Blancura Cosmopolitismo y Representación en Guatemala. González Ponciano, J. R.

download Blancura Cosmopolitismo y Representación en Guatemala. González Ponciano, J. R.

of 23

description

lancura, cosmopolitismo y representación en GuatemalaJosé Ramón González PoncianoCentro de Estudios Mayas, IIFL, UNAMVersión de la conferencias presentada durante el VI Congreso Internacional de Estudios Mayas, Villahermosa, Tabasco, 15 de julio de 2004.

Transcript of Blancura Cosmopolitismo y Representación en Guatemala. González Ponciano, J. R.

  • GONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZ PONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANO / / / / / BLANCURBLANCURBLANCURBLANCURBLANCURAAAAA,,,,, COSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMO YYYYY REPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTAAAAACINCINCINCINCIN 125125125125125

    BLANCURA, COSMOPOLITISMOY REPRESENTACIN EN GUATEMALA1

    JORGE RAMN GONZLEZ PONCIANOCentro de Estudios Mayas, IIFL, UNAM

    En la larga historia de las relaciones serviles en Guatemala, ser sirviente o chole-ro ha sido asociado al hecho de ser indio, pobre y no-blanco.2 Las clases altas ymedias a menudo auto-representadas como gente decente, blanca o ladina, utili-zan el trmino cholero para denigrar a los sirvientes y ridiculizar a la gente co-rriente, a quien consideran social, cultural y racialmente inferior. En este artcu-lo examino algunas de las razones que provocaron durante los aos recientes,la exacerbacin del sentimiento racista y clasista en contra de ladinos e indge-nas de las capas medias bajas y populares, estigmatizados como choleros, shu-mos y/o mucos. Como asunto de representacin y guerra simblica, el sentimien-to anti-cholero, anti-shumo y anti-muco es un importante factor ideolgico quefacilita la reproduccin de las relaciones serviles y las reglas no escritas de lablancura, que establecen cul es el lugar que cada quien debe ocupar en sociedad enGuatemala. La blancura, ms all del fenotipo, constituye una ideologa transna-cional, interclasista e intertnica cuyos repertorios tienden a reforzar los princi-pios del darwinismo social, la ley de sobrevivencia del ms fuerte o del que,por linaje, gnero, religin, raza, clase o nacionalidad, tiene derecho naturala hacer menos, dominar, someter o eliminar a los dems3 (Allen, 1997; Bonilla-Silva, 1997 y 2000; Delgado, 1995; Frankenberg, 1993; Press Giroux, 1997; Gold-berg, 1995; Harrison, 1995; Horne, 1999; Lipsitz, 1999; Omi y Winant, 1986, yRoediger, 1995).

    Si la dcada de los aos ochenta se caracteriz en Guatemala por la insur-gencia guerrillera y el genocidio, la dcada de los noventa fue la del auge de

    1 Este artculo es una versin de la conferencia presentada durante el VI Congreso Internacionalde Estudios Mayas en la ciudad de Villahermosa, Tabasco, el 15 de julio de 2004.

    2 Segn Otto Schumann, el uso del trmino cholero en Guatemala se remonta a la poca de laconquista de los choles, en 1695, cuando se les llevaba como sirvientes a Chamic, Chiapas y SantaCruz El Chol, Baja Verapaz, en Guatemala. Otra acepcin es la que se usa entre chujes, kanjobales yjacaltecos para referirse a una entidad mgica que puede ayudarlos. Cholero, dice Schumann, era untratamiento similar al de mayero para llamar al que habla maya, o tzeltalero al que habla tzeltal (co-municacin personal, 22 de abril de 2004, Mxico D. F.).

    3 Uno de los esfuerzos ms notables por mostrar el arraigo del racismo cultural en Guatemala,son los estudios de Marta Elena Casus Arz (1992, 1998 y 1999), que vinculan el anlisis del racis-mo con la existencia de una elite blanca casi nunca mencionada en las investigaciones realizadaspor antroplogos nacionales y extranjeros en Guatemala.

  • 126126126126126 ESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOS DEDEDEDEDE CULCULCULCULCULTURTURTURTURTURAAAAA MAMAMAMAMAYYYYYAAAAA XXXXXXXXXXVIIVIIVIIVIIVII

    diversas expresiones racistas apoyadas en la blancura y en los sentimientos anti-indgena y anti-mestizo popular. Esos sentimientos expresan el miedo tnico delos estratos altos y medios a las movilizaciones indgenas y a los cambios intro-ducidos por la migracin intranacional y transnacional, que le han dado mayorvisibilidad a una muchedumbre joven y desprotegida, una mara carente de opor-tunidades educativas y laborales, y por lo tanto propensa a engrosar las marasterritoriales. En este artculo examino algunas etiquetas tnicas y socio-racistasque no aparecen en los estudios antropolgicos realizados en Guatemala, basa-dos en las perspectivas de la dicotoma indgena-ladino, que a menudo invisibi-lizan la cultura finquera y la violencia simblica de las relaciones serviles.

    La mara

    En la definicin contempornea del universo simblico de lo joven en Guate-mala es importante destacar la presencia histrica del concepto mara, el senti-miento de ser parte de la mara y la apropiacin de ese concepto por jvenes delas capas medias y hasta de la elite, que lo utilizan para referirse a territoriosde lo social, donde se manifiesta una voluntad de nosotrosidad y un senti-miento de pertenencia colectiva, nacional y transnacional. Antes de que seconvirtiera en un tratamiento grupal que identifica a delincuentes juveniles or-ganizados, la mara fue equivalente a banda, grey, broza, raza, manga o pia, se-gn algunas de las expresiones del cal local. El surgimiento de la mara comoexpresin contracultural de la juventud citadina guatemalteca a fines de losaos cincuenta, intent contener la represin del anticomunismo instaurado enel Estado a partir del derrocamiento de la revolucin nacionalista de Juan JosArvalo y Jacobo Arbenz Guzmn en 1954. Marco Augusto Quiroa (2001) sitael origen de la mara como espacio de esa subjetividad contestataria a mediadosde los cincuenta, cuando lleg a Guatemala la pelcula Marabunta, protagoni-zada por Charlton Heston. Quiroa destaca el gregarismo contracultural de lamara, que sigue aludiendo a la voluntad popular y al espacio interclasista articu-lado alrededor de alguna demanda en contra del Estado.4 La mara era o es un

    4 Escrito en un cal en el que se mezclan palabras del castellano dialectal guatemalteco conotras inventadas por el autor. Quiroa (2001) describe con humorstica irona los usos contempor-neos del trmino:

    Los chirices de la nueva ola y las patojas recin salidas del cascarn, tal vez no sepan el ori-gen de la palabra mara, usada en la actualidad para designar con pelos y lunares a grupos dediferente ndole y distinta conducta [...] Un peliculn con Charlton Heston llamado Marabun-ta, que trataba de colonias millonarias y neoliberales de hormigas canches, entre arrieras yzompopos, que cuando se les alborotaba el apellido implantaban en la selva amaznica lapoltica de tierra arrasada, usando el mtodo de aqueche (Ros Montt) [...] A resultas de eso,asociaciones y sindicatos, pandillas y grupos, adoptaron el vocablo para dirigirse a colectivos

  • GONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZ PONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANO / / / / / BLANCURBLANCURBLANCURBLANCURBLANCURAAAAA,,,,, COSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMO YYYYY REPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTAAAAACINCINCINCINCIN 127127127127127

    sustituto del llamado pueblo con nfasis en el pueblo joven ladino e indgenapopular y urbano.5 Un concepto que alude a un fenmeno distinto al de lasmaras transnacionales que en aos recientes han captado la atencin de laprensa debido a su participacin en las redes del crimen organizado en Cen-tro y Norteamrica.

    Maras estudiantiles y maras territoriales

    Dentro del amplio espectro de manifestaciones sociolgicas englobadas en elconcepto mara, las maras estudiantiles fueron en Guatemala durante los aossetenta parte de la identidad escolar de muchos estudiantes de institutos pbli-cos y colegios privados, que anualmente se enfrentaban en encuentros de bs-quetbol en el gimnasio capitalino Teodoro Palacios Flores. Como expresindel gregarismo escolar, el protagonismo pblico de las maras estudiantiles du-rante los aos noventa, empez a ser rebasado por las acciones de las marasterritoriales formadas por jvenes residentes en barrios y asentamientos popu-lares, participantes en las protestas que llevaron a la destitucin del presidenteJorge Serrano Elas en junio de 1993.6

    El marero territorial, ms que el miembro de las maras estudiantiles, es quienrene todos los atributos ms aborrecidos por la supremaca autoritaria en Gua-

    de buenas y malas costumbres. Muchachos obedientes a la ley del menor esfuerzo y ahorra-tivos al mximo, abreviaron la palabra cutendola a mara como se conoce al sol de hoy. Esusada y abusada por chancles aguacateros de la zona viva, chicas fresa del Montemaruca,hierberos del cartel de El Gallito, diputados expertos en buscarle tres pies al gato e intro-ducir mano de simio a deshoras de la noche y esforzados guajeros del basurero multifamiliar de lazona tres.

    5 Las maras, segn Quiroa (ibid.):

    han invadido todos los sectores de la sociedad sin respetar el nivel acadmico, filiacinpoltica, clase social, linaje aristocrtico o pureza de sangre. Son multitnicas asegn con-venga, pluriabusadas en pagar con pisto del vecino y multidisciplinarias cortando parejo[...]. Tambin existen maras gruesas entrndole de a gordo a secuestros forcivoluntarios,fugas increbles desde las puertas del mismsimo infiernito escuintleco, cambio de dueosde vehculo sin pedir permiso y reparto de nieve colombiana por gramo, onza, kilo y tone-lada, en trailer o a granel. Maritas rascuaches de nivel parvulario especialistas en pasar eldos de bastos en camiochatarras y apretazones o puyar con tortilla tiesa en oscuranas mar-ginales por donde el cachudo perdi el celular, la chamarra y el carn del partido de lamanita.

    6 Vase Cancelarn las matrculas de los estudiantes que estn holgando, La Hora, 6 de mar-zo de 1992; Educacin y Gobernacin actuarn contra estudiantes, La Hora, 9 de marzo de 1992;No permitirn ms bochinches, Siglo Veintiuno, 10 de marzo de 1992; No habr contemplacionespara quienes infrinjan la ley, La Hora, 28 de abril de 1992. 84 estudiantes menores y 13 adultoscapturados.

  • 128128128128128 ESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOS DEDEDEDEDE CULCULCULCULCULTURTURTURTURTURAAAAA MAMAMAMAMAYYYYYAAAAA XXXXXXXXXXVIIVIIVIIVIIVII

    temala. Dentro de los mareros territoriales, el marero pandillero es por lo gene-ral adicto al alcohol, el crack, la mariguana o los inhalantes, y utiliza la violenciapara intimidar, robar o asesinar.7 La gran cantidad de crmenes, asaltos y agre-siones atribuidos a mareros, cholos o pandilleros ha hecho que en la opininpblica se mantenga el clamor interclasista por una mano dura que los extermi-ne y ejecute una limpieza social, como la que el general Efran Ros Monttimpuso tras el Golpe de Estado del 23 de marzo de 1982. El traslape de lasmaras estudiantiles y las maras territoriales, que tambin se dio en El Salvador, yel posterior protagonismo transnacional de las segundas (v. g. la Mara Salvatru-cha), son dos de varios factores que favorecen a la delincuencia de los jvenesindgenas y mestizos desempleados en Centroamrica. Como parte de esta cri-minalizacin, muchas veces el ser marero se utiliza como sinnimo del ser shu-mo, muco o cholero.

    Del problema del indio al problema de la juventud

    Hace ms de 50 aos, el principal problema para la construccin del Estado-na-cin y la democracia en Amrica Latina era el llamado problema del indio. A esteproblema, que se esperaba sera solucionado por la integracin social de los ind-genas a la nacin homognea con ayuda de la antropologa, se agreg luego elproblema de la mujer. Posteriormente, la controversia sobre la modernizacin re-gresiva, simulada, fallida o pospuesta, se desplaz al universo conceptual delproblema de la juventud. El discurso sobre la juventud como problema y no comola energa social fundamental para la construccin democrtica, criminaliza acientos de miles de desempleados que cada ao se convierten en parte del

    7 Segn un informe sobre las maras elaborado por la Asociacin para el Avance de las CienciasSociales en Guatemala (Avancso, 2000), a finales de los aos ochenta, el perfil del marero medio era:Joven, menor de veinte aos, nacido y crecido en la ciudad; alfabeto y con algn grado de estudios,perteneciente a una familia pobre o de clase media, sin trabajo pero habiendo trabajado en puestosmal pagados, que usa drogas de forma habitual y roba para poder conseguirlas, procedente de unafamilia inestable, con padres o padrastros violentos, alcohlicos e incomunicativos, con malas expe-riencias escolares. Un rasgo decisivo para entender su psicologa, dice el informe: la mayora sien-te que no tiene futuro. Aunque este estudio no aborda el factor tnico-racial en la definicin delos considerados mareros, puede percibirse que en el imaginario dominante existe una separacinsimblica entre el lugar metasociolgico asignado a la mara, el pasado de las maras estudiantiles,el ser marero territorial y los nuevos cdigos culturales adoptados por muchos jvenes como resulta-do de la migracin intranacional y transnacional. Muchos de los mareros viven en asentamientoscomo El Mezquital, en donde casi la mitad de los habitantes son menores de quince aos y muchos delos adultos son albailes, choferes, mecnicos, maestros, trabajadoras de maquilas, pequeos co-merciantes, tortilleras, trabajadoras domsticas, enfermeras y vendedores. Cada mara manejacdigos propios que los diferencian entre s y tiene una influencia territorial cuya defensa o controlla lleva a involucrarse en peleas ms o menos violentas con otras maras. Los hechos de violencia seincrementan de viernes a domingo, con el cobro del salario semanal y un mayor consumo de alco-hol, tanto de jvenes como de adultos.

  • GONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZ PONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANO / / / / / BLANCURBLANCURBLANCURBLANCURBLANCURAAAAA,,,,, COSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMO YYYYY REPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTAAAAACINCINCINCINCIN 129129129129129

    problema de la juventud, el ltimo gran chivo expiatorio del capitalismo tardoen la periferia del mundo. La criminalizacin de la juventud y en particular dela juventud plebeya, no-blanca, cholera, shuma y muca, convierte al desempleadojoven en vago, reforzando viejos mitos de la mentalidad dominante que atribu-yen el origen de toda delincuencia a la proliferacin de haraganes y viciosos. Aello hay que agregar el poder movilizador de las representaciones que legiti-man el ejercicio de la mano dura, en contra de los jvenes que por ser indge-nas o mestizos de extraccin popular, son considerados racial, social y cultural-mente inferiores, y por lo tanto desechables.

    La percepcin de los estratos altos es que estos jvenes choleros carecen deeducacin y son proclives a la delincuencia por tener tendencia a la holgazane-ra, estn mal alimentados y, por lo tanto, difcilmente permanecern en la escue-la y mucho menos llegarn a la universidad. Para esos jvenes desempleados osubempleados la nica opcin laboral es incorporarse a la denominada econo-ma informal (Bastos y Camus, 1994; Prez Sinz, 1990; Roberts, 1968 y 1970),la delincuencia comn o a cualquiera de las redes clientelares manejadas pormilitares involucrados en negocios ilcitos heredados de la contrainsurgencia.

    En Guatemala, como en otros pases del mundo, la construccin de lo joveno de la juventud se ha dado a travs de representaciones histricamente orien-tadas a darle visibilidad a los jvenes con acceso al cosmopolitismo tecnolgicoy cultural de la economa de exportacin y al poder simblico de la blancuraque va mas all del fenotipo y del colorismo que separa a los canches de los mo-renos. As, el ser joven ha sido proyeccin del ser urbano local, capitalino, alfa-beto, europeizado, blanco o mestizo, asumido no-indgena y observante de losvalores de la civilizacin, el cristianismo, el mercado y el entusiasmo por el ca-pitalismo.

    Esta construccin del ser joven y su relacin con el conservadurismo en Gua-temala tiene sus antecedentes en fenmenos cvico-culturales como las Miner-valias, organizadas por el dictador Manuel Estrada Cabrera (1898-1920) en ho-nor de la juventud estudiosa. Estas fiestas incluyeron la construccin detemplos de Minerva en muchos poblados del interior del pas y la publicacinde lbumes conmemorativos, lujosamente impresos, en los cuales se reproduje-ron artculos, mensajes, fotografas y crnicas provenientes de figuras literariasy polticas del mundo liberal latinoamericano, europeo y norteamericano. Ra-fael Spndola, Mximo Soto Hall, Enrique Gmez Carrillo, Rubn Daro y JosSantos Chocano fueron algunos de los intelectuales que prestaron su nombre ala denominada religin de la cultura promovida por el seor presidente enhonor de la juventud guatemalteca. Aunque el eje organizador de todo el dis-curso fue el servilismo a Estrada Cabrera, en las Minervalias se combinaron alu-siones a la educacin, la pedagoga, la teora de la historia, la civilizacin, elnacionalismo, la tradicin clsica y, como uno de los autores dice, el valor delas ideas y el poder de persuasin de las imgenes. Las Minervalias incluyeronla ejecucin de valses, mazurkas, pasos doble, himnos, evoluciones militares, ho-

  • 130130130130130 ESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOS DEDEDEDEDE CULCULCULCULCULTURTURTURTURTURAAAAA MAMAMAMAMAYYYYYAAAAA XXXXXXXXXXVIIVIIVIIVIIVII

    nores al pabelln nacional, conciertos de marimba, declamacin de poesas, lec-tura de discursos, quema de bombas, cohetes, entrega de medallas, elevacinde globos, carreras de cintas, premios y comida (lunch). Las referencias a laniez y la juventud indgenas son ms bien marginales o inexistentes, y a losumo en la seccin las Minervales, en los departamentos, en la parte dedica-da a Alta Verapaz, se hace mencin del premio ganado por Mara Victoria Mottapor su trabajo Mtodo para lograr la mayor asistencia a la escuela, y el modoms prctico para educar al indgena del departamento. Es interesante desta-car en las diversas actividades, el espritu castrense que exalta la virilidad, lahigiene, la disciplina y el combate al vicio y a la ignorancia. As, por ejemplo,Enrique Gomz Carrillo, desde el Consulado General de Guatemala en Hambur-go, Alemania, reporta las conclusiones sobre el Congreso de Higiene Escolarcelebrado en Pars, y en el mismo nfasis socio-racial y castrense; E. V. Berg-mann, articulista alemn, colabora con la pieza titulada Lo que no cura el fuego locura el hierro. Acuerpado en los valores de la superioridad racial, otro autor an-nimo a nombre de la legacin de Bolivia en Washington, D.C. saluda la iniciati-va de Estrada Cabrera con la afirmacin: Creo que los sajones tienen razn alformar jvenes fuertes con pocos conocimientos, pero bien inculcados (lbumde las Minervalias, 1919). Desde fines del siglo XIX y durante todo el siglo XX, lajuventud indgena estuvo presente en el imaginario de la sociedad dominantecuando se plante la necesidad de contar con brazos para la agricultura y elejrcito, o bien con motivo de la inminencia de revueltas populares y desrde-nes pblicos (bochinches).

    Las investigaciones sobre el universo cultural y poltico de los jvenes guate-maltecos tras la firma de los acuerdos de paz, en diciembre de 1996, son bas-tante escasas. No existen suficientes estudios sobre el papel del racismo y elautoritarismo en el imaginario de los distintos estratos de jvenes, aunqueambos fenmenos son mencionados frecuentemente en los informes de orga-nismos internacionales y no gubernamentales que promueven la participacinorganizada de la juventud en la reconstruccin del Estado y de la sociedad . Enun informe publicado por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (DeCazali et al.) con el apoyo de la Agencia Sueca para el Desarrollo Internacional(1998), es significativo que 64.14% de la poblacin estudiantil investigada res-pondi que en Guatemala no se respetan los derechos de los jvenes. El 18% delos 600 encuestados, se defini como maya o indgena, 48.50% dijo que las dro-gas son el principal problema que enfrenta la juventud y 41.04% opin que lademocracia no sirve para resolver los problemas nacionales.

    La mayor parte de las escasas aproximaciones al papel de las ideologas ra-ciales y clasistas en el universo cultural de los jvenes guatemaltecos han sidorealizadas por socilogos, economistas, politlogos, pedagogos, historiadoreso trabajadores sociales (ngel, 1981; Azmitia, 1992; Bautista, 1993; Carranza,1992; Hadden, 1997; Rojas, 1980 y Tezaguic, 1993). La perspectiva etnogrficaes prcticamente inexistente o muy limitada (Smith, 1996), con lo cual se pier-

  • GONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZ PONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANO / / / / / BLANCURBLANCURBLANCURBLANCURBLANCURAAAAA,,,,, COSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMO YYYYY REPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTAAAAACINCINCINCINCIN 131131131131131

    de la posibilidad de contextualizar la informacin estadstica recogida por agen-cias internacionales y organismos gubernamentales y no gubernamentales. Porejemplo, Ren Poitevin, en sus ensayos sociolgicos sobre juventud y polticapublicados con el ttulo de Nadie quiere soar despierto (2001), advierte entre losjvenes guatemaltecos apata, indiferencia, ignorancia, frustracin colectiva eindividualismo. Los jvenes, dice Poitevin, son pesimistas respecto al futurodel pas; no tienen una utopa que les de el derecho a soar y a proyectarsedentro de un sueo colectivo. A pesar de la manera oportuna en que comple-menta el informe de investigacin sobre Los jvenes guatemaltecos a finales delsiglo XX, realizado por FLACSO (2000), este trabajo ignora dos factores que sonfundamentales para cualquier visin contempornea sobre la juventud guate-malteca: en primer lugar, no reconoce el hecho de que los indgenas constitu-yen la mayora demogrfica infantil y juvenil en el pas, y en segundo lugar, apesar de que analiza las relaciones entre juventud, democracia, Estado, educa-cin, sexualidad, drogas, violencia, reconstruccin de la sociedad y el futuro dela regin centroamericana; no contiene referencia alguna a los procesos de cri-minalizacin de la pobreza que estn operando a favor de la marerizacin y lacholerizacin de la juventud indgena y mestizo-popular.

    Solamente hasta la dcada de los aos noventa del siglo XX, la representa-cin de lo joven en Guatemala empez a incluir fotografas, pinturas, textos yla voz transcrita o escrita de la juventud indgena de origen maya (Warren,1999). Sin embargo, cuando se alude a la juventud en Guatemala, se sigue te-niendo en mente a los jvenes citadinos pertenecientes a las capas medias, al-tas o trabajadoras no-indgenas con acceso a la educacin pblica y privada. Laidea de lo joven en esos trminos est vinculada al poder de compra y al capi-tal cultural indispensable para ser reconocido como miembro de una minorageneracional y planetaria (Willis, 1981).

    Shumos, choleros y mucos

    Si antes el problema para la civilizacin y el desarrollo era el problema del indio, ahorael problema lo constituye la shumada, la cholerada y la muchedumbre de mucosdesempleados y cuasi delincuentes. Estos desplazamientos simblicos son eviden-tes en la produccin hemerogrfica y en las opiniones de jvenes, en su mayoraladinos pertenecientes a estratos bajos, medios y altos de la ciudad de Guatema-la, entrevistados por el autor de este artculo entre los aos 2001 y 2003.

    Ernesto Alvarado, recin graduado bachiller en ciencias y letras en un cole-gio privado de clase media baja, dice que todos los que no tienen pisto sonshumos. Son shumos todos los que no son mara caquera, los que son pela-dos, patanes para hablar, especialmente con las chavas. Los shumos quieren sertodo pero a nada llegan. En la definicin de Ernesto, bajo la categora de shu-mos entraran ms de tres cuartas partes de los guatemaltecos que no tienen

  • 132132132132132 ESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOS DEDEDEDEDE CULCULCULCULCULTURTURTURTURTURAAAAA MAMAMAMAMAYYYYYAAAAA XXXXXXXXXXVIIVIIVIIVIIVII

    pisto y que segn cifras oficiales viven en pobreza o extrema pobreza. El uso delas llamadas malas palabras, el ser patanes para hablar es otro rasgo que con-vertira en shumos a hombres y mujeres de todos los estratos sociales que lasutilizan en Guatemala y comparten la cultura machista y homofbica contenidaen ellas. En sta y en otras definiciones de lo shumo como negacin de lo caquero,8

    est presente la crtica al igualamiento y al arribismo social de quienes presu-men de un estatus simblico superior al que les reconocen sus vecinos o cono-cidos. Quieren tenerlo todo pero a nada llegan. Shumo entonces es ser pobre,no tener pisto, pero al mismo tiempo es ser igualado, querer ser alguienpero sin conseguirlo y adems ser patn y pelado.

    Nancy Guzmn, cursante del ltimo ao de perito contador en una escuelapblica, dice que la palabra shumo se refiere a indio pero de una manera anms despectiva que indio. Un shumo, dice Albertina Rodrguez, estudianteen un colegio mixto de la capa media alta, se distingue de alguien que no lo espor su forma de hablar, de caminar, se nota que es un indgena y por su fsico.Por eso dicen: Ah, es un shumito . Sin embargo, a pesar de ser un sinnimode indio, la palabra shumo se utiliza, asienta Nancy, cuando una persona tomaactitudes que no son aceptadas en el grupo y se le dice Ay, que shumo sos,puro shumito, o sea que es un indio, aunque tal vez la actitud no tiene nadaque ver con los indgenas pero es una forma de insultar. Carmen Salazar, alum-na de uno de los colegios ms caros de la ciudad capital, afirma que ese insultose le dice a personas que son necias. Necio, es una persona a la que tal vez unole dice que haga algo y no lo quiere hacer o se le pide haga tal cosa y esthaciendo lo contrario.

    En estas definiciones, shumo es un indio que se denuncia a s mismo por sufsico, su forma de hablar y de caminar o por su terquedad. Es un trmino anms despectivo que indio, aplicable a quienes se empean en llevar la contra-ria y a quienes toman actitudes que no son aceptadas por el grupo. La nece-dad y el llevar la contraria en estas definiciones, recuerda la narrativa colonialque perdura hasta el presente en torno a la terquedad de los indgenas. Estaterquedad o necedad es una construccin estereotipada que a la par de laharaganera, la embriaguez, la idolatra, la suciedad y la vida austera, formaparte del conjunto de las caractersticas atribuidas a indgenas y ladinos indge-nas populares.

    Daniel Snchez, alumno del ltimo ao de magisterio en un instituto pbli-co, dice que muco quiere decir pobre y shumo es el natural. Son palabrasdiscriminativas que se usan como indio y cholero. Ernesto Santizo, estudiantedel ltimo ao de bachillerato fsico-qumico en un colegio particular de capa

    8 Se denomina caquero al individuo o a la persona llena de mierdas, un trmino similar a lochancle que critica desde abajo a los estratos altos o a los que en sus ansias de escalamiento socialpresumen de lo que no son o de lo que no tienen. Sin embargo, dentro de esta taxonoma, muchoscaqueros no se salvan de ser tildados de shumos o igualados.

  • GONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZ PONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANO / / / / / BLANCURBLANCURBLANCURBLANCURBLANCURAAAAA,,,,, COSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMO YYYYY REPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTAAAAACINCINCINCINCIN 133133133133133

    media baja, apunta que los mucos se caracterizan por ser cacos. Casi todos losmucos son indgenas. Un muco y un shumo son la misma babosada aunque unshumo es el que slo llega a joder la pita y un muco casi seguro que es mareroo es largo. Los dos son mara a la que le pela la verga todo, no llevan celular niropa de marca. Slo les gusta andar jodiendo la pita. Estos mucos no van a laescuela y, si van, llegan slo a chingar.9

    rsula Martnez, alumna de uno de los colegios ms caros de la ciudad, sea-la que no es necesario que alguien sea un shumo completo pero puede utilizarcosas de shumo y se le puede decir ala, qu shumo sos por tus zapatos, o al-gn detalle de la persona o por las calcomanas en tu carro o algo as. La incli-nacin shuma a llevar la contraria puede ejemplificarse hasta en la forma devestir.10 Por ejemplo, Eduardo Benavides explica la relacin entre el ser shumo,el Che Guevara y el ser rebelde en el vestido:

    Los jvenes que lo llevan (al Che Guevara en la playera) son los que hasta ciertopunto son mucos o shumos y no deberan vestirse as, por qu?, porque (el Che)fue una persona que fue en contra de la poltica de su pas. Entonces ahora escomo tener una playera de... de quin?, seguro habrn playeras de Osama BinLaden y por qu? Porque estuvo en contra de Estados Unidos, simplemente fuerebelde en contra de ellos. Entonces a este muco o shumo si se le puede llamaras o como se le llame a esta persona de poca cultura, le gusta ir siempre en con-tra. Mir, ven a las siete, pues entonces llega a las seis y media, por qu?,porque le dijeron que llegara a las siete. Son rebeldes pero no rebeldes en buensentido de decir vamos a mejorar, sino rebeldes de ir en contra de todo y no lesparece nada.11

    9 Carmen dice que muco es como shumo, slo que yo siento que el shumo va ms abajo que elmuco. Aunque depende. Cada persona lo toma diferente. Pero si son palabras degradantes paracualquiera.

    10 En una ocasin le coment a Albertina que un estudiante del Colegio Irlands, uno de loscolegios mixtos de la elite capitalina, pensaba que slo los shumos usan camisas con la cara delChe Guevara y su respuesta fue: Eso ha de ser porque l se ha de creer mucho. l se ha de creermejor. Un shumo es un indgena y es la palabra que ms se puede encontrar para discriminarlos:Ah, es un shumo. Es una palabra que denigra totalmente al indgena, sin embargo puede decrse-le shumo a alguien que no sea indgena, porque supngase usted lleva una playera del Che, y di-cen mir l carga una playera, ah, pero parece shumo, o sea que usted est imitndolos a ellos (alos shumos).

    11 Agregando otros elementos a este contexto para una definicin mltiple siempre relaciona-da con el vestido, Nancy Fernndez dice que ser muco es ms denigrante que ser cholero. El mucoes lo ms bajo que existe en la jerarqua. La mayora se identifican porque tambin son choleros yestn metidos en maras, son personas que usan as playeras flojas, pantalones flojos que llegan alas rodillas, con gorras hacia atrs y muchas pulseras. Hasta sucios se miran. En la misma dimen-sin del vestido, rsula acota: si usted va para Panajachel, se pone una camisa tpica, un morral yun gorrito tpico encajan perfectamente con el ambiente, pero si usted se va para Jutiapa, paraeste lado de oriente, usted se ve mal si se viste de esa manera; se ve mal, se ve como muco.Nancy dice que a los mucos se les reconoce porque llevan playeras flojas, pantalones flojos quellegan a las rodillas, con gorras hacia atrs y muchas pulseras. Se califica de muco a alguien, segnEduardo, porque no va vestido como debera, como se viste nuestra generacin.

  • 134134134134134 ESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOS DEDEDEDEDE CULCULCULCULCULTURTURTURTURTURAAAAA MAMAMAMAMAYYYYYAAAAA XXXXXXXXXXVIIVIIVIIVIIVII

    Aqu vale la pena sealar nuevamente las coincidencias que shumos y mucosmuestran en relacin con el vestido, la falta de clase, el buen gusto y lamsica.12 En cuanto a la msica, Eduardo ha establecido una taxonoma disco-tequera en la llamada zona viva de la ciudad de Guatemala que para l es unmicrocosmos en donde pueden observarse con claridad las caractersticas detodo el espectro que va de los mucos, los choleros y los shumos a los fresas o ca-queros pasando por los normales y los intermedios. La observacin de rsu-la respecto a que la gente los acusa de shumos pero a veces disfruta de esascosas (de su msica) coincide con la afirmacin de Eduardo con relacin a queel lugar ms alegre es el de los mucos.13 Este reconocimiento con visos deinterclasismo implica un relajamiento en el self-restraint guatemalteco, un reade interseccin entre la muchedumbre muca y la denominada gente fina o dealta cultura, que momentneamente rompe la normalidad impuesta por el con-servadurismo dominante, aunque esta ruptura temporal se d a la par de unaguerra simblica que permanece y normaliza los espacios de la reproduccinsocial jerarquizada en Guatemala.14

    En estas caracterizaciones y en las sanciones a la transgresin de lo que seconsidera apropiado o inapropiado destaca el elemento transnacional que com-plica las percepciones sobre la diferencia y la estratificacin social, cultural y

    12 Coincidiendo con Eduardo en relacin con la msica pero incorporando el factor del carro,rsula dice que una cosa importante es que el carro est lleno de calcomanas siempre y tiene unescape grande que suena bbbbbffffffffffffff. Eso es clsico de una persona que se llamara shumo.Aunque no todos los shumos tengan carro. Pero si una persona mira eso dice ala, que shumo esecarro. Y la msica, clsico que en el carro a miles de volumen. Tienen que cargar unas bocinas deeste tamao.

    13 Eduardo abunda sobre el tema:

    En la zona viva yo podra definir cada uno de los lugares a donde va cada tipo de gente ypor qu la msica los atrae y los lleva a ese tipo de lugares. El lugar ms alegre es el de losmucos porque es donde hay ms relajo, bueno supuestamente es el ms alegre. Yo piensoque no es donde uno se la pasa mejor pero s donde hay ms ruido, porque quiera que no,esa msica es ruido, es ruidosa y como que a la gente le gusta or ruido [...] En la sextaavenida se mira mucho muco escuchando msica muca, por qu?, porque mucha de lapoblacin que anda por all, es gente as, es gente a quien le gusta ese tipo de msica porqu?... porque estn en contra de algo y tal vez no saben ni en contra de qu, slo quierenestar en contra de algo y lo ms fcil es ponerse en contra del mismo gobierno, entoncesestn en contra de qu?, de que no les va bien en el negocio o de cualquier otra cosa. Lacosa es ir en contra. Como que un muco anda desorientado, bueno creo que por eso estanta la contra contra la gente muca y ello se mira ms cuando uno va a lugares como lazona 10, la zona viva o La Pradera.

    14 Los criterios para definir lo intermedio y lo normal dependen por otro lado de la maneraen que se posiciona la normalidad en contra de la rebelda. Dice Eduardo, por ejemplo, que no esnormal pasar maana, tarde y noche, oyendo rock pesado. Eso no es normal. Para Josefina, en m-sica estn los roqueros, los mucos y los normales que supongamos son los que escuchan msica deRoberto Carlos y cosas as.

  • GONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZ PONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANO / / / / / BLANCURBLANCURBLANCURBLANCURBLANCURAAAAA,,,,, COSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMO YYYYY REPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTAAAAACINCINCINCINCIN 135135135135135

    racial. La forma de llevar la playera, el uso de cadenas, pulseras, pantalones flo-jos, gorras, zapatos masudos, botas, tatuajes, ropa tpica, y en general el so-breadorno y el decorarse el cuerpo de los shumos, mucos y choleros es muy se-mejante al acostumbrado por los jvenes latinos y negros de las grandesciudades de los Estados Unidos (Valenzuela, 1997).

    En una aproximacin diferente, Daniel Snchez, estudiante de bachillerato enun instituto pblico mixto, dice que shumo y muco son palabras discriminativasque se usan como indio y cholero, y de forma inesperada agrega, son insultosque se utilizan bastante en la escuela entre todos pero ms que nada entre lasmujeres. Segn Daniel:

    El hombre con poder es la fuente de la envidia y de los sueos de grandeza de lasmujeres, y por eso es ms fcil que ellas se relacionen con uno por inters delcarro o del dinero. Las mujeres tienen ms sueos de grandeza que los hombres,y cuando miran algo que desean y les da envidia comparan y ven que hay hom-bres que tienen ms que otros y entonces empiezan a restregrselo a uno en lacara. Tal vez por eso, digo yo.

    Esta inusual interpretacin de lo shumo y lo cholero como crtica masculina alas envidias y sueos de grandeza de las mujeres, muestra la fuerte presen-cia de la memoria de desposesin en el universo mental de muchos ladinos mesti-zos guatemaltecos. Desde la perspectiva de Daniel, los tratamientos denigrato-rios de shumo y cholero seran en este caso un recordatorio hegemnico decmo la acumulacin de mltiples despojos materiales y simblicos impiden amuchos hombres mestizos pobres tener pleno acceso al poder patriarcal del sermasculino, amo, patrono blanco y dueo de la mujer que acepta ser parte desus propiedades. Esa podra ser tambin la razn por la cual un estudiante dela Escuela de Ciencia Poltica de la Universidad de San Carlos me dijo que pre-ferira que lo tratasen de hijo de la gran puta en lugar de que le dijeran chole-ro. Ambos insultos (hijo de la gran puta y cholero) muestran el arraigo de lamemoria de desposesin y la complejidad de las guerras simblicas que puedenobservarse en Guatemala. Y es que la vergenza o el temor a sufrir humillacio-nes por el hecho de ser indgena o parecerlo; ser pobre o carecer de acceso a losmarcadores de estatus superior reconocidos a nivel nacional y transnacional, oser sealado de nuevo rico ostentoso y de mal gusto; hace que cada perso-na o grupo vivan con el temor constante de ser conceptuados como inferiores.

    La normalidad del insulto y el molestar pero no con ganas de ofender essemejante a otras justificaciones como el insultar pero slo para divertirse, o laaclaracin explcita de que no se trata de agredir a grupos raciales, sociales oculturales, que aparece en documentos como El cholermetro, El shummetro, Al-gunas seas de que sos un loser, o los Cantos y chistes y anti-rojos, donde semuestran los repertorios que caracterizan a la jerarqua socio-racista. El do-cumento Mida su cociente shumencial dice, por ejemplo, que Los ngeles es lameca de los shumos. De esa forma, los shumos, como los mucos, los mareros y

  • 136136136136136 ESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOS DEDEDEDEDE CULCULCULCULCULTURTURTURTURTURAAAAA MAMAMAMAMAYYYYYAAAAA XXXXXXXXXXVIIVIIVIIVIIVII

    los choleros, son una manifestacin de la circulacin transnacional de bienes,ideas, atuendos, msica, formas de saludarse y otros rasgos del gregarismo ri-tual rechazado por los jvenes que se asumen como normales y de maneramucho ms activa por los burgueses, los fresas y los caqueros.

    Visiones caqueras

    El conocimiento del idioma ingls, el poder de compra y la experiencia cosmo-polita han sido histricamente propiedad simblica de la elite y las capas me-dias altas. Como resultado de la dispora mesoamericana a los Estados Unidos,un mayor nmero de guatemaltecos migrantes tienen ahora acceso al cosmo-politismo y a la experiencia de la libertad al interior del mercado. La disporaen ese sentido ha transnacionalizado las arenas en donde se dirimen, disputany negocian fronteras de clase y prejuicios raciales y culturales. En estas arenasse critica el consumo y se jerarquiza al consumidor, la mercanca consumida yel lugar donde se consume, abriendo nuevos espacios de confrontacin simb-lica entre la gente decente y la gente corriente que reciben el impacto de las din-micas generadas por la migracin intranacional y transnacional.

    Es particularmente llamativo el hecho de que a pesar de ser un lunar blancoen medio de la masa indgena y shuma; la elite blanca y ladina ha sido bastan-te exitosa en movilizar el repudio del mestizaje indgena y las normas no es-critas que critican el igualamiento, y organizan simblicamente la jerarqua quedefine el lugar de cada quien en sociedad. La crtica del igualamiento ha adqui-rido mayor fuerza en aos recientes a travs de narrativas visibles en columnasperiodsticas, obras de teatro, pginas de Internet y programas de radio en losque se ridiculiza el arribismo de los nuevos ricos y se denigra a quienes pre-tenden abandonar el lugar que la mentalidad dominante les asigna en la jerarquanacional y global. Por ejemplo, con el objeto de hacer visibles los prejuicios encontra de mucos, shumos, choleros y nuevos ricos, la comediante Mni-ca Recinos cre el personaje de La Jacky, por Ya Quisieras, una mujer ficticia quegoza de gran popularidad entre los estratos altos de la ciudad de Guatemala.En entrevista con el periodista Juan Luis Font (2001), La Jacky dice que no sesiente amenazada por la ostentacin de riqueza que hacen los nuevos ricos,sino ofendida. Es disgusting ver gente muca disfrazada de gente decente. Vergente que debera ser guardaespalda y anda con guardaespaldas. Que cadaquien se ubique donde le toca en la sociedad. La energa de los mucos y la mano van, por mucho dinero que tengan. Usted sabe que la gente cree que a mslo me interesa el dinero, pero no es as, es cosa de ser elegante, asunto derefinamiento, dice La Jacky.15

    15 Le doli que gente como usted dejara de hacer el gobierno? pregunta Font a La Jacky.A quin se refiere?

  • GONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZ PONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANO / / / / / BLANCURBLANCURBLANCURBLANCURBLANCURAAAAA,,,,, COSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMO YYYYY REPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTAAAAACINCINCINCINCIN 137137137137137

    En esa misma direccin, una pieza de notable valor conceptual para el estudiodel socio-racismo guatemalteco en muchos aspectos ms directo que la entrevis-ta de Font con La Jacky, es el artculo Shumada, escrito por Alfred Kalschmitt(1999). Los shumos, segn Kalschmitt, son sucios, abusivos, impertinentes,ladrones, vulgares, indecentes, perezosos y desatentos. El shumo notiene nada que ver con diferencias raciales sino con el mal gusto y con unarebelda incorregible ante el imperio de la ley, dice el autor. El shumo es la ant-tesis del buen gusto, segn Kalschmitt. El gusto como marcador de clase y elproblema de tener o no tener buen gusto es parte del cuerpo de ideas y este-reotipos que sirven para estigmatizar al shumo. Es shumo, sostiene Kals-chmitt, quien satura el avin con olor a pollo frito y llena los compartimentoscon apretados bultos. Sin mayor prembulo ni mediacin afirma: El rap es shu-mo. La marimba si no se toca bien se torna shuma. La cancin del moo colo-rado es shuma. La moda extravagante y el body piercing es shumada total.Como en otros espacios, la normalizacin autoritaria que certifica lo que esapropiado y lo inapropiado en Guatemala es extremadamente intransigente yse proyecta fuera de las fronteras nacionales, como en las crticas a la modaextravagante, el body piercing, las actitudes de los opositores a Pinochet y lasluchas de la izquierda internacional que tambin son shumas. Para Kalschmitt:

    La izquierda tiene mucha responsabilidad en avivar el fuego de la shumada. Du-rante aos le ha brindado dialctica barata y teora perversas para justificar suactitud; especialmente su rebelda. Y es que la izquierda est llena de shumos.Shumos que incitan a la rebelin social con justificaciones absurdas, como si sepudieran tener derechos sin responsabilidades; y lugar y posicin sin trabajo ydedicacin.

    Kalschmitt asume una nosotrosidad que compacta ideolgicamente a la eli-te y moviliza a las capas medias y aun a los sectores populares que se asumenno indgenas. As dice: La shumada nos invade, nos est ahogando con susuciedad y su vulgaridad (a quines, nosotros?, a nosotros la gente decen-te?). Y luego se apresura a aclarar que la shumada no se origina de la pobre-

    A gente como usted de alcurnia y abolengoAh, usted est hablando del Canche (el expresidente Arz).S, le hablo del Canche.Yo siempre le deca: Canche, cmo puede gobernar un pas con tantos choleros? , y el me

    contestaba: El amor a la patria. De veras que se entreg enterito, fue un mrtir.ltimamente se han odo muchas criticas respecto a que el (Colegio) Americano se ha llena-

    do de gente comn.S, es que eso pasa cuando cualquiera llega a tener dinero. Los new rich son de los que creen

    que con el dinero pueden comprar cualquier cosa. Y realmente my place no se puede comprar. Osea que lo que natura no dio, el instituto central para varones no lo presta.

    (Entrevista de Juan Luis Font a La Jacky, 2001)

  • 138138138138138 ESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOS DEDEDEDEDE CULCULCULCULCULTURTURTURTURTURAAAAA MAMAMAMAMAYYYYYAAAAA XXXXXXXXXXVIIVIIVIIVIIVII

    za porque hay pobres respetuosos y decentes. Lo shumo, advierte, no tie-ne que ver con el racismo porque hay shumos blancos, amarillos y negros.

    Midiendo quin es quin en la sociedad guatemalteca

    Un buen ejemplo de cmo se expresan los prejuicios en Guatemala son los do-cumentos annimos que circulan en el Internet y muestran la estigmatizacinradical del que aspira a ser clase media, o al que por ser indio o shumo sele considera incapaz de acceder a los beneficios del mercado y al reconocimien-to pblico. Tanto en El shummetro, El cholermetro, Algunas seas de quesos un LOSER, el Mida su cociente shumencial, o en los Cantos y chistes anti-rojos se expresan abiertamente y de manera annima prejuicios de clase, cultu-ra, gnero y raza con los cuales se intenta disciplinar conductas, mantener elmoral leadership y producir opinin pblica favorable a la reproduccin delconservadurismo local.

    El shummetro

    En El shummetro, por ejemplo, se mide la condicin shuma con base en mar-cadores tan dismiles como el fenotipo, las costumbres, los nombres propios,la forma de vestir, hablar, el trato, la etiqueta, la comida, las caractersticas de lavivienda, el manejo de las excrecencias,16 las preferencias deportivas, televi-sivas, musicales, los sitios de entretenimiento, todo lo relativo a los carros, losvnculos reales o imaginarios con las fuentes del poder econmico y poltico yhasta la manera de utilizar el celular y el correo electrnico. El shumo es hue-

    16 La alarma por sonarse la nariz en pblico, exprimindose los mocos para despus chico-tearlos al suelo o escupir para despejar la molestia, es parte del rechazo a lo grotesco de loshbitos higinicos de la mayora nacional a quien se considera brbara e irredimible. El repudio delo grotesco popular muestra la preeminencia del cuerpo clsico de la moral burguesa y su formade disciplinar al individuo que an forma parte de una masa primitiva aferrada al cuerpo antiguoque de manera cotidiana fusiona sus excrecencias con los elementos que integran el orden csmico(Stallybrass, 1986). Otros aspectos en donde se nota ese celo por imponer el cuerpo clsico y disci-plinado de la burguesa, sus orificios y su pnico al contacto fsico y a las formas de comunicacinque pueden ser consideradas viles y pre-modernas del cuerpo antiguo, es la burla por tomar el ante-brazo a la gente cuando le extienden la mano para saludar, o el llamar la atencin de alguien consonidos como Chst Chst Chst Chst!, Shshsht! o ah ks-ks-ks!. En esta misma dimensin corpo-ral, el hecho de que una mujer no se rasure las piernas y las axilas o que un hombre se deje elbigote o la barba a pesar de que no le crezcan en abundancia, es motivo tambin para ser ubi-cado en esa clasificacin denigratoria. Se repudian asimismo las uas de cevichera, un rasgo queevoca al amplio espectro de cocineras, verduleras, tortilleras, atoleras, tamaleras, cholojeras, rega-tonas del mercado, vendedoras de canasto y todas las mujeres que por su condicin de trabajado-ras vinculadas a la preparacin y suministro de alimentos para las ciudades, constituyen el cuerpofemenino de la nacin cholera, el bajo pueblo despreciado por la gente decente.

  • GONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZ PONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANO / / / / / BLANCURBLANCURBLANCURBLANCURBLANCURAAAAA,,,,, COSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMO YYYYY REPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTAAAAACINCINCINCINCIN 139139139139139

    vn, chilln, traicionero, borracho barato, idiosincrtico, machista, cobarde, ig-norante y por lo general aunque no siempre: delincuente. El shumo as defini-do se encuentra en contraposicin social e ideolgica con el macho blanco, pa-triarcal, masculino, ejecutivo, rico, liberal o conservador que protege, provee,cuida, defiende, y de esa forma gana el derecho a subordinar a los dems, em-pezando con la mujer que lo admira y le est agradecida. Las caractersticasshumas recuerdan el estereotipo sobre el indio haragn, quejita, no confia-ble, no bolo fino que aparece en los ejemplos recogidos por Lisandro Sando-val en su Semntica guatemalense (1940) y por Federico Hernndez de Len ensus Viajes presidenciales (1941), que describen buena parte de los repertorios quedan cuerpo a las relaciones serviles en Guatemala.

    La vigilancia simblica sobre lo que es considerado socialmente apropiadohacer de acuerdo al origen social y cultural de cada quien, se inicia con el nom-bre propio que identifica a cada individuo. As, para los cnones impuestos porla ideologa dominante es correcto llamarse Wilmer si se tiene un apellidocomo Plotcharski, pero alguien con apellido Chonay con el mismo nombre,violenta las reglas no escritas que establecen cules son los nombres que losindios y los shumos se espera utilicen de acuerdo con el capital social y cul-tural asociado a sus apellidos, un aspecto que ha sido abordado por AmandaPop en sus investigaciones. Como sujeto transnacional, el shumo, miembro deuna comunidad diasprica que carece de educacin y alta cultura, tomaprstamos lingsticos que lo hacen susceptible de ser estigmatizado dentro dela propia Guatemala como cholo latino o naco mexicano. De esa manera esshumo el que escucha norteas (pero a todo volumen...CHOLERISISISISIMO) o el quese las lleva de rappero [sic] negro (con todo y ademanes de delincuente rap-pero). Aqu nuevamente la shumizacin cruza las fronteras nacionales, crimina-lizando el ser rapero, negro o no-blanco y por consecuencia delincuente. El retra-to del rapero como negro, el negro como rapero y el negro como delincuentecorresponde tambin a la prctica ideolgica que denigra las expresiones musica-les que pertenecen al universo cultural de los que son considerados gente co-rriente. Se es shumo por pintar la casa propia de color celeste o azul nacio-nal, y un detalle tan simple que pasara completamente desapercibido enMxico o en los Estados Unidos como el ponerse la camisola de futbol parasalir con la familia, es en Guatemala objeto de burla (aaahhhh, qu shumo!).Se es shumo si se va por lo menos una vez al mes al estadio Mateo Flores o aLa Pedrera porque es un lugar chilero . Como si en la ciudad de Mxico al-guien fuera social o culturalmente inferior por el mero hecho de asistir a encuen-tros de futbol en los estadios. Sin embargo, la representacin del futbol comodeporte shumo no excluye que el sentimiento anti-cholero y anti-shumo se pro-yecte tambin en los chistes con que los cremas del Comunicaciones tratan decholeros e hijos de la gran puta a los rojos del Municipal.

    Muchas de las expresiones ms virulentas del sentimiento anti-shumo se ori-ginan curiosamente alrededor del artefacto ms potente producido para el mer-

  • 140140140140140 ESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOS DEDEDEDEDE CULCULCULCULCULTURTURTURTURTURAAAAA MAMAMAMAMAYYYYYAAAAA XXXXXXXXXXVIIVIIVIIVIIVII

    cado por la modernidad tecnolgica: el automvil. As, lo shumo puede definir-se a partir de la marca del automvil que se posee, el color, la msica que selleva, el tamao de las bocinas y la decoracin. El carro como eje articuladorde la vida cotidiana sirve para exhibir el poder que se tiene o por el cual se esrespetado, envidiado, o bien, denigrado y calificado de indio igualado. El he-cho de que ahora haya un chingo de indios con carro y de que cualquier in-dito anda manejando un BMW, me dijo Jaime Fernndez de la universidadFrancisco Marroqun, ha venido a modificar el poder simblico de esa mercan-ca y la frontera entre los que se supone deben andar a pie o en camioneta(transporte pblico) y los que por su blancura y su poder de compra puedenadquirir carros cuyo costo es inaccesible para la mayora. Los migrantes a losEstados Unidos que regresan con carros usados, chocados o semi-nuevos paravenderlos luego han contribuido a democratizar el prestigio asociado a ser pro-pietario de un vehculo por muy deteriorado que ste se encuentre. Ya que parala elite es imposible restringir el acceso al gran ttem de la modernidad capita-lista, se es shumo entonces por colocarle al carro calcomanas con palabras eningls, polarizarle los vidrios de color negro guardaespaldas, ponerle lucesfluorescentes o intermitentes en diversas partes, instalarle alarma y utilizar stacomo bocina en los semforos, llevar la msica con el volumen muy alto, y otrosaspectos que concurren a la crtica del adorno y del sobreadorno, como en laburla de los low riders en los Estados Unidos.

    Otro documento de autora annima y con una apreciable cantidad de ele-mentos que reproducen la convergencia clasista y racista en Guatemala es Al-gunas seas de que sos un LOSER. Este documento, que circula tambin en In-ternet, repite varios de los temas abordados por El shummetro, pero bajo lapremisa de que ser loser es ser shumo. Aqu es mucho ms claro el castigo a lasaspiraciones de escalamiento social utilizando elementos norteamericanos ymexicanos que influyen en las definiciones de lo LOSER LOSER, SOCIAL LOSER, LOSERWANNABE, LOSER INTERNACIONAL, LOSER INGENUO, LOSER NACO, LOSER SNOB, LOSER HIPER SHUMO yLOSER POBRE, entre otras. As, por ejemplo, LOSER LOSER o SOCIAL LOSER (es en inglspues!!!) es quien admira y en da sbado no tiene otra cosa que hacer en sucasa que ver en la televisin mexicana Otro Rollo conducido por Adal Ramones.LOSER NACO es quien sigui por televisin las dos ediciones del programa tam-bin mexicano, La Academia y tiene como favoritos a los aspirantes Miriam oYahir. LOSER SNOB es quien no sabe que significa SUV Sport Utility Vehicle yno tiene ni siquiera una. LOSER HIPER SHUMO es quien tiene un carro con una oms calcomanas de No fear, Nitto, Racing Team, cualquier cosa. Com, bad boys, oun Niito orinando. LOSER POBRE es quien tiene ms de cuatro CDs piratas com-prados en la 6ta. [avenida] o en un semforo, y finalmente LOSER es la personaquien usa la palabra LOSER siendo ella misma LOSER.

    En esta conceptualizacin de lo loser destaca la conciencia sobre la limitadaoferta de entretenimiento y las jerarquas del consumo y el poder de compra,especialmente entre quienes tienen que conformarse con la radio comercial y

  • GONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZ PONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANO / / / / / BLANCURBLANCURBLANCURBLANCURBLANCURAAAAA,,,,, COSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMO YYYYY REPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTAAAAACINCINCINCINCIN 141141141141141

    las estaciones de la televisin local. El acceso al cable, la computadora, el Inter-net, el celular, el carro y la ropa de marca se convierten en marcadores de clasecon sus respectivos matices particulares. En un contexto donde el manejo delidioma ingls y de sus anglicismos es todava un marcador de superioridad so-cial, es importante decir el lugar donde uno aprendi o piensa que aprendi elingls.17 En cuanto al fenotipo femenino, se dice que si te pints el pelo decanche oxigenada y decs que es natural, no solo sos LOSER sino tambin RE-MUCA. En este caso se restituye el prestigio asociado al cabello rubio, despre-ciando a quien pretende imitarlo y por imitarlo mal, merecedor de un dobleinsulto (RE-MUCA).18 En la cuestin central del carro, alguien es shumo si tienepor lo menos cuatro familiares que viven en los Estados Unidos y viaja all m-nimo tres veces al ao a traer uno o dos carros chocados. Se es shumo ademspor pensar que tener un Honda es smbolo de status,19 o bien en la vertien-te que vincula carros y decencia se es shumo si su familia tiene ms carros delos que caben en el garage, y por lo tanto varios se parquean en la calle, aunqueentre todos no sale un carro decente.

    Es revelador que al final del documento el gran corolario de su desarrolloconceptual y clasificatorio sea la afirmacin, remarcada con un OJO en mayscu-las: ...hay LOSERS que no son SHUMOS y pocos SHUMOS que no son LOSERS!. El senti-miento anti-indgena y la vergenza por lo indgena alcanzan su clmax en elsentimiento anti-loser. Se normaliza el prejuicio que valora la existencia de losindios puros obedientes y laboriosos y repudia las expresiones ladinas del mesti-zaje indgena y la cultura de masas consideradas de mal gusto y carentes de cla-se. En la misma lnea del sentimiento anti-indgena que considera a los shumosresponsables del disloque de la sociedad y de sus instituciones, y a tono conlos llamados de Kalschmitt en contra de la shumada y del por qu estamoscomo estamos, invocado en nombre de una nosotrosidad elitista defensorade un guatemalteco esencial que casi siempre es producto de supremacismos yautodenigraciones, el documento dice: El shumo (a) es la razn por la que es-tamos como estamos... No tiene nada que ver con el dlar, el gobierno (queest lleno de Shumos, por cierto) ni con la Iglesia, ni los gringos, ni NADA de eso.

    17 As por ejemplo, es sea de ser loser si cantas las canciones en ingls y ni siquiera aprobas-te el curso 1 del IGA, o bien, si no fuiste al IGA sino al CIAV. En esta contradictoria mezcla delocalismo y transnacionalismo es evidente que ahora existe un nmero importante de guatemalte-cos indgenas y ladinos de extraccin popular que han estado expuestos al idioma ingls, pero queson ridiculizados y desautorizados a utilizar los anglicismos que se supone son patrimonio simblico dela cpula social. Lo cool, el ser cool, cute; usar bumper stickers, tener su fashion, ir de shop-ping, ser social loser, loser wannabe, o el no tener un SUV, son ejemplo de estas calificacio-nes que marcan diferencias sociales importantes.

    18 En El shummetro, la hispanizacin de los nombres anglos tambin es objeto de escarnio:Te llamas Wilmer, Yadira, Yonatn, Jerson, Giovanni, Rozable, Walter, Wilians, Lesly, Yhajaira, Jes-sica, Marlon, Beverly, Esteeven (y mal escrito).

    19 En otra anotacin adicional se establece que los carros favoritos de los choleros siguen sien-do el Honda Civic, Nissan Sentra, Toyota Teruel o los ya casi chatarra CRX.

  • 142142142142142 ESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOS DEDEDEDEDE CULCULCULCULCULTURTURTURTURTURAAAAA MAMAMAMAMAYYYYYAAAAA XXXXXXXXXXVIIVIIVIIVIIVII

    Son los Shumos. Punto. Son los shumos... los responsables de por qu esta-mos como estamos, quines, nosotros? para luego llegar a la conclusin cate-grica de que estamos como estamos por culpa de la indeseable y extermina-ble masa de shumos.

    En otro documento, el Mida su SQ (Mida su cociente shumencial) dice porsu parte que la shumitis es una grave enfermedad crnica y altamente conta-giosa, de la cual actualmente en Guatemala hay una epidemia incontrolable ydebe tratarse como cualquier afeccin mdica, siempre que se tengan no msde dos sntomas. Si se tienen no ms de dos sntomas de shumitis se le debenadministrar al paciente ocho dosis diarias extrafuertes de CL ASE, as con ma-yscula y para garantizar una mejor absorcin, este medicamento viene sola-mente en supositorios de tres pulgadas de ancho. La terapia anti-shuma ilustrala manera feudal en que la joven patriarqua, y su machismo gay penalizan lafalta de clase, habitando, re-colonizando y poseyendo en la connotacin mssexual y patriarcal del trmino a los considerados choleros, a una buena parte delas mujeres y en general a los pobres especialmente si son indios, mestizos eiletrados.

    Otro espacio en donde se manifiesta de manera annima, bastante cruda ydescarnada, la misoginia, la homofobia ldica, el homosexualismo machista, laanalidad, lo escatolgico y la creencia en la superioridad de la clase, son loscantos rojos anti-choleros y los chistes anti-rojos con que los seguidores cremas delComunicaciones atacan a sus rivales rojos del Municipal. Los cremas feminizan,bastardizan y homosexualizan a los choleros rojos. Se retrata a la madre delcholero rojo como prostituta, al cholero como impotente sexual, cornudo e hijode la gran puta, repudiado por las mujeres, excepto por las prostitutas. En loscantos y los chistes se agrede a la figura femenina ya sea como madre, prostitu-ta, o mujer violada, pero ms inteligente que el bastardo cholero. En los cantosanti-rojos al rojo adems de adjudicrsele la condicin de homosexual, se le in-fantiliza, criminaliza y animaliza, tratndosele literalmente como mierda, basu-ra, persona o rival deportivo que merece ser suprimido social y violentamente.

    Conclusin

    La exacerbacin de los discursos racialistas que aluden a una taxonomaracial, sin necesariamente expresarse como racistas del conservadurismo gua-temalteco a partir de la dcada de los noventa, muestra en primer lugar el ca-rcter anti-indgena y anti-mestizo popular del llamado racismo, y en segundolugar manifiesta la pertinencia de asumir el estudio de los discursos y las prc-ticas que hacen menos a los indgenas, los rurales y los iletrados, especialmen-te si son pobres e iletrados.

    La criminalizacin de la juventud y la exacerbacin de la racializacin de ladesigualdad en Guatemala es resultado de diversos factores como el miedo t-

  • GONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZ PONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANO / / / / / BLANCURBLANCURBLANCURBLANCURBLANCURAAAAA,,,,, COSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMO YYYYY REPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTAAAAACINCINCINCINCIN 143143143143143

    nico de las capas medias empobrecidas, que estaran reaccionando al temor aligualamiento de los indios y los shumos como resultado de la ampliacin del mer-cado y de la ciudadana. Estas capas medias acomodadas o empobrecidas des-confan de los indgenas y de las dinmicas del consumo vinculadas a la migra-cin transnacional, que han acelerado procesos de movilidad social yestimulado el temor a la guerra tnica de los indgenas (Warren, op. cit.) con-tra los no-indgenas, o la rebelin de los choleros en contra de sus patronesblancos y ladinos. La elite percibe los nuevos esfuerzos democratizadores comoun mal sntoma de que para siempre se han ido los viejos tiempos, cuando cadaquien dcilmente aceptaba ocupar su lugar en la jerarqua nacional y global.

    Adems de sus connotaciones abiertamente racistas y clasistas, lo cholero, loshumo y lo muco son trminos equivalentes, utilizados para estigmatizar diver-sas formas de consumo y cambio cultural, que sintetizan de manera contradic-toria tres factores fundamentales de la modernidad cultural guatemalteca: a) Elculto al mito del indio puro como sirviente trabajador y obediente; b) el retratodel mestizo ladino como subordinado haragn y rebelde, y c) la manera en queambas representaciones fomentan el sentimiento anti-indgena y el racismoanti-mestizo indgena de los ladinos, los blancos y los criollos. Si bien shumo,cholero y muco son clasificaciones utilizadas para burlarse de los indgenas y delos plebeyos de piel oscura, puede decirse que esas clasificaciones encarnan elespacio del mestizo no-blanco y del mestizaje negado por la blancura e invisibi-lizado por la dicotoma indio-ladino. El shumo, el cholero y el muco es el mestizoindgena repudiado por la elite y por el sistema de representaciones que glori-fica las purezas raciales, en particular las del blanco puro y del indio puro.Ser indio pero indio puro, dice una seora que se identifica como maya antela audiencia de Casos y cosas, un programa con telfono abierto en RadioSonora. O ser indio, pero de clase, dice otra radioescucha que se presentacomo indgena maya en el programa Buenas Noches, Buenos Das, que setransmite en la misma emisora. Esta valoracin positiva de la pureza racial ycultural asociada a la clase defendida por personas que no son miembros dela elite, muestra cmo la negacin cotidiana del mestizo, o del culturalmentemixto, se da tambin desde abajo y desde la postura de los indgenas que seconsideran puros. La vergenza de la impureza (indgena, negra, asiticao plebeya oscura) contrasta con el culto al mestizaje eugensico invocadopara mejorar la raza, y en buena medida responsable de que no exista un or-gullo mestizo capaz de propiciar el desarrollo institucional de una cultura na-cional que asuma la herencia indgena y afro-guatemalteca. A diferencia deMxico, Ecuador, Per o Bolivia, el repudio del mestizo indgena en Guatemalaes ms radical, y en ello juega un papel importante la relacin entre los valoresde la blancura, el imperialismo cultural y el anticomunismo, que han sido estra-tgicos para la modernizacin regresiva del Estado y de la economa.

    Tanto en El shummetro, Algunas seas de que sos un LOSER, el Mida suSQ o en los Cantos y chistes anti-rojos se evocan algunas de las ideas de Dur-

  • 144144144144144 ESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOS DEDEDEDEDE CULCULCULCULCULTURTURTURTURTURAAAAA MAMAMAMAMAYYYYYAAAAA XXXXXXXXXXVIIVIIVIIVIIVII

    kheim en cuanto a la divisin del trabajo adoptadas por la sociologa funciona-lista y estructural-funcionalista. Segn estas ideas, por el bien de la sociedad ysu armona, cada quien debe conformarse con el destino que le viene por ellugar y las circunstancias de su nacimiento. As, si los plebeyos se conformarancon su suerte y los miembros de la elite aprendieran del self-restraint de los ple-beyos, unos y otros podran asumir la armona que viene de las condicionesnaturales en que ambos funcionan en sociedad (Willis, op. cit.). Dentro de esanormalizacin y naturalizacin de las jerarquas, la virulencia del sentimientoantimestizo en particular puede ser interpretada como reaccin de las capasmedias que temen ser identificadas como parte de la masa plebeya de indge-nas pobres y choleros. En una reedicin del dicho racista de los ladinos popu-lares soy pobre pero no soy indio, podra decirse soy pobre o clase mediaempobrecido pero no soy cholero. Esta vergenza por lo indio y lo choleroagudiza la autodenigracin ladina y sus irresueltas ansiedades acerca de la su-premaca blanca y el poder simblico de la blancura. Los ladinos de todos losestratos poseen una identidad que es resultado de afirmar una negacin, la ne-gacin explcita de la cultura que los constituye como mestizos y no-blancos.Este predicamento colonial, post-colonial y neo-colonial es parte de las contra-dicciones no resueltas de un ser nacional y una ciudadanizacin ahogadas toda-va por el enorme peso de las relaciones de servidumbre, jerarquas y diferen-cias, reguladas por etiquetas ms o menos violentas y autoritarias.

    BIBLIOGRAFA

    Allen, Theodore W.1997 The Invention of the White Race. Londres: Verso.

    ngel Madrid, Rosa Mara1981 Estudio sobre los valores sociales de las alumnas del 5to. magisterio en educacin

    urbana de establecimientos pblicos y privados de la ciudad de Guatemala. Gua-temala: Universidad Rafael Landivar (URL), Facultad de Humanidades.

    AVANCSO2000 Heridas en la sombra. Percepciones sobre violencia en reas pobres urbanas y

    periurbanas de la ciudad de Guatemala. Guatemala: Asociacin para el Avancede las Ciencias Sociales.

    Azmitia Barranco, Oscar Guillermo1992 La formacin docente del graduado de magisterio rural y la factibilidad de su par-

    ticipacin efectiva en el proceso de su desarrollo. Guatemala: URL, Facultad deHumanidades.

    Bastos, Santiago y Manuela Camus1994 Sombras de una batalla: los desplazados por la violencia en ciudad de Guatemala.

    Guatemala: Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO).

  • GONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZ PONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANO / / / / / BLANCURBLANCURBLANCURBLANCURBLANCURAAAAA,,,,, COSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMO YYYYY REPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTAAAAACINCINCINCINCIN 145145145145145

    Bautista Velsquez, Roberto1993 Actitudes de indgenas profesionales y no profesionales hacia su idioma

    materno y cultura. Guatemala: URL, Facultad de Humanidades.

    Bonilla-Silva, Eduardo1997 Rethinking racism: toward a structural interpretation, American Sociological

    Review, 62(3): 465-480. Washington: American Sociological Association.

    2000 This is a white country: The racial ideology of the western nations of theworld system, Sociological Inquiry, 70 (2): 188-214. Alburn: United Chaptersof Alpha Kappa Delta International Sociology Honor Society.

    Carranza Umaa, Elizabeth1992 El carcter del estudiante indgena. Estudio realizado en el ciclo diversificado de

    los establecimientos privados y pblicos de la ciudad de Quetzaltenango. Guate-mala: URL, Facultad de Humanidades.

    Casus Arz, Marta Elena1992 Guatemala, linaje y racismo. Guatemala: FLACSO.

    1998 La metamorfosis del racismo en Guatemala. Guatemala: Cholsamaj.

    1999 Los proyectos de integracin social del indio y el imaginario nacional delas elites intelectuales guatemaltecas, siglos XIX y XX, Revista de Indias, LIX(217): 775-813. Espaa: Departamento de Historia de Amrica, Instituto deHistoria del CSIC.

    De Cazali, Lilian, Virgilio Reyes y Vctor J. Moscoso1998 Perspectivas de los jvenes sobre la democracia en Guatemala. Guatemala, FLACSO

    y Agencia Sueca para el Desarrollo Internacional.

    Delgado, Richard1995 Critical Race Theory: The Cutting Edge. Filadelfia: Temple University Press.

    FLACSO2000 Los jvenes guatemaltecos a finales del siglo XX. Guatemala: FLACSO.

    Font, Juan Luis2001 La gente es rematerialista y retacaa, El Peridico, Guatemala, 20 de mayo.

    Frankenberg, Ruth1993 White Women, Race Matters: The Social Construction of Whiteness. Minneapolis:

    University of Minnesota Press.

    Goldberg, David1990 Anatomy of Racism. Minneapolis: University of Minnesota Press.

    1995 The semantics of race, Ethnic and Racial Studies, 15(4): 543-69. Filadelfia:Taylor and Francis.

  • 146146146146146 ESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOSESTUDIOS DEDEDEDEDE CULCULCULCULCULTURTURTURTURTURAAAAA MAMAMAMAMAYYYYYAAAAA XXXXXXXXXXVIIVIIVIIVIIVII

    Hadden, Gerald1997 Teenage Refugees from Guatemala Speak Out. Nueva York: Rosen Publishing Group.

    Harrison, Faye V.1995 The persistent power of race in the cultural and political economy of ra-

    cism, Annual Review of Anthropology, 24: 47-74. Baltimore: Johns HopkinsUniversity.

    Hernndez de Len, Federico1941 Viajes presidenciales. Guatemala: Tipografa Nacional.

    Horne, Gerald1999 Race from power, U.S. foreign policy and the general crisis of white su-

    premacy , Diplomatic History, 23(3): 437-461. Cambridge, MA: Society forHistorians of America Foreign Relations, Blackwell Publishers.

    Kaltschmitt, Alfred1999 Shumada, Siglo XXI, Guatemala, 11 de octubre.

    Kang, Liu1997 Hegemony and cultural revolution, New Literary History, (28): 69-86. Balti-

    more, Maryland: The Johns Hopkins University Press.

    Lipsitz, George1999 The Possesive Investment of Whiteness. How People Profit from Identity Politics.

    Filadelfia: Temple University Press.

    Omi, Michael y Howard Winant1986 Racial Formation in the United States: From the 1960s to the 1980s. Nueva York:

    Routledge.

    Prez Sinz, Juan Pablo1990 Ciudad, subsistencia e informalidad: Tres estudios sobre el rea metropolitana de

    Guatemala. Guatemala: FLACSO.

    1991 Ciudad de Guatemala en la dcada de los ochenta: Crisis y urbanizacin. Guate-mala, FLACSO.

    Poitevin, Ren2001 Nadie quiere soar despierto. Guatemala, FLACSO.

    Press Giroux, Henry1997 White squall: Resistance and the pedagogy of whiteness, Cultural Studies,

    11(3): 376-389. Durham: Duke University Press.

    Quiroa, Marco Augusto2001 El reino de las maras, El Peridico, Guatemala, 2 de diciembre.

  • GONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZGONZLEZ PONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANOPONCIANO / / / / / BLANCURBLANCURBLANCURBLANCURBLANCURAAAAA,,,,, COSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMOCOSMOPOLITISMO YYYYY REPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTREPRESENTAAAAACINCINCINCINCIN 147147147147147

    Roberts, Bryan1968 Politics in a neighborhood of Guatemala city, Sociology, 2 (2): 185-203.

    Londres: Sage Publications.

    Roberts, Bryan1970 Urban poverty and political behavior in Guatemala, Human Organization,

    29(1): 20-28. Oklahoma: Society for Applied Anthropology Publications.

    Roediger, David1995 Towards the Abolition of Whiteness: Essays on Race, Politics and the Working

    Class History. Londres: Verso.

    Rojas Angulo, Roberto1980 Estudio comparativo del CI entre un grupo de universitarios indgenas y otro no

    indgena. Guatemala: URL, Facultad de Humanidades.

    Sandoval, Lisandro1940 Semntica guatemalense. Guatemala: Tipografa Nacional.

    Smith, Carol A.1996 Myths, intellectuals and race/class/gender distinctions in the formation of

    Latin American nations, Journal of Latin American Anthropology, 2(1): 148-169. Florida: Florida International University, College of Arts and Sciences,Latin America and Caribbean Center (LACC).

    Stallybrass, P. A. W.1986 The Politics and Poetics of Transgression. Ithaca, Nueva York: Cornell Universi-

    ty Press.

    Tezaguic Tohn, Joel1993 Actitudes de estudiantes mayas de educacin media hacia sus idiomas. Guatema-

    la: URL, Facultad de Humanidades.

    Valenzuela Arce, Jos Manuel1997 Vida de barro duro: cultura popular juvenil y graffiti. Guadalajara: Colegio de la

    Frontera Norte.

    Warren, Kay B.1999 Indigenous Movements and their Critics, Pan-Maya Activism in Guatemala. Nueva

    Jersey: Princeton University Press.

    Willis, Paul1981 Learning to Labor: How Working Class Kids Get Working Class Jobs. Nueva York:

    Teachers College Press.