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CATÁSTROFES EN PREHISTORIA

JORDI ESTÉVEZ

A Mn.GEORGES LAPLACE,Maître, camarade et complice;

et a Delia son âme.

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JUSTIFICACIÓN¿Porqué un libro sobre catástrofes? ¿Porqué en la Prehistoria? ¿Porqué ahora, cuando hace ya años quehemos superado la anunciada y no sobrevenida catástrofe del fin del milenio que auguraba un Apocalipsis(entre otras causas, por la caída de los sistemas informáticos debida al efecto 2000)?Podríamos pensar que este libro está dentro de una ola de moda actual que enfatiza posibles desastresinminentes: Se pronostica un inminente desastre climático global, un agotamiento de las fuentes energéticas,del agua potable, un pinchazo de la burbuja especulativa... Los medios de comunicación insisten enpresentarnos desastres que además magnifican selectivamente (a). ¿Pero porqué persiste ese climacatastrofista? ¿Cómo se combinan los intereses políticos de mantenimiento del sistema económico-social ylas aspiraciones de los grupos mediáticos de aumentar sus beneficios con la demanda social de consumomorboso de desastres?Se ha escrito [391] que, entre otras, las bases que mueven la selección mediática son la satisfacción queprovoca en las personas receptoras de las noticias el haberse “librado” de una pena que ha afectado a otraspersonas con las que nos podríamos identificar y el poder socializarnos –comentando o actuando- a través deesa identificación compartida.Frente al estado de ánimo que producen los desastres, se generan dos salidas: la de los grupos de personasque creen que con su acción pueden contribuir a mitigar o evitar las consecuencias de esos desastres, y la depersonas que, enfrentadas a un sentimiento de impotencia o por alienación, se dejan arrastrar a una actitudpasiva y se refugian en la mística o en la lectura y contemplación de historias mediáticas virtuales sobrepersonajes paranormales.Esa dicotomía en la actitud de las sociedades occidentales la podemos rastrear primero en la base de latradición maniqueísta judeo-cristiana. La visión apocalíptica se vincula particularmente con la historiaeuropea desde la Edad Media: pródiga en pestes, hambrunas y prolongadas guerras catastróficas. Lasreligiones cristianas frente a la catástrofe individual de la Muerte o de la miseria colectiva insistían en unpresunto premio de consolación del Cielo eterno, y frente a la rebelión contra los poderes establecidosamenazaban con un infierno igualmente ilimitado. Se explicaban las catástrofes como consecuencias“sobrenaturales” de las culpas de las gentes y se utilizaban como elemento de retroalimentación paramantener el sometimiento.Después, a partir de finales del siglo XVIII, los triunfos de las revoluciones burguesas, la norteamericanaprimero y las europeas después, permitieron plantear una alternativa. Incluso en España, donde esarevolución no se dio, se llegó a vislumbrar que la propia institución monárquica (“Por la Gracia de Dios”) noera intocable y que otra Constitución era posible. Frente al estatismo que esperaba “el Fin de los Tiempos”creció una visión científica dinámica que buscaba explicaciones naturales, normales. Frente a la concepciónde la catástrofe como consecuencia “normal” del “pecado” se empieza a considerar como un fenómeno“anormal” en la evolución histórica.Frente a la pasividad social catastrofista también se abrió paso una visión de futuro social terrenal optimista,para el cual las gentes podían y debían asumir un papel activo.Estas dos nuevas tendencias de pensamiento fueron una necesidad para la consolidación de la nueva clase -laburguesía- emergente, pero su trascendencia ha ido más allá, una vez que, a finales del siglo XX, esa clase halogrado del todo su objetivo. La visión infantil del infierno ya no asusta más que un posible crac financiero,que pueda comprometer el bienestar presente. Pero hay que asegurar el “crédito”, la estabilidad y lapersistencia del sistema.¿Qué papel juega pues ahora el “neo-catastrofismo” para el mantenimiento del sistema? Por un lado se hapercibido con claridad que la dinámica económica no es fácilmente aprehensible, que existen implicacionessociales en la economía (contradicciones internas insuperables, como la que opone fuerza de trabajo abeneficio). Esto le confiere un carácter complejo que aparece como irracional. Por otro lado el mismo sistemaeconómico se fundamenta en la desigualdad y hay que despenalizarlo atribuyendo la miseria que genera acausas naturales ajenas a él. Hay que “naturalizar” los desastres. Deben ser incorporados a la vida normal

a Sólo hace falta percatarse de la diferencia entre el tratamiento de la tragedia de las Torres Gemelas de Nueva York frentea la constante sangría del hambre y las epizootias que afectan el llamado Tercer Mundo o las consecuencias del maltrato alas mujeres en todo el planeta, fenómenos objetivamente (y numéricamente) más trágicos y persistentes. Es un cálculomacabro, pero es muy ilustrativo y terrible apreciar la desigualdad de minutos dedicados en los informativos según lavictima sea “euro-americana” o de otro “color”.

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como explicación. Pero como es imprescindible no perturbar la confianza en el sistema, se debe conferir a loseventos catastróficos o súbitos un carácter extraordinario, anómalo. Sin embargo es imprescindible podercalcular “el riesgo” para evaluar el “beneficio” a medio plazo tal como conviene ahora a los nuevos interesesde las corporaciones supra-individuales. Como consecuencia se hace necesario estudiar los cambios bruscos,calcular su frecuencia o sus probabilidades, evaluar las posibles pérdidas y minimizar los costes de lascatástrofes que generan. En definitiva volver a enfatizar en el papel de las catástrofes juega un doble papel: elnaturalizarlas sirve como aparente justificación de la miseria y su estudio contribuye a asegurar los beneficiosdel neo-capitalismo.

Este libro, a pesar de su título “Catástrofe en Prehistoria”, pretende otra cosa: por un lado desnaturalizar esetipo de fenómenos. Mi tesis fundamental es que no existen catástrofes “naturales”; sólo cambios más omenos súbitos, que pueden provocar o no catástrofes según su interrelación con las variables sociales. Porotro lado aspira a demostrar la importancia de esos cambios súbitos en el desarrollo social. Es decir pretendecontribuir a normalizar su incorporación como una variable de la explicación, frente a una perspectivacientífica que para intentar comprender los fenómenos desacreditó su importancia, enfatizando el papel de lascausas regulares.Al fijarme en el caso de la Prehistoria más antigua (antes de la agricultura) debería quedar más clara cuál esla trascendencia de esos cambios súbitos sobre sociedades ágrafas y con poco desarrollo tecnológico. Enefecto, uno de los motores de este libro ha sido poner en cuestión el determinismo ambiental sobre lassociedades cazadoras-recolectoras que se ha dado por “supuesto” desde las más variadas posiciones teóricas.Las sociedades cazadoras-recolectoras según la visión académica predominante se habrían ido adaptandopoco a poco, fatalmente, a los lentos cambios del entorno a lo largo de los milenios. Quisiera demostrar quelos cambios bruscos en el medio ambiente también han tenido un papel crítico en el desarrollo de lassociedades prehistóricas, pero que incluso las más inermes y con menor capacidad de previsión han sidoafectadas de una forma variable dependiendo de sus estrategias económicas y sociales (de su desarrollotecnológico y de la experiencia acumulada).El estudio arqueológico de esta interacción en la Prehistoria más antigua entre cambio súbito en el medio ydesarrollo social puede aportar informaciones necesarias para entender plenamente los procesos sociales. Almismo tiempo contribuiría a demostrar, en la línea más optimista, que no estamos fatalmente condenados,que frente a cualquier cambio brusco se puede actuar. Que uno de ellos se transforme o no en catástrofedepende también de la gestión de nuestros conocimientos y de las acciones que emprendamos.

Esos son pues los objetivos determinantes del libro. Pero ha sido necesario un detonante. La inquietud queme ha llevado a desarrollar este tema fue un artículo sobre la desaparición súbita de la fauna al final de laúltima era glaciar, incluido el mamut, en la península de Taymiria, al norte de la Federación Rusa, y sureaparición en Siberia en el Holoceno avanzado. Los autores no encontraban una explicación climáticaconvincente, y atribuían el fenómeno a una causa catastrófica desconocida. El artículo fue publicado en elJournal of Archaeological Science nº 29 en el 2002, en un momento personal de maduración de miexperiencia americana y al mismo tiempo de revisión de mi trayectoria profesional al haberme decididoentonces a presentarme a una “habilitación“ a cátedra.La base sobre la que se asentó esa preocupación ha sido nuestra experiencia con el cambio climático global,que pudimos poner de manifiesto al estudiar los concheros (b) del pueblo pescador-recolector-cazadorYámana del extremo sur americano. A lo largo de nuestros proyectos hispano-argentinos pudimos percibir elcambio actual, pero también comparar los cambios históricos de la temperatura del mar y al mismo tiempoinvestigar la extinción de una sociedad cazadora-recolectora que había sobrevivido durante 6000 años en unambiente extremo, pero que no pudo superar los cambios sociales y ambientales inducidos por loscolonizadores blancos.Cuando se sale del caparazón protector de lo que alguno ha llamado la Vieja Europa se percibe con muchamás objetividad (¿perspectiva?) la trascendencia de los elementos que han regido el devenir de lassociedades: la inmensidad del territorio vacío, la magnitud de las llamadas catástrofes naturales. Lo que aquípuede ser un vendaval que azota el litoral atlántico o una granizada que echa a perder la cosecha de fruta, alláse transforma en un huracán que asola América Central o en una inundación de provincias enteras en el norte

b Las acumulaciones de los residuos de su alimentación, basada en gran medida en el consumo de mejillones y otrosmoluscos.

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argentino. La erupción de un volcán islandés que en Europa sería apenas un espectáculo televisivo de luz ysonido, se transforma en una catástrofe ganadera en centenares de kilómetros a la redonda.Este cambio de escala se puede trasponer también al ámbito de la experiencia social: lo que aquí es unapreocupante inflación del 3% aparece allá como una hiperinflación del 300% en minutos, la privatización dealgunas empresas públicas se transforma allá en la privatización completa de un país.Nuestra presencia en América se ha visto acompañada de una serie de experiencias muy directas con ese tipode factores: hemos sido testigos de las consecuencias de huracanes, deslizamientos sedimentarioscatastróficos (como los provocados por el huracán Mitch), del vulcanismo de Patagonia central (los efectosde la erupción del Hudson se hicieron notar hasta Tierra del Fuego), de mortandades catastróficas en losungulados (como la provocada por una sola noche de nevada en Tierra del Fuego durante un inviernoparticularmente frío y húmedo, que acabó con dos tercios de los ungulados salvajes y domésticos en la costanorte del Canal Beagle donde realizábamos nuestros estudios), de caos social...Sin embargo, si analizamos con rigor algunos de estos fenómenos espectaculares podremos constatar que noson tampoco extraños en Europa (pensemos en incendios forestales o en mortandades catastróficasprovocadas por epizootias, por no hablar de las catástrofes sociales de la Europa de la primera parte del sigloXX). Es muy probable que la diferencia, en más de un caso, no estribe tanto en los fenómenos en sí mismos oen su magnitud, sino en la percepción que lastra nuestro análisis de los cambios o en las circunstanciashistóricas de domesticación de los elementos, su previsión y amortiguación, así como la absorción de susefectos por la organización social y económica [372 y 175]. Sin descartar tampoco el hecho de cómo nos sonpresentados por los medios de comunicación: como algo lejano, ajeno, y finalmente traducibles a undeterminado precio monetario que ninguna persona espectadora cree que va a pagar directamente.

Otro elemento que ha contribuido a la redacción de este trabajo fue la existencia de un lapso en la ocupaciónprehistórica de la cornisa cantábrica, que evocamos al leer el problema de la curiosa anomalía en la evidenciapaleontológica de los mamuts de la península siberiana,. Este fenómeno se nos hizo evidente y lo habíamosdiscutido durante la realización de la tesis doctoral de un ex-alumno Ermengol Gassiot. Atando cabos yestirando del hilo he ido desmadejando los indicios de los fenómenos que desarrollaré en las páginas queseguirán.La numeración invertida de los capítulos no es un error de la compaginación. La he presentadovoluntariamente como una cuenta atrás. Al principio debemos ver cómo se generó una visión científicacontradictoria de la Prehistoria, que debe ser superada. Después trataremos de cómo habría que enfrentar eseproblema, cómo se define y cómo proceder a su estudio. Luego veremos los distintos tipos de cambiossúbitos con ejemplos de sus diferentes efectos en sociedades prehistóricas. Finalmente desde lo más antiguohasta hacia lo más reciente iremos dando una vuelta al mundo prehistórico analizando la trascendencia deposibles cambios bruscos.

ADVERTENCIA: EL INICIO DE UNA CUENTAATRÁSLas anécdotas y comentarios al volver de nuestras campañas de campo en Tierra del Fuego sobre cómo sepercibía allá el cambio climático y sobre nuestros avances en la investigación del cambio global despertaronuna gran curiosidad e interés (y a veces también incredulidad) entre mis compañeros y compañeras de laUniversidad. Me parece increíble que hayan transcurrido diez años antes de que esa percepción, que yacompartíamos muchos científicos, se haya popularizado tanto (hasta el nivel de que Hollywood ha producidouna película “de masas” catastrofista climática).Desearía que este libro contribuyera un poco a la comprensión de este problema. Por ello me gustaría creerque le he dado accesibilidad y fiabilidad, una forma y una sintaxis que lo haga legible (sin perder el hilo) paracualquier persona incluso ajena a nuestra especialidad. Pero no he querido renunciar al nivel y al estándar dela rigurosidad científica. Aunque prefiero utilizar términos comunes, por mi formación en un Instituto deInvestigación de “Ciencias” y por mi vocación como docente de “Ciencias Humanas” estoy de acuerdo conlas personas que piensan que no hay que tener miedo a los conceptos o palabras estandarizadas de lasdisciplinas especializadas. No son las palabras en sí las que dificultan o facilitan la comprensión, pues confrecuencia las palabras mas sencillas se usan para generar un lenguaje, una jerga “seudo científicaoscurantista”, que no hay quién entienda.

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He decorado las páginas con numerosas citas no como un ejercicio de erudición, sinó porque existennumerosas facetas, interrelaciones, conexiones y referencias a temas colaterales que son importantes y no sepueden perder pero que enmarañarían la línea argumental central y harían más difícil la lectura general. Conel mismo propósito he obviado mucha información de detalle: he renunciado a poner tablas con centenares dedatos y dataciones, pero como no me los he inventado me he preocupado de recopilar y citar la bibliografíafundamental de la que he extraído los datos. Estas referencias están al final del libro numeradas y las citas enel texto hacen referencia a esa numeración, con ello pretendo limpiar el texto central de nombresintercalados.Puede que en el lapso que va desde la redacción a la publicación surjan nuevos trabajos o datos relevantes, oque existan ya trabajos clave que me hayan pasado desapercibidos. El tema de este libro abre muchos camposy disciplinas que no es posible tratar en toda su profundidad. La ecualización ha sido inevitable. A algunaspersonas les podrá parecer que unos temas se tratan demasiado someramente y que en otros se dandemasiados sobreentendidos. Para intentar paliar este problema y a fin de ayudar en la comprensión dealgunos temas he incluido un miniglosario sintético al final. Pero además, afortunadamente la mayor parte delas personas que podemos leer este libro, tenemos el recurso a bibliotecas especializadas o bien acceso a lafuente increíble e inmediata de información que es Internet. Allá se pueden encontrar desde enciclopedias,hasta los últimos artículos de las revistas científicas punteras o incluso lecciones y cursos completos de lasmás variadas materias. Aprovechando esta facilidad la persona que me lea encontrará entre la bibliografíatambién algunas referencias a páginas en las que he encontrado información muy valiosa (inclusoconferencias) resultado de investigaciones punteras. Debido a que las páginas de referencia en Internetcambian frecuentemente de dirección es posible que en algún caso sea necesario usar un buscador y unaspalabras claves con las que, se podrá encontrar la información que se desee.Me gustaría pensar que este libro pueda ser también una incitación a la participación militante activa,especialmente en el campo de la acción científica; una provocación a quienes lo lean para que sigan leyendo,pensando y actuando.

Debo, y quiero, reseñar que este libro hubiera sido imposible sin la intervención de otras personas. En primerlugar de Assumpció Vila con la que he compartido todo durante más de treinta años y me ha alentadoespecialmente en este trabajo. La exposición de algunas de las ideas de este libro a los miembros de nuestroequipo de investigación, a amig@s como Nines Querol y a mis alumn@s ha contribuido a aclararme ypresentarlas mejor. La discusión con nuestros colegas americanos José López Mazz y Ernesto Piana ha sidode gran ayuda para el capítulo sobre las extinciones sudamericanas. Marian Cueto me ha ayudado con elcapítulo sobre la cornisa cantábrica. Finalmente, también me azuzaron a escribirlo y me convencieron de suutilidad los contradictorios comentarios, públicos y privados, del tribunal “habilitador” y el adverso resultadodel concurso.

Bellaterra, 12 Octubre 2004

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PARTE PRIMERA: CATÁSTROFES Y CAMBIOSÚBITO

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10. DESARROLLO DEL ANÁLISIS CIENTÍFICO DELCAMBIOLos conocimientos que hoy tenemos sobre las sociedades prehistóricas [301] se han ido produciendo comoconsecuencia de la labor científica del siglo XX [105]. Pero de un modo general podríamos decir que ese sigloha sido el heredero de las teorías del siglo precedente, en el sentido que durante su transcurso se intentaroncomprobar o verificar y confrontar, llevándolas a la práctica, las teorías científicas, económicas y políticasque se habían formulado previamente.

El siglo XIX, con el desarrollo de la ciencia en la sociedad europea, vio aparecer los primeros ensayos deexplicación de los cambios. En el campo académico de la Paleontología se estableció una pugna entre lasposiciones catastrofistas representadas paradigmáticamente por Cuvier (a) y las teorías gradualistas que seenraizaban en las primeras formulaciones de leyes científicas: el Uniformitarismo y el Actualismo oRealismo, propias de la Geología y desarrolladas, entre otros, por los trabajos de Charles Lyell (b).

Figura 1. El Barón Cuvier y Charles Darwin, decorando el frontispicio del Museo de Ciencias de La Plata(Argentina).

Las Ciencias Sociales, y por tanto la Historia, vieron aparecer también ensayos explicativos del cambio socialcomo por ejemplo las propuestas de Thomas Malthus (c). Pero sería con Charles Darwin (d) y a partir del

a El Barón Georges Cuvier en su “Ensayo de teoría sobre la Tierra” (1817) relacionaba las extinciones con catástrofes desubida y bajada del nivel del mar. Ello que le permitía enlazar con el conveniente referente bíblico del Arca de Noé ycompatibilizar la mitología religiosa con un relato científico.

b Charles Lyell, en sus “Principles of Geology” (1833) postulaba que en lugar de catástrofes, de inundaciones causadaspor el cambio del nivel del mar, vulcanismo… hubo procesos lentos, como los que se pueden observar en la actualidad yque NO haría falta recurrir al catastrofismo si conociéramos bien los procesos evolutivos y como se acumulangradualmente sus efectos.

c El clérigo y economista Thomas Robert Malthus (1766-1834), “An essay on the principle of population as it affects thefuture improvement of society” (1789) planteó el problema de la superpoblación, contra la que aconsejaba la limitación de

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Evolucionismo cuando se estableció el nexo entre las ciencias sociales y las naturales a través de lasexplicaciones sociales evolucionistas -desde Lewis Morgan(e), Quatrefages(f), los biólogos anatomistas...hastaKarl Marx (g) y sobre todo Friedrich Engels (h).

La pugna entre las dos posiciones, Gradualismo - Catastrofismo, aunque atravesaba otros antagonismos, seencontraba desequilibrada a finales del siglo XIX. Las explicaciones científicas materialistas optaron por elGradualismo y el Realismo. El Catastrofismo en cambio se convirtió en el refugio de las posturas idealistas ymetafísicas, que lo consideraron más compatible con el relato mitológico bíblico literal -de Creación en sietedías, Diluvio, plagas y otros castigos divinos.

Figura 2. Friedrich Engels

A pesar de que en el mismo siglo XIX existió una tercera posibilidad, que científicamente superaba elantagonismo entre esas dos posiciones, no fue totalmente publicada hasta el siglo XX. En efecto, los ensayossociales de Marx y sobre todo el manuscrito de Engels “Dialéctica de la Naturaleza” permitían superar eseprimer antagonismo, pero podemos afirmar que en el siglo XIX tuvieron poca trascendencia en el ámbitocientífico y académico (i). El fuerte compromiso social que se derivaba de los trabajos de esos autoresprovocó su rechazo por parte de la Academia, originada con la burguesía y comprometida mayoritariamentecon esa clase social dominante.

matrimonios y la continencia. Puede ser considerado uno de los pioneros de la aplicación de las ecuaciones integrales a lassociedades humanas al plantear la ecuación de crecimiento exponencial: xj+1=kxj

d Charles Darwin “The origin of species…”, 1859; y “The Descent of Man and Selection in Relation to Sex” , 1871.

e Lewis Henry Morgan (1818-1881) “Ancien Society”, 1864.

f Jean Louis Armand de Quatrefages de Breau (1810-1892), “L’unité de l’espèce humaine”, 1961 y “L’espéce humaine”,1877. Zoólogo y anatomista antagonista del darwinismo postulaba la particular peculiaridad espiritual de la especiehumana.

g Karl Marx (1818-1883) “Das Kapital, Kritik der politischen Öconomie”, Vol. I, 1867).

h Friedrich Engels (1820-1895) “Der Ursprung der Familie, des Privateigenthums und des Staats”, 1884.

i El manuscrito que Friedrich Engels sobre “Dialéctica de la Naturaleza” había ido elaborando desde 1873 quedóinconcluso al morir Karl Marx en 1883 y dedicarse Engels a partir de entonces a compilar “El Capital” y a la actividadpolítica. No se publicó entero hasta 1925, pero hubo resúmenes o partes publicados en revistas reivindicativas (verprefacio a la obra de Engels en la edición de Akal, 1978 :22)[99].

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A finales de ese siglo se estableció un cierto consenso que, más que superar la dualidad de las posturas, hizoresurgir una separación entre las ciencias sociales y las naturales. El Gradualismo fue adoptado como laposición científica oficial en el campo de la Paleontología y en el de la Geología, mientras que se dejaba en unimpreciso limbo la explicación del cambio social. Éste se hallaría sometido a elementos idealistas intrínsecoscomo los preconizados por el Particularismo y la Historia Cultural de carácter fuertemente catastrofista: cadapueblo o cultura reemplazaba a la precedente moribunda.Así, mientras se producían teorías de gran poder predictivo y resistencia como la curva de Milankovitch (j)sobre la influencia de la orbita terrestre en los cambios climáticos, en la investigación sobre las sociedadesprehistóricas sólo se pugnaba por establecer una descripción consensuada de las secuencias culturales, de lasucesión de culturas (k).

Figura 3. Curva de Milankovitch de la intensidad solar que resultaría de los cambios en la órbita terrestre enfunción de las tres variables de excentricidad, oblicuidad y precesión del eje de rotación de nuestro planeta.

No sería hasta la segunda mitad del siglo XX que se planteasen objeciones y alternativas en los dos ámbitos,aunque en sentidos contrarios. Así el equilibrio puntual, el mutacionismo, el neutralismo y las teorías de lasextinciones catastróficas por factores mecánicos externos y aleatorios (como el impacto de meteoritos)volvieron a ganar terreno en las ciencias de la Naturaleza.(l).

j El astrofísico Milutin Milankovitch (1879-1958) desarrolló a partir de 1912 la teoría matemática de las variaciones de laradiación solar en función de los ciclos de la excentricidad (90-100ka), la oblicuidad (40ka) y la precesión (27ka) de larotación de la Tierra. “Théorie mathématique des phénomènes thermiques produits par la radiation solaire”, 1920.

k Para seguir un desarrollo detallado de la evolución de los estudios sobre la Prehistoria más antigua en la Península ver[105]

l La Teoría de Síntesis permite comprender que no existe cambio gradual (especiación evolutiva) sin cambio súbito(mutación). Para seguir el desarrollo de estas teorías sobre la Evolución de las Especies hasta el desarrollo delsaltacionismo son especialmente interesantes los libros divulgativos de Stephen Jay Gould [145 y 146].

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Por el contrario el Funcionalismo neoevolucionista, el Adaptacionismo o en nuestro campo concreto teoríascomo por ejemplo la del Sintetotipo de Georges Laplace (m) intentaron reintroducir el aspecto normativo y lapredictividad en los estudios de Prehistoria. La Arqueología procesual, asumiendo un estado de homeostasis yequilibrio del sistema social, ha tendido a rechazar la idea de que los cambios bruscos hayan causado cambiospermanentes en las sociedades. La misma Nueva Arqueología americana (n) y sus herederas, la Arqueologíamaterialista cultural o la Ecología cultural, han asumido una explicación gradualista de “adaptación” social alas grandes tendencias de los cambios ambientales (o).Pero en la práctica de las dos posiciones teóricas –la idealista y la materialista cultural- que han sidopredominantes en la Arqueología de Sociedades Cazadoras-Recolectoras en el último cuarto del siglo XX hanacabado confluyendo en la propuesta de una visión gradualista del pasado.La primera, representada por la Historia Cultural, ha tendido a considerar el registro arqueológico comorepresentativo de periodos uniformes. Durante esos períodos la sociedad se habría mantenido estáticareproduciendo rígidamente (aunque se pudieran admitir ligeras variaciones menores por “aculturación”,préstamos culturales o variaciones regionales, denominadas “facies”) el mismo patrón o “norma cultural”. Setomó prestado de la Geología no sólo el concepto de fósil director, sinó también el nivel geológico comounidad de discriminación temporal. Aunque pocas veces se explicitaban había dos corolarios principales. Elprimero era que las culturas habrían cambiado de golpe al cambiar el estrato. Con ello aparecía una paradoja:el cambio cultural, es decir la sustitución de una cultura por otra (fenómeno que se había atribuido a suscaracterísticas intrínsecas) se producía coincidiendo con el fenómeno geológico que habia provocado uncambio en la estratificación. El segundo corolario es que el contenido de cada estrato era una muestrarepresentativa producto de todas las actividades de cada cultura, independientemente del tiempo realtranscurrido en la formación del estrato (p). Así daba igual que este tuviera 5 o 50 cm de grosor y que fuera laconsecuencia de una arroyada o de una sedimentación fina.La segunda corriente teórica, representada por el Neofuncionalismo, comenzó la explicación desde unlamarkismo (q) remanente. Así ha propugnado que “la Adaptación (en este caso la necesidad) crea el útil”,achatando la dimensión temporal (porque la respuesta a la necesidad tiene un carácter coyuntural). El registrosería la consecuencia de las respuestas humanas a las necesidades de cada momento. Es decir que lascondiciones ambientales han producido o seleccionado las mejores respuestas adaptativas humanas. En lapráctica, esta segunda posición ha tendido a considerar además que el registro arqueológico es normalmenteuna evidencia de “grano grueso”(r), un palimpsesto suma de muchas ocupaciones o actividades. Esto es, quecada yacimiento es una muestra aleatoria, representativa de la suma yuxtapuesta e indiferenciable de lasactividades producidas durante mucho tiempo. La paradoja se da aquí porque este argumento daría una m Laplace en su tesis “Recherches sur l'origine et evolution des complexes leptolhitiques” (1966) y con su Teoría delSintetotipo “Les niveaux aurignaciens et l'hypothese du synthetotype” (1968) planteaba una evolución filética de lasindustrias prehistóricas en correlación con las oscilaciones climáticas, parangonable a la de la evolución y mutación de lasespecies o ecosistemas, e intentando correlacionarla después con el modelo de la dinámica del ciclotema obrotérmico deP. Rey [307].

n El paradigma es sin duda Lewis Binford, “Bones, ancient men and moderns myth” (1980), quien enfatizaba el carácterpredominantemente de “palimpsesto” de los registros arqueológicos normales –captados como un muestreo o “lluvia” deelementos materiales a lo largo de un periodo largo e indefinido-, y la rareza de los registros “pompeyanos” o de “granofino” generados durante un episodio discreto y corto.

o Para una visión general de qué representa cada posición teórica en Arqueología se puede consultar el manualuniversitario [25]. Para una visión general de la Prehistoria de cazadores recolectoes en Europa [301].

p Sólo así se justificaría su metodología de comparar los registros arqueológicos de paquetes estratigráficos cuya duraciónes totalmente desconocida mediante gráficas acumulativas de tipos cerrados, que es el instrumento analítico que se empleasiguiendo la propuesta de François Bordes en “Principes d’une méthode d’étude des techniques et de la typologie duPaléolithique ancien et moyen”, 1950.

q Aunque no era exactamente así [ver 146], la teoría evolutiva de Lamarck se ha “vulgarizado” postulando que: laEvolución se ha producido porque los animales han “tenido” que adaptarse al medio. Sólo los que han “logrado” cambiarhan sobrevivido dejando a su descendencia los nuevos caracteres “adquiridos”.

r Se utilizó en la metáfora la terminología de la fotografía tradicional, hoy siguiendo la terminología de la imagen digitalhablarían de “imagen de baja resolución”, terminología que sería más precisa.

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justificación ineludible a practicantes de la Historia Cultural antagónica: si cada registro fuera una muestraaleatoria de la suma de actividades de cada sociedad durante un largo periodo, entonces las diferencias entreyacimientos de una misma sociedad serían aleatorias y no significativas de distintas actividades, ni productode la respuesta a diferentes necesidades conyunturales concretas. En consecuencia si observaran diferenciasentre yacimientos dependerían (en contra de su propio postulado) de factores “culturales, ideológicos,metafísicos”, a menos que se hubieran mantenido estáticas las condiciones paleo-ambientales que generan lasnecesidades y sus respuestas. Sólo así podría explicarse que un determinado patrón funcional o deasentamiento se mantuviera generando una serie de palimsestos diferenciados (yacimientos utilizadosrepetidamente como campamentos base, lugares seculares de caza o carnicería…).Poco a poco la perspectiva adaptacionista determinista de la Nueva Arqueología neofuncionalista ha sidoparcialmente adoptada por la historiografía contraria, en gran medida por imitación cientifista (porque alincorporar unos apéndices con el análisis económico y del paleoambiente aparece como más científica) y porpolítica académica (porque los nuevos aires que dominan la Academia en general proceden, como la NuevaArqueología, de Norteamérica). Así la investigación académica tradicional (vinculada aún a la explicaciónidealista Histórico-Cultural) ha “aceptado” en parte la importancia de los grandes cambios climáticos para laexplicación del cambio social en la Prehistoria más antigua. Aunque sigue manteniendo que el cambio en síconsiste en la sustitución de unas culturas por otras.Frente a la aproximación tradicional Histórico - Cultural o a la funcionalista y determinista el MaterialismoHistórico –heredero de Marx y Engels- ha señalado que el desarrollo gradual de las fuerzas productivasproduce saltos revolucionarios en la organización de las sociedades, enfatizando las contradicciones socialesinternas como motor del cambio. Sin embargo algunos trabajos enmarcados dentro de esta corriente depensamiento también han aceptado que es la interacción con las lentas transformaciones del medio natural loque explica el desarrollo social en las primeras fases de la Humanidad prehistórica (s).Así hoy, el cambio social perceptible en Prehistoria se concibe mayoritariamente como un fenómeno gradualen el que no tienen cabida explicativa los cambios súbitos (t).

Sin embargo en su praxis la Arqueología histórico-cultural ha proporcionado suficientes evidencias deasociaciones de elementos significativas no perturbadas por ocupaciones sucesivas. De esta manera hadesmentido el carácter universal de palimpsesto. Es decir ha demostrado que el registro no se puedeconsiderar homogeneo a lo largo de todo el periodo tiempo representado en un mismo estrato. Incluso hapuesto de manifiesto que en un mismo estrato geológico pueden superponerse registros de lo que considera“culturas” diferentes. La Arqueología funcionalista por su parte ha admitido siempre la existencia de registros“pompeyanos” de alta resolución, aunque nunca ha teorizado en cómo se combinan en la práctica con losotros. Tampoco ha tenido en cuenta la contradicción que supone proponer procesos lentos de adaptacióncultural y cambios paulatinos en el medio ambiente frente a la evidencia de cambios nítidos y bruscos en lasestratificaciones.En definitiva no se ha afrontado como debe acometerse el estudio de esta realidad compleja y aparentementecontradictoria.

s Probablemente la falta de información sobre esas fases históricas más antiguas – y el énfasis de su interés en lassociedades de clases- ha hecho que en el Materialismo histórico se insistiera poco en la aplicación de las leyes básicas dela Dialéctica Materialista con todas sus consecuencias para la Prehistoria: la ley de unidad de la materia a través delmovimiento y la concatenación universal de los fenómenos obligaría a tener en cuenta la influencia de los eventosambientales incluso en el desarrollo de las sociedades clasistas, aunque fuera como elemento secundario. La misma ley dela transformación de cantidad en calidad debería tenerse en cuenta para explicar otros saltos cualitativos no sólo paraexplicar las “revoluciones sociales”. Esto es, debería haberse considerado la posibilidad de una evolución no lineal en loscambios ambientales y la repercusión de los cambios bruscos sobre las sociedades. Gordon Childe (1892-1957) desde suposicionamiento materialista histórico fue una de las pocas personas que tuvo en cuenta esta concatenación desarrollandoel concepto de “Revolución neolítica”.

t Las catástrofes naturales, incluidos los impactos meteoríticos, que han ganado credibilidad en Paleontología por ejemplo,han sido “convenientemente” expurgados de los relatos históricos científicos y arrinconados en la Mitología, dejados “alalbedrío divino”.

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CAMBIO LENTO, CAMBIO BRUSCO, TEORÍA DEL CAOS ODIALÉCTICA DE LOS SALTOS DE ESTADO.En Arqueología de sociedades cazadores-recolectoras prehistóricas, ya en los años setenta se hicieron algunostanteos de enfrentarse al problema de la complejidad que supone la consideración de las distintas escalastemporales (u). Pero la nueva visión que han desarrollado las ciencias paleoambientales acerca de cambios nolineales en el medioambiente no se ha correlacionado con una nueva explicación social. Así paradójicamentela explicación arqueológica de los cambios en la sociedad ahora está dominada por el gradualismo adaptativoy es refractaria a la aceptación de saltacionismos en la esfera social (v). Mientras tanto la Paleoecología tienecada vez más en cuenta los cambios ambientales y evolutivos bruscos. En efecto a finales del siglo XX, se haabierto paso en las ciencias naturales, la Teoría del Caos determinista frente a la aleatoriedad (w).Esta teoría y las que han seguido -la Teoría de la Complejidad emergente, la Autosimilitud inherente aalgunos procesos, como los fractales, la Dinámica no lineal intermitente, la Criticalidad de los sistemasautoorganizados, las leyes de potencia…- han sido impulsadas desde la Física, la Matemática y laMeteorología pero han sido adoptadas y desarrolladas también desde la Biología, y especialmente desde laEcología de poblaciones. Para algunas Ciencias Naturales vienen a ser, desde mi perspectiva, el mismo tipode revulsivo que supuso para la Arqueología la denominada “Nueva Arqueología Americana” de los añossetenta.Esta nueva orientación es probablemente consecuencia, en parte, del propio desarrollo económico e industrialcomo una respuesta para incrementar, por ejemplo, la eficacia de ciertos procesos y mecanismosautomatizados. También ha tenido la finalidad y está promovida por la necesidad de prever los efectos ocontrolar los problemas generados por ese mismo desarrollo tecnológico.No voy a negar que existen en este nuevo acercamiento elementos muy interesantes. Entre otros, por ejemplo,la superación del pensamiento mecanicista unilineal, que iba de forma obsesiva en pos de una relaciónunívoca causa–efecto. Pero la fascinación por la presunta novedad, como si fuera una atracción hipnótica porlas figuras fractales que emergen de la ecuación de Benoit Mandelbrot (x), ha producido también muchasleyes o teoremas generales del tipo que la Arqueología había denominado “leyes Mickey Mouse” (y).En efecto es normal que las teorías científicas surjan contaminadas de y por su ambiente social y que, una vezformalizadas, sean recicladas de nuevo por el conjunto social. Así no se edifica mejor conocimiento científico

u G.Bailey, paleolitista de la escuela Paleoeconómica de Cambridge planteó en 1983 [26] el problema de las escalastemporales y de cómo el salto de una escala de tiempo a otra otra puede conciliar diferentes aproximaciones teóricas-metodológicas a través de un cambio en el énfasis en los factores causales del cambio social.

v Quien sabe si influenciada por la necesidad de una política conservadora o suavemente reformista. En esa esfera de laintrascendencia política se daría una convergencia entre una postura neutralista neo-evolucionista y un escepticismonihilista representado por el postprocesualismo postmoderno. Mientras que por el otro extremo, en el ámbito científicosería posible que coincidieran descripciones del Idealismo histórico cultural con algunas explicaciones científicasmaterialistas (como demuestra el caso del propio Gordon Childe).

w La Teoría del Caos Determinista no cuestiona las leyes físicas, pero el estudio de las ecuaciones clásicas aparentementemás simples demuestra (igual que en el caso del péndulo que se mueve entre tres imanes) que muy a menudo éstas tienensoluciones inesperadas. Así el determinismo más estricto es completamente compatible con la impredictibilidad másabsoluta en la evolución temporal de un sistema. En un sistema caótico hasta un cierto punto se pueden hacer prediccionesconvencionales. Pero cuando en unas ecuaciones aparecen unos parámetros de los que dependen las soluciones, la mismaecuación (superado cierto dintel ínfimo) origina soluciones cualitativamente diferentes (pasa de la regularidad a unassoluciones caóticas) según los valores que tomen sus parámetros. Son ecuaciones como por ejemplo la logística queexpresa la forma lógica del funcionamiento de una relación ecológica.

x Benoit Mandelbrot "The Fractal Geometry of Nature" en 1977 [237]: Un fractal es un forma geométrica que permaneceincambiada cualquiera sea el aumento con el que se la observe. Esta propiedad recibe el nombre de autosemejanza. Lasfiguras se generan a partir de la fórmula Zn = Z(n-+1)

2 + c. Se basa en que una curva cualquiera no es derivable a partir deun punto cuando, aun existiendo ese punto, forma un pico o esquina. La característica especial del fractal Mandelbrot esque genera un infinito conjunto de fractales, ya que en cada uno de sus puntos se puede generar un nuevo fractal [375]. EnArqueología española hubo un ensayo de teorización y aplicación de fractales en [310].

y La Arqueología tradicional (Flannery por ejemplo) trató de ridiculizar algunos ensayos de formalizar, en enunciados tipoley, relaciones tan evidentes que podrían calificarse de “perogrullada”.

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sino que se construyen nuevos instrumentos ideológicos que a su vez, como en una espiral / círculo vicioso,actúan como elemento explicativo de la realidad de la que han surgido.

Figura 4. Representación gráfica resultante de la ecuación Fractal de Mandelbrot (Figuras de Mandelbrot en[183])

De esta guisa se han formulado frases como: “La materia se organiza porque la autoorganización es unaforma natural de que las cosas cumplan con las leyes de la mecánica cuántica y de la mecánica estadística”,que en esencia no son más que poesía científista. La transpolación abusiva tiene que ver también condeterminadas necesidades de justificación ideológica. No podemos por menos que desconfiar cuando, inclusoa nivel popular, se habla de “Complejidad emergente” para justificar la “Autorganización (es decirautorregulación) del Mercado libre al margen de los agentes sociales”. Ello no significa más que unapretendida naturalización pseudo-científica del “neoliberalismo absoluto”. De igual manera cuando sedescribe la mágica solución de una “Internet como un sistema complejo emergente autorregulado, basado enla complejidad de la estructura fractal del hipertexto”, también se está haciendo un puro ejercicio semántico.Frecuentemente, por un sentimiento de impotencia ante la necesidad desorbitada de datos o de afinar en lasvariaciones mínimas, de algunas de las ecuaciones que se manejan, se cae en un relativismo inmovilizador. ElCaos y la Complejidad se toman entonces como coartada para un agnosticismo científico que se declaraincapaz de la explicación frente a la impredictibilidad de la dinámica de los fenómenos reales complejos.

Desde mi perspectiva, además del abuso de teoremas y del concepto de la autorganización (probablemente enmuchos casos se ha confundido nuestra ignorancia sobre los parámetros de control de fenómenos críticosestándar con sistemas autoorganizados), uno de los problemas principales es que sólo se ha tratado dedescribir una serie de fenómenos interconectados aparentemente de forma inconstante, lo cual no equivale aexplicar sus causas.Aún así hay ensayos prácticos de control de las variables, ensayos de utilización de redes neuronales y de lalógica difusa que son muy interesantes, por cuanto intentan replicar los fenómenos controlando las variables omanipulando las “cajas negras”. Pero eso tampoco equivale necesariamente a encontrar las causas ymecanismos reales (z).Probablemente, como han reconocido algunos autores, falta desarrollar una teoría que unifique conceptos dedinámica no lineal, geometría fractal y Criticalidad autoorganizada (aa).

z Sabemos por ejemplo que un fenómeno no lineal determinístico y uno lineal estocástico (azaroso probabilístico) puedentener el mismo espectro de potencia.

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Algún autor optimista señala el surgimiento de una “nueva ciencia”, la integradora y dialéctica de los sistemascomplejos: los saltos cualitativos (de estado) son denominados “cambios de una cuenca de atracción a otra.”En realidad toda esta aproximación viene a ser, en parte, el “redescubrimiento” de la dialéctica hegeliana (bb).Algunos autores implicados reivindican en efecto la herencia de la dialéctica materialista marxista [269 y 53].Y en cierta medida, no es sino un redescubrimiento o reformulación de la Dialéctica de la Naturaleza, almenos en cuanto permite conciliar (aunque no necesariamente superar) esa contradicción entre los cambiosgraduales cuantitativos y los cambios bruscos saltacionales o de estado cualitativo (cc). Sin embargo le suelefaltar entre otras cosas el principio dialéctico de la unidad de contrarios.

aa Existe en este sentido una página en Internet [164], que es muy interesante confrontarla con la perspectiva en [406].

bb Los fractales se han definido como “modelo Geométrico de funciones iteradas que contiene puntos de estabilidad,mezclados con inestabilidad (cambios cualitativos abruptos) y regiones de límites mutables”. [375] Criticalidadautorganizada se da cuando los sistemas cambian de fase de forma espontánea (auto-organizada). En definitiva es laintroducción del salto cualitativo en la serie cuantitativa continua, una ley bien conocida de la Dialéctica; pero Engels ensu manuscrito había ido más allá y resaltaba tres leyes de la Dialéctica [99 p.58]: la de la transformación de cantidad encalidad y a la inversa; la ley de la interpenetración de los contrarios o de la unidad y lucha de contrarios y la ley de lanegación de la negación.

cc Engels como objetivo de su trabajo Dialéctica de la Naturaleza había señalado, la necesidad de entender lacomplejidad, la unicidad entre los procesos naturales e históricos y criticado el mecanicismo (y el gradualismo) al escribir:“…en la Naturaleza, en medio de la multitud de innumerables cambios, se abren paso las mismas leyes dialécticas delmovimiento que en la historia gobiernan el surgimiento, en apariencia fortuito, de los acontecimientos…” y que las leyesdel cambio en seres vivos funcionan en condiciones de suma complejidad por lo que por el momento las medicionescuantitativas nos resultan muy a menudo imposibles. K.Marx por su parte dedicó buena parte de su trabajo en los últimosaños a dar una perspectiva dialéctica al cálculo diferencial. El primer autor subrayaba que dado el nivel de desarrollo delas ciencias, la perspectiva dialéctica materialista era una necesidad absoluta, pero reconocía que la falta de reflexiónteórica llevaba los científicos a una adopción lenta e inconsciente de esos principios. También señaló la unión decontrarios entre “casualidad y necesidad” y vaticinó el carácter inmovilizador de afrontar la complejidad sin tener encuenta esa unión de contrarios.

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Figura 5. Gráfica [extraída de 184]. que muestra la Bifurcación de Feigenbaum. A partir de un valor de µupróximo a 3, la variable x(n) puede tomar valores muy diferentes. Es el límite del caos. Es anecdóticamente casual

que la palabra alemana "Feigenbaum" en castellano signifique higuera, y que “estar en la higuera” sea una frase queexpresa el despiste.

En este contexto el concepto de Caos determinista, el papel de los Atractores (dd) y el del Estado inicial de unsistema se utilizan para explicar fenómenos cuya mecánica no responde al azar pero cuyo desenlace finaldepende de tal multiplicidad de variables que nos es imposible controlarlas y modelizar el movimiento conprecisión o establecer un vínculo entre la magnitud de la causa y el efecto. Este concepto de Caos no essinónimo de desorden como podría parecer en el lenguaje común. Viene a ser una expresión de inestabilidad,de secuencia de concatenaciones causa / efecto que por la intervención en origen de variables pocosignificativas acaban produciendo fenómenos particulares dificilmente predecibles en origen.

Pienso que una salida del laberinto sin escalas (del tipo del de los espejismos fractales) es justamente definiresas escalas, determinar las discontinuidades jerarquizando las causas y fijando las relaciones más que loscomponentes.

dd Atractor es una región del espacio de las fases de los sistemas disipativos hacia la cual convergen las trayectorias queparten de una determinada región, llamada cuenca del atractor. También se ha definido como una singularidad en el"espacio de acción" donde ocurre un fenómeno, hacia el cual convergen las trayectorias de una dinámica dada, queencuentran en su atractor una condición local de mínima energía. Dicho de otro modo los atractores, son zonas quedelimitan el comportamiento de variables en aparente desorden, a las cuales tienden los sistemas dinámicos. Por ejemploen la trayectoria de un péndulo o en un "valle" el punto más bajo.

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Hay que atenerse al principio de Parsimonia de Occam: hay que buscar el modelo más parsimonioso, el mássencillo que explique la complejidad. Sólo hay que recurrir a la multicausalidad cuando es imprescindible (lasentidades no deben multiplicarse más de lo necesario).La coevolución de los sistemas, las ecuaciones diferenciales más sencillas como la ecuación logísticapermiten describir fenómenos complejos, identificar patrones evolutivos o plantear conjeturas acerca deaspectos cualitativos esenciales en los procesos.En este sentido vale la pena recoger una cita larga: “La realidad social puede matematizarse no con lapretensión de predecir la sucesión de acontecimientos sino para identificar sus cualidades y pautasintrínsecas de comportamiento y superar el pasmo asociado a la pura acumulación de datos estadísticos quenunca constituyen, por sí mismos, una ciencia o una teoría.Los sistemas sociales son abiertos, dinámicos, intercambian energía, información con su entorno. Por lotanto operan lejos del equilibrio termodinámico. Pero los cambios no son azarosos porque están acotados.Merced solamente a la dinámica interna se produce un funcionamiento coherente.” [164].

En realidad en la práctica tenemos ejemplos antiquísimos que pueden ayudar a entender de que se trata. Unejemplo que se me ocurre es el del ajedrez: una reducida serie de reglas y dos jugadores permiten un juego deposibilidades ilimitadas y de resultados poco predecibles. También puede entenderse con una metáfora másmoderna: las tradicionales máquinas de millón (“pinball”). En este juego mecánico, de entrada sabemos quela bola va a acabar cayendo inevitablemente por el agujero, sabemos porqué rueda la bola, sabemos que laacción humana va a tratar de contraponerse a ese efecto fatal de la fuerza de gravedad. Lo que nos esimposible predecir con exactitud es por donde va a pasar o cuanto va a tardar en producirse el final de lapartida (depende tanto de la trayectoria inicial como de la interferencia de las reacciones humanas). Sinembargo la familiaridad con la máquina permitía al jugador intentar influir en el resultado y dar de entrada ala bola el impulso que consideraba más adecuado para sus intereses y ayudarlos con suaves golpecitos con lapelvis.Aunque esos sistemas se comportan aparentemente de una forma caótica y poco predecible en realidad se hancreado modelos matemáticos y juegos que reproducen con bastante exactitud el funcionamiento. En realidadlo que vemos en un juego informático de “pinball” no es más que un modelo, un programa basado enalgoritmos perfectamente manipulables. Este sencillo ejemplo demuestra que se pueden simular y programary por tanto aprehender procesos en apariencia impredecibles y caoticos simpre y cuando definamos la escalade las predicciones o conozcamos con suficiente detalle el juego de las variables implicadas.La introducción en la consideración científica paleoecológica de la interacción de la pequeña escala micro conla escala macro tiene también ejemplos muy interesantes. El concepto de “disturbio” en Ecología, porejemplo, tiene un papel clave para comprender la dinámica de regeneración de los ecosistemas, y por tanto dela continuidad de las especies. Así se ha podido comprender el papel fundamental en la regeneración de losbosques de disturbios tales como los incendios forestales naturales, y los aludes o corrimientos de tierras (ee).Sin pretender negar la importancia trascendental de los cambios sustantivos macro a largo plazo, la preguntaque cabe hacer es cómo se articulan éstos con los cambios a corto plazo (cambios súbitos), y también cómolos pequeños cambios cuantitativos muy graduales se transforman, por un efecto acumulado o añadido a otrosfactores, en un cambio brusco de fase o cualitativo. (ff)

El tema que voy a plantear a continuación va a ser el de los posibles efectos de este tipo de fenómenos sobrelas sociedades cazadoras-recolectoras del pasado.Una cuestión pertinente sería, por ejemplo. ¿cómo podría haber afectado a un tipo de sociedad como laindígena de Tierra del Fuego, que basara su supervivencia cotidiana en los mejillones, una marea rojaendémica persistente como la que vivimos directamente allí desde 1990 (y que dicho sea de paso casi acabócon todo nuestro campamento durante las excavaciones del sitio Túnel VII).

ee La perspectiva por ejemplo de que el bosque crece hacia afuera es fundamental para valorar más adecuadamentefenómenos, como los que nos van a interesar, de reforestación rápida en las terminaciones climáticas bruscas.

ff Es lógico pensar que el primer tipo de cambio gradual puede explicar el porqué no había poblamiento humano haceveinte mil años en Inglaterra, cuando estaba cubierta por una capa de hielo de más de un kilómetro de espesor. Pero espoco probable que ese largo plazo haya incidido en las decisiones sociales; que haya sido ese grosor del hielo lo queprovocase la decisión y la reacción humana de abandonar la isla. Tendremos que pensar más bien que fueron alguna otraserie de pequeños cambios bruscos los que pudieron provocar esas decisiones en las comunidades humanas.

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En general me pregunto: ¿hasta qué punto estamos capacitados en Arqueología prehistórica para captar (yevaluar) los efectos de este tipo de eventos de corta duración y apariencia caótica? Si tienen, como handemostrado en Ecología, un papel fundamental en la dinámica de las poblaciones y por ello en la evoluciónfinal de las especies, deberíamos pensar que, por extrapolación, tal vez hayan tenido aún más trascendencia enla propia evolución de las sociedades humanas.(gg)

Para realizar este ensayo he investigado diferentes factores que consideramos susceptibles de cambio brusco,y buscado ejemplos que se perciben como agujeros en la evidencia, tales como extinciones o rupturas en elregistro arqueológico. He utilizado como elementos de control lo que se conoce acerca de la dinámica actualde poblaciones animales, de los cambios bióticos y abióticos (geológicos, atmosféricos y extraterrestres), quepueden ser representados a su vez por ese tipo de ecuaciones que expresan la dinámica del Caos determinista.Si, como pienso, ese llamado Caos es como mínimo producto de la superposición y la mutua influencia deciclos de diferente frecuencia sintónica, este ensayo sólo puede ser, de momento, heurístico. Aunque existenecuaciones relativamente sencillas (hh) que se han usado para ilustrar ese tipo de eventos en la dinámica depoblaciones, o procedimientos más sofisticados como los algoritmos de filtrado, en el estado actual denuestros conocimientos respecto a la Prehistoria antigua es difícil ahora mismo filtrar el ruido producido porlos errores de medida (ii).Sin embargo creo que vale la pena realizar una primera aproximación a la generalidad de estos fenómenos. Laapreciación de si es posible de verificarlos es muy relevante en este momento para evaluar y re-enfocar laencuesta arqueológica.

CATÁSTROFE Y CAMBIO SÚBITO: DEFINICIÓN DE ALGUNOSCONCEPTOS:En primer lugar y sin ánimo de exhaustividad voy a definir desde mi propio punto de vista ciertos conceptosque son claves para situar la discusión del tema.He mencionado la palabra catastrofismo. Esta es una de las primeras definiciones que hay que abordar:La palabra catástrofe, independientemente de la controversia sobre los límites de su definición [372], tiene unénfasis semántico en el aspecto negativo. Se identifica con desastre (algo ruinoso, perjudicial, trágico…).Si, como hemos expuesto, la propia ley de la Evolución responde a un mecanismo de selección, siefectivamente son necesarios eventos bruscos, saltos cualitativos o rupturas para asegurar la persistencia,entonces la palabra catástrofe por su connotación negativa no debe ser adecuada para los cambios quequeremos tratar. Lo que para una sociedad o una población o una especie puede tener un carácter negativopuede ser beneficioso para otra. Catástrofe pues es un término relativo. Pero no sólo por esta negatividad sinoporque hace referencia más al efecto que a la causa en sí. El mismo cambio puede producir efectos distintos /opuestos en una sociedad dependiendo desde factores aleatorios, hasta vectores internos de la propiaorganización social afectada. Un ejemplo serían las inundaciones de rios: pueden ser catastróficas o

gg Independientemente de catástrofes de la Antigüedad clásica conocidas históricamente y registradas por la Arqueología,como la famosa erupción del Vesubio o la famosa erupción de Tera hace 3632 años en la isla Santorini, sólorecientemente y de forma aislada empiezan a ser considerados por la Arqueología fenómenos de cambio súbito y se hanorganizado algunos coloquios. Pero las contribuciones siguen siendo presentadas prioritariamente desde las CienciasNaturales y se han centrado en periodos recientes como por ejemplo el titulado “Environmental Catastrophes andRecoveries in the Holocene", organizado en 2002 por Suzanne Leroy y Iain Stewart del Department of Geography &Earth Sciences en la Brunel University de Uxbridge, Reino Unido [393].

hh Por ejemplo la "ecuación logística" de la que he hablado, formulada en 1845 por P. F. Verhulst (1804-1849):Xn+1=c Xn (1-Xn) para explicar el crecimiento de una población de una especie que se reproduce en un entorno cerrado sinningún tipo de influencia externa. [184] o [20].

ii La aproximación naiv de la Arqueología tradicional –que confundía la descripción de lo percibido con lo real (loverdaderamente existente y sus causas)- ha tenido poco en cuenta los problemas generados por lapsos de excavación, demuestreo, de datación, de clasificación, de falta de prospección... La evaluación de su incidencia comenzó con losplanteamientos de la Nueva Arqueología.

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imprescindibles, como las crecidas del Nilo sin las cuales no se habría producido la fertilidad que aseguró lavida a la antigua sociedad egipcia.Para evitar esas connotaciones hablaríamos mejor de “eventos que causan un cambio súbito en laconfiguración o aspecto de partes de la Tierra (entendida como el conjunto de elementos abióticos y bióticos(que por supuesto incluyen las sociedades humanas)”.Así pues conviene diferenciar “cambio brusco” de la “catástrofe” que puede o no desencadenar.El concepto de “cambio brusco” tiene un componente inherente de temporalidad. El problema es laconsideración de la escala temporal: ¿qué significa “súbito”? Se entiende como el que se produce en unperiodo relativamente corto de tiempo, o como un cambio anormalmente corto: una montaña tarda mileniosen formarse pero se puede levantar bruscamente en cuestión de días por una erupción volcánica.El otro componente semántico que posee el concepto es el de su salida del ámbito de la variabilidad normal:las olas tienen una frecuencia y una altura regulares, predecibles dentro de unos márgenes. Un tsunami estáfuera de frecuencia y de magnitud.Otra connotación reside en el posible cambio cualitativo que puede conllevar el término. Existendeterminados dinteles en las progresiones cuantitativas que equivalen a un cambio de calidad (“la gota quedesborda el vaso”). La diferencia en un solo efectivo puede significar la superación del dintel entre lacontinuidad o la extinción irreversible de una especie. El carácter de presencia-ausencia significa asimismo uncambio cualitativo que se produce bruscamente: en tecnología pueden conocerse todas las técnicas parafabricar por separado los componentes de un arco, pero éste sólo estará disponible a partir del momento enque todos los elementos estén presentes y se ensamblen correctamente.El “cambio brusco” aunque puede aparentar ser caótico no tiene porque tener necesariamente un carácter deimprevisible (una tormenta, por ejemplo) pero sí que ha de entrar de alguna manera en unos parámetros deanormalidad. El paso de la noche al día no se definiría adecuadamente como un “cambio brusco”.Finalmente habría que distinguir también entre cambio súbito y cambio extremo. Un calificativo hacereferencia a la velocidad mientras que el otro se refiere a la amplitud. No todos los cambios extremos sonbruscos.Cambios bruscos, serían pues aquellos que conjugan ambas características de cambio súbito (más rápido ofrecuente de “lo normal”) y extremo (más amplio de lo normal para la escala de tiempo considerada). Comocambios bruscos podemos enumerar: cambios y fenómenos meteorológicos extremos, la desertificación,tormentas de arena, terremotos y tsunamis, erupciones volcánicas, lluvias de cenizas y ácidas, movimientos yefectos derivados del glaciarismo o deshielos (como los eventos sedimentarios consecuencia del deshielo,solifluxiones, aludes…), eventos hidrológicos como desbordamientos y desecamientos de ríos y lagos,inundaciones de llanuras marinas o fluviales, colapsos y derrumbes del karst y extinciones animales…

Naturalmente que al referirnos al parámetro temporal, a la normalidad y a las sociedades es cuando sejustifica plenamente la relevancia de la consideración de esos fenómenos por parte de la Arqueología asícomo su especificidad: el concepto de “brusco” o de corto plazo no ha de significar lo mismo para laArqueología prehistórica que para otras ciencias sociales.

Para que un cambio brusco se transforme en catástrofe, ha de tener un grave impacto negativo inmediato en lasociedad humana afectada. Esto quiere decir que en la definición intervienen otro factor variable (laorganización de la sociedad afectada) y un término cuantitativo relativo: la gravedad. Esto es un número depersonas relativamente elevado de personas afectadas, directamente como víctimas o indirectamente pormengua en sus medios de vida.Para intentar comenzar a formalizar el tratamiento de las catastrofes se ha intentado enumerar las variablessignificativas del cambio brusco por un lado y de la capacidad social de reacción por otro y el juego de suscorrelaciones [37]. Respecto al primero de los términos se ha distinguido:• Magnitud (amplitud de onda) del cambio (cuanto mayor más necesario el desarrollo de la tecnología).• Frecuencia del fenómeno: cuanto más frecuente mayor necesidad de respuesta.• Duración del evento: cuanto más prolongado mayor necesidad de resistencia, pero más tiempo para generaruna respuesta adecuada.• Rapidez de desencadenamiento: Cuanto mayor rapidez menos capacidad de respuesta.• Extensión del efecto: cuanto mayor, más necesaria una organización social ampliada.• Dispersión del efecto: cuanto más inhomogénea, menos impacto porque quedan zonas no afectadas.• Periodicidad del evento: cuanto más irregular, mayor trauma por menor capacidad de previsión.

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• Temporalidad del evento: afectará más o menos, dependiendo del momento y de la repartición estacional delas estrategias económicas (por ejemplo si se produce antes o después de la recogida de las cosechas…).Respecto al segundo, algunas de las variables sociales que pueden variar el impacto pueden ser:

• Tipo de organización económica (sistema de mercado, monopolio, especialización oligárquica… monocultivoespecializado, etc.).

• La diversificación y formas de distribución de los recursos. Cuanto más diversificados y homogéneamenterepartidos, más posibilidades de superación del problema. El hambre en la mayoría de los casos no esproducto directo de la catástrofe sino del precio (del reparto) de la comida. Una mayor cantidad de personasprivadas de capital (de pobres), mayor extensión de la población expuesta al riesgo (por menor resistencia ymayor zonas de riesgo ocupadas) y menor capacidad de respuesta.

• Del nivel del capital invertido en la explotación de los recursos (por ejemplo medios de producciónconstruidos por ejemplo infraestructuras como canales, aterrazamientos…) afectado.

• Nivel de eficiencia tecnológica (cuanto mayor, más capacidad de respuesta, con la ponderación anterior).• Nivel de complejidad y forma de organización socio-política y extensión de la influencia del sistema político,

que puede cambiar la capacidad de movilización para ofrecer una respuesta.• Experiencia acumulada frente al evento.• Densidad y distribución de la población.

Las consecuencias de la catástrofe pueden significar desde un disturbio temporal sin mayor trascendencia, unareadaptación a largo plazo, hasta el colapso de la sociedad. Obviamente es posible que de una catástrofe, sederive a medio plazo también una consecuencia positiva: una mejora de la organización social, de latecnología o una mayor capacidad de previsión y resistencia.

DETONANTE, CAUSA DOMINANTE Y CAUSA DETERMINANTE.Las primeras aproximaciones sistémicas se complacían, como hemos comentado, en presentar unos esquemasde flujo de influencias (información) en unos sistemas homeostáticos y unas líneas de movimiento causallineal. La dinámica de las sociedades se representaba así con un esquema estático de componentes del sistemaque se relacionaban con flechas de “input” y “outputs”. En ese sentido tenía poca cabida la inestabilidad, elfactor aleatorio y la reacción caótica.Pero al introducir en juego el movimiento periódico o cíclico en un sistema sencillo y así ordenado, este secomplica. Al combinarse dos o mas longitudes de ondas de amplitud diferente, se produce una reacción que sevuelve más imprevisible. La complicación se puede apreciar cuando un fenómeno con una onda de bandaancha y de frecuencia baja que actúe como causa dominante, coincide con otro de alta frecuencia y bandaestrecha que interfiere con el primero (ver figura 22). Henri Poncaire demostró (jj) la imposibilidad de preverel movimiento concreto de un péndulo de hierro entre tres imanes. En los fenómenos que se rigen porretroalimentaciones y que se pueden modelizar con ecuaciones diferenciales no lineales la superación dedeterminados dinteles de magnitud pueden desencadenar una reacción en cadena que puede acabar en uncambio brusco de dirección o de cantidad que no guarda relación de magnitud con la pequeña causadetonante. Así no es difícil entender las dificultades de anticipar el resultado de la interacción de varioselementos en principio no directamente relacionados: Uno de los mejores ejemplos como veremos es elsistema caótico del clima: depende de la orografía (consecuencia de la tectónica de placas, finalmenteproducida por la energía de rotación de la Tierra), de la interacción de atmósfera y océanos (variaciones detemperatura y humedad, consecuencia final de la repartición de la energía solar) en interacción con lagravedad. Las consecuencias del clima: los biotopos (geomorfología y vegetación) a su vez se transforman encausas de variación de la causa.

jj Jules Henri Poincaré. (1854-1912), “Sur le problème des trois corps et les équations de la Dynamique”, 1890. Ademásde ser uno de los impulsores del cálculo diferencial y de la topología algebraica, es un precursor del concepto de lo que enlenguaje actual se denominan soluciones caóticas u homoclínicas, que él llamaba doblemente asintóticas. Demostraba quelos movimientos de tres cuerpos controlados por un determinismo tan mecánico como la ley de atracción universal deNewton podían resultar extremadamente complicados. [273]A veces, una misma ecuación origina soluciones cualitativamente diferentes (regulares unas, caóticas las otras) según losvalores que tomen estos parámetros. A estos fenómenos se les llama bifurcaciones. Un ejemplo es la gráfica deFeigenbaum, resultado de una ecuación aparentemente tan sencilla como la logística cuando se supera un determinadodintel [184].

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He señalado el necesario énfasis que se debería poner en la concatenación de los fenómenos. La dualidadentre el simplismo de una explicación mecánica y la inhabilitación que provoca la propuesta caótica, se superaestableciendo una jerarquización causal y una red de conexiones cualificada. No podemos tranquilizarnosafirmando perogrulleramente que todo movimiento (cambio) es consecuencia del intercambio materia /energía. En el caso del experimento de Poncaire, es absolutamente previsible que si lo reproducimos volverá aproducirse un movimiento caótico (aunque no se pueda predecir hacia cual de los imanes tenderáconcretamente el péndulo primero). Sabemos que el fenómeno de movimiento caótico se va a repitir ysabemos porqué, aunque en principio y de momento no sepamos hacia donde va derivar sucesivamente elpéndulo. Para ello deberíamos poder medir, las ínfimas variaciones de posición, forma y magnitud de cadaelemento que interviene, con una precisión por ahora fuera de nuestro alcance.No se puede confundir azar (un azar absoluto: una casualidad, una falta de conexión causal entre dosfenómenos que se interfieren) con nuestra ignorancia sobre las correlaciones causales, con consecuenciascausales de magnitud o calidad imprevistas debido a nuestro desconocimiento sobre las diferencias en lascondiciones de partida y sus concatenaciones. En muchos casos deberíamos distinguir entre fenómenosdeterminados, indeterminados e indeterminables.Es pues interesante distinguir primero entre casualidad y causalidad, y dentro de esta última entre causadominante, causa determinante y factor desencadenante (kk).Como un ejemplo podemos escoger el caso de los aludes. Es muy evidente que la causa determinantenecesaria de los aludes es la acumulación de hielo en las cumbres, que las variables que influyen son lapendiente y la temperatura. El desencadenante puede ser simplemente la acumulación de una ínfima cantidadmás de hielo que hace que se supere el dintel de equilibrio, o bien una fusión que desestabiliza esa masa, oincluso una causa aleatoria externa, una onda expansiva sónica que desencadena el mismo efecto. En esteúltimo caso se puede entender perfectamente que la causa del alud no es el ruido: ningún petardo, por fuerteque sea, puede desencadenar un alud si no hay acumulación crítica de nieve sobre una pendiente. Endefinitiva conocemos perfectamente las circunstancias necesarias, los mecanismos que desencadenan elfenómeno, podemos aproximarnos a una predicción de la probabilidad –un índice de riesgos- de que el eventose produzca, aunque no podamos determinar con precisión el instante ni su magnitud exactos.

El mismo tipo de fenómenos se dan en desarrollo de las sociedades. Sin los logaritmos de Napier, lapascalina, el telar de Jacquard, Ada Lovelace, la electricidad, la conductividad, el interruptor, el plástico, etc.no habría ordenadores, pero estos no son la suma de plástico, electricidad y metal. De la misma forma que elconocimiento del proyectil emplumado, el trenzado y el trabajo de la madera no equivalen a un arco. Son lascondiciones necesarias pero hacen falta otras causas dominantes (la demanda de un arma para obtener losmedios de subsistencia) y una causa determinante: unas personas que han aprendido a ensamblar y utilizar elarma.Así pues podemos suponer la complejidad de la interacción entre los fenómenos naturales (de causas nolineales) y el desarrollo de las sociedades (con concatenaciones causales tampoco lineales),

Resumiento pués, al hablar de cambio brusco me estaré refiriendo a eventos súbitos de amplitud superior yfrecuencia anormal en la configuración o aspecto de partes de la Tierra, en sus elementos abióticos, bióticos ypor supuesto en las sociedades humanas.La catástrofe, en cambio la he definido defino como las consecuencias negativas (en cuanto a que provocadaños personales y/o materiales en la sociedad) de un cambio brusco. Que un evento brusco se transforme encatástrofe depende del impacto que pueda causar como consecuencia del azar, de la capacidad de previsión,de resistencia, asimilación y recuperación de la sociedad en concreto.

kk Engels, como he comentado, trató con mucha agudeza la unidad de contrarios que implicaba la casualidad (el azar) y lanecesidad. Ver p.ej. en [99] pp.175 y ss. y 186 y ss.

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Figura 6. Ejemplo de niveles críticos. Graficos del resultado de la ecuación Xn=C(1-X)X . Un ligerísimo aumentode C puede cambiar totalmente el resultado de Xn y la dirección de la gráfica. Superando el nivel crítico de 1,1…se

pasa de una disminución (arriba izquierda) a un incremento (arriba derecha). Superando el 2 tendremos unaoscilación regular (izquierda abajo), pero superado el 3,5...9 las oscilaciones adquieren una apariencia caótica

(derecha abajo).

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9. LA MEDIDA DEL CAOS: COMO MEDIR LABRUSQUEDAD DEL CAMBIOLa posibilidad de poner de manifiesto cambios súbitos ha estado condicionada a disponer de los instrumentosadecuados para medir el tiempo con exactitud. Era imprescindible desarrollar un sistema de datacionesabsolutas, independientes del contexto que se desea datar, y suficientemente preciso para poner de manifiestosi las condiciones que nos interesan se han dado con una rapidez anormal, y por tanto se trata realmente de uncambio brusco tal como los hemos definido.El sistema para medir el tiempo más utilizado en Arqueología ha sido el radiocarbono. Es cierto que hastahace poco existía una cierta desconfianza ante los resultados del C14. Muchos fechados eran incompatiblescon lo que se esperaba. A veces aparecían invertidos dando una datación más antigua para el estrato superiorque para el inferior, contradiciendo el principio fundamental de la superposición. No faltaban aquellosfechados disparatados, que no podían aceptarse. Era un problema derivado tanto de la falta de discusión sobreel carácter de la muestra, ya que no se comprendía el proceso que se realizaba en el laboratorio de datación,como también de la propia naturaleza probabilística intrínseca del método, y de lo escaso del muestreo (elbajo número de dataciones que se realizaba). Por supuesto la falta de comunicación entre la Arqueología y laFísico-Química estaba en la raíz de estos problemas.El desarrollo de las dos disciplinas ha mejorado los métodos por ambos lados potenciando mejores resultadosde la interacción. La Arqueología ha ido entendiendo que las estratificaciones no son estáticas ni cajascerradas: los objetos que contienen son como partículas sedimentarias que se mueven y que nonecesariamente se formaron (ni vivieron) en el mismo momento. Los métodos de datación absoluta hanavanzado mucho en los últimos años. Se han afinado las técnicas gracias al abaratamiento de los procesos y ala generalización de las dataciones, y también porque han surgido alternativas metodológicas como porejemplo el AMS (o Acelerador de Partículas) que ha permitido radioactividad remanente muy baja y por tantodatar materiales mucho más antiguos. Se han contrastado los resultados con otros métodos, ensayandocomprobaciones mediante el cruce de varios procedimientos de datación: al C14 tradicional y al AMS seañaden la Termo-ionización del espectrómetro de Masas para el Torio/Uranio (Th/Ur), latermoluminiscencia… y es también posible que veamos aparecer algunos métodos nuevos (a).Así se ha comprobado que hay elementos contaminantes y materiales más o menos fiables para la datación…Se han podido comparar resultados sobre diferentes materiales para comprobar la fiabilidad de unos y otrosfrente a los distintos sistemas: por ejemplo, en las dataciones sobre huesos las de colágeno son menos fiablesque las de aminoácidos pero más que las de flúor -apatita de dientes (b).El principal problema del C14 era, además de su naturaleza (de tratarse de una aproximación estadística), lacuestión de la variación en la proporción original del isótopo radiactivo que incorporaban los seres vivos através de la cadena trófica.Se comprobó que la proporción del C14 presente en cada momento o lugar no es ni ha sido homogénea (c).Esto hizo necesario el desarrollo de curvas de calibración que compensan las variaciones en tiempo y espaciodel contenido isotópico de la atmósfera y del mar. Las curvas se establecen mediante algoritmos decorrelación entre las dataciones de C14 y las fechas obtenidas para las mismas muestras mediante otrosmétodos no dependientes del carbono atmosférico (dendrocronología, varvas de sedimentos [144](d), conteo

a Para una descripción de los tipos de dataciones empleadas en Arqueología consultar [25 o 128]. Normalmente se dan lasfechas de C14 en años BP (antes del presente) contando desde 1950 hacia atrás. Yo en este libro para simplificar voy adarlas en miles de años (kiloaños) anotando x "ka BP".

b Por ejemplo los de dientes de elefantes del yacimiento del final del Paleolítico en Pincevent (cerca de París) han dadomás fechados más recientes que los carbones de los hogares del propio asentamiento, lo que indica que sin duda que esosdientes dan fechados desviados, demasiado recientes.[362]

c La cantidad depende del campo magnético, la radiación solar o la lluvia de partículas subatómicas desde el espacio, y dela redistribución desde los reservorios oceánicos, en los que se concentran grandes acumulaciones de C14.

d En la cuenca Cariaco del Caribe venezolano, o en los lagos continentales como los del sur de Alemania o los de Gosciaky Perespino de Polonia, o el Suigetsu de Japón, por ejemplo hay series de miles de pequeñas capas de sedimentos decoloración gris diferente que marcan las estaciones del año y las diferencias de productividad orgánica del lago [144]

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de capas de hielo en sondeos en glaciares (e), termoluminiscencia, series del uranio...) o mediantecorrelaciones con un tercer evento que ha sido fechado mediante un sistema independiente como por ejemplouna erupción volcánica [23] o vertidos súbitos de agua de los grandes lagos de deshielo al mar (f) [43], o porcorrelaciones con eventos climáticos súbitos y cortos (los cambios en el contenido de los isótopos de lossedimentos marinos) bien situados cronológicamente gracias a otras dataciones controladas.Estos trabajos han permitido comprobar la existencia y evaluar la magnitud de “mesetas” en el contenido de∂C14 atmosférico (que coinciden frecuentemente con "picos" de mayor cantidad del Berilio (Be10). Sonperiodos en los que cambia súbitamente la proporción original del isótopo radioactivo y por tanto lacorrespondencia entre la antigüedad del organismo y la proporción de C14 que contiene se escapa de la líneade correlación a partir de la que se calcula la edad real del calendario.

Para explicar estas anomalías se discute [143 y 57] el papel de la circulación oceánica y de la formación deagua profunda en el Atlántico norte (NADW). El océano, en efecto, constituye una de las mayores reservas deCO2 y por tanto también del isótopo C14. Este isótopo radioactivo en el mar está en una proporción distinta ala de su atmósfera contemporánea (porque es gas que se ha incorporado disuelto en el agua, es más viejoporque se ha producido antes y porque además quedó atrapado en un momento en el que su proporción en laatmósfera tampoco era igual a la del momento en que el organismo acuático lo incorpora). Cuando cambia lacirculación de las corrientes marinas y por tanto la renovación de los gases que contiene el mar, se liberan oretienen estos isótopos en proporciones distintas a las que existen en ese momento en la atmósfera. Se hanpodido evaluar esos efectos “reservorio” y cómo han ido variando en función de la circulación y del aireadode los océanos. Por ejemplo, el efecto reservorio del Atlántico norte que se evaluaba en una constante de 400años (los animales y plantas marinas daban dataciones más viejas) se ha podido recalcular. Así se ha visto queexiste cierta relación entre los cambios climáticos (que a su vez se vinculan a cambios en la circulaciónmarina) y las anomalías en el C14. En los momentos de máximo frío la proporción aumenta (en el episodiofrío H1 hace 15ka BP y las dataciones se rejuvenecen 1,23-1,94ka o para el fin del Dryas Reciente en 0,82-1,01 ka), y se reduce a los valores actuales en los periodos más cálidos [394]. También se sospecha, en base ala cronología de las varvas de los lagos, que en las dataciones C14 de los árboles de controldendrocronológico (los que vivieron en Suiza y Alemania por ejemplo) se pudo producir un efecto reservorioal absorber en grandes cantidades el agua fósil procedente del deshielo de los glaciares que se formaron enperiodos anteriores [144].También se ha llegado a pensar en la influencia de cambios (salidas bruscas de la línea de evolución normaldenominadas “excursiones”) del magnetismo terrestre (g) o en causas extraterrestres de intensificación de lalluvia de partículas subatómicas (por cambios en la actividad solar o por la explosión de una Supernova) paraexplicar algunas anomalías del C14 más antiguas, que aparentemente son demasiado grandes para serexplicadas por la circulación de las corrientes marinas.

Figura 7. Curva de correlación entre el C14 y la edad real de calendario según las varvas del lago Suigetsu, Japón.Las dos ventanas se abren a escalas diferentes: a la izquierda entre la actualidad y 50ka y a la derecha desde hace

8ka a 15ka antes de 1950. He marcado las “mesetas” o divergencias más notables entre el C14 y la edad decalendario real con flechas. [a partir de 204]

e Los casquetes de hielo de Groenlandia o de la Antártida principalmente.

f Periodos de grandes fusiones de agua denominados en inglés “Melting Water Peek” (MWP).

g básicamente el episodio correspondiente al Lago Mono hace 28ka BP y el de Laschamp hace entre más de 35ka y 47kaBP (aunque la myor probabilidad es de hace unos 41ka BP)

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Figura 8. Correlación entre la edad de calendario de la Dendrocronología y el C14 [a partir de 143] He señaladola meseta entre el Dryas reciente y el Preboreal.

Poco a poco se han ido fijando las líneas de correlación entre las edades radiocarbónicas y las del calendario yse han trazado las líneas de “mesetas” de 100 años de duración por ejemplo en el Tardiglaciar (h).

h Entre hace en miles de años antes de ahora (ka BP): 12,7-12,6; 11,4-11,3; 11-10,9; 10,9-10,6; 10,4-10,3 y 10-9,9(contabilizados y datados en según las varvas del Lago Suigetsu). [204]

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Figura 9. Correlaciones entre la edad en años C14 y la edad en años calendario según distintos elementos decalibración: dendrocronología, varvas de lagos, sedimentaciones marinas y dataciones de corales [a partir de 144]

Las grandes oscilaciones del C14 permiten entender, como veremos, algunos de los graves problemas con lasdataciones del final del Paleolítico medio, problemas que han enturbiado los estudios sobre el cambio deHomo neanderthalensis a Homo sapiens sapiens en Europa occidental.

Al mismo tiempo que se han ido perfeccionando los sistemas de datación por isótopos radioactivos, a escalamundial se van perfilando y sincronizando las fases de Cambio Global y se ponen de manifiesto sus efectosregionales y las consecuencias locales. Eso permite sincronizar las secuencias de acontecimientos endiferentes sondeos, extrapolar y calibrar mejor dataciones absolutas.La depuración de los sistemas de muestreo y registro, la acumulación y cruce de datos con “proxis” (i) y conlos métodos independientes han permitido perfeccionar los sistemas de calibración y han aumentadoextraordinariamente el potencial de datación .

i Fenómenos paralelos en el tiempo que se pueden correlacionar globalmente como serían periodos cortos de cambioclimático, paleomagnetismo, erupciones volcánicas, sedimentaciones de lagos y hielos...y que permiten la sincronizacióny datación absoluta de secuencias de acontecimientos.

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Figura 10. Correlaciones de "proxis" (o próximos) de diferentes sondeos según la propuesta de INTIMATE, 1998[44]

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Figura 11. Correlación de diferentes índices de “proxis” contenidos en el sondeo Dye-3 de Groenlandia [a partir dela figura 2 de 361].

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Figura 12. Correlación de proxis en el sondeo del Mar de Alborán comparado con el sondeo de GISP deGroenlandia [a partir de 268] Se puede ver la perfecta correlación de las oscilaciones milenarias y de los episodios

fríos Heinrich (H3, H4, H5) entre el Mediterráneo y el Atlántico norte desde hace 28ka hasta hace 48ka BP.

Se pueden calibrar las dataciones radiocarbónicas con la dendrocronología (j), gracias a que se hanmultiplicado los hallazgos de troncos de árboles que se solaparon en el tiempo y a que las secuencias decrecimiento de sus anillos se han podido hacer corresponder. En Europa occidental se ha llegado a construirun calendario anual hasta el periodo Dryas reciente ajustando las curvas dendroclimáticas de pinos delperiodo Preboreal, solapando dos secuencias alemanas (la de Hochenheim con la de Gotinga) y conectándolascon la secuencia de los robles que vivieron en el periodo Boreal. El recuento y la verificación cruzados devarios científicos permitieron hacer correcciones y afinamientos, y así ahora se pueden solapar y empalmarlas series hasta hace casi 12000 años de calendario (k). Aún quedan algunas secuencias flotantes de árboles

j La dendrocronología, el cálculo de la edad de un árbol mediante el conteo de las bandas de crecimiento anuales y lacomparación con su datación de C14 fue el primer sistema de calibración gracias a la existencia de árbolesmulticentenarios y el solapamiento de su vida con otros troncos de árboles fósiles hasta llegar a establecer una secuenciade solapamientos que llegan al final del Tardiglaciar hace más de 10ka. [27; 28 y 210]

k Después de la primera prueba, para llegar a la corrección actual primero se corrieron 41 años en la fecha de hace 7192años y se retocaron 273 años calendario en la secuencia de pinos master de Hochenheim. Diez años más tarde [335] se hamatizado aún más: se corrieron 41 años entre hace 7.250-7.833, 200 años entre hace 7.833-8728; 42 años entre 8.728-8.784 y a partir de hace 8.784 se corren 200 años más. Con estas correcciones se consiguió empalmar la secuenciamoderna hace 11.900-12.324 años cal.den. con la antigua de pinos entre hace 11.171 y 11.871 años cal.den. Ello permitellevar la secuencia de pinos desde 9,9 hasta 11,871 cal den BP. Sigue habiendo algún lapso débil –con sólo tres pinos desolapamiento entre 11,299-11,199 cal.den. BP y también en 9,7ka cal.den.BP). Algunos eventos son muy significativos y

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que crecieron en el periodo anterior templado Allerød, en sitios como el paleobosque de Reichwalde [123],que tal vez se puedan llegar también a conectar si se encuentran algunos árboles que hubieran sobrevivido a lolargo del periodo frío del Dryas Reciente.El cruce de los análisis isotópicos del ∂C14 con otros sistemas de datación ha permitido conocer losparámetros probables de calibración más allá del rango de la dendrocronología: eso permite hoy sistemas decalibración mejorados integrando y confrontando diferentes tipos de series continuas: la dendrocronológicaclásica (den cal), la del Torio/uranio (Th/Ur cal), y la del hielo (Ice cal) (l).Con los sondeos en los hielos perpetuos y en las sedimentaciones finas también se han logrado grandesprogresos para afinar el C14. Los sondeos presentaban varios problemas: se realizaban en segmentos de sólodos metros y las capas a contar eran muy finas (entre una extracción y la siguiente se podía perder lacontinuidad), existía la posibilidad de que las precipitaciones de nieve no fuesen homogéneas en distintospuntos de la geografía (por lo que no siempre sería fácil correlacionar una secuencia con otras de otrossondeos) y de que faltaran segmentos por fenómenos erosivos o episodios de deshielo (por lo que faltaría ladocumentación de algún periodo sin que fuera fácil de identificar este lapso). En suma, que no coincidiesenlos resultados de los distintos autores o que no se correspondieran los distintos sondeos, y que por ello nofuesen extrapolables. Había algunas discrepancias notables, de centenares de años, entre sondeos cercanosincluso dentro mismo de Groenlandia. Hay que tener en cuenta que los dos primeros GRIP y GISP tenían3000 metros de profundidad y llegaban más allá de 100ka BP. la compresión por el grosor y los mediostécnicos al comienzo de los análisis los convertían en un instrumento de baja definición cronológica porquetenía una limitación en la discriminación de las capas. Pero al multiplicarse los sondeos en hielos y al podercruzar distintos índices y proxis se ha podido ya reajustar y reconciliar [334] los dos sondeos groenlandesesmás importantes: el GISP (Greenland Ice Sheet project) con el GRIP (Greenland Icecore Project). Las nuevasperforaciones como el GISP2 permitieron un afinamiento mayor y así se pudo establecer un ensayo desecuenciación fina de los periodos estadiales del Tardiglaciar (m) [334 y 354]:

así el cambio entre el Dryas reciente (YD) y el Preboreal se nota en un crecimiento doble de los anillos alrededor de11530±20 cal BP. (Estas fechas siempre contando desde 1950 hacia atrás).Ahora es más fácil conectar la secuencia de pinos antiguos y robles más modernos porque se solapan en una etapa debuena regresión del C14 entre 8.800-9.200 [335].

l Las fechas calculadas en años por el recuento de los anillos de crecimiento de los troncos de árboles se reseñan comodatación BC den cal (años calendario antes de nuestra Era) o bien en BP den cal (años calendario antes del presente -engeneral se toma en 1950 como año 0 para el C14. Yo voy a reseñar siempre cal den BP de las fechas calendariodendrocronológico, Ice-cal BP tomando para las fechas que se han obtenido contando los niveles de sedimentación dehielo en los sondeos marinos y simplemente cal BP las que se han obtenido mediante los algoritmos de cálculo decalibración que especificaré en cada caso. Yo prefiero utilizar el primer sistema sin calibrar en años calendarios a no serque se trate de una comparación en un caso concreto en la que se justifique la transformación, porque los sistemas decalibración se van perfeccionando y actualmente existen varios sistemas que no dan resultados totalmente iguales. Voy autilizar el término kiloaños (resumido como “ka”) para abreviar y expresar las dataciones en miles de años: 10,2 kasignifica pues 10200 años.

m En el sondeo GISP2 publicado en 1995 [355] La escala hasta el año 818 de nuestra Era es anual y hasta el 16,5ka cal BPes bidecadal. Esto no permitía afinar todavía eventos de menos de 20 años en el Tardiglaciar aunque ya se intuía quehabría habido cambios más bruscos.

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Figura 13. Oscilaciones de la proporción del oxigeno 18 (directamente correlacionada con la temperatura) en elsondeo GISP2 que permite un afinamiento máximo de 20 años (según 354].

Figura 14. Comparación de las curvas isotópicas (climáticas) obtenidas en los diferentes sondeos del hielo deGroenlandia. [a partir de la figura 2 en 193]

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Figura 15. Variaciones en la proporción del 018 en los sondeos de Groenlandia y propuesta de cronología y fasesdel grupo de investigación INTIMATE 1998 [44].

Con ello finalmente se ha conseguido una buena capacidad de análisis de los cambios climáticos breves, conuna calibración contextual (CAC o “calendaric age conversion”) hasta el 22ka BP (la base del hielo enalgunos sondeos de Groenlandia) y razonablemente buena hasta el 30ka en base a la sedimentación del LagoSuigetsu en Japón y al sondeo PS2644. A partir de 55,6ka BP el registro es más débil.Las tefras (depósitos de materiales procedentes de erupciones volcánicas) intercaladas en hielos y sedimentoshan servido para sincronizar secuencias. El depósito de una misma erupción identificada y datada servía paraestablecer la sincronía entre puntos concretos de diferentes sondeos. Antes eran estudiadasmacroscópicamente para reconocer idénticos tipos de componentes y cristales; ahora se pueden emplearmétodos más estrictos y fiables como la susceptibilidad magnética, infrarrojos, o analizar el sedimento conrayos láser y microscopia lo que, además, permite detectar depósitos volcánicos mucho más sutiles.

La finura cronológica de los análisis actuales nos deja ver la importancia significativa de los acontecimientoscada veinte años (bidecadales) e incluso bianuales, para según que periodos y zonas [361]. Así por ejemplo elcambio del último periodo frío Dryas reciente (n) al primer periodo templado del Holoceno (Preboreal) seestimaba en 60 años porque la precisión de los análisis de los primeros sondeos era bidecadal, pero con elsondeo Dye 3 se ajustó a 40 años y, ahora, se ha reducido a la mitad, e incluso se ha podido apreciar que huboun aumento muy significativo de la nivación en un par de series bianuales.

n En inglés "Younger Dryas", abreviado frecuentemente "YD" y renombrado en la propuesta de INTIMATE comoGS1(por Grenland Stadial 1).

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Figura 16. Cambios climáticos en la Última Terminación a diferentes escalas o “ventanas” temporales. [A partir delas figuras 1 y 3 de 361]

La necesidad de calibración para poner de manifiesto esos fenómenos de corto plazo está clara, más si se tieneen cuenta que la datación radiocarbónica comprime la edad real, del Tardiglaciar por ejemplo, en 800 años (o).En 1998 un gran grupo interdisciplinar propuso un cambio radical (p) en la periodización y nomenclatura [44].Posteriormente otros autores han ajustado y perfilado las dataciones para estos periodos añadiendo más proxis[199].

o Una datación C14 de 10ka BP equivale a una antigüedad de 11.500 años de calendario calibrados por dendrocronología.Una edad C14 de 10,8 a 9,8ka BP equivale a una edad de 12500 a 10000 años de calendario; es decir 1000 años de C14equivalen a 2000 de calendario o una antigüedad de C14 entre 12,6-12,1 años equivale entre a 15000 a 13,800 años decalendario en base a las sedimentaciones anuales del Lago Suigetsu [203]. Siempre contando desde el año 1950 haciaatrás.

p Se formó una comisión especial para la paleoclimatología y unificar la cronología de la Unión del Cuaternario (INQUA)el grupo INTIMATE (INTegration of Ice-core, MArine and TErrestrial records) sintetizando los datos de los sondeosmarinos, glaciares y terrestres de la Última Terminación Glaciar.

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Figura 17. Tabla de las cronologías en ka años para las diferentes periodizaciones (periodos climáticos) delTardiglaciar, que se han ido haciendo desde los años setenta.

La progresión de los análisis y de los cruces de información han permitido realizar una serie de ajustes quehan mejorado notablemente las posibilidades de una datación calendárica fina [199 y 198] y las hauniversalizado poniendo los programas informáticos, cada vez más ajustados, a la disposición de todas laspersonas interesadas: se ha pasado del sistema de calibración Calip, al Oxcal y después a la versión 2003 delprograma CalPal.Esa situación implicará un esfuerzo considerable para la revisión de los datos cronológicos, que algunaspersonas ya han emprendido (q).Todo hace pensar pues que los problemas antiguos están hoy en vías de superación y que en poco tiempopodremos tener series de dataciones numerosas, fiables y correlacionables. Además, ya hay una comunicaciónmás fluida entre Arqueología y Radiocarbono porque muchas personas de ambas disciplinas se han integradoen las problemáticas de la opuesta.

Pero lo más interesante es que la mejora, la multiplicación de métodos y de datos en los sistemas de dataciónindependientes permiten, por fin para el periodo desde el Tardiglaciar (y puede que a medio plazo tambiénpara momentos más antiguos de la Prehistoria) poner en evidencia cambios bruscos (fuera de ciclos generales)y evaluar sus consecuencias para las sociedades humanas.Una vez podamos establecer la frecuencia (el ritmo) de los cambios procederemos a continuación evaluar laamplitd de la variación y por fin los efectos combinados de velocidad y amplitud anormales.

q El problema son hoy justamente los reajustes que todavía se están haciendo en la calibración. Como he dicho, es por elloy dada la facilidad hoy de actualizar y usar los últimos algoritmos, que he preferido utilizar las dataciones BP de C14brutas y que sólo ajustaré la calibración con la última versión del algoritmo en los ejemplos de síntesis de conjuntos o enlas revisiones de análisis de datos en los que conviene dar idea de la magnitud temporal exacta de calendario.

Años B.P. Estimados OACKLEY 1973 C14 BP Mangerud,e.a. 1974 C14 BP ka cal BP Stuiver 1995 cal BP INTIMATE 1998 C!4 BP Cal BP

9,6 final PREBOREAL IV 10YD final PREBOREAL

inicio 10 11,65 Transición YD PB 11,3110,25 Final DRYAS

RECIENTE

III 11YD inicio Allerød final

11,021 12,89 DRYAS RECIENTE INICIO 11,50 Holoceno inicio 10,05 11,57

Preboreal 0Holoceno antiguo

OIS1

10,8 fin ALLERØD

II 12,65 GS-1 inicio 10,82 12,71

YD = Dryasreciente/ Dryas III

GS1

11,9 DRYAS MEDIO/OLDEST

DRYAS IC 12,90 GI-1a inicio 11,15 13,01

IS1a =Allerød 3

GI1a

12,3 final BÖLLiNG

IB

11,8 Allerød inicio-Dryas antiguo final=ZP Ic

11,73 13,25

INTER ALLERØD COLD PERIODO

13,15 GI-1b inicio 11,2 13,12

Gerzensee/ oscilación Killnarey/ Inner Allerød Cold período / Allerod 2/3

GI1b

13,5 final DRYAS I

IA12 Dryas antiguo= inicio

Bölling= ZP Ib fin 11,8 14,01 ALLEROD inicio 13,53Allerod 2 GI1c1

final PREBOLLINGIA 13 Oldest Dryas final=

ZP_Ie fin 12 14,09 Dryas antiguo inicio 13,58Dryas medio(II) GI1c2

15 final DRYAS MAS ANTIGUO

IA 15,07 Dryas más antiguo inicio 13,90 GI-1c inicio 11,98 13,93

IS1c AL1= Allerød 1/Bølling

GI1c3

17 final LASCAUX

14,05 GI-1d inicio 12,02 14,04

IS1d =Dryasantiguo= Dryas II

GI1d

12,5 14,67 transición Bolling inicio 14,70 GI-1e inicio 12,64 14,67

IS 1eINICIO =Meiendorf ay b (Bollings.l)

GI1e

16,90 GS-2a inicio 18,95

Dryas másantiguo =DRYAS I

GS2

19,50 GS-2b inicio 20,7 interestadial INICIOLaugerie

21,20 GS-2c inicio21,80 GI-2 inicio

Weninger,e.a. <GRIP/GISP

PBO= PIOTTINO

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8. LOS CAMBIOS BRUSCOS DE CLIMAHablar de causas extra-terrestres cuando tratamos de cambios en las sociedades humanas despierta siempreuna suspicacia inicial: “Extraterrestre” lo asociamos hoy día inmediatamente a platillos volantes o a causassobrenaturales.Sin embargo, debemos saber que los factores que regulan las variables (a) que determinan los cambiosclimáticos son astronómicos, es decir extraterrestres. Y el clima, y sus cambios, han sido una de las causasmás invocadas para la explicación del desarrollo de las sociedades paleolíticas (b) y también como vector quedirigió la evolución homínida y marcó (directa, por el frío, o indirecta generando ecosistemas desfavorables)los límites para la expansión ecuménica del género Homo.

Nuestro conocimiento de los fenómenos y causas del cambio climático se ha ido detallando a medida que sehan perfeccionado los instrumentos y los sistemas de medida. Paralelamente a la Paleoclimatología sedesarrolló también la Meteorología, recogiendo datos cuantitativos desde hace más de un siglo [194].A mediados del siglo XIX ya se formularon teorías respecto a la dependencia de los cambios climáticos de losciclos orbitales. Estas explicaciones que se irían definiendo con precisión durante siglo XX(c). A principios deese siglo se utilizó como marco de referencia ambiental el esquema derivado de los estudios glaciológicospublicados por Brückner y Penk en 1909 [293], a los que se incorporaron después los resultados de análisispalinológicos de turberas y yacimientos paleontológicos.Así se construyó un primer esquema paleoclimático en base a la Geología continental organizado en grandesperiodos glaciares (d). Es un esquema didáctico que se ha utilizado hasta los años 70.

Figura 18. Fases glaciares tradicionales según un esquema propio de los años setenta del siglo XX [66]

La explicación extraterrestre para estos grandes periodos glaciares e interglaciares, es coherente con elpostulado de la Física que dice que los cambios oscilatorios de bajo espectro (de larga duración) sólo segeneran por fuerzas que operan o bien a niveles astronómicos o bien subatómicos de la mecánica cuántica: esdecir, en eventos en los que prácticamente no hay fricción (como los astronómicos).

a Estas son la cantidad y la distribución de la energía que llega desde Sol a la Tierra.

b En la terminología tradicional hubo incluso nombres de culturas como “musteriense de tipo frío”.

c A mediados del siglo XIX, Louis Agassiz en 1840 [5] y más tarde en 1875 Croll [84] ya formularon la teoría de ladependencia de los cambios climáticos de los ciclos orbitales, que después formularía Milutin Milankovitch en 1941 [262]y después todavía Brouwer y Van Woerkom en 1950 [60].

d En nuestro caso peninsular se transportaron como referencia los periodos glaciares alpinos que fueron traídos por el curaprehistoriador Hugo Obermaier, que los había estudiado, cuando fijó su residencia y campo de trabajo en España [105]

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Hoy sabemos que existen grandes ciclos de 100 ka años en los que, como norma, los primeros 90 ka son deenfriamiento y acumulación de hielo y los 10 ka siguientes de rápido deshielo. Así, el último ciclo alcanzó sumáximo frío hace 21 ka y desde hace 16 ka a 6 ka se produjo el calentamiento hasta su máximo.Los estudios paleozoológicos y paleobotánicos [192, 108, 404] así como los de Geomorfología continentaldemostraron rápidamente que existían pulsaciones menores dentro de esos ciclos por lo que se fueronproponiendo secuencias regionales de detalle que se encajaban en el esquema glaciológico general (e). Alprincipio esto se modelizó estableciendo fases y subfases interglaciares dentro de los ciclos mayores,utilizándose en la denominación tanto la nomenclatura alpina numerada en fases (por ejemplo: Würm I, II,III) como los nombres de yacimientos palinológicos o de sedimentos marinos en los que se habíanidentificado por primera vez (por ejemplo: Allerød, Bølling…) (f). Y a partir de los años cincuenta [97, 98, y322, 323] los estudios de sedimentaciones marinas (estudios isotópicos de 016/18 y paleontológico deforaminíferos) permitieron conocer con más precisión esos detalles (g) y proponer veintiuna fases climáticasisotópicas (OIS). Estas no tienen una equivalencia exacta con la cronología clásica que se había establecido enbase a los testimonios de los glaciares cuaternarios alpinos.

Figura 19. Cronología de los últimos periodos isotópicos (OIS) y su correspondencia aproximada con los periodosglaciares establecidos por loas trazas de los glaciares cuaternarios alpinos (recogida en 205 p. 59)

En los años 70 [59] se sugirió que los ciclos de 100ka corresponderían a la excentricidad de la órbita terrestre.Pero también se pudieron reconocer ciclos de menor frecuencia (41 ka correlacionables con las variacionesen la oblicuidad del eje terrestre y de 23-19 ka sincronizados con la precesión del mismo eje) [314].

e Los datos originales que habían servido para la construcción y consolidación del sistema de glaciaciones alpinas y que seutilizaban como referencia en Arqueología se obtenían con los yacimientos en cuevas o depósitos sedimentarios al airelibre y con el análisis geológico de las formaciones de valles, glaciares y de terrazas lacustres y marinas.

f En la Península ibérica los trabajos en sedimentaciones de cavidades de M.Hoyos [179] y de P.Fumanal [124] intentaronajustar e interpretar las secuencias estatigráficas según las fases cronopolínicas y paleoclimáticas que se aceptaban en losaños ochenta.

g Para la medición de la temperatura ambiente a partir del isótopo del O16/18 se aplica una fórmula lineal por ejemplo de:T=(O18)+13,7%o )/0,67. Con fórmulas como esta se puede evaluar la temperatura media del océano (SMOW=StandardMean Ocean Water temperature) y la temperatura media de la superficie (SST-Standard Surface Temperature).

OIS 6 145 - 128 ka BP RISS

OIS 5 127 - 71 ka BP RISS/WÜRM

OIS 4 71 - 57 ka BP WÜRM ANTIGUO o 75 - 64 ka BP

OIS 3 57 - 24 ka BP INTERWÜRM 6 4 -31 ka BP

OIS 2 24 - 11 ka BP WÜRM RECIENTE 34-15 ka BP

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Figura 20. Esquema de las oscilaciones climáticas del Cuaternario incorporando los datos de los análisis isotópicosde los sondeos marinos, propio de los años ochenta. [según 127, fig.2.3]

A ello se añadieron luego las modelizaciones ayudadas por computadora, como por ejemplo el CLIMAP [77].A partir de los años ochenta se produjo un avance impresonante en los estudios de Paleoclimatología. Elmundo científico y poco a poco también los organismos oficiales tomaron conciencia de los indicios que sepodría estar produciendo un Cambio climático de amplitud desconocida y que éste podría sobrevenir muyrápidamente. La crisis mundial que va a suponer el Cambio Global inducido antrópicamente (por la acciónhumana) estimuló macro y micro proyectos internacionales multidisciplinares climatológicos ypaleoambientales (h). Desde la Meteorología y debido a la necesidad hacer previsiones cada vez más fiables sehan ido perfeccionando los sistemas de modelización en base a modelos predictivos numéricos, se hanexplorado a través de ecuaciones diferenciales los dinteles de cambio climático y buscado periodicidades enlas sequías e inundaciones. Pero sobre todo la aportación de la Meteorología moderna no ha sido tanto laconsecución de esos modelos de periodicidad sino confrontar los sistemas descriptivos de diferentes modelosy, sobre todo, demostrar la correlación global de los fenómenos meteorológicos y el funcionamiento del climacomo un todo interrelacionado.La dedicación de fondos y esfuerzos ha estimulado que se afinaran de tal manera los aparatos y sistemas demedida que hoy es posible datar directamente el polen y muestras de 250mg para el CO3Ca o analizar losisótopos con 6mg de carbonato cálcico. También ha permitido elaborar modelos más complejos con el uso deecuaciones diferenciales, algoritmos y máscaras de filtrado que permiten precisar y corregir las primerasreconstrucciones climáticas, que están hoy ya algo envejecidas (i).El trabajo básico se hacía para la Prehistoria a partir de las estratigrafías de cuevas. Pero era muy difícilcalcular en una sedimentación de cueva la duración de la formación de cada estrato: si se ha rellenado degolpe en un solo episodio de inundación, si ha sido en sucesivos episodios seguidos, o a veces incluso, si se haproducido paulatinamente. También es difícil verificar el tiempo transcurrido entre la formación de un estratoy otro, si ha habido interrupciones o periodos de rexistasis (vaciados del relleno) y su magnitud. Lascorrelaciones con los periodos paleoclimáticos cortos ha sido muy problemática porque las secuencias decuevas son parciales, cortadas y con una serie de factores aleatorios (tales como la altura sobre el nivel debase freático o del valle, las pendientes, la micro-topografía, acontecimientos de colapsos catastróficos) odifícilmente controlables como la incidencia antrópica sobre la propia sedimentación.El desarrollo de los sistemas de datación independientes nos permite ahora cambiar la filosofía y el objetivode los estudios de Sedimentología. Esta disciplina debe ser utilizada para establecer la historia tafonómica, esdecir la del proceso de formación del depósito (o del paisaje estrictamente circundante) y ya no debería serusada para intentar de dar una fecha a los momentos de ocupación humana correlacionando la actividadhumana con el estrato (que contiene sus evidencias arqueológicas) y este con los eventos climáticos globales.Esto será un gran avance porque sabemos que los efectos del mismo fenómeno climático pueden producir

h como lo fue nuestro propio proyecto de 1994 proyecto de la Unión Europea “Marine resources in the Beagle Channelprior to the european exploitation: an archaeological perspective” en Tierra del Fuego. [388]

i Se sabe p.e. que los datos de CLIMAP exageraron en un 55% la acumulación de hielo puesto que, entre otras cosas,tomaron modelos estáticos y no tuvieron en cuenta que no existió ningún periodo estático de más de 5000 [291 y 292].

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consecuencias sedimentarias contrapuestas. Por ejemplo el cambio YD–Holoceno implicó un aumento de lahumedad en el Cantábrico, que pudo producir nevadas intensas. El deshielo de esa nieve pudo causar tantoerosión como su opuesto, una sedimentación fina. La variable crítica para la diferencia pudo ser la orografíade la trampa sedimentaria (cueva, dolina, abrigo), de su entorno y de la vegetación local.

En base a los estudios en depósitos de hielos, fondos marinos y lacustres, desde finales de los ochenta existeya una secuencia climática y de proxis extremadamente detallada de base centenial, decadal e incluso anual oestacional para ciertos periodos. La superioridad de estos datos sobre los tradicionales procedentes de laGeología continental tradiconal (en cuevas o geomorfológica) es bien manifiesta, por la independencia yvariedad de los análisis que se realizan y que se verifican entre sí, por la escala global, también verificada deforma independiente de los eventos registrados, y porque soslayan los problemas de discontinuidad,remociones y las cicatrices erosivas que causan tantos problemas de interpretación en los depósitoscontinentales, especialmente los cársticos en cuevas.

Figura 21. Cuadro de los tipos de análisis utilizados en Paleoclimatología.

Los registros isotópicos de sondeos profundos en fondos marinos, lacustres y sobre todo de las capas de hieloen los glaciares continentales (Groenlandia y Antártida) y de montaña, los ajustes dendrocronológicos de lospinos y robles suizos y alemanes, así como el avance técnico y crítico en los métodos de datación (C14,Th/Ur, termoluminiscencia…) han demostrado la existencia de una serie muy numerosa de fluctuacionesclimáticas rápidas difíciles de percibir en esos registros sedimentarios continentales. Esas fluctuaciones muycortas pero muy amplias, se han documentado en todo el Cuaternario pero con especial detalle en su tramofinal (el mejor estudiado) y en el Holoceno (j).

j los cambios isotópicos de los foraminíferos bentónicos [389] en los sondeos marinos como el SU81-18 de Portugal [394]documentan el paso del máximo frío del episodio H1 (17.800 cal BP) al Holoceno y permiten calcular en 7-12 °C laamplitud del cambio de temperatura de superficie marina (SST). La cantidad de estomas en las hojas conservadas en lasturberas de Dinamarca han servido [395] para estimar las oscilaciones de la temperatura en la transición YD/Preboreal conun poder resolutorio de 50 años. La Paleobotánica y la Sedimentología de los lagos islandeses permiten establecer fases de40 años en la transición YD/PB en las que cambia la cubierta vegetal y las condiciones del suelo. Así comoindirectamente de los avances y retrocesos del frente polar marino. La sedimentación del Ammersee, [389] ha permitidouna precisión de 11 años en la secuencia del periodo entre 15 y 5ka BP. [Como glosario es útil consultar el 187].

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Figura 22. Cuadro sumario del desarrollo histórico de la Paleoclimatología del Cuaternario

Comparando los sondeos realizados en todos los mares, depósitos persistentes de hielo en todos loscontinentes y latitudes ya se ha demostrado que esos ciclos cortos han tenido una amplitud incluso mayor quelos largos. Estos ciclos cortos (que no dependen ya necesariamente de fenómenos extraterrestres de bajafricción y largo plazo) han enmascarado las oscilaciones mayores de baja frecuencia de base astronómicaoriginadas por la excentricidad de la órbita terrestre y los ritmos subyacentes (la influencia de la precesión ola inclinación y oblicuidad del eje terrestre).Se trata de un sistema global aparentemente sincronizado. Las oscilaciones están bien acopladas desde elOccidente atlántico hasta el Mediterráneo, e incluso más allá hasta la cuenca Cariaco de Venezuela,Colombia, Bolivia, el mar arábico, Pakistán, el Tíbet, China, e incluso Nueva Zelanda, el extremo sur deAmérica y hasta la Antártida…

QUADRO ESQUEMÁTICO DE LA EVOLUCIÓN DE LA PALEOCLIMATOLOGÍA• Agassiz (1840) y Croll, (1875) Ciclos climáticos astronómicos• Penck y Brückner (1909) ciclos glaciares alpinos.• Milankovitch (1920) ciclo astronómico de 100ka• Brouwer y Van Woerkom (1950) ciclos astronómicos• K.Jessen (1935), Iversen, (1960) paleozoológicos y paleobotánicos• Woillard (1978) pulsaciones menores secuencias regionales de detalle• Emiliani, (1951 y 1955), y Hays, e.a.(1976) estudios isotópicos y paleontológico deforaminíferos fases isotópicas. El hielo avanza y retrocede cada 100ky. con arrugas cada23 y 41ky.• Broecker y van Donk, (1970) ciclos de diferente frecuencia• ciclos 100 ka excentricidad 41ka oblicuidad y 23-19 ka precesión• Dansgaard, (1989) cambio YD/Holoceno en 50 años. ciclos Dansgaard• Shackleton y Hall, (1984…)ODP (ocean Drilling Project): el O18 sintonizado con oblicuidad• Ruddiman e. a. (1986) Raymo et al. (1989) Muller y MacDonald, (1997) DSDP(Sea DrillingProject)• CLIMAP (1984)• Stuiver, e.a. (1991) Reorganización del agua profunda entre 12/14 ka BP• Bond,e.a. (1993) Ciclos Bond• Broecker (1994…2003) Flotas de Icebergs detonan de ciclos Heinrich• Severingshaus (1998) Análisis de ∂N14/15 y Ar40/36• Peltier (1994) Corrección cálculo acumulación hielo continental• Muller (1997) y Kortencamp (1998) la acreción del polvo estelar se multiplica por un factorde 2 a 3 ciclo 100 ka no en fase con oblicuidad.• Broecker y Denton (1999): formación de Agua profunda, Lago Agassiz, comportamientocuántico. Ciclos climáticos globales• Proyectos internacionales interdisciplinares:• GRIP, GISP, DYE. Sondeos en glaciares de Groenlandia• PAGES (Past Global Changes)

Subproyecto Paleoclimate Model Intercomparison Project (PMIP),proyecto IGBP (the International Geosphere-Biosphere Programme)

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Figura 23. Puntos del globo con evidencia del periodo Dryas reciente sincronizado [a partir de 55]. El punto grisindica una presunta discordancia en la sincronización.

De todas maneras queda aún por verificar la sincronización entre los hemisferios Norte y el Sur, porqueexisten aún algunas discrepancias sobre la correlación, o magnitud de la manifestación de eventos tales comoel Dryas reciente en latitudes medias del hemisferio sur o sobre la amplitud de onda en cada registro. Se hanobtenido algunos datos contradictorios en Chile [230] y en algunas de las secuencias debido a la peculiaridadde la Reversión Climática de la Antártida (ACR- “Antarctic Cold Reversal”). Con nuestro proyecto, sinembargo, pudimos poner en evidencia la sincronización Norte Sur de varios eventos climáticos como elÓptimo Climático del Holoceno, el óptimo medieval y la “Pequeña Edad de Hielo” (k), y constatar el mismoproceso de calentamiento global actual también en el extremo sur americano. Este tipo de problemas desincronización deberán solucionarse en pocos años (l) a medida que se clarifique mejor la jerarquía de causasque han provocado los distintos eventos de cambio súbito.La cuestión general no puede resolverse con una mera yuxtaposición de periodos y superposición de causassino como una sucesión en la que los distintos factores pueden actuar sucesiva, antagónica oacumulativamente. El resultado final son unos cambios que responden a un sistema, al menos de apariencia,caótico al que se añaden fenómenos de frecuencia aleatoria o no relacionados (como las lluvias de meteoritoso la acreción de polvo estelar), u otros cuya correlación o frecuencia de ciclo no se conoce con precisión(como la criogenia, los eventos volcánicos, la formación del agua marina profunda y la circulacióntermohialina y de las corrientes).

CAUSAS Y FACTORES DE CAMBIO CLIMATICOTomemos por ejemplo la búsqueda de la causa de las oscilaciones climáticas grandes. Utilizando filtros deFourier y máscaras de paso bajo [60] se ha comprobado que los grandes ciclos glaciares (marcados por el

k El Óptimo Climático medieval se sitúa entre el año 900 y el 1350 de Nuestra Era; la Pequeña Edaddel Hielo entre 1350 y 1800.

l Esta investigación continua en forma de proyectos internacionales: Paleoclimate Model Intercomparison Project (PMIP),uno de los subproyectos del PAGES (Past Global Changes) proyecto del IGBP (the International Geosphere-BiosphereProgramme) o proyectos sobre la dinámica climática actual como el GPCP [188]. La correlación de los datos oceánicos yde los hielos con los datos lacustres y dendroclimatocronología permitirá jerarquizar las causas y las relaciones entreventilación oceánica, formación de agua marina profunda, y producción de ∂C14 ya que la actividad solar y el campogeomagnético como hemos señalado no permiten explicar las oscilaciones menores.

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isótopo ∂018) están dominados por los ciclos de oblicuidad de la elipse terrestre, que desde hace un millón deaños tendrían una frecuencia de 100ka.(m)Sin embargo no se pudo excluir una influencia debida a la variación de la inclinación y precesión del planeta.La inclinación del eje terrestre varía 21,5-24,5º en un ciclo de 41 ka. La precesión (desviación entreequinoccio y perihelio) tiene un ciclo de 23ka, y aunque su efecto en la variación del isótopo ∂018 está muyenmascarado, la combinación de varios efectos puede producir una oscilación del 20% en la insolación enaltas latitudes. Además no se descarta un ruido de base debido al ciclo de 400ka en la excentricidad de laórbita terrestre.En suma, aunque parece que el espectro del isótopo ∂018 indica que la acumulación de hielo depende de lainclinación del eje y oblicuidad de la orbita terrestre, también hay otros elementos que intervienen en el clima,como la excentricidad o la precesión.

Un pequeño modelo que he diseñado puede servir para ilustrar la dificultad de realizar el filtrado del “ruido” afin de establecer una jerarquización de las causas de los fenómenos oscilatorios. He trazado una serie decurvas sinoidales de distinta amplitud y de frecuencia variable (con la sencilla fórmula del seno y tomando lasmagnitudes 100, 41 y 27 a imitación de los ciclos del eje terrestre). Cuando combinamos con una simplesumatoria las variables de la amplitud aparece una curva aparentemente irregular que nos recuerda lostrazados de las curvas paleoclimáticas. Eso es así introduciendo sólo tres ciclos de frecuencia diferente ycombinándolos de una manera sencilla con una suma.

Figura 24. Simulación gráfica sencilla de ciclos con la frecuencia de las variables orbitales terrestres (100ka, 41kay 27ka) y de su efecto sumado. El resultado abajo a la derecha es una curva de alta frecuencia y amplitud variable

con apariencia caótica y ocultación de los ciclos regulares subyacentes.

Sin embargo estas variables astronómicas son insuficientes como explicación [56]. Si la causa de lasoscilaciones climáticas globales fuera sólo la posición del eje de la Tierra, el clima en los dos hemisferiosdebería ir al revés y no sincronizado como sucede (n). Deben pues existir otros mecanismos que mitigan la

m Imbrie [190], Shackelton, e.a. [322] ya implicaron los ciclos de 100ka pero vieron la arrugas de los ciclos menores en suestudio de los sondeos marinos.

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influencia de los ciclos orbitales y sincronizan periodos de cambios climáticos fríos o cálidos coincidentes enlos dos hemisferios.Como he dicho existen, dentro de esos ciclos orbitales de gran longitud de onda, otros mas cortos pero deamplitud muy variable, que han podido influir más en decantar el clima global hacia una u otra dirección en elmedio o corto plazo.

ELEMENTOS QUE INTERVIENEN SIGNIFICATIVAMENTE EN LOS CAMBIOSCLIMÁTICOS.

CAUSAS EXTRATERRESTRESLas investigaciones actuales están intentado filtrar los ciclos, buscar los factores y causas determinantes, verla influencia de otras variables terrestres y extraterrestres en las oscilaciones climáticas e intentandodeterminar las regularidades. Voy a hacer una pequeña revisión de los elementos cuya influencia se hareconocido hasta el momento en la investigación, tal como puede seguirse en revistas científicasespecializadas.

Figura 25. Representación de las variaciones isotópicas de O16/18 (lineas de arriba) y de la insolación deducida(lineas de abajo) del sondeo Vostok en la Antártida. Con los dos gráficos repetidos quiero indicar que existen

posibilidades alternativas de inducir ciclos de cambios (alternancias de círculos negros y blancos).

La cantidad del polvo estelar [206], se multiplica por un factor de 2 a 3 en un ciclo regular de 100ka. aunqueno está sincronizada con el ciclo orbital de idéntica frecuencia. Podría estar relacionada con la cantidad delisótopo Helio3 de los sedimentos lacustres, que sigue ciclos de igual longitud de onda pero 50ka fuera de fase(desincronizado) respecto a la excentricidad terrestre. El incremento de las bandas de polvo estelar ometeoroides [271] puede resintonizar el ciclo provocado por la oblicuidad (o). Este factor también puedeexplicar la sintonización de la oblicuidad terrestre con los ciclos del clima, porque los ciclos de Helio3 en

n Los registros y modelos meteorológicos del clima actual han demostrado perfectamente la dependencia del clima de unfuncionamiento global: cuando en el Norte de África hay mucha lluvia, hay grandes huracanes en el Caribe. Lacirculación de las borrascas desde el Atlántico norte hasta el Mediterráneo oriental, que tienen una gran trascendenciasobre las sequías en el Asia occidental están correlacionadas con las variaciones en los Monzones, que a su vez influyenen la precipitación sobre Etiopia y por ello en el cauce del Nilo. Los Monzones por su parte tienen una influencia sobre elPacífico. Una sequía en Hawai está correlacionada con los episodios de irregularidad del fenómeno de El Niño que afectaa la costa Pacífica Americana y de pasada al Caribe… En suma aunque las variaciones meteorológicas son globales, no setraducen de la misma forma en todo el planeta. Luego es intrigante que determinados episodios climáticos, que estánvinculados a la inclinación del eje produzcan un enfriamiento no sólo en el hemisferio que quedará más alejado sino entodo el planeta. [132]

o Este polvo estelar tiene unas órbitas determinadas por la viscosidad de la luz solar y la atracción de Júpiter y otrosplanetas. Hay dos bandas de polvo orbitando y en su mayor parte se nutren de las colisiones de asteroides del complejoEos-Themis-Koronis [206].

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sedimentos demostrarían [111] la coincidencia del aumento ("acreción") de polvo cósmico con los periodosclimáticos interglaciares. Ello podría explicar que hace un millón de años se enmascare el ciclo de 41ka y sepasara de un ciclo de 100ka a otro (p).La influencia de partículas extraterrestres es también una de las explicaciones para la enorme excursión delisótopo ∂C14 y del Be10 durante el periodo de hace 45-33ka.Otras posibles causas extraterrestres de la variabilidad climática se han atribuido a la actividad solar. Lasvariaciones que se han podido documentar por concentraciones de ∂C14 pero sobre todo por el Be10 – devida media más corta- en el ultimo milenio tienen un ciclo de 11 y 21 años pero una influencia de sólo el0,3%. Esa señal de cambio isotópico es por tanto mínima. Hay ciclos de 210 y 88 años atribuidos a lasoscilaciones solares, que pueden disminuir las temperaturas en –0,27ºC a –0,42º C. Estas manchas solares o laintensidad del sol pueden tener ciclos como los de Maunder (en los años 1645-1715 de nuestra Era), Spörer(años 1450-1550) y Wolf (años 1280-1350). Son estos cambios de actividad solar los que pudieron producirefectos como la Pequeña Edad de Hielo y el avance de los glaciares de montaña (q).

Figura 26. Análisis de la columna del sondeo Vostok de la Antártida señalando los resultados de los proxis [a partirde 294]

A pesar de la aparatosidad relativa de estos efectos hay que señalar que para el periodo Maunder (1650-1715AD), de máxima estabilidad solar sin manchas, esa perturbación es de sólo 0,24%. Esto equivale a un cambiomáximo de la temperatura media de –0,51ºC (, lo que es muy poco si tenemos en cuenta que el cambio para ladiferencia glaciar / interglaciar en Groenlandia es de 20ºC de máxima y 6ºC de media global.Otros autores [194] señalan que las variaciones en las manchas solares aumentarían la temperatura sólo entre0,28 y 0,08ºC, pero que el efecto moderador del océano frena esa tendencia dejándola en oscilaciones deapenas 0,03º.También existen ciclos de variación del diámetro solar de 80 años, aunque sin efectos climáticosdeterminados.Es igualmente muy hipotético que los ciclos de 1470 años, que quedan claramente destacados después deaplicar un filtro de Fourier a la curva del ∂O!8 en el sondeo GISP2 para el periodo entre 11-75ka, hayan sidoforzados por la actividad solar. Esos episodios tienen un extraño y no explicado cambio de frecuencia (sehacen un 13% más cortos) hace 50ka BP, y para el periodo Holoceno dejan de registrarse. [354]

p La súbita acreción de polvo hace un millón de años pudo ser debida a una colisión mayor en el círculo de asteroides deKorolis y haber desintonizado los ciclos de la oblicuidad de la órbita terrestre.

q Es interesante subrayar esa coincidencia temporal con las hambrunas que se produjeron en Europa por malas cosechas.

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Se han identificado oscilaciones de 18,7 años relacionadas con áreas de presiones solares-lunares; finalmentese han observado variaciones en los isótopos de los sondeos sintonizadas con ciclos oceánicos de 69 añoscausados por la gravitación.Las oscilaciones climáticas frías de “la Niña” y calida de “El Niño” de la temperatura superficial del agua delPacífico ecuatorial oriental tienen una conexión o repercusión muy importante sobre el clima de todo elGlobo. Es indudable que se conecta con las oscilaciones climáticas del Atlántico Norte y con las del trópicosur atlánticas. El fenómeno de “El Niño” o ENSO(r) con periodicidad de 2,7-6,3 años provoca uncalentamiento y cambio de la presión atmosférica a través de todo el Pacífico, desde el ecuador oriental altrópico occidental. Causa sequía tropical, cambios en el nivel del mar, vientos extraordinariamente fuertes quellegan a California, huracanes, tormentas con precipitaciones extraordinarias.A pesar de su periodicidad relativa todavía no se ha resuelto cómo se conecta exactamente con los otrosfenómenos atmosféricos y cual es su causa (ver por ejemplo: 318]. Se ha pensado que el viento solar causadopor las erupciones solares, el flujo de plasma emanado de la corona solar, puede tener una influenciaprimordial [214, 215 y 216]. Pero otros estudios sugieren que es un fenómeno cuya irregularidad en el detalledel momento de su aparición y magnitud cae fuera de toda predictibilidad y que es un fenómeno que deriva decausas puramente intrínsecas y de retroalimentaciones negativas y positivas de las variaciones en lainteracción del régimen de vientos, la temperatura del agua superficial o los movimientos de las capas detemperatura del océano. Finalmente “tiran la toalla” y sugieren que es el ejemplo de dinámica caóticatotalmente impredictible [290]. Los registros paleoambientales sugieren que a lo largo de la historia estefenómeno no ha sido regular. Así se ha sugerido que en el periodo entre 12ka y 5ka BP no existió o fue pocoactivo. La vida de las sociedades aún actualmente resulta muy afectada por este evento [ver por ejemplo: 67].En el pasado hay evidencias de su tremendo impacto en sedimentaciones en los valles de la costa del Pacíficoperuano e incluso se ha relacionado con el desarrollo de las sociedades complejas de la zona [203 y 258].Sabemos que entre esas sociedades estatales de la vertiente pacífica sudamericana existieron mecanismossociales que intentaban predecir su aparición. La cuestión más urgente hoy día es saber si el cambio globalestá o no afectando, y de qué forma, a este fenómeno [113].

CAUSAS INTERNASYa dentro de las causas internas al planeta se ha dado como explicación de los periodos glaciares a la propiamecánica de formación del hielo o criogénesis: el hielo tendría un ciclo propio de acumulación de 100kadespués del cual, por su propio peso o por el efecto eustático provocado por su peso, se empezaría afragmentar y a deshacer. Pero esta explicación no es convincente pues sería difícil entender porque sesincroniza el último máximo de frío hace 19,5ka BP y la fusión a partir del 14ka BP en ambos hemisferios. Eldominio del hemisferio norte sobre el sur por el desequilibrio de las masas continentales no es tampoco unaexplicación suficiente para aceptar esa hipótesis.Últimamente parece que se ha puesto de manifiesto la importancia de la dinámica de los océanos en loscambios climáticos, especialmente en los cambios bruscos de gran amplitud y duración media (un milenio,por ejemplo). El registro del ion cadmio, de los nitratos y fosfatos demuestra los cambios en las corrientesmarinas, en la surgencia de aguas profundas, en el intercambio de nutrientes y sales y en la formación delagua profunda oceánica. En la actualidad una corriente de agua salina templada procedente de la costaAtlántica africana aflora en la superficie en la latitud de Islandia. Esto se produce porque en el invierno elagua superficial fría se desplaza lateralmente impulsada por los vientos. Esa corriente cálida libera su calor(equivalente al 30% del calentamiento solar) a la atmósfera y templa las costas nordeuropeas. Al hacerlo seenfría (de 10º a 2ºC) y, al ser muy densa por la salinidad y por el enfriamiento, se sumerge de nuevo hacia elfondo al tiempo que gira hacia el sur a lo largo de todo el Atlántico occidental, gira al Este por el cabo BuenaEsperanza y se va al Pacífico norte donde se reequilibra y deja los nutrientes que ha arrancado en su viaje porel fondo atlántico (por ello el Pacífico norte tiene el doble de esas sustancias que el Atlántico). En las épocasglaciares los nutrientes están mejor repartidos y es esto lo que sugiere que no se formaba ese agua profunda.Por tanto no existiría esa corriente templada calentando Europa septentrional. En definitiva el enfriamientodel Atlántico norte favorecería el enfriamiento global. Así es probable que las épocas glaciares esténcorrelacionadas con el cambio en las corrientes marinas.

r ENSO es la abreviatura para "El Niño Southern Oscillation".

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Este fenómeno de formación de agua profunda con la transferencia de calor del agua del mar a la atmósferamultiplica su repercusión sobre el clima, primero porque la capacidad de disolución y la cantidad demicroorganismos en la superficie del mar dependen de su temperatura. Esto provoca que no se absorba el CO2

con la misma eficacia (s). Actualmente hay dos tercios mas de CO2 en la atmósfera que en un periodo frío yeso sólo puede ser atribuido a la dinámica del océano (que es la mayor reserva -60 veces superior a laterrestre- del CO2).

El efecto de todos los cambios solares es mínimo comparado con lo que pueden hacer los gases invernadero.Un bajo nivel de CO2 pudo contribuir al enfriamiento de los periodos glaciares (máximo en -2ºC). El controlde los gases vertidos por la industrialización ha permitido su conocimiento porque la contaminaciónatmosférica que ha provocado es bien conocida: desde 1765 el CO2

ha pasado de 280ppm a 350ppm, elmetano de 800 a 1700 ppmm –se ha duplicado-, el NO2 de 285 a 310 ppmm –más del 10%-. Pero en losúltimos 30 años los halocarburos han pasado de 0 a 1ppmm. Este efecto invernadero es el mismo que siaumentara el 1% la actividad solar. Los modelos de ordenador predicen una aumento geométrico de latemperatura de entre 0,8 a 2,6ºC (entre el año 2010 y el 2025).Otras diferencias entre los periodos fríos y la actualidad se relacionan con la atmósfera: durante el últimoperiodo frío el metano atmosférico era la mitad que el actual, el polvo en suspensión que se fue sedimentandoera treinta veces mas que el de hoy, el clima -la atmósfera seca- favorece un mayor gradiente altitudinal detemperaturas (mayor diferencia por más frío en altura). Esta mayor diferencia favorece a su vez la potencia delos vientos (más fuertes en los periodos fríos).Como he indicado el viento, causado por las diferencias de presión y de temperatura, tiene unos efectos bienconocidos en la parada o desviación de las corrientes marinas (corriente termohialina del Atlántico Norte o enlos episodios ENSO) que han provocado cambios climáticos tanto de frecuencia media y banda ancha comode alta frecuencia (poco persistentes pero de consecuencias muy importantes para la biosfera y la economía enépocas históricas).Si los cambios en la circulación de las corrientes marinas pudo tener un efecto en cascada sobre la atmósfera yel clima, queda preguntarse ¿Qué fue lo que provocó ese primer cambio desencadenante? Puede que larespuesta esté sólo en un efecto retardado de los cambios extraterrestres orbitales o de densidad del espaciorecorrido por la Tierra. El problema es que la complicación del encadenamiento causal provocaría esa imagende oscilaciones de apariencia caótica.

s Por el mismo proceso se entiende que la cantidad de C14 esté correlacionada con cambios climáticos.

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Figura 27. Oscilaciones climáticas en la columna GRIP de Groenlandia [44]. Muestra una apariencia caótica.

Puede sin embargo existir otro tipo de detonantes causados por factores terrestres que en principio noparecerían vinculados a variables extraterrestres. El vertido de aerosoles a la atmósfera antes de laindustrialización fue debido básicamente a los volcanes. Estos tienen un efecto bien conocido gracias alcontrol efectuado de grandes erupciones recientes, como la del Pinatubo. Sin embargo la señal isotópica deesa gran erupción alcanzó apenas el 0,5% y su efecto no fue persistente (sólo 10 años), aunque hay quienesatribuyen el calor extraordinario, entre 1920 y 1940, a la falta de erupciones volcánicas en ese periodo (t).En el pasado existieron eventos volcánicos de magnitud probablemente parecida a la del Pinatubo que dejaronrastro en Groenlandia (donde la señal está magnificada) de -1,9ºC. Como veremos más adelante los efectosvolcánicos pudieron ser mayores de lo que sugiere ese modelo del Pinatubo. Algunos autores [194] sugierenque determinados efectos volcánicos pudieron actuar como detonantes de episodios Heinrich (concretamentedel H19).

Otro factor terrestre de cambio climático ha sido las “armadas” de icebergs desprendidos del gran glaciarLaurentiano del Canadá, que atravesaban el Atlántico norte deshaciéndose y enfriando el agua a modo demega cubitos de hielo. Son probablemente las responsables de los episodios Heinrich (u). Significan el fin deun ciclo frío de larga duración de 7-10ka (ciclo Bond). Se sincronizan con máximos fríos en los Andes, enNueva Zelanda o en el mar de Sulu en Columbia Británica, en los niveles de los lagos del Canadá o del Áfricay en los isótopos del Oxígeno de la Antártida [54].

t La falta de nubes de origen volcánico no habría proyectado sombras facilitando la penetración directa de los rayossolares.

u Las "armadas" de icebergs (de hasta 1km cúbico) del Atlántico Norte desprendidas del glaciar Laurentiano que ocupabatodo el NE de América del norte están bien documentadas no sólo por la geomorfología continental sino también por lossedimentos que han dejado en los fondos marinos atlánticos. Son peor conocidos los posibles efectos de los grandesdesprendimientos de masa de icebergs de la Antártida y del enfriamiento del sur Atlántico que debieron provocar. En elfuturo inmediato debido al calentamiento global habrá que contar con esos desprendimientos masivos vertidos desde elcontinente Antártico.

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Otros episodios Dansgaard/ Oeschger de ciclo mas corto (2-3ka) parecen forzados por la fusión del glaciarescandinavo. El cambio de temperatura provocado en estos ciclos llegó a ser de -15ºC en Groenlandia (lo quees enorme si se compara a la diferencia máxima de -20ºC entre el Último periodo de Glaciación Máxima–"LGM" por Last Glacial Maximum- respecto a la actualidad).Los momentos de desagüe repentino de los antiguos grandes lagos Agassiz en Canadá y Báltico se hanconsiderado recientemente como una de las causas de cambio climático súbito más importante de los últimosmilenios.

LAS RELACIONES DE CAUSA / EFECTOEn consecuencia no se puede pensar en un solo factor sino en una coincidencia de factores y frecuencias, enun efecto de retroalimentación que desencadena saltos de estado (un comportamiento no lineal sino cuántico).Las consecuencias de estas causas se correlacionan con sus efectos que, a su vez, adquieren la categoría denuevas causas (como la influencia, que hemos comentado, de las armadas de icebergs). Así se han intentadomodelizar explicaciones del tipo de caos determinista. Los cambios abruptos requieren una fuerza causaldesencadenante, lo que se ha llamado un disparador (la ruptura de diques de los lagos Agassiz y Báltico, lafusión del hielo escandinavo, el efecto invernadero de los aerosoles volcánicos…), unamplificador/globalizador (que arrastran otros y los amplían -sequedad, polvo, corrientes marinas-) y unafuente de persistencia (de movimiento continuado) o causa dominante (tal vez en las variables astronómicas).Los cambios pequeños, a veces difíciles de detectar (una subida de 4-5ºC por ejemplo), pueden forzar lascondiciones generales por encima de un determinado dintel produciendo un cambio que está por encima delefecto esperado. Una pequeña causa detonante provoca un cambio de estado (por ejemplo, el paso súbito deun periodo glaciar a otro interglaciar) muy por encima de lo previsible a partir de su reducida magnitud.

LOS CAMBIOS CLIMÁTICOS SÚBITOS.El análisis del final del Pleistoceno (Último Glaciar Máximo y Tardiglaciar) y del principio del Holocenopermite comprobar la naturaleza súbita de los cambios climáticos que afectaron a sociedades cazadoras-recolectoras, porque existe un registro muy fino al que contribuyen diferentes proxis. El análisis detallado delfinal del Tardiglaciar ha permitido ir perfilando también las causas y el ritmo temporal involucrado en esoscambios.Las armadas de glaciares y el vertido del agua del deshielo al Atlántico Norte se consideran como losdetonantes para los cambios de fase de la circulación termohialina y se han evocado como las causas másprobables para estos cambios climáticos súbitos que no tienen correlación con las oscilaciones cósmicas, lascuales tal vez sólo establecen las tendencias de fondo.

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Figura 28. Fluctuaciones climáticas del Último Glaciar Máximo Glaciar y Holoceno (arriba) según la profundidadde los diferentes sondeos realizados en Groenlandia. Se marcan los periodos isotópicos cálidos (GI -curvas hacia la

derecha) y los periodos fríos o estadiales (GS- curva hacia la izquierda)

LOS EVENTOS DANSGAARD-OSCHGER Y HEINRICHLas secuencias de ∂018 y los proxis en los sondeos lacustres, marinos y glaciares demostraron la existencia detres modelos de circulación oceánica y por tanto de fases -de escala milenaria con cambios internoscentenarios y plurianuales: ciclos Bond, ciclos Dansgaard/Oeschger (con una sintonización más corta de2/3ka) y los episodios Heinrich (de un amplitud algo mayor). (v)Estos episodios tienen su expresión por lo menos en todo el Hemisferio norte, aunque su efecto puedecambiar: enfriamiento en Europa, extrema sequedad en el golfo de Guinea, humedad en los trópicosamericanos o formación de loes en China.

Los ciclos Heinrich (detonados por las armadas de icebergs aparecen al principio y final de los ciclosglaciares de gran escala. Ocurrieron hace 16, 22, 30, 38, 45 y 65ka BP en aparente sincronía en todo elmundo. Se han documentado perfectamente en Portugal, Islandia o en el Mediterráneo, aunque algunos comoel H5 o el H6 no se reflejen bien por ejemplo en la columna de polen de Monticchio en el Mediterráneocentral.Más allá de los diferentes ciclos, periodos y frecuencias hay en general una dinámica común desdeGroenlandia hasta el Mediterráneo: los cambios de fase del frío hacia temperaturas cálidas son más bruscosque los enfriamientos.

LOS EFECTOS CATASTROFICOS DE LOS DESAGÜES DE LAGOS EN ELTARDIGLACIARUno de los elementos al que se atribuye la mayor influencia como detonante de alguno de esos ciclos cortosde un milenio es el de los avances y retrocesos del lago Agassiz (en el que habría cabido dos veces laPenínsula Ibérica). El vertido de sus aguas al Atlántico norte se considera como uno de los detonantes delperiodo frío del Dryas reciente. La fusión anual de 2500 km3 del hielo laurentiano drenaba regularmente hacia

v Hans Oeschger (1927 - 1998) Científico suizo uno de los principales ponentes del First Assessment Report of theIntergovernmental Panel on Climate Change (IPCC), en la cumbre mundial de Rio de Janeiro de 1992 y de los que dieronla voz de alarma frente al efecto invernadero y al cambio climático global.

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el sur con un caudal calculado en 0,02 Sv(w), pero con el aumento de la temperatura en el Allerød se producela erosión y la fusión y al final la fractura del dique oriental (de cuarenta metros de altura) hacia el SanLorenzo, con el consiguiente vertido catastrófico ( 0,05 Sv) de agua dulce fría suplementaria en el Atlánticonorte en menos de dos años [177]. Probablemente el efecto de estas descargas súbitas (entre 11,4 y 10,4kaBP), junto a la fase de drenaje Billingen del mar Báltico (10,955-10,855 BP) producen y mantienen el fríoDryas reciente al frenar durante 1150 años la formación de agua profunda atlántica. Ese desatasco del desagüede los enormes lagos glaciares produce un enfriamiento de 15ºC de temperatura media en los pequeños lagossuecos en menos de 150 años (probablemente en menos de 70 años).Es más que probable que un Iceberg desprendido y flotando en el lago Agassiz volviera a taponar esa salidareanudándose la formación de agua profunda nordatlántica. Esto habría producido el abrupto comienzo delperiodo templado Preboreal hace unos 10,1ka BP. El nuevo atasco (permitió el calentamiento en menos de 20años de más de 6,5ºC ). En los lagos suecos la temperatura aumentó 9ºC de media (pasó de 9,3º a 18,2ºC demedia en verano).

w 0,02 Svedrups (Sv) equivalen a un caudal de 200.000 metros cúbicos por segundo.

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Figura 29. El drenaje súbito del lago Agassiz que tenía una extensión de >840.000km2 entre 7,65-7,2 ka BP (8,4-8ka cal BP). La rotura del dique laurentiano produjo el vertido de >1014 m3 de agua en un año, interrumpió la

corriente del Labrador produciendo un enfriamiento global. [Basado en 34 y 177]

Unos 150 años más tarde hacia el 9,75 ka BP (hace 11.300 cal BP con el máximo entre 11,170 y 11,050 calBP) se observa un nuevo enfriamiento, el periodo húmedo-frío PBO (Pre-boreal Oscillation) con el descensode 4ºC de media en menos de 10 años. Está producido por un cambio de la circulación de agua marinacausada por un influjo inusitado de agua dulce que inhibe nuevamente la convergencia nordatlántica. [43]. Setrata con toda probabilidad de la ruptura del dique del lago Báltico (entre 9,9 y 9,5ka BP) que vierte unacatarata de 25 metros de altura con un flujo de 0,15 a 0,3 Sverdrups (x).Cincuenta años después (hace 11ka cal BP) las temperaturas normales del Holoceno se habían recuperado[43].

Figura 30. Tabla de fechas de los vertidos súbitos de los grandes lagos glaciares durante el Tardiglaciar

Finalmente [34] otra fractura entre 7,65 y 7,2 ka BP (hace 8470 años cal BP) se produce el drenaje del mayorlago (la fase Emerson del lago Agassiz), un total de 1 millón de km3 y causa el enfriamiento (de 1,5-3ºC en

x Que equivalen entre 1,5 y 3 millones de metros cúbicos de agua por segundo. Esta magnitud es difícil de imaginar: ¡uncubo de agua de más de 1km de ancho y largo y más alto que la montaña más alta de la Península por segundo!

CUADRO CON LOS GRANDES VERTIDOS DE LOS LAGOS PERIGLACIARES, DETONANTES DEENFRIAMIENTOS (fechas en años C14BP)

LAGO AGASSIZ16,5 ka BP12,8 ka BP11,0 ka BP VERTIDO de >9.500km3 de agua fría dulce

detonante Dryas reciente 9,6 ka BP oscilación PBO~7,7 ka BP VERTIDO 163.000 km3--->catarata de 40 m en un año (4-5 Sv)

LAGO BÁLTICO10,95-10,85 ka BP drenaje Billingen

descenso 15ºC en lagos suecos en 70 años9,9-9,5 ka BP catarata de 25m VERTIDO ->1,5 a 3 Hm3 segundo descenso 1,5-3ºC en Atlántico norte y de 8ºC en Groenlandia

(tomado de Clark,e.a. 2001,Bjorck,e.a. 1996; Barber,e.a., 1999; Hostetler,e.a. 2000)

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todo el Atlántico norte y de hasta 8ºC en Groenlandia). Este vertido fue mucho mayor que el último delBáltico (el dique tendría 40m de desnivel). Pero a diferencia del primero los dos últimos episodios, aunquemayores, probablemente sólo ralentizaron la formación de agua profunda sin llegar a frenarla del todo y portanto no provocaron un periodo frío tan fuerte y persistente como el Dryas reciente.

Figura 31. Sucesivos desagües lago Agassiz [a partir de 76] a medida que se reduce el glaciar laurentiano: 1) por elMississipí, 2) por el Niágara 3) por el San Lorenzo, 4) por el Hudson.

El conjunto de proxis y sondeos permite ya hacernos una idea mucho mas concreta del ritmo de esos cambiosclimáticos provocados por los vertidos de los inmensos lagos glaciares. Es sorprendentemente súbito, rápido,pero al mismo tiempo de gran amplitud. Estos son fenómenos esperables, de causa conocible pero que seproducen siempre de golpe y en momentos concretos aleatorios (y). La brusquedad de los cambios de fasepermiten comparar su efecto al producido por un interruptor.

y Aunque podemos afirmar que el momento concreto de ruptura o taponado del desagüe es aleatorio, en casos conocidosque se producen en la actualidad, aunque menores, como el del lago Perito Moreno en la Patagonia se aprecia un ciclobastante regular de unos seis años.

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Figura 32. Simulación de un modelo de conmutador climático [según 76 Fig. 3]. En función de por donde desaguael lago Agassiz aumenta o disminuye la formación de Agua Profunda en el Atlántico Norte (NADW).

Consecuentemente sube o baja la temperatura superficial del mar (SST) y por ello retrocede o avanza el frentepolar, aumentando o reduciéndose los casquetes de hielo.

Estos eventos súbitos y de magnitudes difíciles de imaginar, tuvieron lugar frente a poblaciones humanas quepodrían haber asistido al evento desde el margen sur o suroccidental de ambos lagos.Los estudios (en el lago Ammersee del sur de Alemania, GRIP, GISP2, DYE, Lagos polacos, alemanes,escandinavos…) coinciden en mostrarnos [389] una dinámica homogénea para los episodiosDansgaard/Oeschger: un calentamiento súbito (que pudo producirse en sólo 30 años entre los periodos frío delDryas y templado Bølling o entre el Dryas reciente (YD) y Preboreal, realizándose la mayor parte del salto enmenos de 10 años (z). Este calentamiento viene seguido de un enfriamiento lento durante de 2-3ka y una fasefría de 1ka. En el centro de esa fase puede haber (como durante el YD hace 12120 años cal BP) un cambio de20/30 años de duración con un clima templado que alcanzó valores interestadiales calidos propios delHoloceno (aa).

z El problema de determinar el tiempo exacto que tarda el cambio de fase es doble: por un lado el tipo de muestra o deanálisis no permitía afinar un periodo menor de tiempo por otro lado los cambios año a año no tienen una mismatendencia sino que la tendencia se va marcando a lo largo de una serie de oscilaciones serradas. Así es probable que unaño muy cálido fuese seguido de otro no tan cálido, seguido a su vez de otro un poco más cálido, etc. hasta llegar a undintel de media mucho más templado.

aa estos cambios son 11,5 veces más marcados en el registro de Groenlandia que en el continente.

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Las bajadas de la temperatura en las oscilaciones breves Gerzensee (descenso de 7,5ºC de media) o del OlderDryas (bajade media de 11ºC) en los lagos escandinavos son equivalentes a las del Máximo Glaciar Último.Es decir las oscilaciones de corta duración tienen una amplitud no siempre menor que las oscilaciones delarga duración. El paso al periodo templado Bølling se dio en menos de 70 años. En realidad en 10 años elcontenido de O18 varió desde 39,5o/oo a 36,5o/oo y consiguió llegar al tope de 35o/oo en 180 años [a partir deello se puede calcular un cambio de hasta 12º o19ºC en Groenlandia).Hubo [86] un aumento del 80% en la nivación en sólo 25 años y de un 200% en 41 años, al tiempo que latemperatura subió 9ºC (de los 12º que se registran en el total del cambio). La oscilación máxima detemperatura se dic en 60 años entre hace 14655 y 14595 años cal BP en el sur de Groenlandia, pero es posibleque en solo cinco años (entre hace14672 y 14665/60 cal BP) ya aumentara 7ºC (bb).En el sondeo GRIP, en los lagos escandinavos o en los anillos de crecimiento de los pinos alemanes seconstata que el enfriamiento siguiente del YD se pudo producir menos de 70 años (la temperatura media bajó15ºC en un máximo de 150 años). Cien años antes del enfriamiento del YD hay un máximo de agua de fusión(Melt Water Peek IA), que es un episodio anómalo de fusión de hielo e indica el efecto del vertido súbito deagua fría de los grandes lagos del deshielo glaciar continental hacia el Atlántico norte.

Figura 33. Oscilaciones en el ∂018 y en el grueso de los anillos de crecimiento de los árboles al final delTardiglaciar [a partir de 44]. Se observa perfectamente como la máxima variación se da en apenas setenta años.

El ritmo del calentamiento que se produjo después entre el YD y el Preboreal fue bastante semejante al quehubo anteriormente entre el Dryas antiguo y el Bølling. En el centro de Groenlandia se experimentó unaumento de 15º de la temperatura y del Metano en menos de 30 años [320 y 321].Todo el calentamiento en este paso del YD al Preboreal (las temperaturas en Groenlandia aumentaron 9,3ºCen julio y 18,2ºC en enero) se da entre 11525 y el 11465 años ice cal BP según el calendario establecido en elsondeo en el hielo del GRIP, o entre 11450 y 11390 años den cal BP según el calendario del crecimiento delos anillos de los pinos suizo-alemanes, que coincide además con el registro de los lagos suecos. En lossedimentos de los lagos este cambio ocupa entre 1 y 5mm de grosor dependiendo de la velocidad desedimentación (cc).

bb En Groenlandia parece que primero aumentó la temperatura -marcada por las proporciones de N15 y O18- y unos sieteaños después el metano (tal vez por el efecto invernadero de la descomposición de materia orgánica vegetal en bajaslatitudes).

cc El grosor de los sedimentos depositados cada año se ha estimado en 1 mm anual. Esto podría llegar a significar que elcambio se produjo en menos de cinco años. El problema es que para “borrar ruido” y despejar los cambios significativos,pasan un filtro de Fourier y un “filtro de paso bajo” (Low pass filter), algoritmo de cálculo que “lima” los picos en base auna frecuencia de 240 años, simplificando la imagen.

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Figura 34. Oscilaciones del ∂018 el Tardiglaciar abriendo “ventanas” centeniales [a partir de 10]. Se ve (remarcadopor mis flechas) que según los datos brutos la mayor parte de los cambios hacia clima cálido se dan en algo más deun lustro. El “salto” brusco queda disimulado en la curva promediada de 25 años (la media sólo recoge la variaciónpromedio y por tanto enmascara el hecho que el salto se haya producido de golpe dentro de ese lapso de 25 años).

Aunque lo más probable es que la causa determinante fuesen los cambios en la circulación termohialina (delagua salada del Atlántico) y el detonante de estos cambios del Tardiglaciar fuesen los vertidos repentinos deicebergs o aguas frías de los grandes lagos, los análisis del deuterio y del metano de las burbujas de aire en lossondeos de Groenlandia permiten acotar e incluso aventurar otros detonadores [361]: Tomando la cronologíacalibrada en años según el hielo se planteaba que:• Hace 11670 años cal BP hay un pico en el sulfato de sal no marina, extremadamente ácido y con granconductividad. Este es normalmente un proxi indicador de vulcanismo. Los autores del estudio sugerían quepodría tratarse de un volcán no identificado islandés, de Alaska, Kamchatka o incluso alguno más lejano perode gran potencia. Este pico va seguido de un enfriamiento (marcado por reducción del deuterio durante diezaños) con un máximo, diez años después, hace 11660 años cal BP.• Mientras que en Groenlandia el frío persistiría durante 15 años, es muy probable que, coincidiendo con esemínimo del norte, se produjera un notable aumento de la temperatura y la humedad en latitudes bajas.• En 11645 y en 11612 cal BP la temperatura (calculada en base al deuterio) aumentó de golpe en todo elGlobo persistiendo cinco años. De tal manera que, en menos de quince años, subió una media de 15ºC enGroenlandia, lo que es muchísimo si tenemos en cuenta que el máximo glaciar había implicado un descensode 19ºC.• El máximo térmico se alcanzó en 11490 cal BP.

En definitiva pues toda la transición se habría realizado en menos de 50 años y todo el cambio en menos de200 años. Esto podría explicar el aumento de metano en Groenlandia antes de notarse el calentamiento.Según mi opinión éste es un fenómeno que reproduce con bastante exactitud lo ocurrido en la explosión delPinatubo, aunque con efectos mucho más magnificados, por lo que la hipótesis del detonante volcánico y lainfluencia de los gases invernadero tendrían mucho sentido. Pero aunque algunos autores también hanseñalado también la gran explosión de Toba como desencadenante del episodio frío Heinrich 19, otrosrecuerdan que el actualismo ofrece, en cambio, ejemplos para dudar de la eficacia del vulcanismo a la hora dedetonar un cambio persistente.

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En definitiva se ha demostrado por el cruce de los datos de distintos proxis (del GISP, GRIP, DYE, las varvas,el Th/Ur, los corales, la susceptibilidad magnética, los contenidos isotópicos de sedimentos, del hielo o lasburbujas de aire, la composición de las faunas de foraminíferos, los estomas de las plantas, el polen y esporas,las faunas de paleoinsectos…; desde los sondeos de Groenlandia a los de la Antártida, Venezuela, Bolivia,Santa Bárbara en EEUU, norte del Atlántico, norte y centro de Europa, el Mediterráneo hasta el mar deArabia) que existieron cambios climáticos súbitos y extremos.Como hemos visto el paso del frío al periodo templado Bølling se dio en menos de 70 años con una subida deunos 13ºC de temperatura media. El cambio del periodo templado al frío del Dryas reciente (YD)probablemente como consecuencia de la ruptura del diques del lago Agassiz no se demoró mucho más.Durante esa fase fría hubo breves periodos cálidos de pocos años que alcanzaron valores típicos del Holoceno.El paso del YD al Holoceno analizado bianualmente demuestra que (aunque el frente polar tardara 400 añosen retirarse de 35º a 55º de latitud N) el grueso del cambio se produjo en menos de veinte años. Todo ellopuede resumirse en una tabla.

Figura 35. Tabla de variación de los cambios bruscos el Tardiglaciar el O18 se tomó como función de cambio en latemperatura [35]

CONCLUSION: CAMBIOS CLIMATICOS Y CAMBIOS SOCIALES.La asociación directa del desarrollo social con los grandes episodios climáticos, que la Arqueología delPaleolítico había postulado al principio, perdió definitivamente su base ya en los años setenta del siglo XX

CAMBIOS BRUSCOS DE TEMPERATURA (en años cal BP)GS1/2 (frio)14800 máximo frío(O18-43)Dryas antiguo (frio) a Bölling (templado) entre 14672 – 14665 cal BPen 5 años un aumento de 7ºCen 30 años se completa el cambioen 70 años máximo aumento hasta +12/19ºCEn 14650 cal BP calor (O18 -37)

Bölling/Allerød máximo calor (O18 -35)Allerød (cálido) entre 14655 y 14595 cal BPen 25 años aumenta la nivación en + 80% y la temperatura subió 9ºCen 41 años aumenta la nivación en +200% y temperatura subió 12ºCen 60 años máximo aumento

Allerød (cálido) a Dryas reciente (frio)en 50 años se produce el cambioen 150 años se completa llegando a bajar -15ºC

Dryas reciente (frio)12120 a 12090-- 20 años con temperatura interestadial templada11670 pico en el sulfato de sal no marina (explosión volcánica?)11660 enfriamiento durante diez años11645 a 11612 calentamiento +15ºC (O18-41,2)11580 máximo frío

Dryas reciente a Preboreal (cálido)11.525 a 11.465- 50 años aumenato de +9,3/18,2ºC11430 máximo calor (O18-36)

(según datos de Dansgaard, 1989; Severingshaus, 1998 y Bjorck,e.a., 1996)La temperatura está calculada a partir de la fórmula de correlación de una proporción deO18 (–0.6o/oo) por grado. (tomado de Bard)

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(dd), cuando se puso de manifiesto la no concordancia de los periodos culturales tradicionales con lasoscilaciones climáticas clásicas mayores y menores.

Hoy sabemos que la amplitud (las diferencias entre las variables del clima –temperatura y humedad) en loscambios climáticos no son proporcionales a su frecuencia (a su duración temporal) y tampoco a su extensiónespacial.Por otro lado es difícil sostener que los cambios climáticos de todo rango afectan indistintamente a sociedadescon estrategias organizativas de diferente ciclo económico (diario, anual, supra-anual) o incluso con diferentegrado de especialización, de movilidad, cantidad y densidad de población…No se pueden entender correlaciones directas entre sequía y estado de salud en cazadores-recolectores (ee) sinoes por el intermedio de otros elementos: alimentación y estrés social. Un aumento súbito de la nivación en un200% (como la que se produjo durante el Bølling) pudo provocar efectos catastróficos sobre las poblacionesanimales. La experiencia actual de gestión de parques naturales o mi propia experiencia de Tierra del Fuegolo demuestra claramente [235]. Pero esta catástrofe en el mundo animal sólo afectaría a una sociedad quedependiera especialmente de la caza de herbívoros, otra que explotase los recursos marinos en esa mismazona no tendría porque verse afectada.

Frente a la distinta duración de los ciclos climáticos podríamos pensar que determinadas sociedades se“adaptan” a ciclos largos o coevolucionan con estos. Probablemente existió una cierta vectorización de laevolución biológica marcada por determinados eventos climáticos: el proceso de enfriamiento, de desecacióno de reducción de la canopia arbórea desde el Terciario pudo favorecer a homínidos bípedos, de conductainstrumental y flexible y con una organización social cooperativa.También es lógico admitir que los grupos humanos reaccionan estratégicamente, con toma de decisionesconscientes, frente a los cambios inmediatos, súbitos. Pero es poco probable (tampoco lo es en nuestrasociedad, con todo su bagaje de conocimientos históricos y de previsión) que planifiquen las estrategias frentea ciclos climáticos de medio plazo (supra-generacionales por ejemplo).

A pesar de ello podemos hipotetizar sobre la existencia de ciertos dinteles de tolerancia o de posibilidades desuperación de las limitantes climáticas incluso las más amplias y persistentes: la despoblación del centro deAlemania desde 23ka BP hasta 13ka BP se debió al extremo rigor del Último Máximo Glaciar. Esa limitaciónclimática ha sido también invocada para explicar el aparente despoblamiento del centro de la Península [88 yrecientemente en 82] hasta el Preboreal. Pero como se ha demostrado [366], los grupos humanos organizaronesporádicamente asentamientos que debieron estar muy cerca del frente glaciar justo antes y después delMáximo Glaciar, tal vez aprovechando incluso un posible momentáneo recalentamiento atmosférico breve(como el denominado "Laugerie").

dd A partir de obras como “Approche Ecologique a l’Homme fossile” [220]

ee Como señala por ejemplo para dos poblaciones del 2800 y 1200 BP en la Baja California [398]

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Figura 36. Mapa con la localización de los asentamientos del Último Máximo Glaciar en Europa Central. Zonas devegetación y extensión del glaciar continental hacia 18ka BP Son los sitios de 1=Wiesbaden Igstadt (datado entre el

19,3 y el 17ka BP) y Breitenbach (alrededor del 18ka BP), 6=Gera-Zoitzberg, 7=Bockstein-Törle y tal vez5=Grubgraben, 3=Kastelhöhle y 4=Mittlere Klause. Los asentamientos que los grupos humanos organizaron

esporádicamente se ubican sobre el límite del desierto polar, no muy lejos del margen glaciar [a partir de 366].

HIATO 23 y16ka BP WIESBADEN IGSTADT

Figura 37. Dataciones de asentamientos desde 30ka BP al Holoceno en el centro del occidente europeo, mostrandoel hiato de fechados (y de ocupación humana permanente durante el último glaciar máximo. [a partir de 347]

La limitante climática ha sido la explicación del porque no se ocupó el extremo norte euroasiático hasta muytarde [297 y 96]. El argumento climático también se ha tomado como el fundamental en que basar la hipótesisde que la colonización del continente Americano se produjo después del periodo glaciar hace menos de 12ka.Sin embargo esas limitaciones son muy relativas y condicionadas a la tecnología. Las islas del Ártico fueronocupadas por poblaciones cazadoras que buscaban el oso polar ya hace más de 8000 años, soportandotemperaturas de –40ºC. También el modelo de ocupación americana tardía, basado en la apertura del corredorinterglaciar ha sido puesto en cuestión, como vamos a ver, por las dataciones más antiguas repartidas por todoel continente y por las dificultades, no menores, que entrañaría también el recorrer un paisaje peri-glaciar enplena fusión.

Más allá de esta cuestión de los cambios climáticos direccionales generales existen, como hemos visto,cambios súbitos extremos bien documentados en el Tardiglaciar. A pesar de la semejanza entre los sucesivos

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saltos climáticos que se produjeron en este periodo, probablemente no afectaron a las sociedades de la mismaforma ni temporal ni geográficamente.Por lo que sabemos históricamente las sociedades sedentarias, sin gestión central planificada, pueden resultarmás afectadas cuanto más impredecibles y abruptos sean los cambios, incluso podemos pensar que son másfrágiles que las sociedades móviles aunque estas tengan menor desarrollo tecnológico y no sean agrícolas-ganaderas. Los cambios globales pueden ser más catastróficos en algunos lugares que en otros: cuando estoscambios son persistentes, a escala subcontinental y por encima de la capacidad (velocidad) de adaptación delos ecosistemas existentes o de cambio de la sociedades que dependen de ellos. Es más fácil también que elsistema económico se adapte mejor a cambios a largo plazo que a los de pequeñas oscilaciones fuertes eimpredecibles que son económicamente mas costosas de superar. La organización social y económica(incluyendo las estrategias y tecnologías tanto de explotación de los recursos como de producción ymantenimiento de las condiciones de habitabilidad -vestido, cobertores, viviendas… (lo que podríamosdenominar termotecnología) pudieron ser los factores determinantes en esa dinámica de relaciones ydecisiones.Aunque los cambios que tuvieron que superar las sociedades del Tardiglaciar, fueron mucho más amplios ybruscos que los acaecidos durante el Holoceno, el registro histórico del Holoceno nos da ejemplos concretosque nos pueden dar idea de la flexibilidad de resultados de la interacción de esas variables.Como he comentado, las variables sociales pueden haber tenido más peso en las sociedades recientes que enlas más antiguas, pero un cambio climático brusco ha podido colapsar una sociedad agrícola sin afectar encambio a una cazadora-recolectora. Por ejemplo la pequeña colonia agropecuaria vikinga más septentrional deGroenlandia fue abandonada después de dos inviernos especialmente crudos entre 1351 y 1353 y la PequeñaEdad del Hielo hacia 1468 forzó al abandono del resto de sus asentamientos. Pero estos enfriamientos nodesanimaron a la gente cazadora esquimal, que ocupó Groenlandia.La densidad de población es otra de las variables a tener en cuenta a la hora de evaluar posibles consecuenciascatastróficas de un cambio brusco de clima: no sería de prever el mismo efecto de un cambio global sobre unadensidad de pocos habitantes por Km. cuadrado, característica del Tardiglaciar, que sobre una densidad depoblación de miles de millones como en la actualidad.La propia estructura social de distribución de bienes tiene unas consecuencias críticas para evitar la catástrofefrente al cambio climático. Aunque no podríamos decir que la Revolución Francesa fue causada por el cambioclimático, si podríamos conjeturar que los pequeños enfriamientos de 1788 y 1791, que produjeron malascosechas y consecuentemente hambrunas en Europa, pudieron favorecer la detonación de la RevoluciónFrancesa. En el sur de Alemania esas hambrunas no colapsaron ni tan solo una ciudad, el ayuntamiento de laciudad alemana de Ulm, por ejemplo, hizo un programa social de redistribución y racionamiento paraamortiguar los efectos de esas dos hambrunas.Obviamente el impacto del clima es filtrado por la estructura social y no puede contemplarse pues como unacausa directa del cambio social. El calentamiento de 4ºC del lado atlántico del Ártico durante los años veintese tradujo en una gran sequía en todo Estados Unidos en los años treinta. Pero no podemos argumentar queesto fuera el desencadenante de la crisis de Wall Street o del ascenso del nazismo.

Aunque la Arqueología ya ha empezado a revisar el efecto del impacto de los cambios bruscos para laHistoria antigua (ff), también deberá rediseñar el tipo de encuesta que se hace a los datos que existen sobre lassociedades prehistóricas más antiguas: tener en cuenta primero la existencia de esos cambios súbitos, despuésintentar ponerlos de manifiesto en el registro arqueológico y finalmente comprobar cual es su correlación conlos cambios en las estrategias organizativas de los grupos humanos cazadores-recolectores.

ff Se han intentado correlaciones con fenómenos climáticos de cambio brusco para el final del Imperio Acadio, y elImperio Antiguo Egipcio, para los cambios y crisis sociales en la época tardoimperial romana, para el declive de losimperios precolombinos peruanos y para los del Indo y China.

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7 METEORITOS Y PALEOMAGNETISMO

CAÍDAS DE CUERPOS CELESTES: DEL ESCEPTICISMO A LADUDA.Las mitologías de todo tipo están llenas de referencias a “encuentros cercanos” con las estrellas. Hay estrellas“amables” que anuncian “el advenimiento de una nueva Era”, que guían a reyes hacia Dios y hayconjunciones astrales que traen la “Era de Acuario”. Pero también hay lluvias de fuego, certeros castigosdivinos que eliminan ciudades por las “desviaciones” de sus habitantes.La Ciencia en un principio se preocupó de borrar toda traza de “impactos extraterrestres” sobre la Evoluciónde las especies (incluida la humana). Pero en 1960 la proporción anormal de unos minúsculos átomos en unasrocas pone a un equipo de científicos sobre la pista de un mega impacto meteorítico que habría acabado conlos animales terrestres más grandes que habrían vivido sobre la Tierra [225].Aunque ya se había identificado y reconocido en 1905 como cráter el llamado “Barringer” en Arizona [309],la virtud del trabajo de los Alvarez [17] en los años ochenta del siglo XX fue poder documentar bien elimpacto y su magnitud por las trazas de iridio en las rocas del periodo que coincidía con la extinción de losdinosaurios. El trabajo fue publicado en revistas científicas de rigurosidad consensuada, lo que forzó que sefuera admitiendo la importancia del impacto de un cuerpo celeste en la evolución de la vida sobre la Tierra enla frontera Cretáceo-Terciario (a). Desde ese momento se emprendió una “caza” sistemática de meteoritos,aupada por los medios de comunicación y por el impacto mediático de la imaginería sobre la extinción de losdinosaurios, primero en los reportajes de la BBC y finalmente en las apocalípticas películas de Hollywood,que aprovechaban para recolocarnos héroes semidioses frente al evento para redimirnos o para acompañarnosen el Apocalipsis final.En los diez años siguientes se documentaron más de 50 impactos y se han ido identificando las característicasgeomorfológicas y geoquímicas del metamorfismo (además de la abundancia en níquel, platino, cobalto) quepermiten identificarlos.Nadie duda hoy ya de que la Tierra ha estado sometida a impactos de meteoritos desde sus orígenes, y seadmite que este tipo de acontecimientos tiene una frecuencia y un alcance aparentemente aleatorios. Con laacumulación de datos algunos autores incluso han planteado la posibilidad una periodicidad cíclica de losimpactos mayores, con una frecuencia sintonizada en 26 millones de años causada tal vez por ciclosgalácticos o del sistema solar [303].Así [330] se ha admitido otra probable gran catástrofe de consecuencias globales en la frontera Triásico-Jurásico marcada por otra anomalía del iridio (b). Otra se habría producido tal vez durante el gran cambioPérmico-Triásico (hace 250 millones de años) documentada en este caso por la abundancia de helio y argonen las rocas de ese periodo y por la coincidencia con otro episodio de extinciones masivas (c).Si en principio se pudo dudar de la magnitud global de las consecuencias de los efectos de tales impactos elseguimiento en 1994 de los efectos del impacto del cometa Shoemaker-Levy 9 de sólo 700m de diámetrosobre Júpiter ha borrado algunos escepticismos [260].

a A pesar de que algunos autores lo vinculan al cráter Chicxulub del Yucatán, tampoco se ha identificado con seguridad elpresunto cráter de la extinción de los dinosaurios de hace 65 millones de años, que los investigadores L.W. y W. Alvarez–padre e hijo- postularon por las trazas anómalas de iridio en los sedimentos de ese periodo. Se calcula debió tener undiámetro de 150-200km. Debió ser provocado por un cometa de sólo 10km de diámetro o un asteroide a una velocidad 20km/seg y habría liberado la energía de 100 billones de toneladas de TNT.

b Una anomalía de hasta 285 partes por trillón [según 284] marcaría un impacto que habría instaurado la era de losdinosaurios.

c Las tres mayores colisiones posibles han sido descritas para:el límite Pérmico-Triásico, hace 250 millones de años impacto de asteroide o cometa que elimina 84% de los génerosmarinos (95% de las especies) y 70% de especies terrestres;el límite del Cretáceo-Terciario, hace 65 millones de años con extinción de 75% de géneros marinos; 18% de vertebradosterrestre incluidos los dinosaurios;el Devoniano final, hace 365 millones de años eliminación de 55% de géneros marinos. Impacto provocó enfriamiento ymodificación de las condiciones en el océano [330 y 100]

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Figura 38. Cráter Barringer [a partir de 309]

Para nuestro objeto de estudio, la Prehistoria de las sociedades humanas, no podemos pensar en ese tipo degrandes impactos: la prueba evidente es que no nos hemos extinguido. Pero también hay documentadosimpactos menores, como el Riess de Nordlingen, a partir de cuyo cráter se puede calcular un arrasamiento detoda la vida en algunos centenares de kilómetros a la redonda. Y el cráter Barringer, que lleva el nombre delpionero descubridor, es mucho más cercano en el tiempo: puede datarse grosso modo entre el 30ka y el 40kaBP, lo que nos acerca definitivamente a la posibilidad de que este tipo de fenómeno afectara poblaciones dehomínidos. El cráter tiene 1,2 Km. de diámetro y fue producido por un meteorito férrico de tan sólo 60m quelevantó una explosión equivalente a 20 megatones.Se ha estimado estadísticamente que impactos de menor magnitud como esos podrían ser más frecuentes. Enconcreto se pudieron producir entre uno y tres impactos con cráteres de mas de 20km cada millón de años.Así pues no sería improbable que durante el último millón de años hubiera habido uno. Pero, dejando de ladoel cráter de Barringer, el registro geomorfológico y sedimentario de los sondeos que afectan al Cuaternario yal Holoceno no han ofrecido por el momento pruebas de otro evento de este tipo que haya podido tener unatrascendencia visible en las sociedades homínidas.

Entonces, ¿no hubo realmente más impactos? Si los hubo ¿donde están las pruebas? ¿En el fondo del mar, oes que no se encuentra lo que no se busca?El famoso meteorito que presuntamente habría desencadenado la extinción masiva en el Cretácico en realidadtampoco ha dejado un cráter inequívoco. Dada la constitución de la Tierra hay un 60% de probabilidades deque la caída de cuerpos celestes se produzca en el mar. En este caso los efectos quedarían realmenteenmascarados: un gran tsunami y un gran disturbio en la sedimentación marina, además de la anomalía en eliridio y fragmentos de meteorito, serían las únicas pruebas de un evento de este tipo. Este parece ser el caso[331] en la frontera entre el Plioceno y el Pleistoceno, hace 2,15 millones de años, con la caída del meteoritoEltain de 4 Km. de diámetro en una hoya de 5000m de profundidad en el Pacífico, a 1500km de la costa delsur de Chile. Pero de hecho sólo se han identificado las pruebas físicas directas de uno de tales impactos (de60km de diámetro) en las aguas someras de Nueva Escocia.Un episodio tan reciente como el de Tugunska, en Siberia, tan ignorado en el mundo académico comoinvocado por “ufolocos” de todo tipo (un asteroide o cometa de menos de 100m de diámetro que se destruyó a10km de altura) no ha dejado prácticamente trazas visibles en el registro terrestre geomorfológico, pero arrasóuna superficie de 200km2 con una potencia de 15 megatones provocando un seísmo de fuerza cinco. [411]. Lacuestión es que, si este impacto fue causado por un cometa entonces habría que pensar que un asteroide de lamisma magnitud puede dejar un cráter de 4km de diámetro y que este evento tiene una frecuenciaprobabilística de 1 cada 1000 años, sin embargo sólo existen unos pocos evidenciados.Sólo si la masa del meteorito supera las 1000 toneladas puede llegar a impactar sin reducir la velocidad ydejando huella geomorfológica. Los más pequeños se desintegran, y los grandes se funden en la atmósfera[154]. Cuerpos menores que caen con regularidad sobre la Tierra dejan trazas que desaparecen, degradándoserápidamente sus componentes [36].Los estudios sobre la degradación de los micrometeoritos procedentes del paso de la Tierra por el complejo demeteoroides (d) demuestra que el 90% de estas partículas (las mayores de 0,1 micrómetro) se funden alcontactar la atmósfera [363]. Aún así, la masa calculada de lluvia de meteoritos es de 1010 Kg. por año, pero

d Meteoroide es toda materia que gira alrededor del Sol o cualquier objeto del espacio interplanetario que es demasiadopequeño para ser considerado como un asteroide o un cometa. Se denomina meteorito a un meteoroide que alcanza lasuperficie de la Tierra sin que se haya vaporizado completamente. Meteoro es la luz que se produce cuando un fragmentode materia extraterrestre entra a la atmósfera de la Tierra y se desintegra.

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puede variar multiplicándose por 2 o 3. La frecuencia de este ciclo de incremento (calculado en 100ka perofuera de fase respecto al ciclo de excentricidad de la Tierra) parecería indicar que existen periodos deincremento en la colisión de asteroides, por lo que la Tierra podría estar sometida a una mayor probabilidadde colisiones con asteroides cada 106ka [206] en función de la inclinación de la órbita terrestre y por laexistencia de ciclos de mayor producción de polvo estelar (producto de la colisión de asteroides ydesintegración de cometas), como indicaría la proporción de He3 en sondeos sedimentarios (e).Tal vez habría que verificar hasta que punto se han buscado efectivamente las trazas de este tipo de eventos.La formación de un cráter y el metamorfismo de impacto (presión enorme producida en escasos segundos)son la única forma de reconocerlos directamente. Pero los cráteres pueden quedar rápidamente borradosgeomorfológicamente. Las rocas fundidas producidas pueden parecer volcánicas, aunque hay algunasdiferencias en el modo de cristalización y la estructura que permiten identificarlas/ diferenciarlas. Tambiénhay elementos siderófilos (f) en gran proporción: níquel, cobalto, platino e iridio (g), además de una inusualproporción isotópica de los gases nobles como el helio y el argon, y del cromo (h) en las rocas. Pero yo no heencontrado ninguna referencia explicita a que se haya buscado el contenido proporcional de iridio, porejemplo, en los sondeos marinos o continentales profundos. Sabemos que los cromatógrafos y espectrómetrosde masas están calibrados para identificar sólo cierto tipo de componentes y no otros; además, las oscilacionesen las proporciones de gases nobles se han intentado explicar aduciendo otras causas como la variación en laactividad solar.

Un trabajo de divulgación realizado por Mike Baillie, de la Universidad de Belfast, uno de los especialistasmás reputados de la dendrocronología, repasa acontecimientos catastróficos que han afectado sincrónicamenteel crecimiento de los árboles en áreas que van desde China a Suiza o al sudoeste de los Estados Unidos.Finalmente “sucumbe” ante esa explicación de impactos meteoríticos para toda una serie de episodioshistóricos, y además intenta relacionarlos –hipotéticamente- con relatos o registros escritos [28].En Arqueología prehistórica hemos estado bien dispuestos a aceptar la relevancia de los cambios climáticosde largo plazo en el desarrollo de las sociedades, pero pocas veces hemos enfatizado el carácter cósmico de sucausa dominante. En cambio, existe una reacción de aversión mayor frente a la posibilidad de que otro tipo deevento cósmico, como los meteoritos, haya tenido algún tipo de impacto sobre la vida de algunas sociedades.Para la Prehistoria antigua, algunas coincidencias me han parecido indicios que habría que explorar: eldescontrol que existe entre los diferentes valores del ∂C14 (entre las varvas del lago Suigetsu, el mar deIslandia, el lago Lisan, el GISP2 y los espeleotemas de Bahamas, GB89, datados por espectrometría de masasde ionización termal del Th230).La extrusión equivale al doble del efecto acumulado de los primeros 30 años de pruebas nucleares del sigloXX. Va seguida de dos picos (en el 42 y 33ka BP) que coinciden con un mínimo del magnetismo y dosmáximos en el Berilio (Be10) y el Cloro (Cl36) cosmogénicos [38]. Como la alternativa de un cambio en elmagnetismo terrestre y solar juntos no puede explicar la mitad de la variabilidad, se ha sugerido comoposibilidad un cambio radical del ciclo del carbono que sólo se podría dar por un cambio brusco en el régimenoceánico. Pero, ¿a qué se debería esta “parada total” en las corrientes del océano? Se ha apuntado hacia unevento extraterrestre y así se ha sugerido la explosión de una supernova [255]. Esto podría explicar el pulso demil años ocurrido en el contenido atmosférico de isótopos hacia 44ka cal BP. Relacionando todas esasvariables la hipótesis de un impacto extraterrestre mayor tampoco deja de ser una posibilidad.

e El ciclo de 100ka en el clima terrestre que Milankowitch atribuyera a la excentricidad en realidad se podría deber alciclo de 106-104ka en que de la orbita terrestre pasa por estas zonas de mayor polvo solar. [61]

f elementos que tienen afinidad por el hierro y se comportan como él. Al ser pesados se concentraron en el núcleo de laTierra: manganeso, hierro, cobalto, níquel, molibdeno, rutenio, radio, paladio, osmio, oro, iridio, platino y oro.

g Los autores [como 324 y 174] sugieren que es preferible identificar los impactos y calcular la medidas de los cráteres porlas anomalías gravitatorias o por las trazas de esos elementos siderófilos [como 260].

h Los isótopos de cromo recogidos en Irlanda, España y E.E.U.U. demuestran su origen extraterrestre y corroboran elimpacto del meteorito en la transición Cretáceo/ Terciario.[326]

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Figura 39. Variación extrema en el ∂C14 atmosférico hacia entre 45 y 35 ka cal B.P. [a partir de 38]

Lo que debería estar fuera de duda (por pura lógica probabilística) es que, desde hace 2500ka, debe haberhabido impactos de meteoritos sobre la superficie terrestre, y que éstos han podido afectar a las poblacionesde homínidos. Lo mismo podríamos decir de época histórica. Pero los relatos antiguos han quedadooscurecidos por interpretaciones metafísicas, y probablemente integrados en construcciones o tradicionesmitológicas.La cuestión es ¿cómo poder demostrar este tipo de eventos? Ya hemos comentado la resistencia académica(que se enfrenta con sorna a este tipo de argumentos “extraterrestres”). Por otra parte ha sido difícil, hastahace muy poco, distinguir unas trazas meteóriticas de unas volcánicas (al principio incluso geomorfológicas,pero también las mineralógicas y las sedimentarias). El efecto global sobre el suelo y especialmente sobre laatmósfera y los conjuntos de organismos vivos del ecosistema (biocenosis) puede ser muy parecido al de losvolcanes y por lo tanto dejar una señal ambigua en los registros sedimentarios, del hielo y de ladendrocronología. Luego es normal que, si no se buscaron y eran además difíciles de identificar, no se hayanencontrado.Sin embargo hoy es posible una identificación directa geomorfológica, mineralógica y, sobre todo, porelementos traza químicos. También sería posible, dado el refinamiento de los sistemas de medidacronológicos, reseguir la sincronización de los eventos “sospechosos” y evaluar su alcance. Es muy probableque los impactos mayores, los que pudieron afectar significativamente alguna o más sociedades prehistóricas,sean perfectamente identificables porque la traza que dejan es más extensa incluso que el área afectada.Aún así, sin que eso signifique abandonar esta investigación sino todo lo contrario, las conclusionesdemandan prudencia. De momento no hay una verificación directa (con iridio y las otras pruebas unívocas) ymientras no se excluyan eventos de demostrada mayor probabilidad (como los cambios climáticos,inundaciones, actividad volcánica…) que permitan explicar cambios súbitos, deberíamos minimizar el efectode este tipo de causas de cambio brusco en el desarrollo de sociedades humanas. Por otra parte nos puedetranquilizar el hecho que los eventos más frecuentes de este tipo son también los más limitadosgeográficamente, y por ello sus efectos no pueden ser considerados críticos para las sociedades humanas… almenos de momento.

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PALEOMAGNETISMO

La Tierra es una especie de gigantesca dinamo que produce el campo magnético. Pero este geo-imán esinestable, tanto en intensidad como en la orientación y posición de los polos. Los grandes cambiosgeomagnéticos, los periodos de polaridad invertida durante los cuales los polos magnéticos de la Tierra estánal revés de como están actualmente, han sido ampliamente empleados como elementos de datación de lasrocas y de los yacimientos arqueológicos prehistóricos (i).Es un fenómeno de alcance global. Dado que puede identificarse en las rocas más antiguas se ha utilizadobásicamente como elemento para constatar los movimientos de las placas tectónicas desde antes del Terciario.Como pasa en el clima, por debajo de los grandes ciclos de polaridad normal e invertida que duran mileniostambién hay eventos geomagnéticos cortos que a veces acaban en esas inversiones totales. Poco a poco se vanconociendo mejor esos periodos cortos, de picos anómalos, en los que disminuye la intensidad del campomagnético. De momento se piensa que el cambio en profundidad puede tardar 5ka pero se instala tal vez ensólo un milenio.Se ha constatado en el sondeo GRIP que en los últimos 100ka ha habido por lo menos 3 grandes periodos deexcursión, y que hay ciclos (ciclos de Vries) de 205 años. Obviamente los eventos mas conocidos son lasanomalías más modernas: el episodio de Fram Strait estaría datado hace en 100ka BP; en Noruega sedocumentó uno alrededor de hace 70ka, alrededor de hace 35ka el famoso episodio de Mungo Lake y algoanterior el de Laschamp, el episodio Mono Lake hacia 23-24ka BP , y con menos de 20ka años se handocumentado [278, 279, y 280] eventos paleomagnéticos entre el 17 y 18 ka BP.Aún así, las dataciones no están rigurosamente definidas y un mismo episodio se atribuye a una grandisparidad de fechados. Probablemente existe un problema técnico y de muestreo que no ha permitido afinarsuficientemente en el ritmo o la velocidad (si es o no constante) en que se van produciendo los cambiosmagnéticos (j).Lo más importante de todo ello para el tema de los cambios bruscos y sus efectos son las consecuencias delmomento de inversión. Es posible que esas inversiones sean el resultado final de una traslación continua,gradual de la posición de los polos. Pero es muy probable que, como mínimo, el tramo final del paso de unafase a otra sea un salto brusco como en todos los fenómenos magnéticos de este género. Debemos recordarque fue justamente el efecto del magnetismo lo que desencadenó el desarrollo de la Teoría del Caos.

Lo que no es demasiado conocido son los efectos que pudieron haber provocado los cambios en elmagnetismo terrestre. Por supuesto las lluvias de meteoritos pueden tener alguna relación con ellos: serconsecuencia o ser una de las causas que los han disparado. Pudo también incrementarse durante esosepisodios de cambio súbito la incidencia de la radiación cósmica al ser afectados los cinturones de Van Hallen(k). Y ese incremento de radiación sabemos que afecta a los seres vivos.

i La disciplina del paleomagnetismo se desarrolló a partir de los trabajos de Pierre Weiss en 1907 [401] y más tarde conlas contribuciones en los años cuarenta y cincuenta de Néel [274].

j En los sondeos en las capas de hielo se toma el registro del Be10 y del Cl36 como indicador, porque se supone que sonelementos químicos cosmogénicos, que se producen por la intercacción de las partículas de rayos cósmicos con laatmósfera y que esa producción está en relación al helio y modulada por la influencia del geomagnetismo sobre esos rayoscósmicos. En los sondeos puede haber un índice de sedimentación de sólo 1,9 a 2cm por cada mil años. De manera que sise toma una muestra cada 3cm esta queda promediada y la fiabilidad es de menos de 1,5ka. En sondeos terrestres se hallegado a fiabilidades de 750 años. También se ha sabido que el paleomagnetismo puede estar interferido por impacto derayos de tromentas sobre la superficie, por lo tanto existen ciertos elementos de incertidumbre y dificultades paraaveriguar esos ritmos de cambio. Habra que esperar a tener más datos bien referenciados cronológicamente por datacionesindependientes para cruzarlos y poder afinar más.

k Las partículas cargadas de radiación cósmica y solar atrapadas por el campo magnético terrestre (en sus limitesexteriores, la Magnetosfera), forman los denominados cinturones de radiación de Van Hallen. El campo magnético desvíala mayor parte de la radiación protegiendo la atmósfera. Las partículas que quedan atrapadas en esos cinturones actúantambién de escudo.

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Pero el estudio del paleomagnetismo no ha avanzado lo suficiente, y la dificultad en identificar las pruebas desus consecuencias hace que, de momento, debamos dejar aparcado el tema de la repercusión de posiblescambios bruscos en el magnetismo terrestre sobre las sociedades humanas.

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6 EL VULCANISMOHa acompañado a la humanidad desde sus primeros pasos, documentados en el yacimiento de Laetoli enÁfrica, donde tres homínidos, ya bípedos, dejaron sus pisadas sobre unas arenas volcánicas hace más de unmillón y medio de años. Hay más huellas humanas sobre sedimentos volcánicos tapadas por nuevos depósitoseruptivos como las de Alcahualinca (Nicaragua) de más de 4ka de antigüedad. La erupción histórica dePompeya fue la primera catástrofe que dejó un relato escrito de testigos directos.

Figura 40. Huellas de homínidos en Laetoli (Tanzania) y pisadas humanas en el yacimiento de Alcahualinca(Nicaragua)

Los efectos sobre los registros paleoclimáticos se conocen bien por episodios recientes como los del Pinatuboy del Hudson. Estos casos recientes se han seguido lo suficiente como para poder modelizar las consecuenciasdel vulcanismo sobre el clima. Las trazas directas han quedado registradas por depósitos de tefra y anomalíasen el contenido de SO4 en los sedimentos marinos, de lagos y de hielos.Los materiales que se lanzan a la estratosfera producen un velo de polvo que tiene un efecto directo sobre elclima (a). Esta modificación del clima ha quedado reflejada en los anillos de crecimiento de los árboles endiferentes zonas del globo: en los pinos “britlecone” (Pinus aristata) de California, o en los robles de Europacentral y septentrional. El efecto está perfectamente documentado en las erupciones recientes de los volcanesLaki (1783), Tambora (1815), Krakatoa, (1883), Askja (1875), Katmai (1912), Agung (1965) o del Pinatubo(en 1991).La erupción del Pinatubo, con la proyección de 20 megatoneladas de SO2, provocó un enfriamiento de 2ºC enverano y un recalentamiento de 3ºC del invierno en todo el hemisferio norte durante los dos años siguientes.Pero las anomalías se manifestaron de forma antagónica en diferentes zonas, incluso vecinas comoNorteamérica y Groenlandia: mientras que en unas aumentaba la temperatura media en otras ocurría locontrario. Esas consecuencias se mantuvieron hasta cinco años.

a Los volcanes pueden lanzar sus emisiones (partículas del SO4, cristales de hielo y polvo de minerales ígneos) a más de40km de altura. A más de 14km de altura en la estratosfera son arrastrados y dispersados por los fuertes vientos formandoun velo que refleja e impide la entrada normal de los rayos del sol. Así se produce una bajada de la temperatura distribuidade forma no homogenea en la superficie terrestre.

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Figura 41. Anomalías climáticas provocadas por el Pinatubo [a partir de 308]. Las zonas de grises marcan ladiferencia con la temperatura media actual.

Los efectos del vulcanismo sobre el clima global a largo plazo y sobre las sociedades no están correlacionadosde forma lineal con la magnitud del evento (b).Sobre el clima global se limitaría a actuar como detonante de cambios a largo plazo si el efecto de una granerupción coincidiera en el tiempo con otros factores de cambio climático global. Así, se ha sugerido [355,353, 354 y 413] que en el cambio climático al Holoceno pudo haber habido la influencia de un acontecimientovolcánico en el hemisferio sur, en un lugar de momento no ubicado. La secuencia de cambios registrada enlos hielos de Groenlandia en el inicio del Holoceno se parece a los efectos de la erupción del Pinatubo. En esecaso el vulcanismo sólo habría significado un detonante en un momento en el que coincidían otros factores decambio global, como el máximo de la insolación del último ciclo orbital terrestre de Milankovitch.En la Última Terminación, durante el Tardiglaciar y en el Holoceno, en los registros del norte atlánticoeuropeo hay 29 episodios volcánicos mayores, algunos de los cuales llegaron a quedar registrados en el centrode Rusia. Los depósitos identificados proceden de los cuatro grandes centros de vulcanismo europeo: Eifel enAlemania, Islandia, Italia y Macizo Central de Francia. El efecto de uno estos acontecimientos en el registrode hielos de Groenlandia sugiere que hacen bajar la temperatura en 1,4ºC, y su efecto perdura en el registrodel isótopo O18 durante dos años (c).Los efectos directos persistentes pueden tardar dos años en notarse (hasta que los aerosoles llegan a laestratosfera o se detecta la cantidad anómala de SO4), y tardan sólo tres años más a regularizarse. Pueden

b Para comparar la potencia de las erupciones volcánicas se usa el índice VEI, que es la abreviatura de VulcanicExplosivity Index, La magnitud (de 0 a 8) se calcula a partir de la estimación del material (sólido y gaseoso) expedido.Una tabla de ejemplos es [185]:VEI Volumen de emisión Ejemplo de volcán0 1000 m3 Kilauea1 10,000 m3 Stromboli2 1,000,000 m3 Galeras, 19923 10,000,000 m3 Ruiz, 19854 100,000,000 m3 Galunggung, 19825 1 km3 St. Helens, 19816 10 km3 Krakatoa, 18837 100 km3 Tambora, 18158 1.000 km3 Yellowstone, 2 Ma

c Esto ha sido por tanto algo muy dificil de detectar ya que la escala normal del registro tardiglaciar, el grado de precisión,ha sido de 20 años.

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perdurar más de cien años y llegar a bajar la media anual de temperatura en 0,5º. Las 43 grandes erupcionesde volcanes en el último milenio, p.e., han podido contribuir a bajar la media de temperatura en 0,1ºC. [355]Con el tratamiento estadístico de los datos cada vez más numerosos se ha empezado a vislumbrar la existenciade ciclos de mayor o menor actividad volcánica. Así, se ha correlacionado el incremento del vulcanismo conlos cambios en la presión superficial provocados por la fusión de las capas de hielo. Estadísticamente en losúltimos 110ka se ha contabilizado una media de una gran erupción cada 1,05 ka años en el Mediterráneooriental, excepto en tres periodos (entre 8 y 15 ka BP; 34 y 38 ka BP; 55 y 61ka BP) en los que se incrementóla actividad. Coinciden con niveles de mar altos antes y después del máximo glaciar, y van seguidos de unperiodo anómalo de reposo. [231]

Figura 42. Erupciones volcánicas marcadas en los registros de los sondeos del Mediterráneo. (según 231.)

Su incidencia sobre las sociedades humanas dependería de las estrategias organizativas de los gruposconcretos afectados, y también de factores aleatorios (como el momento o circunstancias concretas y larapidez con que se produjera el evento).Pero no siempre son tan visibles los efectos de las erupciones sobre las sociedades como en Pompeya o enSantorini (d). En los sondeos realizados en el Mediterráneo; norte de Alemania y en los del hielo deGroenlandia, se han identificado muchos más episodios durante el Holoceno procedentes de la región delAtlántico Norte y del Mediterráneo [413; 376] que se confirman porque coinciden con anomalías en elcrecimiento de los árboles (tal como queda reflejado en la dendrocronología) pero que no se hancorrelacionado con ningún registro arqueológico (e).Es necesaria la aplicación de la observación microscópica de sedimentaciones en muestras de láminas finaspara poder identificar eventos y definir con mayor exactitud frecuencias y efectos en las sociedades. Lasposibilidades de la micromorfología de sedimentaciones nos permiten correlacionar estos eventos conconsecuencias de rango cronológico corto y ya han contribuido a aclarar incluso eventos de época histórica,que no tenían una explicación del todo satisfactoria. Es el caso del hiato de cuatrocientos años que se produceen Mesopotamia en el periodo Haburu 1 y el colapso del imperio acadio hace 4250 años cal BP., que que seha atribuido [400] a una mega explosión de un volcán no identificado en Anatolia. Este episodio también hasido resaltado, independientemente, por otros autores [28] desde otras perspectivas y con diferentes técnicas ypruebas: la Micromorfología de suelos, la Dendrocronología, el C14, la Palinología y la Sedimentología. Seha asociado al volcán Hekla 4 de Islandia y podría haber provocado una sequía y aridificación notable en todoel Próximo Oriente, occidente asiático y hasta Etiopía, Italia, España, Escocia o el Sudoeste de EEUU, con unincremento de cinco veces del polvo atmosférico desde el golfo de Omán al lago Van en Anatolia, y con uncambio en el régimen de los Monzones en el Índico [400]. La lista de efectos que se enuncian es mucho más

d La explosión del volcan de Tera, en la isla de Santorini al principio se situó hace 3390 años en base a la cronología defaraones egipcios. Las investigaciones de dendrocronología primero y luego en el sondeo Dye 3 de Groenlandia losituaron después con mayor exactitud hace 3627 años o 3645 cal BP por el C14. Supuso no sólo el final del asentamientodel periodo Heládico Tardío en la isla sino el colapso en otras sociedades del Mediterráneo oriental [28].

e Baillie señala como erupciones claves, que se notan en el crecimiento de los anillos de los árboles en diferentes partesdel mundo las de hace: 6370; 5190; 4345 del volcán Hekla 4; 3628 de Tera que sepultó el asentamiento de Akrotiri; 3159relacionada con el Hekla 3; 2207; 2044 y 1460 años. El investigador intenta correlacionar algunas de estas erupciones concrisis y relatos históricos o míticos. Otros autores/as señalan tambien la Tefra Lairg B de hace 6774–6677 años y Hekla 5de hace 6900 años.

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larga y cubre desde el Titicaca y el registro de Huascarán en los Andes hasta el GISP de Groenlandia (f). Entodo caso el evento se ha relacionado con la desestabilización de sociedades históricas (acadia, egipcia) delPróximo oriente, de la India y de China [28].

MEGA-ERUPCIONES EN LA PREHISTORIA ANTIGUA.Teniendo en cuenta la escala cronológica de la Prehistoria más antigua podemos prever estadísticamente laposibilidad de erupciones volcánicas de magnitud incluso mayor. Así se ha propuesto que la gran erupciónvolcánica del Toba de Sumatra, de hace 71ka (tal vez la mayor en los últimos 500 ka) tuvo una repercusiónclimática importante en el hemisferio norte: habría provocado un enfriamiento que pudo producir una granperturbación climática y con ello desencadenar el último “cuello de botella” evolutivo humano. Pudo ser elprimer detonante de la expansión de la forma humana moderna, como detallaré más adelante [18].Mejor documentada está la repercusión de la gran erupción de los volcanes gemelos del lago Laacher en elcentro de Alemania sobre las sociedades cazadoras recolectoras de Centro Europa. En la primavera de hace12916 años comenzó una serie de tres episodios eruptivos que duraron varias semanas. En ese tiempo seexpulsaron 6km3 de lava, 20km3 de cenizas y otros materiales; la columna de humo alcanzaría una altura de40km, y una extensión de 1300km2 del valle medio del Rhin quedo cubierta por una espesa capa de materialeruptivo que destruyó la vegetación, alcanzando, cerca del punto eruptivo, más de 50m de grosor. Losmateriales vertidos taponaron el curso del río Rhin que se embalsó en un gran lago. Al romperse el dique porla presión una gran ola arrasó todo el curso medio del valle. La lluvia ácida llegó hasta los Alpes, por el sur, yhasta el sur de Suecia por el norte. La traza de aerosoles (g) se registró en las capas de hielo de Groenlandia, ytanto el registro isotópico como el dendrocronológico de Suiza demuestran que durante siete años hubo un“invierno volcánico” con temperaturas por debajo de lo normal, provocado por los aerosoles vertidos a laatmósfera.

Figura 43. Panorámica actual de los cráteres del volcán del Laacher See

Sin embargo el periodo templado Allerød perduró durante 200 años más sin que se desencadenase un salto defase hacia un periodo frío más duradero. Los grupos (clasificados por la arqueología tradicional con el nombre“Federmesser”) cuyos asentamientos en la zona del Rhin habían quedado cubiertos por capas de lapilli ytefras reocuparon casi de inmediato la zona, como lo demuestra el sitio arqueológico de Bad Breisig [199, 24,y 376].

f En este último registro del sondeo GSIP2 de Groenlandia queda claro que no se trata de una anomalía “normal” ytampoco parece volcánica porque hay un aumento en aerosoles (el EOF1) y en amonio pero no en sulfuros o sulfúricos (S,SO4

++). Las trazas sugieren una quema masiva de biomasa continental pero sin erupción volcánica. ¿Pero qué es lo que laprovocó?¿Una sequía prolongada? Es dificil en este caso correlacionarla a un ciclo extraterrestre “normal” (actividadsolar, polvo estelar). ¿Hay que pensar en otra causa, impacto de un cuerpo extraterrestre? Si así fuera la quema de biomasano sería producto de la sequía, sino más bien al revés: la sequía y las otras anomalías climáticas y atmosféricas (como elpolvo) serían producto del impacto y la quema consecuente.

g Los ácidos del azufre se miden en los sondeos del hielo por Conductividad Eléctrica (ECM). Es un sistema muy precisopara detectar los depósitos volcánicos muy finos.

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Figura 44. Extensión y grosor de la tefra volcánica depositada por el volcán del Laacher See. A la derecha paisajede Centroeuropa contemporáneo de la erupción, con la extensión de los glaciares, la tierra emergida en el Mar del

Norte, el lago de la fase Billing del mar Báltico y con círculos se marcan los sondeos donde se han encontradodepósitos de la erupción. [a partir de 199, 24 y 165].

Al otro lado del mundo, en Tierra del Fuego, los resultados obtenidos a través de la Micromorfología desuelos permitieron demostrar que la capa de tefra identificada encima de la capa F en el asentamiento deTúnel I [288] hace entre 6720 y 6675 años fue consecuencia de una lluvia de cenizas recientes expulsadas poralgún volcán activo en aquel momento en la Patagonia. El asentamiento presenta unas características (seabandonaron unos productos no consumidos y utensilios no amortizados) que sugieren una huida precipitada,tal vez como consecuencia de esa erupción [288]. No podemos evaluar todavía la trascendencia de estaexplosión, y de la lluvia de cenizas consecuente, sobre el global de la sociedad que ocupaba Tierra del Fuegoen aquellos momentos. No tenemos aún suficientes yacimientos datados de ese lapso que nos permitangeneralizar el fenómeno. Tal vez en un futuro se consiga correlacionar ese evento con el abandono y con elhiato de ocupación que se produjo a continuación, o relacionarlo con el hecho que la sociedad que reocupa elmismo sitio unos siglos mas tarde tenga una expresión arqueológica y unas estrategias de subsistenciaradicalmente distintas. Ya no son grupos cazadores de herbívoros terrestres sino que basaron su subsistenciaen la explotación de los recursos marinos.

EFECTOS DEL VULCANISMO SOBRE SOCIEDADES MÓBILES Y SEDENTARIASCon independencia del trastorno inmediato y casual o de los efectos secundarios de los tsunamis (queveremos a continuación), el impacto directo de las erupciones volcánicas sobre sociedades móviles y de bajadensidad de población debió ser muy distinto de las consecuencias de explosiones volcánicas sobresociedades complejas cuyas estrategias económicas y subsistenciales se basaban en una agricultura intensivasobre un territorio políticamente acotado. Las sociedades sedentarias no sólo pudieron ser desalojadas de susterritorios y perder los medios de trabajo (los campos, canalizaciones,…) y el capital de trabajo acumulado ensu preparación. También serían más sensibles a crisis climáticas de mediano-corto plazo como las quedesencadena una erupción volcánica grande. Es posible que ese fuera el caso de la sociedad minoica y laexplosión de Tera o el caso akadio que hemos comentado.

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Incluso hoy día si ocurriese una explosión como la del Laacher See en el centro económico y poblacional dela Unión Europea es muy probable que provocara una grave crisis en toda Europa, y en Alemania incluso uncolapso total.Las sociedades prehistóricas móviles del centro de Alemania del periodo Allerød en cambio siguieron suHistoria.

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5 TERREMOTOS Y TSUNAMIS

Los movimientos súbitos de grandes masas de tierra (terremotos, deslizamientos, solifluxiones,desprendimientos) y agua (tsunamis, inundaciones, riadas, aludes de nieve…) son los eventos geológicosparadigmáticos de fenómeno catastrófico [272]. Con la única excepción de los movimientos generados pormeteoritos o lluvias torrenciales, podemos decir que en general la causa determinante de estos fenómenos esla liberación brusca de tensiones acumuladas (producto de la fuerza de gravedad y de los movimientostectónicos).En muchos casos, ya lo he comentado, son el ejemplo perfecto de cómo un aumento mínimo en cantidad (elúltimo copo de nieve, granito de arena, sacudida mínima) deviene en un desencadenante que provoca unefecto cualitativo sin relación de magnitud con la causa.Este carácter súbito hace que, a diferencia de lo que ocurre con la mayor parte de otros fenómenos como laserupciones volcánicas, no sea siempre posible una reacción preventiva por parte de las sociedades afectadas.Por ello aunque el área afectada sea sólo local o regional, aún en la actualidad estamos acostumbrados apercibirlos como grandes catástrofes. Sin embargo, también hoy sabemos que muchos de ellos sonperfectamente previsibles y se puede calcular razonablemente la probabilidad y magnitud, aunque sea másdifícil predecir el momento concreto.En realidad el efecto catastrófico no es producido tanto por el cambio brusco, sino que depende en mayormedida de las variables sociales: un terremoto en el Asia occidental provoca muchas más víctimas que uno dela misma magnitud en Tokio debido a las diferentes condiciones constructivas de los edificios en los que seencuentran las posibles personas afectadas; las inundaciones o deslizamientos de tierra provocan muchas másvíctimas en aquellos países en los que la gente pobre, mayoritaria, vive amontonada en lugares de riesgo (porser éstos los únicos en los que el sistema de la propiedad les deja establecerse).

EFECTOS DE TERREMOTOSLa ocurrencia de terremotos en la Prehistoria podría documentarse sin demasiados problemas, pero susconsecuencias catastróficas son más difíciles de evaluar precisamente por esas características de aleatoriedad.Por eso y por las características (movilidad, baja densidad de población…) y tecnología (construcciones conmateriales ligeros) propias de aquellos momentos no parecería, en principio, que tuvieran un gran impactosobre el desarrollo de las poblaciones cazadoras recolectoras.Los terremotos fueron frecuentes en la Península Ibérica, tanto en el sur como en la zona circumpirenaica.Sólo en los últimos 9ka años en la cuenca de Granada se produjeron tres de gran intensidad. Se ha podidoreseguir en esa zona terremotos hasta hace 30ka. De todas maneras para que queden registradosgeológicamente deben tener una intensidad mayor de 6 en la escala Mercalli, y la frecuencia de los registradosen nuestro país con esa magnitud no es muy elevada (a). Sin embargo tenemos algunos indicios para creer quepodrían ser eventos utilizables para establecer “momentos” sincrónicos regionales a través de los derrumbesde cuevas y aleros. No son pocas las cuevas en la Península que presentan la boca cegada por este tipo dederrumbes. Sería interesante, en este sentido, hacer un inventario completo y tratar de datar esos derrumbespor ejemplo en la cornisa Cantábrica, donde se han documentado desde Tito Bustillo, La Garma hasta Isturitz(en el País Vasco francés). También en el extremo noreste y en toda la vertiente mediterránea tenemosepisodios de derrumbes recurrentes y grietas en formaciones calcáreas cársticas que, datados, podrían servirpara construir un repertorio de estos posibles episodios regionales.En la práctica es difícil sincronizar estos sucesos pues el actual desarrollo de los sistemas de datación nopermite una precisión suficiente. Pero la capacidad de discriminación cronológica se podría incrementar parael Tardiglaciar y principios del Holoceno ya que se ha estimado que los terremotos fuertes en nuestra zona nofueron muy frecuentes: se ha calculado un sólo evento medio-grande cada 1000 años para una zona de riesgomediano, como la cuenca del Segura [392]. De existir un programa expreso de dataciones se podría conseguirun registro más exhaustivo de las colapsos cársticos asociables a esta causa, y no sería imposible intentar esacorrelación.

a Para España existe un catálogo ya desde 1932 [126].

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De todas formas como ya he comentado, es lógico pensar que el impacto sobre las sociedades cazadoras-recolectoras prehistóricas debió ser muy aleatorio y localizado, dependiendo de factores incontrolables (desdela hora, la estacionalidad, la ubicación exacta de los asentamientos…). Como máximo podemos pensar quealgún grupo pudo quedar sepultado catastróficamente por un derrumbe que, accidentalmente, les sorprendieradentro de una cueva.Se puede hacer una reflexión análoga para otro tipo de catástrofes similares: aludes, inundaciones súbitas...Aunque algunas pudieron tener una magnitud absolutamente sin paralelos en la actualidad. Las citadasrupturas de los diques de los lagos de deshielo de las grandes masas glaciares en el hemisferio norte (lagoAgassiz, Báltico y probablemente los de los glaciares asio-siberianos) o grandes episodios que combinaronterremotos con grandes manifestaciones del El Niño [201] fueron acontecimientos súbitos difíciles deimaginar hoy día. Y todo ello pudo ocurrir delante de los ojos de grupos humanos, que vieron cortado deforma súbita y prolongada su paisaje. La repercusión social de estos acontecimientos está aún por explorar enArqueología prehistórica.

LOS TSUNAMIS Y LA PREHISTORIAEn cambio estas olas gigantes que son los tsunamis, eventos súbitos de ámbito regional o supra-regional, sípudieron causar gran impacto especialmente en sociedades recolectoras-pescadoras litorales. En efecto, por lavelocidad y el rango de sus efectos [181] el impacto sobre poblaciones sedentarias costeras puede ser enorme.Como es bien sabido los tsunamis se originan por terremotos, deslizamientos en los taludes submarinos ocaídas súbitas de masas (rocas –incluidos meteoritos-, hielo o masas de agua) en el mar. Pero, además, otrascausas menores (incluso antropogénicas) pueden provocar también deslizamientos de materiales y rocas quevayan a parar al mar produciendo pequeños tsunamis locales con olas que no guardan proporción con la masavertida (b).Los tsunamis que se producen en el centro de los océanos pueden generar en alta mar olas de gran longitud(>100km) pero de una altura apenas perceptible (45cm), y así en algunos casos la ola puede pasardesapercibida. Sin embargo estas olas pueden desplazarse a una velocidad de hasta 1000km por hora y cuandose aproximan a la costa la energía cinética se transforma en altura, la velocidad puede descender a 50km porhora, la longitud de onda se reduce a 1,5-3km pero pueden superar los 100m de altura.Tenemos datos del pasado reveladores de su efecto devastador. En Chile la combinación de terremotos ytsunamis han hundido porciones muy vastas de las costas al sur de la isla de Chiloé. El asteroide Eltain queimpactó en el sur de Sudamérica hace 2,15 millones de años causó una ola gigantesca que afectó a todo elPacífico, el Atlántico y Sudáfrica en menos de 24 horas. Probablemente un tsunami causado por undeslizamiento en la isla del Hierro, en las Canarias, hace 50ka causó una ola que arrojó enormes bloques depiedra de cientos de toneladas por encima de acantilados de más de 30m de altura en las islas Bahamas.Los estudios [298] realizados a partir de 1990 en la península de Kamchatka, zona especialmente sensible,demuestran que allí la frecuencia máxima es de uno cada treinta años, que se produce una ola gigante de másde cinco metros cada 100, y que por lo menos una vez cada milenio hubo uno gigante de más de 30m dealtura y de 19km de penetración. El primero documentado hace 7,15ka BP (llegó hasta una altura de 32metros sobre el nivel del mar de la época)

LOS INDICIOS: CÓMO SE PUEDEN DETECTARAnte la espectacularidad de estos datos cabe preguntarse ¿porqué entonces estos eventos bruscospotencialmente tan catastróficos no se han tenido en cuenta en los estudios de sociedades litorales?

b Algunos han llegado a tener un alcance de 30km. Un deslizamiento de tierras en Niza en 1979 durante la construcción deuna prolongación del aeropuerto por ejemplo provocó una ola de 3m.

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Figura 45. Esquema de la dinámica de un depósito de tsunami en Kamchatka [a partir de 298 fig. 5]. La altura deltsunami de 10m dejaría depósitos difíciles de detectar sobre las antiguas terrazas marinas a más de 500m de la costa

actual.

EL problema ha sido cómo detectar las pruebas. En realidad, aunque existen algunos artículos advirtiendo deesta posibilidad a finales de los ochenta [90 y 49], el interés real por este tipo de fenómenos y el inicio de suidentificación geológica sistemática empezó a mediados de los noventa. Es posible pues que en lasexcavaciones de yacimientos arqueológicos costeros anteriores a 1995 no se hayan llegado a detectar ese tipode eventos.Frecuentemente las trazas geológicas se han confundido con los efectos de ciclones o grandes tormentas. Aveces la evidencia no es más que una fina capa de arena de playa de menos de 1cm, desarticulada yredepositada por encima de la línea o verma de tormenta (c). Las investigaciones han demostrado lo difícil quees detectar o interpretar adecuadamente ese tipo de depósitos mediante el tradicional sistema de "carrotage"(introduciendo una sonda de pistón para sacar una muestra cilíndrica) o sondeo limitado puesto que así sepuede confundir con el efecto de grandes tormentas. Hace falta realizar una cata algo más extensa que permitaver un perfil más continuo de la sedimentación.

Figura 46. Depósitos del tsunami Storegga en el oeste de Noruega. A la derecha la arena de base, en el centro lossedimentos removidos y a la izquierda el sedimento del reflujo. [48]

c Por ejemplo en Escocia hay sedimentos de tsunamis que son apenas una capa de arena fina, gris, micácea (de un máximode 10cm de grosor), dentro de capas de arcilla limosa gris o limos arcillosos grises. Estos depósitos se atribuyeron primeroa tormentas y no se reconocieron como de tsunami hasta 1988.

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LAS CONSECUENCIAS DE TSUNAMISHistóricamente tenemos bien documentados los efectos y las consecuencias de algunos grandes eventos deeste tipo: la explosión de Tera de hace 3628 años debió producir una ola de más de 30 metros; en 1883 elKrakatoa en el estrecho de Sunda (Indonesia) provocó tsunamis que mataron unas 36000 personas; unterremoto de magnitud 7 provocó, el 17 de Julio de 1998, una ola de 15 metros barriendo por completopoblaciones costeras en el norte de Papúa y matando a más de 2500 personas.

A pesar de lo que solemos pensar las costas europeas tampoco han estado exentas de ese tipo de agresiones.Incluso en la Península se han documentado geológicamente los efectos de tsunamis: el primero de granmagnitud (d) se ha detectado en el Golfo de Cádiz (hace 2300-2280 años cal BP), pero desde ese episodio sehan registrado 23 tsunamis considerables en esa misma costa [227].El tsunami producido por el terremoto de Lisboa (de fuerza 8-9 en la escala Mercalli) llegó desde la mismabahía de Cádiz hasta el sur de Galicia, se notó desde las costas inglesas y holandesas hasta el África y elCaribe, y pasó por el Mediterráneo aunque debilitado (e).No es necesario que se trate de una costa o zona inestable: son bien conocidos los llamados tele-tsunamis quepueden atravesar a 1000km por hora todo el océano Pacífico, desde Chile a Kamchatka. Como, por ejemplo,el que se originó en 1960 frente a la costa chilena, cuya ola alcanzó una altura de 4m en las costas deKamchatka y llegó hasta Hawai y Japón (f).

TSUNAMIS Y SOCIEDADES PESCADORAS-CAZADORAS-RECOLECTORASNo podemos dejar de preguntarnos cómo pudo haber afectado a una sociedad recolectora litoral como porejemplo la gente indígena recolectora-pecadora-cazadora fueguina un evento de estas características, cuandosabemos que el 90% de sus asentamientos o de su actividad general no solía ubicarse por encima de los 5m dealtura sobre el nivel del mar. Nuestros colegas chilenos [282] opinan que el cambio en el patrón deasentamiento que parecen observar alrededor del Optimo Climático medieval pudo ser la consecuencia de unaexperiencia traumática de ese tipo. Falta sin embargo, en este caso como en otros posibles, un estudio quepermita la confirmación poniendo de manifiesto ese fenómeno brusco y su sincronización con una reacciónhumana correspondiente.También podemos plantear, por ejemplo, que en la costa noroeste de América, donde se han registrado olasmuy potentes producidas como reflejo de sacudidas de la costa occidental del Pacífico, algunos de esoseventos pudieron tener algo que ver en las interrupciones que se observan en el desarrollo de las sociedadescazadoras-pescadoras-recolectoras.En la Prehistoria antigua europea se han documentado grandes eventos de este tipo ocurridos por ejemplo enel mar de Noruega hace 30ka. Y los sondeos en el fondo del fiordo Volda, en Noruega, han detectadoasimismo otras turbulencias que han sido fácilmente atribuibles a tsunamis prehistóricos: hace 9,6 ka BP y11ka BP [319].

d Curiosamente coincide en el tiempo con el tsunami que produjo la mayor turbulencia en el fiordo Volda en Noruega.

e El epicentro estuvo a unos 200km al WSW del Cabo San Vicente y la zona más afectada fue el Algarve aunque llegódesde Huelva y Cádiz hasta Galicia. Esta catástrofe dio lugar al primer registro y evaluación moderna de daños a partir delinforme que encargó el rey español Fernando VI. Hubo 1.275 víctimas censadas en España y en total sucumbieron entre15 y 20 mil personas. También es considerado uno de los primeros episodios de este tipo de haber sido tratado comonoticia por los incipientes medios de comunicación europeos de la época. Se redactaron numerosos escritos ypublicaciones de muy distinto tipo como cartas, poemas, o ensayos de carácter filosófico, cuyos autores (Feijoo, Goethe,Voltaire o Kant) trataron sobre el origen y causas como fenómeno de natural. Fue tal vez también el primero cuyanaturaleza de “castigo divino” fue profundamente discutida y es posible que su impacto social favoreciera toda una seriede cambios políticos: separación iglesia-estado, aumento del poder secular... Para más información e ilustraciones de laépoca ver [207 y 248].

f El terremoto de 1960 de una intensidad de 8,6 en la escala Richter fue uno de los mayores del siglo XX. El tsunami queprovocó llegó a las costas más cercanas al epicentro en menos de quince minutos con olas de 25m. En 15 horas llegó a laislas Hawai a 6800km de distancia. Ocho horas mas tarde llegó con olas de más de 6m a las costas de Japón causando allá180 víctimas [181]

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Figura 47. Sedimentología del sondeo en el fiordo de Volda (Noruega) en el que se observan dos picoscorrespondientes a perturbaciones por tsunamis: uno entre 9575 y 9655 BP y otro (el tsunami Storegga) después de

7675BP (extraído de 319. fig 11]

Pero evento prehistórico de este tipo que mayor interés ha despertado por su intensidad es el de Storegga dehace entre 8040-8170 años cal BP (C14 7,31-7,25ka BP). Sus olas pudieron llegar a alcanzar de 23 a 34m enalgunos puntos y afectaron como mínimo toda la costa de las Islas Británicas y por supuesto la deEscandinavia (g).El tsunami Storegga fue doble en un intervalo de tiempo muy corto. Fue provocado por un deslizamientosubmarino de 1700km3 de sedimentos a 1000m de profundidad. Causó una ola que dejó depósitos a mas de

g Probablemente esa zona del mar de Noruega estuvo sometida a otro gran deslizamiento submarino hace 30-35ka,aparentemente mayor pero de consecuencias menos conocidas.

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9m de altura sobre el nivel actual de la costa en las Shetland. Teniendo en cuenta que el nivel del mar estabaentonces entre 20 y 28 metros por debajo del actual eso significa una ola de más de 30m.Esa ola barrió toda la llanura costera del Mar del Norte, las costas de Inglaterra, Escocia y Escandinavia,zonas ocupadas en ese momento por grupos orientados en gran medida a la explotación de recursos marinos.Uno de los modelos propuestos para la ocupación de esta zona, sur de Escandinavia, en este momento sitúalos asentamientos a dos centenares de metros, máximo, de distancia de la línea de costa y entre 1,5m a 4msobre el nivel del mar de la época. Esto evidentemente los exponía a la destrucción de la ola del Storegga.El problema en este caso es la complicada dinámica geomorfológica de este litoral. En la costa oeste deNoruega, los efectos, que debieron ser catastróficos, de una ola de 16m han podido borrarse o ser confundidoscon sedimentos de la transgresión de Tapes (una subida isostática paulatina del mar que alcanzó un máximode 10m sobre el nivel actual mil años más tarde, a los 6,5ka BP). En la costa oriental de Escocia, otro de lospuntos críticos, existen pocos asentamientos datados en esa época, y en algún caso los depósitos marinossuprayacentes fueron interpretados como vermas de tormenta.A pesar de estas dificultades, he podido encontrar algunos datos muy sugestivos respecto al posible impactode este evento en una serie de asentamientos que ocupaban una posición susceptible de ser afectada en lacosta occidental de Escandinavia. El yacimiento de Lego al sur de Stavanger (Noruega) está situado a 4km dela costa actual y a 4,5m sobre el nivel del mar, y tiene un fechado de 7,5 BP. Su ocupación se interrumpe justoantes del evento. Está cubierto por una capa de sedimento marino revuelto, que ya se atribuyó, como unaposibilidad, a este fenómeno [30]. Ese nivel revuelto ha dado las únicas inversiones anómalas en series muycoherentes de dataciones y es diferente de los niveles documentados en otros sitios (Jare y Dunde porejemplo) que pueden interpretarse con mayor probabilidad como arena de la transgresión marina posterior[313].Es interesante la coincidencia del fenómeno con el cambio entre lo que se ha llamado la “cultura de Fosna II”(caracterizada por instrumentos líticos en forma de láminas, puntas con muesca y buriles) y “la cultura deNosvet I” (instrumentos microlíticos y con azuelas pulidas). La falta de sitios con dataciones de este momento(no se conservan demasiado los materiales orgánicos para datar) hace aún difícil ver que pasó realmente,aunque la costa occidental de Noruega es uno de los sitios donde podrían detectarse el impacto de esa ola.

Pero no es el único indicio de las consecuencias de ese tsunami. Pasa algo muy semejante en la costa oeste deSuecia. El sitio de Balltorp [277], del periodo Sandarna, estaba en una isla del antiguo fiordo de Gota(Goteborg). Tiene una datación última de 7,24 ±130ka BP. La playa en aquellos momentos debía estar a 15mpor encima de la actual. El asentamiento, a uno o dos metros por encima del nivel del mar de la época, estabapor lo tanto completamente expuesto a las consecuencias de una ola aunque fuera de apenas algo más alta detres metros.Por encima del último nivel de ocupación hay una capa de arena gruesa que se interpretó como de una playatransgresiva. Sin embargo en ese nivel superior algunos materiales aparecen revueltos, y se han datadocarbones en 7,57±150ka BP. Esa es la única datación discordante (más antigua que la capa del ultimomomento de ocupación, que está por debajo) de toda una serie de 11 fechados.En la misma monografía se recogen 83 dataciones de otros yacimientos mesolíticos de la costa oeste deSuecia. En toda la lista sólo hay dos dataciones (de 7,42 y 7,40ka BP, y por tanto justo antes del evento) enlos seiscientos años que van entre 7,64 y 7,05 ka BP. Esto sugiere realmente un hiato de poblaciónimportante. Tradicionalmente la manifiesta falta de datos y la discontinuidad no se había atribuido a unacatástrofe, sino que siguiendo la argumentación histórico-cultural se había interpretado como un simpleperiodo de transición ”atípico” entre el que se llama ”complejo cultural Sandarna” y el siguiente periodo o”complejo cultural Lilhut”.Este momento también coincide con el final de la ocupación del sitio Bua VästerGärd, situado en una pequeñaisla a 5km del continente, que tenía a una altura máxima de 55-60m, también al sur de Goteborg. El sitio tuvouna ocupación que comienza alrededor de hace 8,2±200ka BP pero la última datación es del 7,425ka BP. Enla misma costa el asentamiento de Ölmanas se abandonó hacia 7,405ka BP y el de Dammen hacia 7,6ka BP.Los yacimientos de la zona del Gran Belt están datados justo antes: el de Musholm en 7,490-7,410±115ka BPo Kalo Vig en 7,5ka BP., casi coincidiendo con él tsunami tenemos sitios como Tude/Frølunde, datado en7,245±65kaBP, y ya mucho después del evento otros como Halsskov 6,83±105ka.En el sur de Dinamarca el periodo Maglemosiense esta datado entre el 9,5 y el 8ka BP. Después, durante elKongemose, los grupos cazadores habrían desarrollado estrategias orientadas a la explotación de recursosmarinos. Por ello podrían haber estado también sometidos a las consecuencias del evento. Lo difícil en este

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caso es saber cómo se combinó el posible impacto del maremoto con otro: el más general y permanente de latransgresión del mar de Litorina causado por el desagüe catastrófico final del Agassiz que inundó las costas.En Escocia hay pocos sitios arqueológicos de ese momento en la costa oriental, que es otro de los puntosdonde se podría detectar esta incidencia. Pero en la costa occidental se evidencia un lapso entre lo que se haclasificado como asentamientos del periodo Maglemosiense (hasta hace 8,8ka BP) y asentamientos conconcheros (restos del consumo intensivo de moluscos) de gente que explotaba los recursos litorales delllamado periodo Obaniense (a partir de hace 6,5ka BP) (h).En las Hébridas del Sur entre 8,1 y 7,2ka BP hay asentamientos (Gleann Mor, Bolsay Farm y Staosnaig)situados en zonas altas que también se interrumpen.En resumen también en esa costa escocesa podría existir un hiato con poca población entre el 8,4 y 7,2 ka BP,y luego otro hasta 6,5 en que empezaría una explotación más intensiva de los recursos costeros (el llamadoperiodo Obaniense pleno). Esta dinámica de población podría correlacionarse con un primer impactoclimático y dinámico sobre la costa hacia el 8,2ka BP (el gran desagüe del lago Agassiz) y tal vez otrodinámico (el maremoto Storegga) en 7,3ka BP.Es posible incluso que la ola se hiciera notar dentro del Báltico en las costas orientales [327].

Figura 48. Mapa de la costa escocesa y escandinava con situación se los sitios aludidos en el texto posiblementeafectados por tsunamis. [a partir de la figura de 48].

h En esta costa, aunque hay algunas continuidades en los tipos de instrumentos como los martillos de asta de ciervo yexiste una datación de un material de conchero de 7,8ka BP., existen pocos concheros anteriores al 7,5ka BP [118]. Enuno de estos pocos, el de la cueva de Ulva (situado a bastante altura a 43m sobre el nivel del mar), ese nivel antiguo dehace 7,6ka (cronológicamente cercano al tsunami) tiene un instrumental “atípico”; después hay un hiato hasta una nuevaocupación con un instrumental diferente (el que caracteriza la fase llamada “obaniense”). El énfasis en la recolección demarisco hace que los concheros se hicieran cada vez mas numerosos después del 7 ka BP al tiempo que hay cada vezmenos sitios con los instrumentos microlíticos que habían caracterizado el periodo anterior.

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Figura 49. Evolución del mar Báltico [según 1] A) al final de Dryas B) el Mar del Yoldia 10ka BP en el inicio delHoloceno C) fase del Lago Ancylus en el periodo boreal D) Mar de Littorina 8000BP

CONCLUSION: LA RELATIVIDAD CONYUNTURAL DEL EFECTODE TERREMOTOS Y TSUNAMIS EN PREHISTORIAEL impacto de los tsunamis sobre las poblaciones sedentarias costeras puede ser enorme por la velocidad y elrango de sus efectos. La posible magnitud de la catástrofe se hace difícil de mesurar: pudo depender deelementos tan aleatorios como el momento concreto del impacto (la estación del año, la hora del día)encombinación con la topografía, el patrón de asentamiento y la velocidad de reacción de la gente afectada (i).En un hipotético caso de grupos pescadores cazadores recolectores como los de Tierra del Fuego se puedemodelizar que un tsunami podría haber tenido mucho mayor impacto si se hubiera producido de noche,cuando la mayoría de la gente estaba durmiendo en sus cabañas junto al mar. En este caso apenas se salvaríanaquellas personas que ocasionalmente residieran en campamentos transitorios situados en altura, o en partidasde caza como las que realizaban los hombres en busca de guanacos. En cambio, de producirse durante el díaes posible que dado lo abrupto del terreno algunas personas, de haber estado alertas, tuvieran tiempo deponerse a salvo o que grupos de mujeres en búsqueda de leña en el interior también se hubieran librado.En definitiva, una encuesta en los perfiles sedimentarios costeros submarinos junto a un análisis de lassedimentaciones litorales y su correlación con los asentamientos podría hacer comprobable posiblesrepercusiones de estos cambios bruscos. El afinamiento de los sistemas de datación de los sitiosevidentemente es uno de los requisitos que limitan, de momento, esa comprobación final sólo a ciertos

i En este sentido es paradigmático el mismo caso del terremoto de Lisboa, Ocurrió a las 9,30 de la mañana del día deTodos los Santos, cuando mucha gente estaba en las iglesias, veinte de las cuales que cayeron enteras sobre sus cabezas.Después, unos 40 minutos mas tarde, llegó la ola del tsunami cuando muchos habitantes de la ciudad se habían acercado alTajo intentando escapar. Hubo tres enormes olas que arrasaron las costas y a la gente que se había embarcado huyendo delos efectos del terremoto y del incendio que se había declarado. Finalmente llegaron las enfermedades infecciosasprovocadas por la descomposición de los cadáveres.

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periodos con mejor fidelidad en los fechados, como el Tardiglaciar o el inicio del Holoceno como es el casoque he presentado de Escandinavia.

TRANSGRESIONES RÁPIDAS: CAMBIOS RÁPIDOS, PERO NOTANTOSi bien he descrito los efectos de terremotos y tsunamis como causas de cambio brusco por antonomasiaalgunos cambios isostáticos y transgresivos podrían también considerarse cambios bruscos. La subida delnivel marino que se produjo alrededor de 8,6 ka BP en la costa occidental de Dinamarca [118] fue de 28metros en 850 años (equivalente a 3m en 100 años) sumergiendo la mitad de la península danesa. Aunquesólo significa una subida de 3cm anuales, en vida de un individuo representa 1,5m y la inundación probablede muchos lugares donde existieran asentamientosLa transgresión de 65m y la consiguiente inundación de la llanura del mar del Norte desde el 10ka BP tuvo unritmo de subida de 2m cada cien años. El Báltico entre 10,4-10,2ka BP [327] subió 14 metros es decir sólo7cm anuales, pero esto es lo mismo que 3,5m en 50 años. En definitiva estas trasgresiones del nivel del marsupusieron un cambio de paisaje perceptible directamente por los grupos humanos. Además ese ritmocalculado para las transgresiones tampoco fue necesariamente paulatino y continuado. Si, como han sugeridoalgunos autores [71], la transgresión se debió en gran parte al vertido final del lago Agassiz en 8,3ka BP, elnivel del mar debió subir repentinamente medio metro en un par de años.Los movimientos isostáticos provocaron otros acontecimientos bruscos bien documentados en la zonaescandinava-báltica como por ejemplo los cambios de drenaje de los lagos (concretamente los cambios entreel mar de Yoldia y el drenaje final del lago Ancylus). Una subida isostática de 7m al norte del lago Vänern enSuecia supuso hacia el 9,3 ka BP el cierre del desagüe y el establecimiento del istmo entre Suecia y Noruega,en un proceso que duró menos de100 años.

No es descabellado pensar que las estrategias organizativas de los grupos cazadores-recolectores-pescadoresquedaran afectadas por este tipo de transformaciones relativamente bruscas. Desde la Arqueología tradicionalse han querido correlacionar, por ejemplo, con el final de “la cultura” Maglemosiense y su substitución por la“cultura” Kongemose. Es decir, aunque no se sabe que significa realmente a nivel de las sociedadesprehistóricas lo que la Arqueología tradicional ha denominado un cambio de “culturas”, si que se puedeaventurar que se produjo un cambio brusco en la dinámica social (desarrollo de nuevos instrumentos, nuevasestrategias de explotación de los recursos o incluso tal vez substitución de gente). Como en el caso de losdesagües súbitos, que hemos comentado en el capítulo 9, un estudio detallado de la paleotopografía y delpaisaje podría evaluar mejor y en profundidad las correlaciones de esos cambios con los documentados en elregistro arqueológico.

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4 CAMBIOS BIÓTICOS SÚBITOSLas consecuencias inmediatas de los cambios abióticos bruscos pueden ser cambios bióticos igualmentesúbitos. Pero éstos pueden ser también la consecuencia de la propia dinámica interna de las biocenosis y/o dela intromisión humana.Los desplazamientos territoriales, los cambios en las asociaciones específicas, la evolución y la extinción sonlos cambios bióticos que más nos interesan desde la perspectiva del cambio brusco en la Prehistoria. Elcambio biótico fue sin duda la estrella de la discusión científica del siglo XIX y la clave de la puesta en dudade los relatos mitológicos. En esa lucha por imponer la visión científica, como he comentado, el gradualismose convirtió en una premisa.Quiero exponer, de manera breve, algunos elementos propios de reflexión para apuntar de qué forma sepueden introducir en la nueva discusión científica la trascendencia en las sociedades humanas de loselementos de cambio biótico rápido no como alternativos a los cambios graduales (que hoy nadie puedediscutir), sino como otra faceta, contraria pero al mismo tiempo complementaria: lo que en términos de laDialéctica Materialista se consideraría una unidad de contrarios: no puede existir el gran cambio lento sin lospequeños cambios bruscos, de la misma forma que estos actúan sobre las consecuencias de la lentaacumulación de los cambios graduales precedentes.

LOS CAMBIOS DE DISTRIBUCIÓN DE LAS ESPECIESVeamos en primer lugar los cambios en el espacio, es decir los cambios bruscos en la Paleobiogeografía. Laexpansión desde, y retracción hacia refugios como consecuencia de los cambios climáticos es uno de loscambios súbitos que podemos analizar.El estudio de la vegetación antigua, la Paleobotánica, nos había acostumbrado a pensar en cambios devegetación muy lentos, coherentes con los grandes ciclos climáticos de baja frecuencia. Sin embargo hoy díalos análisis palinológicos, el incremento de los controles de largo plazo y el actualismo han demostrado quehabía que revisar esa premisa. Sabemos también que los cambios de vegetación (independientemente de lasupervivencia de especies o de especimenes de larga vida resistentes) se han producido de forma muy rápida:Hoy sabemos por ejemplo, que la selva tropical (que se había considerado un bioma prístino) en muchoslugares es una biocenosis bastante reciente y con una capacidad de recuperación elevada (puede avanzar 1km2

anual). Durante unos años hemos desarrollado proyectos de investigación en la costa atlántica de Nicaragua.Esta zona está cubierta por una espesa selva con manglar sólo alterada por pequeños campos de agricultura deroza y por zonas restringidas de sabana más abierta (a). Allí tuvimos la ocasión de comprobar esa rápidarecuperación de la vegetación. Durante las prospecciones previas los sitios que nos marcaban los guías (quehabían vivido allí) como poblados abandonados apenas hacia algo más de veinte años, eran del todoirreconocibles debajo de la maraña de vegetación y de árboles. Más aún, las investigaciones nos handemostrado que la zona ahora de selva estuvo muy cultivada con maizales como mínimo hasta hace 800 años.También sabemos que los “disturbios”, lejos de significar un inconveniente, son fundamentales para elrejuvenecimiento, la supervivencia y la evolución del bosque y que por tanto forman parte de sus ciclosnaturales.También indican rapidez las señales de la colonización del bosque avanzando sobre la retirada glaciar enEscandinavia, o los sondeos de lagos como la columna palinológica del lago Monticchio, uno de los sondeosmás importantes realizados en el área central del Mediterráneo y que recoge toda la evolución de lavegetación del último ciclo glaciar [10].

a El avance de la frontera agrícola industrial, precedida de la explotación maderera amenaza hoy este biotopo que se podíahaber considerado prístino o al menos intacto desde el inicio del Holoceno.

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Figura 50. Diagrama palinológico del sondeo en el lago Monticchio [según 10]

En el primer caso las peculiaridades de los profundos y súbitos cambios de nivel del Báltico han permitidoconservar tocones de árboles de más de 9ka BP bajo el mar. La datación por C14 y la dendrocronología deestos árboles permiten reconocer que el bosque postglaciar crecía muy cerca del frente del gran glaciarcuaternario a medida que éste se retiraba [118].En el segundo caso, a partir de las investigaciones se calcula que la amplitud máxima de la frecuencia tenía unpromedio de sólo 142 años durante todo el espectro temporal del Pleistoceno superior en el Mediterráneocentral. Es decir, que en menos de 150 años de promedio, la tendencia del paisaje dominante bascula de unextremo al otro de la variabilidad.(b)Otro dato que nos indica la necesidad de la revisión de las premisas que se habían aceptado en Botánica es lacantidad de estomas de las hojas. Se podría suponer que su número está pautado genéticamente, sin embargose ha visto que cambia muy rápido en función de las circunstancias climáticas. En definitiva, la proporción deestomas en la superficie de las hojas es un óptimo indicador de las oscilaciones microclimáticas permitiendoun nivel de discriminación de una década [395]. La misma forma de las hojas varía de forma rápida en lasramas bajas de ciertas especies de árboles en función de la presencia o ausencia de animales ramoneadores, loque nos indica también la elasticidad adaptativa de las plantas.

La consecuencia de los posibles cambios bruscos a nivel de la producción primaria, de la vegetación, es surepercusión en los consumidores.

b En España se ha tomado como referencia clave el trabajo palinológico realizado en la turbera de Padul. La modelización[de 189] de los biomas europeos durante el periodo climático isotópico OIS3 es especialmente discrepante para España ydemuestra, a mi entender la dificultad de la interpretación realizada en base a esa secuencia palinológica de Padul. Tal vezhabría que revisarla en base a los nuevos datos isotópicos y al estudio fino de las sedimentaciones marinas y lacustres delMediterráneo.

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Cuando los paleontólogos chinos Chow [70] y Pei [289] en los años cincuenta definieron la asociación“Coelodonta antiquitatis -Mammuthus primigenius” estaban describiendo una asociación de fósiles(tafocenosis) recurrente en los yacimientos pleistocenos desde el Golfo de Vizcaya hasta el mar del Japón: loshuesos de mamut y de rinoceronte lanudo a menudo se encontraban juntos en yacimientos correspondientes aépocas glaciares del final del Cuaternario. Pero cuando el norteamericano Guthrie [159], en 1984, fue más alláy definió el concepto “estepa del mamut” estaba definiendo un bioma extrapolado a partir de sólo unas pocasespecies del conjunto y de la presencia recurrente de unas especies no univocas en las tafocenosis desdeFlorida hasta Asturias. En definitiva, pretendía la existencia de una estepa homogénea en toda este área apartir de la presencia de algunas de las especies de cuyos descendientes pueden encontrarse actualmente enun biotopo de estepa en una lista mucho más amplia de animales.El problema de la segunda propuesta respecto a la original es que no es lo mismo describir una “tafocenosistipo” (c) que derivar, a partir de ella, un determinado bioma. Tal vez ha contribuido a esa confusión el que sehaya indicado la contradicción que suponía la presencia de especies hoy incompatibles en un mismo depósitopaleontológico. Por ejemplo, en el yacimiento catalán de l’Arbreda yo mismo indiqué que en mismo nivel sehabían encontrado restos de lirón careto y de reno. Estas dos especies son incompatibles porque el lirón paradespertarse del letargo invernal necesita una temperatura mínima, que el reno no soporta. Por ello se hasugerido que tales asociaciones no se corresponden a ningún ecosistema existente en la actualidad. Además deque no existen ya ni el mamut ni el rinoceronte lanudo, tampoco coexisten en el mismo valle, por ejemplo, elreno y el corzo. Así pues ese presunto bioma de la “estepa del mamut” no tendría ningún equivalente en lasestepas actuales pues en él habrían coexistido un gran número de animales, algunos de los cuales son hoyincompatibles.No cabe duda de que las condiciones durante la épocas glaciares y en el Cuaternario en general, fuerondistintas a las actuales (d) pero tal vez hemos contribuido a la representación de biomas dignos del Dr.Frankenstein al construir un paisaje imaginario del pasado, poblándolo con todas las especies que hemosencontrado en el mismo estrato arqueológico o geológico. Porque una cosa es que haya habido cambios en latolerancia de las especies (permitiendo que vivieran en el mismo lugar) y otra muy distinta sería que hubierahabido una sucesión muy rápida de biocenosis. Esto segundo es admitir que los cambios en el paisaje vegetalhan podido tener un ritmo superior (o haber sido más sensibles a oscilaciones climáticas menores o breves) alde los cambios visibles en las sedimentaciones de los yacimientos. En definitiva, que las diferencias en lossedimentos que identificamos como estratos y que usamos como unidades de conjunto para el análisispaleontológico se produzcan con más lentitud que los cambios en las biocenosis [173]. Las dos posibilidades,distintas, pueden explicar la presencia de esas asociaciones paradójicas de animales, pero la segundatradicionalmente se ha tenido muy poco en cuenta.

c Una asociación recurrente de un número limitado de especies en los conjuntos de fósiles, que sirve para marcarbioestratigráficamente una cronología paleontológica determinada

d Por ejemplo hoy faltan en Europa los grandes mamíferos: elefantes, hipopótamos, los grandes carnívoros…

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Figura 51. Esqueleto actual de canguro sobre el yacimiento de Mungo Lake en Australia. De quedar tapado esteesqueleto por la duna de arena se podría producir una mezcla de huesos contemporáneos con huesos del yacimiento

antiguo.

En latitudes medias y sobre todo en zonas ecotonales o de montaña, como son Iberia o los Balcanes enEurasia occidental, por sus características de diversidad topográfica, existe una gran heterogeneidadpaisajística. Esta permite la existencia de refugios desde los cuales se expande la población fronteriza deforma exponencial al final de cada ciclo climático (e).

Figura 52. Rutas para la repoblación de Centroeuropa después de los periodos glaciares. Se marcan las zonas dehibridación que responden a la velocidad de migración en función de las barreras ecológicas[extraído de 173 fig. 3].

Los cambios en la distribución y la velocidad de colonización están todavía poco estudiados. Es evidente queel esquema cronológico glaciar alpino, basado en unos ciclos de decenas de miles de años, no da cuenta de larealidad concreta de los ciclos climáticos cortos y los cambios bruscos.

e La península italiana, de menor, extensión tiene el handicap de los Alpes que actúan de barrera y filtro. Durante elCuaternario, en los momentos de desglaciación cuando el paso por esa vía alpina quedaba por fin expedito, las áreascentroeuropeas desheladas a reocupar ya estaban copadas por los emigrantes de la Península ibérica o balcánicos quepodían llegar antes [360].

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¿Cómo se explica la permanencia del mismo espectro faunístico paleontológico –la tafocenosis del complejofaunístico del mamut y rinoceronte lanudo (f)? Esta asociación, además de alguna especie fría, está constituidaen su mayoría por una fauna banal (de clima templado y muy tolerante con el biotopo). Son conjuntos defósiles, en los que se mezclan animales que hoy corresponden a climas fríos y a bosques templados. Seencuentran desde el Mediterráneo peninsular hasta Beringia, pero sólo se da alguna variación entre susextremos geográficos.¿Como se conjuga la persistencia de esa fauna a lo largo del tiempo con espectros florísticos que oscilandesde bosques templados a estepas frías, tal como vemos en el diagrama palinológico del sondeo deMonticchio? Hay dos posibilidades de explicación, contrarias pero que no se excluyen.Podría tratarse de una notable resistencia o movilidad de esas especies de grandes mamíferos frente unavariación crítica de la vegetación. Hoy día también podemos ver por ejemplo elefantes en el margen sur delSahara, en Malí.O bien estaríamos ante una frecuencia, más elevada de lo que admitimos, de palimpsestos. Estas mezclasserían el resultado de unos cambios rápidos y drásticos en la distribución de las especies animales comorespuesta a pulsos muy breves, pero marcados, de las condiciones ambientales y a cambios rápidos de lospaisajes vegetales dominantes.Así pues no debería descartarse a priori la posibilidad de que lo que aparece en el registro como unatafocenosis muy variada no fuera en realidad mas que una sucesión muy rápida de asociaciones bióticas en lasque puede predominar una u otra tendencia climática.

EVOLUCIÓN VERSUS EXTINCIÓN: LA EXTINCIÓNCATASTRÓFICA COMO FACTOR EVOLUTIVOLa evolución y la extinción son los cambios bióticos más populares. Desde el pensamiento tradicional, queintentara racionalizar Cuvier, los cambios en las faunas se habían producido por extinciones que se entendíancomo catástrofes (Diluvio Universal bíblico) y se contraponían al concepto Evolución gradualista de loscientíficos realistas (g). Considerado desde una perspectiva más moderna, ambos términos forman parte deuna misma unidad: no existe evolución sin extinción: una especie nueva sustituye total o localmente a suantecesora. La posterior discusión y las explicaciones sintéticas nos han llevado a entender la SelecciónNatural como mecanismo gradual que actúa a nivel de la población, pero la Evolución sólo se explica si haymutación a nivel individual, si se van produciendo individuos distintos. Aunque el carácter más o menosestocástico o caótico de esa mutación sea aún objeto de debate, no hay duda que se debe concebir como unfenómeno súbito. Es decir que en el sentido más clásico, aunque sólo hubieran habido ciclos ambientales muylargos como directores de la Selección Natural (lo que tampoco es cierto), la Evolución sería la consecuenciade su acción cuantitativa y gradual a gran escala sobre una suma de pequeños cambios genéticos cualitativosbruscos a escala molecular.Otra cuestión, que debe recordarse, es que no sólo la competencia intraespecífica es la que está actuando en elproceso de Selección Natural. También hay que tener en cuenta la interacción entre los componentes de losecosistemas. Es lo que entendemos como co-evolución: la modificación en un componente produce unareacción en los demás con los que interactúa [42]La selección se puede desencadenar por un elemento ajeno al organismo: sea un agente patógeno, un cambioen el nivel de la competencia interespecífica o un efecto extraterrestre (como hemos comentado un cambio declima derivado del movimiento terrestre, de la actividad solar, del polvo interestelar o de un meteorito). Elefecto de la selección puede ser una reacción en cadena [137, 191]: una decena de huéspedes puedensucumbir con su portador, la redundancia ecológica puede hacer que una especie ocupe completamente y demanera irreversible el nicho de otra que haya sufrido una fuerte reducción (h).

f Tal como la define el paleontólogo alemán Kahlke [200]

g De la pugna entre el catastrofismo del barón de Cuvier (1817) y el gradualismo de Lyell (1833), la Teoría de laEvolución darwinista por su énfasis en la Selección Natural se inclinaba por la segunda opción.

h Así por ejemplo la extinción de los mamuts arrastró consigo la desaparición de los parásitos específicos. Pero también seha argumentado [417] que si los humanos extinguieron los mamuts de Siberia, estos dejaron de limpiar la nieve de laestepa con sus patas y colmillos, ello imposibilitaría la vida a otros herbívoros menores, menos eficientes como cavadores

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Por ello ciertos autores [333] consideran que la diferencia entre evolución por sustitución o por extincióndeviene en gran medida una cuestión de la escala cronológica, poblacional o específica involucradas. Tanto desi se trata de extinciones bruscas o de extinciones paulatinas (normales), tal vez se pudiera establecer unaúnica diferencia entre aquellas extinciones específicas, en las que desaparece una especie sin sucesión (comola de Australopitecinos) y aquellas con sucesión (Homo arcaico o Paleoantropinos a Homo moderno oNeantropinos). O se podría entender la Extinción como un fenómeno extremo de selección que opera a nivelmasivo eliminando toda una especie, en vez de sólo una espectro de su abanico de variabilidad.Las causas que se han barajado para todas las extinciones se pueden resumir en catastróficas (como lasastronómicas súbitas), los cambios climáticos o del hábitat (sea por reducción, fragmentación- insularizacióno por fluctuaciones anuales o accidentales que extinguen parejas, la competición con nuevos taxones -elAustralopithecus frente a los neocarnívoros, las nuevas especies de carnivoros del Pleistoceno [396], o aHomo-, y finalmente la oleada antrópica, la intervención directa o indirecta humana (en el Pleistocenocontinental y el Holoceno insular).

Figura 53. Mapa de las extinciones más importantes donde se explicita la falta de sincronía. Las extinciones enAustralia habrían precedido a las de América y estas a las de Madagascar, en el mismo orden de la llegada de los

humanos a cada uno de estos lugares. [según 242]

LOS CAMBIOS SÚBITOS EN POBLACIONALES ANIMALES.En Prehistoria, y tradicionalmente en Paleontología también, cuando se tratan los cambios en las biocenosis seacostumbra a pensar en términos gradualistas de Selección Natural, en cambios paulatinos y a utilizar deforma apropiada el concepto instrumental de distribución normal de una población. Cuando se produce uncambio climático y disminuye por ejemplo la temperatura la distribución normal se va desplazando poco apoco hacia tamaños mayores de los individuos siguiendo la Ley de Bergman.

Figura 54. Efecto de la ley de Bergman

pero más efectivos como rumiantes. Como consecuencia estos ya no habrían mantenido a raya el crecimiento de lataiga/tundra, por lo que esta sería beneficiada por la primera acción, remplazando a la estepa del mamut. Al final estereemplazo habría favorecido el cambio climático del Holoceno al cambiar el albedo. O sea que habría sido la sobrecazahumana la que (en una especie de “efecto mariposa caótico”) habría acabado con la Era glaciar. Sin ir tan lejos es másfácil pensar que la mengua de herbívoros grandes y medianos por la caza humana provocó en la Península el aumento delnúmero de conejos; la explotación industrial y desmesurada de ballenas tal vez ha multiplicado el número de pingüinos enla Antártida…

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Cuando la selección está forzada por una predación continuada, la población afectada tiende a desplazarsehacia tasas de reproducción más elevadas, lo que puede significar un desplazamiento de su distribuciónnormal hacia tamaños más reducidos (i).¿Pero qué pasa si en lugar de gradual ese cambio es brusco y afecta al centro de la distribución? Si el cambioes brusco lo más probable es que afecte a la mayor parte de población (el centro de la distribución normalpuede equivaler a más de sus dos tercios…) porque esos individuos tienen unos caracteres muy semejantes ycentrados en las condiciones que van a cambiar de golpe. Sólo se salvarían los extremos anómalos de ladistribución. Dependiendo de la longitud de onda de la perturbación, la selección podría derivarse hacia losindividuos más resistentes de un extremo o hacia los individuos con menos requerimientos del otro extremo.Esto, en caso de un estrés previo, puede acabar con la población entera al quedar reducida a un númeroinferior al dintel de reproducción viable, produciendo el colapso.[40, 45]

Figura 55. Gráfica del colapso de la población frente a un cambio brusco.

En el corto plazo la reducción de poblaciones es un efecto que puede depender estocásticamente de unavariación ambiental y de un elemento estadístico lineal como es la relación entre densidad de población ycapacidad de carga de su nicho ecológico. Las variables ambientales significativas son la capacidad de cargadel medio y su calidad, el clima, las enfermedades y parásitos, competición intra-específica, la predación(humana o animal)…En este corto plazo las poblaciones tienden a mantenerse en un equilibrio inestable: una población mínimaque evite la homocigosis (j), pero que no exceda el nivel poblacional de los rendimientos decrecientes que lallevarían a un efecto Allee y al exterminio (k).Los modelos estadísticos (l) demuestran que la variable más significativa en la estabilidad de la población deuna especie es la capacidad de reproducción r (o ratio de incremento poblacional: nº de nacimientos/nº de

i Pero puede darse la tendencia contraria: los animales grandes pueden tender a un aumento del tamaño que permitaenfrentar con éxito un ataque del espectro normal de sus depredadores, en este caso la tendencia es compensar lainmunidad frente al depredador reduciendo la tasa de reproducción, coherentemente con la necesidad de una etapa decrecimiento más prolongada.

j Una reproducción en un grupo muy pequeño podría producir la acumulación de defectos genéticos que harían al finalinviables a los individuos. [285]

k Hay un punto crítico en el que la relación entre población y recursos produce una inflexión en la curva creciente y latransforma en decreciente.

l Usando funciones sencillas como el modelo de la ecuación Verhulst-Pearl: Nt+1 = Nt + rNt(1-Nt/K) en la que Nt es eltamaño de la población en el tiempo t, r representa el índice de crecimiento o reproducción, y K representa la capacidad decarga del habitat. El belga Pierre Verhulst desarrolló esta ecuación (Equation logistique) en 1838 como mejora de la deThomas Malthus [384]. Fue re-descubierta en 1920 y republicada por Alfred J.Lotka en 1924 en "Elements of PhysicalBiology" como "ley del crecimiento de la población". Este último autor austro-americano, al mismo tiempo que el italianoVito Volterra desarrollaron las ecuaciones diferenciales para describir la dinámica predador/presa, además de las quedefinirían la competición intraespecífica por el mismo recurso.

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muertes) dependiente del nº de parejas. Las poblaciones en el corto plazo dependen más de la supervivenciainfantil que de la adulta (que está reducida básicamente por epizootias). La mortandad infantil y de hembrasprimerizas es más variable que el índice de supervivencia de adultos. La supervivencia infantil está sometida ala capacidad reproductiva, a su vez muy correlacionada con la capacidad de carga puntual del medio. Estaúltima es condicionada por la densidad de la población y por las variaciones estocásticas ambientales (ladensidad es una variable de la capacidad de carga). En la práctica esa mortandad infantil tiene diferentes ymúltiples causas: predación, sequía prolongada en primavera y verano, inundaciones, inviernos duros conmucha nivación, bajo peso natal, partos atrasados, áreas de cría empobrecidas, factores genéticos o inmunocompetencias infantiles alteradas [125]. En definitiva está sometida al juego muy complejo de la interacciónuna serie de factores no siempre interconectados.Así pues el equilibrio de una especie (especialmente en el medio o corto plazo) esta determinado en lofundamental por ese índice de supervivencia infantil, dependiente del ciclo reproductivo. Por ello en el cortoplazo las poblaciones estabilizadas están más predispuestas a no superar variaciones súbitas si tienen un cicloreproductivo largo (los animales mas grandes), una vida reproductiva corta, una población muy fluctuante,una conducta no social, o poca densidad de población (las que ocupan niveles más altos en la cadena trófica)y un nicho ecológico estrecho.Se ha supuesto que existe una relación de equilibrio homeostático entre herbívoros y predadores (incluidos loshumanos). Los segundos en función de la termodinámica y de la pérdida de energía y para hacer frente afallos estocásticos siempre ocuparán una distribución solapada y una biomasa menor que la de los primeros.La desaparición brusca de la mayor parte del espectro de la distribución de los primeros afectará pues muchomás críticamente a los segundos: siempre se extinguirá antes el depredador que su presa, la ballena antes queel krill. Si a este funcionamiento le añadimos que los herbívoros tienen un ritmo (una frecuencia) diferente dereproducción (porque tienen en general una sola cría por parto) que el de los carnívoros (con partos múltiples)este presunto equilibrio es muy improbable. Lo que existe más bien es una situación de desequilibrioestructural permanente. Podríamos entender esta relación como una relación dialéctica en una unidad decontrarios: ambos términos -depredador-presa- son contradictorios en el sentido más clásico de la DialécticaMaterialista. Coexisten en el espacio pero se suceden en el tiempo: el depredador niega al depredado, peropara que continúe existiendo, una presa ha de haberse salvado (negación) de la depredación. No puede existirun término sin el otro ni predominancia de uno sobre otro. En cualquier momento la ausencia de depredadoresproyectará la dinámica poblacional de los herbívoros hacia una forma de curva en J. El aumento exponencialsúbito hace que, llegado un punto de superación de la capacidad de carga, la población se desplome.

Figura 56. Modelo de oscilación con efecto Allee. La población de carnívoros se mantiene oscilando por debajo dela capacidad de carga (la biomasa de herbívoros disponible, que a su vez está sometida a un equilibrio inestable). A)

El aumento de la reproducción de carnívoros por encima de la capacidad de carga o una oscilación a la bajaligeramente superior a la normal en la biomasa disponible puede llevar a los predadores a un descenso catastrófico(efecto Allee). B) Una desaparición de los predadores puede conducir a la población de herbívoros a un aumento

geométrico de su población y a una dinámica de “oscilaciones en J” catastróficas.

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Todo ello significa que la incidencia humana puede ser muy decisiva en función de las estrategias extractivas:una caza en periodos o zonas de reproducción es mas dañina, una matanza selectiva de hembras juveniles yprimerizas es mas destructiva que una matanza de juveniles. No todos los efectos climáticos tienen tampoco elmismo efecto: una nivación incrementada o un invierno prolongado en el lugar de parto o en el territorio delas hembras afecta mucho más a la densidad de la población… a corto plazo.La diversidad de factores involucrados y el juego de relaciones entre ellos ha hecho que algunos autoreshayan insistido (sin demasiado éxito, hay que apuntarlo) en la estructura caótica de las extinciones e inclusose han propuesto aproximaciones fractales sin escalas. [237, 251, 357, 333]. La apariencia caótica o fractal alargo plazo no sería la consecuencia de un fenómeno autoorganizativo sino de una combinatoria defenómenos bióticos, climáticos, astronómicos y de cierta probabilidad de impactos extraterrestres.

LAS EXTINCIONES FINIPLEISTOCENAS: ANÁLISIS DE UNCAMBIO SÚBITO.Se pueden considerar las extinciones como un cambio extremo. Las de animales cuaternarios, en especial lasde la Terminación de la Última Glaciación, constituyen un cambio brusco de gran relevancia para laPrehistoria y han recibido una atención especial en la Paleontología (m). Nuestro mejor conocimiento de losdetalles, la finura de grano cronológico, han hecho que se hablara de extinción catastrófica por lo súbito y porel alcance global del proceso.Para el caso de las extinciones del final del Pleistoceno la literatura científica se ha dividido en un extensodebate [247; 244; 276] alrededor de dos posiciones fundamentales: la causa antrópica o la biótica.

Explicaciones para las extinciones del Final delPleistoceno

1. Sobrecaza por humanos colonizadores de nuevos espacios (Martin 1984;Martin y Steadman 1999, Schuster y Schule, 2000…),

2. Causas naturales climáticas o bióticas de cambio no necesariamentebrusco (Graham y Lundelius 1984; Graham 1990; Guthrie 1984, 1990; Lister y Sher 1995;Grayson 2001),

3. Causas naturales en las que los humanos habrían tenido un papelsecundario:

– finalizadores de especies en condiciones de estrés biótico (Haynes 1991 oStuart 1991 y 1999)

– vectores de cambios bióticos en vegetación,– por traslocación de competidores (Grayson, 2001)

– por transmisión de “hyperenfermedades” (MacPhee y Marx 1997).

Figura 57. Resumen de las causas esgrimidas para explicar las extinciones del final del Pleistoceno.

Esa desaparición de los grandes mamíferos del Cuaternario desde un lado han sido atribuidas a la sobrecazapor humanos colonizadores de nuevos espacios [242; 243; 246; 317], y como alternativa desde el lado opuestoa cambios naturales no necesariamente bruscos por causas climáticas o bióticas [148; 147; 159; 224]. Comocabía esperar, más recientemente se han propuesto alternativas eclécticas de causas naturales en las que los

m Ha habido una serie de proyectos que se ocupan de recoger datos para verificar la pertinencia de las diferentes hipótesisexplicativas (por ejemplo el proyecto del Natural Environment Research Council -NERC de A.J. Stuart, y A.M. Lister delDepartment of Biology, University College de Londres). Otro proyecto muy intensivo sobre el mamut es el de Siberia yextremo oriente [286; 325]. Por el contrario la extinción de la especie cálida de elefante cuaternario, Paleolodoxon, que talvez se refugiaría en las penínsulas mediterráneas antes de su extinción está poco clara. [352]

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humanos habrían tenido un papel, aunque secundario: bien porque habrían contribuido a dar la puntilla aespecies en condiciones de estrés biótico [169; 349 y 350] o porque los humanos habrían provocado cambiosen la vegetación, o translocación de competidores [150] o colaborado de manera involuntaria en latransmisión de “hiper-enfermedades” [233].

HOMO ANIMALI LUPUS: LOS HUMANOS COMO FACTOR DE EXTINCIÓNEn las primeras propuestas tienen el papel preponderante los humanos, por ser un factor nuevo introducidoque ejerció una caza muy activa. Su elevada capacidad extractiva –respuesta a unas necesidades crecientes yposibilitada por unas armas cada vez más efectivas- habría provocado una especie de guerra relámpago(“Blitzkrieg”) sobre unos animales sin mecanismos de reacción ante su presencia. La desaparición de especieshabría afectado antes a los animales de reproducción mas lenta.

La argumentación del principal exponente [242; 241] de esta posición desde los años sesenta se basa enargumentos de distinto tipo:Las extinciones naturales se han intentado explicar por ciclos de 26 millones de años, pero sería en este casoun antropocentrismo pensar que la llegada de humanos a las zonas colonizadas al final del Cuaternario y enespecial a América (o la llegada a Australia o a Madagascar) ha coincidido justo, por casualidad, con laextinción más importante desde el Cretáceo. Pero la extinción no es sincrónica en todo el mundo, por lo que debe rechazarse el factor climático. Y también existieron otros cambios climáticos previos, igualmente notables, pero sin consecuencias tangraves de extinción de especies. En el carácter de las especies extintas es selectivo. Son sobre todo las terrestres de más de cinco kilos (lasmenores representan sólo el 10% de las extinciones); las de reproducción más espaciada y los grandescarnívoros, que podrían haber competido con gente cazadora por la misma fuente de alimentación. No sólo se pierde biodiversidad en los continentes, sino en las islas, afectando también a los animalesmayores, pero las extinciones se dan antes en los continentes que en islas, en las que los ecosistemas son mássensibles, al contrario de lo esperable si hubiese habido una causa de cambio ambiental natural. La primera presencia incontrovertida de humanos coincide con la fecha de la extinción de la fauna,preferentemente la más grande de cada zona. Si hay restos de animales extintos en niveles arqueológicos, delHoloceno, muy posteriores a la llegada de los humanos es porque la gente pudo sacar esas piezas, como porejemplo dientes de mamut de yacimientos de fósiles [94]. Los continentes donde los humanos han co-evolucionado con sus presas sufren menos extinciones: la faunaen esos lugares ha ido generando contramedidas para superar la presión o existían elementos de controlnaturales (por ejemplo enfermedades que limitaban la población humana) para equilibrar esa relacióndepredador humano - presa.

El problema de toda esta argumentación es que hay que sincronizar muy bien la llegada de humanos con lasextinciones y desvincular la fecha de la extinción de cambios ambientales súbitos. El otro problema es que loshumanos pudieron dar ese "paso adelante", motivados por un cambio climático, con lo que la causa de laextinción sería una causa subsidiaria pero independiente de la primera causa climática. En el caso americano,que es el modelo principal existen tanto dataciones demasiado modernas de fauna extinguida como dataciones“demasiado” antiguas (cada vez más numerosas y menos discutidas) para la primera presencia humana.

ARGUMENTACIONES “NATURALISTAS”: LA EXTINCIÓN ES UN FENÓMENONATURAL NORMALOtros autores consideran que la última extinción es absolutamente natural. Esta hipótesis reposa en la premisade la "presunción de inocencia" o de la “incompetencia" de los humanos para producir este efecto, porquehabría habido una densidad de población demasiado baja y una tecnología poco efectiva e insuficiente.Consideran:• La extinción finipleistocena como una extinción normal más.• Sugieren que las extinciones recientes, las del Cuaternario, se han producido al final y al principio de cadaciclo glaciar largo, y en especial durante los ciclos OIS12 y OIS2.• Que en todo caso el elevado número proporcional de especies extintas al final del Cuaternario se debería a laelevada variabilidad que se habría producido al principio del Cuaternario. Es decir que como se habrían

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producido muchas especies al principio del Cuaternario también se extinguieron muchas después del últimoperiodo frío.• Consideran que el cambio climático es el principal responsable de la extinción finipleistocena. Este cambiohabría producido un cambio brusco global de vegetación con el consecuente desequilibrio y reorganizaciónglobal posterior [148]. Se habrían reducido los espacios abiertos –notablemente la estepa y la sabana, ricas engrandes herbívoros, en beneficio de espacios de selva tropical y taiga / tundra mucho más homogéneos ypobres en biomasa de herbívoros grandes [159;161].• El cambio ambiental habría producido estrés nutricional en los herbívoros [150], amplificado por la mayorproporción de plantas venenosas, y visible en la reducción de tamaños de los individuos.• El cambio en la vegetación habría incentivado el aislamiento, y como consecuencia la deriva genética.• Hubo un aumento de la competencia interespecífica [303].

Todos estos argumentos tienen también sus pegas:• En primer lugar es muy difícil equiparar la extinción finipleistocénica con las extinciones anteriores inclusocon las mayores de hace 5 o 60 millones de años. No hay constancia alguna de que estas fueran tan bruscas ydesconocemos agente desencadenante. Tampoco puede compararse con la de hace 120 millones de años,porque en la finipleistocénica no hay ninguna constancia (por el momento) de que fuera causada por unmeteorito. Tampoco es comparable a la del inicio del Cuaternario cuyo tempo, y por tanto mecanismo,desconocemos.• La extinción del final del Pleistoceno es mucho más amplia y radical que las desapariciones de algunasespecies durante los otros ciclos climáticos del Cuaternario.• Las especies que se desarrollan en el principio del Cuaternario se asocian a un clima cálido y habría sido elclima cálido del Holoceno lo que las habría eliminado definitivamente.• Es cierto que hay una reducción de ciertos biomas, pero se compensa con el aumento de otros, cuya noadecuación a las especies extintas está por demostrar. No todas las especies que desaparecen se asocian a undeterminado clima o al bioma de estepa y no está claro que las que se extinguieron no pudieran sobrevivir enlos nuevos biotopos o desplazarse a otros lugares donde podrían seguir encontrando los nichos adecuados. Ladiversidad de biotopos continua brindando esas posibilidades y la fusión de los glaciares facilita eldesplazamiento. Tampoco desaparecen del todo, a escala continental, todos los paisajes del Cuaternario. Aúnen época moderna existieron enormes espacios “vaciados” con un ecosistema perfectamente adecuado paraalgunas especies extinguidas. De hecho la reintroducción por los europeos de especies con requerimientosidénticos (el caballo, los bovinos, ovejas…) en esos nichos ecológicos ha demostrado su idoneidad y que enrealidad la extinción de esas especies había dejado un espacio “desierto” y un empobrecimiento nocompensado de la biodiversidad. Hay una mejor correlación entre especies extintas y su tamaño que con subiotopo.• El argumento del estrés biológico y alimentario, que se reflejaría en la reducción de tamaños de las especieses un argumento un poco ambiguo y nos llevaría pensar por ejemplo que los jabalís extremeños están másestresados que los alemanes!! La ligera reducción de tamaños de las especies de mamíferos que se da en elHoloceno sería también esperable, tanto por el efecto de la ley de Bergman ya que al aumentar la temperaturadisminuyen los tamaños de la mayoría de las especies, como por un incremento de la presión depredadora, talcomo he explicado. Muchas especies, extintas o no, sufren esa reducción de tamaños en el Holoceno.• Antes de aceptarse el problema de la deriva genética debería modelizarse cuales son los dinteles en los que lareducción del área de dispersión y de la población se convierten en críticos y si estos dinteles se cruzaron.• El argumento de un aumento de la competición interespecífica curiosamente no tiene en cuenta una especienueva recién llegada: los humanos.

En definitiva los argumentos ambientales tienen debilidades muy evidentes e incluso elementoscontradictorios. Atribuir la causa de la extinción a las consecuencia del cambio en las condiciones abióticasdel Holoceno se enfrenta a una cuestión fundamental: “¿porqué no se habrían extinguido en cualquiera de losciclos climáticos previos?”. La contestación que se aporta es: “porque el Holoceno es un periodo especial,diferente de los otros periodos cálidos anteriores”. Pero, si así fuera, entonces, ¿qué puede ser lo que hace alHoloceno tan especial? ¿cuál es la novedad que no se había producido antes y que llega a extinguir génerosque se desarrollaron mucho antes desde el Eoceno? La respuesta más obvia y sencilla vuelve a ser: “lapresencia humana”, pero esto contradice la premisa básica de que no fue una causa antrópica.

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ARGUMENTOS “SÍ, PERO…”: LA EXTINCIÓN DETONADA O ACABADA PORHUMANOS.Dado lo ambiguo de estos argumentos naturalistas la mayoría de los trabajos más modernos en apariencia ”noalineados” recurren al argumento multicausal, incluyendo una acción humana, pero no activa y ni directa.También consideran que la actuación humana, por si sola, es insuficiente para provocar una extinción, por lasmismas razones que invocaban los “naturalistas” puros: la baja densidad de población y la incapacidadtecnológica de las sociedades cazadoras-recolectoras.Todos estos argumentos ponen el énfasis en un proceso multicausal en el que los humanos pudieron ser undetonante (la puntilla final) de unas causas bióticas: los humanos, dicen, habrían contribuido a la extincióncon la caza de animales ya estresados por el cambio ambiental.O podrían haber sido una causa inconsciente e indirecta propagando epizootias –directamente o a través de losanimales domésticos y comensales [233], translocando e introduciendo animales rivales (herbívorosdomésticos como cabras) o predadores (el perro y el gato) más eficaces, rematando animales ya estresados[349, 350], quemando bosques…

Aunque pueden parecer razonables y elaborados, estos razonamientos también tienen puntos débiles en laargumentación y se contradicen entre sí. Por ejemplo está bien documentado que la gente cazadora-recolectora practica la quema de bosques. Pero lo hacen para recrear un biotopo más favorable para losanimales que cazan: despejan espacios cerrados para favorecer pastizales, para hacer crecer brotes tiernos…Esta práctica produce un disturbio en el bosque que no siempre lo perjudica. En ocasiones lo beneficia porquelo rejuvenece o porque, como en Australia, las especies se han adaptado a esa quema. Pero aunque en Eurasiao América la quema hubiera producido un gran impacto y una mengua en el bosque, fueron justo los animalesde espacios abiertos los más afectados por la extinción. Una de las causas bióticas que se han esgrimido paraesta extinción ha sido precisamente el cambio en la vegetación que tuvo lugar al principio del Holoceno enque se cubrieron de bosque amplios espacios cubiertos de praderas herbáceas.Otro de los cuestionamientos que se invocan también es algo contradictorio: se admite que sí existen algunoslugares de matanza humana de mamuts, pero se afirma que la extinción no pudo ser antrópica porqué no sedocumentan lugares de matanza de otras especies de megafauna (como los perezosos gigantes) que también seextinguieron. Además los elefantes –los únicos con evidencia clara de haber sido cazados- han sido de losúltimos en extinguirse, lo que no sería lógico ya que los verdaderamente cazados deberían haber muerto antes.Esta línea argumental no es coherente porque si se admite que los humanos fueron capaces de “matar”mamuts, el argumento de la incapacidad tecnológica ya no se sostiene: ¿qué tecnología podía ser buena paramamuts e ineficaz para perezosos? ¿Cual habría sido entonces el “freno” para la caza y las matanzasexterminadoras de otros animales? En todo caso habría que reformular la interrogación: ¿porqué si hayevidencias de matanzas de mamuts, no se encuentran lugares semejantes de las otras especies de megafaunaque también se extinguieron? ¿porqué si eran capaces de matar elefantes, no cazaron las otras especies, queademás eran más fáciles de conseguir, ya que eran animales más solitarios, menos agresivos y más lentos?Las respuestas no son unívocas: una podría ser que, en efecto los humanos, por alguna razón no técnica sólomataron el mamut y no otras especies de megafauna y por tanto no fueron responsables de su extinción.Pero existen otras explicaciones, tafonómicas (n) o de muestreo más simples para explicar la ausencia delugares de matanza de megafauna. No hay una evaluación de la densidad de población de las distintasespecies por lo que no conocemos la probabilidad relativa de hallar sus restos. Así la respuesta alternativapuede ser que no se encuentran cazaderos de perezosos porque la probabilidad de encontrarlos es muy baja encomparación con la de encontrar cazaderos de mamut. Como no sabemos la proporción natural de animales decada especie, tampoco podemos saber si una matanza indiscriminada pudo eliminar antes a los perezosos quea los mamuts. El hecho de que esos elefantes fueran más difíciles de cazar puede explicar por si solo quefueran los últimos en desaparecer.Otro razonamiento para minimizar la importancia de la acción humana en la extinción es tautológico. Primerose utilizan argumentos sistémicos de homeostasis basados en que antes de acabar el recurso los humanos yahabrían cambiado de sitio, de estrategia o de densidad de población. Después se calculan los índices dedensidad y reproducción humana extrapolados a partir de sociedades cazadoras subactuales, sin tener en

n Tafonomía, desde la perspectiva arqueológica, es la disciplina que estudia los procesos que ocurren desde que unaentidad (natural o social) deja de en activo y pasa a quedar enterrada (a integrarse en la litosfera) e incluso hasta que esdesenterrada de nuevo por procesos naturales (por ej. geológicos) o por la acción humana. Tafonómico se refiere pues atodo ese proceso que experimentan dichas entidades u objetos [102].

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cuenta que estos grupos están en un momento de su historia en que están estabilizados o en claro retroceso porel impacto colonial y por supuesto sin ese recurso de la fauna extinta. Sin tener en cuenta ese cambio radicalen la capacidad de carga del medio y en la población no puede aplicarse una variable dependiente en lasecuaciones de este tipo. Pero además el argumento de la escasa población humana está viciado, puesto queplantea como un apriorismo actualista que los humanos se regirían siempre por un funcionamiento mecánicode la ley de rendimientos decrecientes (o), lo que no esta demostrado. El planteamiento de la extinciónantrópica es por lógica en sí mismo contradictorio con esa ley: no dejarían de cazar los animales extintoscuando se rarificaron, sino que el exterminio se produjo porque los apurarían hasta el final. También sepresupone que no hubo presión demográfica porque la reproducción humana está regulada de forma natural yde la misma manera en las sociedades cazadoras recolectoras prehistóricas y modernas, lo cual está lejos deser demostrado.

En realidad algunas de estas posturas que parecen como neutrales no son más que una "trinchera" de las“naturalistas”, que han debido reconocer que los efectos de la presión humana (acción directa o indirecta) esun universal [150]. Admiten que los humanos son una causa universal de reducción de las poblaciones desdela Polinesia hasta Córcega, desde Australia hasta Ibiza o desde la Costa NW hasta Chiloé (p), pero sostienenque han sido incapaces de acabar con las poblaciones.La única excepción que llegan a aceptar es la extinción de especies en islas reducidas y tal vez por el efectocombinado de causas colaterales. Sin embargo estos son fenómenos que según ellos no se pueden compararcon las extinciones continentales.El énfasis en la multifactorialidad es una buena manera de diluir la importancia del factor humano. Nojerarquizar el juego de causas (detonantes, determinantes y condicionantes) es una manera de eludir unaexplicación.

BALANCE DE LAS HIPÓTESIS EN LIZAAmbas hipótesis, contrarias, parten de apriorismos sobre la capacidad extractiva humana y/o sobre lacolonización rápida de aquellos continentes donde se produjo la extinción. Los posicionamientos tienen unacierta trascendencia política porque, según los partidarios de la acción humana, pensar que la intervenciónhumana no ha podido ser importante, que la sociedad humana ha tenido por fuerza sólo un papel pasivo sirvepara tranquilizar la conciencia de las personas no “conservacionistas”. Por su parte algún autor [150], queniega por principios la capacidad de una acción humana prehistórica contundente y exterminadora, criticaparadójicamente a los “exterminacionistas” [como 242 o 417] por exhibir una p r e c o n c e p c i ó nconservacionista, propia de los movimientos “hippie y ecologistas”. El argumento político de fondo de esoscríticos es que, de la misma forma que acción humana no pudo extinguir la fauna, tampoco la puede ayudar aconservar o a reconstruir. Por tanto no hay nada que hacer a favor de la conservación de los ecosistemas o dela sostenibilidad. Además, aunque los humanos no hayan exterminado especies de fauna, sí que hanmodificado indirectamente desde el principio los ecosistemas, y desde la Prehistoria ya no hay ecosistemas“prístinos” por lo que no se puede volver atrás para reconstruirlos o conservarlos. Incluso se acaba diciendoque los humanos en algunos casos han enriquecido el medio ambiente, por ejemplo llevando cabras a Chipre(q).

o Según el modelo de esa fórmula, el más popular de estos modelos aplicados a las sociedades humanas, el crecimiento dela población es geométrico hasta que llega a un punto de inflexión determinado por la oferta limitada de la capacidad decarga del medio. A partir de ese punto asintótico el crecimiento monotónico se transformaría en decrecimientomonotónico. Esa caída crítica sólo se evita si se estabiliza la población en un punto asintótico por debajo de esa capacidadde carga, o bien si se adopta una innovación técnica o se emigra a otro medio ambiente no explotado o más rico, lo quepermitiría un nuevo crecimiento de la curva poblacional (ver figura 56).

p Incluso en el Pleistoceno medio la recolección de moluscos por Neanderthales ha estresado las poblaciones de moluscosde las costas del mediterráneo central y oriental [340].

q Este argumento sobre la beneficiosa ingerencia humano-caprina en Chipre se basa en que la fauna Pleistocena de la islase había extinguido antes de llegar la gente. Los humanos nada tuvieron que ver con ello y en cambio al introducir denuevo un herbívoro los pastores de cabras enriquecieron el medio. Como vamos a ver más adelante eso no ha sido así yeste argumento es absurdo. Las cabras en un medio insular cerrado como ese no hacen más que empobrecer el bioma,favorecer la deforestación y la erosión.

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El argumento básico de las teorías antrópicas es que la extinción se produce de forma no sincrónica y que el"hecho diferencial" más importante de la Última Terminación es la presencia humana de grupos cazadores.El argumento fundamental de las teorías "naturalistas" es que no existen pruebas del "crimen": no hayyacimientos de grandes masacres y en cambio hay un cambio radical del medio ambiente.Los partidarios de la acción humana resuelven esa falta de pruebas de matanzas insistiendo en unacolonización muy rápida y unas matanzas catastróficas, para lo cual rechazan pruebas contundentes quesugieren lo contrario. Al final recurren a modelos matemáticos y biológicos aplicados a sociedades humanaspara demostrar la viabilidad de la extinción antrópica.

LOS MODELOS BIOLÓGICOS APLICADOS A LAS POBLACIONESHUMANAS:La Arqueología evolucionista (desde Binford, Cohen, Hassan [168]…) ha propuesto el uso de modelos comoel de la teoría del “forrajeo” óptimo o la fórmula del rendimiento decreciente para verificar las distintasdinámicas económicas y de expansión humanas. A partir de esa función logística se han propuesto [202] dosmodelos de expansión de la población humana. Uno logístico según el cual se maximiza la captura derecursos críticos de alto rango K (animales grandes que dan un alto rendimiento por cada individuo cazado):la población se expande entonces de forma muy rápida pero con una densidad muy baja. En el otro modeloalternativo se tiende a aprovechar recursos R (animales pequeños pero de reproducción rápida): la poblaciónse expandiría a ritmo más moderado siguiendo una dinámica de satisfacción a partir de cambiar del animalmás rentable al recurso siguiente en la escala de preferencias. Así se ocupa el hábitat siguiente aunque seamenos satisfactorio. La consecuencia es una ocupación más lenta, no homogénea pero de más alta densidad.En resumidas cuentas estos modelos de cambio social ofrecen tres opciones: bajar el límite mínimo (comermenos), subir el techo de la oferta (añadir otros alimentos a la dieta, implementar nuevas tecnologías), omantener con fórmulas sociales un status quo (disminuir la procreación). Existe también la cuarta opción deemigrar.Los modelos matemáticos y las simulaciones [410] de expansión humana (usando el índice de reproducción,la capacidad de carga y un índice constante de migración) permiten comprobar la capacidad geométrica deexpansión de los humanos y que ciertas hipótesis, como la de “Out of Africa” (para explicar la expansión dehomínidos modernos) o la de la “Guerra Relámpago” de Martin, entran dentro de las posibilidades. En teoríahabría sido posible colonizar toda América en 1500 años partiendo de un índice de reproducción de sólo0,03% y de un índice de expansión de 0,1km2 al año.Pero una cosa es demostrar que podría haber sido así y otra que los modelos sirvan como elemento deconfirmación, porque para elaborarlos se necesitan parámetros arqueológicos (que aún son discutibles y paralos que faltan datos suficientes) para, por ejemplo, calcular la variable del índice de expansión. Esta es unaincógnita y una de las variables independientes que pretendemos averiguar en Arqueología. Se debería poderdatar en cada lugar la primera documentación de presencia humana y calcular a partir de ella esa velocidad deavance.La otra variable necesaria también es arqueológica. A veces se ha dado por sobrentendido que los cambios enel desarrollo de la tecnología y de los instrumentos de producción son paulatinos. Por ello se ha escrito que lasfuerzas productivas se van desarrollando “poco a poco”. Esto es cierto en general. No hay duda que entre elchopper del Paleolítico arcaico y el microlito mesolítico hay una lentísima progresión. Pero si miramos eldetalle y recordamos el ejemplo del arco es fácil comprobar que existen saltos tecnológicos que suponen unaumento cualitativo de la capacidad extractiva de la caza.En definitiva una variable arqueológica, el salto tecnológico cualitativo (como el que supone el arco y flecha),puede cambiar nuestra perspectiva y el funcionamiento de cualquier modelo. Los cambios en la gestión de losrecursos pueden causar cambios bruscos en la dinámica de las presas afectadas, incluso sin la concurrencia deotros factores bióticos o abióticos desencadenantes o determinantes.

UNA POSIBILIDAD ALTERNATIVACreo que habría que distinguir dos casos, por un lado cuando consideramos el África sur-oriental podríamoshablar de la inexistencia de hábitats prístinos porque desde el comienzo se produjo una co-evolución de loshomínidos con sus ecosistemas. Pero por otro lado se ha de tener en cuenta el caso en el que sí existe uncambio brusco, un punto de desequilibrio ecológico:

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• Bien porque los humanos se introducen en medios en los que no han coevolucionado con el resto de la faunadesde el principio y porque no han desarrollado estrategias de contención. Es decir donde no existe un factornatural de control del equilibrio entre humanos y fauna, como podrían ser las enfermedades tropicales.

• porque han sido forzados a introducir, adoptar o desarrollar nuevas estrategias de explotación de recursosque les permiten acceder de pronto o con mayor éxito a un nuevo nicho ecológico. Esa ruptura puede serforzada por invenciones producto de la acumulación y recombinación de técnicas que mejoran los mediosde producción (la invención del arco, la canoa…), por una falta de control del equilibrio necesario entreproducción-reproducción (la población animal o humana experimenta un cambio brusco detonado por otrascausas bióticas o abióticas), o por dinámicas sociales internas y externas (reorganización de las relacionessociales, movimientos de gente en cadena…).

Como he expuesto, la virtud de los modelos estadísticos es haber demostrado que la capacidad dereproducción humana y las necesidades que generan pueden potencialmente generar una acción extractivahumana que haya causado las rápidas extinciones finiglaciares.Pero debemos preguntarnos si existe otro modelo alternativo, de funcionamiento complejo, que permitaexplicar el cambio brusco que suponen las extinciones, teniendo en cuenta esas variables arqueológicas. Hayque poder integrar en la explicación los datos que indican que la colonización (en especial las del continenteamericano) no fue un sólo evento brusco y tardío.Sabemos que ha habido otro patrón muy usual de colonización. Este parece producirse en las islas -desde lasdel Mediterráneo [386] hasta Isla Grande de Tierra del Fuego- y también en el finiglaciar del centro y norte deEuropa. Según esta alternativa en lugar de existir un avance en onda expansiva, se produce una primera etapade exploración que deja unos rastros arqueológicos muy tenues. Este “primer contacto” ya puededesequilibrar fatalmente poblaciones animales nativas, incluso antes del asentamiento definitivo (segundaetapa). Será a partir de ese segundo momento cuando se producirá un crecimiento rápido que satura en pocotiempo la capacidad de carga del nicho inicial.En muchas islas la primera presencia humana se nota por translocaciones. Antes de tener un registroarqueológico clásico, con evidencias de asentamiento humano, se documentan animales cuya llegada sólopuede haberse dado por transporte humano. En otras hay una extinción, que precede al asentamiento humanodefinitivo, sin una causa de cambio ecológico abiótico, pero sólo con pruebas muy sutiles de esa presenciahumana. En Mallorca, por ejemplo [8], el Miotragus, especie de cáprido endémico, se extingue 700 años antesdel asentamiento humano claramente establecido. En Ibiza hay una acumulación antrópica de huesos animalesy de conchas de moluscos de hace 6.680 años cal BP. Es decir, 2500 años antes del asentamiento definitivo[150]. Esa dinámica sugiere, un proceso de colonización en dos fases: una exploratoria (con aprovechamientoindiscriminado de los recursos locales y tal vez estancias esporádicas que dejan tras de sí una evidenciaefímera) y una de asentamiento en la que se adecuan a la oferta local de más rédito o provocan translocaciónde animales (domésticos o incluso salvajes) si el medio del lugar tiene una capacidad de carga baja.

Para explicar porqué se encuentran tan pocos lugares de matanza de animales extintos no hay que recurrir a la“Guerra Relámpago” ni tampoco hay que insistir en una población humana baja o esporádica. Hay razones demuestreo (r) y tafonómicas. Los resultados de muchas observaciones tafonómicas han indicado con rotundidadque es en la práctica un hecho fortuito y muy poco probable que unos restos animales sometidos a laintemperie, como debieron ser las carcasas abandonadas en el lugar de caza, se conserven durante muchotiempo. Si consideramos la escasa probabilidad de hallar tales restos es esperable que, en todo caso, seencuentren restos de matanzas de animales de rebaño (el caso de los mamuts en América) más que deanimales solitarios, y que, además, sean los animales de manada los que dejen las evidencias más numerosasy los últimos en “desaparecer” del registro.Pero para poder seguir toda estas argumentaciones y ver hasta que punto es compleja pero imprescindible laconsideración de los cambios bruscos en el análisis científico de la Prehistoria, voy a introducir una serie decasos con los que vamos a dar la vuelta al mundo en siete ejemplos

r En Arqueología hay una cuasi-ley que explica que es muy difícil encontrar lo que se busca pero que es casi imposibleencontrar lo que no se quiere encontrar. Este podría ser probablemente el caso de las ocupaciones antiguas enNorteamérica. Como veremos más adelante, si se parte de la idea de que no hay ocupaciones anteriores a 13ka BP no sebusca en los sitios donde pueden estar las evidencias de esa época y por tanto no se encuentran.

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PARTE SEGUNDA: TRES EJEMPLOS Y PICOALREDEDOR DEL MUNDO PREHISTÓRICO.

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3 ¿QUE PASÓ CON LA NEANDERTHAL? ¿UN FINALCATASTRÓFICO, LA LENTA AGONÍA DE UNAESPECIE O TODAVÍA ESTÁN ENTRE NOSOTROS?

La Arqueología prehistórica del siglo XX se ha complacido presentando repetidamente el origen de “hombremoderno” como un cambio brusco. La población neanderthal precedente habría sucumbido de formacatastrófica por varias causas posibles: por una inferioridad en la lucha o en la competencia frente a losgrupos humanos modernos, por una incapacidad mental, económica o biológica. Pero también se hanplanteado muchas hipótesis sobre la incidencia determinante de cambios paulatinos abióticos (para algunosautores la instalación de un periodo templado, para otros de un clima demasiado frío) en la desaparición de laforma neanderthal. Aunque la postura de cambio paulatino podría parecer más razonable tampoco puededescartarse, del todo todavía, que la sustitución de neanderthales fuera la consecuencia de un cambio brusco.En tal caso sería el fenómeno de este tipo más interesante puesto que con él se habría instalado la formahumana moderna en Europa y en Asia central para después pasar al continente americano. Así pues éste va aser el primer ejemplo cuyas posibilidades voy tratar.Lejos de estar aclarada, para esta cuestión siguen en pugna distintas hipótesis explicativas. Estas discrepan ensi hubo una sustitución paulatina, súbita o por etapas (con períodos de parada en los que existiría unafrontera), o si lo que se produjo fue una inmersión de la población arcantropina en la neantropina, o bien unarápida evolución de una forma a otra.Se han formulado modelos variados de cómo se produjo el predominio final de la forma humana modernasobre la neanderthal: desde el de “Continuidad regional e hibridación (p.ej. el de evolución multiregional[405]) con contribución africana mayor (modelo de hibridación y reemplazo. [52]) o menor (modelo deasimilación. [332]) hasta los reemplazo puro [348], “Out of Africa” [138] (variante "arca de Noé" [178],"Jardín del Edén" [167], "Eva africana" [64])(a).

Figura 58. Mapa con la extensión de la forma humana neanderthal. He marcado los yacimientos que se citan en eltexto y se han dibujado los límites del glaciarismo continental de la época [a partir de la fig. 1 de Stringer y Gamble

1993 En busca de los Neanderthales. Crítica ed.].

CAMBIOS MOLECULARES Y CONSECUENCIAS ESPACIALES, ¿OVICEVERSA?En la decisión de optar por una u otra explicación para el remplazo de la foma antigua por la moderna debentenerse en cuenta varias cuestiones:

a Curiosa costumbre de los "cameo" bíblicos para las teorías antropogénicas norteamericanas…

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Una es la cómo y cuando se extiende la mutación molecular que representa la humanidad moderna. La otra escómo o porqué surge y se impone en todo el globo.¿Qué nos dicen las moléculas? La mayor parte de los datos que proporciona la genética (la secuencia denucleótidos, el ADN mitocondrial y del cromosoma Y) demostrarían con efectividad la baja variabilidadhumana actual acumulada y por ello, si se acepta una tasa de mutación aleatoria regular, estarían indicando laexistencia de un cuello de botella evolutivo y una expansión a partir de África hace menos de 200ka [222; 63;364; 305; 114; 315; 213]. Sin embargo el cálculo del tiempo exacto, depende de la tasa de mutación y de otrosfactores desconocidos como el número de población original afectada. Tampoco existe una explicaciónunánime aceptada para ese efecto de “cuello de botella” evolutivo.Seria imprescindible plantearse preguntas como las siguientes para poder aceptar esa posibilidad: ¿Porque seprodujo el cuello de botella? ¿Por epidemias (b), cambio climático global, catástrofe global…(c)? ¿Hubo sólouno o fueron sucesivos cuellos de botella?¿Cuándo se produjo el cuello de botella y el reemplazo? ¿Fuedurante el estadio isotópico IOS4 (hace 74–60 ka) o durante el estadio 6 (hace 190–130 ka)?¿Cuanto tiempoduró? ¿Hubo un efecto fundador producido por un filtro geográfico como el Sinaí?¿Que causó la expansión posterior? ¿Una mayor viabilidad biológica (resistencia a enfermedades, aumentoexponencial de la población fundadora), un cambio climático acompañado de superioridad de estrategias?

Los modelos que se han formulado sólo responden en parte a estas cuestiones. La hipótesis de Jardín del Edénsugiere un cuello de botella hacia el 100ka seguido de expansión y diferenciaciones regionales (aisladas) deesa población colonizadora original (la cual se habría producido antes en África que en cualquier otro sitio),cuyo éxito se explica por una mejor tecnología o mejores estrategias de explotación de recursos.La expansión de homínidos modernos desde un refugio africano se produciría después del 50ka, fecha que seda (en el sitio de Enkapune-Ya- Muto en Kenya) como inicio del instrumental lítico técnicamente moderno.Algunas modelizaciones sugieren que es posible también que el cuello de botella se produjera después y noantes de la primera expansión de homínidos modernos. Estos se habrían expandido primero pero luegohabrían sido “barridos” de todas partes excepto de un pequeño reducto africano. Esto habría permitido aneanderthales sobrevivientes, más resistentes a las condiciones frías generadas, reganar el terreno antesperdido en el Próximo Oriente durante el primer avance de homínidos modernos. Sería pues una segundaexpansión de homínidos modernos la que al final se habría impuesto. Se sugiere un cuello de botella africanohacia el 190-130ka (IOS 6), y que la primera expansión hacia el 100ka (IOS 5) no conllevó la extinción de loshomínidos arcaicos [213]. Su desaparición no tuvo lugar hasta el periodo isotópico IOS4, hacia el 74-60ka, enel que se produjo una segunda expansión (hacia Asia suroccidental vía Arabia del sur y el Cuerno de África).Después habría habido una tercera expansión hacia el 45ka. El fracaso de la primera expansión sugiere quelos neoantropinos antiguos no tenían aun superioridad tecnológica y no estaban tan adaptados como la formaneanderthal para sobrevivir en un clima más frío al norte de la latitud mediterránea.

¿PORQUÉ MEDRÓ LA FORMA HUMANA MODERNA? UNA HIPÓTESISCATASTRÓFISTA.Para explicar porqué se produce la especiación, es decir la diferenciación, de la forma humana moderna,algunos autores han insistido en los efectos catastróficos de la mega explosión volcánica del Toba, hace 73-71ka BP, como desencadenante del cambio IOS4 causante del cuello de botella evolutivo (d) del que habríasalido la forma humana moderna en África [302] El efecto cuello de botella, combinado con el efectofundador, la deriva genética y la adaptación a las condiciones locales de pequeños grupos humanos de tipomoderno supervivientes salidos de África en diferentes direcciones explicaría el porqué de las grandesdiferencias en la apariencia en las formas humanas actuales y en cambio la reciente separación que marca elADN [18].La explosión del Toba se ha comparado (a través del índice de rocas densas o DRE, calculado en 800km3) conla mayor de la historia terrestre (la de Millbrig Beds en el Ordovícico: calculada en 1140 km3) y con las

b Sería una causa no verificable hoy en día.

c Estas otras posibilidades pueden ser rastreadas con las técnicas disponibles hoy.

d La deriva genética que ocurre cuando una población se ve sometida a un acontecimiento catastrófico que causa unasevera reducción en el tamaño poblacional. Sólo sobrevive un espectro reducido de esa variabilidad inicial.

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mayores de época histórica (la del Tabora F5, 20km3, la del Monte Sta.Helena de 0,2km3). La erupción delToba quedó registrada en Groenlandia como el mayor deposito de sulfuros entre los episodiosDansgaard/Oeschger 20 y Dansgaard/Oeschger 19, y marca el fin del Dansgaard/Oeschger 20 hace 71ka[413]. El comienzo de ese periodo Dansgaard/Oeschger es el más frío y con mayor carga de polvo de losúltimos centenares de miles de años, mucho más marcado que el Último Máximo Glaciar hace 21-18ka. Perodespués de un milenio frío el clima volvió a unas condiciones interstadiales durante 2000 años. El cambio dela flora está bien marcado en los depósitos palinológicos desde Francia (columna de grande Pile) hasta Java oIndonesia. La erupción del Toba debió bajar la temperatura del océano entre 3 y 3,5º C. En la latitud deQuébec bajaría en 12ºC durante unos cuantos años. El efecto inmediato se prolongaría unos seis años sinverano, si modelizamos a partir de las erupciones modernas controladas.

¿CUÁNDO Y CÓMO DESAPARECE LA FORMA NEANDERTHAL?Lo que está aún menos claro es el proceso de difuminación o desaparición de la forma neanderthal [259], esdecir el cómo y porqué se impone y se expande al final la forma humana moderna.Hasta los años ochenta se establecía una cronología en función de los periodos climáticos largos (los periodosestadiales cada vez más fríos del Würm I, II y III, siguiendo la cronología glaciar alpina del sur de Alemania)y se pensaba que el conjunto de artefactos líticos tipificado con el nombre de “Chatelperroniense” era elcomienzo del Paleolítico superior, y por ello indicio de una cierta ruptura y de la aparición o predominio de laforma humana moderna. El descubrimiento de un enterramiento neanderthal acompañado de esa industrialítica en el yacimiento de Saint Cesaire, ubicado en el centro del área más significativa para la arqueología delPaleolítico en Francia, complicó esta explicación (e).La resolución para este problema, depende en gran medida de la datación y de secuenciación de lasevidencias. En cualquier caso, el “cambio” o la parte fundamental de la “transición” se habría producido entre40-30ka BP [344].Una interpretación precedida de una “limpieza” de las dataciones inconvenientes permitió formular lahipótesis de la “frontera del Ebro”. Esta hipótesis postulaba la venida de la forma humana moderna, trayendola industria llamada “auriñaciense” (la cual por tanto sería la prueba de su presencia) desde el PróximoOriente pasando por Europa central, coexistiendo al final durante milenios en la Península Ibérica las dospoblaciones de homínidos una a cada lado de la línea río Ebro-Duero [414]. La primera aparición de esaindustria auriñaciense (y por tanto de humanos modernos) en el SW de Europa se habría dado en 36,5ka BP yno habría llegado hasta el SW de la Península Ibérica hasta 33,5ka BP pero las últimas apariciones delPaleolítico medio habrían perdurado en esa zona de la Península hasta hace una media 28ka BP.Una revisión posterior de las mismas dataciones usadas para la anterior hipótesis con un sistema de“limpieza” distinto (por parte de un equipo con especialistas en datación de C14) rechazaba esa posibilidad, einsistía en la sucesión de las dos formas de homínidos [195]. La apariencia de las curvas de probabilidades delas dataciones de C14 y el resto de dataciones absolutas estarían indicando una caída brusca de la poblaciónneanderthal y su rápida sustitución por la gente moderna. El primer Paleolítico superior (considerando laindustria llamada “auriñaciense” su indicio) aparecería hace 38,3 ka BP en la Península, y en Francia hace35,4ka BP. Las fechas más recientes para el Paleolítico medio (que se usaban como argumento de la hipótesisde la “frontera del Ebro”) no serían fiables. Por ello la media en la Península para el final del Paleolíticomedio seria de 38,4ka BP (en lugar de 28ka BP), estadísticamente idéntica a la media de las primeras fechasdel Paleolítico superior del yacimiento de L’Arbreda (en el norte de Catalunya). Este cambio rápido de unasindustrias a otras sería coherente con las fechas en el resto de Europa, y se sitúa en el cambio entre lascondiciones interestadiales del GI 11 (GI = Greenland interstadial) a las estadiales del GS 11 (GS =Greenland stadial) alrededor de 41.9 ka cal BP.Sin la "limpieza el solapamiento se prolongaría desde el GI11 hasta el GS5. Pero si se eliminan comodataciones anómalas las correspondientes a los flecos, la sustitución se podría haber producido entre el GI11 yel GS11 como marcan los autores. Primero se refleja en un pequeño pico "auriñaciense" y mucho más tardevendría el grueso de las dataciones. Lo que podría interpretarse también desde la alternativa de un proceso

e Unos artefactos de sílex quemados encontrados cerca de los restos de neanderthal en el yacimiento de Saint Cesairefueron datados con Termoluminiscencia en 36,300 ± 2700 BP. Al no estar sometido este sistema de datación a losproblemas del radiocarbono puede considerarse que estos restos son de los mas modernos de la forma humana antigua. Elnivel siguiente en ese yacimiento está datado en 32ka BP. [221]

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como el que explicado en el capítulo precedente: una primera fase exploratoria y una explosión demográficadespués.

Figura 59. Gráfica de probabilidades acumuladas de las dataciones de C14 para los niveles con industrias líticasclasificadas como Paleolítico medio o "auriñacienses". Las gráficas se superponen a las oscilaciones climáticasevidenciadas en Groenlandia (marcadas con su número de orden, GS las oscilaciones estadiales frías y GI las

interestadiales templadas. [Extraído de 195].

El problema con que han chocado los distintos ensayos de explicación ha sido precisamente la dificultad dedatación absoluta. Al principio el alcance de la técnica de datación del C14 no permitía llegar tan atrás.Después se pudo desarrollar esta técnica más allá del umbral de los 30ka BP. Pero al cruzar los fechadosradiocarbónicos obtenidos con los resultados de otros sistemas de datación, ha quedado en evidencia queexiste una gran anomalía en el contenido del C14 atmosférico en ese periodo crítico entre hace 30 y 44ka[79]. Se observaron dos picos del máximo en ∂C14: uno entre 44,3 y 43,3ka y otro entre 42 y 33 ka BP,seguidos de una caída de la proporción del isótopo entre 35 y 33 ka BP. La oscilación de C14 es tan fuerte eneste periodo [38] que se puede hablar de inversiones de dataciones, e incluso se puede poner en dudacualquier datación.

Otro problema que se ha puesto de manifiesto es la disparidad de dataciones radiocarbónicas que se obtienenpara este periodo tan antiguo, dependiendo del tipo de material que se someta a datación: las realizadas sobrehuesos parecen con mucha frecuencia rejuvenecidas respecto a las obtenidas con carbón vegetal por ejemplo[195]. También es fácil darse cuenta que las dataciones obtenidas con acelerador (AMS) dan normalmente

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valores más antiguos. Esto hace que en muchos yacimientos se produzcan dataciones contradictorias y nocoherentes con la estratigrafía.Por su parte la estratificación ha sufrido, en muchos yacimientos, fenómenos de rexistasis: se intercalanperíodos de erosión y vaciado de sedimentos cuyo alcance es difícil de determinar. Así el análisisestratigráfico no siempre es sencillo y unívoco.

Así pues no es fácil hilar fino en una respuesta a la pregunta de ¿cuándo se produjo el proceso?Y ¿qué hay del porqué se produjo?

EL CAMBIO NATURAL COMO CAUSAAlgunos autores han planteado un cambio extremo climático y de las condiciones ambientales como causa dela desaparición de Neanderthal [117]. El análisis de la evolución general del clima nos indica que después delinterstadio OIS-5e el clima se fue enfriando, pero el mayor avance del hielo en Escandinavia no se produjo hasta el OIS-4(74,000–60,000 ka BP) y fue breve. El clima predominante que se puede reconstruir para el periodo isotópico detemperatura OIS-3 (65-25ka BP) en el que se supone desapareció la forma neanderthal, no parece que fuera d epredominio frío, sino mas bien templado excepto en periodos internos cortos. Durante la ultima parte de OIS-3 (45-30kacal BP) solo hubo una variabilidad muy limitada de radiación solar. Esto permite atribuir las oscilaciones menores a otrascausas. Los datos paleobiológicos inferidos muestran una gran coherencia con las oscilaciones de Groenlandia: en lasfases cálidas el calor no era tan elevado como el actual pero los periodos fríos tampoco llegaban a la situación del máximoglaciar. En definitiva unas situaciones distintas entre sí pero diferentes de los máximos interglaciares y glaciares. Seconsidera fase cálida el GI2 (o Interestadio Groenlandia 2 GSIP) de hace 44 ka cal BP (antiguo periodo Hengelo del Nortede Europa tal como fue definido por Dansgaard, 1993). Se toma el 30ka cal BP como representativo de fase fresca.Corresponde la última fase fría del OIS-3, al estadio frío que se encuentra entre los Interestadios de Groenlandia 5 y 4,justo antes del máximo glaciar.Según las modelizaciones paleoclimáticas y ambientales [189], que se han realizado con la técnica de biomización (f) paratodo este periodo OIS-3 en Europa, se puede suponer que hubo una diferencia respecto a la vegetación actual: durante lasfases cálidas, el bosque estaría menos desarrollado que hoy día y habría una baja productividad primaria neta. El bosquecaducifolio templado sólo se desarrollaría en algunos refugios sur europeos del centro y Este. Los bosques de coníferasfríos tampoco se extienden demasiado al norte. Solo los bosques caducifolios boreales tendrían una extensión moderada aleste de Fenoscandia (pero no en Europa central). En cambio la pradera fría y las herbáceas templadas alcanzarían grandesarrollo. Tal vez la abundancia de pastos relativa pueda explicar la predominancia de especies de pradera como losrinocerontes, hipopótamos y elefantes… frente a su reducción durante el máximo glaciar siguiente (con el predomino deuna estepa mas seca).Todo sugiere un gradiente de humedad aumentando hacia el Este y un gradiente de temperatura Norte -Sur mayor que elactual con una temperatura mas baja en el golfo de Vizcaya.Aunque hay indicios de que existió alguna discontinuidad ecológica entre el norte y el sur de la Penínsulaporque la distribución de las especies frías o del oso de las cavernas viene a coincidir con la “frontera delEbro” [103] no está claro cual fue su papel en la sustitución de una forma humana antigua por la moderna.Las pulsaciones climáticas sin duda debieron hacer cambiar estos límites repetidas veces durante todo estelapso de 10ka en cuestión.Pero, si la forma Neanderthal había superado el máximo frío que es el que corresponde al inicio del episodioDansgaard/ Oscher19, no tiene base postular [21] como más decisivo un enfriamiento menos marcadoposterior, hacia el 40ka (g). El seguimiento de las curvas paleoclimáticas no sustenta esa hipótesis de crisisdebida a un frío especialmente riguroso pues no se aprecia nada anómalo en la oscilación GI11 a GS11 y esincluso menos marcada que la GS12-GI12. En la figura de las oscilaciones climáticas según el registro de f Procedimiento computerizado que reconstruye biomas a partir de "tipos funcionales de plantas" (FTP: por ejemplobosque caducifolio boreal)-y de su registro (combinación y frecuencia) sobre la evidencia de pólenes.

g Estos modelos, muy coherentes con las secuencias Groenlandesas, dan en cambio como muy poco fiable y no encajancon el espectro de polen de la turbera de Padul en Granada, que como he comentado se había tomado en la Penínsulacomo un referente importante para establecer cronologías relativas en yacimientos arqueológicos de la zona. El problema,si no reside en el análisis de las muestras que se realizó, puede estar en la incertidumbre de las dataciones y en lascorrelaciones con las fases del OIS3 que se establecieron a partir de ellas. Además la adjudicación de cronologías enfunción de los presuntos periodos o fases glaciares simplificados clásicos, extraídos del modelo glaciar alpino alemán, nopueden ser ya aceptados para una zona tan alejada como es el sur peninsular. Así pues algunas atribuciones cronológicasde yacimientos andaluces como Cariguela, Zafarraya o los de Gibraltar que sustentan, para algunos autores, la hipótesis decoexistencia deben ser revisadas o puestas, de momento, entre interrogantes.

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Groenlandia queda muy claro en cualquier caso que no hay ninguna anomalía climática visible (con el nivelde discriminación temporal que tenemos para esta época) que se pueda invocar como causa del "fracaso"neanderthal.He planteado en otro lugar que casi al mismo tiempo en que desaparece o se reduce de forma muysignificativa la población de arcantropinos pasó lo mismo con la gran fauna en las penínsulas mediterráneas.Hay una cierta simetría en la extinción de osos de las cavernas y neanderthales. En la Península Ibérica y en laItaliana se rarifican o desaparecen casi del todo los grandes mamíferos: hipopótamos, proboscidios delPleistoceno medio, rinocerontes, grandes carnívoros: hienas, osos de cavernas y luego leones y panteras[103]. Pero la asincronía de esos fenómenos de extinción/sustitución de esas especies animales (primero en elsur y más tarde en el centro de Europa) no puede explicarse ni por un cambio climático hacia mayorenfriamiento, ni por la llegada desde el Este de homínidos modernos. La secuencia va al revés de lo quecabría esperar si esos fenómenos hubieran sido su causa. Habría que desconectar la causa de este cambio enlas formas de homínidos de la cuestión de los cambios ambientales de medio plazo.No es pertinente pensar en un dintel geográfico o ecológico que habría limitado la entrada a unos inmigrantesque por el otro lado habían llegado a las antípodas, a Australia, atravesando brazos de mar mucho másimportantes que el Estrecho.Sería ridículo pensar una “vigilancia fronteriza neanderthal anti-inmigración” tan efectiva que no dejara pasaresa frontera ni por el norte ni por el Estrecho de Gibraltar durante milenios (h).

¿SUPERACIONES O COMPETENCIAS HOMÍNIDAS?Se ha argumentado por fin que la humanidad moderna se impone porque tiene más flexibilidad mental einteligencia, mejor capacidad de comunicación y simbólica, mayor desarrollo tecnológico y organizaciónsocial. Pero esto son argumentos post hoc. Sabemos sin duda que la forma humana neanderthal no desarrollóla bomba atómica y no llegó a la Luna, tampoco lo hicieron los humanos modernos ni hace 23000 ni hace 200años. En Europa Occidental, groso modo, el conjunto de instrumentos y bienes que la Arqueología hadenominado "auriñaciense" sucede en el tiempo al denominado "Paleolítico medio" o "musteriense" y al"chatelperroniense" que se habían encontrado asociados los restos neanderthales. La desaparición osustitución de esta forma "antigua" por cromagnoides se había relacionado causalmente al desarrollo del"nuevo" tipo de instrumental y a las otras producciones del “auriñaciense” porque los cráneos de tipo"moderno" de los yacimientos de Centro Europa se habían encontrado asociados con industrias“auriñacienses”. Las dataciones de esos estratos correspondían a fechas de más de 30ka BP por lo que seconsideraba probada la sustitución rápida. La forma humana antigua no podía haber sido absorbida o haberevolucionado hacia la moderna por el poco tiempo transcurrido entre los últimos restos neanderthales y losprimeros modernos. Sin embargo ahora casi todos estos cráneos han sido revisados y vueltos a datardirectamente con técnicas más modernas. Los resultados han sido sorprendentes: los restos del sitio deWildscheuer atribuidos en 1967 a Neanderthales se re-clasifican como pertenecientes a Ursus spelaeusjuveniles, al igual que los restos belgas de Sclayn [367]; el humano de Velika Pecina antes considerado demás de 30ka BP se re-dató en sólo 5ka BP; el de Hahnöfersand de más de 30ka pasó a 6ka; el de Kelsterbachdatado en 31ka también se pone en duda. Los restos del yacimiento del Vogelherd V podrían ser los únicosauténticos del Paleolítico superior más antiguo [79] pero proceden de una excavación vieja de 1931 sinmucho control y tampoco han sido datados los huesos directamente [367]. Los restos humanos de la cueva deEl Castillo (Cantabria) con más garantías de corresponder a ese momento y estar asociados al conjunto"auriñaciense" más antiguo no parece que se puedan clasificar sin problemas como de humanos "modernos".No quedan pues pruebas fidedignas inequívocas sobre qué forma humana fue la que fabricó lo que se hadenominado “auriñaciense” entre hace 40 y 30ka BP [72].Así de momento habría que desvincular también el desarrollo de un tipo de instrumental, de los cambios en lamorfología biológica humana. Se puede plantear que tal vez la llegada de la forma humana moderna seprodujo más tarde, o de forma más paulatina.Eso reabre el abanico de hipótesis y ampliaría las posibilidades de permeabilidad y de inmersión de una formaen otra. Se ha llegado a argumentar incluso que ciertos rasgos que se consideraban definitorios de la formaneanderthal están presentes y caracterizan aún las poblaciones mesolíticas del norte de Europa (veinte mil

h Hay que recordar que los humanos modernos procedían de África, por lo que no es descabellado que ya estuvieran en lacosta africana de enfrente antes de haber llegado a la Península por el Norte. Además la desertización episódica del Saharapodía constituir un estímulo importante para el paso del Estrecho. [158]

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años posteriores). En este contexto es muy interesante el debate sobre un resto infantil hallado en elyacimiento portugués de Lapedo y datado en sólo 24ka BP, que conservaría también rasgos arcaicos [415].Cabria preguntarse si en efecto la población mesolítica del norte no tendría un remanente más marcado deesos caracteres arcaicos que irían siendo diluidos en poblaciones modernas afluidas poco a poco desde el Sur(y no sólo necesariamente desde sudoeste por el Próximo Oriente). La explicación alternativa, de que algunoscaracteres arcaizantes son una “adaptación” al frío, también debería hacer revisar la consideración del estatusy el destino de la forma neanderthal. El problema sería como compaginar un proceso como éste con lashipótesis de sustitución que plantean algunas de las investigaciones a partir del ADN. Podríamos afirmar conuna imagen, que la pelota sigue en el aire y va hacia el campo de las moléculas.

Estando pues abierta la interrogación de ¿qué pasó en ese momento?, se puede recordar que ese período es untiempo de gran irregularidad en las condiciones atmosféricas y en el C14 (difíciles de explicar por procesosnormales); que se produjeron otros fenómenos de cambio brusco que podrían ser sincrónicos y tal vezrelacionables: grandes tsunamis, que afectaron las costas de Noruega y a las Bahamas. Tampoco se descartaque fuera sincrónico de la anómala excursión Laschamp en el campo geomagnético y la datación del cráterBarringer se sitúa dentro de ese lapso de tiempo. No hay que olvidar por último otras anomalías como laextinción o rarefacción de ciertas especies [103]… ¿Tienen alguna relación? y, si es así, ¿cómo se vinculanesos fenómenos? En otros momentos de la historia este tipo de acontecimientos han estado relacionadoscausalmente. También he expuesto que el campo geomagnético protege la superficie de la radiación cósmicay esta afecta a los seres vivos a nivel biológico y molecular. En este momento crucial también hubo cambiosnotables en el paleomagnetismo. Así pues todas las posibilidades permanecen abiertas, desde las causasextraterrestres (caídas de meteoritos, bombardeo intenso de radiación cósmica) hasta la hipótesis de unmomento de una evolución filética acelerada o de inmersión de una población neanderthal en una sapiens másprolífica o exitosa.El espacio pudo cambiar las moléculas de los homínidos y este cambio acabó repercutiendo en su expansiónpor el espacio.

ABRAMOS LA PUERTA A UN CAMBIO BRUSCO PARA ACABAR(PROVISIONALMENTE) CON LA DISCUSIÓN SOBRE EL FINAL DE LA FORMANEANDERTHAL.Por el momento no se pueden contestar de manera definitiva las preguntas acerca de si hubo, o dónde, unperiodo sin ocupación humana (resultado de una retirada o extinción de la población neanderthal) antes deuna presunta nueva ocupación de Eurasia por la gente moderna. Queda aparcada por el momento la cuestiónde si existió una substitución (inmediata o lenta) como consecuencia de la pérdida, por parte de una poblaciónde arcantropinos frente a la de neantropinos, de batallas (más o menos largas), de competencia social (pororganización, tecnología…) o biológica (por falta de inmunidad frente a enfermedades nuevas traídas deÁfrica, de menor capacidad mental, menor capacidad reproductiva…). La superación del problema delradiocarbono y la recopilación de más dataciones con otros sistemas permitirán sin embargo ir acercándonos ala posibilidad de aclarar este tema, y será el momento también de controlar el tiempo o el posible carácter“brusco” de esos cambios. Las posibilidades actuales para este periodo no permiten todavía un controlsuficientemente fino de las oscilaciones menores, que como se ha visto en el Tardiglaciar (donde sí existe laposibilidad de afinar más), han podido provocar saltos muy bruscos y de consecuencias profundas. En estecaso la compresión de los niveles más antiguos de los sondeos en los casquetes glaciares y de lassedimentaciones en depósitos marinos y lacustres dificulta aún esta visualización. No es posible afinar tantoen los segmentos estratigráficos que corresponden a este periodo y por ello las posibles oscilaciones cortaspero de gran amplitud deben haber quedado promediadas en el conjunto de las oscilaciones más amplias.De igual manera caben ciertas posibilidades de que haya habido algún cambio brusco global, breve pero degran repercusión. Debido a esas dificultades técnicas, no podemos todavía verificar en este problema laintervención de cambios bruscos (desde la posible incidencia de neo-virus, hasta la desaparición de losgrandes mamíferos por cambios ambientales o sociales bruscos; o incluso, ¿porqué no? otro tipo de factorescomo impactos extraterrestres que provocasen cambios radicales pero de tan corta duración que han quedadoenmascarados)Aún así han surgido indicios de algunos elementos que van a ser recurrentes en el análisis de los grandescambios bruscos que han precedido, acompañado o sido causados por la humanidad moderna. Vamos a ver

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como vuelven a aparecer a continuación cuando analicemos otros ejemplos más recientes, y por ello mejoranalizables, de cambio brusco en la Prehistoria.

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2 HISTORIAS DE ELEFANTES PELUDOS: ¿FUE LAGRAN FAUNA VÍCTIMA DE UNA CATÁSTROFE ALFINAL DEL CUATERNARIO?

A) EL CASO DE LOS MAMUTS SIBERIANOS: ¿UNA EXTINCIÓNSÚBITA?A veces parece mentira, y no es cierto, que en los destinos de las personas se entrecruza alguna especie deanimal. Este ha sido mi caso. Como he comentado al principio, fue el problema planteado en un artículo sobrela desaparición de mamuts en Taymiria uno de los desencadenantes que me han llevado a realizar este trabajo.Pero no era la primera vez que me tropezaba con elefantes y que estos encuentros alteraban mi vida. Son elloslos que, en una concatenación de acontecimientos, me han llevado hasta estas páginas.Tal vez todo empezó siendo niño, en una excursión arqueológica con mi padre quién me llevaba a visitar unosyacimientos en el límite entre Guadalajara y Soria. Una vez allí, no me impresionó tanto la visión de laspiedras hincadas en el suelo del campo frisio del yacimiento celtibérico de Guijosa como la de los restos deelefantes que se estaban extrayendo en Ambrona. Es posible que este impacto marcara mi vocaciónarqueológica inicial. Más tarde cayó en mis manos el libro de Henri Lhote [223] sobre las pinturas del Tassili.El enigma de sus elefantes extrañamente grabados en lo más profundo de una cordillera del centro del Saharame fascinó. Casi diez años después acabé la carrera de Arqueología conociendo, sin proponérmelo y sindarme cuenta de la casualidad, a Jean Lesage. Él era una de las personas que habían recogido en calcos esasfiguras, que habían contribuido a despertar mi vocación. Él mismo se encargó de enmendar mi sesgo “deletras” y de reintroducirme en los vericuetos de las ciencias exactas y la matemática. En ese mismo momentoconocí al prehistoriador francés George Laplace, que sería mi verdadero maestro en la forma de pensar yactuar. Con él, durante la que fue mi primera excavación paleolítica seria, tropecé con otro mamut. Era undiente de leche de un animal joven que salió en un estrato “donde no debía” y al que casi destrocé de un“picotazo”. Este “tropezón” provocó una interesante discusión que acabó con mis huesos en el Laboratorio deArqueozoología, abandonando así mi primera inclinación hacia los instrumentos de piedra paleolíticos por elestudio de restos animales de los yacimientos arqueológicos.

Figura 60. Monumento al elefante antiguo en Ambrona.

Toda esta cadena de sucesos explica que, ahora, me haya interesado por la extinción del mamut en Eurasia,pero no tanto desde un punto de vista de la Paleontología del Cuaternario, sino más bien desde la perspectivade la Prehistoria.

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El mamut es la especie más grande de la biocenosis terrestre del Pleistoceno final y por tanto puede serindicador muy sensible de cambios bruscos. Su desaparición pudo ser la consecuencia de una modificaciónradical en el medio (que en este caso pudo afectar de la misma forma a las sociedades prehistóricas) o de unareorientación de las estrategias organizativas humanas (una intensificación de su caza). A su vez la extinciónpudo implicar un cambio brusco para las mismas comunidades que lo pudieron haber depredado. Hay inclusouna hipótesis que considera su exterminio como el detonante de una reacción en cadena que supuso lasustitución de la estepa del Cuaternario por la tundra-taiga actual en Siberia. Es decir, que la sobrecazahumana habría desencadenado la mayor transformación de la biocenosis euroasiática de los últimos milenios[416,417].

Figura 61. El autor en un encuentro con mamuts en el Museo en la extinta Republica Socialista de Ucrania.

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA:¿QUÉ OCURRIÓ EN LA PENÍNSULAÁRTICA DE TAYMIR?La Península del Taymir es un lugar muy prospectado por buscadores de huesos de mamut y porpaleontólogos y se han realizado numerosas dataciones absolutas. Allí la megafauna pleistocena fría parecesobrevivir hasta entrado el Holoceno, y va desapareciendo, para volver unos milenios más tarde. El mamut alo largo de la secuencia desaparece entre 36 y 33ka BP y también entre 21 y 19 ka BP, pero su desapariciónen Taymir después de la entrada del Holoceno, a diferencia de otras especies frías, es definitiva. Sin embargovuelve a estar presente milenios más tarde en la isla ártica de Wrangel, situada más al Este.Los investigadores [232] descartaban una explicación tafonómica, de problemas de conservación, o de sesgodel muestreo. Dudaban de la influencia determinante del clima en el fenómeno, pues constataron que duranteese lapso, en el que faltan los animales árticos, las condiciones climáticas que podrían explicar alguna de lasextinciones locales fueron variando sin que se produjera la repoblación. Los análisis paleoclimáticos indicanque en Siberia ha habido una serie de periodos cálidos equivalentes al clima actual o incluso al ÓptimoClimático a lo largo de los cuales han sobrevivido sin extinguirse esas especies de clima frío. Tampoco se hanencontrado evidencias de la presencia humana hasta más de un milenio después de la desaparición de losmamuts. Así, insinuaban al final la posibilidad de una catástrofe desconocida que arrasara la fauna, de la quesólo se recuperó una parte pero no los mamuts.

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Figura 62. La extinción de la fauna en la península de Taymir y en el Ártico siberiano. Se compara (a la izquierda)con los cambios en las variables climáticas (temperatura y precipitación) obtenidas con un sondeo palinológico en

un lago de la misma península. Los puntos, cuadraditos y triángulos negros señalan las dataciones para restos de lasdiferentes especies en tres zonas nord siberianas. Las flechas señalan cambios ambientales y su coincidencia conalgunas de las extinciones o lapsos sin presencia de cada especie (marcados con los rectángulos grises). Se puedever claramente que ambos fenómenos no están totalmente sincronizados y que después de esos lapsos las especiesvuelven a aparecer (excepto el mamut que sólo reaparece en la isla de Wrangel). En el periodo entre 8 y 9ka BP

(líneas discontinuas) la Península de Taymir queda vacía. [montado a partir de 232 y 19].

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Fases climáticas en Siberia en ka BP y en relación conla actualidad

48-25 + cálido que hoy 50-45 +Cálido45-41 Enfriamiento41-35 Óptimo climático:

+Cálido35-30 Fresco:

estepa/tundra fría30-23 =Actual:

estepa/taiga24-10,3 estepa fría 23-15 Frío:20-17 máximo frio estepa- taiga abierta12- interestadio 15-10 Templado: estepa

(1,5º más cálido) arbolada (taiga)11-10 +seco+frío (-3º)

tundra estepa10-9 tundra arbustiva 10-9 Fresco: tundra fría/

con con abedul enano tundra en el Norte9,6-8,3 fresco

9,4- tundra arboladacon Larix8,5 -episodio cálido

6-4,5 Óptimo Climático 6-5 + Cálido2,9-hoy =Actual

Figura 63. Fases de clima en Siberia desde hace 50ka BP en relación con el clima actual. A la izquierda en Taymira la derecha al sur de Siberia. Los mamuts sobrevivieron fases climáticas semejantes a la actual y una gran cantidad

de cambios climáticos hasta el Óptimo Climático [extraído de 229 y 19].

¿Cual podría haber sido esa catástrofe no climática? ¿Por qué desapareció sólo el mamut y no otras especiesfrías? ¿Dónde se escondió hasta que reapareció en la isla Wrangel? ¿Cuál fue la historia del mamut enEurasia? ¿Cómo es posible que viviera incluso en la Península Ibérica y no pudiera en cambio encontrarningún refugio en todo Siberia cuando, sin embargo, sobrevivió en una isla del Ártico en condiciones inclusomás cálidas que las actuales?El tema adquiere mayor interés cuando se sitúa en el contexto global de la extinción del mamut.

RETRATO ROBOT DE MAMMUTHUS PRIMIGENIUSFilogenéticamente el género Mammuthus se habría [200;7;182;306] originado en Siberia siguiendo una líneaevolutiva que desde Elephas meridionalis pasa por Elephas trogontherii, armeniacus, fraasi y al finalMammuthus primigenius en Eurasia. Otra línea evolutiva se habría separado hace 1,3 millones de años dandoen América: M.imperator y luego M.columbii (con la subespecie M. jeffersoni).Se supone que Mammuthus era una adaptación a ambientes más fríos que su predecesor y se habríadesarrollado en el periodo glaciar Saaliense (entre 330 y 127ka), retirándose hacia refugios fríos durante elinterglaciar Eemiense en el que se habría extendido la especie de proboscidio templada Paleoloxodonantiquus. Por el registro obtenido en algunos yacimientos (Averley en Essex) se piensa que llegaron asolaparse los territorios de las dos especies (Mammuthus y Palaeoloxodon) en algún momento.Tendría unos 2,5 a 3,5m de altura y un peso de 4 a más de 5 toneladas. Pero su característica mássobresaliente era la protección térmica: tres capas de pelo (una exterior con largos pelos de 1m de longitud,una capa intermedia con pelos de 15cm y una interna muy espesa de pelos finos cubrían una piel de 2cm; éstaa su vez cubría una capa de grasa subcutánea de 8cm).Respecto a la Paleobiogeografía: la presencia del mamut se documenta por oriente hasta Japón y Corea delnorte, y en China baja hasta los 40º de latitud norte, y ocasionalmente hasta los 35º (Sichuan-Ziyan, al nortedel Yan Chang Jiang). Por occidente no llega más al sur de los 40º de latitud. Nuestra Península, donde sóloestá constatado en la franja cantábrica, País Vasco y Catalunya, constituye su límite occidental.

Por ser el extremo de su distribución, la Península Ibérica es un punto clave. El paleontólogo EmilianoAguirre realizó un inventario [6] según el cual en la Cornisa Cantábrica el mamut había sido citado en Bujan(Lugo), yacimiento paleontológico que es una brecha de edad indeterminada, y en el Paleolítico superior de la

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cueva de El Castillo (según señalaron sus excavadores a principios del siglo XX). Pero sólo se introdujo al surde los Pirineos en el momento de máximo frío del periodo glaciar Würm (el Último Máximo Glaciar) segúneste autor, quien también opina que en las pinturas rupestres de las cuevas de Pindal o Castillo en la CornisaCantábrica hay evidentes figuras de mamut.Por su parte el arqueozoólogo Jesús Altuna [14] cita un calcáneo hallado en Urtiagako Leizea (Itziar, Deba)en un contexto con oso de las cavernas, rinoceronte lanudo y reno como mamífero dominante (a). Además,durante el Paleolítico superior, quedó un resto en el nivel Auriñaciense medio y otro en el del Magdaleniensemedio de Isturitz (País Vasco francés), también en Cueto de la Mina (en el nivel Solutrense citado por elprehistoriador Obermaier en 1916), en Altamira (en el Magdaleniense según dijeron en 1935 sus excavadores,Breuil y Obermaier) y en Morin (Cantabria, nivel Gravetiense según Altuna en 1971). Asimismo sedocumenta su presencia en los yacimientos paleontológicos de Mina (Santander, un resto citado por el curaCarballo en 1912) y de Udías (Santander, citado por Graells en 1897).Más recientemente se ha encontrado en otros yacimientos arqueológicos como la cueva de Las Caldas, enAsturias [16; 81].Al otro lado del istmo pirenaico se citó un resto de mamut en Vall de Vianya (Olot, Girona), pero sinprocedencia exacta (b). Más allá he verificado [101] otra cita de la especie asociada a Cau de les Goges,yacimiento clasificado como Solutrense superior, y en L’Arbreda existen fragmentos de dientes (c) en losniveles del último Máximo Glaciar (junto con industrias clasificadas como auriñaciense antiguo, gravetiense,y solutrense). También pude verificar la existencia de dos fragmentos de huesos indeterminados, que por sutamaño pudieran ser de paquidermos entre los materiales de la Bora Gran (d). Todos estos yacimientos son delextremo Nordeste de la Península al norte del río Llobregat.

Figura 64. Cara oclusiva de molar de mamut en la que se aprecian las láminas de esmalte

a por la fauna acompañante yo me inclinaría a pensar que es previo al Último Máximo Glaciar de hace 18ka.

b Es una cita antigua del paleontólogo Bataller en 1918, que a su vez vuelven a citar los paleontólogos Crusafont, 1960 yVillalta 1974 [101].

c Se trata de trozos de las láminas que forman los de molares de elefante.

d El yacimiento se excavó hace tiempo y sin demasiado rigor y, aunque hay alguna evidencia de una ocupación durante elMáximo Glaciar, el conjunto se atribuyó al Tardiglaciar y al "periodo cultural magdaleniense" por la presencia de arponesfabricados en asta de cérvidos. Si esos huesos fueran de mamut y correspondieran a esa segunda época podrían ser losrestos meridionales más recientes ya que una datación que se hizo del material del yacimiento dio un fechado (algodudoso) de 11,5 ka BP.

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Aguirre ponía en duda las citas más meridionales en Castilla: los restos de Vaciamadrid y Puente de Toledo(en la terraza derecha del Manzanares) serían de Elephas trogontherii, el elefante estepario predecesor delmamut; el yacimiento de Legazpi no tiene situación estratigráfica precisa; el resto de Aranjuez hallado en laterraza baja del río no parece mamut, lo mismo que otras citas de hallazgos en Castilla que deberían atribuirsea trogontherii o a antiquus. Los restos atribuidos al mamut en Peña Cabarga son en realidad Elephastrogontherii o Elephas intermedius, lo mismo que los de Campo de Tiro y Buena Vista en Toledo (margenderecha del Manzanares). La especie antiquus estaría en Cova Negra (en el País Valenciano) y, desde elperiodo glaciar Mindel inferior, en San Isidro, Llanera, o en los yacimientos Transfesa, Torralba, Pinedo 21m,Guadalquivir 20m y Posadas. En el sitio de Baza sería Elephas meridionalis.También según Aguirre las citas de mamut en latitudes más meridionales son las de Cardamone (Otranto,Italia) y las de Pollesini (en el centro de Italia pero con unas dataciones anteriores al Último Máximo Glaciar).

En los dos extremos de su extensión geográfica, la última datación directa de los restos es de 18ka BP (enCueto de la Mina y China). En ambos lugares están asociados a una fauna con uro (Bos), caballo salvaje(Equus) y rinoceronte lanudo (Coelodonta). Los animales más meridionales en China están datados cerca delmáximo glaciar (entre 26 y 21 ka BP).Taymiria, junto con el Este del Báltico (sitios de Kunda y Puurmani en Estonia), el sitio de Cherepovets (enKarelia, Norte de Rusia occidental) y la cuenca del Yuribey (Península de Gyda en norte de Siberiaoccidental) son los últimos lugares continentales donde se ha documentado, con dataciones del principio delHoloceno (menos de 10 ka BP). La extinción, o mejor las últimas piezas fechadas, difieren sin embargo encada región. La mayor parte de los fechados se paran en 12 ka BP. Las únicas dataciones más recientes seconcentran por encima del paralelo 75/70ºN, con la excepción de las del istmo de Karelia que he mencionado.

¿PERO, QUÉ LE PASÓ AL MAMUT?El hallazgo de ejemplares de mamut congelados en Siberia llamó poderosamente la atención de los científicosen los siglos pasados. Ya en 1730 se especulaba (Tatishev y Gmelin) sobre la vida y extinción de los mamuts,y se atribuyó su extinción al deterioro climático.La hipótesis del cambio climático postglaciar (e) como una explicación para la extinción de la especie seríacoherente si:• se apreciara que con el aumento gradual de las temperaturas la especie se retirara desde el Sur y desde el

SW hacia el Norte y Noreste, y• se constatara que no quedó ningún espacio vital suficiente con las condiciones adecuadas donde el animal

pudiera haberse refugiado.Una primera aproximación a las dataciones de esos restos parecería en efecto responder a la primera premisay apoyar el cambio climático Holoceno y la subida de temperatura como la causa dominante [351]. Pero hayque revisar mejor la evidencia porque, como hemos visto, por lo menos en Taymiria hay datoscontradictorios, no explicados por los cambios climáticos. La aparente correlación entre desaparición y latitudno tiene porqué significar una relación causal directa: el clima podría ser la causa determinante para otrofactor desconocido que fuera, de forma independiente, la verdadera causa directa fundamental de la extinciónfinal.

Así pues, he sofisticado un poco el análisis. Para comprobar la primera condición he procesado 383dataciones, estableciendo una curva de regresión desde Cueto de la Mina (en Asturias) hasta la isla deWrangel (en el Ártico) y he calculado el rango que deberían ocupar los 70 yacimientos eurosiberianos con lasdataciones más recientes de su región (f). La conclusión es que no existe tal correlación. No se observa unritmo continuado.

e Sería la estabilidad Holocena, demasiado prolongada, a partir del 9ka BP la responsable de la expansión de la tundrataiga impidiendo la regeneración de la estepa seca [224]

f He tomado para ello los mismos datos de los partidarios del cambio abiótico [351] para matizar sus conclusiones deorden climático.

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Figura 65. Análisis de las frecuencias acumuladas de probabilidades de dataciones de los últimos mamuts de lasdistintas zonas de Eurasia. Se compara (abajo) con cambios climáticos según la curva de temperaturas de los

sondeos de Groenlandia. Se puede observar el lapso de dataciones en la isla de Wrangel ("??") que queda cubiertopor las dataciones en Báltico y Rusia (). También he marcado con flechas oblicuas el “decalage” (la falta de

sincronización) entre la curva de frecuencias de dataciones y las oscilaciones de temperatura según el sondeo GRIPde Groenlandia. Finalmente la flecha vertical indica el pequeño pico final que corresponde a las últimas dataciones

de Siberia continental.

El análisis de la acumulación de probabilidades de las dataciones calibradas comparadas con las oscilacionesde la temperatura registrada en los isótopos del oxígeno en el sondeo GRIP de Groenlandia (g) nos muestrauna discordancia, diferente en cada zona.En Europa occidental y central se observan dos agrupaciones de la probabilidad de los últimos fechados. Una(hacia el 17,2ka cal BP en el periodo GS2a) antes del calentamiento Tardiglaciar y otra justo antes (hacia15ka cal BP) y al principio (14,2ka al BP) del interstadio templado GI1 (Bølling-Allerød). Prácticamente nohay dataciones correspondientes a la última fase fría del Dryas reciente.En el Báltico se observan también dos agrupaciones pero esta vez se centran justo antes de los calentamientosdel interestadial GS2a (16ka cal BP) y del Preboreal (11,8ka cal BP).

g Para esto he utilizado el programa de calibración Calpal de Joris y Weninger 2003 (que calibra y acumula lasprobablilidades).

8 16 14 12 10 8 6 4 2 020

6 36

5 36

4 36

3 36 KA. cal BP

∂O18 GRIP

0

2

4

1 6 1 4 1 2 1 0 8 6 4 2 0

RUSIA

0

2

4

1 6 1 4 1 2 1 0 8 6 4 2 0

EURASIA

0

2

4

1 6 1 4 1 2 1 0 8 6 4 2 0

EUROPA OCCIDENTAL

0

2

4

1 6 1 4 1 2 1 0 8 6 4 2 0

BÁLTICO

??????? Wrangel

1

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En Rusia las dos agrupaciones principales están más separadas: una antes del primer calentamientotardiglaciar (también hacia el 17,2ka cal BP en el periodo GS2a) y otra ya entrado el Holoceno (11,2 ka calBP).En general en Eurasia se conforman tres agrupaciones (17,2ka cal BP; 14,8ka cal BP y hacia el 11,8) cuyocentro máximo se sitúa hacia el transito de las fases frías a las cálidas.Con la comparación entre las zonas queda evidente también la asincronía entre las distintas zonas. Esimportante destacar que la curva de frecuencia acumulada de la suma de probabilidades de las últimasdataciones sigue un trazado paralelo a la curva de las temperaturas de Groenlandia, pero con una anticipaciónmuy significativa de casi un milenio.El lapso en que desaparecen los mamuts de la isla de Wrangel se cubre por su presencia en las penínsulas delÁrtico y Karelia. Me parece muy interesante el pequeño pico de frecuencia muy marcado, al que contribuyenlas dataciones del extremo norte continental y que precede a la caída definitiva. Creo que corrobora una de lasproposiciones explicativas, que veremos más adelante.

A partir de este análisis podemos afirmar que las dataciones de los últimos mamuts no siguen una pautaregular de correlación con los cambios climáticos. Existen subidas y caídas de las frecuencias de datacionestanto después de periodos climáticos cálidos como tras momentos fríos. Queda claro si consideramos las 383dataciones en bruto, las representamos en forma de histograma y situamos en él los periodos climáticos.

N=383

0

5

10

15

20

25

30

35

0 10000 20000 30000 40000 50000 60000

FRECUENCIA DE DATACIONES C14 BP. DE RESTOS DE MAMUT EN EURASIA

MGA Clima predominantemente más templadoOC

Figura 66. Histograma de la cantidad de dataciones en bruto. Cada intervalo de clase (las barras) corresponde a1ka. Abajo he colocado las fases climáticas según la propuesta INTIMATE. Dataciones [de 378, 232] y la revista

Radiocarbon. El Paleoclima [de 19]: oc= óptimo climático; A=Allerød; MG= Máximo Glaciar).

En el istmo de Karelia los mamuts desaparecen después de un momento en el que ya se había producido unaprimera modificación de la cubierta vegetal. Allí su desaparición definitiva se da después de un primeraumento de la proporción de árboles (de pino y Picea) y precede a un cambio brusco identificado por un hiatoy un proceso erosivo, justo antes del aumento definitivo del polen arbóreo (sobretodo de abedules). Por tantodesaparecieron cuando existía un hábitat semejante al del extremo oriente siberiano en el momento de sumáxima presencia allí. Además, en la secuencia polínica [403] del lago Tambichocero (en la misma Karelia)se aprecian otras fases climáticas previas, a las que ya habían sobrevivido los mamuts, con unas vegetacionessemejantes a las del momento posterior en el que se extinguieron.

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Figura 67. Diagrama palinológico del lago Tambichozero en Karelia (tomado a partir de [403]). Con la flecha largahe marcado un hiato en la sedimentación. La flecha corta señala un episodio erosivo. Las dataciones están en años

calibrados BP. Las oscilaciones en la vegetación en el momento de la extinción del mamut en la zona no sonespecialmente críticas.

EL EXTRAÑO CASO DE LA ISLA DE WRANGELLa pequeña isla ártica de Wrangel presenta un enigma interesante, que curiosamente sirve para despejaralguna duda. Al igual que la Península Taymiria esta isla ha sido muy prospectada, ya que es un punto clavepara este tipo de cuestiones. El problema es que los mamuts estuvieron presentes allí desde hace comomínimo 41ka BP. pero luego parecen desaparecer antes del 12ka BP. La isla tiene un perímetro de 304km yuna superficie total de 7.246km2, de la cual 4395km2 está por encima de 1000m, por lo que no existe muchoespacio donde se hayan podido esconder los mamuts durante el periodo de más de 5ka en el que no estándocumentados. En ese momento, además, la isla debía estar todavía unida al continente, por lo que no habríaimpedimentos de acceso a la zona [155].

Figura 68. Mapa de situación y del relieve de la isla Wrangel en el Ártico

Después de su reaparición (hacia el 7,5 ka BP) aún sobrevivieron [22, 377] ya aislados en ella durante más detres milenios (hasta el 3,7ka BP) a pesar de que la reducida extensión de la isla y la altura de su cordilleracentral no dejaban mucho espacio utilizable para una población de mamuts.

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Esta evidencia nos señala dos puntos importantes:• el clima no debería ser considerado un elemento determinante de la extinción puesto que sobrevivieron en

las mismas condiciones de hoy, y• los mamíferos de reproducción lenta pudieron sobrevivir en islotes reducidos como se demuestra también en

otros casos de aislamiento de una población de elefantes (como en Chipre, Cerdeña, Sicilia, Creta y Malta oen las islas Célebes y en la de Santa Rosa en California…) o incluso de homínidos (como la reciéndescubierta en la isla de Flores, en el Pacífico).

En el extraño caso de Wrangel subsisten dos enigmas: ¿porqué desaparecieron una temporada? Y ¿porqué seextinguieron del todo ya entrado el Holoceno en un momento de estabilidad climática?

Figura 69. Esqueleto de elefante enano de la isla de Sicilia.

LA EXTINCIÓN BRUSCA Y ESCALONADA EN EURASIAEn definitiva pues el análisis de la desaparición de los mamuts eurosiberianos nos ofrece una imagen de unaserie escalonada de extinciones regionales: en las Penínsulas meridionales probablemente antes delTardiglaciar, en el Centro de Europa antes del 12 ka BP, y en el Ártico de Siberia en un momento casiequivalente. Las poblaciones de algunos refugios en las penínsulas árticas por encima de los 75º de latitudnorte y en el oriente del Báltico no se extinguieron hasta el Holoceno, después del 10ka BP, y nos quedaría lapoblación de Wrangel que perdura enanizada más acá del Óptimo Climático y después de un extraño lapso sindocumentación.

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Figura 70. Gráfico de cuadros de dataciones para los últimos mamuts eurosiberianos en las diferentes zonas. Lasflechas hacia arriba marcan el momento de la extinción escalonada en las diferentes zonas.

¿CAUSALIDAD EXTERNA O CAUSAS BIOTICAS INTERNAS? DISCUSIÓN

¿QUÉ HAY DEL CAMBIO CLIMÁTICO?Hemos visto que es difícil extrapolar una causa climática universal directa. Por ello se han presentado [383]diferentes hipótesis del porqué se extinguió el mamut, vinculadas de alguna forma al clima:• Se ha pensado en un golpe de calor en el comienzo del Holoceno.• Como alternativa se ha propuesto que los mamuts pudieron sufrir el cambio de humedad entre el paisaje

seco de la estepa pleistocena y el paisaje húmedo de la taiga-tundra siberiana actual. Se ha argumentado quecarecían de una buena capa dérmica impermeable para hacer frente a las nevadas intensas, por haber estadoadaptados a un clima frío pero seco. Así el aumento de la precipitación habría convertido los mamuts,empapados por la nieve y la lluvia, en verdaderos icebergs andantes antes de quedar definitivamentecongelados. Algunos geólogos, especialistas en podzoles y permafrost, opinan que el cambio ecológico fuecatastrófico; que hay que contar con causas externas abióticas (cambios orográficos y climáticos súbitos):deshielo de la cuenca ártica y del permafrost de la estepa con graves inundaciones, la formación de pantanosy lagos y la sustitución de estepa por tundra y zonas anegadas, con mucha nivación y fuertes vientos connieve [369, 9].

• También se ha pensado que pudieron morir de sed y de hambre, por no poder acceder a ríos y fuentesheladas, ni a la hierba. Estos elementos vitales estarían cubiertos por una capa de nieve helada mucho másgruesa de lo que había sido antes durante el periodo glaciar más seco.

Este tipo de causas externas climáticas tropiezan con una serie de incoherencias en el registro:• En primer lugar los mamuts han sobrevivido al menos a dos ciclos glaciares de 100 años. Estamos pues con

la misma objeción general: ¿Qué tiene de especial el Holoceno que no tuvo el interglaciar anterior?• En segundo lugar, la especie ocupó un rango que va desde la Península Ibérica hasta Norteamérica, desde

Italia hasta la isla de Wrangel o a la China. Los registros palinológicos, isotópicos y microfaunísticos deestos sitios demuestran que las diferencias en las condiciones de temperatura, humedad y vegetación en lasque vivieron, superan las que existieron entre el ambiente siberiano pleistoceno y el actual.

5000

10000

15000

20000

25000

WRANGEL

ÁRTICOTAYMIR

GAMAL

SUECIA

E-BÁLTICO

ALEMANIA

Fechas (cal BP) para los últimos Mamuts europeos

Cueto de la Mina

?

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En efecto, todos los modelos que se han realizado calculan que, durante el Tardiglaciar, existió un fuertegradiente de las temperaturas (tanto las medias anuales, como las del verano o del invierno) entre el extremonororiental y sudoccidental de Eurasia (en el ámbito geográfico de repartición de los mamuts). En Siberia elmínimo de temperatura media calculada para enero en el periodo entre hace 40 y 10 ka BP era de entre –32y -46ºC. Hoy día esa temperatura es de entre –21 y -27ºC. Es decir, las mínimas en invierno habrían subidoun máximo de entre 11ºC y 19ºC pero la diferencia en la mayor parte de Siberia no fue tan marcada: soloentre -8ºC y -12ºC menos que la actual en invierno, y es posible incluso que en verano fuera 1ºC o 4ºCsuperior a la media actual. En realidad durante el periodo más frío podría existir una diferencia detemperatura, entre el invierno y el verano siberiano, mucho mayor que la actual.Aunque calculásemos una temperatura pleniglacial para el Golfo de Vizcaya de –8ºC inferior a la actual (h)jamás se habrían alcanzado en esa zona las temperaturas que se dan hoy día en el extremo norte siberiano.En definitiva pues, si los mamuts pudieron vivir hasta la latitud 40ºC en el norte de la Península, es pocoprobable que se murieran de un golpe de calor en el Holoceno siberiano. Los mamuts sobrevivieron encondiciones más templadas y como mínimo igual de húmedas que las actuales de Siberia. No parece pueshaber un motivo climático directo por el que no pudieran sobrevivir hoy en Siberia.

Al analizar las dataciones del curioso lapso en el que desaparece la fauna fría en Taymiria vemos que esemomento no coincide con un evento de cambio ombro-térmico (de humedad y temperatura [217]) ni con unaumento exclusivo de la humedad (los datos de paleotemperaura y humedad de señalan una buena correlaciónentre sequedad y frío).En definitiva, aunque la mayor parte de los mamuts no sobreviven hasta el Holoceno, no se puede decir quelas condiciones climáticas sean una causa directa de su extinción. Como causa universal tampoco hay quepensar en un acontecimiento climático extremo de corta duración que no haya dejado registro, porque laextinción a nivel geográfico se produjo de manera escalonada.

¿Y EL CAMBIO EN LA VEGETACIÓN?Como efecto del clima pero indirecto se ha sugerido que la causa principal de la extinción pudo ser el cambioen la vegetación: la sustitución de la “estepa de mamut” por la tundra-taiga [381]. Los animales habríanperecido por envenenamiento al no poder aprovechar el nuevo tipo de plantas que se habría expandido en elpostglaciar al avanzar la taiga y tundra. El cambio de plantas tipo C3 a C4 (i) habría sido la causa de laextinción del Mamut y de otros herbívoros monogástricos cuyo estomago más sencillo no habría sido taneficiente como el de los rumiantes a la hora de procesar esas nuevas plantas [159].

También se pueden hacer algunas objeciones a estas explicaciones:• Aunque está claro que al final del Pleistoceno hay una gran homogeneidad en la fauna eurosiberiana de

grandes mamíferos desde el norte de la Península Ibérica hasta la de Chukotka, esta homogeneidad no es tala nivel de la vegetación. Las diferencias aparecen si se comparan los micromamíferos o si se analiza condetalle no sólo el aspecto cualitativo sino también el cuantitativo de los espectros botánicos. En China porejemplo esos grandes mamíferos aparecen en un ambiente donde dominan las especies arbóreas: Picea,Abies, Betula y Larix, y donde no hay predominio de especies esteparias. En el Cantábrico los niveles dehumedad fueron muy superiores a los del centro de Alemania, Mongolia o el norte de Siberia, e inclusosuperiores a los de Catalunya. En todos estos ambientes sobrevivió el mamut y aunque admitamos unaumento de las plantas C4 las C3 siguen siendo las dominantes en el ámbito boreal.

h Es la diferencia máxima que puede extrapolarse a partir del estudio de los invertebrados en Holanda, y por tanto superiora la diferencia que debió existir realmente en la costa Cantábrica

i Las plantas de tipo C3 tienen el primer compuesto orgánico fabricado en la fotosíntesis formado por 3 átomos decarbono. En las del tipo C4 tiene 4 átomos de carbono (ácido oxalacético). El 85-89 % de las plantas superiores son deltipo C3 (casi todas las arbóreas, trigo, cebada, papa, frijol, arroz, tomate). Ambos tipos tienen una estructura foliardiferente. En su mayoría las plantas del tipo C4 son hierbas tropicales de clima cálido y seco (como el maíz, sorgo, cañade azucar, mijo perla…), de zonas áridas, semiáridas y ambientes epifíticos. Son más resistentes a la sequía y la atmósferacargada de CO2.

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En definitiva más que en una homogeneidad a nivel de la producción primaria habría que pensar en unaamplitud del espectro tolerado por estas especies de grandes mamíferos. Un indicio para esta tolerancia podríaser el que si bien algunas especies de esta asociación, como el mismo mamut, atraviesan el filtro de Beringia ycolonizan el norte del continente americano otras, como el rinoceronte lanudo, no lo superan (se supone quepor el efecto conjunto de una temperatura extremadamente fría y, sobre todo, porque la parte del arco pacíficode Beringia estaba cubierta de bosques). Es decir que el mamut tenía mayor tolerancia ambiental que elrinoceronte y pudo atravesar sin problemas espacios con cobertura boscosa. En efecto, los mamutssobrevivieron hasta entrado el Holoceno en el norte de Rusia y Siberia, cuando la vegetación ya habíacambiado en esas zonas.

• Respecto a los problemas de alimentación, también hay datos que permiten rechazarlos como causa básicade la extinción. Aunque no se sabe muy bien qué comían durante el invierno en el permafrost, dondellegaron a vivir a mas de 60º bajo cero, en el inventario de plantas consumidas entran las de estepa,bosquecillos y prados. El análisis de la dieta a través del estudio de fitolitos (j) incrustados en las piezasdentales, de heces, de contenidos estomacales y de restos vegetales asociados a los mamuts congeladosdemostró que la vegetación que los rodeaba y de la que se alimentaron no era tan diferente de la actual. Seha sugerido incluso que hoy día existe un paralelo muy cercano, a tan sólo doscientos kilómetros más al surde la orilla del océano Ártico y se sospecha que estos animales migraban hacia allí, siguiendo los vallesfluviales. Por tanto estuvieron viviendo en zonas en las que hoy sigue existiendo la vegetación que seconsidera optima para su desarrollo.Los mamuts siberianos vivieron en un ambiente variado, desde las estepa seca hasta zonas ligeramentehúmedas y pantanosas o árticas y alpinas [378]. La paleovegetación asociada a los restos de mamutsdemuestra que incluso sin salir de la actual Federación Rusa los mamuts estaban sometidos a condiciones detemperatura y humedad muy variables. Esta conclusión está avalada además por el análisis isotópico dedientes con el que se demostró que aunque hayan consumido sobretodo plantas de tipo C3, las condicionesde temperatura y humedad fueron muy variables. Los nichos ecológicos y los propios mamuts de Dakota enEE.UU. o del Occidente europeo son muy diferentes de los del mamut siberiano [122]. El mamut pues teníauna gran tolerancia ambiental y flexibilidad somática.

• El análisis [119] de crecimiento de la dentina indica que los machos hacían grandes desplazamientos norte-sur mientras que las manadas de hembras con cría tenían una residencia más estable en el extremo norte, porencima del círculo polar, para minimizar la predación sobre los recién nacidos. A partir de ese dato se hapodido concluir que los machos adultos eran expulsados de los grupos “matriarcales” y pasaban la mayorparte de su vida más al sur. Subían al círculo polar para el apareamiento.Esto sugiere grandes movimientos como los que se observan en los rebaños actuales de elefantes de Mali,que pueden cubrir en un año una superficie de 24.000km2 y soportar las condiciones límite del desiertosahariano.

Todos estos argumentos, unidos a las incoherencias del Báltico oriental (que en lugar de vaciarse se repueblaen el Holoceno inicial) y la tolerancia demostrada en Wrangel hacen difícil que se pueda admitir una causa deextinción climática o ambiental de manera exclusiva.Así pues, ni la mayor humedad ni el cambio en la vegetación permiten explicar la extinción o el porqué laespecie no se refugió en las zonas aún hoy día cubiertas de una estepa seca, que ya estaban habitando y quehabían ocupado antes (recordemos otra vez que los mamuts habían sobrevivido a otros eventos climáticos dela misma envergadura que los del principio del Holoceno).

¿Y OTRAS CAUSAS BIÓTICAS?Otra posibilidad de explicación para la extinción basada en causas naturales externas es atribuirla a causasbióticas, hoy por hoy, difíciles de verificar: enfermedades epidémicas, competidores, parásitos…

j Los fitolitos son precipitaciones de cristales microscópicos de sílice hidratada o de oxalato de calcio, producidos por lasplantas a partir de los silicatos y carbonatos de calcio libres que son absorbidos desde el suelo y precipitan en las zonas demayor evaporotranspiración. Pueden quedar incrustados en la superficie dental debido a la presión de la masticación.

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Como explicación en esta línea se han planteado las causas internas vinculadas a la propia evolución o a ladinámica reproductiva: pérdida de resistencia y viabilidad, exceso de especialización o por el carácter noadaptativo de la evolución. En definitiva por un fallo evolutivo.La asunción de la incompetencia evolutiva queda puesta en entredicho por la misma evidencia de la islaWrangel. La isla se separó hace unos 10,5 ka BP, lo que quiere decir que se produjo con gran probabilidadantes de la extinción de los mamuts en el continente y de la llegada de los humanos a la costa de Ártico. Los“mamuts enanos” de Wrangel pudieron llegar de otro sitio, ya enanizados [378], o bien enanizarserápidamente. La rápida flexibilidad de los proboscidios está demostrada también por lo ocurrido en las otrasislas que he mencionado, donde se conservaron elefantes enanos en el Holoceno hasta la llegada de loshumanos.

Y así hemos llegado a la última posibilidad de explicación.

EL FACTOR HUMANO¿Que otras posibilidades quedan para explicar la desaparición? La atribución de la responsabilidad a loshumanos no es novedosa. A partir de los años sesenta del siglo XX se pensó en la caza humana, añadida alefecto del deterioro climático, como puntilla para la extinción. Otra alternativa era adjudicar la extinción enSiberia a la reforestación y al cambio de clima, pero la de los animales en Ucrania a la acción humana [382] ose opinaba [296] que la extinción del mamut en Ucrania y el sur de Rusia se debió a la sobrecaza y que pudoocurrir en un solo milenio.

Figura 71. Figurilla de mamut en marfil (fotografiado por cortesía de J.Sovoda) frente a la zona de losyacimientos de Vestonice en Moravia.

PARÁMETROS TEÓRICOS: ELEMENTOS IDEOLÓGICOSUno de los parámetros que podemos recordar a la hora de “cargarle el muerto” a los humanos es la sobrecargaideológica asociada al mamut, que existió en las sociedades del Paleolítico superior. En yacimientos de laCornisa Cantábrica se documentan varios restos de este animal (Caldas XI, Cueto de la Mina E, El CierroCapa 6) vinculados también a niveles cercanos al último Máximo Glaciar (hace 22-21,2ka años cal BP).Aunque esos restos están asociados a otras especies de fauna fría como el reno, se ha señalado el carácterextraordinario de estas piezas (la mayoría sólo son láminas de dentina) y no se descarta una procedenciaantrópica más lejana. Ya ha sido publicado [81] que algunos pueden responder más a un transporte por causasideológicas que a la presencia directa del animal.

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Esta sugerencia se puede correlacionar con un registro semejante en Catalunya, que coincide con untransporte desde el norte de otros materiales extraordinarios calificables de “fríos” (como asta de reno y elúnico diente de buey almizclero en el yacimiento de l’Arbreda).Esto daría a la circulación de “materiales de mamut” un carácter muy generalizado, tanto en el espacio comoen el tiempo. Se conoce, por ejemplo, el funcionamiento de las canteras de restos de esqueletos de Siberia (k).La obtención de materias primas óseas de mamut en este tipo de yacimientos tenía lugar probablemente desdeantes del fin del Pleistoceno, como en el yacimiento de Berelekh, un osario de 8500 huesos que podría llegar atener una antigüedad de 13ka BP (l).En ese sentido es muy interesante señalar que en el yacimiento alemán de Gönnersdorf, datado en (13-12,8kaBP) los restos óseos de mamut han proporcionado una datación mil años más antigua (unos 14,4 ka BP) quela del propio asentamiento. A eso se une el énfasis en representarlo en las placas grabadas que se hanencontrado en este mismo sitio: después del caballo es la especie más reproducida. Pero en realidad en todo elPaleolítico superior antiguo, desde centro Europa (los yacimientos de Vogelherd y de Geissenklösterle en surde Alemania, en los de Moravia…) hasta las pinturas rupestres occidentales (en el Cantábrico, y en losPirineos franceses), es una especie reproducida recurrentemente. En algún caso incluso vemosrepresentaciones deformadas o sobre-simplificadas (m), quien sabe si por una falta de referencia directa(porque no podían verlo de forma habitual) o con toda intención. Está claro que el mamut tuvo para lassociedades del Paleolítico superior europeo un sobrevalor ideológico especial. Esta focalización en el mamuttiene su expresión más espectacular en los yacimientos de Moravia (Dolni Vestonice y Pavlov) y de la llanuracentral ruso-ucraniana al norte del Mar Negro (Mezhirich, Kirillovskaya, Gontsky, Eliseevichi, Mezin,Timonovka, Kostienki…) en los que se han utilizado estos animales no sólo como fuente de alimento, sinocomo material de construcción para las cabañas y de soportes para la confección de objetos esculpidos [296,358,359,311].

Figura 72. Uno de los dos colmillos de mamut decorados de los yacimientos moravos. Foto extraída del libro deAbsolon [2]. El original se perdió durante la Segunda Guerra Mundial.

k Hasta principios del siglo XX aún se extraían hasta 32 toneladas anuales de marfil de las canteras siberianas. Incluso hoyse venden dientes de mamut por correspondencia a los coleccionistas [200]

l Así uno de los problemas que existen a la hora de evaluar el momento concreto de la extinción en cada región loconstituye a posibilidad de que algunos de sus restos hayan sido transportados a largas distancias por la misma gente.

m Es el caso del extraño mamut de la Grotte Chauvet en el Sur de Francia, o los atrofiados colmillos de las figurasgrabadas en las paquitas de piedra en el mismo yacimiento de Gönnersdorf.

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EL CÁLCULO DE LA EXTINCIÓNPero el mamut pudo tener también un papel fundamental en cuanto a la resolución de la subsistencia, comoobjeto de consumo directo. Vamos a verlo a través de algunos parámetros teóricos. Si realizamos un modelomuy sencillo: tomando una cifra de 150.000 personas en Siberia (lo cual corresponde a una densidad depoblación muy inferior a la mínima conocida para las sociedades cazadoras recolectoras actuales) podremosrealizar un cálculo estimativo de sus necesidades subsistenciales. Enseguida comprenderemos tanto laimportancia de su obtención para unas sociedades cazadoras que dispusieran de la suficiente tecnología, comolas posibilidades de acabar con la población por sobrecaza en muy poco tiempo.Una unidad de reproducción de 5 personas consumiendo el mínimo constatado [383] para esquimales (que esde 2kg) o siberianos (entre 2 y 5kg de carne de reno diaria) nos daría un consumo de más de tres toneladas(365 días x 5 personas x 2 Kg.) de carne anuales –un mamut entero por año.Una población de sólo 15000 personas en el sur de la llanura rusa consumirían la friolera de 30 toneladas decarne diarias: diez mamuts diarios. En un año 10.950 toneladas de carne. Calculado su equivalente en caballos(100kg de carne por caballo) significa más de cien mil caballos, o 36.500 bisontes (300kg por animal).Incluso aunque redujéramos la cantidad de población a un diez por ciento (lo que ya es una cifra mínima)siguen saliendo unas cantidades astronómicas en demanda anual de carne: 10.000 caballos, o 3.650 bisontes o370 mamuts. En realidad podríamos pensar que la demanda podría ser fácilmente la suma de estas tres cifrasanteriores.Pero todo este cálculo es demasiado prudente. Teniendo en cuenta una superficie de 12 millones de km2 paraSiberia y si tomamos el índice de población más bajo documentado para sociedades cazadoras recolectoras(3,1 personas por 100km2 en las grandes llanuras) nos daría un total de 380.000 personas. Además, estacantidad se puede multiplicar por tres si utilizamos índices de poblaciones periárticas o por diez si tomamoscomo referencia una población cazadora-recolectora de alta densidad.En definitiva cualquier aproximación teórica nos da una posible demanda social muy elevada y justificaperfectamente la posibilidad de una extinción antrópica. En realidad a partir de estas cifras podríamospreguntarnos ¿porqué NO se extinguieron antes estos animales?Una explicación parcial me ha sido sugerida por los datos de un investigador ruso [299]: Ese autor constataque, sin tener en cuenta las dataciones anteriores al máximo glaciar en el extremo oriental y tal vez incluso enla entrada de la península de Chukotka, la colonización final de Siberia y del extremo norte y nororiental nohabría tenido lugar hasta muy entrado el Tardiglaciar.Las dataciones de las que se dispone han señalado un avance en las fechas de la colonización humana desde elS hacia el N, con un gradiente secundario de SW a NE. En realidad es el tipo de dinámica que habíamosesperado (y que no se cumplía de forma estricta) para los mamuts de haber habido una extinción por causassolo climáticas. Es decir: el avance humano sí que parece seguir un gradiente climático.

Figura 73. Reproducción de una cabaña paleolítica de las llanura de ucranio-rusa construida con huesos de mamut.

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SITIOS ARQUEOLOGICOS Y DATACIONES DE LA RETIRADAHay serios indicios de que existió una tenue ocupación humana del extremo norte de Siberia antes del ÚltimoMáximo Glaciar (n). Por debajo de los inmensos depósitos de loess y fluvioglaciales (a veces de más de veintemetros de profundidad) provocados por los episodios climáticos del último gran ciclo se han encontradoposibles instrumentos tallados. El difícil acceso a la zona y la consecuente dificultad en organizar campañasde investigación de campo sumado a la gran actividad geomorfológica que ha sepultado los posiblesyacimientos hacen en extremo complicado encontrar esas pistas. Sólo perforaciones profundas o la erosiónfluvial pueden exponer de manera casual ese tipo de yacimientos, cuyo descubrimiento por otros medios escomo intentar encontrar una aguja en un pajar.Los hallazgos arqueológicos se concentran todavía hoy en la parte meridional de Siberia (o).Lo que es bastante seguro es que durante el periodo del Último Máximo Glaciar, la posible población humanaque pudiera haber ocupado el norte de Siberia se retiraría más al Sur del paralelo 60ºN.La recolonización se produjo durante el Tardiglaciar o ya en el Holoceno. Todos los fechados deasentamientos situados por encima del Círculo Polar Ártico son posteriores a 9 ka BP (p). El análisis de lasdataciones obtenidas permite establecer unas isocronolineas, líneas que unen yacimientos con la mismacronología, documentando el avance del poblamiento humano documentado hasta ahora.en la región. En elmapa se puede apreciar que existen algunos yacimientos al sur del paralelo 60ºN con dataciones superiores a20ka BP (anteriores por tanto al Último Máximo Glaciar). Después de un lapso en el que la ocupación (si lahubo) no ha dejado rastro, porque (en todo caso) debió ser muy tenue o esporádica, se puede apreciar unaprogresión de los sitios datados hacia el Norte, pero con predominancia del avance por el Este, dejando elNorte a un lado y avanzando hacia Chukotka y Beringia por la cuenca del Pacífico y no por el Ártico. No estámuy claro en que momento entre el 13 y el 10ka pudieron avanzar desde el Este por el Sur de Beringia haciaAmérica. Pocos yacimientos (q) han sido datados.Tal vez entre el 11ka y el 8ka BP penetraron en el extremo norte y se dedicaran a la caza intensiva de losúltimos mamuts pero sólo después del 8ka BP existen dataciones en toda la zona. En ese momento inclusocomienza a haber ocupaciones datadas en las islas del Ártico (como el sitio de Zhukhov datado entre 8-7,8 kaBP). El acceso a los últimos mamuts estaba abierto. Los últimos mamuts continentales euroasiáticos seacabaron al mismo tiempo de la entrada humana en el Ártico. Después del 8ka BP hay un cambio en latecnología del instrumental de piedra y los grupos se orientan a la caza del reno.

n En la depresión de Vankarem hay algún indicio de ocupaciones humanas de 39,3ka y 40,1ka BP.

o Hay un interesante debate a propósito del proceso de colonización de Siberia [96; 211; 212; 299…]. La compilación dedataciones deja bastante claro que el extremo oriental de Siberia tiene un vacío de dataciones entre el 32 ka BP y el 21 kaBP. Hay algunas pocas dataciones anteriores al máximo glaciar (concentradas en sitios al sur del Amur y de la cabeceradel Aldan) pero no vuelven a ser más numerosas hasta el 14ka BP [96]. En el sur de Siberia (concentrada alrededor delmacizo del Altai, en el alto Yenisey, en la cuenca del Angara al E y al SE del lago Baikal) persiste la ocupación humanadesde antes de 40ka BP, pero se hace mucho más abundante a partir del 16ka BP. Esta dinámica no se parece a la de lallanura central ruso-ucraniana donde la ocupación experimenta un máximo desde el 24 al 18ka BP. Ahí parece unaocupación de la estepa ártica al sur del frente de expansión del Ultimo Máximo Glaciar por gentes que explotaron mamutscomo recurso primordial.

p Sólo la datación de huesos de mamut en Berelekh ha dado 11ka BP y hay dos yacimientos (Maiorych y Kymyneike) queson tal vez de la misma época. Pero, ya lo hemos mencionado, Berelekh podría haber sido una verdadera cantera dehuesos antiguos y la datación podría corresponder a esqueletos de animales muertos mucho tiempo, incluso más de unmilenio, antes. Los otros dos no se han datado.[299]

q Los sitios de Bochanut, Chokurdakh, Igilyakh, Maiorych, Olenek y Kuranakh en Yakutia; Ryveyem en la isla de Aian,monte Kymyneike en la depresión de Vankarem en Chukotka; y siete yacimientos en la Península de Chukchi: Ul'khum,Chaatam'ye 1, Kymynanovyvaam VII, VIII and XIV, Ioniveem VII e Igel'khveem XVI. En ellos se han hallado algunosbifaces, núcleos de laminitas líticas, instrumentos y utensilios de marfil de mamuts fabricados por gente cazadora derenos, perdiz ártica y liebres.

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Figura 74. Mapa de Eurasia con extensión del mamut y la posición y la datación de los yacimientos arqueológicosmás antiguos de cada zona (hexágono=Alemania central, triángulo=Moravia, ovalo=llanura ucranio-rusa,

rombo=Karelia y Báltico sur). Se marcan isocronolíneas del posible avance de la ola humana.

UN BALANCE FINAL POSIBLEComo posibilidad a explorar se puede apuntar que aunque parece haber una causa climática dominante en laregresión del mamut en Europa, ésta no fue la causa determinante de su extinción definitiva.He comentado que debió existir una zona en el extremo norte ocupada por las manadas de reproducción demamuts. Por razones climáticas esta zona debió estar más allá del área de acceso regular para la gente. Porello pudo actuar como una reserva, que aseguraría el reemplazo de la población depredada. Esa barrera fuefranqueada de forma definitiva, concordando con las últimas fechas que hemos expuesto antes para laextinción de la especie en el continente.

El cambio brusco que supuso la desaparición de los mamuts puede ser un ejemplo de la combinaciónjerarquizada de causas. El clima actuó como trasfondo dominante. La caza, como causa determinante, noactuó de forma gradual sino escalonada y brusca: primero se eliminaron los animales del Oeste y centro deEurasia, después, una vez franqueada una cierta barrera climática, los siberianos y al final los de isla Wrangelque nos demostraron la capacidad de estos animales para sobrevivir en lugares muy inadecuados para ellospero sin presencia humana. El detonante de la extinción sin embargo debe ser considerado como lacombinación de varios factores:• La baja tasa de reproducción de los mamuts, ya que otras especies de menor tamaño y reproducción más

rápida no llegaron a extinguirse.• El desarrollo de la capacidad humana para cazarlos sin demasiados problemas. Los elefantes habían sido

aprovechados desde el Pleistoceno medio en Europa pero se ha puesto en cuestión la capacidad humanapara efectuar una depredación eficaz antes del Paleolítico superior. Sólo al principio de este periodotenemos documentado el uso de armas con proyectiles propulsados (azagayas lanzadas con propulsores).Sin una tecnología de caza adecuada, con una caza marginal u ocasional, no se pudo llegar a una extincióndefinitiva.

• A diferencia del elefante templado y de otras especies de grandes mamíferos terrestres, como el rinoceronteo el hipopótamo, de reproducción también lenta, el mamut estuvo protegido por la barrera del extremo nortey fue preciso desarrollar una tecnología térmica adecuada para superar la barrera.

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Como consecuencia de la discusión terminal del problema de la ocupación total de Siberia nos ha quedadouna duda: ¿llegaron los humanos antes del Tardiglaciar más al norte de la Península de Magadan (60ºN)? Esoes lo mismo que preguntar ¿pudieron pasar los humanos por Beringia hacia América antes del ÚltimoMáximo Glaciar? Hay algunos indicios de ocupación humana en el extremo NE de Siberia y que apoyarían laposibilidad de un paso antes del 32ka BP. Si fue así llevarían consigo una tecnología tosca muy semejante a ladel Paleolítico medio como la que había en Siberia. La cuestión que se debate es si serían una forma antiguade la humana moderna [96] o bien homínidos representantes de una forma arcantropina [211], descendientesaún de Homo erectus.

En todo caso esta cuestión me da pie para pasar al próximo ejemplo.

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B) LA BRUSCA EXTINCIÓN MASIVA DE ELEFANTES Y DE LAMEGAFAUNA AMERICANA.

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMANuestra historia del mamut eurosiberiano tiene una continuidad natural. Deberemos seguirlo a través deBeringia y penetrar por Alaska en el continente americano. Introducirnos en este tema significa enfrentarnos auna complicada maraña de literatura que va desde páginas web de extrañas universidades norteamericanas enlas que se utiliza el mamut como la prueba irrefutable de la existencia del Diluvio Universal, hasta teorías máscientíficas, que no por ello a veces estan también impregnadas de reminiscencias bíblicas o de Hollywood (a).Aún así es imprescindible abordar este tema de la extinción de estos grandes mamíferos americanos e inclusoseguirlo hasta el fondo, hasta la Tierra del Fuego, porque se trata de la desaparición súbita de fauna másimportante en los últimos 20 millones de años. La desaparición del mamut en América forma del evento, másrotundo y cercano en el tiempo, de la extinción en masa de un gran numero de especies. En definitiva es elejemplo de cambio brusco biótico más estudiado y debatido y su análisis no se puede soslayar tratando estetema.La extinción de Mammuthus primigenius va acompañada, en toda América, de la desaparición de: una o dosespecies de Mammuthus (el columbii y el jefferssonii), un mastodonte (o Mammutidae: el Mammutamericanum), los Gomphotheridae de América Central y del Sur: Cuvieronius (andino, desde Chile hasta elnorte de Sudamerica o América Central), Haplomastodon (ocupa las alturas boscosas del área tropical y lassavanas hasta Ecuador) y Stegomastodon (animal de bosque abierto del final del Pleistoceno en las llanuras deVenezuela, Brasil, Paraguay, Uruguay, Argentina y la parte norte y central de Chile.).

En Norteamérica se puede trazar un mapa de distribución de estos proboscidios (b): nuestro Mammuthusprimigenius estaría reducido a Alaska y a la tundra estepa al SE de los Grandes Lagos. Tal vez se solaparaallí, en el NE de EEUU, con la otra especie de Mammuthus , el columbii o su variedad jeffersoni, unproboscidio de pradera muy abundante en el centro de EEUU, que se extendió hasta México. Ambas especiescompartieron su hábitat con el mamut americano (en realidad un mastodonte). Esta última especie tuvo unaconcentración máxima de población en Alaska y en el centro y sudoeste de EEUU coincidiendo con laextensión de la estepa ártica y las praderas, que compartía con animales de pasto (caballos y bisontes). Suhábitat se extendió hasta la costa atlántica, en un ambiente de bosque parque y acompañado de cérvidos ycastores, e incluso llegaba por el sur hasta El Salvador (zonas de sabana seca) y Florida, donde tuvo otraconcentración máxima, aquí en ambiente de bosque templado.

a Se ha asociado a esta cuestión de la extinción de elefantes la hipótesis del paso de los primeros pobladores americanosdesde Siberia entre los glaciares a través del corredor laurentiano – atapascano. Esta imagen no puede dejar derecordarnos la película bíblica de los Diez Mandamientos y del paso del mar Rojo por los judios dirigidos por un Moises-Charlon Heston. Para partidarios del Diluvio el presunto "olvido" de los mamuts por Moises no fue tal. Según algunas deestas doctas versiones, el Patriarca prefirió meter en el Arca, como representación del elefante, a una pareja de la razaafricana que habría sido de la misma especie pero menos peluda que el mamut.

b A pesar de que se hayan confundido algunas determinaciones de las especies, atribuyendo a Mammuthus primigenius loque en realidad habrían sido restos de Mammuthus columbii [6]

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Figura 75. Distribución de los proboscidios en EEUU. MC Mammuthus columbii; MJ Mammuthus jeffersoni; MPElephas primigenius (mamut); MA Mammut americanum.

Así pues estos animales tendrían una tolerancia ambiental amplia y habría algún área donde se podrían habersolapado los rangos de tres especies, justo en la zona más afectada por los cambios bruscos del desagüe delgran lago Agassiz producto del deshielo de los glaciares del Cuaternario reciente. En América Central y delSur no es raro tampoco encontrar en el mismo contexto paleontológico representantes de dos o incluso tresespecies de proboscidios.La gran caida de la población de mamuts se produce mil años después de su desaparición en Europaoccidental y mil antes que en Siberia septentrional.Pero además la extinción del mamut va acompañada de la de 37 géneros de mamíferos en Norteamérica. Seextinguen más del 60% de los mamíferos. Algunas de estas especies americanas que desaparecieron eranpersistencias del Eoceno, otras del Plioceno. Es decir, habían sobrevivido a todos los cambios ambientalesdurante los varios millones de años previos.Otras especies (como la paleollama o el bisonte nortemericano extinto Bison latifrons) fueron substituidas, enmenos de dos mil años y después de un breve lapso para el que no hay documentación, por sus descendienteso parientes filéticos muy cercanos.

Figura 76. Mandíbula de mastodonte extraído de un yacimiento de brea en la península de Sta. Elena en Ecuador.

Lo que más nos interesa de este tema es su vinculación con las sociedades humanas cazadoras recolectorasprehistóricas, puesto que existe un consenso según el cual en el momento de esta extinción la ocupaciónhumana del continente ya se ha producido y porque hay inequívocas evidencias de que esta fauna fue cazaday aprovechada. Por tanto cabe preguntarse cómo afectó el cambio brusco de la desaparición de los grandesmamíferos a las primeras sociedades americanas, o bien qué papel jugaron éstas en el cambio brusco quesignificó la extinción.

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TEORÍAS EN PUGNA:A pesar del citado consenso de que se produjo "en presencia de humanos", sobre la extinción se hanformulado varias hipótesis alternativas igual que ocurrió en el caso de la del mamut eurosiberiano. Todo eldebate está contaminado por la posible vinculación entre esas extinciones y la fecha de la primeracolonización humana del continente. La discusión se ha polarizado entre las posiciones partidarias de laprioridad de la acción humana (“Overkill“,“Blitzkrieg“), y las que defienden la prioridad de los factoresmedioambientales o bióticos: desaparición de biotopos adecuados, inadaptación, envenenamiento, virus...(c).Así se produce una situación académica caótica: algunos arqueólogos acusan a otros de escepticismo frente ala hipótesis de sobrecaza enfatizando la aceptación de ésta por biólogos [170], mientras que algunos biólogosacusan a los arqueólogos de aceptar demasiado fácilmente una hipótesis de sobrecaza que estaríadesacreditada por completo en Biología.

Se han escrito centenares de páginas sobre este tema, en especial para el caso norteamericano. Lacontroversia, en la que aflora toda la grandeza de la Ciencia y la miseria de la Academia, está servida porqueen ella se mezclan elementos sensibles de la política. En Norteamérica el relacionar el fenómeno de laextinción con la cuestión del primer poblamiento del continente, y éste a la situación política y social actualde las comunidades de “nativos americanos” enmaraña, aún más si cabe, todo el asunto. Ambas posicionesenfrentadas producen descalificaciones apasionadas de la postura contraria e incurren en contradiccionesinternas. Por ejemplo, las posturas “naturalistas”, que conservan reminiscencias del concepto del “buensalvaje” respecto a los paleoindios (atribuyéndoles una conciencia "ecologista") al mismo tiempo argumentan“la incompetencia” de cazadores recolectores para producir extinciones masivas o ni tan sólo para cazarmegafauna (por su falta de desarrollo "tecnológico"). Desde esa perspectiva tachan a los “antrópicos” deeuropeistas y anti-indigenistas (por sugerir que los indios habrían sido tan poco respetuosos con la fauna). Los"exterminacionistas" por su parte acusan al otro bando de no querer ver la capacidad de los humanos paratrastocar de forma grave el equilibrio natural y los acusan de “antiecologistas” por no querer ver el riesgo quesupone la acción humana para el planeta.En ambas posiciones hay un desprecio sesgado hacia datos concretos. Las dos coinciden en un empeño porrechazar aquellas dataciones que consideran “demasiado modernas”. Las personas que reivindican el papel delos desencadenantes abióticos las rechazan porque, para justificar que el cambio climático holoceno enAmérica es la causa de la extinción, las especies no deberían haber sobrevivido in extremis mucho más allá.Por su parte los partidarios del “overkill” y de la “Blitzkrieg” atribuyen la extinción a los primeros gruposinmigrantes "Clovis" (d) y rechazan esas dataciones porque una larga coexistencia de humanos con faunaextinta negaría el modelo de una matanza rápida. Tampoco aceptan las dataciones de presencia humana másantiguas (pre-Clovis) para aumentar el efecto relámpago de la “Guerra”.En suma, es un buen campo de batalla en el que los paladines de ambos bandos pueden hacerse notar, yalcanzar la “notoriedad” ( lo mejor dentro del “sueño norteamericano”).Voy a exponer mis propios argumentos y abrir hipótesis alternativas a partir de una premisa (e), untratamiento y un análisis de los datos, distintos.

TEORÍAS SOBRE FACTORES NATURALES.Las teorías que defienden el cambio climático o el cambio biótico brusco como causas fundamentalespretenden responder al hecho de que parece tratarse de un cambio universal, de enorme amplitud y caráctersúbito.Existe, como he comentado, una correlación bastante buena entre las fases climáticas del hemisferio norte ylas del sur, como se puede apreciar en las secuencias paleoclimáticas derivadas de las perforaciones realizadas

c Que yo he llamado "naturalistas"

d Llamados así por el nombre del yacimiento en el que se hallaron las puntas de proyectil, muy características, que seutilizan como fósil director del momento más antiguo de la colonización.

e A pesar de haber trabajado en América desde 1986, estoy al margen de la Academia americana, de sus "problemasdomésticos" y juegos de poder. Desde una perspectiva europea me puedo enfrentar a este problema de una forma máslibre.

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desde la Antártida (Vostok), Bolivia (Sajama), Perú (Huascarán), cuenca Caribe (Cariaco) hasta Groenlandia.Los episodios Dansgaard-Oscher o los Heinrich son reconocibles a nivel general, aunque a nivel local algunosautores han puesto en duda su repercusión o su exacta sincronía (por ejemplo el Dryas reciente, en Américadel Norte o en la zona de lagos de latitudes medias de la vertiente del Pacífico sur).Esta extinción finipleistocena sería pues una extinción normal más, del mismo orden que las que se dieron enEras anteriores y bien sincronizada por la globalidad del cambio climático brusco de la Última Terminación.

Figura 77. Cambio de las zonas de vegetación en América del Norte durante la ultima Terminación [a partir de337]. Se puede observar que el cambio entre 11ka y 10ka BP (marcada con una flecha) no es significativo. Las

zonas de vegetación se extienden hacia el norte con el retroceso de las masas de hielo continentales y se amplia lafranja central de Canadá. No hay pues un cambio de vegetación que justifique la extinción en ese momento.

Esas teorías se apoyan en tres preconcepciones o prejuicios:

1. la incapacidad de los animales a adecuarse y sobrevivir al cambio.Esto es un apriorismo, porque es difícil de argumentar la incapacidad de adaptación “a posteriori”. Es encierto modo tautológico afirmar que: “se extinguieron porque no pudieron adaptarse, como demuestra elhecho que se extinguieran”.

2. la incapacidad humana de cazar de una manera efectiva la megafauna:

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la “incompetencia de los humanos” para producir este efecto debido a una densidad de población insuficientey a una tecnología ineficiente.Este es otro apriorismo que habría que demostrar arqueológicamente. Desconocemos la población inicial, eltiempo concreto de su entrada en América, y la tasa de reproducción, pero en cambio sabemos que proyectilespropulsados con puntas de piedra de forma igual a las halladas en todo el continente en un momentocoincidente con el de la extinción, son capaces de matar animales como los extinguidos

3. una difusa idea del “buen salvaje conservador“,combinada con una supuesta baja tasa natural de reproducción entresacada de datos etnográficos desociedades cazadoras-recolectoras actuales .Tampoco puede ser aceptado este "a priori" como un axioma, pues las tasas de reproducción de gruposcazadores-recolectores históricos no son extrapolables sin más al pasado, ya que sabemos que handesarrollado sistemas de control de su reproducción. Los mismos indios norteamericanos tienen tras de sí unahistoria "muy movida", tal como pone de manifiesto la Arqueología. Tampoco podemos argumentar que losgrupos paleoindios eran conservadores "por naturaleza" ni que tuvieran desde el principio la "conciencia pre-ecologista" que se ha atribuído a los grupos indígenas contemporáneos. En realidad estariamos negando sucapacidad de aprendizaje y de acumulación de experiencias históricas y de cambio.

Desde estos planteamientos "naturalistas" se exige a los partidarios de la incidencia humana, la hipótesiscontraria, pruebas de grandes matanzas y puntas de proyectil clavadas en los huesos de los grandes animales.Pero a esta exigencia la podríamos calificar de injusta. De tener que cumplirse deberíamos admitir quetampoco existen pruebas de caza en todo el Paleolítico superior europeo. En todo el Viejo Mundo existen muypocas evidencias de ese tipo y sin embargo pocas personas dudan aquí de la capacidad cazadora de “nuestrosantepasados”, los “grandes cazadores de las cuevas pintadas”, a los que se reconoce además una antigüedadsuperior en milenios a los americanos.A esta objeción se puede añadir una reflexión complementaria: está bien demostrado (y a nosotros nos ocurrióen Tierra del Fuego) que las evidencias de “puntas clavadas en huesos” no se ven si no se buscan [236].

Dentro de las teorías de "factores naturales como causa de la extinción", se han formulado para el ejemploamericano diferentes posibilidades:

1. disfunciones fisiológicas debidas al calorEn este sentido se ha insistido [162] en las peculiaridades del Holoceno. El último periodo interglaciar en elque vivimos habría sido más seco y cálido que otros periodos interglaciares anteriores.

2. clima severoOtros autores (f) han propuesto todo lo contrario y culpan de la extinción al Dryas reciente, demasiado frio yhúmedo [115]. Consideran que si el clima se hizo más humedo y continuó siendo frio, los proboscídeos nopodrían haber accedido al agua de rios y fuentes (habría estado helada), ni a la hierba seca, helada y sepultadabajo una capa demasiado gruesa de nieve helada. Así, habrían muerto de sed y de hambre.

3. demasiada inestabilidad climáticaLo significativo no habría sido el tipo de cambio sinó la inestabilidad climática extrema [56]. La últimaterminación habría sido un periodo demasiado inestable para la gran fauna.

4. deficiencias dietéticas por cambio de vegetaciónLos partidarios de los factores bióticos han enfatizado también posibles deficiencias dietarias como la causaprimordial de la extinción brusca [159, 50, 51…]. Ese posible estrés nutricional debido al cambio devegetación predominante habría sido amplificado [150] por la mayor proporción de plantas venenosas, y seríavisible en la reducción de tamaños de los individuos.Se argumenta que se redujeron los espacios abiertos –sobretodo la estepa y la sabana, ricas en grandesherbívoros- en beneficio de espacios de selva tropical y taiga/tundra mucho más homogéneos y pobres enbiomasa de herbívoros grandes [159, 160]. Muchos de los taxones que se extinguieron tendían a ser

f Como el paleontólogo Russell W. Graham del Denver Museum of Nature and Science [147, 148, 149].

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característicos de espacios abiertos sin gran cobertura vegetal. El cambio holoceno trastocaría la calidad delalimento (las plantas se harían más venenosas, menos nutritivas). Las plantas tipo C3, mas nutritivas, seriansustituidas por otras (tipo C4) de pradera calida.Guthrie, quien se atribuye el concepto de “estepa del mamut”, aboga por una desaparición de la gran faunadebida al cambio de ese biotopo. La estepa se habría extendido por lo visto desde Padul en Granada (o tal vez,¿porqué no? desde la presunta "frontera del Ebro“) hasta Florida en Norteamérica, pero habría estado formadapor un variado mosaico de manchas de vegetaciones diferentes. Este paisaje habría sido substituido en elHoloceno por unos biotopos monotonos muy extensos. Todo ello habría perjudicado catastróficamente(envenenando y restringiendo el área ocupable) a los herbívoros monogástricos, tanto de bosque-parque comolos de estepa.Así los últimos Mamut americanum (hacia el 10ka BP) por ejemplo estarían asociados al bosque mixto depinabeto y se habrían refugiado en el NE de los EEUU, huyendo del avance de los bosques caducifolios quese habría producido a partir de 16 ka BP.

Tomando el mismo modelo para Patagonia, algunos autores partidarios de una extinción rápida de lamegafauna por causas naturales también han argumentado [51] que la fauna pleistocena se extinguió por laimplantación de la fase templada holocena con la que se habría extendido una vegetación más cerrada. Otrospor el contrario, [115] opinan que esa fauna, que era en realidad pre-pleistocena, se extinguió después de ladesertización del Último Máximo Glaciar.

Se ha escrito que, como reacción frente al estrés ambiental generado por el cambio biótico y abiótico de sumedio, tanto los mamuts como el resto de la fauna extinta pudieron reaccionar de distintas maneras:• con un desequilibrio y reorganización global posterior [148].• incentivando el aislamiento- y como consecuencia produciendo deriva genética [91]• reactivando la competencia interespecífica [303]• ralentizando la reproducción.

DEBILIDADES ARGUMENTALES DE LAS HIPÓTESIS DE CAMBIO AMBIENTAL.

1. Argumentos contra el cambio de clima como causa.Una de las primeras objeciones para aceptar el supuesto de cambio climático como causa de las extincionesamericanas es general a todos los fenómenos de este tipo: habría que explicar porqué afectó más en el últimocambio global de la Última Terminación que en los anteriores. En realidad la persistencia de la megafaunaamericana a lo largo de muchos cambios climáticos previos estaría demostrando que no fue una causaambiental, a menos que se argumentara cuál es en todo el continente americano la característica tan peculiardel último de los veintiún grandes cambios climáticos.Se tendría que explicar de manera convincente porqué en América se extinguieron tanto los elefantes deestepa como los de bosque. Y porqué los mastodontes del continente meridional tanto de montaña como dezonas bajas... ¿Porqué en especial los animales mayores (que pudieron ser mucho mas flexibles que losmenores frente a un espectro vegetal)?Antes de 11ka BP los proboscidios norteamericanos vivían desde los 0 hasta los 1400 metros de alturasobreviviendo en condiciones de temperatura muy distintas. Todos se extinguieron casi al mismo tiempo y nose documentan antes de su extinción grandes desplazamientos buscando lugares más favorables. ¿Porqué seextinguieron en todo América tantas especies de gran fauna, tan distinta, y en cambio sobrevivieron especiessimilares en África o Asia, dos continentes donde además el rango de latitud y variabilidad de biotopos no estan grande?El problema para admitir el cambio climático brusco global como causa es que tampoco están absolutamentesincronizadas todas las extinciones de proboscidios. Es más, algunas de ellas van al contrario de lo que seríaesperable: Mammuthus primigenius por ejemplo se extingue antes (puede que hasta milenios) en Alaska quemás al sur en el NE de EEUU, cuando sería lógico suponer que la vegetación más fria, más adecuada para elanimal, debería haber desaparecido más tarde en Alaska que más al sur. La evidencia paleontológica sugiereque los proboscideos de estepa y los de bosque-parque solaparon sus rangos de distribución geográfica enmuchas zonas. Frente a un cambio ambiental en una u otra dirección podrían haberse desplazado y reajustadosu distribución geográfica.

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Un empeoramiento del clima en el Dryas reciente (YD) no es un buen argumento porque la trascendencia deesta fase no parece regular ni documentarse de forma sincrónica, ni con igual intensidad, ni tan sólo enNorteamérica. En Alaska sólo aparece una pequeña y corta fase de aumento de tundra y sedimentacióninorgánica, y en el extremo sur del corredor laurentiano atapascano tal vez un momento de condicionesdesérticas, alrededor de 10,6-9,9ka BP [166].El argumento de un incremento de las heladas es dificil de demostrar incluso a nivel local pero, sobre todo, elrango continental de la extinción es demasiado vasto para poder universalizar esta explicación. Cuesta creerque todo el continente se helara en un momento y que esa helada acabase prioritarimente con los animalesmás grandes, salvándose los pequeños.

2. Argumentos contra el cambio de vegetación como causa.La intoxicación a nivel continental es tambien muy improbable. No es fácil de explicar que ninguna de lasespecies extintas pudiera sobrevivir con el tipo de plantas C4, y menos aún que no encontraran ningún refugiocon las plantas adecuadas en todo el continente. O surge de nuevo una cuestión antigua no respondida:¿porqué cambiaron las plantas, de C3 a las C4 intoxicadoras en este cambio climático y no en los anteriores?Los restos de mamuts de Colorado, por ejemplo sugieren que sobrevivieron en una gran amplitud de biotoposy no hay restos posteriores a 12ka BP tampoco en las zonas altas de montaña, lo que desmiente la posibilidadde que buscaran refugio en paisajes relictos a mayor altitud en el Postglaciar [149].Además algunas de esas especies se extendieron desde América del Norte hasta Tierra del Fuego y laextinción afecta a todo tipo de megafauna de requerimientos ecológicos diferentes.No se explicaría porqué afectó tanto a los elefantes de estepa como a los de bosque parque y a losmastodontes del continente meridional. He indicado las condiciones ambientales diferenciales que se asociana cada especie y como, a pesar de ello, se solapan sus zonas de repartición geográfica. El "éxito" de lareintroducción en época histórica de especies con requerimientos idénticos a las extinguidas en los nichosecológicos "abandonados" ha demostrado que no eran inadecuados, y que en realidad esas especiesdesaparecidas habían dejado un espacio “desierto” y un empobrecimiento no compensado de la biodiversidad.No se explica por ejemplo que los caballos fueran los primeros en desaparecer y que luego, al serreintroducidos por europeos, se reprodujeran sin problemas en estado cimarrón en las zonas de praderas detodo América. Estos mismos animales perduraron en Siberia y han demostrando ser buenos sobreviviendotanto en estepas como en bosques boreales. Para justificar el porqué los caballos reintroducidos proliferarontanto, los autores “naturalistas” llegan a aceptar que los indios cazadores-recolectores modificaron(antropizaron) la pradera americana antes de la llegada de los caballos europeos. Es decir, fueron incapaces deacabar con los caballos salvajes pero después llegaron a modificar la vegetación hasta el punto de posibilitarsu reintroducción por los españoles.Desde Ecuador o Venezuela hasta el estrecho de Magallanes encontramos asociadas recurrentemente especiesde nichos diversos, como los équidos o los mastodontes y no sería explicable que la rarefacción de unostaxones causada por el cambio en la vegetación no hubiera favorecido a los contrarios.Se ha afirmado que el cambio ambiental finipleistoceno, desde hace 14ka a 8,5ka BP, fue crítico por la graninestabilidad climática , pero aún así es difícil pretender que unas especies de fauna que se extienden desdeEstados Unidos hasta Patagonia (y que incluyen desde ramoneadores hasta pacedores, como el Milodón) nohayan encontrado en dos continentes ningún refugio con un nicho ecológico adecuado para su supervivencia.Si el problema fue la inestabilidad, no es lógico que se extinguieran justo cuando se instaura un periodo másestable.En definitiva, tal como han señalado autores críticos [254] la fauna se extinguió cuando aumentaba elpotencial biótico (cuando desapareció el gran casquete de hielo que había cubierto todo el norte) y antes deque la trasgresión marina hubiera inundado toda la extensa plataforma continental.

Pero es que, en rigor y en detalle, no se puede decir que haya habido un cambio considerable de vegetación entodas partes que explique las extinciones Algunos animales (como el perezoso terrestre del sudoeste deE.E.U.U.) se extinguen un milenio antes del cambio de la vegetación [245]; otros (como el perezoso deNeuquén) sobrevivieron bien en un entorno de vegetación similar a la actual (que ya existía hace 14 ka BP),pero se extinguieron milenios más tarde [176].

Un argumento "naturalista" es que los mamuts y el resto de la fauna extinta pudieron reaccionar al estrésambiental con una ralentización fatal de su reproducción. Pero en todos los ambientes insulares (donde lagente tardó más en llegar) los proboscídeos sobrevivieron, y la consecuencia adaptativa frente a la

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insularización fue el enanismo: desde las islas Célebes a las del mediterráneo, desde el Artico a las islas delcanal de Santa Rosa en California. En definitiva, en los casos de aislamiento y estrés ambiental no hayralentización sino reducción de tamaño. Cuesta por tanto pensar que si el problema hubiera sido de reducciónnatural de sus hábitats ningúna población hubiera podido encontrar en todo el continente una zona aislada, nique fuera del tamaño de la isla de Wrangel, donde sobrevivir, incluso "enanizándose".

CRITICA GENERAL A LAS POSTURAS AMBIENTALISTAS

No hay ninguna explicación natural plausible para la extinción en el Dryas reciente o en el Holoceno y no encambios anteriores de igual magnitud. La objección básica es que la fauna americana (g) era en gran parte pre-Pleistocena, con una larga trayectoria de superación de todos cambios climáticos cuaternarios precedentes.Como he comentado en el capítulo de cambios bióticos, no es lícito equiparar sin más la extinción de esteperiodo climático IOS2 con otras extinciones. La finura de discriminación que tenemos para el final delúltimo periodo glaciar no existe para los anteriores. Debido a la diferencia de las escalas cronológicasinvolucradas desconocemos con certeza el agente desencadenante en los otros procesos de extinción y lo másseguro es que no todos tuvieran las mismas causas. Pudo haber casos catastróficos en los que el impacto de unmeterorito acabara con la mayor parte de la fauna y otros en los que las desapariciones de especies pudieronescalonarse a lo largo de decenas de miles de años, aunque lo percibamos ahora como un proceso bastantesúbito. En el caso americano la escala cronológica involucrada es suficientemente pequeña para que lopodamos considerar un cambio súbito. De momento no hay evidencia de que estuviera tan sincronizado comopara pensar en un cataclismo, del que por otra parte no hay pruebas. El carácter súbito y global de los cambiosclimáticos de la Última Terminación tenía precedentes y por ello es dificil aceptar que es justo en esta faseúltima y no antes cuando el cambio natural acaba con la megafauna.Es curioso que entre los elementos de competencia extraespecífica los autores „naturalistas“ no colocan a loshumanos como formando parte del mismo ecosistema. No quieren aceptar que la peculiaridad principal de laÚltima Terminación fue la presencia, bien documentada, de unas sociedades humanas que con seguridadusaron unas armas de caza a larga distancia y que aprovecharon la fauna mayor. A pesar de que intentan [151]eliminar todas las asociaciones de restos de megafauna y señales de intervención humana, al final no puedenobviar las pruebas existentes en los sitios con caballo, Mamut y Mammuthus. Las admiten y aún dan máspruebas inequívocas de que hay caza humana de proboscídeos. Pero siguen insistiendo en que no hayevidencias de que los humanos tuvieran un papel importante en la extinción.

LAS POSICIONES "NEUTRALES“Para hacer frente a los argumentos críticos los partidarios de una causa natural adoptaron una posición mixta o"neutral“. Aceptaron que los humanos han sido una de las causas de la extinción, pero por sí solos habríansido incapaces de acabar con toda la megafauna americana. Como argumento aportan el que los gruposhumanos hicieron matanzas intensivas de bisontes durante diez mil años sin extinguirlos, y que esas matanzassí están bien documentadas.Las posiciones "neutrales" tienen diferentes variantes:

1. Teoría de la "puntilla"Según una de estas teorías [349; 350 y 169] es admisible que la gente entrara en tropel en el Tardiglaciar(después del 12ka BP), pero esa "gente Clovis“ habría matado mamuts que ya se estaban muriendo por causasnaturales. Eran poblaciones de animales que ya estaban estresadas. Los humanos sólo eran oportunistas quecazaban o remataban los pocos mamuts que quedaban, que iban encontrando al azar o concentrados alrededorde las pocas charcas o de los reducidos biotopos favorables que habían quedado despues del cambioclimático. O bien aprovecharon la baja forma de los proboscídeos, consecuencia del cambio ambiental, paraespecializarse en ese momento en su caza, dándoles la puntilla extintora.Otra posibilidad admitida es que las gentes que entraron fueran especialistas que ya iban dirigidos a la caza demamuts, pero el resto de las especies se habría acabado o se estarían acabando por causas naturales o por

g A diferencia de la europea, que va cambiando de forma más rápida durante el Cuaternario "en presencia o bajo presión"de homínidos.

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otros efectos. ¿Cómo sinó, se preguntan, puede explicarse que existan lugares de matanza de mamuts pero nose documenten (en Norteamerica) lugares de matanza de otras especies de megafauna (como los perezososgigantes)? ¿Cómo se explica que los elefantes sean aparentemente de las últimas especies en extinguirse?

2. La modificación antrópica del medio ambienteLos humanos habrían impactado de manera significativa en el paisaje llegando a modificarlo, por ejemploquemando bosques, y alterando los nichos de las especies provocando así, de manera indirecta, su extinción.Este es un argumento forzado. En primer lugar la quema del bosque habría favorecido en lugar de perjudicar aalgunas de las especies extinguidas, que se supone no eran precisamente de bosque. En segundo lugar cabepreguntarse ¿para qué quemarían bosques los humanos? Si era para cazar o para propiciar la reproducción delos animales que querían cazar no se debería considerar un efecto colateral sino directo. Si fueron quemasaccidentales habría que replantearse la visión del "buen salvaje" y cambiarla por la del "piromanoinconsciente" que arrasó no a sangre, pero si a fuego todo el continente.

3. Nuevas enfermedades introducidas.Otra teoría que incluye el factor humano aunque sólo como desencadenante inconsciente e inocente, es la deuna epizootia introducida por los humanos, sus parásitos o sus comensales [150].Esta teoría puede ser interesante, y además muy de actualidad puesto que su formulación [233] coincidió conla eclosión de la Era del SIDA, pero es bastante dificil de demostrar y tendría que haber sido una plaga de talamplio espectro que no existe ningun equivalente conocido. Habría que pensar en una enfermedad que saltaralas barreras específicas: desde los humanos o de posibles perros domésticos (cuya presencia desde la primeracolonización humana es posible pero no está demostrada) a todas las especies de megafauna y que acabaracon todos los contagiados pero no con los portadores, vectores de su propagación.

CRITICA A LAS POSTURAS NEUTRALES

Presuponer un efecto indirecto humano (fuego, neovirus…) es recurrir a elementos no verificados y todavíade difícil verificación. No establecer una jerarquización de las causas no resuelve sino que solo complica (demanera innecesaria) el problema y contradice el principio de Occam. Se busca así una explicación máscomplicada y con igual o menos posibilidades de comprobación.Una catástrofe como la que se plantean no tendría porque haber sido absoluta. La fauna se podría recuperar.Hay que admitir entonces que:• bien la presión continuó• o bien la población de todas esas especies había caido hasta un punto de no retorno por debajo del dintel de

la recuperación potencial.

Otra cuestión es que, de haber sido un fenómeno lento determinado por un cambio ambiental paulatino, éstese habría notado en una presión (reduccion de tamaño) en los carnívoros depredadores, pero esa reducción nose dio. Luego hay que concluir que los carnívoros tampoco tuvieron tiempo de readaptarse antes de perder asus presas. Así pues este fenómeno no siguió una pauta natural normal.En definitiva lo que hacen las posturas mixtas neutrales es volver a introducir (por la puerta trasera y de formavergonzante) el "factor humano". Sea por activa o por pasiva, pues, tendrían que admitirlo como causadetonante o determinante.

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Figura 78. Puntas Clovis.

LA IMPORTANCIA DEL FACTOR HUMANOLa hipotesis alternativa insiste en el papel relevante de la acción humana en una matanza relámpago. Lahipotesis del "Overkill“ (h) se fundamenta en varios puntos:

1. En la excepcionalidad.Sería antropocentrismo pensar que la presencia humana ha coincidido por casualidad con la extinción másimportante desde el Cretáceo y con el final de uno de los ciclos de 26 millones de años con los que se haintentado sintonizar las extinciones naturales [254]. La existencia previa de otros cambios climáticos igual denotables no tuvo consecuencias tan graves de extinción de especies.

2. En la asincronía.Las extinciones recientes no son sincrónicas en todos los continentes, por tanto no se trata de una catástrofeglobal. Además el hecho de que las especies se extingan en América de forma tan brusca (en menos de 1000años) excluiría el cambio climático paulatino.

3. En el sesgo de las extinciones.El carácter más selectivo de las especies extintas sería un índice de la causalidad antrópica. La extinciónafecta sobre todo a las terrestres de más de cinco kilos de peso. El 65% de las especies extintas pesaban másde 40kg. En cambio los animales pequeños sólo representan el 10% de las extinciones.. Completan el retratorobot de la especie extinguida: las que sólo paren una cría y tienen un menor ritmo de reproducción, lasterritoriales, con poca movilidad, poca velocidad de desplazamiento, las monogástricas y de reproducción másespaciada, y los grandes carnívoros que podrían haber competido con gente cazadora por la misma fuente dealimentación.

4. En la sintonización con la llegada bien documentada de Homo.La coincidencia de la extinción con la primera llegada de los grupos pioneros Clovis. La presenciaincontrovertida de humanos en América coincide con la fecha de la extinción. La gente "Clovis" estaríapresente desde el 11,5 ka BP, y después de 10,5 ka BP no queda ya fauna grande. A continuación aparecen en

h Fue propuesta por Mosimann y Martin en 1975 [270] y reivindicada, mas tarde, por otros como John Alroy [13] de laUniversity of California en Santa Barbara, quien estableció una modelización en la que, partiendo de 100 humanos a unritmo de crecimiento de 2% anual llegan a extinguir la megafauna en 1000 años con un ritmo de matanza de sólo 10/20animales anuales para el consumo de 50 personas.

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Norteamérica otro tipo de puntas de proyectil (las llamadas Agata Bassin) junto con bisonte extinto. Mástarde, después del 8ka BP ya empieza lo que se ha llamado el Periodo Arcaico, con bisonte moderno. Laextinción es súbita, y si se encuentran restos de animales extintos más tarde, en el Holoceno, es porque lagente pudo recuperarlos a modo de materias primas, como el marfil de los dientes de mamut fosiles [94].

5. En la brusquedad y rapidez de la "onda expansiva" que no deja trazas de masacresCon el fin de apuntalar el punto que consideran más débil, el porqué no se encuentran los lugares dematanzas, sugieren que la onda expansiva humana fue muy rápida. Para justificar la ausencia de pruebasdirectas de las masacres (no hay lugares de grandes cazaderos de muchos individuos en Norteamérica), creenque es necesario que los humanos hayan llegado al nuevo continente muy poco tiempo antes del momento enque se completa la extinción y hayan arrasado, “limpiando” a su paso toda la megafauna. Así la poca duracióndel evento, lo efímero de ese proceso, explicaría el rastro tan ténue y la falta de pruebas. En caso contrario, dehaber durado muchos más años el proceso habría dejado más yacimientos tras de sí y por tanto deberíanexistir mas pruebas. Una masacre instantánea deja menos animales muertos que si se prolonga a lo largo deltiempo. Si los humanos hubieran llegado antes tampoco se explicaría porque no acabaron con la megafauna alllegar y porqué se acaba en cambio de golpe más tarde. ¿Cual habría sido la ventaja de dedicarseintensivamente a la caza extinguidora en un momento posterior cuando los animales ya habrán percibido a loshumanos como predadores potenciales?Por todo ello niegan las dataciones más antiguas de América y además para demostrar que fue posiblerecurren a la utilización de modelos de dinámica de poblaciones [168; 410: 337…), y desarrollan el modelomatemático del frente o "Blitzkrieg" [247]. Ese modelo de "Ola de Avance" que se utiliza fue ideado por ungenetista [120] y con él calculan que la onda expansiva habría progresado a razón de 160km por década. Estosíndices, y todos los demás en realidad, han tenido la virtud de demostrar con modelos matemáticos que enteoría es posible ocupar el continente y acabar con la fauna en un milenio y medio. Señalan que lasobreexplotación de los recursos faunísticos es normal, calculable y previsible.

CRITICA AL MODELO DE “GUERRA RELÁMPAGO”

1. La rapidez no explica por sí sola la causaLa rapidez de la extinción tampoco sería incompatible con la explicación climática. Ya he planteado que loscambios climáticos pudieron ser muy rápidos, por lo que no se excluiría el papel determinante del clima.

2. Extrapolación de variables significativasUn problema en ésta como en las otras teorías (i) es la aceptación y extrapolación de las densidades depoblación a partir de las sociedades “etnográficas”. Eso es suponer que la gente ya estaba adecuada a lacapacidad de carga desde el principio y en cada momento. Aunque en realidad no se sabe cuál, ni tan sólo si,existe una única velocidad de adecuación de una sociedad humana a la capacidad de carga. Es decir, sedesconoce lo que habrán tardado en controlar y ajustar su propia reproducción. Tampoco se puede extrapolarfácilmente esa relación entre población y capacidad de carga a partir de los datos etnográficos, debido a lasdiferentes estrategias que debieron tener los paleoindios respecto a los neoindios actuales con todos sus milesde años de experiencia acumulada. De todas formas, si en los modelos utilizados se parte del supuesto de queno controlaron con efectividad la tasa de reproducción desde el primer momento, se incrementan aún más lasposibilidades de que se hubiera producido la sobreexplotación.

3. "Posibilidad y modelo” no son equivalentes a "realidad“.El modelo matemático del "frente de avance o Blitzkrieg" demuestra que es factible. Pero que sea posible noindica que sea real, no excluye otras posibilidades alternativas. No hay que olvidar que para el cálculo de lasecuaciones diferenciales que se utilizan hay que conocer ciertas variables (indice de reproducción, velocidadde expansión y población de partida) que sólo podemos conocer o estimar a través de la evidenciaarqueológica.Pero en este caso, como he comentado, para consolidar la hipótesis de la Guerra Relámpago y como corolariola teoría del "factor humano", niegan la colonización antigua del continente. Se rechazan de forma arbitraria o

i Que ya se señala en [337]

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con argumentos ad hoc todas las dataciones antiguas y tampoco se tienen en cuenta que algunas de lasextinciones son previas a la presencia Clovis más antigua constatada en la zona (anteriores de 12ka BP). Asípues, si no aceptan el registro arqueológico que "no les conviene"¿cómo se calculan esas variables necesariaspara el modelo? Si se contruyen a priori las variables que se utilizan para justificar el modelo, es lógico queeste se justifique.Sin embargo existen cada vez más datos de una ocupación humana anterior a la extinción que comienzan a seraceptados, y el argumento del ingreso tardío por el corredor terrestre es difícil de encajar con las fechasantiguas de antes del 11,5 ka BP de Sudamérica.

UN BREVE PASO (O CIRCUNLOQUIO) POR LA CUESTIÓN DE LA “PRIMERA”COLONIZACIÓN DE AMÉRICA.

Como he indicado, la primera entrada de pobladores en América es un tema relevante cuando estamostratando de ese gran cambio brusco que supuso la desaparición de la gran fauna americana. En sí mismas lascolonizaciones americanas también pueden considerarse un cambio brusco a escala continental puesto que,según las hipótesis predominantes, la primera colonización de todo el continente fue súbita y se produjo enmenos de un milenio, acarreando (directa o indirectamente) consecuencias catastróficas para la faunaoriginaria (j). Es pues imprescindible que incorpore una reflexión sobre este tema antes de enfrentarnos a unanálisis más detallado y sobre todo antes de intentar dar una explicación al cambio brusco de las extincionescon el que esta ligado de una forma u otra.Las posturas en la investigación arqueológica se reparten en dos polos opuestos, con alguna hipótesis de“compromiso” o intermedia. La controversia remonta hasta antes incluso de la constitución de la Arqueologíacomo ciencia. Desde el siglo XVI (José Acosta) se hipotetizaba(k) con la llegada al continente americano deuna primera población de gente cazadora procedente de Asia a través de un istmo en el NE de Asia que nisiquiera se había descubierto. Los primeros arqueólogos, en Norteamérica (como Wright [407]) y losprocedentes de Europa emigrados hacia América del Sur, propugnaron una ocupación muy antigua,equivalente en antigüedad a la de Europa. Esta propuesta fue criticada enseguida por varios autores. Susargumentos y la aplicación, en los años cincuenta del siglo XX, del C14 a los hallazgos de los sitios Folsom yClovis contribuyeron a fijar, ya en los años sesenta, otra hipótesis que triunfó en medios académicosnorteamericanos: la llamada “Clovis first”. Según ésta los primeros americanos pasaron desde Siberia, através del istmo emergido de Beringia hacia Alaska. Cuando la fusión de las masas de hielo continental de laúltima glaciación abrió el paso hacia el sur entre las Rocosas y el Laurentiano, (no mucho antes del 11,5kaBP) la gente se lanzaría en una oleada hacia el sur alcanzando Tierra del Fuego en pocos siglos.Este es un tema que también ha hecho correr ríos de tinta ensangrentada, pero lo voy a tratar aquí de unamanera somera y con algún apunte de reflexión propio [238, 219, 170, 201… ]. Tampoco en este caso lapolémica es ajena a la vida y políticas académicas. El staff dominante en la Academia se inclinó en unmomento por la hipótesis “Clovis first” rechazando cualquier prueba “pre-Clovis” o de ocupación anterior aese “momento cultural” que situaron hace 11,5-10,5ka BP. Las actitudes descalificadoras y de desprecio, oincluso boicot de algunos de estos académicos hacia los sostenedores de otras posiciones o hipótesisprovocaron que éstos los denominaran “mafia” o “policía clovis”. Los académicos partidarios de la hipótesis“Clovis-first” por su parte respondieron acusando a los "heterodoxos" de hacerse famosos con el victimismopropio de la heterodoxia (l). De todas maneras todo ello sirvió a los paladines de una u otra postura a serconocidos, famosos. Y, en la vorágine, los arqueólogos involucraron a las naciones indias.

j Ni decir tiene que la última colonización (la europea) puede asimismo considerarse, a escala continental y a nivelbiológico y cultural una catástrofe para las sociedades asentadas previamente y para el medio ambiente.

k Frente a especulaciones mitológicas que buscaban tribus perdidas en la Biblia.

l Sin embargo una de las polémicas más agrias las provocó S.Fiedel, un arqueólogo no académico que trabajaba en unaempresa privada de asesoría patrimonial y que se hizo notar por haber escrito un manual “ortodoxo” poco documentado ymuy parcial sobre Arqueología americana. Se le ha citado en especial por haber vertido en una revista de divulgaciónarqueológica todo tipo de sospechas sobre decenios de trabajo del equipo que presentó el yacimiento chileno Monte

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BREVE EXCURSO POLÍTICO DE CÓMO LA EXTINCIÓN SE VUELVE A RELACIONAR HOYCON LOS INDIGENAS AMERICANOS.Voy a aprovechar esa última idea como para introducir un excurso, recurso muy querido en abogacía ypolítica para afectar a la tensión del público relajando o elevándola. A mi me va a servir para recordar, pasadoya el Ecuador del libro, una de sus intenciones.La investigación arqueológica ha involucrado el pasado remoto, con las estrategias políticas y aspiracionesindígenas legítimas. Sin embargo lo que podría ser una buena intención, en muchos casos no ha hecho másque desviar su atención de los problemas reales urgentes que tienen estas comunidades para sobrevivir. En lapráctica les ha ayudado poco en poder pronunciarse sobre su futuro y en participar de los dividendos que haproporcionado a los WASP (“White AngloSaxon Protestants”) la explotación de los recursos de sus antiguastierras. Por ejemplo el derecho a reclamar los restos humanos de los familiares antepasados, ha sidotergiversado a través de la Arqueología postmoderna y se ha trasplantado a ciertas élites de nativos. Así hasido recogida en el “Native American Graves Protection Act” de 1990. Esta hace que se entreguen esqueletosa las comunidades que los reivindican para ser re-sepultados. De esta manera desaparecen esqueletoshumanos de más de nueve mil años que con mucha seguridad tienen poco que ver con la comunidad a la quese entregan, y que en absoluto tiene la misma forma de pensar o enterrar que la original del difunto.En realidad basar el natural derecho a la autodeterminación y a la propiedad de la tierra de cualquiercomunidad en la polémica arqueológica siempre llevaría a los indígenas a una posición en falso: si sedemostrase que la colonización es reciente y que se puede establecer un nexo genético entre los primerospobladores Clovis y los indígenas, ello no dejaría de constituir “una colonización”, que los “WASP” podríanparalelizar a su propia colonización y además sería contrario a la creencia muy extendida entre los pueblosindígenas de haber vivido allí desde el principio de los tiempos. Si se demostrara lo contrario, que lapoblación americana es mucho más antigua, que es el producto de la mezcla de distintos grupos humanosentrados de forma sincrónica y/o sucesiva, se daría tal vez un mayor pedigrí temporal a la reivindicación, peroal mismo tiempo se desvincularía genéticamente la población indígena actual de la primera población. En estesentido algunos ya hablan de “Paleo-americanos” y rechazan hablar de “Paleo-indios” e insisten incluso en loscaracteres presuntamente “europeos” de algunos restos humanos antiguos.Desde la perspectiva de un ciudadano de Europa, y de una nación histórica sin estado (como es Catalunya), escomprensible la necesidad de una justificación histórica por parte de la población indígena. Sin embargo lareivindicación del derecho a conseguir su autonomía y la propiedad de los recursos de la tierra que les fuearrebatada hace menos de 200 años, tiene poco que ver con lo que pasó o con quienes hubieran llegado aAmérica hace 11ka. Sólo algún español, catalán o vasco mal informados, por ejemplo, basaríanrazonablemente su nacionalismo político en la persistencia de sus antepasados en esas tierras desde elPleistoceno superior. Con toda seguridad se ha cambiado desde la comida a la religión dominantes más de unadecena de veces, la lengua otras tantas, también el color de la piel y del cabello …(m). Del mismo modo,incluso en la penúltima isla del fin del mundo, en la Isla Grande de Tierra del Fuego, desde la primera genteque llegó hasta el siglo XX, la Arqueología ha demostrado que se cambiaron rituales, las formas de lascabañas, los instrumentos (aunque cambiaran muy poco los recursos explotados)…, y la Antropologíabiológica sugiere que hubo gentes que fueron llegando y mezclándose con las primeras en llegar.En la interferencia de la política sobre el tema del cambio brusco en la megafauna americana, con la quehemos tropezado, es como mínimo curioso el hecho de que las fechas modernas para la ocupación de Américahayan sido propuestas por autores norteamericanos o por los más influidos por ellos. En cambio las fechasantiguas han sido propuestas por los más lejanos a Washington o aquellas personas de Europa o su área deinfluencia. Cabría preguntarse si no existe en este sesgo un problema inconsciente de política y de tradiciónacadémicas.

Verde, el sitio pre-clovis mejor documentado. El simple hecho de actuar como ariete de la postura ortodoxa (el ruido delelefante en una exposición de porcelana fina) le proporcionó una fama poco merecida.

m En los "corrillos científicos" circula una leyenda según la cual unos análisis de ADN mitocondrial habrían demostradoque un profesor inglés era el descendiente más directo de una persona que vivió en la misma zona de su pueblo durante elMesolítico. Si ese estudio existiera y fueran esas sus conclusiones estariamos ante la prueba más importante de labanalidad o falta de fiabilidad de los estudios de ADN mitocondrial.

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Hemos de tener en cuenta dos elementos fundamentales: en primer lugar, en el orden de la política, la mayoríade los académicos norteamericanos han sido de ascendencia europea o criolla, es decir descendientes deinmigrantes recientes y en general estuvieron poco comprometidos a favor de las poblaciones indígenas. Aello se añade la hegemonía que ejerce Estados Unidos sobre la Academia latinoamericana.En segundo lugar por la tradición académica, salvo excepciones, la Antropología ha tenido un gran peso en laformación de las personas que se dedican a la Arqueología en América y muy poca relevancia la Geología delCuaternario. Por ello es natural que se produzca un sesgo de reconocimiento de los yacimientos y delinstrumental moderno, el más parecido al de las poblaciones recientes, y no se reconozca, si lo hubiere, uninstrumental tosco de una ocupación más antigua localizado en una posición geológica cuaternaria. Por suparte los arqueólogos norteamericanos que sí han tenido esa formación y capacidad de reconocimiento delinstrumental arcaico han trabajado mas bien en África o Europa y no en Norteamérica. Los autores llegadosde, o formados en, Europa (en especial los de origen francés o alemán, que tienen esa formación en Geología)han formulado a veces hipótesis poco verosímiles sobre colonizaciones muy antiguas transoceánicas desdeÁfrica, Norte de Europa o Australia y tampoco han sabido imponerse en los circuitos académicos americanos.En definitiva esto podría ser también una de las explicaciones del porqué hay más indicios de una ocupaciónantigua en Sudamérica que en Norteamérica.Las causas del cambio brusco en el pasado no van a cambiar nuestro presente. El presente no fue inevitable,porque ha habido innumerables alternativas. El presente es ahora inevitable. Lo trascendente es quedeterminado futuro sí es evitable y tiene alternativas. Lo importante del estudio de los cambios es comprendersu dinámica. Introducir el cambio brusco en nuestra interpretación del pasado es crítico porque han tenido unaimportancia trascendental en la configuración de nuestro presente y permiten darnos cuenta de cómo unaacumulación y combinación de cambios pequeños han provocado cambios gigantes.Una vez refrescada esa primera intención vayamos…

DE VUELTA AL TRATAMIENTO DE LA EVIDENCIA ARQUEOLÓGICA.

¿Cuáles son, en resumen, las pruebas que tenemos?Los partidarios de la colonización reciente (“Clovis first”) se basan en que:• La gran masa de dataciones en el continente es posterior a 11,5ka BP.• El corredor entre glaciares no estuvo abierto antes de 12ka BP. Rechazan por poco probable cualquier

camino alternativo.• La colonización de la parte siberiana del corredor de Beringia no está bien documentada antes de 13ka BP

(las dataciones de Berelekh y Bolshoi Elgakhan I)• La desaparición de la gran fauna y en particular de proboscidios, se debe a que los inmigrantes serían

cazadores especializados (o que se especializarían al llegar) lo que les permitió y al mismo tiempo forzó aocupar a gran velocidad todo el continente. La justificación es que la explotación de este tipo de recurso (lafauna) no necesita experimentación previa, porque no tiene los problemas de la toxicidad para el consumohumano que presentan muchos vegetales. Al mismo tiempo exige una gran movilidad buscando la facilidady rentabilidad máxima que ofrece una concentración de presas que no hayan tenido contacto con loshumanos.

Los partidarios "pre-Clovis" sostienen que hay fechas antiguas desde Canadá a Tierra del Fuego, pasando porlas de América central, Colombia, Venezuela o Brasil (n).Las pruebas para la ocupación más antigua son las dataciones obtenidas para la cueva brasileña de Toca daEsperança. La industria lítica de este sitio fue datada mediante Thorio/uranio en 295ka por un equipo franco-norteamericano, los/as especialistas más importantes de la investigación en Pleistoceno medio de laPrehistoria europea del momento [228].Otros de los yacimientos que han despertado mayores pasiones son los del parque nacional de Serra daCapivara en Piaui, Brasil. La arqueóloga que los trabajó (desde 1973) argumenta unas ocupaciones humanasanteriores a 20ka BP. Existen muchas dataciones coherentes de radiocarbono sobre carbones de los distintos

n Una obra que repasa muy críticamente toda esta evidencia aunque admite la posibilidad de presencia humana antigua es[219].

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niveles [156,157], por ejemplo en el yacimiento de Toca da Pedra Furada, que concuerdan también condataciones de concreciones calcíticas [397]. Los críticos argumentan que aunque las dataciones deradiocarbono son irreprochables, los carbones procederían de incendios naturales espontáneos y que losinstrumentos y elementos, en apariencia producto de la actividad humana, no serían más que la consecuenciade fenómenos naturales y piedras rotas por azar. Al volver a realizar pruebas de datación con sistemasexperimentales de la fracción orgánica en pinturas rupestres existentes bajo una capa de calcita (que se habíadatado antes como muy antigua,) los críticos obtuvieron fechas muy modernas [312] con las que fomentan laduda.En Alaska y Canadá, los sitios de Blue Fish y Trap Cave proporcionado dataciones de más de 20ka BP. En elprimero se encontraron huesos rotos de una forma que difícilmente puede atribuirse a un fenómeno que no seala acción antrópica [73]. En Alberta, en el valle el rio Bow, en las estribaciones orientales de las MontañasRocosas, un equipo checo-canadiense [68, 69] ha trabajado en yacimientos (entre ellos los de Silver Springs yVarsity Estates) que están a bastante profundidad debajo de la sedimentación del último máximo glaciar,anteriores por tanto a 21ka BP. Como en el caso de los de Alaska, la situación cronológica de los sitios esindiscutible y los autores críticos sólo pueden aportar la duda de si las piedras talladas son de factura humana,a pesar de que los argumentos aportados en ese sentido por los investigadores son sólidos.

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Figura 79. Mapa de América con la localización de los principales sitios más antiguos con posible presenciaantrópica y la representación de las especies más significativas de megafauna. Se ha marcado en gris la extensión de

los glaciares y en punteado la de la plataforma continental [a partir de 219].

En Venezuela los yacimientos de Taima Taima, Muaco, Cucuruchú están asociados a restos de mastodontesprocesados por humanos y con puntas líticas del tipo llamado Jobo. Existen 15 fechados coherentes de más de12,58 ka BP hasta 13,39 ka BP debajo de un nivel estratigráfico posterior (que se produjo después de uncontacto erosivo) datado hace 11,8 ka BP. En este último estrato ya no hay mamut pero sí otras especies defauna extintas. [316]. Lo mismo encontramos en Colombia.Pero el yacimiento clave, de momento, es Monte Verde, en Chile [92, 93]. La controversia generada y laresistencia a aceptar su evidencia ha hecho que, como reacción, éste sea uno de los yacimientos mejorestudiados y más exhaustivamente publicados de todo el continente. La resistencia al final parece inútil y,como he dicho, injusta, pues no se ha exigido este rigor a ningún otro sitio de Norteamérica considerado"aceptable" por los escépticos. La conservación de materia orgánica animal y vegetal, la excavación extensivay la presencia de restos de cabañas ha convertido este yacimiento en uno de los más interesantes de toda laprehistoria americana. Las dataciones situaban el nivel I hacia el 13ka BP, pero por debajo y después de una

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capa estéril existia otro con algunos utensilios de piedra que se dató en 34ka BP. Al parecer los ocupantessubsistieron de la recolección de vegetales y del consumo de animales (mastodonte Cuvieronius, paleollama yanimales menores) con una estrategia de explotación de los recursos alimentarios poco especializada. Lo mássignificativo es que el instrumental estaba realizado con una técnica muy expeditiva, salvo 3 puntas (parecidasa las del yacimiento El Jobo de Venezuela) y algun bifaz, y no tenia nada en común con el instrumental de lossitios Clovis. Es más, de no haberse conservado la materia orgánica no habría sido fácil aceptar el sitio comoasentamiento humano. Incluso los adversarios de la hipótesis "pre-clovis" deben reconocer que si el sitio fueun asentamiento humano se han perdido muchísimos sitios semejantes (en los que la materia orgánica no sehubiera conservado), porque no se habría reconocido el instrumental de piedra. La crítica al sitio en realidadha aportado argumentos superficiales, subjetivos y arbitrarios: defecto de las dataciones, sitio no antrópico yacumulación natural de los restos, incoherencias estratigráficas y mezcla de materiales de distinta cronología,baja probabilidad de que la gente ocupe de forma recurrente el mismo lugar (este argumento por ejemplodescalificaría la mayor parte de los yacimientos del Paleolítico europeo).Pero también en EEUU hay yacimientos que podrían equipararse: el abrigo Meadocroft (Pennsylvania) con52 dataciones coherentes con la estratigrafía que llegan hasta hace 16,77ka BP, Cactus Hill (en la llanuracostera de Virginia) dio dataciones de hasta 16,94ka BP, Saltville (Virginia) de 14,51ka BP, y Topper(Carolina del Sur) con fechas anteriores a 14ka BP.La lista de yacimientos que parecen anteriores al “momento Clovis” es mucho más larga y no todos los sitiosque podrían ser contemporáneos son semejantes, ni corresponden a una gente cazadora especializada en lacaza de grandes vertebrados. En realidad, incluso algunos de los que se aceptan como "típicos de Clovis" dandataciones superiores a 11,5ka BP (o). En el cono sur americano, donde existen puntas de piedra que no sonexactas a las de Clovis (las denominadas “cola de pescado” o “Jobo” ) y que según la hipótesis “Clovis-first”deberían ser derivaciones posteriores de la forma de punta Clovis original, hay dataciones anteriores a las deAmérica del Norte. Como consecuencia se está habla de la “paradoja Clovis”: el punto de llegada (los sitioscon puntas que creen "derivadas" de Clovis en Patagonia) es más antiguo que el de partida (EEUU).Es por ello que los partidarios de la hipótesis “Clovis-first” cada vez deben descalificar más evidenciasesgrimiendo todo tipo de argumentos: que la excavación no es correcta, que los presuntos instrumentos sóloson piedras o huesos rotos por causas naturales y por tanto no son producto de la actividad humana, que lascondiciones para las dataciones del continente sur son distintas y suelen dar fechas radiocarbónicas másantiguas que las del hemisferio norte, y que además la gente se movió tan deprisa que en unos pocoscentenares de años ya estaba en el sur y por tanto la diferencia no es detectable por el C14. O bien que laabertura del corredor entre glaciares se calculó mal (p) y ya estaría sobradamente abierta antes del 12 ka BP, oque se abrió un momento breve entre 12,5 y 12,9ka BP.La crítica a los fechados es siempre problemática y subjetiva: ¿porqué los considerados demasiado antiguosdeben ser rechazados y aceptados los considerados “convenientes”?, ¿porqué coinciden con una determinadaexpectativa apriorística? Es curioso comprobar como, en el caso de yacimientos exclusivamentepaleontológicos sin acción humana, para los que no se plantea ninguna controversia previa, en caso de dudaslas fechas aceptadas suelen ser las más antiguas (q).La crítica de que no existe conexión evolutiva filética entre los presuntos sitios pre-Clovis y Clovis y que notuvieron tiempo de evolucionar es un argumento también apriorístico: se presupone un cierto ritmo constantey lento de evolución. Además es de doble filo. En efecto, no existe tampoco ningún precedente (nadacomparable y más antiguo a Clovis) ni en Alaska ni en Siberia (r) de donde deberían proceder. Para explicar

o Incluso un partidario de Clovis-first, en su tabla de sitios aceptados como Clovis da una media de 12150±75 para tresdataciones del sitio Paleo-Crosing, para el sitio Sheridan Pit llega a 11,9ka BP, en Aubrey una media de 11,57ka BPcalculada con dataciones muy variables y en Big Eddy hasta 11,9ka BP. [170]

p Como también pretende desde la Paleoclimatología [291, 292]

q Por ejemplo en un yacimiento paleontológico argentino del final del Pleistoceno [370, 371]] se han datado materialesdistintos de un mismo estrato: las dataciones sobre valvas de moluscos y carbonatos del suelo dieron unas dataciones demás de 19ka BP mientras que las realizadas sobre los huesos dieron dataciones más recientes, inferiores a 11ka. Se sabeque los moluscos pueden presentar problemas de recalcificación o de efecto reservorio y que los huesos pueden dar fechasdemasiado rejuvenecidas. En este caso paleontológico las que se aceptan son las más antiguas, pero es muy probable quede haber habido evidencia de acción humana se hubiera insistido en cambio en las fechas recientes obtenidas con loshuesos.

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esta falta de precedente en origen, también se debe admitir al final que Clovis fue una rápida “mutacióncultural” y adaptación a la abundancia de proboscidios que habrían encontrado los recién llegados al sur delcorredor interglaciar. Pero es que además las fechas de “lo más semejante a Clovis” en Alaska sonposteriores. Para encajar esa evidencia se ha tenido que pensar en un “reflujo”: la gente Clovis debió volver alnorte más tarde con su armamento ya “desarrollado”.Las explicaciones necesarias para aceptar la teoría "Clovis first" son demasiado forzadas. Los datos encajancon mayor facilidad aceptando un ingreso más antiguo que el que sugieren las fechas aceptadas para la"colonización Clovis".Pero ese ingreso o bien tuvo lugar al margen del Glaciarismo por el corredor costero del Pacífico que tal vezestuvo pasable desde el 16ka BP (s), o bien podríamos pensar en una más problemática navegacióntransoceánica desde África o Asia, o siguiendo el límite de la banquisa polar ártica desde Europa durante elUltimo Máximo Glaciar (t)Existe otra alternativa que sería coherente con esas fechas antiguas que hemos mencionado y con el hecho quelas puntas de proyectil semejantes a las Clovis sean más antiguas en el sur que en norte, por donde se suponeque debían haber llegado: hubo una entrada por el itsmo de Beringia anterior al Último Máximo Glaciar,cuando no estaba cerrado todavía el corredor laurentiano entre glaciares. Una cuestión previa es si existensuficientes evidencias de presencia humana en Siberia, por el camino hacia Beringia antes de ese UltimoMáximo Glaciar. He mencionado ya la existencia de fechados previos al máximo glaciar en el extremo orienteeuroasiático, pero aunque existen algunas dataciones superiores al 35ka BP extraidas de sondeos profundos enla depresión de Valkarem [299], se ha insistido en el relativo desconocimiento de la evidencia arqueológica enel extremo norte de Siberia.. Por otro lado al parecer podría haber ocupación de homínidos hasta los 40º delatitud en China hace más de un millón de años [412].Después de esa primera entrada pudo producirse un aislamiento de la población al sur del gran glaciarWisconsin durante todo el periodo del Último Máximo Glaciar (tal vez durante más de 9000 años).Dos o más entradas en el continente estarían hoy dia reforzadas por los estudios antropobiológicos quedemuestran la heterogeneidad de la población americana posterior al 9000 BP. Estas conclusiones se basan enel análisis de cráneos como los de Kennewick y Spirit Cave (EE.UU.), Mexico [142], Lapa Vermelha enMinas Gerais de Brasil y los resultados antropobiológicos de nuestros propios proyectos en Tierra del Fuego,y el ADN fósil y moderno [129, 373]. Ciertos caracteres podrían interpretarse como pre-mongoloides, comode una población de Homo sapiens antigua que ha recordado a los estudiosos los rasgos característicos de laspoblaciones Australianas y Negroides.Además del antropobiológico, otro argumento controvertido, no arqueológico, que se ha esgrimido parafundamentar la llegada sucesiva de varias poblaciones y como consecuencia la heterogeneidad de la poblaciónantigua americana, es la Glotocronología. A pesar de que es un acercamiento discutido, merece ciertaatención y sus argumentos exigen una respuesta. Abogaría por una heterogeneidad idiomática original de lapoblación americana. Los idiomas hablados por la población pre-europea son demasiado desiguales comopara derivar de una pequeña población homogenea entrada en fecha tardía [153].Por tanto o bien hubo dos o mas entradas de gente distinta (con lenguas diferentes) ya en momentos antiguosen el continente, o bien hubo una primera entrada „antigua“ y una desconexión de 6000 años (provocada porel cierre del paso hacia el sur durante el Último Máximo Glaciar Wisconsin) entre los habitantes de Alaska ylos que quedaron al otro lado en el resto del continente.

r Aunque aceptáramos que 13ka BP es la fecha de la ocupación humana del sitio Berelekh y no la antigüedad de los restosfósiles de mamut extraídos que se extrajeron hace unos 8ka BP por gente interesada en esa materia prima; la evidenciaarqueológica en Siberia tiene poco que ver con Clovis.

s Como pretendían [121], pero sólo pocos sitios cercanos a la costa pacífica norteamericana han dado cronologias altas:Manis (datado hasta 12,1ka BP ) y Daisy Cave en la isla San Miguel (con una datación de hasta 15ka).

t El origen de los paleoamericanos desde la Península ibérica en el momento del Máximo Glaciar circunnavegando ocaminando sobre el límite del hielo ártico ha sido presentada [336] pero sólo se fundamenta empíricamente en laexistencia durante el periodo solutrense peninsular de puntas líticas con una formatización por retoque plano que se pareceal Clovis [345].

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UNAS CUESTIONES Y UNA SENCILLA SOLUCION ALTERNATIVA

Si aceptamos que los humanos han podido entrar antes de lo que aceptan tanto los autores „naturalistas“ comolos „guerra-relampagueantes“ que tratan el problema de la extinción súbita de la macrofauna americana, yretomando argumentos, cabría preguntarse:• ¿Porqué no hay pruebas arqueológicas más contundentes?Este problema es en parte epistemológico, porque como he dicho la pregunta pertinente en realidad sería¿porqué no se ha aceptado de manera unánime ningún yacimiento encontrado en EEUU comparable a los deSudamérica y Canadá?• ¿Porqué no hay extinción de macrofaunas más antigua? O bien ¿porqué existe una apariencia de extinción

súbita a partir del 11ka BP, casi al mismo tiempo en que se produce una cierta uniformización de losproyectiles de caza , aunque no sean estrictamente contemporáneos en todo el continente?

PREMISAS Y UNA HIPOTESIS EXPLICATIVA ALTERNATIVAS:Lo que no contemplan los protagonistas de la polémica es que un exterminio antrópico NO tiene porqué serinmediato, y mucho menos a escala continental. Tampoco tiene porqué seguir una pauta lineal: si se cruzancausas de distinto orden, frecuencia y longitud de onda, deberíamos percibir una dinámica no lineal nipaulatina sino que podría aparecer de golpe por el efecto acumulado.Para responder a la objección de la falta de lugares de masacre es más sencillo tener en cuenta los argumentosdel sesgo tafonómico que he mencionado ya:• la desaparición irremisible de cualquier esqueleto depositado al aire libre y que no quede tapado de forma

rápida, y• la escasa representatividad de la muestra, porque hay muy pocos yacimientos (arqueológicos o sólo

paleontológicos) bien estratificados que pudieran corresponder a esas cronologías. Tampoco se han buscadodemasiado en las formaciones geológicas donde podrían estar y cuando se ha hecho (como en Alberta, enCanadá) se han encontrado.

Estos dos puntos podrían justificar mucho mejor la ausencia, de otros lugares de matanza que no sean los deanimales de grandes rebaños como bisontes (que sí existen, aunque son más recientes). Desde luego, es aúnmás dificil encontrar una punta clavada en un hueso (aunque también las hay), sobre todo si no se buscan.

Figura 80. La experimentación tafonómica, como esta que realizamos en Tierra del Fuego, demuestra que unesqueleto depositado al aire libre puede desaparecer en muy poco tiempo, consumido por carroñeros y destruido por

la intemperie.

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La mayor frecuencia de sitios Clovis que de pre-Clovis puede ser un efecto con varias causas acumuladas:• los factores tafonómicos (la mayor antigüedad, puede significar menor conservación de vestigios, sobre todo

si se cruzan periodos de gran actividad geomorfológica como el Último Máximo Glaciar y el Tardiglaciar),• factores académicos: no se reconoce lo que no se considera o no se quiere considerar como testimonio de la

actividad humana y además puntas de proyectil líticas bifaciales como las Clovis tienen una alta visibilidady son fácilmente reconocibles; y

• factores propios de la evidencia: un aumento rápido de la población, que pudo ser producto mismo de unasnuevas estrategias de explotación de los recursos (incluyendo las mismas puntas de proyectil).

La presunta „unidad“ Clovis no es en realidad una entidad social ni cultural ni siquiera técnica o morfológicade los proyectiles. Incluso sus partidarios tuvieron que admitir una elevada adaptabilidad. En principio, desdeuna perspectiva estricta, sólo es resultado de aplicacion de una técnica concreta de fabricación de proyectilesque se adoptó y que derivo en poco tiempo formas muy variadas, denominadas en la literatura arqueológica"tanged“ , "steemed“, "Miller“, "Jobo“,"joboides“, triangulares, y más tarde, "Folsom“, "Agata Basin"… (u).Para revisar este problema sin prejuicios he re-analizado varios registros que presentaré a continuación.

MAMUTS Y TIEMPO DE EXTINCIÓN: ¿CUÁNDO SE EXTINGUIERON ENNORTEAMÉRICA?La mayor parte de los autores admiten que los mamuts se extinguen después de la primera presencia Clovisdocumentada y que hay asociaciones entre instrumentos de caza y restos de estos animales. El maximoimpacto se daría hace 11,2 ka BP, es decir 1.200 años antes de su completa extinción mas probable [6]Según los autores "naturalistas", el Mamut americano habría perdurado hasta 10,3 ka BP en el este, aunque enel oeste pudo extinguirse hacia el 14 ka BP. En cambio el Mammuthus parece extinguirse entre 10,6 y 10,5 kaBP en ambas regiones. Todas las extinciones se completarían según ellos hacia el 10ka BP, tal vez inclusohacia el 10,8 ka BP, y rechazan las fechas posteriores [257; 261].

Pero ¿que pasa si aceptamos todas las dataciones sin prejuicios y sin excluir ninguna a priori ? He compiladoun centenar de dataciones de los sitios con mamut posteriores a 16ka BP y en mi histograma) se observa unadistribucion normal centrada en 11,5ka BP.

u El indicio de que estamos frente a una artificialidad o un sesgo provocado por la propia investigación histórico-culturales que en España sucede lo mismo con el mismo tipo de vestigios arqueológicos. Las puntas “solutrenses” del Paleolíticosuperior son tan aparentes que se identifican enseguida. Las variadas formas que se consiguen con este proceso de tallapermiten identificar distribuciones “estilísticas”. Por ello parece que se multiplicaran los asentamientos de esta época (porejemplo en Andalucía) respecto a las épocas anteriores y que se establecieran subgrupos a partir de una llamada “culturasolutrense” [105].

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BP

Figura 81. Histograma de frecuencias de las dataciones de proboscidios norteamericanos posteriores al 16ka BP.Se aprecia una curva normal con una caída brusca en el 10ka BP pero un repunte que entra en el Holoceno.

Hasta aquí coincide con lo reconocido, pero si se analiza el detalle de la distribución se puede constatar quehay una bajada muy significativa (un agujero) despues del 10ka BP. Luego remonta, y después siguedescendiendo normalmente hasta desaparecer despues de 7,8ka BP con un rebrote antes de 6ka BP. Estasituación es semejante a la observada en Siberia y sólo respondería en parte a una sobreexplotación: ésta seríala causante de la curva normal asimérica alrededor del 11,5 ka BP pero los animales no estarían exterminados.Lo que está muy claro es que hay un colapso despues del 10ka BP (el inicio del Preboreal).

El colapso tammbién senotaría aunque elimináramos las dataciones de las que se duda. En este caso a caidasólo un poco más brusca despues del 11,5ka BP y así se reforzaría la acción humana como factor causalindependiente del cambio climático. Sin embargo la evidencia cronológica que percibimos indica que laextinción no es inmediata, no es sincrónica.

UN REPASO AL CASO DEL YACIMIENTO RANCHO LA BREA:Me he querido detener durante unos párrafos en la ciudad de Los Angeles pues allí está el yacimiento RanchoLa Brea, considerado el cronotipo para la fauna del final del Pleistoceno de Norteamérica y la base másimportante para la discusión sobre la extinción de la megafauna norteamericana. El yacimiento eraoriginalmente del tipo de pozas naturales en las que afloraba la brea o de arenas empapadas en brea, como losque existen en la costa pacífica hasta la península Santa Elena en Ecuador.El resultado de un proyecto de dataciones directas sobre los restos faunísticos que se realizó en los añosochenta permite hacernos una idea de como se desarrolló el final de la última fase glaciar. Los autores [240]presentaron sus datos insistiendo en la mejor calidad de las dataciones realizadas a partir de los aminoácidos yponiendo en duda las dataciones recientes. Utilizaban este argumento para sumarse a la tesis de extinciónantrópica súbita.Las dataciones cubren un periodo entre 40-4,5 ka BP. aunque hay lapsos importantes. He reprocesado lasdataciones publicadas para establecer un punto de vista sin prejuicios y de perspectiva actualizada.

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0 5000 10000 15000 20000 25000 30000 35000edad C14 BP

Frecuencias de dataciones AMInoacidos de Rancho la Brea.

HOLOCENO

UMG

Figura 82. Frecuencia de dataciones C14 a partir de aminoácidos de Rancho La Brea. Se observa el lapsocorrespondiente al Último Glaciar Máximo (UMG), la drástica reducción durante el equivalente al Dryas reciente y

la penetración de las dataciones en el Holoceno.

La cantidad de dataciones de alta fiabilidad (sobre aminoácidos) nos da una información muy relevante. Elhistograma de repartición de dataciones a lo largo de la cronología es ya muy expresivo. En primer lugar senota muy bien el lapso entre 19,33 y 15,7 ka BP que correspondería al momento crítico final del UltimoMáximo Glaciar. Con esto se podría cuestionar la teoría sobre un paisaje pleistoceno en mosaico favorable alos grandes herbívoros: en el Pleistoceno simplemente no hay restos. En todo caso deberíamos afirmar que,después, las condiciones en el inicio del Tardiglaciar sí habrían favorecido ese florecimiento específico (v) Ensegundo lugar vemos que las dataciones sobrepasan el tránsito al Holoceno pero que se da una gran reducciónno al final mismo del Pleistoceno si no antes, durante el complejo interestadial GI1, momento que los críticosde la extinción antrópica consideraban más favorable para el desarrollo faunísitico: entre 12 y el 11ka BP, quees justo en el instante en el que se da el inicio de Clovis. La hipótesis antrópica sale favorecida aunque hay uncomponente climático, la ausencia de dataciones en el máximo glaciar, que no se puede ignorar.

v Dado que, en principio se trata de una poza natural que no es producto de la actividad humana podemos pensar que unaumento en la cantidad de individuos (de dataciones) corresponde a un aumento de la cantidad global de animales en elmedio y no necesariamente a un aumento de su mortandad.

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Figura 83. Rango del conjunto de dataciones C14 de Rancho La Brea desglosadas por especies. Se observa unrasgo climático en la presencia de Camelops y la ausencia de Bison (dos especies de requerimientos ambientales

opuestos) durante el Máximo Glaciar. Los proboscidios o Glossoterium no parecen afectados por los cambiosclimáticos. La desaparición aparece como un fenómeno escalonado.

Pero si tenemos en cuenta todo el conjunto de dataciones, no sólo las de aminoácidos, y observamos condetalle especie por especie, vemos un interesante fenómeno: considerando el rango de presencias la primeraespecie en extinguirse es Camelops (el herbívoro más primitivo y se podría decir que "ecológicamenteineficiente“, pero que resiste las condiciones más extremas de aridez). Su presencia sólo se hace efectiva en elmáximo glaciar y viene a ser alternativa a la de otras especies, como Equus, pero sobre todo a Bison. Encambio Glossotherium y Mamut no experimentan este lapso.Por lo que aparece en el gráfico de distribución de las dataciones por especies la extinción se produjo demanera escalonada, lo que seria contradictorio con la hipótesis de un efecto catastrófico de cambio climáticoholoceno pero también con la expresión catastrofista del „Blitzkrieg“.En realidad la secuencia de desapariciones es coherente con una reducción de la biomasa de herbívorosiniciada con Camelops (cuya tolerancia hemos comentado). Pero la siguiente desaparecida fue Smilodon, elmayor carnívoro, tal como sería previsible de haberse dado una competencia con humanos cazadoreseficientes. Le siguen Mamut, Glossotherium, Bison y Equus. Esa secuencia encaja perfectamente con laecuación de lo esperable en la hipótesis de presión cinegética: teniendo en cuenta los factores de competencia

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Edades C14BP

BISON

CAMELOPS

EQUUS

GLOSSOTHERIUM

MAMMUT

FRECUENCIAS DE DATACIONES NO DEPURADAS, POR ESPECIES

UMGHOLOCENO

RANCHO LA BREA

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ecológica y tamaño, velocidad de remplazo y movilidad de la presa. Los depredadores se extinguen antes quesus presas y los menos eficientes primero. Teniendo en cuenta que Smilodon, el tigre dientes de sable, debióser un poderoso carnívoro, si en la causa de su extinción intervino un factor de competencia con otra especie,ésta (en nuestro caso presuntamente la humana) debió ser bastante competente como predadora.

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DATACIONES C14 BP

URSUS

MAMMUT

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GLOSSOTHERIUM

CANIS DIRUS

CAMELOPS

RANCHO LA BREA: RANGO DE DATACIONES POR ESPECIES

SMILODONBISON EQUUS

BP

Figura 84. Extensión del rango de todas las dataciones C14 de las especies más significativas de Rancho La Brea.Aquí se observa como Smilodon desaparece antes que sus posibles presas. La persistencia de Ursus (el oso es un

omnívoro más flexible) nos indica que no hay un problema de temperatura implicado. La presencia física de restoshumanos es un accidente que sólo ocurre mucho después.

Los autores que estudiaron el sitio remarcaban que, en el otro extremo de la secuencia cronológica, alprincipio del Holoceno, existe también un lapso de dataciones entre el 10,700+320 (fechado que correspondea un hueso de perro „doméstico“) y el 9000+80 BP. (correspondiente a un esqueleto humano). Como veremosmás adelante este lapso es altamente significativo, para la interpretación de la historia de las sociedades, porsu recurrencia en otros sitios del globo.

En conclusión: el ejemplo de Rancho La Brea nos proporciona unos indicios a tener en cuenta: que hay unainfluencia innegable del clima en la historia de las especies (la alternancia de Camelops y Bison, por ejemplo).Pero la extinción no se puede explicar por un cambio del clima hacia frío (el Dryas reciente) o hacia el calor(el Holoceno). La desaparición de las especies es un fenómeno escalonado, que se prolonga hasta entrado elHoloceno y en este proceso está involucrada una especie depredadora, la humana, que actuó con mayorefectividad que el tigre de dientes de sable, el carnívoro más poderoso de la época.

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EL FINAL DE LOS GIGANTES DEL SUR: LA EXTINCIÓN DE LA MEGAFAUNASUDAMERICANALos elefantes del norte no se desvanecieron solos. Los mastodontes del Sur y toda la megafauna del extremoopuesto del continente americano los acompañaron. La extinción de los mamíferos gigantes de la megafaunade América del Sur también ha sido presentada como un fenómeno de cambio súbito. Para explicarlo se haninvocado tanto causas climáticas [50] como la intervención humana [241].La fauna extinta más significativa del extremo sur comprende Mylodon (está documentado desde elPleistoceno antiguo y se extendió hacia el norte como mínimo hasta Paraguay), Nothrotheriops, Doedicurus,Glyptodontes (el glyptodonte originado al final de Plioceno está documentado biogeográficamente hasta elyacimiento de Taima Taima, en Venezuela), además de los géneros Toxodon, Scelidotherium, Glossotherium,Megatherium (éste se documenta a partir del Plioceno final y se extendió hasta Norteamerica), Hippidion,(desde el Plioceno final y desde Bolivia) y Paleolama (desde el Plioceno final hasta Perú, pero su variedadPaleolama mirifica llegó hasta Florida y California).

Figura 85. Esqueletos de Gliptodonte, Milodón y Tigre de dientes de sable del Museo de la Plata (Argentina)

Desgraciadamente no existe el mismo registro para la Última Terminación glaciar en el extremo sur que parael Atlántico norte y hay ciertas contradicciones entre distintos autores/as sobre la cronología, sobre susincronización con los cambios equivalentes en el hemisferio norte y sobre la amplitud de las oscilaciones[264, 265, 266]. Por ejemplo, tenemos una buena correspondencia general entre las fases del hemisferio norte yel registro de paleotemperaturas del lago Sajama de Bolivia o de Huascarán en Perú [368] y nosotros mismoshemos podido constatar, coincidiendo con otros autores/as [83, 338], la perfecta sincronización del ÓptimoClimático y de la Pequeña Edad del Hielo medieval. Sin embargo otros trabajos plantean [40, 230, 402]secuencias climáticas distintas, al tiempo que se pone en duda el impacto del periodo frío del Dryas reciente(al menos en latitudes medias en la vertiente del Pacífico sur a partir de los sondeos de los lagos chilenossituados entre 44° y 47° latitud sur y del análisis del Glaciar continental Patagónico), y se postula unaanticipación en varios milenios de los cambios en el sur respecto a los del norte.

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Sin embargo los ensayos de correlación entre las oscilaciones climáticas evidenciadas en los sondeos de laAntártida muestran una bastante buena correspondencia general (aunque tal vez con cierta asincronía y conalgo menor amplitud) con los episodios Dansgaard-Oeschger del hemisferio norte en Groenlandia.

Figura 86. Gráfica comparativa entre cambios climáticos del hemisferio norte y los cambios según los sondeos deGroenlandia y de Antártida.

Figura 87. Mapa de los cambios de vegetación desde el último Máximo Glaciar a la actualidad. Los cambios entreel Holoceno antiguo y la actualidad son mínimos. No existiría una causa en la vegetación que explicara la extinción

de la fauna del principio del Holoceno. [a partir de 3].

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También es interesante la falta de acuerdo entre los autores sobre el impacto del cambio climático en la flora.Pero a grandes rasgos el cambio al Holoceno desde el Máximo Glaciar no debe ser considerado muy distintodel hemisferio norte, y se cubre en distintas etapas a partir del 16ka BP. En la zona pre-cordillerana al pie delos Andes orientales se pasaría de una tundra a un bosque de haya sudamericana (Nothofagus) mientras que enla zona pampeana y de la baja Patagonia los espacios abiertos alternarían, según la humedad local, pastizalesy estepa arbustiva con corredores más forestados alrededor de las masas de agua dulce continentales y loscañadones de ríos [130, 131].

Algunos autores [51] partidarios de una extinción rápida de la megafauna por causas naturales hanargumentado que es una fauna pleistocena y que se extingue por la implantación de la fase templada holocenadurante la que se habría extendido una vegetación más cerrada. Contrariamente, otros [115], opinan que esa lafauna se extinguió por una desertización en el máximo glaciar.Para analizar y evaluar las hipótesis explicativas he reunido las 190 dataciones de C14 más antiguas desdeUruguay a Tierra del Fuego de yacimientos con fauna extinta y/o con presencia humana (a).

a para los cálculos yo he tomado como arqueológicos aquellos sitios con industrias o carbones mientras que he clasificadoestrictamente como paleontológicos aquellos exclusivamente con deposiciones o restos faunísticos.

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Figura 88. Mapa del Cono sur con la situación de los yacimientos más antiguos.

Unos sitios son exclusivamente paleontológicos y otros tienen evidencias de presencia humana. Un primeranálisis de la distribución de fechados nos muestra su ausencia entre 24ka BP y 13,75ka BP (o 14,66ka BPpara dataciones de AMS). Es decir, no hay dataciones para el Último Máximo Glaciar. Esto coincide con loque hemos visto en el sitio Rancho la Brea en California. Nuevamente pues la máxima documentación de estamegafauna está antes y después de la crisis climática del máximo glaciar. Teniendo en cuenta que losedentados, perezosos y equinos se habían originado en el Mioceno y habían perdurado todo el Pleistoceno, suausencia en los niveles del máximo glaciar en el sur de Argentina no deja de ser muy significativa. Es decir,no parece que fueran animales que resistieran el ambiente de tundra o estepa fría. Es falaz, pues, decir que se

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trata de una fauna Pleistocena queriendo indicar que se trata de una fauna fria. Al contrario, sólo está biendocumentada a partir del Tardiglaciar avanzado.

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ARQUEOLÓGICAS

HIATO13750-24000

ArroyoSeco

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nº de dataciones

Figura 89. Gráfico de frecuencia de dataciones de C14 BP en sitios paleontológicos y arqueológicos del Cono suramericano. Se puede ver el hiato desde el Ultimo Máximo Glaciar hasta el Tardiglaciar avanzado. Las de

frecuencias de dataciones de sitios arqueológicos adquiere una forma de distribución normal centrada justo antes delHoloceno pero con una extensión hasta el Óptimo Climático. La máxima de dataciones de los sitios arqueológicoscoincide con una máxima de los sitios solo paleontológicos. Estos tienen un primer pico en el momento en que se

empieza a documentar la presencia humana.

Así pues en realidad no se puede sostener ninguna de las dos posiciones de extinción por causas climáticas(por excesivo frío o calor) sin forzar la evidencia actual. Desde un punto de vista exclusivamente cualitativotampoco se explicaría una extinción por una causa ambiental simple, porque encontramos asociadasrecurrentemente, desde Ecuador o Venezuela hasta Magallanes, especies de nichos muy diversos como loséquidos o los mastodontes. Es inexplicable aquí mucho más que en Norteamérica por la variabilidad en losecosistemas , que la rarefacción de unos taxones no favoreciera alternativamente a los contrarios.Igual que en el hemisferio norte probablemente también las oscilaciones de humedad y temperatura fueronmuy rápidas en el extremo sur (aunque no existen tantas dataciones hay algunos datos significativos como losre-avances glaciares hace 15-14ka BP o 11,4-10,2ka BP o la evidencia del yacimiento Los Toldos enMagallanes y el de Lago Mascardi en la precordillera).Pero, incluso aunque el supuesto cambio ambiental finipleistoceno, desde el 14ka a 8,5ka BP, hubiera sidocrítico por la gran inestabilidad climática [56] es difícil pretender que unas especies de fauna que se extiendendesde Estados Unidos de Norteamérica hasta Patagonia, con unos requerimientos ambientales tan variados nopudieran encontrar en dos continentes ningún refugio con un nicho ecológico adecuado para su supervivenciahasta la actualidad y que se extinguiesen, como he comentado, justo cuando se supone que se instauró unperiodo más estable.

El cuidadoso análisis del yacimiento de Cuchillo Curá en Neuquén –datado en 14ka BP- demuestra que elperezoso responsable de las deposiciones comió ya una flora semejante a la actual [176].Con el registro de que se dispone actualmente no se puede decir tampoco que las distintas especies seextinguen juntas y de golpe. Es posible que los mastodontes se extinguieran primero (en Chile, yprobablemente también más al norte en contextos antrópicos) y siguieran animales cada vez menores:

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milodones, megatherios, equinos, paleollamas, glyptotherios, perezosos menores y rhea (un ave no voladoragrande).

Por lo que se refiere a la presencia humana, el sitio arqueológico más antiguo, -además del ya citado de MonteVerde de 13ka BP- es Cueva Lago Sofía (con 12,99ka BP), y enseguida Piedra Museo. La datación fiable másmoderna de fauna extinta estaría en Arroyo Seco: hacia 6,45ka BP (obviando su datación mas reciente de5,25ka BP).Sorprende la enorme abundancia de sitios precisamente después del 12,9ka BP y la rarificación de sitios mástardíos. Podríamos pensar que es la consecuencia del interés en la datación del poblamiento más antiguo.Efectivamente se podría sospechar que los arqueólogos/as que aspiraban a conseguir el “record para lapresencia humana más antigua” han tenido mucho interés en datar los niveles que presentaban restos demegafauna asociados con posibles industrias líticas. Sin embargo también hay una gran cantidad dedataciones de sitios donde sólo hay fauna (que se dataron obviamente sin perseguir ese "record") y tampocohan dado dataciones más antiguas.En realidad, como pasa con el oso de las cavernas en Europa [103] encontramos la máxima cantidad dedataciones justo en el momento previo a su extinción (o como mínimo a su rarefacción) definitiva. Es como sila fauna extinta (particularmente Mylodon) hubiera incrementado el hábito de refugiarse en las cuevas(incrementando así las probabilidades de morir en ellas) al aumentar el estrés provocado por humanos. Es unadinámica muy parecida a la observada en los grandes carnívoros europeos del Pleistoceno y en los carnívorosafricanos actuales (particularmente las hienas).Así podemos pensar que ese incremento de restos en esa fase última no responde a un aumento real en sucantidad sino a un aumento significativo en su tasa de muerte y depositación de sus restos en cuevas.Con la evidencia actual parece que esa secuencia de extinciones no está correlacionada con las posiblesoscilaciones climáticas (tomando como referencia, en este caso, el gráfico de temperatura de Sajama enBolivia y la curva paleoclimática a partir del O16/18 del sondeo Vostok en Antártida que he elegido comoextremos del área estudiada).

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Figura 90. Histograma con las frecuencias de dataciones enfocando con mayor detalle el lapso entre 14ka y 4ka BPdesglosando arriba los sitios sin evidencias de acción humana y abajo los sitios arqueológicos. El primer pico de

frecuencias de yacimientos con fauna coincide con la primera evidencia de presencia humana. La entrada de sitiosarqueológicos con fauna extinta en el Holoceno está remarcada con flechas.

Se puede apreciar que no existe tampoco correspondencia entre la disminución de la fauna y algún cambiobrusco unidireccional durante el periodo cronológico que nos interesa. Tomando como indicio los datosbrutos de la frecuencia de dataciones no hay evidencia que las fases frías hayan influido en la abundancia dedataciones.

Sí se ha considerado [266] la posibilidad de algún evento súbito de gran impacto: una de las explosiones delvolcán Reclús, bien evidenciada y datada en 12,7ka BP podría estar seguida de una fase inicialmente fría.Pero existen evidencias de erupciones muy importantes también antes del 14ka BP del mismo volcán Reclús,

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o de 8,9ka y 9,38ka BP, atribuidas al volcán Auer, cuyas capas de tefra llegan a documentarse hasta Uruguay.También se ha remarcado un colapso más o menos sincrónico de muchas cavidades rocosas hacia el 9ka BP,seguido de un hiato prolongado de ocupación humana. Pero aunque se llegue a sincronizar este evento conalguna de esas erupciones volcánicas fuertes, ninguna produjo aparentemente un efecto catastrófico total ydefinitivo en la megafauna.En definitiva pues, en este caso tenemos un cambio brusco (una extinción de especies de megafauna) cuyaseñal coincide en la zona con el inicio (hace 12,9ka BP) de la actividad humana bien documentada. Existepues una concordancia entre la primera actividad humana y el incremento de la mortandad de la megafauna.

Figura 91. Gráfica de probabilidades acumuladas (usando el sistema CalPal2003) de las dataciones calibradas deC14 para Patagonia. He sumado yacimientos antrópicos y paleontológicos y la he comparado a la curva

paleoclimática del sondeo de Sajama y al de Vostok. Se puede observar bien el lapso del 8,5 BP.

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Analizando en detalle esta evidencia (entre 14ka y 5ka BP) aparecen nuevos rasgos que nos permitenaventurar nuevas hipótesis. Existe un desajuste entre la frecuencia de sitios exclusivamente paleontológicos yde sitios arqueológicos. En la fase más antigua, del 13ka al 12ka BP, hay un pico de frecuencias en lasdataciones de sitios paleontológicos; el siguiente pico concuerda con la gran abundancia de fechados en sitiosarqueológicos con megafauna. Si podemos interpretar este segundo pico paleontológico como una respuestaal estrés provocado por la caza podríamos también interpretar el primero como consecuencia del impactoinicial de la presencia humana (que al principio habría dejado un trazo arqueológico débil).Después del 8ky BP los sitios con megafauna son exclusivamente asentamientos humanos.

La evidencia de lugares de descuartizamiento en sitios relativamente recientes, como La Moderna [300], enUruguay [356]..., tampoco dejan ya lugar a dudas de que hay una actividad humana asociada a la megafaunasudamericana.

Entre los sitios arqueológicos de Patagonia y Pampa hay un notable lapso entre 7,5 y 8,0ka BP. Sólo hay dosdataciones (b). Este lapso es sumamente interesante pues es el mismo que separa también el nivel inferior delyacimiento Piedra Museo (10,4ka BP o 8,4ka BP AMS), con fauna extinta, del superior con fauna moderna(datación de 7,67ka BP).Hay que caracterizar la naturaleza de ese momento después del 8,5ka BP como un momento crítico de noretorno. Este coincide a grosso modo con el último momento de deshielo (el segundo escalón haciatemperaturas más altas en el Holoceno que se observa en la curva de temperaturas del sondeo de Vostok). Enese mismo periodo se produce la inundación definitiva de las costas por la subida transgresiva del nivel delmar y la apertura del estrecho Magallanes en el Sur. Al mismo tiempo coincide con la diversificación de lasestrategias de explotación de los recursos y de fabricación de instrumental lítico (se rompe la uniformidad delinstrumental que se ha definido como “toldense”). A partir de ese momento hay una diferenciación en eldesarrollo de los conjuntos instrumentales en el noroeste, noreste o en el sur de Patagonia) y aparecen unasestrategias nuevas en algunos grupos humanos (como la explotación de los recursos litorales) [265].Desconocemos el carácter, la velocidad y la repercusión, que estos eventos climato-geológicos debieron tenersobre las poblaciones humanas. Sí sabemos que una población de gente cazadora-recolectora quedóaparentemente aislada del resto del continente en Isla Grande de Tierra del Fuego, y también sabemos que elavance de la gente fue siguiendo muy de cerca el retroceso del hielo en los grande glaciares de la Patagoniameridional [75].

Si calibramos las dataciones, el análisis de las fechas corregidas en años de calendario no hacen sinocorroborar esta dinámica.

Una vez calibradas, las dataciones se esponjan y los lapsos que se apreciaban se amplían. Si tomamos laprobabilidad de las dataciones en lugar de su número bruto, aparece una serie de figuras muy sugestivas.Desglosando los tipos de yacimientos se observa en primer lugar que la curva de yacimientos paleontológicosparece sincronizada con el aumento de temperatura (según el registro del Lago Sajama) hasta el tránsito alHoloceno.

b 8,045ka BP en Gruta del Indio y 8,060ka BP en Cerro del Sombrero

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Figura 92. Calibración con el sistema CalPal2003 de las dataciones de los yacimientos paleontológicos del Conosur. La curva de frecuencias acumuladas de probabilidades muestra unos lapsos interesantes (óvalos), justo antes de

sendos picos en que aumenta. No se observa una correlación con las curvas paleoclimáticas de Sajama (líneaquebrada) o Vostok (línea sinuosa).

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210-1-2-3-4-5-6-7-8-9-10-11

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Figura 93. Calibración con el sistema CalPal2003 de las dataciones de los yacimientos arqueológicos más antiguosdel Cono sur. No existe una sincronización con las curvas climáticas. Se observa una escasa distribución anterior al

13ka cal BP y una máxima acumulación alrededor del 12,5ka cal BP. Después, ya en el Holoceno, al principiotenemos una pequeña concentración y una lenta caída de la curva.

En segundo lugar apreciamos que esta línea oscilante no está sincronizada en fase con la línea deprobabilidades de las dataciones de sitios arqueológicos. Después de los yacimientos arqueológicos másantiguos (que son escasos), durante más de dos milenios se produce primero un ligero pico en la curva desitios arqueológicos que coincide con la ausencia de dataciones paleontológicas; a continuación viene el pico

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de mayor frecuencia (primero en sitios sólo con fauna –el efecto estrés- y enseguida en yacimientosarqueológicos). Después ya van disminuyendo las curvas hasta unos repuntes finales. Finalmente cae,definitivamente, la frecuencia de dataciones paleontológicas coincidiendo con un último pequeño pico de lasarqueológicas).

Con estos datos puedo sugerir una hipótesis interpretativa sobre la dinámica que pudo tener lugar:• Una primera fase de poblamiento humano pionero inicial del extremo sur americano (que pudo comenzar

antes de 13ka BP) produjo un rastro arqueológico sutil pero que afectó con un estrés considerable a lapoblación de megafauna.

• Después la depredación y el estrés aumentarían espectacularmente entre el 11ka y el 10ka BP (hace 13-14ka cal BP), sin una correlación con elementos climáticos.

• Ya en Holoceno (entre el 10ka-11ka cal BP) un repunte en la caza produjo una reducción drástica de losgrandes animales (ya no quedaron sitios sólo con megafauna).

• Tal vez hace 8ka BP se produjo un cambio o evento súbito medioambiental que, sin acabar del todo con lamegafauna, dejaría sólo unos remanentes que fueron apurados por las poblaciones humanas.

• A partir de ese momento los grupos humanos fueron obligados a reajustar sus estrategias productivas,entre las cuales se afianzó la explotación de los recursos litorales.

Así pues en este caso, a pesar de que existen efectivamente momentos críticos y vacíos en el registropaleontológico coincidentes con cambios ambientales, la catástrofe final para los animales gigantes delextremo sur (su extinción) sería más bien un fenómeno acumulativo (no muy brusco) catalizado y conducidofinalmente por la acción antrópica.

UNA CONCLUSION ALTERNATIVA PROVISIONAL PARA AMÉRICA: UNAHIPÓTESIS DE “CAMBIO BRUSCO” A EXPLORARMi propuesta es que hubo un cambio dominante ambiental pero que en sí mismo no explica nada. Respecto alproblema americano que hemos visto, habrá que admitir que la caza de la gente (que tal vez entró antes deClovis en el Tardiglaciar por Beringia) pudo producir al principio un estrés en la fauna pero no llegó aextinguirla. Después de un reajuste esta incidencia se incrementó de golpe antes del Holoceno, apurando lafauna poco a poco hasta su extinción. Este proceso sería más gradual, escalonado y con ritmos distintos paralas diferentes especies, prolongándose hasta entrado el Holoceno y no una extinción súbita global. No esnecesaria una primera presencia humana en tromba para explicar la extinción.Si entraron por la costa del Pacífico o en un momento de apertura del corredor interglaciar anterior al 11,5kaBP, es un problema que debería ser analizado desde la perspectiva de la Geología del Cuaternario canadiense,teniendo en cuenta esos cambios bruscos y los cortos periodos de inversión climática que se dan en el interiorde las fases climáticas mayores.Pero existe aún una tercera posibilidad para explicar el poblamiento (que a modo de comentario marginal hamencionado el equipo que trabajó en Blue Fish Cave y que habían intuido otros investigadores clásicos):Pudo existir una primera tentativa de poblamiento truncada o minimizada por el rigor del máximo glaciar.Aunque se puede objetar que no hay apenas actividad humana documentada, esta poca documentación puedeser un efecto del muestreo. Los yacimientos han sido criticados como dudosos porque no tienen unasindustrias líticas fáciles de reconocer y porque no son lo que se espera desde la posición académica dominanteen EEUU. La escasa visibilidad de estos posibles yacimientos no sería extraña, porque también se produceuna baja generalizada en la cantidad de yacimientos o una desaparición de restos faunísticos en toda América(desde Alaska hasta Patagonia) antes del Tardiglaciar. Es decir que no hay trazas muy numerosas de presenciahumana antes del Tardiglaciar pero sorprendentemente tampoco hay trazas de fauna desde antes delpleniglaciar!! Obviamente a nadie se le ocurrirá plantear que toda la fauna desapareció y volvió a aparecerpara darle la bienvenida a la gente Clovis. Está fuera de dudas que la fauna persistió durante todo elPleistoceno superior en América, que hubo fauna durante el Último Pleniglaciar y antes, aunque tampocohaya muchas pruebas de ello. La respuesta a la pregunta ¿dónde está el posible poblamiento humano pre-clovis del Cuaternario reciente? puede ser sencilla: ¡tal vez allí donde esté la fauna!Si el clima no es causa suficiente que explique la extinción y fue la gente la que acabó con la fauna, entonces¿porqué, esa posible población pre-glaciar o Tardiglaciar, no acabó con la fauna hasta el Holoceno? No estoypostulando una incompetencia absoluta por parte de esos primeros hipotéticos pobladores preglaciaresrespecto a cazar gran fauna. En realidad no les haría falta desarrollar costosas técnicas de fabricación deinstrumental sofisticado para conseguir una subsistencia más que suficiente. Más tarde, a finales del

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Tardiglaciar, sí se pudo producir un salto cualitativo en el desarrollo de la tecnología y las estrategiasorganizativas. Una inversión mayor en la producción de instrumentos de producción a medida que losrecursos fáciles (la fauna sin distancia crítica, ni mecanismos de defensa frente al nuevo depredador humano)se fueran agotando.

¿Cómo queda detallada pues mi explicación?El proceso empezaría con una primera „ola“ de población humana(c) que avanzaría por un terreno nuevo muyrápidamente, porque ello les daba la ventaja de explotar un territorio con recursos mejores (más abundantes yfáciles de captar) que aquel de donde procedían (y que ya habían explotado). Hasta aquí sigo una posiciónsemejante a la de los partidarios de la Guerra Relámpago. Pero si no "liquidamos" las dataciones "incómodas"no sería un momento o gente Clovis, sino una pre-Clovis incluso anterior al Máximo Glaciar Último. Laprimera oleada de gente pudo entrar en cualquier fase calida entre el 70 y el 25 ka BP por Beringia, aunqueme inclino a pensar en una fecha mas cercana al 25ka BP que a la más antigua, por la relativa poca delecciónbioantropobiológica [129]. Tampoco hay ninguna evidencia por ahora que los hominidos pre-sapienssuperaran en Asia nordoriental la latitud 40º y por lo tanto no pudieron pasar a América por Beringia.Este primer avance de grupos recolectores-cazadores generalistas, oportunistas (como parecería ser el caso deMonte Verde, por ejemplo), que utilizarían un instrumental lítico poco elaborado y expeditivo (el mínimoimprescindible), de baja densidad demográfica y rápido movimiento no pudo acabar con la gran fauna. Pero alllegar a una barrera ecológica o geográfica, o al límite de estos grandes recursos, se detendría el avance yaumentaría rápidamente la población. Se podría calificar a esta dinámica como la “Hipótesis del Rebote“: elefecto de los rendimientos decrecientes obligaría a desarrollar (a recuperar) tecnologías e instrumental de cazay a la explotación de los recursos más costosos/difíciles que el anterior sistema poco especializado. Desde esepunto geográfico, opuesto al de entrada, empezaría a expandirse esa población y las nuevas estrategias deexplotación de recursos (incluyendo ya la caza intensiva de megafauna) en sentido inverso, rellenando elespacio con una densidad demográfica cada vez mayor, agotando primero los „mejores recursos“ (los másrendibles como la megafauna) y buscando estrategias de explotación que permitieran obtener el máximo decada zona. A partir de ese momento las extinciones se producen muy rápidamente, causadas por gente que yaes previamente conocedora del terreno. En cada lugar dependerá de elementos aleatorios como cambiosclimáticos súbitos, conyunturas desfavorables para la fauna local (y favorables para la caza) y de la propiacapacidad de carga de cada sitio.Es muy probable que lo aparentemente (o relativamente) súbito de este proceso de extinción (tanto en Siberiacomo en América, a partir del 11,5ka BP) haya sido el hecho que fue detonada al superar un dintel en eldesarrollo tecnológico (y no por haber franqueado la barrera geográfica de Bering y la de los glaciarescanadienses, en el caso americano). Esta superación permitió un cambio brusco en las estrategiasorganizativas humanas que posibilitaría la explotación intensiva de un espectro de fauna a la que no habíanpodido acceder antes (al menos no con la misma facilidad o regularidad). En Siberia sería el caso de laexplotación de los últimos rebaños de cría de mamuts (gracias a una tecnología térmica más eficiente). En elcaso americano lo fue el acceso regular (gracias al desarrollo de una nueva tecnología de armas) a unamegafauna que tal vez no había experimentado nunca una depredación humana intensiva.En América la gente, a partir del momento en que desarrolló o adoptó (d) un instrumental con proyectilesefectivos (las azagayas provistas de puntas líticas bifaciales Jobo/ Clovis/Cola de Pescado/ Agata Bassin),tuvo un acceso más fácil a la caza de megafauna y finalmente pudo exterminarla (e). Esta gente acabaríapresionando y penetrando en los refugios de las cordilleras y en las zonas periféricas que habrían actuadocomo "reservas naturales" para la reproducción de animales, acabando con las posibilidades de reproducciony recuperación de esas especies.

c Tampoco rechazo la posibilidad de otra(s) entrada(s) sucesiva(s) e incluso que la gente cazadora de proboscidios llegaradesde Siberia después del 11ka, pero de momento no veo que exista una prueba vinculante para esto último.

d las dataciones señalan, por ahora, una progresión de sur a norte en ese cambio y en Siberia las puntas bifaciales estaríandocumentadas sólo a partir del 8,5ka BP

e Si se prefiere no ser tan drástico se puede pensar también en un cambio ambiental súbito, que contribuiría en darle lapuntilla en sus refugios.

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Esta proposición encaja mejor con la evidencia actual que la hipótesis „Clovis -de origen Siberiano- first“,porque no hace falta descalificar de entrada muchos datos existentes. Es una forma más fácil de explicar elregistro.

Quedan “agujeros” por resolver: ¿que pasó en América durante el máximo glaciar con la fauna y/ tal vez conlos humanos? ¿Cual fue la incidencia, en los sistemas sociales y en el medio, de macro eventos volcánicos oterremotos de la Patagonia que van seguidos (hacia 9ka y 8ka BP) de un reemplazo, casi absoluto, de lamegafauna residual por una fauna de mamíferos moderna empobrecida?¿Que papel jugaron realmente, y en que extensión, los grandes eventos bruscos como los mega desagües dellago Agassiz?Para rellenarlos habría que proceder a un análisis detallado, región por región, y a correlacionar esos eventos.Pero es una tarea que no se ha emprendido aún.Es muy difícil por el momento, a no ser que “limpiemos en masa” dataciones que indican lo contrario, pensarque haya existido un único evento brusco antrópico o abiótico que haya producido mecánicamente laextinción masiva de los animales americanos. Es mas complejo pero más fácil pensar en términos de unacausa dominante y factor de persistencia (la presión demográfica humana), una detonante: la superación deldintel tecnológico y, tal vez en algunos casos, un amplificador: los cambios ambientales desfavorables paralos animales.En definitiva, creo que el caso de extinción de la fauna sólo podría ser considerado cambio brusco a unaescala milenaria, pero no lo es a una escala de décadas o centenaria, como se había planteado. Los cambios enel ambiente sí pudieron ser súbitos y radicales a una escala de décadas. Por tanto no pudieron estar en fase,sino como máximo coincidir en un tiempo, amplificando otro factor detonante: el cambio en los instrumentos.Este sí pudo ser en origen un cambio brusco y catalizó los efectos de otro cambio de acción centenaria, quefue la causa dominante: la presión demográfica (f). Esta puede hacer variar de manera radical la ecuación de ladinámica social por una ligerísima diferencia de las condiciones de partida o de los índices exponencialescomo he señalado en el capítulo del cambio biótico.La interacción de diferentes escalas temporales y la jerarquización de causas son básicas para comprender estetipo de dinámicas en las que interactúan diferentes cambios bruscos y fenómenos con diferente "longitud deonda".Después de este (fra-)caso deberemos volver al punto de partida. Saltaremos "el Charco” hacia la Península,para analizar otro presunto cambio brusco prehistórico más reciente.

f Utilizo la palabra presión conscientemente y no "aumento". La presión es un vector persistente, herencia de nuestraespecie, frente al que las sociedades pueden reaccionar de muchas formas para minimizar la presión y evitar el aumento.

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1 CAMBIO BRUSCO EN EL FINAL DELPLEISTOCENO CANTÁBRICO

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMASiguiendo la filosofía expuesta en la Justificación quisiera casi acabar este recorrido de mi investigacióncerrando la gira de 360 grados alrededor del mundo con un ejemplo más cercano.Lo he escogido porque es un registro con gran cantidad de datos, procedentes de monografías resultado deexcavaciones modernas, con series estratigráficas bien documentadas y datadas. Quiero hacer notar quegracias a este registro podemos explorar ahora la posible incidencia en el desarrollo social de un cambioclimático cuya brusquedad está hoy demostrada.Lo que voy a exponer a continuación es la consecuencia de una reflexión global a partir del análisis de cadasitio concreto tal como está publicado (a). No voy a resumir aquí toda la información sino que pretendoreflexionar sobre la posibilidad de introducir “el cambio brusco” dentro de la explicación.

CONSTATACIÓN DEL PROBLEMA: ¿QUÉ HAY DESPUÉS DE LA“MUERTE (DEL AZILIENSE)”?Al final del Paleolítico superior, durante el Tardiglaciar (a partir del 11,5ka BP), se produce en la CornisaCantábrica lo que se ha llamado el proceso de “azilianización” [218]. Este cambio fue descrito en el siglo XXcomo el inicio de una “paulatina decadencia” de los grandes cazadores del Paleolítico: se perdía el arterupestre y el arte mueble quedaba reducido a pintar rayas y puntos sobre guijarros. Por su parte elinstrumental sobre asta o hueso simplificaba las formas, perdiendo al mismo tiempo la decoración.Si la continuidad de este proceso parecía muy clara a los investigadores, no pasaba lo mismo con el periodosiguiente en el proceso de “mesolitización o desazilianización”. No se podía hablar de un proceso de cambiopaulatino de “asturianización”. En términos de la Historia cultural se había "muerto" la cultura Aziliense paraser sustituida por otras culturas mesolíticas, entre ellas el "Asturiense cantábrico".Ya en 1921 se consideró que lo que se denominó “industria asturiense” era un precedente del Neolítico másque una continuación del periodo Paleolítico. Siguiendo el gradualismo del momento se explicó el cambio poruna paulatina alteración de las condiciones ambientales. Y así se buscaba un tránsito paulatino, a pesar de quese reconocía que éstas habían cambiado radicalmente: “Parece verosímil el admitir que el cambioclimatológico sobreviene de una manera muy lenta, como sucede con los fenómenos geológicos; por tantodebe haber habido un momento en que el clima era lo suficientemente fresco para que todavía sobreviviese laLittorina y lo suficientemente templado para que el Trochus coexistiese con aquella en la costa cantábrica. Sinembargo, en el presente momento podemos decir que no hemos hallado ningún yacimiento en el que ambasespecies convivieran; este periodo es el que transcurre entre el final del Paleolítico y el Asturiense; existe,pues, según mi manera de interpretar los hechos, un hiatus.” [379 pp.13 y 39]Esta ruptura ha sido remarcada más tarde por varios autores. Así, por ejemplo, a propósito del instrumentalrecuperado en la Cueva del Perro en Cantabria, y por las fechas de C14, se ha escrito que después delAziliense “el cambio producido en los productos industriales es brutal” (b). Pero no sólo eso, sino que se ha

a He de advertir que algunas personas que han generado el registro de datos mediante el trabajo de campo, a vecescontraponen ese trabajo práctico a las teorías interpretativas. Esta actitud es una reliquia de un positivismo científicotrasnochado. En sí misma es la herencia de una teoría particularista , que en el fondo niega la posibilidad de un verdaderoconocimiento científico de la Historia. Critican los ensayos recopilatorios o de síntesis. porque dicen que no tienen encuenta algunos de los datos críticos que ellas sí poseen. No se dan cuenta de que al hacerlo se cuestionan a mismas, pueses evidente que es difícil conocer lo que no han publicado adecuada o suficientemente. Lo que sí es posible es poner enevidencia los fallos lógicos y contradicciones en las descripciones de esa información, y reinterpretar o re-sintetizar losdatos publicados en función de otros parámetros de partida, dándoles la forma de otra teoría.

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visto también un cambio profundo y en plazo muy breve en la recolección de moluscos: de Littorina se pasó aMonodonta (o mejor de recoger moluscos en estuarios se pasó a hacerlo en costas batidas). La apariciónrecurrente de depósitos importantes del caracol terrestre Helix…, la diversificación de animales cazados,etc.… son otros elementos indicadores del cambio.En algunos casos particulares se había anotado la presencia de un hiato en las dataciones (c). Y en otrostrabajos también se apreciaba “estrangulamiento” después del 10ka BP en los gráficos elaborados con lasdataciones [141], es decir una posible reducción de la presencia humana. En una compilación más reciente[133,134] se apreció un significativo hiato de quinientos años en las dataciones del radiocarbono desde 10,1hasta 9,6ka BP.

Figura 94. Mapa de la región cantábrica con la situación de los yacimientos, resaltando los mencionados en eltexto. Abajo se indica el área que he tomado como región mediterránea e interior-Pirineos

EL INTERRUPTOR CLIMÁTICO Y LA DESCONEXIÓN TEMPORALDEL REGISTRO.Para esta investigación he compilado las dataciones que existen para el periodo entre 16ka y 6ka BP en estaregión peninsular (Asturias, Santander, País Vasco) y, como elemento de contraste, también las de lasregiones vecinas hasta el Mediterráneo (Valle del Ebro -Rioja, Navarra y Aragón-, las Mesetas, Catalunya yPaís Valencià, Pirineos franceses). Las he procesado en bruto. Al igual que he hecho en los ejemplosanteriores he preferido no excluir a priori los casos presuntamente “aberrantes” para realizar unaaproximación estadística heurística. Después las he analizado y depurado, tomando en cuenta su coherenciaestratigráfica y la opinión de sus publicadores, las he calibrado, y las he reprocesado estadísticamente. En este

b Ya dieron cuenta de lo rápido del cambio entre el nivel 1 (clasificado Mesolítico) y el 2 (con arpones azilienses) delAbrigo del Perro sobre la costa en Cantabria [140 p.6]: además de “la brusca transformación de los modelosindustriales”, también cambiaron las estrategias organizativas en general, incluido un aumento significativo del marisqueoy un cambio de las especies de moluscos recolectadas. Las acumulaciones de conchas consumidas (concheros) previos aese salto estarían compuestos prioritariamente por Littorina littorea o Patella grande mientras que después estaríancompuestos por Monodonta lineatta. [109, 110, 139]

c Otro autor [343] había señalado este lapso de dataciones fijándolo entre 9,75 y 10ka BP y también advertía que existeotro entre 9 y 9,2 ka BP.

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proceso he usado el programa Calip 4, y he comparado el resultado con el obtenido con el programa OXCAL;al final he optado por el uso del programa CALPAL2003 porque grafica mejor la acumulación de frecuenciasde probabilidad del C14 y sobre todo porque incorpora la posibilidad de analizar al mismo tiempo los“proxis” climáticos actualizados.

Observaciones4000

6000

8000

10000

12000

14000

16000

18000

FIABLE

estéril o NO FIABLE

C14 BP

Figura 95. Ordenamiento de las dataciones de C14 en la Cornisa Cantábrica para el periodo entre 4ka y 17ka BP.Las flechas marcan los dos hiatos más importantes.

En las gráficas resultantes del procesado se puede detectar efectivamente un hiato estadístico entre 10,3 y 9,6ka BP. No es el único (d), pero es el más marcado. Sólo dos dataciones se “cuelan" en ese agujero: una deBerniollo, yacimiento al aire libre en Álava, que tiene una datación en ese lapso (9940 BP) pero con unosdatos incompletos y con una desviación estándar muy elevada de ±490 que la hace insegura. La otra tambiénse ha puesto en duda. Es una de las del nivel D de el yacimiento Berroberría (9740±190 BP), que no escoherente con las otras del mismo nivel ni con los datos paleoclimáticos. Podría proceder de un estrato estérilposterior al D, que se pudo aislar mejor en la parte del yacimiento afectado por las excavaciones antiguas. Losprimeros excavadores lo señalan y dibujan y es posible que estuviera parcialmente erosionado en la zona delas nuevas excavaciones de las que procede la datación (e).

d Existe otro testimoniado en el yacimiento de Berroberria entre los niveles C2 (8130+200. GrN16510) y Berroberría Binf(7640+190. GrN16511) aunque este agujero no es tan notorio porque hay una continuidad en el tipo de productosdepositados en los dos estratos “mesolíticos”.

e Este episodio erosivo fue identificado por la Sedimentología [179] y el análisis de polen se puede interpretar en el mismosentido. En la sección estratigráfica (FG – cuadros 1, 2, y 4 de la figura 5) que se publican en la monografía modernaparece percibirse este acuñamiento entre el Nivel D y el siguiente C. [32] Es decir la datación podría corresponder a algúnmaterial remanente del momento del lapso en cuestión. El nivel que faltaría parcialmente se había definido como estéril yen todo caso confirmaría que en ese momento no habría habido ocupación humana y también que hubo procesos deactivación de la circulación de agua en la cavidad (incremento de la humedad).

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Figura 96. Estratigrafía de Berroberría según [32] fig 3. Con una flecha señalo el estrato que podría corresponder alhiato significativo y que se acuña entre los estratos C y D (remarcados por mi en gris).

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Figura 97. Interpretación de la estratigrafía de Berroberría [a partir de los datos de 32 y de 179]. He marcado conuna flecha el hiato significativo y la datación problemática.

Si se calibran los resultados aún se dilata más ese agujero. De las 204 dataciones de 60 yacimientos, una vezdepuradas, hemos retenido 160 coherentes con el registro estratigráfico. Muy pocos yacimientos de lavertiente cantábrica escapan a este hiato de dataciones, que aparece (aun considerando una desviaciónestándar de 2sigmas, esto es, el intervalo de máxima fiabilidad para los fechados) como un auténtico“apagón”.Este lapso no es consecuencia del efecto de las variaciones en el contenido atmosférico del C14 (las mesetasdel radiocarbono). Al contrario, de seguir el trazado de correlación de la curva deberíamos haber encontradomás bien el doble de las dataciones halladas, porque en el periodo tratado los años de calendario secomprimen en años de radiocarbono (cada año de radiocarbono corresponde a más de un año de calendario).Tampoco se puede considerar un problema estadístico de muestreo: hay suficientes muestras antes y despuésdel lapso, y el test de la secuencia excluye la posibilidad de un fenómeno aleatorio.Podría pensarse que lo que ha pasado es que ha habido procesos geológicos que han hecho desaparecer losestratos correspondientes a este periodo. Pero este lapso no se puede explicar sólo por procesos erosivos: yadesde 1930 sabemos que existen estratos de arcilla roja estéril entre los del final del Dryas reciente (lamayoría de los cuales se clasificaron tradicionalmente como “azilienses”) y los del inicio del periodoPreboreal (que fueron clasificados como “asturienses”) por ejemplo en los yacimientos de Balmori y LaRiera.(f)

El lapso adquiere significado por:• Coincidencia cronológica con el cambio global en los factores abióticos.En el registro de Groenlandia se aprecia que de golpe, en menos de 50 años (hacia el 10,05ka BP), subeprimero la pluviosidad y luego se estabilizó la temperatura después de una subida equivalente a más de dostercios de todo el cambio global postglaciar.• La transformación de las estrategias económicas.

f De los yacimientos datados, doce (además de Berroberria) tienen dataciones antes y después del “agujero negro”. Notodas ellas están admitidas como válidas (las que se han puesto en duda las señalo en cursivas). Los yacimientos y lasdataciones (entre paréntesis y en ka BP) son: Berroberria (10,16-8,86), Arenaza (9,6-10,3) yacimiento con el menoragujero, Ekain (12,05-9,54), Buxu (12,09-7,14), Garma (7,7-¿), Riera (9,09-10,34), Azules (10,33-9,54), Miron (10,25-9,55), Perro (9,26-10.16) el segundo agujero menor y cercano a la costa, Morín (9->16), Santimamiñe (9,43->16), Urtiaga(8,7-10,28) y Urratxa (10,24-6,950). Trece yacimientos tienen dataciones sólo después del agujero (nueve sólo sonunicomponente). Las dataciones mas cercanas al agujero son de Arenaza y La Fragua (9,6ka BP). Diecinueve tienendataciones sólo antes del agujero y el más cercano al agujero es Valle (10,12ka BP).En ese hiato el análisis detallado de las estratigrafías de Zatoya, Berroberría, Fragua, Mirón, y especialmente La Riera yPeña del Perro serían claves [109].

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Se entró en el lapso con una especialización en la caza del en ciervo (con un gradiente más marcado hacia elOccidente) y se salió con una caza más diversificada: jabalí, cabras, corzo, pequeños mamíferos. Se produjoun cambio cualitativo y cuantitativo (g) en la recolección de moluscos (también más marcado en la zonacentro-occidental) Esta reorientación de la estrategia en el marisqueo no tuvo una causa directa en la subidarápida de la última transgresión marina que se produciría después. En el momento clave estaríamos con unnivel del mar a –30/-40m por debajo del nivel actual. Más adelante también se intensificó la recolección devegetales y frutos como estrategia subsistencial.• la delimitación espacial-ecológica.El fenómeno del lapso de dataciones se centra en la vertiente cantábrica. Es decir, se notan las diferencias encuanto a la dinámica ecológica de la vertiente marítima respecto al valle del Ebro, provocadas por lacontinentalidad de esta última zona. También se nota la afinidad entre las dos vertientes del extremo vasco delos Pirineos [31].

Figura 98. Histograma de las dataciones de C14 en el Cantábrico (la flecha marca el hiato comparado con elcorrespondiente al resto de la Península.

g Los yacimientos de Bricia, Penicial, Coberizas, La Riera y Mazaculos corresponderían a ese segundo momento deconcheros básicamente con Monodonta. Los concheros pre-apagón “azilienses” con Littorina estarían documentados porAitzbitarte IV y Pendo. Con Patella, cronología antigua y clasificados de “aziliense” tenemos los sitios de Lloseta y ElCierro. Han dado dataciones antiguas o se han clasificado como “azilienses” pero tienen Monodonta, Lumentxa, LosAzules -Capa superior del nivel 3- y Ekain. En todos estos casos las dataciones han sido consideradas problemáticas.[134]

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0

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Num

.dat

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6000 8000 10000 12000 14000 16000edad Cal BP

CANTABRICO

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6000 8000 10000 12000 14000 16000edad Cal BP

RESTO PENINSULA

VERTIENTECANTABRICA

RESTOPENINSULA

Figura 99. Histograma de las dataciones de C14 "depuradas" y calibradas BP en el Cantábrico (la flecha marca elhiato comparado con el correspondiente al resto de la Península.

EL “APAGÓN CANTÁBRICO” A LA LUZ DE LAS REGIONESVECINAS.El lapso adquiere significado sobre todo en el contexto supra-regional :Como resultado de nuestro proyecto de investigación sobre el Mesolítico en Catalunya a principios de losaños setenta, también pusimos de manifiesto lo que denominamos la crisis “mesolítica” del periodo Preboreal[387]. Pero si comparamos el fenómeno observado en el Cantábrico con la frecuencia de dataciones en laszonas próximas de la Península (el Valle del Ebro, el Centro, los Pirineos y la vertiente mediterránea)podemos observar que no hay equivalencia en cuanto al grado. Sobre un total de 262 dataciones hay una seriede seis yacimientos de la vertiente mediterránea y dos yacimientos de Pirineos que sí cubren el lapso (h).

h De todos los sitios hay 34 yacimientos con dataciones de después de 9,6ka; 14 de antes de 10,12ka BP: pero 21yacimientos que tienen dataciones de antes y de después del agujero. Lo interesante es que de éstos últimos, 8 tienendataciones que cubren el agujero (seis en la vertiente mediterránea: Parco, Filador, Foradà, Gai, Guineu, Cingle Vermell ydos en Pirineos: Forcas y Margineda). Teniendo en cuenta que la única datación (y dudosa) de la vertiente cantábrica erala de Berroberria D, yacimiento situado ya en las estribaciones del Pirineo occidental, eso nos lleva a considerar que el

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Aunque siguen existiendo 13 en los que sí se marca el lapso, podemos afirmar que si bien existe una "crisis",la tendencia está menos marcada en Pirineos y Mediterráneo que en la vertiente cantábrica.

Figura 100. Grafica de las frecuencias de probabilidad acumuladas para las dataciones de las diferentes zonas de laPenínsula comparadas con la curva de temperaturas del Lago Monticchio y con el sondeo GISP de Groenlandia

Hay algún indicio de que algo pasó también en las estrategias de organización de la gente en la vertientemediterránea. El 10ka BP se ha identificado como un punto límite de cambio entre las industrias lítica quetradicionalmente se han clasificado como Epipaleolítico microlaminar I y las del microlaminar II. También seha notado que en ese periodo, para mi “postlapso”, hay una “ausencia de relaciones con el sustratomagdaleniense en la mayoría de los casos” [283]. Es decir, en la forma de los instrumentos de piedra se notacierta continuidad inmediata pero un alejamiento respecto a los de épocas más antiguas del Tardiglaciar,aunque se desconoce que significado social real tiene ese cambio y porqué se produjo. A nivel de la faunaconsumida la alternancia entre dominancia de conejo y de artiodáctilos (ciervo / cabra) siguen esa dinámicade oscilaciones.Es muy interesante comparar la menor visibilidad del lapso en la vertiente mediterránea respecto a lacantábrica, con las diferencias que se aprecian en el detalle de las oscilaciones de las condiciones abióticas.En el sondeo de Monticchio del Mediterráneo central la oscilación Dryas reciente (GS1) no se marca tanto ypor tanto se observa una dinámica más continuada desde el 14ka BP, si la comparamos con las grandescolumnas de referencia nord-atlánticas (GRIP y GISP).Tal vez se podría relacionar el cambio brusco con la primera ocupación después del pleniglaciar de los sitiosde montaña del interior (es decir con un aumento de frecuentación de la montaña). Se ha sugerido unareocupación tardía, a partir de un Preboreal avanzado, de la Meseta, lo que podría estar marcando otradinámica regional diferente (i).

agujero no se marca tanto en la zona de los Pirineos y la vertiente mediterránea (aunque haya 13 en los que sí existe ellapso). La diferencia es estadísticamente significativa.

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Es tentador relacionar la inestabilidad de los primeros siglos del Holoceno (la Oscilación Preboreal) con lapersistencia del fenómeno en la costa cantábrica, o con el nuevo descenso de frecuencias de dataciones que seproduce, en general, alrededor del 9ka BP.Esa situación contrasta con la estabilidad del periodo siguiente (j). La diversificación de las bases de lasubsistencia durante ese periodo siguiente permitiría una mayor estabilidad económica, a la vez que produceuna más marcada regionalización de las estrategias de gestión de los recursos y tal vez una menor movilidadde la población.Este último fenómeno, de una posible menor movilidad habitual de la población, se cruza con una fluidacirculación de ciertos elementos ideológicos y tecnológicos, como es el caso de la Columbella rustica [15].Este caracol (la trompetita), con apenas un centímetro y medio, se utilizó como elemento social ornamental,perforándolo. Así “llegó” mucho antes y más lejos que las improntas de otro molusco, el Cardium, sobre lacerámica del Neolítico antiguo (k).

i La recolonización definitiva de la Meseta después del máximo glaciar [según 82] no se produciría hasta entrado elPreboreal (después del “agujero”) , tal vez con la excepción de los yacimientos de Uña y Níspero (en el norte de laMeseta).

j Que se ha descrito como “un continuum marcado por la geometrización hasta la neolitización cerámica” [33 p.515]. Esdecir como un proceso de desarrollo continuado.

k En la Arqueología prehistórica, algunos autores/as toman la cerámica decorada con impresiones producidas por el bordede un berberecho (Cerastoderma edule o Cardium edulis), como indicio de la expansión de grupos agricultores. Encambio no han tenido en cuenta la anterior “circulación” mucho más amplia del molusco Columbella. En rigor, aplicandolas mismas premisas inductivas deberían haber concluido que hubo una expansión o una circulación de grupos mesolíticosprevia a la "neolítica cardial".

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REPERCUSIONES MÁS ALLÁ: LAPSOS EN LAS HISTORIAS DEOTRAS ZONASPodemos intentar rastrear “el agujero” más allá: en la Francia mediterránea hay un lapso después del 10ka BPen muchos yacimientos. Después se generalizó el consumo de vegetales y aumentó la diversidad de las faunasexplotadas, en concreto aumenta el jabalí, sustituyendo subsistencias más centradas en la caza de ciervos ocabras. En Provenza el lapso de dataciones se marca, por ejemplo, en la secuencia clásica del yacimiento AbriCornille [267].Si tomamos el camino del norte vemos reproducirse el lapso (10,1-8,5ka BP) en todo el norte de Europa: en elnorte de Francia, en Bélgica, en el norte de Alemania hasta Polonia. En el sitio Calowanie, cerca de Varsovia,entre el Nivel V (datado en 10,5 ka BP) y el VII mesolítico (de 9,2 ka BP) se observan niveles de dunas,gyttja (l) y turbera sin ocupaciones.Si saltamos al sitio Franchthi, en la Argólida de Grecia, vemos [112] que, después del estrato V consideradoPaleolítico superior, se produce un hiato entre 10,46 y 9,43 ka BP. y después hay una ocupación delMesolítico en el nivel W. En la publicación de ese yacimiento no se descarta como explicación que la grancaída de piedras del nivel intermedio pudiera haber sido causada por terremotos, pero los depósitos de tefrasvolcánicas más importantes, que parecería más lógico asociar a ese tipo de causas, están en los niveles másantiguos datados hace 27-28 ka BP y entre 35-30 ka BP.Incluso al otro lado del Mediterráneo, en el centro del valle del Nilo, una amplia campaña de prospecciones y355 dataciones dieron como resultado un vacío de fechado entre 11 y 8 ka BP [80]. Los autores del trabajoatribuyen a este lapso algunos conjuntos de industrias de piedra recuperados en siete sitios de los que notienen ninguna datación y por tanto sin prueba definitoria. Sin embargo, ven el tipo de industrias líticas comoelementos ajenos, intrusivos, respecto al mismo tipo de restos del periodo precedente. En este caso noatribuyen el lapso a una causa ambiental directa, sino a una tensión social que se habría ido acumulando desdelas intensas inundaciones producidas durante el 12 ka BP. Esta desocupación del valle del Nilo la contraponena la contemporánea reocupación del Sahara a partir del 9,5 ka BP. Se vaciaría el Nilo pero se desplazaría lapoblación hacia el Oeste.

En todas partes en el Mesolítico se habría producido un incremento del sedentarismo y la ampliación delespectro de recursos alimentarios aprovechados (hacia la pesca y recolección sobre todo). Se ha señalado quelos tipos de conjuntos de bienes producidos se restringen a zonas cada vez más cerradas y reducidas [385].Aunque se ha visto que existen elementos que trascienden esos límites (ciertas materias primas, bienes dereproducción social y técnicas de producción en serie de instrumentos con formas geométricas). En cuanto alinstrumental lítico una primera fase después del hiato se asocia con frecuencia a piezas que algunos autoreshan denominado “unortodox” [136] o “atípicos” (“esquillés”, “machurees”...). Una posible interpretación esque se produce instrumental de bajo valor objetivo: se intenta un ahorro en el esfuerzo de producción delinstrumental, esfuerzo que sería necesario desviar hacia otras esferas de las estrategias organizativas [365 y134, 133].

EL CAMBIO BRUSCO COMO POSIBILIDAD DE EXPLICACIÓNNo haría falta recurrir a un fenómeno de largo plazo para buscar una causa de algunas perturbaciones socialeslocales. El cambio climático en este caso es un fenómeno súbito. En el Cantábrico por ejemplo habría bastadoincrementar el doble las nevadas, como lo que se ha documentado en Groenlandia, para acabar con la mayorparte de los ungulados (muy sensibles a la disminución drástica si ya están sometidos a un control severo porla continuada presión cinegética precedente). La población de ciervos por su tamaño, requerimientosalimentarios y etología sería la más sensible al cambio y podría caer en una dinámica de no recuperación desus efectivos. Bastaría una secuencia de tres inviernos especialmente húmedos para acabar con lasposibilidades de mantener una economía de caza muy centrada en esa especie (tal como parece que fue laCantabro-Asturiana del final del Dryas reciente).

l Gyttja es un tipo de sedimento propio de cienagas y bordes de launas: limo de color marrón oscuro muy homogéneocompuesto por partículas de materia orgánica, precipitaciones inorgánicas y material mineralizado, con un contenido deCarbono orgánico menor del 50%.

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Por nuestra experiencia en un ambiente semejante al de ese paisaje finiglaciar pensamos que los vallesabrigados costeros serian la perfecta trampa mortal para los rebaños de ungulados, si además las nevadas noestán acompañadas de viento.El problema es que de haberse dado el caso, e incluso al margen de la propia inercia social, la salida no debióser fácil: las cosechas de avellanas o bellotas, favorecidas a la larga por la reforestación del clima mástemplado preboreal, no se multiplicarían instantáneamente. La sustitución de una especie de molusco marinodominante por otro de requerimientos más adecuados al cambio de temperatura del agua y de las corrienteslitorales tampoco pudo ser inmediato, por su lento ritmo de colonización pero sobre todo de crecimiento. Lariqueza de nutrientes en este caso está muy ligada a la cantidad de biomasa vegetal terrestre que fluye al mar,como se ha sugerido en otros casos de explotación de este tipo de recursos litorales [287]. No es extraño queen las fases anteriores de menor cobertura vegetal los grupos humanos se concentraran en la recogida demalacofauna de estuario (zona más rica en nutrientes). En todo caso si la alternativa fue incrementar deinmediato la explotación de los recursos costeros, el principal registro –los asentamientos y los concherosconsecuencia del consumo de los moluscos en la misma orilla del mar- estarían hoy a 30m por debajo delnivel actual del Cantábrico. Por tanto si la gente resolvió momentáneamente la crisis de los ungulados así,incrementando su dependencia de los recursos marinos las pruebas no se han podido recuperar. El nivelmarino no se acercó al actual hasta un momento posterior, que corresponde a la multiplicación de loshallazgos de yacimientos con concheros.Haciendo un chiste podríamos decir que con la llegada del buen tiempo salieron todos de las cuevas y sefueron a la costa a comer frutos del mar.La alternativa es mas triste: pensar que se murieron de hambre y que durante unos siglos la costa cantábricafue un desierto despoblado, o que la gente se refugió en otros lugares, buscándose la vida comiendo caracolesterrestres y apurando las aves…

Como es natural, esta hipótesis no es más que una sugerencia para demostrar que una explicación de cortoplazo es plausible y pueden formularse otras muchas alternativas. La ventaja es que ahora se puede llegar averificar. Por supuesto eso implica que hay que continuar profundizando en el análisis de la evidencia.¡Afortunadamente para las personas que investigamos, nuestro trabajo no se ha acabado!En el caso del Cantábrico una serie de nevadas extraordinarias (en mi ejemplo) podría ser detonante suficiente(y es verificable con la Arqueología). La demora en la generación de alternativas viables podría ser causa depersistencia del lapso. Aunque el cambio climático brusco afectó globalmente a toda la población mundial, notuvo en absoluto la misma repercusión social. Ni tan sólo en los dos extremos del istmo pirenaico. Tampocola tuvo el cambio anterior (Allerød GI1) de igual velocidad y amplitud. A pesar de la crisis, la mayor parte dela gran fauna del Cantábrico de ese momento no se extinguió del todo. Todo esto es muy significativo. Nosindica que nos equivocaríamos si quisiéramos atribuir a las condiciones ambientales el papel de causadeterminante. En este caso podemos pensar que lo determinante fue el desarrollo a lo largo de todo elTardiglaciar de un sistema cada vez más especializado y dependiente, centrado en la caza de ciervos.Ignoramos cual sería el grado de balance alcanzado entre el potencial demográfico y la capacidad dereproducción de los ungulados (el nivel o intensidad de la caza, la cantidad de gente y la biomasa deherbívoros), pero al fallar una variable todo el sistema pudo venirse abajo con facilidad. El cambio climáticobrusco actuaría pues como detonante de una situación ya de por sí frágil.

En este caso del problema del Cantábrico, para incorporar la posibilidad de los efectos del cambio brusco a laexplicación, y poder verificar esta posibilidad, habría que comenzar revisando, por ejemplo, lasadjudicaciones de las ocupaciones a las fases o periodos climáticos que se establecieron en los años setenta-ochenta (m). Se basaron fundamentalmente en una propuesta original de 1974 [239] y hoy en día existe unmarco de referencia global más fiable. Esto significa como he señalado en el segundo capítulo que nodeberían sincronizarse depósitos sedimentarios semejantes, como se hacía antes, sino que debe explicarse ladinámica particular de la estratificación en cada sitio por el efecto de los cambios globales en su formación ycomprobar luego el alcance de las recurrencias de cada momento. Una recurrencia notable (que se observadesde el sitio de Los Azules a Berroberría y hasta Catalunya) para este momento Holoceno temprano podríaser, por ejemplo, la existencia de series de finos niveles de formación rápida en los que se alternan coloresrojo-amarillentos con otros más oscuros.

m Se propusieron en base a la Sedimentología de las cuevas [179]

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Debido a los cambios bruscos, no se debería utilizar la fauna de mamíferos como elemento de sincronizaciónporque es demasiado dependiente de la acción antrópica o puede reaccionar demasiado rápidamente antecambios menores aleatorios. Por esta causa no es extraño que aparezcan restos de reno o de mamut en unestrato formado en el Interestadial templado GI1. Esta presencia de fauna fría podría perturbar la explicaciónpor no ser coherente con las características del resto de la fauna o el significado de la estratificación.Además no se puede inferir el cambio en las condiciones abióticas a partir de los conjuntos de fauna grande,cuando pretendemos verificar si es afectada, y cómo, por cambios bruscos.Los procesos de reforestación, tal como se documentan en las cuevas no son tampoco un buen sistema desincronización: no se ha alcanzado, a mi modo de ver, una imagen clara de cómo se produce a escala local, nide la velocidad con la que se produce.Pero sí se debería enfatizar y generalizar, a todos los yacimientos, los análisis a nivel micromorfológico de losprocesos sedimentarios y los programas específicos de dataciones radiocarbónicas dirigidas a la resolución decuestiones concretas: resolver problemas de la estratificación, de la formación del sitio, de los procesos yvelocidades de depositación, etc., tal como se han empezado a realizar en algunos sitios.

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Figura 101. Comparación de las periodizaciones para el Tardiglaciar desde la establecida tradicionalmente en base ala secuencia de pólenes, las fases de [179] para el Cantábrico y la más reciente en [197, 199, 196] que incorpora los

datos de los sondeos de Groenlandia y otros proxis. Las discordancias mayores (que marco con flechas) son muysignificativas e implican la necesidad de revisar las atribuciones que se han hecho con los sistemas antiguos.

También se comparan las fechas C14 BP en bruto con las calibradas para poner de manifiesto el corrimiento que seproduce (según los autores alemanes) mediante la calibración.

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0 CONCLUSIÓN FINAL

No es acertado pensar que los cambios bruscos en las condiciones ambientales no afectaron a unas sociedadesprehistóricas que dependían de la reproducción espontánea de los recursos animales y vegetales. Sin embargoparece evidente que no existe una determinación ambiental, de los cambios bruscos en este caso, sobre lassociedades cazadoras-recolectoras [135]. Dominante y condicionante no son lo mismo, aunque forman partede una misma cosa: la causa del cambio.Los distintos estados de desarrollo social pueden transformar las causas determinantes en causascondicionantes o desencadenantes. Un meteorito sobre la zona de Washington no produciría la mismacatástrofe sobre el planeta hoy, que hace 6000 años. Los cambios ambientales son la causa fundamental de laSelección Natural que nos transformó en homínidos, pero tuvieron una influencia menor sobre el cambio quenos hizo agrícolas. Una serie de años climatológicamente anómalos pueden repercutir de manera mucho másgrave sobre una sociedad agrícola que sobre una sociedad cazadora. Como hemos visto los volcanes son otroejemplo de cómo esa interacción entre cambio brusco e historia social es compleja.A diferencia de los cambios paulatinos milenarios, en el caso de los cambios bruscos está involucrada la tomade decisiones conscientes y por tanto es un proceso sometido a múltiples alternativas. Frente a los cambiosbruscos las sociedades no siguen una trayectoria unívoca. Aunque pueden desencadenar un cambio en lasociedad no marcan necesariamente su dirección. Esta forma de ver encajaría en lo que se ha denominado lateoría del caos determinista: una minúscula variante en la situación de partida puede inclinar en definitiva elrumbo de las decisiones / acontecimientos hacia una u otra dirección (atractor en la terminología de la Teoríadel Caos Determinista).Sin embargo si enfocamos los procesos sociales y establecemos una jerarquización de los factores, elproblema de la indeterminación se reduce notablemente.La contradicción dialéctica, en el sentido más clásico del materialismo dialéctico de Marx y Engels, entre ladualidad “orden y caos” planteada por la ciencia moderna permite afrontar desde esa perspectiva teórica elproblema. Así en nuestro último ejemplo no es lo mismo el proceso de “difuminación de las reminiscenciasaziloides”, la “mesolitización y postazilianización” que la “asturianización”. Aunque podríamos pensar quelas diferencias pudieron ser debidas a variaciones casi aleatorias en la combinación de múltiples factores, locierto es que existieron condicionantes históricos, cognoscibles, que determinaron el efecto y las trayectoriasdiferenciales.Pero lo más interesante son las conclusiones que se obtienen de un análisis comparativo. Por ejemplo, elcambio abiótico del 14 ka BP fue drástico y fulminante. Más tarde el desbordamiento del lago Agassiz en unaño detonó un cambio en la temperatura del planeta que sufrió un milenio de frío (el Dryas reciente). Aunqueel momento concreto fuera aleatorio, el vertido catastrófico era previsible en el periodo (reguladoastronómicamente) del calentamiento global que había sucedido al Último Máximo Glaciar del ciclo climáticofrío. No se ha buscado todavía seriamente ningún reflejo arqueológico de que ese cambio brusco hubieracomportado un cambio social apreciable. Pero de momento el registro que tenemos es que sólo “estimuló”,como máximo, el proceso de “azilianización”, el cual no implicó ninguna ruptura cualitativa.Bien distinta es la consecuencia del calentamiento Preboreal hacia el 10ka BP. La diferencia a mi entenderentre el 14ka BP y el 10 ka BP no estriba en el aumento disruptivo de la cantidad de abedules, avellanos, ociervos, ni tan sólo en la cantidad de gente. La disparidad está en que la relación entre el nivel de explotaciónde los recursos y el del desarrollo social (incluido el demográfico) no había alcanzado el mismo nivel. Comohe señalado en los otros ejemplos la superación de determinados dinteles en la organización social es el factormás determinante del efecto de los cambios bruscos. Así se explicaría porqué el cambio al Preboreal afectamenos al global de las sociedades peninsulares que el cambio, de mucho menor profundidad y alcancecronológico, que debió producirse dos milenios más tarde y que se ve reflejado en un hiato más corto peromás universal que el que he detallado. El nivel del desarrollo social (que incluye el del nivel demográfico) esvector direccional determinante ante a cambios bruscos. Las sociedades cazadoras-recolectoras tienencapacidad de reacción estratégica frente a cambios bruscos. Así es inapropiado poner el énfasis de la causa delfin de estas sociedades y de la irrupción del Neolítico (de sociedades con agricultura y ganadería) en loscambios climáticos del final del Cuaternario [365].

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La diferencia entre cambio súbito y catástrofe tampoco estriba en la magnitud del cambio físico externo sinoque está determinada por la propia estructura y los dinteles sociales de resistencia de las sociedades humanas.Un fenómeno (unas nevadas extraordinarias) que puede acabar con una sociedad cazadora-recolectora nocausa más que una ligera perturbación en la sociedad industrial del siglo XXI y viceversa, un fenómeno queapenas perturba aleatoriamente a una parte muy restringida de una sociedad cazadora-recolectora (recordemosla explosión del volcán del lago Laacher) podría perturbar de forma muy profunda a una sociedad como laeuropea actual.

El énfasis en el gradualismo y la inercia o empeño de la Académia en negar la relevancia de los cambiosbruscos, y las catástrofes que producen, en el devenir de las sociedades ha expulsado de las monografíasarqueológicas a la investigación sobre este tipo de fenómenos (a).La insistencia en buscar regularidades y ordenamientos lógicos y causas mecánicas sencillas era un paso talvez necesario en la Historia de la Ciencia. El hecho que se deba revisar esta actitud no implica defectos en laaplicación del método científico, sino que es en realidad la demostración de su principal virtud. Unaafirmación sólo se puede realizar científicamente cuando es posible formular lo contrario. No tiene demasiadosentido afirmar lo que no tiene discusión posible. Esa es una interesante paradoja. La cuestión entonces esdecidir cual de las vías alternativas seguir. Como norma en el método científico se escoge la que pasa por serla más probable, o lo que es lo mismo, la forma más coherente de conectar los datos existentes en cadamomento. En este caso he revisado un registro arqueológico, que se construyó bajo la premisa de que loscambios ambientales son paulatinos, siguiendo el esquema de grandes periodos glaciares alpinos. Enfocadobajo la perspectiva de que existen cambios bruscos y/o catastróficos que están inmersos en los ciclos de largaduración la evidencia necesita otra explicación más compleja.He pretendido mostrar que hay cabos sueltos en el entramado de la explicación que se deben justamente a esteproblema. La mayor complejidad no es sinónimo de incomprensibilidad, ni de aleatoriedad, ni nos obliga arenunciar a formular leyes sobre la conducta social, como he expuesto en el primer capítulo.Una baja posibilidad tampoco es sinónimo de imposibilidad: es más improbable (y menos frecuente) unmeteorito de 10km de diámetro que una “lluvia de estrellas”, pero los primeros han caido y han tenido unarepercusión más profunda en la Evolución. Que el impacto de un meteorito pudo influir en el fin de la formahumana neanderthal es poco probable. Es más lógico, en principio, pensar en una causa climática o en unainteracción con la forma humana que ha perdurado hasta hoy. Sin embargo ese “ocaso neanderthal” podríaestar sincronizado con las anomalías en la atmósfera dificiles de explicar y existe el crater Barringer que sesitua hacia la misma época (entre el 40 y el 30 ka BP). Estudiar si existe correlación es un imperativo.La introducción de la consideración del cambio brusco y de su interrelación con los cambios a largo plazo enel estudio arqueológico es imprescindible. Ayudará a entender los cambios de dirección o las interrupcionesen el desarrollo humano prehistórico. Los nuevos sistemas analíticos nos van a permitir profundizar más alláde los cambios paulatinos de baja frecuencia dominantes: se podrán analizar los elementos desencadenantesbruscos y el efecto de catástrofes, frente a los que la reacción humana alternativa y las decisiones han tenidoun papel determinante. Esta será la única manera de superar ciertas explicaciones insuficientes.He querido demostrar que existen bastantes probabilidades de que las acciones de las sociedades humanas,incluso las menos desarrolladas tecnológicamente, hayan tenido un papel determinante en la extinción de losmamíferos más grandes. No es imposible, pero no es probable que la actividad cinegética humana en elTardiglaciar tuviera el papel tan determinante sobre el cambio de la vegetación y del clima que Zimov [417]pretende adjudicarle. Sin embargo es poco probable que la caza no haya tenido ninguna incidencia en laextinción de la megafauna euro asiática y americana, como pretenden algunos autores que rechazan laposibilidad o la capacidad de los humanos en cambiar decisivamente el futuro del planeta.El aprendizaje de este tipo de experiencias humanas frente a los cambios bruscos, además de permitirnosevaluar mejor las condiciones y capacidades sociales prehistóricas debería permitir enfrentarnos de una formamás racional y planificada al futuro.

a Un problema distinto era la falta de coherencia lógica interna motivada por la interferencia de una ideología metafísicaen las explicaciones histórico-culturales. Se pretendía que los cambios culturales eran bruscos e independientes (lasustitución de unas culturas por otras) pero que estaban sincronizados (por alguna extraña razón no investigada) con loscambios climáticos paulatinos.

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EPÍLOGO O GUINDA FINAL:

EL FASCINANTE CASO DE PHANOURIOS MINUTUS, LAEXTINCIÓN DE UN PEQUEÑO GRAN ANIMAL: EJEMPLO PARALA ESPECIE HUMANA EN EL FINAL DE LA CUENTA ATRÁSDesde que conocí su existencia quedé atrapado por la extrañeza de la especie Choeropsis liberiensis, que seme apareció como el paradigma de la contradicción: un hipopótamo enano (a). Desde entonces he queridotener uno como mascota y, aunque tuve sucesivamente un canario, dos hámsteres y varios perros, estosanimales nunca me acabaron de llenar del todo, como lo habría hecho el tener un hipopótamo en la bañera decasa.

Figura 102. Hipopótamo enano africano.

Mucho más tarde me interesé por el problema criptozoológico del Kilopilopitsofy, el hipopótamo enano“fantasma” de Madagascar, enigma aún sin resolver (b). Así pues el libro de A.H.Simmons [329] sobre laextinción del hipopótamo pigmeo de Chipre (Phanourios minutus Cuvier) no pudo pasarme desapercibido yno he podido evitar comentar el caso antes de cerrar este libro porque además nos puede ayudar a entender lapeliaguda problemática de los elefantes.Chipre es una de las grandes islas del Mediterráneo y como éstas (a excepción de Sicilia) nunca estuvoconectada a tierra firme durante el Cuaternario. Así la fauna terrestre cuaternaria tuvo que llegar flotando onadando. Esto último, en el caso de los dos grandes mamíferos, el elefante (Elephas cypriotes Bate) y el

a Choeropsis liberiensis no es en realidad una enanización de la especie de hipopótamo africano (Hippopotamusamphibius) sino que pertenece a un género distinto. Fue descrito en 1814 pero no se conoció bien en Europa hasta 1913 enque fueron traídos varios ejemplares.

b El hipopótamo de Madagascar se extinguió probablemente por la acción humana hace unos mil años. El problema delpresunto avistamiento en tiempos subactuales de algún animal aislado superviviente que los habitantes de la isladenominaron Kilopilopitsofy fue publicado como un caso de crioptozoología en la revista American Anthropologist [62].

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hipopótamo pigmeo (c) que la habitaron, no es sorprendente. La distancia mínima de 30-40km que debióseparar la isla del continente en algunos momentos del Cuaternario permite su visualización desde elcontinente y tanto hipopótamos como elefantes han demostrado que pueden atravesarla nadando sin problema(también estuvieron presentes en otras islas del Mediterráneo, como Creta o Malta)(d).Se trata de un ejemplo más de la extinción de especies endémicas de mamíferos insulares. Es muy posible queesa fauna mastológica mayor en islas, como las mediterráneas, haya padecido una serie de momentos deestrés a causa de la oscilación entre sobrepoblación (por ausencia de depredadores) y reduccionescatastróficas (por sobreexplotación de su nicho o por momentos de adversidad abiótica). Ello podría explicarla velocidad evolutiva y la tendencia al enanismo de estas especies. La rareza de sitios arqueológicos confauna extinta hizo que muchos autores pusieran en duda la acción antrópica prehistórica como factor deextinción de la fauna insular. Sin embargo, en los casos históricos conocidos la actividad humana ha sido unfactor claramente determinante del exterminio en islas. La caza directa, la introducción de factores decompetencia –bien sean especies transportadas o por destrucción y sustitución del nicho ecológico o inclusopor enfermedades parasitarias importadas- han sido históricamente las mayores causas de la extinción defauna insular endémica. Como en el caso de la gran fauna del Cuaternario continental, la supervivencia a lolargo de todas las oscilaciones del Cuaternario reciente de las especies de mamíferos insulares y el quedesaparezcan en momentos distintos en cada isla, obligaría a no atribuir su desaparición a causas meramenteabióticas, de clima.Como he comentado el “efecto isla” tiene la virtud de exagerar ciertos procesos naturales y sociales, y lasconvierte en laboratorios idóneos [107].¿Qué tiene pues de extraordinario el caso de Chipre, que nos pueda servir para resolver incógnitas?Los restos paleontológicos de Phanourios en Chipre son conocidos desde el comienzo del siglo XX (fueronpublicados por D.Bate en 1905) y se han encontrado en varias decenas de yacimientos. Es muy probable quela llegada a la isla se produjera mucho antes, pero ninguna de las dataciones obtenidas para los restos de estaespecie es anterior al último máximo glacial (e).No existen dataciones fiables después del 6ka BP y tampoco asociación fiable de restos de esta especie en loscontextos del Neolítico precerámico bien conocido de la isla (entre hace 9000 y 7500 años cal BP). Por elcontrario, la presencia en la isla desde épocas prehistóricas de otras diez especies “silvestres” de mamíferosterrestres (que incluyen el muflón, el gamo y el jabalí) se ha atribuido al transporte humano pues no se handocumentado en épocas anteriores a los asentamientos humanos del Neolítico precerámico.La problemática de la extinción del hipopótamo pigmeo se centra en el sitio de Aetocremnos, en el sur de laisla, y tal vez en el de Akanthou Arkhangelos Mikhail al norte (f). Puede constituir un clarificador ejemplo decatástrofe biótica humanamente inducida.

La presencia humana está perfectamente documentada y datada en el primero de los dos sitios citados en unmomento anterior al Neolítico de la isla [329]. Se trata de un abrigo derrumbado situado en el talud al pie deun acantilado erosionado en el extremo de la península de Akrotiri. El yacimiento excavado, de unacincuentena de metros cuadrados, está hoy a 40m sobre el nivel del mar y a unos treinta de la cumbre delcantil. Se interpretó como un sitio de caza (tal vez despeñando a los animales). Había más de 200.000 restosde hipopótamo (correspondientes a más de 500 individuos) en esos pocos metros cuadrados, un verdaderomagma de huesos, algunos calcinados, rotos intencionalmente y con marcas de cortes. Además hay restos de c Phanourios era un hipopótamo del tamaño de un cerdo grande con un peso estimado de unos 200 kilos para ejemplaresadultos. Con unas adaptaciones endémicas que le atribuyen una locomoción mas corredora y trepadora y menos adaptadaal medio acuático comparado con las especies de hipopótamos actuales, una alimentación menos acuática y una conductagregaria.

d Recientemente ha habido incluso noticias de jabalís y cérvidos nadando a esa distancia de la costa avistados porpescadores en el Mediterráneo.

e Si efectivamente pasaron en el momento del máximo glacial esto habría coincidido con el máximo stress abiótico deestas especies en el continente y con el momento en que el brazo de mar a superar habría sido mínimo por la regresiónmarina. Si así fuera deberíamos pensar que el fenómeno del enanismo es muy rápido en las islas aunque se estabiliceluego (el enanismo de los mamuts de la isla de Wrangel no sería pues más que otro caso parecido).

f Desde la invasión del ejercito turco, que se produjo como respuesta al golpe de estado ultraderechista griego, no se hanrealizado investigaciones de este tipo en la parte norte de la isla.

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hogares, instrumental de piedra tallada y huesos de otros animales aunque en mucho menor número: más de3000 restos de aves, 229 fragmentos de hueso correspondientes a 3 elefantes enanos y algunos restos deserpientes y de tortuga. Unos pocos fragmentos de gamo y jabalí -o cerdo- se atribuyen a elementosdecorativos (de vestidos). El yacimiento tiene dos estratos con un contenido arqueológico muy semejanteseparados en algunos lugares por una fina capa estéril. Las numerosas dataciones absolutas realizadas sereparten desde el 11,72ka BP hasta 3,7ka BP, agrupándose alrededor de dos momentos antes y después de unlapso muy significativo entre 10,15 y 9,49 BP. El problema de las dataciones es que cuando se tienen encuenta las más fiables aparece una inversión porque las del estrato inferior son ligeramente posteriores a lasdel superior. Los autores realizan un profundo análisis y discusión de estos datos señalando que lasposteriores al 9ka BP están contaminadas, que los huesos dan dataciones en general agrupadas alrededor del9,4ka BP (excepto una de 10,770 BP) mientras que los carbones dan fechas siempre anteriores a 10ka BP, ylas conchas muestran un “efecto reservorio” que envejecería las fechas en más de 350 años. Así puespromedian todas las dataciones y obtienen una fecha estimativa de hace 10529±26 BP (es decir hace entre12009 y 11706 años calendario, estimativamente hace ahora 11829 años). Considerando todas las datacionesy correcciones obtenían para el estrato superior 10508±28BP y para el inferior 10618±76 BP, lo que lesconfirmaría dos ocupaciones sucesivas del sitio en un lapso de tiempo muy breve.La interpretación propuesta por los investigadores es que se trataría de grupos de gentes venidas del Levantemediterráneo –cazadores-recolectores o pre-neolíticos- que se asentarían en la isla, cazando hasta su extincióna los animales endémicos. Para demostrar esta extinción antrópicamente inducida plantean una serie demodelos o supuestos basándose en las posibles densidades de población de humanos y animales y en lademanda de alimentos que plantearían los humanos. Una vez agotado este recurso la gente habríadesaparecido (¿abandonado?) de la isla y sólo 4000 años después regresarían otros grupos, con unasubsistencia basada ya en la agricultura y que además traerían consigo animales hoy silvestres (como el jabalí,el gamo de Mesopotamia y el muflón), que tal vez dejaron escapar para cazarlos.Independientemente de la posibilidad interpretativa que plantean los autores del libro, lo cierto es que tanto sien origen fueron gente cazadora recolectora (mesolítica) como agricultora-ganadera (neolítica precerámica),cuando llegaron a la isla no se dedicaron a la agricultura sino a explotar un recurso fácil pero frágil: losmamíferos autóctonos no habían tenido depredadores, por lo que habrían perdido toda respuesta de huidadefensiva y probablemente se habrían adaptado a un ciclo de reproducción lento.Los datos pueden interpretarse y modelizarse como hacen los citados autores: un breve período deasentamiento de una comunidad, pero también como una serie de visitas cortas y repetidas. En ambos casos elresultado de extinción sería el mismo. Sólo hace falta recordar que un grupo reducido de gente, inclusoplanteando una demanda mínima de carne, consume una gran cantidad de animales: 30 personas a sólo mediokilo de carne diario demanda 15 Kg. Esto significa que deberían consumir al menos un hipopótamo pigmeoadulto entero (80kg de carne) cada cinco días. En definitiva, 73 animales adultos anuales, lo cual exigiría unmínimo de 730 animales viviendo en esa zona de la isla. Esta cifra es una apreciación demasiado optimistapara un biotopo que ya habría estado en frágil equilibrio (g).Pero un cálculo más realista daría cifras aún más catastróficas. Basándonos en una exigencia de 3000 caloríaspor persona día (lógica si tenemos en cuenta el necesario esfuerzo físico) y en una subsistencia basada en un60% sobre ese recurso fácil, podemos suponer una demanda de 1,35kg de carne al día por persona, o lo que eslo mismo 6 Phanourios adultos enteros por persona al año. Esto equivale a 180 animales para un grupo de 30personas (que es un tamaño estándar para un grupo humano cazador recolector mínimo viable). Estaríamoshablando de una población-fuente mínima de 1800 animales para mantener el sistema, y eso es claramenteimprobable. Además supondría una explotación controlada restringida a animales adultos no reproductorespara garantizar la sostenibilidad, lo cual no parece ser el caso por los huesos encontrados.Tanto si se produjo una explotación lenta y aplazada por parte de una gente asentada establemente en la islacomo si las técnicas de caza (-por despeñe) empleadas produjeron masacres colectivas indiscriminadas, esperfectamente comprobable que una actividad humana –pre-agrícola- pudo acabar con esta fauna.Así pues la evidencia de Chipre no sólo muestra la complejidad de las relaciones entre humanos y animales(h) durante el proceso de domesticación y desarrollo de la ganadería, sino que demostraría que las extinciones g Una estimación basada en la densidad de población de animales semejantes y en condiciones ambientales desfavorablespermiten estimar una población máxima de 216 animales (2 por Km. cuadrado) en la península.

h Parece una increible coincidencia: al hipopótamo enano se ha denominado Phanourios. Este es nombre de un santogriego (se celebra el 27 de agosto) al que se recurre para encontar cosas perdidas y que al parecer era en realidad el mismoSant Jordi. Esta coincidencia con el nombre del autor de este libro cierra el círculo que abrimos en la página 0.

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en las islas pudieron ser episodios súbitos causados por la actividad antrópica. Este caso nos sirve para llegara la conclusión de que una masacre como ésta puede pasar fácilmente desapercibida, sin dejar demasiadosrastros de matanzas ni de ocupación humana. También demuestra que no es necesaria la destrucción delmedio como consecuencia de las labores agrícolas, ni la competencia o la incidencia inducidas por otrosanimales introducidos antrópicamente. En definitiva, la caza realizada por visitantes esporádicos (desdeépocas pre-neolíticas) en otras islas del mediterráneo como Córcega, Cerdeña e incluso tal vez Las Balearespudo ser el detonante o agente final de las extinciones de los mamíferos mayores insulares.

POSTSCRIPTUMAcabada la primera redacción de este libro saltó a las páginas de las revistas científicas de impactonorteamericanas el hallazgo de unos de restos de homínida encontrados en la isla de Flores y quecorrespondían a una forma enanizada de Homo erectus.[85]La peculiaridad es que ha sido datada hace sólo 18ka BP, es decir decenas de miles de años después de lapresunta desaparición completa de esa forma humana paleoantropina.Este hallazgo no sólo es una demostración de la capacidad de adaptación de los grandes mamíferos y dehomínidos en particular, de su posible supervivencia en condiciones extremas, de aislamiento einsularización, sino un aldabonazo de atención frente a la rigidez y la fijación de los conocimientos quetenemos sobre la Prehistoria. Es una lección de humildad que nos ha dado la pequeña homínida. También nosadvierte de la importancia de conocer tanto "el primero" de cada clase o fenómeno, como la "última de laúltima (homínida) de su especie".

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ÍNDICE

JUSTIFICACIÓN .................................................................................................................................................... 1

ADVERTENCIA: EL INICIO DE UNA CUENTA ATRÁS ............................................................................. 3

PARTE PRIMERA: CATÁSTROFES Y CAMBIO SÚBITO........................................................................... 5

10. DESARROLLO DEL ANÁLISIS CIENTÍFICO DEL CAMBIO .............................................................. 6

CAMBIO LENTO, CAMBIO BRUSCO, TEORÍA DEL CAOS O DIALÉCTICA DE LOS SALTOS DEESTADO. ............................................................................................................................................................. 11CATÁSTROFE Y CAMBIO SÚBITO: DEFINICIÓN DE ALGUNOS CONCEPTOS: ................................ 16

DETONANTE, CAUSA DOMINANTE Y CAUSA DETERMINANTE.................................................... 18

9. LA MEDIDA DEL CAOS: COMO MEDIR LA BRUSQUEDAD DEL CAMBIO.................................. 21

8. LOS CAMBIOS BRUSCOS DE CLIMA ....................................................................................................... 33

CAUSAS Y FACTORES DE CAMBIO CLIMATICO..................................................................................... 38ELEMENTOS QUE INTERVIENEN SIGNIFICATIVAMENTE EN LOS CAMBIOS CLIMÁTICOS. ......... 40

CAUSAS EXTRATERRESTRES .................................................................................................................................40CAUSAS INTERNAS ....................................................................................................................................................42LAS RELACIONES DE CAUSA / EFECTO ...............................................................................................................45

LOS CAMBIOS CLIMÁTICOS SÚBITOS....................................................................................................... 45LOS EVENTOS DANSGAARD-OE SCHGER Y HEINRICH......................................................................... 46LOS EFECTOS CATASTROFICOS DE LOS DESAGÜES DE LAGOS EN EL TARDIGLACIAR.............. 46

CONCLUSION: CAMBIOS CLIMATICOS Y CAMBIOS SOCIALES......................................................... 53

7 METEORITOS Y PALEOMAGNETISMO................................................................................................... 57

CAÍDAS DE CUERPOS CELESTES: DEL ESCEPTICISMO A LA DUDA................................................. 57PALEOMAGNETISMO ..................................................................................................................................... 61

6 EL VULCANISMO............................................................................................................................................. 63

MEGA-ERUPCIONES EN LA PREHISTORIA ANTIGUA. .......................................................................... 66EFECTOS DEL VULCANISMO SOBRE SOCIEDADES MÓBILES Y SEDENTARIAS.............................. 67

5 TERREMOTOS Y TSUNAMIS........................................................................................................................ 69

EFECTOS DE TERREMOTOS.......................................................................................................................... 69LOS TSUNAMIS Y LA PREHISTORIA........................................................................................................... 70

LOS INDICIOS: CÓMO SE PUEDEN DETECTAR...................................................................................... 70LAS CONSECUENCIAS DE TSUNAMIS ....................................................................................................... 72TSUNAMIS Y SOCIEDADES PESCADORAS-CAZADORAS-RECOLECTORAS........................................ 72

CONCLUSION: LA RELATIVIDAD CONYUNTURAL DEL EFECTO DE TERREMOTOS YTSUNAMIS EN PREHISTORIA ....................................................................................................................... 76TRANSGRESIONES RÁPIDAS: CAMBIOS RÁPIDOS, PERO NO TANTO .............................................. 77

4 CAMBIOS BIÓTICOS SÚBITOS.................................................................................................................... 78

LOS CAMBIOS DE DISTRIBUCIÓN DE LAS ESPECIES............................................................................ 78EVOLUCIÓN VERSUS EXTINCIÓN: LA EXTINCIÓN CATASTRÓFICA COMO FACTOREVOLUTIVO....................................................................................................................................................... 82

LOS CAMBIOS SÚBITOS EN POBLACIONALES ANIMALES.................................................................... 83LAS EXTINCIONES FINIPLEISTOCENAS: ANÁLISIS DE UN CAMBIO SÚBITO. ............................... 86

HOMO ANIMALI LUPUS: LOS HUMANOS COMO FACTOR DE EXTINCIÓN ...................................... 87ARGUMENTACIONES “NATURALISTAS”: LA EXTINCIÓN ES UN FENÓMENO NATURALNORMAL.......................................................................................................................................................... 87

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191

ARGUMENTOS “SÍ, PERO…”: LA EXTINCIÓN DETONADA O ACABADA POR HUMANOS.............. 89BALANCE DE LAS HIPÓTESIS EN LIZA ..................................................................................................... 90

LOS MODELOS BIOLÓGICOS APLICADOS A LAS POBLACIONES HUMANAS: ............................... 91UNA POSIBILIDAD ALTERNATIVA ............................................................................................................. 91

PARTE SEGUNDA: TRES EJEMPLOS Y PICO ALREDEDOR DEL MUNDO PREHISTÓRICO...... 93

3 ¿QUE PASÓ CON LA NEANDERTHAL? ¿UN FINAL CATASTRÓFICO, LA LENTA AGONÍADE UNA ESPECIE O TODAVÍA ESTÁN ENTRE NOSOTROS? ................................................................ 94

CAMBIOS MOLECULARES Y CONSECUENCIAS ESPACIALES, ¿O VICEVERSA? ........................... 94¿PORQUÉ MEDRÓ LA FORMA HUMANA MODERNA? UNA HIPÓTESIS CATASTRÓFISTA. ............ 95¿CUÁNDO Y CÓMO DESAPARECE LA FORMA NEANDERTHAL? ........................................................ 96EL CAMBIO NATURAL COMO CAUSA ....................................................................................................... 98¿SUPERACIONES O COMPETENCIAS HOMÍNIDAS? .............................................................................. 99ABRAMOS LA PUERTA A UN CAMBIO BRUSCO PARA ACABAR (PROVISIONALMENTE) CON LADISCUSIÓN SOBRE EL FINAL DE LA FORMA NEANDERTHAL........................................................... 100

2 HISTORIAS DE ELEFANTES PELUDOS: ¿FUE LA GRAN FAUNA VÍCTIMA DE UNACATÁSTROFE AL FINAL DEL CUATERNARIO?..................................................................................... 102

A) EL CASO DE LOS MAMUTS SIBERIANOS: ¿UNA EXTINCIÓN SÚBITA?..................................... 102PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA:¿QUÉ OCURRIÓ EN LA PENÍNSULA ÁRTICA DE TAYMIR?........................................................................................................................................................................ 103RETRATO ROBOT DE MAMMUTHUS PRIMIGENIUS .......................................................................... 105¿PERO, QUÉ LE PASÓ AL MAMUT?......................................................................................................... 107

EL EXTRAÑO CASO DE LA ISLA DE WRANGEL...............................................................................................110LA EXTINCIÓN BRUSCA Y ESCALONADA EN EURASIA ...............................................................................111

¿CAUSALIDAD EXTERNA O CAUSAS BIOTICAS INTERNAS? DISCUSIÓN ........................................ 112¿QUÉ HAY DEL CAMBIO CLIMÁTICO? ...............................................................................................................112¿Y EL CAMBIO EN LA VEGETACIÓN?.................................................................................................................113¿Y OTRAS CAUSAS BIÓTICAS? .............................................................................................................................114

EL FACTOR HUMANO ................................................................................................................................ 115PARÁMETROS TEÓRICOS: ELEMENTOS IDEOLÓGICOS................................................................................115EL CÁLCULO DE LA EXTINCIÓN..........................................................................................................................117SITIOS ARQUEOLOGICOS Y DATACIONES DE LA RETIRADA.....................................................................118

UN BALANCE FINAL POSIBLE .................................................................................................................. 119B) LA BRUSCA EXTINCIÓN MASIVA DE ELEFANTES Y DE LA MEGAFAUNA AMERICANA. .. 121

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA......................................................................................................... 121TEORÍAS EN PUGNA:.................................................................................................................................. 123

TEORÍAS SOBRE FACTORES NATURALES. .......................................................................................................123DEBILIDADES ARGUMENTALES DE LAS HIPÓTESIS DE CAMBIO AMBIENTAL. ..............................126CRITICA GENERAL A LAS POSTURAS AMBIENTALISTAS.......................................................................128

LAS POSICIONES "NEUTRALES“...........................................................................................................................128CRITICA A LAS POSTURAS NEUTRALES.......................................................................................................129

LA IMPORTANCIA DEL FACTOR HUMANO.......................................................................................................130CRITICA AL MODELO DE “GUERRA RELÁMPAGO”...................................................................................131

UN BREVE PASO (O CIRCUNLOQUIO) POR LA CUESTIÓN DE LA “PRIMERA” COLONIZACIÓNDE AMÉRICA. ............................................................................................................................................... 132

BREVE EXCURSO POLÍTICO DE CÓMO LA EXTINCIÓN SE VUELVE A RELACIONAR HOY CON LOSINDIGENAS AMERICANOS. ....................................................................................................................................133

DE VUELTA AL TRATAMIENTO DE LA EVIDENCIA ARQUEOLÓGICA.............................................. 134UNAS CUESTIONES Y UNA SENCILLA SOLUCION ALTERNATIVA..................................................... 139

PREMISAS Y UNA HIPOTESIS EXPLICATIVA ALTERNATIVAS: ..................................................................139MAMUTS Y TIEMPO DE EXTINCIÓN: ¿CUÁNDO SE EXTINGUIERON EN NORTEAMÉRICA?....... 140UN REPASO AL CASO DEL YACIMIENTO RANCHO LA BREA:............................................................ 141EL FINAL DE LOS GIGANTES DEL SUR: LA EXTINCIÓN DE LA MEGAFAUNA SUDAMERICANA........................................................................................................................................................................ 145UNA CONCLUSION ALTERNATIVA PROVISIONAL PARA AMÉRICA: UNA HIPÓTESIS DE“CAMBIO BRUSCO” A EXPLORAR........................................................................................................... 155

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1 CAMBIO BRUSCO EN EL FINAL DEL PLEISTOCENO CANTÁBRICO.......................................... 158

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA ......................................................................................................... 158CONSTATACIÓN DEL PROBLEMA: ¿QUÉ HAY DESPUÉS DE LA “MUERTE (DEL AZILIENSE)”?............................................................................................................................................................................ 158EL INTERRUPTOR CLIMÁTICO Y LA DESCONEXIÓN TEMPORAL DEL REGISTRO..................... 159EL “APAGÓN CANTÁBRICO” A LA LUZ DE LAS REGIONES VECINAS. .......................................... 164REPERCUSIONES MÁS ALLÁ: LAPSOS EN LAS HISTORIAS DE OTRAS ZONAS........................... 167EL CAMBIO BRUSCO COMO POSIBILIDAD DE EXPLICACIÓN.......................................................... 167

0 CONCLUSIÓN FINAL.................................................................................................................................... 171

EPÍLOGO O GUINDA FINAL: ........................................................................................................................ 173

EL FASCINANTE CASO DE PHANOURIOS MINUTUS, LA EXTINCIÓN DE UN PEQUEÑO GRANANIMAL: EJEMPLO PARA LA ESPECIE HUMANA EN EL FINAL DE LA CUENTA ATRÁS.......... 173POSTSCRIPTUM.............................................................................................................................................. 176

BIBLIOGRAFÍA.................................................................................................................................................. 177

ÍNDICE.................................................................................................................................................................. 190