Artes & Cultura 27 septiembre 2015

8
www.lahora.com.ec Ecuador, domingo 27 de septiembre de 2015 3 Cine. Baumbach, juventud y ambición. >> 7 Diálogo. Oscar Vela trae ‘Todo ese ayer’. >> 4-5 934 FOTO: GAREL BENALCÁZAR Valencia, a flote El escritor ecuatoriano presenta una nueva edición de ‘El libro flotante’.

description

Artes & Cultura 27 septiembre 2015

Transcript of Artes & Cultura 27 septiembre 2015

Page 1: Artes & Cultura 27 septiembre 2015

www.lahora.com.ec

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

Ecuador, domingo 27 de septiembre de 20158

Ecuador, domingo 27 de septiembre de 2015

3

Cine. Baumbach, juventud y ambición.

>> 7

Diálogo. Oscar Vela trae ‘Todo ese ayer’.

>> 4-5

Nº 934

FOTO

: GA

REL

BEN

ALC

ÁZA

R

publicidad

Valencia, a floteEl escritor ecuatoriano presenta una nueva edición de ‘El libro flotante’.

P

Page 2: Artes & Cultura 27 septiembre 2015

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

2 Ecuador, domingo 27 de septiembre de 2015

Ecuador, domingo 27 de septiembre de 2015 7el librero bambalinasO O

ÉDGAR FREIRE RUBIO • Ángel F. Rojas era un cliente asiduo de la desaparecida Librería CIMA. Era uno de los tantos escritores, periodistas, intelectuales e historiadores que aprovechaban sus viajes a la capital para ponerse al tanto de la producción bibliográfica nacional y extranjera. Adu-cían, en ese entonces, que Guayaquil no llenaba sus necesidades culturales (no sé si hoy esa realidad habrá mudado). En su columna periodística ‘Cartas de Gua-yaquil’ (El Comercio, 7-XII-88) hacía un homenaje a Luis A. Carrera y rememora-ba sitios de su Guayaquil y sus libreros y librerías. No faltan las menciones a Pedro Janer, Janer e hijos, y finalmente a V. M. Janer (se refiere al periplo hereditario de la Librería Janer’, supongo). Cuando jue-ga con la memoria de sus caminatas por Quito, evoca a Arsenio Briz Sánchez, a Sacoto Arias (otro escritor Librero, hoy olvidado), a Jorge Icaza, Pedro J. Vera y Enrique Berrezueta y sus aventuras en el arte de vender libros. Hace 27 años, el amigo novelista ya preveía lo que aconte-cería con la vida de estos negocios cultu-rales (‘Presente y futuro de las librerías’ se titula su columna). Analiza los precios de los libros, de la poco o casi nula ayuda bancaria a estos emprendimientos y, des-de luego, la carencia de lectores (los llama ‘marginales’). Sugiere con ironía que lo mejor sería que los dueños de estas libre-rías las vendan y coloquen ese dinero en pólizas de acumulación o en bonos de es-tabilización. Y con pena pronostica que la cita del poeta clásico, como ideal de vida: “Un rincón, un amigo y un libro…” sería difícil de cumplir.

El maestro amigo sigue siendo pro-feta. Aunque mi amiga Librera, Mónica Varea (El Universo 10-07-2015) expresa textualmente que “faltan algunas pero

tenemos suficientes Librerías, para todos los gustos…”. Mónica señala las librerías que perviven. Lamenta la desaparición de algunas emblemáticas (dicen que Li-bri Mundi no cambiará de lugar) y de otras que aparecieron y se esfumaron en un santiamén. Se le escapa la vigencia de otras empresas libreras como Autores Ecuatorianos, Studium, Progreso, Tecni-libro, Club de Lectores (antes Círculo de Lectores), que vivieron decenas de años de existencia y fueron negocios innovado-res, como es vender libros puerta a puerta y “a plazos”. Entre sus “chismes libreros” no lamenta la carencia de libreros ni la poca iniciativa de la Cámara del Libro y sus núcleos (¿existen toda-vía?) para preparar este limitado recurso humano. No sacamos nada con inaugurar nuevos centros cul-turales y librerías si el Librero (con mayúscula) brilla por su ausencia (salvo poquísimas excepciones).

Desde mi “atalaya” expreso que “no hay suficientes librerías en Quito”, ni sumando las de “viejo”, que no tienen nada que ver con las que conocí en los años de mi forma-ción. ¿Qué empresa se atreverá a poner una buena y completa librería en el Centro Histórico de la capital y con libros enteramente ecuatorianos? No omito las valiosas excepciones, pero las que conocí cumplían una función social y cultural: atesoraban nuestras bibliografías nacio-nales y los precios eran asequibles.

Cuánto me alegra que el Fondo de Cul-tura de México tenga su casa propia en Quito. ¡Tantos recuerdos de lo que en los años 70’ u 80’ se vendía de esta prestigio-sa Editorial! Que sea suficiente nombrar tres colecciones: Popular, Breviarios y Tierra firme. ‘Pedro Páramo’, de Rulfo,

se vendía como ‘pan caliente’, o ‘Los de abajo’ de Mariano Azuela. Lo que lamen-to es que su horario de atención sea tan “burocrático”. Qué suerte conseguir un comodato. ¿Qué tal si ese mecanismo se aplicara a nuestras Librerías o prestigio-sas Editoriales? ¿Y para cuándo harán lo mismo con Siglo XXI y Ediciones Era de México, por decir lo menos? En fin.

LecturasHe leído y releído un librillo sabroso, su-gestivo y provocador: ‘¿Por qué tener una librería? Los cinco primeros años de Tols-toi Librería’, de Karina Sánchez. Esta jo-

ven Librera rompió esquemas y en su casa procreó su venta de libros a pedido. Goza del cariño y la admi-ración de un sinnúmero de devotos lectores. Tolstoi no es una Librería independiente, es alternativa. Se salió por la tangente. No quiso ven-der lo mismo y lo mismo. Salió de la uniformidad. El buen lector no solo consume “el más vendido”. Hay otros “alimentos terrenales” que no se hallan en el común de nuestras perezosas Librerías. Tolstoi vivirá largo. ¡Qué rico es leer el primer ca-

pítulo de lo que será una Memoria de una atrevida Librera. ¡Congratulaciones!

Solo voy a señalar 7 de los 16 folletos (son siete los que he leído) que me ha en-viado el profesor Jorge Villarroel Idrovo desde Ibarra: ‘El ecocidio capitalista’, ‘Fútbol y antivalores’, ‘Loas al papa Fran-cisco’, ‘El Vaticano Verde’, ‘Ideología de los libros de autoayuda’, ‘Lectura y com-putadoras’ y ‘Felicidad por decreto’. Mi amigo ya desaparecido, Reinaldo Miño, cuando leía este tipo de folletos decía que eran “botafuegos”. No queda títere con ca-beza y con sólidos argumentos. El autor

no vende humo. Es rompedor con el pen-samiento único que nos quieren imponer. Es su verdad (hoy que este gobierno habla de la palabra ‘verdad’ como si fuera mer-cancía) y hay que leerla y respetarla. La pregunta de siempre: ¿en qué Librería ha-llar estos libritos? (les doy su correo elec-trónico: [email protected]). Ofrece regalarlos. El maestro vive de lo que escri-be. ¡Gracias, buen amigo!

Ya que hablo de folletos, menciono uno más: ‘Tiempo de coplas’, del cayambeño Luis Guzmán. Sus coplas tienen buen sa-bor a bizcochos y queso de hoja. Él mismo paga la edición de sus libros. Amor a la ca-miseta y a su pueblo. ¡Congratulaciones!

Antes de mi “partida” llegó a tiem-po Gestión No. 254 (agosto-septiembre 2015). Me informé sobre la gran acelera-ción en la actividad humana que se inició en 1950. América Latina en Movimiento No. 505: ‘Francisco y los movimientos po-pulares’. Tierra, techo y trabajo es su tema central. Y recibí también una entrañable carta de la amiga historiadora Raquel Rodas. Ya la comentaré en extenso. Es gratificante saber que mientras muchas “amigas” se han ido otras permanecen in-variables en sus afectos. ¡Qué bien! Que-do en deuda con muchos libros.

A la distancia me he enterado de quié-nes han merecido el premio Eugenio Es-pejo. Seguiré lamentando la omisión de H. Rodríguez Castelo, Alejandro Moreano, Iván Carvajal, Alfredo Costales. ¡Cosas del poder! Eso sí: celebro los 33 años de vida del Diario La Hora a cuya casa Nico-lás Kingman me permitió ingresar hace cerca de 20 años. ¡Felicidades!

Pensamiento del mes: “Hay que tener cuidado al elegir a los enemigos, porque uno termina pareciéndose a ellos” (J. L. Borges). Amén

¿Existen suficientes librerías en Quito?

El Librero recibe sus publicacio-nes en: Almacén Bolmar, calle Guayaquil N2-49 y Sucre, con atención a Martha Freire Rubio. También puede dirigirse a la casilla 17012561.

TOME NOTA

RICARDO SEGREDA • Al igual que Woody Allen, el cineasta Noah Baumbach siem-pre se ha inclinado a lo pretencioso. Esto, al exhibir sus credenciales intelectuales. Así, en su más reciente película, ‘Mientras somos jóvenes’, cita el diálogo de la obra ‘El maestro constructor’, de Henrik Ibsen. Las palabras se refieren, específicamente, al oportunista arquitecto-protagonista de mediana edad, Solness, y su paranoia con respecto a jóvenes.

‘Mientras somos jóvenes’, sin embargo, es mucho más cercana al Hollywood an-tiguo que al trabajo de Ibsen. Sobre todo, hay un guiño al clásico ‘Eva al desnudo’, de Joseph L. Mankiewicz, con el que tiene una similitud en su narrativa y tema.

En la obra clásica de Mankiewicz, Bet-te Davis tiene el papel de Margo Chan-ning, una veterana y muy admirada ac-triz. Pese a esto, como ya es una mujer de mediana edad, los papeles principales son más difíciles de conseguir. En este momento vulnerable en su vida Margo conoce a una joven admiradora, Eva Ha-rrington, que apela a la vanidad de Mar-go, quien la adopta, empleándola como su asistente personal.

Pero Margo no se da cuenta de que Eva tiene una agenda, así como una historia personal muy diferente a la que ella infor-mó cuando se conocieron. Al final de la película, Eva anexa la carrera de Margo y asume su papel en una obra de Broadway.

Aquí, por lo tanto, los papeles de Mar-go Channing y Eva Harrington son asu-midos por los actores Ben Stiller y Adam Driver, el primero como veterano director

de documentales, Josh Schrebnick, que desperdició su potencial mientras que la-boró en un proyecto que ha consumado los últimos diez años de su vida. Su carre-ra como profesor universitario ha suplan-tado mucho de lo que Josh se imaginó que iba ser su vocación.

La vida personal de Josh, por desgra-cia, ofrece poco como compensación. Mientras que sus amigos están avanzan-do con sus metas de tener hijos, la esposa de Josh, Cornelia, ha sufrido una serie de abortos involuntarios. Al mismo tiempo, Cornelia es la hija de un famoso y admi-rado director de documentales, Charles Breitbart, y esto solo sirve como humi-llación para Josh porque nunca igualó el éxito de su suegro.

Así que, como Margo, Josh es vulnera-ble a la adulación. Cuando se encuentra

con Adam Driver, un ambicioso joven ci-neasta, Jamie Massey, Josh es demasiado inclinado a ser el mentor de Jamie, espe-cialmente después de que Jamie expresa su admiración por las primeras obras de Josh, que establecieron su reputación.

En poco tiempo, Jamie persuade a Josh que le ayude en un documental que tiene la posibilidad de hacerle famoso. Al inicio, Josh responde con entusiasmo, pero al fin se da cuenta de que, al igual a Eva en ‘Eva al desnudo’, Jamie, con mo-tivos mercenarios, es capaz de distorsio-nar la verdad y aprovecharse de otros.

Noah Baumbach nació en Nueva York y es el hijo de la reconocida crítica de cine, Georgia Brown, y uno puede presumir que tiene más conocimiento acerca de lo que sucede en la industria cinematográ-fica de esta ciudad que en su audiencia. Aun así, la juicios morales de Baumbach en esta película son dudosos. Como dijo el gran crítico Andrew Sarris, a pesar de todas sus virtudes, ‘Eva al desnudo’ tuvo un defecto en su narrativa en que nunca abordó en cuanto que Margo hizo en su juventud para hacerse famosa.

En este sentido, ‘Mientras somos jóve-nes’ no es muy creíble porque ni siquiera insinúa que Josh, cuando era un ambicio-so y joven documentalista, tuvo sus pro-pios motivos mercenarios al casarse con la hija de un muy exitoso cineasta. Esto, desafortunadamente, da a la película un desagradable olor de deshonestidad ma-nipuladora que da la falta de moralidad de Jamie el olor de una rosa en comparación.

[email protected]

RECOMENDADOS

‘Marcianos al ataque!’ (1996) es una divertida comedia de ciencia ficción, diri-gida por Tim Burton, quien expone toda su creatividad en esta parodia de los filmes de serie B. Además de su ritmo hilarante, cuenta con una constelación de estrellas en el elenco: Jack Nicholson, Glenn Close, Pierce Brosnan, Annette Bening, Danny DeVito, Sarah Jessica Parker, Martin Short, Natalie Portman, Michael J. Fox, Jack Black, Christina Applegate, entre otros.La trama es sencilla y el título lo dice todo. Un gran platillo volador y una nutrida flotas de marcianos atacan la Tierra. Controlando el pentágono y sometiendo al humano, un abanico de personajes librarán la batalla por salvar al planeta. Todo esto, al compás de la músuica de Tom Jones.El filme se transmite hoy por TCM (canal de cable), a las 16:30.

PLANETARIAMENTE DIVERTIDA

Venía y cancelaba. Todo estaba en ascuas. Sus fanáticos a la expectativa de que si Ecuador entra en la agenda de su gira o no.Se trata del músico inglés Morrissey, quien saltara a la fama como vocalista de The Smiths y que tras la separación se consolidara como solista.El artista se prepara para arribar al Ecuador este 7 de noviembre en el Teatro de la Casa de la Cultura Ecuatoriana, en Quito. Ante la espera, se puede escuchar su primer disco en solitario, ‘Viva Hate’, álbum que lo lanzara al estrellato.

[email protected]

MORRISSEY A LA VISTA

Arte y ambiciónPAÍS: EE.UU.AÑO: 2014DIRECTOR Y GUIONISTA: Noah BaumbachREPARTO: Ben Stiller, Naomi Watts, Adam Driver y Charles GrodinTIEMPO: 97 minutos CALIFICACIÓN: ****

‘Mientras somos jóvenes’

‘MIENTRAS SOMOS JÓVENES’

Page 3: Artes & Cultura 27 septiembre 2015

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

“Nadie lanza un libro al agua. Se lo hecha al fuego, se lo aprisiona en una caja, se lo entierra de pie en una biblioteca. Pero na-die lanza jamás un libro al agua. Nadie. Nunca. Jamás. Ella mira desde la orilla del lago. Mira y parece decir: nadie lanza un libro al agua. Sólo que ella, la niña que juega en la orilla del lago con un cubo de plástico rojo, no ha pronunciado ni una palabra. Alarga su brazo, señala hacia el libro flotante, agita la mano y frunce las cejas como si le doliera, avisándome que lo rescate”.

Leonardo Valencia arranca así su no-vela ‘El libro flotante de Caytran Dölphin’, pero este inicio, gran inicio, no estaba pla-neado de esta manera. Gracias a un halo lúdico, el escritor guayaquileño dio con estas profundas líneas: Se encuentra pu-liendo la obra. Sabe que iniciará con una escena donde un texto, lanzado al agua, debe ser rescatado. Su tipeo se ve inte-rrumpido cuando una pelota roja irrum-pe su concentración. La esfera es lanzada por su pequeña sobrina, quien le invita a jugar. Así, este acto se transmuta y se transforma.

Y como todo está sujeto al cambio, el título de la novela también lo ha hecho. Se ha simplificado. En una nueva edición, presentada por Debolsillo (Penguin Ran-dom House), Valencia ha optado por lla-marla ‘El libro flotante’. Nada más.

“Fue una cosa inesperada. El libro tie-ne un nombre complejo. Los lectores y mis amigos le quitaban el ‘Caytran Döl-phin’. Desde que apareció, todos lo lla-

maban tan solo como ‘El libro flotante’.Consulté con los editores y estuvieron de acuerdo en que el título se acortara”, com-parte el autor.

¿Qué dice Caytran de que su nombre ya no esté en la portada? “El problema con Caytran es que no sabemos dónde está, se fugó y desapareció por miles de historias”, comenta Valencia, mientras una risa picaresca aparece tras su comen-tario.

A flote“La literatura es algo flotante. La literatu-ra no solo está metida en las bibliotecas, es lo que todos comentamos y leemos, es el cúmulo de opiniones, lo que se reco-mienda. La literatura es una especie de atmósfera por donde los libros via-jan, sean estos del presen-te o del pasado”, opina el también autor de ‘La luna nómada’, al momento de cuestionarle acerca de que una reedición permite que un libro continúe flotando.

Un texto también puede naufragar o tocar puertos en ese océano llamado In-ternet. ‘El libro flotante’ puso un faro y construyó un muelle desde esta platafor-ma a la par de que se publicara en papel (2006). Eugenio Tisselli creó www.libro-flotante.net, un espacio que busca estar vigente dentro de los procesos de cambio, pues “la escritura siempre se ha ligado a la tecnología”, tal como lo afirma.

“Siempre me ha interesado lo que su-cede entre la literatura y lo tecnológico. Por otra parte, siempre me interesa la reacción de los lectores, y en este libro es-pecialmente porque se construye desde la interpretación”, dice el escritor.

“En Internet, lo que se puede hacer es el mismo procedimiento del personaje: interpretar los fragmentos, añadir sus cometarios, se puede crear y distorsio-nar. La dinámica que se propone no es un mero traslado: se trata de un trabajo informático para dar rienda suelta a la imaginación”, explica.

MovimientoValencia, quien asegura que nunca arro-

jaría un libro al agua (ni lo quemaría o rompería), deja en claro sus preocu-paciones sobre el arraigo y desarraigo, sobre la mo-vilidad en general, temas que se transforman en una constante de este es-

critor nómada. “Últimamente, y en estos días espe-

cialmente, hablamos de los refugiados, asilados, de los migrantes, de los despla-zamientos. Hay una condición en nuestra época de una extrema movilidad, radicali-zada en el buen y mal sentido. Vivimos en un mundo donde los esquemas de los si-tios fijos se han problematizado mucho”, argumenta.

Comparte que en medio del “desplaza-miento” su “asidero es la escritura”. “La

escritura es mi refugio. La literatura bus-ca captar esas cosas evanescentes y que, de alguna manera, dan un pequeño orden a ese caos que es la realidad, a ese deseo de estabilidad en un mundo tan cambiante. Ante las dinámicas de cambio, la palabra es un salvavidas en un mar muy agitado. A ese salvavidas nos agarramos los escri-tores y los lectores”.

Ese ‘salvarse’ es el que le permite con-tinuar apostando por esas obras de “volu-men y esfericidad”, esas narraciones que gracias a sus distintos lados “permiten que la obra se lea desde distintos puntos de vista”.

“Siempre apostaré por la interpreta-ción, como lo hago en ‘El libro flotante’. La interpretación es primordial porque algunos lados no me son visibles, pero por todo el proceso de la masa narrativa, pue-den aparecer nuevas lecturas”, concluye. (DVD)

[email protected]

Ecuador, domingo 27 de septiembre de 2015

Ecuador, domingo 27 de septiembre de 2015 protagonista 36 biblioteca

Composición electrónica:Pantone Impresiones

Edita: Editorial Minotauro S.A.Correspondencia:

Planta Diario La HoraAv. Galo Plaza N62-08 y Nazareth

Fax: 247-6085 casilla 17-17-243 CCIcul tu ra @la ho ra .co m.ec

Quito, Ecuador

Director (e): Francisco Vivanco RiofríoEditor (e): Damián De la Torre AyoraDiseño: Luis Alberto Aspiazu

VITRINA DE LIBROS

HAIKUS ELEMENTALESRamiro Caiza

Nacido en Machachi, pero ciudadano del mundo, el autor se apega a la tradi-ción japonesa y comparte 273 haikus, donde el amor, el erotismo, la pasión, la melancolía, entre otras temáticas, son trazadas en versos cortos. Sobre la obra, José Sánchez del Viejo dice: “La saga continúa con este conjunto de textos agrupados bajo el volumen de ‘Haikus elementales’, elemental propuesta que le sigue a ‘Haikus emergentes’, esta cantera que empieza a ser cultuvada por la sensibilidad de quien conoce la tierra”. CCE

A FLOR DE PIELJavier Moro

El autor español no esconde su afición por desempolvar personajes históricos sepultados en el olvido. Esta vez, da un destello de la vida de Isabel Zendal, Francisco Xavier Balmis y Josep Salvany, quienes junto a 22 niños construyen la aventura de mayor proeza humanitaria de la historia de la humanidad. Moro no solo entretiene con la campaña por combatir a la viruela, sino que con su narrativa combate el aburrimiento y trae un libro que se catapulta como una vacuna para entender una época. SEIX BARRAL

LOS MÁS VENDIDOS

ARGENTINA

° Grey, E.L. James (Grijalbo).° El amante japonés, Isabel Allende (Sudamericana). ° La chica del tren, Paula Hawkins (Planeta).° Gaturro 24, Nik (De la Flor).FUENTE: TEMATIKA.COM

° La chica del tren, Paula Hawkins (Planeta).° Lo que no te mata te hace más fuerte, David Lagercrantz (Planeta).° Maravillosamente imperfecto escandalo-samente feliz, Walter Riso (Planeta).° El amante japonés, Isabel Allende (Penguin Random).FUENTE: LIBRERÍA NACIONAL

COLOMBIA

ESPAÑA

MÉXICO

° Virtual Hero. El Rubius, Ruben Doblas (Temas de Hoy).° Casi sin querer, Defreds (Frida).° Lo que no te mata te hace más fuerte, David Lagercrantz (Destino).° En un mundo de grises, Sergio Carrión (Frida).

FUENTE: CASA DEL LIBRO

° Aristóteles y Dante descubren secretos del universo, Benjamín Alire Sáenz (Planeta).° Lo que no te mata te hace más fuerte, David Lagercrantz (Destino).° 1984, George Orwell (Debolsillo).° Hombres sin mujeres, Haruki Murakami (Tusquets). FUENTE: LIBRERÍA GANDHI

° Pepe, el lobo marino, Andrea Holguín (Libri Mundi-Enrique Grosse Luemern).° The Andes as the condor flies, Tui de Roy (Libri Mundi-Enrique Grosse Luemern).° Galapagos: Islands born of fire, Tui de Roy (Libri Mundi-Enrique Grosse Luemern).° Pie de Bruja, Carolina Andújar (Montena).FUENTE LIBRI MUNDI

° Las ventajas de ser invisible, Stephen Chbosky (Alfaguara).° Si decido quedarme, Gayle Forman (Salamandra).° La fiesta de la insignificancia, Milan Kundera (Tusquets).° Hielo Negro, Becca Fitzpatrick (Blok).

FUENTE MR. BOOKS

ECUADOR

Nota: Listado de libros de ficción de EFE, excep-to Ecuador.

Datos del autorANTONIO TELLO

° Escritor argentino nacido en 1945. Tras iniciar estudios de Ciencias Económicas, decidió abando-nar estos y dedicarse a la literatura. A los 18 años se desempeñaba como periodista e intervino en la fundación de tres revistas, una de las cuales le costo el exilio hasta 1975. Desde 1976, y tras una breve estancia en París, reside en Barcelona, donde se ha dedicado fundamentalmente a la actividad editorial y a la escritura, sobre todo de literatura infantil. Entre su obra cabe destacar los libros de cuentos ‘El día en que el pueblo reventó de angustia’ y ‘El Quijote a través del Espejo’, así como la novela ‘De cómo llegó la nieve’.

OSWALDO PAZ Y MIÑO J. • Palabras: “Unos trazos, manchas sobre el papel, tenues patas de mosca. Unos ojos reúnen esas letras, las ordenan y nacen las palabras”. El misterio de la palabra es ser lo que se designa. Una palabra es representación imprescindible. No contingente de cada idioma, sino necesaria. Las palabras tie-nen que estar cargadas por quienes las pronuncien. Si para decir te amo, hay que decir primero yo; para hablar con pleni-tud, las palabras han de definir a aquel que las emplea y contener su experiencia del mundo. Por medio de ellas nos mani-festamos nosotros. De no ser así, lo único que haremos será llenar en apariencia el vacío con sonidos vacíos: voces y nada más. La palabra, que es la primera semi-lla del razonamiento, de la religión, el arte y la ciencia, es la causa inicial de todos los desastres que el hombre -ese mono endio-sado- podría evocar. O que quizá haya, en otra ocasión, hace millones de años, pro-vocado”. Así las define Antonio Gala.

La palabra nos humaniza, nos habita, nos identifica. La palabra, dice Valère No-varina: “Recuerda, anuncia, y transmite; nos atraviesa pasa por nosotros sin que lo sepamos”.

Según la RAE, la palabra, del lat. Para-bla, es el “segmento del discurso, facultad de hablar. Aptitud oratoria. Empeño que hace alguien de su fe y probidad en testi-monio de lo que afirma. Promesa u oferta. Dicho, razón, sentencia, parábola. Metal de la voz”. La forma de los sacramentos a distinción de su materia. Si buenas, expresiones o promesas corteses, dichas con intención de agradar y convencer. No menciona el diccionario de la Real Acade-mia Española cuando la palabra es mala,

sí que apunta lo que es palabra grue-sa (dicho inconveniente u obsceno) y la palabra picante (la que hiere o mortifica a la persona a quien se dice).

Somos palabristas. El verbo nos es tan indispensable como el alma para vivir. La palabra nos permite nombrar y ser nombrados. Pode-mos con ella llamar a las cosas por su nombre.

“Pero con el correr del tiempo, el poder del nombre propicio, la co-dicia de algunos y el temor de otros obligando al común a crear una len-gua secreta, activa, pícara y festiva para referir aquello que no debía ser nombra-do. Uno de esos aquellos conflictivos en las sociedades occidentales y cristianas ha sido el sexo, especialmente en la comu-nidad española y su radio de influencia” (pág. 13).

Palabra de honor que esta semana propongo un libro indispensable, un tomo maravilloso de Antonio Tello: ‘Gran diccionario erótico: De voces de España e Hispanoamérica’. Allí, de la ‘A’ a la ‘Z’, en sus trescientas ochenta y ocho páginas, la libertad de expresión es concretamente un “orgasmo léxico”.

“Loba: Mujer atractiva y provocadora. Si bien, para los antiguos romanos era el equivalente a ramera, en castellano la voz ha perdido su contenido condenatorio y señala a la mujer bella y, en cierto modo, sexualmente depredadora” (pág. 227).

Publicado por Ediciones Temas de Hoy, se exponen palabras relacionadas con la sexualidad humana como: coño, dedear, estocada, pitalla, furcia, panocha, chongo, cipote, maridear, moza, nabo,

Palabras al desnudo

orto, ósculo, perigallo, perno, pervertido o quiquiricuando. Todas estas definidas al desnudo, descriptas, que es lo que cabe, con naturalidad, sin maquillaje, con toda la tonalidad erótico-cultural de la diver-sidad humana. Todo un placer leerlo. Un libro que cabe tener cerca para descifrar tentaciones.

[email protected]

O I

I

F

‘La palabra es un salvavidas’

LEONARDO VALENCIA

ESCRITOR. Junto a su obra flotante, en la Universidad Andina Simón Bolívar, donde labora actualmente.

PERFILLeonardo Valencia

°Escritor ecuatoriano (Guayaquil, 1969). Posee un doctorado en Teoría de la Literatura por la Univer-sidad autónoma de Barcelona y una maestría en Edición por Publish/Oxford Brooke University. Su obra abarca al cuento, la novela y el ensayo. Entre sus publicaciones están: ‘La luna nómada’ (cuen-tos), ‘El desterrado’, ‘El libro flotante’, ‘Kazbek’ (novelas), y ‘El síndrome de Falcón’ (ensayo). En Barcelona, ciudad donde reside, dirige el Laborato-rio de Escritura.

La escritura es mi

refugio”.

Page 4: Artes & Cultura 27 septiembre 2015

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

lidando la historia que realmente habla sobre el que-branto.

En medio de este quebranto, ¿con quién se identifica Ud.? ¿Jerónimo? Me han dicho eso varias veces, pero no tanto. En to-dos hay algo de Oscar Vela. Pensaba en Jerónimo como un tipo mayor, áspero, que no tiene comportamientos y actitudes como las mías, que es muy soberbio. Pero en varias cosas coincido con él. Cuando vuelve a La Floresta, que era un barrio maravilloso, se topa con edificios que destrozan las hermosas casas de antes, que desentonan con la esencia de lo que fue ese barrio; eso me choca, me fastidia. Está toda esa zona donde trabajo, el edificio donde laboro. En La Floresta, efec-tivamente, también estaba el bar La Sentencia, que sí existió y que jus-tamente quedaba donde mi mamá tenía su restaurante…

En otras palabras, el cambio de ese barrio, al igual que la vida de Fede-rico y de otros personajes, evocan la

decadencia, que es otro de los temas que aborda…

Sí, la decadencia está junto a los que-

brantos, al rom-pimiento de las vidas. Lo que le sucede a Se-

bastián es una cadena de quebrantos

hacia sus seres queridos, que termina repercutiendo

en las personas al pasar los años, algo que termina en la decadencia. Federico encarna la decadencia, y se desenvuel-ve en una sociedad decadente, pseudo-aristócrata que vive del apellido y cree en una falsa al-curnia. Mira que Federico, un tipo de clase media, cuando cae de la alta sociedad, ni siquiera llega al estrato al que pertenecía, pues cae mucho más abajo.

Tras esa caída, Federico se da cuenta que “Quito si-gue siendo igual de puta, pero menos hipócrita”. ¿Es

así? Porque tras leer el libro parecería que la hipocre-sía es un lujo que el poder puede darse…

La hipocresía siempre se sigue dando. Algo ha cam-biado en esta franciscana ciudad que en territoriali-dad es una metrópoli, pero en actitudes sigue siendo algo pueblerina. Todavía no dejamos el curuchupismo. Rocío encarna ese curuchupismo, de que te vean en la misa los domingos así hagas tonteras entre semana, todo por guardar las apariencias.

Hablando de Rocío, es un personaje que se odia, pero al que se termina compadeciendo. Más allá de que le pongan los cachos, es una víctima…

Rocío causa reacción. De hecho, quienes han leído la obra me hablan mucho de este personaje. Sí, la odias, pero comparto en que es una víctima gracias al mundo que le creó su padre. Ella vive una evolución intere-sante, da un giro. ¡Qué personaje tan de mierda! Pero, quizás, odiamos lo que somos. Quizás, nos representa en muchas cosas.

¿Representa el hecho de que siempre se busca aplacar la conciencia?Es que hablamos de un acto de supervivencia. Si no se logra defender los pecados que se cometen, viviríamos en un estado de locura tenaz. Solo vamos sublimando las culpas.

No se va a revelar quién, pero está pre-sente el suicidio. Cuando a uno le ha-cen añicos, ¿no queda más remedio que esta salida?Le di vueltas al tema. No me había planteado lo del suicidio de inicio. Lo que sucede es que a ese persona-je todo le va perjudicando. Además, siguiendo la psicología del personaje, era propenso a caer, a derrumbarse. Las situaciones lo van empujando. No se hace apología ni se castiga. Es algo que está allí, que aparece en la vida y que está presto al debate.

Otro tema que aborda, y que ya lo ha he-cho antes, es el tema de la homosexuali-dad, la cual se presenta con naturalidad. ¿Busca desde su propuesta que este tema no solo quede en el plano discursi-vo?La homosexualidad sigue siendo un tabú, y eso es imperdonable. Pongo un ejemplo quizás extremo, como lo es este viejo pervertido que corrompe menores, del que me baso un poco de un viejo abogado de Quito que tenía esas prácticas; pero también aparece el caso de Jerónimo. Mira, personal-mente, creo que se debe ver con na-turalidad y sin prejuicio a la homose-xualidad porque es un tema normal. Yo no doy ningún mensaje, pero si lo

hubiera, sería el que la homosexualidad debería ser tratada de manera normal. Ahí podríamos hablar de una sociedad evolucionada.

Para concluir, ¿está trabajando en una nueva obra?Sí, en una novela histórica, que me llegó por casuali-dad al igual que ‘Todo ese ayer’, pero que me llevará un buen tiempo en construir. Se trata de un personaje de la Revolución Cubana, que viajó junto a Fidel (Castro) en el Granma. Es un personaje que se desencantó y que a sus más de 90 años asegura que es el último revolu-cionario. Dice que Fidel y Raúl se vendieron y entrega-ron la patria a Rusia cuando se declararon comunistas. Es brillante ver su mirada de la Revolución. (DVD)

[email protected]

Ecuador, domingo 27 de septiembre de 20154 5I diálogo

Oscar Vela no cree en la inspiración. Él es de los que, metódicamente, trabaja casi todos los días (los fines de semana se en-trega por completo a la paternidad). Eso explica el que en los últimos cinco años entregara tres novelas de gran talla, las mismas que lo proyectan como uno de los máximos referentes de la narrativa ecua-toriana de la actualidad.

En su estudio, el cual está colmado de libros, trabaja por horas sin descanso. “Soy bien organizado. Si me propongo es-cribir, no me pongo a ‘huevear’ en el ‘Face’ ni nada. Escribo y punto”, comparte con una sonrisa franca.

También dice que cuando uno escribe “se expone completamente”. “En mis li-bros hay parte de mí, de mis lecturas, de mis espacios. De alguna manera es una forma de desnudarse y de entregarte para que te vean completo”.

Vela ya se desnudó antes con ‘Desnuda oscuridad’ (desnudó también la mirada del público); se quemó con ‘Yo soy el fue-go’ y esa flama prendió también el interés de los lectores. Ahora, publica ‘Todo ese ayer’ (Alfaguara), donde el pasado no deja de envolver al lector del presente.

Federico, su personaje central, se confiesa y al igual que Al Pacino en ‘El abogado del diablo’ dice que “la vanidad es su pecado favorito”. Después del éxito de sus novelas anteriores y con la publicación de ‘Todo ese ayer’, ¿Oscar Vela ya cayó en pecado?Todos caemos de todas formas, de alguna u otra manera. La vanidad es el gran pe-cado de la humanidad, del que nos encan-tamos tarde o temprano. Pero espero no cruzar la línea, hay fronteras y espero no caer. Solo trato de hacer el mejor trabajo que puedo y luego lo entrego a los lecto-res. Por supuesto, te gusta oír que la gente está satisfecha con tu libro y te disgustan las críticas, pero por ahora trato de no caer en pecado.

‘Todo ese ayer’ rompe con la frase de que ‘todo tiempo pasado fue mejor’…Esa frase me da iras. Yo no concibo esa po-

sibilidad. Si no es así, estamos aceptando por completo que este mundo es una mier-da, quizás lo sea, pero prefiero ser más op-timista con respecto a lo que nos depara el futuro o con lo que vivo. Esa frase no la digo nunca y me molesta. ‘Todo ese ayer’ surgió de un verso del poema ‘Límites’ de Borges, al igual que ‘Yo soy el fuego’. Siem-pre ocupo alguna de sus frases.

¿Por qué no empezó con la frase ‘Como de-cíamos ayer’?La frase que tiene su origen alrededor de Fray Luis de León. Te confieso que no utilicé a ‘Como decíamos ayer’ porque ya hay una novela escrita con ese nombre. Si bien es la frase con la que empieza la novela y es el verso con el que comienza la historia real en que me baso, preferí prescindir de ese título. La verdad, con el poema de Borges siento que ahí está el título ideal, que te envuelve, que quizás parecería desmesurado por la totalidad que encierra, pero estamos hablando de la totalidad de los personajes, solamente de ellos, de Federico, Rocío, Sebastián…

¿Hasta dónde se ficciona la realidad? ¿Cómo no exponer a los personajes cuando le han pedido que no se revele su identidad?Eso es un problema porque te están dan-do poder, y por el poder todos nos fascina-mos. El escritor tiene la potestad de deci-dir. Me encontraba terminando ‘Yo soy el fuego’ y un amigo me llegó con esta histo-ria. Se me puso la piel de gallina y le dije “esto da para novela”. “Por eso mismo te lo cuento, por si te sirve y puedes escribir algo”, me respondió. Eso sí, no quería que se revele su identidad. De ahí voy sacando ciertas escenas, las ficciono, las reinvento.

¿Su amigo leyó el texto?Por supuesto. Cuando lo terminé, le rega-lé el manuscrito. Él me ayudó muchísimo. Colaboró en la corrección con respecto a cuidar el lenguaje argentino, pues me ha-bía equivocado en las estructuras, en los términos. Fue una pieza clave junto a la correctora del libro para poder publicarlo.

La verdad es una historia tremenda, de gran impulso. Eso también se revela en el tiempo que le costó escribirla…Sí, el tiempo fue relativamente corto. Me refiero al de escritura. Después llegan lecturas y correcciones y hay que sumar el tiempo que pasa por la editorial para revisiones. Pero sí, es una historia im-pactante, que te empuja a que la cuentes enseguida.

El personaje de Rocío toma fuer-za desde el evento del 30-S (revuelta policial). Ahí aparece el mendigo Eric, un Cristo encar-nado. ¿Este personaje salvador, como metá-fora, marca un para-lelismo con quienes se muestran como salvado-res de la patria? Francamente, nunca lo pensé por allí. Lo del 30-S lo empleé por la nubosidad de la jornada, por lo que no queda nada claro. Lo tomé para anclar el tema del falsear información, del monta-je de videos, de las manipulacio-nes, del querer incriminar, que es lo que sucede entre el padre de Rocío, ella mismo, Federico, Fer-mín. En el 30-S flotan esas ideas, lo nebuloso, y el misterio conti-núa sobre los hechos. Lo del 30-S trato de relatar de la forma más objetiva posible, que se vea lo que pasó. Después, doy completa liber-tad a los personajes para que actúen. No es una novela política, pero como hay eventos políticos, cada uno tiene su opi-nión de acuerdo a sus circunstancias.

¿De paso también se empieza a enganchar con el militarismo, el poder de los uniforma-dos, que también se toca en la novela?Sí, está el militarismo, el abuso de poder, la dictadura en Argentina. Por supuesto, los eventos guardan distancias, pero lo empleo para robustecer, para ir conso-

AUTOR. En la sala de su casa, junto a su más reciente publicación.

‘Mi novela no es política, habla sobre el quebranto’

Algo ha cambiado en esta franciscana ciudad que en territorialidad es una metrópoli, pero en actitudes

sigue siendo algo pueblerina”.

PerfilOSCAR VELA

Escritor y abogado ecuatoriano (Quito, 1968). Ha publicado las novelas ‘El Toro de la Oración’, ‘La dimensión de las formas’, ‘Irene, las voces obscenas del desvarío’, ‘Desnuda oscuridad’ (Premio Joaquín Gallegos Lara) y ‘Yo soy el fuego’ (Premio Jorge Icaza). Ganó el Concurso Internacional de Cuentos El Albero (2006) y fue finalista del Concurso Internacional de Cuentos La Felguera, Asturias (2003).

Si no se logra defen-der los pecados que se cometen, viviría-

mos en un estado de locura tenaz”.

OSCAR VELA

Page 5: Artes & Cultura 27 septiembre 2015

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

lidando la historia que realmente habla sobre el que-branto.

En medio de este quebranto, ¿con quién se identifica Ud.? ¿Jerónimo? Me han dicho eso varias veces, pero no tanto. En to-dos hay algo de Oscar Vela. Pensaba en Jerónimo como un tipo mayor, áspero, que no tiene comportamientos y actitudes como las mías, que es muy soberbio. Pero en varias cosas coincido con él. Cuando vuelve a La Floresta, que era un barrio maravilloso, se topa con edificios que destrozan las hermosas casas de antes, que desentonan con la esencia de lo que fue ese barrio; eso me choca, me fastidia. Está toda esa zona donde trabajo, el edificio donde laboro. En La Floresta, efec-tivamente, también estaba el bar La Sentencia, que sí existió y que jus-tamente quedaba donde mi mamá tenía su restaurante…

En otras palabras, el cambio de ese barrio, al igual que la vida de Fede-rico y de otros personajes, evocan la

decadencia, que es otro de los temas que aborda…

Sí, la decadencia está junto a los que-

brantos, al rom-pimiento de las vidas. Lo que le sucede a Se-

bastián es una cadena de quebrantos

hacia sus seres queridos, que termina repercutiendo

en las personas al pasar los años, algo que termina en la decadencia. Federico encarna la decadencia, y se desenvuel-ve en una sociedad decadente, pseudo-aristócrata que vive del apellido y cree en una falsa al-curnia. Mira que Federico, un tipo de clase media, cuando cae de la alta sociedad, ni siquiera llega al estrato al que pertenecía, pues cae mucho más abajo.

Tras esa caída, Federico se da cuenta que “Quito si-gue siendo igual de puta, pero menos hipócrita”. ¿Es

así? Porque tras leer el libro parecería que la hipocre-sía es un lujo que el poder puede darse…

La hipocresía siempre se sigue dando. Algo ha cam-biado en esta franciscana ciudad que en territoriali-dad es una metrópoli, pero en actitudes sigue siendo algo pueblerina. Todavía no dejamos el curuchupismo. Rocío encarna ese curuchupismo, de que te vean en la misa los domingos así hagas tonteras entre semana, todo por guardar las apariencias.

Hablando de Rocío, es un personaje que se odia, pero al que se termina compadeciendo. Más allá de que le pongan los cachos, es una víctima…

Rocío causa reacción. De hecho, quienes han leído la obra me hablan mucho de este personaje. Sí, la odias, pero comparto en que es una víctima gracias al mundo que le creó su padre. Ella vive una evolución intere-sante, da un giro. ¡Qué personaje tan de mierda! Pero, quizás, odiamos lo que somos. Quizás, nos representa en muchas cosas.

¿Representa el hecho de que siempre se busca aplacar la conciencia?Es que hablamos de un acto de supervivencia. Si no se logra defender los pecados que se cometen, viviríamos en un estado de locura tenaz. Solo vamos sublimando las culpas.

No se va a revelar quién, pero está pre-sente el suicidio. Cuando a uno le ha-cen añicos, ¿no queda más remedio que esta salida?Le di vueltas al tema. No me había planteado lo del suicidio de inicio. Lo que sucede es que a ese persona-je todo le va perjudicando. Además, siguiendo la psicología del personaje, era propenso a caer, a derrumbarse. Las situaciones lo van empujando. No se hace apología ni se castiga. Es algo que está allí, que aparece en la vida y que está presto al debate.

Otro tema que aborda, y que ya lo ha he-cho antes, es el tema de la homosexuali-dad, la cual se presenta con naturalidad. ¿Busca desde su propuesta que este tema no solo quede en el plano discursi-vo?La homosexualidad sigue siendo un tabú, y eso es imperdonable. Pongo un ejemplo quizás extremo, como lo es este viejo pervertido que corrompe menores, del que me baso un poco de un viejo abogado de Quito que tenía esas prácticas; pero también aparece el caso de Jerónimo. Mira, personal-mente, creo que se debe ver con na-turalidad y sin prejuicio a la homose-xualidad porque es un tema normal. Yo no doy ningún mensaje, pero si lo

hubiera, sería el que la homosexualidad debería ser tratada de manera normal. Ahí podríamos hablar de una sociedad evolucionada.

Para concluir, ¿está trabajando en una nueva obra?Sí, en una novela histórica, que me llegó por casuali-dad al igual que ‘Todo ese ayer’, pero que me llevará un buen tiempo en construir. Se trata de un personaje de la Revolución Cubana, que viajó junto a Fidel (Castro) en el Granma. Es un personaje que se desencantó y que a sus más de 90 años asegura que es el último revolu-cionario. Dice que Fidel y Raúl se vendieron y entrega-ron la patria a Rusia cuando se declararon comunistas. Es brillante ver su mirada de la Revolución. (DVD)

[email protected]

Ecuador, domingo 27 de septiembre de 20154 5I diálogo

Oscar Vela no cree en la inspiración. Él es de los que, metódicamente, trabaja casi todos los días (los fines de semana se en-trega por completo a la paternidad). Eso explica el que en los últimos cinco años entregara tres novelas de gran talla, las mismas que lo proyectan como uno de los máximos referentes de la narrativa ecua-toriana de la actualidad.

En su estudio, el cual está colmado de libros, trabaja por horas sin descanso. “Soy bien organizado. Si me propongo es-cribir, no me pongo a ‘huevear’ en el ‘Face’ ni nada. Escribo y punto”, comparte con una sonrisa franca.

También dice que cuando uno escribe “se expone completamente”. “En mis li-bros hay parte de mí, de mis lecturas, de mis espacios. De alguna manera es una forma de desnudarse y de entregarte para que te vean completo”.

Vela ya se desnudó antes con ‘Desnuda oscuridad’ (desnudó también la mirada del público); se quemó con ‘Yo soy el fue-go’ y esa flama prendió también el interés de los lectores. Ahora, publica ‘Todo ese ayer’ (Alfaguara), donde el pasado no deja de envolver al lector del presente.

Federico, su personaje central, se confiesa y al igual que Al Pacino en ‘El abogado del diablo’ dice que “la vanidad es su pecado favorito”. Después del éxito de sus novelas anteriores y con la publicación de ‘Todo ese ayer’, ¿Oscar Vela ya cayó en pecado?Todos caemos de todas formas, de alguna u otra manera. La vanidad es el gran pe-cado de la humanidad, del que nos encan-tamos tarde o temprano. Pero espero no cruzar la línea, hay fronteras y espero no caer. Solo trato de hacer el mejor trabajo que puedo y luego lo entrego a los lecto-res. Por supuesto, te gusta oír que la gente está satisfecha con tu libro y te disgustan las críticas, pero por ahora trato de no caer en pecado.

‘Todo ese ayer’ rompe con la frase de que ‘todo tiempo pasado fue mejor’…Esa frase me da iras. Yo no concibo esa po-

sibilidad. Si no es así, estamos aceptando por completo que este mundo es una mier-da, quizás lo sea, pero prefiero ser más op-timista con respecto a lo que nos depara el futuro o con lo que vivo. Esa frase no la digo nunca y me molesta. ‘Todo ese ayer’ surgió de un verso del poema ‘Límites’ de Borges, al igual que ‘Yo soy el fuego’. Siem-pre ocupo alguna de sus frases.

¿Por qué no empezó con la frase ‘Como de-cíamos ayer’?La frase que tiene su origen alrededor de Fray Luis de León. Te confieso que no utilicé a ‘Como decíamos ayer’ porque ya hay una novela escrita con ese nombre. Si bien es la frase con la que empieza la novela y es el verso con el que comienza la historia real en que me baso, preferí prescindir de ese título. La verdad, con el poema de Borges siento que ahí está el título ideal, que te envuelve, que quizás parecería desmesurado por la totalidad que encierra, pero estamos hablando de la totalidad de los personajes, solamente de ellos, de Federico, Rocío, Sebastián…

¿Hasta dónde se ficciona la realidad? ¿Cómo no exponer a los personajes cuando le han pedido que no se revele su identidad?Eso es un problema porque te están dan-do poder, y por el poder todos nos fascina-mos. El escritor tiene la potestad de deci-dir. Me encontraba terminando ‘Yo soy el fuego’ y un amigo me llegó con esta histo-ria. Se me puso la piel de gallina y le dije “esto da para novela”. “Por eso mismo te lo cuento, por si te sirve y puedes escribir algo”, me respondió. Eso sí, no quería que se revele su identidad. De ahí voy sacando ciertas escenas, las ficciono, las reinvento.

¿Su amigo leyó el texto?Por supuesto. Cuando lo terminé, le rega-lé el manuscrito. Él me ayudó muchísimo. Colaboró en la corrección con respecto a cuidar el lenguaje argentino, pues me ha-bía equivocado en las estructuras, en los términos. Fue una pieza clave junto a la correctora del libro para poder publicarlo.

La verdad es una historia tremenda, de gran impulso. Eso también se revela en el tiempo que le costó escribirla…Sí, el tiempo fue relativamente corto. Me refiero al de escritura. Después llegan lecturas y correcciones y hay que sumar el tiempo que pasa por la editorial para revisiones. Pero sí, es una historia im-pactante, que te empuja a que la cuentes enseguida.

El personaje de Rocío toma fuer-za desde el evento del 30-S (revuelta policial). Ahí aparece el mendigo Eric, un Cristo encar-nado. ¿Este personaje salvador, como metá-fora, marca un para-lelismo con quienes se muestran como salvado-res de la patria? Francamente, nunca lo pensé por allí. Lo del 30-S lo empleé por la nubosidad de la jornada, por lo que no queda nada claro. Lo tomé para anclar el tema del falsear información, del monta-je de videos, de las manipulacio-nes, del querer incriminar, que es lo que sucede entre el padre de Rocío, ella mismo, Federico, Fer-mín. En el 30-S flotan esas ideas, lo nebuloso, y el misterio conti-núa sobre los hechos. Lo del 30-S trato de relatar de la forma más objetiva posible, que se vea lo que pasó. Después, doy completa liber-tad a los personajes para que actúen. No es una novela política, pero como hay eventos políticos, cada uno tiene su opi-nión de acuerdo a sus circunstancias.

¿De paso también se empieza a enganchar con el militarismo, el poder de los uniforma-dos, que también se toca en la novela?Sí, está el militarismo, el abuso de poder, la dictadura en Argentina. Por supuesto, los eventos guardan distancias, pero lo empleo para robustecer, para ir conso-

AUTOR. En la sala de su casa, junto a su más reciente publicación.

‘Mi novela no es política, habla sobre el quebranto’

Algo ha cambiado en esta franciscana ciudad que en territorialidad es una metrópoli, pero en actitudes

sigue siendo algo pueblerina”.

PerfilOSCAR VELA

Escritor y abogado ecuatoriano (Quito, 1968). Ha publicado las novelas ‘El Toro de la Oración’, ‘La dimensión de las formas’, ‘Irene, las voces obscenas del desvarío’, ‘Desnuda oscuridad’ (Premio Joaquín Gallegos Lara) y ‘Yo soy el fuego’ (Premio Jorge Icaza). Ganó el Concurso Internacional de Cuentos El Albero (2006) y fue finalista del Concurso Internacional de Cuentos La Felguera, Asturias (2003).

Si no se logra defen-der los pecados que se cometen, viviría-

mos en un estado de locura tenaz”.

OSCAR VELA

Page 6: Artes & Cultura 27 septiembre 2015

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

“Nadie lanza un libro al agua. Se lo hecha al fuego, se lo aprisiona en una caja, se lo entierra de pie en una biblioteca. Pero na-die lanza jamás un libro al agua. Nadie. Nunca. Jamás. Ella mira desde la orilla del lago. Mira y parece decir: nadie lanza un libro al agua. Sólo que ella, la niña que juega en la orilla del lago con un cubo de plástico rojo, no ha pronunciado ni una palabra. Alarga su brazo, señala hacia el libro flotante, agita la mano y frunce las cejas como si le doliera, avisándome que lo rescate”.

Leonardo Valencia arranca así su no-vela ‘El libro flotante de Caytran Dölphin’, pero este inicio, gran inicio, no estaba pla-neado de esta manera. Gracias a un halo lúdico, el escritor guayaquileño dio con estas profundas líneas: Se encuentra pu-liendo la obra. Sabe que iniciará con una escena donde un texto, lanzado al agua, debe ser rescatado. Su tipeo se ve inte-rrumpido cuando una pelota roja irrum-pe su concentración. La esfera es lanzada por su pequeña sobrina, quien le invita a jugar. Así, este acto se transmuta y se transforma.

Y como todo está sujeto al cambio, el título de la novela también lo ha hecho. Se ha simplificado. En una nueva edición, presentada por Debolsillo (Penguin Ran-dom House), Valencia ha optado por lla-marla ‘El libro flotante’. Nada más.

“Fue una cosa inesperada. El libro tie-ne un nombre complejo. Los lectores y mis amigos le quitaban el ‘Caytran Döl-phin’. Desde que apareció, todos lo lla-

maban tan solo como ‘El libro flotante’.Consulté con los editores y estuvieron de acuerdo en que el título se acortara”, com-parte el autor.

¿Qué dice Caytran de que su nombre ya no esté en la portada? “El problema con Caytran es que no sabemos dónde está, se fugó y desapareció por miles de historias”, comenta Valencia, mientras una risa picaresca aparece tras su comen-tario.

A flote“La literatura es algo flotante. La literatu-ra no solo está metida en las bibliotecas, es lo que todos comentamos y leemos, es el cúmulo de opiniones, lo que se reco-mienda. La literatura es una especie de atmósfera por donde los libros via-jan, sean estos del presen-te o del pasado”, opina el también autor de ‘La luna nómada’, al momento de cuestionarle acerca de que una reedición permite que un libro continúe flotando.

Un texto también puede naufragar o tocar puertos en ese océano llamado In-ternet. ‘El libro flotante’ puso un faro y construyó un muelle desde esta platafor-ma a la par de que se publicara en papel (2006). Eugenio Tisselli creó www.libro-flotante.net, un espacio que busca estar vigente dentro de los procesos de cambio, pues “la escritura siempre se ha ligado a la tecnología”, tal como lo afirma.

“Siempre me ha interesado lo que su-cede entre la literatura y lo tecnológico. Por otra parte, siempre me interesa la reacción de los lectores, y en este libro es-pecialmente porque se construye desde la interpretación”, dice el escritor.

“En Internet, lo que se puede hacer es el mismo procedimiento del personaje: interpretar los fragmentos, añadir sus cometarios, se puede crear y distorsio-nar. La dinámica que se propone no es un mero traslado: se trata de un trabajo informático para dar rienda suelta a la imaginación”, explica.

MovimientoValencia, quien asegura que nunca arro-

jaría un libro al agua (ni lo quemaría o rompería), deja en claro sus preocu-paciones sobre el arraigo y desarraigo, sobre la mo-vilidad en general, temas que se transforman en una constante de este es-

critor nómada. “Últimamente, y en estos días espe-

cialmente, hablamos de los refugiados, asilados, de los migrantes, de los despla-zamientos. Hay una condición en nuestra época de una extrema movilidad, radicali-zada en el buen y mal sentido. Vivimos en un mundo donde los esquemas de los si-tios fijos se han problematizado mucho”, argumenta.

Comparte que en medio del “desplaza-miento” su “asidero es la escritura”. “La

escritura es mi refugio. La literatura bus-ca captar esas cosas evanescentes y que, de alguna manera, dan un pequeño orden a ese caos que es la realidad, a ese deseo de estabilidad en un mundo tan cambiante. Ante las dinámicas de cambio, la palabra es un salvavidas en un mar muy agitado. A ese salvavidas nos agarramos los escri-tores y los lectores”.

Ese ‘salvarse’ es el que le permite con-tinuar apostando por esas obras de “volu-men y esfericidad”, esas narraciones que gracias a sus distintos lados “permiten que la obra se lea desde distintos puntos de vista”.

“Siempre apostaré por la interpreta-ción, como lo hago en ‘El libro flotante’. La interpretación es primordial porque algunos lados no me son visibles, pero por todo el proceso de la masa narrativa, pue-den aparecer nuevas lecturas”, concluye. (DVD)

[email protected]

Ecuador, domingo 27 de septiembre de 2015

Ecuador, domingo 27 de septiembre de 2015 protagonista 36 biblioteca

Composición electrónica:Pantone Impresiones

Edita: Editorial Minotauro S.A.Correspondencia:

Planta Diario La HoraAv. Galo Plaza N62-08 y Nazareth

Fax: 247-6085 casilla 17-17-243 CCIcul tu ra @la ho ra .co m.ec

Quito, Ecuador

Director (e): Francisco Vivanco RiofríoEditor (e): Damián De la Torre AyoraDiseño: Luis Alberto Aspiazu

VITRINA DE LIBROS

HAIKUS ELEMENTALESRamiro Caiza

Nacido en Machachi, pero ciudadano del mundo, el autor se apega a la tradi-ción japonesa y comparte 273 haikus, donde el amor, el erotismo, la pasión, la melancolía, entre otras temáticas, son trazadas en versos cortos. Sobre la obra, José Sánchez del Viejo dice: “La saga continúa con este conjunto de textos agrupados bajo el volumen de ‘Haikus elementales’, elemental propuesta que le sigue a ‘Haikus emergentes’, esta cantera que empieza a ser cultuvada por la sensibilidad de quien conoce la tierra”. CCE

A FLOR DE PIELJavier Moro

El autor español no esconde su afición por desempolvar personajes históricos sepultados en el olvido. Esta vez, da un destello de la vida de Isabel Zendal, Francisco Xavier Balmis y Josep Salvany, quienes junto a 22 niños construyen la aventura de mayor proeza humanitaria de la historia de la humanidad. Moro no solo entretiene con la campaña por combatir a la viruela, sino que con su narrativa combate el aburrimiento y trae un libro que se catapulta como una vacuna para entender una época. SEIX BARRAL

LOS MÁS VENDIDOS

ARGENTINA

° Grey, E.L. James (Grijalbo).° El amante japonés, Isabel Allende (Sudamericana). ° La chica del tren, Paula Hawkins (Planeta).° Gaturro 24, Nik (De la Flor).FUENTE: TEMATIKA.COM

° La chica del tren, Paula Hawkins (Planeta).° Lo que no te mata te hace más fuerte, David Lagercrantz (Planeta).° Maravillosamente imperfecto escandalo-samente feliz, Walter Riso (Planeta).° El amante japonés, Isabel Allende (Penguin Random).FUENTE: LIBRERÍA NACIONAL

COLOMBIA

ESPAÑA

MÉXICO

° Virtual Hero. El Rubius, Ruben Doblas (Temas de Hoy).° Casi sin querer, Defreds (Frida).° Lo que no te mata te hace más fuerte, David Lagercrantz (Destino).° En un mundo de grises, Sergio Carrión (Frida).

FUENTE: CASA DEL LIBRO

° Aristóteles y Dante descubren secretos del universo, Benjamín Alire Sáenz (Planeta).° Lo que no te mata te hace más fuerte, David Lagercrantz (Destino).° 1984, George Orwell (Debolsillo).° Hombres sin mujeres, Haruki Murakami (Tusquets). FUENTE: LIBRERÍA GANDHI

° Pepe, el lobo marino, Andrea Holguín (Libri Mundi-Enrique Grosse Luemern).° The Andes as the condor flies, Tui de Roy (Libri Mundi-Enrique Grosse Luemern).° Galapagos: Islands born of fire, Tui de Roy (Libri Mundi-Enrique Grosse Luemern).° Pie de Bruja, Carolina Andújar (Montena).FUENTE LIBRI MUNDI

° Las ventajas de ser invisible, Stephen Chbosky (Alfaguara).° Si decido quedarme, Gayle Forman (Salamandra).° La fiesta de la insignificancia, Milan Kundera (Tusquets).° Hielo Negro, Becca Fitzpatrick (Blok).

FUENTE MR. BOOKS

ECUADOR

Nota: Listado de libros de ficción de EFE, excep-to Ecuador.

Datos del autorANTONIO TELLO

° Escritor argentino nacido en 1945. Tras iniciar estudios de Ciencias Económicas, decidió abando-nar estos y dedicarse a la literatura. A los 18 años se desempeñaba como periodista e intervino en la fundación de tres revistas, una de las cuales le costo el exilio hasta 1975. Desde 1976, y tras una breve estancia en París, reside en Barcelona, donde se ha dedicado fundamentalmente a la actividad editorial y a la escritura, sobre todo de literatura infantil. Entre su obra cabe destacar los libros de cuentos ‘El día en que el pueblo reventó de angustia’ y ‘El Quijote a través del Espejo’, así como la novela ‘De cómo llegó la nieve’.

OSWALDO PAZ Y MIÑO J. • Palabras: “Unos trazos, manchas sobre el papel, tenues patas de mosca. Unos ojos reúnen esas letras, las ordenan y nacen las palabras”. El misterio de la palabra es ser lo que se designa. Una palabra es representación imprescindible. No contingente de cada idioma, sino necesaria. Las palabras tie-nen que estar cargadas por quienes las pronuncien. Si para decir te amo, hay que decir primero yo; para hablar con pleni-tud, las palabras han de definir a aquel que las emplea y contener su experiencia del mundo. Por medio de ellas nos mani-festamos nosotros. De no ser así, lo único que haremos será llenar en apariencia el vacío con sonidos vacíos: voces y nada más. La palabra, que es la primera semi-lla del razonamiento, de la religión, el arte y la ciencia, es la causa inicial de todos los desastres que el hombre -ese mono endio-sado- podría evocar. O que quizá haya, en otra ocasión, hace millones de años, pro-vocado”. Así las define Antonio Gala.

La palabra nos humaniza, nos habita, nos identifica. La palabra, dice Valère No-varina: “Recuerda, anuncia, y transmite; nos atraviesa pasa por nosotros sin que lo sepamos”.

Según la RAE, la palabra, del lat. Para-bla, es el “segmento del discurso, facultad de hablar. Aptitud oratoria. Empeño que hace alguien de su fe y probidad en testi-monio de lo que afirma. Promesa u oferta. Dicho, razón, sentencia, parábola. Metal de la voz”. La forma de los sacramentos a distinción de su materia. Si buenas, expresiones o promesas corteses, dichas con intención de agradar y convencer. No menciona el diccionario de la Real Acade-mia Española cuando la palabra es mala,

sí que apunta lo que es palabra grue-sa (dicho inconveniente u obsceno) y la palabra picante (la que hiere o mortifica a la persona a quien se dice).

Somos palabristas. El verbo nos es tan indispensable como el alma para vivir. La palabra nos permite nombrar y ser nombrados. Pode-mos con ella llamar a las cosas por su nombre.

“Pero con el correr del tiempo, el poder del nombre propicio, la co-dicia de algunos y el temor de otros obligando al común a crear una len-gua secreta, activa, pícara y festiva para referir aquello que no debía ser nombra-do. Uno de esos aquellos conflictivos en las sociedades occidentales y cristianas ha sido el sexo, especialmente en la comu-nidad española y su radio de influencia” (pág. 13).

Palabra de honor que esta semana propongo un libro indispensable, un tomo maravilloso de Antonio Tello: ‘Gran diccionario erótico: De voces de España e Hispanoamérica’. Allí, de la ‘A’ a la ‘Z’, en sus trescientas ochenta y ocho páginas, la libertad de expresión es concretamente un “orgasmo léxico”.

“Loba: Mujer atractiva y provocadora. Si bien, para los antiguos romanos era el equivalente a ramera, en castellano la voz ha perdido su contenido condenatorio y señala a la mujer bella y, en cierto modo, sexualmente depredadora” (pág. 227).

Publicado por Ediciones Temas de Hoy, se exponen palabras relacionadas con la sexualidad humana como: coño, dedear, estocada, pitalla, furcia, panocha, chongo, cipote, maridear, moza, nabo,

Palabras al desnudo

orto, ósculo, perigallo, perno, pervertido o quiquiricuando. Todas estas definidas al desnudo, descriptas, que es lo que cabe, con naturalidad, sin maquillaje, con toda la tonalidad erótico-cultural de la diver-sidad humana. Todo un placer leerlo. Un libro que cabe tener cerca para descifrar tentaciones.

[email protected]

O I

I

F

‘La palabra es un salvavidas’

LEONARDO VALENCIA

ESCRITOR. Junto a su obra flotante, en la Universidad Andina Simón Bolívar, donde labora actualmente.

PERFILLeonardo Valencia

°Escritor ecuatoriano (Guayaquil, 1969). Posee un doctorado en Teoría de la Literatura por la Univer-sidad autónoma de Barcelona y una maestría en Edición por Publish/Oxford Brooke University. Su obra abarca al cuento, la novela y el ensayo. Entre sus publicaciones están: ‘La luna nómada’ (cuen-tos), ‘El desterrado’, ‘El libro flotante’, ‘Kazbek’ (novelas), y ‘El síndrome de Falcón’ (ensayo). En Barcelona, ciudad donde reside, dirige el Laborato-rio de Escritura.

La escritura es mi

refugio”.

Page 7: Artes & Cultura 27 septiembre 2015

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

2 Ecuador, domingo 27 de septiembre de 2015

Ecuador, domingo 27 de septiembre de 2015 7el librero bambalinasO O

ÉDGAR FREIRE RUBIO • Ángel F. Rojas era un cliente asiduo de la desaparecida Librería CIMA. Era uno de los tantos escritores, periodistas, intelectuales e historiadores que aprovechaban sus viajes a la capital para ponerse al tanto de la producción bibliográfica nacional y extranjera. Adu-cían, en ese entonces, que Guayaquil no llenaba sus necesidades culturales (no sé si hoy esa realidad habrá mudado). En su columna periodística ‘Cartas de Gua-yaquil’ (El Comercio, 7-XII-88) hacía un homenaje a Luis A. Carrera y rememora-ba sitios de su Guayaquil y sus libreros y librerías. No faltan las menciones a Pedro Janer, Janer e hijos, y finalmente a V. M. Janer (se refiere al periplo hereditario de la Librería Janer’, supongo). Cuando jue-ga con la memoria de sus caminatas por Quito, evoca a Arsenio Briz Sánchez, a Sacoto Arias (otro escritor Librero, hoy olvidado), a Jorge Icaza, Pedro J. Vera y Enrique Berrezueta y sus aventuras en el arte de vender libros. Hace 27 años, el amigo novelista ya preveía lo que aconte-cería con la vida de estos negocios cultu-rales (‘Presente y futuro de las librerías’ se titula su columna). Analiza los precios de los libros, de la poco o casi nula ayuda bancaria a estos emprendimientos y, des-de luego, la carencia de lectores (los llama ‘marginales’). Sugiere con ironía que lo mejor sería que los dueños de estas libre-rías las vendan y coloquen ese dinero en pólizas de acumulación o en bonos de es-tabilización. Y con pena pronostica que la cita del poeta clásico, como ideal de vida: “Un rincón, un amigo y un libro…” sería difícil de cumplir.

El maestro amigo sigue siendo pro-feta. Aunque mi amiga Librera, Mónica Varea (El Universo 10-07-2015) expresa textualmente que “faltan algunas pero

tenemos suficientes Librerías, para todos los gustos…”. Mónica señala las librerías que perviven. Lamenta la desaparición de algunas emblemáticas (dicen que Li-bri Mundi no cambiará de lugar) y de otras que aparecieron y se esfumaron en un santiamén. Se le escapa la vigencia de otras empresas libreras como Autores Ecuatorianos, Studium, Progreso, Tecni-libro, Club de Lectores (antes Círculo de Lectores), que vivieron decenas de años de existencia y fueron negocios innovado-res, como es vender libros puerta a puerta y “a plazos”. Entre sus “chismes libreros” no lamenta la carencia de libreros ni la poca iniciativa de la Cámara del Libro y sus núcleos (¿existen toda-vía?) para preparar este limitado recurso humano. No sacamos nada con inaugurar nuevos centros cul-turales y librerías si el Librero (con mayúscula) brilla por su ausencia (salvo poquísimas excepciones).

Desde mi “atalaya” expreso que “no hay suficientes librerías en Quito”, ni sumando las de “viejo”, que no tienen nada que ver con las que conocí en los años de mi forma-ción. ¿Qué empresa se atreverá a poner una buena y completa librería en el Centro Histórico de la capital y con libros enteramente ecuatorianos? No omito las valiosas excepciones, pero las que conocí cumplían una función social y cultural: atesoraban nuestras bibliografías nacio-nales y los precios eran asequibles.

Cuánto me alegra que el Fondo de Cul-tura de México tenga su casa propia en Quito. ¡Tantos recuerdos de lo que en los años 70’ u 80’ se vendía de esta prestigio-sa Editorial! Que sea suficiente nombrar tres colecciones: Popular, Breviarios y Tierra firme. ‘Pedro Páramo’, de Rulfo,

se vendía como ‘pan caliente’, o ‘Los de abajo’ de Mariano Azuela. Lo que lamen-to es que su horario de atención sea tan “burocrático”. Qué suerte conseguir un comodato. ¿Qué tal si ese mecanismo se aplicara a nuestras Librerías o prestigio-sas Editoriales? ¿Y para cuándo harán lo mismo con Siglo XXI y Ediciones Era de México, por decir lo menos? En fin.

LecturasHe leído y releído un librillo sabroso, su-gestivo y provocador: ‘¿Por qué tener una librería? Los cinco primeros años de Tols-toi Librería’, de Karina Sánchez. Esta jo-

ven Librera rompió esquemas y en su casa procreó su venta de libros a pedido. Goza del cariño y la admi-ración de un sinnúmero de devotos lectores. Tolstoi no es una Librería independiente, es alternativa. Se salió por la tangente. No quiso ven-der lo mismo y lo mismo. Salió de la uniformidad. El buen lector no solo consume “el más vendido”. Hay otros “alimentos terrenales” que no se hallan en el común de nuestras perezosas Librerías. Tolstoi vivirá largo. ¡Qué rico es leer el primer ca-

pítulo de lo que será una Memoria de una atrevida Librera. ¡Congratulaciones!

Solo voy a señalar 7 de los 16 folletos (son siete los que he leído) que me ha en-viado el profesor Jorge Villarroel Idrovo desde Ibarra: ‘El ecocidio capitalista’, ‘Fútbol y antivalores’, ‘Loas al papa Fran-cisco’, ‘El Vaticano Verde’, ‘Ideología de los libros de autoayuda’, ‘Lectura y com-putadoras’ y ‘Felicidad por decreto’. Mi amigo ya desaparecido, Reinaldo Miño, cuando leía este tipo de folletos decía que eran “botafuegos”. No queda títere con ca-beza y con sólidos argumentos. El autor

no vende humo. Es rompedor con el pen-samiento único que nos quieren imponer. Es su verdad (hoy que este gobierno habla de la palabra ‘verdad’ como si fuera mer-cancía) y hay que leerla y respetarla. La pregunta de siempre: ¿en qué Librería ha-llar estos libritos? (les doy su correo elec-trónico: [email protected]). Ofrece regalarlos. El maestro vive de lo que escri-be. ¡Gracias, buen amigo!

Ya que hablo de folletos, menciono uno más: ‘Tiempo de coplas’, del cayambeño Luis Guzmán. Sus coplas tienen buen sa-bor a bizcochos y queso de hoja. Él mismo paga la edición de sus libros. Amor a la ca-miseta y a su pueblo. ¡Congratulaciones!

Antes de mi “partida” llegó a tiem-po Gestión No. 254 (agosto-septiembre 2015). Me informé sobre la gran acelera-ción en la actividad humana que se inició en 1950. América Latina en Movimiento No. 505: ‘Francisco y los movimientos po-pulares’. Tierra, techo y trabajo es su tema central. Y recibí también una entrañable carta de la amiga historiadora Raquel Rodas. Ya la comentaré en extenso. Es gratificante saber que mientras muchas “amigas” se han ido otras permanecen in-variables en sus afectos. ¡Qué bien! Que-do en deuda con muchos libros.

A la distancia me he enterado de quié-nes han merecido el premio Eugenio Es-pejo. Seguiré lamentando la omisión de H. Rodríguez Castelo, Alejandro Moreano, Iván Carvajal, Alfredo Costales. ¡Cosas del poder! Eso sí: celebro los 33 años de vida del Diario La Hora a cuya casa Nico-lás Kingman me permitió ingresar hace cerca de 20 años. ¡Felicidades!

Pensamiento del mes: “Hay que tener cuidado al elegir a los enemigos, porque uno termina pareciéndose a ellos” (J. L. Borges). Amén

¿Existen suficientes librerías en Quito?

El Librero recibe sus publicacio-nes en: Almacén Bolmar, calle Guayaquil N2-49 y Sucre, con atención a Martha Freire Rubio. También puede dirigirse a la casilla 17012561.

TOME NOTA

RICARDO SEGREDA • Al igual que Woody Allen, el cineasta Noah Baumbach siem-pre se ha inclinado a lo pretencioso. Esto, al exhibir sus credenciales intelectuales. Así, en su más reciente película, ‘Mientras somos jóvenes’, cita el diálogo de la obra ‘El maestro constructor’, de Henrik Ibsen. Las palabras se refieren, específicamente, al oportunista arquitecto-protagonista de mediana edad, Solness, y su paranoia con respecto a jóvenes.

‘Mientras somos jóvenes’, sin embargo, es mucho más cercana al Hollywood an-tiguo que al trabajo de Ibsen. Sobre todo, hay un guiño al clásico ‘Eva al desnudo’, de Joseph L. Mankiewicz, con el que tiene una similitud en su narrativa y tema.

En la obra clásica de Mankiewicz, Bet-te Davis tiene el papel de Margo Chan-ning, una veterana y muy admirada ac-triz. Pese a esto, como ya es una mujer de mediana edad, los papeles principales son más difíciles de conseguir. En este momento vulnerable en su vida Margo conoce a una joven admiradora, Eva Ha-rrington, que apela a la vanidad de Mar-go, quien la adopta, empleándola como su asistente personal.

Pero Margo no se da cuenta de que Eva tiene una agenda, así como una historia personal muy diferente a la que ella infor-mó cuando se conocieron. Al final de la película, Eva anexa la carrera de Margo y asume su papel en una obra de Broadway.

Aquí, por lo tanto, los papeles de Mar-go Channing y Eva Harrington son asu-midos por los actores Ben Stiller y Adam Driver, el primero como veterano director

de documentales, Josh Schrebnick, que desperdició su potencial mientras que la-boró en un proyecto que ha consumado los últimos diez años de su vida. Su carre-ra como profesor universitario ha suplan-tado mucho de lo que Josh se imaginó que iba ser su vocación.

La vida personal de Josh, por desgra-cia, ofrece poco como compensación. Mientras que sus amigos están avanzan-do con sus metas de tener hijos, la esposa de Josh, Cornelia, ha sufrido una serie de abortos involuntarios. Al mismo tiempo, Cornelia es la hija de un famoso y admi-rado director de documentales, Charles Breitbart, y esto solo sirve como humi-llación para Josh porque nunca igualó el éxito de su suegro.

Así que, como Margo, Josh es vulnera-ble a la adulación. Cuando se encuentra

con Adam Driver, un ambicioso joven ci-neasta, Jamie Massey, Josh es demasiado inclinado a ser el mentor de Jamie, espe-cialmente después de que Jamie expresa su admiración por las primeras obras de Josh, que establecieron su reputación.

En poco tiempo, Jamie persuade a Josh que le ayude en un documental que tiene la posibilidad de hacerle famoso. Al inicio, Josh responde con entusiasmo, pero al fin se da cuenta de que, al igual a Eva en ‘Eva al desnudo’, Jamie, con mo-tivos mercenarios, es capaz de distorsio-nar la verdad y aprovecharse de otros.

Noah Baumbach nació en Nueva York y es el hijo de la reconocida crítica de cine, Georgia Brown, y uno puede presumir que tiene más conocimiento acerca de lo que sucede en la industria cinematográ-fica de esta ciudad que en su audiencia. Aun así, la juicios morales de Baumbach en esta película son dudosos. Como dijo el gran crítico Andrew Sarris, a pesar de todas sus virtudes, ‘Eva al desnudo’ tuvo un defecto en su narrativa en que nunca abordó en cuanto que Margo hizo en su juventud para hacerse famosa.

En este sentido, ‘Mientras somos jóve-nes’ no es muy creíble porque ni siquiera insinúa que Josh, cuando era un ambicio-so y joven documentalista, tuvo sus pro-pios motivos mercenarios al casarse con la hija de un muy exitoso cineasta. Esto, desafortunadamente, da a la película un desagradable olor de deshonestidad ma-nipuladora que da la falta de moralidad de Jamie el olor de una rosa en comparación.

[email protected]

RECOMENDADOS

‘Marcianos al ataque!’ (1996) es una divertida comedia de ciencia ficción, diri-gida por Tim Burton, quien expone toda su creatividad en esta parodia de los filmes de serie B. Además de su ritmo hilarante, cuenta con una constelación de estrellas en el elenco: Jack Nicholson, Glenn Close, Pierce Brosnan, Annette Bening, Danny DeVito, Sarah Jessica Parker, Martin Short, Natalie Portman, Michael J. Fox, Jack Black, Christina Applegate, entre otros.La trama es sencilla y el título lo dice todo. Un gran platillo volador y una nutrida flotas de marcianos atacan la Tierra. Controlando el pentágono y sometiendo al humano, un abanico de personajes librarán la batalla por salvar al planeta. Todo esto, al compás de la músuica de Tom Jones.El filme se transmite hoy por TCM (canal de cable), a las 16:30.

PLANETARIAMENTE DIVERTIDA

Venía y cancelaba. Todo estaba en ascuas. Sus fanáticos a la expectativa de que si Ecuador entra en la agenda de su gira o no.Se trata del músico inglés Morrissey, quien saltara a la fama como vocalista de The Smiths y que tras la separación se consolidara como solista.El artista se prepara para arribar al Ecuador este 7 de noviembre en el Teatro de la Casa de la Cultura Ecuatoriana, en Quito. Ante la espera, se puede escuchar su primer disco en solitario, ‘Viva Hate’, álbum que lo lanzara al estrellato.

[email protected]

MORRISSEY A LA VISTA

Arte y ambiciónPAÍS: EE.UU.AÑO: 2014DIRECTOR Y GUIONISTA: Noah BaumbachREPARTO: Ben Stiller, Naomi Watts, Adam Driver y Charles GrodinTIEMPO: 97 minutos CALIFICACIÓN: ****

‘Mientras somos jóvenes’

‘MIENTRAS SOMOS JÓVENES’

Page 8: Artes & Cultura 27 septiembre 2015

www.lahora.com.ec

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

CYAN MAGENTA YELLOW BLACK

Ecuador, domingo 27 de septiembre de 20158

Ecuador, domingo 27 de septiembre de 2015

3

Cine. Baumbach, juventud y ambición.

>> 7

Diálogo. Oscar Vela trae ‘Todo ese ayer’.

>> 4-5

Nº 934

FOTO

: GA

REL

BEN

ALC

ÁZA

R

publicidad

Valencia, a floteEl escritor ecuatoriano presenta una nueva edición de ‘El libro flotante’.

P