Como Engordar Un Caballo

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¿Cómo engordar un caballo? De vez en cuando, a los criadores de caballos o aficionados al hipismo se les presentan casos en que por un motivo u otro, tienen caballos que se les han adelgazado con el paso del tiempo, o simplemente adquieren caballos delgados o en “malas carnes”, los cuales interesa que estén en óptimas condiciones en un futuro no tan lejano. La pregunta principal en esta situación es, ¿Cómo lo logramos ? Siempre hay distintas maneras de llevar la situación de acuerdo a las condiciones que tengamos, algunos optan por el encierro en cuadras o boxes, lo cual significa comida, forrajes y agua a control; otros optan por el potrero, donde el caballo puede comer todo el pasto que quiera. Pero igualmente, aunque nuestras condiciones sean distintas hay puntos que debemos tomar en cuenta: 1. Examen clínico del caballo En este punto, es necesario la evaluación veterinaria del caballo, conocer si se encuentra enfermo o en optimas condiciones sanitarias [muchos caballos se encuentran delgados simplemente por falta de comida], ya que debemos de tomar en cuenta que un caballo enfermo nunca logrará engordar o convertir eficientemente todos los alimentos que nosotros les brindemos. En este punto debemos evaluar infecciones, parásitos, patologías de cascos, de dentadura, de hígado y muchas cosas más que afectan la actitud y estado general de nuestro caballo Nunca sobra una desparasitación de un caballo que no conocemos si ha sido o no desparasitado antes de llegar a nuestras manos, recordemos que las desparasitaciones son

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¿Cómo engordar un caballo?

De vez en cuando, a los criadores de caballos o aficionados al hipismo se les presentan casos en que por un motivo u otro, tienen caballos que se les han adelgazado con el paso del tiempo, o simplemente adquieren caballos delgados o en “malas carnes”, los cuales interesa que estén en óptimas condiciones en un futuro no tan lejano.

La pregunta principal en esta situación es, ¿Cómo lo logramos?

Siempre hay distintas maneras de llevar la situación de acuerdo a las condiciones que tengamos, algunos optan por el encierro en cuadras o boxes, lo cual significa comida, forrajes y agua a control; otros optan por el potrero, donde el caballo puede comer todo el pasto que quiera.

Pero igualmente, aunque nuestras condiciones sean distintas hay puntos que debemos tomar en cuenta:

1. Examen clínico del caballo

En este punto, es necesario la evaluación veterinaria del caballo, conocer si se encuentra enfermo o en optimas condiciones sanitarias [muchos caballos se encuentran delgados simplemente por falta de comida], ya que debemos de tomar en cuenta que un caballo enfermo nunca logrará engordar o convertir eficientemente todos los alimentos que nosotros les brindemos.

En este punto debemos evaluar infecciones, parásitos, patologías de cascos, de dentadura, de hígado y muchas cosas más que afectan la actitud y estado general de nuestro caballo

Nunca sobra una desparasitación de un caballo que no conocemos si ha sido o no desparasitado antes de llegar a nuestras manos, recordemos que las desparasitaciones son periódicas y muchas veces los calendarios sanitarios no se cumplen

Debemos de tomar en cuenta además los exámenes de sangre para diagnosticar enfermedades como la Anemia Infecciosa Equina, muy difundida en nuestro país, la cual no permitirá que nuestro caballo se engorde, y que definitivamente no tiene cura.

2. Buena alimentación

Trabajando siempre conforme al orden, debemos recalcar que ningún caballo se engordará a base de vitaminas y minerales inyectables, más bien es contraproducente el uso y abuso de complejos multivitamínicos sin razón alguna.

En este punto debemos de tomar en cuenta la cantidad de pasto que necesita nuestro caballo diariamente, el cual varía dependiendo del peso y edad del caballo; pero pensando en que el caballo consume en alimento diariamente el equivalente al 2 - 3 % de su peso vivo; concluimos que un caballo de 400 kilogramos debe consumir aproximadamente entre 8 y 12 kilos de forraje al día.

En cuanto a los concentrados, varían dependiendo de sus formulas nutricionales: la cantidad de proteínas, carbohidratos y grasas que estos contienen.

Igualmente, un concentrado comercial para caballo adultos con un 14 % de proteínas puede suministrarse un equivalente al 1 % de peso vivo del caballo, es decir, 1 kilogramo por cada 100 kilos de peso; en el caso de nuestro caballo de 400 kilogramos, esto sería un total de 4 kilos al día de concentrados.

Además debemos de tomar en cuenta que para optimizar la absorción del concentrado, debe de suministrarse al menos en 3 comidas al día, recordemos que los caballos tienen estómagos pequeños con poco volumen, los estudios indican que los caballos comen menos cuando tienen el alimento siempre disponible; y de esta manera también reducimos la incidencia de cólicos.

Algo que se ha venido utilizando mucho en los últimos años y con excelentes resultados es la suplementación con aceite de maíz [aceite de cocina], que es en sí una fuente de grasas para los equinos, por tanto una fuente de energía con niveles muy altos. Otros beneficios de la incorporación de aceites en la dieta son: mejora en la calidad del pelo, colabora en la absorción de vitaminas y previene la aparición de cólicos.

3. Observar el ambiente en el que vive

Muchas veces, cuando se manejan muchos potros o yeguas en potrero observamos que hay 1 en especial que no engorda a pesar de estar desparasitado, de que se les suministra alimentos de buena calidad y que tras examinarla se encuentra bien de salud.

En estos casos vale la pena tomarse un poco de tiempo y observar, observando nos damos cuenta de que en muchos casos, los más grandes no dejan comer a los más pequeños, o simplemente los “dominantes” le hacen la vida imposible a los más dóciles. El mundo equino es también bastante jerárquico y vale la pena tomarlo en cuenta

Otra condición que vale la pena recordar es que muchas veces se suelta a potrero animales que han estado en cuadra toda su vida y después de un tiempo esperamos que luzca igual, es casi imposible, peor aún cuando el animal se encontraba en la zona más caliente de León y lo trasladamos a la más fría de Jinotega, aquí surge el llamado factor de “estrés” que solamente con tiempo y brindando condiciones favorable podremos superar.

4. Aplicación de complejos vitamínicos, minerales, etc.

Cuando ya sabemos que nuestro caballo está sano, que está recibiendo una buena alimentación y que además de eso se encuentra en un ambiente adecuado, si podemos hablar de la aplicación de complejos vitamínicos y minerales para “colaborar” un poco más en nuestro causa.

En nuestro país existen muchos productos indicados para equinos, pero la utilidad de cada uno es dependiente de sus ingredientes activos, los principales activos son:

- Sueros con dextrosa y/o aminoácidos- Vitaminas ad3e, complejo B y otras- Minerales como I, Se, Cu, P, Ca, Fe y S principalmente

5. Paciencia

Debemos recordar que la prisa no produce buenos resultados, y en los equinos es prácticamente una generalidad; la prisa en la doma, en el desbrave de los potros y en el aumento de peso puede producir muchos problemas con soluciones complicadas, que perfectamente se podían evitar tomando el tiempo necesario para realizar cada labor.

Siempre hay un tiempo prudente para ver resultados, y suponiendo que nuestro caballo con las mejores condiciones posibles aumente 1 kilogramo de peso por día, un tiempo prudente para ver resultados es de 40 a 45 días, en lo cual no solo veremos cambios en el peso y volumen, sino también en el carácter y actitud del animal.

Concluyendo, espero que estos consejos sean útiles a quienes como yo han vivido alguna vez el problema de los caballos en “malas carnes”, algo muy común, que muchas veces no sabemos tratar. Cabe recalcar que ante todo siempre debe de estar la salud de nuestros animales, siempre para y por el bienestar animal, de nuestros caballos, fieles amigos que nos acompañan en cualquier situación.

Adrián Zelaya D.Médico Veterinario

azlayer589 @hotmail.com