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CAPITULO VII Construccion de la fortaleza de San Carlos: proceso contra el GobernadOl Don Juan de Salinas 1666 a 1669 Dificultades que enconh6 el Sefiol Alvarez Alfonso para enCaIgmse del Gobieillo civil dell eino pOI fin posesi6n de el-Opini6n del Oidor G,hate sabre Ia conducta del Gobelnadm Salinas -Comienza este a sel objeto de illm ffim acioues y rivalidades -Cal tas del Gener a1 Men cos al Seilol Salinas -Expedici6n del Gobel uadOl al do de Paeosol para pI aetieat un 1econocimiento -Recibe alaI mantes noticias de Cos ta Rica -Proponese hallm un punta en daude puedan 1eunil se las tt apas de aquella y de esta provincia -Encuenh a el pm aje deseado e inieia los tt abajos de fm tificaci6n -El Gobernadol infol rna al Capitan General soble la impOltancia que habia adquilido el filibustelo Man fIet -Conclusion del castillo de San Cal los -Como 10 desci ibia el Go bel nadOl Salinas -Encargase del gobierno de la fOl taleza el Capitan Gonzalo de Noguela-RegleSo del Sefiol Salinas a Glanada-Esfuer- zos de Don Francisco Valdes, Gobelnador provisional en ausencia de Salinas, para quedalse con el gobielno en plopiedad-Dirigese Valdes a Guatemala, ert doude encuentra el apoyo del Capitan General .Alval ez Alfons'o -Presenta este funci6nal io a la Audiencia un informe contra Salinas -Calgos que Ie hacia -Pedimento del Fiscal sobre el mismo objeto -EI SefiOl Alvarez Alfonso designa a un enemigo de Salinas para que Ie tome residencia y nOmblCl. Ii Valdes GobernadOl de esta provincia -Encaminase el SeuOl Salinas a la capital del reino -Apela ante la Audiencia de las resoluciones del Capitan General YI eeusa al Juez de 1 esidencia -Druena aquella CorpOl ac16n que vuelva. Salinas a su destine; nomb!'3. Juez de lesidencia al Didor Don Benito Novoa y comisiona a Don Juan MaiqUeZ de Cabrela para que examine la for taleza levantada en el San Juan _El capitan General impide el cum- plimiento de las resoluciones de la Audiencia Y plocede contI a Sali- nas -Manda encal celal 10 y dicta otras plovidencias -Resuelve venir a esta provincia con el fin de reconoeer el castillo.-Le lequiere la Au diencia pala que desista de ese viaje -ConfiImase el en su lesoluci6n y manda al DidOl Garat, Ie acompafie -Ploeedimiento I uidoso contI a Gar ate -El Cabildo de Guatemala haee observaciones al Capitan Ge neral !:lObI e los ineonvenientes de su JOI nada a Nicaragua -Enojo del SefiOl .AlVa! ez Alfonso contI a los capitulaTes -Ordena al Alcalde Don Juan Roa y al Regidor Andravide se aUsten para 8alh en Stl compania Resultado de la expedici6n del Capitan General a esta pI ovincia -Como la calificaban los GidDIes Novoa, Galate y Mhanda en calia dhigida al

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CAPITULO VII

Construccion de la fortaleza de San Carlos: proceso contrael GobernadOl Don Juan de Salinas

1666 a 1669

Dificultades que enconh6 el Sefiol Alvarez Alfonso para enCaIgmse delGobieillo civil dell eino ~Toma pOI fin posesi6n de el-Opini6n delOidor G,hate sabre Ia conducta del Gobelnadm Salinas -Comienza estea sel objeto de illm ffim acioues y rivalidades -Cal tas del Gener a1 Mencos al Seilol Salinas -Expedici6n del Gobel uadOl al do de Paeosolpara pI aetieat un 1econocimiento -Recibe alaI mantes noticias de Costa Rica -Proponese hallm un punta en daude puedan 1eunil se lastt apas de aquella y de esta provincia -Encuenh a el pm aje deseado einieia los tt abajos de fm tificaci6n -El Gobernadol infol rna al CapitanGeneral soble la impOltancia que habia adquilido el filibustelo ManfIet -Conclusion del castillo de San Cal los -Como 10 desci ibia el Gobel nadOl Salinas -Encargase del gobierno de la fOl taleza el CapitanGonzalo de Noguela-RegleSo del Sefiol Salinas a Glanada-Esfuer­zos de Don Francisco Valdes, Gobelnador provisional en ausencia deSalinas, para quedalse con el gobielno en plopiedad-Dirigese Valdesa Guatemala, ert doude encuentra el apoyo del Capitan General .Alval ezAlfons'o -Presenta este funci6nal io a la Audiencia un informe contraSalinas -Calgos que Ie hacia -Pedimento del Fiscal sobre el mismoobjeto -EI SefiOl Alvarez Alfonso designa a un enemigo de Salinaspara que Ie tome residencia y nOmblCl. Ii Valdes GobernadOl de estaprovincia -Encaminase el SeuOl Salinas a la capital del reino -Apelaante la Audiencia de las resoluciones del Capitan General Y I eeusa alJuez de 1 esidencia -Druena aquella CorpOl ac16n que vuelva. Salinas asu destine; nomb!'3. Juez de lesidencia al Didor Don Benito Novoa ycomisiona a Don Juan MaiqUeZ de Cabrela para que examine la fortaleza levantada en el San Juan _El capitan General impide el cum­plimiento de las resoluciones de la Audiencia Y plocede contI a Sali­nas -Manda encal celal 10 y dicta otras plovidencias -Resuelve venira esta provincia con el fin de reconoeer el castillo.-Le lequiere la Audiencia pala que desista de ese viaje -ConfiImase el en su lesoluci6ny manda al DidOl Garat, Ie acompafie -Ploeedimiento I uidoso contI aGar ate -El Cabildo de Guatemala haee observaciones al Capitan General !:lObI e los ineonvenientes de su JOI nada a Nicaragua -Enojo delSefiOl .AlVa! ez Alfonso contI a los capitulaTes -Ordena al Alcalde DonJuan Roa y al Regidor Andravide se aUsten para 8alh en Stl companiaResultado de la expedici6n del Capitan General a esta pI ovincia -Comola calificaban los GidDIes Novoa, Galate y Mhanda en calia dhigida al

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Monetca -InfOlmes del SenOl Alvarez soble el ~xito de su viaje -Co­municaci6n de Ja Real AUdiencia relativa al mismo asunto -Disposi­cianes de la COl te de Espana Iefel emes a los Plocedimientos contraSalinas -Este exhibe sus cuentas POI las que se deduce su inculpabiJidad -NombJamiento de Don AntonJo 'remino Davj]a paJ3 GoheJnadolde Nicar agua -Reflexiones gc>nelales sobre los acontecimientos de estecapitulo

GOZOSA quedo la Audiencia con 10 que ella consideraba sutriunfo en las contiendas con el Capitan General, y acaso pen­saba que habia asegurado irrevocablemente en sus manos elgobierno del reino y que los presidentes quedarian sometidosa sus sabias decisiones Pero de la accion latente dfl pensa­miento de Dios nace la fuerza productora de los Bucesos hu­manos, oponiendo elementos contrarios a la irregularidad y aldesorden, y el choque restablece el equilibrio perdido y colo­ca a la sociedad en sus ejes naturales para continuar en lasevoluciones de su progreso

Don Sebastian Alvarez Alfonso llego al pueblo de Jocote­nango, el 17 de Enero de 1667 Envio sus despachos a la Au­diencia, mas como observara el Oidor Garate que solo pre­sentaba los de Presidente y Capitan General para los asuntosde la guerra, y no el de Gobernador, propuso se pasasen alFiscal para que pidiera 10 conveniente Don Pedro Mjranda ySantillan, hizo la misma observacion y pidio que el SenOI Al­varez fuese posesionado de la presidencia y capitania general;que se declarase vacante el gobierno civil, y que entrase laAudiencia a gobernar Esta resolucion fue origen de cues­tion acalorada con el nuevo Presidente, quien por fin envioen 21 del mismo mes eJ despacho que traia para residenciar aJSenor Mencos, encargo que correspondia al gobierno En su, ,vista se acordo posesionarJe de sus destinos s;n limitacionninguna

EI Gobernador de Nicaragua, Don Juan de Salinas y Cer­da, activo en el cumplimiento de sus deberes y temeroso denuevas tentativas de parte de los corsarios, trabajaba sin ce­sar en las obms de defensa Mucho Ie honraba el Oidor Ga­rate en carta dirigida al Rey, despues de los grandes padeei­mientos del Gobernador y de los cuales se hablara en este ca­pitulo «Aun los mismos enemigos del dicho Don Juan con-

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fesaban el que todo el tiempo que estuvo en el gobierno tra­bajo incesantemente por la defensa de aquella provincia, espe­cialmente en la fuerza que fabrico, tal cual sea, donde cuatroo cinco meses, dicen por publico no se desnudo ni de dia nide noche, siendo el primero que trabajaba, usando de todos losoficios concernientes a dicha fuerza, por mecanicos que fue­sen» Como el Gobernador habia recibido tambien orden delevantar una fortaleza en las bocas del rio de San Juan, quedefendida por cuarenta 0 cincuenta hombres resistiese al ene­migo, decia el Oidor: «!a cual puso por obra en la forma quepudo, haciendo una fuerza no en las bocas del rio, sino enotra parte y sitio que Ie parecio a proposito»

EI Senor Salinas, tan celoso por la defensa de la provin­cia encargada a su experiencia, valor y conocimientos mili­tares, remontado en el rio de San Juan, sin relaciones que Iedistrajesen, experimentando toda clase de incomodidades yprivado hasta de 10 necesario para su alimentacion, era ya elobjeto de injustas rivalidades, no obstante la rectitud de suconducta, la modestia de sus miras, su alejamiento del centrode la politica y su laudable dedicacion al servicio del ReyFermentaban las innobles pasiones que debian perderlo, y sehacian manifiestas las tramas en que habia de ser enredado

Asi 10 habia comprendido el Capitan General Senor Men­cos, justo apreciador de los oficios del Gobernador Salinas ytestigo imparcial e idoneo de su buen comportamiento Encarta sin fecha dirigida de Guatemala, contestando dos que te­ulan la de 12 de Septiembre, en otra de 30 de Diciembre de 1666,y en otra que Ie envio de Almolonga en 20 de Enero de 1667,Ie decia 10 que sigue

«Cuando esta llegue a manos de vmd debo pensar que conel socorro que llevo de los tres mil pesos y de la orden que sedio a los oficiales reales de esa provincia, como se expresa enel despacho que llevo el Capitan Bartolome Munoz Hidalgo,o habra bajado vuestra merced a las bocas del rio, 6 estara enterminos de ejecutarlo, si no es que por algiin accidente queobligue a suspender dicha bajada haya resuelto vuestra mer­ced, como tan gwn soldado, no ejecutarlo, por estar prontoy desembarazado para acudir a su remedio, sllpuesto que des-

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de aca no se pu€den dar ordenes fijas, por no saberse efecti­vamente por cual de esas dos provincias de Costa-Rica y Ni­caragua emprendera el enemigo hacer su invasi6n Pero con­siderando, segUn las noticias fl1timas que se han tenido delGobernador de Costa-Rica, que se halla el ingles con treintay ocho bajeles surtos en los puertos de su jurisdicci6n, ha pa­recido generalmente que el intento que tiene es entrar y apo­derarse de dicha provincia, por juzgarla COn poca gente y des­prevenida Hecha esta consideraci6n se ha resuelto por laJunta de Hacienda remitir a dicho Gobernador ciento treintaarmas de fuego y siete botijas de p61vora pel ulera y cuatroquintales de balas y ocho mil pesos, con orden que todo pasea Cartago, en esta forma los cuatro mil ciento y cincuentapesos, con quien lIeva las iiltimas armas, que es Antonio delos Reyes y los tres mil ochocientos cincuenta a su cumpli­miento de los ocho se queden en las cajas de Nicaragua, todoa disposici6n de dicho Gobel nador de Costa-Rica, caso queel enemigo hiciese su entrada por aquella provincia, pero condeclaraci6n en dicha orden que para sus efeetos no se gastenada de los oeho mil pesos por si el enemigo emprendiese lafacei6n por la provineia de Nicaragua, pOI que en este easosera preciso aplicar todo el caudal referido a disposicjlSn y or­den de vuestra merced, de que me ha parecido darle noticiapara todos los sucesos Dios nos los de buenos y gual de avuestra merced como puede y yo deseo»

«Recibi la de vuestra merced de 28 del pasado con la re­lacion e informe del puesto que vuestra merced ha elegido enel rio de San Juan, que guarda la provincia de Nicaragua yla entrada de Costa-Rica por el rio de Pocosol, y reconozcopor ella ser el paraje muy aprop6sito y por su naturaleza muydefendido y para ofender al enemigo y estorbarle no pase elrio arriba sin muy considerable riesgo y perdida de gente, yasimismo conozco el mucho trabajo, cuidado y desvelo que avuestra merced Ie cuesta asegurar esa provincia y a la parsiento la cortedad de medios, para que pOI su defecto nadaquedase que hacer y su fineza de vuestra merced se viese eje­cutada conforme a su deseo y al mio Esto nO tiene facil re-

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medio, pero ya vuestra merced y yo estamos en el empeiio yprocurando en 10 posible hacer cuanto se pueda Yo partiremuy breve desta ciudad para la de Granada, a donde deseollegar cuanto antes, para que no me quede que hacer estandoen ella, facilitando cuanto pudiere, y vuestra merced sea asis­tido En el estado que vuestra merced me dice tenia el sitioy castillo y su cuidado en continuar hasta ponerle en perfec­cion, tal que sea y silva de segura defensa, tengo por ciertocrecera cada dia mejorandole, y supuesto esto y ser tan de susatisfaccion de vuestra merced, fuera de parecer se demolieseel fuerte del raudal de Santa Cruz, asi para excusar aquellosgastos y aplical10 todo a 10 que vmd esta obrando, como por­que vuestra merced me dice, habiendolo visto, que no se hizoy forma donde se debiera y refOlzando con mas gente el quevuestra merced mantiene y la compaiiia de cien infantes quehe enviado para que este de presidio en Granada Me parece,por ahora, es cuanto se puede aplicar para su seguridad Losgastos hechos son muchos no me espanto, por ser mucho 10que se ha emprendido Lo que se debe a la gente es cantidadque si se hubiera de pagar enteramente no tiene el Rey ha­cienda en sus cajas para hacerlo, y asi harto conseguir esacabar la obra que vuestra merced tiene entre manos Se hade ir socOlriendo 10 mas necesario, de suerte que no les falteel sustento, que es 10 principal, hasta que yo l1egue, que en­tonces esforzare cuanto fuere posible En cuanto a la torreque sirva de ataiaya fuerte que vuestra merced dice ha dehacer despues de acabado ese castillo, en la boca del rio deSan Juan, para que vigie la mar y de aviso con tiempo al cas­tillo, me parece muy bien trate vuestra merced ahora de perfeccionarle, que despues, de mas cerca, comunicaremos 10 de­mas que a vuestra merced pal eciere conveniente »

"Con las iiltlmas cartas que tuve de Granada, rescibi dosde vuestra merced de 4 y 12 de Septiembre, y por no confun­dirme en responder a cada capitulo de por si, reduzgo la res­puesta de ello a 10 que tengo por mas esencial»

"Avisado tengo a vmd que padecemos entrambos de emu­laciones injustas, vuestra merced en 10 que va ObI ando con

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112 HlSTORIA DE NICARAGUA

Sus experiencias y zelo, y yo en tener por justo cuanto hastaaqui ha ejecutado vuestra merced Y siendo entrambas cosasciertas y que la guerra que se nos hace en virtud de los mu­chos gastos hechos hasta el estado presente, y que concurrenen este sentido muchos y pal ticularmente los que mas los de­bieran excusar, quedo leceloso quede vencedOla su malicia, ydoliendome mucho de verla introducida tan sin fundamento,y pudieran considerar que vmd se halla en un despoblado, sa­orificando su vida al servicio de S M por que conoce y sabe10 que debe hacer por el Rey y defensa de sus tierras »

«Y yo que tambien estoy en este conocimiento, mientrascorren por mi cuenta estas provincias, hare como h~sta aquimas de 10 posible de mi parte, para que en 10 preciso e inex­cusable no se falte, ya que no puedase para dar entera satis­faccion a todos los gastos, particulalmente estando ya mi su­cesor a la vista, pues tengo carta de su senoria, de 10 de Oc­tubre, su fecha en Juajaca Y supuesto 10 leferido, y que juz­go tendra vuestra merced puesto en defensa el fuerte de SanCarlos y aun en toda perfeccion, soy de parecer, no hallando­se inconveniente considerable, baje, como vmd me aVisa, elSargento Mayor Noguel a con gente, y Ie entregue vmd dichocastillo con 10 que pareciese necesario para su defensa y conlas municiones y bastimentos correspondientes Y' parecien­dole a vmd como me 10 dice ir a reconocer las bocas del rio,10 podria ejecutar y retirarse a Granada, de donde dara vmdcuenta al gobierno del terreno de dichas bocas y de todo 10demas que Ie pareciere conveniente, procUt ando que para to­dos sucesos se mantengan vigias en dichas bocas, con quiense anticipen las noticias de los enemigos que parecieren a suvista, para que asl el fuerte como la ciudad de Granada sehallen prevenidos EI diseno 0 planta del fuerte de San Car­los me ha parecido muy bien, aunque juzgo nesitara de masgente que la que estaba resuelto hubiese de presidio en las dostorres de San Juan y Taure, y como el computo que se hizoasi para su fabrica como para su dotacion fue el que se re­solvio por Junta general de hacienda, hacen de aqui los emu­los para introducir su malicia, y de que vmd por cualquiernueva leve convoca no solo la gente de esa provincia, sino

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Ill. de todas las inmediatas tambien Pero como yo conozcoel celo con que vmd obra, y que sus experiencias no tienenigual en estas provincias, sabrelo representar a S M llevan­dome Dios con bien como 10 espero en esta flota, y me prome­to tendra vmd de su real mano no solo gracias sino merce­des que Dios de a vmd muchos anos, como puede y yo deseo »

«Yo tenia determinado salir el dill. 15 de Octubre para Gra­nada y me hallaba con toda Ill. prevencion y avio en mi casa,y a los trece llego aviso a esta ciudad, de hallarse mi suceSoren camino para venir a ella Y es cierto que aunque he soli­citado siempre salir de aqui, senti que fuese en ocasion quese malograse el fin con que hacia esta jornada, porque de­seaba verme con vmd y obrar en servicio de S M cuanto juz­gase ser conveniente para Ill. seguridad de esa provincia y Ill.de Costa-Rica»

«Aunque con muchos achaques y mi sucesor a Ill. vista, res­pondo ados cartas que he recibido de vmd , sus fechas en Gra­nada a 30 de Noviembre Ill. una y l' de Diciembre Ill. otra, yaunque quisiera responder a entrambas por capitulos, ni misalud me da lugar, ni los cuidados de mi partida a que sea enotra forma que Ill. que se reduce a estos breves renglones Heholgado saber que vmd se retiro a Granada y que deja encar­gado el fuerte que fabrico en el rio al Sargento Mayor Gonza­10 Noguera, quien se entrego de el de orden de vmd, habien­do procedido a hacer pleito homenaje de defenderlo, con 10que vmd de su parte ha hecho cuanto por su obligacion ysangre y experiencias de tan gran soldado ha podido obrar, ypor mas que Ill. malicia haya querido desacreditar su cuidadode vmd se debe esperar que por el mismo caso se reducira amayor credito, pues hasta estos senores de Ill. Real Audienciahan reconocido que vmd de su parte no ha podido obrar conmas acierto, y si Dios me lleva a Espana, como 10 espero desu Divina Majestad, yo dare a entender al Real Consejo contestimonios de todo 10 obrado, que debe a vmd Su MajestadIll. seguridad de esa provincia, mientras se sirviere de remitir6rdenes en virtud de las noticias que Ie han dado por diferen-

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tes vias de 10 que para adelante se ha de observar, que a miparecer en los galeones vendra dicha resolucion »

"Supuesto que con la seguridad del fuerte de San Carlosqueda asegurada la entrada del rio, de cualquiera invasion deenemigos, juzgo que se habra demolido en toda forma el fuer­te del raudal de Santa Cruz, y que 10 mismo habra hecho vmdde las fortificaciones que a los principios hizo en Granada,porque como dice el refran Ii pUe? ta ce1'1 ada el diablo 8e 'Vlwl­ve, y como, sobre todo, 10 mas conveniente es excusar gasto,no se hara poco en asistir a los presidios del dicho fuerte deSan Carlos, y al presente con solo 10 preciso y necesa;rio paraque no desespere la gente de su guarnici6n, animandolos vmdcuanto fuere posible, en fe de que en remitiendo la plata deS M [que sera a principios del mes que vieneJ se iran co­brando en todas estas provincias los efectos destinados paradicho sustento y pagas con que habra caudal bastante palamantener dicho castillo todo el tiempo que tardare la reso­lucion que S M mandare tomar para su sustento y pagas, ysupuesto que la piedra del escandalo ha sido los muchos gas­tos hechos hasta el estado presente, en que han frmdado lospocos afectos su malicia, debo aconsejar a vmd excuse cuan­tos fueren posibles, teniendo por cierto que a mi s!lpesor elSenor Don Sebastian, que aguardo por horas, Ie dejare bieninformado de todo 10 obrado por vmd y de 10 que segUn miscortas experiencias debe S S obrar para asegurar esa provin­cia y la de Costa-Rica»

«Hallandome de partida para la Vera Cruz, en el pueblode Almolonga, recibi la carta de vmd su fecha en Granadaen 30 del pasado Y fue para mi de mucho gusto por infini­tas razones, siendo la principal que vmd se halle con salud;y supuesto que si Dios me lleva con bien a Espana respectode algUn credito que tengo en la Corte, a donde ha de ser mihabitacion, y de entrar ya por antiguo Consejero de la Juntade Indias, podra vmd asegurarse que tendra en mi un fielagente en la solicitud de sus aumentos, y que a cara descu­bierta dare voces sobre 10 mucho que debe a vmd Su Majes­tad, en cuanto ha obrado como tan gran soldado en esa pro-

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vineia, que aunque en ella la malieia ha declar"do algunosemulos no se si 10 lograr{m, porque el Senor Don Scbasti{m,mi sucesor, queda bastantemente informado por mi de todo, yha reconocido S S con evidencia que en casos tan considera­bles siempre hay emulaciones Mucho pudiera decir a vmdsobre el particular, pero 10 mas esencial se Ieduce a 10 dichoy a que el Senor Don Sebastian queda muy empeiiado en apli­car los medios necesarios para conse! var el fuerte que vmddeja fabricado en el rio y el sustento de la gente de su presi­dio, mientras que S M con las noticias que se Ie han dado pordiferentes vias no mandase remitir las ordenes necesarias de10 que se ha de aplicar para defensa de esa provincia y la deCosta-Rica, que sin duda vendran en los primeros galeones» (1)

Para levantar la fortaleza quiso Don Juan de Salinas prac­ticar un reconocimiento de los rios y entradas por donde elenemigo pudiera penetrar en esta provincia y en la de Costa­Rica sin tocar con las torres del San Juan y del Taure Acom­panado de veintJtres hombres, inclusos seis oficiales de herre­ria y carpinteria, del Capitan Don Antonio Sequera y su al­ferez Don Antonio Hincapie y de cuatro soldados de Segovia,se dirigi6 al rio de Pocosol En el camino 10 alcanzo un co­rreo, mandado por el Gobernador de Costa-Rica, con intere­santes cartas en que se Ie daba conocimiento de que el enemi­go habia saqueado a Veragua, pasado a la costa del Sur y sa­queado tambien a Coele

Tan alarmantes acontecimientos lIamaron fuertemente laatenci6n de Salinas Le parecio medida de la mayor impor­tancia buscar un punto en donde pudieran reunirse las tropasde Nicaragua y Costa-Rica LIego a una punta de tierra fir­me, anegadiza por la parte del Sur AI frente existia una is­leta formada por dos brazos de rios, uno el San Juan y otro elPocosol, a cuya sombra podian pasar ocultamente los corsariosy sorprender a Granada, dejando atras las fortificaciones cons­truidas Continuo el reconocimiento y a poco mas de un tiro

(l) Como estas cartas completan las apleciaciones hechas sorne 18conducta del GobernadOI Salinas, las hemos inclufdo en el cue} po rle lahistOI ia, tomandolas de documentos ineditos del al chivo nacional, y sinhacel en ellas otl a altel acion que la de Ia 01 tOgl affa de algunas palabl as,pal a faciIital su lectura

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de canon de la isleta hallo un puesto en tierra firme, a 1abanda del Norte, el mejor que };Iudiera desearse para La de­fensa de las dos provincias, de terreno fertilisimo, abundantede aguas potables, de buen c1ima, sin mosquitos y en partecubierto de zalZaparlilla, y considerando el Gobernador deNicaragua que era el mas gt ande Vde mejores condiciones paralevantar un castillo, tomo posesion de el en nombre del Rey,mando desmontallo y puso en tierra la artilleria que lIevabaAcampo la tropa, levanto una plataforma e hizo trincherasque Ie ponian a cubierto de una sorpresa Las seguridadesque daba a las provincias, la fortificaci6n que en e~e puntoconstruyo el Senor Salinas, a la que dio el nombre de Castillode San Carlos de Austria, hacian inutiles, a juicio del Gober­nador, las torres del Taure y el San Juan, y asi era en reali­dad, porque elias no alcanzaban a cubrir las entradas que losenemigos podian encontrar en 10 interior pOl' el territorio deCosta-Rica, y aun quedaban otras dos bocas descubiertas

EI Gobernador Salinas doblaba su actividad a medida queapuraban las circunstancias En el informe que sobre su ex­pedicion dirigio al Capitan Genel ai, decia

«Los designios del enemigo son diferentes de los que teniael ano pasado, pues de un enano se considera gigal)\e ayerse presentaba con titulo de Capitan de ladrones, hoy, de Ge­neral Manflet, con un tercio de franceses y de ingleses, conSargento Mayor, ayudantes y otros oficiales de guerra: ayercon cuatro escopetas, y hoy con maS de cien piezas de at ti­Heria »

EL dia 1. de Agosto de 1666 quedo el castillo concluido yen estado de servir para la defensa del San Juan, aun vinien­do el enemigo con el crecido numero de tropas con que Crn­zaba las costas y armado de gruesa artilleria V abundante mos­queteria PorIa estrechura del rio, no hubieran podido loscorsarios hacer de frente un ataque formidable, y si los de lafortaleza impedirles el paso con mediana resistencia

Quedo edificada aquella fortaleza sobre el rio de San Juan,a la banda del Norte, cubriendo tambien la boca del Pocosol,pOl' estar rio abajo a tiro de arcabuz EI Gobernador Salinasdescribio asl las dimensiones y forma de su obra

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«Frimeramente tiene a la banda del Sur un puente leva­dizo con su galp6n, que Ie cubre abierto, de manera que lostraveses de la fuerza principal corren y franquean desde elfortin la cortina que cae al Sur, que tiene cien varas de largoy desemboca a dicho puente y rio, y dentro de dicho castillo,sobre dicho rio, tiene plataforma con cuatro piezas encabalga­das, cafioneras y explanadas, beque al Sur, galita al Norte,cuarteles de Santa Barbara, casas y tabancos para cien hom­bres, y en dicho cuartel, almacen para bastimentos, con supuerta, plaza de armas muy capaz, casa fuerte con su escale­ra, San Juan Bautista, con cuatro corredores y cinco puer­tas, puerta fuerte y principal que cubre dicha escalera conuna pieza, y al pie de ella, a la banda del Sur una garita muyalta que descubra y sujete los traveses del fortin, y limpiany corren la surtida que desemboca dicho puente, y a la bandadel Norte, de la parte de adentro, otra garita que sujeta lostl aveses de dicho fortin por aquella banda hasta desembocaral rio y tiene de lado 6 cortina ciento y cinco varas, IglesiaSanta Maria, con dos puertas Un fortin con dos fuerzas: laprimera, Santa Tere£a, con una escalera que Hene cuarenta ydos escalones de media vara cada uno de ancho y una terciade alto, y tres piezas encabalgadas en dicha fuerza Santa Te­resa, con sus explanadas, cafioneras y garitones que las cu"bren, capaces cada una de alojar veinte infantes, y cae di­cha fuerza Santa Teresa sobre el rio, sujeta la casa fuerte,cuarteles de Santa Barbara, y la fuerza que Ie sigue de arribala gloria, con su escalera, tiene dos escalones con una terciade alto cada uno, media vara de ancho y su puerta (como asi­mismo Santa Teresa), con tres piezas con sus encabalgadas,con sus explanadas, cafioneras y garitones que cubren la arti­lleria, capaces de alojar veinte hombres Las dos piezas su­jetan y cubren la campafia a la banda del Norte, y la una caesobre el rio it la misma banda, y dicha fuerza que es la glo,ria, sujeta todas las fortificaciones de dicho castillo, tiene lamayor parte del foso abierto y dicho fortin, dispuestos y ajus­tados los desaglies, y en dicha fuerza de la gloria beque alSur y garita al Norte que corren las cortinas, franquean ycaen sobre el foso, y de la otra banda del rio, a la banda del

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Sur y tierra de Pocosol, esta fabricada la atalaya San Juan deDios, capaz de doce mosqueteros, que defiende el rio por aque­lIa banda y esta debajo de la artilleria de dicho castillo y en­frente de la plataforma, tan cerca que el mas corto a1 cabuzarroja la bala por enclma, de dicha atalaya, en donde se poneun falOl que alumbra en la noche mas oscura el rio de mane­ra que no puede pasa1 por el un pajaro por pequeno que seasin ser visto de la banda del Sur y Norte Y para que constea S M, Seno1 es Presidente y Oidores de la Real Audienciade Guatemala, por cuyo acuerdo yo dicho Gobernador vine afabricar dicho castillo despues de la invasion, y defender di­cha plOvincia de Nicaragua, di la presente firmada de mimano etc» (1)

EI Capitan y Sargento Mayor Gonzalo Noguera Rebolledopresento en el castillo de San Carlos el dia 15 de Noviemb1 ede 1666 al Gene1al Don Juan de Salinas, un titulo expedidopor el Rey a 28 de Octubre del ano anterior, en que Ie nom­braba Comandante de aquella fortaleza, la que debia serle en­tregada para su custodia cuando estuviese concluida y en todaperfeccion para el servicio Examino el titulo el Gobe1nadory encontrandolo en debida forma 10 beso y puso sobre su ca­beza, expresando que obedecia 10 mandado por su MajestadTorno las manos del Sargento Mayor y poniendolas entre lassayas Ie recibio juramento de fidelidad y sumision al Rey enla defensa y gua1da de la fortaleza (2) Y habiendo Noguerahecho pleito-homenaje, tomo las Ilaves, abrio las puertas delcastillo y se dio por posesionado de el, del armamento, de to­dos los enseres y abundantes comestibles

Nada mas tenia que hace1 el Senor Salinas en el rio deSan Juan: volvio, pues, a Granada, en donde residia custo­diando la ciudad pa1a defenderla en el lance de nueva in­vasion

Encargado Salinas de los trabajos de fortificacion en el

(1) Documentos inerlitos nel Au:hivo nacional(2) La costumille rte Iecihil el iut amento a los castellanos 6 coman

danles de fOllalezas tOillandoles las manos en senal de ohediencia, plOcedia de los ~Iabes de EspafIa y segulamente se conselvaba en todos 6en algunos de los dominins de ]a mona/quia cuancJo se efectu6 la entlegadel castillo al Capitan Nogll~la

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rio de San Juan, y habiendo tenido que ausentarse por dilata­do tiempo y permanecer a larga distancia de Leon y Granada,centros del gobierno y de toda elase de provisiones, se habiahecho necesario el nombramiento de otra persona que interi­namente gobernase la plOvincia EI General Mencos, movidode esas consideraciones habia nombrado Gobernador de las ar­mas a Don Francisco Valdes, que desempeiiaba las funcionesde Corregidor del partido de Subtiava, pero dejandolo someti­do en todo caso a las ordenes del Maestre de campo Don Juande Salinas

Ni aun las revoluciones, que aumentan 0 debilitan la fuer­za y actividad de las sociedades humanas, variando su aspec­to, modificando sus principios, alterando sus movimientos, tie­nen poder para mudar la naturaleza del hombre mal dispues­to, que siempre permanece el mismo, si la razon iIustrada nocambia sus daiiosos instintos en nobles sentimientos y eleva­das aspiraciones Tal sucedio a Don Francisco Valdes Intri­gante de mal caracter, llego a creer que desacreditando a DonJuan de Salinas, haciendo aparecer sin valor alguno sus im­portantes servicios, rompiendo las buenas relaciones que cul­tivaba con el Capitan General y arrojandolo del alto puestoque ocupaba en el concepto publillO, lograria separarlo por com­pleto y sucederle en el primer destino politico y militar de laProvincia Empezo su ingrata empresa escribiendo al SeiiorMencos falsedades con que tal veo: habria sorprendido el celode otra persona menos prudente que aquel juicioso y experi­mentado funcionario Nada logro por entonces en tales cir­cunstancias no era ese el camino que debia tomar para lIegaral termino de sus pretensiones Una casualidad (que asi debiaconsiderarla porque el suceso era para el inesperado) vino afavorecer su avaricia EI nuevo President", y Capitan GeneralDon Sebastian Alvarez Alfonso era cuiiado de Valdes Asi quellego a conocimiento de este la posesi6n de Sll pariente, se di­rigio a Guatemala, para hacer en persona 10 que antes habiaprocurado por escrito sin exito satisfactorio, y logrando laproteccion del Senor Alvarez, coloc6 las cosas en el peor esta­do imaginable para el Gobernador Salinas, cuyos padecimien­tos fueron tan grandes como inmerecidos

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Fundandose en los apasionados informes de Valdes, el Ca­pitan General presento en el Acuerdo de la Audiencia un in­forme contra el Senor Salinas, haciendole el cargo de haberlevantado la fortaleza ~n distinto sitio del que convenia, e in­vertido grandes cantidades de dinero EI Fiscal formul6 enseguida ante el mismo Capitan General su acusacion EI Se­nor .Alvarez designo a un enemigo declarado de Salinas paraque en concepto de juez viniera a tomarle residencia, y nombroGobernador de la Provincia a su cunado Don Francisco Val­des, despojando arbitrariamente al Senor Salinas de ese des­tino, que servia con desinteres ejemplar Juntos salleron deGuatemala el nuevo jefe de esta Provincia y el juez de resi­dencia

Nada tenia que hacer en Nicaragua el antiguo Goberna­dor Guatemala era el teatro de sus nuevOs afanes, alia de­bia defender su honor mancillado por la calumnia de un ene­migo sin conciencia y los procedimientos de un Presidente sindignidad, que para favorecer a su deudo desatendia los meri­tos de un buen servidor, a quien trataba con insolente injusticia

Se presento Don Juan de Salinas ante la Audiencia, inter­poniendo el recurso de apelacion de la providencia en que elCapitan General Ie habia despojado de su empleo, i'Elcusandoal juez de residencia por ser enemigo suyo, y pidiendo se Ie­vantase el embargo de sus bienes EI Tribunal resolvio queel quejoso volviese a su destino, que se tuviese por recusadoal juez, que viniese a hacer Ia pesquisa el Oidor Don BenitoNovoa Salgado, y a examinar la fortaleza el Sargento MayorDon Juan Marquez Cabrera, Gobernador de la provincia deComayagua

EI Senor .Alvarez Alfonso, que desde su posesion en el altopuesto de Presidente y Capitan General, se habia presentadocomo un tirano vengativo y soberbio, se exaspero al saber laresolucion de la Audiencia; y recogiendo los despachos paraque no se entregasen a la parte interesada, procedio personal­mente contra Salinas, sin consulta de asesor, mand6 encarce­larle, tomole confesion con cargos, recibio la causa a pruebasy dicto otras providencias judiciales EI despechado Presiden­te queria tener una existencia separada del Tribunal, y no se

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ruborizaba al decil que procedia con tanto empeno contra Sa­linas porque se habia este valido de la Audiencia Asi toma­ba la justicia como instrumento de sus pasiones, sin permitira su victima ni el desahogo de Ill. queja, recurso del que sufrela opresion de un poder arbitrario Dispuso tambien venir aNicaragua a examinar Ill. fortaleza levantada por Salinas en elrio de San Juan: tal vez queria reagravar los cargos para ejer­cer su venganza con mayor escandalo y escarnecer Ill. justiciaadministrada por la Audiencia, a la que deseaba ver arrodilla­da a sus plantas

Los oidores y todas las personas de juicio que presenciabanaquellos sucesos, considerabanlos como abortos de Ill. ira delCapitan General, y comprendian muy bien que Ill. expedicionproyectada era peligrosa, innecesaria y gravosa, porque no po­seyendo el Senor Alvarez los conocimientos indispensables paracalificar los trabajos ejecutados en el rio de San Juan, tendriaque comisionar a una persona inteligente, 10 que podia haceren Guatemala, sin exponerse a una jornada de doscientas se­senta leguas, de malos caminos y diversos dimas Por esasconsideraciones 10 requirio la Audiencia para que no saliesede Ill. capital, pero el contesto que estaba resuelto a empren­der el vi&je y ordeno al Oidor Garate que se alistase porquedebia acompanarle Este Ie dirigio una suplica redactada enterminos sumisos, para que 10 dispensase del cumplimiento deaquel mandato, 10 que dio origen a una providencia del Pre­sidente, que coloco a Garate en Ill. necesidad de refugiarse enel edificio de Ill. Compania de Jesus Pero hubo explicaciones,y el Oidor convino en hacer Ill. expedicion i Cuantas veces re­cordaria Ill. moderacion y bondad del General Mencos! Por elresultado de tales contiendas se dijo al principio de este ca­pitulo, que del pensamiento de Dios sale Ill. fuerza productorade los acontecimientos, oponiendo elementos Qontrarios a Ill.irregularidad y al desorden

El Cabildo de Ill. ciudad dispuso dirigir observaciones al Se­nor Alvarez, exponiendole los inconvenientes de Ill. jornada quese proponia hacer La distancia de mas de doscientas leguas,los malos caminos, Ill. variedad de dimas y el perjuicio que losnegocios del reino tendrian por su ausencia, esos fueron los

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fundamentos de las observaeiones Pero el iraeundo CapitanGeneral leeibi6 asperamente aI Alcalde ordinario mas antiguo,Don Juan Roa, y al Regidor Don Luis LOpez de Andravide, eo­misionados para l/evarle los pliegos, dieiendoles que el objetode la corporaci6n a que pel tenecian el a motejar sus providen­eias y darle leeciones de gobierno Y 01 den6 que el dia 5 deNoviembre se reuniese el Cabildo extraordiJlariamente y en iHse notifiease a DOJl Juan Roa yaDon Luis L6pez de Andla­vide se presentasen dentro de veintieuatro horas, para saliI' ensu compafiia el 7 inmediato Los apereibidos no se atrevierona pedirle revocatOl ia de su disposiei6n. SaJielOn con ,el en lafecha sefialada, pero les di6 orden de regresar, sin saberse queIe haya movido a aquel acto de espontanea e inesperada in­diJlgencia

Llegado el Presidente al termino de su viaje, praetie6 losreeonocimientos que se plOponia, con intervenci6n de Don Mar­tin de Andujar, ingeniero inteJigente y experiInentado SegUncarta de los oidores Novoa y Galate y del fiscal Miranda, di­1 igida al Rey en 20 de Mayo de 1668, el eonocimiento de laseosas qued6 en mayor eonfusi6n, todo se redujo a opiniones ya vagas determinaeiones referentes al sitio en donde debi6 ha­eerse la fortaleza para defender las provineias de NicjLragua yCosta-Rica, sin que la venida del Sefior Alvarez se enderezasea otro fin que el de ratificar las declal aeiones que habian dadolos testigos en la informaci6n seguida contra Salinas

En otra carta dirigida al Monarea en la misma fecha, de­cia el DidoI' Garate:

«EI segundo motivo que tuvo (el Presidente) para esta jor­nada, eonsisti6 en ir a haeer formalmente vista de ojos delcastillo 6 fuerza que el dicho Don Juan de Salinas fabric6 enel rio de San Juan, y aunque es asi que pOI' las personas queIe reconocieron y se dice entienden de la materia Ie hal/aronalgunos defeetos eonsiderables, pocas fuerzas hay que dejende tenerlos, si se empiezan a escudrifiar, mayormente cuandoel que ohr6 no era ingeniero ni de la profesi6n e hizo 10 quepudo y a1canz6»

«Toda esta jOlnada tan ruidosa y de tanto eosto se ha re­dueido a ratificar los testigos de una informaci6n y a mandaI'

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que Don Juan de Salinas diese cuenta del dinero que habiagastado en dicha fuerza y aver y reconocer si cuarenta hom­bres que han de estar atrincherados en el rio de San Juanpara su defensa estaran mejor en otro punto que en el que hoyestan Esto es todo 10 que se ha hecho: y para esto sale unPresidente a mas de doscientas leguas, lleva arrastrado a unOidor, saca de su Provincia al Gobernador Juan Marquez Ca­brera, teniendo ya en Ill. de Nicaragua al Gobernador de ellaDon Antonio Temifio Davila, Caballero de Calatrava»

Si por un lado el Oidor Garate mal informaba al Presiden­te y desacreditaba su expedicion, considerandola caprichosa einutil al fin que este se habia propuesto, y aun perjudicial alos intereses fiscales por los C1 ecidos gastos hechos en ella,par otro lado el Senor Alvarez Alfonso, dando a sus afanes exa­gerada importancia procuraba por otros medios congraciarsecon el Rey, haciendole creer que Ill. jornada al rio de San Juanhab!a asegurado Ill. defensa de estas provincias, regularizadolos gastos y dado los beneficos 1esultados que "I se habia pro­metido,

Para dar mayor fuerza a sus informes quiso que 10 apoya­ra Ill. Audiencia, Ill. que en 20 de J unio de 1668 elevo al MOllar"Cll. una acta firmada por el mismo Presidente, los oidores Me­dina y Novoa y el fiscal Miranda En ella Ie decian:

"Par Noviembre del ano pasado de sesenta y siete salio deesta ciudad el Presidente Don Sebastian Alvarez Alfonso a re­conocer el castillo que se habia fabricado por el Maestro deCampo Don Juan de Salinas para Ill. defensa de Ill. Provinciade Nicaragua, examinar sus gastos, por quejas que habian ve­nido, advertir el sitio, su disposicion y alcance para Ill. mos­queteria y discurrir a las bocas de San Juan y Taure y tocarcan las manos, a fuerza de muchos inconvenientes, si conveniao no fablicar en cada una de elias Ill. fortificacion que se habiamandado hacer y dotar por Juntas de guerra y hacienda Fuede tanta importancia su jornada, que se Ie hubieran gastadoa S M muy gruesas cantidades de su real hacienda, pOl'quelos efectos destinll.dos y muchos mas que hubiesen no cranbastantes con manifiesto desperdicio y malogro del intento,que era Ill. defensa y resistencia al enemigo en sus invasiones »

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«Hall6 su cuidado un sitio, registrandolos todos, en el 1au­da1 que Uaman de Santa CI liZ, el mas a proposito, cel callO paralos socorros y avisos y e1 mas libre de los peligros e inclemen~

cias de aqueI rio, de que dara cuenta a v M con mas claridady distinci6n, como quien vi6 a costa de su hacienda y en co­nocidos riesgos de su vida, si bien Ie ayud6 mucho la inteli­gencia y expel iencia del Capitan Martin de Andujar, personade toda satisfaccion, ingenielO y con eelo del selvicio de V M.Todo parecera de los autos que remite el Presidente »

Al final del antelior infolme se haee eonstar que el DoctorDon Benito Novoa y el fiscal Miranda no estaban de \acuerdocon 10 1eferido, 10 que haee Cl eer que aunque 10 firmalOll encumplimiento de las practicas de la Audiencia, salvaron sus vo­tos, por no juzgar ajustado a la vel dad cuanto en el se decia

Las cuestiones sostenidas par Don Juan de Garate y Fran­cia con el Capitan General Meneos, y los efimeros triunfos deque aquel acaso se gIoriaba, desvanecido con el humo embria­gadOl de la vanidad, tuvieron el resultado que era de esperar­se EI Presidente Alvarez Alfonso recibio una leal cedula. ex­pedida en 24 de Enero de 1668, en que se Ie ordenaba saearal Oidor Garate quinientos pesos de multa por haber desobe­decido la disposicion dictada por el Seiior Mencos g~ra queIe acompaiiase en el viaje a Nical agua No solo esta deter­minacion obtuvo el Seiior Mencos en la COl te de Espaiia, comomuestra del aprecio que merecian sus buenos servicios y delas consideraciones que a su persona dispensaba Habiendoel Consejo tornado conocimiento de los infOlmes y autos diri­gidos por el Seiior Alvarez Alfonso sobre los trabajos que enel rio de San Juan habia emprendido el Gobernador Salinas,acord6 en 23 de Febrelo de 1669, que con 10 que informase elGeneral Mencos se llevasen al Consejo de Guerra, demostI an­do can esa resolllci6n que no bastaban los informes del SeiiorAlvarez, pal a apoyar una decision conveniente a los gl andesintereses de que se trataba, y que para el meior conocimientode los hechos debia tomarse en cuenta el juicio que se hubieraformado el antiguo Capitan General, cuya imparcialidad, peri­cia y 1 ectitud habian sido manifiestas en el ejercicio de susfunciones En cuanto it las dilapidaciones de que se acusaba

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al Gobernador de Nicaragua, dispuso el Consejo que informa­se el SefiOl Alvarez Alfonso

Presento su cuenta Don Juan de Salinas, a Ill. que los con­tadores hicieron reparos en mas de ocho mil pesos, pero pasoal Tribunal de Ill. Audiencia y este declaro que solo era deudorde trescientos veintitl es Tan mezquina suma habia, pues, mo­tivado el proceso, Ill. prision y destitucion del Gobernador Noaparecio defraudacion ninguna, y aun pal a hacerle el cargopor aquella cantidad, debieron tomarse en conside! acion losmuchos pequefios gastos que se hacen en esa clase de traba­jos, sin poderse exigir documentos Salinas ya no fue Gober­nador de Nica! agua, pelO tampoco 10 fue Valdes, sino DonAntonio Temifio Davila, Caballero de Ill. orden de Calatrava

Los padecimientos de Don Juan de Salinas forman uno delos episodios mas interesantes de Ill. histOlia de Nicaragua,en el siglo XVII En el se encuentra Ill. muestra mas clara yrepugnante de Ill. arbitrariedad a que puede llegar un funcio­nario irresponsable que nada teme, que nada respeta y que sinfreno que Ie detenga en su carrera caprichosa, pasa sobre todaconsideraci6n, sin miramiento a Ill. ley y extrafio it Ill. razon yal buen sentido Alii se ven Ill. avidez y dureza que caracteri­zan a los subalternos de gobiernos situados en el centro deuna vasta circunferencia, sin vias de pronta y facil comuni­cacion y rodeados de los embal azos que les ponen Ill. perfidiay mala fe de los parasitos que a su alrededor se agitan evitan­do que conozcan Ill. verdad

Para el Gobelllador Salinas toda Ill. justicia se hallo encasa del Presidente Don Francisco Valdes fue el denuncian­te y testigo del mal manejo que se Ie imputaba, y tambienpretendiente a Ill. gobernaci6n en propiedad, y ejel ci6 los ofi­eios de Juez su cufiado Don Sebastian Alvarez Alfonso Losintereses y afecciones de familia lanzaron al Capitan Generalen una senda de pareialidad e injusticia, nada honrosa paragobernantes que deben tener siemp!e en Ill. mano Ill. balanzade Ill. equidad Sin que Salinas hubiese cometido delito nin­guno Ie formul6 un proceso que careeia de fundamento legal,y 10 aprisiono, pretextando dilapidaci6n de los caudales delRey Y esto hacia cuando el GobernadOl aun no habla pre-

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sentado SUS cuentas, ni el Presidente hecho reconocer la for­taleza par personas instruidas e imparciales, sin 10 cual nodebia aquel ser juzgado como culpable en la direccion de tandificiles y dispendiosas obras, emprendidas en remotas comar­cas, en media de cerradas montanas, y cuando daba pruebasinequll1QcJ\s de exclusiva dedicaclon al desempeno de su cargoy de su adhesion al Gobierno a quien servia

El decimoquinto Concilio toledano, convocado en 668 bajoel gobierno de Ejica, declaro solemnemente que el primer de­ber de los reyes es la justicia, y que ante ella deben callar suvoz todos los intereses privados, aun los que nacen d~ las re­laciones de familia Don Sebastian Alva, ez Alfonso, repre­sentante del poder real en estas regiones, no tuvo presenteaquella declaracion, dictada para la monarquia gotica y queno solo era un precepto de la leglslacion espanola, sino tam­bien un eterno principia de derecho a que deben ajustarse to­dos los gQbiernoa si han de corresponder a los fines de au ina­titucion

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CAPITULO VIII

Segunda invasion de los filibusteros li Granada: flibrica delCastillo de la Inmaculada Concepcion: nuevos esfuerzos pa­

ra conquistar las tribus salvajes de Tologalpa

1670 a 1679

Descuido de las autOl idades supeIiOles en la defensa de esta gobernaci6nEl Ph ata Gallardillo entra por el San Juan y se enf! enta al Castillo deSan Callos-Extl9,na conducta de la tlopa que custodiaba aquella fortaleza -Perretra el corsmio en Granada y la saquea -Situaci6n en quese hallaba el cornel cia de aquella ciudad -El Obispo de Nicaragua, elVin ey de Nueva Espana y Don Juan de Gllr ate, Alcalde del Crimen deMexico, informan Ii la COl te de Madrid sobre 10 acaecido en esta PIOvineia -Dispone la Reina que se fO! tifique la boca de San Juan­Nombra Capitan General inteIino a Don Fernando Francisco de Escobedo -Oldenes que Ie comunic6 -Posesi6nase Escobedo de su destino y pasa despues a Gl anada -Reconoce los lugares en donde pudie] a levantarse la fOl taleza -Elige un pm aje frente al raudal de Santa Cl uz -Inicia los tl abajos de fO! tificacion y nombra CastellarlO a DonGaspar de Inestrosa y Vasconcelos -Regreso del Capitan Genelal aGuatemala -El Gobernadm Loyola concluye la fabrica del Castillo dela Inmaculada Concepcion -J'l1bilo de los granadinos por este sucesoOrdenanzas que dicto el Capitan General Pal a el· arreglo de la gualnicion -Inaction de la COl te de Espana en los conflictos Que experi­mentaban las plovincias del 1eino de Guatemala -Causas que Iii ocasionaban -Situaci6n genel a1 de la Peninsula, desclita por Don Modesto Lafuente -Nomblamiento de Don Alonso Bravo y Laguna paraObispo de Nicalagua -Su muerte -Las tlibus salvajes de Pantasma yPmaka piden sel doctrinadas Y leducidas a poblaciones-EI Piovincialde Iii 01 den de San FI ancisco, para 1esolvel sobre esa solicitud. ponese de acuerdo con las autoridades civiles -Comisiona al Padre Legal es pal a aquella empl esa --Dirigese el misionero a Nueva Segovia,en doncIe funda un hospicio y otros establecimientos religiosos -Forrna los pueblos de San Jose Paraka y San Francisco Nanaica -Muertedel P Legares -Envio de ott 0 1eligioso pal a que continuase la conquista -Intellumpese esta -Causas probables de la suspension -Viltudes y mel itos del Padl e Fernando Espino -Sus servicios en la convelsion de los indios-Don Flav AndleS de las Navas y Quevedo esnombrado Obispo de esta Di6cesls

Los empleados superiores del reino, sin tener presenteslos padecimientos del vecindario de Granada en la invasion

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128 HISTOR1A DE NICARAGUA

que los filibusteros habian efeetuado en Junio de 1665, se oeu­paban en diseutir fOlmas y pequefteees, en helilse recipraca­mente por motivos de amor plopio, en adular al Monalea, apa­rentando laudable celo par sus intereses pecuniarios y en di­rigirle informes vados de importancia para la situacion delmomento y que no daban otto resultado que la peldida detiempo

Mientras tanto el enemigo, audaz en sus detel minaciones,ligero en sus movimientos, aeampaba en nuestras costas yasechaba la oeasion oportuna de eaer sobre la desamparadaciudad Asi 10 hizo el pirata Gallardilla en 1670 Apenas ha­bian transemrido cinco anos de la plimera invasion, cuandouna segunda traia la desolaeion y el duelo a aquella ciudad,que de largo tiempo experimentaba las inquietudes de una pla­za en estado de viva y perenne guerra, y Ia odiosa y clUel con­dicion de un pueblo sometido a expiacion inmeredda

EI filibustero Gallardillo se entro con una partida de pira­tas pOl la boca de San Juan y subio el do hasta enfrentarsecon la fortaleza de San Carlos EI valor y la altivez de los de­fensores de la Provincia, estinlUlados por Ia consideracion deque aquel eneuentro era el primero que se iba a tener con los!enemigos en el Castillo construido a costa de mucho dinero, deimprobos tt abajos y trascendentales desagl ados, la convenien­cia de escarmentar a los ingleses, haciendoles comprender quehabia pasado el tiempo en que podian irnpunemente efectualsus vandalicas irrupciones, y la expectativa general de las co­lonias hispano-americanas, y aun del Rey y la Corte de Espa­na, que probablemente querian eonocer el lesultado de los sa­crificios hechos para la defensa y la efieacia de los mediosadoptados, daban del echo a aguardal un ehoque desesperado,una lucha varonil hasta obtener la victoria, que en 10 porve­nir diera segmidades al pais y avivase e1 denuedo de sus hijosSe hallaban, pues, frente a frente los dos advelsarios Todoaparecia sombrio en aquel lugar pOl un lado el sUencio de losbosques, por otto la corriente imperturbable del rio, y com­pletando el cuadro, los dos enemigos con el arma levantadapara lanzarse al combate Gallardillo fue acercandose, mien­tras los nicaragUense~ permanedan en inaccion inexplicable

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Lin vI- CAP VIII -SEQUNDA INVASION FILtBUSTERA A GRANADA, ETC 129

l Que sucedia? Que el Castellano Gonzalo Nogue1 a Rebolledohabia ordenado a la tropa no hacer fuego contra los filibuste­ros Estos entraron en la fortaleza, sin la resistencia de unsolo til 0 de a1 cabuz, la incendialOn y destruyeron la poblacionque a- sus inmediaciones se habia formado

La conducta de Nogue1a hace sospechar que en 10 interiorde la Provincia habia traidores encargados de corromper latropa destinada a Ia defensa, 0 que aquel desgraciado milita1habia sido halagado con tenm parte en el botin Esos juiciosy aun peOles pueden fOlmarse en vista de la entrega del Cas­tillo, y tomando en consideracion el interes que debian tenerlos ingleses posesionados de la costa, en conocer las dificulta­des que aquel balua1 te presentara a sus incursiones futuras

Concluidos los trabajos de destruccion en el Castillo, diri­gielOnSe los invasores a- Granada, la sorprendieron, la sa­quearon y se lIevaron glan numero de hombres y mujeres

El puerto de San Juan del Norte habia hecho de aquellaciudad uno de los centros principales del comelCio de todo elreino Cuando las f1agatas partian para Espana circulabansumaS crecidas de dinero, y ese movimiento productor daba a­la ciudad la fama de ser de las mas ricas poblaciones de laparte septentIional de America Habianse dedicado con ardorlos granadinos a la agricultura y al comercio habian embelle­cido la ciudad con elegantes edificios, enriquecido los camposcon valiosas fincas, y entrega-dose al trafico con Cartagena,Guatemala, San Salvador, Comayagua, Panama y el Peru Muygrandes fueron, pues, las perdidas que experimentaron en laprimera invasion de los filibusteros Pero cuando vieron queel Castillo de San Carlos cerraba el paso a- los enemigos, re­doblaron las faenas para reponer sus capitales Y ciertamen­te, con una fortaleza bien artillada y defendida por competen­te guarnicion l como no se habian de considerar al abrigo denuevas invasiones? Esa confianza, si bien legitima, impru­dente en extremo, porque en la guerra cuesta caro el mas pe­queno descuido, favorecio a Gallardillo y sus secuaces

EI Obispo Don Alonso Bravo de Laguna elevo a la Cortede Madrid, con fecha 15 de Marzo de 1671, un informe cir­cunstanciado de los ultimos acontecimientos de Granada, y en

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130 HISTORlA DE NICARAGUA

25 del mismo mes dirigi6 otro el Marques de Mancera, Virreyde Nueva Espana, sobre las hostilidades de los ingleses enSanta Marta, Caracas y la Provincia de Nicaragua Motivosde justa inquietud fueron sin duda para el gobierno espanollas alarmantes noticias que Ie llegaban de America, en las cri­ticas circunstancias que pesaban sobre la monarquia, por losinfinitos germenes de desconcierto que en toda ella habian sem­brado la guerra con Portugal, la perfida conducta de Inglate­rra despues del tratado de los Pirineos, la sublevaci6n de Ca­talufia y las divisiones alimentadas por Don Juan de Austria,a. causa de la privanza que la Reina Gobernadora D~na Ma­riana dispensara al Padre Juan Everardo Nithard

Aquel Informe y otro dirigido por Don Juan de Garate yFrancia, antes Oidor de la Audiencia de Guatemala y a la sa­z6n Alcalde del Crimen de Mexico, sobre la necesidad de for­tificar las bocas del San Juan, sirvieron de fundamento a lasdisposiciones dictadas por la Corte Sorprende el ver que DonJuan de Garate se hubiese convencido, estando en Mexico, de10 que no pudo 6 no quiso comprender cuando se hallaba en Ni­caragua reconociendo el Desaguadero y recibiendo los infor­mes que los practicos daban al Capitan General Don SebastianAlvarez Alfonso En su informe dirigido de Mexico m/,-nifies­ta la conveniencia de fortificar las bocas del rio de San Juan,y eatablecer presidi" con fuerza competente para impedir laentrada del enemigo, porque despues de estar dentro del riono habria paraje que no pudiese ser cortado

Se vi6 el asunto en Junta de Guerra de Indias, como seacostumbraba hacer en casos de mucha gravedad, y oido elparecer de los vocales sobre las medidas que convendria to­mar, se consult6 a la Reina Gobernadora, quien dict6 en Ma­drid la real cMula de 29 de Octubre de 1671 En esa impOr"tante disposici6n se reconocia que «era muy necesario fortifi­car la boca del rio de San Juan, para que se pudiera defenderla entrada de la ciudad de Granada y Provincia de Nicaragua,que tan apetecida era de los ingleses y franceses asl por la fer­tllidad y buen temple de la tierra y tener los generos necesa­rios para fabricar y aprestar embarcaciones, como porque po­blando y apoderandose de toda la Provincia se hallarian por

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LIB VI - CAP VIII ------8EGUNDA INVASI6N FILIBU':;'fERA A GRANADA) ETC 131

la mar del Norte con la entrada del rio San Juan, y por la delSur con el puerto del Realejo, con que por ambos mares po­drian hacer hostHidades, siendo esto del mayor perjuicio quese pudiera considerar» Esta exacta observacion hecha por~a Reina, no habia sido admitida por la Audiencia y Junta deHacienda de Guatemala, cuando la hizo el Presidente Don Mar­tin Carlos de Mencos, a fin de inclinarlas a consentir en el gas­to de ocho mil pesos del real tC130ro para hacer los prepara­tivos necesarios a la defensa.

Para la ejecucion de sus disposiciones nombro la Reina Ca­pitan General interino al Excelentisimo Senor Don FernandoFrancisco de Escobedo, General de la Artilleria del reino deJaen, Caballero Gran Cruz de la Orden de San Juan y BaHiode Lora Le ordeno que luego que recibiera los despachos vi­niese en persona a reconocer las bocas del San Juan y levan­tar la fortificacion que creyera necesaria Dispuso que vi­niera de Espana un ingeniero para asistir a los trabajos, peropudiendo ese retardar el viaje, ordeno al Virrey de Mexico,por despachos de la misma fecha en que dictaba la real cedu­la, enviase sin tardanza otro ingenier9 que estaba en VeracruzExpidio ordenes a los empleados de hacienda para que entre­garan al Senor Escobedo el dinero que pidiese de los ramossenalados, y para que si estos no producian 10 necesario dieranel de las reales cajas en general, observando la mayor econo­mia Encargo al Senor Escobedo Ie enviase la planta de lafortificacion que debia levantar y Ie informase sobre la guar­nicion que hubiera de custodiarla Y en cuanto al delito co­metido por Gonzalo Noguera, Comandante del Castillo, Ie man­do que hiciese la averiguacion del hecho, y que con la demos­tracion que convenia Ie impusiese la merecida pena, para ejem­plo de los demas, sobre 10 que debia darle cuenta el CapitanGeneral

Hemos buscado con la mayor solicitud el proceso que hade haberse instruido contra NogueI a, en cumplimiento de lareal disposicion, pero ha sido imposible hallarlo Los descar­gos que haya alegado y la sentencia pronunciada por los jue­ces llamados a conocer, tendrian un gran interes historico encuanto se relacionasen con los pormenores de la invasion Ha-

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132 HISTORIA DE NICARAGUA

brill, sido de deseal que aquel hombre, sobre quien pesa Ill,grave responsabilidad moral de una deslealtad incalificable,hubiera rehabilitado su nomble, pala que Ill, posteridad Ie hi­ciese justicia

EI Capitan General Escobedo se dirigio a Guatemala y tomoposesion de su destino, el afio de 1672 Sin perder tiempo,porque las circunstancias el an apremiantes, se sltuo en Gra­nada e hizo los apl estos convenientes a los trabajos que debiaempl ender, casi a vista del enemigo, que constantemente sepaseaba por Ill, costa en asecho de su codiciada presa Reco­nocio el puerto y todos los puntos que Ofl eclan seguf.idad ycomodidad para levantar Ill, fOltaleza, y con pleno conocimien­to del terreno, y en virtud de los informes presentados pOl losingenieros, dispuso edificar el Castillo de Ill, Inmaculada Con­cepcion, frente al 1 audal de Santa C, uz, y fortifico el presidio,nombrando castellano al Maestle de Campo Don Gaspar Ines­trosa y Vasconcelos Hizo las Ordenanzas para el gobiernodel Castillo, las que firma en Granada Ii 20 de MalZO de 1673,y en Abl il del mismo afio 1egreso a Guatemala Poco despuesconcluyeron los trabajos de edificacion, con gran contento delos granadinos, expresado en una festividad religiosa, en quehubo sermon, segun dice e1 historiadOl Juarros, quien detel­mina de un modo especial esa cil cunstancia, acaso porque enaquel tiempo eran raros los sermones aun en Ill,s fiestas massolemnes Tanta novedad plOdujo ese disCUlSO, que se dispu­so enviar copia a Guatemala, en donde fue impreso con el ro­tulo siguiente PO? habe,se acabado este p,esente ano de 1675,en el ,'0 de San Juan, la !lib1ica del Castillo con titulo de Nues­tw Sffiow de la Concepcion, Ii diligencia y cuidudo del Gober­nudor de las at mas y de 10 politico, Teniente de Capitan Gene­wi Don Pablo de Loyola

De 10 expresado en ese rotulo se deduce que aunque el Se­fior Escobedo inicio los trabajos, los concluyo el GobernadorLoyola, razon por que se quiso honrar su memoria colocandoe1 nombre en aquella oracion religiosa, como una expresion degratitud por las molestias y peligros en que durante mas de

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un ano habia estado para dar garantias a la maltratada ciu­dad (1)

Las ordenanzas del Senor Escobedo tenian por objeto elarreglo de la guarnicion, su reemplazo y surtimiento Ese pe­queno plan militar era en Nicaragna el germen de una orga­nizacion mas completa, que el tiempo y los sucesos posterioresharian necesaIia para la defensa de toda la Provincia y aunde todo el reino Por 10 demas, aun regian las ordenanzas deDon Pedro de Alvarado, en las cuales, sin duda para economizar gastos, y no pOl que la guer, era Espana ignorara como seforma un ejercito, se disponia que en el momento del peligrose reuniesen los vecinos e hiciesen su propia defensa

Puede ser que la manera de defender las poblaciones, es­tablecida en la ordenanza de Alvarado, haya sido una conse­cuencia del sistema segnido en Espana por los, eyes de la EdadMedia En el Concilio de Leon, celebrado a presencia de Al­fonso V el de los buenos fue,os, el ano de 1020, en el modo yforma de los que se reunian en Toledo en tiempo de los go­dos, hay un Canon que contiene la siguiente disposicion «Losque han acostumbrado ir al fosado con el Rey, con los condeso con los merinos, vayan siempre segun costumhre" Don Mo­desto Lafuente, en la Historia General de Espana (parte II, li­bra I, cap xx), dice que ir al fosado era 10 mismo que ir acampana, a 10 cual, por las leyes godas estahan obligados to­dos los propietarios, llevando a la guerra, ademas de su Pel­sona, la decima parte de sus esc/avos ;, Quien no vera en esaobligacion la misma impuesta a los encomenderos de estas pro­vincias?

Cualquiera que lea la historia del reino de Guatemala y laparticular de Nicaragua en la epoca que relacionamos, notaracon extraneza la poca proteccion, si algnna hubo, dada por par­te del Gobierno espanol a esta colonia en los constantes em­bates de los filibusteros

(1) EI SefiOl Gaida Pelaez, en la Usta de los gohetnadOles de Nica1agua, omiti6 a Don Pablo de Loyola, euyo nombt e no s610 apaI ece endocumentos originales, sino que se halla intimamente 1 elacionado con laconstlucci6n del Castillo de la Inmaculada, como acabamos de vetloMl Bancroft asegut a que Loyola cuando huho cesado en el destino deGobernadOl, se tlaslad6 a Mexico, en donde tom6 la sotana de resufta

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134 HISTORIA DE NICARAGUA

8i los ingleses se hubiesen posesionado definitivamente deeste suelo, facil les habria sido establecer en el un centro paradirigir sus hostilidades sobre Mejico y Tierra-Firme, puestoque encontrando maderas, jarcia, resinas y todos los Milesnecesarios a la construccion de una formidable marina, nadales habria faltado para dominar ambos mares, aislar la Ame­rica e impedir por completo el comercio con Espana

Fijando algun tanto la atencion en esas consideraciones secomprende la naturalidad con que deben de haberse pregun­tado nuestros mayores: i. que hace el Gobierno espanol? i. Endonde estan sus riquezas, en donde su marina, en donde aquelformidable poder eon que Carlos V hizo temblar a Europa ypretendio la monarquia universal? i. Por que no se ve ni unsolo buque armado en guerra por Espana para aniquilar lahorda de fO! ajidos que asesina los habitantes, incendia las eiu­dades, arrebata los caudales del Rey y deja reducidas a la mi­seria las familias en estos pueblos indefensos? i. Por que pel­mite a los filibusteros que durante euarenta anos asalten losbuques espanoles, que cargados con inmensas Iiquezas atta­viesan estos mares? La historia lamentable de la madre pa­tria pudo responder a todas esas preguntas, pI esentando el cua­dro de su tristisima situacion

No pertenece a nuestra empresa relacionar las continuasguerras largo tiempo sostenidas por Espana con Inglaterra,Francia y Holanda, sin una utilidad conocida para el puebloespanol, en que se perdieron importantes territorios y ricasprovineias, en que con profusion desconoeida se derramaronlas grandes riquezas lIevadas del Nuevo Mundo, en que a to­uentes vertieron su sangre los hijos de Pelayo y los Alfon­sos, y en que todo se perdia menos el valor y la constanciatransmitidos a traves de los siglos y de las vicisitudes por losheroicos montaneses de Asturias, restauradores de la religiony de la patria

Oigamos 10 que sobre esto dice el i1ustre historiador citado«A la perdida material de territorios, que fue inmensa y

no menor durante la administracion del de Haro que en eltiempo que goberno el de Olivares, contribuyeion muehas cau­sas Algunas fueron ""clusivas de este reinado, otras venian

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de atras EI empeno de engrandeeer la easa de Austria a cos­ta de Espana, de dominar en apartadas regiones que no habiande poder eonservarse, de saerificar la riqueza, la sustancia, lapoblacion y el bienestar de Castilla al mantenimiento de do­minios insostenibles, de ayudar al imperio con 10 que 0 no te­niamos 0 necesitabamos bien, y no alcanzaba para nosotros, deestar en lucha eterna con todo el mundo antes que aceptarhonrosas y plOvechosas transacciones, afan era este que veniaheredado de los primeros soberanos espanoles de la casa d3Habsburg Con la diferencia que los primeros, fuertes ellos yrobusta la monarquia, si no 10 hicieron con fortuna, 10 inten­taron con gloria, y si no fueron bastante politicos, tampocopodia decirse que fuesen iIusos del todo Los segundos, debi­les y flacos, quebrantada ya pOl los anteriores esfuerzos lamonarquia, ellos sin el talento y la actividad de sus padres, lanacion sin la robustez de otros tiempos, ellos entregados a or­gullosos e ineptos favoritos, el pais desangrado y agobiado,intentaron 10 mismo que sus mayores, y esto era una temeri­dad y un imposible Porque temeridad, insensatez y locuraera imaginar que 10 que Carlos V con su infatigable actividady su brillante espada, y Felipe II con su gran cabeza y astutapolitica no pudieron lograr, 10' alcanzara Felipe III fundandoconventos y cofradias, y FelipJ' IV asistiendo a comedias y galanteando a comediantas »

«Si los predecesores de Felipe IV habian tratado con pocapolitica a los reinos y estados anexos a la Corona de Castilla,y con la opresion y los disgustos que les dieron los prepararona tentativas de rebelion, las tiranias y las ofensas y las in­discreciones de los ministros de Felipe acabaron de provocarlas insurrecciones que trajeron tras si la perdida de provineiasy reinos enteros, y el peligro de perder otros y de venir a suruina la monarquia entera Sin los agravios que se hicieron alos catalanes, Cataluna no se habria lewmtado, y sin el alza­mienio y la guerra de Cataluna, ni se habria perdido el Rose­lion, ni se hubiera insurreccionado el Portugal, 0 por 10 me­nos no hubiera logrado su emancipacion de Castilla Sin losexeesos y los desmanes de los virreyes no se habrian subleva­do Sicilia y Napoles, y por atender a apagar la sublevaeion

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de Napoles se desguarnecian los Paises Bajos, 0 se abandona­ba Portugal 0 se descuidaba Cataluiia »

«Y era que los virreyes, hechuras y favoritos de los priva­dos, imitadores de su inmoralidad, emulos de su opulencia, an­siosos de rapido enriquecimiento, y compartiendo muchas ve­ces virreyes y validos el fruto de sus cohechos, de sus exac­ciones y de las sordidas gran jerias de sus cargos, a trueque deacrecer sus fortunas y las del Ministro que los sostenia, ve­jaban y esquilmaban sin consideracion los paises sujetos a sumando De aqui la desesperacion de los oprimidos y las rebe­liones de los desesperados, que limitadas en un priJ;1cipio aarl anques de ira y de furor contra los virreyes, con protestasde sumision al Monarca, degeneraban despues en unas pal tes,como en Napoles, en proclamacion de Republica, en otras, comoen Cataluiia, en la resolucion de someterse al yugo de un Reyextranjero, y en otras, como en POI tugal, en el sacudimientode toda dependencia de Castilla y en la completa emancipa­cion en que en otro tiempo estuvo aquel reino de esta corona»

«Habiase extendido la corrupcion, cosa lamentable pemnada extraiia, de los valldos, cortesanos y virreyes, a los ge­nerales que mandaban los ejercitos Y sobre haberse ido aca­bando, no la raza, sino la escuela y maestria de aql1~llos in­signes y predaros capitanes que en los tiempos de los ReyesCatolicos, de Callos V y de Felipe II levantaron tan alto enel mundo el nombre de las almas espaiiolas, bien que queda­ran todavia algunos honrosos restos de aquella antigua falan­je de famosos guerreros, ya los mas no iban como entoncesaf frente de las banderas de la patria por dar gloria a su na­cion y ganar honra personal, sino por gozar de los sueldos yhacer fortuna Ni como entonces eran nombrados los masdiguos, los mas valerosos y capaces, sino los mas amigos ymas allegados del Ministro a los mas vanidosos y los mas adu­ladores del Rey Hombres eran algunos que Ilevaban su co­dicia hasta el punto de hacer figurar en las revistas doble nu­mero de soldados de los que hacian el verdadero y efectivocontingente de las guarniciones 0 de los ejercitos, para es­pecular con los sueldos y las provisiones de los que se supo­nian y faltaban De aqui el malograrse combates y perderse

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plazas con gran sorpresa de la Corte y del Gobierno, que porlos partes de los generales creian contar con mucho mayor nu­mero de combatientes 0 de defensores Imitado este funestoejemplo de los gobernadores de fortalezas, capitanes de com­panias y otros subalternos, it veces buscaban gente perdidapara hacerla figurar como soldados en las revistas, it vecesvendian hasta los viveres y las municiones que el Gobierno, acosta de sacIificios les suministraba Con estos elementosi. como habian de ganarse batallas, y como no habian de per­derse plazas y territorios 1» (1)

Seanos permitido decir que la situacion en que se hallabaEspana, con tanta exactitud descrita por el Senor Lafuente,impedia al Gobierno socorrer con elementos de guerra a suscolonias en las duras pruebas a que las sometian los enemigosde la casa de Austria Tan graves males se habrian evitadobajo un Gobierno prudente, dirigido por sabios y energicos mi­nistros, en vez de favoritos ineptos, que entregados a la embriaguez del lujo y de la personal opulencia, sometian a la pa­tria a mala e inmerecida fortuna

Apartemos por un momento la atencion de estas considera­ciones generales, it que nOs ha conducido la constante y por­fiada lucha sostenida entre los nicaragiienses y los invasoresextranjeros En el siguiente capitulo volveremos a tratar esteasunto con ocasion de nuevos e importantes acontecimientosverificados durante los anos que el ha de complender Ahorase hace necesario dirigir una mirada a la situacion interiorde esta Provincia en 10 que se refiere a la administracion ecle­siastica y a grandes y beneficas empresas en que tuvo no pocainfluencia el esph itu religioso de aquella epoca

Hemos manifestado ya que el Obispo Don Fray Juan Torrehabia muerto seis dias despues de su Jlegada a Leon Le su­cedio el Senor Don Fray Alonso Bravo y Laguna, franciscanoy natural de Tepeaca, en el reino de Mexico Por no haberlevenido las bulas goberno siete anos 1a diocesis con solo lacedula de su nombramiento AI cabo de ese tiempo las reci­bio y fue consagrado en Guatemala el 21 de Septiembre de 1671Paso it visitar la Provincia de Costa-Rica, que formaba parte

(1) Lafuente Hist gen de Espana, pal te III lib IV, cap XVIII

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138 HISTORIA DE NICARAGUA

del Obispado, y mud6 en la ciudad de Cartago por Enerode 1675

La conquista de Tologalpa, abandonada en 1612, a causadel asesinato que los indios ejecutaron en los Padres Fray Es­teban Verdelete y Fray Juan de Monteagudo, volvi6 a ocuparla atenci6n de la Orden SerMica, que con santo celo y lauda­ble decision y a costa del martirio de dos de sus i1ustres hijos,la habia proyectado y dadole principio En la primera vez losindios, no acostumbrados al trato con los espalioles, y acasotemiendo la adversa suerte de sus compatriotas conquistadosen 10 interior de la Provincia, hicieron sangrienta re~istencia

a los religiosos que con heroica abnegaci6n y el crucifijo enla mano les I1evaban la paz y la civilizaci6n, ofrecidas por lasdoctrinas del clistianismo Sesenta y dos alios despues,en 1674, los mismos indios de Pantasma y Paraka, con nuevasconvicciones, con el conocimiento del distinto trato que a lOBnaturales daban las autoridades, se dirigieron a Guatemala, asuplicar al Padre Fray Fernando Espino viniese a doctrinar­los y reducirlos a poblaciones Ya querian iglesias, ya querianparrocos y de grado se sometian a la direccion de sabios yvirtuosos conductores

Aunque eran los indios mismos quienes solicitaban. la mi­si6n, y no habia razones para temer una celada como la quepusieron al Padre Verdelete y sus compaiieros, porque de1612 a 1674 habian variado enteramente las circunstancias, ce­sado las hostilidades y extorsiones y cambiadose la asperezamilitar de la conquista en la dulzura evangelica practicada porlos religiosos en las comarcas de Segovia, no quiso el PadreEspino, Provincial de los franciscanos, proceder aisladamenteen el asunto Era natural que buscase tanto en Guatemalacomo en Nicaragua la protecci6n del poder civil, y que quisieseautorizar sus medidas con la aprobaci6n del Presidente, paraeximirse de ulteriores responsabilidades, aunque fueran desco­nocidas y aun improbables en aquel momenta Conferencio,pues, con eL Capitan General, y se resolvio que viniera el Pa­dre Fray Pedro Legares, dandole la preferencia sobre otrosreligiosos que se ofrecIan, porque, aunque joven, era docto yvirtuoso

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Provisto el misionero de las licencias expedidas por el Su­perior de su Orden y del permiso del Obispo de esta di6cesis,se dirigi6 al Corregimiento de Nueva Segovia EI Capitan DonLuis de Cerve1l6n, vecino de esa ciudad, Ie di6 una casa, y enella fund6 el religioso un hospicio que sirviese de escala a losdemas sacerdotes de esta Provincia destinados a entrar en lamontana Quiso tambien fomentar el sentimiento religioso enla ciudad y estableci6 Escuela de Cristo y Tercera Orden depenitencia, a donde los vecinos concurrian para recibir el so­plo de la religi6n, en que se siente el espiritu de Dios

No queriendo perder tiempo el Padre Legares, di6 princi­pio desde luego a sus trabajos de convertir a los indigenas id6­latras, viajando con frecuencia a la montana y fundando dospueblos en el valle de Culcali, distante cinco leguas del fondode aquellos montes, con los imlios que voluntariamente Ie se­guian En esas dos poblaciones, a que di6 los nombres de SanJose Paraka y San Francisco Nanaica, habia por Octubrede 1678 mas de doscientos indios de confesi6n y muchos par­vulos, segim asegura J uarros, apoyandose en certificacionesexpedidas por los capitanes Jose Vasquez de Coronado y Ma­nuel r>iaz de Velasco (1)

Un acontecimiento lamentable vino a entorpecer el activomovimiento de los trabajos emprendidos por el P Legares lamuerte de este virtuoso sacerdote, ocurrida el 24 de Juliode 1679, cuando apenas tenia treinta y cinco anos de edad Elhospicio que fund6 en Nueva Segovia Ie sirvi6 de ultimo asiloTan esclarecidas fueron las virtudes del joven religioso, y tan­ta su abnegaci6n por extender entre los infieles la doctrina deCristo, que muri6 en opini6n de santidad y aun se Ie atribu­yeron varios milagros i Cuantos hombres que merecen el dic­tado de grandes pasan oscuros por el mundo, sin pretender elbriIIo ni la pompa de los que con 1a espada en la mano y de­rramando torrentes de sangre, se conquistan una celebridadno merecida! Pero la gloria que aquellos bienhechores de lahumanidad se adquieren con sus obras es recompensada porlas generaciones posteriores con la veneraci6n que consagrana su santa memoria.

(1) Camp de la Hist de Guat. tI at v, cap IB

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140 HISTORIA DE NICARAGUA

EI religioso que habia acompaiiado al Padre Legares se re­tiro a Guatemala, buscando la salud, perdida en los asperostrabajos de su ministerio apostolico Acontecimientos fueronesos dignos del sentimiento de todas las comarcas indigenas,cuyos habitantes, acostumbrados a 1ecibir la benefica influen­cia que siempre ejerce la virtud en los corazones bien dispues­tos, experimentaban la necesidad de los consuelos religosos queles inspiraban aquellos padres con la doctrina y el ejemplo

EI Provincial de la Orden Serlifica supo en Guatemala elfallecimiento del Padre Legal es, por aViso que Ie dielon los al­caldes de la ciudad de Nueva Segovia La pena que esa des­gracia causo al Prelado y el interes que Ie inspiraba\ el bienespiritual de las tribus de Pantasma y Pal aka, se dejan veren las medidas que tom6 para volver a los trabajos de la santaobra comenzada Convid6 a los religiosos de toda la Provin­cia, considerando que no habtia uno solo que se negase a pres­tar sus servicios en tan gloriosa empresa, y en efecto se pre­sentalOn varios, entre los cuales escogi6 al que debi,! antici­parse con el caracter de Prelado de los que despues habriande venir No consta el nombre del que fue designado pal a elejel cicio de ese cargo, pero Sl que salio de la capital del reinoel 22 de Septiembre del mismo aiio de 1679 y que poco mastarde se Ie enviaron dos compaiieros con quienes trabaj6 conlaudable empeiio en formar reducciones

POl muchos aiios continu6 con feliz exito esta conquistapacifica, en la que a manos Ilenas se esparcia la saludable si­miente de la moral, que dulcifica las costumbres y hace la fe­licidad de los individuos como de los pueblos

El Padre Juarros, que escribi6 su obra por los aiios de 1808a. 1811, lamenta el que en mas de medio siglo, transcurridohasta esa epoca se hubiese abandonado la conquista de Tolo­galpa, sin saberse la causa que obligara a los religiosos a suspender el cultivo de esa villa Pensamos que tan dilatada in­terrupci6n fue ocasionada por las frecuentes invasiones de losfilibusteros y el asiduo empeiio que estos pusieron en desmo­ralizar a los indios, a fin de asegurar ulteriores procedimien­tos para posesionarse de aquellos importantes territorios, como10 veremos en SU oportunidad

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LIB VI - CAP, VIII -SEGUNDA INVASION FILIBUSTERA A GRANADA) ETC 141

No debemos pasar inadvertida una cilcunstancia notablepara Nicaragua, y es la de que el R P Fray Fernando Espi­no, religioso anciano, instruido y virtuoso, que con tan grandeempeno mantuvo la misi6n encalgada de catequizar la tierrade los pantasmas, era natural de Nueva Segovia Su vida fueejemplar, y heroico su celo por la conversion de los indios in­fieles Sabia con bastante perfeccion la lengua lenca, y cuan­do en epoca anterior dispusieron los superiores de la Ordenque viniese en misi6n el P Pedro de Ovalle a conquistar a losjicaqucs de Xamastran y Olancho en territorio de Honduras,el P Espino se Ie agrego, sin consideracion a su avanzada edadSalieron de Guatemala los dos misioneros en 16 de Mayode 1667 y lIegaron a los confines de Taguzgalpa, experimen­tando grandes trabajos y venciendo serias dificultades en elfondo de la montana En esos lugares, inaccesibles para todoel que no tuviera el conocimiento y la destreza de los indios,encontraron una familia lenca dispuesta a dar muerte a unajoven por el crimen de hechiceria Grandes esfuerzos hizo elvenerable Espino por salvarla, mas no 10 consiguio: tuvo si lasatisfaccion de catequizarla prontamente y de bautizarla enseguida En 1668 regreso a Guatemala el Padre Espino, enfuerz8. de santa obediencia

AI Obispo Don Fray Alonso B,avo y Laguna sucedio en elobispado de Nicaragua Don Fray Andres de las Navas y Que­vedo, del Real y Militar Orden de la Merced Se hizo su elec­cion en 1677 y se consagro en Guatemala en la iglesia de suorden el 30 de Noviembre del siguiente ano

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CAPITULO IX

Establecimiento del Colegio Seminario: tercera invasion delos filibusteros a Glanada; su entrada en la capital de la

Provincia.

1680 a 1689

Erecci6n del Colegio TlldenUno-Condidones de este establecimtento­Don Antonio Coello es nombrado Gobelnador de la Provincia -Una8uoadilla al mando del General Don Francisco Valdes sale en buseadel corsal io Chat pe -Resultado inefic8z de eata expedici6n -Defic\encia de los medias empleados pm a la defensa del 1 eino contra los flUbustel os -IntI oducense estos al Realejo -El Maesh e de ,Campo DonLOi enzo Gondlez Caldelon los obliga ~ I eUral se -ImpOl (antes servi­cios de aquel ilustre mllitar y del Gobel nadOl Alvmez Castrill6n enbeneficia de los pueblos amenazados-Tercel3 invasion de los lngle~s

a Granada -----",SUB funestas consecuencias -Aconlecimientos OCULI idos enLe6n -Deseripci6n de esta eiudad, hecha POl el Padre Gage -Inquie­tudes que causal on los enemigos en 1684 -Entran estos p'or el estelode "Dofia Paula" y se dil igen soble Le6n -Resistencia que lee opusielon los vecinos -Saquea el invasOl la poblaci6n e incendia algunosedificios -Relaci6n de los muel tos y hel idos en e1 eambate -Conside1 aeiones genel ales sobt e este suceso -ESrUel zos de los habitantes deLe6n pOl lestablecer las casas destIuidas-Constlueci6n de la CatedlalDimensiones y forma de este edificio -Nuevas hostilidades de los filibustel as -Apodel anse de Amapala -Expedici6n enviada POI 1a Audien­cia de Panama pal a all ojallos de aquel puer to -Llega la escuadra alRealejo, en donde 1ecibe SOCot2 as de Jas autol idades de ests Provincia -Nuevos auxilios pI estados Ii la al mclda de Panama -J!:sta desalojaa los filibustelos de Amapala -Visita del Oldor Bolanos a la Gobelna­ci6n de Nical agua -Los ingleses amenazan la capital del reLno -Jrnponente actitud del Capitan General -Eflcaces medidas que diet6 -Tras·leei6n del SefiOI Obispo Navas y Quevedo a la di6cesis de GuatemalaEl SefiOl Don Fl ay Juan de Rojas oeupa la Silla Episcopal de Nicaragua.-Muel te de este PI elado -Es electo en su 1eposici6n Don Fl ayNicoh'is Delgado

EL Senor Obispo Don Fray Andres de las Navas y Qlleve­do erigi6 el Colegio Tridentino, en 15 de Diciembre de 1680,bajo la tutela y patrocinio de San Ramon Nonnato En el in­forme que dirigi6 al Rey el Senor Obispo Don Agustin Morel

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144 HISTORIA DE NICARAGUA

de Santa Cruz en 1752, dio conocimiento circunstanciado de laforma y comodidades del edificio Era de adobes y teja y te­nia de longitud setenta y dos varas de Oriente a Poniente, yde latitud setenta y media de Norte a Sm Habla en iiI oncepiezas, todas estrechas, las cuales eran un oratorio, sala ycuarto del Rector, cinco para los colegiales y las restantes paraoficinas EI Rector no tenia renta el maestro de mOl al y elde gramatica latina disfrutaban de doscientos pesos anualescada uno, que se pagaban de la real caja No se admitian enel establecimiento mas de ocho colegiales, a quienes se dabacomida y cena con alguna escasez ,

La falta de buena alimentacion, la limitaci'Al de la ensenan­za y las malas dotaciones de los profesores, plOvenian de queel Senor Navas y Quevedo no arreglo la fundacion del Colegioa 10 ordenado por el Concilio de Trento y solo dispuso que loscuras de la diocesis pagaran cada ano, unos diez pesos y otrosdoce Esa contribucion y doscientos pesos de los tributos deNindiri, concedidos al Obispo para los gastos del Colegio, as­cendian a quinientos ochenta pesos cuatro 1 eales al ano, sumademasiado pequena para proveer a la manutencion de los alum­nos, hacer las reparaciones necesarias en el edificio y otroscostos indispensables Entonces tenian los viveres P91'0 pre­cio, pero aun asi no se comprende como podia conservarse elestablecimiento, aunque fuera en tan mala situaci6n No seexigio de la cuarta episcopal y capitular y demas beneficios ycapellanias pension alguna Por la poca prevision y el muchodescuido con que se erigio el Seminario, fue de escasa utilidada la iglesia y a la ensenanza publica en general, y aun suce­dia que los que deseaban adquirir conocimientos mas extensosen las ciencias 0 en las letras, tenian que dejar sus casas ydirigirse a Guatemala, haciendo crecidos gastos, porque el Co­legio de Nicaragua no podia satisfacer sus aspiraciones

En 1681 fuii nombrado Gobernador don Antonio CoelloLos ultimos acontecimientos de Granada habian estreme­

cid<1 a todo el reino y puesto en armas esta Provincia, por con­siderarse la mas expuesta a las invasiones de los filibusteros,y estar convencidos sus habitantes de que, agotadas las ri­quezas de la ciudad del Lago por los saqueos de que habia sido

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LIB VI -CAP IX -ESTABLECIMIENTO DEL COLEQIQ SEMINARIOJ ETC 145

victima, aquellos pasarian a otI os pueblos interim es, con laconfiaoza de no encontIar lesistencia que no pudieran v~ncer

La inquietud y confusion de las autoridades y poblacionestomaron extram dinarios creces al recibirse la noticia de queel filibustero Charpe andaba por el mar del Sm Nicaragua seveia amenazada por ambos mal es y sin elementos de gue" apal a defendel se, porque no los tenia la Capitania General enla cantidad que ya era necesaria, ni de la Peninsula se envia­ban, por las causas que tenemos conocidas TIiste condicionen la que estahan estos desamparados colonos, de presental elpecho como antemmal indestructible a la altilleria de una tro­pa hambrienta de I iquezas y discipJinada en los peliglos

Sin embargo, la desesperacion les presento medios, comocasi siempre sucede, y pudieron, a costa de sacrificins, fOlmaruna armadiUa que al mando del General Don Flancisco Valdessaliese en busca del corsaIio Charpe Estos esfuerzos no tu­vielon satisfactorio resultado, porque no se encontro al ene­migo, y puede suponerse que la provincia volvio a su anteriorindefension pOl carecer de lecursos con que mantener la arma­da que tan crecidos gastos requeria

Aun habrian tenido remedio tan graves males y podidoseevitar tantas calamidades, tantos infortunios y afrentas, si elGobierno hubiela sabido aprovechalse de la disposicion natu­I al en que se hallaban los pueblos, de hacer su propia defensaEI abandono en que se tenia al reino de Guatemala era ocasionde justas quejas Los holandeses se habian hecho duenos dealgunas provincias del Brasil, en ailos anteriores, y por elde 1638 enviaron una escuadl a al mando del Conde Mauriciode Nassau, para ensanchar sus conquistas Unidos espaiiolesy portugueses no pudieron evitar que provincias enteras sefneran sometiendo al invasor i. Que podia esperar Nicaraguasola y desamparada? Asi 10 comprendieron los hijos del paisy tomaron las armas para luchar como independientes de unpoder que en realidad para ellos. no existia De nada servianlas torres y castillos mandados construir en el rio de San Juan,si el Gobierno dejaba inerme la provincia y descubiertos losmuchos puntos pOl donde podia entIar el enemigo

La medida maS segura de salvaci6n, la menos costosa y de10

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146 HISTORIA DE NICARAGUA

Ia que no habrian podido burIarse los filibusteros, era lade armar los pueblos, bajo la direccion de hombres de valory firmeza, disciplinarlos con perseverante eficacia y mantener­los con el mosquete al hombro, conservando los animos al ni­vel del peligro Tratandose de defender aun las creencias re­ligiosas, debieron exigirse socorros a las parroquias, cofra­dias y conventos, para escaIonar fuerzas, aseguradas con trin­cheras y dar reguIaridad a Ia tropa bisona y coIecticia Losposteriores acontedmientos haran conocer cuan deficientes ha­bian sido las medidas de defensa tomadas hasta entonc£s y conque facilidad podia ocupar eI enemigo toda Ia provincia, que­dando aisladas e inutiles en muchos casos las fortalezas, y sinotros recursos que los que ofrecieran la necesidad y el patrio­tismo No nos parece avanzado el juicio de que en estos tiem­pos de conflictos no evitados, en que la America debio consi­derarse sin vinculos sociales con Espana, y comprender que ape­nas se movia esta para conservar sus extensas y lejanas co­lonias, disputadas por naciones que no se daban reposo en lagigantesca lucha con ella sostenida, nacio la idea de la indepen­dencia, que siglo y medio despues se convirtio en un hecho

En 1683 entro el corsario al puerto del Realejo con tresriavios de guerra Perdida debio considerarse la provin'cia contim crecido numero de enemigos a sus puertas Pero teniaLeon un hijo valiente y desinteresado cuya gloria ha perma­necido sepultada en el polvo de los archivos por espacio dedoscientos anos: el Maestre de campo Don Lorenzo GonzalezCalderon, quien armo cerca de mil hombres en 10E momentosdel conflicto, reciutados en los pueblos de Chichigalpa, Posol­tega y Quezalguaque, y los sostuvo a su propia costa Contoda su tropa se situo en la isla del Cardon, esperando quedesembarcaran los invasores mas estos viendo la numelOsafuerza que los agual daba, no se atrevieron a venir a tieHa ydispusieron emprender el regreso Temiendo Gonzalez Calde­ron que al retirmse el de la isla volvieran los filibusteras, di­vidio su tropa manteniendola por mas de tres meses en aque­lIas pueblos Esta misma conducta observo al tener noticiade una invasion que hicieron por esa epoca en el pueblo delViejo

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LIn VI -CAP IX -ESTABLECIMIENTQ DEL CQLEGIO SEMINARIO, ETC 14-7

En todos esos lances estuvo presente el Gobernador DonPedro Alvarez CastriIIon, dando valor y aliento a la tropa consu presencia y denuedo y socorriendola de bastimentos queGonzalez Calderon pagaba a subidos precios, por haber esca~

seado con ocasion de la guerra (1)Los filibusteros ingleses, ha!agados' por la exuberante fer­

tilidad de la costa del Norte y la hetmosura de toda la provin­cia, con sus poeticos lagos de aguas dulces, sus caudalosos rios,sus liquisimas minas de oro y plata, sus espesas montanas depreciosas maderas y sus facilidades de pasar de un mar a otro,se prometian ser duenos y senores de tan grandes riquezas y

(l) El SenOl Gal cia Pelaez, en la lista de los gobel nadOl es de estdplovincia omiti6 a Don Pedlo Alval ez Castl ill6n, y puso como inmediatoSUCCSOI de Coello al Maestl e de Campo Don Gabl iel Rodl iguez BI avo deHoyos De documentos autenticos existentes en el Al chivo Nacional deesta Republica consta que el SenOl Alvalez fue uno de los gobeinadOlcsmas notables que tuvo Nicmagua, y aunque no puede senalmse el anaen que comenzo a eieI ceI ese destino, es indudable que fue en los de 1681a 83 pot consiguiente, Don Antonio Coello, nombrado en 1681, 10 tuvo:a su cm go POI muy COl to tiempo

Don Jose Milla, en BU Histolia de la Auuhicfl Central, tomo II, cap XXI,dice 10 siguiente:

«Las plOvincias de Nicalagua y Costa Rica habian continuado sufliendo las hostilidades de los COl sat ios y piI atas ingleses, asi POI los pueI tosdel NO! te como POl los del SUI En cl ana de 16H3, habiendo avistado enaquellas costas seis navios gI andes de enemigos, Don MelchOl de Mencosy Don Juan Gonzalez Bat! es, vecinos de Guatemala que habian acudido aNicalagua can gente, pOI disposician del Capitan Genet aI, mantuvieloncincuenta homhres a su costa mientl as dm 6 el peliglO»

Entle los numelOSOS documentos oilginales del AIChivo Nacional quehan SCI vida pal a escI ihil estc capitulo no hay uno solo Que hable oelenvio de fuel zas de Guatemala en auxilio de esta plovincia el anade 1683, ni que haga mencion de Don l\IelchOl de Mencos y Don JuanGonzaJez Bah es, a quien atl ibuye el Seiim MilIa la defensa de NicqwguaPm el contlalio, de todos apmece que fue el Maeshe de Campo Don Larenzo Gonzalez Caldclon, Quien al ma cel ca de mil hombt es I edutad09en 10$ puehlos de Chichigalpa, Posoltcga y Quezalguaque y los mant.uvoa su costa elm ante algunos meses, comu nuerla dicho en el toxto de estaobi a Son muchos los documentos que ha-n sel vida de base a esta aser·cion; pel a no Ct eyemlo neceSaI io publicm los todos se colncan comocomplolmntes, al fin del pI esente volumen un escI ito y dos declal aciones tomaelas de la Infmmaci6n 1eribida pm el Oidm Don Anto1lio de)Navia acclca dc l()s p~ocedimientos y se?vicios del Maest?e de CampoDon Lo? enzo Gonzalez Calde} on No esta dem:ls advet til que en esa infOlmaci6n se tegistlan declalaciones del Smgento MayOl Don Juan Ja­cinto Lopez de Anell aviele, del Gobel nadm (Ie Panama Don Dionisio deAl tunduaga, de los Cnpitanes Don Tuan Ibanez de Glotin, Don GasparBaca de Quii10nes y Don Tuan Antonio de Unda y del Alfel ez I cal Don Domingo Pel eir a, todas p2lsonns impOltantes, y algunas rouy bien infO!madns de los sucesos de 1683 POl habel inteivenido en elIas

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148 HISTORIA DE NICARAGUA

formar una naci6n desde la enalJ con una mana tocasell a Ja­maica y con la otra las plOvincias del Sur de America

Bien se comprende que tratalOn de asaltal casi a un tiem­po las principales poblaciones En 7 de Abdl de aquel ano,filibusteros ingleses y f,anceses en niimero como de cuaho­cientos se introdujeron por Escalante, puerto situado en e\ maldel Sur, a veinte leguas de Granada InfOlmados los glana­dinos de esta novedad, levantaron en la plaza una trinchel acuadrada, en que colocaron catOl ce piezas grandes de al tillel iay seis pedrelos A las dos de la tarde del mismo dia en quehicieron esos pleparativos de defensa, se presento el el1emigoqueria sorprender la ciudad y doblo sus marchas Una embos­cada puesta en las orillas, detuvo momentaneamente el pasode los invasol es, en daude perdieron un hOlllbre, perc acer­candose a la trinchera la asaltaron en breve tiempo y se apo­deraron de la plaza

Noche de inquietudes para los habitantes de Granada fuela que siguio a aquel funesto dia El 8 en la manana pidieronlos filibusteros el rescate de la ciudad, amenazando con incen­diarla si no 10 presentaban al momento No se creyo que talcosa hiciel an, hasta que vieron arder la iglesia del conventode San Francisco y dieciocho casas principales Saquearon lapoblacion, y causados tan graves danos, se retiralOn, con laperdida de trece hombres, pasando por Masaya y otros puebloshasta salir pOl Masachapa Granada quedo sin archivos, porlos estragos ocasionados en esta invasion y en las dos ante­riores (1)

Vamos a refedr graves acontecimientos que llenaron deconsternacion y angustias a la hmmosa ciudad de Leon, cabe­cera de la provincia y una de las mas comodas de todo el rei­no Para dar a conocer el grado de prosperidad en que sehallaba, nos valdremos de las mismas palabras con que 10 hizoel religioso Ingles Tomas Gage, en la relacion de su viaje porestas tiel ras

(1) InfOIme de Don Jel0nimo de 1a Vega y Lacayo Salgento Mayorde Gl anada al Rey en 19 rle enClO de 1759 <!ue COlI i6 imm eso ~Cer tificacion expert ida pOl el Padre GOembes de Villanueva CUla rcctOl deaquella ciudad, en 1734, cor IT,l0tivo de 1a confil macion del V P Obando

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LIB VI -CAP IX -ESTABLECIMIENTO DEL COLEGIO SEMINARIO, ETC 149

«Esta ciudad de Leon, dice, esta muy bien construlda, por­que el mayor placer de los habitantes es tener bellas casas ygozar de los placeres del campo, donde encuentran can abun­dancia todo 10 que es necesario pal a la vida, mas bien queacumular glandes liquezas asl es que no se encuentIan gen­tes muy ricas, como en otlOS muchos Jugales de America Ellosse contentan con tener hermosos jardines, criar pericos y otrospajaros que cantan, tener abundancia de caIne y pescado ba­rato, viviI en bellas casas y pasar una vida dulce y ociosa,sin cuidalse mucho del trafico, aunque tienen el lago cerca deellos, de donde parten buques todos los anos para la HabanapOl el mar del Norte, y por el Realejo al mar del Sur, de don­de podrlan tI aficar comodamente al Peru y a Mexico, si tu­vleran mas ganas y se arriesgaran a ir tan lejos como esoLos Caballeros de la ciudad son casi tan vanos y locos comolos de Chiapa Es particulal mente por razon de las deliclasde qne alii se goza, par 10 que los espanoles llaman a toda laprovincia de Nicaragua el paraiso de Mahoma »

Puede suponerse que de 1625, en que el Padre Gage vlsitola ciudad, a 1685 en que estamos considerandola, haya progre­sado notablemente, puesto que no habla ocurrido en ella nin­gun acontecimiento en que se hubiese desmejOlado 0 empo­brecido, y que el trabajo tI anquilo y las pocas necesidades quesentian sus moradores para disfrutar de una vida dulce y hol­gada, deblan aumentar las comodidades, el bienestar y la ri­queza

EI ano de 1684 fue de constantes aIarmas, nacidas unasveces del temor que Infundian las hostilidades de los filibus­teros ejecutadas en la ciudad de GI anada y demas puntas dela costa del Norte, y otras de los avisos comunicados par losvigias de avistarse embarcaclones sospechosas can direccion aalgunos de los puertos par donde podlan hacer un desembarque

Aciago fue para Nicaragua el ana de 1685 EI dia 21 deAgosto los filibusteros tomaron tierra en un estero Inmediatoal Realejo, y posesionados de el sin reslstencia ninguna, por­que no hubo quien la hlciera, impldielOn toda comunicacion con10 Interior, a fin de evital que dielan aviso a los pueblos cer·canaS y de preparar comodamente su invasion Pero hablen-

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150 HISTORIA DE NICARAGUA

dolos sentido uno de los hombres que atalayaba el puerto, pasoaceleradamente a Leon a dar la noticia Las autoridades noquisieron creerIe, y aun 10 arrestaron y pensaban azotarlo pu­blicamente Pronto lecibieron un amargo desengano POl unlio que entra en el playon del Jaguey se dirigieron los COlsa­rios en pequenas embalcaciones a la hacienda de Don Juan deOconor, llatUlal de esta ciudad, en donde leunieron las provi­siones necesarias y alistaron ]a fuerza para emprender en re­gia la COlleria devastadora que se proponian ejecntar

Marcharon rapidamente SOble Leon, con objeto de darIeuna sorpresa, mas no pudieron evitar que las autoridades yel vecindario se aprestaran a la defensa, aunque atlOpellada­mente y sin organizacion, por haber Cl eido tal de la aproxima­cion del enemigo

EI Gobernador Don Pedro Alvarez Castrillon y el Maestrede Campo Don Lorenzo Gonzalez Calderon recorrielOn ]s ciu­dad, hacienda un llamamiento a los habitantes y manifestan­doles el inminente peliglO en que se hallaban, de perder susbienes y ser capturados para esclavos si prontamente no aPou­dian a hacer su propia defensa No el valor, sino el miedose extendio par toda la poblacion, y aunque ocurrieron unospocos a empunar las armas, la mayor pal te de los del 'pueblobuyeron al campo a ocultarse con sus familias y a asegurarlOs pocos intereses que pudieron lIevar en aquellos angustiososmomentos

Subitamente se presento el enemigo en las calles de L30nen numero de cuatrocientos hombres La suegra del Gobel­nador, llamada Dona Paula, esposa de Don Antonio del Real,toco la caja, y par esa circunstancis se dio el nombl e de aque­lIa Sefiora al estero por donde entralOn los ingleses Los Se­nores Alvarez y Gonzalez Calderon se situaron en Ia plaza caneincuenta soidados, y cuando el advelsario llego Ie salieron alencuentro Empefiaronse en el combate, pero pronto se vie­ron solos, par habel huido la mayor parte de los defensOles,al principia de la pelea Los 1estantes cumplieron can SU de­ber, hasta que unos murieron aCl ibillados de heridas y nuevefueron hechos prisioneros, entre elias el Presbitelo LicenciadoDon Francisco de Oband9

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LIB VI -CAP IX -ESTABLECIMIENTO DEL CO!..IEGIO SEMINARIO, ETC 151

Asi quedaron los enemigos dueiios de la ciudad y de cuan­to en ella se encerraba, sin que sus desesperados mOl adorescolumbraran medio alguno pal a Iibrarse de los excesos y veja­ciones que en tan apurado trance ya sentian Los filibusteros,sin haber tenido mas perdida que la de uno que cay6 en po­der de los leoneses, saquearon los templos y las casas, arre­batando de los primeros los vasas sagrados, ultl ajando las ima­genes de los santos y apoderandose de los muebles y de cuan­to tenia alglin valor En una de las capillas de la catedral conservaba su altar la efigie de Jesus Crucificado, que aun exis­te es de bronce, y creyendo los invasOles que pudiera ser deoro, Ie diewn tres sablazos en el pie derecho, pal a reconocerel metal Aun se perciben las seiiales de esos golpes, que losleoneses miran como restos de la historia de aquellos aciagostiempos

Terminado el saqueo, incendialOn la catedral, el conventode la Merced, el hospital y muchas casas principales, y regre­sawn en seguida al pum to del Realejo, de donde zalparon lIe­vandose un buque mercante qne estaba alii fondeado con al­gunos intereses y despues de haber incenciado la poblaci6n dela villa No se dice en los documentos que hemos tenido a lavista para hacer la relacion de 10 ocurl ido en la capital de laProvincia, que los filibusteros hubiesen capturado mujeres,como habian hecho en Glanada otlas veces, ni mas hombresque los nueve tomados en el combate, no obstante que eransu mas codiciada presa, pOlque los vendian en las Antillas amuy buenos precios Puede suponerse que los haya detenidoel temor de que los leoneses los persiguieran para quitarlessus padres, hijos y mujeres En Granada habian tenido la fa­cilidad del inmediato embarque, pero ellargo trayecto de Leonal Realejo debia presentarles graves inconvenientes para unaretil ada rapida y sin peligro

Los leoneses muertos en el combate fueron espanoles, loscapitanes de caballerfa Don Pedro de Barrida y Don Pedrode Cardosa, Don Anton Fernandez, Don Juan Flores y DonJose Ramirez mulatos, el sargento Lucas Salgado y el cabode escuadra Diego Fernandino indios, los capitanes SebastianSanchez y Raimundo Alvarado, el plincipal Juan Membreiio y

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152 HISTORIA DE NICARAGUA

Francisco Calero, todos del barrio del Laborio, los caciquesDon Pedro de Aguilar y Don Manuel Lal ios, capitanes de Que­zalguaque

Los hece valientes mueltu", cinco espanoles, dos mulatosy seis indios, demuestran que el combate fue renido Se lesdiii sepultm a en el convento de San Francisco, por el curaDon Nicolas Call ion, y las partidas de entelramiento fueronapuntadas al folio trece y siguiente del libra de difuntos, quecomenzo en l' de Enew de 1681 y telmino en 6 de Febrerode 1731

En vista de los desafueros que los felOces em(sarios delGobierno ingles cometian en estas inocentes e indefensas plo­vincias, se hace forzoso reconocer que era barbal a la politicade aquellos tiempos en que una declaracion de guerra equi­valia a sentencia de muerte, plonunciada conh a los su.bditosdel gobielno enemigo No tenian limites los derechos con quelas naciones beligerantes se consideraban autorizadas parahacel a sus contrarios todo el mal imaginable, aunque fuerainnecesario, desconocian las reglas de humanidad y abusabande la superioridad que obtenian, sin reconocer virtud ningunaque se opusiera a la desenfrenada pasion de la venganza ;, He­mos mejorado mucho en nuestros tiempos? PreglJ'i'ta es esacan que tal vez se provoca a una de,sconsoladOJ a respuestaDa tlisteza decirlo, pero la historia es inflexible aun se pien­sa que los placeres transitorios de la dignidad, la riqueza, ellustre y el podel de las naciones, constituyen su felicidad, yno se peldona medio para autorizar lahocinios y usurpar lasoberania de otros pueblos La moral politica suele ser des­atendida pOl las grandes potencias cuando se atraviesa el sor­dido interes a que dan el pomposo nombl e de 1azon de estado

Inmediatamente despues de haber terminado en Leon losterribles sucesos que hemos referido, se dedicaron los mora­dores de la ciudad a levantar en los mismos sitios las casas yotros edificios quemados EI ingles a quien aprisionaron losleoneses en el combate, diligio los habajos de la catedral, laque fue consh uida en la cuadra OJ iental de la plaza, que esel mismo lugar en que hoy se halla el nuevo temple destinadoa aquel servicio La fachada de la catedral era elegante Te-

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LIB VI ~CAP IX ~ESTABLECIMIENTODEL COLEGIO SElMINI\.RIO) I;Tr 153

nia una tOl re al lado i7qlliel do y seguia la fabrica de la igle­sia y el Sagrario, fOlmando un todo almonioso y grave Sesubia al atrio por tl es gradas de ladrillos y estos seguian cu­briendo el suelo hasta la pared del templo La elevacion yanchura de la tone eran correspondientes a las dimensionesdel edificio, y tenia cinco campanas, unas gl andes y otl as pe­quenas, y un 1eloj que indlcaha con el sonido las horas y lasmedias La catedl al constaba de tl es naves las paredes erande cal y canto, y las arquerias de ladrillo EI techo, de ma­dera y tejas, se hallaha pintado por la pal te intelior de diver­sos colores y regado de estrellas doradas, plesentando un con­junto agradable El mismo adorno ostentaban las moldm asde las lIaves y soleras Hermoseaban el arco total del corolas armas pontificias y leales y una efigie de Santiago Tam­bien el COlO se hallaba sembI ado de estl elias dOl adas, pero eramuy pequeno y no guardaba propOl cion con el resto del edi­ficio La longitud del templo, de oliente a poniente, era decincuenta y siete varas, su latitud, de NOl te a Sur, de vein­tidos, y nueve y media de altura En la nave principal habiatres altares, el mayor y los colaterales La rodeaban cincocapillas, las cuales eran denominadas de las Animas, Concep­cion, Carmen, Rosario y Sagrario Junto a elias estaba elbautisterio, y la saclistia, qlle tambien servia de sala capitu­lar, se comunicaba con las naves La capilla del Rosario teniapulpito, puerta al atrio y bastante capacidad para las funcio­nes religiosas La del Sagl alia era de cal y canto, con sucanon y media nal anja, pintados y dorados por delltro, cons­taba de tres cuerpos y a sus espaldas estaba la saclistia, algapequena, sin la cual tenia la capilia veintidos varas de largo,ocho y media de ancho yonce y media de alto el cuerpo dela media naranja subia hasta veintitres En fin, dice el SenorMOlel de Santa Cruz, de cuyo informe al Rey se han tornadoestos datos, era una pieza tan primorosa (la capilla del Sagra­rio) que la catedral mas sel ia no se desdenal ia de tenerla asu lado En el lugar corl espondiente se tl atara de los dete­rioros que con el tiempo fue recibiendo la elegante catedralde la Diocesis, y de los motivos de su completa destruccion

No cesalOn las inquietudes causadas por la flltima invasion.

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154 HISTORIA DE NICARAGUA

con el reth 0 de los filibusteros, a quienes se consideraba comolobos cebados con la sangle de sus plesas, y mas bien se au­mentaron con la noticia de que se habian posesionado de laisla de Amapala, amenazando de alli mas a Nical agua que aHonduras y el Salvador, por la distancia a que estaban aque­lias provincias y las dificultades que encontrarian en la aspe­reza de los caminos EI Gobernador Don Pedro Alvarez Cas­trillon y el Maestre de Campo Don Lorenzo Gonzalez Calde­ron no se descuidaban un momento Los CI ecidos gastos queAlvarez habia hecho dos anos antes para organizar la defen­sa, Ie tenian reducido a pobreza, pero su patrioti~mo supliaen gran parte la falta de dinero, que patliotismo y muy puroes el sacrificio voluntal io del propio bienestar en provecho delsuelo comun, sin otra recompensa que la satisfaccion de ha­berle hecho el bien posible

La ocupacion de Amapala ponia el mar del Sur a disp'osi­cion de los filibusteros, y como esa situacion violenta se fuel aprolongando y se comprendiese que fortificados en aquel ven­tajoso punto, con mayor numelD de tropas, escogida artilleriay abundante provision de subsistencias, seria dificil hacerlossalir, penso la Audiencia de Panama que aun era tiempo demoverse para evitar una lucha mas costosa, mas I',orfiada yde resultados mas dudosos Dispuso, pues, organizar una ex­pedicion que viniese a arrojar a los ingleses de los puntos endonde estuviesen alojados

En Diciembre de 1687 lIego al Realejo la escuad, ilia, com­puesta de una galera y un bergantin, al mando del Gobernadorde Panama Don Dionisio LOpez de Artunduaga Los SenoresAlvarez Castrillon y Gonzalez Calderon la socorrieron con vi­veres y otros objetos necesarios y plocuraron con eficacia subreve despacho Artunduaga se dirigio a Amapala, y habit\n­dose aproximado a la isla pidio nuevos auxilios a estas auto­ridades El Gobernador Alvarez alisto doscientos cincuentahombres, los hizo embarcarse en un navio que a la sazon habialIegado al Realejo, procedente del Peru, y con este socorropudo Artunduaga desalojal de Amapala a los ingleses

En medio de tantos conflictos lIego a Nicaragua el OidorDon Antonio de Navia y Bolanos a gobernar interinamente la

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LIB VI --cAP JX -ESTABLECIMIENTO DEI.. dOLEGIO SEhoHNARIOJ ETC 155

provincia, trayendo encargo especial de informar a la Real Au­diencia de Guatemala sobre las ciudades, villas, poblaci6n, igle­sias, conventos, ermitas y habitantes eclesiasticos y secularesque contenia toda la gobernaci6n, con distinci6n de espaiioles,mestizos, mulatos, neglOs, zambos e indios EI Oidor debiaregresar a la capital del Reino asi que hubiese recogido esosdatos

No consta de los documentos que tenemos a la vista 10 quela Audiencia se propondria hacer cuando el Seiior Navia y Bo­laiios, provisto de las noticias que Ie pedia, volviese a Guate·mala Debe de haber sido cosa de importancia, puesto que des­tinaba a tan alto empleado a ejecutar 10 que podia haber prac­ticado ctro de inferior categoria, pero es 10 cierto que no seencuentra en la providencia del gobierno superior ninguna re­lacion con los ultimos acontecimientos, ni con la situaci6n de­sesperada en que se hallaba la provincia EI conocimiento dela politica observada desde el principio de la guerra, nos au­toriza a pensar que se trataba de medidas fiscales, dirigidasa exigir de los vecinos, impuestos mas crecidos para los gastosque requeria la defensa

POl' todas partes invadian los filibusteros las provincias delil Capitania general de Guatemala En 1681 y 1686 se intro­dujeron con Charpe pOl' el puerto de la Caldera, en territoriode Costa-Rica, y robaron e incendiaron la hermosa ciudad deEsparza, cabecera entonces de aquella gobernacion Los nu­merosos indios que habitaban los pueblOS de Aranjuez y Ga­ravito, situados en e1 camino que de Nicaragua pasa a Carta­go, huyeron a las montaiias para librarse del cautiverio y lasatrocidades que en ellos ejecutaban los invasores, y desde en­tonces aquellos lugares habitados pOl' muchos miles de labo­riosos indios, quedaron solitarios y yermos

En 29 de Septiemble de 1689, los piratas del ma,r del NOl­te entraron pOl' el rio de Nueva Segovia y junt{tndose con losdel Sur, incendiaron Ia ciudad y se dirigieron a Honduras pOl'el rio de Aguan, cuya navegaci6n habia sido desconocida has­ta entonces Dividieronse en dos pal tidas de doscientos hom­bres unos fueron a saquear y exterminar a Trujillo, en dondecometieron grandes crueldades, llevandose al Teniente de Go-

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156 HISTORIA DB NICARAGUA

bemador, veintidos mujeres y otros tantos hombres, cuyo res­cate valuaron en cinco mil pesos, otros encaminaronse a Olan­cho y se pel dieron en la montaiia: por esa feliz casualidadse Iibl aron aquellos pueblos de la destruccion y la miseria

EI designio de los piratas era el de entrar en Guatemala,riquisima capital del Reino, donde segUl amente habrian reco­gido valioso botin, objeto principal de sus incUlsiones, y lahabrian incendiado, como hicieron en estos pueblos Habiatenido noticias el Capitan General de que lIegarian por la barrade Iztapa, sin que las fragosidades y las breiias sirvieran deinconveniente a la voracidad de su codicia Convoc6 las com­paiiias de gente espaiiola y parda del partido tres saco deGuatemala y cinco del Valle, y se co10co en los pasos estrechospor donde podia el enemigo dirigir sn marcha Cansado de es­pel ar inutilmente asento sus reales en ia ciudad, redoblandosiempre los preparativos, pues palpitantes estaban las victimassacrificadas en Chiliqui, donde los filibusteros roharon cuantariqueza habia, lIevando sus hostilidades hasta el exceso de 3.20­

tar cruelmente al Gobernador, y con razon se temia que igualsuerte cupiese a Guatemala, si se les presentaba debil resis­tencia Es de suponel se que tan grandes apl estos, tanta de­cision y la imponente actitud del Capitan General, lIevados alconocimiento del enemigo, sirviesen para detenerle en su pro­yectada correria y Ie hiciesen compl ender la dificultad de vol­ver al mar sin sel COl tado 0 perseguido por fuerzas supe­riares

VOlviendo a 1a situacion interior de Nicaragua, resta decirque el SeiiOl Obispo Don Fray Andres de las Navas y Queve­do fue trasladado a la iglesia de Guatemala ef aiio de 1682,dejando edificados el Colegio Tridentino y el Palacio Episco­pal, y establecida en el Cabildo eclesiastico la dignidad deMaestrescuela Le sucedio en el gobierno de la Diocesis elSeiior Don Fray Juan de Rojas, de la real y militar orden dela Merced se posesiono de su obispado el aiio de 1684, y elsiguiente de 85, haciendo la visita murio en el pueblo de SanPedro de Metapa Por el fallecimiento del Seiior Rojas, fueelecto Obispo Don FI ay Nicolas Delgado, de la orden de SanFrancisco, y tomo posesion el 22 de Diciembre de 1688

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CAPITULO X

Amenazas de invasion pOl el ti~ de San Juan, y otros sucesos

1689 a 1694

Alalma cttusada en el castillo de la Inmaculada Concepcion pOl habelseaido tilos de mosquetelfa en dileccl6n del do de San Juan-EI Castellano manda dispat 81 una pieza de 81 tillel la -Plepal ase al comhate1a gU8Jnlcl6n de la fOllHleza-El enemigo se letha sin atacaI1a-lnfOi mes que diel on los soldados de la atalaya -Disposiciones dicladas POIel Comandante del CaslUlo -Manda practicar un Ienocimiento en elrio -Resultado de esta opel acion -El vigia del )10 de los Sabalos daaviso de 10 ocullion, a las autoridades de Gumada -Nuevas noticinscomunicadas por los soldados de In atalaya -El Gobernador Bl avo deHoyos pone la ciudan. en 81 mas y pal ticipa estos sucesos al (apitanGenelal-Inquietud que produie1on en Guatemala -Reunesc la Juntade Hacienda y acuelda cnvial p6lv013 v otlos auxHios a esta plovincia-C'on6cese en In capital del Ieino In exagclaci6n de los infOlmesdados pal el GobeInactol -Pedimcnto del Fiscal contra BIavo de Ho'\ as -lnculpaciones que Ie hacia -EI Capitan Genet al comisiona at CoIIegidOi del Realcjo pnra que siga infOlmaciones sabre la conc1uctadel GobmnarloI -Nuevas aIm mas ocasionadas POI notlcias de que lospiIatas de Ia UJgueta se proponian Invadh este telfitOlio-Oldenescomunicadas al COIl cgidOl del Realejo -Suspende este su comisi6nconti a Bravo de Hovos -Medidas que aquel tom6 pal a la segtlJ idaddel puelto-Continlla In informacion soble los plocefJimientos de) Gobernador -Resultado de aqucllas diligencias -Nuevos acontecimicntosque agl i81 on las 1elaclones del Gobel nsdOI can los empleados supe! 10res del leino-Quejas del Capitan Cunchillo de Luna cantIa Blavo deHoyos -Resolucion de la Audiencla a es1ie J espceta -Sublevacl6n deSebaco-Causas que la oC<.1SianaIon -Otlos ccugos contra el GObCInndOl POI los sucesos de Sebaco -Bl avo de Hoyos es destituido de sudestino, y se Ie mnn<.la procesm -Padecimientos tle Ia ciudad de GIanada a consecuencia de las invasiones pil aticns -Sollcltan sus nurOlIdades 1a desh ucci6n de las it inchCI HS -Tramites que se diewn en Guatemaln a estn petici6n -Los empleados supel i01es eluden una resolucion deflnitiva en este asunto -Estado de In guet ra de Espana conotl as potencias em opcas -EI Gobel nadot de Nical agua pide D:I mas alCnpit~n Gcnelal p::ua dal segmidad A 1a plovincia-Conv6case ~ Juntatie Hacienda Ii cCccto de delel minat Jo conveniente a este I eSPl'clo­Disposiciones evasivas de aquella COl pOlaci6n -Se concede Ii Nicmagun un pequeno SOCOI ro

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158 HISTORIA DE NICARAGUA

No habia quedado satisfecha la codicia de los filibuste­ros con el pingiie botin recogido en Leon, y mas bien pareceque la facilidad de la empresa y la insignificante perdida te­nida por parte suya en aquella vez, los movian a mantenerseobstinadamente en nuestras costas, deseando siempre ocasionesfavorables a nuevos actos de rapma 0 pensando en apoderarsedel pais para procedimientos ulteriores contra las colonias es­paliola~.

Desgraciadamente los nicaragiienses menos se afanabanpor amaestrarse en el manejo de las armas y los caballos, parapreserttarse al enemigo fuertes y disciplinados, quy por cuidarsus haciendas y huir Ii los montes en los momentos de peli­gro . Ifatalidad ha sido de este pueblo, como de los otros dela America ~Central, verse siempre en la necesidad de desnu­dar ~I acero y disparar el fusil, bisolios en el arte, abandonan­do all acaso el resultado de una luch8. de que tal vez dependenlos mas clj,J;,.os intereses del Estado, y sl1jetandose Ii perdidasde vida, que habria en menor numero si destreza y habilidadtuvieran

Muy pocos alios habian transcurrido desde el saqueo deGranada hasta la alarma de que va a tratarse Por la nuli­dad de su~consecuencias, no mereceria eata un.\ugar en lahistoria, pero hemos creido que no debe omitirse, ya que pin­ta con vivos colores el caracter social de la epoca y la excitacion en qlle se mantenian los animos por el temor de nuevasincursiones piraticas

Era la noche del 24 de Diciembre de 1689 EI Comandantedel Castillo de la Inmaculada Concepcion, Don Francisco Ro­driguez de Barrio, solazabase jugando Ii los naipes con los AI­fereces Don Francisco Ortiz Cano, Don Francisco de Herediay Don Jose Barrio, sobrino del Castellano Pasada la medianoche oyeron un tiro de mosquete, y en seguida siete u ochomaS en la direcci6n del rio de San Juan Rodriguez de Barrio,con toda la presteza que el lance exigia puso el Castillo en ar­mas Los centinelas de las garitas y otras personas que re­corrian la-plaza a aquella hora, informaron que en la isleta enque la forlaleza mantenia una atalaya de cinco hombres, ha­bian visto n. la claridad de la luna los fusiles con que se hi-

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LIB VI - CAP X -AMENAZAs DE INVASION POR EL RIO S JVAN; ETC 159

cieran los tiros Y como los de la atayala solo tenian un, arInade fuego para dar aviso de 10 que observaran, compre'ndieronque el enemigo se acercaba y que no tardaria en acometer lafortaleza

Tambii'm el Comandante Rodriguez de Barrio quiso haceralarde de su actitud, a fin de demostrar a los invasores queestaba prevenido para el combate, y ordeno que_disparasenuna pieza de artilleria, dirigiendo la bala hacia la'isleta Conacuerdo de sus oficiales mando que se hiciera Qtro tiro de ca­fion, en direcci6n del rio de los Sabalos, para que "el vigia aillsituado fuese a dar aviso a las autoridades de 'Granada delas novedades que en el Castillo ocurrian Ese vigia tenia or.denes anticipadas de hacerlo asi a la sefial de dOB tiros, conlos cualcs se Ie daria a entender que el enemigo se hallaba ala vista

Toda la noche permanecieron los nicaragUenself-liatos parala pelea los ofioiales en sus puestos, los soldados .con el armapreparada, los artilleros al lado de los canones, encendidas lasmechas de los botafuegos, y el Capellan Fray Juan de AgUerQincorporado a la tropa y dispuesto a ejercer prontamente SUsoficios espirituales, todos esperaban con serenidlid la impe­tuosa arremetida de los filibusteros, y ansiaban porque lIegaseel momento de darles el castigo de su temeraria provocacion.Pero el enemigo no se acerco a la fortaleza, ni volvio a darindicios de su presencia en aquellos lugares, y menos del ob­jeto que habia tenido en mira al lIegar hasta la isleta, haceruna descarga de mosqueteria, dando aviso a los defensores delCastillo de hallarse a sus inmediaciones, y regresar a la costasin haber tanteado siquiera el grado de resistencia que podri8llhacerle, para volver con la tropa y los elementos necesariosa un triunfo segura " -

A las siete de la manana del siguiente dis, cuando empezoa disiparse Is espesa niebls que sobre el rio flotaba, -pudo ob­servsrse desde la muralla en que se hallaban el Comandantey sus oficiales, que a cortos intervalos y en direccion del pun­to donde se situaba la atalaya, agitaban un palio ~anco sobrela superficie del agua, como pidiendo socorro a la guardia quede lejos veia aquella extralia sefial En el acto dispuso el Cas-

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160 HISTORIA DE NICARAGUA

tellano, que cinco hombres de los mas resueltos, bien armadosy en son de ataque se diI igieran a aquel punto en uno de losmejores botes del Castillo, para prestar auxilios al que conahinco los pedia, acaso en momentos de angustia y desespe­racion

Los comisionados efectuaron su exploraci6n y encontraronsumergidos en el agua al cabo Crist6bal MarciIla, con una he­rida en el brazo y otra en la espalda, y a tres soldados de loscuatro que se halIaban en la atalaya de la isleta Conducidosii presencia del Comandante, muy escasos informes pudierondarle sobre 10 ocurrido en aquel puesto La descarga Ide mos­quetes, dirigida a quemarropa, les habia anunciado la proxi­midad del peligro, y pudieron observar cerca de elIos sietehombl es en actitud amenazante Apenas tuvieron tiempo deocultarse dentro del rio, donde permanecieron siete horas conel agua hasta el cuelIo el otro soldado se dirigi6 a distinto lu­gar, buscando su salvaci6n en la espesura del bosque, pero pocotiempo habia transcurl ida, cuando aquelIos comenzaron a airsus lamentos asi que estos cesaron, comprendieron que habiamuerto

EI CastelIano, aunque temiendo que el enemigo no se hu­biese retirado y esperase capturar a algunos de los que a el seacercaran, orden6 que inmediatamente regresaran los del botey lIevaran al Castillo el cadaver de aquel desgraciado SituadoaIli, hizo que 10 reconocieran Encontr61e el cirujano dos he­ridas de bala, mortales ambas, y dos de alfanje, con una delas cuales Ie habian mutilado una pierna EI cabo y los sol­dados dedan que todos habrlan muerto si tan a tiempo no sehubieran hecho en el Castillo los disparos de la artillerla

Se pens6 que el enemigo no habia abandonado aquelIos lu­gares y que aguardaba fuerzas mayores para empl Ender for­mal campana, porque en la manana del siguiente dia el Alfe­rez Francisco Heredia di6 parte al CastelIano, de haber vistopasar de una banda a otra del rio, por la huerta denominada«Las Animas», a dos de los invasores, vestidos de blanco Cantodas las precauciones debidas fueron los del Castillo a prac­ticar un reconocimiento, y a su regreso informaron que el cam­po estaba solo y que los bultos a que la imaginaci6n preocu-

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LIB VI-eAP X -~AMENAZAS DE INVASION POR EL RIO S JUAN, ETC 161

pada del Alferez habia atribuido formas hUOlanas, eran dosgrandes hojas secas de platano que de tiempo en tiempo el vien­to levantaba a la altura de un hombre circunstancia insigni­ficante al parecer, pero que debe apuntarse, porque puedecontribuir a dar un conocimiento exacto de aquellos sucesosque el temor revestia de impOl tancia, can grave perjuicio dela tranquilidad genel al y del credito de los empleados

EI vigia del rio de los SabaIos, Juan Espinosa Fletes, par­ti6 pal a Granada asi que oyo los dos canonazos del Castillo,como se ha dicho, pero lIego a la ciudad el 15 de Enero, vein­tid6s dias despues de aquellas ocurrencias, contando falseda­des y engrandeciendo sus informes pala darles exagerada im­portancia, que es achaque de los portadoles de noticias entiempo de revueltas aumentar 10 que ha acaecido, favorable 0adverso, para llamar hacia elIas la atencion general No selimito a dar parte de que el 24 de Diciembre en la noche ha­bian disparado en el Castillo dos tiros de canon en senal dealarma, sino que, reagravando la situaci6n de los que defen­dian aquella fortaleza, y anunciando desdichas creadas en suimaginacion pOl' el miedo 0 la malicia, aseguro tambien que eljueves 12 de EnelO como a las dos de la tarde habia oido trestiros par el rio de los Sabalos, y el viernes al amanecer la de­tonaci6n de una descarga de mosqueteria y arcabuceria EIGobernador penso, no sin fundamento, que los filibusteros si­tiaban el Castillo, y que el Comandante Rodriguez de Barrio ysu trapa se hallarian en los mayores conflictos, escasos de vi­veres y elementos de guena, y tal vez, para salvar la vida,aceptando condiciones humillantes y nocivas a la seguridad delReina

Pocos dias despues lIegalOn ii Granada el cabo y los tressoldados de la atalaya, enviados par el Castellano para quedieran ciertos y extensos informes del peligro en que se ha­bian vista, y es de suponerse que para encarecer sus servicioshayan dado formas de seria invasion a 10 que solo habia sidoel encuentro inesperado de dos pequefias partidas, una explo­radOla y otra de observaci6n, 10 que se deja comprender parla extrafia conducta de los filibustelos, quienes limitiindose iihacer una descarga sabre la escolta nicaragUense, regresaron

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162 HISTORIA DE NICARAGUA

a la costa del mar, sin que reapareciesen, como debla espe­rarse.

Tal era el verdadera caracter de los sucesos ocurridos el 24de Diciembre Si Nicaragua hubiera tenido en el Castillo fuer­us arregladas en competente numero, se habrla persegUido alenemigo hasta alcanzarlo en su regreso, 0 averiguado dondetenia su guarida, 0 si en el mar existian embarcaciones supe­riores, asechando estas provincias Pero todo qued6 en im­penetrable oscuridad

Al recibirse en Granada las noticias lIevadas por ,Juan Es­pinosa Fletes, el desaliento, el terror, la desesperaci6n cun­dieron instantaneamente, y los vecinos, a vueltas de su ante­rior confianza, lIegaron a. pensar que no tenlan fortaleza se­gura, ni un palmo de terreno en que colocarse al abrigo de laferocidad de sus adversarios La primera medida de defensaque dict6 el Gobernador fue la de poner en armas la ciudad ydespues toda la provincia, y la segunda comunicar al CapitanGeneral el estado inseguro en que esta se hallaba

Peto Don Gabriel Rodriguez Bravo de Hoyos, que ya erael Gobernador, parUcipando de las preocupaciones del vigiaEspinosa, y acogiendo como realidad todas las ficcion.es crea­das por los soldados que hablan lIegado, asegur6 en su infor­me al Capitan General del Reino, que el Castillo estaba sitiado:que se hablan Dido cinco tiros de artillerla, y que se presumlaque el corsario Lorencillo, para dominar el mar del Sur, pre­tendia tomar una de nuestras plazas

Natural era que noticias de tanta gravedad causaran sumllinquietud en el animo de los empleados superiores, puesto queel prop6sito atribuido a Lorencillo, de ocupar una de nuestrasplazas, y el siUo formal del Castillo de la Concepcion, eran an­tecedentes que daban por consecuencia la resoluci6n de pose­sionarse de Granada para dominar ambos mares Las juntasde Hacienda y Guerra se reunieron repetidas veces, convoca­das por el Presidente, para acordar las medidas mas eficacesa la defensa del do de San Juan y de esta gobernaci6n en ge­neral Se dispuso en elias enviar p61vora, plomo y ot~os so­corras necesarios, y que de las cajas reales se acudiese al Go-

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LIB V1--cAP X -AMENAZAS DE INVASION POR EL RIO S JUAN, ETC 163

bernador con el dinero precieo al cumplimiento de las 6rdenesque extensamente se Ie habian comunicado

Grande era la ansiedad de que estaban poseidos por saberel resultado de la campana abierta en Nicaragua, pues quela suerte del Reino y aun de las otras colonias de la Americaespanola dependlan de la lid en qlie se decidiese si el predo­minio de ambos mares pertenecia :a las hordas de forajidoslanzadas sobre nuestras costas pot Inglaterra y Francia, enodio a su rival el Gobierno de Espana Pero grande fue tam­bien la indiguaci6n del Capitan Gerieral y la Audiencia, cuan­do comenzaron a lIegar noticias de 10 insiguificante de los su­cesos del rio, y de las exageraciones CI eadas por la imagina­cion de los empleados, las que aquellos atribuyeron a miraspersonales del Gobernador Don Gabriel Rodriguez Bravo deHoyos.

TratO el Capitan General de hacer pesquisas sobre 10 ocu­rrido, y pas6 al Fiscal Doctor Don Pedro de Barreda el oficioque Rodriguez Ie habia dirigido, para que en au vista p5diera10 conveniente a la averiguaci6n de Is verdad La contesta­ci6n del Fiscal demuestra claramente el desagrado y la pre­venci6n de que estaban animados los altos funcionarios de laCapitania contra el Gobernador de Nicaragua EI pedimentocomenzaba asi:

«EI Fiscal de su ~ajestad ha visto esta carta y la del Maes­tre de Campo Don Lorenzo Gonzalez Calder6n y la de los ofi­ciales reales de Le6n, y dice que dichas cartas de oficialesreales y Maestre de Campo insinuan bastantemente que ha sidoafectada la noticia que ha divulgado el Gobernador de Nica­ragua, de correr riesgo el Castillo de Granada, y entre lasmuy graves consecuencias que de esto se pueden originar seexperimenta ya la pretensi6n del dicho Maestre de Campo, deque Usia Ie exonere de este cargo, 10 cual al presente no pa­reee conveniente, y a su ejemplo pretenderim 10 miemo los de­mas cabos militares & »

Tambien atribula el Fiscal a Bravo de Hoyos el prop6sitode molestar a los moradores de esta provincia con fingidasInvasiones, para obligarlos a ejecutar en todo su voluntad, ejer­ciendo una autorldad arbitraria y simulando exigirlo asi la con-

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164 HJSTORIA DE NICARAGUA

veniencia del Reino y la seguridad de estos pueblos Le impu­taba asimismo la mil a de buscar ocasiones en los movimien­tos que inventaba, pala librar ordenes contra la real caja, apa­rentando guerras que no existian, y pi esentaba como pruebailrefragable de la mala conducta del Gobernador el levanta­miento que hizo de la provincia a pretexto de que los filibus­teros venian por el rio de Segovia, sm que hubiese podido ma­nifestar el fundamento que habia tenido para promover aque­lIa conmocion, tan perjudicial a la paz del Reino, gravosa alreal tesoro, y con la cual causo a Nicaragua los trascendenta­les danos de la paralizacion de toda industria Recor"aba, ca­lificandola de I idicula, la invencion del Gobernador, de quelos filibusteros atacaban el Castillo, solo por haberse oido unosdisparos de artilleria «mandados hacer por el Castellano pal asolemnizar la fiesta de la Purisima Concepcion», y recordabatambien el empeno que habia tomado en convencer al Maestrede Campo Don Lorenzo Gonzalez de que el pirata Lorencillose acercaba, sin explesarle el conducto por donde Ie lIegabaesa alarmante noticia y asegurando al plopio tiempo a los ofi­ciales del tesoro, en carta de 16 de Septiembre, que aquel cor­sario reclutaba gente hacia seis meses para ocupar una denuestras plazas • \

Tan graves cargos, formulados por el Fiscal de la Real Au­diencia contra el principal empleado de Nicaragua, en situa­cion aflictiva para todo el Reino, exigian del Capitan Generalprontas y severas providencias, a fin de evitar otros abusosy restablecer la quietud de los pueblos Con ese proposito, ypara proceder con regulalidad en tan escabroso asunto, con­firio en 20 de Enero de 1690, comision al Capitan Don GasparBaca de Quinones, Corregidor del Realejo, para que pasando aGranada y al Castillo de la Concepcion, procediese a hacer in­dagacion secreta sobre los hecbos de que se inculpaba al Go­bernador Rodriguez Bravo

EI Senor Baca de Quinones se traslado it Granada paradesempenar su importante comision, pero un nuevo mcidenteque aumento la alarma e inquietud de los nicaragUenses, Ieimpidi6 de momenta continual1a, incidente que confirmaba lasnoticias comunlcadas par el Gobernador, sobre los preparativos. ,

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LIB VI -CAP X -AM€NAZAS DE INVASION POR EL RIO S JUAN) ETC 165

del enemigo y su proyecto de dirigirse a nuestros puertos Enesos dias recibi6 el Capitan General correspondencia de Pana­ma, en que Ie manifestaban las autoridades de aquella ciudad,qne los piratas de la Urgueta, que recorrian el mar del Sur,se hallaban en las costas del Peru, habian apl esado cinco ba­jeles y se propolilan venir al Realejo a capturar el barco delCapitan Francisco de Artola Veytia, que alli estaba fondeadoEn 27 de Enero expidio el Capitan General nuevas ordenesal Corregidor Baca de Quinones, para que en el acto hiciesesalir el buque con direcci6n a Panama y Ie daba al efecto cuan­tas facultades fuesen necesarias EI Senor Baca, reconocien­do que era mas conveniente volver al Realejo para evitar queel enemigo apresase el barco, suspendi6 la informaci6n que Iehabia Ilevado a Granada y el viaje preparado al Castillo, perucuando hubo despachado el navio de Artola con todas las pre­venciones que la brevedad pel mitla, regres6 para continuar enel desempeno de su primera comisi6n Muy solicito fue en laaveriguaci6n de los hechos ocurridos la noche del 24 de Diciem­bre anterior, mas no consiguio otra cosa que conocer 10 queatras queda referido, con el agregado de que unoS indios Ie in­tormaron haber visto a los filibusteros por el rio de los Saba­los, y que se habian Ilevado cuatro indias y una piragua queaquellos tenian

Aunque de la informacion seguida por orden del CapitanGeneral no result6 cargo ninguno contra Bl avo de Hoyos, lasrelaciones de eate con los empleados auperiores del Reino yano fueron armoniosas puede ser que aquellas autoridades hu­biesen encontrado en la conducta del Go\>ernador algunas som­bras que no bastasen a formularle cargos legales, 0 que se hu­biese hecho repugnante y antipatico por su caracter sediciosoy turbulento Un hecho demuestra c1aramente 10 que se acabade decir

Hallabase de servicio en el puesto de Capitan de guerraDon Miguel CunchUlo de Luna, vecino de Granada El tiempoque debia dUatar en ejercicio de sus funciones, era de diezalios, pero el Gobernador 10 destituyo cuando aun Ie faltabantres, fundando su providencia en que Cunchillo habia declaradocontra un clerigo, y sustituyendolo cQn el Alferez Juan de Mesa

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166 HISTORIA DE NICARAQUA

Cunchillo de Luna se dirigio a Guatemala, y en 14 de Mayode 1692 presento su queja ante la autoridad competente, pa­trocinado por el Licenciado Don Servando de la Puente No­riega, pidiendo en ella que se Ie restituyese en el destino deque habia sido despojado EI Oidor Fiscal, con solo la vistadel escrito y sin preceder otro tramite para averiguar la ver­dad de 10 expuesto por la parte interesada y los motivos quehubiesen impelido al Gobernador a dictar la destitucion, pidioque «se hiciera como aquiilla pretendia y se impusiesen 81 Gobernador las penas condignas al modo de proceder tan ex­abrupto, asi en este caso como en los demas que cada dia seofrecian»

La sentencia que pronuncio el Tribunal superior, en 17 delmismo mes, pone de manifiesto la dificil posicion en que sehallaba Bravo de Hoyos, por el mal concepto que de iii se ha­bian formado las autoridlldes del Reino EI procedimientoatropellado del Gobernador origino la resolucion violenta dela Audiencia, pronunciada a continuacion del pedimento fis­cal, y que es como sigue:

«Vistos librese despacho para que el Gobernador y Te­niente de Capitan General de la provincia de Nicaragua, man­de a Juan de Mesa que luego e sin dilacion cese en el ejerciciode Capitan, y arrime la insignia de tal, y recoja el titulo, y 10remita a esta Capitania General a manos del presente servi­cio YaDon Miguel Cunchillo de Luna 10 restituya a la po­sesion de su compania y 10 mantenga en su uso y ejercicio, ytodo 10 cumpla precisa y puntualmente, so pena de quinien­tos pesos, aplicados por mitad a la real Camara y situado decastillos Y se Ie advierte ser muy de su obligacion en el go­bierno politico mantener en paz y quietud a los vecinos de laRepublica, sin motivarles pleitos ni disturbios con la ocasionde los empleos militares, y no deber executar informes apa­sionados y extraordinarias diligencias, como 10 ha hecho so­bre la consecucion del titulo de Capitan para el dicho Juande Mesa, que habiendola logrado en nombre del susodicho elSargento Mayor Don Juan de Novoa, 10 tuvo guardado y sinponerlo en uso mas tiempo de diez meses desde el dia en quese mando librar hasta Ia fecha de su auto, cuyo testimonio se

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ha presentado Y no cumpliendo dicho Gobernador con 10 queva ordenado, 10 ejecute, so la misma pena, el Maestre de Cam­po Don Lorenzo Gonzalez Calqeron, luego que en cualquier ma­nera Ie conste no haberlo cumplido el dicho Gobernador, ha­biendo sido requerido Y haga notificar a oficiales reales re­tengan los dichos quinientos pesos del sueldo devengado 0 quedevengue el dicho Gobernador, y de 10 que ejecutare de cuentaa esta Capitania Genera!» (1)

Esa sentencia, redactada en terminos tan desabridos, y conla cual se mancilIaba la conducta oficial del primer empleadode la provincia, debilitando su autoridad cuando por las cir­cunstancias se necesitaba que fuese firme y decisiva, demues­tra a toda luz el mal concepto que de el se habian formadoen Guatemala y la creciente indisposicion que presidia en lasresoluciones de la Audiencia. Es inexplicable la manera deportarse observada por este Tribunal y su Presidente El Go­bernador Bravo de Hoyos habia hecho ante ellos renuncia deldestino en vez de admitirsela y nombrar otro que no fuerasospechoso y si leal, discreto y de buen consejo, 10 conserva­ban como necesario, contrariando los intereses del Reino ycomprometiendo la tranquilidad de esta provincia

Nuevos acontecimientos ocurridos aquel ano vinieron a darclara muestra de la falta de prevision con que procedian elCapitan General y la Audiencia

Sebaco era por la epoca a que nos referimos una poblacionimportante, a causa del gran numero de sus vecinos Consta­ba de trece parcialidades, cada una de las cuales tenia su al­calde, y residia en el pueblo el Corregidor, que despues fuetrasladado a Matagalpa

La situacion vacilante en que estas poblaciones se mante­nian por las constantes amenazas de los filibusteros, los fre­cuentes reclutamientos, y las marchas y contramarchas a queestaban sujetos los vecinos por exigirlo asi la defensa de lospueblos invadidos, el abandono de las familias en la desespe­racion y la miseria, sin que entrevieran siquiera el termino desus padecimientos, la escasez de viveres y de numerario, con-

(1) Autos sob? e la destituei6n del Capitcin Miguel CunchHlo de Luna,originales en el Al chivo Nacional de NicaI agua

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siguiente a la guen a, todo esto y el desaliento de los animos,y la antipatia entre la raza dominante y la dominada, y laseveridad de los empleados, abt:io las puertas al huracan dela discordia civil EI pueblo de Sebaco se sublevo, no pudien­do soportar por mas tiempo el rigor de sus trabajos Obviaes la consideracion de la alarma que ese acontecimiento ines­perado, aunque natural, produjo en Nicaragua, y acaso mayoren Guatemala, pues se temia que haciendose trascendental aotros pueblos, encendiera una guerra de castas, cuando a duraspenas podian defenderse de los filibusteros

Pudo ser sofocada facilmente la sublevacion, pero la pie­dra de esdmdalo fue el Gobernador Bravo de Hoyos, a quiense atribuyo aquel desorden Se Ie destituyo del gobierno yse Ie mando procesar, haciendose talde 10 que pudo habersehecho temprano, sin agravio de quien habia servido por dila­tado tiempo y en circunstancias dificiles el maS importante em­pleo de esta seccion territorial En el capitulo siguiente setratara del proceso formulado contra el Gobernador y de lossucesos a que dio origen

La hermosa ciudad de Granada se hallaba casi en ruinasy bajo el peso de las desastlOsas consecuencias de la guerraComo la mas eficaz medida de defensa habian las autoridadeshecho levantar fuertes y elevadas trincheras al rededor de laplaza y al fin de cada manzana, para cubrir todas las callesy poder disputar el terreno palmo a palmo Pero elias estor­baban la libre corl iente de las aguas, y en los inviernos que­daba la poblacion como en un lago, por no llenar su objetclos canales abiertos Comenzaron a caer las casas, y aun pocofaltaba pal a que la parroquia tuviera la misma suerte EIapurn era grande ni se atrevian a destruir los parapetos, te­miendo una repentina invasion del enemigo, ni podian confor­marse con el gravisimo mal que a los edificios causaban lasaguas estancadas i. Que se haria en semejante conflicto? Niel Gobernador, ni el Ayuntamiento querian echar sobre si laresponsabilidad de una determinacion con la cual se complO­metiera la seguridad publica 0 que diera por resultado la destruccion completa de la ciudad

Para resolver la dificultad, y despues de perjudiciales va,

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cilaciones, en 6 de Julio de 1693, el Ayuntamiento, compuestode Don Pedro Luis de Colmenares, Don Luis Antonio AvellanFernandez, Don Diego Vasquez de Montiel, Jacinto de PasoPorta, Mateo Hurtado de Mendoza y Bernardo Gutierrez deSuazo, acordo consultar con el Capitan General si debieranconservar 0 destruir los atrincheramientos

Los curas de la parroquia, Don Mariano Luis Lopez deLerma y Don Francisco Lozano, representaron tambien anleel Capitan General, en 8 del mismo mes, sobre el peligro quela ciudad corria con la permanencia de las trincheras, y losdeterioros que en la parroquia se notaban ya y que sedanmayores y de dificil reparo si por mas tiempo seguian obs­truidas las corrientes de las lIuvias

Por los tramites que las autoridades de Guatemala dierona las solicitudes del Ayuntamiento y de los curas, se com­prende claramente que aun elias querian eludir una resolu­cion que por cualquiera extremo fuera causa de graves res­ponsabilidades EI Presidente las paso al Oidor Fiscal DonManuel Valtodano, quien opino que debia pedirse informe alGobernador y Teniente de Capitan General de esta provincia,que ya 10 era el Sargento General de Batalla Don Pedro Je­ronimo Luis de Colmenares y Camargo En 3 de Noviembremanifesto este empleado, que podian deshacerse las trinche­ras, pera que por esa gracia, otorgada al Cabildo y a los cu­ras de Granada, debia ordenarseles prestaran algun servicioparticular en beneficio de la fltbrica de la iglesia del CastilloPor manera que, calificfmdose de favor 10 que era de justiciay necesidad publica, se exigia pago pal a evitar que se arrui­nasen los edificios que aun quedaban en pie

No se conformaron los empleados de la Capitania con elinforme del Gobernador En 5 de EnelO de 1694 pidio el Fis­cal que se solicitase otro de Don Antonio Navia y Bolanos, aquien se consideraba bien impuesto de la situacion de estaprovincia por haberla visitado de orden de la Audiencia po­cos anos antes EI Capitan General proveyo de conformidad,y en consecuencia pidiose su opinion al Oidor Navia, quien lamanifesto en un informe que no aparece entre los documentosdel Archivo Nacional

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170 HISTORIA DE NICARAGUA

Con la contestacion de 1I]'avia, aun no quiso el Presidel1teechar sobre si la responsabilidad de una resolucion definitiva,y dispuso «que el Gobernador de Nicaragua, como tan expertosoldado que era, ordenase 10 mas conveniente sobre la demo­Iicion de las trincheras» (1)

No carecian de razon los empleados superiores e inferiorespara temer los resultad!,a de una providencia que podia serorigen de amargas inculpaciones, dictada cuando el Gobiernoespanol se hallaba en los mas serios conflictos con ocasion dela guerra que sostenia contra Francia, en union de los gobier­nos de Inglaterra, Rolanda, Alemania e Italia Las ~peracio­

nes de 1693 habian sido desfavorables a los aliados La famo­sa batalla .de Neerwinde, ganada por el Mariscal frances Lu­xemburg, en que aquellos perdieron millares de valerosos gue­rreros, setenta y seis canones, ocho morteros, nueve pontonesy ochenta y dos estandartes, puso a Luis XIV en aptitud dehostilizar con mas empeno y mejores resultados a las coloniasde America Los espanoles, que en aquella batalla fueronobjeto de admiracion general por su valor y constancia, reci­bieron otro rudo golpe en Mayo de 1694, en TorroeUa de Mont­gri, orillas del Ter, por la imprudente confianza del duque de~scalona «Con veinte mil soldados todos espanolel!>, no hayque temer», decia ese jefe, no obstante que el ejercito se com­ponia de reclutas, a quienes los jovenes catalanes ensenabanel manejo del arma EI experimentado duque de Noailles va­deb el rio, y cayendo sobre el ejercito bisono, 10 deshizo yquedo dueno del campo .

Del desastre de 111'eerwinde se tenia conocimiento en estasprovincias, y de alii nacian los temores que impedian a las au­toridades destruir los unicos medios de defensa con que con­taba Granada

Debian los reinos de America esperar con todo fundamen­to que el Monarca frances Ilamado el Grande, y Ii quien seatribuye la mas alta expresion del absolutismo, «el Estado soyyo», protegiese con mayor decision las hostilidades de los cor­sarios Unido el Gobierno ingles al espanol en la guerra con-

(1) In/ormes de las CU1as de Granada &, A N

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tra Francia, habia dado orden a su Gobernador en Jamaica, elduque de Abemarle, de exterminar a los piratas, que tantosdaiios causaban en estas costas EI Gobernador cumplio elmandato de su Soberano, dando muerte a cuantos pudo captu·rar por aquellos lugares, con 10 que se logro la tranquilidaden algunos puertos de las colonias EI Gobierno peninsularhabia expedido tambien una real cedula en 14 de Noviembrede 1690, en la que ordeno que los cabos de los piratas apre·sados en las Indias, sufrieran la pena de muerte, y que los de·mas prisioneros fueran condenados a galeras y enviados a Es·pana para que alIa cumpliesen la condena

Todas esas disposiciones fueron inutiles para este Reino,porque no habiendose capturado con posterioridad a elIas, nia un solo pirata de los que recorrian nuestras costas, ni im·puestose aquellas penas, que acaso habrian servido para in·fundiries temor viendo sobre si el anatema de poderosos go·biernos y el apoyo que de ellos recibian estas colonias, con·tinuaron en sus vandalicas correrias, solos unas veces, y otrasasociados de indios mosquitos, quizas para hacer creer a lospueblos europeos, que era guerra de castas, y no expedicionespiraticas, 10 que asolaba esta provincia

Pero al mismo tiempo que los granadinos, obligados poruna necesidad presente trataban de evitar la ruina de la ciu·dad, dictaban providencias oportunas para asegurar su defen­sa en el evento de nueva invasion, enfrentando al enemigo, noya trincheras, sino sus propios pechos como baluartes de lasIibertades del pais

Con ese proposito, el Gobernador Colmenares habia dirigi­do en 23 de Septiembre de 1693 un informe a Don Jacinto deBarrios Leal, Presidente de la Real Audiencia de Guatemala,manifestandole las dificultades en que estos pueblos se halla­ban, y pidiendole doscientos arcabuces para resistir cualquierataque

La dependencia de una Corte severa en sus juicios, las in­trigas de pretendientes ambiciosos, que lIevaban capciosasmurmuraciones a los oidos de los ministros y de los grandes,aunque los destinos estuviesen provistos en personas dignas;y el celo, real 0 aparente, por los intereses de la Corona. todo

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172 RISTORIA DE NICARAGUA

esto concurria a que hasta las autoridades supelioles temiesendictar por si solas una medida que pudiera comprometer suposicion Aun a los asuntos mas urgentes de la guerra dabantramites dilatorios, procurando obtener en las resoluciones losvotos del mayor numero de empleados, para evitar que estoscensurasen los resultados de elIas El Capitan General reunio,pues, la Junta de Hacienda, para someter a su conocimientola solicitud del Gobernador de Nicaragua y una carta en queDon Francisco Antonio de Barrios, que habia sido Alcaide delCastillo de la Inmaculada Concepcion del rio de San Juan, yque habia fallecido poco despues de dil igir esa corresponden­cia, manifestaba la necesidad de armas para la d~fensa deaquella fortaleza La Junta, siguiendo siemple en su conduc­ta parsimoniosa, y estimando mas la conservacion de unos po­cos arcabuces que la suerte de estos pueblos, tan de cercaamenazada por feroces enemigos, acm do que el Presidente or­denase al Gobernador de esta provincia que enviase una listade todas las armas que habia lepartidas en diversos puntos,con separacion de los partidos en donde se hallaran, y que ensu vista resolveria 10 conveniente

El Capitan General pidio el informe por auto de 18 de Di­ciembre de 1693, y el Gobernador 10 dirigio del Realejo en 8 deAbril del ano siguiente Por eI reconocio el Senor Barl iosLealIa necesida5! de armalse en que estaba la provincia, perocomo por otra parte consideraba escaso el numelO de armasque existlan en el almacen de Guatemala, dispuso consultalesa nueva dificultad con la Junta de Hacienda, la que reunidaen 21 de Junio hizo llegar a su conocimiento las listas envia­das por el Gobernador Colmenares, y unas informaciones se­guidas por el Corregidor del Realejo, Don Juan Lucas deUgarte

La resolucion que se dicto fue una consecuencia de la im­posibilidad en que el Monarca se hallaba, de enviar elementosa estas provincias por estar dedicado a contener en el Intel iordel Reina la ambicion de los partidos, que aspiraban a con­vertir en provecho prapio los males de la patria, y en el ex­terior a sostener largas y encarnizadas guerras contra pode_rosas naciones, que pretendian aniquilar el poder espaiiol, y it

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defender otros extensos ten itorios de America, tan codiciadospor sus riquezas naturales y por ser centros activos de consu­mo de los productos creados por la industria europea

Dispuso, pues, la Junta que se enviasen al Gobernador deNicaragua cincuenta escopetas La resoluci6n, dada en formade sentencia, dice textualmente asi

«Vistos: 1 emitanse cincuenta escopetas de las que hay ensala de armas, pertenecientes it S S el Presidente, que con lascincuenta remitidas it los oficiales reales de Nicaragua, sonciento, y el valor de todas paguen los oficiales reales de estaCorte Y S S se sirva mandar al Gobernador tenga especialcuidado con todas las armas de S M Y se Iibre despacho paraque los pficiales reales tomen raz6n de todas las armas que hu­biese repartidas en lit provincia, para que en las residencias delos gobernadores puedan pedirles las que falten por su des­cuido y mala administraci6n, como pertenecientes it S M, Yse entienda dicho despacho con todos los oficiales reales deeste Reino y sus tenientes y con los alcaldes mayores, corregi­dores, gobernadores y sus lugal tenientes de todas las provin­cias y partidos, y para todo se Iibren despachos»

EI Presidente, en auto de 23 de Junio mand6 se estuviesea 10 dispuesto por la Junta, y comunic6 esa resoluci6n al Go­bernador y it los oficjales reales de Nicaragua, en 8 de Juliode 1694

Las dilaciones acordadas en este incidente y en todos losque ocurlian de igual naturaleza, pudieron ser funestas en ex­ceso it la defensa y conservaci6n de la provincia, porque mien­tras los filibusteros asechaban constantemente ocasiones pro­picias para hacer sus ritpidas incursiones, los empleados delReino perdian el tiempo dando tritmites aun it los asuntos depoca importancia conducentes it la defensa de los pueblos En23 de Septiembre de 1693 habia pedido Don Pedro Luis de Col­menares los doscientos arcabuces que consideraba necesariospara resistir cualquier ataque, y en 8 de Julio de 1694 se co­munic6 it los oficiales reales de Nicaragua la concesi6n de cin­cuenta escopetas diez meses transcurrieron para que los ni­caragiienses pudieran obtener un pequeno auxilio de guerra (1)

(1) Despacho de Don Jacinto de Banios Leal, en el Atchivo de Ntcalagua

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CAPITULO XI

Administracion de Justicia en estas provincias: estado delcomercio al tenninar el siglo XVII: primeros esfuerzos de

Inglatena por posesionarse de PSte territorio.

1694 a 1700

COrIupci6n en la administlaci6n de las provincias~Lo que sucedia conlos jueces de I esidencia -AbusDs cometidos en algunos pueblos deHondUlas y c.uatemala-Conducta de la Real Audiencia Ii este respecto -Disposiciones dictadas pOl el Monal ea !lara COlI egil la mala admi­nisil aeion de justicia -PI ceeso contra el ex Gobernadou-c.Bl avo de Hoyos -Cargos que se Ie hacian -MOl osidad del juez de fesidencia eneste asunto-Quejas a que dio Oligen-Fuga del pIocesado-EI GohelnadOl Colmenmes da cuenta de este Bucesa al Capitan General-LaAudiencia de Guatemala exhOi ta a la de Panama eneal gandole la captm a de Bravo de Hoyos -Reflexiones acel ea de esta materia -Situacion del cornel cio en esta provincia -Causas que produCian su deca·dencia ........:-Restl icciones con que Ie I epl im[an las leyes -Inquietudes cau­sadas POI los filibustelos-Reforma en la OIganizaci6n de las miliciascoloniales -Agitaciones oem I idas en Granada el ana de 1696, a causade la eleeeion de alcaldes -Conducta del Gobel nador Colmenm es enestas disputas -Acusaciones que ocasionalon -Resolucion dictada pOIla Real Audiencia -EI Gobierno ingles inicia sus tendencias a posesion31 se del tell itOI io nical agUense -Acontecimiento en que aquellasse hicielon mas visibles -Guillel mo Pitt se establece en la Taguzgalpae impulsa el cornel cio en favOl de los ingleses -Muel te del SefiOJ Obispo D FI ay Nicolas Delgado -Mel itos v virtudes de este Hustl e saceldote -Fallecimiento del Maestl e de Campo Don LOI enzo Gonzalez Caldel6n -Datos histolicos soble la vida de este pelsonaje y sabre losselvicios que presto a la plOvincia -Consideraeiones soble el callictelgenel al del siglo XVII

LA administracion de las provincias, que no debia tenerotro objeto sino la felicidad de los pueblos, mediante el fo­mento de la riqueza publica, el alivio de los impuestos, la Ii­bertad del trabajo, la supresi6n de las encomiendas y las me­didas econ6micas convenientes al espiritu y a los conocimien­tos de la epoca, lIego a convertirse en fuente copiosa de injus-

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176 HISTORIA DE NICARAGUA

tieias y campo de especulaciones criminales La impunidadde los gobernadores y jefes de eorregimiento era segura y com­pleta, y se fundaba en la inmOl alidad y corrupcion de losjueces de residencia, nombrados para oir las quejas de los par­ticulares contra aquellos empleados y examinar los aetos desu gobierno Veamos 10 que aeontecia en el Pel U, segun eltestimonio de escritores peninsulares, bien informados de losasuntos de America

«Luego que el Corregidor tiene noticia del juez que Ie hade residenciar, se vale de sus amigos en Lima para que Ie cor­tejen en su nombre, y que Ie instruyan en 10 necesario, a finde que euando salga de aquella ciudad vaya ya convenido yque no haya en que detenerse Aqui es necesario advertir queademas del salario regular que se Ie considera al Juez a costadel resideneiado por espacio de tres meses, no obstante que laresidencia no dura mas de cuarenta dias, esta arreglado el va­lor de cada residencia proporcionado al del eorregimiento, 0mas propiamente el indulto que da el Corregidor a su juez paraque Ie absuelva de todos los cargos que pudieran aparecer con­tra el Esto esta tan establecido y publico, que todos sabenalia que la residencia de tal corregimiento vale tanto, y la delotro tanto, y asi de todas, pero esto no obstante, si al Corre­gidor ha agraviado a los vecinos espaiioles de su jurisdicciony hay recelos de que estos Ie puedan hacer algunas acusacionesgraves, en tal caso se levanta el precio por costa extraordina­ria, pero de cualquier modo el ajuste se hace, y a poco mascosto sale Iibre el Corregidor

»Cuando el juez de la residencia lIega al lugar principaldel corregimiento, la publica y hace fijar los carteles, correlas demas diligencias tomando informacion de los amigos yfamiliares del Corregidor, de que ha gobernado bien, que noha hecho agravio a nadie, que ha tratado bien a los indios, yen fin todo aquello que puede contribuir a su bien Mas paraque no se haga extraiia tanta reetitud y bondad, buscan treso euatro sujetos que depongan de el ievemente, esto se justi­fica con el examen de los testigos que se lIaman para su com­probacion, y COnCh.lldo que obro mal, se Ie multa en cosas tanleves como el delito. ljln estas diligeneias se haee un legajo

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de autos bien abultado, y se va pasando el tiempo, hasta queterminado se cierra la residencia, se presenta en la Audiencia,queda aprobada, y el Corregidor tan justificado como 10 esta­ba antes de empezar su gobierno, y el juez que 10 resideneioganancioso con 10 que Ie ha valida aquel negocio Estos ajus­tes se hacen con tanto descaro, y los preeios de las residen­cias estan tan entablados, que en la de Valdivia sucedia, quecomo este pal aje esta tan retirado del comercio de aquellosreinos, es regula! que los gobernadores que entran sean jue­ces de resideneia de los que acaban, y como el valol de la re­sideneia pasase sucesivamente de uno a otto, tenian los gober­nadores cuatro talegas de mil pesos debajo del catre dondedormian, a cuya cantidad no tocaban nunca, porque no se lesofrecia ocasion que les precisase a ello, y como luego que lIe­gaba el sucesor, Ie cedia el que acababa aquella habitaeion pal amayor obsequio, al tiempo de acompanarle a dentro Ie sena­laba los cuatro mil pesos, y asegurandole que debian estar ca­bales porque el no habia abierto las talegas, Ie decia que enaquella cantidad Ie habia dado la resideneia su antecesor, y queel se la daba en 10 mismo Este metodo se practico hasta des­pues que pasamos a aquellos reinos, segun decian los del pais,pero nO sabemos si continua todavia, y si los cuatro talegosestan intactos 0 no, despues de haber pasado bajo la posesionde tantos duenos, es cuestion de poca sustancia, siempre quepase por la misma cantidad

»Si al tiempo que el juez esta tomando la residencia ocu­rren algunos indios a deponer contra los corregidores algunasde las tiranias e injustieias que les ha hecho, 0 los desimpre­sionan de ello diciendoles que no se metan en pleitos, que trae­ran malas consecueneias contra ellos, porque el Corregidol lestiene justificado 10 contrario, 0 ya dandoles el Corregidor unapequena cantidad de dinero [del mismo modo que se enganaraa un niiio ofendidol consiguen que desistan de la queja, pera8i los indios no consienten recibir casa alguna, mas insistenen pedir justicia, los reprende el juez severamente dandoles aentender que se les hace demasiada equidad en no castigarleslos delitos que el Corregidor ha justificado contt a ellos, y ha­ciendose mediadores los mismos jueces, los persuaden, despues

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de haber sufrido tantas tiranlas, a que les deben estar obIiga·dos por no haberlos castigado en 10. ocasion con 10. severidadque mereclan sus delitos, de suerte que 10 mismo es para losindios; que sus corregidores sean residenciados 0 que no

»Si 10. acusacion se hace por los espaiioles sobre otros pun·tos, pr6cura mediar el juez, y les exhorta a que se compongan,de suerte que queden' amigos, y olvidados los agravios, perosi no 10 puede conseguir sigue el Iitigio y como el juez esta deantemano incIinado al Corregidor, siempre 10 procura sacarcon bien, y si no 10 puede conseguir por sl, remite 10. causa a10. Audiencja, mas como sus diligencias van dispuestas en taoles termjnos que lIevan de su parte Is mejor probanza, con pocoesfuerzo .que haga el Corregidor queda absuelto y su residen·cia concluida como deseaba Para pl ueba de esto registren·se los castigos que se han hecho en una continuacion de tantoexceso, y sera muy raro el hallar uno, luego es preciso conce­der, que en las residencias no hay materia suficiente sobre querecaigan siendo asi que sobra tanto. en 10. conducta de aquelloscorregidores como queda dicho en este articulo y se dira enel siguiente. (1)

19uales procedimientos se observaban en las provincias delreillo de Guatemala Todos los gobernadores y alcaldes ma­yores erall mercadel es, y ell el tritfico que haclan por las di·versas tierras de su jurisdiccion ejecutabsn escandalosas ex·poIiaciones y cometian toda clase de injusticias, en la confian·za de que para ellos no habia pellas Sucedia, pues, que cuan·do se anunciaba 10. Ilegada del juez enviado a residenciarlos,preparaball el dinero COil que debian corromperlo En Hon·duras era costumbre dar 0.1 juez de residencia 10. sumo. de tresmil pesos para que siguiera y sentenciara el juicio a placerdel residenciado Abusos semejantes se cometian en los pue·bIos de 10. provincia de Guatemala Don Gaspar Saenz de Vi­teri, Alcalde Mayor de Gliegiietenango, en dos meses que durola residencia tomada a su antecesor por comision de 10. Au­diencia, saco 10. Cl ecida cantidad de quince mil pesos Estosescandalos; que eran comunes en todo el reino, IIegaron a no-

(1) Noticia.I) seclctas de Amelica, pm Don JOige Juan y Don Antoniode Ulloa, pal te 2 a, cap I

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LIB VI -CAP XI --ADM6N D~ JUSTICIA EN ESTAS PROVJNCJABJ ETC 179

ticia del Monarca, quien trata de remediar el mal, expidiendouna real cedula en Madrid a 22 de Junio de 1692, en que or­dena a la Audiencia hiciese seguir informacion para compro­barlos y la remitiese a la Corte 10 mas pronto posible, debien­do proceder desde luego contra Saenz de Viteri, hasta impo­nerle el merecido castigo en el caso de ser ciedo el cargoque se Ie hacia

La misma Real Audiencia habla aflojado tanto en este pun­to el rigor de la ley, que se hizo acreedora a una prevenciondel Monarca POI el ano de 1688 habia sido Alcalde Mayorde la Trinidad de Sonsonate, Don Francisco Vasquez de Cam­pos, y sucedidole en el empleo Don Carlos Colomo, quedandoel cesante sujeto al juicio legal de residencia Par deferenciasdispensadas a Vasquez, la Real Audiencia consintio en que seomitiera el juicio, en consideracion a los danos que con la tar­danza recibia el ex-Alcalde, puesto que aun no habia IIegadoel juez que debia residenciarlo, y dispuso que en lugar deaquel procediiniento, establecido por la ley como muy conve­niente a la buena conducta de funcionarios que a tanta distan­cia de las autoridades superiores tenian que desempenar suscargos, se siguiese una simple informacion de testigos idoneosque declarasen sobre la direccion y manejo de los negocios,observados por el que habia de ser residenciado

La Audiencia sentaba un antecedente peligroso al buen re­gimen de las provincias i. Como habria podido negarse a otor­gar iguales gracias a otros corregidores 0 alcaldes? Pero aunno se conform6 con haber dispensado a Vasquez del juicio deresidencia, sino que ocurri6 al Rey pidiendole un buen destinopara su favorecido, porque de la informaci6n seguida apare­cia can grandes merecimientos EI Monarca dia su contesta­ci6n en real cMula expedida en el Buen Retiro a 12 de Juliode 1690, manifestando a la Audiencia que ya estaba nombradoel juez que debia tamar cuentas al ex-Alcalde Mayor de Sonso­nate, y previniendola que en 10 sucesivo no hiciese concesionescomo la que habia otorgado a Vasquez, ni permitiese que loscorregidores y alcaldes salieran de la provincia antes de serresidenciados

Los empleados de Nicaragua no podian levantar la voz para

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180 HISTORIA DB NICARAGUA

proclamarse exentos de los prevaricatos cometidos por los jue­ceS en otras partes En el capitulo anteIior se dijo que el Go­bernador Bravo de Hoyos habia sido destituido y mandadoprocesar por complicidad en la sublevacion de Sebaco DOliPedro Luis de Colmenares, sucesor de aque! en el gobierno dela provincia, fue nombrado juez de residencia, y Don Juan J a­cinto Lopez designado para ejercer las funciones de FiscalLos cargos contra Bravo de Hoyos eran los siguientes quehabia hecho pagos Begales a los soldados de Segovia y a losdel Castillo que en las visitas de los pueblos cobraba salariosindebidos que no habia enterado en las reales cajasleI dinerode ciertas multas impuestas en tres provL,iones expedidas conmotivo de los acontecimientos de Sebaco, ni el de las penasde Camar a destinadas a beneficio del Castillo en las caUSasque por el mismo Gobernador y ob os jueces se habian se­guido, ni el de tres residencias que tomo por comision del TIi­buna] a Frey Alvaro de Lozada, a Don Antonio de Navia y alGeneral Don Pedro Alvar ez Castr illon, ni los donativos pedi­dos por el para ayndar al real tesoro en los gastos de Ia de­rensa, y sobre los cuales no habia presentado cuentas

La actividad del Fiscal y su celo en el cumplimiento de los, \

deberes contraidos al aceptar ese cargo se estrellaban en Iaindiferencia culpable y no disimulada proteccion con que eljuez Don Luis de Colmenares favoreda a Bravo de HoyosCinco pedimentos presento Don Jacinto Lopez, promoviendoIa instancia, y el juez, sin dar una plumada, se Iimitaba a ma­nifestsr su impaciencia y mal humor Los apoderados del pue­blo de Sebaco pedian tambien el juicio, par el interes que enel tenian, y en vez de providencias judiciales, recibian inju­rias y ofensivas reprensiones del encargado de administrarjusticia Colmenares les daba it entender que tenia ordenessecretas de la Audiencia para excusar el procedimiento, y losinculpaba a ellos y al Fiscal por los pasos qne daban contrael proposito que atribula al Tribunal superior del Reina

EI Fiscal LOpez dio cuenta a la Audiencia, de la parciali­dad con que Colmenares procedia en Ia resideDcia de Bravode Hoyos, para que dictase las medidas mas convenientes a Isrecta administracion de justlcia, y Ie decia que aunque eran

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muchos los particulates agraviados por eI ex-Gobernador, na­die se atrevia a reclamar sus derechos, por no provocar el eno­jo de Colmenares, cuya conducta era objeto de las mas acer­bas murmuraciones y hacia ineficaz el juicio de responsabilidadcontra un funcionario que tan agresivo y tillbulento habia sidoen su gobierno

Un acontecimiento inesperado puso en claro 10 que antesno habian podido penetrar En 4 de Diciembre desapareci6Bravo de Hoyos, y se aseguraba que habia tomado el caminode Costa-Rica para pasar a Panama, Ilevando unos almofrejcsy siete cal gas de petacas, mueble muy usado en aquella epo­ca EI mismo Gobernador Colmenares comunic6 esa novedada la Audiencia, pew aunque aquel empleado se manifestabapenoso pm la fuga de quien habia estado bajo su responsabi­Iidad y cuidado, no podia evitar las sospechas de connivenciay aun venalidad que sobre su honm y dignidad arrojaba la re­beldia en iniciar el juicio, desatendiendo los repetidos pedi­mentos del Fiscal y de los representantes de Sebaco

Don Luis de Colmenares se dirigi6 al Capitan Genelal DonPedro Lopez de Ursino, en oficio del propio dia 4 de Diciem­bre, exponiendole la facilidad de detener a Bravo de Hoyos enPanama, donde acaso permaneceria, puesto que por el ternorde ser capturado no debia pensar aun en irse a Espana In­formabale tambien que s610 nueve cargos habian resultado deljuicio contra Bravo, todos de poca importancia, y que ha­biendose descargado satisfactoriamente de seis, 10 declar6 res­ponsahle de tres, contra los que no probO bien, imponiendolela multa de quinientos pesos, mitad para la Real Camara y laotra mitad para gastos de residencia: que asi mismo 10 habiacondenado al pago de seiscientos cuarenta y cinco pesos enque fue alcanzado de penas de Camara, pues aunque las di6por no cobradas, se Ie desech6 el descargo, y finalmente queesas cantidades estaban aseguradas con buenos fiadores y conbienes suficientes embargados al fugitivo, pero que Bravohabia interpuesto el recurso de apelaci6n pal a ante el Con­sejo de Indias

La Real Audiencia de Guatemala exhorto a la de Panama,encargandole la captura de Bravo y el embargo de sus inte-

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reses, entre los cuales se encontraban treinta mil pesos, se­gUn los informes recibidos No hemos podido hallar en el Ar­chivo Nacional documentos que sirvan de datos para saber lasuel te que tuvo Bravo de Hoyos, ni el modo como conc\uyoeste ruidoso asunto, pero 10 que se deja relacionado da plenoconocimiento del lamentable estado en que se hallaba la admi­nistracion de justicia, encargada a hombres destitUldos de mo­ralidad y en quienes predominaba la rapaz avaricia y el desen­freno del ciego interes personal Nos quejamos de las pareia­lidades y malas pasiones que hacen de la administracion dejusticia un elemento corruptor en nuestra actual sociedad Males ese que viene transmitiendose como ciertas enfermedadesque vician las generaciones hasta extinguillas, y que solo pue­de remediarse difundiendo en el pueblo la instruccion y eli­giendo para sel vir los empleos judiciales pel sonas diguas porBUS buenas dotes, sin consideracioll a las opiniones poUtleasque profesen

La direccion hacia Panama, tomada por Bravo de Hoyos,pasando por el territorio de Costa-Rica, no causaba entoncesnovedad, COmo la causada en estos tiempos La navegacion,segUn ya se ha dicho, era escasa, por la faIta de embarcacionesque dieran actividad al comercio, y la pel manencia\ constantede los filibusteros en las costas, la exponia a inevitables pe­ligros, cuando los barcos de estas plOvincias no llevaban lacustodia de las naves del Gobierno Esas dificultades, naci­das de la situacion en que se hallaban las colonias de la Ame­rica espanola, obligaban a los comerciantes del Reino de Gua­temala a hacer con Tierra-Filme el trafico, llevando sus efec­tos en numerosas recuas que debian pasar por Nicaragua EIpasaje de mulas constituia uno de los ramos del real tesoro,arrendandose al mejor postor Pero el ano de 1696, no obs­tante la diligencia de los empleados de hacienda y los frecuen­tea pregones que en toda la plovincia se daban llamando arren­dadOles del derecho de pasaje, no comparecio uno solo a ha­cer postura, cil cunstancia de que pucde deducirse la decaden­cia del comercio con TierlS-Firme, originada tal vez de lasrestricciolles impuestas por las leves No hay traba que masdesaliente a los pueblos y que con mas violencia lleve Ia des-

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composicion a las sociedades, que las prohibiciones y los re­glamentos con que los gobiernos encadenan la industria

A esas causas, que por si solas habrian sido bastantes paraalejar los capitales y todo movimiento generador de riqueza,se agregaba la mas aterradora, la que esteriliza de momentolos campos, ahuyenta los brazos e infunde las mas justas des­confianzas, a saber, la guerra No daban descanso los fili­busteros a estos consumidos pueblos Las personas que algu­nos valores en dinero conservaban, viendolos expuestos a lasrapinas de los enemigos, los sepultaban en la tierra, para dar­les la garantia que la autoridad no podia prestaries «EI nu­mel alio, dice un escritor, tiene la particularidad de que des­aparece de un modo fantastico, como el rocio bajo los rayosde un hermoso sol, cuando la tranquilidad publica experimen­ta alglin vaiven» (1)

Las frecuentes invasiones de los filibusteros y los desas­trosos resultados que siempre tenian, por carecer la provinciade tropas organizadas que hicieran resistencia, habian espal­cido el terror en todas las clases y paralizado el trabajo Unconsiguiente necesario de tan ruda situacion era la pobrezaPor estas causas no habia postores al pasaje de las mulas paraPanama, y es facil comprender tambien que los comerciantesde las provincias de Occidente no quisiesen exponer sus capi­tales, enviandolos por una via tan nena de peligros

Los impuestos sobre los frntos que se llevaban a Espanacrecian al par de las necesidades de la monarquia, con motivode la guerra Gran parte del comercio de Guatemala se ha­cia por Veracruz En acuerdo de 22 de Febl ero de 1669 re­feria el Cabildo de aquella ciudad que para el pago de cientoveinticinco mil pesos qne se asignaron a Nueva Espana en elasiento del Consulado de Sevilla, de cada una de las flotas,se habia impuesto a cada cajon de tinta de anil diez pesos,a cada carga de cacao dos, a cada tercio de grana silvest!ediez, a cada cajon de chocolate diez y a cada cajon de vainillaotros diez

Las vejaciones que el comercio de Guatemala sufria de par-

(1) Gal niel, Elent de Econ politica, cap IX, § VI, mlmelO 299

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te de los empleados de Veracruz, en el cobro de esos impues­tos, rayaban en escandalo Por el ailo de 1684 se vio el Ayun­tamiento de la capital en la necesidad de pedir al Rey orde­nase que la armada de barlovento recorriese los puertos deeste Reino, para evitar el mal tratamiento que los comercian­tes recibian de los empleados de Veracruz En 9 de Febrerode 1685 hubo un cabildo abierto para tratar de estas mate­rias, y habiendo pedido en el la palabra Don Jose de Aguilary Rebolledo, dijo: que del almojarifazgo de salida, lIamadode barlovento, podia justificar, que en el curso de treinta ailosse habian cobrado mas de ochocientos mil pesos, ~in que laarmada hubiese entendido en ninguno de estos puertos (1)

Esa era la dura situacion en que se hallaba el comerciode estas provincias a fines del siglo xvn La cobranza se ha­bia hecho en anos anteriores, y aun en aquella sazon se hacia,con nimia escrupulosidad, y sin embal go, Ia pobreza del te­soro real era cada dia mas notable Una cedula de 3 de Ju­nio de 1697 decia, que el Virrey de Nueva Espana deseabacomponel la armada de diez navios, de modo que se carena­sen unos, mientras se hallaban en Ia mar otros, pero que di­ficultandose por haberse minorado los efectos aplicados a sudotacion, no podian mantenerse mas de los seis d~ ,que cons­taba Esa extremidad a que habia lIegado la pobreza del te­soro era forzoso resultado de la falta de sistema en el esta­blecimiento de los impuestos Se carecla entonces, como aho­ra, de una estadistica que sirviese de base a las disposicioneseconomicas, equilibrando las necesidades con los recursos Peroentonces tambien como ahora, los capitales se hallaban a dis­crecion de los gobiernos, quienes los eel cenaban rutinaria­mente, aumentando sin regIa ni medida las contribuciones delcomercio para cubrir las mas veces necesidades ficticias 0 na­cidas de una politica arbitraria y desatentada

Los pueblos de Nicaragua, no obstante la ignorancia deaquellos tiempos y las trabas impuestas por un regimen de go­bierno protector de 1a c1ase dominante, no ;,ran indiferentesa la perdida de los escasos derechos que las leyes otorgaban

(1) Galcia Pelaez, MemoJias. tomo 2", cap LXIV

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a Ill. generaUdad de los eiudadanos Las eleeeiones de alcal­des en Granada habian produeido extraordinaria agitaeian po­pular par el ano de 1696 El Gobernador Don Pedro Luis deColmenares protegia al pal tido politico que seeundaba sus de­seos, y el Ayuntamiento de aquella eiudad formaba con elpueblo EI alboroto fue grande Colmenares puso querellacontra el Alcalde ordinario Don Juan de Novoa, en acuerdo de3 de Noviembre de aquel ano, 10 que demuestra que el resul­tado de Ill. eleccian no Ie habia sido favorable Siempre sonlos mismos los resortes que mueven el eorazan humano Des­de aquellos remotos tiempos y bajo distintos plineipios de go­bierno viene observandose que cuando el partido que sucum­be es el de mayores influeneias, oeurre al medio de las quejas,ya para anular Ill. eleeeian, ya pal a sobreponerse nuevamenteal partido veneedor En 11 de Dieiembre de 1698 el SenorNovoa y los demas eapitulares fueron multados por Ill. RealAudieneia, sin duda para que en 10 sueesivo no hiciesen opo­sieiones al Gobernador en Ill. eleeeian de autoridades locales,a para apagar el fuego del patriotismo que podia causal mastlaseendentales ineendios en una soeiedad empobrecida y for­mada de elementos opuestos

Conocida Ill. situacian difieil en que se hallaba esta plOvin­cia, asi por las agitaeiones interiores como por las amenalaSque en 10 exterior bacian los fil\busteros, se bata de pleve­nir sus probabIes eonseeueneias, dando a las tropas una orga­nizaei6n mas extensa Hasta Ill. epoea en que lIevarnos Ill. pre­sente narraei6n, las eornpanias se formaban de pardos, c1asemedia entre espanol y el indio, no muy dispuesta a soportarfatigas en que no aleanzaba a ver un interes direeto, y que yamanifestaba mareadas antipatias contra los dominadoresdel pais

Para dar robustez a Ill. tropa, y en previsi6n de praximosaeonteeimientos, se mezclaron espanoles en las eompanias depardos, y aun se formo algnna s610 de espanoles europeos,eombinaei6n con que se pensaba evitar Ill. flojedad del solda­do, equivalente a una traici6n EI Capitan Don Domingo deAyarza pidi6 al Cabildo de Guatemala, en Ill. sesi6n de 18 deSeptiembre de 1697 Ill. creaei6n de las compafiIas en esa nueva

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forma, por las noticias de estar ambos mares infestados depiratas franceses, para resistir a los cuales se valian los go­bernadores de la gente miliciana, que era pobre, misera y sinalientos para la guerra Eso fue todo 10 que se hizo, y no po­dian dictarse mas eficaces medidas de defensa, porque no ha­bia dinero en las reales cajas, ni facultad para gastar el quelos empleados fueran recaudando

Los acontecimientos politicos y sociales venian modifican­do insensiblemente el aspecto moral de cstos pueblos y dan­doles la fisonomia que aun conservan, en la vida publica comoen la domestica, sin que el cambio de los tiempos y qe las ins­tituciones haya podido alterar la impalpable atmosfera quealimenta sus inclinaciones, usos y costumbres y que forma lascondiciones que distinguen a la nueva raza, Hamada a desti­nos diversos de los del antiguo conquistador y de los del pue­blo conquistado No obstante el juego de las incesa.ntes evo­luciones que se realizan en el seno de las sociedades humanas,la poderosa voluntad del que gobierna los mundos ha queridoque los habitantes de las que fueron colonias espanolas seansiempre hispano-americanos, conservando su existencia y es­pecial naturaleza, sin ser suplantados por otras razas Gran­des esfuerzos hizo Inglaterra para apoderarse de N~caragua,

halagada por su posicion topografica, la fertilidad de su suelo,la riqueza de sus bosques, la abundancia de sus aguas, la di­versidad de sus minas, la poesia de su flora, la bondad de suclima, que por sus distintos temples ofrece solaz y comodida­des al europeo, al asiatico, al africano y a los de nacionalidadamericana

Un acontecimiento aislado y de poca significacion hizo aunmas vehementes los deseos del Gobierno de la Gran Bretana,y fue origen de un nuevo sistema de hostilidades empleadopara tomarse a Nicaragua Guillermo Pitt, natural de la islade la Bermuda, se establecio en la Taguzgalpa por el anode 1699, con el objeto de hacer grandes cortes de maderaspara el comercio de Inglaterra, e introducir de contrabandosus ropas al interior de esta provincia Obtuvo grandes ga­nancias, y la riqueza que en poco tiempo adquirio sirvio depoderoso aliciente par\, que otros de su nacion viniesen a ave-

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cindarse en aquel lugar Ese fue el principio de la ocupaci6nque los ingleses hicieron de la costa del Athintico el titulocon que la ejecutaron fue la fuerza, y su objeto el contraban­do y el robo de maderas Desde entonces aquel suelo, rega­do con sangre de nicaraglienses para sacar de los bosques ~

los habitantes feroces de las montaiias, y santificado con elmartirio de abnegados sacerdotes que con la cruz en la mana-civilizaban al indio salvaje, enseiiandole las doctrinas del cris­tianismo, ha sido objeto de la codicia britanica y campo desus mas injustas pretensiones En los capitulos posterioresse iran viendo las consecuencias de aquel hecho, pequeiio yoscuro, como 10 son casi todos los que sirven de pie a gran­des acontecimientos

La silla episcopal habia quedado vacante por muerte delSeiior Don Fray Nicolas Delgado, ocurrida en 22 de Diciem­bI e de 1688 Gobern6 la Di6cesis diez aiios, y sus muchas ygrandes virtudes Ie hicieron acreedor a la fama de santidadFue sepultado en su Catedral

Otro fallecimiento lamentable, ocurrido a fines del siglo,fue el del infatigable y generoso defensor de Nicaragua, Maes­tre de Campo Don Lorenzo Gonzalez Calder6n Este ilustlepersonaje, dej6 de existir el aiio de 1696, siendo Gobernadorde armas Era espaiiol, natural del lugar de Queveda, en lasmontaiias de Burgos, e hijo de Don Tomas Gonzalez Calder6ny Peredo y de Doiia Catalina de la Llana De valor inque­brantable, de costumbres severas y de actividad extraordina­ria, se habia conquistado la admiraci6n general y formado unade las mas grandes fortunas de la provincia Los empleadossuperiores de la Capitania, que con frecuencia se cambiaban,reconocian pronto su importancia politica y personal y Ie pro­digaban respetuosas atenciones, en consideraci6n a sus dotesindividuales y a los constantes y desinteresados servicios quea la causa nacional prestaba en los lances mas apurados, con­tra los enemigos de Espaiia Es justo suponer que fue gene­ralmente sentida la muerte del heroe del Card6n, del nobleadalid que mantuvo mil hombres con su propio caudal, pormas de seis meses, para impedir la invasi6n de los filibus­teros y dar seguridad a Nicaragua y aun al Reino en general

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Cuando de lejos se dirige la vista a ulla llanura, sobre lacual flota la niebla nivelando la superficie y dandole el aspec­to de un mar en calma, al que prestan las nubes sus vistososcolores, no se piensa en que aquel suelo que tantos encantosproduce en nuestra imaginacion, abriga en su seno venenosasserpientes, carnivoras fieras, dafiinos insectos, aIbergados enhondas cavernas y putridos arroyos Eso mismo sucede cuan­do se vuelve la vista a las pasadas generaciones, niveladaspor la bruma del tiempo Se cree que la paz fue su constanteelemento, el bienestar el fruto de un trabajo moderado y se­guro, el respeto a los ancianos pedestal del orden, \en una pa­labra, que la vida de aquellos dichosos antepasados se desIi­zaba entre flores, formando un poema pastoral en que el amorembellecia la existencia de la sociedad humana

Esa patetica imagen de una engafiosa situacion es ironiamordaz dirigida a la edad presente El hombre siempre fue,es y sera el mismo, y sus pasiones produciran en todo tiempoguerras, asesinatos, usurpaciones, ambiciones miserables quepara obtener el triunfo apagan el brillo de la razon y dejanen tinieblas el pensamiento i Ah, dicen muchos, como pudie­ramos volver a la edad de oro de la colonia! sin conocer lascalamidades de todo linaje que experimentaron nq,\stros ma­yores Ya 10 hemos visto: el siglo XVI fue el de las depreda­cione" de la conquista, de las encomiendas, de la esclavitud, delarriendo del hombre para improbos trabajos y de las exac­ciones ejecutadas por mandarines sin entrafias, y el siglo XVII

fue el de la constante guerra con los filibusteros, de los in­cendios, de los asesinatos y saqueos y de las continuas pre­venciones helicas para dar seguridad a la provincia y al Rei­no Nada tiene, pues, que envidiar la edad presente Ii la pa­sada nuestro progreso es lento pero efectivo, y cuando ad­quiera creces que Ie den fuerza, levantarli el vuelo por unaimpulsion casi espontlinea