESDE LA VIDA

SANTUARIO FAMILIAR José Luis Segura Lacruz, scj

Se sentía llena de alegríacuando le regalaban

alguna imagen de la Virgen.

Los aspectos negativos de laconducta humana son siempre losmás llamativos y difundidos por laprensa, radio y televisión. Pero nonos deben llevar a creerque lo “malo” de nuestrasociedad es lo más im-portante. Que son tantoslos “malos”, que casi noexisten personas buenasy que la bondad tiene labatalla perdida frente almal.

Aún reconociendoque las acciones fruto dela maldad y de la vio-lencia, serán siempremás conocidas y lamen-tadas y causarán mayorpreocupación social, losactos de bondad frutodel buen corazón y rectaconciencia de inconta-bles personas, seránsiempre más numerosose importantes. Y es queel mal hace mucho ruido y, el bieny tantos y tantos actos buenos enla vida diaria, no son noticia. Peroahí están y cuánto nos alegra co-nocerlos y cuánto bien nos hacen.

Las dos experiencias que voy acompartir, no saldrán nunca enninguna primera página de laprensa ni serán comentadas en losmedios masivos de comunicación.Por eso creo que es bueno darlas aconocer.

Iba buscando el domicilio de unenfermo y me equivoqué de casa.Eso me llevó a conocer inespera-damente a la buena familia deÁngel Ramón y Flor. Me indicaronamablemente la casa del enfermoque buscaba, muy cerca por ciertode donde ellos viven. Era una fa-milia conocida para ellos. Cuandome despedía me pidió Ángel Ra-

món que los visitara otro día paraque pudiera conocer a una hija en-ferma. Así lo hice y he aquí el re-sumen de la primera experiencia.

Glendy es la hija intermedia en-tre un varón y otra hija. PeroGlendy nació afectada por una le-sión cerebral que le dañó irrever-siblemente los movimientos y lacapacidad de razonar y de hablar.Mira a las personas pero no las co-noce y es incapaz de sonreir o decambiar su estática mirada. No esagresiva aunque a veces sufreconvulsiones. Tiene a su lado atiempo completo a sus padres y losdos hermanos ayudan todo lo quepueden porque tienen que atendersus propias familias.

Cuando Glendy está un pocomás tranquila y se mantiene enpie, es algo más alta que su padre.Glendy tiene ¡32 años! Ángel Ra-

món y Flor llevan con naturalidady sin quejas ni lamentos, esa cruzque les trajo la vida. Me dicen quees como tener una bebé pero adul-

ta a la que tienen queasear, vestirla, darle elalimento y no dejarlasola en la casa. ¿Quiénpuede contar los actosde amor, de bondad y depaciencia que estos ben-ditos padres le han pro-digado a Glendy duran-te ¡32 años!?

Vayamos con la se-gunda experiencia. Jua-na María es una maes-tra jubilada. Viuda,tuvo cinco hijos y le vi-ven cuatro. Y, cosas dela vida, el que murióera el hijo más “madre-ro”, el más pegado a sumadre. Enfermó grave-mente por problemasrenales y los doctores

que lo atendían, anunciaron quesólo con un trasplante podría se-guir viviendo. En caso contrario,moriría pronto.

Al no poder conseguir la dona-ción de un riñón, Juana María, en-tonces maestra activa, no lo pensómucho, aunque le costó convencera su hijo porque se oponía. “Tevoy a dar un riñón porque con unome basta y los estudios que mehan hecho dicen que hay compati-bilidad y confían que no habrá re-chazo”. Y así fue. El hijo pudo vi-vir unos años más con el riñónmaterno. Ella hubiera preferidomorir antes que el hijo pero... Hi-zo lo que le dictaba su generoso ybondadoso corazón de madre. Jua-na María, con un solo riñón hacumplido ya 77 años. ¡Cuántabondad y cuánto amor! ❦

42 el Reino

DESDE LA VIDA

BONDAD SIN RUIDO

Es un acto de virtud atendera los enfermos.

–Con el debido respeto, no pare-ce usted un obispo.

–¿Por qué? [cómplice].–¿Usted qué cree?–Haces un cliché de que un obis-

po tiene el pelo blanco, más o me-nos cantidad, y debido a la dura ta-rea pastoral [irónico], sucomplexión física tiende a una cier-ta perfección esférica.

–Lleva un carrerón. ¿Cuáles sonsus activos?

–Cuando hoy intentaba terminarel libro del Santo Padre Luz delmundo para estar a punto en esta en-trevista he leído que cree que losobispos tienen que ser valientes.Personas de Dios, preparadas, capa-ces de dialogar, de hacerse cargo deque vivimos en una sociedad que noes la de hace 40 años, sino la de2011, que hayan nacido en este con-texto plural, donde la Iglesia es unainstitución con su importancia, perono la única. Hombres valientes paraafrontar los cambios que la Iglesiatendrá que dar en estos años.

–¿Qué cambios son esos? ¿Cuá-les son los retos del siglo XXI?

–El primero es transmitir la fe ala nueva generación. Lograr que, siquiere, crea en Jesucristo y viva se-gún su Evangelio. Para eso hacenfalta personas que hablen un len-guaje sensible a los problemas dehoy, vocaciones, acciones imagina-tivas que permitan lo que ya no ha-ce la familia. Vivimos de rentas. Lossacerdotes cuidamos una fe que hantransmitido las madres. Pero eso es-tá a mínimos. Muchos no van a

creer porque no han recibido la feen casa y no hallan en su hábitat aquien les anuncie el Evangelio.

–¿Cuál es esa generación: la su-ya o la de sus sobrinas adolescen-tes?

–Todas. La generación entre los30 y 50 años está bautizada, pero oha perdido el tesoro de la fe o no laha encontrado, y este conjunto denormas morales más o menos opre-sivas le han resultado insoportables.Y hay adolescentes que ven un cru-cifijo y dicen: por qué le han hechoesto a este.

–Si hemos abandonado la fe, esoimplica que los encargados detransmitirla han hecho algo mal.

–La sociedad ya no se deja llevarde la mano por la Iglesia, que eraconstructora de cultura, educación,

pensamiento, y casi tutora de todo,el nacionalcatolicismo que yo noconocí. Con el cambio democrático,se ve como la mano derecha del dic-tador. En estas, la Iglesia, con elConcilio Vaticano II, hizo un es-fuerzo de acercarse y hablar de loque a la gente le hace sufrir, lo quele interesa, y dejó de hablar de loque es más difícil, complejo, miste-rioso. A los sacerdotes nos pilló acontrapié y no supimos hablar deDios en el nuevo contexto. Y llegaun día en que eso, que requiere pe-dagogía, se ve como irracional. Mu-chos dejan de ir a misa y creer enDios porque se puede ser bueno ycristiano sin sacramentos y sin fe.

–Lleva 15 años de cura, ¿haceautocrítica?

–Yo era un chico fruto de estapastoral. Estaba en el scoutismo,aprendiendo los valores que nos ha-cen buenos cristianos. En el semina-rio me encontré con el Señor, y esocambió mi corazón. Ser cristiano esvivir de Él, fiarme de Él, pedir queÉl sea quien construya mi vida. Pe-ro, claro, esto no conectaba con misideas, porque yo era un hijo de lamodernidad: ser el amo de mi vida.Y ese abandonarse a Dios me pro-vocó cierta crisis. Voy a Roma y ha-llo maestros que me abren a unacomprensión de la fe más abierta aese Dios que no se deja atrapar pornuestros esquemas. Y vuelvo con uncorazón entregado y una inteligen-cia sometida a Dios. Entonces hago,como vicepárroco, lo mismo que yorecibí, y veo que no funciona. Y

43el Reino

ENTREVISTA

A MONS. XAVIER NOVELL Luz Sánchez Mellado

El obispo Xavier Novell.

El nuevo obispo de Solsona no gasta complejos. Locuaz y divertido, rompe clichés de imagen y quiere evangelizar a la juventud des-de la doctrina oficial. Ha sido elegido por el Papa obispo de Solsona a los 41 años, lo que le convierte en el más joven de España.

Monseñor Taracón, el llamado cardenal de la Transición, también fue en su día el obispo más joven, a los 38 años. Y también ini-ció su labor pastoral en esta diócesis rural catalana igual de lejos de Lleida que de Barcelona y habitada por 145.000 almas queNovell se ha propuesto devolver o atraer al rebaño de la Iglesia. Un lugar tan bueno como otro cualquier para saltar a la primeralínea. O para dejar pasar tranquila la vida. No consta aún que el nuevo pastor apueste por lo primero. Pero, desde luego, da la sen-sación de que no está por lo segundo. Locuaz. Irónico. Divertido. Monseñor exprime la entrevista-almuerzo que ofrece a la visita de“El País semanal”. Pero que nadie se confunda. “Aquí mando yo”, ha dicho mientras, manojo de llaves en ristre, enseñaba la ca-tedral, el palacio episcopal y el confortable apartamento donde vive. Aborda todos los temas. Total, Dios es la respuesta a todas laspreguntas.

cambio mi acción, no sin problemascon mis sacerdotes, que decían: es-te se ha convertido en un espiritual,solo quiere hacer retiros y confesar.No era verdad. Pero vi que es nece-sario invitar a quienes levantan lascejas cuando oyen hablar de Jesús.

–Un conocido le recuerda de se-minarista defendiendo el fin del ce-libato en el Concilio Tarraconensede 1995.

–Es verdad, defendía cosas conímpetu porque digo lo que pienso yentonces pensaba eso. Era deudo dequien me había formado. Tenía 22años. Yo no viví una adolescenciapropiamente dicha, siempre fui unbuen chico. Quizá mi época de en-fant terrible fueron esos 15 días delconcilio.

–¿Ese cambio tuvo que ver con suestancia en Roma, la Gregoriana, lagrandiosidad del Vaticano?

–Entonces encontraba las magnascelebraciones romanas largas, pesa-das y cargadas. Fue un itinerariopaulatino, de búsqueda personal. Encuarto de Teología viví un encuen-tro con el Señor muy intenso queme hizo ponerme ante Él, y no dejópasar la oportunidad.

–Estamos ante la generaciónmás preparada y el panorama labo-ral más duro de la historia. ¿Quéles ofrece la Iglesia a los jóvenes?

–El encuentro con Dios. En la sor-presa de ese encuentro se esconde to-do. Y por eso es tan extraordinario yal mismo tiempo tan poco atrayente,por incomprensible. La generación dehoy, preparada o no, es frágil. Porquepersonal, afectivamente, y sobre todoespiritualmente, son personas sin ri-queza, con excepciones. Cuando unose encuentra con el Señor, le salenfuerzas para todo y desaparece el pa-sotismo y el desinterés. Eso es lo tanpequeño y tan grande que puedeaportar la fe: el motor de la vida.

–¿Realmente cree que así va aatraer a los jóvenes? Inténtelo en unsitio de botellón.

–Si yo intento una conversacióncon unos chavales que están con la

litrona, va a ser difícil. Primero ten-dría que ver si hay un agujero, uninterrogante para poder, significati-vamente, ofrecerles una palabra deesperanza. Si no, dirán: este cuaren-tón ¿de qué va? Pero lo puede hacerun chico de su edad. Esa es la cla-ve: que tú veas lo que digo en mí.Dicen que el cristianismo se trans-mite por envidia. Ver a alguien ypensar: me gustaría ser feliz comoeste, tener esas agallas, ¿de dóndesaca la energía, quién se lo ha ense-ñado? Ven y verás.

–Creo que quiere ‘fichar’ a laicospara eso.

–Sí. Algunos laicos pueden sentir-se llamados a trabajar full time comoapóstoles. La fórmula que estamosprobando es pagarles media jornaday que la ofrezcan entera. No comoexplotación, sino para respetar su de-seo de voluntariado. Son trabajadoresapostólicos. Tenemos algunos, y si laeconomía lo permite, crecerán.

–Esto viene de la escuela de lai-cos que creó cuando era cura.

–Fue una idea de un grupo de cu-ras jóvenes que hace 10 años pensa-mos en hacer una escuela de forma-ción para que otros jóvenespudieran ayudarnos. Eso ha cambia-do esta diócesis. Si no, viviríamosdormitando y resignados.

–¿En qué se ha notado el cam-bio?

–Este es un fenómeno exponen-cial. Convertir a una persona re-quiere dos años mínimo. Primerouno abre el corazón. Si le pareceque hay algo, pasa tiempo buscan-do, aprendiendo a orar. Luego llegaun día en que choca lo que descubrecon lo que vive, y eso exige unaconversión en el obrar. Pero cuandouna persona se convierte, pasa a serun apóstol. Y convierte a dos o tres,ya somos cuatro. Los cuatro, a trescada uno, 12. Un día eso explota, ycreo que nos estamos acercando a laexplosión. En 10 años, esto no lo vaa conocer ni...

–¿Ni Dios?–Bueno [ríe], lo ha dicho usted.–Los datos cantan: se desploma

el número de jóvenes que se decla-ran creyentes y mucho más lospracticantes.

–Y va a seguir cayendo, porqueeste es un trabajo micro, en un rin-concito, y debería haber muchosotros alrededor. A veces tengo esasensación: esto es lento y cuestamucho. Pero hay que seguir invitan-do a la gente.

–Da entrevistas a quien le llama.¿Le gusta chupar cámara?

–[Ríe]. No me desagrada chuparcámara, pero es parte de esto. LaIglesia tiene que ser pública. No tie-ne que esconderse. Un día me subíal tren en Barcelona. Una chica memira y me dice: qué fuerte. Y yo: elqué. Y ella: nunca se me había sen-tado enfrente de un cura. Le pre-gunté: ¿eres católica? Contestó: nicatólica, ni apostólica, ni romana. Yyo: pues si eres capaz de decir eso,lo fuiste, hija mía. Y en media horale anuncié el Evangelio.

–Así en marcha.–Sí. Hay muchísima gente que no

sabe que existe siquiera la Iglesia.Al saber que El País quería una en-trevista pensé: Dios mío, ven en miauxilio [dramático], ven deprisa asocorrerme. Primero, porque es pa-ra toda España y yo soy de un rin-concito perdido. Y luego, porquehay mar de fondo con la visita del

44 el Reino

De pequeño.

ENTREVISTA

Papa y demás. Yo no sé mucho so-bre muchas cosas, pero un sacerdo-te me dijo: Xavier, en las entrevis-tas puedes decir no sé y no pasanada.

–¿Cree, con el cardenal Rouco,que España es tierra de misión quehay que reconquistar?

–Ciertamente, es tierra de misión,y tenemos que ser públicamentepropositivos. La palabra reconquistano es la que yo usaría. Pero sí estoypor el anuncio amable y valiente delEvangelio.

–¿Que los obispos salgan a la ca-lle contra las leyes forma parte deese anuncio? ¿Se manifestará si leconvocan?

–Si los fieles laicos convocan al-guna manifestación de importanciarealmente fuerte, como la defensade la vida, me lo plantearía. Pero enprincipio pienso que los obispos nodeben asistir gratuita y fácilmente amanifestaciones públicas en la calle.

–¿Por qué algunos párrocos desu diócesis le llaman intolerante?

–Porque no hemos tenido tratopersonal. Otra cosa es que algunotiene ideas sobre lo que ha de pre-dicar la Iglesia diferentes a lo que lajerarquía dice y a lo que yo me ad-hiero. Hacen el cliché: nosotros so-mos progresistas porque creemosque la Iglesia ha de cam-biar. Y Xavier es un con-servador, un papista, unortodoxo. Lo de intoleran-te es por mi vehemencia.Puedo dar la impresión,pero soy hijo de la liber-tad. Para mí, el hecho deque Dios haya respetadola libertad de cada hombrey no le haya obligado acreer es como un manda-miento. Invito a todos, pe-ro no obligo a nada a na-die.

–¿Es papista, ortodoxoy conservador?

–Si ser conservador esamar a Cristo en su Igle-sia, el que más. Si ser pa-

pista significa vivir en comunióncon la Iglesia, el más ultramontano.Y ortodoxo siempre, porque somoshijos de la tradición. Ahora, si que-rer innovar, ser capaz de dar razónde la fe hoy de un modo nuevo esser progresista, lo soy. Si no escan-dalizarse por nada, llorar con losque lloran, decir a quien ha cometi-do lo peor que Dios puede cambiarsu vida es ser comprometido, el pri-mero.

–¿Por qué una mujer no puedeser sacerdote?

–Porque Cristo escogió 12 hom-bres para ser la imagen de estenuevo Israel, y porque lo impor-tante es ser santo, no cura, papa ocardenal. En el infierno hay curas,papas y cardenales, Dios no loquiera. Y de santas, el cielo estáplagado. De mujeres que han he-cho cosas extraordinarias, la Igle-sia está llena. Ser sacerdote es unservicio al que Dios llama a unhombre concreto. La Iglesia no sesiente con autoridad para cambiareso. Considera, y yo considero,que viene del Señor. La masculini-dad del sacerdote nos reporta a lahistoria encarnada de Cristo. ¿Esosignifica que la Iglesia es machis-ta? No. Que hay machistas en ella,pues sí, claro, y fuera.

–Jesús no habló de celibato.–No, y la Iglesia no ha dicho que

eso no puede cambiar. Pero el mi-nisterio, en la historia, apunta siem-pre a una identificación del sacerdo-te con Cristo: pobre, casto yobediente. Es verdad que alguienpuede no sentirse llamado a la re-nuncia de la afectividad sexual y,pese a no tener mujer, ni hijos, pre-cisamente porque no ha sido llama-do y lo vive tensamente, ni vive cas-ta, ni pobre, ni obedientemente. Paramuestra, el conjunto de botones quehan aparecido.

–Me decía la ministra Aguilar,creyente, que la jerarquía católicano la representa porque se dedicamás a hacer políticia que a ayudar.¿Qué le diría?

–Que quizá no vive en casa. Si yotengo un padre y vivo en su casa, sélo que dice. Y quien vive en esta ca-sa y oye a su obispo en estéreo, noa base de titulares, ve que habla deCristo a destajo. Y un día dice algoy sale en el periódico, y gente queno vive en casa cree que el obisposolo habla de eso.

–Hablemos de Roma. Dicen queun obispo siempre es católico, apos-tólico y romano.

–Yo soy catalán y no muy roma-no en el sentido eclesiástico, pero sí

un enamorado de Roma.Es más bonita que París oLondres, muchísimo másque Madrid o Barcelona.

–Y eso que dicen que escatalanista.

–Yo no soy un obispocatalanista. Tampoco es-pañolista. Soy obispo. Sihay fieles independentis-tas y logran la indepen-dencia, voy a felicitarles.Si los hay españolistas,quieren que desaparezcala autonomía y lo logran,también. Y después les di-ré que Cristo hace de to-dos hermanos y de estemundo una sola nación yuna sola humanidad. ❦

45el Reino

La catedral de Solsona.

Respuestas de alumnos de se-gundo de primaria a las si-

guientes preguntas:

¿Por qué hizo Dios a las Ma-dres?

1. Principalmente para limpiarla casa.

2. Para ayudarnos cuando está-bamos naciendo.

3. Porque es la única que sabedónde están mis calcetines.

¿Cómo hizo Dios a las Ma-dres?

1. Usó tierra, como lo hizo pa-ra todos los demás.

2. Con magia, además de súperpoderes y mezclar todo muybien.

3. Dios hizo a mi mamá así co-mo me hizo a mí, sólo quecon cachos más grandes.

¿Qué ingredientes usó?1. Dios hizo a las madres de

nubes y pelo de ángel y todolo bueno en este mundo yuna pizca de malo.

2. Tuvo que empezar con hue-sos de hombres y despuéscreo que usó cuerda, princi-palmente.

3. Con carne blandita que olíamuy bien.

¿Por qué Dios te dio a tu ma-má en vez de otra mamá?

1. Porque somos parientes.

2. Porque Dios sabía que ella me quería más a mí que otras mamásme quieren.

3. Porque mi mamá me había pedido para ella.

¿Qué clase de niña era tu mamá?1. Mi mamá siempre ha sido mi mamá y nada de esas cosas.2. No lo sé, porque yo no estaba allí, pero creo que era muy mandona.3. Yo la he visto en una foto y era una niña muy antigua.

¿Qué necesitaba saber tu mamá de tu papá antes de casarse conél?

1. Su apellido.2. Si me quería para hijo.3. Si tenía dinero para gastar.

¿Por qué se casó tu mamá con tu papá?1. Porque mi papá hace los mejores spaghettis del mundo, y mi ma-

má come mucho.2. Porque mi papá era muy pesado y la convenció.3. Mi abuela dice que porque no se puso su gorra para pensar.

46 el Reino

PÁGINAS SOCIALES

¿QUÉ PIENSAN LOS NIÑOSDE SU MAMÁ?

¿Qué piensan los niños?

¿Quién es el jefe en tu casa?1. Mi mamá no quiere ser jefe, pero tiene que serlo, porque mi papá

es un chistoso.2. Mi mamá, porque ve todo en la inspección de mi cuarto. Ella ve

hasta lo que hay debajo de mi cama.3. Creo que mi mamá, pero sólo porque ella tiene más cosas que ha-

cer que mi papá.

¿Cuál es la diferencia entre las mamás y los papás?1. Las mamás trabajan en el trabajo y en la casa, y los papás sólo van

al trabajo.2. Las mamás saben hablar con las maestras sin asustarlas y hacer

muchas magias.3. Los papás son más altos y fuertes, pero las mamás tienen el ver-

dadero poder, porque a ellas les tienes que pedir permiso cuandoquieres quedarte a dormir en casa de un amigo.

¿Qué hace tu mamá en su tiempo libre?1. Las mamás no tienen tiempo libre.2. Va a la compra o pone la lavadora.3. Me ayuda a hacer los deberes y me lee cuentos.

¿Qué haría a tu mamá perfec-ta?

1. Por adentro ya es perfecta,pero afuera creo que un pocode cirugía plástica en la tripa.

2. Ya sabes, su pelo; yo lo teñi-ría tal vez de azul.

3. Que no tuviera que repartír-mela con mi hermana.

Si pudieras cambiar algo detu mamá, ¿qué sería?

1. Tiene esa cosa rara de pedir-me que siempre limpie micuarto. Eso le quitaría.

2. Haría a mi mamá menos co-tilla, está todo el día pregun-tádome cosas.

3. Me gustaría que desaparecie-ran esos ojos invisibles quetiene atrás de su cabeza.

47el Reino

LasfamiliasconunhijoconsíndromedeDownsonabrumadoramentefelices

Comopuedodarfedirectadelanoticia,ladoydoblementecontento.ElúltimoestudiopublicadoenlaAmeri-canJournalofMedicalGeneticspresentaunasestadísticas,quenoporbuenasdejandesersorprendentes.

ElDr.BrianG.Skotkocoordinóunequipoqueentrevistóa2.400padressobrelarelaciónconsuhijo/síndro-medeDown:

– El99%declaróqueamabanasushijos,– El97%quesesentíanorgullososdeellos.– El79%queveíanlavidadeunmodomuchomáspositivo«porsuculpa»,– El5%seavergonzabadeellosy– El4%searrepentíadehaberlostenido.Con los hermanos la cosa va por la misma línea, y casi todos ellos consideraban la relación con su

hermano/síndromedeDownpositivayestimulante.El88%deloshermanosmayoresdeclaróquegraciasaelloseranmejorespersonas.

Pero...,pordesgraciaestemensajenollegaalosmédicosyalospadres.ElDr.Stotkoopinaquenosefacilitaunainformacióncompletaalosresponsablescuandosetransmiteúnicamentelosaspectosdifíciles.

Enalgunoscasosnosecuentanadapositivoacercade losniñosconestesíndrome,llegandoaejercerunaagobiantepresiónparadeshacersedeellos.Elresultadoesque9decada10niñosconsíndromedeDownsonabortados.Eshoradequeesospadressepanquetambiénestántirandoalabasurasufelicidadterrena.Heesta-dobuscandounestudiodesatisfaccióndelospadresconloshijos,engeneral,parapodercompararlo,ynoloheencontrado,perodudoquearrojemejoresresultados.

JuanJoséRomero(buenas-noticias.org)

48 el Reino

MISIÓN Y MISIONEROS

Durante catorce años he es-tado escribiendo todos losmeses en “EL REINO” y,

concretamente en esta misma sec-ción de “Misión y Misioneros”,por lo que en el momento de ha-cer este artículo para la última edi-ción de la revista, es normal quemi ánimo y espíritu estuvieran unpoco melancólicos. Entre otras co-sas, esto quiere decir que en esequehacer me he sentido cómodo, agusto y realizado. Además, el mó-vil de mis reflexiones no era otroque el de comunicarles algunas demis lindas experiencias misionerasen Ecuador. Si lo conseguí acerta-

damente, le doy gracias a Dios porque también habrá servido un pocopara la expansión de su Reino.

De igual modo, era natural que tuviera mis pequeñas dudas sobre elargumento de este artículo pero, pronto se desvanecieron esas indeci-siones, despejé la incógnita y me decanté por dedicárselo a los venera-bles ancianos de nuestro “centro de día”, con los que he vivido y com-partido muchos momentos y días importantes en Quito y de quienes herecibido y aprendido muchas cosas.

Hace pocos meses les hablaba de ellos con el título “Por una feliz ydigna ancianidad” (septiembre) y “Terapia ocupacional en las personasmayores” (octubre). Al volver a releer aquellos pensamientos y consi-deraciones, tuve la sensación de que además de la dietética y de la te-rapia ocupacional, había que decir también cosas importantes sobre es-te complemento de nuestro centro de día, el de la fisioterapia.

Definir algo, por lo que significa enunciar con exactitud la significa-ción de una palabra o concepto, es muy difícil y, por supuesto, tambiénen el caso que nos ocupa. De entrada este vocablo, como el de otros mu-

chos parecidos (psicoterapia, quimioterapia, reflexotera-pia...) nos suena a un poco ampuloso pero, la verdad es quese trata tan sólo de la fusión de dos palabras, pues de loque realmente estamos hablando es de la “terapia física”.De todas maneras, podemos seguir con la aclaración de lostérminos para recordar que “terapia” significa, sencilla-mente, tratamiento o curación de una enfermedad.

Sin demasiado compromiso, podríamos decir que la fi-sioterapia es una de las ciencias de la salud dedicada al es-tudio del ser humano, que se caracteriza por buscar el ade-cuado desarrollo de las funciones que producen lossistemas del cuerpo. Siguiendo con una descripción, diría-mos que el empleo de las técnicas científicas intervienecuando el ser humano ha perdido o se encuentra en riesgode perder el movimiento.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) definió asíla fisioterapia en el año 1958: “Ciencia del tratamiento através de: medios físicos, ejercicio terapéutico, masotera-pia (masaje), y electroterapia. Además, la fisioterapia in-cluye la ejecución de pruebas eléctricas y manuales paradeterminar el valor de la afección y fuerza muscular, prue-bas para determinar las capacidades funcionales, la ampli-tud del movimiento articular y medidas de la capacidad vi-tal, así como ayudas diagnósticas para el control de laevolución”.

ADULTOS MAYORES CON CALIDADDE VIDA Artemio López Merino,scj

Dña. María Rosario Pérez Pérezestuvo en el “Centro de Ancianos”desde el primer día que lo abrimos.

49el Reino

Los ancianos de nuestro centro de día tansólo asisten por las mañanas (de las 8 a las14) y es entonces cuando su fisioterapeutales atiende médicamente pero, para que esasinstalaciones se aprovechen debidamente,también por las tardes tenemos sesiones defisioterapia para las gentes de nuestros ba-rrios. A los beneficiarios vespertinos losatiende otra fisioterapeuta, y a la hora de pe-dirles una colaboración económica, para na-da olvidamos el carácter popular y caritati-vo de nuestras “obras sociales”.

Para no divagar en un asunto en el queme considero la mar de profano, hablé conlas dos fisioterapeutas (aquí se les llama fi-sioterapistas) y, al explicarles de qué se tra-taba, gentilmente acudieron en mi ayuda. Loprimero que me fascinó fue la efusión queponían en sus relatos, dando a entender suverdadera profesionalidad y un importantecariño a los mayores del centro de día.

Iniciaron la explicación manifestando queestaban ejerciendo su auténtica vocación en este trabajo, al que se en-tregan diariamente con mucho amor, humildad y sencillez. También ladefinió cada una, y a su estilo dijo lo que entendía por fisioterapia. Ydespués de hablar de la medicina en general, entraron directamente enmateria comenzando por las funciones de esta ciencia en sus aspectos:preventivo, curativo y de rehabilitación. Pronto me llamó poderosamen-te la atención el hecho de que hablando de las funciones medicinales dela fisioterapia, las dos subrayaran claramente cosas como estas: cómoconseguir la relajación general y local, cómo motivar psicológicamentea los pacientes, que hay que darles una educación especial y el modo depromover la integración familiar y grupal.

Seguidamente, pero como en un segundo capítulo aparte, disertaronsobre la fisioterapia en la geriatría, como algo muy propio y principalde nuestro centro. Emocionaba escucharles decir cosas como esta: la fi-sioterapia entra en contacto con el adulto mayor, no sólo en el aspectorelacionado con la asistencia sanitaria, sino también mediante la educa-ción para la salud; es decir: transmitir cómo llevar una vida saludable abase de ejercicios físicos debidamente elegidos y la higiene personal ensu día a día.

Debemos conocer bien esos beneficios para aumentar su calidad devida durante el envejecimiento, ya que en esta mayoría de edad se ma-nifiestan cambios fisiológicos y morfológicos que los hace más vulne-rable para padecer cualquier tipo de trastorno o deterioro que, aunquesean leves, tambien son insanos. Es que, ciertamente, las etapas de la in-fancia y de la vejez, la una por estar en la fase de maduración estructu-ral y la otra por estar en la fase de la debilidad, son los períodos más

frágiles y muy susceptibles de per-cibir los cambios.

Antes de acabar este lindísimocoloquio, las dos fisioterapistas seexplayaron elocuentemente sobrela transcendencia de la rehabilita-ción en los adultos mayores, re-marcando sobre todo los siguien-tes objetivos de la terapia física: lareadaptación psicológica, biológi-ca y social; la resocialización paramantenerse activos en su mediohabitual; la reincorporación a lafamilia y a la sociedad. Igualmen-te, insistieron en una larga serie decosas fundamentales, como porejemplo: tener máxima actividad eindependencia. Con todo esto me-joraremos la calidad de sus vidas,mantendremos sus capacidades yreintegraremos a los ancianos a sumedio natural, aumentando su au-tonomía. Y, esta fue su frase ter-minal y lapidaria: “la tercera edad,será para cada uno lo que él quie-ra hacer de ella”. ❦

El padre Artemio,en casa de una feligresa.

La chufaLa chufa, cuya planta se conoce

desde hace 3.000 años, tiene su ori-gen en el Sudán; fue introducida enEspaña por los árabes en el sigloVIII, encontrando el mejor climapara su producción y calidad en lazona norte de la huerta valenciana,concretamente en Alboraya y otraspoblaciones cercanas.

Su popularidad inicial se justifica,por una parte, por la prohibición delconsumo del vino en la religón ma-hometana; y, por otra, por el reco-nocimiento de sus propiedades me-dicinales, existiendo constanciaescrita de que en el siglo XIII ya se

consumía una bebida refrescante lla-mada “llet de xufes” (leche de chu-fas), antecedente de la actual hor-chata.

La chufa es un tubérculo que sedesarrolla bajo tierra, quedando enla superficie unos tallos de colorverde intenso. Se cultiva en terrenossueltos, con una textura franco-are-nosa.

Las condiciones más idóneas pa-ra su cultivo son: temperatura míni-ma del suelo de 12º C, clima suavecon temperaturas medias entre 13º Cy 25º C y humedad elevada.

Las chufas se siembran de abril amayo, y la recolección suele reali-zarse entre mediados de noviembre

y mediados de diciembre. Previa-mente se elimina el sistema aéreo delas plantas. Actualmente la recolec-ción es mecánica. Antiguamente sejuntaban un grupo de labradores o“colla” y las recolectaban manual-mente, recogiendo en capazos conuna azada las chufas y echándolasen la “máquina de cribar”, para se-pararlas por rotación de la tierra.

Hasta hace pocos años el lavadosolía realizarse manualmente enunos lavaderos construidos junto alas acequias de riego. En la actuali-dad, el lavado se realiza en su ma-yor parte en lavaderos mecanizados,utilizando agua potable.

La horchata,el zumo de chufas

La horchata de chufas se conside-ra tradicionalmente como un zumovegetal, bebida refrescante y nutriti-va, con un elevado contenido en al-midón, grasas, azúcares y vitaminas,entre los que destacan fósforo, pota-sio y las vitaminas E y C.

Para su elaboración, se prensa ytamiza la chufa, se procede a la ex-tracción del jugo, que junto con lasproporciones correspondientes deagua y azúcar, es sometido a un pro-ceso de enfriamiento.

Hoy la fabricación de horchataestá totalmente mecanizada. Tradi-cionalmente el proceso de semicon-gelación se lograba a partir de lashorchateras, depósitos cilíndricos demetal, recubiertos de corcho y conuna cámara intermedia que permitíala colocación del hielo que por fro-tación enfriaba el refresco.

Dependiendo del grado de frío alque ha sido sometida, obtenemoshorchata “líquida” o “granizada”. ❦

50 el Reino

SALUD

LA CHUFAY LA HORCHATA M.ª Pilar Romero-Mapi Bolumar

Señor Jesucristo:en agradecimiento por tu amor a nosotros,queremos ofrecer finalmente a tinuestra mente con sus facultades,nuestro cuerpo con su vigor,pero también nuestras limitaciones,nuestras enfermedades o achaques.

Te ofrecemos todos los momentos de nuestra vida,con todo lo que en ella acontezca:

cada pensamiento, cada anhelo,cada palabra y cada accióncada paso de nuestros piescada gesto de nuestras manos,cada latido de nuestro corazón...

Acepta, Señor, esta humilde ofrenda nuestra,para gloria de tu padre.Así sea.

Una entrega incondicional

(Sólo para pendientes de abonar la suscripción en 2011)PRECIOS DE SUSCRIPCIÓN

■■ Ordinaria: 23 € al año.

■■ De amigo: 40 € al año.

■■ De bienhechor: 50 € al año.

■■ Para el extranjero:– 45 $ USA al año.– Aérea: 75 $ USA al año.

MODO DE ABONARLA

■■ Giro postal.■■ Talón bancario.■■ Transferencia o domiciliación bancaria:

C/C 0075 0271 67 0600020261Banco Popular EspañolC/ Enmedio, 3428850 Torrejón de Ardoz

REVISTA EL REINO - Apartado 112. Tel. 91 675 15 36. 28850 TORREJÓN DE ARDOZ (MADRID)

2001.–11 septiembre: atentado contra las torres gemelas de NuevaYork.

2002.–Entra en vigor el euro, moneda europea.16 septiembre, en Roma: † Fco. Javier Van Thuan (n. 1928).

2003.–Invasión de Irak por Estados Unidos.21 enero, en Königstein (Alemania): † Werenfried van Straaten(n. 1913).

2005.–2 abril, en el Vaticano, † Juan Pablo II (n. 1920).Abril: Benedicto XVI, Papa.16 agosto, en Taizé (Francia): † Roger Schutz (n. 1915).

2006.–5 de febrero, en Roma † Eduardo Pironio (n. 1920).2008.–Noviembre: Barak Obama, primer presidente afroamericano de

los Estados Unidos.14 marzo, en Rocca di Papa (Italia): † Clara Lubich (n. 1920).

“El porvenir de la Iglesia no puede venir y no vendrá másque de aquellos que tienen profundas raíces y viven en pleni-tud su fe. No puede venir de aquellos que no saben vivir másque en el instante. Tampoco vendrá de los que critican a losdemás y se consideran como la norma de la infalibilidad, ni delos que escogen caminos fáciles y evitan el de la Pasión, el dela Fe, de los que bautizan la mentira y los vejestorios...

El porvenir de la Iglesia, una vez más, llevará la marca desus santos: es decir de aquellos hombres que encuentranun sentido detrás de las frases, y por eso mismo son moder-nos. De aquellos hombres capaces de ver con más acuidad,porque su vida abarca espacios más amplios. Esta muerte así mismo que libera al hombre, sólo se adquiere en la pa-ciencia de las pequeñas renuncias de cada día”.

Joseph Ratzinger (1968)

Ofrece al Señor con liberalidad los dones de la naturaleza que te da tu trabajo y así, poco a poco, irásconformando tu voluntad con la de Dios. Él custodiará con firmeza tu vida, gobernándola misericordioso y teconservará incólume en los peligros.

(Cristianos de Campinas)