DEFINICINCovada es un trmino francs que deriva de couver (incuvar), alude a la costumbre de la madre de ceder el lecho al padre tras el parto, es decir, la madre entrega el beb al padre para que sea l quien se ocupe del beb. Consista fundamentalmente en un rito en que, tras el parto, y mientras la mujer parturienta volva a sus labores y quehaceres domsticos habituales, el marido se meta en la cama simulando los dolores del parto y recibiendo los cuidados y atenciones que deban haberle proporcionado y ofrecido a la madre. Pero en algunas culturas pareca tratarse ms de un acto de reconocimiento de la paternidad, ms que de un rito mgico, con el fin de restaurar o afianzar la institucin patriarcal en pueblos muy enraizados en el matriarcado. Podra ser una manifestacin de fuerza por parte de patriarcalismo de los invasores en sectores muy afectados por las prcticas matriarcales de los vencidos. De hecho, la covada tiene su origen en el trnsito de las primitivas sociedades matriarcales a las patriarcales. Los hombres trataron de conquistar el poder, que por razones religiosas (culto a las deidades femeninas, y religiones telricas), estaba en manos femeninas. Para ello fingan ser mujeres, y de ah nace la costumbre de la covada, segn algunas hiptesis evolucionistas. Esta costumbre, practicada por algunos pueblos, especialmente de Amrica del Sur y Nueva Guinea, se encontraba tambin en Europa entre cntabros, vascos, maragatos, ibicencos y corsos.

ORGENESLa primera mencin documentada de la covada data del siglo III a.C. Apolonio de Rodas, en su obra Los argonautas, haciendo referencia a la conducta de los hombres tras el parto de sus mujeres en la Tibarnida. El historiador Diodoro de Sicilia mencionaba que los corsos tenan una costumbre semejante: Con el nacimiento de sus hijos observan una costumbre muy extrao: no tienen cuidado alguno de sus mujeres que estn de parto, pero cuando una mujer ha dado a luz, el marido se acuesta en la cama pareciendo enfermo, y permanece encamado un nmero fijo de das, como una recin parida. Marco Polo trat de explicar este comportamiento chocante al observarlo en la provincia de Kardandan , y le pareci que se tratara de un tipo deindemnizacin, puesto que la madre sufre al parir y el padre tendra que sufrir con ella, para lo cual hara unas restricciones en su vida durante al menos 40 das. 1

La primera cita concreta de Espaa se hace en 1638 por Colomis, y a partir de ella son

mltiples las referencias. Adquiri autoridad por la del gran naturalista y antroplogo Quatrefages, al sealar en Souvenirs d'un naturaliste, en 1854, como existente la covada en Vasconia, aunque a principios de siglo lo negara Aranzadi, y puede que por ello muestre tal interpretacin Caro Baroja acerca de esta costumbre en el Pas Vasco. Es posible que por datos bien recogidos pueda ampliarse la zona vasco-cntabra de la covada de los Pirineos, a uno y otro lado de la cordillera, a otras regiones de Espaa. A los dos lados del Pirineo se dictaron leyes imponiendo el derecho a primogenitura en los dos sexos, lo cual demuestra que antes haba sido privilegio de la mujer, incluso anterior a la poca romana y a la de los celta, y que tambin debera ser ahora del hombre.

INTERPRETACIONESPara unos, la covada es algo curioso: cuando la mujer da a luz, el que recibe las mximas atenciones es el marido, hasta el punto que la recin parida se dedica a sus faenas domsticas y agrcolas, y el padre de la criatura se acoge a la cama y es atendido. Otra versin de la covada se refiere a las relaciones ntimas prematrimoniales alargadas ms de lo que fuera conveniente. Durante el siglo XIX se recogen en un fichero del Museo Etnolgico y Antropolgico de Madrid testimonios de esta costumbre. En Ibiza Tan pronto como se presenta el parto, el marido se mete en la cama con su mujer, tomando tazas de caldo como ella y colocando al recin nacido entre los dos. En Canarias, los hombres ya no se acuestan mientras lo hace la purpera, pero continan hacindose agasajar al igual que sus mujeres paridas; comen y beben lo mismo, las mismas veces y durante el mismo nmero de das. En Albacete, el hombre adems de acostarse con el recin nacido le pona su camisa y quemaba la placenta en una hoguera ritual (en Alabama y Carolina del Sur bastaba con que el sombrero del padre estuviera sobre la almohada del lecho de la parturienta). Los hombres, en un intento por obtener el poder sobre todos los aspectos de la comunidad, se apropiaban del parto y el postparto, recibiendo as los cuidados que realmente necesita la madre y llevndose el mrito de tener la experiencia del alumbramiento. Esto no es difcil de creer si nos ceimos a la situacin de muchas mujeres en la actualidad, que de alguna manera podran mostrar unas ideas semejantes a las expuestas. Pero hay ms formas de abordar este ritual. Por ejemplo, como un intento de compartir los dolores y el sufrimiento de la mujer, para que los hombres experimenten la maternidad. Con esto el marido ocupara el puesto de la mujer para atraer sobre s los peligros que los espritus pueden arrojar sobre la purpera en forma de infecciones 2

mortales. Esta explicacin se basara en multitud de datos de diferentes culturas que han practicado todo tipo de rituales y sortilegios con el fin de engaar a la muerte en el momento del alumbramiento, y por tanto poda ser una forma de conjurar mgicamente la proteccin de la mujer y el beb y exponerse l mismo a los peligros.

ACTUALIDADEtimolgicamente la covada castellana y la couvade francesa son primas hermanas. Y aunque en castellano no tenga madre verbal, en francs, s: couver: empollar. En el Bearn, tan prximo a Navarra que son la misma a uno y otro lado del Pirineo, la couvade se realizaba tal y como la hemos descrito y se considera como una aceptacin plena de la paternidad del recin nacido. Los cientficos han observado que efectivamente en el hombre se producen cambios, tanto a nivel fsico, como psicolgico y afectivo, que demuestran que no es neutro ni ajeno al embarazo. En resumen podramos decir que la prctica moderna de la covada en la sociedad actual sirve: Al nio, porque significa que el padre se hace presente desde el comienzo y lo incorpora a sus primeras sensaciones y vivencias. Esto permite fijar los primeros lazos afectivos con sus dos progenitores y no slo con la madre. Al padre, porque le permite la elaboracin interna que requiere su transformacin en padre. A la madre, porque la presencia cercana del padre significa un apoyo y garanta de que no estar sola en un futuro, facilitndole una relacin equilibrada con su maternidad. Hoy nos resultan incomprensibles algunas prcticas y costumbres que se han conservado y han estado vigentes por muy difcil de pensar que sea para muchos, pero fue verdad y si se estudia atentamente la historia ms lejana, la arqueologa y se tienen en cuenta los escritos de los escritores que nos dan testimonio de las culturas ms remotas, podemos llegar a atisbar que las situaciones sociales no han sido siempre las mismas y que han existido largos perodos en los que el matriarcado, por ejemplo, marc profundamente toda la vida de clanes, tribus y pueblos. De todo ello quedan reminiscencias en nuestra cultura. La covada, que significafra reaccin contra el matriarcalismo dominante, sera ahora la oposicin al feminismo. Resulta interesante para reflexionar sobre los roles paternos vigentes y la nueva forma de entender la paternidad, que lleva forjndose desde nuestros antepasados.

Hoy da hay quienes padecen el llamado SNDROME DE LA COVADA:

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Se define como un estado de empata en el que los hombres sienten y experimentan algunos trastornos propios del embarazo cuando su compaera est en estado, antojos, dolor de espalda, vmitos, nauseas,etc. Incluso se puede llegar a empatizar hasta un punto extremo en el que sentiran los dolores cuando su pareja da a luz. No es una enfermedad y puede afectar a cualquier hombre, segn indican los especialistas, existe una fuerte asociacin con la pareja y con los problemas fsicos que experimentan. Otros especialistas indican que son problemas derivados de la angustia y de la preocupacin generalizada por la situacin que les espera: la llegada del nuevo hijo, nuevas responsabilidades, la situacin econmica, la relacin sentimental con la pareja, etc.

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