Ayer y hoy en la poesía de Donne

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Universidad Central de Venezuela Facultad de Humanidades y Educación Escuela de Letras Barroco Europeo Prof. Agustín Silva-Díaz Autora: Lorena Alejandra Quijada Struve Caracas, 24 de febrero del 2015 Ayer y hoy en la poesía de Donne: La recepción de la obra poética de John Donne en el contexto del siglo XVII y en el contexto actual. “¿No nos sentimos más encantados al ver frutas, pájaros y animales pintados que al verlos al natural?” John Donne. Paradojas. “NUNC LENTO SONITU SICUNT, MORIERIS” El siglo XVII fue una época de “mirar con desengaño” como diría Oliveros, para los hombres de esa época, el mundo era un absurdo, todo era una impostura, todo era actuar, interpretar un papel, colocarse una máscara y salir a escena. La muerte acechaba en todos lados, dormir era sólo prepararnos para ella, “la calavera se transforma en un recuerdo al ser humano de la vanidad de su vida, de que la vida se define por la muerte, de que toda la vida del hombre debe ser una meditación de la muerte para hacerla bien una sola vez” (González García, 144) y en Donne este pensamiento se evidencia claramente a lo largo de sus obras y en especial en sus devociones. Donne poseía una obsesión por la muerte que lo acompañó hasta el final de sus días, tanto fue así, que su último sermón parece haber sido escrito para su propio funeral. Ésta misma obsesión por la muerte es la de todos los

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Pequeño trabajo propio en el que quise aplicar un poco la teoría de la recepción a la obra poética de John Donne en el contexto del siglo XVII y en elcontexto actual. Ésta aproximación es basada en la obra "La mirada del desengaño" de Alejandro Oliveros, principalmente.

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  • Universidad Central de Venezuela

    Facultad de Humanidades y Educacin

    Escuela de Letras

    Barroco Europeo

    Prof. Agustn Silva-Daz

    Autora: Lorena Alejandra Quijada Struve

    Caracas, 24 de febrero del 2015

    Ayer y hoy en la poesa de Donne:

    La recepcin de la obra potica de John Donne en el contexto del siglo XVII y en el

    contexto actual.

    No nos sentimos ms encantados al

    ver frutas, pjaros y animales pintados

    que al verlos al natural?

    John Donne. Paradojas.

    NUNC LENTO SONITU SICUNT, MORIERIS

    El siglo XVII fue una poca de mirar con desengao como dira Oliveros, para los

    hombres de esa poca, el mundo era un absurdo, todo era una impostura, todo era actuar,

    interpretar un papel, colocarse una mscara y salir a escena. La muerte acechaba en todos

    lados, dormir era slo prepararnos para ella, la calavera se transforma en un recuerdo al

    ser humano de la vanidad de su vida, de que la vida se define por la muerte, de que toda la

    vida del hombre debe ser una meditacin de la muerte para hacerla bien una sola vez

    (Gonzlez Garca, 144) y en Donne este pensamiento se evidencia claramente a lo largo de

    sus obras y en especial en sus devociones. Donne posea una obsesin por la muerte que lo

    acompa hasta el final de sus das, tanto fue as, que su ltimo sermn parece haber sido

    escrito para su propio funeral. sta misma obsesin por la muerte es la de todos los

  • hombres y mujeres del barroco, casi llegando al temor medieval, el Zeitgeist era el

    Weltschmerz.

    El barroco es, as, el resultado de un proceso de ruptura que se produce

    en un momento histrico determinado. Esto implica el surgimiento de

    una nueva Weltanschaung y la aparicin de un nuevo estilo mediante

    el cual poetas, pensadores y artistas ofrecern una visin del mundo y

    del hombre diferente a la del Renacimiento. La claridad dar paso a los

    tonos sombros y el optimismo ser sustituido por la melancola y el

    sentimiento trgico. (Oliveros, 11)

    La representacin del cuerpo humano de forma anatmica como en La miasma o

    ver el proceso de morir como en Florecer eran cosas impensables en el Renacimiento, el

    cuerpo era perfecto sin ms, slo haba luz, pero en el barroco el cuerpo era anatoma,

    imperfeccin, vanidad, mscaras Que a las mujeres les favorece pintarse dira Donne,

    qu puede ser ms vanidoso y artificioso que una mujer maquillndose, arreglndose y

    ponindose pestaas postizas? Creo que Donne se hubiese sentido realmente cmodo en

    este mundo neobarroco actual, como llama Beuchot a sta era, con sus cirugas plsticas,

    tratamientos de belleza, productos para el cuerpo y el cabello. Estoy segura de que se

    sentira muy cmodo en la artificiosidad del postmodernismo.

    Hablar de la poesa de John Donne es hablar del barroco, ineludiblemente. l mimo

    fue un personaje totalmente barroco, criado en una familia con larga tradicin catlica, se

    convierte al protestantismo y, con el tiempo, logra un puesto de alto rango y un gran

    reconocimiento en la iglesia. Pero, fue real el gran abrazo que le dio a la iglesia protestante

    o fue todo una impostura, un engao, una mscara, una representacin del papel que le toc

    en el teatro que es el mundo?

  • Nuestro siglo, vido de rarezas hasta lo absurdo, ha acogido con simpata las

    elegas funerales de nuestro barroco poeta nos comenta Oliveros (110), y es que nuestro

    mundo moderno, y ms an el postmoderno, sabe que la originalidad es un falso mito

    como lo dice Gradowska (66), la aoramos, pero vivimos en un mundo de masas donde la

    reproduccin est a la orden del da, donde un artista no puede aspirar a realizar algo

    original pues sabe que eso ya fue hecho previamente. Donne recibi en su poca crticas

    por oscuros, prosaicos y exagerados, y es que la extravagancia de muchas de sus obra

    junto con sus ingeniosas analogas y atrevimiento no siempre eran bien recibidas, pero en

    nuestra poca nos hemos acercado con ms curiosidad y benevolencia.

    Drummond of Howthornden incluso llam a los Aniversarios de Donne profanos

    y llenos de blasfemias, en nuestra era postmoderna podemos elegir libremente pues todos

    los puntos de vista son aceptables, esto nos lleva a una nueva metafsica postmoderna

    (Gradowka, 106), quizs esto nos haga recibir con ms entusiasmo ese tipo de poemas de

    Donne. En efecto, en esta nueva poca han proliferado ms religiones y sectas que en la

    premodernidad, e incluso, mientras que en pleno auge de la ciencia se desechaban las

    explicaciones espirituales y mitolgicas para las enfermedades, hoy en da estn mirando

    ests explicaciones con un pequeo guio (recordemos a Donne con pichones muertos en

    los pies como remedio para su enfermedad), al igual que a muchas creencias orientales. El

    barroco fue una era de conversiones y contradicciones, el postmodernismo tambin.

    Podemos percatarnos de que la esttica y la Weltanschaung barroca se ven

    reflejados en nuestra poca que muchos autores consideran neobarroca. Mauricio Beuchot

    dice acerca del barroco que comienza al principio diferencindose trabajosamente del

    humanismo, conservando todava caracteres de equilibrio, y poco a poco desbordndose,

    como cobrando conciencia de que ese equilibrio ya estaba perdido, y que, adems, no

  • importaba. (167). Omar Calabrese en su libro La era neobarroca citado por Gradowska,

    hace la diferenciacin entre lo clsico y lo barroco, y habla de la presencia de ambos en la

    esttica actual, nos dice que la crisis, la duda, el experimento son una caracterstica

    barroca, la certeza es la caracterstica de lo clsico. (104).

    Siguiendo la lnea de pensamiento de Calabrese y Gradowska, en la ciencia y la

    cultura el caos, la inexactitud y el azar fueron siempre despreciados, pero Gradowska sita

    la aceptacin y descubrimiento de estos valores barrocos en la dcada de 1970, en los que

    las teoras del caos, el deconstruccionismo, el arte fractal y otros pensamientos cientficos y

    estticos ms desordenados, por llamarlo de alguna manera, fueron adquiriendo fuerza.

    Tambin el neobarroco es reaccin contra los ideales de la

    modernidad, cuyo comienzo fue el humanismo renacentista, y ahora se

    ve personificado en el racionalismo cientificista. Conlleva una crtica

    de la razn, un desengao de la misma, un abandono de los patrones

    cientficos, por ejemplo, del positivismo. Y tambin el neobarroco

    responde a una crisis econmica y poltica de inflacin, a pesar de la

    globalizacin, la cual deja, de manera semejante, a muchos pobres a su

    paso. Se da en el neobarroco, en cambio, la hibridizacin cultural, el

    multiculturalismo, que fue muy caro al barroco, en ese tiempo de

    grandes sincretismos culturales, incluso con el oriente. Pero sobre todo

    en Amrica, ya que es cuando lo hispnico y lo indgena llegan a una

    mezcla muy notable, y a una convivencia muy conflictiva. (Beuchot,

    169)

  • A pesar de todo, es evidente que a este neobarroco le hacen falta muchas de las

    caractersticas del barroco original, no son totalmente iguales aunque tampoco tendran que

    serlo, no es una repeticin exacta de los modelos o de las edades, primeramente no es

    posible, pero adems es acerca de destacar elementos de un ethos que pueden trasladarse a

    otro ethos, distinto en el tiempo y en la cultura () es un solo trasladar, transferir,

    metaforizar. Simples metforas. (Beuchot, 166).

    sta mirada de desengao tan cara a Donne y a los barrocos de su poca, es la

    misma que se puede percibir en nuestros das. Para el hombre del barroco el hecho de la

    muerte ya era dejar en evidencia que el mundo estaba al revs, la muerte era ininteligible

    para ellos, otra manifestacin de la locura del mundo como nos dice Oliveros. Para

    nuestra poca, la muerte sigue siendo tan incomprensible como entonces, la idea de suicidio

    estaba tan presente en la poca de Donne y en toda su obra y pensamiento, como puede

    estarlo en la nuestra. Lo oscuro, lo extrao, lo incomprensible, la brevedad del tiempo y las

    cosas, siguen llamando nuestra atencin, la bilis negra fue el humor dominante en aquellos

    das y lo sigue siendo an ahora. La desesperanza terrible de la idea del fin del mundo en la

    cual slo hay dos opciones: sentarse a ver llegar el fin del mundo o bailar, tomar y vivir que

    todos vamos a morir. No es muy distinto de ahora en el que las personas cada cierto tiempo

    piensan que en tal o cul fecha es el fin del mundo y en el que las personas hacen lo que

    quieren porque qu importa? Hay que vivir al mximo que la vida es corta. Carpe diem.

  • Referencias

    Beuchot, Mauricio. El barroco en el neobarroco actual. Devenires, IV, 7 (2003): 166 -

    173. Web. 11 Feb. 2015.

    Donne, John. Elegas. Madrid: Hiperin, 2006. Impreso.

    Donne, John. Canciones y poemas de amor. Madrid: Hiperin, 2004. Impreso

    Donne, John. Paradojas y devociones. Sexto piso. Impreso.

    Gonzlez Garca, Jos M. La cultura del barroco: figuras e ironas de la identidad.

    Devenires, IV, 7 (2003): 125 - 165. Web. 11 Feb. 2015.

    Gradowska, Anna. El otoo de la edad moderna (Reflexiones sobre el postmodernismo).

    Venezuela: Consejo de Desarrollo Cientfico y Humanstico de la Universidad

    Central de Venezuela, 2004. Impreso.

    Modern Language Association, manual de estilo. Online.

    Oliveros, Alejandro. La mirada del desengao: John Donne y la Poesa del Barroco.

    Venezuela: Ediciones del Rectorado de la Universidad de Carabobo, 1992. Impreso.