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Aula Abierta 2008 Mentor y Alumno: una camino compartido Con frecuencia, los roles que menos llaman la atención son los más importantes Encuentro Anual 27 al 28 de junio de 2008 Hotel Cabo Cervera, Torrevieja (Alicante)

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Aula Abierta 2008Mentor y Alumno: una camino compartido

Con frecuencia, los roles que menos llaman la atención son los más importantes

Encuentro Anual 27 al 28 de junio de 2008

Hotel Cabo Cervera, Torrevieja (Alicante)

Índice General

Filosofía y objetivos de la EET . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2

El ministerio del mentor: una tarea fundamental . . . . . . . . . . . . . 8

La preparación del mentor: itinerarios formativos . . . . . . . . . . . 20

Prov. 27:17 - La importancia de las amistades con propósito . . . 33

Un buen final: Cinco características vitales . . . . . . . . . . . . . . . . . . 41

Filosofía y objetivos de la EET: Programa 2008-2009 Jonathan Nelson

2Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Filosofía y objetivos de la EET

I. La misión de la EETLa Escuela Evangélica de Teología de la FIEIDE (EET) existe para ofrecer una formación integral teológica de alto nivel a aquellos líderes actuales y potenciales de la iglesia evangélica que no pueden acceder a un seminario presencial.

La Escuela es de la FIEIDE • Responde a una franja teológica determinada: se mantiene fiel a la Confesión de Fe de

la FIEIDE y a la autoridad máxima de las Divinas Escrituras.

• La Escuela responde a las necesidades de la FIEIDE, a los imperativos del ministerio de quienes sirven en las iglesias de la Asociación o se proponen desarrollar tal servicio.

No obstante, la Escuela estará abierta a miembros de otras asociaciones y denominaciones cristianas. Creemos que el sistema de estudio informatizado a distancia será atractivo para muchos, incluso para estudiantes en otros países europeos y en América Latina, los cuales no tienen acceso a estudios teológicos en su región.

La Escuela ofrece una formación integral La EET propone mantener un equilibrio entre el saber, el ser y el hacer. Fomenta la formación y disciplina espirituales, y también el ministerio en la iglesia local, como aspectos integrales del proceso de aprendizaje.

La escuela ofrece una titulación homologada de alto nivel. La Escuela ofrece titulaciones en tres niveles: Certificado en Estudios Teológicos Iniciales (2 años), Grado en Teología (4 años), Máster en Teología / Máster en Estudios Pastorales (6 años).

La acreditación y la titulación se ajustan a los criterios del Ministerio de Educación y Ciencia. La Escuela formará parte de la Facultad de Teología Protestante de España cuando esta entidad llegue a existir.

II. La EET y la educación a distancia informatizadaLa EET en su nueva etapa no depende de un plantel tradicional. Aunque tiene una sede administrativa en Barcelona, ni los alumnos ni el cuerpo docente se concentran allí. Más bien, todos aprovechan “la oficina virtual” y “el aula virtual” en Internet para el aprendizaje y la administración.

Beneficio para el alumnoEl sistema que usa la EET tiene varios beneficios para el alumno:

• éste no necesita dejar su trabajo e iglesia para inscribirse;

• no tiene que viajar para estudiar;

• forma parte de una “comunidad virtual” de instructores y alumnos cuyo nivel de interactividad puede ser mayor de lo que se experimenta en la educación presencial;

• su horario diario de estudio es más flexible de lo que sería un programa presencial; le es

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más fácil compaginar los estudios con otros aspectos de la vida;

• el calendario fijo de la Escuela le anima a mantenerse al día en los estudios;

• puede aplicar inmediatamente en su iglesia lo que aprende en el aula.

Beneficio para la iglesia localEl alumno de la EET sigue colaborando con su propia iglesia. Mantiene su membresía activa en la comunidad evangélica local mientras va incorporándose también a la comunidad virtual de estudiantes que comparten los mismos intereses, retos y metas. Así, el programa potencialmente tiene un impacto directo y continuo sobre la vida de la iglesia local.

III. Perfil del alumno de la EETLa formación que ofrece la EET se ajusta a las características que deseamos que el alumno tenga cuando se gradúe y aun cuando esté estudiando. La formación del alumno de la EET tiene estas características como metas:

1. Depender de Dios

2. Estar comprometido con el Evangelio

3. Poner en práctica la autoridad máxima de la Palabra de Dios

4. Dialogar bíblicamente con las personas en su entorno cultural

Punto 1. El alumno demuestra su dependencia de Dios estudiando, obedeciendo y viviendo la Palabra de Dios, y orando en toda ocasión.

Punto 2. El compromiso con el Evangelio se demuestra cuando el alumno se esfuerza para hacer que las buenas nuevas de Jesucristo cambien a las personas y la sociedad.

Punto 3. El alumno pone en práctica la autoridad suprema de la Palabra mediante:

• el conocimiento de la Palabra – contenido, temas, teología, trasfondo, idiomas, etc.

• el saber interpretar sanamente la Palabra,

o valorarla por encima de las teologías y los sistemas humanos e incluso cuestionar constantemente los sistemas

o practicar la exégesis sana y permitir que la Palabra sea su propio intérprete

o dialogar con otros intérpretes – teologías, hermanos, iglesias, padres de la iglesia e intérpretes del pasado

• el saber enseñar la Palabra exegéticamente.

Punto 4. El alumno conoce la cultura y la forma de pensar de sus compatriotas, sabe evaluarla y retener lo bueno. Sabe responder a las preguntas que la gente hace, sin perder de vista lo que la Biblia dice ser el problema real (el pecado y la separación de Dios).

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4Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

IV. La EET y la mentoríaEn la época moderna, la educación teológica pasó por un proceso de despedazamiento: las áreas de Biblia, teología, historia y ministerios se fueron separando las unas de las otras, y se volvieron cada vez más teóricas. El conocimiento que el alumno adquiría del texto bíblico, de la teología o de la historia no se integraba con el ministerio, ni mucho menos impactaba la comunión del estudiante con Dios. Hablamos mayormente de las facultades de teología “liberales” estatales en Alemania y otros países protestantes; pero éstas han influenciado nuestra forma evangélica de concebir la educación teológica.

La Escuela Evangélica de Teología de la FIEIDE intenta crear y mantener un equilibrio entre el saber, el ser y el hacer. Fomenta la formación integral del alumno, las disciplinas espirituales en la vida del mismo y el ministerio en la iglesia, sean cual sean las áreas de especialización del estudiante.

El mentorEl mentor ejerce su papel precisamente en estas áreas que acabamos de mencionar: la formación espiritual del alumno y su ministerio en la iglesia local. El papel del mentor de la EET está concebido dentro de los marcos de la “Guía espiritual” y del “Coach”, tal como vienen descritos en la ponencia sobre “El ministerio del mentor”. También tiene un elemento pasivo: el mentor debe servir de modelo en el servicio al Señor. Lo que cuenta no es solamente aquello que dice, sino también la manera de decirlo y su manera de ser. Por ello debe estar caracterizado por la consagración y el equilibrio.

El mentor juega un papel clave, ya que mantiene el contacto más cercano con el alumno. También posiblemente tenga la oportunidad de hacer el seguimiento al alumno a largo plazo, después de que éste termine sus estudios. El contacto personal con el mentor ayuda a minimizar la desvinculación que pueda sentir el alumno que estudia en el entorno virtual.

En concreto, es importante que el mentor:

• mantenga el contacto personal frecuente con el alumno. Debe mantener con él un mínimo de cinco encuentros por trimestre;

• ayude al alumno a desarrollar un plan de formación espiritual (tiempos a solas con Dios, aspectos de su vida y carácter que desee mejorar, disciplinas espirituales que quiera desarrollar, etc.);

• ore frecuentemente con el alumno;

• ayude al alumno a mantenerse al día con los estudios, desarrollando (si fuese necesario) un plan para el buen manejo de su tiempo, analizando cualquier problema que tenga con el horario y el calendario, animándole a fijar bien sus prioridades y a manejar bien el tiempo;

• supervise las actividades prácticas del alumno.

El mentor en principio ha de ser el pastor o un miembro del equipo pastoral; también puede ser un anciano de la iglesia. Sería de desear que fuese un pastor con experiencia en el ministerio. La EET reconoce que los pastores ya están sobrecargados de trabajo. Sin embargo, una de las mejores inversiones de tiempo de cualquier pastor es la de “multiplicarse”, de formar a discípulos que puedan llegar a ejercer el liderazgo también, ya sea en puntos de misión o nuevas congregaciones, ya sea ayudando a sobrellevar los cargos del pastor mismo.

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V. Plan de Estudios Contenido general, horas y créditosEl programa “online” de la EET se divide en dos partes: el Título de Grado (cuatro años) y el Máster (dos años). A su vez, el Título de Grado tiene un nivel básico que es el Certificado de Estudios Teológicos Iniciales (dos años). Además, la EET ofrece el Certificado de Estudios Bíblicos, un diploma privado que se otorga a los que aprueben el Grado 1 (los primeros 60 créditos).El número de créditos que son necesarios para completar cada nivel de estudios de la EET es como sigue:

Titulación Asignaturas Créditos Total de créditos

Certificado de Estudios Bíblicos 12 60 60

Certificado de Estudios Teológicos Iniciales 12 60 120

Grado – 3º año 12 60 180

Grado - 4º Año (asignaturas y prácticas) 8 40 220

Investigación y tesina 20 240

TOTAL – Grado 44 240

Máster 60 300

60 360

Áreas generales de estudio

Énfasis Ministerios Énfasis Teología

Biblia80 créditos / 16 asig.

Teología50-60 créditos / 10-12 asig.

Ministerios80-90 créditos / 12-14 asig. + inv. y tes.

Biblia80 créditos / 16 asignaturas

Teología80-90 créditos / 12-14 asig. + inv. y tes.

Ministerios50-60 créditos / 10-12 asig.

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Asignaturas por añoCertificado de Estudios Bíblicos (Grado 1)12 asignaturas (60 créditos)*

BI101 Sinopsis del Antiguo Testamento 1

BI102 Sinopsis del Antiguo Testamento 2

BI103 Sinopsis del Antiguo Testamento 3

BI104 Sinopsis del Nuevo Testamento 1

BI105 Sinopsis del Nuevo Testamento 2

BI106 Sinopsis del Nuevo Testamento 3

TE101 Principios de interpretación bíblica (Hermenéutica 1)

TE102 Doctrina cristiana 1

TE103 Doctrina cristiana 2

MI101 Espiritualidad cristiana

MI102 Evangelización y discipulado

MI103 Comunicación y exposición bíblica

MI104 Liderazgo de jóvenes* Troncales: Biblia 6 (30); Teología 3 (15); Ministerios 2 (10) + Optativas: 1 (5)

Certificado de Estudios Teológicos Iniciales (Grado 2)12 asignaturas (60 créditos) + el Certificado de Estudios Bíblicos

BI201 Herramientas para la exégesis (Hermenéutica 2)

BI202 Romanos

BI203 Salmos

BI204 Evangelios sinópticos

BI205 Isaías

TE201 Teología del AT

TE202 Teología del NT

TE203 Teología de la misión (Misionología 1)

TE204 Historia de la iglesia – temas esenciales

TE205 Historia de la iglesia 2

TE206 Historia de la iglesia 3

TE207 Eclesiología

MI201 Ética

MI202 Apologética 1

MI203 Misionología 2

MI204 Teología pastoral * Troncales: Biblia 5 (25); Teología 4 (20) + Optativas: 3 (15)

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Grado 360 créditos / 12 asignaturas. Requisito previo: Certificado de Estudios Teológicos Iniciales

BI302 Griego 3

BI20 Griego 2

BI205 Literatura juanina

BI305 Pentateuco

MI301 El culto

MI302 Los ministerios en la iglesia

MI303 Fundación y crecimiento de iglesias

MI304 Teología pastoral (optativa)

MI305 Las Artes y el creyente (optativa)

TE301 Teología 2: Cristo y la salvación

TE302 Historia de las misiones

TE303 Teología 3: El Espíritu Santo y la Iglesia

TE304 Nuevas corrientes en la iglesia (optativa)

TE305 Apologética 2 (optativa)* Biblia 25 / 5; Ministerios 15-25 / 3-5; Teología 15-25 / 3-5

Grado 440 créditos / 8 asignaturas + Investigación y tesina (20 créditos). Requisito previo: Grado 3

BI401 Literatura apocalíptica

BI402 Exégesis avanzada

TE401 Historia de las ideas (optativa)

TE402 La Iglesia católica romana en el siglo XXI (optativa)

MI401 La ética en el siglo XXI (optativa)

MI402 (optativa)* Biblia 10 / 2; Ministerios 0-10 / 0-2; Teología 0-10 / 0-2

El ministerio del mentor: una tarea fundamental Heriberto Poganatz

8Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

“La mentoría es… la relación por la cual un mentor ayuda a su encomendado a alcanzar el potencial que Dios ha puesto en él” (B. Biehl).

“La mentoría es… el proceso de abrir tu vida hacia otros; un proceso de vivir para la próxima generación” (R. L. Davies).

“La mentoría es… una experiencia relacional en la cual una persona potencia a otra, compartiendo los recursos recibidos de Dios” (J. R. Clinton)1

El ministerio del mentor: una tarea fundamental

El tema a tratar es un desafío tanto para el expositor como para el oyente. En poco tiempo debemos decir algo sustancial, pero no demasiado exhaustivo. Debemos tocar aspectos decisivos, sin perdernos en detalles. La amplitud del tema y el poco tiempo que tenemos a nuestra disposición exige que nos limitemos en esta ocasión a aspectos básicos, nociones fundamentales. Trataré de exponer puntualmente lo que me parece ser importante. En este sentido debíamos hablar de una introducción al tema: El ministerio del mentor.

1. Origen, uso y definición de la palabra “mentor”La palabra griega Méntor (en griego clásico Μέντωρ), es un nombre propio y se refiere originalmente al hijo de Álcimo, personaje de la Odisea.

Méntor fue el fiel amigo de Ulises, que quedó encomendado de los intereses del héroe en Ítaca y de la educación de su hijo Telémaco, cuando el héroe partió para la Guerra de Troya. Más adelante, la diosa Atenea, según la mitología griega, adoptó la apariencia de Méntor para acompañar a Telémaco en la búsqueda de su padre.2

El nombre de este personaje griego ha pasado a la lengua como el de consejero sabio y experimentado, o como preceptor.

La primera mención del término “mentor” en su significado actual aparece en el libro del autor francés François Fénelon, “Las aventuras de Telémaco”. En este libro el personaje principal es Méntor, consejero de Telémaco. Fue publicado en 1699 y llegó a ser muy popular durante el

1 Citas tomadas de Leavenworth 2005:1 (“Leadership Tips” v.s. Bibliografía)2 ¿Quién no pensaría inmediatamente en el libro deuterocanónico de Tobías, donde el ángel Rafael se constituye en una especie de “Méntor”… (Tobías 5:5 ss). Sea Atenea o Rafael, los mentores que nuestros alumnos de la EET necesitan, no serán semidioses o ángeles, sino seres humanos, hombres y mujeres de Dios, entregados a la tarea de acompañar a sus hermanos estudiantes con amor, comprensión y sus dones conferidos por Dios.

Telémaco y Méntor

El ministerio del mentor: una tarea fundamental Heriberto Poganatz

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siglo XVIII, así que el uso de este término en tiempos modernos, posiblemente tenga su origen en la obra de Fénelon.

Remontándose a la historia griega, en la actualidad se refiere a un amigo de confianza, un consejero o profesor, generalmente una persona más experimentada que el “alumno”.

En el mundo del trabajo existen programas de “mentoring” (ingl.), donde obreros o empleados nuevos forman un equipo con personas más experimentadas, para obtener buenos ejemplos e instrucción. El mentor tiene la tarea de ayudar a los menos experimentados a avanzar en su carrera profesional, a obtener una educación más completa y a construir su propia red de relaciones.3

En el Nuevo Testamento no aparece la palabra “mentor”. Sin embargo tenemos preciosos ejemplos de la práctica de la “mentoría”4, que inclusive van más allá de sus dimensiones seculares. Uno de ellos es la relación entre Pablo y Timoteo:

Hech 16:1; 17:14; 19:22 etc.; Rom 16:21; 1Cor 4:17; 16:10; 1Tes 3:2; 2Cor1:1; 1:19; Col1:1; Filem 1; Fil 2:19; 1Tes 3:6; 1Tim 1:2,18; 6:20; 2Tim 1:2.

En el Antiguo Testamento destacan las “relaciones mentoriales” entre Moisés y Josué, entre Elías y Eliseo, por mencionar solo unos pocos ejemplos. Tanto Moisés como Elías prepararon a sus sucesores durante años, mediante el acompañamiento personal y vivencias compartidas, para la tarea que les esperaba.

Así que no siendo “mentor” un término bíblico, sin embargo lo usamos en la EET para describir todo el proceso de acompañamiento y la relación entre el alumno y su consejero personal, el mentor. En nuestra “Guía General de Mentoría” describimos el papel y el perfil personal del mentor en los siguientes términos:

“El mentor en principio ha de ser el pastor, o un miembro del equipo pastoral; también puede ser un anciano de la iglesia. Sería de desear que fuese un pastor con experiencia en el ministerio.

El mentor sirve de modelo en el servicio al Señor. Lo que cuenta no es solamente aquello que dice, sino también la manera de decirlo; la manera de ser. Por ello debe estar caracterizado por la consagración y el equilibrio.

El mentor tiene la responsabilidad de acompañar al estudiante tanto en el aspecto práctico de las tareas como en el personal y espiritual. Esta responsabilidad debe tomarse muy en serio y se debe exigir que se le conceda tiempo y energía. Dentro del sistema a distancia informatizado de la EET, el mentor juega un papel clave porque mantiene el contacto personal con el alumno. (En cambio, el profesor mantiene contacto con el alumno mayormente en el ámbito virtual --correos electrónicos, contactos en Internet-- y lo mismo pasa con los compañeros de estudio, en la mayoría de los casos.)”5

3 Estas definiciones fueron obtenidas de diferentes Wikipedia en alemán, inglés y español.4 Dicho sea de paso, que según el DRAE (Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española) no existe el término “mentoría”, solo “mentor, mentora”. Sin embargo hacemos uso de “mentoría”, pues es ya un término ampliamente aceptado. Otra versión que encontré es “mentoreo”. A mi criterio, “mentoría” es más agradable.5 Guía de Mentoría, pág. 1 (EET)

El ministerio del mentor: una tarea fundamental Heriberto Poganatz

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Sin entrar en definiciones pormenorizadas, para el programa Preparados para servir, existe también la figura del “tutor”. Una breve descripción de sus tarea nos da el Manual del Tutor:

“El papel principal del tutor consiste en...

Evaluar. El tutor debe ayudar a los estudiantes a identificar sus puntos fuertes y débiles y animarles a evaluar su progreso a fin de asegurarse de que todos los temas del servicio cristiano se trabajen de una forma bíblica.

Estimular. El tutor tiene el deber de animar y motivar a los alumnos a aprender, ayudándoles, incluso, a encontrar oportunidades adicionales para formarse o participar activamente en ministerios que se ajusten a sus dones.

Facilitar. El tutor debe procurar que los estudiantes aprendan a sacar sus propias conclusiones y aplicaciones, y no sólo decirles lo que deben saber o hacer.”6

Todo esto se podría decir de alguna manera también de la tarea de un mentor, sin embargo es obvia la diferencia que podemos observar en las dos breves descripciones citadas.

En todo caso, tanto el mentor como el tutor tienen la tarea de hacer crecer a sus encomendados, como ilustra la foto (tomada de Poitras: carátula).

2. Jesús, el “mentor” por excelenciaEn esta parte me refiero principalmente a un pequeño libro, que he apreciado mucho desde mis tiempos de misionero en Perú: Plan supremo de Evangelización de Robert E. Coleman. Describe la metodología del Maestro mismo, adiestrando a sus discípulos para la gran tarea que les iba a encomendar. Coleman destaca 8 principios rectores del método de Jesús:

1. Selección 2. Asociación 3. Consagración 4. Comunicación5. Demostración 6. Delegación 7. Supervisión 8. Reproducción

Se puede decir, que Jesús dedicó la mayor parte de su vida, de la cual tenemos referencias en los Evangelios, a sus discípulos, guiándose por los principios mencionados. No es posible referirnos en detalle a todos ellos, solo destacaremos algunos.

“… la vida de Jesús nos enseña que encontrar y preparar a hombres para que ganen a otros hombres ocupa el primer puesto. Las multitudes no pueden conocer el evangelio a no ser que tengan un testigo vivo. Darles sólo una explicación no

6 Preparados para servir, Manual del Tutor, pág. Tutor 0.5 (EET)

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bastará. Las masas desorientadas del mundo deben tener una demostración de qué creer - deben tener a un hombre que en medio de ellos les diga, “seguidme, yo conozco el camino”. En esto, pues, deben centrarse todos nuestros planes. Por espiritual que fuera nuestro enfoque, la importancia duradera de todo lo que hagamos dependerá de lo bien que se cumpla esta misión.

Con todo, debemos darnos cuenta de que la clase de hombres que Cristo necesita no se consigue por casualidad. Para ello se necesitan planificación premeditada y esfuerzo concentrado. Sí queremos preparar hombres, debemos trabajar para ellos. Debemos buscarlos. Debemos ganarlos. Sobre todo, debemos orar por ellos. Algunos ya están ocupando puestos importantes en la iglesia. Otros todavía están entre aquellos que esperan recibir la invitación para llegar a Cristo. Pero dondequiera que estén, han de ser ganados y preparados para que lleguen a ser discípulos eficaces de nuestro Señor.”7

Eran hombres ansiosos de aprender. (¿Y no es esto lo que un pastor o mentor busca en primer lugar en sus discípulos?) Sin embargo, eran hombres que a simple vista no reunían los requisitos prometedores para continuar la obra de Jesucristo después de su ascensión al cielo. Eran “hombres sin letras y del vulgo” (Hech 4:13) según el criterio del mundo, pero eran moldeables. Nos da la impresión de que Jesús estaba dispuesto a dedicar su vida a los que quería preparar. Cabe la pregunta, ¿por qué Jesús consagró su vida en forma deliberada a un número tan reducido de personas? Escuchemos a Coleman:

“La respuesta a esta pregunta pone inmediatamente de relieve el verdadero propósito del plan evangelizador de Jesús. Él no quiso impresionar a las multitudes sino introducir un reino. Esto significa que necesitaba hombres que pudieran ser líderes de las multitudes. ¿De qué hubiera servido para su objetivo final el suscitar el entusiasmo de las multitudes y hacer que lo siguieran si esa misma gente no iba luego a tener quien los dirigiera e instruyera en el Camino? Se había demostrado en un sinnúmero de ocasiones que las multitudes son presa fácil de los dioses falsos cuando no hay quien las cuide. Las masas eran como ovejas indefensas, descarriadas y sin pastor (Mat. 9:36; 14: 14; Mar. 6:34). Estaban dispuestas a seguir a quien se presentara con promesas que los favorecieran, ya fuera éste amigo o enemigo. Esta era la tragedia de ese tiempo: Jesús despertaba fácilmente las nobles aspiraciones de la gente, pero con la misma facilidad las apagaban las falaces autoridades religiosas que la dominaban. Los líderes de Israel, espiritualmente ciegos (Jn. 8:44; 9:39-41; cp. Mat. 23: 1-39), aunque relativamente pocos en número,8

7 Coleman 1972:968 Los fariseos y los saduceos eran los lideres principales de Israel, aparte de las fuerzas romanas de ocupación, y toda la vida religiosa, social, educativa, y hasta cierto punto, política de los aproximadamente dos millones de personas que vivían en Palestina, estaba moldeada de acuerdo con su querer. Con todo, el número de personas que pertenecían al grupo fariseo, compuesto casi exclusivamente de rabinos y de gente acomodada. Según el cálculo de Josefa (Ant., XVII, 2, 4), no excedía los 6.000; el número de saduceos, por otro lado, en su mayor parte familias de los sumos sacerdotes y del Sanedrín, probablemente no excedía unos pocos centenares. Cuando se piensa que este grupo reducido de privilegiados de menos de 7.000 personas, que representaba alrededor de un tercio del uno por ciento de la población de Israel, dirigía el destino espiritual de la nación, no es difícil comprender por qué Jesús habló tanto de ellos, al mismo tiempo que enseñó a sus discípulos la

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12Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

tenían dominada por completo a la gente. Por esta razón, a menos que a los convertidos de Jesús se les dieran hombres de Dios competentes que los dirigieran y protegieran en la verdad, muy pronto iban a caer en la confusión y desesperación, y su condición final sería peor que la de antes de conocer a Jesús. Por consiguiente, para que el mundo pudiera recibir ayuda permanente, se hacía necesario preparar a hombres que pudieran dirigir a las multitudes en las cosas de Dios. (Coleman 1972:23)

Si aplicamos este principio de Jesús a nuestra práctica actual en las iglesias, tendremos que decir que esto exige más concentración de tiempo y talentos en unos pocos hombres y mujeres en la iglesia, sin olvidar a la congregación y la pasión por el mundo. Significa intensificar la preparación de líderes “para la obra del ministerio” en unión con el pastor y los ancianos de la iglesia (Ef 4:12). Esto no significa mostrar favoritismo hacia un grupo selecto dentro de la iglesia, tampoco hacia una persona en particular. Significa reconocer la prioridad de ganar y preparar a los que ya están en posiciones responsables de liderazgo. Coleman recomienda además:

“…si no podemos comenzar desde arriba, por lo menos comencemos donde estamos, y preparemos a unos cuantos de los que ahora están en cierne para que después lleguen a ocupar cargos elevados. Y recordemos también que no es preciso poseer el prestigio del mundo para ser de gran utilidad en el reino de Dios. Quienquiera que esté dispuesto a seguir a Cristo puede llegar a poseer una gran influencia en el mundo, suponiendo, desde luego, que esta persona tenga la preparación adecuada. Ahí es donde debemos comenzar, como lo hizo Jesús.(:28)

No tenemos aquí el tiempo para exponer a cada uno de los 8 principios del Plan del Maestro, me limitaré a dos más.9

Jesús mostró a sus discípulos cómo vivir. Hablamos del principio 5, “Demostración”. Como dice Coleman, “en un sentido técnico, la vida precede a la acción, pero bajo un punto de vista completamente práctico, vivimos gracias a lo que hacemos…” (:59) Jesús p.ej. les dio lecciones prácticas de cómo orar, del uso de las Escrituras, de la práctica de ganar almas, de enseñar con naturalidad. Jesús no pidió a nadie que hiciera o fuera algo que él no hubiera demostrado antes en su propia vida. “La gente busca demostraciones, no explicaciones” (:65).

Para aplicar este principio en la actualidad, el “mentor” se constituye en ejemplo (Fil 3:17s; 1Tes 2:7,8; 2Tim 1:13). Sus alumnos aprenden de lo que oyen y ven en él. No se puede eludir la responsabilidad personal al mostrar el camino a los que estamos preparando, incluyendo nuestra propia práctica espiritual. Coleman concluye: “La aplicación de este principio es tan notable que hay que estudiarla como parte de su estrategia de conquista por medio de hombres preparados y espiritualmente activos” (:22).

Mencionando el principio 6 “Delegación”, Jesús asignó trabajos prácticos a sus discípulos, haciendo así que ellos dieran los primeros pasos. Observaron a su Maestro en lo que él hacía, inspirándose en su ejemplo. Pero no les eximió de continuar en su escuela de preparación. Seguía siendo una clase continuada mientras él estuvo con ellos.

Concluyo esta parte de mi ponencia, mencionando la necesidad de la “Supervisión” (principio

necesidad estratégica de disponer de mejores líderes. 9 Recomiendo sinceramente la lectura completa de la pequeña obra de Coleman. vs. Bibliografía.

El ministerio del mentor: una tarea fundamental Heriberto Poganatz

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7 de Coleman). Jesús vigiló sin cesar a sus discípulos, había “clases de repaso y aplicación constantes”. Él no les permitió descansar ni en los triunfos, ni en los fracasos. Se alegraba con sus éxitos, y les daba lecciones de paciencia.

Coleman termina diciendo: “En nuestros días se necesita una supervisión no menos paciente aunque decidida de parte de los que tratan de preparar a otros para la evangelización” (:82).

Lo poco que hemos visto hasta aquí al observar la estrategia y los principios aplicados por Jesús en la preparación de sus discípulos, nos indica que él ha sido el “mentor” por excelencia, el modelo supremo, y sigue siéndolo.

3. Diferentes tipos de mentoríaAntes de mencionar escuetamente los diferentes tipos posibles de ejercer la tarea de mentor, unas breves palabras acerca del ¿por qué? de la mentoría. En el mundo del trabajo y también en la iglesia, la práctica de la mentoría contribuye notablemente al desarrollo tanto del mentor como del “mentoreado”10. Además fortalecerá al organismo al cual servimos. La educación formal es indispensable, sin embargo no siempre es la manera más eficaz de desarrollar el liderazgo del grupo en el cual estamos. Educación formal sola, muchas veces deja al estudiante o alumno aislado de la situación actual del ministerio y puede llevar a disfunciones y hasta deficiencias ministeriales. La meta es, desarrollar un ministerio sobre la base de un carácter cristiano, competencia y habilidad ministerial y confiabilidad, y no meramente enfocado en competitividad de conocimientos.

Para ello, necesitamos la ayuda de personas experimentadas, que se pongan a nuestro lado para relacionarse con nosotros, capacitándonos a desarrollar los recursos personales recibidos de Dios. “Hay líderes potenciales por nacimiento, pero líderes efectivos se hacen. Son el resultado de una buena formación recibida. Su potencial pleno no será alcanzado sin darles oportunidades, desarrollándolo intencionalmente y ayudándoles a adquirir experiencia”.11 Y esta es la vocación principal de un mentor en el sentido pleno.

La manera primaria de aprender algo en nuestra vida ha sido sin duda imitando a otros: padres, amigos, maestros etc. Las cosas más importantes que usamos a diario aprendimos imitando a otros – la lengua, valores, cosmovisión y la mayoría de la cultura que nos rodea. Lo mismo sucede con la vida espiritual y la formación ministerial. Lo confirman los resultados de varios estudios empíricos hechos: Una persona puede aprender casi todo por medio de observación e imitación.12

El que desea ser mentor, primero debe estar dispuesto a ser “mentoreado”, es decir de recibir instrucción. Prov 13:10: “La sabiduría está con los que admiten consejos” (hebr.). Prov 15:31: “El oído que escucha las amonestaciones de la vida, entre los sabios morará” (RV) – “Oído que escucha reprensión saludable, tiene su morada entre los sabios “ (Biblia de Jerusalén, 1966).

10 Nuevamente indico que se trata de una palabra que se emplea ante todo en América Latina.11 Parafraseando a Clinton: “Potential leaders are born. Effective leaders are made. Without opportunity, intentional development, and experience full potential will never be achieved” (Clinton 1997:11, citado en Poitras:11).12 Hago uso de mis notas obtenidas en talleres sobre mentoría en Alemania. Varias citas y materiales citados son de: Elliston, Edgar J. Ph.D: Mentoring: A call to Excellence in Leadership for a Lifetime y Elliston, Edgar J. 1992. Home Grown Leaders. Pasadena, California: William Carey Library.

El ministerio del mentor: una tarea fundamental Heriberto Poganatz

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Algunos tipos de mentoría

A. Mentoría intensiva1. Discipulador. Procura capacitar a nuevos creyentes en el discipulado, es decir, en seguir a Cristo de acuerdo a la Palabra de Dios. Es una tarea que demanda del discipulador, entrega, tiempo, amor e interés en el bienestar espiritual del discípulo. Es un constante seguimiento y consiste en contacto personal frecuente, reuniones de oración, estudio bíblico o de algún material adecuado.

2. Guía Espiritual. Este tipo de mentoría destaca en las áreas de fomentar la responsabilidad del aconsejado, de proporcionarle una dirección adecuada y la percepción correcta de asuntos personales, de familia, trabajo etc. Le ayuda a un compromiso serio con las cosas de Dios. Le orienta en decisiones que tienen que ver con la espiritualidad y la madurez.

3. Coach. Transmite motivación, fomenta conocimiento práctico, habilidades y las aplicaciones necesarias para cumplir tareas y enfrentar desafíos. El “coaching” espiritual es el proceso que ayuda a otras personas a desarrollar el potencial que Dios les dio, para crecer personalmente y para contribuir al crecimiento del Reino de Dios. Posiblemente Bernabé, el “hijo de consolación”, sea uno de los modelos más notables de una persona, que acompaña a otra con su apoyo y dedicación (Hch 9:27; 11:25,30).

La clase de mentoría que yo percibo como la requerida en nuestro contexto eclesial, es la “intensiva”. El mentor de la EET, p.ej., para poder ejercer un ministerio eficaz, hará bien en fijarse en las características descritas en A. 1-3.

B. Mentoría ocasional4. Consejero. No es fácil describirlo en pocas palabras, pero se caracteriza por dar consejos a tiempo y ayudas, para que el aconsejado tenga perspectivas y opiniones correctas acerca de si mismo, de otros, de las circunstancias y del ministerio.

5. Maestro. Transmite conocimientos y comprensión de materias y contenidos que el alumno debía conocer mejor, y lo adiestra en el manejo del saber y hacer.

Intensiva Ocasional Pasiva

Discipulador Guíaespiritual Asesor Consejero Maestro Patrocinador Modelo

Contemporáneo

Histórico

Más intencionado Menos intencionado

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6. Patrocinador (“sponsor”). Dirige, acompaña y protege al líder emergente cuando éste se inicia en un ministerio o una nueva organización.

C. Mentoría pasiva 7a. Modelo contemporáneo. Una persona contemporánea, cuya vida personal inspira a un admirador en su vida, ministerio o profesión. Este personaje no solo sirve de modelo, sino causa también cierta envidia. A veces los libros de este personaje ejercen una gran influencia sobre la persona, que se constituye en un “mentoreado” por tal o cual libro.

b. Modelo histórico. La vida de algún personaje del pasado, que transmite y enseña principios dinámicos y valores válidos para hoy en nuestro ministerio o profesión.

4. La dinámica de una relación mentorialExisten cinco características que contribuyen a que la relación entre mentor y mentoreado sea eficiente y satisfactoria:

1. Relación personalNotamos la importancia de esta relación personal entre Moisés y Josué, Pablo y Timoteo, por mencionar dos ejemplos prominentes. Sin embargo, en las iglesias con todas sus fluctuaciones no siempre existen esta clase de relaciones, basadas en años de conocerse o haber sido miembros de la misma iglesia. Muchas veces, mentor y alumno entran en relaciones convenidas para lograr ciertos propósitos. Esto no es nada extraño, más bien en muchos casos lo normal. Será de gran ayuda para ambas partes, establecer relaciones personales basadas en el respeto mutuo, la confianza y el propósito común de librar el potencial que Dios ha conferido al mentoreado.

2. AtracciónEl alumno debía sentir cierta inclinación hacia el mentor, y viceversa. El mentor tendrá mayor influencia si el alumno se siente atraído por sus buenas perspectivas, experiencia, valores, entrega, sabiduría perceptible, buenos puntos de vista, carácter, conocimientos e influencia. Esto implica una relación de confianza y respeto.

3. CorrespondenciaEl alumno debe mostrar la disposición y la voluntad de aprender algo del mentor. Esta actitud es crucial para el “mentoreado”. Un espíritu dispuesto, correspondiente y abierto de parte del alumno, y la atención, el cuidado y cierta finura de parte del mentor, aceleran el proceso y acrecientan la capacitación. La correspondencia mutua facilita a ambos lograr las metas de la mentoría: la potenciación del alumno en sus facultades (en ingl. “empowerment”).13

13 En la revisión que hicieron Conger y Kanungo (1988) del tratamiento del fenómeno de empowerment en la literatura señalaron que éste ha sido abordado con un doble significado: a veces como un constructo relacional y otros como uno motivacional. Entre las traducciones comunes del concepto al español como facultamiento o delegación tienen relación tanto con la opción competitiva de la palabra poder como con la acepción relacional del constructo “empowerment”. Estas opciones no agregan realmente nada nuevo al entendimiento de la gestación de equipos de alto desempeño y de organizaciones aprendientes. En esta acepción el “empowerment” sigue siendo un fenómeno unilateral en el que la autoridad “concede” poder a los niveles inferiores, manteniendo relaciones de dependencia. La acepción motivacional, por otra parte, se refiere al fenómeno a través del cual los individuos liberan su potencial. En español se ha venido utilizando la palabra empoderar con este sentido aunque también tienen inherentemente la acepción competitiva de poder. La palabra “Potenciar” es definida

El ministerio del mentor: una tarea fundamental Heriberto Poganatz

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4. ResponsabilidadLa responsabilidad mutua el uno por el otro es un elemento importante en el proceso de la mentoría, que asegura el avance y la terminación exitosa de la relación mentorial. Compartiendo las expectaciones, unidas a revisiones periódicas con evaluaciones, darán cierta fuerza a este proceso y facilitan la potenciación del alumno. Es la responsabilidad del mentor, iniciar y mantener viva la responsabilidad mutua.

5. PotenciaciónEn la relación mentor-alumno, no todo el poder o la capacidad se centra en el mentor. Más bien, en la relación transaccional o transformadora existe la real posibilidad de que también el mentoreado tenga cierta cantidad de control. El alumno tiene el derecho de señalar y asignarse a si mismo cierta “autoridad personal”, es decir conceder el derecho de ser influenciado por el mentor en esta relación personal. Pues el mentor no es el “gurú” que determina todo o inclusive le impone lo que enseña. Potenciar a un alumno significa, librar las capacidades, los dones y habilidades que tiene de parte de Dios, para hacerlas más fructíferas y útiles en el Reino de Dios. Potenciar es permitir que el poder de Dios pueda obrar más en la vida del mentoreado. No significa quitarle la independencia, no significa moldearlo a la imagen del mentor, sino a la imagen de los conceptos bíblicos, a la imagen de Cristo. Potenciar se basa en la convicción de que el alumno ya tiene un potencial que hay que desarrollar.

5. La calidad requerida en un ministerio de mentoríaNaturalmente es difícil establecer características comunes del mentor, teniendo a la vista las diferencias entre culturas. Sin generalizar, hay algunas características “transculturales” que son de ayuda, al fijar algunas cualidades requeridas y deseadas de un mentor, en un ministerio eficiente:

• La habilidad de descubrir el potencial existente en una persona.

• Tolerancia con errores, ciertas asperezas, incongruencias etc., con la finalidad de ver el potencial descubierto desarrollarse.

• Flexibilidad en el trato con el mentoreado y la gente en general, sin negar puntos de vistas propios, pero sin imponerlos. Capacidad de responder adecuadamente a circunstancias variadas.

• Paciencia, sabiendo que tanto el tiempo como la experiencia son necesarias en el proceso del desarrollo del potencial de alguien.

• Perspectiva, es decir saber transmitir una visión y tener la habilidad de mirar más lejos, sugiriendo al mentoreado los siguientes pasos que tiene que dar.

• Dones y habilidades para edificar, animar, alentar y fomentar a otros.

por la Real Academia Española como “Comunicar potencia a algo o incrementar la que ya tiene”, “Capacidad generativa; Capacidad para ejecutar algo o producir un efecto”. Sostengo que la Palabra “Potenciar” resulta inequívocamente más compatible con el abordamiento motivaciónal del empowerment. El empowerment es entonces la potenciación de las personas, fenómeno mediante el cual los individuos aumentan su capacidad generadora. En este sentido Warren Bennis señaló que con la potenciación (empowerment) la gente se enriquece personal y sicológicamente, se siente significativa, logra mayor confianza y autonomía, desarrolla un sentido de comunidad, encuentra su trabajo estimulante y retador e incrementa su motivación, compromiso, esfuerzo y perseverancia. Potenciar no requiere tanto de jefes que cedan poder sino de líderes que sepan ser buenos “coaches”. En: http://empowerment.blogspot.com/2005/05/traduccion-de-empowerment.html

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Los líderes más experimentados en la materia de la mentoría llegan a la conclusión de que hay varias características esenciales aplicables en todos los contextos de la mentoría cristiana:

Un mentor con impacto es una persona con visión y dedicación (compromiso), es alguien que da prioridad al Reino de Dios y su justicia, y que entiende profundamente lo que significa aceptar responsabilidad. Además, un mentor eficiente exhibirá entusiasmo y será una persona accesible. UN MENTOR EFICIENTE ESTÁ DISPUESTO A DELEGAR RESPONSABILIDADES, pero permanecerá al lado del mentoreado para proveerle la dirección esencial. En la medida en que un mentor es sincero y veraz, se ausentará el criticismo subordinante. Si le asigna al mentoreado algún ministerio o tareas, lo hará con miras a que el mentoreado sea el beneficiado, y no el mentor. Un mentor eficiente procurará relacionar las expectativas que tiene con su mentoreado, con el logro de más altas y más significativas metas.14

6. Mentoría y poderAparte de la habilidad de potenciar los dones existentes en el “mentoreado”, liderazgo y mentoría pueden ser descritos como el proceso de ejercer influencia sobre otros. Esta influencia ocurre en una dirección compartida durante un tiempo. El proceso de ejercer influencia generalmente beneficia tanto al mentor o líder, como a los seguidores o mentoreados y también a su entorno.

El potencial para ejercer influencia es llamado “poder” (“power” en ingl.). Poder o el potencial para ejercer influencia puede ser físico, social o espiritual. Dirigentes cristianos procuran usar bases de poder social y espiritual, para alcanzar los propósitos que Dios les ha señalado. El poder social generalmente incluye competencia y conocimiento, pero también se relaciona con el potencial de legitimizar, crear acceso a información, recompensar etc.

Hay un “trío”, es decir tres tipos de ejercer poder, que caracterizan a un mentor:

1. Poder personal, carisma, relaciones interpersonales.

2. Poder posicional, basado en el puesto que ocupa en la red relacional de una organización o comunidad

3. Poder espiritual, basado en la relación personal que el mentor tiene con su Dios. Para un mentor cristiano, este tipo de poder es crucial, por no decir indispensable. Los puntos 1 y 2 forman parte del trío en mención y son de mucha ayuda, pero si falta el elemento 3, temo que los dos anteriores no serán suficientes para llevar al mentor a una gestión de éxito.

El poder espiritual del mentor depende de su vida con el Señor Jesucristo, su obediencia a la Palabra de Dios, su vida devocional. El mentor no tiene que temer el involucrarse en este proceso de ejercer su ministerio en el poder de Dios, pues Dios pone su poder y su sabiduría a nuestro alcance.

El mentor no tiene por qué temer este proceso, porque poder espiritual es un potencial expansible, y no materia prima limitada. Algunas maneras de potenciar al “mentoreado” pueden ser las siguientes:

• Asígnele trabajos importantes, y haga que las unidades de aprendizaje guarden relevancia

14 Parafraseando algunas citas de varios textos en inglés.

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con el ministerio.

• Procure extender paulatinamente las responsabilidades asignadas.

• Celebre los logros del mentoreado, no los del mentor.

• Provea los recursos necesarios, tales como el conocimiento contextual, recursos físicos e informativos, soporte intelectual y relacional etc.

• Establezca una red de relaciones provechosas con otras personas y tal vez con la organización (el entorno eclesial), en la cual el mentoreado servirá más adelante.

• De ayuda siempre es el establecimiento de una “auto-supervisión” para el alumno.

• Crea estructuras y sistemas que les serán de ayuda al mentoreado.

• Desarrolle metas y ante todo el carácter de la persona que le ha sido encomendada.

7. Algunos principios sencillos, pero básicos• No olvidemos que la potenciación es para y a favor del mentoreado.

• En la medida en que se nota progreso en el mentoreado, el mentor hará bien en no atribuirse a si mismo el éxito ni buscar beneficiarse de ello.

• Mentoría tiene un precio. El mentor empleará tiempo, tal vez hasta recursos económicos, asume cierto riesgo personal.

• Al líder emergente debe dársele libertad y reconocimiento.

• Al mentor le debe caracterizar la actitud de esperar el éxito de su labor.

• A medida que avanza el proceso de mentoría, debe haber un cambio - de enseñar a actuar cooperativamente. Esto ayuda a establecer una relación crucial de confianza mutua, un status nuevo, y la legitimación necesaria para el “mentoreado”, que ya no es mero alumno, sino un líder emergente o tal vez confirmado en algún ministerio específico.

• La acción más significativa del mentor en el proceso de potenciación de su alumno es, sin duda, la oración con y la intercesión frecuente por el alumno.

8. Cinco pasos didácticos importantes en la relación mentor-alumno

5. Feedback (mirar juntos lo logrado o lo deficiente)

4. Independencia (permitir que el alumno haga algo solo)

3. Instrucción (el mentor hace algo con el alumno)

2. Observación (el mentor le demuestra algo, el alumno observa)

1. Teoría (el mentor explica algo y el por qué)

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19Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

BibliografíaColeman, Robert E. 1972: Plan supremo de evangelización. Traducido por José María Blanch.

Prólogo por Luis Palau. San José, Costa Rica; Miami, Florida, EE.UU.: Editorial Caribe.

Leavenworth, Paul 2005: Leadership Tips. A publication of Leadership Development and Church Ministries. Open Bible Churches. Compiled by Dr. Paul Leavenworth, Spring-Summer 2005.

Logan, Robert E.; Clegg, Thomas T.; Buller, Jeannette; Schalk, Christoph 2001: Mehr und bessere Gemeinden. So setzen Sie das Potenzial Ihrer Gemeinde frei. Würzburg: Edition ACTS von CoachNet D.A.Ch., Christoph Schalk.

Título del original americano: Releasing Your Church’s Potential.A Natural Church Development Resource Kit for Pastors and Church Leaders. Churchsmart, St. Charles, Il, USA.

www.coachnet.de

Ott, Craig 1996: Das Trainingsprogramm für Mitarbeiter. Biblische Grundsätze. Didaktische Hinweise. Praktische Modelle. Giessen: Brunnen Verlag.

Poitras, James G.: Growing Leaders. http://www.reachingthroughteaching.com

Taller: La preparación del mentor: itinerarios formativos Jonatán Haley

20Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

La preparación del mentor: itinerarios formativos

Clase de mentoría Enfoques principales

Inte

nsiv

a

1. Discipulador Capacitación en lo esencial de seguir a Cristo.

2. Guía espiritualSeguimiento, dirección, perspectiva de cara a las dudas, compro-misos, y decisiones que afectan a la espiritualidad y la madurez.

3. Entrenador / AsesorMotivación, destrezas, y aplicaciones necesarias para superar un reto o contratiempo.

Ocas

iona

l 4. ConsejeroConsejo oportuno y perspectiva imparcial sobre cómo uno se ve a sí mismo, los demás, las circunstancias, y el ministerio.

5. Maestro Conocimientos y destrezas sobre un tema en concreto.

6. PatrocinadorDirección y protección profesional mientras uno avanza dentro de una organización.

Pasiv

a 7. Modelo contemporáneoUna persona viva que sirve de ejemplo e inspiración para la vida, el trabajo o el ministerio.

8. Modelo histórico Una persona del pasado cuya vida sirve de ejemplo e inspiración para la vida, el trabajo o el ministerio.

Intensiva Ocasional Pasiva

Discipulador Guíaespiritual Asesor Consejero Maestro Patrocinador Modelo

Contemporáneo

Histórico

Más intencionado Menos intencionado

Taller: La preparación del mentor: itinerarios formativos Jonatán Haley

21Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Hoja de trabajo 1: Vista panorámica

1. Identifica alguna de las personas que han sido importantes en tu propio desarrollo. Aprovechando el esquema de las 8 clases de mentoría, procura identificar qué función cumplió cada una de ellas para ti. De tu propia vida, ¿puedes pensar en un ejemplo de cada uno de los 8 tipos?

Clase de mentoría Personas

Inte

nsiv

a

1. Discipulador

2. Guía espiritual

3. Entrenador / Asesor

Ocas

iona

l

4. Consejero

5. Maestro

6. Patrocinador

Pasiv

a

7. Modelo contemporáneo

8. Modelo histórico

Taller: La preparación del mentor: itinerarios formativos Jonatán Haley

22Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Hoja de trabajo 1: Vista panorámica

2. Haz una lista de las áreas de tu vida en las que necesitas crecimiento y con las que te podría ayudar un mentor. Procura ser lo más específico posible. (Puede que te ayude pensar en los roles que tienes en tu vida.)

Para la reflexión futura.3. El seguimiento merma a medida que uno va hacia la zona de menor intencionalidad en

la mentoría. ¿Cómo se podría incluir alguna dinámica de seguimiento con un personaje histórico como mentor?

4. Haz un estudio de la vida de Bernabé (Hechos 4:36 y los capítulos 11-15), fijándote en aquellas cualidades de su vida que le hicieron tan buen mentor para los que le rodeaban.

5. ¿Cuáles son algunas de las ventajas de buscar múltiples mentores para tu vida en vez de una persona tipo “gurú” que cumpla todos los roles mencionados?

Taller: La preparación del mentor: itinerarios formativos Jonatán Haley

23Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Hoja de trabajo 2: Mentoría intensiva

1. Piensa en tu vida devocional, estudio de las escrituras, relaciones interpersonales y ministerio. ¿Sientes necesidad de progresar en alguna de estas áreas? ¿De qué maneras?

2. Evalúa tu propia experiencia y habilidades. ¿En qué ámbitos podrías compartir tu experiencia y habilidades con otros? (Recuerda, ¡no necesitas ser un experto total en un área! De hecho, una de las mejores maneras de mejorar tus propias destrezas es enseñar a otro.)

3. Elabora una lista de creyentes más jóvenes a quienes podrías ofrecer mentoría. ¿Qué necesidades específicas ves en sus vidas? Ora por esas personas, pidiéndole al Señor que te haga disponible para suplir algunas de sus necesidades.

Nombre ¿Qué necesita?

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24Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Hoja de trabajo 2: Mentoría intensiva

4. Según Stanley y Clinton, la mentoría intensiva abarca el discipulado, la dirección espiritual y la asesoría. Comparte en un grupo pequeño las ideas que tengáis y los recursos de los que sepáis para formarte más en estos ministerios.

Para la reflexión futura.5. Procura entablar una amistad más cercana con las personas por las que estás orando.

Al dar los pasos iniciales, el Señor te guiará para saber con quien podrías establecer una relación de mentoría.

6. Estudia 1 Tesalonicenses 2. ¿Qué actitud tenía Pablo como mentor hacia los tesalonicenses? Enumera algunos de los roles de mentoría que él cumplía en sus vidas. ¿Qué cosas les enseñaba?

7. Examina el rol de Joiada como Guía espiritual de Joás en 2 Crónicas 24. Observa de forma especial los versículos 2 y 17-18. ¿Qué sugiere esto sobre los Guías espirituales?

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25Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Hoja de trabajo 3: Mentoría ocasional

1. Para entender mejor los tres tipos de mentoría ocasional, forma un grupo con 2 otras personas. (Usa la tabla que aparece en la próxima página.) Entre los tres, debéis perfilar un poco más vuestro entendimiento de lo que implica cada una de estas clases de mentoría. Luego, desarrolla una lista de lo que representaría el éxito o el fracaso / abuso del papel de la mentoría en cada caso. Si puedes usar ejemplos personales, mejor que mejor.

Para la reflexión futura.2. Quizás los consejeros más famosos de la Biblia hayan sido los de Job. Sin embargo,

no fueron efectivos y desde luego Job no se vió capacitado en absoluto por ellos. Aparentemente tocaron las ocho funciones descritas en la Tabla 6-1. ¿Qué faltaba? ¿Qué lecciones ves en este ejemplo sobre buscar o ser un consejero?

3. Moisés caminaba con el Señor (¡habló con él cara a cara!), y fue un gran líder de Israel. Aun así, él también necesitaba mentores en su vida. Estudia Éxodo 18, donde su suegro Jetro le visita.

a. ¿Cómo sirvió Jetro de mentor en la vida de Moisés? ¿Cuál era la actitud de Jetro como mentor? ¿Cómo respondió Moisés?

b. ¿Cómo funcionaron las dinámicas de atracción, receptividad, y seguimiento? ¿Se dio la capacitación?

4. ¿Qué factores se dieron para que el consejo de Jetro surtiera efecto? ¿Qué observas en la relación de Moisés con Jetro que hiciera que su respuesta a Jetro mejorara la experiencia de consejería?

5. Sirviéndote de una concordancia, investiga un poco en la primera etapa de la vida de Josué. ¿Cómo te imaginas que Moisés habría actuado como mentor-maestro para Josué? En Números 27 observamos cómo esta mentoría culmina en el patrocinio de Moisés a Josué.

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26Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Hoja de trabajo 3: Mentoría ocasional

Consejero:

Éxito Fracaso / Abuso

Maestro:

Éxito Fracaso / Abuso

Patrocinador:

Éxito Fracaso / Abuso

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27Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Hoja de trabajo 4: Mentoría pasiva

1. Teniendo en mente los modelos en tu vida (tanto contemporáneos como históricos) contesta las siguientes preguntas. ¿Por qué y en qué te fueron modelos? ¿Cómo han influido en tu vida para hacer de ti una persona diferente hoy?

2. Si alguien fuese a mirarte a ti como ejemplo a seguir, ¿qué cosas querrías que viesen?

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28Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Hoja de trabajo 4: Mentoría pasiva

3. Como grupo, elaboraremos una lista de las biografías más importantes que hayamos leído y las lecciones principales que hemos aprendido. Esto te proporcionará una lista para leer en el futuro. (Pero recuerda que sólo porque una biografía haya sido importante para otro no significa que tenga que serlo para ti. No te sorprendas si algún libro “muy bueno” no te dice mucho. Hay muchos factores implicados en que un libro le haya sido de bendición a otro.)

Para la reflexión futura.4. Echa un vistazo a nuestra bibliografía anotada de biografías y escoge un mentor histórico

que te gustaría llegar a conocer. Búscate una copia del libro y ¡a empezar! Puede que también quieras mirar en una librería cristiana para ver qué biografías venden mejor... pero tampoco dejes de fijarte en algunas biografías clásicas.

5. Considera la vida de Jesús en los evangelios. Enumera las maneras en que él ejemplificaba lo que enseñaba. De manera especial, fíjate en las formas en que sus acciones hablaban con mayor fuerza que el mero discurso.

Taller: La preparación del mentor: itinerarios formativos Jonatán Haley

29Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Constelación de relaciones de mentoría

Orientación Descripción

Mentoría desde arriba

Proporciona perspectiva, dirección y seguimiento a la relación. Cuan-do tienes esta clase de relación, alguien te ayuda a ti.

Co-mentoría desde fuera

Una relación con alguien fuera de tu grupo u organización (que tiene más o menos tu mismo nivel de madurez). Al estar en otro contexto, puede aportar objetividad a tus circunstancias y preguntarte, “¿Por qué hacéis las cosas de esa manera?”

Co-mentoría desde dentro

Una relación con alguien dentro de tu grupo u organización (que tiene más o menos tu mismo nivel de madurez). Al estar en tu mis-mo contexto, conocerá mucho sobre ti y tu grupo u organización. Se puede compartir información confidencial.

Mentoría hacia abajo

Cuando tienes esta clase de relación, tú ayudas a otro, por lo menos en las áreas en que tú tienes experiencia, conocimientos y destrezas. Al mismo tiempo, a veces recibes dos aportaciones especiales (1) pre-guntas desconcertantes que te obligan a re-evaluar tus presupuestos, y (2) una inyección de fe de parte de alguien que no está cínico todavía.

Co-mentoríadesde fuera

(de tu grupo uorganización)

Mentoríadesde arriba

Mentoríahacia abajo

Co-mentoríadesde dentro(de tu grupo uorganización)

Elcreyente / líder

necesita

Taller: La preparación del mentor: itinerarios formativos Jonatán Haley

30Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Hoja de trabajo 5: Perfil de mentoría

1. Valiéndote del diagrama de la Constelación de relaciones de mentoría, junto con las descripciones de lo que cada clase de mentoría implica, coloca en su sitio a continuación los nombres de los mentores / alumnos / co-mentores que tienes en tu vida.

2. Evalúa cada una de estas relaciones para determinar el nivel de capacitación y apoyo que recibes y lo vigente de la relación (¿necesitas “actualizar” alguna relación?)

3. ¿Cómo puedes fortalecer las relaciones identificadas anteriormente para que puedan ejercer una mayor influencia positiva? ¿Te faltan algunas relaciones de mentoría, alumno o co-mentoría en la constelación? ¿En qué áreas? ¿Qué posibilidades existen de conseguirlas?

Elcreyente / líder

necesita

Taller: La preparación del mentor: itinerarios formativos Jonatán Haley

31Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Matices y observaciones

1. Según Stanley y Clinton, cualquiera de las ocho clases de mentoría pueden entrar en los cuatro cuadrantes.

2. Normalmente, las relaciones de mentoría son de tiempo limitado hasta que se cumplan los objetivos de capacitación.

3. No es imprescindible tener relaciones de mentoría en los cuatro cuadrantes (o de los ocho tipos) de forma simultánea. Sin embargo, en su conjunto, a lo largo de la vida esto trae equilibrio.

4. A medida que un líder madura es más difícil encontrar mentoría desde arriba. Esto es lógico dado que habrá cada vez menos líderes más maduros que uno mismo.

5. Un líder con un deseo activo de aprender estará siempre en busca de mentoría.

Nota: La mayor parte de este material procede directamente del libro, Connecting: The Mentoring Relationships You Need to Succeed in Life, de Paul D. Stanley y J. Robert (Bobby) Clinton. NavPress, 1992. Si existiera en castellano, recomendaríamos su compra y estudio.

Taller: La preparación del mentor: itinerarios formativos Jonatán Haley

32Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Tarea final

En la “hoja de trabajo 5” dibujaste algo de tu perfil actual en cuanto a la mentoría e identificaste áreas de posible mejoría. Partiendo de ese trabajo, tómate un tiempo más pausado para pensar en cómo sería tu perfil ideal este próximo año. Este será tu itinerario formativo (o por lo menos, tu brújula formativa). Comparte tu trabajo con alguien que te puede ayudar a verlo hecho realidad (tu cónyuge, pastor, etc.).

Elcreyente / líder

necesita

Devocional: Proverbios 27:17 Jonatán Haley

33Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Devocional: Proverbios 27:17 La importancia de las amistades con propósito

Introducción 1. Proverbios 27:17 dice, “El hierro con hierro se afila, y el hombre con el rostro de su amigo.”

a. El pasaje que tenemos por delante esta mañana nos manifiesta una verdad básica. Las personas con quienes te relacionas pueden tener una influencia marcada sobre ti.

i. Esta es la razón por la que todos los padres buenos se preocupan por las amistades de sus hijos.

ii. No es lo mismo que sus amigos sean chicos estudiosos y honrados a que sean unos mangantes retrasados y rebeldes.

b. También es la razón que todas las culturas tienen afirmaciones sobre estos asuntos en su sabiduría popular.

i. Sin ir más lejos, aquí en España decimos, “Dime con quién andas..., y te diré quién eres.”

ii. En EEUU se suele decir, “Pájaros de un mismo plumaje hacen bandada.”

c. Estas observaciones simplemente son unas maneras de constatar, entre muchas que podríamos mencionar, la poderosa influencia que nuestras amistades pueden tener sobre nosotros.

i. Obviamente, las mismas escrituras tienen mucho más que decir sobre esto, también.

ii. Proverbios 13:20, “El que anda entre sabios será sabio, pero el que se junta con necios saldrá mal parado.”

iii. Proverbios 22:24-25, “No te unas al iracundo ni te acompañes del irascible, no sea que aprendas sus costumbres y pongas trampa a tu propia vida.”

2. Pero volviendo a Proverbios. 27:17, me gustaría aprovechar la imagen que el versículo nos plantea como modelo sencillo para una especie de mentoría particular - la co-mentoría - o lo que también podríamos llamar, “un amigo con propósito”.

a. Proverbios. 27:17, “El hierro con hierro se afila, y el hombre con el rostro de su amigo.”

b. La Biblia en lenguaje actual lo pone de esta manera. “Para afilar el hierro, la lima; para ser mejor persona, el amigo.”

c. El consejo del proverbio, sería el siguiente, “Si quieres mejorar como persona, búscate un amigo.”

3. Pero como ya hemos vislumbrado en lo poco que hemos dicho hasta aquí, no todas las amistades son provechosas y no todas nos ayudan a ser mejor persona.

4. Además, según Clinton y Stanley, los amigos representan la fuente más disponible de capacitación, pero la menos desarrollada. (p. 169)

Devocional: Proverbios 27:17 Jonatán Haley

34Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

a. Por consiguiente, con esta imagen en mente, me gustaría que nos hagamos dos preguntas,

i. ¿Con quién me estoy relacionando?

ii. ¿A qué fin?

b. Puesto de otra manera, nos podemos preguntar

i. ¿Qué amistades tengo?

ii. ¿Qué efectos producen en mí?

¿Con quienes nos estamos relacionando?1. Desde la óptica de la mentoría, me gustaría sugerir que en su esencia, este versículo nos

habla gráficamente de lo que comentábamos ayer en la definición de Stanley y Clinton sobre la mentoría.

a. La mentoría es una experiencia relacional en la que una persona capacita a otra persona al compartir recursos dados por Dios.

b. Lo que Stanley y Clinton definen, Proverbios nos dibuja.

2. Este versículo nos ofrece una imagen que resume la esencia de lo que encierra la mentoría. A saber, que una persona ayuda a otra a ser mejor persona.

3. Dicho esto, sin embargo, y aunque tenga su aplicación para todas clases de mentoría, me parece que lo que está más directamente en vista en el proverbio son, ante todo, los amigos - las relaciones más cercanas que uno tiene. Las relaciones que hasta podríamos decir surgen naturalmente, por afinidad o circunstancias, más que otra cosa.

a. A veces nos relacionamos con alguien por comodidad.

b. A veces por intereses mutuos o el trabajo.

c. Otras veces por las amistades de los hijos.

4. Ahora bien. No todas estas amistades gozan del mismo nivel. Tenemos amigos más íntimos y otros menos. Stanley y Clinton hablan de tres niveles de amistad, y que cada nivel cumple funciones importantes en nuestras vidas. Hablan de (ver grafico)...

a. Niveles de amistad

i. Conocidos

ii. Amigos

iii. Amigos íntimos

b. Según el nivel de amistad, existe más o menos

i. Transparencia

ii. Confianza

iii. Compromiso mutuo

iv. Responsabilidad

v. Capacitación

Devocional: Proverbios 27:17 Jonatán Haley

35Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

¿A qué fin tenemos estas amistades?1. Lo más probable es que todos tengamos muchas amistades - algunas muy positivas.

Pero quizás hemos pensado poco en desarrollarlos al punto de que sean de un beneficio mutuo importante.

2. Desde luego que nuestra intención no es ser utilitario con nuestras amistades.

a. No es cuestión exprimirle al otro para ver cuánto provecho le puedo sacar.

b. Más bien, la intención debería ser el beneficio mutuo, tal como lo plantea las escrituras.

i. Hebreos 10:24, “Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras”

ii. 1 Tesalonicenses 5:11, “Por lo cual, animaos unos a otros y edificaos unos a otros, así como lo estáis haciendo.”

iii. Colosenses 3:16, “La palabra de Cristo habite en abundancia en vosotros. Enseñaos y exhortaos unos a otros con toda sabiduría.”

c. La misma imagen del proverbio nos mueve en la dirección de la reciprocidad y el beneficio mutuo, “el hierro con hierro”. El efecto que contempla Proverbios 27:17 es bidireccional.

3. Ahora bien. Como hemos visto, no es simplemente cuestión de tener amistades, es cuestión de que éstas realmente sean provechosas, y que sean provechosas para los propósitos de Dios.

a. Tengo un amigo misionero con quien me llevo muy bien por defecto.

i. Siempre que estamos juntos lo pasamos divinamente y casi siempre nos ponemos, sin mayor esfuerzo, a compartir reflexiones teológicas y lo que sea. Es una amistad muy buena.

Amigo íntimo

Amigo

Conocido

TransparenciaCon�anza

Compromiso mutuoResponsabilidad

Capacitación

más menos

Niveles de amistad

Devocional: Proverbios 27:17 Jonatán Haley

36Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

ii. Hace unos años, sentí que habían varias disciplinas que tenía un poco cojas, así que le pedí que me hiciera un seguimiento varios meses de esas disciplinas.

1) Dijo que sí, y con poco esfuerzo adicional, me hizo mucho bien y encima pudimos llevar nuestra amistad a nuevos terrenos.

2) Se lo agradecí mucho.

b. ¿Y cuáles son algunos de los propósitos que se podrían perseguir con mayor intencionalidad por medio de una amistad?

iii. Pues supongo que casi cualquier cosa que uno se podría imaginar desde la espiritualidad personal, la familia, destrezas laborables, conocimientos bíblicos...

iv. Cumplir aquella lista de “los unos a los otros” también daría mucho orientación buena (Juan 13:34-35, 1 Juan 3:11, Gálatas 6:1-2, Colosenses 3:13, 1 Tesalonisenses 5:11, Hebreos 3:12-14, Hebreos 10:24-25, Santiago 5:16).

4. Por cierto, hay veces que nuestras amistades pueden fomentar características negativas. Como, por ejemplo, promover la amargura. Eso no es bueno.

a. Me acuerdo hace años, Kathy y yo vivimos una experiencia laboral bastante dura.

i. En medio de ese dolor, lo más natural era juntarnos con otros que también habían sido heridos.

ii. Al final tuvimos que juntarnos menos con aquellos amigos por una temporada. Aunque fueran buenos amigos y muy positivos en circunstancias normales, en ese momento, nuestro sufrimiento mutuo con frecuencia creaba conversación que no edificaba a nadie.

b. Hay un refrán que dice, “La miseria ama compañía.” Un profesor mío, experto en relaciones interpersonales1, solía decir que eso no es totalmente cierto, más bien que “la miseria ama compañía miserable.” Cuando nos sentimos mal, no queremos estar con uno que está alegre, queremos estar con alguien que otorga validez a nuestra emoción. Pero esa dinámica puede encerrar una trampa de la cual debemos estar prevenidos.

c. Hebreos 12:15, “Mirad bien, para que ninguno deje de alcanzar la gracia de Dios, y para que no brote ninguna raíz de amargura que os perturbe y contamine a muchos.”

d. Por lo tanto, al igual que nuestras amistades pueden ir a más, también es posible que vayan a menos.

5. No lo sé, pero quizás sería de provecho hacer un pequeño análisis del estado de todas nuestras amistades. Podrías hacerte una lista, y luego unas preguntas. Por ejemplo.

a. ¿Cuál es el fruto de esta amistad?

1 Em Griffin, autor de obras como, Making Friends and Making Them Count (“Hacer amigos, y hacer amigos que valgan”).

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37Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

b. Si la respuesta es positiva, pregunta, ¿Puede esta amistad ir a más? ¿Haciendo qué?

c. Si la respuesta es negativa, pregunta, ¿Se puede redimir esta amistad? ¿Cómo?

d. Si no se puede redimir, por lo menos a corto plazo, pregunta, ¿Cómo puedo mermar su influencia negativa sobre mi?

Conclusión1. En lo dicho hasta aquí, nos hemos hecho dos preguntas principales.

a. ¿Qué amistades tengo?

b. ¿A qué fin?

2. Las dos preguntas son importantes.

a. La primera, porque dependiendo de quienes conforman tu red de relaciones será la ayuda a tu disposición.

b. La segunda porque es posible que tengas las relaciones adecuadas pero que no las estés sacando su mejor partido. Acaba siendo como ese fabuloso software que compraste pero que nunca usas.

3. Y cómo trabajamos estas dos preguntas, al fin y al cabo, puede tener una marcada influencia en el mismo rumbo de nuestras vidas y nuestro servicio al Señor.

a. En mi último año en la universidad compartí una casa con 9 compañeros de curso. Como todos procedíamos de estados occidentales en EEUU, nos titulamos “The Wild West House”, “La Casa del Oeste Salvaje.”

i. Entre nuestras filas habían algunos personajes muy interesantes, como uno que se había criado en amazonas, y siempre iba descalzo - incluso cuando el hielo cubrías las calles.

ii. Otro mantenía una guerra abierta con un amigo en el que siempre se robaban las bicis el uno al otro y los colgaban en los lugares más inesperados, como por ejemplo, del campanario de la iglesia.

iii. Luego habían cuatro que no estaban apuntados al comedor de la universidad, sino que vivieron todo el año de lo que recogían de los cubos de basura detrás de los supermercados. Y hasta una vez invitaron al presidente de la Universidad y su mujer a cenar de los frutos de sus cosechas...

iv. Luego otros que albergaban una manía especial por las ardillas. Las pillaban, pintaban sus colas de color naranja y las soltaban por el campus. Uno directamente se liaba a dispararles con su rifle desde la ventana de la casa hasta que un día reventó el parabrisas de un coche aparcado y la policía le multó.

b. Pues, con un nombre como la Casa del Oeste Salvaje y con los personajes que éramos, esto podría haber sido un año de mucha fiesta, poco estudio y poco provecho. No fue así.

c. El asunto es que a pesar de nuestras idiosincrasias y creatividad lo que nos unía como amigos era nuestra lealtad a Cristo y un rumbo común en su servicio.

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38Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

i. Diez chichos universitarios viviendo juntos todo un año podría haber sido una receta para el desastre, pero no lo fue, porque nuestra intención era otra. Nuestra finalidad era apoyarnos a ser cada vez más semejantes a Cristo y más útiles en su servicio.

ii. Al final del año nos hicimos un compromiso de mantenernos en contacto a lo largo de nuestras vidas y ser una comunidad de apoyo y consejo. ¡Incluso en asuntos tan importantes y prácticos como la elección de nuestras futuras mujeres! Hoy 6 de los 10 estamos en el campo misionero y los otros cuatro apoyan.

iii. 20 años más tarde seguimos en contacto. A veces más. A veces menos. Pero nuestro compromiso sigue allí.

1) Por ejemplo, hace dos años, uno de los nuestros perdió su mujer de un cáncer. Hicimos lo que pudimos para apoyarle desde diferentes puntos del mundo.

2) Cuando empezó a pensar en casarse de nuevo, varios estuvieron para aconsejarle (y para asegurarse de que no lo hacía precipitadamente y de rebote). Cuando se casó nuevamente, ayudamos a que uno se desplazase a Albania para estar en la boda.

d. Cuento todo esto para resaltar el hecho de que unas buenas amistades con propósito pueden ser de muchísima bendición.

e. También pueden ser una interesante radiografía del estado de tu corazón.

i. En el caso del Oeste Salvaje, nos escogimos los unos a los otros, en parte, por quienes ya éramos. Y nos escogimos los unos a los otros, en parte, por quienes queríamos llegar a ser.

ii. Nuestras amistades pueden reflejar simultáneamente la clase de persona que somos, y la clase de persona que nos gustaría llegar a ser.

iii. La falta de amistades, o amistades con propósito, también puede revelar algo.

1) A lo mejor no profundizamos por temor a que se descubra algo de nosotros.

2) A lo mejor uno desaprovecha las relaciones buenas que tiene porque ha perdido algo de interés en lo que podrían apoyar en servicio al Señor.

f. Yo tendría que confesar, por ejemplo, que en balance, en estos últimos 20 años no he sacado todo el valor que las relaciones del Salvaje Oeste me brindaban. Es una pena, en realidad. Oportunidades perdidas.

4. Por lo tanto, apostemos por las amistades con propósito.

5. Amistades en las que nos podemos servir de co-mentores, de diversas maneras, los unos a los otros.

6. Apostemos por aquellos que nos afilan y no aquellos que nos desafilan.

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39Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Remate 1. En esta Aula Abierta nos hemos dedicado a la mentoría. Pero desde una óptica

bastante amplia, porque creemos que su potencial va mucho más allá de una asignatura determinada o una habilidad determinada. En el mejor de los casos abarca toda la vida...

2. Y es con ese concepto que me gustaría concluir.

a. Como mencioné ayer, Stanley y Clinton, de quienes hemos citado descaradamente2 (je je), afirman que en su estudio de aquellos que han terminado bien su vida y ministerio, una de las características que destacaba era la presencia continuada de personas - amigos y mentores - que les influenciaban para bien.

b. Nos parece un reto digno de transmitir.

3. La mentoría... desde arriba y hacia abajo, desde fuera y desde dentro, es un regalo de Dios para nuestra formación, servicio y perseverancia.

Cinco características de quienes llegan bien al final de la carrera

1. Tenían una perspectiva que les permitió mantener un claro objetivo.

2. Disfrutaban de intimidad con Cristo y experimentaban continua renovación interior.

3. Eran disciplinados en las áreas importantes de la vida.

4. Mantenían una actitud de aprendizaje positiva durante toda su vida.

5. Se relacionaban con personas que influenciaban su vida para bien, así también como con mentores capacitados.

2 Paul D. Stanley y J. Robert Clinton, Connecting: The Mentoring Relationships You Need to Succeed in Life, Colorado Springs, NavPress, 1992.

Devocional: Proverbios 27:17 Jonatán Haley

40Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Para la reflexión futura1. Pensando en los diferentes grados de amistad (conocido, amigo, amigo íntimo), pon los

nombres de las personas que para ti están en cada categoría. ¿El temor o el orgullo hacen que no persigas mayor profundidad en algunas de estas relaciones?

2. Usando una concordancia haz un estudio temático sobre la amistad. Incluye los versículos de los “unos a otros” con los otros textos que encuentras. Luego califica cómo eres como amigo para las personas enumeradas anteriormente. ¿Qué cosas específicas podrías hacer esta semana para aplicar estos versículos? (¿Por ejemplo, qué podrías hacer para animar a un amigo en particular en su crecimiento espiritual?)

3. Después, piensa en lo receptivo que eres a otros cuando quieren poner por obra los “unos a los otros” contigo. ¿Eres receptivo a su aliento y corrección? ¿Les permites entrada en tu vida para que puedan soportar algo de tus cargas?

4. ¿De qué maneras te ha ayudado un amigo a ser consecuente? (Si no lo han hecho, posiblemente no les has permitido acercase tanto como habías pensado.)

5. Considera. ¿Te es más fácil ser responsable con tus amigos en algunas áreas de tu vida y menos en otras? ¿En qué áreas es más difícil recibir corrección? ¿Por qué? ¿Merece la pena luchar a solas?

6. Escoge un área y un amigo. Dile a esa persona esta semana que le concedes la libertad de mantenerte responsable en esa área. Es un inicio.

Colofón: Un buen final Stanley y Clinton

41Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

Un buen final: Cinco características vitales

El apóstol Pablo estaba obsesionado en tener un buen final. Veía la vida como una carrera. Al encontrarse con sus amados ancianos de Éfeso por última vez dijo: «Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios» (Hch. 20:24). Pablo estaba tan motivado por terminar bien, que desafiaba a los creyentes Corintios a: “Correr (la carrera) de tal manera que obtengan el premio… No… corriendo como a la ventura” (1 Co. 9:24-26). Disciplinaba su cuerpo a hacer lo que debía hacer no a lo que deseaba, “no sea que habiendo sido heraldo para otros, yo mismo venga a ser eliminado” (v. 27). Qué gozo invadió su corazón, cuando testificó al final de su vida: “He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe” (2 Ti. 4:7).

¿Qué fue lo que motivó al Apóstol Pablo a proseguir hasta el final? Quizá el mismo motivo que incitó a Daniel y sus tres compañeros, Sadrac, Mesac y Abednego a fijar sus ojos en Dios y ser suyos hasta el final, sin importar las consecuencias. O a David, José, los apóstoles, Bernabé, Jorge Müller, Billy Graham y miles de seguidores de Cristo cuyos nombres quizá sean conocidos por unos pocos, pero que han influido en la vida de los que los conocieron.

Terminar bien no significa alcanzar la perfección, sino como Pablo, proseguir hasta el final para que cuando éste llegue, nos encontremos aún creciendo en amor e intimidad con Cristo, dándole a conocer, viviendo como sus discípulos y amando a las personas que Dios pone en nuestro camino, procurando hacer siempre Su voluntad.

Hemos comparado escritos sobre los muchos líderes que hemos estudiado, tanto de los que han terminado bien como de los que no han terminado bien. Los que terminaron bien parecen haber tenido algunas características similares y a los que no terminaron bien les faltaban esas mismas características.

Cinco características de quienes llegan bien al final de la carrera1. Tenían una perspectiva que les permitió mantener un claro objetivo.La perspectiva se destaca como característica de todo buen líder y de quienes terminan bien la carrera. Dicha perspectiva incluye ver el contexto más amplio de la circunstancia presente, poder relacionar lo que está sucediendo con el panorama a largo plazo. Con una perspectiva clara y adecuada uno puede centrar su atención en lo importante o prioritario. Sin esa perspectiva uno puede perder de vista el objetivo.

Un amigo mío en la universidad acostumbraba comprar rompecabezas y organizar equipos de competencia para ver quién podía ordenarlos más rápidamente. Los equipos llegaron a ser bastante buenos. Un día desparramaron los pedazos del rompecabezas sobre el piso sin dejar que los equipos vieran la figura de la caja. Sin un modelo que los ayudara a organizar las piezas, la confusión era total.

La perspectiva es como la fotografía o el dibujo en la caja de rompecabezas. Sin una meta

Colofón: Un buen final Stanley y Clinton

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clara en nuestra vida la tendencia será no canalizar las energías y caer en la mediocridad, haciendo un poco de todo, no siendo eficaces en nada. Aquellos con influencia en su mundo son aquellos que pueden concentrar esfuerzos y atención en áreas apropiadas y pueden mantener esa actitud.

El apóstol Pablo demuestra el efecto recíproco que tienen la perspectiva y la mirada concentrada en la meta. En Filipenses 1.12-19 Pablo se enteró de que algunas personas que supieron de su encarcelación estaban predicando sobre Cristo por motivos de rivalidad, maldad y ambición. Él se pudo haber enojado y recomendado a los cristianos que se lo impidieran, pero el enfoque de su ministerio era llevar a los gentiles a Cristo (Gá. 2.7).

Su perspectiva le recordaba que la salvación de Dios viene a través del nombre de Jesucristo, no a través de una presentación o de la motivación del presentador… y Dios estaba utilizando sus situaciones difíciles (cárcel, entre otras) para extender el evangelio a las comunidades gentiles, ese era su enfoque.

La perspectiva viene a través de la experiencia y de la meditación en la presencia de Dios. Asaf, el escritor del Salmo 73, se desanimaba al ver que los malos prosperaban y que él no era recompensado en sus esfuerzos por mantenerse puro. “Cuando pensé para saber esto, fue duro trabajo para mí, hasta que entrando en el santuario de Dios, comprendí el fin de ellos” (vv. 16-17). La verdadera perspectiva viene de la Palabra de Dios y su presencia.

Cuando comenzamos a entender cuáles son las prioridades de Cristo y las aplicamos a nuestra vida, podemos entonces centrar nuestro objetivo en lo correcto. Simplemente requiere tiempo conocer a Cristo y su Palabra, permitiendo que Su mente invada nuestra mente. Un mentor que reúne estas cualidades es de gran valor para tal fin.

2. Disfrutaban de intimidad con Cristo y experimentaban continua renovación interior.La intimidad con Cristo es la substancia de nuestro ser interior. Salomón, el rey de Israel, escribió en Proverbios: “Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón, porque de él mana la vida” (4.23). El poder para guiar y ministrar viene de la vida interior. Este era el área de enfoque de la vida del apóstol Pablo: Conocer a Cristo íntimamente (Fil. 3.10). La consideraba una práctica de por vida que necesitaba múltiples llenamientos.

En Juan 14.21 Cristo nos asegura que si obedecemos los mandamientos de Dios, el Padre y Cristo nos amarán y nos revelarán más de sí mismos. Mateo 11.28-30 nos invita a unirnos en yugo con Cristo, a obedecerle y trabajar en unión con Él y, por lo tanto, a aprender de Él. Cuando era niño trabajé todo un día con mi padre en un duro trabajo de reparación. Estábamos solos los dos, pensando, excavando, transpirando, conversando para reparar una cañería y válvula de agua. A través de esa experiencia aprendí más que nunca antes de él. Nos “unimos juntos en yugo”.

Al pasar tiempo con Cristo, tratando de vivir en obediencia y ministrando a sus ovejas juntamente con Él (Jn. 21.15-17, Mt. 25.40), habrá tal intimidad con Él que cada área de nuestra vida se verá afectada. La integridad y el carácter semejantes a Cristo serán parte de nosotros al tiempo que permitimos al Espíritu Santo tomar posesión de nuestra vida y al tiempo que experimentamos una continua comunión con Él.

Cuando notamos falta de integridad en nuestra vida exterior, hay un síntoma claro de falta de integridad en la vida interior que nadie percibe. Y cuando hay falta de integridad, no hay poder

Colofón: Un buen final Stanley y Clinton

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espiritual, confianza, libertad ni transparencia. El secreto de la integridad interior es intimidad con Cristo.

La mayoría de los líderes que hemos estudiado, que no terminaron bien, fallaron en su vida interior. Su integridad se deterioró y tomaron malas decisiones. Al concientizarse del creciente abismo entre la verdad y la vida en su ser interior y al temer ser descubiertos, se apartaron de la comunión que más necesitaban… y de la comunión con Cristo.

Hace varios años conocí a un anciano hermano que gozaba de intimidad con Cristo por vivir en integridad, haciendo evidente el fruto del Espíritu (Gá. 5.22-23) y pasión por la gloria de Cristo. Mientras oraba con él percibí en mi corazón la presencia de Cristo y la familiaridad que disfrutaba con Él. Le pregunté acerca de su relación con el Señor Jesús y cómo se había desarrollado. «Todo comenzó a cambiar cuando me entregué a lo que dice Mateo 22.37-39: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante. Amarás a tu prójimo como a ti mismo”.

Su desafío me motivó a buscar esa intimidad a un nivel más profundo. ¿Ha tratado usted de cumplir ese mandamiento? Jesucristo lo hizo en Su amor por Dios el Padre. Mire a Su vida:

• Pero no se haga mi voluntad, sino la tuya (Lc. 22.42).

• Porque yo hago siempre lo que le agrada (Jn. 8.29).

• Pero le conozco, y guardo Su palabra (Jn. 8.55).

• Ahora está turbada mi alma, ¿y qué diré? ¿Padre, sálvame de esta hora? Mas para esto he llegado a esta hora. Padre, glorifica tu nombre (Jn. 12.27-28).

• Porque yo no he hablado por mi propia cuenta, el Padre que me envió, él me dio mandamiento de lo que he de decir, y de lo que he de hablar (Jn. 12.49).

• Yo te he glorificado en la tierra, he acabado la obra que me diste que hiciese (Jn. 17.4).

• Mete tu espada en la vaina, la copa que el Padre me ha dado. ¿no la he de beber? (Jn. 18.11).

Estos versículos revelan una total rendición a Su voluntad, un impulso por agradarle, una confianza plena… una pasión para la gloria de Dios. Jesús vivía en armonía con Él porque le conocía, le confiaba todo y pasaba tiempo con Él. Usted puede decir: “Él es Jesús, yo nunca podría hacer eso”, o puede comenzar a practicarlo y Dios le dará poder para realizarlo. Nosotros se lo podemos asegurar.

3. Eran disciplinados en las áreas importantes de la vida.La disciplina no se destacó en todas las áreas de aquellos que terminaron bien, pero sí en las áreas importantes y aun éstas variaban. Por ejemplo, algunos fueron disciplinados en su oración y estudio bíblico, pero no en su dieta. Algunos eran disciplinados con sus planes pero desorganizados con su puntualidad. Y así seguía… pero cada uno demostró disciplina en las áreas importantes.

El diccionario define la disciplina como un “entrenamiento que produce control propio, carácter o método y eficiencia”. Para tener un buen final debemos tener dominio propio y canalizar la energía en una dirección específica. Nancy Moyer, experta en trabajar con niños talentosos dijo: «No hay nada más frustrante que observar a niños talentosos derrochar los

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44Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

bienes que Dios les dio. Muy pocos niños con talento (o aun adultos) alcanzan su potencial por una simple razón: falta de disciplina.

Para desarrollar nuestros dones, habilidades y destrezas y que lleguen a ser verdaderos valores para lograr las metas de la vida, se necesita disciplina. ¿En qué áreas? En aquellas que son importantes para lograr un buen fin.

Cuando los misioneros van a trabajar entre gente de otra cultura, generalmente se rigen por lo que dice 1 Corintios 9.19-23 para adaptarse al medio ambiente y ajustarse al de aquellos a quienes están tratando de alcanzar. En este pasaje Pablo enfatiza que la meta es “ganar a tantos como sea posible”. Por lo tanto, dice “a todos me he hecho de todo” o a los legalistas secularizados, débiles, fuertes o a quien fuere. Dijo “esto hago por causa del evangelio”.

Como supervisor de misioneros, me di cuenta de que muchos luchaban con el estilo de vida ya que caían en abusos propios de la cultura de que eran parte o se sentían tentados a hacerlo. Un misionero de trabajo muy fecundo, un hombre que parecía vivir con bastante libertad y parecía espiritualmente fuerte en medio de quienes vivían contrariamente al evangelio, me compartió su secreto: “Hay que poner en práctica los últimos cuatro versículos de 1 Corintios 9”.

Como ya dijimos en 1 Corintios 9.24-27, Pablo enfatiza la importancia de la perseverancia y la concentración… con disciplina. Los versículos 25 y 27 lo demuestran: “Todo aquel que lucha, de todo se abstiene, ellos a la verdad, para recibir una corona corruptible, pero nosotros, una incorruptible… golpeo mi cuerpo y lo pongo en servidumbre no siendo que habiendo sido heraldo para otros, yo mismo venga a ser eliminado”. Pablo está hablando de disciplina y dominio propio. Si cedemos en nuestra forma de vida, debemos ser consistentes en la disciplina interior o podríamos llegar a ser descalificados o no terminar la carrera.

¿Cuáles son las tres áreas que usted considera importantes para su vida interior y para su crecimiento espiritual? ¿Qué es lo que alimenta su intimidad con Cristo? Quizá necesite disciplinarse en estas áreas. No la disciplina por amor a la disciplina, ya que esto pronto se convertiría en legalismo y dureza; más bien disciplina por el bien de la intimidad… por amor al crecimiento… por amor al ministerio… por amor a Cristo. La disciplina en las áreas adecuadas para hacer lo correcto contribuirá al crecimiento y lo capacitará para responder a la gracia de Dios y Su Espíritu en plenitud.

4. Mantenían una actitud de aprendizaje positiva durante toda su vida.

La mayoría de la gente deja de aprender a la edad de cuarenta años. Con esto queremos decir que no se empeñan más en adquirir sabiduría, entendimiento y experiencia para mejorar su capacidad de crecimiento y contribución para los demás. La mayoría simplemente se queda con lo que ya sabe; pero los que llegan a un buen final mantienen una actitud positiva de aprendizaje durante toda su vida.

Muchas personas, especialmente los líderes, se estancan. Están satisfechos con lo que son y lo que saben. Esto generalmente ocurre después de haber adquirido lo suficiente para estar confortables o cuando pueden prever un futuro relativamente seguro. Pero esto contradice el principio bíblico de mayordomía.

Hemos observado que Dios a menudo desafía providencialmente a los creyentes a dar los pasos necesarios para llevar a cabo sus propósitos para Su gloria. Algunos no están conscientes

Colofón: Un buen final Stanley y Clinton

45Aula Abierta 2008: “Mentor y Alumno: Un camino compartido”Escuela Evangélica de Teología, 27-28 de Junio 2008

de la situación hasta que Dios a través de las circunstancias los estimula a crecer. Como mayordomos somos responsables de incrementar lo que Dios nos dio.

El mantener una perspectiva clara nos ayudará a identificar lo que precisamos aprender para continuar creciendo y proseguir apuntando a nuestra meta. La amistad con personas que valoran seguir aprendiendo es provechosa y de ayuda. Exponerse a situaciones nuevas o variadas, estimulará nuestra necesidad de aprender.

La madre de Pablo tiene ochenta y cinco años y siempre está leyendo algún libro, aprendiendo más sobre nutrición (es su hobby), y hablando con la gente acerca de sus vidas. Una vez fue invitada a asistir a un estudio bíblico para personas mayores. Luego se unió a un estudio bíblico de mujeres jóvenes para el cual había que prepararse de antemano. Le pregunté por qué no se había quedado con el grupo de personas mayores. Ella respondió: “Oh, ellos eran muy amorosos, pero querían hablar siempre de las mismas cosas. Yo quiero aprender cosas nuevas”. Así lo hace y va a terminar bien.

5. Se relacionaban con personas que influenciaban su vida para bien, así también como con mentores capacitados.Cada líder que hemos estudiado o analizado estuvo rodeado de buenos amigos y mentores durante su vida. Por lo tanto, es importante destacar que tener colegas y mentores cercanos nos ayudará y animará en las otras cuatro áreas para tener un buen final.

Por ejemplo:

• Los mentores proveen orientación para las decisiones importantes de la vida.

• Los mentores están conscientes de la necesidad de experiencias de renovación y pueden ayudar a discernirlas.

• Los mentores pueden detectar y prevenir malos hábitos y el caer en la tentación del abuso de poder y autoridad.

• Los colegas y mentores pueden ser de estímulo y ayudarnos a ser responsables en lo personal y en nuestra diaria relación con Cristo.

• Los colegas y mentores ayudan a desarrollar disciplinas correctas y nuevas perspectivas.

• Los colegas y mentores modelan los valores y actitudes positivas de aprendizaje.

• Los mentores pueden señalar el estancamiento y estimular el aprendizaje.

___________________

El Doctor Roberto Clinton es profesor de liderazgo en la Escuela de Misiones Mundiales en el Seminario Teológico Fuller en California. Se especializa en estudios de liderazgo. Como antecedente a sus contribuciones en el estudio y desarrollo de liderazgo, ha investigado extensamente las vidas de más de 600 líderes pasados y presentes.

Paul Stanley es vicepresidente de Los Navegantes, responsable de ministerios en más de 70 países. Durante 20 años ha trabajado en el área de desarrollo de liderazgo, y ahora es asesor de otras organizaciones en la misma área.

Connecting por J. Robert Clinton y Paul D. Stanley © 1992., Usado con permiso de NavPress, Colorado Springs, CO, USA. Apuntes Pastorales Volumen XIV, número 3.