Campaña Redentora 2011 2012 Huanca - Peru

_____________________________________________________________________________ Provincia Mercedaria del Perú

Pasaje Quiñones 142, Jesús María. Lima – PERÚ www.mercedarios.pe

Orden de la

Merced



CAMPAÑA REDENTORA

2011 – 2012

ESCUELA SAN PEDRO NOLASCO

HUANCA (CUSCO)



I. DESCRIPCIÓN DE LOS DESTINATARIOS DE LA CAMPAÑA REDENTORA 1.1 Destinatarios.

Niños de 05 a 12 años que viven en las comunidades campesinas a inmediaciones del santuario del Señor de Huanca – Cusco (Perú).

1.2 Descripción de la realidad en la que viven los destinatarios.

El Santuario del Señor de Huanca se encuentra enclavado entre las grandes



montañas que rodean a la región Cusco a una hora de la ciudad. La población está concentrada en varias comunidades campesinas que se organizan para poder subsistir trabajando mancomunadamente y a veces sembrando algunos productos agrícolas. Son personas pobres y en algunos casos la extrema pobreza (miseria) golpea sus vidas sin cesar. Paradójicamente a pesar de no estar tan lejos de la ciudad se percibe la ausencia del Estado y sus programas sociales, es decir, los pobladores de Huanca carecen de los recursos básicos o son mal atendidos: alimentación, salud, educación, agua y desagüe, energía eléctrica entre otros. Y muchas familias viven por debajo de la línea de pobreza la cual, sociológica y económicamente, se calcula en nuestro país, en menos de un dólar por día para vivir.

En general los niños se dedican a trabajar desde muy temprana edad debido a que las pocas escuelas del Estado que existen en aquel lugar son deficientes y por lo mismo no brindan una buena educación; obligando a que los padres prefieran que sus hijos trabajen y ayuden en el hogar



antes de que estudien. Esta situación de cautividad por la cual nuestros hermanos de Huanca se ven estrujados entre las garras de la pobreza material, moral y espiritual se repite de generación en generación, como un círculo vicioso que atrapa y destruye la dignidad y la libertad de nuestros hermanos en la marginación y olvido. La ignorancia es un signo inequívoco de la cautividad actual; los abuelos de estos niños fueron analfabetos y sus padres en su gran mayoría también lo son, nuestra responsabilidad ética y moral nos exige cambiar la historia de abandono de sus ancestros para que no se repita en los más pequeños.

Para hacer frente a esta situación la Provincia Mercedaria del Perú decide iniciar la construcción de una escuela gratuita y benéfica en el año 2003 que esté dirigida a los niños de este sector, brindándoles una educación de calidad, acorde a las exigencias del mundo actual, como instrumento redentor, que les permita desarrollar plenamente su pensamiento y su libertad de hijos de Dios. El colegio como tal abrió sus puertas en el año 2006 recibiendo en su inicio a 30 alumnos para el nivel inicial. En la actualidad el colegio tiene una población de 128 niños que cursan los niveles de inicial y primaria hasta el cuarto grado, dado que su capacidad de infraestructura por el momento no puede ofrecer más.

La Provincia Mercedaria del Perú, como parte de su opción carismática por

las necesitados, construyó las aulas y las implementó; del mismo modo, asumió, desde entonces los costos que implican los sueldos y la formación de los profesores, los útiles escolares de los niños, la alimentación, el uniforme de los niños y la formación indirecta de los padres de familia mediante escuelas de padres de familia, jornadas espirituales, talleres formativos, catequesis familiar y otros. Todo lo anterior con la única finalidad de mostrarles el rostro amoroso de



Cristo Redentor. Por eso, hoy más que nunca necesitamos del apoyo de la gran familia mercedaria en el mundo para construir la infraestructura que nos hace falta para atender y servir a través de la educación liberadora a muchos más niños. II. FUNDAMENTACIÓN TEOLÓGICA DE LA CAUTIVIDAD A LA QUE SE QUIERE RESPONDER 2.1. SINTESIS DE LA PERSPECTIVA TEOLÓGICA DE LA REDENCIÓN EN HUANCA

La respuesta carismática de la Provincia Mercedaria del Perú a la cautividad detectada en Huanca como problema latente se fundamenta en la fortaleza del Carisma que san Pedro Nolasco nos legó. La vitalidad del carisma mercedario se expresa en la variedad de obras que surgen en nuestra Orden para dar respuesta a las nuevas formas de cautividad. La identidad de nuestro carisma es uno y pluriforme a la vez. “… en su unidad e identidad original viene implicado su dinamismo plural, capaz de inculturarse en las diferentes realidades actuales”. (Mensaje del XV Capitulo General No. 36)

La realidad de Huanca nos exige a los mercedarios del Perú el auxilio de acciones y gestos redentores por los cuales debemos ofrecer vida digna y libertad. Luego de muchos años de reflexión sobre nuestro carisma y su aplicación y, desde luego, después de un análisis profundo de la realidad decidimos responder a la problemática de abandono y marginación, signos de cautividad en Huanca, con una educación liberadora, con la esperanza de que a través de ella podamos introducir en el horizonte educativo la oportunidad de educar en la libertad y para la libertad. Conscientes, además, de que la situación de deshumanización que viven los niños de este lugar no es la verdadera vocación a la que están llamados. Su vocación es la de la humanización en Cristo y ésta debe ser conquistada a través de una educación redentora que en primer lugar sea capaz de presentarles el rostro misericordioso de Cristo Redentor.



En ese sentido, la institucionalidad de la Obra Redentora, iniciada hace ocho

años en Huanca, es el paso por el cual los mercedarios del Perú hemos revisado y meditado la más sublime redención: la de Jesucristo. Este modelo ha impregnado nuestra misión redentora, la ha fortalecido y la ha alimentado en el diario caminar por la vida. Tratamos de ver al cautivo con los ojos de Jesús no como un desecho humano sino como a un amigo por el cual hay que preocuparse en darle la libertad; «ya nos les diré servidores, porque un servidor no sabe lo que hace su patrón, les digo amigos porque les he dado a conocer todo lo que aprendí de mi Padre» (Jn 15, 15). Todo lo que aprendimos es lo que entregamos; la fe que recibimos es la que damos al cautivo amigo para que en él reviva esta luz que se ha ido debilitando, para que sea digno y valorado como hombre.

Somos conscientes que redimir no es simplemente liberarlos y dejarlos a la intemperie, es más bien continuar con ellos en el camino hasta que lleguen a su propio autodesarrollo, a partir de lo cual puedan valerse por sí mismos y para que hagan uso de su libertad responsablemente. Redimir es dar todo de sí por el otro, es devolverle su dignidad, su fe, no imponiéndole sino reviviéndolo, respetando su propia identidad y consolidando sus valores culturales e históricos, porque todo hombre, por haber sido hecho a imagen de Dios, tiene la dignidad de la persona; no es solamente algo, sino alguien. Es capaz de conocerse, de poseerse y de darse libremente y entrar en comunión con otras personas; y es llamado, por la gracia a una alianza con su Creador, a ofrecerle una respuesta de fe y de amor que ningún otro ser puede dar en su lugar.

Visitar y redimir, es la forma como se va entrelazando la misión redentora

en nuestra Orden desde siempre; con estos medios, los mercedarios en el Perú a imagen de Cristo hemos encaminado nuestra obra porque hemos podido ver, oír y hasta sentir el trato inhumano de nuestros hermanos (cf. Ex 3, 7-9). Dios visitó y



redimió a su pueblo por medio de Jesús su Hijo (cf. Lc 1, 68ss.). La redención es una dimensión humana y cristiana porque por ella se puede poner en práctica la virtud teologal de la caridad redentora de Jesucristo, mediante la evangelización, las obras de bien social y por medio del servicio educativo liberador. Liberar al cautivo, presupone que nosotros somos y vivimos en libertad (cf. Gal 5, 1); . Teniendo en cuenta que la libertad alcanza su perfección cuando está orientada a Dios, podemos afirmar con el Magisterio que «La auténtica libertad es una espléndida señal de la divina imagen en el hombre, ya que Dios quiso dejar al hombre en manos de su propia decisión, de modo que sepa buscar espontáneamente a su Creador y llegar libremente a la plena y feliz perfección, por la adhesión a Él» (GS 17). Para los seguidores de Nolasco no hay verdadera libertad sino en el servicio del bien y ésta se ejercita en las relaciones interpersonales, que por medio de la acción educativa intentaremos hacer realidad.

Toda nuestra vida mercedaria es un servicio, un servicio a los cautivos que están a punto de perder su fe, en ella nos unimos haciéndonos prójimos en aquellos que son marginados, despreciados u olvidados por la sociedad, somos nosotros los mediadores de la Libertad para que descubran el sentido de su vida, su realización como hombres y como hijos de Dios (cf. Gal 5, 1). Dar la vida nos impulsa a encaminarnos por el hermano cautivo, nos lleva a servirlo para descubrir en él a un Cristo que sufre: opresión, injusticia, violencia y marginación, quien clama a gritos ¡Libertad!, es por ello que «el espíritu mercedario supone fundamentalmente el descubrimiento de Cristo que continúa padeciendo en los cristianos oprimidos y cautivos, expuestos a perder su fe» (COM 9). Éste Cristo es el que encontramos en nuestro camino redencional y por el cual disponemos nuestra vida a su servicio alegremente. Entregar lo más preciado que uno tiene: la vida por los demás, es servir y construir un mundo mejor. Dar la vida, es entregar amor, y si uno no descubre el amor hacia los hermanos en el servicio, que es el amor en acción, difícilmente podremos realizar este camino de redención.



2.2. LA OBRA DE HUANCA COMO ACCIÓN LIBERADORA EN LA ORDEN Y EN LA IGLESIA

Los mercedarios nos consagramos a Dios, siguiendo a Cristo, que, obediente, virgen y pobre, redimió y santificó a los hombres. San Pedro Nolasco, nos conduce, ante todo, a un encuentro radical con Jesús, el verdadero redentor que «visita y libera a los cautivos», lo encontramos padeciendo en los cautivos, que son para nosotros signo de su presencia en el mundo. El seguimiento de Jesús nos compromete a adoptar una actitud de entrega total y efectiva por los otros.

2.2.1. San Pedro Nolasco y la obra liberadora

Las Constituciones actuales nos presentan a san Pedro Nolasco, como el «realizador más perfecto de la obra liberadora de María»; nos llevan al encuentro con la Madre de la Merced, protectora de cautivos e inspiradora de los redentores. Precisamente la acción liberadora se constituye para el mercedario en una exigencia: «Contemplando a María descubrimos el sentido de nuestra espiritualidad y la urgencia de nuestra acción apostólica» (COM 7); como eco filial del Magníficat de María. Es importante resaltar, y siguiendo la doctrina del Concilio Vaticano II, que nuestras Constituciones son también un camino de encuentro con la Iglesia. Nuestra fidelidad eclesial se mueve en dos ámbitos importantes:

a) Realizamos la acción redentora en nombre de la Iglesia, que acogió el carisma de san Pedro Nolasco en el año 1218, lo confirmó de forma



universal en el año 1235 y lo ha ratificado nuevamente al aprobar nuestras nuevas Constituciones en el año de 1985.

b) Al mismo tiempo, por inspiración de Pedro Nolasco, nos sentimos especialmente ligados a la Iglesia que sufre, en los que se encuentran en peligro de perder la fe; ellos son para nosotros el verdadero “corazón” de la Iglesia de Jesús. Cuanto mayor sea nuestra fidelidad a la Iglesia Jerárquica que nos aprueba y envía, más grande ha de ser nuestra inserción entre los hombres oprimidos por las nuevas formas de cautividad [...] Fieles a los propósitos del Fundador y «por la integridad de la fe, por la caridad para con Dios y el prójimo, por el amor a la cruz y por la esperanza de la gloria venidera», mediante obras adecuadas de misericordia, nos dedicamos a visitar y redimir a los cristianos de las nuevas formas de cautividad, por las que se ven expuestos al abandono de las prácticas de la vida cristiana y a la pérdida de la fe. Con este fin estamos dispuestos a entregar la vida, si fuere necesario, a imitación del Redentor (COM 4).

Desde el horizonte siempre nuevo del

carisma de san Pedro Nolasco, la obra carismática de Huanca nos platea un encuentro real y concreto con las nuevas cautividades. Esta realidad nos exige que penetremos en las nuevas formas de cautividad con el espíritu de san Pedro Nolasco ya que nuestros hermanos, constantemente, están amenazados por diferentes situaciones que degradan su dignidad, su vida misma, su fe, su compromiso con la verdad y la justicia. Ello, el servicio redentor, nos obliga a un esfuerzo inteligente, programado y decidido y permanente de encarnación: hemos hablado por mucho tiempo de cautividades, pero habíamos hecho poco para conocerlas de modo experiencial y comprometido en Huanca. A veces lo más fácil es decir que no existen, y quizá se encuentran cerca de nosotros, en los márgenes de nuestra sociedad, en los barrios populares o barriadas de nuestras parroquias y ¿por qué no en las comunidades campesinas?. Huanca nos presenta una oportunidad para vivir en actitud de disponibilidad y encarnación, en contacto con la Escritura y atentos a la palabra de la Iglesia: «Las nuevas formas de cautividad, que constituyen el campo propio de la misión y cuarto voto mercedarios, se dan allí donde hay una situación social en la que concurren las siguientes condiciones: (1ª) es opresora y degradante de la persona humana; (2ª) nace de principios y sistemas opuestos al evangelio; (3ª) pone en peligro la fe de los cristianos; y (4ª) ofrece la posibilidad de ayudar, visitar y redimir a las personas que se encuentran dentro de ella» (COM 16).



III. ACCIONES CONCRETAS DE LIBERACIÓN EN HUANCA.

a) Construcción de 3 aulas, Biblioteca y laboratorios para los niños de inicial y primaria. (Con el apoyo de la Campaña Redentora 2011-2012)

b) Continuar brindando la alimentación diaria desde el desayuno hasta el almuerzo a fin de combatir la desnutrición infantil.

c) Seguir brindando a los niños de Huanca los uniformes, útiles y materiales de estudio cada año.

d) Mantener el servicio liberador, por el cual se expresa el rostro de Cristo Redentor, a todas las familias de los niños de Huanca, como parte de la educación integral.

IV. RECURSOS HUMANOS 1. Responsable: M.R.P. Provincial Fr. César Pavel Iván GÁLVEZ LEÓN, O. de M.

2. Equipo de Misión: R.P. Fr. Francisco Juvenal ORTEGA PEREDA, O. de M.

E-mail: [email protected] R.P. Fr. Miguel VELÁSQUEZ MERCADO, O. de M.

E-mail: [email protected]



R.P. Fr. Carlos Humberto SILVA RAMOS, O. de M. E-mail: [email protected]

R.P Fr. Mirko Paul CANALES DÍAZ, O. de M. E-mail: [email protected]

3. Equipo de Publicidad: R.P. Fr. Mirko Paul CANALES DÍAZ, O. de M. Sr. Daniel FELIPA TORREJÓN.

4. Equipo de Comunicación y Relaciones Humanas: R.P. Fr. Carlos Humberto SILVA RAMOS, O. de M. R.P. Fr. Mirko Paul CANALES DÍAZ, O. de M. Sra. Lidia NÚÑEZ LUCHO.

5. Religiosos de la Provincia Mercedaria del Perú. 6. Laicos Mercedarios (Voluntariado) de la Provincia Mercedaria del Perú.

V. RECURSOS ECONÓMICOS

Las obras que conciernen a la segunda parte del Proyecto Huanca implican la construcción de un pequeño pabellón que abarque la fabricación de aulas y espacios adecuados para Biblioteca, Centro de Cómputo y Laboratorios. Elementos necesarios para brindar una educación de calidad. En síntesis lo que necesitamos construir es: Construcción de 3 aulas. Construcción de ambientes para laboratorios de Biología y Química. Construcción de ambientes para Biblioteca y Centro de Cómputo.



Construcción de 2 oficinas para la atención de los padres de familia y administración.

Toda la estructura de la obra está calculada en $ 387,000.00 (trescientos

ochenta y siete mil dólares americanos). En ese sentido animamos a todas las Provincias de la Orden a sumarse a esta cruzada; cientos de familias estarán sumamente agradecidas si hacemos realidad el sueño de acompañarlos en el proceso de la educación liberadora. Si dividimos el costo total de la construcción de la obra le tocaría a cada Provincia recolectar en el año $43,000.00 (Cuarenta y tres mil dólares). Somos conscientes de que esa cantidad no significa lo mismo para cada una de nuestras Provincias, pero a la vez estamos, seguros de que el espíritu generoso de la gran Familia Mercedaria en el mundo hará que lleguemos y superemos la meta trazada.

VI. LAS CUENTAS DONDE DEPOSITAR Teniendo en cuenta los acuerdos tomados en la última Reunión de Provinciales se determinó que las donaciones, especialmente las de las Provincias de Europa, se depositen en las cuentas de la Curia General, de tal manera que al finalizar la campaña redentora se entregue todo lo recaudado, desde setiembre del 2011 a setiembre del 2012, a la Provincia Mercedaria del Perú para la obra del colegio San Pedro Nolasco de Huanca. Dichas cuentas son las siguientes: Donativos en euros (€)

Nombre: ISTITUTO PER LE OPERE DI RELIGIONE VATICAN CITY Cuenta: DE 81501108006231606168 JP MORGAN AG FRANKFURT Dirección: 14 JUNGHOFSTRASSE 60311 FRANKFURT AM MAIN

GERMANY swift: CHASDEFXXXX BLZ50110800

Entidad beneficiaria: CURIA GENERALIZIA DEI PADRI MERCEDARI DONATIVOS EN DOLARES ($) Nombre: ISTITUTO PER LE OPERE DI RELIGIONE VATICAN CITY Cuenta: 001-1-975000 JPM MORGAN CHASE BANK NEW YORK Dirección: 270 PARK AVENUE NY 10017

swift: CHASUS33XXX CTA. 14462002 Entidad beneficiaria: CURIA GENERALIZIA DEI PADRI MERCEDARI La rendición de cuentas a todas las Provincias de la Orden de todo lo recaudado en el año de la Campaña Redentora y su inversión se realizará de acuerdo a la ejecución de la obra. VII. Nuestro Sitio Web. Para una mayor información estaremos actualizando continuamente nuestro sitio web, el cual tendrá un espacio dedicado exclusivamente a la Campaña Redentora «Manos para liberar hermanos» durante todo este tiempo que dure la Campaña; además, gracias a la ayuda de hermanos de las distintas provincias,



nuestro sitio web estará traducido en los cinco idiomas que nuestra Orden utiliza: Español, Italiano, Inglés, Francés y Portugués. El sitio oficial de la Provincia Mercedaria del Perú es:

www.mercedarios.pe

Dios siempre los bendiga y acompañe. Su Hermano en Cristo y María de la Merced:

M.R.P. Fr. César Pavel Iván GÁLVEZ LEÓN, O. de M. Superior Provincial

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