Boletín mercantil de Puerto Rico (San Juan, Puerto Rico ... · KfLITIN MERCANTIL DE PUERTO RICO...

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KfLITIN MERCANTIL DE PUERTO RICO Main mffminTi n nmsiieiiü tobal <Br ~ ¦• ' ' i.,, /V-, -A Suscrición mensual: 75 centavos. Número suelto: 3 centavos. *0 SE PUBLICA LOS OIAS FESTIVOS. BIRKOCIÓK TANARUS RBDAOCIÓV, A.LLEN, ZTftmA. M y H f!* *• 44—Cerr—, 4M—T.Kgrefw MMIt SMM M ha Jta at NMtS (Um aun aunar. Nota del día Mr- Winthrop, cuando habla en parábolas, hace alarde supe- rior de una reconcentrada elo- cuencia que tiene unainsup2ra- ble expresión y un delicioso la- conismo. Oigámosle en esta sentencia, que parece de encargo para los funcionarios redentoristas: “Diez hombres malos en una ciudad pueden dar y darán una mala reputación á una comuni- dad de io.ooo habitantes, á me- nos que los hombres honrados é inteligentes demuestren una re- solución firme de reprobar sus acciones y hacer resistencias á sus nefandas prédicas.” La cifra es lo de ménos. Lo mismo que sean diez como que sean siete; lo mismo que sean hombres malos, como que sean funcionarios malos. Las parábolas no han de ser precisamente matemáticas, lo que importa es saberlas inter- pretar y que tcDgan la exacti- tud precisa del símil, Y nada mas aplicable que el dicho deí Gobernador á los Je- fes de los Departamentos, á los señores feudales de la ínsula, á los burócratas redentoristas. No se necesita un gran esfuer- zo para encasquetarles el sayo, que no por estar echo á ojo ha de venirles grande, ni ha de so- bral les nada. Los siete funcionarios meten ruido por los diez hombres de la parábola, y hasta por un núme- ro mayor. Basta con que cite- mos sus hechos raás conocidos para que la cíente popular, que ha debido encontrar grandes pa- recidos entre los hombres que inspiran tan serias inquietudes al Gobernador y los funciona tío* torpísimos y cazurros, rati- fique su sospecha lógicamente fundada. ¿Es edificante y seria, es plausible la conducta de esos burócratas congregantes? Ni puede ser más tempestuo- sa, ni más digna de censura. Juntos ó separados, corno fa- tales intérpretes de un sistema ue gobierno que el pueblo re- chaza abiertamente ó como ¡o que son, como los funcionarios que han empe< rado el régimen con sus demasías, con si s intro- misiones. con sus abusos y con sus descuidos, resultan esos bu rócratas ios hombres compren- didos en la terrible alusión de Mr. Winthrop- Es á los que hablan de Edu- cación y Democracia, sin saber lo que esto significan ni medir los alcances de estos grandes principios sociales; es á los que tocan á somatén contra los na- tivos, expulsándolos de un de- partamento, como si fueran inú tiles trastos que se tiran á la calle, es á los que anuncian el remate constante y perenne de la propiedad puertorriqueña, per- seguida por la voracidad insa- ciada de un sistem i contributi- vo, que tiene como finalidad su- prema una hecatómbica liqui- dación. A estos y á los otros debe ser dirijida ía frase condenado- ra, como implacable excomu- nión de la autoridad suprema norteamericana en la isla ; á estos y al covachuelista que se entretiene en dar á las leyes interpretaciones habilidosas y extra legales como los más fa- mosos picapleitos; y á quien en vez de poner todos sus empeños en la solución, ó por lo menos en el estudio de la crisis eco- nómica, se dedica á publicar li- bros perversos, inspirados en el más rabioso criterio redentoris- ; á estos funcionarios que se anuncian como sociólogos, como inventores, como eininentes'edu- cacionistas, y forman un ver dad ero cuartel de inválidos; á estos burócratas que se congre- gan para el fracaso de la colo- nización americana y el despres- tigio ruidoso dej expansionis- mo; á estos redentoristas espe- culadores que han invadido los edificios públicos, eu una orgía desenfrenada de explotación sin medida, á estos políticos bara- tos para la exportación á las colonias, es que se dirije el di- cho del gobernador en su dis- curso de Humacao. Debe ser á ellos, porque los actos del gobierno se reflejan en las costumbres, y las inmo- ralidades de los funcionarios establecen inevitables contagios contra los que no sirven, á ve- ces, que los hombres honrados é inteligentes demuestren vna resolución firme de reprobar sus acciones y hacer resistencias á sus nefandas prédicas. Estos buenos propósitos, estas resoluciones firmes, estas re- sueltas actitudes se estrellan fa- talmente contra la anarquía ofi- cial, cuando se exhibe sin repa- ros y sin ningún género de con- sideraciones. Hasta ahora, no ha valido la resistencia. Ni siquiera para abrir los ojos á los funcionarios que hemos creído amigos, lle- vados de nuestra natural bene- volencia. E 1 pueblo sí; el puebio ha des pertado, el pueblo ha medido el abismo en que puede caer, en que va á caer fatalmente, si no consigue apelando á los esfuer- zos más heroicos, sacudir la ma- no opresora, la mano férrea, la mano siniestra que lo arrastra á seguras y previstas desgracias. Y el mal ejemplo cunde, el morbosismo continental tiene contagios. Ya están algunos municipios convertidos en cam- pamentos de refugio, en los cua- les encuentran los primeros in- festados de la anarquía mvasora un campo protegido y atrinche- rado, que tienen forzadamente que abastecer las eternas vícti- mas de la inmoralidad ambien- te ; los propietarios, los contri- buyentes y, en consecuencia, el pueblo. Y es natural que esto ocurra. Es natural y es fatal, porque el mal ejemplo viene de las esfe- ras en que viven los superhom bies, los excesos, los augus- tos redentoristas, apóstoles de la Democracia y la Educación, in ventores de Guiñol, sociólogos de mentirijillas, rudos trasplan- tadores de leyes de California y Montana, rematistas incansa- bles de la propiedad puertorri- queña, arregladores ciclónicos de carretelas que no llegan nun- ca á afirmarse , ni á tener más de una pulgada de espesor, é incubadores de Boards que con- tienen trades de muy sospecho sa caladura. Hospital tle la Poiiiia tapa El dia 1 0 empiéza la no. vena que todos los años vienen cele brando las Religiosas 'Siervas de María” á su amantísima madre la Vitgen de la Salud. El dia la misma hora, salve y el 10 misa solem- ne. El sermón está á cargo del Rev. Padre don Francisco Vicario, S. A, M. Ernesto Avellanet El 'joven escritor racionalista señor Avellanet Mattey, ha estado en estas oficinas á despedirse personalmente de nosotros para su ciudad natal maya, giiezana. Buen viaje deseamos al joven es- critor. BOLETIV MERCANTIL DB PUERTO RICO. EL CIERRE DE LOS ALJIBES USURPACION DE ATRIBUCIONES Según dijimos ayer, el Ayunta- miento ha aprobado una ordenanza re- ferente al cierre de los aljibes, em- pleando la fraseología pérfida que es- de moda ahora, en los actos y do- cumentos públicos para disimular y atenuar las verdaderas intenciones que se abrigan. Diferentes veces hemos censurado este procedimiento, impropio á todas luces de los pueblos en que se dice que rigen instituciones democráticas. Resulta ya demasiado triste que la democracia brille por su ausencia en nuestro país, para que los que la han disfrutado y conocido imiten la perí- frasis ó circunlocución burlesca y hu- millante que usan hombres de otra raza para ingerir dulcemente en la nuestra sus desafueros y atropellos. El Ayuntamiento se ha servido, pa- ra decretar el cierre de los aljibes, va- lerse de la fórmula equívoca de que podrán los vecinos utilizar solamente los aljibes por medio de bombas, dic- tando el Alcalde las órdenes oportu- nas en cada caso para armonizar los intereses de la Sanidad pública con las exigencias relativas á desagüe, aereación, etc., etc. A primera vista' parece que no se ordena el cierre de ios aljibes, y, sin embargo, esa es la verdadera inten- ción del documento, contra la que no prevalecerán después las exigencias de desagüe, aereación, etc. Esas exi- gencias no valdrán nada al lado de las de la Sanidad pública. Tal es la forma en que se ulasca ahora. Y á pesar de tales primores de dic- ción, resulta evidente que el Ayunta- miento no tiene facultades para ar- monizar las exigencias á que se refie- re. ni para obligar á instalar bombas ni ningún otro aparato en los aljibes. Quien puede tener esas facultades, y sería también diset tibie legalmente, es la Dirección de Sanidad, Benefi- cencia y Correcciones, á tenor de la Sección 19 de la ley que creó el de- partamento así llamado. Y claro está que una Dirección que tiene un cuerpo consultivo como la Junta .Superior de Sanidad ofrece al público mayores gara 1 tías que las que puede prestar una elucubración trasnochada sobre mosquitos que se la ha ocurrido urdir á un oficial de Sanidad, cuyos antecedentes como bacteriólogo son desconocidos. Indudablemente, para acordar una medida de la gravedad y trascenden- cia de laque nos ocupa, serían pocas todas las investigaciones y deficientes los informes más luminosos acerca de unenemigoque de hecho ha resultado fantasmagórico, como puede afirmar- se, teniendo en cuenta la higieniza- ción de Cuba, realizada sin extinguir el mosquito y sin tocar para nada los aljibes. Médicos ilustradísimos del país, de qnienes hemos solicitado una opiniórr científica en el asunto, convienen en afirmar categóricameute que es risi- risible y empírica la cruzada predica- da contra los los mosquitos, pero enorme y absurda la disposición re- ferente ai cierre de los aljibes. No se cerrarán éstos sin que los particulares atropelladas en sus de- rechos y en el goce legítimo del agua limpia y sana de sus aljibes, ejerciten todos los recursos legales de que dispongan contra esas extra- limitaciones poco edificantes de la corporación municipal, y sin que no- sotros pongamos de relieve toda la magnitud y proporciones del abuso proyectado. Resolución aprobada El Municipio de San Juan al con- firma! el acuerdo de la Junta local de Sanidad referente á la matanza de los cerdos se funda en que el artículo 8 del Reglamento dictado por el Su- perintendente y Junta Superior del ramo y apr< bado por Consejo Ejecuti- vo constituye una violación de la ¡ey aprobada en de Marzo de 1904 pa- ra regularizar la matanza de ganado y la venta de carnes frescas para el con sumo público, por cuya ley se autori- za á los municipios para cobrar 50 cen- tavos por cada cerdo que se beneficie y ese ingreso se ba tenido en cíe ita para la formación de los presupuestos mu- nicipales que estáo rigiendo hasta 30 de Junio de 1906 y por lo tanto la Di- rección de Sanidad, Caridad y Prisio. nes ni el Consejo Ejeeutiuo tienen po- der ni la autoridad bastante para li- mitar á 6 meses la matanza de cerdos cuando existe la ya citada ley de la Asamblea Legislativa, y siendo el re- glamento de la Superintendencia de Sanidad una modificación de aquella ley y no existí*udo ley orgánica posterior al Bill Poraker que confiera poder al Consejo Ejecutivo para modificar una Ley de la Asamblea Legislativa, se aconsejó dar cumplimiento al Re. ¿lamento menos í su articulo 8 que dispone una cosa contraria ála Ley. i X<A _PAZ! Los cablegramas de hoy del Bole- tín Mercantil expresan que acaba de firmarse la paz, Al fin cesó la ruda contienda, el feroz duelo en el que dos naciones po- derosas han hecho derramar á torren- tes la sangre de sus hijos. ¡La paz está hecha, bendita sea la paz; Durante diecinueve meses el mun. do ha estado bajo el dominio de la feroz lucha. Los cablegramas y par- tes de la guerra eran arrebatados; la prensa, ese tonel de la Danaides, monstruo, insaciable devoraba las pal- pitaciones, el latir de los campos de batalla para devolverlos á la faz de la tierra en el vértigo de la noticia, en la fiebre de la información. Escenas sin precedentes en la his- toria de la guerra se sucedían á dia- rio; masas de hombres eran empuja dos ála batalla. Se rendía tributo á la epopeya de la pólvora, de la bayo- neta y el cañón. Los hijos eran arrancados del regazo de las madres; un alarido de dolor brotaba de todos lo i pechos; un sollozo de todos los corazones. Hubo un instante en que la guerra ruso japonesa fué un insulto á la ci. vilización, al progreso del siglo. Se arrojó sangre al rostro de las doctri ñas que cifran en la paz y al trabajo la regeneración de la familia humana. Los pechos destrozados por la bayo- n ta, el hambre y el frío de los ejér- citos, la vergüenza de la derrota, el ódio de los combatientes, las masas de carnes, las espantables masas que sir- vieron de columnas de carne para su- bir á la muralla, locos todos, furiosos todos, con la rabia en el corazón y el insulto en los labios; hubo un instan- te en que todo eso sólo servía para pensar en la desmembración de un imperio soberbio y absolutista que, cerrados los oidos á la voz de la líber tad y el derecho de los pueblos dor- mía un sueño de esclavitud, un sueño insolente digno de la edad media, en medio de la lucha por la regeneración y la justicia. •La guerra es un mal necesario, dijo el anciano misterioso autor de la te rrible novela .‘Los Miserables ¡La guerra es un mal necesario! ¡Ay! ¿Ésa guerra va á ser motivo una nueva ere de justicia para ese oprimido pueblo que asistía ensan- grentado, per los golpes del knut y el hierro de las lanzas de los cosacos, á las conquistas del derecho humano? Bien está. El dolor es la más her- mosa de las leyes morales. jOjalá que algún día no sea nece- saiio sellar con sangre el derecho á ía vida y libertad de los pueblos de la tierra! La paz se ha firmado. Descubra- mos nuestras frentes ante el magno suceso. Bendita sea la pazl J. E. LKVIS. UNICA PROTESTA El digno é inteligente concejal don Pío Amador y Rodríguez, fué el único que se opuso en la sesión última del Concejo municipal, al acuerdo arbitra- rio é injusto de ordenar á los propiets rios de Sau Juan, mediante el lítase de una terrible ordenanza, el cierre total en el breve plazo de sesenta dias, de todos lós aljibes; y el propietario que desee conservarlo, que lo tape hermé ticamente y use solamente bomba para extraer el agua. Y cuando llueva mucho, ¿por dónde descarga el aljibe el agua sourauter Y cuando baya una gran sequía, como acontece á veces, y el mezquino y su- cio río de Río Piedras no pue'da satis facer de agua á la ciudad, como lo han pronosticado y consta en sus inforim s sabios ingenieros, ¿á dónde acudiremos en busca de agua potable? ¿A los an- tiguos pozos de Miraflores? Sr. Alcalde, no caiga usted en el error de ponerle el visto bueno á seme- jante absurdo. Consulte esta trascen - dental cuestión de higiene pública con los médicos peritos dei país, yse evi- Miérco'es 30 de Agosto de 1905 íará usted dar su asentimiento á tan tremendo disparate. Felicitamos alo batallador Buriata, que ha defendido valientemente los intereses sacratísimos del pueblo por- torriqueño. •' ' Jorge Rolatín. En el “Ponce” Ayer tarde salieron para Nueva York los siguientes señores: Ssfiora Isabel Picó, seao r ita Car- men Colén señora Molhere Katz, hijo y 1 niño, José Benet, G. Villari, Henry Miler, E. Abelatdo León, Francisco Parachini, G. G. Henry, Henry Drake, Madre Elvira Casano- va, A. Roig y señora, Ramón Henri- que, José A. Bruno, Rev. Manuel Te- rrando y señora, señora Lizzie A Boyd, Félix Villella, Miguel Arzuagaj W. R. Bennett y señora, Rafael O-car Nevares, Manuel Miró, Capitán José Quijano, señero Mary C. Hawkins, J E. Salichs, Leopardo Cabassa, Jacob v Germán Cabassa, Pedro Villodos y Malea, señorita Consuelo Santiago Na. güero, Miguel y Arturo Godreau, Pablo Bruzard, José Moreno, Salomón y Domingo Abdo, B. A. Wall, B. R. Vaughn, señorita Estella Baiz J M. Turner, 11. P. Tallo* Ramón Tebles, Walter A. Lawrie, señorita Gertrudé A. Iíastings, señorita Horada Sierra, Mr. Antonio Romero Mr. M. K. Yoa- kan y señora, señoritas Getcher. y Ka- trie Greig señorita Isabel Eglington, Re&r Admiral Dunlap y señora Mr. Mr, Mario Teijero, Mr. Antonio Samo, za, Oliver Shaw Mr, Juan Morales, Mr. R. K. Lijano, reverendo G. B Be- nedict, Mr C. H Jones, Mr. S. Carri in Mr. TANARUS Malpica, Pereiv B. Cobb, TANARUS. K. Tewe, Wm. H, Carker, Rafael Váz- quez Bruno. Noticias diversas lambién pasó el Ayuntamiento una ordenanza para gestionaar un em- pséstito de 815,010 para construir un hespital municipal ab nándose dicha suma al Tesoro insular en cinco anua- lidades. Probablemente llegarán esta noche á bordo del ‘Coamo’, nuestros estima- dos amigos don Tulio Larínaga v don Frank H. Dexter. ' El,Concejo municipal de San Juan acordó en su última sesión que por el Alcalde se ge tione del Consejo Eje- cutivo que defina de una manera que no deje lug.r á dudas, hasta donde alc.nzan las atribuciones déla Junta Superior de S midud y del Superinten- dente y desde donde se limitan para empezar á ejercerlas las juntas y ofi- cinas locales. Se ha acordado por el municipio de San Juan, facilitar al estudiante de leyes, don Pedro Gómez Lasserre, la suma de sesenta dolí..rs para comprar los libros del seg md > año. Se h.i aprobado o.ir el ayuntamiento una ordenanza pira subastar el expen- dio de carnes frescos de res en esta capital, durante cada semana, ios lunes a las diez de la mañana, comprome- tiéndose los rematistas á tener carne en la ciudad marina, Puerta de Tierra y Santurce, desde las 5 de la mañana á las 12 del día. I‘ué aprobado por e 1 Concejo muni- cipal de San Juan en sesión de ante- noche, el reglamento de la Liga de Munipios y la cuota de $53496 del fondo de imprevistos para los gastos de ¡a misma. Concurrieron á la sesión del muni- cipio de Sn Juan, verificada anteano- ch los concejales Sres. Salas. Panla- gua, Falú, Rosario, Pinnas, Rivero, Ponte, Daubón, Amador y Ramírez, cupaudo la presidencia por ausencia del señor Sánchez Morales el señor Salas. La vacante del joven estudiante don José Carballeira. grada <do médico en la Universidad de Syracuse, la ocupa- el joven don Rufiuo García de Oue- vedo. La ordenanza para regular la venta de leche en la ciudad de San Juan comprende 51 artículos y se pondrá en vigor 45 días después que haya si- do aprobada por el Alcalde. En ia sesión efectuada por el Ayun- tamiento se acordó aceptar el informe del señor Alcalde relativo á que el 20 per 100 pata escuelas solo hay que calcularlo sobre el producido de la contribución directa. 2

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KfLITIN MERCANTIL DE PUERTO RICOMain mffminTin nmsiieiiü tobal

<Br~ ¦• ' ' i.,, /V-, -A

Suscrición mensual: 75 centavos.Número suelto: 3 centavos.

*0 SE PUBLICA LOS OIAS FESTIVOS.

BIRKOCIÓK TANARUS RBDAOCIÓV, A.LLEN, ZTftmA. M y H

f!**• 44—Cerr—, • 4M—T.Kgrefw MMIt

SMM M ha Jta at NMtS (Um aun aunar.

Nota del díaMr- Winthrop, cuando habla

en parábolas, hace alarde supe-rior de una reconcentrada elo-cuencia que tiene unainsup2ra-ble expresión y un delicioso la-conismo.

Oigámosle en esta sentencia,que parece de encargo para losfuncionarios redentoristas:

“Diez hombres malos en unaciudad pueden dar y darán unamala reputación á una comuni-dad de io.ooo habitantes, á me-nos que los hombres honrados éinteligentes demuestren una re-solución firme de reprobar susacciones y hacer resistencias ásus nefandas prédicas.”

La cifra es lo de ménos. Lomismo dá que sean diez comoque sean siete; lo mismo dá quesean hombres malos, como quesean funcionarios malos.

Las parábolas no han de serprecisamente matemáticas, loque importa es saberlas inter-pretar y que tcDgan la exacti-tud precisa del símil,

Y nada mas aplicable que eldicho deí Gobernador á los Je-fes de los Departamentos, á losseñores feudales de la ínsula, álos burócratas redentoristas.

No se necesita un gran esfuer-zo para encasquetarles el sayo,que no por estar echo á ojo hade venirles grande, ni ha de so-bral les nada.

Los siete funcionarios metenruido por los diez hombres de laparábola, y hasta por un núme-ro mayor. Basta con que cite-mos sus hechos raás conocidospara que la cíente popular, queha debido encontrar grandes pa-recidos entre los hombres queinspiran tan serias inquietudesal Gobernador y los funcionatío* torpísimos y cazurros, rati-fique su sospecha lógicamentefundada.

¿Es edificante y seria, esplausible la conducta de esosburócratas congregantes?

Ni puede ser más tempestuo-sa, ni más digna de censura.

Juntos ó separados, corno fa-tales intérpretes de un sistemaue gobierno que el pueblo re-chaza abiertamente ó como ¡oque son, como los funcionariosque han empe< rado el régimencon sus demasías, con si s intro-misiones. con sus abusos y consus descuidos, resultan esos burócratas ios hombres compren-didos en la terrible alusión deMr. Winthrop-

Es á los que hablan de Edu-cación y Democracia, sin saberlo que esto significan ni medirlos alcances de estos grandesprincipios sociales; es á los quetocan á somatén contra los na-tivos, expulsándolos de un de-partamento, como si fueran inútiles trastos que se tiran á lacalle, es á los que anuncian elremate constante y perenne dela propiedad puertorriqueña, per-seguida por la voracidad insa-ciada de un sistem i contributi-vo, que tiene como finalidad su-prema una hecatómbica liqui-dación.

A estos y á los otros debeser dirijida ía frase condenado-ra, como implacable excomu-nión de la autoridad supremanorteamericana en la isla ; áestos y al covachuelista que seentretiene en dar á las leyesinterpretaciones habilidosas yextra legales como los más fa-mosos picapleitos; y á quien envez de poner todos sus empeñosen la solución, ó por lo menosen el estudio de la crisis eco-nómica, se dedica á publicar li-

bros perversos, inspirados en elmás rabioso criterio redentoris-tá ; á estos funcionarios que seanuncian como sociólogos, comoinventores, como eininentes'edu-cacionistas, y forman un verdad ero cuartel de inválidos; áestos burócratas que se congre-gan para el fracaso de la colo-nización americana y el despres-tigio ruidoso dej expansionis-mo; á estos redentoristas espe-culadores que han invadido losedificios públicos, eu una orgíadesenfrenada de explotación sinmedida, á estos políticos bara-tos para la exportación á lascolonias, es que se dirije el di-cho del gobernador en su dis-curso de Humacao.

Debe ser á ellos, porque losactos del gobierno se reflejanen las costumbres, y las inmo-ralidades de los funcionariosestablecen inevitables contagioscontra los que no sirven, á ve-ces, que los hombres honradosé inteligentes demuestren vnaresolución firme de reprobar susacciones y hacer resistencias ásus nefandas prédicas.

Estos buenos propósitos, estasresoluciones firmes, estas re-sueltas actitudes se estrellan fa-talmente contra la anarquía ofi-cial, cuando se exhibe sin repa-ros y sin ningún género de con-sideraciones.

Hasta ahora, no ha valido laresistencia. Ni siquiera paraabrir los ojos á los funcionariosque hemos creído amigos, lle-vados de nuestra natural bene-volencia.

E 1 pueblo sí; el puebio ha despertado, el pueblo ha medido elabismo en que puede caer, enque va á caer fatalmente, si noconsigue apelando á los esfuer-zos más heroicos, sacudir la ma-no opresora, la mano férrea, lamano siniestra que lo arrastra áseguras y previstas desgracias.

Y el mal ejemplo cunde, elmorbosismo continental tienecontagios. Ya están algunosmunicipios convertidos en cam-pamentos de refugio, en los cua-les encuentran los primeros in-festados de la anarquía mvasoraun campo protegido y atrinche-rado, que tienen forzadamenteque abastecer las eternas vícti-mas de la inmoralidad ambien-te ; los propietarios, los contri-buyentes y, en consecuencia, elpueblo.

Y es natural que esto ocurra.Es natural y es fatal, porque elmal ejemplo viene de las esfe-ras en que viven los superhombies, los excesos, los augus-tos redentoristas, apóstoles de laDemocracia y la Educación, inventores de Guiñol, sociólogosde mentirijillas, rudos trasplan-tadores de leyes de California yMontana, rematistas incansa-bles de la propiedad puertorri-queña, arregladores ciclónicosde carretelas que no llegan nun-ca á afirmarse , ni á tener másde una pulgada de espesor, éincubadores de Boards que con-tienen trades de muy sospechosa caladura.

Hospital tle la Poiiiia tapaEl dia 1 0 empiéza la no.

vena que todos los años vienen celebrando las Religiosas 'Siervas deMaría” á su amantísima madre laVitgen de la Salud. El dia 9á lamisma hora, salve y el 10 misa solem-ne. El sermón está á cargo del Rev.Padre don Francisco Vicario, S. A, M.

Ernesto Avellanet

El 'joven escritor racionalista señorAvellanet Mattey, ha estado en estasoficinas á despedirse personalmente denosotros para su ciudad natal maya,giiezana.

Buen viaje deseamos al joven es-critor.

BOLETIV MERCANTIL DB PUERTO RICO.

EL CIERRE DE LOS ALJIBESUSURPACION DE ATRIBUCIONES

Según dijimos ayer, el Ayunta-miento ha aprobado una ordenanza re-ferente al cierre de los aljibes, em-pleando la fraseología pérfida que es-tá de moda ahora, en los actos y do-cumentos públicos para disimular yatenuar las verdaderas intencionesque se abrigan.

Diferentes veces hemos censuradoeste procedimiento, impropio á todasluces de los pueblos en que se diceque rigen instituciones democráticas.

Resulta ya demasiado triste que lademocracia brille por su ausencia ennuestro país, para que los que la handisfrutado y conocido imiten la perí-frasis ó circunlocución burlesca y hu-millante que usan hombres de otraraza para ingerir dulcemente en lanuestra sus desafueros y atropellos.

El Ayuntamiento se ha servido, pa-ra decretar el cierre de los aljibes, va-lerse de la fórmula equívoca de quepodrán los vecinos utilizar solamentelos aljibes por medio de bombas, dic-tando el Alcalde las órdenes oportu-nas en cada caso para armonizar losintereses de la Sanidad pública conlas exigencias relativas á desagüe,aereación, etc., etc.

A primera vista' parece que no seordena el cierre de ios aljibes, y, sinembargo, esa es la verdadera inten-ción del documento, contra la que noprevalecerán después las exigenciasde desagüe, aereación, etc. Esas exi-gencias no valdrán nada al lado de lasde la Sanidad pública.

Tal es la forma en que se ulascaahora.

Y á pesar de tales primores de dic-ción, resulta evidente que el Ayunta-miento no tiene facultades para ar-monizar las exigencias á que se refie-re. ni para obligar á instalar bombasni ningún otro aparato en los aljibes.

Quien puede tener esas facultades,y sería también diset tibie legalmente,es la Dirección de Sanidad, Benefi-cencia y Correcciones, á tenor de laSección 19 de la ley que creó el de-partamento así llamado.

Y claro está que una Dirección quetiene un cuerpo consultivo como laJunta .Superior de Sanidad ofrece alpúblico mayores gara 1 tías que lasque puede prestar una elucubracióntrasnochada sobre mosquitos que sela ha ocurrido urdir á un oficial deSanidad, cuyos antecedentes comobacteriólogo son desconocidos.

Indudablemente, para acordar unamedida de la gravedad y trascenden-cia de laque nos ocupa, serían pocastodas las investigaciones y deficienteslos informes más luminosos acerca deunenemigoque de hecho ha resultadofantasmagórico, como puede afirmar-se, teniendo en cuenta la higieniza-ción de Cuba, realizada sin extinguirel mosquito y sin tocar para nada losaljibes.

Médicos ilustradísimos del país, deqnienes hemos solicitado una opiniórrcientífica en el asunto, convienen enafirmar categóricameute que es risi-risible y empírica la cruzada predica-da contra los los mosquitos, peroenorme y absurda la disposición re-ferente ai cierre de los aljibes.

No se cerrarán éstos sin que losparticulares atropelladas en sus de-rechos y en el goce legítimo delagua limpia y sana de sus aljibes,ejerciten todos los recursos legalesde que dispongan contra esas extra-limitaciones poco edificantes de lacorporación municipal, y sin que no-sotros pongamos de relieve toda lamagnitud y proporciones del abusoproyectado.

Resolución aprobadaEl Municipio de San Juan al con-

firma! el acuerdo de la Junta local deSanidad referente á la matanza delos cerdos se funda en que el artículo8 del Reglamento dictado por el Su-perintendente y Junta Superior delramo y apr< bado por Consejo Ejecuti-vo constituye una violación de la ¡eyaprobada en 1° de Marzo de 1904 pa-ra regularizar la matanza de ganado yla venta de carnes frescas para el consumo público, por cuya ley se autori-za á los municipios para cobrar 50 cen-tavos por cada cerdo que se beneficie yese ingreso se ba tenido en cíe ita parala formación de los presupuestos mu-nicipales que estáo rigiendo hasta 30de Junio de 1906 y por lo tanto la Di-rección de Sanidad, Caridad y Prisio.nes ni el Consejo Ejeeutiuo tienen po-

der ni la autoridad bastante para li-mitar á 6 meses la matanza de cerdoscuando existe la ya citada ley de laAsamblea Legislativa, y siendo el re-glamento de la Superintendencia de

Sanidad una modificación de aquella leyy no existí*udo ley orgánica posterioral Bill Poraker que confiera poderal Consejo Ejecutivo para modificaruna Ley de la Asamblea Legislativa,se aconsejó dar cumplimiento al Re.¿lamento menos í su articulo 8 quedispone una cosa contraria ála Ley.

i X<A_PAZ!Los cablegramas de hoy del Bole-

tín Mercantil expresan que acaba defirmarse la paz,

Al fin cesó la ruda contienda, elferoz duelo en el que dos naciones po-derosas han hecho derramar á torren-tes la sangre de sus hijos.

¡La paz está hecha, bendita sea lapaz;

Durante diecinueve meses el mun.do ha estado bajo el dominio de laferoz lucha. Los cablegramas y par-tes de la guerra eran arrebatados;la prensa, ese tonel de la Danaides,monstruo, insaciable devoraba las pal-pitaciones, el latir de los campos debatalla para devolverlos á la faz de latierra en el vértigo de la noticia, enla fiebre de la información.

Escenas sin precedentes en la his-toria de la guerra se sucedían á dia-rio; masas de hombres eran empujados ála batalla. Se rendía tributo ála epopeya de la pólvora, de la bayo-neta y el cañón. Los hijos eranarrancados del regazo de las madres;un alarido de dolor brotaba de todoslo i pechos; un sollozo de todos loscorazones.

Hubo un instante en que la guerraruso japonesa fué un insulto á la ci.vilización, al progreso del siglo. Searrojó sangre al rostro de las doctriñas que cifran en la paz y al trabajola regeneración de la familia humana.Los pechos destrozados por la bayo-n ta, el hambre y el frío de los ejér-citos, la vergüenza de la derrota, elódio de los combatientes, las masas decarnes, las espantables masas que sir-vieron de columnas de carne para su-bir á la muralla, locos todos, furiosostodos, con la rabia en el corazón y elinsulto en los labios; hubo un instan-te en que todo eso sólo servía parapensar en la desmembración de unimperio soberbio y absolutista que,cerrados los oidos á la voz de la líbertad y el derecho de los pueblos dor-mía un sueño de esclavitud, un sueñoinsolente digno de la edad media, enmedio de la lucha por la regeneracióny la justicia.•La guerra es un mal necesario, dijo

el anciano misterioso autor de la te

rrible novela .‘Los Miserables ¡Laguerra es un mal necesario! ¡Ay!

¿Ésa guerra va á ser motivo déuna nueva ere de justicia para eseoprimido pueblo que asistía ensan-grentado, per los golpes del knut yel hierro de las lanzas de los cosacos,á las conquistas del derecho humano?

Bien está. El dolor es la más her-mosa de las leyes morales.

jOjalá que algún día no sea nece-saiio sellar con sangre el derecho áía vida y libertad de los pueblos dela tierra!

La paz se ha firmado. Descubra-mos nuestras frentes ante el magnosuceso.

Bendita sea la pazl

J. E. LKVIS.

UNICA PROTESTAEl digno é inteligente concejal don

Pío Amador y Rodríguez, fué el únicoque se opuso en la sesión última delConcejo municipal, al acuerdo arbitra-rio é injusto de ordenar á los propietsrios de Sau Juan, mediante el lítase deuna terrible ordenanza, el cierre totalen el breve plazo de sesenta dias, detodos lós aljibes; y el propietario quedesee conservarlo, que lo tape herméticamente y use solamente bomba paraextraer el agua.

Y cuando llueva mucho, ¿por dóndedescarga el aljibe el agua sourauter Ycuando baya una gran sequía, comoacontece á veces, y el mezquino y su-cio río de Río Piedras no pue'da satisfacer de agua á la ciudad, como lo hanpronosticado y consta en sus inforim ssabios ingenieros, ¿á dónde acudiremosen busca de agua potable? ¿A los an-tiguos pozos de Miraflores?

Sr. Alcalde, no caiga usted en elerror de ponerle el visto bueno á seme-jante absurdo. Consulte esta trascen -

dental cuestión de higiene pública conlos médicos peritos dei país, yse evi-

Miérco'es 30 de Agosto de 1905

íará usted dar su asentimiento á tantremendo disparate.

Felicitamos alo batallador Buriata,que ha defendido valientemente losintereses sacratísimos del pueblo por-torriqueño. •' ' •

Jorge Rolatín.

En el “Ponce”Ayer tarde salieron para Nueva

York los siguientes señores:Ssfiora Isabel Picó, seao r ita Car-

men Colén señora Molhere Katz, hijoy 1 niño, José Benet, G. Villari, HenryMiler, E. Abelatdo León,Francisco Parachini, G. G. Henry,Henry Drake, Madre Elvira Casano-va, A. Roig y señora, Ramón Henri-que, José A. Bruno, Rev. Manuel Te-rrando y señora, señora Lizzie ABoyd, Félix Villella, Miguel ArzuagajW. R. Bennett y señora, Rafael O-carNevares, Manuel Miró, Capitán JoséQuijano, señero Mary C. Hawkins, JE. Salichs, Leopardo Cabassa, Jacobv Germán Cabassa, Pedro Villodos yMalea, señorita Consuelo Santiago Na.güero, Miguel y Arturo Godreau,Pablo Bruzard, José Moreno, Salomóny Domingo Abdo, B. A. Wall, B. R.Vaughn, señorita Estella Baiz J M.Turner, 11. P. Tallo* Ramón Tebles,Walter A. Lawrie, señorita GertrudéA. Iíastings, señorita Horada Sierra,Mr. Antonio Romero Mr. M. K. Yoa-

kan y señora, señoritas Getcher. y Ka-trie Greig señorita Isabel Eglington,Re&r Admiral Dunlap y señora Mr.Mr, Mario Teijero, Mr. Antonio Samo,za, Oliver Shaw Mr, Juan Morales,Mr. R. K. Lijano, reverendo G. B Be-nedict, Mr C. H Jones, Mr. S. Carri inMr. TANARUS Malpica, Pereiv B. Cobb, TANARUS. K.Tewe, Wm. H, Carker, Rafael Váz-quez Bruno.

Noticias diversaslambién pasó el Ayuntamiento una

ordenanza para gestionaar un em-pséstito de 815,010 para construir unhespital municipal ab nándose dichasuma al Tesoro insular en cinco anua-lidades.

Probablemente llegarán esta nocheá bordo del ‘Coamo’, nuestros estima-dos amigos don Tulio Larínaga v donFrank H. Dexter.

'

El,Concejo municipal de San Juanacordó en su última sesión que por elAlcalde se ge tione del Consejo Eje-cutivo que defina de una manera queno deje lug.r á dudas, hasta dondealc.nzan las atribuciones déla JuntaSuperior de S midud y del Superinten-dente y desde donde se limitan paraempezar á ejercerlas las juntas y ofi-cinas locales.

Se ha acordado por el municipio deSan Juan, facilitar al estudiante deleyes, don Pedro Gómez Lasserre, lasuma de sesenta dolí..rs para comprarlos libros del seg md > año.

Se h.i aprobado o.ir el ayuntamientouna ordenanza pira subastar el expen-dio de carnes frescos de res en estacapital, durante cada semana, ios lunesa las diez de la mañana, comprome-tiéndose los rematistas á tener carneen la ciudad marina, Puerta de Tierray Santurce, desde las 5 de la mañanaá las 12 del día.

I‘ué aprobado por e 1 Concejo muni-cipal de San Juan en sesión de ante-noche, el reglamento de la Liga deMunipios y la cuota de $53496 delfondo de imprevistos para los gastosde ¡a misma.

Concurrieron á la sesión del muni-cipio de Sn Juan, verificada anteano-ch • los concejales Sres. Salas. Panla-gua, Falú, Rosario, Pinnas, Rivero,Ponte, Daubón, Amador y Ramírez,cupaudo la presidencia por ausencia

del señor Sánchez Morales el señorSalas.

La vacante del joven estudiante donJosé Carballeira. grada <do médico enla Universidad de Syracuse, la ocupa-rá el joven don Rufiuo García de Oue-vedo.

La ordenanza para regular la ventade leche en la ciudad de San Juancomprende 51 artículos y se pondráen vigor 45 días después que haya si-do aprobada por el Alcalde.

En ia sesión efectuada por el Ayun-tamiento se acordó aceptar el informedel señor Alcalde relativo á que el 20per 100 pata escuelas solo hay quecalcularlo sobre el producido de lacontribución directa.

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