UNIVERSIDAD SANTO TOMÁSESCUELA DE PSICOLOGÍACURSO: FUNDAMENTOS DE LA PSICOTERAPIA SISTÉMICA PROFESOR: MOISÉS NAVARRETE P.SEMESTRE I – 2013

EL ENSAYO 1

Objetivos Reconocer los aspectos fundamentales de la redacción académica.

Elaborar textos con valor académico personales y reflexivos.

Comprender el valor del trabajo académico y el desarrollo lógico de las ideas.

Estructura del ensayo.El ensayo es un género que permite diferentes adaptaciones. Así, un ensayo histórico se diferenciará de uno literario o filosófico por su tema y por la forma en que se desarrolla su estructura y la importancia que se le asigna a las fuentes de información.

La estructura del ensayo es flexible, pero posee características básicas que se pueden resumir de la siguiente manera:

I. INTRODUCCIÓN Idea general referente al contexto del tema escogido

Planteamiento del tema

Problema o descripción del contexto del tema escogido

Planteamiento de la tesis

II. DESARROLLO1. Argumento 1Tesis (debe replicar la señalada anteriormente)

Bases Garantía

Respaldo o prueba

2. Argumento 2

Contrargumento (no es imprescindible, puede ser sólo una cita al planteamiento contrario al que propone el ensayo).

3. Argumento 3

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? Extraído de Manual Para Elaboración De Instrumentos Pedagógicos Y Sugerencias

Metodológicas. Dirección Nacional de Lenguaje. Universidad Santo Tomás.

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III. CONCLUSIÓN

Resumen de los argumentos planteados

Reafirmación de la proposición de la tesis

Comentario

Recomendaciones

Bibliografía de acuerdo a las normas A.P.A. citadas en este manual.

Ejemplo de ensayo:

“EL LUGAR DONDE ESTABA EL PARAÍSO”

Alberto Fuguet

Introducción

Tesis

De toda la cobertura que ha producido el cataclismo, lo que más ha impresionado a los medios locales y extranjeros es que esta tragedia ocurrió en el centro mismo del paraíso.

Problema o descripción En esos sitios idílicos donde se hacen películas como "La playa" y comerciales para trajes de baño.

Justo ahí, donde brilla el sol y el aire huele a aceite de coco, ahora se ha instalado la muerte, diezmando a cientos de miles de "nativos". Pero son los turistas - público objetivo de esta revista- quienes acaparan la atención. Mal que mal, fueron ellos los protagonistas del cataclismo al captar las olas y todo el desastre con sus molestosas cámaras.

Es curioso como representantes de lo más espúreo de la casta (suecos y alemanes en zunga aprovechando gangas de charter) se transformaron, en un instante, en historiadores. al parecer, el mundo ("occidente") no está interesado en esas familias famélicas de la costa de la india, sino en los familiones con la piel quemada que estaban recostados sobre la arena frente a un mar tan turquesa como traidor.Argumento 1

Bases Para un editor cualquiera, que miles de "pobres" mueran aplastados o ahogados no es algo "tan fuera de la norma". Garantías Se sabe que huracanes y monzones siempre azotan a los menos afortunados de esa región. Lo que sí es novedad es que esto ocurra en los resorts, donde los extranjeros llegan por un motivo bien claro: descansar y carretear. Respaldo o prueba Por eso, fue una chica chilena desaparecida durante más de una semana la que ocupó las portadas y los reportajes, y no un chico pescador con los ojos rasgados. Es posible que esto sea un exceso pero la tragedia fue, sin duda, excesiva. Es lógico que la prensa, y los chilenos en general, pensaran inmediatamente en dos cosas: en que nos pudo pasar a nosotros (después de todo, una vez nos pasó, en 1960); y en que aquéllos que gustan del turismo (o quisieran ser turistas) debieran sentirse doblemente tocados ("pensar que yo quería ir a Phi Phi"; "yo una vez estuve ahí veraneando").

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Argumento 2Base No cabe duda de que, por un tiempo, Tailandia y los países de la región se volverán tabú. Un sitio para evitar a toda costa. Garantías No sólo tendrán que reconstruirse las cabañas y los hoteles, también tendrá que cicatrizar la memoria. Pasará mucho tiempo antes de que una pareja decida pasar su luna de miel frente a ese mar turquesa. Respaldo o prueba Y quizás de eso se trata mi columna. La razón por la cual escribo todo esto en esta página y no en otra. Cuando se mira una revista de turismo o de viajes, lo que salta de las páginas es algo parecido al paraíso. A la felicidad.

Argumento 3Bases Ninguna revista o guía promociona la pobreza ni la tragedia. Garantías Niñitos rodeados de moscas no sirven de promoción. La moral de la industria del turismo tiene claro que ciertas capitales son, digamos, "más problemáticas", y eso, de alguna manera, es su atractivo. Respaldo Que te pase algo en un callejón de Manila o en una barriada de Bogotá es, dentro de todo, esperable. El mito de Río de Janiero es que te asalten en la playa, no que la playa te asalte a ti. Lo que no está en la lógica turística es que mueras. Que ocurra una tragedia no en la ciudad o en el país, sino en tu propio sitio de descanso.

Conclusión

Resumen de los argumentos Hubo un terremoto el otro día, sí. Pero para la industria del turismo hubo dos. El mito del paraíso se vino abajo y se acercó más a lo que es: una quimera. Reafirmación de la tesis Yo he estado poco en el paraíso, pero siempre me ha parecido más bien infernal. Sobre todo cuando el paraíso está en el Tercer Mundo. Yo miro para el lado cuando viajo desde el aeropuerto y me deprimo cuando veo que, más allá de las playas, lo que hay son chozas. En la isla de San Pedro, en Belice, me insistieron en que no fuera a la capital. Fui. Y entendí por qué no querían que la conociera. Los turistas que van a Zanzíbar van a las playas, no a Stonetown. Lo que más recuerdo de Stonetown son los callejones oscuros y el olor a basura. ¿Esto es el paraíso? Comentario En internet circula un rumor: que lo que pasó fue una suerte de "castigo divino" para limpiar Sodoma y Gomorra (Tailandia - se sabe- es uno de los destinos del llamado "turismo sexual", retratado con precisión y detalle por el francés Michel Houllebecq). El terremoto arrasó con un sueño, pero al final acaso no se trataba de un sueño. Tailandia y Sri Lanka y Sumatra siguen siendo sitios paradisíacos, pero ahora, quizás, la gente tendrá más internalizada la idea de que, más allá de los desastres naturales, el verdadero desastre es que los sitios más paradisíacos están siempre muy cerca de ese infierno llamado Tercer y Cuarto Mundo.

DOMINGO EN VIAJE Revista de El Mercurio. Santiago 16 de enero de 2005

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