ASpectos Psicosociales Del Niño Con Autismo

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ASPECTOS PSICOSOCIALES DEL NIÑO CON AUTISMO

Prof. José L. Cordovés Avilés

ASPECTOS PSICOSOCIALES:Conducta estereotípica

Frecuentes episodios de conducta estereotípica e infrecuente o ningún compromiso de interacción social con pares son dos características que definen el autismo (Volkmar, Lord, Bailey, Shultz, & Klin, 2004).


La conducta estereotípica, en algunos niños interfiere con el aprendizaje y puede aislarlo de sus pares o adultos debido a su altamente inusual y estigmatizante naturaleza.


Aislamiento social de sus pares los previene de la formación de relaciones sociales, los cuales son esenciales para el desarrollo social temprano (Lee, Odom, Loftin, 2007).


Estudios sugieren que puede existir una relación colateral entre la conducta estereotípica y la falta de compromiso en interacción social (Lee, et al.,2007).


Estereotipos en niños con autismo incluyen conductas repetitivas descontroladas y rítmicas que no aparentan producir efectos adaptativos inmediatos (Bodfishet al., 1995).

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Puede envolver conducta motora, tales como aplaudir, mecerse, girar la cabeza o manipulación repetitiva de objetos (Lewis & Bodish, 1998).


Puede envolver, además, conductas repetitivas orales/verbales o llevarse objetos a la boca. En ocasiones pueden combinar conductas orales/vocales con motoras, y, otras veces tales conductas pueden ser autodestructivas (Turner, 1999).


Tales conductas pueden crear estigma social y reducir las oportunidades para una inclusión social completa (Durand & Carr, 1987).


La conducta estereotípica puede interferir además con actividades del diario vivir (Repp et al., 1991), que incluyen instrucción académica (Koegel & Covert, 1972), ejecución precisa en actividades de aprendizaje y jugar con juguetes (Nuzzolo-Gómez et al, 2002).


Los niños con autismo no sólo interactúan infrecuentemente con sus pares, sino que ellos mismos pueden activamente buscar el aislarse socialmente (Lee et al., 2007).


Efectos positivos han sido conseguidos utilizando intervenciones diseñadas para promover la interacción social entre niños con autismo y sus pares (McConnel, 2002).

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En particular, las intervenciones mediadas por pares han probado ser efectivas aumentando el compromiso social de niños con autismo (Odom et al., 2003).


En estas intervenciones, pares socialmente competentes son enseñados a iniciar interacciones con el niño con autismo para maximizar la oportunidad de que éstos se comprometan socialmente (Strain & Odom, 1986).


Cuando estrategias mediadas por pares han sido utilizadas, estudios han notado cambios colaterales en otras conductas.


Oke and Schreibman (1990) hallaron una disminución colateral in conducta desorganizada cuando el niño era enseñado a iniciar interacción social.


Pierce and Scheibman (1997) utilizaron un enfoque de entrenamiento de respuesta fundamental (“pivotal”) mediada por pares que incluyó: instrucción didáctica, modelaje, “role-playing”y retroalimentación.


Encontraron que, además de producirse un aumento en el compromiso social, también hubo mejoría colateral en jugar con juguetes y uso del lenguaje generalizado.

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Aunque a través de intervenciones mediadas por pares aumentan el compromiso social y disminuyen la conducta estereotipada, ésta no desaparece por completo (Lee et al. 2007).

ASPECTOS PSICOSOCIALES:Intervenciones

Déficit en destrezas sociales son una característica central en el autismo. Por lo tanto, presentan dificultades en: comunicarse con otros, procesar y integrar información del ambiente, establecer y mantener relaciones sociales con otros y participar en nuevos ambientes (Bellini et al. 2007).


Dificultades específicas incluyen:Iniciativas de interacciónMantener reciprocidadCompartir disfruteEntender la perspectiva de otrosInferir los intereses de otros


Pocos niños reciben apropiados programas de intervención en destrezas sociales lo que los puede conducir a pobre aprovechamiento académico, fracaso social y rechazo de los pares, ansiedad, depresión, abuso de sustancias y otras psicopatologías (Bellini, 2006).


Las destrezas sociales tiene una importancia crítica para el exitoso desarrollo social, emocional y cognoscitivo. Programas de desarrollo social deben ser un componente integral de la programación educativa del estudiante con autismo (Bellini et al. 2007).


McConnell (2002) identificó cinco categorías de intervenciones de destrezas sociales:

1. Modificaciones al ambiente-envuelve modificaciones al ambiente social y físico.

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2. Intervenciones específicas (“child-specific”)- envuelven la instrucción directa de conductas sociales tales como iniciar y responder a interacciones.


3. Intervenciones de destrezas colaterales- envuelven estrategias que promueven la interacción social mediante el entrenamiento de destrezas relacionadas, en lugar de la destreza directamente.


4. Intervenciones mediadas por pares- envuelve el entrenamiento de pares sin impedimentos para dirigir y responder a la conducta social del niño con autismo.


5. Intervenciones comprehensivas- envuelven la combinación de dos o más categorías de intervenciones.


El entorno escolar ofrece un entorno ideal para programar intervenciones que desarrollan destrezas sociales de manera efectiva (Welch et al., 2001).


Sin embargo, implementar programas de intervención social puede ser un reto para el personal escolar debido a la falta de:TiempoRecursosEntrenamiento

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Bellini et al., 2007 apoya las recomendaciones de Gresham et al. 2001 para mejorar las intervenciones de destrezas sociales. Estas recomendaciones son:


Dosis-No se debe planificar para menos

de 30 horas de intervención distribuidas a lo largo de 10 a 12 semanas.


Escenario de la intervención-Las intervenciones deben

realizarse en ambientes naturales y no en ambientes descontextualizados.


Un ambiente descontextualizado conduce a pobres efectos de mantenimiento y generalización. Intervenciones posibles de ser realizadas en ambientes naturales múltiples deben ser seleccionados.


Pareo de la estrategia con la dificultad específica-

La estrategia debe responder a la necesidad específica del niño, en vez de obligarla a “encajar” en la estrategia seleccionada.


Por ejemplo, se debe contrastar entre la necesidad de adquirir una destreza versus ejecutar una destreza.

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Fidelidad de la intervención-Es importante para

determinar el éxito de la intervención seleccionada. Además, es importante que tenga validez social.

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