CONTRA LA ESPADA Y LA PARED

No podían haber esperado mejor escenario para la segunda vuelta electoral. La derecha y toda la reacción peruana habían trabajado por meses y hasta años para esta posibilidad y hoy solos en el juego saltan de un pie. Su vieja astucia para estas lides y los millones de por medioen recursos invertidos en esta campaña le sirvieron para involucrar en su farsa electoral a algunos ingenuos y otros oportunistas, hambrientos de una curul que les permita gozar de los privilegios y gollerías que da el ser considerado “Padre de la Patria”. Se ha acabado el primer acto de esta comedia electoral y los que pasan al segundo son dos de los mas claros exponentes de la extrema derecha del país y del neoliberalismo a raja tabla. Toda la obra desde el inicio de esta campaña estuvo preparado, oleado y sacramentado para ello. No hay porque asombrarse y si algunos lo hacen solo es expresión de hipocresía o tonta ignorancia. Era el manejo de la lógicaneoliberal. Desde el pitazo inicial, es mas, de antes, todo el llamado pelotón de “presidenciables” eran aquellos aplicadores o defensores del orden neoliberal. Pero como también desde el inicio se hizo claro la corriente de opinión publica de que este proceso estaba “cocinado”, trataron de aderezarlo, de hacerlo más “plural” con otros candidatos de otras corrientes, aquellos que dicen rechazar el modelo pero que transitan por el mismo camino capitalista del cual no pueden salir. Y, para agregar algunos condimentos al menú, siempre neoliberal, impulsaron e inflaron a otros como Acuña en un primer instante yluego a Julio Guzmán, quienes fueron defenestrados en plena campaña. Pero como a la farsa le tenían que dar un nivel de legitimidad para mantenerla en el desayuno, almuerzo y cena de la opinión publica, encontraron a otros dos mas que cumplieran el reparto de los excluidos anteriormente. Y ese papel lo cumplieron Barnechea, elevado a la calidad de “outsider” pero luego desinflado al final de campaña, y el otro lo asumió la Sra. Mendoza, dizque de izquierda, pero claro, aquella “izquierda” que si bien no es del completo gusto de la CONFIEP por lo menos es de aquella “izquierda” domesticada, aquella respetuosa del orden consagrado, aquella de la vieja tendencia llamada “leal oposición”, o sea de esos que dicen “oponerse” pero son leales al mismo sistema de explotacióny depredación capitalista.

Y reiteramos, como casi desde el inicio del mismo, cuando se excluyó a organizaciones como el FUDEPP que cumplió con la recolección y presentación de firmas para su inscripción dentro de los plazos establecidos por los propios parcializados e incapaces organismos electorales, que en este proceso electoralya estaba el fraude electoral en marcha. La consigna era imponer a los candidatos de la derecha y garantizar la prosecución y profundización del modelo neoliberal con el que mejor les representase. Pensar que un fraude electoral en estos tiempos puede desenvolverse como los hacían las antiguas organizaciones oligárquicas en el siglo XIX, cuando colocaban tiradores con escopetas en las azoteas adyacentes a los lugares de votación para ahuyentar a los votantes que estaban seguros no eran de su agrupación, es no ver la “evolución” de estos patrones capitalistas del dinero, cavernícolas políticos, que hoy hacen usos de otros medios mas sutiles y subliminales, como la gran prensa a su servicio (televisiva, radial y escrita), para engatusar a la opinión pública. Porque FRAUDE, en el sentido semántico de la mismapalabra, no solo significa “un acto para eludir una disposición legal en perjuicio del estado o terceros”, sino también “el acto de burlar los derechos de una persona o colectividad”. Y este proceso electoral, por mas careta democrática en que se hayan esforzado por darle, no es mas que otra de sus farsas electorales, en que han excluidos aquellos que mantienen sus principios firmes en qué representa esta democracia burguesa, para qué sirve y cómo se usa y otros por pugnas de a qué grupos de poder sirven.

“Fiesta electoral” o “triunfo de la democracia” han sido los titulares de toda la prensa reaccionaria para edulcorar el paso a segunda vuelta de una de las conspicuas candidatas del neoliberalismo, la corrupción y la represión popular, la Sra. Fujimori, cuya organización representa uno de los periodos mas negros y nefastos para el pueblo. Mas alegría aun para los grandes capitalistas y la reacción, porque el segundo es otro del mismo redil, el pro imperialista PPK, mas yanqui que la Coca Cola aunque luzca un DNI con el cual dice acreditar que es peruano. Así, el voto para la derecha es seguro y sin mayores inconvenientes, y claro que irán a votar en esta segunda vuelta con los ojos vendados, pues con cualquiera quien gane tienen los hilos del control económico asegurado.

Pero, veamos también, que reflejan los resultados en números de estas elecciones. La gran prensa, con algunas excepciones, ya sea por intereses que defienden o por simple cálculo político, no han querido profundizar en las cifras de votación y participación. Casi todos los medios nos quieren vender la imagen de una candidatura fujimorista “fuerte y consolidada”, con un supuesto 39% o 40% de votación(en números 5´905,000) pero que tratan de ocultar que esorepresenta solo el de los votos válidosque excluye del conteo a los votos nulos y/o viciados y los votos en blanco. Pero ¿Cuál es la verdad de la milanesa en términos reales de votación?¿Es cierto la gran aceptación y el mayoritario apoyo popular a candidatura del fujimorismo? Lo que no se trata a fondo es que el fujimorismo ha obtenido ese porcentaje de los votos válidos, pues cuando se hace el porcentaje de los votos emitidosincluyendo los votos nulos y

viciados que suman casi 880,000 (5%) y los blancos que son casi 2´150,000(12%)este se reduce a 33%. Aquí ver, que más o menos el 17 % de los votos emitidos no ha votado por ningún candidato. Claro que esto debe ser materia de mayor análisis, pero tampoco debemos rebanarnos los sesos como los sabihondos opinólogos para descubrir que hay un mayoritario rechazo a estas farsas electorales que ya no convencen a todos. Pero eso no es todo, en el caso de los que decidieron no ir a votar en esta comedia electoral, el porcentaje es uno de los más altos, incluso superior a las del 2011. De casi 22´900,000 de electores hábiles para votar son más de 5´ millones quienes no acudieron a sufragar, lo que significa aproximadamente ¡el 28%! Y es con ese72% de participación de votantes del total, convertido en 100% por arte de magia, con la cual la derecha y la reacción peruana pretenden legalizar la “victoriosa” campaña de su candidata en esta primera vuelta para imponernos a otro neoliberal que perpetúe el modelo y el camino capitalista, como proclaman: ¡por los siglos de los siglos! Claro que con eso tienen el control completo del Congreso, pues les representa más o menos 70 escaños con la cual no necesitaran de mayores alianzas en ese establo congresal para imponer sus planes de profundización neoliberal. El resto le hará comparsa y tocara el cajón, y otros solo pataletas.

Son estos resultados a los que hoyel pueblo consciente rechaza y muestra su preocupaciónacentuándose en él la posición de farsa y fraude electoral que debe estar dispuesto a rechazar. Pero no faltan aquellos que dicen respetar los resultados, los mismos de la “leal oposición” que de seguro han sido favorecidos en la repartija y que ni siquiera se atreven a denunciar esta comedia electoral barata por miedo a perder su escaño congresal. La propia candidata del autodenominado Frente Amplio, la Sra. Mendoza, representante demócrata burguesa en el mejor de los casos, ya ha asumido la derrota de su candidatura y plantea darle vuelta a la página de esta primera parte electoral, avalando con ello y desde el inicio de su participación este fraudulento proceso, y que trataahora de consolarse con el papel “fiscalizador” que dice asumirá ella y su bancada. ¿Cómo? No lo entendemos. Lo que está claro es que su agrupación tendrá 20 o 21 congresales y eso no le bastara para hacerse oír entre tigres y tiburones fujimoristas y acabaran otra vez, como siempre ha sido el papel de los viejos oportunistas, legitimando las tropelías de una bancada fujimorista acostumbrada a imponer sus deseos y las de sus representados a carpetazo limpio. Pero era lo menos que se esperaba de una persona ligada a toda la trama de eternizar el sistema, aunque de vez en cuando le dé un acceso epiléptico de “democratítis”. Desde el inicio de su carrera presidencial, aunque la prensa reaccionaria se ha esforzado por pintarla como la supuesta representante de una izquierda que no es tal, solo ha demostrado ser el guiñapo de trapo que usa la reacción, ya para legitimar sus farsas electorales, ya levantando el supuesto cuco de la estatización, el socialismo, etc., cuando no el fantasma de su odiado pero latente sepulturero: el comunismo. Veremos cuánto dura el “Frente Amplio” como organización y bancada congresal. Puede que alguno que otro tenga por lo menos la dignidad de llamarse de izquierda, pero eso no basta. La práctica demostrara si realmente lo es. Pues ahí no pocos son socialistas de palabra, pero sí burgueses en los hechos. Es casi una realidad que todos sí puedan ser anti fujimoristaspero eso no significa ser un verdadero hombre de izquierda. Y veremos cuál es la posición que adopten en la posible segunda vuelta, donde es casi seguro que muchos de esa cúpula organizacional del FA hagan caso de ese espíritu antifujimorista para optar por el llamado “mal menor” y no sea raro que busquen el abrazo de PPK, con la cual solo confirmarían su posición burguesa de defensa del modelo neoliberal junto a ese otro escribidor reaccionario y pontificador de candidatos del capitalismo como es ese Vargas Llosa.

Al pueblo, lo hemos dicho y lo reiteramos por enésima vez, no le cabe cifrar esperanzas en ningún candidato de esta farsa electoral. El único camino es la organización popular pues lo que se viene es una mayor arremetida neoliberal, claro también en un momento complejo económica, política y socialmente para cualquiera que asuma la administración del estado, pues en esta coyuntura el país de hoy no es el país de los 90, y el pueblo también ha aprendido en cómo defender sus derechos y conquistas. El panorama futuro es complejo para el país y lo sigue siendo para el mundo en general, con una crisis económica mundial que no termina aun de dar sus coletazos finales. Politización, organización y verdadera unidad es el único camino del pueblo, y es en eso donde debemos concentrarnos más allá de esta coyuntura y farsa electoral.

Puno, 16 de abril del 2016