RESISTENCIAS: Obstculo e InstrumentoLucia MorabitoCuando hablamos de resistencia, lo primero que pensamos es en una gran piedra en elcamino, en un obstculo que impide el paso, que impide que hagamos nuestro trabajo.El conceptoderesistenciafueunconceptobastanteprecoz quecumpliunpapeldecisivo en la consolidacin del psicoanlisis como mtodo psicoteraputico, porque fueprecisamentedebidoal descubrimientodelasresistenciasqueFreudfuepuliendosutcnica, abandonandolahipnosislosmtodoscatrticosugestivoenprodelaasociacin libre.! esto muestra cmo en psicoanlisis, la teor"ala cl"nica van siemprede la mano# los descubrimientos cl"nicos van modificando tanto la teor"a como la tcnica.$esde entonces, la misma tenacidad que caracteriz a Freud, estimul a sus seguidoresa no dejarse vencer por los obstculos.! es que si ha algo que caracteriza al psicoanlisislo distingue de otras modalidadespsicoteraputicas, es precisamente el hecho de que convierte los obstculos eninstrumentos# que se sirve de lo ms dif"cil, de lo ms doloroso, de los aspectos negativos oscurosdelfuncionamientomental, conlaauda dela repeticin quese daenlatransferencia, los convierte en un trozo de piedra para esculpir.En lugar de erradicar los s"ntomashacer desaparecer lo que molesta, se sirve de ellopara transformarlo. %nte esta modalidad tcnica, es natural que se e&acerben lasresistencias. 'orque resulta naturalhasta obvio que toda vez que invitamos a alguien aobservar la realidad desde una perspectiva diferente# es decir, cada vez queinterpretamos, los procesos de acomodacinadaptacin de la perspectiva nueva sobrela vieja, conllevar necesariamente alg(n grado de resistencia.Clasificacin de las resistencias segn su origen:En un principio, Freud distingui slo dios tipos de resistencia) la resistencia detransferenciala resistencia de represin.* +esistencia de represin) concebida como una fuerza interior siempre presente endiversosgrados,quese opone alasfinalidades perseguidas porel tratamiento,cua manifestacin cl"nica es la defensa contra los impulsos, recuerdos,sentimientos que, de traerse a la conciencia, provocar"an gran malestar.* +esistencia de transferencia) similar a la anterior, pero con la particularidad de quemuestra la lucha contra los impulsos infantiles que aparecen de diversas formasrevividos en la transferencia.,s adelante, agreg tres modalidades ms de resistencia)Conferencia presentada en el Marco de las IV Jornadas de Psicoterapia Psicoanaltica de la Asociacin Venezolana de Psicoanlisis. Caracas, Marzo de 2003.PsiclogoPsicoanalista,!ie!"ro Asociado de la Asociacin Venezolana de Psicoanlisis. #elef. $%&'(%2. e.!ail l)cia!ora"ito*cant+.net&* +esistencia derivada del beneficio secundario de la enfermedad) la cual implica ladificultad de renunciar a ser cuidado por estar enfermo o renunciar a la satisfaccinque conlleva la descarga de los impulsos agresivos o vengativos en quienes seven forzados a compartir el padecimiento.* +esistencia de Ello) es la resistencia que ofrecen tercamente los impulsosinstintivos a su cambio o modificacin, tambin denominada -inercia, adhesividad oviscosidad de la libido..* +esistencia del /upero) que proviene de la conciencia de culpade la necesidadde castigo.Clasificacin de las resistencias segn su intensidad:0as resistencias tambin pueden ubicarse en un continuo seg(n su intensidaden esesentido tenemos) * las resistencias ms inocuas, inherentes a todo proceso, como la dificultad para asociaro el guardarse informacin# * las resistencias medianamente obstaculizadoras, como las llegadas tarde# * hasta las resistencias ms groseras, como faltar a la sesin, que impiden la continuidaddel proceso.Clasificacin de las resistencias segn lo !ue "erturban:Cuando las resistencias se convierten en un obstculo, llegan a perturbar el proceso dediferentes maneras. 'or ejemplo, pueden perturbar)* 0a tarea) cuando perturba la tarea, el paciente en lugar de asociar, de recordar, derepetir en la transferencia, lleva a la accin dichos recuerdos. Esto es el actino out.* 0oslogrosdel insight) cuandoel pacienteenlugar demejorar luegodeunainterpretacin que le ha generado un nuevo conocimiento sobre s" mismo, lo quehace es que se empeora. Esta el la +eaccin teraputica 1egativa.* El Contrato teraputico) cuando el paciente incumple abierta o encubiertamente lasnormas del contratoalberga una agenda oculta. Esto se denomina +eversin dela perspectiva.!as" sucesivamentepodr"amosclasificarlasresistenciasdedemuchasotrasformascomo seg(n su objetivo, seg(n la patolog"a del paciente, entre otras.'ero en todo caso, lo que vemos es que todas estas modalidades de resistencia tienenencom(nel hechodequeseoponenal procesoteraputico. !enesesentido, lasresistenciaspors" solassonrealmenteunobstculoenel proceso, aqueen(ltimainstancia impiden el logro de las metas del tratamiento, es decir, el insightlaelaboracin.Sin Resistencias no #a$ %roceso:/in embargo, la tarea del terapeuta es precisamente atravesar esas resistencias,interpretarlas, parapoderlasconvertir eninstrumentodeinvestigacin. 'araellodebequedar claro ante todo, que sin resistencias no ha proceso. Es decir, por definicin, lasresistencias soninherentes atodoproceso. 'orquetal comonos lolegFreud,sabemos que para que haa proceso, debe haber elaboracin,no sin el vencimiento delas resistencias no ha elaboracin posible. 2%horabien, estonoquieredecirquesinel vencimientodelasresistenciasnopuedahabercurasintomtica, disminucindelaansiedad, omejoraenel estadodenimo.'ero, sin el trabajo de las resistencias en el marco de la relacin transferencial, no habrlo que los psicoanalistas llamamos proceso. 'ero pasmemos ahora de la teor"a a la tcnicapreguntmonos 23u hacer entoncescon las resistencias4 2Cmo podemos hacer para abordarlas4 'orque muchas veces seescucha decir que tal o cual paciente no puede tratarse porque est mu resistido, o queno se puede llegar ms lejos con talo cualpaciente porque sus resistencias son mubravas. /i bien puede ser cierto que en algunos casos el paciente se vuelveprcticamente inaccesible debido a la intensidad de sus resistencias, tambin es ciertoque la (nicamanera de convertir las resistencias en aliadas del proceso es a travs de lainterpretacin. En otras palabras, las resistencias deben ser e&haustiva sistemticamente interpretadas.'orque, si bien las clarificaciones, los se5alamientos, lasrecapitulaciones, laspreguntas, lasugestinlasconfrontaciones, sonherramientas(tiles en psicoterapia, solamente a travs de interpretaciones es que podemosverdaderamente lograr un efecto teraputico en los pacientes.El "a"el del tera"euta:6emosvistohastaahoralasdiversasmodalidadesderesistencia, hemoscentradonuestra atencin en elpaciente que se resiste, en las formas en que lo haceen losgrados en que lo hace. 'ero sabemos que las resistencias se e&presan en latransferenciaque por lo tanto, en virtud misma de la naturaleza interactiva del procesoteraputico, podemos suponer que las resistencias del paciente tienen alguna resonanciaen la contratransferencia del terapeuta.Entonces, 2cul es el papel que cumple el terapeuta en la e&presine&acerbacin delasresistenciasdel paciente4'udiramosllamaraesto-resistenciasdel terapeuta.o-contraresistencias. En otras palabras, 2qu podr agregar o restar elterapeuta a lasresistencias del paciente4 23ue ser lo que le impide cumplir su funcin4 23u ser loque le impide interpretar las resistencias adecuadamente4 6e all" un punto sobre el quenosotros como terapeutas tenemosquedetenernos apensar, porqueresulta mufcilecharle toda la culpa al pacientea sus resistencias, cuando en realidad muchas vecessin darnos cuenta, estimulamos pseudo insights en los pacientes, favoreciendo que serefugien eternamente en sus resistencias. 7eamos algunos ejemplos.Cuando el 8erapeuta)* 'ermite pasar por alto u obviar alguna informacin porque siente que interpretarlaser"a demasiado doloroso para elpacientese queda trabajando sobre un focoparticular que no amenaza la integridad del proceso#* 9, cuando de forma similar el terapeuta se aleja del punto de maor ansiedad lleva alpaciente hacia otras asociaciones, a travs de preguntas fuera de lugar,buscando disipar dicha angustia#8odoloanterior,muchasvecesen nombredel respeto al -timing.del paciente,puedepromover la intelectualizacinestimular la complicidad inconsciente entre ambosllevando alpaciente a atrincherarse en sus resistencias con la anuencia delterapeuta.En estos casos la resistencia del paciente se convierte en un obstculo.3'or el contrario, cuando el terapeuta)* :dentifica la resistencia, se pregunta sobre el por qu de staes capaz de tolerarla incertidumbre hasta dar con una interpretacin adecuada, fomenta que laresistencia se transforme en un instrumento aliado del proceso.*Entonces,&!u' es lo !ue #ace !ue el tera"euta "ueda reali(ar adecuadamente sutraba)o* 9, 2qu es lo que lo limitaentorpece su capacidad teraputica4%mi juicio, e&istendosaspectossumamenteimportantesquepuedenaudarnosacomprender esta situacin.;< En primer lugar, la influencia del Modelo M'dico:0amentablemente, lapsicoterapiasehavistosumamenteinfluenciadapor el modelomdico, otorgndole al terapeuta un rol curativo que realmente no le pertenece, porque lamente humana no se comporta de la misma forma en que lo hacen los rganos enfermos.El sufrimientomental see&presaatravsdem(ltiplescaminosquenecesariamentedebern transitarse para lograr algo ms que la cura sintomtica.% maor influencia delmodelo mdico en la relacin terapeuta paciente, maor ser lasuperioridad otorgada al terapeutatanto ms se fomentar la disociacin entre el motivodeconsultalascausasquelomantienen. Enesascondicioneslasresistenciassee&acerbarnal terapeuta se le dificultar mucho ms el poder interpretarlas.'or el contrario, desdelaperspectivadelModelo%sicoanal+tico, consideramosquecuandoel pacientesolicitaaudaparaprocurarsealivio, al mismotiempo repiteenlatransferencialaesenciadesuconflictiva. 'oresarazn, enlugardel rol curativo, elpsicoanalistaoel psicoterapeutadeorientacindinmicaadoptaunrol investigativo,creandounclimademutuaalianzaparalograr dichainvestigacin. %s" lascosas, elterapeutano sabe nada, noopina nada, noaconseja nada, sino que investigacon supaciente. Cuando ambos internalizan este modelo, la investigacin de las resistencias sehace menos peligrosa para el paciente. 'orque esta actitud, cuando es compartida porpacienteterapeuta, conlleva una suerte de legalizacin de los s"ntomasde las mismasresistencias# alasqueanoselestemecomoalgohorribleajenoquedebeserremovido, sinoquecomienzanaversecomoaspectosimportantesdel s" mismoque,aunquedisociados, cumplenunafuncinms alldel sufrimientoqueprovocan. !entonces el terapeutauna parte del paciente se al"an para investigar lo que ocurre enotra parte del paciente.Con esto no quiero decir que sielpaciente asume la postura anal"tica van a cesar lasresistencias. 8odo lo contrario, seguirn e&istiendose disfrazaranunaotra vez parapoder asegurar su e&istencia. 'ero en estas condiciones, la interpretacin de lasresistencias estimular menos en elpaciente eldeseo de salir corriendodefenderse.'ermitir ms bien, encontrar los caminos para investigarprocurar poco a poco el aliviodel sufrimiento. /e podr ir integrando la personalidad, ir recuperando las partesdisociadas e&presadas en la resistencia, a travs de su investigacinsuperacin.,7emosentoncesqueel lugar enel quesesit(ael terapeuta, el rol quejuega, serdeterminante para el vencimiento o no de las resistencias. /in embargo, la aceptacin deesedel rol deinvestigadordel terapeutaporpartedel paciente, esalgoquetomasutiempo# de hecho, es quiz a una de las primeras cosas a las que se resiste el pacientecuando llega buscando ser curado rpidamente. %veces se convierte en lo msimportanteaelaborardurantelafaseinicial del tratamiento# perounavezlogrado, laurgencia por la cura se disipala investigacin de los conflictos o contenidosinconscientes se hace mucho ms accesible. Es a partir de ese momento que podemosdecirqueseiniciel procesoteraputico, porqueunavezqueselogradesmontarlaresistenciaasaber des" mismo, el pacienteescapazdeir reconociendosumundointerno eir trabajando las otras modalidades de resistencia que encontrar en surecorrido. 6asta que idealmente, adquiera la suficiente autonom"a como para hacerlo sinla auda del terapeuta.=< En segundo lugar, tenemos la ace"tacin $ el uso de la Contratransferencia. Estoestsumamenterelacionadoconel aspectoanterior,aqueenlamedidaenqueelterapeuta est ms influenciado por el modelo mdico, deja pasar de largo o no capta lasidentificaciones proectivas del paciente, por lo que habr ms tendencia en l a contraactuarlas en lugar de darles cabida e interpretarlas. 'or el contrario, salirse del modelomdicoimplicasabersevulnerablealavezinstrumentoparael proceso. Esdecir,implica aceptar la contratransferencia, no tenerle miedousarla para audarse acomprender qu es lo que denuncia el inconsciente del paciente a travs de lasresistencias o a pesar de las resistencias. /inembargo, estaratentoalacontratransferenciapuederesultaramenazanteparaelterapeuta, en especial para el terapeuta que no ha pasado por una e&periencia anal"tica,porque atenta contra su narcisismo, contra su deseo de curar, contra el controlomnipotente que otorga el sentirse conocedor de la verdad, de lo buenode lo malo# por lo tanto impone en el terapeuta una gran frustracin que deber ser capaz de tolerar.$eber tolerar ante todo la frustracin que implica el saberseaceptarse como un simpleinstrumentopara elproceso delpaciente, renunciando a la satisfaccin de lospropiosdeseosnecesidadesusando los sentimientos contratransferenciales para comprenderal paciente.El paciente recibemuchodel terapeuta, aun cuandoel terapeuta concretamente siguiendo la regla de abstinencia no le da# recibe el estimulo a investigarcrecer, recibela posibilidad de rescatar su capacidad discriminatoriacon ello la esperanza de ser unamejor persona. El paciente recibe del terapeutacuando se da cuenta lo agradece. Elterapeuta, por el contrario, no puede recibir nada del paciente, porque lo que el pacientele da, el terapeuta no se lo puede quedar,aunque muchas veces el paciente le hacecrecer, no lo puede agradecer. 0a funcin delterapeuta es servir de depositario de lasidentificaciones proectivas delpaciente, para sentirlas, comprenderlas e interpretarlas.En la medida en que sea capaz de hacer e&actamente eso, ir disminuendo la fuerza delas resistencias del paciente.%'erosi enlugar deinterpretar lorecibidoel terapeutaloretienesincomprenderlodigerirlo antes de devolverlo al paciente, quedar entonces atrapado en unacontratransferencia que obstaculiza, que estimula la disociacinpor tantoserfavorecedora de la resistencia.'or lo tanto, no habr maor obstculo en el proceso teraputico que las resistencias delterapeuta, resistencias que como hemos visto sonmuchas veces el producto tanto de supostura no anal"tica, como de las dificultades contratransferenciales debidas a la falta deanlisis. En cambio, las resistencias del paciente son debidas a su sufrimiento,por tantosernbienvenidasutilizadascomoherramientaindispensablealoslargodetodoelproceso teraputico. ,ibliograf+a:Etchegoen, 6. >;?@A< Los Fundamentos de la Tcnica Psicoanaltica. %morrortu Editores. Buenos %ires.Creenson >s.f.< Tcnica y Prctica del psicoanlisis.0pez, +. E. >=DD=;??H