Cuarto domingo de cuaresmaLunes, 16 de marzo del 2015 Para que otros crean El oficial del evangelio...

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Cuarto domingo de cuaresma Lecturas del día: 2 Crónicas 36:14–16, 19–23; Salmo 37:1–2, 3, 4–5, 6 (6ab); Efesios 2:4–10; Juan 3:14–21. Alguien puede sorprenderse del tono exaltado de las plegarias y lecturas de la misa de hoy. La Antífona de entrada entona: “Regocíjate Jerusalén”, y la Oración sobre las ofrendas las presenta “con alegría”. Esta fecha la Cuaresma tiene un aspecto alegre. Es Domingo de Laetare; se pueden usar ornamentos color rosa, y aunque tomamos con seriedad la Cuaresma reconocemos nuestra alegría en Cristo. Las lecturas dan la razón para alegrarnos. En la pri- mera, vemos que el Señor tiene compasión de su pueblo; en la segunda, que Dios es “rico en misericordia”. San Pablo subraya esto a los efesios diciendo que cuanto tenemos es don de Dios. “Por gracia han sido salvados”, apunta. Nuestra gracia no deriva de mérito nuestro. Así como el Señor envía mensajeros a su pueblo infiel, ahora nos provee con su gra- cia, aun cuando estemos en pecado. Su gracia nos hace vivir en Cristo. En el relato del evangelio de san Juan, se nos dice por- qué Dios es compasivo y misericordioso con nosotros: nos ama. “Tanto amó al mundo que le dio a su único Hijo, para que todo el que cree tenga vida eterna”. Sabiendo esto, ¡cómo no vamos a estar alegres! ¡Pongamos en Cristo nues- tra alegría! Para pedir la conversión Padre de inagotable misericordia, tú enviaste a tu único Hijo al mundo para salvarnos. Miramos a tu Hijo, levantado en el árbol glorioso de la cruz, para que el poder de las tinieblas no nos mantenga cautivos. Tú convocas al cansado y al herido, al lastimado, al refugiado y al pecador; abrázalos con tu amor firme y misericordioso. Tu Hijo nos acompaña en el sendero de la conversión; haz que nuestras oraciones, ayunos y limosnas conduzcan a otros a dejarse tocar por tu amor sin medida. Dale a tu pueblo santo una mirada clara, para que fije sus ojos en Cristo, Luz del mundo. Concédenos la fuerza para caminar siempre como hijos de la luz, mirando al que fue levantado en cruz. Te lo pedimos por el mismo Cristo, Señor nuestro que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo; todo honor y toda gloria, por los siglos de los siglos. Amén. Domingo, 15 de marzo del 2015 La cruz de Cristo

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Page 1: Cuarto domingo de cuaresmaLunes, 16 de marzo del 2015 Para que otros crean El oficial del evangelio pone su fe en Jesús antes incluso de conocerlo. Por esa fe, Jesús cur ó al muchacho.

Cuarto domingo de cuaresma

Lecturas del día: 2 Crónicas 36:14 –16, 19 – 23; Salmo 37:1– 2, 3, 4 – 5, 6 (6ab); Efesios 2:4 –10; Juan 3:14 – 21. Alguien puede sorprenderse del tono exaltado de las plegarias y lecturas de la misa de hoy. La Antífona de entrada entona: “Regocíjate Jerusalén”, y la Oración sobre las ofrendas las presenta “con alegría”. Esta fecha la Cuaresma tiene un aspecto alegre. Es Domingo de Laetare; se pueden usar ornamentos color rosa, y aunque tomamos con seriedad la Cuaresma reconocemos nuestra alegría en Cristo. Las lecturas dan la razón para alegrarnos. En la pri-mera, vemos que el Señor tiene compasión de su pueblo; en la segunda, que Dios es “rico en misericordia”. San Pablo

subraya esto a los efesios diciendo que cuanto tenemos es don de Dios. “Por gracia han sido salvados”, apunta. Nuestra gracia no deriva de mérito nuestro. Así como el Señor envía mensajeros a su pueblo infiel, ahora nos provee con su gra-cia, aun cuando estemos en pecado. Su gracia nos hace vivir en Cristo. En el relato del evangelio de san Juan, se nos dice por-qué Dios es compasivo y misericordioso con nosotros: nos ama. “Tanto amó al mundo que le dio a su único Hijo, para que todo el que cree tenga vida eterna”. Sabiendo esto, ¡cómo no vamos a estar alegres! ¡Pongamos en Cristo nues-tra alegría!

Para pedir la conversiónPadre de inagotable misericordia,tú enviaste a tu único Hijo al mundo para salvarnos.Miramos a tu Hijo,levantado en el árbol glorioso de la cruz,para que el poder de las tinieblasno nos mantenga cautivos.Tú convocas al cansado y al herido,al lastimado, al refugiado y al pecador;abrázalos con tu amor firme y misericordioso.Tu Hijo nos acompañaen el sendero de la conversión;haz que nuestras oraciones, ayunos y limosnasconduzcan a otros a dejarse tocar por tu amor sin

medida.Dale a tu pueblo santouna mirada clara,para que fije sus ojos en Cristo, Luz del mundo.Concédenos la fuerza para caminar siemprecomo hijos de la luz,mirando al que fue levantado en cruz.Te lo pedimos por el mismo Cristo,Señor nuestro que vive y reina contigoen la unidad del Espíritu Santo;todo honor y toda gloria,por los siglos de los siglos. Amén.

Domingo, 15 de marzo del 2015La cruz de Cristo

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Recursos reproducibles para Cuaresma-Triduo Pascual-Pascua 2015

La semana en casaLunes, 16 de marzo del 2015Para que otros creanEl oficial del evangelio pone su fe en Jesús antes incluso de conocerlo. Por esa fe, Jesús curó al muchacho. Por esa curación, otros creyeron. Los nuevos creyentes tienen fe gracias a la fe del oficial. En La alegría del Evangelio, el papa Francisco dice que todos debemos ser discípulos misioneros. En otras pala-bras, la alegría de nuestra fe debe atraer a otros hasta Cristo. ¿Has conducido hasta Cristo a otros? Lecturas del día: Isaías 65:17– 21; Salmo 30:2 y 4, 5 – 6, 11–12a y 13b (2a); Juan 4:43 – 54.

Martes, 17 de marzo del 2015San Patricio, ObispoCorren muchas leyendas sobre san Patricio; algunas proba-bles, como la de que enseñaba con un trébol la doctrina de la Trinidad, otras no tanto, como la de que expulsaba duendes y encantaba serpientes. Lo que sabemos de su vida es lo que escribió en su Confesión. Cuenta allí lo vital que era su rela-ción con Dios y la fe que le sostuvo durante todo su cautive-rio. Aunque era feliz de poder volver a su terruño, prefirió seguir el llamado de Dios para evangelizar Irlanda. Lecturas del día: Ezequiel 47:1– 9, 12; Salmo 46:2 – 3, 5 – 6, 8 – 9 (8); Juan 5:1–16.

Miércoles, 18 de marzo del 2015San Cirilo de Jerusalén,Obispo y doctor de la IglesiaLas Catequesis de san Cirilo se siguen estudiando todavía hoy. En ellas, el obispo expone la doctrina de la Iglesia con-forme prepara a sus catecúmenos para el bautismo en la Vigilia pascual, e introducir a los neófitos en los misterios de los sacramentos, durante el periodo de la iniciación sacra-mental. Este santo del siglo cuarto es reconocido por la com-pasión que exhibió siempre. Cuando una hambruna azotó a las gentes, vendió los bienes de la Iglesia para dar de comer a los pobres. Lecturas del día: Isaías 49:8 –15; Salmo 145:8 – 9, 13cd–14, 17–18 (8a); Juan 5:17– 30.

Jueves, 19 de marzo del 2015San José,Esposo de Santa María VirgenPor los pocos detalles sobre san José que dibujan los evange-lios, se perfila un hombre de gran fe. José creyó a los ángeles que se aparecieron en sueños; primero, para decirle que reci-biera a María como esposa, y luego, que huyera a Egipto con su familia. José estuvo siempre dispuesto a ir a donde Dios dispusiera. Pensemos si esa misma disposición guía nuestros pasos de cada día. Lecturas del día: 2 Samuel 7:4 – 5a, 12–14a, 16; Salmo 89:2 – 3, 4 – 5, 27 y 29 (37); Romanos 4:13, 16 –18, 22; Mateo 1:16, 18 – 21, 24a, o bien Lucas 2:41– 51a.

Viernes, 20 de marzo del 2015Orar con un SalmoEsta Cuaresma dediquemos algo de tiempo a conocer mejor los Salmos. Tratan de nuestras necesidades, temores, alegrías y tristezas. El Salmo de hoy, el 34, habla del cuidado de Dios con sus fieles. Los escucha cuando claman a él y los rescata de sus dificultades. Conviene que busquemos y meditemos algún Salmo que refleje nuestros sentimientos esta Cuaresma. Lecturas del día: Sabiduría 2:1a, 12 – 22; Salmo 34:17–18, 19 – 20, 21y 23 (19a); Juan 7:1– 2, 10, 25 – 30.

Sábado, 21 de marzo del 2015Día cuaresmalAlguna gente pensaba que Jesús era un profeta y otra que era el Mesías, pero también había quienes lo rechazaban. Todo parece asunto del pasado. Pero podemos dedicar este momento a preguntarnos, quién es realmente Jesús para nosotros. Seguramente nos habrán aprovechado los ratos dia-rios de oración para ganar intimidad con Cristo. ¿Estamos dispuestos a profundizar en ella, después de la Cuaresma? Lecturas del día: Jeremías 11:18 – 20; Salmo 7:2 – 3, 9bc–10, 11–12 (2a); Juan 7:40 – 53.

© Liturgy Training Publications. 1-800-933-1800. Texto de Michael R. Prendergast. Ilustración de Cody F. Miller. Texto bíblico conforme a La biblia de nuestro pueblo. Biblia del peregrino (2001). Aprobación canónica de la Arquidiócesis de Chicago, 30 de octubre del 2014.