12º Edición 15/11/201

12º Edición 16/11/2010

Canalladas y canallas

El partido fue como quiso Preciado que primero calentó el encuentro desde la sala de prensa y luego las piernas de los contrarios. Fue un partido duro, fuerte, viril, es decir solo para hombres. Y así salieron los dos, yo que me esperaba más empuje de los asturianos al principio pero me sorprendió su actitud ruda. Si la cogía Xabi Alonso palo, si Cristiano intentaba arrancar palo, si Marcelo intentaba subir por la banda más palos… y eso que Ramos y Pepe no se quedaron cortos, pero no al nivel del Sporting. Así se fue calentando en Molinón, protestando todo, clamando contra Mourinho, Cristiano y el gremio de portugueses, A Higuain se estrellaba con los palos y a Turienzo se le iba la cosa de las manos. Menos mal que llego el descanso. Y ahí bajo Mourinho (no gracias al ascensor del palco fuera de servicio) y le dijo a los suyos que no entraran en provocaciones y jugaran su partido, y eso hizo el Madrid empezar a jugar su partido. Y como era previsible el gol se acercaba, Higuain fallaba y fallaba, Cristiano y Di María probaban a Juan Pablo y salió Benzema, otra vez revulsivo le cambio la cara al ataque del Madrid que encerró al Sporting atrás y colgó balones hasta que un cabezazo del galo crucificado (ya perdonado por algunos que le MARCAron la cruz en la frente) le dejo un rechace al 20 para firmar la victoria, los tres puntos, el silencio y bajar algún que otro humo. Pero el incendio que parecía extinguido entre los dos técnicos, se volvió a iniciar en el parking del estadio. Hay muchas versiones sobre lo ocurrido, cada parte como no da la que le favorece. Y ¿por qué se produjo esto? ¿Quién es el culpable? Mourinho que acuso (con o sin razón) sin pensar en las consecuencias o Preciado al que se le calentó la boca por una tontería. Lo único que parece claro es que se dejo de lado el futbol y se incito a la violencia. Imagínense que al final del campeonato el Madrid ya haya cumplido y las jornadas restantes que quedan juegue con los menos habituales, y le toque jugar con un equipo que se esté jugando el descenso con el Sporting. ¿Qué dirá Preciado? ¿Se quejara? Seguro. Y si alguien esta avispado tirara de hemeroteca y sonrojara algunas mejillas. Sino que se lo digan a Alonso al que su pasado (Renault y Hamilton) le costaron el titulo Mundial. Porque después del diluvio siempre llega la calma pero… ¿Hasta cuándo durará?