Balkan (Madrid) 6 (2005)

179
nº 6 (2005) Introducción 3 El tema del número Personalia 5-14 Ayer Karadzic y Mladic 15-21 La matanza de Srebrenica 23-35 Croacia: sombras de una batalla 37-39 Yugonostalgia nakon svih ovih godina 41-45 Temas de hoy La Unión (Desunión) de Serbia y Montenegro 47-67 Serbia, cinco años después 69-73 Bosnia-Hercegovina 75-91 Kósovo 93-94 Playboy 95-97 Violencia y criminalidad 99-103

description

Llegamos al número 6 de la revista Balkan (Madrid) y, al hacerlo, superamos con mucho nuestras previsiones más optimistas de enero de 2000. Cerca de 1000 páginas son hoy el resultado del debate que durante estos años hemos desarrollado a través del Foro de Estudios Balcánicos. El número se ha construido bajo el título general de Personalia. Nuestra idea inicial era que la historia, con mayúsculas y con minúsculas, en singular y en plural, consiste también en la suma de las biografías de sus protagonistas y pensábamos dedicar una atención especial a estos protagonistas, tanto a los grandes como, sobre todo, a los pequeños. Al final, sólo una pequeña parte de nuestros debates abordó de una manera directa este tema. Indirectamente, sin embargo, nuestros personajes, los habitantes de Personalia, son los héroes de todas las demás historias que se encuentran en las casi doscientas páginas que siguen. Los tiempos están cambiando, y esto se refleja también en el contenido de las discusiones que mantenemos en el Foro. No hemos abandonado a “nuestros clásicos”, los temas que vienen siendo debatidos desde que iniciamos este proyecto, pero a lo largo de 2005 se hecho un esfuerzo mayor que nunca para incorporarnos a las nuevas realidades que están emergiendo en los Balcanes. Los debates más apasionados fueron sobre la influencia mutua entre España y Yugoslavia y reflejan la realidad de que estos casi veinte años de crisis en la antigua Yugoslavia han cambiado también las reglas del juego político en el resto de Europa y del mundo.Nos llamamos Balkan y siempre nos hemos encontrado con el problema de nuestros intereses siempre acababan siendo más yugoslavos que balcánicos. Aun dentro de lo yugoslavo, nuestro enfoque ha sido durante años excesivamente belgradocéntrico. Es posible que sea una insuficiencia nuestra y es también posible que aleje de nuestro foro a personas cuyos intereses están centrados en otras partes de la península balcánica. Este problema tiende a agravarse, pero no tiene solución fácil. Somos una lista abierta a todos, y debatiremos aquellos temas que los colisteros quieran poner sobre la mesa. El administrador puede animar los debates y, en algunos casos, moderarlos, pero no es un redactor jefe que decide sobre qué se escribe y a qué importancia se concede a cada cuestión. Si nos hemos centrado en un determinado enfoque es porque ése ha sido el deseo de nuestros miembros más activos. Para bien o para mal, el contenido de este número refleja lo que nosotros, los miembros de la comunidad congregada en torno al Foro de Estudios Balcánicos, somos en estos momentos.Para el año 2006, nuestro primer propósito es seguir insistiendo en la misma línea y continuar siendo un foro interdisciplinar válido para la comunicación y el debate de quienes nos interesamos por las cuestiones balcánicas. Existe el proyecto de que podamos disponer de una base organizativa más sólida mediante la formación de una asociación, abierta a todos los miembros de la lista. Esperemos que en el próximo año este proyecto se convierta en realidad.

Transcript of Balkan (Madrid) 6 (2005)

Page 1: Balkan (Madrid) 6 (2005)

������� ����� ������������� ������� ��������

���������! �" #$� �%�& (')#$��*!� #$�+-,).0/$1�2 34,)5!/$.!687:9<;�2$=

nº 6 (2005)

Introducción 3

El tema del número

Personalia 5-14

Ayer

Karadzic y Mladic 15-21

La matanza de Srebrenica 23-35

Croacia: sombras de una batalla 37-39

Yugonostalgia nakon svih ovih godina 41-45

Temas de hoy

La Unión (Desunión) de Serbia y Montenegro 47-67

Serbia, cinco años después 69-73

Bosnia-Hercegovina 75-91

Kósovo 93-94

Playboy 95-97

Violencia y criminalidad 99-103

Page 2: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Cuestiones emergentes: los nuevos Balcanes

Emigrantes balcánicos 105-109

Otra vivencia de la etnicidad: ¿alianza de civilizaciones? 111-126

Perspectivas de integración europea 127-139

España y la antigua Yugoslavia

Nación y estado 141-164

Lenguas y literaturas nacionales 165-175

Participaron en los debates Claudia Aguilar, Javier Asensio,Roberto Barral, Jacinto Benito, Tino Brugos, César Luis Díez,Jairo Dorado, Carlos Flores Juberías, Julio Garrote,Enric Gil yGonzález, Ivan Grac, Miguel González Lázaro, Silvia Marcu, José-Miguel Palacios, María Palacios,G. Presa Arias, Arsenio Sánchez,Dalibor Soldatic, Ivan Zverzhanovski y Zoran Vujic.

Varios

Reseña y crítica de libros 177-182

Cine ex-yugoslavo 183-191

REDACCIÓN

César Luis Díez

Page 3: Balkan (Madrid) 6 (2005)

- 3 -

Página inicial

Llegamos al número 6 de la revista Balkan (Madrid) y, al hacerlo, superamos con mucho nuestras

previsiones más optimistas de enero de 2000. Cerca de 1000 páginas son hoy el resultado del debate

que durante estos años hemos desarrollado a través del Foro de Estudios Balcánicos.

El número se ha construido bajo el título general de Personalia. Nuestra idea inicial era que la

historia, con mayúsculas y con minúsculas, en singular y en plural, consiste también en la suma de

las biografías de sus protagonistas y pensábamos dedicar una atención especial a estos protagonistas,

tanto a los grandes como, sobre todo, a los pequeños. Al final, sólo una pequeña parte de nuestros

debates abordó de una manera directa este tema. Indirectamente, sin embargo, nuestros personajes,

los habitantes de Personalia, son los héroes de todas las demás historias que se encuentran en las

casi doscientas páginas que siguen.

Los tiempos están cambiando, y esto se refleja también en el contenido de las discusiones que

mantenemos en el Foro. No hemos abandonado a “nuestros clásicos”, los temas que vienen siendo

debatidos desde que iniciamos este proyecto, pero a lo largo de 2005 se hecho un esfuerzo mayor que

nunca para incorporarnos a las nuevas realidades que están emergiendo en los Balcanes. Los debates

más apasionados fueron sobre la influencia mutua entre España y Yugoslavia y reflejan la realidad

de que estos casi veinte años de crisis en la antigua Yugoslavia han cambiado también las reglas del

juego político en el resto de Europa y del mundo.

Nos llamamos Balkan y siempre nos hemos encontrado con el problema de nuestros intereses

siempre acababan siendo más yugoslavos que balcánicos. Aun dentro de lo yugoslavo, nuestro

enfoque ha sido durante años excesivamente belgradocéntrico. Es posible que sea una insuficiencia

nuestra y es también posible que aleje de nuestro foro a personas cuyos intereses están centrados en

otras partes de la península balcánica. Este problema tiende a agravarse, pero no tiene solución fácil.

Somos una lista abierta a todos, y debatiremos aquellos temas que los colisteros quieran poner sobre

la mesa. El administrador puede animar los debates y, en algunos casos, moderarlos, pero no es un

redactor jefe que decide sobre qué se escribe y a qué importancia se concede a cada cuestión. Si nos

hemos centrado en un determinado enfoque es porque ése ha sido el deseo de nuestros miembros más

activos. Para bien o para mal, el contenido de este número refleja lo que nosotros, los miembros de

la comunidad congregada en torno al Foro de Estudios Balcánicos, somos en estos momentos.

Para el año 2006, nuestro primer propósito es seguir insistiendo en la misma línea y continuar siendo

un foro interdisciplinar válido para la comunicación y el debate de quienes nos interesamos por las

Page 4: Balkan (Madrid) 6 (2005)

- 4 -

cuestiones balcánicas. Existe el proyecto de que podamos disponer de una base organizativa más

sólida mediante la formación de una asociación, abierta a todos los miembros de la lista. Esperemos

que en el próximo año este proyecto se convierta en realidad.

Page 5: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 5 -

Personalia

Normalmente cuando leemos sobre lo ocurrido durante la desintegración de Yugoslavia,nos encontramos con una serie de teorías que intenta explicarlo todo desde unaglobalidad quizá engañosa. Teorías sobre las estructuras políticas, las relacionesinternacionales, la estabilidad de los bloques, etc. que intentan situar lo que ocurrió enlos últimos momentos de la antigua Yugoslavia y lo que fue dando origen a la formaciónde las nuevas realidades en cada uno de las repúblicas emergentes.

No es que no sea necesario este marco general para intentar entender lo ocurrido, peroparece que en algunas ocasiones se despega de la realidad y se consigue teorizacionessobre unos hechos que antes que nada han sido inducidos por personas (o por "actores"en una terminología politológica).

Una idea de trabajo, que podría parecer más “particularista”, sería intentar acercarnosa las personas (y a los personajes) que participaron directamente en lo ocurrido. Lahipótesis sería la siguiente: cada persona involucrada en mayor o medida en losacontecimientos que se estudian tiene una biografía y participa de una "red decontactos" en muy diversas esferas. Si nos ponemos a analizar muchas de estas redes,nos encontraremos con una red más general que se asemejaría a una "tela de araña"(o a internet). En este nuevo marco es donde se podrían volver a lanzar las preguntasque una y otra vez se han formulado sobre lo sucedido la última década y media.

Para tejer esta red de araña, habría que pasar necesariamente por nudos muy grandes(las biografías de Milosevic, Tudjman, etc.) sobre los que hay ya mucho escrito desdebastantes puntos de vista. Ellos, mucho más que las ideas que representan en unmomento y que pueden cambiar en otro, son los actores que han ido articulando lossucesos ocurridos en la historia reciente de esta parte del mundo. Pero para jugar estepapel principal han necesitado toda una serie de “segundones” que han ido desempe-ñando distintas funciones a lo largo de esos mismos acontecimientos.

Esos personajes de segunda o tercera fila son nudos más pequeños en la red, peroindispensables para el entramado de la misma. Son personajes que pueden en un primermomento desempeñar labores oscuras, burocráticas o ajenas a la vida política pública,pero que después se convierten en líderes de formaciones políticas y ocupan cargosimportantes en las estructuras de gobierno durante un período determinado. Y estospersonajes consiguen su promoción precisamente por estar dentro de la misma red(existen pocos casos de “extraños” a este sistema).

Por tanto el modelo de análisis propuesto consiste en desplazar el centro de atenciónde los hechos globales y de las supuestas ideologías que los engendraron hacia unestudio de la red de relaciones que los individuos forman, entendiendo que esa red –más tupida en unos casos y momentos que en otros – es la generadora de las decisionesque provocaron los procesos de desintegración de Yugoslavia y la creación de losposteriores estados.

César Luis Díez

Page 6: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Personalia

- 6 -

16 de mayo de 2005 José-Miguel Palacios

Una de las sensaciones editoriales del año en la antigua Yugoslavia la constituye, sin

duda, el libro de Milos Vasic sobre el atentado que acabó con la vida del Primer Ministro

Zoran Djindjic, pero también sobre la criminalización de la vida social en Serbia (y no sólo

en Serbia) y sobre las extrañas relaciones entre políticos, Estado y delincuentes.

Resulta muy interesante la perspectiva del autor, que no está “fuera de los acontecimien-

tos”, sino que es un “observador participante”. Milos Vasic, desde el primer momento,

actúa como miembro de un determinado grupo político y social que entiende que a partir

de octubre de 2000 tiene la oportunidad histórica de operar transformaciones revolucio-

narias en la sociedad y en el Estado serbio. De esta manera, justifica, como probablemente

el propio Djindjic habría hecho, el origen “revolucionario” de su poder y la necesidad

(conveniencia, incluso) de prescindir de formulismos legales cuando no facilitaban la tarea

que había que realizar (como es habitual en muchos círculos serbios, el adjetivo “legalis-

ta”, aplicado a Kostunica y sus partidarios, tiene en Vasic una connotación peyorativa).

El propio título del libro (Atentat na Zorana, atentado contra Zoran, sin apellidos), habla

de proximidad a un hombre al que se tutea, porque es el representante de un círculo al

que el propio autor pertenece. En cualquier caso, es la proximidad del crítico que observa

respecto al artista que crea y Vasic no desperdicia algunas ocasiones de ironizar sobre

Djindjic, al que denomina con frecuencia “Doktor Svih Nauka” (Doctor de todas las

ciencias, en alusión a su carrera académica, de la que el difunto Primer Ministro se sentía

orgulloso).

Vasic no pretende describirnos a Djindjic, sino la Serbia que él dirigió y que él, como

nadie, contribuyó a modelar. De manera indirecta, sin embargo, acaba ofreciéndonos

muchos datos sobre la personalidad de un Primer Ministro, entre cuyos rasgos caracterís-

ticos destacaba un pragmatismo extremo, apenas moderado por un sentido moral.

No sé si estamos aún a tiempo de escribir la biografía definitiva de Zoran Djindjic. En

Page 7: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 7 -

cualquier caso, cuando se haga, se habrá escrito uno de los capítulos más relevantes de la

historia reciente de Serbia y de Yugoslavia.

17 de mayo de 2005 César Luis Díez

Hay otro libro sobre Djindjic que en su momento no fue tan bien acogido por el público y

la prensa e incluso - creo recordar - hubo algún incidente en la presentación del mismo. Se

trata de la obra de Zivota Ivanovic Zoran Djindjic u mrezi mafije (Zoran Djindjic en las

redes de la mafia). Belgrado: Beletra, 2004.

Lo primero que llama la atención del mismo, además de lo explícito del título, es la

portada en la que aparecen sobre fondo negro las fotos de ZD y de Legija, en una clara

alusión a la relación que según el autor les unía.

17 de mayo de 2005 Dalibor Soldatic

No sé si estamos a tiempo de escribir la biografía definitiva de Zoran Djindjic.En cualquier caso, cuando se haga, se habrá escrito uno de los capítulos másrelevantes de la historia reciente de Serbia y de Yugoslavia.

Mi experiencia de profesor de literatura enseña que es mejor dejar que pasen los años

antes de emitir juicios definitivos o casi definitivos sobre personajes y acontecimientos. En

el caso de Zoran Djindjic hay tantas contradicciones, tantas acusaciones y exaltaciones

que, francamente, a los que seguimos aquí más de cerca todos los acontecimientos resulta

difícil juzgar y emitir juicios objetivos. Y luego, cuando uno se pone a leer solamente el

intercambio de acusaciones entre los propios seguidores de Djindjic cabe preguntarse qué

hay de cierto en todo ello. Por eso propongo un poco mas de paciencia en cuanto al tema

de las biografías, salvo lo que es el dato escueto: nació a tantos y tantos del año X ,

estudió Y y ocupó tales y tales puestos.

Page 8: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Personalia

- 8 -

Me explico. El propio Djindjic es un buen ejemplo.

Estudia filosofía. Protagonista del movimiento estudiantil del 68 (sus profesores fueron

Mihajlo Markovic, Ljuba Tadic, Dragoljub Micunovic, Zaga Golubovic Pesic, Trivo

Indjic - profesor adjunto en aquella época-, Svetozar Stojanovic, entre otros). Se va a

Alemania como becario. Vuelve a Belgrado, participa en la fundación del Partido

Demócrata, del cual logra ser presidente después de haber resuelto a su favor todas las

luchas internas en el seno de ese partido (primero se fue Kostunica y luego Micunovic).

No es capaz de ganar elecciones si no va asociado con algún otro partido. En 1996 es

alcalde de Belgrado poco tiempo y volverá al poder en el ano 2000 cuando la coalición

DOS gana las elecciones y él es elegido presidente del Gobierno de Serbia mientras

Kostunica es Presidente de Yugoslavia y Micunovic presidente del Parlamento federal.

Fue gerente de la campana electoral en el año 2000 y las malas lenguas y la prensa

amarilla señalan que el Congreso norteamericano asignó 75 millones de dólares a los

partidos de la oposición democrática para organizar la campaña electoral contra Milose-

vic. Sin embargo, en el informe presentado por el gerente de la campaña se habló sólo de

45 millones de dolares gastados. Del resto, de los 30 millones, nunca se habló. Djindjic

mostró ser, desde luego, el único político de la oposición capaz de manejar la maquinaria

del Gobierno, mostrándose práctico, pragmático y eficaz. Aprendía rápidamente las artes

del gobierno, a diferencia de muchos otros. Parece que en su pragmatismo supo tratar a

los nuevos poderosos magnates millonarios, que se hicieron ricos durante el decenio de

Milosevic, y así mismo a las fuerzas paramilitares o a los principales mafiosos del país.

Llegó a haber demasiados a los a los que no convenía su presencia sobre la escena

política. La lista es larga:

� la familia Milosevic: se ha hablado de la venganza del hijo Marko;

� los partidos Socialista, JUL y Partido Radical que perdieron el poder;

� los partidos de su misma coalición (el DSS, principalmente);

� las fuerzas de seguridad del Ministerio del Interior o la Policía;

Page 9: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 9 -

� el Ejército;

� algunos de los magnates, temerosos de perder posiciones privilegiadas.

De todo lo dicho, no he querido sacar conclusiones. Ni positivas ni negativas. El capitulo

Djindjic ha sido cerrado brutalmente, pero la auténtica interpretación de todo lo aconteci-

do, de sus méritos (indudablemente, enormes) y de sus errores todavía no la tenemos.

Quedará en la historia de Serbia como el personaje que ha marcado el fin del siglo XX y

el inicio del XXI. Dejemos que el tiempo asigne los adjetivos. Lo único de lo que sí

podemos estar seguros es que con su muerte Serbia ha perdido a un gran protagonista de

la vida política; a un líder que tenía una visión europea de su futuro y estaba decidido a

realizarla.

No ha sido la primera vez en la historia contemporánea de Serbia que el político con la

visión más moderna es el que pierde la batalla. Recuérdense los casos de Koca Popovic, el

intelectual surrealista partisano, comandante de la Primera Brigada Proletaria, que se

apartó de Tito casi por completo; o los posteriores de Marko Nikezic, Latinka Perovic y

Mirko Tepavac, con una visión más moderna del socialismo autogestionario. O, en épocas

relativamente recientes, el del propio Ivan Stambolic, que no era muy moderno, pero sí

propugnaba una solución al problema de Kósovo “con la cabeza fría” y fue destituido por

Milosevic, que estaba a favor de una respuesta más enérgica.

18 de mayo de 2005 José-Miguel Palacios

Djindjic mostró ser, desde luego, el único político de la oposición capaz demanejar la maquinaria del Gobierno, mostrándose práctico, pragmático y eficaz.

Creo que hay que hacer caso a Dalibor y dejar a futuras generaciones que compongan un

retrato fiel de Zoran Djindjic. Lo que pasa es que, quizá, para futuras generaciones él ya

no tendrá el mismo interés que tiene para nosotros. Quizá, con un poco de mala suerte, no

haya nadie en futuras generaciones que escriba esa biografía definitiva de Djindjic. O

quizá sólo sea una tesis doctoral y la leen el director y los miembros del tribunal. O quizá

Page 10: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Personalia

- 10 -

(ojalá no sea así) futuras generaciones se muestren incapaces de superar los prejuicios

(sobre Djindjic o sobre todo) que ha creado la nuestra.

Así que, sin más ánimo que dejar sobre la mesa algunos materiales que puedan servir a

nuestros descendientes, me gustaría destacar algunos detalles que, quizá (sólo quizá)

pueden ser indicativos de la personalidad humana y política de Zoran Djindjic.

� El primero es su enorme penetración analítica. Es, probablemente, uno de los

ex-yugoslavos que mejor ha comprendido el momento en que vivía y su posible

evolución. Basta leer su libro Jugoslavia kao nedovrsena drzava (Yugoslavia,

como un estado inacabado, de 1988). O recordar su actuación durante las

manifestaciones del invierno 1996-1997 (fue el único político opositor capaz de

articular los objetivos de la protesta). O su toma del poder real tras los sucesos del

5 de octubre. Por supuesto que también en ocasiones se equivocó (su campaña

antimontenegrina de 1994, su viaje a Pale aquel mismo año), pero ¿quién no se

equivoca?

� Siempre me ha impresionado su interés juvenil por San Ignacio de Loyola y por

Kropotkin. No sé gran cosa de la obra de San Ignacio, pero en medios no

católicos se le conoce (quizá tergiversadamente) como el gran impulsor de la idea

de que “el fin justifica los medios”. Kropotkin, por su parte, puede simbolizar la

revolución. Así que, uniendo a ambos, tendríamos en Djindjic una inclinación

hacia el cambio revolucionario, frente al democrático, y un convencimiento

profundo de que la santidad de los fines que se persiguen acabará justificando

medios torcidos. Tendríamos así su actitud en las protestas de 1997, cuando pedía

la caída de Milosevic (lo que escandalizaba a algún español, que pensaba entonces

que para ser Presidente lo suyo es ganar unas elecciones). También en este marco

tiene sentido la puesta en circulación, con sentido peyorativo, del término “legalis-

ta”: frente a quienes creían que el respeto al procedimiento era una garantía de

limpieza democrática, Djindjic siempre pareció convencido de que el procedimien-

to, despojado del espíritu que lo inspiró, puede utilizarse torticeramente para

impedir o retrasar unos cambios necesarios.

Page 11: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 11 -

24 de mayo de 2005 G. Presa Arias

Estaba tranquilamente tomando un café con una amiga en la esquina de Zmaj Jovina con

Cika Ljubina (dos céntricas calles de Belgrado) cuando ha pasado Ceda Jovanovic

flanqueado por tres guardaespaldas. Y me ha parecido que este antiguo líder estudiantil,

reciclado después en político de moda capaz de negociar con el propio Milosevic en su

casa (mientras que le disparaba la hija de aquél), para continuar siendo uno de los

portadores del ataúd de Djindjic (de aquellos de los que alguien dijo: “no son ellos

quienes lo portan, sino el ataúd quien los sujeta”), y terminar enfrentado a la cúpula del

partido de su mentor político - y a la viuda de aquél -, sería uno de esos personajes

interesantes sobre los que escribir una minibiografía para Balkan.

Y claro está, como estaba sentado la terraza de Srpska Rec (“la palabra serbia”), local que

pertenece a Danica Draskovic, esposa del ministro de Asuntos Exteriores de Serbia-

Montenegro, el poeta Vuk - quien precisamente este último 15 de mayo ha vuelto a

Ravna Gora (la montaña sagrada de los chetnici) sin melenas y con la barba recortada -,

también me ha parecido que un esbozo de biografía de éste último sería una interesantísi-

ma adquisición para la galería de “Personalia”.

Valga todo esto como excusa (pseudo)intelectual para disfrutar, aún más si cabe, de un

café en una agradable tarde de comienzos del verano en Belgrado.

28 de mayo de 2005 César Luis Díez

¿Es Ceda el político del que se decía que su primer trabajo remunerado habíasido como Vicepresidente del Gobierno?

La respuesta es afirmativa. Aquí tenemos una biografía oficial de este político extraída de

su propia página web (http://www.cedajovanovic.com)

Page 12: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Personalia

- 12 -

Nacido el 13 de abril de 1971 en Belgrado.

Se diplomó como dramaturgo en la cátedra de guiones cinematográficos y de

televisión y dramaturgia de la facultad de Arte Dramático, Universidad de las

Artes de Belgrado. Actualmente cursa estudios de magistratura en el Departa-

mento de Cine de la facultad de Arte Dramático en Belgrado.

Durante sus estudios, trabajó como periodista para algunas de los medios de

comunicación belgradenses, para agencias y emisoras de radio y televisión.

Fue uno de los organizadores de las protestas estudiantiles de 1996-97, así como

fundador y presidente del Club Político Estudiantil. Aquéllas fueron las protestas

más largas de la historia serbia (con algunos incidentes graves con la Policía) y

consiguieron que Slobodan Milosevic, tras 130 días, reconociera la victoria de la

oposición en las elecciones locales de la mayoría de las grandes ciudades de

Serbia.

Durante la protesta, varias veces fue detenido y maltratado por la Policía.

En el período en que fue el líder de la protesta estudiantil, la Universidad de

Belgrado apoyó a los estudiantes, y por esto ello hicieron lo mismo un gran

número de instituciones de educación superior a lo largo y ancho de todo el país.

Se afilia al Partido Democrático en 1998 y se convierte en su vicepresidente en

octubre de 2001.

Participó en las campañas electorales de septiembre y diciembre de 2000.

Durante las campañas desempeño el puesto de jefe del comite electoral del

Partido Democrático y de la Oposición Democrática de Serbia (DOS).

En las elecciones republicanas de diciembre de 2000, fue elegido como miembro

de la Asamblea de Serbia.

Page 13: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 13 -

Desde enero de 2001 hasta marzo de 2003 desempeñó la función de portavoz

parlamentario de DOS (más exactamente, de DOS-Reforma de Serbia). Fue el

político más joven en ese cargo de la historia de Serbia.

Fue encargado de la detención de Milosevic en marzo de 2001 y de su entrega al

Tribunal de la Haya. Consiguió convencer a Milosevic de que se entregara

pacíficamente y de que evitara el derramamiento de sangre que se hubiera

producido en el caso de utilizarse la fuerza.

En el nuevo gobierno que se formó en Serbia después de la muerte de Zoran

Djindjic, el 18 de marzo de 2003, Cedomir Jovanovic desempeñó el cargo de

Vicepresidente de la República de Serbia encargado de la integración en Europa

y de coordinar las reformas. Participó en el diseño del Plan de Acción y de una

armonización más profunda de las relaciones de Serbia y Montenegro.

Habla inglés. Está casado y su mujer se llama Jelena.

Como es una biografía de corte oficial, no se tratan algunos puntos conflictivos: su salida

del Partido Demócrata para encabezar una nueva formación denominada Fracción

Demócrata Liberal; o el “dudoso episodio” de que la hija de Milosevic disparara sobre él

durante las negociaciones para que éste se entregara. Tampoco, evidentemente, se

mencionan episodios de la “crónica negro-amarilla” de la ciudad, como su supuesta

adicción a las drogas o su “presunta amistad” con M. U. Legija.

20 de noviembre de 2005 César Luis Díez

En el número 775 de la revista Vreme (10/11/05) encontramos una interesante entrevista a

Cedomir (Ceda) Jovanovic, con motivo de la formación de su nuevo partido político

(LDP – Liberalno Demokratska Partija, Partido Liberal Democrático). En verdad, la

entrevista se convierte en un repaso del programa política del partido y para nosotros

puede ser muy interesante, ya que es una especie de catálogo de los “asuntos pendientes”

Page 14: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Personalia

- 14 -

de la política serbia. Que son:

� Kósovo (y su influencia en la opinión pública serbia),

� la independencia (separación) de Montenegro,

� la autonomía de Voivodina (y descentralización de la administración serbia),

� la colaboración con el Tribunal de la Haya y la existencia de un grupo de presión

“anti-tribunal” en la cúpula del gobierno,

� la negociaciones con la UE sobre una futura adhesión,

� la inestabilidad política y fuerza electoral del partido radical (SRS),

� la herencia política de Zoran Djindjin (y la lucha de distintas familias políticas

sobre ella).

También curiosamente, y a raíz de los comentarios en la lista sobre la música pop-rock

yugoslava, se le pregunta a Ceda si tiene intención de despedazar al partido DS, como

hizo con el grupo musical Idoli. Y confieso que con esta pregunta me he perdido. No sé

de qué va el tema. Quizá algún colistero me pueda ayudar e iluminar un poco.

Page 15: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

1 “Republika Srpska ima površinu od 25.053 km2 ili 49% teritorije Bosne i Harcegovine na kojoj �ivi

1.391.503 stanovnika, što je svrstava me � u najmanje evropske zemlje” (La República Srpska tiene unaextensión de 25.053 km2, el 49% del territorio de Bosnia-Hercegovina, y en ella viven 1.391.503 habitantes,lo que la sitúa entre los países más pequeños de Europa). Datos extraídos de la página web de la RepúblicaSrpska <http://www.srpska.com>.

2 <http://www.evropanedeljnik.co.yu>.

- 15 -

Karadzic y Mladic

27 de febrero de 2005 César Luis Díez

Julio Garrote escribía: “¿Alguien en su sano juicio piensa que si la mal llamadaComunidad Internacional, con su NATO, sus espías, su OSCE, su SFOR, y su UNen general hubiera querido realmente, no estarían hace tiempo ambos ante elICTY?”

Y ésta es una pregunta que en mi opinión no es nada “retórica”. Es algo que mucha gente

tiene en la cabeza y que periódicamente vuelve como un bumerang a la vida pública de

Serbia-Montenegro. Pensar que en una extensión tan reducida como es la República Srpska

(RS)1 puedan esconderse desde hace tantos años (¿cuántos exactamente?) Mladic y

Karadzic es bastante poco creíble. Por otra parte, pensar que se esconden en Serbia (o en

Montenegro) es algo que pende sobre el Gobierno Federal, siempre en la tensión que

significa su colaboración con el Tribunal de la Haya y la repercusión pública que ello pueda

tener. Un ejemplo son los constantes artículos referidos al tema en la prensa diaria y en las

publicaciones políticas semanales. Sin ir más lejos, en el último número de la revista Evropa2

encontramos un artículo sobre la “comparecencia voluntaria” de Milan Gvero - uno de los

generales de Mladic - ante el Tribunal de la Haya y lo que esto puede significar para

estrechar el cerco sobre el propio Mladic.

Se podría resumir la situación con las siguientes preguntas:

� Si están en la RS, ¿cómo es que no los encuentra la Comunidad Internacional?;

� si se esconden en Serbia-Montenegro, ¿por qué el poder político no es capaz de

Page 16: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Karadzic y Mladic

- 16 -

hacerse con el control de la situación y los entrega, como ya hizo con Milosevic?.

Y frente a este resumen - que se podría denominar objetivo - existen otras teorías inmersas

en el marco general de la teoría de la conspiración, tan apreciada en el entorno balcánico.

Por ejemplo: ¿y si estuvieran muertos? Sería algo beneficioso para muchos de los “agentes

o actores políticos”, ya que entonces casi todo el mundo tendría razón: desde los que niegan

que se muevan libremente por la RS, hasta los que dicen desconocer su paradero en Serbia-

Montenegro.

Una aportación curiosa a la bibliografía sobre este tema la puede constituir la novela

Cudesna hronika noci (Asombrosa crónica de la noche), escrito por el propio Radovan

Karadzic (Belgrado, Igram: 2004). Fue presentada en la pasada Feria del Libro de Belgrado

(octubre) y va ya por la segunda edición, con una tirada de 1500 ejemplares.

28 de febrero de 2005 Ivan Zverzhanovski

I do not believe that the question of Mladic in particular is a question of capacity but one

of will to capture and transfer him. After all, each of the four Ministers of Defence since 5

October 2000 has claimed that the VJ/VSCG was not protecting Mladic (nor any other

ICTY indictee). However, almost all of these proved wrong as indications kept on emerging

on continous Army links to Mladic.

How keen is Kostunica on the ICTY? Not at all - the fact that Lazarevic was told that

surrendering should be decided at the right moment by the Prime Minister is indicative.

28 de febrero de 2005 Julio Garrote

No es retórica la pregunta con la que inicié el debate. Tras dedicar años a contestarla, la

única conclusión que se me ocurre, vistos los implicados y los resultados, es ésta:

Page 17: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 17 -

La mal llamada Comunidad Internacional (un presunto y curioso bloque de estados que

negocian beneficios propios sobre el futuro de los que no pertenecen a él) debe tener un

interés concreto en mantener a los principales presuntos autores de crímenes de guerra en

libertad, puede que como simple excusa para presionar a los políticos que se alzan en el

poder en RS según sus reglas, y para mantener el miedo y la amenaza permanente sobre la

población (el miedo es la mejor herramienta de manipulación de un pueblo). Me explico.

Si la OHR (Organización del Alto Representante) considera que un cargo de la administra-

ción local “no cumple”, se le obliga a dimitir. Esta organización, de nula autoridad

democrática, es la que realmente gobierna Bosnia-Hercegovina. No existe allí el estado de

derecho.

Los informes que los miembros de esa omnipotente organización emiten, basados en una

buena proporción sobre rumores y denuncias anónimas (muy parecido al sistema de la

Inquisición), son decisivos en las actuaciones de Paddy Ashdown, así que, cuando hace falta

recordar a los que pagamos sus sueldos, dietas, despachos, vehículos, borracheras,

discotequeos, viajes turísticos, chalés en Bosnia Central y comilonas, que ellos siguen siendo

muy importantes para la estabilidad y el futuro de Bosnia, emprenden una nueva campaña,

suben el volumen mediático de las vistas de la sala del ICTY, alzan graves bramidos ante

la ineficaz actuación de las instituciones locales y remiten sus informes. Ellos saben que si

esas instituciones son corruptas e ineficaces es porque así lo necesitan. Total, un círculo

vicioso autoalimentado. Un negocio redondo.

El año pasado, fueron despojadas de sus cargos 59 personas en la RS, pero la lista era

muchísimo mayor. Sin procedimiento judicial, ni administrativo, sin posibilidad de recurso,

sin apelaciones, sin derecho a ser oído, sin remedio, sin alternativa. Así no se da ejemplo de

procedimiento democrático, de estado de derecho o imperio de la ley.

A la salida de Vlasenica camino de Milici, reza un cartel junto a una iglesia: Tesko Bogu sa

nama taki kakvi smo. Pues eso.

Page 18: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Karadzic y Mladic

3 Ahora que ya no existe ningún país que se llame Yugoslavia supongo que podemos recuperar elgentilicio "yugoslavo" (eslavo del sur) para referirnos a personas originarias de cualquiera de los paísessurgidos de la desmembración de la RSFY.

4 En el verano de 2003 desarrollamos un debate sobre este tema, tras un polémico artículo de GeraldKnaus en Journal of Democracy. <http://www.estudiosbalcanicos.org/2003/3_bih.html>.

5 De hecho, se trata de un genio diabólico dual: Mladic y Karadzic, Karadzic y Mladic, que tantomonta, monta tanto.

- 18 -

5 de marzo de 2005 José-Miguel Palacios

Ivan Zverzhanovski pertenece a un grupo bastante amplio de jóvenes especialistas

yugoslavos3, formados en el exterior (en general, en países anglosajones) y que están

empezando a realizar unas aportaciones muy valiosas al conocimiento de sus países de

origen. Escriben en inglés, lo que les ayuda a tener mayor difusión internacional, y trabajan

sobre bases fundamentalmente distintas a las que han cimentado el debate intelectual en la

antigua Yugoslavia durante los últimos 15 años. Ivan Zverzhanvoski es discípulo aventajado

del Profesor Gow, quizá el más citado de los especialistas occidentales en cuestiones

militares yugoslavas. Personalmente, no estoy de acuerdo con muchos de sus enfoques y

conclusiones, pero nadie discute que es una autoridad mundial en la materia.

I do not believe that the question of Mladic in particular is a question of capacitybut one of will to capture and transfer him.

Creo que Ivan acierta al plantearse “de qué va” el debate sobre Karadzic y Mladic. Hace ya

nueve años que Mladic y Karadzic están apartados de la vida pública. Ha llovido mucho, y

aquella guerra nos parece ya muy lejana. ¿Por qué, entonces, nos preocupamos tanto de

Karadzic y Mladic? Mis dos peniques en este debate consistirán en una serie de proposicio-

nes, que no puedo demostrar, por lo que ni siquiera lo intentaré:

a) Para bastantes responsables internacionales, el “fantasma de Mladic y Karadzic” sirve

para justificar el fracaso de la política desarrollada en Bosnia-Hercegovina, en la que tanto

dinero y esfuerzos se han invertido4. Lo hemos hecho todo bien, pero ha habido siempre un

genio diabólico que se las ha arreglado para frustrar nuestros planes5. Como la República

Srpska protege al “genio diabólico”, está radicalmente deslegitimada (es una genocidna

tvorevina - engendro genocida - en palabras de los nacionalistas bosniacos), lo que nos

Page 19: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 19 -

puede permitir tender a la “superación de Dayton” y la “racionalización” del Estado de

Bosnia-Hercegovina (su presente estructura resulta poco funcional) llegando, si es

necesario, la supresión de la RS.

b) Para los bosniacos, Mladic y Karadzic sirven para explicar por qué no se ha producido

una reconciliación real con los serbios. Como nación más numerosa, tienen una responsabili-

dad especial en Bosnia-Hercegovina y, en particular, se supone que tendrían que hacer que

el país sea “amigable” para sus ciudadanos croatas y serbios. Los esfuerzos en este sentido

son mínimos y, en general, están forzados desde Occidente. La justificación, sin embargo,

es clara: no puede haber reconciliación sin justicia, y no puede haber justicia si no son

capturados y juzgados los grandes responsables de lo que ha ocurrido.

c) Para muchos internacionales cínicos, Mladic y Karadzic permiten que se mantenga a

Serbia y a los serbios un poco al margen del proceso de normalización de la región, lo que

permite que todas las cuestiones conflictivas se resuelvan en su contra. En el fondo, es una

opción muy pragmática: en un conflicto con muchas partes interesadas, la solución más

normal es que todas ganen a costa de una; es lo que pasó en la Primera Guerra balcánica (a

costa de Turquía) y en la Segunda (de Bulgaria), así que parece natural que ocurra también

en la Tercera (con Serbia y los serbios de paganos). El problema es que ahora ya no somos

(oficialmente) “cínicos”, sino “moralistas”, así que tenemos que buscar argumentos morales

que justifiquen nuestra realpolitik.

d) Para tantos serbios, el asunto Mladic/Karadzic sirve para alimentar su victimismo (znam

da su svi protiv Srbije) y para reincidir en una línea política que puede ser muy cómoda,

pero que no ha dado ningún resultado en cerca de 15 años. A estas alturas se podría y se

debería intentar algo distinto.

6 de marzo de 2005 José-Miguel Palacios

Donald Hays, primer suplente del Alto Representante de la comunidad internacio-nal en Bosnia-Herzegovina (BiH), cree que los dos presuntos criminales de guerra

Page 20: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Karadzic y Mladic

6 Resumen de Simón Tecco para ABC. 5 Mar 2005.

- 20 -

en fuga, Radovan Karadzic y Ratko Mladic, son también los actuales jefes de lacriminalidad organizada en BiH, según recoge el diario Nezavisne Novine6.

Evidentemente, se confirma la tendencia a responsabilizar a Karadzic y a Mlacic de todo lo

que no nos sale bien. De aquí, podemos extraer dos conclusiones:

a) Resulta improbable que nadie acuse a Karadzic y a Mladic de la ola de frío, o de los

pésimos resultados del Velez Mostar, del Borac o del Zeljeznicar (comparados con los de

antes de la guerra), ya que a nadie se le ha ocurrido todavía que estas materias puedan ser

responsabilidad de los diversos órganos internacionales desplegados en Bosnia-Hercegovina.

b) ¿Qué hacemos si, de repente, alguien los captura o ellos mismos se entregan?

Una observación para terminar: estamos hablando de política y muchos de los argumentos

que manejamos son cínicos. Está también el aspecto humano, la moral y el sentido común:

hay buena gente y hay gente malvada. Los malvados deberían encontrar su castigo, a ser

posible, antes del Juicio Final.

Aún otra observación: estamos hablando de dos hombres que han conducido a su pueblo

durante una guerra, lo que implica que han tenido que enviar a muchas personas a la muerte.

¿Cómo es posible que no sientan un mínimo de responsabilidad hacia ese mismo pueblo y

no sean capaces de sacrificarle su libertad? ¿No les da vergüenza utilizarlo como escudo?.

6 de marzo de 2005 Julio Garrote

La gente normal, la que ha perdido todo en la guerra, la que aún sigue en la RS porque no

le ha sonreído un funcionario de la embajada del Canadá con visado en la mano, la gente

joven sobre todo, los desheredados, todos esos están hartos de tanto “cinismo” canalla. Y

lo mismo piensan de Ratko y de Rado, pero con esa diferencia que ya refería en otra

contribución. Son acusados de ser criminales; y nada de héroes, sino, más bien, de cobardes.

Page 21: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 21 -

Son, sin embargo, sus criminales, sus antihéroes, sus cobardes. A ver si después de tanto

mensaje no somos capaces de comprender ese “estúpido” orgullo serbio.

Hagan un esfuerzo de memoria y recuerden lo que el prudente Kostunica decía respecto a

entregar a Sloba: si tenía que responder a la justicia, que lo hiciera ante su pueblo.

Y otra observación: no es la ciudadanía la que decide su futuro en RS; sin embargo, cuando

tocaba sufrir un embargo, bien que se lo imponían a ella.

La política de los internacionales en RS está propiciando el engorde de la delincuencia

organizada y la corrupción. Y no vigilan lo que tienen que vigilar: dónde han ido a parar los

ingentes esfuerzos económicos para reconstruir el país.

Page 22: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

1 Formación paramilitar liderada por Arkan.

- 23 -

La matanza de Srebrenica

28 de mayo de 2005 César Luis Díez

La proyección del vídeo en el que se ve el asesinato de seis musulmanes por parte de

miembros del grupo paramilitar Skorpion ha provocado la detención de varios integrantes

de esta formación por parte de las autoridades de Serbia. Todo ello, con el telón de fondo

de la visita de la fiscal Carla del Ponte a Serbia-Montenegro y a otros países de la zona.

De nuevo aparece el tema de las formaciones paramilitares y de su vinculación directa con

el gobierno de Milosevic. Esto es algo que se sabe, pero que debe ser “demostrado”; es

decir, se deben aportar las pruebas suficientes para que nadie pueda negarlo. Y, además, a

la opinión pública le preocupa si estas unidades han sido totalmente desarticuladas. O, lo

que es lo mismo, si la transición se está completando. Por ejemplo, la portada de la

semana pasada del semanario NIN colocaba sobre la foto de un “boina roja” el titular:

“Expediente JSO: de Kula a Dubai. ¿dónde están los boinas rojas?”. Y en el artículo

interior se hablaba de que hay ocho miembros en prisión, otros (no especificaba número)

en agencias de seguridad y “desaparecidos”, así como unos doscientos en los cuerpos de

seguridad de Serbia, Montenegro y la República Srpska.

Los Skorpion parece que fueron una de las formaciones que “intercambiaban miembros”

con los “boinas rojas” y “Guardia Voluntaria Serbia”1 y hoy, en relación con esta noticia,

volvían a aparecer los nombres de Jovica Stanisic y de Franko Simatovic, organizadores

de estas unidades.

Otro aspecto interesante que se ha comentado en los medios es la imagen de un pope

bendiciendo a los integrantes de la unidad. No se ha podido identificar a ese pope, y el

comentario de la radio B92 ha sido que la Iglesia ortodoxa debería hacer pública su

posición respecto a estos acontecimientos.

Page 23: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La matanza de Srebrenica

2 Newsweek, 6 jun 2005.

- 24 -

5 de junio de 2005 José-Miguel Palacios

Es difícil describir el horror que se siente al ver la película, y es fácil comprender el

impacto que ha tenido en toda la antigua Yugoslavia, pero muy en especial entre los

serbios.

Lo primero que llama la atención es que sean precisamente las imágenes las que han

provocado todo este revuelo, ya que los hechos eran conocidos desde hace años. ¿Qué

nos pasa? ¿Es que en nuestro mundo de imágenes las palabras ya no son suficientes para

conmovernos?

Habrá quien diga (y habrá quien piense) que lo grave del asunto es que las imágenes

existan y se difundan. Es lo que parece sugerir Donald Rumsfeld al comentar Abu Ghraib

y quejarse de la dificultad de hacer una guerra en la “ information age where people are

running around with digital cameras and taking these unbelievable photographs and

then passing them off, against the law, to the media, to our surprise, when they han not

even arrived in the Pentagon” 2.

A mí no me parecen tan terribles las imágenes de Srebrenica como los asesinatos que

representan. Y me parece espantoso pensar que contra un enemigo demonizado (es decir,

al que demonizamos) alguien pueda pensar que cualquier medio es válido. Ésa es la

mentalidad que subyace a la tragedia de Srebrenica, pero también a muchas otras

tragedias de la antigua Yugoslavia.

Y, aunque pensemos a veces que son cosas del salvaje Balcán, en el pacífico y liberal

Oeste esas mismas ideas están muy extendidas. En el último número de Newsweek, Fareed

Zakaria comentaba que una de las escuelas de pensamiento americanos (la jacksoniana)

estaba basada en la idea de que “normal rules of warfare are suspended when dealing

with ‘dishonorable enemies’”. El propio Zakaria, una persona nada extremista, confesaba

sentir “some sympathy for the Jacksonian view” (el “some” es interesantísimo) y se

lamentaba de que “in today's world, militarily effective methods can generate huge

Page 24: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 25 -

political costs” .

Todas estas ideas aberrantes están relacionadas con un extremo utilitarismo muy

enraizado en nuestro mundo contemporáneo (quizá la frase “el fin justifica los medios” no

sea popular, pero sí lo es todo lo que ella implica). Nos enfrentamos al mal y contra él,

todo vale. Supongo que es lo que pensarían los autores de la masacre de Srebrenica

(aquellos que no fueran simples gángsteres con tendencias psicópatas): luchamos por una

causa justa y para hacerla triunfar todo está permitido.

6 de junio de 2005 Jairo Dorado

Yo no tengo tan claro que sea el hecho en si de la existencia de las imágenes lo que

horrorice. La existencia de horas y horas de imágines sobre el holocausto nazi no impide

que haya personas que nieguen su existencia y hablen de complot sionista al respecto.

La aparición física de pruebas que muestran el delito es lo que horroriza. Pero, la

pregunta clave es, ¿quién filtró las imágenes y con qué finalidad?

Si se supone que es una obra de la fiscalía del Tribunal de La Haya (ITCY) para mostrar

la prueba real de los indicios, es grave. Porque todo aquello que no sea a través de

imágenes no podrá mostrarse como real (“sí, lo de Srebrenica fue un crimen, pero

pagamos ya por ello...”, se dirá como excusa). Y hay un precedente muy grave para estas

situaciones: la Segunda Guerra Mundial.

El horror de los campos de concentración ocultó graves crímenes cometidos por los

aliados: el bombardeo de Dresde, las bombas atómicas, el avance del ejército rojo sobre

Alemania y las violaciones que cometió entre la población germana de Prusia...

Y hay un ejemplo claro también de esta doble moral de culpabilidad: comparar la

influencia que el nazismo tiene hoy en día en Alemania con la que tiene en Austria.

Page 25: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La matanza de Srebrenica

- 26 -

Eso podría ser un elemento muy grave para la región: todos tuvieron la culpa, pero los

crímenes de una parte hace que los otros crímenes sean irrelevantes, por su número y por

su repercusión.

Esto no es ni mucho menos una justificación o una apología de una parte, sino una crítica

a la poca ética de la fiscalía, si es que fue el órgano que filtró esas imágenes. Porque si el

objetivo que se tiene es culpabilizar de forma exclusiva a una parte, adelante. Pero ésa no

es la labor de la fiscalía, sino de la historia.

6 de junio de 2005 Ivan Grac

Dentro de toda la locura en los Balcanes en la década de los noventa, Slobodan Milosevic

logró que la población de Serbia creyera poco en lo que se decía de las guerras y

exterminios.

Lo de Srebrenica es crucial para que los serbios más apasionados acepten e interioricen lo

que allí sucedió. Las personas más educadas, las personas que leían las noticias entre

líneas, las que son testigos, las que siempre estuvieron contra el régimen, sabían que los

del Ministerio del Interior serbio habían matado a personas de otras nacionalidades y

religiones. Para ellas, esta prueba no es información nueva.

Lo que sí es chocante, además de que se filmaran esos materiales y se guardaran nueve

años, es ver la reacción de los que no creían es los crímenes cometidos por los serbios.

Para la población que voluntaria o involuntariamente se sometió a la política de desinfor-

mación de Milosevic, esta filmación y las que vendrán son una directa acusación, una

prueba de los rumores que, pensaban, era una campaña contra su país. A muchos les

abrirán los ojos y espero que sirva para que poco a poco empiecen a terminar esas teorías

de que los serbios son un pueblo muy antiguo, descendiente de dioses y que vivieron en la

desaparecida Atlanta; que hay un complot internacional para desprestigiar a los serbios; o

que los serbios tienen un arma secreta basada en los principios de Nikola Tesla y M.

Einstein; porque, créanlo o no, todavía hay personas que creen en estas artimañas

Page 26: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 27 -

inventadas por el régimen de Milosevic y solamente hay que echar un vistazo a algunos

periódicos del país.

En todo caso, tampoco creo que sean los serbios los únicos criminales en estas guerras.

No podemos centrarnos en la culpabilidad serbia y olvidar todo lo demás. También es

interesante cómo enseguida empieza la campaña para localizar y arrestar a Mladic y a

Karadzic. Es como si todo lo hubieran planificado: sacan la filmación y viene Carla del

Ponte a los Balcanes a ver si un alma decepcionada traiciona a su héroe y le delata.

6 de junio de 2005 José-Miguel Palacios

Eso podría ser un elemento muy grave para la región: todos tuvieron la culpa,pero los crímenes de una parte hace que los otros crímenes sean irrelevantes, porsu número y por su repercusión.

Soy consciente de que se practica una “doble moral”, pero no me parece que en este

asunto que tratamos lo fundamental resulte la existencia o no de equilibrio entre las

partes. Para cualquier persona en sus cabales, el horror ante crímenes como los de

Srbrenica es la única reacción decente, y ello con independencia de lo que haya hecho o

podido hacer cualquier otra parte. Quien haya tenido alguna responsabilidad, debe

horrorizarse de sus actos y arrepentirse. El serbio en cuyo nombre, supuestamente, se

cometieron esos crímenes tiene que horrorizarse y distanciarse de ellos. Y decir alto y

claro que nunca dio mandato a ninguna pandilla de criminales para que hicieran cosas

semejantes, que su bando es el de las víctimas y que los culpables no pueden ampararse en

ningún tipo de solidaridad nacional. Una de las perversiones de las guerras civiles es que,

en un breve plazo de tiempo, transforman al vecino, amigo, kum, en el “otro”, un enemigo

odioso y amenazador. Y ya no es Milan, Alija o Ivo, sino un cetnik, un balija o un ustasa.

Siento no tener a mano la cita exacta, pero alguien escribió que la única manera sana de

afrontar la guerra civil de la antigua Yugoslavia es sentir que todas las víctimas fueron

propias (lo que implica también asumir que todos los villanos, en alguna medida, lo fueron

también).

Page 27: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La matanza de Srebrenica

- 28 -

6 de junio de 2005 Dalibor Soldatic

No nos hagamos ilusiones de que Serbia entera vaya a arrepentirse o sentirse culpable por

la matanza de Srebrenica. La inmensa mayoría de la población reacciona, lógicamente,

horrorizada ante lo que es un evidente crimen, ante lo vil del acto. Otros dicen sí, pero no

sabes lo que hicieron los musulmanes en Srebrenica antes de que llegaran las tropas

serbias. Otros prefieren guardar silencio y se sienten mal porque temen que la nación

entera vaya a ser culpable y tratada de responsable. Creo que resumiendo podemos decir

que en su mayoría la gente ha reaccionado indignada de ver que un crimen tan bajo haya

podido cometerse en su nombre y defendiendo supuestamente a los compatriotas. El

efecto positivo del vídeo, si es que de algo positivo puede hablarse, es que va cayendo el

mito de los héroes de las guerras en Bosnia y Croacia y las cosas empiezan a llamarse por

su nombre. Por otra parte se está trazando la línea de demarcación entre lo que es

defender el país y el territorio y lo que es ir a pillar, violar y matar a gente por la simple

razón de no ser de la misma nacionalidad. Además se insiste en que nadie tuvo el derecho

de hacer eso en el nombre de la nación serbia y que, si crímenes hubo, hay que procesar y

condenar a los culpables.

Y creo que con ello basta. No caigamos en sensacionalismos. Primero, es muy sospecho-

so el hecho de que el Tribunal haya tardado tanto en sacar a relucir el vídeo. Segundo,

seamos objetivos, por más que se quiera justificar unos u otros actos, lo de Croacia y

Bosnia fueron guerras civiles, guerras sucias en las que hubo crímenes por todas partes.

Uno no es más criminal o menos criminal porque mató a más o a menos personas. Una

persona se califica de asesina por haber matado a una sola persona. Y un solo muerto

basta para indignarse. Estoy de acuerdo que miles de muertos requieren gritos hasta el

cielo, pero muertos, asesinados, hubo en todas partes. O, ¿nos estamos olvidando de los

vídeos británicos de Kupres, con cabezas clavadas en las puertas de los hogares, de los

doscientos mil serbios expulsados de Croacia, de que cuando cae una bomba y mata a una

niñita que está en el baño eso es daño colateral?

Ejemplos de comportamientos inhumanos e indignos hay en todas las guerras. No

tenemos que ir muy lejos para encontrarlos. Irak, Afganistán y Vietnam están llenos de

Page 28: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 29 -

ejemplos.

Me acuerdo que en pleno debate sobre la detención de Pinochet en Inglaterra Jack Straw

explicaba a la BBC que el general no podía ser responsable porque un capitán del ejército

había matado a un estudiante o violado a una mujer durante el interrogatorio. Parece que

ignoraba lo que viene aplicándose en La Haya como “responsabilidad de mando”.

No, no justifico a nadie. Todo lo contrario, he denunciado desde siempre todos los actos

indignos del ser humano cometidos en todos los episodios de la desintegración de

Yugoslavia. Lo que no comprendo es hasta cuándo vamos a seguir contando los muertos

y cuándo vamos a comenzar a ver hacia el futuro. Porque de lo contrario vamos a seguir

viviendo en la espera del play-off balcánico que ya podría convertirse en una tercera

guerra mundial.

15 de julio de 2005 José-Miguel Palacios

Lo que sí es chocante, (...)es ver la reacción de los que no creían es los crímenescometidos por los serbios. Para la población que voluntaria o involuntariamentese sometió a la política de desinformación de Milosevic, esta filmación y las quevendrán son una directa acusación, una prueba de los rumores que, pensaban,era una campaña contra su país.

Creo que Ivan Grac ha expuesto magníficamente una de las cuestiones clave en torno a la

matanza de Srebrenica: la evidencia sirve para demostrar a muchos serbios que, frente a lo

que ellos creían (cegados por la propaganda del régimen de Milosevic), era verdad lo que

desde otras repúblicas y desde el exterior se decía. La parte serbia había cometido

terribles crímenes.

Voy a intentar reconstruir mi percepción de lo que los serbios creían en aquellos tiempos.

Por supuesto, se trata sólo de una percepción y estoy seguro de que otros la tendrán

diferente. Los puntos clave serían:

a) Nadie dudaba que se estaban cometiendo crímenes, pero se creía que era un subpro-

Page 29: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La matanza de Srebrenica

3 Un disco de Zabranjeno Pusenje de aquellos años se titula, precisamente, así: “Ja nisam odavde” .Y era verdad: el líder del grupo, Nenad Jankovic (alias, Dr. Nele Karajlic), era uno más de los muchosserbios de Sarajevo instalados en Belgrado desde el principio del conflicto.

- 30 -

ducto necesario (aunque horrible) de toda guerra (“la guerra es la guerra”) y que no eran

muy diferentes a los que cometían las otras partes.

La realidad que muchos serbios (en particular, muchos belgradenses) tenían delante de los

ojos la constituían cientos de miles de refugiados, muchos de los cuales contaban

tragedias espeluznantes (muchas veces, es verdad, estos testimonios habían sido exagera-

dos por el adoctrinamiento, por el miedo o por la frustración, pero eso no cambia la

impresión del que los escucha). Mucha gente tenía familiares “del otro lado” en casa, y

eso durante años. Y era muy frecuente que el camarero que te atendía en el café hablara

ijekavski (hacia 1995-96 le pregunté a un amigo croata de Belgrado qué tal le trataba la

gente cuando le oía hablar; me dijo que casi todos pensaban que era un refugiado). Y si

preguntabas por una calle en Belgrado o Novi Sad no era raro que te respondieran “Ja

nisam odavde” (“No soy de aquí” 3). Y la gente sabía que tenía una vikendica en la costa

dálmata y que la había perdido (en muchos casos, a través de intermediarios, algún

aprovechado se la acababa comprando por una fracción de su valor). Y veía que en

Belgrado había habido un importante movimiento de huida de una guerra que no se

deseaba (deserciones, fuga al extranjero de jóvenes en edad militar), mientras que, al

parecer, en el otro lado tomaban con toda naturalidad el fusil y se ponían a disparar contra

los serbios. Así que, con todos estos datos (todos ellos tomados de la vida real, aunque el

régimen se encargara de exagerar algunos), la gente aceptaba con bastante calma las

maldades del propio bando, demasiado concienciada, como estaba, de las maldades de los

otros.

b) Segundo convencimiento: se había desencadenado una campaña internacional de

propaganda que presentaba a los serbios como canallas y a los demás ex-yugoslavos

como ángeles.

Muy rápidamente se estableció en Occidente una imagen sobre quién era bueno y quién

era malo en la antigua Yugoslavia. De hecho, si repasamos los periódicos del verano de

1991, veremos que esa imagen es muy anterior a los principales crímenes de guerra.

Page 30: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

4 Durante la guerra de 1999, una célebre canción de Bora Corba empezaba con la frase “Znam dasu svi protiv Srbije” (“Sé que todos están contra Serbia”).

- 31 -

Desde que eso fue así, las noticias sobre los serbios fueron en ocasiones grotescas (no

sólo Milosevic manipulaba la realidad), así que no debe extrañarnos que en Belgrado la

credibilidad de lo que se decía en el exterior fuera muy limitada. Los que tenían contacto

con extranjeros, tanto en Belgrado com en la República Srpska, acababan casi siempre

contando la misma historia: “llegan pensando que tenemos cuerno y rabo, pero luego

acaban diciendo que somos muy majetes y que con nosotros se lo pasan mejor que con los

otros”.

La idea de que desde Occidente se les estaba tratando injustamente (“nepravedne,

nezasluzene sankcije” , “sanciones injustas e inmerecidas” era una frase tipo en el discurso

de la gente de Milosevic) caló hondo en la población4, pero también entre intelectuales

liberales, con excelentes conexiones en el exterior y nada ligados a Milosevic. Seguro que

alguno puede añadir nombres, pero ahora mismo me vienen a la memoria dos que

escribieron bastante en esos años sobre lo injusto de la percepción occidental del

conflicto: Svetozar Stojanovic y Aleksa Djilas. De este último, que ha publicado en inglés

sus obras más importantes, es la terrible constatación de que durante los años noventa los

serbios eran la víctima perfecta: para las derechas europeas, los últimos comunistas; para

las izquierdas, nacionalistas furiosos.

No creo que la propaganda de Milosevic, a pesar de sus innegables esfuerzos, tuviera

demasiado que ver en la conformación de la opinión pública serbia. El entusiasmo por

Sloba existió, pero se vino abajo muy pronto (creo que con la evidencia de la desaparición

de Yugoslavia, en 1992) y a lo largo de los 90 la credibilidad interna de su régimen

resultaba muy limitada. Exagerando un poco, si la gente oía en el Vreme de la 19.30 que

estaba lloviendo, miraba por la ventana para confirmar si era cierto.

Así que cuando ocurrió lo de Srebrenica, la opinión pública serbia no estaba nada

preparada para creer en nuestras noticias de grandes crímenes (durante los dos años

anteriores, parecía increíble que siempre que políticamente se necesitaba se producía una

matanza espectacular de la que se podía responsabilizar a los serbios. Pero es que,

Page 31: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La matanza de Srebrenica

- 32 -

además, el “momento procesal” resultaba inoportuno. Para los belgradenses, lo peor ya

había pasado. Desde 1994 existía ya un esbozo de la solución final del conflicto (el plan

del Grupo de Contacto) y, además, había empezado el proceso de suavización de las

sanciones. La opinión serbia tendía a pensar que las grandes barbaridades eran cosa de los

primeros meses (“en caliente”), pero no le veían lógica en una situación en la que,

evidentemente, no conducían ya a nada. Creo que nadie prestó demasiada atención a la

progresiva descomposición de la estructura de mando serbobosnia, que hizo que

comenzaran a cometer errores graves (¡a quién se le ocurre secuestrar a varios cientos de

soldados de pacificación, como hicieron en mayo de 1995!). Y nadie prestó tampoco

demasiada atención a lo que podía estar pasando por la cabeza de Ratko Mladic (su hija,

estudiante en Belgrado, se suicidó hacia 1993; por entonces se dijo que no había podido

soportar la presión ambiente).

Las personas más educadas, las personas que leían las noticias entre líneas, lasque son testigos, las que siempre estuvieron contra el régimen, sabían que los delMUP serbio habían matado a personas de otras nacionalidades y religiones.Para ellas, esta prueba no es información nueva.

Hubo de todo. Hubo gente perfectamente lúcida, pero hubo también gente que se opuso a

Milosevic por sistema, y que, por ello, ha acabado siendo contabilizada entre los buenos.

Algunos demócratas de los años noventa no eran, en realidad, más que los derrotados de

la Octava Sesión. Y líderes impecablemente democráticos apoyaron en 1994 a la

República Srpska cuando Milosevic le aplicó sanciones por no aceptar el plan del Grupo

de Contacto. Porque no siempre estuvo claro para todo el mundo si se traba de apoyar la

democracia, la justicia y la sensatez (aunque ello supusiera estar puntualmente de acuerdo

con Milosevic) o si se trataba de acabar contra Milosevic.

Hay ejemplos divertidos de este “el enemigo de un enemigo de la democracia es necesa-

riamente un demócrata”. En 1988 las embajadas occidentales en Belgrado protestaron

ante las autoridades yugoslavas por la prohibición de un libro de un autor al que considerá-

bamos democrático simplemente por oponerse al comunismo. El autor era un tal Vojislav

Seselj. Y, por si alguno tiene alguna duda y puede pensar que algún trauma personal pudo

convertir al demócrata de 1988 en el nacionalista radical de 1990, basta con que se lea sus

libros.

Page 32: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 33 -

16 de julio de 2005 Dalibor Soldatic

Resulta muy difícil comentar en frío asuntos en los que van de por medio muchas

emociones. Como sigo siendo yugonostálgico a pesar de ser consciente que se trata ya de

un sueño imposible, trataré de añadir algunos comentarios como alguien que ha podido

vivir las cosas desde el lado “de allá” y desde el de “acá”. Quizás algunos de esos

elementos ayuden a comprender las reacciones de la gente en Belgrado.

a) Los serbios fueron los únicos a los que nadie preguntó su opinión respecto a la

desintegración de la antigua Yugoslavia. Todas las repúblicas tuvieron sus referendos,

salvo Serbia.

b) Serbia fue, junto con Montenegro, la única que entró en Yugoslavia como Estado y vio

en poco tiempo cómo se deshacía todo. Hay que recordar que después de la Segunda

Guerra Mundial muchas de las industrias de Serbia fueron trasladadas hacia otras

repúblicas con miras a asegurar un desarrollo equilibrado.

c) La memoria histórica de los serbios no olvida las matanzas de serbios en la Segunda

Guerra Mundial. Escuchar a Franjo Tudjman declarar en un discurso oficial que Croacia

es la realización final del sueño del Estado Independiente de Croacia (NDH, el Estado

fascista gobernado por el ustacha Ante Pavelic bajo los auspicios de la Alemania nazi y la

Italia fascista) inevitablemente despertó las viejas heridas. ¿Cómo reaccionarían los judíos

al escuchar a un político alemán declarar que la Alemania unida es la realización del sueño

de Hitler?

d) Serbia perdió en los primeros episodios de la desintegración de Yugoslavia la batalla de

propaganda. La mentira entró a formar parte de las operaciones eslovenas, croatas y

bosníacas. Lo que no quiere decir que la prensa serbia no se dedicara a mentir a su

público. Todo empezó con los aviones MiG que bombardean Ljubljana (la agresión serbia

contra la pequeña Eslovenia), pero nadie se atreve a decir en alto cuántos eslovenos

muertos hubo y cuántos reclutas del Ejército que tenían armas sin municiones perdieron la

vida en aquel primer conflicto. El guión previsto destinaba a Serbia y a los serbios el papel

Page 33: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La matanza de Srebrenica

- 34 -

de los malos. Milosevic, efectivamente, era tachado del último comunista en Europa. No

importa el hecho de que Kucan, el primer presidente esloveno, también lo fuera, o que

Drnovsek hubiera presidido la Yugoslavia comunista. Muchas de las acusaciones contra

los serbios fueron falsas.

e) Todo lo expuesto no justifica el terrible caso de Srebrenica. No creo que haya persona

que no pueda quedar horrorizada por ese hecho. Pero ¿qué pasó con más de 3 000 serbios

masacrados previamente en la zona de Srebrenica por las fuerzas bajo el mando de Naser

Oric? Nadie habló tampoco de los más de 200.000 serbios que tuvieron que salir de

Croacia y cuyas columnas fueron atacadas por fuerzas militares croatas.

f) Todo ello hace que mucha gente, al afrontar situaciones como la de Srebrenica,

reacciona diciendo: “sí, pero, ¿qué pasa los serbios masacrados?; ¿quién levanta la voz de

protesta por ellos?”.

g) Al fin y al cabo, del horrendo crimen de Srebrenica se sabe desde hace años. ¿Por qué

el video, que en realidad es poca cosa, a pesar de ser atroz, pues muestra el fusilamiento

de seis personas, sale apenas ahora? ¿Se presentará en La Haya el muyahidin que corta las

cabezas a los serbios del vídeo presentado por los radicales en Belgrado? ¿Levantará

alguien la voz de protesta?

Veamos las cosas tal y como son. Hubo una guerra civil. Sucia, como lo son todas las

guerras civiles. En ella se cometieron atrocidades. Que hay que denunciar y someter a

juicio a todos los culpables de ello. Dejemos de lado todos los intereses y juegos subterrá-

neos de los diversos factores internacionales. Que no salen exentos de culpas en ese

asunto. Diez años después de Srebrenica tuvimos en los días pasados una guerra de

vídeos. Los únicos en haber ganado puntos al final fueron los radicales serbios, que

mostraron en el Centro Sava de Belgrado su famoso vídeo de hora y media con matanzas

de serbios. Y que tienen toda la razón del mundo al preguntar: ¿qué emisora de televisión

transmitió esas imágenes? ¿La prensa internacional informó de la conmemoración de

Bratunac, dos días después de Srebrenica?

No quiero defender a nadie, ni acusar a nadie en este triste asunto. JM Palacios ofrece una

Page 34: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 35 -

imagen bastante objetiva de lo que sucedía en aquellos años en Serbia. De ese sentimiento

de injusticia cometido contra los serbios. Con noticias de atrocidades cometidas por el

otro bando (recuérdese la salida del Ejército Popular Yugoslavo de Sarajevo durante

aquel episodio del secuestro de Izetbegovic y las órdenes emitidas por Ganic). Con las

sanciones que, claro, fueron sentidas como injustas. Porque el que sufría las consecuen-

cias de las sanciones era yo, lo eran mi familia y mis amigos, y no Milosevic. Lo mismo

que nos bombardearon, aunque sabían que cuando menos el cincuenta por ciento de

nosotros estaba en contra de la política de Milosevic.

Ciertamente estoy de acuerdo en que según el refrán cada cual debe comenzar barriendo

su propio patio. Que cada cual tome conciencia de los crímenes cometidos en su nombre

durante la desintegración de Yugoslavia. Pero seguir con la política de que hay “más

culpables” y “menos culpables” nunca dará resultados.

Hay otro factor que debe tenerse en cuenta. Demasiadas presiones sobre todo el mundo al

final radicalizan mucha gente. Serbia nunca estuvo tan unida como durante los bombar-

deos.

Por eso sigo insistiendo en que Serbia necesita aperturas ante el mundo. No es haciendo

colas denigrantes y vergonzosas con un montón de papeles y certificados que humillan

para obtener visados que se van a formar “europeos”. A mí me dijo el otro día un

diplomático occidental que así será hasta que “no entreguemos a Mladic y Karadzic”. Le

pregunté por qué no aplica la misma lógica a Alemania hasta que no entregue a Martin

Bormann o a Chile hasta que no entregue a Pinochet al juez Garzón . Me dijo que

exageraba. Claro. Pero no supo decirme cuándo íbamos a conmemorar a los muertos en la

guerra civil de Ruanda. Porque eso es África y allí se pueden cometer atrocidades. Que

serán juzgadas, pero sin tanta publicidad.

Page 35: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 37 -

Croacia: sombras de una batalla

17 de marzo de 2005 Javier Asensio

Me extraña que no haya ya reacciones en este foro sobre el rechazo de la Unión Europea

a seguir las negociaciones de entrada de Croacia por la “escasa colaboración” en la loca-

lización, detención y juicio a Gotovina.

Justo hace unos días se hablaba en el foro precisamente de otros criminales de guerra. Me

viene a la memoria el debate que hubo en el foro sobre la oportunidad de que entre Croa-

cia en la Unión Europea antes que Serbia-Montenegro. Creo que la Unión Europea, apar-

te de jugarse la credibilidad, se juega nuevas desestabilizaciones en la zona por el agravio

comparativo que podría suponer.

Lejos de alegrarnos por este hecho, creo que deberíamos ser muy prudentes. A lo mejor

hay que cerrar algunas heridas más, pero en toda la antigua Yugoslavia y no sólo en algu-

nas de sus partes.

19 de marzo de 2005 José-Miguel Palacios

Me extraña que no haya ya reacciones en este foro sobre el rechazo de la UniónEuropea a seguir las negociaciones de entrada de Croacia, por la “escasa cola-boración” en la localización, detención y juicio a Gotovina.

Cuando Ivica Racan llegó al poder tras la muerte de Tudjman circulaba un chiste que

atribuía al líder socialdemócrata unas intenciones más radicales de las que luego mostró.

Se suponía que viajaba a Bruselas en busca de un importante crédito y que la contraparte

europea le preguntaba cómo pensaba pagarlo. Racan respondía “Gotovinom”, que puede

significar “al contado”, pero también “con Gotovina” (entregándolo).

Page 36: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Croacia: sombras de una batalla

- 38 -

La interpretación del “asunto Gotovina” depende de la opinión que cada uno tenga sobre

los condicionantes políticos del Tribunal de La Haya. El que crea que es completamente

independiente no atribuirá ningún significado especial a este hecho (si acaso, le servirá

para confirmar su imparcialidad). El que piense que las necesidades políticas pesan mucho

en sus decisiones tenderán a leer la presión sobre Croacia en el contexto del procesamien-

to de Ramush Haradinaj, hasta hace unos días Primer Ministro de Kósovo. En pocas

semanas, dos decisiones muy importantes de carácter “proserbio”.

Times recuerda, acertadamente, que Gotovina es un héroe nacional para muchos croatas.

Lo mismo podría decirse de Haradinaj para muchos albaneses kosovares. Y, aunque los

derrotados no tienen héroes, habrá serbios que piensen que bastantes de los encausados

en La Haya no han hecho otra cosa que defender a su gente. Parece que la situación dista

de estar madura para una visión común de lo ocurrido y para una reconciliación basada en

verdades compartidas.

20 de noviembre de 2005 José-Miguel Palacios

Circulan por Internet fotos de la campaña electoral para las elecciones locales de este año

en Vukovar (Croacia). En la primera de ellas, en un cartel del SDSS (Partido Serbio De-

mocrático Independiente) puede leerse (en latinica): “Vukovar je i nas grad” (Vukovar

también es nuestra ciudad).

Unos metros más allá, HDZ (Comunidad Democrática Croata) contesta con otro cartel:

“A, zasto ste ga rusili?!” (¿Y por qué la destruisteis?).

Tampoco esto se queda sin contestación. En el cartel de la lista independiente de Danijel

Rehak se lee: “Rusili su ga, a vi ga niste branili” (La destruyeron y vosotros no la defen-

disteis).

Como puede verse, no es tan fácil superar una guerra civil, en particular allí donde sí hubo

combates.

Page 37: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 39 -

4 de diciembre de 2005 César Luis Díez

Hace unas horas saltaba a los medios de comunicación la noticia de la captura de Ante

Gotovina en un hotel de las Islas Canarias. Con esto acababan los rumores de los últimos

meses sobre el paradero del general croata (situado en algún momento incluso en un

monasterio franciscano), y seguramente empezaran otros de cómo ha llegado hasta allí,

con qué pasaporte, etc.

Fuera de esta “rumorología”, parece más interesante ver cuáles son las reacciones que

este suceso provoca en los países de la antigua Yugoslavia. Por ejemplo: ¿cómo se perci-

be el hecho en Croacia y que consecuencias políticas puede acarrear?

En este sentido, he estado navegando por la web de B92, leyendo los comentarios que los

lectores de esta página estaban enviando ( había ya, aproximadamente, unos 150) y parece

que a los participantes en este foro lo que más les preocupa es que no se haya producido

todavía la detención de Karadzic y Mladic. Vinculan el hecho producido al que todavía no

se ha producido y, entre bromas y veras, lamentan que hasta en esto los “vecinos” se

hayan adelantado. Es una sensación de “algo ya visto”, de no poder creer que una vez

más su país va con retraso. Aunque claro está, no faltan los comentarios que dicen que la

responsabilidad de que no aparezcan los fugitivos es de Bosnia-Hercegovina y de la Repú-

blica Srpska, mientras que los que pagan por esto son los del “otro lado de la frontera”.

Page 38: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 41 -

Yugonostalgia nakon svih ovih godina

22 de mayo de 2005 José-Miguel Palacios

Siento rebajar el alto nivel cultural que había alcanzado nuestro debate, pero no me resisto

a comentar algunos aspectos interesantes del festival de Eurovisión que se celebraba ayer.

Para empezar, fue curioso ver cómo los yugoslavos se votaban en bloque (hubo también

bastantes votos interbalcánicos, pero la preferencia absoluta de los yugoslavos por los

yugoslavos resultó muy llamativa). La locutora de TVE, que acabó comprendiendo bastante

bien la tendencia, estaba algo escandalizada: ¿no son estos mismos señores los que se han

estado dando palos durante diez años?

Respecto a las canciones, la macedonia buscaba mezclar elementos tecno con otros étnicos.

Son los ingredientes del turbofolk, del que tantas veces nos ha hablado César Luis Díez,

sólo que combinados de forma distinta. La bosnia, cantada en inglés, podría haber sido

escandinava (las chicas, rubias teñidas, pretendían parecerlo). La serbomontenegrina y la

croata, sin embargo, resultaron extraordinariamente fieles al clásico pop yugoslavo y fueron

las que más gustaron dentro de la zona.

Por Serbia-Montenegro, unos chicos montenegrinos (No nejm) interpretaron una melodía

que recordaba bastante a algunas canciones de Zdravko Colic. Sin embargo, el arreglo, muy

actual, y la propia edad de los intérpretes marcaban una distancia, cariñosamente nostálgica,

con respecto a la canción y al mundo que evocaba.

El enfoque de Croacia fue diferente. El gran Boris Novkovic (su Tamara fue uno de los

grandes hits yugoslavos de los años 80) fue fiel a sí mismo y nos ofreció una buena muestra

de yugopop clásico. El jurado de Sarajevo nos recordó que Novkovic había nacido en la

capital bosnia. Los que hayan buceado más en su biografía sabrán que es hijo de Djordje

Novkovic, un reputado compositor de música ligera, natural de Pancevo (junto a Belgrado).

Page 39: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Yugonostalgia nakon svih ovih godina

- 42 -

Un detalle curioso más: en un festival donde casi todas las canciones se interpretan en inglés,

el serbocroata, con Croacia y Serbia-Montenegro, fue el segundo idioma más oído.

Y una reflexión: ahora va a resultar que, después de diez años de guerra y muchos más de

propaganda agresiva de unos contra otros, va a resultar que los yugoslavos de a pie, los que

envían SMS, siguen teniendo una conciencia bastante desarrollada de lo mucho que

comparten.

Fue curiosa la frase con la que se despidió el jurado de Zagreb: damos nuestros doce puntos,

y una gran alegría, al equipo de Serbia-Montenegro.

3 de julio de 2005 César Luis Díez

Querría comentar el megaconcierto belgradense de Bijelo Dugme el pasado martes. Los del

“botón blanco” cerraban en la capital serbia su gira de “reunificación”, tras dos conciertos

en Sarajevo y en Zagreb. El gigantesco concierto en el hipódromo de Belgrado, ante una

multitud que los medios estiman en más de 150.000 personas, se caracterizó por una pésima

organización, un catastrófico sonido y problemas de circulación que duraron toda la tarde

y la noche. Eso no quitó para que se juntaran en la arena del hipódromo familias enteras con

niños pequeños, adolescentes que eran bebes cuando triunfaban las canciones del grupo,

yugonostálgicos en general, habitantes de varias antiguas repúblicas yugoslavas y algunos

extranjeros (entre ellos, el que escribe este mensaje con dos compañeros de la lista,

verdaderos expertos en el tema, que me ayudaron a comprender bastante mejor el

concierto).

Fueron casi tres horas de repaso que empezaron con la formación más reciente de la banda

(la de los noventa, con Tifa de vocalista) para terminar con la de los éxitos de los ochenta.

Siempre, claro está, con la omnipresente figura de Goran Bregovic, demostrando que no hay

que cantar para ser el líder indiscutible. Después del concierto vino la lectura de las críticas

y la de frases tan curiosas como ésta de Tifa remarcada por el semanario NIN: “Kakve crne

Page 40: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

1 “¿Qué coño de emoción? Lo de Bijelo Dugme ha sido la mentira del siglo; todo se ha organizadopor la pasta”. Traducción totalmente libre y - espero- sujeta a toda serie de críticas.

- 43 -

emocije?! Ovo sa Dugmeton je bila prevara veka; sve je organizovano zbog love”1.

5 de julio de 2005 José-Miguel Palacios

De los tres cantantes de Dugme, Tifa es el que menos me convence y la frasecita que recoge

NIN tampoco me sirve para mejorar su imagen. ¿Qué más da la emoción que pueda sentir

él, comparada con la que sentían las 150.000 personas que le estaban pagando el sueldo?

Porque a esa gente, probablemente, la había llevado al hipódromo más el “mito Dugme”

(uno de los iconos de la yugonostalgia) que las canciones. Vista desde la distancia de tres

décadas, la música del grupo de Sarajevo es muy de su época y sólo algunas de las

canciones de sus primeros años siguen siendo actuales. La gente estaba por otra cosa y él,

el gran Tifa, podría respetarlo en lugar de hacerse el original con una frase copiada a Frank

Zappa (sobre los Beatles).

El estatuto de Tifa en el grupo, por otra parte, fue curioso. Si creemos lo que cuenta

Janjatovic en su enciclopedia del yugorock, Dugme nunca fue una banda al estilo de los

Beatles (un grupo de amiguetes que acaban haciéndose famosos), sino que entre ellos

siempre existió una clara jerarquía. Todavía, los componentes de las primeras formaciones

(el cantante Zeljko Bebek, por ejemplo) podían considerarse miembros de verdad del grupo.

Sin embargo, a partir de mediados de los ochenta, cuando Beber es sustituido por Tifa,

Dugme es ya, en la práctica, “la banda de Bregovic”. Los demás componentes del grupo,

grandes artistas en muchos casos, eran poco más que músicos a sueldo.

Según Janjatovic, la elección de Bregovic para sustituir a Bebek había sido Alen (Alija)

Islamovic, pero éste se encontraba comprometido con otro grupo bosnio (Divlje Jagode,

creo), así que tuvo que optar por Tifa. Un par de años después, Tifa se marchó y entró Alen.

Más allá de mitos, quizá sea el mejor cantante de los tres.

Page 41: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Yugonostalgia nakon svih ovih godina

- 44 -

6 de julio de 2005 Dalibor Soldatic

Bijelo Dugme ha sido, sin lugar a dudas, el mejor grupo de rock en serbocroata. Goran

Bregovic, que con el tiempo ha demostrado ser un músico de talento indiscutible, fue el

primero en lanzar lo que en aquella época se llamaba “rock de pastores” ( pastirski rok), del

que después derivaría el turbofolk.

Es un hecho que todo lo que cantaron en el concierto de Belgrado había sido un éxito y que

las canciones eran muy populares. Bastaba ver a aquellas cien mil o doscientas mil personas

que coreaban las piezas y se sabían la letra de todas.

La asistencia al concierto tuvo un poco de todo. La gente acudió al hipódromo movida por

motivaciones diversas:

a) por el hecho de que se tratase del mejor grupo de rock en la historia de la escena pop

yugoslava;

b) por la indiscutible calidad y popularidad del Bregovic de hoy en día, junto con el deseo

de ver qué había pasado con los demás miembros del grupo;

c) porque se juntaron en el concierto padres e hijos;

d) por la yugonostalgia, no cabe duda;

e) también por la rivalidad que aún existe con otras metrópolis yugoslavas. Había que

demostrar a Zagreb y a Sarajevo lo que puede Belgrado, aunque es verdad que ni la capital

croata ni la bosnia estuvieron nunca a la altura de la serbia en este terreno.

Lo demás es lo menos importante. Todos sabemos que Bregovic ha renegado de sus días

de músico de rock y que solamente una considerable suma de dinero podía hacerle vestir de

nuevo ese traje. Los que conocemos algo de Bijelo Dugme no hemos dudado de ello ni un

momento. Y no importa el hecho que un gran porcentaje de su repertorio actual con su

Banda para Entierros y Matrimonios provenga de la época de Bijelo Dugme, o que se sepa

Page 42: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

2 Qué mejor ejemplo que la canción tradicional dálmata “U te sam se zaljubila” (Me enamoré deti), incluida en la banda sonora de La reina Margot bajo la firma de G. Bregovic.

- 45 -

que ha tomado motivos del folklore y firmado con su propio nombre2. En cuanto al

conjunto, siempre estuvo organizado de modo que Bregovic tomaba todo el dinero y los

demás tenían salario y percibían una suma fija por concierto o disco.

De los tres cantantes, Bebek ha sido siempre el mejor, ya que es el más cercano por su

sensibilidad a la música rock. Tiene el defecto de una voz débil y, generalmente, no da más

de tres o cuatro canciones seguidas. Tifa tuvo problemas con la droga y la bebida y ha sido

bastante inestable como cantante. Alen es el mejor cantante de los tres y lo ha demostrado

en el concierto de Belgrado, pero no alcanza la comunicación emotiva con el público que

tiene Bebek.

Espero haber aclarado un poco a los interesados lo que fue un concierto histórico. Y

dejemos de lados el hecho que había que ir a pie durante horas porque no permitían el

acceso de automóviles, que el sonido era pésimo, que las bebidas eran carísimas, que no

había esto y aquello... El concierto de Bijelo Dugme fue histórico, lo mismo que en tiempos

fue histórico su concierto en Kosutnjak, en la Hajducka cesma. Bregovic siempre supo

hacer las cosas. No se pierdan su Carmen gitana cuando la presente por España.

Page 43: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 47 -

La Unión (Desunión) de Serbia y Montenegro

4 de julio de 2005 Roberto Barral

Aventurarse en la cuestión de qué pasará con la Unión de Serbia y Montenegro es un tema

peliagudo que ni los más duchos en las cuestiones políticas del entorno se atreven a abordar

abiertamente. Tampoco se trata de hacer elucubraciones quinielísticas a la ligera, pero sin

opiniones al respecto tampoco podremos desechar argumentos que de nada sirven.

Me explico. Hoy he leído en Blic (nº 263) que desde el gobierno serbio se espera que la

cuestión de la secesión se posponga a una presumible entrada en la Unión Europea (UE).

Parece quizá más fácil entrar en la UE “de inmediato” y después abordar si nos separamos

o no, dado que “Solanija” (La Unión de Serbia y Montenegro) está en parte condicionada

(desde la propia UE) a permanecer unida para entrar en el “mejunje europeo”. Otra cosa

será que una vez dentro “te dejen” separarte...

Por otra parte, algunos dirigentes montenegrinos creen que su república entraría más

fácilmente en “el Club” si no tuviese lo que ellos consideran el “lastre” serbio. Y a todo ello,

añadámosle el posible efecto dominó que tendría la secesión de Kósovo sobre el entorno,

y volverán a poseer una razón más en Montenegro para separarse definitivamente.

Sé que todo esto es de sobra sabido por los colisteros.

Pero es que tampoco he tenido la impresión de que haya habido muchos desánimos (o

aspavientos) por los resultados negativos de los plebiscitos europeos sobre el tratado de la

Constitución. La impresión que tengo es que se sigue pensando que la prioridad es entrar

en Europa “al precio que sea”. En todo caso, una vez dentro ya se verá qué sucede con

dicha unión.

Me encuentro un poco desorientado. ¿Alguien cree en una secesión apresuradamente

cercana?.

Page 44: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La Unión (Desunión) de Serbia y Montenegro

- 48 -

4 de julio de 2005 Julio Garrote

De todas las opiniones oídas y pronunciadas por mis buenos amigos serbios y montenegri-

nos, que haberlos haylos, no he encontrado ninguna, ni procedente de los unos o de los

otros, diferente de la convicción del ciudadano de a pie de que Serbia y Montenegro deben

continuar juntas, a pesar de lo que los políticos digan. Y es que sólo en Belgrado dicen que

hay más de 200.000 montenegrinos viviendo y trabajando. Si una se consumara la secesión,

tendrían que solicitar visado y permiso de residencia y trabajo, lo que supondría un grave

perjuicio para ellos. Total, en Montenegro el turismo está como está; el sector servicios,

poco desarrollado; la industria, atrofiada. Quedan las cabras y las ovejas, pero me temo que

hay pocos montenegrinos que quieran volver a los oficios ancestrales. A ver entonces quién

es lastre de quién.

Lo lógico es que los políticos secesionistas montenegrinos se dejen de tanta demagogia. En

particular, Milo, de dudosa catadura moral.

6 de julio de 2005 Miguel González Lázaro

Me llamo Miguel González Lázaro y llevo trabajando desde hace un año en Podgorica con

una ONG española, en un programa transfronterizo de ayuda legal gratuita a refugiados y

desplazados financiado por AECI.

Sobre el tema de la independencia, quizá la perspectiva que se tiene desde el propio

Montenegro es diferente a la que se tiene en Serbia. Es cierto que la población local no se

decanta de forma mayoritaria por una opción o por la otra, pero también lo es que un

porcentaje alto de los montenegrinos, alrededor del 50 %, son favorables a una independen-

cia de iure que sancione lo que en muchos aspectos es ya de facto. Desde el proceso de

redefinición de la Unión que tuvo lugar hace unos años, como sabéis Serbia y Montenegro

funcionan autónomamente en varios aspectos, quizá el más importante de ellos el

económico. No es sólo que haya diferentes monedas o que los presupuestos de ambas

Page 45: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 49 -

repúblicas sean independientes, sino que hay que pagar derechos de aduana por productos

importados desde Serbia y los puestos fronterizos entre ambas repúblicas son más

imponentes que los que hay con Croacia o con Bosnia (financiados por USAID, todo hay

que decirlo).

Mucha población siente que la unión con Serbia no reporta especiales beneficios a

Montenegro y que la independencia no sólo no acarreará costes añadidos a Montenegro sino

que permitirá, en última instancia, un más rápido acceso a la Unión Europea y una mejor

defensa de los intereses de Montenegro ante las instituciones y organismos internacionales,

dado que se tiene la impresión general de que la diplomacia de la Unión defiende

básicamente los intereses del pez grande. Obviamente esto no es más que una opinión y

propaganda gubernamental que Solana y otros intentan matizar constantemente.

Como sabéis, Milo Djukanovic tiene intereses personales en la independencia (inmunidad

para los cargos que tiene abiertos en Italia, por ejemplo), pero también políticos, y utiliza

el nacionalismo como flotador político que evite el hundimiento de un gobierno corrupto,

nepotista e ineficiente, intentando convencer a los ciudadanos de que su mayor problema

es la independencia y no la crisis económica, el paro, los problemas de suministro eléctrico

o las irregulares privatizaciones que se están llevando a cabo. Toda la maquinaria del

gobierno está dedicada a favorecer el sentimiento independentista de la población, y en

cierto modo están teniendo éxito.

El tema del referéndum es una incógnita, y todavía no está claro ni quién votará. Hace unas

semanas Kostunica informó a Bruselas de que 263.000 montenegrinos viven en Serbia, y

que alrededor de 1,5 millones de serbios tienen raíces en Montenegro. 263.000 son muchos,

comparados con los 620.000 habitantes de Montenegro según el censo de 2004, y la

discusión se centra ahora en si tienen derecho al voto o no. El gobierno montenegrino se

niega a incluirles en el censo (“si no pagan impuestos, no tienen derecho a decidir”), pero

el Consejo de Europa, la UE o la Comisión de Viena consideran que tienen todo el derecho,

pues, no lo olvidemos, y por mucho que le pese a Milo, esta diáspora no vive en el

extranjero (todavía), sino en el seno de un único Estado.

A la pregunta que hace Roberto Barral, de si la secesión está cerca, considero que no, pues

Page 46: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La Unión (Desunión) de Serbia y Montenegro

- 50 -

por el momento es el principal soporte que mantiene a Milo y a los suyos en el poder.

Probablemente preferirán alargar el juego, seguir dando temas de conversación desviando

la atención de la ciudadanía, culpando a Serbia de todos los males de Montenegro, antes que

verse independientes y obligados a reconocer su incapacidad política.

7 de julio de 2005 Roberto Barral

En referencia a lo que dice Julio sobre los visados y permisos de trabajo para acceder a

Serbia por parte de los montenegrinos y viceversa, estoy completamente de acuerdo, entre

otras cosas porque conozco a tantos/as amigos/as estudiantes montenegrinos/as en Belgrado

(que además dicen que la universidad aquí es casi gratuita para ellos/as), que sólo en el

ámbito educativo sería otra debacle más sin sentido en un periodo récord.

Ni que decir tiene que el primer motor del turismo montenegrino proviene de Serbia. ¿Se

imaginan en Madrid haciendo denigrantes colas ante la “Embajada de Valencia” para

tomarse 15 días de playa? Como se dice ahora: ¡Va a ser que no!

Se me ocurre que ante semejante arrogancia los serbios volverían a intentar veranear

masivamente en la costa croata, prefiriendo incluso tragarse su orgullo del pasado reciente,

(cosa que los empresarios croatas tampoco dejarían pasar), y más ahora que parece que hay

intención de que vuelva el “buen rollito” y el “Bijelo Dugme” entre ambas naciones.

Sobre la intención del gobierno montenegrino de no querer incluir a los residentes en el país

para el referéndum sobre la secesión de Serbia, ¿de verdad lo creen factible?. ¿Podrán votar

los montenegrinos que residan en Viena, Madrid o Nueva York (quizá paguen algún

impuesto) y no los que residan en Serbia?. ¿Tendrán derecho los padres residentes, pero no

sus hijos en la diáspora serbia?. Es más, ¿tendremos que llamar a Don Manuel (Fraga

Iribarne, ahora ya más disponible) para que venga y les explique la importancia que tiene el

electorado en el “extranjero”? (perdón por la broma).

No sé, no quería caer en la tentación de pensar que es más importante Serbia para

Page 47: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 51 -

Montenegro que viceversa. Es una subjetividad peligrosa, pero en todo caso son muy

importantes ambas para sí mismas y para su desarrollo en conjunto. Está claro que cuando

se agotan las ideas (esa incapacidad política que dice Miguel), en verdad se antoja más

rentable desviar la atención ciudadana, como tantas veces ha ocurrido ya en la antigua

Yugoslavia, que hacer caso a la lógica aplastante.

Mi preocupación ahora es que en Serbia también parece haber un desencanto con dicha

Unión y se percibe en la calle algo así como “antes de que se separen ellos, nos separamos

nosotros”. Esa está empezando a ser mi sensación.

7 de julio de 2005 José-Miguel Palacios

Es un magnífico comentario, Miguel. Tus observaciones y tu análisis proceden de un

contacto directo con la realidad que la mayor parte de los demás colisteros no tenemos, así

que poco podemos añadir, más allá de nuestro agradecimiento por haber querido

compartirlas con nosotros.

Permíteme tan sólo algunas consideraciones de tipo general:

La primera es que los estados duales tienden a ser inestables. La razón para ello es que ante

cada decisión se tiende a interpretar que lo que gana una parte lo pierde la otra. Sólo en

épocas de expansión la situación es tolerable, ya que ganan todos. En cuanto aparece una

fase de estancamiento o de recesión surge el problema del reparto de los sacrificios y del

cambio de política. Siempre una de las dos partes se siente maltratada y tiende a buscar la

separación. Tenemos un caso muy reciente y muy característico: el de Checoslovaquia.

El modelo más típico de estado dual viable es cuando una parte es considerablemente más

fuerte y próspera que la otra, de forma que tiene capacidad de sobra para garantizar a la

parte menor un flujo continuo de transferencias que hagan que su nivel sea considerablemen-

te superior al que tendría siendo independiente, pero inferior al de la “hermana mayor”. Es

lo que ocurre con la “Unión USA-Puerto Rico” (podemos considerarla un caso de estado

Page 48: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La Unión (Desunión) de Serbia y Montenegro

- 52 -

dual, dejando de lado la complejidad interna de una de las partes). Puerto Rico, a pesar de

su clara distancia cultural e histórica respecto a Estados Unidos, no busca la independencia.

De acuerdo con este criterio, nuestra política europea hacia Serbia y Montenegro desde, al

menos, 1997, favorece objetivamente la ruptura del Estado, no su mantenimiento. A pesar

de las declaraciones públicas y, probablemente, de los deseos de nuestros políticos.

Un segundo problema lo constituye el ingreso en la UE. Tanto Serbia y Montenegro, por

separado, como Serbia-Montenegro formando un Estado único habrían de ser, al menos

durante los años iniciales, receptores netos de fondos comunitarios. Y la experiencia

muestra que la UE absorbe con mayor facilidad a receptores pequeños que a receptores

grandes. Por eso, entre otras cosas, Grecia entró cinco años antes que España. Y por eso

mismo, digamos lo que digamos, es posible que Podgorica tenga razón cuando sostiene que

entraría sola antes que Serbia o que Serbia-Montenegro (suponiendo, claro está, que la

ampliación no sufre un parón largo como consecuencia de un fracaso definitivo del proceso

constituyente).

Otro factor que ha sido muy importante en las ampliaciones es el haber sido capaces de

encontrar un “patrón” entre los poderosos de la Unión, algo que consiguen con mayor

facilidad los pequeños que los grandes. Al final, se acaba llegando al típico mercadeo de “sí

a los tuyos” a cambio del “sí a los míos”. A esto hay que añadirle el factor “amigo

americano” (“tenemos que apoyar, porque, si no, los americanos, que lo van a hacer de

todos modos, nos dejarán fuera”). Y Montenegro, con poco más de medio millón de

habitantes, es una pieza relativamente barata en el mercado geopolítico de Europa.

Como sabéis, Milo Djukanovic tiene intereses personales en la independencia(inmunidad para los cargos que tiene abiertos en Italia, por ejemplo), pero tambiénpolíticos, y utiliza el nacionalismo como flotador político que evite el hundimientode un gobierno corrupto, nepotista e ineficiente.

Montenegro es un caso único en la Europa postcomunista: es el único Estado (independien-

te o semiindependiente) donde no se ha producido la transición política plena, donde ha

seguido gobernando de manera ininterrumpida el último liderazgo comunista (Milo era uno

de los jóvenes líderes - lepi, mladi, pametni - del grupo que llegó al poder en enero de 1989

Page 49: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 53 -

de la mano - pecadora - de Slobodan Milosevic). Todo lo ha conseguido aprovechando la

especial situación de la república dentro del Estado yugoslavo (que hace que las autoridades

de Podgorica puedan presentarse como irresponsables en última instancia de los problemas

de sus ciudadanos). ¿Se podrá mantener este esquema en un Montenegro independiente, o

seguirá la senda de los demás países postcomunistas?

Julio, por su parte, hablaba de la “convicción del ciudadano de a pie de que Serbia y

Montenegro deben continuar juntas, a pesar de lo que los políticos digan”. Juntas o

independientes, no es necesario que Serbia y Montenegro se peleen, ni que exijan visados

a sus ciudadanos, ni que no se concedan a los nacionales de la otra república los mismos

derechos que a los propios. Es perfectamente posible, y compatible con la independencia,

establecer un régimen de doble ciudadanía que permita que esos cientos de miles de

montenegrinos de Serbia puedan ser ciudadanos a la vez de los dos Estados.

Lo que, con toda la mejor “hermandad y unidad” entre serbios y montenegrinos sigue

faltando es un proyecto de Estado común, y quizá crearlo ahora ex-novo saldría demasiado

caro. Fijándonos sólo en las infraestructuras (uno de los elementos vertebradores de

cualquier país) resulta que Serbia y Montenegro siguen estando débilmente conectadas, de

suerte que desde Belgrado se tarda la mitad de tiempo en llegar a Zagreb o a Skopje que a

Podgorica. Los puertos naturales de Belgrado son Rijeka o Salónica, no Bar. Y la salida

natural de Montenegro hacia Europa será a través de la transadriática o por el futuro eje

Adriático-Sarajevo-Budapest, no por Belgrado.

Como decía muy oportunamente Roberto, “se me ocurre que ante semejante arrogancia

los serbios volverían a intentar veranear masivamente en la costa croata, prefiriendo

incluso tragarse su orgullo del pasado reciente, (cosa que los empresarios croatas

tampoco dejarían pasar) y más ahora que parece que hay intención de que vuelva el “buen

rollito” y el "bijelo dugme” entre ambas naciones”. Desde el punto de vista práctico (y las

cuestiones de estatalidad nunca son simplemente prácticas), la costa montenegrina es una

segunda opción, que se activa si Dalmacia e Istria están cerradas; y Bar es una segunda

opción, interesante tan sólo mientras Rijeka esté fuera de juego. Si el fenómeno “Bijelo

Dugme” se consolida, Montenegro será prácticamente irrelevante para Serbia y veremos

Page 50: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La Unión (Desunión) de Serbia y Montenegro

1 Estos datos están sacados de la revista Evropa, nº65, 7 jul 2005.

- 54 -

cuánto se está dispuesto a pagar por mantener unos restos de “hermandad y unidad”.

9 de julio de 2005 César Luis Díez

Son muy interesantes los últimos mensajes sobre una posible secesión de Montenegro, o de

Serbia, de la Federación; o acerca de una posible decisión conjunta de abandonarla a la vez.

Perdón si la primera línea es algo farragosa, pero creo que plasma gráficamente la confusión

frente a este tema de un belgradense de “a pie” (aunque en este caso sea un extranjero). La

mayoría de la gente con quien puedo comentar este tema termina siempre con una frase

parecida a “¡que se vayan ya!”. Existe un hastío en gran parte de la población de los temas

políticos, y este parece ser un “aburrido” epílogo de un proceso empezado hace muchos

años.

Sin embargo el problema es de un gran calado y tiene muchas vertientes (una de política

interior, otra de exterior, de relaciones internacionales, etc.). En este mensaje, me gustaría

comentar la más social: la opinión de la gente. Y aquí hay que tener en cuenta que los

habitantes de ambas repúblicas no son un conjunto homogéneo. Sin ir más lejos, los

habitantes del Norte de Montenegro se consideran en una gran mayoría serbios (de

Montenegro) y no estarían a favor de la independencia. Por otra parte, está la cantidad de

montenegrinos que ocupan puestos relevantes en la vida social y política de Serbia (o de

Serbia-Montenegro, si se prefiere). Por ejemplo: en el plano político están Boris Tadic

(Presidente de Serbia y Presidente del Partido Demócrata), Ljubomir Tadic (académico y

antiguo disidente; padre del anterior), Dragan Jocic (Ministro de la Policía y Vicepresidente

del Partido Demócrata de Serbia - DSS -; uno de los colaboradores más cercanos de

Kostunica), Vladimir Bozovic (Inspector General de la Policía), Danica Draskovic (mujer

de Vuk Draskovic; se dice de ella que quiere llegar a la cúpula de la BIA, el Servicio

Secreto), Aleksandar Nikitovic (Jefe de Gabinete de Vojislav Kostunica), Zoran Stojkovic

(Ministro de Justicia en el Gobierno de Serbia; miembro del DSS), Rade Bulatovic (Jefe de

la BIA). Junto a éstos, hay más en el mundo del espectáculo, los deportes o el cine1.

Page 51: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 55 -

Una de las preguntas sería por qué hay que considerarlos montenegrinos. Es decir, qué hace

que alguien sea montenegrino. Y la respuesta no es tan fácil, sobre todo si tenemos en

cuenta que la sociedad de Montenegro sigue siendo muy patriarcal. Habría entonces que

distinguir entre “ser montenegrino” porque tu padre lo ha sido y “ser montenegrino” en el

sentido de actual habitante de Montenegro. En el primer caso, habría muchos de ellos -

residentes en Serbia - que en el caso hipotético de la separación (o secesión) tendrían serias

dudas sobre qué nuevo pasaporte pedirían.

Frente a esto, no se debe olvidar tampoco la población montenegrina que se declara

“abiertamente” independentista (¿entre un 49 y un 51 por ciento?) y que se concentra

mayoritariamente en la costa.

11 de julio de 2005 Dalibor Soldatic

Nadie habla al considerar la posible separación de Montenegro con los números y los índices

económicos sobre la mesa. Montenegro en la antigua Yugoslavia era una de las repúblicas

en bancarrota (junto a Macedonia y la provincia de Kósovo). Ésa fue una de las razones

principales de la salida de Eslovenia de la federación yugoslava. JM Palacios hacía mención

de este dato el otro día al trazar el paralelo con la crisis actual de la Unión Europea (UE).

Por lo tanto, se plantea la pregunta: ¿quién va a pagar las deudas y las cuentas de

Montenegro?

Mientras la separación de Montenegro de la Serbia de Milosevic venía bien a la comunidad

internacional, pues era un elemento adicional de presión sobre Milosevic, era lógico esperar

que el “patrocinador fuera la UE. Como me decía un amigo español en aquella época: la

Unión Europea puede darse el lujo de mantener una ciudad con medio millón de habitantes.

Y ésa es la población que tiene Montenegro. ¿Cuáles son esas industrias y actividades

económicas con las que Montenegro piensa poder sobrevivir? ¿Alguien dispone de cifras?

Porque en los Balcanes la economía es exitosa cuando logras sobrevivir y basta.

Por otra parte, ¿para qué sirven esos estados minísculos en una Europa que se está

Page 52: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La Unión (Desunión) de Serbia y Montenegro

- 56 -

integrando?

De un lado, creamos integraciones grandes y, por el otro, fomentamos la creación de

estados con medio millón de habitantes. ¿Quién espera que esos estados balcánicos que

hasta fueron capaces de entrar en guerras sangrientas con tal de separarse y afirmar su

nacionalismo de la noche a la mañana renuncien a su orgullo nacional y lo subordinen a la

idea de una Europa común? Queda por verse.

¿Què pasará con los montenegrinos que viven en Serbia? Son, según parece, unos 250.000.

Y, ¿qué hacemos con los montenegrinos que se declaran serbios?. Porque allí también el

asunto se complica. Lejos de tener intenciones de negar la existencia de la nación

montenegrina, tengo que recordar a muchos que uno de los padres de la patria montenegri-

na, Petar Petrovic Njegos, declaraba en su libro Gorski vijenac ser serbio.

Por último, no creo que la Iglesia Ortodoxa Serbia incline favorablemente a la idea del

separatismo. El metropolita Amfilohije Radovic en el pasado ha hecho declaraciones muy

claras en ese sentido.

El que Milo Djukanovic necesite perpetuar su poder político en Montenegro para salvarse

de las posibles persecuciones judiciales en Italia, donde se le acusa de “asociación de tipo

mafioso” no justifica, en definitiva, una política separatista. Hay quienes no olvidamos que

en un pasado no tan remoto vestía uniforme militar y pasaba revista a los reservistas

montenegrinos que hicieron de lo suyo por la costa adriática en Dubrovnik, Konavle y

cercanías. Porque, si ahora quiere separarse de Serbia, ¿por qué no lo hizo en la primera

Conferencia de La Haya, cuando Lord Carrington quiso hacer de Yugoslavia una

“federación flexible”? Se salieron todos, menos Montenegro y Serbia. ¡Cuántas vidas y

destrucciones se hubieran evitado! ¿Se lo preguntará alguien a Milo Djukanovic?

15 de julio de 2005 Miguel González Lázaro

La mayoría de la gente con quien puedo comentar este tema termina siempre con

Page 53: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 57 -

una frase parecida a “¡que se vayan ya!”. Existe un hastío en gran parte de lapoblación de los temas políticos, y este parece ser un “aburrido” epílogo de unproceso empezado hace muchos años.

Igual que César, yo, con toda la gente con la que hablo del tema (montenegrinos, pero

también serbios, bosnios o croatas), recibo la impresión de un desdén y desprecio a la clase

política muy poco compatible luego con los resultados electorales. En Montenegro, la zona

que mejor conozco, no he encontrado a nadie todavía que elogie a Milo, a su partido, el

DPS (Partido Democrático de los Socialistas) o al otro partido de la coalición gobernante,

el SDP (Partido Socialdemócrata). Y, sin embargo, ganan todas las elecciones (últimamente,

las municipales en Niksic o Budva, dos de las principales ciudades del país).

Después de cada una de estas elecciones se lanzaron cohetes desde la sede del Gobierno,

como si desde Moncloa se lanzaran petardos por la derrota de Fraga. La hermana de un

colega trabaja para Correos, y después de las últimas elecciones presidenciales recibió el

siguiente comentario de uno de sus superiores: “He oído que no has votado. ¿Te parece que

eso está bien?”. Y otro amigo, cuando comentó a su familia que votaría por la Liga Liberal,

le preguntaron: ¿Pero tú quieres seguir trabajando?

Montenegro es un Estado desestructurado, en el que lo único que funcionan son las

estructuras represivas y de mantenimiento de un determinado proyecto político y de un

Gobierno en particular. Cuando ocurrió la guerra de Bosnia yo era muy joven, pero no es

difícil intuir que la situación era similar. Aunque las nuevas generaciones se rebelan en parte

contra esta situación, la mayoría de la población sigue con el esquema mental del Estado

socialista, omnipotente y omnipresente. Y la mayoría de los estados en transición, si es que

tienen interés en conservar algo de la época comunista, es el del control de los ciudadanos

por el temor.

César alude al problema de la definición de “montenegrino”, problema que nos remite

directamente al dilema de las indentidades y de la manipulación de la que pueden ser objeto,

algo que tanto sufrimiento provocó la década pasada en los Balcanes. Novedosamente, Milo

pretende imponer ahora la identidad geográfica o, más correctamente, impositiva: sólo votan

en el referéndum aquéllos que pagan impuestos en Montenegro, o sea, que residen allí.

Hacienda somos todos y el que no paga, no cuenta. Montenegro es todavía una sociedad

Page 54: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La Unión (Desunión) de Serbia y Montenegro

- 58 -

tribal, pero es también la prueba de que un argumento tan manido como el de la identidad

(sanguínea, nacional, religiosa o étnica) sigue siendo capaz de causar problemas.

25 de julio de 2005 José-Miguel Palacios

¿Cuáles son esas industrias y actividades económicas con las que Montenegropiensa poder sobrevivir? ¿Alguien dispone de cifras? Porque en los Balcanes laeconomía es exitosa cuando logras sobrevivir y basta.

Hace quince años, se decía lo mismo de las repúblicas yugoslavas. ¿Dónde va Eslovenia?

¿Quién le va a comprar sus electrodomésticos Gorenje, su material deportivo Elan o sus

zumos Fructal, que no sea el resto de Yugoslavia? Pero se ha visto que, con las nuevas

reglas del juego, Eslovenia puede sobrevivir muy bien sola en un mundo globalizado. De

hecho, con la experiencia de estos años podemos aventurar que le ha ido mucho mejor sola

de lo que le habría ido en el conjunto de la RSFY.

Esta observación y otras parecidas han llevado a dos economistas italianos, Alberto Alesina

y Enrico Spolaore, a plantearse en su libro The Size of Nations (muy comentado durante los

dos últimos años) cuál es el tamaño ideal de los países. Su conclusión es que en el mundo

moderno estados más pequeños pueden ser viables en aquellos casos en que las ventajas de

una mayor homogeneidad superen a los inconvenientes de la pérdida de beneficios de escala.

Desde este punto de vista encontramos la lógica de la secesión eslovena. En un momento

en que (por la desaparición de los bloques) el estado yugoslavo ya no era una garantía de

defensa y cuando (a causa de la integración europea, por una parte, y de la desintegración

del estado yugoslavo, por otra), el mercado que podía garantizar Yugoslavia ya no era tan

atractivo, la enorme ganancia de homogeneidad que suponía la independencia favorecía

precisamente esta opción. En Bosnia-Hercegovina, donde no se ganaba en homogeneidad,

la independencia resultó mucho más problemática (de hecho, habida cuenta de los costes de

transacción, desde este punto de vista no hubiera resultado razonable optar por ella).

Volviendo a Montenegro, nos encontramos que el posible nuevo estado no sería más

Page 55: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 59 -

homogéneo que Serbia-Montenegro, sino menos (según el último censo, 40% de

montenegrinos frente a 30% de serbios; según encuestas, algo más a favor de la independen-

cia que en contra de ella). Si se llega a la independencia no será a causa de las tendencias

históricas que describen Alesina y Spolaore, sino por otros motivos.

25 de julio de 2005 Roberto Barral

Hace unos días hablando con unos amigos en una cervecería “casi hispana” y optimista de

Belgrado, salió el tema de la supervivencia económica de un Montenegro separado de

Serbia.

Al margen de que a su Presidente, Djukanovic, le interese la secesión para obtener un

“status” de Jefe de Estado que le dé inmunidad para ser juzgado en Italia, y que pueda

aducir un sentimiento nacionalista y convencer a la ciudadanía de que el turismo y el dinero

de la UE “sostendrá” la economía de un pequeño país, ha aparecido una razón que bien

podría valer una secesión más interesante.

Según he entendido, Serbia NO dispone de secreto bancario para los clientes investigados

por delitos fiscales de otros países. La diferencia es que Montenegro parece que sí.

Quien tiene dinero, dinero de verdad (y por lo visto hay mucho), va a un paraíso fiscal y

luego éste se lo devuelve más “lavadito”.

Los paraísos fiscales en países europeos son los más atractivos. Las mismas ventajas que los

“bananeros” y un verdadero estado de derecho que respalda sus bienes, incluso los que son

secretos.

Derechos garantizados. Y, además, cientos de bufetes de abogados dispuestos a garantizarle

que nadie utilizará fraudulentamente su empresa. Ése es su negocio. Si algo le ocurre a su

dinero, se les acabó el negocio al país “paradisíaco” y, además, con altas probabilidades de

que terminen en la cárcel los que deberían “cuidar” de dicho dinero.

Page 56: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La Unión (Desunión) de Serbia y Montenegro

- 60 -

También, por lo visto, hay gran necesidad de nuevos paraísos fiscales porque cada vez se

ponen las cosas más difíciles. En este contexto, Montenegro parece tener la oportunidad

perfecta. Y en esta supuesta estrategia la pertenencia a la Unión con Serbia sí sería un lastre

a sus aspiraciones.

Por otra parte, ganar un futuro referéndum parece no ser una difícil empresa. Podgorica “es”

de Djukanovic. Atendiendo a la distribución geográfica de Montenegro, mi impresión es que

la población se encuentra atomizada en pequeñas ciudades y pueblos (donde mejor funciona

la red clientelista y el control de los “pedáneos” afines al gobierno). Por si fuera poco, la

población total sería de unos 650.000 habitantes y, dado que no todos tienen derecho al

voto (menores de 18 años más aquellos que residan fuera de sus fronteras llegado el día de

la votación), la posibilidad de “comprar” unos cuantos votos que garanticen el éxito tendría

un precio muy asequible y fácilmente financiable por países, empresas y mafias interesadas.

Dada la teoría del “paraíso fiscal montenegrino”, parece resuelto un poco más el problema

de la financiación (por lo menos a corto plazo) de su economía. Y Djukanovic no será el

político atípico que se preocupe por primera vez de los “largos plazos”.

25 de julio de 2005 César Luis Díez

Me parece interesante volver a plantearnos el problema desde el principio:

¿Quién puede separarse? En principio cualquiera de los dos integrantes de la unidad. Es

decir, Serbia podría decidir que no le interesa seguir unida a Montenegro ya que esta unidad

le produce más quebraderos de cabeza que ventajas. O, también, podría ser Montenegro

quien decida la separación por las razones que estamos discutiendo. Lo interesante es que

una vez producida esa secesión lo que ocurrirá es que desaparecerá un “ente”, al contrario

de los que ocurrió con la SFRJ, que iba perdiendo las repúblicas que la componían, pero que

mantenía - al menos formalmente - una estructura remanente. El paso fue, más o menos (y

sobre esto podríamos discutir con detalle), de República Socialista Federativa de

Yugoslavia (SFRJ) a República Federal de Yugoslavia (SRJ) y, por fin, a Serbia-

Page 57: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 61 -

Montenegro (SCG).

Esto que acabo de escribir no es nuevo en esta lista, lo hemos visto ya varías veces; pero

creo que puede ayudar a centrar el problema de la posible separación. Por otro lado, creo

existen dos planos de análisis que deben contraponerse:

a) Visión interior. Es decir, lo que se piense o se pueda proponer desde cualquiera de las

dos repúblicas sobre el futuro común de ambas.

b) Versión exterior. La opinión de la comunidad internacional sobre el futuro de esta unión

y las presiones que ejerza en cualquiera de las dos direcciones (permanencia de la unidad o

desintegración). Además, me parece que la “llamada comunidad internacional” hay que

dividirla (para este caso) en tres corrientes de opinión: Estados Unidos, UE y OTAN, que

no tienen por qué tener el mismo punto de vista sobre el problema. También hay que tener

en cuenta, en este apartado, otro tema ya mencionado en la lista: el de una aparentemente

coherencia. Parece que se fuerza a convivir a Serbia y Montenegro de la misma manera que

se mantiene unida Bosnia, o se trataría de evitar una separación de Kósovo que pudiera

provocar la creación de un nuevo “mini-estado” hacia el que los estados limítrofes (Serbia,

Montenegro, Macedonia y Albania) tendrían pretensiones territoriales. Si de repente se

optara por un apoyar la ruptura de SCG, ¿qué ocurriría en los otros casos?.

1 de agosto de 2005 Jairo Dorado

Hace unos mensajes, el Profesor Soldatic aludía a que nadie preguntó a Serbia sobre su

estatus. Me recordó un articulo de historia que leí en Hungría hace unos años en el que se

explicaba la creación del Reino de los Eslovenos, Croatas y Serbios como la creación de una

gran Serbia. Si esta teoría fuese cierta - la explicaré a grandes rasgos- bien se podría

entender desde un punto de vista histórico la separación de Serbia y Montenegro y también

que nadie “preguntase” a Serbia.

Al acabar la Primera Guerra Mundial, los territorios de Austria y Hungría fueron separados

Page 58: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La Unión (Desunión) de Serbia y Montenegro

- 62 -

y, por lo general, la tendencia fue a crear nuevos estados. Bohemia y Moravia, austriacas,

por un lado, y el Félvidek y Silesia, húngaras, por el otro, constituyeron Checoslovaquia.

Lo mismo se podría haber hecho con la Krajina, Estiria y Carintia por un lado, y Croacia y

Dalmacia por otro, mientras que Serbia obtendría el Banato y Bosnia, así como una salida

al mar en Salónica.

Sin embargo, según este articulo, se colmaron las aspiraciones nacionalistas serbias al

concederle una serie de posesiones más allá de lo esperado. Incluso, la inclusión en el

paquete de un reino independiente - Montenegro - como salida al mar.

La desintegración de Yugoslavia, según Michaela Wolf, de la Universidad de Graz - no

tengo aquí la referencia del artículo - considera este proceso como un claro caso de

postcolonialismo, de la misma manera considera la separación de la URSS o de Checoslova-

quia.

Si así fuere, la ideas de Roberto sobre Montenegro entran en el paquete de características

de cualquier estado postcolonial, con una actividad empresarial exclusiva y el presidente

sempieterno en el poder.

A colación con lo indicado por JM Palacios, recuerdo una pintada a principios de los

noventa en uno de los barrios más nacionalistas de mi Vigo natal que decía “Eslovenia

somos nós”. Económicamente, Galicia no es, ni por asomo, como Eslovenia, pero si se

atiende al factor de homogeneidad, sí hay mucha más correspondencia que en las otras

nacionalidades históricas.

Esto plantea un desafío interesante: ¿es el nacionalismo más radical cuanto menos

homogéneo un país? Es posible, pero los ejemplos existentes dan que pensar. Principalmen-

te, porque no está claro cuál es el factor de homogeneidad. Si es la religión, para explicar

el caso bosnio, Montenegro y Serbia no deberían tener problemas. Si es el idioma,

recordemos que Eslovenia tiene como idiomas oficiales tres y hay minorías de dos idiomas

más en su pequeño territorio... ¿Qué es entonces la homogeneidad?

Page 59: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 63 -

2 de agosto de 2005 César Luis Díez

Jairo terminaba su mensaje de ayer preguntando qué es la homogeneidad. Me parece una

cuestión muy pertinente y en parte el propio Jairo la responde en ese mismo mensaje. Para

establecer la “homogeneidad” de cualquier colectivo es necesario definir algún rasgo sobre

ese mismo colectivo. Puede ser, por ejemplo, la religión y entonces definir a un conjunto

humano homogéneo en cuanto a ese rasgo cuando todos los componentes del mismo

profesan la misma religión; o el color de la piel, y entonces decir, por ejemplo, que los

zulués forman un grupo homogéneo (¿o habrá zulués blancos?).

La cuestión se complica cuando no existe un único rasgo que defina al colectivo, sino que

se pueden considerar varios, con resultados parcialmente diferentes. Se puede tomar, por

ejemplo, el criterio geográfico (haber nacido allí), el lingüístico (hablar una determinada

lengua), la raza, la etnia o la simpatía por un club de fútbol (¿puede haber catalanes socios

del Real Madrid?). En este caso, debería existir una jerarquía de esos rasgos: es decir unos

deberían ser más determinantes que otros.

Y eso es lo que parece que no existe en los análisis que se hacen. No hay una “lista

unificada” de rasgos que permitan la identificación de los distintos colectivos que formaban

la antigua Yugoslavia; y, al no existir esa “lista”, tampoco tenemos una jerarquía. Lo que

normalmente se hace es usar para unos un rasgo y para otros, otro, de una manera más o

menos arbitraria: los bosniacos serían musulmanes - religión -, mientras que los eslovenos

serían los nacidos en Eslovenia - criterio geográfico -, etc.

Un par de ejemplos fuera de contexto: ¿puedo ser chino sin ser de color amarillo, ni tener

los ojos rasgados, ni hablar cantonés o mandarín? Quizás las autoridades de la República

Popular China no encuentren problema para darme un pasaporte, ya que debe de haber

varios millones de ciudadanos que compartan esas características. O, siendo negro,

musulmán, hablante de castellano y nacido en Coruña, ¿puedo ser gallego?

Page 60: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La Unión (Desunión) de Serbia y Montenegro

- 64 -

11 de agosto de 2005 José-Miguel Palacios

La cuestión se complica cuando no existe un único rasgo que defina al colectivo,sino que se pueden considerar varios, con resultados parcialmente diferentes. Sepuede tomar, por ejemplo, el criterio geográfico (haber nacido allí), el lingüístico(hablar una determinada lengua), la raza, la etnia o la simpatía por un club defútbol (¿puede haber catalanes socios del Real Madrid?). En este caso, deberíaexistir una jerarquía de esos rasgos: es decir unos deberían ser más determinantesque otros.

Creo que César destaca algo muy importante: en la vida real, los seres humanos nos

agrupamos de forma diferente según diversos criterios. No sé si alguno recordará un

anuncio de hace quince años, cuando aún no era pecado anunciar coñá. Se veía juntos a los

entrenadores del Madrid, del Barça y del Español, con una copa en alto, y la leyenda era:

“enfrentados en la Liga, unidos en la copa”. Sin embargo, el modelo de Alesina/Spolaore,

del que hemos hablado en la lista, es unidimensional (se asume que el más distante

“geográficamen te” es más distante “ideológicamente” en todos los aspectos). Es una

simplificación probablemente necesaria, pero que presenta también notables inconvenientes.

Frente a lo que querría el modelo, en la vida real es frecuente que las distintas adscripciones

identitarias de las personas las conduzcan en direcciones diferentes y las lleven a integrarse

en grupos formados por individuos distintos. Esto es un factor de estabilidad. Quien es tu

rival en un ámbito puede ser perfectamente tu socio en otro. Sin embargo, en determinadas

circunstancias, las “identificaciones” de la gente tienden a acumularse, y entonces llegamos

al enfrentamiento permanente de dos grupos, cada uno de ellos caracterizado por la ausencia

de toda una serie de rasgos redundantes, y por la ausencia de todos los rasgos que

caracterizan al grupo rival. En la Yugoslavia de los noventa, sí se producía este fenómeno

y podíamos ver, por una parte, a croatas, católicos, hinchas del Dinamo y anticomunista,

frente a serbios, ortodoxos, seguidores del Zvezda y postcomunistas. Esto ocurriría

porque:

a) como nos dice César, algunos rasgos tienen más peso que otros en un contexto concreto.

En general, pueden compatibilizarse diferentes afiliaciones, pero en determinadas

circunstancias se tienden a acumular. Un amigo albanés kosovar me decía, muy en serio,

hacia 1997 que serbios y albaneses se diferenciaban “en todo”, hasta en el olor;

Page 61: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 65 -

b) la circunstancia que normalmente fuerza a las personas a ajustar sus propias afiliaciones

a las más habituales del grupo de referencia al que pertenecen (este grupo sería el formado

en torno al rasgo característico predominante) es la situación de conflicto. En 1999 me

encontré en la plaza principal de Bijeljina (República Srpska, BiH) a un tipo que vendía

banderolas del Partizan y del Zvezda. Le pregunté cuál de los dos era su equipo favorito y

me dijo que él, en realidad, siempre había sido hincha del Sarajevo. En situación normal, no

era problemática su doble afiliación como serbio étnico y como hincha del Sarajevo (y como

ciudadano bosnio y como ciudadano yugoslavo). En el ambiente de 1992-95, estas

compatibilidades ya no eran políticamente correctas. Si eras serbio rechazabas el adjetivo

bosnio. Y, por supuesto, no tenía sentido que fueras hincha del Sarajevo;

c) el caso extremo, el medio más eficaz para obligar a la gente a agrupar todas sus

identidades en torno a las características más frecuentes del grupo al que se pertenece es la

guerra. Los que hayáis leído La Cartuja de Parma recordaréis esta explicación del Conde

Mosca a la duquesa Sanseverina sobre el terrible, y duradero, valor político de los muertos:

“ ... au fond, j'aime mieux cent absurdités atroces qu'un seul pendu. Qui se souvient d'une

absurdité deux ans après le numéro du journal officiel? Au lieu que les fils et la famille du

pendu me vouent une haine qui durera autant que moi et qui peut-être abrégera ma vie...”.

10 de octubre de 2005 Dalibor Soldatic

En cuanto al futuro de Serbia- Montenegro, sigo siendo muy escéptico. Primero, porque

creo que la insistencia en la separación se debe a que el grupo dominante ve que es la única

manera de mantenerse en el poder y proteger unas actividades económicas privadas que

están mostrando ser muy lucrativas. Todos parecen olvidar que solamente gracias a la

decisión de Momir Bulatovic, Presidente de Montenegro en aquel entonces, de reconsiderar

su voto fracasó la Conferencia de La Haya sobre la desintegración de Yugoslavia (la

presidida por Carrington) y la creación de una “federación flexible”. Milo Djukanovic era

en aquel entonces Presidente del Gobierno de Montenegro. Lo hicieron bajo fuertes

presiones de Milosevic, pero no aceptaron la desintegración. Lo hacen unos quince años

Page 62: Balkan (Madrid) 6 (2005)

La Unión (Desunión) de Serbia y Montenegro

- 66 -

más tarde. Gran parte de las muertes sobre el territorio de la antigua Yugoslavia recae

también sobre su conciencia. Y no olvidemos las fotos de Bulatovic y Djukanovic en

uniforme sobre el frente de Dubrovnik, donde fueron los reservistas montenegrinos los que

cometieron muchas de las acciones “heroicas” de las que ahora se avergüenza todo el

mundo.

Por último, no se debe olvidar el hecho de que un gran número de montenegrinos viven en

Serbia, ya que Belgrado fue siempre el centro hacia el cual gravitaban. Muchos de los

montenegrinos se siguen considerando serbios aún hoy en día (por no volver a citar al gran

poeta Njegos). Sólo que esos montenegrinos no tendrán derecho de votar en el referéndum.

Por último, perdonen por insistir, todos parecen olvidar el factor de la Iglesia. No tengo la

impresión de que Amfilohije Radovic, que está a la cabeza de la Iglesia Ortodoxa Serbia

(SPC) en la Zona de Montenegro y del Litoral, sea muy favorable a la separación. No es

casual el hecho de que en Montenegro se esté creando por la fuerza y artificialmente una

nueva Iglesia Ortodoxa Montenegrina, con Miras Dedejic a la cabeza (expulsado hace

muchos años de la SPC y egresado de las escuelas ortodoxas griegas).

12 de diciembre de 2005 Carlos Flores Juberías

Como sin duda tendréis presente, en febrero del año próximo finaliza el plazo previsto en

los Acuerdos de Belgrado y en la Carta Constitucional de la Unión de Estados de Serbia y

Montenegro para someter a revisión el sistema institucional pactado en aquella ocasión. En

concreto, el articulo 60 de la Carta estableció que transcurridos tres años desde su entrada

en vigor cualquiera de las dos partes firmantes podría iniciar un proceso de revisión del statu

quo, lo que incluía la posibilidad de separarse de la Unión - en este caso, mediante la

convocatoria de un referéndum sobre el particular.

En los últimos años - y, de manera más intensa, en los últimos meses - el Gobierno de

Podgorica ha hecho patente su intención de acogerse a esta última posibilidad y de convocar

de inmediato un referéndum para la independencia de Montenegro. Una consulta que, según

Page 63: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 67 -

todos los indicios, es de segura celebración, aunque de resultado más bien incierto.

Para analizar los aspectos jurídicos y políticos más relevantes de la cuestión, el pasado mes

de septiembre la delegación en Montenegro de la Fundación Open Society Institute celebró

un seminario internacional, con participación de expertos procedentes de Eslovenia, España,

Gran Bretaña, Irlanda, Macedonia, Polonia, Serbia y Montenegro, Suiza y los Estados

Unidos, bajo el título “Legal Aspects for Referendum in Montenegro in the Context of

International Law and Practice”. Sus conclusiones acaban de ver la luz en un volumen

pronta y oportunamente editado por la propia Fundación.

La obra, de casi doscientas páginas, recoge sólo los “keynote speeches” de los participantes

en el seminario (y no los debates subsiguientes, ni las participaciones de otros invitados),

pero constituye una interesante aproximación a los principales temas de debate: qué exige

el Derecho internacional para aceptar el ejercicio por parte de Montenegro del derecho de

autodeterminación, qué condiciones políticas plantea la comunidad internacional para

reconocer a Montenegro como Estado independiente, cuáles son las garantías democráticas

que ineludiblemente debería satisfacer un referéndum para la independencia y cuáles son los

pasos que deberían darse una vez verificada la voluntad política de los montenegrinos de ser

independientes.

Page 64: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 69 -

Serbia, cinco años después

8 de octubre de 2005 José-Miguel Palacios

Esta semana se han cumplido cinco años de los sucesos de Belgrado que provocaron la

caída de Slobodan Milosevic. El que se nos haya pasado la fecha, el que ningún miembro

de la lista haya enviado un comentario, ya nos da una cierta idea sobre dónde está el

problema: con un follow up crecientemente irrelevante, el 5 de octubre quizá ya no vaya a

ser una fecha histórica.

En algunas épocas, cinco años han supuesto toda una vida. Pensemos, por ejemplo, en lo

mucho que cambiaron las cosas entre 1989 y 1994. Sin embargo, cinco años después de la

caída de Milosevic, Serbia y Montenegro siguen sin despegar y los problemas que están

sobre la mesa son, en gran parte, los mismos. Otros países del entorno, como Croacia, sí que

han avanzado bastante.

Hace unos días, el ICG publicaba uno de sus bien documentados estudios sobre cómo estaba

la situación en la zona y por qué. El aroma era de desaliento y la receta para solucionar las

cosas, la misma que ICG ha recomendado durante los últimos diez años: apretarles las

tuercas a Serbia y a los serbios.

9 de octubre de 2005 Dalibor Soldatic

Es verdad que han pasado cinco años desde la caída de Slobodan Milosevic y la efemérides

merecía algún comentario. Si no lo hubo desde aquí de Belgrado es porque estamos

viviendo en un ambiente político que no sé si puede calificarse de extraño:

� Los principales partidos de orientación democrática están peleados entre sí, hasta

el extremo que el Presidente de Serbia, Boris Tadic, haya hecho que su partido, el

Page 65: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Serbia, cinco años después

- 70 -

Demócrata, abandone el Parlamento;

� Serbia-Montenegro sigue siendo un país que no se consolida. El tema de Kósovo,

que más o menos todos saben perdido, pero nadie se atreve a decirlo en público y

menos aún a aceptar la idea; y el destino de Montenegro y su referéndum nos hacen

vivir en un país que nadie sabe cómo va a ser en el futuro;

� la transición se está llevando a cabo sin disponer de todo los instrumentos necesarios

para ser eficientes en el proceso. Muchas de las condiciones básicas no se han dado.

Así, se están privatizando empresas sin haber acabado antes el proceso de restitución

de la propiedad privada nacionalizada por el régimen comunista;

� la correlación de fuerzas en el Parlamento es tal que se tienen crear coaliciones que

no son naturales. Es el caso de la que existe entre el Partido Demócrata de Serbia

(DSS) de Kostunica y el Partido Socialista (SPS) de Milosevic;

� los radicales siguen contando con el apoyo del 30 por ciento del electorado;

� la situación económica es aún precaria. El porcentaje de paro es alto. Los jóvenes

no logran ver su futuro dentro del país;

� la comunidad internacional todavía no se ha abierto ante el país. Sigue presente

constantemente la idea de que habría que apretarle las tuercas. Aparte de que se

trata de una especie de chantaje, lo que no se comprende es que situaciones como

ésas favorecen precisamente a los líderes y a sus secuaces. Los millonarios serbios

y las grandes fortunas se hicieron durante las sanciones. Y resulta curioso que la

actual dirección política del país, salvo honrosas excepciones tipo Kostunica o

Tadic, está constituida por gente que desde se llegada al poder se ha hecho con una

fortuna considerable;

� la corrupción no ha sido erradicada y ya constituye una enfermedad seria del

organismo social.

Page 66: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 71 -

En resumen: todavía no hay acuerdo general sobre la vía a seguir en el futuro. Resulta que

lo único en lo que había un consenso general era sobre la necesidad de apartar a Milosevic

del poder. Las ideas sobre lo que había que hacer después resultaron ser muy diferentes. De

ahí los desacuerdos, las discordias, las disputas. En perjuicio del país y de la nación.

Vuelvo a mi tesis de siempre. Solamente con aperturas y programas positivos se podrá hacer

algo en este país. La recetas del ICG siempre han resultado malas y peligrosas. ¿Qué dirían

ustedes si leyeran que al País Vasco hay que darle la independencia, y, si no se acepta,

apretarle las tuercas a Madrid? Sé que no es el mismo caso, pero piénsenlo un poco desde

el punto de vista de las reacciones emotivas.

Yugoslavia es el único país europeo que ha sido desintegrado sistemáticamente y a la fuerza.

Y, si los serbios quizá sean culpables de haber intentado la limpieza étnica por la fuerza de

las armas, cosa que todavía está por probarse, la comunidad internacional ha permitido:

� que Eslovenia no concediera la ciudadanía a miles de personas que llevaban años y

años viviendo en Eslovenia, pero no eran eslovenos;

� que los croatas expulsaran a los miles de serbios en las operaciones Oluja y Bljesak;

� que el UÇK, con la ayuda de la OTAN, dejara en Kósovo a unos 120.000 serbios

aislados dentro de enclaves.

Todo ello, en su conjunto, crea un ambiente de apatía y desengaño. Éste es el motivo

principal por el que los cinco años de la caída de Milosevic no han sido celebrados en el

país. Parece que nuestra lista está aquejada del mismo mal.

10 de octubre de 2005 César Luis Díez

Es totalmente cierto que el aniversario del 5 de octubre ha pasado desapercibido para la

mayoría de la población, ésa que no pudo asistir a alguno de los actos oficiales o de las

Page 67: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Serbia, cinco años después

1 Podéis encontrar información al respecto en http://beohispa.estudiosbalcanicos.org, así como enhtpp://foro.estudiosbalcanicos.org/archivo/98/index.html.

- 72 -

recepciones organizadas con motivo de tal evento. Tampoco hay que olvidar que aquí se

vive en un una “Federación” que para casi todo el mundo tiene los días contados, y su

desaparición supondría el último paso en la desintegración completa de lo que un día fue la

República Socialista Federativa de Yugoslavia. Esto se concreta en esa apatía de una

sociedad que no encuentra referentes nacionales contemporáneos válidos. Para empeorar

las cosas, uno de los pocos que aún se mantienen, el deporte (no es broma), ha sufrido un

revés muy fuerte con el pésimo resultado obtenido en el Campeonato Europeo de

Baloncesto, que, para mayor desgracia, se celebraba en Belgrado.

¿Hay espacio para el optimismo? Pues no lo sé. Pero creo que sí, si se replantean una serie

de cuestiones en la escena social y en la política. Entre ellas, claro está, se encuentra el papel

que representa la comunidad internacional, algo con fuertes repercusiones sobre Serbia-

Montenegro a causa de la situación de Kósovo y del “fantasma” de la “no solucionada”

estabilidad en Bosnia-Hercegovina. Podría añadirse aún“la calma tensa macedonia”.

10 de octubre de 2005 José-Miguel Palacios

En 1998 conmemoramos el centenario del 98 español. Por aquel entonces, la Embajada

organizó diversos actos, entre ellos una jornada de discusión académica1. Nuestro principal

socio local fue el Profesor Dragoljub Zivojinovic, que dio a la jornada un aire historicista,

nada politológico. Frente a su enfoque rememorativo-conmemorativo, algunos quisimos

explicitar una comparación que nos parecía obvia. En 1898 se produce para España el

desastre, algo que, en gran parte, supone la desintegración del Estado anterior (la pérdida

de su dimensión ultramarina; su anclaje a Europa). Lo peor, con todo, no parece ser la

derrota, sino la crisis de confianza en sí mismo que el país sufre. Viendo las cosas desde la

distancia de un siglo, parece que es entonces cuando muere la Restauración. Pasarán varias

décadas antes de que el país se recupere. A finales de 1998 parecía obvio que Yugoslavia

se encaminaba hacia la escena final de su derrota (en realidad, lo más importante había

Page 68: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 73 -

ocurrido ya) y, si sirven de algo los precedentes, se podía aventurar ya entonces que la

superación del trauma no iba a ser rápida ni fácil. Parece que siete años después, esta idea

se va confirmando.

Page 69: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 75 -

Bosnia-Hercegovina

9 de enero de 2005 Julio Garrote

Este año que entra será protagonista el relevo aparentemente finalizado de las fuerzas de la

NATO en la llamada Fuerza de estabilización (SFOR; anteriormente, IFOR, Fuerza de

implementación) por la Fuerza Europea, llamada a partir de ahora EUFOR. La machacona

propaganda de Radio Mir en Sarajevo no ha dejado de recordarnos que será una fuerza más

reducida, pero no por ello menos operativa y eficaz. De este modo, el protectorado que es

hoy Bosnia-Hercegovina pasa de forma aparente a responsabilidad europea

La Unión Europea ha anunciado repetidamente que esta su primera misión internacional está

condenada a ser un éxito. Al mismo tiempo, el que ha sido hasta ahora el Alto Representan-

te de la Comunidad Internacional, Lord Paddy Ashdown, lo será en adelante de la Unión

Europea. Sus comentarios acerca de la facilidad que supone este “cambio de chip” no hacen

presagiar un cambio en su labor.

No existen referencias sin embargo a la permanencia de las fuerzas norteamericanas en

Tuzla, en Eagle base, o en Sarajevo (Butmir), aunque mucho menor que en otros tiempos

de aciago recuerdo. Ni tampoco se menciona la magnífica base militar (la mayor de Europa)

que Estados Unidos ha establecido en la provincia serbia de Kosovo y Metohija

La población de Bosnia, especialmente en la castigada Republika Srpska, muestra su

escepticismo y no cree que las cosas vayan a mejorar.

26 de febrero de 2005 Julio Garrote

El Alto Representante de la Comunidad Internacional en Bosnia-HercegovinaPaddy Ashdown ha manifestado que las detenciones de los acusados por La Haya

Page 70: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Bosnia-Hercegovina

- 76 -

Radovan Karadzic y Ratko Mladic es prioridad para la RS y ha amenazado conimponer nuevas sanciones contra la RS mientras no se haga nada en absoluto porcooperar con el Tribunal de La Haya.". Tomado de <http://www.rtrs.tv>.

El Señor Ashdown piensa que tomando decisiones como las del pasado año, en las que se

le vio bastante el plumero, por cierto, va a solucionar la detención y entrega de Rado y

Ratko. Este caballerete, de dudosa catadura moral, no ha logrado o querido entender los

desafortunados pero comprensibles sentimientos de la inmensa mayoría de los serbios de

Bosnia. Ellos están hartos de humillaciones, embargos, miserias, ruinas, ayudas humanitarias

parciales, injusticias, promesas incumplidas, políticos e instituciones corruptas y mafias. Y

él, a cambio, vuelve con su lenguaje de cowboy. ¿Cuándo se darán cuenta los internaciona-

les en Bosnia de que nadie en la República Srpska (RS) moverá un dedo por colaborar, ni

con ese Lord ni con ese tribunal político. Así no. Ellos saben que ni uno ni otro (Rado o

Ratko) merecen un gramo de consideración. Son supuestos criminales, pero son suyos.

Por cierto, en el protectorado de Bosnia-Hercegovina, para los mercenarios de la

Comunidad Internacional la presunción de inocencia no existe, ni el respeto a los derechos

del detenido, ni el habeas corpus, ni la inviolabilidad del domicilio. Ellos, en cambio, allanan

moradas, roban, arrestan y torturan.

¿Dónde está Amnistía Internacional?

19 de abril de 2005 José-Miguel Palacios

Muchos de vosotros habréis oído la noticia. El pasado sábado, por primera vez, un grupo

de reclutas del ejército de la República Srpska tenía que jurar fidelidad a Bos-

nia-Hercegovina (no a la RS), ante la bandera de Bosnia-Hercegovina, y con el himno de

Bosnia-Hercegovina. Según cuenta toda la prensa, los reclutas (allí se repite a viva voz la

fórmula del juramento) cambiaron Bosnia-Hercegovina por RS; ellos y sus familias silbaron

la interpretación del himno bosnio.

Parece clara la interpretación de este hecho.

Page 71: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

1 “"Sobre la movilización del odio tribal” <http://www.cccb.es/transcrip/urbanitats/est_cas.htm>.El artículo procede de un ciclo de conferencias que se celebró del 16 de enero al 30 de abril de 2001 sobrela transición de la Europa del Este, conferencia titulada. Las referencias temporales deben adaptarse a eseaño.

- 77 -

En cualquier caso, creo que hay que tener en cuenta que: a) existe la presión de la masa (en

todas las comunidades): la gente puede hacer dentro de un colectivo algo que no haría a

título individual; b) es probablemente distinto el comportamiento de los serbios (de los

croatas; no estoy seguro si también de los bosniacos) cuando son mayoría y cuando son

minoría.

5 de mayo de 2005 Julio Garrote

Quisiera comentar una afortunadísima intervención de Zlatko Dizdarevic, que el Centre de

Cultura Contemporània de Barcelona publica en su página web1.

En dicha página, Dizdarevic es presentado como analista de Sarajevo, aunque podría serlo

mejor y de manera más precisa como consagrado periodista, escritor y Profesor de la

Escuela de Periodismo de Sarajevo, galardonado, entre otros, con el Premio Capri, el

Premio Bruno Kreisky de los Derechos Humanos y el Premio Internacional de Periodismo

de Reporteros Sin Fronteras. Fue el valiente redactor jefe de Oslobodjenje durante la guerra

y creo indudable su solvencia.

Didarevic afirma:

El ideólogo de la idea de la Gran Serbia, escritor y durante un tiempo presidentede la “nueva” Yugoslavia, formada a principios de los años noventa sobre lasruinas de la República Socialista Federativa de Yugoslavia, formuló una tesis fatalque sirvió de base para la plataforma sobre la que se rediseñó Yugoslavia: “¿Quéclase de pueblo somos nosotros, qué clase de personas somos, si después perdertantas vidas por la libertad, a pesar de las victorias, nos quedamos sin ella?¿Cómo es que alguien de entre nosotros, de casa, nos quita lo que en los camposde batalla no nos pudo quitar el enemigo más poderoso (…). Es trágico serdescendientes de aquéllos que, después de la más difícil y más grande victoria enla historia de Serbia, se quedaron sin fuerzas para reafirmarla en la paz…”(Dobrica Cosic: Stvarno i moguce. Rijeka: Otokar Kersovani, 1982).

Page 72: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Bosnia-Hercegovina

- 78 -

En realidad, con lo de “la mayor victoria en la guerra”, Dobrica Cosic se referíaa la creación de Yugoslavia después de la Primera Guerra Mundial, en la queparticiparon croatas, eslovenos y otras naciones; así que no se podía hablar de unaintocable Gran Serbia. Sin embargo, cualquier aceptación de las especificidadeshistórico-culturales y étnicas de otras naciones dentro de esa Yugoslavia seconsideraba una “derrota en la paz”.

La continua repetición de esta tesis ha reforzado el mito de los sufrimientosheroicos que datan de la batalla de Kósovo, que en 1389 los serbios perdieronfrente a los turcos, así como el mito de la heroicidad histórica, que se supone esmuy importante para la futura solución de las relaciones dentro de la Yugoslaviade finales del siglo XX. Para satisfacer las ambiciones de Dobrica Cosic y de sudiscípulo Slobodan Milosevic, Yugoslavia tenía que ser la Gran Serbia, y sóloentonces no habría razones para el trauma de una “victoria en la guerra y unaderrota en la paz”. Y para realizar esta Yugoslavia había que destruir el Estadofederal actual, compuesto por seis repúblicas de igual status y dos provinciasautónomas. Esto se podía conseguir expulsando a Eslovenia de la unión,constatando que el viejo país ya no existía y, luego, rediseñando militarmente lasfronteras. En este proyecto de crear territorios nacionalmente compactos, hasta un60% de los habitantes de la Bosnia- Hercegovina de antes de la guerra tenía queser desplazado de su actual lugar de residencia, en el que llevaban viviendo susfamilias desde hacía cientos de años. Sin una guerra, por supuesto, no era posiblehacerlo.

Para hacer la guerra hubo que forzar a los habitantes de Yugoslavia para que seinclinaran a su favor, pues nadie normal consideraba que la situación en el paísde este momento fuera motivo para una guerra. Para hacer que la gente semovilizara para una guerra por las enloquecidas ideas de unos pocos eraimprescindible el odio, que hasta aquel momento, objetivamente, no existía ni enmayor ni en menor medida que en cualquiera de los territorios europeos donde semezclan y chocan diferentes naciones y religiones. Era, por supuesto, necesarioromper la sociedad, destruir las instituciones del Estado y sustituir el concepto deciudadano por el de nación. Los ganadores de las primeras “elecciones democráti-cas” se convirtieron en nuevos totalitaristas y nacionalistas.

Milosevic y Tudjman, y en cierta medida también Izetbegovic, consiguierondestruir la sociedad e instaurar en su lugar la monstruosidad llamada pueblo. Enuna gran operación de atontamiento mediático, se convenció a la gente de queeran miembros de la tribu y no individuos con nombre y apellidos, profesión,sentimientos y puntos de vista propios. Atacar a cualquier parte de la tribusignificaba atacar también al individuo. En una situación así, toda la tribu sesiente atacada y actúa colectivamente, a la defensiva, buscando para esta defensaun perdón colectivo. De aquí procede una tesis sospechosa del nuevo presidenteyugoslavo Vojislav Kostunica, según la cual Milosevic no puede ir al Tribunal deLa Haya, pues ¡¿”constatando la culpabilidad individual de Milosevic, se acusaríacolectivamente a todo el pueblo serbio”?! Esta intencionadamente fabricadaconciencia de lo colectivo tuvo como resultado actos violentos y de limpieza étnicaen territorios en los que antes reinaba la tolerancia de la vida en común. El

Page 73: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 79 -

concepto de convivencia en Bosnia-Hercegovina ha sido utilizado y explotadoequivocadamente. La gente ahí no vivía una junto a la otra, que es lo que suponela convivencia. La gente ahí se mezclaba una con la otra. Incluso la comunidadjudía de Sarajevo era una de las pocas en el mundo que no estaba encerrada en ungueto. La gente vivía como una parte de una comunidad mixta que no conocíafronteras interiores. Hoy en día son visibles las consecuencias de una colectiviza-ción forzosa.

Hace poco, la redacción de un semanario hizo una encuesta en las calles deSarajevo, haciendo la misma pregunta a todo el mundo: “¿Qué es Usted?”. En el99% de los casos, la respuesta era musulmán, serbio, croata u otra cosa, mientrasque sólo un 1% de los encuestados contestó que era estudiante, o trabajador, oalgo parecido. La verdad es que, diez años atrás, la gente, de entrada, no seidentificaba de esta manera. Una gran mayoría creía entonces sinceramente que,además de pertenecer a una nación o una religión, que nadie cuestionaba, existíanotros valores que representaban un elemento clave de su vida como ciudadano.

El ejemplo siguiente ilustra la ironía del ensalzamiento de la simplificaciónnacionalista. Es un caso verdadero y ocurrió en Sarajevo justo cuando empezabala guerra. En el muro de la gran oficina de correos, en el centro de la ciudad,alguien escribió durante la noche un graffiti en letras muy grandes: “Esto esSerbia”. Al día siguiente debajo de estas palabras alguien añadió: “Estúpido, estoes Correos”. Cuando las cosas se simplifican desde la perspectiva actual, laguerra, en realidad, no tuvo lugar entre serbios, croatas y musulmanes, sino entreaquellos que veían la oficina de correos exclusivamente como Serbia, Croacia o“Musulmania”, y que hoy siguen pensando igual, y aquellos para los que Correoscontinúa siendo, ante todo, un lugar desde donde se envían cartas y paquetes o serealiza una llamada telefónica”.

Cito precisamente este fragmento para clarificar que mi más acendrada crítica pretende

saetear a aquellos que con su falso prestigio no permiten que la sociedad en Bosnia-

Hercegovina recupere eso que todos disfrutamos día a día en España: ciudadanía, derechos

civiles, estado social de derecho.

Ciudadanía cívica. Ése es el objetivo que deberían marcarse como primordial todos aquéllos

que desde la “comunidad internacional” y sus organizaciones rigen el destino de ese triste

protectorado. Bosnia no necesitaría protectorados si se creara una auténtica sociedad civil.

Nadie se plantearía hablar de tolerancias, sino de simple educación cívica como miembros

de una sociedad.

Y eso, en fin, es por lo que trabajé todo este pasado año en Bijeljina, Tuzla, Zvornik,

Srebrenica, Janja, Ugljevik y Vlasenica, entre otros lugares. Y, curiosamente, los obstáculos

Page 74: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Bosnia-Hercegovina

- 80 -

más importantes no los interponían ni las instituciones locales ni las personas que allí tratan

de poner en pie sus esperanzas, sino los okupatori internacionales, nosotros mismos.

18 de mayo de 2005 Arsenio Sánchez

Entre 1999 y 2001 tuve la suerte de coordinar un proyecto de cooperación con la ONG Paz

Ahora para la reconstrucción de la Biblioteca Nacional Universitaria de Bosnia-Hercegovi-

na, generalmente conocida como Biblioteca de Sarajevo. En el año 2000 la Agencia

Española de Cooperación Internacional financió los talleres de conservación de la Biblioteca

y me trasladé a Sarajevo para realizar la instalación y organizar los servicios de conserva-

ción.

Como os podréis imaginar, la situación allí era bastante penosa. Durante el bombardeo de

agosto de 1992, se destruyó una gran parte del patrimonio escrito de Bosnia-Hercegovina,

los catálogos de la biblioteca, y 1.200.000 volúmenes. La propia biblioteca quedó

completamente arrasada. Entre 1995 y 1999, la biblioteca comenzó una nueva andadura en

los antiguos cuarteles de Tito, en Zmaja od Bosne, compartiendo espacio con los restos del

Instituto de Estudios Orientales - arrasado por otro bombardeo en mayo de 1992 - y la

Universidad de Sarajevo.

El laboratorio quedó terminado en noviembre de 2001. Desde entonces, ha desarrollado una

intensa labor de restauración de fondos documentales de Bosnia y se han restaurado

numerosos documentos, a pesar de lo exiguo de su plantilla y las dificultades económicas.

Hace unos días, un amigo de Sarajevo me escribió informándome de que la biblioteca va a

cerrar sus puertas al público. Las dificultades económicas son insostenibles, se ha reducido

el presupuesto del centro en un 90% y el personal no cobra sus sueldos desde hace meses.

Es uno más de los numerosos casos que he podido ver en estos años. Recuerdo la visita al

Archivo Nacional de Hercegovina en 2001, una visita en la que evaluamos con linternas el

estado de la documentación en los depósitos, ya que habían cortado la luz por falta de pago.

Me imagino que la situación es la misma en otros centros de similares características y,

Page 75: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 81 -

aunque no he podido confirmarlo, creo que también en el Zemalski Muzej, que conserva la

espléndida Haggadah de Sarajevo.

Lo que me preocupa del tema es que, si bien la mayoría de los políticos considera a las

instituciones culturales como un lujo prescindible, en realidad un país necesita de sus

instituciones culturales para sobrevivir.

Era algo que me planteaba cuando preparaba el proyecto. O, si no ¿por qué dieron su vida

algunas personas que protegían instituciones culturales como la Biblioteca o el Zemalski?

Por otra parte, ¿cómo se van a formar los futuros ingenieros, abogados o médicos si no

existen centros donde obtener los textos para estudio? ¿Es posible que, finalmente, los

librocidas que atentaron contra el patrimonio bosnio se salgan con la suya?

10 de noviembre de 2005 Julio Garrote

Muchos de los que trabajamos años junto con la mal llamada “Comunidad Internacional”

y sus organizaciones en Bosnia-Hercegovina, especialmente justo al firmarse Dayton;

muchos, digo, manteníamos la convicción de que se iba a dar paulatino cumplimiento a lo

que ese acuerdo contempla claramente, y era la unión de la RS a Serbia.

Luego vinieron las felices ideas del Distrito de Brcko, como ejemplo a seguir de comunidad

multiétnica modelo elevado a Entidad, es decir, exactamente a la misma categoría política

que la RS o la Federación de Bosnia-Hercegovina, arrancado de la RS y sometiendo a ésta

a la definitiva discontinuidad territorial. Al mismo tiempo, pretendieron hacer creer a todos

que la IEBL (Inter Entity Bondary Line), frontera entre la RS y la Federación fijada en

Dayton, había desaparecido...

Según las últimas noticias de las que disponía, entre los proyectos de la Misión de la Unión

Europea (UE) se apuntaba a la creación de regiones administrativas mixtas, de modo que,

por ejemplo, Bijeljina y Tuzla quedarían administrativamente unidas. Que me corrijan si me

equivoco.

Page 76: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Bosnia-Hercegovina

- 82 -

De los términos de aquel acuerdo de paz, sagrado en lo que a algunos les convenía, no

queda mucho. Y así nos luce el pelo a todos. Si no se respeta lo que tanto costó, qué vamos

a esperar ya de la gestión de los okupatori.

11 de noviembre de 2005 Julio Garrote

Cualquiera que haya tenido la oportunidad de trabajar para cualquier Organización de la

“Comunidad Internacional” sabe:

� Que no depende del mandato que se reciba el que las cosas mejoren en el país al que

se supone se va para ayudar.

� Que las organizaciones, en su fuero interno, no funcionan como un bloque

homogéneo, donde las decisiones y los actos deberían de ser independientes a la

procedencia, ideología o nacionalidad del responsable, sino justo lo contrario.

� Que los servicios militares y civiles de inteligencia de los países introducen a sus

elementos en esas organizaciones para el puro espionaje en el país anfitrión. Otra

cosa es que sean lo efectivos que uno se imagina tras ver películas made in

Hollywood.

� Que los conflictos de intereses entre países de la organización siempre se mantienen

como prioridad a la hora de adjudicar la ejecución de los objetivos estratégicos.

Cuando hablo de organización me refiero a la ONU, a la OTAN, a la UE, a la UEO, a la

OSCE, y a las derivadas de todas ellas.

A Kosmet, justo tres semanas antes de los bombardeos de la OTAN, en marzo de 1999,

fueron destacadas unas setenta unidades de la OSCE (que yo viera), y fui testigo de su

desplazamiento desde Bosnia-Hercegovina en sus vehículos. Me produjo gran extrañeza

cuando los que pertenecíamos a la “Comunidad Internacional” estábamos siendo evacuados

Page 77: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 83 -

de la República Srpska ante la inminencia de la agresión contra Serbia, no fuera a ser que

se produjeran actos de violencia contra nosotros y nuestras instalaciones. Casualmente, el

Ejército Serbio y la Milicija habían descubierto que alguien se había encargado de fijar los

posicionadores laser para los supuestos objetivos de las bombas inteligentes que cargaban

los bombarderos de Aviano. Luego mataron a muchos civiles serbios en los autobuses...

Daños colaterales dijeron.

Menudos asesinos.

Por cierto, los de la OSCE, en el camino, debieron coincidir con las tropas rusas que

perteneciendo a la entonces SFOR, habían recibido instrucciones de abandonar sus

cometidos dentro de Bosnia para dirigirse en apoyo a Serbia en caso de invasión terrestre

por parte de la OTAN, cosa que después oficialmente no trascendió. Créanme, la cosa

estuvo muy complicada.

12 de noviembre de 2005 José-Miguel Palacios

No resisto la tentación de recomendaros Gori Vatra, una película bosnia reciente (2003)

en la que se puede ver muy bien esta situación que describe Julio desde el punto de vista de

los administrados, los bosnios.

El director es Pjer Zalica y la acción se desarrolla en Tesanj, una pequeña ciudad de mayoría

bosniaca próxima a Doboj (Bosnia Central) en el año de Dios de 1997, segundo de la era

daytoniana. Resulta que Bill Clinton viaja a Sarajevo y le preparan un recorrido por el feliz

país, recién pacificado, dentro del cual figura una visita a Tesanj. A partir de aquí, las

autoridades locales, con la supervisión de esa “Comunidad Internacional” de la que tanto

hablamos, se ponen a adecentar la ciudad para que esté en condiciones presentables cuando

llegue el ilustre huésped. Si a estas alturas os ha parecido reconocer el argumento básico de

Bienvenido Mr. Marshall, enhorabuena por haber descubierto lo mismo que casi todo el

mundo.

Page 78: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Bosnia-Hercegovina

- 84 -

La Tesanj daytoniana resulta ser un desastre: tráficos ilícitos diversos, prostitución,

corrupción policial, etc. etc., y aquí la película circula a través de algo que se ha convertido

en un subgénero característico dentro del cine postyugoslavo contemporáneo: el tema de

gángsteres como consecuencia de la guerra. Lo que pasa es que las películas más conocidas

de este subgénero (Rane, Bure Baruta, Bulevar Revolucije) se desarrollan en una gran

ciudad, con ese relativo anonimato que las caracteriza. En Belgrado, por ejemplo, las

“hazañas” de los “héroes” son conocidas por el gran público a través de los medios de

comunicación; en la calle, la gente se cruza con los gángsteres y muchas veces no sabe que

lo son. En Tesanj, en cambio, todos conocen a todos. Se sabe perfectamente quién controla

qué, a quién unta y con quién colabora. Es una variante interesante.

La vida que se ve en Gori Vatra es la de ellos, los bosnios (casi todos, bosniacos; algunos,

serbios), pero sobre sus vidas gravita la “Comunidad Internacional”, que en todo interviene,

que todo lo condiciona. Ellos, los bosnios, creen que los extranjeros son tontos (“Stranci

su glupi” , dice uno de los personajes), que es muy fácil ver lo que buscan y que se les puede

engañar y sacar provecho de ellos. Y hay multitud de ejemplos. El alcalde, musulmán, va

a buscar a un viejo amigo, serbio, para pedirle que le preste unos cuantos de los suyos que

quieran “volver” a su antigua casa en Tesanj y así mostrar ante los internacionales lo bien

que marcha la reintegración. Y lo consigue, pagando; y los internacionales se quedan tan

contentos. Y se organizan festejos donde celebran el espíritu “multiétnico” con frases

traducidas de los discursos internacionales, y el organizador de todo es, precisamente, el jefe

de los gángsters. El policía internacional que supervisa la administración comunal es el único

en toda la región que no sabe que aquel tipo del traje blanco no es un promotor de

espectáculos, sino un delincuente.

Esto por lo que se refiere al “stranci su glupi” . Porque, al mismo tiempo, “stranci su

opasni” (los extranjeros son peligrosos). El alcalde es un hombre poderoso en Tesanj, pero

en numerosas fases de la película se le puede ver poseído por el terror ante la posibilidad de

que algo se tuerza, de que los extranjeros se lo tomen a mal, y él pierda su puesto.

Finalmente, está el punto de la humillación. Figura implícitamente en muchas fases, pero hay

una escena en que Zalica lo hace explícito. El jefe de Policía ha reunido a sus chicos y ha

Page 79: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

2 DGS (en inglés, SBS) son las siglas de Drzavna Granicna Sluzba (Servicio Estatal de Fronteras).

- 85 -

preparado un plan para garantizar la seguridad de Clinton durante el viaje. En esto aparece

una joven americana encargada de coordinar la visita y le dice que los bosnios no deben

hacer absolutamente nada. Los americanos se encargan por completo de la seguridad. Lo

máximo que permiten es que, bastante por delante de la comitiva, vaya una pareja de

motoristas bosnios, desarmados.

Muchas veces, una obra de arte puede servir mejor para transmitir estados de ánimo que

muchas encuestas.

19 de noviembre de 2005 Julio Garrote

Vi la película de Gori Vatra el año pasado y, aunque parece que exagera en algún aspecto,

la triste realidad ha sido y es ésa. Pongo un ejemplo un poco tétrico, pero revelador y muy

real.

La OSCE lanzó el año pasado una campaña para la lucha contra la trata de blancas y el

tráfico de seres humanos en general, contra las mafias que explotan la prostitución y las

redes de distribución de jóvenes de países del Este (búlgaras, ucranianas, rumanas, rusas,

etc.) que utilizan Bosnia tanto para explotación sexual de las mujeres como en calidad de

zona de paso hacia la Europa rica.

Se trataba de obligar a la Policía de las entidades (en concreto y en lo que a mí me tocó

trabajar, a los Equipos de Investigación de la Policía de la RS y del DGS de Bosnia-

Hercegovina2) para que hicieran el máximo esfuerzo en el control de los pasos fronterizos

clandestinos (qué difícil es el Drina) y para la erradicación de prostíbulos y de pisos

clandestinos donde mantienen a las mujeres secuestradas como verdaderas esclavas

sexuales.

Todo lo planteado por los profesionales de la seguridad en la RS y en el DGS fue con

Page 80: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Bosnia-Hercegovina

3 Se emplea “yugoslavas” en el sentido de relativas a la antigua Yugoslavia o a los países que hansurgido de ella”.

- 86 -

inequívoca actitud de total colaboración, pero el primer problema que se presentó fue que,

paralelamente a las acciones policiales, se procurara estrangular el negocio evitando que la

“clientela” siguiera teniéndolo fácil a la hora de acceder a los “servicios” ofrecidos por las

redes de prostitución.

La campaña de concienciación de la OSCE fue dirigida, no a la población local, sino a los

extranjeros. Sí, sí, precisamente a los que apretaban a la Policía para que redoblara

esfuerzos. Porque los principales clientes son, entre otros, los soldaditos de SFOR, (hoy

EUFOR) y muchos otros. Así que prepararon carteles para pegarlos por todas las entradas

a la Eagle Base de Tuzla, Butmir en Sarajevo, etc, con dudosa y lamentable efectividad.

19 de noviembre de 2005 José-Miguel Palacios

Creo que alguna vez hemos comentado que algunos historias yugoslavas3 tienen que

desarrollarse en Belgrado, porque sin el ambiente de gran ciudad no serían creíbles (una vez

leí en un foro bosnio que la acción de Rane no resultaba verosímil en Tuzla). A la inversa,

creo que las pequeñas ciudades de Bosnia son espacios ideales para escenificar muchas de

las historias que un cineasta yugoslavo puede plantear. Quizá por su relativo atraso con

respecto a otras zonas (Belgrado, Zagreb, Ljubljana, Novi Sad). Quizá por su carácter de

lugar de encuentro de varias influencias.

Acabo de ver Sest dana juna (Seis días de junio), de Dinko Tucakovic, un conocido crítico

de Belgrado (nacido en Zenica, Bosnia-Hercegovina), que también ha rodado algunas

películas. Ésta, en particular, es de mediados de los años ochenta, aunque la acción se

desarrolla casi veinte años antes, en 1968.

La acción se desarrolla en un pueblo de Bosnia Oriental. Rajko, obrero metalúrgico, recibe

la citación para incorporarse al ejército. Le quedan seis días y el espectador lo acompaña

Page 81: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 87 -

durante ellos y, de paso, es testigo de todas las divisiones que existen una sociedad aún

apacible, pero en vísperas de grandes cambios:

� Divisiones de clase: están los obreros, como Rajko, y los estudiantes de vacaciones.

No se mezclan. Rajko y otros como él envidian a los estudiantes.

� Divisiones religiosas: en un par de ocasiones, se oye al muecín llamando a oración

mientras los jóvenes pasean por la calle. En dos ocasiones, el pope ortodoxo

(significativamente, es joven) aparece con un papel destacado, en calidad de centro

de referencia de su comunidad (es un apoyo del poder establecido; aconseja a Rajko

que sea respetuoso con sus superiores en el Ejército).

� Divisiones nacionales. Uno de los estudiantes invita a la chica a ir al “biosk op”

(cine en serbio), mientras que ella le corrige con “kino” (versión croata).

Tucakovic ha elegido el momento en que empezaba la modernidad yugoslava y, probable-

mente, ha intentado buscar allí las raíces de los problemáticos años posteriores. Ya hay pop

yugoslavo (en muchos pasajes Indexi ponen la música de fondo), pero está aún muy lejos

del fenómeno de masas que sería años después. Ya ha empezado el fenómeno de la

emigración, pero por el momento afecta tan sólo a algunos, que vuelven al pueblo y

provocan la admiración de todos. En dos momentos, nos muestra números de Praxis

(revista de filosofía de Zagreb) y de Student (periódico estudiantil de Belgrado), iconos de

la apertura política e intelectual en aquellos años.

El problema básico es de aburrimiento y de falta de perspectivas. Ella dice en un pasaje que

se aburre (dosadno!) y en otro que le gustaría irse a cualquier sitio, aunque fuera al ejército.

Por otra parte, el “héroe” es el emigrante, que vuelve de Bélgica con su espléndido coche

y es recibido por todos como un ejemplo a imitar. Cuando Rajko le pregunta a un amigo

estudiante qué tiene que hacer para inscribirse en la Facultad, el otro le responde “Bolje ti

radi, pa idi u Belgiju” (mejor trabaja y vete a Bélgica).

Éste es uno de los temas de la película. Porque el otro es una variante de American

Graffitti: últimas horas (días) antes de irse de su ciudad (a la Universidad, al Ejército) y

Page 82: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Bosnia-Hercegovina

- 88 -

búsqueda obsesiva de una chica que es como un fantasma, a la que sigue con la vista, pero

con la que no habla. Al final, a diferencia de lo que ocurre en Graffitti, Rajko no se va.

Y ésta es la variante que menos me gusta de la película, que desciende de una manera

demasiado abrupta hacia un final, en mi humilde opinión, demasiado tremendista. Volviendo

un día a casa por una carretera oscura, él se atreve a acercarse a ella y le ofrece fuego. Se

quedan charlando, hablan de su aburrimiento y de su futuro, y él, de repente, se echa sobre

ella e intenta violarla. Aparece la Milicia y él huye, montándose sobre la marcha en un tren.

Allí, mata al revisor que le pide el billete. Una mujer lo ve y hace que el tren se detenga. Él

salta.

En un momento de la película hay una canción popular interpretada a dúo por una morena

muy del estilo de la más tarde famosa Ceca Raznatovic y por el emigrante, Ljubo Todorovic

(por el nombre, un serbio), del que se dice que “preko granice poznat kao Ljubo Bosanac”

(conocido en el extranjero como Ljubo el bosnio). En épocas muy próximas a la gran

tragedia, los gentilicios “serbio” y “bosnio” no se consideraban aún incompatibles.

22 de noviembre de 2005 José-Miguel Palacios

¿Es posible que nadie se haya acordado del X aniversario de Dayton?.

23 de noviembre de 2005 César Luis Díez

El X aniversario ha pasado bastante desapercibido, fuera de algún acto oficial. Los medios

de comunicación de fuera del entorno balcánico han presentado artículos de conmemoración

y revisiones de sus hemerotecas y los del entorno balcánico han hecho algo similar.

Ahora cabe preguntarse el porqué de esta “ignorancia”. Y yo creo que la explicación reside

en la percepción de desengaño y fracaso ante los acuerdos. Sus defensores alaban la

Page 83: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 89 -

arquitectura y el diseño, pero tienen problemas para justificar la manera en la que se ha

implementado y sigue haciéndose. Bonia-Hercegovina es un territorio dividido actualmente

por razones étnicas, donde se ha creado una costosísima administración artificial que hace

que los ciudadanos se sientan bastantes perdidos. La presencia internacional es a la vez un

seguro de tranquilidad y una tranquila fuentes de ingresos directos y no tan directos (a

través de subvenciones). El panorama no parece ser demasiado halagüeño, pero aún así

aparece en el horizonte más cercano la idea del comienzo de las conversaciones para una

futura adhesión a la UE, proceso difícil y lleno de obstáculos políticos.

Lamento dar esta imagen pesimista; pero me parece que todos opinan que los acuerdos de

Dayton están muertos, y la cuestión es si darles unos funerales de estado, o un discreto

entierro en un círculo restringido. La situación está cambiando y se necesita un nuevo marco

que la regule. Y la cuestión ahora, será ver si los actores de la llamada Comunidad

Internacional van a tener las suficientes energías - recursos económicos - para afrontar esos

cambios. Más aún si tenemos en cuenta que la situación internacional ha cambiado

sustancialmente en estos diez años y que las prioridades actuales en materia de política

exterior de muchos gobiernos se encuentran muy alejadas del escenario balcánico.

24 de noviembre de 2005 José-Miguel Palacios

Decía hace unos días que el final de Sest dana juna, de Tucakovic, era desmesurado.

Vamos, que la cosa no era para tanto. Pensándolo mejor, quizá fuera una premonición de

lo que acabaría ocurriendo en la antigua Yugoslavia. La cosa no era, ni mucho menos, para

que acabar ocurriendo lo que ocurrió. Tal vez el final de la película, después de todo, sea

mucho mejor de lo que a primera vista me pareció.

Page 84: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Bosnia-Hercegovina

- 90 -

25 de noviembre de 2005 José-Miguel Palacios

Quiero aclarar una cosa. No trabajo para Pjer Zalica, el director de cine bosnio. Y creo que

esta aclaración es importante, porque hace pocas semanas hablaba, muy bien, de su película

Gori Vatra (2003) y hoy voy a tener que hacer lo mismo de otra de sus películas, Kod

amidze Idriza (“En casa del tío Idriz”, de 2004).

Kod amidze Idriza es una película de guerra en la que no hay enemigo, ni odio, ni violencia,

ni batallas. Sólo hay recuerdos. De lo que fue, y ya no es. De lo que puedo ser y ya nunca

será.

La acción se desarrolla en uno de los barrios periféricos de Sarajevo (con esas calles en

increíbles cuestas) en un año indeterminado de la postguerra, pero que podría ser 2001-2002

(el hijo de Idriz había muerto 7 años antes, y la guerra terminó en 1995). El plano inicial

sirve ya para dar el tono. El protagonista, Fuke (sobrino de Idriz) arranca (con dificultades)

su coche (es un Golf del primer modelo, el de los años setenta) en una zona moderna de

Sarajevo (edificios altos de los años ochenta, no demasiado bien conservados; podría ser

Dobrinja, aunque no estoy seguro). El día es uno de esos días grises y húmedos, tan

característicos de la capital bosnia.

Toda la pelicula se desarrolla en la casa de Idriz (Fuke va a arreglarle el calentador) y en los

alrededores. Y todos los personajes, todo el entorno, aparentemente tranquilo, sufren de

alguna manera las consecuencias de la guerra. Idriz y su mujer no hacen más que pensar en

su hijo muerto, pero también en su nieta, a la que ya no ven. La nuera vive ahora con otro

hombre (a él le han ido bien las cosas; tiene un buen coche) e Idriz no puede aceptarlo. El

vecino va tirando, pero quien de verdad sostiene la casa es su mujer, que tiene un buen

trabajo en Sarajevo (él sospecha que también un amante). La novia de Fuke marchó como

refugiada a Estados Unidos y ha vuelto. Están saliendo y él cree que ella quiere quedarse.

En realidad, tiene billete de ida y vuelta, y el viaje ha sido para resolver un problema de

reclamación de propiedad. Todos ellos son buena gente, y todos ellos parecen profundamen-

te infelices.

Page 85: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 91 -

La película tiene un “happy end”. Fuke, que es el arquetipo de lo que se podría llamar “una

buena persona”, consigue traer a casa de Idriz a la nuera con la nieta y su nuevo marido.

Hay un momento de duda, pero muy pronto todos se dejan llevar por la alegría del

reencuentro. Empiezan a cantar (una canción popular, de ésas que se cantan a coro en tales

situaciones), sacan comida y bebida y a la fiesta espontánea se van uniendo todos. A mí me

recordó la fiesta final de Underground, pero seguro que hay analogías mejor buscadas.

Hay una frase hacia el final de la película que creo que refleja muy bien el mensaje que Zalica

quiere transmitir. La novia de Fuke dice que no se quiere quedar en Sarajevo, que querría

ir a vivir a Rovinj y Fuke no sabe exactamente dónde está ahora, con todos los cambios que

han ocurrido. En medio de la fiesta le pregunta al nuevo marido de la nuera, un hombre que

tiene suficientes recursos para viajar, dónde está ahora Rovinj, si en Croacia o en Eslovenia.

El otro le responde: “En Croacia. Rovinj siempre ha estado en Croacia”. Que es algo así

como decir: “a pesar de todo lo que ha pasado, a pesar de todo lo que nos ha pasado, las

cosas, en el fondo, siguen siendo como siempre; para lo bueno y para lo malo”.

Page 86: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 93 -

Kósovo

25 de marzo de 2005 José-Miguel Palacios

Algunas líneas sobre Bajram Kosumi, el nuevo Primer Ministro de Kósovo, elegido tras la

dimisión de Ramush Haradinaj, procesado por el Tribunal de La Haya.

Kosumi es uno de los “presos políticos”, encarcelados durante los años ochenta por su

participación en la revuelta de Kósovo de 1981. En la década de los noventa fue presidente

del Partido Parlamentario (que fundara, precisamente, Veton Surroi), aunque luego dejó el

puesto en favor de Adem Demaçi cuando éste se incorporó a la política activa.

Se puede encontrar bastante sobre Kosumi en la colección de Koha que tenemos situada en

el portal de la lista: http://koha.estudiosbalcanicos.org.

En particular, se habla de Kosumi en los siguientes números: 3, 5, 29, 51, 78, 80-81, 84, 87,

88, 90, 98, 116, 146, 151.

12 de abril de 2005 Tino Brugos

Kosmet je Srbija

¿KOSMET?¡Ah!¿pero existe KOSMET a estas alturas?

No dejo de sorprenderme con tanto vaivén balcánico... Yo creía que había pasado al limbo

del protectorado internacional. Nada de independencia, pero, claro, KOSMET... ¿es volver

a cuándo?; ¿a antes de la Constitución de 1974?

Sorprendente.

Page 87: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Kósovo

1 <http://www.foia.cia.gov/search.asp?pageNumber=1&freqReqRecord=nic_geo_eur.txt>.

- 94 -

22 de abril de 2005 José-Miguel Palacios

En algunas ocasiones hemos aludido en los debates que hemos desarrollado en esta lista a

los orígenes del conflicto yugoslavo, a la intervención internacional y a la inevitabilidad de

la ruptura del país y las consiguientes guerras.

Para el que no lo conozca, resultará muy útil echar un vistazo a la estimación norteamerica-

na de 1990, desclasificada en 1999, bajo el título (EST PUB DATE) YUGOSLAVIA

TRANSFORMED1. Es un excelente trabajo analítico, realizado en una fecha tan temprana

como la segunda mitad de octubre de 1990, cuando las reformas de Ante Markovic habían

dejado de funcionar bien, pero no se habían perdido aún las esperanzas de que el Prsidente

del Gobierno fuera capaz de enderezar la situación. Pues bien, en ese documento se prevé

ya que la federación yugoslava dejaría de funcionar antes de un año (es decir, antes de

octubre de 1991) y dejaría de existir antes de dos (octubre de 1992). Un pronóstico

excelente.

En lo que falla por completo es en el pronóstico que formula sobre posibles estallidos de

violencia. El informe preveía un levantamiento armado albanés kosovar, algo que no llegaría

a producirse hasta 1997-98. Daba menos importancia relativa a los estallidos esporádicos

de violencia étnica y descartaba que pudieran desencadenar una guerra interrepublicana. Es

eso, precisamente, lo que acabó ocurriendo.

Page 88: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 95 -

Playboy

15 de febrero de 2005 César Luis Díez

Serbia-Montenegro, al igual que otros países de la zona (Bulgaria, Croacia, Grecia,

Rumanía), tiene su propia edición de la revista Playboy. Y algo que no deja de sorprender

al lector extranjero es el peso de la política en ella. Desde enero de 2004 se han publicado

14 números y en ellos ha quedado bastante representada la clase política. La fórmula

empleada es la de la entrevista, anunciada en la portada y (por lo menos en los primeros

números) con subtítulo. Entre ellas encontramos las del Presidente Federal (número 1), la

de los líderes radicales (números 2 y 9), la del encargado de los servicios de seguridad de

la época de Djindjic (número 3), la de conflictivo C. Jovanovic (número 11), y - por

supuesto - la de este mes a B. Karic (número, 14 - con bastantes fotos del álbum familiar).

El resto de la lista se completa con personajes de la cultura (escritores en su totalidad) que

también han tenido un papel relevante en la escena política en un momento determinado.

Los números que no presentan a políticos corresponden a los meses de verano, y en estos

casos se tiraba de entrevistas a actores y directores de cine extranjeros (con seguridad, se

trata de material no producido localmente).

Una pregunta que se me ocurre es si es normal está situación en los países que podríamos

denominar en transición. Es decir, si la esfera política se introduce en cualquier otra, incluso

en una revista dedicada al “ocio”. Por otra parte, también se podría encontrar la explicación

en el perfil de los lectores y en el interés de la revista por tratar todos los temas de

actualidad (cine, televisión, vida social, etc.), además de mostrar fotos de guapas chicas.

17 de febrero de 2005 Dalibor Soldatic

Me temo que nuestro amigo César está pecando de ingenuo o es que está conociendo muy

Page 89: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Playboy

- 96 -

tarde una revista como Playboy. Desde siempre ha pretendido ofrecer al público lector,

además de las amenidades pictóricas, textos serios como entrevistas con políticos de primera

y fragmentos de novela o cuentos de las plumas más notables de la literatura anglosajona.

Algo similar para el mundo francófono hizo en su momento la revista Lui, mientras que en

el espacio yugoslavo esa orientación la representaba la revista Start de Zagreb. A título de

ejemplo, Playboy ha entrevistado a Fidel Castro cuando éste era considerado el archienemi-

go de Estados Unidos, a Jimmy Carter etc. Por lo tanto, Playboy en su edición serbia no

hace otra cosa sino seguir la pauta de las demás ediciones.

20 de febrero de 2005 César Luis Díez

Me temo que nuestro amigo César está pecando de ingenuo o es que estáconociendo muy tarde una revista como Playboy. Desde siempre ha pretendidoofrecer al público lector, además de las amenidades pictóricas, textos serios comoentrevistas con políticos de primera y fragmentos de novela o cuentos de lasplumas más notables de la literatura anglosajona.

Debo discrepar en algo. En mi mensaje lo que comentaba es la proliferación de entrevistas

a políticos, algo que, por ejemplo, si cogemos los números de la 2ª época de la edición

española de Playboy no podemos apreciar. Una razón más para la comparación con esa 2ª

época, que arranca en 2003, es el formato (número de páginas, lomo cuadrado, etc.), que

es ahora el más común y ha sido adoptado por la versión serbia, quizá por influencia del

entorno: Croacia tiene el mismo formato, aunque no Grecia...

Más allá de una exégesis de las “ediciones” de Playboy, lo que me sigue llamando la

atención es las entrevistas a los líderes radicales Nikolic y Vucic. Forzando de nuevo una

comparación - que puede pecar de ligera - es como si en el 78 la joven edición española de

la revista hubiera lanzado entrevistas a políticos de Fuerza Nueva, FE de JONS (es decir,

al sector “más duro” del anterior régimen) o a los políticos de la emergente Alianza

Popular.

Page 90: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 97 -

24 de febrero de 2005 César Luis Díez

Isidora Bjelica, una conocida escritora belgradense, publica en el último número de la revista

Playboy (consciente soy de que después de mis últimos mensajes a la lista parece que ésta

es mi única lectura) un artículo titulado U krevetu s Titom (“En la cama con Tito”), donde

se puede leer el siguiente párrafo:

“El propio biógrafo oficial de Tito, Vladimir Dedijer, difundió un sinnúmero deinformaciones confusas, ilógicas y sin contrastar. Cuentos sobre su origenaustriaco, judío o ESPAÑOL circularon por todo el país, pero sus difundidores nofueron perseguidos. Sin embargo la teoría más extendida es la de que al cambiode identidad se llegó en el frente, pero que Josip Broz y un tal Josip Ambroz (segúnotras versiones, Franc Broz) se habían encontrado por primera vez en ciertaescuela en Pec. Ahora una historia legendaria, pero también confirmada, es la deque en la misma escuela al mismo tiempo coincidieron también Adolf Hitler yMiroslav Krleza” [la mayúscula no aparece en el texto].

Como señalo con las mayúsculas, me ha llamado mucho la atención que exista una supuesta

teoría del origen español de Tito. Algo que seguro carece de fundamento, pero que no deja

de ser una anécdota que puede resultar simpática en una lista de balcanistas en español. De

todas formas, si alguien tiene alguna información sobre dicha teoría me encantaría que nos

la contará.

Page 91: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 99 -

Violencia y criminalidad

7 de marzo de 2005 César Luis Díez

Acaba de aparecer la segunda entrega (“Zeljko Raznatovic: El comandante Arkan”) de un

artículo del periodista Brana Crnevic en el semanario Evropa. Y lo que no me deja de

sorprender es el tono del propio texto: una casi completa alabanza al “comandante”

(comparado con el Che), dentro de en un tono de prosa decadente típico de la serie de

artículos firmados por este periodista bajo el título “Srpska Knjiga Mrtvih” (El libro serbio

de los muertos).

Dentro de la sorpresa general, ocupa un puesto privilegiado un párrafo en el que el autor

niega que Arkan conociera a Milosevic:

“Arkan jamás conoció a Slobodan Milosevic. De encontrarse Arkan entre los vivos,incluso para esas damas fácilmente iracundas que tratan al Tribunal de “tú”,hubiera sido difícil colocarle bajo las órdenes de Slobodan Milosevic; ya queArkan fue un comandante en jefe; por encima de él - para su bien entrenadoentorno - sólo estaba Dios. El exclusivo dios serbio al que cantara Laza Kostic. Laúnica fotografía en la cual, gracias a un truco fotográfico, se ve a SlobodanMilosevic y a Arkan a la altura de los ojos uno del otro fue tomada en el funeraldel teniente general de la policía Radovan Stojic, Badza”.

¿Por qué me sorprendo? Porque me parece que

� o me he ido equivocando en las lecturas que he hecho de esta revista (es decir que

ocuparía un espacio a la derecha de NIN y de Vreme), o que

� hay algún tipo de lectura irónica - en clave de enrevesado juego literario - que se me

escapa por completo.

A esto se debe añadir un dato curioso relacionado con este periodista: fue uno de los

inculpados por Beba Popovic - antiguo director de los servicios secretos durante el periodo

de Z. Djindjic - en una entrevista concedida al programa “Insajder” de la cadena B92. A

Page 92: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Violencia y criminalidad

1 Unidades de Operaciones Especiales de la Policía serbia. Muchos de sus miembros más destacadosestaban relacionados con el crimen organizado y se vieron implicados en el asesinato de Djindjic.

- 100 -

estos ataques el periodista respondería con un largo artículo en la misma revista dos

números más tarde.

18 de mayo de 2005 César Luis Díez

Ayer saltaba una noticia a los medios de comunicación de Serbia-Montenegro una noticia

curiosa: la mujer de Legija ha abierto una empresa de seguridad con el logo - algo

transformado, pero todavía reconocible - de las JSO1 y con varios antiguos miembros de

esta formación entre sus contratados. Esa misma empresa fue la que editó la novela de

Legija.

Hoy todos los periódicos retomaban esta noticia desde varios ángulos: legalidad o no de la

empresa, moralidad de la misma, el problema del sector de la seguridad en este país (se

daban unas cifras francamente altas de personas dedicadas a este tipo de actividad), etc.

Incluso, los periódicos más sensacionalistas (y de una cierta ideología afín al antiguo

régimen) han hablado de un posible plan de fuga de Legija organizado por esta empresa y

su entorno, según supuestas declaraciones de personajes de la vida pública, entre ellos la

mujer del Ministro de Exteriores, Danica Draskovic.

Todo esto, con el trasfondo del careo que tuvo lugar, el martes, en el tribunal entre Legija

y Beba Popovic, con cruce de acusaciones sobre narcotráfico.

Ahora queda por ver si se trata de una noticia para consumo interno, surgida en un primer

momento en el entorno de esa prensa sensacionalista y expandida después por el resto de

la prensa; o si se trata de algo distinto.

Tampoco hay que olvidar que, a veces, éste es un cauce “normal” para este tipo de noticias.

Hace unos meses comenté cómo antes de la entrega de Legija estos diarios publicaron una

serie de artículos que anunciaban su vuelta.

Page 93: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

2 SALAS, Antonio Salas. Diario de un skin. Un topo en el movimiento neonazi español. Madrid:Temas de Hoy, 2003. Pg.167.

- 101 -

Lo que sí parece es que, con independencia de las partes más increíbles de la historia (planes

de fuga con destino a países exóticos, etc.), hay algo que preocupa a la sociedad y a parte

de la clase política y es la pervivencia de estructuras del pasado en la vida política del

presente y, en particular, qué ha ocurrido con las “desmanteladas” JSO.

10 de junio de 2005 César Luis Díez

En España B&H [Blood and Honour] y HS [Hammerskin] están radicalmenteenfrentados. No ocurre así en otros países. Cuando en el verano de 2001 varioscomponentes de la División España de B&H viajaron a Serbia, Belgrado y otrasciudades de la ex Yugoslavia para estrechar lazos de Hermandad con los skinsserbios, lógicamente dedicaron la mayor parte de su tiempo a contactar con gruposafines a B&H-División Serbia, organización creada en 1995 por Branco, yreorganizada en 1997 y nuevamente en 1999. Grupos como Triump od de Hill deBelgrado, Razor88 de Novi Sad, The Terrorist de Novi Sad o Real Aggresion deKikinda acogieron a los nazis españoles. Pero también estrecharon lazos conHammerskin-Serbia y su líder, Alex. Esa camaradería es imposible en España2.

Este párrafo tan detallado sobre la actividad de grupos neonazis en Serbia me ha llamado

mucho la atención. Desde luego, el informador del escritor parece tener información de

primera mano. Otro dato: en la página de Falange Española encontramos un enlace a la

formación serbia Obraz y otros enlaces a partidos de los denominados “del bloque nacional”

en Grecia, Rumania y en Bulgaria.

Estos datos nos pueden hacer reflexionar sobre los puntos de conexión entre dos fenómenos

diferentes:

� la presencia de formaciones (neo)nazis en los países balcánicos; y

� la relación de los partidos de extrema derecha de estos países con las ideologías

fascista y ultranacionalista.

Page 94: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Violencia y criminalidad

3 Historia y Vida, 391 (octubre 2000).

4 <http://www.debka.com>. DEBKA es un think tank israelí.

- 102 -

Dichos fenómenos son diferentes - creo yo - desde un punto de vista politológico ya que

muestran las diferencias existentes entre movimientos aparentemente muy parecidos. En este

sentido, he vuelto a leer un dossier sobre el nazismo de S. Vich, D. Carcedo, S. Tarín y M.

Florentín3 que se cierra con un cuadro de semejanzas y diferencias entre el fascismo, la

extrema derecha, el neopopulismo, la derecha radical y el neofascismo.

También resulta paradójico ver cómo la página de la sección croata de B&H se autodefine

como “nacionalista” (y no nacional-socialista) y muestra su odio contra los serbios, incluidos

“sus camaradas” de B&H-División serbia.

10 de julio de 2005 César Luis Díez

La cadena B92 (Belgrado) acaba de comentar (en su telediario de las 19:15) una noticia

aparecida en internet sobre la posibilidad de que los explosivos utilizados en los atentados

de Londres se hubieran adquirido en Belgrado. El texto que sigue se ha copiado de dicha

página:

DEBKAfile Exclusive: Al Qaeda gets its bombs in Serbia Belgrade is where alQaeda goes shopping for the explosives and arms for its terror attacks, accordingDEBKAfile’s exclusive intelligence and counter-terror sources. Thursday, July 7,eight hours after four coordinated blasts hit London transport and killed at least50 people, British terror experts were on a special flight from London to theSerbian capital. They were carrying samples of the explosives collected from thefour crime scenes to probe their origin and find out how the substance wassmuggled into the UK. According to our sources, several large illicit weaponstraffickers set up business in Belgrade a year ago. Al Qaeda is one of their biggestcustomers. The Americans discovered this from examinations of explosives andweapons seized from terrorists in Iraq and Israeli probes of the origin of weaponsseized from smugglers crossing through the southern Negev on their way fromEgyptian Sinai to Jordan and thence to Iraq. The arms traffickers in Belgrade helpthemselves to the contents of Serbian army arms stores by bribing the right officers.The Serbian government has not responded to appeals from Washington to shutdown this arms racket operations.4[Final de cita]

Page 95: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

5 NIN, 10 Nov 2005, Pg.21.

- 103 -

Por supuesto, para B92 era una noticia importante (por su vinculación con este país),

aunque para muchos lectores pueda parecer una simple anécdota, o un chisme sin

credibilidad.

12 de noviembre de 2005 César Luis Díez

Esta semana, el semanario serbio NIN trae en portada una foto del asesinado presidente

Djindjic con un titular que (traducido) dice: “Nuevo descubrimiento: el papel de la Legión

Extranjera en el atentado”. Este titular y la lectura del artículo “Atentado contra Zoran

Djindjic: una foto-robot de la Legión Extranjera” me han recordado el segundo libro

publicado en fechas bastante recientes por el principal acusado de organizar el atentado,

Minorad Ulemek, “Legija”, titulado precisamente “Legionario” ( Legionar. Spina: 2005).

El libro en cuestión, en sus 384 páginas, cuenta sus experiencias en Legión Extranjera

francesa e intenta hacer un recorrido por la historia de este cuerpo militar. Posiblemente se

trate sólo de una coincidencia; pero, sin duda, también es una buena excusa para lanzarse

a especular y a agitar las paranoias tan típicas en el análisis de los hechos ocurridos en los

Balcanes. En este sentido basta citar una frase del artículo mencionado arriba: “¿Cuál fue

el papel en el atentado de los servicios secretos extranjeros, los bajos fondos croatas y la

Legión Extranjera francesa?” 5.

Page 96: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

1 Para el resto de los países, el portal del INE no facilita datos a causa del escaso número de susresidentes.

- 105 -

Emigrantes balcánicos

22 de abril de 2005 José-Miguel Palacios

Según acaba de hacer público el Instituto Nacional de Estadística (http://www.ine.es), el

número de extranjeros empadronados en España asciende ya a casi 3.700.000 personas, lo

que supone el 8,5% de los 44 millones de habitantes del país.

Entre los principales países de origen de los inmigrantes figuran dos balcánicos: Rumanía

(314.300; el tercer país en números absolutos tras Marruecos y Ecuador) y Bulgaria

(91.300).

Las cifras son también muy notables si las comparamos con la población de estos países.

Nada menos que un 14,1 por mil de los rumanos y un 12,3 por mil de los búlgaros están

empadronados en España.

Esta fuerte tendencia a emigrar hacia nuestro país es algo muy particular de Rumanía y

Bulgaria, y no se corresponde con la situación en los demás países de la región. Los índices

correspondientes a otros Estados de Europa Sudoriental1 son los siguientes:

� Bosnia-Hercegovina, 0,5 por mil

� Serbia-Montenegro, 0,3 por mil

� Eslovenia, 0,2 por mil

� Grecia, 0,2 por mil

� Chipre, 0,1 por mil

Page 97: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Emigrantes balcánicos

- 106 -

1 de mayo de 2005 Silvia Marcu

Creo que no podemos evitar el tema de la inmigración en nuestros debates, pues, este

fenómeno es de actualidad, y muy importante para España.

Más exactamente, tenemos que abordar a estos dos países de la región bajodanuabiana, y

balcánica a la vez. Los ciudadanos rumanos y búlgaros emigran a España por varias razones.

En primer lugar, porque los efectos de la transición económica no se sienten todavía.

Durante 15 años, la población de Rumanía y Bulgaria luchó con la pobreza, el desempleo

y las desigualdades sociales, como consecuencia de las intensas privatizaciones y

reestructuraciones que se registraron. La falta de recursos económicos convirtió a Rumanía

(y a Bulgaria) en países de emigrantes.

En segundo lugar, los rumanos llegaron a España, después de que a lo largo de la década

de los noventa, “exploraran” otros países de la Unión Europea (UE), sobre todo, Alemania

y Austria, que, a partir de 1995, dejaron de recibir ciudadanos rumanos, aplicando políticas

migratorias muy férreas.

Sólo un dato: si en 1994 residían en España 1.028 rumanos, en 2004 el número había

aumentado a 67.081 residentes legales, o regulares. Además, España llevó a cabo varios

proceso de regularización y los inmigrantes tuvieron la oportunidad de acogerse a los

mismos.

En tercer lugar, existe el efecto “llamada”. Muchos inmigrantes que vinieron a España a lo

largo de los últimos años ayudaron a sus familiares, vecinos y amigos a emigrar. Esto se

pone de manifiesto en varias regiones de España, como en Castellón, o en el Corredor del

Henares, donde la población de origen rumano es muy alta. Solamente en Coslada hay más

de 10.000 inmigrantes rumanos.

Como recordaremos, la apertura del espacio Schengen, en enero de 2002, favoreció la

Page 98: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 107 -

avalancha de los ciudadanos de la Europa bajodanubiana hacia los países del sur de Europa.

Los rumanos emigraron de manera significativa también a Italia. La proximidad cultural, la

raíz latina de su idioma, es muy importante a la hora de escoger su destino.

Pero también se impone destacar, en el caso rumano, la emigración descontrolada que se

produce en el último año, cuando el número de rumanos en España, prácticamente se

duplicó, llegando a 314,000, lo que sitúa a Rumanía en el tercer colectivo de inmigrantes

más numeroso de España.

1 de mayo de 2005 Dalibor Soldatic

Para los ciudadanos de los países del Este de Europa, Occidente siempre ha sido la “tierra

prometida”, el paraíso. Primero, porque cualquier trabajo que uno tenga permite un nivel

de vida decente en comparación con los países del Este. Con la transición los costos de la

vida han ido en aumento mientras que los salarios, en líneas generales, se han quedado a un

mismo nivel. Por lo tanto, un profesional, una persona con diploma universitario, segura de

sus conocimientos, ve en los países del Oeste la posibilidad de afirmarse profesionalmente

y de ganar mucho mas de lo que sería el caso en su país. Por otra parte, el obrero no

cualificado, aceptando cualquier tipo de trabajo en el Oeste está seguro de tener un mejor

nivel de vida que en su propia patria. Por lo tanto, resulta lógico que emigren. No olviden

que en muchos países solamente lo que se da como ayuda social a los que se quedan sin

trabajo es netamente superior a lo que en los países del Este es un salario relativamente

bueno.

España se ha hecho interesante en los últimos años simplemente porque el mercado de la

mano de obra en otros países ya no es capaz de absorber nuevas olas de inmigrantes. Me

refiero a los tradicionales países de destino: Alemania, Francia, Holanda, Suecia.

El hecho de que haya diferencia entre Rumanía, Bulgaria y Serbia es lógico. Los búlgaros

y rumanos solamente desde hace algunos años pueden salir al extranjero. Antes eran

sometidos a restricciones muy duras. Los habitantes de la antigua Yugoslavia viajaban

Page 99: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Emigrantes balcánicos

- 108 -

libremente por el mundo. En los sesenta y setenta había mas de dos millones de trabajadores

emigrados en Europa, provenientes de Yugoslavia. Una nueva oleada de emigrantes

abandonó el país a raíz de su desintegración y de las guerra que la siguieron. Los de Serbia,

también por las condiciones precarias y la falta de perspectivas bajo el régimen de Milosevic.

España, que había estado fuera de las zonas en las que había emigrados de Serbia y

Montenegro, ahora cuenta ya, según tengo entendido, con una colonia de más de 30.000

personas. Estamos a años luz de distancia de la época en la que Miljan Miljanic, entrenador

del Real Madrid, era casi el único yugoslavo (montenegrino en su caso) en la capital

española.

Llamo la atención de los listeros sobre varios artículos aparecidos en la prensa de Serbia en

los que se habla de la política de visados de entrada en los países de la UE para los

ciudadanos de Serbia. Dejando de lado la falta de organización de muchas embajadas

europeas en Belgrado, las humillantes colas en la calle desde las cinco de la mañana y el

montón de documentos que hay que presentar, hay un hecho que preocupa sumamente. Y

es que generaciones enteras de jóvenes no han salido nunca de su país. De mi propia

experiencia, puedo decir que es muy difícil formar europeos y una mentalidad pro europea

cuando resulta más que difícil viajar en Europa por cuenta propia como turista con recursos

modestos. Cuántas veces alumnos que estudian lengua y la literatura española en la

Universidad han visto rechazado el visado para España. Y España no es la excepción. Lo

mismo sucede con Italia, Francia, Alemania o Inglaterra, por mencionar sólo a los países

más importantes. Traigo a colación este hecho porque crea una actitud de rechazo entre

algunos, mientras que en otros contribuye a formar la ilusión, el espejismo de El Dorado

europeo. Y una vez que han vendido todo lo que poseen aquí y se embarcan en su propia

aventura europea ya es tarde para darse cuenta de las amargas realidades.

5 de mayo de 2005 Zoran Vujic

En cuanto la emigración de la antigua Yugoslavia a España, yo tengo una teoría muy simple.

Las emigraciones de Europa del Este siempre se dirigían donde había algún vínculo familiar

Page 100: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 109 -

o de amistad con algún emigrante anterior (es lo que ahora se llama “efecto llamada” o

idiomático). La gran emigración yugoslava se dirigió generalmente hacia Alemania, Austria,

Francia, Suiza, Suecia o Italia cuando esos países reclamaban una mano de obra extranjera

y cuando los yugoslavos eran los únicos que podían viajar libremente, dentro de los países

de Europa oriental. Cuando España empezó de tener necesidad de importar mano de obra

extranjera, los países de la antigua Yugoslavia ya estaban en otra situación. Los eslovenos,

ante las puertas de la UE; los croatas, emigraban a Canadá, Australia o a países de Europa

donde tenían vínculos familiares y podían, así, quedarse con más facilidad; los bosnios eran

refugiados aceptados en todo el mundo, pero, al igual que ocurría con croatas, serbios y

montenegrinos, continuaron emigrando a países donde los posibles emigrantes tenían

familiares, para los que no necesitaban visado, o que ofrecían facilidades para inmigrar,

como Canadá, Australia o Nueva Zelanda. Los albaneses repetían la historia, tratando de

irse a Suiza o Alemania, mientras que los macedonios se dirigían a Australia o a Alemania.

Prácticamente en el momento en que España empezó de tener necesidad de inmigrantes

aparecieron los búlgaros y los rumanos, a cuales se le había abierto la puerta europea por

primera vez desde el inicio de la Segunda Guerra Mundial y que, además, no tenían una

emigración afincada en algún de los países de la UE. Por otra parte, alemanes, austriacos,

franceses o italianos habían cerrado sus puertas años atrás para la emigración obrera,

mientras que se acababa de abrir la de España, Grecia o Portugal.

En mi opinión, simplemente se trata de un mal timing para emigrar a España desde los

países de la antigua Yugoslavia. Además, la mayoría de los nuevos emigrantes a partir de

1995 vino a visitar a los familiares, amigos, parientes, o se matriculó en alguna de las

universidades españolas, y decidió quedarse.

Según mis estimaciones, la colonia de Serbia-Montenegro en España comprende unas

10.000 personas, incluyendo a los albaneses de Kósovo. De ellos, un 30%, aproximadamen-

te, tenía la documentación en orden (la situación habrá cambiado con la última regulariza-

ción). A señalar, igualmente, que un 37% de los niños nacidos en España de ciudadanos de

Serbia-Montenegro (al menos, uno de los dos padres) era albanés de Kósovo. Probablemen-

te ese porcentaje ira creciendo en los años que vienen.

Page 101: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 111 -

Otra vivencia de la etnicidad: ¿alianza de civilizaciones?

27 de marzo de 2005Julio Garrote

La idea de una “Alianza de civilizaciones” surge con motivo del discurso del actual

Presidente del Gobierno ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, el pasado 21 de

septiembre de 2004. Hacia finales de un texto plagado de generalidades, Zapatero dijo lo

siguiente:

“…como representante de un país creado y enriquecido por culturas diversas,quiero proponer ante esta asamblea una Alianza de Civilizaciones entre el mundooccidental y el mundo árabe y musulmán. Cayó un muro. Debemos evitar ahoraque el odio y la incomprensión levanten otro. España somete al SecretarioGeneral, cuya labor al frente de la Organización apoya con firmeza, la posibilidadde constituir un Grupo de Alto Nivel para llevar a cabo esta iniciativa”.

Es una lástima que los asesores para tamaña Alianza no existieran decenios atrás. Todo lo

contrario, correligionarios del actual Presidente Zapatero abanderaron la nueva forma de

hacer las cosas en la política intervencionista de la “Comunidad Internacional”. Me hubiera

gustado ver a ZP convenciendo a Izetbegovic y a Karadzic de una Alianza de Civilizaciones

era mejor que una Alianza Atlántica dirigida por Solana.

27 de marzo de 2005César Luis Díez

Después de muchos años en los Balcanes, sigo creyendo que, si echamos un vistazo a la

Bosnia-Hercegovina de los sesenta o setenta, no habría ninguna diferencia de “cultura”, ni

de “civilización” entre croatas, musulmanes y serbios. Evidentemente, sí que las habría de

opinión política o de manifestaciones sociales. Lo que se diría desde los púlpitos católicos,

sería diferente a lo que se diría desde el interior de las iglesias ortodoxas, o de las mezquitas;

y todo este discurso “religioso” sería diferente al “laico” propuesto (impuesto) por el

modelo socialista. Y seguro que ambos discursos estarían en completa “desintonía” (término

Page 102: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Otra vivencia de la etnicidad: ¿alianza de civilizaciones?

- 112 -

de creación dominguera mía) con lo que gritarían los jóvenes en los conciertos de Bijelo

Dugme. Después de las guerras de los noventa y con la presencia de una rama militante del

Islam - primero presente como apoyo bélico y después como financiador de la reconstruc-

ción -, es posible que la brecha “de civilizaciones” se haya abierto; pero sigo teniendo en

mente a los señores mayores con boina negra saliendo de las mezquitas bosnias y me

gustaría saber cuál es su opinión acerca del barbudo fundamentalista que propone una visión

radical del Islam. No hay que olvidar que Bosnia-Hercegovina fue siempre un territorio del

Islam Otomano (más corriente administrativa que teológica) y la visión fundamentalista

actual tiene sus raíces en una concepción saudí, tanto política como de organización

teológica.

En el otro caso, el de Kósovo, sí creo en la brecha cultural. No parece que nunca haya

habido convivencia real entre albaneses y no albaneses (serbios, gitanos, etc.) - aunque, por

supuesto, siempre hay casos personales que te hablan de las estupendas relaciones con su

pastelero albanés, etc. -. No sabría explicar el porqué de esta situación y si de verdad es así.

Aunque si la aceptamos como algo que ha sucedido la pregunta de qué va a ocurrir con

Kósovo es difícil de contestar.

¿Cómo se puede obligar a grupos humanos que no quieren convivir juntos a que lo hagan?.

¿En nombre de qué principios se hace? Para el pensamiento occidental “avanzado”, el

objetivo de una sociedad multiétnica es legítimo y defendible (pasa como con el concepto

“democracia”). Pero puede que no ocurra lo mismo desde un punto de vista “oriental”. ¿Se

ha preguntado a los albaneses de Kósovo si quieren vivir con sus vecinos de otras etnias?

¿Por qué los serbios de Kósovo empezaron a vender sus inmuebles allí ya durante los años

sesenta y setenta?, etc.

Yo no puedo (ni quiero, por supuesto) concebir Estados separados por el origen étnico o

religioso de sus habitantes. Por eso, me niego a usar el sintagma “musulmanes españoles”,

ya que para mí no son específicos, como tampoco los católicos, los agnósticos, o lo que sea.

Todos los que queramos sentirnos españoles, pondremos ese gentilicio primero y después

los adjetivos que nos apetezca: judío, del Atleti y gastrónomo aficionado, por ejemplo. Sin

embargo, soy plenamente consciente de que es mi opción personal y que puede haber otras

Page 103: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 113 -

desde las cuales yo sería - por ejemplo - un fundamentalista democrático que “no puede, ni

quiere” concebir otro sistema al margen del democrático.

Ahora bien, trasladando de nuevo esta postura a los Balcanes (y por ende a una visión

general): ¿podemos poner al mismo nivel posturas radicalmente enfrentadas? Una visión de

un estado teocrático se enfrenta diametralmente a la de un estado democrático. En la

primera, el máximo punto de referencia está fuera del sistema, ya que lo ha generado; en la

segunda el sistema libremente elegido es el máximo punto de referencia. También por

definición, en el segundo modelo parece que todo es sujeto de discusión y de modificación

por consenso; ¿pero qué ocurre en el primero?

2 de abril de 2005José-Miguel Palacios

Después de muchos años en los Balcanes, sigo creyendo que si echamos un vistazoa la ByH de los 60 o 70 no habría ninguna diferencia de "cultura", ni de"civilización" entre croatas, musulmanes y serbios.

No sé si está suficientemente bien definido el concepto de “civilización” (en el sentido en

el que lo estamos usando). A mí me sugiere algo así como “superetnias”, formas diferentes

de enfocar la vida y que suponen entre sus adherentes distancias mayores que las puramente

étnicas (distancias casi insalvables, al menos en estos momentos). Supongo que se deber

referir a algo más “colectivo” que la simple “orientación política” o “ideología” (que son

orientaciones individuales, aunque para materializarlas busquemos la solidaridad de otros).

En resumen, dentro de un mismo grupo étnico podrían coexistir distintas orientaciones

ideológicas, pero no distintas “civilizaciones”. Una determinada etnia estaría adscrita a una

determinada “civilización”, junto con toda una serie de etnias relativamente próximas.

En la antigua Yugoslavia (y en los países sucesores, al menos durante los primeros años tras

la separación) se estudió bastante el tema de la “distancia étnica” entre los distintos pueblos

yugoslavos y los resultados muestran que estaba influida por antagonismos políticos (más

o menos coyunturales), pero que, en los casos de distancia extrema, afectaba a las relaciones

de casi todos los demás con los albaneses. ¿Sería éste un caso de diferencia de civilización,

Page 104: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Otra vivencia de la etnicidad: ¿alianza de civilizaciones?

1 Un inciso: hace unos años el IUGM organizó en Madrid un seminario sobre nacionalismos enEuropa del Este y allí el Embajador Westendorp organizó un pequeño escándalo al afirmar que en la antiguaYugoslavia todos pertenecían al mismo grupo étnico, excepto los montenegrinos - entiendo que fue unlapsus linguae por albaneses -. George Schöpflin y - creo recordar - Lidija Basta se levantaron para decirleque etnia es algo más que rasgos físicos y puede incluir detalles como lengua y religión).

- 114 -

frente a los casos simples de “diferencia de etnia”, típicos, por ejemplo, de Bosnia-

Hercegovina?1

En el primer caso, Kósovo, sí creo en la brecha cultural. No parece que nuncahaya habido convivencia real entre albaneses y no albaneses...

Es verdad que todos hemos oído que en el Korzo de Pristina unos iban por una acera y otros

por otra (yo mismo nunca lo noté). Incluso algunos hemos oído que serbios y albaneses

comen diferente (sí me pareció que en los restaurantes albaneses se veía más el coñá

Skanderbeg que en los serbios) y huelen diferente (nunca aprecié nada). Pero también hay

bastantes ejemplos que hablan de una tendencia contraria, que podría haberse consolidado

si la modernización del país no se hubiera visto traumáticamente interrumpida con las crisis

económicas y políticas de los años ochenta y noventa. Algunos casos que conozco:

� La cantante de Zana (uno de los grupos pop yugoslavos más populares en los

ochenta) era Zana Nimani, una albanesa de Kósovo. Una de sus canciones más

conocidas (aún se oye bastante) fue “Dodirni mi kolena” (tócame las rodillas), y no

puede considerarse un ejemplo de moral musulmana (sobre todo, porque a lo mejor

la cosa no paraba en las rodillas).

� Azem Vllasi, el líder comunista kosovar de finales de los ochenta, estaba (creo que

aún está) felizmente casado con una musulmana de Bijeljina, a la que había conocido

estudiando ambos Ciencias Políticas en Belgrado.

� Muchos hemos oído a albaneses kosovares de nuestra generación decir que cuando

viajaban por el extranjero durante los ochenta se definían a sí mismos como

yugoslavos, no como albaneses.

� La convivencia dentro del mismo estado parece que tiende a uniformar las

costumbres. Hace unos años, en un artículo de Política Exterior se sostenía que en

Page 105: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

2 Nacionalismos y minorías en Europa Central y Oriental. Barcelona: ICPS, 2004. Puedeencontrarse una reseña en <http://www.estudiosbalcanicos.org/2004/4_libros.html#ruth>.

- 115 -

España había aumentado la diversidad lingüística durante los últimos años, pero que

la “cultura” (¿la “civilización”?) se había uniformado. Lo que sentían los bisabuelos

cuando iban de Valladolid a Barcelona (el choque ante una ciudad donde se vivía de

forma diferente, y donde existía una cultura de trabajo distinta) ya no se siente

ahora. Tengo la impresión de que algo distinto sucedió en toda la antigua

Yugoslavia, incluyendo Kósovo. Todos hemos oído hablar de la enorme natalidad

de los albaneses kosovares, pero es muy frecuente que los casos que hemos

conocido (en general, gente educada de Pristina) el número de hijos no fuera muy

distinto del que, en un ambiente similar, se habría dado en Belgrado.

Para el pensamiento occidental “avanzado”, el objetivo de una sociedad

multiétnica es legítimo y defendible (pasa como con el concepto “democracia”).

Pero puede que no ocurra lo mismo desde un punto de vista “oriental”.

El año pasado, Ruth Ferrero publicó un libro excelente sobre nacionalismos y minorías en

Europa del Este2. En él, se incluía un capítulo de Victor Neumann (“Educación cívica y

derechos humanos desde una perspectiva intercultural: el caso de Rumanía”) comparando

el modelo multiculturalista (que su país practica en Transilvania) con el interculturalista

(Banato). En su opinión, este último es mucho más eficaz.

7 de abril de 2005Claudia Aguilar

Resumiendo muy mucho, el trabajo que estoy haciendo busca cuestionar las diferencias

étnicas en Bosnia, sobre todo entre los jóvenes, a través del análisis de sus discursos y de

sus redes personales.

Creo que la identificación de las personas, tanto la autoidentificación como la identificación

por otros (es un término que me gusta más que identidad), es relacional, es decir, se crea

Page 106: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Otra vivencia de la etnicidad: ¿alianza de civilizaciones?

- 116 -

constantemente a través de las relaciones sociales. Por ello, considero básico el estudio de

las redes personales pues nos dan mucha información de la realidad cotidiana de la persona,

donde se “negocian” constantemente las identificaciones colectivas.

Ello no quita que en el ámbito político existan discursos sobre las identidades étnicas y que

se hable de “etnias” dándoles estatus de grupos reales. Es un discurso más. Pero creo que

en el ámbito académico hemos de superar estos discursos políticos u ideológicos y no

utilizar categorías de práctica que crean determinadas “realidades” sociales.

Hemos de dar un paso más y cuestionar tales categorías. El concepto de etnia, al igual que

el de cultura, es amplio y vago por lo que es muy fácilmente utilizable por el discurso

político. Este discurso es luego también utilizado por los ciudadanos para construir su

imaginario social. Por ejemplo, en Bosnia, antes de la reciente importación del concepto de

etnia no había etnias habían nacionalidades o pueblos.

Por ello quiero cuestionar estos términos en el ámbito académico y estudiar cuál es su uso,

cómo afectan realmente a la identificación de los jóvenes y cómo son sus relaciones.

En un primer trabajo de campo que realicé pude ver que ciertos jóvenes no querían utilizar

las categorías étnicas excluyentes para identificarse y resultó también que eran bastante

centrales en la red social de relaciones. Si encontramos un número importante de jóvenes

con un discurso identitario no esencialista y que son centrales o se mueven en varios grupos

a nivel social, creo que es una buena noticia para el futuro de Bosnia.

Podéis encontrar un artículo sobre este tema en:

http://revista-redes.rediris.es/pdf-vol7/vol7_6.pdf

8 de abril de 2005Javier Asensio

En los últimos años de ir y venir por la zona (sobre todo, por Bosnia-Hercegovina) no he

Page 107: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 117 -

encontrado diferencias ni físicas ni tampoco en los comportamientos superficiales de la gente

entre unos “pueblos constituyentes” y otros.

Otra cosa distinta es cuando empiezas a tener algunos amigos y empiezas a conocer distintos

puntos de vista. Entonces empiezas a distinguirlos sobre todo por sus opiniones. Pero aquí

coincido con Claudia en lo de la “identidad colectiva” en la forma de verse cada uno y su

sentido de pertenencia a un grupo social (me niego a hablar de etnias en Bosnia-Hercegovi-

na).

Sólo quisiera preguntar a Claudia, donde se desarrolló su trabajo de campo.

En un primer trabajo de campo que realicé pude ver que ciertos jóvenes no queríanutilizar las categorías étnicas excluyentes para identificarse y resultó también queeran bastante centrales en la red social de relaciones.

A tenor de lo que cuenta (esto es solo una impresión personal, quizá muy equivocada,

basada en mi experiencia en la zona, que puede estar muy sesgada), podría haber dado con

una mayoría de bosniacos en su trabajo de campo. Por lo que yo sé, los serbobosnios y los

croatobosnios no tienen ningún problema en identificarse como serbios y croatas

respectivamente, incluso alardean de ello. Si no, que le pregunten a muchos hercegovinos

qué pasaporte tienen o si aceptan kunas croatas como moneda en las tiendas.

Los bosniacos que conozco son más reacios a establecer diferencias y utilizar “categorías

étnicas excluyentes” (en palabras de Claudia), y estoy de acuerdo en que son más

“centrales” en su red social y relaciones. Yo diría hasta que son más abiertos que los otros.

No sé la razón, pero una vez leí de Filipovic que los bosniacos no deberían quedarse solos

en un miniestado musulmán.

8 de abril de 2005Julio Garrote

Los bosniacos que conozco son más reacios a establecer diferencias y utilizar“categorías étnicas excluyentes” (en palabras de Claudia), y estoy de acuerdo enque son más “centrales” en su red social y relaciones.

Page 108: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Otra vivencia de la etnicidad: ¿alianza de civilizaciones?

- 118 -

Según mi experiencia de años de trabajo tanto en la Federación de Bosnia-Hercegovina

como en la República Srpska, puedo afirmar que los mal llamados “bosniacos”, si es que se

refieren a la nación musulmana de Bosnia, mencionan a Allah con frecuencia, no a “Bog”,

y tratan intencionadamente de utilizar turquismos y arabismos para diferenciarse del resto.

No me equivoco al tratarles como nación, porque Tito se la otorgó y aún se lo creen. No

me equivoco al tratarles como musulmanes, porque así han nacido y así lo viven. Y no

diferencio entre generaciones. Otra cosa es cómo se toman su “dogma”, más o menos

flexibilizado a su conveniencia personal. Con todo, incluso a un nivel muy superficial de

interrelación, enseguida emerge la condición de cada uno.

No me equivoco, salvo en honrosas excepciones, en dudar de su tolerancia respecto a otros.

No creo equivocarme tampoco al afirmar que durante Tito y después de él nadie olvidó su

pertenencia y devoción. Ruego a Claudia, si se encuentra en Bosnia-Hercegovina, que preste

atención a lo que en inglés se viene llamando “body language”. Hasta en eso.

A las civilizaciones les separa el Tiempo. Nada más, nada menos.

9 de abril de 2005José-Miguel Palacios

En su mensaje, Claudia nos hacía referencia a un artículo suyo que me parece de obligada

lectura. Creo que el resumen del artículo puede ser, en sí mismo, una aportación muy valiosa

a nuestro debate:

Después de un trabajo de campo realizado con un grupo de jóvenes en Sarajevo,hemos constatado la existencia de una relación entre los discursos que sostieneny las categorías étnicas que utilizan tanto para clasificar a los demás como paraautoidentificarse.

Asimismo hemos encontrado que los jóvenes que se autodenominan “Bosnios”juegan un rol importante en la red de relaciones multiétnicas, en la que los lazosfuertes, sorprendentemente, son muy importantes. Finalmente hemos hallado unarelación entre la composición de las redes personales y los discursos étnicos quese sostienen. Vivimos, o creemos vivir, en múltiples "comunidades", imaginadas o

Page 109: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 119 -

no. Al mismo tiempo, el individuo y no el lugar, la familia o el grupo, se sitúa enel centro de la vida social y de las comunicaciones (Cf. Wellman, 2001).

En este contexto, inducido por el avance del capitalismo flexible (Castells, 1996),pensamos que para entender adecuadamente la identidad o identidades postuladaspor los individuos es necesario estudiar las redes personales y su dinámica. Desdeesta perspectiva no podemos hablar de "etnias" o "multietnicidad" sin másprecisiones, pues son conceptos basados en una concepción esencialista y estáticade la identidad individual. El concepto de “sociedad multiétnica” es utilizado deuna manera engañosamente progresista y objetiva, pues lo que en realidad legitimaes la existencia de diferencias esenciales entre personas, alejando en lugar deacercar.

Sin embargo, somos plenamente conscientes que los discursos esencialistas de laidentidad étnica son omnipresentes, con enormes efectos políticos e individuales.

Que planteemos que la concepción esencialista de la identidad sea inapropiadadesde un punto de vista académico, no significa que ésta no se utilice políticamentey por lo tanto tenga consecuencias formidables en las relaciones sociales.

Precisamente el estudio de las redes personales nos permite situarnos en unaperspectiva que no utiliza con pretensiones analíticas conceptos “folk”, como sonlos de “etnia”, “pueblo” o “nación”, sino que los sitúa en el terreno de losdiscursos sustentados por los actores (y los estados y medios de comunicación) ynos permite contextualizarlos mediante conceptos etic, es decir, impuestos por losinvestigadores. Sólo así podemos superar las tautologías que abundan en losdiscursos étnicos.

11 de abril de 2005José-Miguel Palacios

podría haber dado con una mayoría de bosniacos en su trabajo de campo. Por loque yo sé, los serbobosnios y los croatobosnios no tienen ningún problema enidentificarse como serbios y croatas respectivamente, incluso alardean de ello. Sino, que le pregunten a muchos hercegovinos qué pasaporte tienen o si aceptankunas croatas como moneda en las tiendas.

El trabajo de campo lo hice en Sarajevo y en algunas otras partes de Bosnia-Hercegovina,

pero hablé con gente de todo tipo no solamente bosníacos o musulmanes. Y realmente

encontré, no solamente entre musulmanes, a gente que se autodenominaba “bosnia” y se

negaba a utilizar las categorías excluyentes. Que las personas utilicen un pasaporte croata

no es signo de pertenencia étnica, sobre todo cuando con tal pasaporte puedes entrar en la

Unión Europea sin visado. Hay también muchos “serbios” que han nacido en Croacia y que

Page 110: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Otra vivencia de la etnicidad: ¿alianza de civilizaciones?

- 120 -

tienen pasaporte croata por conveniencia.

Lo que yo estoy argumentando, y respondo también a Julio Garrote, es que no dudo de que

Tito instaurase unas “naciones” y de que hay gente que se las crea, pero creo que no son

todos por el hecho de que se trata, a mi modo de ver, de una ideología. Separar a las

personas en supuestos grupos étnicos basados en una creencia religiosa es una ideología con

la que puedes comulgar o no. Yo, personalmente, no comulgo y trato de buscar a personas

en Bosnia que tampoco lo hagan pues creo, como se puede ver en mi artículo, que son ellos

el futuro del país.

11 de abril de 2005G. Presa Arias

Estuve trabajando en Banja Luka entre mediados de mayo de 1999 hasta noviembre de ese

mismo año y todos los serbobosnios que conocí (y fueron muchos) se consideraban serbios

hasta la médula. El resto de la gente con la que traté en Bosnia-Hercegovina, musulmanes

y croatas, también tenía su identidad muy afianzada. Es cierto que lo ideal sería, como dice

Claudia, que no hubiera grupos étnicos, pero los hay. Por si os orienta, hablo de un universo

de población de mi edad, entre 30 y 40 años.

Nadie en la República Srpska se considera bosnio. Supongo que un ejemplo claro lo

tenemos con cualquier evento deportivo. Siguen a Serbia (y Montenegro).

11 de qbril de 2005Claudia Aguilar

Soy consciente de que la mía es una lucha difícil. El discurso etnicista-nacionalista es muy

poderoso. Yo entiendo lo que explicáis. También he hablado con nacionalistas serbios en

Sarajevo y conozco sus discursos. Pero, ¿no creéis que se trata de discursos políticos e

ideológicos, y no de diferencias étnicas?

Page 111: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

3 Para los despistados: Inter Entity Boundary Line.

- 121 -

En realidad se trata sólo de etiquetas, pero los efectos de utilizar una u otra no son iguales.

Si hablamos de etnias, estamos naturalizando las diferencias, diciendo que son innatas que

se nace serbio o se nace croata, y yo creo que es una decisión política.

12 de abril de 2005Julio Garrote

Ese experimento de Bosnia-Hercegovina, que nunca antes fue un estado y ahora parece ser

junto con otros ejemplos de armonía y pacífica convivencia, como Kosmet, Macedonia, o

la mismísima Chipre, la apuesta definitiva de la Alianza de Civilizaciones, no tiene un futuro

a largo plazo porque esa hermosa tierra de tolerancia y entendimiento se está manteniendo

bajo los puntos de mira de la OTAN, y al que se mueva, Paddy lo apaña. Y podemos (y

tenemos que) hablar de etnias porque la, con perdón, Comunidad Internacional, así lo

quiere. Pero allí todos saben quiénes son, quiénes han sido, quiénes no quisieron ser, quiénes

cambiaron para no perder, quiénes siguen siendo lo que son y fueron, y quiénes no.

Por cierto, ¿sabéis de dónde salió ese fantástico vocablo “bosniaco”? Preguntad a los de

ACNUR, si los tenéis cerca. Hasta 1998 eran musulmanes, pero no convenía que se les

siguiera denominando así. Y en sus “daily report” prohibieron utilizar el calificativo de

musulmanes, al tiempo que lanzaban a los cuatro vientos que la IEBL (seguro que todos

sabemos lo que es)3 había desaparecido. Menuda risa. Cualquiera se aventuraba a pasar al

otro lado sin escolta. Tanto los “bosniacos” como los serbios o los croatas. Porque pueden

decir lo que quieran, pero los bosniocroatas son croatas porque son católicos, los

serbobosnios lo son por ser ortodoxos y los musulmanes son musulmanes. ¿Lo de bosniaco?

Mal invento. ¿O es que ahora los serbobosnios o bosniocroatas no son bosnios, o

hercegovinos, que tanto monta monta tanto?

Por cierto, los croatas ortodoxos (serbios por etnia) merecen el pasaporte croata tanto como

los croatas de Croacia, y no es por conveniencia. Es que son croatas. Igual que los serbios

eslovenos con pasaporte esloveno.

Page 112: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Otra vivencia de la etnicidad: ¿alianza de civilizaciones?

- 122 -

Pregunte a la sazón en el consulado de Croacia en Tuzla, cómo andan las concesiones de

pasaportes croatas a muchos que sí que no se lo merecen, pero por conveniencia en unos

casos o por falta de control en otros se lo están dando.

15 de abril de 2005José-Miguel Palacios

Me parece que el artículo de Claudia constituye una aportación muy interesante al estudio

de la Postyugoslavia. Como ella misma destaca, venimos repitiendo durante años (yo diría

que, al menos, desde 1991-93, cuando se consolida una versión internacionalmente aceptada

de cuál era la situación étnico-política en la antigua Yugoslavia) unas determinadas ideas y,

mientras tanto, la vida sigue y la situación cambia. Es bueno que alguien baje del mundo de

los argumentos al de las realidades, saque la vara de medir y nos ofrezca datos frescos sobre

lo que de verdad está ocurriendo.

Tanto el mensaje de Claudia como su artículo me sugieren bastantes comentarios. En la

mayor parte de los casos, son dudas, que se manifiestan como preguntas a la autora:

a) En primer lugar, me llama la atención la composición “nacional” de la muestra con la que

ha trabajado Claudia. Me da la impresión de que no responde a la actual composición

nacional de la población de Sarajevo. Me surgen dos dudas: ¿con qué criterios se eligió el

grupo con el que se ha realizado el trabajo?; ¿entendemos que los resultados son, en

cualquier caso, relativamente independientes de la selección de la muestra?

b) En segundo lugar, el panorama que Claudia nos describe procede de un medio urbano

bastante cosmopolita, en el que una parte importante del “grupo mayoritario” sigue una

línea de no discriminación (de hecho, de integración) de los grupos menores. ¿Serían los

resultados muy diferentes si se hubiera trabajado en alguna de las grandes urbes de la

antigua Yugoslavia, como Belgrado o Zagreb?

c) Tengo algún problema con la caracterización de las actitudes básicas de la población de

Sarajevo. Allí se libró una guerra por constituir un Estado independiente, separado de

Page 113: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 123 -

Yugoslavia (y por hacer que parte de ese Estado se independizara de él y siguiera

conservando lazos estrechos con esa Yugoslavia). En este contexto, estar a favor de la plena

igualdad de todos los ciudadanos “dentro de los límites de Bosnia-Hercegovina” puede ser

para un “musulmán” (en sentido étnico) una actitud sustancialmente igual a la “nacionalista

bosniaca”. Como decía el sociólogo croata Vjeran Katunaric en 1991, antes del comienzo

de las guerras, los programas nacionales de todos los grupos yugoslavos se basaban en una

misma idea: maximizar el territorio donde ellos eran mayoritarios. En este contexto, un

“musulmán-bosniaco” no nacionalista, cosmopolita, no debería hacer énfasis sobre la

estatalidad bosnia, sino, quizá, buscar la reintegración de la antigua Yugoslavia, ya que,

además de convivir en plano de igualdad con todos los grupos étnicos sin distinción, le

permitiría ampliar el territorio por donde se puede mover con toda libertad.

d) Creo que hubiera sido interesante conocer el origen étnico de los que se autodenominan

bosnios. Por una parte, algunos pueden emplearlo como se empleaba antes “yugoslavo” en

ciertos medios (eras de origen croata, te habías establecido en Kragujevac y te sentías más

integrado declarándote yugoslavo que croata). Al fin y al cabo, “bosnio” puede ser,

simplemente, un gentilicio geográfico (así era empleado en la antigua Yugoslavia) y, siendo

más cómodo que “serbio” o “croata” en ciertos medios, no supone una renuncia a la propia

identificación nacional.

Creo, sin embargo, que en el caso que nos ocupa la razón principal puede ser otra. Para Vuk

Karadzic, “bosanac” y “bosnjak” (bosnio y bosniaco) eran sinónimos y sólo el uso

posterior los ha separado. Mientras que bosanac/bosanski está bastante bien asentado en

el idioma, bosnjak/bosnjacki funciona, en la práctica, como un neologismo, perfectamente

asumido en el lenguaje administrativo, y no tanto en el lenguaje de la calle, donde es

frecuente seguir hablando de “musulmán”. Creo que existe aún una vacilación importante

entre los términos bosnio y bosniaco (el nombre oficial de la normalización bosniaca de la

lengua común es “bosanski jezik”, lengua bosnia, no bosniaca), así que la distinción entre

ambos gentilicios no tendría en muchas ocasiones ningún significado especial.

e) Una última cuestión es en qué idioma se realizaron las entrevistas y si los entrevistados

eran conscientes de hablar con un extranjero. En toda la antigua Yugoslavia (pero, sobre

Page 114: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Otra vivencia de la etnicidad: ¿alianza de civilizaciones?

- 124 -

todo, en Bosnia-Hercegovina) están muy entrenados en hablar con occidentales, y en

intentar transmitirnos los argumentos adecuados. Saben qué buscamos, saben cuáles son

nuestros prejuicios, nuestros objetivos y nuestras limitaciones, y hacen todo lo posible por

adaptarse a ellos.

18 de abril de 2005Dalibor Soldatic

Interesante el debate que se está sosteniendo pero creo que habría que ser un poco más

riguroso ido en materia de metodología.

Primero hablemos de nombres. Hay una distinción clara entre “srbin” y “srbijanac” . Srbin

(en viejos textos se podrá encontrar “Srb” ) es el miembro de la nación que pertenece a los

eslavos del Sur y que en su mayoría vive en Serbia. Srbijanac es el serbio de Serbia. Por lo

tanto un habitante de Kragujevac o de Belgrado es Srbijanac, mientras que un serbio de

Bosnia es Srbin. El español no distingue estos matices y tiene una sola traducción: serbio.

En Bosnia no había nación bosnia ni bosniacos, sino croatas y serbios, así como algunos

turcos que se quedaron. Durante el imperio otomano, muchos croatas y serbios aceptaron

el Islam. El problema es que en los Balcanes lo religioso se identifica mucho con lo nacional

porque la religión fue en muchos casos la única defensa de lo nacional. Un serbio que se

pasaba (esto es traducción literal del serbio: no se dice “se convertía” sino “se pasaba”) al

catolicismo ya no era considerado serbio. Lo mismo ocurre con el serbio que adoptaba el

Islam. De modo que Bosnia, después de la Segunda Guerra Mundial, estaba habitada por

croatas católicos, serbios ortodoxos, y serbios y croatas convertidos al Islam. En un

momento dado, las autoridades yugoslavas, encabezadas por Kardelj y Tito, consideraron

que era mejor dejar constancia de ese elemento específico e incorporaron en los documentos

constitucionales a los musulmanes como nación. Tal caso no se había dado en todo el

mundo, pero a los yugoslavos nos gustaba mucho ser originales en todo.

Con la desintegración de Yugoslavia y la guerra en Bosnia, los gobernantes y propagandis-

tas occidentales se dieron cuenta de que iban a tener dificultades en convencer a los

Page 115: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 125 -

contribuyentes de que se estaba apoyando la causa justa en Bosnia respaldando a los

musulmanes. No hablemos aquí ahora de la Declaración Islámica de Alija Izetbegovic, de

los muyahedines árabes que toman parte en los combates, del dinero de Irán, Arabia Saudita

etc. etc. El caso es que se optó por la solución de bosnjak para lo que antes era musulmán.

Porque bosanac había sido utilizado durante más de cincuenta años para designar al

habitante de Bosnia. La lengua española sigue, al menos oficialmente, sin ofrecer una

solución, ya que “bosnio” es relativo a Bosnia, es decir, “bosanac” . Se ha intentado

resolver el asunto con “bosniaco” para “bosnjak” , lo que parece ser una solución viable.

Con todo, habrá ver en qué medida un español medio es capaz de hacer la distinción.

En cuanto a los sentimientos y realidades no hay que hablar mucho. Si la Comunidad

Internacional se empeñó tanto para demostrar que la antigua Yugoslavia era una ilusión y

que ya no era factible no se comprende por qué se empeña tanto en mantener con vida una

“mini Yugoslavia”. Después de la sangre derramada sobre esos territorios me temo que la

vida en común, volver a lo de antes, resulta posible solamente mientras la Comunidad

Internacional se mantenga en su papel de policía y financie la supervivencia. Porque, seamos

sinceros, Bosnia sin la Comunidad Internacional no existe. No funciona como Estado. Y eso

de que las jóvenes generaciones ven las cosas de otra manera se ha podido comprobar en

las guerras de Croacia, Bosnia y Kósovo. Baste decir que en Croacia sigue vivo el debate

entre los ustashe y los partisanos y en Serbia entre los chetnitsi y los antiguos comunistas.

Es un debate absolutamente anacrónico que ya no resuelve nada en la actualidad y no ofrece

nada al futuro, pero que sigue. Y para los croatas y serbios de Bosnia, en el habla de la calle,

el musulmán sigue siendo el turco.

Recuerdo bien haber preguntado a un conocido mío que vivía en una aldea serbia de Bosnia

cómo estalló la guerra. Me inquietaba la cuestión de cómo fue posible que vecinos y amigos

se enemistaran de repente hasta el grado de poder matarse. Y me lo contó. “Primero

empezaron a resonar cañonazos y disparos como ecos nocturnos en la lejanía. Y, por si

acaso, nos armamos, unos sacando armas viejas de la Segunda Guerra Mundial, otros

comprándolas por aquí y por allá. Después, se empezó a distribuir armas por las aldeas, cada

etnia a sus miembros. Y una noche dispararon sobre la nuestra. Y nosotros devolvimos los

disparos. Al día siguiente estábamos en guerra”. Como ven, sobre el terreno resulta muy

Page 116: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Otra vivencia de la etnicidad: ¿alianza de civilizaciones?

- 126 -

simple. Me pregunto quién distribuyó las armas, quién las vendió, quién disparó por la noche

y por qué. Pero eso ya sería para otro tipo de análisis.

Page 117: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 127 -

Perspectivas de integración europea

16 de febrero de 2005Julio Garrote

Hoy he encontrado en el buzón el folleto promocional que publica la Oficina de Publicacio-

nes de las Comunidades Europeas para dar a conocer las bendiciones de la nueva

Constitución para la Unión. En la contraportada aparece un mapa de Europa, con colorines

distintos según la situación de cada Estado en el proceso de integración: un amarillo

hepatítico para los miembros, un supuesto rosado para los candidatos y un grisáceo para los

que aún no tienen ni el privilegio de la negociación de acceso. Por supuesto, entre ellos,

Srbija i Crna Gora, Poranesna Jugoslovenska Republika Makedonija y Bosna i

Hercegovina. El corazón de Europa no es Suiza, porque los suizos no quieren serlo, son los

Balcanes, así que nuestra Europa Unida aún no tiene corazón. Ojalá y al menos tenga buena

cabeza y visión de futuro. Ruego no pierdan esta referencia geográfica.

A veces, leyendo libros de muy diversa procedencia y carácter se encuentran datos curiosos.

A falta de pruebas fehacientes que en la actualidad demuestren conspiraciones internaciona-

les contra Yugoslavia, bien se podría hacer un análisis sobre los dudosos incondicionales

apoyos de Estados Unidos a una Europa fuerte y unida. Y, si volvemos al mapa europeo,

vamos a ver qué se inventan en los próximos años para que la Europa unida no acoja a

todos los europeos por igual en su seno. Y cómo se repartirán (seguro que ya lo han hecho)

los empresarios, banqueros y políticos las zonas de influencia en los Balcanes.

Y como conclusión: ¿alguien cree que por muy buena voluntad que tenga el nuevo

protectorado europeo sobre el territorio bosnio va a dar viabilidad a Bosnia-Hercegovina

como Estado? Con la forma y el ejemplo que algunas organizaciones internacionales dan a

las autoridades locales, desde luego que no. Y de eso sí hay pruebas concluyentes.

Page 118: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Perspectivas de integración europea

- 128 -

5 de marzo de 2005José-Miguel Palacios

ALTMANN, Franz-Lothar. “Les Balkans occidentaux et l'Union”. Politique étrangère

4/2004, 795-805.

F.L. Altmann es un personaje bastante conocido en el mundo de los estudios sobre Europa

sudoriental. Durante bastantes años fue director del Südost Institut de Munich y en estos

momentos es el responsable del grupo de análisis sobre Balcanes Occidentales en la Stiftung

Wissenschaft und Politik (SWP) de Berlin (<http://www.swp-berlin.org>).

En medio de tantas buenas palabras sobre la integración europea de los países de Balcanes

Occidentales, el artículo de Altmann se distingue por su cruel realismo. Sus conclusiones

no son necesariamente artículo de fe, pero vale la pena leerlas con atención:

� Considera dos grupos de países: Rumanía, Bulgaria y Croacia, en vías de

integración; y Serbia-Montenegro (podríamos matizar que también puede ser Serbia

y Montenegro, o Serbia, Montenegro y Kósovo), Bosnia-Hercegovina (sin

matizaciones), Macedonia y Albania, a las que se aplicaría todo lo que sigue.

� La opinión pública de los países de la UE está cada vez más cansada de ampliaciones

sucesivas. Los políticos tendrán más difícil “vender” a sus electorados la convenien-

cia de la integración de nuevos países.

� Los dirigentes de estos países tienen dificultades para explicar a sus poblaciones que

la integración es una perspectiva a largo plazo, después de haber reiterado estos

últimos años la necesidad de acelerar el proceso.

� Las diferencias dentro de la región (entiendo que este comentario afecta también a

Rumanía, Bulgaria y Croacia) se acentuarán en lugar de disminuir, lo que dificultará

la cooperación regional.

� Siendo realistas, hay que pensar en una integración de aquí a 15-20 años, lo que no

supone un incentivo para las reformas internas dentro de estos países.

Page 119: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 129 -

Altmann propone que se actúe en dos frentes:

� Crear una especie de “mercado común regional”, con los cuatro países excluidos y

sus vecinos inmediatos. Es una idea aparentemente similar a la que tantas veces nos

ha expuesto Dalibor Soldatic.

� Ofrecer a estos países un estatuto intermedio entre el de “asociación” y el de “plena

integración”, que resulte suficientemente atractivo y pueda alcanzarse en un plazo

de tiempo sensiblemente más corto. Altmann no precisa en que podría consistir este

estatuto, pero puede entenderse que supondría una participación limitada en las

instituciones comunitarias (sin comisarios y sin derecho de voto, por ejemplo).

Esta nueva forma de integración a la que alude Altmann sería, en todo caso, más fuerte que

la prevista en “Wider Europe” y, en su opinión, podría extenderse a países como Turquía

(problema grave: ¿se conformarán los turcos?), Moldavia, Bielorrusia y Ucrania (problema

grave: ¿no es algo así como crear un “cordón sanitario en torno a Rusia”?).

13 de abril de 2005Javier Asensio

Las autoridades de Serbia-Montenegro se han declarado hoy satisfechas por la decisión de

la Unión Europea (UE) de autorizar el estudio de viabilidad para la apertura de las

negociaciones para un Acuerdo de Asociación y Estabilización con la Unión Europea.

El Consejo de Ministros de Serbia-Montenegro subrayó que el país tiene que seguir el

proceso de reformas internas y cumplir plenamente sus obligaciones frente al Tribunal Penal

Internacional para Yugoslavia (TPIY), condición impuesta por la UE para la plena

cooperación.

El presidente de Serbia, Boris Tadic, que está hoy de visita en Hannover (Alemania),

consideró la evaluación positiva de Bruselas como una señal de que Serbia es capaz de

unirse a Europa y añadió que todo lo demás depende de “nuestro deseo de realizar reformas

Page 120: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Perspectivas de integración europea

- 130 -

globales (...). Cuando hablo de reformas, no pienso sólo en el cumplimiento de las

obligaciones hacia el Tribunal de La Haya (sede del TPIY), la solución del problema de

Kósovo y la estabilización de la Unión Estatal [de Serbia-Montenegro], sino en una reforma

estructural global de toda la sociedad”, dijo Tadic, citado por su portavoz en Belgrado.

Por su parte, el Primer Ministro serbio, Vojislav Kostunica, declaró que el estudio de

viabilidad es el primer y decisivo paso hacia la realización de los objetivos serbios de llegar

“a ser miembro de pleno derecho de la familia de pueblos europeos (...). Estoy convencido

de que todos los ciudadanos están orientados sin reserva hacia la UE y que tenemos fuerza

suficiente para seguir reformando el sistema económico y político”, declaró Kostunica en

una rueda de prensa en Belgrado.

El jefe del Gobierno serbio consideró que con el estudio de viabilidad el país ha iniciado el

camino europeo “en el que tenemos que emprender todavía muchos pasos difíciles pero que

nos llevará a la UE (...). Siempre hemos pertenecido a Europa y vemos a la Unión Europea

como nuestra casa común”, concluyó Kostunica.

La Comisión Europea confirmó hoy que Serbia-Montenegro ha realizado “progresos

suficientes” para abrir negociaciones para un Acuerdo de Estabilización y Asociación,

aunque advirtió de que las autoridades de Belgrado tienen que reforzar su cooperación con

el TPIY, el tribunal creado para juzgar los crímenes de guerra en los Balcanes.

16 de junio de 2005Roberto Barral

En el día que se monta todo el “guirigay” de la Cumbre Europea, todavía no se ha suscitado

ningún debate en este foro en torno al inesperado éxito de la democracia relativo al rotundo

“no”, que las ciudadanías francesa y holandesa han dado al proyecto de Tratado Constitu-

cional para la Unión Europea, y qué posibles consecuencias podrá tener en los países de la

antigua Yugoslavia.

Es evidente que el análisis que se hace desde la UE es diferente al que realizan los que

Page 121: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 131 -

aspiran a formar parte de ese conglomerado. De lectura rápida y populista es el análisis que,

supongo, hacen sectores radicales en algunos países exyugoslavos, es decir: “Cómo vamos

a querer entrar en la Unión Europea, si ni tan siquiera sus propios ciudadanos (socios

fundadores) quieren aceptar sus reglas y rechazan sus designios”. Por el contrario, entre los

dirigentes y los ciudadanos proeuropeos surge la preocupación por la posibilidad de que el

resultado de esos referendos contribuya al desánimo social. Sabido es que un importante

incentivo (si no el mayor) para las reformas es la posibilidad de entrar en la UE y que por

ello (y por otros motivos) las autoridades y la ciudadanía “aceptan” que sus criminales sean

juzgados fuera de sus fronteras, y parece se esfuerzan por buscar y entregar a dichos

criminales a La Haya.

Pero si esa panacea llamada Europa da signos de flaqueza, ¿qué estímulo tendrán los

ciudadanos de estos países para hacer el esfuerzo necesario para ingresar en el club?

No estaría de más explicar que el de Francia y Holanda no ha sido un voto nacionalista. Ha

sido un voto mayoritariamente proeuropeo, pero con la salvedad de que “otra Europa es

posible”. No ha sido supuesto tampoco un debilitamiento de Europa frente a Estados

Unidos que dejaría a la potencia americana sin contrapeso, ya que la aprobación de esa

Constitución hubiera alineado todavía más a la UE (sobre todo en el plano militar y en el

ultraliberal-financiero) con Washington.

Si estos ciudadanos han dado un NO a la constitución, quizás hayan hecho un favor, no sólo

a ellos mismos, sino también a países que, como Croacia, Bosnia-Hercegovina, Serbia-

Montenegro, Macedonia, Rumanía, Bulgaria, etc., optan por hacer fuertes sacrificios para

entrar en la UE, y para que dichos esfuerzos hayan merecido la pena y sus expectativas no

se vean frustradas el segundo día de pertenencia a esa unión (démosles uno de gracia).

16 de junio de 2005José-Miguel Palacios

Estamos en profunda crisis. Ni Constitución ni presupuestos. Hace unas semanas, políticos

italianos reclamaban la salida del euro y el retorno a la lira. Esto puede ser sólo el comienzo

Page 122: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Perspectivas de integración europea

1 Recomiendo muy especialmente el artículo de Claude Smadja en la edición atlántica de Newsweekdel 20-6-2005 <http://www.msnbc.msn.com/id/8184874/site/newsweek>.

- 132 -

de un proceso que nos conduzca al práctico desmantelamiento de la construcción europea,

tal y como la hemos conocido durante los últimos cincuenta años. O puede ser también que

el vértigo ante lo desconocido nos haga amarrarnos a lo que tenemos, aunque no creamos

ya en ello. Aunque, con un poco de suerte, debería servirnos para reflexionar sobre los

errores cometidos e intentar corregirlos.

No voy a embarcarme en un ejercicio de “examen de conciencia colectivo”, entre otras

cosas porque hay muchas mentes brillantes, como Claude Smadja, que ya lo están haciendo1.

Querría, simplemente, referirme a un factor que esté presente en su análisis y, por desgracia,

no en muchos otros. Es lo que Smadja llama la falta de un “sueño europeo”, que es, más o

menos, lo que otros llamarían “falta de una identidad europea”.

Sin conciencia de identidad compartida se puede convivir relativamente bien en fases de

prosperidad, cuando hay un exceso de recursos que se reparten entre todos y colman las

aspiraciones de todos. Otra cosa es en tiempos de crisis. Si no hay conciencia de comunidad

no existe la idea del “bien común” y pierde su sentido sacrificar los intereses propios por el

bien del conjunto. Sin conciencia de comunidad checoslovaca (o con una conciencia muy

debilitada), no había manera de que unos políticos checos responsables ante su pueblo

pudieran justificar una política económica que era la que Eslovaquia necesitaba, pero no la

que les convenía a ellos. Y a la inversa.

Lo mismo ocurrió en la antigua Yugoslavia (¿por qué sacrificar los eslovenos sus esperanzas

- como se ha visto, muy justificadas - de progreso en aras de la estabilidad de un conjunto

con el que ya no se sentían identificados?). Y lo mismo ocurrió también en la Yugoslavia

de Milosevic-Djukanovic.

Sin conciencia de comunidad, nadie está dispuesto a sacrificarse por nadie, así que el invento

sólo funciona con tasas de crecimiento suficientemente altas. En épocas de crisis, por

definición, el sistema quiebra.

Y ésta es la situación en que nos encontramos. Nos hemos empeñado en construir una UE

Page 123: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 133 -

sin identidad compartida (porque el viajar sin fronteras, el programa Erasmus y la moneda

común pueden ayudar a forjar una identidad compartida, pero son muy poco para

caracterizarla). Hemos identificado UE con Europa, lo que, por una parte, ha servido para

ofender mortalmente a los europeos que estaban fuera (estén dentro o estén fuera, Croacia,

Serbia o Rumanía son plenamente europeas) y, además, ha servido para que todos los

europeos se sintieran con derecho a estar en la UE, sin necesidad de identificarse

particularmente con las ideas de los “padres fundadores”. Al final, hemos tenido la

UE-Europa que nos merecíamos: sin fronteras (no sabemos hasta dónde es Europa), sin

valores comunes (en nombre del multiculturalismo ya no sabemos qué significa ser europeo,

más allá de tener buenos sueldos y un sistema de protección social bastante desarrollado),

sin un sueño compartido.

Roberto Barral nos hablaba el otro día de las consecuencias de la crisis de la UE para los

países balcánicos y nos decía sobre los ciudadanos franceses y holandeses que habían votado

no a la Constitución:

Si estos ciudadanos han dado un NO a la constitución, quizás hayan hecho unfavor, no sólo a ellos mismos, sino también a países que, como Croacia, Bosnia-Hercegovina, Serbia-Montenegro, Macedonia, Rumanía, Bulgaria, etc., optan porhacer fuertes sacrificios para entrar en la UE, y para que dichos esfuerzos hayanmerecido la pena y sus expectativas no se vean frustradas el segundo día depertenencia a esa unión (démosles uno de gracia).

No sé muy bien qué decir. Me parece claro que el proceso de construcción europea ha sido

a partir de Maastricht un completo fiasco. Creo que en el dilema de entonces entre

profundización y expansión se eligió la opción errónea (se dijo elegir ambos, pero, en la

realidad, se optó por expansión a costa de profundización). Creo que en el dilema posterior

sobre si ampliación “por oleadas” (un grupo de países de golpe) o “tipo regata” (cada uno

entra cuando cumple determinadas condiciones) también se eligió erróneamente (se dijo que

sería en regata, pero se hizo en oleada). Y creo que la Constitución se planteó de manera

errónea (no tiene nada que ver con los documentos fundacionales norteamericanas, que

creaban una base moral sobre la que construir un Estado y una sociedad; es, más bien, una

especie de reglamento para gestionar un condominio). A estas alturas me parece muy

razonable la idea de Dalibor Soldatic cuando proponía que se creara para los Balcanes una

integración regional que con el tiempo fuera convergiendo con la UE, en lugar de plantear

Page 124: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Perspectivas de integración europea

- 134 -

de inmediato la adhesión.

No tengo una idea clara sobre lo que nos espera. Necesitamos desesperadamente a un

Schuman, a un Adenauer, a un Spaak.

20 de junio de 2005César Luis Díez

� ¿Falla el propio proyecto de “construcción” de la UE? Y, si es así, ¿cómo se percibe

esto desde los países de este entorno?

� ¿Qué tipo de partidos apoyan la integración europea en Bosnia-Herecegovina,

Bulgaria, Croacia, Serbia-Montenegro, Rumanía, etc...? ¿Qué tipo de partidos está

en contra?

La primera cuestión me parece de tipo interno a la UE y me interesa sobre todo la

proyección que puede tener sobre el exterior. Por ejemplo, si existiera en el seno de los

países de la UE una fuerte corriente contra la Unión, los países que hasta han estado

solicitando su adhesión (o aspirando a ella) podrían replantearse el proyecto.

En la segunda cuestión me parece interesante discutir si los partidos que están a favor o en

contra de una futura adhesión de sus países son de un tipo ideológico similar a las corrientes

contrarias a la Unión que existen en países como Gran Bretaña, Francia, etc.

20 de junio de 2005José-Miguel Palacios

¿Falla el propio proyecto de “construcción” de la UE? Y, si es así, ¿cómo sepercibe esto desde los países de este entorno?

En el número 560 de IWPR (<http://www.iwpr.net>) hay un interesante comentario de

Gerald Knaus que incide plenamente en la cuestión que planteaba César. Hay que recordar

Page 125: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

2 El artículo de Knaus motivó en su día un debate dentro nuestra lista. Véase <http://www.estudiosbalcanicos.org/2003/3_bih.html>.

- 135 -

que Knaus es el presidente de ESI (European Stability Initiative), un think tank con base

en Berlín que ha trabajado mucho sobre Bosnia-Hercegovina y cuyo centro de interés, en

estos momentos, se ha desplazado hacia Kósovo. En el verano de 2003 publicó en la

prestigiosa Journal of Democracy un polémico artículo criticando la acción internacional

en Bosnia-Hercegovina2.

20 de junio de 2005Dalibor Soldatic

[20/06/05][Dalibor Soldatic]["La UE y los Balcanes"]

La UE funcionó muy bien mientras fue un “club exclusivo”. En aquel entonces, la base de

la asociación, unión o comunidad, como quieran llamarla, fue la actividad económica. Con

penas y dificultades, los principales países europeos lograron plantearse objetivos comunes,

bases de política económica comunes y, más o menos, a pesar de todas las diferencias,

lograron que funcionara la máquina europea. Los problemas comenzaron cuando las

ambiciones se elevaron al nivel de la política. Primero, porque resultó ser una ilusión esperar

que funcionen de la misma manera, al mismo compás y toquen de acuerdo con idénticas

notas políticos provenientes de partidos con plataformas ideológicas diferentes. Yo sigo

creyendo que entre un Felipe González o un Zapatero, por una parte, y un Berlusconi con

Finni de Ministro de Exteriores, hay leguas y años luz de distancia. Una cosa es la escena

política de un país, donde esos juegos son posibles y hasta a veces necesarios. La Unión

Europea, sin embargo, necesitaba una plataforma ideológica común que no tuvo. La idea

de una Europa común de todos no bastó, o bien no fue lo suficientemente convincente, a

la hora en la que se convirtieron en “europeos” polacos, checos, húngaros y recibieron la

promesa de serlo rumanos, búlgaros, albaneses o serbios. El ciudadano medio de los países

avanzados de Europa ve a los ciudadanos de esos países como unos muertos de hambre

dispuestos a aceptar cualquier tipo de condiciones de trabajo y, por lo tanto, como una

amenaza a su futuro. Pero antes de los referendos recordemos que el primer fracaso de la

Page 126: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Perspectivas de integración europea

- 136 -

UE fue el famoso Tratado de Maastricht y el “caso Yugoslavia”, ya que sirvieron para

demostrar que no existe una política exterior común de los países de la UE. La suciedad se

echó bajo la alfombra, pero el asunto quedó sucio. Toda una serie de errores fueron

cometidos en el caso de la desintegración de Yugoslavia gracias a los conflictos de intereses

de los diversos países miembros de la UE.

Lo que me extraña es que nadie haga mención de los Estados Unidos. ¿Es que no está claro

que a Estados Unidos no le conviene una UE fuerte, económicamente poderosa y

políticamente unida? Estados Unidos tiene muchos motivos para ver en una UE fuerte un

poderoso rival y oponente económico. Vista la amenaza asiática del triángulo Japón, China,

Corea del Sur no creo que Estados Unidos deplore demasiado la actual crisis europea.

Me parece, no obstante, que no hay que ser pesimista en la situación actual. Creo que el

momento es bueno para reconsiderar la situación, para sacar enseñanzas de lo ocurrido, para

replantearse ciertas bases y objetivos, y para seguir adelante. Desde luego, limitando un

poco la ambición de las metas. En una Europa que cuenta ya con la OSCE (la que nos

promovía una Europa en la que ya no pueden modificarse fronteras), el Parlamento

Europeo, el Consejo de Europa y la OTAN, con la subsiguiente Asociación para la Paz, una

UE que cubra todo el territorio de Europa, salvo excepciones, debe definir sus objetivos,

ideales y agendas de un modo mucho más modesto, pero realista y concreto.

20 de junio de 2005Jairo Dorado

Querría recordar que, en cierta medida, los Balcanes YA son parte de la UE: Grecia y

Eslovenia. No es ésta una región aislada de las políticas de integración, como pueda ser el

Cáucaso. Además, Bulgaria y Rumanía ya están encaminadas hacia un posible ingreso en el

2007, por lo que la cuestión de si UE sí o no en esta región se centra exclusivamente en

varias de las antiguas repúblicas yugoslavas, así como en Albania. No es un problema

Balcanes-EU, a no ser que sea esta una discusión ex-yugoslavacentrista, si se me permite

el neologismo.

Page 127: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 137 -

Por otra parte, Magyar Szó - el diario de la minoría húngara de Voivodina - en su edición

de este fin de semana pasada (18 y 19 de junio) dedicaba gran parte de su contenido al

proceso de integración de Serbia-Montenegro en la UE. En titulares destacaba lo siguiente:

“Visados de 5 años para los húngaros” (traducción propia). Este titular, y el referéndum del

pasado mes de diciembre sobre los hátarontulimagyarok, los húngaros fuera de las fronteras

de la actual república, da en el clavo de uno de los problemas de la UE: el desarraigo de las

distintas minorías (lingüísticas o étnicas, que cada cual aplique el término que desee), que

comprenden 40 millones de europeos a los que la Constitución dejaba literalmente de la

mano de Dios. La construcción europea atendiendo exclusivamente a intereses esta-

do-nacionales o económicas es el camino erróneo.

Tal vez no sea esta la manera de enfocar la cuestión, pero la UE y la Yugoslavia de los

ochenta tienen un punto en común: las cuestiones nacionales. Y ese elemento es de gran

provecho para cualquier populista de la región.

Y existe un profundo dominio de los sentimientos estado-nacionales en la UE. Macedonia

carece de un nombre oficial estable por problemas de Grecia. Hungría decide realizar un

referéndum sobre si ciudadanos de países con fronteras con la UE, atendiendo a ciertos

factores de discriminación, pueden obtener la nacionalidad húngara.... Ése sí es un elemento

muy distorsionador si se vende bien en la región.

21 de junio de 2005César Luis Díez

La matización de Jairo sobre el caso de Grecia y Eslovenia me parece acertada: no

deberíamos olvidar que existe una “parte balcánica de la UE”. También me parece

interesante su argumento sobre el desarraigo de las distintas minorías, lingüísticas o étnicas,

dentro de la actual y futura UE. Me surgen al respecto algunas preguntas:

� ¿Cuáles son las minorías en Eslovenia y Grecia? ¿Cuál es el reconocimiento de las

mismas en estos países? Con esta pregunta no quiero lanzar de manera indirecta un

argumento del tipo “los países con menos minorías se integran más rápido”, ya que

Page 128: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Perspectivas de integración europea

- 138 -

creo que en ambos casos hubo distintas razones (y momentos históricos) para dicha

integración, sino que me interesa el poder comparar estas situaciones con las de los

otros países del entorno.

� 2) Uniendo el tema de las minorías con la segunda pregunta de mi anterior mensaje

(¿Qué tipo de partidos apoyan la integración de sus respectivos países en ByH,

Bulgaria, Croacia, SyM, Rumanía, etc...?, ¿y que tipo de partidos está en contra?),

la cuestión sería: ¿cuál es la postura frente a la integración de los partidos que

representan los intereses de las minorías de estos países?, ¿a favor, en contra, o no

es posible generalizar?

� Volviendo a Grecia y Eslovenia: ¿existe en ellas una oposición a la integración

europea articulada en forma de partido político, como pueda suceder en otros países

de la UE?

30 de junio de 2005José-Miguel Palacios

La UE funcionó muy bien mientras fue un “club exclusivo”. En aquel entonces, labase de la asociación, unión o comunidad, como quieran llamarla, fue la actividadeconómica (...). El ciudadano medio de los países avanzados de Europa ve a losciudadanos de esos países como unos muertos de hambre dispuestos a aceptarcualquier tipo de condiciones de trabajo y, por lo tanto, como una amenaza a sufuturo (...). Creo que el momento es bueno para reconsiderar la situación (...).Desde luego, limitando un poco la ambición de las metas. En una Europa quecuenta ya con la OSCE (...), el Parlamento Europeo, el Consejo de Europa y laOTAN, con la subsiguiente Asociación para la Paz, una UE que cubra todo elterritorio de Europa, salvo excepciones, debe definir sus objetivos, ideales yagendas de un modo mucho más modesto, pero realista y concreto.

He extraído algunos párrafos (físicamente alejados) del mensaje de Dalibor y quisiera no

estar tergiversando su pensamiento, pero me da la impresión de que nuestro amigo apuesta,

como tantos otros hoy, por una Europa más modesta, de contenido fundamentalmente

económico, dado que otras organizaciones se especializan en mantenimiento de la

estabilidad, en defensa, etc..Creo que los últimos acontecimientos demuestran que esa

Europa es imposible.

Page 129: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

3 Fondo para los subdesarrollados, en la antigua Yugoslavia. Se beneficiaban de él Kósovo (sobretodo), Macedonia, Bosnia-Hercegovina y Montenegro.

- 139 -

Lo que falló en Bruselas fue el acuerdo para aprobar un presupuesto, que es, básicamente,

un mecanismo para transferir recursos de unos miembros a otros.

Sin una integración política avanzada que suponga la aparición de una identidad común (que

los españoles sintamos como propios los problemas de los agricultores franceses, por

ejemplo), va a resultar crecientemente difícil aprobar esas transferencias, sobre todo en

tiempos de crisis. Los británicos querrán lo suyo, y los alemanes lo suyo.

En estas condiciones, es evidente que se puede seguir adelante con una integración mínima,

de carácter predominantemente económico. El problema es que para algunos (los más ricos

del oeste) esa Europa económica sería una zona de libre cambio en la que tendrían todas las

de ganar, mientras que para los menos afortunados tendría que ser una especie de gigantesca

ONG.

¿Cómo conciliar ambas visiones contrapuestas?

Jairo Dorado decía que la situación le recordaba a la de Yugoslavia en los años ochenta y

me parece que la suya es una observación muy aguda. En 1987 no se pudo aprobar el

presupuesto federal porque Eslovenia lo vetó, y la razón profunda del veto era que

Eslovenia (y, en general, los ricos) estaba harta (hartos) de que sus aportaciones al

FADURK3 sirvieran para financiar inversiones (fundamentalmente en Kósovo) que

consideraban improductivas. Mientras la economía fue relativamente bien, mientras existió

un cierto sentimiento de comunidad, mientras hubo autoridad central, la cosa, a trancas y

barrancas, fue funcionando. Cuando la identidad común se disolvió y la gente se cansó de

una crisis que nunca terminaba, pasó lo que pasó.

Page 130: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 141 -

Nación y Estado

Are Europe's oldest nation states immortal?

Spain will soon test this supposition. Basque nationalists late last month put thecountry's unity in unprecedented jeopardy.

Wall Street Journal, 10-1-2005

17 de enero de 2005 Julio Garrote

Según mi modesto entender, el artículo del Wall Street Journal trata de justificar un

paralelismo sobre la base de una tesis errónea. No mi parece acertado generalizar y

comparar, porque se tiende siempre al olvido de realidades que a veces son decisivas.

No logro entender por qué lo balcánico es continuamente puesto como ejemplo de

intolerancia, guerra, violencia, separatismo y nacionalismo excluyente, y sólo espero que

algún día todos podamos olvidar calificaciones tan poco afortunadas para describir

situaciones de la convivencia humana. Quisiera recordar que España fue durante demasiados

años tildada de tierra de salvajes, sanguinarios, sádicos y desalmados por los tristes

acontecimientos durante las guerras carlistas del siglo XIX, y se tardó mucho tiempo en

quitarnos el sambenito. Y lo considero lamentable en el caso de los Balcanes.

La situación de los nacionalismos e identidades diferenciadoras como conflicto entre lo

individual y lo colectivo es una realidad que existe desde que la especie humana lo es, y se

ha utilizado como motor principal de la supervivencia entre civilizaciones, culturas, imperios

y naciones. Hay quien considera que la derivación de la individualidad en disgregación es

el último resquicio de la herencia genética que aún conservamos de los reptiles.

Algunos de los que conocemos los Balcanes, en especial la antigua Yugoslavia, sentimos

primero una gran desilusión por lo que pudo ser y no es, pero a la vez una esperanza de que

algún día pueblos con raíces comunes e idiomas casi idénticos reconozcan que unidos se

logra mucho más que separados. A eso se tiende y, sin caer en globalizaciones cerriles, me

inclino por la congregación, la tolerancia y el diálogo. No basta el talante, que bien viene,

Page 131: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Nación y Estado

- 142 -

hay que actuar en pro de la comprensión y la solidaridad.

17 de enero de 2005 José-Miguel Palacios

No creo que este foro sea el lugar idóneo para dialogar sobre el Plan Ibarretxe. Pero me

parece también que, en un momento en que está de actualidad, es natural que los balcanistas

de aquí y los hispanistas de allá queramos comprender mejor nuestras realidades utilizando

como herramienta el ejemplo de la antigua Yugoslavia.

Son casos distintos (ya veremos en qué medida) y distantes (ma non troppo), pero creo que

comparables. Si se me permite una sugerencia para orientar el debate, me parece que

deberíamos, al menos, buscar respuestas a las tres cuestiones siguientes:

� ¿Qué factores hicieron que en Yugoslavia el proceso de independización de las

repúblicas resultara imparable? ¿Se dan todos ellos en España? ¿Cuál es la influencia

previsible de la eventual ausencia de alguno de estos factores?

� ¿Qué factores hicieron que en Yugoslavia el proceso resultara trágicamente

sangriento? ¿Se dan también en el caso español?

� ¿Ha tenido el conflicto de la antigua Yugoslavia un reflejo directo, en clave

nacionalista-antinacionalista, sobre los debates internos españoles? Se trataría de

saber, por ejemplo, si los nacionalistas periféricos españoles han apoyado, por

sistema, a las repúblicas que se separaron, y si los antinacionalistas, a los serbios; o

bien si no ha existido ninguna relación directa entre actitud política dentro de España

y la postura ante el conflicto de la antigua Yugoslavia).

Page 132: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 143 -

18 de enero de 2005 César Luis Díez

En España, a veces se habla de un enfrentamiento entre los nacionalismos denominados

“periféricos” y un nacionalismo “centralista” (llamado por algunos “españolista”). Si

examinamos la “cuestión yugoslava” (término que podría englobar el proceso de

desintegración de la RSFY), ¿es posible plantear un análisis semejante?

En un primer momento, el nacionalismo esloveno o el croata se enfrentan a la idea de

Yugoslavia identificándola con el comunismo (más exactamente, con una de sus versiones,

el llamado socialismo autogestionario). Después, el nacionalismo serbio - aunque

formalmente unido a esa misma idea socialista y casi unánimemente reconocido como

“continuador” del antiguo Estado Federal, les sigue en ese enfrentamiento. Frente a estas

posturas, quedaría una minoría de “yugoslavistas” (defensores de la idea de una Yugoslavia

unida), que en muchos casos no eran otra cosa que nostálgicos del comunismo. Es este

panorama, esbozado con bastante prisa, se me ocurren varias preguntas más: ¿se planteó una

supervivencia de Yugoslavia prescindiendo del paradigma titoísta? Y, en ese caso,

¿podríamos hablar de un nacionalismo “centralista” yugoslavo?

Lo que intento de alguna manera preguntar es si hubo en algún momento una concepción

del nacionalismo como algo “moderno y democrático”, frente al “anticuado centralismo

socialista antidemocrático” del postitoísmo.

Si esto es así, el problema de Bosnia es todavía más complicado. No hay que olvidar en este

caso lo que ya se menciono en su día en esta lista: los musulmanes en varios momentos de

la historia se encontraban entre los que más apoyaron la idea de una Yugoslavia unida.

19 de enero de 2005 Julio Garrote

¿Qué factores hicieron que en Yugoslavia el proceso de independización de lasrepúblicas resultara imparable? ¿Se dan todos ellos en España? ¿Cuál es lainfluencia previsible de la eventual ausencia de alguno de estos factores?

Page 133: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Nación y Estado

1 Stranka Demokratske Akcije, Partido de Acción Democrática.

- 144 -

Enseguida se me ocurren los siguientes:

� Las influencias externas (todavía muchas de ellas ocultas) procedentes de países

europeos (póngase Alemania) en el reparto del mercado incipiente de la Europa del

Este. A cualquier ciudadano de a pie en Eslovenia, Bosnia o Croacia, y aún en

menor medida (pero sin duda en proceso) en Serbia-Montenegro se le puede

preguntar qué ha cambiado en la fisonomía económica y en las entidades financieras

de sus países: la imparable entrada de Alemania en sus vidas. Influencias procedentes

también de países no europeos, especialmente en el caso de Bosnia (sin temor a

equivocarme incluiría aquí a Irán, Arabia Saudí, Kuwait...), con su apoyo a la opción

de Alija Izetbegovic en su delirante carrera hacia a la creación con su SDA1 de un

Estado islámico.

� La vergonzosa pasividad de la Unión Europea cuando todo lo que ocurrió se había

gestado durante muchos años. Todos sabían lo que estaba ocurriendo en Yugoslavia

y nadie movió un dedo por evitarlo. Dudo que Europa vuelva la espalda a lo que

pretende el secesionismo en España.

� El fracaso en el consenso básico entre las opciones políticas mayoritarias surgidas

con el plurarizam tras el colapso de la Liga de los Comunistas, todas ellas de tipo

nacionalista o étnico-religioso. En España se dio un consenso básico para allanar el

camino a la democracia que hoy disfrutamos. En Yugoslavia no hubo democracia,

pero es que ni en Bosnia, ni en Croacia ni en Serbia-Montenegro hay democracia

hoy en día. Lo que hay es mucho miedo y mucha corrupción, pero pocas libertades

desarrolladas.

� La falta de compromiso de los dirigentes posteriores a Tito con la conservación de

Yugoslavia como Estado, mientras debía producirse entre otros un proceso duro de

privatización y adaptación al sistema de libre mercado. La clase política que surge

tras 1981 prefiere alimentar ambiciones propias y desprecia la posibilidad de

acuerdos conciliadores.

Page 134: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 145 -

¿Qué factores hicieron que en Yugoslavia el proceso resultara trágicamentesangriento? ¿Se dan también en el caso español?

Podríamos en esta cuestión centrarnos en el ejemplo de Eslovenia, que proclama su

independencia y, sin apenas sufrir conflicto bélico, se ha situado en tiempo record en la

membresía de la Unión Europea. ¿Es casual? Eslovenia formó parte con croatas y serbios

la primera Yugoslavia, en un acuerdo consensuado tras la terrible experiencia de la Primera

Guerra Mundial. Unidos afrontarían mejor la amenaza de invasión por parte de las potencias

europeas de aquel tiempo. Por razones similares, Eslovenia se incorpora también a la

Yugoslavia de Tito. Fue un acuerdo como el que, salvando las distancias y motivos, puede

tener Navarra con el estado español. Navarra digo, no Baskia.

Llegado el colapso del sistema comunista light yugoslavo, Eslovenia no encuentra ninguna

razón para permanecer en un Estado que se resquebraja por tensiones a las que se siente

ajena. Croacia pretende seguir su ejemplo, pero fracasa, porque los croatas no están unidos

en la opción independentista del HDZ. Y es que en Croacia había una respetable población

de croatas ortodoxos que se identifican con el nacionalismo serbio y resisten. Fueron cientos

de miles serbios croatas que abandonaron la Srpska Krajina tras la caída de Knin. Y aún no

han regresado. Las comparaciones, dije antes, son injustas, pero puestos a ello, diría que en

la Comunidad Autónoma Vasca no puede aplicarse el caso esloveno...

¿Ha tenido el conflicto de la antigua Yugoslavia un reflejo directo, en clavenacionalista-antinacionalista, sobre los debates internos españoles? Se trataría desaber, por ejemplo, si los nacionalistas periféricos españoles han apoyado, porsistema, a las repúblicas que se separaron, y si los antinacionalistas, a los serbios;o bien si no ha existido ninguna relación directa entre actitud política dentro deEspaña y la postura ante el conflicto de la antigua Yugoslavia.

Personalmente creo que cualquier nación que desee decidir sobre su futuro debe hacerlo,

sin injerencias externas y por sí misma. Pero eso es desgraciadamente belleza retórica, salvo

en admirables casos pacíficos, como el de Chequia y Eslovaquia. Y dudo que en España,

con la manipulación informativa a la que se ha sometido el conflicto de la antigua

Yugoslavia, se tenga un reflejo al que refiere esta cuestión.

Pero puestos a decir, creo que no se debe relacionar unívocamente el rechazo a planes

secesionistas con antinacionalismo, sino quizás con otro nacionalismo, el español, que existe

Page 135: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Nación y Estado

- 146 -

basado en la existencia corroborada de una nación. Y ahora deberíamos discutir... ¿nación

y nacionalidad es lo mismo? ¿Existe la nación vasca como la eslovena? ¿España es una

nación de naciones, si es que esto significa algo?

20 de enero de 2005 Tino Brugos

Mi opinión es que los nacionalismos son un sujeto tremendamente flexible y moldeable,

difícil de abordar. Del artículo del WSJ poco que decir, salvo que tiene un tono claramente

provocador o, simplemente, refleja el “pensamiento neocons” con el que está alineado ese

periódico y que aquí se corresponde con el ideario del PP (versión Aznar) sobre la forma

de tratar la “cuestión nacional”.

El título no me parece afortunado. Creo que es alarmista, aunque la realidad sea que existe

un riesgo real pero... ¿por qué se concede tanta importancia a lo vasco y no, por ejemplo,

al caso de Bélgica donde el estado central está cada vez mas disminuido?

En todo caso, no creo que sea original. El nº 91 de 1998 de la revista Herodote se titulaba

precisamente “Balkanes ibéricos”, o sea que el concepto está ya registrado.

Respecto a la antigua Yugoslavia. Mi impresión es que, efectivamente, camuflado de

socialismo y federalismo residual el nacionalismo serbio tomó las riendas del poder en Serbia

y contribuyó a incrementar las tensiones hasta donde sabemos: Dobrica Cosic, el

Memorandum, etc.. Cuanta más Serbia, menos Yugoslavia, fue la respuesta.

En nuestro caso... ¿cuanta más España, menos España? Está claro que las periferias

reaccionan ante los estímulos centralizadores en lo político, en lo ideológico y en lo

simbólico. ¿Cuanta más independencia, menos Euskadi? También ahí tenemos un tema

interesante. Un Estado vasco centralizado y uniformizador generaría tensiones que

comienzan a verse en el horizonte.

Una última reflexión a cerca de la balcanización. Se ha insistido mucho en que no se podía

Page 136: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 147 -

entender el mapa del estado autonómico sin tener en cuenta las identidades generadas en la

época medieval. ¿Se refiere a los reinos cristianos? ¿Incluye también a la parte islámica de

aquella época? En ese caso, ¿a cuál? ¿Al Emirato, al Califato o acaso a los reinos de taifas?

Porque la balkanización ibérica no es un asunto nuevo. En todo caso creo que el asunto

estrella a estudiar es qué pasó y qué sigue pasando con el nacionalismo español. El modelo

tradicional del s XIX no fue capaz de crear una nación compartida por todo el mundo. El

s XX tampoco nos ha permitido llegar a conocer eso que algunos llamaban “patriotismo

constitucional”, ni “nación de ciudadanos”, ni “nación de naciones”... Y, sin embargo, es

evidente que existe y no creo que tenga mala salud.

20 de enero de 2005 Julio Garrote

Quisiera ceñirme a la aplicación punto por punto de la comparación a la que nos obliga el

dichoso artículo del Wall Street Journal. Independientemente de su orientación política, si

dirige su atención hacia España es probablemente como consecuencia del análisis que sus

autores hayan realizado del último año político en nuestro país.

¿por qué se concede tanta importancia a lo vasco y no, por ejemplo, al caso deBélgica donde el estado central está cada vez mas disminuido?

Porque en los Estados Unidos los asuntos españoles llaman la atención desde el 11-M y el

terrible precedente sentado en su “lucha contra el terrorismo global”. Bélgica no llama la

atención de ese modo. Bueno, tampoco hay quien mate por ser valón o flamenco

independiente, aunque de paso desconfíe de la idea que los estadounidenses tienen de los

terroristas etarras.

camuflado de socialismo y federalismo residual el nacionalismo serbio tomó lasriendas del poder en Serbia y contribuyó a incrementar las tensiones hasta dondesabemos: Dobrica Cosic, el Memorandum, etc. Cuanta más Serbia, menosYugoslavia, fue la respuesta.

No estoy de acuerdo en el “camuflaje socialista y federalista residual” que equivocada e

intencionadamente se le ha impuesto de forma exclusiva al nacionalismo serbio, en especial

Page 137: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Nación y Estado

2 Véase el libro de Laura Silver & Allan Little The Death of Yugoslavia.

- 148 -

por el CNNismo (¿cinismo?). El nacionalismo serbio desea romper con el régimen comunista

que aprisiona sus aspiraciones, a no ser que se interprete tomando como referencia el “who

was who” en ese nacionalismo. En ese caso, tampoco es el único residuo, ya que otros

dirigentes políticos encumbrados por los partidos mayoritarios de otras facciones son

comunistas que cambian de chaqueta. Hay una cierta excepción, la de Alija, que pasó

cuarenta años vigilado por la policía desde sus primeros conatos islamistas radicales en su

juventud con Mladi Muslimani. Por cierto, que se libró de volver a la cárcel en 1983 por

la defensa impecable que le hizo el prestigioso abogado (serbio) Rajko Danilovic.

No hay camuflaje federalista residual, porque en el referido Memorando de la Academia

Serbia de las Ciencias y las Artes se acusaba a la federación yugoslava precisamente de la

injusta situación de los serbios en ella, política y económicamente discriminados frente a

croatas y eslovenos. Por cierto, Dobrica Cosic manifestó no haber contribuido al

memorando, “aunque al referirse a él lo calificara poco convincentemente de anti-Tito y

pro-yugoslavo” 2.

¿Cuanta más independencia, menos Euskadi? También ahí tenemos un temainteresante. Un Estado vasco centralizado y uniformizador generaría tensiones quecomienzan a verse en el horizonte.

Efectivamente, y siempre que se aplique la teoría de los fractales al nacionalismo y a su

último fin, la diferenciación hasta la individualidad. Y si se trata de divisibilidad en

partículas, hasta el infinito.

23 de enero de 2005 Julio Garrote

Encuentro en el artículo objeto del debate más de una influencia, y más de una mano, varias

fuentes consejeras. Parece dar como una de cal y otra de arena, un toque irónico y otro de

contundencia, pero de lo que no me cabe duda es que está escrito para que los españoles lo

leamos. Me permito a continuación comentar algunos fragmentos:

Page 138: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 149 -

Are Europe's oldest nation states immortal?

Si despreciamos su posible carácter irónico, no por ignorar (o querer ignorar) la realidad se

acierta en la elocuencia. ¿Quién dice que los vascos (que no son ni por asomo legado de los

vascones, ni siquiera los de los catorce apellidos vascuences) es la nación más antigua de

Europa?

La frase me recuerdan al pobre chetnik que en Lepa Sela, Lepo Gore explica a la periodista

americana quiénes son los serbios y, con una mueca de frustración y decepción, termina

diciendo: “...'nas li ti, nesreco, da smo mi Srbi, najstariji narod na svetu?” (¿No sabes,

infeliz, que los Serbios somos el pueblo más antiguo del mundo?)

...José Luis Rodríguez Zapatero, the prime minister, is contending with probablythe worst political crisis since Spain restored democracy almost three decades ago.The outcome will provide useful hints for the future of Europe's other multiethnicstates.

No sé si me comporto como un pretencioso al interpretar lo de “otros Estados multiétni-

cos”, como si existiera una etnia vasca, una castellano manchega u otra pacense de la misma

manera que existen la corsa, la sarda o la flamenca.

Lamento esa práctica estandarizadora, clasificadora y compresora, propia de los

estadounidenses, y que ha dado lamentables resultados. No sé si es una carencia absoluta

de “savoir faire” o, simplemente, de “savoir” lo que han demostrado en Europa y en el

resto del mundo. Es la misma práctica que les llevó a pedir por vía diplomática al Ministerio

de Defensa de cierto país aliado que les cedieran el Manual de trato con la población local

en Bosnia, ante el éxito rotundo de la interacción de los efectivos desplazados con ella.

Patético. ¡Cuántas amistades nacieron al calor de café turco y rakija!

Por último, quisiera hacer notar algo que he echado en falta (¿omitido deliberadamente?)

en el artículo. Me refiero a que en ningún momento se refieren abiertamente a la Unión

Europea en aspectos como, por ejemplo, el encuadre de ese eventual estado asociado vasco

en el seno de la Unión.

Page 139: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Nación y Estado

- 150 -

24 de enero de 2005 Javier Asensio

La frase “Are Europe's oldest nation states immortal?” se refiere a España. España y

Portugal están consideradas las primeras naciones europeas de la “Era Moderna” y es a ese

hecho al que hace alusión el artículo. A mi modo de ver, sin ninguna ironía.

25 de enero de 2005 Dalibor Soldatic

Hay en serbio un proverbio que dice, traducido literalmente, “el oso va a bailar también en

tu patio”. No cabe duda de que es lo que estamos viendo en este momento en España.

Como hispanista en Belgrado muchas veces he buscado los paralelos entre lo que sucede

en los Balcanes y en España, pero también he evitado caer en comparaciones forzadas. Creo

que en este momento el que quiera establecer paralelos entre lo que ocurre en España y lo

que ocurrió en la antigua Yugoslavia corre el riesgo de equivocarse.

Yugoslavia, como país federal, es de creación tardía. En su última versión se fundó en 1943

en la sesión del Consejo Antifascista de Liberación Nacional en Jajce, cuyas decisiones

fueron confirmadas por la Asamblea Constituyente en 1945. Las naciones (aquí ya hay que

hacer distinciones precisas entre conceptos de nación, pueblo, nacionalidad, estado, nación

constituyente) que constituyeron la federación yugoslava hablaban idiomas que se parecen

mucho, pero son distintos (me refiero al serbocroata, en sus variantes oriental y occidental,

al esloveno y al macedonio). Estas naciones, además, se diferenciaban entre sí por su

religión: católica, ortodoxa y musulmana.

El único elemento aglutinador fue el Partido Comunista de Yugoslavia y lo que emanaba del

Estado comunista: Ejército, Policía y organizaciones políticas. Con la caída del Muro de

Berlín y la desintegración del bloque socialista se abrieron ulteriores procesos de

democratización de la vida política y surgieron partidos nacionales. Si añadimos a esto una

crisis económica que impuso el debate de quién gasta el dinero de quién en la federación,

tenemos suficientes motivos para empezar a generar algo que ya tenía su pasado. No hay

Page 140: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 151 -

que olvidar que de toda la antigua Yugoslavia solamente Serbia y Montenegro habían sido

Estados; los demás habían sido en su historia provincias de antiguos imperios.

Sin caer en la trampa de las conspiraciones internacionales contra Yugoslavia no hay que

olvidar tampoco la intervención del factor internacional que tuvo mucho que ver. Por una

parte porque algunos estados vieron la posibilidad de extender su zona de influencia; por

otra, porque muchos de los protagonistas de la política internacional en aquel momento

tenían escasos conocimientos del problema. Prueba de ello es que en su gran mayoría han

caído en el anonimato absoluto en sus respectivos países.

El gran problema de la desintegración, al fin y al cabo, fue el hecho de que pocas repúblicas

eran étnicamente puras y se planteó el problema de qué hacer con una nación considerada

por la propia Constitución de las repúblicas como constituyente y que de la noche a la

mañana es declarada minoría nacional. Ése fue el caso de los serbios en Croacia, por

ejemplo.

El último problema es la Historia de los conflictos de épocas pasadas y hasta remotas.

Nunca falta quien haga recordar a las masas las páginas tristes de la historia de los Balcanes

en las que tal y tal ejército masacró a tantos y tantos connacionales. Como si en los Balcanes

todos esperaran un futuro play-off.

Conclusión: todas esas condiciones no se dan en España. Lo que no quiere decir que el País

Vasco no está abriendo el tema del poder central y de la necesidad de organizar el país como

una federación o confederación “más laxa”, como se decía en Yugoslavia. Todo dependerá

de cuántos vascos estén dispuestos a separarse de España y en qué grado. Eso decidirá

todo. Lo demás son variantes. La democracia española de la época postfranquista ha

mostrado tener un espíritu negociador y ha sabido buscar soluciones de transacción. Por lo

tanto, excluyo conflictos armados del tipo yugoslavo. Pero que algunas cosas habrán de

cambiar con el tiempo: habrá música que no agrade todos los oídos. Pero así es la época que

nos ha tocado vivir.

Page 141: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Nación y Estado

3 Texto completo en <http://usuarios.lycos.es/politicasnet/autores/linz.htm>.

- 152 -

25 de enero de 2005 Julio Garrote

¿Puedo insistir en la ironía de la referencia a “nation states” ? Me permito una cita:

Hay dos géneros de libertades: la de las colectividades (de las nacionalidades,regiones o autonomías) y la de los individuos. Creo que el mejor patrón de libertadimplica las dos. Habría muchas fórmulas para coordinarlas, pero todas han departir de un requisito: una voluntad de convivencia, y no de hostilidad. Frente aese modelo que ya no podemos aplicar en España, el del Estado-nación, hay otroque llamaré de nación- Estado. Este último implica un sentimiento de identidad enlo propio y de respeto a los intereses comunes; en una palabra, de lealtad haciala federación3.

Es de Juan José Linz Storch de Gracia (Bonn, 1926).Catedrático emérito de la Universidad

de Yale y Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales.

9 de octubre de 2005 Dalibor Soldatic

¿Qué dirían ustedes si leyeran que al País Vasco hay que darle la independencia y, si no,

apretarle las tuercas a Madrid? Sé que no es el mismo caso [que el de Kósovo], pero

piénsenlo un poco desde el punto de vista de las reacciones emotivas.

10 de octubre de 2005 César Luis Díez

¿Qué dirían ustedes si leyeran que al País Vasco hay que darle la independencia

y, si no, apretarle las tuercas a Madrid?

Creo que al País Vasco no se le puede dar la independencia de nada, al igual que a ninguna

otra parte de las entidades (nacionalidades, comunidades autónomas, etc.) que forman

España.

Page 142: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 153 -

En tal caso, el País Vasco - como el resto - podría “separarse” de España (seguramente tras

un complicado proceso, por lo menos en lo político) y en ese momento me parece se

produciría la desintegración de lo que conocemos como la actual España; ya que “el ente”,

España, está formado por todas las partes que lo integran y la desaparición de uno de sus

componentes supondría la redefinición del propio ente (creo yo). Devolviendo la pelota al

tejado “yugoslavo”: ¿era ésta una situación parecida a la que había en la RSFY?

10 de octubre de 2005 José-Miguel Palacios

Insistiendo en utilizar las comparaciones (y plenamente conscientes de las limitaciones que

tiene esta técnica), podemos recordar que durante estos quince últimos años, amigos

yugoslavos (particularmente, serbios) nos han estado diciendo a los españoles que algo

similar nos podría ocurrir a nosotros. No creo que las situaciones sean muy parecidas, pero

sí que presentan notables similitudes. Una de ellas es que nos encontramos, como en la

Yugoslavia de finales de los ochenta, en una situación en la que varias partes no reconocen

ya la Constitución como las regla del juego político (o, para ser más precisos, reconocen su

particular lectura de la Constitución, fundamentalmente distinta de la lectura que hacen otras

partes y de la interpretación tradicional consensuada). En estas condiciones, se entra de

hecho en un nuevo periodo constituyente (en Yugoslavia, nos encontraríamos a caballo

entre 1989 y 1990), pero con el inconveniente de que las partes lo abordan desde un

desacuerdo básico. En Yugoslavia, la imposibilidad de crear un nuevo consenso desembocó

en una guerra, y en España eso no podría ocurrir nunca. Con todo, podrían surgir las

mismas dudas que tenían los yugoslavos hace quince años sobre qué mecanismos deberían

servir para solucionar este desacuerdo.

Una segunda similitud se refiere al carácter de “sin precedentes”. La desintegración

yugoslava de 1989-1991 rompió el tabú de la inmutabilidad de las fronteras europeas, según

lo acordado en Helsinki. El tabú hizo que hasta el último momento no se acabara de creer

lo que se avecinaba, pero su ruptura favoreció también nuevas rupturas en otras partes del

continente (Checoslovaquia, URSS). Ahora se trata de un caso que afecta a Europa

Page 143: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Nación y Estado

- 154 -

Occidental, donde las fronteras no deberían ser tan importantes después del mercado único

y de Schengen, y, en este aspecto, es también algo que carece de precedentes históricamente

próximos.

10 de octubre de 2005 Jairo Dorado

Yo creo que la opinión del profesor Soldatic (¿Qué dirían ustedes si leyeran que al País

Vasco hay que darle la independencia y, si no, apretarle las tuercas a Madrid?) puede

tener una visión lógica: si para conservar la unidad nacional se utilizan unas Fuerzas

Armadas teóricamente de todos, se arma a un grupo de visionarios-criminales que en el

nombre del bien de la unidad nacional cometen pillaje -entre otras cosa s- y, sobre todo, hay

una negativa a negociar; si se ve claramente quién es - si ése fuese el caso, que no creo que

lo sea - el agresor, sí se le podrían apretar las tuercas a Madrid. ¿Por qué no? ¿Acaso por

ser el Estado asentado, respetado e histórico tiene carta blanca? Es un supuesto hipotético,

no cabe duda: pero entre democracia-separación vs. dictatura-statu quo no creo que nadie

- en Europa - apostase por lo segundo en estos momentos.

Con el señor Palacios estoy en desacuerdo con la visión de que hay ciertas interpretaciones

no consensuadas de la Constitución. Yo creo que en casi todas las cuestiones el inmovilismo

y la intransigencia hacia cambios naturales suelen provocar los problemas. La revolución es

peligrosa, pero la contrarevolución, más. La diferencia, en cualquier caso, entre la

Yugoslavia de los ochenta y la España actual, también muestra un punto a favor de la

primera: la RSFY era en muchos aspectos - de hecho, Serbia-Montenegro lo sigue siendo

- mucho más liberal que el actual modelo español. Hay un punto en común: en los dos

Estados, llegados a un punto, se llega a asociar lo yugoslavo (o lo español) con una parte

del todo. Si en España lo español viene expresado en una lengua y cultura primordial, en la

RSFY, desde mi humilde punto de vista, la crisis de los ochenta vino asociada a un revivir

de una visión muy concreta de entender Yugoslavia.

Enlazando la opinión del profesor Soldatic con las del señor Palacios, si la crisis del 98

Page 144: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 155 -

supuso el anclaje de España y una eliminación de su diversidad (ojo, el nacionalismo gallego

y catalán surgen como reacción a una mayor centralidad cultural del país en los primeros

veinte años del siglo XX), la visión de lo yugoslavo en los años ochenta como lo serbio (o,

en el plano opuesto, como lo no croata o lo no esloveno) provoca ciertas reacciones

contraproducentes. Yo defiendo que Yugoslavia, en su origen, era una Serbia extendida,

con una ideología de maquillaje, de la misma manera que España es una Castilla extendida,

donde ser catalán, vasco o gallego no implica estar representado en el conjunto.

Sin embargo las diferencias son más grandes: España es muchísimo más homogénea que

Yugoslavia (si me apuran, casi más de lo que es Serbia-Montenegro, incluyendo Kósovo)

y el sistema de gobierno apuesta a caballo ganador. Además, los vecinos - en especial,

Francia - son los primeros interesados en mantener todo como está. No creo ni que en su

momento Austria, Italia y sobretodo Hungría, no viesen con buenos ojos la discusión

familiar y la ruptura de sus vecinos.

P.S. Recuerdo, en cualquier caso, un artículo polémico aparecido hace apenas un año en

Portugal sobre las pretensiones que en su momento Salazar tuvo de invadir y anexionarse

Galicia durante la Guerra Civil española. Si substituimos el concepto de anexión política por

el de control económico, vemos ya un mayor parangón con los intereses de Austria o Italia

en la separación del vecino de la estrella roja...

10 de octubre de 2005 Dalibor Soldatic

Confieso que mi pregunta sobre el País Vasco era una provocación, pero también una

invitación al debate. Volvemos al eterno tema: ¿quién define el conjunto que constituye un

país? ¿Cuándo y dónde comienza y cuándo y dónde termina el derecho a la autodetermina-

ción?

Tomemos el ejemplo de la desintegración de Yugoslavia. El referéndum se hizo en

Eslovenia y luego en Croacia y más tarde en Bosnia. Nunca se hizo en el ámbito de toda la

Yugoslavia. ¿Por qué? Simplemente, porque de los veinte millones de yugoslavos, una

Page 145: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Nación y Estado

- 156 -

mayoría habría votado en contra de la desintegración. Entonces, ¿por qué se respeta la

voluntad de la mayoría en un especio determinado y no la de la mayoría en otro?

El caso de España es, estoy plenamente de acuerdo, muy distinto; precisamente por

pertenecer a la Unión Europea y porque en la UE las fronteras cuentan cada vez menos,

mientras que resulta más importante un espacio común. Cuando uno viaja por toda la UE

con una tarjeta de identidad empieza a sentirse ciudadano del mundo y no va a buscar las

fronteras de su pequeña localidad. Ahora bien, la gran pregunta es: ¿por qué el esloveno no

quiso ser yugoslavo y luego europeo, sino que prefirió separarse de la federación y ser

europeo? Por una parte fuimos testigos de un egoísmo nacional y por otra de la tendencia

a un internacionalismo que no admite tanto la insistencia en lo nacional. La explicación

económica y financiera es bien conocida, pero a un nivel cultural quedarán muchas dudas.

Queda por verse si el catalán preferirá comunicar con Bruselas directamente o lo seguirá

haciendo vía Madrid.

Por último, lo de la preponderancia serbia en la federación yugoslava es un cliché ya

desgastado. Véanse las listas de quiénes fueron Presidentes de la Presidencia, del

Parlamento, del Gobierno, Ministros de Gobernación, de Exteriores y de Defensa en los

últimos veinte años de vida de la federación yugoslava. Y no olvidemos que el Ejército

Yugoslavo entró en Eslovenia en los primeros días de la desintegración por orden del primer

ministro Ante Markovic (croata) y con soldados que no tenían municiones, y que tuvo más

bajas que la Defensa Territorial de la república noroccidental, prevenida a los pocos minutos

de tomada la decisión por el Vicepresidente del Gobierno Zivko Pregl (esloveno). El que

los dirigentes serbios no supieran reaccionar adecuadamente ante la crisis y que desde esos

momentos en adelante muchas de sus decisiones fueran errores históricos graves es otra

cosa.

11 de octubre de 2005 César Luis Díez

El intercambio de mensajes de hoy me parece muy constructivo, ya que creo que presenta

Page 146: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 157 -

una de las claves para entender el proceso de desintegración de la RSFY: la propia identidad

de la misma. Si no entiendo mal, según la opinión de Jairo Dorado Yugoslavia era “una

Serbia extendida”, mientras que Dalibor Soldatic piensa lo contrario: se fundaba sobre la

convergencia de intereses de una clase política común perteneciente a todas las repúblicas.

Claro está, estas dos opiniones enfocan de manera diferente el comienzo del proceso de

desintegración. Para Dalibor, éste se origina con actores políticos mezclados (“no olvidemos

que el Ejército Yugoslavo entró en Eslovenia en los primeros días de la desintegración por

orden del primer ministro Ante Markovic (croata) y con soldados que no tenían

municiones, y que tuvo más bajas que la Defensa Territorial de la república noroccidental,

prevenida a los pocos minutos de tomada la decisión por el Vicepresidente del Gobierno

Zivko Pregl” ); mientras que para Jairo la oposición “democracia-separación vs. dictadura

statu quo” es la que podría explicar una reacción de las repúblicas “periféricas” frente a la

“centralista”.

Creo que ambas opiniones, si no las he entendido mal, pueden llevarse al terreno de la

comparación. España se forma, es cierto, sobre la base de hegemonía castellana (una Castilla

que se expande); pero se consolida con unas elites políticas vascas, navarras, etc. que

formarán la burocracia imperial y después permanecerán en los procesos de “decadencia”

hasta la llegada de los nacionalismos del XIX y principios del XX, que bien podrían ser el

fruto de una clase burguesa deseosa de consolidar ciertas parcelas de poder. Ahora bien, la

RSFY, ¿habría seguido un camino similar? ¿Habría surgido del aprovechamiento de una

situación política especial (bélica y posbélico) por parte de una fuerza unificada (Tito y el

Partido Comunista) que aplastó los sentimientos nacionalistas - tanto de uno de otros -, y

habría desaparecido cuando las elites políticas huérfanas de un poder central se refugiaron

en unos renovados sentimientos nacionalistas para consolidar espacios propios de poder?

Y yo en este punto vuelvo a una de mis ideas preferidas: las ideologías políticas predomi-

nantes en un momento dado en cada uno de los bandos enfrentados me parecen muy

próximas. O, acaso, ¿hay una gran diferencia ideológica entre lo postulado por el

movimiento chetnik serbio y el ustasa croata?. La cuestión entonces sería entender el

proceso por el cual los antiguos comunistas fueron mutando e integrándose en las

Page 147: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Nación y Estado

- 158 -

estructuras de poder emergentes. Aparte, claro está, de explicar el caso esloveno, el

“proceso de identificación musulmán”, etc.

12 de octubre de 2005 José-Miguel Palacios

Hay una novela de Margaret Drabble, The witch of Exmoor, que empieza con una especie

de juego intelectual en una reunión familiar. Se trata de imaginar las bases de funcionamien-

to de una posible sociedad perfecta con la condición de que no podemos saber qué lugar

vamos a ocupar en ella, ni siquiera cuáles van a ser nuestras capacidades (no sabremos si

vamos a ser altos o bajos, rubios o morenos, rápidos o lentos, listos o tontos).

Es muy difícil llegar a ese grado de abstracción. En la mayor parte de las ocasiones, estamos

asumiendo que seguiremos siendo nosotros mismos, de forma que las reglas ideales que

imaginamos son, en realidad, reglas según las cuales resultamos beneficiados.

El debate sobre nación y Estado, en particular cuando llega a la comparación explícita o

implícita de los casos yugoslavo y español, lo hemos intentado en varias ocasiones y ha

resultado, en general, estéril. Los argumentos que hemos expuesto, muchos de ellos muy

válidos, han estado muy mediatizados por la solución que a cada uno de nosotros nos

parecía la mejor, la más justa, la más deseable. Por ello, en lugar de buscar la verdad (o la

mejor verdad posible) nos hemos limitado a proporcionar artillería intelectual al que

consideramos nuestro bando.

Creo que si queremos tener más éxito en esta ocasión deberíamos enfocar el debate según

las reglas de Drabble. Es decir, olvidarnos de cuál es el resultado que nos conviene que

salga, o que consideramos mejor, y limitarnos a observar la realidad con los ojos más fríos

y neutros que podamos. Es muy difícil, pero quizá podamos conseguir aproximaciones

válidas.

Partiendo de esta premisa, creo que son tres los puntos a los que un estudio comparativo

desapasionado nos podría permitir hallar respuesta:

Page 148: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 159 -

a) En las nuevas condiciones, ¿es racional la división de Estados de tamaño medio, como

Yugoslavia o España, y la formación de otros más pequeños en su lugar? Hace unos meses

hablábamos del libro de Alesina y Spolaore The size of nations y creo que las conclusiones

de estos autores nos podrían servir como guía. Recordaremos que ellos afirmaban que hay

una tendencia a que Estados más pequeños sean viables, ya que las políticas en las que son

más evidentes las economías de escala (seguridad, mercado único) o bien tienen menos

importancia que en otros tiempos, o bien están ya resueltas con la globalización. Según estos

autores, se tiende a formar un Estado nuevo cuando se gana en homogeneidad, y esta

secesión puede no llegar a efectuarse si los costes de transacción fueran muy altos.

En Yugoslavia, la secesión eslovena era fácil por el criterio de homogeneidad, pero por ese

mismo criterio, las de Bosnia-Hercegovina o Montenegro resultaban muy problemáticas (no

se ganaba homogeneidad con la separación).

El factor coste es también importante. Si en 1991 se hubiera sabido con exactitud cuánto

iba a costar, es posible que algunas de las decisiones de entonces (en todas los bandos, en

todos los sentidos) no se hubieran tomado.

Una primera vía de análisis comparado sería, pues, examinar la homogeneidad de posibles

nuevos Estados y los previsibles costes de transacción.

b) El ejemplo de 1991 nos ilustra un problema real: más importante que la homogeneidad

real o los costes de transacción razonablemente esperables son la homogeneidad percibida

por los que van a tomar las decisiones y su propio cálculo de los costes de transacción.

Una segunda línea de análisis sería el estudio de la percepción de la realidad por parte de los

principales actores políticos.

c) Por último, un factor esencial en la formación de nuevos estados es el reconocimiento

internacional. Gracias al reconocimiento internacional existe una Croacia que está a un par

de pasos de ingresar en la UE. Sin reconocimiento internacional, Transnistria o Chipre del

Norte llevan años y años moviéndose en un ambiguo terreno de nadie. En este sentido, una

tercera línea de análisis consistiría en intentar anticipar la reacción de los factores

Page 149: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Nación y Estado

- 160 -

internacionales más importantes.

En Yugoslavia se ha dicho mucho que algunas potencias europeas quisieron la división del

país e hicieron todo lo posible por conseguirla. No es verdad. Tanto Europa como Estados

Unidos sostuvieron que estaban por una Yugoslavia unida, y hasta un cuarto de hora antes

del momento decisivo creyeron que iban a apoyar la unidad de Yugoslavia. Luego la

situación fue distinta.

13 de octubre de 2005 Jacinto Benito

El caso de España es, estoy plenamente de acuerdo, muy distinto; precisamente porpertenecer a la Unión Europea y porque en la UE las fronteras cuentan cada vezmenos, mientras que resulta más importante un espacio común.

El caso de España no tiene nada que ver con el de la extinta Yugoslavia. Porque,

sencillamente, en el País Vasco y Cataluña la opción independentista es minoritaria. Ni

siquiera en la Comunidad Autónoma Vasca (excluida Navarra, por tanto) la independencia

obtendría un apoyo popular mínimamente suficiente (mayoría absoluta de los votos válidos

emitidos). Y Cataluña y el País Vasco, en cualquier caso, nunca serían otra Eslovenia, sino

una Bosnia-Hercegovina. Esto es, un país traumatizado para muchos años por haber sufrido

una guerra injusta a causa del egoísmo de su clase dirigente. En ambas regiones españolas

hay una amplia comunidad que no reconoce más patria que la española.

Eslovenia, Croacia y Macedonia, a pesar de todo, se han convertido en Estados estables y

viables. Pero en España aún recordamos la tragedia que tuvo lugar en Bosnia-Hercegovina.

Para los nacionalistas vascos o catalanes la independencia de esos pequeños Estados puede

que parezca un logro. Pero para el español medio fue algo inútil, que sólo sirvió para que

la antigua clase dirigente comunista se perpetuase en el poder.

Page 150: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 161 -

13 de octubre 2005 Jairo Dorado

¿Y Galicia, con una población muy heterogénea, con 68% de la población que usa a diario

una lengua distinta al castellano y donde el nacionalismo político todavía no ha cuajado

plenamente, pero con una consciencia nacional plena?

¿Es Macedonia el supuesto más similar debido a su pobre situación económica?

¿No son acaso las decisiones de independencia por parte de la población una medida

desesperada, un último recurso?

13 de octubre de 2005 Jacinto Benito

¿No son acaso las decisiones de independencia por parte de la población unamedida desesperada, un último recurso?

Por supuesto que no. Son un último recurso de la clase dirigente para conservar, o agrandar,

su poder.

En la extinta Yugoslavia, los comunistas se convirtieron, de la noche a la mañana, en

nacionalistas. Durante décadas adormecieron las ideas nacionalistas en beneficio de un

“internacion alismo” que no estorbaba, en nada, a sus intereses. Yugoslavia se acabó

disolviendo por los mismos motivos que la Unión Soviética: porque el partido único

marxista-leninista se bloqueó y se convirtió en una estructura de poder totalmente inútil.

Porque, en definitiva, ya no buscaba el desarrollo de su país, sino el enriquecimiento de sus

miembros. Así, el comunismo dejó de ser ideología de Estado, ya que no fue capaz de

garantizar, en ambos países, su propia viabilidad económica.

El nacionalismo radical fue el último recurso de la clase dirigente yugoslava para continuar

en el poder. Ellos conocían muy bien la mentalidad profunda de sus respectivos pueblos.

Así, por ejemplo, Milosevic apenas tuvo escrúpulos en utilizar el mito de Kósovo o la

Page 151: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Nación y Estado

- 162 -

quimera de una Gran Serbia, con el fin de mantenerse en el poder. Y lo mismo se hizo en

Eslovenia, Bosnia-Hercegovina, Croacia y Macedonia.

En el caso yugoslavo fue donde mejor podía verse ese total divorcio entre los dirigentes

políticos, su ideología, los sentimientos nacionalistas colectivos y las realidades concretas

de las personas. Porque en Yugoslavia no escaseaban los matrimonios mixtos, por ejemplo.

Y no creo que hubiera mucha animosidad por motivos religiosos, por razones evidentes y

desde un punto de vista subjetivo.

La secesión es, efectivamente, una medida desesperada. Pero no porque estén en juego los

derechos nacionales de un determinado pueblo (lo cual no sucede en España, en modo

alguno), sino porque ésa es la única manera que tuvieron algunos de conservar sus

poltronas. Y una cosa son, evidentemente, los casos de Estonia, Letonia y Lituania, que

fueron Estados soberanos antes de 1940, y otra muy distinta unas repúblicas que sólo

existen desde 1945, como es el caso de Eslovenia.

13 de octubre de 2005 Jairo Dorado

No estoy de acuerdo con denominar dirigentes comunistas a la clase gobernante de

Yugoslavia. Primero, porque creo que es un binomio raro, comunista-dirigente, y segundo,

porque es difícil no ver un matiz tremendamente nacionalista en Yugoslavia, a diferencia de

otros estados del llamado bloque oriental. Yo creo que sí existía un nacionalismo yugoslavo,

que permitía agrupar a las distintas nacionalidades y nacionales (narodi o narodnosti) de

Yugoslavia. Considerar que desde el 55 Yugoslavia es un país comunista me parece una

quimera. Yo lo veo más como un Estado socialista con capital occidental.

Por eso yo creo que sí hay un pequeño parecido entre España y Yugoslavia: en mi opinión

existe - existía - un nacionalismo gobernante, un concepto de unidad. En un caso de unidad

sobre lo existente y en el otro de unidad con lo existente. Y seguro que pocos están de

acuerdo con este punto de vista.

Page 152: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 163 -

No veo tampoco compatible entonces el caso de que una clase política tenga tantos

problemas en cambiar de parecer. A fin de cuentas, la elección es simple, ser nacionalista de

esto o de aquello.

Sobre Macedonia: sí creo que es difícil poner de acuerdo a muchas personas sobre si existía

antes de 1945 una nacionalidad, carácter nacional o identidad macedonia nítida. En

Bosnia-Hercegovina sin duda existía, aunque con un matiz muy diferente al concepto

excluyente de identidad bosnia.

Y por último, antes de 1945 Eslovenia fue un Estado independiente, concretamente durante

dos-tres meses de 1918 y 1919 (si mal no recuerdo, de noviembre a febrero) aunque el

objetivo de Estado fue la traslación de soberanía desde el Imperio Austro-húngaro al todavía

no creado Reino de los Serbios, Croatas y Eslovenos. Así lo cita Stavrianos en su

monumental The Balkans from 1453 to the present.

13 de octubre de 2005 Jacinto Benito

No estoy de acuerdo con denominar dirigentes comunistas a la clase gobernantede Yugoslavia. Primero, porque creo que es un binomio raro, comunista-dirigente,y segundo, porque es difícil no ver un matiz tremendamente nacionalista enYugoslavia, a diferencia de otros estados del llamado bloque oriental.

Yugoslavia, hasta donde sé, tenía un régimen autoritario, por no decir totalitario. El poder

lo controlaba la Liga de los Comunistas de Yugoslavia, partido único de ideología

marxista-leninista. Cuestión aparte es la existencia de fuertes peculiaridades en el modelo

socioeconómico yugoslavo con respecto al de otros países “socialistas”. Los comunistas

yugoslavos, por tanto, eran los dirigentes de la sociedad en aquel momento. Aunque parezca

una contradicción que un comunista “pueda ser” un dirigente, lo cierto es que ésa ha sido

la historia del comunismo, guste o no. ¿Comunismo según el modelo soviético? ¿Titismo?

¿Estalinismo? La verdad es que el régimen del general Tito tenía sus semejanzas con el de

Stalin. Y, seguramente, la simple formulación de un modelo socioeconómico peculiar en

Yugoslavia (igual que pasó en Polonia), distinto al del resto de los países de Europa

Page 153: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Nación y Estado

- 164 -

Centrooriental, incentivó un marcado nacionalismo estatal.

14 de octubre de 2005 Jairo Dorado

Seamos sinceros, todos los Estados europeos, todos, tienen una ideología nacionalista,

excepto aquellos heterogéneos, que son los memos. La diferencia es si el nacionalismo está

dentro del aparato del Estado o no. Yugoslavia, igual que España, tenía un importante

componente nacionalista para cohesionar bajo una misma bandera o idea un conjunto

divergente.

Hay un fuerte componente nacionalista incluso en la ideología comunista. El nacionalismo

está presente en el aparato de Estado de cualquier nación europea.

Por cierto, no todos los nacionalismos vieron las independencias como un paso positivo...

Page 154: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 165 -

Lenguas y literaturas nacionales

Un comentario del Profesor Dalibor Soldatic, sobre si en el futuro habría que hablar

de literatura catalana o bien de literatura española en lengua catalana desencadenó un

debate acerca de la existencia o no de literaturas nacionales. Los participantes

utilizaron con apasionamiento los numerosos ejemplos que tanto España como la

antigua Yugoslavia ofrecen para la reflexión.

31 de octubre de 2005 Jairo Dorado

Yo no creo que se pueda nacionalizar las literaturas, ya que son un producto directamente

cultural. Andric es un escritor de literatura serbia, no yugoslava. Más dudas me plantea Kis,

aunque también lo enmarcaría en la literatura serbia. Por la misma regla de tres, un croata

puede estar en la esfera cultural serbia. Personalmente, no considero a Cela literatura

gallega, a no ser en el apéndice de literatura infantil. Lo que es injusto, a todas luces, es

empaquetar una creación cultural con una etiqueta nacional.

31 de octubre de 2005 Dalibor Soldatic

Creo que sin quererlo he tocado un tema delicado y a la vez interesante. Para los que

estudiamos la literatura el tema puede ser apasionante. Simplemente porque hay una serie

de criterios que se aplican de una manera muy distinta en distintos casos.

Yo no soy abogado de los nacionalismos y los que me conocen saben muy bien que el

nacionalismo es la última causa que abrazaría. Todo lo contrario, los nacionalismos de otros

me han amargado la vida. Sin embargo, hay que admitir que resulta necesario adoptar

criterios objetivos, libres de pasiones nacionalistas.

Page 155: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Lenguas y literaturas nacionales

- 166 -

No veo ningún mal en decir literatura española en lengua catalana. Desde el punto de vista

de los madrileños todo puede ser tachado de literatura española, pero entre los catalanes ya

habrá quien no esté completamente de acuerdo. Pero el término que he utilizado es de lo

más correcto. Toma en cuenta la existencia de un país, España, y el hecho de que esa

literatura esté escrita en otra lengua.

El caso yugoslavo no se puede comparar porque aquí hay de todo. Ivo Andric es,

indiscutiblemente, el mejor ejemplo de ello. Era originario de Bosnia, comenzó escribiendo

en la variante occidental, o sea croata, del idioma serbocroata, para pasar luego a la variante

oriental, o sea serbia, por considerarla “más literaria”. En estas circunstancias, todos pueden

reclamarlo como propio. Excepto, claro, los musulmanes de Bosnia, a lo que nunca les

gustó la imagen de su historia que daba Andric.

Otro ejemplo más divertido aún es el de Mesa Selimovic, autor de una novela preciosa, El

derviche y la muerte. Ya su nombre muestra que es musulmán, originario de Bosnia, y, sin

embargo, él se ha declarado como serbio y considera que su obra pertenece a la literatura

serbia. ¿Qué hacemos? ¿Qué criterio podemos adoptar?.

Julio Cortázar siempre ha sido considerado un escritor argentino, a pesar de haber pasado

en Europa la mayor parte de su vida madura de escritor.

No me acusen, por tanto, de introducir nacionalismos o de “balcanizar” la literatura. Estoy

buscando, simplemente, criterios que puedan aplicarse de un modo universal. El hecho de

que la literatura sea patrimonio de la humanidad es innegable. Sin embargo, estudiamos la

literatura inglesa, la francesa, la italiana, la española, etc. Por algo será.

1 de noviembre de 2005 César Luis Díez

Cuando consultamos manuales, enciclopedias, internet, etc. encontramos sintagmas “la

literatura X”, donde X representa a adjetivos diferentes. Veamos una pequeña tipología:

Page 156: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 167 -

1) X = adjetivos derivados de países: “literatura española”, “literatura francesa”, “literatura

norteamericana”, etc.

2) X = adjetivos derivados de entidades geográficas: “literatura hispanoamericana”,

“literatura africana”, etc.

3) X = adjetivos derivados de lenguas: “literatura latina”,“literatura persa”, “literatura

hebrea”, etc.

4) X = adjetivos derivados de religiones: “literatura judía”,"literatura cristiana”, etc.

5) X = adjetivos derivados de “adscripciones de los autores a colectivos”: “literatura

afroamericana”, “literatura femenina”, “literatura homosexual”, etc.

En fin, seguro que la lista no está completa y que podría ser reformulada de muchas

maneras, pero me parece una base para debatir sobre “la percepción de la literatura” desde

varios grupos de profesionales, ya que creo que las prioridades son diferentes. Ejemplos:

� Un grupo que tenga la literatura como uno de sus objetivos profesionales -

historiadores de la literatura, críticos, traductores - hará prevalecer el rasgo 3

(lengua). En este sentido, hablarán de “literatura serbia” cuando se trate únicamente

de literatura escrita en lengua serbia. Y no hablaran de literatura yugoslava, ya que

el “yugoslavo” no es una lengua.

� Un grupo que su interés sea el análisis histórico o político - historiadores,

politólogos, analistas - hará prevalecer el 1 (país), ya que permite la interacción de

la literatura con otra serie de productos culturales dentro de un marco cronológico

determinado. De esta manera, por ejemplo, este grupo podría hablar de la “literatura

yugoslava de los sesenta” y de su influencia en “la política yugoslava de la época”

o viceversa.

� Un grupo que su interés sean los estudios religiosos - teólogos, historiadores de la

religión - hará prevalecer el 4 (religión) y podrá hablar de “literatura musulmana de

Page 157: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Lenguas y literaturas nacionales

- 168 -

Bosnia”, o de “literatura judía de los Balcanes”.

� Un grupo cuyo objetivo sea la comunicación - periodistas, comunicadores, etc. -

seguramente optará por adjetivos del tipo 5 que permitan titulares impactantes o

asociaciones rápidas de sus lectores. Así se podría hablar de “literatura femenina

musulmana”, o “literatura yugoslava” (ya que la mayoría de lectores identifican

Yugoslavia, pero no su composición política o étnica).

Me parece que la conexión entre “percepción de la literatura” y “expresión lingüística de esa

percepción” (uso de los adjetivos) nos puede ayudar a orientarnos en el debate sobre este

tema de una manera que se dejen a un lado concepciones “subjetivas”.

1 de noviembre de 2005 Roberto Barral

Por supuesto que se puede nacionalizar la literatura, y precisamente que sea un producto

cultural es uno de los pretextos más utilizados para hacerlo. ¿Cuál es acaso el argumento

más esgrimido por los nacionalismos como base para su ideología? La existencia de una

cultura “distintiva” en cualquier ámbito; ya sea la literatura, la lengua o la iconografía

religiosa, el qué es lo de menos, sirve, con una buena propaganda, para diferenciarnos del

vecino.

Por ejemplo el caso más claro es el del idioma, lo que Jairo ha citado de “español vs

castellano”. ¿Por qué el castellano es conocido como español? Pues muy sencillo, porque

es la lengua mayoritaria de la península y porque además es la común a toda la península.

De hecho, si dejamos de mirarnos el ombligo un rato y echamos un vistazo a nuestro

alrededor, veremos que en Francia el bretón es una lengua con entidad propia y diferenciada

del francés; sin embargo, nadie se siente ofendido porque la lengua mayoritaria sea llamada

francés. Lo mismo sucede con el bávaro en Alemania o el galés en Gran Bretaña; por no

hablar de la falta de unificación entre las variantes del italiano, o el caso del inglés en la

India, que es la lengua común y oficial para todas las regiones simplemente porque es la

Page 158: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 169 -

lengua de comunicación de toda la población, independientemente de las lenguas locales que

deben ser igualmente respetadas y utilizadas en su contexto geográfico, sin perjuicio de la

común.

Alfonso X escribía en gallego un género genuinamente gallego, “las cantigas”. Está claro,

por tanto, que su obra pertenece inequívocamente a la literatura gallega. Desde luego que

casos como el suyo no abundan, porque es necesario un amplio dominio del lenguaje y la

cultura para escribir en un idioma que no es el tuyo materno. En cualquier caso, no se trata

de una condición sine qua non. Quiero decir con esto que el empleo de un idioma o de un

tipo de literatura desborda las fronteras geográficas, es más que eso.

César tiene razón en que las etiquetas sirven para simplificar y agrupar obras autónomas

según determinados criterios, elegidos en un momento dado, por lo que éstos pueden variar,

según lo que nos interese distinguir. Con lo cual es únicamente un elemento de consenso,

una convención, no signo de una nacionalidad.

2 de noviembre de 2005 Jairo Dorado

Hay, desde mi punto de vista, dos enfoques en el estudio de las literaturas. Un enfoque

filológico, que considera la literatura como elemento de creación cultural de origen nacional

y lingüístico. De ahí que se hable de literatura española - sea en la lengua que sea - y de

literatura hispanoamericana. Es el enfoque tradicional, como bien indicaba el profesor

Soldatic, y queda patente al hablar de literatura española, italiana, francesa, etc. Sin

embargo, nunca he oído hablar de literatura británica.

Hay un segundo enfoque, de raíz más filosófica y con más implantación en Gran Bretaña.

Es el que podríamos llamar “traductológico”, que ve en la literatura un producto cultural

con un vehículo de expresión lingüístico cultural. Es un enfoque en algunos aspectos

radicalmente opuesto al enfoque tradicional filológico, ya que, por ejemplo, considera una

obra traducida tan “propia”de un polisistema literario como una obra original. Es una

escuela muy implantada en sistemas literarios comúnmente denominados menores, por

Page 159: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Lenguas y literaturas nacionales

- 170 -

ejemplo, en Israel. Guideon Toury o Alexis Nouss son algunos de sus representantes.

Si el planteamiento nacional fuese correcto, hay muchos escritores de literaturas que ya no

existen (Andric, producto de la literatura de Yugoslavia, un país desaparecido). Sin

embargo, es difícil que alguien niegue lo práctico que resulta hablar de literatura serbia, y

de un periodo yugoslavo dentro de ella, o de literatura rusa con su periodo soviético.

2 de noviembre de 2005 Jacinto Benito

En cuanto a la extinta Yugoslavia, yo me quedaría con el dato de que serbios, croatas y

bosnios hablan una misma lengua. Otra cuestión es que la misma se escriba con tal o cual

alfabeto, o que quien la habla practique tal o cual religión o pertenezca a tal o cual

tradición cultural. La cultura de uno o varios pueblos es fiel reflejo de la realidad más

íntima de los mismos. Los politiquillos al uso poco pueden aportar a esa sabiduría popular

de siglos. En el caso yugoslavo, de hecho, apenas han aportado algo, aparte de odio. Los

pueblos europeos forman entre ellos una fina red. Yugoslavia, por ejemplo, era como

Hungría: un Estado entre Oriente y Occidente, un puente entre dos mundos.

4 de noviembre de 2005 Dalibor Soldatic

Lo que en esencia, desde el punto de vista lingüístico es un solo idioma con variantes se

ha convertido ya en serbio, croata, bosnio y ahora vamos a tener también el montenegri-

no. Es decir cuando la política prevalece sobre la lingüística, todo es posible.

4 de noviembre de 2005 José-Miguel Palacios

Lo que en esencia, desde el punto de vista lingüístico es un solo idioma con

Page 160: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 171 -

variantes se ha convertido ya en serbio, croata, bosnio y ahora vamos a tenertambién el montenegrino.

The times they are a-changing, que diría Bob Dylan. Cuando nos encontramos que

actores como Bogdan Diklic actúan tanto en películas serbias como croatas o bosnias,

cuando Miki Manojlovic es protagonista de una película croata, ¿dónde queda lo de

lenguas distintas?

Acabo de ver una película bosnia con Diklic como protagonista. Habla ijekavski, dice

bolan e imita bastante bien el típico tonillo bosnio. En eso ha quedado la divergencia de

las lenguas yugoslavas. Más o menos, en el mismo punto en que estaban las cosas antes

de que ocurriera lo que nunca debió ocurrir.

En estas cosas de las que discutimos se puede llegar a cometer bastantes desatinos en un

momento (en unos años) de exaltación. Lo que pasa es que las cosas son como son y la

racionalidad tiende a imponerse.

5 de noviembre de 2005 Roberto Barral

Yo creo desde luego que se puede sacar algo útil de todo esto y es que, cuando se impone

una conducta visceral a una racional, desaparece el sentido común y empieza a aflorar el

absurdo. Personalmente creo que en el equilibrio o término medio está la virtud.

Creo que en el caso de la antigua Yugoslavia, a nadie que conozca mínimamente las

lenguas se le escapa que se trata de la misma con variantes dialectales (se llamen como se

llamen). Claro que si lo demuestras, lo próximo que van a hacer es tratar de disfrazar la

lengua para que se parezca lo menos posible a sí misma, y esto siempre en perjuicio de los

ciudadanos. Porque, como ya hemos dicho, la principal finalidad de una lengua es la

comunicación, y todas estas maniobras dificultan la comunicación entre los países de la

antigua Yugoslavia, en los cuales un porcentaje elevado de ciudadanos todavía tiene

familia y otros lazos.

Page 161: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Lenguas y literaturas nacionales

- 172 -

Y como ejemplo de lo pueril que se puede llegar a ser, os contaré una anécdota que me

ha sucedido con un individuo de uno de los países de la antigua Yugoslavia (para no herir

susceptibilidades no voy a especificar el origen) el cuál al referirme a él en una de las

variantes de dicha lengua, me contestaba sistemáticamente en inglés; yo continuaba en

dicha variante, y él en inglés. Así que yo le dije: “si me entiendes, ¿por qué no me

contestas en tu lengua?” Y su respuesta fue: “hago un enorme esfuerzo por entenderte,

pero no creo que tú puedas entenderme a mí, porque eres extranjero y no hablas mi

idioma”. A lo cual yo le contesté: “hombre, yo he estado viajando por todos los países de

la zona y nunca he tenido ningún problema para entenderme en idioma local con ninguno

de ellos; pero tienes razón, seguro que a ti no voy a entenderte”. Y seguimos nuestra

conversación de locos.

Porque está claro que si no hay voluntad de entenderse, un serbio y un croata no lo harán,

aunque hablen la misma lengua, mientras que un español y un italiano, por ejemplo, con

voluntad y un poco de esfuerzo, pueden hacerlo utilizando cada uno sus lenguas

respectivas. Así que cuando aparecen ese tipo de insensateces, es mejor ser prácticos y

seguirles la corriente.

5 de noviembre de 2005 César Luis Díez

Un lenguaje es un código que sirve para comunicarse. Una lengua es un código determi-

nado. Estas definiciones son exactas y muy generales. Para concretarlas y poder usarlas en

la descripción de las distintas realidades que nos rodean hay que dotarlas de “adjetivos”

(“lengua X”, “lengua Y”, etc.). En nuestra lista de debate, se ha intentado abordar el tema

del “serbio”, “croata”, “serbocroata”, “”croatoserbio”, “bosnio”, “lengua local”, “lengua

materna”, etc.; y yo creo que lo primero que hay que hacer es definir esta(s) realidad(es)

como “objeto(s) de estudios”, y como tal(es) con una naturaleza(s) interdisciplinar(es)

sobre la(s) que influyen perspectivas temporales y culturales - algo muy similar a lo que

propuse para el caso de la “literatura yugoslava” -.

Page 162: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 173 -

Intentaré ser mas claro. Como lingüista, después de analizar unas cuantas variedades

habladas en una zona geográfica (enclavada dentro de lo que se denomina Balcanes),

puedo asegurar que se trata de una serie de “dialectos” de la familia eslava. Ahora bien,

¿cómo denomino a esos “dialectos” que se han convertido en mi objeto de estudio? Pues,

quizá como lingüista teórico, no tendría problema en darles etiquetas totalmente

arbitrarias (“dialecto A, B, C, etc.”); aunque normalmente eso no se hace y se recurre a

“adjetivos” acuñados por la tradición y que tiene su origen en objetos de estudio propios

de la geografía, la etnografía, la historia, la política, etc. De esta manera, surgen expresio-

nes como “lengua macedonia”, que podría ser tanto “la lengua hablada por los macedo-

nios” como “la lengua hablada en Macedonia”. Una cosa más: estos “dialectos” no viven

en el aire, sino que están inmersos en realidades culturales y políticas determinadas, en

momentos históricos determinados. Por ejemplo, al surgir centros de prestigio cultural y

social (características que normalmente se asocian a un gran influencia política), se van

creando los llamados “estándares lingüísticos” y con ellos las instituciones culturales que

apuntalan las dimensiones sociales, políticas e históricas de una lengua (“gramáticas”,

diccionarios, academias, etc.).

Seré más concreto todavía. Si mis compañeros de lista me preguntan, a día de hoy, si

existe el serbocroata, mi contestación será: “pues no sé, depende de la perspectiva que

adoptemos”. ¿Por qué? Porque el “serbocroata” es un “objeto de estudio” y podrá existir

(o ser utilizado) en diversos análisis, si lo creemos necesario. Como lingüista, me podría

ser útil esa etiqueta para referirme a toda una serie de dialectos emparentados entre sí y

con una gran capacidad de inteligibilidad entre ellos. Desde un punto de vista político, y

en 2005, no podría usarlo, ya que la República de Croacia llama a su lengua “croata” y la

de Serbia a la suya “serbio”, con el problema político de cómo denominar a la lengua que

se habla en Bosnia-Hercegovina. Igualmente, como historiador, podré seguir la evolución

y el uso de los términos “serbocroata”, “croatoserbio” como instrumentos para forjar una

identidad cultural yugoslava durante el período de la RSFY. Es decir, debería siempre

señalar mi perspectiva (y el marco temporal en el que se inserta) para saber qué utilización

de la terminología me va ayudar a comprender mejor los problemas a los que me enfrento.

Page 163: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Lenguas y literaturas nacionales

- 174 -

6 de noviembre de 2005 Jairo Dorado

De acuerdo. Como lingüista, es una cuestión nominal. Ahora bien, un pequeño repaso de

la cuestión nominal a través de la historia puede deparar sorpresas. ¿Qué nombre recibía

la lengua antes de 1918? Y no olvidemos que, si no me equivoco, en el siglo XIX los

croatas eran más paneslavistas (Gaj) que los serbios (Karadzic).

La lingüística habla (desde Heinz) sobre lenguas por distanciamiento y lenguas por

construcción. No nos olvidemos que hay otros muchos factores. Y uno es fundamental,

cómo desean los hablantes que se denomine el idioma y de qué grado de independencia

quieren dotarlo. Por mucho que haya gente que diga que el gallego es portugués (y

ciertos postulados de esa afirmación no son falsos), los hablantes de uno y otro lado

tienen la última palabra. Digan lo que digan lingüistas y universidades. La ciencia, más de

una vez, se aleja de la realidad.

8 de noviembre de 2005 Dalibor Soldatic

¿Cómo lograr que el espíritu de comunidad no anule la percepción de la diferencia?

Yugoslavia se desintegró precisamente por haber permitido en un momento dado que lo

nacional local (esloveno, croata, serbio, musulmán) prevaleciera sobre lo común

(yugoslavo). Sigo creyendo que de haber sido todos yugoslavos de origen serbio, croata,

esloveno etc. ese país hubiera tenido alguna oportunidad. En cuanto se desintegraron los

factores aglutinantes, como el Partido Comunista, el Ejército y la Policía, brotaron todos

los nacionalismos posibles. Un capítulo aparte sería el de considerar el papel de los

intelectuales en el asunto, ya que la cultura fue precisamente el campo por excelencia de

la afirmación de la identidad nacional, pero también de los nacionalismos.

Por otra parte el caso de Kósovo es particularmente interesante en este contexto. En la

antigua Yugoslavia, Kósovo, como región autónoma, no sólo tenía derecho a usar la

lengua albanesa y la bandera albanesa, sino que disponía de una Universidad y de todo un

Page 164: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 175 -

sistema educativo con dos secciones paralelas, serbia y albanesa. Había, además, una

Biblioteca Nacional, un Teatro Nacional, televisión, radio, diarios y revistas en lengua

albanesa. Y, de todos modos, protestaron en 1981 y en 1989. Kósovo no es un problema

creado por Milosevic. El problema de Kósovo preocupa Serbia desde hace decenios.

Resulta que respetando a tal grado los derechos de los kosovares se ha creado un ghetto.

Gente con formación universitaria en lengua albanesa no podía trabajar fuera de su medio

ambiente lingüístico. Y una economía subdesarrollada como la de Kósovo no podía

absorber tanta mano de obra con formación universitaria o con diploma de liceo. Así que

acabaron lanzándose a la calle.

25 de noviembre de 2005 Enric Gil y González

El Parlament de Vojvodina té sis llengües oficials.

El Parlament de la Província Autònoma de Vojvodina (Sèrbia i Montenegro) haaprovat el reglament d'usos lingüístics, que permet l'ús de les sis llengües oficialsde la regió. Amb aquesta decisió, totes les minories que viuen en aquest territori,que serà Regió Europea de l'Any el proper 2006, poden parlar la seva llengua ala cambra, la qual és traduïda posteriorment a la resta d'idiomes oficials. Les sisllengües que es poden utilitzar són: serbi, croat, hongarès, eslovac, romanès irutè.

Page 165: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 177 -

Reseña y crítica de libros

Terminología balcánica

GARDE, Paul. Le discours balcanique: les mots et les hommes. Ed. Gayard.

26 de enero de 2005Julio Garrote

Para quien lea en francés, quisiera recomendar un libro muy interesante, cuyo objeto es,

precisamente, aclarar o explicar todos los términos que se emplean habitualmente en esta

ciencia de la balcanología.

Paul Garde es un eslavista, hombre ya mayor, catedrático de la Universidad de Avignon, y

buen conocedor del mundo balcánico. Como libro de consulta es muy claro, conciso y

esclarecedor.

Una novela de Legija

ULEMEK, Milorad (Legija). Gvozdeni rob. M.Books/Alfa, 2004.

13 de febrero de 2005César Luis Díez

Una traducción aproximada del título podría ser “el esclavo de acero”, o “el esclavo

irreductible” y, en principio, cualquiera podría esperar que se tratara de un libro de

vivencias, o de las memorias de uno de los principales encausados en el caso de la muerte

de Zoran Djindjic. Sin embargo, y aquí viene la sorpresa, se trata de una novela de trama

bélica.

Lo que también resulta bastante significativo (además de la tirada de 70.000 ejemplares) es

el texto de la contraportada del libro: Milorad Ulemek-Legija, nacido en 1968 en Belgrado,

en cuyo asfalto se crió, a mediados de los ochenta se alistó en la Legión Extranjera francesa,

Page 166: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Reseña y crítica de libros

1 En la propia portada se indica “Knjiga pisana u zatvoru” (libro escrito en la cárcel).

- 178 -

dentro de la cual consiguió las mayores distinciones de guerra. A principios de los noventa

volvió a la patria con el fin de defender al pueblo serbio. En 1996 fue promovido como a

Comandante de la unidad de élite serbia (JSO). Después del 2000 se convierte en una

víctima de las intrigas políticas. ACTUALMENTE SE ENCUENTRA EN LA PRISIÓN

CENTRAL (CZ)”.

Como todavía no he terminado la lectura del libro no puedo comentar más sobre el mismo,

auque sí me gustaría decir algo que quizá no suene demasiado serio: se lo recomendaría a

todos los subscriptores de la lista que estén empezando con el estudio del serbio, ya que

tiene un estilo de muy fácil lectura, lo que resulta interesante desde un punto de vista

didáctico para el lector que se decida a empezar a leer obras de carácter político o

periodístico en este idioma.

Hay también otros libros sobre Legija. Destaca entre ellos una reciente biografía, obra de

Marko Lopustina (autor de bastantes obras sobre temas de seguridad, política y mafia):

Legija i Zemunski Klan (Legija y el clan de Zemun), publicada por Knjiga-Komerc

(Belgrado) en 2004.

Por cierto, la misma editora del libro de Ulemek (M.Entertainment) ha sacado al mercado

dos DVIX sobre las JSO (la unidad de Legija) y sobre la operación Sablja (Arena), que fue

el dispositivo de seguridad que se puso en marcha tras el asesinato de Djindjic.

Las memorias de la “dama de hierro” serbobosnia

PLAVSIC, Biljana. Svedocim. Banja Luka: Trioprint, 2005.

20 de febrero de 2005César Luis Díez

La autora fue Presidenta de la entidad serbia en Bosnia-Hercegovina, Biljana Plavsic,

actualmente en prisión1. Hay en torno a este libro unas cuantas cosas que pueden llamar la

Page 167: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 179 -

atención: su distribución en quioscos, su bajo precio (menos de 300 dinares, unos 3 euros)

y una frase que aparece al final de las palabras de introducción de la propia autora: “Tekst

treba da bude stampam cirilicom i ekavstinom” (el texto tiene que ser impreso en cirílico

y ekavski).

Milos sobre Zoran

VASIC, Milos. Atentat na Zorana. Belgrado: Politika/B92/Vreme/Narodna Knjiga, 2005.

16 de mayo de 2005José-Miguel Palacios

El libro de Vasic constituye un excelente ejemplo de periodismo de investigación e

impresiona tanto por los detalles que ofrece como por su descripción verosímil de la vida

serbia en el tránsito del milosevicevismo a la democracia (aceptaremos que el “régimen de

"Milosevic” podría encuadrarse dentro de un subtipo de regímenes híbridos que algunos

autores ex-yugoslavos - si no me traiciona la memoria, Podunavac y Kuljic, por ejemplo -

han denominado “cesaristas”). Quizá aún sea pronto para escribir la biografía definitiva de

Djindjic. En cualquier caso, el libro de Vasic es uno de los que quedarán.

Un joven político sobre su breve e intenso pasado

JOVANOVIC, Cedomir. Moj sukob s prosloscu.

3 de julio de 2005César Luis Díez

“Ajuste de cuentas con elpasado”, es mi traducción libre del título. Se trata de un libro

bastante breve (175 páginas), que ha salido al público desde los quioscos de prensa a un

precio bastante asequible (250 dinares, unos tres euros aproximadamente). Está publicado

por el diario Danas en una colección denominada FAST BOOK. Todavía no he tenido

tiempo de leerlo, pero tras un vistazo preliminar parece bastante interesante, sobre todo por

Page 168: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Reseña y crítica de libros

- 180 -

la personalidad de su autor, uno de los políticos jóvenes más brillantes y discutidos.

Algunos libros de reciente publicación

14 de septiembre de 2005José-Miguel Palacios

A partir de 2000 han ido apareciendo en Belgrado libros de memorias y estudios políticos

que nos pueden ayudar a completar lo que sabemos del pasado reciente en Serbia y en el

conjunto de la antigua Yugoslavia. Algunos de ellos ya han sido comentados en estas

páginas. Otros que parecen interesantes son los siguientes:

BULATOVIC, Momir. Pravila cutanja. Istiniti politicki triler sa poznatim zavrsetkom. (Las

reglas del silencio. Thriller político verídico con un final conocido).

Con todos los respetos, Momir Bulatovic fue un segundón durante la época de

Milosevic. Quizá no tomó muchas decisiones, pero estuvo presente en todos los

momentos importantes de la pasada década. Como Bora Jovic, antes que él. En las

muchas entrevistas de prensa que ha concedido con motivo de la aparición del libro

aparece como un hombre sincero, fiel a sus convicciones, leal a sus amigos, y

honesto.

Vecernje Novosti ha publicado en forma de serial algunos de los pasajes más

interesantes del libro. Puede encontrarse fácilmente en varias localizaciones de la red

con ayuda de un buscador.

MIHAJLOVIC, Dusan. Povlenske magle i vidici.

Dusko Mihajlovic ha sido todo en la política reciente de Serbia. Ya en el antiguo

régimen, con Milosevic y después de Milosevic. Siempre le gustó hablar largo,

aunque no necesariamente demasiado claro.

Page 169: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 181 -

ISAKOV, Miodrag. Parados

También el gran clásico de los autonomistas voivodinos se ha decidido a escribir.

Ya en tono menos memorístico, reseñar el libro que ha publicado el G17 Plus: Izvestaj o

tranziciji u Srbiji i Crnoj Gori (Informe sobre la transición en Serbia y Montenegro). Es un

título de lo más prometedor y G17 Plus parece perfectamente capacitado para desarrollarlo

bien.

Por último, una mirada al futuro, hacia un futuro del que hemos hablado mucho en esta lista.

El Instituto de Estudios Europeos ha editado Kako ubrzati pridruzivanje Republike Srbije

Evropskoj Uniji (¿Cómo acelerar la incorporación de la República de Serbia a la Unión

Europea?). ¿Alguien más puede aportar alguna buena idea?

Un libro sobre Rumanía

MARCU, Silvia. Rumanía, territorio olvidado: procesos de transición e integración1989-2005. Valladolid: Universidad de Valladolid, 2005.

4 de diciembre de 2005Silvia Marcu

Es un honor para mí escribir este mensaje, para anunciarles que la Editorial de la

Universidad de Valladolid publicó a finales de octubre de este año, el libro Rumania

territorio olvidado: procesos de transición e integración 1989-2005.Es la tesis doctoral que

defendí en 2000 y puse al día posteriormente.

Creo que es el primer libro sobre Rumanía que se publica en España. Y como Rumanía es

también un país balcánico, me permito recomendar este libro a las personas que estudian

temas relacionados con este país.

Page 170: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Reseña y crítica de libros

- 182 -

Novedades beohispánicas

13 de diciembre de 2005Dalibor Soldatic

TOSIC, DRAGANA. Srpsko-spanski recnik pravnih i poslovnih termina. (Diccionario de

términos jurídicos y de negocios serbio-español). Belgrado: Sluzbeni glasnik, 2005. 453 pp.

Unas 27 000 entradas.

STOJANOVIC, JASNA. Servantes u srpskoj knjizevnosti (Cervantes en la literatura serbia).

Belgrado: Zavod za izdavanje udzbenika, 2005. 336 pp. Con una bibliografía de las

traducciones de Cervantes al serbio, así como de los textos críticos sobre Cervantes y su

obra en la literatura serbia.

SERVANTES SAAVEDRA, MIGEL DE. Mastoglavi idalgo don Kihote od Mance (El

ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha). Traducción de Aleksandra Mancic. Belgrado:

Rad, 2005. II tomos. 551 p. i 577 pp. La traducción más reciente del Quijote, con notas y

registro.

Page 171: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 183 -

Cine ex-yugoslavo

25 de febrero de 2005 César Luis Díez

Mañana se inaugura el Festival de Cine de Belgrado (FEST) en su 33 edición. Es, sin

duda, uno de los acontecimientos culturales de esta ciudad y siempre ha sido un punto de

referencia en cuanto a los gustos y las inquietudes de la población belgradense. Incluso en

los momentos más difíciles de los noventa, el FEST significaba para muchos de estos

belgradenses el único punto de unión con el resto del mundo (por lo menos en el ámbito

cultural y a través del cine).

En este momento, el FEST cuenta con el apoyo de todos los medios de comunicación y en

la selección de películas aparecen obras de mayor presupuesto. Para los lectores de esta

lista, una de las secciones más interesantes del FEST es la denominada Slovenski paket, en

la que se proyectan 11 películas de los países eslavos. Como dice la guía del festival, “el

FEST 2005 incluye también un paquete eslavo: once películas de países eslavos como

confirmación de los esfuerzos sobre culturas complementarias”.

He de reconocer que el párrafo me ha motivado la reflexión sobre Yugoslavia y el entorno

cultural eslavo. ¿Qué entendemos por esto último? Pues casi únicamente la presencia de

una serie de lenguas estrechamente emparentadas entre sí que denominamos la familia

eslava. Además de estas lenguas también existe un folclor y un sustrato cultural. Sin

embargo, lo que me resulta más difícil es ver una historia común, ya que los acontecimien-

tos históricos han situado a los diferentes países eslavos en posiciones diferentes. Sin

embargo, también han existido momentos, como la guerra fría, en los que parece que

todos los países eslavos eran una unidad, al menos si se miraba desde fuera. Todo ello, a

pesar de que “el país de los eslavos del sur” no estuviera de acuerdo con “el mayor de los

hermanos eslavos”.

Page 172: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Cine ex-yugoslavo

- 184 -

27 de febrero de 2004 José-Miguel Palacios

Es bien sabido que el FEST programa películas ya estrenadas y, si no me equivoco, en

tiempos funcionaba como una especie de “mercadillo” que servía para mostrar en

Belgrado lo que se estaba produciendo en el mundo y vender películas para su exhibición

comercial dentro del país.

Creo que este modelo entró en crisis en los años noventa, y no sólo a causa de la guerra:

las televisiones por satélite, los videos piratas y, más tarde, internet hicieron que la gente

estuviera mucho mejor informada sobre lo que se estaba produciendo fuera. El hábito de

ir al cine cambió (pero no sólo en la antigua Yugoslavia, sino también entre nosotros) y,

en general, el hecho de que determinadas películas, dirigidas a un público con inquietu-

des culturales se pasaran en el Sava Centar (quizá unas dos mil 2000 localidades) hacía

inviable que después se proyectaran comercialmente. De su público potencial, una gran

parte ya las había visto. Creo que en esos momentos el FEST pasó a representar un papel

muy diferente del original.

No sé bien cuál puede ser el papel actual del FEST, y ni siquiera si lo tiene. ¿Esta

atención a las cinematografías eslavas es de este año, o puede ser una tendencia perma-

nente? ¿De verdad están los belgradenses tan interesados por el mundo eslavo? ¿No hay

peligro de que FEST y Palic (el Festival del verano, en el norte de Voivodina) se pisen

mutuamente la temática?

27 de febrero de 2005 Roberto Barral

He tenido la oportunidad de asistir a dos proyecciones del FEST2005, ambas hispanas

(Crimen Ferpecto y Diarios de Motocicleta) y, más allá de juzgar sus méritos y calidad

(las dos me hicieron pasar un rato muy agradable), quisiera decir que la afluencia a ese

“coliseum moderno” del Sava Centar fue considerable. Lo que no tengo tan claro es que

“la masa” acudiera allí con intención de demostrar que “todo sigue siendo igual”, con

Page 173: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 185 -

afán restauracionista, ni añorando un mundo polarizado donde poder negociar con el

mejor postor.

Aun a riesgo de caer en análisis “pseudo-simplistas”, mi impresión sobre esta situación es

que la gente acude al cine esperando encontrarse un stock comprimido de lo que la

crítica ha dicho que “vale la pena ver”.

NO ven en su asistencia un apoyo - rancio/nacional- de orgullo moral y/o cultural.

Si acaso, algún político con ansias de salir mediáticamente “comprometido” se dejaba

“caer” (con toda la familia...) cerca de las cámaras de televisión para opinar de esta

guisa. Había, además, críticos, directores y gente de la farándula, pero el resto, la

mayoría del resto, estábamos allí para disfrutar de las películas.

Entre otras cosas porque hoy, la industria cinematográfica mundial está distribuida de

forma cuasi-equitativa y no repara en geopolítica ni azucarillos: “la pela es la pela”, y

para este propósito el FEST es un escaparate. Se trata de crear y mantener una costum-

bre, y de paso es un instrumento para luchar contra el visionado casero pirata.

Y, así como el colega cincuentón que (gracias a la tecnología “extranjera”) me vende los

Dvix piratas en la calle más céntrica de Belgrado - gran NOSTÁLGICO de la Gran

Yugoslavia - me habla de una posible adhesión a la Unión Europea con palabras no

reproducibles en un foro respetuoso; mis compañeros/as de la facultad y, en general,

todos los amigos veinti y treintañeros YA no se quieren parecer a Tito (o a cualquier

estereotipo de esa sastrería), NI añoran “esos modelos” que estudian y les han contado.

Ellos quieren llegar a ser como Solana, por ejemplo, me dicen ante mis oídos incrédulos.

No buscan reminiscencias históricas. Tan sólo desean MODERNIDAD, aunque tengan

que olvidar parte de su pasado glorioso. “Ser” y “Vivir” como el resto de Europa,

conservando sus tradiciones, eso sí (como el FEST, las slavas, o el chevapi), pero más

abiertos al mundo que nunca y repudiando la diferencia. Globalizados, a fin de cuentas.

Puede que sus padres, abuelos, etc., vayan al FEST y “huelan” un Sava Centar yugosla-

Page 174: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Cine ex-yugoslavo

- 186 -

vo, pero, según mi subjetiva impresión, la mayoría de la gente que me rodeaba hace un

par de horas sólo reconocía el aroma de una estupenda y gigante sala de proyecciones y

espectáculos del, para todos, SIGLO XXI. Esta mayoría es y será la que construya la

Serbia del futuro.

1 de noviembre de 2005 César Luis Díez

Hemos discutido si debemos hablar de literaturas nacionales (serbia, croata, eslovena),

de literaturas en un idioma (literatura en serbocroata, cuando se consideraba un único

idioma), o de literaturas de un Estado (la de la antigua Yugoslavia, que se habría

fraccionado al partirse el país). Diversos colectivos, con diversos intereses profesionales

o personales, tienden a optar por una u otra clasificación. Me parece que la conexión

entre “percepción de la literatura” y “expresión lingüística de esa percepción” (uso de los

adjetivos) nos puede ayudar a orientarnos en el debate sobre este tema de una manera

que se dejen a un lado concepciones “subjetivas”.

Por cierto, si todo esto ocurre con la literatura, ¿qué pasara con otros productos

culturales?. ¿Qué pasa, por ejemplo, con el cine? ¿Será posible hablar de un cine

yugoslavo? ¿Cuándo aparecen las cinematografías serbia, croata, etc.?

2 de noviembre de 2005 María Palacios

Con respecto al cine, sí se debe hablar de cine yugoslavo. Aunque existiesen productoras

de cine en todas las repúblicas, y se produjeran ciertas obras “mono-republicanas” (que

podrían asimilarse a una cinematografía nacional serbia, o croata, o lo que sea), lo cierto

es que desde sus principios el cine yugoslavo (que nace tras la Segunda Guerra Mundial)

va a hacer fe de una clara vocación federal. El ejemplo de los dos primeros largos

producidos tras la guerra habla por sí solo:

Page 175: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 187 -

� El primero, Slavica (1946) es una producción serbia de la productora belgraden-

se Avala Film, pero con historia dálmata y un director y guionista croata,

Vjekoslav Afric;

� El segundo, Zivjece ovaj narod, también de 1946, es una producción croata de la

compañía de Zagreb Jadran Film, pero trata del sufrimiento de los serbios de

Bosnia a partir de una novela del serbio Branko Copic, y con director (Nikola

Popovic) y reparto de Belgrado.

Más ejemplos: el de Zivojin Pavlovic (serbio) rodando en Eslovenia (y en esloveno), el

de France Stiglic (esloveno) haciendo lo propio en Croacia, o el de Veljko Bulajic, que

realizó películas en todas y cada una de las repúblicas...

En general, el cine yugoslavo 1945-1991 aparece ante todos como la expresión de un

espacio común y se caracteriza precisamente por su carácter multinacional. La primera

gran retrospectiva de cine yugoslavo en el ámbito internacional tiene lugar en el MoMa

de Nueva York en 1967. Su comisario, Williard Van Dyke, escribía entonces: “Outspo-

ken, vigorously individualistic, the Yugoslav film reflects aspects of a nation composed

of many different peoples”. Para Daniel Goulding (autor del estudio más completo a

proposito del cine yugoslavo 1945-2001, que él define como “la experiencia yugosla-

va”), el carácter multinacional del cine yugoslavo es el rasgo que mejor define su

identidad.

Parece por lo tanto artificial y oportunista intentar ahora dividir más de 40 años de

tradición cinematográfica común en distintas cinematografías republicanas. El cine

serbio, croata, esloveno, etc. propiamente dicho aparece por lo tanto en los noventa. El

caso serbio es aún más complicado, ya que tras 1991 el país continúa llamándose

Yugoslavia, y el cine no se decide claramente por una identidad yugoslava o una nueva

identidad serbia. El cine nacional serbio está por lo tanto naciendo ahora mismo.

Ahora bien, en los últimos años han proliferado las coproducciones entre las ex-repúblic-

as yugoslavas.

Page 176: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Cine ex-yugoslavo

- 188 -

Algunos ejemplos:

� El guionista (Gordan Mihic) y el protagonista (Nikola Kojo) del film macedonio

Kontakt (2005) son serbios.

� El serbio Miki Manojlovic protagoniza también el film croata 100 minuta slave

(2004)

� Kajmak in marmelada (2003) es un film esloveno de un director bosnio (Branko

Djuric), con protagonista serbio (Dragan Bjelogrlic) y hablado en ambas lenguas,

serbocroata y esloveno.

� Pogled sa Ajfelovog tornja (2004) es una coproducción de Serbia con

Montenegro, Croacia y Eslovenia. Cuenta con actores croatas como Varja

Djukic o Darko Rundek, serbios como Petar Bozovic y Svetozar Cvetkovic y

serbobosnios como Sergej Trifunovic.

El ejemplo más fuerte es el de la última película de Rajko Grlic (compañero de filas de

Markovic, Karanovic, Paskaljevic, etc. en la Escuela de Cine de Praga a finales de los

sesenta... y que se negó a realizar cine en Croacia durante los noventa). Se trata de una

coproducción de Croacia, Serbia-Montenegro, Eslovenia, Bosnia-Hercegovina y

Macedonia, lo que lleva a plantearse la siguiente pregunta:

� tras diez años de búsqueda de diversas identidades nacionales, ¿acabará el cine

yugoslavo siendo reemplazado por un nuevo cine “multinacional” o “transnacio-

nal” serbo-croato-bosnio-esloveno-montenegro-macedonio?;

� ¿cuáles serán las diferencias entre este hipotético nuevo cine balcánico

ex-yugoslavo, y el cine de la RSFY?.

Page 177: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 189 -

30 de noviembre de 2005 César Luis Díez

Actualmente se pueden encontrar un montón de películas más o menos recientes de la

filmografía local en los quioscos de Belgrado (en formato DVD). De todas ellas, me

gustaría comentar hoy la obra póstuma de Zivojin Pavlovic, Drzava Mrtvih (El país de

los muertos).

Se trata del drama de un militar esloveno casado con una macedonia que, tras la

independencia de la república, rechaza un puesto en el recién creado ejército esloveno y

decide permanecer fiel a Yugoslavia y al JNA. La familia, compuesta por el militar, su

mujer, el hijo mayor y dos hijas mellizas, se traslada a vivir a Belgrado, donde será

alojada en un edifico para refugiados en unas condiciones precarias. Al poco tiempo, se

les unirá la hija mayor, que se ha quedado viuda tras la muerte de su marido, un militar

serbobosnio, en combates en la República Srpska. La tragedia irá aumentando con la

conversión del hijo en un conocido mafioso del sangriento asfalto belgradense de los

noventa y el fallecimiento de las mellizas en un desgraciado accidente.

Como se puede observar, la película trata de ser una metáfora del proceso de separación

y de todas las contradicciones que provocó. En ocasiones, al espectador extranjero le

puede parecer una cinta algo exagerada y un tanto patética, pero tiene momentos de

indudable valor cinematográfico y, ante todo, constituye un interesante documento de la

desintegración de Yugoslavia.

4 de diciembre de 2004 José-Miguel Palacios

Kad porastem bicu Kengur (cuando sea mayor, seré “el Canguro”), de Radivoje Andric.

Kengur es un portero de fútbol belgradense, de Vozdovac, que ha fichado por el

Ipswich, un equipo menor dentro de la Premier League inglesa. La acción de la película

se desarrolla, en su mayor parte, mientras un grupo de amigos ve el partido en un bar. Al

Page 178: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Cine ex-yugoslavo

- 190 -

mismo tiempo, el protagonista (Sergej Trifunovic) sale por primera vez con una chica (es

una maniquí de éxito), y dos del grupo de amigos (Awacs y Hybrid) están tumbados en

la terraza de un edificio, viendo el cielo, escuchando música (en un viejo aparato que

apenas funciona) y bebiendo cerveza.

Andric ha comentado, creo, que su película es una comedia de la desesperanza. Porque,

como se pregunta uno de los protagonistas, ¿ocurrirá alguna vez algo?

Y es que ya nada ocurre en Belgrado. La gente no vibra con un Zvezda-Partizan, sino

con un Ipswich-Manchester, y el Ipswich se ha convertido en importante para ellos

porque allí juega uno de los suyos, Kengur. Kengur sí tiene una vida allí en Occidente,

mientras que ellos se limitan a observar cómo esa vida pasa de largo.

Hay dos personajes de éxito en la película. Uno es Kengur, la emigración. El otro,

Gangula, el gángster. La chica, Ljubica, ha sido novia de Kengur, pero, al final, ha

elegido a Gangula.

Y hay también un personaje que lucha (Sumbor), que intenta salir adelante. Pero todos

los demás son soñadores, que imaginan un mundo mejor y que no creen poder llegar a

alcanzarlo. Trifunovic sueña con ser director de cine en Estados Unidos y tener una casa

de 10 habitaciones, pero se mira al espejo y ve que la vida va pasando y que nada de eso

va a ser realidad. En un pasaje, dice que tiene 27 años, vive en casa de sus padres y es un

parásito social.

Hay diversos grados de aceptación del destino. Awacs es, quizá, el más acomodado a

esta vida que no es vida. En una escena, le dice a Sumbor: “Somos los más rentables. No

tenemos ingresos, pero tampoco gastos”. Como dice otro de los personajes, “mientras

nos llegue para cerveza”.

Parece haber un contraste importante entre el estereotipo masculino y el femenino en las

películas recientes de la antigua Yugoslavia. Los hombres son casi siempre soñadores

inútiles, mientras que las mujeres suelen ser eminentemente prácticas. Algo así ocurre

también en Kengur. Toda esta crisis existencial es cosa de hombres, mientras que las

Page 179: Balkan (Madrid) 6 (2005)

Balkan (Mad.), 6 (2005)

- 191 -

mujeres están enfrentándose (con cierto éxito) a la vida. Iris, la chica con la que sale

Trifunovic, es una maniquí de éxito. La madre de Kengur, que está viendo el partido, es

la única que se atreve a enfrentarse de verdad al gangster. Incluso Ljubica. Puede no

gustarnos que haya optado por Gangula, pero la verdad es que luce un coche impresio-

nante y, puestos a ser prácticos...

Hacia el final de la película, un tipo empieza a gritar insistentemente en la noche:

Sladjana. Y entonces, Trifunovic grita desde lo alto de la azotea: Iris. Y siguen, por

turno, todos los demás: Branka, Ljubica, Marija... Trifunovic llama a Iris por teléfono (es

un móvil prestado) y parece que las cosas se arreglan. Tal vez.

El director de “Kengur” es Radivoje Andric, conocido, sobre todo, por la serie de

televisión Mile protiv tranzicija (Mile contra las transiciones), algunos de cuyos

episodios pueden verse en el portal de B92.