Con el cariño no basta

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CON EL CARIÑO NO BASTA. Nancy Samalin.

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¿CÓMO SUELEN COMENZAR LAS DISCUSIONES?

• Ciertas palabras usadas al inicio de la frase son provocaciones ante los ojos del niño. Le invitan a comenzar una batalla.

• Las frases que se dirigen directamente a la persona y empiezan por

• “Tú…”. “Tú siempre…” “Tú nunca…”. .”“Te estás volviendo…

• “Si…” suele ser el inicio de una amenaza donde la figura fuerte amenaza a la débil, y esta que lo interpreta como un reto, le devolverá el golpe. Además son ineficaces como medidas disciplinarias. Las amenazas originan juegos de poder. “Si vas a tirar así tu ropa no te compraré nada más…”. En su lugar ”Cuando” o “Tan pronto como”…. Son menos provocadores que “Si”.”Tanpronto como recojas los vestidos iremos juntas de compras”

• ¿Por qué ? Suele ser el inicio de una acusación.

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POSIBILIDADES DE ELECCIÓN.

• “¿Cuando prefieres el baño, antes o después de la cena?”

• “Necesito tu ayuda. Puedes poner la mesa o bien vaciar el lavavajillas”.

• Todos los padres saben que responder a una provocación con una alternativa y sin enfadarse no es nada fácil.

DEJAR QUE EL NIÑO RESUELVA EL PROBLEMA.

Cuando consultamos con los niños y les pedimos que nos ofrezcan soluciones, es frecuente que sus ideas sean sensatas y nos eviten mayores discusiones.

LA FANTASÍA Y LA IMAGINACIÓN.

La imaginación permite responder a los padres de una forma graciosa sin criticarlos ni enzarzarse en discusiones largas. Usted sigue diciendo “NO”, pero de una forma más asimilable. “Me pregunto por qué me hablas de esa forma…¿es que me has tomado por la bruja malvada de las montañas?

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UNA RUTINA FIJA Y ESTABLECIDA AYUDA A EVITAR LOS PROBLEMAS.

• EL HUMOR

Es un truco efectivo para disipar las peleas diarias, es una buena forma de no caer en las provocaciones de los niños.

Andy de cuatro años se enfadó mucho con su madre porque esta no le quiso comprar en la tienda aquel juguete que tanto le gustaba.

• Andy: ¡Yo lo quería! Si no me lo compras, te cortaré la cabeza con un hacha.

• Mamá: ¡Arggg! Seguro que estaría muy graciosa si voy por la calle sin la cabeza.

• Andy comenzó a reírse, luego se fue a jugar sin comentar más este tema.

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ENVIAR MENSAJES ESCRITOS, SOBRE TODO SI TIENEN HUMOR.

El padre de Karl estaba harto de que su hijo dejara siempre en la sala las cartas de baloncesto. Lo que hizo fue sujetar una nota en la puerta de Karl.

Querido Karl:

Estoy más que harto de ver tus cartas de baloncesto esparcidas por el suelo de la sala de estar. Muchas gracias.

Tu compañero de pluma.

Papá

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ELOGIOS.

• Cuando usted elogia a un niño, intente escribir de la forma más precisa posible lo que él ha hecho.

• “En lugar de despertarme esta mañana, te has preparado tú solo el desayuno y así he podido dormir un rato más. Ha sido una gran ayuda. ¡Y te has servido el zumo y la leche sin derramar una sola gota!

• Si elogia a un niño con precisión, este se dará cuenta de que usted ha observado realmente sus logros. Pero si sus palabras de elogio son demasiado generales, quizá dude de su sinceridad.

• También es bueno elogiarlo de vez en cuando delante de un adulto:

• Susannah se encontraba en la cocina mientras su madre hablaba por teléfono con una amiga : “Nunca adivinarías lo que hizo Susannah ayer por mí. Ya sabes lo deprimida que me siento desde mi marido murió. Pues bien, Susannah elevó mi estado de ánimo al ayudarme a hacer todas las tareas de la casa. Me emocionó mucho”.

• “Cuando entraron en el ascensor, la madre dijo al padre de Danny: “Danny ha venido hoy conmigo a hacer la compra. Ya no me acuerdo de la última vez que acabé tan pronto”.

• Si el elogio es demasiado exagerado, el niño no nos va a creer o bien ser va a ver agobiado por no ser capaz de satisfacer una expectativa tan alta. “Estoy orgullosa de ti porque nunca mientes…”

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¿CÓMO ACTUAR CUANDO EL NIÑO ESTÁ ENFADADO O PREOCUPADO?

• Muchos padres pretenden minimizar y negar estos sentimientos, pero esto resulta contraproducente, ya que el pequeño se siente incomprendido.

• Aprender a responder con empatía es el primer paso para ayudar al niño para que tenga más confianza en sí mismo.

• Cuando el niño desea algo que no podemos o no queremos darle…”Me parece realmente que te gustaría tenerlo” en lugar de “Dios mío, nunca estás contento, con todos los juguetes que tienes…”

• Usted puede ser permisivo con los sentimientos, sin serlo con el comportamiento. Puede dejar que su hijo desee algo sin dárselo. A veces el niño renunciará a lo que pide porque se siente satisfecho al ver que usted ha comprendido y reconocido su deseo.

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La madre de Darren, Louise, nos muestra cómo podemos ser amorosos y estrictos con la disciplina al mismo tiempo. Louise y su hijo Darren estuvieron viendo una película de vídeo hasta bastante tarde:

• Darren: Por favor, mamá,¿podemos verla otra vez?

• Mamá: Bueno.., me parece que no…es bastante tarde.

• Darren: Anda, mamá Una película tan bonita.

• Mamá: Es demasiado tarde. Hora de irse a dormir.

• Darren: (sollozando) . Yo quería verla otra vez. Si no me dejas, no te ayudaré nunca más. Cuando me pidas algo, te diré :”NO”. Si me pides un abrazo no te lo daré. Así verás cómo te sientes.

• Mamá: Darren, entiendo que te desagrade no conseguir lo que quieres y siento mucho que sea así. Resulta difícil aceptar un NO por respuesta. Lo entiendo.

• Darren: Me ha gustado mucho esa película. Querría verla otra vez.

• Mamá: Si Darren, lo sé. Me gustaría que fuera más temprano para que pudieras. A mí también me gustaría volver a verla. Pero ahora hay que irse a dormir.

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AUNQUE TENGAMOS UNOS LÍMITES BIEN ESTABLECIDOS, LLEGA UN MOMENTO EN QUE EL NIÑO LOS TRASPASA. ¿SIRVEN LOS CASTIGOS?

Castigar significa causar daño, agraviar, imponer una sanción, causar un dolor. Todo el mundo (adultos y niños) reaccionan con rabia y desafío. Deseamos devolver el golpe. Nos quedamos llenos de resentimiento o bien evitamos al que nos castiga.

• Mamá: Es hora de dormirse. Ha llegado el momento de apagar la luz.

• Fred: Mami, quiero mirar el libro de los osos.

• Mamá: Es demasiado tarde.

• Fred: Pero, mami…

• Papá: Fred,¡ no discutas! Nada de libros. Métete bien en la cama. Sin rechistar. Una palabra más y te caerá una bofetada.

• El padre salió de la habitación.

• Fred: Odio a papá. Él no es jefe. Es malo. Lo ODIO, lo ODIO, lo ODIO. Cuando sea mayor yo le diré a él lo que debe hacer. La próxima vez que me quiera mandar, no le dejaré que me dé más besos ni abrazos. Entonces estoy seguro de que sentirá mal

¿Qué debería haber hecho papá? En lugar de amenazarle con una bofetada podía haber reconocido el deseo de Fred: “Ya sé que te gusta mucho el libro de los osos. Tal vez mañana por la noche podamos empezar antes y te lo leeré”, sin dejar por ellode fijar el límite: “Pero ahora voy a apagar la luz”.

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ALTERNATIVAS

• Ayúdele a buscar soluciones.

• Deje que las consecuencias hablen por sí mismas

• Hágale ver que está muy decepcionado y dele una posibilidad de rectificar.

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• Pam y Jody estaban jugando en casa de esta última mientras sus madres hablaban. Pam pegó a Jody.

• Madre de Pam: Esto no está permitido. Si vuelves a pegar a Jody, nos iremos a casa.

• Pam: No quiero mamá.

• Veinte minutos después Pam pegó de nuevo a Jody.

• Mamá: (Con toda tranquilidad). Tenemos que irnos.

• Pam comenzó a gritar

• Mamá: Ya veo que estás triste porque debemos marcharnos.

• Pam: Quiero quedarme y jugar.

• Mamá: Ya lo sé, pero hemos de irnos. ¿Quieres quedar con ella para otro día?

• Pam: Sí.

Las madres quedaron para verse otra vez el martes siguiente. Pam protestó y lloró durante el regreso a su casa, pero su madre se contuvo para no decir (“Si no hubieses sido una niña mala con ella, aun estarías jugando en su casa”). Estas frases son muy tentadoras. Ella respondió a las lágrimas de su hija con el silencio, y permitió que la niña experimentara la tristeza, la consecuencia de haber tenido que marcharse.

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• Papá: Tina, ¡levanta el culo de aquí ahora! ¡Mira que pocilga! Cada día eres más desordenada. ¿Por qué no cuelgas nunca tus vestidos? Me niego a comprarte ninguno más si los tiras en cualquier sitio.

• Tina: ¿Por qué no le chillas nunca a Tommy? Su habitación también está revuelta. Eres malo.

La rabia del padre no era constructiva: no la animaba a cambiar.

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