CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA...

20
DISCURSO DE CONTESTACION PRONUNCIADO POR EL DOCTOR HECTOR MALAVE MATA CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓN Este acto, revestido de sencilla formalidad, tiene la particular significación que todos conocemos. Se incorpora hoy, como Individuo de Número de esta Academia Nacional de Ciencias Económicas, la doctora Sarah Orestes Rosas de Pareles, habiendo cumplido los requerimientos académicos que la Ley de la propia Corporación establece al respecto, para ocupar desde ahora el sillón que en vida correspondiera al ilustre doctor Carlos Alberto D'Ascoli. Tal es la razón de este acto. No puede ser más justa la investidura ni más honrosa la subrogación. Por cuanto es menester la referencia de rigor a nuestra distinguida recipiendaria, debo expresar que la doctora Orestes de Pareles, actualmente profesora jubilada por la Universidad Central de Venezuela, obtu- vo en el año 1949 el título de Licenciada en Cien- cias Económicas y Sociales de la misma Universidad, donde años más tarde, en 1980, recibió el título de Doctora en Ciencias (mención Economía). En la ucv fue Miembro fundador del Instituto de Investigacio- nes de la Facultad de Ciencias Económicas y Socia- les (1947); Directora de este mismo Instituto (1958- 1963); Representante de la Facultad de Ciencias Eco- 507

Transcript of CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA...

Page 1: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

DISCURSO DE CONTESTACION PRONUNCIADO POR EL

DOCTOR HECTOR MALAVE MATA

CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS

DE LA GLOBALIZACIÓN

Este acto, revestido de sencilla formalidad, tienela particular significación que todos conocemos. Seincorpora hoy, como Individuo de Número de estaAcademia Nacional de Ciencias Económicas, la doctoraSarah Orestes Rosas de Pareles, habiendo cumplidolos requerimientos académicos que la Ley de la propiaCorporación establece al respecto, para ocupar desdeahora el sillón que en vida correspondiera al ilustredoctor Carlos Alberto D'Ascoli. Tal es la razón deeste acto. No puede ser más justa la investidura nimás honrosa la subrogación.

Por cuanto es menester la referencia de rigor anuestra distinguida recipiendaria, debo expresar quela doctora Orestes de Pareles, actualmente profesorajubilada por la Universidad Central de Venezuela, obtu­vo en el año 1949 el título de Licenciada en Cien­cias Económicas y Sociales de la misma Universidad,donde años más tarde, en 1980, recibió el título deDoctora en Ciencias (mención Economía). En la ucvfue Miembro fundador del Instituto de Investigacio­nes de la Facultad de Ciencias Económicas y Socia­les (1947); Directora de este mismo Instituto (1958­1963); Representante de la Facultad de Ciencias Eco-

507

Page 2: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

nómicas y Sociales ante el Consejo de Desarrollo Cien­tífico y Humanístico (1958-1971); Miembro principaldel Consejo Nacional de Investigaciones Científicasy Tecnológicas, CONICIT, (1969-1971); Profesora delas Cátedras de Mercado (1953-1956) y Teoría Eco­nómica (1953-1963). Una larga experiencia en la Fa­cultad de Ciencias Económicas y Sociales (UCV) acre­dita su carrera universitaria en actividades docentes,de investigación, dirección, coordinación y asesora­miento durante más de treinta años de labor justa­mente reconocida.

En su discurso de incorporación que con sencillezha titulado De la Economia, la doctora Orestes de Parelesnos ha presentado la versión resumida de la investiga­ción que lleva a cabo sobre la evolución histórica dela civilización occidental donde se inscribe el desa­rrollo de la Ciencia Económica, desde sus orígeneshasta su moderna configuración, en lo que la autorarecurre a juicios y razones para explicar la historicidaddel pensamiento económico a través de los tiempos,como forma de entender el curso de las ideas desdeel pasado hasta el presente, tanto como el atisbo delfuturo a partir de la fluctuante realidad de lo actual.

En ello es importante el concepto de

que la doctora Orestes de Pareles maneja en la acep­ción que lo identifica con "un acervo común y acce­sible a todas las sociedades", gracias a relaciones deintercambio y facilidades de comunicación, lo queproyecta la imagen cierta de una civilización globalpero no uniforme, en vista de las diferencias que resi­den en la diversidad del medio geográfico y en lavariedad de estadios culturales, y cuya evolución con­temporánea no se detiene sino que avanza continua­mente por impulsos de la novedosa inteligencia tec­nológica que precipita transformaciones en el ordenmundial. Es éste, en opinión de nuestra recipienda­ría, un aspecto que exige profunda reflexión porque

508

Page 3: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

en el presente se advierten manifestaciones de un com­plejo proceso de globalización, tras cuya apariencia,conocida como un rápido transcurso de lo antiguo alo moderno, se encubren mecanismos emergentes delpoder mundial que actúa sólo conforme a los mó­viles de sus propias estrategias. Tomo precisamenteeste último señalamiento de la doctora Orestes comopunto de partida de mis siguientes elucidaciones.

BREVE LECTURA DE LA GLOBALIDAD

En este ocaso del siglo xx, el discurso contagiosodel globalismo, recargado tanto por las expresionesreiterativas de una tendencia del pensamiento econó­mico que prevalece en esferas académicas y profe­sionales, como por la profusa información massme­diática que desborda los límites de la percepción in­dividual, intenta prefigurar las perspectivas del pre­sente desde la atalaya del presente mismo y concibeel futuro desde un punto de observación fijado en lasincronía de lo actual. El llamado fin de la historia, adiferencia de como lo piensa Fukuyama, no se vislum­bra en línea de visión racional porque el hombre, siem­pre dotado de razón trascendente, debe aún recorrersendas inéditas para dar forma vital al aura de suspropias utopías. El análisis de los horizontes globa­les, apoyado en el enfoque de la reorganización deltiempo y el espacio, adopta una visión no lineal de lahistoria a partir del reconocimiento de la multipli­cidad de las culturas en un mundo donde todo fluyeen diversas direcciones.

En estos tiempos de gran movilidad internacionalde capitales, se observa el explosivo desarrollo de lasfinanzas, el comercio y los medios de comunicaciónen el heterogéneo ámbito global. Tales actividades,con el estímulo de tecnologías portentosas que toni­fican el capital abaratando los costos salariales, han

509

Page 4: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

generado grandes imperios económicos -algunos denueva forjadura- que elaboran sus propios códigos,localizan y deslocalizan estratégicamente sus centrosproductores, movilizan sus capitales con celeridad ver­tiginosa, invierten y desinvierten a tenor del signofluctuante de las coyunturas, desestimando jurisdic­ciones y fronteras, estipulaciones y tratados, debe­res y derechos constitucionales, caracteres y patri­monios culturales autóctonos.

Esos colosales imperios, que actúan conforme alinflexible pragmatismo de los factores de poder, des­deñan la soberanía nacional en nombre de una supuestagobernabilidad de la globalización, seducen a los go­biernos con promesas de colaboración y asistencia,especulan contra las monedas con el argumento de lavolatilidad financiera de mercados emergentes, alien­tan por doquier la asimetría social pugnando por unarbitraje irrevocable a favor de las rentas del capitaly en detrimento de las del trabajo.

En relación con esto mismo, es necesario recu­rrir aquí a una digresión no viciosa. La tendenciadeficitaria mundial de los recursos públicos suscitainsuficiencias y restricciones que degradan a los go­biernos nacionales a la condición de simples admi­nistradores de una austeridad que les impide asumir-aun bajo el despliegue de enormes presiones sociales­la responsabilidad de atenuar la pobreza y la exclu­sión. Esto erosiona fatalmente la razón y los cimien­tos del Estado democrático que debe recurrir a endeuda­mientos y devaluaciones para financiar sus débitosfiscales. La persistente rigidez financiera es, comopuede observarse, un indicio entre otros tantos deldeclive de la política estatal, hasta el punto que, juntocon el dominio fiscal y monetario, también se des­gasta y enerva otro balaustre del Estado nacional: elmonopolio público de la autoridad.

510

Page 5: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

De esto se deriva colateralmente una observacióngeneral que en casos como el nuestro puede particu­larizarse a la lumbre de algunas evidencias. Decimosque quienes, con protagonismo en las lides de la alter­nancia gubernamental, realizan largas campañas elec­torales con el propósito de ganar democráticamenteel poder, poco parecen percibir que en estos tiempos,plenos de mudanzas y trasiegos globalizadores, algu­nas facultades del Estado han sido desplazadas desus espacios habituales, a un tiempo que segmentosimportantes del poder estatal ya no residen en losfueros institucionales en donde los gobiernos .circuns­cribieran algunas de sus políticas principales, puesun poder que desde ahora es considerado determi­nante -un poder tan difuso como absorbente- radicaen la instancia de la unidad de los mercados finan­cieros y las redes de información, que integrados estra­tégicamente no sólo constituyen el sistema nerviosode las sociedades en proceso de globalización, sinotambién el ensamble sinérgico que asume, en una suertede taumaturgia ultramoderna, el compromiso de for­talecer y elevar el orden espontáneo del mercado sobreel orden presidido. por el Estado de Bienestar, comolo quiere y propugna un neoliberalismo sin rostro hu­mano ni pensamiento múltiple, sin contenido socialni mucha vocación para afrontar democráticamentelas contingencias de las crisis.

CRISIS DE LA REALIDAD, CRISIS DE LA RAZÓN

Así se entiende porque la crisis no ocurre única­mente en el sentido de las disfunciones que entraña,sino también en cuanto fenómeno que afecta la capa­cidad del sistema y sus actores para organizarse yrestablecerse confiando en automatismos eventuales.Es posible tener una visión correctiva de la crisisconforme a la providencia de no separar orden y de­sorden, estructura y movimiento, equilibrio y dese-

511

Page 6: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

quilibrio, pues de tal forma puede entenderse que laconstrucción de la economía -vale decir su produc­ción y su reproducción- se realiza sobre una basesocial inestable, allí donde la lógica del comporta­miento económico se subordina al arbitrio de la re­lación del orden con la actividad.

Por esto, en aras de la estabilidad y el equili­brio, no puede sino considerarse inconveniente la ten­tación de abandonar la sociedad a sí misma y de apos­tar al establecimiento de la franquicia y la esponta­neidad, como hace un neoliberalismo simplificadorque procura a toda costa entronizar el orden espon­táneo en detrimento del orden discrecional, reivin­dicando para el individuo la licencia de servir sólo asus propios fines, reconociendo a la economía mer­cantil la disposición de crear un sistema autorregu­lado, reduciendo la política económica al ámbito deun Estado mínimo, rehusando todo plan de sistema­tización social y cualquier proyecto de ordenamientoprogramático de la sociedad, no imponiendo límitesni restricciones sino por mandato de la prescripcióncivil y el dictado de la tradición, en aceptación deuna sociedad que no define ni diseña su orden, suhorizonte y sus propios objetivos, pues en cierto modosólo reconoce las fuerzas espontáneas que se inscri­ben entre los límites de un tradicionalismo más an­cestral que proyectivo.

Esa sociedad, que no luce abiertamente ordenadaen sus propios estamentos, se observa poco estruc­turada y un tanto fluida, aunque con tendencia a ge­nerar regresiones continuas en el marco de la hetero­geneidad social que la configura y explica. Allí no esdifícil constatar la paradoja del transcurso social comocontinuidad que es puesta una y otra vez de mani­fiesto, cuando las malas réplicas a desarreglos ac­tuales conducen a 'inevitables trastornos futuros. Noes fácil, sin embargo, enfocar la constitución diná-

512

Page 7: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

mica de un orden cuando no es poco lo que ostentaen su inestabilidad y su imagen engañosa.

A propósito también de los desequilibrios, lasperturbaciones y las averías del sistema, visto éste endistinta perspectiva, resulta ilustrativo volver al asuntode la crisis, no tanto en pos de sus reflejos cuanto enpos de sus fuentes, porque su realidad es presenciaque nos afecta de manera diversa, causándonos a ve­ces la frustración de no poder conjurarla por fuerzade poco conocer su etiología. En términos generalesy sinópticos, no incurriendo en explicaciones impe­riosas, es posible enunciar algunas razones de la cri­sis. Así entendemos que sobrevienen crisis porque secomete perfidia contra el método; porque el métododesestima la observación del orden; porque por faltade método el orden degenera en desorden; porque eldesorden rompe el equilibrio de fuerzas y tensiones;porque la atención se ofusca en el atascamiento delas situaciones y no se centra en la reorientación delmovimiento; porque se apela a viejos paradigmas pararesolver problemas nuevos; porque el discurso sometela acción a dogmas, aforismos, artículos de fe o abso­lutismos conceptuales; porque la rigidez de la estruc­tura coarta o restringe la operatividad de las funcio­nes; porque el menoscabo de las funciones limita losmecanismos de la acumulación; porque el módulo re­gresivo del reparto social no corresponde al rendi­miento del trabajo productivo; porque se acentúa laincapacidad para gobernar la riqueza; porque se sub­estima el horizonte social de subversión de la pobreza...Hay crisis, en otro sentido, porque la razón pierdeautoridad y la autoridad pierde juicio, equidad y certeza.

Existe, en nuestro caso, una crisis de los paradig­mas o modelos, de las ideologías, las instituciones, elcomportamiento, los valores y principios. Pero tam­bién se advierte una crisis de la razón. La crisis denuestra sociedad y particularmente de nuestra eco-

513

Page 8: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

nomía, permítanme decirlo, no es ajena a los extra­víos y retrasos del conocimiento. (Por lo que a míconcierne, me despojo de toda arrogancia para con­fesar que la poca teoría económica que he aprendido,hoy me resulta casi inservible). Mucho nos cuestacomprender las razones de la crisis, como tambiénabatirla o moderarla, porque padecemos quebrantosde imaginación y creatividad. En nuestro caso, comocreen espíritus perspicaces, la crisis de la realidad noes más alarmante que la crisis del pensamiento. Elpensamiento creativo que se inmoviliza frente a losaccidentes de la realidad puede ser indicio de geniomenguante.

En estos tiempos en que lo simple se torna com­plejo, lo múltiple predomina sobre lo singular, 10 alea­torio prevalece sobre lo determinado, y el desordendesacata y vulnera la racionalidad del orden, nuestropensamiento parece estar conociendo su propia pe­nitencia porque está condenado a rehabilitarse, a avan­zar en su acrisolamiento, a discernir entre lo verda­dero y lo imaginario, a sumergirse con percepciónabierta en lo real y lo sensible, desechando revela­ciones carentes de sentido y trascendencia, descar­tando el mensaje de los mitos superfluos y las accio­nes dudosas, desoyendo las voces que sólo predicanrenuncia y desencanto. En el mejor de los casos setrata de la puesta en escena de la racionalidad y laimaginación a la luz de la inteligencia creadora, conmiras a descubrir lo que se oculta en la apariencia delo que acontece, a desentrañar las contradicciones enlo que ocurre o permanece, no exceptuando conocerla aventura del ensayo en los nuevos comienzos, conuna suerte de convicción estimulante en no hacer delos tropiezos del camino el pretexto de una resigna­ción estéril.

514

Page 9: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

FRONTERAS ECONÓMICAS DE LA DEMOCRACIA

Pero estas reflexiones no son suficientes todavía.Está claro que el deterioro de las instituciones, laperversión de los valores y la falta de alternativasconducentes son señales del empobrecimiento de larazón en las actuaciones públicas y privadas, inclu­yendo por supuesto la de quienes ejercen los man­dos del poder y la de quienes aspiran a ejercerlo, através de mandatos que aún siendo democráticos po­drían servir para la legitimación de un poder capazde cometer desviaciones y excesos. La indeseable po­sibilidad de que eso ocurra es un riesgo que confir­maría la opinión de que los políticos en funciones degobierno pueden involucrar a la condición de ges­tores sectarios de la cosa pública, tanto como a la deadministradores mezquinos de aparatos oficiales quemanejen como suyos, a la vez que los mandantes abri­gan la esperanza de un voto que podría no encontrarjusta correspondencia. No es éste un juicio de valorsino la lección incontestable de muchas decepciones.

Por razones dimanantes del nuevo espíritu de es­tos tiempos, resulta indiscutible la idea de moderni­zación de las instituciones y maquinarias estatales.La reforma estructural del Estado es hoy un impera­tivo insoslayable para nuestro país. Pero por ello nose puede convenir con quienes creen que la moder­nización del Estado y la democratización son incom­patibles. Tal criterio a menudo es esgrimido para adu­cir la renuncia a uno de esos dos objetivos: quienesrechazan la opción de la reforma estructural celebranel sistema democrático como la mejor alternativa; mien­tras que quienes no aceptan la democratización con­sideran que la reforma no puede realizarse en un en­torno de libertades públicas. Aquellos primeros pa­recen incurrir en una exaltación del sufragio comoestilo de una democracia puramente electoral, deses­timando los componentes de una democracia de vo-

515

Page 10: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de
Page 11: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

en el ejercicio y la expresión de las ideas. Son cono­cidas las exclusiones que comete el patronato de al­gunos órganos de comunicación contra la oportuni­dad de expresión del pensamiento. Ello revela las dis­criminaciones y reservas que desmerecen la actua­ción del poder mediático en estos tiempos de plura­lidad mal ejercida. A pesar de esto, existe la convic­ción de que el clima de libertad es más propicio parala razón disidente que el clima de autoritarismo, aun­que ello no significa que la propia libertad siempreestá exenta de un deplorable enflaquecimiento del es­píritu y de una deuda con la buena conciencia que laemblematiza.

Con la inquietud que sentimos parafraseando es­ta vez a Pierre Schori, el destacado político sueco,importa preguntarnos: ¿cuánta pobreza está en capaci­dad de mitigar la democracia?, ¿cuánta exclusión pue­de tolerar la seguridad social? O con razones pro­pias interrogarnos: ¿cuánta regresión social, en nues­tro caso, puede soportar el libre comportamiento delmercado?, ¿por cuánto tiempo puede la libertad sobre­llevar las desigualdades que persisten en nuestro orde­namiento democrático? Estas cuestiones autorizan aplantear particularmente la revisión del alcance realde la democracia venezolana y sus actores, en en­tendimiento de que el modelo de orden político acep­tado por la casi unánime voluntad de los venezola­nos es el democrático vigente, y de que éste sólopuede funcionar en el dominio pluralista del Estadonacional, a un tiempo que el libre mercado, conside­rado otro paradigma de legitimación del sistema, im­pera plenamente como mandato del pensamiento úni­co en el espacio mundial. Esta disimilitud ya cons­tituye uno de los problemas inherentes a las impli­caciones nacionales del proceso globalizador desple­gado actualmente en el mundo.

517

Page 12: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

RETOS y TRAMPAS DE LA GLOBALIZACIÓN

Se percibe asimismo que la globalización, en tér­minos teóricos, corresponde a un ciclo del capita­lismo definido como posfordista o de acumulación flexible,en la que un proceso de desterritorialización econó­mica y política confiere mayor energía, dinamismo yexpansión a los capitales transnacionales, irrumpien­do en países y regiones, en formas de producción yconsumo, en actividades tangibles y culturales, en me­canismos de intercambio internacional, en modos deser y de pensar. Los exegetas de tal proceso creenque la reproducción ampliada del capital ya no seefectúa de manera apropiada en el espacio de los Es­tados nacionales, los que al convertirse en traba detal tipo de reproducción son sometidos a inevitablesreformas de liberalización y reestructuración. Esas re­formas implican, en la generalidad de los países latino­americanos, procesos denominados de "ajustes estruc­turales" que entrañan a la vez la apertura externa einterna de las economías nacionales.

En ese proceso de globalización de los ajustespuede observarse que la disminución del ámbito delas atribuciones públicas, las privatizaciones y la des­valorización de las instituciones estatales suprimenlos obstáculos internos a la penetración de capitalestransnacionales; al igual que, por otra parte, la aper­tura comercial externa desmonta o reduce las barre­ras aduaneras, desprotege la producción interna y per­mite el libre flujo de aquellos capitales. No es otro elsentido de las políticas económicas de inspiración neo­liberal que procuran adaptar las condiciones localesde la acumulación capitalista a las nuevas exigenciasdel sistema global.

La globalización, considerada como el desplie­gue económico del proceso de mundialización en losaños más recientes de la vida contemporánea, tiendea transformar el contexto del desarrollo a través de la

518

Page 13: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

vertiginosa movilidad internacional del capital, el flu­jo creciente de intercambios transnacionales de bie­nes y servicios, y la aplicación de novedosas tecno­logías electrónicas que aceleran notablemente las co­rrientes financieras y comerciales en el mercado mun­dial, creando nuevos problemas y desafíos, perspec­tivas de un futuro no fácilmente gobernable y exi­gencias de adaptación que no es posible evadir o deses­timar.

En la percepción de algunos analistas de la escenaeconómica contemporánea, se trata de un proceso con­forme al cual instancias inveteradas del poder de losEstados nacionales pasan a la jurisdicción del mer­cado global, de forma que lo que fue reconocido comofactor de bienestar y asistencia, ahora comienza a serlode desigualdad, incertidumbre y mayor incoherenciasocial, puesto que es visto como una reformulaciónque tiende al achicamiento del Estado bienestarista, ala abolición de su rol providente y a la consagraciónde severos ajustes institucionales en el retablo de unaeconomía sometida a las estipulaciones de ajustes im­placables, para empezar a dar cuenta de un desacuerdoinapelable entre eficiencia y equidad.

Una aproximación a la realidad económica de es­tos tiempos permite observar el mundo de hoy comoun universo global de desequilibrios y perturbacio­nes que se han agravado desde 1997 por el colapsoque capitales especulativos transnacionales indujeraninicialmente en las llamadas economías emergentesdel sudeste asiático. En este crítico escenario, contrasiegos y recolocaciones efectuados a la sorprendentevelocidad de los capitales financieros internacionales,los trastornos monetarios configuran un problema com­plejo porque el dinero adquiere más tropismo y vo­latilidad en un mundo de enormes operaciones subi­táneas donde el valor movilizado en las actividadesde especulación es cuarenta veces mayor que el ge-

519

Page 14: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

nerado en los sectores de la economía productiva. Seensancha de tal modo la brecha entre aquellas activi­dades y estas otras. Tanto es así que el mercado finan­ciero mundial luce hoy severamente congestionadopor un volumen gigantesco de capital -dos billones dedólares en rotación diaria global- en sólo activida­des especulativas según una relación en la que lasoperaciones cambiarias y bursátiles centuplican el va­lor de las transacciones comerciales corrientes.

Esto confirma que el proceso globalizatorio, conel predominio de su creciente expansión financiera,aún transcurre limitado a algunos aspectos de la eco­nomía -los no productivos en particular- sin preva­lecer ni influir en otros restantes, ni en todos a la vezde manera pareja o similar. No por otro motivo seadvierte, desde el inicio de la década de los noventa,el auge de una economía global de especulación quereproduce de manera más o menos perversa las acti­vidades lucrativas del capital financiero ("financie­rización"), colocando de relieve tanto la prolifera­ción de los llamados paraísos fiscales como la caídade la acumulación de capital en los sectores reales dela economía.

El modelo de libre mercado, inscrito con prima­cía en el mapa planetario de la globalización, sus­tenta como razón y objetivo el logro del nivel máxi­mo de competitividad posible. La dinámica de la com­petitividad, en tanto factor que preside la asimetríade las relaciones entre el capitalismo tecnocéntrico yel capitalismo tardío de la periferia, genera brechaseconómicas internacionales con el empleo de .para­digmas tecnológicos excluyentes y con el empeora­miento de los mecanismos de intercambio desigual,no siendo capaz de suscitar condiciones que permi­tan detener la caída que causa la "financierización"desbordada a la productividad real en países de eco­nomías emergentes, donde los principios y arbitrios

520

Page 15: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

de la competencia internacional imponen, por fuerzade la tiranía y las imperfecciones del mercado, des­ventajosas condiciones de inserción respecto a los paí­ses de economías desarrolladas. Así es como, segúnse dice, los vientos de la competencia tienden a con­vertirse en tempestad.

En esta situación los países perdedores dirigensus reparos contra gobiernos cuya capacidad para in­tervenir en la solución de los problemas disminuyede continuo. Lo mismo da si se tiene que regular elpoder de los medios de comunicación o acometer ac­ciones de justicia social, si hay que devaluar el sig­no monetario o luchar contra los factores de corrup­ción. El Estado es así desbordado y los arreglos inter­nacionales no siempre trascienden la simple decla­ración protocolar. Pero si los gobiernos, frente a to­dos los problemas que comprometen el desempeño desu gestión, sólo se concretan a atender las fuertespresiones de los capitales transnacionales, la políticagubernamental se convierte en ejercicio subalterno yrestringido, por lo que el Estado democrático expe­rimenta agotamiento en los atributos esenciales de sulegitimación. La globalización opera así como tram­pa para la democracia.

En referencia a las controversiales implicacio­nes del proceso globalizador, puede manifestarse, nosin justificable atrevimiento, que ya es hora de de­sistir de esquemas rígidos y unidireccionales en elenfoque de los roles del Estado respecto del mercado.Como la ideología de la globalidad plantea el ajustedel Estado en función del mercado, y el mercado aun tiempo necesita de la actividad pública para habi­litar sus mecanismos de competencia, la reforma es­tatal es por tanto una de las innovaciones requeridaspara colocar la gestión pública en el nivel de las exi­gencias internacionales de la globalización. Gober­nar la globalización y desarrollar una hábil estrategia

521

Page 16: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

de articulación de lo nacional en lo global son razonesque confieren pertinencia a la reforma del Estado.Con lo cual no se quiere decir que se deben validaractuaciones estatales al margen de patrones de efi­ciencia; ni tampoco sugerir, en denegación de argu­mentos incuestionables, la minimización o el peli­groso desmadejamiento del Estado, tanto en su funciónreguladora del acontecer económico y social, comoen su función correctiva de las desviaciones del mer­cado, por medio de políticas sociales de tenor redis­tributivo que estimulan el desarrollo con equidad apartir de estímulos eficaces a las áreas de educación,salud, justicia y seguridad.

Aunque por lo común tiende a creerse que globa­lismo y estatismo son en cierto modo contradicto­rios, es de comprender que la inserción voluntaria ocompelida en el proceso globalizador plantea la ne­cesidad de un Estado capaz de renovar y fortalecersus propios aparatos en el manejo de sus relacionesreales y simbólicas con el mundo global. Para ello esnecesario asumir una estrategia de desarrollo que per­mita lograr, en base de un equilibrio entre lo externoy lo interno, una concomitancia interior entre lo eco­nómico, lo político y lo social. Por esta vía es posi­ble volver al planteamiento de la coexistencia opera­tiva de Estado y mercado. Pero en este caso tomandoen cuenta que, sin la racionalidad pública del com­portamiento económico, el mercado libre tiende a trans­formarse en "monopolio sin competencia", a riesgode luego terminar en "monopolio incompetente". Igualresulta que ese monopolio sea privado o estatal. Comoquiera que sea, si se trata de discernir entre una esferay la otra, lo que importa considerar es que, comoalguna vez se ha dicho, no todo lo público se contraeal Estado, ni todo lo privado se limita al mercado.

Un diagnóstico realista sobre la actualidad mun­dial autoriza a inferir que la globalización, tal como

522

Page 17: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

se desenvuelve en el ámbito planetario de relacionesinternacionales asimétricas, puede al cabo significarpérdidas, exclusiones y rezagos para aquellos paísesque al respecto no tienen estrategias ni objetivos defi­nidos, a la par que no pocas frustraciones a Estadosnacionales inhibidos o poco partícipes en las corrien­tes transnacionales de la economía de estos tiempos.Pierden y quedan excluidos los países que carecen declaras visiones mundialistas y no realizan planes con­cebidos a tono con los grandes retos externos e inter­nos del nuevo ciclo histórico. Por eso la globaliza­ción, siendo un desafío irreversible que exige ser asu­mido sin tardanza, plantea a las economías satélitesemergentes un sentido oportuno en realizaciones queentrañan modernización del Estado, reformas estruc­turales, nuevos y mejores horizontes productivos, ma­nejo polivalente y flexible de los mecanismos de lacompetencia. En este contexto, por añadidura, lo querequieren tales economías es pensar el plan y la praxisdel cambio, restablecerle a la gestión pública la ra­zón de sus propios desempeños, restituirle a la ini­ciativa privada el sentido de su compromiso produc­tivo. Habría que forjar entonces las condiciones efec­tivas de realización de utopías razonables.

CON LOS PIES SOBRE LA TIERRA

No incurrimos en contrasentido, sino a lo sumoen dilema fundado, al decir que la nueva teoría econó­mica no debiera confiar a ultranza en el dogma de losautomatismos del mercado, ni en las supuestas supina­ciones de la "mano invisible", ni en la conjetural neu­tralidad de los programas de ajuste, si es que esa teo­ría se propusiera encontrar un puente epistemológicohacia la exégesis no valorativa del capitalismo globa­lista del siglo veintiuno. La lección de los ajustesmacroeconómicos, a juzgar por la experiencia vene­zolana, parece justificar el mensaje alternativo que

523

Page 18: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

se desprende de ciertas negaciones: ni el Estado defi­citario de los socialdemócratas, ni el Estado mínimode los ultraliberales, sino el Estado que proteja a laeconomía con el equilibrio de las fuerzas del mer­cado, regule los empeños especulativos del sistemafinanciero y reduzca los riesgos de la globalizacióncon una política económica que estimule los afanescompetitivos del aparato productor. En esa perspec­tiva, para decirlo en tono de disenso, no cabrían eleconomicismo de los laboratorios gerenciales, ni elburocratismo del Estado, ni el reduccionismo de lossantuarios tecnocráticos, ni el totalitarismo del pen­samiento único, si es que se pretendiera un desarrollohumanamente tolerable, un desarrollo provisto de refe­rentes culturales auténticos.

Hasta ahora hemos hablado de la crisis, el Estado,la democracia, la libertad y la globalización de ma­nera elemental y no prolija, desde una perspectivacentrada básicamente en Venezuela, pero sin hacerpuntualizaciones sobre la presente realidad del país.Volvamos a esa realidad por un instante para obser­varla en su situación más reciente. Sólo por un ins­tante antes de dar fin a estas palabras. Así aprecia­mos que la imagen actual del país, tras sucesivos ajus­tes y reformas, luce no satisfactoria. La depresivarealidad nacional habla a la luz de sus propias evi­dencias. La lectura de indicadores macroeconómicosy sociales revela una situación de veras inquietante.Hoy asistimos a la declinación de la política de ajustecon resultados sociales nada favorables, en medio dela fetichización del mercado como ámbito absolutode la competencia; la agricultura con bajo rendimientoy pocos impulsos productivos; la situación fiscal conrecurrentes desequilibrios e insuficiencias; la indus­tria del petróleo sometida a los efectos de persisten­tes precios viles; la indomeñable inflación como in­munizada contra sus antídotos; la política monetariaexprimida costosamente entre los ejes de su formu-

524

Page 19: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

lación ortodoxa; el desarrollo humano bloqueado porla escandalosa proliferación de la pobreza; el desem­pleo amontonando millones de brazos inactivos; lasinstituciones del conocimiento condenadas a la cró­nica falta de recursos; la seguridad social a la de­riva; la corrupción abrazada al tráfico de influencias,a la impunidad, al nepotismo, al usufructo de intere­ses creados. Allí donde por debajo de la pobreza extre­ma se ubican los más pobres de los millones de po­bres que aumentan por las secuelas recesivas de lacrisis. Allí donde, para muchos venezolanos, vivir esuna penitencia, pensar es un accidente y subsistir casiun prodigio. Esto digo sin atentar contra el testimoniode palmarias evidencias.

Es grande el inventario de nuestras carencias ylimitaciones. Grande es también el catálogo de nues­tras pérdidas y demoras. Creo, sin embargo, que nin­guno de estos malos saldos es in subsanable. En laardua tarea de eliminarlos es preciso no actuar porencima de los recursos disponibles, ni actuar por de­bajo de los objetivos asignados. Es necesario enton­ces un proyecto nacional basado en una economía dela certeza que contemple la ponderación entre la mo­lestia de comenzar demasiado tarde y el inconvenientede terminar precipitadamente. De suerte que nuncacomo en este fin de siglo, tan poblado de incertidum­bre y contradicciones, tan lleno de retos y de riesgos,el futuro de los venezolanos se subordina tanto a laracionalidad de sus propios desempeños. En esto im­porta no rezagar el ejercicio de la inteligencia crea­dora con respecto a los grandes desafíos del cambio.

Nos encontramos hoy en la disyuntiva de inven­tar un camino de certidumbre hacia el futuro o deresignarnos a la ruinosa condición de parias del por­venir. Nada resulta ahora más apremiante que la de­sactivación de las contracorrientes del cambio. La ne­cesidad del cambio brota de la conciencia de nuestros

525

Page 20: CRISIS y DEMOCRACIA EN LOS FUEROS DE LA GLOBALIZACIÓNance.msinfo.info/bases/biblo/texto/NE/NE.12.10.pdf · en el presente se advierten manifestaciones de un com plejo proceso de

retrasos y frustraciones. Pero la participación socialen el cambio no debe traducirse en afirmaciones ri­tuales sino en expresiones de crítica, confrontación odiferencia, pues el cambio no sólo necesita la una­nimidad activa de sus partidarios y ejecutores, sinotambién el diálogo fértil que facilite el cotejo de larazón en la forja de un nuevo elenco de principios yvalores.

No puedo concluir estas palabras sin acatar unmandamiento de rigor. Quiere, en efecto, una buenacostumbre que al término de estas reflexiones demosla bienvenida a la doctora Sarah Ores tes de Pareles,nuestra distinguida recipiendaria.

Señoras y señores

Paraninfo del Palacio de las AcademiasCaracas, 2 de diciembre de 1998.

526