Contra la neutralidad

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Contra la neutralidad Regresando al tema de la neutralidad; a pesar de que esta se vende como valor positivo e incluso inherente de la sociedad, la publicidad, el cine, los programas de televisión que vemos desde pequeños, están empapados con ideología. Simplemente recordemos las películas de Rambo, donde el héroe gringo combate a los terroristas de ojos rasga- dos. Dichas historias se sitúan en la invasión estadouni- dense a Vietnam entre 1955 y 1975. Esto es porque la batalla cultural se libra en todas partes, la ideología hegemónica bombardea día y noche con sus campañas publicitarias, arquetipos de héroes y villanos, y valores aparentemente imparciales pero que buscan perpetuar el sistema político-económic o imperante. AÑO 1 ARTÍCULO OCTUBRE 2015 Actualmente la “neutralidad” se exalta como un valor positivo en nuestra sociedad global. Así, no es extraño escuchar o enunciar con frecuencia frases como “no soy ni de izquierda ni de derecha” o con- testar a cualquier opinión algo como “depende desde qué punto de vista lo veas”. Si eres un árbitro, un juez o un moderador sin duda la neutralidad es una virtud deseable y aun necesa- ria, pero estas ocupaciones son contingentes, son roles que se asumen durante un periodo determina- do. Así como resulta natural preferir unas cosas sobre otras, lo es también poderar valores y asumir bandos. La vida en comunidad exige que la tan alabada neutralidad sea abandonada, pues está se transforma fácilment e en indiferencia y por omisión en cómplice de la injusticia. Toda actividad humana requiere de juicio, porque toda actividad humana se realiza con una intención. Incluso la ciencia, que busca realizar acercamientos objetivos a fenómenos naturales está condicionada en última instancia a los intereses del investigador (¿Qué temas le interesa investigar?) o el financia- miento de las investigaciones (¿Qué temas es más lucrativo investigar?). Por ejemplo, el brillante científico alemán Werner Heisenberg, quien entre muchas otras cosas enun- ció “el principio de incertidumbre” sin el cual nos sería imposible comprender la física cuántica, aceptó dirigir la investigaciones nucleares nazis, en el entendido de que el desarrollo científico-tecnoló- gico es políticamente neutral. La historia se encargó de desmentir esta idea, mos- trando que la ciencia está supeditada a intereses económicos y políticos. Escribió Isaac Asimov al respecto: 'La tecnología es la ciencia puesta al servicio de la humanidad, pero la falta de sabiduría puede transfor- marla en algo pernicioso para ella' Pero no sólo se trata de la ciencia, en la cotidianidad se suelen evocar frases como “ni de política ni de religión se puede hablar” o “tú tienes tu opinión y yo la mía, ninguna de las dos está mal”. Dichas afirmaciones constituyen la negación de nuestra naturaleza y cultura, de nuestras capacida- des y potencialidades, de nuestra lógica, entendi- miento, intuición, razón etc. La historia del hombre es la historia de las ideas, la historia de la contraposición y síntesis de las ideas, en muchos casos también de la imposición de las ideas. Basta con darse una vuelta por la historia de la filoso- fía occidental y recordar al maestro Sócrates que impulsaba la mayeútica como método para “dar a luz” a la verdad a través del diálogo, en contraposi- ción a la retórica que partía de discursos largos (uni- direccionales) que buscaban “persuadir” a las multi- tudes. Lo mismo sucede con las políticas educativas, que van en correspondencia con las económicas; eso podemos verlo en nuestras escuelas, donde desde hace un par de años comienza a introducir- se el paradigma del emprendedor. Algunas de las promesas que se les hacen a los  jóvenes aspirantes de empr endedor son: -Sé tu propio jefe -Trabaja sin horario -Haz lo que te apasiona -Libertad financiera Cabe decir que la crítica que se realiza en este artículo no es hacía iniciativa individual o colecti- va, sino a la fantasía incoherente de “producir” empresarios en masa desde la educación pública. No puede negarse que existen ejemplos (pocos por supuesto) de personas que de alguna manera han logrado ser “exitosos” económicamente, pero la pregunta es siempre, ¿A qué costo? 1 2 AÑO 1 ARTÍCULO OCTUBRE 2015 Escrito por César López

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Artículo de Círculo guinda, Octubre 2015

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Contra la neutralidad

Regresando al tema de la neutralidad; a pesar de queesta se vende como valor positivo e incluso inherente dela sociedad, la publicidad, el cine, los programas detelevisión que vemos desde pequeños, están empapadoscon ideología.

Simplemente recordemos las películas de Rambo, dondeel héroe gringo combate a los terroristas de ojos rasga-

dos. Dichas historias se sitúan en la invasión estadouni-dense a Vietnam entre 1955 y 1975.

Esto es porque la batalla cultural se libra en todas partes,

la ideología hegemónica bombardea día y noche con suscampañas publicitarias, arquetipos de héroes y villanos,y valores aparentemente imparciales pero que buscanperpetuar el sistema político-económico imperante.

AÑO 1 ARTÍCULO OCTUBRE 2015

Actualmente la “neutralidad” se exalta como unvalor positivo en nuestra sociedad global. Así, no esextraño escuchar o enunciar con frecuencia frasescomo “no soy ni de izquierda ni de derecha” o con-testar a cualquier opinión algo como “dependedesde qué punto de vista lo veas”.

Si eres un árbitro, un juez o un moderador sin dudala neutralidad es una virtud deseable y aun necesa-ria, pero estas ocupaciones son contingentes, sonroles que se asumen durante un periodo determina-do.

Así como resulta natural preferir unas cosas sobreotras, lo es también poderar valores y asumirbandos. La vida en comunidad exige que la tanalabada neutralidad sea abandonada, pues está setransforma fácilmente en indiferencia y por omisiónen cómplice de la injusticia.

Toda actividad humana requiere de juicio, porquetoda actividad humana se realiza con una intención.

Incluso la ciencia, que busca realizar acercamientosobjetivos a fenómenos naturales está condicionadaen última instancia a los intereses del investigador(¿Qué temas le interesa investigar?) o el financia-miento de las investigaciones (¿Qué temas es máslucrativo investigar?).

Por ejemplo, el brillante científico alemán WernerHeisenberg, quien entre muchas otras cosas enun-ció “el principio de incertidumbre” sin el cual nossería imposible comprender la física cuántica,aceptó dirigir la investigaciones nucleares nazis, enel entendido de que el desarrollo científico-tecnoló-gico es políticamente neutral.

La historia se encargó de desmentir esta idea, mos-trando que la ciencia está supeditada a intereseseconómicos y políticos.

Escribió Isaac Asimov al respecto:'La tecnología es la ciencia puesta al servicio de lahumanidad, pero la falta de sabiduría puede transfor-marla en algo pernicioso para ella'

Pero no sólo se trata de la ciencia, en la cotidianidadse suelen evocar frases como “ni de política ni dereligión se puede hablar” o “tú tienes tu opinión y yola mía, ninguna de las dos está mal”.

Dichas afirmaciones constituyen la negación denuestra naturaleza y cultura, de nuestras capacida-des y potencialidades, de nuestra lógica, entendi-miento, intuición, razón etc.

La historia del hombre es la historia de las ideas, lahistoria de la contraposición y síntesis de las ideas, enmuchos casos también de la imposición de las ideas.

Basta con darse una vuelta por la historia de la filoso-fía occidental y recordar al maestro Sócrates queimpulsaba la mayeútica como método para “dar aluz” a la verdad a través del diálogo, en contraposi-ción a la retórica que partía de discursos largos (uni-

direccionales) que buscaban “persuadir” a las multi-tudes.

Lo mismo sucede con las políticas educavan en correspondencia con las económpodemos verlo en nuestras escueladesde hace un par de años comienza a ise el paradigma del emprendedor.

Algunas de las promesas que se les ha jóvenes aspirantes de emprendedor son

-Sé tu propio jefe-Trabaja sin horario-Haz lo que te apasiona-Libertad financiera

Cabe decir que la crítica que se realizartículo no es hacía iniciativa individualva, sino a la fantasía incoherente de “empresarios en masa desde la educació

No puede negarse que existen ejemplpor supuesto) de personas que de alguhanlogrado ser “exitosos” económicament

pregunta es siempre, ¿A qué costo?

1 2AÑO 1 ARTÍCULO OCTUBRE 2015

Escrito por César López

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-Libertad positiva: capacidad del individuo de serdueño de su voluntad y de controlar y determinarsus propias acciones y destino.

-Libertad negativa: ausencia de coerción externa alindividuo que desea realizar una acción determina-da.

La ley y el régimen económico -en teoría- nosgarantizan solo libertad negativa: no nos prohíbenser felices, no nos prohíbe viajar, leer, autorrealizar-nos.

Pero, ¿cómo vamos a hacer todo eso si tenemostrabajos con jornadas interminables?, si tenemossueldos miserables, estrés, tiempo de esparcimien-to nulo.

Si las condiciones laborales han ido en detrimento ylos derechos han ido perdiéndose uno a uno, si la jornada laboral de 8 horas que se ganó con siglos deluchas obreras hoy es simplemente un recuerdo, si

con el discurso de generar más empleos se permitióla modalidad de subcontratación (outsourcing) y lacontratación temporal (con el fin de que no puedasgenerar antigüedad ni por tanto derechos).

Es tarea del estado -por definición y, nuevamente, enteoría- gestionar los recursos e implementar políti-cas en beneficio de la población. Estos beneficiosdeben ser genuinos y no simplemente inmediatistas.

Lamentablemente quienes están al frente de lasdecisiones de carácter público no piensan así, y handemostrado que más que el trabajo digno le impor-

tan los indicadores de empleo y la preservación desus privilegios.

Lo mismo pasa con la llamada “modernización” dePEMEX, que es muy probable que de alguna maneraincremente el Producto Interno Bruto (PIB) del país,lo cual no necesariamente se traduce en mejorescondiciones de vida. Cabe volver a preguntar:¿Riqueza para quién?Lo que legitima el estado no es libertad para elpueblo, sino un libertinaje para los grandes capitales,libertad para explotar.

La paz y la democracia en abstracto también sonvacías, la paz sin justicia social se sostiene únicamen-

te con la violencia material y alienación del pueblo yla “democracia de los ricos” se resume como diceChomsky en un: “Son libres de hacer lo que quieran,siempre y cuando sea lo que queremos que hagas” 

Escribió Alain Touraine:La democracia no nace del estado de dedel llamado a unos principios éticos –libecia– en nombre de la mayoría sin poder yintereses dominantes. [...] La democratanto no se reduce jamás a uso procedimsiquiera a unas instituciones; es la fuerzpolítica que se empeña en transformar e

derecho en un sentido que corresponda ases de los dominados, mientras que el fo jurídico y político lo utiliza en un sentidoligárquico, cerrando el paso del poder podemandas sociales que ponen en peligro elos grupos dirigentes.

Es tarea de todos nosotros actuar en potades genuinas, de libertad económica*inalienable del trabajador al fruto de spor tanto a no ser explotador ni explottad intelectual: el hombre sólo es libreelegir, puede elegir solo si sabe lo bastcomparar; libertad moral: el hombre norealmente libre si es esclavo de sus pasi

puede ser libre si tiene un ideal y unfilosófica, que le hacen posible tener unacoherente en la vida.

El primer paso sin duda es romper con ldad que deviene en parálisis. Es un campero aquí estamos, caminando juntos.*Psicoanálisis de la sociedad contemErich Fromm.

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De la libertad:Incluso nuestro concepto de la libertad está sujeto a

interpretaciones ideológicas. En el sistema capitalis-ta se dice que somos libres porque tenemos “liber-tad de consumo” y porque se vive en un relativoliberalismo político, sin embargo existen al menosdos tipos de libertad:

Típicamente a costa del bienestar propio: adicción altrabajo, deterioro de la salud psicológica y física, asícomo de imponer a los trabajadores sueldos misera-bles y condiciones infrahumanas de trabajo sinningún tipo de seguridad social.

De nuevo, lo que se cuestiona no es la capacidad delcapitalismo para generar riqueza, lo que se cuestio-

na es ¿Para quién es esa riqueza?No es posible pensar en crecimiento infinito en unmundo con recursos finitos y que por si fuera pocoestá regido por el principio de conservación de laenergía (la energía no se crea ni se destruye, setransforma) y la segunda ley de la termodinámica(irreversibilidad de los sistemas termodinámicos yentropía o parte de la energía que no puede utilizar-se para producir trabajo).

Es necesario asumir las limitaciones físicas de nues-tro eco-sistema y con ello replantear el sistema dedistrbución de los recursos y de la riqueza, pues esevidente que lo que en un lugar es lujo y derroche enotro se refleja en miseria y muerte.