Comprender el juego ajedrez de peones titan

193

description

los peones son el alma del ajedrez

Transcript of Comprender el juego ajedrez de peones titan

Drazen Marovicd compren er el

juego de peones en ajedrez

EDITORIAL LA CASA DEL AJEDREZ

© Drazen Marovic

© Editorial La Casa del Ajedrez Calle San Marcos, 41 TeiE§fono 91 521 2008 - Fax 91 531 3880 Madrid - 28004 Email: [email protected] Direcci6n Internet: http://www .lacasadelajedrez.com

Titulo original: Understanding pawn play in chess. Gambit Publications, 2000.

Direcci6n Editorial: Andres Tijman Marcus Consejero editorial: Daniel Elguezabal Varela Traducci6n: Antonio Gude Correcci6n: Sofia Montero Oria de Rueda - Gabriel Rojo Huertas Diseno de portada: Claudia Tijman

I.S.B.N.(10): 84-934786-9-5 I.S.B.N.(13): 978-84-934786-9-8 Deposito Legal: M-46.901-2006

Impresi6n: Impresos y Revistas SA Impreso en Espana - Printed in Spain

No esta permitida Ia reproducci6n total o parcial de esta publicaci6n, ni su tratamiento informatica, ni Ia transmisi6n de ninguna forma o por cualquier media, ya sea electr6nico, mecanico, por fotocopias, por registro u otros medias, sin el permiso previa y por escrito de los titulares del copyright.

Sumario

Introducci6n . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 4

Peones aislados . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7

2 Pares de peones colgantes y semicolgantes. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 42

3 Peones pasados. .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 65

4 Peones doblados . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 90

5 Peones retrasados . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ,. . . . . . . . . . . . . . 1 15

6 Cadenas de peones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15 1

7 Islotes de peones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 70

indice de jugadores . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 87

indice de aperturas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 89

Introduccion

"(Los peones) son el alma de este juego: ellos solos forman el ataque y la defensa . . . ". Muchos entusiastas contemponineos de ajedrez deben quedar asombrados al leer esta solemne declaraci6n de Philidor, confiriendoles tan alto honor a los modestos peones, que los famosos predecesores de aquel, Greco y la Escuela ltaliana, tenian en tan poca estima. En 1749 fue publicado en Londres un pequefio librito de Philidor, que se recuerda por el titulo de su primera edici6n, L 'analyze du Jeu des echecs.

Pasaria mucho tiempo antes de que las ideas expresadas por Philidor pudiesen entenderse plenamente, pero el famoso ajedrecista y musico frances vio el papel de los peones desde un angulo no convencional, muy por delante de su tiempo. ·Al insistir en las armoniosas relaciones entre peones y piezas, Philidor arroj6 nueva luz sobre el desarrollo y el centro.

Philidor practic6 lo que predicaba: las formaciones de peones fueron una caracteristica de su estilo. A diferencia de la Escuela ltaliana, que enfatizaba en el papel de las piezas, el entendia las profundas relaciones ocultas entre piezas y peones, que condicionaban todo juego serio en el tablero. Su juego no impresionaba ni era elegante. Sin embargo, muy por encima de las trampas y analisis err6neos de Greco, se trataba de un estilo que, al elevar el nivel defensivo, anunciaba que los ataques injustificados, por elaborados que fuesen, podrian fracasar.

Como consecuencia, debido sobre todo a la significaci on de los peones, el juego tom6 nuevas caracteristicas, de equilibria y restricci6n, alejandose de los parametros tan valorados en el siglo XVIII. Todas las corrientes de la vida artistica e intelectual en Francia estaban entonces imbuidas de sentido comun y moderaci6n. Volviendo al hombre en cuesti6n, su juego y sus ensefianzas, podemos reconocer la tendencia predominante de los tiempos hacia un juego claro y sencillo, regular y armonioso.

No muchos jugadores siguieron los pasos de Philidor. Habria de avanzar mucho el siglo XIX para ver en escena a otro gran jugador, Howard Staunton, que se propuso explorar sutilezas como el avance sopesado de peones, o el j uego contra peones doblados y el bloqueo. Staunton ampli6 los conceptos de Philidor sobre formaciones de peones, formulando ideas que Aaron Nimzovich y Richard Reti desarrollarian un siglo despues. Naturalmente, la epoca de Philidor tambien tenia sus defectos. La filosofia del orden y la disciplina se habia desarrollado desde fines del siglo XVII, dejando sus huellas en la literatura y las bellas artes, pero era en esencia de caracter exclusivamente racional, no dinamico. En el tablero, el periodo mostraba una tendencia a reducir los intereses del juego a sus valores posicionales estaticos. No debe sorprender, por tanto, que el periodo del romanticismo en ajedrez que sigui6 no partiese de esas premisas.

La epoca de Adolf Anderssen y Paul Morphy aport6 algunas otras convicciones. En pocas palabras, la suya fue una epoca marcada por un fuerte movimiento, caracterizado por pasar de una cultura intelectual a otra nueva, emocional, en la que el objetivo del arte, en general, no era ensefiar, sino provocar emociones, que preferia la libertad a la disciplina, el gusto personal a los valores consagrados. Los mejores jugadores de ajedrez, que compartian ese clima espiritual, no trataban de formular un marco de principios generales, en la mejor tradici6n del sentido comun, representada por Philidor. Confiaban en sus sensaciones, en su intuici6n. Una partida de ajedrez era, sobre todo, el fruto del gusto personal, una creaci6n individual. Puesto que no estaba condi-

4 INTRODUCCION

cionado por reglas estrictas, el estilo ajedrecistico del periodo era libre y dimimico. La combina­ci6n de ajedrez como simbolo del periodo era cuesti6n de fe, de optimismo, podriamos decir que de coraz6n, ciertamente no de sentido comun. Los peones perdieron su significado e importancia en la construcci6n del juego. Y a no eran quienes conformaban el ataque y la defensa. El centro a menudo se desintegraba, las partidas se convertian en una lucha abierta, con los peones como carne de cafi6n, y la construcci6n racional de formaciones centrales habia desaparecido.

No es dificil reconocer en estos rasgos la oculta relaci6n entre el ajedrez y otras formas en las que el romanticismo inundaba Europa como una oleada arrolladora. En ajedrez lleg6 con el habi­tual retraso, pero con gran fuerza y en completa armonia con las tendencias generales del movi­miento, tal y como se expresaban en la literatura, las artes y, sobre todo, en la musica, su forma de expresi6n mas natural.

Sin embargo, el final del siglo XIX produjo un nuevo giro. En los fundamentos del siglo XIX habia una fuerte tendencia a formular sistematicamente todo el conglomerado de los conocimien­tos existentes, y expresar asi las leyes generales del desarrollo. No es casual que Steinitz perte­nezca a esa epoca. Lleg6 como un legislador, y el nucleo de sus ensefianzas era la ley del equi­libria. Segun Steinitz, una partida esta en equilibria basta que un error, o una serie de pequefios errores, lo alteran, inclinando la balanza a favor del otro bando. Esta ley general adopt6 la forma de consejo practico en diversas maximas. Steinitz insistia en la construcci6n de posiciones y, por consiguiente, en los elementos con que se forjan las ventajas. Junto con casillas debiles, co­lumnas abiertas, pareja de alfiles, etc., volvia a hablar de peones. Los peones habian resucitado. A fin de preservar el equilibria, habia que luchar por el centro, ocuparlo y compartirlo. A l .d4 se contestaba l . . .d5 , los puntos fuertes centrales se mantenian mientras fuese posible un desarrollo normal, al amparo de la estructura central de peones, que era importante. Esa estructura debia ser firme, simetrica, compartiendose la influencia sobre las casillas vitales del centro. El Gambito de Dama y sistemas similares estaban al orden del dia y los peones cobraron nueva vida.

Sin embargo, en las primeras decadas del siglo XX, comenzaron a producirse cambios en el juego de un grupo de grandes jugadores y te6ricos. Se llamaban a si mismos "hipermodernos", y se rebelaron contra el estilo dominante, arido y un tanto dogmatico de los seguidores de Steinitz. Nimzovich y Reti, fundadores de la nueva escuela, publicaron obras maestras, para acabar plas­mando una autentica revoluci6n ajedrecistica. El primero escribi6 Mi sistema, y el segundo Nue­vas ideas en ajedrez. Levantandose contra las reglas y la rutina, los hipermodernos advertian: "No hay reglas generales que sean invariablemente validas" . "Estamos interesados en las excep­ciones, no en las reglas", es el lema del movimiento. Examinando el con junto de nociones y afirmaciones expresadas por Nimzovich, descubrimos que el nucleo de las nuevas ensefianzas ra­dica en el concepto original del centro y las estructuras de peones. Mientras que el ajedrez clasico insistia en la simetria de peones, los hipermodernos introdujeron el concepto de control del cen­tro a base de piezas. La limitada implicaci6n de los peones en la primera fase de la partida de­semboc6 en todo un conjunto de nuevos sistemas de apertura. Al mismo tiempo, por primera vez en la historia del ajedrez, se estudiaban a fondo todo tipo de formaciones de peones en todas las fases del juego. Lo que hoy sabemos se lo debemos en gran parte a Aaron Nimzovich. En Mi sistema los peones vivieron sus dias de gloria. La nueva ensefianza acerca del centro se concen­traba en ellos y en su sutil interrelaci6n con las piezas.

Sin embargo, ir6nicamente, la filosofia del centro de Nimzovich era el comienzo de un signi­ficativo proceso en los fundamentos del ajedrez moderno: la desintegraci6n de las estructuras cla­sicas de peones y la asimetria de las formaciones de peones modernas. Es caracteristico que, en sintonia con las tendencias generales, intelectuales y artisticas, el proceso se hizo mas acusado bacia la mitad del siglo XX. Despues de la Segunda Guerra Mundial, esa tendencia se manifesto en modernos sistemas de apertura como las defensas Siciliana y Benoni.

Y a en las decadas de los afios cuarenta y cincuenta, Bronstein y Boleslavsky dieron un paso mas alla de Nimzovich, al manifestar su convicci6n de que las negras no debian buscar la sime-

INTRODUCCION 5

tria central, ni tampoco controlar el centro. Podria cederse el centro, proclamaban, acabar el desa­rrollo basico con prontitud y luego tratar de fijar y minar el centro rival con agresiones laterales.

La clave era fijar el centro, lo que significaba provocar un bloqueo, y quitarle a ese centro su potencial dimimico. Los dos maestros citados confiaban en una verdad sencilla y universal, a saber, que todo aquello que esta fijo, inmovil, tiende a debilitarse. Fue exactamente gracias a estas nuevas proposiciones como se introdujeron nuevos sistemas de apertura, con la Defensa India de Rey como el mas famoso de ellos.

Asi pues, llegamos a la segunda parte del siglo XX, conscientes del flujo constante y cambio de dos tendencias dominantes, que exploran por tumo las posibilidades atacantes y defensivas. Es interesante observar que la historia del arte sigue el mismo modelo. Existe una constante repeticion del proceso tipico de lo estricto a lo libre, de lo sencillo a lo complejo, de lo cerrado a lo abierto, de lo estatico a lo dinamico.

En el constante cambio de la moda ajedrecistica, entre factores estaticos y dinamicos, veo la logica inherente del desarrollo del ajedrez. Cada epoca que hemos analizado 11evaba, al transcu­rrir, el germen del periodo siguiente, y cada una de elias estaba dominada por un estilo, un enten­dimiento. En ese sentido, no obstante, el siglo XX fue, en esencia, distinto. Lo mismo que el arte del siglo XX, el ajedrez modemo esta caracterizado por una mezcla de diferentes estilos. AI mismo tiempo y en el mismo Iugar coexisten fuertes corrientes estilisticas, componiendo asi un complejo tapiz de ideas y actitudes.

El destino de los peones en ajedrez, su ascenso y caida, esta interrelacionado con los modelos de cambio. Los periodos que los menospreciaban fueron seguidos por otros en que el juego racional se basaba en elios. Nuestra epoca ha absorbido finalmente la experiencia de siglos anteriores y entendido plenamente los valores intrinsecos de los peones y los distintos papeles que pueden asumir en una partida de ajedrez. Hoy en dia somos conscientes de que los peones constituyen la columna vertebral de los sistemas de apertura, y tambien que son realmente los peones los que dan forma tanto al ataque como a la defensa.

La intencion de la obra es explorar la naturaleza de los peones y las formas basicas en que pueden surgir en el tablero. Mi objetivo no es ocuparme de cada aspecto de distintas formaciones de peones, partiendo de innumerables ejemplos de la practica magistral, y decirle, en consecuencia, al lector que hacer en cada caso. No hay reglas que puedan definir en su totalidad la compleja vida de un peon, ni ofrecer un consejo seguro que resulte siempre valido. Por otro lado, temo examinar demasiados casos que solo podrian contribuir a crear confusion. Lo que he tratado de hacer es revelar la naturaleza variable y ambigua de los peones, que siempre dependen del entomo en que deben cumplir su mision. Entender plenamente esa relacion nos ayudara a elegir el camino correcto en nuestras propias partidas.

Aprenderemos de partidas notables por su claridad y simplicidad de pensamiento. En primer lugar las analizaremos, para ver como los peones se comportan en determinadas circunstancias, y luego extraeremos algunas conclusiones valiosas. Creo que es indispensable examinar el fenome­no de las cadenas de peones, en particular las creadas en el centro, en columnas centrales, sobre la base de partidas completas, porque solo entonces podremos comprender todo el proceso. Asi veremos como surgen las estructuras y como se transforman, y las causas que subyacen en el proceso. El resultado es gratificante, pues permitira asimilar la leccion general sobre el tema.

Le concedo mucha importancia al entendimiento general, pues, si bien asimilado y organizado en nuestra mente, siempre nos ayudara a elegir el plan correcto, aun cuando no conozcamos li­neas concretas ni novedades teoricas, y aunque no seamos conscientes de los procesos mentales que intervienen en nuestras decisiones. Si somos capaces de formular planes generales confiando en conocimientos generales, el calculo de posibilidades concretas sera mas facil y provechoso. Nunca deberiamos olvidar que solo la profunda comprension de las leyes generales que rigen la partida de ajedrez nos permitira alcanzar ese alto nivel de habilidad que hace posible vulnerar las reglas y pasar por encima de elias.

6 INTRODUCCION

1 Peones aislados

Procede iniciar nuestro estudio sobre las formaciones centrales de peones con peones aislados, aunque solo sea porque son una caracteristica comun en sistemas modemos. Pueden encontrarse en un numero sorprendente de importantes lineas y con una increible variedad de ordenes de ju­gadas, desde la Defensa Ortodoxa o el Gambito de Dama a la Defensa Caro-Kann, desde el Gambito de Dama Aceptado a la Defensa Francesa, de la Apertura Inglesa a la Defensa Nimzo­india, de la defensa Siciliana a la Defensa Tarrasch, etc. Sin embargo, pese al hecho de que a las posiciones que menciono se llega por distintas rutas y de que esconden algunas peculiaridades, siguen estando determinadas, de forma intrinseca, por la existencia misma y la naturaleza de peones centrales aislados. Esa naturaleza es tan inestable que siempre ha constituido un problema especifico.

En este diagrama puede verse el caso mas habitual de un peon aislado en el centro. Cada vez que nos enfrentamos a este tipo de posi­cion, existe la pregunta latente e inevitable: �se trata de algo preocupante, o de un anna oculta de ataque? Podria observar, por mi pro­pia experiencia, que jugamos esas posiciones con un sentimiento de incomodidad, sea cual sea nuestro bando. Pronto aprendemos de nuestra practica la amenaza que representan para el oponente, pero tambien lo vulnerables que son y que estrecha linea separa una pro­metedora situacion central de otra desespe­radamente pasiva. El hecho de que el peon aislado pueda avanzar en un momento dado es, en sf mismo, aterrador. Por otra parte, al no

tener compafiero en las columnas vecinas, los peones aislados, como la gente solitaria, son criaturas aisladas y, por tanto, vulnerables.

A fin de distinguir claramente si tenemos un triunfo en el centro sobre el que elaborar nuestro juego, o si lo que tenemos es un mo­tivo para un futuro incierto, debemos aprender de la rica experiencia existente. Comenzare nuestro estudio con una partida que constituyo un momento de inflexion en mi propia edu­cacion ajedrecistica. Siempre habia tenido la impresion de que un peon aislado era una de­sagradable carga. Para mi era una fuente regu­lar de ansiedad, hasta que un dia vi su otra cara, la cara oculta, en una partida de Alexan­der Alekhine . . .

Euwe - Alekhine Campeonato Mundial (253 partida)

La Haya 1 937 Defensa Nimzoindia

l.d4 �f6 2.c4 e6 3.�c3 .ib4 4.e3 0-0 5.�e2 En la Variante Rubinstein de la Defensa

Nimzoindia, el caballo puede estar algo pasivo en "e2", ya que a menudo ofrece posibilidades restringidas. Sin embargo, tambien tiene su aspecto positivo, pues las blancas cuidan su estructura de peones, evitando el par de peo­nes doblados en la columna "c" .

PEONES AISLADOS 7

5 ... d5 6.a3 !il.e7 7.cxd5 exd5 8.�g3 c5 9.dxc5 i.xc5 10.b4

Tras haber aislado el peon negro en el cen­tro, la intencion de las blancas es asumir el pleno control de la casilla "d4", lo que sera posible tras la retirada del alfil .

AI analizar la partida, afios atras, sigo .re­cordando de forma vivida que mi reaccion fue la misma: mi mano fue mas rapida que mi mente y tome el alfil para retirarlo. Un vistazo a la jugada que sigue me sorprendio tanto co­mo debio haber sorprendido al Dr. Euwe durante la partida . . . 10 ... d4!

i Un esplendido golpe tactico ! Ahora no es dificil concluir que 1 1 .ttJce4 no da resultado, tras 1 1 . .. ttJxe4 12 .ttJxe4 i.b6. Si las blancas confiaban en 1 1 .ttJa4?, entonces tendrian que afrontar la cruda realidad: 1 1 . . . dxe3 12 .'W'xd8? pierde rapidamente, por 1 2 . . . exf2+ 1 3 . �e2 i.g4+. Por consiguiente . . . ll.bxc5 dxc3 12JWc2?!

Aqui podemos presenciar una metamorfo­sis habitual en situaciones similares: un golpe central ha transformado un peon aislado en pasado, es decir, un peon cualitativamente su­perior, mas movil y, a menudo, mas peligroso. En nuestra partida, las blancas no comprenden basta que punto se ha vuelto peligroso el peon, pues de otro modo habrian seguido el consejo de Alekhine, y jugado 1 2.'W'xd8 �xd8, y en­tonces 1 3 .ttJe2 ttJe4 14.f3 ttJxc5 1 5 .ttJxc3 , aunque las negras siguen conservando ventaja. En una partida mas reciente, Agdamus - Rai­mundo. Garcia, Buenos Aires 1 972, encontre

1 3 .a4 i.d7 14.�a3 c2 1 5 .i.b5 a6, que tambien fue favorable a las negras. Sin embargo, con damas sobre el tablero, las cosas seran aun mas dificiles. 12 ... VMa5 13J�bl

En caso de ataque directo, con 1 3 .ttJe2, era posible hacer 1 3 . . . ttJd5 14.e4 ttJb4 1 5 .'W'b1 ttJ4a6. 13 ... i.d7

Capturar el peon pasado no es tan facil co­mo pueda parecer. Las negras amenazan hacer 14 . . . i.a4, que no puede ser prevenido con 14.i.c4 i.a4 1 5 .i.b3 i.b5 , ni tampoco con 1 4.�b4, debido a la contestacion 14 . . . ttJa6 1 5 .i.xa6 'W'xa6. En ambos casos, las blancas no pueden enrocar. Asi que tratan de salvarse de otra forma . . . 14J�b3 i.a4 15.VMxc3 VMd8

Puesto que la torre no puede moverse, por el mate en la casilla "d1 ", las blancas pierden calidad. Asi que la movilidad del peon aislado se ha convertido en un peon pasado lo que, a su vez, se ha traducido en ventaja material. Todo eso sucedio tras una serie de golpes tac­ticos, resultado de una ruptura en el centro. Lo que continua es solo el habitual problema tec­nico. 16.�c4 �a6

La jugada mas fuerte. Las negras evaluan correctamente que el peon pasado blanco de la columna "c" no sera peligroso, y que realizar la ventaja material sera mas facil sin el alfil blanco. 17.i.xa6 bxa6 18.0-0 i.xb3 19.VMxb3 gbs 2o.VMc2 VMds 21.e4 VMb3 22.VMe2 VMb5 23.VMt3

8 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

23 . . . YMxc5 24.tt)f5 gbl 25.YMf4 Si ahora 25 .'.Wg3, entonces podria continuar

25 . . . g6 26.'\Wg5 ttJxe4 27 .tiJe7+ <j;lh8 . 25 . . )t�xe4 26.h4 ges 27J�el YMc3 28J�dl �d2

Una inteligente jugada, que trastorna la coordinacion de las piezas blancas para sim­plificar la posicion. 29.gxd2 gxcl+ 30.�h2 YMc7 31 .gd6 gcs 32.g3

La ultima trampa, si podemos llamarla de esta manera, porque despues de la captura 32 . . . �xf5 la proyectada 33 .�e6 no es su­ficiente, en vista de la respuesta 33 . . . fxe6 34.'\Wxc7 �xf2+, etc. Alekhine, sin embargo, prefiere evitarla, llevando su barco a aguas mas tranquilas . . . 32 . . J�f8 33.g4 f6 34.�h3 h5 35.YMd2 hxg4+ 36.�xg4 YMti 37.h5 gxf5 38.�xf5 YMxh5+ 39.�f4 YMh4+ 40.�f3 YMh3+ 41.�e4 ges+ 42. �d5 YMb3+ 43. �d4 YMxa3

Las blancas se rindieron. Desde que vi esta partida, cada vez que me

encontre en una posicion caracterizada por el peon central aislado, me plantee la misma pre­gunta: (,puede el peon avanzar o no? Se trata de la cuestion basica, crucial, que uno deberia plantearse en cada jugada.

La segunda leccion que aprendemos de la victoria de Alekhine es tan simple como im­portante: un avance central puede promover el peon aislado, convirtiendolo en pasado, e in­crementando a la vez todo tipo de amenazas tacticas. Las partidas que siguen confirmaran nuestras prim eras impresiones . . .

Kasparov - Short Bruselas 1 986

Gambito de Dama

l.d4 e6 2.�13 �f6 3.c4 d5 4.�c3 �e7 5.�g5 h6 6.�xf6 �xf6 7.e3 0-0 s.gcl c6 9.�d3

La continuacion empleada por las blancas es una forma de evitar las lineas principales de la Tartakower. Las blancas ceden la pareja de alfiles, pero en una posicion cerrada en la que los alfiles negros dificilmente pueden tener un papel importante. 9 ..• �d7 10.0-0 dxc4 l l.�xc4 e5

En la partida Kasparov - Karpov, Campeo­nato Mundial { 123), Londres 1 986, las negras jugaron 1 1 . . . c5, tratando de abrir la posicion y activar sus alfiles, pero despues de 1 2.iWe2 a6 1 3 .�fd1 cxd4 14 .tiJxd4, no lograron su obje­tivo. La textual responde a la misma idea. 12.h3 exd4 13.exd4 �b6 14.i.b3 �f5 15J�el �g5?!

Esto parece una mejora, porque el cambio en 11g511 simplifica la situacion del tablero. En dos partidas del Campeonato Mundial, contra Kasparov, Karpov opuso su torre en la co­lumna 11e11, lo que, tras �xe8+ iWxe8, hizo po­sible la maniobra iWd2-f4, que dio al blanco la iniciativa en el ala de rey. Notese, sin embar­go, que en ambos casos el problema basico de las negras sigue siendo el mismo. El alfil blan­co es una pieza poderosa que las negras no pueden neutralizar. Las blancas, por tanto, es­tan mas fuertes en la casilla clave II d5 II, y po­dran avanzar su peon oportunamente. jNues­tro peon central aislado es aqui muy fuerte !

PEONES AISLADOS 9

16J�al ! i S e requiere paciencia para optar por esta

jugada! Dejemos que la dama negra siga en "d8" , de paso que se amenaza ges . 16 ... �d7

Una reaccion pasiva, pero a veces no hay opciones atractivas. Ahora, al menos, queda controlada la casilla "e5 " . Por desgracia para las negras, lo que planeaba sobre la posicion desde la primera fase de la partida va ahora a producirse . . . 17.d5

Es el momento adecuado para avanzar el peon. 17 .. J�c8?

Puesto que, obviamente, 17 . . . cxd5 esta fuera de cuestion y a 17 . . . lt:J c5 seguiria 1 8 .ic2 .ixc2 19.�xc2 cxd5 20.gad l , con ventaja, las negras, como a menudo sucede en circunstan­cias parecidas, toman el camino mas peligro­so. 18.�d4 .ig6

19.�e6! Uno de los motivos tacticos que surgen tras

el avance del peon es la penetracion del ca­ballo al amparo del mismo. Utilizando la ca­silla evacuada como trampolin, las blancas fuerzan los acontecimientos en su beneficio. 19 ... fxe6 20.dxe6 ®h7 21.�xd7 Y;Yb6

El cambio de damas facilitaria las cosas a las blancas. Con damas sobre el tablero, las negras tienen alguna esperanza, aunque mini­ma, de contrajuego. Sin embargo, nada puede cambiar el hecho crucial de que, como en la partida de Alekhine, el peon aislado se ha con-

vertido en un peon pasado y avanzado, lo que les costani caro a las negras. 22.e7 E!fe8

22 . . . gxf2 pierde, por 23 .lt:Ja4, mientras que 22 . . . �xf2+ 23 .<;t>hi g[e8 24.lt:Je4 parece mas bien desesperado. 23.Y;Yg4!

Las blancas encuentran una excelente solu­cion tactica. 23 ... '1Wc5

Kasparov explico que tenia in mente hacer 23 . . . gc7 24.h4 gcxe7 25 .gxe7 .ixe7 26.h5 id3 27.gdl id6 28.J.f7. Sin efllbargo, con un peon pasado en septima siempre hay alguna solucion. 24.�e4! '!Wxe7

25 . .ic2! No todo el mundo puede captar esta oculta

posibilidad. La jugada subraya el hecho de que las negras son vulnerables sobre la diago­nal "bl -h7" , y que poco pueden hacer al res­pecto. 25 .. J:U8 26.g3!

26.h4 ixh4 27.lt:Jg3 �g5 28 .ixg6+ tam­bien gana, pero con la tranquila jugada textual se acentUa la indefension negra. 26 ... '1Wd8 27J�adl '!Wa5 28.h4 i.e7 29.�c3!

La ultima clave sutil: las torres penetran en septima. La partida esta decidida. 29 .. i.xc2 30.E!xe7 gg831J�dd7 i.f5 32.gxg7+ ®b8 33.'1Wd4

Las negras se rindieron. jLa misma inquietante metamorfosis ! El

vigoroso peon aislado se convirtio en pasado, haciendo estragos en la septima fila.

1 0 COMPRENDER E L JUEGO D E PEONES EN AJEDREZ

Smyslov - Karpov Campeonato de la URSS

Leningrado 1 97 1 Apertura Inglesa

l.c4 c5 2.�f3 �f6 3.�c3 d5 4.cxd5 �xd5 5.e3 e6 6.d4 cxd4 7 .exd4

Esta vez tenemos un caso de peon aislado en la Apertura Inglesa, que muchos jugadores evitarian con 5 . . . lt:Jxc3, seguido de . . . g6. En realidad, el juego ha transpuesto a una· Caro­Kann, Ataque Panov. 7 ... i.e7 8.i.d3 0-0 9.0-0 �c6 lOJ�el �f6

Aqui una frecuente altemativa ha sido el movimiento 1 0 . . . if6. No tiene mucha logica retirarse del centro, ya que la siguiente jugada blanca aborta la proyectada . . . 4Jb4, que per­mitiria un absoluto control del peon central aislado. l l.a3

Esta jugada tiene un contenido adicional, pues hace posible la maniobra estandar ic2 y 'I!Md3, causando dificultades al rey de las ne­gras. ll ... b6 12.i.c2 i.b7 13.�d3 gcs?

Es algo extrafio que estos dos grandes ju­gadores solo percibiesen las consecuencias de este error en los analisis posteriores. Ahora, ya en fase tan temprana, era posible la decisiva ruptura en el centro, 14.d5, pues en caso de· 14 . . . exd5, se castigaria moviendo 1 5 .ig5 g6 16 . .El:xe7, mientras que a 14 . . . 4Ja5 seguiria 1 5 .ig5 g6 1 6.d6.

Como el lector puede ver, si el peon aislado no esta bloqueado, es una especie de espada

de Damocles que pende sobre la cabeza del ri­val. Obviamente, era indispensable la jugada 1 3 . . . g6. 14.i.g5? g6 15.gadl �d5 16.i.h6 ges 17.i.a4 a6

1 7 . . . lt:Jxc3 1 8 .bxc3 ixa3 seria muy arries­gado, debido a la variante 1 9.c4 if8 20.ig5 o 20.'1We3 . 18.�xd5 �xd5?!

Es mejor hacer 18 . . . exd5, pero como desea mantener despejada la diagonal de casillas blancas para su alfil, Karpov se olvida del pe­ligro. 19.�e3 i.f6?

Este es un grave error. El Dr. Euwe propu­so 1 9 . . . '\Wh5, mientras que Korchnoi sugirio 1 9 . . . .El:ed8 . El castigo es inmediato . . . 20 . .ib3 �h5?!

20 . . . '1Wd8 2 1 .4Je5 es favorable a las blancas. 21.d5 �d8 22.d6

De nuevo la misma transformacion, con las mismas brutales consecuencias. La aparicion de este peon pasado avanzado constituye en si misma una victoria. 22 ... gc5 23.d7 ge7 24.�f4 i.g7 25.�b8 �xh6 26.�xd8+ i.f8 27.ge3 .ic6 28.�xf8+ �xf8 29.d8�

Las negras se rindieron. Una derrota tan demoledora debe haber de­

jado una profunda impresion en Karpov. Sin embargo, un par de afios mas tarde, de nuevo se encontraria sufriendo contra un peon cen­tral aislado, y en ese caso nunca se es lo bas­tante prudente.

PEONES AISLADOS II

Portisch - Karpov Milan 1 975

Defensa N imzoindia

l.c4 lLlf6 2.lLlc3 e6 3.d4 .ib4 4.e3 c5 5 . .id3 0-0 6.lLlf3 d5 7.0-0 cxd4 8.exd4 dxc4 9 . .ixc4 b6

De otra secuencia alcanzamos la misma formacion de peones en el centro, pero con las piezas en distintas posiciones. Karpov planea un fianchetto de dama para lograr el control de Ia importante casilla "d5" . lOJ�el .ib7 ll ..id3

Se necesita el alfil en la diagonal mas importante. ll ... lLlc6

La experiencia de decadas recientes parece demostrar que Ia defensa negra es mas fun­dada si se basa en . . . ctJbd7. En "c6" el caballo ocupa una torpe posicion, ya que bloquea la accion de su propio alfil . Las posiciones con un peon central aislado son, por lo general, muy sensibles, y requieren una plena armonia entre piezas y peones. Un detalle que parece no tener importancia puede a veces marcar to­da la diferencia. 12.a3 il.e7 13 . .ic2 ges 14.Wfd3

14 .. J�!c8? Cuando dama y alfil forman su amenazado­

ra bateria sobre la diagonal "b1 -h7", es precisa una extrema precaucion. Karpov, curiosamen­te, reacciona con la misma superficialidad que hemos visto en Ia partida anterior. Era indis­pensable 14 . . . g6. 15.d5 exd5

No hay alternativa. Si 15 . . . ctJa5, entonces 1 6.i.g5 g6 1 7 .d6 gana material. 16.il.g5 lLl e4

Ahora es demasiado tarde para 1 6 . . . g6, por­que 1 7 .El:xe7 decidiria en el acto. 17.lLlxe4 dxe4 18.Wfxe4 g6 19.Wfh4 h5

Es curioso que un afio antes, en la partida T. Petrosian - Balashov, Leningrado 1 974, se jugase 1 9 . . . '1Wc7, pero las negras cayeron bajo un ataque devastador tras 20 . .ib3 h5 2 1 .'1We4 ctfg7 22.i.xf7 ctfx£7 23 .i.h6 '1Wd6 24.'1Wc4+. En Iugar de eso, Karpov debilita de inmediato su flanco de rey. i Conocia la ' derrota de Bala­shov y es posible que considerase una mejora su jugada? Dificilmente puede ser el caso, porque 20.i.b3 le habria creado dificultades insalvables. Portisch complica las cosas, y las negras consiguen salvarse con unas tablas. 20J�adl? Wfc7 21 . .ixg6 fxg6 22.Wfc4+ ®g7 23.il.f4 .ia6

iFue esta jugada lo que las blancas omitie­ron en sus calculos? 24.Wfc3+ .if6 25 . .ixc7 .ixc3 26.gxe8 gxe8 27.bxc3 .ie2 28.gel E:c8 29.gxe2 gxc7 30.E:e6 lLld8 31J�e3 ®f6 32.®fl lLle6 33.g3 g5 34.h3 lLlc5 35.lLld2 gd7 36.®e2 E:d5 37.c4 gd4 38.ges h4 39.gf8+ ®e7 40.gh8 hxg3 41.fxg3 gd3

Tab las. El fracaso de Karpov en impedir las ame­

nazas de la apertura, amplia nuestra experien­cia acerca de peones centrales aislados. Su avance en el centro crea amenazas directas al enroque enemigo. Notese que en ambas parti-

1 2 COMPRENDER E L JUEGO D E PEONES EN AJEDREZ

das, Ia amenaza se produjo sobre Ia diagonal "b 1 -h7" . La ruptura central consigue exponer al rey a fuertes ataques. En nuestro ejemplo, se produjo como consecuencia de errores mas o menos evidentes. A veces, sin embargo, el peligro esta oculto de manera mas sofisticada. Tomemos, por ejemplo, una partida reciente . . .

Kramnik - Anand Dos Hermanas 1 999

Gambito de Dama Aceptado

l.d4 d5 2.c4 dxc4 3Jt)f3 e6 4.e3 �f6 5 . .ixc4 c5 6.0-0 a6 7 .J.b3

Esta continuacion, rescatada del olvido por Kasparov, desperto mucho in teres en Ia decada de los noventa. Es una forma tranquila de neu­tralizar Ia expansion de las negras en el flanco de dama, puesto que a 7 . . . b5 , las blancas re­plicarian en el acto con Ia molesta 8 .a4. 7 ... �c6 8.�c3 cxd4 9.exd4 J.e7 lOJ:lel 0-0 ll.a3

En Ia partida Kasparov - Anand, Wijk aan Zee 1 999, Kasparov eligio 1 1 .if4 tLla5 12.ic2 b5 1 3 .d5 , demostrando que el avance central no requiere el apoyo directo del alfil, que resulta mas util en otra diagonal. En caso de 13 . . . ttJxd5, sigue 14.tLlxd5 exd5 1 5 .Wd3 g6 16.ih6 �e8 (o bien 1 6 . . . if5 1 7 .We2 ixc2 1 8JWxc2) 1 7.Wc3 f6 1 8 .tLld4, con fuerte presion. Anand jugo mejor: 1 3 . . . exd5 14.Wd3 tLlc6 ( 14 . . . g6 busca problemas, despues de 1 5 .ig5), y ahora 1 5 .ic7 Wd7 1 6.tLle5 lLlxe5 17 .ixe5 g6 1 8 .ixf6 ixf6 1 9 .tLlxd5 ig7 condujo a una posicion equilibrada.

l l. .. �a5 Un experto en estas posiciones recordara

que, en caso de 1 1 . . .b5 , se produce una po­sicion de Ia Defensa Nimzoindia, pero con una diferencia: que el alfil de casillas blancas esta en "a2", y las blancas pueden castigar Ia expansion contraria con 12 .d5 ttJxd5 1 3 .tLlxd5 exd5 14.Wxd5 ib7 1 5 .Wh5, llevando Ia dama a una posicion agresiva. En nuestra partida, sin embargo, el alfil esta en "b3" , y despues de 1 1 . . . b5 12.d5 ttJxd5 1 3 .ttJxd5 exd5 14.Wxd5, las negras tienen a su disposicion 14 . . . tLla5, que ofrece a las blancas una eleccion entre 1 5 .Wxa8 tLlxb3 1 6.�a2 ie6 1 7.Wxd8 �xd8 (o quiza sea mas preciso 1 7 . . . ixd8) y 1 5 .Wxd8 ixd8 1 6.ia2 ib7. La idea se me ocurrio al analizar la partida Kasparov - Anand, en Ia que Ia rapida retirada del caballo a "c6" jugo un papel crucial en la defensa. 12.J.c2 b5 13.d5!

Queda claro de inmediato que 1a jugada a3 es mas util que la de Kasparov if4. Tambien esta claro que 1a lucha contra "d5" es mas di­ficil. 13 ... :aes

Una mejora sobre la partida Kasparov -Ivanchuk, Linares 1 999 (que se analizara mas adelante), donde se jugo 1 3 . . . tLlc4?!

Aparte de 13 . . . tLlxd5, habia que considerar la altemativa 1 3 . . . exd5 1 4.Wd3 g6 ( 14 . . . tLlc6 no amenaza . . . ttJb4, de modo que Ia simple 1 5 .ig5 g6 1 6.�xe7 decide Ia lucha a favor del blanco), 1 5 .ig5 if5 1 6.We2 ixc2 1 7 .Wxc2, por ejemplo, que crea serias amenazas, como �xe7 .

PEONES AISLADOS 1 3

14..ig5 h6 14 ... tt:Jxd5 15.tt:Jxd5 J.xg5 16.lLJxg5 no

puede recomendarse, y 14 ... exd5 15.'.Wd3 g6 16J!xe7 todavia menos. Algunos comentaris­tas propusieron 14 ... lLJc4, pero entonces la nefasta 15.lLJd4 refuerza la presion de las blancas. 15..ih4 t!Jxd5

15 ... g5 invita a tomar medidas represivas, en forma de 16.lLJxg5 hxg5 17.J.xg5, con pe­ligrosas consecuencias. Si 15 ... lLJc4, entonces de nuevo parece fuerte 16.lLJd4. 16.t!Jxd5 exd5 17.'i'd3 g6 1S.'i'e3 .le6

La secuencia 18 ... lLJc6 19.'.Wxh6 es ventajo­sa tambien para las blancas, mientras que la linea 18 ... g5 19.lLJd4 parece desesperada para las negras. 19.'i'xh6 .ixh4 20 . .ixg6 'i'f6 21..ih7+ ebbS 22..ig6+ ebgS 23.'i'h7+ ebf8 24.t!Jxh4 'i'g7

Las negras podrian mantener el equilibrio material con 24 ... '.Wxb2, pero entonces no podrian forzar el cambio de damas. Su rey esta desnudo, asi que deciden luchar por su vi­da en un dificil final, antes que exponer al rey a un tremendo ataque. 25.\Wxg7+ ebxg7 26 . .id3 t!Jc4 27.b4

Innecesario. 27 . .E:e2 es Ia jugada natural. 27 ... t!Jb2 2S . .ifl d4 29.t!Jf3 :SadS 30.:Sebl t!Jc4 3l.:Sdl .ig4 32J3d3 t!Jb2 33J3xd4 .ixf3 34J�xdS gxdS 35.gxf3 :ScS 36J�a2

Para invalidar 36 ... !!c2, con 37.a4. 36 ... t!Ja4 37J3d2 :Sc6 3S.f4 t!Jb6 39.ebg2 t!Jc4 40.:Sd3 tlJ b2

40 ... !!g6+ 4l.!!g3 tt:Jxa3 pierde, debido a

42.J.d3, y el caballo no puede salir. 41.:Sg3+ ebbS 42 . .le2 :Sc2 43 . .ih5 :Sc7

44.f5?! Una extrafia jugada, por decirlo suavemen­

te. 44 ... ebh7 45.Ae2 ebb6 46.h4 gc2 47.Af3 t!Jc4 4S . .i.d5 t!Jd6 49J�d3 ebg7 50 . .if3 t!Jxf5 5l.Ab7 t!Jxb4+ 52. ebgl ge2 53 . .ixa6 :Se5 54.:Sc3 t!Jf5 55J�c5 :Sxc5 56.bxc5 t!Jd4 57.c6 t!Jxc6 5S.Axb5 t!Ja5 59.ebg2 ebf6 60.ebf3 ebe5 61.ebe3 t!Jb7 62.Ac4 f6 63.a4 t!Jas 64.At7 t!Jc6 65.ebd3 ebd6 66.ebe4 t!Je7 67.a5 ebc5 6S.a6 t!Jcs 69.Ah5 ebd6 70 . .if3

Las negras se rindieron. El juego en el final incluy6 algunos errores,

y no result6 impresionante, pero nuestro inte­res en esta partida es de distinta naturaleza. Compleja y emocionante desde los primeros compases de Ia apertura, contiene todo lo que las posiciones pueden ofrecer, incluido el ha­bitual suspense acerca del avance de pe6n en el centro, una serie de amenazas tacticas sobre las diagonales que llevan hacia el flanco de rey negro, finales dudosos planeando sobre Ia cabeza de las negras, el fuerte caballo centrali­zado, con amenazas y motivos adicionales. i Una partida ciertamente instructiva!

Como Karpov, Anand sucumbi6 a las ame­nazas propiciadas por una inesperada y en apariencia mal apoyada ruptura en el centro. Lamentablemente para sus intereses, Ia diago­nal "bl-h7" no fue Ia Un.ica ruta para el ataque blanco. Las partidas que siguen advierten de que Ia diagonal "a2-g8" juega un papel igual­mente importante en sus planes ...

1 4 COMPRENDER EL JUEGO D E PEONES EN AJEDREZ

Botvinnik - Vidmar Nottingham 1 936 Gambito de Dama

l.c4 e6 2.tLlf3 d5 3.d4 tLlf6 4.tLlc3 i.e7 5.J.g5 0-0 6.e3 tLlbd7 7 • .ld3

Aunque permite a las negras un temprano . . . c5, a Botvinnik le gustaba esta jugada. 7 ... c5 8.0-0 cxd4

Una buena altemativa es 8 . . . dxc4 9.ixc4 a6. 9.exd4 dxc4 10.Axc4 tLlb6

De nuevo, parece mas preciso 1 0 . . . a6, pro­vocando a4. Vidmar, sin embargo, estaba tan decidido a bloquear el peon central, que no queria esperar. ll . .ib3 .id7?!

Estamos entrando en una fase delicada de Ia partida. Las negras han bloqueado con exito el peon central aislado, pero no son conscien­tes de otra amenaza. Es cierto que en caso de l l . . .ltJbd5 1 2 .ltJe5, las blancas mantienen una ventaja espacial, pero 1 1 . . .lDfd5, tratando de simplificar mediante cambios, parece definiti­vamente mejor. 12.flYd3 tLlbd5?!

Una vez mas, era preferible 1 2 . . . ltJfd5 . Vid­mar deja escapar su oportunidad de desactivar Ia presion blanca. Olvida Ia regia de oro de que los peones centrales aislados suelen per­der su fuerza con el cambio de piezas. 13.ttle5 Ac6 14J�:�adl tLlb4

Otro intento de simplificacion, a base de 14 . . . ltJh5, se responderia con 1 5 .ltJxc6 bxc6 16.ic l . Con su torre dama ya desarrollada por Ia casilla "d1 ", Ia retirada a "c1 " resulta natu­ral. 15. ti'h3 .idS

Era demasiado 'tarde para j ugar 1 5 . . . ttJ fd5, que ahora se contestaria con 1 6.ic l . Vidmar, por consiguiente, trata de reducir Ia presion, entregando su alfil de casillas blancas. 16.ttlxd5 tLlbxd5

Ver el diagrama siguiente

Por tercera vez en Ia partida, Vidmar juega el caballo equivocado, porque subestima el inminente ataque.

17.f4 gcs Ahora que se ha jugado f4, se entiende por

que hubiera sido mejor 1 6 . . . ltJfx.d5 : porque ahora las negras podrian responder al avance de peon con 1 7 . . . f5 . Tambien debe observarse que 1 7 . . . g6 falla, por 1 8.ih6 :ge8 1 9.ia4. En caso de 1 7 . . . ltJe4, Botvinnik mostro un golpe demoledor: 1 8.ltJxt7 @xt7 1 9.:gde l . Ahora comenzamos a sentir Ia fuerza del alfil. 18.f5 exf5 19.gxf5 YlYd6

Vale Ia pena observar aqui dos lineas que subrayan los problemas de las negras despues de 1 9 . . . :gc7 20.:gdfl :

a) 20 . . . a6 2 1 .lDxt7 :gxt7 22.ixd5 ltJxd5 23 .:gxf7 ixg5 24.\We6.

b) 20 . . . ltJb6 2 1 .\Wh4 ltJbd5 22.ltJxt7 :gxf7 23 .ixd5 lDxd5 24.:gxf7 ixg5 25 .\Wxg5, ga­nando. La presion coordinada sobre Ia dia­gonal "a2-g8" y Ia columna "f' es mas de lo que las negras pueden soportar. 20.tLl xti! �bfi 21..ixf6 .ixf6 22.gxd5 flYc6

PEONES AISLADOS 15

23.E!d6 �e8 24.Eld7 Las negras se rindieron. Vidmar perdio porque no capto en absoluto

el peligro que le amenazaba sobre la diagonal "a2-g8" . Notese otro rasgo de la partida: a lo largo de todo el juego no se percibio el peon de "d4" como una debilidad. Por el contrario, aunque bloqueado, su apoyo del dominante caballo de "e5" jugo un papel clave en el ata­que de Botvinnik.

Esta victoria de Botvinnik es muy conoci­da, quiza algo gastada por los muchos afios en que se le ha prestado atencion, pero fue jugada con tal claridad de objetivos que en el tema que estudiamos no puede reemplazarse por nin­guna otra partida.

La siguiente es, menos famosa, pero tam­bien muy instructiva, y en ella la decisiva pre­sion y amenazas de nuevo se producen a lo largo de la misma traicionera diagonal.

Gligoric - Po mar Olimpiada de Niza 1 974

Defensa Nimzoindia

l.d4 l!Jf6 2.c4 e6 3.l!Jc3 .ib4 4.e3 0-0 5 . .id3 d5 6.l!Jf3 c5 7.0-0 dxc4 8 . .ixc4 l!Jc6

En afios posteriores, otras lineas ganaron una mayor popularidad. Las negras normal­mente fianchettan el alfil dama antes de desa­rrollar el caballo, o bien optan por 8 . . . id7. 9 . .id3 .id7 10.a3 cxd4 ll.exd4 .ie7 12J�el E!c8

Un vistazo a la posicion le bastara al ob­servador experto para concluir que las piezas

negras del flanco de dama no estan situadas de forma natural para frenar el avance central. El alfil esta pasivamente ubicado en "d7", el ca­ballo de "c6" esta expuesto al avance d5, y las negras no han tornado medidas contra esta amenaza basica. 13 . .ibl!

Est jugada introduce el procedimiento es­tandar de forzar un debilitamiento en el enro­que negro con 'W'd3 . Sin embargo, no es la (mica idea que contiene la excelente jugada de Gligoric. 13 .. J�e8 14.�d3 g6

Con el avance d5 en el aire, las negras tie­nen que cerrar la diagonal "b l -h7" , pero el al­fil de casillas blancas se situara ahora en una posicion mas activa. 15 . .ia2

La pasiva posicion de Pomar no esta prepa­rada para la evidente ruptura en el centro, que esta a punto de hacerse realidad. Con su si­guiente jugada ( al menos, debia haber hecho con rapidez 1 5 . . . 'W'a5), solo echa lefia al fuego. 15 ... a6 16 . .ih6 �a5

Contra el claro plan de las blancas, las pie­zas negras estan agrupadas en el centro sin sentido de peligro inminente. Hasta la ultima jugada de Pomar llega demasiado tarde. 17.d5 exd5 18.l!Jxd5 .if5

Despues de 1 8 . . . ttJxd5 1 9.ixd5, el peon de "f7" se convertiria en objetivo, pero la textual conduce a una rapida derrota. 19J�xe7 E!xe7

A la evidente 1 9 . . . ixd3, seguiria 20.ttJxf6+ <i>h8 2 1 .�xf7, etc.

1 6 COMPRENDER EL JUEGO D E PEONES EN AJEDREZ

20.tLlxf6+ mhs 21.'\&d2 Ae6 22.tLld5 YNxd2 23.i.xd2 i.xd5 24.�c3+ mgs 25.i.xd5 gd7 26.i.xc6 bxc6 27.tLle5 gdd8 28.mfl h5 29.gel gd5 30.tLlxc6

Las negras se rindieron. La leccion es sencilla: al enfrentarse a un

peon central aislado, no se puede ignorar el tema vital de su avance. Debe impedirse para siempre, o bien prepararse contra el avance. El Gran Maestro Pomar no hizo ni una cosa ni otra.

Sin embargo, Ia amenaza de un avance cen­tral y sus consecuencias no siempre son tan dramaticas. Lo que el avance a menudo repor­ta es un mejor final o una pieza centralizada dominante tras una serie de cambios, si bien deberiamos aprender a temer tanto las venta­jas posicionales como los violentos ataques que hemos visto. El par de instructivas parti­das que sigue ayudara al lector a ser conscien­te de ello.

Gligoric - Eliskases Buenos Aires 1 960 Defensa Caro-Kann

l.e4 c6 2.d4 d5 3.exd5 cxd5 4.c4 tLlf6 5.tLlc3 e6 6.tLlf3 i.e7 7.cxd5 tLlxd5 8.i.d3 tLlc6 9.0-0 0-0

Esta vez llegamos a Ia estructura de peones tematica, a partir del Ataque Panov en Ia Defensa Caro-Kann: todos los caminos condu­cen a Roma. to.get i.f6

No es en vano repetir que, en caso de ha-

cerse l O . . . ttJf6, con idea de crear un firme blo­queo en Ia casilla "d5" , siguiendo con . . . ttJb4, Ia mejor reaccion de las blancas es l l .a3 , que impide Ia maniobra y, al mismo tiempo, hace posible Ac2 y Wi'd3, ejerciendo presion contra el enroque negro. l l.i.e4 tLlce7

Ahora vemos Ia idea subyacente en la jugada . . . Af6: las negras contienen el centro con firmeza. 12.tLle5

Probablemente lo mas desagradable para las negras. Apoyado por el peon de "d4", el dominante caballo irrumpe en campo enemi­go, cuyo ulterior desarrollo queda restringido. En una situacion asi, Wi'd3, con amenazas so­bre Ia diagonal "b l -h7" , asi como Ia posible lt:Jg4, pueden resultar muy molestas para las negras. 12 ... i.d7?!

Notese que despues de 1 2 . . . lt:Jxc3, seguido de . . . Axe5, las negras quedan debiles en las casillas de su color, pero la textual tambien esta considerada inferior. Varios teoricos pro­ponen 1 2 . . . g6. 13.'\&d3 g6 14.i.h6 i.g7 15.i.xg7 mxg7 16.tLlxd5 tLlxd5?!

A 1 6 ... exd5, las blancas deben haber tenido in mente 1 7.ttJxd7 Wlxd7 ( 1 7 . . . dxe4 falla, por 1 8 .Wlb5) 1 8 .Af3, con un final favorable. El peon de "d5 " seguira estando presionado, lo que puede incrementarse con El:e5 o E!c l -c5, doblando torres y, al mismo tiempo, apode­randose de una de las colurnnas abiertas, o un avance de peones en ambos flancos. La tex-

PEONES AISLADOS 1 7

tual, sin embargo, se encuentra con otros pro­blemas. 17 . .ixd5 exd5 18. YNb3!

Esta vez el peon central aislado ha sido debidamente bloqueado, pero gracias a el, las blancas han conseguido un activo juego de piezas, y pueden forzar un mejor final. 18 ... f6

La secuencia 1 8 . .. ic6 1 9 . .El:ac 1 no es muy tentadora. La textual, por supuesto, debilita la posicion del rey negro, de modo que los fina­les de piezas mayores implicarian dificultades adicionales. 19.�d3 J.f5

Es demasiado tarde para 1 9 . . . ic6, porque 20.lt:lc5 gana material . Las negras deben en­tregar un peon. 20.'1Nxb7+ gn 21.YNa6 gb8 22J��e2 .ixd3 23.'1Nxd3

Con peon menos y las defensas de su rey comprometidas, las negras han pagado el pre­cio por su inadecuado tratamiento de la aper­tura con peon central aislado. Las blancas consiguen ahora demostrar lo dificil que es defender tales posiciones. 23 ... YNa5 24.h3 gb4 25.b3 YNb6 26J�d1 a5 27.'1Ne3 a4 28J�d3 axb3 29.axb3 gb7 30.YNe8 gxb3 31.gxb3 YNxb3 32.ge7+ gxe7 33.YNxe7+ �g8 34.YNxf6 YNb1+ 35.�h2 YNb8+ 36.f4 YNe8 37.YNe5 'INti 38.g4 h6 39.f5 gxf5 40.gxf5 �h7 41.�g3 YNb7 42.�f4 YNc6 43.YNe7+ �h8 44. �e5 'IN c1 45.f6 'IN e3+ 46. �d6 'IN a3+ 47.�e6 YNxh3+ 48.�fi

Las negras se rindieron.

Karpov - Uhlmann Madrid 1 973

Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 d5 3.�d2 c5 4.exd5 exd5 5.�gf3 �c6 6.J.b5 J.d6 7.dxc5 J.xc5 8.0-0 �ge7 9.�b3 J.d6 10.J.g5

Esta posicion de la Variante Tarrasch es una de las mas instructivas para el estudiante del tema que nos ocupa. El peon de "d5 " esta bien protegido por numerosas piezas negras, y debilitarlo es tarea que requiere sutileza.

La continuacion que Karpov solia aplicar en los setenta esta en linea con el plan es­trategico general . Volveremos a hablar de ello, pero por el momento mencionaremos de pasada que los cambios minan gradualmente la estabilidad del peon central aislado. Lo que Karpov tenia in mente es la maniobra ig5-h4-g3, a fin de cambiar alfiles de casillas negras, en detrimento del peon "d5" . Esto es per­fectamente logico, aunque la experiencia pos­terior demostro que la maniobra en cuestion es un tanto lenta, prevaleciendo, por tanto, la ju­gada 1 1 ..El:e l . 1 0 .•. 0-0 1 1..ih4 J.g4

Es de considerar l l ... Wfb6, pero la textual tambien es logica. 12.J.e2 .ih5

Mientras haya tantas piezas protegiendolo, el peon "d5" es un peon saludable, y la presion blanca apenas es perceptible. Sin embargo, un solo paso en falso puede cambiar el cuadro de forma significativa. Aunque, por ejemplo, 12 . . . 1!Mb6 parece natural, habria dado Iugar a

1 8 COMPRENDER EL JUEGO D E PEONES EN AJEDREZ

una serie de cambios no deseados por las ne­gras, desembocando en un final en el que el peon "d5" seria muy fnigil : 1 3 .J.xe7 Ci:Jxe7 14.�d4 �xd4 1 5 .Ci:Jfxd4. Es satisfactorio, en cambia 1 2 . . . �e8 1 3 .�e l �b6. En tal caso, 14.J.xe7 se contestaria con 1 4 . . . �xe7 1 5 .�xd5 Ci:Jb4. 13J:tel �b6 14.ti.)fd4 .ig6

Teniendo siempre presente la naturaleza del peon aislado, podemos ver que estas son reac­ciones logicas por ambas partes. Las blancas buscan cambios y las negras tratan de evi­tarlos. 15.c3

Otra medida logica. La casilla de enfrente del peon central aislado es un punta fuerte pa­ra las blancas, asi que tratan de establecer un firme control sabre ella. 15 .. J��fe8 16 . .ifl .ie4 17.J.g3 J.xg3 18.hxg3 a5?!

Estamos comentando aqui una posicion muy delicada, en la que hasta los errores mas imperceptibles pueden cambiar las tomas. La ultima jugada de Uhlmann es un palo de cie­go, porque crea• una cas ilia debil ("b5") a cam­bia de nada. Pronto veremos por que. 19.a4! ti.)xd4 20.ti.)xd4 ti.)c6

Ahara vemos que 20 . . . �xb2 no sirve, por 2 l .Ci:Jb5 (o 2 l .J.b5), seguido de f3, ganando material. Con 1 8 . . . a5 Uhlmann trataba de ejer­cer presion sabre "d4", pero no lagro su obje­tivo. Las blancas utilizaran ahara la casilla "b5", apoderandose de la iniciativa. 2l..ib5 ged8

Las negras siguen obstinandose en la firme

casilla "d4" de las blancas, y quiza fuese pre­maturo abandonar la columna "e". Era de con­siderar 2 1 . . . J.g6. 22.g4 ti.)xd4

Aunque esto sin duda es coherente con su juego precedente, es una de esas posibilidades "obvias" que los jugadores deberian pensarse dos veces antes de decidirse por ella. 23.�xd4 �xd4 24.cxd4 gac8

Parece mas natural 24 . . . @f8, a fin de im­pedir la penetracion en septima, pero no esta clara que pueden hacer las negras contra el doblaje de torres en la columna "e". 25.13 J.g6 26J:te7 b6

Aqui merece consideracion 26 .. . �c2 . 27J��ael b6

Es mejor la inmediata 27 ... h5 . 28.gb7 gd6 29J�ee7

Las dos torres blancas en septima son para­lizadoras. La posicion negra es critica. 29 ... b5 30.gxh5 .ixh5 31.g4 .ig6 32.f4

La suerte esta echada. El plan iniciado con 25.f3 ha sido ejecutado a la perfeccion. 32 .. J�cl+ 33.<it>f2 gc2+ 34.<it>e3 J.e4

No es mejor hacer 34 . .. �e6+ 35 .�xe6 fxe6 36.�xb6 �xb2 37 .�xe6. 35.:axfi gg6 36.g5 <it>b7 37.:afe7 gxb2 38.J.e8 gb3+ 39. <it>e2 gb2+ 40. <it>el gd6 41J:txg7+ <it>b8 42.gge7

Las negras se rindieron. Una de las mejores partidas que Karpov ha­

ya jugado jamas. Recuerdo haber presenciado a un grupo de Grandes Maestros analizandola. Durante mucho tiempo, no pudieron descubrir la razon de la derrota negra. En la lucha contra

PEONES AISLADOS 1 9

el peon central aislado, las blancas consiguie­ron un final ventajoso explotando errores mi­nusculos y apenas perceptibles de su oponen­te. Frenar el inmediato avance central no es suficiente. Tras los entresijos de las aperturas acechan siempre finales cuya naturaleza y destino a menudo se deciden en la fase mas sensible de la partida, en la transicion de la apertura al medio juego. En este caso las negras no estuvieron a la altura de la dificil tarea.

Rubinstein - Tartakower Marienbad 1 925

Gambito de Dama Aceptado

l.d4 e6 2.ltJf3 d5 3.c4 ltJf6 4.ltJc3 dxc4 5.e3 a6 6.a4 c5 7 . .ixc4 ltJ c6 8.0-0 cxd4 9.ltJxd4 ltJxd4?! 10.exd4 .ie7

Sin debatir los matices de la apertura, solo observaremos que un giro un tanto inusual de los acontecimientos ha llevado a la conocida posicion, con una diferencia: se ha cambiado un par de caballos, haciendo posible una infre­cuente -por lo temprana- ruptura central. . .

ll.d5 exd5 12.ltJxd5 ltJxd5 13 . .ixd5

Esta vez el avance del peon movil ha de­sembocado en una posicion caracterizada por un dominante alfil en "d5", que apunta a am­bos flancos. Como las blancas siempre van un paso por delante de su adversario, una ventaja asi no puede tomarse a la ligera. 13 ... 0-0 14.YMf3 .id6

Al apuntar a "h2", las negras indirec­tamente defienden el peon de "b7" . 15J�el

Esperando, probablemente, 1 5 .. JWb6, Ru­binstein prepara 1 6.ge8. Las blancas estan mejor: su desarrollo es superior y su presion sobre los peones de "b7" y "f7" les garantiza la iniciativa. t5 ... YMh4 t6.h3 YMb4

Tartakower no era un hombre paciente, dis­puesto a defender tenazmente el equilibrio material. La activa salida de su dama pretende neutralizar 1 7 .ge8 con 1 7 . . . �e6, ahora posible porque la primera fila no esta defendida. Sin embargo, tambien expone la dama. 17J�dl E:b8 18.b3 .ie6

El tipo de clara replica que podemos espe­rar de Tartakower. lgnora la amenaza 1 9.�a3, a la que puede contestar 1 9 . . . Wfb6 20.a5 Wfc7, esperando que un final de piezas mayores le ofrezca posibilidades de tablas. Rubinstein, sin embargo, plantea a su oponente una tarea mas dificil . . . 19 . .ixe6 fxe6 20.YMe2 .ic5

Las negras esperan liberarse de sus pro­blemas contrapresionando sobre "f2", a cam­bio del peon de "e6". 21.YMxe6+ �h8 22 . .ia3

No 22.�e3 gbe8, etc. 22 ... YMa5 23.E:d5 .ixf2+ 24.�hl YMc3 25.E:cl YMf6 26.YMxf6 E:xf6

De modo que, a pesar de su imaginativa de­fensa, Tartakower se enfrenta a un dificil fi­nal. El peon de "g7" esta expuesto y la septi­ma fila indefensa. 27J�d7 .ie3?

Esto facilita las cosas a las blancas. Sin em­bargo, tanto 27 . . . gb6 28 .�b2, como 27 . . . b6

20 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

28.ib2 8:g6 29.8:cc7 El:g8, conducirian, antes o despues, al colap_so de la posicion negra. 28J�xb7 :ab6 29J3xb6 .ixb6 30.:ac6 h5 31..id6 :ab7 32.b4 a5 33.b5 c;f{b7 34.g4 hxg4 35.hxg4 c;t>gs 36.c;t>g2 c;f{f7 37.c;f{f3 .idS 38.'tt>e4 c;t>es 39.c;t>d5 g5 40.c;t>e6 .ib6 4t.:acs+ idS 42.i.c5 :abs 43.:ac6 :ab7 44.b6 Eib8 45.:ac7 i.xc7 46.bxc7 :acs 47.i.b6 :aas

48 . .ia7 Las negras se rindieron. Esta partida, que Rubinstein jugo con su

inimitable sencillez, es altamente instructiva. En ella podemos ver como un peon central aislado, si es restringido de forma deficiente por el rival, permite, con su ruptura, transfor­mar la iniciativa en una pieza estrategica­mente dominante sobre un punto fuerte. El re­sultado, en este caso, es un final superior para las blancas. Piezas fuertes situadas en casillas centrales son otra consecuencia de un peon central movil que el jugador debe temer.

Spassky - Antonomov Leningrado 1 949

Gambito de Dama Aceptado

l.d4 d5 2.c4 dxc4 3JLif3 �f6 4.e3 c5 5.i.xc4 e6 6.0-0 a6 7.ffe2

La etema pregunta es si prevenir la expan­sion negra en el flanco de dama o permitirla. La moda cambia, pero la cuestion persiste. 7 .. . b5 8 . .ib3 �c6?!

Tengo preferencia personal por las lineas basadas en . . . 'LJ bd7. 9.lDc3

Si 9 .B:d 1 , existe la linea bien conocida 9 . . . c4 1 0.ic2 '2Jb4, y el alfil sera eliminado. 9 ... cxd4

Es mejor 9 . . . ie7 . lO.:adt i.b7 l l .exd4 �b4

Las negras deben haberse sentido muy sa­tisfechas con su posicion, pues controlan la fuerte casilla "d5" , y solo necesitan un tiempo antes de enrocar, cuando habrian conseguido la posicion ideal. Sin embargo, las apariencias engafian. El hecho de que hayan perdido tiem­po en el desarrollo de su flanco de dama, re­trasando el desarrollo natural del flanco de rey, resulta fatal. Las piezas blancas estan per­fectamente situadas para apoyar el golpe si­guiente, que parece surgir de Ia nada.

12.d5! � bxd5 Si 1 2 . . . ctJfxd5, entonces 1 3 .a3 decide.

13.i.g5 i.e7 14.i.xf6 gxf6 15.�xd5 i.xd5 16.i.xd5 exd5 17.�d4

Como en la partida de Tartakower, el avan­ce central es seguido de la instalacion de una fuerte pieza en el centro. El caballo blanco do­mina el tablero. Este hecho, por si solo, junto con Ia fracturada formacion de peones negros, permite evaluar la posicion como totalmente perdida para las negras. 17 ... c;f{f8 18.�f5 h5 19.:axd5 ffxd5 20.ffxe7+ c;t>gs 21.fixf6

Las negras se rindieron. El caballo blanco se incorporo a Ia batalla

por la casilla evacuada tras el avance del peon aislado. Es un motivo habitual para mantener en pie la iniciativa y coronar lo que el peon central aislado habia comenzado.

PEONES AISLADOS 21

Steinitz - von Bardeleben Hastings 1 895 Giuoco Piano

1.e4 e5 2.�f3 �c6 3.J.c4 .ic5 4.c3 �f6 5.d4 exd4 6.cxd4 Ab4+ 7.�c3 d5?!

La experiencia ulterior confirmo que lo correcto es 7 . . . tt:Jxe4 8 .0-0 ixc3. 8.exd5 �xd5 9.0-0 .ie6

Desde los dias de Gioacchino Greco sabe­mos que 9 . . . tt:Jxc3 1 0.bxc3 ixc3 pierde, por l l .'Wb3 ixal 1 2.ixf7+ cj;>f8 1 3 .ia3+ tLle7 14.ih5 g6 1 5 .tLlg5 �e8 1 6J�e 1 , etc. Las ne­gras, por tanto, cierran la columna abierta y tratan de completar su desarrollo lo antes posi­ble. 1 o.J.g5 J.e7

Las blancas estan mejor desarrolladas y tra­tan de preservar la iniciativa por medio de cambios. 11.J.xd5 .ixd5 12.�xd5 �xd5 13 . .ixe7 �xe7 14J��e1

Ahora las negras no podnin enrocar, y su rey tratani de sobrevivir en el centro. 14 ... f6 15.�e2

Probablemente planeado y ejecutado con rapidez, pues de otro modo las blancas ha­brian considerado 1 5 .�a4+ cj;>f7 ( 1 5 . . . �d7 pierde por 1 6.�b4, mientras que 1 5 . . . c6 tam­bien pierde, por 1 6.�a3 �d7 1 7J1xe7+, etc.) 1 6.tt:Je5+! fxe5 1 7 .gxe5 �d6 1 8.�c4+ cj;>f8 19 _gae 1 , con tremenda presion sobre las des­coordinadas piezas negras. 15 ... �d7

16.E!ac1 Esta posicion atrajo la atencion de nume­

rosos comentaristas, que debatieron la posible continuacion 1 6.d5 cj;>f7 1 7.gad1 , cuando 1 7 . . . tt:Jxd5 pierde debido a 1 8.tLlg5+, pero existe la mas fuerte 1 7 . . . gad8. Paul Keres in­dico 1 6.�e4 c6 1 7.ge2 cj;>f7 1 8.gae 1 tt:Jd5 1 9.�h4. Tambien es posible hacer 1 6.gad1 @f7 (si 1 6 . . . c6, sigue 1 7 .d5) 1 7 .�c4+, pues 1 7 . . . tt:Jd5 pierde debido a 1 8 .tLle5+ fxe5 1 9 .dxe5 . Todo eso esta muy bien, pero yo me alegro de que Steinitz hubiese continuado co­mo lo hizo. 16 ... c6

Las negras esperaban poder efectuar algun tipo de enroque artificial y quiza llegar a un comodo final, debido al potencialmente debil peon de la casilla "d4". Tal vez pensaban en lo que luego se considero la jugada salvadora, 1 6 . . . cj;>f7, pero no seria muy facil evaluar las consecuencias de la variante 1 7 .tLlg5+ fxg5 1 8.�f3+. Por ejemplo: 1 8 . . . @g8 1 9.�xb7 �d5 20.gxc7 . Incluso la, en apariencia, sim­ple 1 8 . . . tt:Jf5 1 9 .g4 conduce a posiciones en las que las blancas mantienen la iniciativa (si 19 . . . ghf8, sigue 20.�b3+ cj;>g6? 2 1 .ge6+ gf6 22 .gxf5+ cj;>xf5 23 .�h3+, ganando; en caso de 1 9 . . . gae8, 20.gxf5 , o bien 20.ge5; a 1 9 . . . c6, 20.gcs, y si 19 . . . ghd8, 20.gxf5 , o aun 20.�b3+). En comparacion con toda esa con­fusion, la textual debe haber parecido consis­tente y ofrecer seguridad a von Bardeleben. Sin embargo . . .

17.d5!

22 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Esta fuerte jugada responde a dos objetivos principales: abrir otra columna para su torre y dejar libre la casilla "d4" para el caballo. Co­mo un ariete, el peon central aislado abre el porton, a traves del cual penetrani la caballe­ria. 17 ... cxd5 18.tlJd4 ®ti 19.tlJe6 :SheS

19 . . . �ac8 pierde, por 20.l!Mg4 g6 2 1 .ctJg5+ �e8 22.�xc8+, etc. 20J�'g4 g6

El escenario esta dispuesto para que se pro­duzca una de las combinaciones memorables de la historia del ajedrez. 21.lt)g5+ i>es 22.:Sxe7+! <it>f8

22 . . . @xe7 pierde debido a 23 .�e l + @d6 24.'1Wb4+ @c7 25.ctJe6+, etc. , pero las negras siguen encontrando respuestas, basadas en la debilidad de la primera fila. Lamentablemente para sus intereses, solo eran soluciones mo­mentaneas . . . 23.�fi+ ®g8 24.:Sg7+ i>h8 25J�xh7+

Las negras abandonaron. von Bardeleben se rindio de hecho, al aban­

donar la sala de jueg0 y no regresar, dejandole a Steinitz que mostrase a los espectadores el remate de la bella combinacion: 25 . . . @g8 26.�g7+ @h8 27.'1Mh4+ @xg7 28.'1Mh7+ @f8 29.'1Wh8+ �e7 30.l!Mg7+ @e8 3 1 .'1Mg8+ @e7 32.'1Wt7+ �d8 33 .l!Mf8+ l!Me8 34.ctJt7+ @d7 35.'1Wd6++.

La ruptura d5 no reporto resultados inme­diatos, pero abrio paso a una fuerte iniciativa, basada en la maniobra de caballo, lo que re­sulto fatal para las negras.

Kasparov - Ivanchuk Linares 1 999

Gambito de Dama Aceptado

l.d4 d5 2.c4 dxc4 3.tlJf3 e6 4.e3 c5 5 . .ixc4 a6 6.0-0 tlJf6 7 . .ib3 tlJ c6 8.tlJc3 cxd4 9.exd4 §J..e7 lO.:Sel 0-0 ll .a3 tlJ a5 12 . .ic2 b5 13.d5!

Y a hemos visto esta secuencia de jugadas en la partida Kramnik - Anand, antes comen­tada. Dicha partida se jugo despues de esta, y las negras se encontraban en mejor situacion que I vanchuk en Linares, al afrontar una po­sicion q_ue este no habia podido analizar en la tranquilidad casera. Como vimos, Anand pro­dujo la mejora 1 3 . . . �e8. Ivanchuk tenia que encontrar la respuesta ante el tablero . . . 13 ... tlJc4?!

El avance d5 es molesto para las negras y no es un gran secreto por que juegan esto: al esperar 1 4.ig5, planean responder 1 4 . . . ltJb6, pues si entonces 1 5 .l!Md3 , pueden seguir con 1 5 . . . ttJ bxd5 . 14.�d3!

Una profunda continuacion al avance d5 . Ahora esta excluido 14 . . . ctJb6, por la fuerte replica 1 5 .ctJd4, manteniendo la tension. 14 ... :Se8 15.a4

Las negras se disponen a contestar al salto 1 5 .ctJg5 con sangre fria: 1 5 . . . exd5 1 6.ctJxh7 g6, pero supongo que no habian previsto este zarpazo en el flanco de dama. 15 ... exd5 16.axb5 a5 17.b3 tlJd6 18.tlJd4 .ib7 19.f3

En un par de jugadas, la posicion se ha mo­dificado radicalmente. En Iugar de las amena-

PEONES AISLADOS 23

zas al rey negro, que fue lo que caracterizo la victoria de Kramnik sobre Anand, esta posi­cion se caracteriza por diversos factores esta­ticos. Lo primero a percibir es que la situacion en el centro se ha invertido, y ahora son las negras quienes tienen un peon aislado o, po­driamos decir, quienes han asumido el lastre del peon central aislado. Por el momenta esta bien protegido, pero se encuentra absoluta­mente bloqueado, sin la menor esperanza de que pueda adquirir movilidad. Junto con el peon, y a causa de el, se encuentra bloqueado el alfil de "b7" . Ademas de eso, existe otro punto debil en el campo negro: el peon de "aS" , bien protegido por ahora, pero potencial­mente fragil. En comparacion con estos fac­tores, los peones blancos doblados en la co­lumna "b" cumplen su mision: el de "b3" controla la casilla "c4", y el de "b5" restringe considerablemente a las negras. Por otro lado, el peon de "f3" impide a los caballos negros llegar a la ansiada casilla "e4". Lo unico que ahora necesitan las blancas es mejorar la po­sicion de sus alfiles, que han perdido sus ob­jetivos basicos en el flanco de rey y aspiran a mejores horizontes. 19 .. J�c8 20.tlJa4

Curiosa y logico. AI controlar "c5" y "b6", las blancas incrementan su ventaja espacial, evitando de paso cualquier inconveniencia sa­bre la diagonal "gl -a7" . 20 ... .if8 21..ig5 g6 22.�d2

Debe cederse la casilla "d3 " al alfil de ca­sillas blancas. 22 .. J�xel+ 23J�xel tiJde8

I vanchuk plan tea una bonita tramp a, que las blancas esquivan tranquilamente. 24J�e2!

Despues de 24.!he8? �xe'S 25 .ixf6 ib4, 26.Wfc l ia3 conduce a una repeticion de ju­gadas. Kasparov menciono la linea 26.Wff2? ie l 27.Wffl Wfe3+ 28.cj;>hl ih4 ! , con la que las negras volverian las tornas. 24 ... .ib4 25.�e3 gc7 26 . .id3

Todos estos movimientos han sido muy co­herentes. AI haber concluido que cualquier fi­nal de piezas menores es favorable a su causa, las blancas aceptan los cambios de buen gra­do.

26 .. J�e7 27.�cl gxe2 28 . .ixe2 �e7 29.�e3 �xe3+ 30 . .ixe3

La verdad acerca de los finales comienza por los peones. Una vez que se haya dafiado Ia propia estructura de peones, hay que vivir con ello. En esta partida, los peones constituyen un factor restrictivo para las negras. 30 ... tiJd7 3t.tlJc6 .ixc6 32.bxc6 tiJb8

32 . . . ttJe5 33 .ib6, o 32 . . . ttJf8 33 .ttJc5 , no ofrecerian mejores esperanzas a las negras. 33 . .ib6 .id6 34.tlJc3 .ic7

35 . .if2? AI final, y tras una larga serie de brillantes

soluciones posicionales, las blancas se equivo­can. No es facil percibirlo a primera vista, y a Ivanchuk se le escapa. Esto sirve para recor­darnos que una partida de ajedrez no ha fina­lizado hasta que no se firma Ia planilla.

Si las blancas hubiesen jugado 35 .ic5, en­tonces la rendicion habria sido Ia (mica op­cion razonable para las negras.

24 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

35 ... d4 36.�d5 Las negras se rindieron. Justo en el momento en que Ivanchuk se

rindio, podia haber continuado con 36 . . . ctJxc6 37.ib5 ctJb4 3 8.ctJxb4 ctJd6, recuperando la pieza con posibilidades de salvarse, como sefialo Jan Timman en un detallado amilisis. A nosotros eso no nos importa demasiado. Lo que nos importa es que muchos de los aspec­tos tematicos, en nuestra busqueda de la ver­dad del peon central aislado, se encuentran en la partida, tanto en el juego imaginativo de la apertura como en la profunda transicion al medio juego, confiando en motivos e ideas que enfatizan en los elementos mas instructi­vos de la posicion caracteristica.

En esta partida, asi como en la mayoria de las que hemos analizado, el avance del peon central aislado a menudo se ve pronto en la apertura. Contra un adversario prudente y bien preparado, esa tarea es, por lo general, dificil de llevar a cabo con exito. A continuacion le ofrezco al lector dos partidas del Gran Maes­tro Gligoric, en las que demuestra su destreza en las delicadas posiciones del Gambito de Dama Aceptado.

Gligoric - Portisch Match Yugoslavia - Hungria

Pula 1 97 1 Gambito de Dama Aceptado

l.d4 d5 2.c4 dxc4 3.�f3 �f6 4.e3 e6 5 . .ixc4 c5 6.0-0 a6 7.a4

Sin duda consistente, porque enfatiza en el problema basico de las negras: el desarrollo de

su alfil dama. Con todo, en vista de la forma­cion de peones que resultara en el centro en pocos movimientos, cuando la ruptura se vea definitivamente abortada por la maniobra . . . ctJb8-c6-b4, es comprensible que la conti­nuacion textual no sea hoy la mas popular. 7 ... �c6 8.YNe2 cxd4 9.E:dl .ie7 10.exd4 0-0 ll .�c3

Como 1 1 .ig5 ctJd5 conduce a simplifica­ciones no deseadas, es mejor postergar el de­sarrollo del alfil dama. l l. .. �d5

La opcion es 1 1 . .. CtJb4, con intencion de responder, de nuevo, a 1 2.ig5 con 1 2 . . . ctJfd5 . Las blancas, por supuesto, deberian proseguir con 1 2.ctJe5, manteniendo cierta presion. 12 . .id3

El alfil resultara mas util en la diagonal "b 1 -h7" . 12 ... �cb4 13 . .ibl b6

Es posible 13 . . . ctJf6, pero es peor 1 3 . . . id7, porque permite 14.�e4 g6 1 5 .ctJe5, con pre­sion en el centro y flanco de rey. Por ejemplo: 1 5 . . . if6 1 6.�f3 ig7 1 7 .�g3 , seguido de h4, y las blancas tienen la iniciativa, como ha demostrado buen numero de partidas. 14.a5

Un par de dias antes, en el mismo match, Gligoric eligio 14 .CtJe5, pero despues de 14 . . . ib7 1 5 .8:a3 8:c8 1 6.ctJxd5 �xd5 1 7 .8:g3 f5 , las negras cerraron los puentes que lleva­ban hasta su rey. La textual fue producto de analisis caseros. 14 ... .id7?!

PEONES AISLADOS 25

Aunque impide tLla4, las negras se olvidan de que "b7" es el Iugar natural para este alfil. Lo correcto es 14 . . . bxa5 1 5 .lt:Je5 ib7, con buen juego.

Es instructivo observar la sensible relacion entre piezas y peones. Mientras unas y otros se encuentren en armonia, los efectos de su colaboracion son positivos. Tan pronto como existe falta de armonia entre ambos, la posi­cion se resiente. Aqui lo percibimos de inme­diato, tan pronto como las negras han situado su alfil en "d7" . 15.ttle5 bxa5 16.:aa3

Con los alfiles bloqueando Ia coordinacion normal de Ia primera fila, la tercera fila se convierte en una salida natural para las torres. En el tipo de posiciones que estamos analizan­do, Ia maniobra de torre por la tercera fila se utiliza a menudo con buenos resultados. La to­rre de "a3 " mira de reojo al flanco de rey enemigo, y las blancas amenazan ya ixh7+, provocando el debilitamiento que sigue. 16 ... f5 17.ttlxd5 ttlxd5 18.ttlxd7 �xd7 19.E:xa5 ttlc7 20 . .ia2

Siempre existe la otra diagonal. Las blan­cas comienzan a ejercer una fuerte y duradera presion sobre las debilidades contrarias. Su pareja de alfiles empieza a hacerse notar.

Observese tam bien que todo el tiempo, jun­to con las demas piezas, el peon de "d4" par­ticipa en los acontecimientos . Tranquilamente, casi pasando desapercibido, controla casillas centrales clave y apoya una importante pieza centralizada, ofreciendoles a las blancas ven­taja de espacio. Pero lo primero y mas impor-

tante es que constituye una fuente de preocu­pacion para las negras. 20 ... .i.d6 21..i.c4 ci>b8 22.�f3 .i.b4 23.:aat a5

Las negras se defienden bien y se desem­barazan de uno de sus puntos debiles, pero al mismo tiempo las blancas consiguen adelantar sus piezas a puestos dominantes. 24 . .i.f4 ttld5 25 . .ie5 :arcs 26.�e2 �b7 27.h3 :ac6 28.:aacl :aac8 29 . .ixd5!

La decision correcta. Los cambios no faci­litan las cosas a las negras, a causa de sus per­manentes debilidades. 29 ... exd5 30.:axc6 �Jc6 31.E:d3

La tercera fila de nuevo es una ruta apro­piada para las torres blancas. 31 ... �d7

Notese que es un sinsentido 3 1 . . .iWc2, una jugada que se castigaria con 32 .ixg7+. 32.:ag3 .if8 33.b3

Impidiendo ... a4, una util medida en el fi­nal. 33 ... :aas 34.�c2 :acs 35.�d2 :aas 36.�g5 ci>g8 37.:af3

Forzando un nuevo debilitamiento. 37 ... g6 38.:ac3 �d8 39.�cl .id6 40.�f4 i.xe5 41.�xe5 :aa7 42.:ac5

La jugada secreta. 42 ... :ae7

Las negras perderan un peon. 42 . . J�d7 43 .�b5 �f7 se contesta con la tranquila 44.g3, ya que 44.�b8 iWc7 ofrece resistencia. 43.:axd5 �c7 44.�xc7 E:xc7 45.E:xa5 :ab7 46.:aa3 :ab4 47.d5 ci>g7 48.ci>fl ci>f6 49.ci>e2 ci>e5 50. ci>d3 ci>xd5 51. ci>c3 E:e4 52.:aa4 :ae2

26 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

53J!d4+ ®c5 54.b4+ ®b5 55J�d5+ ®c6 56J!d2 gel 57.f3 ggl 58.®d4

Era importante para las blancas ganar esta partida. Recuerdo que la analizamos en dos grupos, compartiendo informacion, porque el tiempo era limitado. Todos los pequefios deta­lles se tomaron en consideracion y no era po­sible sorpresa alguna. La amenaza de penetra­ci6n en el flanco de rey, combinada con el peon pasado, decide ahora nipidamente. 58 ... gel 59,gc2+ ®b6 60.®d5 ge3 61J!c6+ �b5

Si 6 1 . . . �b7, entonces 62J�e6. 62.gc7 h5 63,gb7+ ®a4 64®c4 ®a3 65.ga7+ �b2 66J!g7

Las negras se rindieron.

Gligoric - Szabo Campeonato de Europa por equipos

Hamburgo 1 965 Gambito de Dama Aceptado

l.d4 d5 2.c4 dxc4 3.lLlf3 lLlf6 4.e3 e6 5 . .ixc4 c5 6.0-0 a6 7 .a4

Ya he hablado del agujero de "b4", que mas facilita el bloqueo del peon central aislado. Nunca se insistira lo bastante en que cualquier cosa que se haga en los flancos repercute en el centro. 7 . .. tLlc6 8.�e2 cxd4 9J!dl .ie7 10.exd4 0-0 ll.lLlc3 i.d7?!

Personalmente, prefiero la jugada de Par­tisch en la partida anterior, 1 1 . . .ltJd5, o incluso l l . . .lLlb4, con idea de impedir i.d3, ademas del evidente motivo de controlar la casilla

"d5" . En ambas lineas, las negras deberian tratar de desarrollar su alfil dama por la casilla "b7", su posicion natural contra el peon en "d4". 12..if4!

Una de las cuestiones clave en esta variante es el desarrollo del alfil blanco de casillas ne­gras. En general, suele hacerse por "g5", pero las ideas simplificadoras como . . . ltJd5, o in­cluso . . . lDh5 en el momento oportuno, disua­dieron a las blancas, que comenzaron a seguir la continuacion de Gligoric. La decision blan­ca se basa en la situacion del peon central y su futuro. 12 ... lLlb4 13.lLle5

Es posible 1 3 .d5 , pero tras una serie de cambios las negras jugarian sencillamente . . . '1We8, diluyendo la presion blanca. 13 ... .ie8

Despues de las jugadas 1 3 . . . ic6 14 .ltJxc6 bxc6 1 5 .a5, las blancas conservan mejores posibilidades. A pesar de todo, me parece que es el camino correcto para las negras, porque antes o despues el alfil tendra que abandonar su refugio. 14.i.g5

A pesar de la perdida de tiempo, este mo­vimiento es ahora bueno, y merece acreditar­sele a Gligoric que haya descubierto este sutil matiz. 14 ... lLlfd5 15 . .ixd5 lLlxd5 16.lLlxd5 .ixg5

1 6 . . . exd5 es una dudosa reaccion, en vista de 1 7 .i.xe7 'W!xe7 1 8 .'W!f3, que nos recuerda la partida de Gligoric contra Eliskases: el caballo debe ser superior al alfil.

PEONES AISLADOS 27

17.tDc3 Confiando en su caballo centralizado, las

blancas planean d5, abriendo la posicion en su favor. En ajedrez, aquello que no puede ha­cerse directamente, a menudo puede hacerse con una perdida de tiempo, y debemos mante­nernos abiertos a estas posibilidades. 17 • • • �c6 18.tDxc6 bxc6 19.a5

De modo que, finalmente, las negras no pu­dieron evitar la pasiva posicion con peones en las casillas "a6" y "c6", pero en una situacion algo peor. 19 • • • �e7 20.VNc4 VNd6 21.tDa4 gfd8 22J3acl

Haciendo 22.t2Jb6 �a7 23 .�ac l se llega, pnicticamente, a la misma posicion de la par­tida, evitando la opcion del comentario que si­gue. 22 ••• VNb4

Las negras podrian jugar 22 . . . if6, y a 23.t2Jb6, seria posible contestar 23 . . . �ab8, y a 23 .t2Jc5, 23 . . . 1Wd5 . 23.tDb6 E:a7 24.VNxc6 VNxa5

24 . . . 1Wxb2? pierde, debido a la respuesta 25.t2Jc8. 25.d5

Por fin se produce el avance, pero con gran fuerza, porque los efectivos negros han per­dido su coordinacion normal. 25 ••• exd5 26.tDxd5

La amenaza basica es �al , que debe pa­rarse con suma precision. 26 ••• <i!?f8?

Es esencial 26 . . . �b8. A primera vista pa­rece que las blancas deberian tener aqui una continuacion ganadora, pero tras 27 .'1Wc8+?

27 . . . �xc8 28.t2Jxe7+ mrs 29.t2Jxc8, puede se­guir 29 . . . �b7, pues 30.�c5? pierde, debido a 30 . . . �d7 ! La planeada 27.�al solo reporta tablas despues de 27 . . . 1Wc5 28.�xa6 �xa6 29.1Wxa6 �xb2 30.1Wc8+ if8. Lleva algun tiempo comprender que las blancas deberian ejercer presion posicional. En este sentido, pa­rece bueno 27.t2Jc7, cortando a la torre de "a7'' del juego, privando a las negras de la im­portante casilla "b5" y preparando �d7, se­guido de �cd l , con juego sobre "f7" y la oc­tava fila. En tal caso, parece apropiada la pru­dente jug ada 27 . . . if8 ( es desagradable hacer 27 . . . 1Wb6, debido a 2s .�d8+ if8 29.'1Wxb6 �xb6 30.t2Jd5 , mientras que 27 . . . if6 28 .b4 causa otros problemas).

27.b4 Las negras se rindieron. Si 27 . . . 1Wb5 , entonces 28.t2Jxe7, etc. Una partida impresionante, jugada con co­

herencia a traves de todas las complicaciones, y teniendo in mente lo que es bueno para el peon central aislado y que es lo que incremen­ta su potencial .

Las partidas que hemos analizado hasta ahora muestran el peon pasado bajo su mejor cara. Movil y agresivo, en total armonia con las demas piezas, ha sido un simbolo de la iniciativa y la accion. Por desgracia, y como ya apunte en la introduccion, los peones viven una doble vida, en particular los peones cen­trales aislados. Para entender plenamente lo que son, debemos contemplarlos en circuns­tancias menos afortunadas.

2R COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Regedzinski - Rubinstein Lodz 1 9 1 7

Gambito de Dama

l.d4 d5 2.tiH3 �f6 3.c4 e6 4 . .ig5 �bd7 5. � c3 .ie7 6.e3 0-0 7 . .id3

Un maestro modemo experimentado conti­nuaria con 7.Vfic2, 7.8:c 1 o 7.cxd5, seguido de id3 . 7 ... dxc4 8 . .ixc4 a6 9.0-0 b5 lO . .id3 .ib7 llJMfe2 c5 12.E!adl cxd4 13.exd4 �b6

Debido al juego superficial de las blancas, Rubinstein ha conseguido lo mejor que podia esperar de esta variante. Su contrario le ha permitido expansionarse en el flanco de dama, desarrollar sus piezas menores por las casillas optimas y bloquear con firmeza el peon cen­tral aislado. La casilla "d5" es el punto fuerte de las negras, y sus piezas podnin utilizar a discrecion. 14.�e4?

La jugada, por supuesto, era 14 .lt:Je5 , para tratar de compensar el desarrollo superficial de las blancas y activar sus piezas de forma tal que la potencial • debilidad de "d4" quedase menos expuesta. La textual es un error muy instructivo, del tipo a que ya he aludido. A fin de jugar un papel activo, los peones centrales aislados necesitan un buen apoyo por parte de sus piezas. Sin ellas, su aislamiento se acen­rua. Regedzinski no entiende la naturaleza de su peon "d4" y elige exactamente el camino que deberia evitar. 14 ... �xe4 15 . .ixe7 ffxe7 16 . .ixe4 gfd8 17.E!d3

Otra jugada carente de senti do. 17 ... .ixe4 18.ffxe4 gac8

Los cambios han debilitado visiblemente el peon "d4" . Por si eso fuera poco, el dominio de la columna abierta por parte de las negras, vaticina un final muy dificil para las blancas. 19.gfdl �d5 20.E!3d2

Las blancas han adoptado la defensa mas pasiva. 20 ... �f6 2l.ffe3 ffb7 22.h3 h6 23.ge2 ffd5 24.b3 ffd6

Siempre he admirado la claridad de pensa­miento de Rubinstein. Primero expulsa la da­ma blanca del centro, a fin de provocar un nuevo debilitamiento, con . . . VfJ d5 . Ahora vuel­ve a evacuar la casilla "d5" , esta vez para ser ocupada por el caballo. El valor de casillas tan fuertes radica precisamente en el hecho de que pueden ser utilizadas por distintas piezas y con diferente proposito. 25.E!cl � d5 26.ffd2 fff4!

Lo que las blancas no entendieron, si lo en­tienden las negras, que siguen buscando el fi­nal, conscientes de que cuanto mas avance el juego en esa direccion, tantos mas problemas tendran las blancas. 27.gc2 ffxd2 28.E!exd2 E!xc2 29.E!xc2 �b4 30.gb2 E!c8

La penetracion de la torre por la \mica co­lumna abierta resultara decisiva. 3t.'it>fl gel+ 32.'it>e2 gal 33.'it>d2 gxa2 34J:�xa2 � xa2

Las negras han ganado material. Ahora so­lo se requiere cierta atencion. 35.�e5 �b4 36.�d7 f6 37.g3 'it>ti 38.�b6

PEONES AISLADOS 29

38 ... ®e7 39. ®c3 aS Las blancas se rindieron. La leccion es transparente: cuando se tiene

un peon central aislado, no se deben cambiar piezas. La partida que acabamos de ver es un perfecto ejemplo de lo que no debe hacer el bando con el peon aislado. A efectos didac­ticos, tales partidas constituyen un tesoro.

Botvinnik - Zagoriansky Sverdlovsk 1943 Apertura Inglesa

l.c4 c5 2.�f3 �f6 3.�c3 e6 4.e3 i.e7 5.b3 0-0 6.i.b2 d5 7.cxd5 �xd5 8.�xd5 exd5? !

Parece mas logico 8 . . . \Wxd5 . 9.d4 cxd4

En caso de 9 . . . \Wa5+ o 9 . . . .if6, las blancas siguen con 1 0.'?Nd2, jugando en ambas lineas para tratar de crear un peon potencialmente debil en "d5" . lO.YlYxd4

Buscando el cambio de alfiles, las blancas provo can . . . .if6. 10 .. . i.f6 ll .YlYd2 �c6 12.i.e2 .ie6 13.0-0 i.xb2 14.YlYxb2 YlYa5 15JUdl

En situaciones similares, el plan es muy simple: primero, crear la maxima presion po­sible sobre el peon central aislado, a fin de atar las fuerzas enemigas a una defensa pasiva del mismo. 15 .. JUd8 16J�d2 �M7 17J�adl gadS 18.h3 h6 19.�e5

De nuevo, transparencia absoluta. Cuantas menos piezas queden sobre el tablero, tanto

mas expuesto estara el peon de "d5" . 19 ... �xe5 20.YlYxe5 YlYc5 21.i.f3 b6 22.YlYb2 gcs 23.YlYe5 gcd8 24.gd4

Siguiendo la vieja recomendacion de que un peon debil debe ser inmovilizado. Por otra parte, la torre en la cuarta fila puede resultar ser muy util para desplazarse a los flancos. 24 ... a5 25.g4!

Una jugada para recordar, efectuada en un momento importante. La posicion es muy ins­tructiva, por el metodo aplicado contra un peon central bloqueado. En el momento en que todas las piezas negras estan atadas a Ia defensa del lisiado peon "d5" , las blancas abren otro frente en el flanco de rey. Los ata­ques de este tipo son, en principio, muy pe­ligrosos, porque se emprenden cuando la pasi­vidad de las piezas defensoras disminuye las perspectivas de resistencia del bando atacado. 25 ... YlYc6

Notese que las negras no pueden jugar 25 . . . Wd6?, porque tras el cambio de damas, e4 gana material. Otra razon por la que el peon de "d5" debe ser bloqueado. 26.g5 hxg5

Alguien sugirio que las negras deberian ju­gar 26 . . . Wc2, tratando de incorporar al menos una pieza a la defensa de su enroque. Puede que asi sea, pero solo seria una solucion tem­poral. Lo que por principio es malo, dice el proverbio Iatino, el tiempo no lo puede me­jorar. 27.YlYxg5 f6

Con Ia columna "g" abierta, el enroque ne­gro no podra ser defendido mucho tiempo.

30 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

28.W/g6 J.fi 29.W/g3 f5 Esto solo ayuda a las blancas, pero es difi­

cil recomendar nada sustancialmente mejor, ante Ia presion ejercida sabre Ia columna "g". 30.W/g5 W/e6 3t.®hl W/e5 32J�gl :Sf8 33.W/h6 :Sb8 34.:Sh4 ®f8 35.W/h8+ .i.g8 36.:Sf4 :Sbb7 37.:Sg5 :Sti 38.W/h5 W/al+ 39.®h2 g6 40.W/xg6 Ah7 4l.W/d6+ :Sfe7 42.W/d8+

Las negras se rindieron.

Korchnoi - Karpov Campeonato Mundial (93 partida)

Merano 198 1 Gambito de Dama

l.c4 e6 2.tlJc3 d5 3.d4 Ae7 4.tlJf3 tlJf6 5.J.g5 h6 6.J.h4 0-0 7 .:Set

El Gran Maestro Uhlmann empleaba este arden de jugadas, a fin de responder a Ia Va­riante Tartakower (7 . . . b6) con 8 .cxd5 lt:Jxd5 9.ixe7 Wixe7 10 .lt:Jxd5 exd5 1 1 .g3 ie6 12.ig2, y el alfil fianchettado esta bien dis­puesto contra el centro negro de peones. Mas tarde, las negras contrarrestaron esta idea pos­tergando . . . ie6 y manteniendo en cartera . . . ia6. Karpov, sin embargo, planteo una idea mas simple . . . 7 ... dxc4 8.e3

A 8.e4 Beliavsky respondi6 8 . . . lt:Jc6 9.ixc4 lt:Jxe4. 8 ... c5 9.J.xc4 cxd4 10.exd4 tlJc6 11.0-0 tlJh5!

Una de esas sencillas reacciones, tipicas de Karpov, que suponen una profunda compren­si6n de Ia posicion central . Aunque no deseen

hacerlo, las blancas no tienen otra opci6n que cambiar alfiles de casillas negras, limitando asi de modo considerable sus posibilidades de actividad en el media juego. 12.Axe7 tlJxe7 13.J.b3? !

Demasiado blando para satisfacer las ur­gentes necesidades de Ia posicion. Cuando ve­mos toda Ia partida y Ia analizamos retros­pectivamente, llegamos a Ia conclusion de que Ia ventaja inicial de las blancas ha desapare­cido, y que el camino mas apropiado es 1 3 .d5, que conduce a cambios y a tablas. Natural­mente, con las piezas blancas el jugador es reticente a buscar unas tablas, y menos en fase tan temprana de Ia partida, pero la evaluacion objetiva de Ia posicion deberia prevalecer sa­bre las emociones.

Si las blancas deciden seguir luchando, en­tonces no deberian poner sus esperanzas en la textual. Se ha ensayado aqui 1 3 .�e 1 , pero no me convence. Estoy seguro de que un jugador pragmatico como Petrosian no dudaria en pro­poner tablas. Pronto veremos por que. 13 ... tlJf6 14.tlJe5 J.d7 15.W/e2 :Sc8 16.tlJe4?

Las negras han bloqueado el peon aislado como en las lineas del Gambito de Dama Aceptado, pero con una crucial diferencia: los alfiles de casillas negras han desaparecido del tablero, un hecho que favorece a las negras. Ulteriores cambios llevarian agua al molino de las negras. En Iugar de la natural 16.�cd1 , las blancas buscan cambios, y las consecuen­cias de esa estrategia pronto resultaran eviden­tes. 16 ... tlJxe4 17.W/xe4 J.c6 18.tlJxc6 :Sxc6 19.:Sc3

PEONES AISLADOS 3 1

Esta jugada de Korchnoi tam bien ha recibi­do criticas, proponiendose 1 9 Jhc6 como me­jor. Pero tengo serias dudas al respecto, por­que 1 9 . . . bxc6 aislaria para siempre el peon de "d4". Sabemos desde el match Lasker - Capa­blanca de 1 92 1 (vease la partida siguiente), que la defensa de un peon asi, en posiciones de este tipo, representa una tarea imposible. 19 ... \Wd6 20.g3

La torre no tiene perspectivas en el flanco de rey. 20 .. J�d8 21.:Sdl �b6

Para hacer posible que las negras jueguen . . . Wd7 y . . . El:d6, ejerciendo la maxima presion sobre el peon "d4" . 22.\Wel \Wd7 23.:Scd3 :Sd6 24.\We4 \Wc6 2S.\Wf4 �dS 26.\Wd2 \Wb6 27 . .ixdS?!

Jugando, una vez mas, en contra de los principios. Como ya he dicho en varias oca­siones, cuantas menos piezas queden sobre el tablero, mas vulnerable resultara el peon cen­tral aislado. No es atractivo 27 .a3 , pero lo que debe hacerse, debe hacerse. Es una creencia erronea, muchas veces refutada, que un final de piezas mayores ofrece las mejores posi­bilidades de salvacion. Por el contrario, es la ruta mas corta bacia el desastre. 27 ... :SxdS 28.:Sb3 \Wc6 29.\Wc3 \Wd7 30.f4

A fin de impedir . . . e5, las blancas deben debilitar su enroque, y eso sera el comienzo del fin. Karpov juega con gran precision y, aunque podriamos criticar algunas jugadas de Korchnoi, tampoco sabemos proponer nada sustancialmente mejor. 30 ... b6 31.:Sb4 bS 32.a4 bxa4 33.\Wa3 aS

34.:Sxa4 \WbS 3S.:Sd2 eS! Antes o despues, este avance es inevitable.

La posicion se abre y el rey blanco queda ex­puesto. 36.fxeS �xeS 37.\Wal \We8 38.dxeS :Sxd2 39.:SxaS \Wc6 40.:Sa8+ ®h7 41.\Wbl + g6 42.\Wfl \WcS+ 43.®hl \WdS+

Las blancas se rindieron. Una partida de jugadas magistrates y mag­

nos errores, jpero todo enormemente instructi­vo !

Lasker - C�pablanca Campeonato Mundial (1 oa partida)

La Habana 1 92 1 Gambito de Dama

l.d4 dS 2.c4 e6 3.�c3 �f6 4 . .igS .ie7 S.e3 0-0 6.�f3 �bd7 7.\Wc2

La jugada de Rubinstein, que a menudo im­plica enrocar largo y accion en el ala de rey. 7 ... cS 8.�dl

Ante la energica respuesta central, las blan­cas cambian de planes. En realidad, la cohe­rente jugada 8.0-0-0 es mas peligrosa para las negras. 8 ..• \Was

Las negras no temen 9.cxd5 lt:Jxd5 1 0 . .ixe7 lt:Jxe7 1 1 ..id3 lt:Jf6, que les concede buen jue­go. El cambio de alfiles de casillas negras les favorece. Ademas, 8 . . . cxd4 parece prematuro, en vista de 9.lt:Jxd4. 9 . .id3 h6 10 . .ih4

10 . . . cxd4 Los comentaristas sefialaron posteriormen-

32 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

te que tras 1 O . . . dxc4 1 l .ixc4 ltJ b6, el alfil blanco tendria que contentarse con un panora­ma mas pobre, desde "e2" . ll.exd4 dxc4 12 . .ixc4 ti.)b6 13 . .ib3 .id7 14.0-0 gac8

La impaciente 14 . . . ic6 no basta: 1 5 .ltJe5 id5 1 6.ltJxd5 ltJbxd5 1 7.'We2 Ei:ac8 1 8 .f4, amenazando f5, con prometedora actividad. 15.ti.)e5

Una vez que conocemos la respuesta de las negras, podemos decir que era mejor la alter­nativa 1 5 .'We2. 15 ... .ib5 16.gfel ti.)bd5

La partida se ha convertido en una comple­ja lucha en tomo a las casillas centrales y el peon aislado. Las negras han conseguido res­tringir al peon "d4", consolidando un puesto firme en "d5" .

Esta posicion inspiro a numerosos comen­taristas de entonces, uno de ellos el famoso jugador hungaro Gyula Breyer, quien reco­mendo la variante que sigue: 1 7 .ixf6 ixf6 (no 1 7 . . . ltJxf6, debido a 1 8 .ltJg6) 1 8 .ixd5 exd5 1 9.ltJg4 (la jugada de Lasker 1 9.'Wf5 tambien resulta insuficiente, en vista de 19 . . . ic6 20.ltJg4 .ig5 2 l .f4 g6) 1 9 . . . ig5 20.f4, y ahora 20 . . . .ixf4 2 l .'Wf5 ic7 22.ltJxd5 cj{hs 23 .ltJxh6 gxh6 24.ltJf6 r:t1g7 25 .ltJh5+. Pasarian aiios antes de que otro minucioso analista descubriese la mejora que significa 20 . . . ih4. Menciono estos analisis porque son esenciales para entender las complejas rela­ciones en el centro. 17 . .ixd5 ti.)xd5 18 . .ixe7 ti.)xe7 19.YNb3 .ic6 20.ti.)xc6 bxc6!

Frente a nosotros tenemos un final de lo mas interesante. Ambos bandos tienen peones aislados, pero un analista curtido pronto lle­gara a la conclusion de que son las blancas quienes tienen las cosas cuesta arriba. La razon reside en que su peon central aislado es mas debil que el de "c6". Por otro lado, las negras disponen de una columna semiabierta, sobre la que pueden crear presion adicional. 21J�e5 YNb6 22.YNc2? ! gfd8 23.ti.)e2?!

Las dos ultimas jugadas de Lasker fueron criticadas por demasiado pasivas, sobre todo 23 .ltJe2, en lugar de la cual se sugirio 23 .ltJa4. Es cierto que situar el caballo en "a4" dificultara un ulterior ataque de las minorias, pero, por otra parte, debilitara mas al peon "d4". Lo cierto es que la posicion es mucho mas facil de jugar para las negras, porque su plan es claro. Las blancas, por el contrario, deben esperar acontecimientos. 23 .. J�d5

24J�xd5 Una decision precipitada. El cambio favo­

rece, en principio, a las negras. En este caso, hay una consideracion adicional: las negras se desprenden de su peon aislado, mientras que el de "d4" sigue sometido a presion. 24 ... cxd5 25.YNd2 tl.)fs 26.b3 h5

Muchos comentaristas observaron que este avance debia haberse preparado con 26 . . . g6, pues las blancas podrian crear ahora proble­mas, aunque no aliviar sus dificultades, con 27 .ltJg3 . 27.h3 h4

Ahora el flanco de rey de las blancas esta

PEONES AISLADOS 33

bloqueado, el peon "d4" requiere una defensa constante, y la columna abierta esta dominada por las piezas mayores negras. Tales son, re­sumidos, los inconvenientes visibles. 28.VNd3 gc6 29.i>fl g6 30.VNbl VNb4 31.i>gl a5

Y a hemos visto antes este metodo. Con la maxima presion sobre un punto debil y las fuerzas enemigas atadas a la defensa del mis­mo, suele ser eficaz abrir un segundo frente. Como hemos visto antes, en la partida con Zagoriansky, Botvinnik a taco en el flanco de rey. Capablanca emprende un ataque de mino­rias que, antes o despues, dara Iugar a otro punto debil en el campo blanco. Sostener una posicion con dos puntos debiles sera, por sim­ple logica, doblemente dificil. 32.VNb2 a4 33.VNd2 VNxd2 34.gxd2 axb3 35.axb3 gb6 36J�d3 �a6

Las torres requieren, naturalmente, colum­nas abiertas, y su ideal es irrumpir en la sep­tima fila. Aqui la torre negra tiene ambos in­centivos. 37.g4 hxg3 38.fxg3 �a2 39.�c3 �c2 40.�dl �e7 41.�e3 gel+ 42.i>f2 �c6 43.�dl gbl

Nunca se es demasiado prudente. Despues de 43 . . . CLlb4 44.Ei:d2 Ei:b l 45 .CLlb2 E!:xb2 46.Ei:xb2 CLld3+ 47.�e2 CLlxb2 48.�d2, el ca­ballo queda atrapado. 44.i>e2? gxb3 45.i>e3 gb4 46.�c3 �e7 47.�e2 �f5+ 48.i>f2 g5 49.g4 �d6 50.�gl lLJe4+ 51.i>fl gbl+ 52.i>g2 �b2+ 53.i>fl �f2+ 54. i>el ga2 55. i>n i>g7 56.�e3 i>g6 57.�d3 f6 58.ge3 i>ti 59.gd3 i>e7 60.ge3 i>d6 61.�d3 �f2+ 62. i>el �g2 63. i>n �a2

64.�e3 e5 65.�d3 exd4 66.gxd4 i>c5 67.�dl d4 68.�cl + i>d5

La desesperada resistencia por fin ha sido rota.

Las blancas se rindieron.

Karpov - Vaganian Skopje 1 976

Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 d5 3.�d2 c5 4.exd5 exd5 5.�gf3 a6 6.dxc5 �xc5 7 .� b3 �b6

Cuando las negras retiran el alfil en esta diagonal, normalmehte lo hacen por "a7'' (7 . . . ika7). En tal caso, a 8 JigS puede seguir 8 . . . CLlf6 9 .CLlfd4 0-0 1 0.ike2 \Wd6, desclavan-dose, y el peon de "d5 " esta comodo. 8.�d3 �e7

Me parece mas logico 8 . . . \We7+. 9.0-0 �bc6 lO.�el

El procedimiento estandar contra el alfil de casillas negras. Las blancas preparan !ke3, un cambia tematico de piezas y un paso adelante hacia el deseado final. 10 ... �g4 l l.c3

Primero, bloquear el peon. ll . .. h6 12.h3 �h5 13.�e3 0-0

Las negras no pueden evitar el cambio con 1 3 . . . ikc7, porque entonces es muy fuerte 14.g4. 14.�xb6 VNxb6 15.VNe2 gfd8 16.�adl a5

A primera vista, esta jugada parece crear algun problema, pero la impresion es falsa. 17.�bl

No es dificil ver la idea subyacente en la

34 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

retirada del alfil. Ahora, a 1 7 . . . a4 puede res­ponderse 1 8 . ttJ bd4 ttJ xd4 1 9 . .El:xd4, y 1 9 . . . ttJ c6 falla por 20 . .El:xd5, al ser vulnerable la ultima fila. El objetivo, por supuesto, es controlar la fuerte casilla 11 d4 11 • 17 ... .ixf3 18.YMxf3 a4 19.�d4 YMxb2

Las negras no pudieron resistir la tentacion de capturar el peon, o quiza sintieron que ha­bia algo dudoso en su posicion, lo que les hizo buscar alguna compensacion. Como conse­cuencia de ello, su rey caera bajo un ataque. 20.�xc6 �xc6 21.YMf5 g6 22.YMf6

Las blancas amenazan .ixg6, y 22 . . . .El:e8 no es suficiente para neutralizar la amenaza, porque 23 . .ixg6 fxg6 24.l.Wxg6+ <j{f8 25 .iWf6+ c;t>gs 26 . .El:e6 decide. Con la dama fuera de juego, es imposible que las negras puedan de­fender a su rey.

El lector debe tomar nota de que cuando un peon central aislado es bloqueado con exito, por lo general existe la posibilidad de empren­der acciones de flanco. El bando defensor, concentrado en la proteccion del peon central, a menudo se encuentra indefenso en el flanco. 22 .. J�d7 23 . .if5!

Hacer 23 . .El:e3 es demasiado len to, debido a 23 . . . 1Wa3, y la dama regresa a tiempo. Pero la textual es una jugada ejecutora, que deja a las negras sin esperanzas.

23 ... �e7 23 . . . gxf5 falla, por 24 . .El:d3 f4 25 .1Wxf4, etc.

24.�xe7 �xe7 25 . .id3 �f5 26 . .ixf5 gxf5 27.�el YMxa2 28.YMxh6!

Vaganian habia planteado una refinada trampa, que a Karpov, obviamente, no le paso

desapercibida. Despues de 28 . .El:e3 f4 29.1Wxf4 iWb1 + 30.<j;>h2 a3 3 1 ..El:g3+, seguiria 3 1 . . .1Wg6, y el peon pasado sal varia a las negras. 28 ... a3 29.YMg5+ ®f8 30.YMf6 ®gs 3t.YMxf5 YMd2 32J�e7 gf8 33.VMg4+ �h7 34J;es YMh6 35.gh5 gas 36.YMf5+ �g7 37.gxh6 ®xh6 38.YMf6+ ®h7 39.YMxti+ ®h8 40.YMxb7

Las negras se rindieron. En muchas de las partidas estudiadas hasta

ahora, hemos podido ver que la casilla de en­frente del peon central aislado se convierte en un punto fuerte para el bando contrario. A me­nudo la influencia que pueda ejercerse sobre esa casilla marca la diferencia entre el exito y el fracaso. En ese sentido, las partidas de la Francesa Tarrasch son particularmente revela­doras y merecen nuestra atencion.

Karpov - Korchnoi Match de Candidatos (43 partida)

Moscu 1 974 Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 d5 3.�d2 c5 4.exd5 exd5 5.�gf3 �c6 6 . .ib5 .id6 7.dxc5 .ixc5 8.0-0 �e7 9.�b3 .id6 10.c3

Una de las posibilidades logicas, aplicadas por Karpov en sus matches contra Korchnoi. Las blancas basan su estrategia de apertura en conseguir un total control de la fuerte casilla 11d411 • 10 ... .ig4

Una reaccion natural : Clavar el caballo, pa­ra cambiarlo encualquier momento. Las negras inician su lucha por contrarrestar la presion

PEONES AISLADOS 35

sobre Ia citada casilla "d4". l l.�bd4 0-0 12 . .ie2

En partidas posteriores del mismo match, Karpov prefirio 1 2.�a4, pero tras 1 2 . . . �h5 1 3 .�e3 �c7 1 4.h3 ctJa5 , con idea de . . . ctJc4, las negras mantuvieron el equilibria. 12 .. J:�e8 13J��el a6 14 . .ig5 h6 15 . .ih4 �b6

Tras haberse desarrollado armoniosamente, Korchnoi toma una decision correcta, al ejer­cer toda Ia presion posible sobre "d4" .

16.�b3 .ic5 17.�xb6 .ixb6 18 . .id3 Esta claro que no hay forma de que las

blancas puedan conservar su punto fuerte en "d4". 18 . . . �f8 19.a3 �xd4 20.lt)xd4 �xd4 21 .cxd4 �f5 22.f3 �xh4 23.fxg4 �g6

El panorama se ha aclarado. Las negras han logrado anular Ia presion enemiga en el cen­tro sin hacer concesiones ( comparese esta lu­cha con Ia partida Karpov - Uhlmann, Madrid 1 973). 24.g3

Con blancas, el jugador a menudo cae en un falso sentido de seguridad, que puede con­ducirle al abismo. En Iugar de asegurarse unas tablas con 24.�xg6, Karpov entra, sorpren­dentemente, en un final ventajoso para su ad­versario. 24 ... tlJe7 25 . .ifl �c6 26 . .ig2 gxel+ 27.gxel gd8 28. �f2 gd6 29.gdl �e7 30.b4 gd8 31.�e3 �d6 32.gfl f6 33.gcl gc8 34.gc5 �e7 35 . .ifl ? !

Un grave error. Se requeria 35 J�xc8, segui­do de a4. 35 ... ge8 36.�d2 f5 37 . .ie2

37 .gxf5 ctJxf5 activa el caballo, que amena­zaria entrar en juego por "e3 " . 3 7 ... fxg4 3 8 . .ixg4 g f8 39.gc2 g6 40.�e3 h5 41 . .ih3 �c6 42.gd2 b5?!

Si las negras preparasen Ia jugada .. J!e8+ con 42 . . . g5, entonces Ia defensa blanca no seria facil. 43 . .ig2 a5 44.h4 axb4 45.axb4 ge8+

Tab las. Las blancas pensaban seguir con 46. ri>f4

ctJxb4 47.ti>g5 :ge3 48.g4, etc. A veces Ia fuerte casilla situada enfrente

del peon aislado se encuentra por completo en manos del oponente. En tal caso, podemos contemplar como evoluciona con sus piezas menores y mayores a voluntad. Cuando es po­sible, sin embargo, Ia presion ejercida sobre ella puede recompensar en forma de igualdad posicional, 0 incluso mas, si las circunstancias lo permiten . . .

L. Schmid - Portisch Olimpiada de Niza 1 974

Defensa Francesa

l .e4 e6 2.d4 d5 3.�d2 c5 4.�gf3 �c6 5.exd5 exd5 6 . .ib5 .id6 7.dxc5 .ixc5 8.0-0 tlJe7 9.tlJb3 .id6 10 . .ig5 0-0 ll ..ih4

Y a hemos visto esta secuencia de jugadas. La idea es cambiar alfiles de casillas negras, con �g3 . l l. .. .ig4 12 . .ie2 ges

Una mejora, en relacion con Ia partida Kar­pov - Uhlmann, Madrid 1 973, ya comentada al comienzo de este libro.

36 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

13J�el 13 .i.g3 culminaria la planeada maniobra de

las blancas, pero entonces 1 3 . . . i.xg3 14.hxg3 W!'b6, para seguir con . . . �ad8 y . . . ctJf5 , les da a las negras un juego satisfactorio. 13 ... Wfb6 14.�fd4

14.c3 se contesta con 14 . . . ctJf5 , con pleno control de la casilla "d4", mientras que hacer 14.i.xe7 se vuelve contra las blancas, en vista de 14 . . . �xe7 1 5 .�xd5 ctJb4. 14 ... i.xe2 1SJ��xe2 i.eS

Esto tambien ha sido posible gracias a 12 . . . �e8. La presion ejercida sobre "d4" obli­gani a las blancas a abandonar el bloqueo. Portisch ha logrado resolver el problema te­matico de las Casillas centrales. 16.�xc6 �xc6 17.c3 aS

Aqui, en circunstancias algo diferentes, es­ta jugada se apodera de la iniciativa, pues 1 8 .a4 pierde, por 1 8 . . . i.xh2+. 18J!bl a4 19.�d2 WlbS 20.i.g3 i.f6

Las negras han logrado cambiar las tomas. Ahora son ellas quienes dominan el centro. 21.�xe8+ �xeS 22JW!fl WfcS 23.�el �d8

Las piezas activas no se cambian volunta­riamente. 24.a3 h6 2S.Wid3 Wfb6 26.Wfc2 WfbS 27.i.c7?!

Es mas natural 2 7. ctJ f3 . 27 ... �c8 28.i.f4?

Era indispensable 28.i.g3 . La textual pierde un peon. 28 ... �d4 29.Wfdl �e6 30.Wfg4 hS 31 .WffS ges 32)tH'3 Wfxb2 33.i.eS i.xeS 34.�xeS �d8 3S.h3 g6 36.Wfd7 �xeS 37.Wfxd8+ <lt>g7

38.gxeS Wfcl+ 39.<it>h2 Wff4+ 40.g3 WfxeS 41 .WfaS h4 42.WfcS hxg3+

Las blancas se rindieron, en vista de que a 43 .fxg3 , sigue 43 . . . b6, etc.

Portisch exhibio con maestria otro motivo, en su tentativa por controlar el peon central aislado y mantener el equilibria posicional. Muy a menudo, sin embargo, el bando que juega contra el peon central aislado puede re­currir a soluciones tacticas, trastocando los planes estandar de su oponente y comprome­tiendo la disposicion de sus fuerzas. Vale la pena dedicarle una reflexion a los aconteci­mientos que se produjeron en las siguientes partidas . . .

Botvinnik - Euwe Hastings 1 934-35

Defensa Caro-Kann

l.c4 c6 2.e4 dS 3.exdS cxdS 4.d4 �f6 S.�c3 �c6 6.i.gS e6 7.�f3 dxc4

En pocas jugadas, la partida ha pasado de una apertura a otra. El jugador debe mante­nerse constantemente alerta ante estas posibi­lidades. Veremos en que medida fue correcta la decision de Euwe. 8.i.xc4 i.e7 9.0-0 0-0 lO.gcl

Decadas en la pnictica de los Grandes Maestros nos han ensefiado que la torre de "c 1 II es poco util a las blancas. Hoy se prefiere la continuacion 1 0.a3 , preparando �d3, �ad l y �fe 1 . Por otro lado, en e l Gambito de Dama Aceptado el alfil queda mal situado en "g5" . Deberia estar en "e3" , haciendo posible ctJe5 .

PEONES AISLADOS 37

Al trasponer de una variante a otra, las negras estuvieron mas acertadas. 10 ... a6

Una buena replica. La planeada . . . b5, se­guido del fianchetto del alfil dama, correspon­de con la estrategia general de bloqueo del centro. ll .J.d3 h6

La jugada precedente de las blancas no im­pidi6 l l . . .b5, porque despues de 1 2.ttJxb5 axb5 13 . .B:xc6 ib7, las negras toman en "a2" . Por consiguiente, esa era la opci6n mas simple para las negras. 12 . .ie3

Hemos llegado a una fase critica de la par­tida. Las blancas podrian elegir tambien la jugada 12 .ih4, con idea de crear amenazas con ib 1 y Wf d3 , como hemos visto en buen numero de partidas. 12 .. .ltJb4 13 . .ibl b5 14.tLle5 .ib7 15.YMd2 �e8

La apertura ha concluido, y las negras han conseguido sus objetivos estrategicos. Domi­nan "d5" , y el peon "d4" se ha convertido en una potencial debilidad. 16.f4? !

Dado que en comparaci6n con la victoria de Botvinnik sobre Vidmar las posibilidades de ataques estan considerablemente reducidas, era una opci6n mas saludable la mas mode­rada 16.f3. 16 ... tLlbd5 17.tLlxd5 Dxd5 18.f5

18 . . . .id6! Jugada muy fuerte. El punto "e5 " es vulne­

rable. 19.fxe6 �xe6 20 . .if5

Las blancas no pueden contemplar 20.ttJf3 .B:ae8, ni 20.if4 ixe5. 20 ... �e7 21..ih3 J.xe5 22.dxe5 Dxe5 23 . .if4 Dd5 24.Wfxd5

En sus calculos previos, las blancas consi­deraron el sacrificio 24.ixh6 gxh6 25 .Wfxh6, pero tuvieron que renunciar a la idea, porque ahora las negras seguirian con 25 . . . .B:e2. 24 ... tLlxd5 25 . .id2 gae8 26.b3 �e2

Las negras han ganado el duelo te6rico y se disponen a transformar en victoria su ventaja material. 27.gf2 tLlf6 28.J.a5 �xf2 29.®xf2 tLle4+ 30.®fl tLlg5 31 ..id7

3 1 .ig4 ofrece mayor resistencia. 31 ... ge7 32.J.f5 �e5 33 . .ibl .ie4

Euwe utiliza su ventaja de modo ejemplar. jObservese la maniobra . . . ttJf6-e4-g5 ! 34.J.xe4 tLl xe4 35.�c6

Mas preciso era 35 . .B:c8+, seguido de ie l , a fin de impedir Ia penetraci6n de la torre. 35 ... �f5+ 36.®el �f2 37.a4 gxg2 38.�xa6

Despues de 38 .ic7, se requiere alguna con­centraci6n. Lo correcto es 38 .. J�b2, pero no 38 . . . bxa4 39.bxa4 .B:a2 40.a5 (no 40 . .B:xa6? El:al+). 38 .. . bxa4 39bxa4 gxh2 40.�a8+ ®h7 41..ib6 �a2 42.a5 h5 43.a6 h4 44.a7 h3 45.i.gl tLlf6 46.®dl tLlg4 47�e8 h2 48.J.xh2 �xa7 49 . .ib8 �a8 50.�d8 tLle5 51..ic7 �xd8+ 52 . .ixd8 ®g6 53.®e2 ®rs 54.®e3 ®g4 55.J.c7 tLlf3 56.®f2 f5

Las blancas se rindieron. La fuerza del caballo centralizado de "e5 "

3 8 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES E N AJEDREZ

depende del peon "d4", y viceversa. Ambos triunfan o fracasan a la vez.

Otra partida de los afios treinta tambien constituye una pequefia leccion de juego tac­tico en la misma variante . . .

Hasenfuss - Flohr Kemeri 1 937

Defensa Caro-Kann

l.e4 c6 2.d4 d5 3.exd5 cxd5 4.c4 �f6 5.�c3 �c6 6 . .ig5 e6 7.�0 dxc4 8 . .ixc4 .ie7 9.0-0 0-0 lOJ�cl a6 l l .a3

La famosa Radio Erevan diria: "Las blan­cas jugaron bien. El (mico problema es que situaron sus piezas en el lugar erroneo y en el momenta inoportuno" . ll. . . b5 12 . .ia2 .ib7 13.V9d3 �d5

14.�e4? A las blancas les gustaria explotar la seduc­

tora debilidad de "c5 ", pero no les agradaba 14.ixe7 tDcxe7 1 5 .!iJe4 a causa de 1 5 . . . !iJf4. Por otra parte, 1 4.!iJxd5 .ixg5 o 14 . .ib1 f5 , cuando la casilla "e4" es inalcanzable, tampa­co eran posibilidades atractivas. Estas consi­deraciones deben haber llevado a Hasenfuss a dar un paso en falso. Mirando la posicion ob­jetivamente, lo correcto parece 14 . .ixd5, con lo que o hay ventaja o no la hay, pero no puede forzarse la posicion. El castigo es inme­diato . . . 14 ... �cb4! 15.VNbl

Tomar en "b4" costaria un peon. 15 ... �xa2 16.VNxa2 i.xg5 17.�exg5 h6 18.�e4 �f4 19.E:cel .idS 20.b3 f5 21.�ed2

2t . .. VNf6 22.®ht Jugado en prevision de . . . Wfg6.

22 ... :Sac8 23.VNbl No servia 23 .:gc 1 , por 23 . . . Wfg6 24.g3 Wg4.

23 ... �xg2 24.®xg2 VNg5+ 25.®hl V9xd2 26.:Se3 Wxd4

Las blancas se rindieron.

Szabo - Petrosian Bamberg 1 968

Defensa Nimzoindia

l.d4 �f6 2.c4 e6 3.tLlc3 .ib4 4.e3 0-0 5 . .id3 d5 6.�0 c5 7.0-0 tLlc6 8.a3 cxd4 9.exd4 dxc4 10 . .ixc4 .ie7

Confrontado a 8 .a3 , Petrosian ha elegido una continuacion arriesgada. Y a hemos exa­minado posiciones similares en algunas parti­das, y la comparacion le resultara util al lector. l l.:Sel .id7 12 . .ia2

Una retirada logica. En "a2" el alfil no pue­de ser atacado con . . . tD a5 , y puede pasar de inmediato a la otra diagonal importante, es decir, "b 1 -h7" . 12 . . . :Sc8 13.VNd3 :Se8 14.tlJe5

En este punto mejor parece desarrollar el flanco de dama. 14 ... g6 15 . .ig5

Parece preferible 1 5 . .ih6.

15 ... tlJh5! Las negras eligen el momenta apropiado

para realizar esta jugada. Las blancas han fi­nalizado sus preparativos para la ruptura en el centro, pero las negras consiguen atenuar la presion. Su jugada nos recuerda la reaccion de

PEONES AISLADOS 39

Karpov en una de sus partidas de match contra Korchnoi, ya comentada. Esta jugada simplifi­cadora es caracteristica de muchas posiciones del Gambito de Dama, y vale la pena recor­darla. 16 . .ixe7 V!ixe7 17.ttlc4

En caso de 17 .d5 , sigue 1 7 . . . lt:Jxe5 1 8 J:�xe5 V!i d6, con juego igualado, pero 17 .E!ad 1 pro­duce mejor impresion que la poco natural ju­gada del texto. 17 ... b5!

Puesto que a 1 8 .ltJxb5 se replica 18 . . . ltJb4, el repentino avance del peon "b" neutraliza el inminente peligro de la ruptura. 18.ttle3 b4 19.ttle4 ttlf6

Petrosian no deja escapar ni una sola opor­tunidad: el cambio de caballos aliviani sus dificultades en el centro. 20.ttlc4 gcd8 21 .ttlxf6+?

2 1 .ltJed6 habria sido mas molesto para las negras. En general, los cambios ayudan al bando que carece de espacio. 21. .. V!ixf6 22.ttld6 �e7

Observaciones generales

Esto mantiene la torre en juego. 23.�adl .ie8 24.ttlxe8

No es mejor 24.ltJe4, en vista de 24 . . . Wfg7. 24 .. J3exe8

La niebla se ha disipado. El peon aislado si­gue estando bajo presion y no puede moverse. 25.V!ia6 ttlxd4 26.V!ixa7

26.axb4 ltJc2 27.%!xd8 E!xd8 28 .E!fl ltJxb4 29.1Wxa7 Wfxb2 30 . .ic4 E!c8 no es ningun ali­vio para las blancas. 26 ... b3 27 . .ibl ttlc2 28J�xd8 gxd8 29.�fl

29 ... V!ixb2 Defendiendo habilmente una posicion pa­

siva y explotando algunas pequefias incohe­rencias de las blancas, Petrosian ha vuelto la posicion en su favor. El peon pasado avan­zado le garantiza la victoria. 30.�b6 gds 31.a4 �c3 32.h3 ®g7 33.g3 �aS 34.b4 gxa4 35.h5 gxh5 36.�d8 h6

Las blancas se rindieron. La maestria defensiva exhibida por Petro­

sian en esta partida justifica el analisis en de­talle de la misma.

Al estudiar esta corta seleccion de partidas, hemos aprendido que el peon central aislado tiene una vida incierta. El centro caracterizado por un peon de ese tipo requiere, por consiguiente, una sobria evaluacion y el tratamiento mas preciso. La posicion es tan sensible que hasta los mas pe­quefios errores -que pueden ser imperceptibles al ojo inexperto- pueden causar graves dificul­tades. Al mismo tiempo, el lector debe ser consciente del hecho de que todas estas situaciones centrales, por similares que parezcan, son diferentes. Un avance de peon lateral o una pieza si­tuada en una distinta casilla pueden cambiarlo todo. Las reglas estrictas, siempre vigentes, acerca

40 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

de como jugar estas posiciones, no existen, por muchos ejemplos que examinemos. No obstante, el lector debe haber percibido que pueden aplicarse ciertas directrices generales,

que cubren un amplio numero de casos. Estas reglas generales son las unicas guias de que dis­ponemos. Si las asimilamos estudiando casos tipicos, si son fruto de un trabajo analitico, tanto mejor. De modo que para formular algun consejo general en que confiar, debemos comenzar por observaciones sencillas y pnicticas.

Al estudiar este tema, pronto nos damos cuenta de que existen dos tipos de peones centrales aislados: uno movil y agresivo; el otro, inmovil, controlado y bloqueado. Estas categorias se tra­ducen en situaciones muy diferentes.

Si la ruptura es posible, por lo general libera una considerable cantidad de energia, que se ma­nifiesta en varios casos tipicos:

a) Ataque al enroque enemigo, ejecutado mediante amenazas directas, combinadas, sobre las diagonales "b l -h7" y "a2-g8", y a menudo apoyado por amenazas sobre la columna "e" abierta.

b) Penetracion del caballo rey, propiciada por el avance del peon aislado. c) Transformacion de la iniciativa en una pieza fuerte, centralizada y activa. d) Transformacion de la iniciativa en un mejor final. En todos estos casos, y los resultados no dejan lugar a duda, el bando que prepara y realiza

con exito la ruptura central consigue un porcentaje muy alto de victorias. La conclusion es evidente : un peon central aislado debe ser bloqueado.

Hemos visto que se requiere paciencia, precision en el orden de jugadas y, a veces, tambien agudeza si queremos tener exito. Las medidas contra un peon central aislado se concentran en el absoluto dominio de la casilla delantera del peon. Si se alcanza ese equilibria de fuerzas en el centro, el bando con el peon aislado creani actividad basada en sus piezas moviles. En primer lugar, con un caballo dominante centralizado, apoyado por el peon, o bien con una maniobra de torre por la tercera fila, junto con la presion que ejercen los alfiles sobre las diagonales que llevan hasta el rey contrario enrocado. Notese, sin embargo, que tal actividad no surge por si sola. Por lo general, es el fruto de un mejor desarrollo, ventaja espacial y piezas activamente situadas.

El bando que lucha contra un peon aislado, por el contrario, debe tratar de simplificar la posicion mediante cambios, asegun1ndose de que no sea posible la ruptura central. Es imperativo un incuestionable dominio de la casilla delantera del peon.

Teniendo en cuenta todo esto, nunca se repetinin lo bastante estas dos maximas: 1) El ban do con el peon central aislado debe conservar las piezas, no cambiarlas a la ligera,

porque un peon aislado necesita mucha compafiia. Al mismo tiempo, debe mantenerse alerta a todos los posibles golpes tacticos derivados de la ruptura, aun a costa de algun sacrificio.

2) El bando que lucha contra el peon aislado debe tratar de bloquearlo, concentrando sus esfuerzos en dominar la casilla de enfrente del peon, reducir el material (la mayoria de los cam­bios son bienvenidos) y tratar de alcanzar un final, porque esta fase no es un habitat natural para el peon central aislado, y porque en los finales, como regia general, se convierte en un objetivo inmovil y, por tanto, fragil.

Por ultimo, sea con blancas o con negras, al jugar una posicion caracterizada por la existencia de un peon central aislado, en cada tumo debe plantearse una pregunta esencial : (.puede el peon avanzar o no? La siguiente pregunta es: (.que puedo hacer para preparar el avance? 0 a la inversa: (.que debo hacer para que el avance resulte inocuo?

En una partida de este tipo el resultado dependera en gran parte de la seriedad con que se plantee estas preguntas y la eficacia con que sepa responderlas.

PEONES AISLADOS 4 1

2 Pares de peones colgantes y semicolgantes

Una vez estudiados los peones centrales aislados, pasamos a un nuevo tema. Examinaremos en este capitulo un par de peones centrales, que no tienen el apoyo de peones en las columnas veci­nas. Surgen normalmente como consecuencia de dos cambios de peones en el centro o, muy a menudo, como descendientes de un peon central aislado, tras un cambio en ' Ia columna vecina. Solo se requiere una jugada para que un peon central aislado se convierta en un par ( o pareja) de peones semicolgantes, y un paso mas para que se produzca lo que llamamos peones colgantes, es decir, un par de peones en Ia cuarta fila ( o en Ia quinta, si se trata de peones negros ). AI ser pa­rientes tan cercanos, heredan y comparten algunas cualidades similares. En primer Iugar, dedi­caremos nuestra atencion a los peones semicolgantes.

Aqui tenemos uno de los casos tipicos de un par de peones semicolgantes. En "d5" vivia un peon central aislado, y un cambio en "c6" vinculo al segundo peon en un destino comun. Lo primero que se observa en el diagrama es el agujero de "c5 ", y un ojo experto lo asocia de inmediato con su potencial debilidad.

Por el contrario, si el peon de "c6" avanza a "c5" , tenemos posicion que sigue.

Ver el diagrama siguiente

La diferencia es pequefia, solo un detalle en Ia formacion de peones negros, y sin embargo lo asociamos de inmediato con un agresivo avance en el centro. Las siguientes partidas

confirmaran nuestra primera impresion, ofre­ciendo algunas respuestas basicas.

Rubinstein - Salwe Lodz 1 908

Gambito de Dama

l.d4 d5 2.c4 e6 3.�c3 c5 4.cxd5 exd5 5.�13 �c6 6.g3 �f6 7.J.g2

Debido sobre todo al entusiasmo de su in­ventor, el Dr. Tarrasch, algunos problemas cruciales de esta sensible variante fueron re­sueltos a comienzos del siglo XX, pero aun no se habian entendido algunos matices en Ia epoca en que se jugo esta partida. La presion sobre el peon "d5" , propiciada por el fian­chetto del alfil rey blanco, es, obviamente, un

42 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

factor importante en la posicion. Hoy lo sabe­mos y lo tenemos en cuenta. La modema linea principal sigue asi : 7 . . . Jie7 8.0-0 0-0 9 .Jig5, y solo entonces ceden las negras el centro, con 9 . . . cxd4. Salwe lo cede prematuramente. 7 ... exd4?! S.lLJxd4 YNb6

Al ejercer presion sobre "d4" en un mo­mento en que las blancas no pueden fortificar este punto, las negra provocan ltJxc6, en cu­yo caso el peon "d5" dejani de ser aislado. Parece una decision logica, pero pronto vere­mos cuales son las contrapartidas. 9.tLlxe6 bxe6 10.0-0 i.e7 l l.tLla4!

Las negras han logrado unir sus dos peones centrales, pero a costa de tiempo y desarrollo, pues a(m tienen que enrocar y la casilla "c5 " es debil. Las blancas concentran sus fuerzas precisamente sobre esta casilla. Desde "a4", el caballo controla "c5" y defiende el peon "b2", haciendo posible una mayor presion sobre "c5" , con iie3 y a lo largo de la columna "c". 11. . . YNb5 12..ie3 0-0 13J�el Jig4

A primera vista, esta es una jugada normal de desarrollo, pero una mirada mas detenida permite ver que' facilita al blanco una presion rapida y concentrada sobre la columna "c" . 14.f3

Fea jugada, pero solo hasta que comprende­mos su verdadero proposito. Y a aqui tenia in mente Rubinstein la maniobra gf2-c2, que fi­jara definitivamente los peones semicolgantes "c6-d5" , condenandolos a una total pasividad. 14 ... i.e6 15 . .ie5

Si disponemos de una casilla fuerte, es util cambiar las piezas que la defienden. Tales cam-

bios acentuaran la debilidad de dicha casilla. 15 • . J!feS 16JH'2 tLld7 17.i.xe7 gxe7 1S.YNd4

Desaparecidos los alfiles de casillas negras, las negras tratan de cubrir la debilidad con su caballo, pero la poderosa dama centralizada refuerza el dominio de las blancas sobre la ca­silla critic a "c5 " . lS .. J:!:eeS

En caso de 1 8 .. J�c8, las blancas, natural­mente, no capturarian codiciosamente el peon, con 1 9.'1Wxa7, porque 1 9 . . . c5 cambiaria el pa­norama en su contra. Pero la tranquila 1 9. ltJ c5 impediria todo esfuerzo de las negras por li­berar su juego. 19 . .ifl geeS 20.e3 YNb7 21.�e5 �xeS 22.gxe5

De modo que las piezas menores han desa­parecido del tablero y el bloqueo sobre casi­llas negras se va haciendo mas y mas fuerte. 22 .. J�e7 23.gfe2 YNb6 24.b4

La amenaza b5 provocara otra debilidad, despues de 24 . . . a6. Esto nos ofrece otra im­portante leccion: los peones en tomo a casillas debiles se vuelven debiles y vulnerables, a medida que pasa el tiempo y las debilidades se multiplican. Precisamente a este implacable proceso le debemos numerosas victorias, gra­cias a las casillas debiles. 24 ... a6 25.gas gbs

Tras el cambio en "d4", caera un peon. 26.a3 ga7 27.gxe6

Por fin, la ventaja espacial de las blancas se convierte en una tangible ventaja material. 27 ... YNxe6 2S.Y9xa7 gas 29.YNe5 YNb7 30.<i>fl h5 31 .i.e2 g6 32.YNd6 YNes 33.ges YNb7 34.h4

PARES DE PEONES COLGANTES Y SEMICOLGANTES 43

34 . . . a5 35J�c7 �b8 36.b5 a4 37.b6 gas 38.b7 Las negras se rindieron. En su simplicidad, una partida magnifica

para analizar y aprender de ella. Una pareja de peones centrales semicolgantes, una vez blo­queada con firmeza, muestra Ia misma debili­dad que hemos descubierto en el peon central aislado, cuando este no puede avanzar, y en ultima instancia cae en una desesperante pasi­vidad en los finales resultantes.

Balashov - Dreev Copa de Rusia Samara 1 998

Defensa Caro-Kann

l.c4 c6 2.e4 d5 3.exd5 ltJf6 4.ltJc3 cxd5 5.cxd5 �xd5 6.�f3 ltJxc3 7.bxc3 g6 8.d4

Aqui tenemos Ia formacion de peones de Ia partida anterior, pero reflejada en un espejo. Nuestro par de peones semicolgantes se en­cuentra en "c3" y "d4" , mientras que la pre­sion de las negras procede del alfil de su color y se ejerce en la semiabierta columna "c". 8 .. . �g7 9.�d3 ltJc6 10.0-0 0-0 l l .�e4

En un par de movimientos este alfil re­gresani a "d3" , produciendo Ia impresion de un juego sin sentido. Una altemativa legitima era l l .:ge 1 , pero poco cambiaria los hechos basicos, pues la presion sobre Ia pareja de peones semicolgantes seguiria siendo fuerte, y es dificil imaginar como podria mejorarse su situacion. Al mismo tiempo, el plan de las ne­gras es evidente, y el Gran Maestro Dreev lo ejecuta gradualmente en pocas jugadas . . . ll . .. �d7 12.ge1 gcs 13.�g5 ges

14.gcl?! Un momento critico. Las negras tocan a re­

tirada, con escasas perspectivas ante un final, con el fardo de tres islotes de peones, de los cuales el central quedara expuesto a una per­manente presion. Yo preferiria la mas activa 14.d5 ltJa5 1 5 .d6, aunque despues de 1 5 . . . if6 1 6.ixf6 exf6, el peon pasado blanco queda bien bloqueado. Pero con 1 7.id5, el juego precedente de las blancas tendria cierto sen­tido. 14 ... ltJa5 15.�d3 �c4 16.�b3

Las blancas siguen contemplando la degra­dacion progresiva de su posicion. Es cierto que 1 6."1We2 no es muy atractiva, en vista de 1 6 . . . ie6, pero parece indispensable 1 6.ixc4 :gxc4 1 7 .ltJe5. La textual permite a Dreev se­guir asfixiando a su oponente. 16 ... b5 17.�xc4 gxc4 18.ltJd2

Ahora, 1 8 .ltJe5 ixe5 1 9.dxe5 expone el rey blanco al ataque, tras 1 9 . . . :gg4. 18 ... ga4 19.�e4 ic6 20J�cdl?

La enfermedad se ha extendido a las casi­llas blancas y no es facil recomendar un plan efectivo. Solo podemos observar que Ia tex­tual es un error evidente, que pierde material . 20.ltJc5 :gc4 2 1 .f3 ofrece resistencia, aunque en circunstancias adversas. 20 ... �d5! 21.�bl

2 1 .�xb5 pierde, por 2 1 . . .:ga5 . 21..J�xa2

La perdida de material es el castigo por el pasivo esquema adoptado por las blancas en el centro y su visible falta de iniciativa. 22.ltJc5 a6 23.ltJd3 ga4 24.ltJb4 .ib7 25.f3

44 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

25 ... YMc7 26.YMb3 e6 27J�al gcs 28.i.d2 gxal 29.gxal YMd6 30.i.e3 e5 3l .gdl exd4 32.i.xd4 i.xd4+ 33.gxd4 YMcs 34.tlJa2 ges 3S.Y;Ydt aS 36.YMd2 i>g7 37.tlJcl i.dS 38.t2Jd3 Y;Yb6 39.h4 h5 40.i>h2 i.c4 41.tlJf4 a4 42.YMf2 Y;Yr6

Las blancas se rindieron.

No es un caso raro que el bando con la pa­reja de peones semicolgantes caiga en situa­cion desventajosa, a causa de la debilidad la­tente de los peones. Sin embargo, una de las cuestiones clave es si el peon retrasado puede o no avanzar, a fin de que la pareja se con­vierta en peones colgantes, pues de ser asi los peones reciben una inyeccion de movilidad y fuerza. Veamos Ia siguiente partida.

Reshevsky - Donner Santa Monica 1 966 Defensa Nimzoindia

l.d4 tlJf6 2.c4 e6 3.tlJc3 i.b4 4.e3 c5 5.i.d3 d5 6.tlJf3 0-0 7.0-0 dxc4 8.i.xc4 tlJbd7

Por entonces tambien se investigaba inten­samente 8 . . . lt:Jc6 9.a3 ia5, pero prevalecio Ia impresion de que era mas preciso desarrollar el caballo por "d7" . 9.id3

En caso de 9.a3 cxd4 1 0.exd4 ixc3, se­guido de .. Yrflc7, las negras ejercerian presion sobre la columna "c", que Ia textual evita. En afios posteriores, sin embargo, se hizo mas po­pular 9.�e2, seguido de �d l . 9 ... b6

Si 9 . . . a6, entonces 1 0.a3 ia5 l l .�e2, y las blancas pueden responder a l l . . .b5 con 1 2.b4. 10.a3 cxd4

Despues de 1 0 . . . ixc3 l l .bxc3 ib7 1 2 .�e l ie4, las blancas evitan el cambio con 1 3 .ifl , planeando lt:Jd2. ll.exd4 i.xc3 12.bxc3 i.b7 13.gel YMc7 14.id2

Antes de jugar c4, Reshevsky quiere pre­parar minuciosamente el avance. La fase de Ia apertura se ha caracterizado por la atencion que ambos jugadores han prestado a la pareja de peones semicolgantes.

14 ... gfe8 15.YMe2 gac8 16.gacl i.dS Puesto que sera dificil organizar ninguna

presion significativa sobre los peones col­gantes, provocar su creacion constituye una perdida de tiempo. 17.c4 i.b7

AI jugar 1 6 . . . id5 , quiza Donner proyectaba 1 7 . . . ixf3 1 8 .�xf3 e5 1 9.d5 lt:Jc5, pero luego entendio que 20.if5 , seguido de �c3 y ig5, era desagradable para las negras . Cualquiera que fuese el caso, Reshevsky ha logrado aquello con que Salwe y Balashov solo podian sofiar. Bien apoyado por numerosas piezas (entre elias la pareja de alfiles ), el par de peo­nes semicolgantes paraliticos se ha metamos­foseado en un par de agresivos peones colgan­tes . De ahora en adelante, las negras viviran bajo una constante preocupacion. Lo mismo que su padre, el peon central aislado, estos peo­nes de la cuarta fila estan dispuestos a atacar en el momento propicio. Ademas de las arne-

PARES DE PEONES COLGANTES Y SEMICOLGANTES 45

nazas reales que plantean, tambien son una amenaza psicologica. 18.a4 �c6

Parece mas natural 1 8 ... h6. La idea de to­mar el peon de "a2" es excentrica. 19.i.f4 �xa4 20J�al �c6 21 J'�xa7 E:a8 22.E:xa8 E:xa8 23.h3

Una modesta, pero util jugada. Las negras deberian responder tomando medidas, por ejemplo, 23 . . . h6. En Iugar de ello, deciden ju­gar "activamente" y caen bajo un fuerte ata­que. 23 ... E:a3?

24.d5! El motivo que justifica Ia ruptura es la

debilidad de Ia ultima fila. Ahora van a suce­der acontecimientos decisivos, con la torre de "a3 " como mera observadora. No hay que des­cuidar nunca esta constante amenaza del avan­ce, siempre que nos enfrentemos a dos chicos malos en Ia cuarta fila. 24 ... exd5 25.cxd5 �xd5

25 . . . ctJxd5? pierde, por 26.i.b5, o bien 26.'!Mfe8+ ctJf8 27.j,xh7+. Recuerde que cuan­do Ia posicion se abre hay, por lo general, al­gunas diagonales por las que el bando activo puede atacar. 26.i.c4 �c5 27.i.xfi+! �xfi 28.�e6+ �g6 29.i.d6

Las blancas tenian una forma mas simple de ganar: 29.ctJh4+ �h5 30.El:e5+! '!Mfxe5 3 1 ..ixe5 �xh4 32.j,xf6+ ctJxf6 33 .'!Mfe7. 29 ... �a5?!

Las negras podian ofrecer mayor resisten­cia con 29 . . . '!Mfc3, aunque las blancas ganan de

todos modos, con juego preciso. Despues de 30.CDh4+ �h5 3 1 .CDf5 (amenazando 32.Wf7+ g6 33 .g4+ CDxg4 34.'1Mfxh7+, con mate), las negras tienen que jugar 3 1 . . . El:a4, con pieza de ventaja, pero su rey esta indefenso en terri­torio enemigo. Ahora puede seguir:

a) 32.CDxg7+ �g6 33 .Wf5+ (33 .El:e3 Wxe3 no cambia gran cosa) es una tentativa directa por rematar rapidamente a las negras, que da resultado en caso de 33 . . . �xg7 34.Wg5+ �h8 35 .El:e7 CDg8 36.j,e5+, pero las negras pueden responder 33 . . . �h6, y 34.E!:e5 es insuficiente, por 34 . . . '!Mfc l + 35 .�h2 Wf�+. Consuela saber que es posible 34.CDe6, y las negras no tienen nada mejor que 34 . . . '!Mfxe l + 35 .�h2 '!Mfxe6 (no, por supuesto, 35 . . . El:a5??, por 36.j,f4++), con una dudosa posicion, pese a las envidia­bles reservas materiales de las negras.

Sin embargo, una vez que el rey se ha inter­nado en posicion tan peligrosa, no estamos dispuestos a dejarlo escapar . . .

b) 32.El:e3 ! parece ganar.

Pero 32 . . . '1Mfc l + 33 .�h2 g6 ofrece nuevas barreras. 34.f3 se para con 34 . . . Wc2, 34.j,e7 con 34 . . . '!Mfc6, y 34.f4 '!Mfc2 (34 . . . j,xg2?? 35 .CDg3+ �h4 36.ie7 '!Mfc6 37.Wg4++) dista de estar claro. Afortunadamente, 34.CDg3+ �h4 (34 . . . �g5 pierde, debido a 35 .f4+ �h4 36.CDf5+, y 34 . . . �h6 por 35 .j,f8+ CDxf8 36.Wxf6) 35 .E!:e5 mantiene al rey expuesto. Si, entonces, 35 . . . CDxe5 (35 .. . Wc6 36.CDe4 fuerza el mate; 35 . . . El:al pierde, debido a 36.CDfl ), el blanco tiene varias formas de ganar: 36.j,xe5 CDd5 37.id6 ! , amenazando ie7+ y CDe4, o

46 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

bien 36.'!Mxf6+ '!Mg5 37.'!Mg7, y las negras no pueden parar todas las amenazas. 30.�e5+ �xe5 31J�xe5 gal+ 32.c;t>h2 Wfa8 33.Wff5+ <;t>n 34.ge7+ c;t>gs 35.J.e5

Tras una impresionante secuencia de juga­das forzadas, el rey negro es arrinconado, sin escapatoria posible. Si 35 . . . '!Mf8, las blancas ganan con 36.'!Me6+ Wh8 37.ixf6, etc. 35 ... gel 36J�xg7+

Las negras se rindieron. La partida es una magnifica leccion acerca

de la diferencia entre el par de peones semi­colgantes y sus parientes, los peones colgan­tes. Las partidas que siguen reforzanin esta primera impresion.

Gligoric - Keres Match Yugoslavia - URSS

Zagreb 1948 Defensa Nimzoindia

l.d4 �f6 2.c4 e6 3.�c3 .ib4 4.e3 c5 5 . .id3 b6 6.�f3 .ib7 7.0-0 0-0 8 . .id2

No es muy logico 8 .a3 , en vista de la sim­ple 8 . . . ixc3 9.bxc3 ie4.

La textual tiene en cuenta la tentativa de simplificacion 8 . . . ixc3 9.ixc3 lt:Je4, y Oligo­ric pensaba responder 1 o .ixe4 ixe4 1 1 .dxc5 bxc5 12.'!Md6. Sin embargo, las negras tienen a su disposicion mejores respuestas, de modo que en afios posteriores, las preferencias se decantaron por 8. ltJ a4. 8 ... cxd4

8 . . . d6 es una importante altemativa. 9.exd4 d5 10.cxd5

10 . . . .ixc3?! Es posible 1 0 . . . lt:Jxd5, manteniendo abierta

la gran diagonal "h1 -a8", porque 1 1 .lt:Jxd5 ixd2 1 2.lt:Jxb6 axb6 no es, obviamente, hue­no para las blancas. l l.bxc3 tixd5

1 1 . . .exd5 12.ig5 tiene sus inconvenientes para las negras, pero la textual plantea el caso tipico de dos peones semicolgantes que se convierten de inmediato en peones colgantes. 12.c4 Wfd6 13.ic3 tLlbd7

13 . . . lt:Jg4 obviamente falla ante 14.ixh7+, de modo que las negras deben optar por ju­gadas rutinarias de desarrollo. 14J�el gac8 15.h3 gfd8 16.ge3 tlJh5?

En la primera partida del mismo encuentro, Keres hizo 16 . . . h6, una jug ada sin duda util y apropiada en tales posiciones. Esta vez, sin embargo, las negras no fueron prudentes . 17.d5!

Las blancas pueden atacar, antes de que el caballo llegue a la casilla "f4" . El golpe tacti­co se basa en 1 7 . . . exd5 1 8.lt:Jd4, y el caballo aprovecha el avance del peon (un motivo que se repite a menudo en posiciones con peon central aislado ). Al mismo tiempo, el a vance libera la gran fuerza de los alfiles blancos ha­cia el rey negro, creando to do tipo de amenazas. 17 ... tlJc5 18.tLlg5 g6 19 . .ie2 tlJg7 20.tid4

Ahora es el tumo de la dama para emplear la fuerte casilla "d4" . La defensa del rey, ba­sada en la pareja de caballos de "d7" y "f6", ha sido desordenada. El dominio de las blancas de la gran diagonal "a1 -h8" hace vaticinar un rapido colapso.

PARES DE PEONES COLGANTES Y SEMICOLGANTES 47

20 ... �f8 21.�h4 h5 22 . .ig4! Se diria que era Keres quien estaba ata­

cando . . . 22 ... f5 23.lLJxe6 lLJgxe6 24.dxe6 !!e8 25 . .ixh5 �h6 26.�f6 f4 27.�f7++

Esta partida de nuevo ilustra el caso de un par de peones semicolgantes moviles, que consiguen avanzar antes de que el rival pueda organizar un bloqueo. En la mayoria de los casos, sin embargo, los peones colgantes sur­gen como consecuencia de un doble cambio de peones en el centro.

Nimzovich - Tarrasch San Petersburgo 1 9 1 4

Gambito de Dama

l.d4 d5 2.lLJf3 c5 3.c4 e6 4.e3 lLJf6 5 . .id3 Un orden de jugadas un tanto inusual, que

las negras podrian explotar con 5 . . . dxc4, ga­nando un tiempo sobre una version del Gam­bito de Dama Aceptado. 5 ... lLJc6 6.0-0 .id6 7.b3 0-0 8 . .ib2 b6 9.lLJbd2 .ib7 10J�cl

La posicion guarda reminiscencias de una variante de la India de Dama, con la diferencia de que el caballo negro esta situado mas acti­vamente en "c6" (en lugar de "d7"), y que el alfil de casillas negras se encuentra en el lugar adecuado, haciendo posible .. .'W.e7. 10 ... �e7 l l .cxd5 exd5 12.lLJh4

Las blancas invierten tiempo en provocar un debilitamiento en el enroque negro. Una temprana inversion en este caso, porque las perspectivas de cualquier accion en la dia­gonal "a1-h8" siguen estando en el reino de los suefios. 12 ... g6 13.lLJhf3 !!adS 14.dxc5? bxc5

Ver el diagrama siguiente

Asi pues, en el momento en que la partida pasa de la apertura al medio juego, ha surgido un par de peones colgantes en la quinta fila. Podemos decir que, en principio, la creacion de tales peones solo tiene sentido cuando se puede presionar sobre ellos de tal forma que su potencial dinamico no pueda explotarse. En esta partida, Nimzovich no ha creado estas

condiciones y su estrategia de apertura debe considerarse deficiente. 14.dxc5 fue un error considerable.

. 15 . .ib5 lLJe4 16 . .ixc6 .ixc6 17.�c2 lLJxd2 18.lLJxd2

Quiza las blancas tenian algunas ilusiones acerca de explotar la gran diagonal "a1 -h8", pero el curso dramatico de la partida demues­tra que su concepcion fue desastrosa . 18 ... d4!

Ademas de cerrar la gran diagonal al alfil de "b2", las negras abren diagonales para sus alfiles. Ahora presenciaremos un mecanismo efectivo de los peones colgantes en accion. 19.exd4?

La precaucion natural sugiere 1 9 .e4, pero las blancas decidieron erroneamente aceptar el desafio. 19 ... .ixh2+!

19 . . . ixg2 20.@xg2 'W'g5+ tambien es efec­tivo.

48 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

20.�xh2 YNh4+ 21.®g1

21. .. �xg2! Los expertos deben haber dicho que es algo

"deja vu" (ya visto ), recordando la combina­ci6n de Lasker de un cuarto de siglo antes, pero esta combinaci6n contiene detalles origi­nates. 22.f3

22.@xg2 no da resultado, por 22 . . . 'l!Mg4+ 23 .@h2 �d5 24.'l!Mxc5 �h5+ 25 .'l!Mxh5 'l!Mxh5+ 26.@g2 'l!Mg5+, y el caballo cae. 22 .. JUe8

Las negras defienden indirectamente el al­fil, y amenazan hacer . . . �e2, que no puede pa­rarse con 23 .'l!Md3, debido a 23 . . . 'l!Mg3 24.ctJe4 �xe4. 23.�e4 YNh1+ 24.®f2 �xfl 25.d5

El ultimo intento desesperado. 25 .�xfl obviamente pierde la dama, mientras que 25.ctJf6+ @f8 26.ctJxe8 �xe8 no consigue nada. 25 ... f5 26.YNc3 YNg2+ 27.®e3 gxe4+

El golpe final. 28.fxe4 f4+ 29. ®xf4 grs+ 30. ®e5 YNh2+ 31 .®e6 ges+ 32.®d7 �b5++

El mate de un condenado.

Kasparov - Portisch Niksic 1 983

Defensa India de Dama

l.d4 �f6 2.c4 e6 J.tt)f3 b6 4.tt)cJ �b7 5.a3 d5 6.cxd5 tt)xd5 7.e3 tt)xc3 8.bxc3 �e7 9.�b5+ c6 10.�d3 c5 1 1.0-0 tt)c6 12.�b2

La casilla "b2" es una posicion natural para

el alfil de casillas negras. Su objetivo eventual es el flanco de rey enemigo, pero entretanto puede apoyar el avance de sus peones, pues cuando se produzcan peones colgantes, estos necesitanin un pleno apoyo. 12 .. J!c8 13.YNe2 0-0 14J!ad1 YNc7

14 . . . cxd4 1 5 .exd4 mantiene en el tablero los peones "d" y "c" . 15.c4!

Esto es claramente mas fuerte que 1 5 .e4, que puede contrarrestarse con Ia natural 1 5 . . . 't:Ja5 . 15 ... cxd4

Observe el lector que 1 5 . . . iJ6 fall a por 1 6.d5, y la fuerza del alfil de "b2" se hace sentir a traves del tablero. 16.exd4 tt)a5

Portisch contaba con este contrajuego sobre el peon de "c4". Sin embargo, el expuesto flanco de rey negro queda a merced de los alfiles blancos. Un sacrificio en el centro esta en el aire, y un jugador experto detecta esas posibilidades al vuelo. 17.d5!

Como de costumbre, dadas las circunstan­cias, esta ruptura se basa en lineas tacticas: 1 7 . . . 't:Jxc4 se castiga con 1 8 .'1Mfe4 g6 1 9.ixc4 'l!Mxc4 20.'1We5 f6 2 1 .'1Mrxe6+ �f7 22.�c1 'l!Ma6 23 .d6, con una gran ventaja de las blancas. El peon pasado y avanzado debe resultar decisi­vo. Tenemos aqui un excelente ejemplo del dafio que pueden hacer los peones colgantes : todo el enroque negro cae bajo un ataque de­vastador. 17 ... exd5 18.cxd5 ixd5 19 . .ixh7+! ®xh7

PARES DE PEONES COLGANTES Y SEMICOLGANTES 49

20J�xd5 ®g8 21..ixg7! ®xg7 22.�e5 Los motivos se repiten. Estos sacrificios

nos recuerdan viejas partidas, cuya sabiduria tratamos de absorber. (,Como defender a un rey desnudo? 22 . . . f5 23 .�d7 empeora las co­sas. 22 . . . 'W'c2 falla, por la continuacion 23 .'W'g4+ \t>h7 24.�d3 �c3 25 .'W'f5+ (o sim­plemente 25 .'W'h3+) 25 . . . \t>g7 26.�g3+. La mas tenaz 22 . . . �h8 se refuta con el movimien­to 23 .'W'g4+ @f8 24.'W'f5 f6 25.�e l . Por con­siguiente . . . 22 . . JUd8 23."g4+ ®f8 24.�f5 f6

24 . . . id6 se contesta con 25 .'W'f6. Si las ne­gras juegan 24 . . . ixa3 , entonces podria seguir 25 .�d7 �xd7 26.ctJxd7+ \t>e7 27 .�e l + \t>d8 28.ctJe5. 25.�d7+ gxd7 26.gxd7 "c5 27."h7 gc7

Las blancas amenazaban �xe7 . Las negras no solo paran la amenaza, sino que tambien plantean una astuta trampa: 28.�d3? permiti­ria la terrorifica 28 . . . 'W'xf2+. jNunca se es lo bastante precavido ! 28."h8+ ®ti 29J�d3 � c4 30J�fd1 �e5?

Despues de 30 . . . id6 (lo mejor) 3 1 .�h3, las negras tienen serios problemas. 3l."h7+ ®e6 32."g8+ ®f5 33.g4+ ®f4 34.gd4+ ®o 35."b3+

Las negras se rindieron. Ajedrez emocionante, si bien fue la cons­

truccion racional de la posicion, el armonioso desarrollo de las blancas y la plena coope­racion entre piezas y peones lo que hizo posi­ble que los acontecimientos parecieran tan simples.

Korchnoi - Karpov Campeonato Mundial ( 1 a partida)

Merano 198 1 Gambito de Dama

1.c4 e6 2.�c3 d5 3.d4 .ie7 4.�13 �f6 5 . .ig5 h6 6.i.h4 0-0 7.e3 b6 s.gc1 i.b7 9 . .ie2 �bd7 10.cxd5 exd5 1 1.0-0 c5 12.dxc5?

En la partida Hort - Karpov, Amsterdam 198 1 , las blancas jugaron 12 . 'W' c2, que es cier­tamente mejor. Korchnoi comete el mismo error que vimos en la partida Nimzovich - Ta­rrasch. Por decirlo en pocas palabras, no de­berian crearse peones colgantes al rival, si las condiciones existentes no los exponen a una fuerte presion, que permita controlarlos. 12 ... bxc5

Aqui se me ocurre una util comparacion. En la partida Yusupov - Ljubojevic, Tilburg 1 987, se produjo esta posicion, con una dife­rencia, que no parece importante: el alfil blan­co estaba en "f4", y no se habia jugado . . . h6. Debido a la posicion del alfil en "f4", las blan­cas pudieron continuar con 1 2.ctJe5, preparan­do if3 y proponiendo un ventajoso cambio de caballos. Las blancas tenian presion. En la presente partida, los peones centrales negros estan fuertemente respaldados por piezas, y de pronto constituyen un peligro inminente. 13.�c2 gc8 14.gfdl "b6

Cuando la presion sobre los peones es debil, su duefio, por lo general, puede trasla­dar sus piezas a posiciones activas. Aqui las negras dominan mas espacio. 15.�b1

50 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

El comienzo de una maniobra bastante ar­tificial, lo que nos convence de que, en esen­cia, hay algo err6neo en la posicion blanca. 15 .•• E!fd8 16.E!c2 Y;Ye6 17 • .ig3

1 7.�cd2 se contestaria con 1 7 . . . lt:Je4. 17 ... lLlh5 18.!!cd2 tLlxg3 19.hxg3 lLlf6

Ahara que el alfil blanco de casillas negras ha sido eliminado, las negras pueden esperar tranquilamente a que se presente el momenta oportuno para emprender acciones en el cen­tro. 20.Y;Yc2 g6 2t.Y;Ya4 a6 22 • .id3

Las blancas han perdido mucho tiempo en maniobrar con su dama a "a4", donde, como veremos, no esta bien. Esta jugada es el co­mienzo de otra maniobra, con la que las blan­cas Bevan el alfil a "a2" a fin de incrementar la presion sabre el peon de "d5" . 22 ... ctt>g7 23 • .ib 1 Y;Yb6 24.a3

Korchnoi, por supuesto, es consciente de que los peones colgantes resultan muy peli­grosos si se ponen en movimiento, pero cree que no pueden avanzar. Karpov demostrara lo contrario. 24 ... d4!

A primera vista, esta jugada se contempla con escepticismo. Parece que las blancas pue­den tamar el peon, pero 25.exd4 no da resul­tado, debido a una tremenda replica, 25 . . . ic6. Dado que 26.dxc5 no es posible, debido a 26 . . . ixa4, seguido de . . . ixdl , la dama tiene que moverse. 26.1Mic2 pierde, por 26 . . . ixf3 27.gxf3 (o 27.dxc5 ixdl ) 27 . . . cxd4 28.ltJa4 '!!Mb5, mientras que 26.1Mic4 pierde por 26 . . . cxd4 27.lt:Ja4 1Mib5 . En mi opinion, las

blancas omttteron la intermedia . . . ic6, y cuando la vieron, era demasiado tarde. Las blancas no tuvieron mas altemativa que entrar en una fea situaci6n. 25.tLle2 dxe3 26.fxe3 c4 27.�ed4 Y;Yc7 28.lLlh4 Y;Yes 29.ctt>ht ctt>gs

La ventaja espacial de las negras, combina­da con los islotes de peones blancos indefen­sos, convierten el juego en una tarea rutinaria. 30.tLldf3 Y;Yxg3 31 .!!xd8+ .ixd8 32.Y;Yb4 .ie4 33 • .ixe4 tLlxe4 34.!!d4 lLlf2+ 35.ctt>gt tLld3 36.Y;Yb7 E!b8 37.Y;Yd7 .ic7 38.<i:t?bl !!xb2 39.E!xd3 cxd3 40.Y;Yxd3 Y;Yd6 4t.Y;Ye4 Y;Ydt+ 42.tLlgl Y;Yd6 43.tLlbf3 E!b5

Las blancas se rindieron.

Keres - Taimanov Campeonato de la URSS, Moscu 1 95 1

Gambito de Dama

l .c4 lLlf6 2.tLlf3 e6 3.tLlc3 d5 4.e3 .ie7 5.b3 0-0 6 • .ib2 b6 7 .d4 .ib7 8 • .id3 dxc4

Casi un cuarto de siglo mas tarde, los mis­mos oponentes se encontraron en Tallinn 1 975 . Estaban sentados cerca de mi tablero, y

cuando comenzaron a jugar, recorde este viejo encuentro y observe con interes la apertura. En aquella ocasion, Taimanov fue mas pru­dente: jugo un temprano . . . c5, luego . . . cxd4, y mantuvo su punta fuerte de "d5 ", rehusando abrir la gran diagonal "a l -h8" . Taimanov ha­bia aprendido la leccion. Aqui crea peones colgantes, olvidando la cantidad de energia que pueden producir. 9.bxc4 c5 10.0-0 cxd4 l l.exd4 � c6 12.Y;Ye2?!

PARES D E PEONES COLGANTES Y SEMICOLGANTES 5 1

En lo que respecta al peon "d4", Ia jugada es tacticamente correcta, pues tras 1 2 . . . lt:Jxd4? 1 3 .lt:Jxd4 �xd4, existe la trampa 14.lt:Jd5 ! �c5 1 5 .ixf6 gxf6 (o 1 5 . . . ixf6 �e4) 1 6.�g4+ c;i{h8 1 7.�h4. Sin embargo, despues de la textual, las negras tenian a su disposici6n 12 . . . lt:Jb4, y Keres demostr6 que tras 1 3 .ib l ixf3 14.�xf3 �xd4 1 5 .a3 lt:Ja6 1 6.�b7 falla, por la inesperada 1 6 . . . id6 1 7 .�xa6 ixh2+ 1 8 .c;i{xh2 �h4+ 1 9.c;i{g1 lt:Jg4. Por consiguien­te, consider6 1 4.gxf3 �xd4 1 5 .lt:Je4, con pers­pectivas de ataque. Es curioso que, siguiendo la recomendaci6n de Keres, la partida Gri­gorian - Karpov, Campeonato de la URSS, Moscu 1 976, continuase con 15 . . . �d8 1 6J�dl �c7 1 7.lt:Jxf6+ ixf6, y en Iugar de 1 8 .ixh7+, buscando las tab las, Grigorian jugase 1 8.ixf6 gxf6 1 9.ixh7+, quedando en un final desfa­vorable tras 1 9 . . . c;t>g7 20.gd4 gh8 2 l .gg4+ c;i{f8.

Naturalmente, permitir el cambio del alfil de "d3 " reduciria el potencial ofensivo de las blancas, y ademas los peones centrales pier­den su principal soporte. Podemos, por tanto, concluir que 1 2.�e2 fue un error que, como veremos, Taimanov no supo explotar. 12 ... ge8?! 13.gfdl �c8 14J��acl Wfd6

Las negras buscan mas espacio vital para llevar su dama a "f4" . Despues de 14 . . . lt:Jb4 1 5 .ib l ix£3, las blancas pueden seguir con 1 6.gxf3. El flanco de rey de las blancas queda deteriorado para siempre, de modo que seguia siendo una mejor opci6n. 15.J.bl Wff4 16.d5!

A pesar de los posibles inconvenientes en la columna "e", ha llegado el momento de avanzar. Ahora entramos en una lucha ca6tica, del tipo que le gustaba a Keres desde sus dias j6venes, y que jugaba con asombrosa sangre fria. 16 ... exd5

17.cxd5 Keres pens6 durante mucho tiempo, eva­

luanda las consecuencias de 1 7.lt:Jxd5 lt:Jxd5 (descart6 con raz6n 1 7 . . . �h6 1 8 .ge 1 ) 1 8 .cxd5 if6 1 9.dxc6 gxe2 20.cxb7. Vale la pena sefialar lo que vio, y por que, al final de un largo calculo, renunci6 a la variante, en favor de un camino mas seguro hacia la ventaja. He aqui lo que escribi6 el propio Keres:

a) 20 . . . gxc 1 2 1 .gxc 1 id8 (o bien 2 1 . . .ge8 22.gc8 �a4 23.g3 �d7 24.if5, ganando) 22.gc8 �d6 23 .g3 gxb2 24.ie4, ganando.

b) 20 . . . gce8 2 l .ixf6 (no 2 1 .gc8? ixb2 22.gdd8 (podemos anadir que las blancas ga­

nan tambil?n con 22.J.d3 y 23.ib5) 22 . . . �c1 + 23 .gxc l gxd8 24.gc8 gee8) 2 1 . . .gxf6 (2 1 . . .�xf6 22.gc8 �e6 23.gcd8, o bien 21 . . . �b8 22.lt:Jd4 ! ) 22.gc8 c;i{g7 23 .b8� (23 .gdc 1 �d4 ! ) 23 . . . �xb8 24.gxb8 gxb8 25 .g3 , con un final ganado.

c) 20 . . . gb8 2 I .ie5 ! Ei:xe5 22.lt:Jxe5 g6 (o bien 22 . . . �xe5 23 .gc8+ �e8 24.gdc l ie5 25.gxe8+ gxe8 26.ge 1 , ganando) 23 .lt:Jd7 (no 23 .gc8+ c;i{g7 24.gxb8 ixe5, con peligroso contrajuego) 23 . . . gxb7 24.g3 �f3 25 .ie4!

d) 20 . . . gf8 2 I .ia3 (2 I .ixf6 �xf6 22.gc8 gee8, y luego 23 .b8� gxc8 24.�xa7 �b2, 6 23 .gdc 1 � e6, con buenas posibilidades de

52 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

salvar la partida) 2 1 . . . .ie7 22.ixe7 (no 22J�c8 ixa3 23 .8:dd8 \Wei+ ! ) 22 ... 8:xe7 23 .8:c8 g6 24.b8\W \Wxb8 25.8:xb8 .El:xb8, y la ventaja blanca en el final puede resultar insuficiente" .

Despues de 1 7. ctJxd5 ctJxd5 1 8.cxd5 if6, Keres menciono entre parentesis la altemativa 19.\Wc2 .ixb2 20.dxc6 .ixc l ! Sin embargo, Nunn encontro mas tarde 2I .\Wxh7+ <i>f8 22.cxb7 .El:cd8 23 .\Wh8+ <i>e7 24.8:e l + <i>d7 25 .if5+ \Wxf5 26.8:xe8 .El:xe8 27 .\Wxe8+ <i>xe8 28.b8\W+, y los peones de "a7'' y "b6" caen.

Una impresionante serie de lineas especta­culares. Cito a Keres porque me gustaria que el lector fuese plenamente consciente de la asombrosa cantidad de energia que libera una ruptura central. 17 ... �b8

1 7 . . . ctJb4 !? puede contestarse con 1 8 .8:d4 (1 8.a3? .ic5 ! ) 1 8 . . . \Wb8 1 9.\Wd2 .El:cd8 20.ctJh4, con posibilidades de ataque. 18J�d4 Wfd6 19J�cdl .irs

La ruptura central ha transformado las pie­zas mas activas de las blancas y su ventaja es­pacial en otro tipo de ventaja: un peon pasado en la columna "d", movil, restrictivo y bien apoyado. AI mismo tiempo, la pareja de alfiles blancos ejerce una evidente presion sobre el ala de rey rival. Considerando todo eso, era esencial 1 9 . . . ctJbd7, para la proteccion del rey. 20.�e4 �xe4 21 J�xe4 gxe4 22.Wfxe4 Wfh6

Despues de 22 . . . g6 23.ctJg5, las blancas tambien mantendrian perspectivas de ataque. 23.�g5 id6 24.h4 �d7 25.Wff5 �f6 26.ixf6

Es mas simple 26.ctJxf7. 26 ... gxf6 27.�xf7 Wfcl 28.Wfxh7+ <ibf8

29.�xd6 Wfxdl+ 30.<ibh2 Wfxd5 31.�xb7 Wfe5+ 32.g3 gc7 33.Wfh8+ <ibn 34.h5 gxb7 35.Wfh7+ <ibe6 36.Wfxb7 Wfxh5+ 37.<ibg2

Las negras se rindieron. La victoria de Keres sobre Taimanov repite

los temas estandar de partidas anteriores, y arroja luz sobre las premisas que se requieren para la ruptura, los motivos de ataque sobre las diagonales, Ia fuerza de los alfiles que Iibe­ra el avance y la transformacion de una ven­taja en otra. Sin embargo, los peones colgan­tes no siempre tienen el necesario apoyo para tener exito en su mision basica. Pueden ser utilizados de modo mas tranquilo, enfatizando en su valor posicional. Las partidas que siguen ofrecen informacion sobre este aspecto.

Korchnoi - Ivkov Tomeo Interzonal

Sousse 1 967 Defensa Bogoindia

l.d4 �f6 2.c4 e6 3.�f3 Ab4+ 4.�bd2 d5 5.a3 Ae7 6.e3 0-0 7 .Ad3 b6

El fianchetto es la forma natural de desa­rrollo del alfil dama negro, preparando, de paso, . . . c5 . 7 . . . ctJbd7 tiene Ia misma idea, y si 8 .b4, entonces 8 . . . a5 . 8.b3 i.b7 9.i.b2 c5 10.0-0 cxd4 ll .exd4 �bd7 12.gel

Cuando la estructura de peones toma esta forma en el centro, \W e2 es una buena eleccion para las blancas, dejando las casillas "e l " y "dl " para las torres, en apoyo de los peones centrales.

PARES DE PEONES COLGANTES Y SEMICOLGANTES 53

12 .. J�e8 13.�e5 dxc4 Las blancas tienen ventaja de espacio, lo

que incita a las negras a buscar cambios. Por lo general, es una decision responsable, pero Ivkov, obviamente, espera poder controlar la fuerza dimimica de los peones centrales. 14.bxc4 �xe5 15.:Sxe5 .i.f8

Las negras evaluan correctamente que su flanco de rey puede caer bajo ataque. En con­secuencia, se disponen a fianchettar su alfil de casillas negras, que no solo aportaria segui�­dad a su rey, sino que tam bien podria presio­nar sobre el peon blanco de "d4" . 16.a4

Es dificil imaginar que las blancas puedan realizar el avance central en condiciones razo­nables. Los peones, por consiguiente, se em­pleanin para controlar espacio en el centro, mientras que se emprenden acciones de flan­co. El ataque de minorias en el flanco de dama pretende crear debilidades en campo negro. 16 ... g6 17.a5 .i.g7 18.:Sel

Tiene poco sentido 1 8 .�b5 . 18 ... � b5?!

Una jugada atractiva, que pretende atacar tanto "d4" como "g2" . Sin embargo, aunque los comentaristas la silenciaron, hemos llega­do a un momento critico de la partida. El ul­terior desarrollo de los acontecimientos de­muestra, sin Iugar a dudas, que la presion so­bre los peones colgantes blancos debe pre­pararse con mas cuidado. En mi opinion, 1 8 .. ."1Wc7 era la eleccion adecuada. El caballo negro esta destinado a "d7" , no a "h5" . 19.i.e4 .i.xe4 20.�xe4 �c8 21 .Y*Ib3!

Muy bueno. En caso de 2 l . . .i.xd4 22.i.xd4 'Wxd4 23.�ad l 'Wxc4 24.'Wxc4 �xc4 25 .ltJd6 �ec8 (o bien 25 . . . �cc8) 26.a6, las blancas ga­nan. 21 ... f5? ! 22.�g3 �xg3 23.hxg3 bxa5?!

Dos malas decisiones en tres jugadas haran dificil la vida de las negras. 23 . . . f5 debilita la posicion, mientras que 23 . . . bxa5 debilita los peones "a" de forma permanente. 24.:Sedl Y*fc7 25.c5 gb8 26.Y*/a2 Y*fc6 27 . .ic3 :Se7 28.Y*/xa5

Se ha restablecido la igualdad material, mientras que las blancas han conservado una saludable estructura de peones. Observe como los peones centrales, bien protegidos todo el tiempo, jugaron el papel de vigilantes, mien­tras se._ producian las acciones en el flanco de dama. El resultado es el peon pasado de la columna "c", y el peon aislado negro de "a7' ' . 28 ... :Sd7 29.Y*/a6 gcs 30.Y*fc4 Y*id5 31.Y*/xd5 :Sxd5 32.f4

32.�xa7 no se contestaria con 32 . . . �cxc5, debido a 33 .�xg7+, pero la sencilla 32 . . . e5 bastaria. Lo que sigue es una muestra de la ha­bitual maestria de Korchnoi en el final, que vale Ia pena seguir detenidamente. 32 ... :Sd7 33. ®n gc6 34. ®e2 .i.f6 35.:Sa4 g5 36J�dal gxf4 37.gxf4 gcc7 38.:Sbl :acs 39.g3 h5 40.�ab4 ®ti 4l.:Sb7 ®e8 42.®d3 .i.d8 43. ®c4 a5 44J�b8 :Sxb8 45.:axb8 ®e7

45 . . . �a7 provocaria un divertido remate: 46.c6 a4 47.i.a5 . 46.:Sa8 :Sb7 47.c6 gb1 48.ga7+ ®d6 49J�d7+ ®xc6 50.�xd8 :Sgl 51.d5+ exd5+ 52.:Sxd5

54 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

gxg3 53J�xa5 h4 54J�xf5 go 55 . .ie5 ga3 s6.ghs h3 57gh6+ ®d7 ss. ®ds go 59.gh7+ i>d8 60.®e6

Las negras se rindieron.

0. Bernstein - Capablanca Partida de exhibicion

Moscu 19 14 Gambito de Dama

l.d4 d5 2.c4 e6 3.ltJO ltJf6 4.ltJc3 J.e7 5 . .ig5 0-0 6.e3 ltJbd7 7.gcl b6

La jugada introductoria al llamado "Fian­chetto ortodoxo". Las negras planean resolver su problema basico de desarrollo: el del alfil dama. Comparando la posicion con situacio­nes similares en la fase de apertura, percibi­remos que el temprano desarrollo del caballo dama ha dejado un agujero en "c6", que es un motivo a explotar. 8.cxd5 exd5 9.VNa4

Es interesante constatar que en una partida entre Capablanca - Teichmann, Berlin 1 9 1 3 , el propio Capablanca jugo la fuerte 9.i.b5 ib7 1 0.0-0, y despues de 10 . . . a6 1 1 .i.a4, quedo claro que el proyectado a vance 1 1 . . . c5 seria replicado con 1 2.i.xd7 Wfxd7 1 3 .dxc5 bxc5 14.'Lla4. Igualmente, en caso de 10 . . . c5, 1 1 .i.xd7 Wfxd7 1 2.dxc5 bxc5 1 3 .i.xf6 ixf6 14.'Lle4 refuta el juego negro. Lo que Capa­blanca sabia, otros no lo sabian. Los jugadores fuertes eran afortunados entonces, porque no habia lnformators, ni discos informaticos para ensefiarles a sus oponentes a jugar mejor. 9 • • • J.b7

En la partida Capablanca - Lasker, Cam­peonato Mundial (sa), La Habana 192 1 , Lasker opto por 9 . . . c 5 1 0.Wfc6 gb8 1 1 .'Llxd5 i.b7 12 .'Llxe7+ Wfxe7, con compensacion por su activa posicion y posibilidades de igualar. 10.i.a6

Una jugada logica, que debilita el complejo de casillas blancas. 10 ... i.xa6 tt .VNxa6 c5

Las negras podrian elegir Ia mas tranquila 1 l . . .c6 12.0-0 Wfc8, pero en esta partida no tenian intenciones pacificas. 12 . .ixf6

No era necesario en este momento. Es pre­ferible 12 .0-0. 12 ... ltJxf6 13.dxc5 bxc5 14.0-0 VNb6 15.VNe2 c4!

Una fuerte logica respalda esta sencilla ju­gada. Hasta aqui hemos analizado casos clasi­cos de rupturas. En esta posicion, la tarea es­tandar de las negras de preparar . . . d4 es impo­sible, con su alfil de casillas negras situado pasivamente en "e7" . Por consiguiente, las ne­gras evaluan su posicion con realismo. Puesto que pueden ejercer presion sobre la columna "b" semiabierta, de esta forma enfatizan en la debilidad del peon de "b2" . Las negras mue­ven su peon "c" y crean las premisas para ex­primir la defensa de su oponente. AI mismo tiempo, la jugada, que cede Ia casilla "d4" a las blancas, ejerce un excepcional efecto psi­cologico. En circunstancias normales, solo tras una eficiente presion pueden bloquearse los peones colgantes. Bernstein lo ha conse­guido gratis y esta encantado de poder situar

PARES DE PEONES COLGANTES Y SEMICOLGANTES 5 5

su caballo en "d4" y formular su plan sobre esta base. Asi, como veremos, prosigue en la direccion erronea. 16J:'Udl?!

Aunque los peones colgantes estan blo­queados, son peligrosos, porque ofrecen a las negras una evidente ventaja espacial, y la con­siguiente capacidad para maniobrar con sus piezas. Si las blancas hubiesen evaluado co­rrectamente su posicion, habrian optado por 1 6.e4, para dislocar la pareja y buscar la igual­dad en una secuencia de cambios. 16 .. JUd8 17.ltJd4

Bernstein de nuevo tiene Ia posibilidad de jugar 1 7 .e4, pero obviamente pensaba que es­taba mejor. 17 ... .ib4

Gracias a la jug ada . . . c4, el pasivo alfil ne­gro logra un papel activo. 18.b3

Era de considerar 1 8 .Wic2, pero 1 8 .. J�ab8 mantiene la presion. Bernstein debe haber comprendido finalmente que las cosas estaban saliendo de su control, y trata de simplificar por medio de cambios. 18 .. J�ac8 19.bxc4 dxc4 20J3c2

20 . . . .ixc3 El peon pasado es un triunfo importante pa­

ra el negro, asi que debe aclanirsele el camino. 21J3xc3 tiJd5 22J3c2 c3 23J3dcl S:c5 24.tlJb3 gc6 25.tlJd4 �c7 26.tlJb5

Las blancas se vuelven codiciosas. Muchos comentaristas propusieron hacer 26.Wiel �dc8 27.CiJe2 como lo correcto. Las negras tienen tiempo para responder sin inmutarse 27 .. J:!c4,

pero incluso con la linea 27 . . . '\MfaS 28 .e4 CiJb4 29.�xc3 CiJxa2, sigue conservando alguna ven­taja. 26 ... �c5 27.tlJxc3?

Seguia habiendo tiempo para regresar hu­mildemente a "d4" . 27 . . . tlJxc3 28.�xc3 :!3xc3 29.S:xc3

29 ... %Vb2! Las blancas se rindieron ante este golpe

contundente.

Bertok - Fischer Tomeo Interzonal Estocolmo 1 962

Gambito de Dama

l.d4 d5 2.c4 e6 3.tlJc3 .ie7 4.tlJf3 tiJf6 5 . .ig5 0-0 6.e3 h6 7 . .ih4 b6 8.cxd5 tlJxd5 9 . .ixe7 Y*fxe7 lO.tlJxd5 exd5 l l..ie2 .ie6 12.0-0 c5 13.dxc5?

Mi compafiero de club, Mario Bertok, esta­ba jugando claramente a tab las, contra un opo­nente superior. Sin embargo, y como a menu-:: do sucede en tales circunstancias, lo hace de forma equivocada. Podia haber aplicado la maniobra rutinaria contra los peones colgantes negros, bas ada en Ia clavada despues de WI a4-a3 , o bien podia optar por 1 2.CiJe5 o 1 3 .CiJe5. La textual es un error. El cambio en "cS" es prematuro, porque le deja amplia eleccion a su oponente, y Fischer no deja escapar la oportu­nidad de evitar las posiciones estandar y elegir una continuacion mas prometedora. 13 ... bxc5 14.%Va4 Y*lb7!

56 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Antes de que el caballo se sirue en "d7", Fischer lleva su dama a una posicion mas ac­tiva. AI omitir el orden correcto de jugadas, Bertok, en Iugar de obligar a Ia dama negra a permanecer pasivamente en "e7", permitio una jugada que es parte del plan estrategico de las negras. El peon de "b2" y Ia columna "b" semiabierta dictan los futuros acontecimien­tos. 15.�a3 ttld7 16.ttlel

Las blancas se encuentran ya en dificul­tades. 1 6.�ac l �fb8 1 7.�c2 .if5 1 8 .�d2 lt:Jf6 es favorable a las negras, pero Ia textual tam­poco es efectiva. 16 ... a5 17.ttld3 c4

Como Capablanca, Fischer tenia una rara habilidad para encontrar jugadas sencillas y directas que, por lo general, formaban parte de planes igualmente sencillos y directos. Dado que pudo mover su dama a "b7", el curso sub­siguiente de accion se explica por si solo. t8.ttlf4 gtbs t9.gabt

A primera vista, lo mas coherente parece 19 . .if3 lt:Jf6 20.�fd l . Tras haber gastado va­rios tiempos en llevar el caballo a "f4", las blancas tenian Ia posibilidad de ejercer contra­presion sobre el peon "d5" . Lamentablemente, el peon de "b2" es mas valioso, y la tran­saccion, despues de 20 . . .'\Wxb2 2 1 .l!Mxb2 �xb2, y los siguientes cambios en "d5" , no pueden satisfacer a las blancas, pues el peon pasado en Ia columna "c" se dirige hacia la casilla de promocion con serias consecuencias.

Fischer opinaba que Ia mejor opcion de las blancas era 1 9.lt:Jxe6 fxe6 20 . .ig4.

19 ... i.f5 20J�bdl ttl f6 21.gd2 Despues de 2 1 .i.f3, Fischer considero

2 1 . . .l!Mxb2 22.l!Mxb2 �xb2 23 .ltJxd5 lt:Jxd5 24 . .ixd5 (o bien 24.�xd5 ie6 25.�c5 �c8) 24 . . . 8:c8 25 .e4 i.e6 26.ixe6 fxe6 27.a4 c3, etc. , asi como la altemativa 2 1 . . . .ie4 22 . .ixe4 lt:Jxe4.

21 . .. g5 Simple, pero decisivo. La pasividad de las

blancas se pondra plenamente de manifiesto, una vez que desaparezca Ia presion sobre "d5" . 22.ttlxd5

Entregar una pieza por poca compensacion es desesperado, pero 22.lt:Jh5 lt:Je4 23 .8:c2 l!Mb4, amenazando . . . lt:Jg3 , serviria de poco a las blancas. 22 ... ttlxd5 23.i.xc4 i.e6 24JUdl ttlxe3 25.�xe3 i.xc4 26.h4 ges 27.�g3 �e7 28.b3 i.e6 29.f4 g4 30.h5 �c5+ 31.gf2 i.fS

Las blancas se rindieron.

Una vez mas, se nos ha ensefiado que el momento en que surgen los peones colgantes es de gran importancia. Si cuando se crean no es posible ejercer una presion significativa so­bre ellos, podemos estar seguros de que no hemos elegido el momento oportuno.

Se deben cumplir algunas premisas a fin de controlar sus opciones dinamicas. Las siguien­tes partidas nos permitiran arrojar luz sobre este tema. A fin de hacer nuestro mensaje lo mas creible posible, sigamos con la variante empleada por Bertok, pero ahora en manos de dos grandes campeones.

PARES DE PEONES COLGANTES Y SEMICOLGANTES 57

Spassky - Pachman Memorial Capablanca

La Habana 1 962 Gambito de Dama

l.d4 llJf6 2.c4 e6 3.llJf3 d5 4.llJc3 ie7 5.ig5 0-0 6.e3 h6 7 . .ih4 b6 8.cxd5 tlJxd5 9.Axe7 Bxe7 lO.tlJxd5 exd5 l l . .ie2 .ie6 12.tlJe5 c5 13.0-0

En comparacion con Ia partida Bertok -Fischer, podemos concluir, sin Ia menor duda, que con 'DeS las blancas crean mayores difi­cultades a su oponente. 13 .. J;d8? !

Esto dificultani su ulterior desarrollo. Pare­ce natural 1 3 . . . 'Dd7. En cambio, 1 3 . . . c4 puede contestarse con 14.b3, y ahora fallan 14 . . . b5, por 1 5 .a4, y 14 . . . 'Dd7, por 1 5 .'Dxd7 '1Wxd7 1 6.bxc4 dxc4 1 7.e4, en ambos casos con ven­taja blanca. 14J;cl f6?!

Esto es llevar agua al molino de las blan­cas, pero conviene observar que 14 . . . c4 de nuevo falla, esta vez por 1 5 .�f3 b5 1 6.b3 . 15.tlJg6 tfd6 16.dxc5

Tras haber acumulado pequefios errores ne­gros, las blancas finalmente cambian en "c5", pero en un momento en que, gracias a su me­jor desarrollo, pueden ejercer Ia maxima pre­sion sobre los peones. 16 ... bxc5 17.tlJf4 .if7 18.%Vc2 tiJd7 19J3fdl d4

Si las negras paran Ia amenaza evidente ('Dxd5) con 1 9 . . . i>h8, entonces no hay res­puesta a 20.�f3. Pachman consigue Ia ruptura,

pero en circunstancias adversas. 20.J.c4 .ixc4 21.tfxc4+ ®h7

0 bien 2 I . . .i>h8 22.'Dg6+ i>h7 23 .'1Wd3. 22.b4!

Bajo presion, los peones centrales negros fueron obligados primero a avanzar, y ahora se ven dislocados. 22 .. J3ac8

Hacer 22 . . . cxb4 pierde material, despues de 23 .!hd4. 23.tlJe6

Posible porque el rey negro esta expuesto a los jaques en la diagonal "b 1 -h7" . 23 ... tlJe5 24.ffc2+ d3 25.tlJxd8 tfxd8 26.tfb2 c4 27.h3 tfb6 28.a4 g5 29.®tl ®g7 30.ffd4 c3

Si 30 .. .1.Wxb4, 3 1 .f4, seguido de gxd3 .

31.E!xd3 tlJxd3 32.tfd7+ Las negras se rindieron. Despues de 32 . . . �g6 33 .'1Wxd3+ f5 34.g4,

las blancas ganan facilmente.

5 8 COMPRENDER E L JUEGO D E PEONES EN AJEDREZ

Fischer - Spassky Campeonato Mundial (63 partida)

Reykjavik 1 972 Gambito de Dama

l.c4 e6 2.lLJf3 d5 3.d4 �f6 4.�c3 J.e7 5.J.g5 0-0 6.e3 h6 7 . .ih4 b6 8.cxd5 �xd5 9 . .ixe7 Wfxe7 10.�xd5 exd5 11 J�cl .ie6

Hay que decir que 1 1 . . .'W'b4+ 1 2.'W'd2 con­duce a un final favorable a las blancas. 12.Yfa4 c5 13.YMa3

Pasando a la vieja maniobra de dama, las blancas esperan un mejor momento para crear peones colgantes. Entretanto, buscanin la for­ma de explotarlos. 13 .. J�c8 14 . .ib5

Una jugada provocadora, descubierta por Furman. La tranquila 14.i.e2 se contestaria con 14 . . . a5 . En la partida Szily - Marovic, Wijk aan Zee 1 972, despues de 1 5 .0-0 'W'a7 16.dxc5 bxc5 1 7.:Bc3 'Lld7 1 8 .:Bfc 1 :Bcb8 (im­pidiendo '2Jd4 y justificando la situacion de Ia dama en "a7'', con idea de . . . 'W'b7 o . . . 'W'b6) 19 .'Lle1 a4 20.'Lld3 c4 2 1 .'Llf4 'Llf6 22.i.f3 �b6, las negras quedaron mejor. Conocia Ia partida de Capablanca contra Bernstein y, al prepararme para esta, descubri . . . 'W'a7 y el plan subsiguiente, en cinco minutos. 14 ... a6?!

Esto resultani inadecuado. Mas tarde, en Ia partida Timman - Geller, Hilversum 1973, Geller jugo la fuerte 14 . . . 'W'b7, sacrificando un peon por Ia iniciativa. Despues de 1 5 .dxc5 bxc5 1 6.:Bxc5 :Bxc5 1 7 .'W'xc5 '2Ja6 1 8.i.xa6 �xa6 1 9.'W'a3 'W'c4 20.�d2 'W'g4 2 1 .:Bg1 d4,

Timman quedo en serias dificultades. 15.dxc5 bxc5 16.0-0 :Sa7

Esta jugada es tan antinatural como parece. 17.J.e2 �d7 18.�d4

Comparese la textual con el juego de Ber­tok, y la importancia del momento oportuno se pondra de manifiesto. Fischer puede utilizar las casillas centrales en su ventaja, ejerciendo presion sobre la pareja de recien nacidos. ts ... YMrs

Hubo unanimidad en cuanto a que era mas natural 1 8 . . . ttJ f6. 19.�xe6 fxe6 20.e4!

Las blancas han conseguido organizar pre­sion sobre los peones colgantes. Ahora, mover 20 . . . 'Llf6 llegaria tarde, pues 2 1 .e5 'Lld7 22.f4 da una clara ventaja a las blancas. 20 ... d4?

A toro pasado, muchos comentaristas mani­festaron su opinion de que era mejor 20 . . . c4, a lo que Fischer pensaba responder 2 1 .'W'h3 , con Ia iniciativa. Despues de Ia textual, las blancas consiguen lo que, en terminos generales, pre­tenden al luchar contra peones colgantes. Con un firme control de las casillas delanteras, las blancas han minado su potencial agresivo. Aparte de eso, existe Ia seductora casilla "c4" para el alfil de casillas blancas. 21.f4 YMe7 22.e5

De nuevo lo mejor, fijando Ia debilidad de "e6". 22 ... gb8 23 . .ic4 �h8 24.YMh3 tiJf8

Si Spassky contaba con controlar la fuerte casilla "e4" para su caballo, estaba equivo­cado. No tuvo respiro hasta que se vio obli-

PARES DE PEONES COLGANTES Y SEMICOLGANTES 59

gado a retrasar el caballo, para defender "e6". El alfil de "c4" es el zar del tablero. 25.b3 a5 26.f5

El comienzo del fin. El rey negro no en­cuentra refugio seguro. Tras haber ganado la batalla de los peones colgantes, Fischer ha lo­grado una abrumadora ventaja estrategica. 26 ... exf5 27.�xf5 lLl h7 28.E!cfl �d8 29.�g3 �e7 30.h4 �bb7 31.e6 �bc7 32.�e5 �e8 33.a4 �d8 34.E!lf2 �e8 35.�20 �d8 36 . .!d3 �e8 37.�e4 lLlf6

38.�xf6 gxf6 39.E!xf6 ®g8 40 . .!c4 ®h8 41.�f4

Las negras se rindieron. Aunque los peones colgantes tuvieron un

pequefto papel en la accion, es su destino lo que queda en la memoria, tras la brillante lee­cion impartida por Fischer. Desde el momenta en que los peones centrales de Spassky queda­ron bloqueados, se vieron privados de energia, por su falta de movilidad, y las blancas gana-

ron la partida de forma contundente. Los te­mas basicos de esta lucha tienen importancia para el pleno entendimiento de los peones colgantes, y en la siguiente partida proseguire­mos nuestro debate.

Romanishin - Psajis Campeonato de la URSS

Moscu 1 983 Defensa India de Dama

l.llJO lLlf6 2.c4 b6 3.d4 e6 4.g3 .!a6 5.lLlbd2 d5 6 . .!g2 .!e7 7.0-0 0-0 8.lLle5 c5

La alternativa es 8 . . . �b7, pero sin temer la presion sobre la gran diagonal, las negras eje­cutan la rutinaria . . . c5 en una temprana fase de la partida. La pasiva posicion del caballo da­ma blanco (en "d2") debe haber tenido algo que ver con la decision de Psajis . 9.dxc5

Aftos atras, me llamo la atencion la partida Sosonko - Portisch, Tilburg 1 98 1 . Sosonko siguio con 9.ltJb3, que complica el desarrollo de las negras. Despues de 9 . . . �b7 1 0.dxc5 bxc5 1 1 .cxd5, Portisch tuvo que asumir un peon central aislado y jugar 1 1 . . . �xd5 . De ha­ber elegido 1 1 . . . exd5, entonces 12 .�g5 le ha­bria causado serios problemas. Los peones colgantes se encuentran bajo fuerte presion, y no hay una solucion eficiente. 9 ... bxc5

En numerosas partidas posteriores, las ne­gras optaron por 9 . . . �xc5 1 0.cxd5 exd5, y en este momenta es digno de consideracion 1 1 .ltJdf3, seguido de b3 y �b2.

60 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

10.b3 i.b7 Necesario para completar el desarrollo. Por

otro lado, el alfil no pinta nada en "a6" . ll.cxd5 exd5 12.i.b2 a5

De modo que de nuevo estamos en una de las innumerables posiciones que dan paso a peones colgantes en el centro. Esta vez se encuentran presionados y podrian estarlo mas. Por ejemplo, si las negras hubiesen conti­nuado con 1 2 . . . ctJbd7, las blancas podrian ha­ber jugado 1 3 .ctJdc4, explotando la clavada para activar todos sus efectivos. Observe que la clavada es posible con frecuencia en estas formaciones centrales. 13.e4!? d4

Ya hemos concluido que los peones col­gantes son moviles y peligrosos por naturale­za, pero si estan bloqueados se vuelven debi­les. Si las negras aceptan el peon, con 13 . . . ctJxe4, entonces 14.ctJxe4 dxe4 1 5 .1Wc2 f5 16.�ad l W!'e8 17 .W!'c3, y las blancas se apo­deran de la iniciativa. 14)t)ec4

De esto estabamos hablando. El potencial dinamico de los peones centrales se ha evapo­rado. 14 ... lL'lfd7 15J�el lL'lb6 16.lL'lxb6 �xb6 17.lL'lc4 �d8 18.i.cl!

Es muy importante mejorar la posicion del alfil de casillas negras. Su lugar idoneo es ahora "d2", des de don de obstaculiza la pro­yectada maniobra . . . ctJd7 -b6, asegurando una posicion dominante para su caballo y "tocan­do" el peon de "a5" . 18 ... lL'ld7 19.i.d2 �a6

No es facil encontrar un buen plan para las negras. Evacuan "a8" para la dama, probable­mente con idea de un ulterior . . . f5 . 20.a4

Fijando, otra vez, una potencial debilidad. 20 ... �a8 21.�c2

21. .. .id8 2 1 . . .f5 no da resultado, debido a 22.ctJxa5

�xa5 23 . .ixa5 W!'xa5 24.exf5 .ixg2 25 .�xe7, lo que explica la jugada del alfil . 22.i.f4

Amansando a las negras. Ahora 22 . . . f5 se contestaria con 23 .ctJd6. 22 ... i.e7 23.i.fl

La solucion final contra . . . f5 . 23 ... � c8 24.f3 � d8 25.i.d2

Evitando . . . .ig5 . 25 ... !!a8 26.i.d3 g6 27J�e2 lL'lb8 28.�fl lL'lc6 29.f4

El fruto de la buena estrategia de las blan­cas es una mayoria de peones en el flanco de rey. 29 ... lL'lb4 30.i.xb4 cxb4 31.�dl �c8 32J�d2 i.c5 33.�el �e8 34J�de2 �g7 35.h3 gc6 36.�h2 �ce6 37.�c2 i.a7 38.e5

Solo ahora esta todo dispuesto para em­prender las acciones decisivas. 38 ... i.f3 39.�f2 .idS 40.f5 gxf5 41 .gxf5 �h6 42.�d2 i.c5 43.gf6 gbs 44.�f4 i.e6 45.g4

Las negras se rindieron. Una vez ganada la batalla contra los peones

colgantes, el resto fue una labor tecnica ru­tinaria, bien ejecutada por Romanishin, con algunas bonitas claves, instructivas para nues­tro tema de estudio.

PARES DE PEONES COLGANTES Y SEMICOLGANTES 6 1

Korchnoi - Geller Match de Candidatos ( 5a partida)

Moscu 1 97 1 Gambito de Dama

l.d4 d5 2.c4 e6 3)t]c3 J.e7 4.tlJf3 tlJf6 5.J.g5 0-0 6.e3 h6 7.J.h4 b6 8.J.e2 J.b7 9.J.xf6 tlJxf6 10.cxd5 exd5 11 .0-0 fle7

Las blancas han cedido la pareja de alfiles a su oponente, confiando en su formacion de peones para mantener cerradas las diagonales. Las negras, por el contrario, quieren abrir esas diagonales para activar sus alfiles. 1 l . . . c5 es demasiado ambicioso y puede responderse eficazmente con 1 2.dxc5 bxc5 1 3 .Wfb3, y la presion sobre los peones centrales ya estaria en marcha. 12.flb3

Esperando . . . c5, las blancas Uevan su dama a una posicion activa, evacuando al mismo tiempo la cas ilia "d 1 " para la torre. Esta claro que en un par de movimientos la partida se ca­racterizara por los peones colgantes negros en la quinta fila. Es de la mayor importancia afrontarlos con las fuerzas totalmente desarro­Uadas. 12 .. J�d8

Otra jug ada necesaria para apoyar . . . c5. 13J�adl c5

El Gran Maestro Suetin propuso 13 . . . c6 14.id3 l2Jd7 1 5 J%fe l '2Jf8, con una posicion pasiva pero firme. Pero Ge11er era un jugador intrepido, siempre dispuesto a aceptar cual­quier reto. 14.dxc5 .ixc3 15.flxc3 bxc5 16J!:cl

Ambos jugadores han conseguido lo que querian. Las negras han efectuado el avance . . . c5, mientras que las blancas estan listas para ejercer la maxima presion sobre los peones centrales. El curso ulterior de la partida de­mostrara si los peones constituyen una carga para las negras o una amenaza para las blan­cas. 16 ... tlJd7 17J�c2

Una jugada util en postcwnes similares. Las blancas podran doblar torres en las colum­na "c" o "d" a discrecion. 17 .. J�ab8? !

Las torres buscan columnas abiertas o se­miabiertas por naturaleza. Hemos visto ya, en posiciones similares, que puede crearse una contrapresion sobre el peon retrasado de "b2" . Aqui, sin embargo, no existe esa posibilidad. Por otra parte, la torre puede resultar util en la columna "a", apoyando un eventual . . . a5 .

AI mismo tiempo, puesto que el peon "d5" esta bien protegido y puede apoyarse aun mas con . . . '2Jf6, toda la atencion deberia centrarse en el peon de "c5 " . Por consiguiente, lo nor­mal parece ser 1 7 . . . �dc8. 18.b3 fle6 19J�dl V!lb6?!

Ahora era logico 1 9 . . . �bc8, pues no hay objetivo en la columna "b". Las negras proba­blemente contaban con . . . a5 , omitiendo la res­puesta de su oponente, que es extraordinaria­mente fuerte. 20.tlJel !

Una vez dirigida toda su artilleria pesada contra los peones colgantes, las blancas apro­vechan la oportunidad para comprometer to-

62 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

das sus fuerzas contra la pareja retenida en el centro. Las blancas amenazan ig4, para eli­minar un defensor vital ( el caballo de "d7"). AI mismo tiempo, el caballo proyecta jugar a "d3", desde donde actuani plenamente sintoni­zado con las demas piezas blancas. 20 .. J�bc8

El apoyo llega demasiado tarde, ya que las negras han perdido varios tiempos, y ademas en el momento inoportuno, cuando el alfil se dispone a jugar a "g4". 21 .ig4 �g6 22 . .ih3 E:c7

22 . . . d4 falla, por 23 .exd4 cxd4 24.Wfg3, y la presion blanca es mas fuerte que la defensa negra.

Observaciones generales

23.�d3 �f6 24.�a5 �e8 25.E:xc5 E:xc5 26.�xc5

Las negras se rindieron. j Sencillo e impresionante ! Korchnoi jugo

con gran consistencia toda la partida, con­centrandose por completo en los peones cen­trales enemigos. Primero, restringio sus mo­vimientos, luego comprometio literalmente to­dos sus efectivos, creando la maxima presion sobre la desafortunada pareja, despues de lo cual pudo recoger los frutos de su trabajo. Observese tambien los instructivos errores co­metidos por Geller, que no consiguio aportar a los peones colgantes la proteccion que siem­pre requieren.

Nuestro analisis de los peones colgantes conduce a conclusiones inequivocas, que no difieren mucho de la que hemos alcanzado acerca de los peones centrales aislados. Ambos temas com­parten el mismo origen y algunas caracteristicas basicas. Ambos son armas de ataque, si se pre­sentan las circunstancias propicias, y ambos son objetivos indefensos cuando la proteccion es inadecuada. Ambos se sienten bien acompaiiados cuando hay numerosas piezas amigas y muestran signos de agotamiento cuando el material es reducido.

Las partidas que hemos analizado nos enseiian muy claramente que la energia dinamica latente en los peones colgantes es muy grande. Siempre que puedan avanzar en el centro con pleno apo­yo, la posicion se abre y las piezas que colaboran en Ia ruptura, sobre todo los alfiles, se vuelven extremadamente activas, con el rey enemigo a menudo en su punto de mira. En muchos casos, en tales ocasiones surgen posibilidades tacticas ocultas y, en general, cualquier reaccion suele llegar tarde para impedir los daiios derivados de elias. Hay que estar plenamente alerta ante su daiiino potencial, y evaluar con sumo cuidado cuando existan peones colgantes en el centro y cuando es conveniente preservar una saludable dosis de precaucion y evitarlos.

Siempre me siento obligado a recordar una escena que se produjo en Ia sala de prensa en el tomeo de Banja Luka de 1 979. Dos jugadores defendian tercamente una posicion contra dos potentes peones blancos en Ia cuarta fila, pero todo lo que intentaban fallaba. Tigran Petrosian observaba tranquilamente los acontecimientos del tablero, hasta que uno de los analistas le pidio ayuda, preguntandole: "(,Que jugaria usted en esta posicion?" . Petrosian respondio: " jYo nunca permitiria una posicion' asi ! " .

Ciertamente, s i no se dan algunas premisas, s i Ia presion que puede ejercerse sobre los peones colgantes es pobre, entonces, como dijo sencillamente Petrosian, lo mejor es no entrar en una posicion asi. Por otra parte, si se puede desarrollar activamente y, mediante presion sobre los peones, provocar su avance o transformarlos en un peon aislado, controlado y bloqueado, todos los aspectos negativos de Ia formacion se ponen de manifiesto.

Naturalmente, el exito de un plan asi depende, sobre todo, de la actividad de nuestras piezas y de Ia presion que podamos crear sobre los peones colgantes, tan pronto como se produzcan. En Ia mayoria de los casos, algunas ulteriores medidas defensivas no daran resultado. La capacidad de Ia unidad central de peones de romper las defensas excede, con mucho, la del mejor peon central aislado.

PARES DE PEONES COLGANTES Y SEMICOLGANTES 63

En comparacion con los peones centrales semicolgantes, los peones colgantes tambien ofrecen otras ventajas. Se transforman mas facilmente en peones moviles. Por otra parte, cuando no es posible una ruptura central, su influencia y control sobre las casillas centrales es mayor, lo que hace posible emprender acciones de flanco. El bando que cuenta con los peones colgantes a menudo puede utilizar las columnas semiabiertas vecinas para presionar sobre los peones re­trasados. En tales casos, uno de los peones colgantes puede avanzar para restringir al maximo el peon retrasado, incluso a costa de ceder una casilla fuerte al oponente.

En general, podemos decir que los peones colgantes estan relacionados con ventaja espacial y que se requieren fuertes contramedidas para neutralizar una unidad movil, y que no siempre es­tan a disposicion del bando que se opone a ellos.

Por supuesto, cuando conseguimos forzar su avance y, empleando las casillas fuertes que habilitan tras su avance, frenar su accion, quedan atascados y Ia amenaza que representaban de­saparece. La presion frontal, combinada con clavadas en diagonal, resultan ser los mejores me-dios para lograr una posicion ventajosa. '

Las partidas caracteristicas e instructivas que se le ofrecen al lector pretenden constituir una seria advertencia: hay que temer el potencial dinamico de los peones colgantes y ser conscientes de su debilidad estatica.

La historia de Ia pareja de peones semicolgantes no es precisamente Ia misma. Un par de peones semicolgantes no representa un peligro inmediato para su oponente. Por el contrario, Ia casilla debil relacionada con su aparicion es, mas a menudo que al contrario, un signo de una debilidad potencialmente duradera. Aceptar un par de peones de ese tipo en Ia propia estructura central, es una seria responsabilidad. Hay una cuestion crucial que deberiamos planteamos en el momento en que surgen en el tablero: (,puede el par de peones semicolgantes convertirse, con exito, en un par de peones colgantes, o debe Ia unidad de peones soportar Ia presion en su forma actual? Si el caso es el ultimo, entonces podria repetir con Tigran Petrosian: jnunca permita una posicion asi ! En un gran numero de casos, su pas iva inmovilidad conduce a un dudoso medio juego y, con mucha frecuencia, a un final comprometido.

64 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

3 Peones pasados

En los capitulos anteriores, nos hemos encontrado en numerosas ocasiones con curiosos casas de metamorfosis, en los que peones aislados y colgantes, al adquirir movilidad y fuerza, se transformaban en una nueva especie de peones, a los que llamamos pasados.

El diagrama muestra un ejemplo tipico de peon pasado en una columna central. Ilustra la definicion basica: los peones pasados no tienen peones enemigos en su columna ni en las columnas adyacentes. Esta es la clave para entender la fuerza de los peones pasados, pues su libertad de movimiento es la causa y la ex­plicacion de la seria amenaza que plantean. Sin obstaculos a su avance, recorren la colum­na hacia la casilla de coronacion. A fin de fre­nar un peon pasado, a menudo debe sacrifi­carse una pieza, lo que, junto con su pasiva obligacion, hace que se eche de menos esa pieza en la lucha que se desarrolla en otros sectores del tablero.

Aparte de eso, podemos facilmente imagi­nar que el peon de "d5" (que ya se encuentra en campo negro) pueda avanzar a "d6" o "d7", con los efectos consiguientes en la restriccion de las piezas enemigas.

Podemos alcanzar estas conclusiones direc­tas mediante pura especulacion, examinando el diagrama y previendo los posibles aconteci-

mientos, pero si queremos conocer las virtu­des e inconvenientes del peon pasado, necesi­taremos algo mas. Asi pues, nos centraremos aqui en una seleccion de buenas partidas de Grandes Maestros para estudiarlas. Nuestro objetivo es observar el peon pasado en las complejas batallas del media juego, cuando sus mejores cualidades salen a relucir, pero antes de proceder, haremos un alto para ver un par de partidas clasicas por sus sobresalientes finales. Es en las elementales condiciones de un final, donde los valores basicos de una pie­za se ponen de manifiesto. Nuestro peon pa­sado no es una excepcion.

Euwe - Alekhine Campeonato Mundial (83 partida)

Amsterdam 1 935 Defensa Semi-Eslava

l.d4 d5 2.c4 c6 3)t]f3 tlJf6 4.e3 e6 5.tlJc3 a6

Hace mucho tiempo, esta variante estaba en boga, como una especie de Merano acelerado,

PEONES PASADOS 65

en la que las negras preparan . . . dxc4, seguido de . . . b5 y . . . c5. La siguiente jugada blanca constituyo entonces una novedad teorica. 6.c5 b6?

Un par de partidas despues, Alekhine mejo­ro su juego con la natural 6 . . . ttJbd7, al enten­der que 6 . . . b6 era prematuro y daba lugar a se­rias dificultades. 7.cxb6 �bd7 S.�a4 �xb6 9 . .id2 �xa4

En afios posteriores, Najdorf trato de mejo­rar esta jugada, con 9 . . . ttJbd7, pero entonces l O.Ei:c l i.b7 l l .a3 i.d6 1 2 .i.b4 deja agujeros en el campo negro. lO.VNxa4 VNb6 l lJ�cl .id7 12.�e5 VNxb2 13.�xd7 �xd7 14 . .id3!

Aunque era un excelente tactico, Euwe tam bien sabia jugar con sencillez, y esta parti­da es un brillante ejemplo de su rara habilidad. 14.'!Mxc6 se contestaria con la fuerte 1 4 . . . i.b4, mientras que 14.8:xc6 falla, por 1 4 . . . i.a3, y las negras se disponen a enrocar o seguir con . . . '!Mbl +. Por consiguiente, por ahora las blan­cas se desarrollan, con idea de retomar mas adelante el peon. 14 .. J�bS 15.�e2 :ab6 16.:abt

Tambien es bueno 1 6.8:xc6 Ei:xc6 1 7 .Ei:b l , propuesto por Alekhine. 16 ... �a3 1�xa3 .ixa3 tS:axb6 �xb6 19J�bl �d7 20 . .ixa6 �e7 2t .:ab3

2 l .i.b7 Ei:b8 22.Ei:b3 <i>d6 no da resultado. Las blancas han creado un peon pasado dis­tante y con la textual le abren paso. 21. .. .id6 22 . .ib7 c5 23.a4 .ibS

Lo molesto de los peones pasados es que hay que bloquearlos, lo que implica una pos-

tura defensiva. Para el alfil, "a7'' no es un lu­gar muy atractivo, pero no hay altemativa. 24J��b5

24.i.c6 Ei:d8 no les da nada a las blancas. 24 ... J.a7 25.dxc5 �xc5 26 . .ib4 �d6 27.a5 �c7 2S . .ixc5

La ventaja de la pareja de alfiles consiste en la posibilidad de cambiar uno de ellos a discrecion. Aqui, 28 .a6 ttJd7 29.J.c3 El:g8 30.i.d4 se contesta con la fria 30 ... J.b6. 2S ... J.xc5 29 . .ixd5 �d6

29 . . . exd5 30.8:xc5+ <i>d6 3 1 .8:c2, con idea de El:a2, conduce a un final , de torres perdido para las negras. Los alfiles de distinto color ofrecen mayor esperanza. 30.J.b7 J.a7 31.a6 :ads 32.:ab2 :!3d7 33.:!3d2+ �e7 34J�c2 :ad6 35.:!3c7+ :ad7 36J�c2 :!3d6 37.f4 f5

No es facil de decir como deberian esperar las negras, pero no hay duda de que los peo­nes negros sobre casillas blancas, lo mismo que el alfil blanco, constituyen un fardo adi­cional. Notese que 37 . . . Ei:d8 pierde, debido 38 .i.c8, y que 37 . . . f6 3 8.h4 no facilitaria las cosas. 3S.gcs :ads 39J�c7+ :ad7 40.:!3c3 gd6 41J�c7+ :!3d7 42.:ac3 :ad6 43.h4

43 ... g6 Tras un par de jugadas de espera, el juego

blanco se hace consistente, buscando el zugz­

wang. 43 . . . 8:d8 de nuevo falla, por 44.J.c8, 43 . . . <i>d7 por 44.8:c8, 43 . . . J.b8 por 44.8:c8 El:d8 45 .8:xb8, y 43 . . . i.b6 por 44.8:c8 El:d8 45 .8:c6 i.a7 46.i.c8 . 44.:ac2 h5 45.:!3c3

66 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Una buena opcion es 45 .El:c8 El:d8 46.E:xd8 @xd8 47.e4, seguido de exf5 y .idS . Las ame­nazas constantes a los peones negros harian posible que el rey blanco penetrase por "b7" . 4S .. J�b6 46J:�c7+ ®d6 47J�g7 �b2+ 48.®d3 ga2 49J�xg6 �a3+ SO.®c4 J.xe3 Sl . .idS .ixf4 S2.�xe6+ ®c7 S3.�c6+ ®b8 S4.�g6

54J�b6+ @a7 55.@b5 falla, por 55 . . . El:a5+. S4 ... .ic7 SS..ib7 ®a7 S6J��gS .idS S7.�xhS .ixh4 S8.�xf5 ®b6 S9J�bS+ ®c7 60.Eib3 gas 61. ®d4 .if2+ 62. ®e4 ®d6 63J�d3+ ®e6 64 . .ic8+ ®e7 6S.�dS Eia4+ 66. ®rs .ig3 67.gd7+ ®f8 68.a7 .if2 69 . .ia6

Las negras se rindieron. A causa del peon pasado distante de las

blancas, Ia resistencia negra era desesperada.

Kurajica - Karpov Skopje 1 976

Apertura Ruy Lopez

l.e4 eS 2.tlJf3 tlJc6 3 . .ibS a6 4 . .ia4 tiJf6 S . .ixc6 dxc6 6.tlJc3 .id6 7.d4 .ib4

7 . . . .ig4 tam bien es muy bueno, pero Kar­pov aspira a mas. 8.tlJxeS tlJxe4 9.0-0 .ixc3 10.bxc3 0-0 ll ..ia3 tiJd6 12.c4 f6

Las blancas han tratado Ia apertura torpe­mente y Ia posicion negra ya es algo mas facil de jugar. 13.tlJg4

1 3 .ltJd3 o 1 3 .ttJf3 E:e8 son, obviamente, fa­vorables a las negras. 13 ... ge8 14.tlJe3 tiJfS

A fin de ganar una partida de ajedrez, las negras deben primero igualar. Un jugador ex­perto, que busque Ia victoria, no debe desani­marse por Ia presencia de alfiles de diferente color si, de algun modo, puede obtener alguna ventaja minima de Ia posicion. lS.tlJxfS .ixfS 16.YlYd2 .ie6 17.YlYc3 YlYd7 18JUel YlYti 19.YlYb2

Las blancas no pueden permitirse continuar con 1 9 .c5 .ixa2, porque un peon pas ado dis­tante en Ia columna "a" seria una autentica pe­sadilla. 19 ... b6 20.cS bS

20 . . . .id5 2 1 .c4 conduciria a simplificacio­nes del tipo que quieren precisamente evitar las negras. 21..ib4 aS 22 . .id2 .idS 23.f3 �xel + 24J�xel b4 2S.a4 bxa3 26.YlYxa3 a4 27 . .ib4

La dama es demasiado valiosa para em­plearla como bloqueador, de modo que cedera su puesto al alfil . Debido a los alfiles de distinto color, el juego sigue equilibrado, pero el peon de "a4" es Ia primera sefial de peligro. De ahora en adelante, el alfil de casillas ne­gras tendra que estar muy atento. 27 ... YlYg6 28.YlYc3 hS 29 . .ia3 Eie8 30Jbe8+ YlYxe8 31 .®f2 YlYg6 32.YlYd3 YlYxd3 33.cxd3 h4 34.g3 ®ti 3S.®e3 fS 36.®f4 ®g6 37.®e3

Si 37 .gxh4, entonces 37 . . . @h5 38 .@g3 g6, y la situacion de las blancas se vuelve resba­ladiza. 37 ... ®hS 38 . .ib4 gS 39.®f2 .ia2 40 . .ia3 .ibl 41.®e2 .ia2 42 . .icl .ie6 43.®f2 .ic8 44.dS?

Desde el comienzo de la partida, las blan­cas han estado jugando a tablas. A pesar de su

PEONES PASADOS 67

juego pasivo, han mantenido el equilibria, pe­ro ahora pierden la paciencia. Despues de 44.me2 i.a6, vieron 45 .i.b2 hxg3 46.hxg3 f4 47 .gxf4 gxf4 48.i.c1 mg5 , y no les gustaba porque tendrian que entre gar el peon de 11 d3 11 o permitir . . . mh4-g3 . Omitieron, sin embargo, lo que Karpov seiialo despues de la partida: 45.me3 f4+ 46.gxf4 g4 47.f5 . Una vez omiti­da esta posibilidad, las blancas concluyeron que podrian simplemente entregar su peon 11d3 1 1 , un peon insignificante que necesitaba proteccion. Fue una decision erronea. 44 ... cxd5 45.d4

Las dificultades con que se enfrentan las blancas se deben al hecho de que su alfil esta anclado en la diagonal 11C l -a3 1 1 • A pesar de ello, sin embargo, parece que las negras no pueden mejorar su posicion, porque su rey no puede penetrar en campo blanco. Karpov, sin embargo, encuentra un estrecho camino hacia la victoria . . . 45 ... f4!

Las negras amenazan . . . fxg3+, seguido de . . . h3 , en cuyo caso los dos peones pasados ata­rian a las piezas blancas, y el rey negro podria emprender un agradable paseo hasta 11b 1 11 • Puesto que 46.g4+ falla, debido a 46 . . . ixg4 47.fxg4+ mxg4, etc. , las blancas no tienen eleccion. 46.gxf4 g4 47.®g2 .if5 48.®t2 gxf3 49.®xf3 �e4+ 50. ®t2 ®g4 51..ib2

Entregar el peon de 11h211 aim es peor. 51. .. ®xf4 52.�cl + ®g4 53 . .ib2 c6 54 . .icl ®h3 55.®gl .ig6 56.®hl .ih5 57.®gl �dl

Las blancas se rindieron.

El rey de Karpov jugara a 11e411, y las blan­cas no pueden evitarlo.

La fuerza del peon pasado es impresionan­te. A veces parece que su mera existencia ga­rantiza la victoria.

Alekhine - Capablanca Campeonato Mundial (343 partida)

Buenos Aires 1 927 Gambito de Dama

l.d4 d5 2.c4 e6 3.�c3 �f6 4 . .ig5 �bd7 5.e3 c6 6.a3

Las blancas evitan asi ' la Variante Cam­bridge Springs, pero ahora es mas facil para las negras conseguir el a vance liberador . . . c5 . 6 ... .ie7 7.tlJf3 0-0 8 . .id3 dxc4 9 . .ixc4 �d5 10 . .ixe7 ffxe7 l l.�e4 �5f6 12.�g3 c5

En su libro sobre Alekhine, el Gran Maes­tro Kotov consideraba un error esta jugada, porque retrasa el desarrollo de su alfil dama, y proponia 1 2 . . . b6. El fianchetto tiene su logica, pero la jugada de Capablanca tam bien es logi­ca y buena. 13.0-0 �b6 14 . .ia2 cxd4 15.�xd4 g6 16J3cl .id7 17.ffe2 gac8 18.e4 e5 19.�f3 ®g7?!

11El miedo es libre11 , dice el proverbio. Las negras temen, en su subconsciente, la presion sobre la diagonal 11a2-g811, asi que retiran de ella a su rey, sin razon evidente. Una solucion mas simple era jugar 1 9 . . . �xc l 20. �xc 1 �c8, o bien 19 .. . i.g4, eliminando el caballo de 11f3 11 • 20.h3 h6 2l .ffd2! !

Las negras s e liberaron de l a inseguridad que les creaba el alfil de 11a211, pero le regala-

68 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

ron un tiempo a su adversario, que ahora pue­de emplear en una extraordinaria jugada. El propio Alekhine estaba orgulloso de esta juga­da tranquila y sutil, que pone de manifiesto debilidades casi imperceptibles. Se amenaza Vf1 aS, creando marej ada en aguas aparente­mente tranquilas. Los cam bios repentinos siem­pre constituyen algun tipo de trastorno, y no es de extrafiar que hasta el gran Capablanca no consiga encontrar la replica adecuada. 21 • • • .ie6?!

La opcion era 2 1 . . . .ic6, contraatacando so­bre el peon de "e4", pero las blancas habian concebido una brillante amenaza tactica, 22.lDh4, para responder a 22 . . . lDxe4? con 23 .lDhf5+ gxf5 24.lDxf5+ <;t>g6 25 .Vfixh6+, y mate a la siguiente, mientras que 22 . . . .ixe4 23 .Vfie3 �xc l 24.�xc l �d8 25.lDxe4 lDxe4 26.Vfixe4 �d4 27.l2Jxg6 es peor para las negras que la continuacion de la partida.

Fue Lasker quien propuso la defensa co­rrecta: 2 l . . . lDa4. 22 • .ixe6 %Yxe6 23.%Ya5 llJc4 24.%Yxa7 llJxb2 25J�xc8 E:xc8 26JWxb7 tlJc4 27.%Yb4

Asi pues, finalizadas las complicaciones, tenemos la posicion cuyo estudio nos interesa. Se caracteriza por un peon pasado distante, en la columna "a". En adelante, todos los esfuer­zos de las negras estanin concentrados en de­tener dicho peon. 27 • • • E:a8 28.E:al %Yc6 29.a4 llJxe4 30.llJxe5!

Las negras persisten en su defensa, diabo­licamente ingeniosa. En caso de 30.l2Jxe4 Vfffxe4 3 l .�c l �c8 32.lDxe5? ! , Capablanca te­nia in mente hacer 32 . . . lDe3 33 .Vfixe4 �xc l +

34.<;t>h2 lD fl +, y cae la dama. 30 • • • %Yd6

De nuevo, lo mejor. 31.%Yxc4 %Yxe5 32J�el llJd6 33.%Ycl %Yf6 34.llJe4 llJxe4 35J�xe4

Una excelente defensa les ha permitido a las negras evitar lo peor y, con una serie de jugadas "unicas" , alcanzar un final de piezas mayores, esperando poder bloquear el peon pasado. Por desgracia para sus intereses, es una tarea imposible. 35 ••• E:b8 36J�e2

Acto primero: situar Ia torre detras del peon para obligar a las negras a adoptar una postura pasiva. 36 • • • E:a8 37.E:a2 E:a5 38.%Yc7

Acto segundo: lograr el control de la gran diagonal de Casillas negras, porque solo COm­binando amenazas contra el rey con el avance del peon podran tener exito las blancas. 38 ••• %Ya6 39.%Yc3+ i>h7 40.E:d2

La amenaza �d8 defiende indirectamente el peon. 40 ••• %Yb6 41.E:d7 %Ybl +

Deberiamos percibir que 4 1 . . .�a7 esta fue­ra de cuestion, pues el final de damas esta fa­cilmente perdido. 42. ®h2 %Yb8+ 43.g3 E:f5

Acto tercero : avanzar constantemente el peon, amenazando mate. 44.%Yd4

La dama ha encontrado una posicion domi­nante, controlando todo el tablero. 44 • • • %Y e8 45.E:d5 E:f3

El cambio de torres de nuevo esta fuera de

PEONES PASADOS 69

cuestion, porque con la dama blanca en la gran diagonal de casillas claras, el rey esta bien protegido y la promocion del peon es im­parable. 46.h4

Amenazando h5, las blancas arrancan nue­vas concesiones. Notese tambien la trampa 46.i>g2 se contesta con 46 . . . El:a3 47 .El:d8 (47 .a5 '\Wc6) 47 . . . El:xa4 48.'\Wf6 El:a6. 46 ... �h8 47.�b6!

En principia, el cambio de damas conviene a las blancas, pero en el momento en que la torre negra pueda atacar por detras al peon pasado. Naturalmente, si las negras jugasen ahora 47 . . . '\Wf6, las blancas cambiarian damas y obtendrian la posicion ideal, con El:d2-a2. 47 ... �al 48.i>g2 �U6 49.�d4

Acto cuarto: las blancas consiguen un final de torres ganado .

49 ... �xd4 50J�xd4 i>g7 51 .a5 ga6 52J�d5 gf6 53.gd4 ga6 54J�a4 �f6 55. i>f3 i>e5 56.®e3 h5 57.®d3 ®d5 58.®c3 ®c5 59J�a2 ®b5 60. ®b3 ®c5 61. ®c3 ®b5 62. ®d4 gd6+

Las negras consiguen liberar a su torre, pe­ro la penetracion del rey blanco resultara deci­stva. 63. ®e5 ge6+ 64. i>f4 i>a6 65. ®g5 ge5+ 66.®h6 gr5 67.f4 gc5 68.ga3 gc7 69.®g7 gd7 70.f5 gxf5 71. i>f6 f4 72.gxf4 gd5 73.®g7 gr5 74.ga4 ®b5 75.ge4 ®a6 76.®h6 gxa5 77.ge5 gal 78.i>xh5 ggl 79.gg5 ght so.gr5 ®b6 st .gxfi ®c6 82.ge7

Las negras se rindieron.

Esta lucha de gigantes es otra leccion de Ia vitalidad de un peon pasado. Aunque atacado por fuerzas superiores, logra sobrevivir, y las amenazas en ambos flancos evolucionan sin alteraciones.

Naturalmente, no hay reglas sagradas eter­namente validas. Incluso en el final su valor cambia segun las circunstancias. Podemos de­cir que, en general, un peon central pasado es menos peligroso que otro distante, lo que se explica facilmente. Su bloqueador no esta per­dido en el borde del tablero, de modo que pue­de llevar a cabo otras funciones. A veces, el peon pasado central se encm!ntra en peligro, y un ejemplo nos ayudara a recordar este hecho.

Gipslis - Korchnoi Campeonato de la URSS

Riga 1 970 Defensa Francesa

l .e4 e6 2.d4 d5 3.tlJd2 c5 4.exd5 exd5 5.tlJgf3 tlJc6 6.i.b5 .1d6 7.0-0 cxd4 8.tlJb3 tlJe7 9.tlJbxd4 0-0 10.b3 i.g4 t t .i.b2 �b6 12.i.e2 gadS 13.h3 i.h5 14.�d2 gfe8 15.gadl .ig6 16.gfel i.c5 17 . .1fl i.e4 18.a3 tlJxd4 19.tlJxd4 �g6

Las negras han neutralizado las tentativas blancas por crear presion sobre el peon central aislado, mediante un habil contrajuego de piezas y contrapresi6n sobre "d4". Al tras­ladar la dama a "g6", evacuan "b6" para el al­fil y apuntan a un nuevo objetivo en "c2" . 20.ge3 .ixd4 2t..ixd4 tlJf5 22.gc3 b6 23.a4 h6

Es erroneo 23 . . . lt:Jxd4, en vista de 24.'\Wxd4

70 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

24 . . . �xc2 25J!g3 Wfh6 26.Ei:c l �xb3 27.Ei:c6. 24J�ct �g5 25J�dl gcs 26.f3 tt)xd4 27.�xg5 hxg5 28.gxc8 :B:xc8 29.fxe4 tt)xc2 30.exd5?

Jugando bajo el influjo del peon pasado y su excelente curriculo en finales. Todo estaria bien si pudiese evitarse el cambio que sigue. Lo correcto es 30.Ei:xd5 ttJe3 3 l .Ei:d3, con jue­go igualado.

Despues de la textual, el peon queda expues­to, porque su soporte es debil. Es evidente que el rey negro lo bloqueani, permitiendo asi la movilidad de su torre. Cuando se combinan estos hechos, podemos concluir facilmente que el peon pasado se encuentra en serio peli­gro. 30 ... tt)e3 31 .:B:d3 tt)xfl 32.�xfl �f8 33.d6

De otro modo, seguiria 33 . . . �e7 y . . . �d6, con lo que pronto se perderia el peon. 33 ... :B:d8 34.a5 f6 35. �e2 �fi

El peon esta condenado.

36.:B:c3 �e6 37.axb6 axb6 38.:B:c7 gd7 39.:B:c6 :B:xd6 40.gc7 g6 41.�e3

4 1 .El:g7 se contestaria con 4 1 . .. Ei:d4 42.Ei:xg6 �f7 43 .Ei:h6 �g7 44.El:h5 El:b4. 41 ... �f5 42.:B:c4 �e5 43J!:c8 gd5 44.b4

Las negras amenazaban 44 . . . El:c5 . El pro­blema de las blancas, ademas de encontrarse con un peon menos, es la peligrosa situacion del peon "b" . 44 ... :B:b5 45.ge8+ �d6 46.gd8+ �e6 47.gd4 :B:e5+ 48.�f3 b5!

Juego preciso. Las blancas no podran man­tener su torre en la cuarta fila, lo que significa que el peon "b4" tambien esta perdido. 49.gd8

A 49.g3 , f5 amenaza 50 . . . Ei:d5, y a 49.g4, Ei:e l no tiene respuesta (50.�f2 �e5, etc.). 49 ... gf5+ 50. �e3 :B:f4 51.:B:e8+ �d7 52.gg8 �e7

Las blancas ganaran el peon de "g6", pero a costa de que la torre quede marginada en la columna "h" . 53.:B:xg6 �fi 54.gh6 �g7 55.:B:h5 :B:xb4 56.g3 gb3+ 57.�f2 b4 58.h4 gb2+ 59.�f3 :B:h2

En esta desesperada situacion, las blancas se rindieron.

El peon pasado, el orgullo de la posicion en tantos finales, fracaso en esta partida. Su rey estaba demasiado lej os y cayo pres a de las piezas enemigas. Esto sirve de excelente ad­vertencia contra los prejuicios de cualquier ti­po. Debemos tener presente que no hay reglas sagradas, y que cada caso de peon pasado de­be considerarse un caso unico.

PEONES PASADOS 7 1

Pillsbury - Gunsberg Hastings 1 895 Defensa Eslava

l.d4 dS 2.e4 e6 3.e3 g6 4.�e3 i.g7 S.�f3 ttl f6 6.i.d3 0-0 7 . � eS

Las blancas evitan hacer 7 .0-0, debido a 7 . . . �g4, pero no es una buena razon. Aunque el juego es cerrado, antes o despues los dos al­files blancos encontranin sus diagonales. Des­pues de 7.0-0, es mejor 7 . . . �e6, que tambien podria aplicarse contra la jugada textual. 7 ... dxe4 8.i.xe4 �dS 9.f4 i.e6 lO.YNb3 bS ll .i.xdS i.xdS 12.�xdS YNxdS 13.Y*fxdS exdS 14.�d3 �d7 1S.i.d2 �fe8 16.®e2 e6 17.�hel i.f8 18J!xe8 �xeS 19.�cl �xel 20.i.xcl i.d6

Las blancas han conseguido una ventaja minima, basada en la potencialmente fuerte casilla "c5" . Por supuesto, es muy poco, pero con las jugadas siguientes las negras contribu­yen a minar su propia posicion . . . 21.i.d2 ® f8 22.i.b4 ®e7 23.i.eS a6?! 24.b4 f6 2S.g4 AxeS 26.bxeS � b8?

Ver el diagrama siguiente

Las negras podian haber jugado mejor en varios momentos de esta secuencia. Por ejem­plo: 22 . . . �xb4, 23 . . . a5 o 24 . . . lt:Jxc5. Incluso ahora, 26 . . . a5 evitaria la catastrofe que sigue.

Es cierto que es muy facil omitir la oculta idea tactica de las blancas. Las negras espe­raban hacer . . . lt:Jc6, con una posicion impene­trable, pero juegan las blancas y golpean an­tes . . .

27.fS! De pronto, el peon de "d5" se vuelve vul­

nerable. La amenaza surge por "f4" y "b4", y no hay forma de parar ambos saltos de caba­llo: 27 . . . exf5 28.gxf5 g5 29.lt:Jb4, y 27 . . . lt:Jc6 28.lt:Jf4 conducen a la misma desafortunada posicion. 27 ... gS 28.tlJb4 aS 29.e6!

En este momento critico es cuando el peon pasado avanza de forma decisiva. 29 ... ®d6 30.fxe6 tlJxe6 31 .�xe6 ®xe6 32.e4!

jLa clave final! El peon de "e6" recibe re­fuerzos, y el rey blanco puede luchar contra los peones negros del ala de dama. 32 ... dxe4 33.dS+ ®d6 34. ®e3 b4 3S. ®xe4 a4 36.®d4 hS

Mayor resistencia ofrecia 36 . . . <it>e7 3 7. <it>c4 b3 38 .axb3 a3 39.<it>c3 f5 40 .gxf5 h5 4 1 .b4 a2 42 .<it>b2 al�+ 43 .<it>xal g4 44.b5 h4 45 .b6 g3 46.hxg3 hxg3 47 .d6+ <it>xd6 48.b7 <it>c7 49.b8�+ <it>xb8 50.e7, etc.

72 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

37.gxh5 a3 38.®c4 f5 39.h6 f4 40.h7 Las negras se rindieron. La proeza tactica realizada por el peon

pasado de Pillsbury no es un ejemplo raro. Las ideas combinativas a menudo estan relacio­nadas con peones pasados, cuando Ia fuerza de los peones se manifiesta en toda su pleni­tud. Veamos otro ejemplo.

Kasparov - Romanishin Match-tomeo de selecciones nacionales

Moscu 1 98 1 Defensa Griinfeld

l.d4 ltlf6 2.c4 g6 3.ltlc3 d5 4.cxd5 ltlxd5 5.e4 ltlxc3 6.bxc3 �g7 7.ltJf3 c5 8.�e3 �aS 9.�d2 ltJc6 lOJ�cl cxd4 l l .cxd4 �xd2+ 12.®xd2 0-0 13.d5 �d8 14.®et ltJa5

Una variante muy estudiada de Ia Defensa Griinfeld. Mencionemos que 14 . . . lbb4 1 5 .id2 no es atractivo, como tampoco 14 . . . tbe5 1 5 .tbxe5 ixe5 1 6.f4 ig7 1 7.®f2. 15.�g5 �f6

Exactamente lo que las blancas querian provocar. AI atraer el alfil a "f6", impiden que las negras ataquen su centro de peones con . . . f5 o . . . e6. Mas tarde, analistas minuciosos recomendaron 1 5 . . . id7 1 6.id3 f5 1 7 .e5 ie8 1 8 .d6 �dc8. 16.�d2 b6 17.�c7 �g4 18.�a6 e6 19.tDg5!

Es cierto que las blancas no han resuelto del todo su desarrollo, pero Ia torre negra de "a8" y el caballo de "a5" tambien estan fuera de juego. La textual es posible por las bien si­tuadas piezas blancas y un pequefio truco tac-

tico que no deberiamos omtttr: 1 9 . . . exd5 20.tbxf7 �d7 pierde, debido a 2 1 .lbh6+ �g7 22.�c8 . 19 ... �e5 20.�xf7 exd5 21.f4 lLg7 22.f5 dxe4?

A Romanishin se le escapa 22 . . . gxf5 23 .h3 ih5 24.�xg7+ cj;;xg7 25.tbe6+ cj]f6 26.exf5 �e8 27 .g4 �xe6+ 28.fxe6 ig6. Sin embargo, ve una luz al final del tunel, depositando sus ultimas esperanzas en el peon p&sado. 23.ixa5 bxa5 24.ic4 ic3+ 25. ®f2 e3+

Sigue habiendo esperanza. Si 26. �xe3, en­tonces 26 . . . id2+. 26.®g3 ie5+ 27.®xg4

A 27. �h4 seguiria lo mismo. 27 ... �d4+ 28.®h3 �xc4 29.f6

Esto les costara toda una pieza a las negras, pues 29 . . . �c7 no da resultado, a causa de 30.�xc7 ixc7 3 1 .f7+ �h8 32.tbe6 id6 33 .�e l . 29 ... �xf6 30.�xf6 �e8 31.�el e2 32.®g3 �a4 33.®f2 �xa2 34.tDe6 a4 35J�bl ?

35 .tbd4 bastaria para ganar, pero las blan­cas quieren construir una red de mate. 35 ... a3 36.�b7 el �+

36 . . . �al 37 .�xe2 a2 tambien es suficiente para hacer tab las. 37.®xel �xg2 38J�g7+ ®h8 39.�gf7

Se amenaza mate y parece inevitable, pero dos peones pasados son un arma terrorifica que nunca deberiamos subestimar. 39 ... h5

Veremos que era mas seguro 39 . . . h6, sin ceder Ia casilla "h6" a Ia torre blanca. 40.'t!?n �xh2?

El error final, en el momento en que la po-

PEONES PASADOS 73

sicion era segura. Con 40 . . . a2 4 1 .8:xa7 8:xh2, las negras tienen tablas. 41Jhg6 E:xe6 42J3xe6 ®g8 43.E:xa7

Las negras se rindieron. Aunque Romanishin dejo escapar su opor­

tunidad, no debe escaparsenos a nosotros el mensaje de esta emocionante lucha: j atencion a los peones pasados ! Bien por el efecto para­lizador de un peon muy avanzado o distante, o bien por su vitalidad combinativa, los finales constituyen un increible espejo en el que se reflejan sus cualidades naturales. Sin embar­go, el escenario idoneo para que un peon pasado muestre todo su poder es el centro del tablero.

A continuacion pondremos a prueba su va­lia en circunstancias mas complejas.

Korchnoi - Mikenas Campeonato de la URSS

Riga 1 970 Gambito de Dama

l.d4 d5 2.c4 e6 3.tlJf3 c5 4.cxd5 exd5 5.g3 tlJc6 6 . .ig2 c4 7.0-0 .ib4

En el orden normal de jugadas, con ltJc3 en lugar de 0-0, esta es la variante jugada y analizada por Stahlberg y algunos otros maes­tros suecos, de ahi que se le haya llamado Va­riante Sueca. Sin embargo, hay una pequefia diferencia en el orden de jugadas elegido por Korchnoi, que constituye una diferencia signi­ficativa. AI haber diferido el desarrollo de su caballo dama, las blancas pueden minar la unidad de peones "d5-c4" .

8.b3 cxb3 9.�xb3 tlJge7 10 . .ia3 Los comentaristas sefialaron que 1 O.id2

1 0 . . . ixd2 1 1 .ltJbxd2 era tambien favorable a las blancas. 10 ... .ixa3 l l.�xa3 0-0 12.tlJc3 .if5 13.tDh4

La idea no es solo privar al alfil de su ac­tivo puesto en la casilla "f5" , sino tambien preparar e4. 13 ... .ie6 14.E:abl b6 15.E:fdl tlJa5 16.e4

Este avance fue preparado con ltJh4, y se ejecuta en armonia con la posicion de las blancas. Korchnoi esta jugando para crear un peon pasado en una columna central. Las ne­gras no pueden anular las expectativas de su rival, pero la cuestion es si podran sostener firme la casilla "d5" , bloqueando el peon "d4" . 16 . . . dxe4 17 . .ixe4 tlJd5 18.E:bcl E:c8?

L,Quien podria imaginar que este movi­miento tan natural constituye, de hecho, el error decisivo? 19 . .ixd5! .ixd5 20.tlJf5 tlJc4

La primera clave radica en el hecho de que 20 . . . <j{h8 se refuta haciendo 2 1 .ltJxd5 'I.Wxd5 22.ltJe7 �xc 1 23.ltJg6+, ganando calidad. 21.�b4

La segunda clave: al provocar . . . aS , las blancas impiden . . . ctJa5 . 21. . . a5 22.tlJe7+ ®b8 23.�b3

Ahora 23 . . . '\Wxe7 pierde pieza, y no es posi­ble jugar ya 23 . . . ltJa5 . Las negras estan obli­gadas a seguir el camino alfombrado por la combinacion de Korchnoi. 23 ... tlJd2 24.�xd5 �xe7 25.E:xd2 �xc3 26J3xc3 �el+ 27.®g2 �xd2 28.�xti

Tercera y ultima clave. Las negras pierden

74 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

material y, lo que es peor, no pueden permi­tirse hacer 28 .. J!d8, debido a 29.V9d5, jugan­do de nuevo sobre Ia debilidad de Ia ultima fila. La posicion en el centro esta despejada, y el peon pasado solo debera superar obstaculos menores. 28 .. J3g8 29J3e3

Defiende el peon "d4" por Ia amenaza :§:e8, y mejora Ia posicion de Ia torre. 29 ... h6 30J�e4 �c2

30 . . . b5 ofrece mayor resistencia. El peon "d4" debe ser contenido por todos los medios posibles. 31J�e6 b5

Esta vez era mejor 3 1 . . .V9d2, porque ahora el veloz peon pasado priva a las negras de toda posibilidad. 32.d5 �xa2 33.d6 1l;Yd5+

34.�h3 1l;Yc4 35.d7 �fl+ 36.�h4 g5+ 37.�g4 h5+ 38.�xh5+

Las negras se rindieron.

La combinacion de Korchnoi se baso en Ia existencia de un peon pasado, que es el res­ponsable del triunfo final. No es una casua­lidad que los fuegos tacticos estuviesen justifi­cados. La mera existencia de un peon pasado central se basa normalmente en motivos tac­ticos. Las partidas que siguen confirman esta leccion elemental.

Szabo - Timman Amsterdam 1 97 5

Defensa India de Rey

l .c4 g6 2.tiJc3 �g7 3.d4 d6 4.e4 tiJf6 5.f4 c5 6.d5 e6 7.tiJf3 0-0 8.�e2 exd5 9.cxd5 ges

El Ataque de los Cuatro Peones contra la India de Rey se caracteriza por las tentativas blancas de realizar una ruptura central. Sin embargo, invierten muchos tiempos en la idea, dejando a las negras una amplia gama de op­ciones.

Los jugadores agudos pueden optar por 9 . . . b5, mientras que los mas tranquilos pueden decantarse por 9 . . . i.g4, contrarrestando indefi­nidamente el a vance e5 . 10.e5

Evaluacion correcta. Este sacrificio de peon les permitira a las blancas abrir la columna "f', acelerar su desarrollo y, lo que es mas importante, crear un peon pasado en la co­lumna "d" . 10 ... dxe5 l l.fxe5 tlJg4 12.�g5

1 2.e6 fxe6 1 3 .d6 i.d7 14.0-0 i.c6 1 5 .ttJg5 ttJe5 resulto mejor para las negras en la par­tida Udovcic - Marovic, Campeonato de Yu­goslavia 1 964. 1 2.0-0 ttJxe5 1 3 .i.f4 i.f5, se-

PEONES PASADOS 75

guido de . . . ctJbd7, tambien es favorable a las negras.

En ambos casos, el peon pasado puede blo­quearse con exito, de modo que las blancas pierden la iniciativa. 12 ... (6

Racer 1 2 . . .'\Wb6 conduce a juego mas agu­do : 1 3 .0-0 ctJxe5 (o bien 1 3 . . . c4+ 1 4.�h l , y 14 . . . ctJf2+? 1 5 .El:xf2 Wlxf2 1 6.ctJe4 Wlb6 1 7 .ctJd6 El:f8 1 8 .ie7 ctJd7 1 9.ctJxc4 les da a las blancas una abrumadora superioridad central) 14.d6, y este peon avanzado constituye una evidente compensacion por el insignificante material sacrificado. 13.exf6 i.xf6 14.YMd2 i.f5

El ala de dama negro esta subdesarrollado, y no hay tiempo que perder. 14 . . . ctJd7 1 5 .0-0 ctJde5 1 6.ixf6 W!xf6 1 7.ctJg5 y 14 . . . ixg5 1 5 .Wxg5 ctJe3 1 6.Wxd8 El:xd8 1 7 .�f2 son con­tinuaciones dudosas para las negras. 15.0-0 i.xg5 16.YMxg5 lL!d7 17.h3 lL!e3 18.YMh6!?

Las blancas sacrifican calidad, entrando en complicaciones en las que el peon pasado ten­dra un papel protagonista. 18 ... lLlxf1 19.lLlg5 YMe7

Despues de 19 . . . El:e7 20.d6, la amenaza sur­ge en forma de ic4+, y 20 . . . ctJe3 2 1 .dxe7 Wxe7 22.El:e l es favorable a las blancas. 20.d6

El peon resulta muy molesto. 20 ... YMe3+ 21.�xfl lL!f8 22J�d1 �e5

Las negras quieren jugar . . . El:f5+. 23.d7 �d8?

Las negras disponian aqui de una buena

eleccion de jugadas, en lugar de la textual, que es perdedora. La primera que llama nuestra atencion es 23 . . . Wif4+ (quitandoles a las blan­cas el jaque de "c4") 24.if3 (o bien 24.�e l El:d8 25.ctJd5 Wlc4) 24 . . . El:d8 25.ctJe2 Wle3, y las negras estan mucho mejor. Tambien es juga­hie 23 . . . ixd7. Por ejemplo: 24.El:xd7 El:f5+ 25.if3 ctJxd7 26.Wixh7+ �f8, y con cualquier cosa que he probado, las negras quedan bien. Incluso me resulto sorprendente que tambien sea digna de considerar 23 . . . ixh3 . Por ejem­plo: 24.Wxh3 Wlxg5 (controlando la casilla "d8"), mientras que 24.d8WI, pierde, debido a 24 . . . El:f5+.

Sin embargo, con un peon pasado en septi­ma siempre hay que mantenerse alerta. En su busqueda de la victoria, las negras subesti­maron el peon de "d7" . 24.i.c4+ i.e6

25.lL!xe6! �f5+ 25 . . . Wixh6 pierde, debido a 26.ctJxd8+ �g7

27.ctJe6+ ctJxe6 28.ixe6. 26.lL!f4+ �h8 27.lL!d5 f;Ye4 28.i.e2 lL!e6 29.i.f3 YMc4+ 30.�g1 lLlxf4 31.lLle3 f;Ye6 32.lLlxf5 YMxf5 33.�e1 lL!e6 34 . .ig4

Las negras se rindieron. El peon pasado podia haberse conservado

en esta partida, pero su avance dio paso a un rico juego tactico en el que cualquiera podia perder facilmente el hilo. Notese tambien que en el momento en que surgio el peon pasado en la columna "d", las negras aun tenian que desarrollar su flanco de dama. Las blancas quedaron con ventaja espacial y pudieron ini­ciar juego en el flanco de rey.

76 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Kasparov - J. Pribyl Campeonato de Europa de paises

Skara 1 980 Defensa Griinfeld

l.d4 �f6 2.c4 g6 3.�c3 d5 4.cxd5 �xd5 5.e4 �xc3 6.bxc3 .ig7 7.�0 b6

Por supuesto, 7 . . . c5 es conocido y con­sistente con el fianchetto de rey. Si la textual llega a merecer consideracion, no es desde luego en este momento. 8 . .ib5+ c6 9 . .ic4 0-0 10.0-0 .ia6 ll ..ixa6 �xa6 12.VNa4

Una importante altemativa es 1 2.ig5 , con idea de Vfff d2 y Ei:ad 1 . El errante caballo de las negras justifica una concentracion de fuerzas asi en el centro. 12 ... VNc8 13 . .ig5 VNb7 14JUel e6 15J�iabl c5 16.d5

A costa de un peon, las blancas crean un peon pasado. El apoyo coordinado de sus piezas justifica la decision. Ahora vemos por que la torre dama se movio a "b 1 " : para frenar el a vance del peon "b" . 16 ... .ixc3 17J�iedl exd5 18.exd5 .ig7 19.d6

Las blancas amenazan ie7, ganando mate­rial. Los frutos de la ruptura que se tradujo en el peon pasado son evidentes. Las piezas ne­gras han perdido su coordinacion, y son inca­paces de oponerse al avance del peon pasado. 19 ... f6 20.d7!

Confiando en el valor de su peon pasado, las blancas estan dispuestas a sacrificar una pieza entera. Rehusar el sacrificio no sirve, pues si 20 . . . Ei:ad8, continua 2 l .Vfffc4+ �h8

22.tLle5 fxe5 23 .ixd8 Ei:xd8 24.Vfffe6 Vfib8 25 .Ei:b3, que conduce al desastre.

Hagan lo que hagan, el problema de las ne­gras sigue siendo el mismo. No tienen forma alguna de oponer una defensa razonable, pues sus fuerzas estan divididas por la ominosa presencia del peon pasado "d7" . 20 . . . fxg5 21.VNc4+ �h8 22.�xg5 .if6 23.�e6 �c7

23 . . . tLlb4 no Iibera a las negras de su si­tuacion, pues 24.Vffff4 tLlc6 25.tLlxf8 Ei:xf8 26.d8=Vfff gana material gracias a la clavada. 24.�xf8 gxf8 25J�d6 .ie7

En caso de 25 . . . id8, sigue 26.h4 Vfffa6 27.Vfffc3+ �g8 28.Vfffc2, y E!:xg6+ planea sobre la posicion.

Lamentablemente para las negras, la textual permite al peon alcanzar su objetivo final: 26.d8\W!

Inesperado y precioso. Puesto que pierde 26 . . . Ei:xd8, no hay altemativa. 26 ... .ixd8 27.VNc3+ �g8 28.gd7 .if6 29.VNc4+ �h8 30.VNf4

Las blancas recuperan el material, pero las negras, cansadas y confundidas, omiten el ma­te. 30 ... VNa6? 3t .VNh6

Las negras se rindieron. El peon pasado causo estragos en el campo

negro. La explicacion radica en la excelente disposicion de las piezas de apoyo y la fuerza en si del peon pasado, que pudo cortar en dos al ejercito enemigo, haciendo posible que las blancas maniobrasen facilmente contra el ex­puesto rey negro.

PEONES PASADOS 77

Minic - Planinc Zagreb 1 975

Apertura Ruy Lopez

l.e4 e5 2.tlJf3 tlJc6 3 . .ib5 a6 4 . .ia4 tlJf6 5.0-0 b5 6 . .ib3 .ib7 7.d4

Las blancas podrian continuar solidamente con 7 J�e 1 , pero tenian in mente algunas ex­periencias anteriores. Era bien sabido que Planinc jugaba esta linea. 7 ... tlJxd4 8.tlJxd4 exd4 9.e5 tlJe4 10.c3 d3

Ambos jugadores consideraban que tras 1 0 . . . dxc3 l l .�f3 �e7 12 .tbxc3, Ia posicion estaba perdida para las negras, y creo que tenian razon. La teoria recomienda l l . . .d5 1 2.exd6 (por entonces Minic opinaba que 1 2.tbxc3 reporta buena compensacion por el peon) 1 2 . . . �f6, pero las negras no desean desarrollar a su oponente, sobre todo porque pueden contestar a 1 1 . � xd3 con 1 1 . . . tD c5 y eliminar el alfil de "b3 ", linea que habian ju­gado antes con exito. l l.�f3

Esto era lo que Minic habia preparado en casa, impidiendo l l . . . d5 , debido a 1 2.exd6 tbxd6 1 3 .i.xt7+, etc. l l. .. �e7 12.tlJd2 0-0-0! ?

Con Planinc siempre s e trataba de " o todo o nada" . Despues de Ia partida, ni siquiera que­ria ver 1 2 . . . tbc5 1 3 .i.d5 i.xd5 (si 1 3 . . . c6, 14.tbe4) 14 .�xd5 c6 1 5 .�d4, que ofrece mejores posibilidades a las blancas, y con lo que las negras solo pueden esperar una defen­sa pasiva. 13.tlJxe4 �xeS 14J�el f5 15.�g3 �e8

Nunca fue facil predecir las jugadas de Planinc. La idea de sacrificar Ia dama no es en absoluto evidente. A juzgar por el tiempo que invirtio en Ia apertura, Planinc Ia encontro ante el tablero. Su decision audaz y decidida, no lo olvidemos, se basa en el casi olvidado peon libre, que ha sobrevivido, incrustado en campo blanco. 16.tlJd6+ .ixd6 17J�xe8 ghxe8 18 . .if4?

Solo al dia siguiente encontro Minic Ia co­rrecta (aunque nada atractiva) 1 8 .f4 i.c5+ 1 9.<j{fl ge2 20.i.d l , devolviendo material para conseguir, de esa �orma, un final venta­joso.

18 ... d2! Cuanto mas cerca se encuentre de Ia casilla

de promocion, tanto mas peligrosos son los trucos tacticos derivados del peon pasado. Protegido por Ia clavada del alfil de "f4", el peon amenaza mate. En este momento, las blancas seguian teniendo ilusiones de ganar Ia partida. De haber entendido que las cosas se estaban poniendo feas para sus intereses, probablemente habrian logrado salvar el jue­go. Por ejemplo: 1 9.Wfl ge4 20.ixd6 gde8 2 l .f3 ge l + 22.gxe l dxe l �+ 23 .�xe l gxe l + 24.Wxel cxd6 era l o mejor que podian hacer. Minic eligi6, en cambio, lo que parecia ser una facil victoria. 19.gfl gel 20 . .Axd6 gde8 21 .f3

La variante 2 l .�d3 gxfl+ 22.�xfl cxd6 23 .f3 ge l 24.Wf2 gxfl + 25.Wxfl i.d5 es fa­vorable a las negras y fuerza Ia eleccion de las blancas. 21. . ..id5!

78 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

(,Como sobrevivir a este zarpazo? Minic no lo consigue, lo que no es sorprendente, pues cada jugada es un shock para las blancas y todas ellas giran en tomo al peon pasado. La idea, por supuesto, es desviar la defensa de la casilla de coronacion, "d l ". Para que las cosas sean peores, las negras no solo amenazan . . . i.xb3, sino tambien . . . i.c4. 22.YNf4

Las blancas, por fin, entienden que se jue­gan la vida y que el peon de "d2" es su cruz. El peon debe, por tanto, eliminarse a cual­quier precio, pero al tratar de hacerlo con la dama, las blancas pierden el control de otra casilla vital, "e l " .

Por consiguiente, lo preciso era 22.i.f4, la jugada mas segura para las blancas, contra la cual las negras pueden forzar una repeticion de jugadas, con 22 . . . E:xfl+ 23 .i>xfl i.c4+ 24.i>f2 E:e2+, etc. Tambien pueden aspirar a mas, con 22 . . . i.c4, pero las blancas disponen de una elegante maniobra defensiva: 23 .i.xc4 d l\W 24.i.d3, y el alfil colgado mantiene in­tacta la posicion. 22 ... .ic4 23.h4

Lo unico que puede hacer ahora el rey blanco es escapar. Pero a(m hay esperanza. 23 • . J�xfl+ 24.�h2 E:e2

Las negras no estan dispuestas ya a entre­gar su precioso peon. 25 . .ixc7 gm

Ver el diagrama siguiente

Despues de la partida, Minic opinaba que 25 . . . E:g l no basta para ganar, y tenia razon, ya

que tras 26.i>xgl i.xb3 27 .i.a5 d l\W+ 28 .i>h2 d6 29.\Wg5, el rey de las negras queda expues­to.

26.YNd6? Ambos jugadores entraban en apuros de

tiempo, cuando las blancas se vinieron abajo. En realidad, a(m no habian agotado sus posi­bilidades de salvacion, y 26.i.d 1 ! sigue ofre­ciendo resistencia.

Despues de 26 . . . E:xg2+, 27 .i>h3? pierde en el acto, por 27 . . . i.e6 ! , que paraliza la dama blanca por la constante amenaza . . . f4+. Sin embargo, con 27.i>hl las cosas no son tan faciles. 27 . . . E:gf2 no lleva a ninguna parte, y en caso de 27 . . . i.d5 (amenazando . . . E:gf2), 28 .i.b6 E:h2+ 29.\Wxh2 i.xf3+ 30.i>gl E:xh2 3 1 .i>xh2 (pero no 3 1 .i.xf3 E:xh4 32.i.e3 E:h3, o bien 32 . . . E:e4, etc.) 3 1 . . . i.xd l 32.i.e3 con­duce a una posicion en la que no esta claro co­mo pueden ganar las negras, aunque 32 . . . i.b3 33 .i.xd2 ixa2 les deje con tres peones de ventaja. 26 ... E:xg2+ 27.�h3 E:h2+ 28.�g3 E:eg2+ 29. �f4 gxh4+ 30. �xf5 E:h6

Las blancas se rindieron. Fue una soberbia partida. Colgando sobre

el destino de las blancas cual espada de Da­mocles, el peon pasado negro fue toda una fuente de inspiracion.

Ahora es mucho mas facil entender a Aa­ron Nimzovich, cuando dijo que el peon pa­sado era un delincuente al que habia que en­cerrar bajo llave, porque otras medidas no eran suficientes.

PEONES PASADOS 79

Spassky - Petrosian Campeonato Mundial (53 partida)

Moscu 1 969 Gambito de Dama

l.c4 tiJf6 2.tiJc3 e6 3.tiJf3 d5 4.d4 c5 5.cxd5 tlJxd5 6.e4 tlJxc3 7.bxc3 cxd4 8.cxd4 .ib4+ 9 . .id2 .ixd2+

Vale la pena comparar el curso de esta partida con una famosa partida clasica, Ru­binstein - Schlechter, San Sebastian 1 9 1 2, que continuo asi: 9 . . . Wfa5 1 0.Ei:b 1 ixd2+ 1 1 .Wfxd2 Wfxd2+ 1 2.mxd2 0-0, y la excelente jugada de Rubinstein, 1 3 .ib5, obstaculizando el desa­rrollo normal y disponiendose a dominar la columna "c", le reporto una evidente ventaja, realzada por la activa posicion del rey blanco centralizado. to.tyxd2 0-0 l l ..ic4

La posicion mas activa para el alfil de casillas blancas. Desde aqui apoya el avance en el centro. La primera advertencia de futu­ros acontecimientos. ll ... tlJc6

Es mas flexible 1 1 . .. ttJd7, en muchos as­pectos, porque deja abierta la diagonal "a8-h 1" para el alfil negro, mientras que el caballo puede incrementar la presion sobre los peones centrales con . . . ttJf6, o bien defender al rey con . . . ttJf8, y servir de bloqueador ante el avance del peon de "d4", pero es mas pasivo. 12.0-0 b6 1 3 .a4 ib7 14.Ei:fe 1 Ei:c8 1 5 .id3 (como en la partida Petrosian - Tal, Campeo­nato de la URSS por equipos, Moscu 1 972), con idea de a5 y una duradera presion, que

subraya los inconvenientes de ese desarrollo altemativo. 12.0-0 b6 13J�adl

Cuando se planea el avance central, la po­sicion mas natural para las torres es "d 1 " y "e1 " . 13 ... .ib7

En otra famosa partida, disputada mas tarde en ese mismo afio, despues de las jugadas 1 3 . . . lt:Ja5 14.id3 ib7 15 .Ei:fe 1 Ei:c8, 1 6.d5 ! de nuevo sorprendio a las negras. La continua­cion fue: 1 6 . . . exd5 1 7.e5 lt:Jc4 1 8 .Wff4 ttJb2 1 9 .ixh7+! mxh7 20.ttJg5+ mg6 2 1 .h4 ! , que coloco al rey negro en una siiuacion muy difi­cil, Polugaievsky - Tal, Campeonato de la URSS, Moscu 1 969. 14JUel gc8 15.d5

Todo esta listo para que las blancas creen un peon pasado en la columna "d" . 15 ... exd5

Si las negras reaccionan con 1 5 . . . ttJa5 , en­tonces 1 6.dxe6 Wfxd2 1 7.exfl+ mh8 1 8 .ttJxd2 lt:Jxc4 1 9.ttJxc4 Ei:xc4 20.e5 ic8 no reporta nada, pero sencillamente 1 6.id3 traspone a la partida Polugaievsky - Tal mencionada en el comentario a la jugada 1 3 . 16 . .ixd5 tlJa5?!

Una clavada siempre produce inquietud, y los jugadores estan inclinados a desembara­zarse de ella lo antes posible. Sin embargo, la pregunta que surge de inmediato es: {.que hara el caballo en la banda? Era superior el movi­miento 1 6 . . . Wfe7. 17.Wf4 Wc7?!

Cambiar alfiles significa aceptar un fuerte y

80 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

bien protegido peon pasado en la columna "d", pero de nuevo era mejor 17 . . .'tJ:ff.e7. 18.Wff5!

Aunque algo sorprendente, esta jugada es natural y fuerte. AI amenazar lt:Jg5 , las blancas provocan la reaccion que sigue. 18 ••• .ixd5 19.exd5 Wfc2

Situadas entre dos fuegos (amenazas direc­tas a su rey y el peon pasado, listo para avan­zar), las negras deciden que su prioridad es el primero de estos temas. No pueden resolver ambos problemas. 19 . . . lt:Jc4, tratando de con­seguir la posicion de bloqueo ideal en "d6", falla, por 20.lt:Jg5 g6 2 1 .1Wh3 h5 22.lt:Je4 lt:Jd6 23.lt:Jf6+ r:Jlg7 24.1Wg3, seguido de 1We5 y pa­nilisis completa. La defensa altemativa del flanco de rey, con 1 9 . . . 'tJ:ff. d6 20. ttJ g5 1W g6 falla, despues de 2 1 .1Wxg6 hxg6 22.d6, y ahora es el peon avanzado lo que paralizani a las negras. Spassky mostro la linea 22 . . . lt:Jb7 23 .d7 �cd8 24.�e7 lt:Jc5 25 .�d6 lt:Jb7 (o bien 25 . . . f6 26.lt:Je6 lt:Jxe6 27.�dxe6, etc.) 26.�c6 lt:Jc5 27 .�c7 f6 28.�xc5, etc.

Siguiendo la logica de esta continuacion, la textual podria castigarse del mismo modo: 20.1Wxc2 �xc2 2 1 .�e7, y el peon no puede ser detenido con exito. 20.Wff4?! Wfxa2?!

Esta 20a jugada se caracteriza por una falta de concentracion de ambos contendientes, ya que los dos subestiman la fuerza del avance del peon pasado. En el caso de las negras es psicologicamente mas comprensible. "Puesto que no puedo frenar al peon, debo, al menos, ganar algun material", un razonamiento co-

mun en tales situaciones. El peon de "a2" no tiene valor y las negras deberian concentrarse en el peon "d". Su unica posibilidad era 20 . . . �ce8 2 1 .d6 �xe1 + 22.�xe 1 1Wd3 . 21.d6 E:cd8 22.d7

El efecto paralizador del peon pasado anun­cia el fin de la lucha. Por lo general, cuando avanza demasiado en campo enemigo, no es posible ofrecerle una defensa organica. 22 • • • Wfc4 23.Wff5 h6 24.E:cl Wfa6 25.E:c7 b5?

Es mejor 25 ... lt:Jb3 , en tanto que evita la de­vastadora replica 26.�e8 (vease la nota si­guiente ), pero despues de 26.g3 , las negras si­guen en dificultades. 26.�d4?

Las blancas se complican la vida, al omitir Ia simple 26.�e8. 26 ••• Wfb6

El entrenador de Spassky, Igor Bondarevs­ky, demostro que era mas tenaz 26 . . . 1Wd6 27.lt:Jxb5 1Wd2 28 .�fl lt:Jb3 29.�xa7 lt:Jd4, disminuyendo la presion con el cambio de ca­ballos. 27J�c8 �b7

Si 27 . . . b4, entonces 28 .�e8 1Wxd4 29.�xf8+ �xf8 30.�xf8+ r:Jlxf8 3 1 .1Wc5+. Un bonito to­que final, posible de nuevo por el peon avan­zado.

28.�c6 �d6 29.�xd8 �xf5 30.�c6 Las negras se rindieron. La victoria de Spassky me recuerda la si­

guiente partida, jugada unos a:fios antes y ca­racterizada por las mismas tipicas dificultades que el bando defensor experimenta al enfren­tarse a un peon pasado en el centro.

PEONES PASADOS 8 1

Keres - Geller Candidatos, match de desempate (83 partida)

Moscu 1 962 Gambito de Dama

l.d4 tl)f6 2.c4 e6 3.tl)f3 d5 4.tl)c3 c5 5.cxd5 tl)xd5 6.e3 tl)c6 7 . .ic4 tl) xc3 8.bxc3 .ie7 9.0-0 0-0 10.e4

Al tomar en la casilla "c3 ", las negras re­forzaron el centro enemigo, lo que, por em­plear el lexico tenistico, probablemente fue un error no forzoso. Al ayudar a su oponente a construir un centro de peones, se crearon difi­cultades. 10 ... b6 l l..ib2 .ib7 12.YNe2 tl) as

El avance central ya esta en el aire: d5 , exd5, ixd5 conviene perfectamente a las blancas. 13 . .id3 gcs 14.gadl cxd4

No es una decision facil. El cambio subraya la fuerza del alfil de "b2" y, en combinacion con la evidente ruptura central, se acenrua la postura agresiva de los alfiles blancos, que apuntan al enroque negro. 15.cxd4 .ib4?!

Esta jugada constituye una bonita idea, pe­ro a las negras les faltara un tiempo para im­plementarla. La intencion de E. Geller es 1 6 . . . ic3 , una forma natural de defender la po­sicion del rey enrocado. 1 5 . . . if6 era la unica forma de tratar de parar el ataque masivo que amenaza al rey negro. 16.d5 exd5 17.exd5 YNe7

1 7 . . . ixd5 facilita a las blancas el ataque directo, con 1 8.VMe5 f6 1 9.VMh5, mientras que

1 7 . . J�e8 1 8 .tt:Je5 multiplica las amenazas. Es probable que Geller tuviese in mente 1 7 . . . ic3, pero tuvo que renunciar a la idea, debido a 1 8.if5, despues de lo cual la torre no tiene lugar en la columna "c". 18.tl)e5! f6

Keres sefialo 1 8 . . . id6 1 9.VMh5 g6 20.tLlg4. No es una sorpresa que las negras no dispon­gan ya de jugadas utiles. El avance central ha dividido sus fuerzas y todas las piezas meno­res estan cortadas en el flanco de dama, en un momento en que las blancas han abierto el frente del flanco de rey. 19.YNh5 g6

I

20.tl)xg6 hxg6 21 . .ixg6 Las defensas del rey han sido destruidas y

el golpe final viene por Ia tercera fila. Se amenaza 22.El:d3, y las negras poco pueden hacer al respecto. 2 1 . . .ia6 lo impide, pero se refuta con 22 .if5, o incluso con 22.d6 ixd6 23 .El:fe 1 . El otro ens a yo defensivo consiste en llevar la torre a "g7", pero 2 1 . . .El:c7 tambien falla, por 22.d6 ixd6 23.El:fe 1 VMd8 24.El:d4, y no puede pararse El:h4. 21 ... YNg7

2 1 . . . El:c4 pierde, por 22.El:d3 . 22J�d3 .id6 23.f4 YNh8 24.YNg4 .ic5+ 25.d>ht gc7 26 . .ih7+ d>ti 27.YNe6+ d>g7 28.gg3+

Las negras se rindieron. El sorprendente parecido de esta partida

con la anterior no es gratuito. Ambas compar­ten situaciones habituates, caracterizadas en esencia por el imparable avance en el centro de un peon pasado y sus consecuencias: o bien el rey queda expuesto al ataque, o el peon pa-

82 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

sado sigue avanzando hacia su destino final, paralizando las fuerzas defensivas.

En un gran numero de casos, el avance central se ejecuta en la fase temprana de la partida, y los frutos se recogen en el medio juego. Sin embargo, tampoco es raro encon­trarse con partidas en las que se crea un peon pasado en la apertura, pero es bloqueado por piezas, y solo avanzada la contienda, cuando el material en el tablero es reducido, adquiere nueva importancia y se convierte en un factor decisivo.

Un peon pasado de esta manera suele ser el mascaron de proa de una cadena o un grupo de peones. Hablamos de peones pasados y protegidos, que senin el tema de nuestra pro­xima partida.

Botvinnik - Tal Campeonato Mundial ( 1 38 partida)

Moscu 196 1 Defensa India de Rey

l.d4 �f6 2.c4 g6 3.�c3 i.g7 4.e4 d6 5.f3 0-0 6 . .ie3 e5 7.dxe5 dxe5 8.VNxd8 gxd8 9.�d5

Una vez creado un agujero en su estructura de peones por propia voluntad, las blancas deben justificarlo, y esta es la unica forma de hacerlo. 9 ... �xd5 10.cxd5 c6 l l . .ic4 b5

Las negras aprovechan la oportunidad de expandirse en el flanco de dama, creando, al mismo tiempo, presion sobre el alfil de ca­sillas blancas. Una reaccion logica, dadas las circunstancias. Mas tarde, David Bronstein

sefialo una altemativa, basada en contrajuego tactico: 1 l . . .cxd5 12.ixd5 ttJc6 1 3 .0-0-0 ttJd4. Si, ahora, 1 4.ixd4 exd4 1 5 .ttJe2, entonces 1 5 . . . if5, y 1 6.ttJxd4? pierde, por 1 6 . . . ih6+ 1 7.�b1 E:xd5 . lgualmente oculto y bonito es 1 6.�d2 E:ac8 1 7 .E:c 1 ? ih6+ 1 8 .f4 E:xc1 1 9.E:xc 1 d3 20.�xd3 E:xd5+ 2 l .�e3 E:e5 ! , manteniendo una pieza extra. 12 . .ib3 .ib7 13.0-0-0

En afios posteriores, las blancas trataron de mejorar el juego con 1 3 .E:c 1 , provocando el cambio, y tuvieron exito despues de 1 3 . . . cxd5 1 4.E:c7 E:d7? 1 5 .E:xb7, etc. , y tambien en caso de 1 3 . . . E:d7 1 4.ttJe2 cxd5 1 5 .ixd5, pero 1 3 . . . a5 , manteniendo la tension y apoderando­se de espacio, resulto ser bueno para las ne­gras. 13 ... c5?!

Explotando la posible clavada sobre la co­lumna "c", las negras crean una mayoria en el ala de dama, olvidandose del precioso precio que pagaran por ello, en forma del fuerte peon pasado y protegido de "d5" . En comparacion con otros peones pasados que hemos examina­do, este es inmovil, pero dado que esta bien defendido, puede esperar a que lleguen tiem­pos mejores.

De nuevo, el a vance 1 3 . . . aS era la jugada a elegir, manteniendo la presion y otras op­ciones. 14.i.c2 �d7 15.�e2 i.f8 16.�c3 a6?!

Es bastante extrafio que Tal no optase por una linea mas aguda en algtin momento. En el tumo anterior podia haber jugado 1 5 . . . c4, mientras que ahora era posible 1 6 . . . b4 1 7.ttJa4

PEONES PASADOS 83

1 7 . . . c4. En lugar de ello, busco, por lo visto, un camino mas seguro. 17.b3! gac8 18.�d3! lt)b6 19.�e2

Lo que parecia tan bueno y solido un par de movimientos atras, es ahora una masa inmovil de peones, con un par de piezas tras ellos, que no juegan ningl:m papel en los acontecimien­tos inminentes. Tres jugadas magistrates les bastaron a las blancas para bloquear toda ac­cion en el flanco de dama. Fue el primer paso de su estrategia. 19 .. J�d6 20. ®b2 f5

Las negras admiten que sus preparativos del flanco de dama fueron inutiles. Habiendo defendido el caballo de "b6", pueden, por fin, poner en marcha sus peones, pero solo en su detrimento. Despues de 20 . . . b4, 2 1 .ctJb l c4 22.bxc4 ctJxc4+ 23 .ixc4 E!:xc4 24.8:c l expone la mala posicion de la torre en "d6" . La idea negra de la textual es preparar . . . b4, jugando antes . . . fxe4, pero la respuesta de las blancas aborta la idea, asegurandose de que, tras un eventual . . . b4, la casilla "c4" quedara debida­mente cubierta. 21.:ac1 gr6 22.a4!

Una vez inmovilizada la masa de peones negros, las ultimas jugadas blancas han prepa­rado el golpe final, que abre una brecha en la muralla. 22 ... bxa4 23.bxa4 a5 24.®c2 c4 25J3bl �b4 26.lt)a2 �c5 27.�xc5 gxc5 28.lt)c3

Algunos comentaristas sefialaron que 28.f4 daba resultado, pero, teniendo a su disposicion 28 .ctJc3, £.por que deberian las blancas buscar otras jugadas? Ademas, ctJc3 encaja perfecta-

mente en la estrategia general iniciada con 1 7.b3 . La penetracion en la columna "b" es el paso siguiente. Notese tambien que el peon de "d5" esta esperando su momento. 28 ... �c8

29.:ab2 �d7 30.:abbl �xa4+ 31.lt)xa4 lt)xa4 32.:ab8+ ®g7

32 . . . 8:f8 pierde, por 33 .f4. 33.:atb7+ :an 34.d6

Ha llegado, por fin, el momento. A medida que el material se ha reducido, las potenciales piezas bloqueadoras son retiradas del tablero. El peon pasado, que ha observado las compli­caciones del medio juego desde su protegida posicion central, inicia, por fin, su marcha triunfal. 34 ... :axb7 35.:axb7+ ®f6 36.:axb7 gcs 37.d7 :ads 38 . .ixc4 lt)cs 39.:ati+ ®g5 40.�b5 fxe4 41.fxe4

Las negras se rindieron. La partida es una autentica leccion magis­

tral sobre peones pasados y protegidos. El peon "d" de Botvinnik ha estado esperando, emboscado, desde la apertura, para coronar la estrategia blanca en la fase final. Tuvo exito porque no habia bloqueador que pudiera con­tenerlo.

Al pensar en todas las partidas con un peon pasado, siempre llegamos a la misma conclu­sion esencial. En terminos practicos, es dificil imaginar tener exito contra un peon pasado sin disponer de un bloqueador fiable.

Las partidas que siguen estan consagradas al inseparable destino del peon pasado y su bloqueador.

84 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Petrosian - Fischer URSS - Resto del Mundo

Belgrado 1 970 Apertura Inglesa

l.c4 g6 2.lLlc3 c5 3.g3 .ig7 4 . .ig2 lLlc6 5.lLlf3 e6 6.0-0 lLlge7 7.d3 0-0

El orden de jugadas es de gran importancia en la Apertura lnglesa. El elegido por Petro­sian permite a las negras una estructura muy flexible, caracterizada por su fuerte alfil de fianchetto. 8 . .id2 d5 9.a3 b6 10J!bl .ib7 ll .b4

Hecha en armonia con las jugadas prepa­ratorias id2 y El:b 1 , la textual es, aparente­mente, una tentativa natural por ganar espacio e iniciativa en el flanco de dama. Sin embar­go, un examen mas detenido demuestra que este es precisamente el momento en que las blancas empiezan a extraviarse del buen ca­mino. ll ... cxb4 12.axb4 dxc4 13.dxc4 gcs

La primera sefial de que el peon de "c4" es vulnerable, pero las blancas seguian mirando con optimismo la posicion, como demuestra su proxima jugada. 14.c5?

Es mas que evidente que 14.lMrb3 o 14.lMra4, jugadas que de algun modo encajan en este tipo de posicion, se contestarian con 14 . . . tt:J d4, y en caso de 14.tt:Je4, R. Fischer menciono 14 . . . tt:Ja5. Despues de la partida, Petrosian vio los acontecimientos desde otro angulo y pro­puso la mas prudente 14.tt:Jb5, a fin de prote­ger el peon "c" con tt:Ja3 .

14 ... bxc5 15.bxc5

Justo en el momento en que las blancas pensaban que la columna abierta "b" y el peon pasado avanzado constituian factores ventajo­sos, las negras demuestran ahora lo contrario, con una brillante maniobra posicional: 15 ... lLl a5! 16.lLla4 .ic6!

El alfil asume la tarea de bloqueador, mientras el caballo tomara su lugar en "b7", comenzando a ejercer presion sobre el peon. Observe tambien la bien coordinada actividad de las piezas menores negras, especialmente los alfiles. 17.Wfc2 lLlb7 18JUcl Wfd7 19.lLlel

Jugado para responder a 1 9 . . . ixa4 con 20.El:xb7. 19 ... lLld5 20.lLlb2 .ib5

La leccion de Fischer es tremendamente simple : primero, bloqueo del peon pasado; lue­go, j ejercer presion sobre el mismo! La presion se hace fuerte, pidiendo 2 1 .tLlbd3, que aqui parece lo mejor. 21.lLl ed3 .id4

La culminacion de la estrategia de las ne­gras contra el peon libre, que ha quedado sen­tenciado. 22.Wfb3 lLlxc5 23.lLlxc5 gxc5 24.gxc5 .ixc5 25.lLld3

25 .ixd5 falla, por 25 . . . l!Mxd5 . 25 ... .ixd3 26.Wfxd3 gd8 27 . .if3 Wfc7 28 . .ig5 .ie7 29 . .ixe7 Wfxe7 30.Wfd4

Cambiar alfiles de casillas negras no parece lo mas inteligente que pueden hacer las blan­cas, puesto que el cambio favorece a las ne­gras. 30.ixd5 tambien podria ser bueno para

PEONES PASADOS 85

las negras, recordandonos la 34a partida entre Alekhine y Capablanca. Sin embargo, 30.�a1 merece consideracion. 30 ... e5

Buscar sus posibilidades en ambos flancos es, sin duda, una mejor politica que confiar solo en el peon de "a7'' . 31.�c4 �b6 32.�c2 gcs 33.�d3 gc4 34 . .ig2 �c7 35.�a3 gc3 36.�a5 gcs 37.�a3 a5 38.h4 �c4 39.�d3 �d6 40.<i>h2 ®g7 41J�dl

Las negras han mejorado considerablemen­te Ia posicion de sus piezas, y la idea de cam­biar damas no reportara ningun alivio. 4 1 .h5 podria, al menos, darles a las negras algunos momentos de incertidumbre. 4l ... �e8 42.�d7 �xd7 43J�xd7 �f6

Aun es mas fuerte 43 . . . lt:Jc7. 44.ga7 �g4+ 45. ®gl gel+ 46 . .ifl gal 47.e4 a4 48.®g2 ga2 49.gxf7+

Jugada perdedora, pero no las hay mejores. A 49.�g1 , las negras ganan con 49 . . . lt:Jxf2 (49 . . . �xf2 se contesta con 50.ih3) 50.ic4 lt:Jh3+ 5 l .�h1 �f2 52.ie6 a3 53 .ixh3 a2, etc. 49 ... ®xf7 50 . .ic4+ ®e7 51.i.xa2 a3 52. ®f3 �f6 53.®e3 <i>d6 54.f4 � d7 55 . .ibl �c5 56.f5 �a6 57.g4 �b4 58.fxg6 hxg6 59.h5 gxh5 60.gxh5 ®e6 61. <i>d2 <i>f6 62. ®c3 a2 63 . .ixa2 �xa2+ 64.®b2 �b4 65.®c3 �c6 66.®c4 �d4

Las blancas se rindieron. El bloqueo del peon pasado expuso su de­

bilidad estatica, recordandonos que los peones centrales aislados sufren el mismo destino, en circunstancias similares.

Bondarevsky - Smyslov Campeonato de Ia URSS 1 946

Apertura Ruy Lopez

l.e4 e5 2.�f3 �c6 3 . .ib5 a6 4 . .ia4 �f6 5.0-0 .ie7 6 . .ixc6 dxc6 7.gel

En esta linea las blancas normalmente jue­gan aqui 7 .lt:Jc3 o 7.�e 1 , a fin de evitar Ia cla­vada . . . ig4, que es de considerar despues de Ia textual. 7 ... �d7 8.d4 exd4 9.�xd4 0-0 lO . .if4 �c5 l l.�xd8 .ixd8 12.�c3 f5 13.e5?

Las blancas acaban de cometer un error po­sicional que vale Ia pena recordar y analizar. Las negras han preservado su pareja de alfiles y, naturalmente, tratan de abrir Ia posicion para activarlos. Las blancas se niegan a ceder, confiando en su peon pasado central, por el momento bien protegido y apoyado. Sin em­bargo, el ulterior desarrollo de Ia partida de­muestra que Bondarevsky debia haber sido mas prudente y optado por mantener el equi­librio con 1 3 .igS . 13 ... �e6!

Natural y evidente, pero tan fuerte que me­rece un signo de admiracion. Las negras po­dian haber jugado 1 3 . . . ie6, pero tras 1 4.b4, seguido de 1 5 .lt:Jd4, las blancas habrian su­primido al bloqueador. El caballo, por el con­trario, es mucho mas fuerte en "e6" . Las blan­cas no pueden atacarlo ni cambiarlo, lo que justifica Ia conclusion de que Ia casilla que ocupa un bloqueador asi es un punto fuerte, porque tambien esta protegida de un ataque frontal. AI mismo tiempo, no podemos ignorar

86 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

que el caballo no solo bloquea el peon de "e5" , sino que sima bajo su eficaz control otras importantes casillas del entomo. 14 . .id2 g5 15.�e2 c5

De nuevo, simple y preciso. Las dos ulti­mas jugadas negras aseguran la privilegiada posicion del bloqueador. 16 . .ic3 b5 17.b3 .ib7

Aqui comenzamos a percibir otro feno­meno tipico del bloqueo: un eficiente bloquea­dor es una fuente de contrajuego activo. Las negras han conseguido ventaja espacial y es­tan mejor. 18.�g3 g4 1 9.�d2 IJ..e7 20.�h5 �fi 21.�fl �g6 22.�f6 gadS

Una vez activado su rey, las negras podrian continuar tambien con 22 . . . l2Jd4, pero el pro­ceso simplificador que provocan en la colum­na "d" les favorece por completo. 23.gadl gxdl 24J3xdl gd8 25.gxd8 .ixd8 26.�e3

Ante la doble amenaza . . . l2Jf4 y . . . l2Jd4, las blancas deberian ensayar 26.ib2, pues la textual empeora su posicion. 26 ... f4 I

Lenta, pero gradualmente, el peon pasado se hace vulnerable. Al mismo tiempo, la posi­cion de las piezas blancas se va deteriorando. 27.tlJdl

27.l2Jed5 y 27.l2Jexg4 pierden pieza, mien­tras que 27.l2Jfl ixf6 28.exf6 ie4 tambien es desesperado. 27 ... .ixf6 28.exf6 .ie4

La ventaja posicional de las negras se ha transformado en material. Las consecuencias

del potente bloqueador de "e6", que literal­mente ha paralizado a las piezas blancas, re­sultan ahora evidentes. 29 . .ib2 b4

29 . . . ixc2 30.l2Jc3 cambiaria significativa­mente el decorado. El peon de "c2" esta con­denado, y las negras lo tomaran cuando lo crean conveniente. 30.f3 1J..xc2 31.�f2 gxf3 32.gxf3 .ibl 33.�e4 .ixa2 34.tlJd2 a5 35.�f2 tlJd4 36 . .ixd4 cxd4 37.�e2

37 . . . �xf6 Por fin, el peon pasado ha sucumbido a su

destino. 38.�d3 �e5 39.�c2 a4 40.bxa4 c5 41.a5 c4 42.a6 d3+

Las blancas se rindieron. La leccion que podemos extraer es obvia:

un fuerte bloqueador es el peor enemigo para el peon pasado. La razon es igualmente obvia, a saber, que la fuerza de un peon pasado ra­dica en su movilidad, y cuando pierde esa cua­lidad vital, esta condenado a una muerte lenta en el final.

El exito o fracaso de un peon pasado de­pende, en gran medida, del apoyo que otras piezas puedan prestarle y de la coordinacion de su actividad conjunta. En posiciones cerra­das, el apoyo que pueda recibir esta mas limi­tado, y el exito de su mision es dudoso. En ta­les circunstancias, el peon pasado a menudo finaliza como un cordero sacrificado. La unica cuestion es que compensacion puede obtener­se a cambio. El contraste de estas reflexiones con la practica de nuevo nos servira de ayuda.

PEONES PASADOS 87

Marovic - Stu pica Campeonato de Yugoslavia

Zagreb 1 96 1 Defensa India de Rey

l.d4 ttlf6 2.c4 g6 3.ttlc3 j,g7 4.tt:H3 0-0 5.g3 d6 6.�g2 ttlc6 7.0-0 e5 8.d5 ttle7 9.e4 ttld7 10.�e3

Mas consistente es 1 O.b4, emprendiendo acciones en el ala de dama, el terreno natural de actividad de las blancas. La textual fue pre­parada por mi oponente, que habia jugado mal esta variante en un encuentro anterior. 10 ... f5

Esta ruptura tematica se prepara a veces con 1 0 . . . h6, pero 1 1 .'1Mfd2 @h7 1 2 J�adl f5 1 3 .exf5 gxf5 14 .ltJh4 ttJf6 1 5 .'!Mfc2 muestra sus inconvenientes. ll.ttlg5 ttlc5?

Lo correcto es 1 1 . . . ttJ f6 !? 12 .exf5 gxf5 , a lo que puede seguir 1 3 .ltJe6 ixe6 1 4.dxe6 c6 1 5 .'1Mfb3 '!Mfc8, dejando en peligro el peon libre. 12.�xc5 dxc5 13.ttle6 �xe6 14.dxe6

Intemado en las lineas negras, el peon pa­sado de nuevo corre un grave peligro. Antes de entrar en esta posicion, las blancas tenian que evaluar claramente que podian obtener a cambio.

Observaciones generales

14 ... c6 15.'Wd7! Mi oponente habia omitido esta jugada. El

cambio de damas hara mas dificil que las ne­gras puedan ganar el peon, ofreciendoles a las blancas mucho tiempo para buscar temas adi­cionales, explotando la columna abierta, las diagonales de casillas blancas y su caballo. 15 ... 'Wxd7 16.exd7 �adS 17J�adl �fi 18.E:d3

Doblando torres, las blancas satisfacen la necesidad de defensa de su peon, pero al mis­mo tiempo planean un ulterior ga3, emplean­do la tercera fila para penetrar en la posicion cerrada. 18 .•. <it>f8 19.�fdl ttlg8 20.ttla4 b6 21.exf5 gxf5 22.�xc6 e4 23.�a3 ttlf6 24.ttlc3 ttlxd7 25.�xa7

La accion co lateral, sobre la columna "a", llego a tiempo. 25 ... �d4 26.�xd7 �fxd7 27.�xd7 �xd7 28.b3

El caballo es libre, y la ventaja material de­cisiva. 28 ... <it>fi 29.a4 e3 30.fxe3 �xe3+ 3t.<it>g2 �xdl 32.ttlxdl �d4 33.ttlf2 �e5 34.ttld3 �c7 35.<it>f3 �d6 36.ttlf4 �xf4 37.<it>xf4 <it>f6 38. <it>e3 <it>e5 39. <it>d3 h6 40. <it>e3 <it>e6 41. <it>f4

Las negras se rindieron.

Al tratar de entender la naturaleza del peon pasado, lo examinamos en situaciones caracteristicas que revelan sus mejores cualidades, asi como sus inconvenientes.

88 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Cuando estudiamos su papel en el final, entendimos que, a diferencia de sus ancestros, los peones aislados y colgantes, el peon pasado se caracteriza por una diferencia esencial: su fuerza aumenta a medida que el juego se acerca al final. Incluso podemos llegar tan lejos como afirmar que el bando que cuenta con un peon pasado, sobre todo si es distante, ha creado las premisas ne­cesarias para ganar. Cuando el numero de piezas se reduce, es cada vez mas dificil contener un peon pasado avanzado en un flanco, lo que requiere la vigilancia constante del bloqueador. He­mos podido ver por nosotros mismos que no hay "circunstancias atenuantes", cuando intervienen temas como alfiles de distinto color o piezas mayores, es decir, que estos factores no sirven de ayuda al bando que lucha contra un peon pasado distante. Sea cual fuere la pieza que ha asumido el papel de bloqueador, queda practicamente hipotecada por el peon pasado, y no puede actuar en otro sector del tablero. Cada vez que se producia un caso asi, la balanza de fuerzas se inclinaba, inequivocamente, del lado del peon pasado.

Por si eso fuera poco, el peon pasado a menudo participa en las complicaciones tacticas. Su posicion en la septima fila ha inspirado numerosas combinaciones brillantes, lo que le ha valido su reputacion de ser una fuente de problemas.

A pesar de su excelente registro de resultados en el final, a menudo asociamos mentalmente el peon pasado con su papel en el centro del tablero, donde su movilidad resulta el factor decisivo.

En condiciones mas favorables (puesto que, por definicion, la infanteria enemiga no puede oponersele ), el peon pasado es un privilegiado descendiente del peon central aislado y los peones colgantes. Su fuerza se deriva de su movilidad y va en aumento a medida que avanza. Cuanto mas lejos llegue, mas fuerte resulta, acumulando fuerza por el hecho mismo de su progresion. Cuando alcanza la sexta o septima fila, nos recuerda a una fuerte cufia que divide el tablero y las desorientadas piezas enemigas en dos partes, ya que pierden coordinacion y capacidad de juego.

Su movimiento va acompafiado de sorpresas tacticas de todo tipo. El pequefio y modesto peon se convierte asi en un horrendo monstruo. En muchas ocasiones se requiere bastante mas que un juego rutinario para poder frenarlo.

Tras cada paso que da, su poseedor amplia el espacio para maniobrar, mientras que el espacio del defensor se reduce, y se debilita la coordinacion de sus piezas. Podemos decir sin exageracion que un peon muy avanzado es como una espina clavada en la garganta del contrario. Su avance obliga a una resistencia pasiva en el mejor de los casos, y en un amplio porcentaje de casos i!llpide todo contrajuego significativo.

La mera existencia de un peon pasado en el centro tiene amplias connotaciones: ventaja espacial, iniciativa, libertad de maniobra y accion. Naturalmente, su activo papel no seria posible sin el activo soporte de otras piezas. Por lo general, el apoyo de las piezas mayores, que impulsan el peon a lo largo de la columna, y tambien las piezas menores, que le van despejando el camino, a base de cambios. El apoyo es de vital importancia. En el momento en que el apoyo falla, las fuerzas bloqueadoras anulan su energia cinetica, y las posibilidades se invierten. Un fuerte blo­queador -por lo general, un caballo o un alfil- puede inclinar la balanza del equilibria en su fa­vor, y cambiar asi las tomas. Cuando eso sucede, la ruta hacia el final es un Iento proceso de debilitamiento, que suele ser irreversible y fatal .

Considerando todo esto, el peon pasado vive una vida emocionante, pero con frecuencia tambien arriesgada. A menudo es el subproducto de un sacrificio, que carga con altas expecta­tivas, pero que debe sobrevivir en circunstancias adversas. Depende, por consiguiente, de una clara evaluacion y calculos precisos y, a diferencia de otros tipos de peones tematicos, en tal caso puede confiarse menos en reglas generales. Cada situacion, aun mas que en el caso de otras for­maciones centrales, es un caso especifico que debe ser evaluado por sus propios meritos.

PEONES PASADOS 89

4 Peones doblados

En el siguiente diagrama tenemos una estruc­tura de peones de una variante de apertura muy conocida.

Esta estructura se caracteriza por los peo­nes doblados negros de la columna "c". Un vistazo a la formacion de peones nos revelani sus pequefios secretos.

En el plano positivo, percibimos que el peon de "c6" sigue siendo una parte util de la estructura, puesto que cubre la casilla central "d5", que de no ser asi seria un punto fuerte para las blancas. Tambien podemos ver que al retomar en "c6", las negras han abierto la co­lumna "b", que pueden utilizar para presionar sobre el flanco de dama.

En el plano negativo, podemos concluir de inmediato que el bloque de peones de "c7", "c6" y "d6", que contiene los peones dobla­dos, dificilmente puede avanzar sin debilitar las casillas de su entomo. Si seguimos espe­culando, podriamos concluir tambien que las posibilidades de mejorar la estructura de peo­nes no son realistas. Por otro lado, el cambio en "c6" ha dejado un peon aislado, potencial­mente debil, en "a7' ' , que, como es facil ima­ginar, quedara expuesto al ataque.

Estas son reflexiones sencillas, inspiradas por la posicion del diagrama. Ahora procede­remos a investigar hasta que punto la practica magistral refuerza nuestras. conclusiones y es­peculaciones. No olvidemos que la verdadera sabiduria ajedrecistica radica en la practica.

Capablanca - Janowski San Petersburgo 1 9 1 4 Apertura Ruy Lopez

l.e4 e5 2.�f3 �c6 3.�b5 a6 4.�xc6 dxc6 5.�c3 �c5 6.d3 �g4 7.�e3 �xe3!? 8.fxe3

Estamos en la primera fase de la apertura que, desde el punto de vista de la teoria actual, parece un tanto anticuada. La quinta jugada negra fue muy ambiciosa y se tradujo en el cambio en "e3" . Los comentaristas condena­ron el cambio, seiialando que es ventajoso pa­ra las blancas y, en su Iugar, recomendaron como mejor 7 . . Y!ie7. A fin de juzgar obje­tivamente, debemos percibir los cambios que se han producido en la posicion y evaluarlos. Asi, podemos ver que el peon de "e3" esta bien, cubriendo las casillas "d4" y "f4", que antes del cambio eran potencialmente debiles.

90 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Tambien percibimos que se ha abierto la columna 11f'' y que solo las blancas podnin ex­plotarla. Podemos concluir, por tanto, que los criticos tenian razon, y que era mejor para las negras 7 . . . Vfie7.

Inmediatamente vemos que, ademas de los peones doblados blancos, hay un par de peo­nes doblados en campo negro. Lo mismo que el peon de 11e3 11 , el de 11C611 tiene su impor­tancia, porque cubre la valiosa casilla 11d5 11 • La importancia de ambos pares de peones dobla­dos se basa en su valor estatico. 8 ... Wfe7 9.0-0 0-0-0?!

A pesar de la columna semiabierta, el flan­co de rey era un sector mas seguro para el rey negro. En este momento o en el turno anterior, Janowski podia haber preparado el enroque corto, a base de . . . f6 y . . . ctJh6-t7. lO.Wfel liJh6 l l J!bl !

Seguro en su refugio de 1 1 g 1 11 , e l rey blanco puede ·dirigir comodamente dirigir un ataque en el otro flanco. La textual prepara un asalto al enroque enemigo. En este momento percibi­mos un inconveniente que caracteriza a los peones doblados. Cuando avanzan, dejan agu­jeros en su entomo, que el oponente podra ex­plotar. 1 1 . . .c5 era una util respuesta, impidien­do b4, de no ser por el punto debil 11d5 11 • l l. .. f6 12.b4 ltJti 13.a4 .ixf3 14J!xf3 b6

Capablanca tiene razon al afirmar que este avance constituye un grave error, indicando 14 . . . b5 como la unica jugada que podria parar el inminente deterioro de la posicion de las negras. 15.b5 cxb5 16.axb5 aS 17.liJd5

El hecho de que las negras no puedan de­fender la casilla 1 1C611 influye decisivamente en el curso de la partida. El lector no debe pensar que eso sucedio por azar. Los peones dobla­dos, cuando forman parte integrante de una masa mas amplia, pueden ser fuertes y utiles en el aspecto estatico, pero tan pronto como se mueven, en general se vuelven mas debiles, originando ademas nuevas debilidades. La ca­silla 11d511 se ha convertido en un inexpugnable puesto avanzado para las blancas, lo que les permite lanzar el asalto concluyente. 17 ... Wfc5 18.c4 liJgS 19JH'2 liJe6 20.Wfc3 gd7 21 J!dl ci>b7 22.d4

Habiendo protegido casillas claves del cen­tro durante buena parte del juego, el peon de 11e3 11 apoya el decisivo ataque a la bayoneta. 22 .. JWd6 23.gc2 exd4 24.exd4 tlJf4 25.c5 tlJxdS 26.exd5 Wfxd5 27.c6+ ci>b8 28.cxd7 Wfxd7 29.d5 ges 30.d6 cxd6 31.Wfc6

Las negras se rindieron.

PEONES DOBLADOS 9 1

La siguiente partida y el amilisis de la mis­ma confirmanin nuestras primeras impresio­nes acerca de los peones doblados.

Polugaievsky - A. Zaitsev Match de desempate por el

Campeonato de la URSS 23 partida Vladimir 1 969

Apertura Ruy Lopez

l.e4 e5 2.tiJf3 ltJc6 3.liJc3 d6 4.d4 exd4 5.ltJxd4 tiJf6 6 . .ib5 .id7 7.0-0 .ie7 8 . .ixc6 bxc6

Tras las jugadas iniciales, las negras han quedado con peones doblados en la columna "c", cediendo ventaja espacial a su oponente. El peon de "c6", sin embargo, esta bien defen­dido y, ademas, bien situado, porque veta la casilla "d5" a las blancas. El problema de la formacion negra es que tiene una movilidad muy limitada, pues tanto el a vance . . . c5 como . . . d5 crean agujeros en su campo. 9.Wff3

Las blancas flirtean con el avance e5, tmica forma de incrementar la presion sobre el peon de "c6". Mas en linea con la teo ria de la variante en las ultimas decadas es 9. b3 0-0 1 o.ib2, alcanzandose una delicada situacion que debe jugarse con paciencia. 1 O .. J�e8 1 1 .ge 1 if8 1 2.Wld3 g6 1 3 .gad1 ig7 14.f3 Wlb8, oponiendose al alfil de fianchetto y disponiendose a emprender contrajuego con . . . a5-a4, lo que les ofrece buenas perspectivas a las negras. Comparese este prudente enfo­que, recomendado por el Dr. Lasker, con la

impaciente reaccion 1 o . . . d5 l l .e5 ctJe8 1 2.Wld2 c5 1 3 .ctJde2 c6, con la que las negras han avanzado sus peones centrales una fila, ganando algun espacio. Un examen mas dete­nido, sin embargo, revela que los peones son aqui mas debiles que en su posicion inicial. Era dificil atacar el peon de "c6", mientras que el de "c5" , por el contrario, es mas vulnerable. La partida Bilkat - 0. Bernstein, Ostende 1 907, continuo asi : 14.gad1 Wlc7 1 5 .ctJf4 Wlb7 (se amenazaba 1 6.lt:Jxd5) 1 6.lt:Ja4 (amenazan­do ia3) 1 6 . . . c4 1 7.id4, y ahora ni 1 7 . . . Wlb5 1 8 .Wle3, ni 1 7 . . . cxb3 1 8 .cxb3 son satisfacto­rias para las negras. At' avanzar, los peones, pierden su tenacidad natural. 9 ... 0-0 lO.�el

1 0.e5 no es una amenaza, despues de todo, ya que puede seguir 1 0 . . . lt:Jg4 1 l .exd6 ixd6 1 2.if4 (o bien 1 2.g3 lt:Jxh2) 1 2 . . . lt:Jxh2, que seria muy desagradable para las blancas. 10 ... c5 ll .tiJf5 .ixf5 12.Wfxf5

1 2.exf5 les permite a las negras ganar es­pacio con 1 2 . . . d5 1 3 .ig5 c6. 12 ... tiJd7 13.tiJd5 tiJb6

La decima jugada negra cedio la casilla "d5" a las blancas, pero solo por el momento. La maniobra . . . lt:Jd7-b6 recupera lo entregado. El cambio en "d5" resolveria todas las difi­cultades potenciales de las negras. 14.ltJe3 Wfc8 15.e5?!

Precipitado. Las blancas tratan de lograr una ventaja que no existe. 15 ... d5 16.Wfxc8 �fxc8 17.a4

17 . . . d4 Esta vez el avance de peon es logico, pues

92 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

su movimiento no deja debilidades tras el. 18.�f5 �f8 19.b3 gds 20.a5?!

El propio Polugaievsky critico esta jugada, y con razon, pues las blancas empujan el ca­ballo enemigo hacia una mejor casilla, y el peon de "a5" queda potencialmente expuesto. Lo correcto era 20.i.d2, y a 20 . . . d3 podia con­testarse con 2 1 .c4, dejando al peon pasado bien bloqueado y privando de la casilla "d5" al caballo negro. 20 ... � d5 2l.�d2 gabS 22.gabl

Ahora las blancas debian tomar en cuenta . . . d3 , porque su peon de "b3 " sera vulnerable. 22 ... gb5!

Una excelente reaccion. Si las blancas pen­saban jugar 23 .e6 fxe6 24Jhe6, tuvieron que cambiar de idea, a causa de 24 . . . lt:Jb4. 23J�e4 g6 24.�h4?

Una desafortunada decision. Con 24.lt:Jg3 etJb4 25 .c3 , las blancas siguen estando en la partida. 24 ... �b4 25.c3 dxc3 26.�xc3 gd3 27.gc4 �d5 28.�el i3bxb3 29.i3bcl �h6 30.i3al i3d4 31.i3aa4

No hay buenas solu<!iones. 3 1 .:gxc5 pierde, por 3 I . .. i.f8, mientras que 3 1 .:gxd4 cxd4 abre paso a los peones "c", que finalmente quedan libres. La textual debilita de forma irremedia­ble la primera fila. 31 ... gbl 32.�f3 .id2 33.<it>fl .ixel 34.�xd4 cxd4 35.i3xd4 �c3+ 36.<it>e2 �xd4 37.i3xd4 i3b5

Las blancas se rindieron. La leccion que podemos extraer de esta

partida es simple. El peon doblado es fuerte en

el plano estatico y util en su posicion inicial. Por consiguiente, acelerar su avance puede ser peligroso, porque crea debilidades colaterales, y ademas requiere una cuidadosa preparacion.

Sutovsky - Morozevich Pamplona 1 998-99 Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 d5 3.�c3 �f6 4.�g5 dxe4 5.�xe4 �e7 6.�xf6 gxf6 7.�f3

Aqui tenemos otro caso tipico de peones doblados. El cambio en "f6" debilito el flanco de rey negro, pero Morozevich busca compen­sacion en la abierta columna "g", mientras que el bien defendido peon de "f6" asume la tarea de controlar la casilla "e5 ", vedandola al ca­ballo de "f3 " . 7 ... a6

Aqui se requiere un prudente enfoque. 7 . . . f5 8 .etJc3 i.f6 9.'W'd2 solo debilita a las negras, y no contribuye en nada al desarrollo. Por el contrario, las blancas se disponen a en­rocar largo y efectuar una ruptura central. 8.'\Mld2 b5 9.�h6

Parece preferible un desarrollo normal, pero es intrigante ver que puede hacerse con­tra el debilitado flanco de rey. Sutovsky, ob­viamente, sintio esa curiosa inquietud. 9 .. �b7 10.�d3

Aqui, I OJMI'g7 :gf8 l l .'W'xh7 gana un peon, pero despues de l l . .. f5 1 2.lt:Jed2 ( 1 2 .lt:Jg3? pierde tras 1 2 . . . i.xf3 ! 1 3 .gxf3 'W'xd4) 1 2 . . . i.f6, la escena esta dominada por la parej a de al­files.

PEONES DOBLADOS 93

10 • • • �d7 1 1.�g3

Dos ideas confluyen en esta jugada: i.e4, para reducir la presion sobre la gran diagonal de casillas blancas, y ctJh5, para plantear algu­nas amenazas concretas y darle algun sentido a la temprana salida de dama. Es util percibir que 1 1 .0-0-0 podia contestarse con 1 1 . . .f5 12 .ctJeg5 i.xg5+ 1 3 .ctJxg5 \Wf6. Tras una cui­dadosa preparacion, el peon doblado avanza sin consecuencias negativas. 11 .•• f5

En el momento adecuado, el peon negro de "f6" avanza, facilitando asi la defensa y, al mismo tiempo, amenazando con 1 2 . . . i.xf3. 12.�h5 .if8 13.VNe3? !

Era, objetivamente, l a mejor respuesta 1 3 .ctJg7+ i.xg7 14 .\Wxg7 \Wf6 1 5 .\Wxf6 ttJxf6 16 .i.e2, aunque la posicion es muy satisfac­toria para las negras. La retirada es la ad­mision de que todo el concepto ha fracasado. 13 . • . �f6 14.VNe5?

Tentadas por la, en apariencia, fuerte cla­vada, las blancas vuelven al atolladero del que acababan de salir. En lugar de plantear trucos, era hora de pensar en salvar la piel, como por ejemplo en esta linea: 14.ctJxf6+ \Wxf6 1 5 .\We2 0-0-0 1 6.0-0-0. 14 • • • �xh5 15.VNxh8 .ixf3 16.gxf3 �f6

El resultado de la deficiente estrategia blan­ca se ve a las claras en el diagrama anterior. La dama no solo esta fuera de juego, sino que corre el peligro de no volver a estarlo nunca, pues 1 7 . . . rJde7, seguido de 1 8 . . . \Wd5, es una evidente amenaza. La astuta 1 7 .d5 encuentra una buena replica en 1 7 . . . \We7, amenazando 1 8 . . . 0-0-0.

Si completamos el cuadro con la dafiada formacion de peones y el debil alfil de casillas blancas, podemos decir, sin exagerar, que las blancas estan perdidas. Siguen unas tentativas desesperadas por rescatar Ia dama. 17 J�g1 VNxd4 18J!:g8 rtle7 19. rtln .ig7 20.VNxg7 gxg8 21.VNh6 VNxb2 22.ge1 VNc3 23.VNh4 c5 24J�d1 c4 25 • .ixf5 VNxf3 26.VNd4 �d5

Las blancas se rindieron. 27 .i.e4 se castiga con 27 . . . ctJe3+. Los peones doblados preservan su firmeza

y estabilidad estatica, y si no se avanzan con precipitacion, no son una presa facil. Las debi­lidades colaterales tampoco pueden explotarse por medios violentos.

Estudiaremos varios casos que se caracteri­zan por la tipica constelacion de peones do­blados, en la que juegan un papel activo, po­sitivo.

94 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Spassky - Korchnoi Match de Candidatos ( 1 4a partida)

Belgrado 1 978 Apertura Vienesa

l.e4 e5 2.tiJc3 tiJf6 3.g3 d5 4.exd5 tiJxd5 s . .ig2 liJxc3 6.bxc3 .id6 7.tiJf3 0-0 8.0-0

Las blancas han asumido peones doblados en la columna "c", considerando que, por el dafio que ha sufrido su estructura, tienen com­pensacion en forma de presion sobre la colum­na "b" y la gran diagonal blanca, asi como tambien en la compacta y flexible masa cen­tral de peones. S ... cS 9.d3 tiJc6 lO.tiJd2

Los peones cubren importantes casillas cen­trales y pueden emplearse de forma flexible, segun las circunstancias. Mas tarde, Spassky puede realizar el avance d4, pero tambien es posible ttJc4-e3, creando un control sobre "d5" . 10 ... �d7 ll .�f3

Para prevenir el movimiento l l . . . b6. El al­fil de "g2" es mas fuerte cuando no se le opo­ne otro alfil que este , fianchettado por la ca­silla "b7" . ll ... �c7 12.liJe4 .ie7 13 . .ie3 c4 14.d4 .ie6

14 . . . f5 falla, debido a la respuesta 1 5 .ttJc5, y si 1 5 . . . j,xc5, entonces 1 6.'�d5+, o bien 1 5 . . . e4 1 6.We2. 15J�fdl gadS 16.�e2 idS 17J�abl exd4 18.cxd4

El peon doblado se ha convertido en un peon pasado en una columna central. 18 .. JUe8 19.tiJc3

Como ya hemos aprendido, los bloqueado­res del peon pasado deben eliminarse. Al mis­mo tiempo, el peon de "c4" quedara debili­tado, forzando al caballo negro a situarse en el borde del tablero. 19 ... .ixg2 20.®xg2 tiJa5 21.�f3 tiJc6 22JWe2 tiJa5 23.a4 b6 24.�f3 �d7 25.gb5 tiJb7 26 . .if4 tiJd6 27 . .ixd6 .ixd6 28.liJe4 .ie7 29.c3

El peon pasado se ha convertido ahora en protegido y, por lo tanto, en un valioso triunfo de cara al final. 29 ... g6

30.g4! Abortando el contrajuego . . . f5 .

30 .. JU8 3l.gdbl Las blancas quieren jugar a5 .

31 ... a6? Esto es malo, pero 3 1 . . .f5 32.gxf5 �xf5

33 .�xf5 Wxf5 34.Wxf5 gxf5 falla, por 35 .ttJg3 �f8 36.�b5 f4 37 .ttJf5, etc.

PEONES DOBLADOS 95

32J�xb6 f5 33.gxf5 E:xf5 34.Y*fe2 Y*fxa4 35.E:b7 E:e8 36.E:c7 .id6 37.gxc4 gxe4

Las negras comienzan a jugar flojo en apu­ros de tiempo. 38.E:c8+ <it>g7 39.Y*fxe4 Y*fa2 40J�fl Y*ft7

Esta jugada facilita las cosas a las blancas. Era mejor 40 . . . �g5+ 4 I .@h1 �h5 . 41.f4 E:h5

Tambien es desesperado 4 I . . . .ixf4 42.@hl . 42.E:e8 Y*fb3 43.E:e6 Y*fb2+ 44.Y*fe2 Y*lb8 45.Y*le4 Y*fb2+ 46.Y*fe2 Y*fb8 47J�e4 gb5 48JH2 Y*fb7 49.Y*ff3 Y*fc8 50.h3 a5

51 .E:e5 .ixe5 52.fxe5 Y*ff5 53.c4 E:b4 54.Y*fe3 Y*fc8 55.e6 gxc4 56.Y*le5+ <it>b6 57.Y*ff4+ <it>g7 58.Y*lf6+ <it>b6 59.Y*fh4+

Las negras se rindieron. La metamorfosis de un peon doblado en

pasado no se produce a menudo, pero convie­ne mantenerse abiertos a esa posibilidad, y ex­plotarla cuando surja en el tablero.

Keres - Reshevsky Los Angeles 1 963

Apertura Ruy Lopez

l.e4 e5 2.�f3 �c6 3 . .ib5 a6 4 • .ia4 �f6 5.0-0 .ie7 6J!el d6 7.i.xc6+ bxc6

Los pares de peones doblados que con ma­yor frecuencia se producen son en "c3" , "c6", "f3" y "f6", pues en estas casillas es donde en la primera fase se suelen cambiar los alfiles por caballos. Tales peones forman parte de Ia masa general, de modo que no pueden con­siderarse debiles. 8.d4 �d7

Despues de 8 . . . exd4 9.CDxd4 .id7 1 0.CDc3 0-0, lo mas natural parece 1 1 . .if4. Con �e1 ya jugado, observe que a 1 1 .b3 puede contestarse 1 l . . .d5 1 2.e5 .ib4. Conviene estar preparado para explotar tales posibilidades. AunqUte pa­recen torpes, los peones doblados son movi­les, lo que conviene tener siempre presente. 9.�bd2 f6 10.�c4 �b6

Esperando CD a5, 1 0 . . . CD f8 y . . . CD e6 parecen una mejor opcion. l l .�a5 .id7 12.Y*fd3?!

La idea de hostigar al peon de "c6" era bue­na, pero el caballo de "a5" deberia estar apo­yado por 1 2.c4, explotando la posicion del ca­ballo de "b6" . Ahora vemos por que la manio-bra . . . CDf8-e6 era preferibh�: a c4 se contestaria con . . . c5 . La textual parece una medida a me-dias contra Ia masa de peones negros. 12 •.. 0-0 13 • .ie3 <it>b8 14.E:adl exd4 15.�xd4 c5 .

Las negras deciden avanzar, luchando por

96 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

el espacio, pero pueden permitir 16 .lt:Jdc6 �e8. 16.tLlf5 ges 17.b3 .if8 18.-icl .ie6 19.tLle3 Y;Yd7 20.a4 c6

Tras un par de jugadas indecisas de las blancas, las negras aprovechan su oportuni­dad, y sus peones doblados y retrasados avan­zan en el centro, bien protegidos por sus pie­zas. 21.tLlac4 tLlxc4 22.tLlxc4 gadS 23.tLlb6 Y;Yb7 24.a5 d5 25 . .if4?

25 ... c4! A las blancas se les escapo esta jugada.

Ahora, a 26.bxc4 sigue 26 . . . i.b4, mientras que si 26.�c3, 26 . . . cxb3 27 .cxb3 d4 tambien es bueno para las negras. 26.Wfd2 cxb3 27.cxb3 d4

Los peones doblados han producido un raro fruto: un peon pasado en una columna central. 28.b4 .ib3

Es util disminuir la presion sobre el peon pasado y eliminar las piezas que se encuentran en su camino. 29.gbl Wff7 30 . .ic7 Wfxc7 31.gxb3 f5

Junto con el pec6n pasado, como ya sabe­mos, suelen aparecer posibilidades tacticas. 32.Wfd3

32.exf5 no da resultado, debido a 32 . . . �f4 33 .'\Wdl :gxe l+ 34.'\Wxel d3 , y el peon llega demasiado lejos. 32 ... fxe4 33.gxe4 gxe4 34.Wfxe4 c5 35.bxc5 Wfxc5 36.g3

36.'\Wel no salva el peon, en vista de 36 . . . d3 37 .:gb2 iWc2 ! El avance de peon ha cambiado sustancialmente la situacion. La ventaja mate-

rial y las activas piezas de las negras prevale­ceran. 36 ... Wfxa5 37.Wfd3 Wfel+ 38.®g2 a5 39.Wff3 Wfe6 40.gb5 .ib4

40 . . . d3 4 I .lt:Jd5 d2 42 .:gxa5 'Wei tambien gana. Empujar el peon pasado todo lo lejos que se pueda es, generalmente, el mejor meto­da, pero las ultimas jugadas se realizaron en apuros de tiempo. 41.tLld5 Wfd7 42.Wfd3 Wfc6 43.f3 .id2 44.tLle7 Wfe8 45.tLld5

45 .lt:Jf5 .ib4 46.lt:Jxd4 h6 les costara a las blancas el caballo clavado. 45 ... a4 46J�c5 .ie3 47.Wff5 d3

Una buena defensa contra la amenaza blan­ca lt:Jf6. 48.gc3 .id4 49.gxd3 Wfe2+ 50.®h3 g6 51.Wfe4 Wfxe4 52.fxe4 .ib2 53.tLlb4 gxd3 54.tLlxd3 ®g7

Pese a la tenaz resistencia de Keres, las negras se imponen con excelente juego. En el final de piezas menores pueden verse algunos elegantes detalles, en el que el alfil negro es muy superior, debido al peon pasado distante. 55.®g4 ®f6 56.®f3 a3 57.tLlb4 ®e5 58.®e3 .id4+ 59.®d3 .ic5 60.tLla2 .igl 61.h3 h5 62.tLlb4 .ic5 63.tLla2 .if2 64.g4 h4 65.tLlb4 .ic5 66.tLla2 g5 67.tLlc3 .ia7 68.tLla2 �f4 69.tLlc3 .ib8 70.®c2 .ie5 71.tLld5+ ®g3 72.®b3 ®xh3 73.tLle3 ®g3

Las blancas se rindieron. Es raro, desde luego, que unos peones do­

blados desemboquen en uno pasado, pero a menudo encontramos peones doblados acti­vos.

PEONES DOBLADOS 97

Spassky - Gligoric Baden-Baden 1 980 Apertura Vienesa

l.e4 e5 2.tlJc3 tlJf6 3.g3 .ic5 4 . .ig2 tlJc6 A primera vista, parece que las negras pue­

den construir un fuerte centro de peones, con 4 . . . c6, pero tras 5 .ttJge2 d5 6.exd5 cxd5 7.d4 exd4 8 .ttJxd4, quedan con un fnigil peon ais­lado. 5.d3 d6? !

Las negras han descuidado la guardia. Pri­mero deb ian jugar 5 . . . a6, a fin de preservar el bien situado alfil. 6.tlJa4 .ig4

6 . . . i.b4+ 7.c3 i.a5 8 .b4 tambien es favora­ble a las blancas. 7.f3 .ixgl?

Una decision apresurada. Era mucho mejor retirarse a "e6" y permitir peones doblados en la columna "c", sin doblar los peones "g" blancos. La razon pronto resultani evidente . . . 8.fxg4 .ic5 9.tlJxc5 dxc5 10.g5

Tenemos un instructivo ejemplo de fuertes peones doblados que pueden utilizarse con efectos agresivos. Junto con ellos, las blancas pueden presionar sobre la columna semiabier­ta. Las negras probablemente entraron en esta pasiva posicion contando con el hecho de que la estructura de peones esta cerrada para la pa­reja de alfiles blancos. Pero fue una evalua­cion erronea. 10 ... tlJd7 l l . .ie3 f!e7 12.0-0 tlJf8 13.h4

Un avance natural, antes de que el alfil se sirue en "h3" .

13 ... tlJe6 14.i.h3 0-0-0 15.f!h5 gdf8 16J3f2 i>b8 17J�afl tlJcd8 18.i>h2 b6 19.a3!

Una excelente estrategia. Habiendo some­tido a la maxima presion a las negras y atado sus fuerzas a la defensa, es hora de pasar al otro flanco y abrir la posicion. 19 ... a5 20.c3 f!d6 21.f!dl :ges 22.b4 axb4 23.axb4 cxb4 24.cxb4 tlJd4

24 . . . Wfxb4 falla, por 25.El:a2 y 26.Wfa l . 25.:ga2 f!c6 26 . .ixd4 exd4 27.f!al ge7 28.:ga7 f!c2+ 29.i>hl f!xd3 30.:gcl tlJc6 31 J�a8+ i>b7 32.:gxh8 tlJb8 33 . .ic8++

El lector no debe pasar por alto que esto fue posible por el cambio fxg4 y el a vance g5 . Al permitir que las blancas exprimiesen a las negras en defensa de su principal debilidad, "f7", este hecho cambio por completo la situa­cion. Lo que siguio estuvo condicionado por la favorable estructura de peones, dominada por el peon doblado de "g5" . Su sola existen­cia condiciono todo el curso de la lucha.

Janowski - Capablanca Nueva York 1 9 1 6

Defensa Eslava

l.d4 d5 2.c4 c6 3.tlJf3 tlJf6 4.tlJc3 .if5?! Hoy sabemos que el temprano desarrollo

del alfil dama no es tan bueno si el caballo blanco ya esta desarrollado por "c3" . La razon radica en 5 .cxd5 cxd5 (o 5 . . . ttJxd5 6.ttJd2) 6.Wfb3 , ganando un peon u obligando al alfil de "f5" a retroceder a "c8". 5.f!b3?! f!b6 6.f!xb6?! Es mejor 6.c5

98 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

6 ... axb6 7.cxd5 �xd5 8.�xd5 cxd5 9.e3 �c6 10.i.d2 .id7! !

Una extraordinaria y profunda idea. Las ne­gras retiran su bien situado alfil a una posicion aparentemente pasiva pero, como veremos, te­nian in mente un brillante plan estrategico en el flanco de dama. ll .i.e2

Si las blancas hubiesen entendido que se proponian hacer las negras, entonces habrian continuado con l l .�d3 o l l .�b5, seguido de un ulterior me2. ll. .. e6 12.0-0 �d6 13JUcl ®e7 14 . .ic3 ghc8 15.a3

No era necesario. jNunca mueva sus peo­nes sin ton ni son! 15 ... �a5 16.�d2 f5

Antes de ejecutar su idea, las negras difi­cultan un posible e4, que activaria a las blan­cas. 17.g3 b5

Este aparentemente inutil peon doblado de la columna "b" lleva a cabo el papel de actor importante en el flanco de dama. 18.f3 �c4 19.i.xc4

Es mejor tomar con el caballo, pero en cualquier caso, el modesto peon doblado ha jugado su papel en la creacion de una prome­tedora estructura de peones. 19 ... bxc4 20.e4 ®ti 21.e5?

La casilla "e5" deberia preservarse para el caballo blanco, con 2 1 .exd5 , seguido de f4 y 'Llf3-e5 . 21 . . . i.e7 22.f4 b5 23. ®f2 :aa4 24. ®e3 gca8 25J!abl h6

Las negras juegan con maestria, compro­metiendo sus fuerzas en ambos flancos. 26.�f3 g5 27.�el ggs 27.®f3 gxf4 28.gxf4 gaa8 30.�g2 gg4 3t.:agt gagS 32 . .iel b4!

Ha recaido en dos humildes peones dobla­dos llevar a cabo uno de los planes estrategi­cos mas profundos de toda la historia del ajedrez. El primero, mediante el avance a "b5" y tras el cambio en "c4", creo una disposicion de peones muy favorable. El segundo, al sacrificarse a si mismo, abrira el paso a las piezas negras hacia el campo blanco. 33.axb4 .ia4

j Eso es ! El alfil penetra hacia el puesto avanzado por "c2", y 34.:gc l no puede impe­dirlo, debido a 34 . . . :gxf4+. 34.gal .ic2 35.i.g3 .ie4+ 36.®f2 h5 37J��a7 .ixg2 38.:axg2 h4 39 . .ixh4 :axg2+ 40.®f3 gxh2 41 ..ixe7

Si 4 1 .:gxe7+ mf8 42.�f6, entonces las ne­gras juegan 42 . . . :ggh8.

PEONES DOBLADOS 99

41..J:l:h3+ 42.�f2 gb3 43 . .ig5+ �g6 44J::l:e7 gxb2+ 45.�f3 gas 46.gxe6+ �h7

Las blancas se rindieron. Los peones doblados consiguen, de cuando

en cuando, especiales oportunidades, pero en muchas ocasiones se requiere un jugador de gran clase y una mente abierta para percibir esas posibilidades. lncluso entre los campeo­nes, la mayoria no habria captado la extraor­dinaria idea de Capablanca.

Smyslov - Uhlmann Mar del Plata 1 966 Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 dS 3)tJc3 .ib4 4.e5 ctJe7 S.a3 .ixc3+ 6.bxc3 cS 7.ctJ f3 .id7 8.a4

En tres partidas de la final de Candidatos de 1977, Spassky jugo 8.dxc5 contra Korch­noi, lo que hizo posible la maniobra :gb 1 -b4-g4 con presion en ambos flancos. Esas par­tidas arrojan luz sobre la importancia del or­den de jugadas. 8 .. -VNas 9.�d2 ctJbc6 10 . .ie2

A 1 0 . .id3 , las negras disponen de la buena respuesta 1 O . . . f6 1 1 .0-0 ( o bien 1 l .exf6 gxf6 12 .dxc5 e5) 1 l . . .fxe5 12 .ttJxe5 ttJxe5 1 3 .dxe5 0-0. 10 .. J��c8

Una de las innumerables novedades de Uhlmann por entonces. Las negras amenazan l l . . .cxd4 1 2.cxd4 'l!Mxd2 1 3 .i,xd2 ttJf5, y puesto que 14 .i,c3 no es posible, las blancas deben jugar 14.c3, permitiendo la respuesta 14 . . . ctJa5 .

1 1.dxc5!? Las blancas se infligen tres peones aislados

en la columna "c" y dejan la casilla "e5" muy debilitada. Sin embargo, Smyslov demostrani que los aparentemente fnigiles peones triplica­dos de la columna "c" juganin su papel. 11. .. ctJg6 12.0-0

Si las blancas juegan 1 2.'l!Me3 , entonces las negras siguen con 1 2 . . . d4 con suficiente con­trajuego. 12 ... 0-0?!

Un par de afios mas tarde, e l incansable pa­ladin de la Defensa Francesa, Wolfgang Uhl­mann, mejoro el juego con t2 . . . ttJgxe5 . 13.�e3 �c7 14.ctJd4!

Smyslov muestra una profunda evaluacion de la posicion: a pesar de su comprometida es­tructura de peones, las blancas tendran un me­jor final. Una decision ciertamente extraordi­naria. 14 ... �xe5 15.ctJb5 �xe3 16 . .ixe3 a6 17.llJd6 gc7 18.a5

Quitandole una importante casilla al caba­llo de "c6". 18 ... e5 19.gfb1 ctJd8 20.gd1 .ic6 21..ig4 ctJe6 22.gab1 ctJe7 23.g3 fS 24 . .ih3 g6 25.f4 d4

Tanto 25 . . . exf4 como 25 . . . e4 dejan a las ne­gras en una posicion pasiva. Su eleccion es claramente mejor. 26.cxd4 ctJdS 27 . .if2 exd4

27 . . . ttJc3? pierde, por 28.fxe5 . 28 . .ixd4 tlJxd4 29.gxd4 ge7 30.�f2 tlJc3?

Lo correcto era activar la otra torre con 30 . . . :gf6.

1 00 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

31J�el gxel 32.cjjlxel ltle4 33.ltlxe4 .ixe4 34.c3 E:f6

Es importante que 34 .. J:�c8 y 34 . . . %U7 fa­Han, por 35J�xe4. El alfil de "h3", que parece estar fuera de juego, ha preservado una inu­sual actividad. 35.gd8+ cjjlg7 36.E:d7+ E:f7?

El final resultante demuestra que las torres deben conservarse. 37.E:xf7+ cjjlxf7 38.®d2 ®e6 39.c4 ®d7 40. ®e3 ®c6 41. ®d4 ®d7 42. ®e5 .if3

De otro modo, 43 .g4 decide. 43. ®f6 ®c6 44. ®g7 ®xc5 45. ®xh7 i.h5 46 . .ifl <it> b4 4 7 . .ig2 ®xa5

47 . . . �xc4 pierde, debido a 48 . .ixb7 �b5 49 .�h6 �xa5 50.�g5 �b6 5 I ..ixa6 �xa6 52 .h3 , etc. 48.i.xb7 ®b6 49 . .ic8 a5 50.i.d7 ®c5 51.h3 .if3 52. ®xg6 .ic6 53 . .ixf5 a4 54 . .ib 1 a3 55.f5 .1e4 56 . .1a2 .1d3 57.h4 <it>d4 58.h5 ®e5 59.g4 <it>f4 60. ®g7

Las negras se rindieron. Incluso en los finales, los peones doblados

no estan tan indefensos como generalmente se cree. Con una armoniosa actividad de piezas menores y, por supuesto, en manos de un fuer­te jugador, los peones doblados pueden par­ticipar de la estrategia general. En esta partida, los peones de "c2" y "c3 " cubrian importantes casillas, y el de "c5" apoyo una invasion de caballo en "d6", lo que aborto todo contra­juego. Como el peon "g5" de Spassky en su partida contra Gligoric, la infanteria torpe­mente dispuesta por Smyslov dicto el curso de la lucha.

S in embargo, debemos ser conscientes de que tales peones no son frecuentes en el final, y de que los ejemplos negativos prevaleceran de largo. Pero hablaremos del tema mas ade­lante. Habiendo analizado los peones dobla­dos en circunstancias favorables, ahora pres­taremos atencion a sus inconvenientes.

Tarrasch- Rubinstein Mahrisch-Ostrau 1 923

Apertura de los Cuatro Caballos

l.e4 e5 2.ltlf3 ltlc6 3.ltlc3 tlJf6 4 . .1b5 .1b4 5.0-0 0-0 6.d3 d6 7 . .1g5 .1xc3 8.bxc3 V!le7 9.E:el ltld8 10.d4 .1g4

Una posicion muy conocida por la teoria, que se jugo e investigo en las primeras deca­das del siglo XX. La continuacion recomenda­da es 1 0 . . . ctJe6 1 I ..ic1 c5, oponiendose a las blancas en el centro y manteniendo la posicion cerrada y desfavorable a los alfiles blancos. Esta respuesta es posible porque 1 2.dxe5 dxe5 1 3 .lt:J xe5 perderia, por 1 3 . . . lt:J c 7 . ll .h3 .1h5 12.g4 .1g6 13.d5

13 ... c6 14 . .1c4? En conjuncion con esta jugada, el bloqueo

1 3 .d5 pierde su senti do. Como consecuencia, los peones doblados en la columna "c" siguen aislados, mientras que el caballo de "d8" lo­grara reactivarse por "e6" . El juego blanco so­lo puede justificarse si el caballo se mantiene fuera de juego, asi que lo correcto es 14 . .id3 . La partida Spassky - Gligoric, Sarajevo 1 986, continuo con 14 . . . cxd5 1 5 .exd5 e4 16 . .ixe4 (no es adecuado 1 6 . .ifl , en vista de 1 6 .. . ctJe6)

PEONES DOBLADOS 101

1 6 . . . ixe4 1 7 .�d4 l2Je6 1 8.�xe4, y las negras quedaron perdidas. Gligoric concluyo que tomar en "d5" era dudoso, y que las negras de­bian haber mantenido- cerrada la posicion. Despues de 14 . . . h6 1 5 .ih4 es factible jugar 1 5 . . . :gc8 1 6.c4 :ge8. Aqui incluso es posible cambiar en "d5 " : 1 5 . . . cxd5 1 6.exd5 :gc8 17 .c4 e4 1 8 .ixe4 ixe4 1 9.�d4 g5 (si 1 9 . . . :ge8, entonces 20.l2Jd2) 20.ig3 l2Je6 2 l .dxe6 ixf3 22.ixd6 :gfd8 23 .ixe7 :gxd4 24.ixf6 :gf4 25 .e7 :ge8, etc. 14 ... gc8 15.dxc6 bxc6

No hay otra solucion que cambiar peones en "c6", pero Ia actual estructura de peones es peor para las blancas que Ia anterior. Los peo­nes doblados y aislados son bastante mas de­biles que cuando formaban parte de la masa central de peones. En la octava jugada, inme­diatamente despues del cambio en "c3" , te­niamos una masa central compacta, no tan mo­vil, pero firme. Al jugar 1 O.d4, las blancas buscaban la iniciativa en el centro. Su forma­cion de peones ya no era tan solida, pero los peones doblados seguian estando juntos y su torpeza no podia explotarse de ninguna forma previsible. En ese momento desempefiaban un papel activo, apoyando Ia tension en el centro. Despues del cambio en "c6", ya no jugaron ningun papel, aparte de su pasiva lucha por Ia existencia. 16 . .id3 ttle6 17 . .icl ttl c5 18.ttld2

1 8.ia3 falla, debido a 1 8 . . . l2Jcxe4 1 9.ixe4 l2Jxe4 20.:gxe4 ixe4 2 I .ixd6 �d8 22.ixf8 �xdl + 23.:gxd l ixf3, etc. 18 ... h5

Mientras las blancas tienen que ocuparse de Ia pasiva defensa de sus peones, las negras atacan las debilitadas defensas del rey blanco. 19 . .ia3 ttle6 20.ttlc4 c5

Los alfiles blancos no tienen suerte en su busqueda de buenas diagonales. La estructura de peones sigue siendo adversa para ellos. 21..icl hxg4 22.hxg4 ttlh7 23.�g2 ttlhg5 24.f3 gcd8 25.ttlb2 d5!

Las blancas no tienen tiempo de hacer Ia proyectada ic4. Las negras abren el juego, en total sintonia con el hecho de que sus piezas son mas activas. 26.exd5 gxd5 27.c4 gd4 28..ie3

28 .:gxe5 no da resultado, debido a 28 . . . �f6 29.:ge l l2Jf4+ 30.ixf4 :gxf4, etc. 28 ... gd6 29.V;Ye2 e4

La ruptura en el centro de la jugada 25 ha reportado una mayoria de peones en el flanco de rey, que ahora se emplea para abatir Ia ul­tima proteccion del rey blanco.

1 02 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

30.fxe4 �xe4 31.\Wt3 �4g5 32.\Wg3 Wb7+ 33.®fl gb6 34.�a4 .ixd3+ 35.cxd3 f5 36 . .ixg5 fxg4+ 37.®gl �xg5 38.�xb6 �t3+ 39.®f2 �xel+

Las blancas se rindieron. La pesadilla de las blancas comenzo con

14.ic4?

A menos que este bien preparado y en cir­cunstancias favorables concretas, el avance de los peones doblados implica generalmente riesgos. Como pudimos presenciar en el ejem­plo anterior, avanzar significa debilitar las ca­sillas de su entomo, a veces incluso columnas enteras. En la segunda y tercera filas tales peones estan menos expuestos a presion. Un peon doblado en "c3" o "f6", por ejemplo, es mas seguro y estable que otro peon doblado en la cuarta o quinta fila. Las siguientes parti­das nos daran la oportunidad de comparar am­bos casos.

Portisch - Fischer Santa Monica 1 966

Defensa Nimzoindia

l .d4 �f6 2.c4 e6 3.�c3 .ib4 4.e3 b6 5.�e2 .ia6

La jugada de David Bronstein o, para ser exactos, la jugada que a Bronstein le gustaba y que popularizo. 6.�g3?!

Incoherente. Despues de la jugada natural, 6.a3 ixc3+ 7.lt.Jxc3, las blancas conservan una sana estructura de peones, mientras que en caso de 6 . . . ie7, puede seguir 7.lt.Jf4 d5

8.cxd5 ixfl 9.mxfl exd5 1 0.g4, ganando es­pacio y apoderandose de la iniciativa, como en Ia conocida partida Botvinnik - Smyslov, Campeonato Mundial (23), Moscu 1 954. 6 ... .ixc3+ 7.bxc3 d5

Las negras han contestado correctamente a 6.lt.Jg3 . Una vez dafiada Ia formacion de peo­nes blancos, las negras provocan ahora que el peon de "c4" se cambie por el de "d5", lo que deberia conducir a una posicion equilibrada, debido a Ia perdida, por parte de las blancas, del derecho a enrocar. Las blancas, sin em­bargo, aspiran a mas . 8.\Wt3 0-0 9.e4

Portisch espera demasiado de este avance. Que este dispuesto a sacrificar el peon de "c4" es comprensible, dado el potente centro blan­co de peones y las amenazas tacticas que ob­tendria a cambio, pero subestima la linea que se produce en la partida . . . 9 ... dxe4 10.�xe4 �xe4 1 1.\Wxe4 Wd7!

PEONES DOBLADOS 1 03

Un pequefio y sutil detalle que posiblemen­te escapo a la atencion de las blancas. AI dis­ponerse a cambiar sus torres por la dama blan­ca, las negras hacen posible la activa . . . CLJc6. 12 . .ia3 ges 13 . .id3 f5 14.Wfxa8 �c6 15.Wfxe8+ Wfxe8 16.0-0 �aS

Finalizadas las complicaciones, las negras vuelven a ocuparse del peon de "c4" . El pro­blema con peones debiles radica en el hecho de que siguen siendo debiles pese a todas las vicisitudes por las que atraviese Ia partida y, en ultima instancia, quedan condenados. Su debilidad es permanente. La estructura blanca de peones quedo dafi.ada en la sexta jugada y, diez jugadas despues, cuando las complicacio­nes han llegado a su fin, el peon inva.Iido de "c4" esta a punto de sucumbir. 17J!ae1 .ixc4

Aun era mas fuerte 1 7 . . . Wia4. Despues de 1 8 .ib4 ixc4 1 9.ixc4 CLJxc4 20.�xe6 a5 2 1 .ie7 CLJd2 22.�fe l CLJe4, la posicion es muy desagradable para las blancas. 18 . .ixc4 �xc4 19 . .ic1 c5 20.dxc5 bxc5 21 .if4 h6

Las acciones decisivas tendran Iugar en el flanco de rey. 22J�e2

Las blancas no pueden oponerse al avance de peon con 22.h4, debido a 22 . . . e5 23 .ixe5 CLJxe5 24.f4 CLJf3+ 25.gxf3 Wla4, etc. 22 ... g5 23 . .ie5 Wfd8 24JUe1

En caso de 24.f4, continuaria 24 . . . CLJd2 y 25 . . . CLJe4. 24 ... ci>ti 25.h3 f4 26.ci>b2 a6 27.ge4 WfdS 28.h4 �e3

La solucion final. 29.g4xe3 fxe3 30J3xe3 Wfxa2 31.gf3+ ci>e8 32.i.g7 Wfc4 33.hxg5 hxg5 34J�f8+ ci>d7 35.gas ci>c6

Las blancas se rindieron.

Nimzovich - H. Johner Bema 1 93 1

Apertura Nimzovich

l.�f3 �f6 2.b3 d5 3 . .ib2 c5 4.e3 �c6?! 5 . .ib5 .ig4 6 . .ixc6+ bxc6 7.h3 .ixf3 8.Wfxf3 Wfc7 9.d3 e6 10.�c3

Las negras han jugado superficialmente la apertura. AI desarrollar demasiado pronto su caballo dama, permitieron la creacion de peo­nes doblados en la columna "c", una debilidad permanente. Su siguiente decision era propo­ner un sacrificio de peon, que las blancas rechazaron por principia. AI haber situado su objetivo en el peon de "c5" , maniobran con su caballo para llevarlo de inmediato a "a4" . 10 . . . .id6 11 .�a4 .ieS

Las negras creen que Ia reduccion de ma­terial facilitara su carga. En realidad, su con­cepcion comenzo con 8 . . . Wic7, como con­secuencia de algun malentendido basico. En general, todas las debilidades de peon, inclui­dos los peones doblados, se acentuan a medi­da que el material se reduce. 12 . .ixe5 Wfxe5 13.0-0 �d7 14.Wfe2!

Una jugada sutil. La idea no es liberar el peon de "f2", sino trasladar la dama al otro flanco, incrementando asi la presion sobre el peon de "c5 " . S u destino final es "a5" .

1 04 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

14 ... 0-0 15.�d2 f5 En vista de la amenaza blanca, esta jugada

parece un tanto negligente, pero Johner creia que contaba con una solucion tactica para la defensa del peon de "c5 " . 16.�a5 �Ub8

Esto no defiende el peon como las negras esperaban, pero lo cierto es que tambien 1 6 . . . '\Wd6 las dejaria en una situacion pasiva e insatisfactoria. 17.tLlxc5! gb5 18.tLlxd7 �xal

Esto se suponia que era el castigo, pero Nimzovich habia visto mas lejos. 19.�c7 �c3 20.a4

Una clave sutil y decisiva, basada en la des­conexion de las torres negras. 20 ... gb4

Si 20 .. J�a5 , entonces 2 1 .'\Wd6 :ge8 22.lt:Je5 . 21.tLle5 �US?! 22.tLlxc6 �h8 23.�d6

Las negras se rindieron. Una bonita miniatura, basada enteramente

en los peones doblados. Un peon doblado ne­gro en la quinta fila es un facil objetivo y, por tanto, vulnerable.

El hecho de que los peones doblados pier­dan su fuerza natural al avanzar nos tienta a concluir que una buena estrategia contra los peones doblados deberia basarse en provocar su avance. Desde luego, a veces esa estrategia funciona. Sin embargo, no es el unico metodo que consigue resultados contra ese tipo de peones. Muchas veces tenemos que hacer jus­to lo contrario: bloquear los peones, inmovili­zarlos y explotar su debilidad mas tarde, cuan­do las circunstancias lo permitan.

Staunton- Club de Ajedrez de Bristol Correspondencia 1 844-45

Apertura Bird

l.f4 d5 2.ltH3 c5 3.e3 tLlc6 4 . .ib5 a6? 5.i.xc6+ bxc6

La estructura de peones negros ha sido da­fiada sin ningun tipo de compensacion. El temprano desarrollo del caballo dama no pue­de recomendarse. Hoy dia, mas consciente de los matices de apertura, todo buen jugador prefiere 2 . . . lt:Jf6 o 2 . . . g6, evitando la clavada .ib5 . Por supuesto, 4 . . . a6 es un grave error, porque significa una perdida de tiempo que crea problemas a largo plazo con la formacion de peones. 6.0-0 e6 7.c4!

Unos 80 afios mas tarde, Nimzovich reco­mendaria el bloqueo de los peones doblados antes de atacarlos. Debe acreditarsele a Staun­ton que entendiese perfectamente la posicion y encontrase, en consecuencia, esta jugada na­tural. 7 ... tLlh6

Esperando b3 y ib2, las negras eligen esta extravagante jugada, planeando un ulterior . . . f6. Es natural 7 . . . lt:J f6, seguido de . . . lt:Jd7. 8.�e2 i.d6 9.tLlc3 �e7 10.b3

Incorporando no solo el fianchetto, sino tambien la maniobra tipica ia3 y lt:Ja4, si se presenta la ocasion. 10 ... f6 ll .d3 0-0 12.e4 dxe4?

Al comentar esta partida, en su libro sobre Staunton, Raymond Keene tenia absoluta ra­zon: "Un grave error posicional, que le quita

PEONES DOBLADOS 1 05

toda flexibilidad a la estructura negra de peo­nes. Igual de malo hubiera sido hacer 1 2 . . . d4 1 3 .ltJa4, vigilando el frente del peon "c". La unica alternativa jugable en este punto era 12 . . . ib7!, sosteniendo con firmeza el centro, pero tales necesidades posicionales no eran entendidas, en general, hasta que Nimzovich las explico en sus libros Mi sistema y Prac­tica de mi sistema".

Solo puedo advertir del hecho bien cono­cido de que los peones doblados son mucho mas vulnerables si quedan cortados de la masa general y aislados. 13.dxe4 e5 14.f5

No solo cerrando el paso al alfil de casillas blancas, sino abriendo tambien perspectivas de ataque en el flanco de rey. 14 ... ltJti 15.ltJh4

Las blancas dejan en paz los peones dobla­dos por tiempo indefinido. Podrian incremen­tar Ia presion sobre ellos con ie3 , l&t2 y tt:Ja4, pero las negras llevarian su caballo a "b7" y podrian resistir. En el flanco de rey las pers­pectivas son brillantes, mientras que el peon de "c5 " no puede escapar. jUn razonamiento sencillo y logico! 15 ... id7 16J�f3 gfd8 17.ie3 .ie8 18.gan ltJgs 19.gg3 h6 20JWg4 �d7 21.ltJf3

Las blancas han encontrado, por fin, Ia llave de Ia cerradura contraria. 21. .. ®f8 22.ltJxg5 hxg5 23.h4

23 ... .ifi Esto pierde sin lucha. Al analizar esta po­

sicion, me atraia esta variante: 23 . . . gxh4 24.l&xh4 �g8 (o bien 24 . . . if7 25 .l&h8+ ig8

26.ih6) 25.�h3 l&f8 26.tt:Ja4 �ad8 27.l&t2, y el peon de "c5 " cae. Que tales posibilidades se produzcan no pueden atribuirse al azar. Cierto tipo de debilidades va madurando a lo largo de la partida y, al cabo de algun tiempo, basta con recoger los frutos. Esto tambien es tipico de los peones doblados. 24.hxg5 ®e8 25.g6 .ig8 26.�h3 ®d8 27.YMe2 ®c7 28.ltJa4 gdd8 29.VMf2 ®b7 30.g4 YMc7 31.ixc5 AxeS 32.ltJxc5+ ®c8 33.gd3 �xd3 34.ltJxd3 'iMd6 35.gdl ®c7 36.gd2 'lMd4 37.'iMxd4 exd4 38.®f2 gds 39.®f3

Un par de jugadas desp.ues, las negras se rindieron. Atascado en "c5" , el peon estaba, eventualmente, perdido.

Geller - Smyslov Tomeo de Candidatos

Zurich/Neuhausen 1 953 Defensa Nimzoindia

l.d4 ltJf6 2.c4 e6 3.ltJc3 .ib4 4.e3 c5 5.i.d3 0-0 6.a3 .ixc3+ 7.bxc3 ltJc6 8.ltJe2 b6 9.0-0 .ia6

La Variante Samisch de la Defensa Nim­zoindia se caracteriza por el temprano cambio en "c3 " con peones doblados en la columna "c". Tan pronto como queden bloqueados, las negras se disponen a presionar sobre ellos. 10.e4 ltJe8

Antes de proceder con el plan preconce­bido, las negras deben asegurarse de que pue­den neutralizar Ia accion blanca en el flanco de rey. Ahora, l l .f4 se contestaria con 1 l . . . f5 . Sin embargo, parece una continuacion mas

1 06 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

logica que la elegida por Geller. l l.Wfa4?! Wfc8!

Una buena solucion defensiva. 1 2.dxc5 se castigaria ahora con ·t2 . . . lt:Je5. Al mismo tiem­po, aumenta la presion sobre "c4". 12 . .ie3 d6 13J�adl �aS 14.dxcS dxcS

Enfrentadas a una dificil eleccion, las blan­cas han decidido asumir un par de peones do­blados y aislados, cuyo futuro es dudoso. La leccion de nuestra partida siguiente es que una posicion bloqueada tiene otros inconvenientes para el jugador con peones doblados, pero, en general, es una mejor opcion que permitir que los peones queden aislados. Por tiempo inde­finido, las blancas se ven liberadas de la pre­sion sobre el peon de "c4", pero es una solu­cion temporal, que antes 0 despues sera puesta en tela de juicio. lS.eS Wfc6 16.Wfc2 fS 17.Wfa2?

Esto es demasiado pasivo. Las blancas de­bian haber buscado sus opciones en la conti­nuacion 1 7.exf6 lt:Jxf6 1 8 .ig5, aunque es fa­vorable a las negras 1 8 . . . ixc4 1 9.ixf6 ixd3 20.gxd3 gxf6 2 1 .gfdl �e8 17 ... Wfa4 18.tlJf4 tlJ 'c7 19 . .ic2 We8

La innecesaria 1 9 . . . �xc4 solo serviria para complicar las cosas. Las negras dejan los peo­nes abandonados a su suerte, preparandose pa­ra abrir un nuevo frente en el flanco de rey. 20 • .ib3 gS 21.tlJh3 h6 22.0 Wfe7 23.tlJt2 gadS 24.�d3 Wg7 2S.f4 E:d7 26.tlJct gfd8 27.E:xd7 gxd7 28.We2

Las blancas han tenido que gastar muchos tiempos con su caballo para liberar a la dama, pero en la lucha por mantener el equilibria rna-

terial, han perdido la coordinacion de sus pie­zas. Por si eso fuera poco, las negras utilizan ahora la clavada sobre la diagonal "a6-fl" para incorporar refuerzos a la batalla.

28 ... tlJdS 29 . .id2 tlJxf4 30 . .ixf4 gxf4 31.gxf4 WigS 32.g3 �h7 33.�f2 Wid8 34.WfhS gg7 3S.Wfe2 gd7 36.WhS WigS 37.We8 Wfe7 38.Wfxe7+ :Sxe7 39 . .ia2 :Sd7 40.�e2 .ib7

Los jugadores estaban ahora apurados de tiempo, y las blancas no consiguen arreglar su situacion. Nada puede hacerse respecto a la deficiente formacion de peones, en especial el fragil de "c4" . 41..ibl �g8 42.g4 fxg4 43.:Sxg4+ E:g7 44.gh4 :Sgt 4S.�d2 �g7 46 . .id3 J.o 47.E:f4 .ihS 48.tlJe2 :Sg2 49.�e3 ggs SO.h4 gxeS+ Sl.�d2 tlJb3+ S2.�dl ge3 S3.�c2 eS S4.gn e4

Las blancas se rindieron. Es curioso que tres afios mas tarde, de nue­

vo en el Tomeo de Candidatos, los mismos ju-

PEONES DOBLADOS 1 07

gadores volviesen a enfrentarse y Geller otra vez tuviese que recibir Ia misma dura leccion.

Geller - Smyslov Tomeo de Candidatos

Amsterdam 1 956 Defensa Nimzoindia

l.d4 ltlf6 2.c4 e6 3.ltlc3 .ib4 4.a3 .ixc3+ 5.bxc3 c5 6.e3 b6

Una reaccion logica: el potencialmente vul­nerable peon de "c4" es bloqueado, lo que per­mitini a las negras presionar mas tarde sobre el. AI mismo tiempo, las negras desarrollan su alfil dama de forma natural. 7.ltle2

En el gran Tomeo de Candidatos de 1 953, Geller no estuvo afortunado con la Variante Samisch. Como hemos visto, perdio sin lucha contra Smyslov, y tambien sufrio una famosa derrota ante Euwe, que siguio asi: 7 .J.d3 J.b7 8.f3 ctJc6 9.ctJe2 0-0 1 0.0-0 ctJa5 1 1 .e4 ctJe8 12 .ctJg3 cxd4 1 3 .cxd4 :§:c8, y las blancas su­frieron perdidas materiales, en fase muy tem­prana de la partida (a 14 .Wa4, continuaria 14 . . . ia6), por las que no lograron suficiente compensacion. 7 ... ltl c6 s.ltl g3 0-0

La maniobra ctJe2-g3 no es una gran mejora sobre Ia partida precedente. Con el inmediato enroque, las negras estan preparadas para res­ponder a e4 con . . . ctJe8, con una posicion equilibrada. 9..id3 .ia6 10.e4 ltle8

Las negras no podian capturar el peon con

garantias, porque 1 O . . . cxd4 1 1 .cxd4 ttJxd4, 1 2.ib2 reportaria a las blancas una fuerte ini­ciativa. l l ..ie3

El negro evaluo correctamente que tras 1 1 .d5 ctJa5 12 .We2, ni con 1 2 . . . Wh4 1 3 .0-0 ctJd6 14.e5 ltJdxc4 1 5 .ctJe4, ni con 12 . . . ctJd6 1 3 .e5 :§:e8 14.exd6 exd5 1 5 .ie3 d4 1 6.Wh5 su posicion seria satisfactoria. Asi que se dispo­nen a hacer 12 . . . f6, seguido de 1 3 . . . ctJd6, con mejor juego. ll . .. ltla5 12.Wfe2 �c8!

Un procedimiento tipico. Despues del blo­queo, viene Ia presion. Notese que despues de 12 . . . ctJd6 1 3 .e5 ctJdxc4 14.Wih5 g6 1 5 .Wh6 (con Ia devastadora amenaza 1 6.ctJh5) 1 5 . . . f5 1 6.ig5 , las blancas tienen un peligroso ata­que. 13.d5

La presion que las negras estan ejerciendo obliga a las blancas a parar las inmediatas amenazas bloqueando el centro. AI principio, los comentaristas creian que las blancas de­bian haber mantenido la tension con 1 3 .:§:c 1 , pero el Gran Maestro Taimanov vio mas lejos, y propuso 1 3 . . . ctJd6 14.e5 cxd4 1 5 cxd4 (si 1 5 .ixd4, entonces sigue 1 5 . . . ctJf5) 1 5 . . . ctJdxc4 16.Wh5 g6 1 7.Wh6 ctJxe3 1 8 .ctJh5 :§:xcl + 1 9. 1i�id2 ctJf5 20.ixf5 ctJb3+ 2 1 .�e3 :§:c3+ 22 .�f4 Wh4+, ganando. La eleccion de Geller anula Ia tension, pero su masa central de peones se hace menos movil y flexible. 13 ... Wfh4 14.0-0 ltld6 15.�adl f5!

Un momento instructivo. Smyslov sabe bien que el inmovil peon de "c4" seguira sien-

1 08 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

do tan debil como ahora si no se apresura a capturarlo. Antes de eso, las negras compren­den que es urgente restringir la actividad de la pareja de alfiles blancos, y desactivar la ini­ciativa contraria en el flanco de rey. 16.dxe6 dxe6 17.exf5 exf5 18.Wff3 .ib7 19.Wff4 Wff6 20 . .ibl tlJe4 21J�d7

Despues de 2 1 .ctJxe4 fxe4 22 .'\Wxf6 �xf6 23 .�d7 �f7 24.�fd 1 �c6, el final sigue carac­terizandose por el desafortunado par de peo­nes doblados. 21 ... Wfc6 22Jhb7

0 bien 22 .�e7 ctJxc3, etc. 22 ... Wfxb7 23.tlJxf5 geeS 24.Wfg4 <i>h8 25.tlJg3 tlJxg3 26.hxg3 Win 27.Wfh4 h6 28 . .id3 Wff6 29.Wfh5 gds 30 . .ie2 Wff5 31.Wfh4 Wff6 32.Wfh5 tlJc6 33.g4 Win 34.Wfh4 tlJe7 35.Wfh3 tlJg6 36.Wfh2

A 36.g5, las negras contestarian 36 . . . ctJf4, y a 36.g3 , 36 . . . mg8 . 36 ... tlJf4 37 . .if3 Wfxc4

Una vez anuladas las amenazas a su rey, ha llegado el momento de capturar el peon. Re­quirio mucha paciencia y sabiduria practica saber esperar. 38.g5 gd6 39.gcl gg6 40.gxh6 gxh6 41.Wfg3 Wfe4! !

i Sencillo, logico y bonito! Al amenazar 42 . . . '\Wh7, las negras fuerzan cambios, que fa­cilitan su tarea. 42 . .ixf4

Despues de 42.'\Wg4 '\Wh7 43 .g3, las negras ganan con 43 . . . ctJe2+. 42 ... Wfxf4 43.Wfxf4 gxf4 44.gel ga4 45.ge8+

�h7 46 . .ie4+ g6 47.g4 gxa3 48.ge6 gxc3 49. <i>g2 b5 50.f3 b4 51.g5 gh4 52 . .ixg6+ �g7 53. �g3 gd4 54 . .ie8 b3 55.g6 gds

Las blancas sobrepasaron el limite de tiem­po.

A pesar de sus valores positivos, los peones doblados -mas a menudo que al reves- son una carga. Hay un tipo de peones doblados que constituye un caso critico del tema. Me refiero a los peones doblados aislados, como los que tenia Ia posicion de Geller. Un par de partidas ilustrativas ayudara al lector a ver claramente las razones de su debilidad en cir­cunstancias diversas.

Rukavina - Karpov Tomeo Interzonal Leningrado 1 973 Apertura Inglesa

l.c4 tlJf6 2.tlJc3 e6 3.tlJf3 c5 4.d4 cxd4 5.tlJxd4 .ib4 6.tlJc2 .ixc3+ 7.bxc3

Las blancas han aceptado el par de peones doblados y aislados en la columna "c", con­fiando en la fuerza de su alfil de casillas ne­gras, que se dispone a situarse en "a3" . 7 ... Wfa5 8.tlJb4?

lncoherente y artificial. En la partida entre Ivkov y Fischer, Vinkovci 1 968, las blancas continuaron 8 .'\Wd3 ctJc6 9.�a3, ateniendose a su idea inicial . Despues de 9 . . . b6 1 0.�d6, in­cluso lograron ventaja, sofocando las posibi­lidades de contrajuego rival. Pero la correcta 9 . . . d5 1 0.e3 e5 , con idea de 1 l . . .�e6, habria ofrecido buen juego a las negras.

PEONES DOBLADOS 1 09

8 ... 0-0 9.e3 b6 10.i.e2 j,b7 1 1.0-0 gcs Esta claro que las blancas no tienen com­

pensacion por su debilidad en la columna "c". 12.f3 �c6 13.�b3 �e5 14.�xc6 gxc6 15.j,d2 '

Las blancas estan obligadas a defenderse pasivamente. 15 ... �c7 16.�a4 a5 17JHb1 j,a6

Apenas hemos salido de la apertura y el peon doblado esta ya perdido. 18J�b2 .ixc4 19 . .ixc4 gxc4 20.�b5 gc6 21.e4 d6

Las negras encuentran el modo mas sen­cillo y convincente de convertir su ventaja material. El caballo de "f6" viaja, a traves de "d7" y "e5" , para instalarse en el fuerte puesto avanzado de "c4", desde donde controlara las casillas importantes del contomo. 22.�g5 �d7 23.�e7 �e5 24.�xc7 gxc7 25.gb5 �c4 26 . .ic1 gac8 27.gab1 gcs

Ahora podemos recurrir a la famosa for­mula: no se requieren mas comentarios. 28.<ibn <ibf8 29.<ibe2 <ibe7 30.g5b3 <ibd7 31.a4 <ibc7 32 . .if4 ®b7 33 . .ie3 gsc6 34 . .id4 f6 35J�!dl gd8 36.f4 d5 37 . .if2 gcd6 38 . .ic5 gc6 39 . .if2 gdd6 40.exd5 gxd5 41.gxd5 exd5 42.gb5 ge6+ 43. <ibd3 ®c6 44.g3 ge7 45J�b1 gb7 46.gb5 �d6 47.gb2 b5 48.axb5+ gxb5

Las blancas se rindieron. Es cierto que se trata de uno de los peores

escenarios en que pueden aparecer los peones doblados y aislados, pero es una realidad que a menudo estan obligados a soportar. El mero hecho de su inmovilidad hace que corran es-

pecial peligro en el final, convirtiendolos en un factor esencial que nunca debemos ignorar. La partida que sigue constituye una impresio­nante advertencia.

Boleslavsky - Smyslov Campeonato de la URSS por equipos 1 948

Apertura Ruy Lopez

l .e4 e5 2.�f3 �c6 3 . .ib5 a6 4 . .ia4 d6 5.c4 .ig4 6.�c3 �f6 7.h3 .ixf3 8.�xf3 .ie7 9.�e2 0-0 10 . .ixc6 bxc6 11 .d4

En la continuacion caracterizada por 5 .c4, que Duras popularizo en su tiempo, el blanco consigue realizar el avance d4, pero en un mo­mento inoportuno, con su rey aun en el centro. La replica de Smyslov no se hace esperar . . . 11 . . . d5! 12.dxe5 .ib4+ 13.�c3 �xe4 14.0-0 .ixc3 15.bxc3 �e7 16.cxd5 cxd5 17.c4 �xeS 18 . .if4 �c3 19.cxd5 �xf3 20.gxf3 �f6 21 . .ixc7 �xd5 22 . .ig3 grcs

1 1 0 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Tras una serie de movimientos pnictica­mente forzados, se ha entrado en este final, en el que la estructura de peones blancos ha que­dado irremediablemente daiiada, aunque, dado el escaso material, parece no ser un factor im­portante. j Sin embargo, sin duda lo es! 23JUdl gcs 24J�d2 h6

Lo mas preciso. 24 . . . f6 abre la Septima fila, lo que no es prudente con todas las torres so­bre el tablero. 24 . . . g6 a(m es menos recomen­dable, en vista de la existencia del alfil de ca­sillas negras contrario. 25.gel gac8 26 . .id6?!

Las blancas subestiman el peligro poten­cial. Es preferible mantener ambas torres. Las posibilidades negras se incrementan con el cambio de un par de torres. Era mejor hacer 26.<i>g2. 26 .. J�cl 27J�xcl gxcl+ 28.�g2 �b6 29 . .ig3 gc6 30.�fl?

Aunque el cambio de un par de torres fa­vorecia a las negras, el cambio de las cuatro torres disminuye las posibilidades activas del mismo bando. En opinion de Smyslov, era mejor 30J!d6. 30 ... f6 31 .�e2 �fi 32.�d3 gcs

La torre se traslada a "aS" , donde quedara activamente situada, en vista del peon retrasa­do de "a2" y su libertad de movimientos por la columna "a". 33.gb2 �d7 34.�d4 gas 35.gc2 c;!?e6 36.gc6+ c;!?rs 37.gc7 �e5 38.gcs

Si 38 Jhg7, entonces las negras ganan ma­terial con 3 8 . . . ct:Jxf3+ 39.<±>e3 �a3+ 40.cj;>e2 ctJd4+, etc.

Con la textual, esperando el mov1m1ento 3 8 . . . �a4+, las blancas tenian in mente 39.cj;>c3 �a3+ 40.cj;>b4 �xf3 4 1 .a4, con posibilidades en el ala de dama. Sin embargo, las negras tienen otras ideas. 38 ... ga3 !

Una aguda respuesta. Ante la amenaza de mate, las negras obligan a su rival a entrar en un dificil final de torres. 39 . .ixe5 ga4+ 40.gc4

40. cj;>e3 ofrece mayor resistencia, aunque despues de 40 . . . fxe5 4 l .�c2 �a3+ 42 .<i>e2 a5 43 .�d2 g6 44.�c2 h5 45 .�b2 �c3, la amenaza . . . cj;>f4 gana un peon. 40 ... fxe5+ 4l.�d3 gxa2 42.gg4 g5

Las blancas se rindieron. En ultima instancia, los peones doblados y

aislados se convierten en la pres a. j La derrota de Boleslavsky es realmente descorazonadora!

El problema con una unidad de peones de ese tipo esta relacionado con su incapacidad para transformarse en otra formacion mas fa­vorable, e incluso cuando eso sucede, lo unico que se consigue, en el mejor de los casos, es un final inferior.

Spassky - Petrosian Campeonato Mundial (23 partida)

Moscu 1 966 Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 d5 3.�c3 �f6 4 . .ig5 dxe4 5.�xe4 .ie7 6 . .ixf6 .ixf6 7.�f3 .id7?!

Petrosian probablemente esperaba 8 .id3 ic6 9.c3 ctJd7 1 0.Wie2 ie7, con un juego

PEONES DOBLADOS Ill

satisfactorio. Pero esa no es la (mica opcion de las blancas. 8.�d2 .ic6 9.llJxf6+ �xf6

9 . . . gxf6 1 0.�f4 tambien es ventajoso para las blancas, pero retomar de peon privaria a las privaria de la casilla "e5", que el caballo ocupa de inmediato. lO.llJe5 0-0 11 .0-0-0

El enroque largo mantiene opciones activas en el flanco de rey. ll. .. llJd7

En caso de 1 1 . . .Ei:d8, con idea de seguir 12 . . . ie8 y . . . ltJc6, las blancas reaccionan ha­ciendo 1 2.h4. 12.llJxc6 bxc6

Las negras permitieron esta fractura en su formacion de peones, en vista de que las blan­cas no podnin impedir . . . c5, desembarazando­se asi del peon "c" doblado. Tambien deben haber tenido en cuenta que la columna "b" po­dria utilizarse para presionar sobre el peon de "b2" . 13.h4!

La forma mas rapida de activar la torre de rey. Desde la tercera fila podra emplearse contra las debilidades enemigas. 13 .. J3ab8 14J3h3 c5

Lo natural es que uno quiera desprenderse del peon doblado. Por desgracia para las negras, aunque la textual parece una forma perfecta de hacerlo, tendran que pagar un alto precio por ello. 15.�g5!

Una jugada extraordinaria. 15 ... cxd4

Dado que 1 5 . . . �xf2?? pierde, por 1 6.8:f3, las negras deben aceptar el cambio de damas y, por consiguiente, un dificil final. 16.�xf6 llJxf6 17J3xd4

Los peones doblados ya no son una pero­cupacion para las negras, pero las conse­cuencias si se hacen notar, en forma de dos peones aislados. Por otro lado, las torres blan­cas son mas activas, y su alfil de largo alcance es superior al caballo negro. 17 .. J3b7

Petrosian pensaba despues que era mas tenaz 1 7 . . . c5 . Puede que asi sea, pero no cambiaria las caracteristicas esenciales de la posicion. 18J�b3

Con su superior estructura de peones, a las blancas les resulta util cambiar un par de torres. Lo mejor que pueden hacer las negras es responder 1 8 . . . 8:b6, evitandolo. 18 .. J3xb3 19.axb3 gas 20.gc4 llJe8 21 .ga4

En vista del plan 22.g3 y 23 . .ig2, el peon de "a7'' no puede defenderse. 21 ... llJd6 22.g3- <i>f8 23.Ag2 gcs 24.gxa7 ®e7 25.<i>d2 h6 26.c4 g5 27.hxg5 hxg5 28.<i>c3 ci>d7 29.b4 gh8 30.b5 gh2 31 . .ic6+ ci>d8

Las negras se rindieron, sin esperar a la evidente 32.c5 .

Los peones doblados acarrearon un final desesperado. El problema es que el peon do­blado no es la unica debilidad en la posicion. Los peones que los rodean tambien suelen quedar debilitados y constituyen una debilidad permanente.

1 1 2 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Petrosian - W. Schmidt Olimpiada, Skopje 1972

Apertura Inglesa

l.c4 t!Jf6 2.t!Jc3 d5 3.cxd5 t!Jxd5 4.g3 g6 5.�g2 t!Jb6 6.d3 �g7 7.�e3 t!Jc6?!

Como observo un ingenioso Gran Maestro, los errores estan esperando, emboscados, a ser cometidos, y al jugar al ajedrez podemos co­meterlos ya en plena apertura. 8.Axc6+!? bxc6 9.�cl

El alfil blanco fianchettado es una pieza fuerte en la gran diagonal de casillas claras, y muchos jugadores dudan a la hora de cambiar­lo por una pieza de menor importancia. Petro­sian, sin embargo, sabe bien que los alfiles son fuertes precisamente porque pueden cam­biarse, en un momento dado, en condiciones favorables. Una vez dislocada la estructura ne­gra de peones, las blancas se disponen a res­ponder a 9 . . . 0-0 con I O.�h6, privando a las negras del par de alfiles. 9 •.. h6

Este avance ha recibido criticas. El peon de "h6" queda atacado, pero, por otra parte, 9 . . . h5 permitiria un ulterior lt:Jg5, que no conviene a las negras, que estan proyectando . . . �h3 . 10.t!Jf3 �h3 l l.:ggl .ig4

Expulsando el caballo a un mejor puesto. 12.t!Jd2 t!Jd5 13.t!Jxd5 cxd5 14.t!Jb3 �d6 15.f3 �d7 16.d4

Las negras han tenido exito en deseaba­razarse del peon doblado de "c6", por medio de cambios (como hizo Petrosian contra Spas­sky), pero pronto se veran obligadas a entrar

en un final inferior, caracterizado por el peon retrasado de "c7" y la debilidad general de la columna "c" . Notese tam bien que la forma­cion de peones centrales es favorable a la pa­reja caballo + alfil vs. la pareja de alfiles.

16 ... :gb8?! Los comentaristas propusieron como mas

fuerte 1 6 . . . h5 1 7 .�f2 e5 . La textual poco hace por lograr compensacion por la inferior es­tructura de peones y alfiles peores. 17.®f2 h5 18 . .if4 e5 19.dxe5 Axe5 20.�e3 f6 21 .�xa7

El proceso tipico esta llegando a su fin: la debilidad de los peones doblados se ha trans­formado en una formacion de peones deficien­te en el flanco de dama. Ahora la ventaja posi­cional de las blancas se convierte en ventaja material. 21 ... 0-0 22.:gacl :gfe8 23.�xe5 �xe5 24.:ggel gas 25.�xc7 �e3+ 26.®g2 ga7 27.�d6 h4 28.gxh4 �e6 29J�c3 �h6 30.a3 gd7 31.�g3

PEONES DOBLADOS 1 1 3

d4 32.gd3 .ixb3 33J�xb3 VNd2 34.�fl �h7 35.gb8 ges 36.%Yg4 f5 37.VNg5 ge3 38.%Yf6

Las negras se rindieron. Lo que en esencia es erroneo, dice un pro-

Observaciones generales

verbio Iatino, el paso del tiempo no puede re­pararlo. Cuando los debiles peones doblados se convierten en alguna otra formacion, Ia de­bilidad se transfiere a Ia nueva formacion.

Como nuestro estudio demuestra, los peones doblados son de dos naturalezas, compartiendo esa cualidad relativa e intrigante con otros tipos de peones que ya hemos estudiado. Segun las circunstancias, pueden ser piedras utiles sobre las que se base el edificio de peones o, cuando estan irremediablemente daiiados, una parte muy debil de su tej ido.

Como antes se ha dicho, Ia casillas "c3 ", "c6", "f3" y "f6" son los lugares mas comunes en que surgen peones doblados, por Ia razon evidente de que en numerosas variantes de apertura se cambian en dichas casillas alfiles por caballos. Al respetar el principio de retomar hacia el centro, en tales casos las columnas "b" y "g" se abren para el contrajuego, mientras que los peones do­blados forman parte integrante de la masa central de peones, cumpliendo la mision de cubrir to­das las casillas centrales importantes .

Hemos visto que en su posicion inicial los peones doblados no pueden, en general, ser ataca­dos con exito, y que cumplen su tarea de cooperar con otros peones a los que estan unidos. En ciertas situaciones, mediante una cuidadosa preparacion incluso pueden llegar a asumir un papel activo en el plan de juego.

Sin embargo, tambien hemos aprendido que al avanzar debilitan casillas de su entomo y ellos mismos se exponen mas a la presion enemiga. Debemos tener presente que solo en raras oca­siones pueden los peones doblados dar Iugar a formaciones mas positivas y que, mas raro incluso es que puedan producir un peon pasado. Por consiguiente, y hablando en general, cuanto mas avancen, mas expuestos se encontraran al peligro. Cuando un peon doblado llega a la cuarta fila, su destino se vuelve incierto, sencillamente porque puede ser mas facilmente atacado. En tales casos, atan otras piezas a su defensa, lo que a menudo lleva a una pasividad general o falta de actividad.

El tipo mas critico de peones doblados se produce cuando el par queda separado de los demas peones, perdiendo toda flexibilidad y esperanzas de mejora. Entonces suelen ser realmente debiles. Como regia, las posibilidades de defensa de peones doblados y aislados disminuyen con la reduccion de material en el tablero, lo que a menudo puede ser un factor decisivo en los finales mas simples.

Las caracteristicas que hemos descrito sugieren como tratar a los peones doblados. Muy a me­nudo se consiguen buenos resultados provocando su avance, lo que es coherente con su debilidad dinamica. En la mayoria de los casos, sin embargo, el exito se consigue mediante el bloqueo. En ocasiones es una premisa fundamental para iniciar la presion en el medio juego, pero con mayor frecuencia lo es un proceso a largo plazo, Iento, que apunta a reducir los medios defensivos.

El jugador que este en posesion de peones doblados, a menos que se trate de circunstancias inusuales, debe atenerse a dos reglas de oro:

a) No debe avanzar los peones doblados sin reflexion, sin una razon especifica de peso, que responda a un buen plan.

b) Debe procurar que sus peones doblados no queden aislados del resto de la formaci on. Recuerde que su fuerza es de naturaleza estatica, y que con su integracion en la masa general es como resultan mas utiles.

1 1 4 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

5 Peones retrasados

Los peones retrasados son bien peones aislados, bien los ultimos peones de una cadena. Ge­neralmente se encuentran en Ia segunda fila o avanzados una casilla, en Ia tercera fila. Es su po­sicion concreta en el tablero lo que habla de sus inconvenientes y su solo nombre implica una de­bilidad posicional.

Este diagrama representa un caso tipico de peon retrasado. Situado en "d6", se encuentra bajo presion. No puede avanzar y no puede sacrificarse para obtener contrajuego. Por con­siguiente, debe ser defendido. La defensa ata a las piezas negras en un esfuerzo pasivo por mantener el equilibrio material . Un inconve­niente adicional es Ia debil cas ilia "d5 ", un punto fuerte para las blancas, algo que sucede regularmente con peones retrasados. De modo que las piezas negras est{m atadas a Ia defensa de un sector restringi'do del tablero, que origi­na pasividad y falta de contrajuego. En gene­ral, esa es Ia imagen negativa de los peones retrasados, pero aprenderemos que cuando los peones retrasados se encuentran en armonia con las piezas menores, pueden jugar un papel positivo en Ia partida. Nuestro proposito es ver la cara y Ia cruz de Ia moneda. Para enten­der y distinguir entre sus inconvenientes y sus cualidades, consideraremos ejemplos de la ri­ca experiencia magistral.

Karpov - Andersson Madrid 1 973

Defensa Bogoindia

l.d4 l£lf6 2.c4 e6 3.ltlf3 b6 4.g3 J.b4+ 5.tiJbd2 .ib7 6.i.g2 0-0 7.0-0 c5? ! 8.a3 J.xd2 9 . .ixd2 cxd4 10.i.b4 �e8 ll .J.d6

La apertura de las negras no es precisa­mente un ejemplo de buen juego. AI ceder Ia pareja de alfiles y capturar en "d4", han hecho posible Ia maniobra J.b4-d6. El alfil de casi­llas negras bloquea el peon de "d7" en su posi­cion inicial, impidiendo que las negras liberen su juego. El peon de "d7" seguini estando re­trasado mientras dure el bloqueo en "d6". ll. .. tlJe4?! 12.Wfxd4 ltl a6 13.b4 �c8 14J�acl tlJxd6 15.Wfxd6

Al entrar en esta continuacion, las negras probablemente confiaban en la posibilidad de expulsar al alfil de "d6", pero un nuevo blo­queador ha ocupado la plaza del alfil. Es cier­to que la dama es demasiado valiosa en la rna-

PEONES RETRASADOS 1 1 5

yoria de los casos para ser utilizada como blo­queadora, pero combinada con un posterior �fd1 , su papel sobre la columna "d" es natural. 15 ... tlJc7

Las negras deb ian continuar con 1 5 . . . W c7, pero entonces el caballo permaneceria fuera de juego. El peon de "d7" esta amenazado y Andersson, un excelente maestro de la defen­sa, concibe una defensa oculta: el caballo ju­gara a "e8" para expulsar a la dama y lograr algun espacio. El problema con los peones re­trasados es a menudo no solo su propia debili­dad, sino la falta de espacio para maniobrar que generan en la posicion. 16JUdl E:e7 17J�Yd3 i.xf3

1 7 . . . d5 no da resultado, debido a 1 8 .e4, mientras que 1 8 .ttJg5 planea en el aire. Las negras estan obligadas a entrar en un final en el que el alfil blanco sera superior al pasivo caballo negro. 18.i.xf3 tlJe8 19.i.b7 �c7 20.i.a6!

No muchos jugadores encontrarian esta profunda maniobra. Si las negras contaban con jugar . . . d6, ahora tendran que pensarselo dos veces, pues i.b5 ganaria el peon retrasado. Asi pues, se veran obligadas a vivir en un es­pacio muy restringido. 20 ... E:c6 21.�b3 �b8 22.�a4 �c7

La amenaza era 23.�xd7. 23.�b5 tlJf6 24.f3 d5

Las negras consiguen, por fin, avanzar su peon retrasado, pero solo para enfrentarse a otros problemas. La maniobra i.b7-a6, junto con la profunda decision e�trategica de trasla­dar la dam a a "b5 ", producira una mayoria de peones en el flanco de dama. 25.c5 h5 26.a4 �e8 27.cxb6 cxb6 28.a5

La mayoria del flanco de dama se convierte ahora en un peon pasado, que resulta ser el anna decisiva de las blancas. 28 .. J�xcl 29.E:xcl �e5

Dado que 29 . . . bxa5 30.�xb8 �xb8 3 1 .bxa5 �a8 32.�c8+ y otros tipos de final estan igual­mente perdidos, las negras tratan de impro­visar un contrajuego en el flanco de rey, lo que es futil y pronto fracasa . . . 30.�xb6 d4 31.®hl �e3 32.�fl e5 33.i.d3 h4 34.gxh4 �f4 35.�gl YBxh4 36.a6 g6 37.a7 ®g7 38.i.xg6

Las negras se rindieron. Si 38 . . . fxg6, 39.a8� no deja la menor espe­

ranza. Todo el curso de la partida estuvo in­fluido por el peon retrasado de "d7" y su blo­queo. Las consecuencias para las negras fue­ron la falta de espacio para maniobrar y una pasividad general.

1 1 6 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Karpov - Svidler Dos Hennanas 1 999

Defensa Griinfeld

l.d4 llJf6 2.c4 g6 3.llJc3 d5 4.llJt3 �g7 5.�b3 dxc4 6.�xc4 0-0 7.e4 a6 8.e5 b5 9.�b3 llJfd7 10.e6 fxe6 l l.�e3!

Las blancas han dafiado la estructura de peones de su oponente, pero sin intencion de explotarla de inmediato con 1 1 .'W'xe6+ o 1 1 .tt:'lg5, continuaciones que habian fracasado en partidas anteriores ante el fuerte contra­juego de las negras. ll ... llJf6

Antes, en Wijk aan Zee 1 999, Svidler de­fendio la misma posicion contra Kasparov, con l l . . .tt:'lb6, pero tras 1 2.h4 tt:'lc6 1 3 .h5 , las blancas consiguieron ataque. 12.a4 bxa4 13J�xa4

13 ... llJc6 Svidler ha aceptado el sacrificio de peon,

pero a costa de un dafio pennanente en su for­macion de peones, compuesta ahora por is­lotes con varios peones retrasados. A fin de compensar sus debilidades, esperan poder uti­lizar la columna "b" y generar en ella contra­JUego.

La altemativa era 1 3 . . . tt:'ld5, con idea de responder a 14.J.c4 con 14 . . . c6, depositando sus esperanzas en su finne, aunque pasiva posicion. Sin embargo, esa jugada contribuye poco al desarrollo del flanco de dama, y tam­bien expone el flanco de rey negro al ataque, con h4-h5 . 14 . .ic4 r;bs 15..ixe6+ <it?h8 16.'\Wc4 .ixe6 17.�xe6 %Vd6

He aqui como esperaban las negras resolver el tema. Despues de 1 8 .'W'xd6, el peon debil de "a6" tendria su contrapeso en el de "b2" . 18.llJg5 r;xb2 19.0-0

Las negras no temen 1 9.tt:'lf7+, por la fuerte replica 1 9 . . . �xf7 20.'W'xf7 e5 . Con la textual, las blancas finalizan su desarrollo y renuevan la amenaza �xa6, que fuerza los aconteci­mientos. 19 ... llJd8 20.�h3 %Vd7

Ante la amenaza 2 l .tt:'lce4, las negras en­tran en un final en el que el equilibria material se mantiene, pero con dos peones retrasados en "c7" y "e7" . 21.�xd7 llJxd7 22.:axa6 llJb6 23.h4 r;c2

A 23 . . . tt:'lc4 sigue 24.tt:'ld5 . 24.llJce4 h6 25.llJt3 llJc6 26.r;aal !

Sencillo y fuerte. Las blancas planean cam­biar un par de torres, y asi podnin presionar con mas fuerza sobre el peon retrasado de

PEONES RETRASADOS 1 17

"c7", el mas expuesto de los dos peones debi­les negros. 26 ... �b4 27J��fcl ��bel+ 28J��xcl �4d5 29.�c5 gf6

Las dificultades que las negras han estado experimentando en la partida, son la conse­cuencia de dos peones retrasados que "ador­nan" su estructura. Los peones de "c7" y "e7" requieren una defensa constante. Por otra par­te, no debemos dejar de percibir que las casi­llas delanteras ("c6" y "e6") son debiles y pue­den explotarse por las piezas blancas, lo que es un caso muy habitual cuando existen peo­nes retrasados. 30 . .id2

La presion sobre "d4" es debil y no requie­re que el alfil siga en "e3 " . Las blancas podran ahora incrementar la presion sobre la columna "e", con gel . 30 ... gd6 31.�b7 gf6

3 1 . . .gd7 obviamente pierde, por 32.CLJe5, y 3 1 . . .ge6 32.t2Jd8 ge4 33 .gc6 <i>h7 34.l2Je6 es desesperado. 32.�e5 <it>b7 33.g3 gf8 34.�c5 gas 35.gc2

Las blancas no tienen prisa, pues las debi­lidades de peones son permanentes. De modo que pueden permitirse gastar un tiempo en cubrir su segunda fila contra la proyectada 35 . . . ga2 . 35 ... gd8 36. <it>g2 .ixe5

Cuando un jugador recurre a tales cambios, es que su posicion debe ser realmente deses­perada. Por supuesto, la cuestion es que hacer si no. 37.dxe5 �d7 38.�xd7 gxd7 39J��c6 �b6

40 . .icl gd5 41.ge6 �c8 0 bien 4 1 . . .gd7 42.h5 .

42.h5 gxh5 43.gxh6+ <it>g7 44.gxh5 c5 45.<it>f3 c4 46.i.e3 e6 47.gh4 �e7 48J��xc4 �g6 49 . .id4

Las negras se rindieron. Los peones retrasados en la septima fila re­

sultaron muy sensibles, sobre todo al ser ex­puestos a la perfecta tecnica de un gran juga­dor posicional como Karpov. La falta de espa­cio hizo dificil organizar una defensa efectiva.

Euwe - Capa�lanca AVRO, Amsterdam 193 8

Defensa India de Dama

l.d4 �f6 2.c4 e6 3.�13 b6 4.g3 .ib7 5 . .ig2 .ie7 6.0-0 0-0 7.�c3 d5 8.�e5 �e4?!

A 8 . . . t2Jbd7, la casilla "c6" queda debilitada despues de 9.cxd5 exd5 1 0.�a4, lo que causa molestas dificultades a las negras. � . . . c6 9.e4 es pasivo, y puesto que la textual tambien fa­lla, parece que la paciente 8 . . . �c8 era la mejor opcion. 9.cxd5 exd5 10.�xe4 dxe4 1 1.\Wc2!

Una excelente continuacion, que excluye l l . . . f6 debido a 1 2 . .ixe4, y ll . . . �xd4 por 12 .�xc7. De esta forma, la dama dificulta el desarrollo de las negras en el flanco de dama de forma normal, apuntando de paso al peon retrasado de "c7". l l . . . f5 12.i.e3 �a6

En vista de la presion sobre la columna "c", el desarrollo de las negras resulta cuestiona­ble, y deben optar por soluciones artificiales.

1 1 8 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

En "a6" el caballo defiende el peon de "c7", pero la casilla "c6" queda ahora disponible pa­ra el caballo blanco. 13J�acl YMd5 14.�c6

Al provocar cambios, las blancas acentuan la debilidad del peon retrasado y de la casilla delantera "c6". Un fenomeno tipico en la ma­yoria de los peones debiles. 14 ... J.xc6 15YMxc6 YMxc6 16J�xc6 gr6 17.gfcl gxc6 18.gxc6 i.d6 19.a3

Al dejar bajo control la casilla "b4", las blancas mantienen al caballo de "a6" fuera de juego. En la defensa de los peones retrasados, las piezas a menudo son obligadas a adoptar posiciones no naturales, altenindose asi la coordinacion entre elias. 19 ... ge8 20 . .if4

El cambio de alfiles de casillas negras eli­minani al defensor clave del peon "c7" . A pri­mera vista parece cuestionable, porque el alfil esta encerrado en "g2", pero es facil prever su liberacion. 20 ... J.xf4?!

A 20 . . . El:d8, las blancas planeaban 2 l .e3 , seguido de 22.f3 . Mayor resistencia ofrecia 20 . . . ttJb8 2 1 .El:c3 ixf4 22 .gxf4 c6, aunque de nuevo 23 .f3 y 24.e3 mantienen la ventaja. 21.gxf4 <t!?ti 22.e3 ge6 23.gc4

El problema de los peones retrasados radica en su inmovilidad. Ahora, 23 . . . c5 perderia, por 24.El:a4 b5 25.El:a5 cxd4 26.exd4, y la ame­naza 27 .ifl es fatal. Asi pues, ante la ame­naza 24.El:a4, las negras deben debilitar aun mas su formacion de peones. 23 ... b5 24.gc3 c6 25.f3 g6

25 . . . exf3 26.ixf3 ttJb8 pierde, por 27.d5. 26.fxe4 fxe4 27.a4!

Una jugada decisiva. 27 ... bxa4

27 . . . b4 28.El:b3 abre paso a 29.ifl , mien­tras que 27 . . . ttJ c7 28.axb5 ttJ xb5 29.El:c5 ame­naza 30.ih3 , y la posicion negra, con varios islotes de peones y peones debiles, no puede sostenerse. 28.gc4 i>f6 29.gxa4 c5 30 . .ifl

Esta jugada ha estado en el aire desde hace algun tiempo. La ventaja acumulada por la constante y concentrada presion sobre el peon retrasado se ha transformado en un final su­perior de alfil contra caballo, que pronto re­portara ventaja material y la victoria a las blancas. 30 ... cxd4 31J;xa6 dxe3 32.gxe6+ ®xe6 33 . .ih3+ ®d5 34. i>n i>c4 35. ®e2 ®b3 36.i.e6+ i>xb2 37 . .ig8 a5 38.i.xh7 a4 39.J.xg6

Las negras se rindieron. Analizando esta partida podemos ver que

se desarrollo con las mismas caracteristicas posicionales que vimos ya en las dos partidas ganadas por Karpov: un peon retrasado en su segunda fila, una casilla delantera debil, pre­sion duradera sobre la columna y, como con­secuencia, un final inferior. Podemos percibir que los peones en su segunda fila se encuen­tran en una situacion muy dificil, porque no es posible un esfuerzo defensivo coordinado, de­bido a la restriccion de espacio. Un par de peones retrasados en la segunda y tercera filas suele afrontar las mismas dificultades.

PEONES RETRASADOS 119

Tal - Kupreichik Sochi 1970

Defensa Siciliana

l.e4 c5 2.llJf3 g6 3.d4 cxd4 4.llJxd4 �g7 5.c4 llJc6 6.�e3 llJh6?! 7.�e2 d6 8.llJc3 0-0 9.0-0 f5?!

La Formacion Maroczy se caracteriza por el fuerte centro blanco. Puesto que su superio­ridad en ese sector dificulta todo contrajuego importante, las negras preparan y ejecutan rupturas laterales. 10.exf5 llJxd4 ll .�xd4 �xd4 12.Wfxd4 llJxf5 13.Wfd2

Las negras han tenido exito simplificando la posicion, por medio de una serie de cam­bios, pero las blancas han conservado su ven­taja espacial. La casilla "d5 " es una casilla im­portante, que puede ser utilizada por las piezas menores, mientras que las columnas centrales se utilizanin para ejercer una fuerte presion sobre el par de peones de "d6" y "e7" . Este par esta vinculado en su pasiva incapacidad de avance. Si el peon de "e7" avanza, entonces el de "d6" quedara retrasado. Por otro lado, exis­ten las habituates casillas debiles delante de los peones: "d5" y "e6" . Estos factores com­plicaran la defensa de las negras. 13 ... �d7 14.�f3 �c6 15.�d5+!

Las blancas pueden utilizar las casillas fuertes a discrecion. 15 ... ®g7

Despues de 1 5 . . . ixd5 1 6.cxd5, el pobre peon negro de "e7" permanece tragicamente debilitado.

16J:Uel e5 El peon de "d6" es ahora potencialmente

debil, pero -piensan las negras- quedara cu­bierto por . . . ttJd4. Sin embargo, con peones tan fragiles hay que estar siempre pendiente de los posibles golpes tacticos. 17.c5! dxc5 18J:�xe5 �e8 19.�ael Wfd6 20.ge6 �xe6 21.�xe6 Wfd7 22.Wff4

A pesar de la debilidad de la primera fila, asi de simple. El desprotegido rey negro lo posibilita. 22 ... �xd5 23. WI e5+ ®ti

Si 23 ... �h6, entonces sigue 24. ttJxd5 �d8 25 .ttJe3. 24.�f6+ ®g8 25.llJxd5 Wfa4

25 . . . �d8 y 25 . . . �e8 pierden, por 26.�xg6+! hxg6 27.ttJf6+, etc. 26.h3 �d8? 27.�xf5

Las negras se rindieron.

Szabo - Larsen Vinkovci 1970

Defensa Siciliana

l.llJf3 c5 2.c4 llJc6 3.d4 cxd4 4.llJxd4 g6 5.e4 �g7 6.�e3 d6 7.llJc3 llJh6?!

Las negras planean la ruptura . . . f5 . Pueden realizar esta idea en distintas secuencias, pero ha fracasado regularmente en producir los resultados apetecidos. 0 bien las complicacio­nes tacticas terminan, dejando una deficiente estructura de peones, o bien la formacion re­sulta vulnerable a posibilidades tacticas. Para las negras, una idea es, en su tumo anterior, 6 . . . ttJh6 7 .ttJc3 0-0 8 .ie2 f5 9.exf5, y luego

1 20 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

continuar 9 . . . �xd4 1 0.�xh6 !hf5 1 1 .0-0 l.Wb6, pero esta linea descuida el desarrollo. Despues de 12 .lt:Jd5 �xf2+ 1 3 .@h 1 l.Wd4, parece como si las negras pudieran salir airosas, pero 14.�g4 l.Wxd1 1 5 .El:axd1 �f7 1 6.lt:Jxe7+ lt:Jxe7 1 7 .�e6 es una clara refutacion. 8.i.e2 0-0 9.0-0 f5? ! 10.exf5 gxf5

Las jugadas 1 O . . . lt:Jxf5 1 1 .lt:Jxf5 �xf5 1 2.c5 dxc5 1 3 .�xc5 b6 14.l.Wb3+ @h8 1 5 .El:ad1 l.Wc8 1 6.�e3 e5 1 7.Wa4, Kovacevic - Barcza, Zagreb 1 972, de nuevo demuestra que las blancas disponen de varios motivos tacticos para apoderarse de Ia iniciativa. Aqui las blancas amenazan 18.�f3, y la proyectada 1 7 . . . lt:Jd4 fallaria, por 1 8.�xd4 exd4 19.�xd4. l l .f4 i.d7

Tambien se ha ensayado 1 1 . . .l.Wb6, pero entonces 1 2.lt:Jxf5 Wxb2 1 3 .lt:Jxh6+ �xh6 14 .lt:Jd5 es ventajoso para las blancas. Larsen, por consiguiente, decide evitar los cambios. 12.'1Wd2 l2Jg4

El problema de las negras en todas las posiciones similares radica en su potencial­mente debil formacion central de peones, que no puede mejorarse ' de ningun modo. Utili­zando las columnas centrales, la fuerte casilla "d5" y sus activos alfiles, las blancas asfixia­ran a su rival, a menos que este encuentre al­gun contrajuego. Larsen lo entiende perfecta­mente. 13.i.xg4 fxg4 14.liJd5

Las mejores casillas estan en manos de las centralizadas piezas blancas, dejando a las ne­gras con una pobre eleccion: o bien responden con 14 . . . e6, que debilita para siempre al peon

"d6", o bien esperan, lo que resulta una poli­tica igualmente sospechosa. 14 .. -!Ui 15.f5! �h8

Esta jugada es mala, pero la posicion solo ofrece malas jugadas. Por ejemplo: 1 5 . . . lt:Jxd4 1 6.�xd4 �xf5 1 7 .�xg7 @xg7 1 8 .l.Wg5+ �g6 1 9.�xf7+ @xf7 20.El:fl + @g7 2 1 .Wxg4. 16.liJe6 �g8 17.l2Jxg7 �xg7

18.liJxe7 No es una casualidad que estos sacrificios

den resultado. Las fuertes piezas centralizadas a menudo ofrecen soluciones tacticas contra formaciones pasivas de peones. 18 ... l2Jxe7 19.f6 �g6 20.fxe7 E:xe7 21 .i.d4+ �g8 22.gf6 �h5 23.gan g3 24.hxg3 i.e6 25.�f4 E:fi 26.g4

Las negras se rindieron.

Reti- Colle Hastings 1 926

Apertura lnglesa

l.liJf3 liJf6 2.c4 e6 3.g3 b6 4.i.g2 i.b7 5.0-0 i.e7 6.d3 0-0 7.liJc3 c5 8.e4 liJc6 9.d4 liJxd4 lO.liJxd4 cxd4 l l .�xd4 i.c5? !

Las negras juegan con optimismo. La tex­tual y Ia maniobra de caballo que sigue son una forma de buscarse problemas. 12.�d3 l2Jg4 13.h3 l2Je5 14.�e2 gcs 15.b3 f5

Esta jugada es mas de lo que la posicion negra puede permitirse. 16.exf5 i.xg2 17.�xg2 i.d4 18.i.b2 E:xf5 19.f4 liJc6

La estructura central de peones negros nos resulta ya familiar.

PEONES RETRASADOS 121

20.gadl V!le7 21.�b5 .ixb2

22.lZ)d6! Este brillante golpe tactico decide Ia partida

en el acto. Como ya enfatice antes, una estruc­tura de peones irremediablemente pasiva a menudo permite soluciones tacticas. 22 ... .ia3 23.�xc8 V!if8 24.gxd7 gr6 25.lZ)xa7

Las negras se rindieron. Y a sean peones retrasados aislados o pares

de peones (uno en su segunda fila y el otro en la tercera), siguen siendo simbolos de inacti­vidad. A menudo se despachan de la manera en que lo hizo Reti en esta magistral minia­tura.

Los peones retrasados, sin embargo, surgen mas a menudo en la tercera fila. A veces re­sultan por error, en cuyo caso rara vez so­breviven, pero en otras ocasiones forman parte del plan estrategico general. Una caracteris­tica, por cierto, que se encuentra en muchas modemas variantes de apertura. AI estar una casilla mas adelante, generalmente estan me­jor apoyados, y las piezas tras ellos dominan mas espacio, lo que hace posible una mejor coordinacion. Prestaremos atencion a ambas situaciones por orden.

Tarrasch - Lasker Campeonato Mundial ( 1 03 partida)

Munich 1908 Apertura Ruy Lopez

l .e4 e5 2.�f3 lZ)c6 3.i.b5 �f6 4.0-0 lZ)xe4 5.d4 i.e7 6.V!ie2

Las blancas tambien han tenido exito con

6.dxe5 y 6.�e l , pero la jugada de Tarrasch se convirtio en la opcion mas popular. Deja a las negras en una posicion solida, pero bastante pasiva, agravada por los peones doblados. 6 ... �d6 7 . .ixc6 bxc6 8.dxe5 lZ)b7

El caballo de "b7" esta por el momento fue­ra de juego, pero regresara por "c5" . La parti­da Taubenhaus - Tarrasch, Montecarlo 1903, se jugo 8 . . . lt:Jf5 , pero despues de los movi­mientos 9.'!Me4 g6 1 0.ttJd4 ttJxd4 1 l .'!Mxd4 0-0 1 2.i.h6 �e8 1 3 .ttJc3, las negras quedaron con la peor parte, y al continuar con 1 3 . . . i.g5? fue­ron castigadas con la decis;va 14.i.xg5 '!Mxg5 1 5 .lt:Je4 '!Mxe5 1 6.ttJf6+, etc. 9.lZ)c3 0-0 to.gel lZ)c5 l l .lZ)d4 lZ)e6 12.i.e3 lZ)xd4

Quiza sea mas apropiado 1 2 . . . �b8 . AI tratar de romper una posicion bloqueada, en general es el bando mas activo el que se beneficia de la apertura de la misma. 13 . .ixd4 c5 14.i.e3 d5 15.exd6 i.xd6 16.lZ)e4!

En la octava partida del mismo match, las negras respondieron a 1 6.'!Mh5 con 1 6 . . . i.b7, pues el peon de "c5" queda indirectamente defendido por 1 7 . . . g6. La textual, sin embar­go, es mucho mas fuerte. Es posible gracias a que la combinacion 1 6 . . . i.xh2+ 1 7 . �xh2 '!Mh4+ 1 8 .�g1 '!Mxe4 19.i.xc5 '!Mxe2 20.�xe2 solo les da a las negras un final inferior. 16 ... i.b7 17.lZ)xd6 cxd6 18.gadl

Las negras se han desprendido de su peon doblado, pero siguen teniendo uno retrasado en "d6", expuesto a la presion de las piezas mayores enemigas sobre la columna "d" y el

1 22 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

alfil de casillas negras. La batalla que va a producirse gira en torno a ese peon retrasado. 18 ... �f6 19.c4

El tratamiento chisico de debilidades de peon comienza por inmovilizarlos. En poste­riores decadas, se descubrio la alternativa 1 9.f3 �ac8 20.'l!Md2 �e6 2 1 ..if2. 19 ... :afe8 20.�g4

Puesto que el peon de "b2" es tabu, las blancas aprovechan la ocasion para activar su dama, amenazando 2 1 .'l!Md7. 20 ... .ic6?!

Las negras podrian prevenir la amenaza blanca con 20 . . . �e6, como sugirio Paul Keres. 21.E!e2

La 20a jugada blanca elimino las amenazas potenciales sobre "g2" y, al mismo tiempo, evacuo "e2" para la maniobra de torre, do­blando torres e incrementando la presion so­bre el peon "d6" . Como 2 1 . . .�e4 22.'l!Mg3 �xc4 23 .�xd6 �d8 24.�xd8+ l!Mxd8 25 .h3 seguiria dejando a las negras en dificultades aun mayores, Lasker invirtio una hora entera buscando una respuesta. 2t. .. :ae4 22.�g3 �e6 23.h3

A 23.'l!Mxd6, las negras responderian con 23 . . . �g4. Con la textual, las blancas aprove­chan la ocasion para darle a su rey una casilla de escape. 23 ... :ad8

Ofrece mejores posibilidades a las blancas 23 . . . Wxc4 24.ih6 g6 25.�xe4 l!Mxe4 26.�xd6, en vista de que su rey esta mejor protegido. 24J�ed2 :aes 25 . .ih6!

jUn momento instructivo ! Como 25 . . . g6 debilita el flanco de rey para siempre y 25 . . . 'l!Mxh6 pierde, por 26.'l!Mxe5, el peon "d6" esta sentenciado. Cuando las piezas se en­cuentran atadas a la defensa de puntos debiles, las soluciones tacticas son una consecuencia logica habitual. 25 ... �g6 26 . .if4 E!e6 27.Axd6 �h5 28.�g4 �xg4 29.hxg4 :ae4 30 . .ixc5 :axd2 31 .E!xd2 h5 32.E!d6

Las negras se rindieron. Una buena leccion: los peones n!trasados

requieren proteccion constante, y eso se tradu­ce en pasividad y en las consecuencias logicas.

Fischer - Trifunovic Bled 1 96 1

Apertura Ruy Lopez

l.e4 e5 2)tjf3 t!Jc6 3 . .ib5 a6 4 . .ia4 t!Jf6 5.0-0 t!Jxe4 6.d4 b5 7 . .ib3 exd4

Hoy sabemos que 7 . . . d5 es indispensable, pero Trifunovic, el rey de las tablas, confiaba en viejos analisis suyos. s.:aet d5 9.t!Jc3 .ie6

Despues de 9 . . . dxc3 1 0.ixd5 ib7 1 1 .ixe4 ie7 1 2.'1!Me2, las negras no pueden enrocar. 10.t!Jxe4 dxe4 l t .:axe4 .ie7 12 . .ixe6 fxe6 13.t!Jxd4!

Esta era una novedad por entonces. En los viejos tiempos solia jugarse 1 3 .�xe6, pero 1 3 . . . Wd5 o 1 3 . . . 'l!Md7, seguido de . . . 0-0-0, les permitian a las negras zafarse.

Fischer, con buen criterio, prefiere tomar en "d4" y ocuparse luego del peon de "e6", an-

PEONES RETRASADOS 123

tes de tomar en 11e611 y tener que convivir con un peon en 11d411 • 13 ... 0-0

Ahora las blancas podrian contestar a 1 3 .. .l.Wd7 con 14.lM!g4. 14JWg4 tlJxd4 15J:�xd4 VHc8 16J;e4

Una vez infligido a las negras un peon retrasado en la columna 11e11, las blancas co­mienzan a presionar sobre 11e611 • 16 .. J:U6 17 . .ie3

Despues de la partida, Fischer sefialo una trampa oculta: 1 7.cig5? :gg6 1 8 .h4 h6 1 9.lM!h5 lMfe8, y las blancas pierden. 17 ... YHd7 18J��dl VHc6 19 . .id4 gg6 20.VHe2 gds 21.g3 VHd5 22J:;e1

Como Tarrasch en la partida anterior, Fis­cher sigue el metodo mas simple: incrementar al maximo la presion sobre el peon retrasado. Esto da Iugar a la descoordinacion de las piezas negras, atadas a la defensa del peon de 11e611 • 22 ... c5

22 . . . lM!xa2 fallaria, por 23 .b3, pues la dama queda fuera de juego. La idea es importante tam bien en las jugadas siguientes. 23 . .ic3 gd6 24 . .ie5 gd8 25 . .if4 c4

Las negras podrian defender su debilidad con 25 . . . <i>f7, pero entonces, despues de 26.b3 solo podrian esperar j sin esperanzas ! Al de­fender peones retrasados, a menudo debe deci­dirse entre optar por una defensa tenaz, que conduce a una total pasividad y, antes o des­pues, a un fatal desenlace, y un sacrificio ma­terial que reporte alguna compensacion y es­peranza. Trifunovic se decide por esta segun-

da forma de actuar. 26.gxe6 gxe6 27.VHxe6+ VHxe6 28.E:xe6 .if6 29.E:xa6 E:dl + 30. �g2

30 ... .ixb2 Es interesante 30 . . . :gb l , pero 3 l .a4 :gxb2

(si 3 1 . . . b4, entonces 32.:gc6) 32.axb5 :gxb5 33 .:gc6 c3 34.:ge6 <i>f7 35 .:ge2 les ofrece a las blancas un plan simple: llevar el rey al flanco de dama, y tras el cambio de alfiles, el peon de I I C3 I I Caera. 31.gb6 E:a1 32.gxb5 gxa2 33.gc5 ga4

Despues de 33 . . . c3 , las negras serian vulnerables en 11g7 11 • 34.-tes .ixe5 35.E:xe5 ga2 36.ge2

Las negras deben afrontar la triste realidad: su rey esta cortado y su peon de 11C411 es fragil, lo cual basta y sobra para perder la partida. 36 ... �17 37.�f3 �f6 38.�e4 g5 39.�d4 ®rs 40.f3 c3 41.E:f2 E:a3 42.�c4 h5 43.�b4 gas 44.f4 ®e4 45.fxg5 ®e3 46J:;g2 �d4 47.ge2 gb8+ 48. ®a4 ggs 49.h4 gf8 50.E:e7 gn

1 24 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

51J;d7+ ®c4 52.E:c7+ ®d4 53.E:d7+ ®c4 54J�c7+ ®d4 55. ®b3 E:xg3 56.E:d7+ ®e4 57J;h7 ®d4 58.E:xh5 E:g1 59.E:h8 E:b1+ 60.®a4 E:a1+ 61.®b5 E:b1+ 62.®c6 E:g1 63.E:d8+ ®c4 64.E:e8 ®b4 65.®d5 E:d1+ 66.®e6 E:e1+ 67.®ti E:fl+ 68.®g6 E:f2 69.h5 E:xc2 70.h6 E:h2 71 .h7 c2 72.E:c8 ®b3 73.®g7

Las negras se rindieron.

Karpov - Hort Budapest 1 973

Defensa Francesa

1.e4 e6 2.d4 d5 3.�d2 �f6 4.e5 �fd7 5.c3 c5 6.�d3 �c6 7.�e2 Wfb6 8.�f3 cxd4 9.cxd4 f6 10.exf6 �xf6 11 .0-0 �d6

Ejerciendo una fuerte presion sobre el peon "d4" y la cufia de "e5" , las negras han roto la cadena de peones blancos, con lo que han lo­grado mas espacio, permitiendoles finalizar el desarrollo, movilizando sus piezas menores por sus posiciones naturales. El precio a pagar ha sido el peon retrasado de "e6", en la unidad central. Durante mucho tiempo estara bien protegido, lo mismo que la casilla delantera, potencialmente debil. 12.�c3

En la decada de los cincuenta y comienzos de los sesenta, se tenia la fuerte impresion de que 1 2.�f4 creaba serios problemas a las negras, puesto que es natural debilitar el con­trol de la casilla "e5" , y despues de 1 2 . . . ixf4 ( 1 2 . . . 1Wc7 falla, por la tranquila 1 3 .ig3) 1 3 .ctJxf4, 0-0 14.1Wd2, y las blancas estan lis-

tas para aumentar la presion sobre el peon que se encuentra en "e6" . S in embargo, 1 3 . . . '\Wxb2 14.ge l 0-0 deja a las blancas sin otra cosa que la igualdad. 12 ... 0-0 13.�e3

Muy a menudo no puede explotarse de in­mediato una debilidad de peon. En tales casos, los jugadores expertos saben que la paciencia es su mejor aliado, teniendo presente que las debilidades de peones son de naturaleza per­manente. El firme centro hace posible ganar espacio en el flanco de dama con a3 , seguido de b4 o t2Ja4, o incluso explotar la posicion de la dama negra en "b6" para actuar en el centro, con l2Je5.

La textual, desarrollando la ultima pieza blanca, se basa en la linea tactica 13 . . . 1Wxb2 14.ctJb5 ie7 1 5 .gbl 1Wxa2 1 6.gal 1Wb2 1 7 .ga4, cazando la dama. 13 ... Wfd8?!

Se considera mas flexible 13 . . . id7, en cu­yo caso, si 1 4.l2Je5, entonces sigue 14 . . . ixe5 1 5 .dxe5 iWxb2. 14.�g5 �d7 15.E:e1 Wfb8 16.�h4

Las blancas se disponen a jugar ig3, que es la clave de la maniobra de alfil. El cambio de alfiles de casillas negras reforzara el con­trol de las blancas de la casilla "e5" , lo que acentuara la debilidad del peon de "e6". 16 . . . a6 17.E:c1 b5?!

Para impedir l2Ja4 y ganar espacio en el flanco de dama, pero tambien representa un debilitamiento sustancial de la columna "c" . 18.�b1 Af4 19.�g3 �xg3 20.hxg3

PEONES RETRASADOS 1 25

Esta claro ahora que las blancas han logra­do sus objetivos. Ejercen una evidente presion en las columnas "c" y "e", ventaja espacial y mayor libertad de maniobra. 20 ... t\'b6 21.�e2

Despues de la jugada 1 8 de las blancas, parece logico 2 1 .'1Wd3, seguido de 22 .ltJe5. Pero la textual tam bien es buena. ttJ f4 y quiza ltJd3 tambien son ideas tentadoras. 21. .. E!ae8 22.�f4 �xd4

Hort comprende que esperar pasivamente, en una posicion con debilidades en las casillas centrales "c5" y "e5 " , solo puede empeorar su situacion, y decide buscar sus opciones en un contrajuego tactico. 23.t\'xd4

Karpov sefialo despues de la partida que 23 .ltJxd4 e5 24.ltJxd5 Wfxd4 (o bien 24 . . . ltJxd5 25 .lDf3) 25.lDxf6+ El:xf6 26.'1Wxd4 exd4 27.:8:xe8+ i.xe8 28.:8:c8 �f7 29.:8:d8 gana material. 23 ... t¥xd4 24.�xd4 e5 25.�fe6 .ixe6 26J�xe5 .id7 27.:Bxe8 gxe8 28.f3

Las negras se han desembarazado, por fin, del peon retrasado, pero por otro lado ahora tienen un peon central aislado y bloqueado y, por lo tanto, un dudoso final. La leccion, en este caso, es que los peones debiles tienden a seguir siendo debiles aunque se transformen en otro tipo de peon. 28 ... gc8 29.:Bxc8+ .ixc8 30.®f2 ®ti 3t.®e3 ®e7 32.b4

Las blancas aseguran su punto fuerte "c5 " y, al mismo tiempo, fijan una nueva debilidad en "a6".

32 . . . g6 33.g4 �d7 34.f4 �f8 Con todos sus peones sobre casilla blanca

(color del alfil enemigo ), el proyectado cam­bio de caballo no puede ser bueno, pero 34 . . . ltJb6 falla, por 35 .ltJc6+ �d6 36.ltJe5 ltJc4+ 37 .�d4. La unica jugada digna de consideracion parece ser 34 . . . �d6. 35.g5 ®d6 36. ®f3

Las blancas se disponen a poner en marcha su mayoria del flanco de rey. 36 ... �e6 37.�xe6 .ixe6 38.®e3

El rey centralizado obligara a las negras a entrar en zugzwang. 38 ... .ig4 39 . .id3 .ie6 40.�d4 .ig4 41 ..ic2 .ie6 42 . .ib3 .ifi 43 . .idl .ie6 44 . .if3 .ifi 45 . .ig4

Las negras se rindieron. El peon retrasado de "a6" esta a la merced

del alfil blanco.

Smyslov - Boleslavsky Campeonato Absoluto de la URSS

Leningrado/Moscu 1941 Defensa Francesa

l .e4 e6 2.d4 d5 3.�c3 .ib4 4.e5 c5 5.a3 .ixc3+ 6.bxc3 �e7 7.a4 t\'a5 8.t\'d2 �bc6 9.�f3 c4?

Bloquear la posicion en este momento es llevar agua al molino de las blancas. El alfil de "c 1 " tiene ahora un excelente puesto en "a3 " y una diagonal abierta sobre la que ope­rar. 10.g3

Fianchettado, el alfil de casillas blancas

1 26 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

mantendni a raya cualquier accion de contra­juego en el centro. 10 ... 0-0 11 ..ig2 f6 12.exf6 gxf6

AI tratar de descubrir algun contrajuego, las negras se crean dificultades a largo plazo. El peon de "e6" permaneceni retrasado, y "e5 " sera una casilla fuerte para las blancas. 13.0-0 .id7 14 . .ia3 ges 15.tlJh4 tlJc8

Las blancas han preparado f4 para fijar la debilidad enemiga en "e6". Antes de p�rmitir ser comprimidas en sus dos ultimas filas, las negras harian bien en proponer el cambio de un par de caballos, con 1 5 . . . ctJf5 . 16.f4 tlJ6e7 17.gfb1!

jGran estrategia! Antes de emprender ac­ciones en el flanco de rey, las blancas quieren bloquear todo intento de contrajuego en el ala opuesta. 17 ... fic7 18.a5 .ic6 19.tlJt3 tlJg6 20.liJe5!

Las blancas provocan el cambio a fin de abrir Ia columna "f' con intenciones de ata­que. 20 ... liJce7

La variante 20 . . . ctJxe5 2 l .fxe5 �fl 22.�fl �xfl + 23.�xfl Wfxa5 24.ib4 Wc7 25 .'1Wf4 h6 26.if3, seguido de ih5, da a las blancas un fuerte ataque. 21..ic5 a6

Ahora es el momento de pasar al flanco de rey. Las acciones negras en el flanco de dama son inocuas, asi que el peon "e6" esta pi­diendo ser explotado. 22.tlJg4 gn 23.ge1 liJf5 24.E:e2 h6 25.gael fic8 26 . .it3

Las preparaciones son lentas, pero cuidado-

sas y apropiadas. La casilla "g2" se evacua para la torre, y el avance de peon esta en el aire. 26 ... ®h7 27.gfl fic7 28.fie1 tlJf8

Si 28 . . . '1Wd7, sigue 29.ctJf2 ctJf8 30.ih5 g6 3 I .if3, amenazando 32.ctJg4, o en caso de 3 l . . .h5, entonces 32.ctJh3, provocando gra­dualmente nuevas debilidades. 29.liJe5 gf6 30.g4 tlJd6 31.fig3 tlJti

3 l . . .ctJe4 falla, debido a 32.ixe4+ dxe4 33 .ctJxc4 ib5 34.ctJd6. 32.g5 liJxe5 33.gxf6 tlJxt3+ 34.gxt3 gxf6 35.f5

Forzando el cambio de damas. Las blancas decidiran Ia lucha en Ia columna "g". 35 ... fixg3+ 36.gxg3 e5 37.geg2 liJd7 38.gg7+ ®b8 39.g7g6 ®b7 40 . .ia3 exd4 41..icl

Las negras se rindieron. Las debilidades inmoviles de las negras en

la sexta fila, combinadas con otras desventajas resultaron una mala sefial. En esta partida, Ia gran ventaja espacial del primer jugador, su fuerte alfil de casillas negras y las fuerzas concentradas en el flanco de rey no pudo con­trarrestarse. El peon de "e6", aunque en si mismo no corria peligro, ni siquiera Ia debil casilla delantera "e5 ", constituyo el motivo basico de Ia estrategia blanca y la causa de su exito.

Puesto que los peones retrasados son con tanta frecuencia potencialmente debiles, los jugadores tratan de provocar su creacion. Esa tarea normalmente la lleva a cabo un caballo, que ocupa una de las casillas centrales domi­nantes. El adversario debe entonces decidir

PEONES RETRASADOS 1 27

como resolver el problema. Si cambiar el ca­ballo no es atractivo, entonces puede expul­sarlo con un peon, pero eso significa asumir un peon debil en la columna vecina. El motivo se emplea a menudo y vale la pena prestarle alguna atencion.

Romanishin - G. Kuzmin Tashkent 1 980

Defensa Siciliana

l.�f3 g6 2.d4 i.g7 3.c4 c5 4.e4 cxd4 5.tiJxd4 �c6 6.i.e3 ttJf6 7.tiJc3 0-0 8.i.e2 d6 9.0-0 i.d7

La F ormacion Maroczy puede alcanzarse en distintas aperturas y ordenes de jugadas. En mi personal opinion, ninguna de esas posicio­nes es del todo satisfactoria para las negras, porque las blancas consiguen demasiado en pocas jugadas. Su fuerza en el centro es con­siderable y su ventaja espacial evidente. 10J3cl ttJxd4 l l.�xd4 i.c6 12.�d3 a5

Despues de la maniobra . . . j,d7 -c6, es nece­sario impedir la expansion de las blancas en el flanco de dama. Tras las jugadas 1 2 . . . GDd7 1 3 .ixg7 1lxg7 14.b4 'Df6 1 5 .1lhl a5 1 6.b5 id7 1 7.f4, las blancas tienen ventaja. La tex­tual, sin embargo, debilita el flanco de dama de las negras. 13.ttJd5!

Las blancas provocan el avance del peon "e" negro, que resulta de la debilidad de "b6" y de que la posicion resultante, tras el cambio en "d5", les favorece. 13 ... e6 14.tlJc3 a4 15J�fdl

La provocacion de las blancas ha dado lugar a una debilidad, el peon retrasado "d6", lo que les ofrece un buen objetivo. 15 ... �a5 16.a3 �Ud8 17.�e3

17 . . J�d7! Ingeniosa defensa. Kuzmin planea respon­

der a 1 8 .ib6 con 1 8 . . . ih6. Esto requiere ma­yor maniobreo por parte de las blancas, pero no cambia el hecho de que el peon "d6" es pa­ra siempre debil. 18J�c2 �d8 19 . .ib6 �f8 20.�f4 gcs 2t ..ie3 tlJe8 22.�h4

El peon "d6", por el hecho de necesitar pro­teccion, ha obligado a las negras a adoptar una defensa pasiva en un espacio restringido. Con 22.'Dd5 la posicion negra aun seria mas difi­cil, como sefialo Romanishin en sus analisis tras la partida. 22 ... f5 23.exf5 gxf5 24.f3 i.e5 25.gcd2

Las negras han logrado algun espacio para respirar, pero han tenido que pagar un precio

128 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

por ello. En este momento tienen dos peones retrasados en su tercera fila, ambos atascados, pues cualquier avance dejara un agujero en la posicion. 25 ... �g7 26.�d5 gn 27.J.h6 �g6 2s.�r4 i.xf4 29.�xf4 EU6 30.�g5

El cambio de damas eliminara el contrajue­go negro en el flanco de rey, y despues de eso la pareja de alfiles y los peones debiles negros se haran sentir. 30 ... <t!?ti 31.�xg6+ gxg6 32.i.e3 e5 33.<t!?f2

Es mas preciso mover 33 .@fl , con idea de seguir g3 y f4. Este plan no es posible con el rey en la casilla "f2", debido al movimiento . . . ltJf6. 33 ... <t!?e7

34.i.b6?! Lamentablemente, las blancas, en apuros

de tiempo, comienzan a jugar de forma super­ficial, arruinando asi su buen trabajo anterior. Lo correcto es 34.c5, y despues de 34 . . . dxc5 35 .ixc5+, la posicion se abre en beneficia de los alfiles blancos. En caso de 34 . . . d5 35 J�xd5 ixd5 36.8:xd5 8:.e6 (o si 36 . . . @f6, 37.f4) 37 .ig5+ lDf6, 38 .ib5 no es mas agradable para las negras. 34 ... �c7 35.i.d3 i.d7 36.g4 gh6 37.gxf5 �e8 38.ggl gxh2+ 39.<t!?e3 gxd2 40.<t!?xd2 <t!?r6

Tab las. Esta partida se estropeo al final, a causa de

los apuros de reloj , pero la provocadora jugada 1 3 .ltJd5 y sus consecuencias siguen siendo una buena leccion.

Spassky - Donner Leiden 1 970

Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 d5 3.�c3 �f6 4.i.g5 dxe4 5.�xe4 i.e7 6.i.xf6 i.xf6 7.�f3 i.d7?! 8.�d2 i.c6 9.�xf6+ �xf6 10.�e5 0-0 1 1.0-0-0

Al estudiar los peones doblados, analiza­mas una partida del match entre Spassky y Pe­trosian en la que se llego a esta misma po­sicion. l l ... gd8

Donner trata de mejorar la jugada de Pe­trosian, l l . . .lDd7. 12.�e3 i.e8 13.g3 �d7 14.i.g2 c6 15.f4

Donner ha evitado peones doblados, pero a costa de varios tiempos y una posicion sospe­chosamente pasiva. Se enfrenta a dos proble­mas: por un lado, no puede reducir el material, con 1 5 . . . ltJxe5, porque tras 1 6.dxe5 �e7 1 7.8:xd8, o pierde el peon de "a7'' o debe ce­der la columna abierta a las blancas; por otro, tiene que insuflar vida a su alfil de "e8", pero eso tambien tendra su costo. 15 .. JWe7 16.h4 f6

El caballo centralizado ha jugado su papel. Ha provocado el avance del peon "f' contra­rio, lo que deja un peon retrasado en "e6". 17.�f3 i.h5 18.i.h3 i.xf3 19.�xf3 �f8 20J�hel �fi 21.i.fl !

El alfil busca una mejor atalaya, desde la que apuntar al peon de "e6". Los problemas de las negras no radican solo en el peon, pues las blancas tienen un alfil superior al pasivo caba­llo y, en general, la inestabilidad del flanco de

PEONES RETRASADOS 129

rey es un motivo de preocupacion. 21 ... gd6 22 . .i.c4 gadS

Si 22 . . . f5 , entonces 23 .g4 g6 24.h5 abre por completo las defensas del rey negro.

23.f5 gxd4 24.fxe6 gxdl + 24 . . jWe7 25 .�a3 c5 26.�xa7, ganando.

25J�xdl gxdl + 26.Vxdl Las negras se rindieron. 26 . . . �e7 se castigaria con 27 .�d8, el mis­

mo motivo.

Numerosas partidas confirman que provo­car el avance de peones retrasados es un tema habitual y muy a menudo gratificante. Con frecuencia sucede en las columnas centrales, de forma similar a Ia partida que acabamos de ver, y a veces es Ia \mica forma sutil de debi­litar Ia posicion enemiga.

S in embargo, en los peones retrasados hay mas de lo que Ia etiqueta de debilidad que nor­malmente les asignamos sugiere. En buen nu­mero de variantes significativas, en diversas aperturas, las negras aceptan voluntariamente peones retrasados y, pese a su aparente vulne­rabilidad, construyen planes sobre ellos. El papel jugado por el peon de "d6" es excepcio­nal y merece una detenida atencion.

Gutman - Suetin URSS 1 972

Defensa India de Rey

l.d4 tilf6 2.c4 c5 3.d5 d6 4.tilc3 g6 5.e4 Ag7 6.J.e2 e6 7.tilf3 0-0 8.0-0 ges 9.dxe6 .ixe6 10.b3

En los afios que siguieron a Ia Segunda Guerra Mundial, Ia Defensa India de Rey fue extensamente analizada en todas sus ramifica­ciones. Animadas por una numerosa experien­cia en lineas en las que el potencialmente de­bil peon de "d6" sobrevivia a todos los planes y trucos contra el empleados, las negras se embarcaron en proyectos mas audaces. Uno de ellos fue Ia posicion que tenemos en el dia­grama, en Ia que el peon de "d6" parece haber sido abandonado a su suerte. Pero cuando Suetin entro en esta variante contra Gutman, los expertos en Ia India de Rey sabian ya que 1 0.i.f4 tt.Jc6 l l .ixd6 ( l l .�xd6 �a5 es peor) l l . . . tt.Jd4 les ofrece a las negras un excelente contrajuego. Despues de 1 2.e5 ( 1 2.ixc5 falla, por 12 . . . tt.Jxe2+ 1 3 .�xe2 �c8, y 1 2 .tlJxd4 cxd4 1 3 .�xd4, debido a 1 3 . . . ttJxe4, con ini­ciativa de las negras) 12 . . . tt.Jd7 1 3 .tlJxd4 cxd4 14.�xd4 tt.Jxe5 1 5 .i.xe5 �xd4 1 6.i.xd4 i.xd4 concede a las negras compensacion suficiente por el peon sacrificado (en cualquier buen tex­to teorico pueden encontrarse los detalles re­lativos a esta variante ) .

Con la textual, conscientes de la continua­cion mencionada, las blancas preparan i.e3, a fin de establecer un pleno control de la casilla "d4", con idea de presionar sobre el peon de "d6" en mejores circunstancias, una vez finali­zado el desarrollo, pues el peon retrasado per­manecera en su Iugar por mucho tiempo. 10 ... tllc6 l l . .i.e3 Vb6 12J�bl

Defendiendo el peon. Las blancas quieren explotar Ia clavada sobre la diagonal "g l -a7", teniendo in mente un ulterior b4.

_ 1 30 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

12 ... tild7! De nuevo se ofrece el peon, pero 1 3 .'llMxd6

ltJd4 no puede atraer a las blancas: 1 4.'llMxb6 ltJxe2+ 1 5 .ltJxe2 axb6, y se produce un dras­tico cambio de escenario. 13.ttlb5

1 3 .ltJg5 es una mejor opcion, pero el peon de "d6" parece tan vulnerable que las blancas no pueden resistir la tentacion. Curiosamente, las negras siguen respondiendo con sangre fria . . . 13 . . • tilde5 14.b4

Puesto que ni 14.Wxd6 ni 1 4.ltJxd6 dan re­sultado, la adicional clavada amenaza con eli­minar el obstinado peon. Sin embargo . . . 14 ... tilxf3+ 15.J.xf3 ged8

Tan simple como eso. La clavada se hace invaalida. 16.1Ycl tild4

El peon de "d6" resulto ser un hueso duro de roer. Las negras se apoderan ahora de la iniciativa. 17.J.xd4

1 7 .id 1 "lM c6 no es satisfactorio para las blancas, pero el cambio crea un peon pasado en una posicion en Ia que el alfil negro puede jugar un papel activo. 17 ... cxd4 18.a4 gdc8 19.a5 1Yd8 20.J.e2 a6 21.ttla3 1Yh4 22.1Yd2 gc7 23.J.d3 ges 24.gb3 gce7 25.b5 J.c8 26.ttlc2 ge5 27.f4 gcs 28.bxa6 bxa6 29.gb8 g5!

Cuando las blancas se vieron obligadas a aflojar la presion sobre el pe6n "d6", la escena cambio repentinamente. La inteligente jugada de las negras demuestra lo vulnerables que

son las casillas negras del campo blanco. El peon "d6" asegura las cas ill as fuertes "e5" y "c5" , y ahora esta libre y sin presion, lo que le permite realizar una labor util. Las blancas tie­nen demasiados islotes de peones y sus piezas estan descoordinadas. La posicion de Gutman pronto se viene abajo. 30.tilb4 gxf4 31.gxf4 1Yg5 32.tild5 gf8 33.Vf2 Ae6 34.h4 Ve5 35.ttle7+ 'it>h8 36.gxf8+ J.xf8 37.tilf5 gxa5 38.tilxd4

3 8 .Wxd4 solo prolonga el sufrimiento de las blancas despues de, por ejemplo, 38 . . . ga4. 38 .. J�al+ 39.J.fl Axc4 40.Ve3 .ih6 41.Vc3 .ixf4

Las blancas se rindieron. Pese a las apariencias, el peon retrasado en

la columna "d", despues de todo, jno era tan debil!

Kraidman - Vasiukov Manila 1 974

Defensa India de Rey

l.d4 tilf6 2.c4 c5 3.d5 d6 4.ttlc3 g6 5.e4 .ig7 6.tilf3 0-0 7 . .ie2 e6 8.0-0 ges 9J�el ttla6 10.dxe6 .ixe6

Tratando de explotar la debilidad de "d6", que parece dramatica, las blancas emplearon toda su imaginacion y no dejaron ninguna po­sible continuacion sin explorar. Con su no­vena jugada -una util jugada de espera- pro­vocaron la unica respuesta posible, antes de crearles un peon "d" retrasado a las negras. Ahora, el primer jugador espera presionar so­bre el peon de "d6" en una nueva situacion, en

PEONES RETRASADOS 1 3 1

la que la maniobra . . . tt:J c6-d4 es imposible. lt . .ig5 h6 12 . .if4 YNb6 13.b3 .ig4

Las negras se defienden activamente: dejan el peon "d6" en prise, pero amenazan con to­mar el de "e4". 14.h3 J.d7!

Las negras son pacientes. La presion sobre el peon de "e4" sigue existiendo y puede au­mentarse con 1 5 . . . j,c6. Por otra parte, su caba­llo marginal de "a6" no carece de perspecti­vas, ya que dispone de la maniobra . . . tt:Jc7-e6, con "d4" como posible destino final. 15.e5?!

Las blancas podrian proteger el peon de "e4" con 1 5 .j,d3 , por ejemplo, pero en tal ca­so aflojarian su presion sobre el peon retra­sado. La presion desaparece y las negras ob­tienen un tiempo precioso para mejorar la po­sicion de sus piezas. No obstante, con la tex­tual las blancas se crean problemas. 15 ... dxe5 16Ji]xe5 E:ad8 17.Y*fcl .if5

Las negras se han apoderado de la inicia­tiva. La evidente falta de coordinacion en el campo blanco actUa contra el primer jugador. 18 . .ig4 .ixg4 19.hxg4 llJ b4 20J�e3 �d4 21.E:f3

A 2 l .g5 se contesta 2 1 . . .8:xf4 (a 2 l . . .tlJh5, 22.gxh6, o si 2 l . . . hxg5 22.j,xg5 8:xe5 23.8:xe5 tt:Jd3 24.'\We3 tDxe5 25 .'\Wxe5) 22.gxf6 (lo cri­tico es 22. tDd7!?) 22 . . . 8:xe5 23 .fxg7 (o bien 23.8:xe5 1Wxf6 24.8:e8+ �h7) 23 . . . '\Wf6, y las negras tienen ventaja. Por ejemplo:

a) 24.8:xe5 '\Wxe5 25 .g3 falla, por la evi­dente 25 . . . 8:xf2.

b) 24.a3 se con testa con el recurso oculto

24 . . . 8:h4, con las claves 25 .g3 E:h2, o 25.8:xe5 '\Wxe5 26.axb4? ! '\Wh5, o aun 25.axb4 8:eh5 26.8:h3 8:xh3 27.gxh3 '\Wf3. 21. .. YNe6 22 . .ig3 liJxg4 23.liJxg4 E:xg4 24J;bl h5 25.a3 liJc6 26.liJd5 liJd4 27.liJc7? liJxf3+ 28.gxf3 r:;xg3+ 29.fxg3 Y*ih3

Las blancas se rindieron. El teoricamente indefenso peon de "d6" de

nuevo sobrevivio. Si pudiera sobrevivir o ser sacrificado a cambio de compensacion, enton­ces, concluyeron las negras, tendriamos que buscar otras muchas posiciones caracterizadas por peones retrasados y �econsiderar su valor real. Debemos a los ultimos afios sesenta y a la decada de los setenta una nueva mirada so­bre algunas viejas variantes.

Ribli - Planinc Amsterdam 1 973

Defensa India de Rey

l.liJf3 g6 2.d4 .ig7 3.c4 liJf6 4.g3 0-0 5 . .ig2 d6 6.liJc3 liJbd7 7.0-0 e5 8.e4 E:e8 9.h3 exd4 lO.liJxd4 liJc5 l l.E:el a5 12.�bl c6

Hoy hay muchas posiciones de este tipo que se juegan con segundas intenciones. A menudo los jugadores no son conscientes de cu::into esfuerzo debio invertirse para encon­trar el mejor orden de jugadas, para corregir los viejos prejuicios y para descubrir y dis­tinguir nuevos matices. El peon "d6" en la Va­riante del Fianchetto estuvo considerado, du­rante muchos afios, muy sensible y, en conse­cuencia, se puso en duda toda la concepcion de las negras. Por si eso fuera poco, las blan-

1 32 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

cas introducian de forma constante nuevas ideas. La jugada de Ribli, 1 2 .gb 1 , es una util jugada de espera. Antes o despues, la torre apoyani el a vance del peon "b", mientras que el alfil espera a que las negras jueguen 1 2 . . . c6 para atacar el peon retrasado tan pronto como surja en el tablero. 13 . .if4 a4

Las negras necesitan espacio, asi que lo ga­nan en el flanco de dama. Por tiempo indefini­do, no se preocupan por el peon de "d6", por­que tras 14.GtJc2, pueden parar la amenaza di­recta con la elegante replica 14 . . . GtJfd7, y no sirven ni 1 5 .'1Wxd6 ni 1 5 .ixd6, debido a la res­puesta 1 5 . . . a3 . 14.b4

Para esto se ha situado la torre en "b 1 ". El avance del peon "b" obstaculiza el contrajuego de las negras en el flanco de dama, expulsan­do al caballo de "c5" y adquiriendo una consi­derable ventaja de espacio. Se propuso como buena altemativa 14.'1Wd2, pues las blancas quedan en mejor situacion para atacar el peon de "d6" . Sin embargo, las negras podrian res­ponder 1 4 . . . GtJh5 1 5 .ie3 GtJf6, aliviando el asedio, pero recuerdo bien nuestro amilisis despues de la partida. Planinc, fiel a si mismo, consideraba 14 . . . '1Wa5 (pero no 14 . . . '1Wb6 por 1 5 .ixd6 gd8 1 6 .e5 GtJe8 1 7.GtJxc6 bxc6 1 8 .ixc5) 1 5 .ixd6 gd8 1 6.e5 GtJe8, en busca de complicaciones. 14 ... axb3 15.axb3

15 . . . h6!? Las negras de nuevo podrian recurrir a

1 5 . . . GtJh5 1 6.ie3 y ejercer contrapresi6n con

1 6 . . . ga3 . Entonces, 1 7 .'1Wc2 podria contestarse con el fuerte golpe tactico 1 7 . . . f5 . Planinc, sin embargo, siempre les daba preferencia a las ideas originates. 16.b4

Petrosian propuso como mejora 1 6.'1Wc2, planteando una trampa: 16 . . . GtJfxe4 1 7.GtJxe4 ixd4 1 8 .GtJxd6 gxe l + 1 9.gxe 1 , y ahora 19 . . . ga1 pierde material, por 20.gxal ixal 2 1 .'1Wa2 if6 22.'1Wa8. Las negras pueden ofre­cer una mayor resistencia haciendo 19 . . . GtJe6 20.GtJxc8 GtJxf4 2 1 .GtJe7+ cJlg7 22.gxf4 gal 23 .gxal ixal 24.GtJxc6 bxc6 25 .ixc6 '1Wd6, pero defender una posicion asi no es divertido. La altemativa es regresar a uno de los meto­dos rutinarios en Ia India de Rey: 16 . . . GtJg4 1 7 .ged l GtJe5 1 8 . .ie3, preparando f4, y asegu­randose una ventaja espacial, pero no mas. 16 ... tLle6

17.tLlxe6 Cuando el oponente tiene poco espacio, es

mejor evitar los cambios como este, pero a 1 7 . .ie3 las negras responden 1 7 . . . ctJg5, y las blancas deben desprenderse de su alfil de casi­llas negras. Esta es la clave de 1 5 . . . h6. 17 ... .ixe6 18 . .ixd6 .ixc4

AI final, el peon retrasado ha caido, pero a cambio del valioso peon de "c4" . La posicion esta equilibrada. 19.e5 tLld7

En sus comentarios, Petrosian mostro una posibilidad oculta: 1 9 . . . ge6 20.'1Wd4 (o bien 20.f4 GtJh5 2 1 .cJlh2 gxd6 22.'1Wxd6 '1Wxd6 23 .exd6 ixc3 24.gec l .ia2) 20 . . . GtJd5, y aho­ra 2 1 .ctJxd5 ixd5 22 . .ixd5 '1Wxd6, pero las

PEONES RETRASADOS 1 33

blancas, por supuesto, pueden elegir 2 1 .Wfxc4, con una posicion igualada. 20.f4 f6! 21.b5 fxe5 22.bxc6 bxc6 23 . .ixc6 ga6 24.'i'f3?

Era preciso 24 . .id5+, a fin de mantener el equilibria, pero las blancas omiten una posibi­lidad tactic a . . . 24 ... e4 25 . .ixd7?

Petrosian analizo 25.4Jxe4 .id4+ 26.4Jf2 .!xf2+ 27.�xf2 El:a2+ 28.�g1 Wlb6+ 29.�h1 El:ee2, y las negras ganan, asi como tambien con 25.El:xe4 El:xc6 26.El:xe8+ Wfxe8 27 .Wfxc6 Wfe3+ 28 .�h2 Wfxc3, y aunque las blancas son capaces de resistir, pocas esperanzas pueden tener de salvar Ia partida. 25 ... i.d4+

Ribli esperaba, obviamente, el movimiento 25 . . . El:xd6 26.El:xe4, pero se le escapo este ja­que intermedio, que decide rapidamente Ia lu­cha. 26.®h2 gxd6 27.tlJxe4 gxd7 28.f5 gxf5 29.'i'xf5 gf8 30.'i'h5 .ig7 31 .h4 .id3 32J�bdl .ixe4

Las blancas se rindieron.

Smejkal - Planinc Ljubljana 1 973

Defensa India de Rey

l.tiJf3 tlJf6 2.c4 g6 3.g3 .ig7 4 . .ig2 0-0 5.0-0 d6 6.d4 tiJbd7 7.tlJc3 e5 8.e4 ges 9.h3 exd4 lO.tlJxd4 tlJc5 ll .gel a5 12.'i'c2 c6

Cuanto mas fallaban las tentativas directas contra el peon retrasado, tanto mas las blancas se volvian sobre soluciones tranquilas, pia-

neando dominar espacio, someter a su adver­sario a una defensa pasiva, y solo entonces ta­mar el peon de "d6". Desde entonces, Ia ca­silla "c2" se ha vuelto el lugar favorito para Ia dam a.

13 . .ie3 A 1 3 . .if4, las negras defienden su punto

sensible con 1 3 . . . 4Jfd7 14.E:ad1 lt:Je5 . 13 ... a4 14.gabl

Esperando 14 . . . Wfa5, las blancas se dispo­nen a responder 1 5 .b4 axb3 1 6.axb3 Wlb4 1 7 . .id2 Wlb6 1 8.4Jde2, para situar gradual­mente a su rival a Ia defensiva. Si consiguen hacerlo, entonces el peon de "d6" sera mas vulnerable. La altemativa 14.El:ad 1 , con idea de amenazar al peon lo antes posible, al prin­cipia no logro los resultados apetecidos. Des­pues de 1 4 . . . Wfa5, se ensayo 1 5 .4Jde2, pero las negras encontraron una inteligente defensa: 1 5 . . . 4Jfd7 1 6.El:xd6 ctJe5, y recuperan el peon, pues a 1 7.b3 sigue 1 7 . . . .!xh3 . S in embargo, mas tarde se descubrio Ia mucho mejor 1 5 . .!f4 .!f8 (siempre que debe realizarse esta jugada, es que hay algo malo en Ia posicion) 1 6.4Jf3. Ante estos nuevas problemas, las negras pasa­ron a 1 4 . . . 4Jfd7 1 5 .El:e2 Wfa5 1 6.El:ed2, y en el momenta en que Ia amenaza al peon de "d6" se hace real, las negras disponen de una so­lucion tactica: 1 6 . . . Wib4 1 7 .4Jb 1 4Jf6 1 8 .f3 d5, y 16 ... 4Je5 17 . .!fl a3 1 8 .b3 4Jf3+ 19.ctJxf3 .!xc3 20.El:xd6 ctJxe4, y el peon retrasado se ha cambiado conservando el equilibria. 14 .. ..id7!?

Una tipica jugada de Planinc, de las mu­chas que solia sacarse del sombrero . . . AI no

1 34 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

querer definir la posicion de su dama por "a5" n i por "e7" (si 14 . . . We7, entonces 1 5 .El:bdl de inmediato ), las negras esperan a que su opo­nente entre en su juego. La altemativa es 14 . . . ltJfd7 1 5 .b4 axb3 1 6.axb3 ltJe5 1 7 .El:edl We7 1 8 .f4 ltJed7 19.if2 ltJf6 20.El:e l ltJh5 2 1 .El:bd l El:a3, y las blancas tienen ventaja es­pacial, pero las negras no carecen de contra­juego. 15.b4 axb3 16.axb3 ffe7 17.gbdl ?!

17 .. J2jfxe4 Esta jugada, que parece imposible, da re­

sultado, y la hizo posible 14 . . . id7. En la India de Rey, el peon de "d6" parece siempre ame­nazado, pero en realidad el peon blanco de "e4" y, sobre todo, el de "c4" tambien son vul­nerables en numerosas posiciones. 18.i.f4 f5 19.ttlxe4

19.f3 no resulta, por 19 . . . ixd4+ 20.El:xd4 Wf6. 19 . . . ttlxe4 20.f3 g5!

Es posible que a Smejkal se le escapase es­ta crucial respuesta. 21 . .icl .ixd4+ 22J3xd4 ffe5

22 . . . W g7, tratando de evitar el problema mencionado en la nota siguiente, puede con­testarse con 23 .ib2. 23 . .ib2?

Segun Gligoric, las blancas conservan me­jores esperanzas despues de 23 .El:ddl Wc3 24.El:e2 ltJxg3 25.El:xe8+ ixe8 26.Wxc3 ltJe2+ 27.cj{f2 4Jxc3 28.El:d3 ltJa2 29.ixg5 d5 30.f4, lo que es cierto, porque despues de la textual la posicion se viene abajo. 23 .. J3a2 24.ficl fixg3 25J��e2 c5 26J�dl f4

27.fxe4 f3 28.gd3 gf8 29.:Sf2 29.Wc3 pierde, debido a 29 . . . f2+, seguido

de 30 . . . Wxg2+. 29 ... .ixh3 30.:Sdd2 :Sf4 31.ffc3 :Sxb2 32.:Sxb2 .ixg2 33J�xg2 f2+ 34.:Sbxf2 ffxc3 35.:Sxf4 h6 36.gf5 fixb3 37.:Sd5 ffxc4 38.gxd6 ff c1 +

Las blancas se rindieron. En esta partida, el peon de "d6" permanecio

como una debilidad potencial . Su verdadera debilidad estuvo oculta, al amparo del activo juego de piezas de las negras . Veremos el peon retrasado "d6" en escenarios similares, en diversas lineas de la Defensa Siciliana y de la Ruy Lopez: debil por su posicion en el ta­blero, pero firme y tenaz cuando esta ampara­do por piezas activas.

Adams - Salov Dortmund 1 992

Defensa Siciliana

l.e4 c5 2.ttlf3 ttlc6 3.d4 cxd4 4.ttlxd4 ttlf6 5.ttlc3 e5 6.ttldb5 d6 7.i.g5 a6 8.ttla3 b5 9 . .ixf6 gxf6

Hemos llegado a un paisaje estandar de la modema teoria de aperturas. A ojos de un ju­gador inexperto, parece que las negras han su­perado los limites de la prudencia. Su dafiada estructura de peones, con dos peones retrasa­dos, en "d6" y "f6", y el agujero de "d5" , su­gieren que todos los deseos de las blancas en la apertura han sido satisfechos. Sin embargo, el ulterior curso del juego demuestra que no todo puede verse a primera vista.

PEONES RETRASADOS 1 3 5

lO)tJd5 f5 l l.c3 Una vez instalado el caballo en el punto

fuerte "d5" . las blancas planean trasladar su otro caballo a "e3 " , via "c2", aumentando asf su control de las casillas blancas vitales. Al mismo tiempo, el peon de "c3 " controla dos importantes casillas : "b4" y "d4", privando al caballo negro de la casilla central y disponien­do el escenario para ulteriores acciones en el flanco de dama, basadas en a4, para romper la estructura de peones negros, o quiza b4. ll . .. .ig7 12.exf5 .ixf5 13Ji]c2 0-0 14.tlJce3 !e6

Ambos jugadores han conseguido sus obje­tivos a corto plazo. Las blancas han reforzado su dominante caballo de "d5" , bloqueando el peon retrasado de "d6", mientras que las ne­gras se han desembarazado de su peon dobla­do, y se disponen a efectuar el avance . . . f5 , con idea de minar el control central de las blancas. Su peon de "d6" es potencialmente debil, pero las blancas estan retrasadas en de­sarrollo, y la presion sobre "d6" no preocupa por el momento a las negras.

Sin embargo, si las blancas logran finalizar su desarrollo y pueden, cambiando algunas piezas menores, alcanzar una posicion con ma­terial reducido, entonces la potencial debilidad de las negras en la columna "d" y sus expues­tos peones del flanco de dama pueden conver­tirse en un verdadero problema. Temiendo ese guion, algunos adeptos de la Variante Svesh­nikov creen que las negras deberian reducir material antes de que las blancas fianchetten su alfil por "g2" y refuercen su control de las

casillas claras. Por consiguiente, en la jugada anterior se ha ensayado 1 3 . . . CUe7, a fin de res-ponder a 14.CUxe7 con 1 4 . . . .ixc2, y a 1 4.CUce3 con 14 . . . .ie6, y tras 1 5 .CUxe7 Vlfxe7 1 6.g3, sigue 16 . . . d5 (si 1 7.CUxd5, entonces 17 . . . Vlfb7). En caso de 1 5 .g3 , las negras responden 1 5 . . . CUxd5 1 6.CUxd5 0-0 1 7 . .ig2 a5 1 8 .0-0 f5 . En comparacion con esta partida, cambiar un par de caballos conviene a las negras. 15.g3 tlJe7

15 . . . E!:b8 16 . .ig2 es una linea altemativa. En la partida Timoshenko - Luther, Linares 1998, se produjo un intento por ganar la ca­silla "d4" para el caballo negro, con 1 6 . . . f5 1 7 .Vlfh5 b4, pero tras 1 8.0-0 bxc3 1 9.bxc3, las blancas mantuvieron a raya al caballo ene­migo, rehusando ceder el control del centro. S i las negras querfan debilitar el control central de las blancas, debfan haberlo hecho de inme­diato. En tal caso, 1 6 . . . a5 1 7.0-0 f5 me parece lo mas apropiado. 16 . .ig2 gbs 17.0-0 tiJxd5

Merece consideracion 17 . . . Vlfd7. 18 . .ixd5

Esto marca la diferencia. Las blancas se disponen a cambiar alfiles de casillas claras, y entonces su caballo sera netamente superior al alfil contrario de casillas negras. 18 ... ®b8 19.a4 .ih6

Esta es la reaccion natural de las negras, a fin de disminuir la presion eliminando el ca­ballo de "e3 " . 20.axb5 axb5?

El alfil de "d5" y el caballo de "e3" apagan las posibilidades negras de contrajuego. La-

1 3 6 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

mentablemente, las negras dejan escapar su oportunidad. Lo correcto es 20 . . . ixe3 2 1 .fxe3 ixd5 22.'Mlxd5 :gxb5 23 .'Mld2 a5 , aunque las blancas seguirian preservando alguna ventaja. 21.�c2!

Ya no habra cambio: el caballo puede al­canzar la casilla "d5" por "b4". AI mismo tiempo, se bloquea el peon de "b5" . La po­sicion es desfavorable a las negras, cuyos alfi­les son inferiores, y ademas tienen el lastre de tres islotes de peones, y afrontan ya serias di­ficultades. 21. .. YNd7 22J!a6

Por primera vez sentimos que el peon de "d6" es vulnerable. El largo y Iento proceso de elaborar presion posicional esta dando sus frutos. 22 ... i.h3 23.!!el �g5

Este alfil ya no tiene objetivo, asi que se traslada a un puesto de mas actividad. 24.�b4 �d8 25.i.e4 .ib6

25 . . . :gb6 no da resultado, por 26.'Mlh5 f6 27.'Mlh6 :gt7 28.!hb6 ixb6 29.ixh7, etc. 26.�d5

Tambien era bueno 26.'Mlh5 . 26 ... f5 27.�xb6 YNd8 28.�d7 YNxd7 29J!xd6 YNe7 30J3d7 YNg5 31.�c2

AI apuntar al peon "h7", las blancas anulan el contrajuego derivado de . . . f4. 31. .. e4

Aun despues de la mejor 3 l .. J�be8 32.f4, la posicion sigue siendo desesperada. 32.YNd4+ YNf6 33.YNa7 YNh6 34J!al b4 35.YNd4+ YNf6 36.!!aa7 YNxd4 37.cxd4

Las negras se rindieron.

El asedio al peon retrasado fue largo y pa­ciente. Reporto exito gracias a una serie de pe­quefios errores con los que las negras descui­daron su contrajuego y tras cambios equivo­cados, que pusieron de manifiesto los defectos de la formacion de peones negros.

Anand - Kramnik Linares 1 998

Defensa Siciliana

l.e4 c5 2.�f3 �c6 3.d4 cxd4 4.�xd4 �f6 5.�c3 e5 6.�db5 d6 7.i.g5 a6 8.tlJa3 b5 9.i.xf6 gxf6 lO.tlJd5 f5 l l.c3 .ig7 12.exf5 i.xf5 13.tlJc2

13 . . . 0-0 1 3 . . . ie6 permite a las blancas finalizar su

desarrollo, sin perder tiempo en lt:Jce3 . Ade­mas de eso, si el caballo sigue en "c2" , puede tomar parte en acciones en el tlanco de dama. Despues de 14.g3 0-0 1 5 .ig2 a5 1 6.0-0, en la partida Topalov - Lautier, Tilburg 1 998, se jugo 16 . . . f5 1 7 .'Mle2 :gb8 1 8 .:gfd1 �h8 1 9. ltJ a3 , y tras 19 . . . b4? ! (lo correcto es hacer 1 9 . . . ttJ a 7, manteniendo fuera de juego al caballo de "a3" , y con idea de . . . b4 y . . . ltJb5) 20.ltJb5 bxc3 2 1 .bxc3, el peon retrasado "d6" quedo en peligro. Despues de 16 . . . :gb8, las blancas pueden ejercer una directa presion so­bre el peon de "d6", con 17 .'Mld2 'Mld7 1 8 .:gad1 f5 1 9 . ltJ de3 , pero las negras pueden organizar con exito su defensa: 1 9 . . . :gbd8 20.id5 t'iJe7 2 l .ixe6+ 'Mlxe6 22.ltJd5, y ahora 22 . . . f4 man­tiene el caballo de "c2" alejado de la casilla "d5" , con posibilidades de contrajuego en el

PEONES RETRASADOS 1 37

flanco de rey, Tiviakov - McShane, Kilkenny 1998. De modo que el peon retrasado sobrevi­ve frente a varios esquemas especialmente di­sefiados contra el. 14.ttlce3 .ie6 15 . .id3

Fianchettado, el alfil de casillas blancas re­fuerza el control del punto fuerte "d5" , pero por "d3 " queda bien situado contra el rey ne­gro, y tam bien para luchar contra el juego que las negras puedan emprender en el flanco de rey. Ademas, desde "d3 " una corta maniobra puede llevar el alfil a "b3 ", que suele resultar otro Iugar privilegiado. 15 ... f5 16.0-0

A 1 6.\Wh5, las negras respondieron (en la partida Adams - Beliavsky, Campeonato de Europa por equipos, Debrecen 1 992) 1 6 . . . e4 1 7.ic2 tjje7 1 8 .ib3 tjjxd5 1 9.tjjxd5 a5 , im­pidiendo las tentativas contrarias de llegar a algun final favorable.

En conexion con el peon "d" retrasado, pa­rece mas significativo 1 6.ic2 . En principia, las negras deberian generar contrajuego con sus piezas para compensar su potencial debi­lidad, pero siempre teniendo presente que "d6" constituye un punto sensible. Despues de 16 . . . ih6 1 7 .0-0 :ga7 1 8 .f4 \Wh4 1 9.g3 :gg7, el optimista juego de las negras en la partida Topalov - Illescas, Linares 1 995, fue casti­gado con un brillante golpe tactico: 20.tjjc7 ! , y despues de 2 0 . . . exf4 2 l .tjjg2 \Wh3 22 .:gxf4 ixf4 23 .(jjxf4 :gxg3+ 24.cj;>hl , las blancas lo­graron imponerse. Esta idea dio resultado par­que el peon de "d6" quedo indefenso. La par­tida Wang Pin - B. Lalic, Linares 1 998, siguio

asi : 1 6 . . . f4, y tras 1 7 .\Wh5 :gt7 1 8 .ixh7+ cj;>f8 1 9.if5 \We8 20.ixe6 \Wxe6 2 1 .\Wg4 \Wh6 22.(jjf5 \We6 23.(jjfe3 , desemboco en una re­peticion de jugadas. 16 ... e4

En los ultimos afios se ha vuelto popular 1 6 . . . :ga7, pero ex pone a las negras al a vance 1 7 .a4 ( 1 7 .\Wh5 les crea men ores dificultades a las negras, que responden tranquilamente 1 7 . . . :gaf7 1 8 .f4 tjje7). La partida Zelcic -Sermek, Belisce 1 999, continuo con 1 7 . . . tjje7 1 8 .tjjxe7+ :gxe7 1 9.axb5 axb5 20.:ga6 d5 2 1 .:gxe6 :gxe6 22. tjj xf5, con iniciativa de las blancas. 1 7 . . . b4, ofreciendo un peon para ase­gurar un comodo puesto en "d4", produce me­jar impresion. 17.ttlf4 .ifi 18 . .ic2 .ie5 19.ttlfd5

AI centralizar el alfil en "e5" , las negras se han liberado momentaneamente de posibles presiones sobre el peon retrasado, pero su for­macion central sigue estando expuesta a la ju­gada de minado f3 . 19 ... \WgS 20.f4 ext3 21.\WxO

En la partida Topalov - Van Wely, Wijk aan Zee 1 999, las blancas trataron de mejorar con 2 l .:gxf3 ih5 22.tjj c7, pero 22 . . . if4 (22 . . . :gac8 tam bien es satisfactorio) mantuvo el juego equilibrado. 21 ... .ih5 22.\Wfl?!

Con esta pasiva jugada las blancas se crean algunas dificultades. Despues de 22.\Wh3 f4 23 .\Wd7 (tras 23 .tjjc7 fxe3 24.tjjxa8 :gxfl + 25 .:gxfl e2, el peon pas ado es poderoso) 23 .. ..!:l:a7, el juego esta igualado. 22 ... f4 23.h4

1 3 8 COMPRENDER E L JUEGO D E PEONES EN AJEDREZ

23.ttJc7 falla, por 23 . . . �ac8 24.ttJe6 �h6 25 .ttJxf8 fxe3 . 23 ... tfd8 24.�f5 J.g6 25.�d4 �xd4 26.cxd4 J.xc2 27.dxe5 dxe5 28.Yfc5 gfi

Tab las. Las negras estan ahora mejor. La leccion es clara: los peones retrasados

sucumben facilmente en posiciones pasivas, pero se mantienen vivos y saludables cuando estan rodeados de piezas activas, que les per­miten ocultar su debilidad posicional. El peon retrasado que se produce normalmente en las variantes Najdorf y Scheveningen de Ia Sid­liana, comparte esa naturaleza dual. Es fragil y firme a Ia vez. Cua.I de sus naturalezas preva­lecera, dependera de la actividad general de las piezas negras, como atestiguan las siguien­tes partidas.

Karpov - Polugaievsky Match de Candidatos (8a partida)

Moscu 1 974 Defensa Siciliana

l.e4 c5 2.�0 d6 3.d4 cxd4 4.�xd4 �f6 5.�c3 a6 6.J.e2 e5

Opocensky, un maestro checo de Ia vieja generacion, soli a jugar esta linea y, afios atras, asi se la llamaba. Mas tarde se hizo popular en las partidas del GM Miguel Najdorf. AI jugar 6 . . . e5, las negras debilitan Ia casilla "d5" y se autocrean un peon retrasado en "d6", pero ga­nan espacio en el centro, expulsan al caballo centralizado y podran emplear sus piezas me­nores para cubrir Ia potencial debilidad de "d5" .

7.�b3 J.e7 8.0-0 J.e6 9.f4 Yfc7 10.a4 Con esta jugada y Ia anterior, las blancas

tratan de comprimir a su oponente. 10 ... �bd7 l l.<ii?hl 0-0 12.J.e3 exf4 13J�xf4 �e5

AI buscar mas espacio para respirar, las ne­gras han creado un puesto ideal para su caba­llo en "e5" . Sin embargo, al asi hacerlo, tam­bien ceden Ia importante casilla central "d4" a las piezas blancas. 14.a5

Las blancas ganan espacio. La casilla "b6" quedara disponible para el alfil de casillas ne­gras y Ia torre dama podra entrar en juego por Ia cuarta fila. 14 .. JUe8

En Ia sexta partida del mismo match, Polu­gaievsky cubrio Ia debilidad de "b6" con 14 . . . ttJfd7, pero aflojo el control de Ia casilla "d5" . Despues de 1 5 .�fl if6 1 6.ttJd5 ixd5 1 7.�xd5 �xc2 1 8.ltJd4 �xb2 1 9.�ab l �c3 20.ltJf5 , las blancas lograron excelente com­pensacion por el material sacrificado, en for­ma de juego activo e iniciativa. 15.J.b6 tfd7 16J!a4

La ventaja blanca radica en su control de espacio, lo que permite mayores posibilidades de maniobrar. La torre jugara a "d4" para acentuar la presion sobre Ia columna semia­bierta. 16 .. J�!ac8

AI considerar los problemas comentados en las tres notas siguientes, Botvinnik pensaba que lo correcto era 1 6 . . . ttJc6, para impedir �d4.

PEONES RETRASADOS 1 39

17J�d4 V;Yc6? Al efectuar la jugada anterior, Polugaievs­

ky tenia in mente 1 7 .. J�xc3 , pero abandono la idea con reticencia, al considerar las conse­cuencias de 1 8 .bxc3 Wc6 1 9.We l . 18J�d2!

Esta maniobra de torre esta bien justificada. Las blancas acentUan la presion y amenazan ctJd4, comprimiendo aun mas a las negras. Con el peon de "c2" defendido, tambien era posible ctJd5 . 18 ... .ixb3

Mover 1 8 . . . .ic4 1 9.ctJd4 Wffd7 20.ctJf5 .ixe2 2 1 .:gxe2 debilitaria de forma definitiva la casilla "d5" y tambien, por supuesto, el peon retrasado.

Con sus posibilidades de juego activo que no resultan, las negras deciden que deben eli­minar el caballo de "b3 ", lo que significa el debilitamiento de la casilla "d5" y ceder a su oponente una peligrosa mayoria de peones en el flanco de dama. 19.cxb3 �fd7 20.i.gl .ig5?!

Esperando la implacable b4-b5, las negras deciden actuar, pero el cambio de la dama por las dos torres no les reportara mucho alivio, porque la misma amenaza persiste en la posi­cion. 21J�xd6 i.xf4 22J�xc6 �xc6 23.b4!

La mayoria de peones puede convertirse en un peon pasado, apoyado por los alfiles. Esa amenaza no puede pararse de forma satisfac­toria. Notese la tipica transformacion de las ventajas. No hay peon retrasado en la columna "d" , ni tampoco presion, pero las negras deben

enfrentarse, en cambio, a una mayoria movil. 23 ... �f6

Polugaievsky critico esta jugada y propuso, como mejor, la altemativa 23 . . . :gcc8, pero de todos modos podria seguir 24.b5 con fuerza. 24.b5 �ce6 25.bxa6 bxa6 26.g3 i.g5 27.h4 i.h6 28.i.b6

El peon de "a6" es el objetivo natural. 2� ... �ed7 29 . .ic4 �e5

Si 29 . . . :g6e7, entonces 30 . .if2. 30.V;Yb3 �b8 31.i.xt7+ �h8 32.V;Yc4

Una solucion efectiva. 32 ... .id2

32 . . . ctJxb6 33 .axb6 :ge7 pierde, por 34.e5 :gxe5 35 .b7. 33 . .ic7 gcs 34.V;Yxc5 �xeS 35.i.xb8 .ixc3 36.bxc3 �fxe4 37.c4 �d7 38 . .ic7 g6 39.i.e6 �ec5 40 . .ixd7 �xd7 41.i.d6

Las negras se rindieron. El peon de "c5" tiene un alto precio.

Tal - Vogt Tallinn 198 1

Defensa Siciliana

l.e4 c5 2.�13 e6 3.d4 cxd4 4.�xd4 �f6 5.�c3 d6 6 . .ie2 .ie7 7.0-0 0-0 8.f4 �c6 9 . .ie3 e5

Esta en la naturaleza del "pequefio centro" (como el que las negras tienen aqui) buscar libertad para golpes repentinos en el centro. Las negras confian en los avances . . . d5 o . . . e5 . 10.�b3

Habiendo explorado otras continuaciones, las blancas optan por esta tranquila retirada.

1 40 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

1 0. ttJ f5 no consigue gran co sa, despues de 1 0 . . . ixf5 1 1 .exf5 exf4 1 2.8:xf4 d5 1 3 .@h1 8:e8 14.ig1 id6 1 5 .8:f3 ie5 . Tampoco se consigue mucho con 1 0.fxe5 dxe5 1 1 .ctJf5 ixf5 12 .8:xf5 g6 1 3 .8:fl ctJd4. 10 ... exf4 1 1J3xf4

Las negras aceptan el peon retrasado a cambio de un puesto atractivo para su caballo. La debilidad de la casilla "d5" se protegeni con . . . ie6. Despues de 1 1 .ixf4 ie6, las ne-gras estan listas para liberar su juego con . . . d5, que ejecutaron con exito tras 12 .@h1 : 12 . . . d5 1 3 .e5 ctJe4 14.id3 f5 1 5 .exf6 ixf6 1 6.ctJxe4 dxe4, y ahora 1 7 .ixe4 l.Wxdl 1 8 .8:axdl ixb2, o bien 1 7 .ctJc5 exd3 1 8.ctJxe6 dxc2 1 9.l.Wxc2 ctJd4, etc. La jugada liberadora . . . d5 puede pa­rarse con 1 2.if3, pero 1 2 . . . ic4, seguido de 1 3 . . . ctJe5, no es atractivo para las blancas. ll . .. .ie6 12.VNel

Esperando . . . d5 , las blancas evacuan "d l " para la torre. 1 2.ctJd5 tambien lo impediria, pero entonces, despues de 1 2 . . . ixd5 1 3 .exd5 ctJe5, el formidable caballo dominaria la es­cena. Lo mismo sucede despues de 1 2.ctJd4 ctJxd4 1 3 .ixd4 ctJd7, y de nuevo el caballo negro seria el zar del centro. 12 .•. tiJd7 13J3fl tiJde5 14.tlJd5

A 1 4.8:d l , M. Tal demostro que 14 . . . ctJc4 1 5 .ic1 ih4 1 6.g3 if6 daba a las negras un excelente juego de piezas, haciendo improba­ble que Ia debilidad de "d6" se haga sentir. 14 ... ig5 15.VNd2 ixe3+ 16.tlJxe3

Ahora las blancas no pueden permitir la ju­gada . . . ixd5 .

16 • . . VNh4? En opinion de Tal, un error importante. Lo

correcto es 1 6 . . . l.Wg5, pues 1 7 .8:ad1 g6 cubre la casilla "f5" , y Ia siguiente 1 8 . . . 8:ad8 resol­veria de forma directa la defensa del peon "d6" . 17. tlJ f5 .ixf5

Quiza 1 7 . . . '!Mfxe4 1 8.ctJxd6 'Mfb4 ofrezca mejores posibilidades que la triste posicion a que conduce la jugada del texto. 18.exf5 VNf6 19.E!adl E:ad8 20.c4

La salida de la dama a "h4" ha terminado mal. El peon de "d6" ha sido bloqueado, convirtiendose en una permanente debilidad, y

Ia casilla "d5 " esta controlada por las blancas. 20 •.. i!fe8 21.i!f2 h6 22.YlYf4 YlYg5 23.g3 f6 24.h4! YlYxf4 25.gxf4 tlJti 26 . .if3

La idea de cambiar damas y, sobre todo, la debilidad de las casillas blancas creada por 23 . . . f6, les daran a las blancas un final ven­tajoso con torres y piezas menores. Una posi­cion con tantas casillas blancas debiles por atacar es el paraiso para el alfil de "f3" . El peon de "d6" ha quedado debilitado, mientras que hasta los peones "f' doblados jugaran un papel. 26 ... E:e3 27.®g2 ®f8

A 27 . . . ctJb4, las blancas planeaban 28 .8:fd2 ctJxa2 29.t2Ja5 . 28.E!fd2 E!de8 29.®f2 h5 30.c5!

Las piezas activas siempre ofrecen alguna solucion decisiva. 30 ... d5

Las negras realizan un sacrificio de peon, pero 30 . . . dxc5 tambien es desesperado.

PEONES RETRASADOS l 4 l

31J�xd5 t!Je7 32.®xe3 t!Jxd5+ 33.®12 t!J xf4 34J�d4 t!Jb3+ 35.®g2 ge3 36 . .ixb7 t!Jb6 37.c6

Las negras se rindieron. En esta partida y en la anterior hemos visto

a las blancas asediando el peon "d" retrasado y, tras la acumulacion de pequeiios errores y el habil cambio de piezas, obtener impercep­tibles ventajas que condujeron finalmente a la victoria. Al incluir estas partidas queria mos­trar que pequeiias diferencias pueden separar una eficiente defensa del peon retrasado de un final perdido. Sin embargo, en la mayoria de los casos, el peon retrasado de la Siciliana Scheveningen y de la Najdorf constituye un hueso muy dificil de roer.

Spassky - Kavalek Match (sa partida)

Solingen 1 977 Defensa Siciliana

l.e4 c5 2.t!Jt3 d6 3.d4 cxd4 4.t!Jxd4 t!Jf6 5.t!Jc3 e6 6 • .Ae2 Ae7 7.0-0 0-0 8.f4 a6 9 . .ie3 Ylc7 lO.fi'el t!Jc6 l l .a4

Uno de los innumerables ordenes de juga­das de la Scheveningen. Una vez impedida la expansion de las negras en el flanco de dama, las blancas se disponen a llevar su dama al ala de rey. Des de "g3" supervisara el centro y apoyara las acciones contra el rey enemigo. l l ... �xd4 12.Axd4 e5 13 . .ie3

La clavada, con 1 3 .fxe5 dxe5 14.'1Wg3, se contesta friamente con 14 .. J!e8 1 5 .<;t>h1 i.d8. 13 ... exf4

En una version algo diferente de lo que vi­mos en la partida Tal - Vogt, las negras de nuevo entran en una posicion caracterizada por un peon retrasado. Proyectan utilizar su alfil de casillas blancas para cubrir el punto "d5" y llevar el caballo a "e5" . Son maniobras rutinarias de la Scheveningen, que se ejecuta­ran gradualmente despues de la respuesta blanca. 14J�xf4

Las blancas pueden crear mayores dificul­tades con 14.ixf4 ie6 ( 1 4 . . . '1Wb6+ 1 5 .<;t>hi '1Wxb2 no puede recomendarse, debido a 1 6.'1Wg3) 1 5 .'1Wg3 ttld7 1 6.Ah6. En la partida Solozhenkin - Hjartarson, Linares 1 995, las negras se defendieron de Ia mejor manera posible: 1 6 . . . '1Wc5+ 1 7.<;t>hi '1We5 1 8 .i.f4 '1Wc5 1 9.ttld5 ixd5 20.exd5 (o bien 20.ih6 '1Wd4) 20 . . . ttle5 (sacrificando un peon, las negras activan sus fuerzas, bloquean al peon pasado y se apoderan de la iniciativa) 2 I .ixe5 dxe5 22 .'1Wxe5 i.d6 23 .'1Wf5 .E'!ae8 24.id3 g6 25 .'1Wf3 .E'!e3 26.'1Wf2 '1Wd4, con buen juego para las negras. Es instructivo ver diversas formas de defensa con un peon retrasado en "d6", in­cluido su sacrificio. 14 ... .ie6 15.ti'g3 �d7 16J�:�afl t!Je5 17J�f5

Enfrentandose a una dura defensa que no ofrece un resquicio evidente, las blancas tras­ladan su torre a la columna "h". En el mo­mento la idea es posible porque 1 7 . . . ixf5 se castigaria con 1 8.llJd5 '1Wd8 1 9.exf5 , pero con­tra las solidas fortificaciones de las negras pa­rece un tanto extraiia. t7 ... gres ts.ghs g6 t9.®ht Af8 20.Ah6

1 42 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

20 ... .ixh6 21J�xh6 V!le7 22J�h4 V!if8 23J:�hf4 La torre prodiga regresa a la columna "f' .

23 . . J�ac8 24J�dl gc6 25.V!Ie3 gec8 26.gdfl V!id8 27.h3 V!lb6 28.V!Icl

A juzgar por la inutil maniobra de las torres blancas, es evidente que la iniciativa ha pasa­do a manos de las negras. El caballo centrali­zado es fuerte, y su sola posicion en el tablero aborta cualquier tipo de accion enemiga, mientras que la presion sabre la columna "c" paraliza el flanco de dama blanco. No hay que decir que en una situacion asi, el peon retrasa­do, en su tranquilo papel de apoyo, goza de buena salud. 28 ... gxc3?!

Conscientes de su superioridad, las negras deciden que pueden sacrificar calidad. S in duda que pueden, pero no habia necesidad de apresurarse. 28 . . .'.Wa5, por ejemplo, daria paso a otras opciones. Cuando el oponente cae en una posicion pasiva, nuestras amenazas son mas dificiles de contrarrestar. 29.bxc3 gxc3 30.V!id2 V!lc5 3l . .id3 V!ld4 32J�f6 lt:lxd3

33.gxe6! Las torres blancas han encontrado final­

mente un papel productivo. La posicion un tanto expuesta del rey negro ayuda a las blan­cas. En cambia, 33 .cxd3 gxd3 34.\Wf4 habria fallado, por 34 . . . gdl . 33 ... fxe6 34.cxd3 �bd3 ??

Confundidas por el repentino cambia de los acontecimientos, las negras se suicidan. De­bian jugar 34 . . . \Wg7. 35.V!Ig5 gxh3+

Despues de 35 . . . �g7, las blancas fuerzan el mate con 36.'1Wf4. 36.gxh3 V!lxe4+ 37.®h2 V!lc2+ 38.®gl

Las negras se rindieron. Los apuros de tiempo estropearon esta par­

tida. Las negras emplearon un motivo rutina­rio de la Scheveningen, con el que obtuvieron un peon retrasado que presto un excelente apoyo a un caballo centralizado, y debian ha­ber triunfado por meritos propios.

Robatsch - Fischer Memorial Capablanca

La Habana 1 965 Defensa S iciliana

l.e4 c5 2.ltlf3 d6 3.d4 cxd4 4.lt:lxd4 ltlf6 5.lt:l c3 a6 6 . .ic4 e6

7.a3 En el Ataque Sozio, el alfil de rey blanco se

desarrolla por "c4", a pesar de la firme for­macion central de las negras. S in embargo, su agresiva postura esta relacionada con el avan­ce f4-f5, que pretende forzar . . . e5 y abrir asi una puerta ("d5") en el muro de peones. 7.a3 prepara el plan de las blancas, al impedir . . . b5-b4, que reduciria Ia presion de las blancas sabre el centro. Lamentablemente, en Ia tensa posicion que se produce, cada tiempo tiene su peso especifico. Por consiguiente, las blancas tratan de prescindir de a3 , y en la decada de los sesenta se investigo 7 . .ib3 b5 8 .f4 ib7 (8 . . . b4 9.ltJa4 ltJxe4 1 0.0-0 pone de relieve un serio retraso en desarrollo de las negras) 9.f5 e5 l O.lDde2, que consigue debilitar Ia casilla

PEONES RETRASADOS 1 43

"d5" , pues ya no esta protegida por el peon. Si las blancas pudieran establecer un dominio duradero en "d5" , entonces el peon retrasado "d6" tambien quedaria debil, asi como los peones del flanco de dama. En teoria esta bien planeado, pero en la practica no resulta, por­que las piezas pueden asumir el control de la casilla "d5" . Tras l O . . . ttJbd7 l l..� g5 fi.e7 1 2.tLlg3 �c8, 1 3 .0-0 se refuto en la partida R. Byrne - Fischer, Interzonal de Sousse 1 967, con la excelente 13 ... h5 14.h4 b4, y la contra­presion negra resulto irresistible. Mas tarde, 1 3 .fi.xf6 ttJxf6 14.'\Wd3 Wc7 1 5 .0-0-0 0-0 no puso en peligro a las negras, pues ejercian un control suficiente de la casilla "d5" . En el mo­mento critico, siempre existe . . . b4, desbaratan­do el plan concebido, asi que es facil entender por que las blancas ensayaron 7.a3 . 7 ... i.e7 8.0-0 0-0 9.i.a2 b5 10.f4 i.b7 l l.f5 e5 12.ltlde2 ltlbd7

El peon de "e4" esta seguro. Mover 12 . . . ttJxe4 1 3 .ttJxe4 fi.xe4 1 4.ttJg3 fi.b7 1 5 .f6 ixf6 1 6.ttJh5 da a las blancas un fuerte ataque. 13.ltlg3 E:c8 14.i.e3

Si las blancas se dejasen llevar por la idea de reducir la influencia de las negras sobre el centro, a base de cambios, con 1 4.ttJh5, que­darian atascadas en la columna "e", despues de 14 . . . tLlxh5 1 5 .'\Wxh5 �xc3 1 6.bxc3 ttJf6, con excelente compensacion. 14 ... ltlb6

Una vez cubierta de nuevo la casilla "d5" , las negras se disponen a jugar 15 . . . ttJc4, en­cerrando al alfil de "a2", lo que fuerza los acontecimientos.

15 . .ixb6 Y*fxb6+ 16.®hl A primera vista, parece que las blancas han

preservado su influencia sobre la casilla cri­tica "d5" . Sin embargo . . . 16 ... Y*fe3!

Esta jugada resulta tanto mas sorprendente cuanto que las blancas podrian responder con 1 7.�f3, trasladando la torre a "d3" para reforzar su dominio de "d4". Sin embargo, tras 1 7 . . . Wig5, las blancas tienen que contar con . . . �xc3 o . . . �c5, doblando torres en la co­lumna "c" . No obstante, esto seria coherente con el juego anterior de las, blancas, lo que no puede decirse de la continuacion que ahora eli gen. 17.ltld5?! .ixd5 18.J.xd5 .idS!

Dado que puede contestarse a 1 9./i.b7 con 1 9 . . . �b8, las negras aprovechan la ocasion para activar su alfil en la diagonal "g l -a7" . Su plan no puede entorpecerse con 1 9.�f3 Wh6 20./i.b3, debido a 20 . . . ttJg4 2 l .h3 /i.b6. 19.a4 .ib6 20.axb5

Si 20 . .ib7, entonces sigue 20 . . . �c4, y 20.�a3 '\Wg5 afiade la amenaza 2 1 . . .tLlg4. 20 ... axb5 21.E:a6 b4 22.ltlh5

Notese que 22.�f3 falla, por 22 . . . tLlg4, que subraya la fuerza del alfil de "b6". La tentativa de atacar al rey negro tampoco resulta. La posicion blanca esta ya comprometida. 22 ... ltlxd5 23.Y*fg4 g6 24.exd5 gxc2 25.fxg6 hxg6 26.ltlf6+ rtig7 27.ltlh5+ rtib6 28.ltlf6 E:f2 29.gaal E:a8 30.Y*fxb4 ®g7 31.Y*fxd6 Y*fe2 32.ltle8+ E:xe8 33.gfel Y*!g4

Las blancas se rindieron.

1 44 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Sax - I. Sokolov Lugano 1 987

Defensa Siciliana

l.e4 cS 2.ltH3 e6 3.d4 cxd4 4.�xd4 �f6 S.�c3 d6 6.i.e3 �c6 7.f4 eS

Las negras acruan en el centro, en fase muy temprana, a fin de obstaculizar el plan 8.'W'f3, seguido de enroque largo. Ceden una poten­cial debilidad en la columna "d", confiando en que sus piezas puedan generar un activo con­trajuego. 8.�f3

8 .fxe5 se contesta con 8 ... ltJg4, y el caballo rey alcanzani su puesto ideal por un atajo. 8 ... �g4 9.i.d2?!

Las blancas pueden permitirse esta retirada porque a 9 . . . 'W'b6 podrian responder 1 0.'W'e2 'W'xb2 (de otro modo, 0-0-0, etc.) 1 1 .8:b1 'W'a3 (o bien 1 1 . . .'W'xc2 12 .'W'b5) 1 2.lLlb5.

Sin embargo, 9.'W'd2 se considera, con jus­ticia, una mejor opcion, a pesar del cambio del alfil de casillas negras. Por ejemplo: 9 . . . ltJxe3 1 0.'W'xe3 exf4 1 1 .'W'xf4 ie7 1 2 .0-0-0 ie6 1 3 .lLld5 ixd5 14.8:xd5, con una ventaja mini­ma. 9 ... exf4 10.i.xf4 IJ..e7 l l.flYd2 IJ..e6 12.0-0-0 0-0 13.®bl

El peon "d6" esta indirectamente protegido por . . . ltJt2 y 1 3 .ltJd5 ixd5 14.exd5 lt:Jce5 no causa problemas. 13 .. J3c8 14.h3 �geS lS.�dS �e8

Esta tranquila respuesta es posible porque las blancas no amenazan nada. 16.AbS a6!

Otra jugada tranquila, que da resultado porque 1 7.ixc6 falla, por 1 7 . . . ltJc4. El equipo de caballos negros realiza un trabajo de pri­mera clase, controlando todas las casillas im­portantes en el sector central del tablero. 17.1J..e2 i.f8 18.i.gS YlYaS 19.YlYxaS � xaS 20.b3 �ac6 2l.IJ..cl �d7

El caballo se traslada a "c5" para presionar sobre el peon blanco de "e4". Al mismo tiem­po, el peon "d6" se sentira mejor, y toda la posicion resultara perfectamente comoda. 22.�f4 �cS 23 . .id3 �b4 24J��hel

Es mejor 24.lt:Jd4. La textual permite a las negras liberar por completo su juego. 24 ... �cxd3 2S.cxd3 dS 26.�xe6

A 26.e5 sigue 26 . . . l2Jc2 27.8:e2 l2Ja3+, con buen juego. 26 .. J!xe6 27.�d4 gg6 28.g4 dxe4 29.dxe4 gd6 30 . .if4 gdd8 31.a3?

AI jugar . . . d5 las negras han logrado sus objetivos, y ahora un fallo, en apuros de tiem­po, inclina la lucha a su favor. Sigue un rapido final, con errores, en el que las negras acaba­ran imponiendose. 31. .. 1J..cS 32.�fS �d3 33 . .id6 i.xd6 34.gxd3 i.xa3 3S.gedl gxd3 36J3xd3 g6 37.�e3 ge8 38.�dS i.e7 39J3c3 figS 40.gc4 bS 41J3d4 gcs 42.gdl d>g7 43.gfl gc6 44.gel aS 4S.<it>b2 gcs 46.gfl .ih4 47J�f3 gc6 48J!e3 IJ..f6+ 49.®bl .ieS so.gel a4 Sl.bxa4 bxa4 S2.<ii>a2 gc4 S3.®a3 gd4 S4.h4 .ig3

Las blancas se rindieron. En general, los peones retrasados de la Si­

ciliana permanecen sanos y saludables.

PEONES RETRASADOS 1 45

Si analizamos detenidamente esta serie de partidas, que arrojan luz sobre los peones re­trasados, aprenderemos que en la mayor parte de los casos resisten. S in embargo, es raro, aunque no un caso im!dito, que los peones re­trasados puedan jugar un papel activo al avan­zar, o transformarse en un tipo mas activo de peon. Ahora dedicaremos atencion a ese tipo de peones.

lvkov - Keres Beverwijk 1 964

Apertura Ruy Lopez

l .e4 e5 2.tl:H3 tLlc6 3.i.b5 a6 4.i.a4 tLlf6 5.0-0 i.e7 6J:�el b5 7.i.b3 0-0 8.c3 d6 9.h3 ti::)a5 10.ic2 c5 ll .d4 tild7 12.ttlbd2 cxd4 13.cxd4 ttlc6 14.ttlfl ?!

En afios posteriores, las blancas, insatisfe­chas con el curso de los acontecimientos, die­ron preferencia a Ia linea 14.t2Jb3 a5 1 5 .i.e3 a4 1 6.ltJbd2 exd4 1 7 .t2Jxd4 ltJxd4 1 8 .ixd4 ltJe5 1 9.ltJfl , seguido de ltJe3 , con mejor con­trol del centro que en esta partida. 14 ... exd4

Keres descubrio esta idea mientras se preparaba para el Tomeo de Candidatos de 1 962, y Ia idea se hizo popular en los afios sesenta. AI cambiar en "d4" , las negras asu­men un peon retrasado en Ia columna "d", pe­ro a cambio, su alfil de casillas oscuras logra una diagonal abierta y el caballo un excelente puesto central en "e5" . 15.ttlxd4 ttlxd4 16.Yfxd4 ttle5 17.Yfdl

Ante la amenaza . . . ixh3, las blancas reti-

ran Ia dama. La agresiva 1 7 .f4 solo consigue resultados negativos despues de 1 7 . . . ltJc6 1 8.Wf2 ih4 1 9.g3 i.f6 20.�d1 Wc7 2 l .�h2 ib7. 17 . . . J.f6 18.tlJe3 J.e6

Tambien es bueno 1 8 . . . t2Jc4, pero Ia del texto, que cubre Ia debil casilla "d5", es mas natural. 19.tlJd5

A 1 9.i.b3 seguiria 1 9 . . . t2Jc4. Las blancas deciden ganar la pareja de alfiles. 19 ... i.xd5 20.Yfxd5?!

jQue decepcionantes pueden ser las posi­ciones de ajedrez! Tomar con la dama parece natural : el peon "d6" sigue estando retrasado y, si las blancas pudiesen trasladar su alfil de "b3" a "d5", o Ia posicion pudiese abrirse de algun modo, entonces los alfiles blancos do­minarian el tablero. Sin embargo, mirando con mas detenimiento, llegamos a Ia conclusion de que Ia posicion no es favorable a los alfiles blancos y que Ia humilde 20.exd5 era una me­jor eleccion. 20 .. J�c8 2t.ib3 ti::)c4 22J�e2 gc5 23.Yfdl d5!

La excelente estrategia de las negras ha cul­minado con este avance, gracias a que el peon retrasado esta protegido por sus piezas. Las negras se apoderan de Ia iniciativa en un mo­mento en que su rival aun no ha completado su desarrollo.

·

24.exd5 gxd5 25.Yfel gd4 26J�bl Vfd6 27.J.e3 ttlxe3 28J�xe3 g6 29.ge2 ®g7 30.gdl gcs 31.gcl gxcl 32.Vxcl

Las blancas han logrado reducir material, y los alfiles de distinto color les conceden algu-

1 46 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

nas esperanzas de supervivencia, pero su final sigue siendo inferior. 32 ... h5

32 . . . a5 hubiese creado may ores problemas. 33J�el a5 34J��dl a4 35.i.c2 gxdl + 36.Axdl

Con poco tiempo, las blancas tratan de mantener la igualdad material, pero omiten la fuerte replica que sigue a continuacion. Era esencial 36.V;Vxdl . 36 ... Ve6 37.Vc2 Vel+ 38.®b2 i.e5+ 39.g3 h4 40.®g2 hxg3 41.Af3 gxf2 42.Vxf2 Vel 43.b3

Aun presionado por el tiempo, lvkov en­cuentra jugadas "(micas" . Lamentablemente, 43 .id5 no da resultado, en vista de 43 . . . V;Vg5+ 44.�hl if6. 43 .. . axb3 44.axb3 Vf4!

45.®fl Keres seftalo 45 .i.g4 V;Vh2+ 46.�fl V;Vht +

47 .�e2 V;Ve4+, y despues de 48.�fl ic3, cae otro peon. Lo mismo sucede en caso de

48 .V;Ve3 V;Vc2+, seguido de 49 . . . ic3 . 45 ... Ad4 46.Ve2 Vf5 47.Ve4 Vxh3+ 48.®e2 Vd7 49.b4 Ac3 50.Vc6 Vd2+ 51.®fl Vel+ s2.®g2 i.d4

Las blancas se rindieron.

Keres - Flohr Semmering Baden 1 93 7

Defensa Griinfeld

l .d4 �f6 2.c4 g6 3.�f3 i.g7 4.g3 c6 5 . .ig2 d5 6.cxd5 �xd5?! 7.0-0 0-0 8.�c3 �xc3 9.bxc3 c5 lO . .ia3 cxd4 l l.�xd4!

Cuando, en la sexta jugada, las negras re­tomaron de caballo en "d5" , esa decision fue a la vez provocadora y arriesgada. La idea empleada por Keres en respuesta es, a primera vista, sorprendente, pero luego, una vez ple­namente entendida, inspirada. Las blancas es­tan dispuestas a aceptar alg(m dafio en su es­tructura de peones (incluido un peon retrasado en "c3"), a fin de obstaculizar el normal desarrollo de las negras. El potente caballo de "d4" sera, en buena medida, el responsable de ello. El peon de "c3 " es el soporte del caballo, de modo que contribuye a la actividad general de las piezas menores blancas. l t. .. Vc7 12.Vb3 Af6

1 2 . . . tLlc6 1 3 .tLlxc6 bxc6 1 4.V;Va4 es muy desfavorable para las negras, asi que, con el fin de preparar . . . tLld7, deben invertir un tiem­po en proteger antes el peon de "e7" . 13.gfdl �d7 14.c4

Evitando la planeada maniobra . . . tLlb6-c4. 14 ... � c5 15.Vb4 �e6

Despues de 1 5 . . . tLla6, las blancas mantie-

PEONES RETRASADOS 1 47

nen la presion con 1 6.�b5 y oprimen a su oponente con 1 7.c5, pero la textual empeora a(m mas la posicion de las negras. 16.�b5 �e5 17J:!:acl !

Las blancas dejan el peon de "e2" en prise porque son conscientes de la excelente com­pensacion que obtendrian tras la variante 1 7 . . . �xe2 1 8.ctJc3 �e5 (o bien 1 8 . . . ixc3 19 .�xc3) 1 9.ctJd5, con una fuerte iniciativa y amplia superioridad espacial. 17 .. J:!:d8 18J:!:d5 gxd5

De nuevo, dificilmente puede entrar en con­sideracion 1 8 . . . �xe2 1 9.ctJc3 ixc3 20.�xc3 . Las negras estan obligadas a cambiar en "d5" , lo que mejora a l peon blanco. 19.cxd5 a6

Aqui es donde las negras vieron su opor­tunidad: 20.dxe6 Wlxb5, o bien 20.ctJc3 ctJd4, con esperanzas. Pero la abierta columna "c" puede ahora utilizarse para romper la resis­tencia de las negras.

20.�a7! �d4 21.gxc8+ gxc8 22.�xc8 �xe2 23.h4 �f5 24.�e4

Las negras se rindieron. El peon "retrasado" de "c3" jugo el papel

clave en el profundo plan estrategico de Paul Keres.

Kupreichik - Kasparov Campeonato de la URSS por equipos

Kislovodsk 1 982 Defensa Siciliana

l.e4 c5 2.�f3 e6 3.d4 cxd4 4.�xd4 �c6 5.�c3 d6 6 . .ie2 �f6 7 . .ie3 J.e7 8.f4 0-0 9.�d2 e5

Las blancas acaban de prepararse para en­rocar largo, pero antes de que puedan hacerlo, las negras atacan en el centro, obligando al caballo a retirarse. 10.�f3

1 0.ctJxc6 bxc6 1 1 .0-0-0 no tendria ahora sentido, porque el peon de "c6" cubre la ca­silla critica "d5" , mientras que la semiabierta columna "b" puede emplearse para contraata­que. 1 0.ctJf5 ixf5 1 l .exf5 exf4 1 2.ixf4 d5 tampoco es atrayente. A 1 0.ctJb3, las negras juegan primero 1 0 . . . a5 , provocando el debi­litamiento 1 1 .a4, y entonces la rutinaria juga­da 1 1 . . .ie6, con ayuda de la pareja de ca­ballos, cubre los puntos centrales sensibles. Segun lo que muevan las blancas, las negras disponen de abundantes opciones, que hacen inocua la presion sobre "d6" . 10 ... �g4 l l .f5?

l l .ctJd5 no satisfacia las ambiciones de las

1 48 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

blancas, porque tras 1 1 . . .lDxe3 1 2 .�xe3 exf4 1 3 .�xf4 i.e6, las cosas se habrian simplifica­do.

Esta es la posicion que las blancas buscaban. Aqui tenemos el caso chisico de un peon retrasado y una casilla delantera debil, mientras que la casilla "e6", que normalmente es un puerto franco para el alfil dama negro, en este caso esta vedada. Sin embargo, y pese a las apariencias, hay una laguna en el razonamiento de las blancas . . . 1 1. .. tt)b4!

Una replica brutal. Las negras impiden que el caballo blanco se instale en "d5" y preparan la ruptura liberadora 1 2 . . . d5, que seguira en todos los casos. 12.�d3

Despues de 1 2.0-0-0 es posible 1 2 . . . d5 , porque 1 3 .exd5 i.xf5 Iibera al alfil de casillas blancas, y 1 3 .a3 no da resultado, por la linea 1 3 . . . lDxe3 14.�xe3 d4 1 5 .�f2 �c7. 1 2.i.g1 d5 conduce a los mismos resultados. 12 ... d5 13.tt)xd5

Despues de 1 3 .exd5 lDxd3+, las blancas tienen que jugar 14.cxd3, pues si 1 4.�xd3?, 14 . . . i.xf5 es fatal. 13 ... tlJxd5 14.exd5 e4!

Ahora vemos las consecuencias finales del vehemente contraataque negro. El rey blanco ha estado demasiado tiempo en el centro, y ahora las blancas tendran que pagar un alto precio material para poder enrocar. 15.�xe4 ges

La oculta jugada decisiva. 16.0-0-0

1 6.0-0 pierde, por 1 6 . . . i.d6 1 7 .h3 lDxe3 1 8 .�xe3 i.xf5 1 9 .lDd2 �e7, mientras que el enroque largo, como veremos, falla por 1 6 . . . i.f6. 1 6.h3 seria una solucion, de no ser por 1 6 . . . i.h4+. 16 ... �(6 17 . .ig5

Despues de 1 7.�d3 lDxe3 1 8.�xe3 i.xf5 1 9.'LJd2 i.gS , el rey blanco de nuevo esta en mal sitio. La del texto, por supuesto, equivale a rendirse. 17 .•• gxe4 18.h3 tt)e5 19 . .ixf6 VNxf6 20.tt)xe5 VNxe5 21.g4 �d7 22J�he1 ges 23.gxe4 VNxe4 24.VNa5 VNe3+ 25.®b1 VNxh3 26.VNxa7 VNxg4 27J�c1 �xf5 28.VNxb7 h5 29.b3 VNd4 30.a4

30 •.. VNc3 Las blancas se rindieron. Hay que desconfiar de la apariencia inocua

de los peones retrasados. Si pueden avanzar y su avance esta respaldado por piezas, en gene­ral representan un serio peligro. Que el caso sea raro, no hace sino justificar la advertencia.

PEONES RETRASADOS 1 49

Observaciones generales

Hemos analizado una serie de partidas ilustrativas que arrojan luz sobre los peones retrasados. Ahora, espero, podemos ver objetivamente sus notorios inconvenientes, asi como sus virtudes .

Los problemas que los peones retrasados causan se deben, en general, a varios factores. En primer Iugar, su posicion en el tablero. Los encontramos en la segunda o tercera filas. Al margen de algunos casos excepcionales, quedan atascados y expuestos entonces a todo tipo de presiones. A menudo son presionados sobre la columna por las piezas mayores enemigas, a veces con el apoyo de las piezas menores. Su mismo Iugar en el tablero indica que el atacante domina mayor espacio y dispone de mayor libertad de maniobra. Tambien sugiere la necesidad de defensa que, puesto que se reduce a las dos ultimas filas, significa que inevitablemente sera una defensa pasiva. Si un peon retrasado se produce en su segunda fila, es casi un caso desesperado en el que no solo la posicion del peon habla en su contra, sino que resulta especialn;tente significativa la falta de coordinacion de las fuerzas defensivas. Sencillamente, no disponen de espacio suficiente para organizar una defensa efectiva.

Las cosas mejoran sustancialmente en el caso de peones retrasados en la tercera fila. En primer Iugar, el defensor es entonces mas capaz de ofrecer resistencia, pues la coordinacion de las piezas puede mejorar mucho. Por otra parte, al encontrarse en la tercera fila, el peon controla algunas casillas centrales, privando de elias a las piezas contrarias y apoyando a sus propias piezas menores centralizadas, lo que, en general, ejercera una significativa influencia sobre el curso de la partida. En muchas variantes modemas de la India de Rey, en Ia V ariante Keres de la Ruy Lopez Chigorin, y en varias lineas de la Siciliana, tales peones juegan un papel positivo, en plena sintonia con otras piezas, como hemos podido ver durante nuestro examen. Naturalmente, siguen siendo potencialmente debiles, pero mientras haya juego activo sus inconvenientes pueden no salir a la luz. Parafraseando a Alekhine, donde hay actividad todas las debilidades posicionales quedan en suspenso. Se debe a la capacidad de desplegar contrapresi6n y contrajuego por lo que los peones retrasados pueden jugar su papel en el plan estrategico general y, en principio se comportan bien, a pesar de sus defectos. En Ia evaluacion de los peones retrasados mucho depende de esa cualidad: o son blancos inmoviles, que atan sus piezas a Ia defensa, o bien su posicion central e influencia sobre el juego puede apoyar a piezas activas. En la medida en que contribuyan a ello, su papel en la partida sera positivo.

Junto con un peon retrasado, hay una casilla delantera debilitada, que las piezas enemigas a menudo tratan de explotar para acentuar su ventaja espacial y reforzar la presion. Cuando esa casilla queda a merced de las piezas contrarias, el peon, por lo general, se halla en grave peligro. Cuando la casilla esta bien controlada por piezas, el peon, tambien por lo general, es seguro y saludable. No es una casualidad que en la Siciliana Scheveningen o en la Variante del Fianchetto de la India de Rey, por ejemplo, sea tan dificil amenazar al peon de "d6". La razon es que la casilla delantera esta bien controlada. El peon y la casilla comparten un destino comun y es importante ser conscientes de ello.

Para resumir nuestra experiencia de forma mas concisa, podriamos decir que los peones retrasados en su segunda fila son, por lo general, una fuente de total pasividad. Tambien podria­mos afirmar que los peones retrasados en la tercera fila son, son normalmente, mas resistentes, aunque suelen quedar expuestos y vulnerables, a menos que formen parte del plan estrategico general, en armonia con las piezas ligeras, y a menos que la casilla delantera se encuentre con-trolada. ·

1 50 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

6 Cadenas de peones

En nuestro estudio de las estructuras de peones hemos llegado a un capitulo importante, en el que discutiremos las cadenas de peones, una serie de peones ligados en diagonal.

El diagrama representa la conocida cadena que se produce en la Variante del A vance de la Defensa Francesa, ampliamente estudiada y debatida por Nimzovich, a quien debemos las primeras observaciones sistematicas acerca de la cadena de peones. Por tiempo indefinido, debemos concluir justo lo que vemos en el dia­grama. La cadena de peones divide en dos el tablero. Comienza en la base y finaliza en la cufia que se halla en territorio enemigo.

La cufia central define una ventaja de es­pacio, garantizando una mayor capacidad de maniobra y restringiendo el normal desarrollo del enemigo. Las cuestiones basicas a que se enfrentan ambos bandos son como utilizar la ventaja espacial y como luchar contra ella. Dado que, como veremos, la cadena de peones no es una peculiaridad de la Defensa France­sa, sino que tambien se produce en otros sis­temas de apertura (la Defensa India de Rey, en particular), las respuestas tendran una signifi­cacion mas amplia para la teoria de aperturas.

Familiaricemonos primero con algunos co­nocimientos practicos sobre el tema.

Nimzovich - Salwe Karlsbad 1 9 1 1

Defensa Francesa

l .e4 e6 2.d4 d5 3.e5 c5 4.c3

Tras dos pares de jugadas, tenemos una ca­dena de peones con base en "b2" y cuiia en "e5" . Es una posicion sobre la cual Nimzovich reflexiono y escribio, y que jugo con placer. Consideremos sus caracteristicas basicas.

La tercera jugada blanca ha bloqueado el centro, ganando espacio en el flanco de rey y dirigiendo sus pensamientos hacia una inicia­tiva en ese flanco. Las negras reaccionaron de forma natural, con presion sobre "d4", y las blancas han reforzado la cufia con c3 . Apren­dimos de Nimzovich que en la mayoria de los casos es sobre el apoyo a la cuiia sobre el que presionamos, no sobre la cufia en si. Las ju­gadas de Salwe siguen ese consejo. 4 • • .ti�c6 5.tlJf3 YlYb6 6.i.d3 i.d7?!

La experiencia confirmo la primera impre­sion que deja esta partida, en el sentido de que

CADENAS DE PEONES 1 5 1

la textual es prematura. Lo correcto es hacer 6 . . . cxd4 7.cxd4 .id7, exponiendo el peon "d4" a una fuerte presion. 7.dxc5 .ixc5 8.0-0 f6?

Ahora que Ia cufia ha perdido su apoyo, Salwe pensaba que era el momento oportuno para eliminar el bloqueo y liberar sus peones centrales. Sin embargo, el momento no era el apropiado. Lo correcto era 8 . . . a5 , para impedir b4. Si las blancas logran realizar este avance, podnin ampliar al maximo su influencia sobre el centro. 9.b4 .ie7 10 . .if4 fxe5 l l.llJxe5 llJxe5 12 . .ixe5 llJf6

1 2 . . . .if6 no da resultado, debido a 1 3 .�h5+ g6 14 . .ixg6+ hxg6 1 5 .�xg6+ cJJe7 1 6.ixf6+, etc.

13.llJd2 La incoherente 1 3 .�c2 0-0 14 . .ixf6 .ixf6

1 5 . .ixh7+ gana material, pero cede por com­pleto Ia iniciativa a las negras. La textual in-

troduce uno de los temas favoritos de Nimzo­vich : cuando Ia cadena de peones se ha roto, el control del centro solo puede mantenerse con piezas. El caballo se dirige a "f3" para realizar esa idea. 13 ... 0-0 14.llJf3 .id6

La tentativa de cambiar alfiles de casillas blancas acentuaria la debilidad del peon de "e6" . Por ejemplo: 14 . . . .ib5 1 5 . .id4 �a6 1 6 . .ixb5 �xb5 1 7 .ltJg5 . 15.Y«e2

Si 1 5 . .id4, entonces 1 5 . . . �c7 1 6.�e2 ltJg4 1 7.h3 e5, y las negras estan libres. Es crucial mantener el control sobre los peones centrales. 15 .. J�ac8

En caso de 1 5 . . . J.xe5 1 6.lDxe5 gac8, existe Ia fuerte 1 7 .c4. 16 . .id4 Y«c7 17.llJe5!

El bloqueo se ha completado. Ejecutado por piezas, muestra algunas ventajas en com­paracion con el bloqueo de peones que se rea­liza en las primeras jugadas de Ia partida. La cadena de peones centrales oprime a las ne­gras, pero los bloqueadores centrales incre­mentan esa sensacion. Las piezas centraliza­das son poderosas y pueden actuar en ambos flancos, mientras que los peones bloqueados se han debilitado mas, estan mas expuestos al ataque. Sobre Ia base de tales posiciones, Nim­zovich llego a una de sus grandes verdades: es mas valioso controlar el centro con piezas que ocuparlo con peones. Fue sobre esa sencilla verdad sobre Ia que se descubrieron varias aperturas teoricas, con Ia Defensa Nimzoindia en primer Iugar.

1

1 52 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

17 ... i.e8 18J�ael i.xe5 19.i.xe5 Wc6 20.i.d4 i.d7

El alfil regresa a su pasiva obligacion, pues el peon de "e6" es retrasado y vulnerable. 21.Wc2 gn 22.ge3 b6 23J�g3 ®b8 24.i.xh7!

Ademas de tener los peones negros centra­les bajo control, las piezas blancas centraliza­das ejercen una fuerte presion sobre el flanco de rey enemigo, que comienza a derrumbarse. 24 ... e5

24 . . . lt:Jxh7 pierde por 25 .�g6, lo que significa que el peon ha desaparecido. 25.i.g6 ge7 26J�el Wd6 27.i.e3 d4 28.i.g5 gxc3 29J3xc3 dxc3 30.Wxc3 ®g8 31.a3 ®f8 32.i.h4 i.e8 33.i.f5 Wd4 34.Wxd4 exd4 35.gxe7 ®xe7 36 . .id3 ®d6

37.i.xf6 gxf6 38.h4 Las negras se rindieron. Una importante leccion a extraer de esta

partida es que el bloqueo a cargo de peones, si es roto, puede convertirse en un bloqueo aun

mas fuerte a cargo de piezas. Nimzovich de­mostro de forma muy convincente su efec­tividad.

La cuestion, sin embargo, continua siendo esta: (,Seria mejor atacar de inmediato Ia cufia de Ia cadena de peones? La siguiente partida nos aporta algunas respuestas cualificadas.

Nimzovich - Levenfish Karlsbad 1 9 1 1

Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 d5 3.e5 c5 4.c3 �c6 5.�f3 f6? Esta temprana tentativa por atacar Ia cufia

de peones fracasa. Las razones son instructi­vas. 6.i.b5 i.d7 7.0-0 Wb6

Notese de paso que 7 .. .tijxe5 no da resul­tado, debido a 8 .lt:Jxe5 �xb5 9.�h5+, dejando a las negras sin respuesta aceptable. 8 . .ixc6 bxc6 9.exf6 �xf6 10.�e5 i.d6 l l.dxc5 .ixc5 12 . .ig5

La partida nos recuerda lo que vimos en el encuentro anterior. Las blancas han logrado ejecutar el bloqueo en el centro de forma muy parecida. Su caballo centralizado es fuerte, mientras que los peones negros centrales re­sultan fragiles. El temprano ataque a Ia cu:fia se ha vuelto contra las negras. No estaba pre­parado, y cuando Ia pieza crucial que presio­naba sobre "e5" se cambio, el fracaso resulto evidente. Es instructivo observar como proce­de Nimzovich para explotar su ventaja. 12 ... Wd8

Despues de 12 . . . �xb2 1 3 .ctJd2, el superior

CADENAS DE PEONES 1 5 3

desarrollo de las blancas les concede una ex­celente compensacion. 13 . .Axf6 �xf6 14.�h5+ g6 15.�e2 :Sd8 16.�d2 0-0 17.:Sael :Sfe8

Lastradas con su pasivo alfil de "d7" y el peon retrasado, a las negras les faltan algunos tiempos para liberarse. El dominante caballo de "e5" ejerce un efecto sofocante sobre la po­sicion negra. 18.®hl .Ad6 19.f4 c5 20.c4 .Af8

A fin de obtener algun contrajuego, las ne­gras deciden sacrificar un peon. 21.cxd5 .Ac8

Obviamente, 2 1 . . . exd5 pierde, por 22.lDxd7. 22.�e4 �g7 23.dxe6

Tambien es fuerte 23 .d6. 23 ... .Axe6 24.�a6 ®b8 25.:Sdl .Ag8 26.b3 :Sd4 27.:Sxd4 cxd4 28.�a5

Para prevenir . . . .E!:d8. 28 ... :Sc8 29.:Sdl :Sc2 30.h3 �b7 31 .:Sxd4 .Ac5

32.�d8! Al tratar de apoderarse de la iniciativa en­

tregando material, las negras han debilitado seriamente su flanco de rey, y la reaccion es inmediata. 32 ... .Ae7

Despues de la linea 32 . . . ixd4 33 :�xd4 'W!g7 34.ltJd6, las negras no pueden parar la amenaza ltJe8. 33.�d7 �a6 34.:Sd3 .Af8 35.�ti+ .Axti

0 bien 35 . . . �g7 36.'Wid4+, etc. 36.�xti :Sc8 37.:Sd7

Las negras se rindieron. Esta partida y la anteri�r se perdieron por

errores evidentes, pero no hay que subestimar estos logros de pionero. Siguen conteniendo un valioso material pedagogico, debido a la clara secuencia de pensamiento exhibida por Nimzovich.

Bogoljubov - Alekhioe Bad Nauheim 1 937 Defensa Francesa

l.d4 e6 2.e4 d5 3.�c3 .Ab4 4.e5 c5 5.dxc5

i Qui en podria decir que razones incitaron a Bogoljubov a optar por esta continuacion? Quiza queria atraer a las negras a la variante 5 . . . d4 6.a3 ia5 7 .b4 dxc3 8.bxa5 'W!xd l + 9.�xd l , que e s favorable al primer jugador. Cualesquiera que fuesen sus secretos motivos, la idea es contraria a la estabilidad de la ca­dena de peones, pues la cu:fia de "e5" pierde apoyo. 5 ... �c6

1 54 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Dado que las blancas pueden neutralizar Ia influencia de este caballo sabre el centro, cla­vandolo, era mas prudente diferir el desarrollo del caballo, dan dole preferencia a 5 .. Y!! c7 6.lDf3 lDe7 7 .Ad3 lDd7, seguido de . . . lDxc5, con una posicion equilibrada. 6.�f3 f6?

AI tamar en "c5", las blancas debilitaron su cufia, pero no tanto como para permitir el total minado de Ia misma. Es cierto que en caso de 6 . . . d4 de nuevo sigue 7 .a3 ia5 8 .b4, y 8 . . . lDxb4 9.axb4 Axb4 se refuta con 1 0.Ab5+ Ad7 1 1 .0-0 ixc3 1 2.�b 1 . Lo mejor, por tanto, era simplemente desarrollarse con 6 . . . lDge7. 7.J.b5

El punta "e5 " debe sostenerse a toda costa. 7 ... J.xc5 8.0-0 J.d7 9J�el

No solo en defensa del peon "e5" , sino tambien para poder responder a 9 . . . f5 con 1 0.lDxd5 exd5 1 l .e6 (y si 1 l . . .Ac8, entonces 1 2.lDe5). 9 . . • fxe5 10.�xe5 �xeS l l.:Sxe5 .ixb5 12.�xb5 �f6 13J�xe6+ ®ti

Las negras esperaban 14.�e2, en respuesta a lo cual pensaban seguir con 14 . . . '1!Mb6, y su iniciativa compensaria el peon. Sin embargo, no es Ia !mica opcion de las blancas. 14J�xf6+! gxf6

14 . . . ci>xf6 1 5 .'1!Mh5 h6 1 6.Af4 rapidamente moviliza las fuerzas blancas. 15.YlYh5+ ®g8 16.J.h6 YMd7 17.�c7!

Protegido por Ia posibilidad 'I!M g4+, el caba­llo inicia su pequefia cabalgada. 17 ... YMti

A 1 7 . . . �d8, las blancas planeaban 1 8.�e 1 .

18.YMh3 E!b8 19.:Sel :Sd8 20.�xd5 La desesperada posicion del rey desnudo

admite pequefios trucos tacticos. 20 • . J:�xd5 21.YlYg4+ :Sg5 22.YMc8+ .if8 23.i.xf8 h5 24.f4 ®h7

Las negras superaron el limite de tiempo, en una posicion perdida.

De nuevo hay aqui una leccion inequivoca: romper Ia cadena de peones aporta poco con­suelo si el oponente logra controlar las mis­mas casillas con piezas activas.

Smyslov - Hollis Hastings 1 962-63 Defensa Francesa

l .e4 e6 2.d4 d5 3.�c3 .ib4 4.e5 c5 5.a3 Axc3+ 6.bxc3 �c6 7.�f3 YMa5 8.YMd2 YMa4?

Con esta temprana salida de dama, las ne­gras han bloqueado el peon de "a3 ", impi­diendo el desarrollo natural de las blancas con a4 y Aa3 . AI mismo tiempo, manti en en Ia pre­sion sabre Ia cadena de peones, y seguramente pensaban seguir con . . . b6 y . . . Aa6. 9.dxc5!

Anticonvencional y fuerte. Las blancas de nuevo debilitan voluntariamente su cadena de peones, pero en distintas circunstancias. Aun­que el peon blanco de "e5" ha perdido su apo­yo y han aparecido tres peones expuestos en Ia columna "c", V. Smyslov estuvo acertado en su evaluacion. Lo que tenia in mente puede verse con total nitidez en el transcurso de Ia partida. 9 • • . �ge7 10 • .id3 0-0

CADENAS DE PEONES 1 5 5

Si las negras querian minar la cufia de inmediato, con 1 O . . . f6, entonces habria segui­do 1 1 .exf6 gxf6 1 2.Wh6, que no es facil de contrarrestar. 1 2 . . . @£7, por ejemplo, pierde, por 1 3 .Wh5+ @g8 14.We8+ @g7 1 5 .�h6+. 1 1.0-0 f6 12J�el

12 ... fxe5 Si las negras incrementan su presion sobre

el peon de "e5 " con 1 2 . . . ctJg6, entonces, des­pues de 1 3 .exf6, 1 3 .. Jhf6 14.c4 mina la for­macion negra, y resulta que, despues de todo, los peones triplicados no son inutiles, mientras que a 1 3 . . . gxf6 se contesta con 14.Wh6 ctJce7 1 5 _gb 1 , amenazando gb4, y la torre se incor­pora al ataque. 13.�xe5 \Wh4

Ahora, 1 3 . . . ttJxe5 14.gxe5 ttJc6 haria posi­ble finalmente . . . e5, pero 1 5 .gh5 subraya de pronto Ia debilidad del flanco de rey. De ahi Ia textual. 14.ll:H3 \Wh5 15.\Wg5 \Wti 16 . .ie3 h6 17.\Wg3

Los peones centrales negros han sido blo­queados mediante habiles maniobras. Las blancas amenazan �d4, con bloqueo total. Las negras han sido superadas . . . 17 ... �f5 18 . .ixf5 exf5 19 . .if4 .ie6 20 . .ixh6 . . . y se rindieron tras un par de jugadas ine­fectivas.

Nuestra instintiva reaccion a 9.dxc5 puede haber sido negativa, pero un analisis objetivo demuestra que se trata de un prejuicio. Los peones de la columna "c" no fueron un lastre para las blancas. Por el contrario, en el mo­mento crucial, la jugada de minado c4 fue la clave del exito, mientras 'que en otro momento de la lucha, la abierta cuarta fila permitia la importante maniobra gb4-g4. El proceso de bloqueo se apoya en estas opciones laterales, pues sin ellas no tendria exito.

Hasta ahora hemos visto la lucha contra la cadena de peones en su aspecto negativo. (,Como hacer correctamente el trabajo? Busca­remos la respuesta en las partidas que siguen.

Bondarevsky - Botvinnik Campeonato Absoluto de la URSS

Leningrado/Moscu 1 94 1 Defensa Francesa

l .e4 e6 2.d4 d5 3.e5 c5 4.�f3 �c6 5.i.d3?!

En su detallada y minuciosa investigacion de todas las posibles consecuencias de Ia ca­dena de peones en la Francesa, Nimzovich descubrio la idea que muestra el diagrama. Las blancas no toman en "c5" ni defienden el peon de "d4". A fin de ganar tiempo, estan

1 56 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

dispuestas a comprometer su cadena central de peones. Una idea audaz. 5 ... cxd4 6.0-0 .ic5

Logico y fuerte. Las negras se desarrollan y defienden el peon. 7.a3?

Veremos que, en el ulterior curso de Ia par­tida, las blancas abandonaron su idea inicial del avance b4-b5, de modo que Ia textual resulta superflua. Es mejor Ia inmediata 7.ltJbd2, como tambien 7.if4, fortificando el peon de "e5" . 7 . . . Cf).ge7 8.Cf).bd2 Cf).g6 9.Cf).b3 .ib6 lOJ�el .id7 l l.g3

Las blancas tienen in mente tomar en "g6" y luego en "d4", pero no pueden permitir . . . 1Wh4. ll . .. f6

Finalmente, las negras deciden que ha lle­gado el momento de romper Ia cufia. Recuerde Ia leccion basica: al luchar contra una cadena de peones, primero se ataca Ia base ("d4" en este caso ), y solo despues Ia cufia. 12 . .ixg6+ hxg6 13.'i;Yd3

A fin de reducir Ia presion sobre "e5 ", las blancas deben ceder su pareja de alfiles. Su­cede, sin embargo, que Ia proyectada captura en "d4" no da resultado. A 1 3 .ltJbxd4, los co­mentaristas indicaron dos buenas respuestas : 1 3 . . . ixd4 14 .ltJxd4 ctJxe5 1 5 .f4 ltJc6 1 6.ltJxe6 ixe6 1 7 .8:xe6+ �fl. y 1 3 . . . ltJxd4 14.ltJxd4 fxe5 1 5 .8:xe5 1Wf6 1 6.f4 g5 1 7 .c3 0-0-0 1 8 . 8:xg5 El:h3 . 13 ... ®ti 14.h4 'i;Yg8! !

jBonito y profundo! AI llevar su dama a

"h7" y amenazar con Ia apertura de Ia co­lumna "h", las negras obligaran a su oponente a realizar una concesion en el centro. Si las blancas tenian sus esperanzas puestas en 1 5 .if4, reforzando su peon avanzado, tuvie­ron que entender que era demasiado tarde. Tras 1 5 . . . 1Wh7 1 6.ctJbxd4 ltJxd4 1 7 .ctJxd4, si-gue 1 7 . . . g5 . 15 . .id2 'i;Yh7 16 . .ib4 g5 17.'i;Yxh7 �xh7 18.exf6

A 1 8 .hxg5, sigue 1 8 . . . fxe5 1 9.ltJxe5+ ltJxe5 20.8:xe5 ic7, con simi lares consecuencias. 18 ... gxf6 19.hxg5

19 . . . e5! El trabajo se ha llevado a cabo. La textual

encama una de las verdades fundamentales predicadas por Nimzovich. Solia decir que los peones centrales tienen ansias por expandirse, y que la cadena de peones los coarta. Pero cuando la cadena se rompe, la masa de peones puede liberar la energia en ella contenida. Cuando tales peones comienzan a moverse, la partida normalmente esta decidida. Lo que si­gue da plenamente la razon a Nimzovich. 20.gxf6 ®xf6 21 ..id6 �e8 22.Cf).h4 ggs 23.®h2 .if5 24.ge2 d3 25.gd2

No hay esperanza en 25.cxd3 ixd3 26.8:d2 ic4 27 .ctJcl ltJd4. 25 ... dxc2 26.f4 .ie3 27 . .ixe5+ Cf).xe5 28.fxe5+ ®e7 29.�fl

La amenaza era . . . El:xh4, seguido de . . . if4+. 29 ... c1VN

Las blancas se rindieron. Una partida jugada con impresionante co­

herencia desde el mismo comienzo. Botvinnik

CADENAS DE PEONES 1 57

nos ha dado una de las mayores enseftanzas de toda la historia del ajedrez acerca de la cadena de peones.

Timman - Korchnoi Match {38 partida) Leeuwarden 1 97 6 Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 d5 3)t]c3 .ib4 4.e5 c5 5.a3 .ixc3+ 6.bxc3 tlJe7 7.tlJf3 tlJbc6 8.a4

Todo es claro y consistente en la Variante Winawer de la Defensa Francesa. Las blancas se disponen a asumir una formacion de peones dafiada a cambio de reforzar su cadena central de peones. 8 ... �a5 9 . .id2

Tras haber jugado 8 .a4, 9.'!Wd2 parece mas consecuente, pues conservaria la posibilidad de desarrollar el alfil de casillas negras por la diagonal "a3-f8" . S in embargo, Ia jugada 9.'1Wd2 no ha cumplido las expectativas y, por otro lado, "d2" es una residencia temporal pa­ra el alfil, que espera poder regresar a "a3 " en circunstancias favorables. 9 ... .id7 10 . .ie2

1 O.c4 seria una especie de harakiri despues de 1 0 . . . '1Wc7 1 l .cxd5 exd5 1 2.dxc5 0-0, con un centro de peones desperdigado. Segun algunos analistas, debian tomarse en consideracion la provocadora 1 O.j,b5 o 1 O.g3 0-0-0 1 I .j,h3, esperando un ulterior . . . f6. 10 ... f6!

Lo mas energico. Antes de enrocar, las ne­gras minan el centro de peones con . . . c5 y

. . . f6. La receta de Korchnoi parece saludable y competitiva. l l.c4

Quiza las blancas adoptaron este arriesgado avance basandose en consideraciones genera­les (los alfiles necesitan espacio abierto ). Me parece mas prudente 1 1 .�b 1 . l l. .. �c7 12.cxd5 tlJxd5 13.c4?!

En Ia partida Spassky - Korchnoi, Can­didatos ( 48), Belgrado 1 977, Spassky planteo mas dificultades, al desviarse de la jugada an­terior con Ia menos comprometida 12 .exf6 gxf6 1 3 .cxd5 lt:Jxd5 14.c3 . 13 ... tlJde7 14.exf6 gxf6 l5.dxc5 0-0-0 16 . .ic3

16 . . . e5 A costa de un peon inesencial, las negras

han logrado romper los eslabones de la ca­dena. Vale la pena observar que Ia pareja de alfiles blancos no consiguio las deseadas li­neas abiertas. Limitados por la estructura de peones enemigos, los alfiles siguen siendo inocuos. Al mismo tiempo, las negras han ob­tenido dos columnas por las que pueden ejer­cer presion: la columna "g", con . . . �g8, y la columna "d", con . . . lt:Jf5-d4. 17.�d6 tlJf5

De no ser por esta efectiva respuesta, el curso de la partida habria cambiado. Sin em­bargo, se trata de una replica eficaz. Dado que 1 8 . 'IW xf6 �df8 les da a las negras una fuerte iniciativa, se contentan con entrar en el final, en el que sus caballos seran superiores a los alfiles blancos. 18.�xc7+ ®xc7 19.0-0 tlJfd4 20.tlJxd4 tlJxd4 21 . .idl

1 5 8 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

La mejor opcion. En "dl " el alfil es pasivo, pero restringe al caballo contrario. Despues de 2 l . .ixd4 exd4 22 . .id3 E:he8, el peon pasado estaria listo para asumir su trabajo destructivo. 21 ... cjjlc6 22.J.xd4?

Este cambio de opinion no esta justificado. Parece solido hacer 22 .f4 �xc5 23 .fxe5 fxe5 24.El:e 1 , mejorando el radio de accion de los alfiles. 22 ... exd4 23.J.f3+ cjjlxc5 24.J.xb7 J.rs

Esto es todo lo que las negras podian es­perar. Bien protegido, el peon pasado se en­cuentra en su elemento. 25.J.f3 ghe8 26.ga2 gbs 27.gd2 gbl

Las blancas se ven obligadas a efectuar al­gunas maniobras artificiales, pues un cambio de torres abriria paso hasta el peon "d4" . La lucha esta practicamente sentenciada. 28.g4 geel 29J�xel gxel + 30. cjjlg2 J.e4 31.J.xe4 gxe4 32. cjjlf3 ge5 33.h4 cjjlxc4 34.gc2+ cjjlb3 35.gc7 d3 36.gxh7? ! gd5 37.gb7+ cjjlc2 38.gc7+ cjjlbl 39.gb7+ cjjlal 40.gbs gds

Las blancas se rindieron.

Padevsky - Berthold Bulgaria - Alemania Oriental 1 958

Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 d5 3.�c3 J.b4 4.e5 c5 5.a3 J.xc3+ 6.bxc3 �e7 7.\Wg4 \Wc7 8.\Wxg7 ggs 9.\Wxh7 cxd4 10.�e2 �bc6 l l .f4 Ad7 12.Wfd3 dxc3

Una importante posicion en una larga linea teorica. Las blancas han gastado varios tiem-

pos con su dama, pero tienen la posibilidad de ganar un peon. Su descuido del desarrollo es obvio, en un simple vistazo al diagrama ante­rior. El rey blanco sigue en el centro, alte­rando la normal coordinacion entre sus piezas. Este hecho expone la posicion blanca a ciertos riesgos. No es por azar que las blancas no ha­yan conseguido hallar un camino seguro hacia la ventaja, tras afios de busqueda. Esto nos in­duce a creer que toda Ia variante es muy arriesgada, como demuestra la mayoria de continuaciones ensayadas en afios recientes. 13.J.e3?!

1 3 .ltJxc3 a6 permitiria . . . ltJa5 , ampliando las posibilidades de contrajuego de las negras. 1 3 .�xc3 no contribuye al desarrollo blanco. Pero la jugada de Padevsky tampoco es una feliz solucion. 13 ... �f5 14.�d4? !iJfxd4 15.J.xd4 0-0-0 16.g3

Una posicion inusual, caracterizada por dos cadenas de peones cruzadas. Las blancas se disponen a desarrollar su alfil y enrocar, com­pletando su desarrollo de forma satisfactoria. Eventualmente, su peon pasado de Ia columna "h" les garantiza Ia victoria en un final, y pa­rece que nada puede cambiar este inevitable proceso. Lo que sigue debe haber constituido un shock para las blancas . . . 16 ... f6!

Una jugada tremendamente fuerte. El rey blanco sigue en su casilla inicial, y entre el rey y las piezas negras solo se interponen las ca­denas de peones. Las negras atacan Ia cufia de la cadena, y pronto entenderemos por que no

CADENAS DE PEONES 1 59

puede mantenerse el bloqueo. 17.exf6

1 7. WI e3, tratando de mantener cerrada Ia posicion, se contesta con 1 7 . . . fxe5 1 8 .ixe5 lt:Jxe5 1 9.Wixe5 Wixe5+ 20.fxe5 �g5, mientras que 1 7. WI xc3 ttJ xd4 1 8. WI xd4 fxe5 1 9. WI xeS Wixc2 tampoco es atrayente.

17 ... e5! Siempre que el bloqueo se deshace, los

avances de peon son amenazadores. 18.fxe5

1 8 .ixe5 at'm parece peor, mientras que 1 8.f7 �gf8 no cambia nada. 18 .. J�g4 19.�e3 \';Yxe5 20.�h3 ge4 21.�xd7+ gxd7 22.®f2 \';Yxf6+ 23.®g2

23 ... �e5 Las blancas se rindieron. Las rupturas violentas no son raras en la

pnictica magistral . Los peones bloqueados en­tran entonces en erupcion con tremenda fuer­za, pero nunca sin que haya causas especificas

que las originen. En este caso, fue el fracaso de las blancas en finalizar su desarrollo y coordinar sus fuerzas. Cuando se produce el avance central, el rey seguia estando en el centro del tablero y no tenia a nadie que lo defendiese.

Reshevsky - Vaganian Skopje 1 976

Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 d5 3.�d2 �f6 4.e5 �fd7 5.f4 c5 6.c3 �c6 7.�df3 Y9a5 ,

Las blancas han reforzado su cufia de peo­nes, con f4, asegunindose una ventaja espa­cial. Al explorar esta continuacion, las negras han empleado varios enfoques y, durante un breve periodo de tiempo, la textual era rela­tivamente popular. La intencion es evidente: al clavar el peon de "c3 ", las negras intensi­fican Ia presion sobre el peon de "d4" . 8.®f2

Esta jugada estuvo muy de moda en la de­cada de los setenta, pero la sencilla 8.dxc5 Wixc5 9.id3 ie7 1 0.lt:Je2 Wib6 1 I .lt:Jed4 les da a las blancas ventaja sin necesidad de recurrir a medidas extraordinarias. 8 ... �e7

En las partidas en que se planteo esta va­riante hay dos enfoques posibles: 8 . . . b5, con idea de un ulterior . . . b4, atacando el soporte del centro de peones, y 8 . . . f6, abriendo la co­lumna "f' para explotar la incomoda posicion del rey blanco. Analizaremos la primera de es­tas posibilidades mas adelante, en la partida

1 60 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Matanovic - Kovacevic. En Ia presente parti­da, Vaganian elige la segunda posibilidad, solo que enmascarada en el orden de jugadas. A 8 . . . f6, las blancas normalmente continuaban con 9.g3 i.e7 1 0.�g2, con un buen refugio a tiempo para su rey. Reshevsky debia haber seguido Ia sabiduria imperante, pero se deci­dio por un nipido desarrollo de su ala de rey. 9.i.d3?! f;Yb6 lO.llJe2 f6

De pronto, Ia cufia de peones resulta vulne­rable a Ia presion enemiga. Explotando Ia cla­vada, las negras amenazan ganar un peon. Re­trospectivamente, las blancas deben haber la­mentado no haber protegido a tiempo a su rey. l l.exf6

Despues de l l .�g3, l l . . .g5 abre Ia posi­cion de forma desagradable para las blancas. l l . .. .ixf6 12.�g3

Asi es como Reshevsky esperaba resolver sus dificultades. 12 ... cxd4 13.cxd4 0-0 14J�el?

Las blancas siguen sin ser conscientes de lo vulnerable que es su rey. Debian haber jugado 14.h3 , buscando algun santuario para el mo­narca. Ahora sigue un golpe espectacular: 14 ... e5!

Cuando Ia cadena salta, es muy frecuente, como ya hemos dicho, que los peones avancen con destructiva energia. El mal protegido rey blanco se convierte en el objetivo de ataque. 15.fxe5 llJdxe5 16.dxe5 .ih4+!

Hay que admitir que no es facil ver este ja­que. 17.�xh4 E:xf3!

Otro golpe brutal, que deja a las blancas con

una sola salida momentanea. El peligro surge por "f2", "b4" y "d8", y las blancas no pueden parar las numerosas amenazas enemigas. 18.E:fl

1 8 .gxf3 pierde, por 1 8 .. .'1Wf2+, y despues de 1 8 .g3 las negras ganan con 1 8 . . . 'l!Nd8+ 1 9.ig5 Wd7. 18 ... f;Yb4+ 19 . .if4 f;Ye7+ 20 . .ig5 f;Ye6 21 . .if5 gxf5 22.llJf4 f;Yxe5 23.f;Yg4 gf7 24.f;Yh5 llJe7 25.g4 llJg6+ 26.�g3 .id7 27.gael f;Yd6 28 . .ih6 E:af8

Las blancas se rindieron. Del poderoso bastion central de peones no

ha quedado ni una sola piedra.

Reshevsky - Lombardy Campeonato de EEUU

Oberlin 1 975 Gambito de Dama

l.llJf3 llJf6 2.c4 e6 3.llJc3 d5 4.d4 .ie7 5.ig5 0-0 6.gcl c6 7.e3 llJbd7 8 . .id3 a6

Las negras planean . . . dxc4, seguido de . . . b5 y rapida expansion en el flanco de dama. La siguiente jugada blanca lo impide. 9.c5

Las blancas crean una cadena de peones con Ia cufia en "c5 ", ganando espacio en el flanco de dama. Las negras estan comprimidas en sus dos primeras filas y no pueden esperar pasivamente. Deben atacar Ia cadena, y Ia uni­ca cuestion es como hacerlo. 9 ... e5!

Durante mucho tiempo, y siguiendo viejos analisis de Stahlberg, las negras pensaban que

CADENAS DE PEONES 1 6 1

la textual, minando la cadena con el ataque al apoyo de la cufia, no daba resultado, debido a 1 0.ixf6 ixf6 1 1 .dxe5 tt:Jxe5 12 .'Llxe5 ixe5 1 3 .ixh7+, ganando un peon. Convencidas por la evidencia, las negras pasaron su atencion a 9 . . . b6, atacando directamente la cufia. Des­pues de 1 0.cxb6 iWxb6 1 1 .0-0 iWxb2 1 2.'Lla4 '.Wb7 1 3 .tt:Je5 c5 14 .'Llxd7 ixd7 1 5 .'Llxc5 ixc5 1 6.ixf6 gxf6 1 7.'.Wg4+ ci>h8 1 8 .iWh4 f5 1 9.iWf6+ ci>g8 20.dxc5, las negras quedaron en serias dificultades, Hort - Portisch, Madrid 1 973. En la partida Portisch - Petrosian, match de Candidatos ( 1 oa), Palma de Mallo rca 1 974, probablemente recordando su desagra­dable experiencia de Madrid, Portisch busco la misma continuacion con blancas. En esa ocasion, Petrosian trato de mejorar el juego de Hort con 10 . . . c5 1 1 .0-0 c4 1 2.ic2 'Llxb6, pero las blancas se apoderaron de la iniciativa con 1 3 .'Lle5 ib7 14.f4 E:b8 1 5 .f5 . Aunque el juego de Petrosian podia mejorarse mas adelante, las negras perdieron interes en el debate, hasta que William Lombardy intervino en 1 974 . . . 10.dxe5

En la partida Visier - Lombardy, Olimpia­da de Niza 1 974, las blancas siguieron el con­sejo de Stahlberg, pero despues de 1 O.ixf6 ixf6 1 1 .dxe5 ie7 1 2.iWc2 h6 1 3 .'Lla4 '.WaS+ 14.ci>e2 iWc7 1 5 .iWc3 E:e8 1 6.E:he1 if8 1 7.ci>fl 'Llxe5, el juego quedo igualado. Ata­car el soporte de la cufia de nuevo resulto mas efectivo que atacar directamente la cufia. 10 ... �e8 l l..if4 �xeS 12 . .ibl .ig4

En la partida Gligoric - Marovic, Campeo­nato de Yugoslavia por equipos 1 977, las ne-

gras consiguieron buena partida moviendo 1 2 . . . f5 1 3 .exf6 tt:Jxf6. Con la cadena de peones rota, las negras liberaron el juego. 13.fMc2 g6 14.�d4 �e6 15 . .ih6 �8g7 16.0-0 ges 17.fMd2 �xd4 18.exd4 .if5 19 . .ixg7 .ixbl 20.gxbl �xg7 21.b4 f6

Hay una nueva cufia contra la que luchar. Las negras no pueden esperar, por ejemplo, a 'Lla4-c5 . 22.f4 fxe5 23.dxe5

23.fxe5 ig5 es bueno para las negras, mientras que Ua textual libera el peon "d". 23 .. . d4 24.�e4 fMd5 25.fMd3 gadS 26.f5 gxf5 27.gxf5 �h8 28.gbn fMe6 29.gfi fMg6 30JHf3 gg8 31 .g3 gg7

Una habil defensa mantiene la partida equi­librada. 32J�7f5 fMe6 33.a3 �g8 34.�f6+ .ixf6 35.exf6 gg4

La pasiva 35 . . . E:t7 36 .iWd2 seria favorable a las blancas.

1 62 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

36.fi+ ®f8 37.®g2 �e4 38.�xe4 gxe4 39.gg5 ®e7 40.gg7 gf8 41.gxh7 b6 42.gh6 ge6 43.gh4 c5 44.bxc5 bxc5 45.gf5 gxfi 46.gxc5 ge2+ 47.®h3 gcn 48.gxd4 gxh2+ 49.®g4 ge3 50.®f4 gxa3 51.ge5+ ®ti 52.g4 gb2 53.gd7+ ®f8 54.gf5+ ®e8 55.gg7 ga4+ 56. ®g3 ge4 57 .gf6 a5 58.ga6 ®f8 59.gh7 ®g8 60.gc7 gbe2 61.gxa5 ge7 62.gcc5 g2e3+ 63.®h4 ®g7

Tab las. En las partidas que hemos analizado hasta

aqui, la cadena de peones ha sido reemplazada con exito por piezas menores bloqueadoras, o bien ha sucumbido bajo una fuerte presion. En la mayoria de los casos, sin embargo, la cufia y su base sobreviven a las jugadas de minado e influyen sobre la lucha a todo lo largo del medio juego. Con el centro bloqueado, se abren frentes en los flancos.

Nimzovich - Tarrasch San Sebastian 1 9 1 2 Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 d5 3.e5 c5 4.c3 lt:lc6 5.lt:lf3 �b6 6 . .id3 cxd4 7.cxd4 .id7

Como ya hemos visto, Salwe jugo la defi­ciente 6 . . . �d7 contra Nimzovich y fue castiga­do con 7 .dxc5 . En el orden de jugadas elegido por Tarrasch, el peon de "d4" queda atacado, obligando al blanco a perder un tiempo en de­fenderlo. Esto nos lleva a la conclusion de que debia jugarse 6.�e2, tanto mas cuanto que el sacrificio del peon "d4" no es recomendable. 8 . .ie2 lt:lge7 9.b3 lLlf5 10 . .ib2 .ib4+ t t.®n

l l ... .ie7 Una importante posicion para entender las

cadenas de peones. Las negras han incremen­tado al maximo la presion ejercida sobre "d4" . Les gustaria mantener esa presion y retiran el alfil, a fin de poder responder a g4 con . . . 'Llh4. Al estudiar este tipo de posicion, Nimzovich llego a la conclusion correcta, a saber, que mantener la presion sobre cadenas de peones debilitadas ata las piezas enemigas a la defen­sa. Sin embargo, concluyo tambien que no hay que insistir en la presion, si pueden crearse o provocarse en la posicion otras debilidades. Entonces, otras debilidades se convertiran en el objetivo, mientras que la debilidad inicial o potencial debilidad (como "d4" en este caso) no puede desaparecer y podra explotarse pos­teriormente en el final. Por ahora, el peon de "d4" esta, sencillamente, bien defendido, y es inutil esperar que pueda explotarse pronto su debilidad. Nimzovich, por consiguiente, anali­zo 1 1 . .. 0-0 1 2 .g4 ttJh6 1 3 J�g1 , y encontro la inesperada y fuerte replica 1 3 . . . f6. Si ahora sigue 14.exf6 :gxf6 1 5 .g5, las negras contestan 1 5 . . . :gxf3 1 6.�xf3 'Ll f5 1 7 .:gg4 �e8 ( 1 7 . . . :gf8 tam bien parece apropiado ), con excelente acti­vidad por la calidad entregada. 12.g3 a5

Esto debilita la casilla "b5", aunque contro­la "b4" . El curso de la partida demuestra que "b5" es mas valiosa, asi que el negocio resulta dudoso. 13.a4 gcs 14 . .ib5 lt:lb4 15.lt:lc3!

La partida Paulsen - Tarrasch, Nuremberg 1 888, siguio asi : 1 5 .�xd7+? <it>xd7 1 6.CLJc3

CADENAS DE PEONES 1 63

ttJc6 1 7 .ttJb5 ttJa7 1 8 .ttJxa7? Wffxa7 1 9.Wffd3 Wff a6, y las negras penetraron en la segunda fila blanca. El cambio en "d7" fue erroneo en primer lugar, pues el rey esta seguro en "d7", protegido por su masa de peones. Tomar en "a7 '' fue otro error, esta vez decisivo. Nimzo­vich encontro una mejora. 15 ... �a6

1 5 . . . ixb5+ 1 6.ttJxb5 ttJc2 1 7 .�c 1 ttJce3+ 1 8.fxe3 ttJxe3+ 1 9.�e2 ttJxd1 20.�xc8+ �d7 2 1 .�xh8 ttJxb2 22.�c 1 , y las blancas ganan. Como esto no da resultado, las blancas pueden frenar la actividad enemiga en el flanco de dama, y pasan su atencion al otro flanco. 16.<i>g2 �c7 17 . .ie2 .ib4 18.�a2 �a6 19 . .id3

El alfil por fin toma su puesto natural, anunciando las acciones de las blancas. 19 . . • �e7 20J�cl �c6 21.�xb4 �axb4 22 . .ibl h6 23.g4!

El fruto de una buena estrategia, ejecutada con notable cuidado a los detalles posicio­nales. Las cosas se han desarrollado tan bien para las blancas que la mayoria de las fuerzas negras esta comprometida en el flanco de da­ma, donde no consigue nada, mientras que la textual abre un nuevo frente en el flanco de rey, ganando espacio y preparando nuevas ac­ciones agresivas. 23 ... �e7

Quiza 23 . . . �e7 fuese mas apropiado, a fin de trasladar la torre dama a la defensa del rey. 24.gxc8+ .ixc8 25.�el �!18 26.�d3 f6

Abrir la posicion no puede interesar a las negras.

27.�xb4 YMxb4 28.exf6 gxf6 29 . .icl? 29.id3 ! e s natural y fuerte. La impaciente

jugada textual puede responderse con 29 . . . e5 ! 30.g5 �f7! , con contrajuego. 29 ... �c6? 30.g5 hxg5 31.�xg5 grs 32 . .ie3 V!fe7 33.YMg4 YMf6 34.ggl ghs 35.<i>ht gh4 36.YMg3 gxd4 37 . .ixd4 �xd4 38.YMxg7 VMf3+ 39.YMg2 YMxg2+ 40.gxg2 �xb3 41.h4

Las negras se rindieron.

Matanovic - V. Kovacevic Campeonato de Yugoslavia por equipos 1 970

Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 d5 3.�d2 �f6 4.e5 �fd7 5.f4 c5 6.c3 � c6 7. � df3 YM aS 8. <i>n b5

Este optimista avance del peon "b" puede parecer algo extrafio, pero nadie podra acusar a las negras de incoherencia. Una vez jugado f4, las blancas proyectan realizar el avance f5 , atacando la base de la cadena negra. Las ne­gras, por el contrario, tratan de ganar espacio en el flanco de dama y atacar la base de la ca­dena blanca con el avance . . . b4. Con el centro bloqueado, las acciones tienen lugar en las alas. 9 . .id3

Otro enfoque es 9 .ttJe2 b4 1 0.id2 ia6 1 1 .g4, como en la partida Estrin - W. Stem, Campeonato Mundial por correspondencia, 1 965-68. Despues de 1 l . . .h5 , 1 2.gxh5 �xh5 1 3 .ttJg3 �h8 14.cxb4 cxb4 1 5 .f5 . Es dificil decir que es mejor. El alfil esta bien situado en "d3" , pero cuesta un tiempo. 9 ... b4 10.�e2 .ia6

1 64 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

1 O . . . g6 no impediria las acciones de las blancas en el flanco de rey. Despues de 1 1 .g4 h5 1 2.h3 , Ia posicion es favorable a las blancas. l l.f5 bxc3 12.fxe6 fxe6 13.bxc3 j,xd3

Las negras debian haber jugado 1 3 . . . cxd4 14.cxd4 lJ,e7. 14JWxd3 /le7 15.llJf4 c4?

Cerrar Ia posicion en el flanco de dama so­lo puede favorecer a las blancas, que asi que­dan con las manos libres en el flanco de rey. 16.Wfc2 llJd8 17.h4!

AI preparar ctJg5, las blancas ganan la ba­talla estrategica. Las acciones se han efectua­do en paralelo en los dos flancos. Mientras Ia de las negras en el flanco de dama ha quedado definitivamente paralizada, las blancas domi­nan en el otro flanco. 17 .. J��b8 18.llJg5 /lxg5

Esto empeora Ia situacion. Se requeria 1 8 . . . ctJf8.

19.hxg5 llJf8 20.g6 h6 21.llJh5 �b7 22.�h3 llJc6 23J�bl �e7 24.a4

Las negras han sido totalmente superadas. Las blancas dominanin ambas columnas abier­tas y, al incorporarse a Ia lucha por "a3" , el alfil de casillas negras anuncia que el final no esta lejano. 24 ... llJd7 25.�f3 llJb6 26./la3 �b7 27.®gl llJd8 28.�b5 Wfa6 29./lb4 gc7 30./ld6 �b7 31.Wff2 Wfxa4 32.gf8+ ®d7 33.gxh8 Wfxb5 34.W/f8 Wfbl+ 35.®h2 W/xg6 36.llJf4 Wff7 37.Wfxd8+ ®c6 38.�f8

Las negras se rindieron.

La Defensa Francesa no es el unico sistema de apertura en el que Ia cadena central de peones influye sobre el curso del juego, cana­lizandolo a los flancos. La Defensa India de Rey se caracteriza por acciones paralelas en los dos flancos, con Ia posicion dividida por una cadena de peones que atraviesa el tablero. Es de Ia mayor importancia entender las leyes que rigen los acontecimientos en circunstan­cias similares.

Najdorf- Gligoric Mar del Plata 1 953

Defensa India de Rey

l.d4 llJf6 2.c4 g6 3.llJc3 /lg7 4.e4 d6 5.llJf3 0-0 6./le2 e5 7.0-0 llJc6 8.d5 llJe7 9.llJel llJd7 lO.llJd3 f5 l l.f3 f4

El tablero esta dividido por las dos cadenas. Las intenciones de ambos bandos estaban cla­ramente anunciadas por Ia maniobra de las

CADENAS DE PEONES 1 65

blancas tD e l -d3 y de las negras . . . tt:Jd7, abriendo paso al peon de "fl". Ahora las ca­denas interconectadas condicionan el futuro curso de los acontecimientos. Un vistazo al tablero nos dir:i que las blancas deben realizar el avance "c5" , mientras que las negras ataca­nin en el flanco de rey. 12.i.d2 g5 13.b4?!

La cuestion critica es emil de los dos ata­ques sera mas rapido. El elemento tiempo se convierte aqui en el factor decisivo. Es una parte de Ia sabiduria elemental ahorrar cada tiempo, porque al final cada tiempo vale su peso en oro. Por consiguiente, en lugar de la textual, las blancas debian haber preferido 1 3 . .El:c l , tratando de prescindir de b4. Por ejemplo, en caso de 1 3 . . . t2Jf6 1 4.c5 l2Jg6 1 5 .cxd6 cxd6 1 6.t2Jb5 .Ei:fl 1 7 .flc2 t2Je8 1 8 .a4 if8, las blancas abren la columna "c", ha­biendo ahorrado un tiempo, que puede ahora ser invertido para ralentizar el ataque negro en el flanco de rey, con 19 .t2Jf2 h5 20.h3 . 13 .. .ltJf6 14.c5 h5 15.tilf2

Jugar en dos frentes me recuerda a la esgri­ma: un ataque adelante y luego retirada. El caballo jugo a la casilla "d3" para apoyar el a vance c5 . Ahora se retira para impedir el avance . . . g4. 15 ... tilg6 16J�cl �Hi

De nuevo, el mismo juego agudo de ataque y defensa. En espera del movimiento t2Jb5, las negras deben proteger "c7", pero al mismo tiempo preparan . . . if8, seguido de . . . .Ei:g7, tras­ladando la torre a una posicion de ataque en la columna "g".

17.cxd6 cxd6 18.a4 i.f8 19.a5?! En las ultimas decadas, cuando ha sido ya

bien asimilado que el ataque en un flanco y la defensa en el otro deben ser coordinados al detalle, las blancas han pasado a un orden de jugadas ligeramente distinto: 1 9.h3 .Ei:g7, y entonces 20.iel t2Jh8 2 1 .a5 tt:Jf7 22.t2Jb5 t2Jh6 23 .flc2. Cada paso de esta variante se ha examinado en profundidad, descartando inten­tos que han fracasado. Despues de 20.t2Jb5, las negras optaron por 20 . . . t2Jh4 2 I .ie 1 a6 22.t2Ja3 id7, provocando 23 .a5, y 23 . . . b5 ex­cluye el caballo de "a3 " del juego o bien con­sigue una excelente po�icion tras 24.axb6 flxb6. 19 .. J�g7 20.h3 tLlb8 21.tilb5

De nuevo, prestando atencion a los detalles, la experiencia ulterior recomienda 2 1 .ie 1 tDfl 22.t2Jb5 t2Jh6 23 .flc2, asegurando la pe­netracion por "c7". 21 ... g4

Las blancas fueron las primeras en atacar la base de la cadena enemiga. Ahora es el tumo de las negras de hacer lo propio. En la ma­yoria de los casos, no puede hacerse nada con­tra esta cuiia, y hay que buscar contrajuego minando la base. 22.fxg4 hxg4 23.hxg4 a6

Las negras aprovechan la ocasion para ha­cer retroceder al caballo enemigo, ralentizan­do el ataque blanco. En una posicion caracte­rizada por la existencia de cadenas de peones y ataques simultaneos en ambos flancos, una consideracion asi es mas importante que la de­bilidad estatica de "b6" .

1 66 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

24.llJa3 .id7! Las negras no estan impacientes por reto­

mar el peon. Conceden preferencia a cambiar su torre inactiva. 25.llJc4 gcs 26.llJb6 gxcl 27 . .ixcl .ie8

Las negras necesitaran su alfil de casillas blancas en el otro flanco, y no es cuestion de cambiarlo por el marginal caballo del adver­sario. 28 . .ia3 llJti 29.VNc2 llJh6 30.g5 gxg5 31.gcl gg3

Finalmente, las blancas se disponen a ex­plotar la columna "c", pero el contraataque de las negras es mucho mas rapido y no concede respiro. 32 . .ib2 llJfg4 33.llJxg4 llJxg4 34 . .ixg4 gxg4 35.VNf2 .ig6

El paciente alfil ha encontrado su objetivo en la base de la cadena rota. 36.gc4 VNe7 37 . .ic3 VNh7 38.VNe2 gh4 39.�f2

Lo que estamos viendo es un cuadro ha­bitual. El Iento ataque en el flanco de dama ha fracasado, dejando en el camino un par de pie­zas descolocadas, mientras que el mas rapido ataque en el flanco opuesto ha tenido exito, obligando al rey blanco a exilarse.

39 ... 0! El acto final. Cuando dos bandos atacan en

flancos opuestos, el ataque al rey plantea el mayor peligro, como demuestra esta notable partida pionera de los afios cincuenta. 40.VNe3 gr4 41.gx0 VNh2+ 42.�el VNhl+ 43.�e2 .ih5 44.�d2 gxo 45.VNg5+ .ig7 46.�c2 gf2+ 47 . .id2 VNdl+ 48.�c3 VNal+

Las blancas se rindieron.

Larsen - Tal Match de Candidatos (Sa partida)

Eersel 1 969 Defensa India de Rey

l.d4 llJf6 2.c4 g6 3.llJc3 .ig7 4.e4 0-0 5.llJO d6 6 . .ie2 e5 7.0-0 llJc6 8.d5 llJe7 9.llJel llJd7 lO.llJd3 f5 l l ..id2 llJf6 12.0 f4 13.c5 g5

AI utilizar un orden de jugadas algo dife­rente, Larsen ha acelerado su ataque. Omitien­do la innecesaria b4, ataco la base de la ca­dena ("d6") un tiempo antes, y se dispone a abrir la columna "c" . 14J�cl llJg6 15.llJb5

Las blancas provocan 1 5 . . . a6, que parece prometedor para las negras tras 1 6.t2Ja3 g4, pero Larsen habia preparado algo nuevo: 1 6.cxd6 axb5 1 7 .dxc7 '!!Md7 1 8 .'!!Mb3, rompien­do ventajosamente la cadena. 15 .. J�ti 16.cxd6

Incrementar la presion, con 1 6 . .ia5, puede contestarse con exito mediante 1 6 . . . b6 17 .cxb6 cxb6. 16 ... cxd6 17.VNc2 g4

Ignorando la penetracion del caballo. Tal contraataca. Un jugador mas prudente hubiese optado por 1 7 . . . t2Je8, difiriendo la tematica . . . g4. 18.llJc7 gxO 19.gx0 .ih3

Jugando a ganar, Tal era implacable, supe­rando en muchos casos los limites de la pru­dencia, pero su juego contra Larsen es logico y consistente. AI avanzar su peon "g", ha crea­do contrajuego en el flanco de rey para com­pensar la actividad de las blancas en el flanco

CADENAS DE PEONES 1 67

de dama. Mientras ambos ataques se ejecuten correctamente, la partida se encuentra en equi­libria. 20.ti:)xa8

De haber previsto Larsen el inminente ata­que, es probable que hubiese jugado 20.lL\e6, olvidandose de la ventaja material y de situar un fuerte alfil en "h3" (vease nota siguiente).

20 ... ti:)xe4! Las blancas esperaban 20 . . :�xa8, y des­

pues de 2 1 .CtJf2 i.xfl 22.i.xfl , llevando el alfil a "h3 ", con absoluto dominio de las ca­sillas blancas. Pero Tal golpe6 en su carac­teristico estilo. 21.fxe4

2 1 . �h 1 no logra proteger al rey despues de 2 1 . . .CtJg3+ 22.hxg3 fxg3, y no hay forma de parar 23 . . . 1Wh4. 2t. .. VMg5+ 22.�f2 VMg2+

Las negras necesitaban ganar y no se con­tentan con el jaque perpetuo, 22 . . . 1Wh4+. 23.�el ti:)b4

Ver el diagrama siguiente

24 . .ie3? Confundido por el giro de los aconteci­

mientos, Larsen deja escapar su oportunidad en Ia inesperada jugada 24.CtJf2! Por ejemplo: 24 . . . CtJf3+ 25.�d1 CtJd4 26JWc3 . 24 ... VMxe4

Las blancas contaban con hacer a 24 . . . fxe3 , 25 .:gxt7. 25.i.f2 f3 26 . .ixh4 VMxh4+ 27.ti:)f2 fxe2 28.VMxe2 e4 29.ggl

La (mica resistencia significativa. El movi-miento 29.:gc7 pierde, debido a 29 . . . i.xfl 30.�xfl :grs, y 29.:gc4 tambien, por 29 . . . ixfl 30.�xfl Wfxh2. 29 ... e3 30.VMxe3 ge7 31.gxg7+ �xg7 32.gc7 i.d7 33.gxd7 gxd7 34.VMxa7?

Al tratar de salvar el caballo de "a7'', las blancas comprometen a su monarca. Podrian seguir resistiendo con la variante 34.1Wc3+ Wff6 35 .VMg3+ �f8 36.CtJd3 , activando el ca­ballo. 34 ... ge7+ 35. �dl

35 • . . VMc4 36.VMb6 VMfl+ 37.�d2 ge2+ 38.�c3 VMcl+ 39.�d4 VMe3+ 40.�c4 gc2+

Las blancas se rindieron. El mismo instructivo proceso de contrajue­

go contra la cadena de peones report6 exito a las negras. De nuevo, el ataque al rey result6 mas peligroso en la practica que las acciones en el flanco de dama. Un hecho que siempre deberiamos tener presente.

1 68 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Observaciones generales

La cadena de peones es una formacion caracteristica de muchas variantes de la Defensa Francesa y de la Defensa India de Rey, pero que surge ocasionalmente tambien en otros sistemas de apertura.

Incrustada en campo enemigo, la cufia central asegura una ventaja de espacio, privando al oponente de un desarrollo normal y de espacio para maniobrar, reduciendo asi sus opciones.

Al luchar contra la cadena de peones, por lo general debe atacarse su base. Romper la cadena en algun punto debilita la cufia, que puede ser sometida a una fuerte presion. A veces, sin em­bargo, un ataque directo a la cufia tambien es posible. Para tener exito contra una cufia apoyada por una base firme, no basta minarla con peones. El ataque requiere ser apoyado con piezas, que ejerzan una presion simultanea sobre la cufia. Hay que tener cuidado con que las piezas que ge­neren presion no puedan ser excluidas mediante clavadas, y a menudo son indispensables las me­didas violentas, incluidos sacrificios de material.

En el momento critico, cuando la cadena se tronza, el bando que la posee tratara de reemplazar los peones centrales con piezas menores. Si la presion es eficiente, ira en aumento, en Iugar de disminuir. Las piezas menores pueden apuntar a ambos flancos, mientras que los peones blo­queados quedaran mas expuestos que antes, cuando estaban ocultos por los peones enemigos.

Por el contrario, si el bloqueo de piezas no tiene exito, entonces la masa de peones, liberados en el centro, avanzara con gran fuerza y, por lo general, las tomas se volveran radicalmente.

En general, sin embargo, despues de un juego correcto por am bas partes, la cufia y su base re­sistiran la presion y sobreviviran. Si el ataque es equivalente a la defensa, el juego se encontrara en equilibrio. En tal caso, para buscar una ventaja habra que crear motivos adicionales en los flancos, adonde la lucha se traslada de forma natural.

Las cadenas de peones firmes, que atraviesan el centro del tablero, obligan a los jugadores a buscar sus opciones en flancos opuestos. Se producen, en tales casos, situaciones extre­madamente sensibles, en las que los valores posicionales pierden su importancia habitual . La par­tida se caracteriza entonces por ataques simultaneos, en los que el elemento tiempo constituye un factor esencial en la evaluacion de tales posiciones, que a menudo se deciden por un solo tiempo. Tales situaciones requieren, por tanto, un profundo entendimiento de la posicion y experiencia. Cada jugador se defiende en un flanco y ataca simultaneamente en el otro. Dos acciones, agresiva y defensiva, estan interconectadas. Ejecutarlas requiere una gran destreza y sensibilidad. En esta lucha engafiosa, en la que hay que saber nadar y guardar la ropa, la experiencia magistral solo puede recomendar una receta: conviene ahorrar las jugadas defensivas, en particular reducir al minimo las jugadas de peon, sopesando continuamente el tiempo invertido con sus efectos con­cretos. Todo el peso del propio juego debe invertirse en el ataque, aunque mirando siempre de reojo al otro flanco. Suceda lo que suceda, todo puede tener repercusiones drasticas sobre su pro­pio ataque.

Para concluir, hay poca necesidad de enfatizar en lo esencial que resulta entender las cadenas de peones y los principios que rigen su comportamiento. Ese entendimiento es imprescindible pa­ra una plena comprension de toda una serie de importantes variantes teoricas.

CADENAS DE PEONES 1 69

7 lslotes de peones

Tras haber estudiado, con cierto detenimiento, los tipos elementales de peones, somos cons­cientes de la directa relacion entre la correccion de la estructura de peones y la salud general de la posicion que estamos jugando.

Se trata de una relacion profunda, y podriamos decir sin exageracion que debemos apreciarla, si queremos proceder a evaluaciones objetivas.

Sin embargo, al margen de los valores positivos o negativos de diversas formaciones de peones, existe otra cualidad de los peones que influye significativamente en nuestra evaluacion. Me refiero a lo que Jose Raul Capablanca llamaba islotes de peones .*

Una isla o islote de peones es un grupo de peones cortado del resto de la formacion.

En el presente diagrama, la estructura de peones blancos contiene tres islas de peones, y la estructura de peones negros solo dos . Cuan­tos mas islas de peones haya en la propia posicion, tanto mas expuestos estaran y mas dificil resultara defenderlos. A la inversa, cuantos menos islas de peones contenga la propia estructura, tanto mas compacta y fuerte resultara.

No debemos, por tanto, subestimar la im­portancia de este tema. Las siguientes partidas instructivas nos ayudaran a entender su sig­nificacion.

* En espafiol en el original. N.d.T.

E. Cohn - Rubinstein San Petersburgo 1 909

Gambito de Dama

l.d4 d5 2.tlJf3 c5 3.c4 dxc4 4.dxc5 �xdl+ 5.cbxdl tlJc6 6.e3 .ig4 7.J.xc4 e6 8.a3 J.xc5 9.b4 .id6 10 . .ib2 tlJf6 lt .tlJd2 cbe7 12.cbe2 .ie5

Mas flojo que su oponente, y consciente de ello, Cohn juega desde el principio a tablas. Las negras reaccionan bien. El avance de peones en el flanco de dama ha debilitado un tanto la posicion de las blancas, y el cambio de alfiles de casillas negras lo pone tranquila­mente de manifiesto. 13 . .ixe5 tlJxe5 14J�hcl gac8 15 . .ib3 ghd8 16.tlJc4 tlJxc4 17J�xc4 :Sxc4 18 . .ixc4 tlJe4 19.cbet .ixf3 20.gxf3 tlJd6 21 . .ie2?!

Lo correcto era 2 I .i.d3, pero las blancas no son conscientes de la repercusion que tendra la sutil transformacion de su estructura de peones, tras el cambio en "f3" . 21. . . gcs 22.cbd2 tlJc4+ 23 . .ixc4 gxc4 24.:Scl?

Ver el diagrama siguiente

Esto es coherente con el juego previo de Cohn y su deseo de hacer tablas, pero se le escapa un factor importante: su formacion de

1 70 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

peones, fragmentada en tres islas, no es tan buena como Ia de su oponente. Pronto vere­mos que este detalle, en apariencia insignifi­cante, resultani decisivo.

24 .. J�xc1 25.®xcl ®f6 26.®d2 ®g5 27.®e2 Es facil calcular que si el rey blanco se

Ianza a por el peon de "b7", llegara demasiado tarde. Debe apresurarse, por tanto, a defender el punto debil en su estructura de peones: el peon de "h2" . 27 ... ®h4 28.®fl ®b3 29.®gl e5 30.®hl

Obligadas a proteger su islote de "h2", Ia eleccion de las blancas se reduce a una espera pasiva y a repetir jugadas. No pueden ganar tiempo en el flanco de dama, y no pueden ju­gar 30.e4, debido a 30 . . . g5 3 1 .@h1 h5 32.@g1 h4 33 .@h1 g4 34.fxg4 @xg4 35 .@g2 h3+, y el peon de "e4" cae. 30 ... b5 31.®gl f5 32.®hl g5 33.®gl h5 34.®hl

34 . . . g4 35.e4

Despues de 35 .fxg4 fxg4 ! , seguido de . . . h4 y . . . g3, forzando cambios, el rey negro captu­rara el peon "e" blanco, ganando facilmente. 35 ... fxe4 36.fxe4

Si 36.fxg4, entonces 36 . . . hxg4 3 7. @g 1 e3 38 .fxe3 e4 39.@h1 g3 , etc. 36 ... h4 37.�gl g3 38.hxg3 hxg3

Las blancas se rindieron. 39.f4 exf4 40.e5 es demasiado Iento,

debido a 40 . . . g2 4 1 .e6 @g3 42.e7 f3 , y mate a Ia siguiente.

jTenga cuidado de que sus peones no que­den fragmentados en muchos islas y mantenga su formacion todo lo compacta y saludable posible ! La leccion de Rubinstein es inolvi­dable.

Schlechter - Rubinstein San Sebastian 1 9 1 2 Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 d5 3)Dc3 tiJf6 4 . .ig5 dxe4 5.tlJxe4 tiJbd7 6.tiJf3 .ie7 7.tiJxf6+ tlJxf6 8 . .id3 b6

Este avance parece arriesgado, pero tiene fundamento. Las blancas intentan ahora casti­gar el debilitamiento enemigo de la casilla "c6" . 9.tiJe5 .ib7 10 . .ib5+ c6 ll . .ixc6+?!

Las blancas se han dejado llevar por un im­pulso. l l .Wf3 falla, por 1 1 . . .Wd5, pero la con­tinuacion correcta es l l .i.e2. ll . .. .ixc6 12.tlJxc6 '!Wd5 13.tiJe5 '!Wxg2 14.'!Wf3 '!Wxf3 15.tiJxf3 gcs

Tras las complicaciones de Ia apertura, las

ISLOTES DE PEONES 1 7 1

negras han entrada en un final favorable. Por el momenta no se nota mucho, pero la forma­cion de peones es lo que marca la diferencia. Las blancas tendnin que preocuparse por sus tres islas de peones, dos de ellos formados por un solo peon aislado, mientras que la estruc­tura negra es mucho mas compacta, dividida en solo dos islas naturales. 16.0-0-0

Este movimiento fue muy criticado, propo­niendose en su lugar 1 6.c3 , con idea de seguir con 1 7.a4, lanzando la batalla alli donde su mayoria de peones ofrece mejores perspecti­vas. Sin embargo, las negras podrian respon­der 1 6 . . . b5, abortando en el acto tales inten­ciones. 16 ... tLld5

17 . .ixe7 �xe7 18.�bl �hd8 19.�hgl g6 20.tLle5 tLlb4 21 .c3 tLlc6 22.tLlxc6+?

La critica a esta captura es mucho mas fun­dada. Tras el cambio de caballos, las blancas entran en un final de torres en el que su mas compacta estructura de peones ofrece ventaja a las negras. Las blancas debian haber con­tinuado con 22.lt:Jg4 y 23.lt:Je3. Con el caballo, la defensa de los puntos debiles es mas facil. 22 ... �xc6 23J�d3 �d5 24.gh3 h5 25.�f3

Defender tales posiciones siempre es una dura tarea. La textual cubre la columna "f' contra 25 . . . . !!f5 , pero permite la continuacion de la partida, 25 . . . e5 . Si eso se impide con 25.�e l , entonces 25 . . . �f5 26.�e2 �d6, pla­neando . . . �f4, y la otra torre penetra por "d5" . 25 ... e5!

Sencillo y fuerte. Las islas de peones blan­cos en el ala de rey son vulnerables y, a fin de alcanzarlos, las negras abren la posicion. 26.dxe5

La posible clavada, con 26.�el , sirve de poco tras 26 . . . �e6. 26 ... �xe5 27.ge3

Este cambio no servira de alivio. Nada puede cambiar sustancialmente el hecho de que hay dos puntos sensibles en campo blan­co. Despues de 27.�dl �f6, las negras de nue­vo son mas rapidas. 27 ... �xe3 28.fxe3 �e6 29.�el �f6 30.�e2 �e6

Ahora el rey negro penetra. Junto con la to­rre mas activa y una mejor estructura de peo­nes, eso representa una ventaja abrumadora. 31.�c2 �e5 32.c4 �e4 33.b4 g5 34.�c3 g4 35.c5 h4 36J�g2 �g6 37.�c4 g3 38.hxg3 hxg3 39.�b5 bxc5 40.bxc5 �f3 41.�gl a6+

Las blancas se rindieron.

1 72 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

Otro caso chisico de islas con peones de­biles.

Chigorin - Tarrasch Budapest 1 896

Apertura Ruy Lopez

l.e4 e5 2.ltH3 tlJc6 3.�b5 tiJf6 4.Wfe2

Una buena opcion contra 3 . . . ctJf6. AI defen­der su peon "e", las blancas pueden realizar el a vance d4 con o sin c3 . 4 ... d6 5.d4 exd4

Las negras harian bien en seguir con 5 . . . �d7. 6.e5

Esta ruptura es incoherente con Ia cuarta jugada. 6 ... d3

Esto hace posible el jaque posterior, que les da a las negras un tiempo para enrocar, pero las dificultades permanecen. 7.cxd3 dxe5 8.tlJxe5 �b4+ 9.�d2 0-0 10.�xc6 �xd2+ l t.tlJxd2 bxc6 12.tlJxc6 Wfd6

En Ia partida A. Ivanov - Romanishin, Tashkent 1 980, las 'negras trataron de mejorar la jugada textual, con 1 2 . . . �d7, pero los resul­tados no fueron mejores que los conseguidos por Tarrasch: 1 3 .lt:Je7+ @h8 14.lt:Jxc8 :g:e8 1 5 .ctJe4 :g:axc8 1 6.0-0. 13.tlJe7+ i>h8 14.tlJxc8 gaxc8 15.0-0 gfd8 16.tlJe4 Wfxd3 17.Wfxd3 gxd3 18.tlJxf6 gxf6

Ver el diagrama siguiente

La niebla se ha disipado. Las negras con-

servan el equilibrio material, pero su fragmen­tada formacion de peones habla en su contra. Las blancas tienen ventaja, debido precisa­mente a su mejor estructura de peones, con menos islas.

19.gfdl ! Teniendo en cuenta que las negras ocupa­

nin Ia segunda fila, es indispensable cambiar un par de torres. 19 ... gcd8 20.gxd3 gxd3 21.g3 gd2 22.gc1 gxb2 23.gxc7 gxa2

Las negras deberian considerar 23 . . . @g7 24.:g:xa7, y Ia torre blanca se encuentra en po­sicion desfavorable, por delante de su peon, mientras que Ia torre negra ocupa la impor­tante segunda fila. Sin embargo, el equilibrio material tiene su peso especifico en nuestras consideraciones, aunque quienes compitan sean gran des jugadores. 24.gxti ga6 25. 'ttg2 'ttg8 26.gb7 ga2

ISLOTES DE PEONES 1 73

Las negras han conservado el equilibria material, pero a un alto precio: su rey esta cortado, su estructura de peones esta rota en tres unidades, y su peon pasado es mas un in­conveniente que un factor positivo. Si las ne­gras juegan 26 . . . :Bal , para avanzar con su peon pasado en la columna "a", entonces las blancas responden 27.h4 a5 28.h5, y despues de 28 . . . a4, 29.h6, haciendo posible :Bg7+, que decide. Si 28 . . . h6, entonces el peon "a" no puede avanzar, porque el rey blanco se dirige a "g6", ganando facilmente. 27.h4 a6

Las negras planean 28 . . . h5 y quieren im­pedir :Bb5 . 28.ci>f3 h5

No es una decision facil, porque al debilitar la casilla "g6", las negras exponen su peon "h", invitando a penetrar al rey blanco. Sin embargo, el rey negro esta inmovil (28 . . . c±>f8 pierde el peon de "h7", y si 28 . . . c±>h8, 29.:Bf7 gana el de "f6"), y la textual hace, al menos, posible que pueda caminar dentro de su prision (g8-f8 y viceversa). Por consiguiente, es facil entender su decision, pero a pesar de todo, las negras deberian haber considerado 28 . . . :Ba4 29.:Ba7 a5 30.h5 h6 (las negras, obviamente, no pueden permitir h6, seguido de :Bg7+) 3 1 .g4 c±>f8, y si 32.gh7, entonces 32 . . . :Bb4 33 J��xh6 c±>g7 34.gg6+ c±>t7, y el peon de "a5" resulta finalmente valioso. 29J��c7 gas

De otro modo, sigue 30.:Bc5, demostrando que 28 . . . h5 tenia sus riesgos. 30.<i>f4 <i>f8 31.f3

Aqui los comentaristas tienen razon al sefialar que el orden correcto de jugadas era 3 1 .:Ba7 c±>g8 32.f3, porque despues de la tex­tual las negras podrian responder 3 1 . . .:Ba4+ 32.<±>f5 :Ba3 33 .f4 :Bxg3 34.<±>xf6 c±>g8, una oportunidad que paso desapercibida a ambos contrincantes. 31 ... d>g8 32J�a7 ci>f8

33.g4 Otro inconveniente de 28 . . . h5. Las blancas

tienen ahora la posibilidad de crear un peon pas ado. 33 . • • hxg4 34.fxg4

El material se ha reducido un tanto, pero los elementos basicos se mantienen invaria­bles : el rey de Tarrasch esta cortado, su torre es menos activa y sigue lastrado con dos islas de peones por uno de las blancas. 34 .. J:�al?

Esta jugada abre la puerta del campo ene­migo al rey blanco. Por segunda vez en esta

1 74 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

partida, Tarrasch esta pensando mas en el ma­terial que en la actividad de sus piezas, lo que, en un final de torres, suele constituir, por lo general, un grave error. Las negras se han mostrado continuamente preocupadas por la supervivencia de su peon pasado, lo que limita las posibilidades de sus piezas al minimo. Aqui habia una opcion de desprenderse del mismo, logrando un final de tablas, con 34 . . . �g8 35 .h5 , y ahora:

. 1 ) Si las negras deciden esperar, con 35 . . . �f8?, entonces 36.h6 �g8 37J3:g7+ �f8 (o bien 37 . . . �h8 38J3:f7) 3 8J3:g6 �f7 39.h7, y las blancas ganan, porque 39 .. J3:a4+ 40.�g3 ga3+ 4 1 .�h4 gal falla, por la inteligente 42.h8ctJ+ �f8 (o 42 . . . �e7 43 .gg8) 43 .gxf6+ �g7 44. �g5 �xh8 (la opcion es 44 . . . ga5+ 45.gf5 gxf5+ 46.gxf5 �xh8 47.�f6, y las blancas son mas rapidas) 45 .�g6 �g8 46.gb6, etc., segun un viejo ana.Iisis del maes­tro sovietico Fridhstein.

2) 35 . . . gb5 36.gxa6 �g7 37.ga7+ �g8 38 .�g3 gcs 39.�h4 gbs 40.h6 gcs 4 1 .gg7+ �f8 42.gg6 �f7 43 .h7 gcs 44.�h5 gel 45 .h8ctJ+ �f8 46.gxf6+ �g7 47.gf7+ �xh8 48.�g6 gcs, con tablas.

Es cierto que a veces no hay tiempo sufi­ciente para calcular con precision variantes largas, pero la experiencia nos ensefia que los problemas de los finales de torres deben ser resueltos de forma intuitiva, pensando sobre todo en la actividad de las piezas. Como regia general, aferrarse al material es una rueda de molino que nos aplasta. 35.�f5 gfl+ 36.�g6 gr4 37.g5 fxg5

37 . . . gxh4 pierde en el acto, por 38 .ga8+. 38.hxg5

38 .. J:�a4 Despues de 38 . . . gg4 39.�xa6 ggl 40.ga8+

�e7 4 1 .�h6 �f7 42.ga7+ �g8 43 .�g6 �f8, las blancas no consiguen nada, pero 4 l .gg8 (haciendo posible 42. �h7) gana. 39.ga8+ �e7 40.�h6 aS 41.g6 gal 42.g7 ghl + 43. �g6 ggl + 44. �h7 ghl + 45. �g8 ga1 46.ga7+ �e8 47J�a6

AI amenazar gh6, las blancas ganan un peon, consiguiendo la posicion de Lucena. 47 ... gh1 48.gxa5 ge1 49.gh5 ggl 50J�e5+

Las negras se rindieron. Tal vez todos los finales de torres sean ta­

blas, como dijo un Gran Maestro, pero a veces no es tan facil encontrar la forma de hacerlas. Si la estructura de peones esta disgregada en varios islas, la tarea puede ser abrumadora.

j Echemos ahora un vistazo a otras dos par­tidas memorables !

ISLOTES DE PEONES 1 75

Alekhine - Spielmann Nueva York 1 927 Defensa Francesa

l.e4 e6 2.d4 d5 3.llJc3 tlJf6 4 . .ig5 .ie7 5.exd5 tlJxd5 6 . .ixe7 V!!xe7 7.V!!d2 V!!b4 8.tlJxd5 %Yxd2+ 9.®xd2 exd5 10J!el+ .ie6

Considerando el caracter cerrado de Ia po­sicion, las negras deberian continuar tranqui­lamente con 1 0 . . . �f8, pero ahora empiezan a cometer una serie de pequefias imprecisiones. ll .tlJh3 tlJc6?!

1 1 . . .0-0 12 .l2Jf4 l2Jc6 1 3 .c3 a6 da resultado, pero no Ia textual. Y a en esta fase inicial de Ia partida, las negras deben encontrar jugadas "(micas", si quieren sobrevivir. 12 . .ib5 'tt>d7 13.tlJf4 gae8 14.c4 'tt>d6 15.c5+ 'tt>d7 16.ge5

Alekhine sefialo que tambien era fuerte 1 6.Ei:e3 . La torre tiene Ia tercera fila a su dis­posicion, y l2Jh5 es una constante amenaza. 16 ... f6 17.gxe6 !!xe6 18.llJxe6 ®xe6 19 . .ixc6 bxc6 20J!el + ®d7

Ver el diagrama siguiente

Con Ia experiencia de las partidas anterio­res, podemos facilmente concluir que los pro­blemas de las negras se derivan de sus tres is­las de peones, en particular del mas pequefio de ellos ("a7''), que antes o despues atara Ia to­rre o el rey a su defensa. Lamentablemente pa­ra las negras, no pueden oponer torres en Ia columna abierta, debido precisamente a ese peon aislado de "a7' ' , de modo que las blancas podran utilizar Ia tercera fila a discrecion.

21.®c3 gb8 Tras 2 1 . . .Ei:e8 22.Ei:xe8 �xe8 23 . �b4 �d7

24.�a5 �c8 25.�a6 �b8 26.b4, etc., las ne­gras perderian de Ia misma forma en que per­dio Cohn ante Rubinstein ( comparense ambas posiciones ) . 22.ge3 gf8 23.gg3 g17 24.®b4 ge7 25.®c3 g17 26.!!h3 h6 27.®d2 ge7

De pronto, Ia apertura de Ia tercera fila pone en peligro el peon. 27 . . . Ei:f8 28.Ei:a3 Ei:a8 29.Ei:a6 Ei:b8 30.�c3 Ei:b7 3 1 .f3, y las negras se quedan sin jugadas utiles. 27 . . . �c8 a(m es peor: 28 .Ei:a3 �b7 29.Ei:e3, y Ia torre penetra. 28.ga3?!

El largo analisis de Alekhine demuestra que lo correcto es 28.Ei:e3 . AI privar a las ne­gras de Ia casilla "e4", las blancas ganan el fi­nal de peones como sigue: 28 . . . Ei:xe3 (28 . . . Ei:f7 pierde, por 29.Ei:a3 Ei:e7 30.f3) 29.�xe3 �e6 30.�f4 g6 3 1 :g4 g5+ 32.�e3 �d7 33 .�d3 �c8 34.�c3 �b7 35 .�b4 �a6 36.�a4 �b7 37.�a5 a6 3 8 .a4 �a7 39.b3 (las blancas de­ben utilizar los tiempos con precision) 39 . . . �b7 40.b4 �a7 4 1 .b5 axb5 42.axb5 �b7 43 .b6 cxb6+ 44.cxb6 �b8 45.�a6 c5 46.dxc5 d4 47.b7 d3 48.�b6, y las blancas dan mate a tiempo. Ese seria el desenlace logico, demos­trando magistralmente Ia debilidad de Ia es­tructura negra de peones. La textual deja esca­par Ia victoria. 28 ... ge4

N aturalmente, las negras se abalanzan so­bre Ia ocasion que se les ha presentado. 29.ga4 ®c8 30.f3 gh4 31.h3 'tt>b7 32.®e3 f5

1 76 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

33J�b4+ ®c8 34.a4

34 ... g5?! Ahora es el turno de las negras de equivo­

carse. Tras 34 . . . f4+ 35 .�f2 gh5 36.gb3 grs 37 .gc3 gn 38 .gc2 ge7 39.ge2 gxe2+ 40.�xe2, la posicion esta bloqueada y no hay ningun pasadizo. La textual, sin embargo, no es tan mala como afirmaron los comentaristas. 35.a5 g4

3 5 . . . a6 cierra la puerta a la torre blanca, que no puede penetrar sin el apoyo de un peon en "a6", pero despues de 36.�f2 la torre negra queda en una tramp a: 36 . . . g4 pierde, por 37.�g3 gxh3 3 8.gxh3 gh5 39.f4, mientras que despues 36 . . . h5 37.�g3 f4+ 38 .�h2 g4 39 .ga4, la torre penetra en la columna "e" . 36.hxg4 fxg4 37.a6

37 ... gxf3? Kotov sefiala correctamente que 37 . . . g3?

pierde, por 38 .f4, pero es extrafio que tanto a el como a Euwe, y tambien al propio Alekhi-

ne, se les escapase que este era un momento critico. Tomar en "f3" es un grave error, por­que crea un peon pasado en la columna "f' , pues las negras se crean problemas adiciona­les debido al peon pasado que las blancas es­tan a punto de lograr en la columna "a" . Las negras deberian continuar con 3 7 . . . gh2, pues tanto 38 .�f2 gxf3 39.�xf3 gh4, como 38 .fxg4 gxg2 conducen a una posicion en la que el peon de "g4" esta contenido por el de "h6" . Observese que el peon de "h6" no puede ganarse, a menos que caiga el de "g4". Las blancas pueden ensayar 38 .f4 gxg2 39.f5 (si 39.gb7, entonces 39 . . . gg3+ 40.�e2 gg2+ 4 1 . �fl gd2), aunque despues de 39 . . . g3 de­ben tener cuidado, pues 40.gb7? gf2 4 l .gxa7 lleva a la derrota, tras la inesperada 4 1 . . . �b8 42.gb7+ �a8 43 .gxc7 gxf5 44.gg7 gg5 . Las negras tambien estan seguras en otras conti­nuaciones. Spielmann probablemente sobresti­mo su peon pasado y subestimo el peon pasa­do blanco, algo facilmente comprensible, por­que lo que sigue no estaria fuera de lugar en una antologia de estudios. 38.gxf3 ghl 39.gb7 gel+ 40.®f4

40.�d2 ge7 4 1 .gxa7 �b8 42 .gb7+ �a8, con tablas evidentes. El rey debe permanecer junto a su peon pasado. 40 ... gdl 4l.®e5 gel+ 42.®f5 gdl 43Jha7 gxd4 44.ga8+ ®d7 45.f4 ga4 46.a7!

De ahora en adelante, la torre blanca queda atascada en "a8" , pero es vital limitar los mo­vimientos de la torre negra a su columna. 46 ... h5

46 . . . d4 esta contenido por el rey, y despues

ISLOTES DE PEONES 177

de 47.\t>e4 h5 48 .b3 �a1 49.f5 \t>e7 50.\t>xd4 h4 5 1 . \t>e5 �e 1 + (de otro modo, �h8 gana) 52.\t>f4 �a1 53 .\t>g5 h3 54.�h8, la victoria es mas facil que en la partida. 47.b3

Necesario para liberar al rey. 47 .. J��al 48.®e5 gel+ 49.®f6 gal 50.®e5 gel+ 51.®d4 gdl+ 52.®c3 gal 53.f5 ®e7

Las negras no pueden permitir f6. 54.®d4!

Habiendo ganado un tiempo para f5 , las blancas vuelven al flanco de rey para eliminar el peon pasado. 54 ... h4 55. ®e5 gel+

55 . . . h3 pierde, por 56.�h8 �xa7 57 .�xh3 �a1 58 .f6+, etc. 56.®f4 gal 57.®g5 ggl+

57 . . . h3 de nuevo pierde, de modo similar: 58 .�h8 �xa7 59.�xh3 �a1 60.f6+, etc. 58. ®xh4 gal 59. ®g5 ggl + 60. ®f4 gal 61. ®e5 gel+ 62. ®d4 gal 63. ®c3

La torre seguira estando restringida, limi­tando su movilidad al maximo. 63 ... ga3 64. ®b2 ga6 65.b4 ®ti 66. ®b3 gal 67.f6!

El pequefio toque concluyente de un mag­nifico final. 67 ... ga6 68.b5 cxb5 69.®b4

Las negras se rindieron. 0 el rey penetra por "b5 ", o bien 69 . . . c6

70.�h8 cuesta la torre. Estamos lejos de la apertura, pero no olvi­

demos que todo comenzo cuando las negras comprometieron su formacion de peones, lo que condujo a un pun to debil en la isla "a7'' .

Capablanca - Kupchik La Habana 1 9 1 3

Apertura Cuatro Caballos

l.e4 e5 2.ll:H3 �c6 3.�c3 �f6 4 . .ib5 .ib4 5.0-0 0-0 6 . .ixc6 bxc6 7.�xe5 YlYe8 8.�d3 .ixc3 9.dxc3 YlYxe4 10.ge1 YlYh4 l l .YlYt3 .ia6 12 . .if4 gac8 13 . .ie5 .ixd3 14.cxd3 YlYg4 15 . .ixf6 YlYxt3 16.gxf3 gxf6

Las dificultades negras en la apertura co­menzaron con 6 . . . bxc6, en lugar de la natural 6 . . . dxc6. En ese momento puede haber pare­cido inesencial para las negras, pero los cam­bios subsiguientes condujeron a la posicion del diagrama, acentuando el hecho negativo de que la estructura de peones negros esta fragmentada en mas islas que la blanca. Co­mo en el ejemplo anterior, existe el peon debil de "a71', un peon aislado que requeria un apo­yo constante.

1 78 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

17.:Se4 �Ue8 18J�ael �e6 19.�1e3 �ce8 2o.®n

La torre de "e4" se dispone a desplazarse por Ia cuarta fila y atacar el peon de "a7'', pero antes de eso las blancas deben reforzar el pun­to "e3 " . La textual impide Ia liberadora 20 . . . f5 con 2 1 .�d4 �xe3 22.fxe3 �xe3 23.c;t>f2 �e7 24.�a4, mientras que 20 . . . d5 falla debido a 2 1 .�g4+ c;t>f8 22. c;t>e2, y �a4 es inevitable. 20 ... ®f8 21.®e2 ®e7 22.�a4 �a8 23J�a5!

De forma tipica, Ia torre atacante es movil, y Ia ultima jugada mejora su privilegiada po­sicion en Ia columna "a". Desde "aS " controla Ia quinta fila, impidiendo jugadas liberadoras. AI mismo tiempo, Ia torre defensora es obli­gada a situarse en el ignominioso puesto de "a8" . 23 ... d5

24.c4! Una excelente jugada, que oprime aun mas

a las negras, porque 24 . . . dxc4 25.dxc4 causa

mas dafios a Ia estructura negra, y 24 . . . d4 25.�e4 c;t>d6 26.b4 empeora su situacion. 24 ... ®d6 25.c5+ ®d7 26.d4 f5

A las negras no les gustaba 26 . . . �g8, de­bido a 27. c;t>n , y Ia textual parecia Ia forma mas natural de forzar el cambio en "e6", al amenazar 27 . . . �h6. 27.�xe6 fxe6 28.f4

De haber continuado las blancas 28.�a6, las negras se habrian encontrado en proble­mas. 28 ... ®c8 29.®d2?!

En vista de Ia nota siguiente, en Ia que las negras pueden obligar a las blancas a cerrar Ia tercera fila, las blancas debian haber jugado 29.�a3 de inmediato, ya que entonces a 29 . . . �b8 puede contestarse con 30.b3 c;t>b7 3 1 .b4 c;t>as 32.�b3, manteniendo abierto el camino bacia "h3 " . 29 ... ®b7?!

Ambos jugadores pierden Ia concentracion. 29 . . . �b8 habria obligado a las blancas a cerrar Ia tercera fila con 30. c;t>c3, porque despues de 30.c;t>c2 �b4, las blancas deben jugar a "c3 " de todos modos. 30J!a3 �g8 31 .�h3 gg7

Ahora Ia torre negra esta atada a una de­fensa pasiva de otro peon aislado, y Ia movil torre blanca de nuevo domina Ia escena. 32. ®e2 ®a6 33.�h6 ge7 34. ®d3 ®b7 35.h4 ®c8 36.gh5 ®d7 37.gg5

Ganar Ia columna abierta acerca a las blan­cas a su objetivo. 37 .. J:Ui 38.®c3

Una vez conquistada Ia unica columna

ISLOTES DE PEONES 1 79

abierta, las blancas pueden crear amenazas en ambos flancos. 38 . . . �c8 39.�b4 EU6 40.�a5 �b7 41.a4 a6 42.h5 E!h6 43.b4 E!f6 44.b5?

Antes de ejecutar la ruptura, era preciso 44.E:g7 ! , a fin de obligar a la torre negra a asu­mir una postura pasiva en "h6" . Podria seguir entonces 44 . . . E:h6 45 .b5 axb5 46.axb5 cxb5 47.�xb5 E:xh5 48.c6+, y las blancas ganan. 44 ... axb5 45.axb5

45 .. J�U'8! jEsto marca la diferencia! Las negras ac­

tivan su torre y consiguen hacer retroceder al rey blanco, impidiendo que se produzca el guion del comentario anterior. 46.E!g7 E!a8+ 47.�b4 cxb5 48.�xb5 E!a2 49.c6+ �b8 50.E!xh7 E!b2+ 51.�a5 E!a2+ 52.�b4

52 .. J�xf2? La intermedia 52 .. . E:b2+! constituiria una

diferencia esencial, obligando al rey a alejarse

de la casilla critica "c5" . Despues de 53 .�c3 E:xf2 54 .E:e7 E!:xf4 55 .h6 E:h4 56.h7, podria seguir 56 . . . �a7 57.E!:xc7+ �b6 58 .E:e7 �xc6 59.E!:xe6+ �b5, y el activado rey logra unas tab las. 53J�e7 gxf4

Ahora, despues de 53 . . . El:b2+ 54.�c3 E:h2 55 .E:xe6 E!:xh5 56.�b4, es demasiado tarde para las negras. 54.h6 gxd4+ 55.�b5 gdl

55 . . . E!:h4 56.h7 deja sin respuesta a las ne­gras. 56.h7 gbl+ 57.�c5 ,gel+ 58.�d4 gdl+ 59.�e5 gel+ 60.�f6 ghl 6l.ge8+ �a7 62.h8Wf gxh8 63.gxh8 �b6 64. �xe6 �xc6 65.�xf5 �c5 66.�e5 c6 67.gh6 �b5 68.�d4

Las negras se rindieron. Dos islas de peones aisladas en dos alas re­

sultaron demasiado dificiles de defender.

Fischer - Unzicker Zurich 1 959

Apertura Ruy Lopez

l.e4 e5 2.ltH'3 �c6 3 . .ib5 a6 4 . .ia4 �f6 5.0-0 .ie7 6.gel b5 7 . .ib3 d6 8.c3 0-0 9.h3 �a5 lO . .ic2 c5 ll .d4 Wfc7 12.�bd2 .id7 13.�fl gfe8

En la Variante Smyslov, tipificada por la jugada 1 2 . . . id7, Ia altemativa 1 3 . . . lt:Jc4 no es satisfactoria para las negras tras 14 .ttJe3 lt:Jxe3 1 5 .ixe3 ie6 1 6 .ttJd2, y las blancas estan lis­tas para jugar f4, Tal - Petrosian, Campeonato de Ia URSS, Riga 1 958 . 14.�e3 g6 15.dxe5 dxe5 16.�h2 E!ad8

1 80 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

17.Wff3 .ie6 18.�hg4 �xg4 19.hxg4 Wfc6 La lucha por Ia potencialmente fuerte casi­

lla "d5 " sigue en curso. Las negras tratan de cubrirla plenamente, pero Ia experiencia pos­terior indica que era bueno 19 . . . tt:Jc4 20.tlJd5 ixd5 2 1 .exd5 tlJb6. 20.g5 �c4 21.�g4 .ixg4 22.Wfxg4 f6?!

Es mas fuerte 22 . . . tt:Jb6. En este momento Ia textual, aunque puede

no parecer importante, conduce a que la for­macion de peones negros se rompa en mas is­las, lo que, generalmente hablando, es desfa­vorable. En el curso de Ia partida las negras sentiran las consecuencias de esta decision. 23.gxf6 .ixf6 24.a4 � b6

Era de considerar 24 . . . tt:Jd6. 25.axb5 axb5 26 . .ie3 gas 27.gedl �h8 28.b3

28 ... .ig7 En caso de 28 .. J�xal 29Jhal �a8, Fischer

pensaba seguir con 30.�xa8+ tt:Jxa8 3 1 .�dl y

32.�a l . Las blancas mantendran la iniciativa hostigando a los peones negros. 29.Wfh4 .if6 30 . .ig5 .ixg5 31 .Wfxg5 gxal 32.gxal �d7

33 . .idl ! Los grandes jugadores captan matices que a

otros les pasarian inadvertidos. La idea de cambiar alfiles de casillas negras es ahora mas clara. Puesto que 33 . . . �xe4 no da resultado, debido a 34 . .if3, las blancas consiguen trasla­dar su alfil a una posicion mucho mas activa. Con un alfil superior y una estructura de peo­nes mas saludable, no hay duda de que las blancas tienen ventaja. 33 ... �f6 34.E:a7 Wfd6 35 . .ie2 ge7

Las negras deben aceptar el castigo. 35 . . . b4 36.cxb4 cxb4 pierde, por 37 .�f7. 35 . . . �b8 tambien falla, por 36.�f7 tt:Jg8 37.�d7 . Es di­ficil defender peones en distintos flancos, so­bre todo cuando se cuenta con un torpe caba­llo contra un alfil de largo alcance. 36.gxe7 Wfxe7 37 . .ixb5 �g7 38 . .ie2 Wfc7 39.Wfe3 Wfa5 40.g3 Wfa3 41.�g2

Una solucion mas nipida es 4 1 .b4 cxb4 42.�c5, pero el resultado seria el mismo en cualquier caso. 41 ... Wfa5 42.Wfd3 Wfb6 43.Wfc4 Wfc6 44.i.d3 Wfb6 45.b4 cxb4 46.cxb4 �g4 47.Wfc5 Wfxc5 48.bxc5 �ti 49.f4 �e7 50.�0 �f6 5t..ib5 �e6 52 . .ic4+ �e7 53.c6 �e8 54.fxe5 h6 55.�e3 �c7 56.�d4 h5 57.�e3 g5 58 . .ie2 h4 59.gxh4 gxh4 60 . .ic4 �e8 61.�f4 �d8 62.�g4 �c7 63 . .iti �g7 64.�xh4 �xc6 65.�g5

Las negras se rindieron.

ISLOTES DE PEONES 1 8 1

Smyslov - Golombek Match URSS - lnglaterra

Londres 1 94 7 Defensa Siciliana

l.e4 c5 2.tLlc3 tLlc6 3.g3 g6 4 . .ig2 .ig7 5.d3 e6

En esta tranquila variante de la Siciliana, 5 . . . d6 es una mejor opcion. 6 . .ie3 tLl d4 7. tLl ce2

Este particular orden de jugadas de las ne­gras ha permitido a las blancas esta util alter­nativa. 7 ... tLle7 8.c3 tLlxe2 9.tLlxe2 d6 10.0-0 0-0 ll .Yfd2 ges 12.d4 Yfc7 13.dxc5 dxc5 t4JUdt

Como consecuencia del impreciso juego negro, las blancas han podido apoderarse de la columna abierta, aunque eso no significa gran cosa, debido al canicter cerrado de la posicion. 14 ... b6 15.Yfd6 Yfxd6 16J��xd6 .ia6 17 . .ifl .ie5 18J�d2 gadS 19J�adl tLlc6 20.f4 .ib8 21.e5 gxd2 22J�xd2 gd8 23J�xd8+ tLlxd8 24.b3 ®g7 25.c4 f6 26.exf6+ ®xf6 27.tLlc3 .ib7 28 . .ig2 .ixg2 29. ®xg2

Al pasar a un final, tras una serie de cambios, las negras simplificaron la posicion, asumiendo una estructura de peones algo mas debil, rota en tres unidades. En las siguientes jugadas tienen la oportunidad de avanzar su peon de "e6", liberandose asi de su peon ais­lado, pero se muestran indecisas. 29 ... tLlc6 30.®f3 tLlb4?! 31 ..id2 ®e7?! 32.®e4 tLlc6

Las jugadas negras de espera han empeora-

do su situacion. Con su fuerte rey centraliza­do, alfil mas fuerte y superior formacion de peones, las blancas comienzan a pensar en in­crementar su ventaja.

33.tLldl ! Puesto que ahora puede contestarse a

33 . . . e5 con 34.f5, creando una mayoria de peones en el flanco de rey, es el momento co­rrecto de trasladar el alfil a "c3" , desde donde controlara firmemente "e5" y "b4" . Al mismo tiempo, el caballo se dirige a "g4" y "f6", a fin de provocar el avance del peon de "h7" y de­bilitar aun mas la formacion de peones negros. 33 ... .id6 34.tLlf2 tLld8

El caballo se dirige a "f7", donde realizara una util funcion defendiendo los puntos de­biles "e5" y "g5" . 35 . .ic3 tLlti 36.tLlg4 h5

Esto no es malo, pero tampoco necesario.

37.i.f6+ Una buena jugada intermedia, con el pro-

1 82 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

posito de controlar la casilla "g5" . 37 ... �d7 38.ti:H2 .ic7?!

El alfil es un incordio en "f6", y mejor seria eliminarlo con 38 . . . ie7. Al asi hacerlo, con­trolaria la casilla "h4", adonde pronto moveni el caballo blanco. 39.tiJd3 �c6 40.tiJel ! .

Si las negras tenian pensado hacer . . . b5, de­bieron renunciar a la idea, pues l2Jf3-h4 ame­naza con decidir nipidamente la lucha. En comparacion con algunas jugadas sin objeto de las negras, el juego de Smyslov se caracte­riza por la determinacion y la logica. 40 ... tiJd6+ 41.�d3 tiJf5 42.tiJf3 �d7

Las negras deben tener cuidado del peon de "e6", ahora que es posible l2Jg5 . Los debilita­dos peones de "e6" y "g6" influyen cada vez mas en sus decisiones. 43.�e4

Las blancas tenian in mente 44.l2Je5+ ixe5 45 .<;t>xe5, y el rey penetraria por "f6". 43 . . . tiJd6+ 44.�e3 tiJf5+ 45.�f2

El rey se necesita aqui para preparar un avance en el flanco de rey con h3 y g4. 45 ... .id6 46.h3 .ic7 47.g4 hxg4 48.hxg4 tiJh6 49.�g3

49 ... tlJti?! Segun Smyslov, las negras podrian haber

ofrecido mayor resistencia haciendo 49 . . . <;t>es 50.ie5 id8 5 1 .ib8 a6 52.l2Je5 g5, aunque 53 .l2Jc6 if6 54.ie5 mantiene Ia ventaja. 50.g5

El peon de "g6" esta perdido y el juego sen­tenciado. 50 ... J.d8 51. �g4 .ixf6 52.gxf6 �d6

53.tiJe5 Las negras se rindieron. Un final memorable. Las blancas fueron

exprimiendo la victoria a partir de ventajas minimas, basadas en su mej or estructura de peones y piezas menores algo mas activas.

Este final me recuerda el hecho de que las posiciones con un peon central aislado pueden conducir a finales dificiles, con tres islas de peones contra dos. Hasta en el final tipico de caballo contra alfil, a menudo resulta dificil mantener el equilibria, aunque muchas de esas posiciones son tab las con un juego correcto.

A verbaj - Matanovic Match URSS - Yugoslavia

Belgrado 1 96 1 Apertura Inglesa

l .c4 tiJf6 2.tiJc3 e6 3.tiJf3 c5 4.e3 d5 5.cxd5 exd5 6.d4 tlJc6 7 . .ie2 .ie7?!

ISLOTES DE PEONES 1 83

Una clara perdida de tiempo. Lo correcto es 7 . . . cxd4 8. ctJxd4 �d6, con una posicion igua­lada. 8.dxe5 �xeS 9.0-0 0-0 10.b3 a6 l l.�a4 �e7 12.�b2

Las blancas estan mejor, porque las negras no tienen compensacion suficiente por su de­bit peon "d" . 12 ... �e4 13J�el i.f6 14.�xf6 �xf6 15.�d4 �e5 16.�e5 f!e7 17.�d3 �xd3 18.f!xd3 �e6 19J�e2 gae8 20.gfel f!d7 21.f3

Jugado para controlar la casilla "e4", pero tambien porque, mas adelante, en el final, quedara habilitada la casilla "g4". 21 . . J�xe2 22.flxe2 �e8 23.f!xe8+ fixeS 24.gxe8+ i.xe8

El cambio de piezas forma parte del plan consistente en tales posiciones. Las blancas esperan que el peon aislado quede mas ex­puesto con el material reducido. La partida, por supuesto, sigue manteniendose dentro de los limites de las tablas, pero con su for­macion de peones mas debil, las negras deben trabajar duro para conseguirlas. 25.�f2 �f8 26.�el �e7 27.�d2 �d6 28.b4 �e8?!

A las negras les atrae la posibilidad de tras­ladar el caballo a "c7" y luego a "e6". Mejor harian restringiendo las posibilidades de las blancas en el flanco de dama, con 28 . . . �d7. 29.�d3 g6

El deseo del negro de privar a las piezas menores contrarias de la casilla "f5 " es natu­ral, pero de nuevo era mejor opcion 29 . . . �d7. 30.�e3 �e7 31 .a4 b6?!

Despues de esto, el peon de "a6" seguira siendo una debilidad permanente en la estruc­tura negra de peones, sumandose, como nueva debilidad, al peon de "d5" . 32.a5 bxa5 33.bxa5

La debilidad esta fijada, y a partir de ahora una de las piezas negras quedara atada a su defensa: una pequefia, pero importante victo­ria posicional. Conviene aprender a disfrutar de estos pequefios triunfos, con los que se acumulan pequefi.os factores positivos, en el proceso de materializar una ventaja. 33 ... �e5 34.�b3+ �d6 35.�b4 �e6 36.g3 �d8

El caballo esta bien situado, por ahora, en "e6", asi que no hay necesidad de moverlo. 37.�d4 �e6+

Con todos los peones en casillas dominadas por el alfil blanco, habria que abstenerse de este cambio, que no solo empeora las cosas. 38.�xe6 �xe6 39.f4

1 84 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

39 ... f5? El momento critico. En Iugar de f�ar todos

los peones en casillas blancas, las negras de­berian intentar situarlos en casillas negras, evitando una situacion en la que su alfil tenga que asumir la imposible tarea de defender dos o mas debilidades fijas. Era esencial 39 . . . h6, esperando la primera oportunidad para situar los peones del flanco de rey en casillas negras. Preparando . . . g5, las negras podrian esperar salvarse, como consecuencia de una reduccion de material. 40.h4 'it>d6

La mala fortuna de las negras reside en el hecho de que no pueden bloquear la posicion. Tras 40 . . . h5 , sigue 4 1 .�c2 \t>d6 42.�a4, ame­nazando 43 .�e8, que decide. 41.h5 gxh5

0 bien 4 1 . . .�b7 42.h6 �c8 43 .\t>c3 \t>c5 44.�e2 �b7 45 .g4 fxg4 (45 ... �c8 46.g5 �b7 47.�h5, etc.) 46.�xg4, etc. 42.�c3

Las negras se rindieron. Despues de 42 . . . \t>cs 43 .�fl �b7 44.�e2

�c8 45 .�d3, las negras se encuentran en zugzwang y, a fin de impedir la penetracion del rey blanco, su mejor opcion es 45 . . . h6 46.�fl �b7 47 .�e2 �c8 48.�d3 (otro zugz­

wang inevitable) 48 . . . d4+ 49.exd4+ \t>d5 50.�c4+ \t>d6 5 1 .d5 \t>c5 52.d6 \t>xd6 53 .\t>d4 �b7 54.�e2 �c8 55 .�d3 .

Y la lucha queda decidida. Cualquier cosa que se haga con los peones es de naturaleza duradera. Si su formacion de peones ha sido fragmentada en varias islas, puede resultarle

dificil defender una estructura asi, sobre todo si existe algun otro elemento desventajoso en la posicion. En el final que hemos visto, los peones estaban situados en las casillas erro­neas, lo que resulto decisivo.

Hemos analizado distintos tipos de finales, caracterizados por una formacion de peones fragmentada. En cada uno de ellos, en cir­cunstancias de material reducido, el bando con una estructura de peones compacta tenia ven­taja sobre el bando con una estructura de peo­nes dafiada y fragmentada en un mayor nu­mero de islas. Naturalmente, para ganar se requiere la existencia de algun otro elemento adicional, pero la debilidad basica de peones existia invariablemente. Sin embargo, el aje­drez no es tan simple. Nuestra evaluacion po­sicional debe basarse en muchos elementos. Veamos, por ejemplo, la partida que sigue.

Fischer - Euwe Olimpiada de Leipzig 1 960

De fen sa Caro-Kann

l.e4 c6 2.d4 d5 3.exd5 cxd5 4.c4 tiJf6 5.tlJc3 tlJc6 6.tlJf3 �g4 7.cxd5 tlJxd5 8.�b3 .ixf3 9.gxf3

9 . . . e6 Entramos ahora en una linea forzada. En

cambio, 9 . . . 'Llxd4? pierde, por 1 0.�b5+, mien­tras que en caso de la principal alternativa, 9 . . . 'Llb6, las blancas tienen ideas relacionadas con d5 . 10.�xb7 tlJxd4 ll ..ib5+ tlJxb5 12.�c6+ �e7 13.�xb5 tlJxc3?!

ISLOTES D E PEONES 1 85

Despues de esta partida, se llego a la con­clusion de que las negras deberian jugar 1 3 . . . '\Wd7 14.ttJxd5+ '\Wxd5 1 5 .'\Wxd5 exd5, y la ventaja blanca es pequefia. 14.bxc3 '*ld7 15J�bl !

Un vistazo a la horrible estructura de peo­nes blancos sugiere dificultades para este ban­do. Sin embargo, y a pesar de sus cuatro islas de peones, la textual se apodera de la inicia­tiva. El mejor desarrollo de las blancas y sus piezas mas activas resultan elementos mas re­levantes sobre los que basar la evaluacion. 15 .. J�d8

Es mejor 1 5 . . . 'Mrxb5 1 6.�xb5 �d6, pero si­gue sin ser facil para las negras, porque puede continuar 1 7.�b7 f6 1 8 .�e2 �c6 1 9.�f7 a5 20.�e3 . 16 . .ie3 Y*lxb5 17.E!xb5 E!d7 18.�e2 f6 19J�dl

Tan sencillo como posible. AI cambiar las piezas activas del oponente, las blancas incre­mentan su ventaja. 19 .. J�xdl

19 . . . �c7 no sirve de mucho, por 20.�c5 .

20.�xdl �d7 21.E!b8 �c6 22.J.xa7 g5 23.a4 J.g7 24.E!b6+ �d5 25.E!b7 J.f8 26J�b8 J.g7 27.E!b5+ �c6 28.E!b6+ ®d5 29.a5 f5

29 . . . �a8 no es suficiente, por 30.�b7 �f8 3 1 .�xh7 ic5 32.�b6, etc. 30 . .ib8 E!c8 31 .a6 gxc3 32.E!b5+ ®c4

32 . . . �c6 no cambia el desenlace, debido a 33 .�a5 id4 34.@e2, etc. 33.gb7 .id4 34.gc7+ �d3 35.gxc3+ ®xc3 36 . .ie5

Las negras se rindieron. Una partida breve y sencilla, que apenas

requiere explicacion. La incluyo al final de nuestras consideraciones como una adverten­cia acerca de que las reglas no son sagradas y de que no existe ninguna que no tenga excep­ciones.

Hemos tratado de aprender lecciones y ex­traer conclusiones logicas, no para respetarlas al pie de la letra, sino para entenderlas de for­ma tal que nos permitan ver por encima de ellas e ignorarlas llegado el caso. Solo quien entiende las leyes que rigen el tablero a la per­feccion podra hacerlo.

1 86 COMPRENDER EL JUEGO DE PEONES EN AJEDREZ

,

Iodice de jugadores

El numero se refiere a la pagina. En negrita significa que el jugador llevaba las piezas blancas.

Adams 135 Karpov 1 1 , 12, 18, 3 1 , 34, 35, 50, 67, 1 09, Alekhine 7, 65, 68, 1 54, 176 Anand 13 , 137 Andersson 1 1 5 Averbaj 183 Antonomov 2 1 Balashov 44 Bernstein, 0. 55 Berthold 1 59 Bertok 56 Bogoljubov 154 Boleslavsky 1 10, 1 26 Bondarevsky 86, 156 Botvinnik 15, 30, 37, 83, 1 56 Bristol, Club Ajedrez, 1 05 Capablanca 32, 55 , 768, 90, 98, 1 1 8, 178 Chigorin 173 Cohn, E. 170 Colle 1 2 1 Donner 45, 1 29 Dreev 44 Eliskases 1 7 Euwe 7, 37, 65, 1 18, 1 85 Fischer 56, 59, 85, 1 03 , 123, 143 , 180, 185 Flohr 39, 147 Geller 62, 82, 106, 108 Gipslis 70 Gligoric 16, 17, 25, rJ.7, 47, 98, 1 65 Golombek 1 82 Gunsberg 72 Gutman 130 Hasenfuss 39 Hollis 1 55 Hort 1 25 Ivanchuk 23 lvkov 53, 146 Janowski 90, 98 Johner, H. 1 04

1 15, 1 17, 125, 139 Kasparov 9, 23, 49, 73, 77, 148 Kavalek 142 Keres 47, 51 , 82, 96, 146, 147 Korchnoi 31 , 35 , 50, 53, 62, 70, 74, 95, 1 58 Kovacevic, V. 1 64 Kraidman 131 Kramnik 13, 1 37 Kupchik 1 78 Kupreichik 1 20, 148 Kurajica 67 Kuzmin, G. 128 Larsen 1 20, 167 Lasker 32, 1 22 Levenfish 1 5 3 Lombardy 1 6 1 Marovic 88 Matanovic 164, 1 83 Mikenas 74 Minic 78 Morozevich 93 Najdorf 165 Nimzovich 48, 104, 151 , 153, 163 Pachman 58 Padevsky 159 Petrosian 39, 80, 85, 1 1 1 , 1 13 Pillsbury 72 Planinc 78, 1 32, 1 34 Polugaievsky 92, 1 39 Pomar 1 6 Portisch 12, 25, 36, 49, 103 Pribyl, J. 77 Psaj is 60 Regedzinski 29 Reshevsky 45, 96, 160, 161 Reti 121 Ribli 132

INDICE DE JUGADORES 1 87

Robatsch 143 Romanishin 60, 73, 128 Rubinstein 20, 29, 42, 1 0 1 , 1 70, 1 7 1 Rukavina 109 Salov 135 Salwe 42, 1 5 1 Sax 145 Schlechter 171 Schmid, L. 36 Schmidt, W. 1 1 3 Spassky 21 , 58, 59, 80, 95, 98, 1 1 1 , 129, 142 Short 9 Smejkal 134 Smyslov 1 1 , 86, 100, 1 06, 1 08, 1 1 0, 126, 155,

182 Sokolov, I. 145 Spielmann 1 76 Staunton 105 Steinitz 22 Stupica 88

Suetin 1 30 Sutovsky 93 Svidler 1 1 7 Szabo 27, 39, 75, 120 Taimanov 5 1 Tal 83, 120, 140, 1 67 Tarrasch 48, 101, 122, 1 63 , 1 73 Tartakower 20 Timman 75, 158 Trifunovic 1 23 Uhlmann 1 8, 1 00 Unzicker 1 80 Vaganian 34, 1 60 Vasiukov 1 3 1 Vidmar 1 5 Vogt 140 Von Bardeleben 22 Zagoriavsky 30 Zaitzev, A. 92

1 88 INDICE DE JUGADORES

,

Iodice de aperturas

Bird, Apertura Bogoindia, Defensa Caro-Kann, Defensa Cuatro Caballos, Apertura Eslava, Defensa Francesa, Defensa

Gambito de Dama Aceptado Gambito de Dama Rehusado

Giuoco Piano Griinfeld, Defensa India de Dama, Defensa India de Rey, Defensa Inglesa, Apertura Nimzoindia, Defensa Nimzovich, Apertura Ruy Lopez, Apertura Semi-Eslava, Defensa Siciliana, Defensa Vienesa, Apertura

1 05 53, 1 1 5 1 7, 37, 39, 44, 1 85 1 0 1 , 1 78 72, 98 1 8, 34, 35, 36, 70, 93 , 1 00, 1 1 1 , 1 25, 1 26, 1 29, 1 5 1 , 1 53 , 1 54, 1 55 , 1 56, 1 58, 1 59, 1 60, 1 63 , 1 64, 1 7 1 , 1 76 13 , 20, 2 1 , 23, 25, 27 9, 1 5 , 29, 3 1 ' 32, 42, 48, 50, 5 1 ' 55, 56, 58, 59, 62, 68, 74, 80, 82, 1 6 1 ' 1 70 22 73, 77, 1 1 7, 147 49, 60, 1 1 8 75, 83, 88, 1 30, 1 3 1 , 1 32, 1 34, 1 65 , 1 67 1 1 , 30, 85, 1 09, 1 1 3 , 1 2 1 , 1 83 7, 1 2, 1 6, 39, 45, 47, 1 03, 1 06, 1 08 1 04 67, 78, 86, 90, 92, 96, 1 1 0, 1 22, 123, 1 46, 173 , 1 80 65 1 20, 1 20, 1 28, 1 35, 1 37, 1 39, 1 40, 1 42, 1 43 , 1 45 , 148, 1 82 95, 98

INDICE DE APERTURAS 1 89

Otras publicaciones

Estrategia ajedrecistica en accion John Watson

Los siete pecados capitales en ajedrez Jonathan Rowson

Secretos de Ia defensa en ajedrez Mikhail Marin

Corso de Aperturas Sistemas cerrados Sistemas abiertos Sistemas semiabiertos 1 o parte Sistemas semiabiertos r parte

Daniel Elguezabal Varela

Juegue Ia Najdorf Javier Moreno Camero - Julen Arizmendi

Lecciones de estrategia en ajedrez Valeri Beim

Mehiforas de ajedrez Diego Rasskin Gutman

Mi sistema - Practica de mi sistema Aaron Nimzovich

Problemas para gente sin problemas Rene Mayer

1 90