Banco Mundial. Ventajas y desventajas para sus miembros

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Banco Mundial, ventajas y desventajas para sus miembros Autor: Luis Gabriel Urquieta Introducción Una de las instituciones con mayor relevancia en temas como el desarrollo y el combate a la pobreza internacional es el Banco Mundial. Si bien la mayoría de las personas sabe que esta institución es uno de los principales baluartes de la economía global, poco se conoce sobre sus funciones y repercusión real (sea positiva o negativa). Esta polémica institución, pensada originalmente para reconstruir a las naciones afectadas por la Segunda Guerra Mundial, hoy en día tiene por finalidad disminuir la pobreza en el mundo a través del financiamiento de proyectos enfocados al “desarrollo” y al “crecimiento económico” en los países más desfavorecidos del orbe. Misión difícil, repleta de matices y de compleja comprobación. Por su génesis, el dominio decisivo que ostentan las naciones ricas, las recomendaciones neoliberales y las dificultades que llegan a tener las naciones para finiquitar su deuda, el Banco Mundial ha sumado detractores de todo tipo: ex-funcionarios de esta institución, académicos, políticos y organizaciones civiles, que aseguran que el BM es un ingenioso mecanismo neocolonialista que hace más dependientes y vulnerables a los países necesitados; debido a que los préstamos ofrecidos van acompañados, por lo general, de un catálogo de reformas estructurales tendientes a la privatización de servicios y la subsecuente apertura a empresas trasnacionales en busca de recursos naturales y lucro que, por lo general, termina por enriquecer más a los países desarrollados; por tal motivo, el Banco Mundial es visto como algo similar al caballo de Troya, aparenta, a través de sus préstamos, ser una institución relativamente generosa, cuando en realidad esconde un sofisticado esquema de endeudamiento y condicionamientos que terminan por perpetuar la relación

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Banco Mundial, ventajas y desventajas para sus miembros

Autor: Luis Gabriel Urquieta Introducción

Una de las instituciones con mayor relevancia en temas como el desarrollo y el

combate a la pobreza internacional es el Banco Mundial. Si bien la mayoría de las

personas sabe que esta institución es uno de los principales baluartes de la

economía global, poco se conoce sobre sus funciones y repercusión real (sea

positiva o negativa). Esta polémica institución, pensada originalmente para

reconstruir a las naciones afectadas por la Segunda Guerra Mundial, hoy en día

tiene por finalidad disminuir la pobreza en el mundo a través del financiamiento de

proyectos enfocados al “desarrollo” y al “crecimiento económico” en los países

más desfavorecidos del orbe. Misión difícil, repleta de matices y de compleja

comprobación. Por su génesis, el dominio decisivo que ostentan las naciones

ricas, las recomendaciones neoliberales y las dificultades que llegan a tener las

naciones para finiquitar su deuda, el Banco Mundial ha sumado detractores de

todo tipo: ex-funcionarios de esta institución, académicos, políticos y

organizaciones civiles, que aseguran que el BM es un ingenioso mecanismo

neocolonialista que hace más dependientes y vulnerables a los países

necesitados; debido a que los préstamos ofrecidos van acompañados, por lo

general, de un catálogo de reformas estructurales tendientes a la privatización de

servicios y la subsecuente apertura a empresas trasnacionales en busca de

recursos naturales y lucro que, por lo general, termina por enriquecer más a los

países desarrollados; por tal motivo, el Banco Mundial es visto como algo similar al

caballo de Troya, aparenta, a través de sus préstamos, ser una institución

relativamente generosa, cuando en realidad esconde un sofisticado esquema de

endeudamiento y condicionamientos que terminan por perpetuar la relación

centro-periferia que tanto ha criticado la Teoría de la Dependencia. Al final, el

dinero que se presta al sur, tendrá que volver al norte.

No pretendo hacer de este escrito un panfleto antiglobalizador. El Banco Mundial

no se puede juzgar en términos absolutos, no se trata de una institución

genuinamente bondadosa, pero tampoco representa una perversidad intrínseca.

A lo largo de su historia, como lo veremos en el siguiente trabajo, encontraremos

múltiples claroscuros, desde préstamos que realmente se traducen en beneficios

reales para millones de personas, pero también el impulso a proyectos y políticas

económicas altamente costosas ciertos sectores sociales y el medio ambiente.

Veremos cómo el Banco Mundial ha sido utilizado en varias ocasiones como un

instrumento de política exterior de las potencias económicas, en particular de su

principal gestor, Estados Unidos. Asimismo, conoceremos de manera sucinta las

instituciones que conforman al Banco Mundial, los postulados y los resultados que

ha obtenido.

Historia del Banco Mundial

Tras la caída de Berlín, perpetrada por las tropas de la Unión Soviética a inicios de

mayo de 1944, Alemania se vio obligada a rendirse de forma incondicional, hecho

que dio por finalizada la Segunda Guerra Mundial, al menos en el continente

europeo. Llegó la paz, pero las cicatrices que dejó el conflicto bélico sacudieron el

orden mundial. Las añejas potencias coloniales quedaron endeudas hasta el

cuello y su población se enfrentó a un insólito empobrecimiento; por ello resultaba

perentorio generar acuerdos y alianzas internacionales que permitiera sacar a flote

a una economía global desarticulada, con la finalidad de garantizar, en la medida

de lo posible, que las calamidades sufridas no se volvieran a repetir jamás.

Mientras transcurría el conflicto bélico, la imaginación de varios economistas ya

venía previendo la creación de un nuevo orden económico que pudiera ser

implementado en la posguerra. En Estados Unidos, la administración del

presidente Franklin Delano Roosevelt comenzó a preocuparse por generar las

condiciones necesarias para que la economía global no detonara en una crisis

semejante a la acaecida en 1929, cuando la sobreproducción de los

estadounidenses durante la primera guerra mundial encontró en la paz una

desaceleración que desestabilizó las finanzas. Se planteó, ante tal escenario, el

nacimiento de instituciones públicas multilaterales que, ante el carácter aleatorio

de la inversión internacional privada, proveyeran capitales públicos y pudieran así

garantizar el equilibrio económico entre las naciones. En 1941, el economista

estadounidense Harry White, comenzó la elaboración de un plan relativo a la

creación de dos grandes instituciones multilaterales. Para mayo de 1942, el

ejecutivo estadounidense recibió un primer proyecto, el cual vislumbraba la

creación del futuro Fondo Monetario Internacional y un banco internacional para

proveer capitales a las naciones que necesitarían hacerse de recursos al finalizar

la guerra (Banco Mundial). White precisaba:

«Dos agencias separadas, aunque relacionadas, serían mejor que una sola,

pues una agencia que se ocupe de ambas tareas tendría demasiado poder

y se correría el riesgo de cometer demasiados grandes errores de juicio.» 1

El planteamiento de White precisaba que el fondo y el banco deberían incluir a

todos los países, comenzando por los aliados. Y como Estados Unidos se

encumbraba como la nación más acaudalada del orbe, no dudó en proponer que

el peso relativo de cada nación miembro estaría en función a su peso económico.

El fondo debería asegurar la estabilidad de los tipos de cambio y así promover el

comercio internacional. El nuevo banco, por su parte, debería aportar capitales

para la reconstrucción de los países afectados por la guerra y promover el

progreso de las naciones atrasadas. Este proyecto, tal como lo concibió Harry

White, fue revisado y tras ciertas modificaciones se transformó en la bandera

estadounidense en las negociaciones que se organizarían una vez finalizada la

guerra.

Con la esperada rendición alemana a inicios de 1944, prevalecieron dos modelos

económicos y políticos que dividieron al mundo, dos liderazgos; por un lado la

Unión Soviética impuso su hegemonía sobre Europa del este, a través del

vigoroso y altamente costoso avance de sus tropas sobre los nazis. Y por otro

lado, los Estados Unidos, que participaron tardíamente en el conflicto bélico y no

padecieron batallas en su propio territorio, pasaron a ser los mayores acreedores

del mundo debido a todo tipo de préstamos hechos a los combatientes. En pocas

palabras, el final de la guerra generó dos vías políticas que encontrarían profundas

diferencias en los años ulteriores: el capitalismo y el socialismo.

Durante la guerra, tanto soviéticos como estadounidenses fueron aliados, por lo

que establecieron un diálogo constructivo en varios rubros, incluso en lo

económico. Del primero al 22 de julio de 1944, las naciones vencedoras se

reunieron en la denominada Conferencia Monetaria y Financiera de las Naciones 1 Robert W. Oliver, International Economic Cooperation and the World Bank, MacMillan Press, Londres, 1975, pp. 111-112.

Unidas, llevada a cabo en el complejo hotelero de Bretton Woods, en New

Hamphsire, Estados Unidos. Desde ahí emanaron las nuevas reglas de la

economía global (al menos para las naciones capitalistas) y la institución que

analizaremos en el presente trabajo: El Banco Mundial.

Los soviéticos participaron en la conferencia, y de las negociaciones surgidas

entre Washington, Moscú y Londres, la URSS ocupó la tercera posición. El debate

fue dominado por Gran Betaña, potencia económica que antes de la guerra era

considerada la nación más rica y poderosa del orbe, por lo que su voz tenía

profundo eco; no obstante, mucho había cambiado durante el lustro que duró la

guerra, y Estados Unidos había sobrepasado ampliamente a los británicos; es

más, los tenían a sus pies por la gigantesca deuda que éstos habían requerido

para combatir a los nazis. Gran Bretaña necesitaba de Estados Unidos, y estos

últimos aprovecharon la situación para imponer las reglas del juego, colocar su

moneda, el dólar, como la divisa internacional y diseñar, casi de manera unilateral

al Banco Mundial basado en la propuesta de White.

Vale la pena, como precedente valioso, retomar la propuesta británica, la cual fue

planteada por uno de los economistas más reconocidos del siglo XX, John

Maynard Keynes, quien instaba la creación de una institución internacional de

crédito llamada “Unión Internacional de Compensaciones”, capaz de proveer

adelantos en cuenta corriente para corregir los desequilibrios de las balanzas de

pagos de los países miembros. Keynes preveía que se podía otorgar a cada país

hasta un 75 por ciento del valor promedio de sus importaciones y exportaciones

entre 1936 y 1939. Esto créditos se harían mediante una moneda internacional

llamada bancor, la cual no se fijaría exclusivamente en el oro, sino en cerca de 30

productos básicos (petróleo, oro, etc.), mecanismo que aseguraría la estabilidad

en sus precios; además, todas las monedas nacionales se apegarían a esa

unidad. La relación entre los bancos centrales de los países miembros y la Unión

Internacional de Compensaciones sería la misma que entre los bancos nacionales

y sus respectivos bancos centrales. Keynes buscaba igualar créditos y débitos.

Ningún crédito podría excluirse del sistema de compensaciones, sino sólo

transferirse dentro de él, por tal motivo la Unión nunca tendría dificultades para

pagar los cheques que se emitirían a su nombre.2

Estados Unidos rechazó la propuesta de Keynes y presentó el plan de White, que

como hemos visto, preveía la creación de dos instituciones: el Fondo Internacional

de Estabilización y un Banco para la Reconstrucción de las Naciones Unidas y

Asociadas (después denominado Banco Internacional de Reconstrucción y

Fomento, y llamado genéricamente Banco Mundial). Mientras el Banco proveería

el capital para la reconstrucción de posguerra, el Fondo pasaría a ocuparse de los

problemas de los países miembros que enfrentaban crisis de divisas y

desequilibrios en su balanza de pagos.

A diferencia de la Unión Internacional de Compensaciones, semejante a un banco

que ofrecía giros de capital entre los países miembros, el Fondo y el Banco

Mundial propuestos por White sí exigirían a los miembros aportes en oro,

monedas nacionales y títulos valores generadores de intereses, de acuerdo con

cuotas asignadas. El Fondo sólo prestaría divisas a miembros con problemas de

balanza de pagos en proporción a sus contribuciones o cuotas. Durante el debate,

Estados Unidos promovió incansablemente la aceptación de estas propuestas y

demostró escasa o ninguna disposición a considerar otras alternativas. Los

británicos no pudieron sobreponerse a la postura de Washington, por lo que

Keynes abandonó su propio plan y se centró en tratar de influir en el Plan White,

sin embargo su eco no generó grandes cambios. Finalmente, la moneda estaba

echada, Estados Unidos se impuso y, como era de esperarse, Moscú no ratificó

los acuerdos finales y en 1947 denunció en la Asamblea de las Naciones Unidas a

las instituciones de Bretton Woods eran “filiales de Wall Street”.3 Para la

2Aguilera Manuela, Crecimiento Económico y Distribución Del Ingreso: Balance Teórico y Evidencia Empírica, UNAM, México D.F. 1998, p.p. 384-386

3 Toussaint, Eric, Banco Mundial: El Golpe de Estado Permanente, Editorial El Viejo Topo, 2007, p. 30.

representación soviética, el Banco Mundial estaba subordinado a unos objetivos

políticos que lo convierten en un instrumento de una gran potencia.

El punto más criticado fue la repartición de los votos, donde fue evidente la

dominación de Estados Unidos y de Gran Bretaña sobre ambas instituciones. Para

1947, con la salida de la Unión Soviética, los dos países totalizaban casi el 50 %

de los votos (34,23 % Estados Unidos y 14,17 % el Reino Unido). En conjunto, el

continente africano no disponía más que de un 2,34 %, ya que sólo tres países

africanos tenían derecho de voto, pues el resto estaba aún bajo dominio colonial.

Estos tres países eran Egipto (0,7 % de votos), la Unión Surafricana (1,34 %),

gobernada por un gobierno blanco racista y Etiopía (0,30 %). Asia Meridional y

Oriental, con sólo tres países miembros, tenía un 11,66 % de votos: la China (6,68

%), Filipinas, colonia estadounidense hasta 1946 (0,43 %), y la India, que se

independizó de la corona británica en 1947, (4,45 %). Europa Central y del Este

tenían un 3,90 % de votos: Polonia y Checoslovaquia (1,6 % cada uno) y la

Yugoslavia de Tito (0,7 %). El Oriente Medio disponía de un 2,24 % de votos:

Turquía (0,73 %), Líbano (0,32 %), Irán (0,52 %), Siria (0,34 %), Iraq (0,33 %).

Latinoamérica y el Caribe, región considerada como firme aliada de Estados

Unidos, tenía en total un 8,38 % de votos, repartidos entre 18 países: Bolivia (0,38

%), Brasil (1,39 %), Chile (0,64 %), Colombia (0,64 %), Costa Rica (0, 29 %), Cuba

(0,64 %), República Dominicana (0,29 %), Ecuador (0,30 %), El Salvador (0,28 %),

Guatemala (0,29 %), Honduras (0,28 %), México (0,96 %), Nicaragua (0,28 %),

Panamá (0,27 %), Paraguay (0,28 %), Perú (0,45 %), Uruguay (0,38 %) y

Venezuela (0,38) 4

El control de la conferencia por Estados Unidos quedó claro en la determinación

de las cuotas, porque éstas determinaban el poder de votación y, por lo tanto, el

control sobre las decisiones del Banco. Se estableció un sistema de cálculo

económico-matemático que daba una aparente legitimidad a las designaciones.

De hecho, Estados Unidos es la única nación que se adjudicó y sigue

manteniendo un derecho a veto, ya que en 1947 quedó estipulada la suma del

4ibidem, p.30.

80% del voto de los miembros para realizar cambios en los estatutos. Aún con el

ingreso de muchísimos países al Banco Mundial en los años sesenta y setenta,

situación que redujo necesariamente el porcentaje de las contribuciones de

Estados Unidos, los norteamericanos han sabido mantener dicho derecho. En

1987, Japón solicitó un aumento significativo en sus contribuciones y su

porcentaje de voto, lo cual le fue concedido en una serie de negociaciones que

terminaron por aumentar el porcentaje de la mayoría calificada necesaria al 85%

de la votación de los miembros, lo cual aseguró la preeminencia estadounidense,

que actualmente cuenta con el 15,56% del porcentaje en las cuotas.

Como era de esperarse, el Banco Mundial terminó por sentar su base en

Washington, D.C. y su presidente siempre ha sido estadounidense, ya que se

acordó que la nación que tuviera mayores contribuciones ocuparía dicho cargo.

A pesar de la preponderancia de Estados Unidos en la creación del sistema

Bretton Woods, vale la pena mencionar que la propuesta de White recibió duras

críticas internas provenientes de Wall Street, por considerar que sus instituciones

eran demasiado “intervencionistas” y “públicas”. Incluso, en el auge de la llamada

cacería de brujas, el mismo White fue acusado de ser un espía soviético, si bien

nunca se le sentenció, compareció ante el Comité de Actividades Antiamericanas

en 1948 y víctima de una agresiva campaña en su contra, falleció ese mismo año

de un ataque al corazón. En 1953, se le inculpó póstumamente como un espía

comunista5

Como lo hemos visto, el Banco Mundial, cuyo nombre original es Banco

Internacional de Reconstrucción y Fomento, tuvo y sigue teniendo, como uno de

sus principales objetivos, la reconstrucción suscitada tras conflictos bélicos. Por

tales motivos, su primer préstamo fue otorgado a Francia en 1947, sumando un

monto de 250 millones de dólares.

Posteriormente, en los sesentas, con el paulatino desmoronamiento de los

imperios coloniales europeos sobre casi toda África y bastas regiones de Asia, la

5 Ibidem p. 37.

ONU lanzó el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, donde el enfoque

del Banco Mundial pasó a ser el de promotor de los países pobres hacia el

“desarrollo”, con la finalidad de incentivar su crecimiento económico. En un

principio, el Banco se centró principalmente en proyectos de infraestructura de

largo plazo: construcción de carreteras, aeropuertos, y centrales eléctricas.

Ante la dificultad de acceder a los préstamos, los países en vías de desarrollo

promovieron la apertura de un nuevo órgano ante la ONU que se basara en el

principio de “una nación, un voto”, que pudiera facilitar el acceso a los préstamos

enfocados a sus industrias, no obstante los países desarrollados se opusieron y

en contrapartida plantearon la creación de la Asociación Internacional de Desarrollo, rama del Banco Mundial que surgió en 1960 para proporcionar

créditos sin intereses a los países más pobres, principalmente enfocados a

servicios básicos, como son educación, vivienda, agua potable, etc.6 No obstante,

Eric Toussaint, presidente del Comité para la Anulación de la Deuda del Tercer

Mundo (red internacional basada en Liège, Bélgica), asegura que detrás de estos

préstamos existen las diligencias previas de los países donantes para asegurar el

retorno del capital a través de acuerdos comerciales beneficiosos, compras.7

En 1956, se concibió la creación de la Corporación Financiera Internacional (CFI), perteneciente al Banco Mundial, cuyo objetivo ha sido facilitar préstamos al

sector privado de las naciones subdesarrolladas. Los socios comerciales invierten

capital por medio de empresas privadas en los países en desarrollo. Dentro de sus

funciones se encuentra el otorgar préstamos a largo plazo, así como dar garantías

y servicios de gestión de riesgos para clientes e inversionistas.

Para 1966, se creó un nuevo organismo ligado al Banco Mundial, el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones, cuyo principal

objetivo es brindar seguridad jurídica a los flujos de inversión internacionales. La

principal crítica a esta Institución es que, mientras las empresas pueden reclamar

o asegurar sus inversiones, las comunidades indígenas, campesinas y población

6 Ibidem p. 46 7 Ibidem 50

en general no tiene una aún una vía jurídica para reclamar los daños que causan

los proyectos del Banco Mundial. México no es parte de esta institución arbitral.

A partir de los años setenta, Estados Unidos bloqueó varios préstamos destinados

a promover industrias de países emergentes que compitieran con las suyas. Instó

a reducir drásticamente el apoyo a la industria siderúrgica de la India y Paquistán,

actitud que repitió en préstamos destinados a Brasil y México en el mismo sector.

También ha sido una actitud reiterativa, en materia de petróleo, dar créditos a la

perforación para obtener el crudo, pero negarlo si se trata de refinarlo.

A finales de los ochenta los criterios comenzaron a enfocarse en el riguroso

análisis de la estabilidad macroeconómica de cada país y su apertura al comercio

internacional. Bajo este criterio, tanto el Banco Mundial y el Fondo Monetaria

Internacional han condicionado su “apoyo” a países pobres a realizar ajustes

estructurales o recetas que eufemísticamente buscan dinamizar la economía de

las naciones al liberalizar el mercado y permitir de este modo la intervención más

acentuada de naciones ricas en el comercio nacional. Como ejemplo de esta

tendencia se encuentra el denominado Consenso de Washington en 1989, dictado

para América Latina, por el economista estadounidense John Williamson, el cual

se basaba en 10 medidas claves que debían de asumir las naciones que buscaran

acceder a los préstamos:

• Disciplina presupuestaria (los presupuestos públicos no pueden tener

déficit)

• Reordenamiento de las prioridades del gasto público de áreas como

subsidios (especialmente subsidios indiscriminados) hacia sectores que

favorezcan el crecimiento, y servicios para los pobres, como educación,

salud pública, investigación e infraestructuras.

• Reforma Impositiva (buscar bases imponibles amplias y tipos marginales

moderados)

• Liberalización financiera, especialmente de los tipos de interés

• Un tipo de cambio de la moneda competitivo

• Liberalización del comercio internacional (trade liberalization) (disminución

de barreras aduaneras)

• Eliminación de las barreras a las inversiones extranjeras directas

• Privatización (venta de las empresas públicas y de los monopolios

estatales)

• Desregulación de los mercados

• Protección de la propiedad privada.

Estas medidas exigidas por los organismos financieros internacionales,

promueven las bases del neoliberalismo, esquema que busca posicionar al

llamado Estado Mínimo, que implica la drástica reducción de la intervención

estatal en materia económica, para defender al libre mercado como mejor garante

del equilibrio institucional y el crecimiento económico. No obstante los resultados

han sido magros en materia de reducción de la pobreza, por el contrario, estas

medidas han sido frecuentemente acusadas de generar mayor polarización social

y desprotección a los pequeños productores que, al competir con los grandes

monopolios comerciales internacionales han sido marginalizados del esquema de

mercado.

En 1988 se creó una nueva institución perteneciente al Banco Mundial, el

Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones que tiene por finalidad

facilitar la inversión de capitales privados con fines productivos en países en

desarrollo, encargándose de otorgar garantía a los inversionistas contra pérdidas

ocasionadas por riesgos no comerciales como expropiación, inconvertibilidad de

moneda, transferencias cambiarias, guerra civil o disturbios. Asimismo,

proporciona asistencia técnica para ayudar a los países a difundir información

sobre oportunidades de inversión.

A partir de que la ONU estableció los llamados Objetivos de Desarrollo del Milenio

en el año 2000 para materializarse en el 2015, el Banco Mundial ha dado prioridad

a los rubros marcados en dichos objetivos: Erradicar la pobreza extrema y el

hambre, lograr la enseñanza primaria universal, promover la igualdad entre los

géneros y la autonomía de la mujer, reducir la mortalidad infantil, mejorar la salud

materna, combatir el VIH/SIDA, el paludismo y otras enfermedades, garantizar el

sustento del medio ambiente y fomentar una asociación mundial para el desarrollo.

Más adelante, nos centraremos en cómo el Banco Mundial ha participado

concretamente en el tema de la educación.

Estructura actual del Banco Mundial

En la actualidad, el Banco está constituido por dos agencias: El Banco

Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF) y la Asociación Internacional

de Fomento (AID). Asimismo, el Banco Mundial, como ya lo hemos visto, tiene

como instituciones afiliadas a la Corporación Financiera Internacional, el

Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones y el Centro Internacional de

Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones.

Si bien el cuartel central del Banco Mundial se encuentra en Washington, la

institución cuenta con representación en cerca de 100 países. Actualmente el

Banco se encuentra constituido por 188 miembros.

En teoría los países miembros dirigen al Banco Mundial a través de la Junta de Gobernadores, la cual se compone de un gobernador por cada uno de los 188

países miembros. La Junta se reúne anualmente con el fin de analizar las

operaciones y las políticas del Banco, entre sus funciones establecidas en el

Convenio Constitutivo del BIRD, Art. 5, Sección 2, destacan:

a) admitir nuevos miembros y determinar las condiciones para su admisión;

b) aumentar o disminuir el capital por acciones del Banco;

c) suspender a un miembro;

d) decidir apelaciones contra interpretaciones de este Convenio dadas por

los rectores Ejecutivos;

e) celebrar acuerdos de cooperación con otras organizaciones

internacionales (que no fueren acuerdos informales de carácter transitorio

administrativo);

f) decidir la suspensión permanente de las operaciones del Banco y la

distribución de sus activos;

g) determinar la distribución de las entradas netas del Banco.

Aunque la Junta de Gobernadores, con representación de todos los miembros del

Banco es un órgano aparentemente democrático, como lo hemos visto, en

realidad cada miembro tiene un valor de voto diferenciado, correspondiente al

número de acciones que posee en el Banco.

Si bien la Junta de Gobernadores es toral en la toma de decisiones estructurales

del Banco Mundial, la mayor parte de sus labores y la responsabilidad de dirigir la

organización, corresponde a 25 Directores Ejecutivos, quienes trabajan de tiempo

completo para el Banco y gobiernan la organización. Los cinco miembros con el

mayor número de acciones (actualmente Estados Unidos, Japón, Alemania,

Francia y Reino Unido) designan a cinco directores ejecutivos. China, la

Federación de Rusia y Arabia Saudita también eligen su propio director ejecutivo.

Los demás son nombrados y votados pos los demás miembros.

Asimismo, el Banco está bajo la dirección de un Presidente, tres Directores

Gerentes y más de 20 Vicepresidentes, quienes supervisan las principales

unidades operacionales del Banco, tanto en su sede en Washington como en las

más de 100 oficinas geográficas. El presidente dirige al Directorio Ejecutivo, pero

no tiene derecho a voto. Dentro de sus funciones se encuentra conducir los

negocios, organizar, nombrar y destituir a los funcionarios y empleados del Banco.

Es, en pocas palabras, el jefe de personal de la institución. Actualmente la

presidencia está en manos del coreano nacionalizado estadounidense, Jim Yong

Kim.

Asimismo existe un Consejo Consultivo de no menos de siete personas

nombradas por la Junta de Gobernadores que incluya representantes de los

intereses bancarios, comerciales, industriales, agrícolas y del trabajo, y que

represente el mayor número de países posible. En aquellas actividades para las

cuales existan organizaciones internacionales especializadas, los miembros del

Consejo que representen tales actividades deberán ser seleccionados de acuerdo

con esas organizaciones. El Consejo asesorará al Banco en asuntos de su política

general. El Consejo se reunirá una vez al año y cada vez que el Banco lo requiera.

Beneficios de los miembros del Banco Mundial

Aunque la reducción de la pobreza de los países pobres sigue siendo el principal

objetivo del Banco Mundial, éste está lejos de ser una institución caritativa. Por el

contrario, es una Institución Financiera que lucra con los intereses de los

préstamos que realiza a las naciones subdesarrolladas.

No podemos decir que el Banco Mundial represente un beneficio igual para todos

los miembros, en principio porque su labor está destinada al apoyo a países que

necesitan combatir la pobreza, por tal motivo, podemos decir que los miembros se

dividen en tres categorías: países desarrollado, países de ingreso medio o en vías

de desarrollo (como México) y países pobres. Cada grupo tiene beneficios

diferentes. Los primeros, se benefician del Banco Mundial a través del rendimiento

de sus acciones, además con su voto mayoritario, pueden utilizar el Banco

Mundial como un herramienta de negociación en su política exterior, de la cual,

como veremos, se pueden obtener apertura de mercados que permiten

condiciones comerciales favorables. El caso de los países en vías de desarrollo y

las naciones pobres es diferente, si bien también pueden beneficiarse del

rendimiento de sus acciones, son los beneficiarios naturales de los préstamos y

programas que realiza esta institución.

El Banco Mundial ofrece los siguientes tipos de préstamos para sus miembros:

1) Préstamos para proyectos: este tipo de préstamos se otorga para desarrollar un

proyecto en específico como carreteras, puentes, presas infraestructura en

general.

2) Préstamos sectoriales, vía BIRF y AIF: estos préstamos gobiernan todo un

sector de la economía de un país, es decir, energía, agricultura, minería, etc.

3) Préstamos Institucionales: éstos sirven para la reorganización de instituciones

gubernamentales con el fin de orientar sus políticas hacia el libre comercio y

obtener el acceso sin restricciones, de las empresas transnacionales, a los

mercados y regiones.

4) Préstamos de ajuste estructural: este tipo de préstamos, fueron creados

teóricamente para aliviar la crisis de la deuda externa con el fin de convertir los

recursos económicos nacionales en producción para la exportación y fomentar la

entrada de las empresas transnacionales en economías restringidas. Los países

del sur han experimentado estos ajustes y las consecuentes medidas de

austeridad.

5) Préstamos a Fondo Perdido: Este tipo de préstamos, fueron creados como

modo de cambio monetario sin retorno, un prestamista no recibe de nuevo ese

dinero prestado.

La cantidad de dinero que presta el Banco Mundial varía año con año. En 2009, la

crisis financiera internacional, permitió que se dieran préstamos record

equivalentes a 72 mil millones de dólares a gobiernos y empresas. 8 Cuando se

realizan dichos préstamos, el Banco asume la tarea de analizar con concreción

qué tipo de proyecto o programa que se desea realizar, asesora, observa la

viabilidad económica y, por lo general, tiende a hacer recomendaciones o

condicionamientos para realizar el préstamo, lo cual pueden ser desde pequeños

actos protocolarios hasta reformas estructurales, tendientes a adaptar a las

naciones a estabilizar su macroeconomía, controlar su inflación, liberar el mercado

y así, de paso, facilitar el acceso a la inversión del capital transnacional de

empresas que puedan dinamizar el flujo de capital que permita generar más

empleos que terminen por reducir los índices de pobreza. Parece un círculo

virtuoso, pero no siempre resulta adecuado. Esta intervención en las políticas

económicas de los Estados han sido constantemente criticadas. Joseph Stiglitz,

premio Nobel de Economía en el 2002, ex vicepresidente del Banco Mundial,

comenta la siguiente a respecto:

8 La Jornada “Prestó el Banco Mundial 72 mil mdd a países en desarrollo” 2 de julio de 2010, se puede visitar en: http://www.jornada.unam.mx/2010/07/02/opinion/024n2eco

“Es razonable que el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional no

presten a países sin un buen esquema macro. Si el déficit es grandes y la

inflación elevada, existe el riesgo de que no se gaste bien.”9

Como ya lo mencionamos en este trabajo, el Banco Mundial promueve los

Objetivos del Milenio de la ONU, por lo general a través de la Asociación

Internacional de Fomento, entre sus principales actividades destaca su lucha

contra el VIH/SIDA. Según los mismos datos del Banco Mundial, son la institución

que otorga más financiamiento a largo plazo para programas relativos al VIH/SIDA

en todo el mundo. Actualmente, los compromisos del Banco relacionados con el

VIH/SIDA superan los US$1.300 millones, y la mitad de esa suma se destina a

África al sur del Sahara. 10

Las acciones realizadas pueden ser muy variadas. Actualmente el Banco Mundial

participa en más de 1.800 proyectos entre ellos destaca el ofrecimiento de

microcrédito en Bosnia y Herzegovina, la promoción de concienciación sobre el

SIDA en las comunidades de Guinea, el apoyo a la educación de las niñas en

Bangladesh, la mejoría en los servicios de salud en México, la ayuda en la

reconstrucción de Timor Oriental a partir de su recién independencia de Indonesia,

entre muchos otros.

9 Stiglitz, Joseph; El Malaestar de la Globalización, Taurus, Santa Fé de Bogotá, 2002, p. 54 10 Página oficial del Banco Mundial, veáse en: http://web.worldbank.org/WBSITE/EXTERNAL/BANCOMUNDIAL/QUIENESSOMOS/0,,contentMDK:20142933~menuPK:60000127~pagePK:64057863~piPK:242674~theSitePK:263702,00.html

Educación

Desde 1963 hasta la fecha, según afirma el mismo Banco Mundial, éste se ha

consolidado como el mayor proveedor externo de fondos a la educación, ya que

ésta ha sido considerada una de las mejores iniciativas para reducir la pobreza y

formar ciudadanas capaces de competir en el mundo globalizado.

El Banco Mundial afirma que la educación empodera a las personas y construye

naciones. En su página oficial, afirma:

Permite a las personas leer, razonar y elegir sabiamente.

Mejora la productividad individual, los ingresos y la calidad de vida;

estudios muestran que cada año de escolaridad adicional se traduce en

un aumento promedio del 10% en los ingresos de las personas.

Disminuye considerablemente la mala salud entre las mujeres: se ha

demostrado que cada año adicional de escuela reduce la fecundidad en

un 10%; las mujeres más educadas tienen bebés más sanos y con

menor incidencia de mortalidad infantil. Además, las niñas y niños con

mejor educación exhiben tasas más bajas de infección de VIH/SIDA.

Es clave para la creación mano de obra bien capacitada y flexible.

Es fundamental para crear, aplicar y difundir conocimientos e incrementar

las perspectivas de un país en materia de innovación, de conseguir una

ventaja competitiva y de atraer la afluencia de inversión extranjera.

El apoyo a la educación se redefinió y tuvo un nuevo impulso con los

denominados Objetivos de Desarrollo del Milenio que planteó la ONU en el 2000,

donde uno de los pilares es el acceso a la educación primaria de todos los niños

del mundo antes del 2015. Para 2002, se creó la Iniciativa Vía Rápida (IVR), la

cual alienta a los países de bajos ingresos a elaborar planes nacionales de

educación y dedicarles mayores recursos políticos y financieros, lo cual se está

llevando a cabo a través de donaciones de 36 países ricos. Dichas donaciones

son administradas por el Banco Mundial, la UNESCO y otros organismos de las

Naciones Unidas.

Países de bajos y medianos ingresos han implementado numerosos proyectos

enfocados a la educación financiados por el Banco Mundial. Las condiciones de

estos préstamos varían según el proyecto que el país solicitante desee

implementar. En México, por ejemplo, en marzo del 2012, el Banco Mundial

aprobó un crédito de 300 millones de dólares para apoyar los esfuerzos del

gobierno por mejorar el sistema de educación media superior y aumentar los

incentivos para que los estudiantes preuniversitarios se gradúen, ya que de los 4.5

millones de estudiantes en este nivel, sólo el 60% se gradúa. 11

En el caso de países mucho más pobres que México, como Haití, el Banco

Mundial evalúa las solicitudes y, en ciertos casos, concede préstamos sin ningún

tipo de interés, e incluso donaciones. Por ejemplo, los haitianos, recibieron en

2006, 25 millones de dólares como donación de la Asociación Internacional de

Fomento (AIF) para financiar la “Estrategia de educación para todos de Haití”. El

objetivo de dicho proyecto es brindar educación primaria a todos los niños

haitianos y capacitar maestros para lograrlo.12

Asimismo, el Banco Mundial genera diagnósticos, asesorías y recomendaciones

en materia educativa. Asegura la pedagoga ecuatoriana Rosa María Torres,

“El financiamiento no es el único ni el más importante papel del Banco

Mundial en educación, su principal función, es la de cumplir una función

orientadora. De ese modo se ha convertido en la principal consultora

11 Página del Centro de Información de Naciones Unidas “Banco Mundial otorga crédito para apoyar educación media en México” puede verse en: http://www.cinu.mx/noticias/mexico/banco-mundial-otorga-credito-p/ 12 Página oficial del Banco Mundial “Nuestro Objetivo, Educación para todos en Haití” http://web.worldbank.org/WBSITE/EXTERNAL/COUNTRIES/LACEXT/0,,contentMDK:21896738~pagePK:146736~piPK:146830~theSitePK:258554,00.html#About,

educativa para los países en desarrollo y en una fuente y referente

importante de investigación educativa a nivel mundial.” 13

El Banco Mundial reconoce cuatro desafíos fundamentales: acceso, equidad,

calidad y reducción de la brecha entre la reforma educativa y la reforma de las

estructuras económicas.

Como política, estimula a los países a concentrar sus recursos públicos en la

educación básica, mejorar la calidad y eficiencia de la educación como eje de la

reforma educativa (este es considerado el desafío más importante y difícil de

lograr). Esto se verifica a través de examenes.

El Banco Mundial es resultado de la presencia de determinados insumos. Para el

caso de la escuela primaria considera nueve: bibliotecas, tiempo de instrucción,

tareas en casa, libros de texto, conocimientos del profesor, experiencia del

profesor, laboratorios, salario del profesor, tamaño de la clase.

Asimismo, el Banco Mundial promueve la descentralización de instituciones

escolares autónomas y responsables por sus resultados. Para tales fines, se

recomienda hacer uso de los impuestos del gobierno central y los gobiernos

locales; compartir los costos con las comunidades locales; asignar donaciones a

las comunidades y las escuelas sin establecer los requisitos para el uso de dichas

donaciones. También se promueve el impulso de la participación del sector

privado y los organismos no-gubernamentales (ONG) en el terreno educativo tanto

a nivel de las decisiones como de la ejecución. Por ello se propone una

redefinición del papel tradicional del Estado respecto de la educación, una

redefinición de los patrones y prioridades del gasto público, y una mayor

contribución de las familias y comunidades al gasto en educación.

13 Torres, Rosa María, “¿Mejorar la calidad de la educación básica? Las estrategias del Banco Mundial”, Catedra Unesco-UNAM, puede visualizarse el texto original en: http://catedradh.unesco.unam.mx/catedradh2007/SeguridadHumana/prospectiva%206/revista/numero%203/estpros/resenas/laura.htm

Críticas

El Banco Mundial tiene un vicio de origen, no fue preconcebido a través de un

diálogo multipolar, sino que, en su época, fue engendrado y, podríamos decir

impuesto, por la nación dominante: Estados Unidos. A lo largo de la historia de

esta institución, se ha observado cómo las decisiones del Banco han estado

directamente ligadas a la conveniencia de los intereses de Washington, un claro

ejemplo se dio después de la Revolución Cubana, cuando en 1961 se decidió dar

un amplio préstamo a Nicaragua, nación que se encontraba bajo la dictadura de

Luis Anastasio Somoza. Inmediatamente después de los préstamos tropas

estadounidenses se instalaron en tierra nicaragüense para posteriormente atacar

Cuba.14 Asimismo, en Chile, cuando Salvador Allende llegó al poder en 1970,

prestamos que estaban en curso fueron suspendidos debido a la expropiación de

la industria del cobre, la cual lastimaba los intereses de empresas

estadounidenses. Asimismo, a partir de los años setenta, Estados Unidos bloqueó

varios préstamos destinados a promover industrias de países emergentes que

compitieran con las suyas. Instó a reducir drásticamente el apoyo a la industria

siderúrgica de la India y Paquistán, actitud que repitió en préstamos destinados a

Brasil y México en el mismo sector. También ha sido una actitud reiterativa, en

materia de petróleo, dar créditos a la perforación para obtener el crudo, pero

negarlo si se trata de refinarlo. En pocas palabras, el Banco Mundial opera como

una pieza importante de la política exterior estadounidense en la defensa de sus

propios privilegios.

Aunque uno de los principales estatutos del Banco Mundial es la imparcialidad, la

institución ha sido muy criticada por su apoyo a gobiernos dictatoriales en Chile,

Brasil, Rumania y el Congo (por citar algunos ejemplos).Este fenómeno ha

suscitado el debate jurídico sobre la ilegitimidad de las deudas que han contraído

varios Estado. A este fenómeno se le llama deuda odiosa, deuda execrable o

deuda ilegítima que en la teoría jurídica del Derecho internacional sostiene que la

deuda externa de un gobierno contraída, creada y utilizada contra los intereses de

14 Toussain, Op. Cit pag. 47

los ciudadanos del país, no tiene por qué ser pagada y por lo tanto no debería ser

exigida su devolución, ya que los prestatarios habrían actuado de mala fe, a

sabiendas de la ilegitimidad del régimen, y por lo tanto los contratos hechos con

estos regímenes quedarían anulados. Esta es una de las posturas más citadas por

el Comité para la Anulación de la Deuda del Tercer Mundo (CADTM).

Por otro lado, el Banco Mundial ha apoyado proyectos muy controversiales por su

notable impacto ambiental, los cuales han generado desplazamientos y mayor

empobrecimiento de comunidades locales, así como también se le acusa de

reubicar industrias contaminantes de países ricos hacia naciones pobres. Casos

como el apoyo al proyecto de la presa Sardar Sarovar en la India, altamente

criticado por el traslado forzado de cerca de 320 mil indios, generaron que en la

India (nación que ha recibido del Banco Mundial más préstamos que ninguna otra,

con cerca 65.7 mil millones) se propusiera la creación de un tribunal

independiente que pudiera controlar las acciones del Banco Mundial en aquel

país, ya que no hay institución en el mundo que le obligue a rendir cuentas. Más

aún cuando los préstamos otorgados representan una flagrante violación de

derecho humanos u actos ecocidas.15

En el mismo sentido, la corrupción interna del Banco Mundial no ha sido

penalizada de forma ejemplar. El caso más vergonzoso y conocido se llevó a cabo

en 2007, cuando el presidente de la institución, Paul Wolfowitz fue ventaneado por

conceder salarios excéntricos a su novia, los cuales rebasaban por mucho los

estatutos del propio Banco. Aunque Wolfowitz fue obligado a dimitir, no se le juzgó

ni penalizó una vez que abandonó el cargo.

Dichas críticas han suscitado que jefes de Estado manifiesten públicamente su

descontento con el funcionamiento del Banco Mundial, e incluso, en el caso de

Venezuela, se ha amenazado con abandonarlo de una vez por todas. A mediados

de abril del 2007, Hugo Chávez anunció el pago anticipado de la deuda que

15 Nadal Alejandro, India: tribunal para el Banco Mundial, artículo del periódico La Jornada, 1 de agosto 2007, se puede visualizar en la página: http://www.jornada.unam.mx/2007/08/01/index.php?section=opinion&article=023a1eco

mantenía con el Banco Mundial, y su ministro de Finanzas, Rodrigo Cabezas, se

despidió de la siguiente manera:

"Señores del Fondo Monetario Internacional, señores del Banco Mundial:

chao con ustedes. Venezuela es libre (...) y gracias a Dios, ni los

venezolanos de hoy ni los niños por nacer tenemos ya un solo centavo de

deuda con esos organismos (...) dominados por halcones

estadounidenses"16

A pesar de las críticas, el Banco Mundial sigue teniendo la preeminencia mundial

en la otorgación de créditos bajos a países que difícilmente obtendrían préstamos

en otras instituciones de crédito. Sin embargo en América Latina, paralelamente

se han desarrollado Instituciones con finalidades similares, es el caso del Banco

Interamericano de Desarrollo y el Banco del Sur, cuyas operaciones son

sumamente recientes, iniciaron el 26 de septiembre del 2009.

16 Diario El Mundo: Hugo Chávez anuncia la salida de Venezuela del Banco Mundial y el FMI, 01-marzo-2007. Se puede visualizar en la página: http://www.elmundo.es/elmundo/2007/05/01/internacional/1177983208.html

Conclusión

A casi 70 años de la concepción del Banco Mundial, la situación global ha

cambiado considerablemente, quizá no mucho, pero lo suficiente como para

realizar ciertos replanteamientos. Si bien la mayoría de las ex colonias y países

pobres que existían en 1944 no han conseguido, en la mayoría de los casos,

superar sus condiciones de pobreza y hoy en día persiste una clara diferencia

entre los países del norte y del sur. Podemos afirmar que poco a poco la

hegemonía estadounidense ha venido cediendo ante una realidad internacional

multipolar, donde la Unión Europea, China, Medio Oriente e incluso América

Latina, en particular Mercosur, han pluralizado el liderazgo global. Esta realidad

innegable será cada vez más evidente en las acciones del Banco Mundial que,

esperemos, construya un criterio más imparcial y menos político. Por ahora, a

pesar de dicha pluralidad, los estatutos siguen favoreciendo a Estados Unidos.

Según la información del propio Banco Mundial, la pobreza extrema en el mundo

ha descendido considerablemente en los últimos años, de 43.1% en 1990 y al

22.2% en 2008.17 No obstante, afirmar que más personas viven con más de 1.25

dólares al día, resulta una estadística bastante endeble si se trata de concebir un

verdadero avance en la calidad de vida de las naciones más marginalizadas. Ante

el acaparamiento de tierras y recursos por parte de empresas multinacionales, la

proliferación de daños al medio ambiente y la altísima diferencia económica entre

los países del sur y del norte, los préstamos que realiza el Banco Mundial a ciertos

sectores productivos o programas sociales parecen concesiones estériles que,

finalmente tienen un impacto minúsculo en la raíz de la problemática, y que,

infelizmente, genera un mayor endeudamiento y, por lo tanto, más dependencia y

supeditación hacia los países que deciden la viabilidad de los financiamientos.

Paradójicamente, las actuales naciones que otrora padecieron un dominio colonial

y consecuentemente un continuo saqueo de sus recursos naturales, en vez de

17 Diario El Informador “Revela Banco Mundial la reducción de la pobreza extrema en el mundo”, 19-abril-2012. Se puede visualizar en la página: http://www.informador.com.mx/internacional/2012/370939/6/revela-banco-mundial-la-reduccion-de-la-pobreza-extrema-en-el-mundo.htm

recibir cierta compensación, hoy en día están sujetas a mecanismos

internacionales que preservan características claramente colonialistas.

Naturalmente el destino de ciertos préstamos han contribuido a disminuir el

hambre, educar, controlar pandemias y proveer de servicios básicos a millones de

personas, sin embargo, aún falta mayor humanización del Banco Mundial y la

comunidad internacional si se busca cumplir el objetivo de desaparecer la

pobreza. Primeramente, los préstamos y proyectos a realizar deben de observar

de una manera más detenida su potencial daño a derechos humanos, en particular

a comunidades locales, muchas de ellas pueblos indígenas. También debe de

optimizar el seguimiento que se le da a los fondos prestados, con la finalidad de

evitar que gran parte del dinero se despilfarre en trámites estériles y corrupción.

No cabe duda que hay grandes retos por delante.

El Banco Mundial, como ya lo hemos comentado, no es una institución caritativa,

otorga préstamos y espera su dinero de vuelta con intereses teóricamente bajos.

En esta lógica, con el fin de evitar el endeudamiento de los países pobres,

pareciera razonable fortalecer un esquema de donaciones más ambicioso que el

brindado actualmente por la Agencia Internacional de Fomento. La finalidad

prioritaria del Banco Mundial que es, teóricamente, reducir la pobreza, debe ser

orientada a proyectos que en vez de generar dependencia, promuevan la

autosuficiencia de los pueblos, sustentados en mecanismos que permitan

garantizar una soberanía alimentaria y energética. La panacea a la pobreza no es,

per se, la apertura al comercio internacional, sino la educación que permita a los

ciudadanos sobrevivir bajo nuevos paradigmas, utilizando prioritariamente y

óptimamente los recursos disponibles en su territorio. El problema del Banco

Mundial, en pocas palabras, es que su apoyo no es sincero, se sujeta a una lógica

de mercado que estimula a las naciones ricas a buscar provecho en sus

inversiones. Si se pudiera generar un esquema de apoyo económico e

instrumental más humano, más honesto, con el objetivo de apoyar al otro antes de

pensar en el provecho personal, el resultado puede ser virtuoso y redentor.

Bibliografía

• Robert W. Oliver, International Economic Cooperation and the World Bank, MacMillan

Press, Londres, 1975

• Aguilera Manuela, Crecimiento Económico y Distribución Del Ingreso: Balance

Teórico y Evidencia Empírica, UNAM, 1998

• Toussaint, Eric, Banco Mundial: El Golpe de Estado Permanente, Editorial El Viejo

Topo, 2007

• Stiglitz, Joseph; El Malaestar de la Globalización, Taurus, Santa Fé de Bogotá, 2002

Artículos

• Torres Rosa María, “¿Mejorar la calidad de la educación básica? Las estrategias del Banco Mundial”, Catedra Unesco-UNAM, puede verse en:

http://catedradh.unesco.unam.mx/catedradh2007/SeguridadHumana/prospectiva%206/revi

sta/numero%203/estpros/resenas/laura.htm

• Nadal Alejandro, “India: tribunal para el Banco Mundia”, La Jornada, 1 de agosto del

2007, puede verse en:

http://www.jornada.unam.mx/2007/08/01/index.php?section=opinion&article=023a1eco

Consulta Hemerográfica

• La Jornada “Prestó el Banco Mundial 72 mil mdd a países en desarrollo” 2 de julio de

2010.

• El Mundo Diario El Mundo: “Hugo Chávez anuncia la salida de Venezuela del Banco

Mundial y el FMI”, 01-marzo-2007

• El Informador “Revela Banco Mundial la reducción de la pobreza extrema en el mundo”, 19-abril-2012.

Sitios Web

• www.worldbank.org

• www.cinu.mx