Creación de personajes

El personaje Orlando Buitrago Cruz

Narrativas digitales

Crear personajes



EL PERSONAJE

OBJETIVOS

Analizar las técnicas para la construcción de personales para STORYTELLING.

Estudiar las dimensiones de los personajes.

Identificar tipos y roles de los personajes.

Estudiar todas las características y factores inherentes a un personaje.



INTRODUCCIÓN El personaje realiza acciones en lugares y tiempos determinados. Su acción está orientada al desarrollo del conflicto (avance en el conflicto). Hay un consenso más o menos generalizado en los autores de novelas, cuentos, guiones y libretos el considerar al personaje con identidades similares a las de los seres humanos, así el personaje de la historia sea una vaca, un lápiz o un limón (sin dejar de lado claro esta, los rasgos particulares de la vaca, el lápiz o el limón). En este bloque se analizan técnicas para la construcción de personajes y todas las características que le son inherentes. Se abordan los personajes desde la perspectiva aristotélica y las visiones contemporáneas de LINDA SEGER, SYD FIELD y LAJOS EGRI, entro otros.



Aristóteles y los personajes Según Aristóteles un buen personaje es aquel que posee las siguientes características:

El personaje es bueno: aquí la referencia no tiene relación con ser bueno o malo desde el punto de vista ético o lo moral. Para Aristóteles el personaje es bueno si actúa de acuerdo a su naturaleza, si es consecuente con su naturaleza.

El personaje es adecuado: para Aristóteles el personaje es adecuado cuando no se le coloca en situaciones inverosímiles… el rey actúa como rey y el esclavo actúa como esclavo.

El personaje es semejante: Aristóteles aconsejaba que el personaje se parezca a la gente del entorno en el cual se ubica espacial y/o temporalmente… se debe buscar la forma para que espectador y personaje se identifiquen.



El personaje debe ser constante: el carácter del personaje no debe tener cambios abruptos. Los cambios deben ser graduales y lo esencial del carácter no debe desaparecer, debe permanecer… aunque bien es sabido que en las telenovelas los malos al final terminan en conventos…

La peripecia: para Aristóteles la peripecia son cambios que afectan al personaje, pero “cambios de suerte en contraria”, es decir, un personaje es feliz y algo le trae desdicha, o un personaje desdichado alcanza la felicidad. Al finalizar la historia los personajes han cambiado, se han modificado a raíz de las peripecias.

Aristóteles enfatizó en la necesidad de definir acciones verosímiles para los personajes. De otra parte, según Aristóteles cambios en el personaje pueden originarse en:



METÁBASIS: es un cambio de estado en el cual el personaje pasa del equilibrio al desequilibrio o viceversa. En Bogotá vivió la “loca Margarita” una mujer cuyo carácter cambió desde el momento que presenció el asesinato de su hijo por parte de un miembro de la policía.

ANAGNÓRISIS: los personajes cambian a partir de la posesión o revelación de un secreto. La anagnórisis es reconocer un hecho que cambia la vida de un protagonista. Por ejemplo, a Edipo o la vida le cambió cuando supo que se había casado con su madre.

LA CATARSIS: la catarsis es una purga espiritual, es la posibilidad de desembarazarse de los problemas.



El personaje según LINDA SEGER Linda SEGER propone seis pasos para crear un personaje:

1. Determinar el personaje 2. Investigar el personaje 3. Definir el carácter del personaje 4. Crear el contexto biográfico 5. Comprensión profunda del

personaje 6. Crear relaciones entre el personaje

y otros personajes Paso 1: Determinar el personaje En esta fase se determinan el sexo, la edad, la ocupación, la clase socioeconómica y rasgos generales del carácter del personaje. Paso 2: Investigar el personaje Durante la investigación del personaje el autor se responde preguntas respecto al



personaje. Las preguntas corresponden a aspectos tales como:

¿Conozco su cultura?

¿Conozco sus valores?

¿Conozco sus creencias?

¿Conozco sus actitudes?

¿Tengo elementos para no crear estereotipos?

¿Conozco su ocupación?

¿Que significa para el personaje su ocupación?

¿Conozco su vocabulario?

¿Conozco donde vive?

¿Conozco las experiencias que ha tenido por vivir donde vive?

¿Tengo idea del clima, sonidos, olores, ritmos y actividades del lugar donde vive el personaje?

¿Conozco detalles históricos del personaje: sociales, económicos, culturales, éticos?



Paso 3: Definir el carácter del personaje Consiste en humanizar el personaje (no estereotiparlo). Se definen sus atributos sicológicos (los cuales deben ser acordes a su personalidad). Se determinan sus inconsistencias y sus paradojas. En esta etapa se añaden detalles que hagan “único” al personaje y se consolidan aspectos tales como:

Se analizan las experiencias definidas para el personaje

Se establecen los rasgos generales de la personalidad

Se establece el punto central de su carácter para determinar paradojas e inconsistencias

Se definen sus emociones, actitudes y valores.



Paso 4: Crear el contexto biográfico Consiste en construir la biografía del personaje. Se explica el presente del personaje a partir de su contexto biográfico, el cual contempla las siguientes dimensiones. Dimensión fisiológica

Edad

Sexo

Apariencia

Defectos físicos

Cuestiones hereditarias Dimensión sociológica

Clase social

Ocupación

Educación

Vida familiar

Religión

Posturas políticas

Actividades rutinarias

Diversiones



Dimensión sicológica

Ambiciones

Frustraciones

Rechazos

Temperamento

Vida sexual

Actitudes ante la vida

Complejos

Habilidades

Coeficiente intelectual

Valores y estándares morales Se deben construir todos los elementos antes citados, aunque después no se vayan a citar o utilizar en la historia. Paso 5: Comprensión profunda del personaje Consiste en entender el motor interno del personaje, su psicología, sus necesidades



básicas (¿acaso necesita amor?)... Se establece como responde el personaje ante la vida. El carácter del personaje está definido por aspectos tales como:

Su biografía: son eventos pasados, circunstancias externas, rasgos heredados.

El inconsciente: son elementos que han impreso huella en su carácter aunque no se recuerden conscientemente.

Diferencias de personalidad: es la manera individual de experimentar la vida.

Anormalidades: son rasgos patológicos de la conducta del personaje.

En esta etapa se verifica la congruencia de lo hecho hasta el momento y se toman los correctivos del caso.



Paso 6: Crear relaciones entre el personaje y otros personajes Consiste en ubicar los personajes de acuerdo a los siguientes parámetros:

Personajes que tienen algo en común y se mantienen juntos

Personajes que viven en amenaza de separación debido a conflictos

Personajes opuestos por aspectos relacionados con la personalidad

Personajes que tienen potencial de transformarse mutuamente.



El personaje según SYD Field Para SYD Field el personaje es lo que hace, el personaje se descubre por sus acciones en estas se unen el motivo, la intención y el objetivo. Cabe recordar que estos tres conceptos fueron propuestos además por EUGENE VALE quién los definió de la siguiente manera:

El motivo: el motivo es la razón por la cual el personaje quiere o necesita algo.

La intención: La intención es la voluntad puesta al servicio del logro pretendido.

El objetivo: el objetivo es la meta, el logro en sí mismo.

SYD Field propone investigar dos dimensiones del personaje cuando se le vaya a construir:



La vida interior: corresponde a la biografía del personaje hasta antes de comenzar la historia, hasta antes de cómo se le va a mostrar, por ejemplo, en el libreto.

La vida exterior: es la que vive el personaje a partir del comienzo de la historia. Son sus necesidades y las acciones que emprende para satisfacerlas

Durante el proceso de creación y construcción del personaje el escritor debe estar pendiente de factores tales como:

¿Se quiere lograr un efecto persona?

¿Se quiere un personaje naturalista con una identidad sicológica y social similar a la de los hombres?

¿Se quiere un personaje con posibilidad de ser diferente al arquetipo de persona?



Uno es el personaje creado para ser leído (personaje del GUIÓN) y otro el personaje recreado por un actor. El personaje es un ser que hace o que puede ser descrito como resultado de una acción, es decir de un hacer que hace ser.



El personaje según LAJOS EGRI LAJOS EGRI propone considerar tres dimensiones fundamentales para la creación de personaje: la física-fisiológica, la social y la psicológica. Dimensión física-fisiológica

Sexo

Edad

Descripción física (peso, altura)

Apariencia

Defectos

Deformidades

Enfermedades Dimensión social:

Clase social

Ocupación

Educación

Religión

Raza

Nacionalidad

Filiación política



Dimensión Psicológica

Historia familiar

Vida sexual

Autoestima

Actitud frente a la vida

Habilidades

Cualidades

Inteligencia

Temperamento Además LAJOS EGRI trabaja el personaje teniendo en cuenta los siguientes factores:

Sus relaciones con el medio (trabajo, estudio, entorno social, amigos

Sus contradicciones internas frente a las trabas o sus opuestos

Las causas de sus acciones

Los efectos de sus acciones.



El personaje según EUGENE VALE EUGENE VALE propone enfatizar sobre los siguientes aspectos al momento de construir un personaje:

Determinar el motivo: el motivo es la razón por la cual el personaje quiere o necesita algo.

Determinar la intención: La intención es la voluntad puesta al servicio del logro pretendido.

Determinar el objetivo: el objetivo es la meta, el logro en sí mismo.

Para VALE se debe establecer la relación entre el sujeto y el objeto. El sujeto estará siempre en busca de placer o en busca de alejarse del dolor.



El personaje según DWIGTH SWAIN SWAIN subordina el personaje a la acción dramática. La biografía del personaje la considera como una recopilación de circunstancias que motivan o explican sus acciones. El personaje se mueve hacia una meta y en la búsqueda de la misma sufre trabas. Las trabas generan dilemas, diversas posibilidades en cuanto a cursos de acción a seguir… el gran dilema del personaje será el tener que seleccionar un camino.



El GUIÓN de vida, un aporte transaccional Algunos escritores se apoyan en el análisis transaccional para ejecutar la tarea correspondiente a la creación de personajes. Rondando el año 1950, el psicoanalista ERIC BERNE creó el análisis transaccional, el cual plantea que el ser humano sigue ciertos guiones de vida y tiene unos esquemas de personalidad: Los guiones de vida pueden ser: Guiones culturales: La cultura propone un papel para determinadas funciones, por ejemplo el bombero debe ser arriesgado y salvador. Guiones sub-culturales: Son patrones de comportamiento que se esperan de una parte de la sociedad. Así por ejemplo del indígena se espera bondad, respeto por la naturaleza y algunos esperan ingenuidad.



Guiones individuales: Se originan cuando el individuo se pregunta quién es, qué hace en ese lugar, quiénes son los otros . En cuanto esquemas de personalidad se plantean tres:

El padre: el padre es quien protege, ordena, juzga, critica, hace lo que se debe hacer, puede llegar a tener mano de hierro.

El adulto: su pensamiento es lógico y racional, confronta la realidad y toma decisiones, se sabe zafar de la autoridad del padre, es coherente o por lo menos se espera que sea coherente.

El niño: posee pensamiento mágico e intuición, siente, intuye, crea, reclama, es inestable, testarudo, caprichoso, antepone sus necesidades a las de los demás, expresa sus emociones, es sincero, hace lo que le gusta, puede ser temeroso e ingenuo.



Posibles interacciones entre los personajes

Los personajes de una historia, tal como los personajes de la vida real pueden estar vinculados por diversos tipos de relaciones como por ejemplo:

De dependencia.

De entrega.

De indiferencia.

De compañerismo.

De seducción.

De identificación.

Jerárquicas.

Igualitarias.

Amistosas.

De enemistad.

Familiares

Eróticas.

Solidarias.



Los estereotipos son peligrosos

Los estereotipos encajan en una narrativa en la que los personajes son meros instrumentos al servicio de las acciones, como si fueran un videojuego. Quien escribe debe velar porque sus personajes no caigan en prototipos que obedecen a una característica dominante (y más que dominante única). Por ejemplo hay personajes que se caracterizan exclusivamente por uno de los siguientes factores:

Seguridad.

Éxito profesional.

Éxito social.

Éxito sexual.

Comodidad.

Utilidad.

Agresividad.

Evasión.

Placer.



Valores de los personajes (no es un catálogo)

Valores sociales

Pertenencia a un grupo.

Solidaridad recíproca.

Patriotismo.

Competitividad.

Pertenencia a un grupo de edad.

Individualismo. Valores temporales

Niñez.

Juventud.

Madurez.

Vejez.

Apariencia de los personajes



Apariencias del personaje Puede ser:

Eufórica: optimismo desaforado

DISFÓRICA: pesimismo exagerado

Cambiante: a veces eufórico, a veces disfórico

Dirección del personaje

El personaje se puede mover en una de las siguientes direcciones:

Tradición.

Auto dirección.

HETERO dirección. La dirección mantenida por el personaje refleja su personalidad:

Algunos siguen la tradición por encima de todo.



Otros, con fuerte personalidad, siguen su auto dirección.

Otros son volubles, se mueven entre la tradición y la auto dirección (HETERO dirección)

Esta técnica no se debe limitar a una acumulación y enumeración de datos, por el contrario estas dimensiones deben ser el punto de partida para que el escritor construya el personaje teniendo en cuenta dos relaciones dialécticas: la relación con el ambiente y la relación con el interior.

Dialécticas del personaje

El personaje tiene dos relaciones dialécticas fundamentales: Relación dialéctica del personaje con su ambiente: está puede darse a partir de opuestos que el personaje tenga en su entorno. Respecto a este tema ANTOINE CUCCA propone las siguientes posibles



diversidades que se pueden encontrar en un determinado entorno:

Diversidad física

Diversidad de objetivos

Diversidad de comportamiento

Diferencias de comportamiento en un mismo personaje de acuerdo en el espacio (entorno) en el cual se encuentre en un momento dado.

CUCCA plantea además la diferencia entre las necesidades propiamente dichas del personaje y sus intenciones. Plantea además que la caracterización del personaje requiere de conocimiento acerca de:

Su comportamiento ante las acciones de los demás personajes.

Su comportamiento ante los obstáculos.



Su comportamiento en relación con los lugares en los cuales se desenvuelve.

La dialéctica interior del personaje: su universo de motivaciones, de causas y de efectos que lo llevan a ser lo que es. Respecto a la dialéctica interior del personaje hay distintas propuestas de diversos autores: Eugene Vale se refiere a los siguientes aspectos:

La determinación del motivo: razón por la cual el personaje quiere o necesita lograr el objetivo.

La intención: está situada en el ámbito volitivo.

El objetivo: meta a lograr, u objetivo a alcanzar por parte del personaje.



SYD Field engloba motivo, intención y objetivo en el concepto de necesidad dramática. Las acciones son el camino que se le brinda al público para descubrir al personaje (por las acciones los CONOCEREÍS). Lo usual en es apelar a una frase de SYD Field: el personaje es lo que hace. Si embargo, también se suele aprovechar el recurso del narrador omnipresente para ingresar al interior del personaje (el narrador omnipresente es un recurso que el cine casi no utiliza).



La modificación del personaje No es posible hablar del personaje sin hablar de la modificación. El personaje puede sufrir cambios a medida que evoluciona el conflicto. El escritor debe tener la habilidad necesaria para que las transiciones no sean bruscas o injustificadas. Un personaje puede viajar de un extremo a otro, LAJOS EGRI propone el siguiente ejemplo: Amistad --> desencanto --> disgusto --> irritación --> rabia--> agresión--> amenaza -->... premeditación --> asesinato De acuerdo a como le esté yendo al personaje en el camino hacia sus objetivos es posible que sufra crisis que alteren su voluntad o sus principios, entendiendo la crisis como un factor de alteración que no necesariamente es negativa, pueden darse cambios



positivos. El calificativo de positivo o negativo dependerá de la subjetividad del público e incluso de la subjetividad del escritor. Para SYD Field las modificaciones se dan básicamente en los personajes protagonistas, los antagonistas cambian muy poco o simplemente no cambian. MICHEL CHION proporciona una lista de situaciones que modifican al personaje: terror, conmiseración, malentendido, deuda, cambio de clase social, fortuna repentina, sed, hambre, frío, enfermedad… ALFRED HITCHCOCK habla del MAC GUFFIN como factor de cambio o modificación del personaje. El MAC GUFFIN tiene relación con lo oculto, lo secreto y en general con los elementos que tipifiquen suspenso.



¿Cómo mostrar el carácter del personaje?

Hay cuatro maneras básicas de mostrar el carácter del personaje

Por lo que dice

Por lo que hace

Por lo que los otros personajes dicen de el

Por su aspecto Al mostrar carácter de personajes se debe tener en cuenta una regla de oro: ¡no hay personajes neutros!



Tiempos del personaje Durante la construcción del personaje es necesario tomarse un tiempo para caminar en dos sentidos: el pasado y el futuro del personaje

El "pasado" del personaje: es la construcción de su historia previa, para buscar las determinaciones "psicológicas" o "históricas" que han motivado sus carencias y que aflorarán, explicativa o temáticamente en el transcurso de la historia.

El “futuro” del personaje: en donde se plantean "alejamientos" y "acercamientos" entre sujeto y objeto que constituyen la acción dramática misma.

La autonomía del personaje está relacionada con la esfera de sus intereses propios, es decir, con sus carencias esenciales.



Estilo del personaje Los modos de consecución de un objetivo constituyen un estilo del personaje y pudieran ser asimilados a los que en el Análisis Transaccional se denominan Guiones de vida. Los expertos distinguen cuatro niveles para los guiones de vida:

Guiones culturales: corresponden a comportamientos y aspiraciones de un individuo de acuerdo al grupo social macro al cual pertenece (es un inglés, es un turco, es un colombiano).

Guiones sub-culturales: es el comportamiento de un individuo en su grupo social específico.

Guiones familiares: es el comportamiento propio de una estirpe (los Gómez, los Pérez, los Kennedy...)



Guiones individuales: es la programación personal (quien soy, quien quiero ser)

Cada una de estas instancias señala un modelo de conducta en una esfera específica del comportamiento humano.



Aspectos que afectan el personaje La autonomía: la autonomía se manifiesta en la caracterización, de las acciones del personaje y, sobre todo, en los diálogos. El personaje debe aparecer como motor de sus decisiones y como artífice de sus parlamentos. Por ejemplo, en el radio drama el diálogo del personaje encarna su modo particular de actuar hacia los objetivos específicos que lo mueven. El diálogo y las acciones del personaje deben ser gobernadas por su "línea de pensamiento" y debe quedar claro que es la línea de pensamiento del personaje y no la del autor. El personaje debe mantener autonomía ideológica se debe evitar el panfleto y el enmascaramiento de la voluntad del autor. El personaje no debe aparecer como algo que se está utilizando con fines de persuasión.



La consistencia: los rasgos del personaje una vez dados se deben preservar durante toda la historia, a menos que se logre una transformación valida y coherente (un ateo que se convierte al cristianismo). Las transformaciones, si se dan, no deben ser abruptas y deben obedecer a motivos lógicos y consistentes. Las modificaciones de los personajes no deben caer en contradicciones. Con el pretexto de mantener la consistencia no se puede caer en extremos: no es necesario mostrar siempre melancólico a un personaje definido como triste pues es factible que de vez en cuando tenga momentos de euforia. Crecimiento: para LAJOS EGRI, el llamado crecimiento del personaje constituye una condición indispensable del buen drama, pero el crecimiento debe



ser gradual, se deben evitar transiciones bruscas. El crecimiento debe tener origen en el conflicto: Contraste: personajes diferentes (no planos y no repetitivos) brindan el contraste que le pueden dar fuerza a una obra de arte. Además las diferencias entre los personajes son las que posibilitan las oposiciones y las situaciones que pueden conducir a diversas reacciones afectivas del público: risa, tristeza, solidaridad, enojo... Fuerza de voluntad: la fuerza de la voluntad es un requerimiento soportado por el héroe o protagonista y garantiza el mantenimiento de la acción. Así por ejemplo el personaje principal adquiere dentro de la historia el compromiso de alcanzar su objetivo (sin derecho a renuncia). De la intensidad de ese compromiso depende la magnitud del



conflicto y la importancia del final. Este aspecto tiene una relación estrecha con el conflicto pues este debe ser lo suficientemente importante como para mantener el interés del personaje.



La caracterización El personaje se construye textualmente. El escritor debe tener en cuenta los siguientes aspectos mediante los cuales se logra caracterizar al personaje:

El diálogo es un acto de habla que tributa a la historia en diversos sentidos:

El diálogo puede ser portador de información alusiva al personaje.

El diálogo revela aspectos incidentales del personaje tales como las emociones.

El diálogo revela aspectos constitutivos del personaje: ideología, grupo social, actividad socioeconómica...

Adicionalmente, la caracterización de un personaje se puede lograr a través de las acciones y de los diálogos de los otros



personajes (los empleados hablando chismes del jefe). TIPS para caracterización de personajes UTILES PARA ESCRITORES La caracterización corresponde a los actores y parte de los siguientes principios fundamentales, que deben ser marcados por quien escribe la historia.

El actor debe meterse en el interior, en el carácter del personaje:

El actor debe tener claro como actúa y piensa el personaje.

El actor del drama radiofónico físicamente no necesita vestuario ni maquillaje para encarnar al personaje.

El actor del drama radiofónico viste y maquilla su mente para encarnar al personaje.

El personaje creado en la mente del actor brota a escena a través de la



voz, mediante inflexiones y palabras que le dan identidad

El actor debe sentir el lugar en donde se desarrolla la escena: construir una representación visual (imaginar), percibir su olores...

En la radio es clave el casting de voces. Es necesario lograr un buen contraste, para evitar que todos los personajes se perciban igual y el público se confunda.

La voz del actor debe ser adecuada a las características, personalidad y temperamento del personaje... de hecho SUPERMAN no funcionaría si lo interpreta un actor de voz aflautada o funciona si el objetivo del drama es ridiculizarlo.

Los diálogos del personaje son importantes para caracterizar, la manera de hablar es un buen recurso para diferenciar y dar identidad a un personaje. Un libreto con diálogos planos da al traste con una historia



pues todos los personajes hablaran igual y se dificulta dar a conocer tanto el conflicto como los personajes inmersos en el mismo.

Por lo general a algunos personajes se le cuelgan muletillas que los hacen inconfundibles... ¿recuerda usted quién decía, hola viejo...? las viejas generaciones podrán recordar quien con frecuencia decía. Serenidad y paciencia, mucha paciencia...

En el drama radiofónico la actuación debe ser lo más parecida posible a la realidad, dicho en otras palabras, el esquema de caracterización más adecuado es la naturalidad, el diálogo coloquial.



Las personificaciones Se habla de personificación cuando el personaje no es un ser humano sino un objeto, un animal o cualquier otra cosa no humana. En tal caso el personaje puede ser por ejemplo, una media, un árbol, un animal, un carro (Cupido motorizado). Si el personaje es un perro, el escritor y el director deben pensar en como hablaría o actuaría un perro. Se debe buscar el timbre de voz adecuado, para que le personaje “suene como si fuera un perro”.



Los personajes según su rol Personajes principales: realizan las acciones más importantes. Son los más afectados por el conflicto. Personajes secundarios: pueden ser:

Protagónicos: son muy cercanos a los personajes principales

Antagónicos: se oponen al personaje principal.

Incidentales: su participación es breve, puede ser a favor o en contra de los personajes principales (en un caso extremo son neutros).

Los personajes deben ser contrastados, deben ser polifónicos, pues si todos los personajes piensan, sienten y quieren lo mismo difícilmente habrá conflicto y si no hay conflicto no hay drama. Los personajes son contrastados si tienen posiciones contrarias si tienen enfrentamientos.



Tanto la historia como el personaje deben ser una imitación de la vida. El personaje debe parecerse a las personas, debe ser creíble. No se debe caer en el maniqueo de los buenos y los malos, se deben evitar personajes como el protagonista exclusiva y excesivamente bueno y el antagonista exclusiva y excesivamente malo. Las personas son una combinación de virtudes y defectos. Los buenos tienen defectos y los malos tienen virtudes, es necesario saber interpretar y plasmar las curvas contradictorias de los seres humanos, es el único camino hacia la construcción de personajes creíbles. Dentro de la historia los personajes deben tener puntos de giro, tal como sucede en la vida real deben tener cambios a través de la historia. Por ejemplo el hombre severo e inflexible que cuando llega a adulto mayor adquiere algo de benevolencia.



El personaje no necesariamente es un ser humano, podría ser un animal, sin embargo los conceptos que aquí se plantean tienen relación los humanos, ya habrá tiempo de analizar a los animales.



¿Cómo lograr que el público ame al personaje?

Hay tres caminos para lograr que el público simpatice con el personaje. La siguiente es una variante a una propuesta de José Ignacio López VIGIL:

Presentarlo débil pero no tonto o cursi: cuando se trata de personajes adultos el uso del recurso de la debilidad requiere de mucha destreza para que el personaje no caiga en la cursilería o la tontería. En cambio al presentar un niño de cuatro años como débil e indefenso es muy posible que se logre la solidaridad del público.

Presentarlo bueno y muy fuerte: si dudan de la efectividad de esta fórmula pregúntele a SUPERMAN.

Presentarlo bueno y en peligro: meter al protagonista en problemas es una buena estrategia para captar simpatías.



¿Cómo lograr que el público odie al personaje?

Aparentemente es mucho más fácil lograr que el público odie al personaje, muchos piensan que basta con construirlo como un ser cruel y sin entrañas, pero es factible que tal construcción no logre el efecto deseado. No es necesario llegar a extremos, basta con utilizar algunos elementos menos radicales, por ejemplo:

Soberbio

Egoísta

Ingrato

Desagradecido

Intrigante No es necesario quitarle las entrañas al personaje. Los personajes pertenecientes al estereotipo de la crueldad están pasados de moda, ya no se les cree.



El comportamiento del público ha evolucionado, por ejemplo los viejos esquemas de terror ya no funcionan ¿Quién se asusta hoy en día con Drácula o FRANKESTEIN? Parece que nadie ¿cierto?

El nombre del personaje El nombre del personaje debe encajar el perfil social: Daisy Vanesa no es creíble como nombre de campesina santandereana. Algunos textos entregan listas de nombres con el significado y asociaciones a características biográficas y de temperamento... a manera de ejercicio indague por e significado de nombres como Pedro, Pablo, Jesús, Jacinto y José.

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