Cuando la vi por primera vez, sentí tanta alegría que me puse a bailar

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“Cuando Elssie me vio trajo las dos cartas que le había escrito”

“Llevo tres años apadrinando a Elssie, una niña de ocho años que vive en un pueblo de Zimbabue. Siempre había guardado con cariño su foto, pero raramente le había escrito. Me resul-taba algo incómodo escribir, presentarme, enviarle una foto. Yo sí recibía sus cartas con mucha ilusión, pero pensaba que, para una niña, tampoco iba a tener tanta importancia saber de una chica que vive al otro lado del planeta. ¡Cuánto me equivocaba!

En febrero tuve la oportunidad de viajar a Zimbabue y cono-cer a Elssie. Jamás olvidaré ese momento (…) Llegamos a su casa, donde vive con sus padres y sus tres hermanos. Es una sola choza en mitad de un terrenito de arena perfectamente cuidado. Elssie llegó corriendo con su madre y se quedaron muy impresionadas al verme. Yo también estaba abrumada por la niña, aun más cuando me trajo las dos cartas que le había escrito.

Hablamos un buen rato, su mamá me enseñó el huerto y vi los animales que crían. Empecé a darme cuenta de la ilusión que podía causarle recibir noticias mías. Una persona mayor me dijo: “Ésta es la primera visita de un padrino a nuestra comunidad ¡Ahora también sabemos que los padrinos son reales!”.

Este comentario me dio mucho que pensar. Qué importante es para las familias saber que nos acordamos de ellos. Ya le he enviado dos nuevas cartas a mi amiguita Elssie. El proyecto de desarrollo con el que colaboro aún está en su fase inicial y todavía hay mucho que hacer, pero después de esta visita no dejaré de recomendar a mis amigos que den el paso y que apadrinen”.

Clotilde, una joven madrina, visitó a la niña que apadrina en Zimbabue; aquí nos relata su experiencia.

Brigitte apadrinó a Octavious, un niño de Zimbabue, hace me-nos de un año y a las pocas semanas le recordaron que era su cumpleaños. La madrina mandó la tarjeta de felicitación pero pensó que le gustaría hacer algo más especial, por lo que de-cidió informarse de las necesidades de su niño apadrinado. En el Departamento de Atención al Padrino de World Vision le comentaron que podía hacer un donativo especial que serviría para cubrir alguna necesidad de Octavious. “Por supuesto que hice un pequeño esfuerzo, mereció tanto la pena”, recuerda Brigitte.

Dos meses después, Brigitte recibió en su casa una carta pre-ciosa de parte de la abuela de su niño apadrinado. En la carta le contaba lo que habían comprado y que había hecho muy feliz a toda la familia: una cabra que podrían criar, y así pagar las necesidades futuras del niño, unos zapatos negros y las tasas del colegio. Pero lo que más ilusión le hizo al niño fue que pudo comprarse un paquete de chicles y unas golosinas. Ahora la madrina no tiene duda, cada cumpleaños hará un donativo especial para intentar hacer más feliz a su niño apa-drinado.

Nota: Puede informarse de cómo realizar un donativo especial. Llame al 902 20 80 10 – 91 456 24 93 o escriba a [email protected]

Les contamos la historia de Brigitte Goigoux, una madrina que decidió hacer algo especial por el cumpleaños de su niño apadrinado y la sorpresa que se llevó al recibir la respuesta desde Zimbabue.

Clotilde y la familia de su niña apadrinada

“Es increíble cómo un esfuerzo tan pequeño puede generar un beneficio tan grande”

MÁS QUE PADRINOS

Brigitte lee el informe que recibió de Ghana sobre su donativo especial

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“Cuando la vi por primera vez, sentí tanta alegría que me puse a bailar”

Cuando un padrino visita a su niño apadrinado, toda la comunidad lo celebra. A continuación po-drás leer cómo se sintió Fatoumata Coulibaly tras la visita de su madrina.

“A Balue, la aldea donde vivo, no suelen llegar visitantes, por ello, cuando mi madrina me dijo en una de sus cartas que pronto vendría a visitarme me sentí muy feliz. Un miembro del personal de World Vision me dijo: Fatoumata, en unas sema-nas llegará tu madrina.

Todos en mi familia estábamos muy ilusionados. Mi abuela me hizo un vestido nuevo y mi madre me ayudó a cambiar el co-

lor de mi pelo. Todos nos pusimos a limpiar la casa para que, cuando mi madrina llegase, estuviese impecable. Entre todos hicimos obsequios para regalarle porque gracias a su ayuda mi comunidad mejora cada día.

El día de la visita, mis tías y abuelos estaban en casa, nadie de mi familia quería perderse la oportunidad de conocer a la persona que nos ayuda a pesar de no conocernos de nada. Cuando la vi por primera vez, sentí tanta alegría que me puse a bailar y ella bailó conmigo. Mis amigos, el policía de la co-munidad y los vecinos también debieron sentirse muy felices porque, cuando me di la vuelta para mirarles, ellos también bailaban. Me divertí mucho con mi madrina y sólo espero que pronto pueda volver a visitarnos”.

Fatoumata con sus padres

¡Los niños apadrinados están encantados con los regalos de sus padrinos!

MÁS QUE NIÑOS APADRINADOS

En Navidad, los padrinos enviaron a sus niños apadrinados el juego Tres en Raya. Como podrán ver en estas fotos de Gha-na, las tarjetas han sido todo un éxito y los niños han disfrutado con el juego. ¡Gra-cias por ayudarnos a conseguir todas estas sonrisas!

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¡Le invitamos a contarnos la historia más emotiva!

Nos encantaría saber cómo decidió apadrinar. Seguro que tiene una historia bonita que compar-tir con toda la comunidad de padrinos de World Vision.

Su experiencia como padrino merece ser contada y leída. Por eso queremos proponerle que escriba un artículo para el próximo número de la revista.

Elegiremos la historia más bonita de entre todas las que reci-bamos y la publicaremos para que todo el mundo pueda co-nocerla. No se olvide de leer con atención la próxima entrega de la revista porque habrá una historia preciosa esperando a ser leída.

Escriba su historia especial y envíela a la Calle Raimundo Fernández Villaverde, 14, 1ª planta 28003 Madrid o a nues-tro email: [email protected] a la atención de Ana Calvo. ¡Muchas gracias!

¡Sus cartas también mejoran la educaciónde los niños!

En este artículo les damos algunas ideas de cómo hacer que su correspondencia sea más dinámica y vayan conociendo más y más la vida del niño que apadrinan.

Aunque su niño está en otro continente, queremos que su relación con él sea muy especial. ¡A su niño apadrinado le va a encantar saber más sobre usted y su mundo! Las cartas, además de permitir una correspondencia con su niño apadrinado, son otra forma de ayudarle a desarrollar sus destrezas de escritura, lectura y comprensión.

Qué contarle:

Cuando comience a escribir, tenga en cuenta el entorno y la cultura del niño que apadrina. Dado que los niños no tienen muchos recursos ni posesiones, intente evitar hablar de bienes materiales.

Escriba sobre los miembros de su familia, sus amigos, los temas que son importantes para usted y las actividades que le gusta hacer, tales como deportes, manualidades u otras aficiones con las que el niño pueda identificarse o comprender fácilmente.

Envíe fotos de su familia, serán como pequeños tesoros para ellos. Pero por favor, tenga cuidado con el tipo de fo-tografías ya que los protocolos de vestimenta varían de un país a otro. Es mejor evitar fotos tomadas en la playa, etc.

Recuerde: para muchos niños escribir cartas es una expe-riencia nueva. Si el niño no sabe escribir o leer, alguien le ayudará a leer la carta y a responderla. Quizás sea un pro-fesor, un miembro de la familia, o un voluntario de World Vision, por lo que es normal que reciba cartas escritas con diferentes caligrafías.

¿SABÍAS QUÉ?

Niña en Kandal, Camboya, escribiendo a su padrino

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Estamos comprometidos con la transparencia en nuestras cuentas para que los padrinos sepan dónde va su ayuda

Aquí les informamos de cómo se distribu-yeron los fondos en 2010. Encontrarán las cuentas completas y el certificado de audi-toría en www.worldvision.es

Durante 2010, gracias a la ayuda de todos los padrinos y donantes, recaudamos 3.446.323 euros que nos han permitido continuar apoyando 10 proyectos de desa-rrollo a largo plazo que llevamos a cabo en 7 países, así como llevar a cabo proyectos especiales en Bolivia, Uganda y Kenia y realizar proyectos de ayuda humanita-ria en Haití y Chile. En total, pudimos llevar ayuda a más de 191.000 personas.

Gracias a las aportaciones de los padrinos, recaudamos la mayoría de los fondos: el 82%. Un 6% proviene de las aportaciones de empresas y las subvenciones de la administración pública y el 12% restante es una contri-bución de World Vision Internacional.

Así se distribuyen los fondos: de los fondos que se re-caudan gracias al apadrinamiento de niños, el 88% se envió a los países donde realizamos programas de desa-rrollo sostenible que benefician tanto a los niños apadri-nados como a sus familias. El 12% restante se destinó a gastos administrativos, de seguimiento de los proyectos en España y campañas de captación de fondos.

Auditamos nuestras cuentas: las cuentas anuales fueron auditadas por BDO Auditores S.L. y depositadas ante el Protectorado de Fundaciones del Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad; se pueden descargar en la web: www.worldvision.es. Además, cumplimos con todos los requisitos de transparencia y buenas prácticas exigidos por la Fundación Lealtad.

World Vision Internacional: World Vision España per-tenece a la red World Vision Internacional, que durante 2010 trabajó en 96 países, recaudó 1.912 millones de

euros en efectivo y en especie para los proyectos de desarrollo y ayuda humanitaria. Gracias al apoyo de los padrinos y donantes en todo el mundo, el año pasado 3,9 millones de niños apadrinados se beneficiaron de los programas de desarrollo sostenible.

EN PROFUNDIDAD

DESTINO DE LOS FONDOS

EVOLUCIÓN DE LOS INGRESOS

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Los niños de Ghana ahora pueden beber agua con tranquilidad porque el gusano de Guinea, una enferme-dad que se produce por el consumo de agua contaminada, es ya historia en su país. Desde World Vision he-mos ayudado a erradicarla.

Los padrinos de España han puesto su grano de arena en este gran éxito. Gra-cias a que sus donaciones se destinaron a proyectos de construcción de pozos para obtener agua limpia y a las activi-dades de formación en higiene, hemos contribuido a que esta enfermedad des-aparezca y no ponga en riesgo la vida de los niños.

Este logro ha sido un trabajo en equi-po en el que han participado nuestros compañeros de World Vision Ghana, las autoridades locales y otras ONG.

El gusano de Guinea es un parásito que vive en el agua contaminada y que pro-voca una infección que produce llagas en la piel. La enfermedad encontró su último bastión en los países africanos, en los que la población tiene poco acceso al agua potable. En Ghana, sin embargo, es ahora un tema del pasado.

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Contribuimos a erradicar el gusano de Guinea en Ghana

Agua potable para cuatro millones de personas en África

Ceden a World Vision Internacional un proyecto de ayuda humanitaria en Haití

World Vision se ha propuesto un reto en los países del África del Este: lanzar un proyecto para me-jorar las condiciones de higiene y proveer de agua potable a las fami-lias rurales. Un proyecto que salva-rá muchas vidas.

El objetivo de este reto es facilitar el acceso al agua a cuatro millones de per-sonas en áreas rurales de Etiopía, Kenia, Uganda y Ruanda. Con ello se evitará la proliferación de enfermedades que muchos niños padecen por beber agua sucia. Este ambicioso programa, deno-minado “Agua, Salud e Higiene” pro-moverá una serie de reglas básicas que aseguren una buena higiene a través de actividades educativas. Por ejemplo, el uso de letrinas como medida de pre-vención de enfermedades o lavarse las manos varias veces al día para evitar la proliferación de bacterias.

A este reto, lanzado por las oficinas de World Vision en África, ya se han uni-do tanto los gobiernos locales como las comunidades que conseguirán mejorar las condiciones higiénicas y sanitarias de sus niños.

Otras organizaciones confían en nosotros para gestionar proyectos que ellos no pueden continuar.

La buena gestión que World Vision rea-liza en Haití ha permitido continuar con los proyectos propios de reconstruc-ción tras el terremoto y a la vez asumir los que otras organizaciones no pueden gestionar.

Éste es el caso de Esperanzas sin Fron-teras, organización que dirige Fernando Darder y que, por falta de fondos, cedió varios centros de ayuda humanitaria a World Vision Haití. “Pensé en World Vi-sion porque ya trabajaba en el país mu-cho antes del terremoto y, por lo tanto, conoce las necesidades de la población. La organización goza de un abanico de gestión muy importante y realiza un tra-bajo excelente”, apunta Darder.

Gracias a la ayuda de donantes y pa-drinos, los programas de World Vision Haití dan asistencia sanitaria y vivienda para que la población, poco a poco, pue-da reconstruir su país y comenzar una nueva vida.

EN EL MUNDO

Wawaa, una madre de Ghana Pozo construido gracias a los padrinos Fernando Darder, ONG Esperanzas sin Fronteras

EN EL MUNDO

EN EL MUNDO

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Un grupo de mujeres en el programa de desarrollo de World Vision en Tiraque, Bolivia, se reúne para apren-der cómo mejorar la nutrición de sus familias y enten-der mejor la importancia de la lactancia materna. En los proyectos de nutrición que realizamos en el Chaco boliviano, gracias al apoyo de los padrinos, realizamos actividades similares con las madres para asegurar el bienestar de los niños.

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EN IMÁGENES

En el blog: viaje con nosotros al corazón de GhanaConozca cómo viven los niños apadrinados en Gha-na, cómo es su cultura, quiénes son los trabajadores y voluntarios de World Vision en este país africano.

En el blog “Apadrina y multiplica sus sonrisas” les con-tamos en detalle el viaje que hicieron nuestros com-pañeros a Ghana para realizar el seguimiento de los programas de desarrollo que llevamos a cabo gracias a la ayuda de los padrinos y para fortalecer el trabajo que realizamos con el equipo de trabajadores y volun-tarios ghaneses que trabajan con las comunidades en el día a día del proyecto.

Les invitamos a leer los artículos del blog y a viajar de esta forma al corazón de Ghana, justo allí donde los padrinos están cambiando la vida de muchos niños:

http://worldvisionong.wordpress.com/

EN LA WEB

Rebeca: 8 años trabajando por los niños de Bolivia

Rebeca Hidalgo es toda una institución dentro del equipo de World Vision Bolivia. Desde hace 8 años dedica su vida a traba-jar en la lucha contra la pobreza, por ello, cuando habla, todo el mundo sigue una regla no escrita: sólo escuchan, porque saben que de ella pueden aprender mucho. Esta ecuatoriana, radica-da en Bolivia desde hace más de 30 años, conoce con los ojos cerrados las comunidades con las que trabaja, y a pesar de que los cambios no suceden tan deprisa como a ella le gustaría, no ha perdido la esperanza ni la alegría y sigue trabajando en la gestión del apadrinamiento para que los padrinos reciban las fotos y la información de los niños que apadrinan.

Su trabajo es vocacional y exige sacrificios. Casi no ve a su familia porque la región de Camiri está muy alejada de La Paz, donde viven algunos de sus hijos, y los vuelos hasta allí son muy caros. Por esta razón, pasa largas temporadas sin ver a sus nietos, sacrificando su vida personal por la de los demás.

Rebeca tiene un espíritu incansable cuya única motivación es que los niños de las comunidades rurales tengan las herra-mientas necesarias para forjarse un futuro mejor.

Equipo del programa de Macharetí con el que trabaja Rebeca

DESDE EL DEL PROYECTO

Aprendiendo juntas sobre nutrición

Es una de nuestras compañeras de World Vision Bolivia y una mujer muy comprometida con la or-ganización. Rebeca y sus compañeros hacen po-sible que la información entre padrinos y niños apadrinados fluya adecuadamente.

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El equipo de fútbol del Club Deportivo Le-ganés comenzó el 2011 con un reto especial: conseguir padrinos entre su afición. Ellos son los primeros en dar ejemplo y apadrinaron a Rider, un niño boliviano de 5 años. “No du-damos en apadrinarlo”, dice Mario Fuentes, capitán del equipo.

LA ENTREVISTA

Mario FuentesCapitán del Leganés

¿Qué significa para el equipo apadrinar a Rider?

Para el Leganés es un orgullo tremendo ayudar en un proyecto que mejora la vida de muchos niños que no han nacido con las mismas posibilidades que nosotros. Por eso la plantilla no dudó en apadrinar a Rider. Sabemos que somos afortunados por haber nacido en un país rico, donde la educa-ción no es un privilegio.

¿Cómo crees que el compromiso del equipo mejorará la vida de este pequeño y su familia?

Nuestra aportación no solucionará todos los problemas que asuelan ese país, pero sabemos que con nuestra ayuda, mejorará su educación, alimen-tación y el desarrollo de su sociedad.

¿Qué mensaje darías a todos los seguidores del club y aficionados al fút-bol que aún no han apadrinado?

Animo a los aficionados a participar en el proyecto. Entre todos, con muy poco dinero, podemos ayudar a muchos niños.

Fundación World Vision Num. Registro 28/1214 CIF G-83.006.726Oficina Principal-Madrid Raimundo Fernández Villaverde, 14, 1ªpta 28003 Madrid. Tel. 902 20 80 10 [email protected]

LA ENTREVISTA