Cuadernos marxistas Nº 04

98
1

description

 

Transcript of Cuadernos marxistas Nº 04

Page 1: Cuadernos marxistas Nº 04

1

Page 2: Cuadernos marxistas Nº 04

2

Page 3: Cuadernos marxistas Nº 04

3

¿Profundización o sintonía fina?Luces de alerta sobre el rumbo del «modelo»Patricio Echegaray..........................................................................3

Hacia un nuevo horizonte de épocaÁlvaro García Linera.....................................................................9

El imperialismo hoyCrisis y agresividad

Jorge Alberto Kreyness................................................................16

Crisis y BarbariePlinio Arruda Sampaio Jr..........................................................22

Rosa Luxemburgo y las luchas revolucionariasAtilio Boron.................................................................................28

Rataplan, plan, planJorge Luis Ubertalli......................................................................32

El proyecto de la OTAN sobre Malvinas y el Atlántico SurRina Bertaccini..............................................................................39

El marxismo como proyecto transformadorMarcelo F. Rodríguez...................................................................47

Entrevista con Hugo YaskyJuan Bautista Echegaray................................................................51

100 Años del Grito de AlcortaRafael Villareal.............................................................................62

La CasaEduardo Rosenzvaig....................................................................71

DOCUMENTOS 75Declaración del Partido Comunista contra la LeyAntiterrorista.................................................................................76Proyecto del PCA de Derogación de la LeyAntiterrorista......................................................................78Declaración a 36 años del Golpe Cívico Militarde 1976................................................................................80A 22 AÑOS DE LA CARTA DE LOS CINCOSin Pausa por el camino del socialismo........................86

REVISTA COMUNISTADE ANÁLISIS, DEBATES

Y DOCUMENTOS

Director:Patricio Echegaray

Secretario de redacción:

Marcelo F. Rodríguez

Colaboran

en este número:

Plinio Arruda Sampaio Jr.Rina BertacciniAtilio A. Boron

Juan Bautista EchegarayÁlvaro García Linera

Jorge Alberto KreynessMarcelo F. RodríguezEduardo Rosenzvaig

Jorge UbertalliRafael Villareal

Diagramación:

Patricia Chapitel

La revista CuadernosMarxistas

es una publicación trimestralde análisis, debates y

documentos de la editorialCuadernos Marxistas,

con domicilio en laAv. Entre Ríos 1039

de la Ciudad Autónomade Buenos Aires,

República Argentina.4304-0066/68

[email protected]

sumario nº 4

ABRIL DE 2012

ISSN 1853-368X

Page 4: Cuadernos marxistas Nº 04

4

Page 5: Cuadernos marxistas Nº 04

5

por Patricio Echegaray*

* Secretario General del Partido Comunista de la Argentina y Director de Cuadernos Marxistas.

NOTA EDITORIAL

En la nota Editorial del nú-mero anterior de CuadernosMarxistas, consignábamos

algunas de las consecuencias y pers-pectivas que se presentaban tras elarrollador triunfo de la presidentaCristina Fernández. Por un lado, dá-bamos cuenta de la contundenciade un resultado cimentado en me-didas tomadas por el gobierno ta-les como la Asignación Univer-sal por Hijo, la recuperación delos fondos previsionales y deAerolíneas Argentinas, las nego-ciaciones paritarias, la políticade Derechos Humanos y la in-tegración regional.

Por otro, destacábamos la des-articulación en la que había caí-do la derecha política que, en-valentonada por la profecía del«fin de ciclo kirchnerista» am-pliamente difundida por los me-dios hegemónicos de comunica-ción, intentó presentarse comoalternativa.

De esta forma todo, o casitodo, parecía indicar que nos en-contrábamos ante un momentopropicio para tomar algunasmedidas contundentes en la re-cuperación de los recursos pe-troleros y gasíferos que permi-tieran elaborar un proyecto ener-gético propio. Del mismo modoque impulsar una nueva ley deminería, frente a una actividad

¿PROFUNDIZACIÓN O SINTONÍA FINA?

Luces de alerta sobre elrumbo del «modelo»

que debe ser tomada en cuentatanto por el factor ambiental ycontaminante que representa,como para impedir el saqueopor parte de los grandes mono-polios trasnacionales. Tambiénpara afrontar una drástica recu-peración de los ferrocarriles,para impulsar una reforma fi-nanciera y una reforma tributa-ria que permitan seguir poten-ciando el salario, avanzar haciael 82 por ciento móvil en las ju-bilaciones, terminar con el tra-bajo ilegal y recomponer el 50 y50 en el reparto de la renta comobase para seguir avanzando enla distribución y creando condi-ciones para revertir los proble-mas que aún golpean a los argen-tinos y a los sectores popularesen particular.

A pocos meses de iniciadoeste segundo mandato, y másallá de una nueva avanzadamediática de la derecha que de-nuncia la presencia en el gobier-no de un economista marxistade ascendencia judía y de jóve-nes portadores del «gen Monto-nero», viendo en esto una ten-dencia «autoritaria y estatizan-te», se encienden luces de aler-ta. No obstante, el proyecto derecuperar YPF, expropiando el51% de sus acciones que la pre-

sidenta acaba de enviar al Con-greso, al mismo tiempo queanuncia la intervención de laempresa y la declaración de uti-lidad pública de la producciónde combustible, representa unavance positivo respecto a lasituación actual, pero resultainsuficiente para afrontar efec-tivamente las necesidades ener-

géticas del país, para esto, el pe-tróleo debe ser recuperado dán-dole a YPF el carácter de em-presa pública, es decir, una em-presa de propiedad y gestióncompartida entre el Estado y los

«Seguimos sosteniendoque el petróleo debe serrecuperado dándole aYPF el carácter deempresa pública, es decir,una empresa depropiedad y gestióncompartidaentre el Estado ylos trabajadores»

Page 6: Cuadernos marxistas Nº 04

6

trabajadores.Sin embargo, son va-rias las medidas y señales que en-cienden luces de alerta sobre el rum-bo que parece estar tomando el lla-mado «modelo» y sobre el papelque deben jugar la izquierda y lossectores populares en esta etapa.Estas luces de alerta se han expre-sado en el discurso de asuncióndel segundo mandato, en el pro-nunciado con motivo del inicio delas sesiones ordinarias en el Con-greso y, fundamentalmente, con laaprobación de la llamada «Ley An-titerrorista».

Ya en el discurso de la presidentallamó la atención la ausencia totaldel concepto de «profundización»,sobre el que se había articulado lacampaña electoral, cediendo pro-tagonismo al mucho más opacoconcepto de «sintonía fina».

Reconociendo implícitamente losefectos que la crisis capitalista mun-dial comienza a derramar sobre laregión y sobre nuestro país en parti-cular, la «sintonía fina» comenzó amanifestarse en una quita de sub-sidios, y en el intento de poner untecho a las negociaciones salarialespara que no se supere el 18 porciento de aumento para el 2012,límite agravado por los continuosaumentos en la canasta familiar,que hacen de la carestía de la vidaun fenómeno indisimulable.

El concepto de «sintonía fina»,más que anunciar la consolidacióny perfeccionamiento de lo alcanza-

do, puede así parecerse demasia-do al comienzo de un ajuste, locual no puede dejar de alarmar aquienes hemos apoyado la conti-nuidad de este gobierno impulsan-do la profundización de las medi-das tomadas a favor de los secto-res populares.

Toda señal de estancamiento oretroceso en estos avances debe seranalizada con toda seriedad y pre-ocupación por sus consecuenciassobre el conjunto del pueblo.

Como analizamos en su momen-to en Nuestra Propuesta, el extensoinforme con que la presidenta abrióel año parlamentario 2012, dejóvarios puntos para el análisis y lareflexión:

Se insistió en que los resultadosobtenidos no son producto del lla-mado «viento de cola», es decir, delas oportunidades y brechas queofrece la economía mundial, dejan-do sorprendentemente de lado elanálisis de aspectos centrales de la

crisis del capitalismo1 y de los ca-minos que están encontrando lospaíses de la región a través de accio-nes como la liquidación del Alca yagrupamientos comunes como elMercosur, el Alba, la UNASUR y laCELAC, que han favorecido las con-diciones para enfrentar la crisis gra-cias a la manifiesta solidaridad vigen-te entre varios países de la región.

En cambio, a lo largo de su ex-posición la presidenta mencionóreiteradamente al G 20, grupo he-gemonizado por los países impe-rialistas e incluso señaló que nosguste o no, los norteamericanos sa-ben cómo se maneja la economía yqué hacer para reactivarla.

A lo largo del informe, la presi-denta no realizó referencias al suje-to social que, como beneficiario desus políticas, debería ser convoca-do a sostener y profundizar losrumbos del modelo, centrando lainterpretación de la realidad sólo enel accionar del gobierno y, pormomentos, de la oposición políti-ca. En este sentido llamó la aten-ción la réplica de una desafortuna-da referencia, que abreva en el másreaccionario sentido común, refe-rida a los trabajadores docentes, conel mismo desdén con que mesesatrás se había hecho mención a lostrabajadores del subterráneo.

Tras estas señales parece vislum-brarse una reestructuración de lasalianzas del gobierno, con un pesomayor de las mismas en los secto-

1 Ver notas de Jorge A. Kreyness (pág. 16) y de Plinio Arruda Sampaio Jr. (pág. 22)

«En el discurso de lapresidenta llamó laatención la ausenciatotal del concepto de‘profundización’,sobre el que se habíaarticulado la campañaelectoral, cediendoprotagonismo al muchomás opaco concepto de‘sintonía fina’».

Page 7: Cuadernos marxistas Nº 04

7

res empresarios, quienes pidencomo prenda de buena voluntadla imposición de un techo a la ne-gociación salarial.

Otro dato a tener en cuenta esque a la remanida idea de la conci-liación de clases, expresada por unpacto social a través de un contra-to entre trabajadores, empresariosy Estado, se le suma el sospechosoaunque atractivo concepto de con-sumidores y usuarios, herencia vigente

que deja el neoliberalismo.Volviendo al tema de la educa-

ción, sería muy injusto no recono-cer que alcanzar el 6,47 por cientodel P.B.I para el presupuesto edu-cativo es un resultado altamentevalorable. Pero discutir toda la pro-blemática de la educación y no sólolos salarios, resulta fundamental enesta etapa en la que los gremiosdocentes tienen como meta desar-mar todos los efectos del neolibe-ralismo en la educación.

Al reconocer la importancia quehan tenido y deben tener las polí-ticas de subsidios y plantear una

reorientación de los mismos, se estáadmitiendo que, hasta el momen-to, los subsidios más importanteshan estado favoreciendo preferen-temente a las empresas prestata-rias de grandes negocios y no alos trabajadores.

En otro punto es importante elseñalamiento de que Argentina nodepende del financiamiento exter-no para su crecimiento, pero no hayque olvidar que los efectos causa-dos por la transferencia de dólaresrealizada por las transnacionales asus países de origen, con el objeti-vo de paliar la crisis, expresa lisa yllanamente una actitud de depen-dencia hacia las mismas, puesto queesos dineros deberían ser reinverti-dos en el país.

De esta forma vemos como elproyecto presentado como desa-rrollista y productivista por el go-bierno, más allá de los impulsos almercado interno y a la sustituciónde importaciones, continua apos-tando sus fichas más fuertes a lasexportaciones y dependiendo endemasía del estado del mercadomundial, cuya crisis ya se evidenciaen procesos como los de EstadosUnidos, la Unión Europea y Japóny que comienza a extenderse a Bra-sil, China e India.

Insistimos en que es imposibleafianzar un proceso de desarrollo«real, sustentable y equitativo», comoel que se enuncia, sin afectar fuerte-mente la estructura capitalista aúnvigente construida en el últimomedio siglo.

Siguiendo con los trabajadores,la baja que ha experimentado el ín-dice Gini (que mide la concentra-

ción de ingresos) es importante,pero la persistente desigualdad queexiste entre quienes más y los quemenos ganan, es muy grande paraser compensada únicamente con los20 mil millones aplicados a desa-rrollo social.

En el contexto de la puja distri-butiva en curso, la reducción delíndice del trabajo ilegal al 34,3 porciento significa un avance, perotambién un terreno de disputa.

Lo mismo sucede con las jubi-laciones: tras el logro de la recupera-ción de los fondos de pensión, los23 aumentos otorgados a los jubila-dos son destacables, pero no lleganaun así a cubrir la canasta básica.

El Fondo de Garantía de Susten-tabilidad ha crecido hasta comple-tar más de un año de previsiones,pero si el gran número de trabaja-dores no registrados aportara, esteFondo crecería considerablemente,lo que permite decir que las pensio-nes y jubilaciones pueden aumentarse.Para esto resulta necesario que el tra-bajo ilegal sea eliminado o por lomenos reducido a ínfimas propor-ciones, y esto no es posible porqueel Estado trabaja a desgano en esetema, y esto es así porque una partesustancial de las super gananciasempresarias se apoya de manera di-recta o indirecta en la super explota-ción de los trabajadores despojadosde sus derechos.

El capitalismo real, no el em-presariado imaginario «serio» y«productivista», impone esa barre-ra ilegal que el gobierno tácitamen-te acepta escudándose en una su-puesta impotencia derivada deldifícil manejo de la burocracia

«Los subsidios másimportantes han estadofavoreciendopreferentemente alas empresas prestatariasde grandes negociosy no a los trabajadores»

Page 8: Cuadernos marxistas Nº 04

8

El gobierno dice que es necesa-rio disponer de los recursos ya quetodo no puede hacerse al mismotiempo. Todo no, pero sí las prio-ridades. Y esta es una y seria, al igualque el valorado rescate de la líneaaérea de bandera y los subsidios

para levantarla. Recursos existen,salvo que limitemos el uso de lascuantiosas reservas acumuladas alpago de deudas a los usureros in-ternacionales y a operar como «ga-rantía de fuga» de capitales ante lasmafias financieras instaladas en elpaís. Argentina dispone de fondosmás que suficientes como para es-

estatal encargada de fiscalizar lascondiciones de trabajo.

La Presidenta sostiene la necesi-dad de jerarquizar el rol del BancoCentral, transformándolo en un ins-trumento de la política económicadecidida por el gobierno y aleján-dolo de las manipulaciones de lasroscas financieras y del FMI, lo quees correcto para controlar activa-mente la economía y fortalecer a labanca pública. Lo que queda des-ajustado con esta concepción es quese cajonea el proyecto de Ley deEntidades Financieras, al que la Pre-sidenta califica de mucho ruido ypocas nueces. El propósito de eseproyecto no es el de normar sinoel de modificar la función de lasentidades financieras. No es preci-samente ruido: la ley vigente es unengendro de la dictadura.

Tras el desastre ferroviario deOnce, tiene validez el análisis presi-dencial sobre lo que dejara comoherencia el Plan Larkin, que fueralargamente denunciado por el PCen aquellos años, ya que inició eldesguace de los ferrocarriles final-mente concluido por el menema-to y sus privatizaciones. Esto es co-rrecto, pero no aparecen a la vistamedidas de fondo que permitanacabar con la emergencia ferrovia-ria vigente, es decir, la reestatiza-ción del sistema. El Estado mirópara otro lado a la hora de exigircuentas sobre los subsidios y las in-versiones comprometidas.

tatizar integralmente los serviciosferroviarios y poner en marcha ungran programa de expansión y re-novación de los mismos.

Es sugestivo que ante el proble-ma de la minería el discurso hayagirado en torno al cuidado delambiente y a la reinversión de utili-dades. Lo que no aparece es el temade las multinacionales, sus negociosy el saqueo y destrucción de nues-tro patrimonio, tal como reclamandistintos pueblos cordilleranos.También en este tema resulta im-prescindible una nueva ley.

En la reivindicación de nuestrasoberanía sobre las Islas Malvinas,los reclamos del gobierno argenti-no son ampliamente apoyados ennuestro país y son muy correctaslas notificaciones de litigiosidadgiradas a las empresas que explo-tan nuestros recursos.

La denuncia sobre el proceso demilitarización del Atlántico Sur2 estambién importante como aporteal criterio de zona de paz que deberegir en el océano sur. En este con-texto, con la misma firmeza debe-rían dejarse sin efecto la instalaciónde una base del Comando Sur en laprovincia del Chaco y las maniobrasconjuntas de la Armada argentina yla norteamericana en los ejerciciosdenominados «gringo-gaucho»3.

No está desvinculado el temaMalvinas del momento en que seincrementa exponencialmente laimportación de combustibles y la

2 Ver nota de Rina Bertaccini (pág. 39)3 Ver nota de Jorge Ubertalli (pág. 32)

«Recursos existen, salvo,que limitemos el uso de lascuantiosas reservasacumuladas al pagode deudas a los usurerosinternacionales y aoperar como ‘garantía defuga’ de capitales ante lasmafias financierasinstaladas en el país»

Page 9: Cuadernos marxistas Nº 04

9

referencia que la Presidenta hace aldescenso de la producción de cru-do en forma vertiginosa desde laprivatización de la empresa petro-lera nacional, e incluso la menciónde la ley de Abastecimiento en elcaso de los combustibles. Por esoes llamativo que en ese detalladoanálisis no se mencionaran las pre-siones empresariales de Repsol YPF,la corrida de venta de acciones yrecompra y el llamado del princi-pal lobista de Repsol, el rey de Es-paña, cuando se estaba elaborandoel plan de recuperación, aunque node reestatización de la empresa.

En el balance gubernamental pre-sentado al Congreso parece haber-se establecido una tregua en el temade la ley de medios audiovisuales ysu aplicación, tanto como en el casode la legislación sobre el papel dediarios. Al mismo tiempo se abreel debate sobre reformas al Códi-go Civil cuya modernización pue-de resultar oportuna, pero debe-mos seguir insistiendo en una delas cuestiones más serias, como loes la Ley Antiterrorista, cuya apli-cación pone en peligro los dere-chos humanos de los participan-tes en las manifestaciones que lossectores populares llevan adelanteen defensa de sus derechos y desus reivindicaciones.

Es por esto que hemos insistidocon la presentación en el Congresopor parte del Partido Comunista de

un «Proyecto de Derogación de laLey Antiterrorista»4, una de las prin-cipales consignas que levantó eldocumento leído en Plaza de Mayoy tras la cual se marchó el último24 de marzo5.

Esto es de suma importancia so-bre todo porque el enemigo noduerme, sino véase la provocaciónde la Revista Cambio 16 de España,que como parte de los aprietes alpaís, publica un reportaje al dicta-dor genocida Videla, quien llama ala oposición a organizarse contra loque él denomina «lacra».

En este contexto de preocupa-ción ante la luces de alerta que seavizoran en el panorama, el Parti-do Comunista, desde su autonomíae independencia política, tiene unaposición muy clara y explicitadareiteradamente: no existe un capi-talismo «bueno» o «serio» en el cualse pueda confiar, por lo cual lascontradicciones del llamado «mo-delo» serán inevitables y el movi-

miento popular necesita afrontarlocon total autonomía, logrando unir-se a partir de un programa de cri-terios comunes de acción, que ayu-den a superar la dispersión, y avan-zar en el camino de un poderosoFrente Popular de Liberación Na-cional y Social.

Frente a la crisis capitalista mun-dial, que tiene a Europa comoejemplo nefasto de lo que sucedecuando se busca enfrentar la mis-ma con las viejas recetas de ajuste yenfriamiento económico que dictanlos organismos financieros interna-cionales, el rotundo triunfo electoralkirchnerista y las condiciones políti-cas generadas por el mismo (derro-ta catastrófica de la derecha) estable-cían el clima favorable para un au-daz giro hacia la izquierda por partedel Gobierno. Como señalábamosal comienzo de esta nota todo, o casitodo, parecía indicar que nos encon-trábamos ante un momento propi-cio para esos cambios.

La posibilidad de avanzar aún estápresente, pero para esto hace faltaalgo decisivo: la voluntad del gobier-no para emprender ese rumbo. Yno se trata de un problema psicoló-gico sino de algo más importante(que incluye también a la psicologíade los protagonistas), lo que apare-ce es un bloqueo ideológico pro-ducto de la historia, de la forma-ción de no pocos de los dirigentesque componen la capa superior del

4 Ver Declaración y Proyecto de derogación (Págs. 76 y 78)5 Ver Declaración a 36 años del golpe cívico-militar (Pág. 80)

«No existe uncapitalismo ‘bueno’o ‘serio’ en el cualse pueda confiar, por locual las contradiccionesdel llamado ‘modelo’serán inevitables yel movimiento popularnecesita afrontarlocon total autonomía»

Page 10: Cuadernos marxistas Nº 04

10

kirchnerismo fuertemente condicio-nada por las tramas económicas,institucionales, culturales del paísburgués que en casi treinta años dedemocracia (restringida) reprodu-jo el molde estructural dictado porel neoliberalismo y heredado de ladictadura militar.

El «progresismo» (basta ver laexperiencia europea y su fracaso)ofrece el camino acotado del«cambio posible», sin advertir queesto constituye en realidad unatrampa que ahora se está cerran-do sobre un gobierno, que sigueintentando mejorar las condicio-nes de vida del pueblo sin afectarlas super ganancias empresarias.Esto debe evitarse.

La presidenta señaló reciente-mente el hecho de que al ser ataca-da desde «la izquierda» y desde «laderecha» se confirma su esencia pe-ronista. Al autoubicarse entre la de-recha y la izquierda se instala en elcentro político, que como lo en-seña la experiencia, comienza ga-nando posiciones gracias a supragmatismo, pero termina inevi-tablemente alejándose de los deabajo, y sacado del medio por losde arriba cuando deja de serlesútiles a sus intereses.

Aunque para muchos sea duroreconocerlo, la crisis mundial queya empieza a afectar a la Argentinacoloca en términos estratégicos algobierno ante la disyuntiva de se-guir equilibrando presiones y mar-char hacia su declinación, girar a laderecha y ser triturado por el capi-talismo mafioso (el real, el domi-nante en nuestro país) o girar haciael campo popular abrazando las

banderas de las grandes transfor-maciones en beneficio de las ma-yorías. A eso apostamos los comu-nistas, y en este caso el enemigo avencer tiene varios nombres: ma-fias empresarias, intromisiones im-perialistas, monopolios mediáticos,burocracia estatal insolvente, sub-desarrollo, etc., pero un único ape-llido: capitalismo, es decir, el paísburgués con sus estructuras de do-minación económica e institucional

y su subcultura colonial.Entendemos que la izquierda no

tiene porque acompañar silenciosa-mente los titubeos y temores delcentrismo progresista, ni tampocodebe equipararlo con la derecha,cuyo único proyecto es el saqueointegral del país. Tenemos que cons-truir fuerzas transformadoras, re-

volucionarias, desde abajo apoyan-do las decisiones positivas y recha-zando las medidas antipopulares,enfrentando la realidad tal cual es,con honestidad intelectual y sin au-toengaños. Avanzando contra el sis-tema por el camino de una revolu-ción popular que vaya más allá delos límites del capitalismo. El pro-gresismo no es per se amigo o ene-migo de los intereses populares, esun espacio de intermediación, consus buenas obras, sus lealtades y susdefecciones. No somos lo mismopero podemos y debemos hacermuchas cosas juntos.

Cristina se siente orgullosa de suraíz peronista que, como sabemos,cobija sensibilidades diversas y a ve-ces contrapuestas. Los liderazgospopulares no son eternos, en elcaso argentino la ruptura del año2001 desplazó a la derecha políti-ca tradicional aunque no culminóen revolución popular. El kirchne-rismo pudo otorgarle gobernabi-lidad al país asumiendo aspiracio-nes expresadas en las rebeliones deaquellos días de acumulación debroncas arrastradas durante mu-chos años, reparando injusticias,pero sin «sacar los pies del plato»y así preservando el funcionamien-to del sistema.

Ese juego ya da claras señales deagotamiento y resulta necesario pro-fundizar los cambios estructuralescomo una garantía para no retro-ceder. El fantasma del 2001 puederegresar aunque bajo un contextomundial (de crisis capitalista profun-da) y nacional muy diferente. La iz-quierda tiene que prepararse paraestos desafíos.

El progresismo no esper se amigo o enemigode los interesespopulares, es un espaciode intermediación, consus buenas obras, suslealtades y susdefecciones. No somoslo mismo, pero podemosy debemos hacer muchascosas juntos.

Page 11: Cuadernos marxistas Nº 04

11

por Álvaro García Linera**

Si uno se pone a pensar quehasta hace pocos años existíaun apartheid institucionalizado

que segregaba a las mayorías indí-genas de los poderes del Estado re-publicano desde su fundación o, enla turbulencia e inestabilidad políti-ca estructural que vivió Bolivia du-rante el periodo 2000-2005 (cincoPresidentes en cinco años), o en lasmovilizaciones por la demanda deautonomía que intentaron ser apro-vechadas por segmentos fracciona-listas de las viejas élites regionales,hoy, cada una de estas históricas di-visiones sociales ha sido superadapor la consolidación de una estruc-tura estatal plurinacional, autonómi-ca y de un Gobierno Revoluciona-rio que basa su solidez y su estabili-dad en la unidad del pueblo boli-viano, de sus organizaciones socia-les indígenas-campesinas, obreras,vecinales y populares.

Durante los últimos 5 años, sehan comenzado a demoler rápida-mente los mecanismos racializadosde las decisiones estatales que mar-ginaban a las mayorías indígenas.Se ha derrotado al neoliberalismorecuperando el control social y es-tatal de la riqueza pública, anterior-mente enajenada a manos priva-das extranjeras. Igualmente se hapuesto fin a décadas de denigran-te subordinación de las decisionesgubernamentales a la Embajada

HACIA UN NUEVO HORIZONTE DE ÉPOCA

Del republicanismo propietarioal republicanismo comunitario*

* El presente texto forma parte del libro Las tensiones creativas de la revolución, La quinta fase del Proceso de Cambio que próximamente seráeditado en Buenos Aires por Ediciones Luxemburg con presentación de Patricio Echegaray. Agradecemos al autor su autorización parala publicación del mismo.

** Vicepresidente del Estado Plurinacional de Bolivia.

Page 12: Cuadernos marxistas Nº 04

12

norteamericana y a los organismosfinancieros internacionales. Hoy,como nunca en la historia colecti-va de la Patria, indígenas y mesti-zos compartimos las decisiones delEstado y tenemos las mismasoportunidades en la toma de de-cisiones públicas.

En estos años se ha comenza-do a construir un tipo de Estadoautonómico, resolviendo de ma-nera democrática una demandaque amenazó con fisurar la unidaddel país.

En conjunto, fracturas y de-mandas que habían enfrentado alos bolivianos durante siglos, y quehabían subordinado al país a po-deres externos durante décadas, hansido resueltas mediante métodosdemocráticos y revolucionarios, te-jiendo la unidad soberana de la so-ciedad y la solidez del Estado.

También se derrotaron a lascastas políticas, ineptas, y corrup-tas que administraron un sistemade republicanismo-propietario quetanto daño le causaron al desarro-llo de nuestro país. Y por último,se triunfó sobre numerosas cons-piraciones económicas, políticas eincluso intentos separatistas de launidad territorial de nuestra Patria.

En este sentido, las divisiones

sociales de larga data y las más re-cientes, que paralizaron las ener-gías vitales de la sociedad bolivia-na, han venido siendo superadaspor el Proceso de Cambio que conla plurinacionalidad, la autonomíay la economía plural está tambiénlevantado un nuevo republicanis-mo del común1, comunitario, sus-tentado en la ampliación de la ri-queza colectiva de todos los bo-livianos.

Pero todos estos logros y es-tas victorias históricas no hubieransido posibles sin el movimiento as-cendente y envolvente de la uni-dad movilizada del pueblo. Hoy,después de una década de inten-sas batallas, de suturas de los abis-mos estructurales que separaban alpueblo boliviano, todos los traba-jadores del campo y la ciudad hanoptado por un único proyecto deEstado, economía y sociedad.

No se ve en el horizonte unmodelo alternativo de generacióny distribución de riqueza distinto alque el Gobierno lleva adelante: deeconomía plural con liderazgo es-tatal en los sectores estratégicos dela generación del excedente. Noexiste una propuesta alternativa ala de la plurinacionalidad descolo-nizadora que consolida una única na-

ción estatal en la que conviven múlti-ples naciones culturales y pueblos. Nose tiene otra opción de democrati-zación superior del Estado que nosea la del reconocimiento de múlti-ples formas plurales de democra-cia (directa, representativa, comu-nitaria) y de desconcentración terri-torial del poder a través de las au-tonomías.

Están sentadas las raíces y po-sibilidades históricas de un proce-so civilizatorio que a la larga tiendea diluir el Estado en la sociedad, enlo que se ha denominado la pers-pectiva socialista y comunitaria deun Estado integral.

Por eso, de manera categórica,sostenemos que ahora el pueblo estámás unido que hace años y décadasatrás en torno a un gran proyectosocietal. Pero esa unidad del pue-blo y estos logros de nuestra Re-volución Democrática y Cultural noimplican que las tensiones, las dife-rencias internas, las contradiccionesy las luchas hayan desaparecido. Alcontrario, siguen existiendo, e inclu-so a momentos se intensifican, perotodas ellas se dan en el marco derepresentaciones, horizontes y expec-tativas creadas por ese trípode so-cietal: Estado plurinacional, régimenautonómico, e industrialización de los

1 En su libro Commonwealth (2009), Negri y Hardt desarrollan el concepto del republicanismo moderno como «basado en la regla de lapropiedad y la inviolabilidad de los derechos de propiedad privados, que excluye o subordina a aquellos sin propiedad». Como conceptodominante éste se habría constituido en el «fundamento de cada constitución política moderna». En ese marco, la democracia de lamultitud de los pobres se presentaría como «una amenaza objetiva a [esa] república de la propiedad» porque podría desarrollar laspotencialidades del proyecto revolucionario republicano (igualdad, libertad) bloqueadas e invisibilizadas por ese concepto hegemónico,es decir, construir una «política de libertad, igualdad y democracia de la multitud», un republicanismo ya no fundado en la propiedad sinoen el libre acceso de todos a los comunes.

Page 13: Cuadernos marxistas Nº 04

13

recursos naturales en el contexto deuna economía plural. Este trípodees un horizonte de época, y es en suinterior que ahora emergen las lu-chas, las diferencias, las tensiones ycontradicciones.

Algunas contradicciones ante-riores se han desvanecido, otras hanbajado de tono dando lugar a unasnuevas y al reforzamiento de anti-guas que no tenían tanto protago-nismo como el actual. Se trata decontradicciones y tensiones que tie-nen dos características fundamen-tales. La primera, que a diferenciade lo que sucedía años atrás, nopropugnan un nuevo tipo de so-ciedad ni plantean un nuevo hori-zonte de Estado o economía, sinola ralentización o la radicalización delproceso pero en el marco del hori-zonte de época de la plurinacionalidad.

La segunda, que como soncontradicciones al interior de lostres principios ordenadores de larealidad y de las luchas por trans-formarla (plurinacionalidad, auto-nomía y economía plural), son tam-bién contradicciones al interior delamplio bloque popular que con-duce y sostiene el Proceso de Cam-bio. Incluso las fuerzas conserva-doras que intentan utilizarlas pararevitalizar su presencia, lo tienenque hacer con el lenguaje y el nor-te que delimita el horizonte de épocadominante.

En ese sentido, en términos delciclo largo de la época revolucio-naria iniciada el año 2000, el conte-nido y movimiento de estas con-tradicciones son propios de unanueva fase del proceso revolucionario, laquinta -que analizaremos en detalle,

claramente diferenciada de las con-tradicciones y luchas que caracteri-zan las fases anteriores.

Las fases del procesorevolucionario

Primera fase: Develamiento de lacrisis de Estado

La primera fase de esta épocarevolucionaria se inició con la «Gue-rra del agua». Si bien es cierto queaños antes hubo numerosos esfuer-zos de acumulación de fuerzas dedistintos sectores, la sublevación deabril del 2000 marcó una rupturacon todo el consenso pasivo que elneoliberalismo había construido en15 años. Aunque imparable hastaentonces, se detuvo el proceso deprivatización de los recursos públi-cos, en este caso no estatales: elagua. Como nunca antes había su-cedido, regionalmente se articuló enesta movilización un gran bloquesocial-popular urbano y rural entorno al movimiento campesino-indígena (regantes y productores dehoja de coca), que se convertiría enel precedente de la misma articula-ción, ahora a nivel nacional, de to-dos los sectores populares en tor-no a la candidatura del MAS en losaños 2005, 2009. Pero quizá lo másimportante para la continuidad deeste despertar fue saber que el régi-men neoliberal era débil, que se lopodía derrotar, lo que rápidamen-te dio lugar a un estado de ánimopopular desobediente a las ideasfuerza emanadas desde el poder ya una predisposición material de la

plebe a buscar su unificación y amovilizarse expansivamente.

A esta primera fase del ciclo re-volucionario la hemos denomina-do la del develamiento de la crisis deEstado porque los pilares de la do-minación estatal (institucionalidad,ideas fuerza de legitimación, y co-rrelación de fuerzas entre gobernan-tes y gobernados) comenzaron aresquebrajarse irreversiblemente. Esel momento del develamiento delas contradicciones de larga duraciónacumuladas durante siglos (Estadomonocultural contra sociedad plu-rinacional, Estado centralista enfren-tado a la apetencia descentralizado-ra de la sociedad) y de las contra-dicciones de corta duración (naciona-lización de las riquezas naturales con-tra privatización, monopolizaciónde la política contra democratiza-ción social).

Las sublevaciones de septiem-bre-octubre del 2000, en las que seprodujo el bloqueo nacional de ca-minos más largo de nuestra histo-ria (23 días) y las crecientes unifica-ciones sociales de los sectores po-pulares en torno a un conjunto pre-ciso de nuevas ideas fuerza movi-lizadoras que emergían de la pro-pia movilización social (asambleaconstituyente, nacionalización delos hidrocarburos), polarizaron te-rritorialmente el escenario de lasclases sociales en el país. El bloquedominante mantenía el poder, peroal frente tenía líneas internas y ex-ternas en las que las clases subal-ternas de la ciudad y el campo lecomenzaban a disputar el controlterritorial, ideológico y simbólicode la sociedad. Las ideas fuerza del

Page 14: Cuadernos marxistas Nº 04

14

neoliberalismo que atrajeron pasi-vamente a las clases populares, em-pezaban a deshilacharse acelerada-mente frente a otras que crecían enel imaginario colectivo. Cuando ellodio lugar a la constitución de unbloque social con capacidad demovilización territorial y con vo-luntad de poder, esto es, con vo-luntad material de disputar palmoa palmo el control y dirección dela sociedad, entramos en la segundafase de la oleada revolucionaria, ladel «empate catastrófico».

Segunda fase: el empate catastrófico

La cuestión no era simplemen-te que los de arriba no podían se-guir gobernando como antes ni quelos de abajo no querían seguir sien-do gobernados como antes. Lo quesucedió fue que los de abajo que-rían gobernarse, como nunca anteslo habían hecho, y esa sola determi-nación paralizó el orden estatal dedominación: dos bloques de podercon dos proyectos de poder, condos capacidades de presencia terri-torial y con liderazgos antagónicosse disputaban el orden estatal pa-ralizando hasta cierto punto la re-producción de la dominación.

Existía un empate entre ambosproyectos de sociedad y encima eracatastrófico por la irresolución dela unicidad conducente del poder.Esta segunda fase duró del 2003 al2008 y las contradicciones que sehicieron presentes enfrentaban an-tagónicamente e irreversiblementea dos proyectos de sociedad, deEstado y de economía, portado-

res de dos voluntades de poderirreconciliables.

Tercera fase: capacidad de movili-zación convertida en presenciaestatal gubernamental

La tercera fase de la época revo-lucionaria se presentó solapada a lasegunda y aconteció con la suble-vación política democrática de laselecciones que llevaron a la presi-dencia al primer presidente indíge-na y campesino de nuestra historia.

Era un atavismo colonial el queordenaba las razones vivenciales delmundo para las clases pudientes ylas clases subalternas: los indios es-taban destinados a ser campesinos,cargadores, sirvientes, albañiles y talvez obreros, fuera de ello, el uni-verso estaba vacío, no había mar-gen para otro curso de realizaciónsocial. De la misma manera, las éli-tes mestizas y adineradas habíansido educadas para mandar, dirigiry gobernar con una naturalidadcomo la que predice que el sol sal-drá cada 24 horas por el horizon-te. Resulta que este orden simbóli-co del universo de un día para elotro se hizo añicos, o peor aún, seinvirtió y los dominados, los hijosde mitayos, en contra de todo or-den y rigor de las cosas del mundovividas desde hace 500 años, lleva-ron a uno de los suyos, a un indio,campesino, trabajador, Aymara, ala presidencia de la República. Parala historia racializada del país, fuecomo si el cielo se hubiera caído,como si los acerados desprecios deinferiorización escalonada con los

que la sociedad colonial ordenó elmundo a partir de los colores depiel y apellidos, se convirtieran enpolvo ante la insolencia de un cam-pesino entrando al Palacio de Go-bierno.

Ese solo hecho ya es con mu-cho el acto más radical e imperdo-nable ante los ojos de los pudientes,que la plebe pudo hacer en toda suhistoria. Sucedió. Los subalternosdejaron de serlo, se hicieron en co-mún, presidentes, gobernantes, anteel horror de las miradas colonialesde aquellas estirpes que habían con-cebido el poder como una prolon-gación inorgánica de su sangre.

Esta insurrección del ordensimbólico de la sociedad que trajola pérdida del gobierno, más no aún delpoder por parte de las clases do-minantes, constituyó la tercera fase delproceso revolucionario que se ini-ció el 22 de enero del 2006 y quesacaría a luz, precisamente, la con-tradicción antagónica entre gobier-no controlado por las clases popu-lares y poder de Estado aún enmanos de las clases pudientes y susaliados extranjeros. Fue un despla-zamiento del antagonismo de losdos proyectos de sociedad al interiordel mismo Estado, y de las clases sociales enel Estado, ahí radica la novedad de lacontradicción antagónica.

Nos referimos claramente a unacoyuntura política de Estado, divi-dido entre gobierno controladopor los insurrectos, y poder de Es-tado (lógica y mando institucional)controlado por las clases económi-camente dominantes. En cierta for-ma es también una radicalización dela segunda fase del empate catastrófico,

Page 15: Cuadernos marxistas Nº 04

15

pero la novedad del desplazamien-to territorial y clasista de este «em-pate» que se inscribe en la propiainstitucionalidad dinámica del Es-tado, hace necesario tratarla comouna fase específica.

Cuarta fase: el punto de bifurcacióno momento jacobino de la revolución

La cuarta fase de la época revolu-cionaria es a la que llamamos en otrosartículos como el punto de bifurcación,y que en un sentido más poéticopodría denominarse también el mo-mento jacobino de la revolución.

Se trata del momento en quelos bloques antagónicos, los pro-yectos irreconciliables de sociedadque cubren territorialmente la so-ciedad y el Estado, deben dirimirsu existencia de manera abierta,desnuda, a través de la mediciónde fuerzas, la confrontación (el últi-mo recurso que resuelve las luchascuando no hay ya posibilidades deotra salida).

Eso fue lo que sucedió entreagosto y octubre del 2008.

Tras el fracasado intento de re-vocar al presidente Evo2, la oposi-ción de la derecha neoliberal de la«media luna», que tenía presencia

territorial no sólo en Santa Cruz,Beni, Pando, Tarija, sino también enLa Paz, Cochabamba y Sucre, optópor el golpe de Estado. Desde ini-cios de septiembre comenzaría aasumir el control real de las ciuda-des de esos departamentos impi-diendo la llegada de las autorida-des nacionales mediante el controlde los aeropuertos, hostigando alos mandos policiales y a partir del9 de septiembre, lanzándose a laocupación y destrucción violenta devarias instituciones del Estado bajomando nacional. En dos días, másde 72 instalaciones gubernamenta-les resultaron quemadas incluyendoel canal de televisión, la radio esta-tal, oficinas de la empresa de tele-comunicaciones, del Servicio deImpuestos Internos y del INRA.Grupos de choque armados sedesplazaron para controlar, o des-truir como en el caso de Tarija conel gasoducto que va al Brasil, lasredes de distribución de carburan-tes. Para coronar el golpe y con elánimo de escarmentar cualquier in-tento de resistencia popular, asesi-narán a una decena de dirigentescampesinos en la localidad de Por-venir, del departamento de Pando.

El Gobierno, que ya había pre-visto tiempo atrás que un tipo de

acción golpista podría darse porparte de la derecha, esperó a quelos golpistas desplegaran sus inicia-tivas que los deslegitimaron ante elpueblo y el mundo como fascistas,racistas y antidemocráticos. Sinembargo, ante la primera muertese respondió con contundencia,velocidad y fuerza masiva. Se tomómilitarmente Pando, el eslabón másdébil de la cadena del golpe, e in-mediatamente se puso en marchaun plan de movilización nacional ygeneral de todo el pueblo, con elapoyo de las Fuerzas Armadas,hacia los bastiones golpistas.

De todas partes del país, des-de las comunidades, ayllus, minas,fábricas y barrios, una estructura demovilización social se puso en mar-cha para defender la democracia yla revolución.

La violencia de los golpistashorrorizó al país entero. El Presi-dente, al ordenar la expulsión delembajador norteamericano3, losdejó sin estratega y puente inter-nacional. Los sectores que los apo-yaban, asustados, comenzaron aa-bandonar a sus líderes y al mismotiempo la comunidad internacio-nal al condenar el golpe los dejóaislados. Ante la inminente conver-gencia de multitudinarias fuerzas

2 El 10 de agosto de 2008, se llevó a cabo un Referéndum Revocatorio, en el que se decidió sobre la permanencia del Presidente EvoMorales, del Vicepresidente Álvaro García Linera y de ocho prefectos departamentales. El Presidente fue ratificado en su cargo con el67% de votación a su favor. También fueron ratificados los prefectos de Oruro, Potosí, Tarija, Santa Cruz, Pando y Beni, mientras quelos de La Paz y Cochabamba fueron revocados.

3 El 10 de septiembre de 2008, el Presidente Evo Morales declara públicamente al embajador de Estados Unidos en el país, PhilipGoldberg, persona no grata e instruye al Canciller David Choquehuanca realizar los trámites diplomáticos para su salida inmediata delpaís.

Page 16: Cuadernos marxistas Nº 04

16

sociales populares y Fuerzas Arma-das, los dirigentes golpistas tuvieronque capitular.

Se trató ciertamente de un hechode fuerza, de guerra social puntualen la que los «regimientos» de losbloques de poder en pugna se mi-dieron cara a cara para concurrir alcombate. En ese momento ya nocontaba el discurso sino el poten-cial de la fuerza, y a partir de esaevaluación y antes de la conflagra-ción, los golpistas prefirieron retro-ceder y rendirse. Ese fue el punto debifurcación, el encuentro de fuerzasque sobre el escenario del combatesocial dirimieron el control de po-der del Estado.

En esta cuarta fase las contradic-ciones llegaron a su epítome real, asu origen y punto de llegada obli-gatorio como materia estatal: alchoque de fuerzas materiales. Lafuerza es el Estado en su condiciónde organización desolada y arcaica,en «última instancia» si se quiere, yen esta fase, la contradicción anta-gónica por el control del poder es-tatal tendrá que realizarse y dirimir-se en base a la fuerza hasta aquí lo-grada, acumulada, convencida, perohecha fuerza desnuda y nada más.

Fruto de esa lucha desnuda defuerzas, o bien el poder era reto-mado por las antiguas clases do-minantes, o bien asumido por elnuevo bloque de poder emergen-te. No había puntos intermedios ni

posibilidad de mayor dualidad depoderes; era el momento de la con-sagración de la unicidad del poder.Por eso, punto de bifurcación.

La consensuada modificacióncongresal de la Constitución en oc-tubre del 2008 continuaría política-mente esta victoria militar y tras eldesbaratamiento del intento con-trarrevolucionario del separatismo ar-mado organizado por el grupo LaTorre y sus mercenarios contratadosen Europa, el bloque nacional-popu-lar quedaría consolidado en el podercon la victoria electoral del Presiden-te Evo en las elecciones del 20094.

Quinta fase del proceso revolucionario: laemergencia de las contradicciones creativas

Esta victoria cierra la cuarta faseo etapa de la época revolucionariay da inicio a la quinta que se caracte-rizará ya no por la presencia decontradicciones entre bloques depoder antagónicos, entre proyectosde sociedad irreconciliables comosucedía hasta aquí, sino que estarámarcada por la presencia de con-tradicciones al interior del bloquenacional-popular, es decir, por ten-siones entre los propios sectoresque protagonizan el Proceso deCambio, que se darán en torno acómo llevarlo adelante. Se trata portanto de contradicciones no simple-mente secundarias sino creativas por-

que tienen la potencialidad de ayu-dar a motorizar el curso de la pro-pia revolución. Cuando sucedeesto, estas tensiones devienen en fuer-zas productivas objetivas y subjetivas dela revolución.

En toda revolución existen ten-siones y contradicciones de dos ti-pos, en primer lugar están las fun-damentales y antagónicas, que es-cinden estructuralmente las socie-dades, y en segundo lugar, las decarácter secundario (aquellas que elPresidente chino Mao Tse Tung lla-maba contradicciones en el seno delpueblo) que son superables me-diante métodos democráticos y re-volucionarios.

A lo largo de la vida de los pue-blos y los Estados, las contradic-ciones fueron, son y serán las fuer-zas productivas de los cambios, lasfuerzas productivas de la revolución, elmotor de la historia de las socie-dades. En las contradicciones y ten-siones se develan los problemasque afligen a una colectividad, sevisibilizan las diferentes propuestasde solución de los problemas, y enlas conflictividades mismas, deve-ladas por esas contradicciones, esdonde la sociedad articula proyec-tos, alianzas y medios para solucio-narlas, parcial o plenamente. Ten-siones y contradicciones son portanto los mecanismos mediante loscuales se logran los cambios y seimpulsa el avance de una sociedad,

4 En diciembre de ese año, tras una nueva elección general, el Presidente Evo Morales obtendrá el 64% de la votación, 10% más de loque había obtenido cuatro años atrás.

Page 17: Cuadernos marxistas Nº 04

17

***Las principales tensiones creativas al interior del bloque popular que identificael autor son: La relación entre el Estado y los Movimientos sociales; La flexibilidadhegemónica frente a la firmeza del núcleo social; Los intereses generales frente aintereses particulares y privados; El socialismo comunitario del Vivir Bien. (N.E)

y forman parte indisoluble del cursodemocrático y revolucionario de lospueblos.

En Bolivia hubieron, existen y ha-brá distintos tipos de contradiccio-nes: fundamentales, principales, se-cundarias, antagónicas y no antagó-nicas. Un ejemplo de contradicciónfundamental y antagónica fue la que,entre los años 2000 y 2009, enfren-tó abiertamente al pueblo bolivia-no con sus enemigos: el imperio enalianza con terratenientes y secto-res de la burguesía intermediariaaferrados a un neoliberalismo y co-lonialismo depredador. Fue un tipode contradicción que tuvo que serresuelta a favor del pueblo median-te métodos revolucionarios.

En ese mismo periodo (2000–2009) se presentaron contradiccio-nes secundarias que fueron resuel-tas y superadas mediante los mé-todos democráticos de la persua-sión, el diálogo, la articulación y launificación de criterios. Estas ten-siones fueron las que enfrentaronel campo y la ciudad, a los trabaja-dores con el empresariado patrio-ta boliviano, a indígenas y no indí-

genas. Eran contradicciones secun-darias al interior del pueblo quepudieron ser resueltas mediante laconstrucción de alianzas y de acuer-dos sociales en torno a la nacionali-zación de los hidrocarburos, laampliación de los derechos colec-tivos y la igualdad de oportunida-des, que garantizaron la unidad denuestro país para derrotar a los ad-versarios fundamentales.

Hoy, en 2011, a un año de la ins-tauración de la construcción delEstado Plurinacional, también nosencontramos ante la presencia decontradicciones fundamentales,principales y secundarias. La con-tradicción fundamental antagónicasigue siendo la de la unidad delpueblo boliviano enfrentado al im-perialismo que se resiste a recono-cer nuestra soberanía y capacidadde autodeterminación en la cons-trucción de nuestro destino.

Las contradicciones principales semuestran en la lucha del puebloboliviano frente a los residuos frag-mentados del neoliberalismo, delgamonalismo regional, de la dere-cha mediatizada y del colonialismo,

que se oponen al Estado Plurina-cional, a la autonomía y a la indus-trialización.

Pero también surgen en esta nue-va etapa de la Revolución Demo-crática y Cultural -y es necesario quelo hagan- tensiones secundarias y noantagónicas al interior del bloquepopular revolucionario, en el senodel pueblo. Una de éstas tiene quever con el debate fructífero, demo-crático y creativo respecto a la ve-locidad y a la profundidad del Pro-ceso de Cambio.

Por ejemplo, hay algunos secto-res sociales que piden una mayorprofundización de la revoluciónmediante la nacionalización de unaparte de la minería privada, en tan-to que otros sectores obreros mi-neros, consideran que eso no esnecesario.

Esas tensiones y contradiccionessecundarias, con las que tenemos queconvivir, son parte de la dialécticadel avance de nuestro proceso re-volucionario y lo alimentan porqueson la fuente fundamental del desa-rrollo, del debate al interior del pue-blo y de la transformación social.***

Page 18: Cuadernos marxistas Nº 04

18

por Jorge Alberto Kreyness*

EL IMPERIALISMO HOY I

Crisis y agresividad

El capitalismo global másconcentrado, hegemoniza-do por el gran complejo

financiero-militar-industrial glo-bal asentado principalmente enlos EEUU, ha ingresado en unaprofunda crisis que lo afecta sen-siblemente.

Los abusos del «libre comer-cio» cometidos desde los mecanis-mos de especulación financiera e in-mobiliaria, que habían pasado a serel motor principal del desenvolvi-miento capitalista, han derivado enun desajuste general de la cadenade negocios y, a esta altura, de todala economía en un sentido más ge-neral, dejando al desnudo la crisismás severa del capitalismo desdeaquella otra de 1930.

Si entendemos que el régimendel capital, aun en su deterioro,continúa determinando el senti-do principal de los acontecimien-tos internacionales, deberemostener en cuenta estos desbalancesa la hora de pasar revista a cadauno de los aspectos de la situacióndel mundo.

Es evidente que la hegemoníadel gran capital por la vía del ma-yor desarrollo industrial y aun desu capacidad financiera se debilita.La demanda de productos se re-duce y el crédito se encarece cadavez más.

El proceso de centralización yconcentración del capital se agudi-za y el peso de los circunstancialesganadores de la puja inter-mono-pólica cae en círculos concéntricos,como una piedra arrojada al aguaserena, en contra de un amplio es-pectro que va desde los monopo-lios «perdedores» hasta el más hu-milde de los indigentes de la Tie-rra. La onda expansiva conmocio-na en el centro y deja poco o nadaa los que se ubican en las periferias.

El ciclo político iniciado con lacaída del «socialismo real» europeoy el auge neoliberal se va agotandoo al menos transformando, dejan-do paso a una nueva realidad difí-cil de describir por el alto grado deincertidumbre que la caracteriza,pero que ya no es la de la expan-sión capitalista, ni la del absolutodominio unipolar de los EEUU.

La reacción de los círculos depoder de Washington y la OTANante la situación que enfrentan esuna fuerte y decidida opción por elmilitarismo y la guerra, cada vez másintensa, al tiempo que se imponenajustes antipopulares en las econo-mías de los países capitalistas cen-trales y semi-centrales que dan portierra con el «estado de bienestar» queidentificaba a casi todos ellos, im-poniendo una gigantesca transferen-cia de recursos desde los trabaja-

dores y sectores populares hacia elrescate de un privilegiado grupo delos monopolios financieros para sa-carlos del pantano de la quiebra.1

Se producen entonces dos fe-nómenos: al tiempo que se desplie-gan guerras, flotas, bases y tropaspor todas partes y se destinan mi-llonadas para salvar a los super ban-cos globales, caen los empleos, lossalarios y viejos derechos socialesadquiridos, como subsidios, jubi-laciones y otros logros históricos delsector obrero y popular.

Como contracara la vieja, sen-cilla, y hoy cada vez más revolu-cionaria consigna de «Paz, pan y tra-bajo» vuelve a cobrar vigencia.

El militarismo y la guerra

«…los países de hoy con problemaspiden el tipo de administración extranje-ra iluminada que en otros tiempos sumi-nistraron los…ingleses…» Max Boot,Miembro Senior del Consejo de Relacio-nes Exteriores (Council of Foreign Rela-tions) de los EEUU. Editor de The WallStreet Journal.

La avanzada militarista se asien-ta en que desde hace tiempo Was-hington ha hecho de su poderíobélico el factor diferencial que loubicaba como única superpotenciaglobal2. Y hoy a ese factor debe

* Periodista. Analista de Política Internacional. Secretario de Relaciones Internacionales del Partido Comunista de la Argentina.1 Al respecto recomiendo el libro de Walter Formento y Gabriel Merino Crisis financiera global Peña Lillo, Ediciones Continente, 2011.2 Actualmente el gasto militar global de EEUU es más impresionante que nunca. Bajo el Presidente Obama -cuya administración ha

propuesto recortar unos pocos y costosos sistemas anticuados de armamento-, Estados Unidos gastará más de $500 billones de dólaresal año para financiar sus fuerzas armadas y mantener su «Baseworld» (Mundo de Bases). Así llama el autor y analista de política exterior

Page 19: Cuadernos marxistas Nº 04

19

sumarse el dato de que, en mediodel desbarajuste general que afectaa toda la Unión , es sólo su aparatomilitar lo que queda sólido y mejorconstituido, reforzando su podertanto en la definición de la políticaexterior como engrosando su pesoespecífico en el control del ordeninterno. El Pentágono, por tanto,pasa a ocupar un papel central enla vida política de los EEUU comopunta de lanza del complejo finan-ciero-industrial-militar global.

A su despliegue militar poste-rior a la Segunda Guerra y duranteel período de la guerra fría, ha su-mado la ocupación de Irak y Afga-nistán e instalado escudos «anti-mi-siles» en el centro-este de Europa y otras regiones. Ante sus bajas no-tas militares en Irak y Afganistán per-feccionan ahora sus métodos ini-ciando las agresiones a Libia, yaconsumada, y a Siria, en curso a lafecha de escribir estas líneas.

El nuevo modelo táctico con-siste en generar primero conflictosde baja intensidad mediante parti-

cipación de mercenarios y otrosagentes, para buscar luego alianzasinternacionales que faciliten «legiti-mar» los bombardeos y posteriorocupación de los territorios conrecursos o calidades estratégicos. Elobjetivo principal que el imperia-lismo se propone hoy día es Irán,país contra el cual hoy se desarro-llan intensos movimientos agresi-vos3, que también ocurren en lascercanías de la península coreana y,no debemos descuidarnos, tambiénen América Latina.

Es que en nuestra región elneoliberalismo y su crisis, y el intentode volcarla sobre los trabajadores ylos pueblos, han generado resisten-cias populares con diversas hegemo-nías ideológicas que devinieron en go-biernos que en mayor o menor me-dida las representan y que resultan li-mitantes al poder global imperialista.Por ello despliegan ahora una estra-tegia «inter-agencial» que intenta re-ordenar todos los instrumentos desu poder para una guerra de domi-nación integral que incluye la comu-

nicación, la economía y especialmen-te la imposición de la fuerza parasostener su dominio sea por el con-senso o por el peso de las armas.

La República Islámica de Irán,la República Democrática Popularde Corea, la República Bolivarianade Venezuela y Cuba socialista sonlos blancos preferenciales de sus ata-ques. Pero en verdad las apetenciasimperiales incluyen respectivamen-te las riquezas de todo el MedioOriente y el Asia Central, una ame-naza a China y Rusia, y el intento derecuperar terreno perdido en suviejo «patio trasero»: América Lati-na y el Caribe, incluyendo las IslasMalvinas argentinas y el Atlántico Sur,sin excluir al continente africano.

Cuentan con un poder misilís-tico y de destrucción nuclear queninguna nación o alianza de nacio-nes podría igualar. Domina losmares y puede alcanzar por vía aé-rea cualquier lugar del mundo enmenos de 24 hs. Y en estos díasaprovecha al máximo sus aliadosen las regiones, como Israel, los

Chalmers Johnson a la extendida red de campamentos que el país tiene en el extranjero. Oficialmente Estados Unidos cuenta con 737bases en todo el mundo, con un valor total de $127 mil millones de dólares y que cubren casi 2 800 kilómetros cuadrados en unos 130países. Hace muchos años, se podía seguir la extensión del imperialismo contando las colonias», escribió Johnson en su libro Némesis: losúltimos días de la república norteamericana, de 2007. La versión norteamericana de la colonia es la base militar. Johnson explica: «El propósitode todas esas bases es la ‘proyección de fuerza’, o mantener la hegemonía militar norteamericana sobre el resto del mundo. Ellas facilitannuestra ‘labor policial’ del globo y la intención es garantizar que ninguna otra nación, amistosa u hostil, puede retarnos militarmente».Desde el fin de la Guerra Fría, poseer tal poder incontestado es un basamento declarado de la política de defensa de EEUU. Mark Engler,analista de Foreign Policy In Focus, es el autor de Cómo dominar al mundo: la batalla que se acerca por la economía global (NationBooks, 2008). Se le puede contactar por medio del sitio web http://www.DemocracyUprising.com

3 http://www.portalplanetasedna.com.ar/ataque_iran.htm

Page 20: Cuadernos marxistas Nº 04

20

países monárquicos del Consejo deCooperación del Golfo, Corea delSur-Japón y Colombia-Panamá-Costa Rica, o sus ya mencionadasfuerzas invasoras, para utilizarlascomo bases de aproximación alservicio de sus objetivos.

Todo este despliegue militar,tomado como una de sus princi-pales cartas de salvación4, genera asu vez un fuerte gasto militar en me-dio de una economía en crisis, lo cuales verdaderamente peligroso paralas cuentas públicas y la solidez deun sistema. Pero ese gasto parece serel alimento de quienes hoy tomanlas verdaderas decisiones en Was-hington: los bancos globales y el Pen-tágono con sus representantes en elCongreso y la Casa Blanca y en lospartidos demócrata y republicano.

Aun así, hay quienes señalan quelos EEUU no pudieron, despuésde muchos años y por diversas ra-zones, terminar victoriosamente lasguerras de Irak y Afganistán a pe-sar de haber anunciado su final envarias ocasiones5. Podríamos ensa-yar nosotros que el asunto no esnecesariamente «ganar» esas guerrassino sostenerlas en el tiempo paracapitalizar la rentabilidad de los gas-tos militares en favor de las corpo-raciones. Es posible pensar en unacombinación de ambas cosas.

El fin del Estado de Bienestar

El ajuste que ha lanzado en lospaíses centrales a un plazo de cincoaños, en el mejor de los casos, im-plicará por ejemplo la pérdida gra-dual de 1.300.000 puestos de tra-bajo, públicos y privados en el Rei-no Unido, aseguraba el diario TheGuardian. Ese plan ya está en ple-no desarrollo. Ya llegan a casi 17millones los desocupados en la de-nominada Eurozona, y sólo enEnero de 2012 perdieron sus em-pleos 185.000 trabajadores6.

Las cajas de jubilaciones y pen-siones pasan a ser también territo-rios a ocupar por la voracidad delos monopolios. Los problemas fi-nancieros y de déficit acarreadospor la crisis económica global se-rán afrontados por la ComisiónEuropea (CE), entre otros aspec-tos, mediante la aceleración de lareforma de los sistemas de previ-sión social.

La CE advirtió que la edad mí-nima de jubilación en los paísesmiembros de la Unión Europea(UE) podría incrementarse progre-sivamente hasta llegar a los 70 añospara evitar más recortes en las pen-siones, según reportó Prensa Lati-na. Ya se actúa en esa dirección.7

La reforma jubilatoria deberá

enfrentar sus consecuencias sobreel aumento del desempleo, pues amayor cantidad de jubilados, ma-yores posibilidades de empleos, ymientras hayan menos, menos pla-zas quedaran vacantes para quienesaun no tienen trabajo.

Otras fuentes indican que hastala fecha, hay unos 24,5 millones dedesempleados en la UE, de los cua-les más de 19 millones se encuen-tran en la llamada Eurozona.8

Cuando la canciller alemanaAngela Merkel presentó el presu-puesto para 2011, manifestó que setrataba de la primera fase de unplan con el que quiere ahorrar másde 80 mil millones de euros desdeese momento a 2014, el más durodesde la Segunda Guerra Mundial,informó AFP.

Para ello modificó la política desubsidios a desempleados y per-sonas con derecho a ayuda para elalojamiento, y redujo los subsidiospor hijos. Además, pretende elimi-nar entre 10 mil y 15 mil empleospúblicos.

Entretanto, fuera de la zona euro,el primer ministro británico, el con-servador David Cameron, dijo quelos problemas presupuestarios de supaís son aún peores de lo que habíaadelantado, aunque no tan gravescomo en Grecia. Pobre consuelo.

4 http://www.antena3.com/noticias/mundo/obama-defiende-superioridad-militar-eeuu-pero-efectuara-recortes-ejercito_2015 http://internacional.elpais.com/internacional/2010/08/02/actualidad/1280700006_850215.html6 http://www.jornada.unam.mx/2012/03/02/politica/003n1pol7 http://www.elblogsalmon.com/mundo-laboral/la-edad-de-jubilacion-se-alarga-en-toda-europa8 http://www.finanzas.com/noticias/economia/2012-03-01/670358_paro-eurozona-marca-enero-nivel.html

Page 21: Cuadernos marxistas Nº 04

21

Según Notimex, Cameron in-dicó que su gobierno prepara re-cortes dolorosos en el gasto públi-co para intentar atajar el crecientedéficit público que en 2011 fue de156 mil millones de libras esterli-nas, más de 226 mil millones dedólares.

«Las decisiones que tomemosafectarán a todas y cada una de laspersonas en este país. Y sus efectosdurarán años, tal vez décadas», de-claró Cameron, dos semanas antesde presentar al Parlamento un pre-supuesto de emergencia, que impli-cará inevitablemente decisiones di-fíciles en grandes áreas de gastos,como el pago de pensiones y be-neficios.

«A menos que actuemos aho-ra, los pagos de los intereses den-tro de cinco años pueden terminarsiendo más altos que la suma gas-tada en escuelas, lucha contra elcambio climático y transporte jun-tos», indicó.

Jean-Claude Paye9 acaba de se-ñalar en su trabajo Crisis del Euro,Crisis de la Unión Europea, que «Le-jos de ser resultado de la acción dela ‘invisible mano del mercado’, lacrisis del euro es fruto de una es-trategia pacientemente preparadapor Christina Romer1y el Comitéde Consejeros Económicos de laCasa Blanca. El objetivo es salvar

la economía estadounidense obli-gando a los capitales europeos acruzar el Atlántico en busca de pro-tección y poniendo en definitivabajo control estadounidense la eco-nomía de los Estados de la euro-zona, a través del FMI y de la pro-pia Unión Europea».

Allí se ve en Grecia, tomandoel timón del país, a una llamadatroika integrada por el FMI, el Ban-co Mundial y el Banco Central Eu-ropeo que reemplaza con todo des-caro al gobierno socialdemócrataque desacatan después de imponerlelos ajustes, e instalando al frente delejecutivo a los hombres de la superfinanciera global Goldman Sachs.Algo similar con las lógicas diferen-cias sucede en Italia.

Las consideraciones de Payepueden explicar porqué la UE aca-ta sin hesitar la orden de Washing-ton de cesar la compra de petróleoa Irán aun cuando ello perjudicará,a no dudarlo, las ya desvencijadaseconomías europeas, que deberáncomprar en adelante ese insumoclave en otros mercados y segura-mente a mayor precio.

Se trata sólo de algunos datosindicativos de la dimensión de lacrisis, del sentido antipopular de losajustes en los países centrales y delavance del proceso de centraliza-ción y concentración del capital. No

es de descartar que los trabajado-res de Alemania y Francia comien-cen a sufrir de más en más las pe-nurias que ya padecen los de Gre-cia, España, Portugal, Irlanda, Italiay otros11.

Lamentablemente los trabaja-dores y pueblos de Europa, EEUUy Japón, y sus organizaciones, se en-cuentran en difíciles condicionespara enfrentar esos planes, por lasideas subestimatorias de la crisiscapitalista, prevalecientes entre losdirigentes de la mayoría de ellas,visiones que les han impedido unaprevisión adecuada de estos fenó-menos, y por lo tanto aun hoy noatinan, salvo excepciones, a tomarlas medidas de lucha que las circuns-tancias demandan. Pero es de pre-ver que nuevas demandas, luchas,huelgas y movilizaciones, tal vez connuevas formas y nuevos actores, sedesplieguen en adelante.

Varios Frentes

Mientras tanto, los EEUU des-pliegan sus fuerzas militares en losmares del extremo oriente con elpretexto del armamentismo nuclearnorcoreano. Impresionantes ejerci-cios navales se realizan en las costascoreanas implicando una amenazaal este de Rusia y a la República

9 Jean Claude Paye Sociólogo belga. Últimas obras publicadas: Global War on Liberty, Telos Press, 2007; El Final Del Estado De Derecho:La Lucha Antiterrorista: Del Estado De Excepción A La Dictadura, Argitaletxea Hiru, 2008

10 Jefa del Comité de Asesores Económicos de la Administración Obama.11 http://economy.blogs.ie.edu/archives/2010/02/portugal-italia-irlanda-grecia-y-espana-piigs-no-tienen-un-banco-central-que-los-

pueda-rescatar.php

Page 22: Cuadernos marxistas Nº 04

22

Popular China, país este últimocuyo nivel de desarrollo constituyeuna alternativa que afecta los sórdi-dos y mezquinos intereses del co-mando estadounidense.

Fidel Castro se ha encargadode denunciar los desplazamientosnavales de EEUU e Israel que sedirigen contra Irán también con elargumento del supuesto armamen-tismo nuclear de la República Islá-mica. Al respecto, cabe recordar queBrasil y Turquía suscribieron en sumomento con Teherán un acuerdopara el tratamiento pacífico del en-riquecimiento de uranio iraní, peroEEUU y la UE decidieron sancio-nes que hicieron estallar tal conve-nio. Ese acuerdo, aunque frustrado,es demostrativo de que en el mun-do existe una fuerte tendencia alsurgimiento de nuevos sujetos depeso en la política internacional queponen en cuestión la unipolaridadyanqui de las últimas décadas. Lomismo puede decirse del veto chi-no-ruso a la resolución contra Siriaque los EEUU y sus aliados pro-pusieron en el Consejo de Seguri-dad de la ONU.

Todo ello impulsa a tener encuenta la emergencia de nuevos

polos de poder económico y polí-tico a nivel global y debe llevarnosa reflexionar acerca de la necesidadde desarrollar un proceso de cons-trucción de nuevos sujetos interna-cionales, seguramente regionales,indispensables para ejercer contra-pesos al poder del gran capital glo-bal, como comienzan a ser UNA-SUR-CELAC y la Organización deCooperación de Shanghai.

En América Latina y el Caribeel centro de las operaciones del Pen-tágono es Colombia, donde se haninstalado siete nuevas bases de losEEUU. La gestión de Uribe con elPlan Colombia y el Plan Patriota hatransformado a ese país en el Israelde América del Sur y ahora se agre-gan nuevos dispositivos en CostaRica12 y Panamá, además de los exis-tentes en Aruba y Curazao, colo-nias de Holanda.

El gobierno argentino de laPresidenta Cristina Fernández deKirchner acaba de denunciar la mi-litarización del Atlántico Sur porparte del Reino Unido, pero en ladisputa entre Buenos Aires y Lon-dres poca difusión se dio al recha-zo de esa denuncia por parte de losEEUU, que pide diálogo entre las

partes en el conflicto de Malvinaspero que respalda la presencia ar-mada británica en esos mares.13

Todo «está bien», pero no se admi-te que se cuestione la superioridadmilitar de los EEUU y la OTAN. Yen el Atlántico Sur corresponde unpapel prominente al Reino Unido.

A todas luces, los EEUU des-pliegan un esfuerzo por sosteneruna unipolaridad desfalleciente enlo económico y en lo político y encierto modo también en lo cultu-ral, aunque no debe despreciarse lapotencialidad negativa del podercomunicacional con que cuenta elimperio.

Algunos teóricos ven, junto aldeterioro de la unipolaridad yan-qui, la posibilidad de un caos antela falta de un futuro poder rectorde los asuntos globales. En primerlugar cabe señalar que tal derrum-be en caso de producirse debe ima-ginarse como una transición cuyavelocidad es difícil de determinar,por lo que, reiteramos, es válidopensar en la posibilidad, necesidady pertinenecia de impulsar y poten-ciar, junto a la lucha de los pueblospor paz, pan y trabajo, la emergen-cia de nuevos sujetos de la política

12 El pasado 1º de julio el Congreso de Costa Rica autorizó la llegada de 46 buques de guerra y 7 mil tropas estadounidenses a las costascostarricenses para realizar operaciones militares, misiones antinarcóticos y supuestas acciones humanitarias en la región. Según la prensacostarricense, la mayoría de las naves de guerra son fragatas con una longitud de 135 metros, con capacidad para transportar doshelicópteros artillados SH-60 o HH-60B–Blackhawks, además de 200 marines y 15 oficiales en cada uno. Pero otras naves y portaavio-nes, como el USS Making Island, tienen la capacidad para transportar a 102 oficiales y casi 1500 tropas, y están artillados y preparadospara el combate intensivo. Pueden transportar 42 helicópteros CH-46, cinco aviones de combate duro AV-8B Harrier y seis helicópterosBlackhawk. También se ha autorizado la entrada de submarinos de combate, naves tipo catamarán, un buque hospital y vehículos dereconocimiento y combate con la capacidad de movimiento tanto por mar como por tierra. Podrá ingresar a Costa Rica el buque USSFreedom, con la capacidad para combatir a submarinos. El acuerdo incluye inmunidad para los efectivos yanquis.

13 http://m24digital.com/2012/02/15/a-estados-unidos-no-le-preocupa-la-militarizacion-del-atlantico-sur/

Page 23: Cuadernos marxistas Nº 04

23

14 Historiador británico especializado en relaciones internacionales.15 ver Crisis socavará influencia mundial. Análisis de Jim Lobe.ipsnoticias.net/nota.asp.idnews=89903.

internacional, como la UNASUR, laCELAC o la Organización de Co-operación de Shanghai, o los acuer-dos parciales BRICS, de que for-man parte Rusia, China, India, Su-dáfrica, Brasil, y otros.

Mientras tanto, reaparece la fi-gura marcada hace tiempo porPaul Kennedy14: la «sobre-extensiónestratégica». Este autor británico se-ñaló que los imperios caen cuan-do pretenden abarcar más podery más territorios de los que pue-den controlar.

Unipolaridad, sobre-exten-sión y alternativas

Vale reflexionar entonces acer-ca de la relación existente entre elcrecimiento expansivo del esfuer-zo militar de los EEUU, cada vezmenos acompañado por sus alia-dos, y sus problemas internos, es-pecialmente en los terrenos econó-micos y financieros por un lado ylos políticos y sociales por el otro15.Ya se notan impulsos hacia el trata-miento represivo al interior de losEEUU, como es el caso de la si-tuación de los migrantes en Arizo-na y otros estados, así como la atri-bución que se toma el gobierno deintervenir teléfonos, corresponden-cia, etc, de todos sus ciudadanos.

La sobre-extensión militar sinsustento interno abre todo un te-

rreno de riesgos a la estabilidad enlos EEUU y el mundo, que mues-tra como verdaderamente irrespon-sables las acciones que hoy se estándesplegando desde las esferas delpoder central.

Tal cuadro lleva a no descartarque algunos, aun más irresponsa-bles que la media de Washington,estén pensando en una «soluciónfinal» poniendo incluso el sostén deldominio unipolar por encima delos mínimos principios de super-vivencia de la Humanidad. Nos re-ferimos a las fuertes tendenciasneofascistas que brotan en los paí-ses capitalistas centrales e Israel, quese ponen a la vanguardia hoy, porejemplo, en el plan de ataque nu-clear contra Irán.

Entonces Paz, Pan y Trabajoson lemas que deben unirse inexo-rablemente en las conciencias de la

Humanidad y ello involucra unacontraofensiva popular en deman-da de todos los derechos, contratodas las discriminaciones, contratodas las exclusiones, en todas par-tes del mundo. Estamos obligadosa acelerar los pasos de construcciónde todo lo alternativo al nuevo im-perialismo pretoriano con unaamplitud de criterios, de objeti-vos y de alianzas que respondaestrictamente a las necesidades dela hora.

Las batallas locales y parciales yun internacionalismo que no des-crea de la posibilidad de infligirderrotas al imperialismo y no aban-done la lucha por nuevas revolu-ciones populares, pueden unificar-se, dejando de lado antinomias ab-surdas y líneas divisorias que no sonlas que la situación de hoy nos estáreclamando.

Page 24: Cuadernos marxistas Nº 04

24

por Plinio Arruda Sampaio Jr.**

EL IMPERIALISMO HOY II

Crisis y Barbarie*

La crisis financiera que explotó con la intensidad de unhuracán tropical en la segun-

da mitad de 2008, generó un esta-do de absoluta incertidumbre conrelación al futuro del orden global.La desconfianza en la solidez de las

instituciones financieras, provocadapor la quiebra en cadena de ban-cos que hasta entonces parecían in-quebrantables, desencadenó una vi-rulenta crisis de confianza que des-organizó rápidamente las relacionesde producción y circulación que

sustentaban la expansión de la eco-nomía mundial. Al exponer la ex-traordinaria fragilidad del sistemamonetario internacional y los pre-carios fundamentos que sustentanla globalización de los negocios, lacrisis echó por tierra los paráme-

* Artículo publicado originalmente en Critica Marxista N°29. Campinas, SP. Brasil. Traducción de Emilia Segotta.** Profesor del Instituto de Economía -UNICAMP- Universidad de Campinas

Page 25: Cuadernos marxistas Nº 04

25

tros indicadores que balizaban loscálculos económicos, dejando al sis-tema capitalista bajo la amenaza deuna depresión sin precedentes. Larapidez y virulencia con que losproblemas financieros se transfor-man en problemas económicospropiamente dichos, patentizadosen las dificultades ciclópeas queamenazan la sobrevivencia de lasmayores corporaciones industria-les y comerciales del planeta, y enla expansión exponencial del des-empleo en todo el mundo, revelanla gravedad de los desafíos que de-ben enfrentarse.

La especificidad de la crisiseconómica mundial está dada porel proceso de liberalización que en-cubrió las restricciones instituciona-les que, en los primeros años de laposguerra, habían establecido cier-tos límites a la actuación del capitalfinanciero. Al llevar al paroxismola libertad de movimiento de loscapitales y la desregulación de losmercados, el proceso de liberali-zación liderado por los EstadosUnidos, bajo la batuta de los or-ganismos financieros internaciona-les, creó las condiciones ideales parael pleno desarrollo de la especula-ción financiera, mercantil y produc-tiva a escala global. El resultado eraprevisible. La valorización del ca-pital ficticio se despegó por com-pleto de la valorización producti-va y la acumulación productiva sedesvió por completo de la capa-cidad de consumo de la sociedad.En pocas palabras, la juerga espe-culativa se transformó en una clá-sica crisis de superproducción, cuyasolución demandará una brutal li-

quidación de capital productivo,comercial y financiero, con todo loque eso implica: destrucción de lasfuerzas productivas, cierre de em-presas, nueva ronda de concentra-ción y centralización de capitales,escalada de desempleo, aumentode la pobreza y de la desigualdadsocial, crisis social e inestabilidadpolítica.

La especificidad de la crisis

La crisis en curso no es un fe-nómeno aleatorio, que podría ha-berse evitado con políticas econó-micas adecuadas, y si, una conse-cuencia ineluctable del propio de-sarrollo capitalista. Con relación alas innumerables turbulencias quemarcaron la alterada trayectoria delas finanzas internacionales desde elinicio del movimiento de liberali-zación, a comienzos de la décadade 1980, hay por lo menos doscambios significativos en el carác-ter de los problemas económicosactuales. Ambos convergen para laconfiguración de una crisis generaldel capitalismo, un fenómeno es-tructural que tendrá repercusionesde largo alcance sobre las relacio-nes sociales y los nexos internacio-nales y trasnacionales que confor-man el sistema capitalista mundial.

En primer lugar, la profundi-dad y la extensión de los desequili-brios económicos y financieros quenecesitan ser digeridos superan a losde las crisis anteriores en todas susdimensiones y por sus efectos so-bre el conjunto de la economíamundial, solo son comparables his-

tóricamente a la hecatombe quedesarticuló la división internacionaldel trabajo y el sistema monetariointernacional en la década de 1930.Como todos los espacios econó-micos internacionales se encuentranfuertemente interconectados y es-trechamente dependientes de lo queocurre en la economía norteameri-cana, no hay como contener el pro-ceso de diseminación de la crisis sinsubvertir los propios fundamentosde carácter liberal de orden eco-nómico internacional montado enlas últimas cuatro décadas sobre lasbases del sistema de Bretton Wo-ods, o que, salvo una manifestacióninesperada de los acontecimientos,parece bien poco probable por elmomento.

En segundo, la impotencia delpoder político para lidiar con la si-tuación no permite que se vislum-bre una solución rápida e indolorapara el impasse de la economíamundial. La superación de los obs-táculos a la acumulación del capitalexige una acción coordinada, decarácter trasnacional, comprome-tiendo todas las dimensiones delproceso económico –o financiero,o monetario, o comercial y/o pro-ductivo–, cuya posibilidad de con-cretización, retórica aparte, parecetotalmente irrazonable. El Estadonorteamericano, que debería lide-rar ese proceso, se ha revelado im-potente para enfrentar el desafío yno existe la menor posibilidad deque alguna otra potencia imperialis-ta venga a ocupar ese vacío. En esecontexto, lo más probable es que elmundo quede a remolque de la pre-potencia y del provincianismo del

Page 26: Cuadernos marxistas Nº 04

26

imperialismo norteamericano, sinun plan estratégico para enfrentarlas dificultades que inmovilizan elfuncionamiento de la economíamundial.

Se engañan quienes imaginanque la actuación conjunta de losgobiernos de los países desarrolla-dos para salvar los bancos y el em-pleo de técnicas anticíclicas de ele-vación del gasto público sean indi-cios efectivos de que el poder pú-blico ha demostrado capacidadpara enfrentar la crisis. La supera-ción de la crisis requiere transfor-maciones de gran envergadura enlas fuerzas productivas, en las rela-ciones entre el capital y el trabajo,en la estructura técnica y financieradel capital, en la forma de organi-zación del Estado y en el equili-brio económico y político entre lospaíses que componen el sistemacapitalista mundial, cambios quevan más allá de los paquetes deauxilio financiero y económico adhoc, que vienen siendo anunciadosunos tras otros por las autoridadeseconómicas. Hasta el momento, laspotencias imperialistas han tenidoactuación estrictamente reactiva,siempre atrás de los acontecimien-tos, comandadas por la histeria des-esperada de los «mercados» –res-pondiendo a los intereses del capi-tal financiero–, sin osar enfrentar laesencia del problema: la gigantescacrisis de superproducción provo-cada por el proceso de acumula-ción de capital y la absoluta falta decontrol público sobre el accionardel capital financiero.

No hay ningún indicio de quese pretenda contener el big business.

Muy por el contrario. Los aparatosideológicos del gran capital han sidoinequívocos en la advertencia deque no se puede utilizar el «pretex-to» de la crisis para revertir el mo-vimiento de liberalización económi-ca de las últimas décadas.

No es imposible que el esfuer-zo para «administrar» la crisis, san-cionando las presiones de socorroeconómico y financiero de los gran-des grupos económicos internacio-nales, evite el desmoronamientoespectacular de los mercados, dan-do a muchos la impresión de quelos problemas generados por laparálisis de la economía mundialpodrán ser rodeados sin mayorestraumatismos. Es la apuesta de to-dos los segmentos comprometidoscon el orden global. Entre tanto, lomás probable es que, dada la im-potencia de los gobiernos para en-frentar el origen del problema, eldesenvolvimiento de la crisis searrastre por tiempo indefinido, al-ternando momentos de pánico con

momentos de relativo alivio, en unalenta digestión del capital ficticio yproductivo sobre-acumulado. Másallá de la propaganda, el hecho con-creto es que la economía mundialesta a leguas de cualquier tipo deacción «reguladora», capaz de im-poner límites a la anarquía de la ini-ciativa privada y contener el carác-ter ultra-agresivo del patrón de acu-mulación liderado por las finanzasinternacionales, causas fundamenta-les de los problemas que paralizana la economía mundial.

La imposibilidad de volvera Keynes

Los que confunden la seudo-estatización del sistema financieroen curso con la vuelta de la regula-ción de tipo keynesiano toman a lanube por Juno. No es el Estado queestá imponiendo límites al capital,sino que es el capital financiero queestá profundizando aun más la con-quista del estado. Bajo el pretextode evitar una crisis sistémica de efec-tos potenciales catastróficos, lapolítica económica está promovien-do el mayor ataque a la economíapopular de que se tenga noticia enla historia. Bajo la avasalladora pre-sión de los mayores grupos eco-nómicos del planeta, los recursosque hasta entonces faltaban para fi-nanciar las políticas públicas ahorasobran para socorrer a los bancosy a las grandes corporaciones que-bradas, sin que nada garantice, dí-gase de paso, que el cataclismo seaevitado. Para aquilatar la magnitudde la riqueza transferida al sector

Page 27: Cuadernos marxistas Nº 04

27

privado, baste recordar que, segúnlos cálculos de la Cepal, hasta finesde octubre de 2008 los mayoresgrupos financieros del mundo yahabían recibido, bajo la forma deinyección de liquidez y paquetes derecuperación financiera, un montode recursos públicos equivalente acasi 7 mil billones de dólares -valorigual a casi dos veces el PBI anualde América Latina, más de cuatroveces el PIB anual de Brasil1.

Para evitar el equívoco de ima-ginar que la fuerte intervención delestado representa un abandono delneoliberalismo, es importante recor-dar que el socorro al gran capitalno representa en sí una novedad enel patrón de política económica,pues todas las crisis financieras delas últimas décadas fueron enfren-tadas por la línea de menor resis-tencia, con escandalosas operacio-nes de «bail out» que cubrían losquebrantos de las grandes corpo-raciones y sancionaban la calesitaespeculativa.2 En realidad, la desre-gulación de los mercados y la so-cialización de los daños constituyenmomentos distintos de un mismopatrón ultra-regresivo de interven-ción del Estado en la economía. Lanovedad de las medidas que estánsiendo adoptadas para enfrentar lacrisis reside en el volumen de re-cursos involucrados en las opera-ciones de salvamento, fenómeno

que evidencia que la crisis en cursoestá profundizando aun más la pro-miscuidad existente entre la oligar-quía financiera que comanda a lasgrandes corporaciones y el alto co-mando del Estado capitalista. Pues-tas en perspectiva las tendencias encurso -la mundialización del capi-tal y de las finanzas, la liberaliza-ción comercial y financiera, la des-regulación de los mercados y elcontrol absoluto del big business so-bre el aparato de Estado- apare-cen como características estructu-rales del patrón de desarrollo capi-talista en la fase superior del impe-rialismo. La crisis radicaliza tales ten-dencias, llevando al paroxismo elcarácter antisocial, antinacional yantidemocrático del capitalismo.

Así como la crisis que desarti-culó la división internacional del tra-bajo de inicios del siglo XX generóinconmensurable sacrificio huma-no, antes que las relaciones socialesy el orden internacional que susten-taron el ciclo expansivo de los lla-mados «años gloriosos» se reorga-nizasen, en un penoso proceso detransformaciones que se arrastrópor décadas, los problemas que sa-cuden a la globalización de los ne-gocios preanuncian el inicio de unperiodo histórico alterado, cuyodesenlace es totalmente incierto. Losque esperan una solución técnica einstitucional para la crisis de gran

envergadura que se abatió sobre laeconomía mundial, soñando con laposibilidad de un nuevo BrettonWoods y con un renacimiento delwelfare state, abstraen las condicio-nes objetivas y subjetivas que tor-naron viable la reorganización delorden económico internacional enla pos Guerra y la efímera vida delcapitalismo keynesiano, dejando deconsiderar sus substanciales diferen-cias en relación a la situación con-creta generada por la crisis actual.

La ausencia de una potenciahegemónica capaz de liderar la «re-forma» del orden internacional con-trasta radicalmente con la situaciónde pos Guerra. En la crisis que se-lló la suerte del liberalismo, la deca-dencia de Inglaterra como centrode la economía mundial vinoacompañada de una intransigentedisputa, comprometiendo a variaspotencias imperialistas emergentes,para decidir quién asumiría la posi-ción de potencia hegemónica. Elindescriptible sufrimiento subsi-guiente a una depresión de largaduración, el horror del holocaustonazi, la barbarie de dos guerrasmundiales y la amenaza del comu-nismo crearon las condiciones his-tóricas concretas que permitierona los Estados Unidos –el gran ven-cedor de la Segunda Guerra Mun-dial– aprovecharse de su incontes-table supremacía para amoldar el

1 CEPAL, 2007 –Panorama de la inserción internacional de América Latina y el Caribe- Tendencias, 2008, p.6.2 J. Crotty, If financial market competition is so intense, why are financial firm profits high? Reflections on de current ‘Golden Age´of

finance». Political Economy Research Institute, Working Papers Series, n.134, April, 2007.

Page 28: Cuadernos marxistas Nº 04

28

orden internacional a sus intereses,sin, con todo, desconsiderar la ne-cesidad de pacificar parcialmentelas disputas de sus socios estratégi-cos, en el centro y en la periferia dela economía mundial, por una re-lativa autonomía de sus espacioseconómicos nacionales. Fue lo quepermitió, por un breve lapso detiempo, que el proceso de integra-ción del sistema capitalista mundialen torno de la economía norteame-ricana avanzase gradualmente, con-viviendo, por lo menos hasta la cri-sis del dólar al inicio de los años1970, con una relativa protecciónde los mercados internos contra lacompetencia de mercancías impor-tadas y contra la presencia de sig-nificativa restricción a los movi-mientos de capitales3.

Fueron esas condiciones con-cretas las que viabilizaron la emer-gencia de espacios económicos na-cionales dotados de un régimen deacumulación central y de «centrosinternos de decisiones» relativamen-te autónomos, con cierta capacidadde subordinar a la lógica de valori-zación del capital a los interesesnacionales.

El contexto actual es radical-mente distinto. La inequívoca de-cadencia del imperio norteameri-cano no conmueve a su absolutasupremacía económica y militar. Elcolapso de la Unión Soviética y ladesorganización del movimiento

socialista no ponen a su burguesíaante la necesidad de hacer conce-siones a las burguesías aliadas ymucho menos a la clase trabajado-ra. Por lo tanto, en ausencia de unasubstancial transformación del con-texto histórico, es bastante impro-bable que los Estados Unidos re-nuncien unilateralmente a sus privi-legios imperiales en pro de meca-nismos supranacionales de poder.Y, entre tanto, dadas las nuevas ca-racterísticas del patrón de desarrollocapitalista, esa sería una condiciónindispensable para lidiar con el ries-go sistémico y con la desorganiza-ción de la producción en escala glo-bal, fenómenos inherentes al pro-ceso de mundialización del capital.

La brutal asimetría en la corre-lación de fuerzas a favor del capi-tal financiero que caracteriza al ca-pitalismo contemporáneo, desequi-librio que aumenta a medida que elavance de la crisis impulsa el pro-ceso de concentración y centraliza-ción de capitales, también contras-taron lo que ocurría en la inmedia-ta posguerra, cuando, por una se-rie de circunstancias, las fuerzas másconservadoras de la burguesía seencontraban a la defensiva, abrien-do brechas para que, en algunas so-ciedades nacionales, el Estado bur-gués consiguiera trascender el inte-rés puro y simple del gran capital ycontemplar, por lo menos parcial-mente, los intereses populares en la

definición de las prioridades querigen las políticas de Estado. A me-diados del siglo XX, el trauma aunmuy reciente de la crisis de la déca-da de 1930, el cambio en la corre-lación de fuerzas generado por laderrota del fascismo, la necesidadde promover la reconstrucción deEuropa y de Japón y la urgencia enestabilizar la vida económica y po-lítica del «mundo libre» para refre-nar el riesgo comunista permitie-ron la cristalización de una arma-dura institucional que, sin herir losintereses estratégicos del capital fi-nanciero, estableció una serie de lí-mites a la volubilidad espacial y sec-torial de los capitales. Fue lo sufi-ciente para abrir espacio a políti-cas económicas de inspiración ke-ynesiana y para el avance del welfa-re state que, de una u otra manera,se fortalecieron hasta el inicio dela década de 1970 en los países ca-pitalistas más desarrollados. Lascondiciones históricas actuales sonmuy distintas. En ausencia de unavigorosa reacción popular, queponga en jaque el carácter ultra-conservador del bloque de poder,es una ilusión imaginar la posibili-dad de políticas que puedan en-frentar, aunque sea mínimamente,el interés estratégico del capital fi-nanciero.

Finalmente, al contrario de loque ocurría a mediados del siglo XX,la compleja red de relaciones comer-

3 Para una interesante interpretación de la relación del Estado norteamericano con el capital financiero, ver el artículo de L. Pantichy C. Leys (Eds.) El Imperio Recargado, Socialist Register, 2005.

Page 29: Cuadernos marxistas Nº 04

29

ciales y productivas que unifica al sis-tema capitalista mundial crea obstá-culos insuperables a la posibilidad desoluciones «nacionales» a la crisis glo-bal. El avance del proceso de glo-balización de los negocios encubriólas bases objetivas y subjetivas quesustentaban las políticas económi-cas basadas en un régimen centralde acumulación. El grado ya alcan-zado de socialización de las fuerzasproductivas simplemente no tolerala posibilidad de un retroceso «na-cional», pues esto implicaría una granpérdida de eficiencia económica(subsiguiente a una menor escalaeconómica), representando unafuerte regresión en la división so-cial del trabajo. Además de eso, elcontrol absoluto del Estado capi-talista por los grandes conglome-rados internacionales hace muypoco probable la posibilidad de unretroceso proteccionista, toda vezque el grado de internacionalizacióndel capital es incompatible con elespacio económico nacional comohorizonte de la reproducción am-pliada del capital. No hay, por lo

tanto, bases objetivas y subjetivaspara un retorno a Keynes.

Capitalismo y barbarie

En ausencia de fuerzas capacesde detener la furia especulativa delgran capital, la solución de la crisis porla línea de menor resistencia –por laexacerbación de la explotación deltrabajo y por la lucha autofágica en-tre los grandes conglomerados mul-tinacionales– tiende a tornar el régi-men del capital aun más regresivoy predatorio, pues es gigantesco elvolumen de capital sobreacumula-do que necesita ser digerido antesque las condiciones para la repro-ducción ampliada del capital pue-dan restablecerse. El fin del cicloexpansivo profundizará y genera-lizará la barbarie capitalista, abrien-do un periodo de grandes convul-siones sociales y endurecimientode las rivalidades entre los Esta-dos nacionales. Se sabe por la yalarga historia del capitalismo que,al no existir una alternativa concre-

ta al régimen del capital, día másdía menos, con mayor o menorsacrificio, las condiciones para lareconquista de la acumulación decapital serán restablecidas y el ca-pitalismo iniciará un nuevo cicloexpansivo. Los dramáticos acon-tecimientos de la primera mitaddel siglo XX, que dejaran a la hu-manidad al borde del abismo,muestran, por lo tanto, que, en laera del capitalismo monopolista,las crisis capitalistas provocan grandestrucción, no dejando margenpara la posibilidad de solucionesracionales y civilizadas para los pro-blemas de la humanidad. No hayningún motivo para imaginar que,en el siglo XXI, el desenlace serádiferente. En los marcos del or-den burgués, el futuro es sombrío.Más que nunca, el régimen del ca-pital vendrá acompañado de cre-ciente inestabilidad económica,absoluta irracionalidad en el uso dela riqueza, escandalosa desigualdadsocial, escalada de la prepotenciaimperialista e inexorable peligro delas conquistas democráticas.

Page 30: Cuadernos marxistas Nº 04

30

por Atilio Boron**

CRÍTICA AL REFORMISMO

Rosa Luxemburgo y las luchas revolucionarias*

La nueva crisis general del ca-pitalismo, evidenciada nosólo en la periferia del siste-

ma sino en su propio corazón eu-ropeo y norteamericano, torna másurgente que nunca el reexamen delos grandes legados teóricos de latradición marxista. La bancarrotadel neoliberalismo, sostenido ape-lando a dosis cada vez mayores deviolencia, se torna evidente en los«acampes» que conmueven al Es-tado español, la inesperada «pobla-da» islandesa (meticulosamenteoculta por la prensa del capital), latenaz resistencia de los griegos (sie-te huelgas generales en contra delajuste y el FMI) y la insurgencia delos trabajadores estadounidenses enWisconsin. Signos estos de una cri-sis que salta a la vista de todos, pesea las mentiras de las oligarquías me-diáticas que engañan, desaniman ydesmoralizan a nuestros pueblos.

En Nuestra América, tras lacontraofensiva imperialista luego delas múltiples derrotas sufridas en laprimera década de este siglo con elderrumbe del ALCA, continúa laheroica sobrevivencia de la revolu-ción cubana, el ascenso del chavis-mo, los triunfos de Evo Morales yRafael Correa y el paralelo surgi-miento, en el flanco atlántico, de go-biernos calificados de «progresistas»en Argentina, Brasil y Uruguay que,

aunque con vacilaciones y ambigüe-dades y no siempre movidos porlas mejores causas, prestaron sucolaboración para viabilizar la exis-tencia de proyectos más radicalescomo los arriba nombrados. De-rrotas infligidas por nuestros pue-blos a las que ahora se agrega la in-certidumbre provocada por el des-pertar de las masas del norte deÁfrica y Medio Oriente y la inespe-rada reacción de hombres y muje-res del Primer Mundo que, comodecía una pancarta en la Puerta delSol, en Madrid, cayeron en la cuen-ta de que lo que había no era unacrisis sino una estafa.

En este contexto, nada puedeser más necesario que revisar el ar-senal donde se guardan las armasde nuestra crítica. Por supuesto, setrata de un rearme teórico, que sóloserá efectivo en la medida en quese anude inseparablemente con unapraxis transformadora. Una vezmás conviene recordar aquellas co-nocidas sentencias de Lenin cuan-do decía que «sin teoría revolucio-naria no hay praxis revolucionaria»;o que «nada es tan práctico comouna buena teoría»; o que «el mar-xismo no es un dogma sino una guíapara la acción». Una de las grandesvictorias ideológicas del capital hasido convencer a los explotados detodo el mundo que las ideologías

han muerto, que sólo importa «lopráctico, lo útil», confinando la re-flexión teórica a las estériles aulasuniversitarias, cada vez más escin-didas de la tragedia que se desen-vuelve extramuros.

Despojadas del bagaje teóricodel marxismo, fundamento irreem-plazable de cualquier crítica a la so-ciedad capitalista, las clases popula-res quedan indefensas; podrán darmuestras de abnegación y heroísmo,pero difícilmente derrotar a sus ene-migos. Lo ocurrido en Argentina en2001 es una prueba irrefutable deesta tesis; y existe el peligro de quelas grandes victorias populares ob-tenidas en Egipto y Túnez se eva-poren sin dejar rastros a causa delmismo defecto: la ausencia de unabuena teoría que guíe el impulsocontestatario de las masas, señalan-do claramente quién es el enemigo,de qué armas dispone, cuál es el te-rreno de la lucha y cómo se puedehacer para prevalecer en ella.

No hay aquí el menor asomode «teoreticismo» o escolasticismo.Se trata de una convocatoria a for-talecernos mediante la recuperaciónde nuestro gran legado teórico, ins-trumento indispensable e insustitui-ble en la lucha contra la domina-ción del capital. Es a causa de estoque Fidel llamó a librar la gran ba-talla de ideas.

* Retomo algunos conceptos vertidos en la Introducción a la nueva edición de ¿Reforma social o revolución?, de Rosa Luxemburgo(Buenos Aires, Ediciones Luxemburg, 2010)

** Sociólogo y politólogo

Page 31: Cuadernos marxistas Nº 04

31

Crítica implacable delreformismo

Y es en este terreno, precisa-mente, donde la herencia teórica deRosa Luxemburgo (aparte de lasenseñanzas ejemplares que nos dejasu propia vida) adquiere una ex-traordinaria actualidad. Rosa fueuna crítica implacable del reformis-mo socialdemócrata y de las mali-ciosas trampas que tendía a losmovimientos populares. Situada enuna encrucijada fundamental de lahistoria del capital –la recuperación,luego de la «Larga Depresión» quese extendió entre 1873, poco des-pués de la derrota de la Comunade París, hasta casi finales del siglodiecinueve–, Rosa se vio tempra-namente involucrada en la polémi-ca sobre el revisionismo, propues-to nada menos que por el albacea

testamentario de Friedrich Engels,Eduard Bernstein. En ese extraor-dinario debate descollaron dos fi-guras marginales al mundo de lasocialdemocracia: Vladimir I. Le-nin y Rosa Luxemburgo, ambosprocedentes de la periferia europea-uno de la atrasada Rusia, otra dela no menos atrasada Polonia, granparte de la cual se encontraba bajoel dominio del zar-. Al calor de lapolémica uno y otra fueron pro-yectados al centro de un debate in-telectual y político, otrora reserva-do casi con exclusividad para losintelectuales socialistas de las metró-polis europeas del capitalismo, prin-cipalmente Alemania.

Nacidos en 1870 y 1871 res-pectivamente, y del todo margina-les hasta el momento, sus contribu-ciones habrían de marcar el puntomás alto de un debate cuya actuali-

dad no sufrió merma con el pasode los años. Sociológicamente ha-blando, el protagonismo de Leniny Rosa señaló la entrada en escenade una nueva generación de inte-lectuales marxistas. Si Bernstein ha-bía sido amigo de Engels; si Bebely Liebknecht tenían fluidas relacio-nes con los fundadores del mate-rialismo histórico; si Kautsky tam-bién disfrutaba de la confianza deambos, la abrupta irrupción deLenin y Rosa, que jamás habían te-nido contacto alguno con Marx oEngels, reflejaba, por una parte, laextraordinaria difusión alcanzadapor el marxismo en la periferia eu-ropea y, por la otra, un salto gene-racional significativo. Al momentode estallar la polémica, en 1899, nin-guno de los dos alcanzaba los trein-ta años de edad. Luego de su inter-vención en el «Bernstein Debatte»

Page 32: Cuadernos marxistas Nº 04

32

sus nombres se convertirían en re-ferencia obligada del movimientosocialista internacional.

¿Reforma social o revolución?

El ¿Qué hacer? de Lenin, y ¿Re-forma social o revolución? de Rosa, sonlos escritos en donde se plasman suscríticas frontales contra el revisio-nismo bernsteiniano1. Si en el pri-mero de los textos el eje fundamen-tal de la argumentación lo constitu-ye el problema de la organizaciónde las clases y capas explotadas -unproblema esencialmente político,por supuesto, y no meramente ins-trumental o burocrático-, la obra deRosa incluye un amplio abanico detemas relacionados con el curso deldesarrollo capitalista, el papel y loslímites de las reformas sociales y lamisión del Partido Socialista.

Más allá de algunos lugares co-munes -como, por ejemplo, la acu-sación de «espontaneísmo» contrala revolucionaria polaca, o de «apa-ratismo» con que se suele (mal) in-terpretar el libro de Lenin- ambostextos expresan un contrapunto sus-ceptible de conjugarse en una ar-moniosa síntesis. Tarea tanto másurgente en tiempos como los ac-tuales, cuando una reflexión sobrelas perspectivas del socialismo a

comienzos del siglo XXI está sig-nada por una temeraria subestima-ción de la centralidad de la organi-zación (que habilita ensoñacionescomo la de «cambiar al mundo sintomar el poder») y un no menostemerario desprecio por la teoría,cuando no un sesgo abiertamenteantiteórico.

Por eso, al menos en AméricaLatina, las reflexiones actuales so-bre el porvenir del socialismo tie-nen todavía mucho que ver conambos autores. Con Lenin, por ladecisiva importancia de las cuestio-nes organizativas en la lucha contrauna «burguesía imperial» organiza-da como nunca antes en su histo-ria: contrástese si no, la fría eficaciapráctica de Davos con el intrascen-dente colorido del Foro SocialMundial, que se resiste tercamentea darse una organización globalpara luchar contra una burguesíaglobalizada.

Con Rosa, por sus aportacio-nes sobre los límites del reformis-mo y la necesidad de pensar en«otro» tipo de reformas, que lejosde consolidar al capital (como hi-cieron los «reformistas» latinoame-ricanos) preparen el advenimientodel socialismo. O sus reflexionessobre el surgimiento de la concien-cia obrera como producto de lalucha de clases; o acerca de los in-

franqueables obstáculos que la ló-gica del capital impone a la demo-cracia y, por ende, la necesidad deconstruir una democracia socialistaporque, según ella, «sin socialismono hay democracia, y sin democra-cia no hay socialismo». ¿Qué podríaser más actual que esta fórmula paradevelar la miseria de las democra-cias liberales en América Latina, enrealidad, plutocracias disfrazadas dedemocracia?2

Lamentablemente, ambos au-tores y su densa obra teórica sonmuy poco conocidos en la actuali-dad. Por decisivos y cruciales quesean los temas abordados por Rosa,ellos constituyen una parte que sólocobra pleno sentido cuando se lavincula con la obsesiva preocupa-ción leninista por las cuestiones or-ganizativas, dado que, como Leninlo recuerda con frecuencia, la únicaarma con que cuentan las clases sub-alternas para cambiar este mundoes su propia organización. Por eso,uno de los más graves peligros queenfrenta el movimiento popular enAmérica Latina es caer en la falsaantinomia que opone a Lenin yRosa. Si las fuerzas de las clases sub-alternas han de prevalecer en sucombate contra el capital, la síntesisde la obra de estos dos grandes re-volucionarios constituye un impe-rativo categórico.

1 El título de la obra de Rosa en diversas traducciones aparece como Reforma o revolución, algunas veces entre signos de interrogacióny otras no. Otras traducciones ofrecen Reforma o revolución social. El título exacto es ¿Reforma social o revolución?, traducción del que laautora le puso en alemán: Sozialreform oder Revolution?

2 Hemos examinado este tema en Aristóteles en Macondo. Notas sobre el fetichismo democrático en América Latina (Córdoba, EdicionesEspartaco, 2009).

Page 33: Cuadernos marxistas Nº 04

33

Actualidad de su herenciateórica

Quisiéramos poner fin a estabreve nota planteando la preguntaacerca de la actualidad de la he-rencia teórica de Rosa. En su pe-netrante ensayo sobre Rosa, LelioBasso fustiga el balance final queKarl Kautsky extrae de la obra dela revolucionaria polaca. Este de-cía que «Rosa Luxemburgo y susamigos tendrán siempre un pues-to de gran relieve en la historia delsocialismo; de esta historia ellospersonificaron una época, la cualha llegado al final». Precisamentelo que sostiene el teórico italianoes lo contrario: sólo ahora, con elfracaso de la socialdemocracia ycon la crisis del dogmatismo, seabre verdaderamente el períodohistórico en el que el método y elpensamiento de Rosa Luxembur-go pueden y deben convertirse enuna guía intelectual del movimien-to obrero, porque hoy más quenunca es necesaria la síntesis luxem-burguiana de lucha cotidiana yobjetivo final para combatir tantoel oportunismo como el revisio-nismo, que han llevado a la mayo-ría del proletariado occidental a unacapitulación y al extremismo seu-domarxista, que ignora las media-

ciones necesarias y quiere «rápida yabsoluta» la revolución total.3

En esta misma línea se inscribeuna valoración sobre la herencia deRosa hecha por Néstor Kohan, aldecir que en el renovado clima po-lítico que se vive en América Latinacomienzan nuevamente a discutir-se las alternativas al capitalismo ylas perspectivas del socialismo, es-tigmatizadas y dejadas fuera de laagenda de la Izquierda durante lar-gos años. El fracaso del seudopro-gresismo -o del «retroprogresismo»,como lo llama Alfredo Grande- delos regímenes de la «centroizquier-da» en Argentina, Brasil, Uruguay yChile, algunos de los cuales, comoel chileno, fueron exaltados hasta lasaciedad como el «modelo a emu-lar», porque supuestamente habríaexitosamente completado las dostransiciones cruciales: del autorita-rismo a la democracia -imitando ala perfección las «virtudes» del Pac-to de la Moncloa hoy repudiadoen las calles y plazas de toda Espa-ña-, y desde una economía «estatis-ta y socialista» hacia una de libremercado. Estos regímenes han des-nudado su absoluta incapacidadpara crear sociedades más justas yequitativas, ya ni digamos socialis-tas, porque nunca fue eso lo quesus gobernantes se propusieron. En

este nuevo clima ideológico, la re-aparición del interés por la obra deRosa no tiene nada de casual. YKohan agrega, con razón: «Cuandoya nadie se acuerda de los viejospusilánimes de la socialdemocracia,de los jerarcas cínicos del estalinis-mo, ni de los grandes retóricos tram-posos del nacional-populismo, elpensamiento de Rosa Luxemburgocontinúa generando polémicas teó-ricas y enamorando a las nuevas ge-neraciones de militantes».4

Agobiados por un régimen deproducción cada día más opresi-vo, predatorio y explotador, quehace que la revolución sea hoy másnecesaria que nunca, el extraordina-rio libro de Rosa combina una mi-rada analíticamente penetrante y ace-rada como pocas con una inclaudi-cable pasión puesta al servicio de larevolución. Por la relevancia de losproblemas que aborda, por el modocomo los resuelve, por la sorpren-dente actualidad de sus análisis so-bre la articulación entre capitalismo,reformismo, democracia y revolu-ción, su pequeño gran libro, un legí-timo clásico del pensamiento mar-xista, ofrece una contribución inva-lorable para las luchas emancipado-ras de nuestra época. ¡A no desapro-vechar ese formidable recurso quepone en nuestras manos!

3 Basso, Lelio: Rosa Luxemburgo (México, Nuestro Tiempo, 1977), pp. 213-214.4 Kohan, Néstor: «Rosa Luxemburg. La flor más roja del socialismo», en Rebelión, http://www.rebelion.org/docs/17281.pdf, p. 2.

Page 34: Cuadernos marxistas Nº 04

34

El animalito de Dios hurga-ba en la basura en busca dealimento. Roedor abomi-

nado, repugnado por la humani-dad, perseguido a través de la his-toria, revolvía con su hocico algu-nas sobras que sobresalían de lasbolsas plásticas que rebosaban elcontainer residual. De pronto, susojos redondos se sobresaltaron,pegó un chillido y se alejó veloz-mente hasta desaparecer. El algoque causó su espanto se hallaba es-tampado en una hoja de periódico,impregnada de hedores inenarra-bles, que reproducía las palabras deuna auténtica rata humana, el ex dic-tador Jorge Rafael Videla. Al ani-malito de Dios se le erizaron losduros pelos ante tamaño hallazgo.Del mismo modo que nos espan-tamos todos nosotros. El genoci-da, cobarde y ladrón de enseres yvidas humanas aparecía desde lacloaca de su existencia, desbordan-do los efluentes de la hipocresía, eltartufismo, la maldad con mayús-cula, el lacayismo hacia los pode-rosos y la sumisión al capital másconcentrado y depredador, emi-tiendo sonidos humanos. Alguien,un tal Ricardo Angoso, correveidi-le español de la CIA y sus empren-dimientos periodísticos y no tanto,como la organización UnoAméri-ca, lo había sacado de la fecalidad,con ayuda «de contactos del Ejér-cito Argentino» que, cual celestinosde la barbarie, acercaron al escriba

por Jorge Luis Ubertalli*

EL PLAN DE LAS RATAS

Rataplan, plan, plan

con el dictador. Así reapareció Vi-dela recreando la insolencia vertidaen sus palabras del 23 de septiem-bre del 2010 ante el Juzgado que locondenó, y que se transcribieron enla página web de UnoAmérica conel nombre de «Al Pueblo Argenti-no». Ahora no sólo era la páginade los reaccionarios militaristas pro-yanquis, alimentados por la CIA yotros servicios de inteligencia deEE.UU., cuyo capataz mayor, Ale-jandro Peña Esclusa, se halla encar-celado en Venezuela por intento demagnicidio, la que reproducía susmentiras y acusaciones. No. Eran losdiarios de la República, aún los«progresistas» los que se hacían ecode lo vertido por este bolo fecal enel extenso «reportaje» que la revistaibérica Cambio 16, por boca deAngoso, reprodujo hasta el hartaz-go. No haremos hincapié en lo di-cho por Videla en este «reportaje»,por cuanto es conocida su calaña yla de sus «camaradas de armas» ycompinches eclesiásticos, empresa-riales, mediáticos, gremiales y de-más que lo acompañaron en superiplo de escarnio popular y en-trega, y la de estos uniformadosque, en actividad, conectaron al «pe-riodista» con el «general». Pero sínos preguntamos: ¿ Por qué a esteengendro se le permite hablarcomo un prohombre, habidacuenta que fue despojado de susgrados y mandos? ¿Quién o quie-nes permitieron, y en nombre de

qué, que un asesino serial colectivohiciera nuevamente apología deldelito frente a un enviado extranje-ro que lo entrevistó a través de con-tactos personales castrenses, quie-nes hasta ahora no fueron dados aconocer? ¿Es esto libertad de ex-presión, o signo de debilidad fren-te a la maldad y la barbarie, ya juz-gadas por lo producido en los añosde Terrorismo de Estado? ¿Quéperiodista es ese que ingresa al paíspara reivindicar a un genocida y queen vez de ser ignorado, neutraliza-do en su accionar y cuestionado seda el lujo, al ser entrevistado porun medio argentino, de discurrirsobre la «objetividad» de su oficio,plasmada en estas frases, escritas desu puño y letra: «El drama, aunquetambién la tragedia de Venezuela,es que el chavismo no es conscien-te de su ocaso y su sinrazón sin lí-mites, sino que persiste en sus erro-res, ahonda en ellos y trata de se-guir su viaje hacia ninguna partecomo si nada…» 1; «objetividad»que también se plasma en su volu-men «Chávez Perdió, Honduras seSalvó», publicitado en la página webde UnoAmérica el 26 de septiem-bre del 2011, y en la denostación ycalumnia gratuita, transcripta en dis-tintos artículos, a Daniel Ortega y laNicaragua Sandinista de hoy, asícomo a otros gobiernos enfrenta-dos al imperio norteamericano?

¿Nadie supo de la llegada y laposterior actividad de este emba-

* Periodista y escritor.1 «Venezuela, violencia sin fin a merced de Chávez», www.iniciativaradical.org (22/12/2011).

Page 35: Cuadernos marxistas Nº 04

35

jador de las tinieblas proimperia-listas, que se burló del pueblo todoadjudicándole el rango de «gene-ral» a un vulgar asesino y ladrón dehombres, mujeres y niños? ¿O, peoraún, alguien lo dejó hacer creyen-do que lo dicho por Videla tendríaun efecto boomerang en la pobla-ción y, de paso, pondría a la oposi-ción política como carro de coladel genocida? ¿Alguien cree que laaparición pública de Videla es unacuestión de entrecasa, y que por lotanto no forma parte de una juga-da internacional planificada por losconocidos de siempre? Ojo al pio-jo, que oculto entre los árboles dela perversidad se halla el bosque dela conspiración.

El Plan de las ratas

Hace tiempo que quien estoescribe sostiene, en sintonía conotros colegas y hasta funcionariosy jueces, que hoy la Policía se en-carga de crear, a través de sus cuer-pos armados, sus mandados, susasociados en la delincuencia gran-de y chica, buchones y demás, unclima de «inseguridad» y «caos» ten-diente a desestabilizar a cualquiergobierno que se contraponga a susintereses corporativos, que son losde la burguesía imperialista toda ysus sucursos locales. La Policía y otros

cuerpos de «Seguridad» emparen-tados con el delito en sus diversasformas, están hoy llamados en todaNuestra América, a provocar el cli-ma de «inseguridad» que obligue alos gobiernos reacios a obedecer losdictados del imperialismo, a con-vocar a las Fuerzas Armadas paraponer «orden».2 El caso de Ecua-dor es paradigmático. El 30 de oc-tubre del 2010, año y pico despuésdel golpe cívico-militar de Hondu-ras, miembros de la Policía nacio-nal ecuatoriana produjeron un le-vantamiento contra el presidenteCorrea que fue catalogado comointento de «golpe de Estado» y quecasi le cuesta la vida al presidente.¿A quién debió recurrir entoncesCorrea para aplastar la rebeliónpolicial cuyos participantes, dichosea de paso, fueron sobreseídos porla Justicia al año siguiente? Al Ejér-cito. De este modo, y durante unasemana, el ejército del Ecuador, jun-to a sus pares de las otras fuerzas,se hizo del poder real en el país. Fueeste un verdadero globo de ensayollevado a cabo en el marco del Plande las Ratas, que al ritmo del rata-plán, plan, plan, pretenden reiniciarel ciclo de democraduras vigiladaspor las fuerzas Armadas del sub-continente, en «especial» las Fuer-zas Especiales de Operaciones(SOF en inglés), que, adiestradaspor militares norteamericanos y de

otros países de su entorno reaccio-nario, fueron creadas para llevar acabo Guerras Sucias o de Baja In-tensidad en cualquier lugar de laTierra, incluida, claro está, nuestraIndoaméricalatina. En Honduras, ya principios de diciembre del pa-sado año, el Ministerio de Defensasubsumió al de Seguridad. Los ac-tos de corrupción y barbarie poli-cial cotidianos institucionalizaron loque de hecho se estaba llevando acabo: la entente policial-militar encuanto a la represión a la «delincuen-cia», incluidos, obviamente, los con-flictos sociales. En El Salvador, elgeneral Munguía Payés, vinculadoen los años 80 a la guerra contra elFMLN, se hizo cargo, con el avaldel presidente Funes del Ministeriode Seguridad, ocupado hasta esemomento por Manuel Melgar, excomandante del FMLN, quien de-bió renunciar debido a presionesnorteamericanas, tal como se infor-mó en su momento.3

En los primeros días de febre-ro de este año, una rebelión poli-cial en Bahía, Brasil, que produjomuertos y saqueos generalizados,terminó con la entrada en acciónde las Fuerzas Armadas de ese país,encargadas también de reprimir al«crimen organizado» y el «narcotrá-fico». Pocos días después, los «salva-dores» de la situación se cobraron suintervención en la vida política del

2 Ver «Viva la Internacional…reaccionaria», del autor, en Visiones Alternativas y Telesur (31/01/2010) y «Centroamérica en el centro»,en www.rebelión.org (23/09/2011), entre otras.

3 Ver «Nicaragua en la Mira», del autor, www.rebelion.org (18/12/2011).

Page 36: Cuadernos marxistas Nº 04

36

país, cuestionando al poder legal-mente constituido, incluida la mi-nistra de Derechos Humanos, Ma-ría do Rosario. Se alzaron contra lareactivación de la Comisión de laVerdad, que intenta juzgar los crí-menes cometidos por los unifor-mados autoamnistiados en 1979, durante su prolongada dictadurainiciada en 1964, y contra la presi-dente Dilma Rousseff, publicandouna solicitada/manifiesto del ClubMilitar, al que adhirieron más decien oficiales, contra la reactivaciónde la Comisión de la Verdad queascendieron a 647, incluidos 4 ge-nerales y 191 civiles en una se-gunda, titulada «Que vengan, poraquí no pasarán», luego de que laprimera mandataria sancionara alos firmantes de la primera y cues-tionaron la designación del actualministro de Defensa, Celso Amo-rim, por provenir, según fuentes,«de la izquierda» de la Cancillería.Ante la falta de «hipótesis de con-flictos externos» debido a la integra-

ción de nuestros países, en nuestrocaso Unasur, CELAC y otros, el Plande las Ratas consiste en volcar a losmilitares, secundados por las policíasy otras fuerzas represivas institucio-nales, a reprimir los levantamientossociales que se avecinan, producto dela crisis estructural del capitalismo y laconsiguiente y obvia profundizaciónde la lucha de clases que arrastra. Y elmarxismo y el comunismo co-mienzan nuevamente a ser consi-derados enemigos fundamentalesdel sistema capitalista.

A paso redoblado

Haciendo juego con los verdesque vuelven por sus fueros en laregión, viejos y nuevos detractoresdel «marxismo» comienzan a tran-sitar los andariveles de la provoca-ción. Entre ellos, se halla un perio-dista estrella, Horacio Verbitsky,quien a fines de febrero y en elmarco de un Debate sobre Malvi-

nas con algunos intelectuales light ycipayos, a quienes anatemiza como«marxianos», embate contra el Ma-nifiesto Comunista, Carlos Marx yFederico Engels en cuanto apolo-getas del colonialismo. Claro, Ver-bitsky se ancla en 1848 -cosa queendilga a los ‘marxianos’- y referen-cia a ese año con una supuesta ale-gría de Marx y Engels por la «con-quista de México por los EstadosUnidos». Justo allí se detuvo el pe-riodista estrella, a fin de opacar laestrella del «colonialista» Marx.Quien en 1867, en El Capital, escri-bió: «El descubrimiento de regio-nes auríferas y argentiníferas enAmérica, la reducción de los indí-genas a la esclavitud, su soterra-miento en las minas o su extermi-nio, los comienzos de conquista ysaqueo de las Indias orientales, latransformación de África en unaespecie de madriguera comercialpara la caza de los hombres de pielnegra: tales son los procedimientosidílicos de acumulación primitiva

Page 37: Cuadernos marxistas Nº 04

37

que señalan la era capitalista en suaurora». (…) «La historia de la ad-ministración colonial de los holan-deses -y Holanda era en el sigloXVII la nación capitalista por ex-celencia- desarrolla un cuadro deasesinatos, traición, corrupción ybajeza que jamás será igualado».4Más adelante, el «colonialista» Marxhace referencia a los tejes y mane-jes de la «Compañía Inglesa de lasIndias Orientales (que) obtuvo, ade-más del poder político, el mono-polio exclusivo del comercio del téy del comercio chino en general, asícomo el del transporte de las mer-cancías de Europa y Asia y de éstaa aquella»(…) «Según una lista pre-sentada al Parlamento, la compa-ñía y sus empleados arrancaron alos indios (hindúes N. de R.), entre1757 y 1760 ¡solo en el rubro dedonaciones gratuitas, una suma deseis millones de esterlinas! Entre1769 y 1770, los ingleses provoca-ron un hambre artificial al comprartodo el arroz y venderlo a preciosfabulosos».5 «La suerte de los indí-genas era, por supuesto, mas ate-rradora en las plantaciones dedica-das sólo al comercio de exporta-ción, tales como las Indias occiden-tales, y en los países ricos y popu-losos, como las Indias orientales yMéxico, caídos en manos de aven-tureros europeos, feroces en la ca-

cería», prosigue Marx (…) «Losausteros intrigantes del protestan-tismo, los puritanos, adjudicaron en1703, por decreto de su asamblea,una prima de 40 esterlinas por scalp(cuero cabelludo) de indios y otrotanto por cada piel roja aprisiona-do. En 1720, una prima de 100 es-terlinas; en 1744, como Massachu-setts Bay había declarado rebelde acierta tribu, se ofrecieron las si-guientes primas: ¡100 esterlinas porscalp de individuo de sexo masculi-no de dos años y más, 105 porprisionero masculino; 55 por mu-jer o niño capturado…!»6 Y paraterminar con esto, cabe agregar loque el «colonialista» Marx sosteníaen cuanto al colonialismo: «El régi-men colonial dio gran impulso a lanavegación y el comercio. Engen-dró las sociedades mercantiles, do-tadas por los gobiernos de mono-polios y privilegios, y que sirvieroncomo poderosas palancas para laconcentración de capitales. Asegu-ró mercados a las manufacturasnacientes, cuya facilidad de acumu-lación se redobló gracias al mono-polio del mercado colonial. Lostesoros directamente arrancados deEuropa por el trabajo forzado delos indígenas reducidos a la escla-vitud, por la concusión, el saqueo yel asesinato, refluían a la madre pa-tria para funcionar allí como capi-

tal».7 ¿Estas son las «enmiendas tar-días» de Marx que el periodista es-trella obvia, en su polémica con loscipayos light y tutti quanti, en su alo-cución antimarxista? Por favor, ver-güenza debería darle.

Otro que tiró e intenta pegar alos otrora rojillos enemigos de losmilitares represores, Julio Bárbaro,acorde con los tiempos que correny SIN vergüenza ni tapujos, escri-bió el 8 de marzo en el diario de laEmbajada una filípica en contra delotrora «espacio comunista (en elque) se fue desarrollando un siste-ma de obediencias y lealtades…»;en contra de Cuba y «la rigidez bu-rocrática de su partido y la eterni-dad de Fidel Castro…»; cuestionóa Cooke en cuanto a su visión revo-lucionaria del peronismo y ensalzóa Perón y la Tercera Posición, an-clando que hoy «no hay nada másvigente que no sentirse ‘ni yanqui nimarxista’». Utilizando el nombre deviejas amistades y una nada singu-lar apreciación del Terrorismo deEstado como la lucha entre dosdemonios, el inefable palabrador,regresado en los años 80 al paísgracias a innombrables vientosmarineros y expulsado luego porello y otras lealtades non sanctas deIntransigencia y Movilización, con-siguió diputarse, consagrarse comoministro y funcionario en dos oca-

4 Marx, Karl. El Capital. Capítulo XXXI- «Génesis del Capitalismo Industrial», Tomo I, página 731, Cartago, Buenos Aires, 1973.5 Idem, pág. 733.6 Idem, págs. 733/734.7 Idem, pág. 734.

Page 38: Cuadernos marxistas Nº 04

38

siones y hoy arreciar al gobiernodesde un inconfundible oportunis-mo y macartismo que remite atiempos pretéritos. Esos tiempospretéritos que también son renova-dos por periodistas al estilo Ango-so, pagniaguados e insolentes, quevuelven a recrear el fantasma deljudeo-comunismo, aderezado defreudismo psicoanalítico, en desfa-chatadas críticas al viceministo deEconomía, Axel Kicillof8. Clarina-do de la reacción, panegírico deaquel provocador Carlos M. Silve-yra que desde las páginas del pas-quín «Clarinada», engendrado en1937, arremetía contra los «conspi-radores» judíos y comunistas queluego serían detenidos y ultrajadospor la Sección Especial de Repre-sión al Comunismo de la Policía dela Capital, Pagni forma parte de lacohorte de enemigos del marxis-mo y sus clásicos y no clásicos, enuna nueva arremetida que, a nodudarlo, forma parte de la renova-da estrategia de la burguesía impe-rialista y sus socios locales de cazarbrujas en el marco de la crisis mun-dial del capitalismo y la profundi-zación de la lucha de clases. Quie-nes también apelan a sindicalistas.Un afiche rememorativo del 88aniversario del nacimiento de JoséIgnacio Rucci, lugarteniente sindi-cal de Perón en los inicios de los70, adelanta en estos días los tiem-pos que se vienen. Firmado por el

duhaldista Jerónimo Benegas, secre-tario de las 62 Organizaciones, y el«combativo» Hugo Moyano, Secre-tario General de la CGT, quienhomologó hace pocos días al go-bierno con un «soviet», el afiche re-produce un párrafo de una cartade Rucci a Agustín Tosco, dirigentedel gremio de Luz y Fuerza deCórdoba y mártir de la unidad dela izquierda gremial y política en laArgentina, del 28 de setiembre de1972, en donde Rucci subraya sucondición de peronista (frente alsupuesto «drama» de Tosco ante elMovimiento Obrero Peronista, losdirigentes peronistas y el propioRucci, Secretario General de laCGT elegido por elegidos, a su vezdeselegidos por nadie a punta depistola y cadenazos). No es casualque en este marco de revitalizamien-to de los represores convertidos enideólogos y opinadores políticos, yen el contexto del Plan de las Ratas,vuelvan a recrearse viejos antago-nismos entre «peronistas puros» y«marxistas infiltrados», tales comoJulio Troxler, miembro de la Resis-tencia Peronista , sobreviviente de lamasacre de José León Suárez, asesi-nado por una patota de la Triple A, o Atilio López, vicegobernador deCórdoba, torturado y ultimado porla misma banda, o Jorge Di Pas-cuale, también resistente, presoCONINTES, secretario general delSindicato de Farmacia, fundador

del Peronismo Revolucionario, torturado y asesinado en el CCDEl Vesubio durante la dictaduramilitar, o Bernardo Alberte, exmayor del Ejército y ex edecán dePerón, arrojado al vacío desde laventana de su departamento poresbirros de Inteligencia militar elmismo 24 de marzo de 1976, porponer algunos ejemplos. Antimar-xistas, anticomunistas y macartistasvariopintos parecen formar partedel rataplán, con iguales o peoresolores que otrora.

Gringo-Gaucho y un siemprerenovado amor castrense

Poco antes de llevarse a cabola última reunión entre Cristina Fer-nández de Kirchner y Barack Oba-ma, el diario local de la Embajadaanunció que, entre los acuerdos aconcretarse se hallaba el ejerciciomilitar Gringo-Gaucho, que se lle-varía a cabo entre la Armada Ar-gentina y la de los Estados Unidosde Norteamérica. Según una infor-mación del Poder Ejecutivo Nacio-nal, titulada Información básica para laintroducción de tropas extranjeras en elterritorio de la nación y la salida de fuer-zas nacionales fuera de él, se habla deladiestramiento aeronaval en el mar«GRINGO-GAUCHO» como«ejercicio bilateral de oportunidad»que se desarrolla cuando un porta-

8 Pagni, Carlos. «Axel Kicillof, el marxista que reemplazó a Boudou», Diario La Nación (12/03/2012) de 2012.

Page 39: Cuadernos marxistas Nº 04

39

viones de la Armada de EE.UU.navega, con una escolta, en proxi-midades de la costa argentina en elmarco de la utilización de la rutadel sud del continente para trasla-darse del Atlántico al Pacífico. Des-de 1990 hasta el 2010, según un in-forme oficial del año pasado, estosejercicios involucraron a los porta-aviones yanquis «Abraham Linco-ln», «Kitty Hawk», «Constellation»,«Ronald Reagan», «George Was-hington» y «Carl Vinson». Tambiénse transcribe allí que la Armada Ar-gentina, al adiestrarse en este ejerci-cio aeronaval, pasa por una «exce-lente prueba para ponderar nues-tro grado de interoperatibilidad, elnivel de confianza mutua y el res-peto profesional». En el ejercicio,que «se realizará entre enero y agos-to de 2012», y que durará cuatrodías, participarán por la ArmadaArgentina una corbeta Meko 140,dos aviones Super Etentard (SUE),dos aviones Tracker S2-T y Tres he-licópteros. Según el informe, no serequiere inmunidad para las fuer-zas extranjeras que ingresan, y se sos-tiene que el portaaviones de la Ar-mada USA no tocará puerto ni in-gresará en aguas territoriales, aun-que en el marco del Gringo-Gau-cho 2010, el portaaviones «Carl Vin-son», que ancló en las cercanías deBahía Blanca, fue visitado por ofi-ciales navales locales, funcionarios y la mismísima embajadora deEE.UU., Vilma Martínez. El costode la operación, que asciende a635.955.- pesos será oblado por laArmada Argentina. Enfatizandosobre la importancia del adiestra-miento aeronaval local en relación

con el portaviones norteamericano,se acota al final del documento: «Esimportante destacar que una fuer-za naval de una coalición de países,bajo mandato de una organizacióninternacional, podría estar configu-rada en torno a un portaviones. Eladiestrar unidades navales propias,en tareas coordinadas con esa pla-taforma, genera una diferencia cua-litativa de importancia a la hora demedir nuestras fuerzas». Ya se sabeque hacen las «coaliciones de paísesbajo una organización internacional»en el marco del belicismo y el aven-turerismo militar norteamericano ysu recurrente utilización de laOTAN y la ONU para llevar acabo bloqueos y ataques contranaciones que no comulgan con su«democracia». Y también se sabequé función cumplen los portavio-nes en estos periplos, tal como lacumplieron en Irak, Libia y preten-den hacerlo en Irán, Siria, Corea delNorte y demás. Pero ¿hacia dóndese dirigirá el portaviones «amigo»de Argentina cuando, luego de loscuatro días de juerga con la Arma-da local y ya aprovisionado comose debe, remonte el Pacífico?. Nohay que ser muy inteligente para in-tuir cual será su destino. En enerode este año, miles de tropas y equi-pos militares norteamericanos fue-ron enviados a Australia y la zonade Asia-Pacífico en función de con-tener lo que se dio en llamar el«avance chino». En nombre del «in-terés nacional», el presidente Oba-ma manifestó que, aunque se redu-jo el presupuesto militar de este año,la reducción no afectaría a las fuer-zas que se hallan merodeando en

torno a China y zona de influencia,no sólo para «contener» a Chinasino para presionarla para que sesume a las sanciones contra Irán,que provee más del 20% del pe-tróleo que el país asiático consu-me. Estas maniobras de cerco yprovocación en torno a China hi-cieron que este país decidiera au-mentar un porcentual en el gastode defensa, lo que los medios oc-cidentales alineados con EE.UU.y sus socios internacionales -comolos británicos, que casualmentetrasladaron a Malvinas al príncipeGuillermo para que se ejercite enel pilotaje de helicópteros SeaKing, que operan desde tierra yportaviones, y fortificaron las Is-las en el marco del paso del por-taviones yanqui por Magallanes-hayan criticado hasta el cansanciola medida, en consonancia con unpresunto «rearmamentismo chino».

Teniendo en cuenta el filisteís-mo ideológico del capitalismo bue-no o malo, serio o risueño, que sóloconcibe la relación entre países ypueblos de acuerdo a las conve-niencias económicas y comerciales,y siendo China el segundo socio co-mercial de Argentina, con un creci-miento del intercambio comercialdel 700% en los últimos diez añosy con un intercambio de 13.858millones de dólares sólo en el2010, superando al de EEUU-Ar-gentina ¿Por qué Argentina contri-buye a un ejercicio militar aerona-val con EE UU que sólo significadar aire a la intrusión naval norte-americana en la zona perimetral deChina?. ¿Porqué habiéndose confor-mado un Consejo Sudamericano de

Page 40: Cuadernos marxistas Nº 04

40

Defensa de la UNASUR que pro-mueve la creciente desvinculaciónmilitar latinoamericana con la Jun-ta Interamericana de Defensa(JID), Argentina recrea relacionesmilitares con la potencia del Nortede América que, entre otras cosas,ayudó a los británicos a detectarnaves argentinas durante la guerrade Malvinas, como el Crucero Ge-neral Belgrano, hundido fuera de lazona de exclusión?

Como diría el poeta mayor deCuba, Nicolás Guillén: «oh, quién losabe, qué enigma entre las aguas….».

Envalentonado por el trata-

miento brindado al «general» Vi-dela por el fascista Angoso, el tam-bién genocida policial de la Pro-vincia de Buenos Aires, Alfredo Et-checolatz, condenado por críme-nes de lesa humanidad por su ac-tuación durante el Terrorismo deEstado, armó en estos días un bati-fondo en la sala de un juzgado gri-tando que era un «comisario ma-yor» al que supuestamente se debe-ría respetar y aceptar sus insolencias.

El rataplan, plan, plan se vis-lumbra en marcha de acuerdo alPlan de las Ratas, que son sacadasdel fondo de la cloaca para nueva-

mente roer el árbol de las demo-cracias en transición al verdaderoPoder Popular. No se debe permi-tir que los genocidas se expresencomo si fuesen personas comunesy opinadores políticos. Son enemi-gos de la humanidad, asesinos dis-puestos a proseguir su faena ante elmenor atisbo de debilidad o fla-queza. Cárcel para ellos. Cárcel depor vida, y basta. Y construir Po-der Popular para neutralizar la nue-va escalada imperial en el área y elmundo, y que sólo la voz del pue-blo, de los trabajadores, se elevepara cantar verdades y consignas.

Page 41: Cuadernos marxistas Nº 04

41

Para introducirnos en la lec-tura de su libro Patas arri-ba. La escuela del mundo al re-

vés, Eduardo Galeano advierte queel texto –al parecer surgido de subrillante imaginación– es simple-mente un resultado de la observa-ción de la realidad. El autor nos re-cuerda que «después de visitar el paísde las maravillas, Alicia se metió enun espejo para descubrir el mundoal revés. Si Alicia renaciera en nues-tros días, no necesitaría atravesarningún espejo: le bastaría asomarse

por Rina Bertaccini*

OTRA DE PIRATAS

El proyecto de la OTAN sobre Malvinas yel Atlántico Sur

a la ventana». Las recientes declara-ciones del primer ministro británi-co David Cameron acusando de«colonialismo» a la República Ar-gentina merecerían figurar en estelibro de Galeano.

Como no podemos pensarque semejante desatino se debe a laignorancia, preferimos preguntar-nos a dónde apunta la desvergüen-za del representante oficial del im-perio que todavía en el siglo XXImantiene en el mundo por lo me-nos doce posesiones coloniales con-

quistadas mediante guerras y actosde piratería. Precisamente de esemodo, y con la ayuda decisiva delos EEUU, en 1833, desalojaronviolentamente a los argentinos quevivían en Malvinas y trasplantarona súbditos británicos, provenientesde distintos lugares, con el objetivode consolidar la ocupación colo-nial que mantienen desde hace ya179 años. Ese acto pirata –que nofue un hecho aislado sino la expre-sión de una política de expansióncolonial desplegada en el mundo

* Presidenta del Mopassol y vicepresidenta del Consejo Mundial por la Paz.

Page 42: Cuadernos marxistas Nº 04

42

entero– es el origen de la pobla-ción malvinense que ahora quierenpresentar como un pueblo con de-recho a la autodeterminación.

Paralelamente reiteran una vezmás su negativa a iniciar negocia-ciones con la República Argentinapara resolver la verdadera cuestiónde fondo que es la soberanía sobrelos archipiélagos del Atlántico Sur,tal como proponen las sucesivasresoluciones de las Naciones Uni-das sobre Malvinas y en correspon-dencia con la necesidad de ponerfin a esa rémora del pasado que sonlas ocupaciones coloniales. Aunque,por cierto, no se trata únicamentede una supervivencia del pasadocolonial. Las Islas Malvinas, Geor-gias del Sur y Sandwich del Sur,como lo hemos señalado en traba-jos anteriores1, son hoy una piezaimportante en la estrategia globaldel imperialismo y particularmenteen el accionar de la Organizacióndel Tratado del Atlántico Norte(OTAN), maquinaria de guerra, ac-tualmente extendida por todo elplaneta que funciona como puntade lanza de las agresiones armadasy como reaseguro del proyectoimperialista de dominación.

La posesión de nuestros archi-piélagos les permite el control dela parte sur del Océano Atlántico,de las rutas marítimas que unenAmérica del Sur con Africa y su co-nexión con el continente Antárticoy con los países del Pacífico a tra-

vés del Estrecho de Magallanes yel Pasaje de Drake, todo lo cual tie-ne una enorme importancia econó-mica y geopolítica. Están en juego loscuantiosos recursos naturales de la pla-taforma continental argentina –una delas más extensas del mundo– que hoyusufructúan ilegalmente mediante laventa de licencias de pesca y de ex-ploración de petróleo a empresastrasnacionales, de lo cual obtienenganancias millonarias a costa de ladepredación de bienes naturales quepertenecen al pueblo argentino.

Es por todo ello que se niegana entablar negociaciones por la so-beranía. Es precisamente para res-guardar el despojo, pero tambiénpara contribuir a la extensión glo-bal de la OTAN que han construi-do en la Isla Soledad (Archipiélagode las Malvinas) la gran base mili-tar de Mount Pleasant, inauguradaen 1986, que dispone de una pistade aterrizaje de 2.600 metros delongitud, un puerto de aguas pro-fundas donde atracan submarinosatómicos, silos para almacenar ar-mas nucleares e instalaciones concapacidad para albergar varios mi-les de efectivos militares. Obvia-mente, no hace falta tamaño encla-ve militar para «defender a 2.800malvinenses» que no son objeto deataque alguno. Por el contrario laFortaleza de la OTAN en Malvi-nas –como parte de una red mun-dial de control y espionaje que in-cluye alrededor de mil bases mili-

tares extranjeras distribuidas en to-dos los mares y todos los conti-nentes– constituye una amenaza realpara los pueblos de la región puesacerca peligrosamente la guerra alas costas latinoamericanas.

Pero, además, la misma exis-tencia de la Fortaleza Malvinas y lasactividades de entrenamiento béli-co que en ella se realizan contradi-cen abiertamente la Resolución 41/11 de las Naciones Unidas que de-clara el Atlántico Sur una Zona dePaz y Cooperación. En la mismapolítica se inscribe la reciente deci-sión unilateral británica de estable-cer en torno a las Islas Georgias ySandwich del Sur una zona de ex-clusión pesquera de un millón dekilómetros cuadrados que será pa-trullada por naves de guerra delReino Unido; al igual que el pro-vocativo anuncio del envío dellpríncipe Williams a entrenarse en labase de Mount Pleasant, en el mesde marzo, justamente al cumplirse30 años de la Guerra de Malvinas.

Vale recordar que la citada Reso-lución de la Asamblea General dela ONU, aprobada el 27 de octu-bre de 1986, puntualmente (párra-fo 3º) «exhorta a todos los Esta-dos de todas las demás regiones,en especial a los Estados militar-mente importantes, a que respetenescrupulosamente la región del At-lántico Sur como zona de paz y co-operación, en particular mediantela reducción y eventual eliminación

1 Por ejemplo, Malvinas en el plan global del imperialismo, Julio Laborde y Rina Bertaccini, Editorial Anteo, Buenos Aires, 1987.

Page 43: Cuadernos marxistas Nº 04

43

de su presencia militar en dicha re-gión, la no introducción de armasnucleares o de otras armas de des-trucción masiva y la no extensión ala región de rivalidades y conflictosque le sean ajenas».

Todo lo cual, agregado a lareactivación, en 2008, de la IV Flo-ta de Guerra de los Estados Uni-dos que se desplaza libremente «porlas aguas azules, verdes y marrones»del hemisferio occidental, instalanuevas e inquietantes amenazas a lapaz en Nuestra América.

Para calibrar adecuadamente lamagnitud de tales amenazas resultaimprescindible profundizar el análi-sis del «actual desarrollo de la crisiscapitalista mundial»2 y tomar encuenta, por ejemplo, «los recientessucesos en el mundo árabe, quecombinan estallidos populares sinalternativas de poder organizadascon operaciones neocoloniales delimperio, que abarcan desde manio-bras de inteligencia hasta la interven-ción militar directa». En lo militar,el caso de Libia indica que, en elmarco de la presente etapa de pro-fundización de la crisis económica«no estamos exentos (…) de que seproduzcan nuevos conflictos»3 .

Tal como advierte el economis-ta Jorge Beinstein «nos encontramosante la apariencia de una convergen-cia de numerosas ‘crisis’, en reali-dad se trata de una única crisis gi-

gantesca, con diversos rostros, dedimensión (planetaria) nunca antesvista en la historia, su aspecto es elde una gran crepúsculo que ame-naza prolongarse durante un largoperíodo»4. Beinstein señala ademásotro dato de la realidad que nopuede ignorarse a la hora de eva-luar peligros de guerra: «Actualmen-te el Complejo Militar Industrialnorteamericano (en torno del cualse reproducen los de sus socios dela OTAN) gasta en términos realesmás de un billón (un millón de mi-llones) de dólares), contribuye demanera creciente al déficit fiscal ypor consiguiente al endeudamien-to del Imperio…»5.

Tal volumen de gastos impro-ductivos no hace sino agudizar lacrisis capitalista especialmente en lospaíses centrales –Gran Bretaña yEstados Unidos entre ellos– cuyaselites gobernantes pueden verse ten-tadas a buscar «soluciones» a la cri-sis en nuevas aventuras imperiales.

La militarizaciónimperialista en nuestros días

Volvamos ahora a la cuestiónde la OTAN, el bloque militar queen el presente protagoniza todas lasguerras y agresiones armadas con-tra los pueblos. En su última cum-bre, realizada en Portugal en no-

viembre de 2010, la OTAN ha pro-clamado su carácter global, es de-cir la decisión de actuar en todoslos continentes y todos los espaciosmarítimos del planeta como brazoarmado del poder imperial.

Para eso cuenta con la red debases militares extranjeras de Esta-dos Unidos, Gran Bretaña y otrosEstados de la OTAN, con las flo-tas de guerra de las potencias cen-trales (portaviones, barcos, subma-rinos atómicos y aviones de com-bate) que constituyen verdaderasbases militares móviles; con unamasa letal de armamentos moder-nos capaces de destruir el mundo;con decenas de miles de efectivosmilitares de las fuerzas armadas yuna multitud de mercenarios reclu-tados por «empresas contratistas»,repartidos en distintos países. Alrespecto, y aunque es sabido, noconviene olvidar que desde su con-formación –hace más de 60 años–el Jefe de la OTAN ha sido y siguesiendo un general del Pentágono, esdecir el Ministerio de Defensa delos Estados Unidos, la principalpotencia militar de la Tierra, dedonde provienen las orientacionesestratégicas, la dirección efectiva y losplanes concretos que llevarán a cabolos miembros de la alianza atlánticapara mantener la dominación im-perialista a escala global.

De esta maquinaria infernal

2 Ver Patricio Echegaray, Nota editorial de Cuadernos Marxistas, octubre de 2011, Pág. 4.3 Idem, Pág. 5.4 Jorge Beinstein, «¿Comienzo del fin –o fin del comienzo- de la crisis?», en Cuadernos Marxistas, noviembre de 2010, Pág. 17.5Idem, Pág. 20.

Page 44: Cuadernos marxistas Nº 04

44

provienen las principales amenazasque enfrenta la humanidad en estosdías. Por eso es necesario conocersus planes, que pueden advertirsecon bastante claridad en la lecturade los actuales documentos oficia-les del Pentágono.

Formas renovadas paraun viejo proyecto

La militarización imperialista enAmérica Latina se ha expresado his-tóricamente de maneras diversas,pero su esencia no ha variado. Tan-to en las nuevas como en las viejasformas el objetivo ha sido y siguesiendo el mismo: lograr la domi-nación y la explotación de nuestrospueblos. Pero constatar que no havariado la esencia de la dominaciónno nos exime de la necesidad deestudiar las formas renovadas queasume el proyecto imperial, paradenunciar sus propósitos y enfren-tar con éxito la actual ofensiva deremilitarización imperialista en elcontinente. Dicho esto quisiera cen-trar la atención en dos documen-tos elaborados en los últimos años.Me refiero al «Joint Vision 2020»(Visión conjunta 2020) y a otro ti-tulado «United States SouthernCommand Strategy 2018 «(Estra-tegia del Comando Sur de losEEUU 2018). A diferencia de losbastante conocidos Documentos deSanta Fe que fueron elaboradospara el Pentágono por un comitéde expertos convocados al efecto,los dos textos que estoy comentan-do están redactados y suscriptos di-rectamente por el conjunto de los

comandos de las fuerzas armadasestadounidenses el primero y porel Comando Sur el segundo.

El núcleo del documento Vi-sión Conjunta 2020 es la doctrinade la dominación de espectro com-pleto. Pero antes de referirnos es-pecíficamente a este concepto con-viene anotar algunos aspectos quesurgen de la lectura de VC 2020.El documento no está pensadocomo un proyecto para el futurosino como un proceso de actua-lización permanente de la doctri-na militar de los EEUU. Centrala atención en un enfoque estra-tégico definido como «la necesi-dad de prepararnos ya para unfuturo incierto».

El texto permite, además, en-trever cómo el gobierno norteame-ricano visualiza su propia políticade dominación y el próximo desa-rrollo de la misma, cuando dicepor ejemplo: «Los intereses globa-les y las responsabilidades de losEstados Unidos persistirán, y nohay ninguna indicación de que lasamenazas hacia esos intereses o alos de nuestros aliados vayan a des-aparecer. Los conceptos estratégi-cos de fuerza decisiva, proyecciónde poder, presencia de ultramar yagilidad estratégica continuarán ri-

giendo nuestros esfuerzos paracumplir con esas responsabilidadesy enfrentar los retos del futuro.»

Dominación de espectrocompleto

Según VC2020, la dominaciónde espectro completo es «la capa-cidad de las fuerzas de los EEUU,operando unilateralmente o en com-binación con aliados multinaciona-les o fuerzas inter-agencias, de de-rrotar a cualquier adversario y con-trolar cualquier situación a lo largode todo el espectro de operacionesmilitares.» Y, explica: dichas opera-ciones «incluyen el mantenimiento deuna postura de disuasión estratégi-ca. Incluyen acción en el teatro deoperaciones y actividades de presen-cia. Incluyen el conflicto con empleode fuerzas estratégicas y armas dedestrucción masiva, guerras de tea-tro principal, conflictos regionales ycontingencias de menor escala. Tam-bién incluyen aquellas situaciones am-biguas que se ubican entre la paz y laguerra, tales como las operacionespara mantener y hacer cumplir la paz,así como operaciones no combati-vas de ayuda humanitaria y el apoyoa las autoridades locales.»

Page 45: Cuadernos marxistas Nº 04

45

Con toda crudeza nos están ad-virtiendo qué podemos esperar delas guerras imperialistas del sigloXXI: una acción global desplegadaen todos los dominios: el específi-camente militar con su poder letal,pero también en el plano político,económico, ideológico y cultural, sinlimitación o condicionamiento ju-rídico o moral de ninguna clase.No es una simple amenaza, es loque hicieron el año 2011 en Libia;es la forma en que ejecutaron aBin Laden, en Pakistán, violandotodas las normas de convivenciainternacional. Es lo que denunciael investigador canadiense RickRozoff en relación al uso de avio-nes sin piloto en ataques bélicos:«libre de riesgo y por encima de laley; EEUU globaliza la guerra dedrones»; lo hace ahora en Somalia,como lo había hecho ya en Afga-nistán, Iraq, Pakistán, Yemen y másrecientemente en Libia6.

Por si alguien duda de sus in-tenciones, VC2020 indica: «Si nues-tras Fuerzas Armadas van a ser másrápidas, más letales, y más precisasen el 2020 de lo que son hoy endía, debemos continuar invirtiendoen y desarrollando nuevas capaci-dades militares». Para eso el presu-puesto de guerra de los EstadosUnidos crece cada año y en el pe-ríodo actual es equivalente al pre-supuesto militar del resto de losdemás países del mundo tomadosen conjunto.

La guerra, en los términos que laplantea VC2020, requiere de una con-ducción unificada; un «enfoque inte-grado (que) descansa en el uso de to-das las herramientas del estadista paraalcanzar nuestros objetivos naciona-les, unilateralmente cuando sea nece-sario, al tiempo que en el hacer unuso óptimo de las habilidades y losrecursos provistos por las fuerzasmilitares multinacionales, las organi-zaciones regionales e internacionales,las organizaciones no gubernamen-tales y las organizaciones voluntariasprivadas cuando sea posible».

El contexto estratégico

EEUU se ve a sí mismo comoun sheriff global. En ese sentidoafirma : En el mundo del año 2020,«los Estados Unidos continuaránteniendo intereses globales y esta-rán comprometidos con una seriede actores regionales». Y agrega:«Nuestra seguridad e intereses eco-nómicos, así como nuestros valo-res políticos, darán el ímpetu paranuestros compromisos con nues-tros socios a nivel internacional. Lafuerza conjunta 2020 debe estarpreparada para ‘ganar’ en todo elespectro de las operaciones milita-res en cualquier lugar del mundo,para operar con fuerzas multina-cionales, y para coordinar operacio-nes militares, según sea necesario, conagencias gubernamentales y con or-

ganizaciones internacionales».Precisamente, el concepto de

«dominación de espectro comple-to implica que las fuerzas de losEEUU sean capaces de conduciroperaciones rápida, sostenida y sin-cronizadamente con combinacionesde fuerzas diseñadas a la medidapara situaciones específicas y conacceso a y libertad de operar en to-dos los dominios: en el espacio,mar, aire, tierra, y en la informa-ción. Adicionalmente, dada la na-turaleza global de nuestros intere-ses y obligaciones, los Estados Uni-dos deben mantener sus fuerzas depresencia en ultramar y la capaci-dad de proyectar poder rápida-mente por todo el mundo en or-den de lograr la dominación de es-pectro total».

Esto, que suscriben conjunta-mente los comandos del Pentágo-no, es exactamente lo que se haplanteado la reciente cumbre de laOTAN realizada en Portugal en no-viembre de 2010, cuando –comoseñalamos anteriormente– procla-ma el papel global de dicha alianza.

Interoperabilidad ycoordinación inter-agencias

El documento VC 2020 des-taca además que «la interoperabili-dad es la base de las operacionesmultinacionales e inter-agenciasefectivas». Y agrega como elemento

6 Rick Rozoff, Global Research, 11 /07 /2011), «U.S. Globalizes Drone Warfare» en www.globalresearch.ca

Page 46: Cuadernos marxistas Nº 04

46

fundamental «la coordinación quetiene lugar entre elementos del De-partamento de Defensa y las agen-cias involucradas del Gobierno delos EEUU, organizaciones no-gubernamentales, organizacionesvoluntarias privadas, y organiza-ciones regionales e internaciona-les con el propósito de alcanzarun objetivo», lo cual debería lo-grarse «a pesar de las diversas cul-turas, intereses en pugna y diferen-tes prioridades de las organizacio-nes participantes».

Me permito subrayar este pá-rrafo porque en él se explicita loque el imperio está aplicando sis-temáticamente en nuestro continen-te. En la política de militarizaciónactúan no solamente las fuerzas ar-madas de EEUU propiamente di-chas sino además otras agencias gu-bernamentales –como la USAID, laNED– y cada vez más involucran aorganizaciones no gubernamentalesy organizaciones privadas de volun-tarios que supuestamente vienen a«ayudar generosamente» a la pobla-ción en proyectos de paz y desarro-llo y cuentan con enormes recursosfinancieros para llevar adelante susplanes. Precisamente, en el segundodocumento que he mencionado alprincipio se concretan los concep-tos de VC 2020 como objetivos es-tratégicos del gobierno de EEUUpara América Latina y el Caribe.

La Estrategia delComando Sur hacia 2018

En este documento (ECS2018), fechado en diciembre de

2008, se definen las metas y los ca-minos para convertir al ComandoSur de los EEUU «en una organi-zación conjunta interagencial». Elpunto de partida es la idea de que,a pesar de la diversidad de histo-rias y tradiciones, «las Américas es-tán inseparablemente vinculadas».Citando al entonces presidenteGeorge W. Bush, el documento afir-ma: «Estados Unidos está vincula-do a los socios hemisféricos de unmodo incomparable a ningún otrolugar del mundo.»

En base a ello, propone: «De-bemos trabajar juntos, como socios,para hacer realidad la ‘promesa’ deprosperidad futura de nuestro he-misferio compartido. Nuestra visión,misión y metas, junto con la coope-ración de nuestros socios interagen-ciales y los países socios nos permi-tirán cumplir la promesa». Juntosdebemos enfrentar los problemas ydesafíos que nos amenazan, entreellos la pobreza y la desigualdad, lacorrupción, el terrorismo, el narco-tráfico y otros delitos.

Para eso, nuestra «misión actual(es) llevar a cabo operaciones mili-tares y fomentar la cooperación deseguridad para lograr los objetivosestratégicos de los EE UU».

Aunque está dicho con bastanteclaridad me permito llamar la aten-ción sobre el texto anterior: lo queplantean a los países de la región esasociarse para asegurar los interesesde los EEUU. Bajo el lema «Amis-tad y cooperación por las Améri-cas» han iniciado la transformacióndel Comando Sur para poner enpráctica una estrategia de comandoque reserva para el Pentágono la di-

rección general y el trazado del plande operaciones.

Son bastante conocidos los in-tereses comerciales de EEUU res-pecto a la región, así como su nece-sidad de disponer de las fuentes deenergía, la biodiversidad, el agua yotros recursos naturales. Comoejemplo, y según los datos que men-cionan en este documento, los Esta-dos Unidos necesitarán, en las próxi-mas dos décadas, un 31% más depetróleo y un 62% más de gas natural.

Para cumplirla promesa hacia 2018

El documento reconoce quesigue las orientaciones fijadas en losdocumentos generales de la FFAA,en especial los que se refieren a laEstrategia de Seguridad Nacionaly la Estrategia Militar Nacional (en-tre ellos el antes citado VC 2020).

Y agrega: «Los desafíos de se-guridad en nuestro hemisferio noson amenazas militares tradiciona-les y, a menudo, están interrelacio-nados e involucran a actores delestado y fuera de él. Estas amena-zas, desafíos y condiciones requie-ren un enfoque de asociación y co-laboración interagencial.

Y establece cuatro metas parael Comando Sur, entre ellas: Ga-rantizar la seguridad en el hemis-ferio occidental; en primer lugarla de los Estados Unidos. Señala:«Garantizamos la defensa avanza-da de los Estados Unidos al de-fender los accesos del sur. Debe-mos mantener nuestra capacidadde operar en los espacios, aguas

Page 47: Cuadernos marxistas Nº 04

47

internacionales, aire y ciberespaciocomunes mundiales y desde ellos».Aquí nos están diciendo que paradefender su seguridad tienen «de-recho» a desplegar sus tropas entodo el planeta, incluido el espa-cio circundante.

La segunda meta fijada es ase-gurar la estabilidad en la región. Paraello, el Comando Sur «ayudará aenfocar las campañas interagencia-les para avanzar más allá de las ac-tividades tradicionales de coope-ración de seguridad, como ejerci-cios combinados/multinacionales,operaciones contra-narcóticos ycontactos militares y de defensa,(…) apoyará activamente a las en-tidades no gubernamentales inte-ragenciales y las instituciones pú-blicas y privadas con el fin demejorar la estabilidad regional,(…) y apoyará enérgicamente elFinanciamiento Militar Extranjero,para que nuestros países sociospuedan adquirir artículos, serviciosy entrenamiento militares de losEstados Unidos».

La tercera y cuarta metas se re-fieren a «promover alianzas» y trans-formar el propio Comando Surpara responder a esas exigencias.Para cada una de las metas el do-cumento propone una serie deobjetivos, algunos son particular-mente preocupantes, y están for-mulados como el propósito de:

• «Aumentar el apoyo de inteli-gencia, vigilancia y reconocimientoa las actividades que procuran re-ducir el tráfico ilícito y negar refu-gio a las organizaciones terroristasen áreas mal gobernadas».

• «Junto con el Plan Regional de

Guerra contra el Terrorismo, seguircreando iniciativas de cooperacióncon países socios, a fin de destruirlas conexiones del narcotráfico conlas redes terroristas y otras activi-dades de apoyo al terrorismo».

• «Trabajar a través de los canalespolítico-militares y diplomáticospara ampliar la libertad de movi-miento de los Estados Unidos entodo el hemisferio occidental».

• «Ayudar a los ejércitos naciona-les a desarrollar capacidades adi-cionales que garanticen el gobiernoefectivo de sus territorios, específi-camente en territorios sub gober-nados o en estados fallidos o débi-les que pueden constituir un refu-gio para el terrorismo».

Las expresiones son bastantes cla-ras y nos eximen de mayores co-mentarios. Sin embargo lo que vie-ne ocurriendo –por ejemplo, enMéxico con la dominante presen-cia estadounidense en la militari-zación del llamado «combate anti-droga» que en pocos años ya llevamiles de muertos– justifica amplia-mente nuestra inquietud. Especial-mente ahora con la firma de unconvenio de seguridad entre Es-tados Unidos y los países de Amé-rica Central que permite extenderla trágica experiencia de México alresto de los países centroamerica-nos.

La transformacióndel Comando Sur

Quisiera ahora llamar la atenciónsobre los párrafos de ECS 2018 quese refieren a la transformación del

propio Comando Sur el cual «de unaorganización militar tradicional»pasará a ser «un Comando Con-junto Interagencial de Seguridad»,con los objetivos de «mejorar lasincronización de las operacionesy las actividades entre el US-SOUTHCOM y otras organiza-ciones del gobierno de los EEUU»y «comprometer activamente a losresponsables de las decisiones delos socios interagenciales e integraral personal de estas agencias en for-ma permanente al personal delUSSOUTHCOM».

¿Quiénes son esas instituciones yagencias gubernamentales y por quéahora no solamente coordinan suactividad con las fuerzas armadasUSA sino que su personal se inte-gra de manera permanente al Pen-tágono, en este caso a través delComando Sur?

Lo explica el ex Secretario deEstado Colin Powell en agosto de2003 cuando da a conocer el PlanEstratégico para 2004-2009, elabo-rado por primera vez conjunta-mente por el Departamento de Es-tado y la Agencia de los EE.UUpara el Desarrollo Internacional(USAID), al definir los objetivos ymetas asociadas a los lineamientosde la estrategia de Seguridad Na-cional de 2002 en corresponden-cia con el espíritu de la Doctrina Bush.Y lo ratifica la ex Secretaria de Esta-do Condoleezza Rice, al decir: «Eneste mundo, es imposible trazar lí-neas claras y nítidas entre nuestrosintereses de seguridad, nuestros es-fuerzos de desarrollo y nuestrosideales democráticos. La diploma-cia estadounidense debe integrar y

Page 48: Cuadernos marxistas Nº 04

48

promover todas estas metas en for-ma conjunta»7.

En el período que estamos ana-lizando, la USAID ha adquiridouna gran relevancia. Pero no es laúnica agencia USA, que opera enforma similar. Para más informa-ción se pueden consultar, por ejem-plo, el documentado Informe dePaula Aguilar sobre la USAID8, asícomo el libro de Stella Calloni«Evo en la mira»9 en el cual se do-cumenta la existencia de accionesconspirativas «encabezadas por elDepartamento de Estado e imple-mentadas por la USAID y la NED,ambas consideradas como la ‘carasocial’ de la CIA, que además ac-tuaban a través de diversas ramifi-caciones en una red de ONGs».

Buscando alternativas ala militarización imperialista

En trabajos anteriores afirma-mos que los actuales procesos deintegración regional abren mayo-res posibilidades para enfrentar laestrategia imperial de dominación,lo que incluye, en particular, las po-líticas de guerra y militarización10.Y, tras destacar el papel y la im-portancia de la Unasur y su Con-sejo de Defensa Sudamericano, así

como de la Alternativa Bolivarianapara los Pueblos de Nuestra Amé-rica (ALBA), señalábamos tambiénque ese contexto puede marcar «elmomento de llevar a cabo una fuer-te ofensiva político-diplomática (…),ofensiva que seguramente contaríacon el compromiso de las fuerzaspopulares de Argentina y de toda La-tinoamérica», tendiente a poner fin aesa rémora del siglo XIX que es laocupación colonial» de Malvinas y losarchipiélagos del Atlántico Sur.

No hace falta repetir aquí las con-sideraciones que nos llevaron a esaconclusión. Lo cierto es que, frente alas recientes provocaciones y torpe-zas británicas, tanto los países delALBA, como la Unasur, el Merco-sur y los integrantes de la Comuni-dad de Estados de Latinoamérica yel Caribe (CELAC), cerraron filas enapoyo a la reivindicación de la sobe-ranía argentina, así como en la exi-gencia de que la Corona Británica res-pete las resoluciones la ONU e inicielas correspondientes negociaciones.

Pero, esta vez, la decisión de losgobiernos latinoamericanos y caribe-ños fue más allá de las declaracionesde solidaridad y adoptaron algunasmedidas concretas que afectan eco-nómica y políticamente los interesesimperialistas. Tal el caso de los Esta-dos del Mercosur y la Unasur que

acordaron prohibir el atraque debarcos con la bandera de Malvinas.Todo lo cual habla muy claro de laimportancia estratégica de los actua-les procesos de integración regionalque pueden permitir a los pueblosdel continente avanzar unidos paradefender su soberanía y enfrentar lamilitarización imperialista.

En el mismo sentido tiene enor-me significado el anuncio del canci-ller brasileño -anuncio hecho en Bra-silia durante una conferencia de pren-sa realizada el 18/01/2012, en pre-sencia del canciller británico- infor-mando que los gobiernos de Uru-guay y Brasil están trabajando «paraconvocar una conferencia de la Zonade Paz y Cooperación del AtlánticoSur, que reuniría a países suramerica-nos y africanos con costa atlántica»11.De concretarse la iniciativa, puede serotro serio revés para los planes deGran Bretaña y la OTAN en la re-gión. Resultaría muy importante que,en la conferencia proyectada, lospaíses africanos ribereños del At-lántico Sur denunciaran también laactual escalada militarista violato-ria de la Resolución de la ONUsobre la Zona de Paz y Coopera-ción y decidieran con ello unir susfuerzas a la causa de la descoloni-zación, la soberanía y la paz quese encarna en Malvinas.

7 Secretaria de Estado Condoleezza Rice, Comentarios, Georgetown School of Foreign Service, Georgetown University, Washington,DC; 18 de enero de 2006.

8 Paula Aguilar, «El rol de USAID en América Latina y el Caribe / 2006-2008»; disponible en http:/ bibliotecavirtual.clacso.org.ar/ar/libros/becas/2008/deuda/aguilar.pdf

9 Stella Calloni, «Evo en la mira. La CIA y la DEA en Bolivia». Editorial Punto de Encuentro, Buenos Aires, Argentina, 2009.10 Rina Bertaccini, «Militarización imperialista y búsqueda de alternativas», Cap.4. Editorial Cartago, Buenos Aires, 2010.11 Agencia France Press (AFP), 2012.

Page 49: Cuadernos marxistas Nº 04

49

por Marcelo F. Rodríguez*

CENTRO DE ESTUDIOS Y FORMACIÓN MARXISTA HÉCTOR P. AGOSTI

El marxismo como proyecto transformador

El pasado 21 de diciembrede 2011, fue presentado elCentro de Estudios y For-

mación Marxista Héctor P. Agosti(CEFMA), un espacio impulsadopor el Partido Comunista con elobjetivo de promover, según con-signa su declaración de lanzamien-to, «desde el marco de la teoríamarxista y el pensamiento revolu-cionario, el estudio y la reflexiónsobre la realidad contemporánea ylos procesos históricos y políticosque han jalonado la lucha por laemancipación de los pueblos. Es-tudio y reflexión, huelga aclarar, queestán concebidos como necesariosinsumos para orientar la praxistransformadora de los pueblos deNuestra América».

Con estos objetivos ponemosen marcha esta importante iniciati-va que se inscribe en una larga y fe-cunda tradición que siempre ha te-nido a la formación de cuadroscomo una de sus tareas centrales. Alo largo de estos 94 años de histo-ria, han sido miles los compañerosy las compañeras que, formados ennuestro Partido y en la FEDE hancontribuido a la causa de la libera-ción y emancipación de la clase tra-bajadora en nuestro país y en elmundo entero.

En esta búsqueda, asumimos eldesafío de crear desde nuestra iden-tidad comunista un espacio desdeel cual aportar a esta construcción,conscientes de que asistimos a un

momento de recuperación plenadel prestigio del marxismo comometodología para penetrar en elconocimiento de la realidad y ayu-dar a crear las alternativas para susuperación.

El CEFMA nace en el contex-to de una crisis del sistema capita-lista de enormes proporciones que,a diferencia de las que le precedie-ron, tiene un alcance civilizatorio, yaque esta no se reduce a sus aspec-tos económico-financieros sino queafecta cruciales cuestiones talescomo la energía, el medio ambien-te, la alimentación y las pautas deconsumo de una civilización cons-truida sobre el derroche de los re-cursos y la explotación desenfrena-da de la naturaleza.

Frente a esta realidad, el discursodel neoliberalismo que asentaba su

«indiscutible triunfo» en el supues-to fin de las ideologías, de las re-voluciones, del socialismo y del co-munismo evidenció su falsedad, yestos preceptos sobre los cualeshabía construido su hegemonía enlas dos últimas décadas del siglo XX,perdieron consenso dejando al des-cubierto, de forma cada vez másevidente, la esencia autoritaria cons-titutiva del proyecto neoliberal.

El proceso económico iniciadoen Latinoamérica desde mediadosde los años 70, del cual en la Argen-tina podemos destacar sintética yarbitrariamente el Rodrigazo duranteel gobierno de Isabel Perón, la «ta-blita» de Martínez de Hoz bajo ladictadura militar, el plan Austral yla hiperinflación en épocas de RaúlAlfonsín, las privatizaciones y laconvertibilidad de Carlos Menem

* Ensayista.

Page 50: Cuadernos marxistas Nº 04

50

hasta llegar al «corralito» de Fernan-do de la Rúa y del omnipresenteDomingo Cavallo, se desarrollósobre el mito de que las recetas neo-liberales eran la tabla de salvaciónpara nuestros países.

Para construir este mito se echómano, en concordancia con los dic-tados del llamado Consenso deWashington de mediados de los 80,al dogma de la globalización, im-perativo que todos debían acatarpara ser «parte del mundo». En estesentido, se llevó adelante un proce-so de desmantelamiento de los espa-cios y recursos públicos y sociales, afavor de los grandes grupos econó-micos locales y externos, se favore-ció a las empresas de servicios im-pulsando una política de desindus-trialización y se abrieron las puertasal capital financiero-especulativo.

En nombre de la globalizacióny la competitividad se justificaronla disminución de los salarios reales,la explosión del desempleo, el des-mantelamiento de las proteccionessociales y la precariedad y el deterio-ro de las condiciones laborales, en-tre otras reformas presentadas como«inevitables y necesarias».

De la mano de las transforma-ciones de los sistemas normativosy legales que estructuraban las rela-ciones laborales, se produjo un pro-ceso de des-salarización, expansióndel cuentapropismo y una acentua-ción de la fragmentación de las ocu-paciones laborales en términos de

la incorporación desigual del cono-cimiento científico y tecnológico enlos puestos de trabajo, con una dis-tribución cada vez más concentra-da del ingreso y la fragmentacióndel salario en el interior de los dis-tintos sectores laborales.

La crisis política, económica ysocial alcanzó en Argentina magni-tudes extremas. La exclusión eco-nómica y la marginación social, con-secuencias del desempleo y del cri-minal crecimiento de la pobreza,fueron modelando las distintas eta-pas y metodologías del conflictosocial que, a la defensiva y política-mente desarticuladas se dieron enel país. Las izquierdas no fuimosajenas a esta fragmentación y dis-persión de fuerzas.

Esto quedó evidenciado contoda claridad a fines de 2001, cuan-do el sistema político enfrentó loque en términos de Gramsci po-dríamos calificar como una crisisorgánica del sistema, la cual fuedescripta por el intelectual italianode la siguiente manera: «Al llegar aun cierto punto de su vida históri-ca, los grupos sociales se separande sus partidos tradicionales; esdecir, los partidos tradicionales, ensu determinada forma organizati-va, con los hombres determinadosque los constituyen, los representany los dirigen, dejan de ser recono-cidos como expresión propia porsu clase o su fracción de clase»1.

Es así que las históricas jorna-

das de lucha vividas en la Argenti-na a partir del 19 de diciembre de2001 reflejaron dramáticamente losefectos devastadores que el mode-lo de acumulación neoliberal y latan mentada globalización habíantenido sobre la sociedad.

Es que más allá de los picos deconflictividad alcanzados, de suimportante saldo de experienciaacumulada, las características prin-cipales fueron la dispersión de lasluchas, el carácter defensivo y sec-torial de las mismas y la imposibili-dad de dar a luz un movimientopolítico-social con la fuerza y or-ganización suficientes para interve-nir de forma efectiva en la luchapor el poder.

La falsa dicotomía entre lo so-cial y lo político, instaurada a tra-vés de la hegemonía conquistadapor el pensamiento único neolibe-ral, logró su objetivo de escindirlo colectivo de lo individual, en elmismo sentido que el capitalismobusca separar formalmente lo eco-nómico de lo político.

Entendiendo la política comoherramienta de trasformación, estasuerte de «reclusión» de la protes-ta a ámbitos fragmentarios de lo«social» como refractario a lo «po-lítico», lo «sindical» o cualquier tipode organización clásica, presentóuna encrucijada a sortear en unasociedad cuyas transformacionesestructurales eran cada vez másevidentes.

1 Gramsci, Antonio. La política y el Estado moderno (Barcelona: Planeta-Agostini, 1985).

Page 51: Cuadernos marxistas Nº 04

51

De la misma manera, la hege-monía del pensamiento único neo-liberal generó un grave problemaen el campo teórico. Encerrada ensí misma, confinada al espacio aca-démico, la teoría sufrió, comobien explica Atilio Boron, «un pro-ceso de descomposición, y de guíapara la acción como debe ser, seconvierte en una escolástica aca-démica carente de todo soplo vi-tal; a su vez, la práctica históricade las fuerzas de izquierda, socia-listas y comunistas, debe transitarpor la angosta franja que dejan li-bre, por un lado, la resignaciónreformista y, por el otro, el ‘revo-lucionarismo abstracto’ o, parausar la expresión de Lenin, el ‘iz-quierdismo como enfermedadinfantil’ del comunismo. Esta es-cisión entre teoría y práctica es unade las causantes de la crisis por laque atraviesa el marxismo de nues-tro tiempo. Se debe, por eso mis-mo, recomponer la unidad entreuna y otra; recuperar en el mar-xismo la organicidad de su des-envolvimiento histórico significaconcebirlo como una práctica teó-rica que se encuentra inextricable-mente unida al desarrollo de lasluchas sociales»2.

Hoy, la crisis capitalista pre-senta enormes desafíos y una re-novada oportunidad para las fuer-zas revolucionarias, para quienesentendemos al marxismo como

un proyecto que busca la radicaltransformación de la sociedadactual y la superación del capita-lismo a través de la crítica, la in-terpretación y el conocimiento delmismo. Un proyecto en el cual lateoría y la práctica son una uni-dad indisoluble, haciendo delmarxismo una tradición vivienteque reaviva su fuego en la ince-sante dialéctica entre el pasado yel presente y se convierte en indis-pensable instrumento a la hora decambiar al mundo.

En la nueva situación de Amé-rica Latina y Argentina se puedencontar por miles los hombres ymujeres, particularmente entre lasjóvenes generaciones, que vuelvena abrazar la militancia política y as-piran a relanzar y recrear la luchapor el socialismo.

El CEFMA pretende producirun salto en calidad y en cantidad enla incorporación de estas nuevasgeneraciones a la lucha política, paraque puedan desarrollar un avanceen el proceso de cambios estructu-rales en dirección a la necesaria Re-volución Socialista de LiberaciónNacional en nuestro país.

Esta es una tarea que ha ma-durado como exigencia, comonecesidad, pero también comoposibilidad real.

El clima de época por el queatravesamos nos impone superarla crisis de alternativa que coexiste

con la profunda crisis capitalista.Como pocas veces en la historia,cobran hoy un significado tan ple-no las palabras de Lenin «sin teo-ría revolucionaria, no hay movi-miento revolucionario posible».

Es por ello que la conforma-ción del CEFMA busca respondera la necesidad de contar con lasmejores herramientas a nuestro al-cance para enfrentar esta crisis tan-to en el terreno de la práctica po-lítica como en el de la teoría.

Entendemos que el estudio delos procesos históricos, de las di-ferentes tendencias del pensamien-to revolucionario en sus aspectospolíticos y culturales, y la socializa-ción de las diversas experiencias mi-litantes que aportaron y aportan ala construcción de alternativas debeformar parte de la formación teó-rico-práctica de todos aquellos queluchamos por un cambio profun-do en la organización social.

Pretendemos que este Centrosea un espacio de encuentro, inter-cambio y reflexión amplio, dondeconverjan todos aquellos sectoresque intentan construir una socie-dad poscapitalista.

El Centro de Estudios y For-mación Marxista Héctor P. Agostitiene entre sus principales objetivosaportar a un marxismo renovado,lejos de todo dogmatismo, comoindispensable aporte teórico a losproyectos concretos de transfor-

2 Boron, Atilio. Movimientos sociales, democracia y construcción de hegemonía en América Latina. Reflexiones a propósito del legado gramsciano.Texto presentado en el Seminario Internacional Gramsci y los Movimientos Sociales, Niteroi, Brasil, 2010.

Page 52: Cuadernos marxistas Nº 04

52

mación social que con urgencia re-claman los pueblos de NuestraAmérica en momentos en que ladescomposición económica, polí-tica y moral del capitalismo se tor-na insoslayable.

Testimonios en lapresentación del CEFMA

RAFAEL PAZ

Se plantea una situación de de-safío apasionante, sobre todo por-que la idea es no instaurar un Cen-tro de divulgación del marxismo,sino de penetración y profundi-dad de interrogación respecto delcómo, de qué manera pensar lascoyunturas actuales pero ademásincidiendo hacia el interior mismodel Partido. Este no es un datomenor porque sabemos, por ex-periencia histórica, la dificultadpara permear culturas políticassobre todo en condiciones de lu-cha y de dificultad en muchos ca-sos, con formas de pensamientoabiertas, críticas y sistemáticamenteexploratorias de lo que en el mun-do exista. De tal manera que lacreación del Centro de Estudios esun dato original y extraordinaria-mente importante, abierto para ladivulgación, el conocimiento y laexploración del pensamiento mar-xista en nuestro contexto y, porotro lado, fecundando en una cir-culación, que se espera positiva ha-cia el interior del Partido mismo,de las elaboraciones que finalmen-te confluirán en la constitución y laelaboración de la línea política.

STELLA CALLONI

Creo que hemos llegado al co-mienzo de algo que es importan-tísimo, quiero también decir queyo conocí a Héctor Agosti hacemuchos años cuando me acerquéal Partido y además del conteni-do del discurso de Agosti meacuerdo del peso de la palabraque tenía cuando hablaba, cómose hacía entender ante el públicoy cómo transmitía lo que paramuchos se hace muy difícil trans-mitir, la teoría revolucionaria, lateoría marxista. Quiero destacarque aquí convergemos de variasdisciplinas, de varios lugares, quevamos a formar un grupo de al-guna manera heterogéneo peroque tenemos el objetivo claro ysabemos lo que queremos lograr.Al querido comandante FidelCastro, que tanto insistió con laBatalla de Ideas, le estamos res-pondiendo con este Centro queempieza a funcionar.

ATILIO BORON

La «batalla de ideas», a las quetantas veces nos convocara Fidel,es hoy más importante que nunca.El Centro de Estudios y Forma-ción Marxista Héctor P. Agosti estálisto para ocupar su lugar. Nuestralabor será colaborar en la forma-ción de los cuadros militantes queel Partido y las organizaciones deizquierda revolucionarias necesitanpara cumplir con su misión histó-rica. Sabemos que será una largabatalla, pero también sabemos que

nuestras armas son superiores a losde nuestros adversarios.

Me he comprometido con eseproyecto y quiero ratificarlo aho-ra, en la seguridad de que, juntocon quienes hemos ido alumbran-do esta iniciativa, sabremos hon-rar el nombre de Agosti y estar ala altura de los graves desafíos, na-cionales e internacionales, que nosplantea el momento actual.

PATRICIO ECHEGARAY

El compromiso con la revo-lución, el compromiso con nues-tras ideas es lo que funciona comomotor para llevar esto adelante.Estamos en la lucha contra el ca-pitalismo «realmente existente» quees este capitalismo en crisis. Hoyla crisis del capitalismo coincidecon la crisis de las alternativas, peroa la vez la crisis capitalista nos dala posibilidad de dar todos losdebates necesarios para superar lacrisis de alternativas. Hoy pode-mos debatir sobre la revolución,sobre el socialismo, sobre el co-munismo, hoy estos son debatesque están nuevamente legitimados.

Estamos viviendo un cambiode época, debemos salir al en-cuentro de las masas juveniles quese están incorporando a la luchapolítica y el lanzamiento del CE-FMA apunta en esta dirección, elde la lucha cultural, el de la batallade ideas, el de construcción de al-ternativa, el de la conformaciónde un Frente de Liberación Na-cional y Social orientado hacia elsocialismo.

Page 53: Cuadernos marxistas Nº 04

53

Durante la década del 80las corrientes sindicalesmás avanzadas delmovimiento obreroargentino se propusieronla tarea de rehacer unacentral alternativa, capazde representar los interesesdel pueblo trabajadorrecuperando para sí lasmejores tradiciones dehonradez y compromisogestadas en su larga

trayectoria de organización y luchas. No era nada fácil. El genocidioconsumado por la última dictadura había hecho blanco estratégicoprecisamente en la camada de dirigentes gremiales heredera de esahistoria. Pero la continuidad del combate tuvo su recompensa cuandoallá por 1992, en plena resistencia al menemismo, nació la CTA. A 20 añosde aquel acontecimiento, Cuadernos Marxistas charló con Hugo Yasky, suactual secretario general, sobre los desafíos planteados desde la etapaabierta con las elecciones de octubre pasado, poco después analizadosy debatidos por el conjunto de fuerzas que conmemoraron el6° Aniversario de la Derrota del ALCA, en cuyo acto de cierreHugo Yasky manifestaba: «San Martín decía que el enemigo parece másgrande cuando se lo mira de rodillas. Hoy tenemos la convicción de queestamos de pie y que la lucha de los que nos antecedieron, y de hoy, nofue en vano. Son las distintas culturas políticas que recorren elcontinente. Unos levantando la bandera del comunismo, otros delsocialismo, del peronismo, de la liberación, pero todos unidos detrás deun mismo objetivo: demostrar que se puede vivir en un continente sinexplotación, con dignidad, en un continente que recupere su historia yque construya la segunda independencia de América Latina, que esees el objetivo que tenemos por delante».

ENTREVISTA CON HUGO YASKY, por Juan Bautista Echegaray*

«Hablamos de nivelar hacia arriba, node generar escalones abismales

entre unos y otros»

* Escritor, periodista.

Page 54: Cuadernos marxistas Nº 04

54

CM: ¿Cómo se evalúa el resultado de la votación de octubredesde la perspectiva abordada en el recordatorio de la contra cum-bre de Mar de Plata?

HY: El triunfo de Cristina tuvo un valor fundamental para el proce-so de cambio que vive la Argentina y el continente, y en particular paraaquellos países de la región cuyos gobiernos se encuentran igualmenteimpulsando avances transformadores. No se trató de una elección más,porque en su resultado quedó plasmado un posicionamiento de la clasetrabajadora y los sectores populares que mayoritariamente venían de su-frir las derrotas del 2008 y del 2009, cuando el conflicto encabezado porla Sociedad Rural abroqueló detrás de sí a una alianza del poder domi-nante que vio la posibilidad de terminar con el gobierno ya fuera «porabandono», como decía Duhalde para eludir elípticamente a un golpe deEstado, o derrotándolo en las urnas. Alineados en este bloque de poderdominante aparecieron con toda claridad los grandes grupos económi-cos locales vinculados a las multinacionales y el capital financiero, quienescuentan con una especie de expresión orgánica en términos de prensa através de los multimedios como Clarín y La Nación, y al cual se sumantambién los sectores reaccionarios de la cúpula eclesiástica. Ese entrama-do de poder, que vio la posibilidad concreta de ponerle fin al ciclo queellos denominan de «populismo» en la Argentina, es el que fue derrotadoen la elección de octubre.

CM: Al ponderar la acumulación de poderes que estaban endisputa se aprecia mucho más el triunfo.

HY: Por esto mismo ese triunfo implica a su vez la necesidad deseguir avanzando. Haber asumido el reto de enfrentar estos poderes yderrotarlos electoralmente pese a tener a casi toda la prensa en contra,implica también asumir el desafío de profundizar las transformaciones,porque si no se corren serios riesgos de que la fuerza aportada generosa-mente por el pueblo con su enorme caudal de votos se vaya diluyendoen el transcurso de los meses. Este es el gran objetivo que tenemos plan-teado los sectores populares: profundizar los cambios que confrontan almodelo de país que representa el bloque dominante. Su modelo es el deuna Argentina sumida a la relación bilateral dependiente con los EstadosUnidos, al estilo de México o de Colombia. Un país sometido a lasreglas de juego impuestas por el Fondo Monetario Internacional, un paísen donde los mercados monopólicos vuelvan a dictar a su gusto el rum-bo de nuestra economía. Un país en que el Estado retroceda, es decir, endonde la democracia retroceda para reubicarse en los marcos limitadosde una democracia de baja intensidad con un Estado fuertemente repre-sivo. Enfrentar ese proyecto de país requiere inevitablemente de políticascomo las que se fueron avizorando sobre todo después del conflicto dela 125, cuando la ruptura con el bloque dominante quedó bien clara.

CM: Y de las elecciones del 2009, cuando dicho bloque logrócosechar los efectos de una campaña mediática hasta entoncesomnipotente.

HY: Pero lejos de retroceder ante aquella tremenda ofensiva, la reac-ción del gobierno fue avanzar en medidas de política distributiva y hacer

«Alineados en este bloquede poder dominanteaparecieron con todaclaridad los grandesgrupos económicos localesvinculados a lasmultinacionales yel capital financiero,quienes cuentan con unaespecie de expresiónorgánica en términos deprensa a través de losmultimedios como Claríny La Nación, y al cual sesuman también los secto-res reaccionarios de lacúpula eclesiástica»

Page 55: Cuadernos marxistas Nº 04

55

realidad la Asignación Universal por Hijo, una bandera histórica en lalucha de la CTA. Vinieron la recuperación y extensión del sistema jubila-torio y la reestatización de Aerolíneas Argentinas, las leyes de mediosaudiovisuales y de matrimonio igualitario, la decisión de tomar distanciascada vez más nítidas y notorias de las imposiciones del FMI y de utilizarlas reservas del Banco Central para alimentar esa política de distancia-miento, de desconexión, si se quiere, con el mundo financiero internacio-nal, hasta llegar a esta suerte de relación fría y congelada que hoy existecon el Fondo. El impacto de esta serie de medidas fue lo que propició elcontundente resultado electoral a favor de Cristina. A esto le continuó lamedida de obligar a las empresas mineras y petroleras a liquidar las divi-sas, lo que provocó una nueva pulseada con el bloque en su intento degenerar una estampida del dólar que nos pusiera contra las cuerdas.

Son todos elementos que hablan de un escenario en el cual los movi-mientos sociales, las centrales sindicales, los partidos populares democrá-ticos, los sectores de la izquierda decididos a jugar en este proceso, y lasnaciones hermanas con las que compartimos la misma suerte y enfrenta-mos los mismos intereses hegemónicos, es decir, todo eso que denomi-namos bloque popular y que se expresa fronteras hacia adentro y fronte-ras hacia afuera, en la región, está llamado a constituirse en una fuerzacapaz no sólo de seguir resistiendo los embates del bloque de poderdominante, sino de pasar a la ofensiva. En esta nueva etapa es precisorecuperar una fuerte ofensiva que mediante la movilización, la participa-ción y la definición de iniciativas y propuestas, asegure la posibilidad deavanzar hacia cambios más profundos.

CM: Movilización, participación, iniciativa y propuestas sonjustamente los factores que hicieron posible aquellas jornadas denoviembre del 2005, cuyo significado e importancia adquieren unadimensión histórica trascendental.

HY: La cumbre de Mar del Plata fue la gesta popular que por prime-ra vez puso a los gobiernos de América Latina avanzando en el mismosentido que los pueblos venían pidiendo. Por primera vez el antimperia-lismo se expresó en una encrucijada histórica donde los jefes de Estado yla gente en la calle plantearon la misma dirección, el mismo rumbo. No-sotros recordamos aquella fecha rodeados de una presencia multitudina-ria de la juventud y en un marco que mostró un espectro de fuerzasplural, con diversidad, con distintas trayectorias y culturas políticas, peroconvergiendo hacia un mismo objetivo: profundizar la integración deAmérica Latina y avanzar en la construcción de la Patria Grande.

Esta idea de integración tuvo su versión empresarial en el conceptode la globalización y la mundialización de la economía, que se traducíabásicamente como la dictadura de los mercados a escala planetaria. Esaglobalización que ellos proponían fue lo que estalló en Europa. Esa ver-sión de integración que supo ser hegemónica durante la fiesta neoliberalde los 90 hoy se confronta con otra versión, la del internacionalismo delos movimientos populares y los gobiernos democráticos de AméricaLatina, y que se expresa en Venezuela, en Bolivia, en Ecuador, en Argen-tina, en Cuba, en Uruguay, en Nicaragua. Ese modelo que nosotros pro-ponemos requiere consustanciarse como expresión de unidad de todoslos sectores que la impulsan. Es vitalmente necesario que esa unidad nosbrinde las posibilidades materiales de enfrentarnos a los Estados Unidos,

«En esta nueva etapa espreciso recuperar unafuerte ofensiva quemediante la movilización,la participación y ladefinición de iniciativas ypropuestas, asegure laposibilidad de avanzarhacia cambiosmás profundos»

Page 56: Cuadernos marxistas Nº 04

56

que no han renunciado a su proyecto hegemónico, sino que simplementehan decidido archivarlo para intentar avanzar por otros cauces. Decía-mos que México es la fotografía de lo que serían nuestras naciones encaso de haber aceptado el ALCA. La experiencia de México en el NAF-TA es la prueba de cómo estaríamos nosotros si hubiéramos entrado alALCA. Pero si bien los Estados Unidos no lograron extender su patiotrasero más allá de México, siguen pensando en que ese patio debe llegarhasta Tierra del Fuego.

CM: Y al no poder meter el ALCA se mandaron con los acuer-dos bilaterales.

Tras la derrota del ALCA y para contrarrestar a los tres o cuatropresidentes que en ese momento eran la cabeza de la rebeldía, el caminoque tomaron los yanquis fue firmar Tratados de Libre Comercio bilate-rales para ir país por país restándole base de sustentación a esta alternativaregional. En ese sentido creo que fue buena la estrategia de los gobiernosde Kirchner, de Lula, de Chávez, y de Evo –que se incorpora después–de apuntar a expandir esa unidad y evitar quedarse arrinconados. Si vosno tomabas iniciativas como la UNASUR, por la vía de los TLC tedejaban finalmente acorralado en el MERCOSUR. La CELAC se corres-ponde con esa estrategia, que por otra parte te permite seguir disputandoel rol de algunas naciones, como Colombia, porque al tenerlas formandoparte del intento de armar una fuerza regional se neutraliza el accionarimpulsado desde la Casa Blanca para cooptarlas a su propia lógica.

La manera de no ser vulnerables a sus planes es no perder el rumbode este nuevo intento en que después de 200 años América Latina buscanuevamente constituirse en el marco de la unidad como una expresióncapaz de pelear por su propio destino. La clave es impedir que nos pue-dan vulnerar y hacer frágiles separándonos en términos de naciones, ypor eso tenemos que hablar en términos de región. Como lo planteabanlos compañeros en Mar del Plata cuando habló el embajador de Vene-zuela, es necesario reivindicar el día 6 de noviembre para constituirnosaño tras año en un Foro Antimperialista por la Patria Grande. Hay quelograr incorporar esta fecha a la agenda de lucha de los trabajadores ydemostrar que, así como las clases dominantes y sus voceros televisivosse dedican a añorar la época de las «relaciones serias» con los EstadosUnidos y los países centrales de Europa, nuestra meta es la integraciónhorizontal en el Sur. Hay que poner toda la energía y toda la cabeza en elSur. Construir desde la región lazos con otros países del Sur y pensar quees el Sur lo que nos puede permitir desconectarnos de ese capitalismo encrisis que hoy se expresa en la crisis del capitalismo financiero.

CM: ¿Pero cómo se conjugaría este horizonte con la idea del«capitalismo en serio» reclamada por Cristina en Cannes?

HY: Es en ese contexto que yo entendí la alusión al «anarco capitalis-mo» que hizo la Presidenta en la reunión que compartimos con la Confe-deración Sindical Internacional allá en Cannes para la reunión del G20.Hay que desconectarse de ese capitalismo en crisis. Pero no podemoseyectarnos del mundo. La única manera de desconectarnos es, aunqueparezca contradictorio, integrándonos, pero integrándonos regionalmen-te con ese Sur que también necesita sobrevivir y que sólo podrá hacerlo

«Nuestra meta es laintegración horizontal enel Sur. Hay que ponertoda la energía y toda lacabeza en el Sur. Cons-truir desde la regiónlazos con otros países delSur y pensar que es elSur lo que nos puedepermitir desconectarnosde ese capitalismo encrisis que hoy se expresaen la crisis del capitalis-mo financiero»

Page 57: Cuadernos marxistas Nº 04

57

en el marco de esa desconexión, engranando la producción regional yasentando un piso de derechos laborales y sociales que mediante la uni-dad del campo popular apunte a ser cada vez más alto.

CM: Siempre me llamó la atención el parecido geográfico yhasta cierto punto histórico que existe entre la Argentina y losEstados Unidos, pensado esto en términos de recursos naturales,pueblos originarios, conquista, independencia, genocidio indíge-na, inmigración. En el transcurso del siglo XX, y por distintas ra-zones, uno se fue convirtiendo en esa gran superpotencia mundialy el otro quedó relegado a la dependencia, no obstante alcanzó unalto nivel de desarrollo social como producto fundamentalmentede la aparición del peronismo. Ahora el panorama muestra a Esta-dos Unidos inmerso en una crisis descomunal y a la Argentina re-cuperando terreno y formando parte activa del lote de países lati-noamericanos que se agrupan inspirados en las ideas liberadorasde sus próceres independentistas. ¿Será que en el siglo XXI la ba-lanza se equilibra?

HY: Sí, claro. La Argentina es un país de una enorme potencialidad.Pensemos que en la década del 60 teníamos prácticamente los mismosniveles productivos, industriales, tecnológicos, educativos y culturales queCanadá. Las dictaduras, y especialmente la dictadura genocida de 1976, seplantearon sistemáticamente terminar con el influjo y el poder que acu-mulaba la clase trabajadora, terminar con la industria y convertir a estepaís en un país sin industria. Los planes de Martínez de Hoz y de Cavallotuvieron ese objetivo, y se cumplieron a tal punto que la Argentina sufrióuna regresión que afuera de nuestro país no se entiende. Cuando uno viajaal exterior advierte que, desde la distancia, la gente de otros países sepregunta cómo un país tan rico puede tener tanta cantidad de hambrien-tos. El proyecto de nación que se asienta en la autonomía, en la autodeter-minación, en la recuperación de nuestra soberanía alimentaria y energéti-ca, en la reindustrialización y el desarrollo tecnológico, es el único que nospuede mantener a salvo de la crisis que viven los países del norte. Lo quelos medios quieren mostrar como un estallido ocasional y episódico de laburbuja financiera es en realidad la crisis sistémica de un capitalismo que enesta etapa dejó de ser civilizatorio, dejó de ofrecer salida para contenermayorías. Es lo que están diciendo los indignados de Wall Street cuandodenuncian el país del uno por ciento: un país en donde el uno por ciento dela población acapara la riqueza a costa del sufrimiento y del padecimientodel resto. Es decir, un país que no es viable en términos de democracia y dela necesidad de sostener el nivel de vida de sus 300 millones de habitantes.

Nosotros tenemos que pensar hoy en una Argentina que sea capaz dedarle una alternativa de vida a sus 40 millones de personas. Y mirando laregión tenemos que pensar que si sumamos la potencialidad de Brasil, lade Venezuela, la de Argentina, hay recursos como para generar una espe-cie de gran mercado de consumo que puede y debe incluir y cubrir lasnecesidades de todos los sectores populares.

CM: Estados Unidos de Sudamérica.

HY: Hay que generar infraestructura pensando ya en una región que inter-cambia alimentos, energía, producción, saberes. Yo creo que esa potencialidad

«Cuando uno viajaal exterior advierteque, desde la distancia,la gente de otros paísesse pregunta cómoun país tan rico puedetener tanta cantidadde hambrientos»

Page 58: Cuadernos marxistas Nº 04

58

enorme es la que Estados Unidos tratará de liquidar una vez más. Eso es loque lamentablemente hicieron con México, país cuyo PBI está por debajode cero, es decir que no solamente se estancó sino que horadó el piso delcero. México es la imagen de un país sometido a sostener la crisis del capitalfinanciero en Estados Unidos. Teniendo en cuenta ese doloroso ejemplodebemos pensar que con esta pujanza económica actual y con esta riquezaque potencialmente podemos distribuir, tenemos al alcance un destinoque nos devuelva a la idea de formar una gran nación latinoamericanaque no solamente comparta el folklore, que no solamente comparta elimaginario colectivo identificado con una patria única, sino que tambiénlo haga desde la complementación en términos materiales, en términosde construcción política, en términos incluso militares, de alianzas queserán necesarias para asegurar geopolíticamente este proyecto.

CM: Ese uno por ciento podía contentar con cierto grado debienestar al resto porque tenía, literalmente, la vaca atada, o sea ala Argentina, Latinoamérica entera –con la honrosa excepción deCuba– y otras regiones y países del mundo. ¿Qué relevancia tie-nen los procesos de segunda independencia en relación a la crisisnorteamericana y europea?

HY: Hay una relación directa entre la aceleración de los tiempos de lacrisis en el norte y el proceso de independencia y autonomía de las nacio-nes de América Latina. Eso está demostrado, y creo que no hay queperder de vista que para que las cuentas de los países del norte cierrentienen inevitablemente que meter la mano otra vez en los países del sur.El grado de crecimiento económico de la mayoría de las naciones queestamos en proceso de cambio nos convierte sin duda en un botín ape-tecible. El intento de desestabilizar a Evo Morales, el golpe de Hondu-ras, el golpe en Venezuela, la campaña mediática contra Nicaragua, elpropio tractorazo agromediático del 2008, son todos hechos que nostienen que servir para solidificar la UNASUR, para que la apuesta a laCELAC no quede a mitad de camino, para que todos esos instrumentossirvan para consolidar nuestro ideario común en un proyecto social ynacional común.

CM: Retomando la cuestión nacional y esa bandera enarbola-da por la CTA durante tantos años como fue la Asignación Uni-versal, que ya es un hecho, ¿cuáles son las banderas que la CTAlevanta para este nuevo período?

HY: Yo creo que profundizar algunas reformas estructurales quedefinan un escenario social en que la distribución surja de extraer riquezadel grupo de los que más tienen, que es una exclusiva minoría de losargentinos, generando así condiciones de acceso a la riqueza para el gru-po de los que menos tienen, que incluye a la inmensa mayoría. Esto queparece tan simple hay que pensarlo a escala de lo que es la relación conlos grupos económicos vinculados a la explotación minera, a la explota-ción sojera, a los grupos que operan en el sector financiero. Por eso creoque entre esas reformas estructurales es urgente una reforma tributaria decarácter progresivo y la redefinición de las reglas de juego en materia delegislación de la tenencia de la tierra. Ya está la ley para frenar la extranjeri-zación de la tierra y hace falta además la ley que impida los desalojos de

«Creo que no hay queperder de vista que paraque las cuentas de lospaíses del norte cierrentienen inevitablementeque meter la mano otravez en los países del sur»

Page 59: Cuadernos marxistas Nº 04

59

los pequeños campesinos y los pueblos originarios, que en algunos casosterminan en el asesinato, como ocurrió con el compañero Cristian Ferre-yra en Santiago del Estero.

CM: ¿Qué nos podés decir a propósito de la sanción de la nue-va Ley Antiterrorista?

La sanción de la ley antiterrorista nos preocupó de veras y por esosumamos nuestra firma en coincidencia con las objeciones que en sumomento plantearon organismos como el CELS y otros. Sobre todoporque son leyes que al ser aprobadas se convierten en instrumentos quellegado el caso le vienen como anillo al dedo a aquellos sectores que,como bien sabemos, no dudan en poner límites, criminalizar y reprimirlas protestas sociales. La cuestión planteada por la sanción de esta ley esotra de las razones por las que se hace imprescindible avanzar con laintegración política regional. Nación por nación, ese tipo de imposicionesinternacionales te penetran presionadas por la lógica de que si no las aprobásentonces repercutirá en tal o cual consecuencia para el país, y así tenés unmontón de gobiernos progresistas que han aprobado leyes similares. Hayque llegar a un punto en que los gobiernos de la región establezcan pará-metros y pisos comunes que sirvan de escudo a estos chantajes que losllevan a aprobar legislaciones ajenas al marco de la política que realmenteimpulsan, leyes que parecen salidas de otro proyecto.

CM: También sonaron como de otro proyecto algunos tramosdel discurso pronunciado por Cristina para abrir las sesiones delCongreso.

HY: Ese discurso me produjo sensaciones contradictorias. Por unlado una profunda identificación con algunas cuestiones que allí se plan-tearon, como la reforma de la Carta Orgánica del Banco Central o elhomenaje a la presencia de Baltasar Garzón. Pero el tramo sobre losdocentes me produjo exactamente lo contrario. La muletilla de las cuatrohoras diarias y los tres meses de vacaciones es la misma que históricamen-te acuñaron los sectores más conservadores del país para denostar a laprofesión, a mi gremio. También se equivocó al decir que únicamentediscutimos salarios, cuando la ley de financiamiento educativo se aprobósobre la base de una propuesta nuestra.

CM: Y en una semana trágica brilló por su ausencia algún tipode autocrítica respecto al manejo del transporte público.

El grupo empresarial que tiene la concesión del Sarmiento y la Secre-taría de Transporte como supervisora de su gestión tienen que asumir lasresponsabilidades del caso. Pero la cuestión es más profunda e indicaclaramente la ausencia de una política de transporte y la necesidad impe-riosa de que el Estado recupere en sus manos el vapuleado sistema ferro-viario argentino. Por eso insisto en la necesidad de seguir apostando aconstruir correlaciones de fuerza que permitan generar la energía socialque haga posible avanzar y romper los cuellos de botella que el poderfáctico sigue planteando. Aquí no hay una especie de transición líquida,sino que los orificios los tenés que romper, y eso no se hace agarrándoselacon los docentes o guiñándole un ojo a De Mendiguren, porque además

«La sanción de la leyantiterroristanos preocupó de veras ypor eso sumamos nuestrafirma en coincidenciacon las objeciones que ensu momento plantearonorganismos como elCELS y otros. Sobretodo porque son leyes queal ser aprobadas seconvierten eninstrumentos que llegadoel caso le vienen comoanillo al dedo a aquellossectores que, como biensabemos, no dudanen poner límites,criminalizar y reprimirlas protestas sociales»

Page 60: Cuadernos marxistas Nº 04

60

esa imagen que se genera no existe en la realidad. Lo del romance entre elempresariado y el gobierno es un verso. De Mendiguren es una moscablanca dentro del empresariado y de la UIA también. No es ni el sectormás poderoso y ni siquiera el que tiene la posibilidad de juntar a todo elchiquitaje de la UIA. Es un tipo que está ahí maniobrando, que se paró enuna coyuntura donde su discurso sintoniza mejor. Pero la verdad es que elempresariado sigue parado en el mismo lugar y mira con desconfianzaeste proceso, por eso empujó cuatro o cinco corridas cambiarias con elobjetivo de hacer tambalear a todos y discutir en qué condiciones empe-zaba el nuevo mandato para los próximos cuatro años. Ese poder está enla AEA, en los bancos vinculados a los capitales yanquis, a Magnetto, aClarín y La Nación. Ese es un poder orgánico que no se inmuta ni con lasamenazas de Moreno ni con los guiños de Cristina. Ellos tienen su ruta yestán esperando el momento de pegar, como hicieron a fines del añopasado. Juegan hasta donde pueden y cuando ven que no pueden avanzarmás esperan otro momento. Si vos no tenés correlaciones de fuerza, esasembestidas las podés resistir sólo hasta cierto punto. Ellos tienen unaecuación que hoy les produce rentabilidad, pero dentro de un programaque a la larga o en el mediano plazo les debería imponer medidas que noson las que les aseguran el manejo pleno de la situación. Ellos saben quepor ahora este modelo les rinde bastante bien, pero no termina de llevarel rumbo que ellos quieren. Ellos quieren de nuevo la conexión directacon los factores de poder como el Fondo Monetario y el «mundo real»,como suelen decir. La relación con Venezuela les sirve en tanto y en cuan-to haya de por medio algún negocio. Pero la estrategia de consolidar unaunidad regional, de avanzar en un pacto de defensa regional, de un Bancodel Sur y un mercado regional con moneda propia, todo eso para ellos eschino. No creen, no confían en eso. Para ellos son más confiables lasrelaciones bilaterales con los EEUU que una integración en la que tenésque andar acordando cosas con Evo, con Chávez o con Correa. Eso seexpresa incluso en algunos sectores de la cancillería a los cuales la diplo-macia regional les parece una bofetada a sus carreras. Cuando les dicenque hay que ir a Ecuador, a Bolivia, a Venezuela, miran como diciendo«pero cómo, si yo estudié para terminar mi carrera en el Norte…». Loven como si te mandaran a hacer las prácticas de cirugía al Fiorito.

Hay que pasar a diseñar el entramado jurídico que permita construirotra base, claramente diferenciada de lo que fue el modelo neoliberal, quesea el reflejo en los marcos del derecho de esta etapa de transición haciaun Estado que garantice la distribución de la riqueza y la soberanía ali-mentaria y energética. Esto requiere fortalecer en el plano de las leyes elcimiento democrático necesario para los nuevos cambios. Tenemos elejemplo de la ley de medios audiovisuales. Es verdad que su aplicacióncompleta debe vencer la resistencia que el bloque dominante todavía im-pone para defender su poder monopólico sobre la comunicación social.Pero si no hubiese habido una ley, con todo el debate que la mismageneró, no se hubieran empezado a producir los cambios incipientes peroreales que se han dado. Las leyes por sí solas no van a definir los cambiossociales, pero van a generar mejores condiciones para que la movilizacióny la participación popular puedan dotarlas de toda la efectividad y lavigencia para la cual fueron sancionadas.

En el mismo sentido hay que seguir trabajando en las disputas concre-tas y cotidianas del día a día. Terminar con el trabajo en negro tiene que serotro gran objetivo, porque esa situación irregular obliga a que el 40 por

«Hay que pasar adiseñar el entramadojurídico que permitaconstruir otra base,claramentediferenciada de lo quefue el modelo neoliberal,que sea el reflejo en losmarcos del derecho deesta etapa de transiciónhacia un Estado quegarantice la distribuciónde la riqueza y lasoberanía alimentaria yenergética»

Page 61: Cuadernos marxistas Nº 04

61

ciento de los trabajadores esté en un piso mucho más bajo que el resto. Laasimetría que hoy existe dentro de la clase trabajadora es muy grande y si noluchamos para sacar a flote a este sector sumergido, corremos el riesgo deempezar a generar una Argentina en donde leyes como la de participaciónen las ganancias alimenten, sí, la posibilidad de ascenso de algunos sectores,pero despegando a éstos de otros sectores que también son parte de laclase trabajadora. Por eso creo que el trabajo en negro, el trabajo infantil, ladesigualdad salarial y laboral de las mujeres, son temas que tienen que estaren la agenda de manera acuciante. Porque estamos hablando de nivelarhacia arriba y no de generar escalones abismales entre unos y otros.

CM: ¿Este conjunto de fuerzas que se reunió en Mar del Platase ha planteado construir y solicitar en conjunto un espacio decomunicación audiovisual concreto?

HY: Está planteado como objetivo, pero entiendo que falta delinear-lo hacia lo concreto. Lo de Mar de Plata no tiene que ser un episodioanual. Para poder coagular esta gama tan diversa de fuerzas sociales, par-tidarias, sindicales, estudiantiles, movimientistas, hay que darle continui-dad a este espacio y aprovecharlo como una especie de paleta en que losdistintos colores y tonalidades que contiene sirvan para darle fisonomía alos sujetos sociales y políticos que expresen esta etapa. Y en eso todavíahay un retraso. Sabemos el desafío que representa el 2012 para las formassociales y políticas llamadas a expresar este nuevo momento, que están enpleno proceso de construcción. Sigue haciendo falta esforzarse para rom-per los viejos moldes y discursos que muchas veces impidieron la con-fluencia de las distintas historias y culturas políticas indispensables parasostener de manera unificada una etapa de avance. Las diferencias en elcampo de lo popular no deben primar por sobre las contradicciones conel campo antagónico. Hay unas palabras de Lula que siempre me vienen ala memoria y que repito cada vez que puedo.

CM: «Podemos tener diferencias pero no antagonismos».

HY: O en todo caso saber que las diferencias a veces importantes que

«Las diferencias en elcampo de lo popular nodeben primar por sobrelas contradicciones conel campo antagónico»

Page 62: Cuadernos marxistas Nº 04

62

existen y que no podemos negar, no pueden justificar de ninguna manerael salto hacia el otro lado. Cuando yo veo a alguna gente expresandodiscursos pseudo progresistas en una doble página de Clarín me recorreun frío de preocupación porque advierto que alguien está jugando mal, yno es Clarín. Nosotros podemos tener diferencias, pero no antagonis-mos. Es tan grande el espectro popular que necesitamos unificar para queesto sea posible que es preciso tener un exacto manejo de esas diferencias,de tal forma que sea posible dosificarlas para evitar que nos quiebren elnexo de la unidad. Con los palos que antes hacíamos empalizadas ahorahay que construir puentes. Esa es la demanda de esta etapa.

CM: Cabría concluir preguntándote si habría un puente haciala CGT y cómo ves la disputa entre ésta y el gobierno.

HY: Yo creo que con la CGT tenemos que plantearnos un nivel deunidad en la acción, que es necesaria y que tiene que pasar por poderdefender juntos todo aquello que claramente signifique avances para lostrabajadores, desde luchar contra los despidos y la prepotencia patronalhasta plantear en forma conjunta una demanda de aumento salarial o unpiso para el Consejo del Salario Mínimo Vital y Móvil. Sabemos que haycuestiones en las que no necesariamente nos vamos a posicionar igual,pero del paro nacional docente tomaron parte gremios de la CGT y de la

Los YaskyEl apellido Yasky no sólo está arraigado en las luchas del pueblo argentino a través

de Hugo, siendo que su hermano, Gabriel Yasky, se encuentra al frente del Sindicato deTrabajadores de la Industria del Gas, Derivados y Afines. Curiosamente, tenemos ade-más que en Ramos Mejía existe un pasaje ubicado entre las calles Castelli y Espora, a unacuadra de Av. de Mayo, que desde el 2001 se llama «Pasaje Concejal Salomón Yasky» enmemoria a un ilustre vecino que fuera socio fundador de los Bomberos Voluntarios deLa Matanza, fundador del Centro Socialista de Ramos Mejía y Concejal del PartidoSocialista entre 1932 y 1936. Pero además nos encontramos con la figura de SamuelYasky, primo hermano de Salomón y tío abuelo de Hugo. El abogado y contadorSamuel Yasky fue nada menos que la persona escogida por Lisandro De la Torre pararealizar la puntillosa auditoría de las cuentas frigoríficas municipales que permitió alsenador santafesino sostener con números contantes y sonantes su denuncia de las rela-ciones carnales mantenidas durante la década del 30 entre los gobiernos infames deArgentina y Gran Bretaña. Su capacidad y honradez inquebrantable continuaron al servi-cio del pueblo tras la muerte de su mentor, y en 1970 fue elegido integrante de la JuntaDirectiva Central del Encuentro Nacional de los Argentinos. «Estando en la Carpa Blan-ca –recuerda Hugo– entre todas las personas que se acercaron para expresarnos susolidaridad apareció cierto día el actor Arturo Bonín trayéndome de regalo un libro,Lisandro De la Torre de cerca, escrito por Samuel Yasky. Me contó que ese libro había sidola principal fuente de inspiración para los protagonistas de la película Asesinato en el Senadode la Nación, donde Bonín interpreta a Enzo Bordabehere y Salo Pasik a mi tío abuelo».

«Desde el punto de vistade un proyecto deconstrucción de poder yunidad, la confrontaciónentre Moyano y elgobierno es pura pérdidapara el campo popular»

Page 63: Cuadernos marxistas Nº 04

63

FutboleroHugo Yasky es hincha de Ríver y un empedernido activista del balompié: «Sí, el

fútbol fue un vicio. Yo jugaba de 7, o de 4 en cancha de once. Primero jugaba en elbarrio Don Bosco, y luego cuando me fui a vivir a Parque Patricios en una cancha frenteal parque, allí donde todavía suelen juntarse mis ex compañeros, que ahora compensancon algunas manos de truco esos minutos que el tiempo les fue descontando en laspiernas. Después jugué en la escuela. Cuando durante la dictadura me rajaron de maes-tro y pasé a laburar de metalúrgico, seguí jugando, y allí organizamos unos buenoscampeonatos de fútbol en la SIAT, hasta que la privatizaron y me volvieron a despedir.El fútbol era además una forma de juntar a los compañeros. En muchos sindicatos elreunirse para jugar al fútbol termina siendo una forma de ir vinculándose con la política.Y ojo que ahora sigo jugando, los martes o los miércoles, cuando puedo. El año pasadotuvimos un campeonato muy lindo en la CTA Capital, como con 20 equipos, y yo no sé sies que ando bien o que capaz me pasa como a alguien que cuando jugaba en la Quinta deOlivos no lo querían marcar y lo dejaban hacer goles».

CTA. Cuando se dio el conflicto aeronáutico nosotros no creíamos quehabía que defender a libro cerrado cualquier demanda corporativa, por-que detrás de algunas demandas corporativas están los capitales privadosque quieren volver a penetrar. Aerolíneas Argentinas fue el caso testigodel fracaso de la política de las privatizaciones, y ahí no coincidimos.

Tenemos diferencias, y cada uno sostendrá y defenderá la identidaddel proyecto sindical por el que ha luchado. Pero esto no significa descar-tar el hecho de que también podemos estar unidos conceptualmente entorno a un programa en común, en tanto y en cuanto ese programaexprese claramente la necesidad de avanzar en las políticas distributivas yen las políticas de resguardo del patrimonio nacional.

Desde el punto de vista de un proyecto de construcción de poder yunidad, la confrontación entre Moyano y el gobierno es pura pérdidapara el campo popular. Pero los que se están ofreciendo como recambiode la conducción son tipos orgánicos de los grupos empresarios. Con lossectores de Moyano podemos tener diferencias, pero gente como él, ocomo Schmidt, como Schilling, son tipos que tienen en algún punto amorpropio y que vienen del MTA, con quienes marchamos juntos. Los otrosla van de oficialistas pero en realidad son orgánicos del empresariado.Esa es una diferencia grande.

Por otra parte, este 2012 va a ser un año en que las contradiccionesdentro de la CGT se van a expresar con tanta o más fuerza que como sedieron dentro de la CTA. Creo que va a haber recomposición de fuerzasdentro del movimiento obrero, y en un momento de constitución de dosbloques que responden a dos proyectos de país tan claramente diferenciados,esto no es malo. Estamos en un proceso de decantación en donde las distin-tas fuerzas se irán definiendo hacia uno u otro lado, y eso se va a dar dentrode la CGT como se dio dentro de la CTA y en el conjunto de las fuerzaspolíticas. En ese proceso de decantamiento algunos quedaremos del lado dequienes quieren profundizar los cambios, y algunos saltarán del otro lado dela empalizada para sumarse a la fuerza que intenta frenar este proceso.

Page 64: Cuadernos marxistas Nº 04

64

Al conmemorar y rendir homenaje a los prota-gonistas de la primera gran huelga agraria ar-gentina conocida como El Grito de Alcorta,

reconocemos esta lucha como un importante momen-to de un reclamo vigente aún hoy, en un contexto enque el capitalismo transita una crisis civilizatoria y enque nuestra América vive un cambio de época dondesoplan vientos de liberación.

Las políticas impuestas actualmente por el impe-rialismo deben ser vistas como la continuidad de lossaqueos coloniales españoles y están totalmente con-trapuestas a los ideales y objetivos de los patriotasque, en nuestro país y en nuestra América hace 200

años, se pusieron de pie frente al colonialismo lu-chando por la integración y la liberación de la PatriaGrande latinoamericana.

Por esto no se puede condenar al colonialismo y alas oligarquías que surgieron a su amparo hace 200años e ignorar al imperialismo hoy sometiéndose a lasnuevas oligarquías locales, cuando fue justamente esaconjunción de oligarquías emergentes y de oligarquíasterratenientes las que se hicieron del poder en cadanueva república, las que en defensa de sus privilegiosen concordancia con los intereses colonialistas prime-ro, con el imperio ingles posteriormente y con el im-perio emergente de EEUU después impidieron los

por Rafael Villareal*

* Integró del Movimiento de Partidarios de la Reforma Agraria y de UPARA, y participó en 1965 en el 1º Congreso de la CGT por lareforma agraria.

A 100 AÑOS DEL GRITO DE ALCORTA

De pie frente al colonialismo

Page 65: Cuadernos marxistas Nº 04

65

sueños de integración, escudándose en una engañosaneutralidad, para finalmente aplicar la doctrina Mon-roe «América para los americanos» (del norte) con lacomplicidad de las nuevas oligarquías.

Así quedaron en el camino los sueños de los pa-triotas como la Reforma Agraria que propiciaba Arti-gas en la Banda Oriental y Belgrano aquí, quien pro-ponía para los hombres de campo un verdadero plande Reforma Agraria que contemplaba la devoluciónde tierras a las comunidades originarias, arrebatadas asangre y fuego por la conquista española genocidiocontinuado luego por Roca con el financiamiento yen beneficio de la oligarquía terrateniente.

De esta manera no sólo frustraron los sueños delos patriotas, sino que condicionaron el posterior de-sarrollo de nuestros países avanzando sobre los dere-chos de los pueblos originarios, los trabajadores, loslabradores, para ampliar su poder abriendo las puer-tas de nuestros países a los monopolios y haciendover sus intereses particulares, sus intereses de clase,como los de toda la sociedad, erigiéndose así comorepresentantes de la civilización, y como tales, plantea-ron no ahorrar sangre ni de indio ni de gaucho paraconquistar el desierto y terminar con la «barbarie».

Sobre esta base surge el proyecto de la genera-ción del 80: el país agroexportador dependiente.

En torno al Centenario y la Argentinagranero del mundo

Profundas transformaciones sociales se habían pro-ducido durante la década de 1880 que, podríamosdecir, dividieron en dos partes la historia contempo-ránea de nuestro país. Se trata de una etapa donde lasgrandes metrópolis industriales, impulsadas por nece-sidades surgidas de sus propios cambios internos, co-menzaron a tejer una renovada trama de relacionessociales dominantes que tuvo como efecto la progre-siva constitución de nuevas sociedades capitalistas de-pendientes en áreas periféricas.

Para diseñar y promover el rol asignado a las eco-nomías dependientes, el capital imperialista encontróen nuestro país dos condiciones especialmente favo-rables: la excepcional aptitud potencial de nuestras pra-deras pampeanas y un tipo de estructura social agrariarelativamente permeable a la penetración del capitalen el campo.

Tanto las condiciones del suelo, como la ausenciade una masa campesina preexistente atada a relacionesde producción capitalista, favorecieron la inmediatahabilitación de nuevas formas de explotación agrope-cuaria fácilmente adaptables a las necesidades del mer-cado internacional. Por esa razón Argentina se convir-

Page 66: Cuadernos marxistas Nº 04

66

tió en una de las regiones de mayor atractivo para lascorrientes migratorias y para las inversiones externasde varios países metropolitanos, sin embargo dichasventajas tuvieron el contrapeso de un arraigado siste-ma de apropiación territorial latifundista, consumadoen sus rasgos esenciales durante la etapa anterior.

Desde el comienzo el capital inversor debió nego-ciar con una sólida burguesía terrateniente que obligó arespetar sus sagrados derechos de propiedad. De talforma la conversión de los terratenientes ganaderos,en clase hegemónica nacional, consolidada con la ins-talación del saladero, no se produjo como consecuen-cia de una ampliación del mercado interno, sino delmercado externo.

Es decir que el capitalismo en Argentina no mar-chó contra el latifundio, sino que operó desde dentrode la gran propiedad territorial en estrecho entrelaza-miento con el capital extranjero. Así, el capitalismo agro-pecuario en la Argentina nace doblemente condicio-nado: por la orientación económica que le impone ellatifundio y por las oscilaciones y condiciones de ex-propiación externa trazadas desde el mercado exte-rior, todo lo cual implica el desarrollo de una econo-mía complementaria de los grandes centros metropo-litanos, pero también como una sociedad penetradaen todos los niveles por las diversas formas de inver-sión del capital monopólico.

Inglaterra, el país más avanzado de los países capi-talistas del siglo XIX con su vigorosa expansión econó-mica y la pérdida de colonias, como la de Norteaméri-ca, se vio en la obligación de lograr nuevas fuentes deaprovisionamiento, ya que las tierras europeas mostra-ban agotamiento y limitaciones ecológicas. Algunas in-novaciones tecnológicas y las nuevas dimensiones deltransporte en cantidad y calidad permitieron abordar laproducción en las tierras de «pan llevar» como Argenti-na, con climas templados y praderas fértiles.

De tal manera, Inglaterra interviene como prota-gonista principal en la lucha que venían librando desdetiempo atrás algunos sectores minoritarios para im-poner la agricultura en nuestro país, contra la tradicio-nal oposición de los latifundistas ganaderos, inclinan-do la balanza mediante la exportación de capitales; perocon ello impuso las condiciones del futuro desarrollo

de la agricultura. Esta definición queda expresada en laconsigna que preside la pista de exposiciones de la SRA:«cultivar el suelo es servir a la patria.». Aunque los inte-grantes de la SRA ni cultivaron ni sirvieron a la patria.

La estrategia que favorece a los ingleses es presen-tada como una gran epopeya. Se trataba de dejar atrásla Argentina pastoril, atrasada, etc., convirtiéndola enla tierra prometida para millones de personas.

Las luchas obreras

A partir de 1878, los trabajadores comienzan aorganizarse y desplegar importantes luchas. Cuando laprosperidad del «granero del mundo» tocó a su fin en1889, la crisis estalló con fuerza, la oligarquía trató dedescargar los efectos de la crisis sobre la clase obrera ydemás sectores populares, hubo represiones sangrien-tas, como en la huelga de 1902, se acusó a los huel-guistas de agitadores extranjeros, se recurrió al estadode sitio y a la sanción de la llamada Ley de Residencia4144, pero a pesar de la represión y deportaciones, elmovimiento obrero y popular continuó desarrollán-dose librando batallas imborrables como la de lostrabajadores en la Patagonia en 1920/21 donde la huel-ga por mejores condiciones de trabajo derivó en unarespuesta bestial de parte de terratenientes agrupadosen la Sociedad Rural y apoyados por los ingleses y laLiga Patriótica y acusando a los trabajadores de bando-lerismo, de favorecer que los chilenos se apoderen de laPatagonia y lograron hacer fusilar a 1500 trabajadores.

El Grito de Alcorta

El 25 de junio de 1912, en la región santafesina deAlcorta, corazón de la producción cerealista y centrode grandes latifundios y de arrendatarios, cuatro milagricultores reunidos en una asamblea convocada porel comité de lucha que presidió el agricultor FranciscoBulzani, declaró la huelga contra los terratenientes, huel-ga que se prolongó hasta agosto de 1913.

Los huelguistas exigían:1- Rebaja general de los arrendamientos y apar-

Page 67: Cuadernos marxistas Nº 04

67

cerías, cese de los convenios leoninos y de los desalo-jos arbitrarios.

2- Libertad del agricultor para comprar y vender,para trillar y asegurar sus sementeras y derechos a en-tregar el producto de la aparcerías en parva y troja ycomo salga.

3- Contratos por un plazo de cuatro años comomínimo.

A pesar de su programa parcial, el Grito de Alcortafue una de las primeras luchas de gran envergadura delos agricultores en nuestro país contra los terratenien-tes latifundistas y el capital extranjero.

Ya en 1910 las Ligas Agrarias de la Pampa habíanproducido el levantamiento de Macachín, dirigido porun grupo de militantes agrarios socialistas, encabeza-dos por el líder Antonio Buira, miembro entonces delPartido Socialista y posteriormente afiliado al PartidoComunista

El Grito de Alcorta llegó a movilizar más de cienmil agricultores, la declaración de huelga se extendiórápidamente a centenares de pueblos y colonias deBuenos Aires, Santa Fe, Córdoba, La Pampa, EntreRíos. Piquetes de arrendatarios en columnas entrabanen los pueblos rurales y colonias convocando asam-bleas con estruendos de bombas y escopetas, y logra-ban, a través de dichas asambleas, el apoyo de masascampesinas que se plegaban a la huelga. Un hecho pre-vio importante fue la huelga de foguistas y maquinistasferroviarios, producida en febrero de 1912, que duró45 días y tuvo gran influencia en el espíritu de lucha delos campesinos.

Buena parte de los agricultores y obreros que pro-

tagonizaron el Grito de Alcorta estaban imbuidos deideas clasistas, valoraban la alianza obrero campesina,muchos pertenecían o simpatizaban con el PartidoSocialista y algunos después ingresaron al PC.

Entre los dirigentes fundamentales del Grito deAlcorta debemos recordar a Francisco Bulzani, arren-datario del campo «La Sepultura», a Juan Bellotti cam-bista de la estación de Alcorta, quien fuera más ade-lante militante del PCA, a Eugenio Bujarrabal, dueñode un almacén en cuyo sótano, para burlar la vigilanciapolicial, se reunía el comité organizador. Otro a re-cordar es Antonio Noguera, chacarero y periodistade Pergamino que luego sería el primer presidente dela Federación Agraria Argentina.

Es digna de destacar la activa participación de lasmujeres campesinas en la huelga, entre ellas MaríaRubotti de Bulzani y de la juventud, como fue el casode Luis Fontana de Bigand.

Entre los agricultores que participaron en la huel-ga y jugaron un papel dirigente en sus zonas, hay queseñalar a José Moretti, de Casilda, padre de FlorindoMoretti ferroviario y miembro del comité central delPC y a José Bertaccini de Rosario y padre de RinaBertaccini, miembro del Comité Central del PC enla actualidad, entre otros.

En la provincia de Santa Fe, donde comenzó lahuelga, el 64 por ciento de los agricultores eran arren-datarios, el 26 por ciento propietarios y el 10 por cientomedieros. Arrendaban tierras en dinero a 50 pesos lahectárea o al 48 por ciento del producto trillado yembolsado.

La huelga logró importantes éxitos:

Page 68: Cuadernos marxistas Nº 04

68

• Rebaja del precio abusivo de los arrendamien-tos en dinero y especies, (rebaja del 50 por ciento)

• Libertad para vender su producción el agricul-tor sin imposición del terrateniente.

Otro notable avance fue la constitución de la Fe-deración Agraria Argentina como herramienta de lu-cha de los chacareros para defender sus intereses en-frentando a terratenientes y monopolios.

La SRA impulsaba la represión policial y juntabacarneros en los viejos comités conservadores parameterlos en las chacras de los campesinos en huelga, yaunque esta gran huelga no tenía entre sus objetivos laconquista de la tierra, fue un triunfo al poner límites alos privilegios de la oligarquía y producir un gran des-pertar social y dejar plantado el antecedente de la ac-ción común con los trabajadores, que en 1921 se plas-maría en el Pacto de Unidad FORA – FAA y la granmarcha agraria hacia la Capital Federal, que lograra lasanción de la primer ley contractual agraria, preanun-cio de luchas por la Reforma Agraria en las que tuvi-mos activa participación.

El PC levantó las banderas de la Reforma Agrariaprácticamente desde su fundación en 1918 y fue quienpresentó el primer proyecto a través de Alcira De LaPeña en 1962.

Pero además, fue destacable la labor de nuestroscamaradas en el desarrollo del Movimiento contra losDesalojos, de las juntas en defensa de la producción,en la creación de centenares de sindicatos de oficiosvarios, en la organización de filiales de la FAA y aquídebemos destacar al camarada Mario Pellegrini, quienayudó a organizar sindicatos de obreros rurales, fuefundador de la filial de la FAA de Arroyo Seco y deotras localidades cercanas, fundó cooperativas agra-rias y de crédito.

Producto de las luchas de esos años y del avanceen la conciencia se produjeron innumerables pronun-ciamientos por la Reforma Agraria y producto de esecrecimiento de la conciencia y de la labor de nuestroPartido, junto a otros sectores de izquierda, a perso-nalidades y dirigentes de organizaciones sindicales,agrarias, populares e intelectuales, se creó el movimien-to nacional de partidarios de la Reforma Agraria.

A fines de 1963 se logró la convocatoria a las jor-

nadas agrarias por parte de la CGT, de allí surgió laComisión Coordinadora por la Reforma Agraria (CO-COPRA) y, posteriormente, se llegó al Congreso de laCGT por la Reforma Agraria en Santa Fe.

Congreso de la CGT por la Reforma Agraria

En mayo de 1965, siendo el Secretario Generalde la CGT, José Alonso, este Congreso se realizó en elgremio de Sanidad de Santa Fe, el cual fue encabezadopor el camarada Lito Sorbellini con la participación demás de 500 delegados de 100 organizaciones. Ademásde la CGT y 24 Federaciones Obreras Nacionales, 10regionales de la Central Obrera, la FAA, COCOPRA,Movimiento de Partidarios de la Reforma Agraria yotras organizaciones agrarias regionales.

Allí, en el despacho sobre la Reforma Agrariacomo cambio estructural se señaló: « En primer lugary entrando a la temática del cambio propiamente di-cho, deberá modificarse el sistema de tenencia de latierra, base fundamental de todas las demás resisten-cias estructurales para lograr una real y efectiva redis-tribución de la propiedad privada en función social,mediante la supresión del régimen de latifundio y delas formas atrasadas, disociativas de la propiedad y laexplotación de la tierra como arrendamiento, aparcería,mediería.»

Además se estableció la necesidad de resguardar elpatrimonio del suelo argentino frente a las compañíasextranjeras. Nuestro Partido sin dejar de actuar en FAA,trabajó para dar nacimiento, junto a otros sectores aUPARA, Unión de Productores Agrarios de la Repú-blica Argentina, entidad que agrupaba a organizacionesagrarias regionales, no representadas por la FAA. UPA-RA actuó en diversas luchas y el 15 de noviembre de1973 con las firmas de su presidente Antonio NormanGarcía y su Secretario General, el camarada José MaríaGarcía, presentó un proyecto de ley de Reforma Agra-ria que partía de la valoración de la importancia delCongreso de la CGT de Santa Fe y sus resoluciones.

Los comunistas también impulsamos a través dediversas organizaciones obreras y campesinas accio-nes e iniciativas en dicho sentido.

Page 69: Cuadernos marxistas Nº 04

69

Así, por ejemplo en la 3l° Asamblea Nacional dela Unión Ferroviaria, realizada en mayo de 1963, seaprobó una importante resolución reclamando la rea-lización de la Reforma Agraria, en cuyos consideran-dos se decía: «La suerte de los ferrocarriles argenti-nos está íntimamente vinculada al sistema de redistri-bución de la tierra, a través de una auténtica Refor-

ma Agraria, pues es el medio de transporte más ade-cuado para trasladar los productos desde los centrosde producción hasta los de industrialización, consu-mo y exportación...», estableciéndose además:

-Hacer público apoyo al postulado proletario de unaReforma Agraria Integral en beneficio de la comunidad.

-Plantear a la CGT la necesidad de que sea la Cen-tral Obrera la que se coloque al frente de un gran movi-miento nacional tendiente a lograr la Reforma Agraria.

-Propiciar que la redistribución de la tierra sea rea-lizada de acuerdo a planes en los que intervengan re-presentantes estatales y de los sectores de la produc-ción y el trabajo, de manera de asegurar, mediante laparticipación obrera, una auténtica reforma que con-temple las aspiraciones populares.

-Iniciar una campaña pro Reforma Agraria a tra-vés de las páginas de Obrero Ferroviario.

-Instruir a las secciones ferroviarias para que cadauna de ellas, dentro de su radio de acción, se manten-gan en permanente contacto con las entidades obre-ras y populares de la zona y las que agrupan a losobreros rurales y se conviertan en propulsoras y eje-

cutoras de las inquietudes expuestas en la presente re-solución.

-Considerar la Reforma Agraria como un objeti-vo permanente de la organización.

El PC tuvo importante cantidad de militantes en-tre los ferroviarios y nuestro destacado compañeroVíctor Vázquez fue miembro del Secretariado Na-cional de la Unión Ferroviaria, hasta su secuestro ydesaparición por la última dictadura militar.

El gobierno de Perón y la reforma agraria

Hay que señalar que nuestra labor encontró terre-no fértil entre los trabajadores y arrendatarios ya que

Page 70: Cuadernos marxistas Nº 04

70

Perón llegó a su primer gobierno levantando un viejoreclamo de los arrendatarios «la tierra para quien latrabaja», reclamo que en 1935 levantaba la FAA en sufolleto Verdades donde entre otras cosas señalaba: «¿Haspensado alguna vez en la aberración estúpida de quetú, que vives en la tierra y trabajas la tierra, no tengas latierra para trabajar, y algunas personas que viven en ellujo y en la molicie de la ciudad tengan miles de hectá-reas?, ¿Crees que eso es natural, que eso es humano?Y bien, la FAA quiere que eso termine, quiere que eltrabajador de la tierra sea el dueño de la tierra quetrabaje»

Perón diría el 8 de agosto de 1945: «La riqueza dela Nación, extraída del suelo por las duras manos delobrero, es el patrimonio del pueblo al servicio de sufelicidad y de la grandeza material de la patria» y agre-gó en la campaña electoral de 1946 en Santa Fe: «Elproblema argentino está en la tierra, dad al chacarerouna roca en propiedad y el os devolverá un jardín,dad al chacarero un jardín en arrendamiento y el osdevolverá una roca. La tierra no debe ser un bien derenta, sino un instrumento de producción y trabajo. Latierra debe ser del que la trabaja y no del que vive con-sumiendo sin producir a expensas del que lo labora».

Estas definiciones le significaron un gran apoyoobrero y popular que hubiera permitido avanzar endichos objetivos, pero las proclamas se redujeron ala expropiación y colonización de algunos latifun-dios, a la sanción de la ley 13246 que dio estabilidada los arrendatarios y a la sanción del Estatuto delPeón, que mejoró la situación de los trabajadoresrurales. Con ello se ganó el odio de la oligarquía te-rrateniente agrupada en la SRA que comenzó a ac-tuar decididamente en función de generar las condi-ciones para el golpe del Estado que finalmente seimpuso en 1955.

La realización de una profunda Reforma Agra-ria durante el gobierno de Perón, hubiera significa-do mayores posibilidades para el desarrollo indus-trial, la ampliación del mercado interno, el crecimien-to de la clase obrera y una armónica distribución dela población, todo lo cual creaba mejores condicio-nes para un desarrollo soberano, democrático y conjusticia social.

Al no realizarse la Reforma Agraria y mantenerseel predominio de la oligarquía, el agro resultó un ele-mento clave en la estructura dependiente argentina,donde asentaron su poder sectores fundacionales delas clases dominantes locales desde donde han alimen-tado y condicionado el tipo de desarrollo económico,social y político que ha recorrido nuestro país en estos200 años.

La continuidad de la lucha agraria

A lo largo de estos 100 años el movimiento agra-rio ha librado innumerables luchas y se lograron im-portantes reivindicaciones, pero la historia ha confir-mado nuestro enfoque de que limitarse a luchar porreformas o reformas parciales dentro del capitalismosólo puede darnos conquistas transitorias que, con todolo positivo que puedan tener, serán transitorias, puesel sistema se encargará de anularlas o neutralizarlas. Sólosi estos reclamos o reformas son parte de un proyectoalternativo superador, adquieren el valor de batallas ga-nadas hacia el logro del objetivo estratégico.

Seguramente, cuando en el año 2000, centenaresde productores de la FAA, venidos de distintos luga-res, se reunieron en Alcorta en lo que dio en llamarseel «Segundo Grito de Alcorta», habrán llegado a esamisma conclusión, cuando después de vivir la décadadel neoliberalismo menemista y asistir al endeudamientoy desaparición de miles de productores en el país y desu propia organización, plantearon refundar la FAA,hacerla más fuerte y más amplia, incluyendo pequeñosproductores y campesinos que trabajaban la tierra enlas distintas geografías del país. Fortalecer la organiza-ción con más autonomía y pluralismo para articular conotros sectores populares para enfrentar las políticas neo-liberales y contribuir a crear un proyecto alternativo.

Ese fue el sentido de la creación de la agrupaciónAzul y Blanca, que integramos a través del MCL, hastaque se produjo el vuelco hacia la Mesa de Enlace yésta fue dejada de lado, como también fueron dejadasde lado las resoluciones del 91º Congreso de la FAAo las del Congreso Nacional y Latinoamericano sobreUso y Tenencia de la Tierra, que se realizó en 2004

Page 71: Cuadernos marxistas Nº 04

71

con más de dos mil participantes y donde surgieronimportantes denuncias y resoluciones. Fueron tambiéndejadas de lado las resoluciones del 95º Aniversariode Grito de Alcorta de 2007 y la marcha convocadahacia Buenos Aires donde participaron miles de pro-ductores y sectores populares, marcha en la que parti-cipamos activamente y donde, entre otros reclamos,estaba el de la reforma agraria integral.

Pero en 2008, cuando se genera el conflicto por la125, la dirección de la FAA encabezada por Buzzi, sinconsultar a las bases y sin defender los postulados dela Azul y Blanca, se incorpora a la Mesa de Enlacehegemonizada por los ruralistas (SRA y CRA).

En el 6º Encuentro de la Azul y Blanca, mayo de2006, Buzzi había dicho: «Ni oficialismo ni oposición,autonomía política […] No queremos ser funcionalesal diario La Nación, Ámbito Financiero, Clarín, la Rural, alruralismo, a la derecha».

Después de esto, contribuye al montaje y desarro-llo de la más grande operación destituyente de la dere-cha contra un gobierno que había dado una serie depasos positivos a favor de la soberanía, la inclusiónsocial y, fundamentalmente, que había trabajado deci-didamente por la integración latinoamericana.

Nuevamente, la SRA, símbolo de la vieja y nuevaoligarquía, actuaba contra la integración de la patriagrande desde su Mesa de Enlace y creaba las condi-ciones para un triunfo electoral de la derecha en 2009buscando volver al gobierno en 2011.

Alentado por dichos resultados, Clarín profundi-zaba su ofensiva. Héctor Huergo, antes de las prima-rias de agosto de 2011, decía en Clarín Rural: «La mues-tra de la exposición palermitana de la SRA se va con-virtiendo, año tras año, en un acontecimiento de ma-yor voltaje político. Este año abrió sus puertas justo enla semana del contundente triunfo de Macri». El Macrique tuvo el honor de cortar las cintas en la apertura dela exposición es el mismo que en febrero de 2011, devisita en Inglaterra y recibido por el alcalde de Lon-dres, el vicecanciller, diputados y empresarios, hablóde «la necesidad de recrear la confianza entre ambospaíses colocada en el freezer por el gobierno de Cris-tina», y agregó: «Argentina tiene una oportunidad enor-me, hay que volver a tener instituciones creíbles y or-

denadas, queremos que Argentina vuelva a dialogarcon todos y salir de ese mundo bolivariano chavistaen el cual estamos».

La definición del líder PROimperialista Macri afavor de los piratas ingleses que asesinaron a nuestrossoldados, usurparon nuestras Malvinas y saquean nues-tras riquezas, deja bien en claro que quiere enterrar losideales sanmartinianos y bolivarianos y hasta podría-mos decir que nos habilita a pensar que así como Gro-bocopatel sugirió cambiar el nombre de Avenida delLibertador por Av.enida de la Soja, Macri debe estarpensando en una diplomacia de las estatuas, sacar lade Simón Bolívar colocar la de Margaret Thatcherahora que gobiernan los conservadores para sacar lasrelaciones de freezer.

Este Macri desfiló por la Exposición Rural juntoa Duhalde, De Narváez, Carrió, Alfonsín, etc., reedi-tando el viejo y renovado ritual de ir al altar de Paler-mo a escuchar el mensaje de «el campo», dado en estaocasión por Biolcati y aplaudido por la Mesa de Enla-ce en pleno, el Momo Venegas, los personajes señala-dos y los representantes de Monsanto, Cargill y Nide-ra, entre otros.

Pero tanto en agosto como en octubre, fueronderrotados electoralmente de manera contundente. Así,del festejo del voto no positivo de Cobos, pasaron aldesconcierto por el voto sí positivo de las grandesmayorías en octubre. El sentido de dicho voto fue devaloración por los pasos positivos dados y para ir porlo que falta, que no es poco.

En el terreno agrario, es mucho lo que hay quehacer, ya que en líneas generales el modelo productivoagropecuario vigente es el que heredamos del neoli-beralismo y cuyos sectores hegemónicos quieren arti-cular y actuar junto a los principales responsables de lacrisis general que vive el mundo y en particular con losresponsables directos de la crisis alimentaria mundialcon más de mil millones de hambrientos.

Son las transnacionales como Monsanto, Cargi-ll, Dreyfus, Bunge, las que controlan semillas, agro-químicos, agrocombustibles, la exportación de gra-nos. Es el capital financiero lanzado al acaparamientode tierras para su negocio alimentario energético, elque tiene entre sus objetivos principales Argentina y

Page 72: Cuadernos marxistas Nº 04

72

Brasil en Amércia del Sur, para posicionarse en elinicio de un nuevo orden agroalimentario energético,donde el agro crece en su importancia estratégica porla competencia entre alimentos y agrocombustibles,a costa de la producción de alimentos, ya que quienproduzca más etanol y biodiesel dependerá menosdel petróleo.

El gobierno ha enviado un proyecto, aprobadopor el Parlamento, sobre límites a la extranjerizaciónde la tierra. Entendemos que debe estar muy vincula-do con la aprobación de una ley que detenga los des-alojos, que no sólo expulsan gente de la tierra, sinoque también se cobran vidas.

En segundo lugar, entendemos que no se tratasólo de ponerle límites a la extranjerización, sino plan-tearse también recuperar las ya extranjerizadas en granescala y readjudicarlas para el desarrollo del proyectode inclusión social del sujeto agrario postergado. Ade-más, es necesario actuar no sólo sobre la extranjeriza-ción sino también sobre la concentración.

En cuanto al plan estratégico alimentario presen-tado por el gobierno, entendemos que en alianza conlos agronegocios y las transnacionales no es viable nin-gún plan sustentable que aporte a un proyecto nacio-nal y popular. Sólo con el protagonismo de la claseobrera y el pueblo se puede profundizar y radicali-zar el rumbo. Para ello se requiere la construcción deuna fuerza político-social lo suficientemente ampliay fuerte capaz de sustentar un proyecto nacional ypopular que, en nuestra visión, debe ser superadordel capitalismo.

Por ello, nuestra propuesta de reforma agraria laconcebimos como parte de un proyecto de libera-ción y socialismo y, por lo tanto, integral, que parta deuna valoración del rol social de la agricultura sustenta-ble, pero no sólo como productora de múltiples ali-mentos, sino también del cuidado del medio ambien-te, la biodiversidad, la regulación climática e hídrica, elreciclado de nutrientes, etc., que garantice la soberaníaalimentaria, lo cual supone soberanía política, econó-mica y cultural de toda una nación y donde el Estadodebe jugar un rol indelegable.

Por lo tanto, la reforma agraria que proponemosno es sólo distribución de tierras, aunque sí tiene comocuestión central abordar la propiedad, uso, tenencia ydistribución de la misma, realizando un efectivo orde-namiento territorial, desarrollo de la cooperación ycooperativismo múltiple, mayor elaboración de la pro-ducción en origen dando lugar a nuevas fuentes detrabajo y desarrollo del interior y una distribución másarmónica de la población del país.

Todo lo cual implica poner en manos de los tra-bajadores, de los auténticos productores de las comu-nidades rurales y del Estado democrático, las decisio-nes sobre tierra, agua, producción, comercialización ymedio ambiente que hoy están en manos del capitalfinanciero, los agronegocios y las transnacionales.

Pero, además, políticas de fondo como:• Nacionalizar el comercio exterior• Otra política impositiva y crediticia• Desarrollar los ferrocarriles, puertos y caminos• Recuperar el petróleo• Desarrollar tecnología nacional• Recuperar mayor capacidad en la producción

de insumosFinalmente, queremos señalar que hace 100 años,

cuando el Grito de Alcorta, el capitalismo generabaesperanzas, ilusiones y expectativas sobre su capaci-dad para resolver los problemas que afectaban a lospueblos. Hoy podemos decir que cada vez más gene-ra certezas sobre su capacidad para generar proble-mas y su incapacidad para resolverlos.

Basta observar cómo se agudiza la crisis alimenta-ria, la explotación, la desocupación, la desigualdad, larepresión, el racismo, las guerras, la destrucción delmedio ambiente, etcétera.

Por ello, hoy lo que crece es la búsqueda de alter-nativas superadoras del capitalismo y la convicción deque el imperialismo no es imbatible, como lo demuestrala derrota del ALCA y los pasos concretos que lospueblos y los gobiernos, a través de la UNASUR y laCELAC, dan hacia la integración de la patria grande.

Para ello, debemos convocarnos y actuar manco-munadamente.

Page 73: Cuadernos marxistas Nº 04

73

Cuando se acababa de tomar el poder en LaHabana, la guerrillera Haydée Santamaría, quehabía estado en Sierra Maestra, fue enviada atratar de hacer algo con una institución culturalque ya existía sin existir; que era sin ser, y quese llamaba algo parecido a Casa de las Améri-

cas sin una sola América. O por lo menos con una sola, la del Norte. Unoscuántos intelectuales durmiéndose en sillones de cuero dormidos. Cuba nohabía sido formada en esa primera mitad de siglo XX para la cultura viva,sino para fertilizar fantasmas desde sillones de cuero dormidos. La Revolu-ción ocupó la casa frente al mar habanero, e hizo en unos días lo que no sehabía hecho en siglos. Como siempre sucede en las revoluciones.

La Revolución decidió crear una revista, en ese mismo mo-mento, que fuese la Casita de una Casa. Como en un juego.Se trató de iniciar un inicio.Como la revolución estaba bloqueada por los gobiernos americanos amigosdel gran bloqueador, el Imperio, la Casa decidió transformarse en una redintelectual por abajo. No sería una red oficial con intelectuales americanosgravemente gubernamentales. No, sería una red subálvea entre intelectualesdel continente y el Caribe. Una Casa para hombres libres, hombres sueltos,para creadores libres aún en prisión, para intelectuales cuyo acto creador se

por Eduardo Rosenzvaig*

(agosto de 2009)

La casa

La Casa

* Doctor en Historia, escritor. (1951- 2011)

Con motivo del50º aniversario dela Casa de las Américas,se organizó en la sede delPartido Comunista de laArgentina un encuentrode escritores y artistas,que al tiempo de presen-tar sus obras, homenajea-ron a Héctor P. Agosti,por otra parte gran amigode la Casa. Parala celebración, elquerido compañeroEduardo Rosenzvaig leyóel texto, aun inédito, queaquí presentamos. Dosveces Premio Casa de lasAméricas, Eduardobrinda sus bellas pala-bras sobre esta granrealización dela Revolución Cubana.

Page 74: Cuadernos marxistas Nº 04

74

mezclaba a las transformaciones que iniciara la propia Revolución.En 1959 se fundaba la Casa para un acto de creación que fuera grande. Por lomismo un acto de cultura bolivariana, en el sentido de una revolución quehacía de la cultura un acto subversivo y continental. Y con ella una revistacomo expresión de un grupo de hombres para manifestar una voluntadcompartida, un proceso de maduración común y diferente. El vehementedeseo de acabar con la desigualdad y la explotación en América.Haydée creó a la Casa como un sitio de encuentros. Un espacio pequeñopara reunir a las Américas despedazadas. Unas habitaciones con sillones dor-midos que debían despertar a la conciencia intelectual americana en la mar-cha inacabable de Bolívar, Sandino y Fidel.Leer los números de la revista Casa es seguir el itinerario del pensamientoestético y la revolución en América Latina desde los años 60. El techo de laCasa fue para una familia sin techo. Y fue el motor del boom literario latino-americano.Las actividades de la Casa y su revista debatían las esencias y desposesionesde las Américas. Buscaban desde el arte y las ideas machucar a un pasado dealienación. Buscaban y buscan hoy, a 50 años, recuperar selectivamente a latradición, reconstruirla. Imaginar una comunidad cultural americana real.Encender la utopía de libertad en el continente, como quien enciende unbarril de pólvora.La realidad, afiebrada por intuiciones, creó una Casa chica para un continen-te infinito. Este antagonismo de un espacio casi doméstico para tratar y de-batir y cambiar la cultura de todo un continente, sigue siendo el gesto másfascinante y utópico de la Casa. Develar en el rostro de la isla humillada, lashumillaciones americanas; y reunir los gritos creadores americanos entre loscañaverales de la isla liberada.La Casa es también una batalla moral. La Casa se propone entrar al ruedo delas actitudes intelectuales de repliegue, de búsqueda angustiosa de una sensi-bilidad que se había enterrado con el siglo XIX cubano, y desarraigar, llamara la imaginación a suplir todo lo que la historia misma no puede entregar, adecir de Fernández Retamar, uno de sus imagineros.Para Lezama Lima una revista –aún antes de la Revolución– eran aquellaspáginas, esos pequeños cuadernos que serán buscados al paso del tiempo comosímbolos de salvación, como una de las pocas cosas que perdurarán de unaépoca en que la ruina y la desintegración avanzan con un furor indetenible.Casa se nutre de otras revistas y sus intelectuales. Necesita ser una casa abierta.No un núcleo de escritores y pensadores regulares, sino un grupo de contac-tos, de emisarios y correspondencias. De viajes y búsquedas. Se cruzan lasrevistas de unas orillas a otras. Lunes de Revolución, Marcha, La Cultura de Méxi-co, El Escarabajo de Oro, La Rosa Blindada, Cuadernos de Cultura dirigidos porHéctor Agosti que hoy recordamos.Del otro lado Mundo Nuevo, en París, dirigida por Emir Rodríguez Monegalque recibe subsidios de los Estados Unidos. Y hace poco supimos que de la

Page 75: Cuadernos marxistas Nº 04

75

CIA, pero eso no debe decirse, no es intelectualmen-te correcto.La Casa se metió en los diez años de RevoluciónCubana y en el debate Padilla al que Cortázar llamó«Pesadilla». Y en torno al cual se expresaron todoslos intelectuales de América y al que aprovecharonalgunos según Walsh –ya famosos– para retirarsede la Revolución Cubana como pretexto a la im-pugnación de cualquier otra revolución. Por ejem-plo un peruano.La Casa impugnó la torre de marfil. Dicho en lapalabras de Desnoes, el autor de Memorias del Subde-sarrollo: «Consideraba [yo] en 1959 que la Historiaera una farsa, que todo conspiraba contra el hom-bre: pensaba como Beckett: Estás vivo por eso no haycura. Vivía encerrado en la cárcel, pero ya existe unmás allá, la Revolución, no creo que valga la penavivir sin poner nuestro egoísmo y nuestra vanidad,

la inteligencia y el talento al servicio más grande que nosotros mismos».La Casa es el rechazo al dogmatismo y por eso las sanas peleas. Lo únicosagradamente no dogmático es el presupuesto de la realidad revolucionaria.De allí que la Casa se propone el contacto con la vida. Para dejar la torre demarfil hay que repartirse en las calles y los campos y las universidades y lasvillas y los rascacielos y los túneles donde moran los invisibles y en las torresdonde los muertos tañen campanas.En un punto se debate si hay que sustituir al poema por el fusil. Hay vocessobre la autonomía de la palabra, o de la palabra como complemento de laacción. Hay voces que dicen proteger la poesía desde una trinchera a balazoso a sonetos.El debate trepa a la imposibilidad de no hacer otra literatura que no fuese larevolucionaria. Y por ello también, debate sobre la evasión y el panfleto.Gran debate.El público de la revista rebasa a la revista. La Casa no puede albergar atantos actores revolucionarios en la estética del tiempo que se está constru-yendo. La Revolución tiene capacidad para culturizar al pueblo, para desaje-narlo de las formas embrutecedoras del capitalismo. A partir de la Revolu-ción Cubana y esa pequeña Casa con una revista de apenas cuatro númerosanuales, la intelectualidad americana ya no puede ser la misma. Aún en lasformas de impugnación ya no puede.El subdesarrollo y el neocolonialismo cultural se quiebran en pedazos. Elsistema se desespera por volver a juntarlos. Invierte. Invierte mucho.A los 10 años de la Revolución, la Casa, su revista, y los intelectuales delcontinente, acuerdan que el mayor logro cultural de la Revolución es la cam-paña alfabetizadora. Desde este punto, el arte, como decía Ponce, puede ser

Page 76: Cuadernos marxistas Nº 04

76

percibido recién no como un privilegio y, por tanto, no una inmoralidad.Acabo de ver el frente de este edificio con la bella enorme imagen del Che1.La Revista Casa no logra saberse sin la amabilidad sangrante del Che. Ángel1

Rama, en el Nº 46 de 1968, recién asesinado el Che, con su fotografía bolivia-na muerta en los periódicos, dice: «La heroicidad produce el mismo deslum-bramiento y el mismo pánico que la santidad, porque está hecha de su mis-ma atroz desmesura y genera entre el multitudinario coro de quienes presen-ciamos la tragedia, la conciencia terrible de ser destinatarios del sacrificio».No era necesario que el periodista dijera que «parecía un Cristo yacente», nique las fotografías nos propusieran imágenes similares a las que el arte euro-peo cultivó durante siglos, con el cuerpo enflaquecido y la paz de ese rostroya para sí, para sentir que no sólo vivió entre nosotros sino que murió pornosotros. Que ni siquiera nos pregunta qué haremos porque su sola vida ymuerte es una pregunta que no cesa. Bolívar, Martí, Ernesto Che Guevara.Lo que cambia es el estilo, simplemente».Casi 30.000 obras se presentaron en los años que lleva el Premio Casa de lasAméricas. Además de premios continentales y cátedras libres continentales,la Casa es un continente que nace libre desde la raíz. Lo cual no significaperfecto. ¿Qué significa entonces?Es curioso, el edificio no tiene escenario. Tiene apenas un tablado de 20 cmde altura donde se descorre un gran telón detrás del cual hay una pared. Nohay bambalinas, detrás, hay una pared, como The Wall. Pero no es una paredparedón, sino que tiene a ella adherida un árbol gigantesco de la vida, que losartistas mexicanos de la cerámica india regalaron a la Casa. Me contaba Fer-nández Retamar que hubo que romper paredes y puertas para entrar a estebíblico árbol de la vida en la Casa. La Casa que no es un rascacielos ni unpalacio barroco ni un castillo castellano ni un palacete rococó ni un Guggen-heim en Bilbao, es nada más que una casa simple con un árbol de la vidagigante, es decir la imagen india de las raíces subiendo transformadas en pue-blo, en vidas populares terminadas en frutos artísticos, luchas sociales, guerrasde clases, victorias y desesperanzas, muertes anónimas y novelas y retazos deutopías, hasta llegar al sol que es donde siempre terminan los árboles.La Casa es un árbol que termina en un sol.

1 Se refiere a la sede del Comité Central del Partido Comunista en la Ciudad de Buenos Aires.

Page 77: Cuadernos marxistas Nº 04

77

En el presente dossier publicamosuna serie de documentos que, por laimportancia de los temas que tratan,representan insumos importantespara nuestra militancia cotidiana.En primer lugar, reproducimos laposición del Partido Comunistafrente a la sanción de una nuevaLey Antiterrorista en nuestro país,acompañada por el Proyectode derogación de dicha ley presentadopor el Partido en el Congreso Nacionalel 9 de marzo pasado.En línea con este planteo, publicamostambién la declaración leída enPlaza de Mayo el último 24 de marzoal cumplirse 36 años del golpe cívicomilitar de 1976. Entendemos quedicha declaración representa un saltocualitativo en la lucha contra la impuni-dad al hacer eje en los grupos económi-cos que fueron cómplices y beneficiariosde la dictadura y condenar la sanción dela Ley Antiterrorista.Por último, a 22 años de lapublicación de la Carta Abierta a lasFuerzas Revolucionarias y Progresistasde América latina y el Cariberedactada por representantes dePartidos Comunistas de la región,reproducimos su contenido con un textointroductorio de Patricio Echegaray,entendiendo que en la misma se puso demanifiesto la fortaleza del marxismocomo herramienta de análisis socialdesde el cual, continuar elaborando unproyecto alternativo de sociedad quesupere al capitalismo.

DOCUMENTOS

Page 78: Cuadernos marxistas Nº 04

78

POR LA DEROGACIÓN DE LA LEY ANTITERRORISTA

Declaración del Partido Comunistade la Argentina

El PC afirma que la ley 26.268 es una rémora de los tiempos de las «rela-ciones carnales» con el imperialismo norteamericano. Y rechaza el pro-yecto del Poder Ejecutivo enviado el 13 de octubre al Parlamento. El

Partido Comunista reitera su propuesta de derogar la ley denominada «antite-rrorista» nº 26.268, verdadera rémora de los tiempos de las «relaciones carnales»con el imperialismo norteamericano y se pronuncia en contra del proyecto en-viado al Parlamento por el Poder Ejecutivo el 13 de octubre, ya que agrava elcontenido antidemocrático y represivo de aquella ley al establecer la duplicaciónde las penas contempladas en la misma. Junto a ese rechazo, el Partido Comunis-ta propone abrir un amplio debate sobre la necesidad de adecuar el CódigoPenal a los valores proclamados de respeto irrestricto de los derechos humanose integración latinoamericana. El 13 de octubre, el Poder Ejecutivo de la Nación,envió al recinto legislativo un proyecto de agravamiento de la llamada ley antite-rrorista 26.268; sancionada -contra la opinión mayoritaria de los organismos dederechos humanos y numerosas fuerzas populares- en 2007, so pretexto de cum-plir con requerimientos del GAFI (Grupo de Acción Financiera Internacional),uno de los organismos de la órbita del Fondo Monetario Internacional, poten-ciados luego de la declaración de guerra «al terrorismo» por parte del gobiernode los EE.UU. Precisamente en momentos en que dichos organismos son de-nunciados por su responsabilidad en la severa crisis mundial capitalista con susconsecuencias antipopulares y por ello repudiados por amplios sectores socialesde Europa, Asia y América Latina y algunos gobiernos, entre los que se encuen-tra el argentino, encabezado por Presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Fuela lógica de la lucha contra el terrorismo, concepto ambiguo y peligroso en quese basa la Ley, lo que en su momento permitió la expulsión del país de seiscampesinos paraguayos que desde entonces permanecen encerrados en pésimascondiciones en la Cárcel de Tacumbú de Asunción del Paraguay. La experienciade todo el siglo XX, desde la sanción de la tristemente célebre Ley de Residencia4144 de 1902 hasta la nefasta Ley 20840 de «Seguridad Nacional», nos enseñó encarne propia que nunca es gratuito sancionar una ley basada en una lógica repre-sora y macartista: los espacios democráticos comienzan a reducirse, las fuerzasderechistas y nostálgicas del Terrorismo de Estado se envalentonan y los juecesconservadores y anticomunistas sienten que cuentan con un instrumento de con-trol social y represión que podrán usar en el momento que la situación lo ameritey las condiciones lo permitan. El actual proyecto del Ejecutivo se autocritica deno haber sido más drásticos en la Ley del 2007, y al proponer duplicar las penas lohace de un modo tal que modifica la «parte general» del Código Penal por lo quela reforma propuesta «teñirá» todos los delitos contemplados en la «parteespecial». Para ser precisos: proponen modificar el artículo 41, añadiéndole un

Page 79: Cuadernos marxistas Nº 04

79

párrafo, el 5º, que establece el doble de la pena prevista si el delito se consideracometido por una organización terrorista, con lo que se sigue haciendo a nues-tro Código Penal cada vez más inequitativo (las penas por participar en un recla-mo social que sea calificado como producto de una «asociación ilícita terroris-ta», f igura creada por la Ley 26268 del 2007 serán superiores amuchos delitos como por ejemplo el de homicidio simple), generando una se-cuencia de judicialización y criminalización de la protesta social, lo que podríaprovocar una sobre saturación de la población carcelaria, haciendo entrar encrisis una estructura que se mantiene al margen de los cambios habidos en lasFuerzas Armadas y atentaría contra la doctrina de no reprimir la protesta social;por el contrario, las cárceles podrían convertirse en espacios de violaciones, dis-criminaciones, humillaciones y la más sistemática negación de los derechos hu-manos consagrados en la Constitución Nacional y en los innumerables PactosInternacionales firmados por la Argentina. En su momento, el Gobierno Na-cional convocó a un conjunto de académicos y personalidades relevantes delDerecho Penal a pensar una propuesta integral para superar casi un siglo devigencia de un Código basado en una lógica clasista, sexista, represora y macar-tista, agravado por más de ochenta reformas parciales inconexas que culmina-ron en las reformas Blumberg. Dicha propuesta conocida por el nombre delpenalista que coordinó el trabajo, el Dr. Baigun, fue retirada del debate al primer«clarín» de protesta de la derecha. Por lo tanto, el Partido Comunista consideraimprescindible abrir el debate a la sociedad, a los organismos de derechos hu-manos y movimientos sociales, a las fuerzas políticas democráticas para avanzaren dirección a una superación del Código Penal vigente, a la derogación de unalegislación heredada de los tiempos de la Guerra Fría, como la doctrina de laSeguridad Nacional y terminar con los enfoques represores neoliberales, ahorapotenciados por la doctrina plasmada en el Acta Patriótica de 2001 sancionadapor el Gobierno de los EE.UU. como declaración de guerra contra los pueblosque se rebelen total o parcialmente a su dominio. La práctica de asesinar, inclu-sive en territorio neutral o después de su rendición, a todo tipo de opositoresreales o potenciales de los Estados Unidos (Cano, Reyes, Ben Laden, Khadafi,entre muchos miles de víctimas anónimas) anuncia que esta estrategia está llegan-do al momento de su transformación en una práctica sistemática y masiva deTerrorismo de Estado mundial. En consecuencia, subordinar nuestro CódigoPenal a esa lógica sería suicida para la democracia argentina y los propios obje-tivos de soberanía e integración regional proclamados por la Presidenta CristinaFernández al momento de su asunción para cumplir con el nuevo mandato otor-gado por la mayoría de nuestro pueblo.

Diciembre de 2011

Page 80: Cuadernos marxistas Nº 04

80

Buenos Aires, 9 de Marzo de 2012

Sr. PresidenteCAMARA DE DIPUTADOS DE LA NACIÓNDon JULIAN DOMINGUEZSu DespachoDe n/mayor consideración:

El PARTIDO COMUNISTA se dirige a Ud. por mi intermedio, a fin de presentar unproyecto de ley que establece la derogación de la ley «antiterrorista» Nº 26.734, que adjuntamos.

Le encarecemos de curso a la formación del expediente respectivo. Saludámosle muy respetuosamente, formulando votos por el éxito de su gestión.

PROYECTO DEL PARTIDO COMUNISTA PARA DEROGARLA LEY «ANTITERRORISTA» 26.734

FUNDAMENTOS En el año 2007 el Congreso ha dictado la ley 26.268 «antiterrorista» engendrando

la figura de «asociación ilícita terrorista» con altísimas puniciones, lo que hizo revistar en elart. 213 ter del Código Penal. La influencia del G.A.F.I. (Grupo de Acción FinancieraInternacional) para imponer el ritmo y contenido de la actividad legisferante argentina hasido suficientemente comentada en los órganos más representativos de la prensa, y por ellono insistiremos sobre los riesgos de abdicación de soberanía que ello representa.

El PARTIDO COMUNISTA ha presentado un proyecto de ley para derogar esanorma (ver Nota caratulada D-209 y datada 26-11-2008). En aquél momento alertaba quelos problemas a resolver en el país no eran el «terrorismo» sino la distribución de la riqueza,finiquitar la pobreza masiva, exclusión social y empleo en negro, mejorar salud y educacióny recuperar las empresas antes enajenadas. También aludía a que el G.A.F.I. estaba hegemo-nizado por los Estados Unidos, cuya actividad precisamente «terrorista» es ampliamenteconocida (y muy especialmente la «doctrina Bush»): promover dictaduras en el mundo,mantener el bloqueo a Cuba, atacar a Irak, pese a que antes había armado a Hussein para laguerra contra Irán (a imagen de como lo había hecho con Bin Laden para hostilizar a lossoviéticos) ; estos dos dirigentes pasaron de «patriotas» a «terroristas» en cuanto fue elloconveniente. Invadió Afganistán, generando allí y en Irak cientos de miles de muertosinocentes. Y se niega a ratificar el Convenio de la Corte Penal Internacional (CPI) paraconducir más cómodamente su plan agresor.

Se recordaba también allí que el encomendarnos «combatir el financiamiento delterrorismo» exhibía una gruesa contradicción, cuando los Estados Unidos son el mayorvendedor de armas del mundo, y junto a Gran Bretaña, Francia y Países Bajos mantiene 80paraísos fiscales en sus dominios. Que debiéramos inquietarnos en todo caso por la apeten-cia hacia el Acuífero Guaraní y las andanzas de la IV flota de los Estados Unidos en aguasanejas a nuestro territorio.

No sería necesario reiterar hoy ese análisis que hacíamos en 2008 y que mantieneinfortunada vigencia. Ahora pasaremos a la novedad legislativa ocurrida a finales de 2011,cuando el Congreso, con extrema autocrítica, deshizo todo aquél art 213 ter, el conceptode «asociación terrorista», no dejando piedra sobre piedra de lo realizado 4 años antes,

Page 81: Cuadernos marxistas Nº 04

81

todo ello por nueva extorsión del G.A.F.I. con su influjo desenfadado. Así es que se arribóa la conclusión de que además de las asociaciones había que prever asociaciones de «indivi-duos» terroristas, y que los condicionamientos que lucían en esa cláusula 213 ter resultabanahora «complicados». Tan «derogante» de la ley 26.268 resultó la novísima norma, queprefirió evadirse ahora de la Parte Especial del Código (donde revistan los delitos particu-lares) para pasar a introducir la novación en la Parte General, a fin de poder así impactar yagravar «todos» los delitos que existen hoy o se agreguen en el futuro al Código.

La reciente ley 26.734 sencillamente incorpora un párrafo más al art. 41 del Códi-go Penal, fijando que cuando «cualquier» delito, si es que lo hizo con el afán de aterrorizar ala población o coaccionar a las autoridades, la pena se le aumentará «al doble». Esta infla-ción punitiva del 100%, absolutamente inusual por lo inmenso en la técnica penal, añadidoa la extraña forma de tipificar tan abiertamente la acción a reprimir, hacen pensar racional-mente que podrían quedar afectados y criminalizados los actos de protesta social, en medidaabismalmente agravada en relación a las ya excesivas escalas actuales. Es sabido que el verbo«aterrorizar» es polisémico (admite diversas interpretaciones) y que con él no es factibleacuñar un tipo penal por los riesgos inherentes al llegar el momento de la intervención judicialen casos de imputaciones concretas.

Si bien el proyecto original del Ejecutivo excepcionaba los casos de «ejercicio deun derecho constitucional», lo que es decir que a estos supuestos no se aplicaría la normativa«antiterrorista», los legisladores prefirieron añadirle «ejercicio de derechos humanos o socia-les», agregado tan inútil como el que más lacónicamente traía la versión primigenia. Yadesde antiguo, el art. 34 del Código Penal tiene previsto que no será punible quien obró «enel legítimo ejercicio de su derecho», por lo que no era necesaria nueva y sobreabundanteaclaración, y menos si tuvo el afán de llevar confusión al seno popular.

Es lógico pensar que cuando un magistrado sanciona a una persona, no le expre-sa que lo está castigando «porque ejerció derechos constitucionales» (en cuyo caso nadahabría que punir sino felicitar) sino por acciones ilícitas concretas que interpreta se hancometido. Y tradicionalmente se han invocado en los respectivos fallos para reprimir laprotesta social, las figuras de los arts. 90 (lesiones), 213 bis (prepotencia ideológica), o el 149ter (coacción a las autoridades), o el 168 (extorsión), o el 194 (afectar el tránsito), o el 211(intimidación pública), o el 212 (incitación a la violencia colectiva), o el 181 (usurpación depropiedad), o el 183 (daños), o el 210 bis (asociación ilícita calificada), o el 230 (sedición), oel 237 (atentado a la policía), o el 239 (resistencia a algún funcionario), etc. Y ahora quizáspor esos mismos hechos podría llegar a tener el imputado el doble de castigo, verdadera-mente draconiano, sobre todo si se visualiza que las escalas sancionatorias que ya traenprevistas todas estas figuras son enormísimas y desproporcionadas.

Como se ve, no había «vacío legal» o hiato a rellenar, como ya ha expresado eldestacado penalista Dr. Raúl Zaffaroni. Incluso añadiremos la cita del art.190 y siguientesque prevén atentados a barcos, aviones (conductas que arriesgaren naufragios, descarrilamien-tos, desastres aéreos), afectaciones a telégrafos y teléfonos, etc. Es esta una simple aproxima-ción que hacemos, para advertir que no existía «bache» alguno en el Código que precisara denuevas normas.

Por todo lo que hemos manifestado es que estimamos vehementemente debederogarse la ley en análisis por afectatoria a la Democracia argentina alcanzada con esfuerzopopular.

TEXTO DEL PROYECTOArt. 1: Derógase la ley Nº 26.734 y el consiguiente párrafo quinquies del art.41 del Códi-

go Penal.Art.2: De forma.

Page 82: Cuadernos marxistas Nº 04

82

Compañeros y compañeras: estamos nuevamen-te acá, en esta Plaza, otro 24 de marzo más, paraconmemorar el Día Nacional de la Memoria porla Verdad y la Justicia. Hoy, en todas las plazas delpaís, este pueblo salió, como cada año, a defenderla democracia, a repudiar aquel nefasto 24 demarzo de 1976, cuando la Junta Militar comanda-da por los genocidas Jorge Rafael Videla, Eduar-do Massera y Orlando Agosti tomó el poder.

36 años atrás, desde la Casa que está aquí atrás,se orquestaba el terror: comenzaba el último gol-pe cívico-militar. Pero la historia de represiones yresistencias comenzó mucho antes. El terror deEstado se aplicó en nuestra patria durante mu-cho tiempo: así sucedió con nuestros hermanosde los pueblos originarios, con los bombardeosde 1955 y también mucho antes del Golpe de1976, cuando empezaron a operar las organiza-ciones paramilitares como la Triple A.

Con los genocidas en el poder se implementóun plan económico, político, social y cultural con-tra el pueblo. Apoyando e instigando este golpede Estado estuvieron los grandes grupos eco-nómicos, y no sólo pidiendo a gritos el terroris-

Declaración a 36 añosdel último golpe cívico-militar

mo de Estado, sino también en muchos casosprestando sus instalaciones, su logística y sus ve-hículos para el exterminio, y entregando listas detrabajadores que militaban. Ya desde antes delCordobazo buscaron aniquilar a los obreros or-ganizados, a esos que se rebelaban contra losmaltratos, la explotación, defendían los derechosde los trabajadores, se sindicalizaban.

La economía de la dictadura fue el plan políti-co del genocidio. Se ideó un proyecto para colo-car toda la economía al servicio de las multina-cionales, la Sociedad Rural Argentina, y otros gru-pos, destruyendo la industria nacional. Se masacróa una generación que estaba organizada para re-sistir ante el avance de los intereses financierosmultinacionales en el Continente.

El terrorismo de Estado, cometido en casi to-dos los países de Latinoamérica, llegó para alla-nar el territorio al neoliberalismo. Los genocidasinstalaron un modelo de hambre y exclusión quedañó a todo el pueblo. No cometieron sus crí-menes solamente dentro de los centros clandesti-nos. Cometieron también crímenes económicos,de los que todo el pueblo fue víctima, y cuyas

Nuestra venganza es la de ser felices!

Page 83: Cuadernos marxistas Nº 04

83

consecuencias seguimos padeciendo.La dictadura nos dejó una deuda externa que

nos condenó a la dependencia durante décadas.Los empresarios se llenaron los bolsillos y vacia-ron los del pueblo, de la mano del FMI y losorganismos internacionales de crédito.

Por eso es que hoy volvemos a decir bien fuer-te: ¡LOS GRUPOS ECONÓMICOS TAM-BIÉN FUERON LA DICTADURA! ¡EXI-GIMOS JUICIO Y CASTIGO YA! Porquefueron parte de los que instigaron, financiaron y sebeneficiaron con el golpe de Estado de Videla. Seenriquecieron con la dictadura y fueron partícipes:sin ellos el genocidio no hubiera sido posible.

Eran las empresas al servicio del capital y laexclusión, en contra del pueblo. Eran Ford, Mer-cedes Benz, Acíndar, Clarín, La Nación,Loma Negra, La Veloz del Norte, Astarsa,Fiat, Tensa, Techint, Dálmine Siderca, Pé-rez Companc, Celulosa Argentina, Macri,Techint, Bridas, Alpargatas, Papel Prensa,Banco de Italia, City Bank, Lozadur, FirstNational Bank, Chase Manhattan Bank,Bank Boston y La Cantábrica, entre otras.

Muchas de esas empresas cambiaron de due-ños, otras no. Muchas dejaron de existir, otrasno. Y muchas siguen perpetuando lógicas patro-nales en contra de los trabajadores. Clarín siguehoy sin permitir la sindicalización: ¿desde qué lu-gar sale después a hablar de democracia?

Durante todos estos años luchamos contra laimpunidad. Supimos lo que significaba morderel polvo, pero nunca nos detuvimos. Siempremantuvimos viva la esperanza. Y fue desde esamisma Casa que antes señalamos que hace 9 añosse tomó la decisión histórica de terminar con laimpunidad. Fue el presidente Néstor Kirchnerquien primero pidió perdón en nombre del Es-tado y luego sostuvo una política para que elPoder Judicial haga realidad el reclamo históricodel pueblo por Memoria, Verdad y Justicia.

Hoy, la mano ejecutora del Terrorismo de Es-tado está siendo juzgada. Hay 875 genocidas pro-cesados para ser juzgados y 273 integrantes de lasFuerzas de Seguridad fueron condenados, perosólo 43 de esos fallos están firmes. Faltan genoci-das en los juicios, porque mil personas solas nopudieron instalar un régimen terrorista de Estado,donde funcionaron más de 300 centros clandes-tinos de detención donde desaparecieron a 30mil personas. Por eso, todavía falta. Falta tam-bién avanzar hacia el juicio a los civiles, que fue-ron parte del plan sistemático de exterminio, ese

plan que utilizó la desaparición forzada comométodo para implantar el terror e imponer el si-lencio y el miedo, que intentó destruir la política comoherramienta de cambio, compromiso y lucha.

Junto a las Fuerzas Armadas estaba el poderde la cúpula de la Iglesia Católica, de empresas yempresarios, de medios de comunicación y pe-riodistas, de entidades patronales y del Poder Ju-dicial, entre otros.

Los medios de prensa hicieron propaganda delos mismos crímenes que cometían. El GrupoClarín, de Ernestina Herrera de Noble, y La Na-ción, de la familia Mitre, adquirieron de manerasiniestra la empresa Papel Prensa. Ahí se vio cómooperaban: como grupo de tareas intelectual yoperacional.

Secuestraron, violaron y torturaron a Lidia Pa-ppaleo para tener las acciones de esa empresa.Pero se acabó el tiempo de la mentira: la causajudicial por Papel Prensa avanza en la justicia y lasociedad ya no deja ninguna grieta para que losideólogos del terrorismo de Estado hagan ope-raciones políticas.

En el terrorismo de Estado, a Clarín y La Na-ción se sumaron La Nueva Provincia de los Mas-sot, y los periodistas que apoyaron a las FuerzasArmadas como Gelblung, Grondona, Neusta-dt y Morales Solá. Eran la voz única del poder,toda disidencia era silenciada, perseguida e in-cluso aniquilada.

Así como a la iglesia genocida se le opusieronlos religiosos comprometidos con el pueblo, enla prensa también hubo resistencia y lucha. Ahíestaba el compañero Rodolfo Walsh, con la Agen-cia de Noticias Clandestinas, ANCLA. Hoy secumplen 35 años de la Carta Abierta que publicópara denunciar los crímenes de la dictadura. Aldía siguiente fue asesinado en el operativo en SanJuan y Entre Ríos. Es histórica su denuncia y esimpecable su análisis del Golpe, a un solo año dehaberse instalado. Desde la clandestinidad obliga-da, Rodolfo escribió sobre la dictadura cívico-mi-litar: «En la política económica de ese gobiernodebe buscarse no sólo la explicación de sus críme-nes sino una atrocidad mayor que castiga a millo-nes de seres humanos con la miseria planificada».

Son los mismos. Y siguen persiguiendo los mis-mos intereses, en desmedro del pueblo, siemprea favor del capital, la propiedad privada y losintereses de las multinacionales. Muchos, incluso,son los mismos jueces que fueron nombrados enla dictadura y son los que hoy traban las causas.Así sucedió con Bisordi, en la Cámara de Casa-

Page 84: Cuadernos marxistas Nº 04

84

ción, hoy abogado del represor Patti, o con Ro-mano en la Cámara de Mendoza, que se profu-gó a Chile y estamos reclamando su extradición.Muchos de ellos son los mismos jueces que hoycriminalizan la protesta y la pobreza, que orde-nan reprimir las movilizaciones populares. Losque se resisten a democratizar el Poder Judicialpara no perder sus privilegios de poder.

Las entidades patronales como la SociedadRural históricamente han impulsado Golpes deEstado para defender sus privilegios de clase, yaún hoy se siguen oponiendo a una redistribu-ción justa de la riqueza.

Para profundizar el Juicio y Castigo también esfundamental la desclasificación de todos los archi-vos de la dictadura. Y somos categóricos: debenabrirse todos los archivos, de todas las fuerzasmilitares y de seguridad, nacionales y provincialesy los de la SIDE. Porque en esos documentos es-tán las pruebas que nos faltan, los nombres de losrepresores y de los cómplices civiles del genocidio.Por eso le pedimos al Estado que desclasifique YAtodos los archivos, porque el pueblo tiene dere-cho a tener justicia y a saber la verdad.

Como familiares de desaparecidos necesitamossaber la verdad. Es urgente. No podemos seguiresperando, mientras la verdad es retenida. Nece-sitamos saber dónde está el cuerpo de cada unode los desaparecidos. No podemos seguir sin te-ner un lugar donde llorarlos, sabiendo que susrestos fueron recuperados. Necesitamos saber quéles hicieron, quiénes son los culpables y que to-dos ellos respondan ante la justicia.

Pedimos toda la verdad, como madres, pa-dres, hijos, abuelas, familiares, hermanos, espo-sas, esposos. Lo pedimos como pueblo: los des-aparecidos nos faltan a todos.

Queremos agradecer mucho al EAAF, Equi-po Argentino de Antropología Forense, porquegracias a su trabajo y compromiso hemos podi-do identificar los restos de muchos compañeros:ya son 515 las familias que pudieron recuperar asus seres amados.

En poco tiempo terminará el juicio por el plansistemático de robo de bebés, nuestros nietos,que hoy son jóvenes de entre 31 y 37 años. Puedeser alguno de ustedes, o un amigo, un compañe-ro de trabajo, o alguien que conozcan.

Son muchos jóvenes los que necesitan recupe-

rar su identidad. Queremos compartir algo conustedes, que no es sólo un número, porque detrásde la cifra hay una familia, hay vida. ¡Ya hemosencontrado 105 nietos, que han recuperado suverdadera identidad!

Pero también queremos decirles que alrede-dor de 400 jóvenes siguen secuestrados, viviendovidas impuestas. Y acá estamos sus familias, bus-cándolos, esperándolos para contarles sus histo-rias, para recibirlos y darles amor, para que pue-dan ser libres, sabiendo la verdad. Acá estamoslas abuelas para abrazarlos, para compartir la vida,el futuro. Queremos conocerlos, cuidarlos, mi-marlos. No queremos que la mentira nos robemás tiempo con nuestros nietos. Los necesitamoscon nosotras, como debería haber sido desde unprincipio.

Una vez más, les decimos a los apropiadoresde nuestros nietos y a los demás genocidas queestán siendo juzgados que todo el pueblo esperaque digan dónde están esos jóvenes que busca-mos toda la vida. Son una generación obligada ala mentira, todos sentimos la necesidad de querecuperen su libertad. ¡Hablen, digan dónde es-tán, déjenlos ser libres y felices!

Los 30.000 compañeros detenidos-desapare-cidos tenían la edad de muchos de ustedes. To-maron decisiones en un momento histórico en elque la militancia era condenada por el gobiernode turno: la dictadura. Hoy la militancia es posi-ble con libertad. Hay un proyecto de país que lacontiene y sentimos un profundo orgullo porquecada vez más jóvenes deciden involucrarse. Aho-ra se puede. Ese es el temor de los poderosos desiempre: la juventud que defiende sus ideas. Sonlos mismos que en la década del ´70 persiguierony fueron parte del aniquilamiento de los militantes.

Hoy quieren volver con esas ideas desde dis-cursos demonizadores de los jóvenes que mili-tan. En todos ustedes podemos ver a los 30.000compañeros, así que ¡adelante!, sigan con los pro-yectos, si se molestan los poderosos quiere decirque vamos por el buen camino y que hay queprofundizarlo!

Recientemente, Clarín y La Nación criticaron lamilitancia de los jóvenes y puntualmente la demuchos hijos de desaparecidos. Lo hicieron losmismos medios cuyos empresarios fueron partedel plan sistemático de exterminio que dañó a un

Nuestra venganza es la de ser felices!

Page 85: Cuadernos marxistas Nº 04

85

país entero y que masacró a una generación. Am-bos medios son plataformas permanentes de ata-ques a los Organismos de Derechos Humanos.

Hay determinados sectores que permanente-mente critican a la juventud y estigmatizan la mi-litancia. La política ha vuelto a ser la herramientapara transformar la realidad, y una gran cantidadde jóvenes se han volcado a la militancia. La par-ticipación política es garantía de calidad demo-crática y la única posibilidad de construir nuestravoz como sociedad, en lugar del discurso únicode las empresas periodísticas que hablan desdesus intereses y necesidades.

A lo largo y ancho del país se están desarrollan-do juicios con todas las garantías que brinda laley, aquellas que les negaron a los compañeros.Hay 11 juicios en curso y comenzarán más esteaño. Todos son orales y públicos, cada uno denosotros puede participar de este momento his-tórico y escuchar a los testigos, sobrevivientes ytambién a los represores. Ya son 273 los genoci-das condenados, pero no hay ni un empresarioentre ellos. Necesitamos que la Justicia avance más.Porque muchas de las condenas no están firmes yel juicio y castigo efectivo no es posible sin laconfirmación de las sentencias de la Cámara deCasación. Por las calles caminan genocidas con-denados, que están excarcelados hasta confirmarseel fallo. Son asesinos que andan sueltos por el le-targo de la justicia. La justicia debe tener todoslos recursos a disposición para que no se demo-ren los juicios por falta de sala, o conformaciónde tribunal.

Somos categóricos en esto: los juicios a los ge-nocidas deben desarrollarse en espacios prepara-dos para eso, nunca en los ex centros clandesti-nos. No vamos a permitir ningún intento de re-victimizar a los compañeros sobrevivientes. Re-chazamos de plano esa posibilidad.

Este año comenzará otro juicio histórico: a 40años de la Masacre de Trelew, serán juzgados losfusiladores de 19 militantes. A principios de mayoviviremos en Chubut ese juicio por el que lucha-ron los compañeros detenidos-desaparecidos. Seles termina la impunidad a los asesinos y ahí esta-remos, acompañado el juicio, apoyando a los tes-tigos y abogados.

Ya pasaron cinco años y seguimos sin saberdónde está el compañero Jorge Julio López.Exigimos saber la verdad y que los responsablessean juzgados, así como también exigimos el es-clarecimiento del asesinato de Silvia Suppo en SantaFe. Necesitamos la verdad para seguir avanzando

en el camino de Memoria, Verdad y Justicia.Este año se cumplirán 10 años del asesinato de

Maxi Kosteki y Darío Santillán, quienes eran mili-tantes, como Mariano Ferreyra, asesinado en 2010.

En algún tiempo debería comenzar el juicio ala patota criminal de Pedraza y al grupo de poli-cías que participaron en el asesinato de Mariano.Ningún crimen debe quedar impune. Acompa-ñamos a la familia Ferreyra en la lucha por Juicioy Castigo.

La impunidad sólo genera impunidad. Lo de-muestra cada hecho de violencia institucional. Elaparato represivo de la dictadura debe ser des-mantelado material e ideológicamente. Las co-misarías no pueden seguir siendo lugares de tor-tura y muerte, el gatillo fácil debe ser erradicadoy la justicia debe condenar a quienes cometen vio-laciones a los derechos humanos.

En enero se cumplieron tres años de la desapa-rición forzada de Luciano Arruga. ¿Qué más fal-ta para que la justicia avance, juzgue y condene alos culpables? Muchos de ellos están identifica-dos y siguen en actividad en la Policía de la pro-vincia de Buenos Aires. Cuando la justicia no cum-ple su tarea y da ejemplo, garantiza la impunidadpara que se sigan cometiendo violaciones a losderechos humanos.

Las prácticas criminales que persisten en las fuer-zas de seguridad deben ser erradicadas para quenadie más sea víctima de la criminalización de lapobreza o la protesta.

Como sociedad tenemos otro tema que requiereverdad y justicia: la trata de personas, una nuevaforma de desaparición forzada, práctica criminalque debe ser erradicada de inmediato. Mujeres,hombres, niñas y niños son privados de su libertady sometidos a la explotación sexual y esclavitud.

Volvemos a decir: ¡basta de trata! Sin participa-ción de miembros del poder judicial y político,de las fuerzas de seguridad y de los civiles queconsumen o forman bandas de trata, este delitono sería posible.

En Tucumán se desarrolla el juicio histórico a13 imputados por la desaparición forzada y tratade Marita Verón, víctima de la trata desde hace10 años ¡Expresamos todo nuestro apoyo a Su-sana Trimarco en Tucumán y con ella a todas lasfamilias que buscan a sus hijos e hijas víctimas dela trata! Es una causa colectiva, que debemos de-fender entre todos.

Porque de eso depende el país que construya-mos, el que dejemos para generaciones futuras.Estamos convencidos de que no hay otro futuro

Page 86: Cuadernos marxistas Nº 04

86

posible que el que podemos hacer luchando jun-tos. Y queremos que ese futuro sea una realidad,por nuestros hijos, por nuestros nietos, por uste-des, por sus hijos, por sus nietos, por todos.

Dijimos muchas veces que este proyecto de ciu-dad no es parte del proyecto de país que quere-mos profundizar. Les queremos pedir algo: quepor un momento se den vuelta y miren haciaAvenida de Mayo.

Ahí, a su derecha, verán el edificio del Gobier-no de la Ciudad de Buenos Aires, desde dondese gestiona un proyecto de exclusión, con patotaspara ejecutar desalojos violentos, con una infra-estructura montada para las escuchas ilegales, conuna policía diseñada por el represor Jorge «Fino»Palacios, con un modelo de educación y saludpara pocos.

Permanentemente, el gobierno de la ciudad re-curre a políticas que son propias del terrorismode Estado: grupos de tareas, listas negras, crimi-nalización de la protesta y la pobreza. No quere-mos una ciudad cada vez más privatizada. Estaciudad que habitamos necesita que defendamostodos juntos nuestros derechos y que luchemospor otro proyecto: el de una ciudad que incluya,que eduque, que garantice la salud; una ciudadpara todos.

Como defensores de los derechos humanos,también queremos repudiar la sanción en 2007 ysu modificación en 2011 de la llamada Ley Anti-terrorista.

Desde 2003 a esta parte, nuestro país ha avan-zado mucho en materia de promoción y defensade los derechos humanos. Celebramos y estamosconvencidos que una de las medidas más impor-tantes de este proceso político ha sido ordenar lano represión de la protesta social.

Sabemos que todavía queda mucho por hacer,pero esta ley nos hace retroceder en ese camino. Y no puede pasar desapercibida, ya que deja abier-ta la posibilidad a cualquier juez de actuar en de-trimento de los luchadores populares, porque dejalas puertas abiertas a la libre interpretación de losmiembros del Poder Judicial para aplicarla. ¿Dón-de está en la ley la definición sobre «terrorismo»?Nuestro país, como tantos otros, tiene la experien-cia de siete años de genocidio, basado en la crimi-nalización de las organizaciones de resistencia.

Esta ley tiene una gravedad importante para

quienes consideramos que los Estados deben sergarantes de los derechos humanos de todos ytodas. Queremos seguir dando ejemplo ante elmundo en materia de derechos humanos, peromedidas así nos alejan de ese camino. Por esto,exigimos la derogación de la Ley Antiterrorista.

Este año también se cumple un aniversario deotra fecha histórica: 30 años de la Guerra deMalvinas, planeada por los mismos genocidas quetorturaron, secuestraron, violaron, robaron be-bés y desaparecieron compañeros en los centrosclandestinos.

Hoy, acompañamos el reclamo por la sobera-nía de las Malvinas desde la certeza de que el ca-mino que se está eligiendo es el diálogo, la paz ytiene el apoyo de Latinoamérica.

Queremos hacer un reconocimiento a todosaquellos pibes colimbas, que pusieron su cuerpo,y hasta dieron su vida por nuestra Patria. Quere-mos reconocer a esos colimbas, que fueron tor-turados, por sus superiores. Este 24 de marzoqueremos acompañarlos. Y gritar bien fuerte to-dos juntos, ¡Las Malvinas son argentinas! Memo-ria, Verdad, Justicia y Soberanía!

Queremos reivindicar junto a ustedes la me-moria de nuestros compañeros detenidos-desapa-recidos, esos hombres y mujeres comprometidoscon la lucha por una patria para todos, luchadorespor una sociedad más justa, libre y soberana.

Todos tuvieron un sueño latinoamericano: launión de los pueblos. A ese sueño se le respondiócon el nefasto Plan Cóndor, un operativo conjun-to de los Estados terroristas de Uruguay, Brasil,Argentina, Chile, Paraguay y Bolivia con la CIA.

Esa patria grande con la que soñaron los com-pañeros hoy se vislumbra en nuestra AméricaLatina. Quién hubiera imaginado, compañeros ycompañeras, que después de tanta lucha, tendría-mos un gobierno nacional y popular en la Ar-gentina con Cristina, y gobiernos hermanados enla lucha como el de Evo en Bolivia, Dilma enBrasil, Pepe en Uruguay, Lugo en Paraguay, Co-rrea en Ecuador, o Hugo Chávez en Venezuela.Por eso gritamos bien fuerte: ¡Viva nuestros pue-blos hermanos de Latinoamérica! ¡Viva!

Por esta patria grande también luchaban nues-tros detenidos desaparecidos. Eran militantes dedistintas organizaciones políticas, estudiantiles,gremiales, culturales, sindicales. Los unía el com-

Nuestra venganza es la de ser felices!

Page 87: Cuadernos marxistas Nº 04

87

promiso de luchar por cambiar lo que creían in-justo. Y estaban convencidos de que eso se hacíaentre todos, con ese héroe que sólo existe cuan-do es colectivo.

Mientras desde algunos sectores les decían «note metás», ellos y ellas se metieron: en la militan-cia, la política, las villas, las facultades, las fábri-cas, los sindicatos, los gremios, las escuelas, espa-cios religiosos, hospitales. Se comprometieron sinninguna búsqueda personal, sino con un sueñocolectivo: una patria para todos.

Hoy, como cada 24, somos muchos. Noso-tros sentimos a cada una y cada uno de ustedescomo compañeros, porque se trata de compar-tir, de soñar juntos esta patria. Los genocidas rom-pieron los lazos sociales, los quebraron para im-plantar el individualismo, política que se conti-nuó en los sucesivos gobiernos post dictaduracon el neoliberalismo. Pero no pudieron. Lo es-tamos cambiando y aquí estamos nuevamente,en este largo pero hermoso camino de la lucha,la transformación, el cambio de lo que conside-ramos injusto.

Llegamos hasta acá otro 24 de marzo más. Esoes porque este pueblo se compromete cada vezmás con la democracia. Acá somos este grannosotros de compañeros y compañeras. Somosla historia imparable de este pueblo que no daráni un solo paso atrás, que no permitirá ningúnatropello, que seguirá su camino con las banderasbien en alto para llevarlas a la victoria.

Acá estamos, para seguir construyendo todosjuntos una Latinoamérica con más Memoria, Ver-dad y Justicia.

30.000 DETENIDOS-DESAPARECIDOS¡PRESENTES!

AHORA Y SIEMPRE AHORA Y SIEMPRE AHORA Y SIEMPRE

Abuelas de Plaza de Mayo, Familiares deDesaparecidos y Detenidos

por Razones Políticas, H.i.j.o.s. ,Hijos e Hijas por la Identidad y

la Justicia Contra el Olvido y el Silencio,Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora

JUICIO Y CASTIGO A TODOS LOSGENOCIDAS

Page 88: Cuadernos marxistas Nº 04

88

Una de las características más significativas dela actual etapa histórica es la extraordinaria velo-cidad con que se producen ante nuestros ojosfuertes cambios en los climas de época. Es asíque hemos pasado de la feroz soberbia de la con-

trarrevolución conservadora, entronizada a es-cala mundial tras la desarticulación de la URSS, ala actual resurrección del marxismo al calor de lacrisis capitalista.

Dos décadas después de la caída del muro deBerlín y de la boutade de Francis Fukuyama decla-rando el fin de la historia y de las ideologías, elmarxismo vuelve a estar a la orden del día, sureputación opera un resurgimiento asombroso yel capitalismo enfrenta su límite que, como habíaexpresado Marx, es el propio capital y su lógicade reproducción constante que presenta una fron-tera que no puede superar.

La promesa de bienestar general con la que elcapitalismo se expandió a todo el planeta luego

de la caída de la experiencia soviética, en sólo dosdécadas demostró su total inviabilidad, su incom-patibilidad con la lógica de lucro sin límites, fi-nancierización, militarización e individualismo queson su razón de ser.

Hoy, cuando la profundización de esta lógicatiene inmerso al capitalismo en la peor crisis de suhistoria, sosteniéndose en su hegemonía militar yrodeado de revueltas populares y de indignados

que ganan las calles, el fin de la historia es unapromesa más que llegó a su fin.

Para entender lo que está sucediendo, es nece-sario analizar en las últimas décadas un procesohistórico que estuvo signado por las crisis que,con distintos tiempos y evoluciones enfrentaronel socialismo y el capitalismo.

por Patricio Echegaray

A 22 AÑOS DE LA CARTA DE LOS CINCO

Sin pausa por el camino del socialismo

Page 89: Cuadernos marxistas Nº 04

89

Los comunistas latinoamericanos ya analizába-mos este proceso en la Carta abierta a las fuerzasrevolucionarias y progresistas, publicada originalmen-te en marzo de 1990, redactada por HumbertoVargas Carbonell del Partido Vanguardia Popu-lar de Costa Rica; Roberto Padilla Rush, del Par-tido Comunista de Honduras; Narciso Isa Con-de, del Partido Comunista Dominicano; SchafikJorge Hándal, del Partido Comunista de El Salva-dor y Patricio Echegaray del Partido Comunistade la Argentina con la colaboración de Manuel Pi-ñeiro Losada del Partido Comunista Cubano.

En esos años difíciles para las fuerzas revolu-cionarias, donde la hegemonía comunicacional delcapitalismo le permitió esconder los efectos y pro-yecciones de su propia crisis tras el estruendo cau-sado por la caída de la Unión Soviética, esta ma-nifestación de un grupo de dirigentes comunistasno fue sólo un acto reflejo de resistencia, sino quese fundamentó en la convicción de que el marxis-mo seguía siendo la mejor herramienta de análisissocial desde la cual, teniendo en cuenta los aciertosy los errores de la experiencia concreta, continuarelaborando un proyecto alternativo de sociedadque supere al capitalismo.

Mientras los ocasionales triunfadores de esemomento lograron imponer en amplios sectoresla idea de que la caída del bloque socialista arras-traba consigo todo intento de pensar un proyec-to alternativo al capitalismo, que la contrarrevo-lución conservadora había triunfado definitiva-mente en todos los frentes y que el capitalismoen su fase neoliberal y las pseudo democraciasoccidentales, concebidas como verdaderas plu-tocracias por los sectores dominantes, eran la es-tación terminal en la historia de la humanidad.

Bastaron sólo dos décadas para que esta fábulavoluntarista llegara a su fin.

La historia siguió en movimiento y los que pro-metieron paz y bienestar, una vez liberados delpeligro rojo, nos precipitaron en un mundo deguerras, concentración y financierización del capi-

tal, de desocupación y hambre para los pueblos.Envalentonados con su triunfo en una tercera

guerra mundial que se libró en términos ideoló-gicos y económicos, donde resultaron transito-riamente derrotados los ideales de la RevoluciónRusa, desestructuraron los Estados de bienestarsurgidos en Europa occidental en la pos segundaguerra mundial, instalando un modelo de con-centración de la riqueza y aumento de la pobreza,mientras fructificaron las ideas que postulaban lamaldad intrínseca del Estado y las bondades delmercado y la iniciativa privada.

Hoy vivimos una situación que expresa un ver-dadero cambio de época y enfrentamos nueva-mente la necesidad de superar al capitalismo yretornar a los ideales comunistas.

Pero entender este proceso de doble crisis, nonos puede hacer caer en una simplificación deter-minista que prediga que, así como la crisis queatravesó el modelo socialista llevó a la caída de laURSS, la actual crisis del capitalismo traerá por sísola su caída.

Evidentemente derrumbe per se no habrá, es nece-saria la construcción de alternativas, España demos-tró que solamente con los indignados no se resuelve,que son un síntoma, un brote de rebeldía a tener encuenta, pero hace falta organización y una orienta-ción anticapitalista para avanzar en los cambios.

A veinte años de los sucesos que llevaron a lacaída de la URSS como consecuencia de la crisisque enfrentaron esos modelos de socialismo, nosparece oportuno publicar nuevamente la Cartaabierta a las fuerzas revolucionarias y progresistas dadaa conocer en marzo de 1990 porque entende-mos que es un análisis de enorme vigencia políti-ca y que reivindica al marxismo como herramientade análisis, hoy que las tragedias que el poder ca-pitalista ha derramado sobre el mundo, nos po-nen nuevamente ante el desafío de, reivindicandolos ideales comunistas, avanzar firmemente en laconstrucción de una sociedad más justa, por elcamino del socialismo.

Page 90: Cuadernos marxistas Nº 04

90

Apreciados compañeros y amigos:

En estos días de aguda crisis, de intensa ofensiva imperialista y de grandes potencialida-des revolucionarias, hemos decidido hacer llegar a ustedes nues-tras inquietudes y re-flexiones sobre el complejo período en que vivimos. El momento no es para inhibicio-nes. Está en una etapa crucial para las revolu-ciones y las luchas patrióticas y populares ennuestra América Latina y en todo el Tercer Mundo.

La crisis del sistema imperialista

Nunca antes nuestro continente y todo el Tercer Mundo habían vivido una crisis tan profun-da y generalizada. Nunca antes el poder imperialista de los Estados Unidos ha tenido tantosproblemas y tantos riesgos deriva-dos de su política de sometimiento.El estrangulamiento de las posibilidades de desarrollo de América Latina y del Tercer Mundose le revierte al imperialismo en una masiva emigra-ción que traslada a su propio territorio losmales provocados y que amena-za su estabilidad social interna.La tendencia a los estallidos sociales y a la inestabilidad políticacrece en los países dependientes.Las profundas y cada vez más amplias aspiraciones demo-cráticas de nuestros pueblos no se satisfacen con demo-cracias considerablemente restringidas, negadoras deuna participación real y del poder de decisión denuestros pueblos.Las drogas que inundan la sociedad norteame-ricana en un proceso de indetenible descom-posición social, sólo benefician a los inte-reses mercan-tiles de los más encumbra-dos sectores de poder estadounidense alia-do con las mafias narcotraficantes latinoa-mericanas que aprovechan el ahogamien-to económico de América Latina y con-denan a grandes masas a depender di-rectae indirectamente de estas actividades. Lasituación así creada tiene hoy, dada su gra-vedad, un importante efecto desestabilizadoren la socie-dad estadounidense. Los Estados Uni-dos van perdiendo terreno como su-perpotenciaeconómica dentro del propio sistema capitalista. Pier-de terre-no en esa vertiente frente a Japón y a EuropaOccidental y se refugia funda-mentalmente en su po-derío militar para mantener su hegemonía.

Dos crisis paralelas

El poder imperialista de los Estados Unidos, sin em-bargo, está ensober-becido, a pesar de la profunda, pro-

Carta Abierta a las Fuerzas Revolucionariasy Progresistas de América Latina y el Caribe

Page 91: Cuadernos marxistas Nº 04

91

longada y dramática crisis que afecta su sistema de dominación y de la creciente descom-posición en su propia so-ciedad. Esa actitud se aprovecha del hecho de que su gravecrisis coexiste ahora con la crisis de determinados modelos socialistas seriamente afecta-dospor el alto grado de burocratismo, centralismo, dogmatismo y otros factores estructura-les y coyunturales.Estamos frente a dos grandes crisis. Por un lado la crisis del sistema capi-talista mundial,cuya existencia ahora es la causa de los agudos y dramáti-cos problemas que afectan a lainmensa mayoría de los seres humanos; y, por el otro, la crisis de modelos socialistas quese burocratizaron y se torna-ron ampliamente autoritarios y represivos, alejándose así delideal original que fundía la justicia social con la democracia, para garantizar un continuoproceso de auto-superación.Del mismo modo que la carrera armamentista emprendida por el imperia-lismo norte-americano constituye la causa de su actual crisis, la dinámica armamentista en la UniónSoviética, aunque por motivaciones distintas y bajo el funcionamiento de mecanismoseconómicos diferentes, es asimis-mo la que condujo al período de su estancamientoeconómico y a la crisis. La «perestroika» surgió como una necesidad de enfrentar esacrisis y de renovar el socialismo.Los nuevos lineamientos, que primero se circunscribieron a plantear la aceleración eco-nómica y el paso del desarrollo extensivo al desarrollo in-tensivo, rápidamente fueronprecipitados al terreno de la democratización política y de la transparencia informativa.Ese necesario viraje se produjo, sin embargo, presentando problemas imprevistos, evi-denciando grandes debilidades ideológicas así como las enormes dificultades de la ca-rencia de una estrategia coherente de renovación socialista y una fuerza capaz de impul-sarla y conducirla exitosamente.El cambio sacó a la superficie los problemas acumulados en la Unión Soviética y desatólos demás procesos en Europa Oriental, desarrollando un complejo clima de desestabi-lización institucional y de pugnas políticas que hacen más tortuosa la de-mocratización,crean nuevas complicaciones y presentan nuevas desviaciones.La exacerbación de la prepotencia de la administración Bush se deriva, pues, de lasprofundas debilidades existentes en el campo de las fuerzas del socialismo. Esas debili-dades se expresan en crisis, desviaciones e insufi-ciencias teóricas que han conducido a unembotamiento preocupante del antiimperialismo, del internacionalismo y de las posicio-nes revoluciona-rias en no pocos de los componentes de esas fuerzas.

El imperialismo sigue existiendo

Dentro de esa línea, las posiciones extremas llegan al colmo de plantear la «inexistencia»del imperialismo y a considerar a las potencias capitalistas como «no adversarios» e inclu-so, como posibles «socios» dentro de un pro-ceso de convergencia entre sistemas yfuerzas realmente antagónicas. Nues-tra objeción a ese pensamiento y a esa actitud escategórica.Es claro que el imperialismo de hoy no es idéntico al que Lenin describió en las primerasdécadas de este siglo. Pero también es más que evidente que el imperialismo existe y quesigue siendo el principal enemigo de los pueblos y el gran responsable de las más con-movedoras penurias y sufri-mientos que hoy azotan a la humanidad.El sistema imperialista no debe ser juzgado exclusivamente por sus polos subdesarrolla-dos, por sus centros más ricos, por los países capitalistas que exhiben mejores niveles debienestar económico y social.El sistema imperialista es mucho más que eso y precisamente esos polos han sido elproducto de una depredación, un saqueo, una explota-ción y una extorsión sin paralelo

Page 92: Cuadernos marxistas Nº 04

92

en la historia mundial. El denominado Tercer Mundo, del cual forman parte nuestraAmérica Latina y el Cari-be, constituye la dimensión dramática y trágica de este sistema,plaga-do de injusticias, discriminaciones, inseguridad social, desempleo y formas de alie-nación presentes en el propio mundo desarrollado.La realidad es que el imperialismo existe con mayores niveles de voraci-dad y agresividady con recursos, capacidades tecnológicas y experiencias acumuladas que le garantizan unaopresión más global y multifacética, y con un uso más intenso de potentes medios dedominación, mucho más modernos y sofisticados que los empleados en otras etapas.Porque vivimos y sufrimos esta realidad, porque luchamos por transfor-marla, nos alar-man y nos indignan las nuevas tesis sobre la supuesta cadu-cidad del antiimperialismo yde las revoluciones populares en estas regio-nes oprimidas, súper-explotadas y empo-brecidas: tesis que lamentablemen-te tienen incluso ya una determinada gravitación en el«nuevo pensamien-to» o «nueva mentalidad» impulsadas desde la «perestroika».Sólo a través de un enfoque limitado a la pérdida relativa de la importan-cia económicade los países dependientes dentro del sistema imperialista y de un abandono de la visióncrítica del capitalismo, puede arribarse a esas tesis improcedentes, que entendemos debe-rían abandonarse.

Por la paz, el humanismo y la revolución

Esa firme convicción no limita nuestra valoración positiva de los esfuerzos de la UniónSoviética y otros países, destinados a lograr acuerdos interesta-tales con las grandes po-tencias capitalistas que eviten las grandes tragedias que amenazan la existencia de la huma-nidad. Tampoco obstruye una equi-librada reflexión sobre los cambios que tienen lugaren otras partes del mundo.Comprendemos la preocupación presente en Europa por los amenazantes problemasglobales relacionados con los peligros de guerra termonuclear y con los dramáticos des-equilibrios ecológicos provocados por la civiliza-ción industrial. Nos solidarizamos conlos anhelos de paz duradera y res-paldamos las iniciativas y acuerdos en esa dirección.Nos alegramos cuando las aspiraciones de renovación, democratización y autodetermi-nación cobraron fuerza en los países del Este europeo, cuyos modelos burocráticos en-traron en crisis y en fase de agotamiento.Saludamos las proclamas iniciales sobre la necesidad de revitalizar el humanismo en esazona del mundo. Nada de esto ha tenido ni tiene objeción de nuestra parte.El dogmatismo, la unilateralidad y el aferramiento a viejos esquemas o a extremismosinfecundos no forman parte de nuestra manera de pen-sar y actuar.Compartimos todo lo que es creatividad, renovación, democratización, valoración de lonuevo y esfuerzos para superar la falta de desarrollo de la teoría revolucionaria.

Puntualizaciones y objetivos

Pero en torno a estos aspectos, consideramos imprescindible hacer algunas puntualiza-ciones, dada la negativa evolución de esos procesos.No creemos que la democratización deba circunscribirse al este europeo y asumirse co-piando esquemas y modelos de democracia representativa, que en el mundo occidentalhan entrado en crisis y revelado sus limitacio-nes, porque resultan extremadamente for-males y no garantizan la partici-pación y el poder de decisión de los pueblos.No creemos en la sinceridad de las proclamas de libertad y democracia que formulanpaíses capitalistas y fuerzas neoliberales que oprimen, con-denan al hambre, el analfabe-

Page 93: Cuadernos marxistas Nº 04

93

tismo y la insalubridad a cientos de millones de seres humanos. Nos solidarizamos con lasfuerzas democráticas y pro-gresistas que luchan al interior de esos países por los interesesmás am-plios de la sociedad. No creemos que la renovación y democratización necesa-rias dentro del socialismo deban ser desviadas por senderos de la pri-vatización capitalis-ta que tantas injusticias y males han provocado.No creemos que el internacionalismo y la solidaridad deban ser reempla-zados por elegoísmo nacional y la contemporización o complacencia con el imperialismo.No creemos en una paz que se reduzca a la paz entre los grandes.No creemos en un humanismo que se limite a los países del norte o se quede en la CasaComún Europea y desprecie las dos terceras partes de los habitantes del planeta queviven y sufren en el Tercer Mundo, aunque valo-ramos positivamente todo lo que esaCasa Común signifique para la inde-pendencia de Europa frente a los Estados Unidos.No creemos que los Estados Unidos y demás países imperialistas puedan ser definidoscomo «no adversarios» de los pueblos y del socialismo.No creemos en el repliegue y el desarme unilateral del socialismo y de las fuerzas revolucio-narias, mientras los Estados Unidos refuerzan su es-trategia de guerra de baja intensidad ysus planes de militarización del espacio para lograr hegemonía en materia de armamentos.No creemos que ningún interés global pueda ser contradictorio con la redención de lospueblos oprimidos del tercer mundo y con las luchas por la democracia, la paz, la justiciay la autodeterminación que se libran en Centroamérica, Palestina, Sudáfrica y en todas lasnaciones vilmente piso-teadas de Asia, África y América Latina.Nos indigna la prepotencia imperial en cada uno de esos lugares.Nos indigna que nos quieran imponer como «ideal» su cuestionable mo-delo de demo-cracia lleno de limitaciones y cargado de discriminaciones y manipulaciones, que ya hanmotivado un alto nivel de objeción y absten-ción en su propia sociedad y que sirve dedisfraz a múltiples atropellos y opresiones dentro y fuera de sus fronteras.Nos indigna su descaro y su cinismo actual.Nos preocupa que la «perestroika» esté siendo distorsionada, que se esté separando desus propósitos de ofrecer más socialismo y más democracia; nos preocupa que dentrode ella se desarrollen y ganen terreno los partida-rios de corrientes procapitalistas, losnacionalismos separatistas y contra-rrevolucionarios y los enterradores del internaciona-lismo revolucionario atraídos por la convergencia con los Estados Unidos y otras poten-cias capi-talistas.Estamos profundamente convencidos de que el debilitamiento del inter-nacionalismo enla Unión Soviética fortalece el chovinismo contrarrevolu-cionario que amenaza debilitare incluso desintegrar ese estado multinacio-nal. El repliegue en materia de antiimperialis-mo e internacionalismo se revierte contra la propia unidad de la Unión Soviética.Aunque nos preocupa el debilitamiento político sufrido por la Unión So-viética y másaún en los países de Europa Occidental a causa de la crisis y de la ausencia de vanguardiasesclarecidas y con autoridad ante los pueblos para asegurar el rumbo socialista de losacontecimientos que allí se están desarrollando, tenemos que reconocer que las dirigenciaspolíticas de la Unión Soviética y de los países de Europa del Este enfrentan de diferentemanera la lucha que se libra entre preservación y renovación socialista y regresión capitalista.Mientras en algunos países de Europa Oriental sus dirigencias se incli-nan abiertamentepor la inserción de sus países en el capitalismo, la situa-ción en la Unión Soviética yalgunos otros países se presentan de modo distinto y en general la regresión capitalistaestá por verse.Comprendemos lo difícil del presente período en esos países, lo complicado que resultaretomar el rumbo socialista que rearticule el socialismo con la de-mocracia, valoramoslos desvelos de todos los que se empeñan en que la reno-vación implique una fase cuali-tativamente superior de socialismo y no sea desnaturalizada por la influencia capitalista.

Page 94: Cuadernos marxistas Nº 04

94

Alentamos sus trascendentes esfuerzos y les deseamos los mejores éxitos en esa nuevabatalla.Nos preocupa que las debilidades del socialismo hayan facilitado la inter-vención militaren Panamá, la contraofensiva derechista en Nicaragua, las maniobras de los EstadosUnidos y el deteriorado y genocida régimen sal-vadoreño, las graves amenazas que seciernen contra Cuba revolucionaria, la escalada imperialista en toda la región.

Nuestras convicciones

Creemos firmemente en la paz para todos y con dignidad.Creemos en la renovación socialista.Creemos en la democracia con poder popular, en una democracia que potencie la parti-cipación de las organizaciones y de los nuevos sujetos po-líticos y sociales.Creemos en la necesidad de rescatar el ideal socialista original que reúne en un mismoproyecto las transformaciones sociales y la democracia. Ese ideal sigue en pie y luchare-mos por conquistarlo.Creemos en la paz entrelazada con la liberación y la renovación.Creemos en la necesidad y la posibilidad de las revoluciones populares para alcanzar lademocracia, la justicia social y la soberanía.Creemos en el internacionalismo revolucionario y en la necesidad de sos-tener con firme-za las banderas del antiimperialismo.Nuestros pueblos son víctimas del imperialismo y no podemos renunciar a la lucha revo-lucionaria por su emancipación y por la nueva democracia que esa dominación obstruye.En nuestro Tercer Mundo la situación es desgarradora. Las estructuras y modelos capita-listas dependientes carecen de soluciones y agravan los males que provocan. Las institu-ciones se corrompen, la democracia se mutila y restringe, la soberanía es pisoteada y lastensiones sociales y políticas se acumulan. Esta es una crisis de exclusiva responsabilidaddel sistema capitalista, en continuo proceso de empeoramiento.Por estos y otros factores, el centro de la ebullición revolucionaria se ha trasladado desdefinales de la década de 1950 al Tercer Mundo. En el pre-sente, esta realidad es todavíamás intensa y palpitante, presentando una gran potencialidad revolucionaria en AméricaLatina y un especial dina-mismo revolucionario en Centroamérica y en el Caribe, sin dejarde poner atención a la riqueza de los procesos políticos y sociales que se desarrollan enBrasil, Uruguay, Perú, Argentina y otros países.La vida indica que América Latina y el Caribe no tienen alternativa de desarrollo, dedemocracia y de soberanía dentro de la dominación imperia-lista, ya que es precisamenteesa dependencia la que nos ha hundido en el atraso, en la pobreza y en la carencia olimitaciones a la libertad.Las necesidades políticas, sociales y económicas de los pueblos latinoa-mericanos nopueden satisfacerse con estas democracias en crisis, vacia-das de contenido social, tutela-das por grupos poderosos y por el poder imperialista.Nuestros países requieren de revoluciones profundamente democráticas que den partici-pación y poder de decisión a todos los componentes del pueblo trabajador y a todos lossectores que pueden contribuir al desarrollo con justicia social y sienten las bases parallevar a cabo el ideal socialista.

La revolución es el gran reto histórico

Lo anterior no sólo quiere decir que la revolución continúa vigente históri-camente, sinoque constituye una necesidad y la posibilidad para la solu-ción de los problemas de América

Page 95: Cuadernos marxistas Nº 04

95

Latina y el Caribe y del Tercer Mundo. Esto nos impone un gran reto. El reto es mayorsi se tiene en cuenta, ade-más, que los virajes revolucionarios en el Tercer Mundo, particu-larmente en América Latina y el Caribe, tienen capacidad de impactar, e incluso alterar ydesestabilizar el sistema imperialista y podrían, de incrementarse y ampliarse, revertir laeuforia temporal de sus dirigentes y forzarlos pro-gresivamente a aceptar la idea de unnuevo orden económico y político internacional, basado en un auténtico humanismoabarcador de todos los pueblos, de toda la humanidad.Nuestro movimiento revolucionario y las fuerzas democráticas, antiim-perialistas y pro-gresistas de esta parte del mundo debemos y podemos acep-tar ese reto y disponernos aencarnar la nueva esperanza.

Es preciso crear y potenciar las vanguardias revolucionarias a través de la unidad, la luchay la relación estrecha con las masas populares.Es preciso construir una gran alianza por la democracia y la autodetermi-nación. Es preci-so fortalecer el tercermundismo y el latinoamericanismo para librar una lucha sin cuartelpor la victoria de nuevos proyectos democrático-revolucionarios y por la liberación denuestros pueblos.

Page 96: Cuadernos marxistas Nº 04

96

Esto incluye una firme defensa de Cuba socialista como pionera de la transición revoluciona-ria latinoamericana y baluarte del antiimperialismo y el internacionalismo en esta región.Incluye, asimismo, una firme solidaridad con las reservas de la Revolu-ción Popular Sandinis-ta, representadas en el FSLN y en los demás factores de poder popular que perduran despuésdel revés electoral, sobre cuyas causas es preciso reflexionar para superar errores.Incluye, muy especialmente la solidaridad para con la lucha del FMLN, y de todas lasfuerzas patrióticas y democráticas salvadoreñas que apuntan hacia una nueva y trascen-dente victoria y, asimismo, con el batallar ascen-dente del URNG en Guatemala y con lasluchas democráticas que hoy se libran en Haití, Colombia, Brasil, Perú, Argentina, Chile,Honduras y otros países. Esta es una gran verdad y una gran necesidad.

Pensar con cabeza propia

Pero dentro de la agenda revolucionaria latinoamericana no es posible ob-viar el impac-to de lo que acontece en Europa Oriental.Esos problemas han tenido un impacto contradictorio en las fuerzas re-volucionarias yprogresistas del continente: en una parte de ellas han pro-vocado desmoralizaciones yestímulos a concepciones alejadas de nues-tras necesidades y trasplantadas de procesoseuropeos, en otros sectores han reafirmado profundas convicciones revolucionarias, an-tiimperialistas y socialistas dentro de una clara determinación de independencia creadora.Nosotros nos ubicamos entre estos últimos y nos disponemos a poner nuestros corazonesy esfuerzos en dirección a pensar con cabeza propia y a desarrollar nuestra posición enmedio de las extraordinarias potencialida-des revolucionarias existentes en este continente.Nuestro viraje integral, nuestra rectificación revolucionaria, la renova-ción nuestra, tienesu propia problemática y sólo podría ser fructífera den-tro de una línea de unidad ycombate antiimperialista y de estrecha vincu-lación entre revolución popular y democra-cia participativa e integral.Nuestra renovación debe tener bien presente todo lo positivo de las co-rrientes renova-doras y democratizadoras a escala mundial, adecuándolas a nuestras condiciones particu-lares a través de un gran esfuerzo de elabora-ción propia y de búsqueda de la originali-dad necesaria. Los procesos en Europa del Este, con todos sus aspectos positivos encuanto a ejemplos de democratización y autodeterminación que contrastan con la opre-sión vi-gente en América Latina y el Tercer Mundo, responden a condiciones y crisisparticulares y exhiben desviaciones, debilidades y modalidades que no tienen por qué sertrasplantadas o copiadas. Es improcedente copiar tanto lo negativo como lo que no seajusta a nuestras realidades.Dediquémonos nosotros a elaborar y a luchar en función de nuestras ne-cesidades yparticularidades y teniendo en cuenta nuestras tradiciones his-tóricas y las característicasde nuestras sociedades en crisis.Busquemos alternativas democráticas, revolucionarias e innovadoras.

Llamamiento

Agrupemos fuerzas en esa dirección. No dejemos que la dispersión y la desmoralizaciónse tornen irreversibles.Coordinemos nuestras capacidades y voluntades transformadoras.Unámonos para luchar en todos los frentes: para relanzar el ideal revolu-cionario, parasuperar dogmatismos, para enfrentar las desviaciones dere-chistas y las claudicaciones,para combatir con vigor a nuestros enemigos, para hacer rectificaciones y renovacionesauténticamente revolucionarias, para fortalecer el antiimperialismo, para darle contenido

Page 97: Cuadernos marxistas Nº 04

97

popular a la lucha por la democracia, para avanzar hacia nuevas revoluciones democrá-ticas y patrióticas, para rescatar el valor de las metas socialistas, para desarrollar luchasconcretas que eleven la moral y la capacidad de las fuerzas libera-doras en la periferia ylos centros del sistema capitalista mundial.Unámonos para combatir y demostrar que las fuerzas del cambio pueden y deben recu-perarse del impacto de estos fenómenos negativos, que los reveses sufridos son pasaje-ros, que las dificultades actuales pueden ser superadas, que la crisis del sistema imperialis-ta y de nuestros enemigos es un tremendo potencial a nuestro favor.En este Tercer Mundo, en este continente convulsionado, deben cifrarse las nuevas espe-ranzas revolucionarias, esperanzas que los cristianos, los antiimperialistas, los marxistas.los demócratas, los socialistas, los nuevos líderes populares, los movimientos socialesinnovadores, podemos contri-buir a convertir en realidad, procurando además que entodo el planeta las fuerzas del progreso se decidan por detener y derrotar la contraofen-siva imperialista estadounidense.En este mundo y en este continente convulsionado deben cifrarse las nuevas esperanzasrevolucionarias. En América Latina los sujetos de la liberación y la transformación seintegran por una inagotable pluralidad social, política, religiosa e ideológica que reúne aobreros, campesinos, semiproletarios, marginales, empleados, maestros, estudiantes,intelectua-les, cristianos, empresarios, etc., bajo las banderas de los más amplios in-teresesnacionales, populares y democráticos.Es digno destacar el papel que dentro de esta pluralidad desempeñan los cristianos alvincular los contenidos humanistas del cristianismo con la lucha por resolver la dolorosarealidad social, política y económica de las masas latinoamericanas.Esa posibilidad existe; pues, pese a todo, en esta parte del mundo las dificultades del impe-rialismo norteamericano son enormes y en la propia sociedad estadounidense su sistemapierde credibilidad y crecen en la acti-tud de protesta y los nuevos movimientos sociales.Nuestra lucha se entrelaza así con la lucha del pueblo norteamericano y su promisorioabanico de fuerzas solidarias, cada vez más amplio y más sensible, cada vez más firme ensu desafío a las discriminaciones, a los falsos valores, a la descomposición y a todo loinhumano de ese sistema opresor.Clamamos por una expresión unitaria de esa necesaria voluntad de lucha en todos losrincones de la Tierra.Clamamos por la más amplia y vigorosa unidad de todas las fuerzas y sectores que en elcontinente están por los ideales de justicia, independen-cia, democracia y paz.Clamamos por más firmeza antiimperialista.Clamamos por más creatividad revolucionaria.Clamamos por la revitalización del internacionalismo revolucionario.Clamamos por darle continuidad a los grandes ideales latinoamericanos de Bolívar, Su-cre, San Martín, Morelos, Santa María, Morazán, Martí, Sandino y Farabundo Martí.

Abrazos fraternales

Humberto Vargas Carbonell, Partido Vanguardia Popular Costa Rica. Rigoberto PadillaRush, Partido Comunista de Honduras. Narciso Isa Conde, Partido Comunista Domini-cano. Schafik Jorge Handal, Partido Comunista de El Salvador. Patricio Echegaray, Par-tido Comunista de la Argentina.

Marzo de 1990

Page 98: Cuadernos marxistas Nº 04

98