ARTCULOS HITLER

Alemania evoca hoy el fallido atentado contra Hitler del 20 de julio de 1944

Hoy se cumplen70 aos de la Operacin Valkiria, el atentado fallido contra Hitler que inspir lapelculaHYPERLINK "http://www.abc.es/20090127/vivir-ocio-cine/valkiria-200901271638.html" \o "\Valkiria\" \t "_blank" Valkiria, protagonizada por Tom Cruise, en la que daba vida al coronel y aristcrata alemnClaus Von Stauffenberg.El coronel alemn fueel cabecilla de una operacin coordinada con otros aristcratasparaacabar con el dictadoren una trama cuidadosamente trazada queel azar desmantel. Hoy tendr lugar una jornada de recuerdo en Alemania con una ofrenda floral y un discurso en elBendlerblock,la sede del ministerio de Defensa en Berln donde est el monumento de la resistencia antihitleriana, adems de una serie de eventos conmemorativos.Von Stauffenbergera un hombre conocido por todos y con un fuerte compromiso al partido, incluso haba perdido el ojo derecho durante un ataque aliado en frica, peroodiaba en secreto al Fhrer. Aprovech el da que Hitler iba a reunirse con el Estado Mayor en elbnker subterrneo en Prusiaapodado Guarida del Lobopara organizar su plan de accin: adentrarse en el edificio y colocar un maletn con dosartefactos explosivos bajo la mesa de Hitlerpara terminar con su vida. As lo hizo, y sali huyendo con intencin de viajar a Berln, pensando que habra terminado con el dictador.Pero slo una de las bombas estall y aunquemurieron cuatro de las veinticuatro personas presentes, ninguna de ellas fue Hitler,quien slo sufri alguna herida leve.Von Stauffenbergy sus compaeros fueroncapturados y ejecutadosen el patio del Bendlerblock esa misma noche y otros doscientos implicados en la Operacin fueron asesinados o internados en campos nazis en los das posteriores al atentado. Pese al fracaso, la historia elev a ese grupo deoficialesa la categora desmbolos de la resistencia.Valkiria, la pelculaLa adaptacin a lagran pantallade este acontecimiento histrico la llev a cabo el directorBryan Singer, quien escogi aTom Cruisepara interpretar el papel del coronelClaus von Stauffenberg.Su estreno se retras durante meses y finalmente vio la luz en 2008. Se rod en diferentes lugares de Alemania, incluido el Bendlerblock, donde tuvo lugar toda la accin, aunque tuvieron algunos problemas iniciales para rodar all.El filme tuvo que tener especial cuidado con algunosdetalles para ser fiel a la historia,comolos hombres exactos que se encontraban en la reunin con Hitleren ese momento o no daar los aviones que aparecen en la pelcula, ya que muchos de ellos eran reales.

La Unidad Ezquerra, formada por soldados hispanos, luch junto a los nazis en los ltimos das del III ReichBerln, 1945. Los nazis defienden la capital de lo que, en su da, fue el III Reich. Pero de ese antiguo imperio ya slo quedan cenizas. MientrasAdolf Hitlerse protege acongojado en su bnker y las bombas llueven sobre la ciudad, unos pocos soldados tratan de resistir las embestidas de los carros de combate y la infantera sovitica. De repente, entre las continuas rfagas de disparos y el retumbar de alguna granada perdida, suena una orden Disparad!.Aunque lleva el uniforme alemn, el oficial que grita es espaol y pertenece a la Unidad Ezquerra, un grupo formado por300 soldados hispanosque, junto a los hombres del Fhrer,se quedaron en Alemania para batallar contra el comunismo en los ltimos das del nacional socialismo.En aquel grupo caba todo aquel que se presentara voluntario, ya fuera un veterano de la disuelta Divisin Azul, un estudiante que hubiera decidido partir hasta Alemania, o un espaol que hubiera atravesado los Pirineos para luchar del lado del Fhrer. Tan solo haba una norma: deba sentir repugnancia por el comunismo. La Unidad Ezquerra fue la irreductible. Un puado de divisionarios que decidieron combatir hasta el ltimo aliento en el bando alemn contra los rusos. Era un grupo heterogneo, una pequea Legin que aguant hasta el ltimo momento, explica, en declaraciones a ABC, el historiadorJos Luis Hernndez Garvi,autor de Episodios ocultos del franquismo (Editado porEdaf)Los orgenes: La Divisin AzulPara conocer el origen de la Unidad Ezquerra es necesario remontarse hasta el 22 de junio de 1941. En aquel da, Adolf Hitler que, sin prisa pero sin pausa, haba logrado que su esvstica dominara una buena parte de Europa-, no dud en atacar a uno de sus enemigos naturales: la U.R.S.S. Su plan era sencillo: movilizar a sus devienes Panzer y sus soldaten hasta la Unin Sovitica y arrasar con ellos al camarada Stalin. Sin embargo, el Fhrer no pensaba viajar slo, y mucho menos sin refuerzos, hasta la estepa Rusa. Por ello,llam a la puerta espaola y solicit a Francisco Franco que le devolviera la ayuda que le haba prestado en la Guerra Civil.El ferrolano que le deba un favor al lder teutn- no pudo ms que aceptar y, como no, poner una gran sonrisa al hacerlo. Franco ofreci a Alemania el envi de algunas unidades de voluntarios en reconocimiento a la ayuda recibida durante laGuerra Civil. Un ofrecimiento que tena que ser interpretado como un gesto de solidaridad, y no como el anuncio de la entrada en la guerra; que no se producira hasta llegado el momento adecuado explica, en este caso, el doctor en Historia Contempornea Xavier Moreno Juli (autor de varios libros cmoHitler y Franco. Diplomacia en tiempos de guerra -1936-1945-), en su trabajoLa Divisin Azul. Sangre espaola en Rusia. 1941-1945.

Apenas un par de lunas despus de que Adolf Hitler enviara a sus tropas al fro de la madre Rusia -una maniobra que sera conocida como Operacin Barbarroja- el ministro de Asunto Exteriores espaol (Serrano Suer) se preparaba para dar la gran noticia al pueblo espaol a travs de todos los medios de comunicacin: el pas se dispona a organizar una unidad militar de voluntarios que seran incluidos en las filas del ejrcito alemn. Se haba puesto la primera piedra de la que, a la postre, sera la Divisin Azul, despus de que la propuesta fuera aceptada por el mismsimo Fhrer en persona.As explicSerrano Sueraquel da a los presentes las causas de la creacin de esta unidad de voluntarios espaoles: Camaradas. No es hora de discursos. Pero si de que Falange dicte en estos momentos su sentencia condenatoria:Rusia es culpable! Culpable de nuestra Guerra civil. Culpable de la muerte de Jos Antonio, nuestro fundador.Y de la muerte de tantos camaradas y tantos soldados cados en aquella guerra por la opresin del comunismo. El exterminio de Rusia es exigencia de la historia y del provenir de Europa.Muera la Unin Sovitica!. En las siguientes horas, se presentaronms de 20.000 voluntariosa la nueva unidad que se batira, a fusil y cuchillo, contra la U.R.S.S.El 2 de julio de ese mismo ao, tras una semana de inscripciones, finaliz el plazo para alistarse en la Divisin Azul con una afluencia de voluntarios increble. Tras una seleccin previa, se constituy un contingente con aproximadamente 18.000 integrantes al mando de Agustn Muoz Grandes, un veterano de la Guerra Civil con claras tendencias a favor del nacional socialismo. Finalmente, se form la unidad que los alemanes conocieron como Blau divisin o 250. Einheit spanischer Freiwilliger (250 Unidad de voluntarios espaoles).Disparos espaoles en RusiaTras llegar al pas de la esvstica y calzarse el uniforme germano, los espaoles tuvieron que someterse a un entrenamiento de apenas dos meses en el que aprendieron lo bsico para matar rusos: apuntar, disparar y recargar. Del campamento de instruccin fueron transportados en tren hasta Polonia, desde dondellevaron a cabo una marcha de ms de 1.000 kilmetros a pie hasta el frente sovitico ubicado cerca de Mosc. En la marcha se nos rompieron los zapatos y acabamos medio desnudos. Adems, el problema fue el fro que sufrimos, que nos afect mucho ms porque nos cogi medio desnudos tras la caminata, sin apenas calzado que se haba roto. Fue muy duro, explicaba hace un ao el divisionarioJuan Jos Sanz a ABC.La Divisin Azul tuvo que recorrer 1.000 Km. a pie hasta el frente rusoUna vez en su destino, la Divisin Azul hizo frente a los rusos en contiendas como la delrio Voljov. Sucedida en Octubre, en esta ofensiva el mando alemn dio la orden a los espaoles de atravesar la corriente de agua con botes neumticos y tomar posiciones en la zona sovitica. A las tres de la tarde del da 19 el teniente Escobedo, al mando de su seccin, reforzada con dos ametralladoras, cruzaba el ro () capturando 42 prisioneros, explica Manuel Romn Jimnez en su libro Historia del II batalln del 269 (Rusia 1941-1942). A pesar del xito inicial al tomar varias poblaciones cercanas, finalmentehubo que tocar a retirada ante los fuertes contraataques del ejrcito rojo y el apoyo de su artillera.Los intensos combates en plena Rusia, las bajsimas temperaturas, y los disparos soviticos fueron causando en los meses sucesivos una ingente cantidad de bajas entre los espaoles. An as, siempre que se preguntaba por ellos se hallaban en primera lnea de fuego. Tal fue su valenta que (segn afirma el historiador Jos Luis Hernndez Garvi en su libro Episodios ocultos del franquismo) Hitler no tuvo reparos en alabar el coraje y arrojo de los soldados (aunque no el de los oficiales): Extraordinariamente valientes y duros contra los partisanos, pero tremendamente indisciplinados. Lo que es lamentable es la diferencia de trato entre los oficiales y la tropa. Los oficiales se dan la gran vida mientras sus hombres se ven obligados a la mayor de las miserias.La participacin de la Divisin Azul lleg a su fin en 1943. La razn era sencilla: los aliados que estaban empezando a imponerse a base de carro de combate, fusil y bombardero- estaban hasta el casco de las fulleras del ferrolano yle exigieron la retirada de la Blau Divisin. Dicho y hecho. Sabiendo que era mejor no hacer enfadar al bando que poda ganar la guerra, Franco orden la vuelta a Espaa de sus hombres del frente a travs de trenes de carga. As pues, en noviembre de ese mismo ao comenz la llegada de voluntarios a la Pennsula, de donde meses antes haban salido para combatir al comunismo.

El Ejrcito Rojo forzar al enemigo a una batalla esttica de desgaste en la que se diluye su ventaja maniobreraTodava combata el VI Ejrcito en Stalingrado y el Ejrcito Rojo prosegua su ofensiva general, golpeando tanto a las fuerzas ale-manas como a las de sus aliados hngaros e italianos (que a duras penas pueden escapar de la total aniquilacin), y ya, a pesar de la gravedad del momento, el general Von Manstein, ahora a cargo de todo el Frente Sur, planea unacontraofensiva que permita poner fin a la retirada generalen todo el sector.El xito de KharkovA pesar de la obstinacin deHitlerporno ceder terreno, al final se aprueba el plan para la que constituir la tercera batalla de Kharkov (22 de febrero a 5 de marzo de 1943). La ciudad, cuarta en poblacin de la URSS, es adems un vital nudo de comunicaciones.Reconvirtiendo la desbandada en todo el frente en unrepliegue controlado, Von Manstein espera hasta el momento oportuno para golpear a las fuerzas soviticas que, confiadas por sus recientes victorias, no esperan una contraofensiva de la magnitud de la desencadenada por el ejrcito alemn. As, se logr lavictoria para las fuerzas del Reichque, aparte de recuperar la ciudad de Kharkov, lograron estabilizar el frente y dar un respiro a las castigadas tropas del Grupo de Ejrcitos Sur.Es puesmomento de hacer balance. En el norte y el Bltico, la situacin, a pesar de los combates en torno a la ciudad de Leningrado, no ha variado prcticamente desde el invierno de 1941. En el centro, el rechazo de la ofensiva sovitica de invierno ha proporcionado un respiro a las fuerzas alemanas y en el sur, a pesar de la reciente victoria en Kharkov, el desastre es total.Los dos contendientes evolucionan a la inversa: a medida que la estrategia alemana se vuelve ms rgida y los mandos del ejrcito pierden autonoma en la toma de decisiones debido a las continuas injerencias de Hitler, laestrategia soviticase torna cada vez msflexible,conStalindelegando progresivamente en los jefes militares, sobre todo en aquellos que han probado su vala en el mando directo de tropas.La situacin para las fuerzas de la Wehrmacht ha degenerado en todo el frente ruso, de tal forma que la mayora de los mandosdudan de que se pueda alcanzar la victoriamilitar sobre la URSS. An as, el Heer est firmemente establecido en el Frente del Este, controlando amplias zonas ricas en todo tipo de recursos y conserva, adems, cierto grado de iniciativaMientras el barro del deshielo, que ha sucedido a los meses de glido invierno, obliga a una pausa en las operaciones, tanto alema-nes como soviticos contemplan las diferentes opciones estratgicas con vistas a la segura ofensiva de verano, que unos u otros lanzarn en cuanto la tierra se seque y permita el trnsito de las unidades mecanizadas por las llanuras de la estepa.Dos posturasLos alemanes se debaten entredos posturas. Una,defensiva: dar tiempo a las Divisiones Panzer a rearmarse despus de las derrotas del invierno. A las posibles ofensivas soviticas se enfrentar una reserva de fuerzas acorazadas que, gracias a la superioridad tctica y maniobrera alemana como se ha demostrado en Kharkov, desbaratar los ataques enemigos. As se podr pasar hasta 1944, cuando de nuevo Alemania est preparada para combatir en el este o en el oeste gracias a la creacin de esa nueva fuerza mvil reforzada.La otra postura se inclina, sin embargo, por unviolento asalto sin dilacincontra las lneas soviticas, ya que segn sus partidarios cuanto ms tiempo se deje al Ejrcito Rojo ms poderoso se volver. La escasez alemana en medios blindados se paliar dando prioridad en el rearme a todas las unidades que participen en el ataque. Tanto en volumen como en calidad. Para llevar a cabo esta ofensiva se entregaran losnuevos carros y vehculos acorazados: Panther, Hornisse, Ferdinand o Brummbr y tambin grandes cantidades de Tiger, que ya han debutado con xito en Kharkov. La superioridad en hombres y medios del Ejrcito Rojo sera compensada por la calidad del nuevo armamento germano.Desoyendo a sus expertos, la fe casi ciega de Hitler en su nueva generacin de carros forzar la balanza:la Wehrmacht atacar.La mayor batallaEn el otro bando, el debate es similar. Por un lado, Stalin, que desea relanzar las ofensivas cuanto antes, y por otro lado, la mayora de los mandos directos del frente, encabezados por Zhukov, que propugnan librar primero una batalla defensiva A diferencia de Hitler,Stalin se deja convencer por sus expertos. El Ejrcito Rojo (sin duda apoyado por los planes de Hitler) forzar a los alemanes a unabatalla esttica, de desgaste, en la que su ventaja maniobrera quede diluida entre las defensas construidas a tal fin. Y, una vez completada esta fase,sobrevendr la ofensiva del Ejrcito Rojo, para la que se utilizarn las amplias reservas acumuladas tras el frente.La planificacin sovitica cuenta con una ventaja adicional: gracias a sumagnfica red de espionajeLucy y la Orquesta Roja, la Stavka, el Estado Mayor del Ejrcito Rojo, sabe los planes y la localizacin del asalto alemn: el saliente deKursk. All,en la mayor y ms importante batallade la Segunda Guerra Mundial, entre julio y agosto de 1943, la Wehrmacht, que inici el combate mejor armada que nunca y con la moral recuperada, fue vencida, confirmando que en Stalingradola guerra haba dado un vuelco irreversible.

Hitler era capaz de llorar con La dama de las cameliasAl margen de la ya conocida figura en pblico de Hitler, en la intimidadel fhrerse mostraba comoun grancinfilo. Incluso era capaz de emocionarse con su adorada Greta Garbo enLa dama de las camelias, segn el testimonio de Goebbels. Estos son algunos de los datos sobre la otra cara de Hitler que adelantaJaime Nogueraen su libroHitler en el cine. En l analiza los gustos cinematogrficos del dictador, adems de su influencia en el cine alemn de la poca. Incluye tambin una lista de 101 ttulos de pelculas en las que su figura aparece como uno de los personajes principales.

Los supuestos espas que contratara la Asamblea Nacional Catalana si la regin se independizara estaran inspirados en los de la II Guerra Mundial

Si algo trajo laII Guerra Mundial(adems de sangre y muerte) fuela proliferacin de los servicios de inteligenciade los pases beligerantes. Y es que, se debi pensar por aquel entonces, nunca viene mal contar con una ayuda extra para hacer caer al enemigo. Por ello, desde laAlemania nazi de Hitlerhasta los Estados Unidos de Roosevelt, nadie tuvo reparos en abrir la cartera para financiar todo tipo de actividades extraoficiales tales comoel espionaje, el contraespionaje, el sabotaje e, incluso, la creacin de todo tipo de extraos artilugios como los lpices detonadores britnicos o los cigarrillos asesinos de los alemanes. Haba, en definitiva, que vencer a toda costa.Algo parecido parece que podra sucederse en Catalua si sta se independizase ya que, como se public hace menos de una semana, laAsamblea Nacional Catalana ha elaborado un informeen el que se hace referencia a la necesidad dedar forma a un cuerpo de espas en la reginy se propone crear una unidad dedicada a las actividades de contrainteligencia que establecer una poltica de clasificacin de la informacin de la administracin, as como una unidad especializada en el espaolismo violento. Sin duda, un servicio de inteligencia que bien podra parecerse a los establecidos durante la II Guerra Mundial, poca en la que los superagentes campaban por media Europa, parte de Estados Unidos, y el Norte de frica.El mayor conflicto a escala mundial que vivi la Historia fue un escenario en el que el espionaje fue fundamental. Antes de laGuerra Fra,la Segunda Guerra Mundial fue la edad de oro del espionaje internacional. Por ello, era fundamental que tanto los britnicos como los nazis as como los italianos, los japoneses, los norteamericanos y todos los pases que participaron antes o despus del conflicto-, contaran con departamentos de Inteligencia afirma en declaraciones a ABCscar Herradn, escritor, periodista, y autor de Los magos de la guerra. Ocultismo y espionaje en el Tercer Reich (Libros Cpula, 2014).La OSS estadounidense y el SOE britnicoA pesar de que muchos servicios de inteligencia ya existan antes del ascenso de Adolf Hitler al poder, varias agencias fueron creadas o modificadas para adaptarse a las exigencias de la guerra y combatir al enemigo no slo con fusiles y granadas. Ese fue el caso deGran Bretaa, donde los servicios de inteligencia estatales establecidos antes de 1939 dieron paso a una nueva organizacin que, en el transcurso de la contienda, se dedic principalmente aenviar agentes a las regiones que se anexionaba Alemania para favorecer la creacin de pequeos grupos contrarios a la dictaduradel Fhrer. En Inglaterra operaba desde principios del siglo XX el MI5 y en cuestiones de poltica exterior, su homlogo el MI6-. Pero con el inicio de la contienda los departamentos encargados de llevar a cabo tareas de contrapropaganda, propaganda negra y desinformacinse aunaron en torno a la SOE (Special Operations Executive, en sus siglas en ingls), la Ejecutiva de Operaciones Especiales creada exprofeso para la guerra, que, a su vez, estaba dividida en varias subdivisiones, cada una encargada de una tarea en el gran teatro de la guerra, aade el escritor espaol.El caso de Estados Unidos fue similar ya que, antes de la II Guerra Mundial, la formacin de los servicios de inteligencia corra a cargo de las diferentes ramas del ejrcito. En cambio, con la llegada de Hitler a la poltrona, se organiz un grupo de espionaje y contraespionaje queacabara siendo conocido como la OSS (Office of Strategic Services u Oficina de Servicios Estratgicos en espaol). Dirigida porWilliam Joseph Donovan, los agentes de esta oficina se encargaron durante la contienda de todo tipo de labores que iban desdedescifrar mensajes encriptados hasta infiltrarse en organizaciones alemanas. Tampoco faltaban aquellos queviajaban a pases tomados a cuchillo por los nazis para adiestrar en el arte de la guerra y el sabotaje a los lugareos.Espas nazis en EE.UU.Por su parte, los nazis crearon sus propios servicios de inteligencia para combatir esta lucha encubierta de los aliados. En el bando nazi existan diversos servicios de espionaje, el ms clebre el controlado por el almirante Wilhelm Canaris, laAbwehroDepartamento de Defensa para el Exterior o Servicio de Inteligencia de la Marina alemana, pero tambin otros departamentos a menudo enfrentados con ste-, al servicio del ministerio de Exteriores nazi, controlado porJoachim von Ribbentrop, explica Herradn a ABC.En el caso de los seguidores de laesvstica, la cantidad de organizaciones dedicadas a labores de espionaje era ingente. Tambin el vicefhrerRudolf Hesscontrolaba una serie de departamentos de Inteligencia en el extranjero cuando el Partido Nazi comenz a convertirse en una fuerza poltica importante en Alemania:como la NSDAP-Auslandorganization- o AO (Organizacin del Partido en el Extranjero). En s misma no era un servicio de Inteligencia, perocontaba con sus propios espas en gran parte de Europa. Bajo supervisin de Hess tambin se encontraba el Servicio de Poltica Exterior (Aussenpolitisches Amt), a cargo del idelogo naziAlfred Rosenberg, aade el experto.

Red de espas nazis en EE.UU.Algunos de estos grupos consiguieron pasar a la ofensiva contra los aliadossituando a varios de sus agentes en Estados Unidos. stos, entre otros objetivos, recibieron el encargo deviajar a lo largo y ancho del continente fotografiando todas las instalaciones militares que encontrarany enviando, posteriormente, las imgenes a sus superiores en Alemania. En 1942, de hecho, varios submarinos nazis(U-Boote)llegaron a posicionar a ocho espas en las costas norteamericanas. Su misin:sabotear las estaciones de agua del pas y sembrar el terror mediante explosivos en todo el territorio. Aunque, finalmente, fueron capturados.Las capacidades de los superagentes de la II GMAl igual que los supuestos espas que contratara la Asamblea Nacional Catalana si la regin se independizara (los cuales, segn los informes, deberan contar con un coeficiente intelectual superior al 99% de la poblacin) los superagentes que actuaron en la II Guerra Mundialeran tambin hombres con unas capacidades mentales y fsicas que superaban al comn de los ciudadanos. La OSS, por ejemplo, se jactaba de contar entre sus filascon los estudiantes ms brillantes de las universidades de la costa este de los Estados Unidos y con los mejores abogados del pas.Con todo, el intelecto no era lo nico que converta a un hombre en el perfecto agente. Es evidente que una persona encargada de obtener informacin del enemigo utilizando cualquier mtodo a su alcance por ilcito que fuera, ya fuera infiltrndose en las filas enemigas o, en ocasiones, hacindose amigo ntimo de los grandes lderes que deba derrocar,tena que poseer unas dotes diplomticas y unas habilidades-adems de una formacin acadmica-muy importantes.La mayora, claro, eran personas con un coeficiente intelectual alto,aunque no era un requisito que explcitamente fuera requerido por la mayora de agencias.Era tambin importante el arrojo y la capacidad de poner la vida al servicio del paspara el que trabajaban, lo que requera muchas veces ms valenta que formacin. Pero cada espa es un caso particular, por mucho que se les exigiera unos requisitos indispensables para formar parte de los servicios de inteligencia, completa Herradn.Adems de la inteligencia, el entrenamiento militar y saber idiomas eran factores de importanciaAs pues, cada agencia escoga a sus empleados atendiendo a varios criterios, y no slo al intelectual. stos incluan, por ejemplo,el entrenamiento militar especializado,la capacidad para camuflarse entre la genteo, en contadas ocasiones,la belleza(que, en el caso de las mujeres, poda utilizarse en s misma como un arma). Tambin era de suma importancia queel agente supiera hablar varios idiomas(preferiblemente sin el acento de su pas natal aunque, en caso contrario, sus conocimientos tambin eran tiles para llevar a cabo todo tipo de labores de traduccin e interpretacin de las comunicaciones enemigas).Lejos del ideario romntico, el deHollywood, que nos hace pensar en un espa con las facciones deSean Conneryclavando el personaje deJames Bond, mujeriego y elegante, o de unHumphrey Bogartcapaz de compaginar sin pestaear su peligrosa misin y su conquista de una rubia explosiva, lo cierto es quela principal tarea de los verdaderos espas era pasar desapercibidos, y con ello tambin sus operaciones. Por tanto, est claro que, ms que tener porte aristocrtico o un bello rostro como en las pelculas,deban estar muy preparados para poder infiltrarse entre el enemigo,saber qu tipo de informacin captar y, por supuesto, tener dotes diplomticaspues no todos deban actuar en la sombra-. Este fue el caso, por ejemplo, de Albrecht Haushofer, mano derecha de Hess y ms tarde uno de los conspiradores contra Hitler, aade el autor de Los magos de la guerra. Ocultismo y espionaje en el Tercer Reich.Los juguetes del espaAdems de sus capacidades intelectuales y fsicas, los espas no se hallaban solos ante el peligro cuando viajaban a un pas extrao, sino que contaban con todo tipo de ingeniosos artilugios ideados por los servicios de inteligencia de su pas para hacer ms sencilla su tarea. Los reyes en este tipo de investigacin fueron los cientficos nazis, que contaban con todo un arsenal de curiosos objetos con los que equiparon a sus agentes durante la guerra.Entre ellos destacaban varios tipo de alimentos dulces (chocolatinas, bolsas de azcar)que causaban la muerte de forma instantnea si eran ingeridos. Menos letales eran unoscigarrillos envenenadosque provocaban un intenso dolor de cabeza en aquel que los disfrutaba. Sin embargo, estos pitillos iban acompaados de unas pldoras para la jaqueca que, cuando eran tragadas por la vctima para paliar las molestias, provocaba la defuncin en pocos minutos.Tampoco se quedaban atrs los estadounidenses y la OSS, cuyos cientficos fueron muy prolficos durante la II Guerra Mundial. Entre sus juguetes ms destacados, crearonun minsculo botn con capacidad para albergar una brjulao una pequea baraja de cartas que, cuando se mojaba, revelaba un mapa. A un nivel ms ofensivo, tambin idearonuna pistola de reducido tamao que apenas se notaba durante los cacheos(la Liberator) yunas estrellas de metalcuya finalidad era reventar los neumticos de todo aquel vehculo que persiguiera al superespa. No obstante, la investigacin y produccin de estos artilugios era muy costosa, lo que limit su produccin.Finalmente, los ingleses tambin contaban con sus expertos dedicados a la tecnologa del espionaje. Tenan departamentos tan curiosos como el MD1, que extraoficialmente fue conocido como la tienda de juguetes de Churchill. All se desarrollaban artefactos y armas secretas que despus seran utilizadas en el campo de batalla, como ellpiz detonador o la bomba lapa. Pero los britnicos invertan tambin en otro tipo de armas de carcter ms oculto. Segn informes de Inteligencia desclasificados en los ltimos aos, se sabe que tambin ocultistas, astrlogos y msticos trabajaron al Servicio de Su Majestad en su lucha contra Hitler, como Louis de Wohl o Aleister Crowley, completa el experto espaol.Seis preguntas a scar HerradnM.P.V.MADRID1-Era habitual el uso de espas por parte del nazismo?S. Incluso por parte de los propios lderes. Prcticamente todos los mandamases nazis contaban con espas en nmina, como el viperinoJoseph Goebbels, a cuyo servicio de Inteligencia dentro del Ministerio de Propaganda trabajaron incluso ocultistas y astrlogos, episodio que recojo en Los Magos de la Guerra (Libros Cpula, 2014), como Karl Ernst Krafft, y por supuesto el extenso sistema de informacin que controlaban con meticulosidad las SS y la Gestapo al mando de Heinrich Himmler y Reinhard Heydrich.2-Era posible, con los test previos, saber si un espa era un agente doble?Durante la Segunda Guerra Mundial se dieron muchos casos de espas dobles, y de agentes que se pasaron al bando enemigo ni qu decir de la Guerra Fra-, por lo que sus superiores deban de estar convencidos al menos lo mximo posible- de la lealtad de sus oficiales y agentes, algo difcil de medir por muchos test que respondieran y pruebas al lmite de la resistencia a las que fuesen sometidos.3-Cul es la operacin de espionaje que cambi la II Guerra Mundial?Bueno, aunque hubo operaciones secretas de gran importancia para neutralizar los planes del enemigo de gran envergadura tanto en un bando como en otro, destaca por ejemplo la del MI5 que consigui engaar a Rudolf Hess el episodio ms lleno de sombras de la Segunda Guerra Mundial. Pero quiz la aceptada como ms decisiva fue la llevada a cabo por el espa catalnJoan Pujol, aliasGarbo, quien trabajaba para el MI5. El odio de Pujol hacia el fascismo surgi durante la Guerra Civil espaola, lo que le llev a alistarse en los Servicios de Inteligencia britnicos para conseguir informacin ydesinformar a los hombres de Hitler.A pesar de que su figura est rodeada de claroscuros para hacer que Hitler confiara en lle envi varios informes verdaderos sobre futuras operaciones aliadas, lo que parece que cost incluso la vida a hombres que trabajaron para los aliados, sus propios colegas, consigui hacer creer a los nazis que el desembarco aliado, el llamado Da D, a la Hora H, en el marco de la Operacin Overlord de la que se cumpli el pasado 6 de junio el 70 aniversario-,se producira en Calais, a 249 kilmetros de Normanda,en cuyas playas finalmente tuvo lugar la invasin, un golpe maestro de la Inteligencia britnica.Curiosamente,Garbo fue condecorado con la Gran Cruz de Hierro alemanala mxima condecoracin del III Reich y con la Orden del Imperio Britnico, un hecho inslito. Pujol trabaj como agente doble e hizo creer al Fhrer que22 agentes trabajaban para l al servicio de los alemanes. Tal era la confianza de Hitler en l que parece que no dio crdito a los informes que llegaban de Normanda sobre la toma aliada de playas bautizadas por los yankees como Omaha y Utah, hasta horas ms tarde, creyendo que se trataba de una maniobra de despiste de la Inteligencia enemiga. An as, se dieron muchos factores para facilitar la derrota del nazismo adems de las operaciones que llevaron a cabo Garbo y otros espas. No hay que olvidar, claro, los movimientos decisivos en el plano explcitamente militar y en el diplomtico.4-Y los espas ms destacados?Hubo espas muy clebres en la Segunda Guerra Mundial cuya actividad se dio a conocer pblicamente despus, claro-; en el bando aliado, por ejemplo,Garbo, Ian Fleming o el malogrado Ren Lefebvre, quien fue detenido por la Gestapo por trabajar para la Resistencia francesa y el Servicio de Inteligencia ingls, muriendo en el campo de concentracin alemn de Sonnenburg el 4 de marzo de 1944. Tambin destaca el archifamosoKim Philby, quien despus de la Segunda Guerra Mundial se convertira en un agente doble, trabajando para el NKVD sovitico y despus para el KGB.En el bando nazi, quiz, el caso ms clebre es el del almiranteWilhelm Canaris, quien sirvi de espa primero al servicio del Tercer Reich y ms tarde alindose con los miembros del complot conocido comoOperacin Valkiria, que atent contra Hitler en julio de 1944, por lo que fue condenado por traicin y ejecutado en la horca.Dentro de la faceta que yo he estudiado sobre los servicios secretos, hubo personajes relacionados con el mundo del ilusionismo y el misticismo que sirvieron tambin de espas en una guerra mgica que se libr entre bambalinas, lejos del frente, pero que tambin tuvo lugar. Sus hazaas han sido prcticamente olvidadas pero no por ello son irrelevantes. En el bando aliado, por ejemplo,Louis de Wohl oJasper Maskelyne, y en el nazi los astrlogos Karl Ernst Krafft o Wilhelm Wulff, entre otros. No realizaron operaciones del calado de los grandes espas pero sus diversos trabajos ayudaron, y no poco, a sus respectivos gobiernos en el desarrollo de la conflagracin.5-Qu sucedi con los servicios de inteligencia tras la II Guerra Mundial?Hay que tener en cuenta que justo despus del final de la Segunda Guerra Mundial, las democracias occidentales comenzaron a considerar a la Unin Sovitica el enemigo nmero uno; comenz la Guerra Fra y muchos de los documentos que tenan en su poder la OSS antecesora de la CIA-, el NKVD antecedente del KGB o el MI5, continuaron guardndose con celo hasta la cada del comunismo. Incluso hoy son muchos los informes que, estoy seguro, se guardan como oro en pao en los archivos de las agencias y por los diferentes gobiernos. Por lo que pueda pasar. Es un juego de tira y afloja continuo.Es ms,muchos de los nazis que haban formado parte de los servicios secretos del Tercer Reich pasaron a trabajar para la CIA o el KGB, una historia que no gusta recordar a algunos pero que fue escrupulosamente real. Es el caso por ejemplo deReinhard Gehlen, antiguo mayor general de la Wehrmacht, el Ejrcito alemn bajo el Tercer Reich, que pas a dirigir el servicio secreto de la Alemania Federal el BND, Servicio de Inteligencia Federal y a hacer de una especie de garganta profunda de la CIA, al igual queOtto Skorzeny, hroe de guerra del Tercer Reich que vivi entre algodones, bajo identidad falsa, en la Espaa franquista, apoyado por muchos de los miembros del Gobierno de entonces, realizando venta de armas, petrleo e informacin a pases como Egipto, Estados Unidos o la Alemania occidental.6-Qu requisitos hay que cumplir para ser agente de un servicio de inteligencia en la actualidad?Los requisitos para entrar en cada agencia han variado con el paso de los aos y han sido distintas en cada pas. Por ejemplo, para entrar en la CIA, entre otros requisitos, se peda en los ltimos aos ser ciudadano estadounidense, tener menos de cuarenta aos, superar la prueba del polgrafo y dominar al menos dos idiomas, requisitos muy parecidos a los exigidos para entrar a formar parte del MI5 y el MI6 britnicos, aunque en ocasiones se requiere que un agente est formado en antropologa, psicologa, y en muy diversas disciplinas dependiendo de la misin que le haya sido encomendada.En Espaa, formar parte del CNI tiene menos encanto que el trabajo de los espas a lo Bond, y slo a aquellos que provengan de las Fuerzas de Seguridad del Estado o del Ejrcito se les permite entrar en accin; los dems deben conformarse con ser analistas de datos o realizar trabajos relacionados con la informtica e internet, que es en lo que trabajan la mayora de los espas en la actualidad, cuyas actuaciones y descubrimientos, no obstante, pueden causar autnticos escndalos y crisis diplomticas, tal es el caso deEdward Snowdeny sus trabajos para la CIA y la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos NSA, que ha vuelto a poner sobre el tapete el tema de la importancia de la Inteligencia en el tablero internacional.

Rumanos, hngaros, italianos, eslovacos y croatas acompaaron a la Wehrmacht en su ms dura campaa

Los soviticos desencadenaron su ofensiva en el sector deStalingradogolpeando los eslabones ms dbiles del frente enemigo, los ejrcitos rumanos 3 y 4, a los que arrollaron en pocos das atrapando alVI Ejrcito alemn. Posteriormente, el sucesivo desmoronamiento del 8 Ejrcito italiano y del 2 hngaro a lo largo del Don amenaz con destruir el sector meridional del frente del Este.Hitlerculp injustamente a estos ejrcitos, mal equipados, sin reservas y desplegados en frentes amplsimos, de una derrota de la que l era el principal causante, olvidando mencionar que sin su colaboracin y su sacrificio jams habra podido emprender la campaa deverano de 1942que le llev hasta elVolgay las estribaciones delCucaso.Rumana: los eslabones rotosRumana entr en guerra para recuperar los territorios que laURSSle haba arrebatado. En 1941, su4 Ejrcito captur Odesa, sufriendo graves prdidas debido a su falta de preparacin. El 3 contribuy a la ocupacin deCrimeay a su posterior defensa. En 1942, Hitler logr queRumanaaportase 382.000 soldados para la campaa de verano, que colaboraron en la conquista deSebastopoly el avance hacia el Cucaso. En otoo, el 3er Ejrcito del general Dimitrescu despleg sus once divisiones, una de ellas acorazada, a lo largo del Don para defender el flanco norte del VI Ejrcito alemn, mientras el 4, a las rdenes de Constantinescu-Claps, defenda el flanco sur. Durante los combates invernales, las prdidas de ambos ejrcitos ascendieron a 155.000 bajas, incluyendo dos divisiones cercadas en Stalingrado, del total de228.000 efectivos.Hungra: la lucha en el DonDespus de que supuestos aviones soviticos bombardeasen ciudades hngaras,Horthydecidi enviar contra la URSS dos cuerpos de ejrcito, uno destinado a tareas de ocupacin y otro, elCuerpo Mvil, con dos brigadas motorizadas y una de caballera, que alcanzDnipropetrovsk, en cuya defensa particip hasta octubre, cuando fue devuelto aHungraevitando los rigores del invierno. En 1942, Horthy, que quera mantener a su ejrcito defendiendo la recin adquiridaTransilvaniade un posible ataque rumano, slo se decidi a enviar un contingente en ayuda de Alemania cuando supo que Rumana hara lo mismo. El 2 Ejrcito hngaro, mandado por el general Jny, despleg sus nueve divisiones de infantera y la 1 Acorazada en el Don, al norte del 8 Ejrcito italiano. Atacado en enero de 1943, sus211.000 soldadosquedaran reducidos a la mitad.Aunque Hitlerno inform de antemano aMussolinide sus planes contra la URSS,cuando se inici Barbarroja, ste ofreci a su aliado un cuerpo de ejrcito de tres divisiones que avanz por Ucrania hasta ms all del Dniper, donde ocup posiciones defensivas durante el invierno. Al ao siguiente se aadieron al contingente italiano siete divisiones ms para formar el 8 Ejrcito, que, a las rdenes delgeneral Gariboldi, defendera el flanco norte del 3er Ejrcito rumano, a lo largo del Don. Durante estas operaciones, elRegimiento Savoiaprotagonizara la ltima carga de la caballera italiana arrollando, con su coronel Bettoni a la cabeza, a dos batallones enemigos. En diciembre de 1942, el 8 sera destruido despus de ofrecer una dura resistencia. Cuando fue repatriado, slo quedaban la mitad de los229.000 hombres que lo componan.Eslovaquia: hasta el CucasoEslovaquiadividi su ejrcito en dos componentes, uno esttico, para tareas de ocupacin, y otro mvil. El Grupo Mvil, convertido en brigada y finalmente en divisin, con unos8.500 hombres, acompa a los alemanes en su avance porUcraniahasta el roMius, que defendi durante todo el invierno. El verano siguiente alcanz el Cucaso, donde se mantuvo hasta sufrir la contraofensiva sovitica. Los supervivientes se retiraron a Crimea, regresando despus a Eslovaquia.Croaciacontribuy a laCruzada contra el Bolchevismocon la creacin de la Legin Croata,5.000 hombresreunidos en el 269 Regimiento de Infantera reforzado, que llegara hastaStalingrado, participando en los duros combates por la fbrica Octubre Rojo. All se rendiran a los soviticos los poco ms de 100 supervivientes el 2 de febrero de 1943.

En la bolsa de Stalingrado, el grupo ms numeroso de soldados cercados, despus de los alemanes, estaba compuesto por rusos y ucranianos. Quines eran y cmo haban llegado all los que genricamente se conocen como hiwis o los rusos de Hitler?

La colectivizacin agraria, las espantosas condiciones laborales y sociales impuestas por la acelerada industrializacin de los aos treinta en laUnin Soviticay las feroces purgas que haban diezmado tanto alPartido Comunistacomo alEjrcito Rojofueron generando una mezcla de temor y odio ante la figura de Stalin entre una parte creciente de los ciudadanos de la URSS. Adems, casi la mitad de la poblacin de la terica federacin estaba compuesta por nacionalidades no rusas, que en muchos casos ansiaban liberarse del yugo deMosc. De ello se aprovecharon, casi desde el principio de la campaa, algunos comandantes de unidades militares alemanas que empezaron a reclutar personal autctono y prisioneros de guerra. En las divisiones de infantera, que eran hipomviles, haba centenares de puestos que podan ser ocupados por personal ruso o de cualquier otra nacionalidad sovitica:cuidadores de los caballos,carreros,cocineros, zapaterosysastres,camilleros, etc. Se inici as el reclutamiento de los que seran denominados oficialmente comohilfiswillige(auxiliares voluntarios) o, abreviadamente,hiwis. Antes de que pasaran muchos meses, cada divisin alemana contaba con centenares o, incluso, con miles de hiwis en sus filas.Milicias locales.En la retaguardia, para contrarrestar el incipiente movimiento de partisanos fieles aStalin, se crearon igualmente pequeas milicias locales y se instituyeron decenas de batallones de polica, formados por miembros de nacionalidades no rusas (desde los estonios a los trtaros deCrimeapasando por los ucranianos). En 1942, para mantener el orden y luchar contra los partisanos comunistas, los alemanes empleaban en el comisariado deOstland(Pases Blticos y otros territorios limtrofes) unos 4.000 policas alemanes y 56.000 voluntarios locales encuadrados en batallones de seguridad. En el territorio delcomisariado Ukraine, los 14.000 policas alemanes desplegados eran complementados por 71.000 voluntarios locales.Alemanes en el frente ruso reclutaron voluntarios sin el conocimiento de HitlerOtra cosa, sin embargo, era organizar unidades de voluntarios de la URSS para luchar contra elEjrcito Rojo. Ocultndolo a Hitler y a las autoridades deBerln, los grupos de ejrcitos alemanes en el frente deRusia, empezaron a hacerlo ya en agosto de 1941, creando diversas unidades con entidad de batalln. No obstante, en diciembre de ese ao, finalmente se logr convencer aHitlerpara crear las que iban a ser llamadasOstlegionen(legiones orientales). Puesto queAlemaniano pensaba anexionar ni elCucasoni elAsia Central, no haba en principio razn para no fomentar el nacionalismo de las poblaciones de esas reas. Se pens, por tanto, en reclutar unidades que se integraran en el ejrcito alemn, con prisioneros y desertores del Ejrcito Rojo que pertenecieran a las naciones caucasianas y centroasiticas. As surgieron las legiones deAzerbaiyn, de los musulmanes del Cucaso, delTurquestn, de lostrtaros del Volga-Uraly las deArmeniayGeorgia. Pero el proceso de puesta en pie de estas unidades fue muy lento y llevado a cabo con gran desconfianza.Ostbataillonen.Muchos de los que se alistaron lo hicieron para huir de las espantosas condiciones imperantes en esos campos, otros por puro oportunismo y muchos por autntico odio al estalinismo. Las legiones orientales fueron capaces de organizar, en 1942 y la primera parte de 1943, unidades de combate y formaciones auxiliares (de construcciones, de transporte, etc.) con unos efectivos de175.000 hombres. Pero en febrero de 1942 Hitler vet de nuevo el reclutamiento de esos voluntarios, aunque muchos comandantes desobedecieron la orden, de tal forma que siguieron formndose unidades de rusos y ucranianos, a las que para ocultarlas a la vista de Hitler se las bautiz como Ostbataillonen (Batallones del Este).De haber actuado los alemanes como liberadores, habran conseguido xitos decisivos. De hecho, durante los primeros meses de la guerra, los desertores delEjrcito Rojohacia sus filas se contaron por cientos de miles. Pero, para Hitler, los germanos deban constituir una casta dominante que sometera a las masas eslavas. Por eso la idea de formar tropas voluntarias con rusos, ucranianos o miembros de otras minoras nacionales de laURSSera tan contraria a los propsitos nazis como a todas sus teoras raciales.

En el fro invierno de 1943, a las puertas de Siberia, entre ruinas, escombros y miseria, se decidi la Segunda Guerra MundialFue un espanto. El pulso entre dos voluntades sostenido sobre cientos de miles de cadveres.Hitlerconvoluntad absoluta de ganar.Stalincon la mismadeterminacin en no perder. Ninguno de ellos dispuesto a dar un paso atrs en unas ruinas que ni eran estratgicas, ni comportaran especial ventaja militar para ninguno de los dos bandos. Slo un triunfo moral. Al margen de cualquier retrica, Stalingrado, laBatalla de Stalingrado, fue el fruto de la mstica hitleriana. Casi un decenio antes de los combates en la ciudad,Leni Riefenstahlrodaba su espectacular film sobre el movimiento nacionalsocialista entonces recin llegado al poder. All estaban, en vivo y en directo, todos sus gerifaltes, con sus galas pardas, con sus mitos germnicos, con sus desfiles y sus esvsticas. El nazismo en estado puro (Sieg Heil!). Considerado una obra maestra delsptimo arte, este largo reportaje cinematogrfico resume en su ttulo mejor que muchos tratados e interpretaciones sobre el Tercer Reich la esencia del pensamiento de Hitler:El triunfo de la voluntad.Hitler estaba convencido de que la voluntad de ganar conduce siempre a la victoriaDerrota alemana. Ms all de su fanatismo racial,de su odio albolchevismo, de su desprecio a las plutocracias o de su culto a la fuerza, Hitler estaba convencido de que la voluntad de ganar conduce indefectiblemente a la victoria. Y su trayectoria personal desde el albergue de hombres deVienahasta los triunfos polticos que le llevaron al poder enAlemania, los xitos diplomticos que supusieron incorporar alReichpases y territorios o las victorias militares que le comportaron el dominio de Europa, slo sirvi para convencerle an ms de que, por encima de cualquier otra circunstancia, la voluntad le llevara a vencer...Le llev a la derrota.Su negativa a ceder, a replegarse de Stalingrado,contra el criterio de sus generalesy en la seguridad de que la fuerza de su voluntad terminara prevaleciendo, supuso la derrota de Alemania, no slo en la ciudad, no slo en el frente del Este, sino en la guerra. sta pudo prolongarse por dos aos ms, peroAlemania ya estaba vencida, como previamente haban sido vencidosJapneItalia. En el froinvierno de 1943, a las puertas de Siberia, entre ruinas, escombros y miseria, se decidi laSegunda Guerra Mundialcon la derrota de la ltima potencia del Eje con posibilidad de alcanzar sus objetivos militares. An tendra que llegarKursk, la mayor batalla de toda la contienda,o NormandaAn demostrara laWehrmachtsu enorme capacidad de combate retrasando un final inexorable. Pero Alemania ya estaba vencida. Stalingrado haba supuesto el vuelco definitivo: Antes nunca tuvimos una victoria. Despus nunca fuimos derrotados pudieron haber dicho Stalin o los generales delEjrcito Rojo. Pero la frase es de Churchill, con referencia a otrabatalla decisiva, El Alamein.Derrota de Italia. En El Alamein, cuando an se luchaba encarnizadamente en las calles de Stalingrado, perdi la guerra Italia. Aunque las fuerzas del Eje estuvieran dirigidas por generales alemanes, y alemanas fueran las tropas decisivas en aquella campaa, la guerra en elNorte de fricaera una guerra de Italia, por intereses italianos y en donde estaba involucrado el grueso delRegio Esercito. Italia perdi la guerra en El Alamein, aunque se tardara an unos meses en expulsar a los germano-italianos definitivamente de Tnez. Luego vendran Sicilia, la destitucin deMussolini, la invasin del territorio continental, el fin del fascismo y la entrada de los aliados en Roma, declarada ciudad abierta. (Roma citt aperta, de Rossellini, con guin deFellini, otro de los grandes ttulos de la cinematografa universal).Ni el suicidio de los kamikazes cambi la suerte de una guerra que ya estaba perdidaDerrota de Japn. Y Japn, la ltima de las potencias del Eje en unirse a la contienda, haba sido ya la primera en ser vencida. Cunta sangre, cunto sufrimiento, cunto horror, incluidos los holocaustos nucleares, se necesitaron para ratificaruna derrota que haba tenido lugar en Midway. Tras la prdida de sus portaaviones en otra batalla tan crucial comoEl AlameinoStalingrado, Japn estaba vencido, incapaz de sostener ya con posibilidades de xito una guerra cuyo marco, elOceno Pacfico, l mismo haba escogido como el ms favorable: ni el duro cdigo Bushido del guerrero japons, ni la capacidad de lucha fantica de sus soldados o la entrega personal hasta el suicidio de los kamikazes podan cambiar la suerte de una guerra que ya se haba perdido:Guadalcanaly Saipn o Peleliu,Iwo Jimau Okinawa, pasando por la gigantesca batalla delGolfo de Leyte, slo retrasaron el fin y prolongaron la agona.Tres escenarios, tres guerras, tres derrotas. A principios de 1943, en el corto espacio de poco ms de medio ao, una a una las potencias del Eje haban sido vencidas. Quiz ni los propios aliados fueran capaces de darse cuenta entonces de la magnitud de sus xitos, de la suma de sus xitos, pero laSegunda Guerra Mundialhaba quedado decidida y ni el rgimen de cartn piedra mussoliniano, ni la capacidad de autosacrifico del soldado japons y ni siquiera la voluntad de victoria de Hitler podran ya revertir un resultado que tardara an ms de dos aos y medio en quedar certificado, a costa de tanto intil sacrificio

Los herederos de la amante de Hitler dejan de reclamar los regalos del Fhrer; Alemania deber gestionar el incmodo legado nazi, conocido como museo pardo

Eva Brauntena 17 aos y trabajaba como asistente y modelo para el fotgrafo personal deAdolf Hitlerque eraHeinrich Hoffmann cuando conoci al lder nazi en Mnich. Dos aos despus de ese encuentro en 1929, Braun y el dictador alemn comenzaran a verse habitualmente transformndose lajoven fotgrafaen amante del nazi quien comenzara a agasajarla con regalos de todo tipo.El tema acerca del origen y destino de los regalos de Hitler a Braun y en general del arte robado por los nazis volvi a removerse nuevamente ayer, ya que laPinacoteca de Mnichha confirmado que un sobrino ya fallecido de la amante del Fhrer present un recurso ante elTribunal de Mnichpara que se le restituyan a la familia los regalos que Hitler hiciera a Braun. Pero los herederos del sobrino segn confirm ayer el museo bvaro han rechazado continuar con la demanda.Empadronado en MnichHacia 1936, Eva Braun formaba parte del hogar de Hitler en laresidencia de Berghof, donde llev una vida alejada de laSegunda Guerra Mundial, concentrndose en su trabajo fotogrfico: es la autora de gran parte de las fotos y vdeos en color que se conservan de Adolf Hitler. A medida que elTercer Reichcomenzaba a derrumbarse, Eva Braun jur lealtad al dictador y viaj hasta Berln para estar al lado del Fhrer en el bnker. Ah, ante la cercana de las tropas delEjrcito Rojoy bajo laCancillera del Reich, Braun y Hitler contrajeron matrimonio el 29 de abril de 1945 ella tena 33 y l 56 aos, menos de dos das despus ambos se suicidan; Braun con la ingestin de una cpsula de cianuro.El tesoro de Braun reabre el debate de la gestin del legado nazi en AlemaniaA la hora del suicidio, Hitler se encontraba empadronado en Mnich, razn por la cual el ministerio de Finanzas de este Land recibe los derechos deautor de Mein Kampf, libro que pertenecan a laeditorial delpartido nazi Eher-Verlagy con la obligacin de evitar su publicacin. Tambin recibe obras de arte y numerosos objetos de valor que han ido a parar a la coleccin de pintura del Estado de Baviera, como un reloj de brillantes grabado con el nombre de Eva Braun que Hitler regal a su amantecon motivo de su 27 cumpleaos. El reloj en cuestin, que se encuentra almacenado en el depsito de la pinacoteca bvara, fue uno de los objetos reclamados por su sobrino, informacin que ha confirmado ayer dando un nuevo giro al encendido debate acerca del arte robado por los nazis.Demanda desactivadaLuego de la muerte del sobrino de Braun, sus herederos han rechazado continuar con la demanda que no slo inclua el reloj de brillantes sino una pintura que perteneci a la fotgrafa: Gebirgslandschaft an der spanischen Kste (Paisaje montaoso en la costa de Espaa), deFritz Bamberger, una obra que se encuentra en el sitio web Lost Art, ya que no est descartado que fuera robada a familias judas. En el fondo de obras de arte de laPinacoteca de Mnichse encuentra gran cantidad de objetos de valor procedentes de la poca nazi, sobre todo piezas de arte que pertenecieron al crculo de poder de Hitler: pasadores de corbata, gemelos de oro o collares de brillantes que pertenecieron aHermann Gring,Julius StreicheroMartin Bormann.El estado alemn an no ha decidido al respecto de la herencia nacionalsocialistaHitler quera cultivar una imagen de hroe casto; se consideraba a s mismo atractivo para las mujeres y quera permanecer soltero para aprovecharlo, por ello l y Eva Braun nunca aparecieron juntos en pblico. Por otra parte, toda la familia de Eva Braun sobrevivi a la guerra:su madre Franziscavivi en una granja en Baviera y muri en 1976 a los 96 aos, supadre Fritzya haba muerto en 1964,su hermana Gretlmuri en 1987 eIlsela mayor, que no form parte del crculo cercano de Hitler falleci en 1979.El tesoro maldito de Eva Braun ha reabierto el debate acerca de la gestin alemana respecto del arte robado por los nazis y las pertenencias de Hitler y sus comandantes. Se acaban de cumplirochenta aos de la llegada del lder nazi al podery el Estado germano no ha sido capaz de tomar decisiones respecto del legado nacionalsocialista que se encuentra en diferentes instituciones como la Pinacoteca de Mnich.Elcaso Gurlitthizo que se creara una comisin especial que gestionara las obras encontradas, pero hasta ahora no hay resultados claros. Las propiedades extradas a las vctimas del nazismo deben ser devueltas a sus propietarios o descendientes, as lo establece laDeclaracin de Washington, firmada por ms de cuarenta Estados en 1998 (Alemaniaentre ellos).Coleccionistas y arte robadoLas discusiones acerca de quin, cmo, dnde buscar arte robado por los nazis se dieron nuevamente cita esta semana en un coloquio sobre el tema en el Instituto de historia del arte de Mnich en la que se se carg entre otros contra los actuales galeristas y casas de subastas: Lamentablemente, las puertas de los marchantes de arte estn generalmente cerradas para los investigadores, ha comentado el lunesIsabel Pfeiffer-Poensgen, la presidenta de la fundacin pblica alemana responsable de la conservacin y fomento del arte y cultura en Alemania. Segn Pfeiffer-Poensgen, si los galeristas abrieran sus puertas, sera el comienzo de una estupenda amistad. Lacasa Neumllerque dej investigar su pasado nazi y entreg su informe en 2012, sigue siendo una gran excepcin.

La aparicin de Podemos, si algo hemos aprendido de la Historia, no es tan sorprendente

El escritor suizoFriedrich Drrenmatacert plenamente cuando dijo: Tristes tiempos estos en los que hay que luchar por lo que es evidente. Estas palabras me vienen a la cabeza cada vez que tengo que enfrentarme dialcticamente a adversarios polticos que defienden posiciones, ideas o doctrinas que hace ya muchos aos que la Historia ha descalificado.Esto me est ocurriendo ltimamente con Podemos, sus mensajes, sus ideas y sus propuestas. Algunos, entre los que parece que hay bastantes personas de izquierda, e incluso algunas de derecha, dicen que Podemos es un partido nuevo que puede traer soluciones innovadoras para los graves problemas que Espaa tiene hoy planteados.Es verdad que en Espaa la clase poltica est hoy desacreditada. Y tambin es verdad que, en muchos pases donde se da este descrdito, surgen partidos que declaran que ellos son los nicos verdaderamente limpios y que proponen soluciones aparentemente muy sencillas para todos los problemas difciles. A estos partidos se les suele agrupar bajo la etiqueta de populistas. Porque lo que hacen es excitar los sentimientos ms inmediatos del pueblo en dos direcciones. Primero, desprecian, insultan y vituperan a los partidos existentes. Y despus, se presentan como los salvadores de la patria a base de proponer a los ciudadanos soluciones muy simplistas, que explican el mundo como si fuera una pelcula de buenos y malos. Los buenos, naturalmente, son ellos. Y los malos, tambin naturalmente, los que no piensan como ellos.Si los populistas hacen eso con habilidad y usan los adecuados mecanismos de propaganda, pueden tener xito. Y, a veces, mucho xito. La ascensin al poder de Hitler es un ejemplo bastante perfecto de este proceso. La Alemania de los aos treinta estaba inmersa en una profundsima crisis econmica, los partidos polticos de la Repblica de Weimar no eran capaces de solucionar la crisis y se perdan en constantes querellas entre ellos, y por ltimo, pero muy importante,Hitlercontaba conGoebbels, que era un genio de la propaganda poltica.Sin llegar a extremos tan dramticos como el de Alemania, podemos encontrar procesos parecidos en muchos otros pases. Sin ir ms lejos ahora mismo los estamos contemplando, con ms o menos variaciones, en algunos pases hispanoamericanos.No importa que todo lo que dicen los populistas sea mentira. No importa que no sean partidos para nada nuevos, sino representantes de tradiciones polticas muy antiguas y fracasadas. Como tampoco importa que sus soluciones no hayan solucionado nunca ningn problema all donde se han aplicado. Basta con que consigan que haya gente que se lo crea. Y siempre puede haber quien lo haga. Incluso, de buena fe.Porque se dan algunas de las condiciones para la aparicin de un partido de estas caractersticas es por lo que ha surgido en Espaa Podemos. Estamos inmersos en una crisis econmica muy profunda que ha mandado al paro a millones de ciudadanos, que les ha empobrecido y que ha disminuido de una forma tremenda las oportunidades de todos y, sobre todo, de los jvenes. Al mismo tiempo, la confianza en los partidos tradicionales se ha colocado bajo mnimos. Y, adems, los polticos de Podemos han demostrado conocer muy bien las tcnicas de propaganda que crearon y desarrollaron en los aos treintaWilly Mnzenbergy Joseph Goebbels. Mnzenberg y Goebbels eran alemanes, los dos eran ms o menos de la misma edad, los dos fueron unos genios de la maldad, los dos acabaron mal, y los dos tienen una importante cuota de responsabilidad en el triunfo de las dos ideologas ms nefastas de la Historia: el comunismo y el nazismo.La aparicin de Podemos, si algo hemos aprendido de la Historia, no es tan sorprendente. Lo que s puede ser imperdonable es que en Espaa los que sabemos de los peligros de este tipo de movimientos reaccionemos con la irresponsabilidad con que lo hicieron los que, en Argentina, decan Cristinano tiene carisma, o, en Ecuador, Correaes una ancdota irrelevante, o, en Venezuela, aChvez, en cuanto toque poder, se lo come Estados Unidos.Y eso puede ocurrir si creemos que los argumentos demaggicos, simplistas y falaces que utilizan los de Podemos se descalifican solos. Eso puede ocurrir si nos da pereza debatir con ellos porque consideramos que sus argumentos estn absolutamente desprestigiados por la Historia. Porque, efectivamente, da mucha pereza tener que demostrar que el comunismo, del que los de Podemos se declaran hijos, slo ha trado crimen y miseria all donde se ha aplicado. Pero hay que hacerlo. Como hay que insistir en que cuandoIglesiasafirma que el terrorismo de ETA tiene explicaciones polticas est utilizando los mismos falaces argumentos de los etarras para justificar sus 858 asesinatos. Porque, desde hace casi cuarenta aos, en Espaa existen cauces democrticos para defender todas las posiciones polticas. Y nada podr justificar nunca esos asesinatos. Tambin hay que denunciar que utiliza los argumentos de los etarras cuando llama papelito a la Constitucin de 1978, la que, precisamente, le garantiza a l y a todos nuestros derechos. O cuando desprecia a todas las fuerzas polticas democrticas de los ltimos cuarenta aos y tiene el desparpajo de afirmar que solo la izquierda vasca y ETA se dieron cuenta de que esa Constitucin no instaura unas reglas del juego democrticas.Puede ser muy cansado y aburrido tener que discutir argumentos tan simples y mentirosos, pero hay que hacerlo.No se nos pueden olvidar nunca los versos deYeats, el gran poeta irlands que tuvo el Premio Nobel: The best lack all conviction, while the worst / Are full of passionate intensity. (Los mejores carecen de toda conviccin, mientras que los peores estn llenos de una intensidad apasionada). Nosotros, los que amamos la libertad y sabemos de los peligros de la demagogia populista, tambin tenemos que demostrar que estamos llenos de esa apasionada intensidad.

El talento perdido de la Segunda Guerra MundialDe entre todas las consecuencias negativas de una guerra siempre se pone de relieve el nmero de vctimas y lasgeneraciones perdidas. Es decir, los fallecidos y los no nacidos por culpa del conflicto y su posterior miseria. En el caso de la cultura, laSegunda Guerra Mundialno solo fue devastadora con las obras de arte, sino con varios nombres que estaban llamados a hacer grandes cosas en elcine, laliteraturao incluso eldeporte.La ms recordada de estas prdidas ser la deAntoine de Saint-Exupry, autor deEl principitoyde cuya muerte se cumple este mes 70 aos. El escritor francs era conocido por su manejo de las aeronaves, una aficin que reflej en algunas de sus obras ms celebradas, pero aquel31 de julio de 1944todo sali mal.

Saint-Exupry despeg de la isla de Crcega a bordo de unLockheed P-38para fotografiar posiciones enemigas al este de suLyonnatal. Se trataba de un vuelo de reconocimiento en el tramo final de la Segunda Guerra Mundial, pero nunca ms se supo: su avin se perdi en elMediterrneo, cerca de las costas de Marsella.La primera mujerTambin en un accidente areo, aunque en circunstancias bien distintas, perdi la vida laactrizHYPERLINK "http://hoycinema.abc.es/peliculas/1941/un-matrimonio-original-464/" \o "Carole Lombard" \t "_blank" Carole Lombard. En el libro Ser o no ser. Ernst Lubitsch: gua para ver y analizar (Octaedro), Manuel Moreno Daz y Juan Manuel Rodrguez Pachn definen a Lombard como una intrprete estandarte deelegancia, sensualidad, inteligencia y picarda. Una de las grandes de la comedia. En esta ocasin, el destino y el ambiente preblico hicieron que su avin se estrellara 16 de enero de 1942 en las montaas de Nevada.Korczak ayud a los nios de su orfanato a sobrellevar los das en TreblinkaEstados Unidos an no haba entrado en la guerra faltaban dos meses para el ataque sobrePearl Harbor, pero ella vena de participar en una gala que recaud fondos contra los nazis. El entonces presidente estadounidense,Franklin Delano Roosevelt, la consider como la primera mujer fallecida en la guerra, pese a que an no se haba entrado de forma oficial en el conflicto. El avin como medio de transporte estaba an por perfeccionar, y tambin le cost la vida al msico de jazzGlenn Miller, que tena el rango de Mayor en el ejrcito norteamericano y desapareci sobrevolando el Canal de la Mancha.Ms all de la muerte de Saint-Exupry, las letras europeas perdieron a otros autores comoAna FrankoJanusz Korczak. La primera, de origen judo y de sobra conocida por el diario que lleva su nombre, estuvo dos aos y medio ocultndose de los nazis. Acab muriendo de tifus en el campo de concentracin deBergen Belsensemanas antes de ser liberado.El segundo,Janusz Korczak, era un conocido pedagogo, escritor y activista cuya historia aparece en libroEl pianista de Varsovia, de Wladyslaw Szpilman. Korczak estaba al frente de un orfanato judo que fue evacuado alcampo de concentracin de Treblinka. Aunque tuvo la oportunidad de salvarse, no quiso abandonar a los nios. Durante el trayecto y la estancia en Treblinka maquill con buenas palabras al ms puro estilo deLa vida es bella aquella realidad que acab con todos en la cmara de gas.Un sobrino rojoEl caso deEsmond Romillytrasciende todo lo anterior. No se dedic a la cultura, no era judo, pero su influencia provoc una escena para la historia. Conocido como el sobrino rojo deChurchill, Romilly estaba casado conJessica Decca Mitford, perteneciente a una de las familias nobles ms importantes deReino Unido.Se neg a trabajar para el embajador y tir el fajo de billetes a la cara de ChurchillTambin de buena familia, l era un declarado antifascista que combati primero en laGuerra Civil espaola. En pleno conflicto, Mitford se qued embarazada y Churchill envi un destructor al puerto de Bilbao para llevarles de vuelta a Reino Unido, despus de que el padre de Decca, elbarn de Redesdale, se lo suplicara al premier britnico. Ellos no quisieron regresar y emigraron a Estados Unidos, donde Romilly, fiel a sus principios, combati para los aliados en la Segunda Guerra Mundial, perdiendo la vida en unaccidente de avin.Fue entonces cuando surgi una espectacular ancdota que la propia Jessica Mitford recogi despus en su libroNobles y rebeldes(Asteroide). A Mitford le costaba asumir que su marido no iba a volver, y Churchill quiso reunirse con ella en la Casa Blanca. En aquella conversacin le ofrecieron trabajar para el embajador ingls enEstados Unidos: la idea era garantizar su futuro ahora que se haba quedado viuda.Ella se neg, cogi el fajo de billetes y lo arroj a la cara de Churchill. Con el tiempo se convirti, adems de en una gran periodista, en una defensora de los derechos civiles.El prototipo arioAlemania perdi la guerra y tambin aport bajas a esta nmina de talento malogrado. La vida deCarl Ludwig Longpasar a la historia como un ejemplo de deportividad e infortunio. Luz Long era el prototipo de hombre ario: blanco, rubio y ojos claros. Campen alemn de salto de longitud, se present a losJuegos Olmpicos de Berln en 1936culmen de la parafernalia nazi como uno de los favoritos para conseguir la medalla de oro.

El da de la final, con Hitler en el palco,Luz Longse midi entre otros al estadounidense y negroJesse Owens. El atleta forneo, uno de los mejores de la historia, comenz la final con dos saltos nulos. En un intermedio, Long se acerc para darle nimos y sugerirle cmo mejorar. A partir de ah, Owens fue creciendo en la prueba y en el quinto salt consigui la marca que le vali la medalla de oro. Cuentan queHitlerse march del estadio, que prefiri no felicitar al campen mientras Luz Long s lo hizo, protagonizando una de las fotografas ms famosas del olimpismo.El atleta alemn, plata en aquella final, termin combatiendo en la guerra para el ejrcito nazi.Muri en un hospital militardeSiciliacontrolado por las fuerzas britnicas, das despus de luchar en la defensa deItaliadel avance de los aliados.La irracionalidad del conflicto tuvo una ltima vctima en la figura deAnton Webern. Extraordinario msico de la Segunda Escuela de Viena, murimientras encenda un cigarrilloen la puerta de su casa. Era 15 de septiembre de 1945 y an no se haba levantado el toque de queda. Al parecer, un miliciano estadounidense dispar contra l por error mientras persegua al yerno del msico, acusado de contrabando. Segn otra versin, ms absurda todava, el soldado estaba ebrio y confundi la luz del cigarrillo con la rfaga de un fusil.

El atentado contra Hitler comienza a caer en el olvido en Alemania

La bomba que deba matar al Fhrer y cambiar el curso de la guerra pesaba 975 gramos, estaba escondida en un maletn de cuero y estall a las 12.42 horas del 20 de julio de 1944 en la sala de conferencias del fortificado centro de operaciones para el frente oriental, Wolfschanze. La bomba mat a cuatro oficiales y solo dos personas de las 24 que se encontraban en la sala lograron salir casi indemnes. Una de ellas eraAdolf Hitler.70 aos despus, Alemania volvi a rendir homenaje este domingoa los hroes de la Operacin Walkiria, un grupo de oficiales aristcratas que conspir para matar a Hitler. Ellos quisieron acabar con la guerra en el frente occidental, formar un nuevo gobierno y buscar una alianza con los aliados occidentales para acabar con el comunismo. Durante aos, fueron tratados como traidores por el pas que surgi de las ruinas. Pero el nuevo aniversario, y a pesar del interesado gesto de las mximas autoridades del pas de resaltar la memoria de los oficiales que pagaron con su vida la osada de acabar con la vida de Hitler, dej al desnudo un nuevo fenmeno que fue ignorado en los actos oficiales.MS INFORMACIN"Matar a Hitler era una cuestin de honor"Ewald von Kleist, ltimo de la Operacin ValkiriaVDEO: As fueron los complots para matar a Hitler: la autntica operacin ValkiriaSegn una encuesta realizada por el prestigioso Instituto de Demoscopia de Allensbach, solo un 45% de los alemanes mayores de 16 aos fueron capaces de responder afirmativamente a una pregunta capital de la agitada y trgica historia del pas: Sabe usted lo que ocurri el 20 de julio de 1944?. Peor an, el estudio dado a conocer por el instituto demoscpico descubri que las generaciones jvenes desconocen lo que sucedi hace 70 aos en Wolfschanze.La ignorancia de los jvenes alemanes no es gratuita. Segn Emil Mller, un joven de 19 aos que termin la enseanza media en una de las mejores escuelas de Berln, la hazaa trgica del conde Claus Schenk von Stauffenberg, encargado de colocar la bomba, y sus aliados nunca fue un tema en las clases de historia contempornea. Debo ser el nico de mi clase que conoce la hazaa del conde. Me la cont una amiga que es su bisnieta, dijo el joven a EL PAS.Alguien ha intentado asesinarme, dijo el Fhrer a su ayuda de cmara mientras se sacuda los escombros, aquel 20 de julio de 1944. Mein Fhrer, usted vive, usted vive!, exclam el mariscal Wilhelm Keitel cuando vio salir al dictador. Casi cinco horas despus de haber dejado la bomba, el conde von Stauffenberg lleg a las puertas de la sede del alto mando de la Wehrmacht en Berln, convencido de que Hitler haba muerto.El aristcrata y otros tres oficiales fueron fusilados esa noche en el patio del edificio, que ahora es sede del Ministerio de Defensa, donde deban haber puesto en marcha el ltimo captulo de la legendaria Operacin Walkiria. Larga vida a nuestra sagrada patria Alemania, grit el conde antes de ser acribillado por las balas.El desinters que existe en Alemania por la gesta de los autores de la operacin Walkiria tambin fue resaltado por Anjte Vllmner, exvicepresidenta del Bundestag y militante distinguida de los Verdes, quien record que despus del atentado fallido 180 personas fueron ejecutadas. Muchos alemanes tienen dificultades para recordar el nombre de, al menos, cinco personas, dijo.La amnesia colectiva tiene races profundas. Durante aos, Alemania tuvo dificultades para rendir homenaje a las personas que pagaron con sus vidas la osada de intentar acabar con la vida del Fhrer. Los familiares de las vctimas, por ejemplo, vivieron confrontados durante aos con el reproche de ser los hijos y las viudas de un grupo de traidores. Hasta casi finales del siglo XX predomin en el pas la conviccin de que el atentado haba sido planificado por un grupo de aristcratas que haban apoyado a Hitler cuando se inici la guerra y que solo deseaban continuar la contienda contra el Ejrcito Rojo de Stalin.Los entretelones de la hazaa trgica y la amnesia colectiva de Alemania no fueron aspectos fueron resaltados este domingo en el acto oficial que se realiz en el edificio donde hace 70 aos el conde von Stauffenberg fue fusilado. Los oradores, entre ellos,el presidente de Alemania, Joachim Gauck, prefirieron honrar la memoria de los hroes trgicos, para resaltar que en la poca ms oscura que haya vivido el pas tambin hubo personas que decidieron, como record el presidente, ser valientes y no ser cmplices cuando los dems estn equivocados.El 20 de julio nos recuerda lo que queremos y podemos: permanecer valientes a favor de nuestros valores. No convertirnos en cmplices cuando otros cometen injusticias, sentenci Gauck en el acto oficial, en el que no estuvo presentela canciller Angela Merkel, que abandon Berln para iniciar sus vacaciones estivales.El ario, el judo y la honestidadEn 1931, con el inicio de su colaboracin enLa mujer silenciosa, se inaugura la amistad entre Richard Strauss y Stefan Zweig. La versin final del libreto de la pera satisface plenamente a Strauss, pero llega en un mal momento: enero de 1933, el mes en que Hitler asciende al poder y semanas antes de que prohibiera toda participacin de judos sobre escenarios alemanes.La correspondencia que los dos genios mantienen a partir de esa fecha es una sucesin de ingenuidades y decepciones. Zweig se muestra apoltico: La poltica pasar le escribe a Strauss en abril de 1933, pero el arte permanece. Por eso debemos trabajar para lo perdurable y dejar la agitacin a quienes se sientan realizados con ella. Strauss, en cambio, opta por el pragmatismo. Goebbels est de mi parte, le asegura a Zweig, y para rubricarlo le dedica al ministro de Propaganda su composicinDas Bchlein. Tambin acepta toda clase de cargos y compromisos para el nuevo rgimen. El peor de todos: la direccin de la Cmara de Msica del Reich, cargo con que se convierte en representante oficial de la Alemania nazi. La nueva Alemania necesitaba decorarse con el clebre compositor y ste crey que podra dominar a la bestia a su antojo.Unos das antes de que se estrenaraLa mujersilenciosa,al compositor le llega la noticia de que Zweig don los royalties al fondo de emergencia judoLa mujer silenciosasupone un desafo al rgimen: en ella colaboran de igual a igual el ms clebre compositor ario y un detestado autor judo. Los jerarcas nazis dejan la decisin final en manos de Hitler, quien excepcionalmente tolera su estreno. Pero a Zweig le incomoda pasar por judo privilegiado por el rgimen. Strauss le propone a Zweig que en adelante escriba para l en secreto, una propuesta incmoda que ste intenta sacudirse proponindole a otros libretistas arios, pero Strauss slo quiere a Zweig. En junio de 1935, unos das antes de que se estrenaraLa mujersilenciosa,al compositor le llega la noticia de que Zweig ha asignado susroyaltiespor el libreto de la pera al fondo de emergencia judo. Strauss no se lo cree y lo niega ante las autoridades nazis, pero Zweig lo admite en una carta perdida, en la que aprovecha para recriminarle al compositor sus concesiones.Esa obstinacin juda! responde Strauss. As, cmo no voy a volverme antisemita? []Slo conozco a dos tipos de hombre: los que tienen talento y los que no. []Que si hago de presidente de la Cmara de Msica? Slo para hacer el bien y evitar males mayores. Habra aceptado ese molesto cargo honorfico bajo cualquier Gobierno. La carta fue interceptada por la Gestapo y en julio de 1935 Strauss es invitado a renunciar a la presidencia de la Cmara por motivos de salud. Las serviles excusas de Strauss a Hitler, alegando que haba escrito la carta en un momento de ofuscacin, no sirvieron de nada. Con todo, fue un pequeo triunfo de la honestidad que, por insistencia de Strauss,La mujer silenciosallegara a estrenarse con el nombre del judo Stefan Zweig en los crditos, aunque slo durante las tres funciones que permaneci en cartel.En lo poltico, todos estos artistas carecen de carcter, escribi Joseph Goebbels al conocer el contenido de la carta interceptada. Cierto. En nombre del arte, ninguno de los dos haba querido aceptar una verdad napolenica: que la poltica es el destino del hombre.

El Mundial que Hitler perdi

El Mundial de Stanley Matthews, de la Austria mgica, de la Italia de Valentino Mazzola, de la Argentina de la delantera de River Plate, de la Hungra del ftbol arte, de los violinistas checoslovacos, del Brasil de Leonidas da Silva, del orgullo charra, de una primera gran seleccin sovitica dominada por los ucranios del Dinamo de Kiev... Visto as, podra haber sido uno de los mejores Mundiales de la historia, concede Sergio Levinsky, periodista y socilogo argentino especializado en ftbol internacional. Hubiese sido un choque de trenes entre el ftbol alegre y ofensivo de la escuela suramericana y el juego ms fsico y directo de la mayora de selecciones europeas, aade Carlos Maran, periodista director deCinemana, experto en ftbol y cine. Lo hubiese ganado Uruguay, que derrot a Brasil en Maracan en 1950 y an hubiese sido ms competitivo ocho aos antes, se aventura Oriol Rodrguez, director deOffside, festival barcelons especializado en documentales sobre ftbol.El caso es que entre junio y julio de 1942 iba a disputarse un Mundial de ftbol en Amrica Latina. Lo hubiese organizado la Argentina de la Concordancia, presidida por Roberto Mara Ortiz, o el Brasil de la dictadura de Getlio Vargas. Podra haber sido un Mundial extraordinario, a la altura de torneos mticos como los del 58, el 66, el 70, el 74 o el 86. Pero no se disput.En verano del 42, ningn lugar del planeta reuna las condiciones necesarias para que selecciones europeas y latinoamericanas se jugasen entre ellas la Copa Jules Rimet. Tres aos antes, la Alemania nazi haba invadido Polonia, y aquel mes de junio, tropas alemanas cruzaban el Volga para atacar los pozos de petrleo soviticos del Sur del Cucaso, carros blindados alemanes y britnicos combatan en Libia y Egipto, y Estados Unidos derrotaba a la marina de guerra japonesa en Midway al tiempo que preparaba la contraofensiva de Guadalcanal.A falta del ftbol que no fue, queda la leyenda, la explicada enEl hijo de Butch Cassidy, relato del escritor argentino Osvaldo Soriano que arranca con una frase que es puro cogulo de realismo mgico: El Mundial de 1942 no figura en ningn libro de historia pero se jug en la Patagonia argentina sinsponsorsni periodistas y en la final ocurrieron cosas tan extraas como que se jug sin descanso durante un da y una noche, los arcos y la pelota desaparecieron y el temerario hijo de Butch Cassidy despoj a Italia de todos sus ttulos. Esa leyenda comparte fbula y memoria con otra igual de sugerente: la de lo ms parecido a un partido entre selecciones de los Aliados y del Eje que se disput durante la Segunda Guerra Mundial, precisamente en junio del 42. El llamado Partido de la Muerte, que enfrent en la Ucrania ocupada a prisioneros de guerra que haban jugado en el Dinamo de Kiev contra un equipo de la Luftwaffe reforzado por internacionales alemanes. El partido que inspir la pelculaEvasin o victoria(John Huston, 1981). Para Carlos Maran, que ha escrito un libro,Un partido de leyenda, sobre la pelcula y sobre los hechos reales que la inspiraron, casi todo lo que sabemos acerca de aquel encuentro tiene que ver con la versin que difundi aos despus la propaganda sovitica. Hay dos viejas pelculas al respecto, una hngara y otra rusa, y ambas cuentan, con matices, la misma historia: que a pesar de las presiones para que se dejasen ganar, los prisioneros de guerra aplastaron al equipo de sus carceleros, que las autoridades de ocupacin alemana lo vivieron como una humillacin intolerable y que casi todos los integrantes del equipo ganador fueron torturados y asesinados antes del final de la guerra.Hoy podemos dar por cierto que s se disputaron dos partidos amistosos entre prisioneros ucranios y miliares alemanes, tercia Maran, y que los prisioneros los ganaron ambos. Lo que no est tan claro es que sufriesen represalias por su victoria. Sabemos que algunos de ellos murieron, pero hay que tener en cuenta que estaban relacionados con el Dinamo de Kiev, el equipo de la polica sovitica, as que lo ms probable es que sus muertes fueran actos de guerra, no una especie de macabra represalia deportiva. Para la mitologa del ftbol que no pudo ser, queda ese partido (pura ficcin) en la Francia ocupada, en el estadio de Colombes, entre una seleccin mundial de prisioneros de guerra liderada por un tipo sospechosamente parecido a Pel y la de la Alemania nazi. El partido deEvasin o victoria, disputado por hombres con un sentido de la dignidad deportiva tan agudo que acaban abortando su plan de fuga porque prefieren quedarse a remontar un partido que pierden por 4 a 1. Para Maran, un momento de absoluta magia cinematogrfica.Gloria Mapuche en el fin del mundoMientras se jugaba a ftbol en la Ucrania bajo protectorado nazi, qu ocurra en la Patagonia argentina? Probablemente, no gran cosa a nivel futbolstico. Pero el relato de Soriano dio pie hace pocos aos a una pelcula inslita, el falso documentalEl Mundial dimenticato(2011), de los italianos Lorenzo Garzella y Filippo Macelloni. Oriol Rodrguez, que la proyectar el prximo 6 de junio en Barcelona en el marco de la primera edicin del Offside Fest, la considera una gamberrada maravilllosa, la cuota de realismo mgico y de ficcin que queramos incluir en un festival que, por lo dems, programar solo documentales autnticos. Maran la ha visto, y la considera una simptica rareza. Levinsky va ms all: l la ha protagonizado. Los directores me contactaron a travs de un amigo comn, cuenta el periodista, actor eventual en esta oda a aquel ftbol que no fue posible. Todo fue extrasimo desde el principio. Buenos Aires es una ciudad inmensa, pero resulta que ellos se haban instalado, por pura casualidad, no ya en mi barrio, sino en mi calle, a menos de una cuadra de mi casa, al lado del bar en que desayuno todos los das. Era el destino. Me explicaron el proyecto y queran que yo les asesorase, pero bastaron unos minutos de conversacin para que me dijesen que era yo quien deba protagonizar la pelcula. No pude o no supe negarme.Durante semanas, recorrieron la Patagonia transandina filmando a salto de mata. La idea eradocumentarun supuesto Mundial sepultado por la historia oficial. Un torneo delirante, en la lnea del que imagin Soriano, en el que una Alemania compuesta por ingenieros desplazados al lugar para construir una presa se enfrentaron a indios guaranes bajo bandera paraguaya, almaceneros espaoles, expatriados ingleses y (lo mejor de todo) una seleccin mapuche que se encarg de defender el pabelln de la Patagonia y la Argentina en su conjunto, y que ganara el torneo en una final pica, entre destellos de magia blanca. Nadie que haya visto la pelcula puede dudar de que es un falso documental, unfake, y que lo del Mundial de la Patagonia es pura invencin, concluye Maran. Y sin embargo, hay gente que se lo cree, confirma un Levinsky que no sale de su asombro. No ya periodistas que han escrito del tema a toda prisa y sin ver la pelcula, sino gente del lugar que me cuenta que su abuelo vio aquella final, o arbitr e incluso jug uno de aquellos partidos. Supongo que es as como se gestan las leyendas, concluye con una carcajada. Para Oriol Rodrguez, resulta divertido e inteligente que los directores de la pelcula mantengan un cierto margen de ambigedad al referirse a ella: Est en la esencia del falso documental, un gnero que pretende explorar los lmites de la credulidad de la gente, como si se tratase de una especie de experimento sociolgico.Pero Maran considera que especular sobre quin podra haber ganado el Mundial del 42, en caso de que se hubiese podido disputar en Argentina tal como estaba previsto, es incluso ms divertido que la pelcula de Garzella y Maccelloni: Intuyo que Uruguay, Argentina y tal vez Brasil estaban entonces un peldao por encima del resto. Pero me hubiese gustado ver a los equipos centroeuropeos compitiendo contra ellos. Sobre todo Hungra, que hubiese llegado al 42 con un equipo estupendo, porque seguan siendo buensimos despus de que la guerra dejase su pas arrasado. O Austria, pero no integrada en el equipo del III Reich, sino por separado, con el equipo que asombr al mundo en los aos treinta. Su mxima estrella, Matthias Sindelar, muri en el 39, y en caso de haber sobrevivido a los primeros meses de guerra hubiese llegado al verano del 42 con 38 aos. Pero, puestos a especular, por qu no imaginarse a un Sindelar vivo, veterano pero an en plena forma, liderando una Austria maravillosa?.Juega Inglaterra, gana ArgentinaOtra hiptesis sugerente es que el del 42 podra haber sido el primer Mundial de Inglaterra, que en el ao 38 estaba a punto de reconciliarse con la FIFA y volver al redil de las competiciones internacionales. Al final, no lo hara hasta despus de la guerra. Cierto, se entusiasma Levinsky, se podra haber visto a Stanley Matthews, que por entonces estaba en su apogeo y jug poqusimos partidos fuera de las Islas Britnicas. Pero el periodista argentino tiene claro que aquella Inglaterra no estaba en condiciones de ganar la Jules Rimet: No hubiese sido mucho mejor que la que hizo un papel discreto en el siguiente Mundial disputado, el del 50, o la que fue aplastada por Hungra en Wembley en el 53. Los ingleses no lo saban, pero en 1942 ya no eran rival para el ftbol alegre y pujante de las naciones de la Sudamrica atlntica. Brasil hubiese tenido a Leonidas, un jugador formidable, pero su equipo an no estaba maduro para competir con los mejores, como se demostr en el 38. Argentina s. Podra haber contado con el quinteto de ataque de River Plate, La Mquina (Muoz, Moreno, Pedernera, Labruna y Loustau). Pedernera dej a Di Stfano en el banquillo unos cuantos aos, hasta el punto que Alfredo tuvo que irse cedido a Huracn, as que imaginense cmo sera. Rodrguez y Levinsky coinciden en que el mximo rival de Argentina hubiese sido la nacin milagro del ftbol internacional, Uruguay. Ellos tienen el mejor ratio mundial de talentos futbolsticos por habitante. Pero el factor cancha tambin hubiese tenido su importancia. Es aventurado decirlo, pero yo creo que Argentina hubiese ganado el Mundial del 42. Como ganar el de 2014, Messi mediante, dice Levinsky. Para Rodrguez, el favorito sentimental, ahora y siempre, es Urguay. Y para Maran, que confiesa preferir el ftbol europeo a la magia y la mstica del balompi latinoamericano, una victoria hngara, checoslovaca o austraca hubiese sido un acto de justicia potica, aunque bastante improbable. Y tambin me hubiese gustado que la Espaa de la posguerra hubiese ido a jugar a Argentina en el 42. Nos hubisemos abierto a otro ftbol. Estbamos tan aislados, jugando amistosos intiles contra Portugal, que no nos dbamos cuenta de que la raza y la furia ya no servan para nada, que por ah fuera se jugaba a otra cosa y lo hacan mucho mejor. Tal vez las derrotas del 42 nos hubiesen hecho evolucionar y llegar altiki-tacadcadas antes. En esta especie de historia paralela del ftbol que nos estamos imaginando, podramos haber llegado a finales de los aos setenta jugando un ftbol exquisito, una sntesis muy espaola entre la escuela sudamericana y la europea, y el del 78 podra haber sido nuestro primer Mundial.Setenta aos del dia DQuin era aquel hombre de mediana estatura, amplia calvicie, orejitas puntiagudas, penetrante mirada y sonrisa pcara, que aterriz un da de septiembre de 1984 en Madrid procedente de Maracaibo, instado por este peridico a instalarse, por razones de seguridad, en un hotel cercano al Aeropuerto de Barajas? Por su aspecto, poda parecer un simptico abuelo de esos que se dedican a hacer trucos de magia a sus nietos o les cuenta historias divertidas al odo, mientras les introduce caramelos en los bolsillos. Mas, si uno se adentraba algo ms en su mirada, en la fortaleza de sus hombros, en los reflejos de sus movimientos, el pensamiento y la intuicin guiaban hacia una personalidad diferente de la del venerable abuelo, en la que lo que primaba, en verdad, era la conviccin que desplegaba en el habla y, por encima de todo, su capacidad para fabular verosmilmente.Estbamos ante uno de los mentirosos ms importantes de la Historia: Juan Pujol Garca, barcelons, nacido en la calle de Montaner 180, hijo de un tintorero y de una dama muy religiosa, combatiente en la zona republicana, desde cuyas trincheras exhortaba a los franquistas a cambiar de bando, hasta que cruz las lneas, fue hecho prisionero, encarcelado en un campo de concentracin salvado por un fraile amigo de su madre, de nombre Celedonio, para ir a parar, como chfer, al Cuartel General de Franco en Burgos. Luego, en Madrid, sera conserje del hotel Mayestic, en la calle de Velzquez, hasta que, para ofrecerse como espa, se present en la Embajada britnica, de donde sera despedido con cajas destempladas.Aquel hombre llegara a ser conocido tan solo por un reducidsimo elenco de la cpula del espionaje europeo durante la Segunda Guerra Mundial bajo los alias de Arabel, para los alemanes, o por el sobrenombre de Garbo, para los ingleses. Tras ser recomendado a los britnicos por los norteamericanos, se integrara en el servicio secreto britnico. Y, aos despus, llegara a ser el espa que, seis horas antes del gran desembarco aliado en las costas normandas - desembarco que anunci con holgada antelacin a Hitler- enga de tal manera al alto mando hitleriano que le exigi, y lo consigui, que no moviera sus divisiones acorazadas de Calais, porque el ataque sobre Normanda era tan solo una vasta operacin aliada de distraccin, encaminada a desproteger el lugar donde se producira horas despus el verdadero desembarco aliado. Hitler trag el anzuelo. Las tropas germanas combatieron ferozmente en el litoral normando, pero el empuje aliado fue ms vigoroso y aquellas fanticas huestes de Hitler no recibieron el apoyo acorazado necesario para detener la irrupcin aliada, a la espera de un desembarco en Calais que nunca llegara.La pregunta que entonces, aquella maana de 1984, casi 30 aos despus de aquel desembarco, se le formul a Juan Pujol Garca en Madrid fue qu era lo que l haba hecho para granjearse la confianza de Hitler, hasta el extremo de engaarle en una cuestin de importancia capital como el Desembarco de Normanda. Juan Pujol sonri e, impvido, con una aplomada serenidad respondi: Desde el comienzo de la guerra, con la ayuda del servicio secreto britnico, yo haba montado una red ficticia de agentes de espionaje al servicio del III Reich, que informaba a Berln desde Londres. La dinmica era retorcida: Me granje la amistad del espionaje nazi en Madrid, primero; despus, me introduje en el servicio secreto militar alemn, donde aprend todas las tcnicas de espionaje que ellos me ensearon; viaj a Inglaterra, tras conseguir en Portugal acreditarme ante los americanos, que me recomendaron a los ingleses; entonces, comenc desde Londres a pasarles a los nazis informacin verdadera pero inocua- que me facilitaban los ingleses, informaciones que peda que confirmara el mando alemn mediante la Luftwaffe, si se trataba, por ejemplo, de una concentracin de barcos en una baha del litoral britnico concentracin real, pero de buques inutilizados que, desde el aire, daban el pego-, comentaba Garbo con una sonrisa picarona.Juan Pujol haba formado su red ficticia londinense con personajes completamente inventados por l: Un estudiante venezolano que flirtea con la secretaria del ministro del Interior ingls; el