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GuerradeVietnam,1963-1970.SkipSandsesunamericanoingenuoypatriotaconvencidodesupapelenladetencióndelavancedelcomunismoenFilipinas.Traselasesinatodeunsacerdoteacusadodepasararmasa loscomunistas,comienzaasospecharque laguerraque estaba ansioso por librar no es tan buena como creía. Su tío, el héroe de guerraconocido como «el Coronel», tiene grandes planes para derrotar a los comunistas: unaofensiva psicológica con armas atómicas y agentes dobles vietnamitas con el nombre enclave de «Árbol de Humo». En el último eslabón de la cadena de mando, los soldadosvoluntariosBillyJamesHouston,procedentesdelasclasesruralesdeArizona,seenfrentanalhorrorylabrutalidaddelasguerrillas,ydesuspropiosinstintos.LaamanteocasionaldeSkipyunsubalternodelCoronel,obsesionadocon laoperaciónÁrboldeHumo,sonotrosdelospersonajesdeestanovelasobrelaguerra,sobretodaslasguerras,ysobreaquellosquehanencontradosupropiocorazóndelastinieblas.

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DenisJohnson

ÁrboldehumoePubr1.0

SoporAet ernus16.06.15

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Títulooriginal:TreeofSmokeDenisJohnson,2007Traducción:JavierCalvoRetoquedecubierta:SoporAeternus

Editordigital:SoporAeternusePubbaser1.2

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NuevamenteparaH.P.ytodoslosque

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1963

HabíanmatadoalpresidenteKennedya las tresde lamadrugadade lanocheanterior.ElmarineroHoustony losotrosdos reclutas estabandurmiendomientras lasprimeras informacionesdaban lavueltaalmundo.Habíaunpequeñolocalnocturnoenlaisla,unbardecopasruinosoconenormesventiladoresgiratoriosyunamáquinademillón; losdosmarinesque regentabanelbarpasaronadespertarlosylescontaronloquelehabíapasadoalpresidente.Losdosmarinessesentaronconlostres marineros en el barracón de acero para reclutas de paso, mirando cómo el aparato de aireacondicionadogoteabadentrodeunalatadecaféybebiendocerveza.LaemisoradelacadenadelasFuerzasArmadasdelabahíadeSubicsepasólanocheenterafuncionando,emitiendoboletinessobreaquelasesinatoinconmensurable.

Ahorayaeramediamañana,yelmarineroenprácticasWilliamHoustonJr.empezóasentirsesobriootravezmientrasmerodeabaporlaselvadelaIslaGrandeconunrifledelcalibre22prestadoenlasmanos.Sesuponíaquehabíajabalíessalvajesdeambulandoporlasinstalacionesmilitaresdeaquellaisla,queeraloúnicodelasFilipinasqueélhabíavistohastaaquelmomento.Nosabíaquépensardeaquelpaís.Loúnicoquequeríaerairdecazaporlaselva.Sesuponíaqueporallíhabíajabalíessalvajes.

Caminóconcautela,pensandoenserpientesytratandodenohacerruidoporquesihabíajabalíesquería oírlos antes de que cargaran contra él. Era consciente de estar magníficamente tenso. Portodosladoslorodeabanlosdiezmilsonidosdelaselva,asícomoloschillidosdelasgaviotasydelaespumalejana,ysisequedabaquietodeltodoyescuchabaunmomento,tambiénpodíaoírlarisitasofocadadelpulsoenelcalordesucarneyelcrujidodelsudorensusoídos.Sisequedabainmóvilúnicamenteotropardesegundos, losbichos loencontrabanyseponíanaberrearalrededordesucabeza.

Apoyóelriflesobreeltocóndeunplataneroysequitólacintadelpeloylaescurrió,despuéssesecó la cara y se quedó allí un rato de pie, apartando losmosquitos con el trapo y rascándose laentrepiernacongestoausente.Cercadeallí,unagaviotaparecíaestarteniendounadiscusiónconsigomisma,unaseriedechillidosdeprotestaalternadoscongraznidosgravesdedisensiónquesonabancomoalguiendiciendo«¡Uh!¡Uh!¡Uh!».YalgoquesemovíadeárbolenárbolatrajolamiradadelmarineroHouston.

Mantuvolavistaclavadaenelpuntodondelohabíavisto,entrelasramasdeunárboldelcaucho,yestiróelbrazoparacogerelriflesinalterarladireccióndesumirada.Lacosasevolvióamover.Ahoravioquese tratabadealgunaclasedemono,nomásgrandequeunperrochihuahua.Noeraprecisamente un jabalí salvaje, pero se presentaba a sí mismo como algo quemirar, agarrado altroncodelárbolconlamanoizquierdayambospiesyhurgandoenlafinacortezaconairedeprisaminuciosayexasperada.ElmarineroHoustonenfocólaflacaespaldadelmonoenlamirilladelrifle.Acontinuación levantó el cañónunos cuantosgradosy centró la cabezadelmonoen lamira.Sinpensarrealmenteennadaenabsoluto,apretóelgatillo.

Elmonopegóelcuerpoalárbol,extendiólosbrazosylaspiernasengestoentusiasta,yporfin,echandolasdosmanoshaciaatráscomositrataraderascarselaespalda,cayóalsuelodandotumbos.AlmarineroHoustonleaterróversusconvulsionesallí.Elanimalselevantócomopudo,haciendofuerzaconunbrazocontraelsuelo,ysesentóconlaespaldapegadaaltroncodelárbolylaspiernasextendidasantesí,comoalguienquedescansadespuésdeunatarealaboriosa.

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ElmarineroHoustonseacercóunoscuantospasosmásconcautelaydesdeapenasunosmetrosde distancia vio que el pelaje delmono eramuy brillante y que tenía un tinte como de jena a lasombra y un tinte rubio a la luz, mientras las hojas semovían sobre el mismo. Ahora el animalmiraba de un lado a otro, con el aliento saliéndole a grandes y rápidas bocanadas y la barrigaensanchándosetremendamentecadavezquerespiraba,comosifueraunglobo.Eldisparohabíasidobajoylehabíasalidoporelabdomen.

ElmarineroHoustonsintióqueaéltambiénselepartíaelestómagoporlamitad.—¡Dios bendito!—legritó almono, como si este pudiera hacer algopara remediar su estado

vergonzosoyodioso.Pensóqueleibaaexplotarlacabezasielsoldemediamañanaseguíainflamandotodalaselvaa

su alrededor y las gaviotas seguían chillando y elmono no dejaba de contemplar su entorno concautela, moviendo la cabeza y los ojos negros de un lado a otro como si estuviera siguiendo elprogreso de alguna conversación, de algún debate, de alguna pugna que la selva, la mañana, elmomento,estaban teniendoconsigomismos.ElmarineroHoustoncaminóhastaelmonoydejóelrifleenelsueloasuladoylevantóalanimalconlasdosmanos,sosteniendolasnalgasconunaylacabeza con la otra. Con fascinación, y luego con repulsión, se dio cuenta de que elmono estaballorando.Larespiraciónlesalíaentrecortadaycadavezqueparpadeabaseleinundabanlosojosdelágrimas.Mirabaaunladoyaotro,ynoparecíaqueestuvieramásinteresadoenélqueentodolodemásquepodíaestarviendo.

—Eh—ledijoHouston,peroelmononoparecióoírlo.Elmono todavía estaba en susmanos cuando le dejó de latir el corazón.Él lo zarandeó, pero

sabíaqueerainútil.Sintióquetodoeraculpasuya,yaprovechandoquenohabíatestigos,sepermitióecharseallorarcomounniño.Teníadieciochoaños.

Cuandoregresóalbarsituadojuntoalaorilla,Houstonvioqueenlaplayagrishabíaembarrancadounbancodemedusasde colorvioláceo, cientosde ellas, cadaunadel tamañoaproximadodeunamanohumana,traslúcidasysecándosebajoelsol.Elpequeñopuertodelaislaestabavacío.Laúnicaembarcaciónque llegabahastaallí erael ferryde labasenaval situadaalotro ladode labahíadeSubic.

Aescasosmetrosdedistancia, unparde cabañasdebambúdominaban la franjade arenabajounosárbolespalaciegosquerociabansustejadosdeunafinalluviadepequeñasflorespurpúreas.Dedentrodeunadelascabañasllegabanlosgritosdeunaparejahaciendoelamor,deunaputa,supusoelmarineroHouston,yunmarinero.Houstonsepusoencuclillasalasombrayestuvoescuchandohastaqueyanooyómás risitas,nimás jadeos,yun lagartoquehabíaenelalerodel tejadode lacabaña empezóa llamar, conunbreve trino amodode anuncio seguidodeuna seriede risotadasásperasyentrecortadas:«gek-ko,gek-ko,gek-ko».

Alcabodeunmomentoelhombresalió,unhombredecuarentaytantosconelpeloalrape,unatoallablancaanudadapordebajodelabarrigayuncigarrilloagarradoentrelosdientesincisivos,yallísequedóplantadoconlaspiernasseparadas,aguantándoselatoallaenlacaderaconunamano,observandoalgocercanoperoinvisible,ymeciéndose.Probablementeunoficial.Cogióelcigarrilloentreelpulgaryelíndice,lediounacaladaysoltóunanubecillaqueleenvolviólacara.

—Otramisióncumplida—dijo.Seabrió lapuertadelanterade lacabañavecinayunafilipinadesnuda tapándose laentrepierna

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conlamanodijo:—Nolegustahacerlo.Eloficialgritó:—¡Eh,Lucky!Unhombreasiáticoybajitosalióalapuerta,completamentevestidoconeluniformemilitar.—¿Noselohashechopasarengrande?—Podríadarmemalasuerte—dijoelhombre.—Karma—dijoeloficial.—Podríaser—dijoelhombrecillo.—¿Andasbuscandounacerveza?—ledijoeloficialaHouston.Houstonhabía tenido intencióndemarcharse.Ahora sediocuentadequesehabíaolvidadode

irse y de que el hombre le estaba hablando a él.Con lamano libre el hombre tiró el cigarrillo yapartóaunladolateladesutoalla.LuegoledijoaHouston,mientrassoltabaunchorrocasirectohaciaabajoqueespumeósobrelatierra,destruyendolacolilladesucigarrillo:

—Sivesalgoquevalgalapenamirar,melodices.Sintiéndose tonto,Houston entró en el bar.Dentro había dos jóvenes filipinas con vestidos de

flores de colores vivos jugando a la máquina de millón y hablando tan deprisa, mientras losventiladores enormes rotaban encima de ellas, que el marinero Houston sintió que perdía elequilibrio.Sam,unodelosmarines,estabadepiedetrásdelabarra.

—Calla,calla—dijo.Levantólamano,conlacualestabasosteniendounaespátula.—¿Quéhedicho?—preguntóHouston.—Perdona.—Saminclinó lacabezahacia la radio,concentrándoseensusonidocomosi fuera

ciego—.Hancogidoaltipo.—Esoyalodijeronantesdeldesayuno.Noesnuevo.—Haymássobreél.—Vale—dijoHouston.Bebió agua con hielo y escuchó la radio, pero ahoramismo tenía tal dolor de cabeza que no

podíadistinguirniunasolapalabra.Al cabo de un rato entró el oficial, vestido con una gigantesca camisa hawaiana estampada y

acompañadodeljovenasiático.—Coronel,lohancogido—ledijoSamaloficial—.SellamaOswald.—¿Qué clase de nombre es ese? —dijo el coronel, aparentemente tan escandalizado por el

nombredelasesinocomoporsuatrocidad.—Cabronazodemierda—dijoSam.—Cabronazo—dijo el coronel—. Espero que le vuelen las pelotas de un tiro. Espero que le

metanunabalaporelculo.—Secándoselaslágrimassinpudor,dijo—:¿Oswaldeselnombredepilaoelapellido?

Houstonsedijoqueprimerohabíavistoaaqueloficialmearenelsueloyahoraloestabaviendollorar.

—Señor—ledijoSamal jovenasiático—, somosde lomáshospitalario.Peropor logeneralaquínoservimosamilitaresfilipinos.

—LuckyesdeVietnam—dijoelcoronel.

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—Vietnam.¿Sehaperdido?—No,noperdido—dijoelhombre.—Estetipo—dijoelcoronel—yaespilotodeavión.EsuncapitándelaFuerzaAéreadeVietnam

delSur.Samlepreguntóaljovencapitán:—Bueno,¿hayguerraallíoqué?Guerra…Ratatatatatatá.—Pusolasdosmanoscomosillevara

unametralletaylassacudióalunísono—.¿Sí?¿No?Elcapitánapartó lamiradadelamericano,formómentalmente lasfrases, laspracticó,volvióa

girarseydijo:—Nosésiguerra.Muchagentemuerta.—Yaeseso—asintióelcoronel—.Esocuenta.—¿Quéestáshaciendoaquí?—Estoyaquíporformacióndehelicóptero.—Noparecequetengasedadniparairentriciclo—dijoSam—.¿Quéedadtienes?—Veintidósaños.—Levoyadarsucervezaaestepequeñochimpa.¿TegustalaSanMiguel?¿Teimportaquete

llamechimpa?Esunamalacostumbrequetengo.—LlámaloLucky—dijoelcoronel—.Elhombreteinvita,Lucky.¿Québebes?Elchicofruncióelceño,deliberóinteriormenteconairemisteriosoydijo:—MegustalaLuckyLager.—¿Yquéclasedecigarrillosfumas?—preguntóelcoronel.—MegustaelLuckyStrike—dijo,ytodosserieron.DeprontoSammiróaljovenmarineroHoustoncomosiacabaradereconocerloydijo:—¿Dóndeestámirifle?Por una fracción de segundo, Houston no tuvo ni idea de a qué se estaba refiriendo el otro.

Despuésdijo:—Mierda.—¿Dóndeestá?Samnodabamuestrasdeungraninterés,solamentecuriosidad.—Mierda—dijoelmarineroHouston—.Voyaporél.Tuvo que regresar a la selva. Hacía el mismo calor y había la misma humedad. Los mismos

animalesestabanhaciendolosmismosruidosylasituacióneraigualdeterrible:estabalejosdelosescenarios de su memoria y la marina todavía lo tenía durante dos años más, y el presidente, elPresidentedesupaís,seguíaestandomuerto.Peroelmonohabíadesaparecido.ElrifledeSamestabatiradoen lamaleza,dondeél lohabíadejado,yelmonoyanoestabaporningún lado.Algose lohabíallevado.

Élhabíaesperadoverseforzadoaverlodenuevo.Asíquelealivióecharaandardevueltaalbarsin tener que mirar lo que había hecho. Y sin embargo entendía, sin demasiada alarma niintranquilidad,quenuncamásselibraríadeaquellaimagen.

ElmarineroHoustonfueascendidounavezyluegodegradado.Tuvoocasióndevislumbraralgunasde las grandes capitales del Sudeste Asiático, caminó por noches húmedas en las que la brisamalolienteagitabalosfarolesdelascalles,peronuncapasóelsuficientetiempoentierrafirmecomo

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paraacostumbrarse,sololobastantecomoparasentirseconfuso,paraverparpadearlascarasyoírla risa de los que sufrían.Cuando terminó el servicio se reenganchó, fascinado sobre todopor elpoderparacrearsudestinomedianteelsimpleactodefirmarunpapel.

Houston tenía dos hermanos menores. El más cercano a él en edad, James, se alistó en lainfanteríaylomandaronaVietnam,yunanochejustoantesdeterminarsuperíododereengancheenla marina, Houston cogió un tren desde la base naval de Yokosuka, Japón, hasta la ciudad deYokohama,dondeélyJameshabíanquedadoenreunirseenelPeanutBar.Era1967,másdetresañosdespuésdelasesinatodeJohnF.Kennedy.

Enelvagóndetren,Houstonsesintióungigantequemirabaporencimadelascabezasdepelonegro. Los pequeños pasajeros japoneses se lo quedaban mirando sin alegría, sin piedad, sinvergüenza,hastaquesesintiócomosileestuvieranretorciendoelpescuezo.Sebajóymantuvounatrayectoria recta bajo la llovizna vespertina siguiendo las víasmojadas del tranvía hasta el PeanutBar.Teníamuchasganasdedeciralgoeninglés.

ElPeanutBareragrandeyestabaabarrotadodemarinerosydemuchachosdeaspectopulcrodelamarinamercante,ylasvocesleresonaronespesasenlacabezayelhumolellenólospulmones.

EncontróaJamescercadelescenarioyseleacercóconlamanoextendidaparaestrechársela.—¡MevoydeYokosuka,tío!¡Mevuelvoaembarcar!—fueloprimeroquedijoJames.Labandaahogósusaludo:uncuartetodeimitadoresjaponesesdelosBeatlescondeslumbrantes

trajes blancos de flecos. James, vestido de civil, estaba sentado frente a una mesilla mirándolos,pendientedenadamásqueelespectáculo,yBilllelanzóuncacahuetealabocaabierta.

Jamesseñalóalosmúsicos.—Peroestoesunaridiculez.Teníaquegritarparaqueseleoyeraaunquefueraunpoco.—¿Quépuedodecir?NoestamosenPhoenix.—Casitanridículocomotúvestidodemarinero.—Mesoltaronhacedosañosymehereenganchado.Nosé…lohicesinpensar.—¿Estabastaja?—Estababastantetaja,sí.ABillHoustonleasombródescubrirquesuhermanoyanoeraunniño.Jamesllevabauncortede

peloalcepilloquehacíaquesumandíbulaparecieraanchayfuerte,yestabasentadoconlaespaldarecta,sinparecerincómodoninervioso.Hastavestidodecivilparecíaunsoldado.

Pidieroncervezaen jarragrandeysemostrarondeacuerdoenque,salvoporalgunosdetallesextrañoscomoelPeanutBar,alosdoslesgustabaJapón—aunquehastaaquelmomentoJamesnohabíapasadomásqueseishorasenelpaísentrevuelos,yporlamañanaibaacogerotroaviónparaVietnam—,oporlomenosalosdoslesparecíanbuenagentelosjaponeses.

—Hevenidoadecirte—dijoBillcuandolabandahizounapausaysusvocesvolvieronaoírse—que estos japos lo tienen todobien atadoybajo control.En cambio, en los trópicos, tío, unaputamierda.Todoelmundotieneelcerebrodepapillahervida.

—Esomedicen.Supongoquelovoyaaveriguar.—¿Quépasaconloscombates?—¿Quépasa?—¿Quédicen?—Sobretododicenquetúdisparasalosárbolesyquelosárbolestedevuelvenlosdisparos.

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—Peroenserio.¿Estámuymallacosa?—Supongoquelovoyaaveriguar.—¿Tienesmiedo?—Cuandoestabadeinstrucciónvicómountíolepegabaaotrountiroporaccidente.—¿Sí?—Enelculo,porincreíblequeparezca.Fueunaccidente.—YoviauntíoasesinaraotroenHonolulu—dijoBillHouston.—¿Cómo,encombate?—Bueno,aquelcabrónledebíadineroalotrocabrón.—¿Dóndefue,enunbar?—No,enunbarno.Eltíoseacercóalapartedeatrásdeledificiodeapartamentosdelotroylo

llamóparaquesalieraalaventana.Pasábamoscaminandoporallícercayeltíodijo:«Unmomento,tengoquehablarconese tíosobreunadeuda».Hablaronunmomentoyluegoel tíoconelqueyoestabalepegóuntiroalotro.Pegósupistolaalamosquiteradelaventanaypum,unsolotiro,asítalcual.Unaautomáticadelcuarentaycinco.Eltíocayóhaciaatrásdentrodesuapartamento.

—Tienesqueestardebroma.—No.Noesbroma.—¿Lodicesenserio?¿Túestabasallí?—Pasábamosporallí.Yonoteníaniideadequeibaamataraalguien.—¿Yquéhiciste?—Puescagarmeenlospantalones.Éltíosediolavueltaysemetiólapistoladebajodelacamisa

ydijo:«Eh,vamosatomarunasbirras».Comosielincidentequedaraborrado.—¿Ytúquélecomentaste?—Casinoquisemencionarlo.—Yasé…esque,joder,¿quévasadecir?—Teaseguroquemeestabapreguntandosiélmeconsiderabauntestigo.Esporesoporloque

me he perdido el embarque. El tío estaba en nuestro barco. Sime hubiera embarcado con él,mehabríapasadoochosemanassincerrarlosdosojos.

Loshermanosbebieronsimultáneamentedesusjarrasyluegolosdosbuscaronensumentealgodequehablar.

—Cuando al tío aquel le pegaron un tiro en el culo—dijo James—, entró inmediatamente enestadodeshock.

—Mierda.¿Cuántosañostienes?—¿Yo?—Sí.—Casidieciocho—dijoJames.—¿Yelejércitotedejaalistartecondiecisiete?—No.Lesmentí.—¿Tienesmiedo?—Sí.Notodoeltiempo.—¿Notodoeltiempo?—No he visto ningún combate. Quiero verlo, el rollo real, el rollo de verdad. Simplemente

quiero.

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—Cabroncetechiflado.LabandareanudósuactuaciónconuntemadelosKinkstitulado«YouReallyGotMe».

Youreallygotme…Youreallygotme…Youreallygotme…

NopasómuchotiempoantesdequeloshermanossepusieranadiscutirporcualquiertonteríayBillHoustonderramaraunajarradecervezaenelregazodealguienqueestabaenlamesadeallado:unachica japonesa,quese limitóaencorvar loshombrosyaponercara tristeyhumillada.Estabasentadaconunaamigasuyay tambiéncondosamericanos,dosmuchachosquenosupieroncómoreaccionar.

LacervezachorreabadelbordedelamesamientrasJamesintentabacontorpezavolveraponerdepielajarracaída,diciendo:

—Avecesseponeasí.Esloquehay.Lachicanomovióniunmúsculoparacolocarseenotrositio.Seestabamirandoelregazo.—¿Quénospasa?—lepreguntóasuhermano—.¿Estamosmaldelacabezaoalgoasí?Cadavez

quenosjuntamospasaalgomalo.—Yasé.—Algonochuta.—Nochuta,esunamierda,yasé.Porquesomosfamilia.—Lamismasangre.—Todaesamierdayanomeimporta.—Tieneque importartealgo—insistióJames—.Sino,¿porqué ibasadarte lapalizadevenir

hastaYokohamaparaverme?—Sí—dijoBill—.EnelPeanutBar.—¡ElPeanutBar!—¿Yporquéheperdidomiembarque?—¿Hasperdidotuembarque?—dijoJames.—Tendríaquehaberzarpadoestatardealascuatro.—¿Ynohasido?—Elbarcodebedeestarahítodavía.Peromeimaginoqueyahabránsalidodelpuerto.BillHoustonsintióquese le inundaban losojosde lágrimas,que loestrangulabaunaemoción

repentinacausadaporsuvidayporaquellugardondetodoelmundoconducíaporlaizquierda.—Nuncamehascaídobien—dijoJames.—Yasé.Túamítampoco.—Túamítampoco.—Siempremehasparecidounpichacortahijoputa—dijoBill.—Yosiempreteheodiado—dijosuhermano.—Joder,losiento—ledijoBillHoustonalachicajaponesa.Sesacóalgodedinerodelabilleteraylotirósobrelamesamojada,cienyenesomilyenes,no

lopodíaverbien.—Esmi último año en la marina—le explicó a la chica. Le habría tiradomás, pero tenía la

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billetera vacía—.Me topé con este océano ymemorí. Podrían perfectamente llevarmis huesos acasa.Soyotrapersona.

***

La tarde de aquel día de noviembre de 1963, el día después del asesinato de John F. Kennedy, elcapitánNguyenMinh, el jovenpiloto de laFuerzaAérea deVietnam, se sumergió conmáscara yesnórquelfrentealaorilladelaIslaGrande.Eraunapasiónqueacababadedescubrir.Laexperienciase parecía a lo que los pájaros debían de disfrutar en el aire, planeando por encima del paisaje,impulsadosporlaaccióndesuspropiosmiembros,volandodeverdadporoposiciónalmerohechodepilotarunamáquina.Lasaletaspalmeadasqueteníasujetasalospiesledieronungranimpulsomientraspasabaatodavelocidadporencimadeunenormebancodepecesloroquesededicabanacomerdeunarrecife,consumultituddepicosdiminutosrepiqueteandocontraelcoralconunruidocomodechaparrón.Alossoldadosdelamarinaamericanoslesgustababuceartantocontrajecomosinél,hastaelpuntodequehabíandestrozadotodoelcoralyhabíanhechoquelospecessevolvieranmuytímidos,demaneraqueelbancoenterodesaparecióenunabrirycerrardeojoscuandoélseacercónadando.

AMinhnoseledabamuybiennadar,ysinnadieasualrededorsepermitíaexperimentartodoelmiedoquetenía.

Sehabíapasadotodalanocheanteriorconlaprostitutaqueelcoronellehabíapagado.Lachicahabíadormidoenelsueloyélenlacama.Élnolahabíaquerido.Noseacababadefiardeaquellosfilipinos.

Luegohoy,haciamediamañana,habíanidoalbarysehabíanenteradodequealpresidentedeEstadosUnidos,alpresidenteJohnFitzgeraldKennedy,lohabíanasesinado.Lasdosfilipinasseguíanconellos,ycadaunadeellashabíacogidoalcoroneldeunode losrobustosbrazosyse lohabíasujetado,comosi intentaranmantenerloamarradoalsuelomientrasélponía todasusorpresaysudolor bajo control. Se pasaron la mañana sentados a una mesa y escucharon los boletinesinformativos.

—PorelamordeDios—decíaelcoronel—.PorelamordeDios.Por la tarde el coronel ya se había animado y la cerveza corría de un lado para otro. Minh

intentaba no beber mucho, pero no quería ser descortés y acabó muy mareado. Las chicasdesaparecieron,regresaronyelventiladorgirabaeneltecho.Unreclutadelamarinamuyjovenseunió a ellos y alguien le preguntó aMinh si era verdad que estaba teniendo lugar una guerra enVietnam.

Aquella noche el coronel quiso que se intercambiaran las chicas yMinh decidió que haría lomismo que la noche anterior, solo para tener contento al coronel y mostrarle que le estabasinceramenteagradecido.Encualquiercaso,laotrachicaeralaqueélprefería.Leparecíamásguapay hablaba mejor el inglés. La chica, sin embargo, le pidió que dejara encendido el aireacondicionado. Él lo quería apagado.Con el aire acondicionado encendido no podía oír nada. Legustabatenerlasventanasabiertas.Legustabaelsonidodelosinsectosalchocarconlamosquitera.NoteníanmosquiterasdeaquellasenlacasadesufamiliaeneldeltadelMekong,nisiquieraencasadesutíoenSaigón.

—¿Quéquieres?—dijolachica.

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Ellalotratabaconmuchodesprecio.—Nolosé—dijoél—.Quítatelaropa.Losdossequitaronlaropa,setumbaronaoscuraselunojuntoalotrosobrelacamadobleyno

hicieronnadamás.Éloyóaunmarineroamericanoaunascuantaspuertasdedistanciaquehablabaconunodesusamigosenvozmuyalta,talvezcontándoleunahistoria.Minhnopudoentenderniunapalabradelamisma,aunqueconsiderabaquesuingléserabastantebueno.

—Elcoronellatienegrande.—Lachicaleestabaacariciandoelpene—.¿Esamigotuyo?—Nolosé—dijoMinh.—¿Nosabessiesamigotuyo?¿Porquéestásconél?—Nolosé.—¿Cuándoloconocisteporprimeravez?—Haceunasemanaodos.—¿Quiénes?—dijoella.—Nolosé—dijoMinh.Paraqueellapararadetocarlelaentrepierna,éllaabrazóconfuerza.—¿Quieressolocuerpo-cuerpo?—dijoella.—¿Quéquieredecir?—dijoél.—Solocuerpo-cuerpo—dijoella.Selevantóycerrólaventana.Palpóelaireacondicionadocon

lapalmadelamano,peronotocóloscontroles—.Dameuncigarrillo—dijo.—No.Notengoningúncigarrillo—dijoél.Ellasepusoelvestidoporlacabezaymetiólospiesenlassandalias.Nollevabaropainterior.—Dameunpardecuartos—dijo.—¿Quéquieredecir?—dijoél.—¿Quéquieredecir?—dijoella—.¿Quéquieredecir?Dameunpardecuartos.Dameunparde

cuartos.—¿Esdinero?—dijoél—.¿Cuántoes?—Dameunpardecuartos—dijoella—.Quieroversiélmevaavendercigarrillo.Quierounpar

depaquetesdecigarrillo.Unpaqueteparamí,yunpaqueteparamiprima.Dospaquetes.—Elcoronelpuede—dijoél.—UnWinston.UnLuckyStrike.—Perdona.Estanochehacefrío—dijoél.Selevantóysepusolaropa.Salióalporche.Detrásdeéloyólosruiditosquehacíalamujeralbuscarensubolsoydejarlo

sobreunamesa.Elladiounapalmadaysefrotólasmanos.Unavaharadadecoloniapasóflotandoprocedentedelaventanaabiertayéllainhaló.Lezumbaronlosoídosylaslágrimaslenublaronlavista.Seaclarólagarganta,agachólacabezayescupióentresuspies.Echabademenossutierra.

CuandosealistóalafuerzaaéreaylotrasladaronaDaNangyalainstruccióndeoficiales,sehabíapasadovariassemanas llorandoen lacamatodas lasnoches.Ahoraya llevabacasi tresañospilotando cazas, desde los diecinueve. Hacía dos semanas que había cumplido los veintidós, y eldestinoqueleesperabaeracontinuarpilotandomisioneshastallegaralaquelomataría.

Más tarde estaba sentado en una silla de lona del porche, inclinado hacia delante, con losantebrazos sobre las rodillas, fumando—la verdad era que tenía un paquete de Lucky Strike—,cuandoelcoronelregresódelbarconunachicaencadabrazo.LaacompañantedeMinhllevabaun

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paqueteenlamanoyloagitócongestorisueño.—Asíquehoyhasexploradolasprofundidadesazules.Minhnoestabasegurodequéqueríadecir.—Sí—dijo.—¿Hasestadoalgunavezenalgunodeesostúneles?—preguntóelcoronel.—¿Elqué?¿Túneles?—Túneles—dijo el coronel—. Los túneles que hay por debajo de todo Vietnam. ¿Ha estado

dentrodeellos?—Todavíano.Creoqueno.—Yotampoco,hijo—dijoelcoronel—.Mepreguntoquéhayallíabajo.—Nolosé.—Nadielosabe—dijoelcoronel.—Lascélulasusanlostúneles—dijoMinh—.ElVietminh.Ahoraelcoronelpareciónuevamentetristeporsupresidente,porquedijo:—Estemundoescupeaunhombremagníficocomosifueraveneno.Minh se había dado cuenta de que uno podía hablarmucho rato con el coronel sin notar que

estababorracho.Había conocido al coronel una mañana de hacía apenas unos días, delante del taller de

mantenimientodehelicópterosdelabasedeSubic,ydesdeentoncessehabíanbuscadoelunoalotrocontinuamente.Nadieselohabíapresentado:elcoronelsehabíapresentadoasímismo,ynoparecíaquetuvieranningúnvínculooficial.Losdossealojabanjuntocondocenasdeotrosoficialesdepasoen los barracones de un complejo construido originalmente—y luego abandonado enseguida, deacuerdoconelcoronel—porlaCIAestadounidense.

Minhsabíaqueconveníaestarcercadelcoronel.Minhteníalacostumbredeelegirlassituacionesyalagentesiguiendouncriteriodebuenasuerteymalasuerte.BebíaLuckyLageryfumabaLuckyStrike.Elcoronellollamaba«Lucky».

—JohnF.Kennedyeraunhombremagnífico—dijoelcoronel—.Esoesloquelohamatado.

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1964

NguyenHaollegósinproblemasal templode laNuevaEstrellaensumotocicleta japonesaHonda30,vestidoconpantalonesdetrajeycamisadecorteanchoyconlagominaderritiéndoseensupelo.Lecorrespondíael tristecometidodeejercerdeúnicorepresentantedesufamiliaenelfuneraldelsobrinodesumujer.LamujerdeHaoestabaenlacamaconescalofríos.Lospadresdelchicoestabanfallecidos,ysuúnicohermanoestabapilotandomisionesparalafuerzaaérea.

Hao volvió la vista hacia el lugar donde acababa de dejar a un amigo de su juventud llamadoTrungThan,aquientodoelmundosiemprehabíallamadoelMonjeyquesehabíamarchadoalnortealdividirseelpaís.HaollevabaunadécadasinveralMonje,hastaaquellatarde,yahoraacababadeverlo marcharse: se había bajado de la moto dando un brinco hacia atrás, se había quitado lassandaliasysehabíaalejadodescalzoporelcamino.

Hao se aseguródepasardespacio con lamotocicletapor cualquier cosaque separeciera auncharco,yalllegaralosarrozalesechóaandarllevandolamotoconmuchocuidadoyrodeandolasacequias.Teníaqueevitarensuciarselaropa.Ibaapasarlanocheaquí,probablementeenelauladelaescuelaquehabíaalladodeltemplo.LaaldeanoestabalejosdeSaigón,yentiemposmejorespodríahaber regresadoenmotoalanochecer,pero laszonasdecrisissehabíanampliado tantoqueen laactualidadlascarreterasderegresoalaRuta22yaeranpeligrosasdespuésdelastresdelatarde.

Dejósucolchonetadepajasobreelsuelodetierranadamásentrarenelauladelaescuela,afindepoderencontrarlaporlanoche.

No había ni un alma en la hilera de cabañas más que los pollos que buscaban comida y lasancianasinmóvilesquesedivisabanenlosumbrales.Apartóaunladolatapademaderadelpozodecemento,bajóelcuboyextrajode laoscuridadaguaparabebery lavarse.Eraunpozoprofundo,perforadoamáquina.Elaguacayólimpiayfrescaensusmanosysobresucara.

Del templonovenía ningún ruido.Lomásprobable era que elmaestro estuviera echandounasiesta.Haollevósumotorodandohastaelinterior,queerademaderasinpulir,coneltejadodetejasde cerámica y el suelo de tierra, de unos quince metros por quince, no mucho más grande ensuperficieque laplantabajade la casadeHaoenSaigón.Paranomolestar almaestro,diomediavueltaysalióantesinclusodequeseleacostumbraranlosojosalapenumbra,aunquetuvotiempodequeelmohodelsueloyelaromaabarrasdeinciensodespertaranenélelrecuerdodesuinfancia,cuandohabíaservidoallíeneltemploduranteunpardeaños.Sentíaquealgodeaquellaépocatirabade él, un hilo conectado a cierta tristeza que por lo general se mostraba inerte y se olvidabarápidamente de símisma.Gran parte de todo aquello había quedado sepultado bajo el resto de suvida.

También sentía una tristeza confusa por la ridícula muerte de su sobrino. Inconcebible. Alprincipio,Haohabíadadoporsentadoqueelchicohabíafallecidoenunincendioaccidental.Perolaverdadesquesehabíapegado fuegoa símismo, igualquehabíanhecho recientementedoso tresmonjesdemásedad.Losotros,sinembargo,sehabíanquemadoasímismosdeformaespectacularenlascallesdeSaigón,afindeprotestarcontraelcaos.Yeranancianos.Thuteníasoloveinteaños,y se había pegado fuego en el bosque de más allá de las afueras de la aldea, en una ceremoniasolitaria.Incomprensible,demencial.

Cuando elmaestro se despertó no salió vestido con su túnica, sino con ropa de trabajar en elcampo.Haosepusodepieysaludóconunainclinacióndelacabeza,yelmaestrohizounaprofunda

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reverencia.Eraunhombrebajito con el tóraxgrande, brazosypiernas flacuchosy la cabezamalafeitada:aHaoseleocurrióqueprobablementehabíasidoThuelqueselahabíaafeitado.ElpobreThu,muerto.

—Estatardeibaacogerlaazada—dijoelmaestro—.Mealegrodequemelohayasimpedido.Sesentaronenelporcheehicieronunamagodeconversacióneducada,trasladándosealinterior

delapuertacuandoempezóacaerunalluviaestrepitosa.Elmaestropareciódejarqueelparloteodeaquelchaparrónhicieralasvecesdeconversacióninformal,porqueencuantodejódelloversepusoahablarinmediatamentedelamuertedeThu,diciendoquelodejabaperplejo.

—Perotehatraídoatidevueltaaquí.Todopuñoescondeunregalo.—Laatmósferadeltemploesmuyfuerte—dijoHao.—Aquítúsiemprehasparecidoinseguro.—Peroestoyhaciendoloqueustedsugirió.Heconvertidomidudaenmivocación.—Esanoeslamejormaneradeexplicarlo.—Sonlasmismaspalabrasqueusóusted.—No.Yodijeque teníasquepermitirque tududaseconvirtieraen tuvocación,que teníasque

permitirlo.Notesugeríquelohicieras,solamentequelopermitieras.Quedejarasquetududafueratuvocación.Asítududaseharíainvisible.Yviviríasenellacomosifueraunaatmósfera.

El maestro le ofreció un champooy y Hao declinó la invitación. El anciano se metió la frutapicanteenlabocaylachupóvigorosamente,conelceñofruncido.

—Vieneunamericanoalfuneral.—Loconozco—dijoHao—.ElcoronelSands.ElmaestronodijonadayHaosesintióobligadoacontinuar.—ElcoronelconoceamisobrinoMinh.SeconocieronenlasFilipinas.—Yamelodijo.—¿Loconoceustedpersonalmente?—Ha venido varias veces—dijo elmaestro—. Era conocido de Thu. Creo que es un hombre

amable.Oporlomenosunhombreprecavido.—Estáinteresadoenlapráctica.Quiereestudiarlarespiración.—Elalientolehueleacarnedeganado,apurosyalicor.¿Yquémedicesdeti?¿Hascontinuado

conlarespiración?Haonocontestó.—¿Hascontinuadocontupráctica?—No.El maestro escupió el hueso de su champooy. Un cachorrillo esquelético salió disparado de

debajodelporche,loengullóenunabrirycerrardeojos,temblando,yluegosedesmaterializó.—Cuandosueñan—dijoelanciano—,losperrosviajanentreestemundoyelotro.Ensussueños

visitanloquehayantesdelavidaytambiénloquehaydespués.Haodijo:—Losamericanosvanaempezarainterveniraquí,acausardestrucción.—¿Cómo lo sabes?—Lapreguntaeramuy indiscreta,perocomoHaonocontestó, elmaestro

insistió—.¿Telohadichoeseamericano?—MelohadichoelhermanodeThu.—¿Minh?

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—Nuestrafuerzaaéreavaaparticipar.—¿AcasoeljovenMinhvaabombardearsupropiopaís?—Minhnopilotaunbombardero.—Pero¿lafuerzaaéreanosvaadestruir?—Minhmehadichoquelosaqueausteddeaquí.Nolepuedocontarmásqueeso,porqueeslo

únicoquesé.Porquetraficarconinformaciónquefueramásespecíficaqueaquellaloaterraba.Habríaaterrado

acualquiera.Ytendríaquehaberaterradoalmaestro.Haocambiódetema.—AcabodeveralMonje.Sehapresentadoenmicasaymehapedidodinero.Luegolohetraído

hastaaquíenlamoto.Elmaestroloexaminóúnicamenteconlosojos.Sí,yasehabíaimaginadoqueelmaestrohabríatenidonoticiasdeTrung.—¿Cuántotiempohacequelovioporúltimavez?—Nomucho—admitióelmaestro.—¿Cuántohacequevolvió?—¿Quiénsabe?¿Ytú?¿Cuántohacíaquenoloveíastú?—Muchosaños.Ahoratieneacentodelnorte.Haonoquisodecirmás,ysepusoamirarselospies.—Verlotehatrastornado.—Havenidoamicasa.Queríadineroparalacausa.—¿ParaelVietminh?Enlaciudadnocobranimpuestos.—Siéllohapedido,esquelehanmandadoquelopidiera.Esextorsión.Luegoélhainsistidoen

quelotrajeraaquíenlamoto.—Élsabequeestáasalvo—dijoelmaestro—.Sabequetúnolovasadelatarasusenemigos.—Talveztendríaquehacerlo.SielVietminhsesalieraconlasuya,esosupondríaladestrucción

delnegociodemifamilia.—Yprobablementedenuestrotemplo.Peroesosextranjerosestándestruyendoelpaísentero.—Nopuedodardineroaloscomunistas.—TalvezyopuedacomentarleaTrungquenotienesdinero.Quetelohasgastadoenalgo.—¿Enqué?—Enalgoquenosetepuedareprochar.—Dígaselo,porfavor.—Lediréquehashecholoquehaspodido.—Estoyendeuda.Haosintióque lanieblade lamañanasiguienteseempezabaa formarnadamásponerseelsol

detrásdelacolinamáscercanaporeloeste,quesellamabalamontañadelaBuenaSuerte.Lafortunade aquella montaña, sin embargo, había sido desigual. El brazo de construcción del ejércitoamericanoestabainstalandoensucimauncampamento,quelamayoríadelagentesospechabaquetendríaunazonadeaterrizajepermanenteparahelicópteros.Aél lehabían llegadonoticiasdequeteníanplaneadodiseminarcompuestosquímicosporlaRuta1ylaRuta22paramatarlavegetación.Eliminartodacoberturaparaposiblesemboscadaserabuenaidea,pensó.Peroaqueleraelpaísmásencantador del mundo. Estaba todo cubierto de tristeza y de guerra, cierto, pero de momento la

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enfermedaddelatristezatodavíanohabíapenetradolamismatierra.Élnoqueríaverlaenvenenada.Debidoalaposiblellegadadeaquelcoronelamericano,retrasaronelmemorialhastapasadaslas

cuatrodelatarde,peroelcoronelnovino,yahoraelriesgodeemboscadayaleimpediríatomarlascarreteras,asíqueempezaronsinél.Celebraronelservicioeneltemplo.Asistieronochovecinosdelaaldea,sieteancianosyelnietodeunodeellos,todossentadosalaluzdelasvelasalrededordelcentrodel templo, sin cadáver quemirar, solamenteunapequeñamultituddebudasbaratos, sobretododemadera,pintadosdecolordorado.Unadornocentelleanteapilasdeesosqueseencuentranen las tabernas de los soldados americanos remataba el conjunto: un disco sobre el que girabanfranjas cambiantes de luz en el sentido de las agujas del reloj. El maestro era más que audible.Hablabacomosiestuvieraenseñandounalección.Comosinadieaprendieranuncanada.

—Los vietnamitas tenemos dos filosofías en que apoyarnos. El confucianismo nos dice cómocomportarnoscuandoeldestinonosdeparapazyorden.Elbudismonosentrenaparaaceptarnuestrodestinoauncuandoestenostraigasangreycaos.

Losamericanosllegaronconlasúltimaslucesdeldíaenunjeepabierto.Obiennoteníanmiedodelascarreterasobienhabíanacampadoconelgrupodeconstruccióndelejércitoamericanomásarriba, en lamontañade laBuenaSuerte.El fornidocoronel ibaalvolante,vestidodecivil comosiempre y con un rifle sobresaliéndole entre las rodillas, fumando un puro, acompañado por unsoldadodeinfanteríaamericanoytambiénporunamujervietnamitaconblusablancayfaldagrisquelespresentócomolaseñoraVan,empleadadelServiciodeInformaciónamericano.

Habíantraídounproyectoryunapantallaabatibleyteníanlaintencióndeproyectarunapelículadeunahoraparalagentedelaaldea.

El coronel Sands hizo una reverencia ante elmaestro y luego los dos se estrecharon lamanovigorosamente,alestiloamericano.

—Señor Hao, vamos a instalar el proyector en la sala principal, si les parece bien. ¿Quieredecírselo,porfavor?

Haotradujoyledijoalcoronelqueelmaestronoveíaningúnproblemaenello.Eljovensoldadocolocó la máquina, los cables y cuatro sillas plegables de lona—«para la gentemayor», dijo elcoronel—, así como un pequeño generador que llenó el valle de su traqueteo y apestó la regiónenteraconloshumosquesoltaba.Haoexplicóqueélyelmaestroteníanquevisitaraunapersonaenfermadelaaldeaperoquetalvezvinieranmástardeaverpartedelapelícula.Elcoroneldijoqueloentendía,peroHaonosellevólaimpresióndequeasífuera.Yamedidaqueseponíaelsol,yseibahaciendoevidentequenoibaavenirabsolutamentenadie,elcoronelSandspidióquelepusieranlapelículaparaél.Elproyectordepelículas,alimentadoporaquelgenerador tan ruidoso, llenóeltemplodeluzparpadeanteydevocesgravesyretumbantesymúsicaestridente.Lapelícula,Añosdecentellas,undíadetrueno,narrabalabreve,trágicayheroicavidadeJohnF.Kennedy.ElsoldadoamericanoylaseñoraVantambiénlavieron.LaseñoraVanhabíavenidoatraducirelrelatoparaelpúblico,peroclaroestá,nohizofalta.Elcoronelhabíadichoqueduraríacincuentaycincominutos,y a falta de cincominutos para el final,Hao y elmaestro entraron a hurtadillas para unirse a losamericanos.Elmaestrosesentóensucojínenlacabeceradelasala,dondenopodíavernada,yHaoenuna silla juntoal joven soldado.Sentada juntoal coronel, la señoraVanechóunvistazoaHaopero pareció decidir que no le hacía falta traducción.De hecho, sí le hacía falta. Para entender elingléshabladosolíanecesitarcarasygestos.Yademás,elcoronelyaestabahablandomásfuertequelagrabación,sentadoconlosbrazoscruzadosylospuñosenlasaxilas,dirigiéndoseentonoamargo

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alapelícularesplandecientemientraslamúsicaaumentabadevolumenyelplanosecerrabaentornoa la llama eterna que señalaba la tumba de JohnF.Kennedy, una antorcha de forma chata que losamericanosteníanintencióndemantenerencendidaparasiempre.

—Lallamaeterna—dijoelcoronel—.¿Eterna?Sisepuedemataralhombre,estáclaroquesepuedematarsupuñeterallama.Loquepasaeslosiguiente:quealalargaestamostodosmuertos.Alalargasomospolvo.Afrontémoslo,todanuestracivilizaciónnoesmásqueunacapadesedimento.AlfinalalgúnbárbaromestizosedespertaráporlamañanayseplantaráconunpieenunarocayelotroenlavasijavolcadadelallamaeternadeKennedy.Yesavasijaestaráfríaymuerta,yesehijodeputanisiquieraseenterarádeque laestápisando.Simplementeestaráechandosumeadade lamañana.Cuandoyomelevantoporlamañanaymemetodetrásdelatiendaparatirarmeunpedoyvaciarlavejiga,¿enquétumbaestoymeando…?SeñorHao,¿estoyhablandoinglésdemasiadodeprisa?¿Meestoyhaciendoentender?

Hao entendía lo que quería decir el coronel, y sí, quería mostrarse de acuerdo, todo erasimplementeaguaquedesembocabaenmaresmásymásgrandes,ysolamenteloquehacemosenelmomentopresentepuedesalvarnos…Peroloquesuvocabulariolepermitiódecirfue:

—Esverdad.Esocreo.Sí.Ahoraalosdoshombreslosdistrajounapequeñarataotalvezunaranaqueentróbrincandocon

descaropor lapuertaprincipal.ElcoronelsorprendióaHaoreaccionandoconviolenciaaaquellaintrusión, lanzándoseenplanchasobreelhombrecilloyderribándolohaciaatrás,consillay todo,haciendoquelanucadeHaogolpearaelsuelodetierraapisonadayeldolorlenublaralavistacomounaexplosióndeagujasheladas.Lavisiónseleaclarómientraselobjeto,porqueesoesloqueera,ynounroedor,sedeteníaasolounmetrodesucara,yentoncesélentendióqueeraprobablementeunagranadayqueloibaamatar.Algocayóconunruidosecosobrelagranada.Elsoldadolaacababadecubrirconsucascoyacontinuaciónsedejócaer,noconpresteza,sinoconciertareticencia,ycubrióelcascoconsucuerpo,mirandofijamenteprimeroalsuelodetierrayluegohacialacaradeHao,queestabaaescasoscentímetrosdelasuya,deformaquelosojosselevolvieronlegiblesmientrasélseencogíaentornoasuterror.Pasaronunossegundosinterminablesdesilenciovoluminoso.

Elsilenciosemantuvo.Mássegundosinterminables.Elsoldadonoalterólaexpresióndesucaraytampocorespiró,peroelalmalevolvióalosojosysequedómirandoaHaoconcaradeentender.

Hao fue consciente de que tenía al coronel tirado sobre su pecho, de que se le había echadoencimaalmismotiempoqueelsoldadosetirabasobreelcasco.Fueconscientedeldolorquesentíaenlostobillos,enlacabeza,ydelpesodelenormeamericano.Haointentódarunafuertebocanadadeaire,seestabaasfixiando.Elsoldadotambiéndejóescaparelairequehabíaestadoreteniendo,yHaosintióqueelalientodelsoldado lebañaba lacara.Por finelcoronelapoyó laspalmasde lasmanosenelsueloaambosladosdeloshombrosdeHaoyseincorporóhastaponersederodillas,permitiendoqueHaollenaralospulmones.

El coronel se puso de pie como si fuera un hombremuy anciano y se inclinó para agarrar alsoldadodelbrazo.

—No pasa nada, hijo.—El soldado era sordo—. Levántate. Levanta, hijo.Vamos, venga, hijo.Levántate.

El joven, encontrando vida en su cuerpo, venció parcialmente su shock y rodó hasta darse lavuelta.Elcoronelseapresuróaecharaunladoelcasco,cogerlagranadademanoytirarlaporlobajohacialapuerta,perolagranadagolpeólaparedysolamentellegóalumbral.

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—Malditasea—dijo.Seacercóaella,seagachóylacogióconfuerza,despuéssalióporlapuertayfuehastaelpozo.

Apartólatapaaunladoytiróelartefactoalasprofundidades.Porfinregresóaledificioyapagóelgenerador.

Losdemáslosiguieronafuera,aunquetalveznofueralomásaconsejable.LaseñoraVansepusoaatenderalsoldadoyahablarleeninglésmuydeprisamientraslequitabaelpolvodelacamisaylospantalones con energía, casi con histeria, como si estuviera intentando apagar un fuego. Cuandoterminó,sepusomanosalaobraconHao,limpiándolelatierraqueteníaenlapartedeatrásdelacamisa.

—Lagentedeaquíesmala—dijoeninglés—.Estoesloquepasaconestagentehorrible.Elmaestrosaliódeltemplo.Desdesusitioalotroladodelapantallanohabíapresenciadocasi

nada.CuandoHaolecontólodelagranada,diodospasoslargoshaciaatrás,apartándosedelbrocaldelpozo.

—Oiga,losiento—dijoelcoronel—.Elpozoeselsitiomásrápidoquesemehaocurrido.Haotradujoladisculpadelcoronelyluegolarespuestadelmaestro:—Creoqueesseguro.—Siesagranadaexplota,levaallenarelaguadebarro.—Peroluegoseamansarádenuevo—dijoelmaestro.—Esepozopareceprofundo.¿Yesdecemento?—Construccióndecemento—dijoHao.—Esdeprimera.—¿Deprimera?—Queestámuybienhecho.—Sí.LocolocólaCruzRojasuiza.—¿Cuándo?—Nosécuándo.—Debendehaberoídoelruidoespantosoquehaceesegeneradordeloscojones,¿no?—dijoel

coronel.Amododerespuesta,Haofruncióloslabios.Haosequedóesperandoporcortesíamientraslosvisitantescargabansuscosasyllamabanpor

radioalcampamentodelamontañadelaBuenaSuerte.—Vamosasubirdevueltaalacolina—dijoelcoronel.—Bien.Esmásseguroallí—acordóHao.Alcabodeunosminutosllegóunapatrulladetresjeepsllenosdesoldadosyelconvoyseadentró

conunruidodemotoresenlanoche.Haoentróconsigiloenelauladelaescuelaypalpólaparedenbuscadeunclavo.Sedesvistióy

colgólacamisaylospantalones,barriósucolchonetadepajaconlasmanosydesenrollódosmetrosdeteladelinoparaprotegersedelosmosquitos.Elmaestrolooyódesdeelotroladodelapared,enel templo,y levantó lavozparadesearlebuenasnoches.Haorespondióenvozbajayseacostóencalzoncillosycamisetaenlamáscompletaoscuridad.

Aaquelcoronel,Haonunca lohabíavistoconuniforme.Noeraalgoque le sorprendiera.Poralguna razón todos los americanos le parecían civiles, aunque los únicos americanos que hubieravistoensuvidafueranmiembrosdelgobiernoydelejército,yunoscuantosmisioneros.Yaunasí,

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pensabaen losamericanoscomoenvaqueros.Elvalordel jovensoldado lohabíaasombrado.TalvezfuerabuenoquehubieranvenidoaVietnam.

Pero,aunconlapareddepormedio,notabaqueelmaestroestabafuriosoconsigomismoportenertratoconelcoronel.Elamericanoeraatractivo,fascinante,peroafindecuentaslosamericanosno eranmás que otra horda de titiriteros.Cae el telón sobre los franceses, se levanta de nuevo eltelón,yempiezalarepresentacióndetíteresdelosamericanos.Perolaépocadelosesclavosylasmarionetas se había terminado.Unmillar de años sometidos a los chinos, después la dominaciónfrancesa…todoaquellosehabíaacabado.Ahoraveníalalibertad.

Haohabló envozbaja con elmaestro.Ledeseó felices sueños.Él tampocopodía dormir.Lastripas leardíandemiedo.¿Ysi le llegabaotragranada rodandoprocedentede lanoche?Mientrasintentabaoírasusasesinos,fueconscientedelavidaopresivadelaselva,delestruendocolectivodelosinsectos,tanfuertecomoeldecualquierciudadamediodía.Unamaldiciónpesabasobretodo.Sumujer estaba enferma, su sobrino estabamuerto, las guerras no iban a parar nunca. Encontró lassandaliascon lospiesysalióalpozo,bebióde la lataaoscurasy recobróelaplomo.Nadapodíahacerledaño.Habíavivido,habíaconocidoelamor,ytambiénnumerosasmuestrasdebondad.¡Quévidatanafortunada!SerefrescólasentrañasconaguaprocedentedelasprofundidadesdeVietnam.

***

Después de tirar rodando el artefacto al interior del templo,Trung diomedia vuelta y corrió pordetrásdelahileradechozasintentandonohacerruidohastaquellegóalsendero.Pocosmetrosmásadelante,aminorólamarchayescuchó.Voces,movimiento.Peroningunaexplosión.

Unminuto.Dosminutos.Dehaberlellegadoelruido,nolohabríaoídoporculpadelestruendodesupropiopulso.

Estabaquietoenmediodelestrechosendero,conlosbrazoscruzadossobreelvientreylapenasaliendoapresióndesuinterior.Nohabíaesperadoqueaquellostontosestuvieranallísentadosjuntoconelamericano.Hacíaañosquenolloraba.

Siloshubierallegadoamatar,noestaríallorandotanto.Desahogarsedeaquellamaneraerabueno.Lasancianasdecían:Esparcetuslágrimas,sonbuenas

paralacosecha.Dechicohabíalloradopormuchasrazones.Desdeentonces,nomucho.Continuóporelsendero.EnSaigónlehabíandadosolamenteunagranada.Bueno.Lehabíandichoqueesperaraalcivilamericanoquetraíaelproyectordepelículas.Unobjetivo

concreto. Él no les había preguntado por qué nomandaban a un buen tirador con un rifle.Habíasupuestoquelamuertedelamericanoteníaqueparecerunaccidente.

Tuvoqueseguirelarroyoduranteunbrevetrechoparaeludirunvillorriodondevivíanalgunosperrosbastanteruidosos.Siguiendolacorrientellegóalacasadelacélulaqueestabaalmandodelazona.Susocupantesdormían.Eneljardíndiminutoquehabíatraslamismasepusoencuclillasconel traseroapoyadoenel troncodeunárbol,seenvolvió lacabezaconun trozode telayapoyó lacabezasobrelasrodillas.Descansóunpardehoras.

No sabía por qué le había pedido fondos a su amigoHao.No tenía órdenes de iniciar ningúncontacto.Peronoleparecióbuenaideaexaminarsuspropiasmotivaciones.

Inmediatamente después del segundo canto del gallo, despertó a la célula y les informó de sufracaso.Lesuministraronunrifletipo56chino,doscargadoresdeplátanodetreintabalascadauno,

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ylemandaronqueregresaraalcampamentodebandolerosquehabíajuntoalríoVanCoDong,una«base perdida» de la guerrilla Hoa-Hao. Se habían declarado dispuestos a ser trasladados yadoctrinados.

—¿Hahabidoalgúnproblema?—lepreguntóalacélula.—Nadieleshahechodaño.Noencontrarástensionesdeningunaclase.—Muybien.Guardaoselarma.Perodadmeunalinterna.El río estaba crecido. Trung tuvo que llegar a un vado que había muy por encima del

campamento, cruzar al otro lado y regresar caminando corriente abajo, un total de cinco o seiskilómetros.

Ululó comoun búho al encontrarse un puesto de avanzada, un cobertizo de bambú y hojas deplátano,peronadiecontestó.

Elcaminollevabaaunazonacalcinadaquehabíajuntoalríoyqueantiguamentehabíasidounaplazademercado.Alagentequevivíaallíloshabíahechohuirunaplagaymásadelanteunmédicohabíadirigidounaceremoniadesupercheríaenquesequemaronlosedificios.Unpequeñoestablocercanoseguíatodavíaenpie,yahoraservíadecuartel.

Los jóvenes se habían reunido detrás de la edificación para enterrar a uno de sus camaradas.Según le explicaron, un brote demalaria de dos semanas había terminado con él. Ellos le habíanquitado la ropa.Lehabían rociado labocaabiertadegranosdearroz,habían introducidoal jovendesnudoenuna tumbadeunmetroymediodeprofundidadsinataúddeningunaclasey lohabíancubiertoconpuñadoshúmedosyamarillentosdetierra.

Trung se quedó a mirar, apartándose las moscas de la cara con la mano. Los muchachospermanecieroncongregadosalrededordelmontículoduranteunminutomásomenos.Porfinunodeelloshabló.

—Lacosaestámal—dijo—.Ahísefueotro.Eran todos jóvenes; muchos, todavía adolescentes. Su grupo nunca había formado parte del

Vietminh.EranmontañesesignorantesdeBaDenquenosabíannicómoenterrarasusmuertos.Despuésdequeterminaran,sequedóconellosenlapartedeatrásdesubarracónparahablarles,

peronopudohacerotracosaquerepetirloqueotrosyahabíandicho.—Podemosconseguirosmedicinacontralamalaria.Esposiblequepodamostrasladarosalnorte,

a una granja colectiva que llamamos koljoz, donde viviréis en paz y en orden. Pero si queréiscontinuarluchando,ospodemosponerahacertareasmásútiles.

»Estamos centralizados. Tenemos una estructura férrea. Formamos un único puño que cuandohace falta desaparece dentro de una manga. Nuestra voluntad es inamovible. Nuestra voluntad esnuestraarma.Losmayoresejércitoscolonialistasnopuedenhacernadacontraella.Expulsamosalosfrancesesyahoraexpulsaremosalosamericanos,yaniquilaremosyenterraremosasusmarionetas.¿Ellosaseguranlograrvictorias?Quelohagan.Losinvasoresestánluchandocontraelocéano.Noimportacuántasolaspuedanabatir,elocéanodenuestradeterminaciónsigueahí.

»¿Queréis ser libres? La liberación personal es la liberación nacional. Los hombres que osguiabanalprincipioentendíanesto,loaprendieronconlosHoa-Haoyosllevaronhastadondeestáis.Ahoratenéisquevenirconnosotrosyllegarhastaelfinal…queeselprincipioquetodosestamosesperando,elprimerdíadenuestralibertadnacional.

Hacía tanto tiempo que había dejado de asistir a clases que ya no sabía qué era lo que estabadiciendo.

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ATrung lohabíanmandado aquí por el tiempoquehabíapasado sirviendo en el templode laNuevaEstrella, en la aldeavecina.Lesparecíaprobableque conociera a aquellagente.Una ligeraconfusión. Siendo niños, y huérfanos, los había reclutado—secuestrado— río arriba la guerrillaHoa-Hao, originaria del delta delMekong, a la que el Vietminh había expulsado a las montañas.Después los líderesde los chicoshabían abandonado a sus jóvenes reclutas obienhabíanmuerto.Entretanto,laaldeadesusantepasadoshabíadesaparecido,aldispersarloscombatesasushabitantes.Duranteaños,losmuchachoshabíanidobajandomásymásporelVanCoDong,encontrándoseconque no eran bienvenidos en ninguna parte, y por fin se habían detenido en aquella franja bienconocidaenlazonaporsucepaparticularmentevirulentademalaria, llamada«measangre».Nadielosmolestaríamientrasfueranmuriendounotrasotro.

TrunglesexplicóquesufamiliatambiénveníadeBenTre,peroqueélhabíapasadomuchosañosenelNorte.Ahoramismo,yhastalareunificación,elcorazóndeVietnamestabaenelNorte.

—Después de la reunificación, todo Vietnam será nuestro hogar. Millones de kilómetroscuadrados de Vietnam sin partición alguna, sin traslados, sin trastornos del tejido nacional. Nosacostaremosporlanocheenpazynosdespertaremosenotrodíadepaz.Yaquellosdenosotrosquemueranporelcamino,comovuestroamigo,encontraránpazenlatumba.

Miraos,pensó.Desdequenacéishastaquemoríssolohayexilio,errarsinrumboyguerra.—¿Cómoseríanlascosasenlagranjakoljoz?—¿Queréistrabajar?Allítendréistrabajoylibertad.—Perollevamosmuchotiempopornuestracuenta.Yyasomoslibres.—Enlagranjahayunaclasedistintadelibertad.Sí,sí,sí,mentirasynadamás,menudamonstruosidad.Semaldijoasímismoporparticiparen

aquello.Moriddondequeráis,levinieronganasdedecir,peronoosacerquéisalkoljoz.—EshoradellevarosaunareunióndegrupoqueosllevealNorte.Hayuncampamentocercade

BauDon.Esunacaminatalarga.Podemoshacerloenundíasisalimosmañanamuytemprano.—Ya hemos hablado de ello—le dijo uno de ellos—. No tenemos alternativa. Nos vamos al

Norte.Peroestanochelalunaestávacía.Nopodemosviajarmañana.Justodespuésdelalunavacíadamalasuerteempezarunviaje.Acabamosdeperderaotroporculpadelamalasuerte.

—Lamalariano lacausanni lamala suerteni losdioses rencorosos.Lacausanunascriaturasvivasdemasiadopequeñasparaverlas,tanvenenosascomounaserpienteperomáspequeñasqueunamotadepolvo.Aesascriaturaslasllamamosmicrobios.

»Jóveneshermanos,queestoosentreenlacabeza.Todosnosmorimos.¿Queréismoriramanosdeunmicrobio?Lavictoria final secompondrádemuchasderrotas.¿Yqueréisqueosderroteunmicrobio?Cuantoantesnosmarchemos,mejor.

Ellos se limitaron a quedarsemirándolo como si no le entendieran.Probablementemuchosdeellosnoleentendían,detanríoarribaquevenían,unazonacondialectosdistintos.

—Noslovamosapensar—dijoeljoven.Mientrashablabanentreellos,Trungsemantuvoaparteymiróalolejos.Elmismojovenvinoy

letocóelbrazo.—Iremostodosmañana.—Siesaesvuestradecisión—dijoTrung—,entoncesbien.El grupo entero había pasado la noche anterior en blanco con su camarada enfermo. Todo el

mundo estaba cansado. No había nada que hacer, así que enviaron a unos cuantos para apostarse

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como centinelas y el resto se quedaron en el barracón. Trung se sentó apoyado en la pared. Viopaquetes de cigarrillos aplanados que tapaban goteras por todo el techo de paja. Varios gatosescuálidosmerodeabancomiendotrozosdebasuradelsuelo.

Unodelosguerrilleros,unjovenconunsoloojo,trajounabrazadadecocosverdes.Seseñalóelpecho.

—YoMosa—ledijoaTrungenalgunaclasedelenguamontaraz.—Mellamo—locorrigióotro.—MellamoMosa—dijoél,girandolacabezaaunladoparacentrarlaimagendeTrungconsu

únicoojoquefuncionaba.Sonrió:teníalosdientestodoslimados,alestilodeaquellastribusdelamontaña.Conunmachete

tanlargocomolamitaddesupierna,rebanólapartesuperiordeloscocos.Bebierontodoslalecheyhurgaronenlacarneblandaytraslúcidaconesquirlasdelacáscara.

Los jóvenes le ofrecieron un camastro y hasta le dieron una almohada pequeña. Se colocaronformandounaestampadecampamentoalairelibre:unomontabaguardiafueraycincojugabanalascartas dentro mientras uno charlaba y otro roncaba a poca distancia. Trung intentó echar unacabezada, pero no podía dormir. Se imaginó que ellos pasaban muchos días así. Fuera el vientoamainó. Podía oír la crecida del río desbrozando las orillas. Estaba oscureciendo. Los centinelasabandonaronsuspuestosdevigilanciaríoarribayvinieronparalacena.EntotalnoparecíahabermásdequincedeaquellosjóvenessilenciososydemacradosdispersosalolargodeaquellapartedelVanCoDong,protegiéndosedetodoaquelquepudieravenir,noimportabaquién,ysindarsecuentaalparecerdequenoveníanadie.

Mantuvieronelfuegodecocinarardiendosinllamatodalanocheparaahuyentaralosmosquitos.Trungdurmió tapándose lanarizy labocaconsubandana.A losdemásnoparecía importarleselhumo.

La lluvia llegó ya avanzada la madrugada. Los hombres empezaron a guardar sus cosas enrinconessingoterasysecambiarontodosdesitio,repitiendo:«¡Rápido!¡Rápido!».Permanecieronacostadosensusnuevasposicionesmientraslalluviacaíaasualrededorporlosagujerosdeltecho.A la luzde lasvelas,Trungvioque suscarasmirabana lanada.Peronoperdíanel ánimo.Hubocancionesy risas.Eranbuenosmuchachos.Simplemente sededicaban a actuar sobre lamarcha.Amedidaquelalluviaarreció,colocaronmáspaquetesdecigarrillosaplanadosendiversospuntosdeltecho.

A medianoche entraron cuatro perros a hurtadillas. Trung era el único que estaba despierto.Movióelhazdesu linternamientrasellosmerodeabanensilencio.Cuandoelhaz losalcanzó, losanimalessalierondisparadospor lapuertaabierta.La luzatravesóelhumodel fuegodecocinaryjugueteó sobre aquellos jóvenes y muchachos que dormían en grupos de dos o tres. Estabantumbadoscodoconcodo,abrazándoseentreellosobientocándosedeformacasualyfamiliar.

Alamanecersalióconsigilo,sesentóconlaspiernascruzadassobreelsuelohúmedoyafindeaclararse lamente seconcentróen sus inspiracionesyespiraciones, tal comohabíahechodeniñocadamañanaycadanocheeneltemplodelaNuevaEstrella.Dehechohabíavueltoahacerlo,todoslosdías,desdehacíacasiunaño,sin tenerni ideadeporqué.Laprácticaestabahaciendodeéluncomunistabirrioso.Dehecho,yanoestabaconvencidodequelasangreylarevoluciónconstituyeranherramientas útiles para alterar los conceptos de lamente de unapersona. ¿Quién lo había dicho?ProbablementeConfucio:«Nopuedoconvertirunapiedraenunaesculturaconunmazo.Tampoco

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puedoliberarelalmadeunhombreconlaviolencia».Lapazeraelaquí,lapazeraelahora.Lapazprometidaparaotraépocauotrolugareraunamentira.

LoscuatroperrosdelanochepasadahabíansidolasCuatroVerdadesNobles,quehacíanquelasmentirasdeélhuyeranalaoscuridad.

…Yaseestabadesconcentrando.Devolviósuconcienciaalmovimientodesurespiración.VolvióapreguntarseporquélehabíapedidodineroaHao.La cara de Hao cuandome vio: igual a la de aquel cachorro con el que yo jugaba de forma

demasiadoagresiva.Elpequeñínllegóatemerme.Yyoloamaba.Ah,no…… Tarde o temprano la mente se aferra a un pensamiento y lo sigue hasta el laberinto, un

pensamientoseramificahastaconvertirseenotro.Luegoellaberintosedesplomasobresímismoytúteencuentrasenelexterior.Nuncaestuvistedentro:eraunsueño.

Volvióaconcentrarseenlarespiración.Lamañana:unanieblaqueocultabaelríoyunanubeatrapadaenlospicosdemásatrás.Oyóque

loschicossemovíanenelinterior,despertándoseparaencontrarseconelmayordelostriunfosdelatierra: otro día fuera de la tumba. Con los ojos aturdidos, todos salieron arrastrando los pies,envueltosenlasmantas,paramear.

—Jóvenes,mientrasestéisvivos—lesdijo—,averiguadcómosedespiertaunodeestapesadilla.Elloslomiraronconcarassoñolientas.

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1965

Talcomosehabíaconvertidoenrutinasemanal,el lunespor lanocheWilliam«Skip»SandsdelaAgencia Central de Inteligencia estadounidense puso a prueba sus energías acompañando a unapatrulla combinada de la gendarmería y el ejército filipinos en un búsqueda infructuosa de genteinvisibleporentrerecodososcurosdelamontaña.Enaquellaocasión,suamigoelmayorAguinaldono había podido venir y nadie tenía ni idea de qué hacer con el americano. Se pasaron la nocherecorriendo lascarreteras llenasdebachessindecirpalabra,congranestruendo,enunconvoydetres jeeps, en busca de cualquier rastro de guerrilla Huk, tal como era rutinario, y sin encontrarninguno, tal como era rutinario, y justo antes del amanecer, Sands regresó al estadomayor paraencontrarseconlaslucesapagadasyelaireacondicionadoensilencio.Porterceravezenloqueibadesemanahabíafalladolaelectricidadlocal.Abriósuhabitaciónalajunglaysetumbóenlacamaenmediodeuncalorsofocante.

Cuatrohorasmástardeelaparatodelaventanaresucitóyélsedespertódegolpeyporcompletoenmediode lassábanasmojadasdesudor.Sehabíaquedadodormido, lomásprobableeraquesehubieraperdidoeldesayunoyque tuvieraquesaltarsesusejerciciosgimnásticosde lamañana.Seduchó a toda prisa y se puso unos pantalones caqui, una camisa ancha de nativo y una especie devestidodegasaquesellamababarongtagalog,regalodesuamigofilipinoelmayorAguinaldo.

En la planta baja encontró un sitio listo para él a la mesa de caoba por lo demás vacía delcomedor. El hielo se había derretido dentro de su vaso de agua. Al lado del mismo estaban losperiódicosdelamañana,queenrealidaderanlosdeldíaanterior,yllegabandeManilaenunavalijadecorreo.ElcriadoSebastianllegódelacocinaydijo:

—Buenosdías,Skip.Vieneelbarbero.—¿Cuándo?—Vieneahora.—¿Dóndeestá?—Estáenlacocina.¿Quiereusteddesayunoprimero?¿Quierehuevo?—Solocafé,porfavor.—¿Quiereustedbeiconyhuevo?—¿Puedessoportarquetomesolamentecafé?—¿Quéclasedehuevo?Vueltayvuelta.—Bueno,venga,venga.Sesentóalamesadelantedeunventanalconvistasalespectáculodemencialdeunapistadegolf

dedoshoyosrodeadadeselvaexuberante.Aquelpequeñocomplejo—residencia,aposentosdeloscriados, cobertizo y taller— se había construido para servir al personal de vacaciones de la DelMonteCorporation.SandstodavíanohabíaconocidoanadiedeDelMonteyaaquellasalturasyanoesperabaconoceraninguno.Allísolamenteparecíanalojarseotrosdoshombres,unounespecialistainglés en mosquitos y el otro un alemán que Sands sospechaba que era un tipo más siniestro deespecialista,talvezunfrancotirador.

Beiconyhuevosparadesayunar.Huevosdiminutos.Elbeiconsiempreestabasabroso.Veníaconarroz en lugar de patatas. Con un panecillo blando en lugar de tostadas. Había filipinos yendo yviniendoenuniformesblancos,confregonasytrapos,manteniendoarayalamugreyelmoho.Unjoven vestido solamente con unos calzoncillos largos negros pasó bajo el arco que daba al salón

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patinandosobredosmitadesdecocopuestasdelrevés,sacandobrilloalsuelodemadera.SandsleyólaportadadelManilaTimes.AungángsterllamadoBoyGoldenlohabíanasesinado

enlasaladeestardesuapartamento.SandsexaminólafotodelcadáverdeBoyGolden,vestidoconun albornoz, con los brazos y las piernas extendidos en gesto frenético y la lengua colgando porentrelasmandíbulas.

Aparecióelbarbero,unancianoquellevabaunacajademaderaacuestas,ySkipdijo:—Salgamos.Salieronporunaspuertasacristaladasalpatio.Eldíaeradespejadoy teníaunaspecto inofensivo.Con todo,él le temíaalcielo.Seissemanas

seguidasdelluvia,desdeelmismodíaquellegóaManilaamediadosdejunio,yderepenteundíasedetenía.Este era suprimerviaje fuerade las fronterasdeAmérica.Nuncahabía residido fueradeKansashastaquehabíacogidounamaletadecolorrojoanaranjadoysehabíametidoenelautobúsrumboaBloomington,Indiana,paraasistiralauniversidad.Perovariasvecesensuinfanciayunavez más en su adolescencia había ido a Boston para visitar a su familia paterna, la última vezalojándose casi un verano entero entre un tumulto de parientes, una horda irlandesa de poliscorpulentos y veteranos del ejército con pinta demastines guardianes y susmujeres con pinta decaniches preocupados. Ellos lo habían abrumado con su vulgaridad inconsciente y su gregarismoruidoso, lo habían aceptado, lo habían amado y se habían revelado como la familia que él nuncahabíaencontradoenelclandesumadreenelMedioOeste,quesetratabanentreelloscomosimplesconocidos.Teníamuypocosrecuerdosdesupadre,fallecidoenPearlHarbor.SustíosirlandesesdeBostonlehabíanenseñadoaSkipenquiénconvertirse,habíandelimitadoelcontornoqueélllenaríacuandocreciera.Élnopensóqueloestuvierallenando.Solamentequeaquelloponíademanifiestolopequeñoqueera.

Ahora recibía de aquellos filipinos la misma cálida bienvenida, de aquellos encantadoresirlandesesenminiatura.AcababadeiniciarsuoctavasemanaenlasFilipinas.Legustabalagentedeallíyodiabaelclima.EstabaempezandosutercerañodeservicioaEstadosUnidoscomomiembrode su Agencia Central de Inteligencia. Él consideraba que tanto la Agencia como su país erangloriosos.

—Soloquieroquemecortesdeloslados—ledijoalanciano.PorinfluenciadeldifuntopresidenteKennedy,habíaempezadoadejarsecrecerelpeloqueantes

llevabaalrape,ytambiénhacíamuypocoque,talvezporinfluenciadelosvestigiosespañolesdelaregión,sehabíadejadobigote.

Mientraselancianodabatijeretazosasucabeza,Sandsconsultóunsegundooráculo,elEnquirerde Manila: el artículo más grande de la portada se anunciaba como el primero de una serie deartículos escritos por peregrinos filipinos que informaban de milagros asombrosos, incluyendocuracionesdeasma,unacruzdemaderaquesehabíavueltodeoro,unacruzdepiedraquesemovía,uniconodeyesoquellorabayotroiconoquesangraba.

El barbero le sostuvo un espejo de doce por veinte delante de la cara. Era una suerte que notuvieraquedejarseverpor lacapital.Elbigoteexistíaúnicamentecomoesperanzayelpelohabíallegadoaunestadiointermedio,demasiadolargoparapasardesapercibidoydemasiadocortoparasercontrolado.¿Cuántosañoshabíapasadoconelpeloalrape,ochoonueve,desdelamañanadesuentrevistaconlosreclutadoresdelaAgenciaquehabíanvenidoalcampusdeBloomington?Losdoshombresllevabantrajesdeejecutivoyelpeloalrape,talcomoélhabíaobservadolatardeanterior,

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alespiarsullegadaalaresidenciadeprofesoresinvitados:lallegadadelosreclutadoresrapadosdelaCentraldeInteligencia.Lehabíagustadolapalabra«Central».

Aquí,aundíaencochedeManila,nosesentíaenelcentrodenada.Leyendoperiódicosllenosdesuperchería. Mirando fijamente las parras de las paredes estucadas, las franjas de moho de lasparedes,loslagartosdelasparedes,losgranosdebarrodelasparedes.

Desde su atalaya del patio, Sands detectó tensión en el aire, alguna clase de rencilla reprimidaentre los trabajadores—nolegustabaconsiderarlos«sirvientes»—delacasa.Aquello lepicabalacuriosidad. Pero como lo habían criado en el corazón de América, tenía la firme costumbre demantenerse alejado de las controversias personales, de fingir que no veía los ceños fruncidos, derespetar las evasivas y de hacerse el sordo cuando alguien levantaba la voz en la habitación de allado.

Sebastiansalióalpatioconaspectobastantenerviosoydijo:—Havenidoalguienaverle.—¿Quiénes?—Elloslodirán.Yonopuedodecir.Peropasaronveinteminutosynosaliónadieaverlo.Sands terminó de cortarse el pelo y entró en la fresca sala de estar con el suelo de madera

pulimentada.Vacía.YenelcomedornoestabamásqueSebastian,poniendolamesaparaelalmuerzo.—¿Nohabíavenidoalguienaverme?—¿Alguien?No…creoquenadie.—¿Nomedijistequeteníaunavisita?—Nadie,señor.—Genial,gracias,nomeloexpliques.Fuehastaunsillóndemimbrequehabíaenelpatio.Allípodíaobienescucharlasnoticiasobien

contemplar cómo el entomólogo inglés, un hombre llamado Anders Pitchfork, desconchaba unapelotadegolfconunhierro3deunladoparaotroentrelosdosgreensatamañorealdeldiminutocampo de golf. Sus dos acres aproximados de césped estaban minuciosamente cuidados y eranbiológicamenteuniformes, rodeadosporunaalambradaaltacon laque lavidavegetalcircundanteforcejeabadeformaoscuraeinexorable.Pitchfork,unlondinenseentrecanovestidoconbermudasyunacamisadeBan-Lonamarilla,expertoenmosquitosanófeles,sepasabalasmañanasallíjugandohastaqueelsoldejabaatráseltejadodeledificioyloexpulsabaahacersutrabajo,queeraerradicarlamalaria.

En el otro extremo de la columnata, Sands vio que el visitante alemán estaba desayunando enpijamaenelpatioprivadoqueteníajuntoasuhabitación.Elalemánhabíavenidoaestazonaamataraalguien.Sandsnorecordabahaberhabladoconélmásqueunpardeveces.El jefedesecciónlohabía acompañado desde Manila y, aunque en principio la visita del jefe había estado destinadaostensiblementeatratarconSands,despuéssehabíapasadotodoeltiempoconelalemánylehabíadadoinstruccionesaSandsdeque«semantuvieradisponibleylodejaraenpaz».

En cuanto a Pitchfork, el experto en malaria de nombre inolvidable, simplemente estabarecabandoinformación.Posiblementedirigiendoaagentes,oalgoparecido,enlasaldeas.

A Sands le gustaba jugar a adivinar las ocupaciones de todo el mundo. La gente iba y veníahaciendorecadosturbios.EnGranBretañaaaquelsitiopodríanhaberlollamadoun«escondrijo»deespías. En Estados Unidos, sin embargo, en Virginia, a Sands lo habían entrenado para que no

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consideraraseguroningúnescondrijo.Paraquenoencontraraningunaislaenelmar.Elcoronel,suinstructormáscercano,sehabíaaseguradodequetodossusreclutasmemorizaran«LaCostadeLee»delMobyDickdeMelville:

¡Masdadoqueenlafaltaabsolutadetierrafirmeresidelamásaltadelasverdades—enlafaltadeorillas,indefinidaigualqueDios—,esmejorentoncesperecereneseinfinitoaullanteque serarrojadocon ignominiaa lacosta,pormuchoque seestéa salvo! ¡Pues soncomogusanos,oh,aquellosqueansíanarrastrarsealacosta!

Pitchforkcolocósupelotaenunárbol,eligióunpalodemaderadecabezagrandedelabolsadegolf que había en el césped y tiró una pelota por encima de la cerca, a las profundidades de lavegetación.

Entretanto,deacuerdoconelEnquirer,lospiratashabíancapturadounbuquecisternadepetróleoenelmardeSulúyhabíanmatadoadosdesustripulantes.EnCebúCity,auncandidatoaalcaldeyaunode suspartidarios loshabíaacribilladoabalazoselpropiohermanodel candidato.El asesinoapoyabaaloponentedesuhermano,queeraelpadredeambos.YalgobernadordelaprovinciadeCamiguinlohabíaabatido,enpalabrasdelperiódico,«unlocofurioso»,quetambiénhabíamatadoaotrasdospersonas«despuésdeperderlosestribos».

Yahoraelalemánestabapracticandoconunacerbatanacontraunárboldelcaucho:unarmadefabricaciónnadaprimitiva,supusoSands,yaquesedividíalimpiamenteentressecciones.Montada,medíametro ymedio de largo, y los dardos parecían de quince o veinte centímetros de longitud,blancosyacabadosenpunta.Dehecho,parecidosalossoportesparalaboladegolfperomáslargos.Elalemánloslanzabaconpericiaalacortezadesuobjetivo,haciendopausasamenudoparasecarselacaraconunpañuelo.

Skipteníaunacitaenlaaldeaconsuamigo,elmayordelejércitofilipinoEddieAguinaldo.Skip y el asesino alemán, que es posible que no fuera ningún asesino, o ni siquiera alemán,

recorrieron juntos en coche lamitaddel caminodebajadaque llevabade lamontaña almercado.Cogieron el coche con aire acondicionado del servicio y se dedicaron a contemplar desde lasventanillascerradasdelasientotraserolascasascontechosdepajayfabricadascontroncostorcidosymal cortados, las cabras atadas, los pollos que deambulaban de un lado a otro y los perros quecaminaban tambaleantes. Cuando pasaban frente a las abuelitas acuclilladas en los poyospolvorientos, escupiendonuezde areca roja, las cuadrillasdeniñosdiminutos se separabande lasviejasyechabanacorrerjuntoalcoche.

—¿Quédicen?Estándiciendoalgo.—«Dillas»—ledijoSandsalalemán.—¿Cómo?¿Hadichousted«dillas»?¿Yquésignificaeso?—Sus padres solían pedirles cerillas a los soldados americanos. «¡Cerillas! ¡Cerillas!». Ahora

ellos gritan simplemente «Dillas, dillas, dillas». No saben qué quiere decir. Ya no hay soldadosamericanosporaquí,ysiquierenunacerilladicen«pósporo».

Perolasancianassalieronfuriosasarecuperaralosniños,deunaformaqueélnuncahabíavistoantes.

—¿Quélepasaaestagente?—lepreguntóalalemán.

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—Quenecesitanmejorarsudieta.Notienenbastantesproteínas.—¿Nolonota?Aquípasaalgo.—Haydemasiadopocopescadoaquíenlasmontañas.Notienenbastantesproteínas.—Ernest—dijoSkip,inclinándosehaciadelanteyhablandoconelconductor—.¿Pasaalgohoy

enlaaldea?—Esposible,nolosé—dijoErnest—.Puedopreguntarporahí.VeníadeManilaysuingléseraexcelente.El mayor Eduardo Aguinaldo, con su uniforme militar almidonado, estaba esperando en el

asiento trasero de un Mercedes negro delante del Monte Mayon, un restaurante dirigido por unitalianoysufamiliafilipina.Pavese,elitaliano,servíacualquiercosaquelagenteestuvieradispuestaa comprar, queno eramucho.Para los visitantes, Pavese preparabaunos espaguetis a la boloñesabastantedeliciososyconmuchohígadodecabra.Elmayorlediolabienvenidaalalemáneinsistióenquelollamara«Eddie»yenquealmorzaraconellos.

ParasorpresadeSkip,elalemánaceptó.Suinvitadocomíadeformaabundanteyvoluptuosa.Noestaba gordo, pero la comida parecía ser su pasión. Skip nunca lo había visto tan feliz. Era unpersonaje barbudo y con pinta de oso, con unas gafas de montura gruesa y marrón, la piel másquemadaquebronceadayunoslabiosgrandesyblandosqueselehumedecíanalhablar.

—TomemoselcaféexpresodePavese,quelollenaaunodevida—dijoAguinaldo—.Skipsehapasadolanochedespierto.Estácansado.

—¡Nunca!Yonuncamecanso.—¿Lehantratadobienmishombres?—Conelmayorrespeto.Gracias.—PeronolocalizóustedaningúnHuk.—Noamenosqueestuvieranescondidosjuntoalacarreteraynosotrosnolosviéramos.—¿QuémedicedeloschicosdelaGF?—¿LaGF?—Sereferíaalagendarmeríafilipina—.LaGFhaestadobien.Nosemetenmuchoen

lascosasdelosdemás.—Noquierenlaayudadelejército.Ynolosculpo.Noestamosenguerra.EstosHuknosonmás

querenegados.Hansidoreducidosalestatusdebandidos.—Correcto.Peroaquellasexcursionescontribuíana laúnicaestrategiaque teníaSandsparaganarpuntosy

obteneruntrasladoaManilao,todavíamejor,aSaigón.Porencimadetodo,aquellaspatrullasporlaselva loaliviabande la incómodasensacióndehaber recibidounentrenamiento riguroso,habersebalanceadoconcuerdasporparedesdeacantilados,habersetiradoenparacaídasalinteriordenubesde tormenta, haber sudado mientras preparaba recetas de materiales altamente explosivos, haberpasadoporencimadealambredepúas,haberatravesadotorrentescrecidosenplenanocheoscura,habersidoatadoaunasillaeinterrogadodurantehoras,ytodoparaacabarhaciendodesecretarioynada más. Recopilando. Poniendo cosas en orden. Cosas que podía hacer cualquier bibliotecariasolterona.

—¿Yquéhizoustedanoche?—lepreguntóaEddie.—¿Yo?MefuialacamatempranoyestuveleyendoJamesBond.—Estádebroma.—Talvezsalgamosdepatrullaestanoche.¿Quierevenir?—lepreguntóAguinaldoalalemán—.

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Puedeserbastanteestimulante.Elalemánestabaconfuso.—¿Conquépropósito?—lepreguntóaSands.—Nuestroamigonovaavenir—ledijoSandsaEddie.—Yovoymáslejos—explicóelalemán.—¿Máslejos?—Hastaeltren.—Ah. La estación. Va usted a Manila —dijo Aguinaldo—. Es una pena. Nuestras pequeñas

patrullas pueden ser experiencias vigorizantes—dijo, como si se vieran amenudo bajo el fuegoenemigo.

Nuncahabíapasadonadaparecido,porloquesabíaSkip.Eddieteníaaspectodemuchacho,perolegustabadarunaimpresiónamenazadora.

Hacía tres semanas, enManila, Sands había visto a Eddie interpretar a Henry Higgins en unaproduccióndeMyFairLadyynosepodíaborrardelacabezalaimagendesuamigoelmayortodomaquilladoyllenodecoloreteypavoneándoseporelescenarioconchaquetadeesmoquin.Haciendounapausa.Volviéndosehaciaunahermosaactrizfilipinaydiciéndole:«Liza,¿dóndedemoniosestánmispantuflas?».Elpúblicocompuestodehombresdenegocios filipinosconsus familias sehabíacaídoalsuelodelarisa.Sandstambiénhabíaquedadoimpresionado.

—¿Quéesesacosaconlaqueestabaustedpracticando?—lepreguntóSandsalalemán.—Serefierealsumpit.Sí.—¿Unacerbatana?—Sí.DelatribudelosMoro.—¿Sumpitesunapalabraentagalo?—Creoqueesdeusomuycomún—dijoEddie.—Esunapalabraqueseusaportodasestasislas—asintióelalemán.—¿Ydequéestáhecha?—¿Serefierealafabricación?—Sí.—Demagnesio.—Magnesio.PorelamordeDios.—Muyresistente.Bastantepesada.—¿Quiénlaforjóparausted?Lo había preguntado solamente para conversar, pero le asombró ver que Eddie y el asesino

intercambiabanunamirada.—UnagenteprivadadeManila—dijoelalemán,ySandsdejóqueeltemaseacabaraahí.Después de la comida, los tres tomaron café expreso en tacitas diminutas. Antes de llegar a

aquellaaldearemota,Sandsnolohabíaprobadonunca.—¿Quéestápasandohoy,Eddie?—Noséaquéserefiere.—¿Hayalgunaclasede,nolosé,algunaclasedeaniversariotriste?¿Porejemplo,elaniversario

delamuertedealgúngranlíder?¿Porquétodoelmundoparecetanhosco?—Quieredecirtenso.—Sí.Tensamentehosco.

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—Creo que los han asustado, Skip. Hay un vampiro suelto. Una especie de vampiro llamadoaswang.

Elalemándijo:—¿Vampiro?¿QuieredecirDrácula?—Elaswang se puede convertir en cualquier persona, adoptar cualquier forma. Se entiende de

inmediatoelproblema:esoquieredecirquecualquierapuedeserunvampiro.Cuandoempiezaunrumorcomoeste,seextiendeporlaaldeacomosifueravenenofrío.Unanochedelasemanapasada,el pasadomiércoles, sobre las ocho en punto, vi a unamultitud delante delmercado, dándole unapalizaaunaancianaygritando:«Aswang,aswang!».

—¿Unapaliza?¿Aunaanciana?—dijoSkip—.¿Conquélepegaban?—Contodoloquetuvieranamano.Nolopudevermuybien.Estabaoscuro.Meparecióverque

la anciana se escapaba doblando la esquina. Pero más tarde un tendero me dijo que se habíaconvertidoenunloroysehabíaidovolando.Elloromordióaunbebéyelbebémurióalcabodedoshoras.Elsacerdotenopuedehacernada.Hastaunsacerdoteseveimpotente.

—Estagentesoncomoniñosdementes—dijoelalemán.Después de que terminaran de comer, y su compañero de viaje continuara su caminomontaña

abajoenelcochedelserviciocondestinoalalíneaferroviariaquellevabaaManila,Skipdijo:—¿Conoceaesetipo?—No—dijoEddie—.¿Deverdadcreequeesalemán?—Creoqueesextranjero.Yextraño.—Sereunióconelcoronel,yahorasemarcha.—¿Conelcoronel…?¿Cuándo?—Dicemuchoelquenosehayapresentado.—¿Lehapreguntadoustedcómosellama?—No.¿Cómodicellamarse?—Noselohepreguntado.—Nihamencionadoeltemadepagar.Yapagoyo.—Eddieconversóconunafilipinarollizaque

SkipcreíaqueeralaseñoraPaveseyregresódiciendo—:Déjemeiracompraralgodefrutaparaeldesayunodemañana.

Sandsdijo:—Tengoentendidoqueenestaépocadelañolosmangosylosplátanossonbuenos.Todalafruta

tropical.—¿Lodicedebroma?—Claro.Entraronenelmercadoconsutejadobajoderetalesdelonaysuatmósferadecasqueríaranciay

putrefacciónvegetal.Losseguía renqueandounacomitivademendigos indeciblementedeformesylisiados, arrastrándose por el suelo de tierra dura. También se les acercaban los niños, pero losmendigos,montados en carritos con ruedas, o bien apoyados enmuñonesmetidos en cáscaras decoco, o bien con las caras llenas de cicatrices y ciegas y sin dientes, ahuyentaban a los niñosazotándolosconbastonesoconlosmuñonesdesusextremidadesamputadas,soltandopalabrotasymascullandoentredientes.Aguinaldodesenfundósupistolayencañonóaaquellairritantecuadrilla,haciendoqueretrocedierancomounsolohombreylosdejaranenpaz.Luegosededicóaregatearenérgicamenteconunaancianaquevendíapapayasyporfinregresaronalacalle.

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EddiellevóaSandsensuMercedesdevueltaalaresidenciadeDelMonte.Demomentonohabíapasadonadaentreellos.Sandsevitópreguntarlesisureuniónhabíatenidoalgunafinalidadconcreta.Eddieentróconél,peronosinantesabrirelmaleterodelcocheysacarunpaquetelargoypesadodepapelmarrónatadoconcordeles.

—Tengoalgoparausted.Unregalodedespedida.Apeticiónsuya,sevolvieronasentarenelasientodeatrás,tapizadodecueroycubiertoconuna

sábanablancaqueseestabaponiendogris.EddiesostuvoelpaquetesobresusrodillasyretiróelenvoltoriodeunacarabinaM1delasque

usaban los paracaidistas, con la empuñadura metálica y plegable. El guardamanos de madera delcañónhabíasidobarnizadoyteníaungrabadodediseñointrincado.LeentregóelarmaaSkip.

Sandslomiródesdetodoslosángulos.Eddieenfocóelgrabadoconunalinternadebolsillo.—Estoesmaravilloso,Eddie.Esuntrabajofantástico.Teestoymuyagradecido.—Lacorreaesdecuero.—Sí.Yaloveo.—Estámuybien.—Estoyhonradoyagradecido.Sandslodecíadecorazón.—HantrabajadoenellaunpardemuchachosdelaOficinaNacionaldeInvestigación.Sonunos

fabricantesdearmasmaravillosos.—Fantástico.Perolohasllamadoregalodedespedida.¿Quiénsedespide?—¿Esquetodavíanolehandadolaorden?—No.Nomehandadonada.¿Quépasa?—Nada. —El mayor sonrió con su sonrisa afectada de Henry Higgins—. Pero puede que le

asignenaustedunamisión.—¡Nomepongaenlaselva,Eddie,nomepongabajolalluvia!¡Nomepongaenunatiendade

campañacongoteras!—¿Acasohedichoalgo?Sétanpocodeltemacomousted.¿Hahabladodeelloconelcoronel?—Hacesemanasquenoloveo.EstáenWashington.—Estáaquí.—¿QuieredecirenManila?—Aquí,enSanMarcos.Dehecho,estoysegurodequeestáenlacasa.—¿Enlacasa?PorelamordeDios.No.Esunchiste.—Tengoentendidoqueesfamiliadeusted.—Esunchiste,¿verdad?—No a menos que sea él quien está haciendo el chiste. He hablado con él por teléfono esta

mañana.Mehadichoqueestaballamandodesdeestacasa.—Ajá.Sands se sentía estúpido por no estar emitiendo más que sílabas, pero se había quedado sin

palabras.—¿Loconoceustedbien?—Tanbiencomo…hum.Nolosé.Élmeentrenó.—Esoquieredecirquenoesustedquienloconoceaél.Queesélquienloconoceausted.—Ya,ya.

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—¿Esverdadqueelcoronelesparientedeusted?¿Queestíosuyooalgoparecido?—¿Esesoloqueserumorea?—Talvezestoysiendoindiscreto.—Sí,esmitío.Elhermanodemipadre.—Fascinante.—Losiento,Eddie.Nomegustaquesesepa.—Perosiesunhombregenial.—Noeseso.Esquenomegustasacarprovechodesuapellido.—Tendríaqueestarorgullosodesufamilia,Skip.Estésiempreorgullosodesufamilia.Sandsentróencasaparaasegurarsedequeeraunaequivocación,peroeracompletamentecierto.

Elcoronel,sutío,estabasentadoenlasaladeestarbebiendocóctelesconAndersPitchfork.—Veoquetehasvestidoparalavelada—dijoelcoronel,refiriéndosealbarongdeSkip.Selevantóyofreciósumano,queerafuerteyestabaligeramentehúmedayfríadesostenersu

copa.Elcoronelllevabaunadesuscamisasdedibujoshawaianos.Teníaelpechofuerteyalmismotiempounatripaprominente,ademásdeserpatizamboyestarquemadoporelsol.Noeramuchomásalto que el mayor filipino, pero parecía una montaña. Llevaba el pelo canoso al rape sobre unacabezaqueparecíaunyunque.Enaquelprecisomomentoestababorrachoyloúnicoquelomanteníaerguidoeraelpoderdesupropiahistoria:fútbolamericanoalasórdenesdeKnuteRockneenNotreDame,misionesparalosFlyingTigersenBirmania,operacionesantiguerrillaaquíenlaselvaconEdwardLansdaley,más recientemente,enVietnamdelSur.En1941sehabíapasadovariosmesescomoprisionerodeguerraenBirmania,perohabíalogradoescapar.YhabíacombatidocontralosTigresMalayos y contra losPathetLao; había combatido al enemigo enmuchos frentes asiáticos.Skiploquería,peronosealegródeverlo.

—Eddie—dijoel coronel, cogiendo lamanodelmayorentre las suyas, luegomovió lamanoizquierda hacia arriba y lo agarró por encima del codo, masajeándole el bíceps—.Emborrachémonos.

—¡Perosiestemprano!—¿Queestemprano?¡Carajo…!¡Ydemasiadotardeparaqueyocambiederumbo!—¡Estemprano!Unténadamásporfavor—ledijoEddiealcriado,ySkippidiólomismo.ElcoronelmiróconcuriosidadelpaquetequeSkipteníadebajodelbrazo.—¿Traespescadoparacenar?—¡Enséñasela!—dijoEddie,ySkipdejólaM1sobrelamesilladecafédelatón,descansandoen

suenvoltorioabierto.Elcoronelsesentóysostuvoel riflesobre lasrodillas igualquehabíahechoSkipenelcoche

hacíaunmomento,leyendosusintrincadosgrabadosconlosdedos.—Untrabajofantástico.—Sonrió.Peronoestabamirandoanadiemientrassonreía.Despuésse

agachóparacogeralgoqueteníaenelsueloasuladoyselodioaSkip,unabolsadepapelmarróndelasqueseusanparallevarcomida—.Telocambio.

—No,gracias—dijoSkip.—¿Quéhayenlabolsa?—preguntóEddie.—Unpaquetedelmensajerodelembajador—dijoelcoronel.—¡Ah!¡Quémisterioso!Comosiempre, el coronelbebíadedosvasosa lavez.Lehizouna señal conel segundovaso

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vacíoalcriado.—Sebastian,¿setehaacabadoelBushmills?—¡MarchandounadewhiskyirlandésBushmills!—dijoeljoven.—Parecequeloscriadosleconocen—dijoPitchfork.—Puesnovengodevisitaamenudo.—Creoqueletienenrespeto.—Talvezesquedoybuenaspropinas.Elcoronelsepusodepieyfuehastalacubiteraquehabíaenelaparadorparaecharseunparde

hielosenelvasoconlosdedos,despuéssequedódepiecontemplandolosterrenosconairedeestara punto de compartir un pensamiento. Los demás esperaron, pero lo que hizo al final fue dar unsorbodesubebida.

—Coronel—dijoPitchfork—,¿juegaustedalgolf?Eddieserio.—Si tienta a nuestro coronel para que salga ahí—dijo—, va a destruir por completo nuestras

vistas.—Evitoelsoldelostrópicos—dijoelcoronel.Sequedómirandoamorosamenteeltraserodeunadoncellaqueestabacolocandoelserviciodel

tésobrelamesabajadelatón.Cuandotodoslosdemástuvieronalgoenlamanoconquebrindar,éllevantósuvaso:

—PorelúltimoHuk.Paraquevayaprontoalatumba.—¡PorelúltimoHuk!—gritaronlosotros.Elcoroneldiountragolargo,ahogóunaexclamaciónydijo:—Queelenemigoestéanuestraaltura.—Asísehabla—dijoPitchfork.Skipllevólabolsadepapelylahermosaarmaasusaposentosydejóambascosassobrelacama,

aliviadopor tomarseunminutoasolas.Ladoncellahabíaabierto lasventanasparadejarentrareldía.Skipcerrólasventanasdelamasyencendiósuaireacondicionado.

Vació los contenidos de la bolsa sobre la cama: una docena de frascos de goma arábiga dedoscientosgramoscadauno.Aqueleraelmaterialdesuexistencia.

Todo el sistema de catalogación por tarjetas del coronel, más de diecinueve mil tarjetasordenadas de lamás antigua a lamás reciente, estaba sobre cuatromesas plegables pegadas a lasparedesqueflanqueabanlapuertadelcuartodebañodeSkip,másdediecinuevemiltarjetasdeochopordocedentrodeunadocenadecajonesestrechosdemaderadiseñados, según lehabíadichoelcoronel,enlasinstalacionesdemantenimientodelcomplejogubernamentalSeafrontdeManila.Enelsuelo de debajo de las mesas esperaban siete cajas de quince kilos cada una llenas de tarjetas enblancoydoscajasqueconteníanmillaresde fotocopiasa tamaño folio, losduplicadosdelmismosistemadediecinuevemiltarjetas,arazóndecuatrotarjetasporpágina.EltrabajoprincipaldeSkip,sutareabásicaenlafaseactualdesuvida,supropósitoenaquelenormedormitoriosituadojuntoalcampodegolfdiminuto,eracrearunsegundocatálogoorganizadobasadoenunaseriedecategoríasquehabíadiseñadoelcoronel,y luegoestablecerreferenciascruzadasentreambos.Sandsnoteníasecretarianinadieque lo ayudara: aquella era labibliotecade inteligenciaprivadadel coronel, sualijo,suesconditesecreto.Afirmabahaberhechotodas lasfotocopiasenpersona,yasegurabaqueSkiperalaúnicaotrapersonaquehabíatocadoaquellosmisterios.

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Elenormecortadordepapelestiloguillotinaylaslarguísimashilerasdefrascosdepegamento.Ylasdocenasdecajonesparatarjetas,enrobustosbancosdeunmetrodelargocomolosquehayenlasbibliotecas,cadaunoconcuatrodígitosescritosconplantillasobresucaraanterior:

2242

…elnúmerode la suertedel coronel: 2de febrerode1942, la fechade su fugademanosde losjaponeses.

Oyóqueelcoronelestabacontandounahistoria.Suvozarrónretumbabaporlacasamientraslosdemássereían.Enpresenciadesutío,Sandssentíaunadesesperaciónvergonzosaypocomasculina.¿CómoibaélaevolucionarhastaconvertirseenalguientanclaroyenfáticocomoelcoronelFrancisSands?Yadesdemuchachosehabía reconocidoasímismocomoalguiendébile impresionableyhabía tomado la decisión de encontrar buenos héroes. John F. Kennedy había sido uno de ellos.Lincoln,Sócrates,MarcoAurelio…Lasonrisadelcoronelmientrasexaminabaelarma…¿acasoelcoronelhabíasabidodeantemanoqueSkipibaarecibiraquelregalo?Aveceselcoronelteníaunaformapeculiardesonreír—queaSkipleparecíairritante—,unamuecadeastuciaenloslabios.

MuchoantesdequesiguieraasutíoaInteligencia—dehecho,antesdequeexistieralaCIA—,deniño, Skip había convertido a Francis Sands en una leyenda personal. Francis levantaba pesas,boxeaba,jugabaalfútbolamericano.Erapiloto,guerrero,espía.

AqueldíadehacíanueveañosenBloomington,elreclutadorlehabíapreguntado:—¿PorquéquiereunirsealaAgencia?—Porquemitíodicequemequierecomocolegasuyo.Elreclutadornopestañeó.Comosihubieraestadoesperandoaquellarespuesta.—¿Yquiénestutío?—FrancisSands.—¿Noseráelcoronel?—Sí.Enlaguerraeracoronel.En aquella época estaba en el primer año de la universidad y tenía dieciocho años. Aquella

estanciaenlaUniversidaddeIndianahabíasidosuprimertrasladodesde1942,cuando,despuésdelamuertedesupadreabordodelArizonaenPearlHarbor,sumadrereciénenviudadalohabíallevadodesde SanDiego, California, de vuelta a los llanos de su juventud, a Clements, Kansas, para quepasaraelrestodesuinfanciaconellaenunacasaensilencio,enaquellatristezaquenosabíaloqueera.EllalohabíallevadoalacasadeClementsaprincipiosdefebrero,exactamenteenelmismomesenquesucuñadoFrancisXavier,miembrocapturadodelosFlyingTigers,seescapótirándoseporlabordadelbarcojaponésdeprisionerosdeguerraalmardelaChina.

Algraduarse,SkiphabíaaceptadountrabajoenlaCIA,peroantesdelainstrucciónregresóalauniversidadparasacarseunmásterenliteraturacomparadaporlaUniversidadGeorgeWashington,dondeayudabaaexiliadosdelaChinanacionalistaconsustraduccionesdeensayos,relatosypoemasde la China continental comunista. El puñado de revistas que publicaban aquel material estabafinanciadocasiensu totalidadpor laCIA.Élrecibíaunestipendiomensualde laFundaciónpor laLiteraturaMundial,unatapaderadelaCIA.

Al mencionar a su tío aquel día de 1955, los dos reclutadores habían sonreído, y Skip habíasonreídotambién,perosoloporquelohabíanhechoellos.Elsegundohombredijo:

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—Siestáinteresadoenhacercarreraconnosotros,creoquetenemossitioparausted.Y ciertamente se lo habían dado. Y ahora tenía desplegada aquella carrera delante de él:

diecinuevemilnotasprocedentesdeentrevistas,ynoentendíacasininguna:

Duval,Jacques(?),propietariode4barcosdepesca(helios,souvenir,devinette,renard).[GolfodeDaNang],esposa[TrandLu(Luu??)]confidenteafirmabarcosposibleusocriminal/intel.Noobtienebeneficiopesca.CXR.

Las últimas tres letras designaban al interrogador que había hecho la anotación. Skip habíaadoptadolacostumbredeañadiréltambiénfichasconcitasdesushéroes—«Nopreguntesquépuedehacertupaísporti…»—entarjetasconlassiglasJFK,LINC,SOC,aunquedelasquemásteníaeradelasMeditacionesdeMarcoAurelio,mensajesqueelancianoemperadorromano,asediadoysoloenloslímitesdesuimperio,habíaescritoparasímismoenelsigloIIdespuésdeCristo:

Nadapuedeserbuenoparaunhombreamenosque loayudeaser justo,a tenerdisciplina,corajee independencia.Ynadapuedesermaloparaélamenosquetengaelefectocontrario.MAM.

Mientras Skip se acercaba al comedor, le pareció que Pitchfork estaba vociferando: «¡Así sehabla!».

Yaleshabíanservidounprimerplatodepescadoyarroz.Skipocupósulugardelantedeunplatovacío a la izquierda del coronel y el criado le trajo su ración. Comieron a la luz tenue de loscandelabros.Cuandolaelectricidadsefueapenashuboningunadiferencia.Elzumbidodelosairesacondicionadosseapagóentrebastidoresyelventiladordelasaladeestardetuvosumurmulloysurotación.

Entretanto,elcoronelpontificaba,lamayorpartedeltiempoconeltenedorenaltoysujetandosuvaso de tubo con la otramano como si temiera que se lo fueran a robar.Hablaba con un acentoirlandésdeBostonalquesesuperponíanlosañospasadosenlasbasesdelafuerzaaéreadeTexasyGeorgia.

—El único objetivo de Lansdale es conocer a la gente y aprender de ellos. Sus esfuerzosconstituyenunarte.

—¡Asísehabla!—gritóPitchfork—.¡Completamenteirrelevante,peroasísehabla!—EdwardLansdaleesunserhumanoejemplar—dijoelcoronel—.Lodigosinruborizarme.—¿YquétienequeverLansdaleconelaswangoconcualquierotradenuestrasleyendas?—dijo

Eddie.—Déjame que lo repita y a ver si esta vez me escuchas —dijo el coronel—. Lansdale está

fascinadosobretodoporlagenteensí,porsuscanciones,suscuentosysusleyendas.Loqueseaquesalgadeesafascinaciónentérminosde«inteligencia»,¿loentendéis?,seráunderivado.Coño,quépescado tan flaco. Sebastian, ¿dónde estámi pescadito? ¿Adónde ha ido?Eh…¿le estás dandomipescado a él? —En aquel preciso momento, el criado Sebastian estaba ofreciéndole a Skip unasegundaracióndelabandejadebangos.Skipsabíaqueeraelpescadofavoritodelcoronel.¿Acasohabían avisado incluso al cocinero de aquella visita?—.Vale,me ha tocado una ballena—dijo elcoronel,sirviéndoseotraración—.Voyaposponerelrelatodemihistoriasobreelaswang.

Sinquenadieselopidiera,Sebastianpinchóuntercerpescadoconeltenedor,lopusoenelplatodelcoronelyregresóa lacocina,riéndoseparasímismo.Enlacocinalosmiembrosdelserviciohablabanenvozmuyaltayatodaprisa.Enpresenciadelcoronelydesusbromas,losfilipinosse

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aturullaban.El afectoque eraobvioque sentía hacia ellos conseguíavolverlos locos.Y también aEddie,quesehabíadesabotonadolatúnicayhabíacambiadoelaguaconhieloporChardonnay.SkipveíaquelaveladaibaaterminarcontodoelsueloabrillantadollenodediscosdefonógrafoytodoelmundobailandoelLimboRockycayéndosedeculo.DeprontoEddiedijo:

—¡YoheconocidoaEdLansdale!¡Hetrabajadomuchoconél!¿Eraverdadaquello?¿Eddie?Skipnoveíacómopodíasercierto.—Anders—lepreguntóSkipaPitchfork—,¿cuáleselnombrecientíficodeestepescado?—¿Delbango?Sellamasábalo.Desovaríoarriba,peroviveenelmar.Chanossalmoneus.—Pitchforkhablavariosidiomas—dijoEddie.Losbangoseransabrosos,parecidosatruchasysinmuchosaborapescado.LaAgenciaparael

Desarrollo Internacional americana había contribuido a instalar una piscifactoría al pie de lamontaña. El coronel comía sin pausa y con atención, desprendiendo los trocitos de carne de lasespinasdiminutasconeltenedoryayudándoseatragarconvarioswhiskiesalolargodelacomida.Sus hábitos no habían cambiado: después de las cinco de cada tarde bebía en abundancia y sinvergüenza.Laideaasumidaenlafamiliaperoquenadieformulabaenvozaltaeraquelosirlandeseserangentebebedora,peroquebeberantesdelascincoeraseñaldefaltadedisciplinaydemodalesdecadentesypatricios.

—Háblenosdelaswang.Cuéntenosunabuenatrola—ledijoaEddie.—Bueno,deacuerdo—aceptóEddie,adoptandonuevamente,oesoleparecióaSkip,partedesu

personaje de Henry Higgins—. Veamos. Érase una vez, que es como empiezan estas cosas, unhermanoyunahermanaquevivíanconsumadre,quedehechosehabíaquedadoviudadespuésdelamuertedelpadreenalgunaclasedeaccidente trágico, losiento,nomeacuerdodequéclase,peroestoysegurodequefueheroico.¡Lamentoquenomehayandadotiempodeconsultarconmiabuela!Pero, encualquier caso, intentaré acordarmedel cuento.Dosniños,unhermanoyunahermana,yahoramevuelvoadisculpar,porqueeranunaparejadehuérfanos,seleshabíanmatadoelpadreylamadre,ynoerasumadre,sinolaancianatíadesumadre, laquecuidabadeellosenunacabañaaciertadistanciadeunadenuestrasaldeasenLuzón.TalvezennuestramismaaldeadeSanMarcos,ciertamentenolodescarto.Elchicoerafuerteyvaliente,lachicaerahermosaygentil.Latíaabuelaera,bueno,estoysegurodequeyaloadivinan,alatíaabuelalegustabaatormentaraaquellasbuenascriaturasdándolesdemasiadastareasyhablándolescondureza,ylespegabaconunaescobaparaquesedieranmásprisa.Elhermanoylahermanalaobedecíansinquejarse,porquedehechoeranmuydisciplinados.

»Hacíatiempoqueenlaaldeareinabalafelicidad,peroúltimamentehabíacaídosobreellosunamaldición y unaswang sediento de sangre se estaba alimentando de los corderos y de las cabrasjóvenes,ylopeordetodoesquetambiéndelosniños,ysobretododelasniñascomolahermana.Aveces el aswang se aparecía como una anciana, a veces bajo la forma de un jabalí gigante decolmillossalvajes,avecesinclusocomounacriaturaencantadoraqueatraíaalospequeñuelosalassombras y les chupaba su sangre inocente. La gente de la zona estaba aterrada, ya no conseguíansonreír,porlasnochessequedabanenlacasacercadelasvelas,nuncaibanalbosque,alaselva,arecogeraguacatesniningunaotraplantabeneficiosa,nitampocoacazarcarne.Sereuníantodaslastardesenlacapilladelaaldeayrezabanparaquesemurieraelaswang,peronadalosayudaba,ydevez en cuando uno de ellos era sanguinariamente asesinado mientras volvía a casa de aquellasoraciones.

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»Y,bueno,comosuelepasarenestasocasiones,undíaporlaselvaalhermanoylahermanaselesaparecióunsanto,sanGabriel,vestidoconharaposdevagabundo.Seencontróconloschicosenelpozocuandoellosibanabuscaraguayledioalchicounarcoyunabolsaconflechas…¿cómosellamanesasbolsas?

—Aljabas—dijoPitchfork.—Unaaljabaconflechas.Quéexpresióntanbonita.Ledioalchicounaaljabaconflechasyun

arcomuy fuertey leencargóquepasara toda lanocheenelgraneroquehabíaalpiedel camino,porqueallímataríaalaswang.Enelgranerosereuníancadanochemuchosgatos,yunodeelloseraen realidad el aswang, que adoptaba aquella forma para camuflarse. «Pero, señor, ¿cómo voy adistinguiralaswang,sinomehadadoustedbastantesflechasparamatarlosatodos?»YsanGabrieldijo: «El aswang no jugará con su rata cuando atrape una, lo único que hará será destrozarla enpedazos y regodearse en su sangre. Cuando veas que un gato hace eso, tienes que dispararle deinmediato,porqueeseeselaswang.Porsupuesto,sifallas,nohacefaltaqueteinformedequeserásdestrozado por los colmillos delaswang, ymientras te estésmuriendo se beberá tu sangre». «Notengomiedo»,dijoelniño,«porqueséqueesustedsanGabrieldisfrazado.Notengomiedo,yconlaayudadelossantos,nofracasaré».

»Cuando el chico regresó a su casa con aquellas flechas y todo lo demás, la tía de sumadremuerta y ausente se negó a dejarlo salir.Lo atacó con su escobay le confiscó sus armas y se lasescondióeneltejadodepaja.Peroporprimeravezelchicodesobedecióasututoraylasvolvióarobar por la noche, después fue a hurtadillas al granero con una sola vela, y esperó allí en lassombras, ¡y les aseguro que había unas sombras muy extrañas! Y también siluetas de ratascorreteandoporentrelassombras.Ysiluetasdegatoscolándoseportodaspartes,unastresdocenas.¿Cuálseríaelaswang?Déjenmequelesdigaquebrillabanunpardecolmillosrojosenlanoche,quese oyó el susurro de un aswang y que el chico lanzó una flecha y oyó el golpe sordo cuando lacriaturacayóhaciaatrás.Acontinuación seoyóungemidoestranguladoydespuésunchirridodeuñasmientraseldemonioheridosearrastrabaenbuscadeprotección.Alexaminarellugar,eljovenhéroeencontrólapatacercenadadeungatogigantedegarrasletales,lapatadelanteraizquierda,yvioqueestabaatravesadaporsuflecha.

»El joven héroe regresó a casa, y su tutora fea y vieja lo riñó. Su hermana también estabadespierta.Latíaabuelalessirviótéyunpocodearroz.“¿Adóndehasido,hermano?”“Heluchadoconelaswang,hermana,ycreoquelohedejadoherido.”Ylahermanadijo:“Queridatía,tútampocohasestadoencasaestanoche.¿Dóndeestabas?”.

»“¿Yo?”,dijo laquerida tía.“No,yohepasado lanocheaquícontigo.”Perosirvióel téa todaprisayseexcusóparairaecharseunrato.

»Aquelmismodíalosdosniñosseencontraronalaancianaahorcadaenelárboldefuera.Debajode ella había un charco de sangre, que caía del sitio donde le faltaba el brazo izquierdo. Antes,mientras les servía el té, les había ocultado debajo de la túnica la imagen de su brazo cercenado,mientrasdejabaescaparlasangrequeerasuvida,lasangrevenenosadelaswang.

»Esunviejocuento—dijoEddie—.Loheoídocontarmuchasveces.Perolagentesecreequevaa pasar, y ahora se creen que ha pasado aquí, que pasó ayer, o esta semana. Dios mío —dijo,sirviéndose más Chardonnay, agitando la botella del revés sobre su vaso mientras su reducidopúblicoaplaudía—,¿mehebebidolabotellaenteramientrasestabaaquísentadohablando?

Elcoronelyaestabadescorchandootrabotella.

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—Tútienessangreirlandesa,colega.—Levantóelvasoparabrindar—.HoyeselcumpleañosdelcomodoroAndersPitchfork.¡Salud!

—¿Comodoro?—dijoEddie—.¡Estáusteddebroma!—Esbromalodelrango.Peronolodelcumpleaños.Pitchfork:¿seacuerdadedóndeestabausted

ensucumpleañoshaceveintidósaños?—Hace exactamente veintidós años —dijo Pitchfork— yo estaba meciéndome debajo de un

paracaídas en una noche muy oscura, cayendo sobre China. Ni siquiera sabía el nombre de laprovincia.¿Yquiénestabapilotandoaquelavióndelqueyoacababadesaltar?¿Quiénfueelquemediomediadocenadechocolatinasymetiródeunapatadaalcielo?¡Yluegoseretiróadormirauncatrebiencómodo!

—¿Yquiénnollegónuncaporqueaquelloshijosdeputameabatieron?¿Yaquiénledioustedunhuevoduroenelcampodeprisionerosveintedíasmástarde?

Pitchforkseñalóalcoronel.—Noporqueseauntipogeneroso.Porqueeraelcumpleañosdelpobretipo.Eddiesequedóboquiabierto.—¿Sobrevivieronalcampodeconcentracióndelosjaponeses?Elcoronelechósusillahaciaatrásyselimpiólacaraconlaservilleta.Sudóyparpadeó.—Después de haber sido invitado sin honor de los japoneses… cómo explicarlo… sé lo que

quieredecirserprisionero.Déjenmequeloexpliquedeotraforma,deotraforma,denmeunminutoydéjenmequeloexpliquedeotraforma…

SequedómirandoconcarainexpresivaylacabezagachaaSkipenparticular,yaesteloasaltólaincómoda ideadequeelcoronelsehabíaolvidadodesímismoyahora ibaacambiarde temadeformadelirante.

—Losjaponeses—leapuntóSands,incapazderefrenarse.Elcoronelteníalasillaapartadadelamesa,lasrodillasseparadas,lamanoderechaagarrandosu

copa y apoyada sobre el muslo, la espalda absolutamente recta y el sudor cayéndole por la cararubicunda.Heaquíungranhombre, anuncióSandspara símismo.Y lodijo en silenciopero conclaridad: una persona de una grandeza torturada. En unmomento como aquel no pudo evitar serdramático,todoerademasiadomaravilloso.

—Andabancortosdepuros—dijoelcoronel.Su rígida conducta indulgente inspiraba temor, pero no necesariamente confianza. Estaba

borracho,alfinyalcabo.Ytansudorosoqueparecíaqueloestuvieranmirandoatravésdecristalesrotos.Peroeraunguerrero.

Sandsseencontróasímismohablandootravezparasusadentros.Adondequieraquenoslleveesteviaje,yosigoadelante.

—En aquella guerra—dijo Pitchfork—, yo sabía con claridad qué odiar. Nosotros éramos laguerrilla.NosotroséramoslosHuk.YesoesloquenecesitamosserparaderrotaraesoscabronesenVietnam.Lansdalelodemuestra,enmiopinión.Necesitamosserlaguerrilla.

—Yo le diré lo que necesitamos ser —dijo el coronel—. Yo le diré en qué ha aprendido aconvertirseEdLansdale: enaswang. Eso es lo que esEdLansdale.Unaswang. Sí. Voy a respirarhondounpardeveces,adespejarmedelaborracheraycontárseloaustedes.—Respiróhondounavez,peroseinterrumpióparadecirleaPitchfork—.No,no…nosepongaagritar«Asísehabla».

—¡Asísehabla!—gritóEddie.

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—Muy bien, aquí va mi historia del aswang: en las colinas que hay encima de Ángeles, porencimade labaseaéreadeClark,Lansdalehizoque los comandos filipinoscon losque trabajabasecuestraranadosguerrillerosHukqueestabandepatrulla,cogióalosdoschicosqueibanalacoladelgrupo.Losestranguló,loshizocolgardelospiesylessacótodalasangre—elcoronelsellevódosdedosalcuello—pordosagujerosenlayugular.Ydejóloscadáveresenelcaminoparaquesuscamaradas los encontraran al día siguiente.Así que los encontraron…Y al día siguiente losHukabandonaronporcompletoaquellazona.

—¡Asísehabla!—dijoPitchfork.—A ver. Pensemos un momento—sugirió el coronel—. ¿Acaso esos Huk no viven de todas

manerasalasombradelamuerte?Lansdaleysufuerzadeataquelosestabanmatandoenpequeñaspartidas,a razóndemediadocenaalmes,digamos.Si laamenazadesusperseguidoresdiariosnoconseguíaimpresionarlos,¿quétuvolamuertedeaquellosdoschicosquelosahuyentódeÁngeles?

—Bueno,esmiedosupersticioso.Miedoalodesconocido—dijoEddie.—¿Quédesconocido?Yodigoquemiremoselasuntoenunostérminosquenosresultenútiles—

dijo el coronel—.Yo digo que se quedaron fascinados al nivel de losmitos.A fin de cuentas, laguerra es noventa y nueve por ciento mito, ¿verdad? A fin de llevar a cabo nuestras guerras laselevamosalniveldesacrificioshumanos,¿verdad?,einvocamosconstantementeanuestroDios.Lacosa tiene que significar algo más que el mero hecho de las muertes, o bien todos acabaríamosdesertando.Creoquenecesitamossermuchomásconscientesqueeso.Creoquetambiénnecesitamosinvocaralosdiosesdeloponente.Yasusdiablos,asuaswang.Elenemigolestienemásmiedoasusdiosesyasusdiablosyasuaswangdelquenuncanostendráanosotros.

—Creoqueeselmomentodequediga«¡Asísehabla!»—ledijoEddieaPitchfork.PeroPitchforkselimitóaterminarsesuvino.—Coronel,¿acabausteddevenirdeSaigón?—preguntóEddie.—No. De Mindanao. He estado en Davao City. Y en Zamboanga. Y en un sitio que se llama

Damulog,unpueblecitodelaselva.Haestadoustedallí,¿verdad?—Unpardeveces,sí.EnMindanao.—¿YenDamulog?—No.Nomesuenadenada.—Mesorprendeoíreso—dijoelcoronel.—¿Yporquéleibaasorprender?—dijoEddie.—CuandosetratadeciertosaspectosdeMindanao,mehandichoqueustedeselexperto.—Losiento—dijoEddie—,nolepuedoayudar.ElcoronellelimpiólacaraaSkipconsuservilleta.—¿Quéesesto?—dijo.—¡Ah!—dijo Eddie—. ¡El primero quemenciona el bigote! Sí, se está convirtiendo enWyatt

Earp.Eddie también llevaba bigote, de los que se estilaban entre los jóvenes filipinos: unos cuantos

pelosnegrosymuyespaciadosquedelimitabanelsitiodondeiríaunbigotesiestefueraposible.—Unhombreconbigotenecesitateneralgúntalentoespecial—dijoelcoronel—,unahabilidad

especial,algoqueexoneresuvanidad.Tiroconarco,juegosdenaipes,loque…—Palíndromos—dijoAndersPitchfork.Sebastianaparecióconunanuncio:

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—Heladodepostre.Tenemosquecomerlotodoosederretirápornoelectricidad.—¿«Tenemos»?—dijoelcoronel.—Talvezsinoloterminanustedes,tendremosqueterminarloenlacocina.—Yonoquieropostre.Estoyalimentandomisvicios—dijoelcoronel.—¡Oh,porelamordeDios!—dijoEddie—.Porunmomentomehabíaolvidadodeloqueeraun

palíndromo.¡Palíndromos!¡Sí!Regresólaluz,losairesacondicionadosvolvieronconesfuerzoalavidaendiversospuntosdel

edificio.—Comeoselheladodetodasmaneras—ledijoelcoronelaSebastian.

Despuésdelacenasetrasladaronalpatioparaelcoñacylospurosyallísededicaronaescucharelcrepitar del aparato eléctrico contra insectos y a hablar de lo que habían estado evitando hablardurantetodalacena,aquellodeloquetodoelmundoacababaporhablartodoslosdías.

—Diosmío,osloaseguro—dijoEddie—,enManilanosllególanoticiaaesodelastresdelamadrugada.Parael amanecer lo sabía todoelmundo.Ni siquierapor la radio, sinoporelbocaaboca.Losfilipinosseecharonalascallesylloraron.

—Nuestro presidente —dijo el coronel—. El presidente de Estados Unidos. Mal asunto. Muymalo.

—Lloraroncomosifueraungransanto.—Eraunhombremagnífico—dijoelcoronel—.Esporesoporloquelomatamos.—¿«Matamos»?—Lalíneadivisoriaentreluzyoscuridadpasaporelcentrodetodosloscorazones.Detodaslas

almas.Nohayniunodenosotrosquenoseaculpabledesumuerte.—Estoestásonandoa…—Skipnoqueríadecirlo.Religioso.Perolodijo—:Estoestásonandoa

religioso.—Yosoyreligiosoconmispuros—dijoelcoronel—.Entodolodemás…¿religión?No.Esmás

que religión. Es la maldita verdad. Todo lo que es bueno, todo lo que es hermoso, nos tiramosencima y ¡plaf! ¿Veis esos pobres bichos?—Señaló las varillas del aparato insecticida, donde losinsectoschocabanybrillabanfugazmente—.Losbudistasnuncamalgastaríanelectricidadasí.¿Sabenloqueesel«karma»?

—Yaseestáponiendoreligiosootravez.—PorDios,claroquesí.Estoydiciendoqueestádentrodetodosnosotros,laguerra.Esreligión,

¿no?—¿Dequéguerraestáshablando?¿Delaguerrafría?—Estonoesunaguerrafría,Skip.Eslaterceraguerramundial.Elcoronelhizounapausaparaesculpir labrasadesupurocontra la sueladelzapato.Eddiey

Pitchforknodijeronnada,selimitaronaquedarsemirandolaoscuridad,borrachos,obienagotadospor la intensidad del coronel, Skip no sabía cuál de ambas cosas, mientras el coronel, de formapredecible,salíaconlamiradadespejadadelanubeenlaqueparecíahaberestadoperdido.PeroSkipera familia. Tenía quemostrarse a la altura de aquello. ¿De qué?De escalar aquelmonte Everestsocial:unaveladadecenaycopasconelcoronelFrancisX.Sands.Amododepreparaciónparalaascensión,fuehastaelaparador.

—¿Adóndevas?

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—Solomeestoysirviendouncoñac.Sieslaterceraguerramundial,entoncesvoyaservirmeunacopadealgobueno.

—Estamosenunaguerramundial,llevamosenellacasiveinteaños.MedalaimpresióndequeCorea no bastó para demostrárnoslo, o por lo menos nuestra visión no estuvo a la altura de laevidencia.PerodesdeelalzamientoenHungría,noshemosmostradodispuestosaplantarcaraalarealidad.Es una tercera guerramundial encubierta. Es elArmagedón por poderes. Es un combateentreelbienyelmal,y suverdaderocampodebatallaeselcorazónde todos los sereshumanos.Ahora voy a pasarme un poco de la raya. Te digo algo, Skip: a vecesme pregunto si no será elpuñeteroÁlamo.Esteesunmundocorrompido.Cadavezquenosdamoslavueltahayalguienquesevuelverojo.

—Perono es un simple combate entre el bien y elmal—dijoSkip—.Es entre chiflados y nochiflados.Loúnicoquetenemosquehaceresesperarhastaqueelcomunismosedesplomebajoelpesodesuestupidezeconómica.Elpesodesupropialocura.

—Puedequelosrojosesténmaldelacabeza—dijoelcoronel—,peronosonirracionales.Creenenelmandocentralyenelsacrificioimpensable.Metemo—dijoelcoronel,ydiountragodesucopadecoñac.Lavacilaciónhizoqueparecieraqueeraelfinaldesudeclaración:queteníamiedo…Carraspeóydijo—:Metemoqueesohacealoscomunistasimposiblesdecontener.

Aquella forma de hablar avergonzaba a Sands. No le inspiraba ningún crédito. Él habíaencontradoelplaceryhabíavistolaverdadallí,enunaselvadondelossacrificioshabíandesangradolafalsafeyelcentrodemandosehabíapodrido,dondeelcomunismohabíamuerto.HabíanbarridoalosHukallímismoenLuzón,yconeltiempoloseliminaríanatodos,atodosloscomunistasdelaTierra.

—¿Se acuerdan de losmisiles en Cuba?Kennedy les plantó cara. EstadosUnidos deAméricaplantócaraalossoviéticosyleshizoretroceder.

—EnlaBahíadeCochinosseechóatrásydejóamuchoshombresbuenosmorirenlaarena…No, no, nomemalinterpretes, Skip. Soy partidario deKennedy y también un patriota. Creo en lalibertadyenlajusticiaparatodos.Nosoylobastantesofisticadocomoparaavergonzarmedeeso.Peroesonoquieredecirquemiremipaísatravésdeningunanieblarosada.TrabajoenInteligencia.Persigolaverdad.

Pitchforkhablódesdelaoscuridad.—YoconocíamuchoschinosbuenosenBirmania.Dimoslavidalosunosporlosotros.Ahora

algunosdeesostipossonbuenoscomunistas.Yyotengoganasdeverloscaerbajolasbalas.—Anders,¿estáustedsobrio?—Unpoco.—Dios—dijoSkip—.¡Ojalánohubieramuerto!¿Cómopasó?¿Yquévamosahacerahora?¿Y

cómopasamosunsolodíasindecirestascosasunayotravez?—Nosésilosabes,Skip,perohayunafacciónenelCapitolioquecreequelohicimosnosotros.

Nosotros.Nuestrosmuchachos.Enconcreto, losbuenosamigosdeCubaestánsiendovigilados, lagentequedirigióBahíadeCochinos.Luego tenemos la investigación, la comisión,EarlWarrenyRussellylosdemás:Dullesestabaenella,trabajandoparadisiparcualquiersospecha.Trabajómuyduroenello.Noshizoparecercondenadamenteculpables.

Eddieseirguióbruscamente.Sucaraeraunasombra,peronoparecíaencontrarsebien.—Nosemeocurreniunsolopalíndromo—anunció—.Memarcho.

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—¿Seencuentraustedbien?—Necesitoconducirunratoconalgodeaireenlospulmones.—Denleaire—dijoelcoronel.—Yoloacompañoalcoche—empezóadecirSkip,perosintiólamanodelcoronelensubrazo.—Paranada—dijoEddie,yprontooyeronquesuMercedesarrancabaalotroladodelacasa.Silencio.Noche.Silenciono:laoscuraychirrianteconflagracióndeinsectosdelaselva.—Bueno—dijo el coronel—.No pensé que fuera a sacarle nada al viejoEddie.No sé qué se

proponen. ¿Y por qué ha dicho que trabajó mucho con Ed Lansdale? Todavía llevaba pantalonescortosenlaépocadeLansdale.Enelcincuentaydosdebíadeserunbebé.

—Enfin—dijoSands,pensandoque,cuandolapasiónagitabaelcorazóndelmayorEddie,estesolíahablarconunaespeciedepoesía.Nohabríasidojustollamarlomentir.

—¿Enquéhasestadoocupado?—Saliendo por las noches conAguinaldo. Y familiarizándome con el catálogo de tarjetas, de

acuerdocontusinstrucciones.Conesashorriblesinstrucciones.Recortandoypegando.—Bien.Muybien,señor.¿Algunapregunta?—Sí:¿cómoesquelosexpedientesnohacenniunasolareferenciaaestazona?—Porquenofueroncompiladosaquí.EsobvioquevienendeSaigón.Ysusalrededores.Yunos

cuantosdeMindanao,queheredé.Sí, soyeloficial de seccióndeMindanao,queno tiene sección.¿Necesitasalgo?

—Heterminadoconlosduplicadosyestoyvolviendoaguardarlosencajas.Voyanecesitarmáscajonesdeesos.

Elcoronelagarróelasientodesusillaentrelaspiernaseimpulsóhastaponerseasulado.—Apáñateconlascajasdecartón,¿vale?Lasvamosaenviarpronto.—Denuevoparecióabsorto

enlabebida,yprobablemente,sisehubierapodidover,selehabríavistolanarizroja,unareacciónalalcoholquecompartíantodosloshombresdesuladodelafamilia.Perosuspalabraseranfirmesyenérgicas—.¿Máspreguntas?

—¿Quiénesesealemán?Siesqueesalemán.—¿Elalemán?EsunhombredeEddie.—¿UnhombredeEddie?HoyhemosalmorzadoconélyEddienoparecíaconocerlodenada.—Bueno,sinoesunhombredeEddie,entoncesnosédequiénpuedeser.Míonoes.—Eddiehadichoquetútehasreunidoconél.—EddieAguinaldo—dijoelcoronel—eselequivalentefilipinodeuncochinoembustero.¿Más

preguntas?—Sí:Anders,¿quésonestasmanchasdebarroenlasparedes?—¿Cómodice?—¿Estasmanchitasdebarro?¿Tienenalgoqueverconlosinsectos?¿Noesustedentomólogo?Pitchfork,despertándosedesusiesta,diounsorbopensativoasucoñac.—Lomíosonmásbienlosmosquitos—dijo.—Lamásletaldelasplagas—dijoelcoronel.—Miespecialidadesmásbiendrenarciénagas—dijoPitchfork.—Andersmehaestadohaciendoun informemuybuenode ti.Haestadoalardeando totalmente

acercadeti—dijoelcoronel.—Esbuenchaval.Tienelaclaseadecuadadecuriosidad—dijoPitchfork.

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—¿AlgunodenuestrosmuchachosenManilasehapuestoencontactocontigo?—No.Amenos que llames una forma de contacto al hecho de quePitchfork básicamente viva

aquí.—Pitchforknoesdelosnuestros.—Entonces,¿quées?—Soyunenvenenador—dijoPitchfork.—Enrealidad,AndersesunhonorableempleadodelacorporaciónDelMonte.Hacenunagran

contribuciónalaerradicacióndelamalaria.—SoyexpertoenDDTyenrecuperacióndeciénagas.Peronoséquéclasedeorganismopuede

estarhaciendolasmanchitasdebarro.El coronel Francis Sands echó la cabeza hacia atrás y se vació la mitad de un copazo por el

gaznate,parpadeóenlaoscuridad,tosióydijo:—Tupropio padre,mi propio hermano, perdió la vida en aquel sórdido ataquede los japos a

PearlHarbor.¿Yquiéneserannuestrosaliadosenaquellaguerra?—Lossoviéticos.—¿Yquiéneselenemigoestanoche?Skipsesabíaelguión.—Lossoviéticos.¿Yquiénesnuestroaliado?Lossórdidosjapos.—¿Ycontraquién—dijoPitchfork—estabayoluchandoenlaselvamalayaenelcincuentayuno

y el cincuenta y dos? Contra la misma guerrilla china que nos había ayudado en el asunto deBirmaniaenelcuarentayelcuarentayuno.

—Tenemosqueaferrarnosanuestrosidealesmientraslosconducimosporellaberinto—dijoelcoronel—.Mejordicho,porlacarreradeobstáculos.Unacarreradeobstáculoshechaderealidadesinfernales.

—¡Asísehabla!—dijoSkip.Nolegustabaquesutíodramatizarasobrealgoqueeraobvio.—Lasupervivenciaeslabasedeltriunfo—dijoPitchfork.—¿Cuálvieneprimero?—preguntóelcoronel.—Pero,alfinal—dijoPitchfork—,esunacuestióndelibertadomuerte.ElcoronellevantósuvasovacíoendirecciónaPitchfork.—EnFortyKilo,Anderssepasósietemesesmanejandounaradioagalena.Adíadehoytodavía

nomehadichodóndelateníaescondida.Enaquelcampamentohabíaporlomenosunadocenadepequeñoshijoputasjaposquenoteníannadamásquehacerquepensardíaynocheencómolocalizaraquel aparato. —Forty Kilo era el puesto de avanzada del ferrocarril birmano donde en milnovecientos cuarenta había sido internada la cuadrilla de trabajo a la que pertenecían ambos—.Usábamoscáscarasdecococomocuencosparaelarroz—dijo—.Todoelmundoteníasucáscaradecoco.

Extendióelbrazoyagarróasusobrinoporlamuñeca.—Oh,oh—dijoSkip—.¿Leestoyperdiendo?Elcoronelseloquedómirando.—Uh—dijo.Skipselevantódeunsaltoparatraerdevueltaasutío.—Coronel —dijo—, el catálogo de expedientes vuelve a Saigón en algún momento, ¿me

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equivoco?El coronel lo observó en la penumbra, moviéndose ligeramente, haciendo muchos ajustes

diminutos a su postura, como si estuviera manteniendo la cabeza en equilibrio sobre el cuello.Aparentemente a modo de ejercicio focal, examinó la colilla de su puro, colocándola a diversasdistancias,luegopareciórecobrarlacomposturaysesentóconlaespaldamásrecta.

—Heestadopracticandofrancés—dijoSands—.AsígnemeaVietnam.—¿Quétaltuvietnamita?—Meharíafaltapulirlo.—Nosabesniunapalabra.—Yaaprenderé.MándemealaEscueladeIdiomasdelEjército.—NadiequiereiraSaigón.—Yo sí. Mándeme a una oficina de allí. Le vigilaré los archivos de tarjetas. Hágame su

conservador.—Hablaconmiculo.Lacabezameduele.—Haréquehastaelúltimodatominúsculoseaaccesibleyrecuperable…Solamentetendráusted

quehojearconestosdosdedosy,zip-zip,enefecto,loquebusqueaparecerádelantedeusted.—¿Tanenamoradoestásdelarchivo?¿Hascaídobajoelembrujodelagomaarábiga?—Vamosaderrotarlos.Quieroestarallícuandopase.—NadiequiereiraSaigón.LoidealparatiesTaiwán.—Coronel,contodoslosrespetos,señor,loquehainsinuadoustedantesesunerrorcompleto.

Losvamosaderrotar.—Noqueríadecirquenolosvayamosaderrotar,Skip.Queríadecirquenolosderrotaremosasí

comoasí.—Yamedoycuenta.Yocreoquevanaestaranuestraaltura.—Aaah… pese a mis mejores esfuerzos, eres uno de esos chavales de ahora. Eres de una

generacióndistinta.—MándemeaVietnam.—ATaiwán.Allísevivebienyconocerásatodalagentequeestásubiendo.OaManila.Manilaes

elnúmerodos,diríayo.—Mifrancésestámejorando.Loleobien,siemprelohehecho.MándemealaEscueladeIdiomas

delEjércitoyaterrizaréenSaigónhablandocomounnativo.—Vamos, hombre. Saigón es una puerta giratoria, todo el mundo está siempre entrando y

saliendo.—Necesitogomaselásticas.Deesasgrandes, largasygruesas.Quieroagrupar sus tarjetaspor

zonashastaquemeconsigaustedmáscajones.Ymásmesasparatarjetas.DemeunahabitaciónydossecretariosenSaigón.Yleescribiréunaenciclopedia.

Elcoronelsoltóunarisita,bajayjadeante;tambiénsarcásticaehistriónica,peroSkipsabíaqueeraseñaldefelicidad.

—Muybien,Will.Temandaréalaescueladeidiomas,loharemoscomotúquieres.Peroprimeronecesitoquellevesacabounamisiónparamí.Mindanao.Tenemosaunindividuoallídelquequierosabermás.¿TeimportahurgarunpocoporMindanao?

Sandsvencióunaráfagademiedoydijoenfáticamente:—Cuenteconmigo,señor.

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—Introdúceteafondo.Acuéstateconserpientes.Comecarnehumana.Entératedetodo.—Esoesbastanteimpreciso.—Allí vive un hombre llamadoCarignan, un sacerdote, lleva décadas y décadas allí. El padre

ThomasCarignan.Loencontrarásenelarchivo.EmpóllatelainformaciónsobreesetalCarignan.Unciudadanoamericanoperdidoenmediodelanada,uncura.Estárecibiendoarmasoalgoasí.

—¿Quéquieredecireso?—Bueno, no sé qué quiere decir. Esa es la fraseología. Recibir armas. No tengo ninguna

explicación.—¿Yluegoqué?—Luegotevasaveraltipo.Parecequevamosaliquidarsuexpediente.—¿Liquidarlo?—Estamospreparandoelterrenoparaello.Sonlasórdenes.—«Liquidar»parece…Noconsiguióterminar.—¿Parece?—Dalaimpresióndequevamásalládelexpediente.—Pasaránmesesantesdequehayaningunadecisión.Entretanto,queremosquetodoestélisto.Si

alguien da un primer paso, no seremos nosotros. Tú solamente vas allí para informarme a mí.TransmitiráselinformeatravésdelaestacióndeVoiceofAmericaquehayallíenMindanao.

—¿YluegoserésucatalogadorenVietnam?—Vietnam.MejorlemandastuM1atumadre.Yanofabricamoslamuniciónquelleva.—Mierda.Creoquetomaréotrocoñac.ElcoronelalzósucopamientrasSkipservía.—Unbrindis.PeronoporVietnam.PorAlaska.¡Sí,señor!AndersySkiplevantaronsuscopas.—Estoesunafelizcoincidencia.Porqueyoqueríadarteunapequeñatarea,ysituconductasobre

elterrenoestanejemplarcomoimaginoquevaaser,entoncestendrétodaslasrazonesdelmundoparareasignarte.

—¿Meestátomandoelpelo?¿Acasollevatodalanochetomándomeelpelo?—¿Todalanoche?—No.Notodalanoche,no.Desde…—¿Desdecuándo,Skip?Elcoroneldiounacaladaasupurodemaneraquesucaragordaemitióunresplandornaranjaen

laoscuridad.—Esustedunautordevodevil.—¿Yestoyjugandocontigo?—Desdequeteníadoceaños.—YofuiaAlaskaunavez,¿sabes?—dijoelcoronel—.Recorrí lacarreteradeAlaska-Canadá

queconstruyeronallídurantelaguerra.Fuefantástico.Nolacarretera,elpaisaje.Aquellacarreteraimpresionantenoeramásqueunapequeñarayadurainsignificanteatravésdelpaisaje.Niteimaginasunmundocomoaquel.PertenecealDiosqueeraDiosantesde laBiblia…ADiosantesdequesedespertara y se viera a símismo…AlDios que era su propia pesadilla.Allí no existe el perdón.Cometes un error diminuto y el paisaje te machaca hasta dejarte convertido en una manchita de

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sangre,ytodoenunmomento,señor.—Echóunvistazoasualrededorconlosojosrojos,comosisolamente reconociera su entorno a medias. Sands hizo un esfuerzo para no sentirse demasiadodesconcertado—.Conocí a unamujer que había vivido bastantes años allí…o sea, la conocímásadelante,nofuehastalaNavidadpasadacuandotuveelplacer.Yaesunamujeranciana,sepasósujuventudylamayorpartedesumedianaedadcercadelríoYukón.YomepuseahablardeAlaskayellasolamentetuvouncomentarioquehacer.Dijo:«EstádejadodelamanodeDios».

»Pobres hijos de puta caballerosos. Interpreto vuestro silencio como respeto. Y también loaprecio.¿Osgustaríaquefueraalgrano?

»Elcomentariodeaquellamujermehizopensar.Losdoshabíamostenidolamismaexperienciadel lugar: se trataba de algo más que un simple entorno extraño. Los dos habíamos notado laadministracióndeunDiosextraño.

»Unos días antes, un par de días antes como mucho, yo había estado leyendo el NuevoTestamento.Melodiomihija.Lollevoencimaahoramismo,enmiequipo.—Elcoronelselevantóamediasysevolvióasentar—.Peronoosvoyadarlalata.Loimportanteesque…—¡Ajá,sí!Elcabrón tenía algo importante que contar y no estaba demasiado borracho como para no podercontarlo—.Estoes lo importante,Will.—Nadiemás lo llamabanuncaWill—.SanPablodicequehayunsoloDios,loconfirma,perotambiéndice:«HayunsoloDiosperomuchasadministraciones».Yoentiendoqueesoquieredecirqueunopuedesalirtranquilamentedeununiversoyentrarenotromedianteelsimplehechodeapuntarcontuspiesenunadirecciónyecharaandar.Oseaquepuedesir a un país donde el destino de los seres humanos sea completamente distinto de lo que hastaentoncesentendíasqueera.Yesteuniversocompletamentedistintoestáadministradoa travésde lamismatierra.Delatierraquepisas,malditasea.

»Asípues,¿quéesloimportante?Vietnam.Vietnam.Vietnam.

Afinalesdeseptiembre,SandscogióeltrenenelpuebloquehabíaalpiedelamontañacondestinoaManila. Hacía calor. Se sentó junto a una ventanilla abierta. En cada parada se subían al trenvendedoresambulantesconrodajasdemangoydepiña,concigarrillosychiclessueltos,sacadosdesus paquetes.Un niño intentó venderle una instantánea de tres por tres centímetros de algo que éltardómuchoenentenderqueeralaentrepiernadesnudadeunamujer,fotografiadamuydecerca.

Deacuerdoconsusinstrucciones,nodebíapresentarseenlaembajadaniponerseencontactoconnadie deManila acerca de aquella misión. Puede que admirara al mayor, pero le habían avisadoespecíficamente de que se mantuviera alejado de Eduardo Aguinaldo. Sin embargo, no le habíanprohibidoelclubdeoficialesdelcomplejoSeafront,dondeservíanlasmejoreschuletasdecerdoquehabíaprobadoensuvida.EnlaestacióndeManilapasóatodaprisayentreempujonesporenmediode una horda demendigos y pedigüeños, agarrándose la cartera con lamano derecha dentro delbolsillo de los pantalones, y fue hasta el complejo deDeweyBoulevard en un taxi que apestaba agasolina.

EnelclubdelSeafront,consuaireacondicionado,teníalaopcióndecontemplardesdelaventanaquedabaalsurlapuestadesolsobrelabahíadeManila,obienmirarlapiscinaatravésdelaventanaquedabaalnorte.Doshombresdeaspectorobusto,probablementemarinesquehacíandeguardiasenlaembajada,sededicabanapracticarcomplicadossaltosdesdeeltrampolín,volteretasygiroshaciaatrás.Unamujeramericanadepelonegroque llevabaunbañadordedospiezasconestampadodemanchasdeleopardolodejóasombrado.Eraprácticamenteunbiquinifrancés.Lamujerhablabacon

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suhijoadolescente,queestabasentadoenlaextensióndeunatumbonamirándoselospies.Lamujerno era joven, pero tenía un aspecto fabuloso. Todas las demás mujeres de la piscina llevabanbañadoresdeunapieza.Skipteníamiedoalasmujeres.Llegaronlaschuletasdecerdo,suculentas,húmedas. Él no sabía cocinar lo bastante como para imaginarse el truco para que las chuletas decerdosalieranasí.

Almarcharse,compróunpaqueteplanodecigarrillosBenson&Hedgesdelexpositorquehabíaenelmostradordelacaja,aunquenofumaba.Legustabadarlos.

Esperóuntaxijustodelantedelclub,contemplandobajolaluzvespertinalosampliosterrenosdelmismo,losjacarandásylasacacias,elmurorematadoconpinchosylabanderaamericanaquehabíaen la entradadel complejo.Alver labanderanotó en lagarganta el saborde las lágrimas.En lasbarrasyestrellassefusionabantodaslaspasionesdesuvidaparaproducireldolorconqueamabaEstadosUnidos deAmérica, con que amaba las caras sucias, vulgares y sinceras de los soldadosamericanosdelasfotografíasdelasegundaguerramundial,conqueamabalascortinasdelluviaqueondeaban sobre el campo de deportes verde hacia el final del año escolar, con que adoraba losrecuerdos sensoriales de los veranos de su infancia, losmuchos veranos deKansas, corriendo debaseenbase,cayendosobrelahierbasinhacersedaño,conlacabezapalpitandodecalor,lascallesaturdidasdelastardessinbrisa,lasombradensaypalpabledelosolmoscolosales,elmurmullodelasradiosmásalládelasrepisasdelasventanas,elrunrúndelostordossargentos,latristezadelosadultos en sus empeños incomprensibles, las voces que viajaban por los jardines en aquellosatardeceresquecadavezllegabanmástarde,lostrenesquecruzabanelpuebloyseadentrabanenelcielo.Suamorasupaís,asupatria,eraunamoraEstadosUnidosdeAméricaenverano.

Labanderaondeababajolabrisasalada,y,másallá,elsolnotardóenocultarse.ÉlnuncahabíavistonadaenlanaturalezaquefueradeuncolorcarmesítanexplosivocomoaquellaspuestasdesoldelabahíadeManila.Laluzagonizantecargabaelaguaylasnubesbajasdeunavitalidadaterradora.Un taxi destartalado se detuvo delante de él, dos jóvenes de aspecto ordinario del serviciodiplomáticosalierondesuasientodeatrás,yeljovenanónimodelServiciodeInteligenciaocupósulugar.

***

Carignansedespertódespuésdeunsueñosudorosoconairesdepesadillayquelodejótemblando,pero¿quéhabíaenaquelsueñoquelopudieraasustar?Sueñoovisitación:unafigura,unmonjeconunasuperficiedecolorclaroallídondedebería tener lacara, ledijo:«Tucuerpoes la ramitaqueinflamalapasiónentretuamoraJesúsylagraciadeDios».Teníatanabandonadoelidiomainglésquealgunasdelasexpresionesledabanlasensacióndehaberseborradopormuchoqueéllesdieravueltasenlamenteyprobaraaarticularlas:pasión,inflamar.Hacíaañosquenopronunciabapalabrascomoaquellasniaunque fueraensusurros.Y le sorprendióestar soñandosobre lagraciaosobreJesucristo,porquetambiénhacíamuchosañosquehabíandejadodepreocuparleaquellascosas.

Lasoledaddemipropiavida:elsolitarioviajedeJudasacasa.Selevantódesucamaenelrincóndelaiglesiamohosaycaminóhastaelríodecolormarrón

claroconunapastilladejabóndecolormarrónclaro.Dosniñospequeñosseloquedaronmirandomientras pescaban con hilo sin caña desde el ancho lomo de un carabao, el búfalo de aguadomesticadodeaquellaregión.Unasegundabestiadeaquellaespecieserevolcabacercadeallíenlas

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profundidadesdeunhoyodefangoquehabíajuntoalaorilla,dejandoalavistanadamásquesusnaricesyunapartedelcuerno.Vestidoconsuzorisylaropainterior,metiéndoseeljabónpordebajodelaropa,Carignansebañóapresuradamente,paraquenolopillaranlassanguijuelas.

Para cuando hubo regresado y se hubo puesto unos calzoncillos limpios, unos pantalonesmilitaresyunacamiseta,ysehubocolocadoelalzacuellos,Pilaryateníaeltélisto.

El sacerdote se sentó enun tocón situado junto a unamesa tambaleante bajo unapalmera y sefumóelprimercigarrillodeldíamientrasdabasorbosdeunatazadeporcelana.LedijoaPilar:

—HoyvoyaveralalcaldedeDamulog.AlalcaldeLuis.—¿VaustedhastaDamulog?—No.LosdosiremosaBasigynosreuniremosallí.—¿Hoy?—Élhadichoquehoy.—¿Quiénselohadicho?—EldatudeBasig.—Muybien.Mellevarétodoacasademihermanayharemoslacoladaallí.—Nohayservicioshastaeldomingoporlamañana.SolamenteteníaquedecírseloaPilarytodoelmundoseenteraría.—Muybien.—Nos reuniremos con otros tres datus. Es por el misionero. ¿Te acuerdas de aquel que

desapareció?—ElmisionerodeDamulog.—Creenhaberloencontrado.—¿Herido?—Muerto.Siesqueesél.Pilarsepersignó.Erademedianaedad,viuda, teníamuchosparientes, tantomusulmanescomo

católicos,ycuidababiendeél.—Porfavor—dijoél—,tráemelaszapatillasdetenis.Eraundíagris,peroélsepusoelsombrerodepajapararecorrerlosdiezkilómetrosdelcamino

detierrarojaquellevabaaBasig.Elvientosedespertó,lostallostemblabanyseestremecían,igualque laspalmerase incluso lascasas.Unaplagadeescarabajosnegros,diminutosy tannumerososcomogotasdelluvia,habitabalasráfagasdeaireyvolabadeunladoaotro.Losniñosquejugabanen los senderos soltaban exclamaciones al verlo y se alejaban corriendo.EnBasig se dirigió a laplazadelmercado,especulandocomosiempresobrecómomejoraríalavidasivivieraenunpueblocomoaquel.Peroaquelpuebloeramusulmánynotoleraríaunaiglesia.

Antesdellegaralmercado,eldatudeBasigydosdatusdeTanday,unaaldeadelascolinas—lostrescasienlasesentena,vestidosconvaquerosopantalonesmilitaresraídos,consombreroscónicoscomoelsuyoyunodeellosprovistodeunalargalanza—,seleunieronporambosladosy,ahoraqueestabaasalvoenelpueblo,losniñoslegritabanflojitodesdelassombrasdelostoldosdepaja:«Pádare, pádare», padre, padre… Los cuatro hombres entraron desfilando juntos en el café paramatarelratohastaquellegaraelalcaldeLuis.Carignancomióarrozconunplatodecarnedecabraycaféinstantáneo.Losdemáscomieronarrozconcalamares.

CarignancompróunpaquetedecigarrillosUnionyencendióuno,ysiaaquellosmusulmanesnolesgustaba,peorparaellos.Ellos,sinembargo,lepidieroncigarrillos,yloscuatropermanecieron

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sentados,fumando.La semana anterior, el alcaldeLuis habíamandado elmensaje de que a la gente que estaba en

posesióndelcadáverydesusefectospersonalesyaleshabíandadolosdatospertinentesparapoderidentificarlo.LosdatushabíandichoquevolveríanelmarteshastaelmismoBasigconelveredictodesiaqueleraonoelmisioneroamericano.ACarignanleparecíaqueyaerajueves.Noimportaba.

El yipni procedente de Carmen llegó cubierto de pasajeros y se desprendió de ellos como sifueranunacáscaragigante.AbordotendríaquevenirelalcaldedeDamulog.

Lagentepasófrentealapuertadelcaféyjuntoalasventanasymiraronalinterior,peronadieentró.Unancianoborrachoysindientessesentóenotramesaysepusoamurmurarparasímismouna canción. Una música bien distinta venía de la parte de atrás, donde unos chicos estaban encuclillas alrededor de una radio amanivela del ejército americano. La estación que se oíamejoremitíadesdeCotabato.Cancionespopamericanasdehacíaunosmeses.Conpreferenciaporelritmomarchosoolasbaladastristes.

Bajito y barrigón, el alcalde Luis de Damulog entró sonriente en el café, aplaudiendo,comportándose como si él fuera su propio séquito. Se unió a ellos y examinó la escena que teníadelante.

—¿Selohapreguntadousted?—dijoeninglés.—No.Hablandoencebuano,LuisledijoaSaliling,elmayordelostres,elquellevabalalanza:—LagentequeencontróalmuertoenelríoPulangi…—Sí.—Lesdijimosquebuscaranloszapatos.Lesmandamosundibujo.Ylaetiquetadelacamisa.Les

mandamoseldibujo.—Solamentetienenhuesos—dijoSaliling—.Yelanillodeldedo.—¿Eralamanoizquierda?¿Unanillodeoro?—Nolohandicho.—Estamano.Laizquierda.—No.Nolohandicho.—¿Lehanmiradolosdientes?Tienemetalenladentadura.¿Selohandichoustedes?—Sellevó

undedoalabocaylepreguntóaCarignan—:¿Tieneustedmetal?¿Selopuedeenseñar?Carignanabriómucholabocayofrecióunavistadesusmuelasalostresdatus,queparecieron

complacidosporaquellaexhibición.—¿Lehanencontradometalenlosdientes?—preguntóelalcalde.—Buscaremosesaclasededientes—dijoSaliling—.Perohayunproblemaennuestrobarangay

delquequeremoshablarle.—Yonosoyeldatudesubarangay.Ustedeseldatu.Essupuesto,noelmío.—Nuestraescuelanecesitareparaciones.Eltejadoresguardadelsol,peronodelalluvia.—Quieredinero—ledijoelalcaldeaCarignaneninglés.—Entiendoelcebuano—dijoCarignan.—Ya lo sé. Simplementeme gusta hablar algo que estosmusulmanes no puedan entender. Soy

cristiano,señor,delSéptimoDía.SoydelSéptimoDía.Perotodossomosunamismafamiliacontraestosmusulmanes.

—EsemisioneroperdidotambiéneradelSéptimoDía,¿verdad?

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—Sí.EsunanoticiamuytristeparaelpueblodeDamulog.—Delecincuentapesosalhombre.—¿Creeustedquetengocincuentapesos?¡Nosoyrico!—Dígalequeselospagarámásadelante.—¿Cuántoquierepararepararlaescuela?—ledijoLuisaSaliling.—Doscientos.—Lepuedodarveinte.Ahorano,lasemanaqueviene.—Lostablonessoncaros.Porlomenos,cientocincuentaparatablones.—EnDamulogtengotablones.Siloquenecesitasontablones,selospuedodar.—Parteentablonesyparteendinero.—Veinticincoendinero.Saliling habló con los otros. Luismiró aCarignan, pero el sacerdote negó con la cabeza.No

reconocíaeldialecto.—Dieztablonesdetresmetrosporlomenos—dijoSalilingencebuano—.Delosgruesos.—Sí.—¿Cuántodinerovaadarusted?—Cuarentaesellímite.Noestoysimulando.—Cincuenta.—Muybien.Cincuentapesosendineroydieztablonesgruesos.Lasemanaqueviene.Losdatus departieron entre ellos. Llegó la dueña del café, unamujer encorvada y de aspecto

preocupadoquetrajodosbollosdepanparaelcura,ademásdeunacucharametálica,aunqueélyaselohabíacomidotodoconlosdedos,igualquelosdemás.Convencidadequealoshombresblancoslesgustabaelpanynoelarroz,cadavezqueélaparecíaenelpuebloellaseibaalmercadoabuscarbollos.

—No pasa nada porque tarde usted una semana—dijo Saliling—. Ahoramismo tenemos quevolvernosaCarmenyluegocruzarlascolinashastaelríoPulangi.

—¡Todavíanohanidoalrío!—dijoLuiseninglés.—Loheentendido.—Estosmusulmanessonlentos.Lesencantahacernosperdereltiempo.El misionero llevaba desaparecido desde antes de la temporada de las lluvias. La noticia del

cadáverhabíallegadohacíaunmes.—Nos reuniremos aquí dentro de dos semanas—dijo eldatu Saliling—.O bien vendremos a

Damulog.Traeremosunarespuesta,yustedestraiganlamaderayeldinero.—Dos semanas no… ¡una semana, por favor! La señora Jones está esperando noticias. ¡Pobre

señoraJones!Loshombreshablaronentreellosenelotrodialecto.—No—dijoeldatu—,nosepuedehacerenunasemana.EstálejosylagentedelríoPulangino

esdefiar.Nosonmusulmanes.Nosoncristianos.Tienenotrosdioses.CarignansintiólástimaporlaseñoraJones,lamujerdelmisionero.Seleocurrióunaidea:—TalvezpodamosirconustedesyorganizarlascosasparatraerelcuerpohastaDamulog.—EstoydispuestoaviajarconustedhastaTanday—dijoLuis—,sivamoslosdos.Encuantoa

cruzarelríoPulangi,no.Noquieromorir.Quierotenerunavidalarga.—Deacuerdo.

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—¿Quiereirustedconellos,padre?—Sí.—¿Ustedsolo?—Siestoyconellos,noestoysolo.Sepusierondeacuerdo:losdatussereuniríanconLuisenDamulogalcabodedossemanas.Luis

pidióunaSanMiguel.—Megustanlosrestaurantescatólicos—lesdijoasuscompañeros—.EnlosdelSéptimoDíano

sirvencerveza.Noessaludable.La dueña los animó a que comieran unos aperitivos, carne sacada de un frasco grande. Los

lugareñosestabanapiñadosaambosladosdelapuertadelcafé,mirandoboquiabiertos.—Puedoconseguiraguacate—ledijoladueñaaCarignan—.Vengaparaelalmuerzoyleharé

batidodeaguacate.Dio un bocado de carne de carabao ablandada en especias, que tenía un sabor increíblemente

parecido a la caza. Asintió paramostrar que le gustaba y de pronto le estaban trayendo un platoentero.Noestabamalo.Peroelregustodelfinalseparecíademasiadoalolordeloscarabaos.Veníanvocesdelamultituddelapuerta:«Pádere,pádere,pádere».

Judassalióysecolgó.—Voyadecirunaoraciónportodoelmundo—lesgritóelsacerdote.Salilingsepusodepieycargócontralosintrusos.Diounapatadaalsueloconelpiedesnudoy

agitósulanza.Elgruporetrocedióunoscuantospasos.Ladueñasepusoagolpearalviejoborrachodelamesadealladoconlamanoflácida,gritando

cosasininteligibles.Élnopareciódarsecuenta.—Ja,tusseguidoresquierenconfesarse—dijoLuis.Judas se tiró al vacío desde un lugar alto y la barriga se le destrozó contra las piedras. Él se

preguntó si aquella gente, que apenas conseguía sobrevivir, tenía alguna noción de culpa. Lascriaturasdecaoba retorcidas seacercabancojeandoparaconfesarse.Él semarchócon losdemás,mientraslosdatusapartabanaempujonesalosaldeanos.

—Voyarezar.Todoelmundotienequerezar.Rezadalossantosdelcielo.

Acordó ir con losdosdatus hasta subarangay, que se llamabaTanday.Nohabía jeepque fuera aTandayy,pasadociertopunto, tampococarretera.Caminarían.LoúnicoqueCarignanentendíaeraque la gente que tenía en su poder los restos del misionero vivía junto al río Pulangi. No seimaginaba cómo de largo podía ser el viaje hasta encontrarlos. Los datus le dijeron veinticincokilómetros,peroerauna tonteríapreguntarles,porqueellosno teníanmaneradesaberlo.Porpuracortesía le ofrecieron una estimación, dos días de viaje a pie. Los datus insistieron en partirenseguidaafindellegaraTandayparaelanochecer.

Caminaronjuntoshastaelmediodía,hastallegaraMaginda.Allílosdatustuvieronlaamabilidadde pedir prestado para él un caballo, del tamañode un poni y con una silla demontar demaderasobreellomo.Precedidoporlostresancianos,elmagroanimalseestuvotambaleandobajoelpesodeCarignanduranteunoscuantoskilómetros,hastaelpiedelacolinaquehabíadetrásdelbarangayde Tanday, y entonces el sacerdote tuvo que descabalgar y subir por el camino que lo rodeabamientraslaoscuridaddescendíasobrelosplieguesinterminablesdelasmontañasbajas.

Elcaminoquesubía lacolinaeraanchoyenesesentido fácildesubir,yaque losaldeanos lo

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habíandesbrozado,pero tambiéneraempinado,yaél le faltabaelaliento.Estabademasiadoviejopara aventuras…¿cómode viejo?Casi sesenta.No se acordaba con exactitud.Amitad de caminooyeronunsilbidoporlobajoyselesunióuncuartoacompañante.

—Buenastardes,pádere—dijoeninglés—.Losvoyaacompañar.EljovenseidentificócomoRobertson,sobrinodeSaliling.LacaradeRobertsonerainvisibleen

lapenumbravespertina.SehabíapasadoeldíaenteropensandoenJudas,enelmonje,enelsueño.Enelmonjedelsueño

queteníaunanubedeplataenlugardecara.Talvezpudieraencontraraalguienquelointerpretaraparaél.

Subieronalacimayfueronalaescuelaapasarlanoche.Loshombresletrajeronunacenaabasedearrozblancopegajosoydeunaplantaverdequeellosllamabanhwai-an,ypronto,comolanocheeraoscura,nohubomásquehacerqueirseadormir.Setumbódecostadosobreelsuelodemaderaigualquelosdemás,sinesterillanimanta.Nopudodormir.Elaireolíadistintoaldesudormitoriojuntoal ríoapestosodeBasig, laescuelaestabamalventilada, lashojasenormesde losbananerosobstruían las ventanas y hasta los lagartos que cloqueaban en los aleros del tejado sonabanextranjeros.Cercade lamedianocheempezóa lloverdeformacontinua,cadavezconmásfuerza,hastaque la tormenta amagó con romper el tejadometálico, ahogándolosprimero con su ruidoyamenazandoconahogarlosmuyprontoenagua.Lasgotasatravesabanlasjunturasdelasláminasdechapaondulada,yCarignanjuntódosescritoriosysearrastróbajolosmismosenbuscadecobijo.Losaldeanosqueteníantodavíamásgoterasensustejadosseencaminaronalaescuelaconsigiloycompletamenteaoscuras,hastaquesejuntaronmásomenosdosdocenasdeellos.Cuandocesóelchaparrón,todavíapudooírcómosealejabarugiendoporlaladeradurantehoras.

Se despertó al amanecer, sin haber dormido apenas, y salió para aliviar su vejiga contra elcostadodeledificiodelaescuela.Despuésdellovertodalanoche,hacíafrescoynosoplabaniunagotadeviento.Aaquellahoralatierraparecíayacerabierta,dispuestaaentregarsussecretos.

¿Quéofrendapodríayodejaralpiedelacruzdelladrón?Setiróunpedo,yunosniñosqueloestabanmirandofurtivamentedesdelavueltadelaesquina

fruncieronloslabios,imitaronelruidoyserieron.¿Quéconsuelohabíaalospiesdesumuerte?Sinmás preliminares ni despedidas, los tresdatus salieron y reanudaron el viaje.No llevaban

nadaconellos,asíqueéltampoco.Aunqueibandescalzos,élllevabapuestassusKeds.Seorientaronporunsenderomojadoquebajabahasta la largacrestadeunacolinaysubieron

dandotumbosporelmismohaciaotramontaña.Unbordedelmundosevolviórojoyelsolapareciórodandosobreellos,disipandoconsucalorlosvaporesdeabajoydandolaimpresióndeconstruirapartir de lamisma niebla un paisajemás grandioso y complicado, lleno de colinas y barrancos yarroyos parpadeantes y vegetación teñida no solo de los valores innumerables del verde, sinotambiéndeplateado,negroypúrpura.Sedetuvieronenunbarangaydevariascabañasenlacolinadealladoytomaroncafénativoyuncuencodearrozcadauno.SalilinghablóconeljefeeneldialectovisayanoyCarignanlosoyódiscutirsobreunosdisparosdearmadefuegoquehabíanoídoaquellamismamañanaalotroladodelvalle.

—Noshaadvertidodequehayalgunoscombatesmásadelante—dijoRobertson.—Leheoídodecirlo—dijoCarignan.Echaronaandarotravez.

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Bajaronporelotroladodelamontañayllegaronauncaminoanchoyllano,aplanadoporloscascosdeloscarabaos.Gradualmente,elcaminoseestrechóhastaqueCarignantuvoquepegarlosbrazosalpechoparaevitarquelohicierantrizaslosespinosquehabíaaloslados.Salilingabríaelcamino,conlapuntadelalanzarozandolashojasqueteníansobrelacabezayderramandolalluviadelanocheanteriorsobrelacaradeCarignan.Losotrosdosibanencorvadosdetrásdelsacerdote.De prontoSaliling abandonó el sendero y se adentró en un lecho de eulalias a través del cual, enalgún punto de las inmediaciones de sus pies, avanzaba un sendero de unos veinte centímetros deancho.Ahora teníanel solbrillandoencimadesuscabezasysinembargo,bajosuspies,unbarrorojoyespesoqueparecíatenervidapropiasepegabaaloszapatosdeCarignan,crecíaensussuelas,trepaba por los costados y los engullía hasta los tobillos. Descalzos, los demás caminaban confacilidad por el mismo,mientras que Carignan avanzaba con esfuerzo con sus zapatillas de tenisembutidas dentro de un pastizal rojo tan pesado como el cemento. Por fin se quitó lasKeds paraevitarqueaquellacosaselastragara,lasjuntóatandosuscordonesyselascolgódelpuño.

Amedidaquedejabanatráslamesetaydescendíanhaciaunarroyosituadoenlasprofundidadesdeunbarranco,yCarignancontemplabacondesesperootrodescensomásseguidodeotroascensomás,oyeronunlevepetardeoprocedentedemásalládelsiguientepicoyquedaronbajolasombradeunamasadehumoqueaparecióenelcielosobresuscabezas,unacolumnanegraqueseelevabaenlínearectagraciasalafaltadeviento.«Yhabrásangreyfuegoypalmerasdehumo…»,delLibrodeJoel, ¿verdad?Era increíble cómo le estabavolviendoa la cabeza el idioma inglés.Y también lasescrituras, saliendo de la oscuridad. Joel, sí, del capítulo dos, habitualmente traducido como«columnasdehumo»,peroeloriginalhebreodecía«palmerasdehumo».

Cuandocruzaronelarroyodelfondodelbarranco,Carignanintentólimpiarseloszapatos.Aquelbarronosedisolvíaconagua,oseaquetuvoquerascarloyfrotarloconlosdedos.Elaguaseveíalimpia.Sepreguntósiseríapotable.Enalgúnlugardesucurso,todoarroyodeaquellazonateníaunclanounaaldeaquelousabaparariego,obiencloacasqueibanapararalmismo,oanimalesquesebañabanenél.Elsacerdotesentíaunaseddesesperada,todosuserlatíaalcompásdelamisma,perolos hombres no bebieron, así que él tampoco lo hizo. Se puso los zapatos mojados en los piesdescalzos.Ahorapusieronrumbodirectamentealmonolitonegrodehumo.

Coronaronlaelevaciónytomaronunsenderoqueeraalmismotiempofangosoyrocosohaciaunbarangaydevariascabañas,todasquemadashastaquedarreducidasprácticamentealostablonesdel suelo, que todavía estaban negros y humeantes. Saliling hizo bocina con las manos y ululó.Alguiencontestó.Alotroladodeuncontrafuerteencontraronaunancianovestidoconuntaparrabosdearpillera.Carignanse sentó sobreunapequeñaparceladehierbajosy seapartóelhumode losojosconlamanomientrasSalilingysusobrinohablabanconelaldeano.

—DicequelosTad-Tadhanvenidoadestruirellugar—ledijoRobertsonalsacerdote—.Élerademasiadoviejoparaescapar.Lehandisparadoenlamanoysehaescondido.

LosTad-Taderanunasectacristiana.Sunombrequeríadecir«cortar-cortar».Deloshabitantesdeaquel lugaryanoquedabanadiemásqueaquelancianoconunagujerode

balaenlamano,quesehabíaenvueltoélmismoconunacataplasmadehojasyhuevosdemosca.—Enesteclan,aunquetenganunaheridamuygrave,nuncasecortanlosbrazosnilaspiernas—

explicóRobertson—.No les hace falta, las heridas no se les infectan nunca, porque dejan que loshuevosincubenysecomanlapodredumbredesucarne.

—Ah.Ajá—dijoCarignan.

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—Esunbuenmétodo.Peroavecesleshaceenfermarysemueren.Elancianoparecíaterriblementeenfermo,conunacaraencogidademonoyunacarnecorreosa

quelecolgabadeloshuesosenlasarticulaciones.Haciaelfondodelabocateníadosotresmuelasqueestabausandoenaquelmomentopararoerunmangoconintensaconcentración.RespondióalaspreguntasdeSalilingconbrusquedad,perocuandose terminó la fruta tiróelhuesoaun ladoy leenseñó a Carignan su anting-anting, una pulsera de semillas vacías que llevaba alrededor de lacintura.Sumagia, explicó, le garantizabaunamuerte enpaz.Por tanto, suheridadebalano teníaimportancia.

Elancianohablabaundialectocebuano-visayanoqueaCerignannolecostabamuchoentender,aunqueeljovenRobertsonletradujodetodosmodos:

—Solonecesitabeberunpocodesangredemonoyestarácomonuevo.—Llévenmealríoconustedes—dijoelanciano—.Quierobeberunpocodebarro.—Ahoraquierevenirconnosotros—dijoRobertson.—Sí.Yaloheentendido.—Esteclandicequeelbarrolesdavida.Quiereiralrío.—Yaséloqueestádiciendo—insistióelsacerdote.Elancianoseñalóhaciaelestemásalládeunacolinayleshablódeunatierradecuento,unsitio

legendario.—DicequedetrásdeesamontañaestáellugarquellamanAgamaniyog.—Esosoncuentosdeniños—dijoCarignan.Sindejardeseñalaraleste,elancianodijo:—Agamaniyog.Eslatierradeloscocos.—Agamaniyogesunacosadeniños—dijoCarignan.—Entoncesnovayanustedesallí—dijoelanciano.Partierondenuevo,recorriendoelangostovalleporelmediodelarroyoyluegosubiendoporla

ladera opuesta de lamontaña, agarrándose a lasmatas de hierbajos para impulsarse hacia arriba,CarignanafligidoacadapasodelcaminoporlaspullasdelAcusador:Soymalvadoenvirtuddelasoberaníademivoluntad,ynomearrepientoporcompleto.Solomearrepientounpoco,unpoquito.Peroenabsolutoporcompleto.Hefracasadoenmiespíritudehijo.Ahogólavozdeldiablo,queeralasuya,yconcentrósuescuchaenlossonidosdelexterior,eneltemblordelashojasmojadasbajoelviento, en las risotadasde los loros, en la labia insincerade lospequeñosmonosquehabitaban laespesura. El camino ya no era más que un producto de la imaginación de Saliling. Carignan ibatropezandodetrás,mantenido enpieúnicamentepor elmiedo aque si se caía severía perdido enmedio de la vegetación. Tenía la ropa empapada, hasta los bolsillos los tenía llenos de sudor. Elcaminoseensanchódenuevoysalióa lacrestadeunacolinadesde laquesedominabaelmundoentero.Elavancefuemásfácilapartirdeentonces.EnmenosdedoshorasseplantaronenelvalledeArakan, de unos cinco kilómetros de ancho, por donde discurría la corriente de color oliváceoapagadodel ríoPulangi.Acaciasgigantesconformadechampiñones,dediezpisosdealturayuncentenar de pies de diámetro, escondían gran parte de la vista de la ribera. Hasta ese momento,Salilingnolehabíadirigidolapalabraniunasolavez,peroahorasegiróyledijoencebuano:

—Mirehaciaatrás:verádedóndevenimos.Hastaallíhayveintekilómetros.Carignan miró al oeste: la selva de color verde grisáceo se bañaba en una luz rosada,

deshaciéndoseenelinteriordelcalderodelcrepúsculo.

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Pasaron todavía otra hora de descenso a pie hasta lo que quedaba delbarangay de Tatug. Lasinundaciones del año anterior habían apelmazado las hierbas y derribado las casas de sus pilotesbajos,pero lagenteseguíaviviendoallí.Carignan, tanagotadoquenopudoni levantar lasmanosparaquitarseelsombrero,sesentósobreunmontículoqueeravagamenteconscientedequedebíadeser una tumba. Otras tumbas lo rodeaban, todavía no muy cubiertas por las implacables hierbastrepadorasylashiedrasdelsuelo.Algohabíamasacradoaunadocenadeaquellaspersonas,amás,veinte,veinticinco:unaplaga,unainundación,quizámerodeadores.Encontrófuerzasparaquitarseelsombrero.Oyóaniñosquereían,oyóaunamujerllorar.

—Venga, salga de aquí, no puede sentarse aquí—dijoRobertson. Saliling lo tenía cogido delbrazo.Robertsondijo—:Mire,tenemosunacaja.—Sostuvoenlasmanosunacajahechadetablonesreutilizadosycomidosporlaslarvas—.Aquíestánloshuesosdesucompatriota.

***

Eneldesempeñodesuprimeraoperaciónoficialcomoagentedelserviciosecreto,Sands llegóalaeropuertodomésticodeManilaalas4.15delamadrugadadeunsábadoparacogerunDC-3hastaCagayen deOro, la ciudadmás septentrional de la isla deMindanao, y se sumó a lamultitud quehabíafrentealasventanasdeloscomercios,veintenasdepersonasmediodormidas,conlospañuelosatados al cuello, abanicándose lentamente con periódicosmarchitos, arremolinándose suavementeperoconfirmezahaciadelanteendirecciónalasfeascarasdelosempleados.Luegodesaparecierontodosantesdesubirsealavión.ElnombredeSkiperaelcuadragésimoenlalistadeesperaescritaatiza en la pared, pero los primeros treinta y nueve pasajeros no se presentaron, así que él fue elprimeroen subirse alDC-3,que transportó aun totalde cincopasajerospor encimade las selvasiridiscentesy elmarnegroy aterrizó sin contratiempos sobreuna franja llenadebachesde suelorojizo.EstosDC-3, teníaentendido,podíanseguirvolandoaunque lesarrancaranunalaa tiros.Elcoronellehabíacontadohistoriasalrespecto.

SandsencontróuntaxiparairalmercadoDeOro,sesaltóeldesayunoysesubióaunautobúsdepasajerosquecruzaba la islarumboalsur.Llevabaconsigounacámarabarata,unaImperialMarkXIIdecolorverdepastelalaquelefaltabaelacoplamientodelflash,perolamayorpartedeltiempose limitó amirar el paisajemaduro y esponjoso. Iban a una velocidad respetable, aminorando lamarchahastacasidetenerseparadejarquelospasajerossesubieranysebajaranjuntoalacarretera,pero sin pararse nunca del todo. En cada villorrio los vendedores ambulantes corrían junto alvehículo vendiendo rodajas de mango y de piña envueltas en papel y Coca-Cola en bolsasbamboleantesdeplásticocerradasconunnudoyatravesadasporunapajitaparabeber,yasífuesutrayectohastaqueelviajeseinterrumpióparapernoctarenMalaybalay,unaciudaddelasmontañascentrales.

Durantetodoaqueltrayectoloestuvieroninvadiendooleadasdenostalgia,nodeEstadosUnidos,nideKansas,nideWashington,sinodelacasadelasmontañasdeLuzón,consuaireacondicionadoenlosdormitoriosysusopaCampbell’sysumantequilladecacahuetemarcaSkippyprocedentesdelcomedordelclubSeafrontde laembajada.Él sealegrabadeaquellos levesaccesosdepánicoporconsiderarlos señales de una inmersiónmás profunda en su entorno. Le intrigaba una idea que elcoronel le había planteado: un solo Dios pero muchas administraciones. Sus miedos lo llevarontambiénarastrashastaelobjetivofinaldesumisión:¿quiénesibanaleersuinformesobreelpadre

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ThomasCarignanyquéimpresiónseibanallevar?Malaybalay,aunquepobreyconstruidaensumayoríadecontrachapadoygalvanizado,erauna

ciudadpopulosayllenaderuidoydemovimiento.Alladodelaplazadelaiglesiacatólicaencontróunhotelyunahabitaciónconbañoprivadoalestilomusulmán:uncubículodondehabíaalmismotiempo un agujero de letrina y un grifo de agua fría del que salía unmetro demanguera. Aquelexótico sistema lo sumió en una náusea espiritual. En misiones como aquella ya esperabaexperimentar aislamiento y terror, pero no nadamás ver la fontanería. Permaneció tumbado en lacamarespirandodeformaentrecortadamientraslafuerzaseleescapabadelasangre.Lasventanasde la angostahabitaciónerandemasiadoaltasparaasomarsepor ellas.El airedeaquelmundonoparecía transportar oxígeno, solamente el balido de los niños y el jaleo de las calles. Bajó lasescalerasconsucámaraysesentóenunbancodepiedradelaplaza,mientraslelimpiabanlasbotas.El limpiabotas no podía tener más de siete u ocho años, estaba sudando a mares, con grandesgoterones sobre el labio superior, y golpeó la caja rotundamente con el cepillo para señalar elmomentoenqueelclienteteníaquecambiardepie.Sandslesacóunafoto.Elchicoteníadesparpajoy fingiónodarse cuenta.Aquello lo ayudaría, aquello le serviríade apoyo, la carade aquelniño.Pagócongenerosidad,entróenlaiglesia—quenoteníaparedes,tansolounagrancúpulasobrelashilerasdebancos—yesperóaqueempezaralaliturgiadelsábadoporlatarde.Seleunióunpuñadode personas. Se puso el sol. Los murciélagos revoloteaban fuera en la plaza. Oír latín lo relajó.Durantelahomilía,eljovensacerdotehablóenvisayano,peroSkipreconociómuchostérminoseninglés: «posesión diabólica», «exorcismo», «ángeles caídos», «investigación espiritual»,«investigaciónpsicológica».Cuandolacongregaciónsepusodepieparacomulgar,éllosdejóysevolvióaaquellaciudaddevastadoramenteextranjera.

Después de parar a varios transeúntes hasta encontrar a uno que hablara inglés, descubrió laexistencia de un restaurante de estilo occidental y pronto estuvo sentado en La Pasteria, un localitalianoqueposiblementeobteníaunapartedesumenúdelatas,peroquetambiénofrecíaensaladamixtareciénhecha,antipasticonrábanosyapiofrescosyhastaaceitunas.Mantelesblancos,velasenbotellas de Chianti y un fonógrafo en el que los empleados ponían discos de setenta y ochorevolucionesdemúsicadixieland.

Laspersianasdemaderaestabanabiertasydejabanentrarunabrisavespertinaprocedentedelasmontañas y tan fría como era posible en aquella latitud. Junto a una de las ventanas, sola, habíasentadaunamujerqueSandsestabaconvencidodequedebíadeserbritánicaoamericana,jovenperoporalgunarazónnadajuvenil,deaspectoeficiente,conpintadebibliotecariasolteronaodehermanasolteradeunpastorprotestante.Perodurantetodalacena,cadavezqueéllamiraba,ellaledevolvíalamiradaconunafranquezadesorientadora.

Cuandoelcamarerolelimpiólamesa,ellaselevantóycaminódirectamentealamesadeSkip.Traíasucaféconellaylocolocóalladodeldeél.Extendiólamano.

—Nos hemos estado mirando descaradamente toda la noche. Ya podemos presentarnos. SoyKathyJones.

Ella le estrechó la mano y se la sostuvo un momento. Con algo más que amistad. Le mirófijamentealosojos,casiconlágrimas,hirviendodenecesidad.Sandssequedómudo.Nuncahabíasabidoquéhacercon lasmujeres.Lasonrisa falsadeella,derritiéndosededesesperación, llenóelcorazóndeéldepiedadperturbadora.Lamujerestabaenferma,oborracha,otalvezambascosas.

—Oh,porelamordeDios—dijoella,ydiomediavueltaconunarisitaotalvezunsollozopor

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lobajo.Dejósucaféenlamesadeélysalióatodaprisa.Sands se estremeció por dentro y ya no pudo comer. Pese a todo, pidió postre. Cuando llegó

—cannoli—,elcamarerosequedóesperandoenunestadodeatrozpreocupaciónyporfinconsiguiódecir:

—Laseñoranohapagadohoy.¿Vaapagarustedporella?YSkippagó.La tarde siguiente, al bajarse del autobús en la calle principal sin pavimentar de la aldea de

Damulog,vinoa recibirlounhombrebajitoygordezueloquealparecer teníacostumbredepasarrevistaalosreciénllegadosyquesepresentócomoEmeterioD.Luis,alcaldedeDamulog.Luislollevóhastaelúnicohoteldelpueblo,propiedaddeunhombrellamadoFreddyCastro,señalandoporelcamino todos los lugares importantesdeDamulog:elmercado,el restaurante, el edificiode laspeleasdegallosylatiendadetelas.

Damulogestabaalfinaldelacarreteradecemento,alfinaldelarutadeautobuses,alfinaldelaslíneas eléctricas.Aunque la electricidad llegabahasta allí, el pueblono tenía cloacasy,por loquepudoverSands, tampoco tuberías en las casas, o por lomenos no las había en el hotel del señorCastro,queestabafabricadoabasedemaderarobustaperoenelque,aquellatarde,lalluvianosoloatravesabaeltejadosinotambiéndospisosintermediosycaíaenformadegoterasdesdeeltechodesu habitación de la planta baja. Mantener secas su cama y sus pertenencias requirió una serie demovimientosprecisos.Alponerseelsol,tantoelalcaldecomoelseñorCastro,unjovenquehablababien inglés, lo llevaronaunode loscincomanantialesde laciudad,dondeSands,vestidoconsuscalzoncillosacuadrosysuszorisamarillos,anteunpúblicodemujeresydeniñosboquiabiertos,sebañóenelagualimpiaquemanabadeunatuberíaenlaladeradelacolina.

—Báñese,báñese,estáustedasalvo—leprometióelalcalde—.Aquínotenemoscocodrilos.Notenemosmalaria.Notenemosmerodeadores.Creoqueestamosviendociertaactividadorganizadadelos grupos musulmanes del sur, pero solamente en Cotabato. No estamos en Cotabato. Esto esDamulog.BienvenidoaDamulog.

CuandoSkiplesdiolaespalda,losniñossepusieronallamarlo.EnlaisladeMindanaonohabíanvisto aún soldados americanos; por tanto, nadie lo llamaba Joe. Los niños lo llamaban «Pádere,pádere…».Padre…Loconfundíanconunsacerdote.

***

Quésueñostanextrañoshabíatenidolanocheanterior,porDios…Ahoraestabasentadaenunbancodelmercadorememorando los terroresde lanocheanterior,

esperandoelautobúsquesalíaalasseisdelamadrugadayaquelesirvieranuncafémientrasasuladodosmujeresmediodormidasabríansustenderetesparaempezarlaventa.Yoestabadepieenelbanquillo del Juicio, pero qué había antes, qué había, yo teníami bolso, entré en una tienda paracomprarunlápiz,perolatiendaeraunescenariodentrodeunenormeestadioaoscurasenelfindelmundo, y de pronto yo estaba muerta y tenía que dar cuenta de mis pecados. Y no podía. Y laoscuridaderamimuerteeterna.

¿Dequiéneralavozquelehabíahabladoensusurrosenelsueño?Peroahoralamujeryaestabalistaparavenderleuncafé,vertiendoenunvasodeplásticoaguamuycalientedeuntermosobreuna

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cucharadadecaféinstantáneo.Lamujersegiróhaciasutransistorderadio:laDXOKdelaCotabatoCity, canciones pop seguidas de una pausa a las seis en punto de la mañana para rezar cincoavemarías.

Elautobúsestabaesperando,peroelconductornohabíallegado.Elquesalieranatiempoeraunasuntoqueaellaapenasleinteresaba.Nollevabareloj,hacíaañosquenotenía.

¿Yaquién se encontraba ahora?Amenosdediezmetros, sentado también enotro tenderete ycomprando un bollo dulce, estaba el hombre ante el cual había actuado como una idiota en elrestaurante,enLaPasteria. ¡Idiota, idiota!Pero lanocheanterioralverlohabíasentidounenormedolor, una sed enorme. Con su indumentaria hecha en Filipinas, sus pantalones marrones, sussandaliasmarronesysucamisadedeporteblancadecorteancho,alapenumbradelasvelas,consupelo y su bigote desgreñados, le había parecido idéntico a Timothy el recién llegado, Timothy elproveedor de buenas noticias y de compañía inteligente. Y ella se había lanzado sobre aquelamericanotanaciegascomosehabríalanzadosobreTimothysiestehubieravueltoaellaprocedentedelinterrogantevacíoenelquesehabíadesmaterializado.

Todavíanohabíaamanecido.Elclimaeraextrañoenaquellasmontañas,laluzdelsolcaíasobreuno como un yunque, pero a la sombra se estaba fresco, y por la noche casi hacía frío. Ella seencogiódentrodesuparka,conlacarainvisiblealasombradesucapucha,yobservóalamericanodesdediezmetrosdedistancia.Duranteaquelprimerinstantedelanocheanterior,Timothy,creíqueélerastúylasangresemesubiódegolpealacabezayalosdedosyapenaspudevernada,yahoraqueloveobeberCoca-Colaalasseisdelamañanaconlacorreadesubolsadealgodóncolgandodelbrazo,Timothy,siguesiendoclavadoati.Ahoraacabadellegarotrohombre,probablementeelconductordelautobús,sehasentadoalladodelamericanoyhapedidouncafé.Arribaenlostejadosdehojalata, frágiles luces fluorescentesa lasqueacudeunagloriadebichosalados…Vendedorassoñolientasensus tenderetesenvueltasenmantasdelgadas juntoacajonesdemaderaabiertosparamostrarhuevoshervidos,cigarrillos,golosinasybollosdulces.Timothy,¿estásvivo?Lamujerdeltenderetequetengoalladoestátejiendocajitasparaobsequiosdefiestaconhojasdecocotero.Otramujerpasaencorvadasobreunaescobacorta,unsimplemanojodepaja,barriendo…Quesiemprerecuerdeyolaverdadqueestoysintiendoahora…Timothy,vivimosymorimos.

Elconductorabrióelautobúsyelamericanosubiódetrásdeél.Imposiblecogeraquelautobús,dejarse ver. Ya cogería otromás tarde. Se dio la vuelta y pidió un huevo y un bollo ymás caféinstantáneo,despuéslorecogiótodoysemarchó.Llevabasuscosasenunabolsadepapelmarrónconasasdecordel.

Se sentó en un banco de la plaza Rizal y observó cómo media docena de mujeres y niñosextendíanlacosechadearrozsobrelapistadebaloncesto,pasandoporentrelamismaconrastrillospararemoverlosgranos.Noteníaotrositioadondeir.Eramejorarriesgarseconelhorariomenosfiablede la tardequepasar otra noche allí.La ciudadno tenía iglesia delSéptimoDía, así que sehabía alojado en una casa de huéspedes, donde la presencia de unamujer que viajaba sola habíacreado una amabilidad tensa que a ella le había sentado igual que si fuera odio. Todo el mundointentaba ser cortés. Era por eso por lo que había ido a La Pasteria, aunque apenas se lo podíapermitir,demaneraqueparairallíporlomenoshabíatenidoexcusa,peronoparaabrirsedeaquellamaneraaundesconocido.

¿AcasoeraciertoqueseparecíatantoaTimothy?Desubolsadepapelsacóunpaquetedefotos,la única razón de aquel viaje. La semana anterior había encontrado entre el batiburrillo de las

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pertenenciasdeTimothyunrollodepelículayhabíaemprendidoaquelviajeparaencontrarseconunhombreque teníauncuartooscuro.Lamayoríade las fotos sehabían reveladobien,unaveintenamás omenos, y tres de ellasmostraban a Timothy, dos únicamente en la periferia de la imagen:Timothyconungrupode ingenierosdeManila,mirandoelemplazamientodeunafuturaplantadeaguas, y el alcalde Luis apresurándose para ponerse en primer plano como un roedor enorme ycontento; Timothy de cerca pero borroso, al parecer dando instrucciones al poco experimentadofotógrafo; y una deTimothy rodeando con el brazo los hombros de lamismaKathy, posando encompañíadelosinvitadosaunabodafilipinadelantedeunaiglesiadeestucadorosa.Elrestoeranfotos que él había tenido intención demandar a los recién casados:Kathy reconoció la iglesia decolorrosadelaciudaddeCotabato.EllahabíaacompañadoaTimothyenloqueélhabíallamadoun«viajecitodegorra», casiuncentenardekilómetrosporcaminosborradospor la lluvia, apiñadosjuntocondocenasdepasajerosenunyipnidiseñadoparaochopersonas.EnlaiglesiadeCotabatolohabíanrecibidocomoaundios, lehabíanpresentado todassuspeticiones, lohabíanagobiadoconpequeñasofrendas,lehabíansuplicadoqueasistieraabodasdedesconocidosylehabíanpermitidoregistrarlaocasiónconsucámaradefabricaciónalemana.

Ademásdeaquellasfotos,ensubolsadepapelllevabalaropadeldíaanterioryuncojincitoquepusoentreellayelbancodemaderadelautobúsenelquebajólamontañaporlatarde.Elcaminodescendía gradualmente, asomándose a la distancia, con unas vistas al frente inmensas yencantadoras, mil y un matices del verde bajo las nubes de tormenta negras y grises que seamontonabanlentamente.Elaireentrabaaullandoporlasventanillasabiertas,alprincipioconolorapino y luego a la fermentación de las ciénagas. El autobús avanzó bajo un chaparrón y llegó aDamulogtodavíagoteandoalascuatrodelatarde.

AqueldíanoestabaelalcaldeLuisenlaparadadeautobuses.Debíadeestarenlasapuestas.Ellaoyóelestruendodeloshombresquepresenciabanlaspeleasdegalloseneledificiodelotroladodelaplaza.Unavezselashabíaquedadomirando,delejos,paradafueraenlacalle.Losgallosllevabancuchillasatadasalosespolonesysehacíantrizasentreellosencuestióndesegundos.

EllayTimothyvivíancercadelaplaza,enunacasadetresdormitorioscontelamosquiteraenlasventanasyuntejadobienhermético,quecompartíanconsucriadaCorazónytambién,habitualmente,con dos o tres sobrinas de Cory, que no siempre eran lasmismas. Encontró la casa vacía. En elsabbathylosdomingos,laschicasseibanasuscasasenelbarangaydeKinipet.

Despuésdelaromaapinoydelafrescurarelativadelaciudaddelasmontañas,ellapudoolersuhogarotravez,lamaderamojadaylaropadecamamalventilada.Lacasaestabaaoscuras.Tiródelacadenilladeltechodelacocina:laelectricidadfuncionaba.Lascucarachascorrieronarefugiarseen losrincones.Cory lehabíadejadounpocodearrozenuncuencocubierto.Lashormigasse loestabancomiendo.QuélugartandesesperadoyhorribleeraaquelsinTimothy.

Tiró la comida al suelode tierra quehabía al bordede supropiedad, con cuencoy todo, y semarchótresminutosdespuésdehaberentradoenlacasa.

CenóenelSunshineEateryysevioatrapadaallípor lasegundatormentadeldía.Elpueblosequedó sin electricidad y ella esperó a que dejara de llover en el local iluminado por las velas,conversando con un hombre llamado Romy, que había venido desde Manila con un equipo deprospecciones, y con Boy Sedosa, que llevaba el uniforme de guardia de la gendarmería. RomyestababebiendounapintadeOldCastleLiquor,ySedosaunapintaderonTanduay.Thelma,ladueñadelPeople’sSunshineEatery,estabasentadaenuntaburetealtodetrásdelmostradordelotroladode

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lasala,escuchandountransistorderadio.ElamericanoqueseparecíaaTimothyentróchorreando,conalgoqueparecíaunacámaraatada

alacintura,ysequedóenlapuertacongestovacilante.Laconversaciónsedetuvo.Élsesentóalamesadealladoypidiócafé.Silareconoció,tuvolaeducacióndenodecirlo.

Ah,selotendríaquehaberimaginado.Damulogeraelfinaldelalíneadeautobusesylaúnicaparadaqueofrecíaalojamiento.

Elamericanocolocósucámarasobrelamesa.Todossededicaronamirarlomientrasélsebebíaelcaféylalluviacontinuabasindescanso.

Unapandilladejóvenesborrachosinvadióelcafé,haciendoeltontoyderribandomesasysillas.Ala luzdelasvelas teníanunassiluetasaterradorasyviolentas.Thelmaaplaudióyseriocomosifueranhijos suyos.Los jóvenes semarcharonyella sepusoacolocar losmueblesotravezen susitio.El agenteSedosa cambiódeposturapara enfocarlos bajo la lluvia con el hazde su linterna.Luegoentróapedirlimosnaunamujerloca.Thelmayellaseabrazaroncomosifueranparientes,yesposiblequelofueran.

ElagenteSedosa,sindejardemantenerlabarbillayloshombrosbienerguidos,seinclinósobrela vela de la llama. Se quedó mirando al americano de la mesa de al lado hasta que este se vioobligadoadarseporaludido.

—Megustaríapedirlesunombre.—MellamoWilliamSands.—Yaveo.WilliamSands.—LacaradeSedosaestabasacadadeunapelícula:ojosborrachosysin

vidaenmediodeunosrasgosgordosygrasientos.Sunarizeraárabeyafilada.Noparpadeó—.Noesporcuestionarparanadasupersonalidad—dijoSedosa—,pero¿puedemostrarmedocumentaciónqueledépermisoparaviajarpornuestraprovincia?

—Nollevoningunaidentificación—dijoelamericano—.Solotengounbolsillo.Llevabapuestaunacamisetablancayalgoqueparecíaserunbañador.—Yaveo.Sedosaseloquedómirandocomosiyaloestuvieraolvidando.—SoyamigodelalcaldeLuis—dijoSands—.Élhaaprobadooficialmentemivisita.—¿TrabajaustedtalvezconelejércitodeEstadosUnidos?—EstoyconlacorporaciónDelMonte.—Yaveo.Estábien.Esunasimplecomprobación.—Loentiendo.—PregunteporBoySedosacuandonecesitemiayuda—dijoelguardia.—Muybien.YllámemeSkip,porfavor.—¡Esquip!—dijoSedosa.YRomy,delequipodeprospección,dijo:—¡Ah!¡Esquip!YThelma,sentadaensutaburetedetrásdesusfrascosdecomida,aplaudióygritó:—¡Hola,Esquip!—UnbrindisporSkip—dijoKathy.¿Sehabíadadocuentaél?Habíapresentadosuapodo.Nuncamásvolveríaatenerproblemasen

aquelpueblo.Éllevantósuvasoparabrindarcontodosellos.

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—Veoquellevaustedunacámarabajolalluvia—dijoella.—Estanocheestoyhaciendobastantestonterías—admitióél.—¿Lallevaustedtodoeltiempoencima?—No. Intentono cogerle apego.Si unono tiene cuidado, sepuede convertir en tusojos, en el

únicosueñoporelqueves.—¿Hadichousted«sueño»?—¿Cómo?—¿Hadichoqueseconvierteenelúnicosueñoporelqueves?—¿Esohedicho?Queríadecir«ojos».Tucámaraseconvierteentusojos.—Puesesunlapsusextraño,señor.¿Soñabaustedconserfotógrafocuandoerajoven?—No,señora.¿SoñabaustedconserSigmundFreud?—¿TieneustedalgoencontradeSigmundFreud?—Freudeslamitaddelomalodeestesiglo.—¿Enserio?¿Ycuáleslaotramitad?—KarlMarx.Aquellolahizoreír,peseaquenoestabadeacuerdo.—Probablementees laprimeravezquesemencionaaalgunode losdosenestepueblo—dijo

ella.Romy,elagrimensor,seaproximódandotumbosalamanodelamericanoyselaestrechó.—¿Querría usted brindarnos el honor de su compañía?—Tiró de él hasta que el americano

moviósusillayseunióaellos—.¿Podríatomarseporfavoruncaféconnosotros?¿Oalgotodavíamásplacentero?

—Claro.¿Quiénquiereuncigarrillo?Estánunpocomojados.—No pasa nada—dijo el agente Sedosa, aceptando uno y sosteniéndolo cerca de la llama del

encendedorparasecarlo—.¡Ah!¡Benson&Hedges!¡Esdelosbuenos!Ahoraqueveíaotravezalamericano,yhastamásdecerca,nosintióquenadase inmutaraen

ella.Lehabríagustadosentiralgo.Elpuebloestabainundadodebarroyapestabaatodaslasformasposiblesdeestiércoleinfestación.AhoraquehabíavistoaquellugarsinTimothy,yanoqueríaestarallíniconélnisinél.

Los hombres estaban hablando de boxeadores filipinos de peso gallo de los que ella no habíaoídohablarnunca.Sobrelamesahabíadesparramadasvariaspolillasdiminutas,alrededordelavelaencastadaenunajarradeungalónqueanteshabíacontenidoKetchupdePlátanoTamisAnghang,queasaberquésería.Loshombressiguieronhablandodepolíticosqueaellanoleinteresaban.Despuéscontinuaronconelbaloncesto,queveníaaserunapasiónnacionaldeaquelpaís.Cuandosecansódeoírlos, se fue andando a casa bajo una suave llovizna, enmedio de la oscuridad total del apagón,pisandocharcosyconsuertedepoderseguirelcamino,yconmássuerteaúndepoderencontrarsucasa.

Entró,dejóloszapatosjuntoalapuertayfuehastaeldormitorio.Buscóatientaslalinternaquehabíaenlamesilladenocheysedesvistióbajosuluztenue.EnlamesilladenochetambiénestabaellibrodeTimothyquehabíaencontradoentrelascosasdeél,losespantososensayosdeJuanCalvinoysudoctrinadelapredestinación,queprometíauninfiernollenodealmashechasexpresamenteparasercondenadas.Ellanosabíaquéhacerconelmismo,lomanteníacerca,nopodíaevitarregresarasupornografíaespiritualigualqueunperroregresaasuvómito.Encontróunacerilla,encendióun

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rollode incienso insecticidaenunplato,pasóagataspordebajode la telamosquitera, se llevó lasábanaalabarbilla…Habíapersonaselegidasabsolutamenteyacienciaciertaparalasalvación,yotrasigualdeabsolutamentedestinadasaladestrucción…Tiradaallí,enelhedordesuvida,conelpelotodavíamojadoporlalluvia.Nisiquieratocóellibro.

Sedespertóbajounaluzresplandeciente:lalámparadeltecho.Parecíaquealguienhabíaarregladolaslíneaseléctricas.Afueraseguíaoscuroylalluviahabíacesado.Llevósussandaliasalacocina,lastiróalfregaderoparaahuyentaralascucarachas,encendiólaluz,sesirvióunvasodeaguafríadelanevera,queibaagas,ysesentóalamesamirandolasfotografías.Irenbuscadelapelículalehabíaservidosimplementeparamantenerseocupadamientrasesperabaaquealguienletrajeraelanillo,laalianza, que podía o no ser de oro, del dedo de un cadáver que había arrojado a la orilla el ríoPulangi.Lagentedelríonohabíamandadoelanillo.Enlugarderetiraraquelúnicoadornodeloshuesos, se habían ido en busca de occidentales que pudieran reivindicar parentesco con aquellasreliquias. Tras semanas de deliberaciones entre ellos, habían regateado por una recompensainsignificante:tansolocincuentapesos.

Contemplóalosinvitadosdeaquellabodaatravésdelosojosdeél.Leshabíanavisadodequelosibanafotografiar,sehabíanpreparadoparalaocasión.Algunasde

lasniñasestabanengalanadasconpintalabiosypolvos,conelpelonegrobrillantedelagomina.Los ojos de él habían visto, su mente había procesado, exactamente aquel momento en los

escalonesrotosdelaiglesiadecolorrosa.Alfondoyamanoderechaunletrero—«TREADSETTERS:unnuevohorizonteenelmundodel recauchutado»—,yvariasefigiesde sanMiguel flotandoporencimadeunamultituddecelebrantes,conlashojasdesusespadasenvueltasenpapeldealuminio.Era la fiesta de san Miguel. Musulmanes, católicos, todo el mundo bailaba las loanzas al santoguerrero. Mientras Timothy toqueteaba el acoplamiento del flash, la familia del novio empezó asoltar exclamaciones y risas, y cuando el flash se disparó se desnudaron de todo comedimientohumano, chillando y tratando de esconderse los unos detrás de los otros presa del pánicoavergonzado.

SacóunodelospurosfilipinosdeTimothydelacajaquehabíaenlanevera,sesentó,losostuvo,encendió una cerilla del plato que había en la mesa, dio varias caladas antes de apagarlo en elfregaderoysevolvióasentaralamesarodeadodelhedoraél,aunquesehabíaquedadomareada.Buscócualquierdestellodeunrecuerdoenelvacío.Puros, fotografías,cosasqueélhabía tocado,comentariosqueregresabanflotando,ellalorecogiótodocompulsivamente,comosifueranpruebasdealgo.

Regresóa lacamasinapagar la lámparadel techo.Sinmásdemoraabrióel librodeobrasdeCalvino,aquelqueTimothyhabíaencontradoyleídoyqueluegosiguióleyendosinparar.Ladejabapasmada que existiera una fraseología para aquellas profanaciones, ideas que ella había dado porsentado que solo la visitaban a ella, dudas incomparablemente pecaminosas, nunca expresadas. YTimothydebíadesentirseigual,porquenuncalehabíahabladoaelladelasmismasnidellibro.Enlosmárgenesélhabíahechomarcasalápizjuntoaciertospasajes.Ellacerrólosojosylasleyóconlosdedos…

«Pesealhechodequelascosasquesonmalas,entantoquemalas,nosonbuenas,sinembargoesbuenoqueexistancosasmalas.»

«YsiDiosprevióquefueranmalos,maloshandeser,pesealabondadconlaquehoyparezcan

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brillar.»«¿Acasosomosniños?¿AcasonosesconderemosdelacertezadequeDios,enSueternabuena

voluntad,hadesignadoaaquellosaquieneslecomplacesalvaryharechazadoatodoslosdemás?»Aquel corazón palpitante, la emoción del abismo, la verdad inexorable de mi condenación

ordenadadeantemano.Sequedódormidaconlaluzencendida,sosteniendoaquellasafirmacionesaterradorascontrael

pecho.

Lamañanasiguienteamaneciósoleadaycasifresca,conelcielollenodehermosasnubespasajeras,nada que ver con la caldera rezumante de la noche anterior. Cory entró con pan y tres huevosdiminutosprocedentesdelmercadoypreparóeldesayuno,despuésde locualKathysereunióconochoenfermerasauxiliaresa lasquehabíaformadoyqueahoradirigíanpuestosenlosbarangaysmásalejados,delosqueahorasolamentequedabancuatro,delosseisdeltrimestreanterior,yquiénsabíacuántoshabríaeneltrimestresiguiente,unooseisodiez,lafinanciaciónibayvenía.

A la reunión se sumó una mujer de la Fundación Desarrollo y Progreso, la señora EdithVillanueva, que estuvo tomando notas sin que hiciera ninguna falta. Las ocho ayudantes deKathy,todas mujeres, todas jóvenes, todas casadas, todas madres de muchas criaturas, y ninguna de lascuales tenía libertadmuy amenudopara salir de susbarangays, se tomaron la ocasión comounafiesta. Comieron arroz y azúcar fritos en aceite de coco y envueltos en hojas de bananero, arrozenvueltoenhojasdecocoyarroznormal.

—Estodoarroz—dijolaseñoraVillanuevaenunligerotonodedisculpa.AtodaslasmujereslescaíamuybienelmaridodeKathy, todasestabanalcorrientedetodolo

quesesabíasobresudesaparición,hablabandeélconrespetoyevitandoespecularsobresiestaríavivoomuerto.LollamabanTimmy.

Yluego,trasfinalizarelalmuerzo,llegóelmomentodelalcaldeEmeterioD.Luis,queostentabauncargotancentralyprominentegraciasalhechodequesabíatodoloquesepodíasabersobretodoel mundo en Damulog, y que habría sido alcalde aunque no hubiera existido semejante cargo demaneraoficial.Kathylellevótodaslasdeliciasquehabíansobradocolocadassobreunabandejadecaoba y tapadas con un pañuelo de seda.AunqueDamulog albergaba una oficina de correos y unayuntamientoenunaestructuradehormigóndetreshabitacionessituadajuntoalmercado,elalcaldenuncaseacercabaporallí,puespreferíalapequeñasaladeestardesucasa,queteníasombrayairefresco.PusoaKathyenunasillademimbrealladodesuescritorio,pidióagritosaguaconhieloylepreguntóporlainmunizacióncontralapolio.Ellaloconocíadesdehacíadosaños.Aunasí,éltardóunosminutosendirigirseaella,comosiacabaradeaterrizarencalidaddeemisaria.

—¿Podemosllevarlavacunacontralapolioalospuestosmásalejados?Tenemosproblemasenelcampo.NotodoelmundopuedeecharsealacarreteraconunmontóndeniñoshastaDamulog.Setratadelospobresdeentrelosmáspobres.Yavecestambiénpuedehaberbandidosenloscaminos.Noqueremosquenosacosenesoselementosfueradelaley.Setratadelospobresdeentrelosmáspobres.

Kathylehabíaoídousaraquellaexpresiónvariasvecesúltimamente.Siemprelodecíaalrevés.La «D» de Emeterio D. Luis, de acuerdo con el pisapapeles grabado de granito que tenía en suescritorio,eralainicialde«Deus».

Peseaquefaltababastanteparalaselecciones,lecontóquesuoponenteparaelcargodealcalde

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ya lo había difamado, lo había llamado cobarde y «hombre de huevos blancos».En sus ojos, pordebajodelosagobiosdelcargo,resplandecíaunafelicidadgeneral.Suhermana,quedabaclasesenla Universidad deMindanao Sur, estaba cantando canciones tradicionales tribales por un pequeñoamplificador demegafonía que había en el patio, y él escuchaba con satisfacción, con lasmanosunidasjuntoaunjarróndefloresdeespumadepoliuretanoqueteníaencimadelescritorio.

Elalcaldelehablódelamericano,SkipSands,igualquedebíadehaberlehabladoalamericanodeella. Y por supuesto, él estaba al corriente de que ella se había encontrado al americano en elSunshineEatery.

—Lehepreguntado aEsquipSands si conocía al coronel americanoy sí, tienenuna conexiónmuyinteresante…¿novaapreguntarmequéconexión?

—Nomegustaríacotillear.—¡Cotillearnoesdecristianos!—dijoél—.Amenosqueestéustedhablandoconelalcalde.Kathydestapó lospostres y él examinó la bandeja como si fueraun tablerode ajedrez, con la

manosuspendidasobrelamisma.—¡Cuántosvisitantes!—Creoquelosinvocausted—dijoKathy.—¡Yolosinvoco!¡Sí!Heinvocadoalcoronelamericano,yalmayordelejércitofilipino,yhe

invocadoalotrohombre,creoqueerasuizo.¿Creeustedqueloera?—Nolleguéaconocerlo.Nitampocoalfilipino.Solamentealcoronel.—Yhe invocado al equipo de agrimensores. Señora deLuis—le preguntó a su orondamujer

cuandoestaentródelacocina,deslizándoseporelsuelodelinóleoconsuszorisdesueladepaja—,¿quéleparece?¿Creeustedquesoyuninvocador?

—¡Creoquetienesunavozmuyfuerte!—Kathy cree que puedo invocar cosas —dijo levantando la voz mientras ella continuaba en

direcciónalapartetraseradelacasa—.Kathy—dijo—.Quieroqueelequipodeprospecciónhagauntrabajoparamí.Creoquepuedeustedayudarmeaconvencerlos.

—Notengomuchainfluenciasobreellos,Emeterio.—¡Perosilosheinvocado!¡Tienenquetrabajarparamí!—Bueno,tendráustedquehablardirectamenteconellos.—Kathy. Ese americano llamado Esquip, ¿sabe usted quéme dijo?Que el coronel es pariente

suyo.Queelcoronelessutío,paraserexactos.—¡Vaya!—dijoella.El coronel le había causado una impresión general bastante fuerte, pero no se acordaba de su

cara,onolainvocaba,lobastantecomoparaestablecerningunacomparación.—CuandolepreguntéaEsquipporeloficialfilipinoyelotrohombre,fingióquenolosconocía.—¿Porquélosibaaconocer?—Todaesagenteseconocenentreellos,Kathy.Estánenunamisiónclandestinadelgobierno.—Bueno,todoelmundoesagentesecreto.EllamismafigurabaallíbajolosauspiciosdelaMisiónInternacionaldeAyudaalosNiños,una

organizaciónsinafiliaciónreligiosa,perolaverdaderaquehabíavenidocomoesposadesumarido:untrabajadordelosviñedosdeJesucristo.

El alcalde le tiró su sandalia al perro que acababa de entrar, con perfecta puntería, justo en eltrasero,yelanimalchillócomounpájaroysaliódeunsaltoporlapuerta.

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—Apostar no forma parte de nuestras ideas para nada—reflexionó de repente—. Apostar vacontranuestrasideasdelSéptimoDía.Estoyintentandodejarlodeltodo.

—Apuestoaqueloconsigueusted.—Gracias. Oh… ¡«apuesto»! ¡Ja, ja! ¡Apuesto!—Recobró rápidamente la compostura—. Pero

mireusted,voyalaspeleasdegallos.Esmiobligación.Quieroconectarconlaspasionesdelpueblo.—Apuestoaquesí.Habían pasado quince minutos, y ahora una joven—criada, vecina o pariente— les dejó dos

vasosdeaguaconhielosobreelescritorio.ElalcaldeLuissesecóelsudordelafrenteconeldorsodelamano.Suspiró.

—SumaridoTimmy.—Todoslosfilipinossereferíanasumarido,algoquenadiehabíahechonunca,como«Timmy»—.Esperaremosquenoslleguenoticiadeesosrestos.Estátardandounpocomás de lo que esperábamos. Yo aún tengo esperanzas, Kathy, porque es posible que de prontotengamos noticia de algunos elementos criminales que lo tienen vivo en su poder. Nos atacanmuchísimoselementosfuerade la leyysecuestradores,peroestavezsepuededecirquenosestándandoesperanza.

Diounsorbodesuaguamientrasunsilenciocompletamentefranco loenvolvió:No.Nohabíaesperanza.

Alasdosdelatarde,despuésdequeseterminaranlasclasesymientraselpueblodormitaba,ellaabriólaspuertasdesuenfermeríadeDamulog,quefuncionabaenunadelascuatroaulasdeledificiodehormigóndelaescuela.EdithVillanueva,deProgresoyDesarrollo,estabaamanoparavigilarcómolasjóvenesmadresllevabanasusniñosaserinmunizados.Habíaunpardedocenashaciendocola, chicas hasta de doce y trece años—y con aspecto de no tenermás de ocho o nueve— queagarrabanlosbrazosypiernasdesusbebésconfirmezaparalasvacunas,yluegocadaunarecibíaunalatadelechedeshidratada,queeraloquerevestía,paraellas,elverdaderosignificadodelavisita.

Entretanto,elamericanoSkipSandsestabasentadoenelporchedecementodeafuera,mirandounlibro.Llevabapantalonescortosacuadros,camisetablancaysandaliasdegoma.Ynoparecíaquelemolestaranlosgritos.

Cuandosalieron,KathypresentóalamericanoaEdith.Élhizoelgestodelevantarse,peroEdithsesentóasulado,alisándoselafalda.

—¿Quéeseselibro?—preguntóEdith—.¿Uncódigosecreto?—No.—¿Quées?¿Griego?—MarcoAurelio.—¿Sabeustedleerlo?—Asímismo.NormalmentetraducidocomoMeditaciones.—Lingüista.¿Esustedlingüista?—Essolamenteparapracticar.Tengounatraducciónalinglésenelhotel.—¿EldeCastro?Dios,yonomealojaríaahí—dijoEdith—.Memarchodeaquíenelautobúsde

lascuatroenpunto.—El señorCastro tiene el tejado lleno de agujeros, pero el hotelmás cercano estámuy,muy

lejos.—¿Estáustedsolo?Editheraunamujercasada,ydemedianaedad,deotramaneranuncasehabríapuestoacoquetear

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conél.Élsonrió,ydeprontoKathytuvoganasdedarleunapatadaenelcostado,paradespertarlo,enla

parteblandadedebajodelascostillas.Detrastornarelbuenhumordesujovialcaraamericana.—¿Puedover?—dijoKathy.El libroeramuybaratoyfeo, impresopor laCatholicUniversity

Press.Ellaselodevolvió—.¿Esustedcatólico?—CatólicoirlandésdelMedioOeste.Unamezclabienmezclada,comonosgustadecir.—DijousteddeKansas,¿no?—DeClements,Kansas.¿Yusted?—DeWinnipeg, Manitoba. O de la campiña que hay en las afueras. En la misma latitud que

Kansas.—Longitud.—Comoquiera.Estamosjustoalnortedeusted.—Peroenpaísesdistintos—dijoEdith.—Mundosdistintos—dijoKathy.Allíestabanellas,dosesposashastiadas,agobiándoloconsus

atenciones—.Vengaconnosotras,pues—dijoella,ytiródesumanoparahacerlelevantarse.EcharonaandarhacialacalledeKathy.—¿OseaqueesusteddelMedioOestedeEstadosUnidos?—dijoEdith.—Esoes,deKansas.—Mimaridotambién—dijoKathy—.DeSpringfield,Illinois.—Ah.—Seencuentradesaparecido.—Losé,meheenterado.Melohadichoelalcalde.—Selohadichoelalcalde…—dijoEdith—.¡Cómono!—Emeterioselocuentatodoatodoelmundo—dijoKathy—.Asíescomoseenteradelascosas.

Cuantomáshabla,máslecuentalagente.¿Estabaustedesperandoparaverme?—Bueno, laverdadesquesí—admitióél—.Peroheesperadodemasiado.Ahoraya tengoque

irmecorriendo.—¡Corriendo!—dijoEdith—.EsonoesmuypropiodelasFilipinas.Despuésdequeélsefuera,Edithdijo:—Nosehabíadadocuentadequeyoestabatodavíacontigo.Queríaverteasolas.

Sobre las cuatro de aquella tarde, mientras esperaban el autobús que tenía que sacar a Edith delpueblo,lasdosmujeressededicaronaespiarcómoelamericanopaseabaporentrelostenderetesdelmercado,vestidoconsusbermudas,conlaspiernasquemadasporelsolyuncocomarrónypeludoenlamano.

—Andobuscandoaalguienquemeabraesto—dijo.Laplazadelmercadoocupabaunamanzanaenteradelaciudad,rodeadadequioscoscontechode

pajayconelinteriordetierrabatida.Lostreslabordearonenbuscadealguienquelepudieraabrirel coco a su visitante. El autobús llegó, el caos descendió, los pasajeros subieron sus sacos yaguijaronasusniñosybalancearonporlaspatasasuspollosaleteantesycabezaabajo.

—Elconductortieneunmachete,estoysegura—dijoEdith.PeroSkipencontróaunvendedorambulantearmadoconunmachetequelerebanóelcococon

habilidad,lolevantócomosifueraabeberdeélyselodevolvióalamericano.

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Skiploofreció.—¿Alguientienesed?Lasdosmujeresserieron.Élprobólaleche.—PorelamordeDios—dijoEdith—,tireeso,hombre.Levaasentarmal.Skiplovacióenelsueloydejóqueelvendedorcortaralafrutaencuartos.Edithintercambióalgunaspalabrasconelconductoryluegoregresóconellos.—Lehehecholavarlosfaros.Nuncalavanlosfaros.Sehaceoscuroyconducencomosituvieran

losojosvendados,detodoelbarroquellevan.—EmpezóadespedirsedeKathy,yadarlelasgracias,ysetomóunbuenratoparafinalizarsuvisita.LeofreciólamanoaSkipSandsyéllesostuvolasyemasdelosdedoscongestoincómodo—.Muchasgracias—dijoEdith—.CreoquevaaserustedunainspiraciónparaDamulog.

Habíaalgomaliciosoeimpertinenteensutono.Edith llevaba una bolsa de paja gigante y multicolor con cierre de cáñamo. Por fin se alejó

meciéndola, caminando con los pies planos enfundados en sus sandalias, con el traserobamboleándosecomoeldeuncarabaodentrodesufaldadeseda.Bien.Adiós.Kathyllevabatodalatardesintiendoenelcuelloyenloshombrosunatensión,undeseodesacudirsedeencimaelpesodela compañía de aquellamujer. El final de cada jornada le robaba la luz a su corazón, y entoncesllegabalalocuraamargadelasnoches,eldespertarse,elllorar,elpensar,elleersobreelInfierno.

En cambio, el americano, que estaba extendiendo su pañuelo blanco para ella sobre un bancocubiertodemoho,leresultabaabsurdo,estúpido,relajante.Élledijo:

—Voulez-vousparlezfrançais?—¿Cómo…?Oh,no,nohablamosfrancésenManitoba.Nosomosesaclasedecanadienses.¿Es

ustedlingüistadeverdad?—Esunsimplehobby.Estoysegurodequeaquíunlingüistadeverdadpodríahacereltrabajode

una vida entera. Por lo que he podido averiguar, nadie ha intentado estudiar los dialectos deMindanaodeningunaformaorganizada.

Cogió una rodaja de su coco. Las hormigas lo habían encontrado. Las quitó de un soplido yarrancóuntrozoconlahojadeunanavajadecolorazuloscurodelosBoyScoutsofAmerica.

—Tieneusteduntrabajoduro—dijoél.—Oh,sí—dijoella—.Calculémallanaturalezadetodalapropuesta.—¿Enserio?—Laprofundidaddelamisma,sí,ysuseriedad.Ellateníaganasdegritarlequeseobservaraasímismo.—Bueno,yosolamentemereferíaaquetieneustedquetratarconunmontóndegente.—Encuantounoserodeadepaganos,todocambia.Cambiamucho.Todosevuelvemuchomás

claro, muchomás nítido, más nítidamente claro. En fin—dijo ella—. Es la clase de cosa que sevuelveconfusacuandounohabladeella.

—Supongoqueloes.—Entoncesnohablemosdeello.¿Leimportaqueapunteunoscuantospensamientosalgunavezy

selospase?¿Porescrito?—Claroqueno—dijoél.—¿Yquéhaydeusted?¿Cómovasutrabajo?—Sonmásbienunasvacaciones.

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—¿QuéinteresestieneDelMonteaquí?NomedalaimpresióndequesepuedanplantarmuchaspiñasporestasplaniciesdeMaguindanao.Seinundantodoeltiempo.

—Estoydevacaciones.Degira.—Asíquellegaustedsinmásexplicación.Unsimpleembajadorperdido.—Bueno, sí, yo lo vería como una especie de oportunidad de hacer de embajador si no fuera

porquelabuenagentecomoustednosestárepresentandoyamuchomejor.—¿Representándonosaquiénes,señorSands?—AEstadosUnidos,señoraJones.—Yosoycanadiense.RepresentoalEvangelio.—Bueno,EstadosUnidostambién.—¿HaleídoustedunlibrotituladoElamericanofeo?—¿Porquéibaaquererleerunlibroasí?—dijoél.Ellaseloquedómirando.—Oooh,vale,heleídoElamericanofeo—dijoél—.Mepareceunatontería.Laautoflagelación

seestáconvirtiendoenunamoda.Nomelotrago.—¿YElamericanoimpasible?—TambiénheleídoElamericanoimpasible.Yellasefijóenquenoetiquetabaaqueldetontería.—Losoccidentalessomosafortunadosenmuchossentidos—dijoella—.Tenemosunavoluntad

máslibre.Somoslibresdeciertos…—Sequedóencalladaensusreflexiones.—Tenemosderechos.Libertad.Democracia.—Nomerefieroaeso.Nosécómodecirlo.Lodellibrealbedríosuscitapreguntas.Ella se estremeció mientras se planteaba preguntarle si había leído a Juan Calvino… No. La

preguntaensíyaeraunabismo.—¿Seencuentraustedbien?—SeñorSands—dijoella—.¿ConoceustedaCristo?—Soycatólico.—Sí.Pero¿conoceustedaCristo?—Bueno—dijoél—.Nodelaformaalaquecreoqueserefiereusted.—Yotampoco.Élnocontestónada.—YocreíaconoceraCristo—dijoella—.Peroestabaequivocadadeltodo.Ellasefijóenqueélpermanecíasentadomuyquietocuandonoteníanadaquedecir.—Noestamostodoslocosaquí,¿sabe?—dijoella.Yéltampocotuvorespuestaparaaquello—.

Losiento—dijoella.Élcarraspeóconcautela.—Podríaustedirseacasa,¿noescierto?—dijo.—Oh, no. No podría hacer eso. —Ella notó que a él le daba miedo preguntar por qué—.

Simplementeporqueentoncesnuncapodríaarreglarnada.Aquelamericanocreabaunsilenciodifícilderesistir.Ellatuvoquellenarlo:—¿Sabe usted?No es inusual, ni extraño, ni insólito, seguir adelante enmedio de la tragedia.

¡Miredóndeestamos!Elsolnoparadesalirydeponerse.Cadadíaabremásespacioapatadasenelcorazóndeuno,¿cuálsería lapalabra…?Elamores implacable,empujade forma implacable,no

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paradeempujarydedarpatadasdentrodeuno.¡Perobueno!¡Yahehabladodemasiado!¡Menudatontaestoyhecha!,estuvoapuntodegritar.Elsolponientedescendiódelasnubesylosgolpeódetalmaneraquedeprontoelpuebloentero

vibróconunaluzescarlata.Elamericanonohizoningúncomentarioalrespecto.Loquedijofue:—¿Yquépasacuandotodoestoesté…esté…esté…concluido?—Felicidades,haencontradoustedunapalabra.—Losiento.—¿SerefiereasiTimothyestámuerto?—Sí…bueno…sí.Losiento.—No sabemos qué le ha pasado. Se subió en el autobús para ir a Malaybalay y seguimos

esperandoaquevuelva.Parecíaenfermo,prometióqueveríaaunmédicoenelsanatoriodeallíantesde acudir a ninguna otra cita. Por lo que sabemos, en el sanatorio no lo vio nadie. No estamossegurosdequellegaraaMalaybalay.Hemosestadoentodoslospueblosquehayentreaquíyallí…ynada,nada,nohaynoticias.

—Ysupongoqueyahapasadountiempo.—Diecisietesemanas—dijoella—.Sehahechotodoloposible.—¿Todo?—Noshemospuestoencontactocontodoelmundo,todaslasautoridades,laembajadaynuestras

familias,porsupuesto.Hemoshechotodosunmillardellamadas,todoelmundosehavueltolocounmillardeveces.Supadrevinoenjulioyofrecióunarecompensa.

—Unarecompensa.¿Tienemuchodinero?—No,paranada.—Oh.—Hahabidounanovedad,sinembargo.Sehanencontradounosrestos.FielasuorigenenelMedioOeste,elamericanoreaccionóaaquelcomentariodiciendo«Ah»y

«Ajá».—Asíqueahoramismoestamosesperandoaquenosdiganalgosobrelosefectospersonalesdel

cadáver.—MelohacontadoelalcaldeLuis.—¿YsiesTimothy?Mequedaréunatemporadayluegoencontraréundestinonuevo,queeslo

queyaestábamosplaneandodetodasmaneras.Obien,siTimothyvuelveynossorprendeatodos…queesalgoquepuedepasar,noconoceustedaTimothy…sipasaeso,probablementeseguiremosconnuestrosplanes.Élnecesitauncambio.Queríauncambio,unnuevodesafío.Locualquieredecirlosmismosproblemasdesiempre,peroenunlugarcompletamentenuevo.Yyosoyenfermera,meaceptarándondeseaquemepuedanconseguir.Tailandia,LaosoVietnam.

—¿VietnamdelNorteodelSur?—NosotrostenemosagenteenelNorte—dijoella.—¿LosadventistasdelSéptimoDía?—LaMIAN.LaMisiónInternacionaldeAyudaalosNiños.—Ya,laMIAN.—Ydepronto,élsepusoahablarapasionadamente—:Escuche,estagentedepor

aquínuncavaatenernadamuchomejorqueloquetienenahora.Peroesposiblequesushijossí.Lalibreempresacomporta innovación,educación,prosperidad, todasesascosas tancursis.Y la libreempresaestádestinadaaextenderse,essunaturaleza.Susbisnietoslotendránmejorquenosotrosen

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EstadosUnidos.—Bueno—dijo ella, sorprendida—, son ideas bonitas, son palabras de esperanza. Pero «esta

gente»nopuedecomerpalabras.Necesitanarrozenelvientre,ymerefieroaestanoche.—Bajoelcomunismoesposiblequesushijospuedancomermejorestanoche.Perosusnietosse

morirándehambreenunmundoqueserátodounagrancárcel.—Yatodoesto,¿cómohemosacabadohablandodeestetema?—¿SabíaustedquelaMIANestáconsideradaunatapaderadelcomunismo?—No.¿Lodicedeverdad?Eraverdadquenolohabíaoído,ynoleimportabademasiado.—LaembajadaamericanaenSaigónlosconsideratercerafuerza.—Bueno,señorSands,yonosoyningunaquintacolumna,nitercerafuerza.Nisiquieraséquées

unatercerafuerza.—Esalgoquenoesnicomunistanianticomunista,peroqueayudamásaloscomunistas.—¿YustedeslagentedeDelMontepasanmuchotiempoenlaembajadaamericanadeSaigón?—Recibimosboletinesdetodaspartes.—LaMIANesungrupodiminuto.Funcionamosgraciasabecasdeunadocenadefundacionesde

caridad.TenemosunaoficinaenMinneapolisyunascuarentaenfermerassobreel terrenoennosécuántospaíses.Quinceodieciséispaíses,creo.SeñorSands,pareceustedtrastornado.

—¿Enserio?—dijoél—.Puesdebiódesentirseustedbastantetrastornadalaotranoche.—¿Cuándo?—EnMalaybalay.—¿Malaybalay?—Oh, venga… En el restaurante italiano… Cuando el alcalde mencionó a Kathy Jones, la

adventistadelSéptimoDía,elnombreeraelmismo.Peronocreíquefuerausted.—¿Porqué?—PorqueaquellanochenoparecíaustedadventistadelSéptimoDía.Elamericanoparecíaestaresperandoconsusbermudasdecoloresaqueelladijeraalgo,aunque

estabaclaroquenohabíanadaquedecir.—Elalcaldeysufamiliasehanportadomuybienconmigo—dijoella.—Bueno,osea…Vengaya.—Nosiempre locontamos todosobrenosotrosmismos,¿verdad?Porejemplo,elalcaldecree

queustednoesquiendiceserenabsoluto.Creequedesempeñaustedunamisiónsecreta.—¿QuieredecirquenotrabajoparaDelMonte?¿QuesoyunespíadeDolePineapple?—EltíodeusteddecíaserdelaAID.—¿Tuvoustedmuchasocasionesdehablarconél?—Esunviejogranujabastantepintoresco.—Supongoqueesoquieredecirquesí.¿Conquiénestabaél?—Connadie.—Oh.Peroelalcaldemencionóaunpardepersonasmás.Aunalemán,talvez.—Ellosvinieronmuchodespués.—¿Losotrosdos?¿Cuándoestuvieronaquí?¿Seacuerdausted?—Yomemarchéelviernes.Asíqueellosestuvieronaquíeljueves.—Eljuevespasado,medice.Hacecuatrodías.

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—Uno,dos,tresycuatro,sí,cuatrodías.¿Esoesmalo?—No,no,no.Simplementemegustaríahabérmelosencontrado.¿Conquiénibaelalemán?—Déjemever.Conunfilipino.Militar.—Ajá,elmayorAguinaldo.—Laverdadesquenolovi.—Es amigonuestro. Pero no estoy seguro sobre el alemán. ¿Era alemán?No estoy seguro de

conocerlo.Elalcaldedijoqueteníabarba.—Essuizo,segúnelalcalde.—¿Conbarba?—Nolovi.—Perovioustedalcoronel.—Poraquínovemosmuchasbarbas.Debendepinchar.Ytambiénesebigote,apuesto.Él lacontemplóensilencio,comoesperandodesafianteaqueella loexaminara:sinsombrero,

consudorgoteándoledelcuerocabelludoempapadoytambiéndelbigotemustio…Acontinuaciónsepermitióecharunvistazoasualrededor,contemplaraquelresplandordecolorbermellónquelosrodeabaalmismotiempoqueempezabaadesvanecerse.

—Uau—dijo.—Miabuelallamabaaesto«entreluces».—Aveceslodejaaunoestupefacto.—Dentrodecincominutoshabráunanubedemosquitosysenoscomeránvivos.—«Entreluces.»Suenaexótico.—Yaseacaba.Hasidocasicomolíquido.—LehaceaunoestarmássegurodequeexisteelParaíso.—NoestoyseguradequeelParaísosearealmenteunlugardeseable.Ellasupusoqueaquelloloescandalizaría,peroloqueéldijofue:—Creoqueentiendomásomenosloquequieredecirusted.—¿ViajaustedconlaPalabra?—dijoella.—¿Lapalabra?Oh…—¿TieneustedunaBibliaconusted?Enelhotel,merefiero…—No.—Bueno,ciertamentepodemosconseguirponerleunaenlasmanos.—Bueno…vale.—LoscatólicosnoletienentantoapegoalaPalabracomoelrestodenosotros,¿verdad?—Nolosé.Noséquéhaceelrestodeustedes.—SeñorSands,¿cómoheconseguidocaerlemal?—Tienequeperdonarme—dijoél—.Esenoeselcasoenabsoluto.Simplementenoestoysiendo

muycortés,ymetendríaquedarvergüenza.Ladisculpalaconmovió.Intentóarticularunaaceptaciónelegante.—¿QuiénesesequevieneconelalcaldeLuis?—dijoSands—.Llevaunalanzaenlamano.Ella examinó al alcalde y a dos personas más que se acercaban por el camino de barro

apelmazadoycharcospocoprofundos,elalcaldeconsucamisablancadedeportequellevabacomosifueraunmuu-muusobresubarrigaenorme,unodeloshombresqueloacompañabanapuntandoconunalargalanzaalasnubesyelotrofumandouncigarrillo,ysupoalinstanteloquepasaba.

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—Oh,cielos—dijoella,ygritó—:¡AlcaldeLuis!¡Alcalde!EllasepusodepieylomismohizoSkipSands.Enlamanoizquierdaellateníaelpañueloblanco

deél,sobreelquehabíaestadosentada.Loshombressegiraronysedirigieronhaciaellos.—Esella,esella—dijoelalcalde.Amedidaqueseacercaban,parecióque traíanelanochecer

conellos.Lapuntadelcigarrillosoltóundestelloen laoscuridad—.Kathy—dijoelalcalde—.Esmuytriste.

En aquelmomento ella no consiguió recordar si algunavezhabía albergado realmente algunaesperanza.

ElalcaldeLuisparecíaestarhablandoconSkip.—Meentristecetenerqueseryo.Peropordesgracia,sigosiendoelalcalde.Elalcaldeleofrecióelanilloy,paracogerloconlosdedos,elladejócaerelpañueloblancodel

americano.—Kathy,estanocheestamostodosmuytristes.—¡Nopuedoversiestálainscripción!—Lainscripciónestá.Mellenadetristezatraerteestaprueba.—Oseaqueyaestá.—Sí—dijoLuis.EllasostuvoelanillodeTimothyenlamano.—¿Yahoraqué?¿Quéhagoyoconesto?Selopusoenelíndicedelamanoderecha.—Voyadejarlesconsusasuntos—dijoSkip.—No,notevayas—dijoella,cogiéndoledelamano.—Esunaverdaderatragedia—repusoél.—Vamos,Kathy—dijoelalcalde—.Skipyaledaráelpésamemástarde.Elcompañeromásjovendelalcaldetirósucigarrilloauncharco.—Hemoshechounlargoviajeporusted—dijo.Ahorahabíaquepagarles.¿Quiénpagaba?—¿Acasosoyyolaquedebedarlesloscincuentapesos?—dijoella.Nocontestónadie—.¿Yno

tienen…nohantraído…nohaymásqueesto?—Sí. Tenemos los restos de Timmy enmi casa—dijo el alcalde—.Mimujer está con ellos,

guardandounavelasilenciosahastaquelalleveallí.Sí,Kathy,nuestroTimmyestádifunto.Eshoradellorarlo.

***

SandspasójuntoalacasadelaseñoraJonestresocuatrovecesantesdeverluzdentro.Yaeranlasoncedelanoche,peroallílagenteechabasiestaslargasysequedabalevantadahastamuytarde.

Subiólosescalonesypermanecióbajolaluzdelporchedeella,uncírculodeneónmoteadodeinsectosdiminutos.Atravésde laventanalavioenmediodesusaladeestar,depieyconaspectoperdido.Delamanolecolgabaunabotellaporelgollete.

Alparecer,ellatambiénlopodíaveraél.—¿Quiereustedunpuro?—dijoella.—¿Qué?—dijoél.

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—¿Quiere usted un puro?—Una pregunta perfectamente simple que él no podía responder—.Estanocheestoybebiendounpoquito.

Él tuvo que retroceder mientras ella abría la puerta hacia fuera, salía e iba a sentarse en labarandilladelporche.Noteníamuchoequilibrio,yéltemióverlacaeralaoscuridad.

—Quieroquepruebeesto.—¿Quées?—Escoñac.—Nomegustalabebidafuerte.—Escoñacdearroz.—¿Dearroz?—Escoñacdearroz.Es…coñacdearroz.—¿Sesienteusted…?Élsedetuvo.Quéformatanestúpidadeempezar…Sumaridoestabamuerto.—No.—¿No?—Queno,ledigo.—¿Noqué?—Nomesiento.—SeñoraJones—dijoél.—No, no se vaya—dijo ella—. Antes le he pedido que no se fuera y usted se ha marchado.

Escuche, no se preocupe, todo el tiempo he sabido que no estaría vivo. Por eso le cogí lamanoaquellavezenelrestaurante.Sabíaquenohabíaesperanza.Nohayesperanza,asíqueporquénonosvamostodos…alacama.

—Diosmío—dijoél.—Noquierodecirahoramismo.Sí,quierodecirahoramismo.Cállate,Kathy.Estásborracha.—Serámejorquecomaalgo.—Tengounpocodecarnedecerdo,sinosehapuestomala.—Lesentaríabiencomer,¿nocree?—Ybollos.—Probablementelosbollos…Secalló.Habíaqueridodecirquelosbollostalvezabsorberíanpartedelcoñac,perohacíacalor,

le dolía el cuello de tan quemado que lo tenía, y además, ¿qué sentido tenía discutir sobre lascualidadesabsorbentesdelosdistintosalimentos?

—¿Quélepasa,joven?—Estoyviviendosinaireacondicionado.Ellaloexaminódecerca.Parecíamáslocaqueborracha.—Sientomucholodesumarido—dijoella.—¿Qué?Ellateníalablusamediodesabotonadayligeramenteabiertacasihastalaalturadelombligo.Su

sujetadormostrabaundibujosorprendentedefloresazulesdiminutas.Lecaíaelsudorporelvientre.Élteníaunsarpullidoirritadoydolorosoqueleibadesdelossobacosalospezones.

—Sientraustedencasaybebeunpocodecoñac,yocomeré—dijolaseñoraJones—.Hayaireacondicionado.

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El aire acondicionado estaba en el dormitorio, y ellos se fueron a la cama e hicieron algoparecidoahacerelamor.Mientraslohacían,élsesintióincómodo.No.Feo.Encuantoterminaronsequitódeencima lasmanosdeella, sevistióy regresócaminandoalhotelcon los remordimientosennegreciéndoleelcerebroyatascándoselocomograsasucia.Unamujerreciénenviudada,yencimaeldíaenquehabíarecibidolanoticia…Ella,porotrolado,nohabíaparecidoavergonzadaalacabar,nitampocomuyborracha.Solamentefuriosaconsumaridoporestarmuerto.

Alanochesiguiente,élpasópordelantedelacasadeella,peronovioningunaluzdentro.Probóallamarynoobtuvorespuesta.Sillamabamásfuertedespertaríaalosvecinos.Semarchó.

La temporada seca todavía no había llegado, y sin embargo no llovía. Inmediatamente después decadapuestadelsolunatapadenubesempujabaelcalorhaciaabajosobreDamulogyaplastabalasfloresysemetíaalafuerzaenlacabezadetodoelmundo.Elpuebloenterosededicabaadarsorboslentosderon.Romy,eljovenagrimensor,empezóunapeleaapuñetazolimpioconunmusulmánenelSunshineEateryyrecibióunapalizaenmediodelaplaza,peronadiesedignólevantarsedelasmesasparasaliramirar.

El sábadopor la noche el tubo fluorescentedelEatery estaba cubiertode avispas rayadasydelibélulas.Seapareabanenérgicamenteydespuéssedesplomabansobrelosplatos.Unatrasotra,lasbandadas de insectos aterrizaban sobre las que ya estaban allí, se paseaban por encima de toda lailuminaciónyluegoyanoselasveíamás.ElalcaldeLuisfueabuscaraSandsalcafé.Yaterminadosusabbath,andabanecesitadodecompañía.

—Levoyasalvardelarutinadetodaslasnoches—ledijoLuis,ylollevóacenarasucasademaderaydeladrilloconsuextrañosuelodelinóleo.

Comieronadobodecerdopicanteybebieronpainit,uncafénativo.YOldCastleLiquor:nadadewhiskyescocésnidebourbon,solamenteellicor.AhoraqueRomynosalíadelhotel,dondeestabaescondiendosushematomasdelagente,Skipsoloteníaalalcaldeparaecharunasrisas.¿QuépasabaconKathyJones?

—SemarchóaManilaelmartesporlamañana—dijoelalcalde—.Vaaacompañarlosdespojosdesumaridohastaelaeropuerto.

Lanoticiafueungolpeparaél.—¿Sehamarchadoparasiempre?—SevaaencontrarallíconsusuegroyélvaallevarlosrestosaEstadosUnidos.—¿Yellanosemarchaconél?—Dehecho,ellasolovaasubirloshuesosdesumaridoalaviónyluegovuelveaDamulog.No

vaairaEstadosUnidospordedicaciónasutrabajo.AldíasiguientefueconelalcaldeLuisyuncargamentodetuberíasdehierrodediezcentímetros

en un camión de carga Isuzumulticolor con el volante a la derecha hasta el emplazamiento de lafutura planta de tratamiento de aguas, donde había una estación de filtrado de cemento de grantamañoenmediodeunpradoenorme.Estabamásqueclaroqueelproyectodedesplieguedetuberíasaduraspenashabíacruzadolalíneadesalida.ElalcaldeLuistambiénimaginabaunestadioallíalgúndía. Fue recorriendo el perímetro de los alojamientos y las canchas de pelota y de la piscina quehabríaallíenmediodeaquelllanovacíoycubiertodecarrizos,señalandoconsusmanospequeñas.

Lalluviaserefrenóporterceranocheconsecutiva.Expulsadadelbochornodesuscasas,lagente

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estaba tumbada en la pista de baloncesto, la única superficie de cemento de todo Damulog,contemplandoloscielosnegros,llanosyencapotados,sinapenasconversar,esperandoelamanecer.

Todaslasnoches,SandsdeambulabaporelpuebloypasabavariasvecespordelantedelacasadelaseñoraJones,peronovioluzniunasolavezhastalacuartanochequepasóporallí.

Ellasalióalapuerta,peronoleinvitóapasar.Teníaunaspectoterrible.—Estáencasa—dijoSands.—Váyase—ledijoella.—Mevoydelpueblomañana.—Bien.Novuelva.—Podríaorganizarlascosasparavolverdentrodepoco—dijoél—.Talvezdentrodeunparde

semanas.—Noselopuedoimpedir.—¿Puedoentraryhablarconusted?—Largo.Élgirósobresustalonesyempezóaalejarse.—Muybien,muybien,muybien—lollamóella—.Vengaaquí.

El lunesaúltimahoradelamañanaaparecióunyipnienlaplazaysequedóesperandoallíconlacapota levantada y un par de hombres inclinados sobre el motor, las piernas de otro hombresobresaliendodedebajoyelconductorsentadoenelasientodelantero,dándolealfrenoysoltandoexclamaciones.

Sandsfueelprimeroensubirse.SehabíamontadoenaquelloscacharrospararealizartrayectoscortosenManila,peronuncahabíaatravesadoningunamontañaenuno,queeraloqueibaahacerhoy.Aquellos jeeps alargados parecían capaces de transportar a una docena de personas sentadas,entrelosdelapartededelanteylatrasera,peroenrealidadllevabanatantagentecomosepudieracargar a bordo sin romper los ejes, y avanzaban sobre cualquier superficie, siempre pintados demuchoscoloreschillonesyengalanadosconbanderinesytrofeoscromadosyadornosrampantesdeesos que les gustan a los adolescentes aficionados a la velocidad. Y siempre, inscrito sobre elparabrisasdelanterodetodosellos,llevabansutítuloysulema:«Comando»,«Campeónmundial»,etcétera.Aquelsellamaba«Todavíavivo».

Mientras continuaban las reparaciones,Sands se dedicó a esperar en el bancode la seccióndepasajerosdelvehículo,contemplandolostablonesdelsuelosalpicadosdegranosdearroz,embutidoentreotrosviajerosygentequesimplementebuscabaunsitioalasombra.Alcabodedoshoras,unavez arreglado el problema y cargado el vehículo con al menos veinte viajeros y sus equipajes ybolsas,aSandsleparecióquehabíallegadoelmomento.Peroseseguíansumandocuerpos.Contóporlomenostreintaydos,incluyendoonceparesdepiernasquecolgabandeltechoydosbebés,unodormidoyelotroberreando.Tambiénoyópollitos.Losviajerosibanlobastanteapiñadosentreelloscomo para que fuera posible examinar de cerca las motitas rojas que causaba el calor en lassuperficiesdelosglobosocularesdelosdemás,obienparaestirarlalenguasilesapetecíayprobarelsudorde loscuellosajenos…Suúltimorecuento,antesdequeelcacharroempezaraamoverseimpulsadoa trompiconesporalguna fuerza sobrenaturaly salieraarrolladorayapaciblementedelpueblo, como un iceberg sudoroso y grasiento —¿de qué servían los frenos ante semejanteinexorabilidad?—,fuedecuarentayunpasajeros,veinticincoen lapartedeatrásconél, tresen la

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partededelanteydocesobreeltecho.Máselconductor.Ymásquesesubieronenelúltimosegundo,ymástodavíaquesepusieronaperseguirelvehículoytreparonaltechocomopudieron,hastaqueeltrastoacelerólobastantecomoparadejaratrásalosúltimosrezagados,riendoydiciendoadiósconlamano.Sandsteníadelanteaunancianoqueparecíaunmono,aunaancianaqueparecíaunlagartoyaunaniñaconlospiesdeunaviejadecienaños.Alpocodedejaratráselpuebloseadentrarondandotrompiconesenunbosquetupidodebananerosqueamortiguabanyfiltrabanelestruendodelmediodía,despuéspasaronporunaseriedealdeasdiminutasyadormecidasdecabañasdemaderaderoble,yenunmomentodadohastaatravesaronunafogatadebambúqueardíajustoenmediodelamaltrecha carretera.Más adelante el jeep subió por caminosmontañosos en zigzag,meciéndose ygimiendo. Luego pinchó una rueda. Casi todo el mundo se bajó del vehículo y Sands tuvooportunidad de reunirlos a todos para hacerles una foto. Cuarenta y siete personas se apiñaronalrededordelvehículo,soltandochillidosdefascinaciónmientrasélpulsabaelobturador.

A las tres de la tarde desembarcó en Carmen: una calle principal asfaltada, varios edificiosestucadosdedosplantas, lamuestradecivilizaciónmásgrandiosaquehabíaexperimentadodesdeMalaybalayhacíaunasemana.Encontróunahabitaciónparapasarlanoche,seechóadormirunratoynosedespertóhastapasadaslasdosdelamadrugada.Elpueblodormitaba,todoelmundosalvolosperros, y los pecadores…En aquella hora solitaria, Sands se arrepintió de su lujuria haciaKathyJones.Ensuimaginacióncayóderodillasa lospiesdelacruzylesuplicóaJesúsquevertierasusangrepurificadora.LaseñoraJonesera robusta, sucuerpoerademujerdemedianaedadaunqueellatodavíanohubierallegadoalamisma.Teníalacararedonda,mejillasrellenas,unhalodepelotupidoyrizadoquecasiparecíalanadecordero,ojosmarronesmuydulcesyamablesyunasmanosmuysuavesperotambiénfuertes.Cuandohablaba,lalengualetocabalosdientesincisivospequeñosymuyuniformes.Eraunamujerintrigante,agradableyatractiva,peronoloeradeformaenervante.El alma de Sands fue yendo y viniendo a rastras entre Jesús y la señora Jones, hasta que oyó elchillidodelosgallos.

Skip tenía susmapas. Los había examinado a diario, con ansia, con placer, evadido de su propiocuerpo, libre como un halcón. El coronel le había dicho dónde podía encontrar al sacerdote, aCarignan.EnelmapaqueélteníadeMindanaonoconstabaningúnsitiollamadoNasadaycercadeningún río llamado el río Grande. En su mapa de la provincia de Cotabato norte, sin embargo,estabanmarcadaslasiglesiasurbanasdeladiócesis,asíquenadamáslevantarsefuecaminandohastalaFormationHouse,lasedecentralprovistadeciertoairedecentroturísticoquehabíaenlasafuerasde Carmen. Allí le dijeron que el padre Haddag estaba descansando. Este salió al cabo de veinteminutos, un viejo filipino enjuto y fuerte a quien le olía el aliento a vino de comunión. Los dosmiraronjuntoselmapa.Elsacerdotehizounapequeñamarcaconellápiz.

—Creoquelaiglesiaestáaquí,oaquí—dijo—.Esmiconjeturarazonable.Enunfantásticodesplieguedegenerosidad, leprestóaSkipunamotocicletaHondade50cc,y

Skip llevó a cabo un viaje de treinta kilómetros en poco más de dos horas, tal vez cuarentakilómetros, contando las continuasmaniobras en diagonal para evitar los baches. Y allí estaba laiglesia, esperando sobre su marca a lápiz, un bloque de cemento torcido con una lona de coloroliváceoextendida sobre el tejado,obienhaciendo lasvecesde tejado.Skiphabía cruzadovariosvillorriosviniendodeCarmen,peroaquellaestructuraseerguíadeformaextrañamentesolitariaaunkilómetrodelmáscercano,juntoauntramoderíoqueparecíacomerseelsuelodedebajo.

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ElpadreCarignan,deascendenciacanadiensefrancófona,unhombredepeloblanco,correoso,de porte vacilante y mirada vidriosa, llevaba tanto tiempo viviendo allí—treinta y tres años, dehecho,queabarcabanlaocupaciónjaponesa,loslevantamientosmusulmanes,losfamosostifonesyloscambiosrepentinosycalamitososenelcursodelrío,hablandocebuanoyhaciendodesacerdoteparaaquelloscatólicosnativos tostadosporel sol—queyaapenas recordabael idioma inglés.AlpreguntarleaSkipporsusorígenes,lepreguntóquiéneseransusdescendientes,queriendodecirsusancestros.

Carignanlediolabienvenidacomoeradebido,hizosacartéaunamesillasituadaalasombrayse sentó delante de él, quitándose las sandalias y juntando los pies por debajo de lamesa con lasrodillasseparadas.Llevabaunospantalonesvaquerosdescoloridosyunacamisetateñidademarrónpor el agua del río. Respiraba por la boca, fumaba cigarrillos Union y pronunciaba la marca«Onion».Cuandonoestabafumandoseagarraba losmuslosysemecía ligeramenteensuasiento,desviando la mirada hacia abajo y hacia un lado como si fuera un enfermo mental. Hizo ciertoesfuerzopara interesarsepor laconversación.CadavezqueSandshablaba,el sacerdote lomirabacon una expresión —involuntaria, Sands estaba seguro— de espanto comedido, de incredulidadamistosa,comosiSandssehubierapresentadoallísinpantalones.Noparecíaniremotamentecapazdetraficarconarmas.

—¿AlgunavezlollamanaustedSandy?—¡Ytanto!PeromisamigosmellamanSkip.—Skip—repitióelsacerdote,diciendo«Esquip»comolodiríaunfilipino.—Tengoentendidoqueayudóustedaencontraralmisioneroperdido.Quierodecir,arecuperar

susdespojos.—Sí.Sí,esoes.—¿EnelríoPulangi?—Sí.Devueltaaquí,alsubirlacolina,medesmayé.—Pero¿elPulanginoesesteríodeaquí?Esloqueponeenmimapa.—Es una división, ¿cómo se dice? No me acuerdo…Un ramal, ya sabe. Esta parte es el río

Grande.—Unafluente.—ParallegaralramaldelPulangituvimosquecaminarmuchoskilómetros.Muchísimos.¡Porlas

nochessueñoquetodavíaestoydeviaje!¿Leparecebienesteté?—Muybueno,gracias.—Elaguanoestámal.Tenemosbastanteparabeber,peronoparabañarnos.Eltanquepierde.Sereferíaalacisternadecementollenadegrietasquehabíaapocosmetrosdeallí.—¿Tienemuchoscatólicosensuparroquia?—Oh,sí.Sí.Católicos.Hebautizadoacentenares,heconfirmadoacentenares.Noséadóndevan

después.Alamayoríanolosveonunca.—¿Novienenamisa?—Vienencuandolesvanmallascosas.ParaellosnosoyrealmenteunsacerdotedeDios.Aellos

lesgustapedirayudaalasbrujas.Yosoymásbieneso.—Ah.—Vendránmañana.Unoscuantos.PorqueeseldíadelafestividaddesantaDionisia.Elloscreen

quetienepoderes.

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—Ajá.—¿Yusted?—¿Yo?—¿Esustedcatólico?—Mimadrenoeracatólica.Mipadre,sí.—Bueno…elpadrenosuelesermuyreligioso.—Mipadremurióenlaguerra.YovisitémuchasvecesamisparientesirlandesesdeBoston.Eran

católicosbastantefervientes.—Pero¿estáustedconfirmado?—Sí,hicelaconfirmaciónenBoston.—¿HadichoBoston?YocrecíenBridgewater.Cercadeallí.—Sí.Estabanteniendolamayorpartedeaquellaconversaciónporsegundavez.—Despuésdemarcharmeyodecasa—ledijoelsacerdote—,mipadreymimadresemudarona

Boston.Conmimadrehablépor teléfonoenmilnovecientoscuarentayocho.La llamédesdeesehotelnuevoeimportantedeDavao.Bueno,nuevoporentonces.Quizásigasiendoimportante,¿eh?Ellamedijoquesiemprerezabapormí.Eloírsuvozhizoquemeparecieramáslejosquenunca.Cuandovolvíaquíalaparroquia,fuecomovolveraempezardesdeelprimerdía.Mevolvíasentirlejosdecasa.

Había cuatro niños diminutos, completamente desnudos salvo por las camisetas, de pie en laesquinadeledificio,mirando.CuandoSandslessonrió,elloschillaronysealejaroncorriendo.

—Conocíalotrohombre—dijoCarignan—.Éltambiénnosvisitó.—Noestoysegurodeaquiénserefiere.—Alcoronel,elcoronelSands.—Ah,claro,elcoronel—asintióSkip.—Peronollevabauniforme.Creoquelosuniformesdebendedarmuchocalor.Asíquenoséde

quécuerpodelejército.—Estáretirado.—TambiénsellamaSands.—Sí.Esmitío.—Sutío.Yaveo.¿Ustedtambiénescoronel?—No,yonoestoyenelejército.—Yaveo.¿EstáustedconlosPeaceCorps?—No,trabajoparaDelMonte.Creoqueyalohemencionado.—HaygentequeestámuyemocionadaconlosPeaceCorps.Todoelmundoquiererecibirauno,

siesposible.—Lamentodecirquenosémuchodeltema.—Ylosotrosdosdeayer.Elsoldadofilipinoyelotro.—¿Ayer?Carignanjuntólascejasydijo:—¿Nofueayer?—Déjemeversientiendoelordendetodoesto—dijoSands—.¿Cuándovinoelcoronel?—Oh,haceunassemanas.SobrelafestividaddesanAntonio.

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—¿Ylosotrosdosvinieronayer?—Yonolosvi.MelodijoPilar.Yomefuiríoabajoahacerlaextremaunción…aunamujermuy

ancianadeallí.Pilarmehablódeunfilipinoyunblanco.Nounyanqui.Unextranjero.Teníanunachalupadepalma.

—Yaveo,unachalupadepalma—dijoSands,sintiendoquelasorillassedeshacíanbajosuspies.—Boston,¿verdad?—dijoCarignan.—Sí,Boston—dijoSkip.—¿DelMonte,mehadicho?—Esohedicho.Peroesosdosvisitantes…quéraro,¿no?—Creoquetodavíadebendeestarenelrío.LepreguntaréaPilar.Aellalagentedelríolecuenta

todoloquepasa.—¿Pilareslaseñoradeantes?¿Lamujerquenoshaservidoelté?—¿Leparecebueno?Notenemosleche—lerecordóelsacerdote,repitiendolodichocuandose

habíansentado.—PorDios—dijoSkip.ElsacerdotepareciónotarlaconfusióndeSkip.Semostrósolícito.—Todostenemosunviajeespiritualquellevaracabo.Cuandoyoeraniñoestaballenodeodio

hacialosjudíosporquedecíaqueerancrucificadores.TambiénleteníamuchodesprecioaJudas,porsutraición.

—Ya—dijoSands,ynoañadiónada.Carignanpareciópugnarconsigomismo.Laspalabrasnolesalíandelagarganta.Setocólaboca

conlosdedos.—Bueno,esdemasiadoparaqueunoloexperimentesolo—dijo,yfueracualfueralaverdadala

queseproponíallegar,susojoseranlascicatricesvisiblesdelamisma.—¿Puedosacarleunafoto?Deprontoelsacerdotesemostróreflexivoypremonitorio,conlasmanosunidasfrentealpecho.

Skipenfocóypulsóelobturador,yCarignanserelajó.—Esustedunpocoperegrino,¿eh?—dijo—.Sí.Yotambién.Acabodehacerunviajeapiemuy

largohastaelríoPulangi.—Podemosrezarelunoporelotro—dijoSkip.—Yonorezo.—Ah,¿no?—No,no,no.Yonorezo.

***

Alyanquilegustabaelté.Insistióenirabuscarloél.EstuvohablandomuchoratoconPilarsobrelosotrosvisitantes.

Leresultabaunmisterioelqueestuvieraviniendotodaaquellagente.Parecíaquealyanquilehabíagustadovenirenmoto,entrardandotumbossobrelasroderasdel

patio,conelasadesubolsadetelaenganchadaenelcinturónylatelabalanceándoseauncostado.En ausencia del yanqui, los niños se materializaron alrededor de la moto, boquiabiertos,

tocándolaconlasyemasdelosdedos.

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—¡Yaviene!—gritóCarignaneninglés,ylosniñossedispersaron.¿Porqué leestabavolviendoa lacabezael idioma inglésen lasúltimassemanas?¿Eraporque

habíaestadopensandoenelmisioneroinglés?¿Enaquelloshuesosdentrodesucaja,quenodecíannadaperolodecíanentodoslosidiomas?Otalvezporquelehabíaabiertounagujeroenlamenteelhablarporprimeravezconelvisitanteamericano,elcoronel,elprimeramericanoqueveíaenaños.Endécadas.

Aquelcoronelhabíavenidodosveces.Habíavenidosoloysehabíacomportadoconrespeto.Eraunbuenhombreylosnativoshabíanreaccionadoasupresenciaconentusiasmo.Peroseanbuenosomalos,loshombresfuertessiemprecausanproblemas.

Imaginando la impresiónque todoaquellodebíadeproducir a losojosdelvisitante,Carignancontemplóelsenderodebarrorojoquellevabaalaorilladelrío,lacisternaagrietada,elmohoquetrepaba por las paredes. Probablemente el yanqui estaba usando la cámara de cemento, los«servicios»delaplantabaja:oscuros,mugrientosyseparadosúnicamentemedianteunaparedbajadelacocina,dondeahoraPilarestabacocinandoarrozycantandounacanción.Siellaquería,podíaasomarse por encimade la separación ymirarlo a la caramientras él estaba en cuclillas sobre elagujero.Elyanquiquerríapapelhigiénico.Habíaunrolloenlosservicios,perolohabíanempapadotantasvecesloselementosquelaverdaderaqueyanosepodíausar.

Pilardejódecantarenlacocinaysalióconotrabandeja.Rodajasdemangoypiña.—Pilar,yatelohedicho:sivuelveelamericano,ledicesquenoestoy.—Perosinoeselmismo.—Nomegustaquevengantantosamericanos.—Escatólico.—Tambiénloeraelcoronel.—¿Nolecaenbienloscatólicos?Ustedescatólico.Yosoycatólica.—Yateestáshaciendolatontaotravez.—No.Ustedeseltonto.Pilarlerecriminabaelquenoseaprovecharadeella.Yélloentendía.¿Aquiénleibaaimportar

elquelohiciera?Pasabasimplementequeaélledabamuchavergüenzacualquiercontactofísico.—Elviejoesevieneporelcaminoaverloausted—dijoella—.Loacabodeverdesdelacocina.

Noledénadadecomida.Siemprevuelve.—¿Dóndeestáelamericano?—Cuartodebaño—dijoellaeninglés.El anciano esperó a que Pilar entrara antes de aparecer doblando el recodo de la iglesia,

caminandodeladoporunaespeciededeferencia,vestidoúnicamenteconunospantalonescortosdecolorcaquiconlaspernerasarremangadashastalaentrepiernaylacinturasujetaalapanzaconunacuerda.Carignanlehizounaseñalparaqueseacercarayelancianofueasentarseconél.Igualquetodos, estaba demacrado y casi no tenía carne, una momia reanimada. Tenía los rasgos planos yfatigadosdeunesquimalmuysabio.Sonreíamucho.Apenasteníadientes.

—Bendígame,pádere, porque hay pecado—dijo en inglés sin que pareciera entender lo queestabadiciendo—.Bendígameylepidoquemeperdone.

—Teabsolvo.Comaunpocodepiña.Elancianocogióvariospedazosconlasmanosydijo:«Maramingsalamatpo»,quequeríadecir

graciasentagalo,dialectodeLuzón.Porlogeneral,lospreliminaresdelancianoparecíanrequerir

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declaracionesenidiomasdiversos.—Elmespasadotuveunvisitanteenmissueños—lerevelóelsacerdote—.Creoquemetrajoun

mensaje.Elancianonodijonada,selimitóaconcentrarseensucomida,conlacarataninexpresivacomo

ladeunperro.Elinvitadoamericanoregresódelacocinaperonotraíasuté.Aquelyanquiperegrinoteníaunos

andares desenfadados, con unosmiembros que semovían libremente alrededor del enormehornocalientedesutronco,deaquelfuegodelsufrimientodelquenoparecíaserconsciente.

Mientraselyanquiseacercaba,elancianodejólibresuasientoysepusoencuclillassobrelospiesplanosalladodeellos.

—Le estoy preguntando por un sueño que tuve. Él puede desentrañar su mensaje —le dijoCarignanalamericano.

—Hola,pádere—dijoelanciano.—Éllollamaaustedpadre—dijoCarignan.Mientrasseterminabalafrutayselamíalosdedos,elancianodijoencebuano:—¿Porquédiceustedquesusueñotraíaunmensaje?—Fueunsueñofuerte—dijoCarignan.—¿Sedespertó?—Sí.—¿Sevolvióadormir?—Mequedédespiertotodalanoche.—Entoncestuvoustedunsueñofuerte.—Vinoavermeunmonje,unhombredeDios.—UstedesunhombredeDios.—Élllevabacapucha.Sucaraeraunanubeplateada.—¿Unhombre?—Sí.—¿Desufamilia?—No.—¿Leviolacara?—No.—¿Leviolasmanos?—No.—¿Leenseñólospies?—No.ElancianosepusoahablarleaSkipSandsentonomuygraveyunpocodemasiadoalto.—Sí.¿Cómoestáusted?—dijoSands.Elancianoagarróalamericanodelamuñeca.Habló.Sedetuvo.Elsacerdotetradujo:—Dicequealdormir,cuandounoduerme,tuespíritusaledelcuerpo.Yelpastorqueconduceel

rebañodeespírituslosllevaaloaltoy…—consultóconelnarrador—…elpastordelosespírituspersiguealosespíritus,losreúnecomosifueranovejasylosconducealacosta,alaplaya.

Elhombrehablaba,elsacerdotelehacíapreguntas,elhombretirabadelbrazodelamericanoyporfinCarignanconstruyóunrelato:trasserconducidosalaorilla,losespíritussesumergenenel

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maryallíabajoencuentranelmundodelossueños.Cualquieraqueintenteirentreambosmundosseasfixiará en sus remolinos y morirá dormido. Carignan no encontraba las palabras inglesasadecuadas.

—Estácontandounahistoriacomplicada.Creoqueestáunpocoloco.—Estemundonoguardarecuerdosdeloquehabíaantesdenacer,yloquehaydespuésdemorir

noguardarecuerdosdenuestraspenas.Asíquealégresedequevengalamuerte.Ydiciendoaquello,elancianosepusodepieysemarchó.—Espere.Espere.¿Cuáleslaprofecíademisueño?—¿Esquenomehaoído?—dijoelanciano.

***

ElpadreCarignaninsistióenpasarlanocheenunahamacaenlaiglesiamientrasSandsdormíaconlaSantaHostiaenlahabitacióndeCarignan,omejordicho,laHostiadescansabainsomnesobrelacómodadelsacerdote,mientrasqueSandsintentabadormirsobresucamadelamasdemaderaconcolchóndepajadebajodeunafinaredecilla.Unaceldademonje,perfectamenteapropiadaparasuperegrinaje.Permaneciótumbadoenlaoscuridad.Unmosquitogemíaalotroladodelaredecilla.SerecordóasímismoqueteníaquepreguntarlealcoronelporalgoqueestehabíacitadodelaBiblia:aquellodequehabíaunsoloDiosperomuchasadministraciones.Laidearesultabaatractivaparaunhombre del gobierno. Una burocracia cosmológica… Ahora lo inundaba la preocupación. Elcoronel,EddieAguinaldo,elalemán.Habíanviajadohastaallíynadieselohabíadicho.Noestababien que el coronel le ocultara cosas.Aquello apelaba a una zona de duda que él albergaba, dudaacercadelacompetenciadelcoronel,desujuicio,delpoderdesupercepción.Elcoronelestabaunpoco loco. Pero ¿quién no lo estaba? El problema era que el coronel tal vez no confiara en lostalentosdesusobrino,yeraposiblequelohubieramandadoaunafalsamisión.Enunmomentodadosedespertódeunsueñodefuerzabíblica,unsueñoprofético,convencidodequelaisladeMindanaonoteníaningúninterésparaEstadosUnidos,dequeeraimposiblequesusacerdotecatólicoestuvieratraficando con armas para losmusulmanes, que la vida lo había llamado a él—a Skip Sands, elamericanoimpasible,elamericanofeo—aaquellugarsoloparaampliarsuentendimientoconvistasasu trabajo futuro.Porquedemomentoallínohabíanadaquehacer.Delsueñono lequedóniunsolodetalle.Soloaquellacerteza.

***

Carignan le explicó al yanqui que tal vez vendría gente a la liturgia matinal porque hoyconmemorabanaunasantaalaqueapreciabanmucho,Dionisia.

ElyanquinuncahabíaoídohablardesantaDionisia.Niélninadie.—Sí,aquíesmuypoderosa.Basándoseenmilagrosquehahechoporesteríolavanacanonizar,

si es que no es santa ya. Fue martirizada en el norte de África en el siglo quinto. Un martirioconmovedor.

En una homilía de hacía décadas, con total inocencia, Carignan había llevado a cabo unadescripción gráfica de la agonía final deDionisia ante una congregación inusualmente grande, de

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maneraquetantoríoarribacomoríoabajoahora lasantasehabíavuelto legendaria,y lagente leatribuíamuchas curaciones y afirmabahaberla visto y haber sido visitados por ella en numerosasocasiones,asícomohaberrecibidomuchasseñalesymensajes.

—Asíqueintentorecordarlealagentecuándoessufestividad.Peroalagentedelríonosiempreleresultafácilsaberenquéfechaestán.Notienencalendarios.

Alfinalvinomuypocagentealservicio.Anteselsacerdotebautizóaunreciénnacidoenlaorilladelrío,dejándolecaerunasgotasdeaguafangosasobrelafrente.

—Notenemosaguabenditaperse—leexplicóalyanqui—.Asíqueelobispodecretóqueelríoenteroessagrado.Esoesloquelescuento.

Envueltoenunpañuelo,elniñoestabainerte,teníalosojoscerradosylabocaabiertaylesalíanburbujasdeflema.Lamadretambiéneraunaniña.

—Esebebéparecemuyenfermo—dijoelyanqui.—Lesorprenderíacuálessonlosqueacabanviviendoycuálessemueren—ledijoélalyanqui—.

Siempreesunasorpresa.Sereunieronparalamisavespertina.Loviotododenuevoconlosojosdelvisitante:elcuartucho

gris, los bancos de madera combados, el suelo de tierra mohosa y por fin la congregación, unpuñado de ignorantes, diez, once… catorce asistentes, incluyendo al yanqui. Unas pocas ancianas,unos pocos ancianos, unos niños pequeños de ojos oscuros y narices mocosas. Los bebés noberreaban.Devezencuandoalgunodeellossoltabaunatossecaounruidoqueparecíaungraznido.Lasancianasbalabanlasrespuestas,losancianosmurmurabandeformaevasiva.

Elvisitante,sentadoenelbancoconlosdemás,vestidoconsuspantalonescortosdecolorcaquiysu camiseta blanca y sucia, destacaba resplandeciente como si fuera el último americano: sincero,amigable,unoyenteatento,ysinembargocargadodeunasoledadaterradoraenelcentromismodesusojos.

¿Cuáles eran las lecturas del día?Había vuelto a perder el libro, el calendario de liturgia. Laverdadesquellevabaañossinconsultarlo,simplementeleíaloqueleapetecía,losprimerosversosqueencontrabaalabrirellibro.

—Esto,porejemplo.—Ysepusoaleereninglés—:«SiexistealgúnconsueloenCristo,sihayalivioenelamor,sihaycompañíaenelEspíritu,sihayentrañasycompasión…».—Luegointentóexplicarles en el dialecto local lo que él creía que podía significar aquello de «entrañas ycompasión»,y terminódiciendo—:Noestoysegurodequésignifica.Talvez loquesentimospornuestrasfamilias.

BuscóenMateo27,5:—«Ydespuésdearrojarlaspiezasdeplataeneltemplo,semarchó,yentoncesfueyseahorcó».Yporfinlahomilía.—Hoyeninglés.Nodioningunaexplicacióndeporqué.Talveznohacíafaltadecirquelapresenciadelyanqui

sugeríaaquelactodecortesía.Tampocoesquefueranaentendersuspensamientosenningúnidioma.Adoradoresdevampirossupersticiosos.Aunqueélmismohabíavistovolarunavezalaswangconelmiembroensangrentadodeunacriaturaenlasmandíbulas.

—Leshedichoquehoyvoyadarlahomilíaeninglés.Laverdadesquenotengonadapreparado.Hoyhablamosdenuestra lectura,deJudas Iscarioteel traidor:«Ydespuésdearrojar laspiezasdeplataeneltemplo,semarchó,yentoncesfueyseahorcó».

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»Élregresaal templo,alosquelepagaronparatraicionarasumaestro.Quieredevolverlessusucia plata pero ellos no la aceptan. ¿Habéis pensado alguna vez por qué? ¿Por qué rechazan undinero perfectamente válido? ¿Por qué puede ser? “Y después de arrojar las piezas de plata en eltemplo,semarchó,yentoncesfueyseahorcó.”

»Hehechomiúltimaconfesión.¿QuiéneslapersonadelaBibliaquemássemeparece?¿Aquiénmeparezcomásyo?AJudas.Judaseltraidor…esesoyyo.¿Quémáshayqueconfesar?Nadiemehapagado para traicionar a Jesús, pero ¿acaso eso importa? ¿Eh? Yo nunca les podría devolver eldinero.Ellosnuncaaceptaríanquelesdevolvierasusuciodinero.

Hacíamásde treinta añosquenohablaba tanto en su idiomamaterno.Dejóque fluyera, aquelinglésquelesalíadelacabezacomosisalieradeunaltavoz.

—Mi abuela solía usar esa expresión: «entrañas y compasión». Nunca le pregunté qué queríadecir.

»Meacuerdodecómorechacéamiabuela.Yolaqueríamucho.Deniñoyoerasufavorito,peromástarde,cuandomeacercabaalaadolescencia,alosdoceotreceaños,sevinoavivirconnosotrosyyofuimuypocoamableconella.Noeramásqueunaanciana,yyofuimuypocoamable.

»Nomegustarecordareso.Elrecuerdoesmuyamargo.Miabuelameamaba,yyolatratéconmuypocorespeto.Yonosentíaamorpornadie.

»Aquí,por supuesto,donde lagentees tanpobreyestá tanenferma,es imposiblequerera losdemás.Eso tehundiría.Teacabaríashundiendo.Aquí todoelmundosabequerer,perodevolverelamor…Sonarenasmovedizas.YonosoyelCristo.NingúnhombreeselCristo.

»Otrasvecessomosel ladrónde lacruz,alquecrucificaron juntoaJesús,aquel ladrónquesevolvióhaciaJesúsyledijo:“AcuérdatedemícuandolleguesatuReino”.YJesústuvopiedadyledijo:“EsedíatúestarásconmigoenelParaíso”.Deverdadcreoquetenemosqueserunooelotro.Obiensomoseltraidorobiensomoselladrón.

»Miroamialrededorypienso:¿Cómolleguéaquí,aNasaday?¿Cómolleguéaquí?Estonoesmásqueunrecododellaberinto.Unaislaenmediodelaciénaga.JudassedescolgóporunagujeroyDiossabe,Diossabesialgunavezvolveráasubir,¿no?DependecompletamentedeDios.¿Quiénessomosnosotros?AvecessomosJudas.PeroJudas…Judasfueysecolgó.

»Estostreintaaños,ymás,quemehepasadohablandoconbárbaros,viviendoconsuspoderososdiosesydiosas,asimilandolastradiciones,yasabéis,quenosoncuentosdehadas,quesonreales,sevuelvenrealesencuantolasasimilas,ymetiéndomeenlamentetodaslasimágenesdesuscuentosyviviendoenlasaventurasdesusantepasados,ytodoslosañosquehepasadoreuniéndomecaraacaraconsuspeligrososdemoniosysantos,unossantosquellevanlosnombresdesantoscatólicos,perosolamenteparadisfrazarse…¿Cuántasveceshe estado apuntodeperdermepara siempre, cuántasvecesheestadoapuntodeadentrarmeenesapartedellaberintodelaquenosepuedevolvernunca?PeroenelúltimomomentosiemprellegaelcontactodelEspírituSanto,justoantesdequelosdiosesylasdiosasmedestruyan,siempreenelúltimomomentomellegaelrecordatoriodeloquesoy,ydeporquévineaquí.Solounvislumbre,ya sabéis, soloun recordatoriodequién soyen realidad.Yluegomevuelvoahundireneltúnel.

Despuésdeoficiarlamisa,ydequesefueranlosfeligreses,Carignansequitólaropahastaquedarseencalzoncillosysandaliasybajóalríoabañarse.

Elruidodeunachalupadepalmaamotor,bastantepocofrecuenteenaquelrío,lehizodetenerse

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amirar.Laembarcaciónaparecióensucampovisual,aminorandolamarcha,estrangulandoelmotorhastairalralentí,ylosdoshombresqueibanabordomirandoendirecciónalaorilla,acercándose.Carignanlossaludóconlamano.Ellosquedaronmomentáneamenteocultostraslaspalmerassagobajasquecrecíanalolargodelaorilla.

Sesumergióhastalacinturaysebañó.Menudatonteríadesermón.Porculpadelidiomainglés,suantiguavejaciónsehabíadespertado,

forcejeandohastaponersedepieyagitandolosbrazosdentrodesussuciosvendajes:sualmaylasenfermedadesdesualma.

¿Cómohellegadoaquí…?Judassematerializaderepenteenellaberinto.Saliódelríoconlacabezagachaperosinmirarselospies,preocupado,trastornadoporlosactos

dedescortesíaquehabíamostradoensuadolescencia,ningunodeellosmuygrave,peroqueahoraloaterrabanporquehabíansidoperpetradosconunaclasedeamoralidadque,dehabercontinuado,lohabríaconvertidoenalguienmuypeligrosoconelmundo.

Se volvió y vio entre las frondas de los sagos una imagen de lo más curioso: un hombreoccidentalconindumentariaoccidentalquesosteníauntubomuylargoconunextremodentrodesuboca. Algo parecido a una caña de bambú. Mientras Carignan examinaba aquella imagen y sepreparabaparamandarlealhombrealgunaclasedesaludo,lasmejillasdelhombresehundieronyalgopinchóalpárrocoenlacarnesobrelanuezdelcuelloyparecióalojarseallí.Éllevantólamanopara quitárselo. Le empezaron a hormiguear la lengua y los labios y a quemarle los ojos, y encuestióndesegundos levino la sensacióndeno tenercabezaenabsoluto,acontinuaciónnotóqueperdíaelcontactoconsusmanosypies,yderepenteyanosabíadóndeestabaningunapartedeél,todas sus partes parecían estar desapareciendo. No sintió cómo se desplomaba, y para cuando sucuerpoimpactócontraelaguayaestabamuerto.

***

Despuésdehacersusnecesidadesjuntoaunmatorralcercanoalrío,Sandssubióporelcaminodedetrás de la iglesia y se encontró con dos niñosmuypequeños que ibanmontados a lomos de uncarabao,siguiendounazanjaderiego.Elloslesonrieroncontimidezyconduda.

—Pádere,pádere…TalvezcreyeranqueeraCarignan…Talvezcreyeranqueeneluniversoenterosolamenteexistía

unúnicosacerdotequeadoptabamuchasformas.Lestiróunoschiclesalosniños.Unodeellosnoalcanzóacogerelsuyoysebajódelaancha

plataformadelaespaldadelanimalpararecogerlodelahierbadelbordedelazanja.—Pádere,pádere.—Nosoyvuestropadre—dijoSands.Bajolaluzdelcrepúsculocontemplócómounachalupadepalmabajabaatodavelocidadporel

ríoenvueltaenunaneblinamágicadelcolordelarcoiris,batidaporunahélicebastantepotente,ycondosfigurasabordo.Nohabíanadaenlostripulantes,yamuylejosríoabajoycubiertosporunvelodeespuma,quebajoningunacircunstancialehubierahechodecir:«SonEddieAguinaldoyelalemán»,oporlomenosnoconlabastanterotundidadcomoparamencionarlos,porejemplo,ensuinforme.Peroaquellosdoshabíanestadomerodeando,yahoralevinieronalacabeza.Estabaapuntodedarmediavueltayregresarcorriendoalaiglesiaenbuscadesusprismáticoscuandodepronto

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vio al sacerdote, nadando en lamismaorilla y boca abajo. ¿Quién nadaba así?Los que se habíanahogado.Sandssepusoavadearensudirección.Cayóenunhoyoyelaguasecerrósobresucabeza.SalióalasuperficieyvioaCarignan,flotando,girandosobresímismoyavanzandoríoabajo.Sandsechó a nadar detrás de él, después cambió de opinión, nadóhasta la orilla y echó a correr por elcaminoquehabía juntoa lacorrientehastasituarsepordelantedeCarignan,sequitó lassandaliasconlospies,vadeóhastaelaguamásprofundayvolvióalanzarse,intentandointerceptarladerivadel sacerdote. Había calculadomal. Con los brazos y piernas inertes, como un cadáver—tal vezmuerto—,elsacerdoteseescurriórápidamenteporlatangente,ríoabajoyendirecciónalcentrodeaquellacorrientedecuatrocientosmetrosdeancho.

DenuevoSandsrenuncióanadar,diomediavuelta,trepóalaorillaycontinuócorriendo,ahoradescalzo, por el camino. Se desvió hacia una casa, vio unbanca vuelto del revés sobre la hierbacercana, dio ungrito, nohabía nadie en casa, intentódarle la vuelta a la barca, fracasóy trató dearrastrarlahacia lacorriente.Unhombre lodetuvo,unhombremusculoso, joven,descalzo,conelpechodesnudo,desconcertadoyvestidoconunospantalonescortosdecolorrojo.Rápidamentecaptólaurgenciadelmomentoyagarróunremoquehabíaapoyadocontralacasa.Cadahombreagarródeun lado y entre los dos llevaron dando tumbos el bote a la orilla, se subieron como pudieron ysalierondetrásdelcadáver,elfilipinoremandoyelamericanoseñalando,supequeñaembarcaciónganándole terreno con firmeza al hombre asesinado a medida que viajaba hacia el Reino de losCielos.

Al día siguiente, Sands devolvió la motocicleta Honda a la diócesis e informó de la muerte porahogamientodelpadreThomasCarignan.ElpadreHaddagsemostróentristecidopor lamuerte,ytambiénsorprendidodeenterarsetandeprisa.

—Aveceslagentedelríotardasemanasentraerlasnoticias—dijo.Aquel encargo le ocupó la tarde entera. Después Sands reservó una habitación en Carmen y

comió pincho de pollo y un cuenco de arroz en compañía de tres hombres del Departamento deAgriculturaconlosquesimplementesehabíatopadoenlacarreteraquecruzabaelpueblo,mientrasdeambulabantodosporellugarenbuscadeunrestaurante.Porfineligieronunodelostenderetesdelmargendelacarreteradondeunhombreestabahaciendounabarbacoadepatasymuslosescuálidossobrebrasasdecáscaradecoco,rociándolosdeunamezcladesalsadesoja,especiasyCoca-Cola.Losperros famélicos losmiraroncomer.DavidAlverol,el jefede los tres trabajadoresagrícolas,queríairsedejuergaconaquelamericano,peroSandsestabaagotado.Losotrosdosmantuvieronlacompostura,peroDavidAlverolparecíatanexcitadodehaberconocidoalamericanoqueestellegóa temer de veras por su salud mental. No paraba de repetirse a sí mismo, llevando a cabo laspresentacionesunayotravez,conlacarabrillandodesudorytambiéndeunailuminacióninterior.Cadadosminutossugeríaqueelamericanofueraasucasa«paradialogar».

—Es ustedmuy jovial—le dijo al americano—.La clase de tipo queme cae bien. ¿No puedeustedvenirconnosotrosunos treintaminutosmás?—Davidsiguió insistiendocadavezmás,paravergüenzade susdos acompañantes, suplicando,borrachoycon lágrimasen losojos,mientras elamericano se bajabade su jeepdel gobiernodelante de supequeñohotel—.Por favor, señor, porfavor,solomediahora,señor,señor,selosuplico,sí,porfavor…

Sandsconcertóunacitaparaverlosaldíasiguiente,avisándolosdequesusobligacionespodíanimpedirleque la cumpliera.Yde esamanera se separaron,Sandsy losotrosdos entendiendoque

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nuncalovolveríanaver,yDavidAlverolesperandoencontrarseconélaprimerahoradelamañana.

Sands no le había dicho nada al padre Haddag del dardo de sumpit de veinte centímetros que lesobresalíadelcuelloalcadáverdelpadreCarignan.

EnsuhabitaciónenCarmen,permaneciódespiertopensandoenelasesinoalemán.Loqueanteslehabíaparecidoafeminadoenelalemánahoraleparecíapoético:susgafas,suslabiosgruesos,lapielpálida. Tenía contactos íntimos con lamuerte, sabía cosas.ASands le había resultado pomposo eirritable.Ahoraleparecíaquetransportabaunacargatrascendental.

NadamásregresaraDamulog,llegaronalpueblolasdiminutashormigasrojas.CubrieronsumesadelSunshineEateryysucamaenelhoteldeCastro.

PodríahabercontinuadohastaDavaoCity,enlapuntasurdelaisla,yhabercogidounaviónparaManila.LoquehizoencambiofueregresaraDamulog.Podríahaberpasadoallíunanochecomomáximo,esperandoelautobús.Loquehizoencambiofuequedarsetressemanasmientrascomponíauninformequenocontuvieranadasustancial,basadoensutotalidadencotilleosdelalcaldeEmeterioD.Luis,ysinextraerningunaconclusiónacercadelanaturalezadeloscontactosdelsacerdotenidelaresponsabilidadporsumuerte.

Sandsestaba,enlapráctica,desaparecido.Enterrósuabandonoensustareasabsurdasyejercióundesapegosoldadescodesuamargura.YpasólasnochesconlaseñoraJones.

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1966

El permiso en tierra de Bill Houston en Honolulu comenzó con la guardia matinal, demasiadotemprano para un hombre con dinero que gastar: por si le faltaran problemas, lamarina se habíapropuesto negarle cualquier vida nocturna. Cogió un autobús lanzadera desde la estación naval ycruzóloscamposabiertosdelabasedelafuerzaaéreayluegocruzólaciudadhastaWaikikiBeach,donde deambuló abatido entre los enormes hoteles, se sentó en la arena vestido con sus vaquerosLevi’s y su camisa hawaiana chillona y sus zapatosmuy limpios—hebillas blancas con suelas degoma roja—, comió cerdo frito enunpinchodemadera enunquiosco, cogióun autobúsurbanohastalacalleRichards,alquilóunacamaenelYMCAdelEjércitoylaMarina,yempezóabeberenlosbaresdelmuellealaunadelatarde.

Probóun lugarconaireacondicionado frecuentadoporoficiales jóvenes,yallí se sentóaunamesa solo, fumando Lucky Strike y bebiendo Lucky Lager. Aquello le hizo sentirse afortunado.Cuandohuboreunidolasbastantesmonedasdecambio,llamóalcontinenteparahablarconlossuyosyestuvocharlandoconsuhermanoJames.

Solamente consiguió deprimirse más. Su hermano James era tonto. Su hermano James iba aterminarenelejércitoigualqueél.

Paseó por el muelle con la cerveza dando porrazos dentro de su cabeza y una sensación desoledad tirándoledelcorazón.Hacia las tresde la tarde, laaceradeHonolulusehabíarecalentadotantoquealcaminarselepegabaalassuelasdegoma.

Se escondió dentro del Big Surf Club y se puso a beber rondas de cerveza con dos hombresligeramentemayoresqueél,unodeellosunhombre llamadoKinneyquehacíapocoquesehabíaunido a la tripulación del barco de Houston: el Toledo, un carguero de combustible de clase Ttripuladoensumayoríaporciviles,entreellosKinney.Habíapasadotiempoenlamarina,vivíadebarcoenbarcoynoteníaunaverdaderacasaentierra.Kinneylehabíacogidoapegoaunvagabundodescalzode laplayaqueahoraparecíaestar colocado.Elvagabundo invitóa lamesaados jarrasseguidas y al cabo de un rato terminó revelando que había servido con elTercero deMarines enVietnamantesdequelodevolvieranacasalicenciadoantesdetiempo.

—Sí,colegas—dijoelvagabundo—.Medieronlabajamédica.—¿Porqué?—¿Porqué?Porquesoymentalmenteincompetente.—Parecesnormal.—Parecesnormalsinosinvitasaunaronda.—Nohayproblema.Cobrounapensiónporinvalidez.Doscientoscuarentaydosalmes.Puedo

bebermontonesymontonesdeHamm’s, tíos,siduermoenlaplayacomounmokeycomoloquecomenlosmokes.

—¿Quécomenlosmokes?¿Yquiénessonlosmokes?—Por aquí están los mokes y los howlies. Los howlies somos nosotros. Los mokes son los

cabronesnativos.¿Yquécomen?Comenbarato.Yluegoestánlosjaposyloschinos,supongoqueoshabréis dado cuenta.Entran dentro de la categoría de los chimpas. ¿Sabéis por qué apesta tanto lacomidadeloschimpas?Porquelafríenconcagarrosderataycucarachasytodoloquecaigaconelarroz.Noles importa.Lespreguntasquécoñoes loqueapestaynisiquierasabendequélesestáshablando. Sí, yo sí que he visto cosas —continuó el vagabundo—. Allí los chimpas llevan esos

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sombrerosrarosdepaja,seguroqueloshabéisvisto…unospuntiagudos.Cuandopasaunachicaenbicicleta, le agarras el sombrero al pasar y prácticamente le arrancas la cabeza, porque lo tienenatadoconuncordel.Laarrancasdirectamentede labici, tíos,y la tía sepega lagranhostia enelbarro.Una vez vi a una que se quedó toda doblada así, tíos. Se le había partido el cuello. Estabamuerta.

BillHoustonestabacompletamenteconfuso.—¿Cómo?¿Dónde?—¿Dónde?EnVietnamdelSur,tíos,enBienHoa.Enelcentrodelpueblo,prácticamente.—Esoesunacabronada,tío.—Ah, ¿sí? También es una cabronada cuando una de esas chatis te tira una granada al regazo

porque has dejado que se te acerque demasiado en la carretera, tíos. Ellas conocen las reglas.Yasaben que tienen que guardar las distancias. Las que no guardan las distancias es probablementeporquetienenunagranada.

HoustonyKinneyguardaronsilencio.Noteníannadadequehablarquesepudieracompararconaquello. El tipo se bebió su cerveza. Un momento muy parecido al sueño se cernió sobre ellos.Todavíanadiehabíadichonada,peroelvagabundohablócomosiestuvieracontestando.

—Esonoesnada.Yosíquehevistocosas.—Veamosesascervezas—dijoKinney—.¿Notetocainvitarati?Elvagabundonoparecióacordarsedequiénhabíainvitadoaquién.Siguiópidiendojarras.

***

JamesHoustonllegóacasadespuésdelúltimodíadesutercerañodeinstituto.Sebajódelautobúshaciéndoleungestoobscenoconeldedoalconductorysoltandounaexclamacióndejúbilo.

Su madre había encontrado a alguien que la llevara en coche al trabajo y había dejado lacamionetaaparcadadelantedelacasa,talcomoéllehabíapedido.SuhermanopequeñoBurrisestabadepiefrentealacasatapándoseunoídoconeldedoymirandoelinteriordelcañóndeunapistoladejuguetemientrasapretabaelgatillounayotravez.

—Cuidadoconlosojos,Burris.Heoídohablardeunniñoaquienleentróunachispaenelojoytuvoqueiralhospital.

—¿Dequéestánhechoslosfulminantes?—Depólvora.—¿CÓMO?¿DEPÓLVORA?Dentrosonóelteléfono.—Notengopermisoparacontestar—dijoBurris.—¿Hanvueltoaconectarelteléfono?—Nolosé.—Bueno,estásonando,¿no?—Cállate.—Ahorahadejadodesonar,idiota.—De todasmanerasno lo contestaría.Suena como si hubierabichoshablandopor la línea, en

lugardegente.—Eresuntíoraro—dijoJames,yentróencasa,dondehacíacaloryolíaunpocoabasura.

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Sumadresenegabaaencenderelrefrigeradordeevaporaciónamenosquellegaranalostreintaysietegrados.

Traíaunmontóndepapelesdelaescuela,deberes,lasnotasyelboletíndefindecurso.Lometiótodoenlabasuradedebajodelfregadero.

Volvióasonarelteléfono:erasuhermano,BillJunior.—¿HacecalorenPhoenix?—Casitreintaysiete,sí.—Aquítambiénhacecalor.Bochorno.—¿Desdedóndellamas?—DesdeHonolulu,Hawai.HaceunahoraestabaenWaikikiBeach.—¿Honolulu?—Sí.—¿Vesalgunachicabailandoelhula?—Noveomásqueunpuñadodeputas.Peroapuestoaqueestaríandispuestasabailarelhula.—¡Yotambiénapuestoaquesí!—¿Ytúquésabesdeeso?—¿Yo?Nosé—dijoJames—.Erapordeciralgo.—Mierda,megustaríaestardevueltaenArizona.—Bueno,nosoyyoelquesehareenganchado.—Tú dame un desierto comoDiosmanda y yo encantado. Ahí hace un calor como debe ser,

¿verdad?Uncalorseco,delquequema.Aquíhacebochorno,yatedigo.Eh,chaval,imagínateesto.¿Algunavezhaslevantadolatapadeunhervidorllenodeaguadecloacahirviendo?Asísesienteunoalsaliralacalleenestesitio.

—Bueno—dijoJames—,¿yquémáshaydenuevo?—¿Cuántosañostienes,atodoesto?—Voyacumplirdiecisietemuypronto.—¿Yquévasahacer?—¿Quévoyahacer?Nolosé.—¿Hasterminadolosestudios?—Nolosé.—¿Quéquieredecirquenolosabes?¿Tehasgraduado?—Tendríaquehacerunañomásparagraduarme.—Nohaynadamásquehacersalvograduarse,¿no?—Queyosepa,no.Oestabapensandotalvezenelejército.—¿Porquénolamarina?—Demasiadosmarinosenlamarina,socio.—Eres un listillo, socio. Mejor alístate en el ejército de tierra, socio. Porque donde estoy

sirviendoyotepatearíanelculoundíasíyelotrotambién.Jamessequedósinsaberquédecir.Laverdaderaquenoconocíaaaqueltipo.LaoperadoralosinterrumpióyBilltuvoquemetermásmonedas.—¿Estásenunbar,oqué?—dijoJames.—Enunbar,sí.EstoyenunbardeHonolulu,Hawai.—Bueno,supongoqueesoes…

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Nosabíaloqueera.—Sí.HeestadoenFilipinas,HongKong,Honolulu…déjamepensar,¿dóndemás?Nolosé…Y

los trópicos no son ningún paraíso tropical, te lo aseguro. Están llenos de putrefacción, bichos,sudor, peste, y no sé qué más. Y la mayor parte de las preciosas frutas tropicales que ves estánpodridas.Aplastadasenmediodelacalle.

—Bueno…—dijoJames—.Mealegrodequehayasllamado.—Sí—dijoBill.—Vale.—Vale—dijoBill—.Eh,dileamamáquehellamado,¿vale?Ydilequelemandounsaludo.—Vale.—Vale…Dilequelaquiero.—Vale.Hastaotra.—Eh.Eh.James.—¿Sí?—¿Siguesahí?—Sigoaquí.—Haztemarine,tío.—Bah,estánsobrevalorados.—Alosmarineslesdanunaespada.—Losmarinesenrealidadsonlamarina—dijoJames—.Sonpartedelamarina.—Sí…bueno…—Sí…—Perobueno,solamentelesdanespadaalosoficiales—dijoBillJunior.—Sí…—Bueno,tengoquefollar—dijoBill.—¡Aversipillascacho!—¿Ytúquésabesdeeso?—dijosuhermano,riendomientrascolgaba.James buscó en los cajones de la cocina y encontrómedio paquete de losSalemde sumadre.

Antesdesalirporlapuertasonóelteléfono.EraotravezBillJunior.—¿Otraveztú?—Meparecequesoyyo,sí.—¿Quépasa?—SaludademipartealamontañaSur.—YanovemoslamontañaSur.AhoravemoslospeñascosdePapago.—¿Eneleste?—VivimosenEastMcDowell.—¿EastMcDowell?—¿Aquemola?—¡Estáiseneldesierto!—Mamáestátrabajandoenunranchodecaballos.—Lamadrequemeparió.—Entiendedecaballos,decuandoeraniña.—VigilaquenotemuerdaelmonstruodeGila.

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—Nohaysombraenningúnsitio,peroseestábien.EstamosalladodelareservaindiadePima.—Yvasalaescuela,¿no?—LlevounatemporadayendoaPaloVerde,desdeoctubremásomenos.—¿PaloVerde?—Sí.—CuandovivíamosenSouthCentral,nuestraescuela jugabacontraPaloVerdealbaloncestoo

algo,alfútbolamericano.¿Cómosellamabanuestraescueladeentonces?—Yoibaaprimaria.AlaCarson.—Mecagoenlaputa.Nomeacuerdodecómosellamabaelinstitutoalquefui.—Paraflipar,¿no?—¿AlgunavezvasaFlorence?—No.—¿Algunavezvesapapá?—No—dijoJames—.Porquenoesmipadre.—Bueno,ándateconcuidado.Siguesuejemplo.—Nosigoningunodesusejemplos.Niquierosabernadadesusejemplos.—Bueno—dijoBillJunior—,seacomosea…—Seacomosea,sí.¿DeverdadestásenWaikikiBeach?—Puesno.Ahoramismono.—EstamosenlaCincuentaydosconMcDowell.Hayunzooaquí.—¿Unqué?—Sí,unzoopequeño.—Eh,dileunacosaamamádemiparte…¿cuándovaallegaracasa?—Mástarde.Dentrodeunpardehoras.—Talvezlallame.Quierocontarleunacosa.EnmibarcohaydostiposdeOklahoma,ybueno,

¿sabesloquemehandicholosdos?MehandichoquetengoacentodeOklahoma.Yoleshedicho:«Vaya,noheestadonunca,peromifamiliasí».Cuéntaseloamamá,¿vale?

—Loharé.—DilequeellamecrioenOklahomayqueyohablocomolagentedeallí.—Okay.—¡Okay!EslaabreviaturadeOklahoma.—Mirapordónde—dijoJames.—Sí.Paraflipar,¿no?—Okay.—Okay.Hastaotra.Colgaron.Borrachocomounacuba,pensóJames.Probablementeseaalcohólicocomosupadre.Burrisentródesfilandoconsupistoladejugueteenunamanoyunapiruletaenlaotra,sinmás

ropaquesuspantalonescortosyconpintademonigote.—Creoquesemehametidounachispaenelojo.—Metengoqueir—dijoJames.—¿Teparecequetengounachispaenelojo?—No.Cállate,niñorarodelasnarices.

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—¿Puedoirenlapartedeatrásdelacamioneta?—Noamenosquequierassalirdespedidoenunbacheymatarte.Sediounaduchaysecambió,y justocuandoestabasaliendosonóel teléfono.Volvíaa ser su

hermano.—Eh…James.—¿Sí?—Eh…James.—¿Sí?—Eh.Eh.Eh.Jamescolgóysaliódelacasa.

James recogió a Charlotte y luego a Rollo, y luego a una chica que le gustaba a Rollo y que sellamabaStevie—apododeStephanie—Dale,yfuerontodosenlacamionetahastalasmontañasdeMcDowellenbuscadeunafiestadelaquehabíanoídohablar,unajuergabastantesalvajealairelibreysinsupervisión,supuestamente,apartadadelacarreteraylobastanteadentradaeneldesiertocomopara estar lejos de todo. Pero si aquella reunión estaba teniendo lugar realmente, debía de estarperdidaenunlaberintodetorrenterassecas,asíquecondujerondevueltaalacarreteraysesentaronenlapartedeatrásdelacamionetaabebercerveza.

—¿Nolahaspodidoconseguirmásfría?—Laherobadodelaneveradelgranero—dijoRollo.—Nosabesniencontrarunafiestaenlanochedelagraduación—dijoJames.—Hoynoeslanochedelagraduación—dijoCharlotte.—¿Quées,pues?—Eselúltimodíadelaescuela.Yonomegradúo.¿Tútegradúas?—Cervezacaliente—dijoJames.—Yonomegraduarénunca.Nomeimporta.—Sí,aquiénleimportaunamierda—dijoRollo,ytodosserierondesupalabrota,yañadió—:

Somoschavalesdelcampo.—Noesverdad—dijoJames.—Tumadretrabajaenunranchodecaballos.Mipadrehacecurrosderiego.Ydetrásdemicasa

hayungraneroenorme,socio.—Estoesmásagradablequeelpueblo—dijoStevieDale—.Nohaypolis.—Esverdad—dijoJames—.Ynadietemolesta.—Solamentehayquetenercuidadoconlasserpientes.—Cuidado con esta serpiente—dijo Rollo, y las chicas soltaron exclamaciones burlonas y se

rieron.AJamesleresultófrustranteque,cuandolasdoschicasserieron,tuvoqueserCharlotteaquien

le salió cerveza de la nariz. Stevie eramás joven, iba aún a primero, pero parecíamás sencilla ymenos nerviosa. Stevie se sentaba con la espalda recta y fumaba de una forma sexy. ¿Qué estabahaciendoconCharlotte?LaquelegustabaeraStevie.

Dejó a Rollo en su casa y luego llevó a Charlotte. Stevie todavía estaba en la camioneta. SeaseguródedejaraCharlotteprimero.

LediounbesodedespedidaaCharlottemientrasestabandepiedelantedesucasa.Ellalerodeó

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elcuelloconlosbrazosyloabrazófuerte,conloslabiosentreabiertosyhúmedos.Jameslaabrazósin mucha fuerza, solo con el brazo izquierdo, mientras dejaba el brazo derecho colgando. ElhermanomayordeCharlotte,queestabasintrabajo,salióalapuertaamirar.

—Cierralapuertaoapagaelaireacondicionado,atontado—legritósumadredesdedentro.Enlacamioneta,JameslepreguntóaStevie:—¿Tienesqueirteacasa?—Noexactamente—dijoella—.Laverdadesqueno.—¿Quieresdarunavuelta?—Claro.Estaríabien.Terminaronenelmismositiodondehabíanestadoconlosotrosunahoraantes,contemplando

lasmontañasbajasyescuchandolaradio.—¿Quéplanestienesparaelverano?—dijoStevie.—Estoyesperandounaseñal.—Esoquieredecirquenotienes.—¿Quenotengoqué?—Planes.—No sé si tengoquebuscar un simple trabajodeverano, o encontrar algomáspermanente…

Peronopiensovolveralinstituto.—¿Oseaquedejaslosestudios?—Estabapensandoenalistarmecomohizomipadre.Ellanorespondióaaquellaidea.Pusoeldedosobrelaguanterayfrotóconlayemadeunladoa

otro.AJamesselehabíanacabadolostemasdeconversación.Notabaelcuellotantensoquenoestaba

segurodepodergirarlacabeza.Noseleocurríaniunasolapalabraquedecir.DeseabaqueelladijeraalgodeCharlotte.Peroloúnicoquedijofue:—¿Porquéestástanhuraño?—Cosasmías.—¿Qué?—CreoquetengoqueromperconCharlotte.Enserio.—Sí…yocreoqueellaseloespera.—¿Enserio?¿Seloespera?—Noseteveprecisamenteencantadocuandoestásconella,James,enabsoluto.—Lohasnotado,¿eh?—Escomosituvierasunatormentaencima.—¿Yenesteprecisomomento?—¿Qué?—Enesteprecisomomentonotengounatormentaencima,¿verdad?—No.—Ellaestabasonriendo,ellaeraelsol—.¿Deverdadtevasaalistar?—Sí.Enlaarmadaoenlosmarines.Supongoqueahoramevasadejarquetebese,¿no?Ellaserio.—Eresgracioso.Éllediounbesomuylargoyluegoelladijo:—Esoesloquemegustadeti.Queeresgraciosocuandoestáscontento.Yguapo…esotambién.

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Pasaron un rato besándose, hasta que empezó a sonar un anuncio por la radio y él se puso amanipulareldial.

—Hum—dijoella.—¿Quépasa,Stevie?—Estoyintentandopensar:¿estehombrebesacomolaarmadaocomolosmarines?Hum—dijo

ellamientraslobesaba.Luegoseseparódeél—.Talvezcomolafuerzaaérea.Él la besóy le tocómuy suavemente los brazos, lasmejillas, el cuello.Sabíamuybiendónde

teníaqueponerlasmanos.—Mequedaunacervezacaliente—dijo.—Bébetelatú.Yonotengosed.Jamessesentóapoyadoenlaportezueladelconductoryellacontralaotra.Élsealegródequese

estuviera poniendo el sol, porque así no tenía que preocuparse de su aspecto. A veces no estabasegurodequelaexpresióndesucaratuvieraalgúnsentido.

Sintióganasdeeructar.Nosecortóylohizoconfuerza,despuésdijo:—Saludosdelinterior.—Tupadreestáenlacárcel,¿verdad?—dijoStevie.—¿Yesodedóndelohassacado?—¿Esverdad?—No,eseesmipadrastro—dijoJames—.Nadaqueverconmigo.Esculpademimadre,nomía.—Ytupadredeverdadestáalistado,¿no?James cerró las manos en torno al volante y apoyó la barbilla en ellas, mirando hacia el

exterior…Asíqueahoraellasecreíaqueteníanquecontarsesuspeoressecretos.Salió,fuedetrásdeunosmatorralesyechóunameada.Elsolsehabíapuestodetrásdelamontaña

CamelbackMountain,alsudoestededondeestabanellos.Elcieloseguíasiendodecolorazulpuroportodosloslados,peroelhorizonteseempezabaateñirdeotrocolor,deunamarillosonrosadoqueseibacuandoteloquedabasmirando.

Cuandoestuvootravezalladodeellaenlacamioneta,dijo:—Bueno,acabodedecidirme.Meapuntoalainfantería.—¿Enserio?Alainfantería,¿eh?—Ajá.—¿Yluegoqué?¿Teespecializasenalgo?—MevoyaVietnam.—¿Yluegoqué?—Mevoyacargaraunmontóndegente.—Cielos—dijoella—.Noestásconloschavalotes,¿sabes?Soyunachica.—Losiento,socia.Ellalepusolamanoenlanucayleacaricióelpelosuavementeconlosdedos.Paraquedejarade

hacerlo,élsesentóconlaespaldarecta.—Hasidohorribleesoquehasdicho,James.—¿Elqué?—Loquehasdicho.—Mehasalidosinmás.Nolodecíaenserio,creo.—Puesnolodigas.

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—Mierda.¿Tanmalvadocreesquesoy?—Todoelmundotieneunladomalo.Noloalimentesynocrecerá.Sebesaronmás.—Bueno,enfin—dijoél—,¿quéteapetecehacerahora?—Pues…nolosé.¿Tenemosgasolina?—Sí.Aélleemocionóquehablaradeellosenplural.—Vamosadarunavueltaaverquéhayporahí.—Demosunrodeolargo.Aquelloqueríadecirqueibaaintentaralgoserioconella.—Vale.Aquelloqueríadecirqueaellanoleimportaba.

James estaba de pie delante de la casa a oscuras cuando su madre llegó del trabajo en el ChevydescapotabledeTomMooney,mirandoporlaventanilladelladodelpasajeroconlabocaabierta,lacaraocultabajounsombreroraídodepajayunpañueloprotegiéndoleelcuello.MooneysaludóconlamanoaJames,aloqueJamesdejócaerlacolilladesucigarrilloalsuelo,laapagódeunpisotónysaludóconlamano.ParaentonceselChevyyasehabíaido.

Ellaentróenlacasasindecirlepalabraasuhijo,unsilencioqueresultabaalavezpocohabitualybienvenido.

Yqueduróhastaqueéllasiguióalacocina.—Sinocreesqueeseranchomehadejadoagotada,venytocaelmúsculoquemetiemblaeneste

brazo.Sicalientounalatadesopa,serámejorquetelacomas.Nomehagastomarmelamolestiayluego tequedesahípapandomoscas.—Ellaencendió la luzde lacocinaysequedódepiebajo lamisma con aspecto menguado y exhausto—. Tengo mortadela y tengo tomates. ¿Quieres unbocadillo?Siéntateyteprepararésopaybocadillos.¿DóndeestáBurris?

—¿Quién?—Ya vendrá. Siempre tiene hambre. Perdí peso cuando estaba embarazada de él. Empecé con

cincuentaycuatroyenelnovenomesmehabíaquedadoencincuenta.Semeestabacomiendodesdedentro.

Alsecarselacara,selamanchódetierraqueteníaenlamano.—Mamá.Lávateantesdecocinar.—Oh,cielos—dijoella—.Estoy tancansadaquemeolvidodequeestoyviva.Ábreme la lata,

cielo.Comieronsándwichesdemantequilladecacahueteconmermeladaysopadelata.—Voyacortarestetomate.—Yahecomido.Noloquiero.—Tienesquecomerverduras.—Hayverdurasenlasopa.Poresosellama«sopadeverduras».—Noteescapes.Quierohablarcontigo.¿Cuándoseacabaelcursoenelinstituto?—Sehaacabadohoy.—Puesvenatrabajaralrancho.—Esonolosé.

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—¿Quéesloquenosabes?¿Sabesreconocerundólarcuandonoloves?Porqueyonoloveo.—Estabapensandoenalistarme.Talvezenlaarmada.—¿Cuándo?¿Ya?—Tengodiecisieteaños.—Tienesdiecisieteyestásloco.—BillJuniorteníadiecisietecuandosealistó.Túfirmasteporél.—Nolehizoningúndaño,supongo.—Hallamadohoy.—¿Hallamado?¿Yquéhadicho?—Nada.QueestáenHonolulu.—Nuncaherecibidoniuncentavodeél.Nitampocoselohepedido.—Siyoentroenelejército,temandarédinero.—Memandó dinero un par de veces. Nada regular. Últimamente, nada. Y no puedo pedírselo

porqueelorgullomeatenaza.—Yomandarédinerotodoslosdíasdepaga.Lojuro—dijoJames.—Esodecídeloportimismo.—¿Esoquieredecirquefirmaráspormí?Ellanocontestó.Élcogióuntenedorysepusoacomerrodajasdetomate.—Túmemandaselsobrecadamesyyotelodevuelvocondinerodentro—dijo.—¿Yahashabladoconlosreclutadores?—Lovoyahacer.—¿Cuándo?—Yaloharé.—Pero¿cuándo?—Ellunes.—Sitieneslospapelesellunesporlanoche,ymepuedesdaralgunabuenarazónparaalistarte,

puedequefirme.Perosisolamenteestássoñando,entoncesserámejorqueelmartestedespiertesytevengasconmigoal rancho.Vuelvoa tenerel teléfonoconectado,peroelalquilerestáesperandoaqueelSeñorsemueva.¿DóndeestáBurris?

—Yavendrácuandotengahambre.—Siempretienehambre—dijoella,yvolvióacontarotraveztodoloqueleacababadecontar,

porqueeraincapazdenocontarlo.Sumadreeraincapazdecallarse.LeíalaBibliatodoeltiempo.Erademasiadoviejaparasersu

madre,demasiadodemacradayestúpidaparasersumadre.

***

ABillHoustonleencantabalacervezaperollegabaunpuntoenqueyanolebajabadelagarganta.Aquella taberna debía de estar orientada al oeste, porque la puerta abierta dejaba entrar un solabrasador.Nohabíaaireacondicionado,peroélestabaacostumbradoaaquelloen lossitiosdondebebía.Eraunantrocontodaslasdelaley.

RegresódellavaboyKinneyseguíainterrogandoalvagabundodelaplaya.

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—¿Quéhiciste?Cuéntameexactamentequéesloquehiciste.—Nada.Alamierda.BillHoustonsesentóydijo:—No tengonadacontravosotros, chicos.Tengounhermanopequeñoquequiereentrar en los

marines.Elexmarineestababorracho.—Esonoesnada.Yosíquehevistocosas.—Hablacomosilehubierahechoalgoaalgunamujerallí—dijoKinney.—¿Dónde?—dijoHouston.—EnVietnam,joder—dijoKinney—.¿Esquenoescuchas?—Yosíquehevistocosas—dijoelchaval—.Loquepasóesqueinmovilizaronaunamujeryun

tíolearrancóelcoño.Allíesascosaspasantodoeltiempo.—Diosbendito.¿Enserio?—Yotambiénhicecosasdeesas.—¿Túlashiciste?—Yoestabaallí.Houstondijo:—¿Deverdadque…?—Notuvoaplomopararepetirlo—.¿Deverdadhicisteeso?—¿Learrancasteelcoñoaunatía?—dijoKinney.—Estabapresentecuandopasó.Justoallado,enelmismo…casienlamismaaldea.—¿Fueronlostuyos?¿Tucompañía?¿Alguiendetupelotón?—Los nuestros, no. Fueron unos coreanos, una compañía coreana. Esos cabrones no tienen

entrañas.—Esomismoesloqueyodigo—dijoKinney—.Esomismoesloqueyodigo…Ahoracallala

boca—dijo—,ycuéntanosquécoñohiciste.—Pasanunosrollosmuychungos—dijoelhombre.—Eresunembustero.Losmarinesamericanosnunca toleraríanalgoasí.Eresunembusterode

mierda.Eltipolevantólasdosmanoscomosiloacabarandedetener.—Eh,uau,tíos…¿porquéosponéisasí?—Tú dime que has destripado a una mujer viva y yo admitiré que no eres un embustero de

mierda.—¡Tú!—gritóelbarman—.¡Yateheavisado!¿Quieresbrega?¿Quierespelea?Eraunhawaianograndeygordosincamisa.—Estetíoesunmoke—dijosucompañeromientraselbarmantirabasutrapoysedirigíahacia

allí.—Tedijequetelargaras.—Esofueayer.—Tedijequetelargarasdeaquí,túytupico.Esoquieredecirquenotequieroverniayer,nihoy

nimañana.—Eh,tengounacerveza.—Llévatela,nomeimporta.Kinneysepusodepie.

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—Larguémonosdeesteantrodemokesdemierda.Semetiólamanopordebajodelacamisaalaalturadelcinturón.—Túsacaunapistolaaquídentroyvasalacárcel,sinotematoyoantes.—Cuandohacecalormevuelvolococonfacilidad.—Saliddeaquí,lostres.—¿Estásintentandocabrearme?Eljovenvagabundosoltóunarisotadadelocoydiounbrincohaciaatrásendirecciónalapuerta,

conlosbrazoscolgandocomounmono.Houstontambiénsedirigióatodaprisaalasalida,diciendo:—¡Vamos,vamos,vamos!Estaba bastante seguro de haber visto la culata de una pistola en la cintura de los vaqueros de

Kinney.—¿Veis?Esunmoke,esetío—dijoelvagabundo—.Siempreseestánhaciendolosduros.Perosi

lesplantascaraseechanallorarcomosifueranbebés.Cada uno de ellos le compró una botella de Mad Dog 20-20 a un tendero que les obligó a

comprartambiéntrespanesWonderBreadjuntoconelvino,pesealocualseguíasiendounaganga.Comieronunpocodepanylesecharonelrestoaunaparejadeperros.Prontosepusieronaandar,borrachos, rodeados por unamanada de perros callejeros hambrientos, en dirección a una franjablancarelucientedeplayayalmarnegroylaespumaazulquerompíasobrelaarena.

Un hombre detuvo su coche, unGalaxy blanco de aspecto oficial, y bajó la ventanilla. Era unalmiranteuniformado.

—¿Qué,osestáisdivirtiendocomobellacos?—¡Sí,señor!—dijoKinney,haciendounsaludomilitarconsistenteenllevarseeldedocorazóna

lafrente.—Esperoqueasísea—dijoelalmirante—.Porqueparalosgilipollascomovosotrosseavecinan

tiemposdifíciles.Subiólaventanillaysealejó.

Elrestodelatardeselapasaronbebiendoenlaplaya.Kinneysentadoconlaespaldaapoyadaeneltroncodeunapalmera.ElvagabundotumbadobocaarribaconelMadDogapoyadosobreelpecho.

Houstonsequitóloszapatosyloscalcetinesparasentirelbultodelaarenadebajodelosarcosdelos pies. Sintió que se le expandía el corazón. En aquel momento entendía la expresión «paraísotropical».

Lesdijoasusdoscamaradas:—Loqueestoydiciendo,osea,sobreestosmokes.Creoqueestánemparentadosconlos indios

quevivendondevivoyo.Ynosolamenteconesosindios,sinotambiénconlosindiosquesondelaIndia,ycontodoelmundoqueseosocurraqueesasí,quetienealgodeoriental,yesporesoporloquepiensoqueenrealidadenlaTierranohaymuchostiposdistintosdepersonas.Yesporesoporloqueestoyencontradelaguerra…—HizoungestomoviendosuMadDog—.Yesporesoquesoypacifista.

Eramaravillosoestardepieen laplayaanteaquelpúblicoyblandirsumediogalóndevinoydeciridiotecestotales.

Sinembargo,Kinneyestabahaciendocosasraras.Conunamiradasoñolientaenlacarasevolcó

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la botella sobre los zapatos de vestir negros y brillantes y se quedómirando cómo el vino se lederramabasobrelaspunteras.Tiróvariospuñadosdearenaendirecciónalvagabundo,salpicándoleelpecho,lacaraylaboca.Elvagabundoselalimpióconlamanoyfingióquenosedabacuentadedóndevenía.

Kinneysugirióseguirlafiestaencasadeunamigo.—Quieroqueconozcasaese tío—ledijoalvagabundo—,y luegovamosaarreglar lode tus

mentiras.—Pormíbien,gilipollas—dijoelvagabundo.Kinneylevantólamanoconelíndiceyelpulgartocándose.—Megustaríameterteenunagujeroasídegrande.Cruzaron laplayaparaencontrar lacasadelamigodeKinney.AHouston loestabamatandoel

andarconlospiesdescalzos,primeroporlaarenacalienteyahoraporelasfaltonegro.—¿Dóndetienesloszapatos,imbécil?HoustonllevabaloscalcetinesblancosenlosbolsillosdelosLevi’s,peroloszapatosloshabía

perdido.Separóacomprarunaszorisdediecisietecentavosenunatienda.TeníanelvinoThunderbirdde

saldo,peroKinneylesdijoquesuamigoledebíadineroyprometióllevarlosdejuergamástarde.Lehabíanencantadoaquelloszapatosdecordonesdecolormarfil.Paramantenerlosblancoslos

solíaempolvarcontalco.¿Yahora?Abandonadosalamarea.—¿Estoesunabasemilitar?—preguntóHouston.Estabanenalgunaclasedeurbanizacióndecasaspequeñasybaratasdecolorrosayazul.—Sonbungalows—dijoelvagabundo.—Eh—ledijoHoustonasucompañero—.¿Cómotellamas,tío?—Notelodirénunca—dijoelvagabundo.—Esunembusterodemierda—dijoKinney.Tal vez aquellos bungalows parecían un poco miserables, pero no comparados con lo que

Houston había visto en el Sudeste Asiático. Una neblina de arena blanca cubría los senderosasfaltados,ymientraslostrespaseabanentreloscocoterospudooírelestruendodelaespumaalolejos.ÉlhabíapasadovariasvecesporHonolulu,ylegustabamucho.Hervíaafuegolentoyapestabatanto como cualquier otro lugar tropical, pero formaba parte de Estados Unidos, y todo estababastantebiencuidado.

Kinneycomprobólosnúmerosdeencimadelaspuertas.—Estaeslacasademicolega.Vamosalapartedeatrás.—¿Porquénollamamossimplementealtimbre?—dijoHouston.—Noquierollamaraltimbre.¿Quieresllamartúaltimbre?—Bueno,no,tío.Noesamigomío.SiguieronaKinneyalapartedeatrásdeledificio.Enunadelasventanasdeatrás,dondehabíaunaluzencendida,Kinneysepusodepuntillasyechó

unvistazofurtivoalinterior,despuéssepegóaltroncodeunapalmeraquehabíajuntoalaparedyledijoalvagabundodelaplaya:

—Hazmeunfavor,daungolpecitoenlaventana.—¿Porquéibaahacereso?—Porquequierodarleunasorpresaaltipo.

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—¿Paraqué?—Túhazloyyaestá,¿vale?Estetipomedebedineroyquierocogerloporsorpresa.Elvagabundoarañó lamosquiterade laventanacon lasuñas.La luzdedentroseapagó.En la

ventanaapareciólacaradeunhombre,apenasvisibledetrásdelamosquitera.—¿Quéseleofrece,caballero?—Greg—dijoKinney—.Abrelaventana.—¿Quiénes?—Soyyo.—Ah,eh,tío…Kinney.—Esoes,yomismo.¿Tieneslosdoscientossesenta?—Notehabíavisto,tío.—¿Tienesmisdoscientossesenta?—¿Acabasdevolveralaisla?¿Dóndehasestado?—Quieromisdoscientossesenta.—Joder,tío.Tengoteléfono.¿Porquénohasllamado?—Te escribí que atracábamos la primera semana de junio. ¿A qué crees que estamos? Es la

primerasemanadejunio.Yquieromidinero.—Mierda,tío.Nolotengotodo.—¿Cuántotienes,Greg?—Mierda,tío.Probablementepuedaconseguirunaparte.—Eresunputocabrónembusterodemierda—dijoKinney.Sesacódelacinturadelpantalónunaautomáticaazuldelcuarentaycinco,elmodelocompacto

paraoficiales,apuntóaltipoyeltiposedesplomócomounamarionetaalaquelehabíancortadoloscordeles y desapareció. En ese preciso instante, Houston oyó una explosión. Intentó entender dedónde había venido aquel ruido, encontrar alguna otra explicación que no fuera el hecho de queKinneyacababadepegarleaaquelhombreuntiroenelpecho.

—Vamos,vamos—dijoKinney.Enlamosquiteradelaventanahabíaquedadounagujero.—¡Houston!—¿Qué?—Yahemosacabado.Nosvamos.—¿Enserio?Houstonnosenotabalospies.Siguióadelantecomosifuerasobreruedas.Dejaronatráscasas,

vehículosaparcados,edificios.Ahoralosrodeabaeltráfico.Habíanrecorridountrechomuylargoenloqueparecíansertresocuatrosegundos.Estabasinalientoyempapadodesudor.

—Has sidomuy ingenioso, tío—dijo el vagabundo loco—.Creo que esa conversación la hasganado.

—Yonoperdonoamisdeudores.Noperdonoaquieneshanhechoalgocontramí.—Metengoqueir.—Sí,apuestoaquetetienesqueir,atontadodeloscojones.—¿Dóndeestamos?—dijoHouston.Ahoraelvagabundoseseparódeellos,sebajódelaacerayseadentróenlacalzada.—Eh.Nomegustatucara—dijoKinneymientraseltiposeiba—.Cobardelocoytraicionero.

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—¿Cómo?—dijoeltipo—.Oye,amínometoquesloshuevos.—¿Quenotetoqueloshuevos?—Creoqueeseesmiautobús—dijoeltipo.Cruzólacalleesprintandoatravésdelasbocinasdel tráficoysemetiódetrásdelcobijodeun

autobús.—¡Eh!—gritóKinney—.¡Marine!¡Alamierda!¡Sí!Semperfi!Houstonseinclinóhaciadelanteyvomitóencimadeunbuzón.Kinneynoteníabuenaspecto.Unapelículagrasientalecubríalosojos.—Tomemosunacopa—dijo—.¿Algunavezhasbebidounacargadeprofundidad?Esunchupito

debourbondentrodeunajarradecerveza.—Sí.—Nomeiríamalllenarmelabarrigadeesoscabrones.—Sí,sí—dijoHouston.EncontraronunsitioconaireacondicionadoyKinneypidiócervezasychupitosparalosdosen

unreservadoaoscurasalfondodellocalyempezóaprepararcargasdeprofundidad.—Estosíquetevaadarenergíasporuntubo.¿Algunavezlohasprobado?—Claro,echasunchupitoenlacerveza.—¿Algunavezlohasprobado?—Bueno,sécómoseprepara—dijoHouston.

Sintenerningunaconcienciadelashorastranscurridas,Houstonsedespertósudadoytodocomidoporlosmosquitosylaspulgasdelaarena,sobreuncolchónhundidoqueseloestabatragandovivoy con un dolor de cabeza aporreándole el cráneo. También oía el batir de las olas. Su primerpensamientoconscientefuequehabíavistocómounhombredisparabaaotro,asísinmás.

Parecíaestaralojadoenunaespeciededormitorioalairelibre.Sedirigióalgrifodelrincónyallí bebióvarios tragos largosdel aguadulcey echóunameada, despuésde sacar del lavabounasábanamojada que tenía un agujero grande de bordes negros quemado en el centro. Encontró sureloj, su cartera, los pantalones y la camisa, pero había perdido los zapatos en la playa, ahora seacordó,yestababastantesegurodehaberdejadolabolsaconsuequipoenelYMCA.Suszorisdediecisietecentavosparecíanhabersemarchadoandandoporsucuenta.

Dentrodesucarterahabíaunbilletedecincoydosdeuno.Reuniónoventacentavosenmonedasquehabíaesparcidasporelsuelodebambú.Salióparaintentarorientarse.

Lacabezaleflotaba.Elaguaquehabíaestadotragandolohabíavueltoaemborrachar.Elletrerodecía«HOTELKINGKANE»,yañadía«LOSMARINEROSSONBIENVENIDOS».Miró a ver si veía aKinney, pero no vio a nadie en absoluto, ni un alma. Era como una isla

desierta.Palmeras,laplayaluminosa,elocéanooscuro.Sealejódelaplaya,rumboalaciudad.NoregresóalToledo.Noteníaintencióndeacercarseparanadaasuamarradero,nianingúnsitio

dondepudieraencontrarseconKinney,laúltimapersonaalaquequeríaver.Seperdiólapartidaysepasó dos semanas en tierra sin permiso, durmiendo en la playa y comiendo una vez al día en lamisiónbaptistadelosmuelles,hastaquedarseconvencidodequeKinneyestabamáscercadeHongKongquedeHonolulu.Entoncesseentregóalapatrulladecostasparapasarunmesderecuperaciónenelcalabozo.

Le degradaron el rango a E-3 y volvió a ser marinero raso, lo cual quería decir que perdía

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automáticamente el rango de técnico de calderas. Era la segunda degradación de su carrera. Laprimerahabíasidoresultadode«repetidasinfraccionesmenores»cometidasdurantesuestanciaenlabasenavaldelabahíadeSubic,despuésdeaficionarsealosantrosdevicioquehabíaalotroladodesuspuertas.

Houston se pasó los dieciochomeses siguientes asignado a trabajos de pringado y partidas derecogida de basuras en la base de Yokosuka, Japón, principalmente en compañía de negrospendencieros,imbécilescarentesdeaptitudesyjuerguistasinútilescomoélmismo.Másamenudodeloquehabríaquerido, se acordabadel almirantedeHonoluluquehabíabajado laventanillade suFordGalaxyblancoyleshabíaprometidoque«seavecinantiemposdifíciles».

***

Debidoaqueahorateníaunanoviaqueledejabahacérselotodo,Jamesseolvidódelejércitoporunatemporada.Unaodosvecesporsemanaponíauncolchóndeaireyunsacodedormirenlapartedeatrásde lacamionetadesumadre,sacabafurtivamenteaStevieDaledesuhogar inconscientey lehacíaelamorenmediodelfríoprevioalamanecerdeldesierto.Dosyavecestresvecespornoche.Entreel10dejulioyel20deoctubre,porlomenoscincuentaveces.Peronollegaronasesenta.

Stevie no parecíamotivada para participar. Lo único que hacía era quedarse tumbada. Él teníaganasdepreguntarle:«¿Notegusta?».Teníaganasdepreguntarle:«¿Notepuedesmoverunpoco?».Peroenaquellaatmósferadedecepciónydedudaquesecerníasobreéldespuésdequehicieranelamor,eracompletamenteincapazdecomunicarseconella,salvoparafingirqueescuchabacuandoella hablaba. Stevie hablaba del instituto, de asignaturas, profesores, animadoras —ella eraanimadora, solo sustituta, pero esperaba unirse al equipo titular al año siguiente—, le hablaba sincesar.Laalegríadeellaeraunpuñoquelohundíaaélmásenelretrete.

Élteníamáscosasenlacabezaquenoeransuvidaamorosa.Estabapreocupadoporsumadre.Ellanoganabamuchodineroenelrancho.Semolíaatrabajar.Seestabaquedandoflaca,nudosa.SepasabalaprimeramitaddetodoslosdomingosenelTabernáculodelaFeytodoslossábadosporlatardeconducíacientocuarentakilómetroshastalaprisióndeFlorenceparaverasuparejadehecho.Jamesnuncalahabíaacompañadoenaquellasperegrinaciones,yBurris,queteníacasidiezaños,senegaba a hacer de escolta: se limitaba a huir corriendopor el vecindariode chabolas y caravanascadavezquelapobreviejaempezabaaprepararselossábadosylosdomingosporlamañana.

JamesnosabíaquéeraloquesentíaporStevie,perosabíaquesumadrelerompíaelcorazón.Siempre quemencionaba lo de alistarse en el ejército, ella parecía dispuesta a firmar los papeles,perosiéllaabandonabaahora,¿quéibaaserdeella?SumadrenoteníanadaenelmundomásquesusdosmanosysuamordescabelladoporJesucristo,queporsupartenoparecíahaberoídohablarnunca de ella. James sospechaba que lo único que hacía era engañarse a símisma, arrojarse a laBibliayasuspromesasigualqueunbichoquesetiracontraunaventana.Ahoraquehabíatomadointeriormenteladecisióndedejarlaescuelaeiraveralosreclutadoresdelejército,llevabasemanasparalizado,depieenloaltodeltrampolín.Oalbordedelnido.

—Mamá—decíaél—.Todaslaságuilastienenquevolar.—Adelante,pues—decíaella.Yelejércitolorechazó.Noaceptabanamenoresdeedad.—Losmarinestecogencuandotienesdiecisiete,peroelejércitono—ledijoasumadre.

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—¿Esquenopuedesesperartemedioaño?—Sonmásbientrescuartaspartesdelaño.—Podrías crecer y aprender mucho en la escuela, en cuestión de educación. Luego te puedes

graduaryestarlistoparaalistarte,listodeltodo.—Metengoqueir.—Puesvealosmarines.—Noquierolosmarines.—¿Porquéno?—Sondemasiadoestirados.—Entonces,¿porquéestamoshablandodelosmarines?—Porqueenelejércitonomevanacogerhastaquetengadieciochoaños.—¿Nisiquierasiyofirmo?—Niquevenganadieyfirme.Necesitouncertificadodenacimiento.—Yotengo tucertificadodenacimiento.Pone«milnovecientoscuarentaynueve».¿Nopuedes

cambiarlosinmása«milnovecientoscuarentayocho»?Cierrasel rabitodeabajodelnueveparaqueparezcaunochoyyaestá.

El último viernes de octubre, James volvió a visitar al reclutador con un certificado denacimientofalsificadoyllegóacasaconinstruccionesparapresentarseainspecciónellunes.

LasprimerasdossemanasdesuinstrucciónbásicaenFortJackson,CarolinadelSur,fueronlasmás largas que había vivido nunca. Cada día parecía una vida entera en sí mismo, vivida conincertidumbre,humillación,confusiónyfatiga.Todoellofuedandopasoaunestadopredominantedeterroramedidaquelasnocionesdematarysermatadoleempezabanallenarlamente.Sesentíabiensobreelterreno,enlasfilas,enplenaacciónconlosdemás,gritandocomomonstruos,clavandolabayonetaahombresdepaja.Perocuandosequedabasolo,aquelmiedoapenasledejabaverconclaridad.Solamentelosalvabaelagotamiento.Serllevadomásalládesuslímitesfísicosponíaunapareddecristalentreélytodoaquello:nopodíaoírbien,noseacordabadeloqueacababademirar,deloqueleacababandeenseñar.Solamenteesperabaelmomentodedormir.Teníasueñoshistéricosdurantelanocheentera,perodormíatantotiempocomoledejaban.

LoasignaronaVietnam.Élsabíaqueaquelloqueríadecirqueestabamuerto.Nohabíasolicitadoel puesto, ni siquiera había preguntado cómo se hacía la solicitud, simplemente le acababan deentregar sudestino.Cuatrodíasdespuésdeque terminara la instrucciónbásica, estaba llevando sualmuerzo hacia una mesa del comedor de reclutas, con el olor vaporoso del puré de patatasrehidratado elevándose hacia su cara, y las piernas empezaron a temblarle como flanes mientrascaminabahaciaunfuturoplagadodebombastrampayminasdetierra:estaríandepatrullayéliríademasiadoadelantadoencabezadeunahileradetiposenplenaselva,éliríaelprimeroypisaríaalgoque simplemente le arrancaría las venas y lomandaría en formade chorros en todas direcciones,como si fuera pintura. Antes de que el ruido le llegara a los oídos, ya tendría las orejas hechaspedazos,lomásprobableesqueunooyerasoloelprincipioinsignificantedeunsusurrodiminuto.Noteníasentidoestarsentadoallí,comiendoacucharadasdelabandejadivididaencompartimentosdesualmuerzo.Tendríaqueestarsalvandolavida,escapandodeaquelcomedor,desapareciendotalvezenunagranciudaddondeecharanpelículasguarrasdurantetodoeldía.

Dosdelostiposseleacercaronysepusieronahablarconélsobremorirencombate.—¿Estáis intentando asustarme todavíamás de lo que estoy?—dijo James, intentando dar una

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impresióndecoraje.—Haymásprobabilidadesdequenotematen.—Cállate.—Enserio,nohaytantasbatallasnicosasdeesas.—¿Veisaesetipodeallí?—dijoJames.Ysí,lohabíanvisto:atresmesasdedistanciahabíasentadounhombrenegroymuybajitocon

uniforme de gala de sargento de primera. No parecía lo bastante alto como para ingresar en elejército, pero llevabamuchas cintas en la pechera, entre ellas la cinta azul con las cinco estrellasblancasdelaMedalladelHonordelCongreso.

Cadavezqueveíanaunsoldadocondecorado,Jamesy losdemásseasegurabandepasarbiencercaparaecharleunvistazo.Deaquellosetrataba,¿no?Detomarteunatazadecafécontupersonainteriorendurecidayennegrecidaporlashazañasheroicas,yqueloschavalespasaranatuladoconunligerovuelcodelestómago,intentandonomirar.Pero,afindedisfrutarlo,habíaquellegarvivoacasa.

Cuando losdemás semarcharon, James regresóa lacolaparaque le sirvieranotra ración.LagentesequejabadelacomidayporesarazónJamestambiénsequejaba.Perolaverdaderaquelegustaba.

Elhombrenegrodelacintaazulenelpecholehizoseñasparaqueseacercaraasumesa.Jamesnosupoquéhacermásqueir.—Ven,siéntate—dijoelsargento—.Tienesesamirada.—Ah,¿sí?¿Quémirada?—Túsiéntate—dijoelsargento—.Nosoytannegro.Jamessesentóconél.—Tedigoquetienesesamirada.—Ah,¿sí?—Lamiradadice:«Yoqueríaconduciruntanqueotrabajarconmotoresdehelicóptero,peroen

vezdeesomeestánmandandoalaselvaparaquemematen».Jamesnodijonada,pormiedoaecharseallorar.—Melohacontadotusargento,Conrad,oConroy.—Elsargento,sí—dijoJames,extremadamentenervioso—.ElsargentoConnell.—¿Porquénoseteocurriópresentartevoluntarioparaalgo?¿Yasíteescapabas?AhoraJamestuvomiedodequeseleescaparalarisa.—Porquesoytonto.—VasalaVigesimoquinta,¿verdad?¿Québrigada?—LaTercera.—YosoydelaVigesimoquinta.—Ah,¿sí?¿Enserio?—PeronodelaTercera,delaCuarta.—Pero¿laTercera…está…está…yasabe…encombate?—Algunasunidadesestánencombate,pordesgracia,sí.Jamestuvolasensacióndequesipudieradecir:Sargento,yonoquierocombatir,seguramentese

salvaría.—¿Tepreocupaquetematen?

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—Másomenos,yasabe,osea…sí.—Notienesdequépreocuparte.ParacuandoLaCosasetecoma,yaestarásvacíodeltodo,yano

pensarás.Elsubidónselocometodo.Jamesnoconsiguiósacardemasiadoconsuelodeaquellaidea.—Sí.—Elhombrecillonegro inclinó la cabezahaciadelante, juntando lasyemasde losdedos

con rapidez—. Ven aquí. Escucha.—James se inclinó hacia delante, un poco temeroso de que elhombre le pudiera agarrar por la oreja o algo parecido—. En una zona de combate, lo que noconvieneesserunatachuelaenunmapa.Tardeotempranoelenemigovaamachacaresatachuelaconunafuerzasuperior.Loqueconvieneesteneropcionesdemovilidad,¿verdad?Loqueconvieneesparticipardelasdecisiones,¿verdad?Esoquieredecirqueteconvienepresentartevoluntarioparauna partida de reconocimiento.Que son voluntarias.Te tienes que presentar.Ydespués de eso, yanunca,nuncatepresentasvoluntarioparanada,niqueseaparameterteenlacamaconunamujerqueesté buenísima, ni que sea la novia de JamesBond. Esa es la regla número uno, nunca te prestesvoluntario. Y la regla número dos es que cuando estés en un país extranjero, nunca violes a lasmujeres,nuncahagasdañoalganado,ysiesposibletampocotecargueslapropiedad,salvoquemarlaschozas,esoespartedetutrabajo.

—EsoquetieneahíesunaMedalladeHonor.—Síqueloes.Asíqueescuchaloquetetengoquedecir.—Muybien.Deacuerdo.—Puedequeyoseanegrocomoelcarbón.Perosoytuhermano.¿Sabesporqué?—Nomeloimagino.—PorquetevasdereemplazoalaVigesimoquinta,¿verdad?—Sí,señor.—Nomellames«señor».Nosoytuseñor.TevasalaVigesimoquinta,¿verdad?—Esoes.—Muybien.¿Ysabesqué?YoacabodellegardelaVigesimoquinta.NodelaTerceraBrigada,de

laCuarta.Peroentodocaso,podríaseramíaquienestásreemplazando.Poresoteestoycontandoloquehayquesaber.

—Vale.Gracias.—No,nomedeslasgracias,yotelasdoyati.¿Ysabesporqué?Porqueesamíaquienpodrías

estarreemplazando.—Denada—dijoJames.—Yahora:loqueteacabodedecir,somételoasupervisión.—Loharé.AJameslegustabalaformaenquesehablabaenlainfantería,yéltambiénintentabahablarasí.

Opcionesdemovilidad.Tachuelasenunmapa.Somételoasupervisión.Eranlasmismasexpresionesqueunsargentodereconocimientohabíausadodossemanasatrásmientraslesdabaunacharlaensusbarracones.Ahoralasexpresionesresultabancreíbles,teníansentido.Unacosaestabaclara:sihabíaqueserunpringado,másvalíaestarenreconocimiento.

***

Después de pasarmás de un año en EstadosUnidos, enCalifornia—dosmeses en el Instituto de

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IdiomasdelaDefensaenCarmel,ycasidocemesesenlaEscueladePosgradoNavaldeMonterrey—, Skip Sands regresó al Sudeste Asiático, y en algún lugar entre Honolulu y la isla de Wake,volando a variasmillas por encima del Pacífico a bordo de un 707, se adentró en la sombra delmisterioquelodevoraría.

Despuésdel707aTokiocogióunaviónahélicehastaManila,untrenhastaelpiedelamontañaquehabíaalnortedelaciudadyotrocochehastalacasaparaempleadosdeSanCarlos, listoparaenfrentarse aEddieAguinaldo,y tambiéncontento ante laperspectivade las absurdasy sudorosaspatrullas nocturnas del mayor por la selva, solamente para descubrir que las patrullas ya no sellevabanacaboyqueEddieAguinaldoyanoestaba.SehabíadeclaradoextinguidalaguerrillaHuk.Anders Pitchfork se había ido hacía tiempo. La única compañía que le quedaba a Sands era elpersonal doméstico y de vez en cuando algún empleado de Manila de vacaciones, normalmenteemisariosfatigadosquedormíanmucho.Sepasócasiunmesesperandoaqueunodeellosletrajeranoticiasdelcoronel.

Las noticias llegaron en la valija de un correo, en forma de postal con la fotografía delMonumentoaWashington.Unselloamarillopegadoaunaesquinaavisaba:«MANTENGAN ASUNTOS

OFICIALES CERRADOS / CORRESPONDENCIA LEGAL DEBE USAR SOBRES / GRACIAS / SU OFICINA POSTAL

AMERICANA».

FelizNavidadporadelantado.Cierralosarchivos,todoloquehaya.VeaManila.Visitalasección. Estoy enMacLean volviéndome tarumba en una oficina. La semana pasada visitéBoston.Tutíaytusprimostemandanrecuerdos.TeveoenSaigón.TíoFX.

Perolosarchivosyaestabancerrados,oesohabíasupuestoél.Elprimerdíadesuregresohabíadescubierto,enelarmariodondeloshabíadejado,tresbaúlesdelejércitodecolorverdeoliva,todosconelnombre«BENÉTW.F.»estampadoenlatapa—elacentopintadoamanoarotulador—,ylostresprovistosdegruesoscandados.

Comonoteníaniideadedóndeestabalallavedeaquellostesoros,dejóaquelasuntoparaotrodíaehizolosiguientequeleindicaban,queeraviajaralaembajadadeManilaenuncocheparaelpersonal, cargadohasta los topes con el proyecto de su tío.Allí le dieron instrucciones de que sequedara el coche y viajara a unos sesenta y cinco kilómetros de la capital, hasta la base aérea deClark,dondesesubiríaauntransportemilitarquelollevaríaaVietnamdelSur.

AldíasiguienteeraNochevieja.SuitinerariorequeríaquepartieradelabasedeClarkeldíadeAñoNuevoconrumboalaeropuertodeTanSonNhut,enlasafuerasdeSaigón.

¡Por fin! Sintiéndose como si ya hubiera despegado, permaneció sentado en el coche paraempleadosenDeweyBoulevardobservandocómoelsolreverberabaenlabahíadeManila,ybajosuluz gloriosa, a fin de calmarse, examinó su correo.Un boletín de exalumnos deBloomington. ElNewsweekyelU.S.NewsandWorldReport,ambosdemuchassemanasatrás.EnunsobredepapelmaniladegrantamañoencontrólaúltimaremesadesucorreodeCalifornia,reenviadadesdeallíatravés de su dirección de la oficina de correos del ejército. Aquellas cartas llevaban dos mesespersiguiéndolo. Su tía Grace y su tío Ray—el mayor de los cuatro hermanos de su padre— lemandabanunatarjetadefelicitacióndentrodeunsobreconalgoquehacíaruidodentro,queresultóserunadelasnuevasmonedasdemediodólarconlacaradeJohnF.Kennedy,yunapostalmarca

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Hallmark,alaqueeraevidentequelamonedahabíaestadosujetaconcintaadhesivaantesdesoltarsedurantesuviajededieciséismilkilómetros.Skiphabíacumplidotreintaañosel28deoctubre,yparacelebraraquelhitolemandabancincuentacéntimos,eldobledelonormal:yasehabíahechomayorparalasmonedasdecuartodedólar.

Ytambiénhabíaalgobastantemásrarodever:unacartadelaviudaBeatriceSands,lamadredeSkip.Erabastanteabultada.Nolaabrió.

Yporúltimouna cartadeKathy Jones.Había recibidobastantes en el últimoaño, cadaunadeellasmáschifladaquelaanterior;lashabíaguardadotodas,perosolohabíacontestadodosveces.

¿EstásporfinaquíenVietnam?¿Talvezenlaaldeadeallado?TedoylabienvenidaalaBibliaen Panavision y Technicolor. Pero aquí es mejor no ser de tus Estados Unidos de América.Demasiados resentimientos. Los franceses, en cambio, no les caen tan mal. A los franceses losderrotaron.

¿TeacuerdasdeDamulog?

Desdeelpárrafosiguientelesaltóalavistalapalabra«aventura»,ydejódeleer.Niunapalabradelcoronel.Nohabíavistoasutíoenmásdecatorcemeses,yhabíallegadoalaconclusióndequeaalguno

de ellos dos, o bien a los dos, los habían incapacitado por culpa de aquel asunto cuestionable deMindanao. Algo, a fin de cuentas, los había mantenido a ambos alejados de la acción. Él habíaestudiado su cursodevietnamita en el Institutode Idiomasde laDefensa, queyano se llamaba laEscueladeIdiomasdelEjército,y loquehabíaempezadopareciendoelpreludiomássensatoaunpuestoenSaigónsehabíaconvertidoenoncemesesdesconcertantesencompañíadeunequipodeotrostrestraductores,niunsolonativovietnamitaentreellos,trabajandoenunproyectodeutilidaddudosa,esdecir,persiguiendounalocuraobvia:extraerunaenciclopediadereferenciasmitológicasdemásdesetecientosvolúmenesdeliteraturavietnamita,unempeñoemprendidosobretodoentresoficinasdelsótanodelaEscueladePosgradoNavaldeMonterrey,yqueconsistíabásicamenteenellistado,clasificaciónycatalogacióndecriaturasdecuentosdehadas.

ÉlsupusoqueaquelloeralacontribucióndesutíoalGrupodeOperacionesPsicológicasdelaAsistenciaMilitaralMandodeVietnam,queeraparaquienelcoronel trabajabaahora,por loquetenía entendidoSkip, en calidadde jefede enlace con laCIA.Dehecho,y aunquenoeradel todooficial,elcoroneldirigíaOperacionesPsicológicasparalaAMMV,deacuerdoconunoficialdelaagenciadeLangleyque se llamabaShowalter yquevenía a supervisar al equipode traduccióndeSkipmásomenosunavezalmes.YnohabíadepasarmuchotiempoantesdequeSkipayudaraalcoroneladirigirlo.

—¿Cuándomequiereallí?—Eneneromásomenos.—Excelente—dijoSkip,completamentefuriosoporelretraso.Aquellaconversaciónhabíatenidolugarenjunio.Aquel proyecto caprichoso terminó con el traslado repentino a otros lugares de todos los

participantes,quemetieronelmaterialinútilencajasylomandaronaLangley.Abriólacartadesumadre.«QueridohijoSkipper»,sucaligrafíaeraredondeada,inclinada,grande,ycubríavariaspáginas

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depapeldecartadequinceporveinte:

No seme da nada bien escribir, así que, primero de todo, no pasa nadamalo.No quiero quepienses que solamente me siento a mandarte un saludo cuando hay malas noticias. Es justo locontrario,undíamuymajodelveranillodeSanMartín.Uncieloazulamásnopoder,nirastrodenubesahíarriba.Lostrenespasanhaciendounruidodistintodebidoalashojasquesesecanenlosárboles, ahora es un sonido feliz, pronto oiremos ese sonido solitario de un silbato enmedio delinviernosinhojas.Estatardehaceelsuficientecalorcomoparaqueunoañoreunpocodebrisaenlacasa.Abreslasventanasyoyesalosmirlosdealasrojasllamar.Ylahierbasiguecreciendo,sevedóndenecesitasercortadaotravezantesdequeelotoñoseaoficialdeverdad.Cuandohevisto lobonitoqueestabaeldíahepensado:«¡Creoquevoyaescribirunacarta!».

Gracias por el dinero. Me he comprado una secadora nueva a juego con la lavadora. Ahoramismolatengollenaderopaydandovueltassinparar.Pero,conelbuentiempoquehace,megustatenderlascosasgrandescomolassábanasylascolchasfueraenlacuerdaysecarlasalairelibre,yeso es lo que he hecho.Tengo las sábanas tendidas como en los viejos tiempos. Sí, encargué unasecadora,nohecompradounatele.Medijistequemecomprarauna,peronolohehecho.Cuandocreo que necesito entretenimiento, voy a la estantería y sacoAlmacén de antigüedades oEmma oSilasMarnerymepongoaleercualquiercapítulo,ynuevevecesdecadadieztengoquevolveralprincipioyleerellibroentero.Nolopuedoevitar.Sonamistadesdetodalavida.

YatecontéqueelviejoreverendoPierceseretiró.Ahorahayunhombrenuevoenlaiglesia,elpastorPaul.Bastantejoven.SeapellidaConniff,perosehacellamar«pastorPaul».Ledaunenfoquenuevoatodo.Mepicólacuriosidad,estuveyendotodoslosdomingoselinviernopasado,peroluegoeltiempomejora,elsolbrilla,haymuchoquehacerynodebodehabervueltodesdeprincipiosdeabril.Notengotele,perointentomantenermeinformada.¿Nosonterribleslasnoticias?Yanoséquépensar.Avecesmegustaríapodercontarleaalguienloquepienso,luegopiensoqueesmejorqueno. Sé que te uniste al gobierno para hacer algo útil en el mundo, pero nuestros líderes estánmandando buenos muchachos a destruir otro país y tal vez a perder sus vidas sin dar ningunaexplicaciónsensata.

Bueno,hapasadomediahoradesdelaúltimafrase.Esanuevasecadorahahecho«dingdong»yhetenidoquecorreradoblarlaropamientrastodavíaestabacaliente.Perdónameporlascosasqueescribo.Talvezpondréloquesemeantojayluegovolveréalprincipiodelacarta,tacharélaspartesmalasymandarésololaspartesagradables.No,mejorqueno.Laguerrasignificaalgodistintoparamí que para los generales y los soldados. El próximo 7 de diciembre hará veintiséis años queperdimosa tupadre,ycadadíaquepasasigoechandodemenoscómoeranlascosasentonces.Alcabo de un tiempo tuve más novios después de tu padre, y hasta pasé una buena temporada conKennethBrookeantesdequeélcogierauntrabajoenNorthwestAirlines,peroaquellopasóunpocoprontoparaquehubiéramosdecididoloquequeríamoshacer,Kenyyo,asíquecuandoélsemudóaMinneapolis, se acabó todo.De no ser así, creo que nos habríamos comprometido, lo cual quieredecirquehabríastenidounpadrastro.Peromeestoyyendodeltema.¿Cuáleraeltema?¡Cielos,serámejorquenomandeestacarta!NisiquierasésitúsabíasquelascosashabíanidounpocoenserioentreKenBrookeyyo.¿TeacuerdassiquieradeKen?CadadosañosporNavidadély su familiavuelvenacasaparavisitaralospadresyalahermanadeél.LasotrasNavidadessevanadondeestálafamiliadesumujer,quenosédóndees.Caray,estoyteniendounodeesosdías.

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Serámejorquesaqueesaviejacortadoramanualyhagaelcéspeddeljardínporúltimavezesteaño.Latendréqueengrasar.Durantetodoelveranomelohanestadocortandoloschavales,unouotrodeloschavalesdelosStrauss,ThomasoDaniel,peroahoraestánestudiando.Seibanturnandoconese trastomonstruosoyenormeagasolinade supadre.Se sacabandosdólares cadavez.Esaviejacortadoramanualesunaamigamíadetodalavida.¿Teacuerdasdecómocortabayoelcéspeddeljardín?«¡Tenlosdedosbienalejadosdeesascuchillas!»,tegritabayo,comosiaquellascuchillasfueranasaltaryarrancartelosdedosamordiscos,aunquenohubieranadieempujandolacortadora.Y luego un día oigo zumbar esas cuchillas y miro por la ventana y me encuentro a Skipper encamisetayconsusbrazos flacuchos,quepasaempujando lacortadora frentea laventanacomosifuera La Pequeña Locomotora. Hiciste el jardín entero en tu primer intento. Confío en que teacuerdes,porqueyomeacuerdocomosi fueraayer.Confíoenque teacuerdesde locontentoqueestabastú,yyotambién.

Teagradezco lasnotasquememandas.Lagentepreguntapor ti,yesbueno tenernoticiasquecontar.AlumnodelInstitutodeIdiomas,delaEscueladePosgradoNaval,agregadodelaembajadaamericana,bastanteimpresionante,mehacesentirmecomounaestrella.

Hemos tenidoundíahermoso todoeldía,perosobre las tresde la tardeseestá levantandounpocodeaire,quehaceque las sábanas tendidascrepitenyondeen.Escuandomásblancasquedan,cuandosesecanalsolyalaire.Ytenemossuertedeeseaire,porquelasvíasnoestánlejos,perolabrisasiemprevienedelotrolado,conloquenonostraearena.¡Mehacealegrarmedequevivamos«alotrolado»delasvías!Meacuerdodecuandotevipasarfrenteaesaventana.Enunsolomomentoyavitodalafuerzadetucarácter.Teviypensé:Tieneelaplomodesupadre,sevaapagarélmismola universidad con trabajos y becas, nada va a parar a este chavalín. Y ahora más estudios, másposgrados.Ejército,marina,embajadas…parecequetodoelmundotenecesita.

Llegado aquel punto, a seis líneas del final, tuvo que dejar de leer y maldecirse a sí mismo.Acababade pasar catorcemeses enEstadosUnidos, podría haber hechouna visita a casa antes devolveramarcharse.Perohabíaevitadoasumadre.Claro:laguerra,lasintrigas,eldestino…noteníaproblemas para enfrentarse a nada de aquello. Pero, por favor: mamá, no. Ni su ropa tendidaondeandoenmediodelatristezaprimaveral.NiClements,Kansas,consulicenciahistóricaparaserpequeño,bajoyconvencional.Aquí,enManila,aaproximadamentecatorcegradosdelatitudnorteycincuentaysietedelongitudeste,yanopodíaalejarsemuchomásdesucasa.Ysinembargo,noeralobastantelejos.Ledolíapensarqueellaestabacompletamentesola.SobretododespuésdeaquellaestanciaenelInstitutodeIdiomas.Talcomolehabíadichoelcoronel(«Temandaréalaescuelaesa,nohayproblema»),lohabíantrasladadojustodespuésdeAccióndeGraciasde1965aaquelinstitutosituado en un acantilado alto desde el que se divisaba todoCarmel. Las vistas eran de niebla bajaagazapadaportodalacosta,obiendenieblaaltaqueenvolvíalasinstalaciones,obien,enlosdíasdespejados,delPacíficoenestadopuro,conmovedoramentealejadodeélydesucursodeinmersióntotalenelvietnamita,quecomportabacuatro semanasdeencierroen las instalaciones seguidasdeotrascuatrosemanasenquesolamenteteníapermisosdefindesemana.EnsuprimerpermisotomólacomuniónenlasHermanasdeNotreDamedeNamur,enlamismacosta,unconventoqueabríaalpúblicoparalamisadominical.Losseglaressesentabanenlosbancosdelaiglesia,mientrasquelashermanas,separadasdelmundoporsusvotos,permanecíansentadasodepie,eraimposiblesaberlo,detrásdeunmuro,escondidashastadesusfamiliares,algunosdeloscualesestabansentadosenlos

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bancosparapoderveraunquefueraunmomentolaspalmasvueltashaciaarribadelasmanosdelasacólitas enclaustradas, que sobresalían por una ventanilla para recibir el Cuerpo deCristo.Verlasaquellamañana,ypensarenellasahora,suavizóelpesodesuscadenas.¿Acasoélhabía llevadoacabo un juramento de separación?No. Fueran cuales fueran sus circunstancias, era libre, y estabaluchando por la libertad de todos. Pero su madre…Allí sí que había alguna clase de juramento.Algunaclasedeemparedamientoaceptado.

Skip,rezoportiyporelpaísentero.Voyavolveraasistiralaiglesia.Siento mucho no escribir apenas, te agradezco tus notas, pero hace falta que sea una clase

determinadadedíaparaqueyosaqueelpapelyelbolígrafo.Bueno,aquílatienes,¡otracartaoalgoparecido!Pensandoenti,

Tumadre

Después de ponerse a prueba a símismo con aquella, sintió que ya podía afrontar la carta deKathyJones.Perohabíaoscurecidodemasiadoparaleer.

Acababadeinvertiruntiempoconsiderableenleeraquellacorrespondenciaysutaxinosehabíamovidonimediamanzana.

—¿Hayalgúnproblema?—lepreguntóalconductor—.¿Quépasa?—Algoestácausandounaretención—dijoelconductor.Enelotroextremodelacurvadelbulevarqueseguíaelcontornodelabahía,vioquelasluces

deltráficosemovíanconlibertad.Peroellosestabanenplenoatasco.—Ahoravuelvo—dijo.Salióycaminóhaciaellugardelproblema,bordeandoloscochesparados,sorteandoloscharcos

pútridos.Unenormeautobúsurbanohacíadetapón,detenidoporunsolohombrequeestabadandotumbosenmediodelacalle,borracho,conlacaracubiertadesangre,conlacamisetarasgadapordelante, llorando mientras se enfrentaba con aquel vehículo, la cosa más grande a la que podíadesafiar,aparentemente,despuésdequealguienlehubieradadounapaliza.Bocinas,voces,motoresalralentí.Manteniéndoseenlasombra,Skipsededicóamirar:lacaraensangrentada,deformadaporla pasión, reluciendo a la luz de los faros del autobús. La cabeza echada hacia atrás, los brazosinertes, como si el hombre colgara de ganchos por los sobacos. Aquella ciudad apestosa ydesesperada.Lellenabadealegría.

***

CuandollegóJamesdepermiso,sumadresetomótresdíasdevacacionesdelranchoMcCormickylosdossepasaronaqueltiempoviendolatelevisiónjuntosenlapequeñacasaalbordedeldesierto.Eldíaenquellegó,ellalesacósuuniformedeclaseAylealisólasarrugasconsuplanchadevapor.

—Ahorasíqueestáshaciendoalgoportupaís—dijoella—.Tenemosqueplantarlescaraaloscomunistas.NotienenDios.

Y aquello habría querido decir algo si no fuera porque ella decía lomismode los judíos, los

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católicosylosmormones.Despuésdequelaviejavolvieraatrabajar,JamesviomuchoaStevieDale.EldíadeNochebuena

porlatarde,losdoscogieronlacamionetadelamadredeélyfueronporlacarreteradeCarefreehastaelbordedelascolinas,dondeuncochehabíatenidounaccidenteyelconductorhabíamuerto.

—¿Vesahí?—dijoStevie—.Chocóconunsaguaro, luegoconunpaloverdeyporfinconesarocagrande.

Hacía unos días que las patrullas de emergencia habían desprendido de una roca los restosennegrecidos del coche, pero todavía nadie se los había llevado. El coche había quedado volcadohaciaarribaysehabíaquemado.

—Debíadeiratodapastilla.—Unasolapersonaenelcocheyunsolococheenlacarretera.—Supongoquellegabatarde.Se bebieron un par de cervezas cada uno y Stevie no tardó en estar achispada. Los dos

permanecieronsentadosmirandoaquellosrestosdecochequeparecíanunamanocalcinadayvueltadelrevés.

—Elconductormurióquemadodentro—dijoella.—Esperoquehubieraperdidoelconocimiento—dijoJames—.Porsubien.El coche había sido rojo, pero las llamas habían derretido la pintura. Ahora mostraba varias

zonasdemetaldesnudoyreluciente.EsposiblequehubierasidounChevrolet,peronohabíaformadesaberlo.

—Noquedanadaenelmundoquenoestéardiendolentamente—dijoella.—Ah,¿sí?¿Esocrees?Noteentiendo.—Todoseestáoxidando.Elmundoentero.Élsupusoqueellahabíarecibidoaquellanoticiaenlaclasedequímica.Durantelainstrucciónbásica,Jamesnohabíaparadodepensarenella,peronoeranadapersonal.

Pasabaelmismotiempopensandoenporlomenosotrassietechicasdesuinstituto.Yahoraqueporfin estaba con ella, por mucho que estuvieran rodeados de aquellos espacios abiertos, se sentíaatrapadoenuntorno.

—¿Puedopreguntarteunacosa?—dijoél—.Laprimeravezque lohicimos, ¿eras…ya sabes,virgen,oalgoasí?¿Fuetuprimeravez?

—¿Lodicesenserio?—Eh…sí.—¿Estásbromeando?—Sí.Osea,no.—Pero¿túquétehascreídoquesoyyo?—Soloeraunapregunta.—Sí,eravirgen.Estonoesalgoqueunahagatodoslosdías,oporlomenosyono.¿Quétehas

creídoquesoy?—dijoella—.¿Unapendonaquevaconmoteros?AquellohizoreíraJames,locualasuvezhizolloraraStevie.—Stevie,Stevie,Stevie—dijoél—.Losiento.SealegrabadequefueralavísperadeNavidad.Esoqueríadecirquepasaríaeldíasiguientecon

sufamiliaynotendríaqueverla.Peroeransolamentelosefectosdelacerveza,yalcabodedosminutosellayahabíaaceptadosus

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disculpas.—Lapuestadesolsiempreespreciosacuandohaynubes—dijoella.Ahorapodíarefrescarmuydeprisaalanochecer.Élsintióqueselevantabaunpocodebrisa,el

últimoalientocálidodeldíaqueterminaba.Stevielediomuchosbesos.EnCarolinadelSurlohabíantratadocomoaunanimalyélhabíasobrevivido.Sehabíavuelto

más grande, más fuerte, más viejo y mejor. Pero al regresar al mundo en que había crecido seencontrabaconquenoteníaniideadecómoestarsentadoenlamismahabitaciónquesumadre,nidequédecirleaaquellachicadedieciséisaños.NoteníaniideadecómopasarunoscuantosdíasdesuvidaantesdeembarcarseaLouisianaparalaInstrucciónAvanzadadeInfantería,antesdevolveraunsitiodondeledijerantodoeltiempoquéteníaquehacer.

—Supongo que ya falta muy poco para que abramos los regalos y todo eso—dijo Stevie, ycolocólasyemasdesusdedosamorososenlanucadeél—.¿Aquéhoraquieresveniracasa?

Mientras él pensaba en ello, aquella pregunta tan simple pareció ensancharse hasta abrirle lospensamientosmismosencanal.

Forcejeó con lamanecilla de su portezuela y salió al aire fresco y pasó junto a los restos delcoche estallado y permaneció inclinado hacia delante con las manos apoyadas en las rodillas,manteniéndose erguido a duras penas, con lamirada levantadahacia el horizonte invernal.Queríaquealguiensalieradelassuavesdistanciasrosadasyazulesylosalvara.Alolejosveíalasondasdeunespejismo:obienunamuertehorribleabrasadoenVietnam,como ladelhombrealquehabíansacado comohabían podido de aquelChevrolet calcinado, o bien un desfile de años llenos de laspreguntasdeStevieydesusdedostocándoleelcuello.

***

SandssequedóapasarlanocheenunahabitaciónprivadaconbañodelosAposentosdeOficialesSolterosdelaBasedeClark,lamayorpartedeloscualesconsistíanendormitorioscolectivosconatmósferade residenciadeestudiantes, llenosdepuertasque seabríany secerraban,de jóvenesamedio vestir que hablaban a gritos por los pasillos, del ruido de las duchas, de las canciones deNancySinatracompitiendoconlostemasinstrumentalesdebossanovadeStanGetz,ydelhedoraldesodoranteensprayRightGuard.Llegósobrelasochodelanoche.Elconserjeloayudóametersus baúles en su habitación. No habló con nadie, se acostó temprano y se levantó tarde al díasiguiente,queeraNochevieja.Sesubióalautobúslanzaderadelabaseylepidióalconductorfilipinoquelodejaraenalgúnsitiodondepudieraencontraralgodedesayuno.

AsíescomoSandsseencontróasímismoalasnuevedelamañanadel31dediciembrede1966enelbardeunabolera,queyaaaquellahoraestaba llenadeaviadores luchandopormejorar suspromediosenunaatmósferainundadadelclaqueteodelosbolos.Comióbeiconconhuevosenplatodeplástico,sentadoaunamesasituadajuntoahilerasymáshilerasdebolasdebolera,ysededicóamirar.Peseal ruidogeneral,habíaunaespeciedesigilocomodeandardepuntillasenelportedealgunos de aquellos atletas, una concentración como de perro de caza que anda al acecho. Otroscaminabanpesadamentehastalalíneayarrojabanlapelotacomosifueranlanzadoresdepeso.Skipnuncahabíajugadoalosbolos,yhastaaquelmomentonisiquieralohabíapresenciado.Elatractivoeraobvio:lapulcrageometría,laconfianzaenlafísicabalística,lariquezaorgánicadeloscarrilesdemaderaylaservidumbremudadelasmáquinasquelevantabanlosbolosybarríanlosqueestaban

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caídos.Yporencimadetodo,laimpotenciayelsuspense,labolasostenida,laboladirigida,labolaque se alejaba como un hijo, más allá de toda esperanza de influencia. Un juego lento, grande ypoderoso.Sandsdecidióque loprobaría tanprontocomose leaposentaraeldesayuno.Entretanto,bebiócafésoloysepusoaleerlacartadeKathyJones.Teníaunacaligrafíapulcrayparecíaescribirconestilográfica,entintaazul,sobreunpapelcebollaendebleygrisáceo,probablementehechoenVietnam.Lasprimerascartasqueellalehabíamandadohabíansidodirectas,coloquiales,solitariasyafectuosas.EllasehabíapreguntadosipodíanencontrarseenSaigónyaSands lehabíagustado laidea.Peroahoraaquellascartasrecientes,aquellascavilacionesconfusas…

Llevotodalavidatratandoconcomodines.Simplescomodines.Niasesnireyes.Timothyfueelprimerasyélmepresentóalrey:Jesucristo.AntesdeesofuialauniversidadenMinneapolis.Peroperdílaambición,asíquelodejéymepuseatrabajardesecretariaycadanochesalíadecóctelesconjóvenesquetrabajabanenelcentrodelaciudad,jóvenescomodines.

…podríanhaberestadosacadasdeundiarioynoirdirigidasanadie.Élapenaslaspodíasoportar.Selehabíanpasadolasganasdevolveraverla.

La gente de estas tierras que estamos visitando…mira a esta gente. Están tan atrapados por sus circunstancias como loscriminalesestánatrapadosporlaprisión.Nacenyvivenymuerendeacuerdoalosdictadosdecómovanlascosas.Nuncadicen«quierovivir en ese lugar envezde este», «quiero servaquero envezdegranjero».Laverdad esqueni siquierapueden sergranjeros,sonsimplesplantadores.Labradores.Jardineros.

Alprincipio,loscomunicadosdeellanosolíanserlargos,porlogeneralunahojaporlasdoscaras,y terminabanconcosascomo:«¡Bueno,yasemeestácansando lamano!Mejorseráque lodeje.Unabrazo,Kathy».Obien:«Bueno,veoqueyahellegadoalfinaldelapágina,mejorlodejo.Unabrazo,Kathy».Yélsiempresolíacontestarysiempremuybrevemente.Confiando,esosí,ennoresultardemasiadolacónico.Peronuncahabíasabidoquédecir.Lanaturalezadesuconexión,peseaserbastanteclaraenplenocalordelamisma,ahorasehabíavueltomisteriosa.

Cuandose tratadelcontrasteentre tenerelecciónyno tenerninguna libertadparaelegirnada…ahíesdonde lascosasseponendurasdeverdad.Vosotros,América,vuestrasfuerzasestánaquíhaciendolaguerrapordecisiónpropia.Vuestroenemigo,encambio,notieneopción.Nacieronenunpaísenguerra.

Otalveznoseatansimple,EstadosUnidoscontraVietnamdelNorte,no.Esmásbienloshombresobligadosalibrarestaguerracontralosqueeligenestaguerra:lossoldadosquemuerencontralosteóricosylosdogmáticosylosgenerales.

Aquellas eran ideas torpes, y ya hacía tiempo que Sands había perdido la paciencia para lasmismas.¿AcasoaKathylegustaríaverunbustodeLeninenlapuertadetodaslasescuelaspúblicas?¿OverderribadalaEstatuadelaLibertadenunaceremoniaobscena?Porsupuestoquesí.Yaquellamentalidad equivocada lo atraía. Siempre le habían chiflado las mujeres sardónicas, miopes eintelectuales. Las mujeres de ingenio agudo y congénitamente tristes. Con una combinación deagresividadydisculpaenlacara.Yunosojoscastañosydulces.

¿TeacuerdasdequemepreguntasteporunacitadelaBibliaqueafirmabaquehaydiferentesadministracionesenlaTierra,yyotedije que me parecía que no era así? Pues tenías razón tú: Primera Epístola a los Corintios, 12,5-6 y ss.: «Y hay diferencia en lasadministraciones,perounsoloSeñor.Yhaydistintasoperaciones,peroeselmismoDiosquetrabajaentodasellas».

¡Esoledebederesultaratractivoaunagentedelgobiernocomotú!(SigosincreermequetrabajesparaDelMonte.)Siquierescreerque los distintos departamentos angélicos dirigen distintas partes del montaje aquí en la Tierra, no te culpo. Solamente yendo delaeropuerto deManila al de Tan Son Nhut en Saigón yo ya estaría dispuesta a afirmar que existe una diversidad de deidades y deuniversos,todosenelmismoplaneta.

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Ahoraquelopienso,enNorteaméricavariossacerdotesespañoles(¿olamismaIglesiacatólica?)debendehabercreídoquehabíazonasbajocontroldelDiablo,odeCristo,poresohaysitiosquesellaman«monteDiablo»o«montañasSangredeCristo»,ycosasporelestilo.

Metió la carta debajo de la taza del café. No conseguía concentrarse en su lectura. Viajar loexcitaba. Este mundo que se acababa, el siguiente que emergía, los jugadores de bolos que lorodeabanconsusmovimientosysuruido,lanzandoplanetasnegros,destruyendolaconstelacióndebolos de madera. Y de vuelta en su habitación, más cosas que poner en movimiento: el archivomonstruoso del coronel, un talego de lona que contenía dos pares de zapatos resistentes y cuatromudasderopalavableamáquina—nitraje,niatuendodegala—,ademásdeuncajónpequeñohechodemimbre,básicamenteunacesta,perobastanteresistente,llenadediccionariosdeidiomasdiversos.ASkiplohabíanentrenadoparaquenoseolvidaradequeveníaencalidaddecivilydequeeraasícomo tenía quevestir, para que evitara las prendas de color caqui o verdeoliva y llevara zapatosmarrones en lugar de negros y cinturones también marrones. Había dejado atrás su carabinapersonalizadayviajabaconunarmapropiadeagentesecreto,unaBerettaautomáticadelcalibre25que se podía esconder en el bolsillo de los pantalones. Sumente pensaba en todo aquello a todavelocidad,comoresultadodelexcesodecafé.Renuncióalaideadejugaralosbolos,dejólaboleraysefueapasearporelmediodíadeltrópicohastaquelafrenteleempezóalatirdolorosamenteylacamisamojadaseleempezóapegaralcuerpo.

Labibliotecadelabaseparecíaabierta.Ensutejadorugíaelaireacondicionado.Seacercóalapuertayvioagenteenelinteriorbajolaslucesfluorescentes,perolapuertanoseabría,ytuvounmomentodepánicoenquesesintióencerradoenelexterioryobligadoacontemplarimpotenteelpaísdeloslibros.Unhombreabriólapuertaconesfuerzoparasalir—estabaatascadaenelmarco,infladapor lahumedad—,ySandsconsiguióentrar.Sobreexcitadoporelcafé,sededicóapulularentre las pilas de libros, examinando un volumen detrás de otro pero sin sentarse en ningúnmomento.EnunejemplardeWilsonelchifladodeTwainleyólosepígrafesdetodosloscapítulos,enbuscadeunoquecreíarecordar—algoqueverconeltesorodevivirlavidaenelanonimato—,peronoestabaallí.Enlaseccióninfantilencontróalgunostomosdecuentosdehadasfilipinos.NingunodeVietnam.

Leencantódarporcasualidad,acontinuación,conunlibrosobreKnuteRockne.Sesentóypasósuspáginashasta encontrar en lapágina87una fotodeRockne en los camposdeNotreDameen1930conelúltimoequipoalquehabíaentrenado.Yenmediodelmismo,enelcentrodelatercerahilera,conelpelomásabundanteylasarrugasborradasyaquellafranquezaansiosayfamiliarenlacara,eltíoFrancis.Unnovatodelasegundafila,peroaunasíunodelosjóvenesbrutalesyllenosdeconfianza de Rockne: sacando pecho, la barbilla bien alta, mirando hacia delante a un futuro desolamente dos o tres minutos. El hermano mayor de Francis, Michael, padre de Skip, se habíagraduado en Notre Dame el año antes y se había mudado al pueblo natal de su novia, Clements,Kansas.Francisseuniríaalafuerzaaéreadelejércitoysemarcharíaen1939parahacerdepilotocon los seudociviles Flying Tigers en Birmania. Michael se cansaría gradualmente de vendermaquinariaagrícolaysealistaríaenlamarinaen1941paracaerseismesesmástardeconelArizonaen los primeros segundos del ataque a Pearl Harbor. La muerte había visitado antes de tiempodemasiadasvecesalafamiliadesupadre,enformadeguerrasobiendeaccidentes.Elcoronelteníauna hija, Anne. Un hijo que había tenido, Francis Junior, se había ahogado un Cuatro de Juliomientras navegaba por la bahía de Boston. Un hermano y un hijo, y los dos robados por bahías.

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Habíansidotreshermanosyunmontóndeprimos,ymuchoshijosdescendientesdelosmismos,ytodoelmundohabíaperdidoaalguien.Eraunafamiliaruidosaytriste.

Skipsequedómirandolashilerasdejugadores.Hombresquesalíancorriendodelosbancosparachocar entre ellos con jovial derramamiento de sangre. Que se dejaban acorralar y convencer aporrazosparaconvertirseenpolisyguerreros,yquevivíanenunmundocompletamenteinaccesiblealasmujeresylosniños.Ellosledevolvieronlamirada.Unviejodolorcantósucanción.Hijoúnicodemadreviuda.Dealgunamanerahabíaentradoenelmundodeellossinhacersehombre.

CerróellibroyabriólasfrágilespáginasdelacartadeKathyJones:

Nacieronenunpaísenguerra.Nacieronenunaépocadepenuriasquenuncaseacaba.Meda la impresióndequenosehahabladodelhechodequeparaqueel Infiernoseael Infierno, lagentequeestáenélnunca

tendríaqueestarseguradequeesallídondeestán.SiDioslesdijeraqueestánenelInfierno,entoncesselosaliviaríadeltormentodelaincertidumbre,ysutormentonoestaríacompletosinlapreguntaagobiante:«¿Acasoestesufrimientoqueveoportodaspartesesmicondenacióneternaylacondenacióneternadetodasestasalmas,obiennoesmásqueunviajetemporal?».Unviajetemporalalmundocaído.

YpuedodecirtetambiénquemifesehavueltooscuraporqueheempezadoaleeraCalvino,aforcejearconCalvino,yheperdidolapeleaymehevistoarrastradaaladesesperacióndeCalvino.Calvinonolallamadesesperaciónperoesoesloquees.YoséqueestoeselInfierno,estodeaquí,elplanetaTierra,yséqueati,amíyatodosnosotrossolonoshizoDiosparapodercondenarnos.

Ydeprontomepongoagritar:«¡PeroDiosnoharíaeso!».…¿Loves?Eltormentodelaincertidumbre.Osupongoquecomocatólicoqueeres,quizátepreguntessiestoesunviajeporelPurgatorio.Seguroquetelopreguntascuando

vengasaVietnam.Tepararáscincoodiezvecesaldíaytepreguntarás:«¿Cuándomehemuerto?¿YporquéestancruelelcastigodeDios?».

SepasólatardedisfrutandodelfrescodelabibliotecaycogióelautobúslanzaderadevueltaalosAOS.

Nollevabaniunminutodevueltaensuhabitacióncuandoalguienllamóalapuerta,unhombredesuedadmásomenos,vestidodecivilyllevandoencadamanounabotelladecervezaSanMiguel.

—Sonlasúltimasdelcubo,amigomío.Lanaturalezadelasonrisadelhombreleresultódesconcertante.—ASkipperlehacefaltaunacerveza.—¡Eh!—dijoSkip.—¡Quantico!Aceptóunabotellayseestrecharonlamano,Skipruborizándosealreconoceralotro,aunqueno

seacordabadesunombre.HabíanhechounprogramadecódigosdeveintiúndíasenQuanticojustodespuésde su instrucción en laGranja: nuncahabían sido amigos, pero estaba claroque ahora sealegrabandeverse.Sesentaronacharlarsobrenadaenparticular,yalcabodeunosminutosSkipsintióqueyahabíapasadoelmomentodepreguntarleasuamigocómosellamaba.

—¿Dóndetienestubasedeoperacionesahora?—lepreguntóalhombre—.¿TodavíaenLangley?—MetienenaparcadoenDC.EnelDepartamentodeEstado,eledificiograndedePennsylvania

Avenue.Perovoyrotando:Saigón,Manila,DC…¿Ytúqué?—Mevanatrasladar.ASaigón.—EnSaigóntedandetodo:compartescasa,sirvientes,esetipodeexistencia.Lárgatedeallíen

cuantotengaslaoportunidad.Uninfierno,cadafindesemana.Olamayoríadelosfinesdesemana.—Heoídoqueesunpaísprecioso.—Sorprendentemente precioso. Sales de una choza para echar unameada, te sacudes la última

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gota,levantaslavistay…Dios,notelopuedescreer,¿dedóndehasalido?—Comoesto,enotraspalabras.—Bastantemáspeligroso.Allísíqueteganaselsuplementoporriesgos.—Memuerodeganas.—EstásenOperaciones,¿meequivoco?—Sí—dijoSkip—.Oficialmente.PeroparecequetrabajoparaPlanes.—Bueno,yoestoyenPlanesperoparecequetrabajoparaEstado.—¿Quétetraealabase?—Medevuelvengratisalaguerraalasveintecerocero.Semeacabaeltiempo,hijo.Laúltima

oportunidadparabebermeunaSanMiguel.Ojalápudierallevarmeunbarrilconmigo.—¿VendenSanMiguelenbarriles?—Ahoraquelopienso,noestoyseguro.Perolavendenenbotellasenelclubdeoficiales.Vamos.—Voytodoguarro.¿Teveoallí?—¿Quieresqueespere?¿Oporquénovamosalaciudad?—Bueno—dijoSkip—,sitemarchasalasveintecerocero…—OpodemospasarnosporelClubdeMuchachos,averquéhacenloshijosdelosoficiales.—¿Qué?—dijoSkip.—Oye,esome recuerdaalgo…osea,hablandodehijosdeoficiales. ¿Túnoeresparientedel

coronelenpersona?—¿Quécoronel?—¿Noeresíntimodelcoronel?DelcoronelFrancisXavier.—Soyunadesuspersonasfavoritas,siestamoshablandodelmismotipo.—SolamentehayunCoronel.—Nolocreo.—YohiceelcursoesesuyodePsicológicas.Esunhombreconmensaje.—Tienevisión,escierto.—¿Tútambiénlohiciste?Seequivocódetítulo.«Recuerdosyteorías»seríamásapropiado.—Asíeselcoronel.—Haescritoalgunosdesuspensamientosenunartículoparalarevista.¿Lohasleído?—¿Enlarevista?¿TerefieresaStudies?—Lamisma.EstabanhablandodelórganointernodelaAgencia,StudiesinIntelligence.¿Lospensamientosdel

coronelenlarevista?¿Quédeciraaquello?Nada.Setragósucervezaysesecóelbigote.YahabíadejadoatráslafasepeludaKennedy.Ahoratodos

habíanvuelto a los cortes al rape, con laparte superior a cepillo, parademostrarquenoeran losBeatles.PeroSkiphabíaconservadosubigote.Yloteníafrondoso.

—¿Leesmucholarevista,Skip?—MepongoaldíacuandovengoaManila.Enelmediodelanadanolarecibimos.Yoestabaen

SanMarcos.—Ah,sí…lacasadeDelMonte.—¿Hasestadoalgunavezallí?—No.¿Nohasleídosuartículo?—Nomepuedocreerquehayapulidoalgolobastanteparapublicarlo.

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—Nohasalidopublicado.Esunborrador.—¿Ycómoesquetúlohasvisto?—Mepreguntabasitúlohabríasleídoenunaversiónprevia.—Tío,yonisiquierasabíaquesehabíapuestoaescribir.¿Cómolohasconseguidotú?¿Trabajas

enlarevista?—Oseaquenolohasvisto.AhoraSkipsintióqueseleparabaelcorazón.—No—dijo—.Yatelohedicho.—Bueno, voy a ser sincero contigo. El artículo es un poco desconcertante. Una explicación

posibleesque intenteserunasátira.Perosiestámandandounasátiraalórganode lacasa,esoyaresultadeporsídesconcertante.Ytambiénpreocupante,locualesdeporsídesconcertante.

—Yaveo—dijoSkip—.Mira,esobvioquemeacuerdodeti,peromeheolvidadodecómotellamas.

—Voss.—Rick,¿verdad?—C’estmoi.—Tucarameesfamiliar,pero…—Meestoyengordando.—Sitúlodices…—Mehecasado.Hemostenidounacriatura.Yheengordado.—¿Niñooniña?—Niña.Celeste.—Bonitonombre.—Tienedieciochomeses.—Esolohaceduro,¿eh?Lodeviajarytal.—Mealegrodeviajar.Soycomolaluna,voyyvengo.Parasertesincero,creoquenoaguantaría

eldíaadía.Lasmujeresylosniñosmedanmiedo.Nolosentiendo.Prefieroestarenotraparte.—Habíaestadosentadoenlacama.Ahoraselevantóysesentóenunodelosbaúles—.¿Ydequiénsonestascosasdeaquí?

—Sololasestoyentregando.—¿QuiénesW.F.Benét?—Supongoqueeldestinatario.—Otalvezelremitente—dijoVoss.—Laverdadesquenomesuenaelnombre.—¿Dequéeslainicial«W»?¿DeWilliam?—Niidea—dijoSkip.—¿Yquémedicesdela«F»?¿Cuálessunombrecompleto?—Rick…enesteasuntosolamentesoyuncorreociego.—¿Quieresecharunpulso?—dijoVoss.—Eh,no—dijoSkip.—Siechamosunpulso,¿sabesquiénvaaganar?Skipseencogiódehombros.—¿Teimporta?

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—Puesno—dijoSkip.—Amí tampoco—dijoVoss—.Nonecesitamosmúsculos.Ahora tenemosunejércitoprivado.

EsosBoinasVerdes son como tanques humanos. Sonmáquinas de lamuerte.Uno de ellos podríahacernospedazosa losdos,¿eh?Ytrabajanpara laAgencia.Bueno, loquequierodeciresquedeahora en adelante no vamos a dejar que los tipos duros se quiten el uniforme. No se jubilan delterreno,nosemetendetrásdeunescritorioyempiezanadirigirlascosas.EstonoeslaOficinadeServiciosEstratégicos.Aquellaguerrayaseacabó.

SkiphizochocarsubotellaconladeVoss.Lasdosestabanvacías.—Siyanoshubiéramosbebidounacajadeestas—dijo—,pensaríaqueestamosllevandoacabo

unasesióndetrolas.Sifueranlascuatrodelamadrugadayestuviéramospedo.—Peronoloestamos.—No.—Ya.—¿Cuándovamosaporesascervezas?—Bueno,¿quétepareceahoramismo?Losdosselevantaron.—Oh,mierda—dijoSkip—.Esperaunmomento.—¿Qué?—Semehaparadoelreloj—dijoSkip—.¿Quéhoraes?—Lasquinceveinte.—Mierda.Tengoquepresentaruninformerápidodentrodecuarentaminutos.Serámejorqueme

organice.—¿Yluegoqué?¿DirectoaSaigón?—Porloqueyosé,sí.—Probablementeteveréallí.—Muybien—dijoSkip—,yentoncesnospodemostomaresascervezas.¿QuébebenenSaigón?—CervezaTiger.Yluegovomitan.—Meparecebien—dijoSkip.Voss sequedómirandoel sueloy se concentró en levantar lamirada,preparándoseparadecir

algo.—Temarchas,pues—lerecordóSkip.Vosssepusodepie.—Otravezserá—dijo,ymientrasseestabamarchandoSkiplededicóunsaludomilitaramedias.Elcoronelsiemprehabíadicho:Cuandochoquesconlapared,dateunaduchaycámbiatederopa.Skiphizoambascosas,y luegose llevó la ropasuciaabajoa la lavanderíacon la intenciónde

viajarasunuevadestinacióncompletamentelimpio.Sepasómásdeunahorasentadoenunasilladeplástico entre el estruendode las lavadoras—escondido, esencialmente, eludiendo el escrutinio—,entreoleadascrecientesdeconfusiónyterror.Escapódelasmismasmomentáneamenteparadoblarsuropayfuearrastradonuevamenteaellas.Sesentómuyderechoensusilla,conlaespaldarectaylasmanosenelregazo.Recordóquesuvidanoeranada.Seconcentróenaquelpuntodelhorizonte,losólido,loquenocambiaba,lametaprimordial:laderrotadelcomunismo.Elpánicoremitió.

ProntoseencontródepiedelantedelosAOS,bajouncielooscuroperosinlluvia.Laslanzaderasllegabanarazóndecuatroporhora.Sesubióalapróximayviajóallímitequeestablecíalabasede

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«15MILLASPORHORA/24KILÓMETROSPORHORA»atravésdeaquellaciudaddeedificiosverdesconlostejadosidénticosdechapaondulada,sebajóenlaúltimaparadayafrentealascancelasyluegofue en taxi hasta el pueblo deÁngeles, una calle principal asfaltada y un enredo de callejones detierra,bares,burdelesychabolas.

—¿Legustaríaconoceraseñoritas?—lepreguntóeltaxista.—No,gracias.—Entonces,¿vaairalaferia?Sí,porquéno.Iríaalaferia,¿paraquéhabíaidoalpuebloalfinyalcabo?Dosacresdetierra

eran loúnicoquenecesitabaaquella feriaparaplantarsuscarpasmarronesmohosasconsogasdecáñamodeshilachadasy temblorosas, sumediadocenadeatracciones, susaltavocesqueemitían laemisora local de AM y sus murales grandilocuentes y descoloridos delante de cada espectáculo.Mientras pagaba al taxista, unos niños suplicantes lo rodearon y unos vendedores ambulantesfuriososlosecharon.Comprócacahuetesenvueltosenunapáginaderevista.LegustóelaspectodelasirenadeSuluqueaparecíaenunodelosmuralesyentróaverla.Eraelúnicocliente.Ellateníaelpelo largoynegro recogido con floresdeplástico.Suspechospequeños iban enfundados, obienagarrados, por la parte superior de un biquini. ¿De quématerial era la cola?No lo veía bien, dealgunaclasedetela.Nosemovíacomolacoladeunpez.Usandolosbrazos,ellasedabaimpulsohaciaunladoyhaciaelotrodentrodeuntanquedecristaldeunmetroveintedealtoporunosdosymediodelargo,colocadosobreunaplataformasituadaaunmetromásomenosporencimadelniveldelsuelo.Salíaaporaire,volvíaabajar,ibahaciaunladoyhaciaelotro,aunladoyalotro.Ahorasalióunavezmásalasuperficieycogióunatoallablancaquecolgabadelbordedeltanque,sesecólasmanos y la cara, cogió un paquete de cigarrillos y un encendedor que tenía junto a la toalla,encendióunMarlborohábilmenteconlosdedosmojados,fumóduranteunmomento,lehizogestosparaquesefuera,paraquesealejara,ylediolaespalda.Élsalióysedirigióaotratienda:losCincoEnanosdeBohol.¿DóndeestabaBohol?Enalgunapartedeaquellasislas,supuso,yalomiraríaenelmapa.Demomentosolohabíaconocidoaalgunosdesusciudadanos,loshombrecillosbarbudosyrisueños representados en un enorme estandarte desplegado por encima de la entrada, dos de loscuales estaban trabajando en sumina de oro con sus picos de puntas relucientes,mientras que losotrostresllevabanunacarretillacargadadepepitasresplandecientes:Franco,Carlo,Paulo,SantoyMarco, nombres extraños, hombresmágicos. Pero dentro no estaban aquellos hombres. En cincocunas de gran tamaño, los enanos yacían envueltos en pañales sucios, ciegos, espasmódicos,comatosos, con los nombres, edades y pesos descritos en sendas tarjetas. Entre diecisiete yveinticuatro años de edad. Catorce, quince, dieciocho kilos… No tenían barbas, sino largosfilamentos de vello adolescente nunca cortados. Sus brazos y piernas se retorcían, los ojos concatarataslestemblabanenlascaras…Lasmoscasseposabanenellos…Sandssaliódandotumbosyse subió a la montaña rusa, nada demasiado impresionante, la clase de armatoste que se podíadesmontar y llevar en camión de un pueblo a otro, y sin embargo lo que le faltaba en altura yprofundidadlocompensabaconvelocidadyfuerzadetorsión,ycadavezquelosvagonesbajabanatodavelocidadporunapendienteose lanzabancontraunacurva,cadavezque laestructuraenteradabaunbandazoounasacudida,lamuerteleparalizabalagarganta,porqueaver,¿quiénsupervisabaelmontaje,quiéncuidabadeaquellaatracción,quiénvelabaporsuseguridad?Nadie.Semascabalatragedia.Bienmareado,sebajódeallíysedetuvounavezmásdelantedelatiendadelasirena,laprisioneramojada.Seestabaponiendoelsol.Nochevieja.Durantetodalatardesehabíanoídofuegos

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artificialesesporádicos,yahoratodavíamás.Nosilbidosyexplosiones,sinounpetardeoperiférico,estallidosypistonazosqueveníandelejos.EnelpósterbienaltolasirenasonreíaynoteníacaradefumarMarlboro.Éltuvoelimpulsodevolveraentraryvejarsemástodavíaasímismo.

Cerca de él se detuvo un jeep de la fuerza aérea, con un soldado de aviación al volante. ElpasajeroeraVoss.Este se apeóy losdospermanecieronunmomento juntosdelantede la enormeilustracióndescolorida.

—¿Eraestatucita?—Sí.—¿Tuinforme?—Sí.—Sesentíaaterrado,llenodehilaridad—.¿Quieresentrar?—Laverdadesquevinehacedosdías.Entratú.—Yoyaheestadodentro—dijoSkipentonotriste.—Hablemosunpocomás.—Claro.Losdosamericanossesentaronalamesadelinóleodeunvendedorambulante,conunabotella

deSanMiguelcadauno.Conpintadeestarcompletamentefueradelugar.Vossllevabaunacamisaderaya fina, pantalones de sportmarrones y zapatos de cordonesmarrones. Parecía un vendedor debiblias.LomismolepasabaaSkip.

—Oseaqueestonoesunacoincidencia—dijoSkip.—Seguramenteentiendesquehevenidoconunpropósito.—Sí.Esloqueacabodedecir.—Hevenidoaespabilarte.—Nolohasconseguido.—Nopasanada—dijoVoss—.Soloconfíoenquemehayasescuchado.—Loúnicoqueheoídoesunmontóndetonteríasingratas.—¿Quésesuponequesignificaeso?—Mira,estoydeacuerdoenque lascosasevolucionan.Lascosasestáncambiando,somosuna

nuevageneración,pero…¿quétenéiscontralaviejaguardia?—Nadaenabsoluto.Ellosmanejanelcotarro.Peroelcoronelno,¿deacuerdo?Elcoronelesun

cotarroaparte.—¿Acasoloconoces?Apartedelcursoquehiciste.—Loconozco.Hetrabajadoparaél.—¿Enserio?—Todo el verano y el otoño pasados. El viejo F. X. Me secuestró. Y me puso a hacer

investigación.—¿Investigacióndequé?—De todo y de nada. Me llamaba su secretario. Creo que su idea era que si tenía que ser

prisioneroenLangley,porlomenosleconveníatenertambiénunprisionero,yasabes.Peroestoyendeudaconél.Desdeentoncesheascendidodosrangos.

—Uau.—Desdejunio.—Quérapidez.—Comounrelámpago.

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—¿Yélhahechoesoporti?—No,Skip.Nofueelcoronelquienmeconsiguióelascenso.Perodespuésdequeyoestuviera

conél,lagenteseempezóainteresar.—Bien.Maravilloso.—No,no,no.Noestáspillandoestolobastantedeprisa.—¿Elqué?Dímelo.—Lagenteseinteresópormíporquelagentesehaestadointeresandoporelcoronel.Aqueleraelmomentodequedarsequieto,denodelatarnada.—¿Interesando?—Ahoraloestáspillando.—Osea,cuandodicesqueera«prisionero»enLangley…—Ahoralopillas.Lo que tendría que haber preguntado a continuación era si el coronel se había metido en

problemasgraves,enesasdificultadesquedeterminantudestinoydestruyentucarrera.Loquepasaesqueentoncesacontinuaciónlehabríatocadopreguntarsielcoroneltodavíaestabametidoenlíos,yporúltimo:¿Quiénmástieneproblemas?¿Yo,porejemplo,tengoproblemas?

Demaneraquesetragótodaslaspreguntas.YahoraVosssededicóaescupirlas.—¿QuépasóenMindanaohacecatorcemeses?—Supongoquedebesdehabervistoelinforme.—Loleí.Lodescodifiquéyo.Estabasentadoalladomismodeltélexcuandollegópor«Solopara

tusojos».—Bueno,ysillegóporsoloparatusojos,¿porquélodescodificaste?—Soloparatusojosnoesningunaclasificaciónlegal,estoysegurodequelosabes.Estásacado

deJamesBond.—Bueno,aunasí…porcortesía.—¿Porcortesíaaquién?—Porcortesíaamí,yaldestinatario.—Miramostodoloquevadirigidoalcoronel.Oloquevienedelcoronel.—Entoncesyasabescómofueronlascosasallí.—Sí.Elcoronellacagó.—Esonoesloquedicemiinforme,Rick.Léelootravez.—¿Puedescontarmeporquéestádesperdiciandotiempoyrecursosvaliososenintentarlocalizar

imágenesdeunpartidosacadasdelasnoticias?—No,nopuedo.¿Unpartidodebéisbol?—Defútbolamericano.Unpartidodefútbolamericano.Intentóencargarunvuelotranspacífico

parallevarunaslatasdepelícula.¿Acasosecreequeeselpresidente?—Elcoroneltienesusrazonesparatodoloquehace.—Lerugíalasangre.Estabalistoparadarle

unbotellazoaVoss—.¿Quépartidodefútbolamericano?—NotreDamecontraMichiganState.Eldelmespasado.—Notengoniidea.—ElcoronelestáobteniendomásinformaciónsobreelpartidoNotreDame-Michiganquesobre

elenemigo.

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Vosssemiróelrelojdepulseraylehizounaseñalalsoldadodeaviación.—¿Leestásllevandotúesapelículadelpartido?—Skip.Skip.Nadielevaadarningunapelículadeningúnpartido.—Sepusodepieyleofreció

lamano.Contodalafirmezaquepudo,Skipselaestrechó—.Mira—dijoVoss,ymientrasbuscabalaspalabrasapropiadassusojosemitieroncompasiónenestadopuro—.Teveréenlaguerra.

Sujeepyaestabaenmarcha.Sevolvió.Sandssebebiódoscervezasmásycuandooscureciósealejópaseandodelaferiaycomióarroz

conpescadoenuncafé.Atravésdelumbralcontemplóunpequeñoespectáculoqueestabateniendolugarenlacalle,unjovenborrachoconunbrazoquemadoyvendadoencabestrillo,queapesardetodo fue capaz de encender una serie de petardos y tirarlos a los pies de los transeúntes, que sepusieron a saltar y a chillar.A las nueve de la noche, las explosiones festivas traqueteaban por laciudadentera.EldíadelaIndependenciaenSanMarcoslehabíaimpresionado,peroaquelloeramássalvaje y decididamente más peligroso, lleno de disparos de verdad y de enormes cadencias deestallidos, como si la noche entera estuviera siendo objeto de ataque. Tuvo la sensación de queencontraríamáspazenVietnamdelSur.Seadentróenelbarrio rojo—Ángelesconsistíaenpocomásqueeso—,enellimo,elhedorescabroso,bajolasmiradassedientas,inexpresivamentehumanasyboquiabiertasdelasmujeresqueloveíanpasarpordelantedelaschabolashúmedasdondeseoíaelmartilleo de la música rock and roll, tan calurosas y ricas en podredumbre como mausoleos devampiros.ElmisterioimpíodelanochedelSudesteAsiático:loamabacontantapasióncomoamabaAmérica,peroen secreto, conuna lujuriaoscura.Yadmitiópara símismosin evasivasqueno leimportaríanovolvernuncaacasa.

***

DesdedosdíasdespuésdeNavidad,JamesdejódellamarasusamigosydejódecogerleelteléfonoaStevie.Sepasaba losdíasmirandodibujosanimadosen televisiónconsuhermanodediezaños,Burris,participandotantocomopodíadelaserenidaddeunainfanciainconsciente.

EnNocheviejafueaunafiesta.AllíseencontróconStevie.Ellaestabaenfadadaylodejóenpaz.Se quedó en la oscuridad de los márgenes de la fiesta con Donna y el resto de sus amigas, lasanimadorassustitutasyfuturasaspirantesareinasdelapromoción,acurrucadadetrásdeunanubederesentimiento.Mejorasí.LaqueaélsiemprelehabíagustadoenrealidaderaAnneVandergress,quehabíallegadoalaEscuelaSecundariadePaloVerdeelmismoañoqueJamesyqueahoraestabadepie en la puerta de la cocina, preciosa y hablando conunpar de tipos a los que él no había vistonunca.

Bebióron.Eralaprimeravezqueloprobaba.—Aestolollamamosuntrescerodos—dijoalguien.Siteníaqueirseaqueloreventaraunmorterooalgoparecidoenalgunaparte,deseabanohaber

empezadoasalirnuncaconStevieDale.—Puesquédemonios.Eltrescerodosentramejorquelacerveza—admitió.—AhoramézclaloconCoca-Cola.EraAnneVandergresslaquehabíahablado.Eraunarubiacobrizaquesiemprellevabamaquillaje

bonito,yélnunca lehabíaentradoporque leparecíademasiado jovenypurayelevada,hastaqueduranteelúltimocursoquehabíaterminadoenelinstitutoseenteródequeellaestabasaliendocon

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unjugadordefútbolamericano,unestudiantedeúltimocurso,DanCordroy,yluegoconotro,conelamigodeCordroyWillWebb,yluegoconlamitaddelmalditoequipo,todosdeúltimoaño,yoyódecirqueseloestabahaciendocontodosycadaunodeellos.

—Eres jodidamente guapa, ¿lo sabes?—dijo él—. No te lo he dicho nunca. ¿Te lo he dichoalgunavez?

AunqueahoraaJamesleparecíaqueeraunpocomenosguapadeloquerecordaba,unpocomásgruesayanchadecara.Másadulta,peronodeunaformaagradable.Másbiendeunaformaqueaéllerecordabaalamedianaedad.

Hubountragoderonqueseleatascóenlagargantaycasileatragantó,peroluegolebajóbienydespuésdeaquellolagargantaseleinsensibilizó,hastaelpuntodequepodríahaberestadotragandoclavosocristalesobrasas.

Dejó atrás a toda prisa la hora siguiente como si esta fuera algo físico, como un pasillo. Loslabiosselevolvierondegomaylecayólababamientrasdecía.

—Noheestadotanborrachoenmivida.Lagenteparecíaestarrodeándolo,riendo,peronoestabaseguro.Lahabitaciónseinclinóhacia

unladoylaparedledioungolpeeneltrasero.Manosybrazosqueloagarrabanyloincorporabancomolostentáculosdeunmonstruo…

Llegóasucuerpoprocedentedealgúnlugaroscuro,yseencontródepiefuerasosteniendouncigarrilloenunamanoyunacopaenlaotra.

Donnasecerniósobreélcomouncocheaccidentadoqueselevinieraencima.Furiosacomoundemonio.

—¿Porquéhasdichoeso?¿Cómopuedeshablardeesamanera?Stevieestabamásatrásconlacabezainclinada,llorando,rodeadadechicasqueleacariciabanla

cabezaylequitabanlapenaagolpecitos.Rolloloayudóamantenerseerguidoeneljardín.Donnacaíacomounaviónenpicadosobreél,

eraimposiblequitárseladeencima.—Donna, Donna…—Rollo se estaba riendo, soltando resoplidos de burla, ladrando—. No te

puedeoír,Donna.Cortaelsermón.—Stevie estaba casi embarazada. ¿No te das cuenta de que estaba prácticamente embarazada?

¿Cómopuedesactuardeesaforma?—¿Casiembarazada?—dijoRollo—.¿Casi?JamesestabaderodillasabrazadoalaspiernasdeRollo.—Creíaqueestabaembarazada,¿vale,Rollo?Élnopuedetirarlacomosifuerauntrapolaúltima

nochequepasaaquíantesdeirseaVietnam.¿Vale,Rollo?—¡Vale!—¡Puesdíselo!—¡Vale! ¡Ya se lo digo! James—dijo Rollo—. Tienes que hablar con Stevie. Has herido sus

sentimientosatope,James.Pontedepie,pontedepie.SuspiernasloarrastraronhastaelsitiodondeStevieestabadepiejuntoaunhornodepiedrapara

barbacoas dentro del cual ardía un fuego. Dijo algo y Stevie lo besó, con su aliento baboso deadolescentebobalicona.

—Yestásfumandouncigarrillo—dijoella—.Ytúnisiquierafumas.—Yofumo.Siemprehefumado.Loquepasaesquetúnolosabías.

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—Túnofumas.—Síquefumo.Pasó algomás y Stevie desapareció y fue reemplazada por, o bien se convirtió en, su amiga

Donna.—Lehashechodañoporúltimavez,James.—Síquefumo—intentódecirél.Nopodíanicerrarlasmandíbulasnilevantarlabarbilladelpecho.Volvió a encontrarse en la cocina, dondeAnneVandergress ya no le parecía preciosa. Parecía

viejaygastada.Teníaelpelocrespo.Teníalacaraplanayredondaysudorosaysusonrisaparecíamuerta.Ellaseriojuntocontodoslosdemáscuandoélanuncióqueellaeraunaputa.

—Hetardadounpoco…peroeresunaputa.Unaputatotal—dijoenvozmuyalta—.Soloquieroqueteenteres,igualquesehaenteradotodoelmundo,dequeestáshechatodaunaputa,unaguarra.—Annesoltóuna risagrotesca.Teníaaspectodehaberestado tirandodeun tren toda lanoche.Lamente de él estaba atascada en un bucle y no paraba de decir—. Menuda puta… menuda puta…menudaputa…

Lotiraronalsueloyloregaronconunamanguera.Latierraseconvirtióenbarroasualrededoryélseacuclillósobreellodo,manoteando,intentandopermanecererguido.

No era tan distinto de ciertosmomentos de su instrucción básica. Los pies se le separaron degolpeycayódecaraycomióbarro,pensando:Muybien,muchachos,allávamos.

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1967

La tarde del 1 de enero de 1967, Nguyen Hao fue en coche al aeropuerto de Tan Sou Nhut encompañíadeJimmyStorm,unamigomuyíntimodelcoronel.JimmyStormcasisiempreibavestidode civil, aunqueHao lo había visto por primera vez un día en que estaba en cuclillas delante deldepartamento de Psicológicas de laCIA, haciendo una pausa del trabajo, fumando un cigarrillo yllevandoeluniformedelejércitoamericanoconlosdosgalonesdesargento.

Esatarde,elseñorJimmyllevabaesemismouniforme,ydurantetodoelcaminoalaeropuertoelseñorJimmy,oseaelsargentoStorm,fuesentadoconlaespaldamuyrectaysinquitarselagorraenelasientodeatrás,dondenuncaantessehabíasentado,ynodijonipalabra: talvezestabaunpoconervioso,pensóHao,pordarlelabienvenidaalreciénllegado.

Peroaquelsilenciopodíadeberseacualquiercosa.ElseñorJimmyStormeraunjovenextrañoycomplicado. Para cuando vieron a William Sands bajar la pasarela del DC-3 de Air America,agachandounpocolacabezaporelruidodelosreactoresyelataqueviolentodelvientohúmedo,elseñorJimmyyahabíarecuperadotodasulocuacidadysepusoahablarconSandsentonojovialydemasiadodeprisaparaqueHaolosiguiera.

Metieron dos baúles en elmaletero delChevrolet negro y el tercero tuvo que ir en el asientotraserojuntoconelreciénllegado,quepidióasusanfitrionesquelollamaranSkip.

—Vale, vale, vale—acordó el señor Storm, y a continuación discrepó—: Pero déjeme que lollameSkipper.Skipesdemasiadocorto.Pasavolando.

AhoraelseñorJimmyibasentadoenelasientodedelanteconHao.—SeñorSkip—dijoHao—,mealegradarlelabienvenida.Sutíoconoceamisobrino.Yahora

yoconozcoalsobrinodesutío.—Tengoalgoparausted.El recién llegado le entregóuncartónde cigarrillos.Por la caja casi parecíanMarlboro, pero

erandelosotros.Winston.—Muchasgracias,señorSkip—dijoHao.Mientras esperaban en un semáforo se les acercó una bicicleta por la derecha. Jimmy bajó la

ventanilla a toda prisa y dijo: «Diddymao!».Luego se puso a hacer gestos y el ciclista viró paraalejarse.

ElseñorSkipdijoenvietnamita:—¿Puedohablarleenvietnamita,señorHao?—Esmejor—contestóenelmismoidiomaHao—.Yohabloelinglésdeunniño.—HoyesAñoNuevo—dijoelseñorSkip—.Yprontocelebraréotro,elTetdeustedes.—Supronunciaciónesbastantebuena.—Gracias.—¿HavenidoustedmuchasvecesaVietnam?—No.Nunca.—Quésorprendente—dijoHao.—Hehechouncursointensivo—dijoelseñorSkip,diciendolaspalabras«cursointensivo»en

inglés.—Oseaqueahíestán,¿eh?Lostrescientoscincuentakilos—dijoeljovenseñorJimmy,yestiró

elbrazohaciaelasientodeatrásparacolocarlamanosobreelbaúl—.Lasclavesdelreinodelduque

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deEarl.AHao lo asaltó el convencimiento de que, pese a estar conociéndolo por primera vez, Jimmy

StormestabaempantanadoenunodioprofundohaciaSkipSands.Skip,porsuparte,parecíarecelardeStormyvacilóunpocoantesdedecir:

—Sonmásbiencienkilos.Elsolsepusoylosvientresdelasnubessoltarondestellosrojos.EntraronenSaigónypasaron

porunacalledecasasdonde losniños jugabanasaltar lacuerdabajo la luzdelatardecer,yasusoídosllegaronfragmentosdeloscantosmágicosdelossaltadores.Luegollegaronalascallesdelossoldadosamericanos, lasavenidasdecomerciosmaltrechos,pasaron frenteapuertasqueparecíanbocas,cadaunadelascualesemitíasupropiamúsica,susvocesysuhedor,acontinuacióncruzaronelrío,entraronenloqueeraoficialmentelaprovinciadeGiaDinhybajaronporlacalleChiLanghastalamansióndeOperacionesPsicológicasdelaCIA,dondenadiesealojabamuchotiempo,salvoJimmyStormensudesordenadodormitorioconsuaireacondicionadoronroneante,situadoalladodelsalónamuebladoconmesasderatán,unsofáconcojinesdekapok,libreríascasivacías,unabarradebardebambú—sintaburetes—yuncuadroenmarcadoenlapareddecoloramarillopálidoquerepresentabaaunoscaballosenunestablo.

El Chevrolet negro se quedó en la mansión. Hao ayudó a los americanos a descargarlo—elmacuto del señor Skip y su cesta de mimbre y los tres baúles—, después se despidió y regresóandandoacasaporlaacerarotaquebordeabauncanaldeaguasresiduales,avanzandoconayudadeunalinterna.

Vivíanencimaydetrásdeldifuntotallerdelafamilia,él,sumujerKimydevezencuandoalgúnpariente.EltallereraunlegadodelafamiliadeHao;losparientesdeladeKim.Peseaqueyahacíauna hora que era oscuro cuando entró por el callejón,Hao oyó el susurro de las sandalias de sumujerenelpatiodecementodelapartedeatrásdondeellaseestabaentreteniendoconlasplantasfrutalesquecultivabaenmaceterosdegrantamaño.Haoencendiólaluzfluorescentedeltechodelasaladeestarparahacerlaentrar.

Élqueríahablar.Ledabala impresióndequeelhechodequeelcoronel lehubierapedidoquefuera a buscar a un pariente suyo recién llegado había solidificado una alianza y le había hechocruzarunríoensuvida,quetambiéneraladesumujer.Ellateníaderechoaestaralcorrientedesuscircunstancias.

Sesentóensusillóndelantedesuventiladoreléctricodeplásticorojo.EnseguidaentróKim,unamujerdemedianaedad,conlaspuntasdelospiesdesviadashaciafuera,uncuerpoflacuchoalquelehabían echado unos puñados de grasa, brazos delgados y fuertes, piernas patizambas y barrigaprominente.Sucarasehabíavueltounpococomolascarasdelasranasdepiedradelosjardines,yunpocotambiéncomoladeBuda:mofletudaydeojossaltones.Ellasesentójadeandoydijo:

—Hoymeencuentrobien.—Esunmilagro—dijoél,porquesabíaqueaellalegustabausaraquellostérminos.—Hetomadoelremedioparaelasmadelviejocuento.—Uf—dijoél—.Menudasideastienes.—Perohafuncionado.Meencuentrobien.—Déjameque te consiga un chequeo con unmédico americano.Estoy seguro de que el señor

coronellopuedearreglar.—Déjameenpaz—dijoella,comosiempre—.Yosoylaúnicaquevaallenarmitumba.

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EllaseencargabadelascosasconeficaciayeraunabuenaamigaparaHao.Élleteníacariñoyledeseabaunalargavida.Peroellanoteníabuenasalud.

Permanecieron sentados juntosmientras el ventilador rojo ronroneaba y el tablero de lamesavibrababajoelmismo.Kimcerrólosojosconfuerzayrespiróporlanariz,queeraloquelehabíarecomendadootrodeaquellosmédicos.

Habíasidounaenfermedadmuylarga,complicadaprobablementepor lapérdidadesusobrinohacíaunosaños…¿cuatroaños?EllaregresabaamenudoaltemadelsuicidiodeThu.Haosedabacuentadequeellaapartabalavista,entristecida,cadavezquealgo,talvezúnicamenteelsonidodesupropiavoz, laarrastrabadevueltaa ladiscusiónencontrade suvoluntad:¿Creesquepudohabersido un accidente? ¿Te parece posible que pudiera haber estado simplemente experimentando,haciéndosepreguntas,mirando,oliendoelcombustible,nosé?YHaodecía:Yotampocolosé.PeroThutuvoquetomarsemuchasmolestiasparallegaraconseguir lagasolina.NomecaebienBuda,decíaella.Haymuchosdioses,decíaella,peroconBudalascosassondemasiadosimples,miraatualrededor,¿acasolascosasparecensimples?No,no.

Ycomoafindehablarconellaélteníaqueentrarensumundo,lepreguntó:—¿Quétedicentussueñosúltimamente?—Quemirespiraciónvaaseguirlimpiayquemiprimasevaacasarpronto.—¿Prima?¿Quéprima?—¡Lang! ¿Acaso tengo que llevarte al cuarto de al lado y enseñarte a Lang durmiendo en su

catre?—Mehabíaolvidadodecuáleralaqueseestabaalojandoconnosotros.—¡Haydos!LangyNhu.—Eshoradehablardenuestrasituación.—Habla.—Tedas cuenta de que el coronel tiene un proyecto cerca deCuChi, donde lamontaña de la

BuenaSuerte,¿verdad?—Ayudarloespeligroso.¿Puedesesquivaralviento?—Ya lo estoy ayudando. He hablado con varios caciques, he señalado la ubicación de varias

entradasdetúnelesensusmapas.—Sitomaspartido,¿quénosvaapasar?—Ya he tomado partido. Creo que hemos de tener en cuenta lo que va a pasar cuando se

reunifiqueelpaís.Creoquetendremosqueirnos.—¿Irnos?—Irnosdelpaís.Emigrar.Irnosaotropaís.—¡Peroesonolopodemoshacer!—¿Quénosloimpide?Yanoquedanadieviviendoencasa.—Noquedanadieporquetúnotienestrabajoparaellos.¿Porquévendistelosotrosdostalleres

cuandoesteyaestabacerrado?Además,estáMinh.—Minhtienesuspropiasoportunidadesyyaseapañarácomolevayamejor.—Quieresdecirquetardeotempranolomatarán.—Mujer,porfavor,eshoradepensarenestascuestionesconcuidado.Amenudo,cuandohablabandecosasqueaellalapreocupaban,sumujerseponíadepieeibade

unladoparaotrosindarsecuenta.Agarrabaloscojinesyloszarandeabaentrelasmanosylesdaba

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palmadasparaquitarleselpolvo,obienusabaunaescobaquelellegabaalacinturapararemoverlapelusadelsuelodemadera.LamadredeHaohabíausadounaescobadeaquellas.Igualquesuabuela.Habíahabidounaentodaslascasasenlasquerecordabahaberentrado.

—Heconocidoalsobrinodelcoronel.SellamaSkip.Invitémosloacenar.—Noesbuenoteneramericanosencasa.—Sino tomamospartido, ningúnbando confiará ennosotros.Seremos la genteque está en el

medio.Aesaclasedegentesiempre losacabanllevandoaalgúncampoderefugiados,noimportaquébandogane.

—Oseaquetehasunidoalosamericanos.Silosamericanosganan,nospodremosquedar.—No.Losamericanosnovanaganar.Noestánluchandoporsutierranatal.Soloquierenhacerel

bien.Yparahacerelbien,solotienenquelucharunatemporadayluegomarcharse.—¡Hao!¿Porquéayudarlosentonces?—Nopuedenganar,perosípuedenmostrarquesonamigosdesusamigos.Yyocreoqueson

gentedehonoryqueloharán.—PerotútienesamigosenelVietminh.—AhorasellamaelVietcong.—Trung.TrungThanesamigotuyo.—Noquierohablar delVietcong—dijoHao—.Los comunistas solo creen en el futuro.En su

nombrelovanadestruirtodo,vanallenarelfuturodenada.Quierohablardelosamericanos.—Habla.Notelopuedoimpedir.—Siayudoaestosamericanos,notendremosqueserrefugiados,nosayudaránamarcharnos.Tal

vezaalgúnsitiocomoSingapur.Creoqueesfactible.Singapuresun lugarmuyinternacional.Nonosharánsentirnoscomomarginados.

—¿HashabladoconellosdeSingapur?—Hablaré cuando llegue el momento oportuno. También hay otros lugares. Manila, tal vez

Yakarta,talvezKualaLumpur.Cualquieracontaldenotenerquevivirenuncampoderefugiados.—RezaréparaquelosamericanosdestruyanalVietminh.—Yonotengoningunaesperanza,Kim.Hayunviejorefrán:elyunquesobrevivealmartillo.—¿Y cuál somos nosotros? No somos ninguno de los dos. Somos lo que queda aplastado en

medio.—Yotro:todoslosgallospeleanmejorensumuladar.—¡Ja!Yhayotrorefrántodavíamásantiguo:ungalloesunpollo,peroloshombressoncomo

unhatajodegallinas.—Eserefránnuncaloheoído.Ellariocongozo,dirigiéndosealacocina.—Yalosé—dijoHaolevantandolavozparaqueellalooyera—.Eresmásfelizcuandoteburlas

detumarido.Perolereconfortóoírlareír,algomuypocofrecuentedesdelamuertedeThu.Sumujersiempre

había considerado a Thu un regalo del cielo. Sus dos sobrinos habían sido hijos de su hermanamuerta.Eranlosúnicosparientesquetenía.YahorasololequedabaMinh.

***

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En la cocina,NguyenKimencendió el fogónPrimusdonde estaba el hervidor del aguadel té. Sedetuvounmomentofrentealestanteydestapó,unoporuno,todossusfrasquitosdefraganciasparainhalar de cada uno de ellos. El tratamiento para los pulmones le ocupaba mucho tiempo.Últimamente la intrigaba enparticular el romero.Queríamezclarlo con el extractodepachuli, nocomo remedio sino solo por el aroma, pero no encontraba la manera. Al mezclarlos, parecíanproducirunatercerafragancia,nodeltodoagradable.

Suremedioparaelasmalehabíasidoentregadoenunsueño.Estonoselohabíacontadoasumarido.TambiénusabaunjarabedeunherbolariochinodeldistritodeChoLon.Elherbolarionolehabíaqueridodecirquéera,peroellahabíaoídodecirqueusabanlacarneylapieldellagartogecko.Haonoaprobabaaquellascosas.

Kimveíaasumaridocomounjugadoryunsoñador.Élloshabíasorprendidoatodosvendiendodosdesustiendasdetelasyarrendándolelaterceraaunhombrequenohabíatardadoenperderelnegocio.Ahorasusparientesacampabanentresusestantesdesnudos.Enlugardeponersudineroenalgunaotracosa,Haolousabaparacubrirsusnecesidadesdiariasyencambiolesentregabatodosutiempoysualmamismaaaquellosamericanos.¿Acasocreíaélqueaquellonoeraevidente?¿Acasocreíaqueellanosedabacuenta?

AKimlegustabatenerencasaalasdoschicas,LangyNhu,ellaslaayudaban,eranprimasdesupuebloaquienesnosepodíallamarsirvientas.Noteníaformadedecirlesqueenciertassituacioneslegustaríaquesecomportarancomosirvientas.Peronada iríabienamenosqueellasentendieranesto,anoserquelainútildesumadre,latíadeella,leshubieradichoque…

Apartólamentedepensamientospocogenerosos.Ella creíaquecuando la sangreexhalabaunaenfermedad se llevabaconsigociertas impurezas

espirituales,yentonceselconvalecienteexperimentabaunestadofugazdepureza.Enunestadoasí,creíaella,eraposiblepensarconclaridad.Hastaquizáconinspiración.Hao no discutía de finanzas con ella, salvo para decirle que si no llevaban a cabo compras

importantes podrían continuar como siempre.Y a ella ya le iba bien. Jugador y soñador, sí, perotambién era unhombre fiable, y ella lo respetaba.El padre de sumarido, que se dedicaba a bajarproductos locales por el río Saigón para comerciar con los franceses, había levantado un buennegocio.Hao,encambio,maldecidoconunmatrimoniosinhijos,vástagodeunaramamarchitadelafamilia…Haohabíasupervisadosulentadestrucción.Ellanoleibaapedirquesequedaranallí.Siélqueríahuir,huirían.¿Yparaquéibanallorarporelmañana?Talvezestaríanmuertosmuchoantesdetenerquearrancarsusraíces.

Ellallevólateteraydostazasadondeélestabasentadoconlasmanossobrelosbrazosdelsillón,conlosojoscerrados,meditandoalairedesuventiladoreléctrico.

Tomóasientoysirviótéparalosdos.—Necesitoquemehagasunjuramento—dijo.—Dime.—Quieroquemeprometasque,paseloquepase,teharáscargodeMinh.—Teloprometo.—¡Demasiadodeprisa!—No.Entiéndeme,mujer: cuandodigoqueMinh tiene suspropiasoportunidades,quierodecir

que ya está progresando. Ya no es piloto de aviones, ya lo sabes. Ahora pilota helicópteros detransporte americanos: solamente de transporte y solamente para el coronel.Ya está a salvo.Y el

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señorcoronelyyoloseguiremosmanteniendoasalvo.Óyemeotravez,mujer:loprometo.—Yunacosamás.—¿Cuántasmás?—Soloesto:sinosmarchamos,¿volveremosalgunavez?—Siesposible,sí.—Prométemelo.—Tehagoelsiguientejuramento:siesposible,regresaremosacasa.—Aunqueregresemosenformadecenizas.

***

OíraKimhablarabiertamentedesuspreocupacioneslecausósorpresa.Ellanuncahabíadichonadaparecido,siempresecuidabadeescondersusmejoresesperanzasdelescrutiniodelospoderes,delaasambleaindefinidadesusdiosesinnumerables.

La conversación lo llenó de emoción. Su mujer no solo estaba tomando en consideración laopcióndemarcharse,sinoqueestabanegociandolostérminos,estaballegandoaunacuerdo,comosehacecon lascosas inevitables.Fueronalpisodearriba,ypeseal calor,que siempredurabaunpocomásenlapartealtadelacasa,éllaabrazóylatuvoensusbrazoshastaquesequedódormida.Guerra,guerraymásguerra,comounaseriedetifonesqueatacabansusvidas,yahora,másalládetodo,unpicodistantedeseguridad,unlugarhaciaelqueviajar.YKimempezóarespirarensilencio,talcomolehabíaasegurado,sinresollar,porlomenosaquellanoche.

Él se trasladó a su cama, dejando su ropa y sus sandalias en el suelo de al lado de la telamosquitera: sus sandaliasdeplástico,encuyoempeinedecíaen inglés:«Made in Japan».Lasaltasmurallasqueseparabanlasdistintasculturasseestabandisolviendo.Derrumbándosecomosifuerandebarro.ÉlyKimpodíaniracualquierparte.Malaisia.Singapur.HongKong.Serioalpensarquepodíasalirahoraalacalleycomentarleaalguien:«Japónesposible».

Kimlodespertóenplenanoche.Élmirólasagujasderadiodelreloj.Launamenoscuarto.—¿Quépasa?—Losperrosestánladrandoenelcallejón—dijoella.—Duérmete.Yoescuchounrato.Élpermaneciótumbadosinmoversemientrasellasedormía,contemplandolabrasadiminutadel

inciensoinsecticidaqueardíaenlacómodadelotroladodelahabitación.Sehicieron las trespasadas.OyóaTrungenel callejón—por supuestoqueeraTrung,¿quién

másibaaser?—,imitandoeltrinodeunlagartogecko.EralaprimeravezqueTrungllegabatantarde.Perounhombrecautelosointroducevariaciones

ensushábitos.Haoextendióelbrazo,apartólatelamosquiteraysacólospiesafuera.Sellevólospantalones,la

camisaylassandaliasjaponesashastaloaltodelaescalerayallísevistióysequedódepieaoscurassinoírnada,probandoelsabordesupropiarespiración.Empezóabajartanensilenciocomopudo.Las primas dormían justo debajo de sus pies, en la tienda cuyo techo inclinado conformaba laescalera.Nohabía formademarcharseensilencio,cadapasosehacíanotar.Alpiede laescalera,esperóhastaestarsegurodequenohabíadespertadoalasdoschicas.

Entró en la cocina, fue a laventanadedetrásdel fogóndegasygiró el pestillo.Encuanto la

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abrióoyóunpequeñocarraspeoalotrolado.—¿Trung?—Buenosdías.—Buenosdías.—Sientomolestarte.—Notepuedoofrecernadacaliente.¿Quieresunvasodeagua?—Graciasportuamabilidad,peronotengosed.—Ahorasalgo.Salió por la puerta de la cocina al patio diminuto donde Trung estaba pegado a la pared y a

oscuras.—Tengoloscigarrillosarriba—dijoHao.—Nomeparecebuenaideaquefumemos.Nospuedenver.Losdoshombresseacuclillaronelunojuntoalotro,pegadosalapareddedebajodelaventana

delacocina.—Teestásarriesgandoalveniralaciudad—dijoHao.—Ahoracualquierlugarsuponeunriesgo.Hacesolounpardeañospodíaviajarporunazona

bastanteamplia.AhorasomosfugitivosencualquierpartedelSur.—Ycuandovienesamicasa,losquecorremosriesgosomoslosdos.—Yodiríaquemásyoquetú.—Teestoyprotegiendo,TrungThan.Tedoymipalabra.—Tecreo.Peroesmejorponerseenlopeor.—Trung,entiendocompletamentequetetienesquesentirprotegidoacadapasoquedamos.—Noteadelantesaloshechos.Todavíanoestoydeacuerdoenqueestemosdandopasos.—Cadareuniónquehemostenidonoshallevadounpocomáslejos,¿noteparece?—Noshaacercadoaunentendimiento,quizá.Peronohemosdadoningúnpasoensí.—¿Estásdispuestoacambiareso?—No.Unaestratagema,enopinióndeHao,ynounaverdaderanegativa.—Antesdequevayamosmáslejos—dijoTrung—,tengoqueasegurarmedequesemeentiende.—Dime,porfavor.Teescucho.—Tardamos tres días en ir alNorte enunbarco ruso.Eso fue en el cincuentay cuatro.Ynos

dijeronquevolveríamosaunpaísreunificadoalcabodedosaños.—Continúa.—SeisañosdespuéstardéoncesemanasenvolverporelcaminodeHo,yporelcaminoestuvea

puntodemorircienveces.—Teescucho—dijoHao.—Enelsesentaycuatromedicuentadequellevabadiezañosesperandoparavolveracasa.Y

esoqueparaentoncesyallevabacuatroañosenelSur.—Entodosesosnúmerosoigolaacumulacióndelresentimiento.Estásinsatisfecho—dijoHao.—Heestadoviviendounacontradicción.Ynosevaasolucionar.—Yaveo.—Hesidouncobarde.Tengoqueresolverestoyomismo.—Estoyaquíparaayudartedelamaneraenquemeseaposible.

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—Yalosé—dijoTrung—.Pero¿quéquierestúdeesto?—Quieroayudaraunviejoamigo.—Tenemos que hablar con sinceridad. Dices que quieres que me sienta seguro y luego me

mientes.Dilaverdad:¿quéquierestúdeestasituación?—Quesobrevivamifamilia.—Bien.—¿Yquéquierestú?—dijoHao.—Quesobrevivalaverdad.¿Ahoraqué?¿Filosofía?—¿Cómopuedelaverdadestaramenazada?—dijoHao—.Eslaverdad.—Quieroquelaverdadsobrevivadentrodemí.Haopensó:Soyunhombredenegocios.Amíháblamedebeneficiosypérdidas.Pero loúnico

quedijofue:—Estoyintentandoentender.—Nocreoquelaspalabraspuedanayudarmemásaexplicarloqueestoyhaciendo.Soloquiero

que entiendas que nada me obliga. No estoy en apuros. No me hace falta dinero. Solo necesitoacercarmealaverdad.

Haonolecreyó.Estabatraicionandoasuscamaradas,¿quémotivopodíahaberparaaquello?Lafilosofíano.

En cuclillas al lado deHao,Trung echó la cabeza hacia atrás, la apoyó en la pared y suspiró.Parecióqueestabaapuntodedespedirse.

—Muybien—dijoencambio—.Fumemosunpitillojuntos.HaosubiólaescaleraconsigiloyencontrósuscigarrillosysuencendedoramericanoZippo.En

el rellano de arriba encendió dos y los llevó abajo, preguntándose si el Monje seguiría allíesperando.Yallíestaba.Muybien.Aquellanocheibanadarpasosimportantes.

—Quiereconocerte—dijoHao.—Quieredemasiado.—Estádispuestoaprotegerte.—Mientrasélnomepuedaidentificar,nonecesitoquemeproteja.—Loquequiereesprotegertedelossuyos.Desubando,nodeltuyo.—Seréyoelquesepreocupeporambosbandos.Fumaron,losdosconlasmanosahuecadasentornoalabrasa,yHaopensó:Nisiquierapuedo

encenderleuncigarrilloamiamigo,nopuedesobreviviraunaluzensucara.Haceañosquenoleveolosojos.

—Trung,parapoderiradondetúvasnecesitasunprotector,yeseprotectorhadeconfiarenti.—Todavíanoeshora.Suamigodesprendiólabrasadesucigarrilloyseguardólacolillaenelbolsillodelacamisa.—Hacetresaños—dijoHao—,pocoantesdequetepusierasencontactoconmigootravez,mi

sobrinosequemóvivodetrásdeltemplodelaNuevaEstrella.—Estoyalcorriente.—¿Esesoloqueestáshaciendotútambién?¿Destruirteatimismo?En qué hombre tan lento y reflexivo se había convertido elMonje. Siempre había tenido una

sinceridad empecinada, pero esto era más profundo. Sus silencios eran búsquedas. Resultaban

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inspiradores.—Sehadichounamentira.Yolahedicho.Voyadejarquelaverdadmereclame.Ysinopuedo

sobreviviraeseproceso,puesmuybien.—Tenemosqueexpresarunmotivomásinteligible.—No.Laverdad.Detodasmanerasvanadarporsentadoqueestoymintiendo.—Ganarselaconfianzacuestatiempo.Vananecesitaralgo.¿Puedesdarmealgo?—Estaveztediréalgoqueesprobablequeyasepan.Lapróximavezunpocomás.—Ah.Vamosacruzarperonovamosasaltar.—Los que regresan del Norte dicen que se acerca una gran incursión. No enseguida.

ProbablementesobreelpróximoTet.—Noheoídonadaalrespecto.—Tucoronelsí.Seguroquehaoídorumores.Peroyotedigoquenoesningúnrumor.Todoel

mundolosiente.Seacerca.—Élquerráinterrogarte.Duranteunoscuantosdías.Eslohabitual.—Nometomesporidiota.—Perdóname.—Soyyoquiencontrolaelproceso.Tengoqueseryo.—Comotúdigas.—Necesitotiempoantesdedarlealgoconcreto,algoquepuedaconfirmar.—Muybien.—Necesitotiempo.Noestoylistoparacruzar.

***

Los gallos de las casas vecinas cantaron por tercera vez. Trung tenía apenas la primera luz delamanecerparasalirdelvecindariodeHao:árbolesfrutales,patiosdetierra,casasdemadera,lucesfluorescentes encendidas en las cocinas de los más madrugadores, una zanja de aguas residualesserpenteandoporentrelospatios.Leenvidiabaasuamigoaquellapaztansimple.

Cuandollegóalacallesedetuvoparaencenderlacolilladesucigarrilloycontemplaraunparderepartidoresdepanadería,quepasabandeslizándoseensilencioensusbicicletasconelpandelamañana.

SeacordódehabercaminadocogidodelbrazoconHaoaunahoracomoaquellaenununiversocompletamente distinto: tambaleantes y salvajes, dos chavales demasiado borrachos de coñac dearrozrobadoparaimportarlescómoloscastigaríasupatrón.Recordóconexactitudeltamañoyelcolordelalunadeaquellanocheylaafabilidadsinlímitesdelmundojoven,ysusvocescantandounaviejacanción:«Ayerteseguíaporlacalle…Hoyelijounaflorparatutumba…».

***

A la hora del almuerzo del 2 de enero, el primer día completo que pasaba en el país, SkipSandsestabaesperandoasutíoenelClubNautiquejuntoalríoSaigón.Laorillaopuestaestabaabarrotadade juncos y sampanes y chabolas, pero sobre el aguamarrón apenas había nada que semoviera.

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Examinó el menú, ya del todo desganado, jugó con sus cubiertos y se dedicó a escuchar unaestridente mezcolanza de trinos de pájaros, algunos de una musicalidad casi sentimental y otrosfuriosos.Elsudorlegoteabaporelespinazo.Sumiradaseposóenunclientedelamesadeallado,unhombreasiáticoqueteníaunbultonegroincomprensiblementegrandequeledescendíadelcuerocabelludoylecubríalanuca.Delantedeaquelhombrehabíasentadaunamujerqueteníaunmonoenel regazo. La mujer tenía el ceño fruncido, el mono no le daba ningún regocijo y el menú laentristecía.

Una única explosión muy fuerte—¿mortero?, ¿cohete?, ¿ruptura de la barrera del sonido?—causógranconsternaciónentrelospresentes.Elmonodiounasacudidahastaellímitedesucorreaybailó de un lado a otro bajo la mesa. Varios clientes se pusieron de pie. Las mesas quedaron ensilencioyloscamarerossecongregaronenlabarandillaparamirarríoarribaendirecciónalcentrodelaciudad.Alguienserio,otroshablaronyloscubiertostintinearondenuevocontralaporcelana,lascosasvolvieronasusitio.

ElcoronelSandsestabaentrandoenlaterrazaeneseprecisomomentoyledijoaSkip:—Hijo,siéntate.ElcoronelhabíavenidoenhelicópterodesdelamontañadelaBuenaSuerte,oesoteníaentendido

Sands.Teníasalpicadurasdebarrorojoenlasbotasdecombatedelonayenlospuños,perollevabaropadecalleysuaspectoeraalarmantementeinformal,comosiloúnicoqueleinteresarafueranelpaisajelocalyelgolf.Yateníauncombinadodecolorámbarenlamano.

Sandssesentódelantedeél.—¿Vatodobien?Tehanalojadoenelcuartel.—Sí.—¿Cuándollegaste?—Anoche.—¿Hasvistoaalguiendelaembajada?—Todavíano.—¿Quéhayhoyparacomer?—Coronel,déjemepreguntarledeentradaalgosobreSanMarcos.—¿Antesdecomer?—Necesitoaclararalgo.—Porsupuesto.—¿Leestabausteddandoórdenesalmayor?—¿Almayor?—AAguinaldo.Almayor.Laúltimavezquenosvimos.—Ah,sí.EnlacasadeDelMonte.SanCarlos.—SanMarcos.—Ah,sí.—AAguinaldo.Alfilipino.—Sí.Elfilipino.Puesno.Noteníaningúnfilipinoamicargo.—¿Quémedicedelalemán?¿Eradeusted?—EslaSecciónPolíticadeManilalaquecontrolaatodoelmundo.YonosoylaSecciónPolítica.

Nosoymásqueunperroenfermoalquenotienenvalorparadisparar.—Muybien.Quizáserámejorquenoinsista.

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—No,no.Hasempezado,oseaquenolodejes.¿Quéproblemahay?—Talvezestoymetiendolapata.—Acudeamí.Trabajamosjuntos.Resolvámoslo.—Vale.Entonces,¿quépasaconCarignan?—¿Quién?—Carignan,señor.ElsacerdotedeMindanao.Notóquesutíoentendíaporfinqueestabahablandoenserio.—Ah, sí —dijo el coronel—. El padre Carignan. El colaborador. Alguien lo alivió de su

sufrimiento.—¿Quéalguien?—Sinorecuerdomal,aquellaoperaciónseoriginóenelmandodelejércitofilipino.Esoeslo

queentendimosdelinforme.—El informe lo escribí yo. Fui en burro hasta la subestación de Voice of America de las

inmediacionesdeCarmenymandéuninformeencódigoaManilaparaqueseloreenviaranausted.Ydelejércitolocalsolamentehablédepasada,apenaslosmencioné.

—Tengo entendido que fue una operación del ejército filipino. Y también creo que la dirigiónuestroamigoEddieAguinaldo.Y tenemosrazonesdesobraparacreerqueel talCarignanestabainvolucradoenelenvíodearmasalosgruposguerrillerosmusulmanesdeMindanaoytambiénentrelosmismos.

—Alsacerdotelomatóundardo.Unsumpit,lollaman.—Esunarmanativa.—ElúnicoquehevistoenmividafueenmanosdeaquelalemánenlacasadeDelMonte.—Yaveo.—Ustednoledabaórdenesalalemán.—Yatehedichoqueno.—Conesomebasta.—Nomeimportasitebastaono.—Váyasealamierda,señor.—Yaveo.—Mientraselcoronelpensabaenunaréplicaysededicabaapasarundedo,undedo

tembloroso,porelbordedesuvaso,Skipsedesanimó.Habíaacorazadosualmaparaaquelasalto.Peronohabíaesperadoimpactarde lleno—.Bueno—dijoelcoronel—.Meestoyrepitiendo,pero¿quéproblemahay?

—Soloestoypreocupado—lesalióaSands.Elcoronelnorespondiódeinmediato.ASkipselehabíaacabadolamunición.¿Porquénosele

habíaocurridoquepodíahacerdañoaaquelgigante?Quépocosabíadeaquelloshombresmayores:¿Porquénotengopadre?

—Mira—dijoelcoronel—.Estascosasnopasancasinunca,peroavecespasan.Unnombresalemencionadopormás de una fuente, alguien se formauna idea, alguien emite un informe, alguienquiereunaaventura,yestoúltimoloentiendesbien,¿no?,yalcabodepocoyalotienes.Elhechodequehayaspresenciadoesaclasedecagadatevaasuponerunaexperienciavaliosísima,Skip.

—Yodiríaquefuimásqueunsimpletestigo.—Loquequierodeciresqueyaveselpoderdelabestiaqueestamoscabalgando.Tencuidado

concómo la azuzas.—Sucaradebulldogpareciódelataruna tristeza especial.Dioun sorboa su

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copa—.¿Misarchivosestánasalvo?—Sí,señor,loestán.—¿QuéteparecióMonterrey?—Increíblementehermoso.—Pídemeunperritocalienteenvietnamita.Uncamarerolesestabasirviendoagua.Sandshablóconél.—Dicequeesestilobufetyqueporfavorsesirvaustedmismo.—Fantástico.Perolode«bufet»yalohabíaentendido.YhasconocidoaHaoNguyen,¿no?—¿AHao?Ah,sí.—ElqueterecogióenTanSonNhut.¿Hablastevietnamitaconél?—Sí,señor.—¿Tieneshambre?—Creoquevoyapedirdelmenú.—Skip.—Sí,señor.—¿Vamosasentirnosmalporhablarconfranquezaentrenosotros?Porqueesonoloquiero.No

lopodemostolerar.—Deacuerdo.Seloagradezco.—Bien.Elcoronelsedirigióalbufet.Cuando volvió con su sobrino llevaba un cuenco de cangrejo en salsa blanca. Se sentó, cogió

variostrozosconeltenedorylosengullósinapenasmasticar.Diountragodesucopa.—¿QuémedicesdeRickVoss…?¿Voss,sellama?¿Estabaanocheenelcuartel?—¿RickVoss?No.—Loconocerásmuypronto.Demasiadopronto.—LoconocíenlabasedeClarkantesdevenirme.Mevinoabuscar.—Ah,¿sí?—Básicamenteparahacermepreguntassobreusted.—¿Yenquélíneaibansuspreguntas?—Queríahablarsobreunartículoquehamandadoustedalarevista.—No doy un duro por algunos de esos jóvenes cachorros que están subiendo.Mejorando lo

presente.—Esoespero.Leparecióoírsuspirarasutío.—Telodigo,Skip,elmundosehagiradoymehallevadoalaoscuridad.Lasemanapasadame

llegó una carta de tu primaAnne.—Anne era la hija del coronel—.Y resulta que ha entonado elhimnode los izquierdistasuniversitarios, ¿te lopuedes creer?Meescribe: «Creoque tendríasqueplantearte las motivaciones de nuestro gobierno en Vietnam». Está saliendo con un beatnik, unmulato. A sumadre le dabamiedo decírmelo.Me lo ha tenido que contar todo tu tío Ray. «¿Lasmotivaciones de nuestro gobierno?» Por Dios bendito. ¿Qué mejor motivación puede tener elgobiernoquedesafiaralcomunismoallídondeaparece?

SkiprecordabaaAnneSandsencuclillassobrelaacera,vestidaconunospantalonescortosconpeto a cuadros, haciendo botar una pelotita roja y jugando a las tabas sobre el pavimento. Podía

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rememorarsinesfuerzolaimagendeAnnesaltandoalacuerda,conlastrenzasalvuelo,concentradaenlascancionesylosmovimientosdelospiesenelaire.Oírlodesucartaleenfadó,perolapérdidade patriotismo de su prima era algo secundario: su verdadera ofensa era haber dejado atrás losestereotiposdelainfancia…¿Unbeatnikmulato?

—Buenopues—dijoelcoronel—,animémonosyconozcamosaalguien.Señalóaaquelalguienqueseacercaba,unjovenflacuchoconpantalonesybotasmilitaresquesin

embargollevabaunacamisadecorteanchoacuadrosdeMadrásabiertaporencimadelacamisetaverdeoliva.

—SargentoStorm—dijoSkip.—¿Leconoces?—Mevinoabuscaralaeropuertoanoche.—Ah,sí,sí—dijoelcoronel—.Jimmy,siéntate.¿Queréisunacopa,alguno?SkipdijoquenoyJimmydijoquecervezaamericana.SkipestabaviendoaJimmyporprimera

vezalaluzdeldía.Unacaratostadaporelsolyunosojospequeños,despiertosyserios,delmismocolor que los de Skip, clasificados en su documento de identidad como «castaño verdoso». Teníaunostatuajesespectacularesyunpardedientes.Estampadoensucamisetaponía:«STORMB.S.».

Elcoronellehizounaseñaauncamarero,pidióunacervezayuncombinadoydijo:—Vaya, vaya, esto sí que es un gesto respetuoso: Jimmy se está abotonando la camisa para

nosotros.Creoqueestáscometiendounainfraccióndecalabozoalllevaresacamisa.—Estoylocoporlamoda.—Yestásapareciendoenpúblicoconlospantalonesporfueradelasbotas.—Novoyuniformado.—Creoquelainfracciónesesa.—¿Hascomidoya,Skipper?—dijoStorm.—Todavíano—confesóSkip.—Skipdicequeanochefuistearecibirlo.Teloagradezco.—Nohayproblema.—YSkipdicequehaconocidoaVoss.VossloencontróenClarkantesdequellegaraaquí.—Nomeestropeeslacervezadiciendocosasraras—dijoJimmy.—Vosslepreguntóporunartículoenelqueheestadotrabajando.—ElcoronelsedirigióaSkip

—.Heretiradoeseartículo.Lefaltabaunmotivoorganizador,pordecirlosuavemente.Loúnicoquehacía en él era aporrear el estanque de mis emociones con un remo pesado e ir en círculos.Levantandomuchaespuma.¿DequétehablóVoss?

—Laverdadesquemeloquitédeencimaantesdequedijeramucho.—¿Describióelartículo?—Puesno.¿Puedoecharleunvistazo?—¿Porquénomeayudasareescribirlo?—Nolosé.Siveoelborrador…—Sipuedoencontrar elborrador.Erauncaos total.Lo retomédespuésdepasarunañoenun

cajónynoconseguíseguirmispropiasideas.—Bueno—dijoJimmy—,esoesloqueteocurreporpasarteunañoenuncajón.—Mira,yonoenviéeseborradoralarevista.Vosslohizoporsucuenta.—¿Esonoespasarsedelaraya?

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—Yalocreoqueespasarse, joder.Esunactodesabotaje.¿Quémás tedijo?EnClark,quierodecir.

—Bueno,aver—dijoSkip—.Hablódetuinterésporciertopartidodefútbolamericano.—Notre Dame contra Michigan State. Un partido increíble. Muy instructivo. Estoy intentando

conseguirimágenesdelmismoyprepararunacharla.Megustaríaimpartírselaalastropas.Lamoralenesteteatrodeoperacionesestáporlossuelos.Latierramismamandaunafraganciaquetevuelveloco.Skip,noesqueseaunlugardistinto.Esqueesunmundodistintoybajoundiosdistinto.

—Estoseestáconvirtiendoenunaobsesiónfilosóficahabitual—dijoJimmy.—Lasobsesionesfilosóficasgananguerras—dijoSkip.—Touché—dijoJimmy.—Touché?—dijoSands.—¿Cómotevaconelfrancés?—preguntóelcoronel.—Siempreestoyenello—leaseguróSands.—Skipyyonoshemospuestoarememorar—dijoelcoronel—.Todavíanoleheinformado.—¿Puedopillaralgodepapeoantesdequeempieces?—dijoStorm.—Ponte.Yovoyallavabo.LosdoshombresseexcusaronyJimmyregresóenseguidaconunplatoenunamanoyunbollo

depangrandeenlaotra.MientrasStormintentabacomer,Skipleestuvohaciendopreguntasconeseestilo agobiante de la Agencia: deja que el otro se fume un cigarrillo, pero hazle preguntas tandeprisaquenoselopuedafumar.

—¿Dedóndeeres,Jimmy?—DelcondadodeCarlyle,Kentucky.Nopiensovolver.—¿TellamasB.S.Storm?—Correcto.BillemStaffordStorm.—¿Billem?—B-I-L-L-E-M.Eraelapododemiabuelo.Elpadredemimadre,WilliamJohnStafford.Noesque

solucione el enigma, tío, simplemente introduce una pieza descabellada que no encaja. Empiezasconfundidoyterminasperplejo.

—YnotellamanBill.—No.—NiStormy.—ConJimmyyavale.ConJimmyrespondo.—¿Eresdelainteligenciamilitar?—dijoSkip.—DeOperacionesPsicológicas. Igual que tú.Queremos convertir esos túneles en una zona de

torturamentalpsicológica.—¿Túneles?—Los túneles del Vietcong que hay por todo Cu Chi. ¿Mi opinión?Una sustancia psicoactiva

inolora.Escopolamina.LSD, tío.Vertámoslaenel sistema.Esoscabronessaldránenmanadadesusagujerosconloscerebrostodospasadosderevoluciones.

—Caray.—EnPsicológicasloquecuentasonlasideasinusuales.Queremosideasinfladashastaqueestén

apuntodereventar.Estamosenellímitemismodelarealidad.Enelpuntoenqueseconvierteenunsueño.

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—RickVossnoesdePsicológicas,¿verdad?—No.—Pero¿tratáisconéldeformahabitual?—Tenatusamigoscerca.Yatusenemigostodavíamáscerca.—¿Quiéndijoeso?—Elcoronel.—Bueno,peroestabacitandoaalguien.—Seestabacitandoasímismo.—Comodecostumbre.—Vossesuncabroncetedemuchocuidado.—Entoncesestábientenerlodenuestrolado.—¿Dequéladohablas?Enunasituaciónlíquida,losladossemezclan.—EstabacitandoaAtila,reydeloshunos,oaJulioCésar.—¿Quién?¿Voss?Oh…—Elcoronel.—Ya.Yelarchivoese,tío,¿ahíestátoditotodo?¿ElÁrboldeHumoentero?—Oh,hayunpocodetodo.Skiplodejócomer.Stormhabíaelegidoelcangrejo,acompañadodeunaspatatasfritasmuyfinas

ydelicadasqueseestabacomiendoconlosdedos.Rompióunpequeñosilencioaldecir:—¿Tú crees que los tíos que tiraron la bomba sobre Hiroshima después tuvieron

remordimientos?—Seguroqueno—dijoSkipconrotundidad.—Aquívieneeljefe.Mientraselcoronelseuníanuevamenteaellos,Skipdijo:—Jimmymedicequeleinteresanlostúneles.El coronel tenía en las manos una lata de Budweiser y un vaso vacío. Vertió la primera con

cuidadoenelsegundo,sorbiólaespumaydiountragolargoantesdedecir:—Esomismo.Ahora,algrano.ElsargentoStormeselenlacedeOperacionesPsicológicascon

laCDCIA, y yo soy el enlace de laCDCIA con Psicológicas. Juntos, el sargento y yo dirigimos unprogramamuypequeñoyespecíficoquesellamaLaberinto.Hacermapasdetúneles.EstoysegurodequesabeslodelostúnelesdelVietcong.

—Claro.—HoysontúnelesdelVietcong.Cuandotengamosmapasdeellos,sunaturalezacambiará.—Mapas.EsoparecemáscosadeInteligencia.OdeReconocimiento.—Ahora bien —dijo el coronel—. Te he descrito Laberinto como algo específico, pero los

parámetrosdenuestramisiónsonmuyelásticos.Yodiríaqueestamosactuandosinelbeneficiodeningúnparámetroclaro.

—Pero…¿OperacionesPsicológicas?—Dehecho,tenemosunpelotóndeReconocimiento.Yunazonadeaterrizajepermanente,queno

senospermitellamarbase.—¿Quiénlatiene?—Yo.Yunmontónbienmajodesoldadosdeinfanteríaquenoslacuidan.ASkiplediounvuelcoelcorazón.

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—Naturalmente,estoyasuservicio.Sintióuncosquilleoenlasmanosydeprontodejódesudarporcompleto.—William,estoyconvencidodequetenemosalgoenmarchadeloquetúvasaserunapartemuy

importante.Unapartecrucial.Perotodavíafaltabastanteparaquetuparteempiece.Metemoqueloquetevoyapedirquehagasahoramismorequiereesperarunmontón.

—¿Esperardónde?—Tenemosunapequeñamansiónperdidaenelcampo.ElregocijodeSkipmurióensucorazón.—Unamansión—dijo.—Estoesalgoquenolepediríaanadiemás.Skipseobligóasímismoadecir:—Iréadondememande.—Creoqueestetiponoscaebien—dijoJimmy.—Tetendremosbieninstaladoalcabodeunmes.Entretanto,sialgunodelosnuestrostequiere

aquíenlosCincoCuerpos,tambiénestarásasuservicio.—Muybien.Jimmydijo:—Queremosconvertiresostúnelesenunaregióndelinfierno.—Jimmyfuealaescuelademinas.—Estásdebroma,¿no?—Todoespartedelplanmaestro—leaseguróJimmy.—¿Tegraduaste?—Joder,no—dijoJimmy—.¿Tengopintadehabermegraduadoenalgo?Después del café, durante el cual Skip aprovechó para almorzar—unbollo dulce tan pálido y

amorfocomosuestadodeánimo—,StormlosllevóenelChevroletnegrohastaelhotelContinental,dondeel coronel teníaunahabitaciónen laplantabaja, al fondodel todo,bien lejosdel ruidodelvestíbulo.Eraevidenteque la teníade formapermanente:cajasde librosydiscos,unamáquinadeescribir, un fonógrafo, un escritorio para trabajar y otro que le servía de bar.El coronel pusoundisco.

—EstoesPeter,PaulandMaryinConcert.Escuchadlo.Y se inclinó sobre el tocadiscos y guiñó los ojos y con sus gruesos dedos bajó el brazo del

aparato sobre la interpretación que hacía el trío de «Three Ravens», la baladamelancólica de uncaballero caído en desgracia y su amante condenada. Permanecieron sentados en silencio, Skip yJimmy,cadaunoenunescritorio,mientrassonabalacanciónyelcoronelsecambiabadepantalonesycamisa.Suestadodeánimo,elestadodeánimoenquelehabíapuestoSkip,yasehabíadisipado.Ahorasesentóenlacamaysepusounpardemocasinesmientrasdecía:

—EnlamisiónaquelladeMindanao,mehicisteunbueninforme.¿Sabesquéesloquemásmegustó?

Hizounapausa.—No—dijoSkip—.Nolosé.Lemolestabaelhábitoqueteníaelcoroneldeesperarrespuestaalaspreguntasretóricas.—Loquemegustóeraquenomemencionabasamí.—Creoqueteníarazonesmásquelegítimasparadejarfuerabastantescosas.

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—Creoquetienesinstintoparaladiscreción—dijoelcoronel.—Diporsentadoqueustedseríaelprimeroenleerelinforme.—Elprimeroyelúltimo,hijo.Oporlomenosesaeralaintención.—Diporsentadoqueyamelodiríaustedsiqueríamásdetalles.—Estetiposabeloquesehace—dijoJimmy,apoyandoelbrazoenelrespaldodelasilladeSkip

—.Esmáslistoqueelhambre.ElcoronelmirómuyfijamenteaJimmyydijo:—Estehombreesfamiliamíaentodoslossentidosdelapalabra.—Mensajerecibido—leaseguróJimmy.—Muy bien pues. —El coronel se puso de pie y dijo—: Adivina quién ha venido en avión

conmigohastaCaoPhuc.Elbuenodenuestroteniente.—LouieMetepatas—dijoJimmy.—Eh,eh.Unpocoderespeto.—Esoesloquetendríaqueponerensuetiquetaidentificativa.Losdemantenimientolollaman

«TenienteMetepatas».—Probablementeestáabajo.—LouieMetepataslametehastaelfondo.—Aver,Skip, estamos tratandocon la infanteríaamericana.Te sugieroquevayamoshaciendo

aliadossobrelamarchaysinfiarnos.—Estáhablandodelteniente—dijoStorm—.Nodemí.—Notengonadacontraelejército.Soyveteranodelafuerzaaérea.Perolainfanteríayanoeslo

queera.—Porlomenosnohaquemadounpuestodeseismesesysehalargado—dijoStorm.—Esverdad,haestadoconnosotros.¿TenienteMetepatas,asílollaman?—Esesíqueesunaoperaciónpsicológicaensímismo.—Aver,jovenWilliam—dijoelcoronel,buscandoenelcajóndesuescritorio—.Aquítengotu

documento.Letiróasusobrinounpasaportedecolormarrón.Skiploabrióparaencontrarsupropiacaramirándolojuntoalnombre«WilliamFrenchBenét».—¡Canadiense!—dijo.—TualquilerlopagaelConcilioEcuménicoCanadiense.—Nuncaheoídohablardeellos.—Noexisten.TúestásaquíconunabecadelConcilio.TraduciendolaBibliaoalgoparecido.—¡Benét!Elcoroneldijo:—Venga,Benét.Vamosaporuncafé.En el vestíbulo enorme y frenético se sentaron en sillones de mimbre debajo de uno de los

muchos ventiladores giratorios. A su alrededor los mendigos y los chiquillos de la calle searrastrabanalospiesdelosexiliadosylosactivistas:porfin,unacapitalenguerra,unvestíbulodehotelpijollenodeaventuras,atiborradodeespíasyestafadores,gentesinpasadoyyaimposiblesderelacionar con sus antiguas identidades. Tratos cerrados enmedia docena de idiomas, encuentrossiniestros, sonrisas falsas y miradas que calculaban sus posibilidades. Psicópatas, vagabundos yhéroes.Mentiras, cicatrices, máscaras, complots codiciosos. Aquello era lo que él quería: no una

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mansiónperdidaenelcampo.Lepreguntóalcoronelentonotriste:—¿Podréverloaustedenelcampo?—Porsupuesto.Teestamosinstalandocomoesdebido.¿Hayalgoespecialquenecesites?—Lodecostumbre.Bolígrafos,papel,esaclasedecosas.Lodecostumbre.—Cuchillaparacortarpapel.Gomaarábiga.—Muybien.Maravilloso.—Tambiéntetraeréunamáquinadeescribir.Quieroquetengasuna.Ymontonesdecinta.—Escribirésusmemoriasparausted.—Elcalorteestáponiendoirritable—dijoelcoronel.—¿Puedoestardecepcionadodurantemediahoramásomenos?—Venga, sería peor si te quedaras en Saigón y trabajaras para los nuestros. Tienen cincuenta

puestos de interrogatorios en el Sur. Eso implica unamontaña inmensa tras otra de informes querevisar. Todo se hace sobre el terreno. Te meten en un agujero y te ponen a hacer referenciascruzadas hasta que estás cagando tarjetas de veinte por treinta.Es preferible estar ahí fuera en lasmansiones donde puedes conocer a la gente: el país con el que estamos en guerra. Te estamosinstalando en un sitio agradable, no temas. Y al final acabarás haciendo trabajo importante paranosotros.

—Lecreo,señor.—¿Algunapreguntallegadoestepunto?—Sobrelosarchivos.—Dispara.—¿Quésignificadotienelaexpresión«ÁrboldeHumo»?—AsíquehasllegadoalaAdelosarchivos.—No.Heoídolaexpresiónhoy.—Por Dios —dijo Storm—. La he mencionado, pero yo pensaba que por aquí todos

compartíamosnuestrosgérmenesyenfermedades,yasabe.—Élesfamilia—lerecordóelcoronel.—Ypues,¿quésignifica?—dijoJimmy—.«ÁrboldeHumo.»—OhDios,nosénipordóndeempezar.Esvergonzosamentepoético.Esgrandilocuente.—Noparecemuypropiodeusted—dijoSkip.—¿Serpoéticoygrandilocuente?—Estaravergonzado.—Tengounapregunta—dijoJimmy—.¿Quiéndijo:«Tenalosamigoscercayalosenemigos

todavíamáscerca»?—¿Estoesuninterrogatorio?—dijoelcoronel—.Enesecaso,tomemoscócteles.Loscóctelesfueronservidosenunasucesióndeestablecimientosacuálmásruidosoyhúmedode

lacalleThiSach,oscuridades tabernariasdondeduranteunasolacanciónde lamáquinadediscospasaban por delante de uno eternidades enteras desplegadas como bufandas. En cada local, Skipsostenía una cerveza hasta que se le calentaba y trataba de permanecer alerta, observándolo todo,aunquenohabíanadaqueobservarmásquecancionespopypequeñasbailarinasgogóaburridas.Sesentíaaturdido,nosabíaporquénoseibaacasa.Enunmomentodado,nosediocuentadecuándoseleshabíaunidoelteniente,elquellamabanMetepatas.Yciertamentelequedababienelmote:unacara

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tensa, unos ojos deliberadamente abiertos como platos, como si sumensaje para elmundo fuera:«Miradme,mehabéisconvertidoenunniñoasustado».Ciertamentenoinvitabaalaconversación.

—Osvoyacontar loquesédeVoss—estabadiciendoentretantoelcoronel—.LaprimeravezqueloconocínossentamosparatomarnosunasSanMiguelenManila.Élsepidióunaynisiquieralatocó.Latuvoasuspiescomosifueraunpremio.

—Enmipresenciasebebiómediacerveza—dijoSkip.Yseaseguróderemataraquelladeclaracióndandounsorboalasuya.ElTenienteMetepatasparecíahipnotizadoporlasrodillasdeunachicagogóquesededicabaa

darbrincos,aunmetroymediodedistancia,al ritmocaribeñode lamúsicadeDesmondDekker,mientraselsargentoStormlegritabaaloído:

—No pasa nada del otro mundo si ganamos esta guerra o la perdemos. Vivimos en elposdesguace.Vaa serunaera realmentecorta.Enel circuitoectoplásmicodonde los líderesde lahumanidad están todos conectados de forma inconsciente entre ellos y con las masas, tío, se hatomadounadecisiónmundialunánimededesguazarelplanetaymudarnosaotro.Sidejamosestapuertacerrada,yaseabriráotra.

Eltenientenoleprestabaningunaatención.TambiénelcoronelparecíasordoalastonteríasdeJimmy.Sededicabaadartragoslargosasu

millonésimocombinadoyenunmomentodadoanunció:—La tierra es el mito de esa gente. Si penetramos la tierra, estaremos penetrando su alma

nacional. Eso sí que es infiltración. Puede que sean túneles, pero está claro que es el dominio deOperacionesPsicológicas.

Skip no estaba seguro de si su tío estaba hablando en serio o únicamente divirtiéndose con elteniente.

—Eh—dijoJimmy—.Quieroentrareneltemadelossonidos.Lagentepuedeseralérgicaaunsonido.¿Nopodríatodounsustratogenéticoseralérgicoaunconjuntodeterminadodevibraciones?

—Perdona—dijoSkip—.¿«Sustrato»?—Yosoyalérgicoalapólvoraenciertoscalibres—dijoelcoronel—.Alasaspasdehelicóptero

aciertonúmeroderevolucionesporminuto.Ydeprontoeltenienterompiósusilencio:—¿Sabenquéesloquemásmeamargadetodo?Elnivelhastaahorainasequibledemendacidad

quenosvemosobligadosatragar,yquierodecirtodoelputotiempo.—Perdone—dijoSkip—.¿«Mendacidad»?—Algoteestápervirtiendo—ledijoJimmyalteniente—.Talvezseatupercepcióndecómote

vayanaverlosjefazos,peroesqueahoranotevenenabsoluto,oseaqueeslapercepcióndeunafaltadepercepción,tío,loqueequivaleaunapercepcióndenada,loqueequivaleanada,tío.

Elcoronelseestabaquejandodeproblemasconyugales.—Ella llamaanuestraspeleas«disputasdomésticas».Esobsceno,¿noesobsceno?Cogeralgo

quetellegaalcorazónytelodestrozayllamarlo«disputadoméstica».¿Túquécrees,Will?Jamáshabíavistoalcoroneltanborracho.Enunmomentodadode laprocesiónzigzagueantedeacontecimientos,unamujer lecogiódel

brazomuyporencimadelcodoyledijo:—¡Quéfuerte!¡Quéfuerte!Vamosafollar,¿vale?¿Quéhacerconaquello?¿Cuántocobraríalamujer?Peroseimaginósutristedelgadez,suterror

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cordialyadulador,obiensuterroramargo,dependiendodecómosemolestaraellaenenmascararsuterror…Otrabailabalentamentejuntoalamáquinadediscos,conlasmanoscolgando,labarbillacaídasobreelpecho,sinintentarvendersesiquiera.

—No,gracias—dijoél.Lacaradelcoronelseelevóanteélcomounalunaenferma.—Skip—dijo.—Sí.—¿Noteprometíunaoportunidad?—Sí.—¿Yestásteniendounaoportunidad?—Sí.—Chinchinpues,señor.—Chinchin.Un flash relampagueó en un rincón. El coronel pareció reconocer al fotógrafo y fue en su

dirección.Seencontrabanenunlugarsemieleganteyconaireacondicionado.Eltenientesededicabaa tomar notas en posavasos mojados de cóctel con un bolígrafo mientras Jimmy le hablaba consolemnidadaloído.Elcoronelregresóconunacámaraenlasmanos.

—Nosdará copias cuandovaya a buscar la película. Siéntate bien, Skip.La espalda bien recta.Señorita,salgademiencuadre,porfavor.Estoesparalafamilia.—Hubounflash,lalunaseretiró—.Selamandaréalafamilia.TutíaGraceestabapidiendounafoto.Estántodosmuyorgullososdeti.Todosqueríanmuchoatupadre—dijo.

Skipreplicópreguntando:—¿Cómoeramipadre?Ydeprontoestabanteniendounadelasconversacionesmásimportantesdesuvida.—Tupadre teníahonor, teníavalentía—dijo su tío—,y sihubieravividoel tiemposuficiente,

tambiénhabríatenidosabiduría.Dehabervivido,creoquehabríaregresadoalMedioOeste,porqueese es el lugar que tu madre ama. Creo que de haber vivido se habría convertido en hombre denegocios,y lohabríahechobien,habría sidounode losmotoresde sucomunidad.Estoybastanteconvencidodequesehabríamantenidoalejadodelgobierno.

«Sí,sí—lehabríagustadopoderdeciraSkip—,pero¿mequería?¿Mequería?»MientrasenlamáquinadediscossonabauntemacontrompetasdeHerbAlpert,elcoronelhizo

casoomisodesumúsicayentonóunacanciónconvozdebarítonocazallosotodavíamáscascadaporlospuros:

Sheburiedhimbeforehisprime,Downadown,heydown,adownShewasdeadherselfereeveningtime,Withadown.

GodsendeverygentlemanFinehawks,finehoundsandsuchalovelyone,Withadown,derry,derry,derrydown.

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Skip salióde laque tal vez fuera laundécima tabernade laveladay terminó suprimerdía enVietnam alejándose de la calle Thi Sach sin tener más que una vaga noción de dónde vivía,caminando por entre lamuchedumbre apelotonada, a través del humo terroso del diésel, pasandofrente a las vaharadas de los bares y sus interiores latientes. ¿Qué música sonaba? No lo podíadistinguir. A ver, un éxito reciente en Estados Unidos, «When aMan Loves aWoman», luego lamúsicaseretorcíasobresímismamientrasélpasabafrentealaentradaanónimaypodríahabersidocualquiercosa.Regateóconunconductordecicloquelo llevóalotro ladodelríoy lodejóenlacalledeChiLang.Enaquellazonadecallejonesmássilenciososinhalólosefluviosdelasfloresylapodredumbre, de las brasas de carbón, de la fritanga, y oyó el rugido lejano de los aviones y eltableteo de las ametralladoras de los helicópteros, y hasta las bombas de media tonelada queexplotabanatreintakilómetrosdedistancia,notantounruidocomounhechointestinal:estabanallí,las notaba, hacían un ruido sordo en su alma. ¿Qué sensación debía de producir estar debajo deaquellasbombas,obienencimadeellas,soltándolas?Aloeste,loshacesrojosdelasbalastrazadorasveteabanelcielo.Aquelloeraloqueélhabíaquerido.Paraestohabíavenido.Paraserembutidoenlaforja, en un orden enfáticamente nuevo —una «administración distinta», por decirlo de algunamanera—,dondelasteoríasquedabancalcinadasydondelascuestionesdemoralidadseconvertíanenhechosconsumados.

LatardeanteriorenTonSonNhuthabíapresenciadounaactividadaéreaincreíble,undespliegueenormedecazasybombarderosqueaterrizabanydespegabanydeavionesdecargadeltamañodemontañasqueregurgitabanpiezasdearmamentopesadotangrandescomocasas.¿Cómopodíannovencerestaguerra?

Encontrólapuertadelamansión.Noestabacerradaconllave.Dentro,detrásdelabarra,estabadepieRickVoss,queledijo:—Bienvenidoanuestropequeñoespectáculodemente.—Ybuenasnoches.—Noshasencontrado.—¿Tútambiéntealojasaquí?—Siempre,cadavezqueestoyenlaDimensiónDesconocida.¿Martini?Tengolosingredientes.—Meacabodepasarlamitaddelanocheevitandoemborracharme.—Bienvenidoalasegundamitad.—Yamevoyalacama.—¿Hasestadodefiestaconelcoronel?—Unapizcanadamás.—¿Tehacaptadoya?¿Tehapuestoenunamisión?—Todavíano.—Tengoalgoparati.Simplestareasinútiles.—GraciasaDios—dijoSkip.—Soloparatenertecerca—dijoVoss,ylemezclóunmartinisorprendentementefrío.

***

Asaltadosporlahumedadabrasadora,conlasmanoslibreslevantadasparaprotegersedelresplandorondulante, arrastraron susmacutospor lapasarelayhasta el asfalto, el soldadodeprimera James

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Houston y otros dos recién llegados a Reconocimiento Eco, y se dirigieron a una zona deestacionamientosituadaenunhangarenormedondesesentaronconsuscosasybebieronCoca-Colahastaquellegóunaparejadecabosqueparecíaentenderquiéneseran.

Ninguno de ellos saludó para nada a los tres soldados rasos. Se limitaron a continuar con suconversaciónmientras guiaban a los recién llegados a un transporteM35 lo bastante grande parallevaraunpelotón,yunoledecíaalotro:

—AquienyohepedidoespecíficamenteesaCarson,pero¿aquiénhapuestoélenmivehículo?Ati.Yloqueesoquieredecires:sí,jódete,noteacerquesalLongTime,queesmibar.

—OseaqueereslaúnicapersonaenelinfiernoqueentraenelLongTime.Eressuúnicoclienteenelplanetaentero.

—Nadaderencores.—Muchoderencores,latiraderencores.—Valepues,rencorespues.Peronoteacerquesamibar.¿Esosonvuestrasórdenes?—continuó,

dirigiéndoseahoraalostresreciénllegados.Jameshabíacogidolospapelesdelostresylosteníaenunpuñocerradoysudoroso.—Osdaiscuentadequeosvanasuspenderlapaga,¿verdad?—¿Porqué?¿Quélespasaanuestrospapeles?—Nada.Queestántodosmal.—Todolomandanalrededordelmundo—dijoelotro—,teloembutenenlabocaytelometen

enelculo.Losdosanfitrionesibandelanteenlacabinaylostresnovatosenlapartedeatrás,enunacaverna

cubiertadelona,todololejosdelextremoabiertoquepudieron.Experimentaronunasacudidahaciadelantey a continuación la imagendel aeródromodetrásde ellos, el caosde cajas, barraconesdeacero,vehículos,aviones,yluegolaciudad,losedificiosdecoloresestrafalarios,lascallesllenasdegente que no eran conscientes de lo extraño de su aspecto, todo ello fue dejando paso a unavegetacióngeneral.JamessehabíaentrenadoparalosentornosselváticosenCarolinadelSuryenLouisiana,perosolamenteenotoñoeinvierno.Ahoralospies lehumeabandentrodelasbotas.Sequitóelcasco.Eldíaestabanublado,perosuresplandordetrásdeellos,atravésdelaaberturadelaluna,hacíaquelesresultaraimposiblemantenerlosojosabiertos.Diounacabezadahaciadelantequelo dejó sumido en un estupor pardusco y durmió hasta que el camión dio una sacudida y lasexplosionesempezaronarugiralrededordesucabeza.FisheryEvansyasehabíantiradoalsueloentresusmacutos.Jamesselestiróencima.Elcamiónsehabíadetenido.Lasportezuelassecerrarondegolpe.Losdosqueibandelanteahorasesubieronalparachoquestraseroyecharonunvistazoalenredodebrazosypiernas.

—Yatedijeyoqueeranmaricas—dijouno.Elotrosostuvosucigarrilloenaltoyacercólabrasaaloqueresultóserlamechadeunaristra

depetardos,queluegotiróalladodeellos.Hubootroestallidotraqueteanteyensordecedor.Losdoscaptoresdesaparecieron.Elvehículoreanudósuavance.

Lostressoldadosrasosestabanhorrorizadosporlacrueldaddelabroma.Jamescasillorabademiedo,yEvansdijo:

—Situviéramosarmaslepodríamospegaraesetipountiroenlanucaydejarloahítirado,¿oesquenolosabe?

—¡Diosbendito!—gritóFisher.

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Lediounapatadasalvajealapareddelacabina.Elcamiónsevolvióadetener.—¡Miraloquehasconseguido!—gritóHouston—.¡Ahoraesoscabronesnosvanamatar!Solounodeellos,Flatt,aparecióenlapartedeatrás.—¡Soldado!—gritó—.¡Soldadodeloscojones!¡Bombava!—Yunatrasotra,tiróalinteriortres

latasdecervezaBudweiser—.Mehasalidounabromatonta—admitió.—Puessí,joder—dijoFisher.—Bueno,entodocaso,esassonlatasdeverdad,delasquesevendenenAmérica,conlengüeta

paratirarytodo.Trincaoslasbirrasyquenohayarencores.Fishersiguióhaciendodeportavoz:—¡Sí que hay rencores! ¡Dios bendito! ¿Qué eres, unmaldito espía delVietcong?—Abrió su

cervezaylaespumasaliódisparadaentodasdireccionesygritó—:¡Hostia!—Estamos tomando un desvío de Descanso y Recreo —dijo el tipo—. ¿Alguna vez habéis

probadocoñoasiático?Lostresreclutassehabíanvueltoasentarenlosbancos.Ningunodeelloscontestó.—Repito:¿algunavezhabéisprobadocoñoasiático?Elloscontinuaronsopesandolapregunta.—Creo que ahora he conseguido que me prestéis atención —dijo Flatt, después saltó del

guardabarrosyreanudaronsuviaje.—¡Diosbendito!—dijoFisher.—DejayadedecirDiosbendito—dijoEvans.—¿Yquéquieresquediga?—Nolosé.¿Cómovoyyoasaberlo?Jamessostuvolalataentrelospiesparaabrirla.Tirólalengüetadentrodelalata,selallevóala

bocaysepusoa tragarBudweisercalientehastanotar la lengüetacontra la lengua,yaunentoncessiguiósorbiendolaabertura.

Llegóunatormenta,estuvocayendocomounacataratadurantecincominutosyluegoremitió.Acontinuacióndescendiólanieblaycostabarespirar.Jamessedeslizóporelbancohastaelfinaldeltransporte y se aventuró a asomarse a la guerra de Vietnam: lluvia goteando de hojas gigantes,vehículos deformes, gente pequeña; el camión reduciendomarchas, el motor berreando, el barrohirviendo bajo los neumáticos enormes; peatones descalzos que se alejaban de la carretera, carasmarronespasandoaunlado,bachetrasbachetrasbache,lacervezadándoletumbosenelestómago.Sesecólacaraconlosbajosdelacamisa,hizoviseraconlamanoycontemplócómoelcrepúsculo,amedidaquerebasabaelniveldelasnubes,volvíaloscoloresdelmundoalmismotiemposombríosypoderosos.Despuésdesembocaronenunacarreteramásgrande.Todalavegetacióndelosarcenesparecíamuerta.Elpavimentodehormigónhabía adquiridoun tinte rojizode todoelbarroque lepasaba por encima. Aquella carretera la usaba toda clase de vehículos: bicicletas, ciclomotores yartefactos más grandes creados a partir de esos mismos transportes de dos ruedas, además decarretas,carretillasypeatonessemidesnudosencorvadosbajoelpesodefardosenormes.Elcamiónavanzaba pesadamente hacia el este por la carretera con gran despliegue de bocinazos, deadelantamientos en zigzag, de frenazos y cambios de marchas. Durante un rato se movieron tandespacioqueunacarretaqueibadetrásdeellosfuecapazdeseguirleselritmo,yJamessepasóunratobienlargomirandolacaraestúpidayprofundamentecompasivadeunbúfalodeagua.

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Laoscuridad llegóde repente.Durante un rato el tráfico fuemuy escaso, y luegopareció queestaban aminorando lamarcha: habían llegado a alguna clase de pueblo o bien estaban cerca delmismo.Eltransportesedetuvofrenteaunaestructurahechacasiporcompletodebambúyprovistadeunletrerotenuementeiluminadoporunabombillarojaquedecía«COCA-COLA»y«LONGBRANCHSALOON».Flotandoensunuberoja,ellugarteníaunaspectocaluroso,húmedo,misteriosoysolitario.Dentro se oía el estruendo rítmico de la música. Houston se asomó un poco, echó un vistazo endirecciónalacabinaypudoverbastanteactividadmásadelante,estructurasdesombrasylaslucesdiminutasymóvilesde lasbicicletas.Entreaquíyallí, sinembargo, seextendíaun largo trechoaoscuras.

Susanfitriones,osecuestradores,selesacercaron.—Saliddemicamión—dijoFlatt.—Ah,¿sí?—dijoHouston.—Déjalosenpaz,Flatt,anda.—Muybien—aceptóFlatt—.Sientohaberosestadotomandoelpelo.Soislomejorquehapasado

entodalasemana.Elquehayáisllegadotantardecomportaquedeverdad,perodeverdad,enarasdelamayorsensatez,tendríamosquepasarnocheaquíenBienHoa.AsíquevosotrosyJollydistraeosporahí,queentretantoyotengoqueentraraquíenelLongTimeyveraunpardeimportantesespíasenemigos.

—Nosotrosentramoscontigo,¿no?—dijoEvans.—No.Vosotrosnopodéisentrar.—Ah,¿no?—No,estáprohibido.—¿Ytúqué?—dijoJames—.¿Noestásapuntodeentrar?—Voyporunasuntooficial—dijoFlatt—.Vosotrosmejorosbuscáisotrolocalcallearriba.Idal

FloorShow.—¿Callearriba?—dijoFisher—.Esonoesunacalle.Estáoscuro.—ElcaboJolletosescoltaráalpueblo.—Muybien…joder.Vale,joder.Yomeencargo—dijoJollet—.Todoelmundoabordo,quenos

vamos.—Ah,deesonihablar.Elcamiónsequedaaquí.—¡Elsitiomáscercanoestáacasiunkilómetro!—Señores—dijo Flatt—.Muévanse.Avancen en fila india y recen por que no les tiendan una

puñeteraemboscadaensuprimeranochesobreelterreno.¿Tenéisalgodedinero?—Joder—dijoJollet—.Notienennadadedinero.—Noparas de decir «joder» como si yome llamara así—dijo Flatt—. Para de decir «joder»

como si yo me llamara así. ¿Cuánto tenéis? Porque en este mundo moderno y chiflado en quevivimos—lesexplicó—,unonopuedeecharunpolvosindinero.¿Tenéisbastanteparaunacerveza?

—¿Cuántovaleunacerveza?—Yotengounpardepavos—admitióJames.—¿Dineroamericanoocuponesmilitares?—Billetesdedólarnormales.—CaboJollet,lleveaestosnovatosalFloorShow.FlattyJollet, losdoschocandoyestorbándoseentreellos,emitiendounauradedependenciay

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resentimiento mutuos, como si fueran hermanos, colocaron sus M16 en el compartimiento deherramientasdelvehículodetransporte.Jolletlesdijoalosreclutas:

—¿Dóndeestánvuestrasarmas?—¡Diosbendito!—exclamóFisher—.¡OsloDIJE!—Notenemosarmas—dijoJames.—Quéextraño—dijoFlatt.—¿Nosvanadararmas?—Sí, estoy convencido de que podemos suministraros todas las armas que queráis —les

tranquilizóJollet—.Estoesunaguerra.FlattentróenelLongBranchSaloon,dejándolosasolasconJollet,quelesdijo:—Nolovoyadecir,peromeapetecedecir«joder».Diomediavueltayechóaandarhaciaelpueblo.Ellosnotuvieronmásopciónqueseguirlo.—¿Dóndeestamos?—EnBienHoa.Nopasamosdellímite.Másalláestálafuerzaaérea.Estabaoscuro.AquelloeraVietnam.—Mierda—dijoJames,intentandomantenerlavoztanopacacomolaoscuridad.—¿Aquéterefieres?—Merefieroaqueestámásoscuroquelabocadeunlobo.—Tendrían que enseñarte una foto de lo oscuro que es esto antes de firmar en la oficina de

reclutamiento—dijoEvans.—Yonofirmé—dijoFisher—.Mealistarona la fuerza, joder.Y teníacredencialesparahacer

instruccióndehelicópteros.—Entonces,¿quéestáshaciendoaquí?—preguntóEvans.—¿Quéestáshaciendoaquítú?—Yomepresentévoluntario—dijoEvans—.¿Porqué?Pordoscosas:curiosidadmásestupidez.

¿Ytúqué,Vaquero?Despuésdemencionarquesumadretrabajabaenunrancho,JamesHoustonsehabíaconvertido

envaquero.—Supongoqueestupidezynadamás—dijo.—¿Creéis que tienenminas por aquí?—dijo Fisher—. ¿En esta carretera? ¿Bombas trampa o

algoparecido?—Callaostodos—dijoJollet,yellossecallarondegolpe.James olió humo de cocina, vapores grasientos. Caminaron en dirección a las luces tenues y

vagas, que ya no estaban muy lejos, con el suelo crujiendo bajo las botas y las cantimplorastintineando.Nuncaibaasuperarloqueestabasintiendoenaquelmomento,deesoestabaconvencido:sesentíaatemorizado,orgulloso,perdido,escondido,vivo.

Fisherrompióelsilencio.—¿Puedeshacernoselfavordedecirnosadóndeestamosyendo?Jolletsedetuvoparaencenderuncigarrillo,mandandoportodalazonaunaseñalluminosacon

elencendedor.—Aunsitioquese llamaelFloorShow.Losespectáculosdevariedadesanteseranmuyraros,

porque no teníanmúsica.—Hizo varias señales con el encendedor en alto y la llama se apagó—.¿Veis?Nohayfrancotiradores.

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—¿Quéquieresdecircon«variedades»?—Necesitabanurgentementeunaseriedemejoras.Heoídoquehanconseguidounamáquinade

discos.—¿Yquéhayenella?—Canciones,tío.Temasmusicales,¿sabes?—¿Dedóndehansacadounaputamáquinadediscos?—¿Dedóndecreestú?Dealgúnclubdeoficiales.Alguienladebiódevenderdeextranjis.—¿Ynosabesquéhayenella?—¿Cómoloibaasaber,recluta?Notengoniputaidea.—Perobueno…niqueseaunaideageneral.Jolletsedetuvo,conlacaralevantadahaciaelcielo.—CIELOSANTO.TODAVÍANOHETENIDOOPORTUNIDADDEVERELPUTOTRASTO.—Vale,vale.—VOYDECAMINOALLÍAHORAMISMO,HOSTIA.—Vale,muybien.—VOYDECAMINOALLÍCONTIGO.Unletrerorotodelantedellocaldecía«FLOORSHOW».Parecíaunestablo,perodentroenvezde

tenercabrasypolloshabíagente,lamayoríamujeresbajitas.Detrásdelabarradecontrachapadounletrerodeneónverdedecía«LITTLEKING’SALE».Habíalámparasdelava.

—Sentaos aquí —les ordenó Jollet. Ellos se sentaron a una mesa—. Usted, señor, ¿cómo sellama?

—Houston.—Invítameaunacerveza,Houston—dijoJollet.—Teinvitoaunaynadamás.—¡Eh,colega!Meestástocandoloscataplines.—¿Yesoquéquieredecir?—Quieredecirquenecesitodosdólares.Selesacercóunadelasmujeres.—¿Quierenvariedades?—Variedadesno.Ahoracerveza,variedadesdespués.—Yosoysucamarera—dijoella.—Damedosdólares—dijoél—.Cuatrocervezas.—YoquierounaLuckyLager—dijoJames.—NoLucky.PasBuRibbon.—¿Pabst?¿SolohayPabst?—PasBuRibbonoTreintayTres.—TráenosTreintayTres—dijoJollet.—YoquieroPabst—dijoJames.—Hasdepedirlamásbarata—dijoJollet—.Tráelasenlabotella.Nometraigasvasossucios.EllacogióeldinerodeHoustonysealejó.—¡Puesmuybien!—dijoFisher,concaradeterror.—Colegas—dijoJollet—.Yomevoyadarungarbeo.—¿Qué?

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—Tengoencargosquehacer.Noosmováisdeaquí,niños.—¿Cómo?¿Ycuántoratonosquedamos?—Hastaqueyovuelva.—¿Ycuándovuelves,tío?—Cabo Jollet—dijoFisher—,por favor.Acabamosde llegardeAmérica.No sabemosdónde

estamos.—Yosédóndeestáis.Asíquequedaosaquíhastaqueyovuelva.Lamujerregresóllevandocuatrobotellasporelgollete,dosencadamano.Jolletlainterceptó,

cogióunaydijo:—Muchasgracias.Ydesapareció.Yallísequedaronellossentadosmientraslamujerlessecabalahumedaddelasbotellasconun

trapode labarra.Eramuybajitay llevabaunmontóndemaquillajedemasiadoblancopara su tezmorena.

—Estacervezasabeamedicinaparalosgranos—declaróFisher.—¿Cómohadichoquesellamabaestepueblo?—dijoEvans.Jamessellevólacervezaaloslabiosydiountragoytratódepensar.Sebebiólamitaddegolpe,

peronoseleocurriónada.Lacervezasabíacomotodas.—Tampoconecesitábamosalosyanquis.—Yosílosnecesitaba.Estoyperdido—dijoFisher—.Yotambiénsoyyanqui—señaló.—¿Quierenvariedades?—dijolamujer.—Ahoracerveza—dijoEvans—.Variedadesdespués,¿vale?EllaseinclinóyledijodirectamenteaJames:—¿Quierenmamama?—¿Quéhadicho?—Perdone—dijoJames—.¿Haqueridousteddecir,yasabe,«mamada»,esesoloquehadicho?—Chorradas.—Esoesloquehadicho.—Oh,Diosbenditodelcielo—dijoFisher.—¿Cuántoes?—Unavezahoradosdólar.—¿Oslopodéiscreer?—Prestadmedosdólares—dijoJames.—Erestúquientieneeldinero.—Yonolotengo—dijoJames.—¿Cómotellamas?—dijoEvans.—MellamoLau-la—dijoella.—EsoquieredecirLaura,¿verdad?—Tedoymamamabueno.—Ahoracerveza,mamamadespués—dijoEvans.Seloveíapálidoyasombrado.James se terminóa todaprisa su33, que era loúnico en su entorno inmediatopara lo cual se

sentíapreparado.Enunrincónavariasmesasdedistanciahabíaapiñadaunapandilladejóvenescon

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uniformesblancos,marinerosdeunatierraextranjera,todoscongorraspuestasoenlamanodeuncolorindeterminadoenlapenumbra,lamayoríadeellosconputassentadasenelregazo.Cercadeallílafamosamáquinadediscosemitíadestellosrojoscomounafragua.Enelcentrodellocaltresparejas bailaban agarradas, sin apenasmoverse, al son de «You’ve Lost That Lovin’ Feelin’».Unsoldadoaltoledioasucompañeraunbesointerminableyaterrador,amortajándolaconsusbrazos,encorvadosobreellaydevorandosucara.Lasparejascontinuaronexactamentedelamismamaneramientras la máquina detenía su música, mientras zumbaba y deliberaba. Cuando empezó a sonar«BarbaraAnn» de losBeachBoys, losmarineros extranjeros se pusieron a cantar con torpeza.AJamesleapetecíaunirseaellos,peroerademasiadotímido.Fueracualfueraelritmo,losbailarinespermanecíancomozombisintentandosalirdeuntrance.

—Creoqueesostíosconpintademarinerossonfranceses—dijoEvans—.Sí,sonfranceses.Lostressoldadosdeinfanteríasequedaronsentadosmirandoa losquebailabanmientrasenla

máquinadediscossonabaunamujercantando«Makin’Whoopee»yluegootracantando«TheGirlfromIpanema».

CuandoLauraregresóylespreguntódenuevoporlasvariedades,Fisherledijo:—Voulezvouscouchezavecmoi?—Maisoui,monsieur,bucú follar—dijo ella, y los tres soltaronunacarcajadaavergonzada,y

ellalosdejóconairevelozydesdeñoso.—Invítameaunacerveza,Houston.—Yateheinvitadoauna.Ahorameinvitastú.—Eresunhusmeadordeconsoladores—ledijoEvansaJames.—¿Esoquées?¿Quéesunhusmeadordeconsoladores?—Meparecebastanteobvio.AJamesnoselopareció.—¿Quéesunconsolador?—lepreguntóaFisher.—¿Tienesdinero?—¿Dóndeestánmisdosdólares?—Pregúntalesaellos.—¿Nomequedanadadecambio?—Pregúntales.—Nopiensopreguntarlenadaanadie.—Calla—dijoEvans—.Déjamecontar.¿Sabesqué?Enestasalahaymásmujeresquehombres.

Hayquincemujeresmás.—¿Tútefollaríasauna?—¿Quéquieresdecir?Puesclaroquesí.Melasfollaríaatodas.—Sontirandoafeas—dijoFisher.—Unpoco,sí—dijoJames—.Peronoexactamente.Se quedómirando a una que había al otro lado de la sala: nariz chata y labios sensuales. Su

miradaplanayevasivaloprovocó.—Yoinvitoyluegotúinvitas—ledijoEvansaFisher.—Vale.—Tratohecho.—Puesveabuscarlas.

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—Vetúabuscarlas.—Invitastú,oseaquevetú.—Vale,cabrón—dijoEvans—.¿Todoelmundotieneveintiuno?¿Puedovervuestroscarnetsde

identidad?—¿Vasairabuscarlascervezasono?—dijoJames.—Sí.Evansseadentróenlapenumbrallenadehumocomosiestuvierasaliendodeunatrincherapara

atacar,comosiaquellofueraporfinlaguerra.Cuandoregresóparecíafelizconsigomismo.—Unacervezamásyestarélistoparabailar.Peroenserio,Houston,eh.¿Cuántosañostienes?—Dieciocho.—¿Dieciocho?—Igualqueyo—dijoEvans.Enlamáquinadediscosempezóasonar«WalkonBy»deDionneWarwick.Una puta gorda que parecía estar bailando sola cerca de ellos se giró despacio, y al hacerlo

revelóaunhombretanbajitoqueprácticamentelecolgabadelosbrazos,yqueteníalacabezaenelpechodeella.Los taconesdecincocentímetrosdesusbotasdevaquerohacíanque tuvieraelculolevantadocomoeldeunamujer.Fishersepusoareírsedelaparejaysemostródeltodoincapazdecontenerse.

Elhombreseseparódesuparejadebaileyfuealamesadeellos.Estabasonriendo,perocuandoFishersepusodepie,elhombrecilloledijo:

—¿Quieresacabarenelsuelo?—No.—Bueno,puesnotemepongastanerguidonitancerca.¿Cuántomides?—Lobastante.—Lobastanteparaacabarenelsuelo—dijoelhombre,principalmentedirigiéndosealosdemás.LlevabavaquerosyunacamisadecuadrosdeMadrás.Erabajo,anchoyteníalacabezaredonda.—¿Cuántoscentímetros?—Nolosé.—¿Cuántospiesypulgadas,yanqui?—Seispiesycincopulgadas.—Diossantodelcielo.Esoesunputomontóndecentímetros.—Nomepuedestiraralsuelo—dijoFisher.—Soloestásiendosimpático—intervinoJames.—Soloestoydiciendoloquepienso—dijoFisher—,sobreesodeacabarenelsuelo.—Parecequeyahasechadoelmúsculodelacerveza,colega.—Soloestoyconstatandounhecho.—¡Oh,sí,tieneelmúsculodelacervezabienpuesto!—¿Quiénerestú?—SoyWalsh, de lamarinamercante australiana. Peso sesenta kilos, mido unmetro veintiséis

centímetrosypuedopelearmeconvosotroscuatro,todosalavezounodetrásdeotro.Empecemosconelmásduro.¿Quiéneselmásduro?Venga.¿Túereselmásduro?

—Yodiríaqueno—dijoJames.

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—Noteconvienepelearteconmigo,seaselmásduroono—dijoelaustraliano.LuegosedirigióaFisher—:¿Ytúqué,grandullón?¿Tecreesquemepuedesestamparcontraeltecho,grandullón?

—Eresunrenacuajoterco,perotepuedoestamparcontraeltecho—dijoFisher,riendo.ElpequeñoWalshestabafurioso.—¿Mevasaestamparcontraeltecho?Venaquí.Venaquí.Venyestámpameeneltecho,vamos

fuera.Girósobresustalonesysedirigióalapuerta.Fisherlosiguió,unpocodesconcertado.—Oh,mierda—dijo—.Mevaadarunapalizaunenanoquehaceluchalibre.HoustonyEvanssalierontambién.Fueraenlacalleenfangada,dondenohabíamásluzquelaque

salíaporlapuerta,Walshsepreparóparalabatallaejercitandoloshombros,flexionandolasmanos,arqueando la espalda hacia atrás, inclinándose hacia delante y tocando el suelo de tierra con laspalmasdelasmanos.

—Venga.Fisherseagachóconlosbrazosextendidos,comosiseestuvierapreparandoparalevantarauna

criaturaenvilo.Suoponentezigzagueóaunladoyalotro,bamboleólacabeza,hizounarápidafintadescendenteconelhombroizquierdo,sumanoderechasaliódisparadaehizoverqueletirabatierraa los ojos a Fisher. Fisher se irguió, parpadeando, con los ojos guiñados y la boca abierta. Elaustralianolediounapatadaenlaentrepierna,selepusodetráscorriendoylepropinódosgolpesrápidos y secos con la planta del pie, el primero en la parte de atrás de la rodilla y el otro en elespinazo,quemandaronalgrandullónalsuelodenaricesycubriéndoselaentrepiernaconlasmanos.

Elaustralianoseinclinósobreélylegritó:—¡Despierta,cabrónperezoso!Paraentonces,losmarinerosfrancesesysuschicashabíansalidoamirar,perolacosayasehabía

acabado.WalshayudóaFisheraponersedepie.JamesyEvansleecharonunamano.—Vamos,levanta,levanta.Yabastadeniñerías,eshoradetrincarnosunabuenabirraentretodos.Dentro,sereunióconlosjóvenesensumesaysesentóasuputagordaenelregazo.—No te pelees con los bajitos. Nunca te pelees con los bajitos. Estamos entre vosotros los

gigantesporquehemossobrevivido,yhemossobrevividoporquesomosmásdurosqueDios.¡Muybien,entonces!¡Cervezasparatodos!¡Dios!—gritódepronto—.¡Hueloavirgen!¿Quiénesvirgenaquí?—Miró las caras inexpresivas que lo rodeaban—. ¿Es que ninguno de vosotros ha folladonunca?Nopasanada.Yoinvitoalacerveza,chicos.Osheintimidado,oshetimadovergonzosamenteysoyuncabróndelapeorclase.Perojoder,solamentepesosesentakilos.Ytengounapichacomoladeuncolibrí.¿Verdad,cariño?Pequeñita,pequeñita.

—Amígustapequeñita,pequeñita—dijosuchica—.Nomegustapollagrande.Sevieronrodeadosdechicas.UnachicaselesentóaFisherenelregazo.Otrasequedódepie

juntoalasilladeJames,jugandoconsuoreja.Luegoseinclinóylesusurró:—Vamosafollar.LaqueestabaenelregazodeFisherledijo:—Amígustapollagrande.Lassandaliaslecolgabandelosdedosdelospiesaciertadistanciadelsuelo.Teníaunacararara.

Unosenormespómulosinclinados.Parecíaunduende.

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—Quitadeahíencima—ledijoél—.Meduelenlaspelotas.Notequiero.—Midocincuentaynuevepulgadasytrescuartos.Conestaalturalasupervivenciaesmiprincipal

preocupación. Tengo que ser agresivo.—Walsh dio un empujón al trasero de sumujer y dijo—:Quierocervezasamansalvaparaestoschavalestanvalientesdelejércitoamericano.¿Habéisvistoelletrerodelaentrada,valientes?EnlosdíasdeantañoestesitiosellamabaLou’s,yhabíaunletreroenormedeCoca-Colaquedecía«Lou’s»,yelletreritodelaentradadecía«FloorShowAnyTime».Perounanocheunaustralianoborrachodelamarinamercanteledioungolpedekáratealletreroylo rompió. Yo. ¡Sí! Fui yo quien le dio a este sitio su famoso nombre. ¿Dónde está tu casa,grandullón?

—EnPittsburgh.Yallímegustaríaestar.—Eresunbuenchaval,Pittsburgh.Tedoymimanoenseñaldeamistad.Nuncatepeleesconlos

bajitos.Han aprendido a tumbarte en el suelo.He recorrido elmundo enbarcos y he aprendido ahacerme con la victoria. Mido ciento veintiséis centímetros y nunca creceré ni uno más. Y a lasvariedadesinvitoyo.

Jamesprobóabailarconsumujer.Ellaselepegó,suaveycálida,teníaelpeloacartonadoyolíaapolvosdetalco.Cuandoéllepreguntócómosellamaba,elladijo:«Yoinventanombreparati»,consuslabioscarnososydescarados.Elritmoeraanimado,peroelloshicieronunbailelentoyagarradobajolaluzdecolorrubídelamáquinadediscos.Walshinvitóalascervezas.Cantaroncancionesconlosmarineros franceses,unode loscualesbailósobre lamesaencalzoncillosmientras losdemászarandeaban sus cervezas y lo rociaban de espuma.Walsh desafió a pulsos a toda la mesa y losderrotó a todos. Pagó las variedades, pero ellos le tuvieron que pagar a un tipo con un traje degángster a rayas un par de dólares extra, supuestamente «para la máquina de discos». Fueron aldormitorioquehabíaalfondodelestablecimientoysesentaronenelsuelo,acontinuaciónunamujerentró,cerrólapuerta,sequitóelvestidoporlacabezasinsacarseelcigarrillodelabocaysequedódesnudaanteellossalvoporunoszapatosrojosdetacónalto,dandocaladasasupitillo.Sucuerpoeracompletamenteperfectoentodassuspartes.

—¿Cómo,cómo,CÓMOtellamas?—vociferóEvans.—MellamoVirgen—dijoella.Fuera, en el bar, lamáquinadediscosvolvió a poner«You’veLostThatLovin’Feelin’», y la

desnudaVirgenempezóamoverse.—Estoycachondaestanoche,muy,muycachonda—dijoellaentonolastimero.Jamesnonotabalasmanos,lospies,loslabiosnilalengua.Depieamenosdeunmetrodeél,la

mujersepasóunminutobailandoalritmodelamúsica,luegosesentóenlacama,separómucholasrodillasyse introdujolapuntadelfiltrodesucigarrilloentre los labiosdelavagina,despuésdiouna calada y soltó una bocanada de humo con la entrepiernamientras en la sala contigua sonaba«Satisfaction» de los Rolling Stones en la máquina de discos. Ahora James sintió que le habíancortado la cabeza y se la habían tirado a una cuba de agua hirviendo. Virgen estaba tumbada deespaldas,consololacabezayloshombrosapoyadosenlacama,conlostaconesaltosplantadosenelsuelo, contorsionando el torso al ritmo de «Barbara Ann», y todos ellos se pusieron a cantar acoro…Diostodopoderoso,rezóunapartedeJames,siestoeslaguerra,hazquenuncavuelvalapaz.

***

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Los tresCuchiCuchisacudieronparaunadesusconsultas.Nohablaronconnadie, sededicaronaacaparar la sombra de al lado del Búnker Uno en aquella mañana soleada y a nadie deReconocimientoEcoseleocurriómolestarlos.Elnegroeraelquemásmiedodabadelostres.HabíapasadounatemporadaconunaPatrulladeReconocimientoaLargaDistanciaqueviajabadenochecompletamente colocadade anfetas, quitándole lavida a todohombre,mujeroniñoconelque seencontraban.Elpelolecrecíaenformadeexplosióndefloriturassalvajes,sepintabalacaracomounindioeibaporahíconlasmangasdeluniformearrancadas.Porcomparación,elindiodeverdadquehabíaentreellos,untipodiminuto,nervudoypatizambo,procedentedealgúnlugardelsudoeste,parecíabastantecuerdo.Elterceroeradeprocedenciaitalianaotalveztodavíamásextranjera,talvezgriega o armenia. No hablaba nunca, ni siquiera con el superior de sus operaciones, que era elcoronel.

Entretanto,enaquellosmomentos,elcoronelSandsnosecallaba.Ynoerauncoroneldeverdad,era más bien un coronel honorario sureño tipo niño rico, y los hombres lo llamaban «coronelSanders»asusespaldasysereferíanaaquellaspocofrecuentesreunionesmatinalesenelladooestedelamontañadelaBuenaSuertecomola«HoradelPoder».

Pero el coronel no era tonto. Tenía una extraña sensibilidad para averiguar lo que uno estabapensando.

—Osdaiscuentadequesoyuncivil.Yodepartoconvuestroteniente,nolepasoórdenes.Perosíquedirijonuestrasoperacionesenunsentidogeneral.—Estabaenmediodetodalaluzaplastantedela mañana tropical con los brazos en jarras—. Hace doce semanas, el pasado diecinueve denoviembre, la universidad donde me formé, Notre Dame, jugó el que tendría que haber sido elpartidomássangrientodelahistoriacontraMichiganState.Dosequipossoberbios.Losdosinvictos.Los dos ansiosos por combatir.—El coronel llevaba botas de lona iguales que las de ellos, unosLevi’snuevosyrígidosyunchalecodepescadorconmuchosbolsillos.Camisetablanca.Gafasdesoldeaviador.Delbolsillotraserolesobresalíalaviseraazuldeunagorradebéisbol—.Unasemanaantes del partido los alumnos de Michigan State soltaron panfletos desde una avioneta sobre elcampusdeNotreDame.Lospanfletos ibandirigidosa los«pacíficosaldeanosdeNotreDame».Ypreguntaban:«¿Porquénosplantáis cara? ¿Porquépersistís en la creencia erróneadequepodéisganar,deformalibreyabierta,contranosotros?Vuestroslíderesoshanmentido.Oshanhechocreerquepodéisganar.Oshandadofalsasesperanzas».

¿Qué rollo les estabametiendo?El coronel era parte chiste y partemisterio siniestro.Aveceshablaba comoun racistayotrasveces comounKennedy.Legustabaque elTenienteMetepatas lollevara en jeep por lamontañamientras él mordisqueaba un puro y daba sorbos de una pinta dewhisky, con unM-16 agarrado entre las rodillas, confiando en cazar un tigre o un leopardo o unjabalí.

—Puesbien,esepartidodeNotreDamecontraMichiganStatedelqueosestoyhablandoya lohanbautizadocomoelPartidodelSiglo.Paramínoessoloimportantecomoantiguocorredordelos Fighting Irish, sino también como enemigo del Vietcong aquí y ahora. He estado intentandoconseguirimágenesgrabadasdeesepartido.Megustaríaquehastaelúltimosoldadodeesteteatrodeoperaciones estudiara lo que sucedió. Yo confío en obtener la filmación del trayecto en tren quenuestrosFightingIrishhicieronalSpartanStadiumdeEastLansing,Michigan.Gentedepieen loscamposdemaízyenlasgranjaslecherassosteniendoletrerosenaltoquedecían«AveMaría,llenaeresdegracia,NotreDamesonunadesgracia».Megustaríamostrarhastaalúltimodevosotroslo

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que vieron los irlandeses, de camino a un estadio lleno de setenta y seismil personas cantando ymeciéndoseymoviéndosedeunladoaotroyvociferando.Ojalápudiéramossentarnostodosjuntosyverelsaqueinicial.

»LosIrishjugaronbajounanubedeinfortunio.Nuestroprincipalreceptordepases,NickEddy,resbalóenelhieloalbajarsedeltrenysejodióelhombroinclusoantesdequeempezaraelpartido.Siguientecontratiempo:despuésdelaprimerajugada,nuestromejorcentrotienequesalirdelcampoencamilla.LuegonuestromariscaldecampoTerryHanratty se tiróaunameléy fueaél aquiensacaron a rastras con el hombro fuera de sitio.Ya entrado el segundo cuarto,Michigan State nosestabavapuleandodiezacero.PeroentoncesunmariscaldecamposuplentediabéticollamadoColeyO’Briense lasapañópara lanzarunpasede tantode treintaycuatroyardasaunreceptorsuplentellamadoBobGladieux,quenisiquieraesunnombreirlandés,yluegolosIrishmantuvieronarayaaMichiganStatehastaquenuestrochutadormarcóungoldecampoalprincipiodelcuartotiempo.

»Y ahí lo tenéis, partido empatado, diez a diez.Queda unminuto y treinta segundos.Los Irishtienen el balón en nuestra línea de treinta yardas. El campo está ahí. La portería está ahí. Y loshombresestánahí.

»Pero el entrenador jefe, el entrenador Parseghian, decidió dejar pasar el tiempo y aceptar elempate.Eligiódejarelcamposinunavictoria.

»¿Yporquéeligióeso?»Fueporqueaceptarelempatenoreducíasusposibilidadesdeganaruncampeonatonacional.El

empatetodavíalosdejabaenprimerlugar,anivelnacional.Yunpardesemanasmástarde,enefecto,ganaronelcampeonato.AplastaronaUSCporcincuentayunoacero.

»Ahorabien,¿creéisqueosvoyadecirquefueunasabiadecisión?Puestalvezlofuera.Talvezfuerasabia.Peroestabaequivocada.

»PorqueesedíaenEastLansing,frenteasuenemigomásencarnizado,dejaronelcamposinunavictoria.

El sudor le caía amares de su gorra plana de color plateado sobre la cara, pero él no se lolimpiaba.Separó lasmanosde lascaderasysegolpeó lapalmade lamano izquierdaconelpuñoderecho,unpuñodenudillostananchoscomoeldeuncampeóndepesopesado.

—PorDios—dijoelcoronel—,voyaconseguirlafilmacióndeesepartido.Vamosasentarnosyamirarlajuntosaquíenestecampamento.

»Yahoraescuchadme.Noquieroqueoshagáisunafalsaideadeporquéosestoycontandoesto.Os estoy contando esto porque es justo a lo que nosotros nos enfrentamos aquí, invariablemente.Invariablemente nos enfrentamos a un terreno y a un enemigo. Y renunciar al terreno en pos dealguna teoría sobre el futuro no es la forma en que hacemos aquí las cosas. Vuestra misión esmantener esta colina segura para la zona de aterrizaje que tenemos, y también buscar entradas detúnelesyseñalarlasenelmapa.Notenéisqueentrarenlostúneles.Paraesoyatenemosaotragente.

Yciertamentehabíagenteparaaquello:losrudosCuchiCuchis.Aquellostipossedeslizabandecabeza por agujeros oscuros del suelo con una pistola en unamano, sus pelotas en la otra y unalinternaagarradaconlosdientes,alolargoyanchodelaregióndeCuChi.«CuchiCuchis»eraunnombre fabuloso.Al igual que los deReconocimientoEco, no teníanun apodo espectacular, perodebidoasuproximidadaCaoFhuc,quesonabacomolaexpresióninglesa«cowfuck»,nopodíanevitarserconocidoscomolosFollavacas,unrevéstontodelasuerte.Nisiquierateníanocasióndepintárseloenningúnsitioporqueeralenguajeobsceno.

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—Vamosaganarestaguerra.—¿Todavíaestabahablando?—.Ylosesfuerzosdeestasecciónenconcreto van a ser cruciales para ello. Pensad en nosotros como en infiltrados. Esta tierra quetenemosbajolospiesesdondeelVietcongubicaelcorazóndesunación.Estatierraessumito.Sipenetramos esta tierra, penetraremos su corazón, sumito y su alma. Eso sí que es infiltración deverdad.Yesaesnuestramisión:penetrarelmitodelatierra.

»¿Algunapregunta?Hubouna largapausadurante lacualoyeron lospájarosdeallí abajoyel taca-taca-tacadeun

helicópteromontañaarriba.Elcoronelsequitólasgafasdesolyselasapañóparamirarfijamentealosojosdelasección

entera.—¿SabéisloquedecíamossobrelosempatescuandoyojugabaconlosIrish?Decíamosqueun

empateescomobesaratuhermana.YonomevinealSudesteAsiáticoenmilnovecientostreintaynueveparabesaramihermana.VinealSudesteAsiáticoparapilotarmisionesconlosFlyingTigerscontralosjaponeses,ymequedéenelSudesteAsiáticoparacombatircontraloscomunistas,yahoraosdigoalgo,hombres,con toda lasolemnidadde laspromesasmásserias:cuandomemuera,memoriréenelSudesteAsiático,yseráluchando.

MiróalTenienteMetepatasyelTenienteMetepatasdijo:—¡Puedenirse!Y ellos acudieron a sus deberes respectivos. Metepatas y el sargento y los Cuchi Cuchis se

reunieronenelBúnkerUnoconelcoronel.Engeneral,alasecciónnolecaíabienaquelcivil,peroeranjóvenes,alfinyalcabo,yrespetabansuexperienciayteníanunavagasupersticiónsegúnlacualéllestraíabuenasuerte,puestoquehabíaalgunos—comoFlattyJollet,actualmentedesaparecidosencombateperoquelomásseguroesqueestuvieransimplementeausentessinpermiso—quehabíancompletadosuestanciayhabíanrepetidoynohabíanestadoniunasolavezbajofuegoenemigo.

Sobrelasoncecerocero—quincehorasmástarde—oyeronacercarseelM35:FlattyJollettraíanatresreclutasdereemplazo,unobajo,unomedianoyotroalto.

El sargento estaba allí esperando para recibirlos, el sargento de segunda clase Harmon, unhombrequemadoporelsolconlacamisaremangadaporencimadelosbíceps,laspernerasmetidasmeticulosamentepordentrode lasbotasyelpelo rubio, casiblanco, cortadopulcramenteal rape.Parecíaquenosudabanunca.

—Consideroqueestáis regresandodeunaausencia sinpermisoconunvehículopropiedaddelgobierno.

—Nononononononono—dijoFlatt—.No, sargento, no es nadade eso.Estos tipos se lopuedenexplicar.

—Sonustedesdosquieneslovanaexplicar—dijoelsargentoHarmon.—Loqueusteddiga,sargento.—UstedesvayandesfilandoalNúmeroCuatro—lesdijoHarmonalosreemplazos,ysellevóa

FlattyaJolletalBúnkerUno.En cuanto hubieron desaparecido, el soldado raso Getty, que como de costumbre estaba muy

trastornado por algo, tiró su casco al suelomojado de delante de las duchas y se sentó sobre elmismo con los pies separados y las rodillas juntas como si fuera una niña, con su pistolareglamentariasobreelregazo.

—¡SARGENTO!—gritóalguien.

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Getty levantó su arma por encima de la cabeza y prometiómatar al primer hijoputa que se lepusieraamenosdedosmetros.

El sargento Harmon fue hasta allí y se encontró a los tres reclutas de reemplazo mirandofijamentealsoldadoGetty.

—Aléjensedeesehombre—dijoelsargento.Elmásaltoestabaafligido,casilloroso.—Nisiquieraconocemosaestetipo.Acabamosdellegar.—¡Soloquieroquetodoelmundosedécuenta!—gritóGetty.ElsargentosedirigióaFlattyaJollet,queahoraestabanencuclillasjuntoalapuertadelBúnker

Uno.—Dejadlounpocoenpaz.—Eeeh…—Estababienhastaquehabéisaparecidovosotros.Dejaddemeterosconél.—Escuche,sargento.—Yamelohabéishechodecirdosveces.Yanooslodigomás.—Sí,sargento.—Nohacefaltarespuesta.Voyatenerosvigilados.Elsargentoeraunodeesoshombresrelucientesymodélicossinesfuerzo,alto,fuerte,relajado,

muyrubio,hastalascejaslasteníarubias,ylosojosdesconcertantementeazules,seleveíanazulesdesdecincometros.Unsoldadodetodalavida,veteranoyllenodecicatrices,supervivientedePorkChopHill,unade lasbatallasmásheroicasde laguerradeCorea,quemás tardeseconvertiríaenpelículaconGregoryPeckdeprotagonista.

—¿Habéisperdidolasarmasoqué?—dijo.Lostresnuevossequedaroncallados.—¿Soispacifistas?—Sargento, la han cagado con nuestra ruta. Fuimos a Edwards en vez de a San Diego y nos

mandaronaalgúnsitiodeJapónenvezdeaGuam.—Nosmetieronenunavióndecarga,sargento.—Nadienoshadadoarmas.Nadienoshadichonipío.—Os estoy tomando el pelo. Tenemos armas para vosotros. Lo que no tengo es tiempo para

sentarmey esperarmi camión. ¿Porquéhabéis tardadoquincehorasdemásparaviajar sesentayochokilómetrosporcarreterasenbuenestado?

—Lahancagadodeltodoconnuestraruta.—Yelaviónseretrasóunmontón.—PasamoshorasyhorasenJapón.—Creoquesemehaparadoelreloj.Sí…¿love?Sehaparado,sargento.—Nisiquierasabemosenquépuebloestamos.—Nienquéprovincia.—Nosabemosniquéesunaprovincia.Lasecciónesperóavercómomanejabanlostresnuevosaquelinterrogatorio.Parecíanincapaces

de recordar lo que Jollet y Flatt les habían instruido para que dijeran. Pero siguieron igual, sinaclararnada.

—Escuchen.

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—Sí,sargento.—SeencuentranustedesenCaoPhuc,conlaCompañíaDeltade laSeccióndeReconocimiento

Eco.EstamosenlaesquinasudoccidentaldeldistritodeCuChi,Vietnam.Distrito,noprovincia.¿HanoídohablardelTriángulodeHierro?PuesnoestamosenelTriángulodeHierro,estamosalsudoestedelmismo,enunazonaamiga.NosdedicamosamantenerestaáreaseguraparalaZonadeAterrizajequehayestablecidaen la cimade lamontañayqueno senospermite llamarbasepor razonesdeprotocolomilitar.Ecoestáaquíabajoyelrestodelacompañíaestáarriba.¿Leshandadoelclásicosermónde«noseanunatachuelaenelmapa»?Bueno,puesestoesunatachuelaenelmapa.Nolollamamos base, pero es una base permanente, y llevamos a cabo dos tipos de patrullas dereconocimiento permanentes: alrededor de lamontaña y luego por ella, o bien por lamontaña yluegoalrededor.

»Poraquísenosdabiencompartir.Tenemosacatorcetíosycompartimostrestelefonillos,peronohay letrinasquímicas.Asíque tecavas tupropiokaibo en la selvay loquehaces lodejasbientapado.Noquieroolervuestrapeste.No tenemoscomedor,aquíabajo loquehayson raciones.Elcomedor está montaña arriba, dos comidas calientes al día, y a todo el mundo le toca una porrotación,asíquehayquearreglarseconlosdemásparaelegirrotación,ysimevienemuchagentealloriquearmealaorejaporquenoestápillandobastantescomidascalientesytengoquemontarmeunhorariomuycomplicado,voyaestarcabreadoyosintentaréhacerlavidaimposible.Sinomedaisproblemas,yoavosotrostampoco,eseelsistemaporaquí.Buscaoslavidatodolobienquepodáisyyonoserémásqueunapresencia.¿Preguntas?Ninguna.Bien.Sigamos.

»Hay unidades por todo este teatro de operaciones que viven en rebelión abierta contra susoficiales.Estanoesunadeellas.Yoestoyaquípara llevaracabo lasórdenesdel tenientePerryyparaencargarmedequetodoshagáislomismo.¿Oísloqueosdigo?

—Sí,sargento.—Soyuntíotranquiloyfácil,peroloquedigolodigoenserio.—Sí,sargento.—Ahora, soldado Evans, soldado Houston y soldado Fisher. Acabáis de recibir el sermón.

¿Tenéisalgunapregunta?¿No?Estoydisponibleparaquemehagáispreguntascuandoqueráis.—¿Quésontelefonillos?—¿Telefonillos?Puestelefonillos.Duchas,¿quévanaser?¿Tenéisalgunapreguntamás?—¿Quéesunkaibo?—Esvuestraletrina,soldado.Creoqueesfilipino.—Sargento,necesitamossobar.—Bien pensado.Al catre.Quiero vuestros cuerpos en el horario americano, porque os quiero

despiertosporlanoche.Vaisapasarosunatemporadahaciendoguardias.ApoltronaosenelBúnkerCuatro.Siqueréiscolgarunahamacaenlosárboles,pormíbien.PoraquínuncavieneCharlie.IdaveralcaboAmesparaqueosdéhamacasyarmas.

No pudieron encontrar a ningún caboAmes. En su nuevo alojamiento, un búnker de sacos dearena con techo de lona que olía a calcetín sucio y repelente de mosquitos, encontraron cuatrocamastros,tresdeellosvacíosdetrastos.

Mientrassebuscabanlavida,suamigoFlattaparecióenelumbral.—Bienvenidosalaterceraguerramundial.Eh,sientolodeesabromitachungaqueoshicecon

lospetardos.VeníosalPurpleBaryosinvitoaunacerveza.

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—AlPurpleBar.—Siespúrpurayonovoy.—¿Tenéismiedodeloscaníbalespúrpura?—preguntóFlatt.—Notengomiedo,estoycansado—dijoelsoldadoHouston.—Vale,peroosdebouna.Flattleshizoungestoobscenoconeldedoysemarchó.Largocomoera,Fisher,antiguocentrocampistadebaloncestodelaligaestudiantildesecundaria,

ibadeunladoaotrorozandoeltechodeplásticoconlacabeza.—Estonoestámal—dijo.Permanecieron tumbados en sus catres, sinmoverse. Al cabo de un rato, Houston y Evans se

pusieronadiscutirsobrecómoconseguirunaCoca-Cola.Unasensaciónabrumadoradevergüenzaytimidezlesimpedíamoverse.Peronodurmieron:oyeronlavozdeFlattfueraylostresselevantaronylosiguieronhastaelPurpleBar.

Lacarretera,abiertaporbulldozersydestrozadaporlosjeeps,estabatanllenadebachesquenopudieronirporella.Caminaronporelarcén.Unjeepprocedentedelazonadeaterrizajelosadelantóehizosonarlabocina.

—Nolossaludéisnileshagáisseñalesparaqueparen—dijoFlatt—.Noparannunca.Lediounapatadaalparachoquesmientraselvehículopasabasinfrenarenmediodeunanubede

humosdeescape.A muchos de los aldeanos de Cao Phuc, considerados poco de fiar, los habían cargado en

camionesundíayloshabíantrasladadoaDiossabedónde.Losarrozalessehabíanidoalamierdaylosherbicidashabíanconvertidoloscaminosenfranjasdedesolación.Ahoralaaldeaerauncampoderefugiadosdestartaladoparadesplazadosamistosos,dominadoporeltemplodelaNuevaEstrellaenlabarriadadelsuryporelPurpleBarenladelnorte.

—Esperadaquí,vosotros—dijoFlattcuandollegaronalPurpleBar.—¿Porqué,cojones?—¡Esbroma!Elsargentoteníacosasquehacermontañaarriba,oseaquelamitaddelasecciónhabíaidoalbar.

Estaban todos sentados alrededor de dos mesas puestas juntas. Los días de paga había muchasmujeres, pero hoy solamente una, que llevaba zapatos de tacón alto negros y las uñas de los piespintadasderojo,sentadaaunamesaconunperiódicoyvestidaconpantalonesycamisa.

—Cuatrocervezas,cariño—dijoFlatt.—Nosoytuesclava—dijoella,yelpapasan,quesiempreestabaallí,lestrajolascervezasdeun

congeladorllenodeladrillosdehielodecoloramarillopardusco.Antesdeabrirsucerveza,Flattleechóporencimaunchorrodelaguayodadaquellevabaenla

cantimplora,ylosdemásloimitaron,enfangandolapajaqueteníanbajolospies.Atravésdelumbralloscontemplabaungrupodeperrosflacos.

LosreemplazosintentaronpreguntarleaFlattcuálpodíaserelpropósitoomisióndesuunidad,yFlattintentódecirlesqueerasobretodounacuestióndemantenerseguroelperímetroextendidodelazonadeaterrizaje.Peroentoncesotrodijo:

—TrabajamosparalaCIA.—Yocreíaqueestaeraunaunidaddereconocimiento.—Estanoesunaunidaddereconocimiento.Nosabemosquésomos.

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—SiestoytrabajandoparalaCIA,¿dóndeestámiboinaverde?EsossonloscapullosquetrabajanparalaCIA.LosBoinasVerdes.

Yasíderápido,yaqueprobablementetodavíanoseleshabíapasadolaborracheradelanocheanterior,lostresnuevosseemborracharonenelPurpleBar.

—Hayquereconocerteunacosa,Houston,eresunpocopalurdo,perohayquereconocerteunacosa:tienesclase.Tienesestilo.

—Gracias,socio.—No,enserio.Lodigoenserio.Estoyborracho,pero…yameentiendes.—Quesí,quesí.Quieresdecirqueeresmaricaymelaquiereschupar.—Cállate.¿Quiénsehatiradounpedo?—¿Quéquieresdecir?Elpaísenteroapesta.—Elquelohuele,loexpele.—Elquelonotaesquienlobota.—Elquelosiente,esquemiente.Lostiposquevivíancolinaarribaenlasinmediacionesdelapistadelhelipuertosiempreandaban

cubiertosdepolvo.Llevabanlacabezacasiafeitadaparanotenerqueaguantarelpelotodoguarro.Flattlespresentóalosreemplazosaunpardehombresdelazonadeaterrizajeyluegolesdijo:

—Preguntadlescómosellaman.—¿Cómo,alosdos?—Sí,capullo,alosdos,alosdos.—Eh,tú—dijoelVaquero—,escucha,amínomellamescapullo.Hubounapausa.Luegotodosrompieronareír,incluyendoalVaquero.—Vale—dijoporfin—.¿Cómotellamastú?—Bloodgutter.—Yunamierda.—Enserio.Bloodgutter.—Esasí.Sellamaasídeverdad.—¿Bloodgutter? Pero cómo mola ese apellido, tío. Es el apellido que más mola del mundo

entero.—Nomolatantocomoeldeesteotro.—¿Cómosellama?—Firegod.—¿Firegod?—Sí.JosephWilsonFiregod.—Uau.—YélsellamaBloodgutter—dijoFiregod.—Uau.—Asíqueestamosencoñados—dijoBloodgutter—.Vamossiemprejuntos.Tienesulógica.ElsoldadoGettyentróysesentósolo.—Gettypollas,¿dóndeestátufielcuarentaycinco?—Melohaquitadoelsargento—dijoelsoldadoGetty.—¿Dedóndehassacadouncuarentaycinco,soldadoGetty?—Locambié.

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—Locambiasteyunhuevo.Lorobaste.ElsoldadoGettyentróenunodesustrancesenlosquefingíasersordoyhablabasolo.—Noséporquémeestoyacordandotantodecasa—dijo.—NohagáiscasodeGettypollas.Estáchiflado.Estágagá.Todoelmundo, incluyendoaGetty,dejódehablarcuandoentraron los tresCuchiCuchis.Los

tresacercaroncadaunounasillaalamesaysesentaron,yunodeellossoltóunfuerteeructo.Era mejor no decir nada hasta que ellos hablaran, pero Flatt pareció sentirse obligado a

preguntar:—Eh,¿yahavueltoelsargentocolinaabajo?—Elsargentosiguearriba—dijoelsalvajenegro—.Seguísasalvo.Flattnopodíacallarse.—Túeresunindio—ledijoalaratatuneleraindia—,yestecapullodeHoustonesunvaquero.—¿Eresunvaquero?—No,encasano.Soloaquí.Sentadoasolas,elsoldadoGettyseguíaentrance.—Estoy en el bando equivocado —dijo—. Estoy en el bando equivocado. En la… misión…

equivocada.Expresabaaquelpensamientounayotravezyeraloúnicoquedecía.Losotrosdos se limitaronabeberse suscervezas,peroelCuchiCuchinegromiróal soldado

Gettyconelceñofruncido.—Meestácargandoconsucantinela.Meestáhinchandolasnarices.—Bah—dijoFlatt—,noquieredecirnada.—Ya séquenoquieredecir nada.No le voy ahacer daño. ¿Tengopintayodehacerle daño a

alguien?—No.—¿No?Puesmedaquelevoyahacerdañoaalguien.Unsegundojeepsedetuvofrentealapuerta.—Mierda…—dijounodelosnuevos—.EltenientePerry.—Noestáelsargentoconél,oseaquealamierda.Se dedicaron a cubrir al teniente de insultos mientras este entraba apresuradamente con una

sonrisafalsaysabia,diciendo:—Lessugieroquesedejendechorradasconmigo.Ysepusoarepartirdosificadoresdetalcoqueseconvertíaenbarroencimadetiencuestiónde

cuatrominutossilousabas,pesealocualtodoselloslousaban.AcontinuaciónpidióunabotelladeCoca-Colaysesentósolo,igualqueelsoldadorasoGetty.

De vez en cuando echaba ron de una petaca cromada dentro del gollete de su Coca-Cola. En unmomentodadosegiróparamirara losdemás, intentandoparecerunhombredemundo,señalóalVaqueroydijo:

—Tú.¿Túsabesquéeslarealidad?—¿Cómo?—Respuestaincorrecta.Eltipoeraasí,quéseleibaahacer,sobretodocuandobebía,queeralamayorpartedeltiempo.

Aparte de eso, su único problema era ser considerablemente joven y considerablemente tonto, al

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igualquelaconsiderablemayoríadelosdemás.Mástardedijo,sinmiraranadie:—Mefollaréalamuerte.Peronobesaréamihermana.Nadielecontestó.—Esunbobo,¿no?—dijoVaquero.—¿Quées?—Unbobo.—¿Quées?—Hedichoqueesunbobo,queestámaldelacabeza.—¡Esoes!¡Lohasacertado!¡AsíeselTenienteMetepatas!Cuando el TenienteMetepatas se levantó para irse les echó un vistazo a los reemplazos, y en

particularaFisher,eltipoaltoqueteníaunincisivomelladodejugarabaloncesto,yledijo:—Lapelículanoseacabahastaquemueratodoelmundo.Ysalióconandaresdescoordinadosysaltarines.Los demás se quedaron sentados y siguieron informando poco a poco a los nuevos de la

situación.—¿TrabajamosparalaCIA?—TrabajamosparaOperacionesPsicológicas.—¿YPsicológicastrabajaparalaCIA?Unodelosnuevos,Evans,estabamuybeodoynoparabadedecirtodoeltiempo:—Esloquehay.Esloquehay.Esloquehay.—¿Entiendesloqueestápasando?AlrestodeTerceroselosestáncomiendovivos.Alrestodel

VigesimoquintodeInfantería.—Dehecho,cuandoseloscomenvivos,estánmuertos.—Cállate.Peroesverdad.Estánmuertos,queesloqueyonoquieroestar.ElPurpleBarestabahechodepostesdebambúy techodepalmas.Cubríaelsuelounacapade

algoparecidoalapaja.Ydebajodelamisma,tierra.Noteníaparedes,solamentecortinasdecuentassobre las que había pintadas diversas escenas tropicales descoloridas: palmeras y cordilleras demontañas.Una zanja profundapor tres de sus lados evitaba que el PurpleBar se inundara cuandocaíantrombasdeaguasobreelpueblo.Enrealidadnoeramásqueunachozagrandeamuebladaconmesas y sillas plegables, todas mandadas por el gobierno americano. Un estruendoso generadorMASH bombeaba la energía del Purple Bar. Tres ventiladores demesa colocados en el lado oestegirabanlacaraaizquierdayderechacomosiestuvieransiguiendolaconversación.

—Sí.Sí.Sí.Esloquehay.—Unbrindisporloscabronesconsuerte.—¿Quiénessonloscabronesconsuerte?—Somos nosotros, porque hacemos como unas cinco patrullas almes en una zona totalmente

amiga.—Másomenosunavezporsemana,sí,yelrestodeltiemponoslimitamosanomolestaranadie.—Eseesnuestrodebersagrado.Dameunpiti.—¿Unqué?—Unpitillo.Uncigarrillo.Delosquesefuman.Parapoderfumarlo.—Vale.¿Losllamáispitis?

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—El problema es que cuando no estás de servicio, te gastas la paga. La verdad es que es uninconvenienteespantoso.

—Porque…osea…esloquehay.Unamesasituadajuntoalcongeladorservíadebar.Sobrelamismahabíauntocadiscosportátily

ciertojuguetedebarconocidocomolámparadelava,consistenteenunjarrodecolorámbardentrodelcualsepodíanobservarlosmovimientosluminososinsondables,casicíclicosaunquenollegabana repetirse, de la cera líquida dentro del aceite caliente. La chica de las uñas de los pies rojascontrolaba todos losdiscos.No sepermitíanpeticiones.Si lepreguntabascómose llamabaella tedecía:

—¿Quénombregustatú?Yoinventaminombreparati.Una nube de moscas negras y mosquitos llenaba el aire. El papasan los perseguía con un

matamoscasyunbotedeRaid.Lasratastunelerasseemborracharoneinvitaronaunascuantasrondasdeunmodoamigableque

no consiguió que dieran menos miedo. Solamente uno era negro, pero todos hablaban comonegratas.Teníancosasrarasquedecir.Filosofaban.TodosloshijosdeDiostienentúneles.Todoelmundo tiene un túnel que lo estimula. Bebieron y bebieron, bebieron hasta que los ojos se lesapagaronporcompletoyadquirieronunaspectociego,peroapartedeesonoparecíanborrachos,salvoporelhechodequecuandounodeellostuvoquemearselimitóabajarselacremalleraylohizo allí mismo en la mesa, sobre sus propias botas… No era habitual ver a blancos y negrosjuntos…Lagenteseaferrabaalasclasificaciones.

***

MinhentendíaladecepcióndeSkip,perolavidallegabacomounatormenta,yelcoronel,eltíodeSkip,eralafiguradominantedelpaisaje.Teníasentidobuscarcobijoenél.Sielcoronelnoqueríaque su sobrino estuviera en medio, no había problema. Gracias al coronel, Minh ya no pilotabaaviones y tenía razones para creer que podía sobrevivir a aquella guerra. En la actualidad solopilotabahelicópteros,ysoloparaelcoronel.SeponíaropadecivilconfrecuenciaypasabamuchosdíasasusanchasenSaigón.Teníaunanoviaallí,laseñoritaCam,unacatólica,ylosdomingosibaamisaporlamañanaconellaypasabalatardeensucasaencompañíadesunumerosafamilia.

Volar requería concentración y fatigaba la mente. Le estaba gustando ir de pasajero en elChevrolet negro. No había nada más que hacer que contemplar el paisaje asesinado de losalrededoresdelaRuta22ypreguntarseporlaseñoritaCam.

EltíoHaohabíaadvertidoaMinhdequeelseñorSkiphablabavietnamita.Eraporesoporloqueahora,mientrasllevabanalamericanoasunuevoalojamientoenlazonadelamontañaOlvidada,élysutíonoestabanhablandomucho.MinhibasentadodelanteySkipdetrásconunodesusbaúles.Sutíoconducía,conambasmanosenelvolante,lacabezainclinadahaciadelante,muyconcentrado,conla boca abierta como si fuera un niño. La lluvia repicaba sobre el techo negro del Chevy, unatormentaaparecidadelanada,unpocotempranaesteaño.El tíoHaointentóhablar inglés,peroelseñorSkipnocontestógrancosa.

—Talveznodeberíamoshablar.—Ah,amigoHao—dijoSkip—.Lalluviameestáponiendotriste.Minhprobótambiénunpocodeinglés.

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—Esbuenoaprenderaserfelizbajolalluvia.Asíserásmuyfelizcuandohayamuchalluvia.Eninglésaquellonosonabamuyinteligente.EltíofrenódegolpeyMinhtuvoqueapoyarlasmanosenlaguantera:unbúfalodeagua,que

cruzaba delante de ellos. Una furgoneta de carga que venía en dirección contraria se topó con elanimalypareciórebotarcontrasugruesopellejo,deteniéndosedeladoenmitaddelpavimentoroto.

Elbúfalobajólacabezacomositrataraderecordaralgo,sequedóquietounossegundosyporfinsealejó,adentrándoseenlahierbaaltaymeneandoloscuernosdeunladoaotro,conuntraseroquesemecíacomodospuñosalternándosedentrodeunabolsadepapel.HaoesquivóconelChevylafurgonetacaladamientraslabestiasedesvanecíaentrelascortinasdehumo.

EncuantodejaronlaRuta22,empezaronacogercarreterasenmalestado,casi impracticables,peromientraseltíomantuvieralasruedasenmovimientonoseatascaríanenelbarro.

—Cuando lleguemosa lapendientegrande—dijoHao—,voyabajardeprisa,porque tenemosquesubirporelotrolado.

—Lapendientegrande,¿esoquées?—Unacolinaquebajayotraquesube.Elfondoestállenodebarro.—Yaentiendo.Estabanhablandovietnamita.EltíoHaoenfilóelChevroletnegroporlalargabajada,despuéschapotearonporelfangaldel

fondoysubieronporelotrolado,muyabrupto,hastaquecasihabíancoronadolacimaydelantedeellosyanoseveíamásquecielo.Entonceslosneumáticosrompieronla tracciónyaullaroncomofantasmasatormentadosmientraselChevyresbalabalentamentehaciaatrás.Quedarontiradosenelfondo,sumergidosentreintacentímetrosdequingombó.HaoapagóelmotoryelseñorSkipdijo:

—Muybien.Puesaquíestamos.Minh se quitó las sandalias, se remangó las perneras por encima de las rodillas, se echó por

encimasuponchodeplásticodecolorclaroyfuevadeandohastalacasadelgranjeromáscercano,que lo siguiódevueltaal coche, tirandode subúfalodeaguaporel anillonasal,despuésatóunasogaalejedelanteroylosremolcóhastasacarlosdelbarro.

Skipmiróporlaventanillatraseraalsitiodelqueacababandesalir.—Salimosdeunagujeroparaentrarenotro.Noseestaría tanmalenelsitioalqueSkipestabayendo.Tendríaunfogóndegas, tuberíasde

algunaclaseyprobablementeunpardesirvientes.Unbañocalientecuandoloquisiera.Lamansión,por loque teníaentendidoMinh,pertenecíaa la familiadeunfrancés,unmédicoespecializadoendesórdenesauditivos,yadifunto.Porloquesesabía,aquelfrancéssehabíaquedadofascinadoconunodelostúnelesdelazona,sehabíapuestoaexplorarloyhabíatropezadoconunatrampa.

Elrepicardelalluviaamainóhastaconvertirseenunsuavetamborileosobreeltecho.Minhabriólos ojos. Se había quedado dormido. Su tío había vuelto a detener el coche. La carretera parecíaterminarallí,sumergidaenunarroyodesbordado,yMinhsepreguntósiahoraesperaríanaqueunbarqueroesqueléticoyencapuchadotransportaraalamericanoasuexilioenlaotraorilla.PeroHaocruzólacorrientemuypocoapoco.Noeraunarroyo,solamenteunriachueloqueseescapabadealgúnarroyoqueellosnoveían.

La lluvia se detuvo y ellos se adentraron lentamente en la aldea de lamontañaPerdida.El solvespertino arrancaba destellos del mundomojado, y la gente ya salía afuera como si no hubierahabidoningunatormenta,cargandoconsusfardosporelcamino,limpiandolasentradasdesuscasas

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defrondasdepalmera.Por loscaminosde tierra,en lossitiosmássecosya lasombra, losniñossaltabanalacuerdausandounascadenasdeplásticodecolorclaro.

SedetuvieronfrentealamansiónyMinhapenastuvounminutoparacontemplarlaantesdeverseinvolucradoenunapequeñaaventura:seoyerongritosprocedentesdedetrásdelacasayluegounancianoqueparecíaseruncriadoounpapasanapareciócorriendo,agitandounrastrilloporencimadelacabezaygritandoalgosobreunaserpiente.Minhechóacorrerdetrásdeél,seguidodecercaporsutíoyporSkip,yasíescomoseencontraronconunamonstruosaconstrictoraquezigzagueabaporelpatiodeatrás,unapitónatigradamáslargaquecualquieradeellos,máslargaquetodosellosjuntos.

—Dejadme,dejadme—dijoMinh.El anciano la golpeó una vezmás con su rastrillo infructuosamente y le dio el arma aMinh.

¿Ahoraqué?Noqueríaestropearlavaliosapiel.Laserpientesedirigióalarroyodedetrásdelacasa.Élsaliócorriendodetrásylepropinóungolpemuyfuerteconelrastrillo,confiandoenatraparlacabeza,peroloúnicoqueconsiguiófueclavarlelosdientesenelespinazo,ydeesamanera,conunaenergía espantosa, la serpiente se retorció hasta arrancarle el rastrillo de las manos, dio un girobrutal, todavía ensartada, y se adentró en la selva con el rastrillo a cuestas. Minh y el criado lapersiguieron,apartandolaespesuramojadaconlasmanos,losdosyaempapados,yelcriadogritó:

—¡Aquíestáelmonstruo!—Ysaliódedetrásdeunapoinsetiachorreanteconlacolaagarrada—.¡Estácasimuerta!

Peroelanimalvolvióaretorcerseysesoltódesumano.Minhconsiguiócogerelrastrillo,pisarel espinazo de la serpiente, extraer el rastrillo y usarlo para golpear varias veces el cráneo:sorprendentementefrágilyfácildepinchar.

Lacaradelancianoseiluminódegolpe,todosonrisas.—¡Vamos,vamos,selallevaremosamifamilia!Elsacerdotecatólicodelazonavinoasaludarlos.HablóconSkipeninglés.—No es necesario matar a esos animales. Mucha gente los tiene de mascota. Pero esta es lo

bastante grande como para quitarle la piel. Lástima que no tenga un poco más de colorido. Hayalgunasquesonrojasyotrasanaranjadas.—Unjovenbienvestido,probablementedelaciudad,conelalzacuellosdesacerdote—.Tieneustedquevisitarmiresidencia.

YSkipledijoqueasíloharía.LuegoMinhyelancianoestuvieronpaseandosupresaporlacalleprincipalquerecorríalaaldea,

Minhllevandolacabezayelotrolacola,concuatrometroslargosdeserpientecolgandoentrelosdos, que se veían obligados a extender los brazos libres para compensar su peso, y varios niñoscorriendodetrás,chillandoycantando.

De no haberse quedado el señor Skip en la casa con el sacerdote, Minh le habría aseguradoentonces:

—Esteesunpresagiomaravillosodesullegada.

***

William«Skip»Sands,de laAgenciaCentraldeInteligenciaamericana, llegóa lamansióndeCaoQuyen, que quería decir «Montaña Olvidada», con su macuto y los tres baúles de su tío en elmomentojustoenquelalluviatorrencialdejabapasoaunclimabenignoysoleadodelqueélnose

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sentíapartícipe.Vosshabíaafirmadoqueteníaalgoparaél,habíaafirmadoquelomantendríacercadeél.Pero

aquello había quedado en nada, al final lo había dejado tirado, y no precisamente cerca, en unbarracóndeaceroconaireacondicionadodelcomplejodelMandodeAsistenciaMilitardeTanSonNhut,comopartedeunefímeroproyectodedicadoalarecopilacióndeunasuperabundanciadedatosllamadoelsistemadearchivoCORDS/Phoenix,querecogíahasta laúltimaanotacióntomadaalgunavezporalguienquehubieravistouoídocualquier cosaenVietnamdelSur.Elgrupoacargodelproyecto,aproximadamentedieciochohombresydosmujeres, todosreclutadosentre lareservadepersonal,invertíalamayorpartedesusenergíasenintentarcuantificarlasdimensionesdelmaterialllegado a su sede: cajas llenas de papeles que formarían un camino de ocho pulgadas ymedia deanchoquedaríacuatrocomatresvueltasalecuadordelaTierra,obienquecubriríanporcompletoelestadodeConnecticut,obiensuperaríanelpesodelospaquidermosdediecisieteespectáculosdeBarnum&Bailey,yunlargoetcétera.Horrorydesesperación.Laconsideraciónporlasvíctimasdelascatástrofesmarinasmientras el aguaentrabaa raudalesen labodega.Undía llegó laordendemetertodaslascajasencarretillasycargarconellasbajoelsoltropicalporuncaminodecarbonillaquellevabaaunalmacéndelmismocomplejo.Findelproyecto.Adiós.

Luego, la espera en Cao Quyen —la «Montaña Olvidada», la «Montaña del Olvido», o bien«Olvidenestamontaña»—,queaélleparecióDamulog,segundaparte:otravezmásalládelúltimotramodecarreteraspracticablesymásalládelfinaldelaslíneaseléctricas.

Aél,aHaoyaMinhlessirvieronunacomidaabasedearrozypescadolosPhan,laparejadeancianosquecuidabadel lugaryaquienesélse teníaquedirigircomoseñorThoyseñoraDiu,ydespuéssuscompañerosloabandonarontrasprometerlequeHaoregresaríacadasemanaodiezdíastrayendocorreo,librosysuministrosdecomidadelejércitoparaladespensa.

La nueva casa deSkip tenía agua corriente procedente de un depósito situado en el tejado, asícomo tuberías, un cuarto de baño en la planta baja con retrete y lavabo y otro arriba con retrete,bañera,bidetyunpapeldeparedcondibujosdesirenasteñidosporunextrañomoho.Cuandoabriólaspersianasdeaquelbaño,mediadocenadepolillassalieronvolandodelretreteyselepegaronalcuerocabelludo.

Nadaeléctrico.Teníalámparasdebutanoconpantallasdecobreyhabitacionesllenasdemueblesdemimbreconelbarniztododescascarillado.Sillovía,yhacíamesesquellovíatodoslosdías,habíaunaslamasdemaderaquesepodíancerrar.Delpisodearribacaíanpequeñasgoterassobrevarioscuencos lacados que había repartidos por la sala de estar. Pero la casa estaba bien orientada conrespectoalvientoy resultabaacogedora.Lascosas sehacíancon sensatez.La saly lapimienta secogían con cucharilla de unos vasitos diminutos, como si fueran azúcar, en vez de apelmazarlasdentrodesalerosopimenteros.Sucamadelpisodearribaocupabaunaesquinadelacasacerradacon mosquiteras, contigua a la modesta suite principal y abierta a todos los movimientos de labochornosaatmósferanocturna.

Alaluzdelcrepúsculorecorriólamansión,unaestructuradedospisoshechaprincipalmentedeun material áspero y húmedo parecido al cemento o el adobe. En las paredes exteriores habíaagujerosdebaladelosqueentrabanysalíanunasavispaspequeñasynegras:durantelaocupaciónfrancesa,lazonahabíavistobatallas.Unaalcantarilladecementorodeabaloscimientosdelacasaysellevabaelaguadelalluviaaunarroyolentoyanchoquediscurríaporunahondonadadetrásdelapropiedad.Echóunvistazoalmismo:porélseaventurabanniñosnavegandoconflotadoreshechos

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de absolutamente cualquier cosaque flotara—leña, cocos, frondasdepalmera—,y lo llamaban agritosalpasar.

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Elpropietariodelamansión,unmédicofrancés,habíafallecidosindejar,porloqueteníaentendidoSands,másrastrodesupresenciafísicaqueunacostrasobrelasparedesdeuntúnel,perosuszapatosseguíanbienalineados juntoa lapuertaprincipal, trespares:unas sandalias,unaspantuflasyunasbotasdegomadecolorverdebrillante.Suszapatosdepaseohabíandesaparecidojuntoconelrestodeél.Elmédico,untaldoctorBouquet,habíallegadodeEuropaaprincipiosdeladécadade1930acompañadodesuesposa,quesegúnelpapasanseñorThosehabíavueltoenseguidaaMarsellaynohabíadejadorastroalgunodesupasoporlacasa,amenosquefueraellaquienhabíaelegidoelpapeldepareddelbañodearriba,lasinnumerablessirenasmanchadas.Encambio,elmédicodesaparecidoseguíapresenteportodalacasa.Desdelaépocadesumuertenadiehabíacambiadonada,todoseguíaesperando. En su estudio de techo alto contiguo a la sala de estar, la superficie de su gigantescoescritoriodecaobapermanecíaescondidadebajodeunmontóndelibrosyrevistasaguantadosporun modelo de porcelana del oído humano—interno y externo—, con partes de quita y pon; untintero,unceniceroymáscosasporelestilo,unsoporteparatrespipasdeespumademarcolocadasen ángulo ligeramente oblicuo, y junto a este varios libros amontonados con jirones de papel deperiódico o de un papel higiénico grueso de color beige que hacían de puntos de lectura, una decuyaspáginasseguramentecontenía laúltimapalabraquehabía leídoantesdedejarsusgafasaunlado y salir a dar un paseo durante el cual se evaporó. Salvo por el desorden de sus estudios, eldespacho estaba limpio y ordenado, los muebles cubiertos con páginas del Saigon Post y de LeMondeylaspersianascerradas.Skipfisgoneóconcautelaelinteriordeloslibros,concuidadodenocambiarlosdesitio,comosipudieravenirsudueñoacomprobarlo.Elmédicohabíatratadoaquellaspáginas con crueldad: manchas de té, huellas de dedos con tinta, largos pasajes subrayados conaplomo.Todosloslibrosllevabanenelinteriordelacubiertalainscripción«Bouquet»,conidénticacaligrafía y seguida de la fecha de su compra. No consiguió encontrar ni uno que no la tuviera.Además, elmédicohabía coleccionadodiecisiete añosde la revistaAnthropologe, una publicaciónconformatodelibro,sesentayochonúmerosconcubiertasdepapelrígido,todosdecolorbeige.Yvariasrevistasacadémicas,todasencuadernadasporañosconelmismopapelmarrón.ElúnicolibroeningléseraunacopiahúmedayencuadernadaenteladecolorburdeosdeNicholasNickleby.Skiplo había leído en la universidad y no recordaba nada delmismo salvo que en algún lugar de suspáginasDickensllamabaalaesperanzaalgo«tanuniversalcomolamuerte».

Al cabodeuna semana,Hao regresó, tal comohabíaprometido, trayendomuchas cajas de cartónplegadasparaguardarlosefectospersonalesdeldoctorBouquetytambiénelcorreodeSkip.Estesealegródeverlascajas:nolashabíapedidoél,selehabíaocurridoaHao.Entreelcorreohabíaunacarta loca y desesperante deKathy Jones.Al parecer ahora actuaba como enlace entre elMIANyvarios orfanatos, y su vida actual y las cosas que había presenciado habían vuelto su fatalismocalvinista—o,enopinióndeSkip,sufatalcalvinismo—completamentenegro:

Talveznodeberíaleerciertascosas.Peronomeimportadecirtequeempecéacreerenellashaceyatiempo,antesinclusodesaberconseguridadqueTimothyestabamuerto.Haygentepredestinadadesdeel iniciodelmundoapasar laeternidadenel Infierno,yyodigoquejamáslleganaconocerelsabordelavidanormal,sinoqueempiezansuinfiernonadamásnacer,yalohemosvisto,oporlomenos tú lo viste en Damulog, eso lo sé, y si has venido a Vietnam no hay duda de que lo estás viendo en Technicolor, y mecompadezcodeti,perotambiénmerío.

TalvezalgunosesténenelCielo,otrosenelInfiernoyalgunosenelLimbo,otalvezlosmundosesténseparadosgeográficamente.De hecho, ¿no te conté que encontré la referencia a las «distintas administraciones» por la que me preguntaste cuando estábamos

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haciendoelamornochetrasnocheennuestropequeñofosopsicodélicodepasióndeDamulog?PrimeraCartaalosCorintios,¿eraelcapítulo12?

Sí.Acabodecomprobarlo,12,5-6.PeronoreconocílacitaporqueesdelaBibliadelReyJacoboyyoestoyacostumbradaamiEstándarRevisadaquedice:«Yhay

una variedad de servicios, pero unmismoDios.Yhay variedad de trabajos, pero es elmismoDios el que inspira todas las cosas entodos».Oseaque«administraciones»setraducedeformamásadecuadacomo«servicios».Noserefiereaningunaordengubernamentalangélica,¿loentiendes?

Ojalátetuvieraaquíparahablarcontigo,peronuncahemoshabladomucho,¿verdad?Cadavezquenosjuntábamosterminábamos«juntándonos»enseguida.Apenasteconozco.Peroteescribo.

¿Estásleyendoestascartas?

Puesno.Dehecho,no.

Entre chaparróny chaparrón, unabrisaprocedentedel arroyoahuyentaba a losbichosymanteníafresco el estudio. Skip se pasaba las tardes vestido con la bata de seda veteada del médico,investigandolosochocientostítulosenfrancésquecomponíansubiblioteca,yalprincipioapenasseaventurabanuncamásalládelapropiedad.

Para matar el tiempo se dedicaba a devolverles la tercera dimensión a las cajas de cartónplegadas.Haotambiénhabíaencontradounrollodecintaadhesiva,transformadaporelclimaenunaruedasólida,deltodoadheridaycompletamenteinservible.DesdelostiemposdeMarcoPolo,pensó,aquelclimasiemprehabíaderrotadoalacivilizaciónoccidental.

MandóalseñorThoalatiendadelpuebloacomprarcuerdayledijoalaseñoraDiuqueibaacasadelsacerdotelocalatomarelté.

La casita del père Patrice estaba a unos cien metros bajando por la calle principal y luegotomandouncaminomarcadoportablonesdestartaladosquevadeabanloscharcos.

Elpère Patrice viajabamucho por el distrito, y Sands no había pasadomucho tiempo con él.Sandsnolehabíareveladoqueeracatólico.Yseestabaplanteandonohacerlo.Talvez,pensó,estoycansadodemife.Noporquehayasidopuestaapruebaysehayaroto,comoladeKathy.Solamenteabasedenoejercitarla.Ylapequeñaiglesiaalairelibre,untejadodehojalataapoyadoenpostesdemadera con base de cemento, ¿acaso era allí donde se representaba aquel drama de la salvación?Sandsencontróalsacerdote,unhombrediminutoensujardíndiminuto.ElpèrePatriceteníaunacararedondaysimiesca.Másorificionasalquenariz.Ojosenormesdereptil.Másqueexótico,parecíaunhombredelespacioexterior.Letrajoasuinvitadotécalienteenunvasodeagua.Sesentaroneneljardín sobre bancos demadera húmedosmientras la lluvia reciente goteaba de las altas flores dePascua.Sandsprobósuvietnamita.

—Tieneustedbuenapronunciación—dijoel joven,y luegosepasómediominutohablandodeformaincomprensible.

Skipyahabíapracticadoelvietnamitaconlosdoscriadosdelamansiónylohabíaencontradoimposible.

—Losientomucho.Noloentiendo.¿Puedeustedhablarmásdespacio?—Hablarémásdespacio.Losiento.Hubounsilencioentreellos.—¿Tienelaamabilidadderepetirloquehadicho?—Sí,claro.Hedichoqueesperoquesutrabajoaquívayabien.—Creoqueestáyendobien,gracias.—EstáustedconelConcilioEcuménicoCanadiense,¿no?

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—Sí.—EsunproyectodetraduccióndelaBiblia.—Tenemosmuchosproyectos.Eseesunodeellos.—¿Esustedunodelostraductores,señorBenét?—Ahora estoy intentando mejorar mi vietnamita. Más adelante es posible que ayude con la

traducción.—Hablemoseninglés—dijoelsacerdoteeninglés.—Comoustedprefiera.—¿Quierequeoigasuconfesión?—dijoelpèrePatrice.—No.—¡GraciasaDios!¿Noesustedcatólico?—AdventistadelSéptimoDía.—NoconozcolafedelSéptimoDía.—Esunareligiónprotestante.—Porsupuesto.ADiosnoleimportaquiénesprotestantenicatólico.Diosnoescatólico.—Nosemehabíaocurrido.—¿QuésignificaesteuniversoparaDios?¿Esunaobrade teatro?¿Esunsueño?¿Talvezuna

pesadilla?Elsacerdotesonreía,peroparecíaenfadado.—Esunagranpregunta.Creoquesepuededecirqueesunmisterio.—Estoyleyendounlibroqueesunamaravilla.Skipesperóaquecontinuara,peroelotroyanodijonadamásdellibro.—ConocíalcoronelSands,allíenlamansión.¿Esamigosuyo?¿Colegasuyo?—Esmitío.Tambiénamigomío.—Elcoronelmefascina.Noloentiendo.Perocreoquenodeberíamoshablardeél,¿verdad?—Noestoysegurodeaquéserefiere.—Creoquedeberíamoscontenernos.Sandsdecidióque el sacerdote era unhombre sutil, incapazde completar sus pensamientos en

inglés.—¿Puede usted ayudarme a recopilar cuentos tradicionales de esta zona? —le preguntó al

sacerdote.—¿Cuentostradicionales?¿Cuentosdehadas,talvez?—Sí.Esunhobby,uninteréspersonalmío.Noestárelacionadoconmitrabajo.—¿NoestárelacionadoconsutrabajoconlaBiblia?—Bueno,porsupuestoquemeayudacomotraductor.Meayudaaentenderellenguajedelmito.—Pero¿estádiciendoustedquelaBibliaesunmito?—Enabsoluto.Loquedigoesqueusaellenguajedelmito.—Porsupuesto.Estáclaro.¿Quizálegustantambiénlascanciones?—¿Lascanciones?Claro.—Déjemecantarleunacanciónvietnamita—dijoelsacerdote.SequedómirandoaSkipalosojos.Susrasgosparecieronaclararse.Sumiradasevolviógrave.

Durantecasiunminutoestuvocantandomaravillosamenteconunavozfuerteyclara,sinvergüenza,carentedecualquiertimidez.Lamelodíaeraagudayteníaunmatiznostálgico.

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—¿Haentendidoustedlacanción?Skipsehabíaquedadosinhabla.—¿No?Durantetresañoshacedesoldadoenunpuestodeavanzada,lejosdesualdea.Sesiente

muy solo y trabaja duro todos los días cortandobambú.Le duele el cuerpo. Solo comebrotes debambúyunpocodefruta,yelbambúessuúnicoamigo.Entoncesveunpezenlacisterna,quenadasolo, tampoco tieneamigos.Creoquenosotrossomosasí:elseñorBenétyelpèrePatrice.¿No leparece?YoestoylejosdemialdeayustedestálejosdeCanadá.

Nodijomás.—¿Yasíseacabalacanción?—Asíacaba.Vealpeznadandosolo.—Creoquetieneustedunpocodesangreirlandesa,señor.—¿Porqué?—Alosirlandeseslesencantacantar.—Aveceshayconcursosdecancionesyyoacaboenbuenlugar.Tambiénesmihobby,igualque

ustedtieneelsuyo.Aquí,enestedistrito,todosloshombrestienenquecantar.Tenemosquecantarlesalosdemonios.

—¿Deveras?—SeñorBenét,escierto,losdemoniosvivenaquí.—Yaveo.—Sihaceustedalgopocorespetuoso,porejemplosihacesusnecesidadesen laselva,ellos le

gastaránalgunabromapesada.Puedequelecaigaunárbolencima,queserompaunaramayledéenlacabeza,oquesecaigaustedenunagrietayserompaunhueso.Puedeserunaformachocantededescubrirquehayespíritusenlaselvadeporaquí.

—Sí—dijoSkip—,yomequedaríaimpactadosipasaraalgoasí.—Haymédicoschinosenestedistritoqueejercensumedicinaaquí.Conocenaesosespíritus.Ya

le llevaréundíaa su tienda. ¿Legustaría ir?Tienencosas fascinantes.Elmédicodelque lehabloguardaprácticamentetodaslaspartesdeuntigredentrodefrascosyjarros.Simueleloshuesosyselosdaacomeraunperro,elperrosevuelveferoz.¿Sabíaustedquehastalaceradelasorejasdeuntigrepuedecurarciertascosas?Ylospelosdurosdelacoladelelefantepuedenaliviaralamujerqueestá de parto. También muelen las astas del ciervo y las mezclan con bebidas alcohólicas parafabricar un tipo de bebida maligna. Que vuelve a un hombre demasiado poderoso en cuestionessexuales.Yusanmásanimales.Muchasserpientesymuchasclasesdeanimales.Talvezinsectos,nolosé.Elmédicochinosabetodasesascosas.

—Creoquemegustaríaverunacolecciónasí.—No todo lo que hace esa gente es pura superstición.Algunas cosas ya están verificadas. Las

tribusconstruyencapillasyaltaresenlaselva.Casitasdiminutasparalosespíritus,hechasdebambú,obiendecáscaradecoco.Losespíritusestánallí,allíesdondeviven,yotengoquecreerloporquehaypruebas.Sedioelcasodeunjovenqueorinódesdeñosamentedelantedeunaltardelbosqueyluegosufrióuncolapsomentalcompleto.

—Pasmoso.—YomellamoThongNhat—dijoelpèrePatrice—.Esperoqueseamosamigos.—Tengomuchasganasdeello—dijoSkip—.Porfavor,llámemeSkip.Y así eran las cosas: tomar té con el sacerdote, pasear cuando no llovía, un programa de

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gimnasia.Cogióelhábitodecuriosearenlasrevistasfrancesasdelmédicoydetraducirpasajesqueestehabíasubrayado.Sehacíacargodelosarchivosdelcoronel.Avecesoíahelicópteros,cazasobombarderosysesentíaatrapadoenunaburbujairidiscentedeirrelevancia.

Ensusiguientevisita,HaoletrajounacartadelmayorEddieAguinaldo,reenviadaporlaembajadadeManilaaladireccióndeCorreosdelEjércitoquelaembajadadeSaigónteníaenSanFrancisco.

Hedecididocasarmeconciertamujerjovenymuyguapa.¡Puessí!Yasabíayoquesequedaríaustedasombrado.Meloimaginoaquídelantedemíconlabocatodaabierta.EllasellamaImogene.EslahijadelsenadorVillanueva.Tengointencióndeconvertirmeenalgunaclasedepolíticolocal,nodemasiadocorrupto,perociertamenterico,ypuedeustedconfiarenmíparaayudarleaganardinerosiregresaanuestrobellopaís.

He recibido una visita bastante curiosa de un «señor Tal y Cual» de la Sección Política de ustedes enManila. Nome atrevo areferirmeaéldeformamásespecífica.Hamostradoun interésconsiderablepornuestrosamigosyparientes,esdecir,pormiamigoypariente de usted. Confío en que entienda la alusión. La intensidad del señor Tal y Cual ha sido muy poco característica de loscompatriotas de usted. Tengo que decir que me ha dejado un poco alterado. En cuanto se ha marchado me he ido directamente alaparador a servirme algo fuerte, y ahorame acabode sentar a escribirle esta carta sinmásdemora.Siento cierto apremio.No semepuedepresumir saberlo todo,peroquiero transmitirlemiconviccióndequehabríaquehablarledeestoanuestroamigoyparientedeinmediato.Delviolentointerésqueestásuscitandoydeciertotonoantagonistaporpartedealguienquesesuponequeeselcolegadenuestroamigoypariente.Creoquedeberíaustedaconsejarledeinmediatoqueempieceaecharalgúnvistazoatrásdetantoentanto,auncuandosesientacompletamenteseguro.

Skip,enMindanaometimoslapata.Unerrorimperdonable,ylolamentamosmucho.Nopuedodecirnadamásqueeso.Sinceramentesuyo,

Yfirmaba«Eddie»,conunacaligrafíallenadeflorituras.

Jamessoñabaconcombatesarmados:condispararbalasinútilesconunarmaimpotente.Lossueñostemandanmensajes,esolosabía.Nolegustabanaquellosmensajesenconcreto,avisosdequeenlabatallaseveríasinpoder.Pormuchoqueelúnicositiodondevierabatallasfueraensussueños.

Los helicópteros que llegaban y partían de la zona de aterrizaje de la Compañía Deltatransportaban únicamente suministros.De vez en cuando algún herido tenía que tocar tierra en unhelicópterotiroteadoquenopodíacontinuar,peroerancosasdelasqueEcosolooíahablar.

A James no le importaba ir de patrulla. Las patrullas duraban dos días. Tu pelotón subía endirecciónoesteporelcaminoenzigzag,cruzabalazonadeaterrizajeydabaunrodeohaciaelsur;acontinuacióncogíaunviejocaminoqueatravesabalasgranjasabiertas,entrabaenunazonaselvática,salíaalyermoescarpadoquehabíandejadolosherbicidasyporfinregresabaalCampamentoEco.Obiendabaunrodeohaciaelnorte,luegosubíahaciaeloestehastacruzarlazonadeaterrizajeyporfinbajabalamontañayregresabaaEco.Decaminoseacampabaparapasarlanoche.Ynuncapasabanada.

ElladooestedeCaoPhucseguíasiendoVietnam,sinarrasarporlosherbicidasyllenodeselvaydearrozalesdondeelenemigopodíaesconderseconfacilidadparatenderemboscadas.Elladooestetendríaquehaberlesdadomiedo,peronoselodaba.Losgranjerosquehabíadispersosporlaladera,trabajandoconlaazadaensusbancales,siemprelossaludabanconlamano.Sedecíaquesusfamiliasnuncahabían tenidoproblemascon los franceses,ni tampococonelVietcongni con los soldadosamericanos.

En el lado norte tampoco pasaba nada, pero se encontraba deshabitado, era rocoso, abrupto yestabaplagadodebarrancos;amenudounahojafueradesitioreflejabalaluzydabalaimpresióndeserundestelloblancoenloaltodeunacantilado—comosiallíhubieraalgoescondido—,yesolo

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aterraba.Cualquiertroncocaídoparecíaaprimeravistaunfrancotiradorechadoentrelamaleza.—¿Quéesesodeahí?—Uncagarrodeelefante.—¿Túcreesqueponenbombastrampaenellos?—Oh,sí.Oh,sí.Oh,sí.Ponenbombastrampaentodaclasedeporqueríasdeesas.—Esoesmierdadebúfalo—dijoHombreNegro—.Poraquínohayelefantes.—Estállenodeelefantes.—Enestamontaña,no.Esoesmierdadebúfalo.—Esgrande.—Losbúfalossongrandes,atontado.—¿Yquéesesoquelecreceencima?¿Setas?—Las setas crecenencimadecualquierporquería.Crecendisparadas—dijoHombreNegro—.

Crecentandeprisaquelopuedesver.Esunalucine,anivelhormonalytodoeso.—Bueno,entodocaso,enesasmierdasdeahínohaybombas.—Esegrupodecagarroslotenemosinspeccionado.—Esemontóndemierdaestábajocontrol.—Yasoloquedansetentayseismillonesmás.—Sí—dijo Hombre Negro—. Se os viene encima un buenmontón de porquería, embustes y

patrañas…Peronotenéisqueaguantarla,loquetenéisquehaceresdesviaresamierdaconvuestraMenteMáxima.

Enaquelmomento,HombreNegroeraelúnicohermanodecolorde laSecciónEco.HombreNegrohacíaesto.HombreNegrohacíaaquello.HombreNegroteníanombre,peroeraunsecreto.

—NoquieroquenadiemellamenadamásqueHombreNegro—insistía—.Nopiensovivirconelnombredeesclavoqueelhombreblancolesdioamisantepasados.

Sehabíatapadoconcintaadhesivalaetiquetaconsunombredeluniformeysenegabaadecirleanadieloqueponía.

—Soy un hombre negro con una polla negra —les dijo Hombre Negro—. Pero no es muygrande.Muchos tíosvanporahí rajandodesuspollasenormesdeveinticincocentímetros.Perosituvieranveinticincocentímetroscomolosquincequetengoyo,estemundodemierdasepartiríaporlamitad.Asídepotenteesmipequeñapolladequincecentímetros.

Fisher y Evans eran los únicos amigos que tenía James, amigos para siempre. También creíacaerlebienalsargento.EncuantoalrestodelaSecciónEco,hablabanunidiomaextraño,ylamayorpartedeltiempoaJamesledabanmiedoyloenfadabanylehacíansentirseexcluido.

Echabamuchodemenossucasa.AhoraentendíaloquedebíadehabersidoparasuhermanoBillmarcarunnúmeroenHonoluluyhacerquesonaraelteléfonoenlacocinadesumadre.Searrepentíadelahosquedadindolenteconquehabíacontestadoalasllamadasdesuhermano.Teníafantasíasenquehablaba con suhermanoy se reía con él, en quehablaba con sus amigos, en quedominaba aaquelloscabronesdelaSecciónEco,soñabaconnoestarallí,conestarencualquierlugarsalvoallí,conestarenalgúnlugarquefueraotraparte,connohaberoídohablarnuncadeaquellugar.

Se podía obtener un permiso y conseguir que alguien te llevara a la enorme base delVigesimoquintode InfanteríaobienhastaSaigónenunode loscamionesde lazonadeaterrizaje.Ibancamionesparaallítodoslosdías.

El sargento, el sargento Harmon, no era tan distinto a los demás como había parecido al

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principio.Decíapalabrotas,bebíacerveza,aunquesolamenteunaodosencadasentada,ysuúnicootrovicioeramascartabaco.Algunosdelosmuchachoslollamabanchimó,ytambiénlomascaban,poradmiraciónalsargento.Eramayoryteníaaspectodepelículabélica:pelorubiomuyclaro,ojosazulceleste,lacarabronceadayunasonrisaqueascendíaporunladocomoladeElvisPresley.Enaquelmismoladoteníauncolmillomellado,perosudentaduraeramuyblancaynolequedabatanmal, y James casi pensabaqueno lehabría importado tenerundientemelladode aquellamanera,comoelsargento.Fishertambiénteníaundientemellado,peroeraunamelladuraquedabaganasdearreglarla.Y al sargento el uniforme le caía perfectamente. Lo llevaba de una forma que daba laimpresióndequeenlostrópicostampocohacíatantocalor.

FlatthabíapredichoquesupaganuncalosencontraríaallíalasombradelamontañadelaBuenaSuerte,peroseequivocaba,yyabienentradoelmesdemayo,JamesmandóunapartedetodosloschequesasumadreenPhoenix.Unavezellalemandóamododerespuestaunabrevenotadentrodeunsobremuygrande,sussaludosgarabateadosenunahojadepapeldecartadecolorderosaquedebíadehaberrobadodealgúnsitio.Ledabalasgraciasyledecía:«Nosvanlascosasbien,elSeñorestáhaciendoquecuadrenlascuentas».

Elsegundoviernesdejuniolascosascambiaronunpoco.Jameshabíacumplidoañoseldíaantes.ÉlyFisheryEvans salierondelCampamentoEcoconunpase legítimoy llegaronhasta la aldea.Evanshabíadecididoqueteníanquefollar.

—Venga—dijoEvans—.Queestamosenunaguerra.Ysomoshombres.—Yonoveoningunaguerra.—Estáportodaspartes,oporlomenosenalgunapartecercadeaquí,yyonoquieromorirme

sinfollarprimero.Fueron alPurpleBar, y enunahilera de chozas detrás delmismo, sobre unos sacos llenos de

paja,EvansyFisherperdieron lavirginidadyJames traicionóaStephanieDaleconunachicaqueporlomenosnoteníaunosdienteshorrorosos,nideningunaotraclasequeélpudieraver,puestoqueno tuvoquesonreírniquehablar,ypor tantonohizo faltaningunamentiraparaempezar lascosas, ni tampoco ninguna sinceridad, y ella gimió como una salvaje y lo elevó dando vueltas atravésdeunanubedelujuriajovial.

Lostresreclutassereunierondespuésenelbar.Todavíalesquedabandieciséishorasdepermiso,peroyahabíanhechotodoloquesepodíahacerenelmundo.

Evansselevantólasgafas.—¡Hemojado!—Vengaya.—¿Qué?—Nodigas«Hemojado».Esmuyforzado,tío.—Yunamierda,forzado.Noesforzado.Estalcomosoy.—¿Talcomoeres?¿Túeres«Hemojado»?—Déjamequetedigaunacosa, tío,déjamequetedigaunacosa,mamón.—Evansselimpióla

barbilladecervezaydijo—:Muybien,vale,eravirgen,loadmitoaquímismo.Hasidolaprimeravezdemivida.

Ellosseloquedaronmirandohastaqueélsevioforzadoapreguntar:—¿Ytúqué?—Sí,yotambién—dijoFisher.

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—¿Ybien?¿Vaquero?—No,yono.—Teaferrasaesamentira.—Puessí.—Vale.Siemprehassidounpocomásprecoz.—Pero hay una mentira que no pienso mantener. Hoy no cumplo diecinueve años, cumplo

dieciocho.—¿Cómo?—¿Cómo?—¿Acabasdecumplirdieciocho?—Sí.—¿Oseaquetenías…diecisiete?—Yalocreo.—¡Diosmío!¡Eresunniño!—No,yano.Evansextendióelbrazoporencimadelamesatemblorosaparaestrecharlelamano.—Eresmásprecozdeloquenuncasospeché.Conmotivodesucumpleaños,Jamesinvitóavariasrondas.Estabafelizyborrachoyllenode

hilaridad.Ahoraquehabíallegadoadondelahumedaderaespantosaylacervezabarataeinfinita,realmenteentendíaelsentidoyelpropósitodelacerveza.

Bebieron hasta que se hizo de noche.YFisher, que era católico, cayó bajo una nube negra depenitencia.

—Voyacogerunaenfermedadvenéreaseguro.—Nosepuedecogerunaenfermedadvenéreasillevasgoma.—Ya—dijoFisher,llenodeculpa—,esosiunoconsigueabrirelpaquete.—¿Cómo?—¡Quenoheusadogoma!¡Noconseguíabrirelpaquetito!¡Losmalditosdedosmetemblabande

lonerviosoqueestaba!—Lapróximavezusalosdientes…quépenadetío.Regresaroncaminandoaoscuras.Fishersenegóadejarqueloconsolaran.—Diosmevaadarunaenfermedadvenérea.—¿Vasairaconfesarteporesto?—Tengoqueir.—«Católico»suenamuyparecidoa«cólico»—dijoEvans.Fisherparecióherido.—Esoesuncomentariorealmentemaligno.—¿Tútienesunareligión?—lepreguntóEvansaJames.—Ahorasí,yalocreo.AhoraveneroelPolvoSagrado.Ningunodeellosllevabalinterna.Noveíannada.Elbarrosecoeracomocementoyellosseiban

tropezandoconlosbaches.—¡Lohemoshecho!—gritóEvans.—¡Yalosé!¡Lohemoshecho!Escomo…Fishersequedósinpalabras.

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—¡Ya lo sé!—dijo Evans—. ¡Lo es! ¡JODER! Me he corrido tan fuerte que casi me ha salidodisparadalapuntadelapolla.

Fisherpusotonosuplicante:—Vamos,tíos,ahoraenserio…¿habéisusadocondón?—Joder,sí,yoheusadocondón.—Ytúserámejorquelouseslapróximavez—ledijoJamesaFisher.—¿Quépróximavez?Nopiensohacerlonuncamás.—Yunhuevo.—SolamentelerezoaDiosparaquenomedéunaenfermedadvenérea.Mearduelehorrores,y

luegolainyeccióntambiénduele.—Dicenquelainyecciónescomositemetieranuncuchilloporelculo.—Eslasegundapeorinyeccióndespuésdeladelarabia.—Porlomenosunaputanotepuedepegarlarabia.—Ah,¿no?—Mierda.Nolosé.—¡Noamenosquetemuerda!Cuando llegaronal campamento intentaronnohacer ruido,peromientrasandabanbuscandoel

BúnkerCuatro,Evanssusurróentonoalto:—¡Nomelopuedocreer!¡Sivoyamorir,porlomenosyanomorirévirgen!Fishersesentóencorvadosobresucatre.Hablabacomosiestuvieramareado.—Mesientomuymalvado.Notendríaquehaberlohecho.Miprimeravez,yhepagadoporello.Evanssedesplomóensucatreyempezóatocarse.—¡Tío,yotengoganasdebesarmelapolla,detanenamoradoqueestoydeellaporhabersido

capazdeFOLLAR!Alguienlegritódesdeotrobúnker:—Bueno,puesTELACASCASyluegotecallasDEUNAPUTAVEZ.Fishersepusoderodillasenlaoscuridad.—Por favor,Dios, por favor, santaMaría y Jesús y todos los santos, nome dejéis coger una

enfermedadvenérea.—No sé cómo describir esto —dijo Evans—. Pero después de terminar, yo estaba tumbado

encimadeellayellahajuntadolaspiernasdeunaformaasíyhahechocomosi…frotaraunapiernacontralaotra.Ymehesentido…demaravilla.

—Yoteníatantomiedoaquenosemelevantara—dijoJames—queeracomosimedolieralabarrigatodoeltiempo,aquí.—Setocódebajodelesternón—.Peroporunavezenesteestercolerodemierda sientoqueyanohede tenermásmiedo.Porqueestoycondenadamenteborrachoypor fintengodieciochoaños.

—Oh, tío—dijoFisher—.Me loha sacado todo.Mehaquitadomispoderes.Están trabajandoparaCharlie.EsasputastrabajanparaCharlie.

***

En junio, durante las lluvias, un hombre llamado Colin Rappaport tuvo un rendezvous con Kathy

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Jonesenlacarretera,nolejosdelaenfermeríadeellaenSaDec,eneldeltadelMekong.ÉlteníaunLand Rover. Estaba haciendo recados para World Children’s Services, para quienes trabajabaúltimamente.Éllaayudóasubirsumochilaysubicicletanegradestartaladaalapartedeatrásdesuvehículoylosdospusieronrumboalorfanatoquehabíaaochokilómetrosdelacarreteraconstruidaporlosamericanos.

EllalohabíavistovariasvecesenManila,hacíatiempo.Enaquelentonces,Colinestabadelgado,mientrasque ahora sehabíapuesto fondón, despuésdehaber vivido enEstadosUnidosdurante elúltimoañoomás.Mientrasconducíadejósusombrerodepajaaunladoysesecólacoronillaconunpañueloempapado.Siemprehabíasidocalvo.NosepodíasermuchomáscalvoqueColinRappaport.

—¿Estásdisfrutandodetuvisita?—Joder,Kathy,yocreíaquelamiseriayaerabastantemaladeporsí.—¿Ynoloes?—Osea,nuncamehabíapreguntadoquépuedehacerunaguerra.—Alcabodeuntiemposevuelvegracioso.Noesbroma.Acabastanmaldelacabezaqueyate

ríes.CuandollegaronalOrfanatodelEmperadorBaoDai,losdesmañadosayudantesestabancortando

puñadosdeverduraspodridasyechándolasdentrodeuncalderodeaguadelluviahumeante.—Este es Van —le dijo ella a Rappaport mientras un joven se acercaba apresuradamente

limpiándoselasmanosenlacamiseta.—SeñoritaKathy,québuenotenervisitas,venga,yomeencargo—dijoVan,despuésleestrechó

lamanoaRappaporty losguioaoscuraspor laescaleradeaquellaantiguafábricahastael tercerpiso, en cuyo enorme recinto diáfano vivían doscientos niños en seis corrales de tela metálica,segregadosporedades.

Ellugarestabainundadodemoscasydeunolorameadosyaasadura.Vanhizoquelosdeochoañossepusierandepieyformaranfilasvestidosconsuspantalonescortosysuscamisasdealgodónsucias y deshilachadas para cantar una canción de bienvenida, durante toda la cual Rappaportpermanecióinmóvilconunasonrisademiradavidriosa,yluegoKathylovolvióallevarescalerasabajohastalaclínicademalaria,uncobertizoconeltejadodehojalatadondeunadocenadepacientesyacíanaoscurasyensilencio.Kathycaminóporentreellosabriendoalafuerzapárpadosybocas.

—Nohaynadiemuerto—ledijoaColin.Cuandosalieron,unpardeayudantesestabancargandoelcalderoentrelosdosydirigiéndoseal

edificioprincipal,unoconuncazoenlamanolibre.—Oh,Dios—dijoColin—.Esloquecomen.Ellalollevóbajounárbolysesentaronsobreelsuelodetierra.—Yocreíaqueerabasura—dijoél—.Aguadefregar.—LosqueestamosenelPurgatoriocantamosgratamentesobreelInfierno.—Creoqueteentiendo.Vanllegócondosvasosdeté.—Adelante,estáhervido—dijoKathy.Colinsepusoelvasoentre lospies.Sesacóunpurodelbolsillo izquierdode lapecherayun

encendedordelderecho.—Esundesastre,¿verdad?—Elplanetaentero.Esunaépocamaligna…Losiento,¿estoyhablandocomounaloca?

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Eraobvioqueélcreíaquesí.—Noteníaniideadeloagobiadaqueestabas.Élnodijonadamásmientrasseterminabasuté.Sefumólamayorpartedesupuro,lequitócon

cuidadolabrasafrotándolacontralaraízdeunárbolyvolvióameterseelrestoenelbolsillodelapechera.

Prontoarrancóalloverconfuerza,ysequedaronsentadosenelLandRovermientraseldiluviochapoteabasobreelcaminodeasfaltoyconvertíasusuperficieenunlechodepinchosdecristal.

—Voy a ver si puedo conseguiros algunos suministros—dijo él—.Me gustaría desviaros unaviónentero.Creoquepuedohacerlo.Yaveré.

—Bien.Gracias.—¿Hayalgomásquepuedahacer?—¿Puedoquedarmeelrestodelpuroquetienesenelbolsillo?—¿Estásdebroma?—No.—¿Fumaspuros?—Devezencuando.—Supongo que esmejor dejarte hacer lo que quieras—dijo él—.Dios bendito, tenemos que

conseguirtealgodeayuda.—TengoaLanyaLee—dijoella.—¿Aquiénes?—ALanlavasaconocer.EllayLeesehacencargodellugarcuandoyonoestoy.—Ah.Ya.¿Tienenformación?—Sondegranayuda.Notienenformaciónoficial.Muycompetentes.—Kathy, es por eso por lo queme fui delMIAN. Porque se limitan a dejarlo a uno tirado en

mediodelaselvaconunmapayunabrújula.—Perorecibimosayudadetodaspartes.Lossoldadosamericanosnosdancosas.Hacemosloque

podemos.—¿Lossoldadosamericanososayudan?—Lasemanapasadamedieronmediolitrodexilocaína.Mehepasadotodoeldíadeayeryesta

mañanasacandomuelas.Lesencantalaxilocaína.Denoserporellasevanalarrancamuelaslocal,queselassacaconunastenazasenormesyponiéndoleslaplantadelpiesobreelpecho.Ysiélnoestá se las arrancan ellosmismos con un clavo. Un clavo de carpintero. Tardan un día entero ensacarseunamuelaasí.Sonmuyestoicos.

—Nocomolosfilipinos,¿eh?—Losfilipinostienenmuchoorgullo,peroestoicosnoson.—Nuncaseavergüenzandesupadecimiento.—Locreasono,megustamásesto.Enestepaísnoquedanadamásquelaverdad.—En fin—dijoColin, y por su tono ella se dio cuenta de que debía de haber estado diciendo

locurasotravez.Alllegaralaenfermeríaaquellanochemandóasusayudantesacasaehirvióunpocodearrozen

elhornilloportátilPrimus.Hacíadosdíasqueteníasuhamacaocupadaporunniñoenfermo.Hizopapillaelarrozdentrode

uncuencoconlabasedelamanoyluegoseladiodecomeralpacienteconundedo,acunándolela

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cabezacon laotramano,unacabezaqueeracomounacáscaravacíadehuevo.Noconsiguióquetragaranada.ProbóadarleaguadearrozyCoca-Colaenunbiberón,peroelniño,decincooseisaños, había perdido el reflejo de chupar.A lamañana siguiente o la otra lomás probable es queestuvieramuerto.¿Ysivivía?AunadelasjaulasdeBaoDai.

Sesentóenunabutacademimbreyse fumó lacolilladelpurobaratodeColinRappaport.Laaldeaestabaaoscuras.Losniñosgemían,losperrosladrabanylasmujereslevantabansusvocecillasparallamar.Aquíyallísemovíanunoscuantosfarosdebicicletas,callearriba.Estuvodandocaladasalpurohastaquesemareóylevinieronnáuseas,entonceslotiróyvolvióallevarsubutacaadentro,cercadelatrampaparamosquitos,alladodelniñoquerespirabaconestertoresenlahamaca,ysequedódormida.Ensussueñoslagentehablabaconmuchaclaridadenvietnamitayellaentendíatodoloquedecían.

A lamañana siguiente el niñomantenía la cabeza erguida él solo y daba sorbos de agua y deCoca-Cola de una taza. La supervivencia era una brisa que tocaba a algunos y a otros no. Ni laesperanzanilafaltadeesperanzateníannadaqueverconello.Recogiólacolilladepurodelatierradondelahabíatirado,lalimpióunpococonlosdedosyselafumóparacelebrarlo.

***

Monsieur Bouquet, el hermano del difunto doctor Bouquet y encargado de poner en orden elpatrimonio delmédico, llegó a lamansión en una furgoneta con chófer para recoger los efectospersonalesdelmismo.

SandshabíaarregladolascosasparaestarfueraentretantovisitandolasaldeasconelpèrePatrice,perocuandoregresóalfinaldeldíaelhermanoseguíaallí,unfrancéscasianciano,fornido,conlamandíbulainferiorprominente,vestidocomosifueraapasarundíadepesca,conpantalonescortosdecolorverdeolivaychalecoajuegoconmuchosbolsillos,yabanicándoselacaraconungorrodelonaquellevabaunfiador.Suingléseramejorquepasable.Deentradanohablódesuhermano,sinodemujeres.

—Amedidaquemehagoviejo, lasmujeresmayoresme resultanmás atractivas.La carnequeantesmeparecíafeaahoramepuederesultarencantadora.Esasvenastanfinasymoradas,yasabe,tanfrágiles.Esunhermosomisterio.Lanuevaelegancia,laeleganciadelasmujeresserenas,eshastamáserótica.MeheaficionadoaadoraralasmujeresdelapinturadelRenacimiento.Muycarnosas,muyblandaspordentro.¿Tieneustedunaconcubinanativa?

Sandsnoteníarespuesta.—¿No?Yonoconozcoestepaís.Perocreíaqueaquí lacostumbreeratenerunaconcubina.Yo

prefierounaviuda.Unamujercrecida,comoyalehedicho.Haexperimentadoelamorysabecómocomportarseenlacama.

—Heestadosintiendocuriosidadporsuhermano—fueloúnicoqueSkippudodecir.—Claude era mi mellizo. No mi gemelo, no nos parecíamos. Recibí la noticia de que estaba

muertoyno lloré.Deprontopensé:Oh,no,no,no,no loconocía,ni siquieraunpoco.Crecimosjuntosperonuncahablábamosdenada,simplementevivíamosallí.Porloqueamírespectaba,éleracomo un visitante. Pero que no venía a visitarme amí, sino amis padres, o ami hermana, algoparecido.Ahora,estamañana,cuandolohevistotodo,estacasadondeélvivía,hesabidomáscosasdemihermanodelasquesabíadespuésdemuchosañosdejuventudviviendocodoconcodo.Alver

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esto,mehepreguntadosiencontraríaciertograbadoqueteníamosennuestrodormitorioenaquellaépoca. Sí, ya sé.No tiene sentido que lo tuviera después de tanto tiempo.El payaso en reposo, sellamaba,oalgoporelestilo.Unpayasoconlosojoscerrados…¿Muerto?¿Inconsciente?¿Porquécerrados?Mihermanolotuvomuchosañosenlapareddeencimadesucama.Deniñomeaterraba.YelhechodequeaClaudeno ledieramiedoelpayaso,aquellomeaterraba todavíamás.Yél sequedómuchísimos años en este sitio, y no teníamiedo.Amíme damiedo.—Monsieur Bouquetsuspiró—.Hemos cargado las cajas, tal como usted puede ver. Gracias por empaquetarnos tantascosas.Ledejaré losmueblesyesascosas.Enalgúnmomentoalguiende la familiavendráaviviraquí, cuandose terminecon loscomunistas.Cuandoustedes loshayanderrotado.PorahoravoyaseguiralquilándolelacasaasuConcilioEcuménico,y…—VolvióamiraraSkip—.¿NoestaráustedconlaCIAoalgoparecido,talvez?

—No.—Vale.—Serio—.¡Noestoypreocupado!—Nohayporquéestarlo.Skiphabíaapartadounoscuantosobjetosfrágiles,paraqueelhermanolosempaquetaraporsu

cuenta y riesgo.Monsieur Bouquet decidió dejar la delicada representación del oído humano delmédico,consushuesosdeporcelana.

—Con lomuchoque tuvo que viajar para llegar aquí.No tiene sentido devolverlo, sería tristellevárselo. Tenemos que rescatar los libros y los papeles para la biblioteca familiar, eso sí. Es lapasióndenuestrahermana.Papelesymáspapeles.Paraellaesnuestroúnicolegado,peroyoledigo:¿Para qué hemosde tener un legado?Las cosas siempre acabandestruidas, las cosas buenas y lasmalas.TantasguerrasytormentassobrelaTierra.Destrucciónsobremásdestrucción.¿QuélepasóaClaude?Puf,explotó,noquedónada.Lomismonospasaatodos:cenizas,polvo,puf,eseesnuestrolegado.No,estonomelollevo.Sepuederompercondemasiadafacilidad.

Consusgruesosdedoselhermanoseparóyexaminócadapieza:eloídoexternoconsupavillonysulobe,luegoelconduityeltympanyluegoellabyrintheosseuxconsuvestibuleysus fenêtres,sus canaux semi-circulaires y el nerf auditif, el limaçon y el largo tubo de la trompe d’eustacheadentrándose en el cráneo. Hasta los minúsculos huesos internos habían sido reproducidos yetiquetados:elmarteau,enclumeyétrier,ylascellulesmastoïdiennesdeaspectoesponjoso.

—Ah,tanpequeñoytanperfecto,unaantigüedad,desuépocadeestudiante,diríayo.Claudesegraduóenmilnovecientosveinteomilnovecientosveintiuno.—Ydeprontodijo—:¿ConoceustedeltúneldondeClaudevolóenpedazos?¿Lohavisto?

—No,losiento.Nolohevisto.—Avez-vousfrançais?Unpeu?Cambiaronalfrancésylaconversaciónsevolviórápidamentetrivial.Alpareceraquelhombre

voluminosoysólidodisfrutabadesusconversacionesmássincerasenunidiomaenquenosesentíalobastantecómodocomoparacamuflarse.

SandsintentóconvenceramonsieurBouquetparaquesequedarahastalamañana,peroparecióqueledabamiedopasarlanocheallí,pormuchoquelascarreterasfueranpeligrosas.Yaestabatodoenlafurgoneta.Semarchómientrasoscurecía.

Semanas atrás, monsieur Bouquet había mandado una carta al apartado de correos del falsoConcilioEcuménico para avisar del día de su llegada. Entretanto, Sands había desarrollado ciertoapegoporalgunosdelostextosdeldifuntoyloshabíacolocadodentrodesusbaúles,escondidosde

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losparientesyherederosdelmédico.Asíqueelhermanosemarchósinellos.Y semanas más tarde, Sands seguía trabajando en traducir párrafos que el médico había

subrayado: textos filosóficos de intelectuales franceses de los que Sands nunca había oído hablar,pasajesabstractosqueloenardecíaninexplicablemente,uno,porejemplo,sacadodeunartículoquesetitulaba:«D’unvoyageaupaysdestarahumaras»,escritoporalguienllamadoAntoninArtaud:

Que laNature, par un caprice étrange,montre tout à coup un corps d’homme qu’on torture sur un rocher, on peut penserd’abordquenec’estqu’uncapriceetquececapricene signifie rien.Maisquand,pendantdes joursetdes joursdecheval, lemêmecharmeintelligentserépète,etquelaNatureobstinémentmanifestelamêmeidée;quandlesmêmesformespathétiquesreviennent;quanddestêtesdedieuxconnusapparaissentsurlesrochers,etqu’unthèmedemortdedégagedontc’estl’hommequi faitobstinément les frais—et à la formeécarteléede l’homme répondent celles,devenuesmoinsobscures, plus dégagésd’unepétrifiantematière,desdieuxquil’ontdepuistoujourstorturé—;quandtoutunpayssurlaterredéveloppeunephilosophieparallèle à celle des hommes; quand on sait que les premiers hommes utilisèrent un langage de signes, et qu’on retrouveformidablementagrandiecettelanguesurlesrochers;certes,onnepeutpluspenserquecesoitlàuncaprice,etquececapricenesignifierien.

Armadoconunapluma,unpapelenblancoyunapiladediccionarios,seenzarzóen labatallacontrasuespantosavaguedad:

Cuando la Naturaleza, por un extraño capricho, de pronto retrata en una roca el cuerpo de un hombre que está siendotorturado, al principio uno puede pensar que esto no esmás que una casualidad, y que esa casualidad no significa nada. Perocuando, tras pasar días y días a caballo, uno ve que el mismo hechizo se repite, y cuando la Naturaleza manifiestaobstinadamentelamismaidea;cuandolasmismasformaspatéticassehacenrecurrentes;cuandoenlasrocasaparecencabezasdediosesconocidos,ycuandoasíemergeunmotivodemuertecuyoprecioelhombrepagaobstinadamente;cuando la figuradesmembradadeunhombreesrespondidaporaquellos—cadavezmásdefinidos,másseparadosdeunamateriapétrea—delosdioses que siempre lo han atormentado; cuando una región entera de la Tierra desarrolla una filosofía paralela a la de sushombres; cuando uno sabe que los primeros hombres usaban un lenguaje de signos, y cuando uno descubre ese idiomaformidablemente ampliado en las rocas; entonces uno ya no puede pensar que esto no esmás que una casualidad y que esacasualidadnosignificanada.

De acuerdo, no estaba claro lo que había querido decir el misterioso monsieur Artaud, nitampocolaubicacióndesupaísdelostarahumaras,yaestuvieraenalgunapartedelNuevoMundoosolamenteenlacabezadeaqueltalArtaud.Perolarazóndelmédicoparaelegirelpasajeeraobvia:elviajeropálido,latierraextranjeraindescifrable.

Elmédicoensímismoeraunenigma.Alparecerhabíadejadolaprácticadelamedicinamuchoantesdemorirysinembargonosevolvióacasa.Sandscreíaentenderporqué.

Ademásdelasdiversaspublicaciones,Sandstambiénsehabíaguardadounodeloscuadernosqueconteníanlasanotacionesprivadasdelmédico.Lohabíarobado.LasnotasdelmédicosedesplegabanenunacaligrafíafuerteycuadradaqueSandssededicabaatraducir,juntoconlospasajesfavoritosdelmédico,enuncuadernopropio:

QueridoprofesorGeorgeBataille:Enmarzode1954leí,enformademanuscrito,suensayo«Pinturaprehistórica:Lascauxoelnacimientodelarte»enlasoficinasde

laBibliotecadeBellasArtesde laSorbona,donde trabaja lamujerdemihermano.Yoestabavisitandomipaísnatal procedentedeIndochina,dondellevoviviendocasitreintaaños.

Skipreconocióeltítulo—Lascauxoulanaissancedel’art—,unvolumengrandeyhermosocongrabadosacolordelaspinturasencontradasenlasparedesdeunsistemadecavernasdelaregiónfrancesa de Lascaux. Se maldijo a sí mismo por haber dejado escapar aquel libro, pero le había

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parecidodemasiadovaliosopararobarlo.

Hacepocoheadquiridoellibro,conlasfotografías.Porsupuesto,esmagnífico.¿Puedo llamar su atención hacia un libro de Jean Gebser, un «profesor de civilizaciones comparadas» austríaco, Caverna y

laberinto?Cito:

«Regresaralacueva,aunqueseaconelpensamiento,eshacerunaregresióndelavidaalestadodenohabernacido».«Lacavernaesunaspectomaternalymatriarcaldelmundo.»«LaiglesiadeSaintes-Maries-de-la-MerenlaCamargadelsurdeFranciaenlaquelosgitanosveneranaSara,lamadonanegra.»(M.Bataille:EnEspaña,3.000gitanosvivenencuevascercadeGranada.)(M.Bataille:¿Eslamenteunlaberintoporelquelaconcienciaavanzaatientas,oeslamenteelvacíosinlímitesenelqueciertos

pensamientoslimitadossurgenydesaparecen?)(¡M.Bataille!:Pensamosqueenlascuevaslascosassonnegras,pero¿acasonosonpálidas,casitraslúcidas,muypálidas?)«Teseoal entrarenel laberintoestá regresandoalúteroa findeconseguirunposible segundonacimiento,unagarantíacontra la

segunda,irremediableyterriblemuerte.»(M.Bataille:Enelaño1914elcondeBégouëndescubriólacuevadeTroisFrèresenlosPirineos:enella,untúnelporelqueuno

solopuedepasarestrujándosecomosifueraelcanaldelparto,desembocaenunacámaraenormecubiertadeimágenespaleolíticasdedocemilañosdeantigüedadcentradasenlacaza,incluyendoanimalesfantásticosymediohumanos.Esacámaraseusabaparainiciarachicosadolescentesenlasfilasdeloshombresconunritualdemuerteyrenacimiento.)

«Si la cueva representa la seguridad, la paz y la ausencia de peligro, entonces el laberinto es una expresión de la búsqueda, elmovimientoyelpeligro.»

(¿Buscandounasalida,monsieurBataille,obuscandounavíadeescape?¿Obuscandounsecretoenelcentrodelascosas?)(Despuésdemásdesesentaañosdevida,meveoamímismo.)(Caos,anarquíaymiedo:esomemueve:esodeseo:serlibre.)¡Sí!

EltextodelacartainconclusadeBouquetalacadémicoBataille,apasionada,intrincada,prolija…Skipseguíatrabajandoenella.

AlcabodeunmesenaquellamadrigueradejóqueelpèrePatricelosacaraarastrasalaluzparavereltúnelenelquehabíadesaparecidoeldoctorBouquet.Cruzaronelpuebloandandoysalieronporel ladonorteycogieronunsenderoque ibaaloeste,deapenasmediokilómetro.Alpiede laladera de una colina erosionada por la lluvia había un hoyo en la tierra, nada más que eso. Laexplosión fatal había socavado la entrada y las lluvias lo habían hundido todo. Como pasaba contantasotrascosasenaquelpaís,susprofundidadesleestabannegadas.

—Estanoesunazonacrítica—anuncióelsacerdote—.Eltúnelnoseusaba.—¿Quiénpusolabombatrampa?—Élllevabasupropiadinamita,estoyseguro.Llevabadinamitaparaabrirelcaminocerradopor

undesprendimiento,talvez.Ysevolóasímismo.EnelcaminoderegresoSkipledijoalsacerdote:—Mealegrodenohabertenidoqueentrar.—¿Eneltúnel?¿Porquéqueríaentrar?—Noquería.—¿Cómodice?—Soyuncobarde,pèrePatrice.—Bien.Asívivirámásaños.El sacerdote iba a cenar muchos días a la mansión. Si sus deberes hacia la parroquia no le

obligaran a estar viajando todo el tiempo, se habría presentado allí cada noche. La cocina eraprodigiosa.ResultabaquelaseñoraDiusabíahacertortillas,salsas,exquisiteces,cualquierplatodelacocinafrancesa,yaunquenoteníaingredientesexóticosamenudo,aunasíservíaplatossencillosy

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deliciosos de pescado fresco o cerdo con arroz y verduras silvestres, y fruta nativa de postre.Tambiéncocíariquísimosbollosparalacenayhogazasdoradas:Sandsteníalasensacióndequeallísepodríavivirabasedepanyagua.

Enaquellasdiezsemanasde lluvia,elcoronelnohabía idoniunavezavisitarlo.Salvoporelsacerdote que venía dos o tres veces por semana y Nguyen Hao más o menos con la mismafrecuencia, Skip seguía sin amigos y regresó a su soledad natural—sabía aquello de sí mismo,siendo hijo único de unamujer que trabajaba, de unamadre viuda—, a la soledad de los días deescuelalluviososporlatarde.Enelmáspequeñodelostresdormitoriosdelpisodearribacumplíacon su vocación de perito de historias fragmentarias en el archivo «2242» de su tío. Un empeñodesganado. Cada vez que se ponía a ello se cansaba al cabo de poco. Las tarjetas del archivo delcoronel habían sido ordenadas alfabéticamente de acuerdo con los nombres de la gente o bieninterrogada o bien mencionada en interrogatorios entre 1952 y 1963 por todo lo que ahora eraVietnamdelSur.Skiphabíadejadoatráslafasedelrecortarypegaryhabíaempezadoahacernuevosencabezamientosparacadaunadelasdiecinuevemiltarjetasduplicadasyaorganizarlasdeacuerdoconlosnombresdeloslugaresmencionados,paraquealgúndía—¡todavíalejano!—fueraposibleconsultar aquella información por su relación con distritos, aldeas o ciudades. ¿Por qué no se lahabíaclasificadodeentradaporaquellascategorías?¿Yaélquémásledaba?IgualquehabíapasadoconelCORDS/Phoenix, losagenteshabían llevadoacabomisiones,habíanhechopreguntas,habíantomado notas y habían sido trasladados a otras destinaciones. Él ansiaba topar con una pista yseguirla hasta algún descubrimiento devastador —que el primer ministro Ky espiaba para elVietcong,oquelatumbadealgúnemperadorescondíamillonesenconceptodebotínsaqueadoporlos franceses—,perono, allí nohabía nada, nadadevalor.Lonotaba al tocar las tarjetas con losdedos. No solo la información era tan trivial y embrollada como la del CORDS/Phoenix, sino queademás se había quedado completamente anticuada. Aquellas tarjetas de ocho por doce ya soloservíancomoartefactos.Ycomotalesrevestíanciertafascinación.

Aprincipios de agosto,Hao le trajo undiccionario francés-inglésmás grande—apetición deSkip—,yunpaquetedefotocopiasdepartedelcoronel,queconteníaunartículobastantefamosodeStudiesinIntelligence titulado«Observacionessobreelagentedoble»,deJohnP.DimmerJr.,yunborrador parcial del artículo del coronel, el que lo habíametido en líos, siete páginas escritas amáquinayconnotasamano,llenasdeideastodavíamásincendiariasquelostextosfranceses,mássiniestrasquelasadvertenciascrípticasdeEddieAguinaldo.Porunladocompletamenterazonablesyporotroalarmantementedesleales.

Elcoronelhabíaadjuntadounanotaamododeportadadel«agentedoble»deDimmer:

Skipper,vuelveafamiliarizarteconJ.P.Dimmeryéchaleunvistazoaestaspáginasdemiborrador.Tengomás,perosonunlío.Teloirépasandopocoapoco,osinotevolveráslocointentandoordenarlo.

Sands recordaba muy bien la tarde en que había oído mencionar por última vez las«Observaciones sobre el agente doble». No la recordaba por esa mención, sino por otroscomentariosquesutíosehabíapermitido.

AcompañadoporelsargentoStorm,elcoronelhabíaacudidoarescatarmomentáneamenteasusobrinodelCORDS/Phoenix.Devezencuandoelcoronelselollevabaaalmorzar,yaqueldíaselollevóalaterrazadelNewPalaceHotel.Enloaltodelasescalerasunletreroanunciabael«FESTIVAL

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DEHAMBURGUESAS»deldía.Skipcomentóquevolvíaaestarencapotado,yJimmyStormdijo:—Enlostrópicosnohaycielo.Jimmyllevabaropadecivilyestabamuyanimado,Skipsospechabaquetomababenzedrina.Elcoronel,conlasillaescoradaylamanoderechaenlabarandilla,estabasentadoconlamitad

orientaldeSaigóndesplegadaasuespaldaydelantedeunbufetenorme,elFestival,porlovisto,deHamburguesas.Enlamanoizquierdasosteníauncóctel.

—LaAgenciaseencuentraenestadodeshock.LodeKennedyylodeBahíaCochinosnoshandejado temblando.No sabemos cómo comportarnos, cómo llevar a cabo nuestramisión.EnCubaestamosdandotumbos,comoagenciaycomopaís.SomoslaRusiadelhemisferioOccidental.

—¿Ycómoteparecequenosestányendolascosasaquí?—dijoSands—.¿Enestosmomentos?—Depende de los vietnamitas, Skip. Llevamos tanto tiempo diciendo «depende de los

vietnamitas»queyasuenaa trola,peroes laverdad.Lacuestiónes:¿cómolosayudamos?Tú,yo,nosotros,losqueestamossentadosaestamesa.Merefieroanosotrostres.Creoquenecesitamosunanuevaestrategia.Tenemosquesermásagresivosalmanejarlainformación.

—¿Agresivos?—Lostres.—¿Nosotros?—La pregunta que hacerse sobre la recogida de información es dónde para uno de tomar la

iniciativa.¿Salimosahífueraybatimoslaselvaagresivamente,loacumulamostodoagresivamenteyluego se lo dejamos pasivamente a otros para que lo examinen?No. El examen continúa todo eltiempoyatodoslosniveles.

—Laselección—dijoJimmy.—Ynomegusta lamaldita selección,Skipper.Loquedejamos fuera,entreotrascosas,esese

datoenconcretoquenosvaacomplicarlavidaporquevanapreocuparanuestrossuperiores.Yloquequedaal finalesunamentiraqueaterrizaen lamesadearriba,unamentira feliz,unamentiramonstruosa.

—Unmonstruofeliz—dijoJimmy.—Las mentiras llegan arriba, y lo que se deriva hacia abajo son malas políticas, políticas

equivocadas.Segeneranideasestúpidasporlasvíasoficiales,yahífuera,enelterreno,nosponemosapatalearcomolocos.Luegocuandonosloordenanmandamosuninformequediceconcautelaydeformamuymeditadaqueestamossembrandoelcaos.Yasabescómofuncionaeso,Skip:Mindanao.Pasamosdesertímidoseineficacesaserardientesymemos.

—Ardientes,muybuenapalabra—dijoJimmy.—¿Porquétenemosqueesperarlamemezquevienedelcentrodelacolmena?—dijoelcoronel

—.¿Porquénogenerarnuestraspropiassituaciones?Llegadoaquelpunto,JimmyStormsefijóenlaclientaquehabíasentadaaotramesa,unamujer

asiáticajovenybastantealta,cautivadora,magníficamenteacicalada,envueltaenunglamourdeseda,ydijo:

—Megustaríauntarmedesusalsapicante.Elcoronelsoltóunarisa.—¡JA!Subufóncogióuntrozodecarnedesusalsaconlosdedosylasorbióenlaboca.—OtalvezquierahacerloSkip—dijo.

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…Elborradordelartículoempezabaconunanotamanuscrita,conlosarabescosdelcoronel,yfotocopiada:

TODAVÍANOTENEMOSINTRODUCCIÓN.Quiero revitalizar la distinción entre análisis e inteligencia: claridad de pensamiento, pureza de lenguaje, corrección en el habla,

etcétera,claridadenlosdatos,alavistadequelafaltadeclaridadhallevadoalaperversióncompletadelafuncióndeInteligenciadenuestraAgencia.Susmotivosysupropósito.Ysusmedios.Susmétodos.

Marquemosesocomoloprincipal:ladistinciónentreanálisiseinteligencia.Orwell:«Lapolíticayelidiomainglés».Introduccióndemomento:BÁSICAMENTEDECIRAQUÍQUEESTAMOSHABLANDODEDOSFUNCIONESDELOSSERVICIOSCLANDESTINOS:

INTELIGENCIAYANÁLISIS.YELDERRUMBEDELASBARRERASQUELOSSEPARAN,ETCÉTERA.

En la página siguiente empezaba elmaterial escrito amáquina. Skip se esperaba un embrollovergonzoso.Alatercerafraseyasediocuentadequealcoronelledebíadehaberayudadoalguien:

Contaminaciónmutuadelasdosfunciones

Nuestrasfigurasretóricasrelacionadasconelprocesodecomunicaciónnosproporcionanunmodeloparaestadiscusión.Hablamosde«líneas»decomunicaciónyde«cadenas»demando,recordándonosanosotrosmismosquelainformaciónsemuevedeformalinealy concatenada a través de las filas de quienes la interpretan. En el caso de nuestros servicios de Inteligencia, imaginamos que estemovimientoseoriginasobreelterrenoyculminaenarchivos,enplanesoenoperaciones.Losdatosfidedignosrecogidosporelagentesobre el terreno se ralentizan amedida que ascienden poco a poco por la cadena, y al final se ven encallados por consideracionesrelacionadasconsuimpacto—sobreotrasoperaciones,sobrelasmetasdelossuperioresyhastasobrelatrayectoriadelacarreradelapersonaque los está enviando—,hasta queotra información asociada sube por estructuras paralelas para corroborarlos, o bien—deforma desgraciada, tal vez peligrosa—, hasta que el mando descubre que los necesita para justificar políticas, y quienes están enposesióndelosdatospercibenesanecesidad.

Estasvacilacionesydudassonel indicativodeque la funciónde Inteligenciahasidocontaminadapor la funcióndelanálisis.Losdatosseinterpretan,aunqueseadeformainconsciente,ysusefectossobreelmandoseanticipan.Hablamosde«influenciadelmando»sobrelafuncióndeinteligencia,yelhechodequeposeamosuntérminoparaelloreconocesuexistencia.Sinembargo,porelmomentonohemosconseguidocombatirnilasoperacionesnilamecánicadelainfluenciadelmando.

Este ensayo sugiere, en trazosmuy generales, que la «influencia delmando» operamediante la contaminaciónmutua de las dosfuncionesdelosserviciosclandestinos:lainteligenciayelanálisis.

Contaminaciónmutuadelasdoscategorías

Mientraslosdatosvacilansobrelacadena,esperando(1)laacumulacióndepresionesquelospongaenmovimientohaciaarriba,y(2) la corroboración por parte de los materiales asociados, la segregación de la inteligencia humana respecto a la inteligenciadocumentalseveamenazadayporfinsederrumba.Paraexplicarloentérminossimples,lanecesidaddeexaminarlaveracidaddelasfuentes cede ante la presión del proceso. El resultado es la contaminación mutua: los datos procedentes de fuentes humanas,notablementepoco fiables, se convierten en el apoyode interpretaciones dudosas de fuentes documentales, y se llega a percibir queestasinterpretacionesarrojanluzasuvezsobrelosdatosprocedentesdefuenteshumanas.

Lacontaminaciónmutuadeestasdoscategorías,lainteligenciahumanaylainteligenciadocumental,esunsubprocesodelcolapsomásamplioqueestáteniendolugarentrelasdosfuncionesdelainteligenciayelanálisis.

Contaminaciónmutuadelasdosolas

Entretanto,elprocesointerpretativo,recordamos,siempreestásujetoalaapropiaciónyalalistamientoalserviciodelaspolíticas.Lacontaminaciónmutuavuelve losdatosvagos,maleablesy finalmente inútiles salvocomo ingredientesde lasquímicasburocráticasypolíticasinternas.

El examen detallado de los procesos por los cuales las necesidades delmando se comunican hacia abajo por la cadena deberáesperaraotraocasión.Enestemomentobastaráconreconocerquelanocióndelasnecesidadesdelmandoviajaenefectohaciaabajoporlacadenaconlamismaaccióndeolaconquelosdatossecomunicanhaciaarriba.Elresultadoeslacontaminaciónmutuadelasdosolas.

Hayque insistir enqueesteproceso tieneunanaturalezacompletamentedistintaalprocesode recogidade InteligenciadenuestraAgencia en su encarnación anterior, la Oficina de Servicios Estratégicos (OSS). En ella las políticas apenas alteraban la función de

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Inteligencia, puesto que la política es el juego de la paz,mientras que la OSS servía a una estructura demando que perseguía losobjetivosdelaguerra.Deaquellaépocahemospermitidoquesobrevivaelviejomodelodeterrenoaarchivo,archivoaplanyplanaoperación.Sinembargo,esemodeloyanonossirvebien.

CuandosetratadelosprocesosrealesdenuestraAgenciadehoyendía,esmásadecuadoelmodelodeunacadenaenlaquedosolasdedatossometidasapresiónsecontaminanmutuamenteentreellas.Lapresiónhaciaabajoderivade lasnecesidadesdelmando,mientrasquelapresiónhaciaarribaderivadelanecesidaddesatisfaceralmando.

Enestepuntodelaargumentacióndebemosmencionardenuevolafaltadeutilidaddelproceso,habiendodesveladoyalacategoríadelservicioenlaquelainteligenciasevuelveútil,asaber,enlapersecucióndelosobjetivosdelaguerra.

Fertilizaciónmutuadeambosobjetivos

Este ensayodejará abierta la cuestiónde cómovamosa aplicar las leccionesde estemodelomejoradoanuestra situaciónbélicaactual,esdecir,enVietnamdelSur.Sinembargo,algunasideasreclamannuestraconsideración:

Losgruposdeclaranlaguerraconelobjetivodeobtenermetaspolíticas,comoeselcasodelarevolución,obienconelobjetivodeasegurar su supervivencia, comoes el casode la contrarrevolución. (Un largoparéntesis: dejamosde lado los casos enque los dosobjetivosseconfunden,porejemplocuandonaciones-estadoseimplicanenlaconstruccióndeimperios,enlaconstruccióndemercadosobien en la defensa contra estas dos agresiones.Y renunciamosdeliberadamente a las complicaciones y sutilezas que resultaríandesentaralamesaaClausewitzyMaquiavelo.Repetimos:aquínosestamosconcentrandoenusarunmodelomejoradoparareflexionarsobreelroldelainteligenciaennuestrasituaciónbélicaactual,yesporesoporloquesimplificamoslascosas.)

En este punto una flecha en elmargen guiaba al lector hasta una notamanuscrita al pie de lapágina.

V: Muy bien hasta aquí. La parte final solo tiene que decir que invitamos a continuar la reflexión a todo el que lo desee. ElpensamientocentraldelaconclusióntienequeserqueelobjetivodelVietcong-EjércitodeVietnamdelNorteeslarevoluciónpolíticamutuamente contaminada por la supervivencia nacional. Invitar a reflexionar sobre cuáles son los objetivos deEstadosUnidos: ¿quéestamoshaciendo?¿YcuáleselroldeInteligenciaenello?¿YcómorecuperamosunasensacióndeobjetivosbélicosybregamosconunaAgenciaenterapararevivirelroloriginaldeunserviciodeInteligencia?

Necesidaddeactividadaislada

EstadosUnidos,porotrolado,aunenestasituacióndeguerra,nodisfrutadelaclaridaddeunosobjetivosdeguerra.Elnuestroes,en lapráctica,un juegodepeonesquesedesarrolladeacuerdocon laprioridadnodel todomanifiestadeque las filasdeatrás, laspiezas poderosas, los poderesmundiales, nunca han de entrar en la contienda. Para las entidades que se dedican a Inteligencia, estacircunstanciasugierequehayquecrearunciertoaislamientoafindeconstruirunescenariodeactividadesenelqueserecuperenysereanudenlosverdaderosyoriginalespropósitosdeInteligencia.Hemosusadoeltérmino«escenario»,perodigamosahoraqueuntramode lacadenadecomunicaciones tienequeaislarse respectoa laspresionesde la«prudenciadel subordinado»procedentedeabajoytambién a las presiones de la «influencia delmando» procedente de arriba. Es poco probable que dicho aislamiento proceda de unaordendelpropiomando,asíquetienequeproducirsecomoresultadodelainiciativadeestaagenciaodevariosmiembrosdelamisma.

Yalmargen:

V:porfavor,arreglaestoparaquesuenemenosaltivo,másvago:«Aquelquetengaoídosparaoír,queoiga»,FXS.PeroV,eltiempoesesencial.MOVILIZACIÓN-PÉRDIDADEDICOTOMÍA,colega.

¿Quién era «V», el que lo había ayudado a escribir? Solamente podía ser Voss. En la últimapágina,otraanotacióndepuñodelcoronel.

Árbol deHumo: (columna de humo, columna de fuego), el «faro» de un objetivo sincero para la función de Inteligencia:restaurar la obtención de información como la función principal de las operaciones de los servicios secretos, en lugar deproporcionar justificaciones para las políticas. Porque si no lo hacemos, el siguiente paso será que los burócratas cínicos yhastiados,locosporelpoderyobsesionadosporsuscarreras,empiecenausarlosserviciossecretosparainfluirsobrelapolítica.El paso final es crear ficciones y servírselas a los artífices de nuestras políticas a fin de controlar la dirección del gobierno.TAMBIÉN:«ÁrboldeHumo»:fijarseenelparecidoconelhongonuclear.¡JA!

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LuegoregresabanlamáquinadeescribiryVoss:

Sepuededarunpasohipotéticomásalládelúltimo.Considérese laposibilidaddequeunacapillitaogrupoaisladopuedadecidircrear ficciones independientes de la intuición que tiene el mando de sus propias necesidades. Y que puedan servir estas ficciones alenemigoafindeinfluirsobrelasdistintasopciones.

¡JA!Seimaginabaasutíoriendo.IgualquesehabíareídodelastoscasinsinuacionesdeJimmyenlaterrazadelContinental.MientrasJimmysechupeteabalosdedos,elcoronelledijoaSkip:

—¿TeacuerdasdelartículodeJ.P.Dimmersobreelagentedoble?—Loheleídomilveces.—Supónquetienesunagentedoble.—¿Tenemosunagentedoble?—Esunsuponer.—Vale.—Ysupónquequieresdarleunproductofalso.—¿Unproductofalso?—dijoSkip—.NorecuerdoqueesosediscutaenelartículodeDimmer.—Deleunacopia,porfavor,sargento.—¿Queledéunacopiadequé?—Deunartículotitulado«Observacionessobreelagentedoble».EstáenmimontóndeStudiesin

Intelligence,númerodeinvierno,milnovecientossesentaydos.—Quémemoria.—Supón queHanoi creyera que un elemento insubordinado delmando americano ha decidido

hacerestallarunabombaatómicaenlabahíadeHaiphong.—¿Estáusteddebroma?—¿No confundiría eso un poco a Ho? Si creyera que un puñado de cabrones lunáticos ha

decididozanjaresteasuntosinpedirpermiso…—Confíoenqueestemoshablandohipotéticamente.—Skip.¿Llevasunabombaatómicaenelbolsillo?—No.—¿Sabesdóndeconseguiruna?—No.—No. Esto es Operaciones Psicológicas. Estamos hablando de desestabilizar el juicio del

enemigo.—Notenemosfronterasenelprocesodelpensamiento—anuncióelsargentoStorm—.Escasiun

trabajoyóguicooespiritual.ÉlseacordódeotrodelospronunciamientosdelsargentoStorm:«Estamosenellímitemismo

delarealidad.Enelpuntoenqueseconvierteenunsueño».

***

DespuésdesuprimeravezenelPurpleBar,loúnicoquequeríaJameseraregresarloantesposibleabebercervezayecharunpolvo,ydespués regresarunavezmás,ynose imaginabaningunametamáselevada.

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Noseolvidabadesumadre.Desusprimeroschequesdelapaga,lemandólamitad.Despuésyanoteníaquemandarnada.Selopodíagastartodoenjuergas.

Abril no fue un mes primaveral, solo caluroso. Durante todo el verano cayeron lluviastorrenciales.Octubreynoviembrefueronmásfrescosysecos.JamesnosepudocomerelpavodeAcción deGracias que servían arriba en la base de la zona de aterrizaje.Otros comedores teníanpavodeverdad,peroaquelveníablanqueadoydentrodeunalatallenadejugo.

—LaNavidad—dijoFisher—levaaromperelcorazónatodoelmundo.Al principio James le mandaba a Stevie bastantes mensajes cortos y atormentados, le enviaba

baratijasqueencontrabaenSaigón,ansiabaquelellegarancartasdeellaytratabadeimaginarsesucara y su voz cuando leía lo que él escribía.Yun día de pronto pareció olvidarse de ella.Eso lodistinguía del resto de los hombres. A medida que avanzaban sus estancias, los demás se ibanobsesionandomás ymás con las chicas que tenían enAmérica, y amedida que se les acababa eltiempo contaban los días y hablaban con entusiasmo de pillar carne blanca, carne blanca, carneblanca.PeroJamessolamentequeríamásde loqueconseguíaenelPurpleBar, fueracualfueraelcolordesucarne.

LascomunicacionesdeStevielellegabandeformaimplacable,porlogeneralnotasbrevesqueellaescribíaapresuradamenteenclasedemecanografía,exactamentecomolasnotasquelepasaríadeformasubrepticiaaalguienqueestuvieraenlamismaescuela,comosiJamesestuvierasentadoados pasillos de distancia de ella, dormitando, en lugar de abriéndose los pantalones enunbúnker,enfocándose la entrepierna desnuda con una linterna y contemplando una horrenda zona de tiñainguinaldecolormorado,quebajoelhaztemblorososeveíadeuncolorvolátilcasiverdoso.«Notelopasanlasputas,notelopasanlasputas—ledecíanlosotroshombres,loshombresaquienesélpreguntabasinparar—.Noesmásqueunrolloquetesaleconelsudordelaselva,ylamedicinaquetedanhacequeseacabeyendo.Ynotetienesqueafeitarlaspelotas.Asíquenotepreocupes.Ynoteafeiteslaspelotas.»LascartasdeStevie,concirculitosencimadelasíes,loaterrabantantocomolatiña.Casinuncalascontestaba.

Yosolamentepodríallevarteamediocaminodelamor,leescribióunavezél,citandounodelospoemasqueleescribíaEvansasunovia.

Teesperarésiempre,lerespondióella,soyfielhastaelfin.Él tuvoganasdecontestardiciendo:Noseasfielporqueyono losoy.Pero loquehizofueno

contestar.EnNavidad recibió una tarjeta de sumadre y le agobió abrirla: ¿y si le lloriqueaba pidiendo

dinero? Pero lo único que ella había escrito era: «Te quiere, tu madre» al final de un verso deHallmark sobre el Salvador y el pesebre y los pastores y el prodigio de la primera Nochebuenaestrellada.

***

ElTenienteMetepatas se llevó aunpelotóndepatrulla, y loprimeroque sumala suertehizoporellosfuehacerlescruzarunatrincheracondossoldadosdelVietcongmuertosdentro.Metepataslaencontróélsolitocuandosaliódelcaminoparadarunrodeoaunárbolcaídoymetióelpieporeltechodelatrincheraylepisólacabezaauncadáver.VariosmiembrosdeEcoapartaronel troncocaídoysacaroneltechorotodebambúyhierbayencontraronalosmuertos,elunoencimadelotro,

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anegados y apestosos, con las cuencas oculares infestadas de hormigas. El árbol los había dejadoatrapadosdentroalcaeryelniveldelaguahabíaempezadoasubirdurantelanocheyhabíainundadola trinchera tandeprisaquealparecerellossolamentehabían tenido tiempodeempezaraescarbarparasalirantesdeahogarse.ElTenienteMetepatasquisointerrogaratodoelmundoqueencontraranenlazona.Elprimerhombrealquesedirigieron,queregresabadelcampoconunhatillodeleñaalhombro, tiró su carga al suelo y echó a correr seguido de cerca por dosmiembros de Eco. Losdemássepusieronencuclillasyesperaron.

—Estamontañaseestácagandoencimadenosotros—dijoelTenienteMetepatas.Lamayoríadeellosnollevabanallíeltiemposuficientecomoparapercibirloscambiosdelaire.

AhoraqueFlattyJolletyasehabíanidoyquelagenteestabasiendotransferidadeunladoparaotro,losmayores del pelotón eran elEspecialista deCuartaClaseHouston, conocido comoVaquero, yHombreNegro, el sargento sin nombre.Ahora también había otro tipo negro, Everett, recluta deprimera,querespondíaasunombreperoquesolamentehablabaconHombreNegro,yenvozmuybaja,paraquenadielopudieraoír.

—Hablandodeecharunacagada—dijoelTenienteMetepatas,ysefuedetrásdeunmatorral.Estabasaliendoyabrochándoseelcinturóncuandolosdoscorredoresregresaron,sinelnativo.—¿Nohahabidosuerte?—Hadesaparecido.—Estábajotierra,señor.—Esocreemos.—Hayuntúnel,señor.—Mierda.Noselodiganalcoronel—dijoMetepatas.—Estáaquímismo.Elpelotónenteropermaneciódepiejuntoaloqueparecíaserunaaberturadesesentacentímetros

por sesenta que daba al mundo subterráneo. El Teniente Metepatas se puso de rodillas, metió lalinternaenelorificioyluegoselevantóatodaprisa.

—Sí, así es comoson.Bajanunmetroounmetroymedioy luegoempiezanaavanzar.Atrástodos—lesdijo.

Lequitólaanillaaunagranada,latiródentrodelagujeroysaliócorriendocomoalmaquellevaeldiablo.Laexplosiónsonódébilyamortiguada.Hubounaerupciónyluegounalluviadetierra.

—Niputaidea—dijo.Pusoadoshombresavigilarelagujeroyélylosdemásvolvieronconloscadáveres.Enel ladooestede lamontañapatrullabanpor loquehacía lasvecesdeunacarretera.Durante

cincokilómetrosunbulldozerD6habíasidocapazdeensancharelcaminoqueveníadelaBaseEco.Despuésveníanunbarrancoyunahondonada, impracticables para cualquier vehículo.ElTenienteMetepatasllamóporradioalsargentoHarmon,quevinoenjeep.

—Noquieroaestoscabronesmuertosaquí—ledijoaHarmon—.Lleváoslos.SiCharlieestáenestamontaña,quieroquesequedeconladudadesihemoscapturadovivosaestostipos.¿Loveis?—lesdijoalosdemás—.EsoesOperacionesPsicológicas:mangonearconelcerebrodeCharlie.

Élyelsargentosesentaroneneljeepacomerracionesdecombatehastaquealosdemásselesocurriósacaralnativodeltúnelhaciéndolovolarporlosaires,siesqueeraallídondeestaba,congasolina.

Tres hombres cargaron con un bidón de doscientos litros que había en la parte trasera del

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vehículo,llenohastalamitad,ylollevaronrodandoporelcaminohastalaentradadeltúnel,elbarrilzigzagueando a un lado y al otro, los hombres soltando palabrotas y dando machetazos a lavegetación.DoshombresinclinaronelbidónsobrelabocadelagujeroyeltercerosepusoagolpeareltapónconlaculatadesuM16parasoltarlo.

En cuanto vio aquello, elTenienteMetepatas se plantó allí.Dejó la boca ligeramente abierta einclinólacabezahaciadelante,regañándolosensilencio.

—Estamosenplenoprocesodeeliminación—explicóelhombre.—Wayne,suarmanoesunmartillo.—Losiento,señor,perosoloquierodecirquevamosahacersaltaraesecabróndechimpafuera

deahí.Desenroscaroneltapón,vaciaronsucontenidodeoloracredentrodelagujeroyacontinuación

elreclutadeprimeraWayne,unmuchachocorpulentoydescerebradodeIowa,sepusoahorcajadassobre la oscuridad, encendió una cerilla y la dejó caer. La fuerza de la explosión lo hizo salirdisparadoporlosaires,volarporencimadelascabezasdelosdemásycaerentrelascopasdelosárboles,silbandocomounobús.

—Siguiente—dijoelsargentoHarmon.LosdoscompañerosdelreclutadeprimeraWaynecorrieronaencontrarlo.Élregresócojeando

entreellos.—Tehasolvidadodedecir:«¡Fuegoenelagujero!».Noparecíagravementeherido.—Ahorasoyfamoso—fueloúnicoquedijo.—Alcoronelnolevaagustarnadaquesehayacargadoustedestetúnel—ledijoHombreNegro

alTenienteMetepatas.ElTenienteMetepatasrodeóconelbrazoloshombrosdeHombreNegro,mientraselsargentose

leponíadelante.—Alguientendríaquecomprobarelestatusdeeseagujero.—¿Porquénobajastú,HombreNegro?—¿Yo?—Sí.Bajasunmomentitoyechasunvistazo.—Aversiesteeseltúneldelquenovasasalir.—Noquedanadadeltúnel,teniente,señor.ElTenienteMetepatascogióaHombreNegrodeloshombros,seloacercóyledijo:—TodosloshijosdeDiostienentúneles.—Yabajoyo—intervinoVaquero.Todaslascabezasdelpelotónsegiraronparamirarlo.Luegotodosmiraronaotraparte.Arriba,

abajo,aalgúnpuntoalolejos.—Tenemosunvoluntario—dijoelsargento.ElTenienteMetepatasledijoaVaquero:—Vamosahacerfelizalcoronel.ÚltimamenteEconoveíamuchoalcoronel.Losnuevossololohabíanavistadodesdelejos.—¿Esuncoroneldeverdad?—lepreguntóVaqueroaHarmon.—Bueno,novaaserunproductodemiimaginación,¿no?—¿Yesoquéquieredecir?

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—Supongo que quiere decir que es de verdad, soldado. Supongo que si te pisara los dedos,gritarías.

—Nolotengoclaro—dijoVaquero—.MehesentadoenelregazodeSantaClausmásvecesdelasquehevistoaesecoronel.OseaqueparamíesmenosrealqueSantaClaus,¿verdad?

—Ten.—Harmonlediosulinterna—.Llévateunademás.Vaqueroencendiólalinternaysemetióenelhoyodecabeza,talcomoalgunosdeelloshabían

vistohaceralosCuchiCuchis.Cuandoestuvodentrodeltodo,cuandoyanoquedabaningunapartedesucuerpoalavista,los

demássepusieronaesperarjuntoalagujero.Descenderaaquelmisteriodecategoríamundialteníaque producir cierto respeto, si no por la prudencia de Vaquero, sí al menos por sus niveles decordura.

Secontabaquelostúnelesavanzabandurantekilómetros.Queenelloshabíamonstruos,reptilesciegoseinsectosquenohabíanvistonuncalaluz,quehabíahospitalesyburdeles,ycosashorribles,montonesdecasqueríaprocedentedelasatrocidadesdelVietcong,bebésmuertos,curasasesinados.

—Agarradmelospies—gritódesdeelinteriordelagujero.Elloslosacarontirandodelostobillos.Nohabíasidocapazdedarselavuelta.—Estáhundidoaunosveintemetrosmásallá—ledijoaMetepatas.—¿Nohaynadieahídentro?—Nodesdequeyohesalido—dijoVaquero.

***

Ellasedespertóhacialascincoensuhabitacióndelfondodelacasa.Lasventanasestabancerradasysin embargooyó coyotesque aullabanygemían a lo lejos, al este, hacia losmontesSupersitions.Hoynosetrabajaba.Ellasequedóenlacamayrezó.QueBurrisempezaraelAñoNuevoconmejorpredisposiciónhaciasusestudiosyqueencontraraalSeñorensucorazón.QueBilldisfrutaradesusobligacionesyqueencontraraalSeñorensucorazón.QueaJamesnolohirieranenlaguerrayqueencontrara al Señor en su corazón. Los coyotes sonaban como perros heridos. Estaban haciendocampañaporelregresodeCristo.Ojalánofueranoídos.OjaláCristosequedaradondeestabahastaque se salvara la última alma sobre la Tierra. La última alma salvada podía ser la de uno de suschicos.Todaslasseñalesapuntabanaello.

Ellapusolospiesenelsueloyseechóunacamisadefranelaporencimadelcamisón.Todavíaestabamuyoscuro.Sevolvióa tumbaryalcabodeunratosediocuentadequesehabíavueltoadormir.Estavezyasinsoñar.Elrelojhacíatictac.Suesferaderadiodecíaquetodavíanoeranlasseis.Selevantóysepusolaspantuflas.

EnlacocinapusounasgotasdelecheCarnationenunplatilloparalagata.Queloscoyotesnolaatraparan. Ni los gatos de la calle. No necesitaban tener gatitos… Seguía oscuro. Burris se habíapasadomedia noche despiertomirando programas demiedo en la televisión. Ella no podía hacernadaparamantenerloalejadodelastrampas.

Encendió unSalem en el fogón.Hirvió agua para el café en polvo y se sentó a lamesa de lacocina, unamesa plegable para jugar a las cartas, puso el cigarrillo en un cenicero y se cerró elcuellodelcamisónconunamanomientrassellevabalatazaaloslabiosconlaotra.Vetasverdosasde luzaleste.Laventanaestabasucia.Loúnicoque lequedabaerarezar.RezaryelNescaféy los

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Salem.Aquellaeralaúnicahoradeldíaenquenosesentíaloca.Cuandoel teléfonoarrancóasonarenlaparedaellaselederramóunpocodecafé.QueDios

nos asista. Fue a la pared y levantó el auricular buscando en su cabeza las palabras para pedirmisericordiaporloquefueraqueseavecinaba.Anteelterrordelasposibilidades,loúnicoqueseleocurriódecirfue:

—¿Hola?—Hola,mamá.SoyJames.—¿Qué?—Mamá,soyJames.LlamoparadesearfelizNavidad.Supongoqueconunpocoderetraso.—¿James?—SoyJames,mamá.FelizNavidad.—¿James?¿James?¿Dóndeestás?—EstoyenVietnam,comolaúltimavez.Comosiempre.—¿Estásbien,James?—Estoybien.Perfecto.¿CómooshaidolaNavidad?—¿Teencuentrasbien?¿Estásherido?—No,no.Estoybien.—Measustocuandomellamas.—Noqueríaasustarte.Solosemehaocurridosaludar.—Peroestásbien,¿no?—Estoybien,mamá.Noteasustesninada.Eh,teacabodemandarotrogiropostal.—Teestoymuyagradecida.—Sientohabermecolgadounpoco.—Yaséqueesdifícil.Nocuentoconello,solamentedigoquenosayudabastante.—Intentarémandarmás.Deverdad.¿CómohaidolaNavidad?—Haidobien,James.Haidobien.Tengoquesentarme.Déjamecogerunasilla.Mehasasustado.—Nohaynadadequeasustarse,mamá.Mevabastantebienporaquí.—Bueno,puesmealegro.¿HasllamadoaStephanie?—¿AStevie?—AStevie.¿Yalahasllamado?—Ibaallamarlaahora.Vadespuésdetienmilistadeestanoche.—¿Quéhoraesahí?—Sobrelasochodelanoche.Enelejércitollamamosaestahoralasveintecerocero.—AquíenPhoenixsonlasseisyochominutos.—Yaeseso.—Saldeahí,cariño—dijoella—.Túno,esquetengoaestaviejagataaquí.—¿Todavíatienesaesagata?—No.Esotra.—¿Quélepasóalaotra?—Seescapó.—Lapillaronloscoyotes.—Meimagino.—Bueno,ahoratienesotra.

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—James…—empezóadecirella,ylefallólavoz.—Venga,mamá.—James.—Mamá.Nohaynadadequepreocuparse.—Tengoquepreocuparme.—Noes loque te estás imaginando.Estamosmuya salvodondeestamos.Nohevistonadade

combates.Lagentedeaquíestodaamistosa.—¿Sonamistosos?—Sí.Yalocreo,mamá.Todoelmundoesamable.—¿Yloscomunistas?—Nuncahevistoaninguno.Noseacercanporestoslugares.Tienenmiedo.—Siesmentira,teloagradezco.—Noesmentira.—Yesperoquevuelvasprontoacasa.¿Cuántofalta?—Mamá,tellamoparadecirtequemehereenganchado.—¿Tehasreenganchado?—Sí,señora.—¿Unañomás?—Sí,señora.Ellanosupoquédecir,oseaquedijo:—¿Quiereshablarcontuhermanopequeño?—¿ConBurris?Vale.Perorápido.—Tieneproblemasenlaescuela.Losmaestrosmedicenquesedistrae.Queestáahíydepronto

tienelamenteenotrositio.—¿YBurrisquédice?—Dicequenolegustalaescuela.Lehedichoquetienequeir.Queanadielegusta,onosería

gratis.—Queseponga.—Estádurmiendo.Unmomento.—Déjaloestar,pues.Dilesolamentequehedichoquesienteelculoytrabaje.—Gracias,James.Lediréloquehadichosuhermano.—Bueno,estoyhablandoporlaradio,oseaquemejortedejo.—¿Porlaradio?—Sí,señora.Arribaenelcampamentobase.—¿Hablasporlaradio?¡Yoestoyalteléfono!—FelizAñoNuevo,mamá.—Lomismotedigo.—QuetengasunfelizAñoNuevo,mamá.—Deacuerdo.Lomismotedigo.—Yolotendré,seguro.Muybien,pues.Hastaluego.—Hasta luego,James—dijoella—.Rezopor tidíaynoche.Noescuches loquedicenporahí.

EstástrabajandoporelSeñorparamantenersufevivaenunmundocadavezmásoscuro.EstamosenunadeesasépocasdelViejoTestamento.

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—Yalosé.Teoigo,mamá.—Loscomunistassonateos.NieganalSeñor.—Esotengoentendido.—MiraelViejoTestamento.Miraa cuántoshombres sematóenelnombredelSeñor.Mirael

PrimerLibrodeSamuel,miraelLibrodelosJueces.SéelpuñodestructordelSeñorsinotienesmásremedio.

Ellalooyósuspirar.—Solamentequierocogertedelbrazoydarteánimos.LeelaBibliatodoslosdías.Haygenteque

dudaymanifestantesyDiossabequé.Traidoresesloqueson.Sioyeshablardeesagente,hazteelsordo. Gracias a Dios que no se acercan por Phoenix. Si yo viera una manifestación cogería uncamiónyaplastaríaaesapandacomounarocaquecaerodandodeunamontaña.

—Medicenquesemeacabaeltiempo,mamá,asíquemejortedigoadiós.Adióspues.Lehabíallegadounchisporroteoporelteléfonoquesedetuvocuandosuhijocolgó.—Bueno—ledijoellaanadie.Luegosepusodepieycolgóelteléfono.

***

Unamañanaluminosa,algorarodever.NguyenHaosequedóencamahastatarde,mirandocómolosjironesdeniebladevolvíanlaluzdelotroladodelaventanadeldormitorio,pensandoenloquecomportabapresentarbatalla—nolucharcontraellos,sinosimplementeafrontarlossinarredrarse—alosdragonesdelosCincoImpedimentos:lalujuria,laaversión,laduda,laperezayelnerviosismo.

La pereza lomantuvo un rato en la cama.Después el nerviosismo lo llevó escaleras abajo, alpequeñopatiodedetrásdesucocina,dondeel solestabacondensandomásniebla.Bajosucalideztodo proyectaba fantasmas. Se desprendían de los ladrillos, se elevaban con profunda reticencia ydesaparecían.

Hao extendió su pañuelo blanco sobre el banco de piedra, se sentó con cuidado y trató deencontraralgodepazensumente.

Alasnueveymedia,Trungllamóconlosnudillosalapuertadeatrás.Haoselevantó,encontrólallave y abrió el candado. Ahora elMonje poseía documentación falsa. Caminaba por Saigón conimpunidad.Parecíaestarbiendesaludyhastacontento.Sesentaronjuntosenelbancodemármoltalcomohabíanhechomuchasveces,sinqueenopinióndeHaohubieranavanzadonuncaennada.Enalgúnpuntodelfuturoseencontrabaelmomentodecisivo.

—¿Estáisbien?—Kimestáenferma.Peorqueantes.—Losiento.—HeestadopensandoenlosCincoImpedimentos.—A veces yo también pienso en ellos. ¿Te acuerdas de aquel poema? «Estoy atrapado en el

mundocomohumoarrastradoentodasdirecciones.»—Losdragonesmehanderrotado—dijoHao—.Mehanhechoadentrarmetantoenelmundoque

yanopuedoregresaralsilencio.ElMonje pareció pensar en todo aquello.Hao estaba demasiado fatigado para darle prisas.Al

cabodeunratoelMonjedijo:

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—Yotambiénintentovolver.Quieroencontrarotravezelsilencio.Peronoconsigovolver.—¿Vasadejardeintentarlo?—Creoquetengoqueterminarlavidaquehevivido.Heestadomuyconfuso.—Voyasertesincero.Tambiénmehasconfundidoamí.—¿Meestáscriticandoportardartanto?—Hehabladoconelcoroneldetimuchasveces.Élsospechaquepuedesestaraceptandonuestro

dinero falsamente. Pero sigues viniendo. Le he dicho que vale la pena conservarte porque siguesviniendo.

—MeacuerdodecuandollegaronloscuadrosamialdeaenelcuarentaycincoynosleyeroneldiscursodeHo—dijoTrung—.Unajovenselevantóyleyóconunavozqueeracomounacanción.LaspalabrasdeHoresonaronenelmundo.Conlahermosavozdeaquellachicahablódelibertadyde igualdad.Citó laDeclaraciónde IndependenciaAmericana.Se ganómi corazón.Yo le di todo.Dejémihogar.Derramésangre.Sufríenlacárcel.¿Puedescriticarmeporquemecuestetantotiempotraicionartodoaquello?

Haosemostróasombrado.—Tuspalabrassonfuertes.—Laverdadesfuerte.Míraloasí:laseddelibertaddelagentenoshahechobeberaguamala.Estuvieramintiendoono,aquellaeraunahistoriaqueelcoronelentendería.—Lovoyaexplicarenesasmismaspalabras.—Lanegociaciónsehaterminado.Vengoapediryadar.—¿Quépides?—Quieroterminarconestavida.QuieroiraEstadosUnidos.Haonoselopodíacreer.—¿AEstadosUnidos?—¿Sepuedehacer?—Claro.Ellospuedenconseguirloquesea.—Puesquemellevenallí.—¿Yquéofrecestú?—Loqueellosquieran.—Peroahora.Deinmediato.¿Qué?—Tepuedocontarquelosrumoressonciertos.QuevaahaberunagranofensivaenAñoNuevo.

PortodoelSur.Esunaofensivageneralizada.—¿Puedesdarnosinformaciónconcreta?¿Lugares,horasycosasdeesas?—Notepuedodarmucho,porqueserásobretodoelEjércitodelNorte.PeroenSaigónsomos

nosotros.Estaremos trabajandoconunequipodezapadores.Vanaplantar cargas explosivas en laciudad.Probablementenosotrostendremosqueguiarlospordosotresubicaciones.Tanprontocomotengalasubicaciones,telaspasaré.

Haoapenaspudocontestar.—Elcoronelvaavalorarmuchoesaclasedeinformación.—Estoycasisegurodequeestánponiendoesascargasparalagranofensiva.Estoyconvencido

dequeseráexactamenteeneldíadelTet.Cuatroañosbailandoantelaspuertasyahoratodoaquelloenmenosdeveinteminutos.Haono

podíamantenerlasmanosenelregazo.LeofrecióaTrungotrocigarrillo,cogióotroparasímismo

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ysostuvoelencendedorparaambos.—Respeto tu valor. Temereces que te diga la verdad. Y es por eso por lo que te la digo: al

coronelleinteresalaposibilidaddequehagasdeagentedoble.DequevuelvasalNorte.—Probablementepodríavolver.HayunprogramaquellevaagentedelastribusalNorteparasu

educaciónyadoctrinamiento.Laideaesdevolverlosacasamástarde,paraqueorganicenlascosas.Heestadounpocoinvolucradoeneseprograma.

—¿DeverdadvolveríasalNorte?¿Porqué?—Notengoesperanzadepoderexplicarlo.—¿YquépasaconlodeiraEstadosUnidos?—Esodespués.¿DespuésdeiralNorteencalidaddeagentedoble?Haodudabadequeexistieraningúndespués.

Lediounvuelcoelcorazón.—Hemossidoamigos—ledijoaTrung.—Cuandolleguelapaz,seguiremossiendoamigos.Losdoshombrespermanecieronsentadossobreellisomármoldelbancoyfumaron.—Yaestá,¿ves?—dijoTrung—.Yahemoscruzado.

***

DelasnotasdeldoctorBouquet:

Otravezdenoche,losinsectoshacenmuchoruido,laspolillasseestánsuicidandoenlalámpara.Hacedoshorasmesentéenel porche a contemplar el anochecer, llenode envidia a todos los seresvivos—pájaros, bichos, flores, reptiles, árbolesyplantastrepadoras—quenohandesoportarlacargadelconocimientodelbienyelmal.

Sandstambiénestabasentadoenelporche,bajoelcalordelatarde,conelcuadernodelmédicoenel regazo,mientrasdetrásdeélsecaíaapedazosy loacechabaaquellacasa llenadecódigosyarchivos y palabras y referencias y referencias cruzadas, examinando una línea ilegible de lasanotaciones delmédico: el cuaderno se había cerrado apresuradamente sobre la tinta húmeda y lalíneasehabíaemborronado.Noimportabaenquésentidogiraralapágina:

HjgjhgjhgjgjlhgfjjlehgwjlfhwgefjlhgwejlhfgwqYlomásrarodetodoesquelagentequeviajaporestaregión,comosilosacometieraunaparálisissoñolienta,bloqueasussentidos

parapodernopercibirnada.

CuandolaNaturaleza,porunextrañocapricho,deprontoretrataenunarocaelcuerpodeunhombrequeestásiendotorturado,alprincipiounopuedepensarqueestonoesmásqueunacasualidad,yqueesacasualidadnosignificanada.Perocuando,traspasardíasydíasacaballo,unovequeelmismohechizoserepite,ycuandolaNaturalezamanifiestaobstinadamentelamismaidea;cuandolasmismas formas patéticas se hacen recurrentes; cuando en las rocas aparecen cabezas de dioses conocidos, y cuando así emerge unmotivodemuertecuyoprecioelhombrepagaobstinadamente;cuandolafiguradesmembradadeunhombreesrespondidaporaquellos—cadavezmásdefinidos,más separadosdeunamateriapétrea—de losdiosesque siempre lohanatormentado; cuandouna regiónenteradelaTierradesarrollaunafilosofíaparalelaaladesushombres;cuandounosabequelosprimeroshombresusabanunlenguajedesignos,ycuandounodescubreeseidiomaformidablementeampliadoenlasrocas;entoncesunoyanopuedepensarqueestonoesmásqueunacasualidadyqueesacasualidadnosignificanada.

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1968

Cuando le faltaban tres semanaspara licenciarsede lamarina,BillHouston tuvounapeleaconunhombrenegroenelcomedordereclutasdeYokosuka,enlacocina,dondehabíasidoasignadojuntocon otros tres marineros para que pintara las paredes. El estilo invariable de ataque de Houstonconsistía enacercarsedeprisaypor lobajo, estrellar elhombro izquierdocontra el estómagodeloponentemientrasleenganchabalarodillaconelbrazoderecho,yderribarlosalosdosdemaneraque él cayera encima, clavándole el hombro al otro en el plexo solar con todo su peso detrás.Tambiénpracticabaotrosmovimientos,porqueconsiderabaquepeleareraimportante,peroaquellaapertura solía funcionar con los adversariosmás duros, aquellos que se plantaban con firmeza ylevantaban los puños.Aquel negro con el que se las estaba teniendo acertó a darle ungolpe en lafrenteaHoustoncuandoesteibaaporsuspiernas,yHoustonviovolarestrellasyarcoirismientraslosdoscaíansobreuncubodepinturadeveintelitrosyloderramabanporelsuelo.Elabdomendeltipoeratandurocomouncasco,yélyaseestabaintentandoescabullirmientraslosdosresbalabanporelsuelodebaldosassobreuncharcocadavezmásgrandedeesmaltedecolorverdehospitalario.Houston intentó incorporarse mientras el hombre daba un brinco tan ligero como si fuera unamarionetaylelanzabaunapatadalateraldelaqueelcráneodeHoustonsolamentesesalvóporqueeltiporesbalóycayóenmediodetodoelmejunje,conlamanoizquierdaextendidaparapararlacaída.Perolamanotambiénleresbaló,ycometióelerrordeponersebocaarribaenunintentodevolveraincorporarse,yparaentoncesHoustonyasehabía recobradoy lesaltóencimadelvientrecon losdospiesycontodalafuerzaquepudo.Aquellamaniobrasellamabael«pisotóndelcaballosalvaje»,ysedecíaquecausabalamuerte,peroHoustonnosabíaquéotracosahacer,yentodocaso,mientrasponíafinalaltercadoyledabalavictoriaaHouston,nohizomuchomásquedejaraltiposinaire.Seis hombresde la patrulla de costas arrestaron a los combatientes, dosbípedosde color verdeyahoraracialmenteindistinguibles.Mientraslosguardiascosterosloslimpiaban,poníanlonassobrelosasientosdeljeepyselosllevabanesposados,Houstondecidióque,siteníanquepasaruntiempojuntosenelcalabozo,evitaríalarevancha.Oficialmentehabíadejadoaltipofueradecombate,peroeraHoustonelqueteníaunchichónenormeymoradoentrelosojos,enalgúnlugardebajodetodaaquellapintura.

—¿Cómohaempezadolapelea?—exigiósaberunguardiacostero.YHoustondijo:—Mehallamadoblancuchoimbécil.—Túmehasllamadonegrodemierda—dijoeltipo.—Esohasidodurantelapelea—dijoHouston—,oseaquenocuenta.Todavíaexcitadosporlapelea,orgullosos,felices,secaíanbienelunoalotro.—Nomevuelvasallamareso—dijoelnegro.YHoustondijo:—Tampocoibaahacerlo.AsíescomoalmarineroHoustonlolicenciaronantesdetiempo,ysepasólosúltimosdiezdías

enlamarinanocomomarinero,sinocomopresoenelcalabozodelabasenavaldeYokosuka.CuandolosoltaronledieronuntíquetparaunvueloenavióncomercialaPhoenix.Elviajepor

airelepusoenfermo.Losoídosleestallabancomomartillazosenelcráneo,semareaba,elaireteníaun sabor asqueroso.Elprimery elúltimo trayectoenaviónde suvida, se juró a símismo.Enel

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aeropuertodeLosÁngeleshizounabolaconsubilleteparaPhoenixylotiróenuncenicero,sepusoeluniformeenloslavabosy,haciéndosepasarpormarinero,hizoautostophastacasaconelmacutoechado al hombro, a través del resplandor del desierto deMojave en enero. Se encontró con lasafuerasdePhoenixantesdeloquehabíaesperado.Sehabíavueltomuchomásciudad,conelruidodeneumáticos chirriando en la Interestatal 10 y el estruendo de los aviones que se acercaban por elcielo,consuslucesreverberandoenlaclaridadazuldelcielo.¿Quéhoraera?Nollevabareloj.Dehecho,¿quédíaera?HoustonseplantóenlaesquinadelacalleDiecisieteconThomasdebajodeunafarolarota.Teníatreintaysietedólares.Yveintidósaños.Llevabaunmessinprobarlacerveza.Afaltadeotroplan,llamóporteléfonoasumadre.

Una semana más tarde, sentado en la cocina de su madre y bebiendo café instantáneo, Billcontestóelteléfono:suhermanomenorJames.

—¿Quiénhabla?—dijoJames.—¿Quiénhablapreguntandoquiénhabla?—dijoBill.—Bueno…yo.—¿QuétallaschatisdeSaigón?—Supongoquenotienesamamásentadaallado.—Sehaidoacurrar,creo.—¿Nosonlasseisdelamañanaahí?—¿Aquí?No.Máscercadelasocho.—¿Nosonlasseisdelamañana?—Loeran.Ahorasonlasocho.—¿Yquéhacesahíalasocho?—Aquísentado,encalzoncillos,bebiendoNescafé.—¿Yanoestásenlamarina?—Yaacabéconellos,yellosconmigo.—¿Vivesconmamá?—Estoydevisita.¿Ytúdóndeestás?—¿Ahoramismo?EnDaNang.—¿Yesodóndeestá?—Enalgunaparteenelfondodeuncubodemierda.—NoteveodesdeelañopasadoenYokohama.—Sí,esodebedeser.—Tienegraciadecirloasí.—Sí,unpoco.—«NoteveodesdeYokohama.»—Bueno…—dijoJames.Yhubounsilencio.—¿Estásfollandooqué?—preguntóBill.—Oh,sí.—¿Cómoes?—Másomenoscomoteloimaginarías.—¿Sabesquevinotuchica?—dijoBill.—¿Quién?

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—Stephanie.Aquellachavalitaconlaquesalías.Sí.Vinodevisita.—¿Yqué?—Queestuvomolestandoalaviejaconcosastuyas.—¿Conqué?—Dijoqueyanolecontestaslascartas.Queríasabercómoteibanlascosas.—¿Ahoravivesahíoqué?—Semehaocurridocomentártelo.Oseaqueyalosabes.—Puesyalosé.Noquieredecirquemeimporte.—Eresuntíogracioso.Sí,estámuypreocupadaporquetereenganchas.—Seguroqueestásviviendoahí,¿no?—Soloestoyunosdíasdevisitahastaqueencuentreuncurro.—Buenasuerte.—Teloagradezco.—¿Dóndeestámamá?¿Trabajando?—Sí.¿Quéhoraesahí?—Meimportaunpimiento—dijoJames—.Estoydepermiso.Tresdías.—Debendeserlasdiecisieteolasdieciochocerocero.—Hastadentrodetresdíasmeimportaunpimiento.—Yyaescasimañana,¿verdad?—Nuncaesmañana,porlomenosenestaputapelícula.Nuncapasamosdehoy.—¿Yahasvistoalgúncombate?—Heestadoabajoenlostúneles.—¿Yquéhasvisto?Suhermanonocontestó.—¿Quémedicesdeloscombates?¿Hasentradoenbatalla?—Noqueyomehayadadocuenta.—¿Deverdad?—Siemprehaycombatescercaenalgunaparte,peronuncaexactamentedondeestáuno.Osea,he

vistomuertos,tíosheridos,tíostotalmentedestrozados,arribaenlazonadeaterrizaje.—Nomejodas.—Sí,oseaquesí,elmarrónestáportodaspartes.Peronuncallegahastaaquí.—Debedeserquetienessuerte.—Esodebedeser.—¿Yquémás?Venga.—¿Quémás?Nolosé.—Vamos,hermano.Háblamedelaschatisdeahí.La voz de su hermano menor le llegó débil y llena de ecos, desde dieciocho o veinte mil

kilómetrosdedistancia.Unavozanónima.—Estánportodaspartes,hermanoBill.Debajodecadapiedra.Tengounaalaquemantengoen

unachozaenlaaldea.Nuncahevistonadacomoella,osea,nunca.Cuandoestoyconellasuculonotocalacamaniunasolavez.Nopuedepesarmásdetreintaysietekilos,ymetienetodoeltiempolevantadocasihastaeltecho.Debededesayunarcombustibleatómico.Escucha:nocreoquepudieraganarunapeleacontraella.

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—Mierda.Mierda,pequeñoJames.Nosécómovoyafollarahoraquehevueltoacasa. ¡Nosécómohablarconunamujerblancanormal!

—Vasatenerquevolveralamarina.—Metemoquenomecogerían.—¿No?¿Noloharían?—Acabaronunpococansadosdemí,meparece.—Bueno…—dijoJames.—Ya…Durantelossilenciosllegabaundébilchisporroteodeestática,enelcualcasisepodíandistinguir

otrasvoces.—¿CómoestáelviejoBurris?—Estábien.Peroesunchavalraro,igualquetú.—¿Amamálevabien?—Bien,sí.—CaminandoconCristo.—Esoestáclaro.¿Recibistemipostalqueenvióella?—¿Lapostalaquella?Sí.—Yoestabaenelcalabozocuandoellalamandó.—Oh,oh.—Sí…—Escucha,noledigasaSteviequehellamado.—¿AStephanie?—Sí.Noledigasquehashabladoconmigo.—Dijoquenolecontestaslascartas.—TodoslosdemássolamentepiensanenlaschicasquelesesperanenAmérica,es loúnicoen

quepiensan.—¿Ytúenquépiensas?—Enlasasiáticas.—Enlasputasasiáticas.Asiáticasdepago.—NohaynadagratisenelplanetaT,hermanoBill.Muertos,tíostotalmentedestrozados.EraposiblequeJameshubieramentidosobreaquello.Era

posibleque se sintierapresionado, enuna conferencia internacional a largadistancia, a inventarseexperienciasdignasdesercontadas.BillHoustonhabíaoídoquenohabíamuchoscombatesporallí.NoeracomoIwoJima,afindecuentas,noeracomolabatalladelasArdenas.BillHoustonnoveíarazón para recriminarle aquella mentira. James ya no era el gamberrete de su hermanito. Noconveníatomarleelpeloymantenerloensusitio.

—Metengoqueir,hermanoBill.Dileamamáquelaquiero.—Yaselocomentaré.¿YquémedicesdetuStevie?—Yatelohedicho—dijoJames—.Nolemencionesnadademí.—Vale.—Vale.—Manténlacabezaagachada,James.—Agachadaestáyasísequeda—dijoJames,ylalíneasecortóconunclic.

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EnerovinoycasisefueantesdequeBillHoustonencontraratrabajoenelcampoalasafuerasdeTempe,cercadePhoenix.Alquilóunahabitaciónen lacalleSouthCentralque sepodíapagarpordías, semanasomesesydesdeallí ibayveníaenautobús.Todas lasnochesa lasdiezdemartesasábadollegabaenplenaoscuridadalasverjasdeTri-CityRedimix,unaempresadearenaygravilla,paratrabajarcomoencargadodelimpiezanocturna.Hacialasdiezymediayasehabíamarchadoelúltimotrabajadordelsegundoturnoyéltirabaaunladosucascodeobraobligatorioysequedabaasolaspresidiendoseishectáreasdedesierto:montañasderocaspulverizadasorganizadasportamaño,demaneraquecadamontañaestabadesconcertantementehechadecosasdelasmismasdimensiones,desdepiedrasdeltamañodepuñoshastaarena.Deunatolvacaíaunhilodepolvilloqueformabaunmontón al final de un túnel de unos seismetros de largo. Para llenar su pala, Houston tenía queavanzarcomopodíaporelestrechoconductoendirecciónaunabombillalejanaquehabíaencendidaenelcentrodeunhemisferiodealambre,aguantarlarespiraciónmientrasseacercaba,unaneblinadepolvoexplotandoacámaralentacadavezqueélhundíalapalaenelmontón,yporfinretrocederpasoapasoconlapalallenaacuestasyarrojarsucontenidoalascorrientesgélidasquerodeabanlatierra.Lavabalospesebresdecementoquehabíadebajodelascintastransportadorasdelasmáquinasdetrituradoconunaviolentamangueraantiincendiosylasacababadelimpiarrascándolasconunapaladepuntaplana.Lasnochesestaban infestadasdeestrellasy,por lodemás,vacíasy frías.Paradarse calor mantenía bidones de doscientos cincuenta litros llenos de arena empapada de diéselardiendo aquí y allá. Hacía un circuito por el laberinto de cintas transportadoras situadas bajotrituradorascolosalesynuncaconseguíaterminar.Alanochesiguientelasmismascintas,lamismatrayectoria,hastaalgunasdelasmismasrocasyguijarros,teníalógica,ylamismahamburguesafríaparallevardealmuerzo,sentadoalamismamesapolvorientaenlacaravanadelencargadoalasdosdelamadrugada;lavarselasmanosylacaraprimeroenelestrechocuartodebaño,conelgruesocuellomarróncomoeldeunoso,sorbiendoaguaconlosorificiosnasalesyexpulsandoelpolvoenforma de grumos de color de hígado. Poco después de su almuerzo los gallos solitarios de laspequeñasgranjasvecinasempezabanagritarcomohumanos,yjustoantesdelasseisllegabaelsolyconvertía los tejados de aluminio circundantes en antorchas, y luego a las seis ymedia,mientrasHouston fichabapara salir, los conductores llegaban,ponían sus camiones en fila indiayuno trasotropasabanbajolatolvamásgrandedetodasparaesperar,zarandeadosporsusmáquinas,mientrasunacascadadecementohúmedocaíaporlarampadentrodecadatanque,yporfinsemarchabanaponer los cimientos de la ciudad. Houston caminaba un kilómetro y medio hasta la parada deautobuses y allí se quedaba esperando, cubierto de tierra y enternecido por la imagen de losgamberrosdeinstitutoysusnoviasfelicesyguarrillasqueibanandandoaclase,rumboasupropiotormento diario, pasándose cigarrillos entre ellos.Houston recordaba haber hecho aquello, ymástarde en el baño de chicos… no había nada tan dulce como aquellas bocanadas de cigarrillospresurososyrecalentados…robadosalmundoentero…Ensucorazón—igualquelehabíapasadoconelinstituto—,yahabíadejadoeltrabajoelprimerdíaperonohabíaencontradoningúnotrositioalqueir.

***

ElTenienteMetepatasdetuvosujeepylehizounaseñaaunodelosnuevos.Elnuevofuecorriendo

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hastaeljeepyvolviótrayendoacuestasdospaquetesdoblesbásicosdecargadores,acontinuaciónlostiróalospiesdeJamesyechóacorrerdevueltahaciaeljeep,diciendo:

—Meestállamando.—¿Paraquéestodaestamunición?—¡Yyoquécoñosé!¡Meestállamando!El nuevo regresó al jeep del Teniente Metepatas, escuchó y regresó cargando dos latas de

combustible.—¡Aquemarlas,aquemarlasyaquemarlas!—¿Cómo?—¡Aquemarlaschozas!Dicequetenemosquequemarlas.—¿Porqué?—Nolosé.Estápasandoalgomuychungo.—¿Quéquieresdecir?—¡Dicequehayunataque!—¿Dónde?—¡Nolosé!Jamesagarródeunasa,ymientraselpánicopartíaalgalopedesdesunucaydescendíaporsu

espinazoyhastasutrasero, losdosrociaronlachozamáscercanaconlaslatasylaempaparondecombustible.Dealgúnlugarsobrelacolinallegóelestruendodeexplosionesprofundasyrepetidas.

ElreclutanuevosacóunencendedorZippoylachispaencendiólosvaporesylaexplosiónlosmandóhacia atrás, pero el estruendono fue tangrande comoel de las explosiones queveníandecolinaarriba.Luegodijo:

—¡Estájodido,colega,lacosaestájodidísima!Jamesrodeóunachozayluegootra,rociándolasdegasolinahastaquelalataquedóvacía.Tiróla

lataaunacabañaenllamasylasllamaslaencontraronyencendieronlosvaporesdedentroylalatasoltóunsilbidomuyfuerteysepusoagirarsobresímismaysaliódisparadahaciaarriba.

—¿Hasvistoeso?—gritóJames,peroeltechodepajahacíatantoruidoalfreírseyarderquenoseoíahablarasímismo.

Luegogritó:—¿Paraquéhasdichoqueestamoshaciendoesto?—¡Yoquécoñosé!—¿Cómohasdichoquetellamas?—¡Yoquécoñosé!—Esoesbastantejodido—dijoJames,peronoconsiguióhacerseoír.Oyó disparos cercanos. Un helicóptero pasó flotando con gran estruendo por encima de sus

cabezasylanzóunpardecoheteshaciaelotroladodelarefriega,fueradesuvista,aunsitiodondeJamesestabasegurodequenuncahabíahabidonigenteniningúnedificio.¿Algunavezhabíavistoaalguien por allí? Tal vez había alguien defendiendo el lugar. Pues mala suerte, ahora estaríanardiendo.

—¡Espsicodélico!—gritóelrecluta.Los edificios se desplomaron deprisa. James miró el interior de una choza que se estaba

quemando.Estabavacía.Noquedabaniuntrozodebasuraniunviejopaquetedecigarrillos.Eltechoempezóahundirseyélseechóhaciaatrás.

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—Estoeslahostia,colega—leexplicóalrecluta—,porquelosconocemos.Osea,yohevistoaestagente.Pasamosmuchoporaquí.

—Todavíamequedagasolina.—Retrocedamoshastaesaschozasdeahí.Con las cabezas gachas, corrieron hasta un grupo de cabañas que había en una pequeña

hondonada.Allínohabíaniunalma.—¿Dóndeestánlosnuestros,hostia?—Yoquécoñosé—dijoelrecluta.—Veadecírseloalsargento.—Nopiensosubiresacolina…¡allíarribahaygentedisparando!—¿Esdeahídedondeviene?—Sí.MedispararíanigualquesiyofueraCharlie.—Yopensabaquelosdisparosveníandeleste.—Mierda.Vienendetodaspartes.ElsargentoHarmonllegóconlacabezagachaycorriendoporelbordedelahondonada.Cuando

llegójuntoaellosseincorporó.—Osquieroalosdosenformacióndefensivaaquí.—¿Quéhapasado?Parecequehaceunmomentoestábamosenuntiroteo.—¿Túhasdisparadotuarma?—dijoelsargento.—No.—Entoncesnohasestadoenningúntiroteo.—¿Quiéneseran?—¡Puedequefueranlosnuestros,joder!—Todaestaputamontañaestásiendoatacada—dijoelsargento.Seoíanexplosionestremendascolinaarriba.—¿Quéeseso?—¿Morteros?Alesteexplotóalgomásgrande.—¿Quéeseso?Ydedetrásdeellos,máscerca,vinieronmás.—¿Dóndeestán?—Anuestroalrededor.Esosonmorteros—dijoelsargento—.Escuchad.Osquierodefendiendo

aquí.¿Meoís?—Sí—dijoelnuevo.—Aquíestamosdemierdahastaelcuello.Sihacemosestobienpodemosretroceder,acortarpor

el oeste y escabullirnos por detrás de ellos colina arriba. Quiero que los dos extremos aguantenmientras retrocedemos por el centromuy sigilosamente y sin que ellos lo sepan. Si nos toman elflancooeste,estamosfritos.Oeleste.Yvosotrosvaisacubrireleste,¿meoís?SiCharlievieneporesacolina,noechéisacorrer.¿Meoís?

—Sí,sí.Elsargentotiróalsuelounhatillodecargadoresdeveintebalas.—Mantenedlapalancaensemiautomático,¿meoís?

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—Sí.Entendido.—Vaahabermásataques.Vosotrosquietosaquí.Noosmováisoacabaréisconnuestrospropios

cohetesenelculo.—Entendido.Entendido.—Sihacemosestobien,losrodearemosylesvendremospordetrásyvosotrospodréissubirla

colinasinproblemas.Cuandoyo tire labengala.Cuandoveáismibengalaaloeste, subís lacolinahastalazonadeaterrizaje.Solamentecuandoveáismibengala.

LepusolamanoaJamesenelhombroylozarandeóhastaqueJamesdijo:—Entendido.Cuandoveamoslabengala.Elsargentovolvióaponerrumboaloeste,subióyseadentróenlarefriega.En el lado sur de una choza, a su sombra, agrandaron una zanja con sus palas para cavar

trincheras,encogiéndosedemiedoconcadaestallidodemorteroydeartillería.SonabanmásfuertequeelmásfuertedelostruenosqueJameshubieraoídonunca.

—Estoyhaciendoestomuchomásdeprisaqueen la instrucción—dijoel recluta.Se tiraronalhoyoydijo—:Yoquécoñosé.DameunosM&M’s.

En el cinturón para cartuchos, en lugar de uno de sus cargadores, James llevaba una bolsa deM&M’s.

—Dameunpuñado—dijoelrecluta.—Telodoysidejasdedecir«Yoquécoñosé»todoeltiempo.—Esunacostumbre.Tampocolodigotanto.—Di«Quéséyo»o«Diosbendito»o«Bésameelculo».Simplementemézclalounpoco.—Entendido,micabo.—¿Cómotellamas?—Nash.—¡Mierda!—gritóJames.Unalluviadebalasatravesólascabañas,mandandotrozosdecañasypajaentodasdirecciones.Habíahechoinstrucciónbásica,instruccióndearmas,instruccióndeselva,instrucciónnocturna,

instruccióndesupervivencia,evasiónyfugas.Peroahorasedabacuentadequenadiepodíainstruirtesobreaquellascosasdeningunamaneraquesirvieradealgo,ydequeestabamuerto.

Bajólavoz.—EsonosonM16—dijo—.SonAK-47,seguro.Zip, zip, zip, las balas sobre sus cabezas como insectos venenosos, zip, zip. En el aire se

levantaban remolinos de polvoy trozos de choza.Se estaban cayendo las frondas de las palmerassituadasúnicamenteaunosmetrosdeellos.

—¡Estánmatándolotodo!—dijoNash.—Nosabenqueestamosaquí—dijoJames—.Asíquecállate,¿vale?Ningunodeellosdevolvióelfuego.Unaráfagadefuegoautomáticoestallóaloeste.Unavozgritó:«¡CUBRIDME,CUBRIDME,CUBRIDME,

CUBRIDME!».JamesseincorporóyvioaHombreNegrobajandoporelladooestedelahondonada,yahoragritando:«¡DISPARAD,DISPARAD,DISPARAD!», asíqueabrió fuegohacia el este.HombreNegrollevabaalhombrounaametralladoraM60yarrastrabadetrásdeélunacajadecincuentakilosquelaalimentabademunición.Se tiróasu trinchera justoencimadeellosy leshizopolvo los tímpanos

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desahogándoseavozengrito:—¡Nadievaapasarmientrasestéaquíestacabrona!—Seincorporósobrelasrodillasdisparando

y una cortina de tierra se levantó del terrenomás elevado que tenía delante. Estaba aplanando elreborde de la hondonada como si fuera un bulldozer—.Caballeros, tengo bastantemunición paramataralaespeciehumanaentera.

Nuncaenlavidavolveréallamarnegrodemierdaanadie,prometióJamesensucorazón.Accionóel selector conel pulgaryvacióun cargador entero en automático.Colina arriba los

morterosempezaronotravez.—¿Ospodéiscreerestamierda?—¿Quécoñoesesto?¿QUÉCOÑOESESTO?—¡Hadichoelsargentoquelamontañaenteraestásiendoatacada!—Seestándescarriando—dijoHombreNegro—.Normalmentenoatacanalaluzdeldía.—Mierda—dijoJames.—¿Quépasa?—Nosé.Meestáshaciendoreír.—Túmeestáshaciendoreíramí.—¿Porquénosestamosriendo?Nopodíanparar.Conloqueestabapasando.Lesponíatanfelicesquenopodíanparardereírse.—¡Yoquécoñosé!—dijoJames,yvolvióacargarylostresserieronyestuvierondisparando

hastaqueJamesvacióotrosdoscargadoresyHombreNegrogritó:—PARA,PARA,PARA,DEJADEDISPARAR,HOSTIA.Lazonacircundanteestabaensilencio,aunquetodavíaoíanartilleríaomorterosenalgúnpunto

delacimadelacolina.—DameunM&M’s—dijoHombreNegro.—Joder,sí.Jamesledioelpaqueteentero.HombreNegroselovolcósobrelabocaymasticódeprisa.Unparloteovinodelamismavegetaciónquehacíasolounosminutossehabíaconvertidoenun

infiernobajolasbalas.—¿Quéeseso?¿UnaardilladelVietcong?—Unmono.—Ungibón—dijoJames.HombreNegrosonrióconlosdientesmanchadosdechocolateydijo:—Ahíestálabengala.Vamos.—¿Vamosadónde?—Vamosparaarriba.—¿Paraarriba?Nohaynadaarriba.—Nosvamosencuantosemeenfríeelarma.Ahoranosepuedetocar.—¿Quéestápasandoporaquí?—Tócala.Fríeteeldedoyquesetecaigadelamano.—Nopiensotocarnada,joder.—Ponedotrocargador,losdos—dijoHombreNegro—.Tenemosquesubiresacolina.—Esoeranmorteros,tío.—Hayqueirse.Todosdepie,venga.

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HombreNegroechóaandarcolinaarribaconsuametralladoragiganteechadaalhombrocomosifueraelpicodeunminero,conunatoalladecolorolivahaciendodecojíndebajodelamismayagarrándoladelbípode.HoustonsiguióaHombreNegroyNashsiguióaHouston.

Por encima de ellos la ladera de la colina tenía arrozales plantados en bancales. Avanzaronbordeandolosdiquesycaminaronpesadamenteendirecciónmásomenosascendente.

Delanadavinountraqueteodedisparos,lasbalasarrancandolospequeñostallosybisbiseandoenelagua.

Cruzaroncorriendolosdiquessindecirnadaysedejaroncaerenelladoseco,ysearrastraronhastaencontrarunazanjaderiego,setiraronenellaysealejarontorpementedequienfueraquelosestabaintentandomatar.

—Noloentendéis—dijoNash—.Noestoylistoparaestoenabsoluto.¡Solohace tresdíasquellegué!

—Yomeacabodereenganchar—dijoJames—.Nosécuáldenosotrosdosesmáscapullo.Pasaronporentrechozasenllamasyvillorriosvacíosynovieronniaunalma.Ensucompleta

ausencia, los nativos parecían sugerirse a sí mismos con nitidez. Pero más adelante sí que habíaactividad. Oyeron disparos. En un momento dado oyeron una voz que chillaba en un idiomaextranjero. Llegaron a un villorrio cuyos habitantes acababan de marcharse hacía unos minutos.Hastahabíandejadoaunanimalencerradoenuncorral,unacabraqueteníaelcuellomuyestirado,como si lo estuviera ofreciendo para que se lo cortaran con un hacha, pero que solamente estabacagando.Enmediodeunaguerra.

Lostressoldadossiguieronsubiendohacialacima.

Alatardeceryahabíancruzadosietekilómetrosdemontañallenosdegentequelosintentabaasesinar.A James le daba la impresión de que habían subido en unmomento. El cielo era rosa ymoradomientrasrecorríanelúltimomediokilómetroquelosseparabadelazonadeaterrizaje.Alentrarenelperímetrovieronunafiguratumbadabocaabajoyvestidaconununiformeamericano,destrozadaamediasporunladoysinapenasrastrodelacabeza.Jamesnoestabasegurodequefuerauncuerpo,porquenadielomirabasiquiera.Juntoalapistadelhelipuertovariosmiembrosdelcuerpomédicoestabanesperandoelregresodeunhelicóptero,quedijeronquehabíadadomediavueltaysehabíamarchadoporculpadeunsupuestofuegodemisiles.

—Puedequenofueranmásquebengalas—leexplicóuncaboaHombreNegro—.Haentradounaporlaportillayhahabidoquesacarlaapatadas.

Pero seguía sin habermención alguna del cadáver. James se quedó conHombreNegro y conNash.Sesentaronenunmurodesacosdearenaycontemplarondesdearribalamontañaquehabíanpasadocincohoras subiendoenunzigzagdescabellado.Elvalledelestepermanecía frescoya lasombra.

—¿Quéhapasado?—Notengoniidea.—Quenoshanatacado.Somossuenemigo.—Yonosoyenemigodenadie.—Yonoquieroserniamigonienemigoninada.—¿Dóndeestáelsargento?—¿DóndeestáEco?

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UncapitánalqueJamesnorecordabahabervistonuncaantessubióhastaellos,rojodelacabezaalospiesdepolvodelrotor,mordiendounacolilladepuro,yparpadeandoporelsudorquelecaíaenlosojos.

—Estosehaestablecidocomocampamentobase.—Lechocóunbichocontralafrente—.Quierotodaestazonabienprotegida.

Elbichodiounavueltarápida,serecuperóysemarchó.—Capitán,estamosbuscandoalsargentoHarmon.—¿DóndeestálaSecciónEco?ElcapitánseñalóaHombreNegroysuenormeametralladora.—EncuentrenunsitioparaplantareseM60.Ysefue.Ningunodelostressemovió.Unmiembrodelcuerpomédicoconaspectodehippy,bigotegrandeyunpañueloazulatadoala

cabezalestrajotrescomidascalientes,unaapiladaencimadelaotra,yellosseloagradecieronconsinceridad,aunqueNashledijo:

—Tienesunosdeesosbigotesqueparecenunaorugareptando.Hacia todos aquellos hombres que lo rodeaban, James sintió una buena voluntad de una

profundidadsinprecedentes.Elmiembrodelcuerpomédicolesdijoquehabíantenidounabajaencombateporataquedemortero.

—¡Yolohevisto!—dijoJames—.Hevistouncadáver.Peromehaparecidoqueeraotracosa.—¿Otracosa?¿Quéotracosapodíaser,tío?—Esverdad—dijoHombreNegro—.Lohemosvisto.—Noestoyentendiendonada—dijoJames.Todavíanoestabasegurodesiacababadelucharen

unabatalla—.¿Estabanatacandotodaestamontañaono?Ordenóa sumemoriaquemontaraalgunaclasedecrónicade la tarde.Todoeramuynítidoy

estabamuydesordenado.Unacosasabíaseguro.Nuncasehabíamovidotandeprisanihabíaestadotansegurodeloqueestabahaciendo.Todaslastonteríassehabíanconsumidodegolpe.

Yparecíaquesehabíaacabado.Nohabíaexplicación.Ningunaguerrillahabíamolestadonuncaaaquellamontaña. De repente la gente del lado norte se había esfumado, luego había aparecido elVietcongyahoraelVietcongtambiénacababadedesaparecerenunanubedehumo.Jamesseagachóysecomiósussalchichasconjudías.Todavíateníaeluniformeempapadodesudor.Nash,porloqueveía,tambiénestabaempapadodeltodo.

—¿Cómoestás?—ledijoJames.—Estoybien,tío—dijoNash—.¿Porqué?¿Esquenomecrees?Jamessequedóperplejoysolamentepudodecir:—Sí.Tecreo,Claro.Sí.—Mesudanlaspelotas,esoestodo—dijoNash—.Noesquemehayameado.Bajoelatardecerelmédicolos llevóporunsenderoserpenteantehastaunacañadadondeunos

chavales sin camisa se estaban bañando por encima de la cintura. Había alguien acuclillado en laorilla,estrujando loscalcetines sobreelarroyo fangoso.Estaban todosexcitados, riendo, soltandochillidos.Sinbotas,sincamisa:unaconvocatorialegítimaparanadarsignificabaquelacosaseteníaque haber acabado, que estaba claro que estaban a salvo. Bajo la luz agonizante, James se sentíaanimadoycontentoytodaslascarasjóvenesyborrosasquemirabaledevolvíanunmensajedeamorfraternal.

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—LoschavalesdeReconocimientonolleváismuchoequipaje.Elquehabíahabladoeraquizánuevo;no sedabacuentadeque lodeEcoeraunabroma.Era

ciertoquenollevabanmuchoencima.ElpropioJamesyanollevabamochila,solamenteunabolsaalaespaldaalaqueibansujetosunponchoyunaherramientaparacavartrincheras,sietecargadoresdeveinte balas, unos cuantos talismanes sentimentales—gomas, fichas de póquer y golosinas—yvariasdosisderepelentedeinsectosypañuelosparalacabezaempapadosdelmismo.Habíallegadoalaconclusióndequequereralgosolíasermenosdolorosoquecargarconello.

—Bueno—dijoalguien—,laguerrasehaacabado.Yomevoyabajoalaaldeaaecharunpolvo.LasputaslohacengratisenelTet.

—¿QuéeselTet?—EselAñoNuevodeloschimpas,capullo.HoyeselTet.—MañanaesTet.Eseltrecedeenero,tío.—¿Cuándo?—Eshoy.PorDios.Unodelossoldadosacargodelazonadeaterrizajellegóalclaroydijo:—¡Joder!¡Joder!James sediocuentadequeprobablementeél tenía elmismoaspecto: sudoroso, sucioycon la

miradadesencajada.—¡Mierda!¡Mierda!—dijoelchico.Corrióhastaelbordedelclaroymiróelpaisajepúrpuraa

lolejos,lassombrasdelasdemásmontañas—.MIERDA.—¿Mierdaporqué?—dijounodesusamigos.Elchicoregresóysesentónegandoconlacabeza.Cogiólasdosmanosdesuamigoenlasdeél,

comoenalgúnestiloextranjerodesaludoemocionado.—Mierda.Hematadoauntipo.—Supongoquesí.Mierda.—Esigualquedispararaunciervo—dijoelchico.—¿Ytúcuándohasdisparadoaunciervo?—Supongoquemeconfundoconlaspelículas.Peroestohasido:bing.Seacabó.—Nodalaimpresióndequesehayaacabado,Tommy.—Eh.Lamitaddelcráneolehasalidovolando.¿Teparecelobastanteacabado?—Déjaloestar.Estásperdiendoelcontroldetimismo.—Sí,vale—dijoTommy—.Tengoquedejarlo.—Eh,suéltamelasmanos,maricón.James también habíamatado a alguien.Había visto el destello de un cañón, había lanzado una

granadaaunjardincilloydespuésdelaexplosióndossoldadosdelVietconghabíansacadoarastrasaunhombrequenoparecíaprecisamentevivo.Jamessehabíaquedado tanpasmadoquenohabíadisparadoalosdosrescatadores.QuepuedequefuerandelVietcongypuedequeno.

Había estado en posesión de cinco cargadores de veinte balas y el teniente le había traídoveintiochomás.Había disparado trescientas balas y había lanzado dos granadas y había recorridodiezkilómetrosyhabíamatadoaunposiblesoldadodelVietcong.

LosdemásmiraroncómoTommysesacabauncigarrilloyunencendedorZippodelbolsillodelapechera.Lo encendióy soltóunabocanadadehumoconcierto airede autoridady ledijo a suamigo:

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—¿Túhasmatadoaalguno?—Creoquesí.—¿Acuál?—Noséacuál.¿Cómocoñolovoyasaber?James se había pasado un año entero sin herir a nadie y ahora acababa de decir que sí al

reengancheyyahabíamuertoalguien.Yaqueltipo,Tommy,estabacantandounaalegrecancioncillasobreeltema.

Elmédicoseadentróentrelosárbolesconunpardetiposyenseguidallegóflotandounoloramarihuana,peronopasabanada,quesedestrozaranlamente,aquelloeralaguerra.

Elsol,poniéndosemásaleste,saliódedetrásdeunamontañaeiluminóelvalle.Másalládelosarrozaleslaselvabullíadecoloressuaves.DemuchomásabajoveníanloschillidosdeuncerdoqueestabasiendosacrificadoparaelTet.UnchicocantabalaletracambiadadeunaviejamelodíadelosBeatles:

Closeyoureyes,spreadyourlegs,AndI’llfertilizeyoureggs…

—Mierda —dijo otro chico—, ¿vosotros estabais combatiendo? Nosotros hemos bajadopatrullandohasta lamitadde lamontañayhemosvuelto a subirynohemosvistounamierda,nohemosapretadoelgatilloniunavez.Hemosoídocohetes, tío,aviones,helicópteros,bombas,peronohemosvistounamierda.Hemosoídomorteros,tío.Nohemosvistounamierda.

Unjovenaparecióentreellosdiciendo:—Hansonentraenlazonatrayendoalegríaatodoelmundo.YabrióunpaquetedeseislatasdeBudweiserentrelosmáscercanos,queseleacercaroncomo

perrossalvajes.—¿QuiénesHanson?—preguntóJames.—¡Yo!¡Hansonsoyyo!Se imaginó que la cabeza deHanson explotaba. En la instrucción básica había oído hablar de

gentequesimplementecaíamuertaporunabalaperdidaounfrancotiradorenemigoescondido:estáspensandoentuscosas,odiciendoalgo,ydeprontocaesfulminado.Teagachasparaatarteelzapatoytucabezasalevolando.Élnoqueríacaerfulminadoytampocoqueríaestarcercadenadiequecayerafulminado.

HombreNegrosedirigióatodosellos.—En tiempos de guerra tenéis que vigilar vuestro karma. No violéis a las mujeres ni matéis

ningúnanimaloelkarmaosvaajoderbien.Elkarmaescomounarueda.Cuandogirasunaruedapordebajodeti,esohacegirarotraruedaporencimadeti.Yyoestoyavuestrolado.Vuestrokarmatocaelmío.Bajoningúnconceptotrastornéisalkarma.

—¿Esoquées,unrollodelosMusulmanesNegros?—Nosoymusulmán.Simplementehevividoyhevistocosas.Estaba diciendo idioteces totales que nunca se habría aplicado a sí mismo. Pero aquellas

advertenciashicieronqueaJamesselehelaraporcompletolasangre.En cuanto la oscuridad llegó para esconderlos de sus superiores, los tres de Eco encontraron

hamacas desocupadas en unos árboles del lado este del perímetro, lo más lejos que pudieron

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encontrar del sitio por donde el enemigo había venido aquella tarde, y se quedaron dormidos sinquitarselasbotasniloscinturonesdecartuchos.Hastaquellegaranlosdueñosparaecharlos,aquellaerasucasa.Cayólanoche.Sise tumbabade ladoymirabahaciaelsuelo,Jamesdistinguíapuntosfosforescentes en el follaje. De no ser por eso habría creído que se había quedado ciego. Losmosquitoszumbabanenlatelamosquitera.Sepusosuspañuelosempapadosderepelenteallídondesusbrazososumejillapudierantocarlatelamientrasdormía.Porentrelahierbareptabancosas.Lanoche siempre era así. Hoy había matado a alguien. Hacía menos de ocho horas. Durante lainstrucciónbásicanohabíapensadoenmataranadie,solamenteenquelomataranaél,enloscochesquenopilotaríayenlasmujeresquenoconquistaríaporqueestabamuerto.Oyóqueunpardetiposhablaban por allí cerca. Demasiado excitados para dormir. Cuando la muerte andaba cerca, unoaccedíaalfondodesualma.Aquellosotrostambiénlohabíansentido.Élselonotabaenlasvoces.

Por la noche, James abrió la cremallera de la tela mosquitera y se descolgó de la hamacacreyendo que era porque tenía quemear, pero entonces se dio cuenta de que losmorteros habíanvueltoaempezarenalgúnpuntoalpiedelamontaña.Oyóvocesquedecían«Hostia»,«Mierda»,quedecían«Corred, corred, corred».Al este las bengalas flotaban en la noche, y bajo su tenue luz decolor ámbar vio colina abajo los peñascos desnudados por los herbicidas bailar con sus propiassombras.Vioeldestellodelasarmasdefuegoyoyóelpop-pop-popdelosAKyeltraqueteodelosM16.Oyóaviones.Oyóhelicópteros.Oyócohetes.Sequedócongeladojuntoasuhamacaconelarmaen lasmanos, asustado y lloroso, estúpido y solo.Ahora veía qué aspecto tenía una explosión demortero:unamanchadecolorrojoanaranjadotangrandecomounacasa,yunsegundomástardeunestampidotangrandequeledolieronlossenosnasales.Yluegolellegóotra,yotra,yunamás,cadavezmáscerca.Estabaenmediodeuntiroteo.Unabalalerebotóenelcascoyenelrifle.

—¡EH,EH,EH!—Algoloagarródelcinturónytiródeélhaciaatrás.EraHombreNegro—.¿Quéestáshaciendo?

—Oh,no.Mierda,mierda,mierda.—¡Estáscorriendohaciaellos!¡Agáchate,agáchate!—Losiento,losiento,losiento.—¡Oh,mierda!Estáhaciendoseñales.—¿Qué?—dijoJames.—Vamos,vamos,vamos.HombreNegrosemovió,yJamestratódeagarrarloporlapartedeatrásdesucamisa,peroyase

había ido, retrocediendo. El perímetro entero estaba retrocediendo. Nash estaba a su lado, unfantasmaalaluzdelasbengalas.

—¡Paradedisparar!¡Somosnosotros!¡Somosnosotros!¿Yoestabadisparando?,preguntóJames,peronooyónada.Eratodotelepatíamental.Seestaba

moviendo sin tocar el suelo. ¿Hacia dónde?Hacia aquí, por aquí. Seguía estando conNash y conHombreNegro.

—¿Quiénesesagente?—dijoNash.—Hay un oteador en ese otro pico —dijo Hombre Negro—. Nos están escalonando esos

morterosencima.Voces:—¿Dóndeestámioperadorderadio?¡RADIO,RADIO,RADIO!—¡Aquí,aquí,aquí!

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—Dígalesqueestamosbajofuego.¡Aquínobajanadie!—¡Repitaeso,repitaeso!—¡Saldeesapista!¡Estamosbajofuego!¡Estamosbajofuego!Jamesestabatumbadobocaabajoagarrandolatierraconlosdedos.Debajodeél latierradaba

botes.Noconseguíaquedarsequietosobrelamisma.Apenaspodíarespirar.—Pero¿quéquierenesoscabrones?Jamessepreguntósiseestabamoviendo.Laoscuridaderalobastantedensacomoparabebérsela

yestabasurcadadepostimágenesdebalastrazadorasydestellosdearmas.Ahorasehizoelsilencio.Noseoíanielzumbidodeunbicho.Enunsilenciosinprecedentescomoaquel,Jamessediocuenta,soloporelruiditoquehacíasucargadoralgolpearsuavementelacorreadelarma,dequeteníaelcargador vacío,mientras que solamente dosminutos atrás el ruido que lo rodeaba había sido tanespectacularquenopodíaoírnisuspropiosgritos.Enaquelnuevosilencionoqueríareemplazarelcargadorpormiedoaquetodoslossentidosdelenemigoseconcentraranenelruidoylohicierantrizas,trizas,trizas.

A dos kilómetros al este atravesando la oscuridad había otra montaña, él no sabía cómo sellamaba, nunca lo había pensado, pero ahora venían disparos de allí, un ruido ondulante einsignificante.Másdeflagracionesenunaladerasituadamásabajo,quetampocoformabapartedesumundo,peroestavezmáscercanos,secosynítidos.Oíaconclaridadsiempreycuandono tuvieraquedispararéltambién.

Vinieronavionesdesdeeloeste.—Ahoraesoshijoputassonunoshijoputasmuertos—dijoalguien.Loscohetesiluminarontodalaladeradelamontañapordebajodeellosyeltechodefollajeque

teníanencima.—¡No disparéis, no disparéis!—gritó alguien, corriendo pesadamente—. ¡Es soloHanson!—

AqueltiposedejócaeralladodeJamesydijo—:¡Hansondicequealamierdaconesto!PorloquepodíaverJameseranuntotaldeseis,contandoaltalHanson,losqueestabantumbados

bocaabajoenlaselva,enloaltodeunterraplén.Enelsilencioentreunbombardeoyotro,eltiposepusoahablarenvozbaja,comounlocutorde

golfduranteunmomentotensoalembocarelhoyo.—Hansonpermaneceenelsuelo.Hansonsienteelsudorcayéndoleporelespinazo.Hansontiene

elpulgarenelseguroyeldedoenelgatillo.Siviene,elenemigosevaaquedarmuyjodido.Hansonlesvaareventarlacara.EldedodeHansonlameelgatillocomosifueraunclítoris.Hansonquiereasu arma como si fuera un coño. Hanson se quiere ir a casa. Hanson quiere oler sábanas limpias.SábanaslimpiasenAlabama.NoestasranciasyapestosasdeVietnam.

NadiesequejóaHansonporaquello.Sedabancuentadequeelenemigosededicabaamatar,deque ellos no eran más que niños y de que estaban muertos. Les aliviaba oír la voz de Hansonhablandodeaquelmomentocomosifueraalgoquesepodíaentenderyalotalvezinclusosepodíasobrevivir.

—¿DóndeestámigentedeEco?ElsargentoHarmonselesacercópordetrás,caminandoerguidobajolagloriarepentinadeotro

bombardeodecohetesmásabajo,ysupieronqueestabansalvados.—¿Cuántosdenosotroshayaquí?SeoyólavozdeHombreNegro:

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—CincodeEcoyuntornilloflojo.—Tenemosactividadaunosdoscientosmetrosbajandoporeste terraplén—dijoelsargento—.

Vamosabajarhasta cincuentametrosy abrir fuego.Veniddetrásdemí.Cuandohaya luzbajáisymiráis,ycuandoestemosotravezaoscurasavanzáishastadondehabéismirado.—Seinclinóy letocóelhombroaJames—.Estásrespirandodemasiadohondo.Respiradeprisaporlanariz,ynotehacefaltamás.Peronoempiecesahiperventilarteenestassituacionesotevanadarcalambresenlasmanosylosdedos.

—Vale—dijoJames,aunquenoestabasegurodequéestabanhablando.—¡Vamosallá!—dijoelsargento,ysalió.Portodoelvallelasbengalascolgabandesuscolasparpadeantesdehumo,desprendidasdeellas,

y bajaban flotando, ymientras James avanzaba se podía ver los pies bajo lamedia luz humeante.Mientrassiguieraavanzandonadalopodíamatar.Cadamomentollegabacomounaviñetadecómic,y él encajaba a la perfección dentro de cada viñeta. Los bombardeos iluminaban la noche, lasbengalassemecíanenloscielosyasualrededorseescabullíanlassombrasoscuras.

—¡HombreNegro!—gritóJames—.¡HombreNegro!Oyólaametralladoramásadelanteyfuegateandohacialamisma.Lasbalasatravesabanlashojas

rodeándoloportodoslados.Habíaalguienherido,berreando,soltandoalaridossindescanso.Anteélapareció un tipo arrodillado cuyo casco había saltado de un disparo y con el cuero cabelludoarrancadoporunaheridaenlacabeza…No,eraelmédicohippy,quellevabaelpañueloatadoalacabezayteníaunpardejeringuillasdemorfinacogidasentreloslabioscomosifuerancigarrillos,yqueestabaarrodilladojuntoalquegritaba,queeraelsargento.

—¡Sargento,sargento,sargento!—dijoJames.—Bien,bien,háblale,nodejesquesevaya—dijoelmédico,ymordióunajeringuillayclavóla

agujaenelcuellodelsargento.Peroelsargentoseguíaberreandocomounniñopequeño,vaciandoyllenandolospulmonesunayotravez—.Disparaunpoco,¿quieres?—dijoelmédico.

JamessepusoencuclillasycaminóconlaspiernasdobladashastalaposicióndeHombreNegro,disparando colina abajo a los destellos de las armas. Sabía que estabamatando a gente.Moverse,aqueleraeltruco.Sisemovíaymatabasesentíademaravilla.

***

Desdelastresdeaquellatarde,Kathyestabaatendiendounpartodifícil.Alascinco,solohabíasalidolacoronilla.Porencimade lacoronilla,unacarasinojosniorejas.Ladiminutamadre llevabadepartodesdeentonces intentandosacarasucriaturadeforme,perodemomentonada.Lafamilianoteníadineroparaunacomadrona.EstabaviniendounmédicobritánicodelCentroBiomédico,dondeestudiaban a losmonos. Kathy lo asistiría, tal vez en una cesárea. Ella teníamorfina y xilocaína.Confiabaenqueelmédicotuvieraalgomejor.

Los médicos franceses estaban diciendo que eran los defoliantes los que estaban causandoaquellosnacimientosmonstruosos.Lagenteloexplicabadeotramanera,ylessuplicabaalosdiosesofendidosporlamalaconductaquedejarandecastigaralosbebésinocentes.¿Quémalaconducta?Lospensamientosdelcorazón.Unamujerjovenembarazadacomoaquelladebíadehabersucumbidoa horribles imágenes interiores. Sueños o ansias o pensamientos impuros. Sobre su camilla en lachozade techobajo lamuchachaparecía librede todopensamiento, con laspiernas abiertasy las

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manosblancasyagarrotadas.Elesfuerzo,larespiración,elcuerpo…¿NodecíaalgolaEpístolaalosColosenses?Algosobreelcuerpotejidoenformadecapulloynutriéndoseporlascoyunturasylosligamentos…Aquelcuerponoparecíamásqueaquello.Laguerrahabíacastigadoamuchosdelosniñosconlosqueellatrabajaba,unapiernaamputadaolasdos,unbrazoamputadoolosdos,carasquemadas y ciegas. Y huérfanos. Pero ahora aquel milagro trágico de cabeza enorme y consolamentemediacaraencalladoenelparto,yasalíadevastadoporelconflicto.

Hacialasdiezaproximadamenteyaestabaclaroqueelmédiconoibaallegar.Prontoalacriaturase leparóelcorazón.Ellamandósalira la familiaydesmembróalniñomuertoenelúteroyfuesacandolostrozossangrientos,limpiándoloslomejorquepudo,ypocodespuésdelamedianochehizoentrardenuevoalafamilia.FueraenlanochesonabanlospetardosdelTet,ylasmanosdeloscelebrantesagitabanbengalasdepólvora.Sequedódormida.

Luegoseoyeronexplosionesmucho,muchomásfuertes.Unatormenta,pensóella.Diosconsusenormespensamientosblancos.Peroerancombates,algunosalesteyalgunosalsur,comonohabíaoídonuncaanteseneltiempoquellevabaallí,explosionescomopetardosdentrodecubosdebasura,pero de una magnitud que rivalizaba con los truenos naturales, y de una profundidad que hacíarechinarloshuesos.Ellacontólossegundosquepasabanentreeldestelloyelestampidoycalculóquealgunasbombasdebíandeestarcayendoaproximadamenteaunkilómetrodeallí.Todoelmundoestaba despierto en la casa, pero nadie encendía una lámpara. Por encima de los arrozales unhelicópteroproyectóelhazblancodesurastreadorporenmediodeunenjambrecadavezmayordehacesdecolornaranjadelasbalastrazadorasysoltóunadescargaterroríficadesusresplandecientesametralladorasdebabor.Labatallacontinuódurantehoras,losespíritusdesgarradosaleteandobajola tormenta. Luego se detuvo. Siguieron descargas esporádicas. Al amanecer las cosas se habíancalmado.Lascigarrassepusieronacantar,yunaluzlentaydulcesaturólaatmósfera.Ungibóngritóporencimadelascopasdelosárboles.Dabalaimpresióndequenohabíaunasolaarmadefuegoenelmundo. Un pequeño gallo vino y se plantó en el umbral, levantó el pico y cantó con los ojoscerrados.DabalaimpresióndequereinabalaPazenlaTierra.

Luegolallamaronaunaaldeacercanaalcanzadaporlasbombasincendiarias,noestabaclarosidelaaviacióndeVietnamdelSurodelaamericana,peroencualquiercasoporequivocación.Kathyhabíavistoquemadurasantes,peronuncauncrematorioentero.Llegóamedia tarde.Unmanchónnegrodel tamañodeunapistadetenisocupabaenunodesusextremoslamitaddelaaldea.Habíacenizas donde antes había habido unas cuantas chozas, y un arrozal con el agua hervida hastaconsumirseylostallosdesintegrados.Elolorapajaquemada,todoimpregnadodeunoloraazufre.Noeraprobablequehubierasidonapalm,por loqueellavio,sinomásbienunabombadeazufreblanco.Aloírlosavionesquevolabanbajo,losaldeanoshabíancorridoaponerseacubiertoenlaselva.Varioshabíanmuerto.Unadeellas,unaniña,seguíaviva,enestadodeshockprofundo,casitoda quemada, desnuda.No se podía hacer nada. Kathy no la tocó. Los aldeanos estaban sentadosalrededor de ella bajo el atardecer.El pálido reverbero verde de sus quemaduras competía con laúltima luz. La niña parecía mágica, y debido al agotamiento de Kathy y en medio de aquellaatmósferadesilencioydecalmadespuésdelatormenta,laescenaparecíapartedeunsueño.Laniñaeracomounídoloquerecibíaenergíadelaluzdelaluna.Despuésdequecesarantodoslossignosvitales,sucarnesiguióresplandeciendobajolaluna.

Ella se quedó en la aldea hasta la mañana y luego se dirigió en su bicicleta hasta el CentroBiomédico.Lanocheanteriorlehabíallegadonoticiadequelasinstalacioneshabíansidoalcanzadas.

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Destruidas,eraloquelehabíandicho.Elchicoquelehabíatraídolanoticia,quenopodíatenermásde diez años y que sin embargo había viajado en la oscuridad con unmachete echado al hombrocomosifueraelhachadeunleñador,lallevóalaluzdelamanecerporunatajoquediscurríaentrearrozalesycampos,yKathypedaleóconfuerzaporelcamino,ansiosaporllegarcuantoantesconlaparejadecuidadoresdemonos.Elatajolallevóporelmargendeunestrechocanalderiegorodeadodecasasybordeandolosdiquesatravésdeunosanchosbajíosdearrozales.Alolejosunhelicópteroamericano, que el sol naciente teñía de rosa por un lado, acechaba sobre el río. Aquí y allí loscampesinostrabajabanenlosarrozales,aunaaquellahora,aunenundíacomoaquel,conlaspiernasrectas,conlaespaldarecta,dobladosalaalturadelascaderas,mientrasasualrededordeambulabanlos patos y los pollos, los enormes búfalos de agua, las vacas brahmán de color beige y aspectofamélico,ylosponisesqueléticos,todoscomportándosecomosilaguerrafueraimposible.

Yaeracasimediodíacuandosubióunpromontoriobajoyencontróelotro ladodevastado.SedetuvoenlacimadelacolinaquemadacuyosuelotodavíahumeabaymiróhaciaabajoendirecciónalCentroBiomédico.Elalaquealbergabaalosmonoshabíaquedadoarrasadaperonolasviviendas.Caminóllevandosubicicletaporelterrenocalcinadoquelaseparabadeledificio.Lametrallahabíamordidosusparedesperonohabíaacertadoenelcristaldelasventanas.Unchicoacuclilladoconlospiesplanosenelsuelojuntoalapuertayrodeandoconlamanounrifleapoyadoenverticalestabaescupiendoentresuspies.Levantólavistahaciaellaylededicóunasonrisabrillantemientrasellapasabaalinterior.

En la sala principal se encontró a la señora Bingham, unamujer flaca y casi anciana con ununiformecaquimanchadodesangre,elpelocortadocomoeldeunchicoyuncigarrilloasomandode los labios mientras permanecía de rodillas poniendo pañales a una de las muchas criaturassimiescasyparecidasaduendesquehabíaechadassobreunamantadelejércitosobrelamesilladelcafé. Se detuvo, se sacó el cigarrillo de la boca y le dedicó aKathy una especie de sonrisa o demueca,muysimiescatambién,mientrasselellenabanlosojosdelágrimas.

—¿Yahoraquédigo?Entra.—Hizoungestoimpotenteconelcigarrilloseñalandoalrededor—.Notemueras.

A lavistade ladestrucción,Kathyhabía temidopor lasmedicinas.Peroviodosneveras en lacocina.

Kathysesentóydijo:—Esterrible.—Estos son los únicos que han sobrevivido, por lo que sabemos. Siete. Teníamos las cuatro

subespeciesdellangur.Ahoratenemosdos.Seriodeformainexplicable,terminandolarisotadaconunatoshúmedadefumador.—Eshorroroso—dijoKathy.—Estamosenunlugarhorroroso.—Esunmundocondenado.—Notepuedocontradecir.Seríaunatontería.Parecíahaberunadecenaaproximadademonos recuperándosesobre lamanta.Todos llevaban

pañalesdetela.—Perdonaquenollegáramosanoche—dijolaseñoraBingham—.¿Fuebienlacosa?Mejorno

mecontestes.—Lamadreestábien.

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—Elbebéfalleció.—Correcto.—Losiento.Hemosestadomuyocupados.Aquíhahabidounapequeñaepidemiadegripe.Pero

esoyanoimporta,¿verdad?Kathy colocó su mochila sobre la mesa y la abrió. Llevaba una bolsita de plástico llena de

cigarrillos sueltos del ejército americano para regalar, y ahora se los pasó todos a la señoraBingham.

—Algunosparecenrotos,¿no?—dijo.LaseñoraBinghamsostuvoalmonodiminutosobreunarodillaytantoellacomolacriaturade

cejasenormesmiraronlabolsitaconcaradenoentender.—Teníamosoncecunas—dijo—,perosehanquemadotodas.Nosonmásquemonos,estuvoellaapuntodeponerseagritar,monos,monos.Enlacocinahabíaunasirvienta—joven,calzadaconsandaliasdetacónaltoyunafaldacorta—

queparódelavarpañalesdiminutosenelfregaderopararecibiraKathy.—¿Quémedas?—dijo.—Lárgatedemivista—dijolaseñoraBingham.Ylachicaregresóalacocina.—¿Estáelmédico?—Estamosesperando.Esposiblequealgunossehayanescapado.Estábuscandosupervivientes.—¿Lospuedeencontrar?¿Lospuedeatrapar?—Si están heridos sí. Este es un cabeza dorada.—Volvió a colocar al langur herido sobre la

manta.Elmonosequedótumbadomirandohaciaarribaconlosojosnegrosyparecióestarpensandofuriosamente—. Los demás están muertos, probablemente. Todos podríamos haber muerto. Quécabrones.Estánpsicóticos.Enfin—dijo—,atodosnoshanvueltolocos,¿verdad?Nosdemoscuentaono.

Enseguidaentróelmédicoehizoungestohacialareunióndeanimalesmaltrechos.—ContempladalVietcong.—¿Hahabidosuerte?Élnegóconlacabeza.Kathypreguntó:—¿Fueronmorteros?—Cohetes—dijoeldoctorBingham—.Aviones.Ynosolamentecohetes.—¿Napalm?—Probablemente.—Debedehaberlo sido.—Sumujer rompióa llorar—.Todavía tengo losgritosen lacabeza,

justomientrashablo.Notienesniidea.Notienesniidea.—Noteloimaginas—leexplicóelmédicoaKathy—.Losientoperosimplementenopuedes.—Mimi—ledijosumujeralacriada—,tráeleunaCoca-Colaalaseñoritaenfermera.LacriadalediounaCoca-Colaenunvasoconhieloysesentaronenlasaladeestarbajounas

luces alimentadas por el generador mientras el doctor Bingham hablaba de monos. Las cuatrosubespeciesdellangurhabíanpasadoaserconsideradasdosespeciesdistintas,unadelascualessedividía en tres subespecies. De estas, el Trachypithecus poliocephalus de cabeza dorada se habíavuelto,ensuspalabras,«atrozmenteescaso»,ysecalculabaquesolamentequedabanunosquinientos

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individuos.Yahoramuchosmenos.DejaronqueKathymetieralatetinadeunbiberónenlabocadeunode los languresy lasostuvieraasímientraselmono tragaba lechedefórmula.Lacriaturaerabonita,pero lesalíanburbujasdemocoazulde lanarizyellasepreguntósise ibaacontagiardealgomortal.

La pareja se comportaba de la forma más hospitalaria, pero cuando el médico, un hombrecorpulentoybarbudoqueestabaentrandoen lamedianaedad,una figurade lomásagradable,unverdaderobwanadelaselva,oesolehabíaparecidosiempreaKathy,sefijóenlamochilaabiertadeella,dijo:

—¿Quéeseso?Lodijoenuntonomuyfríoymuyllenodeodio.Muyextraño.—Esunaparatoparamedirlapresiónsanguínea.—Esunagrabadora.—Esunmedidordepresiónsanguínea.—Estásgrabandoesto—dijoél.—Cariño,nosepareceennadaaunagrabadora.Eldoctorteníaloslabiosfruncidosylívidos.Respiróconímpetuporlanariz.—Yaloheapagado—dijoKathy.—Vigilaquenosevuelvaaencender.—Creequeesunagrabadora—dijolaseñoraBingham.Kathy estiró el brazo para coger el vaso de Coca-Cola que había en el suelo junto a su silla.

Estaba cubierto de hormigas rojas, que entraban desfilando procedentes del día luminoso en unafalangedequincecentímetrosdeanchurayDiossabecuántosdelongitud.

—¿Hasescuchadolaradio?—dijolaseñoraBingham—.ElNorteestáatacandoportodaspartes.Hanasaltadolaembajadaamericana.

—Ah,¿sí?—Han sido rechazados, parece. Eso dicen los noticiarios. Pero es la emisora americana. Les

convieneparecervictoriosos,¿verdad?Cariño—ledijoasumarido,queestabacuidandoaunadelaspequeñascriaturas—.Estámuerta.Muerta.

—Leestabacolocandobienlosbrazos.—Déjalaenpaz.La criada atacó a las hormigas con golpes enérgicos de una escoba de mango corto,

ahuyentándolasdelapuertaprincipal.Elchicoqueguardabalaentradaseapartómediometroasuizquierda.La chicaparecía china,más alta que lamayoría, bastante alta, conuna faldanegramuycortaylaspiernaslargas.

Kathypreguntó:—¿Osvaisaquedar?—¿Quedar?—¿Podéisrepararlascosas,creéisquepodéisreconstruirlasinstalaciones?—¿Qué otra cosa podemos hacer? ¿Quién más va a cuidar de ellos? Solo quedan siete, pero

bueno,aunasí…Sietedecientosesentaquehabía.—Cientocincuentayocho—dijoelmédico.—Teníaisunaprovisióndeantibióticos,¿no?Mepreguntosiaúnlatenéis.Ellasabíaqueellosteníanantibióticos,enlasegundanevera.

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—Malditos sean, ¿quiénes se creen que son? ¿Qué están intentando hacer?Tú eres canadiense,¿verdad?Noeresamericana.

Kathydijoconvozmuytranquila:—Ahora me estoy preguntando por vuestros antibióticos. Ahora que las cosas han cambiado

tanto.—Oh,porelamordeDios—dijolaseñoraBingham.—Yamepreguntabaporquéhabíasvenido.—Yasé.Losiento.Yasé—dijoKathy—.Esloquehay.Seríandegranayuda.—¿Tienesrefrigeración?—EstabapensandoenlaclínicadeBaoDai.Tenemosunpardeneveras.Seríandegranayuda.De

verdad.Doscientosniños,másomenos.—Nosotrosteníamoscientocincuentayocho—lerecordólaseñoraBingham.—Sí—dijo Kathy, con ganas de golpearla en la cara. Les volvió a preguntar—: ¿Qué vais a

hacer?—Lomásprobableesquenosquedemos.—Sí, nos quedaremos—dijo la señora Bingham mirando fijamente a la criada mientras esta

lavabatraposenelfregadero.—Vuestrogeneradorfuncionabien.—Sí,sí.Todavíatenemoselectricidad.—¿Paraquiéntrabajasenrealidad?—dijoelmédico—.¿Quéesloquebuscas?Sumujersepusoenpiedeunsalto.—¿Quieresmedicinas?¿Quieresmedicinas?—Fuecorriendohastalachicaqueestabafrenteal

fregaderoylelevantólafaldapordetrás.Pordebajolachicaibadesnuda,nollevababragas—.Mira—dijolaseñoraBingham—.¿Sinosvamosaquedar?¡Cómonosvamosair!

—Dejaquesellevelasmedicinas.Ellaabriódeparenparunadelasneverasychilló:—¡Queselaslleveporencimademicadáver!—Dáselas.Lasnecesita—dijoelmédico.—Hascometidounaestupidezalvenir—dijolaseñoraBingham.—Llévatelas—dijosumarido.Lachicacontinuólavandoenelfregaderocomosinoestuvierapasandonadadetodoaquello.

***

Por encimadelCampamentoEco a la salida del sol lamontaña regurgitaba humonegro como sifueraunvolcán.Losarrozalesdelladooeste,quehabíansobrevividointactosadosguerras,ahoraeranunyermo,destruidosporlaartilleríadelEjércitodelNorteoporlosmorterosdelVietcong,asaber cuál, y por lamunición incendiaria y los cohetes de los americanos. El campamento estabaintacto. Las explosiones demorteros habían abierto cráteres a cienmetros delmismo, pero ni unpasomáscerca.LaaldeadeCaoPhuctambiénsehabíasalvado.Dabalaimpresión,sinembargo,dequeamuchosdelosaldeanosloshabíanavisado,dequeelVietcongloshabíaavisado,dequehabíansidocontactados,aleccionadosycambiadosdebando.Ellugarhabíaestadoextrañamentesilenciosola tarde antes del violento ataque.ElPurpleBar había estado inexplicablemente cerrado.El ataque

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había llegado antes de que amaneciera el martes. Amedia mañana del martes la población habíavueltoconsigiloa suscasas,aunquealgunosseguíanviniendo, sinbolsasni fardos,comosi solohubieranestadounosminutosfuera.

Alamanecerelcoronelhabíallegadoenhelicóptero,habíabajadoporlamontañaenjeepyhabíadadounavueltaporlazonaencompañíadelTenienteMetepatasydedoshombresdeOperacionesPsicológicas:elsargentoStormyuncivilalqueelpequeñosargentosereferíacomoSkipper.

—Caray, caray, caray—dijo elTenienteMetepatas—.EsosF-16 le handadouna buena tunda anuestramontaña.

—Estonoesmásqueelprincipio—dijoelcoronel—.Apartirdeahoravaalloverunauténticoinfiernodelcielo.Esunamalditalástima.

Elcoronelestabafueradesí.Duranteloscombatesaquellosaldeanoshabíandesaparecido,perolosgranjerosdelotroladodelamontañano,salvolosquehabíandesaparecidoenlas llamas.Lesdiosopaposenlacabezaavarioslugareñosqueestabansentadossobresustraserosenfilasobreelsuelo de tierra, con las piernas extendidas, los tobillos amarrados entre ellos y las manos atadasdetrásdelaespalda.LosCuchiCuchishabíancapturadoaunhombre,aunvietcong,decían,queseleshabíaacercadoconunAKyhabíahechojironeslamochilaqueelIndiollevabaalaespalda.ElIndioagarróalprisionerodeojosvendadosporlasmuñecasatadasyloarrastróhaciaatrásporelsuelodetierrahastalavegetacióndondelosCuchishabíanplantadosustiendas.Elhombrecillohizotantasmuecasqueparecióqueseibaadesencajarlamandíbulamientraslosbrazosselesalíandelasarticulacionesde loshombrosconun ruidoseco,peronohizoniun ruidomientras losCuchis locolgaban de las muñecas de la rama podada de un baniano, con las puntas de los pies a quincecentímetrosdelsuelo.

Ecoestaba inquietoporel sargento, aquien sehabían llevadoalHospital12conheridasenelcuelloy laespinadorsalyelvientreyqueestabaesperandoallíenestadodeparálisis,demasiadocrítico para trasladarlo a Estados Unidos. La mayoría de Eco estaba sentada en el Purple Bar,bebiendounpoco,locosdepenayasqueadosporelviolentopoderdeldestino.Eltiponegronuevoestaba sentado entre ellos contando mentiras enormes sobre gente a la que aseguraba conocerpersonalmenteenAmérica.Eracapazdehablarporquenoteníaelcorazónroto.Nuncahabíallegadoaconoceral sargento.Veníadeunazona ruraldeLouisianayparecíaalmismo tiempo tímidoencompañíadeaquelloshombresyemocionadoalhablardelsitiodedondevenía.

—Amímemontó una vez una bruja. Sé que una brujamemontó toda una noche porquemedesperté cansado y sucio y con sangre en las comisuras de la boca demorder la brida. Se puedecolgarunaherraduraencimade lacamaparamanteneralejadasa lasbrujas.Antesdeentraren tucasa ella tiene que recorrer hasta el último camino por donde ha caminado esa herradura.Mi tíocogióunapiedraylerompióelbrazoaunabrujaunanocheyaldíasiguientejuroporCristoqueeradomingoyaunaancianadelvecindarioqueestabacantandohimnosenlaiglesialesalióespumaporlabocaysecayóalsueloyelpredicadordijo«Levantadleelchal»ylelevantaronelchalyteníaelbrazorotoylesobresalíaelhuesoallídondemitíolehabíarotoelbrazoalabrujayelpredicadordijo«Arrastradlaalfoso»yelloslaarrastraronalfosoyelpredicadordijo«Quemadalabruja»yelloslaquemaronallímismoenelfoso.Osjuroqueesverdad.Enmipueblooslopuededecirtodoelmundo.Amímelocontómitíoyallílosabetodoelmundo.

Eraunjovennegrodecaramuyancha,muynegro,delcolordelcarbón.Nadielodetuvoypodríahaberseguidohablandounaeternidad,peroentoncesentróNashylointerrumpió:

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—Eh, tenéis que ver esto, los Cuchis se están divirtiendo con ese vietcong y está todo hechopolvo,noostomoelpelo,tíos,deverdadtenéisqueveresto.

Fuera, Hombre Negro estaba mirandomientras se comía un mango, con piel y todo, con lasmanos.Siemprehabíamangosportodaspartes,ytambiénplátanos,yavecestambiénpapayas.Lesdijo:

—Estospatrullerosestántodoscolocadosdebenzedrinasyanfetas.Menudocolocón.Unode lospatrulleros,dehechoelmásdesequilibradoe imprevisiblede losCuchiCuchisdel

coronel,aqueltiponegrovestidocomounsalvaje,estabadepiesobreuncharcodesangredelantedelprisionerocolgado,escupiéndoleenlacara.

ElTenienteMetepatastambiénestabadeespectador,juntoconelsargentoStormdeOperacionesPsicológicas.

Elcoronelobservabadesdelassombras,sentadoencimadeunviejocajóndechapademetaldelejércitollenodeagujerosdebala,dentrodelcualvivíanpollos.NiélniSkipperparecíaninteresadosendaraconocersupresencia.Eltenientefueconellosydijo:

—Puesbueno,esasí,esloquetieneestaclasedecosas…Noterminó.Fruncióelceño.Semordióloslabios.ElCuchinegroparecíaestardándolesunsermónmientrashurgabaenlabarrigadelhombrecon

lahojadeunanavajamultifuncióndelejércitosuizo.—Nosestándandounapalizayvamosaenterarnosdequéesloquepasa.Estánatacandoportodo

elsur.Hastaelcomplejodelaembajadaamericana.ElsargentoStormdeOperacionesPsicológicasdijo:—Tío,no,nolohagas.—Peroenvoznomuyalta.—Dale bien a ese hijoputa—dijoVaquero—.Hazle gritar. Sí, cabrón.Así es como gritaba el

sargento.Hazlegritar.Teníalacaramoradadefuriayestaballorando.—Hayalgoquequieroqueestehijoputacabrónvea.Ahora elCuchi se puso a sacarle los ojos al hombre con la cuchara de su navaja del ejército

suizo.—Hazlo,hazlo—dijoVaquero.—Quiero que este hijoputa eche un… buen… vistazo a algo—dijo el Cuchi—.Oh, sí. Suena

comounaniña—dijoenrespuestaalosalaridosdelhombre.Dejócaerelcuchillosobrelasangreque tenía a los pies y agarró los globos oculares del hombre que le colgaban del nervio ópticomoradoy giró el lado rojo y venoso demanera que las pupilas se quedaranmirando las cuencasvacíasylapulpadelinteriordelcráneo—.Échateunbuenvistazoatimismo,hijodelagranputa.

—Diosbendito—dijoelsargentobajitoyflaco.Elcoronelbajódeunbrincodelcajóndechapa,fueandandohastalaescena,desabrochandoel

cierredesucartuchera,leshizoungestoaVaqueroyalCuchiparaqueseapartaranylepegóuntiroenlasienalprisionerocolgado.

—Bienhecho,joder—dijoelsargentoStorm.Vaqueropusolacarajustodelantedeladelcoronel.—Nooyóustedalsargentolloraryberrearhastaperderlavoz—ledijo—.Unpardecosasasíy

estamierdayadejadetenergracia.

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***

Elcadáversequedóinertedeinmediatoyunchorroviscosodesesoslecayóporunladodelacara.El jovencapitánMinh,encalidaddepilotodelaFuerzaAéreadeVietnam,habíaabiertofuego

contraincontablesobjetivosy,desdelacarlingadesucazabombarderoF-5E,debíadehaberacabadocon las vidas de centenares de personas, pero eran vidas que habían terminado ignotamente, bajoalfombrasdefuegoydehumo,yMinhnuncahabíavistoanadiemataranadie.

Eraunamañanasoleada.Casimediodía.Yahacíauncaloragobiante.Elcoronelenfundósuarmaydijo:—Haymuchas cosas que estoydispuesto a hacer en nombredel anticomunismo.Muchas.Pero

porDios,hayunlímite.Minhoyóqueel sobrinodelcoronelse reía.SkipSandsapenaspodíaaguantarsedepiede tan

fuerte que se reía. Apoyó una mano en la tienda de campaña y casi la derribó. Nadie le estabaprestandoatención.

ElpatrulleronegrosequedómirandoalcoronelylimpióteatralmenteconlalengualasangredesunavajaantesdealejarsepisandofuerteendirecciónalladooestedelvillorrioyalPurpleBar.

Minh adoptó la actitud de que toda aquella destrucción no estaba teniendo lugar, de que estabasoplandounvientopestilentedeilusión,yquetraeríaarastrasunarealidaddepazyorden.LaaldeadeCaoPhuc,porejemplo:¿quéhabíapasadoallí?ElCampamentoEcosehabíaconvertidoenunapequeñabase,conbarraconesdeacero,letrinasydosenormesgeneradoresMASH;eltemploseguíadominandoel ladoestedelvillorrio, pero ahora se levantaba sobreunagruesa losade cementoyteníabaldosasenlaentrada;elladooesteinvadidoporuncomplejodeviviendaspararefugiadosqueparecíancajonesycorrales.Todosaquelloscambioshabíantenidolugarenlosdosañosquesehabíapasadollevandoalcoroneldeunladoparaotroconsuhelicóptero.ElPurpleBarseguíasiendolamisma choza enorme, un antro dondemerodeabanprostitutas de cara sombría, niñas abandonadascuyasfamiliashabíanfallecido.Allínuncaentrabaningunachicadellugar.

—Diosbendito—dijoJimmyStorm—.Perovayanegrochiflado.—¿Y quién lo ha vuelto chiflado? Nosotros —dijo el coronel—. Puede que la historia nos

perdonepor loqueestápasandoaquí.Peroesehombrenonosperdonaránunca.Mejorqueno lohaga.

Minhnoconocíaaaquelpatrulleronegroquelehabíasacadolosojosalprisionero.Cuandonoestabapresente,todoelmundohablabadeél.Dormíaenelsueloencimadesuponchoysolamentededía.Denochesemovíaporelmundo,nadiedecíapordónde.Elpelolecrecíaenmanojossalvajesdetreintacentímetrosdelargo.Secortabalasmangasylamayorpartedelaspernerasdeluniformeynollevabanadaparaprotegerselacarnedelosbichosmásquelosdibujoschillonesdecolorrojo,blancoyazulquelesurcabanlacaraylosmiembros.

Un poco después de las dieciséis cero cero,Minh y los tres americanos volvieron a subir lamontañayfueronaSaigónenelhelicópterodelcoronel,unHueymodificadocondosasientosdemásyunaametralladora,quelaFuerzaAéreadeVietnamlehabíaprestadoalcoronel,aunquehabíasidoelmismocoronelquienselohabíaconseguidoalaFAVparaempezar.SiguiendolasórdenesdelcoronelMinh, loselevóacasimilmetrosymantuvounavelocidaddecasicienmillasamericanaspor hora. El sargento Storm, sentado sobre su casco con unM16 sobre las rodillas, con el peloproyectado hacia atrás por los vientos ensordecedores, de vez en cuando levantaba su arma para

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soltarunaráfagaendirecciónalmundoqueteníandebajo.Elsobrinodelcoronelestabasentadoalladodelsargento,contemplandoatravésdelportónabiertolaselvaylosarrozales,elparpadeodelosincendios,laszonasdemalezadestruidasporelhombredelasqueseelevabaelhumocomosifueraelvaporquesubeatravésdelasrendijasdelatapadeuncaldero.Doscazasquepasaronmuycercapordebajodeellos llegaronaahogarel estruendo increíblede losmotoresdelhelicóptero.Losavionesselesacercaronmucho.EranF-104.Minhcasipudodistinguirelemblemadelcascodeunodelospilotos.

SkipSandssonreíaamenudo,ysiempreestabahaciendobromas,peroMinhnuncalohabíaoídoreír. ¿Por qué se había reído de aquel pobre hombre torturado? Estaba claro que a nadie podríahacerlegracia.Ysinembargo,aélalgolehabíaparecidohilarante.

Elcoronel,consusauricularespuestos,estabasentadoalladodeMinhysededicabaaexaminarelhorizonteyparecíahaberolvidadolosterroresdelamañana.Skip,porsuparte,dabalaimpresióndequenuncaseibaalibrardeellos.Elcoronelnohabíamencionadolaconductadesusobrino.Talvezeraalgoquenovalíalapenamencionar.TalvezahoraSkipleestabadandograciasasuDiospornotenerauricularesyporquesutransporteerademasiadoruidosoparahablar.Pero¿quiénpuedeverlospensamientosajenos?YMinhsentíaamenudoquedetrásdelosactosdelosamericanosnohabíapensamientos,solopasiones.PeroélhabíavistolacaradeSkipmientrassutíoloayudabaasubirabordo y estaba completamente convencido de que aquel americano solo pensaba en el hombreasesinado.

Durante un rato corto,Minh dejó que el coronel tomara los controles.Ni era seguro, pero elcoronelhacíaloquequería,ynadalepodíahacerdaño.ElcoronelhabíavistolopeordelasguerrasyunavezlehabíahechoaMinhunatristeconfesión:afindesalvarasuscompañerosdeprisióndeunamasacre, el coronel,queporentonceseraun jovencapitánde la fuerzaaéreacomoelpropioMinh, había matado a uno de sus propios camaradas en la bodega oscura de un barco-prisiónjaponés,lohabíaestranguladoconlasmanosdesnudas.Elcoronelcontabaaquellaclasedehistoriasamenudo,talvezporquecreíaqueMinhnoloentendía.ElinglésdeMinh,sinembargo,noparabademejorar.Podíahablarsinproblemassobreasuntospertenecientesalámbitodesustareasyavecesseguíaconversacionesenterasentreamericanos,aunqueseperdíalosmaticesynosesentíacapazdeparticipardeformahábil.YMinhcreíaserprobablementelaúnicapersonaquesabíaqueelcoronelteníaunaesposaenelbajodeltadelMekongyqueviajabaconfrecuenciaavisitarlaenaquelmismohelicóptero.

***

ElaeródromodeTonSonNhutenSaigónhabíarecibidofuegodecohetestresvecesdesdeelasaltoinicialprevioalamanecer,peroenestosmomentosnoestabasiendoatacado,ylesdieronpermisoparaaterrizar.DejaronaMinhconelhelicópteroycruzaronlaspistasatravesandounvientooleoso,bajocielosdecolorgris.Enelexteriordelaterminal,HaoesperabaconelChevrolet,justodespuésdelasbarricadasdecemento.

ASkip leparecióque teníaquedemostrarunmínimo interéspor saber adóndeestabanyendo,peronoleimportabaenabsoluto.Storm,sinembargo,exigiósaberlo,yelcoroneldijo:

—MejorseráqueHaolohayaaveriguado.SkipyStormen el asientode atrás, el coronel delante al ladodeHao, que estaba fumandoun

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cigarrillolargoymanoseabalapuntadesufiltroconelpulgar,espolvoreandolaspernerasdesuspantalonesdeceniza,mirandoelexteriorconojosmiopesyconduciendodeformavacilante.Porlaciudadsonabanecosdepequeñasarmasdefuegoyeltableteodeloshelicópterosy,porcuriosoquepareciera, de petardos. Pasaron junto a varios cadáveres abandonados en los arcenes pero vieronpocosdañosreales,vieronalagentededicándoseasusasuntoscomodecostumbre,caminandodeunladoaotro,navegandoensusciclomotores.

—¿Tenemos una idea bien clara de adónde estamos yendo? —dijo el coronel. Pero Hao noparecía entender la pregunta, y el coronel añadió—. Hao, creo que no sabemos adónde estamosyendo.

—Élmedijoellugar.Yoencuentro.—Pocosminutosmástardedijo,adelantándosealasiguientepreguntadelcoronel—:ChoLonesdemasiadogrande.Demasiadascalles.

—Allí…allí…esosjeeps.HaodetuvoelChevroletcercadeuntríodejeepsdelEjércitoRepublicanodeVietnamaparcados

decualquiermanerajuntoaloscadáveresdedoshombresvietnamitas.—Para.Para.Vemásadelanteyparaelmotor—dijoelcoronel,ymientrasHaoapagabaelmotor

añadió—: Hao, vamos a ver a unos cuantos muertos del Vietcong. Quiero que mires bien y teaseguresdequeningunodeellosesnuestroamigo.

Haoasintió.—¿Mehasentendido?—Nuestroamigo—dijoHao.—Nocreoqueestéaquí.Nodebería.Peroquieroqueteasegures.Muybien,procedamos.Todossalierondelcoche.Los dos cadáveres estaban tumbados el uno junto al otro enmedio de la calle con los brazos

extendidosporencimadelascabezas.Losdoshabíanrecibidomuchosdisparos.HabíaunpelotóndeunosnuevesoldadosdelEjércitoRepublicanosentadosoapoyadosen los jeeps.Cercadeellosunoficial bajito del EjércitoRepublicano estaba fumando un cigarrillo, plantado casi en posición defirmesconunamanoenlaculatadesupistola.

—¿MayorKeng?—C’estmoi.—SoyelcoronelFrancisSands.Skip,¿puedes traducirmemásomenos loquedice?Esteesel

señorSkip,misobrinoycolega.Skip,dalelasgraciasporvenir.Dilequesoylapersonadedondevienetuinformación.

Elmayorcerrólosojosysonrió.—Esonoseránecesario,coronel.Leentiendo.—No—dijoSkip—.Suacentoesmagnífico.—Kengesunnombrechino.Yporcierto,nosoychino.—¿Cuántosidiomashabla?—Francés,inglés,chinoyelmíopropio,claro.¿Quépuedohacerporusted,coronel?—¿Todohaidocomolesdijimos?—dijoelcoronel.—Apedirdeboca—dijoelmayor—.Lestendimosunaemboscada.—¿Teníanexplosivos?ElmayorKengtirósucigarrilloyleshizoseñasatodosparaquelosiguieranhastaunjeepen

cuyapartedeatráshabíacuatrocargasenmochilas.

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—DelaChinaRoja—dijo.—¿Aquéhorahanvenido?—preguntóelcoronel.—Alastresdelamadrugadaenpunto.—¿Todotalcomoosdijimos?—dijoelcoronel.—Todo correcto —dijo Keng—. Con precisión. A las cero tres cero cero. —Hizo un gesto

amplioconlamanohacialoscadáveres—.Dosvietcongs.Talcomoprometieron.—¿Cuáleraelobjetivo?—Destruiresepuenteparaeltráfico—dijoKeng.—¿Yestoeslobastantegrandeparaeso?—Porloqueamímeparece,másquesuficiente.—Supongoquenoibanidentificados.—Nollevabandocumentación.—Kengnegóconlacabeza.—Mayor, no lo molestamos más. Solo quería asegurarme de que nuestra información era

correcta.Echaremosunvistazorápidoaesepuenteynosmarcharemos.Storm y Skip siguieron al coronel hasta el puente para el tráfico que al parecer había sido

marcadocomoobjetivoadestruirpordosguerrillerosysedetuvieronenloaltodelmismo.Detrásdeellospasabanlosecosdelzumbidodelosciclomotores.

—No estoy seguro de entender la utilidad de eso —dijo el coronel—. Supongo que habríacongestionadolacalleahíabajo.Peronoestoysegurodeentenderparaqué.

StormcaminójuntoaSkipydijo:—Porlaformaenquetemuevesveoquetegustaestaraquí.Caminasconmuchasuavidadyno

dejas que se te recaliente el cuerpo sin necesidad. Usas el aire que te rodea. —Al hacer aquelcomentarioparecíaextrañamentetímido,ynoelpequeñolunáticoendurecidoqueera—.¿Entiendesloquetedigo?

—Másomenos.—Tefundesconelairecomounnativo—leaseguróStorm.DespuésdequeelcoronelSandsleestrecharalamanoalmayorKengyloinvitaraacenarya

copas, lo que el otro rechazó con cortesía, el coronel se sentó en el asiento delantero del ChevyguardandounaposesolemneyledijoaHao:

—PorlaCarreteraUno.Vamosatomarunacopa.Haoejecutóungirodecientoochentagradosllenodesacudidasydejaronatrásloscadáveres.—Mierda—dijoelcoronel—.Estamosteniendotratosconunagentedoble.

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EstabanenalgúnpuntodelaCarretera1,enunataberna-restaurantesituadaenuncallejónsinsalidaysinpavimentar,elBarJollyBlue,unlugarqueaSkipleparecióqueeraprincipalmenteparaputasygángsteres.PeroeraelabrevaderoenSaigóndelaSecciónEcoydemuchagentequeservíaenlazonadeCaoPhuc,ningunodeellospresenteahora,yaqueaqueldíanohabíaniunsolosoldadoenelpaís de permiso, ni en el ejército del Norte ni en el del Sur, ni en el Vietcong ni en las fuerzasamericanas. Skip, Storm y el coronel estaban sentados en tumbonas bajo un toldo al fresco delatardecer,yteníanlaradiodelChevysintonizadaenlaAFVNysemanteníanalcorrientedetodo.SkipllevabasindormirdesdequesehabíamarchadodeCaoQuyenhacíacuarentayochohoras.Dabaporsentadoque el coronel yStormestaban igual de agotados, peroningunode ellosquería acostarseantesde saberquéhabíapasado,quépodíapasaracontinuaciónycómohabíanquedado lascosasdespuésdeaquellaofensivagigantescaysinprecedentes,queparecíaenaquelmomentohabersidoundesastreparaelenemigo.

Entre los boletines de noticias que se emitían cada hora, el coronel hizo varias llamadastelefónicasdesdelahabitacióndeunchulodeputasalaembajadaamericanayrecibióunaplétoradeinformesconfusosycontradictorios.

—AtaquescoordinadosportodalaprovinciadeQuangTri.Alnorteporlomenoshastaallí.—¿Yalsurhastadónde?—HanatacadoenConMau.—¿Enlapenínsula?Dios.—Estánportodaspartes.Ysiendoexterminadosenmanada.Las fuerzas combinadas del Ejército del Norte y del Vietcong habían asaltado casi todos los

centrosdepoblacióndeciertaenvergaduraeinstalacionesmilitaresdelSur.—Audacesylocos—dijoelcoronelalprincipio,yluego,mientrasseacumulabanlosinformes,

añadió—:Audaces,locosytontos.Aunquelaofensivaglobaldabamuestrasdeunaorquestaciónyunaceleridadasombrosas,deuna

ferocidady unagrandiosidad tremendas, los ataques individuales parecíanhaber sidoorganizadossinningunaplanificaciónclaranielapoyoadecuado.

ElcoronelsirviócopasdeunabotelladetrescuartosdeBushmills,sacadadeunacajadebotellasidénticasqueibaconélatodaspartesenelmaleterodesuChevy.

—YaestamosbombardeandosindescansoCuChi.Hastaelúltimocentímetrocuadradodondenohaydepieunsoldadoamericanovaaseruncráter.Yaosdijequeseibaadesatarelinfierno.Estomepareceapresurado.Teníamosplanesparaesostúneles.

—Solamenteparaceñirmealoshechos—dijoJimmyStorm—,lostúnelesmetraensincuidado.—Estamos buscando otra estrategia para combatir a este enemigo.Lo que sea salvo lo que ya

tenemos—insistióelcoronel.—Yoempecéconundeseoardientedefreírleslamente.Yahoramepasoeldíaintentandoevitar

quemeexplotelamenteamí.Skipsehabíapasadomedioañoenelexilio,echandodemenosesto,anhelándolo,yparecíaque

nohabíaperdidounminuto,sehabíasumadoexactamenteenmitaddelaconversaciónconelcoroneldeojosrojosyeltemblorosoperrodepresadelsargento.Parecíaquelosdosdiscurseabanporvíasparalelas, confiados en reunirse en algún punto del infinito. A Skip le ardía el esófago. EstababebiendoSevenUp.Ensumenteeldatomásciertodelajornadaeraqueelhombreensangrentadoy

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con los ojos arrancados a quien su tío había despachado tan fácilmente era un alma humanapertenecienteaunafamiliadegentequelohabíaconocidoporsunombreylohabíanamado,yaél,aSkip,espíaparalanaciónmásgrandedelahistoria,lepreocupabaqueaquellolepreocupara.

—¿Quétedijedelacentralización?—dijoelcoronel—.ElVietcongyelEjércitodelNorteestáncontroladosdesdeunasolainstancia.

—Muyelegante.—Probablementeinmejorable.Asínopodemosganar.Nuestrojovensoldadorasodeestamañana

lohaexpresadocorrectamente.Estamierdayanoesdivertida.Estamierdatienequeparar.Skipnuncalehabíaoídoalcoronelningunadeclaraciónniremotamenteparecidaaaquella.Era

unaequivocacióntotal.Eracompletamentefalsaporqueabríalapuertaademasiadascosasqueeranciertas.

—Sinopodemosestarcentralizados,sivamosairdandotumboscomohormigasenlamelaza,entonces,encalidaddehormigasquedantumbos,nopodemosesperaraquenoslleguenórdenesdearriba.

—¿Cuáleslasituación,coleguita?—dijoStorm.—La situación es que hemos conseguido un agente doble, y que vamos a trabajar con él con

mucho cuidado. Pero tenemos mucho que planear y que pensar, y nada de eso empieza hoy.Alegrémonossimplementedequeno tenemosqueestarsentadossinhacernadamientrasel tíoHoejecutaunaestrategiagrandiosa trasotrahastaquealgo le funciona.Estavezno leha funcionado.Estavezsehanlanzadoalabatallaysehanlimitadoaexpandirsedemaneraabsurda.

JimmyStormserioconunaespeciedeabandonofatigadobajolasmiradasdeSkipyelcoronel.Luegorecobrólacompostura.

—Joder,¿cómopuedeustedpasarcuarentayochohorassindormiryluegoarrancarseconesaverborrea tanelocuente?QUENO SEMEACERQUENESAS FURCIAS—legritóa lamamasan que estabasirviendolasmesas—.Muybien:tú—dijo—.Túpuedesvenir.—Yabriósuencendedorconunclicpara encenderle el cigarrillo a una mujer menuda de caderas gruesas embutida en una minifaldanegra,explicándoles—:Estaesunaputapsicóticaymentirosa.Buenagente.Gentedelamía.

Elcoronelseencendióelsuyocon lamismallama.EstabafumandocigarrillosJohnPlayerdepaqueteplano:lamismamarca,siSkipnorecordabamal,quefumabaJamesBond.

—¿Estoquées?¿Yanofumaustedpuros?—Haydíasenquesabenunpocoasquerosos.¿Túsiguessinfumar?—Sí.—Puesnoempieces.—Fumó—.Eslaguerra,Skip.—Yaloentiendo.Skipselevantóydeambulóporellugar.ContemplóelinteriorenpenumbradelBarJollyBlue.

Depieenlapuertanotabaquedentroestabanadiezgradosmás.Ellocalestabavacíosalvoportreschicasylamamasandetrásdelabarradecontrachapado,quelegritó:

—Sí,señor,¿quierecerveza?—Tengohambre.—¿Quieresopa?—Sopayunabarradepan,gracias.—Yotraigo.Ustedsiente.—Déjemequemepresente—ledijounadelaschicas,peroélsediolavueltasincontestar.

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Fuehastalaartesadecementoquedabaaunoscuropradodepastoelefantesituadodetrásdeloscuartos para el sexo.Meó, se lavó la cara con agua del grifo de la cisterna, se volvió ameter lacamisa sudada por dentro de los pantalones y se dijo a sí mismo: Es la guerra, Skip. Derrota almiedo.

Regresóconsuscamaradas.Sentadoalamesa,elcoronelleestabadiciendoaStorm:—Eradifícilencontrarhuevos.Hacíamosfondocomúndeesascosas,dehuevosydecualquier

carnequeatrapáramos,y losmédicos,elpersonalsanitario,elque teníamos, losmédicosdecidíanquién comía qué de las provisiones. Atrapábamos perros,monos, ratas y pájaros. Teníamos unoscuantospollosenuncorral.—LedijoaSkip—:LeestoycontandoloqueAndersPitchforkhizopormí en el campo de prisioneros.Yo estaba enfermo yAndersme dio de comer un huevo duro.AAndersseleconcedíaunhuevocadadíaporqueestabaentrabajosforzadosynecesitabaproteínas.Yélmediounoamíporqueyoestabaencamaenfermo.Yyonodije«Andaya,no,gracias»:engullíaquel huevo deprisa antes de que él cambiara de opinión. Si Anders Pitchfork entrara aquí y mepidiera que me cortara la mano por él ahora mismo, no dudaría en hacerlo. Mi mano cortadadescansaríaaquíenestamesa.Esoesloquetedalaguerra.Unafamiliamásintensaqueladesangre.Luegounovuelvealapaz,¿yquélequeda?Enemigosqueteapuñalanporlaespaldaenlaoficinadeal lado. Tíos como Johnny Brewster. Brewster es un capullo integral, y vive permanentementecabreadoconmigo.¿Túloconoces,Skip?

—Personalmenteno.¿Quéhashechoparacabrearlo?—LacuestiónesquémehahechoBrewsteramí.Medejótiradodetrásdeunescritoriodurante

casiseismeseselañopasadoycontestandounmontóndepreguntas.Intentaronhacerqueparecieraalgunaclasedeinvestigaciónsanitaria.Peroyosabíaloqueeraenrealidad.

—¿Yquéera?¿NoeraporaquelasuntodelasFilipinas?—Joder,no.ErasobreCaoPhuc.Sobremihelicópteroymisección.Yyolediunabuenatunda,

¿ysabéisqué?Quelaspreguntassedetuvieron.Elinterludioseterminóyyovolvíaquíotravez.—¿Dicesqueledisteunabuenatunda?—Eljuniopasado—dijoelcoronel—.Lonoqueé.—¿Cómo?—Hasoídobien.Lo invitéa jugaralbalonmano.Noscambiamosenelvestuario, salimosa la

pistayyomeacerquéaélylediunpuñetazoenlabarbilla.Pregúntaleacualquierboxeador:lopeorque te puede pasar es encajar un golpe en la punta de la barbilla. Lo primero que te enseñan es:protégete la barbilla. Lo dejé K.O., señor, y no me arrepiento, porque es un viscoso, baboso,politicucho…¿tenéisundiccionariodesinónimos?TendríaquerepasarundiccionariodesinónimosenteroparadarosunadescripcióncompletadeBrewster.

—Nuncahabíaoídohablardeesteasunto.—Nosésiselohadichoalgunavezaalguien.¿Cómoibaahacerlo?Esimposiblequedarbiensi

vascorriendoalosjefazoslloriqueandoporqueteacabandezurrar.—¿Algunavezlehasechadounpulsoaesteviejomaleante?—preguntóStorm.—No—dijoSkip.—Conmigo el hijoputa ni se inmutó. Johnny Brewster es un hombre fuerte y ágil. Se tiró en

paracaídas sobre el norte de Francia al servicio de la OSS. Pero pasó demasiado tiempo con laResistencia y lo volvieron rojillo. Lo convirtieron en simpatizante izquierdista. Y es un elitista.

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Quiere librarse de los viejos maleantes como nosotros. La guerra tiró unos cuantos sapos comonosotrosentrelospececitosyahoraquierendepurarnos.

LehizounaseñalaHao,queestabasentadoenelChevyaunostresmetrosconlaradioencendidaylaportezuelaabierta.

—Hao,Hao.Ven,anda.—Skipvioporlaformaenquesutíoinclinabalacabezayhacíaseñasconlosdedosqueyaestababorracho—.¿Tehacefaltaalgo?¿Cuándofuelaúltimavezquecomiste?Siéntate,colega,siéntate.

—Puedocogeralgoenelbar.—Siéntate,yatelotraemosnosotros,siéntate.Haosesentóyelcoronellehizounaseñaalamamasanydijo:—Enrealidadyonojuegoalbalonmano.Esaacústicatanruidosaylosporrazosdelapelotayel

chirridodelassuelasdegoma…nuncajuegoaeso.Espeorparalosoídosqueelcampodeprácticasde tiro.Te deja tan sordo como la artillería.—Lamamasan se acercó y él dijo—:Tráele algo decomer.¿Quétepodemostraer,Hao?¿Quéteapetece?

—Yahabloyoconella.Haoselevantóysealejóhaciaelbarencompañíadelamamasan.—John Brewster —dijo el coronel— lleva calcetines con dibujos de relojes y cree que

WashingtonDC esunpocomásgrandequeeluniverso.¿Quémevanahaceramí?¿Despedirme?¿Metermeenlacárcel?¿Matarme?Will,jovenWill,túconocesalgodemihistoria.¿Quémepuedenhacer ahora? Fui prisionero de los japoneses. ¿Qué queda en la experiencia humana con lo quepuedanesperaroconfiarenasustarme?

Lamamasan se les acercó con cuatro cuencos de sopa y un plato de barritas de pan en unabandeja.Elcoronelrompióunabarradepanporlamitadydijo:

—Osdigoesto con total sinceridad:mejorquenohayaniunhombre sentadoa estamesaquetemadeningunamaneralamuerte.

—Asísehabla—dijoSkip.—Alfinyalcabo,muerteestodo—dijoStorm.—Ah,meolvidaba—dijoelcoronelconlabocallenadepan—.ElseñorJimmysecreequeesun

samurái.—Solamenteestoyrepresentandounpapel,papasan.Lamuerteeslacondiciónbásica.—¿Túquésabesdeesoenrealidad?—No. No. El universo tuvo que venir de alguna parte, ¿verdad? Mentira. Tuvo que venir de

ningunaparte.DelaGranNada.—ElseñorJimmysiguealBuda.—Sigounamodalidaddebudismocompletamentedistinta.—ElseñorsargentoJimmyestudiaalostibetanos.—Estudioelconocimientodelasmaniobrasposterioresalamuerte.ElreinodelBardo.Loque

hacemosencadapartedelviajededespuésdemorir.Llenodegirosenfalsoquetetraendevueltaaquí,tío.DevueltaalplanetaT.Yonopiensovolver.Esunestercolero.

—Esunestercoleroconfuegosartificiales—dijoelcoronel.—Vuelvesiquieres.Peronoesperesconservarturangodeahora.¿Cómopodíasutíotoleraraaquelmemo,yhastadarlecoba?—UstedintentóalgodemeditaciónenCaoPhuc…Eneltemplo,¿verdad,coronel?

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El coronel se quedó mirando a Storm con los ojos fruncidos como si estuviera intentandoinvocarunarespuesta,ydespuésdeunapausaconsiderabledijo:

—Nojuegoalbalonmano.Aunqueesmuyantiguocomojuego.Odeporte.Opasatiempo.VienedeIrlanda.—Sereclinóconfortablementeensuasiento—.Unvenerablepasatiempoirlandés.VinodeIrlanda.VinodesdeIrlanda.

Diounacabezadahaciadelanteysequedóprofundamentedormido.DeesaformaempezóelAñodelMono.

***

KathyviajóaSaigónparabuscarayudadequienselapudieradar,empezandoconColinRappaportde World Children’s Services. El Vietcong y hasta soldados perdidos del Ejército del Nortemerodeaban por la zona de Sa Dec, los americanos y el Ejército Republicano se habían vueltoimplacablesyperseguíansinhacerdistinciones,noestabanllegandosuministrosalOrfanatodeBaoDaiyprontotodoibaavolverseimposible.

Loshelicópterosamericanosametrallabancualquiercosaquesemovieraporlosríos.ParallegaralacarreteradeSaigón,ellatuvoquepedalearensubicicletaporlossenderosqueflanqueabanloscanales, difíciles de transitar, no fangosos pero sí endebles, de manera que ralentizaban losneumáticos—quémaleableaquella tierra,qué ricayblanda,quéengañosa—,ypor fin salir a losdiques,aterrenodescubierto.Elvientoazotabalosarrozalesylaluzdelsolsemovíaentrelostallosverdescomounestremecimientobajolacarne.

Ellaesperóenuncaféconelsuelodetierra.Techodehojalatayparedesdepaja.Sesentóaunamesabebiendotécalientedeunalatamientrasesperabaalgúntransportealotroladodeunríoquedebía demedir treintametros de ancho.A sus pies, un niñito jugaba con un saltamontes de colorverdeluminosolamitaddelargoquesubrazo.Elladejósubicicletaconlafamiliaqueregentabaelcafé,yqueledijeronquedesdeprimerahoradelamañananoseveíanhelicópterosporlazona.Unabarqueradejuncosvestidaconguantesparavestidoformaldecolorvioletaclaroyunvelodecolorrosalallevóalaotraorilla.Alotroladohabíacasasyjardines…Unaniñaconunvestidohermosoenunapequeñaparceladetumbas,mediopostradasobreunadelastumbasalasombrasalpicadadeluz…KathyconsiguióquelollevaraungranjeroenunacamionetadetresruedasquetransportabaviejossacosdearrozllenosdeplumasdepatohaciaSaigón.Aunoskilómetrosalsurdelaciudad,suscaminosseseparabanyélladejóallí.

Ellallevabaunafaldahastalostobillosconsandaliasysinmedias.Sentadaenunacasadetéconel techo de paja junto a la Carretera 7, sintió que el sudor le caía por los tobillos desde la parteinteriordelasrodillas.AbriósumochilaysacósuBibliaparaleer,peroyaestabademasiadooscuro.La sostuvo en su regazo, dandogolpecitos con el dedo al punto de lectura.En algún lugar de losSalmosdecía:«Contra tiycontranadiemásque túhepecado».Duranteunosminutosmientras lasexplosionessonabanmuycercadeellaenlanochedeTet,habíasentidotodosuorgulloaplastado,todo su conocimiento detenido, todo su deseo, solo habían existido en forma de sometimientoabyectoydesnudo.Supecadohabíaparecidopequeño,susalvaciónocondenaciónparecíancosassinimportancia.

Llególanoche.Unhombrecolocósillasrojasdelantedelacasadeté.Ellacogióuncicloparaentrarenlaciudad.Sealojóenunaespeciedehostalsituadoenfrentede

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lamezquitaJamiadepersianasverdesdelacalleDongDu.Setumbómediahoraenuncamastroperonopudodormir.

Salióapasear.Erancasilasonce.Mientrascaminabacondificultadporentreeltráfico,unciclistaque cargaba al hombro con un haz demaderos de tresmetros de largo pareció estar a punto dedoblarunrecodoyposiblementeromperlelacabezaconlapuntadesustablones.Elladiounpasoatrás y casi la atropelló un jeep del ejército americano, a los que la gente llamaba por las siglas«MUTT».Losneumáticoschirriaronyunaruedasesubióalbordillo.

—Losiento,señora—dijoeljovensoldadodeinfanteríadecaraasustadaqueibaalvolante.Bien;casihabíamuerto.Noleimportaba.Tomóuncallejóniluminadoconlucesrojas.Enunaventana,unsoldadoledabaunabofetadaasu

mujermientrasunacriaturaderodillassobreelcolchónchillabaychillabaconunacaraqueparecíaunpuño…

Al otro lado de la puerta de una taberna, un par de soldados de infantería borrachos y tristesbailabanbajoelbrillodeunamáquinadediscos,losdossolos,cabizbajos,chasqueandolosdedos,moviendoloshombros,meciendolascabezas,pisandopesadamentecomocaballosdetirorumboaalgúndestinosolitario.Ellasedetuvoparaobservarlos.EnlascancionesdelasmáquinasdediscosodelasradiossintonizadasenlaemisoradelasfuerzasaéreasnorvietnamitasamenudooíaqueDiosla llamaba:«Lovemewithallyourheart»,«Thisguy’s in lovewithyou»,«Allyouneed is love».Peroaquellanochelavozsolamentelescantabaalossoldados,ysumensajenollegabaalacalle.

Pasó junto aun reclutade cabezagachaqueestabaguiando suchorroconunamanocontra lapared.Éllevantóunosojosluminososporelácidohaciaellayledijo:

—Llevomilañosmeando.Asulado,suamigoestabainclinadohaciadelantevomitando.—Nosepreocupepormí,señora—dijo—.Estoycolocadoporlavida.Losvietnamitaseranundescansoparalamiradadeella.Noteníaningúnpasadoencomúncon

ellos.Lossoldadosamericanosseparecíandemasiadoaloscanadienses,ylearrancabanelcorazónenunaresacadeplacerytristeza,deculpa,rabiayafecto.Sequedómirandolasespaldasanchasdeaquellosdosmientrassealejabandeellatambaleándose.

Tirabangranadasdemanoporpuertasabiertasylesvolabanlosbrazosylaspiernasagranjerosignorantes,rescatabancachorrillosdemorirdehambreyselosllevabanasuscasasdeMississippiescondidos dentro de la camisa, quemaban aldeas enteras y violaban a muchachas, robaban jeepsenterosdemedicinasparasalvarvidasdehuérfanos.

Alamañanasiguiente,enlasoficinasdeWorldChildren’sServices,ColinRappaportledijo:—Kathy,porfavor.Déjamequeteencuentreunacamaenunodeloshospitales.—Estanoeslaconversaciónquehevenidoatener.—¿Eresconscientedelestadoenqueestás?Estásagotada.—Peronomesientocansada,noimporta.—Peroeresconsciente.—Soyconsciente—dijoella—,peronomesientocansada.

***

Aprincipiosdefebrero,JamesHouston,consuuniformesuciodelaselva,consiguióquelollevara

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uncamióndelaguadesdelamontañadelaBuenaSuertehastalaCarretera13yluegounjeephastaSaigón.Podríahaberparado—teníaintencióndehacerlo—enlabasegrandeparaecharunvistazoalsargentoHarmonenelHospitaldeEvacuacióndelDoce.Peroloschicosdeljeepseguíanadelanteyélsimplementesequedóenelvehículo.

El sargento, muy pronto, en cuanto lo tuvieran en un estado en que se lo pudiera mover sinmatarlo,seríatrasladadoaJapón.SiJamesqueríavisitarlo,seríamejorquelohicieraahora.EsoledecíaHombreNegro.SegúnHombreNegro,elsargentoestabaheridodemuchagravedadytendríasecuelaspermanentes.Algograndeyposiblementeprocedentedesupropiobandolehabíaalcanzadodesdemuycerca,lehabíadadoentodalabarrigaporencimadelapelvis,yHombreNegrolehabíaprometidoaJamesquenoleibaagustarloqueviera.

A un vendedor ambulante de la calle Thi Sach, James le compró una barrita de chicle y uncigarrilloMarlborofalso.Erael tercerdíadesureenganche.Estabasobrio,sehabíaausentadosinpermisoynoteníaniuncentavo.

LosdosamigosdeJames,FisheryEvans,sehabíanembarcadoeldíaantes.Consucuerpoaltoysusdientesmellados,FisherlehabíaestrechadolamanoaJamesylehabíadicho:

—¿Teacuerdasdelaprimeranochequepasamosaquí?—ElFloorShow.—¿TeacuerdasdelFloorShow?—Puesclaro.—¿YteacuerdasdelaprimeravezquefollamosenelPurpleBar?—Puesclaro.—CuandoelmundoseacabeyJesúsbajemontadoenunanubedegloriaytodosesosrollos,será

lasegundacosamásincreíblequemehapasadonunca.PorquemeacordarétodavíadeaquellanocheenelPurpleBar.

SeabrazaronyJamespusotodasuconcentraciónencontenerlaslágrimas.Todosjuraronvolveraversealgunavez.Jamesdioporsentadoquenoibaapasar.

EnelCozyBardelacalleThiSach,Jameslegorreóotrocigarrilloauntipodelafuerzaaérea,que reveló ser indio cheroqui y descendiente de jefes indios, y que le negó a James un segundocigarrillo y parecía estar a punto de deshacerse de él cuando James, tomando por fin el taburetecontiguoalsuyo,serecolocólapistolaquellevabadebajodelacamisa.Alveraquello,eltipodelafuerzaaéreadijo:

—¿Quéeseso?—Esparalostúneles.—¿Paralostúneles?—Unaautomáticadeltreintayocho.Enelcampamentotengounsupresor.—¿Quieresdecircomounsilenciador?—Sí.Diosbendito,¿quéhueleagasolinaaquídentro?—Mepasoeldíabombeandocombustible.—¿Erestú?—Yoyanolonoto.—Buuuf.Meestásmareando.¿Mepuedesinvitaraunacerveza,porfavor?—Puesno.YasabesquehayunjoyeroenlamismacalleThiSach.Yolehevendidounacuarenta

ycincoestamañana.

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—¿Compraarmas?—Yolehevendidounacuarentaycinco.—¿Creesquequerríaunatreintayocho?—Apuestoaquesí.—Apuestoaquesédóndepuedeconseguiruna.Aquellatarde,borracho,ausentesinpermisoyforradodepiastrasvietnamitasenlacalleapestosa

—olor trasoloryelchisporroteode la fritanga—,Jamesseparóenuna tiendaysecompróunosvaqueros Levi’s de imitación y una camiseta roja y una chaqueta de recluta pintada de amarillochillónconunailustracióndeunamujerdesnudaquedecía«Saigón1968».Hacíademasiadocalorparaunachaquetacomoaquella,peroselapusodetodosmodosporquelehacíaestardeunhumorexcelente.SecompródospaquetesdecigarrillosMarlboroamericanosauténticosysehizocortarelpeloporunbarberodelacalle—nuncasehabíacortadoelpeloenningúnsitioquenofueralagranbase,peroahoraestabalobastanteborrachocomoparaprobaralgodistinto—ydespuéssecompróun par de endeblesmocasines de color negro azulado. Se cambió en la callemientras la gente secuidabamuchodenomirarlo,y luegocargóconsuuniformeenunabolsade lacompradepapelmarrónconasasdecordel.

Leparecióqueseríamejorqueselepasaralaborracheraantesdeiraveralsargento,yqueantesde que se le pasara la borrachera sería mejor emborracharse más. Sobre las once de esa nocheregateóconunconductordecicloparaquelollevaraaunhotelbaratodeldistritodeChoLon,peroenalgúnlugardelcaminorevolucionaronelplanyloquehicieronfueviajardurantelaspeligrosashorasnocturnas casinoventakilómetroshasta lasorillasdelmarde laChina, aunburdeldelqueJameshabíaoídohablarllamadoFrenchie’s,unlugarconleyendapropia.Llegaronalasdosdelamadrugada, un grupo de cabañas desperdigadas cerca de una aldea de pescadores. Despertó a unpapasan que estaba dormitando sobre la barra del café y que entendía un poco de inglés y podíaadivinarelresto,yque,cuandoJameslepreguntó«¿EresFrenchie?»,ledijo«Frenchievieneahora»,pero Frenchie no vino. No había luces exteriores. No oyó ningún generador. No vio chicas porningunaparte.Nohabíaotrossoldados.Nohabíaniunalma.Elviejoymelancólicopapasanlollevóayudadodeunalinternaaunbungalowquenoeramejorqueunachozasituadoenunahileradeotrosiguales.Laropadecamaestabasalpicadadepelospúbicosdeotraspersonas.Jamesquitólasábana.Elcolchóndelgadoteníamanchas,perolasmanchasparecíanmenosrecientesquelospelospúbicos.Poraquellahabitación,queincluíaunventiladorapilasjuntoalacama,estabapagandomásomenosundólarpornoche.Nosemolestóenbajarlatelamosquitera.Noveíaningúnmosquito.

Bajoelresplandordelalámparadequerosenoencontrósunavajayapuntoestuvodecortarlaspernerasdesuuniforme,peroselopensómejoryencambioseacortólosLevi’sfalsos.Paracuandosemetióenlacama,suborracherayasehabíaconvertidoenresaca.

Se levantó sobre elmediodía y fue al café salpicado de arena, donde unamujer le sirvió unatortilla,un técalienteyunabarradepanpequeña.Luego ledijoque levolvieraa traer lomismo,peroconcervezaenlugardeté.

Noeraelúnicocliente.Unsoldadoamericanoconunasolapierna,vaqueros recortadosyunacamisadeuniformeconlasmangasarrancadas,unrubiomuyclaroconlapielquemadaporelsolygafasoscurasdeaviador,estabasentadoaunpardemesasdeallíbebiendocervezaysincomernada,lamayor parte del tiempo con una pistola de nuevemilímetros en lamano, pulsando el botón deextracción con el pulgar, dejándose caer la parte inferior del cargador en la palma de lamano y

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metiéndolootravezensusitiodeunapalmada,extrayéndoloyvolviendoameterlo.—Todosmorimos—decía—.Yomorirécolocado.AJamesnolegustóaquelloniunapizca,asíqueselevantóysefue.Sedirigióal rompeolasbajoyal runruneode lasolas.Laplayaeraestrechay teníaunaarena

marrón.Sesentóenlatapiadepiedra,sefumóuncigarrilloymirócómolaespumaarrastrabaungalloahogado.AquelnoeraelFrenchie’sdelquehablabatodoelmundo.TodoelmundodecíaqueFrenchie solamente vendía cerveza 33—aquella parte parecía correcta— y también Spanish Fly.Tambiénchicas,queerancampesinasperoaunasíeranchicas.YtodoelmundodecíaquefrenteallocalhabíapeleasatirosalmáspuroestilodelOesteamericano.Ysedecíaquelosconductoresdeciclos nunca se acercaban allí después de que anocheciera porque les requisaban los pequeñosvehículosparahacercarrerasporlaplayaynormalmenteacababanenelmar.

Elruidodeunúnicodisparodetuvosuspensamientosylehizocorreralcaféparacontemplareldesastre,peronohabíapasadonada.Elchicorubioclaroseguíasentadosolo.

—HOLAATODOS—gritóelchico,aunquenohabíanadie—.¡Esecapullosecreequehaaveriguadoalgo!

Jamessequedódepieenlapuertaynosemoviódeallí.Leapetecíaunacerveza,perolamujerhabíahuido.

—¿Quieresjugara«hacergirarlaBrowning»?—No—dijoJames.—SerámejorquesepongaustedsuspantalonesdePlaytexapruebademierda,monsieur.Jamescogiólasilladedelantedeélysesentóconlasmanosenloscostados.Elchicodejódejugarconlapistolayserascóelextremoarrugadodesumuñónconlosdedos,

despuésvolvióaempezaraextraerelcargadorydejarlocaerenlapalmadelamanoyavolverameterlodeungolpe.

—Notesientesenmimesasinoquieresjugaramijuego.Habíaborradoelnombredesuparcheidentificativo,alparecerconlabrasadeuncigarrillo.En

lugardeplacasdeidentificación,deunacadenillaquellevabaalcuellolecolgabaunabrelatasconlapuntaoxidada.

Dejólapistoladelantedesísobrelamesa,alladodeunpaquetedecigarrillosParliamentyunencendedorZippo.

—¿Tegustanestos?¿LosParliament?—Nomucho—dijoJames.—Másparamí.Sacó un cigarrillo dando unos golpecitos, se lo puso entre los labios y lo encendió, usando

solamentelamanoderechaparatodoelproceso,dejandolaizquierdaencimadelapistola.—Nopuedomiraresto—ledijoJames.—Bien.Porquenoeselcirco.—¿Cómopuedosalirdetumanicomio?—Yapuedesirtecagandoporlacarretera.—NopuedoandarhastaSaigón.Elchicoserascóelcuerocabelludoconelcañóndelarma.—No,tío,no.Elprimercabrónquetevea,lotendrásencimaconsuciclomotor.Oélosuprimo.Mantuvoelarmaapuntadaasucuerocabelludo.

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—Bajaesetrastodeloscojones,¿quieres?—Todosmorimos,tío.—¿Nisiquieratienesnombre?—Cadwallader.—¿Ysilabajassolounmomento?Entoncesmepodrétomarunacervezacontigo.—Tehedichominombredeverdad.Graveerror.—¿Porquéesunerror?—Lagenteconocetunombre—dijo—yesoduele.—Yahevistoquetehanroto—dijoJames—.Esunaputada.Elchicorubioclarocerrólosojosypermaneciósentadosinmoverunmúsculo,respirandopor

losorificiosnasales.—Oh,tío—dijoalcabodeunmomentolargo—,soistodosunoszombis.El runruneodeunmotordedos tiempos se acercóy sedetuvo frente a lapuerta.Cadwallader

bajólapistolayladejósobrelamesa.—Elfrancéshallegado.Entróunhombreflacovestidoconbermudasacuadrosescoceses,zorisycamisademangalarga.

Unhombreblanco,deojosazulesycalvo.Acercóunasillacomosisefueraasentar,perovacilóalverelarma.

—Esparati—dijo,ydejóunpaquetedecartónjuntoalamanodeCadwallader.Cadwalladertirósucigarrilloydejóqueseconsumieraenelsuelo.Learrancóunladoalpaquete

ydesparramómediadocenaaproximadadetabletasgrandessobrelamesa.Echócuatroporelgolletedesucerveza33ylamezclaempezóasoltarespuma.BrindóconJames.

—Yaeshoradevariar.—¿Frenchie?—dijoJames.—C’estmoi.—¿Hablasinglés?Elotroseencogiódehombros,indolente.—Estecabrónestáintentandohacersedaño.Estavezelencogimientodehombrosfuedecuerpoentero:manos,hombros,sepusounpocode

puntillasehizounapequeñamueca.—¿Porquénonostraesunpardechicas?—sugirióJames.Cadwalladermirócómolastabletasburbujeabanysedisolvíanensucerveza.—Nopuedessimplementepintarlotodoconlamenteparaqueparezcaquetienesentido.—¿Quépasa,quelastíasyanotienensentido?Frenchielediolavueltaasusilla,sesentóahorcajadasenellayestirólaspiernasfibrosascon

losbrazosapoyadosenelrespaldo.Cadwalladerdejólamanosuspendidasobrelapiernacomosiestuvieraconjurandolaparteque

faltaba.—Estoesloúnicoquehevistoenelmundoquenoesunamentira.—Odioserquientelodiga—seaventuróadecirJames—,peroesamierdanoesnada.Haytíosa

quienesleshanhechocosasmuchopeores.—Aquíestálaexplicación,Frenchie.Todosmorimos,¿verdad?Vetealamierda.—Cadwallader

removió su poción y la engulló en varios tragos. Se reclinó en su asiento y se puso a limpiarse

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debajodelasuñasconelextremopuntiagudodesuabrebotellas—.Asíqueadelanteyveaporesapistola.

Elviejonosemovió.—¿Dices que necesito una pistola? ¿Es que no sabes que soy francés? Nuestra guerra ya está

perdida.—Solamente hay un final feliz, tío. Si yo no vuelo este mundo por los aires, es que soy un

cobardeyunembustero.—Teveomástarde.Jamessepusodepiedespacioyconunairequeconfiabaqueresultarainofensivo.—Yonolehechodañoanadie.Asíquenomehablesdelkarma.—Nolohehecho.—Puesnolohagas.—Yonisiquieraséloqueeselkarma.—Mejorquenolosepas.—Mevoyaalgúnsitio.Anadarunrato.Asíquesiterminashaciendoalgo,nohabránadieaquí

paraprestarteatención.—Frenchieestáaquí.—AFrenchienoleimporta—dijoJames,ysefueporelcaminoparasentarseenelrompeolas.Alcabodeapenasunpardeminutos,elchicorubioclarosereunióconél.Conlosdedosíndices

deambasmanosmetidosenlosgolletesdesendasbotellasde33,pudotraerdosbotellascolgandomientras se apoyaba en susmuletas. Se detuvo. Colgado de sus puntales como un espantapájaros,tirándolegotasdelgolletedeunadesuscervezasconelpulgaraJames,directamentealacara.

—EncalidaddecondecoradoconelCorazónPúrpura,puedometermecontigotodoloquemedélagana,ytútejodes.

—Yunamierda.—Nopuedesatacaraunpobrelisiado.—Yalocreoquepuedo.—AguántameestasTreintayTres.Dejócaerlamuletaizquierdaydescendióapoyándoseenlaotrahastasentarseenlaarenaantes

dedejarlacaer.Jamesledevolvióunacervezaysequedóconlaotra.—Pazyamor,compatriotaamericano.—Puesmuybien.Pazyamor.—Semehaidolaolla,meparece.—¿Teduelelapierna?—Puedollamartegilipollasporpreguntarsemejantegilipollezytúnopuedeshacernada,porque

estoylisiado.¿Quieresunaspastillas?—No,ahoramismo,no.—Haytreintamiligramosdecodeínadentrodecadaunadeellas.—Heprobadolahierbaunascuantasveces…Joder,heestadomásborrachoqueeso.—Medueleelpieinvisible.—¿Quézonaesesta?—EstamosenPhanThiet.OenMuiNe.

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—Nuncahabíavistobarcascomoesas.—Esosonbotes.Lasbarcasdeverdadhansalidoapescar.—Parecencuencosparalasopa.—¿Túquéeres?¿Ausentesinpermiso,desaparecidoencombateodesertor?—Ausentesinpermiso,unpoco.—Yosoydesertor.—Yosoloausentesinpermiso.Bueno,esocreo.—Despuésdetreintadíasesdeserción.—Aúnnohellegadoatreinta.—Mipiernadesertó.Asíqueheseguidosuejemplo.MelarguédeChinaBeach.—¿Notegustaba?—¿Aquellafisioterapiasonrienteyoptimista?Joder,no.Megustabeberyllorarytomarpastillas.—Nohacefaltaquemelocuentes.—Ya.Losiento,soldado.Medejollevarporlamelancolía.—¿OseaqueestoesPhanThiet,túcrees?—Sí.OMuiNe.—¿Yestoes realmenteelburdel famosoenelmundoentero?Yo teníaentendidoqueestesitio

estabamovidísimo.—Llevaasíyadossemanas.Noestámovidodesdelagranofensiva.Elenemigohaderrotadoa

Frenchie.—¿Adóndehaidotodoelmundo?—Sobre todo la gente ha vuelto con sus unidades, o a algúnotro sitio, no lo sé.Túvienes en

direccióncontraria.—Supongoquesí.—Siteescaqueasenelmomentoálgido,chico,esoesdeserción.—¿Porquéestásintentandoconvencermedequehedesertado?—Estoy filosofando, hermano, no convenciendo. Eh, si me estuvieran disparando a mí, yo

tambiénmemarcharía…¡Espera!¡Perosiyalohehecho!—Nohedesertadoporeso.—¿Puesporqué?—Teníaqueverauntipo.—¿Aquién?—AuntíoquesesuponequeestáenelHospitalNúmeroDocequehayporallí.—¿Oseaquetehaslargadoparaverlo?¿Otehaslargadoparanotenerqueverlo?—Quégracioso.¿Cómohasdichoquetellamabas?—Cadwallader.—Notepasesconmigo,Cadwallader.Tengoeldobledepiernasconquedarpatadas.—¿Cómotepuedollamarati?—James.—¿Jimno?—Jimnunca.Seterminaronlascervezasytiraronlasbotellasalaespuma.James se adentró entre los cocoteros de la playa, con Cadwallader siguiéndolo con enormes

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zancadas de tres patas mientras James ponía de pie uno de los extraños botes redondos—cestasgigantesdeunosdosmetrosodosymediodediámetro,hechosdemimbretrenzadoytablonesderefuerzo, todo recubiertodealgoparecidoalbarniz—y loarrastróconvarios tironesheroicosyentrecortados hacia la espuma. Varios niños pequeños y desnudos se acercaron para ver elespectáculo.Sihabíaalgúnadultoenlaschozasdemásalládelaspalmeras,nosedejaronver.

Sedetuvoarecuperarelaliento,todavíaamuchosmetrosdelagua.—¿Dóndeestátupoderosaarma?Cadwalladerselevantólapecheradelacamisa.Laculatadelarmalesobresalíaporencimadela

cinturadelospantalones.—Sivienesconmigo,esprobablequesemoje.Porqueesprobablequeyonoshunda.—Levantaesebotedeahí.Jameslevantóelbordedeotrodelosbotesvueltosdelrevés,yCadwalladerenvolviólapistola

juntoconsuscigarrillosyelencendedorensucamisaylo tiró tododebajo.JameshizolomismoconsusMarlboroyenunaúltimaexplosióndeesfuerzoempujólaembarcaciónhastalasolas.

Hundidohastaelpechoenlaespumatemplada,Cadwalladerdejósusmuletasenelboteytrepóalmismo.Laembarcaciónteníaunsoloremo.

—¡Rock and roll!—gritóCadwalladermientras James casi los hacía volcar—. Si cogemos lacorrienteequivocada,novolveremosavertierra.¿Teimporta?

Jamesintentóremaraunladoyalotroalternativamente.Nosabíadóndeponerseonisiquierasiteníaqueponersedepieenaquelhemisferiobamboleante.

—Estonofunciona.¿Cómohacenavanzarestascosas?—Dameeseremo.Llevosangredemarinero.Los niños estaban de pie en la orilla y contemplaban cómo el bote se alejaba a la deriva. Las

cabrasbalabanenelcocotal.ProntoJamesnooyónadamásquelaespumadetrásdeellos.Másalláde laorillaelcocotal,ymásalládelcocotal laschozasde frondasypaja…Ardencomocerillas,pensó.

—¡Estamos perdidos en el mar!—gritó Cadwallader—.Me mareo de lo simbólica que es lasituación.

—Merecuerdasamihermanopequeño.—¿Elqué?¿Enquécosas?—Notelosédecirconexactitud.Simplementemerecuerdasaél.SiguieronflotandoylacorrientelosalejódeVietnam.—Bueno,James,¿tevasaquedarunatemporada?—Talvez,nolosé.—PuedodecirleaFrenchiequetehagadescuento.—Tengodinero.Nonecesitodescuento.—Esaesunaactitudunpocoextraña.—Soloestoydiciendoquenomehacenfaltafavores.—¿Enquémomentodelservicioteencuentras?—Meacabodereengancharhacepoco.—Eresunbatiburrillodeactitudesextrañas.Noentiendoporquénadieseibaareengancharaesta

pocilga.—Porningunarazón—admitióJames—.¿Atitefaltapoco?

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—Notanpoco.—¿Cuántollevasya?—Ochomeses.Seismesesyochodíascuandomehirieron.Lamitadyochodías.Menudaputada.—Igualdeputadaescomermierdasiereselnuevo.—Sí.Comermierdasiempreesunaputada.Espartedelplan.Cadwalladerselevantócomounacigüeñasobresuúnicapierna,seinclinóaunladoysecayóal

agua.JamessequedócompletamenteasolasenelocéanohastaqueCadwalladervolvióasaliralasuperficie,soplandoyescupiendo.

—Eh,tío.—¿Qué?—Vuelvealbote.—¿Paraqué?—Porlomenos,quédatequieto.—Yaloestoy.Erestúquiensemueve.—Nopuedoremarestacosa.Vamos,estoyapuntodeperderte.—¿Sí?—Cadwallader.Cadwallader.—¡Aurevoir,gilipollas!—Estamosadoskilómetrosdelaorilla.Cadwalladerflotabadeespaldasaunostreintametros.—¡Cadwallader!James remó con fuerza pero no sabía cómo se hacía. Ahora solamente podía avistar al chico

cuandoeloleajedescendía.Cadwalladerflotabadeespaldas,mirandohaciaarribaydandopatadas.—¡Vienes en la dirección correcta!—gritó James, pero Cadwallader no lo oyó y tampoco le

importaba.Jamescreíaqueunodeellosestabaavanzandohaciaelotro,yaquelloloinspiró.Elremoparecía

funcionarmejorsiéllomovíadeunladoaotroenlapartedeatráscomosifueraunacoladepez.Elesfuerzo lo tenía agotado. Cadwallader se acercó y James le agarró lamano, pero él lo esquivó.James le agarró el pelo. Cadwallader soltó un chillido y se agarró de la borda. A James no lequedabanfuerzasparasubirloabordo.Nolequedabaalientoniparainsultarlo.Respirabacongranesfuerzoyelsaboracobredelafatigalellenabalaboca.

Cadwalladerpataleó,sediolavueltayempezóanadardandobrazadasporencimadelacabezaendirecciónalaorilla.Jamessepusoaremardetrás.Ahoralacorrienteparecíafavorecerlos.

Laembarcaciónparecidaauna tazade té tocófondoy la finaespuma laempujóaun ladoyaotro.Jamessalióylaarrastróatierrafirme.

Cadwalladerestabatumbadodeespaldasaunoscienmetros.Jamescaminópesadamentehaciaél,arrastrandounamuletaconcadamanoydejandodossurcosenlaarenatrasdesí.Entretanto,lasolashabíanreclamadoelbote.Semecíaenlaespumayparecíadirigirseaaltamar.

—Túestásfatal,tío.Estásmaldelacabeza.—Obviamente.—Yamehehartado,tío.—Damemispalos.Jamestiróunoydespuéselotrolomáslejosquepudo.

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—Tuspuñeterospalostelosvasabuscartú.Caminó arrastrando los pies hasta el sitio donde habían escondido sus cosas, las recogió y

examinóelarmadeCadwallader,unaBrowningHi-Power.—Eh—gritó—.Estaesunarmadeoficial.¿Eresoficial?CadwalladersearrastróamargamenteporlaarenacomounnáufragodecinearrojadoalSáhara.—¿Eresoficial?—¡Soyuncivil!¡Soyunputodesertor!SearrastróhastalospiesdeJames.JamesextrajoelcargadordelaBrowningyechóhaciaatrás

elpasadorparadeshacerlaaccióndelaúltimabalaydijo:—Ahorayapuedesjugartodoloquequieras.—Vetealamierda.Tengounmontóndemunición.—Puesdisfrútala,yomellevoelarma.—Devuélvememipipa.—Nihablar,tematarásconella.—Meestásrobandoelarma.—Esoparece.—Vetealamierda,hijoputa.EsmibilletealParaíso.LosdosencendieroncigarrillosconelZippodeCadwalladeryJamesdijo:—Metengoqueir.Diomediavueltaysealejó.—Alto.Esunaorden.Soyteniente,tío.—Noenmiguerra—dijoJamesporencimadelhombro.MientrascruzabalaaberturadelrompeolasoyóqueeltenienteCadwalladerlegritaba:—¡Mataaunchimpaenminombre,tío!

JamesconsiguiótransporteenunMUTTjuntocondoshombresdelVigesimoquintoqueibandesdeelcentrodeSaigónhastalagranbase.LodejaronjustodelantedelHospitaldeEvacuacióndelDoce,enmediodesuniebladepolvoderotor,yélentrósinhablarconnadieyseperdiódeinmediatoenellaberinto de pabellones con su silencio enfermizo y su hedor amedicinas. Aquellamañana habíabebidomucha cerveza y se sentía irritable y vacío por dentro. Primero le dijeron el PabellónC-3,luego que no, elC-4, y la enfermera delC-4 supuso que sería el Pabellón 5 o el 6, y por fin unaenfermera del 6 le dio una rosquilla y le dijo que ella cuidaba a los que estaban expectantes y aalgunosdelosmásgraves;despuéslollevóhastaunacortinaquerodeabaunespaciosituadoenunaespeciederecesoyledijo:

—¿Jim?¿LollamanaustedJim?—dijosinmoverlacortina.—MesuelenllamarJames.Ellaapartóaunladounpocolapartición.—¿SargentoHarmon?—dijolaenfermera—.EstáaquíJames.Jamesdesuunidad.Elsargentoestabahechounguiñapo.Jamessequedódepiejuntoalacamaydijo:—Hola,sargento.Intentópensarenalgomásquedecir,peronoloconsiguió.Jamesqueríadecir«Losmuchachos

vanadarsealabebidasinoestáusted»y«Hacepocohemostenidotiroteos»y«Yotambiénestabaenlos tiroteos». Estaba furioso con alguien de allí y probablemente fuera con el sargento, que no

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parecíamuydistintoauncadáver,yciertamentenoparecíaqueselepudieraprovocarconnoticiasdecomportamientosindisciplinados.ParecíaelmonstruodeFrankensteincolocadopedazoapedazoyconectadoenesperadeladescargaquelodespertaríaparavivirelfinalconfusoytorturadodeunmonstruo. El sargento incluso tenía tornillos metálicos relucientes como los del monstruo deFrankensteinquelesalíandelosladosdelacabeza.¿Yparaqué?Unasábanalotapabahastaellugardondedeberíahaber tenidoelombligo,si tuvieraabdomenenlugardealgocompuestoapartirdetrozos de carne delmatadero. Junto a la cama unamáquina emitía un susurro y un ruido sordo aintervalosregulares.Lapantalladeunmonitorinformabadesupulsoennúmerosrojos:73,67,70.

—¿Paraquéesesetuboquelesaledelaboca?—James,elsargentotodavíanorespiradeltodoporsímismo.Laenfermeraleacercóunasillayélsesentójuntoalacamaylecogiólamanoalsargento.Una

burbujaviajabaporelgoteroqueelsargentoteníaenlamuñeca.—Sargento.Losojosmuyazulesdelsargento,flotandoaladerivaensuscuencas,sedesplazaronhaciaJames

ysedetuvieron.Elsargentohizounchasquidoconlalenguacontraelpaladar.—¿Meveusted?Elsargentovolvióachasquear la lengua,«tsk, tsk»,comosiestuviera riñendoaunniño,«tsk,

tsk».Loslabiosblancosyagrietados,despellejándose.Jamesseacercómásymiróalsargentoalosojos.Laspestañaspegadasentresíporlaslágrimas,

proyectándose hacia fuera como en una explosión, como en un dibujo infantil. Unos ojos azuleshermosos.Nuncasehabíafijado.Sifueranojosdemujer,unonopodríadejardemirarlos.

—¿Qué es ese ruido que está haciendo?—preguntó, pero la enfermera se habíamarchado—.¿Qué está intentando decir, sargento? —Se secó sus propias lágrimas y escupió en la papeleramarrónllenadehisoposydepañuelosdepapelpringosos—.Mehepasadounrato—dijoJames—.Paradecirhola.Versinecesitabaustedalgo.Esascosas.

Cadapocossegundos,aquelchasquido.¿Eracódigomorse?—Sargento,meheolvidadodecómoibaelmorse—dijo.VinierondosenfermerasehicieronapartarseaJames,acontinuaciónsacaroneltubodeentrelos

labiosdelsargentoylemetieronotrohastaelfondodelagarganta.Eltubohizounruidocomoderestregarydeabsorbery lascifrasdelmonitorascendieron rápidamente:121,130,145,162,184,203.Alcabodeunminutovolvieronameterelprimertuboyelsargentopudorespirarotravezylosnúmerosdescendieronpocoapoco.

—Mierda—dijoJames.—Leestamosmanteniendolospulmoneslimpios—dijounadelasenfermeras.—Nisiquieralehandichohola—dijoJames.—Hola,sargento—dijolaenfermera.DespuéssemarcharonyJamesvolvióasentarseylecogiólamanoalsargento.Losojosdelsargentoflotabanensuscuencas,ardiendoysuplicando.Todolesalíaporlosojos.

Jamesseechóallorarcomounposeso.Larealidadylacertezaquecaíandeélachorros,lapurezadel llanto, de las simples lágrimas, y a quién le importa un cuerno…Esto esmás importante quetodosvuestrosjuegos.Laslágrimaslecaíanalsargentodelosojos,leresbalabanporlassienesyselemetíanenlasorejas,peroélnohacíaningúnruidomásqueaquelchasquidodelalengua.

—Este es James, doctor—dijo la enfermera. Había regresado en compañía de un médico de

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aspectocontento—.JamesesdelaunidaddelsargentoHarmon.—¿Cómoestamoshoy,sargento?—¿Quéhapasado?—dijoJames.—¿Aquéserefiere?—¿Quéhapasado?¿Quélehapasado?¿Cómolohanherido?—¿Quélehapasado,sargento?—dijoelmédico.Elsargentomovióloslabiosdespellejadosychasqueóconlalengua.—Haceeseruido—dijoJames—.¿Looyeusted?—¿Quélehapasadoausted,sargento?¿Seacuerda?Lohablamosayer,¿verdad?El sargento coordinó elmovimiento de sus labios con las exhalaciones de sumáquina y dijo:

«He…he…»,oporlomenosmovióloslabiosparaqueparecieraqueeraesoloquehabíadicho.—¿Recuerdaloquehablamos?Dijimosqueeraposiblequehubierarecibidoel impactodeuna

bengala…Quelehubieraimpactadoenlaespalda.—Yopensabaquelehabíandadoenlabarriga,enelvientre,creíayo…—Labengalaentrópordebajodelplexosolarylesubióporelespinazo,porloquehemosvisto.

Leabrióencanaldeabajoarribadelacolumna.—¿Ledieronconunabengala?—Correcto.—¿Quieredecirunabengaladeseñales?—Correcto.Dañosmasivos.Músculos,pulmones,columna.Lamédulaespinalhasta lasegunda

vértebra.Dañosmasivos,¿eh,sargento?Moviendo los labios. Intentando construir sonidos con la saliva de la garganta, intentando dar

formaaunadeclaración.PorloquepudoentenderJames,elmensajeera:«Hechopolvo».

Lascolasparahablarpor teléfonoerandediezpersonascadauna,perohabíaotros tres teléfonosparausoexclusivodeoficialesenelClubdeOficiales,yallíesdondefue.Despuésdemarcarparaquelesalieralaoperadora,mantuvolamanoderechaenlaculatadesunuevapistolaysededicóamiraralosojosatodoelmundoqueseacercaba.Teníalostresteléfonosparaélsolo.

Ledio a la operadora el númerodeStevie, una serie inolvidable dedígitos, lo habíamarcadocientosdeveceshacíamilesdeaños,cuandoibaalinstituto.

Contestólamadredeella:—¿Hola?Estabaadormiladayquizáespantada.Élcolgó.Un capitán le trajo unaBudweiser.Aquellos tipos no estaban tanmal. Él despegó lamano del

arma,encendióuncigarrilloydespuésllamóacasa.—¿Quéhoraesahí?—dijosumadre.—Nolosé.Porlatarde.—James,¿quéhasdecidido?Sobreesodequedarte…¿Quédecisiónhastomado?—Heextendidounpocomivisitaaquí.—Pero¿porquéquerríasquedarte?¿Notedascuentadequeyahasservidoa tupaís?Tantoo

másquecualquiera.—Ya…Medabalasensacióndequefaltabancosasporhacer.

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—Noteatrevasareengancharteniunavezmásdespuésdeesta.—Heestadodescuidandomisdeberes.Puedequeyanomequieranmás.—Bueno,nomesorprendería.Debesdetenerneurosisdeguerra.—Suponiendoquemeechen…talvezpodríaveniraPhoenix.—Bueno,claro,cariño.¿Adóndesinoibasair?—Nolosé.Aalgunaisla,quizá.—¿Cómoqueaunaisla?Nosotrosnovivimosenningunaisla.—¿Cómoestátodoelmundo?¿CómoestáBurris?—¡Burristomadrogas!—Joder.—¡Nodigaspalabrotas!—Jopé.Jopé.¿Quéclasededrogas?—Cualquiercosaquepuedapillar.—¿Quéedadtiene?—¡Todavíanotienenidoceaños!—Menudocabroncete.Bueno…bueno…¿quénoticiastienesdeBillJunior?¿Algo?—BillJuniorhaestadofueracasiunmes.—¿Fueradónde?—Fuera,fuera.Fuerayyaestá.Jameshizounapausaparadarlaúltimacaladayapagarsucigarrillo.—¿Quieresdecirenlacárcel?—¡Unodrogadoyelotroenlacárcel!—¿Porqué?—Nolosé.Unpocodeestoyunpocodeaquello.EntróenlacárcelunasemanadespuésdeAño

Nuevo y no lo soltaron hasta el diez de febrero. Lo tuvieron tres semanas. Tuvo que declararseculpableyaceptarunasentenciasuspendidadedosañososelohabríanquedadoyquedado.Esagenteestácansadadelamalaconducta.

—¿EstáenArizona?—Sí.Sentenciasuspendida.SisevuelveadescarriarlometeránenFlorencecontupadre.Detal

palo,talastilla.—Québonito.—No te hagas el gracioso. El Espíritu Santo lleva generaciones apaleando las almas de los

hombresdeestafamilia.Pero¿creesquealgunavezhaconseguidodejarniqueseaunamuesca?—Ya…¿sabesqué?TalvezelEspírituSantonoestansanto.—¿Quédemoniosquieresdecir?—HasestadoenOklahoma,¿verdad?YenArizona.Yyaestá.—¿Quéquieresdecirconeso?—Nolosé.Quenecesitassalirunpocomás,antesdeponerteahablardelEspírituSanto.—James,¿vasalaiglesia?—No.—James,¿rezas?—¿Aquién?Sumadreempezóallorar.

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—Mujer,déjamequetedigaunacosadelEspírituSanto.Estáloco.—James—dijoella.Laverdadesqueélnosentíanada,nipenanisatisfacción,ysinembargoledijo:—Mamá,vale,sientohaberdichoeso.Losiento.—¿Quieresrezar?¿Quieresrezarconmigoahora,hijo?—Adelante.—Señor,Redentor,Padrenuestro—dijoella,yélseapartóelauriculardelaorejapensandoque

sielEspírituSantoveníaalgunavezaVietnam,lomásprobableesquelearrancaranlaspelotasdeundisparo.

Vioavarioshombresenelbarquebebíanwhiskyenvasosconhielo.Unoficialconuniformemirabafijamentecómosusdedoshacíanjironessuservilletadecóctel.

EnaquelmomentolevinodeprontoalacabezaelsargentoHarmon:Oh,Diosmío.Queríaagua.—Hijo—dijosumadre—,¿siguesahí?Loslabiosresecosyagrietados:sedientos,cuarteados.—Graciasporlaoración,mamá—dijo,ycolgóelteléfono.Sellevólacervezaaloslabiosysepusoabeberlaynodejóniunagota.Eralamejorquehabía

probadonunca.Lamejorylapeor.

James soñóque nopodía encontrar su coche.El aparcamiento se convertía en una aldea de callesestrechasycurvadas.Noqueríapedirayuda,porquellevabasuM16,yaquellagentepodíadetenerlo.Seleestabaacabandoeltiempo.Esofueloquerecordóaldespertarsesobrelaesterillavestidoconsu ropa de civil toda sudada, aunque el sueño había tenido un millón de elementos periféricos,avenidas de acontecimientos retorcidos y complicaciones secretas. Teníamuchos sueños todas lasnoches.Eracomotrabajar.Dormirlodejabacansado.

Selevantóparaencenderelaireacondicionado,peronohabía.Enelpisodeabajounamáquinadediscos retumbababajo suspies.Una telamosquiteracolgabadevariosclavosporencimade laventanaabierta.Lehabíaparecidoqueeradedía,peronoeranmásquelasbombillasamarillasdeunletreroenelexterior.Encontrósusmocasinesdecolornegroazuladoybajólasescalerasquehabíaaunladodeledificioparairabuscarunacerveza.Erauncallejónsinsalidaysinpavimentarytuvoqueandarconcuidadosobreelbarro.ElBarJollyBlue.SesentóconunostiposquetambiénerandelVigesimoquintoytambiéndeReconocimiento,perochicosmalos,LURP.Ledieronunasanfetasysedespertódegolpe.Noibanacompañadosdemujeres.Losojoslesbrillabancomoojosdeanimales.Aquellostipostomabanácido,cosasquelesestimulabanlosnerviosylesponíanlossesosdelrevés.

—Ven con nosotros. Nosotros salimos. Gobernamos la noche. Tomamos anfetas. Follamos.Matamos.Destruimos.

Él quería que las cosas fueran bien pero no le salía.Era consciente de que iba a acabar comoellos.LespreguntósiconocíanaHombreNegro.

—Sí—dijeronellos—.ConocemosaHombreNegro.Correconnosotros.Élpuedeenseñarmeapedireltraslado,dijoJames.—Pueshazlo,hazlo,¿acasonolohashechotodosalvoesto?Sí,claro,dijoél.Eshoradeirseconlosmonstruos.—¿Tequedaalgodetiempo?

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—Estoydereenganche.—¿Tedanpermisoparairacasa?—Noquieropermisoparairacasa.—¿Noquieresvisitartucasa?—Estaguerraesmicasa.—Bien.Sivasacasaterminasjugandoalsolitariohastaquetodoelmundoseharta.Barajatras

baraja.Sentadojuntoalaventana.—Elnoventaynueveporcientodelamierdaquemepasaporlacabezaadiariovacontralaley

—dijounodeellos—.Peroaquíno.Aquílamierdaquemepasaporlacabezaeslaleyynadamásquelaley.

—Tienenteoríasdelaguerra, tío.Teorías.Nolopodemostolerar.Esintolerable.Tenemosunamisión.Noesunaguerra.Unamisión.

—Moverseymatar,¿verdad?—Lopillas.Estehijoputalopilla.—Deputamadre.—Yquedure.—¿Sabesquéesundobleveterano?Tefollasaunamujeryluegolaejecutas.—Aquítodossomosdoblesveteranos.—¿Sí?—Unbrindisportodosloshijoputasmuertos.Lostipossemarcharon,yélsebebiósucervezaysequedómirandoaunabailarinagogócon

moretonesenlaspiernas.Unpardemosquitoschocabanestúpidamentecontralaparedencimadesucabeza. Salvo por ellos, habría tenido aquelmomento para símismo.Lamúsica retumbaba, rollocountry, rollo psicodélico, los Rolling Stones. En la barra, y detrás de la misma, el lento baileentrecortado de una lámpara de lava, una cascada centelleante dentro de un letrero de cervezaHamm’s,unaesferaderelojcalidoscópicaqueemitíalosminutos,lasdiminutascapillasiluminadasdeunareligión.

Nopuedoadivinarsiesdemasiadoreal,osilefaltarealidad,ledijoJamesaalguien…oalguienaJames…

Luego entró el coronel, el civil, el quehacía de jefe deoperacionesde laCompañíaD, el queveníaaserpadrastrodeReconocimientoEco.

Llenóelumbralde lapuerta, con lacamisaabierta, respirandode formaconvulsa.Losbrazosextendidosalrededordedosputasbajitasquesonreíandejandoverpuentesdeoroenladentadura.Noparecíaencontrarsedeltodobien.

—Ayúdame,soldado.—Sentadloporaquí.Ellasloayudaronasentarseenelasientoraídodelúnicoreservado:todolodemáseranmesas.Él

hizounaseñalparaquele trajeranunacopa.Porloquedejabaver la luzsombría, teníalacaradecolormoradoyluegomuypálida.Unadelaschicasseapretujóasuladoyleabriómáslacamisaylesecóelpechopálidoysudoroso,cubiertodepelosgrises.

—Tengoproblemasmédicoscoronarios.—¿Voyabuscarayuda?—Siéntate,siéntate.Tengoproblemasmédicosperoprincipalmenteestoyacaloradoyenvenenado

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porestemalditocoñacdearroz.PidesunBushmillsytedanCoca-Colallenadecoñacdearroz.Esemejunjenoesparabeberlo.Aunquematalasverrugas,deesonohayduda.

—Sí,señor.—Soyveteranodelaaviación,perorespetoalainfantería.—Séquiénesusted,señor.YosoydeReconocimientoEco.—Eshonorablesersoldadodeinfantería.—Tengoquecreerle.—Sialgunaveztesaleunaverruga,córtalaconunanavajayempápaladiezminutosencoñacde

arroz.—Sí,señor,loharé.—Porsupuesto.Eco.Estáclaro.Túeresmihombreen los túnelesdesdequeperdía losCuchi

Cuchis.—Bueno,bajéaunpardetúnelesnadamás,medalaimpresión.Atrestúneles.—Esocuenta.Tresesunbuennúmero.—Noesmucho.—PorDios,ereselexpertoentúnelesmásgrandequehevistonunca.—Nosoytangrande.—Paralostúneles,sí.—Señor,¿sabelodelsargentoHarmon?—Tengoentendidoquelohanherido.—Sí,señor,sehaquedadoparalizadohastaelcuello.—¿Paralizado?Diosbendito.—Hastaelcuello.Estádestrozadodecuerpoentero.—Esunamalditalástima.—MevoyacambiaralosLURP.Quierohacerdañoaesoscabrones.—Nohayqueavergonzarsedeodiar,hijo,noenunaguerra.—Nosoysuhijo.—Perdonaelatrevimiento.—Estanocheestoyyendodemasiadofuerteconlabebida.—Lamentotupérdida.Elsargentoesunbuenhombre.—¿AdóndehanidolosCuchis,señor?—Semehaprohibidousarlos.Unparhanhecholarotación.Todalazonadeaterrizajesehade

desmantelar.SeacabaronlosCuchis.Yseacabóelhelicóptero.—Yameparecía.Hacíatiempoquenoloveíaausted.—Todoseestáhundiendo.Encasayfuera.Encasaestoyconvencidodequemimujerymihijase

estántirandoalmismomulatoactivistabeatnikpacifista.—Yomequedaríaenestejaleo.—Lo siento. Estoy borracho yme encuentromal y doy vergüenza…Estaba diciendo… lo de

odiar.Sí,señor.Eselamoranuestropaísloquenoshacevenir,perotardeotempranolavenganzaseconvierteenlamotivacióncentral.

Jamesdiopor sentadoqueel coronel sabíadequéestabahablando.Allí teníaauncivilgordohablandodeverrugas,peroalmismotiempoaunaleyendaviva:unavidaenteradesangreyguerraytías.

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—¿Hasidoaloscursosdetúneles?—No.—¿Quieresquetemandemos?—QuieroformacióndeLURP.—¿Cuántotiempollevasaquí?—Llevounmesdereenganche.Misegundoaño.—Sihaceslaformación,probablementetequerránparaunterceraño.—Noesproblema.¿Ypuedearreglarmeustedlaausenciasinpermiso?—¿Sinpermiso?—Llevotressemanasausente,esaeslaverdad.—Vuelveatusecciónmañanaaprimerahora.—Sí,señor.—Recupérateyvuelve.—Mañanaaprimerahora.Sí,señor.—LoarreglaremosytepondremosenlaformacióndeReconocimientodeLargaDistancia.

***

Laslluviasestivalesnohabíanllegado.Y,sinembargo,hoyllovía.Skip caminó varios kilómetros a solas desde una aldea que había visitado con elpère Patrice.

Todavía no eran las diez de lamañana según su reloj de pulsera de la fuerza aérea, que le habíaregaladoelcoronelcuandoeraniño…HabíanmatadoaMartinLutherKing.HabíanmatadoaRobertKennedy.Losnorcoreanos seguíanmanteniendocomo rehenesaunbuquenaval americanoya sutripulación.LosmarinesasediadosenKheSanh,lainfanteríamasacrandolaaldeaenteradeMyLai,idiotaspeludosyarrogantesdesfilandopor las callesdeChicago.Entre lospeludos, el sangrientofracaso de la Ofensiva del Tet de enero había resonado como una victoria espiritual. Y luego enmayootro ataque a escala nacional,más débil pero con lamisma resonancia.Él devorabaTime yNewsweek y lo encontraba todo escrito allí, y sin embargo aquellos acontecimientos le resultabaninverosímiles,ficticios.Enseisosietemeses,lapatriadelaqueélestabaexiliadosehabíahundidoenelocéanodesuhistoriafutura.Clements,Kansasseguíaigualquesiempre,enesopodíaconfiar.AClements,Kansassolamentepodía llegarunverano,consus langostasysusmirlosruidosos,y lasfragancias errantes de las cocinas y de la espuma de jabón y de la alfalfa cortada, y la realidadresplandeciente de la infancia.Y se habíamarchado, estúpidamente: no el verano, sino él. Partido,desnudo, transfigurado. Invalidado y convertido, incluso.Amaba un recuerdo y luchaba por él. Elmundoqueheredaraaquelrecuerdoteníaderecho—élnopodíaevitarverloasí—aseguiradelantelibredelacargadeidealesasesinados.Entretanto,unainvasióndeinsectosdelicadoscentelleabaenelaireasualrededor.Máscercadelsuelo,lapoblaciónsedensificaba:patosypollos,niños,perros,cerditos diminutos y panzudos. Había salido de paquete en el ciclomotor del sacerdote a buscarhistoriasydichosentrelosparroquianosdispersos.Habíarecogidounasolahistoriadeunaanciana,unacatólicaamigadelcura.DespuéselpèrePatricehabíacontinuadoaloestemientrasSkipsevolvíaacasaapie.

Alcabodemediahora la lluvia lopillóy lohizorefugiarsedebajodel toldodeuna tiendecitacuyopapasandecaracorreosaestabafumandouncigarrilloconlanguidezexquisitaynotuvonada

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quedecirle.CuandoSkip le sonrió, lacaradelancianoseabrióenunasonrisaexaltadaybastantellena de dientes de aspecto saludable. La tormenta era un chaparrón estruendoso e inofensivo,interrumpido,sinembargo,porráfagasdevientoasombrosasquedesgarrabanlavegetaciónyabríansurcosenloscharcosenormesdelacarretera.SkipcompróunrefrescoNumberOneenunodesusdiversossaboresnoidentificablesyselobebióatodaprisa.Luegosedirigióalhombreeninglés:

—¿Sabesquépienso?Piensoquetalvezpiensodemasiado.La lluvia se detuvo.Delante de una casita del otro lado de la carretera había unamujer joven

jugando a hacerle cucú a un niño que acababa de aprender a andar, y que ahora se tambaleaba depuntillasmientrasunahermanaunpocomayorimprovisabaunbailesolitario,congestosampliosyenparalelodelosbrazos,lostressonrientescomosielmundonofueramásalládesufelicidad.

Aquellamañana lehabíaconmovidomuchoel relatoquehabíaaprendido,yqueempezabaasí:Habíaunavezunaguerra.Unsoldadodejóa sumujerya subebéyse fueadefender supaís.Lajovenmujercuidabadelacasaydelhuertoydelniño.Cadadíaalatardecerseplantabajuntoalríoquecorríadetrásdesucasayesperabaaquesuqueridoesposoregresaranavegandoasusvidas…

Unanocheestallóunatormentasobresucasitayarrancóeltejadoyazotólasparedes.Lalámparase apagó y el niño se echó a llorar de terror. Lamadre lo abrazó fuerte y volvió a encender lalámpara. Y al hacerlo, su sombra apareció de golpe en la pared y ella reconfortó a su hijoseñalándolaydiciendo:«Notenemosnadaquetemerestanoche,¿loves?».Ydeinmediatoelniñosesintióreconfortadoporlasombra.Todaslastardesdespuésdeaquella,cuandolamujervolvíaalacasadespuésdehaberestadodepiejuntoalríoesperandoquesumaridoregresarabajolosúltimosrayosdelsol,suniñollamabaasupapáyellaencendíalalámparaytodaslasnocheselniñolehacíaunareverenciaalasombradelaparedydecía:«¡Buenasnoches,papá!».Ysedormíaenpaz.

Cuando el soldado regresó con su pequeña familia, a su mujer casi le estalló el corazón defelicidad, y se echó a llorar. «Tenemosquedargracias anuestros antepasados», le dijo ella. «Porfavor,preparaelaltaryvigilaatuhijo—dijo—,mientrasyovoyaporcomidaparahacerunacenadeagradecimiento.»

Cuandosequedóasolasconsuhijo,elpadreledijo:«Venconmigo.Soytupadre».Peroelniñodijo:«Papánoestáaquí.Todaslasnochesyoledoylasbuenasnochesapapá.Túnoerespapá».Ycuandoelsoldadooyóaquellaspalabras,elamormurióensucorazón.

Cuandosumujerregresódelmercado,sintióunanubedemuerteensucasa.Sumaridosenegabaahablarlesiquiera.Élplególaesterilladelasoracionesylenegóaellasuuso.Sequedóarrodilladoensilenciodelantedelacomidaquelehabíapreparadosumujerycuandolacomidaestuvofríayyasehabíaechadoaperder,saliódelacasa.

Suesposaesperómuchosdíasaqueregresara,depiejuntoalríotalcomohabíahechocuandoélerasoldado.Undíaladesesperaciónlavenció,asíquesellevóalniñoacasadeunavecina,lobesóyloabrazóporúltimavez,despuéssefuealríoyseahogó.

Lanoticiadesumuertellegóasumarido,queestabaenunaaldearíoabajo.Elshocklerompióelhielodelcorazón.Regresóacasaacuidardesuhijo.Unanoche,mientrasestabasentadojuntoalcatredelniñoyencendíalalámparadeaceite,susombraapareciódegolpeenlaparedalladodelapuerta.Suhijodiounapalmadaconsusmanitas,lehizounareverenciaalasombraydijo:«¡Buenasnoches,papá!».Entonceselhombresediocuentadeloquehabíahecho.Aquellanochemientrassuhijo dormía construyó un altar junto al río y se pasó horas arrodillado junto almismo, haciendosaberasusantepasados lomuchoque lamentabasuerror. Justoantesdelamanecer llevóasuhijo

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dormidoalaorilladelríoylosdossiguieronasufielesposaalasaguasdelamuerte.Laancianahabíacontadoelrelatosinningunaexpresiónniinterésdetectable.Aél,sinembargo,

loconmovióprofundamente.Lacriaturaylamujerviviendosusvidasasolas.Elhombreylamujerquenoseentendían,lasombraqueeraunpadre.Elríoquesehabíallevadosushistorias.

Entróenunvalleporcuyocentrodiscurríaunarroyoanchoyplano,yaquellavezloatrapóelchaparrón.Caminóbajoelmismoprotegidoporunparaguasnegro.El arroyoespumeababajo lalluviaenérgica.Despuéscontinuabasucaminoconligereza,marrónymusculoso,conremolinosdeinmundicia.Volvió a aquel terreno llano, alfombrado de arrozales, que predominaba en el paisajealrededordeCaoQuyen.

Pasójuntoalasviviendas,nochozasdecampesinos,sinocasitasqueteníansusjardinesdelanteydetráslaslápidasrectilíneasdelastumbasfamiliaresconsusmediascapotas,comoenormescanastasdepiedraparabebés.Dispersosmás adelantepor la carretera, la gentehabía incendiadopequeñosmontones de basura que emitían un humo desorientadoramente reminiscente de los perfumesotoñalesdesujuventud.

La anciana le había añadido una coda al relato: después de las trágicasmuertes, había llovidosobre lasmontañas. El río que había ahogado a la familia experimentó una crecida, sus aguas seenfurecieronyhasta las piedrasmásgrandesquehabía en su lecho sebambolearondeun lado alotro,yelruidodesucóleranuncaseapagaríadeltodo.Hastaenlosmesessecos,cuandosusaguasdiscurren con tranquilidad, el río nunca deja de rugir. Si sacas un poco de arena delmismo y lasostienesenlamano,haceunmontónderuido.Echalaarenaenunaollayllenalaolladeagua:alcabodeunminutoestáhirviendo.

CuandoregresóalamansiónseencontróelChevynegroaparcadodelanteyasutíoacostadodentro,eneldivándelasaladeestar,conunperrotumbadoenelsueloasulado,unperroquellevabauntiemporondandoporlacasa.Elcoronellevantólamanodelacabezadelperro,lehizounaseñalaSkipydijo:

—Tusofámeestádigiriendo.—Skiploayudóasentarseerguido—.Sonestosalmohadones.—Parecíaruborizadoysinembargo,pordebajo,pálido—.Tusalmohadonesdeseda.

NguyenHaoocupabaunsillóndemimbresituadojuntoalamesilladecafébajadelacanegra.Sentadoallímismoperoconaspectodeestarmuchomáslejos,nodecíanada,selimitabaaasentirconlacabezaysonreír.

—¿Quéhoraes?—preguntóelcoronel.—Casilauna.¿Tieneshambre?Ybienvenido,porcierto.Le habían dicho que esperara al coronel en algún momento después de la temporada de las

lluvias,ynadamás.Dehecho,selohabíadichoelmismocoronel.—Hepedidocafé—dijoelcoronel.Elperroseatacólaspartesbajasconunamúsicadegruñidosextasiadayvolcánica.—Veoquetienesunperro.—EsdelseñorTho.Creoquetalveznoslocomeremos.Enelcuartodebañodeabajoalguientiródelacadena.JimmyStormsaliódelmismovestidocon

ununiformelimpio.Recolocándoselosfaldonesdelacamisa,sequedómirandocómoelperrosemasturbaba.

—Creoquetuperroestáenamorado.

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—¿Miperro?Yocreíaqueeratuyo.Stormserioysesentóenelsofáydijo:—Eresunchuchoalocadoyfarsante.Lerascólacabezaalperroyluegoseoliólosdedos.—¿Porquénohascogidoelhelicóptero?—ElveraJimmyStormlehizohablarconbrusquedad.—Elhelicópteroyanoesmío.—Oh,entonces,¿dequiénes?—Sigue perteneciendo a nuestros aliados, pero ellos le han dado un uso mejor. Y estamos

desmantelandolazonadeaterrizaje,yaesoficial.—Yocreíaquetodoesohabíaempezadohacíameses.—Losdiosessemuevendespacio,peronodejannuncademoverse.SeacabaCaoPhuc,apartir

delunodeseptiembre.—Losiento.—Las fortunas de la guerra—dijo el coronel—. En cualquier caso, hoy no habría cogido el

helicóptero.Estaesunavisitanooficial.Simplesasuntosfamiliares.—Thotepuedetraerunacerveza.¿Oprefieresunacopa?—Estápreparandocafé.Hablemosconlascabezasclaras.Megustaríahablardetrabajo.—Nohayproblema.Noestoyaquíporlasrosquillasgratis.Eraalgoquesumadredecíaaveces,yqueaéllesonababastantetonto.—¿HasleídoaconcienciaelartículodeDimmer?—Eldelosagentesdobles.Sí,señor.—Diosbendito—dijoStorm.—¿Qué?—Loheleído.—¿Qué?—Qué,nada.Noesaplicable.—Sargento.—Coronel,siquiereustedasesinaralaVirgenMaríaconelMannlicherdeOswald,yolecubro.—Meestásdiciendoqueestamosfueradelasdirectrices.—Sí.Adaptarseeimprovisar.—¿Skip?¿Túquédices?—Yoconduciréelcochedelahuida.—NovamosadispararalaSantaVirgen.—¿Esperoaquemelocuenten?¿Opregunto?—Estamosaquíparadiscutiralgohipotético.—¿Nounasesinato?—No.Dios,no.—¿Algocomoporejemplounaoperacióndeengaño?—Oseaquerecuerdasnuestracharlapreviasobreestetipodecosas.Nuestracharlahipotética.—Mehablóusteddeunagentedoble.Deundoblehipotético.ElseñorThoentróconunabandejaenlaquellevabatazasydosjarrasysirvióelcaféparalos

americanosyuntéparaNguyenHao.Alsalir,sacóalperrodelasalaconelcostadodelpie.Elcoronelmareósucaféconlacucharilla.

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—¿Quéesesto?—Sucedáneo,¿no?Sucedáneodelecheenpolvo.—¿Lecheenpolvo?—No,sucedáneo.—Dios,nosedisuelve.¿Dequéestáhecho?¿Dearcilla?—LotrajoHao.SupongoquelodebiódepedirlaseñoraDiu.—Diosbendito.Sabeasobaco.—Parecequellevaañosconnosotros—dijoStorm—.Seinfiltróconsigiloenlacivilización.—Los ingenieros podrían construir unapresabastante sólida con esto.Podrían contener aguas

poderosas.Perobueno.Volviendoanuestrarusedeguerre.Laoperación.—Alagentedoble.Elhipotéticoagentedoble.—Suestatushacambiado.—¿Cuántomepuedecontarusted?—Haentrado.Sepasóbastante tiempoconunpiedentroyotro fuera.Peroal llegarelTet, se

metiódecabeza.Silousamos,lovamosausaralargadistanciayacortoplazo.Asíquepodemosmantenerestocomounaoperaciónfamiliar.¿Necesitasinformación?

—¿Operaciónfamiliar?Ylafamiliaes…—Lostresqueestamosaquí,máselsobrinodeHao,Minh,elpilotodemihelicóptero.Lucky.Ya

lohasconocido,Luckyynosotrostres.—YPitchfork—dijoStorm.—YPitchfork,silonecesitamos.Pitchforkestásobreelterreno.—Yocreíaquelosbritánicosestabanfueradeesto.—Tienen un par de equipos del SAS aquí con uniformes de Nueva Zelanda. Y a unos cuantos

especialistasconboinasverdes.AsíqueAndersestáaquí.EstuvoenelSASduranteaños.—Yaver,«alargadistanciayacortoplazo»…¿quéquieredecireso?—Alargadistancia,hedicho,peroacortoplazo.Lovamosamandaralnorteparaunaoperación

única,enlaqueentregarámaterialengañoso.Estaeslaoperaciónparalaquetehetraído,Skip.LaOperaciónÁrboldeHumo.

ElcoronelesperóaqueSkipasimilaraaquellanoticia.Skip no experimentó ninguna emoción. Solamente la letargia y la tristeza que acompañan a la

muerteporcongelación.—¿Cuántonosestamossaliendodelasdirectrices?—Lasdirectricesnoseaplicanalashipótesis.Estamoshaciendoconjeturas.—Entonces,¿noteimportaqueinterpreteunpocoelpapeldeDimmer?—Adelante.Necesitamosunabogadodeldiablo.—Creoque,enestecaso,eldiabloesusted.—Skipperestádelladodelosángeles—dijoStorm.—Estáhaciendolaspreguntasduras.Alguientienequehacerlas.Adelante.¿QuédiríaDimmer?—Lepuedohacerexactamentelaspreguntasqueharíaél.Oporlomenoslasmásimportantes:las

quemevienendeinmediatoalacabeza.—Porejemplo.—¿Puedeustedcontrolarsuscomunicacionesenambossentidos?—No.Nisiquieralovamosaintentar.Estaesunaoperaciónúnicaydesentidoúnico.Élpodrá

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cagarestaoperaciónenconcretoynadamás.Nolevamosadarnadamás.—¿Ysilacaga?¿Ysiesunimpostor?Elcoronelseencogiódehombros.—Quiennosearriesganocruzalamar.Siguientepregunta.—¿Élselohacontadotodoausted?¿Oporlomenoslobastantecomoparaempezaraponerloa

pruebaconelpolígrafo?¿Cómoeslainformaciónqueustedtiene?—En este punto, nebulosa. Seguimos en el proceso de valoración inicial. Tú serás el oficial

interrogadorenestecaso.—¿Yo?—Noestásaquípararascartelabarriga.Seráseloficialacargodelasentrevistas.Skiptomóunabocanadalargaeinvoluntariadeaireyluegolasoltó.—Asípues…—Asípues,siguientepregunta.—Supongo que esta ya está contestada. ¿Cómo de avanzado está el proceso? ¿Ya ha hecho la

pruebadelpolígrafo?Perobueno,esoyaloharemosmástarde.—Noquieropolígrafos.Nomefíodeesoschismes.—Dimmerdicequehayquehacerlapruebatodoeltiempo.«Polígrafodesdeelprincipioycon

frecuencia.»—Nadadepolígrafos.Solohayunaformadeponerapruebaaunhombre,yesconsangre.Él

noshadadolasangredesuscamaradas.Esoesmejorqueloquenospuedadecircualquiermáquina.—¿Yporquénolasdoscosas?—Solo la sangre nos lo dirá.Él necesita sentir que confiamos en él.Y tú confías enmí, ¿no?

¿Puedesseguirmicriterioenesto?—Sí,señor.Nadadepolígrafo.—Gracias,Skip.Significamuchoparamí.—Elcoronelsesecóelbigoteconundedo.Mediante

una especie demarchitamiento interior, y un oscurecimiento del cielo de su expresión, consiguiótransmitirlaideadequelaconfianzaensucriterioeraunbienescaso—.¿Quémás?

—Lapreguntadelmillón.—Dispare,señor.—¿Hainformadousteddelcaso?Elcoronelseencogiódehombros.—Déjemeiraporelartículo.Skipsepusodepie.—Yaleveoloscuernosaldemonio—dijoStorm.Aunqueestabaclasificado,Skiploteníasobrelamesa.—Incluyeunalistadecosasquehacerycosasquenohacer—dijoalregresar—.Númerodiez.—Noestésdepie,porfavor.Skipsevolvióasentar.—Númerodiez:«Noplanearunaoperacióndeengañonipasarmaterialengañososinaprobación

previadelcentrodeoperaciones».—Aesomerefieroyo—dijoStorm—.Peroquécoño…—Veinte:«Informardelcasoconfrecuencia,deprisaycondetalle…».Veamosaquí.Muybien,el

diablohablaaltoyclaro:«Elservicioyeloficialqueseplanteenlaposibilidaddeunagentedoble

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tienenque sopesar laventajanetaparaelpaíscondetenimiento,ynoolvidarnuncaqueunagentedoble es, en lapráctica, un canal condonadode comunicación con el enemigo».El asuntodel queestamoshablandovieneaserunenlacenoautorizado.

—Yoprefiero«auto-autorizado».—Unenlace«auto-autorizado»conelenemigo.—Hao—dijoelcoronel—,¿mepuedestraerunpocodelechedeverdaddedondesea,porfavor?Haosaliódelasala.Elcoronelsesentóconlaespaldarectaylasmanossobrelasrodillas.—Nadiedelosqueestamosenestasalahaconocidonuncaaltipohipotético.Todavíanoexiste

ningúnenlace,técnicamente.—Coronel,señor,ahoraqueestamoslostressolosunmomento…—Sí,adelante.—Entiendo que esto es una operación familiar y todo eso. Pero ¿es necesario que hablemos

delantedeHao?—¿Hao?Enestepunto,Haosabemásquenosotros.Élesquientrajoanuestrohombre.Élfueel

contactoinicial.—¿Quésabemosrealmentedeél?—¿Realmente?¿Quésabemosrealmentedenadieenestagaleríadeespejos?—Realmentenada.—Mensaje recibido.Te doy una regla que suele funcionar: confía en los nativos. ¿Te lo había

dichoalgunavez?—Muchas.—Nosepuedeconfiarentodoelmundoenestepaís,peroenalguientenemosqueconfiar.Nos

guiamosporelinstinto.Ypuedocontartelosiguiente—dijo,mientrasHaoregresabaconunajarrita—:Acabodepedirlecheyaquíestá.YasíescomotodovasiempreconelseñorHao.—Haosesentóy el coronel dijo—: Señor Hao, estamos planeando una operación de engaño nacional auto-autorizada.¿Estáustedconnosotros?

—Exacto—dijoHao.—¿Teparecebien?—lepreguntóelcoronelaSkip.—Bastantebien.—¿Máspreguntas?—Esoeratodo—dijoSkip.—Bien.—El coronel se sacó del bolsillo de la pecheramedia docena de tarjetas de diez por

quincedelasqueSkiphabíamanejadodemasiadoamenudoyempezóunapresentación—.Estásobrelamesa:unaoperacióndeengañonacional.Peronopuedeserunapresentacióndeningunaclaseamenosquevayaacompañadadeunplan.Avancemosaesafasedelahipótesis.¿Cómoponemosunproductofalsoycreíbleenlasmanosdelenemigo?¿YconcretamenteenlasmanosdeltíoHo?¿Através de un infiltrado que se deje capturar y torturar? ¿A través de un agente doble que «robe»documentosfalsos?Unatareacasiimposible,perounacombinacióndeambascosasseríacasiideal.Sivinierandefuentesdistintas,sucredibilidadaumentaría.

—¿Lotienetodoescritoenesastarjetitas?—preguntóStorm.—Jimmy—dijoelcoronel—.Metienescansado.—Todoestoeshipotético,¿no?

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Skipsintiólanecesidaddequeseloaseguraran.—Sí, sí, no hay nada decidido. Todavía no sabemos lo que estamos haciendo. Por eso el

interrogatorioquevamosa llevaracabo.Yel interrogadoreres tú.Elhombrese llamaTrung.Túhablasunpocodevietnamita.Yélhablaunpocodeinglés.Losdoshabláisalgodefrancés.¿Verdad,Hao,queélhablaunpocodeinglés?

Haohablóporprimeravezdesdequehabíaentrado:—No,coronel,disculpe.Nohablainglés.Nada.—Bueno,nopasanada.EsporesoporloqueSkippasóunañoenCarmel.—Yaloarreglaremos—prometióSkip.—Séqueloharás.¡SeñorTho!—gritóelcoronel.Tho apareció con un trapo de cocina en la mano. Debía de tener sesenta y tantos años, pero

físicamente no parecía haber salido de la mediana edad —aunque filosóficamente avezado,imperturbable—,ytraíaunasonrisaradianteporqueelcoronellehabíasonreídoprimero.

—SeñorTho…abraelBushmills.TodostomaronBushmillsconaguaaparte.HastaHaoaceptóuno,ysededicóasostenerelvaso

con ambasmanos sin beber de él.La poción desterró la palidez del coronel, y en cuanto se hubobebidolamitaddelvasoyapareciólibredecualquiersíntomadesuenfermedad.Ynohabíadudadequeestabaenfermo.

Sinningunaamarguraqueélmismopudieradetectar,Skipdijo:—¿Nosepreguntaustedquéheestadohaciendo?—Lomismoquetodosnosotros:esperarhastaquesurjaunaestrategiaviable.Entretanto,¿aqué

tededicasparapasarelrato?—Anada.Aquínopegoniunsello.Soyuncalientasillas.—Esaesterminologíadelosmarines—dijoStorm.—Espertinente.—Hastaestafaseenlaqueestamosentrando—dijoelcoronel—,elcandidatotienequemarcarel

ritmo.Ymira:lomásconvincentedeélestodoesteretrasoyestasreticencias.Esoamímedicequeélesconscientedelpasoqueestádando.Yessinceroconnosotrosalexpresarnossusdudas.

Haohabló:—Sí.Essincero.Yoloconozco.—Peroahorasehacomprometido—dijoSkip.—Havenidoanosotros.Esverdad.Esaeslasituación—dijoelcoronel—.Ahoraesnuestroylo

quieroaquícontigo.No loquieroenCaoPhucnienSaigón.Loquieroenunsitiodondenohayatrabajadoantes.

—Pero¿aquésedebeelretraso?—Nopuededesaparecersinmás.Formapartedeunacélula.Lacélulaespartedeunared.Nose

puedeirdevacacionessinmás.Haofrecidorazonescreíblesparatrasladarseaestazona,oporlomenosesonoshaasegurado,peroparaconseguirlonecesitatiempo.Éldicequenecesitatiempoyyolecreo.

—Entretanto,soyuncalientasillas.MededicoaleeraDickens,comoyasabe.—YaIanFleming.SientonohabertepodidoconseguireldeTolstói.—Cualquiercosaqueseamuylargaoestéllenadeagentessecretosdemodalesamables.—¿HasleídoaShellScott?

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—Claro.TerefieresalaseriedeRichardS.Prather,¿no?—¿QuémedicesdeMickeySpillane?—Todo.Unadocenadeveces.—¿HenryMiller?—¿PuedeconseguirlibrosdeHenryMiller?—Yaeslegal.Fuealostribunales.TeconseguiréalgodeHenryMiller.—TráigameTrópicodeCapricornio.TrópicodeCánceryaloheleído.—AmíeldeCáncernomegustó.Esaburrido.Capricornioesmuybueno.—Uau.Nosabíaquesemantuvieraustedtanaldía.—Fueronescritosenlosañostreinta,chaval.¡SeñorTho!—gritó—.¿Huelocomida?—Vaciósu

vaso—.Salgamosmientrassepreparalacomida.Vamosadarunavueltaconelcoche.—Oandando—dijoSkip—.Hayuntúnelalladodelacarretera.—¿Estásdebroma?¿Aquí?—Tenemostodaslasinnovaciones,tío.—Exploremos—dijoelcoronel—.Ynoteolvidesdelabotella.Laexcursiónfueunfracaso.Siguieronunrumboenzigzagporlacarreteraprincipal,esquivando

loscharcos.—No me hables de la actualidad —dijo el coronel—. Es lo único que pido. Dios mío, otro

Kennedy.¿EsquenadiepuedemataraltíoHo?Esagentenoseandaconchiquitas.—Sedetuvocomosifueraapresentarotraidea,perolomásprobableesquesolamentetuvieraquerecuperarelaliento—.Te los cargas en eneroy ellosvuelvencomonuevos enmayo, listosparaque losvolvamosadestrozarhorriblemente.¿Eseeseltúnel?

—Loquequedadeél.El coronel esperó en silencio diez segundos antes de recorrer con perseverancia los veinte

últimosmetrosyplantarsedelantedeltúnel,queahoraeraunhoyoerosionadoenunpromontorio.—Puesno,Skip,no.Másbienno.¿HasvistolostúnelesdeCuChi?Noloshasvisto,¿verdad?Pronuncióelnombrealestilonativo,deformaqueloquedijovinoaser«guuchi».—No,señor.Noloshevisto.—Estonoesuntúnel,Skip.Parecemásbienunaexcavaciónquehizoesehombre.Máscomosi

estuvieraabriendounacuevaoalgoasí,perolageologíadeaquínoparecequepermitalaformacióndecuevas.¿Nohacefaltaquehayacalizaparaeso?

—¿Unacueva?—Talvezhayaunagrietasubterráneaporaquí.Unagrietaenunarocasubterránea.—Vale.Sí.Altipolofascinabanlascuevas,nohayduda.Lovolvíanloco.Leísusanotaciones.—Claro. Pero no es un túnel de los del Vietcong en absoluto. En los túneles del Vietcong, la

entradaesverticaldeltodo.Esohacequeseatandifícilcolarseenellos.Skipnoestabasegurodesialcoronelsololohabíadecepcionadoeltúnel,otambiénunpocosu

sobrino.Dejaron atrás elmisterio y regresaron a dar cuenta del almuerzo,mientras Skip se tragaba su

irritación:el túnelnoerauntúnel.Lomásprobableesquenisiquierafueraunacaverna.Sesentíatraicionadoporelhombremuerto.Bouquetlohabíadejadoenlaestacada.

Frentealaverjabajadelamansión,elcoronelcogióaHaodelcodo.Aferradoalbrazodeaquelhombremuchomáspequeñoqueél,seagachóarecogerunaramatiradapor lareciente tormenta,

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comosi lehubieravenidouninterésrepentinoporlosobjetosdesechados,ylausódebastónparadarlosúltimospasosantesdelaentrada.

La señora Diu tenía el almuerzo listo. Fueron directamente a la mesa lacada en negro delcomedor,dondeThoestabaoficiando,oesoleparecióaSkip,conciertoairedeacusación:enseismeses,conlaexcepcióndelsacerdote,aquelloseranlosprimerosinvitadosaunacomida.Hoyhabíaplatos locales: sopa de fideos de ternera con hojas dementa y judías germinadas. Eso sí, pan enrodajasalestiloamericanoreciénsalidodelhornoyconmantequilla.YBushmillsaraudales.Nadadepalillos,ni siquieraparaHao.YnadadeBushmillsparaHao.Elpostre eraunaespeciede flanhechodeguayabas.

—Porlosirlandeses—sugirióelcoronel,despuésdeabrirunasegundabotelladetrescuartos,opuedequefueralatercera,setemióSkip.

—ElapellidoSandsnoesirlandés—dijoStorm.—Nohablamosdeeso—admitióSkip.—Ah,¿no?—dijoelcoronel.—Bueno,yocreíaqueno.—SalimosdeallíllamándonosShaughnessey.YderepenteenelbarconosconvertimosenSands.—EsoesloquemecontólatíaGrace.Todamividamimadrelohatratadocongranmisterioy

escándalo.—No,noesmásqueunafuentedediversiónyunpocodevergüenza.¿Quénoticiastienesdetu

madre?—Todobueno,meimagino.Ellamemandacartasyyolemandopostales.—Entodocaso,amigos,noestababrindandoporunpaísentero.Solamentepormiviejoequipo,

losFightingIrishdeNotreDame.Yodiríaquelamayoríaeranpolacos.Oporlomenosloéramoscuandoyoestabaenelequipo.MiraaSkip.Míralelacara.Estápensandoqueelviejoyaempiezaconsusrollos.

—Adelante,tío.Yoestoylobastanteborracho,siustedloestá.—Sí, sí, sí. Estoy lleno de gas caliente. Se podría hacer volar un globo con mis recuerdos.

Adelante,cambiadetema.—Suensayoparalarevista.Noentendísuensayo.—Yotampoco.—Esonoesexactamentecambiardetema,sieltemaeselairecaliente.—Soyinmunealascríticas.—Contienemuchostérminososados:«actividadaislada».—Actividadaislada,mostrariniciativa,porejemplo;cogereltoroporloscuernosmientraslos

jefazoscalientanlasilla.—Yotros.—¿Quéotros?Yosoytuglosario.—Nomeacuerdo.—Lajergaesimportante.Tenencuentaelpúblicopotencial.Esagenteestodogalimatías.¿Has

leído«Lapolíticayelidiomainglés»?—Eh…GeorgeOrwell,sí.—¿Lohasleído?—Sí,esey1984.

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—Bueno,yacasiesmilnovecientosochentaycuatro.Ynosevaatardardiecisieteañosenllegaraquí.

—Enfin—dijoSkip.—Másbiendieciséis—anuncióStorm.—¿Dieciséisqué?—Dieciséisañosparamilnovecientosochentaycuatro.—Esperaunmomento.Dieciocho.Dieciocho.Stormserio,agitandounarebanadadepanjuntoasucabezaconelpelocortadoalrape.—Hombres—dijoelcoronel—,elenemigonoestáhaciendoesto.—¿Haciendoelqué?—Sumaryrestar,sargento.—¿Quéestáhaciendoelenemigo,coronel?—Estácortandoenpedazosnuestraartilleríademierdayvolándonoslostestículosconella.Están

viviendoenagujerosdelsuelo.Noestáncomiendoflan.Estáncomiéndoseasushijosennombredelavictoria.Esoesloquecomenparaalmorzar.Asíquepongámonosmanosalaobra.Ahoratenemosaunodeellosdenuestrolado.Élsolopodríacargarsealamitaddenuestrainfantería.Haentradopor todas las puertas… ¿conoces las «tres puertas» del Vietcong? Sangre, encarcelamiento ytemporadasenelNorte,élhahecholastres.Haotelopuededecir:esetipollevaluchandodesdelaépocadelosfranceses.FueprisioneroenConDau.FuealNorteylovolvieronaadoctrinardespuésdelaPartición.RegresósiguiendolasendadeltíoHoyllevadesdeentoncesportándoselopeorquepuede.HaceunpardeañosenCaoPhucintentóasesinarme.

—Estásdebroma.—DebiódeserunañodespuésdequemurieraKennedy,oseaqueyodiríaquefinalesdelsesenta

ycuatro.Hacedosañosymedio.LoadmitióanteHao.Se giró hacia Hao, que había permanecido invisible pese a su presencia a la mesa, y este lo

confirmó:—Medijoamí,sí.—Tiróunagranadadentrodeltemploqueyoestabavisitando.Esauténticodeverdad.Unabirria

degranadachina.Skip sintió que se le abría la boca mientras contemplaba a su tío: borracho, obsoleto,

completamenteimposibledematar.—Lacuestiónes,conesaclasedecompromiso,¿quélehahechocambiardebando?¿Quédiceél,

Hao?—Nolosé—dijoHao.—Esaeslapartequenomegusta.Nomegustaenabsoluto.—Nolosé—dijoHao.—Escuchad,escuchad—dijoSkip,repentinamenteoptimista—.Tenemosquecrearelrollofalso,

laficción.Talvezyopuedoayudarconeso.—Paraesohasrecorridomásdeoncemilkilómetros.Supongamosqueenelataqueconbombaa

la embajada del año pasado hubiera algunos documentos que se perdieron en el viento. Unatranscripción,porejemplo,lasactasdeunareunióndeunpuñadodeviejospiratasquecreentenerunarma nuclear que pueden extraviar. Esos tipos horribles quierenmeterla a escondidas enHanoi ydejarsedetonteríasdeunavezportodas.Loqueellospercibencomotonterías.Yque,dehecho,lo

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son.—Espera—dijoSkip—.Quenoseaunareuniónsobrela…la…comosellame…elcomplot.No

el complot en sí. La reunión tenía por objeto intentar detener el complot. No fue entre losconspiradores,enotraspalabras.Fuelagentequeestáintentandoinvestigaralosconspiradores.

—Yateentiendo.—Yono—dijoJimmyStorm.—Los documentos no son las actas de una gente que conspira—dijo Skip, con el Bushmills

zumbándole en los oídos—, no proceden de la conspiración en sí, sino de una gente que estávalorandoel…el…—organizósuspoderes—…elavancedelaconspiración.Demaneraqueexisteunatranscripciónenclave…

—Enclaveno.Solounosfragmentosamediodestruirquesobrevivieronalbombardeo…Elcoronelcontinuópensandoensilencio.Skipsearrepintiódehaberretomadoaqueltema.Elcoronelhabíatenidorazónalposponerlas

copashastaquelohubierandiscutido.Ahoraloestabandiscutiendodenuevoyél,paraempezar,nosabía loqueestabadiciendo.Peroelcoronelse llevóotrosorbodewhiskya los labios,y todoseacabó.

—¡Dadmegigantes!—dijo—.Osea,porelamorde…¿JohnnyBrewster?Sehapasadolaguerraentera enWashington golpeando una pelota de balonmano de un lado a otro y planeando cómodesmantelarlaoperacióndeCaoPhuc.Yahorayaestádesmantelada:elunodeseptiembreseacaba,elfindetodo.ElcabróneradelaOSS.Luchóenunaguerra:sabe,odebiódesaber…JohnBrewsterdebedesentarsedegolpeenlacamaalgunasnochesypensar:«Unmomento,unmomento,¿estonotenía otro sentido?». Pero antes de acordarse de que el sentido de esto es la supervivencia de lalibertad, y la salvación humana, y la luz del mundo… lamezquindad y la mentira de sus sueñosdevuelvensucabezaalaalmohadayseponearoncarotravez.YalamañanasiguienteloúnicoqueimportaesLangley.LaguerratienelugarenLangley,yselibraentretiposcomoélytiposcomoyo,yesunaguerraporelcontroldelaAgencia.Yotumbéaltipoylonoqueé.Alamierdaesoscabrones.¿Qué creen esos tipos que están intentando hacer los Estados Unidos de América en Vietnam?Esperad…EsoscabronesdeLangley,esoscabronesdelPentágono…¡Esoscabrones!Nolosaben.Notienenniidea.

Agachólacabeza.—Coronel—dijoJimmyStorm.Elcoronellevantólacabeza.—Coronel.—Sí.—Menudossustosmeda—dijoStorm.—¿Esoesuncumplido?—Sí,joder.—Llevadmealcoche—dijoelcoronel.Haosepusodepie.Ydespuésnohizonadamás.—Eh,escuchen,eh…¿Porquénosequedanapasarlanoche?—No,Skip,no.Esmejorvolver.—Llévenmeconustedes.DéjenmequedarmeenSaigón.Soloelfindesemana.—Notepodemostenerenlaciudad,Skip.

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—Vamos.EstuveallíenelTet.—Medistelástima.Esoseacabó.Eresunsoldado.—Quédese,porfavor.Podemosjugaralpóquer.—¿Tienesnaipes?—dijoStorm.—Sí,sí.Quédense.—No.Nostenemosquevolver.—Soyuncalientasillas.—Secreequeeslahermosacriaturaperdida—dijoStorm.—Uau—dijoSkip—.EselSigloAmericano.—Elrockandrollhavenidoparaquedarse—dijoStorm.Bienborracho,SkipSandsdelaCIAsepusodepieydirigiósucuerpohacialaescalera.Sesentía

lobastantecapazdeandarcomoparasubirlaescalerayencontrarsucamaperodemasiadomareadopara acostarse en la misma, así que se sentó en una silla con los pies apoyados en la camabamboleanteymecidaporlasolas.

Sedespertódespuésdeunacabezadadeunahoraysalióalaterrazaabeberuncaféfuerteymuycaliente que lo revivió menos que el vértigo emocionante que sintió al contemplar sus propioserrores, todas aquellas equivocaciones en las que había incurrido al seguir los pasos de su tío, elHombredeAcciónprimigenio.Neanderthal,escomolohabíallamadoRickVoss.ElseñorThoentróconunserpentínparamosquitoscandenteenunplato,lodejósobreelbrazodelsillóndedelanteyallí se quedó: la simplicidadmisma, la brasa del incienso pestilente, el abalorio de color naranjacreandountúnelporsusenderoenespiralhacialaextinciónylanoentidad.Skipsesintiórodeado,asediado, habitado por toda aquella imaginería serpentina: los túneles, el Proyecto Laberinto, lascatacumbas retorcidas del oído humano…Pero por encima de todo se erguía la imagen central ymuy distinta: el Árbol de Humo. Sí, su tío tenía intención de desplegarse a sí mismo como unespectrooscuroyconquistartodoelServiciodeInteligencia,dearribaabajo,subvertirsusmareasirreversibles.Obienasaltarloenlacanchadebalonmano.

Porqueeramásnutritiva,habíapedidolechedeverdadenelcafé.Elsaboreramuyparecidoaaquelsustitutoparecidoalatiza.Elperronuevoseleacercóentrelasrodillasymetióelhocicoensutazayselobebióconunruidodeengullimientocasivocal.

El tíoF.X.,columnade fuego,árboldehumo,quería levantarunárbolenormeasu imagenysemejanza,unanubeatómica:sinounadeverdadsobrelosescombrosdeHanoi,síporlomenossutemible posibilidad en la mente del tío Ho, el Rey Enemigo. ¿Y quién podía decir que el viejoguerrerodelirantenoestabapersiguiendoverdadesciertas?Alinfiernoconlainteligencia,losdatos,los análisis. Al demonio con la razón, las categorías, la síntesis, el sentido común. Todo eraideología e imagineríay conjuros.Fuegospara iluminar lasmentesy calentar las accionesde loshombres.Eintimidarsusconciencias.Fuegosartificiales,todoello:nosololamateriadelahistoria,sino también lamateria de lamisma realidad, los pensamientosdeDios,mudosyobvios: dibujosincandescentesqueseexpandíaninfinitamente.

Enalgúnmomentodelpasado,eraconscientedeello,podríahaberledichosimplementeasutíoque se quería ir a casa. Pero a estas alturas estaba tan metido que ya no podía escabullirse ydesplomarelcielosobrelacabezadeyunquedesutío.Noqueríaveraquellacabezahundida.

HizosaliraThoalaterraza.—¿Cuáleslahistoriadeesteperro?

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—Lemédicin—dijoTho.—¿Eselperrodeunmédico?Thoasintió,apostandoporunacuerdo,yseretiró.ProntosaliólaseñoraDiu.—ElseñorThodicequeelperrotieneelespíritudeldoctorBouquet.Cuandoelmédicomuere,al

cabodeunañovieneelperro.—¿EldoctorBouquetsehareencarnadoenesteperro?—Sí.EldoctorBouquet.—SeñoraDiu.—Sí,señorSkip.—¿PorquéThonoquierehablaringlésconmigo?—Élnohabla.—¿Nohablainglés,onohablaengeneral?—Sí,aveces—dijoella—.Nolosé.—Bien—dijoél—.Confíoenqueesoleaclarelascosasausted.Ahoraelperroestabaenel jardín, levantandolapataparaapoyarlaenunodelostrespapayos.

CercadeallíelseñorThoseapoyóenelasadelrastrilloparaagacharseyaplicarunacerillaaunmontóndebasuradelacasa.Skipadmirabalospapayosconsussiluetasesbeltasysuspenachosenlacopaylafrutaarracimadaentornoasusgargantas…Elviejopapasandiounpasoatrásysequedómirando, asegurando la llama mientras su jefe resucitado, enroscado del todo como si fuera unbuñuelo,mordíaunaratajuntoalabasedesucola.

—Perdone,señorSkip.—LaseñoraDiuseguíaasulado—.¿Quiereustedcena?—Déjemepensarenello.Estaréahídentrodeunminuto.Unacosadetrásdeotra.TalvezmandaríaabuscaralpèrePatricey lo invitaríaacenar.Casia

modo de penitencia, cuando llegara el sacerdote se obligaría a sí mismo a comer, aunque eso lepusieraenfermo.Perosehabíaquedadodormido,yhabíatomadoaquelladecisiónensussueños.Sedespertóalasnuevedelanochedeacuerdoconsurelojdepulseradelafuerzaaérea.Lanocheeraoscura como una tela de terciopelo, las brasas delmontón de basura relucían, el Bouquet caninoroncabaasuspies.Teníahambre,perolavidaeraridícula.Sefuealacama.

***

ElTenienteVirgeneraunjovenfibroso,fuerteyserioconlacamisadeluniformemetidapordentroylacinturademasiadosubida.Nofumabaybebíademaneramuyfrugal,conrecelo.Hablabamuchosobremicrobios.Lasenfermedades tropicales lepreocupabanconsiderablemente.Alparecer,habíaleídounlibrosobretodaunaseriedecosasrápidasyhorriblescontralasquenoexistíavacuna.Encuantoalenemigo,apenascreíaensuexistencia.Noleasustabaenabsoluto.

ElTenienteVirgenlehabíadichoalsargentoBurke:—Voyasacarletodoelpartidoquepuedaaestafarsadefollamonos.Mesudalapollasiesilegal,

siestáinjustificadaosiespecado.Hoysomoshéroesymañanaseremoslosnazis.Nuncasesabe.Enestebailenadiesabeunamierda.—Eraunaactitudrefrescante,sinodirectamenteinspiradora.Todoslos demás iban en dirección contraria—. Estaba saliendo con Darlene Taylor hasta que un hippyllamadoMichaelCooklallevóaunafiestaylediodrogasyselafollóylaconvirtióenhippy,ysi

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Michaelelhippymalignoestáencontradeestaguerra,entoncesyoestoyafavor,coño.Esloúnicoquemehacefaltasaber.

ElTenienteVirgennoparecíavirgenenabsoluto.Nosabíaenquépaísestaba,peroseencontrabaagustoeneluniverso.

Erarápido,precisoydedicado.Tardódosdíasenadaptarsealazonahoraria,yenlamañanadelterceroselevantódelacamadeunsalto,miróasualrededorconlosojosdespejadosyexigióqueletrajeran de inmediato cualquiermaterial y personal que pudiera expandir su conocimiento de lostúneles locales delVietcong.Aquello se correspondía conunpuñadode tiposy unpar dedibujosarrugados que el Cabo Vaquero había hecho para el anterior, el antiguo, el previo, TenienteMetepatas.

SedecíaqueelTenienteMetepatassehabíaidoaTanSonNhut,allíhabíaencontradoaalguienque lo llevara en un vuelo de laMAC hastaHonolulu y allí se había desvanecido en el gigantescoparaísoqueeraEstadosUnidos.

El Teniente Virgen se pasó una mañana en su barracón metálico con los dibujos del CaboVaquerodesplegadossobrelamesaplegablequeleservíadeescritorio.Exigiórespuestascreativasdesusargento.

—¿Esquenohayalgún radaro sónarquepodamosusarpara tratardemaneraeficazconestamierda?Osea,soloqueremossaberdóndeestánlocalizadosestostúneles.Paraesononoshacefaltameternosarastrasdentrodeellos,¿verdad?¿Acasosomosbichososerpientesoalgunamierdadeesa? ¿O somoshumanos racionalesy erguidos sobredospiernas conun cerebroquenospermiteatacaresteproblema?

—Yonocreoquenoshagafaltarealmentehaceresto,señor.—¿Qué?—Quenocreoquenoshagafaltahacerunmapadeesosagujeros.—Tengoórdenesexpresasdehacerexactamenteeso.Eselúnicopropósitodequeestemosaquí.

Sino,¿sabeloquenostocaríahacer?CogerlaRutaUnoyrespiraralgunacosaletalparanosotros.Esaes lamisiónalternativa.NubesdeDios sabequéque levanacolapsar lospulmonesynohaydudadequelevanaesterilizarlaspelotas.

—Órdenesexpresas,señor,osea,señor,¿quieredecirporescrito?—Quierodecirqueestánclaramenteexpresadasdentrodemimente talcomoyolas interpreto.

¿Quierequeletoqueloshuevosaalguienparaquemelasaclareporescrito?PorqueelCuerpodeEntrenamientodeOficialesdelaReservanomehaenseñadounaputamierdasobrecómosobrevivirun solo día en estamierda, pero sí queme ha enseñado a no ir dando tirones del abrigo demissuperioresniallamarleslaatencióndeningunamanera.

—Y yo le animo a que siga esa política, señor—dijo Burke—. Pero hay pelotones a los quellamanratastunelerasyquesemeteránahíabajoparausted.Puedomiraraversilospuedenasignaraquí.

—EstamosalasórdenesdeOperacionesPsicológicasdelaCIAhastaelunodeseptiembre,luegohaylaposibilidaddequetodosnosvayamosacasa.Unaposibilidad,ledigo.

—Señor.TodoelmundoestádeacuerdoenqueelcoronelF.X.estáfueradecontrol.—Dejeeltema.Noconoceustedlahistoriadeeseasunto.El Teniente Virgen caminó por el campamento con la cabeza descubierta bajo las nubes

abrasadoras del mediodía. Parecía profundamente asustado, pero no de la guerra ni de sus

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responsabilidadesenlamisma.Dealgomásgrande.Cósmicamentepreocupado.AEco le resultabanmuy irritantes las distintas formas de tratar los desperdicios que tenían el

Teniente Metepatas y el Teniente Virgen. Metepatas simplemente había dejado que la basura sedesperdigara por todas partes hasta que el sargento, primeroHarmon y luegoAmes y por fin elsargento Burke, los ponían a limpiar el perímetro, pero Virgen quería que lo hicieran conpuntualidad,todocomounapatena,loqueríatodoimplacablementeimpecable.EnmuchossentidoselTenienteVirgenmetíamáslapataqueelTenienteMetepatas.ElTenienteMetepatasnuncahabíadadomuestrasdeirracionalidadrelacionadasconlabasura.Solohabíasidoextremadamentequisquillosocontodolodemás.

***

HombreNegrosededicabaachasquearlosdedos,arrugarlacara,fruncirlosojosyluegoabrirlosdeparenpar, todosulfuradoporloqueleestabaintentandohacerentenderaJames,peseaqueyaestabanllegandoalbarracónmetálicodelTenienteVirgen,yleibadiciendo:

—YtevasaenfrentarconelseñorCharlie,vasasuencuentro,yoscruzáisporelcamino,yoscambiáissindaroscuentaynoerestúelquevieneaquíarribaconnosotros,tío,contuscolegas.Esél.YnoesélelquesubeallíarribaysereúneconlosdemásCharlies,yseponeencuclillasysepone a engullir ese arroz pegajoso con los dedos, tío, no es él. Eres tú. Oh, están jugando connuestrascabezascomolessaledeloshuevos.

—HombreNegro.—Sí,cariño.—Soyyo.—Oh.Oh.Mierda,sí.Sí,erestúquevaavisitaralnuevo,¿no?—Esoparece.HoyHombreNegronoparabademorderseloslabios.—Esvirgenperoactúacomosinolosupiera.—¿Cómovatodo?—dijoJames.—Bien.Bien.Unpardedemonioshandejadodemorderme.JamesllevabamuchotiemposinveraHombreNegro.DesdeelTet.—Pensabaquetehabíasido.—No fue nada. Resultó que toda la sangre era de una sola venita o algo así. Mierda. ¿No te

enterastedequecasimemuero?—¿Tedispararon?—No.MeapuñalaronenelTuDoBar.Elcabrónmesiguióaloslavabos.—¿Temetisteenunapeleaacuchilladas?—Elhijoputarompióunabotellaymelaclavóenelhombroaquímientrasyoestabameando.—¿YtedanunCorazónPúrpuraporesamierda?—Casilapalmopormipuñeteropaís,yaquímetienesdevueltaoliéndote.Yapestas.—Nosabíanadadeltema.AHombreNegrolebailabanlosojosenlacabeza.—Vialsargento—dijoJames—.¿TeacuerdasdelsargentoHarmon?¿Delsargentodesegunda

Harmon?

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—Sí.Harmon.Elsargento.Sí.¿Lohasvisto?¿Hacepoco?—No.Justodespués.—¿Justodespuésdequelepasara?—Sí—dijoJames.Sequedarondepieenelparalelogramodesombraquehabíaalestedelbarracónmetálico.James

sesentóyapoyólaespaldaenlapared,peroHombreNegronosepodíasentar.—Eh,tío.Dimecómotellamas.—¡Túsueñas!—Porfavor,dimeporlomenostunombredepila.—Charles.CharlesBlackman.—¿Blackman?—Aesomerefiero.Aesamierdajustamente.Menudonombre.—Jodeeer.Menudonombre.—¿Vasaentraraveraltenientenuevo?—Supongo.—Tienenervioeltío.—Sí.Esdearmastomar.—Sí.Dearmastomar.—CharlesBlackman.—¿Loves?—SupongoquehaytíosblancosquesellamanWhiteman.—Sí,sí.Peronooigoquenadieseríaporeso.¿Mesigues?—Yomeestoyriendodeti—dijoJames—,peromeestásponiendounpocotriste.Hubo un portazo. El pequeño sargento de Operaciones Psicológicas salió dando zancadas del

barracónysesentódelantedeJamescomosifueraunindioenunareunióndejefesdetribuydijo:—Otrodíaperfecto.Losepamosono.—Amínomeloparece.ElsargentoleyólaetiquetaidentificativadeJamesydijo:—¿Aver?Houston,J.¿Quéquieredecir lajota,«jodiendo»?Esbroma.Losiento.Estamañana

vuelvoaserunidiota,oh,mierda.YapuestoaquenohasestadonuncaenHouston.—No.SoydePhoenix.—Unsitiocaluroso.¿Quéquieredecirlajota?—James.—¿NotellamanJimmy?—Aveces,peroyolesdigoquenolohagan.—AmímellamanJimmy.PeronomellamesJames.MegustaJimmy.NuncamellamesJames.

Nonospongamosformales.HacecalorenPhoenix.Lleganalostreintayochogrados.Yalostreintaynueveyaloscuarenta.

—¿TúereseldePsicológicas?—Sí.—Joder.—¿Qué?Jamesselimitóanegarconlacabeza.

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Jimmysetumbódeespaldasysetapólacaraconlagorra.—Aquí también hace calor.EnVieeetNam.Quiere decir «sudor permanente» en su idiomade

mierda.Hubootroportazo.Untiposalióyechóaandarhacialasletrinassinsaludarlos.Stormsepusode

piedeunsalto.—EselturnodePhoenixHouston.Siguió a James adentro y se puso al lado del sargento Burke y no abrió la boca mientras el

TenienteVirgentomabalapalabra.—CaboVaquero.—Sí,señor.—¿Pensabaquenoibaadarconusted?—Puesdehecho,señor…—Heguardadolopeorparaelfinal.Jamesbuscóunasillaconlamirada,peroelTenienteVirgenteníalaúnicadelasala.—Nosquedansesentayseisdíasdeesterollo.—Sí,señor.—Antes de que tengamos que desmantelar este asunto y volver a la normalidad del

VigesimoquintodeInfantería.—Sí,señor.—Teníamosnoventadíasyhemosdesperdiciadoveinticuatrodenoventa.Hablandodeeso—dijo

elteniente—,estuvoustedausentesinpermisoveintiúndíaselfebreropasado.Conozcosuhistoria.¿Dóndeestabausted,manifestándoseenlaConvenciónDemócrata?

—¿Laqué?—LaConvenciónDemócrataNacional.ElsargentoBurkedijo:—Señor,laConvenciónDemócratafuelasemanapasada.—¿Adóndeseescapó,cabo?—Estabaenmisiónespecial.—No.Estabaustedborrachoyescapándose,yelcoronelloarreglóconmipredecesor.Diga«Sí,

señor».—Sí,señor.—Nuestramisióneshacerunmapadelostúneleslocales.Ustedeselquesemetióenellos.—¿Yo?—dijoJames.—Ustedentróenellos.—Solamentepara,osea,yasabe—dijoJames—.Señor.—Bueno,¿cuálessuinforme?—Nolosé.¿Tipoqué?—¿Quéviousted?—Solotúneles.—¿Yquéhabía?Cuéntemealgo.—Lasparedessonmuylisas.—¿Quémás?—Sonmuypequeños.Nosepuedeunoponerdepie.

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—¿Hayquegatear?—Noexactamentegatear.Soloandarencorvado.—Debedeestarustedloco—dijoelTenienteVirgen.—Esonoselodiscuto,señor—dijoJames.—Megustaría volverlo ameter en esos túneles.Hacermapas detallados de esos cabrones.No

estosdibujoscutres.Austedlegustaestarahíabajo,¿verdad?—Tampocoesesoexactamente.—Bueno,no,joder,yanadaesexactamentenada.Peroaustedlegustabastanteestarahíabajo.—Puedeustedconvertirmeenvoluntariosiesoselaponedura—dijoJames.—Mire,soldado,quierocrearunentornodeunosdoskilómetroscuadradosdentrodelcualyo

conozcahastalaúltimacosaqueviveyrespira.—¿Sabe usted? Por aquí cerca no haymás que seis túneles.Yo he estado en todos y no van a

ningunaparte.Losverdaderostúnelesestánalnortedeaquí.Alnoroeste.—Nomedigaeso.Meestáquitandomirazónparavivir.—Quieroquesemereembolsemiequipo.—¿Suequipo,dice?—Paguédosochentaycincoporlapistolayelsilenciadorylalinternadediadema.Pareceque

me tendrían que haber dado uno, pero si esperaba a que me lo diera el ejército, todavía estaríaesperando.

—¿Quieredecirdoscientosochentaycincodólares?—Sí,señor.—¿Quéllevaenlapistolera?—UnaHi-Power.—¿Ydóndeestásuarmadeltreintayochoparatúneles?—Esunpococomplicado.—¿Loes?¿Hayalgoquenoseaunpococomplicadoenestafarsadefollamonos?—Nilosueñe.—¿Dosochentaycinco?—Másomenos.—Si pudiera pedir quemandaran dinero enmetálico, pediría un buen pellizco paramí. Puedo

pedirequipoparatúneles,quizá.Esoparecerazonable.—Puespidauno.Puedovenderloyrecuperareldinero.—¿Ahoramequierehacercómplicedeactividadesdemercadonegro?—Solamenteestabapensandoenvozalta.—Nopuedotolerarquemigentepiense.Nolopuedotolerar.—No,señor.—Entretanto se va a pasar usted sesenta y seis días más corriendo de un lado para otro y

partiéndoselaespaldaparalaSecciónEco.SinpermisosdeningunaclaseysincervezaenelPurpleBar.Diga«Sí,señor».

—Sí,señor.—Yapuedeirse,aporellosyvivaelrockandroll.Jamessevolvióparamarcharse.—Aver.Espere.

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—Sí,señor.—Despuésdequeyolomachaquedurantesesentayseisdías,¿quéplanestiene?—MevoyaNhaTrangparalainstruccióndeLURP.—Nomejoda.¿Alaescueladereconocimiento?Esosonprácticassobreelterreno,colega.—Yalosé.—¿Sabecontraquiénhacenlasmaniobrasdelainstrucción?—Sí.—ContralaDecimoséptimaDivisióndelEjércitodelNorte.Simplementetemandandepatrullay

averquiénsecomeaquién.ElpequeñosargentodeOperacionesPsicológicasriofelizmente.—Lacagasenlainstrucciónyestásmuerto—dijo—,ytecrecenchampiñonesenelculo.—Cállese,sargento,porfavor.Cabo,¿esteessusegundoaño?—Sí.—Levanaobligarahaceruntercero.—Meparecebien.—Puedeirse—dijoelteniente—.Buenasuerte,puedeirse.

***

Sedespertóamediatardeconlabarahúndadelospájaros.Selavóelcuerpoconunaesponjay,porsuefectorefrescante,sediounafriegadealcoholenlapiletadelbañodelpisodearriba.Sepusosubañadordelejércitoysuszorisybajólasescaleras.

—SeñorSkip,¿elté?—dijoelseñorThoeninglés.—S’ilvousplait—dijoél.Sesentóalescritoriofrentealenormemapadescoloridodelaorejahumanaysepusoatrabajar

enlospasajesdetextoantesinclusodequellegarasutéoseledespejaranlossueñosdelacabeza,porqueleparecíaqueesteeraamenudounestadofavorableparahallarelsentidodeunaexpresiónextranjera,paraatraparsu luz trémula.Mantuvolas lámparasapagadasy trabajóenunaespeciedecrepúsculo.Durantelaspausasechabavistazosalmodelodeporcelanadelaorejahumana,pasandoeldedoporeldelicadolabyrinthemembraneux,elutriculeyelsaccule,elcanalendolymphatiqueyelnerfvesibulaire,elgangliondescarpayelganglionspinaldecorti,y

Siincroyablequecelaparaisse,lesIndiensTarahumarasviventcommes’ilsétaientdéjàmorts…

«Porincreíblequepuedaparecer—habíatraducidoSands—,losindiostarahumaravivencomosiyaestuvieranmuertos…»

Ilmefallaitcertesdelavolontépourcroirequequelquechoseallaitsepasser.Ettoutcela,pourquoi?Pourunedanse,pourunrited’Indiensperdusquinesaventmêmeplusquiilssont,nid’oùilsviennentetqui,lorsqu’onlesinterroge,nousrépondentpardescontesdontilsontégarélaliaisonetlesecret.

Mehacíafaltaunactofirmedevoluntadparacreerqueibaasucederalgo.Ytodoesto,¿paraqué?Paraunbaile,paraelritodeunosindiosperdidosquenisiquierasabenquiénessonnidedóndevienenniquiénes,cuandoselespregunta,noscontestanconcuentoscuyohiloycuyosecretohanextraviado.

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Todas las tardesdespuésde su siestaemprendíaaquel juegode traducción,mientrasafuera lospájaros continuaban, algunos insistentes, los otros a modo de prueba, interrogativos,majestuosamente extáticos, o bienpreocupados:más inteligibles, por lomenos en sus intenciones,queelmisteriosocantodemonsieurArtaud:

Ilmesemblapartoutlireunehistoired’enfantementdanslaguerre,unehistoiredegenèseetdechaos,avectouscescorpsdedieuxquiétaienttailléscommedeshommes,etcesstatueshumainestronçonnées.

Meparecíaleerportodosladosunahistoriadenacimientoenmediodelaguerra,unahistoriadegénesisycaos,contodosaquelloscuerposdediosesqueestabantalladoscomohombres,yaquellasestatuashumanastruncadas.

AquelArtaudparecíauntipoduro.Talvezibaenserioytalvezbuscabarealmentealgo.PeroE.M.Cioran.ElúnicoCioran.Eradecadente.Era…improductivo,ydelicioso:

Cetétatdestérilitéoùnousn’avançonsninereculons,cepiétinementexceptionnel,estbienceluioùnousconduitledouteetqui,àmaintségards,s’apparenteàla«sécheresse»desmystiques.

Esteestadodeesterilidadenelqueniprogresamosni retrocedemos,esteestancamientoexcepcional,esexactamenteadondenosllevaladuda,unestadoquesepareceenmuchosaspectosala«sequía»delosmísticos.

…nousretombonsdanscetétatdepureindéterminationoù,lamoindrecertitudenousapparaissantcommeunégarement,touteprisedeposition, tout ceque l’esprit avanceouproclame,prend l’allured’unedivagation.N’importequelleaffirmationnous semblealorsaventuresqueoudégradante;demême,n’importequellenégation.

…volvemosacaereneseestadodepura indeterminacióndonde,yaquecualquiercertezanospareceunextravío, toda tomadeposición, todo lo que el espíritu adelanta o proclama, adopta el aura de una divagación. Cualquier afirmación, la que sea, pareceinsensataodegradante.Lomismopasaconcualquiernegación.

Él buscaba una traducción al inglés, si es que existía. Leer y sentir que el significado seerosionababajolaaccióndesumente:estabaansiosoporaquelplacer.Pensóenescribirleunacartaaunamigoquedijera:«Creoqueesposiblequeyoseaunamalapersona,puedequeseamalvado,ysiexisteeldemonioesposiblequeyoseasualiado…Enelcentrodemicapacidadparacaptar laverdad,quieroestarparalizado,quierodesvanecerme…Quieroquelamentemefalleenpresenciadela verdad. Quiero que la verdadme inunde únicamente como algo sensual y no como nadamás.Quieroquememoje,serreal,serunacosa…».

Nuncalollegóaescribir.Nosabíaquiéneraelamigo.NoteníamásamigosenelmundoqueE.M.Cioran:

Le détracteur de la sagesse, s’il était de plus croyant, ne cesserait de répéter: «Seigneur, aidez-moi à déchoir, àme vautrer danstoutesleserreursettouslescrimes,inspirez-moidesparolesquivousbrûlentetmedévorent,quinousréduisentencendres».

Eldetractordelasabiduría,sieratambiéncreyente,nuncadejaríaderepetir:«Señor,ayúdameacaer,aregodearmeencadaerrorycadacrimen,inspírameconpalabrasqueteabrasenatiyquemedevorenamí,quenosreduzcanaambosacenizas».

NoeradeextrañarqueBouquethubieraescritoensucuaderno:

Enlagloriadelaguerra,eneléxtasisdelcombate,enlaverdaddelaguerravemosqueelpoderlegitimalascosas.Yquenuestrorespetoalosprincipiossebasaenlaelocuenciaylasuperstición.

Lociertoesquehabíaterminadoconlosarchivosdelcoronel.Sehabíaidoembalando.Trabajo

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inútil, basura inservible, pero para el burócrata nada es basura hasta que afrenta a su almadeshaciéndosedeello.

¿Por qué no estaba celebrando reuniones con aldeanos de la región para recoger cuentospopulares?¿PorquéhabíamandadoaThodecirlealpèrePatricequeteníafiebrecuandoelcuravinoasuplicarunacomidacaliente?

Sansrimeniraison,remettretoujourstoutenquestion,doutermêmeenrêve!

¡Sinpiesnicabeza,cuestionarlosiempretodo,dudarhastaensueños!

AlleeraCioranlovolvíaavisitarlarevelaciónquehabíatenidoalosdiezaños,cuandoelhijodeunferroviariolehabíamostradounapequeñafotografíadeunamujerhaciendounafelaciónaunenormepenenegro,acuyodueñosoloseleveíaeltorso,losojosenfermizamentecontentosdelamujer flirteando con la cámara, de que su curiosidad sobre aquellos actos no era una traiciónalienante,sinoqueeraalgoconocido,sondeadoyentendido,yqueotragentelaalimentaba.

Ledoutes’abatsurnouscommeunecalamité;loindelechoisir,nousytombons.Etnousavonsbeauessayerdenousenarracheroudel’escamoter,luinenousperdpasdevue,cariln’estmêmepasvraiqu’ils’abattesurnous,ilétaitennousetnousyétionsprédestinés.

Ladudaseciernesobrenosotroscomoundesastre.Lejosdeelegirla,caemosenella.Ypormuchoqueintentemosescabullirnosdelamismaoeludirla,nuncanospierdedevista,porquenisiquieraesciertoqueseciernasobrenosotros:yaestabaennosotros,yestamospredestinadosaella.

Habíavenidoalaguerraaverabstraccionesconvertirseenrealidades.Yloquehabíavistohabíasidolocontrario.Ahoratodoeraabstracto.

Asolasenaquellacasa,asolasenaquellaguerra,acompañadoporgentecomoE.M.Cioran…NoeradeextrañarqueBouquethubierasalidoalaterraza…

Vuelveaserdenoche,losinsectoshacenmuchoruido,laspolillasseestánsuicidandocontralalámpara.Hacedoshorasquemesentéen la terrazaparacontemplarelanochecer, llenodeenvidiahacia todasycadaunade lasentidadesvivientes—pájaro, insecto,flor,reptil,árbolyplantatrepadora—quenohandesoportarlacargadelconocimientodelbienydelmal.

Elabismoestállenoderealidad,elabismoseexperimentaasímismo,elabismoestávivo

***

Cadavezquesequedabasintrabajo,BillHoustonsededicabaagorrearasumadre,avivirconellaytambiénconBurris,suhermanodedoceaños,locualleponíaalmismonivel,oesoleparecíaaél,queaquelextrañopreadolescente,unniñoproblemáticoigualquelosdosmayores,quesuspendíayhacíanovillos,esnifabapegamento,fumabahierbaybebíamedicinasparalatosconrecetamédica.Unapruebadefe,decíalavieja,unallamadaarezar.Enagosto,enrespuestaasuspropiasoraciones,HoustonencontrótrabajoenelWestSidecargandolinazasintratarencamionetasyprontoalquilóunahabitaciónenlazonadominadaporlacalleDosyconocidacomoLosDoses,encuyaatmósferabarriobajera tenía la sensación de que podría olvidar a su madre y luchar en privado contra su

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confusión.HabríavueltoaembarcarsesinofueraporelDespidoGeneral.Sentíacuriosidadporlamarinamercante, pero tampoco creía que lo aceptaran allí. Houston pensó en su hermanomenorJames,enfrentadoalaguerra,asaltadoporlaexperienciayadelantándoloaélenciertamanera.Elmundoenterolohabíadejadoatrás,mientrasenSemillasRoyRuggins,comotantasvecesensuvidalaboral,seganabaelsustentorepitiendolasmismasaccionesdeformamecánica.Selevantabaantesdelamanecer,pateabamontonesdekilómetrosentrandoysaliendodeaquelloscamionesarticuladosdedieciséismetrosde largo,deun ladoparaotro,hastaarribadel todode la rampay luegohastadelantedeltodo,arrastrandodossacosdecuarentakiloscongarfiosparallevarelheno.Aquíyalláseveíanpuntitosdeluzdeldíaenlosinterioresllenosdegoterasdelosvagones.Apilarlossacosencada nivel en el ángulo adecuado respecto al nivel inferior.Ocho niveles amontonados. La linazateníaunolorpeculiaryvomitivo.Hacíanhorarioestivaldelasprofundidadesdeldesierto,decincoanuevedelamañanayluegodelascincoalasnuevedelanoche,tomándoseochohoraslibresdurantelapartemáscalurosadeldía. Intentandonoemborracharseentreun turnooel siguiente.Opor lomenosnoemborracharsemucho.

DespuésdeperderaqueltrabajodejólahabitaciónyprobóconelEjércitodeSalvación,quesinembargo insistía rigurosamente en la abstinencia, y no les pudo engañar durante mucho tiempo.Despuésdequeloexpulsaranporqueelalientoleolíaaalcohol,lehabríaidobiendurmiendodedíaenlaplazadelcentroyvagabundeandoporlascallesdenoche,peroteníaquecomer,yenlaNewLifeMissionsolamente ledabanunbocadillodemantequilladecacahueteamediodíay judíasconsalchicha para cenar, ambas comidas acompañadas de una taza de leche con cacao rehidratada.Mientrasesperabaaquellacomidadosvecesaldíaenunacolacompuestadeperdedores,lavidasereíadesuhambre,yéldeseabaestarenunasituacióndondevolvieraateneruntechoyunacocina,devueltaenlamarina,uotravezenelEjércitodeSalvación,ohastaenlacárcel.SehabíapasadotressemanasencerradoenPhoenixenesperadejuicioporuncargodeasaltoyentrebarrotesnohabíaencontrado nada de qué quejarse. Te servían tres comidas al día y eran bastante buena gente:criminales, talvez,pero loscriminales sobriosybienalimentadosno seportabandemasiadomal.Dondefuerasalvoencasadesumadre.SufanáticafeenelParaísoconvertíaellugarenuninfierno.

EnunatabernadeCentralAvenueconocióaunamujerdeetniapimagorditayadorablequedecíasermestiza.Ella lo llevó al desierto, a la reservaquehabíamuy al este de la ciudady los dos sesentaronsobrelacapotadesuPlymouthdesvencijadobajoelfrescodelatardecermientraselcielosevolvía de un tono de azul que no se parecía a ningún color. Se cayeron bien, él y aquellamujercariñosa que tenía un diente incisivo marrón en medio de su cara feliz de esquimal. Bajita ygordezuela.Laverdadesqueeraliteralmenteesférica.EllaselollevóasucabañaenelladoestedePimaRoad,situadaenlamismaentradadelareserva,yalcabodeunosdíasélsecasóconellaenunaceremoniaoficiadaporunviejoyvenerablecretinoqueasegurabaserunchamán.Houstonysunueva esposa vivieron en estado de éxtasis durante dos semanas, hasta que el hermano oscura yvenenosamentesilenciosodeellaapareciódelanadaysequedóavivirconellos.Mientrasellahacíalasiestaunatarde,HoustoncogióseisdólaresyseiscigarrillosdelaguanteradelPlymouthdeella—seis era el númerode la suertede él, ymenosmalpara ellaquenoeraunodedosdígitos—ycogióunautobúsdevueltaaLosDoses.¿Necesitabaunabogado?Lodudaba.Lamujerhabíaentradoafuegoensucorazón,perodossemanasnoeranapenasnada.Yélnoteníaintencióndecomplicarsuaventuraconundivorcio.

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***

Despuésdeoctubre,despuésdelaestacióndelaslluvias,muchasmañanasenCaoQuyentraíanlaluzdesolantesdeque llegara la tarde inevitablementegris—avecesélpensabaenuncomentariodeJimmyStorm: «En los trópicos no hay sol»—, y con aquel don se infiltraban ciertas regiones debelleza en las salas orientales de lamansión,pliés de luz de aspecto sólido entre las lamas de laspersianas de arriba, la cocina llena de puntitos reflectantes entre los utensilios, las persianasmugrientas de la oficina furiosamente perfiladas, y también las rejillas de ventilación grandes ycuadradas situadas cerca del techo de la sala de estar: planos llanos y austeros como pequeñosejerciciosdeperspectivadeunpintor…Yluegolailuminaciónperpetua,uniformeyrutinariadelatardeprocedentedelcielonubladolehundíaelánimo.Porlamañanaloveía:siemprehabíaopcionesabiertas.Porlatardeyanopodíadarniunpaso,elsuelosehabíaesfumado,ladudalohabíadisuelto.

LaseñoraDiudijo:—Unaseñorapreguntaporusted,señorSkip.Élse levantódelescritorio,entróen lasaladeestaryseencontróconunamujerdesconocida,

conpecas,tostadaporelsol,fibrosa,vestidaconunablusablancaconbolsillosenlapecherayunospantalonescaquidehombre,yéldijo«Kathy»antesdedarsecuentadequelaconocía.

EnDamulogellanohabía tenidoparanadaeseaspectoencorvadoy furibundo—ruborizadoyasustado,histéricooatormentado—detantosmisionerosdelaselva.Ahorasíquelotenía.Conunamanoagarrabaelaladeunsombrerocónicodecampesina:elnongla.Élselocogiódelamanoylodejósobrelamesilladecafédelasaladeestaryellalosiguióhastaquedarseallíunpocojadeante,sinalejarsedelsombrero.

—Mehablarondeuncanadiense.—Puedohacerquetraiganté.¿Quieresunatazadeté?—¿Erestú?¿Túereselcanadiense?—Hablaahora,mujer.¿Quierestéono?—¿Porquénounpocodeesecompuestoincendiarioquetiráissobrelasaldeas?—Yo…yo…estoyretirado.—Tendría que haberlo sabido. Lo sabía. ¡La Agencia para el Desarrollo Internacional! ¡Del

Monte!¡Canadiense!¿Yquémás,laOrquestaSinfónicadeToronto?—AdventistadelSéptimoDía.—Todosvosotros,oh,Dios,soisdemasiadoridículoshastaparareírsedevosotros.—EstoytraduciendolaBiblia,teinformo.—Notienegracia.—¿Nocreesqueyamehedadocuentadeeso?Yahace tiempoqueperdíelsentidodelhumor.

Ahora,¿quierestomartéconmigo,Kathy?¿Oesqueestonoesunavisitasocial?—Estoyvisitandoauncanadiense.—Perosocialmente,¿verdad?—Sí.Apuestoaquetienesmiel.—No.Lechecondensada,deesadulce.—¿Notienesmiel?—Nadaparecido.—¿No?TalveztehasmetidoconMcNamara.¿Esese,no?

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—¿ElsecretariodeDefensa?—Sí.Debedehaberteexiliadoparacastigarte,¿no?—Megustamuchoestaraquí.—Losespíassoistodostanjovialesyrisueños.—Siéntate.Contodoloquelehabíallegadoadesilusionar,conlasrealidadesdeprimentesdesutrabajo,le

alegróelcorazónquelollamaran«espía».Ellasesentóenelbordedelasillaymiróasualrededorconcaraexcitada.—Deacuerdo,pues—dijoél—.Té.—¿CómovanlascosasenCanadá?—Vengaya.Porfavor.—Noséquédecir.Noséquédecir.Estoy,estoysimplemente…furiosa.—Selevantósinningún

propósitoenlacara—.Mevoy.Comosilaidealevinieradelhechodehaberlaexpresado,cruzórápidamentelapuertaysalió,

poniendo las palmas de lasmanos sobre la bicicleta que había aparcado allí fuera y dándole unapatadaalsoportedelamisma,unabicicletanegra.

—Kathy,vamos,espera—llamóSkip,peronofuedetrásdeella.Ellahabíadichoqueestabafuriosa.Aélnoleparecíaqueellasesintieradeningunaotramanera

muyamenudo.Se sentó en el diván y se inclinó hacia delante, con los codos sobre las rodillas,mirando las

revistas de lamesilla del café:Time yNewsweek, una foto en la cubierta de dos atletas olímpicosamericanosnegroshaciendoelsaludoconelpuñodelmovimientodelBlackPower.EnMéxicoDF,leparecíaaél,peronolosabíaseguroporquehabíadejadodeleerlas.

Ellaregresó.—Nuncatuvenoticiasdeti.Élesperóhastaqueellaagarrólaenormebutacadedelantedeél,laarrastróparaalejarlaunpoco

engestodedistanciamientoteatralysesentósobresumimbrechirriante.—¿Ybien?—Bueno,temandéunascuantaspostales.—Yo escribí un montón de cartas. Hasta mandé unas cuantas. ¿Sabes por qué interrumpí la

comunicación?—Esperoquemelodigas.—PorquealmorirelpadreCarignan…¿sabíasquehabíamuerto? ¡Claroquesabíasquehabía

muerto, porque nos llegó la noticia de que el sacerdote de las inmediaciones deCarmen se habíaahogado,ydequehabíassidotúquienllevólanoticiaaladiócesis,ynosotrosestuvimosjuntostressemanas,comoamantes,ytúnuncalomencionaste!

—¿Nomemandasteunacartahaceunaño?Muchodespuésdelasuntoaqueldelsacerdotequeseahogó.

—Tardéuntiempo,peroalfinalloentendí:nomerecelapenahablarconmentirosos.—Talvezno—dijoél—,peromegustabarecibirlascartas.Aquellopareciódarleaellaunmomentodepausa.—Nuncarespondisterealmente.Laspostalesnocuentan.—Talveznoqueríamentir.—Cierto,peroaquellanoeralarazónverdaderadesusilencio.Era

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que lascartasdeella lehabíanparecidochifladas—.Obueno,no…lascartassondifíciles.Esoseacercamásalaverdad.

—Uncanadiensefalsoquehabladelaverdad.Porcierto,¿cómotehacesllamar?—Skip.—¿Skipqué?—Benét.PerosobretodoSkip.TodavíaSkip.—¡AliasBenétquierehablardelaverdad!—Nosiemprepodemoscontarlotodosobrenosotrosmismos.Talcomotúmedijisteunavez.—Norecuerdohaberdichonuncaeso,peroestáclaroqueesverdadenelcasodelagentecomo

tú,estáclaroqueesverdadentucaso.—Entonces,tequedarásunrato.Ella lomiróconcarade furiaycon lágrimasen losojos.Sucólera salíadeellaen formade

suspiroentrecortado,yélsediocuentadequesealegrabadeverlo.Encuantoalespía,estabaemocionado, le temblaban lasmanosdeplacer.Encontróa la señora

Diuylepidióté,frutaypan,despuésvolvióconsuinvitadayledijo:—Esperadosminutos.Yregresóaesperaralacocina,aterradoporelhechodequedarseasolasconKathysinnadaque

comerobeber,mientraslaseñoraDiulopreparabatodo.Trajolabandejaélmismo.Ellatambiénpareciórepentinamentetímida.—Esteperro—dijo—sededicaapasearporaquí.—EseldoctorBouquet.Anteseraeldueñodelacasa.—Actúacomositodavíalofuera.—Sehareencarnado.—¿Enserio?Estáclaroquehaelegidoelpaísmenosadecuadoparanacerperro.—Peroyodiríaqueenlacasamásadecuada.—Acabaráenlospalillosdealguien.—Creoqueyaesdemasiadoviejo.Sepusoarascaralperroysediocuentadequeesoleensuciaríalosdedos.—Eh—dijo—.Laverdadesquenotepuedopedirquetequedes.Noestoyensituaciónderecibir

visitas.Enabsoluto.Últimamenteno.Tengounamontañadetrabajo.—¿Qué?—Bueno,estoesunalocura.—Sí.Loes.Osea…—Pensabaqueloteníabajocontrol,peroestoytotalmenteaterrado.—¿Quieresquemevaya,oquemequede?—Quieroquetequedes.Élhizoungestoenfalso,selecayóunabarritadepanyeldoctorBouquetsealejócorriendocon

ella.Élloviomarcharse,unhombresinagilidaddereflejos.—Lohe estado llamando doctorBouquet, pero creo que tendría que ser «monsieur». Su título

médiconopasaconélasuvidasiguiente,¿verdad?¿YquéestáshaciendoaquíarribaenCaoQuyen?—¿Quéestoyhaciendoaquí?—Sí.Másomenos.—AhoraestoyconWCS.HedejadoelICRE.

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—¿WCS?—World Children’s Services es una red de casi sesenta agencias de todo elmundo, que lleva

desdemilnovecientostreintaycuatroproporcionandoserviciossocialesaniñosyasusfamilias.—Estoysegurodequesí.—LaasistenciaalaadopcióneselservicioprincipaldeWCS.Envariosdistritos,incluyendoeste,

estamoshaciendoloquepodemosparacoordinareltrabajoorientadoalosniñossinfamilias.—Nolopongoenduda.—Paraya.AsíqueestabavisitandoalafamiliademisionerosdeBacSe,yellosmehanhablado

deti.LosThomas.—Nolosconozco.Nuncahabíaoídohablardeellos.—Aellosleshahabladodetiunsacerdote.—ThongNhat…elpèrePatrice.—Esono losé.Solamenteséquemehedesviadodemicaminoparasaludarauncompatriota

canadienseyenlugardeesomeencuentrocontigo.ElAmericanoImpasible.—Oh,bueno—dijoél—.Graciaspornollamarmefeo.—Tampoco lo oirías. Eres sordo. Todos sabemos eso de vosotros a estas alturas, todos salvo

vosotroslosamericanos.—Duranteunsegundoparecíaquenosestábamosllevandobien.—Losiento.Ellasequedósincosasquedeciryseloquedómirandoconlástima.—¿Enquéondaestás?—¿Enquéonda?Hablascomounsoldadoamericano.—Yalosé.¿Enquéonda?—Estoyhechapolvo.—Estoyseguro.—Osea…lafeasoyyo.Ymehadejadohechapolvo,¿no?—Mira—dijoél—.Mealegromuchodequehayasvenido.Estoymuycontento,Kathy.—¿Enserio?—¿Esquetengoqueponermeenridículo?—Nomeimportaría—dijoella.Porsuerteelperrovolvióapormás.Skiplealborotóelpeloylediounostrozosdemango.—Yestásaquíporloshuérfanos,meimagino.PorelWCS.Ellaasintióconlacabeza,sosteniendoenaltountrozodemangopinchadoconuntenedorcomo

sifueraunabanderayconlabocallenadepan.Setragóelpan,elmangoycasitambiéneltenedor.—Ahorasoyyoquienlosiente.Nosemehaocurrido…¿quieresunacomidacomoesdebido?Ellanegóconlacabeza,sindejardemasticar.—No,gracias.Sí…osea,sí,adopciones.Somosunaorganizaciónparaguasparalasagenciasde

adopción.—SicadafamiliadeNorteaméricaadoptaraaunvietnamita,ganaríamoslaguerra.—Algoasí.Nomeimportaríavaciarelpaísydejárseloalosasesinos.—¿SoistanpobrescomoelICRE?—Oh, sí… con respecto al tamaño de nuestra tarea, lo somos. Pero como oí decir una vez al

alcaldeLuis:«Encontraremoseldinero,nosarrodillaremosantequienhagafalta».

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—Lohacesbien.Loimitasmuybien.—¿Habéisestadoencontacto?—No.—Yotampoco.—Volvamosalootro—sugirióél—.Cuandohasdichoquenoteimportaríaquemepusieraen

ridículo.—Déjamecomerprimero.Alcabodeunosminutoslaacompañóalashabitacionesdearriba.Porloqueélpudoveralsubir

lasescalerasdetrásdeella,Kathyhabíamantenidociertovolumenenlascaderasylosmuslos,peroella lohabíadichobien: lavidalahabíadejadohechapolvo.Aél lehabíapasadolocontrario.Noteníabalanza,peroelbañadorleveníamáspequeñoylollevabamásbajo,pordebajodelapanza.Noteníabalanza,perosílehabíandadounestetoscopioyunmedidordepresión.Unadocenaderollosde vendas sin cinta adhesiva. Los suministros en tiempo de guerra eran así, siempre un desastre.Aquelloseranlospensamientosqueloangustiabanmientrasintentabaaveriguarcómotratarconsufelicidad y su lujuria abrumadoras, con el hormigueo en las yemas de los dedos, con el corazóncomounpuño,conelmareo.Noesquepensaraqueaellaleimportabaqueletiraralostrastos,peroestabachiflada,oporlomenoseraunamujermuycomplicada,llenadeheridasocultas,falsamentecínicaydemasiadoapasionada.Claramentefuriosa.Ytodoelloloinflamabaaél.Yellaeralaúltimamujerconlaquehabíadormido,laúltimadelascincoquehabíahabidoentreintaytantosañosdevida. Los hombres de reflejos ágiles no se cuestionan sus oportunidades. Los hombres sin ellostendríanquedejarsedepreguntas.Ydelascinco,ellaeralaúnicaconlaquesehabíaacostadomásdeunavez.Éllaguioasudormitorio,sevolvióhaciaellay…nada.Notuvoreflejos.

—Hedichoque nome importaría—dijo ella, y empezaron conunbeso incómodo—. ¿Tienesvino?

—Sí.GraciasaDios,tengo.YmediabotelladeBushmills.—Menudafiesta—dijoella,ylepusodosdedossuavementeenelantebrazo.Élcogiólosdedosensumanoylallevóalacamadematrimonio,dondepusoenprácticaloque

había aprendido de los atrevidos pasajes de HenryMiller, de pequeñas fotografías obscenas y desesionesdementiraseneldormitoriocolectivo.Allí igualqueenDamulog,nohablaron.Todo loque hacían lo mantenían en secreto, sobre todo el uno del otro. Como ella había dicho, no leimportabanada,yalfinaldetodolevantólavistaparamiraralgoquehabíaenel techoysoltóungemido. Y por un instante él pensó: Soy James Bond, y luego cayó nuevamente en la duda gris:ArtaudyCioran,elperro,elclima,elsentidodetodo,laesperaaentrarencontactoconunsupuestoagentedoble, el asuntopara elque lehabían traídoaquíhacía casidosaños.Yerauna locura.Laoperaciónnoautorizadaylamismaguerra:locurasobrelocura.Yaquellamujerasuladoconquienacababadehacerelamor,sudandocomounjugadordebalonmano.

Luegohubounpequeñoconcurso,oesoleparecióaél,sobrequiénibaahablarprimero.—Hayqueencenderunfuegoparacalentarelagua—dijoél—,perosiquieresunaducha…—¡Oh,venga!Latomaréfría.—Voyamear—dijoél—.Yluegotepuedesduchar,¿vale?Mientrasellaseduchabaélselimpióconlasábanaysevolvióaponerelbañador.Seleocurrió

que podía mirar algún libro, pero el clima era ominoso y solo disponía de la luz rumoreada yverdosadelasnubesdetormenta.Todosloslibros,pensó,estánabajo.Nohaynadaquehacer,pensó

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él.Nadaquehacer.Sesentóantelamesilladetémirándoselasrodillasylospiesdescalzos.Ellaregresóenvueltaenunatoallayconelpelopeinadohaciaatrás,elcolorrosaintensovisible

inclusoensusmejillastostadasporelsol.Teníaunasrodillasflácidasytristes.Sosteniendolatoallacontra el pecho se estiró, extendiendo únicamente el brazo izquierdo y sin despegar la toalla delcuerpo.Delantedeélhabíaunasilla,peroellasesentóenlacama.

—Esaropaseparecealaquellevabaslaprimeravezquetevi.Llevabasunaespeciedebañadorextraño,igualqueese,conbolsillos.

—Dehecho,eselmismo.Noveascómoaguanta.—¿Quépasóconaquellasbermudaschillonas?—Sefueronaltraste,imagino.—Aquellaveztambiénhabíatormenta.—La primera vez queme viste yo llevaba pantalones. En aquel restaurante deMalaybalay, ¿te

acuerdas?—Meniegoaacordarme.Ellahabíallegadoenelmomentoadecuado.Aquellaerasuatmósfera.Aquellaeralaluzidónea

paraella,paralapieltristeypálidaqueteníapordebajodelcuellotostadoyporencimadeloscodosásperos,parasuposedevirgenmártir,parasuesperasinexpectación—eltobilloderecho,gruesocomoeldeunacampesina, colgandode la camaconelpie sumergidoen las sombrascercanasalsuelo,queerademaderavieja,ylaotrapiernaflexionadayconlaplantadelpieapoyadaenlaotrarodilla,haciendounnúmerocuatroconlaspiernasmientrasyacíaenlacama,tapándoselospechosconunamanoyconlaotradetrásdelacabeza—,unaluzdeestanque,unaluzdeiglesia.Dehabersabidoellacómoéllaestabamirando,nuncaselohabríapermitido.Peroellagirólavistahaciaélylomirófijamentecomosinoimportara,sinningúncambioensuexpresión.Ellanoerahermosaensímisma.Susmomentosloeran.

Lahabitaciónseoscurecióylacorrientedeairetrajovocesdelaaldeayuntraqueteodecosasagitadas, aunque justo antesde empezar a llover el viento sehabía apagado, y loque cayópodríahabercaídocualquierdíadeveranoenNuevaInglaterra.

—Estásmirandodeverdad.—Eresunmalditoalivio.Estáshaciendoquetodosedisipe.—¿Todocomoqué?—Aburrimiento.Aburrimiento.Ydemasiadopensar.Claustrofobia.—Oh,enManitobasomosexpertosenclaustrofobia.Llegalaprimaverayloshombressaltana

suscamionetasyrecorrencientosesentakilómetrosparabeberseunchupitodewhisky.—HablandodelreydeRoma.¿QuieresunpocodeBushmills?—¡Noshemosolvidado!PorelamordeDios,pero¿quéestásmirando?—¿Acasonoestápermitido?—Nocuandosoyyo.Soyunaviejabruja.Estesoltetuestacomosifuerasunmalvavisco.Estoy

hechapolvo.—Simplementellevaselemblemadetusaventuras.—Chorradas.—No.—¿Túcreesqueestesitioesunaaventura?—Claro.

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—Perodivertidonoes.Esunaaventura,peroesquelasaventurasnosondivertidashastaqueseacaban.Siesquelosonalgunavez.

Aéllediolaimpresióndequeaquelloeraverdad.Sirviódostragoscortosdewhiskytibioylosllevóalacama.Ellaretrocedióparaapoyarseenlapared,cogióelvasocortoconlasdosmanosydiounsorbo.

—¿SuelenbeberlosadventistasdelSéptimoDía?—Algunos sí y otros no. Enmedio de este caos yo diría que bebemos todos los que tenemos

oportunidaddehacerlo.—¿Dóndeestabastú,enquépartedeldelta?—EnunaaldeallamadaSaDec.Perotuvequemarcharme.Poraquílascosashancambiadodesde

elTet.Todoestáhechotrizasporlasenormesbalasamericanas.Todoelmundohadetenercuidado.El desastre acecha todo el tiempo. Para mucha gente ya ha llegado. Es una situación terrible deverdad.Una seacostumbraaellayva tirando,hastaqueundía tedespiertasyhasdejadodeestaracostumbrada.Yluegoalcabodeuntiempotevuelvesaacostumbrar.

—¿Oseaqueestásaquíbuscandohuérfanos?—Nonoshacefaltabuscar.—Ya.Ya.—Solamente hacemos de enlace con los misioneros. Si podemos, queremos poner algo en

marcha.Algomejor.Másgrande.Lasinstalacionesquehayahorasonterribles,todasycadaunadeellas.

Demomentoaélnoleinteresabanlascosasterribles.Mientrasellahablaba,élexaminósucabezaysepreguntóquéhabríaintentadohacerRembrandtconaquellailuminacióntandeslucidayfielalarealidad.

—¿Ytucámara?—dijoKathy.—¿Cámara?—Meacuerdodequeteníasunacámara.¿Todavíalatienes?—Lodejé.Seacabaronlasfotografías.Conviertenelmundoenunmuseo.—¿Enlugardequé?—Enlugardeuncircochiflado.Élguardabafotografíasenelcajóndesucómoda, juntocon lapistolaBerettaquenuncahabía

usado.—Mira.Yledioaellaunadocenamásomenos.—¡EmeterioD.Luis!—Nohayniunadeti.—¡Unyipni!Cómolosechodemenos…—Concasicincuentapersonasabordo.—Noesdeextrañarquereventaraelneumático.Llamaron.LaseñoraDiupreguntósipodíaentrar.—Ahorabajamosacenar—gritóSkipatravésdelapuerta.—Tengoelincienso.¿Quiereusted?—Muybien.Ellaentrócontresbarritasquesoltabanunhumodulceenlamanoydijo:

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—Sí,buenastardes.—Ylasdejóensusoportesobreunestantealtodelotroladodelahabitación—.Muybien.Cenamástarde.Yaloavisaré—dijo,ysaliócerrandolapuertasuavementedetrásdeella.

Había dejado de llover. A través de la telamosquitera, en los dosminutos de crepúsculo queprecedieronalanochenegra,contemplócómoThotrepabaporunodelospapayosdedetrásdelamansión.Debidoaquecolgabanencimade laorillayelarroyo,elancianonopodíasimplementehacercaerlaspapayas,sinoqueteníaquesubirhastaellasconlasplantasdelospiesdescalzos,laspiernasabiertasyuncuchilloentrelosdientes,agarrándosealtroncoconlasdosmanos,cortarcadafrutaconunasolamanoymetérseladebajodelbrazo,descenderhaciaatrásydar losúltimosdospasosdeunsaltolivianoalsuelo.

—¿Puedotomarotracopa?—Porsupuesto,camarada.—Untraguitonadamás.Skipsesentíaunpocoirritado,derepente,porqueKathyprimerolehubieraarrancadodisculpas

—aunqueélhabíahechochistespararelativizarsuarrepentimiento—yahorasehubieraolvidadodetodo.Yseleocurrióquelosmesesdesoledadlehabíanenseñadoaleerseasímismo,aanalizarseasímismocomosifueraunacadémico.Quehabíallegadoaconoceraunapersonaenelmundo.

Volvióalloveryporfinsehizodenoche.AhoraellayanopodíavolverconlosmisionerosdeBaSec.Durmieron juntos uno al lado del otro, sin sábanas, ella con una de las ásperas camisetaslavadasamanodeélyélconcalzoncilloslargos.DespuésdeldesayunoalamañanasiguienteellasefueaBaSecensubicicletanegraySkipnovolvióaverlajamás.

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1969

CuandolostresamericanosaparecieronenlapuertaprincipaldesucasaparallevarloalaAcademiadeIdiomasdelasFuerzasArmadas,Haonosupoacienciaciertacuáleralanaturalezadelencuentro.Elúnicodeellosquehabló,unhombrenegro, lohizoconeducaciónysepresentócomoKennethJohnson, de la embajada americana. Fueron al centro de la ciudad en un Ford con las ventanillascerradas,aireacondicionadoymatrículadiplomática,Haosentadoenelasientodeatrásconunodelosdoshombresmásjóvenes.

Alllegarasudestinolosdosjóvenessalieron,ycadaunodeellosabrióunaportezuelaparalosotrosdospasajeros.HaoyKennethJohnsoncontinuaronyasoloshastaelotroladodelasbarricadasdecemento,hastaeleleganteedificionuevo.ElantiguohabíaquedadodestruidoenlosataquesdelTet del año anterior. Allí estudiaban inglés dos o tres mil miembros del ejército vietnamita. Elinteriorolíaapinturafrescayamaderaserrada.

Queélsupiera,enaqueledificionoserecluíaaprisioneros.Johnsonlocondujoporunasescalerashastaelsótanodeledificio,dondeselesunióunmarine

uniformado.Losestudiantesabarrotabanlospisossuperioresyelruidodesuspisadasreverberabaenel techodeencimade suscabezas,pero, enaquelpasillodel sótano, Johnson,Haoyelmarinecaminabanasolas.Alfinaldelpasillollegaronaunapuertaqueteníaalgoparecidoaunapequeñacalculadora sujeta a la pared de al lado, cuatro o cinco botones que ahora Johnson pulsó conhabilidad,demaneraquelacerraduradelapuertazumbóehizoclac.

—Gracias, sargentoOgden—dijo Johnson, y él yHao entraron en un pasillo flanqueado porpuertascerradas.

Ellugarerasilenciosoyteníaaireacondicionado.Johnsonlollevóporlaúnicapuertaqueestabaabiertahastaunasalitadeestaramuebladacomocualquierotrasaladeestar,conunsofá,variassillasacolchadas y también un refrigerador eléctrico de gran tamaño, rojo, sobre el cual se leía lainscripción «Coca-Cola». La sala no tenía ventanas. Aquel sótano debía de estar a bastanteprofundidad.

—¿QuiereustedunaCoca-Cola?Johnson levantó la pesada tapa del refrigerador, sacó una botella goteante, la destapó en un

abridorquehabíaacopladoauncostadodel refrigeradory ledioel refrescoasu invitado.Estabamuyfría.

Haosesintióobligadoadarunsorbo.Fruncióloslabios,semetióelgolleteenelladoderechode labocaydioun trago.Enel lado izquierdo teníaunamuelaenmalestado.Elcoronel lehabíarecomendadoundentista.

—Siéntese—dijoJohnson,yHaosesentóenelbordedelcojíndelsofámanteniendolospiesenposesobreelsuelo,comosifuerauncorredor.

Johnsonsequedódepie.Erabajitoparaseramericanoyteníamanchonesenlossobacosdelacamisablanca.EralaprimeravezqueHaoconversabaconunnegro.

Se lohabían llevadounahoramásomenosdespuésdequeKimse fueraalmercado.Aquelloqueríadecirquenohabíanqueridoqueellaloviera.Queeraimportanteparaellosqueaquellavisitaquedaraensecreto.Quenadiesupieradóndeestaba.

Johnsonseacomodóen lasilladedelantede la suyay leofrecióuncigarrillo.Hao loaceptó,peseaquellevabaencimaunpaquetedeMarlboro, loencendióconsupropioencendedor,diouna

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caladaprofundaysacóelhumoporlosorificiosdelanariz.Erasinfiltro.Escupiócondelicadezauntrocitodehoja.Elhechodequelosantepasadosdeaquelhombrehubieransidounarazadeesclavosledabavergüenza.

ElseñorJohnsonvolvióameterseloscigarrillosenelbolsillodelacamisasinsacarunoparaélmismoysepusodepie.

—SeñorNguyen,¿quiereperdonarmeunmomento?MientrasHaointentabaentenderlapregunta,elhombrenegrosaliósincerrarlapuertaylodejó

asolasconsuspensamientos,quenoeranprecisamenterisueños.Tiróelrestodesucigarrillodentrodelabotellaylacolillasusurró,flotó,seoscurecióysehundióamediocaminodelfondo.

Atravésdelapuertaabierta,HaovioasumujerKim,acompañadadeotroamericano,caminandoporelpasillo.Seleabrióunafisuraenelalma.Ellasemirabalospiescomosiestuvieraintentandoavanzarporunsenderorocoso.NoparecióqueKimlovieraaél.

Elhombrenegroregresó.—¿SeñorNguyen?Traslademosladiscusión,sinoleimporta.Johnsonno se había sentado.Hao entendió que no tenía intenciónde hacerlo y que él también

teníaque levantarse.Sedejóguiarporun trechomuycortodel pasillohastauna segunda sala sinventanasenlaquehabíasentadounjovenflacoyanguloso,congafasparaleerenlapuntadelanarizy un tobillo cruzado sobre la rodilla. El joven estaba mirando hacia abajo y hacia la izquierda,examinandoelcontenidodeunacarpetadepapelmanilaqueteníaabiertaenlamesaasulado.SonrióaHaoyledijo:

—SeñorNguyen,entre,quieroenseñarleesto.YHaobuscósignosdeesperanzaensutonodevozcasisociable.Sobrelamesahabíaunaserie

deaparatosycablesqueparecíanunelaboradosistemaderadio.—MellamoTerryCrodelle.TodoelmundomellamaCrodelleyconfíoenquetambiénlohaga

usted.¿LeparecebiensilellamoHao?—Bien.Sí.—Siéntese,siéntese,porfavor.Sesentóen ladurasillademaderaquehabía juntoa ladeCrodelle.Una tercerasillaesperaba

vacía,peroelseñorJohnsonpermanecióenposicióndefirmes.Losdosamericanosquehabíaenlasala eran tipos muy distintos, los dos vestidos igual con sus pantalones oscuros, sus zapatosrelucientesysuscamisasblancasdemangacorta:Johnsondepie,irrelevante,ligeramenteincómodo,consupielmarrónysupelonegro,Crodellerelajadoyalmando,conlapielpálidaypecosayelpelodelcolordelapaja.

—¿QuiereustedaSammy?—dijoelseñorJohnson.Crodellenocontestó.—SeñorHao—dijoCrodelle—.Vamosahacerestodeprisa,notemausted.—Esoesbueno.—Estaráustedencasadentrodeunahora.—HoyvamosaplantarunárbolparaelTet.—¿Entiendeustedmiinglés?—Avecesnoentiendomuchascosas—dijoHao.Seguía sosteniendo la botella amediobeber deCoca-Cola, con la colilla flotandodentro.Con

delicadeza,Crodelleselaquitódelamanoyladejósobrelamesa.

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—¿Algomásdebeber?—No,gracias.Peroesbastantebueno.Crodellesemetiólasgafasenelbolsillodelacamisayseinclinóparaconectarconlamiradade

Hao, sin hostilidad ni artificio, pero con detenimiento. Tenía unas pestañas cortas y gruesas delmismocolorquesupeloylosirisdecolorazulclaro.

—Noquierounintérpreteconnosotros.¿Podemoshablarsinintérprete?—Sí.Miinglésnoesbuenoenhablar,peroentiendomejor.—Conesonosvale—dijoCrodelle.—Conesonosvale—dijoJohnson.Yabandonólasala,cerrandolapuertadetrásdesí.—¿Sabeustedquéesesteaparato?—Talvezunaradio.—Esunamáquinaquedistinguequiénmienteyquiéndicelaverdad.Oesodicen.¿Acasolamáquinaestabaahoratransmitiendoaquelloacercadeél?—¿Cómopuedefuncionar?—Noesmiespecialidad.Hoynolovamosausar.—Estoybuscando lapazverdadera—dijoHao—.Memuerodeganasdequehaganustedes la

paz.Memuerodeganas.Crodellesonrió.—Laguerranoeslapaz.Crodelleselevantó,fuealapuertaylaabrió.—¿Ken?—llamó,yluegodijo—:Perdone,señorHao.FueJohnsonquienapareció.—Necesitamosuntraductor.Johnsondejólapuertaentreabierta.Crodelleacercólatercerasillaydijo:—Soloalguienquenosayudeaentendernos.Sevolvióasentarycruzóeltobilloporencimadelarodilla.Haosepreguntósiledejaríanfumarallídentro.—¿Cuándovioustedporúltimavezalcoronel?HaosepalmeóelpaquetedeMarlboroquellevabaenlacamisa.Crodellesacóunencendedory

sostuvolallamaenaltomientrasHaoacercabalapuntadesucigarrilloalamismaydabaunacalada,meditandosobreelhechodequelavidaenaquellaciudaddefintasycambios totalesexigíapasoságilesyvisiónalargoplazo,yaéllefaltabaaquellacombinación.Sesentíaincapaz,porejemplo,detratarconelhermanodesumujer,queledebíadineroyquellevabaviviendoencasadelpadredeHaodesdelamuertedelanciano,momentoenquehabíapasadoamanosdeHao,ysinembargosucuñado senegabaa reconocer sudeuda.Parientesynegocios: dos cosasquenohabía conseguidoconciliar. Y desde la muerte de su padre había hundido las empresas familiares. Era incapaz degestionar el día a día del simple comercio.Muchomenos lo que fuera que aquella gente tenía enmenteahoraparaél.Inhalóelhumodeliciosoydijo:

—Hacemuchotiempo.—¿Unmes?¿Dosmeses?—Creotalvezqueunmes.Johnsonhabíaregresado.

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—AquíestáSammy—dijo,yunvietnamitamuyjovenvestidoconpantalonesycamisaigualquelos americanos se sentó en la tercera silla de madera mientras Johnson se volvía a marchar yCrodellehablabaconrapidez,mirandoaHao.

—SeñorHao—tradujoelchico—,lehemosinvitadoaquíenlugardemontarunencuentroqueparecieracasualenunespaciopúblico.Levoyacontarlarazón.

—Cuente—dijoHaoenvietnamita.—Porque queremos que entienda que este interrogatorio tiene detrás todo el peso de Estados

Unidos.—YosoyamigodeEstadosUnidos—dijoHaoeninglés.—¿Tieneustedmuchosamigos?Haolepreguntóalintérprete:—¿Quéquieredecirconunapreguntacomoesa?—Noestoyseguro.¿Quierequelepidaqueseexplique?—¿Porquémehantraídoaquí?¿Porquémepreguntansitengomuchosamigos?—Esonoesasuntomío.—Sammy—dijoCrodelle—,limítateahacerlelaspreguntas.Yohablocontigoytúhablasconél.

Noospongáisacharlarentrevosotros.—Esmejorquehableustedconélynoconmigo—lesugirióelchicoaHao.Hao sostenía su cigarrillo casi en vertical para que no se le cayeran los cinco centímetros de

cenizaypusoloslabiosdebajoparadarleunacalada.—Meheolvidadodeponerceniceros—dijoCrodelle—.Esqueyonofumo.—¿Letraigouno?—dijoSammy.—¿Uncenicero?Porfavor,sinoleimporta.AhoravolvíaaestarasolasconCrodelle.¿Muchosamigos?Muchosno.Ytalvezmalelegidos.

Sehabíaaferradoalcoronelcomosiestefueraunárbolpoderosoyhabíaesperadoquelollevaralejosdelatormenta.Perolosárbolesnovananingunaparte.

Sammy llamó a la puerta y volvió a entrar con un cenicero además de su propio cigarrilloencendido,dejóelceniceroenlamesadelantedeHaoyechósuceniza.

—¿Leimporta?—Fumen,fumen—dijoCrodelle—.HastaqueestoparezcaDresde.YHaoacercósuMarlboroconcuidadoalceniceroydejócaerlacenizacolgante.—Cigarrilloamericano—dijo—.MegustamásqueeldeVietnam.Loapagóysereclinóensuasiento.—¿Quiéneselamigoquelovisitaausted?EldelVietcong…Unapreguntabastantesencilla.Perolarutahasta larespuestaempezóunpocolejosypasópor

unaarboledadehistoriasirrelevantes.LeshablódesuformacióneneltemplodelaNuevaEstrella.Decómolospreceptos lehabíanparecidoenciertomodoexcusascobardesparaque losviejosseescudaran tras ellas, pero después, al llegar a la mediana edad, o sea ahora, habían empezado arevelarsuimportancia.HablódelosCincoImpedimentos,queeranverdaderamenteimpedimentos,ydelasCuatroNoblesVerdades,queeranrealmenteverdaderas.Cuandoseleacabaronlascosasquedecir,eltraductorSammydiounacaladaasucigarrilloydijo:

—Budista.—Contragustosnohaynadaescrito—dijoCrodelle—.Noestoyaquíenrepresentacióndenadie

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másquelosCincoCuerpos.YeseamigosuyosellamaTrung,¿correcto?—Trung.Unamigomuyantiguo.EstudiamosjuntosenelTemplodelaNuevaEstrella.—¿Conquénombreestáviajandoahora?—Nolosé.—¿Cuálessunombrecompleto?—Nolosé.—¿Estudióustedconélynosabesunombrecompleto?—Espereunmomento,porfavor—dijoHaoeninglés.—SeñorHao,sellamaTrungThan.—Esocreo.—¿Cuándofueavisitarloaustedporúltimavez?—Espereunmomento,porfavor.…YKim,enelpasillo,cabizbaja.¿Acasolohabíanorganizadoasí?Talvez.Eraprobable.Pero

¿paraqué?Noqueríapensardemasiadoenaquello.Confiabaenentendersusituación.Confiabaentenersusmetasbajocontrol.

—Quieroirmedeaquíaunsitiobueno—dijoeninglés—.ASingapur.—¿ASingapur?—Sí.TalvezSingapur.—¿Ustedsolo?—Mimujertambién,porfavor.—UstedysumujerquierenemigraraSingapur.—Exacto.—¿Esesasuprimeraopción?—QuieroiraEstadosUnidos.—Entonces,¿porquéhadichoSingapur?—ElcoroneldicequepuedoiraSingapur.—¿ElcoronelSands?—Esmiamigo.—Puesno sabedequéestáhablando.Malaisia esunamejor apuesta.O sea, si somosnosotros

quienesloayudamos.Haonoqueríaqueellosloayudaran.Peroparecíaquehabíaqueelegirentrequeloayudaranole

hicierandaño.—Nosestamosadelantandoaloshechos.¿Conoceustedesaexpresión?—Avecesnoentiendo.—Másadelanteyahablaremosdealgunascosas,comoporejemploadóndelollevamosausted.

Ahoramismoloquenoshacefaltaeshacernosamigos.Nadamás.—Esmalo.—¿Quéesmalo?—Ahora.—¿Ahoraesmalo?¿Loqueestápasandoahora?—Sí.Porfavor.Soyamigodelcoronel.—Eligeustedmalasusamigos.—No.Élesbuenhombre.

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—Porsupuesto.Buenhombre.Sí…hayquepreguntarseacuántasoperacionesleshanpuestoelnombreenclave«Laberinto».—Elchiconotradujonada—.¿QuiereotraCoca-Cola?

—No,gracias.Losiento.Midientetieneherida.—Hao,estonoesmalo.Dehecho,nolepuedoecharotraCoca-Colaalgaznate,creoqueporhoy

hemosterminado.Solamentequeríapresentarme.Yalohehechoylaverdadesquenotengomuchomásquedecir.Salvoqueconfíoenqueseamosamigos.Devezencuandomepondréencontactoconustedylotraeréaquí.Ypodremoshablar.Conocernosmás,beberunaCoca-Cola.¿Leparecebien?

—Sí.UnaCoca-Cola—dijoHaoeninglés.—¿NecesitaqueSammyletraduzcaloqueleacabodedecir?—No,estábien.Entiendo.—Supongoquenoshemosquedado sin coche.Déjemedarledineroparaun taxi. ¿Vaaplantar

ustedunárbolparaelTet?—Sí.Todoslosaños,todos.—¿Unkumquat?¿Eldelasfrutasrojas?—Unkumquat.—Sonpreciosos.—Sí,deesetipo.—Comolosquetieneustedahoraensujardín.—Sí.—¿Plantaustedunocadaaño?¿Cuántostiene?—Diez.—Yconeste,once.—Sí.Once.Onceañosdesdequemuriómipadre,pensó.Crodelleparecióexaminarelaparatodelasmentiras,queincluíavarioscomponentesextendidos

sobrelamesa.—Diosmío,mireustedtodosestoscables.Enningúnmomento lehabíandichoqueno lecontaraaquellavisitaalcoronel.Probablemente

servía a sus propósitos tanto que lo hiciera como que no. O bien suponían que Hao no lo iba amencionarporquepodía suscitarpreguntasy él severía agobiadopor lasmentiras.PeroTrung…¿SeloteníaquecontaraTrung?

—¿Paraquédemoniosesesto…?—dijoCrodelle—.Estacosaobviamentesecolocaeneldedo…Decidióesperarasusiguienteencuentro.Trungiríaabuscarloyentoncesélyadecidiríacuánto

lecontaba.—Undíadeestos—dijoCrodelle—,usted,yoyuntécniconossentaremosaquíydescubriremos

cómofuncionatodoesto.—Eslomismo—dijoHao.—¿Lomismo?Queríadecirquetodoeralomismo,quenoimportaba,quetodoelmundomentía.

***

Kimestuvoesperandodelantedelacasaconelárbolallado,queteníalasraícesenvueltasenpapel

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deperiódico,hastaque sumarido llegóenciclotaxi.Ella lomirómientras él sebajabadel carro,pagabaysereuníaconellasonriente,comosinohubierapasadonada.

—EsagentemehaestadopreguntandoporTrung—dijoella—.Tuamigo.—Amítambiénmelohanpreguntado—dijoél.—¿Mehasvistoallí?—Tehevistoenelsótano.—¿Quéesloquequieren?—TienequeverconTrung.Creoqueestámetidoenlíos.—Handichoquevieneavisitarnosacasa.—No,Trungnovieneaquí.¿Lohasvistoalgunavezaquí?—No.Mehanpreguntadosivieneaquíyleshedichoqueno.—Amítambiénmehanpreguntadoyleshedichoqueno,queamicasanoviene.—Bien.Siestanocheelfantasmademiabuelatepersigueaullándote,yatedigoloquedirá:No

vayasrepartiendotuamabilidad.—Nohaymásquehablar—dijoél—.Nohayproblema.—Este de aquí es exactamente del mismo tamaño que la mayoría de los demás —dijo ella,

refiriéndosealárbol—.Hepasadoporelmercadodecaminoacasa.—Kim—dijosumarido—.Escúchame:túsabesquiénsoy.—Noencuentrolapala—dijoella—.¿Quéesperas,quemepongaacavarconlasmanos?—Yameconoces.—Nomonteslíos.—Quierolapaz.—Entoncesescuchaamiabuela.Ellasiemprenosdecía:Novayasrepartiendotuamabilidadpor

elbosque.Plántaladondecrezcaytealimente.—Buenconsejo.—¿Esosamericanosestánenfadadoscontigo?—No.Todovabien.—¿Tehandadodineroparacogerunciclo?—Másquesuficiente.—Amítambién.¿Dóndeestálapala?—Nolosé.Fueronalbordedelaverjabajadehierroforjadoyallí,usandolaesquinadeuntablónpequeño

ademásdelasmanosylosdedos,élhizounagujeroylosdosmetieronelárbolenelmismo.Oyeroncancionesprocedentesdelacalledeallado,petardosyloschillidosdelosniños.Conuncostadodelpie ella echó la tierra dentro del agujero, con cuidado de que le entrara la menos posible en lasandalia.Sumaridosequedócontemplandoaquellaoperacióncomosidesearavolversediminutoytirarsealhoyo.

A ella le iban a leer la fortuna al día siguiente.Hasta entonces había estado deseando hacerlo.Ahoraparecíauncastigo.

—Ah—dijoél—.Yameacuerdo.—¿Qué?—Lapalaestáenel…—¿Dónde?

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—No,no.Noestáallí—dijoél.

***

Elagentedoblehabíallegado.LlegóalamansiónenelChevroletnegroyconunséquitocompuestoporHao,JimmyStorm,el

coronel y hasta el joven sobrino deHao,Minh, el antiguo piloto del helicóptero del coronel, queahora volvía a estar en la Fuerza Aérea vietnamita pero que hoy no llevaba uniforme. A Skip leparecióunareunióninnecesariamentenumerosa.

Se sentaron todos en la sala de estar —el agente doble Trung en el diván, entre el coronelataviado con su camisa hawaiana de colores chillones y Jimmy Storm, que iba uniformado—, ySandspidiócaféyexaminóaaquellapersonaaquienhabíaesperadodosañosparaecharunvistazo.

Trung debía de medir poco menos de metro setenta y era patizambo. Podría haber tenidocualquieredadentretreintaycincuentaaños,peroSkipteníaentendidoquehabíasidocompañerodeescueladeHao,locualqueríadecirquetendríacuarentaypocos.Noseponíafijadorenelpelo,asíqueloteníadepuntaenmediodelacoronilla.Teníaesapieloscuraenlaquesevenlascicatricesdediversosarañazossuperficiales.Unascejasespesasselejuntabanescasamentesobreelpuentedelanariz.Teníalasorejasgrandesylabarbillahuidiza.Unacarafeaperoamigable.Llevabavaquerosdeun tonoextrañoydeaspecto asiático,unacamisetaverdeque leveníaunpocopequeña—lasdoscosas con bastante pinta de ser nuevas—y zapatillas de tenis negras y altas, también nuevas y sincalcetines. Tenía lasmanos sobre las rodillas y los dos pies en el suelo. Entre los pies tenía unamochila de color verde bosque, probablemente nueva.Hundida hacia dentro, probablemente vacía.Trungledevolviólamiradaconexpresiónamable.Elblancodesusojosteníauntonoamarillo.Talvezlosmodalesrelajadosleveníandeestarenfermo.

Enaquelmomento,queeraelmásgenuinoylegítimodelviajedeSkipcomoparticipanteenlaguerrafría,sutíoparecíadistraído,nosequeríasentar,caminabadeunaventanaaotramirandoalexteriorysesaltólaspresentaciones.

—Skip,venconmigo.Tengonoticias.Venafueraconmigo.Salieronalporcheenmediodelamañanabochornosa,mientrasSkippensabaquetendríaqueir

alpisodearribayponersealgoqueno fueraunbañadoryunacamiseta,yentonceselcoronel ledijo:

—Skip,tengounamalanoticia.—Parecemásbienunabuenanoticia.—Sí,esees,esnuestrohombre.—Esoesunabuenanoticia.—No.Sí—dijoelcoronel—.Aver,Skip.Tumadrehamuerto.Beatrice.Bea.—¿Quécoñoestádiciendo?—dijoSkip.—Hapasadoenelpeormomento.Yeltelegramaesdehacetresdías.—No.Nomelocreo.—Skip,siéntate.Sentémonos.Se acomodaron en el escalón. Granito frío y gastado. Su tío se metió la mano derecha en el

bolsillode lapechera.Colocó la izquierdaenelhombrodesusobrino.AhoraSkipsevioconunpapeldecoloramarilloclaroenlasmanos.Siemprequerememoraramásadelanteaquelmomento

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seríaincapazdesuprimiraquellosdetalles,severíaobligadoaincluirlos.—Vuelvoahoramismoconunacopa—dijoelcoronel,ylodejóasolasconeltelegrama.Lo leyó varias veces.En elmismo, el pastor de sumadre explicaba que esta había fallecido a

causadecomplicacionesposterioresaunahisterectomíaradicalrutinaria.Asaberquéqueríadeciraquello.Elpastorofrecíasupésameyporencimadetodosusoraciones.

Elcoronelregresóconunvasoenlamano.—«Radicalrutinaria»—dijoSkip—.¿Quélepareceeso?—Ten.Porfavor.Ten.Necesitasuntragobienfuerte.—Joder,vale.Sutíopermaneciódelantedeélofreciéndoleelvaso,peroSkipnoconsiguióaceptarlo.Conlas

palmasdelasmanoshaciaarriba,sosteníaeltelegramacomosifueraunmontóndecenizaenormeydelicado.

—Mevoyaperderelfuneral.—Esunaputada.—Esperoquevayaalguien.—Eraunabuenamujer.Estoysegurodequeirámuchagenteadespedirsedeella.Elcoronelsebebiódeuntragolamitaddelvasoquehabíallevadoparasusobrino.—Eltelegramallegóhacetresdías.YoestabaenCaoPhuc.Mellamaronporradioparadecirme

quehabíallegadountelegrama,yyoteníaintencióndeponermeencontactoconalguienyverdequésetrataba,peronomelopusecomoprioridad:haytantotráficodetelegramas,yporlogeneralsontonterías,yalosabes…Ycontodasinceridadtelodigo,Skip,yonoestabaporlalabor.

—Bueno,nohacefaltaqueusted…yasabe.—Todosehaacabado.SeacabóEco.CortesíadeJohnnyBrewster,probablemente.Porloqueyo

sé,nosestánquitandodeenmedioparapodersaturarelsitiodebombas.—PorDios.—Asíquelamentoelretraso.Cuandoregresé,Trungdijoqueestabalistoparatrasladarse.Con

todalaemocióndeperderCaoPhuc,casimehabíaolvidadoporcompletodeél.—Elfuneralespasadomañana.—Vesitienesqueir.—Esobvioquenopuedo.—Lafamilialoentenderá.Sonconscientesdequeestásenlaguerra.—¿Mepuededarmicopa?—Oh,mierda.Skipvacióelvaso.—Skip, voy a dejarte solo unos minutos para que te recompongas. Luego necesitamos que

vuelvasadentroparahacertutrabajo.—Losé.Joder.Lasdoscosaselmismodía.—Losiento,peroasísonlascosas.—Claro.Voydentrodeunmomento.Skipcontemplólacarreteraqueseextendíaalotroladodelaverja.Sinpensarparanadaensu

madre. Supuso que ya pensaría en ella más adelante. No ponía predecir el orden de aquellosacontecimientosemocionales.Eralaprimeravezquesemoríasumadre.Oalguiencercanoaél.Supadrehabíamuertoantesdequeél tuvierausode razón.Su tíoFrancishabíaperdidoaunhijode

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tempranaedad,queseahogónavegandofrentealascostasdeCapeCod,pornohablardetodossuscamaradascaídosenlaguerra.ElmismoSkiphabíavistoasutíodispararaunhombrecolgadodelaramadeunárbol. ¿Sabesunacosa?Lagente semuere.Desearíano tenerqueestarpasandoaquelmomentoasolas.Noleestabasirviendodenada.Sealegródeverquesutíoregresabaysesentabaasulado.

—Bueno,tío.Soysusobrinohuérfano.—Beatrice fue una esposamaravillosa parami hermano. Nunca lo había pensado antes, Skip,

peroéldebiódemorirenmediodeunagranfelicidad.Fueunmatrimoniobreve,peroellalohizomuyfeliz.

—Lahanmatado.Esoscarniceros.—No,no,no.Saben loquehacen.Yahasvistodequésoncapaces.Les llevasaunsoldadode

infanteríarotoenmediadocenadepedazosyunañomástardeyaestálistoparadesfilar.Skipdoblóeltelegramaporlamitadydenuevoporlamitad,peronopudodecidircuáldesus

bolsillos profanaba con el mismo. Así que lo tiró por encima de su cabeza, en dirección a lacarretera.

—¿Sabes qué? Tu padre sabía qué era importante. Se casó pronto. No era como el resto denosotros.Joder,ennuestrafamilianingunoescomolosdemás.Yomidometrosetentaycincoconloszapatospuestos.TutíoRaymidemásdedosmetros.

—¿Esmayorquetú?—¿Ray?Esdosañosmásjovenqueyo.Dosañosytresmeses.—Ah.—Loquequierodeciresquetienesfamilia.Noereshuérfano.Aesoiba,supongo.—Gracias.—Lodigoenserio.Peroyalosabes.Siemprelohassabido.Peroescucha,esunanoticiaterrible,

yllegaenelpeormomento…—Estarébien.Entremos.

***

ElseñorSkiplehabíadichoaHaoquetalvezelsacerdotelocalsupieradóndecomprarciertotipodecortezaenpolvoconlaqueKimqueríaprepararuntémedicinal.Últimamentesumujerparecíaestarbiendesalud.Perotodavíalacautivabanlashierbasylasmedicinas.Haoysusobrinodejaronalosamericanosyse fueronabuscar lacasadelsacerdote, tomandoelcaminoquebordeabaelarroyosolamenteduranteunpardecentenaresdemetros,pasandopordetrásdeunaseriedepequeñospatiosde casas, cadaunode ellos provisto de uno, dos o tresmonumentos que cubrían las tumbas de lafamilia,yentraronenlaparroquiacatólicaporeljardíntrasero.

Enlascasasquehabíaarroyoarribayarroyoabajo,lasancianassededicabanahervirelarrozdeldíausandocarbónoastillas,perode ladel sacerdotenosalíahumo.Minh tuvoquesilbardosveces. El hombrecillo salió de la parte trasera de la casa descalzo, abrochándose el cinturón yabotonándoseunacamisadefaldoneslargosdeestiloamericanoquelellegabacasihastalasrodillas.

AHaoleirritóencontrarloencasa.Loúnicoqueélqueríaerahablarconsusobrinosobrelosnegociosdelafamilia.

—Sí,yaleconozco—dijoelsacerdotecuandoHaoempezóapresentarse.

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Haolecontóquenecesitabahierbasparasumujer.Yquizátambiénalgoparaeldolordemuelas.—Puedodecirlecómosellega,peronopuedoacompañarlo.—Nopasanada.—Nopiensosalirhoy—dijoelsacerdote—.Mequedoencasa.Hetenidounsueñoimportante.—¿Acasoelsueñolehadichoquehoysequedaraencasa?—preguntóMinh.—No,simplementequieroestartranquiloyrecordaryentender.Haodesearíanotenerquehablarconaquellaclasedegente.Perosumujer…fantasmas,sueños,

pociones,tonteríasdetodaslasclases.Asíqueaquíestaba.—¿Conoceustedaunherbolarioono?—Coja la carretera hacia el norte hasta salir del pueblo. En el tercer villorrio al que lleguen,

preguntenporlafamiliadeloschinos.Nosonchinosdeverdad—añadió.—Gracias.Regresaronalamansiónporlacarretera.Haodecidióqueaquellabúsquedaderemediosfalsos

terminabaallí.NadadepolvosencantadosparaKim.Seinventaríaunamentira.—Noimporta—ledijoasusobrino—.Solamentequeríahablarcontigo.Hacesemanasquenote

vemos.Tresmeses,porlomenos.—Losiento,tío—dijoMinh—.Soyelesclavodelgeneral.Nopuedoalejarmedeél.—Ylaúltimavezquenosvisitastenisiquieratequedasteatomarelté.Nofuepornosotrospor

loquevinistealaciudad.Fueportuamiga.—Escomplicado,tío.—Lehepedidoalcoronelquetetrajerahoyamicasa,deotramaneranohabríasvenido.—Yelcoronelmehatraídoaquí.—¿Teresultaungraninconveniente?—Esunviaje.Aquínohagofalta,peromegustaverte,ymealegraveralcoronel.—Hayunproblemaconelhermanodemimujer,Huy.—Estoyalcorriente.EltíoHuy.—Notieneremedio.¿Tienesarmasentuhelicóptero?—EselhelicópterodelgeneralPhan.—¿Quéclasedearmas?—Unaametralladora.—Quieroqueataqueslacasa.—¿LacasadeltíoHuy?—Noessucasa.Esmía.Medebeonceañosdealquiler.—¿Quieresquebombardeelacasa?—dijoMinh,usandolapalabraeninglés.—No—dijoHaoeninglés—.Noquelabombardees.Queladestruyas.—Contodoelamoryelrespeto,tío,esonoesbuenaidea.—Yaveslofuriosoqueestoy.—Yaloveo.—EntoncesregresaaLapVung.HablacontutíoHuy,cuéntalelofuriosoqueestoy.¿Vasaira

casaporelTet?—No,nopuedo.Iréporelcumpleañosdemitía.—¿Desumujer?—Enmarzo.

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—¿Quéfechaexactamente?—Eldieciochodemarzo.—Hablaconél,porfavor.—Esunhombretestarudo.NoquieroestropearleelcumpleañosalatíaGiang.—Estropéaselo.Nomeimporta.Yaveslofuriosoqueestoy.HabíanllegadoalaverjabajadehierrodelaenormemansiónenlaquesuviejoamigoTrung,

rodeado de americanos, estaba jugando negligentemente con su propio futuro. Pues bueno. Hastaentonces,Trunghabíasidocompletamentesincero.Haonuncalehabíacreído.

Dentro,elcoronelestabahablando,sentadoeneldivánalladodeTrungconunatazadetéenunamano y la otra sobre el hombro de este.Hao no había vistomucho últimamente al coronel, y encualquiercasoahoraleproducíaterror.AlotroladodeTrungestabasentadoJimmyStorm,conlosbrazoscruzadosdelantedelpechoyuntobilloapoyadoenlarodilla,comosialguienhubierahechoun nudo con él y lo hubiera dejado inmovilizado. Trung, sin embargo, parecía completamentetranquilo.

Hao yMinh ocuparon sendas sillas en el límite entre la sala de estar y la oficina, ni del tododentro de la reunión ni del todo fuera de ella. El coronel dejó de hablar con Skip a fin deinterrumpirseasímismo,ydijo:

—Sondosfamiliasqueseayudan.Enelfondo,lafamiliaesloqueimporta.¿Tieneustedfamilia,señorTrung?

TrungparecióconfusoyHaoselotradujo.—TengounahermanaenBenTre—ledijoTrungaHao—.Mimadremurióhacemuchotiempo.

Túteacuerdas.Haohablóenvietnamita:—Alcoronelselehamuertosucuñadahaceunosdías.Lamadredesusobrino,aquípresente.—¿Esehombrequeestáahoraconnosotros?Haoasintióunavez.—Dalaimpresióndequesítienefamilia—dijoelcoronel.HaoledijoqueTrungteníaunahermanaalaquehacíaañosquenoveía.ElcoronelacaricióelhombrodeTrung.—Estetiposíesauténtico.Llevaabordodesdeelcuarentayseis.Másdeveinteaños.El señor Jimmy no había dicho ni palabra. A Hao no le gustó cómo estaba mirándolo todo

fijamente.—¿Aestejovenseleacabademorirsumadre?—dijoTrung.—Sutíolehatraídoelmensajeestamañana.—Porfavor,dilequelosiento.PeroelcoronelleestabahablandoaSkip.—Loquequieroqueentiendasporencimadetodoesquenoestásdirigiendoaestehombre.En

ciertosentido,nisiquieraestásrecogiendoinformación.Yciertamentenoloestásinterrogando.Esoestáclaro.Simplementesirvescomoesponja.

—Loentiendo,señor.—Sitevesatimismocomoalguienqueaprende,alguienqueseinteresaporsuhistoria,nosirá

todomuchomejor.—Muybien.

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—Ytampocoquieroqueteagobiescontandocuentoschinos.Cualquiercosaqueéltepregunte,quiero que seas completamente sincero con él. Siempre que estés seguro que no está intentandoobtenermaterial.

—Muybien.—Pero,enfin,sitepreguntaportupasado,tufamilia,tuvida…todoeso,túselocuentastodo.—Deacuerdo.—¿Quéestádiciendo?—lepreguntóTrungaHao.—Estádandoinstrucciones.Lehadichoasusobrinoqueseasincerocontigo.—¿Quieresdecirledemipartequeleestoyagradecido?Haoteníaganasdegritar:Osestoymintiendoatodos.—Vosotrosdos,tenéisquetrabajarenvuestracomunicación—ledijoelcoronelaSkip.—Nosentenderemos—dijoSkip.

***

DevueltaaSaigón,MinhfueenelasientotraseroconJimmyStorm.Minhnosabíaporquélehabíapedidoquefueraenaquellaexpedición.Porqueerandosfamiliasqueseentendíanmutuamente,deaquellosedabacuenta,pero,aunasí,élnodesempeñabaningúnpapel.Hacíasolamenteunmessehabríaenfadadoporperdertiempodepermiso,perolaseñoritaCam,sunovia…elpadredeellasehabíavueltofríoconMinh,lehabíacerradolaspuertasdesucasayellasenegabaaencontrarseconélensecreto.Alparecer,elpadrehabíaconfiadoencasarasufamiliaconlafortunadeltíoHao.Yahoradebíadehaberseenteradodequenoteníaninguna.

A su tío los problemas le habían destrozado el buen juicio. La preocupación por la casa delMekongyporaquelalquilerqueseguramentesabíaquenoibaavernunca,ylasugerenciadequeMinh los asesinara a todos, todo aquello resultaba ridículo. Entretanto, Hao ni siquiera habíamencionado al coronel, ni sobre todo el cambio que este había experimentado. El coronel estabapálido,lecostabarespirarysehabíapasadotodalamañanadandosorbospequeñosdesuBushmillsenlugardetragoslargos,ademásdequenososteníaelvasoconelpuñocomodecostumbresinocon la yema de los dedos. Y Jimmy Storm había guardado un silencio poco habitual, sin serconscientedelacadavezmásprofundasoledaddelcoronel,ofingiendonoserlo.

ElpropioMinhnohabíavistomuchoalcoroneldesdequesuhelicópteroC&ChabíasidodevueltoalaFuerzaÁereadeVietnam,yMinhconelmismo,todavíapilotándolo.Salvoporlaametralladoradelcalibre30quesutíoestabatanansiosoporquevolvieracontrasupropiafamilia,elvehículonollevabaningúnequipodeasalto.Lomanteníanlejosdeloscombatesyseguíasiendountaxistaaéreo,ahoraparaelgeneralPhan.Elgenerallehabíaconcedidounpermisosinprecedentesdeunasemanaentera. Él se sentía agradecido, pero veía aquella indulgencia como parte de una nueva forma dehacerlascosas.Laactituddelejércitohabíacambiado.Aélnolegustaba.Elfuegosehabíaapagado.

—Hao—dijoelcoronel—.Paraelcoche.YahabíanllegadoalaRutaUno.Haosedetuvoenelarcényelcoronelsalió,Minhsupusoque

parahacersusnecesidades.Peroselimitóaquedarsedepiejuntoalcoche,fijandosuatención,oesoparecía,enunanube

solitariaquehabíaenelcielodelantedeellosyqueparecíaunalunapequeñaydesmadejada,talvezsituada amuchas docenas de kilómetros, tal vez flotando sobre el mar de la China, que ellos no

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podían ver. El coronel avanzó hacia la parte delantera del coche, con los nudillos de una manoapoyadosenlacapotay lamanoderechaenlacadera,yallísequedóplantado,enmediodeaquelpaisaje marrón de tierra que antaño había sido densa selva y arrozales y ahora eran escombrosenvenenados, nadamás que tocones y esqueletos, mirando la nube con el ceño fruncido como siintentarainfluirensuactividad,contemplandoaquelfenómenonaturalhastaqueelvientoselallevóhaciaelsurylaalejódelcaminodeellos.

Entoncesvolvióalcoche.—Muybien.Enmarcha.Nadie más dijo nada. Hasta el sargento guardó silencio. Antaño Minh se había sentido

familiarizado con los ritmos de aquellos dos camaradas.Ahora notó un espacio en blanco dondeStormhabríahechouncomentariosarcástico,obienunodesuschistes.

***

Skip se dio cuenta de que se había preparadodemasiado. ¿Qué le había quedadopor hacer en losúltimosmesesmásquememorizar los laberintosde laduday las«Observaciones sobre el agentedoble»deJ.P.Dimmer?

«Laexperiencianosmuestra»,avisabaDimmerasuslectores,

queciertaspersonasqueadoptanel roldeagentedoble—dehecho, talvez lamayoríadequienes losondeformavoluntaria—presentanunaseriederasgosencomún…Lospsiquiatrasdescribenaesaclasedepersonascomosociópatas.

•Semuestraninusualmentetranquilosyestablesensituacionesdeestrésperonopuedensoportarlarutinaoelaburrimiento.• No establecen relaciones emocionales adultas y duraderas con otra gente porque su actitud hacia los demás se basa en

aprovecharsedeellos.•Tienenunainteligenciaporencimadelamedia.Sonmuybuenosenexpresiónverbal,avecesendosomásidiomas.•Semuestranescépticosyhastacínicosacercadelosmotivosycapacidadesdelosdemás,perotienenunaideaexageradadesu

propiacompetencia.•Sufiabilidadcomoagentesestáengranmododeterminadaporlamedidaenquelasinstruccionesdeloficialalcargocoincidancon

loqueellosconsideransuinteréspersonal.• Son ambiciosos solo a corto plazo: quieren mucho y lo quieren ya. No tienen paciencia para avanzar lentamente hacia una

recompensalejana.•Sonpornaturalezaclandestinosylesgustaelsecretismoyelengañoensímismos.

ElagentedoblequenuncasehabíaencontradoconJ.P.DimmerledijoaSands:—Sutéesdelicioso.Megustafuerte.Skiptrajounpardediccionariosdesuestudioyloscolocósobrelamesilladelcafé.Supusoque

aquel hombre estaba esperandounas instrucciones que él nopodía darle,mientras que él, Skip, eloficial presente, ¿qué quería? Dejar de esperar. Servir. Hacerse indispensable poniendo a aquelhombreatrabajarcontralossuyos.Conoceraaquelhombre;ysutíoteníarazón:nosepodíahacerelmapa de lamente de un traidor con treinta respuestas de sí o no y tres líneas que trazaban unpoligrama.Eramejoreltitubear,elvolveratrásyperderse,losdiccionariosbilingüesylosobjetivosdesparejos.Yauncon tantasdificultadesycon tantospuentesardiendodetrásdeél,el talTrungsededicaba a saborear su té, se permitió quedar completamente cautivado por las galletas dulces demantequilladelaseñoraDiu,yhastadisfrutócuandolepresentaronamonsieurBouquetyaconsejócocinarloenunasadorenlugardehervirlotroceado.Nadahuidizoenlamirada,ningunatensiónenlosnudillos,nadadenada.¿DóndeestabaJudas?Skipempezóapreguntarsesiaquelhombrenosería

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talvezalgúnvecinodescarriadodeHao,quehabíacaídoallíporculpadealgúnridículoerrordecomunicación.Elagentedoblesolohablabaunpocodeinglés,yelvietnamitadeSkipsimplementeera insuficiente. Los dos hablaban francés con facilidad poco menos que cierta. Usando los tresidiomaspodíanhaceravancesenzigzagendirecciónaunaseriedepropósitoscruzados.

—EnEstadosUnidosnocomemosperros.Losperrossonnuestrosamigos.—PeroahoranoestáustedenEstadosUnidos.EstáenVietnam.Estáustedlejosdecasayhoyes

undíatriste.SeñorSkip,losientomuchoporusted.Ojaláhubieravenidootrodía.—¿Haentendidoustedquemimadrehafallecido?—MelohacontadomiamigoHao.Mesientomuyapenadoporusted.—Gracias.—¿Quéedadteníasumadre?—Cincuentaydos.—YoregresédelNorteenmilnovecientossesentaycuatro.Despuésdepasardiezañosallí.El

viajeacasafuemuyduro.Yopensabatodoeltiempoenmimadre,ymiamorporellarenacióconfuerza. Recordé muchas cosas de ella que ni siquiera sabía que recordaba.Me entristecía muchopensarqueyaseríaunaancianacuandoregresaraconella.Yoqueríaquemimadrevolvieraaserjoven. Pero cuando llegué a Ben Tre ella llevaba seis meses muerta. Había vivido casi hasta lossesenta.SellamabaDao,queesuntipodeflor.Asíquecortélaflordeldaoparasumonumento.

—¿Tieneustedesposa?¿Hijos?—No.Nadie.—¿Ysupadre?—Muriócuandoyoeraunniñopequeño.Lomataronlosfranceses.—Elmíotambién.Lomataronlosjaponeses.—¿Tieneustedmujer?¿Algúnhijo?—Todavíano.—Así que esmuy duro.Ya veo. Esmuy duro cuando se va el segundo. ¿Cómo hamuerto su

madre?—Noestoyseguro.Algunaoperaciónquehasalidomal.¿Yladeusted?—Deenfermedad.Mihermanamedijoquehabíaduradocasicuatromeses.Semuriómientrasyo

tambiénestabamuyenfermoymehabíavistoobligadoapararviniendodelNorte.Mediounafiebre.Distinta de la malaria. Algo diferente. Me pasé dos semanas en una hamaca. Otros camaradasenfermosvinieronyataronsushamacasenelmismolugaryyacimos todosallísinquenadienosayudara. Al cabo de unos días había cadáveres en algunas de las hamacas. Yo sobreviví a mienfermedadyesperéasentirdenuevoelabrazodemimadre.Meentristeciómuchoencontrarmeconquehabíamuerto,peroenaquellaépocayoteníafuerza,ymipasiónporlacausaeramuchomayorquemitristeza.MemandaronaCaoPhuc,dondeunademisprimerasórdenesfueasesinarasutío.Peronolomaté.Miexplosivofalló.¿Nosealegra?

—Mealegromucho.—Sihubiera funcionado,mi amigoHao tambiénhabríamuerto.Pero la causa significabamás

queHao.Yoyahabíaperdidoamuchoscamaradas.Entierrasaunamigotuyoyesotedaunenemigo.Tellamaainvolucrartemásenlacausa.Luegollegaelmomentoenquematasaunamigotuyo.Yesopuede alejarte, aunque tambiénpuede tener el efecto contrario: volverte sordoa tupropiavozcuandoestatequierehacerpreguntas.

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—Yempezóustedahacersepreguntas.¿Esesoloquelotraeanosotros?—Yamehacíapreguntasdesdeelprincipio.Simplemente,noteníaoídosparaellas.—¿Quécambióparausted,Trung?—Nolosé.Talvezlamuertedemimadre.Paraunhombresinhijos,esuncambioenorme.A

partirdeentoncesunoyaestálistoparamorirse.Puedepasarencualquiermomento,inclusoantesdequematentucuerpo.

—¿Quéquieredecirexactamente?Creoquenoloentiendo.—Talveznoquiereentenderlo.Durantelacena,enqueelhechodehablartanpocovietnamitaredujolaconversaciónalmínimo,

Skipsededicóaobservardenuevosuentornoyapreguntarsequédebíadeestarviendoelvisitante:caobadeanticuarioymueblesdemimbre,unapuertaprincipalimponentecuandoenaquellaregiónlonormaleraquelascasastuvieranlafachadaabierta,protegidaporlasnochesconverjasdehierro.Ylasparedesenyesadasydecoradasconpinturassobremaderalacada,pastoralesapincel:escenasreflexivasysilenciosasdecocoterosdedientesserradosenunmundosinalmasquedesgarrar.LaseñoraDiusirvióunasopadeterneraconfideos,verdurasyarrozalvapor.Aquellamañanahabíacolocadopequeñosperoimpresionantesarreglosfloralesportodalacasa.Skipsediocuentadequelohacía todos losdías.Hastaentoncesapenas sehabía fijado.Ellayel señorThovivían justo ríoarriba de la mansión, en una choza rodeada de palmeras y almendros de flores blancas… En unmomentodado,elagentedoblesetapólabocaconlamanoybostezó.

—¿Tienesueño?—Todavíano.¿Dóndevoyadormir?—Tengounahabitaciónpreparadaenelpisodearriba.—Dondesea.—Noeselegante.EntoncesTrungpidióunapistola,obiendijoqueteníauna.—¿Cómodice?Lovolvióadecir,estavezenfrancés.—¿Tieneustedunapistolaparamí?—No.Ninadaparecido.Lapeticiónlodevolvióa larealidad.Habíadejadodepensarenlosdetallesconcretosdeaquel

hombre.Erauninvitado,alguienquemerecíasuhospitalidadynadamás.—Solamenteparaprotegerme.—Novaanecesitarprotección.Aquíestáasalvo.—Muybien.Lecreo.De postre, la señora Diu sirvió unas delicadas natillas de huevo. Trung y Skip sacaron los

diccionarios.—Perdonemivietnamita.Loheestudiado,peroapenasentiendounapalabracuandoustedhabla.—LagentemedicequehecogidoacentodelNorte.Peronocogímuchomásallíarriba.Enel

NortelagentedelSurnosmantenemosunidos.Tenemosunestiloqueesdeaquí.Esmuydistintoalodeallí.

—Esotambiénpasaenmipaís—dijoSkip.—¿CómoeslagentedelSurdesupaís?—Se los considera muy elegantes y pausados en el hablar. Con sus familias y sus amigos se

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muestranmuyabiertamenteafectuosos.EnelNorte,encambio,senosconsideramáscerrados,máscautelosos,nosabrimosmenos.Asísenosconsidera.Perohayexcepciones.Ellugardenacimientode una persona no significa todo.Yya sabe usted que también tuvimos una guerra civil.ElNortecontraelSur.

—Sí,yaconocemoslahistoriadeustedes.Estudiamossuhistoria,susnovelas,suspoemas.—¿Deverdad?—Claro. Incluso antes de que su ejército llegara a Vietnam, América ya era importante en el

mundo.Elmayorpaíscapitalistadelmundo.AmímegustamuchoEdgarAllanPoe.Acontinuaciónhablarondelaequivocacióndelaguerra,sinmencionarquiéneraelquelahabía

cometido.—EnVietnam—dijo Trung— tenemos elmodelo deConfucio para las épocas de estabilidad:

para la sabiduría, laconducta socialyesascosas.Y tenemoselmodelobudistapara lasépocasdetragediaydeguerra:paralaaceptacióndeloshechosyparamantenerlamenteaislada.

—Sí,esoheoídodecir.—Laguerranuncavaadetenerse.—Perotienequedetenerse.—Yoyanoesperoverelfinal.MequieroiraEstadosUnidos.—Esoloentendemos.Ysepuedearreglar.Se imaginó a aquel hombre de pie en una esquina de San Francisco, esperando frente a un

semáforoquedecía«WALK».Algunos de los compañeros de escuela deSkip en su infancia habíansidohijosdeinmigrantes,lamayoríaescandinavos.Élhabíavisitadosuscasasmalventiladas,habíasentido los pulmones atacados por los olores extraños de aquellas casas, había contemplado susbaratijasinimaginablesylasfotografíasborrosasdemilitaresconplumassobresaliendopordetrásdelasgorrassinviseradesusuniformes,yhabíaoídoalospadresdeaquelloscompañeroscometererroresgramaticalesysaltarsepalabras,conacentosfuertesysinceridad,todoenellosunaafrentaasus hijos, que soportaban a sus padres en silencio y pasaban de largo a toda prisa de losofrecimientosdesusmadres:«Sí,mamá;vale,mamá;me tengoque ir,mamá».Comoesnaturalaaquella edad, Skip no había prestado atención a aquellos adultos, héroes del riesgo empecinado,cruzadoresdeocéanos,exiliados.Consuspreguntitas,sacabandequicioasushijos.Acambio,loshijos por quienes habían puesto en juego sus vidas se remangaban las camisas por encima de losbíceps, se engominaban el pelo con Wildroot Cream-Oil, mentían sobre las chicas, practicabancirugíasobrepetardos,pelotasdegolfygatosmuertos,arrojabanpelotillasdemocoalasfarolas,sereían comoamericanos y decíanpalabrotas sin acento.Pero sumejor amigo en séptimo curso, ellituanoRickySash—probablementesuapellidoveníadeSzasz,ahoraquelopensaba—,decía«porfavor»y «gracias» tanto como«joder»y se ataba los cordones de los zapatos conundoble nudoenorme.Nadamáslodelataba.Losasiáticosnolotendríantanfácil.

—Porsupuesto—dijoSkip—,noshemospreguntadoporlasmotivacionesdeusted.—¿Quiereustedunarazónpráctica?—¿Puededarmeuna?—No.—Entiéndalo:paranosotros,esunacuestiónimportante.—Necesitaalgosimple.NecesitaoírmedecirquerobéunosfondosdelPartidoComunista,oque

estoyenamoradodeunamujerprohibidaytenemosqueescaparnos.

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—Algoparecido.—Puesnoesnadaparecido.—¿Melopuedecontar?—Concadagestoquehagoquetraicionaamiscamaradasymicausa,sientodolorenmialma,

peroeseldolordelavidaquevuelve.¿Losjironesconmovedoresdeuncorazónroto,obienpatrañasmoralistas?—Trung,diceustedquequiereiraEstadosUnidos,peroquesevaairalNorte.—PrimeroalNorte.DespuésaEstadosUnidos.ConozcouncaminoquevaalNorte.—Elcoronelmencionóquetrabajabaustedconprimitivos.—UnoschicosdeBaDen.Escierto.Habíaunprogramaparaalistaralastribus,oporlomenos

paraadoctrinarlas.Noséquéhapasadoconelprograma.Haymuchísimotrabajodesperdiciado.Ymuertessinsentido.

—Alcoronelleinteresalagenteasí.—Escierto,quierequeyovuelvaaacompañaraungrupoalNorte.—¿PorquéibaustedaregresaralNorte?—Lapreguntaesporquénoescapéhaceunadocenadeaños,cuandofuialNorteyodiéloque

habíaallí.EnmilnovecientoscincuentaycuatrohubogentequesequedóenelSurporquesabíanqueelpartidonoesperabanadaadosañosvista,nohabíaeleccionesnireunificación.Otrosnofuimostanlistos.NosembarcamosrumboalNorteconlosojoscegadosporlaesperanza,ynovimosnada.NosllevaronalNorteparaquenosolvidáramosdenuestrascasas,denuestrasfamiliasydenuestraverdaderatierra.Peroloquemepasóamíesquerecordéconmayorclaridad.MeacordédelatierrarojadeBenTre,nodelatierraamarilladelNorte.MeacordédeloscálidosdíasdelSur,nodelasgélidasnochesdelNorte.Meacordédelafelicidaddemialdeaynodelarivalidadylosrobosdelkoljós.Lavidadelafamilia,lavidadelaaldea,esaeslaverdaderavidacomunal,noladelkoljós.Nosepuedejuntaragentealafuerzayprohibirlesquesemarchenydecirlesquesonunacomunaunidaporladoctrina.YocreíaqueMarxnosdevolveríaanuestrasfamiliasynuestrasaldeas.PorquesolamentepensabaenelfindelquehablabaMarx:nosécómoeseninglésoenfrancés,peroMarxdicequealfinaldelfuturoelEstadoserácomounaparraquesesecaráysecaerá.Esoesloqueyoesperaba.¿ConoceaMarx?¿Conocelaexpresión?

—Conozcoelinglés.Los dos hojearon los diccionarios y Sands urdió un equivalente para la expresión «el

marchitamientodelEstado».—Sí.ElmarchitamientodelEstado.Ycuandosemarchite, loquequedaráserámifamiliaymi

aldea. Eso era lo que yo veía al final del futuro: los franceses se habrían ido, los americanos sehabríanido,mialdearegresaríaymifamiliaregresaría.Peroestabanmintiendo.

—¿Cuándosediocuentausteddequementían?—PocodespuésdellegaralNorte.Peroentoncesnomeimportóqueestuvieranmintiendo.Aquí

estaban los americanos. Primero teníamos que encargarnos de los americanos y luego podríamosencargarnosdelaverdad.Peromeequivocaba.Laverdadesmásimportante.Laverdadvaprimero.Siemprelaverdad.Todolodemásvienedespuésdelaverdad.

—Estoydeacuerdo.Pero¿dequéverdadestáustedhablando?—ElBudadescribecuatroverdades:eldukkha,elsamudaya,elnirodha y elmagga.Lavidaes

sufrimiento.Elsufrimientovienedeaferrarse.Unopuederenunciaraaferrarse.ElCaminoÓctuple

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llevaaesarenuncia.—¿Yustedselocree?—No todo. Solamente puedo contar mi experiencia. Sé por mi experiencia que la vida es

sufrimiento,yqueesesufrimientovienedeaferrarseacosasefímeras.—Bueno,esosonhechos.LoqueenAméricallamaríamos«lascosasquetienelavida».—Entonces,¿cuáleslaverdadparaustedeslosamericanos?—Algoquevamásalládeloshechos.SupongoquellamaríamosverdadalaPalabradeDios.—¿YcuáleslapalabraqueDioslediceaAmérica?—Déjemepensar.Volvióaposarlamanosobreeldiccionariofrancés-inglés.Peroyaestabacansado.Diezminutos

de conversación les habían hecho consultar un centenar de entradas del diccionario y les habíancostado casi dos horas. Él solamente conocía la Palabra que impartía Beatrice Sands, su madreluterana: «Esta vida —había intentado decirle ella en aquellos momentos que la transportaban,momentos que a él lo avergonzaban porque la veía como unamujer indigna de losmismos, unamujeratrapadaporlaslíneasdetenderlaropaenunjardíndehierbasaltassituadojuntoalasvíasdeltren—,estavidanoesmásquelainfanciadenuestrainmortalidad».Madre,ahorasabrássiesciertoo no.Y le rezo aDios por que no te equivocaras.Y en cuanto aAmérica: derechos inalienables,gobiernoconconsentimiento,pergaminos,montañas,elecciones,cementerios,desfiles…

—Bueno, todo puede debatirse—dijo en inglés—. Todo puede debatirse en cualquier idioma.Peroesoshechosqueustedmencionanosepuedencuestionar.Ysinembargohayalgomásalládelosmismos.—Probóconelfrancés—.Hayunaverdadperonosepuededecir.Estáaquí.

—Sí,nohaynadamás.Estelugar,elmomentopresente.—Yahoraestoymuycansado,señorThan.—Yotambién,señorSkip.¿Yahemoshechobastanteporhoy?—Yahemoshechobastante.AlojóaTrungenelpisodearriba,enlahabitaciónquehabíajustodelantedelasuya,alotrolado

delpequeñopasillo,laqueocupabanlosarchivosdelcoronel,entreloscualesconfiabaqueelagentedobledurmierabien.Skipdurmió,peromal.Sedespertóaoscurasymirólasagujasiridiscentesdesurelojdepulsera: lasdosycuarto.Habíaestadosoñandoconsumadre,Beatrice.Losdetallesseevaporaronmientrasélintentabarecordarlosyloúnicoquequedófuesupenayciertaexcitación.Éllohabíasidotodoparaella.Esosehabíaterminado.Yanoeraelhijoúnicodeunaviuda.Unavez,enellargotrayectoentrenhastaBoston,habíamiradoporlaventanilladeltrenmientrasesteavanzabadespacioatravésdeunaseriedeescenasdelcentrodeunaciudad—¿Chicago?,¿Buffalo?—yhabíavisto adosniños en la calle frente aunapequeña tiendade comestibles, deochoonueve añosdeedad,mugrientosyfumandocigarrillos,yhabíadadoporsentadoquedebíandeserhuérfanos.Esoesloqueéleraapartirdeahora.

Luegolosremordimientosloaplastaronfísicamente,lasangreempezóaaporrearlelacabeza,lecostabarespirar…Nohabíallamado,nohabíaescrito,lahabíadejadoqueseencaminaraalamuerteen una camilla, completamente sola enmedio de su confusión y sumiedo inútilmente corteses yarrepentidosdelMedioOeste.Apartóconbrusquedadla telamosquitera,pusolospiesenelsuelo,irguióloshombros,levantólacarayrespiródeformarápidayentrecortada.Talvezunacopa.

***

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Trungseacostóenelpisodearribadelacasaenorme,enuncuartotrasterollenodecajas,enunacamahechadetablonescolocadosentredosbaúlesycubiertosconuntatamijaponésdepaja.Teníauna lámpara de butano que le había dado el representante de laCIA, una novela social realista envietnamita que no le apetecía terminarse y un ejemplar deLesMisérables en francés.Había leídoaquellaobratantasvecesqueyanoleinteresaba.Yacióaoscurassintiendolacasaasualrededorypreguntándosesialgunavezhabíadormidoenunedificiotangrande,apartedeltemplodelaNuevaEstrellacuandoeraniño.

Oyóqueseabríalaotrapuertadelpasillo.Conlospasossuavesdeunospiesdescalzos,elseñorSkippasófrentealcuartotrasteroytomólasescalerasquebajabanalrestodelacasa.

¿Y ahora qué? Tristeza, insomnio, pensó Trung. Ruidos procedentes de la cocina: era mejordejarlosolo.Sumadresehabíaido.

Madre,sigollorandoporti.Pasódiezminutosacostadoaoscurasy luegosepusodepieysiguióalhombre.Enelpisode

abajoencontróalamericanoenpantalonescortosycamiseta,sentadoenelestudiojuntoaunfarolsusurrantedebutano,conunlibroyunvasoconhieloalladodelfarol.

—¿Hapodidodormiralgo?—Todavíano.—Estoytomandounwhiskyirlandés.¿Quiereotro?—Muybien.Loprobaré.ElseñorSkiphizoelgestodelevantarseyluegodijo:—Tenemosvasosenlacocina.Ysevolvióasentarensusillón.El americano estaba hojeando uno de sus libros de frases cuando Trung regresó al estudio

despuésdeencontrarunvaso.Estirólamanohaciaelsuelodealladodesusillónylevantósubotelladelicor.Trungsostuvosuvasoyéllesirvióunpoco.

—¿Lobebodeprisaodespacio?—¿Cómobebeelcoñacdearroz?—Unpocodespacio—dijoTrung,ydiounsorbo.Almizcladoymedicinal—.Esmuybueno.—Porfavor,siéntese.Trungcogiólasilladelescritorioysesentódelado.—Heestadobuscandoelnombredeusted—dijoSkip.Cerrósulibrodefrases.—«Than»quieredecirelcolordelcielo,yhayunaflorquetambiéntieneesecolor,yelmismo

nombre.—Nosé.¿Serefierealazuldelcielo?—Azul,comoelcielo.—Y«Trung»quieredecir«lealtad»,¿verdad?—Lealtadalpaís.Hoydíatienegraciaquelleveeseapellido.El estudio tenía las paredes llenas de estantes y los estantes estaban llenos de libros. Las dos

ventanasestabancubiertaspormosquiterasbienajustadas,igualqueelalerodelasalaprincipalylasrejas que había a ambos lados de la puerta demadera que daba al exterior. Aun así, los bichitosseguíanatacandolalámparadebutanoymuriendoenella.

—Tieneustedmuchoslibros.

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—Nosonmíos.—¿Quiénviveaquí?—Soloyoyunfantasma.—¿Elfantasmadequién?—Delanteriorpropietario.Elhombrequeconstruyólacasa.—Ah,ya.Creíaquesereferíaustedamí.ElseñorSkipapuróelcontenidodesuvasoysirvióunpocomásdewhiskyencimade loque

quedabadesuhielo.Nodijonada.—Talvezleestoymolestando—dijoTrung.—No.Agradezcolacompañía.Elamericanoseterminósucopa.—YocreíaqueeraustedJudas—dijo—.PeroesustedmásbiencomoCristo.—Esperoqueesoseabueno.—Esloquees.¿Quiereunpocomás?—Mevoyaterminarelmíodespacio.Elamericanodijoeninglés:—Haidoustedahí.Estáustedahí,¿verdad?¿Cómoesllevardosalmasenelmismocuerpo?Esla

verdad,¿no?Esquiensomosrealmente.Elrestosolosomoslamitaddeloquetendríamosqueser.Estáustedahí,estáahí,perohamatadoustedparallegarahí.Hamatado…¿qué?

Trungnolopodíaseguir.Y resignarsea laverdad, la resignaciónúltima, ladesesperaciónque se cuela en la liberación,

¿dóndesehablabadeesascosasentodosaquelloslibros?En silencio, el americano se sirvió otra copa y se la bebió despacio. Trung se quedó, aunque

estabaclaroqueelamericanonoqueríaconversación.

AlamañanasiguienteregresósuamigoHao.LamujersirvióeldesayunoyTrungsesentóacomerconSkipyHao,peronotóquehabíaproblemas.

ElseñorSkiplespreguntóporsuépocaeneltemplodelaNuevaEstrella.ElloslehablarondelavezquehabíanrobadocoñacdurantelacelebracióndelTet,lehablarondelasrisasylascanciones.Los tres se comportaban como estudiantes en un ejercicio de aprendizaje de idiomas llamado«Desayunoconunamericano».

—Trung,hoy labibliotecaes todasuya.Me tengoque irahacerunencargoaSaigón.Volverémañanaamediodía.

—¿Ymevoyaquedarsolo?—Sinoleimporta.Trunglosacompañóalcochenegro.RetuvounmomentoaHao.—¿Quépasa?—Noesmásqueunapequeñareunión.—Cuéntame.—Nopuedo.Nolosé.—¿Nadagrave?—Creoqueno.Elamericanoloshabíaoído.Depiealotroladodelcoche,hablóporencimadeltechometálico

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recalentadoporelsol.—Unamigomeha invitadoa almorzar—dijo—.Uncolega.Creoquemeconviene saberqué

quiere.—Talvezhayaunsitiomásseguroparamíhastaqueustedregrese.—No,no,no.Nadiesabequeestáustedaquí.—Perosísabenqueestáusted.—Esonoesproblema—dijoelamericano.Trungnolecreyó.

***

DietrichFest,delDepartamentoCincodelBundesnachrichtendienstdeAlemaniaOccidental,cogióunvuelonocturnoenelNationalAirport cercadeWashingtonDC, ydurantedieciochohorasno tuvonadaquehacermásqueleeryecharsiestasynadaenquepensarmásqueenlascrisismédicasdesupadre.Hacíasieteuochomesesqueelviejonosalíadelhospital.Vesículabiliar;hígado;corazón;unaseriedepequeñosataquescardíacos;hemorragiasenelintestinoconpérdidamasivadesangreytransfusiones;untuboparaalimentarlodirectoalestómago;yloúltimodetodo,neumonía.Elviejosenegabaamorirse.Peroseibaamorir.Talvezyasehayamuerto,pensóél.Talvezsehamuertohace un rato mientras yo dormitaba con la cabeza caída. Tal vez ahora mismo mientras leo unaestúpidanovelademisterio.«Claude»,escomolohabíallamadoelviejocuandoéllohabíavisitadoenoctubre,concablesytubossaliéndoleportodoslosladosylosojosazulesreluciendoenfocadosalespacio.«Mira,esClaude», lehabíadichoaaquellahabitaciónconoloraorinaypor lodemásvacía,yFesthabíacontestado:«No,soyDirk»,ysupadrehabíacerradolosojos.

Alastresdelatarde,horalocal,FestaterrizóenHongKong.Lediomallasinstruccionesasutaxistaysevioobligadoasalirdel taxia faltadevariasmanzanasparasuhotelycontinuarapie.Inclusoaquelvehículodiminutoerademasiadograndeparaaquellascallesdiminutas.Consuúnicabolsaacuestas,Festsubióporunangostocallejónconescalerasatiborradodetiendassinpuertasquenovendíannadamásquechatarra.

Enunavíapúblicamásgrandecogióunciclotaxiysedejóconducirporunancianofibrosoqueteníapuestounaespeciedepañalyquelollevópedaleandoabuenritmohastasuhotel,queestabaallímismo,irguiéndoseatresmanzanaspordelantedeellos,talcomoelancianopodríahaberledichoperfectamente.Dosminutosdespuésdesubirseaaquelextrañovehículo,Festyahabía llegado.Unletreroimpresopegadojustodebajodelmanillardelciclomostrabaunalistadelastarifasoficiales,yporunviaje tancortocomoelqueacababadehacer,FestdebíacuatroocincodólaresdeHongKong.Peroelviejosediounpuñetazoenelotropuñoygritó:«¡Ventedólar!¡Ventedólar!».Festnoleenvidiaba.Asuedad,elancianosemerecíatodoloquepudierasacarseconsemejantetrabajo.PeroFestcreíaqueenlosnegocioshabíaqueobrarconjusticia.Senegó.Encuestióndesegundossevioacorraladoporunmontóndeciclotaxisyrodeadodeconductoresconpañalesdetodoslostamañosque parloteaban y echaban chispas.Hasta le pareció ver un cuchillo.Un botones furioso salió delhotel y los ahuyentó a todos con una serie de gestosmágicos de lamano que parecían golpes dekáratehaciafuera.Elancianonosemovió.Preferíamorirse.Festlediolosveintedólares.Subióasuhabitaciónydurmiótodalatarde,sedespertóalasdosdelamadrugadayleyóunanovelacortadeGeorgesSimenoneninglés.Llamóalaoperadoradelhotelypreguntósipodíahacerunallamada

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internacionalaBerlín,peroelnúmerodesumadreestabaenalgunapartedesubolsa,asíquelodejóestar.Últimamente la llamaba con frecuencia, casi a diario en las últimas semanas, ahora que ellaestabalidiandoconeldeclivedelasaluddesupadre.

Alasochoseduchó,sevistióybajóal lobbyparaencontrarseconsucontacto.Bebieroncafé,sentados el uno delante del otro en enormes y cómodos sillones de caoba. El contacto era unamericano, joven, impresionadopor sumisiónyunpoco santurrónacercade su rol.AlprincipiosolamenteledijoaFestadóndeiba.Porsupuestoqueélyasabíaadóndeiba,llevabaelbilleteenelbolsillo.

—¿Tieneustedlosdocumentosidentificativosparamí?El jovense inclinóbruscamenteparahurgarensumaletíndecuero,que teníacogidoentre los

pies.—Tenemos dos versiones para usted.—Le entregó un sobre de papelmanila—.Mientras esté

desempeñandosumisión,usaráelquetieneelvisadodeentradaconlafechamásantigua.Destrúyaloantesdemarcharse.Parasusalidauseelquetieneelvisadomásreciente.

—¿Cuálesladuraciónestablecidaparalamisión?—¿Quieredecir de acuerdo con losvisados?Elque tiene la fechamás recientedicequeusted

entróen…¿quépone?Eloncedefebrero,creo.Asíquetendráustedquequedarseenelpaíshastaentoncesporlomenos.Peroelvisadoduraseismeses.

Nolegustabacómosonabaaquellodeseismeses.Peroelpropósitodeunvisadoconfechadedos semanasmás tardeeraafirmarquehabíaentradoenelpaísdespuésdelperíodode lamisión.Entendió,portanto,quenohabíanplaneadoqueduraramásdedossemanas.

Fest se puso el sobre en el regazo, pellizcó el cierre, abrió la lengüeta y levantó el extremoabiertopara echarunvistazo al interior.Dospasaportes alemanes: sacóunoy leyó el nombredelportador:ClaudeGunterReinhardt.

—Interesante.MihijosellamaClaude.Porelviejo.Ytambiénpormihermano,elhéroemuerto.—Caeloquehaymásamano.—Porsupuesto.Unameracoincidencia.La cara era la de él. Siempre había tenido un poco de pinta de niñomalcriado, pero la barba

cubría la blandura y le hacía parecerse un poco, o eso creía él, a Sigmund Freud o ErnestHemingway.Vestidotalvezparecíafondón,peroélsesentíarobusto.EnEstadosUnidosinclusoleteníanhaciendocursosqueincluíanunentrenamientofísicobastanteduroparalasoperaciones.Peroyateníatreintayseisañosydosmeses.Aquellonopodíacontinuar.Dehecho,élhabíapensadoqueyasehabíaacabadosutrabajoenAmérica.

—Entraustedconsupasaporte.Elqueseaqueestáusandoahora.—Porsupuesto.Mientrasestabapagandolosbollosyelcaféylevantándoseparamarcharse,elhombrehizogala

de una pachorra insufrible ymencionó, como de pasada, la hora y el lugar en que Fest tenía querecibirinstruccionesenSaigónyelsantoyseñaqueteníaquedar.

Fest ya no confiaba en los conductores de Hong Kong. Se saltó el almuerzo y salió para elaeropuertocondoshorasdeantelación,llegósinproblemasysequedómirandocómoelrestodelospasajerossecongregabanallíparaviajarasuscasas:asiáticosadineradosyjovialesqueregresabandesusvacacionesenHongKongoenBangkokoenManilaconbolsasde tiendasen tonospastel,

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sonriendoyhastariéndose.Élnosabíamuybienquéhabíaesperadoencontrar,quizáalosmiembrosatribulados de una población diezmada, hombros caídos, caras tensas, la verdad era que no habíapensadomuchoenaquellaguerra,nuncahabía esperado ir a lamisma, lohabíanmandado, estabaseguro, de forma desacertada, como a todo elmundo. La azafata le dio una bolsa de viaje colorpúrpuradeVietnamAirlinesyéllasostuvovacíaenelregazomientrascontemplabalasnubesdesdearriba y se dedicó a dormitar hastamedia tarde, cuando lamisma azafata le tocó el hombro paradecirlequeestabandescendiendohaciaTanSonNhut.

En una terminal deteriorada y abarrotada de soldados tanto americanos como asiáticos, con elsuelo atiborrado de cajas y de equipaje, encontró a su hombre, un negro que sostenía en alto unletreritoquedecía:«IMPORTACIONESMEEKER».

—SeñorReinhardt—dijo—,mellamoKennethJohnson.¿Vienealguienmás?—Nolosé.—Yotampoco.Peroaceptamosatodoelquevenga.Unhombrerisueño.Novinonadiemás.—¿Cómohaidoelvuelo?—Todoslosvuelosterminanenelsuelo.—Esoesloquedicenlospatos.Joder—dijo—.¿Aquiénseleocurrenestossantosyseñas?—Nolosé—dijoFest,ynoañadiónadamás,aunqueentendíaqueprobablementeaquelfuerael

momentomásindicadoparahacerunchiste.Salieronporlapuertaprincipalaunahileradetaxiscuyosconductoressepusieronasaltarya

agitarlosbrazos,yJohnsondijo:—Lo tiene usted todo listo a nombre de Reinhardt en un sitio llamado el Quan Pho Xa. Sus

documentosllevanelnombreReinhardt,¿verdad?—Correcto.—Muybien.Puedeirse,señorReinhardt.—Noloentiendo.—Yollegohastaaquí.Melimitoaverificarlallegada.—Yaveo.—Meveráustedunmomentomañana.Solounmomento.—¿Enlaentregadeinstrucciones?—Sí.Solounmomento.—¿Yusaréelmismosantoyseña?—No.Yoestaréahíparapresentarloausted.SeestrecharonlamanoyKennethJohnsonlometióenuntaxi,hablóunmomentoconeltaxistay

semarchó.—¿Hablaustedinglés?—Sí,señor.Unpoco.—¿Sabeusteddóndeestámihotel?—Sí,señor.HotelQuanPhoXa.—¿Quéquieredecir?No recibió respuesta. El taxi entró en la ciudad propiamente dicha y recorrió una avenida

atiborradadeedificiospintadosdecolorrosaoazuloamarillo,acontinuaciónaminorólamarcha,sedetuvo,avanzólalongituddeunpardecochesysevolvióadetener.Elconductorledijoqueera

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AñoNuevo.Todoelmundoestabayendoaalgunaparte.—¿QuéeselAñoNuevoestavez?—preguntóFest—.¿AñodelPerro?¿AñodelaCabra?El taxista dijo que no lo sabía. Alrededor de los vehículos más grandes fluía una corriente

zumbante de motos. Pasó una que llevaba a una pasajera sentada a mujeriegas, con los tobilloscruzados y leyendo una revista. Los motores escopeteaban humos de escape. Las palmeras noparecíandemasiadosanas.Festcontemplóauncuartetodechicosdelacallequeestabanociososenlaacera,jugandoalascartasyapostandocigarrillos.

¿PorquélohabíanparadoenHongKongpararecogerunosdocumentospreparadosenSaigón?El trafico se reanudó.En las lápidas de un cementeriominúsculo vio emblemas con forma de

esvásticas,ytambiénesvásticaslabradasenlaspuertasdelpequeñotemplo.Laimagenloescandalizó.Nuncahabíavistoesvásticassalvoenfotografías.Incluyendodosotresfotosdesupadre.Festbuscóconlamiradaseñalesdetráficoymonumentos,intentandoregistrarlotodoconlamente,ubicarseasímismo.El tratamientomásbien secoquehabía recibido amanosdeKenneth Johnson resultabamuyelocuente.Suscolegassolamenteloqueríanbienlejos.Talvezlohabíanmandadoallíaporunamericano,talvezaporelmismoKennethJohnson.

Estaba lloviendounpoco,peronosintiómás fríocuandosaliódel taxiparaentrarenelhotel.Frentealaentradahabíaunamujersentadaensandalias.Supusoqueallínosealojabanamericanos:lamujereralaúnicaproteccióndellugar.

Mientras se registraba, lasdos chicasquehabía en la entrada, la recepcionistay su ayudanteobiensuamiga,sededicaronacantarletrasdecancionesininteligiblesconlamúsicadesuradiodefondo.

—¿Cómotellamas?—ledijoalarecepcionista.—Thuyet.—Thuyet,¿puedohacerunallamadatelefónicainternacional?—No,señor.Solocable.Solotelegrama.Llevabauna faldaazulyunablusablancaalmidonada.Se interesóporella.Unacaraextrañay

delicada.Nadadejoyasnidemaquillaje,aunqueprobablementetodasellasfueranputas.Sediounaducha,secambióderopaybajóa lacalle,preguntándosedónde ibaaencontrarun

teléfonoquepermitierahacerllamadasinternacionalesparahablarconsumadre.Yaeradenoche.Alolejos,porencimadelaciudad,loshelicópteroshendíanelaireconsusaspasylasbalastrazadoraselevaban sus haces en dirección a las alturas tenebrosas. Por encimadel horizonte retumbaban lasbombas.Másabajo,unsinfíndebocinasypequeñosmotores.Radiosdondesonabalamúsicaridículadellugar.

Los bordillos estaban cubiertos de sacos de arena. Caminó por la acera rota, sorteando lossocavonesylospiesextendidosdelagenteylasmotosaparcadas,perseguidopormendigosychulosdeputasyniñosmaliciososydescaradosqueleofrecían«cigarrillos,hierba,polvo,U-globe,opio».

—Pan—dijoél.—NohaypanporelfelizAñoNuevo—leexplicóunvendedorcallejero.Renunció a toda esperanza de encontrar un teléfono y cenó en un sitio donde las camareras

llevabanminifaldasrojasconflecos,sombreritosdevaqueroyelegantescinturonesdeplásticoconpistolerasvacías.UnadeellasledijoquedebidoalAñoNuevohoynohabíapan.

Festhabíavistolosletrerosypancartasqueanunciaban«ChucMungNamMoy»ysupusoqueleestaban deseando «Feliz Año Nuevo», aunque lo mismo podrían haber significado «La Peste Es

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Terrible».Se despertó en plena noche, igual que le había pasado la noche anterior.Oyó disparos afuera.

Buscóatientaslamosquiteradelacamayconlacabezagachacruzólahabitaciónysearriesgóaecharunvistazoporencimadelarepisadelaventana.Unamujeribaporlacallellevandounfaroldepapelencendido.Lamanoquebalanceabaelfarolporsumangodealambreparecíaunagarra.Asulado pasó corriendo un grupo de niños por la calle, tirando petardos. Oyó música y voces quecantaban.Regresóalacama.Suhorariodesueñotodavíanohabíacambiado,aquellanochetampocodormiría.Teníados librosyya loshabía leídolosdos.Elventiladordel techozumbabaamáximavelocidad, pero no le refrescaba.Al otro lado de la ventana la locura continuaba.A él le parecíaabsurdoqueunagenterodeadadeguerraportodaspartessedivirtieraencendiendoexplosivos.

SequedóenlacamareleyendoaGeorgesSimenon,sequedódormidoalamanecerysedespertósobrelasdiezdelamañana.

Pocoantesdesucitaalahoradelalmuerzo,cogióuntaxihastaMapasyPlanosSungPhoo,queporloqueleaseguróeltaxistaestabaapocasmanzanasdelhotelysinembargoresultabadifícildeencontrar.Dentro,unjovenenérgicolosaludóeninglés.CuandoFestleexplicóquequeríaelmapamás actualizado que tuvieran de la zona, el joven le hizo subir unas escaleras angostas y lo llevóhastaunasalallenademujeressentadasantemesasdedibujobajounaseriedetubosdeneónblancocirculares, y muy pronto se encontró de vuelta en la mañana de Saigón provisto de tres rollosenvueltosenpapelmarrónyatadosconcordel,tresmapasrotuladosenfrancésycoloreadosamano:VietnamdelNorte,VietnamdelSurySaigón.

Eraundíasoleado,luminoso,calurosoybrillante,consombrasnegrassobrelasacerasdebajodecadaárbol.Caminóunamanzanayparóuntaxi.EltaxistaledijoqueporculpadelAñoNuevonopodíaencendereltaxímetroyqueleibaacobrarunmontóndedinero.Irritado,Festsebajó,cogióunciclotaxihastasucitayllegó,deacuerdoconsurelojdepulsera,concuatrominutosdeantelaciónalrestauranteGreenParrot,unestablecimientomuyestrechoqueseparecíamuchoalvagóncafeteríade un tren, conmesas para dos personas—y solo para dos— a lo largo de ambas paredes, y unpasillo en el medio. Ningúnmaître le dio la bienvenida, solamente un joven detrás de una cajaregistradora,queenarcólascejas.

—¿Hablaustedinglés?—lepreguntóalcajero.—Sí,porfavor.—¿Estánequipadosustedesconcisterna?—Perdón,noentiendo.—Quesitienenustedesdesagüe.—Noséquétúdice.—¿Dóndetienenelbaño?—Sí,señor.Alfondo.Sesentó.Casitodoelmundoquehabíaenellocaleravietnamita.Asolotresmesasdeélhabíasentadounamericanoalquereconociódesuanteriormisiónenlas

islas Filipinas, el sobrino, creía él, del fornido coronel a quien tanto le gustaba bromear con losfilipinos.Unaráfagadecalidez,terrenofamiliarbajolospies,unamigoconquientrabajar,oporlomenosunconocido.

Losrequisitosbásicosdeloficioestablecíanquenosedebíansaludarentreellossinunsantoyseña. Fest se encaminó al lavabo de hombres, pasando cerca de lamesa del americano.Apoyó su

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paquete tubular en la pared húmeda, se lavó las manos y esperó tres minutos, hasta que fueronexactamentelasdoceymedia.Cuandosalió,elamericanohabíasidoreemplazadoporunamericanodistinto,quelosaludóconlamanodesdeunamesadistinta:eraJohnson,elquelohabíarecogidoenel aeródromoeldía anterioryhabíadesaparecido tandeprisa.Sentadodelantedelnegrohabíaunoficialvietnamitauniformado,congafasdesoldeaviador;sobrelamesaalaqueestabansentadosnohabíanadamásqueunpaquetedecigarrillos.

JohnsonselevantóalacercarseFest.—SeñorReinhardt,lepresentoalmayorKeng.—Esunplacer—dijoKeng,yextendióelbrazoparadarlelamano.—¿Dóndepuedosentarme?—Cojamisitio—dijoJohnson—.Yoestoyllegandotarde.Estáustedenbuenasmanos.—¿Sonasuntoslocales?—¿Quéllevaahí?—Mapasdelazona.Haceunosminutosqueloshecomprado.—Acompáñemealapuerta.En la entrada, Johnson le entregó una tarjeta de visita en la que figuraba el nombre «Kenneth

Johnson,deImportacionesMeeker».—En caso de que surja algún imprevisto, vaya al sótano de la Academia de Idiomas de las

FuerzasArmadas.Heescritoladireccióneneldorso.Alsótano,¿deacuerdo?Lorecibiráunmarineamericanoyustedleentregaestatarjeta.

—Muchasgracias.—Solamentecomoúltimorecurso.Enningúnotrocaso.—Sí.Leentiendo.Últimorecurso.Unavezmás,elnegrosedesvaneciócomosifueraunfugitivo.Festsemetiólatarjetaenelmonedero,tomándoseuntiempoextraparaestarsolo.Otrocontacto

nativo.Aquello quería decir que era elmismo tipo de asunto que en las Filipinas. En lamesa, elvietnamita se había quitado las gafas de sol para examinar el menú. No parecía que se hubieracambiadoeluniformecaquidesdeeldíaanteriorpor lomenos,pero llevabalasbotasnegrasbienrelucientes.Asuntoslocales.AFestnolegustaba.

Sesentódelantedesucontacto.—SeñorReinhardt,¿quéquierecomer?—Nada.—¿Nada?¿Yunté?—Unté,estábien.Ypan,siesposible.—Claroqueesposible.Yohepedidopho-ban,sopadeterneraconfideos.Aquíesmuybarata.Sinlasgafasdesol,losojosdelmayorKengseveíanpequeñosynegrosybruñidos.CuandoFest

examinaba lascarasque lo rodeabanpodíaver lasdiferenciasentreellas,y sinembargo todas lascaras,incluyendoladeaquelhombre,eranidénticasasurecuerdode,porejemplo,larecepcionistaThuyet,odetodaslasdemásquehabíavistoenaquellaciudad.Elidiomadeaquellagenteteníaunsonido imposible. Fest se dio cuenta de que ahora era el único cliente blanco de todo elestablecimiento.

Senegóabajardelburroysolamentecomiópanybebiótéaguado.Elmayorlepreguntóquéhabía visto de la ciudad, echó dentro de su sopa de fideos una ensalada de verduras y de brotes

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blanquecinosysepusoasorberlaávidamente,usandounospalillosesmaltadosparatodo,incluso,dealguna forma, para beberse el líquido, y a continuación se puso a hablarle de su época deuniversitarioallíenSaigón.

—¿Legustaaustedsubaguette?—Sí—dijoFestconsinceridad—.Esmaravillosa.—Noshanquedadomuchascosasdelosfranceses.—Yaveo.Claro.Kengapartóaunladosucuencovacío,cogióuncigarrillodesupaqueteysesacóunencendedor

delaguerrera.—¿Puedoofrecerleuncigarrilloytambiénfuego?—No,gracias.ConunamiradaqueFestinterpretócomodedesprecio,obiendedecepción,elmayorencendióla

llama.—EsunencendedorColibrideLondres.Debutano.—¿Esteesunbuensitioparahablardetrabajo?—Porsupuesto.Esporesoporloqueestamosaquí.Tengocosasparausted.—Extendióelbrazo

hacia el suelo de entre sus pies, hasta casi tocar con la barbilla la superficie de la mesa, y seincorporóconunmaletínmarrónenel regazo—.Tengoelmaterial.—Eraunpaqueteenvueltoenpapelmarrónyatadoconcordel—.Ahoratieneusteddospaquetes.¿Hadichoquetienemapasahí?

—Sí.—Mepreocupabaquefueratalvezunrifle.—No.¿Esoeslapistola?—Sí.Useelsilenciador.—¿Eslaqueyopedí?—Esunaautomáticadeltreintayocho.—Yopedíuncalibreveintidós.—Notenemosnadatanpequeño.—¿Mevanadarfotosdevigilancia?—Hastaelmomentonohahabidovigilancia.—¿Quémepuededecirdelobjetivo?—Todavíanomelohanrevelado.Selodiránausted.—¿CuántotiempopuedoesperarpasarenSaigón?—Demomentonohayuncalendariopreciso.—Medijeronquerecibiríaelcalendarioenestareunión.Kengsetomósutiempoparaterminarseelcigarrilloyaplastarlabrasaenunceniceropequeñoy

sucio.Juntólasmanossobreelregazo.—Hemosperdidoalhombre—dijo.AFestleparecióqueelhombresemostrabadivertido.¿Yahoraqué?Cualquiercomentariosobre

semejanteincompetenciaparecíainnecesario.—Estoyaquíúnicamenteporcortesía—dijo.—Loencontraremos.—¿Me entiende usted o no? El queme vaya ome quede depende por completo demí. Esmi

decisión.Asíestánlascosas.

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—Yo solamente puedo informarle. Y entonces usted tiene que tomar su decisión—anunció elmayor,comosiFestnoacabaradedecirexactamentelomismo.

—Muybien,infórmeme.¿Quiéneselobjetivo?—UnmiembrodelVietcong.Festnodijonada.—Nomecreeusted.—Aquíyatienenaunpardeejércitosparamatarvietcongs.Kengencendióotrodesuscigarrillosconsuprodigiosoencendedorplateadodebutano.—Un par de ejércitos, sí. Y hoy hemos traído a un tipo extra, que está almorzando conmigo.

Refuerzos.Ahora sí que Fest le creyó. Aquel hombre estaba furioso. Posiblemente la extravagancia de

aquellaoperaciónleresultabaofensiva,yhabíadecididoconsiderarlaunsimpleentretenimiento.—Puedodecirlequeessencilloencontraranuestrohombre.Losamericanosestántrabajandoen

ello.—Oseaqueloconoceusted.—Puedo ser un poco más específico. La verdad es que no tenemos su ubicación, y estamos

intentandoobtenerinformaciónmásespecíficasincausaralienaciónalafuente.—Tienenustedesunafuenteperonolaquierenponerenpeligro.—Correcto.Debemostenercuidado.Enesteasuntonopodemosponerleunapistolaenlacabeza

anadie.¿Mesigueusted?—Estenoesmiterreno,mayor.—Necesitamosnuestrasfuentesparausarlasenelfuturo.—Entiendo.—Entretanto,tenemosunpuntodeentregaseguroparamensajescercadesuhotel.—Quierootro.—¿Dospuntosdeentrega?—No.Solouno.Ellavabodeesterestaurante.Debajodelapileta.—¿Vaacomprobarloustedtodoslosdías?Esbastantemolestiavenirhastaaquí.—No.Ustedlocomprobarádentrodetresdías.Elmensajeledarálaubicacióndeunnuevopunto

deentrega.Elmayorsepasóunminutoenterosincontestar.—Novoyapelearmeconusted—dijoporfin—.Peronopongaelnuevopuntodemasiadolejos

deaquí.—Entonces,¿estamosdeacuerdo?—Estamosdeacuerdo,señorReinhardt.Se separaron, y llevando losmapasy el arma en sus paquetes respectivos,Fest salió conpaso

firmeabuscaruntaxi.Estabasudandomuchoperonoaminorólamarcha,desafiandoacualquieraque se interpusiera en su camino, a losmendigos que se agolpaban a su lado para enseñarle susmuñones,suscabezasabolladasyasusniñospequeñosesqueléticosyplagadosdeúlceras,¿Yquéquiereeste,atacándomeporel flancoparaofrecermeopio,U-globeyhierba?¿YquéesesodeU-globe?EranpasadaslastresdelatardecuandollegóalQuanPhoXa.

A la mañana siguiente se trasladó. La pequeña recepcionista Thuyet estaba de servicio en laentrada.

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—¿Semarcha?—dijoellaalversubolsademano,yélledijoquesí.Mientrasesperabaunvehículo,lepreguntóalachicaporelnombredelhotel.—Quieredecir«Enlaciudad»—dijoella.—Yaveo.—¿SemarchaustedaEuropa?—Tengoqueviajarmucho.—Ah,ya.Esbuenoparalosnegocios.—EstamosenAñoNuevo,¿no?—NosotroslollamamoselTet.—FelizAñoNuevo.Ellaserio,comosiéllahubierasorprendidoconsuingenio.—¡FelizAñoNuevo!—dijo.—¿EselAñodelPerro?¿DelaCabra?¿DelMono?—No.ElAñodelMonoyaacabado.AhoraesAñodelGallo.Unahoramástardeseregistróenlahabitación214delhotelContinental.Eraunlugarfamoso,un

pococaroyprovistodeaireacondicionado.Almorzóenunrestaurantedelaplantabajaqueestaballeno de europeos y americanos. Después bajó a la plaza de delante, donde parecía que estabanteniendolugarsieteuochocelebracionesalmismotiempo,cadaunadeellasimpávidarespectoalasdemás,todasbajoelescrutiniodetodaunaseriedefigurasarmadasyataviadascongranvariedaddeuniformesycascos:policíalocal,policíamilitaramericana,infanteríaamericanayvietnamita.

Festhablóconunconductordeciclo,queloacompañóandandohastaunacalle lateralyallí lepresentóaunachicaenuncaféy luegolepropusoacompañarlosa losdosaunahabitacióndeunhoteldelqueFestnohabíaoídohablarnunca.

—Iremosamihabitación—dijoél.Elconductorleexplicóestoalachica,yellaasintió,sonriente;rodeólapartesuperiordelbrazo

deFest con los dosbrazosy le apoyó la cabeza en el hombro.Supelo intensamentenegroolía aextractodevainilla.Talvezfueraexactamenteesoloqueusabacomoperfume.Élnoqueríaestarconella, pero era necesario hacer algo así. En aquellas operaciones había aprendido que él venía encalidaddedepredador,queteníaqueviolarlatierra,queteníaquealimentarsedesugente,queteníaquecometeralgúnpequeñocrimenparaponerdesuladoalosdiosesdelaoscuridad.Asíelloslodejaríanentrar.

***

RichardVosssepasólamañanaenlaembajadaleyendoyordenandotelegramasquehabíanllegadoelfindesemanaconladesignación«Clasificado»,locualqueríadecircasicualquiercosa.Todoloimportanteyahabíasidoresuelto,peroalguien—cualquiera—deOperacionesInternasteníaqueverhastalaúltimapalabra,esaeralanorma.«Mándaloclasificado—lehabíadichounavezsuprimerjefeenLangley—,onololeerán.»Aélnoleimportabaquelodejarandelado.Lopreferíaairdecopas con diplomáticos extranjeros y semidignatarios vietnamitas, y si Crodelle alargaba elalmuerzoqueteníanconSkipSandshastabienentradalatarde,élpodríaregresaraquí,revisarlosnuevostelegramasyencontraralgunaexcusaparaquedarseysaltarselahoradelcóctel.

A mediodía se marchó de la embajada, bajó la calle y cruzó Tu Do, pasando por entre la

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muchedumbredevendedoresambulantesydegentedefiestaquellevabantodalasemanahaciendoimposibleeltráficodevehículosdecuatroruedas.Aaqueltrayectotancortohabíadestinadotreintaminutos;aunasípasabandiezminutosdelahoracuandoaparecióanteélelGreenParrot.

SkipSandsestabadepieanteellocalbajoelsoldemediodía,secándoseelsudordelascuencasocularesyconaspectoconfuso.¿Yacasonoloestamostodosúltimamente?,pensóVoss.Skiphabíaganado peso. ¿Y acaso no lo hemos ganado todos también? ¿Acaso no estamos todos gordos ysudorososyconfusos?

Vossabriólaportezueladeltaxiylehizoseñasparaqueentrara.—¡Cuántotiempo,amigomío!Vamos,semehaocurridounsitiomejor.—Bien.Larguémonos.—Sandsentróy se sentóa su lado—.Hevistoaun tipoquenomecae

bien.—¿Aquién?—AalguienqueconozcodeManila.Movámonos,¿deacuerdo?Necesitounpocodeairefresco.—Cruceelrío—ledijoVossaltaxista.—¿QuétepareceelRex?—Nopodemosiralcentro—dijoVoss—.Tienencontrolesportodaspartes.¡EltíoHononosva

apillarconlaguardiabaja!Estamostotalyabsolutamentepreparadosparaloquepasóhaceunaño.—¿Quépasaalotroladodelrío?—Nadadenada,hermano.Escomolavidareal.Unasmonjasabrieronunrestaurantefrancésel

añopasado.—¿Monjas?¿Ysabencocinar?—Cocinandenarices.Todavíanohayclientes,peroyavendrán.—Unpuentenobueno—dijoelconductor—.Yocojootropuente.—Adelante,sáqueseunextra—dijoVoss.—¿Cómoestálafamilia?—dijoSands.—Demaravilla.Nolosveodesdeabril.MeperdíelcumpleañosdeCeleste.—¿Cuántosañostiene?—Joder…No,espera…cuatro.¿Ytúqué?¿Todavíaportucuenta?—Esometemo.—¿Deltodo?¿SinprometidaenAmérica?—Todavíano.Completamentesoltero.Cruzaron el puente hasta el lado este del río, donde los juncos y los restos abigarrados de las

embarcacionesimposiblesdehundirseapiñabancontralaorilla.—Joder,elríoapestapeorquenunca.—Bienvenidootravez.—Gracias.Creo.—No, en serio.Me alegro de verte—dijo Voss. Y lo decía de verdad—. ¿Cuánto tiempo has

estadofuera?—Voyyvengo.—¿Oseaquehasestadofueratodoestetiempo?—Solamentehevenidounasemanaodos.Pararecopilarhistorias.¿Cómovalarefriega?—Oh,vamosganando.—Porfinalguienquelosabe.

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—¿Estásrecopilandohistorias?—Historias,sí…cuentospopulares.Cuentosdehadas.—Bueno,hasvenidoalsitioperfectoparaesaclasedecosas.—Ningunodeellosserio—.Para

loscuentosdehadas.—Sí,acuérdatedeLansdale.—NuncaconocíaLansdale.—«Conocealagente»,suscancionesysushistorias.Vossseoyósuspirarasímismo.—Suscorazonesymentes.—Sí.EsparaunproyectodelaEscueladePosgradoNaval.—¿Laquehayen…dónde?—EnCarmel.—Nuncaheestadoahí.—Unsitioprecioso.Conversacióninformal,pensóVoss,enelpabellóndeenfermosterminales.Tuvoqueponersea

darinstruccionesaltaxistayasíconsiguiólibrarsedelamisma.Amuypocasmanzanasdelrío,ynolejosdelvecindariodondeseencontrabalaviejamansiónde

laCIA-OperacionesPsicológicasdondeVossySkiphabíanpasadovariassemanasviviendojuntos,encontraronelChezOrleans.

—Megustanestasenredaderas—dijoVossrefiriéndosealaincreíblevegetaciónquecubríacasiporcompletolafachada—.Apenassepuedeverporlasventanas.Intimidad.

Estoyhablandocomountonto,pensó.—¿Todavíatealojasdondesiempre?—Dondesiempreyanoexiste.Creoqueseloquedóelejército.AhoraestoyenelMeyerkord.Las enredaderas continuaban rodeando el edificio y florecían por encima de una serie de

enrejados,procurandounasombrarelativamentefrescasobreelpatioenlosado.Veníamúsicadeunaltavozenvueltoenarpilleraysituadoenloalto,enelrincónmásfrescodelenrejado—flamenco,guitarra clásica—, y por debajo del altavoz, cerca de la pequeña fuente, había tres oficiales coninsigniasenormesyamarillasdelQuintodeCaballeríaen lasmangascomiendosinhablar.Por lodemás,niunalma.SesentaronySandssepidióunSevenUpcongranadina.

—Yoquierounmartini—dijoVoss.—No me gustan las aceitunas —dijo Sands. Mientras Voss se preguntaba cómo replicar a

semejantedeclaración,Sandscontinuó—:Esperonohaberparecidouncínicohaceunrato.—Soyyoelquehahabladocomouncínico.Ymedalaimpresióndequeeramiintención.—No,no,loentiendo.Todostenemospreguntas.—Sí,ylaizquierdasecreequenolastenemos,quesomostontosyquenoshanlavadoelcerebro,

que necesitamos a alguien gritándonos al lado de la oreja. ¿Acaso se creen que son intelectuales?¿Quién quiere ser intelectual? ¿A quién le importa lo poderoso que sea tu equipo si no lo sabesmanejardeformasegura?¿Quétienenlosintelectualesenlacabeza?

—Elajedrez.—Elcomunismolelo.Vidassexualespervertidas,insalubreseinsatisfactorias.Sandsnodijonada.Sumiradaparecíaigualdelúcidaquesiempre,eigualdeciega.¿Quétiene

estodedivertido?,pensóVoss.Crodelle,eresuncabrón.

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—Skip.Skipper.¿Quépasa?—Sehamuertomimadre.—Oh,mierda.—Melocomunicaronayer.—Losiento.—Bueno,loestoyasimilando.—Supongoqueesloquetetoca.—Losé.¿Quésepuededecir?Comamos.El menú del almuerzo era ligero: ensaladas, creps y bocadillos. Voss recomendó la salade

niçoise,queprometióqueestabapreparadaconatúndeverdadperoqueSkipnoquisoporquellevabaaceitunas.Ensulugarpidiólasaladed’epinardetcrevettes,yenelínterinsededicaronaexaminarelmenú con admiración: filet de porc rôti, carré d’agneau aux pistaches, thon aux pignons de pin,aquellasmonjasteníandetodo,yademásintimidad,ydehechoellocallollevabanpersonalmentelasmonjas.Vossnuncahabíavistotantasmonjasenaquelpaís.

—EsmejorqueelClubMarítimo—ledijoaSands—.Ymásbarato,tío.Teníahambreyatacósuensaladaamododerepresalia.Sands,encambio,despuésdedarunos

cuantosbocadosdegambasyespinacas,sedistrajovisiblementedeloqueteníadelanteyempezóajuguetearconeltenedor,dibujandoremolinosensusalsadenaranjayalcaparras.Vosssesintiófatalporelmaltragoqueestabapasandoyledijo:

—CuestadecreerquelagentesepuedamorirenAmérica.Dalaimpresióndequetodalamuerteseconcentraaquí.Todalamuertedelmundo.

Skiplevantólavistaconcaradesorpresaydijo:—Esverdad.Yohesentidolomismo.—Todoslosentimos.¿TeacuerdasdelpasadoTet?—Sí.—¿Estabasaquí?—Estabacerca.—¿EnCaoPhuc?—Yendoyviniendo.—Hasestadorecibiendocorreoconbastanteregularidadenlaembajada.—Ah.¿Tútededicasalseguimientodeeso?—Hay alguien que se dedica al seguimiento de absolutamente todo. Pero ¿quién hace el

seguimientodequieneshacenelseguimiento?AsíqueCaoPhuc.Sí.HicisteisunbuentrabajoconlaOperaciónLaberinto.

—Sí,gracias.¿Lodicesenserio?Un taxi se paró delante de la puerta y, aun a través de las celosías emparradas,Voss pudo ver

quiénsalíadelmismo.—Bueno,Skip—admitió,repentinamenteirritado—.No.Laverdadesqueno.¿Quédemoniossé

yodelaOperaciónLaberinto?Soloestoy,yasabes,haciendocumplidosgeneraleseimprecisos.—Muybien.Pues tedoy lasgraciasgeneralese imprecisas.Mira,Rick—dijoSands—, talvez

podamoshablaralasclaras.—Siempre.Siempre.En aquel momento, Crodelle hizo su entrada, avanzando directamente hacia la mesa de ellos

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como si hubiera consultadounmapayhubiera trazado la ruta.Alto, anguloso, no lo bastante altoparajugaralbaloncestouniversitario,aunqueseguramentesehabíavistopresionadoparaelloenelinstituto.Físicamente,teníaaspectodeintelectualadormiladoydehombroscaídos.Nadamáslejosdela realidad. Tenía ese fuego característico de los pelirrojos. Voss siempre había pensado que lospelirrojosdejanatráslaspecascuandosalendelainfancia,peroCrodelletodavíateníabastantesenlasmejillas.Vosseraconscientedequepensabaenaquellascosasdemasiadoamenudo,dequelashabía alojado en su mente a modo de elementos irritantes —la altura de Crodelle y su tipo, suintelecto,suspecas—porqueCrodelleledabamiedo.

—¡Quierosopa!—Noestoysegurodequetengansopa—dijoSands.—¡Quéraro!¿Nohaysopa?—Paraelalmuerzono.—SoyTerryCrodelle.Sedieronlamano.—ÉlesSkipSands—dijoVoss.Crodellesesentóydijo:—Porsupuesto.—Ygritódeunladoaotrodelasala—:¡Unmartini!Yunaensalada.—Señalóel

platodeVossconundedohuesudo—.Commeça.—Yté—dijoSands.—Yté,porfavor.—¿Leesperábamos,Terry?—preguntóSands.—No pienso moverme de este lado del río. Al otro lado no hay nada más que estandartes y

banderasypetardos.¿Yqué,estáusteddevueltaenCaoPhuc?¿Oesquenuncasefue?Sandsmantuvounbuencontroldesupresenciafísica,peronopudoesconderciertasorpresa.—Supongoquetrabajaustedconnosotros.—¿Quiénessonnosotros?—Connosotros.Nosotros.LaAgencia.—TrabajoconelCentrodeSeguridadRegional.—¿Estacionadoaquí?—Devisita.Estoyvisitandosuencantadorplaneta.—¿Suprimeravisitaalpaís?Crodelleparpadeóyseloquedómirando.—Llevoyendoyviniendodeestazonadesdemilnovecientoscincuentaynueve.Soydeantesde

Kennedy.—Caray.Pareceustedmásjoven.—HepasadounpardevecesporCaoPhuc.¿Cómoestálacosaallíúltimamente?—Muchomástranquila.Deltodo.—¿Yahandesmontadoaquelcentrodetransporte?—Noconozcoelestatusoficialdeesaoperación.—Pero¿quéesloqueve?—Esdifícil saber a qué fase han llegado.—Sandsmiró a un lado y al otro como si estuviera

buscandoasucamarero—.Siloestándesmontandoosibiensehanlimitadoaabandonarlo.Peroyodiríaqueeltemplobudistavuelveaserengranmedidaelcentrodetodo.

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—¿EstáocupandolazonaelVietcong?—Amínomehanmolestado.—¿Quélehanmandadoaustedquehagaaquí?—Recopilarcuentos.Cuentostradicionales.—¡Nomevengaconchorradas!Rickpensabaquesehabíamarchadousteddelpaís.—Voyyvengo.—¿Oseaquelabaseestádesmontada?—Nolollamábamosbase.Zonadeaterrizaje.Sandsparecíainexplicablementesatisfecho.—¿SepasabausteddevezencuandoporelPurpleBar?—Soloalahoralegítimadeloscócteles.—¿Sabequé,Skip?Mealegrodequenosconozcamosporfin.—Eh,perdonadme—dijoVoss,yseexcusóunmomento.Fuealoslavabosyencontróunurinariollenodecubitosdehielo,unaextravaganciafascinante.VossdeseóqueCrodellehubieratardadomásenllegaralalmuerzo.Talvezasíhabríanpodido

hablara lasclaras,élySands:¿conquiénvaahablarunosinoesconunhombrequesemarcha?LlevabasolamenteseisañostrabajandoparaInteligencia,perolehabríagustadosalirunratodesusaguas con sigilo para meterse en una cueva y confesarse ante algún molusco gigante. Una ideaabsurda,sí.Peroqueteníaloselementoscorrectos.Aireyasfixia.Oscuridad,humedad.

Menudoputodesastremonstruosoyestúpido.Unodelosoficialesdelejércitoseunióaélenloslavabos,untipoconcaraaguileñayelpeloal

rape, con galones de mayor en los hombros y el parche amarillo en la manga del Quinto deCaballería, un hombre sin secretos, un hombre que hacía sus necesidades delante de los demás.Mientraselmayormeabameditabundosobreelmontóndehielo,Vossselavólasmanos,selassecóconunadelasservilletasdetelaquehabíaapiladasjuntoallavaboytirólaservilletaaunacestademimbre.Aquel lugar teníaclase.Porencimadelespejoamarillentoyneblinosoque ledevolvía laimagendesucaracomosifueralavíctimadealgunainvasiónpegajosadehepatitis,habíapintadasconcaligrafíaprecisayfemeninademonjalaspalabras:

Bonappétit!

CuandoVossregresóalamesa,losotrosdosyaestabanconeltemaqueCrodellehabíaqueridosacaracolación,almenosparaempezar—elartículodementedelcoronel—,yCrodelleseestabaexhibiendo.Siempreselasapañabaparaparecerdespreocupadamenteexpertosobrecualquiertemaquesalieradeformaespontáneaenlaconversación.AVossestonoleimportabademasiado,perosíle importaba que en aquellosmomentos estuviera intimidando a Sands.Aquel rollo de rastrear la«influenciadelmando»…Crodellesepreguntabasielcoronelhabíatenidoencuentalopeliagudoque era aquel terreno. ¿Acaso los hermanosMayo no habían escrito del doctor Gorgas que «loshombresquealcanzanlagrandezanotrabajanconmayorcomplejidadqueelhombredelacalle,sinoconmayorsimplicidad»?¿Acasoelproblemadeintentarmostrarla«influenciadelmando»medianteexperimentos no era justamente que todos esos experimentos se habían llevado a cabo paradeterminar el impacto de una intervención, un tratamiento o una nueva droga, en lugar de parademostrarlapresenciaoausenciadeunfactorcausativo?IgualquehabíapasadoenelsigloXVIIIcon

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laspruebasdeLindparauntratamientoparaelescorbuto,oporponerunejemplomásreciente,conlaspruebasparalasvacunasdeSalk.Porotrolado…¿acasoSandshabíaoídohablardelaComisiónparalaFiebreAmarilladelsigloXIXylaentoncesnuevadisciplinadelabacteriología?¿Deltrabajode Walter Reed y James Carroll? Tal vez sí que se podían hacer pruebas, pero ¿cuál sería el«marcador» experimental de la «influencia del mando»? Y la lucha contra la malaria y la fiebretifoideaylafiebreamarilla,¿acasonohabíasidounaguerratangrandecomolaqueteníanahora?¿AcasoJesseLazearnohabíamuertocomounmártirenunhospitaldeLaHabana,abatidopor lamismaenfermedadqueestabaayudandoaconquistar?Lasguerrasexigíanideasnuevas,ytalvezelcoronelhabíaobtenidouna:¿nopodríamosquizá,soloquizá,inyectarloselementosquepensábamosque podían provocar la «influencia del mando» dentro de una serie de canales de informaciónseleccionadosdeantemano?ACrodellelevencíalacuriosidad,undeseogenuinodecomunicarseleimpregnabalosrasgos,seponíalasmanosdelantedelacara,conlosdedosextendidos,conlacabezainclinadahaciadelante,apuntandoconcuidadoyconfervor,comosicadaunodesusconceptosfueraunapelotadebaloncesto;peroaver,¿cuáldetodosaquellospersonajeseraelcoronel:WalterReed,elmeticulosoinvestigador,obienGiuseppeSanarelli,eltipoquesiempreteníaunarespuestarápidaaunapreguntaequivocada?ElcoronelnecesitabaaunArístidesAgramontequetomaracartasenelasuntoyhurgaraenloscadáveres.¿ConocíaSkipeltrabajodeAgramonte?Yahoraquelopensaba,¿sabíaSkipqueconsubigoteysufrentealtaseparecíaaAgramonte?

Aquellaúltimapreguntanoparecíadeltodoretórica.Crodellehizounapausa.Yesperó.VossnopodíasaberacienciaciertasiSandserauntontoosieraelBudaenpersona.¿Dedónde

lesalíaaquellaposedivertidadeojosrelucientes?—Diosbendito—dijoSands.—Sí.Esmuyfuerte.—¿Quéinteréstieneustedentodoesto,Terry?—Puramente académico. El control de enfermedades era una pasión que yo tenía en la

universidad: hice el primer añodemedicina.Luego lo dejé y acabé cayendo en nuestromundo, ynunca pensé que vería nada de aquel campo que se aplicara a nuestro campo, el campo de lainteligencia.

—Noesmásqueunborrador.Nolovaaterminarnunca.—Loquehacefaltaesdemostrarlaexistenciadela«influenciadelmando».Loquehacefaltaes

aislaresosdistintoscanalesquesubenporlacadenadelmandoeinyectaralazarinformaciónentreestos canales para ver cuánto se distorsiona. ¿Cómo se «limpia» un canal, por decirlo de algunamanera?Pueshacenfaltacanalesenlosqueunointerfierayotrosquesemantenganinalterados.Esonoesnuevo.Volvemosalafiebreamarilla,lapolio,etcétera.Loquesenecesitadeverdadsondosomás organizaciones de inteligencia sin conexión entre ellas: conseguir que participen algunos denuestros aliados. Eso sí sería interesante. Podría llevarnos a alguna parte. Podría provocar unarevolución.Pero¿acasonecesitamosempezarunaantesdequenecesitemosempezaruna?

—Noestoysegurodeentenderaquéserefiereusted.—Resulta notable que él haya puesto la cuestión sobre lamesa.El coronel.O sea, ¿es posible

crearmarcadores,marcadoresdeinteligencia,yseguirlosarribayabajoporlacadenademandoyalolargodelaslíneasdecomunicación,yextraerconclusionesacercadenuestraformadehacerlascosas?Esmuyfuerte,colega.Sutíoestodounrevolucionario.

—¿Loconoceenpersona?

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—Hecoincididoconélunpardeveces.Mecaebienelcoronel.Esunapersonalidadconsiderable.O sea, Cao Phuc, un buen ejemplo. Por lo que hemos podido averiguar, convenció a alguien, alcomandanteborrachodeunodelosgruposdehelicópterosdeasalto,paraqueaseguraraunazonadeaterrizaje en aquella montaña en el sesenta y cuatro, y luego cuando llegó el Vigesimoquinto deInfanteríamásomenospidióprestadaunasecciónylatuvoallíduranteveinticuatromeses,usandounpretextotrasotro,ytuvoalVigesimoquintosirviendoaesazonadeaterrizajecomosifueraunabase.Luegovendiólaideadequelaaldeaeraelmejorlugarparauncampamentodetransporte.Enlacimateníamediadocenadeseccionessubiendoybajandoaquellamontaña,yunhelicópteroparaélsolo.Esoestenerunapersonalidadenorme,colega.Pordesgracia,duranteloquepasóenelTet,tuvobajasyperdióunasecciónenteraquesolamentepodemosconfiarenqueahoraseanprisionerosdeguerra,ylagenteempezóapreguntarsequédemoniosestabapasandoenCaoPhuc.SinofueraporelpasadoTet,aestasalturasyatendríasupropiabrigada.¡Yesoquenotieneningunaconexiónconelejército!SalvocomoenlaceconOperacionesPsicológicas,dondecasinadielohaconocidonuncaenpersona,jamás.Lohizotodousandosupropiaautoridadpersonal.Osea,colega,lohizoabasedepelotasytrolas.¿Selopuedeustedcreer?

—Parecesaberustedmásdeélqueyo.—Haymuchoqueadmirarenél.Esunguerrero.—Unhéroedeguerragenuino,Terry.—Porsupuesto, llamémoslohéroe, lesalen lasmedallasporelculo,vale…Peronoesningún

intrigante, no es de esa clase de gente. Él sospecha que todo elmundo está en su contra, pero secomportacomosinotuvieraunsoloenemigoenelmundo.¿Sabeustedloquealguienmedijounavezsobreelcoronel?«Susenemigossonsoloamigosalosquetodavíanohaderrotado.»

—FueJohnBrewster,¿verdad?—¿Quién?—Yamehaoído.—Ahoraquelomenciona,esposiblequefueraJohn.Nomeacuerdo.Mire.Vamos.Mire…Sutío

tieneunalecciónqueenseñarnos,yesalecciónes:Confíaenlosnativos.Élnuncasehaseparadodeellos.Trabajaconellos,estáunidoaellos.Peroalhacerlo,seseparadenosotros,denuestragente.

—Creoqueestáustedmalinterpretandoloshechos—dijoSkip—,yluegoexagerandosupropiamalainterpretación.Oporlomenosestápermitiendoqueesainterpretaciónsehinche.

—¿HaleídoElamericanoimpasible?—Váyasealamierdaahoramismo—dijoSkip.—Chaval,menudarapidez—dijoVoss—.Yopensabaqueantescharlaríamosunrato.—Sí, sí. —Crodelle parpadeó. Y nada más—. Estaba viviendo en el Continental cuando lo

escribió.—GrahamGreene.Enlapuertadealladodelcoronel.—Skip…todoelmundocreceydejaatrásasusmentores.Esinevitable.—Mire—dijoSkip—.Yaloentiendo.—Explíquelo,pues.—Explíquelousted.—Yo ya lo he estado explicando. Si el coronel quiere comprobar empíricamente sus teorías,

entoncesquepropongaunestudiodeasignaciónaleatoriausandodossistemas:unodecontrol,yotroenelqueintroduzcaalgúnagenteocatalizadorcuyoefectopuedamedirenrelaciónconelsistemade

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control que no tiene el agente.Recuerde: las viejas propuestas de qué podía causar la polio, en laépocaenquesimplemente ibandandopalosdeciegoconloquefueraquese lesocurría:hecesdeperro,porelamordeDios.Inyectarlessupropiaorinaalospacientesdepolio.Esohaceelcoronel.Inyectarle meados al aparato del servicio de Inteligencia. O sea —dijo Crodelle—, hasta enWashingtoneralegendarioporsusalmuerzoshidráulicosdetreshoras.

SandssedirigióaVoss:—Yalamierdatútambién,Voss.—Sepusodepie—.Yhablandodemeados,tengoqueecharuna

meada.—Fundeunpocodehielo—dijoVoss.—¿Qué?—Yaloverás.Sandssealejó,yCrodelleseloquedómirandohastaquehuboentradoenelrestaurante.—Caray,Terry.¿Porquéhastardadotanto?—Rick,¿conocestupapelenesto?Vossnocontestó.MirócómoCrodelledabaunsorbodesumartini.—¿Hayunaventanaahídentro?—Novaasalirporlaventana.—¿Cómolosabes?—Seestádivirtiendodemasiado.—¿Ytú?AVossse leocurriópedirotracopa,pero ledaba lasensacióndequeelcomentariosobre los

almuerzoshidráulicoshabíahechoqueaquellofueradesaconsejable.—Siélpresiona,ledevolverélapresión.Solamenteparamantenerelequilibrioamifavor,¿de

acuerdo?Ylascosassevanaacelerar.—Esoestáclaro.—Amímeparecebien.Ytú tienesunpapelque jugar.Cuandoelequilibriosedesestabilice, tú

saltasenelbalancín,yenmilado,porcierto.—Lotengoclaro.—Decaminoaquíherecogidoalgoenlatienda.—¿Enquétienda?Crodellevolvióalavidaconunaconvulsión.—¿Quieresmiraresto?—Sesacódelbolsillodelapecheraalgoqueparecíaunencendedorde

grantamaño.Losostuvoenlapalmadelamanoyapretóelcostadodelobjetoconelpulgar—.Loabresy…plaf.—Dentrohabíadoscarretesdiminutos—.Lacintaes…¿laves?¿Esecablecito?Tieneunamilésimadepulgadadediámetro,colega.

La gente del Centro de Seguridad Regional de Manila se presentaba de forma habitual en laciudad,yaVossleparecíaquelosconocíaatodos.Crodellenoeraunodeellos.SehabíainstaladoenelsótanodelaAcademiadeIdiomasyOperacionesInternashabíarecibidoinstruccionesdedarletodoloquenecesitara.YhoynecesitabaunaparatodegrabacióndelsigloXXI.

—Tenéistodosloschismesmáschulos.—Estascosasllevanunadocenadeañosencirculación.Sandsregresó.SesentóyCrodelleleenseñólagrabadora,conelcompartimientotodavíaabierto.—Contemplaesto.

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—¿Dóndeestálacinta?—Tienequedarlepocaluz,¿ves?—Unamilésimadepulgada—dijoVoss.—¿Estáencendida?—Noveoporquéno—dijoCrodelle,ycerrólatapaydejóelaparatoentreellossobreelmantel

de lino verde—. Probémoslo a ver qué tal. Estamos aquí en el Salón de Baile Aragon con elextraordinariodirectordebandaSkipperSands.Sands…¿alemán?Inglés.

—No.Irlandés.—¿Irlandés?—Mi tatarabuelo era descendiente de los Shaughnessey. Al parecer se empezó a llamar a sí

mismoSandseneltrayectoenbarco.—Unpocochaquetero.—Nuncaloconocí.Nolesabríadecir.—¿Estabametidoenlíos?—No.¿Puedopreguntarleunacosa?—Claro.—¿Loestoyyo?—ElSalóndeBaileAragonesunlugardemúsicayjuerga.Aquínadieestámetidoenlíos.—Demonios.¿Porquénomehacenelpolígrafo?—Nolodescartamos.—Quierodecirahoramismo,Crodelle.—No, Skip. Ahora mismo, no. Necesitaremos prepararlo a usted si queremos obtener un

poligramamínimamentedecente.—Cuandoustedesquieran.—Claro.Loapuntamos.—¿QuémedicedeCrodelle?C’estfrançais?—Nolosé.Sí,francés.Puedeserunaformacorruptade«Cordelle»…¿DóndeestáeltíoFrancis,

Skip?—Nolosé.Aquíenlaciudad,imagino.—¿Sabe que lo convocaron en Langley hace siete semanas, u ocho… bueno, a principios del

noviembrepasado?—Nolosabía.—No,porquenosepresentó.—Élvaadondequiere.—Sí.Ycuandoquiereselimitaasacarunapistolayadispararaunprisioneroatado.—Vengaya.—¿AcasonoejecutóaunprisioneroenCaoPhucdurantelaGranOfensivadelTet?—Nosénadadeeso.—Bueno,sesabequeustedsabealgodelasunto.Sabemosqueustedlosabe.—Estoysegurodequeloestánconfundiendoconalgunahistoriadelasegundaguerramundial.—Ah, ¿también entonces ejecutaba prisioneros? Vamos a tener que investigarlo. Pero ahora

mismoestáustedubicadoenCaoPhuc,¿no?YtambiénloestabaenelpasadoTet.¿EsCaoPhucsubase,másomenos?

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—Cuandoestoyenelpaís,sí.Voyyvengo.Lamayorpartedeltiempoestoyfuera.Tengoalgunascosasallí.

—Bueno,pasaustedmuchotiempoallí.Necesitateneralgunascosas.Cuandodecimosquetienecosasallí,estamosincluyendoalgunasdelascosasdelcoronel,¿no?Susbaúlesytodoeso.

—¿Baúles?—¿Sabe?Creoqueaquíestáelquiddetodo.Todosesostiposa losquetantoadmiramos,creo

quehastaelúltimodeelloshaperdidolafe,cadaunoasumanera.Luchamoscontraelcomunismoperonosotrosmismosexistimosenunacomuna.Existimosenunacolmena.

—¿Creeustedqueyanocreenenlalibertad?—Creoquesehanvueltoinsensibles.Silencio.—¿Quécreeusted,Skip?—dijoCrodelle.—Creoqueesdemasiadocomplicadoparahablarlo.—¿Quéhayenlosbaúles?—dijoCrodelle.Skipnodijonada.—¿Porquéelsilencio?—¿Sesuponequetengoquecontestarderepentesoloporqueustedlopreguntaderepente?—Haytres, tresbaúles.LosteníaustedenlabasedeClarkel treintayunodediciembredemil

novecientossesentayseisyllegaronconustedalamansióndelaCIA,aquíenlacalleChiLang,eldíadeAñoNuevo.

Sandsnisiquierahabíatocadosutazadeté.Suconcentracióneraasombrosa.—MegustaríapreguntarlequéestáhaciendoenCaoPhuc—dijoCrodelle.—Bueno,yonocreoquedebieraestarustedpreguntándolo.Crodelleseloquedómirandofijamente.—Demonios—dijo.Sandsledevolviólamirada.—Estáustedtrabajando—dijoCrodelle—.Estádirigiendoalgo.Algooaalguien.—¿Quiénesustedexactamente?—Muybien.Identifiquémonos.YosoyTerrenceCrodelle,oficialdeSeguridadRegional.—Felicidades.—Letocaausted.LabasedeSaigóntienedosramas,designadascomoOperacionesdeEnlacey

OperacionesInternas.¿Encuálestáusted,Skip?—EnInternas,trabajandoprincipalmenteenOperacionesPsicológicasmilitares.Crodellesereclinóensuasientoysuspiró.—InternasenPsicológicas—dijo.YVosspensó:Creoqueestáscontralascuerdas.Conunasensaciónliteraldenáuseacreciente,Vossseobligóameterlacabezaenellodo:—¿Teacuerdasde losbaúles? ¿Deaquellos tresbaúles?Seguroque sí.Nomecreoquehayas

olvidadoaquellosbaúles.¿Teacuerdasdelnombrequeponíaenaquellosbaúles?—Puesno.—¿Puedopreguntarlebajoquénombreestáustedaquí?—MellamoWilliamMichaelSands.—¿Quénombrefiguraensupasaporte?

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—Eseeselnombrequefiguraenmipasaporte.—¿Dóndeestáelescondrijodelcoronel?—dijoCrodelle.—LoúltimoqueséesqueteníaunahabitaciónenelContinental.—Tengo entendido que tiene a ciertos socios en el delta del Mekong. Una en particular. Una

mujer.—Esoesnuevoparamí.—CercadeBinhDai.—Primeranoticia.Unvehículosedetuvofuera.Skipselevantó,fuealbordedelpatioyhablóatravésdelacelosía:—Díganleaesetaxiquemeespere,porfavor.Todavíateníalaservilletametidapordentrodelcinturón.Eraelúnicomovimientoenfalsoque

Vosslehabíavistohacerentodoeldía.Regresó,dejósuservilletasobrelamesaydijo:—Elalmuerzolopagáisvosotros,muchachos.

***

Convencidodequeseestabagastandodemasiado,dequealossoldadosamericanosyaloshombresdenegocioslocalesleshacíanmejoresprecios,Festpasólatardeconlajovenaquienleolíaelpeloavainilla,quelecobrótreintadólaresporcuatrohorasenlahabitaciónconaireacondicionadodeél.Ellaseacurrucódebajodelasmantas,insistióenusarelteléfonomuchasveces—aunqueélnocreíaqueconocieraanadieaquienllamar,sinoquesolamenteestabafingiendoqueteníaconversaciones—, le estuvo tirandode la barba y de los pelos del pecho y trató de estrujarle las espinillas de lanariz;dehecho,noparódejugarconlanarizdeél,encantadaconsusdimensioneseuropeas,yengeneralsecomportócomolafulanaestúpidaqueera.IgualqueFesteraunclienteestúpido.Élpidióchampán para la habitación y ella lo rechazó, parloteando, soltando risitas, temerosa, como sirechazaralaofertadealgúnjuegodealcobaparticularmenteperverso.Festselobebióéltodo.Ellanoquisocomer.Él seduchómientrasellahacía llamadas fraudulentas.Lamayoresperanzaqueélhabía puesto en aquel hotel se había desvanecido: que sus teléfonos llegaran a Berlín y le dierannoticiasdesupadre.Lostelegramasnoservían.Élnopodíadaraconocersuparadero.Alparecer,eraposiblellamaraBerlín,peronodesdeelhotel.Elconserjehabíaprometidoarreglárselo,llevarloaalgunaparteenpersona.Entretanto,elviejopodíamorirse.Talvezyaestémuerto,pensó.Talvezsemurióayermientrasyocompraba losmapas.Talvezahoramismoestámuertomientrasyomeducho con agua tibia y enfermay una puta apesta enmi cama.La gente semuere cuando tú estáspensandoenotracosa.Asíescomova.EsohabíahechoClaude:deuntiroenlagargantaquelehabíadisparado un francotirador de la Resistencia francesa. Su padre había sido un hombre fuerte, unpatriotaalemán,conocidodeHeinrichHimmler.SuhermanomayorhabíasidooficialdelasWaffen-SS.Aquellaeralaverdad.Noeracuestióndediscutirla,ocultarlanidespreciarla.YClaudehabíadadosuvidaporlosnazis,otraverdad.PeroClaudeeramásqueunsimpledatoverídico:laleyendadelafamilia,constantementeenbocadesupadre.Muerto,ysinembargomásvivoparasupadrequeelpropio Fest durante toda la juventud de este. Le dio a la chica algo de dinero vietnamita, no leimportabacuánto,yladespidió.

Mientras los juerguistas de la plaza producían música y explosiones dignas de la guerra, la

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derrotaylavictoriacombinadas,élcenóensuhabitaciónysepreparóparaacostarsepronto.Teníaunpuntodeentregademensajes,unpuntodeencuentroyunpuntodeúltimorecurso.Enelmomentopresente, nadie podía encontrarlo, y sobre todo no podían encontrarlo sus contactos locales. Elchampán le había provocado un dolor de cabeza que ahora no le dejó dormir. Se sentó ante elescritorio de la habitación 214 y desmontó y examinó su equipo.A la pistola le habían pulido larampa y la entrada del cañón, por lo que vio. No se encallaría. La volvió a montar. Los doscargadores entraron en ella suavemente y las balas pasaron por la misma sin casi hacer ruidomientras él pasaba el tambor de un lado para otro. Tanto el silenciador como el cañón en que secolocaba eranhechosde fábrica.Alguien estabaprestando atención a los detalles.Pero la absurdareuniónenHongKong,lodeprisaquelohabíadespachadoKennethJohnson,lasensacióndequeseloestabanpasandodeunprimoaotroprimo,siemprebienlejosdelafuente…Yelmerohechodeque lo estuvieran usando…No es que no hubiera precedentes de trabajo para otros servicios deInteligencia.HacíanueveodiezañoshabíasidounargelinoenMadrid.Despuésunhombreabordode un yate enComo, Italia, que a Fest le parecía que podía ser de lamafia.Y en las Filipinas, elsacerdote americano.Ni uno de ellos enemigo de su país.Once operaciones en total, contando lapresente.Showalterlahabíadescritocomo«untrabajoconprisa»,ysinembargoShowalterloshabíaentretenidounpardesemanasantesdemencionarsiquieraunamisión,ydespuésnohabíadichonipalabra hasta unmesmás tarde, y aun entonces no habían hablado de detalles, y ahora él tenía lapistolaen lasmanos…¿Yacasomehabríanelegidoamí, sepreguntó, simehubiera llevadoa lafamiliaaBerlínduranteelpermisodeverano,siyonohubieraevitadocomouncobardevolveramirar el lecho de muerte de mi padre, si no me hubiera pasado el permiso enseñándoles NuevaInglaterra a Claude y a Dora desde las ventanillas de un coche de alquiler? En Cape Cod habíanaparcadodetrásdelacasadeveraneodeShowalter.Lasdosfamiliasseconocíanbienentreellas,seconsideraban amigas, de hecho, pero él nunca había trabajado con Showalter en ninguna clase deoperación.Showalternomostrabaningunailusión,ningunalocontaminaba,eraporesoporloquesecaíanbien.EraporesoporloqueFestconfiabaenél.Quedaosotrasemana,quedaosundíamás,yporsupuestoquesequedaron,eraunsuperior.HastaMegselodecía—aundespuésdedossemanascon cables eléctricos saliendo de sus enchufes de la cocina por la ventana; con tres invitados queagotabanelaguacalienteyledejabantodaslastoallasmojadas;conDoraquejándosedeLangleyydespotricandoensuinglésfluidosobrelosidiotasdelosamericanos;yconeljovenClaudequesecomíalacomidadesuneverayquenoparabadehablardelaescuelaydedeportesporqueMegerahermosa y le escuchaba—, hasta Meg se lo decía: Quedaos un poco más, nos encanta, estamosbastantesolosaquíenlosarenales.AlcabodedossemanaslassonrisasdeMegsevolvierontensasysemezclaron con un sudor invisible. El estrés sacaba a la luz su fuerza y su elegancia y parecíasubrayarsuinteligencia.CharlessellevóaFestalextremomásatlánticodeCapeCod,losdossolos,para enseñarle una casa en la playaque estabapensando en comprarse.Fest la elogió, peronuncahabríavividoenella.Lascontraventanastraqueteabanbajounvientoinfatigableylaespumaazotabalaorillaaescasosmetrosdelospilaresenqueseapoyabalacasa.Showaltersalióasufuturobalcónfrentea su futuroocéanoAtlántico,con los rizosgrisesalborotadosen todasdireccionescomosifueraunpoeta.

—HasurgidounasuntoenSaigón.Megustaríaasignárteloati.Esuntrabajoconprisa.—¿EnSaigón?—Oalrededores.

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PrimerolasFilipinasyahoraaquello.¿Yporquémandarloalaotrapuntadelmundoparaunasimpleoperacióncuandoaquellaregiónestabaabarrotadadeejércitosenteros?

—Esoestáadieciséismilkilómetros—dijoFest.—Uncálculobastantepreciso.—¿MeestásasignandoalProgramaFénix?—NoesFénix,ytampocoesICE-X.Noqueremosquenuestragentesepanadadeesto.—Esunobjetivobastantedelicado,imagino.—Supongo—dijoShowalter,enuntonoquesignificabaqueacasonoleparecíatantounobjetivo

delicadocomounaoperaciónabsurda—.Lehemosprometidonuestraprotección.—Yaveo.¿Cuántomásmepuedescontar?—Nada.HablaremosmásenLangley.Cuandoestemosdevueltaeneltrabajo.—¿Voyatenernoticiasdelosmíosprimero?—Consideraquelasestásteniendoahora.—Nohacefaltacomprobarlo,¿no?—Nohacefalta.YDirk…—Sí,Charles.—Esunaguerra.Notecortesyusaunarmadefuego.Ahora él poseía una automática del 38, un arma muy americana y bélica. Con ella podía

probablemente acertar con un margen de ocho centímetros a doce metros. Más allá de eso laencontrabaimpredecible.Notanbuenacomoelsumpit,lacerbatana.Pero¿cómoibaasaberlohastaqueapuntaraydisparara?

Nadadeequipo,nadadediscusióndelosdetalles,nadadeentrenarseconelarma.¿Por qué no podían haberle dadodocumentos americanos aquí enSaigón, pasaportes oficiales

con visados vietnamitas auténticos? ¿Por qué parar en Hong Kong para recoger documentosalemanes?

Porque los documentos eran falsificaciones. El BND no tenía nada que ver con aquello. Y sinembargoShowalterhabíamásqueinsinuadoqueteníanelapoyodelBND.Sinelsello invisibledelBNDélnoeranadamásqueuncriminal.

Habíaunalínea.Yéllahabíacruzado.Perotambiénlahabíancruzadoloscomunistas.¿Criminal,él?EnChina,enUcrania,elloshabíanmatadoamásgentedelaquenuncaselehabríapasadoporlacabeza al criminalAdolphHitler.Esono sepodíadecir envoz alta, perohabíaque recordarlo.Aveces,también—afindecombatirasemejanteenemigo—,unocruzabaasuladodelalínea.

Supropiacobardíaloasqueaba.Lecausabaundolorfísico,enelestómago.SisehubieraidoaBerlínenveranoenvezdeaNuevaInglaterra…Sinohubieraevitadounúltimomomentoconsupadre, que no lo quería…Da lomismo, yo estaré contigo. Anciano padre, tú luchaste contra loscomunistasyyotambiénluchocontraellos.

***

SkipSandssaliódeSaigónporlaRuta1abordodeunafurgonetacomercialymásadelanteencontróa alguienque lo llevóhastaCaoQuyen enunamotoque tirabadeunpequeño remolque llenodetablonesdedosmetrosymediodelargo,unúltimotramoquelellevócasidoshoras.

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Enmitaddelcamino,lesorprendióverelChevynegrodelcoronelqueibaendireccióncontrariaysepusoahacerseñalesconlasdosmanos,hastaelpuntodequecasiperdióelequilibriodetrásdeljovenmotorista.Demasiadotarde.ElChevycontinuósinpararse.SandsreconocióaHaoperonovioaquépasajerosllevaba.

Al llegar a lamansión encontró un Ford sedán blanco aparcado delante. El coronel lo estabaesperandodentro,eneldivándelasaladeestar,dandosorbosdeunatazadecaféymirandounlibro.

—¿DóndeestáTrung?—Sehaido—dijoelcoronel—.Hemostenidoquesacarlodeaquí.Nopudoentenderporquésesintiótanestrepitosamentedecepcionado.Trasladarporunosdíasal

agentedobleeraloqueélmismohabíasugerido.—¿Adóndehaido?—Metemoquenotelopuedodecir.—Muybien,estoydeacuerdo,comomedidatemporal…—Noestemporal.Seacabó.—¿Loestáustedcancelando?—Sehaacabadoparati.Porloquerespectaatuparticipación.—Pero¿porqué?—Dejadehacerteeltonto.Skipnotuvorespuestaparaaquello.—Siéntate,Skip.Tengoquedecirtealgunascosas.Alparecer,elcoronelhabíatraídocartas:habíaunpardesobresencimadelamesilladelcafé.—¿Sonmiscartas?—preguntóSkip.—Siéntate,porfavor.Élsesentóenlasilladedelantedeladelcoronel.—¿Quélibroesese?—preguntó.Sutíolevantólaportada:Losorígenesdeltotalitarismo.—HannahArendt—dijo.—LamujerquecubrióeljuiciodeEichmann.—Cuandonopuedodormir,leo.Yhaceunatemporadaimpresionantequenoduermo,socio.No

pegoojo.Sostengoestelibroenlasmanosymirocómopasanlaspalabras.—Dejóqueellibroseabrieraporunpuntoalazaryleyóenvozalta—:«…enlasfasesfinalesdel totalitarismoapareceunamaldadqueesabsolutaporqueyanosepuedededucirdemotivacioneshumanascomprensibles».—Tiróellibrosobrelamesa—.Encadapáginahayalgoqueteencogelaspelotas.Estosjudíosestánobsesionados. Y hacen bien. Obsesionados con su destino. Y sin embargo… no mienten cuandohablandeaquénosenfrentamos.Lamaldadabsoluta.

Skipvioquedentrodelatazadelcoronelhabíacafésolo.Puedequeestuvierasobrio—Skipnoolíaaalcohol—,peroparecíabastanteborracho.

—TutíaBrideysequieredivorciardemí.—Perosiescatólica—dijoSkip.—Yanadieescatólico.Norealmente.Yohaceañosquenovoyamisa.—Oseaque…¿haperdidoustedlafeenDios?—Puessí.¿Ytú?—Claro.

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Elcoronelrespiróhondo,comosifueraasuspirar,peroloúnicoquehizofuemirarfijamenteaSkip.

—SeñorTrung,loadmiroausted—dijo.Skipmiróporencimadelhombro.Estabanlosdossolos.—¿Quieredivorciarse?¿Esolehadicho?—SemarchódeMcLeancuandomemarchéyo.Elañopasado.Oelanterior.ElañoantesdelTet.

¿Te acuerdas de cómo antes contábamos el tiempo en relación con el asesinato de JFK y ahora locontamosconelTet?

—¿Yellaselodijoentonces?—Melodijoperoyonolacreí.Ahorasílacreo.Sehaprometidoconunabogadoyhainiciado

lostrámitesdeldivorcio.Bienporella.Nopiensopresentarbatalla.—¿Lehadadoalgunarazón?—Diossabequenolefaltanrazones.—Pero¿algunaenconcreto?¿Onoesasuntomío?—Dicequeestoyenestaguerraparaescapardemisfracasosenlavida.Ytienerazónsobrelode

escapar. Estoy aquí porque no quiero volver a mi país. ¿A qué voy a volver? A un lugardesconcertante lleno de tíos raros afeminados e izquierdosos. ¿Y qué hago si vuelvo? ¿Qué pasaentonces? ¿Me retiro aCarolina delNorte ymemuero y consigoque le ponganmi nombre a unpuentedediezmetrosquecruzaunarroyo?Peroenfin,ellatienerazón.Unaguerracontralamaldadabsolutaesunaexcusamaravillosaparadarlelaespaldaatodolodemás.Asíquesedivorciademí.

—Ylehaafectadoausted—dijoSkip—.Lehaafectadodeverdad.Ahoraelcoronelsepermitióunprofundosuspiro.—Últimamente hay muchos problemas por aquí. Mis marrones personales, este asunto de

Trung…lodetumadreytodo.Losiento,Skip,losiento.—¿Lodemimadreolodelosproblemasengeneral?—Todo.Lodetumadre,claro…Lamentocualquiercosadelaquesemepuedaculparamí.Que

sonlamayoría.Peroningunodenosotrosvaasalirmuyfelizdeaquí.Hemosperdidoestaguerra.Hemosperdidoelánimo.

Hable por usted mismo, tuvo ganas de decir Skip, pero reconoció aquello al instante comooptimismoreflexivo.

—¿Quiereunacopa?—dijo.—No,noquierounacopa.—Muybien.—Tómalatú.SkipllamóaTho.—ElseñorThohahechocaféylohemandadoasucasa—dijoelcoronel.Skipfuealacocina,sesirvióuntragocortoyselobebiódegolpe.Sesirvióotroyvolvióasu

asientoparaenfrontarseasutío,contodossusmovimientosdebilitadosporelterror.Hizounsaludomilitarconelvaso.Aquelsegundotragolehizollorarlosojos,yelcoroneldijo:

—¡Esosíesparahombres!Y lodijode forma tanartificialyafectadaqueélmismosequedóhelado.Permaneciósentado

conlatazadecaféagarradaylosojosentornados,ySkipnosabíaporculpadequéluz,porqueeldíayacasisehabíaacabado…

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—Amínomereconfortaríannilosángeles—añadió.Skip fue consciente de sentirse comoun niño delante de un adulto—delante de sumadre, por

ejemplo,enmediodelosataquesdesoledaddeella—,denoquerernadamásquedejaratrásaquelmomento,dequereroír:«Esoestodo,yapuedesirte».Deestaresperandounfinaaquellaviolacióndelaintimidad.

Durantemuchossegundossutíolomirófijamentecomosinosehubieranvistonunca.—¿HasoídoeldiscursoinauguraldeNixon?—No—dijoSkip—.Soloalgunaspartes.—Ha hablado de mantener compromisos, de preservar nuestro honor… no de ganar. No del

futurodeVietnamnidelfuturodeesosniñosalosquevemosporaquí.Nixon…Nomeimportaloque diga, se le ve en los ojos: ya ha jugado la partida enteramentalmente, jugada a jugada, y laperdemosnosotros.Asíescomoéllove.¿Aquiénvotastetú?¿Alosdemócratas?

—Anadie.Meolvidédepedirlapapeleta.—Yosiemprehevotadoalosdemócratas.Estavezamipesar.Humphreynoshabríasacadode

aquítodavíamásdeprisa,creoyo.Lospecesgordostienenvisióndeconjunto.Oseaqueperdemos.Considerando las cosas en su conjunto, no importa.Enmateria de equilibrio geopolítico, elmerohechodequehayamoslibradoestaguerrayabasta.ParaEstadosUnidoslacosaacabarábien.PeroyonoestoyluchandoporEstadosUnidos.EstoyluchandoporLuckyyporHaoyporgentecomotucocineraytuamadellaves.EstoyluchandoporlalibertaddeindividuosdecarneyhuesoquevivenaquíenVietnam.Yesomerompeelcorazón,Skip.

—¿Creeustedquerealmentevamosaperder?¿Esesoloquepiensa,enresumidascuentas?—¿Enresumidascuentas?—Asutíopareciósorprenderlelaexpresión—.Enresumidascuentas

creo… que nos perdonarán. Creo que nos pasaremos una temporada larga dando tumbos en laoscuridadyunapartedequeloquehayamoshechoaquínuncasearreglará,perosenosperdonará.¿Ytúqué?¿Túquécrees,Skip?

—Tío,estamosenunmarrón.Unmarróntotal.—LamitaddelaAgencianosehaqueridometerenestaguerra.YotelleguéaofreceriraTaipei,

Skip.Telopodríahaberconseguido.—Nomerefieroa lacampañadeAméricaaquí.Merefieroanosotros,austedyamíyaesos

otrostipos.Tenemosproblemasconnuestrapropiaagencia.—¿En serio? No pasa nada. Nunca he sentido ninguna lealtad a ninguna organización, Skip.

Solamenteamiscamaradasenlabatalla.Túluchasparaeltipoquetienesaladerechayparaelquetienesalaizquierda.Esuntópico,perolostópicossuelenserverdad.

—Yotambiénlocreo.—¿Enserio?—Merefieroalodeparaquiénselucha.Deverdad.—Will…¿quéhasestadohaciendoenSaigón?—Sí—dijoSkip—.Esoleestabadiciendo.—No,nomeloestabasdiciendo.—Merefieroaqueestabaempezando.—Entoncestermina,¿vale?—Sí.RickVossmeenvióunanotajuntoconelpaquetedecartas.Queríaverme.Penséquetenía

queir.Asíque…

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Desearíanohaberañadidolacoletilla,comosifueraunniñoenlaescuela.Elcoronelhizoelgestodelevantarseperoalfinalnosemovió,atrapadoensuspropiasmareas,

frotándoselacaraconlasmanos.—LaotranochecenéconPitchfork.Creoquenocruzamosnidospalabras.Noslimitamosaestar

allísentadosenlaterrazadelClubMarítimodejandopasarelrío.Nohablamos.Nonoshacíafalta…»Undíaenelcampamento,enBirmania,cuandoyoteníafiebreytodosdabanporsentadoqueme

ibaamorir,élmediounhuevo.Lohirvióylequitólacáscaraymelodiotrocitoatrocito.Unadelascosasmásgrandesquenadiehahechopormí.Unactodeprofundagenerosidad.Peroélnoseacuerda. Cree que debió de ser otra persona. Pero fue él. Yo me acuerdo de quién fue. AndersPitchforkmediounhuevo.

»Sobrevivir a aquellos terrores juntosy luego sentarse sinmásy compartir una comida enunsitiocomoelClubMarítimo,compartirunpequeñolujo…notienesniidea.Esmejorquecuandomihijita,lapequeñaAnnie,levantabalamanitacuandoteníacuatroañosyyoechabaaandarcogiendolamanodemihija,Will,ymirabahaciaabajoylaveíamirarme.Elamorentrecamaradasesasídeintenso.

»Yloúnicoquepuedodecires:AlamierdaRickVoss.AlamierdaRickVossyloquehahecho.Yoyanopuedohacernadamás.Nopuedoenseñarlenisiquieraunasomodeloqueélsehaperdido.Nuncalosabrá.Loúnicoquepuedohaceresdecirle:Voss,vetealamierda.

Sandsesperóaestarsegurodequehabíaacabado.—Coronel,ustedyyosomosamigos.—Sí,Skip—dijoelcoronel—,túyyosomosamigos.—Estamosjuntosenesto.Elcoronellevantósutazadecaféylasostuvoconambasmanos.—SelocontastetodoaVoss,¿verdad?—¿Lohice?—¿Nolohiciste?—Almorzamosjuntos.—¿Yquétepreguntó?—Creoqueteníacuriosidadpordóndehabíaestado,peronoledioportunidaddepreguntármelo.

Estoydemasiadoconfuso,paraserlesincero.—¿Ytúledejastequedisfrutaraunestadosimilardeconfusión?—Sí,señor.Estoybastantesegurodequesí.Habíaotrotipo,Crodelle.—Noloconozco.¿Crodelle?—DeSeguridadRegional.—¿Quiénmás?—Nohabíanadiemás.Almorzamos.Perohevistoalalemán.—¿Quéalemán?—AltipodeSanMarcos.YdeMindanao.—¿Elqueseidentificabacomoagregado?¿DelBDN?—Seadedondesea,ahoraestáenSaigón.—Entoncesesquepasaalgo.Razóndemáspara sacardeaquíaTrung.¿Elalemánestabacon

Voss?—No.Aélloviantesdelalmuerzo.

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—Alalemán…—Sí.Estabasolo.Puedequenotenganadaqueverconnosotros.—Sinoestáconnosotros,estácontranosotros.—SequedómirandoaSkip—.Demosesopor

sentadodetodoelmundo.—Nohereveladonada.—¿QuéestabashaciendoconVoss?—Almorzar.Almorzaryalmorzar,nadamás.—EsetalCrodelle.¿Quéquería?—Vaaporsucabeza.Ladetodosnosotros.—¿Ytedejaronir?—Sí,señor.Elcoronelselevantócondecisióncomosinecesitaraalgo,peroloúnicoquehizofuequedarse

junto a la ventana y contemplar el jardín, con las piernas muy rectas, las pantorrillas fibrosasperfilándoseenlapartedeatrásdesuspantalones,laenormebarrigasobresaliendohaciadelante,lasdos manos en la parte de atrás de las caderas, en el trasero, casi en el espinazo. Una postura deanciano.Larespiraciónbruscayentrecortada.Asfixiadoporlafuerteemoción.

—SientounaespeciedelástimaporVoss—dijoSkip.—Noesverdad.Noteengañes.ContodoslosrespetoshacialamadredeRickVossycontodala

esperanzaporeldestinodesualma,esehombreesuncondenadohijodeputa.Se volvió a sentar en el diván y se tiró de los bajos de los pantalones. Se sacudió unasmigas

invisiblesdelatelaquelecubríalosmuslos.—Skip, escúchame. Por los sitios estrechos no se puede viajar codo con codo. Por los sitios

estrechosunosubesolo.Tetienequebastarconcreerquetienesaalguiendetrás.—Yoestoydetrásdeusted.—No. Creo que ya has empezado el proceso de salvar tu propio pellejo. Adelante, termina.

Sálvate.—Tío…—CreoquemevolveréaAmérica.Meconvocaronhacesemanas.—Losé.MelodijoCrodelle.—Haréloquepuedaparamantenertealmargen.—Tío,quédeseaquí.—Yamehepuestomanosalaobra.Nohayvueltaatrás.—Merefieroaaquí,justoaquí,aestamansión.Ellosnoconocenestesitio.—Sisabenalgo,conoceránestesitio,porqueselohabrásdichotú.—Nuncamelopreguntaron.SolamentemehablarondeCaoPhuc.Comosicreyeranqueaquello

esmibase.—Esodicestú.—NosabennadadeCaoQuyen.Nada.Quienseaquenoshadelatado,noselohadicho.—Skip,yocreoquehassidotú.—Tío,no,no,no.—Entonces,¿quién?Stormno.—Yocreoqueno.Peronolosé.—No.Élnosentiríalapresión.Esunmono.Esoesloquenosgustadeél.

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—¿Hao?—Haoesunbuenhombre.YTrungesamigosuyo.Imposible.—¿YMinh?—¿Lucky?Tampocopareceestarenposicióndequelopresionen.Yloconozcodesdequeeraun

chavalín.—Entonces,¿porquémeacusaamí?Meconocedetodalavida.Mipadreerasuhermano.—Nolopuedoexplicar,Skip.Esalgoquehayenti.Notieneslealtaddeningunaclase.—Tío,coronel…yonolohetraicionado.—¿Acasosoytonto?—Tío—dijoSkip—.Yoloquieroausted.Nuncaharíanadaparecido.Loquierodeverdad,tío.—Puedequeseaverdad.Esposiblequesí.Peroelamory la lealtadsondoscosasdistintas.—

EchóunvistazoaSkip,conunanecesidadaterradoraenlamirada—.¿Quéesloquepiensoafindecuentas?Piensoquelosjóvenesencuentransufortunaenlaguerra.Ymealegrodequetúlohayasconseguido, joder,Will.—Se reclinó de nuevo en su asiento y suspiró—.Habla conmi culo:meduelelacabeza.

Las responsabilidadesdeSands—aunqueno teníaninguna—leevitaronasistir a los funeralesdelcoronel,nialquesehizoparalafamiliadossemanasmástardeenBostonnialmilitarquehuboalmessiguienteenBethesda,Maryland.Alcoronel lohabíamatadoapuñaladasunaprostitutaenDaNang;alcoronellohabíadegolladoelhermanodesuamantevietnamitaeneldeltadelMekong;elcoronelhabíamuertotrassufrirtorturasobienhabíasidoasesinadoporagentesenemigos.Deestamanera la historia de su defunción fue evolucionando a lo largo de una serie de informes hastaconvertirseenalgomásomenosrespetable.

Cuando Sands recibió la noticia estaba detrás de la mansión, mirando cómo tres muchachosazuzabanaunbúfalodeaguaparaqueselevantaradelhoyoenfangadoenelqueestabaalotroladodelarroyo.Unodeellosledabapatadaseneltraseroconeltalóndelpiedescalzomientraslosotrosdoslepinchabanelespinazoconpequeñasvaras.Elbuey,olosindiciosdelmismo,susnarices,sucornamenta,lascaderashuesudasylascimasdevariasdesusvértebras,nosemovió.Unamujer,lamadredeloschicos,alguienconautoridad,aparecióentrelasbuganvillasenflorquehabíadetrásdeellosysepusoatentaralanimalconunamuestradeverduras.Ycomounacontecimientogeológico,lamasaenormedelmismosedesprendiódel limo.Sandshabíaoídoelmotordeunvehículoyelruido de portezuelas al cerrarse. Solo fue consciente de ello después de que pasara. Mientras sedirigíaalacasa,HaoyMinhsalieronasuencuentro.Haollevabavariascartasenlamano.Algoenla manera en que Minh se quedó atrás, cierto reconocimiento acongojado de la necesidad deintimidadentresutíoyelhombredelacasa,hizoqueSkippreguntara:

—¿Quépasa?—SeñorSkip,talvezlevoyadecirqueelcoronelhamuerto.—¿Muerto?—Muymalacosa.Noslohadichoelseñorsargento.Mehapasadounacartaparausted.Incapaz de decir nada, Skip los llevó al comedor y los tres se sentaron a lamesa.Uno de los

sobresveníasinsello.Éllocortóconlahojadesucortaplumasdelosboyscouts.

Skip:UnoschicosdelosTresPisosdeArribamehansacadodeunagujeroparahacermepreguntas.Parecequelasnoticiasnopuedenser

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peores.Dicenqueelcoronelnoshadejado.Quenohasobrevividoalamisión.Alguienlehaapagadolaslucesperonosesabequién.Oesodicen.Esoes todo loque sé.Averiguarémás.Encuantodescubraquiénycómo tepasaré la informacióny juroporDiosquemevoya

ensuciarlasmanos.Mevoyabeberlasangredeesoscabronazos.

BSStorm

—Nomelocreo.Nomelopuedocreer—dijo,perosíselocreía.—LohadichoelseñorJimmy.Buscópalabrasyseoyódecirasímismo:—LaseñoraDiuestáhaciendoelalmuerzo.NiHaoniMinhcontestaron.—¿DóndeestáTrung?—EstáenelMekong—dijoHao—.Nosotroslollevamos.—¿Sabeesto?—Todavíano.Minhvaairallí.—Puedodarleausteddineroparaél.—Conunpocobastará.—Deacuerdo.—LaseñoraDiuestá…¿hancomido?Voyaavisarla.Unpocodesopa.Voyaavisarla.Asombradopor el poderde las pequeñasnecesidadespara remontar unmomento comoaquel,

pidióquellevaranlasopayelarrozalamesa.Susinvitadoscomierondespacio,guardandotodoelsilencioquepodían,mientrasSkipdejabasucomidasin tocaryabría losotrosdossobres,quedehechoconteníantrescartasyunpoema.

30deenerode1969

QueridoSkip:SoyelpastorPaul,de laPrimera IglesiaLuteranadeClements.Esperopoder llamarte«Skip»yesperoqueno te importeque te

escribaunaslíneassobretumaravillosamadre.Estoysentadoaquíamimesa,yellasolíavisitarmeysentarseenelsillónquehayjustodetrásdeella.Puedodecirqueestáaquíconmigoahora,porlomenosenespíritu.Acabodellegardesufuneral.Descubrirencuántagentedejóhuella,cuántasvidasenriqueció,resultaverdaderamenteinspirador.

Noteconozcopersonalmente,perotumadreeraunamujermuyqueridaenlaparroquia.Noveníatodoslosdomingosalservicio,peromevisitabaunavezodosporsemanaenlaoficina.Veníaporlatardesolamenteparasaludarycharlarunpoco,yamenudomepreguntabaporel sermónqueestabapreparandoparaelpróximoservicio.Cuando laconversaciónsecentrabaen loqueyo teníaenmenteyenloqueibaadecir,porlogeneralsignificabaqueeldomingosiguienteacabaríallevandoalgomásintensoamicongregación.Ella contribuía así de forma natural. Demanera que aunque no la llamaría una asistente regular los domingos, estaba presente connosotrosmuchosdomingosenespíritu.Ysuespíritupermanececonnosotros.

Enlosúltimostresmesesmásomenostumadresevolviómuyespiritual.Pareciótenerungiroespiritual.Pareciónotaralgo,fuecasicomosisuespíritunotaraquesuviajeestabaponiendorumboacasa.Confíoennoestarsiendoatrevidoaldecirteesto,oenno«estarmepasando»,comodicenloschavales.

Teestoyadjuntandoestanotaconunacartaqueellaestabaapuntodemandarte.Laencontrédobladaylistaparaserenviada.Elsobrenoestabasellado,peroibadirigidoati,asíquelevoyapegarunselloyaecharlaalcorreo.(Nolaheleído.)

PaulConiff,pastordela

PrimeraIglesiaLuteranadeClements(«PastorPaul»)

QueridohijoSkipper:Hoyesdomingo.HeleídounpoemaenlaseccióndominicaldelKansasCityTimesdeunpoetaquemurióhaceseisañosydelque

yonuncahabíaoídohablar.Lorecortaríaparamandártelo,peroquieroquedarmelaversiónimpresa,asíquelocopiaréytendrásque

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leerlodemipuñoyletra.Teescribítresocuatrocartasquetuvequetirar,porquemeparecióqueeranpocoalentadoras.Séqueestáshaciendoloquecrees

que esmejor para tu país.O por lomenos confío en ello. Confío en que no estés simplemente atrapado. La gente se puede quedaratrapadaencosasynoencontrarelcaminoadecuadoparasalir.Yyaestoyotravezcomosiempre.Basta.

Tengodoscitasconelmédicoellunesyeljuevesdelasemanaqueviene.Lesencantahacerpruebas.Nadagrave.Perodesdemicambiovitalhetenidoproblemillas.Ahídondeestástienesbuenaatenciónmédica,¿no?Estoyseguradequeteproporcionanlamejor.

Deacuerdo,ahíestáelpoema.Norima,yparacogerleelsentidohayqueleerlovariasveces.Teavisodequeesunpocotriste.

ELLAMENTODELAVIUDAENPRIMAVERAporWilliamCarlosWilliams(1883-1963)

Lapenaesmijardíndondelahierbanuevaardecomotantasveceshaardidoperonoconelfuegofrío

quemeenvuelveesteaño.Treintaycincoañosvivíconmimarido.

Hoyelcirueloesblancoporlosmontonesdeflores.

Montonesdeflorescarganlasramasdelcerezo

ycoloreanarbustos,unosamarillosyotrosrojos,perolapenademicorazónesmásfuertequeellas

porqueaunquemealegrabanantaño,hoylasveoymegiroparaolvidar.Hoymihijomehadichoqueenlosprados,

albordedelosbosques,alolejoshavisto

árbolesconfloresblancas.Yosientoquequerría

irhastaallíycaersobreesasflores

yhundirmeenlaciénagaquehayallado.

¡Yateavisé!¡Esmuytriste!Oseaquenolomandaré.Loheleídoymehesentadojuntoalaventanaconlasmanosenelregazo.Helloradotantoquemehancaídolaslágrimasenlasmanos,hastalasmismasmanos.

Y luegohepensado,bueno,esoesunpoema.Unpoemano tienequerimar.Solamente tienequerecordartecosasysacártelasdedentro.

Piensaenti,

Tumadre

QueridoSkip:Supongoquehasoídodecirquelavidamundanadebilitalavidaespiritual.Esoesloquetodoelmundonosdice.Loquenoparecen

entender es que la cosa funciona exactamente al revés, y la vida espiritual estropea la vidamundana.Le da a todos los placeres unregustodesagradable.LoúnicoqueparececorrectoesseguiraDios,aunquenosiempreresultaagradable,nisiquieranatural.

Asíqueavecesquieroserunamujernatural,ydiezsegundosdespuésdehaberlosido,dehabermecomportadocomouna,quieroescaparmeconDios.Quenomecaedemasiadobien.Mecaesmejortú.

PerotengoqueseguirlavoluntaddeDios.LavoluntaddeDiosparamíesloqueseaquetengodelanteparahacer.Elromancenoformapartedeello.Escaparmeparatenerunaaventura.EscaparmeaCaoQuyen…

¿Captaselmensaje?Talvezsí.Talvezno.Podríadecirmásperosolamentemeestaríarepitiendoconotraspalabras.

Kathy

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P.S.:HetiradounamonedayestoymandandoestanotaanombredeWilliamSands.Talvezlarecibasytalvezno.

Examinó el sobre. La carta había venido a través de la oficina de correos americana de SanFrancisco.

Adiósalasmujeresdesuvida.Yamuchomás.—¿Estánsegurosdequeelcoronelnoshadejado?¿Dequehamuerto?—lepreguntóaMinh.—Sí.Sisiguieravivoyolosentiría.Minhdejósuspalillosysetocóelpechosuavementeparaindicarellugar.—Séaquéserefiere.—Elcoronelesmuerto.Micorazónlosiente.—Sí.Estáclaro.Yotambiénlosiento.Skip se puso a mirar a su alrededor, las baldosas del suelo, las paredes, los conductos de

ventilacióncubiertosdetelarañasdelosalerosdeltejado,enbuscadepistasacercadelanaturalezadelosdíasvenideros.

Todo loquemirabaquedó repentinae inexplicablemente sofocadoporun recuerdoconcretoeirrelevante,unmomentoquehabíaexperimentadohacíadiezuonceaños,mientrasibaencocheconvarioscompañeros suyosdeuniversidaddesdeLouisvillehastaBloomingtondespuésdeun findesemanadevacaciones,conlasmanossobreelvolante,alastresdelamadrugada,losfarosabriendocincuentametrosdesilenciodecolorámbarenlaoscuridad.Lacalefaccióndelcocheemitiendoairecaliente, el olor alcohólico a hombres jóvenes dentro de un coche cerrado. Sus amigos se habíandormidoyélconducíaelcochemientrassalíamúsicade la radioy lanocheamericanaestrellada,absolutamenteinfinita,rodeabaelmundo.

***

Lamañanadel17demarzo,undíaantesdelcumpleañosdesutíaGiang,elcapitánNguyenMinhdelaFuerzaAéreadeVietnamsesentóconuncuencodefideosaunadelasmuchasmesasquehabíabajoeltoldodelaenormeestacióndeautobusesdelvecindariodeChoLonenSaigón.Teníahambre.Los fideos estaban deliciosos. Se los metió en la boca con los palillos y los sorbió con fuerza,secándoselabarbillaconunpañueloblancodespuésdecadabocado.

Lasollashumeantesdearrozygambas,todosaquellosautobuses,todoaquelhumodediésel,lasbocinasqueloestabanvolviendoloco…Talvezsesentíaunpoquitomássensiblequedecostumbreporquenolegustabairacasa.

Había dos suboficiales americanos a cargo de los soldados de infantería vietnamitas quepatrullabanporlaestacióndeautobusesdeChoLon.Habíandobladolaspatrullasdesdelaofensivacomunistadelpasadomayo,laquehabíatenidolugarjustocincomesesdespuésdelaGranOfensivadelTet.Losdossargentossereunieronconelcomandantede lapatrullaysepusieronencuclillasparaconversar.LagentedeMinhseacuclillóconlospiesplanosyrodeándoselasrodillasconlosbrazos.

Elcoronelyallevabaunmesmuerto.Minhnolohabíavistomuchoduranteelañoanterior,peroelcoronelhabíaseguidosiendomuy importanteparaél.Sin la figuradelcoronel interponiéndoseentresuvistayaquellosamericanos,ahoraestosleparecíanclaramentevacíos,confusos,sincerosytontos:niñosmonstruososqueempuñabanarmascargadas.La ideadequeestuvieran luchandodel

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ladodealguieneraestúpida.Enelautobúseligióunasientodeventanillayabrióelcristalunpocoyseabotonóelcuellodela

camisa. El vehículo salió de la ciudad por laCarretera 7, una buena carretera, construida por losamericanos, dejando atrás carros tirados por burros, ciclos y pequeñas furgonetas de tres ruedas;dejandoatrásarrozalesdonde losbúfalosabríansurcosenelbarroconaradosdeunasolapalaydonde las garzas reales y las garcetas asomabanpor entre los brotes de las secciones cercanasyaplantadas; dejando atrás amujeres que vendían gasolina en frascos de cristal y hornos de piedradondelaleñahumeabayseconvertíaencarbónparaelmismotipodepreparativosculinariosenlosquesustíasyprimasprobablementeyaestuvierantrabajandoparaelbanquetedecumpleañosdelatíaGiang.SutíoHaoqueríaqueélresolvieralacuestióndelapropiedadyelalquilerdelacasadeallí,unacuestiónquellevabaañospendiente,peroqueahorasutíoestabarepentinamenteansiosoporquesearreglara.YtambiénteníaquehablarconeltalTrung,mandarloaSaigón.

¿Yporquéirenautobús?SutíotodavíapodíausarelChevroletamericanonegro,podíanirlosdos juntos en el coche. Pues porque su tío era un cobarde a quien el tíoHuy podía comerse conpatatas.Ensuúltimoviaje,Haohabíaevitadoasucuñado.HabíadejadoaltalTrung,lohabíaalojadoen una habitación de alquiler encima de un café y ya hacía un mes que Trung se pudría allí sinconoceranadie,siesquenosehabíaescapado.

Minh desembarcó en el arcén y se compró un bollo y una taza de té en una tienda cuyospropietarios se acordaban de él y le preguntaron por su familia y le contaron que últimamentevolvían a funcionar los taxis de agua, aunque nomuchos. La aldea estaba a unos tres kilómetrossiguiendolacorrientedelríomarrón.Élfueandando.Comparadoconlaciudad,lascosasallíolíandistintas.Elaguaapestaba.Elhumodelosmontonesdehojarascaybasuraquesequemabanteníaelaromadelaleyenda,inclusolascagadasdeconejo.Todolotrasladaba…¿adónde?Aquí.Peronoalmomentopresente.Aquíhabíapescadodesdeel lomodeunbúfalomientrasasu ladoelHermanoThuhabíasostenidolacuerdadeunacometaqueondeabaalvientodelasalturas…yaentoncessuscuerdasseadentrabanenprofundidadesopuestas.Unoal institutoya la fuerzaaérea,elotroa losmonjes.

Vio poco tráfico sobre el agua. Una anciana con una cara machacada de anciana pasóimpulsándoseconlapértigaabordodeunesquife,manteniéndoseenlosbajos,ycadaempujóndelapértigaamenazabaconrobarlesuúltimoaliento.

Minhcaminóbajouncielogris,conlapenamordiéndolelagarganta.Seadentróenunaarboledadebananerosyarrancótresplátanosyseloscomió,tirandolaspielesenelaguatalcomoélyThuhabíanhechoenunmundomejor.

Se imaginó a su hermano ardiendo—lo hacía a menudo—, el cuerpo de su hermano en lasllamas,undolorespantosoporfuera,queselemetíaporlasnaricesyentrabaenél.Yluego,igualqueunmonosesostienededos ramasduranteun instante, luegosuelta laprimerayseaferraa lasegunda,dejódeserelcuerpoparaconvertirseenelfuego.

LapVungeramásqueunasimplealdea.Unmuelleextenso,unmercado,variastiendas,todoigualquesiempre,todo.

EncontróaTrungThancomiendosualmuerzoenlaúnicamesadelcafé.Lahijadelpropietarioestabasentadadelantedesuhuésped,sincomernada,mirándolofijamente,conlacaravacía.

—Hola.

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—Hola.—¿Suhabitaciónestábien?—Venaverla.Salieronysubieronlasescalerasquehabíaaunladodeledificio.Enelrellanodesdeelquese

dominabalapartedeatrás,Trungdijo:—Lahabitaciónespequeña.Hablemosaquí.—Bien.—Nodeberíaquedarmemásaquí.HayactividaddelVietcong.Aestasalturaslascélulasyadeben

dehaberoídoquehayunhombresolteroqueestáhaciendounestudioagrícolapococlaro.—Haoquiereverlo.—¿Estáaquí?—EnSaigón.Sereuniráallíconustedmañana.—¿Voyaviajarcontigo?—No.Mañanapor lamañanavayahasta la carreteray coja el primer autobúsque lleva aCho

Lon.Haoiráabuscarloalaestación.—Loqueseacontaldeirmedeaquí.Esachicaquierecasarseconmigo.Todoslosdíasmesirve

el almuerzo y me pregunta qué he estado estudiando en el campo. Es una mentira descabellada.Demasiadovaga.Mepasolanocheleyendo,yporlamañanamevisto,desayunoymevoyalcampoadormirhastamediodía.

—¿Tienemiedo?—Estoypensandoenlamisión.Minhlocreyó.—SeñorThan,elcoronelhamuerto.—¿Quiereuncigarrillo?—dijoTrung.—Gracias.EstuvieronunminutofumandomientrasTrungdeliberabayporfindecía:—Eraamigotuyo.Estristeparati.—Estristeparamí,ysignificaquelaoperacióndeustednosevaacompletar.—Otracosa.Unaoperacióndistinta.—Haoseocuparádeusted.—¿Quéplantenéisenmenteparamí?—MitíoHaohaorganizadounareunión.Haomehadadoinstrucciones.—¿Yesasinstruccionesvienendelotroamericano?—¿DeSkipSands?No.Trungnodijonada.—¿Quéproblemahay?Trungtirósucigarrilloycompusosucaraypasóporaltolapregunta,peroMinhsabíacuálera

elproblema.Trungsehabíadecididoporfin,habíacruzadoelpuenteconpasoseguroyalotroladosehabíaencontradoalcoronelmuerto.

—Señor Than, tengo entendido que mi tío tiene diversos contactos americanos. Yo sé que laamistadentreustedesesfuerte.Haoseharácargodeusted.

Sabía que no debería estar diciendo aquellas cosas, pero la fortaleza del hombre inspirabalástima.

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Minhdejóalagentedobleabandonadoasusuerteycogióelcaminoqueseguíaelviejocanal.Pordelantedeél,unanciano ibadando tironesdeunbúfalodeaguaatadoporelaronasal,yMinhsepusoaseguirlos,mientraselanimaldababandazosconunritmoselvático,llenodecompañerismoenladesgracia.Elmismohumoespesode losmontonesdebasura, lasmismascasascon techodepalmas,yporfinlacasadesutíoconsustejasdearcilladecolornaranjamanchadasdemoho,elportónbajoabierto,latapiadebloquesdehormigóndeunmetrodealtorematadaporunaverjadehierro forjado de color verde, con flores de lis puntiagudas rematando los barrotes oxidados—ahoramásoxidados—,laalambradaquellegabahastalacinturaydividíaaquellaparceladelasdelos vecinos a ambos lados, el jardín delantero con su pequeña capilla de madera y una docenaaproximadadeárbolesBongMaiornamentales,quesedecíaquedabanbuenasuerte,aunqueaquellosno lahabíandado,yelmismoporchedelanteroconpilaresybaldosas relucientesdeun tonogrisvioláceoqueaélleseguíapareciendomuyrelajante.

Mientrasentrabaporelportón, tresniñossalieronescapandodeélcomosi llevaraunapistola.Sacólospiesdeloszapatosysequitóloscalcetinesyloscolocójuntoalaentradaantesdeatravesarlacasa.

Habíadoschicas,primasalasquenoreconoció,ocupadasenlavarropaenuncalderopuestoalfuegoenlapartedeatrás.LatíaGiangestabahaciendolacomidaenelcobertizodelacocina.Losgritosdelosniñosllamaronsuatención,yellacruzóelpatiosecándoselasmanosensuvestidoylecogiólasmuñecasaMinhconfuerza.

—Yatedijequevendría.—¡No,nomelodijiste!—Teescribíunacarta.—¡Deesohacemuchotiempo!Ahorasítecreo.—Hemantenidomipromesa.—Voyadespertaratutío.Su tía lo llevó a la sala de estar y lo dejó allí. Lamisma capilla en su cajón de color celeste

encimadelmismoaparadorlacadoennegro,mediometromásaltoqueél.Lassuperficiesinterioresde la capilla estaban todas tachonadas de espejos con dibujos geométricos pintados. Al lado, losmismoscandelabrosenormes,cuencosllenosdefruta,largasvarillasdeinciensoenunquemadordehojalataconformadeleón,undesplieguedevelitasvotivas,yunpequeñoárbolBongMaiquecrecíaenunjarrón,talvezelmismoBongMaidesuinfancia,nolopodíasaberconcerteza.

Sutíovinodeldormitoriobueno,elqueestabadentrodelamismacasa,conaspectosoñolientoeinofensivo, flaco ymoreno, apenas cambiado, abrochándose el cinturón de sus pantalones largos,abotonándose la camisa de vestir y sin decir nada. La tía Giang iba detrás, dándole golpecitosnerviososasumaridoenlacabeza.Unacabezapequeña,conlacararedondaylosrasgosagolpadosensucentro.Comosiempre,surostropermanecíainexpresivo.

Los tres se sentaron descalzos en el suelo de baldosas, bebieron té y comieron dulces de uncuencograndedeplásticodoradoqueimitabalacoronadeunreydecuentodehadas.LatíaGianglepreguntó por su vida amorosa y sus perspectivas dematrimonio, por la fuerza aérea, por el grangeneralPhan,yniunasolavezporsuhermanoHao.EltíoHuyapenashabló.Minhnovionecesidaddemencionar la casa, el alquiler sin pagar. Después de tantos años, solo tenía ocasión de volverporqueHaolohabíamandadoallíporasuntosdetrabajo.

AlcabodemediahoraeltíoHuydijo:

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—¿Quépasaconlacomida?—Yavoy—dijosumujer,ylostresselevantarondelsuelo.Eltíolollevóporlossenderosysededicóapresentarasusobrinoconorgulloaunagenteala

queMinhconocíadesdeniño.Todoelmundolepreguntóporquénollevabauniformehoy,queeraelaniversariodelnacimientodesutía.EncasadelhermanomenordeHuylasmujereslosdejaronasolasmientrasvariosparientesmasculinossecongregabanparasaludaralpilotoregresado.Aquelhermano,Tuan,sellamabaasímismotíodeMinh,peronoeraparienteconsanguíneosuyo.Tuansíestabacambiado.Todoél teníamalaspecto.Talvezhabía sufridounderramecerebral.Enel ladoderechoparecíafundido:elpárpado,elhombroylapiernaderecha,queparecíahundirsealaalturadelarodilla.Suojoizquierdoparecíamuyabierto.Talvezlohabíanherido.ElVietcong,deacuerdocon los americanos, operaba por todo elMekong ya desde la Ofensiva del Tet, aunqueMinh noestabatanseguro.TalvezsutíoTuaneradelVietcong.Minhnomencionósudiscapacidad.Nadielohizo.Loshombresfumaroncigarrillosybebierontéentacitasdecafé.Cuandounodeloshombreslepreguntó aMinh por su tía y su tío deSaigón, el tíoHuy interrumpió la descripción cortés de lafelicidaddeambosqueestabahaciendoMinh,ydijo:

—Mealquilauna casa sin tierras.Yyo le tengoque alquilar las tierras al viejoSang.ElviejoSangsellevaelcuarentaporcientodemicosecha.YHaosecreequeélsufre.

VolvieronacasayMinhseechóadormirunasiestaenlacamadesuinfancia.Se despertó confuso. En algún lugar, un descendiente de los gallos de su infancia soltaba

gorgoritoscomounniñoestrangulado,yduranteunsegundoélpensóqueestabaamaneciendo.Lasvocesdelosniñossereíanyllamabanagritos.Habíallegadolafamilia:yadebíadesermediatarde.Lahabitación, conel techodehojalatayhechaabasede tablones sinpulir, teníamásventanaquepared,yélapartóaunladola telamosquiteradelacamayseincorporóhastasentarseparaver,avariosmetrosdedistancia,losmonumentoserigidossobredosdesustíosabuelos.Enaquellacamahabíadormidoconsuhermanomenor.Lassábanasolíananuevoyalimpioperocubríanelmismocolchón,consuolormohosoa sudorviejoyaplumas,yenel techohabíaelmismogalvanizadoachicharrantebajoelcualélyThuhabíanidoaviviralmorirsumadre,conaquellafamiliaquenoerafamiliadeellos.Serdefueraloshabíamantenidounidoscomosolamentelosniñospuedenestarunidos,sinqueningunodeellosseimaginaraqueeltiempolospodíaacabarseparando.

Alascincodelatarde,eltíoHuycongregóalafamiliaenelsalón.Esperaronaqueélencendieravelasen lacapillaquehabíadelantede lacasa,moviéndosepor

entresusaguacatesysuskumquats, frentea lospantalonesyblusasycamisetasde losvecinosquehabíatendidosasecarenperchasdeplásticodecoloressobrelaverja.Ofreciósutributo,entróenelsalónsinsaludaranadieyatravesólacasaparaplantarseenlapartedeatrásjuntoalosmonumentosfunerarios,porfinregresóycolocódosalmohadonesenelsuelodelacabeceradelasaladeestar.Cruzólaspiernasybajóalsuelohastasentarseconlaespaldarectadelantedetodos.Losdemás,losniños,lastías,losprimos,lafamiliadelaqueéleracabeza,sesentaroncontralasparedes,losmáspequeñosjustofueradeloslímitesdelasala,rodeandolosdospilaresdelporcheconlasespaldasapoyadasenellos,comosifueranprisionerosatadosaárboles.Lafamiliaenteraloescuchósindecirpalabra.YfueaMinhaquiensedirigió:

—Mihermanayelmaridodemihermanasiemprehantratadoaestafamiliaconinjusticia—dijo—. Y tú también tratas a esta familia con injusticia. Tu padre tuvo estudios mientras yo araba y

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cosechaba.Cuandomuriósedijoqueeraporquehabíacogidounaenfermedadenlasmontañas,peroyocreoquefueungolpedirectodelespíritudenuestropadre,quemuriódetantotrabajarparanoperder los arrozales donde su hijo,mi hermanoy tu padre, tendría quehaber trabajado envezdecontinuarconsusestudios.MihermanasecasócontutíoHao,unhombredenegocios,paradarlesasus hijos una vida en la ciudad y una educación en las escuelas y permitirles que prosperaran. SumaridoHaonohacíanadaconestacasa.Eraunaherenciadesupadre.MicuñadoHaonuncavivióaquí.Veníadevisitacuandoeraniño,yluegodejódevenircuandosemurieronsusabuelos.Entoncesesta casa se quedóvacía.Mi cuñadoHao es el únicoquequedade esa familia.No tienehijos queprosperendespuésdeél.Yanolequedafamilia.Nosllamafamiliaanosotros,peronostratacomosifuéramoscaballosybúfalos.LagentealaquevesenestasalahacuidadodeestacasaparamicuñadoHao. Esta casa se habría desmoronado y habría desaparecido en los monzones, las enredaderashabríanrotolasparedes,noquedaríanadadepiesinofuerapornuestrosesfuerzosdiarios.¿Vesloscallos que tengo en las manos? ¿Ves la espalda encorvada de mi mujer? ¿Has visto a mi mujerquitandoelpolvode lasparedesestamañanadespuésde ira losarrozalesyvolver?¿Lahasvistococinar una maravillosa comida para que compartas con todos nosotros? ¿Ves la mesa puesta?¿Hueles esa sopa deliciosa?Mira el pollo, el perro, la fruta, y huele el vapor del arroz…¿ves elsudordelafrentedemimujerporelvapor?Todoelmundoquevesenestasalatrabajaasítodoslosdíasparaquelosdemáspodáisvivirenlaciudad.Nopagamosalquiler.EseesnuestroacuerdoconmicuñadoHao.Micuñadonosdijoquecuidardelacasaeraelalquiler.Todoshemostrabajadomásde lo que debíamos. En lugar de trabajar como caballos y búfalos, tendríamos que haber pagadoalquilerydejadoqueeledificiosecayeraapedazos.Yoestoyplaneandopegarlefuegoaestacasa.Voyaquemarlacasaentera.EseHaotemandaparadecirmequecompremipropiacasa,ytúvienessinningúnhonorniamorportufamiliaparatraermeesemensaje.Estamosenépocadeguerra.Notenemosnadaenelmundomásquelafamilia.Túeresunapersonasinamor,sinhonor,elhijodeunladrónquemerobómioportunidaddeeducarmeyellacayodeotroladrónquelerobalacasaaestafamilia.Todoslospresentesvanamorircuandoyoquemeestacasaquenoesunhogarporqueélnosla roba. Tu tía te ha hecho una comida maravillosa. Come con nosotros bajo este techo y luegovuélvetea laciudadydilealhombreconelquesecasómimujerquenotienemásfamiliaquesumujer,porquedeestacasasolamentequedanlascenizasytodosnosotrosestamosmuertos.

Sutíodescruzólaspiernasysepusodepie,conlasmanosunidasenelregazo.—Gracias,tío—dijoMinh.El tíoHuydiounapalmada, sedirigióa lamesaycogióunplatodeporcelanade lapila.Los

demás lo siguieron en silencio y se llenaron los platos o cuencos con la fruta apiñada, el arrozhumeanteylospedazosdeperroydepollo.

Algunos de los niños eran demasiado pequeños para haber entendido el discurso. Comierondeprisa, dejaron los cuencos en el suelo y se dedicaron a salir y entrar del jardín riendo, despuésfueronapormáscomida.Losniñosmayorestambiénsepusieronajugar.Losadultoshablarondeotras cosas, primeropor cortesíayvergüenza, despuéspor interésverdaderoypor fin conciertoentusiasmo.Lasmujeresjóvenescantaron.SutíolesugirióaMinhquetalvezpodíadecirleaHaoquelacasaconsusocupanteshabíasidodestruidaporunabombaamericana.Minhlediolasgraciasotravez.

Cuandosedespertóalamañanasiguiente,sutíoyasehabíaidoalosarrozales.Minhtomócaféconsu tíayconunoscuantosprimos, luegosededicóaabrazarlosa todosunoporunoypor fin

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echó a andar por el sendero del canal en dirección a la carretera que llevaba a la ciudad, dondetendría que explicarle a su tío Hao que parecía que sacarle dinero al tío Huy iba a causar másproblemasdelosquevalíalapena.

***

Skipderodillasfrenteaunbaúlabierto,sacandodelmismoloscajoncitosdondeibanlastarjetasdelas fichasdel archivo—elaromaapapelypegamento,una ligeranáusea, rabia, tantosmesesconaquellosolores en laboca, tododesperdiciado—hasta encontrar la«A», a continuación sepusoahojeartarjetasyporfinsacótresfichasescritasconlasmayúsculasdeimprentadesutío:

AdH

Se elevó sobre el Arca una columna de humo que parecía un cedro. Y trajo tan hermoso perfume al mundo que las nacionesexclamaron:«¿Quiénesestequesaledelaespesuracomounárboldehumo,perfumadoconmirraeincienso,contodoslosafeitesdelperfumero?».

CantardeSalomón3,6

AdH

Yyotraeréportentosaloscielosysobrelatierra,sangreyfuegoypalmerasdehumo.Elsolseconvertiráenoscuridad,ylalunaensangre,antesdeesedíaprodigiosoyterribleenquevendráelSeñor.

Joel2,30-31

AdH

«pilardenubes»(Éxodo33,9-10).Literalmente:«árboldehumo».

SeissemanasyaenlamansiónBouquetdesdelamuertedelcoronel,unestadodedesordenydepermanenciaabsurdacuandoya todohabíaacabado,unsabornuevoparasuencarcelamiento.HaoveníaunavezporsemanaconrevistasytarjetasdecondolenciaporlamuertedeBeatriceSands.Nohubo movimientos por parte de Seguridad Regional, o de quienes fuera para quienes trabajabaCrodelle,acercadelacuestióndelaparticipacióndeSkipenciertaconspiracióndudosa.Estabaclaroqueahoraqueelprincipalconspiradoryaestabamuertoyfueradeescena,seacercabaalgunaclasedeindulto.EstuvoesperandoaqueHaoletrajeraunaconvocatoria.Peronolellegóniunapalabradenadiedelmando.

A Sands le pareció adecuado, entretanto, ponerse a recopilar notas para mandar alguna clase debiografíaalórganodelaAgencia,StudiesinIntelligence,algomásextensoyqueaportaraunaluzmásprofundasobreelcoronelFrancisXavierSandsquelanecrológicadeunsolopárrafoquehabíasalido hacía diez días en la sección «Avisos» del Newsweek. Se sentó ante el escritorio de lahabitacióndelpisodearriba,queúltimamenteocupabaTrung,elagentedobledelcoronel,yabrióuncuadernoporunapáginapautadayenblanco.¿QuésabíaélquenosupieraelNewsweek?Unpocodeestoyunpocodeaquello.SutíaGrace,quenoeratíaconsanguínea,decíaquelafamiliaveníadelosShaughnessey del condado de Limerick, y que la razón por la que su tatarabuelo CharlesShaughnessey había decidido convertirse en Sands, e incluso, de hecho si alguna vez se habíallamadoCharles,erancosasquenuncahabíansalidoalaluz.CharleshabíallegadoaBostonenunbarcoamericano,queeracomollegabatodoelmundo,lehabíaexplicadolatíaGrace,yesquepor

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entonces, le informó al joven Skip, todavía no se habían inventado los aviones. Tal vez el nuevoinmigrantehabíabajadoatierraconlatripulaciónysehabíapresentadoasímismocomociudadanoamericano,tomandoprestadoelnombredelcapitán.Habíatrabajadoenlosmuelles,sehabíacasadotanprontocomohabíapodido,había sidopadrededoshijosyhabíamuertoa los treintay tantosaños sinhabervistonadadel paísmásque labahíadeBoston.Fergus, suhijo, el abuelodeSkip,había trabajado todavíamásduroqueCharles, había engendradomáshijos—Raymond,FrancisyWilliam,yluegodoshijas,MollyyLouise—yhabíatenidounavidamáslarga,hastalacincuentena.LostreschicoshabíanidotodosalaescuelaprimariaSaintMary,yallílahistoriadelafamilia,talcomo la repetía Grace, se había convertido principalmente en la historia de Francis, el hermanomediano.AFrancis lo habían expulsado por alguna travesura innombrable y lo habían desterradoduranteunpardeañosaunaescuelapúblicaquetambiénerainnombrable,luegohabíaregresadoaSaintMaryparahacerlasecundaria,dondehabíajugadoenposicionesdelíneaenelequipodefútbolamericano, se había comportado con honradez, había estudiado mucho y había sido aceptado enNotreDame.Pormediodesucaídaysuredención,Francissehabíaconvertidoenunafiguraaudaz,enelmásinteresante,enelquesecayódecarayselevantóypusorumboaNotreDame.

Losrecuerdosquesolíacontarelmismocoronelnoeranhistorias,sinosimplesanécdotas.Noconstituíanunabiografía.HabíaentradoenNotreDame,siSkiplorecordabacorrectamente,en1930o1931.Denuevobuenasnotas,ycentrocampistadeprimerañoparaNotreDamedurantelaúltimatemporadadeKnuteRocknecomoentrenadordefútbolamericano.DeRocknenuncahabíahabladomucho, y Skip había deducido que el famoso entrenador no había prestado atención al equipo deprimeraño.Francishabíapasadoalprimerequipoenmitaddesusegundoaño.Sehabíagraduadodelos primeros de su clase, sin haber hecho nada, hasta aquelmomento, para distinguirse de tantosotrosjóvenesfuertesyserios,salvosueducación,quelocolocabamásalládelasopcionesobviaspara sus orígenes en la clasemedia baja de Boston—losmuelles, la fuerza policial—, pero queparecióquitarsedeencimajuntoconlatogadegraduadoparalanzarseenposdeaventuras.

FueraloquefueraquehabíaencontradoFrancisyqueloconvirtióenunlocoyunhéroe,Skipllegóalaconclusióndequelohabíaencontradoentre1935y1937,unpuntociegodesubiografía.Alparecersehabíadirigidoaloeste.Skiphabíaoídohablardevagonesdecargaydecampamentosde vagabundos, había oídomenciones a un rodeo, una casa de putas deDenver, un período en lacárcelyunmatrimoniobreveymisterioso…Casitodoselohabíacontadosumadre,Beatrice,nadaveníadebocadel coronelmismo.Másdeunavez, sin embargo, el coronelhabíahechoalusiónaexperiencias con aviones —trabajo con motores de avionetas de acrobacias aéreas y aparatosfumigadores,trabajoenaeródromosyhangares,nadaquelehubieraparecidoquemerecieralapenaexplicar condetalle—,y tambiénacierta asociaciónconobreroschinosenSanFranciscoduranteaquelmismoperíodo,mientrasJapónestabahaciendolaguerraensupaís.Skipnoteníaniideadesialgunodelosaviadoresotalvezalgúnacontecimientoenqueestabanimplicadosloschinoslohabíatraídode cabezay lohabíaorientadohacia el restode suvida; a finalesde1937, sin embargo, eljoven Francis, que ahora tenía unos veintiséis años, había regresado a Boston, había encontradotrabajoenlosmuellesysehabíamatriculadoenunoscursosnocturnosdelCityCollegediseñadosparaayudarapasarelexamendecadetedeaviaciónmilitardelafuerzaaérea.Entróenelejército,hizo instrucción enTennessee conbiplanosStearmany enMississippi ymás tarde enFlorida conavionetasdealasbajasVulteeValiant,yhacia1941,yaconrangodecapitán,estabapilotandocazasP-40Warhawkyhaciendoinstrucción,enlashorasenquepodríahaberdormido,parapilotaraviones

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másgrandes,incluidosbombarderos.En 1938 se casó conBridghedMcCarthy, una amiga de la infancia.Hacia 1940 tenía una hija,

Anne,yunhijodecamino:FrancisJunior,queseahogaríaenveranode1953enmediodeunaregatade veleros desde la bahía de Boston hasta Nantucket. Ni una sola vez había oído Skip a su tíomencionarlatragedia.

Enelveranode1941,elcapitándimitiódelejércitocomopartedeunacuerdoentreloschinos,elgobiernoamericanoylacompañíaparamilitarCentralAircraftManufacturingparavolarencalidaddemercenario, juntoconcasiuncentenardeotrospilotosamericanos,para laFuerzaAéreade laRepúblicaChina en elGrupodeVoluntariosAmericanos deClaireChennault, conocido como losFlying Tigers, cuya misión era proteger la carretera de Birmania por donde llegaban las tropaschinas.Atodoslosvoluntariosamericanosselesprometióquelosreadmitiríanenelejércitoconelmismorangoquedejabanyqueselespagaríanseiscientosdólaresalmesencalidaddesalario,másquinientosporcadaaviónjaponésqueabatieran.AllíelcapitánpilotósuP-40enmásdeuncentenardemisionesysellevósupellizcodelbotín.Sinembargo,endiciembrede1941—pocosdíasdespuésdequesupropiohermanomurieraenPearlHarbor—,ytrasofrecerseparasustituirauncompañeroqueteníamalariaaloscontrolesdeunDC-3modificadoqueibaalanzaracomandosbritánicosenparacaídas,entreellosAndersPitchfork,alcapitánlosorprendióeneltrayectodevueltaelfuegodeunadelasescasasbateríasantiaéreasjaponesasyseestrellósobrelosarrozales,aunqueélasegurabaquenohabíacaídohastaquelosdisparoslearrancaronlasegundaala.Pesealaayudadelosnativos,losjaponeseslocapturaronylocondenaron—juntoaPitchfork,tambiéncapturado,yaotrossesentayunmil prisioneros—a trabajos forzados en la líneade trendeSiamaBirmania: enfermedades,palizas,torturas,hambre.Enciertaocasiónledieronunhuevo.PuestodeformainexplicableabordodeunbarcoquezarpódeBangkokparatransferirlo,talvezaLuzónoquizáinclusoalmismoJapón,elcapitánhabíaescapadotirándoseporlabordajuntoalacostadeMindanaomedianteunaartimañaespantosa.Otrodelosprisionerossehabíavueltolocodurantesuencierroenunabodegasinapenasairesituadabajolacubierta,ysuscaptoresprometieroncerrarlaescotillayasfixiarlosatodossielloconodejabadegritar.ElcapitánSands,elegidoentretodosporsorteo,estrangulóalhombrehastamatarlo.Escaparseestabaprohibido,yaquesignificabaelcastigoparalosquesequedaban.Peroelcapitán,trasmancillarsualmaparaayudaralosdemás,exigiósuderechoaintentarlafugahaciendoque lo pasaran por la escotilla junto con el cadáver de su víctima. Si los japoneses lo daban pormuertoylotirabanporlaborda,confiabaenquenadiedetectaríasufuga.Ylaestratagemafuncionó.Aunque debilitado por un año entero de malos tratos y trabajo duro, nadó durante kilómetros,subsistióenlaselvadurantesemanasyvivióunpardeañosenunaseriedealdeasenlasislasdelmardeSulúantesdeconseguirsitioenuncargueroquelollevóaAustralia.Sereincorporódeinmediatoa la aviacióndel ejército americanoy regresó aBirmaniaparapilotarmisiones aéreas secretas, amenudoconunidadesdecomandobritánicas.Ganómenciones impresionantes,subióderangoconrapidezysaliódeaquellaguerrasiendocoronel,elcoronel, lafiguradehierroquehabíarotolosmartillos.

Elcoronelcontemplabalaviolenciacomoalgoinevitablementehumanoyalosguerreroscomoseresespecialmentebendecidos.Elejércitoen tiemposdepazdebióde llenarlode irritación.Pocodespuésdelaguerracesaronlosascensos.Otropuntociego.Paraunoficialdecarrera,elfinaldeunascensocontinuoeramalaseñal,equivalenteaundespido.Lacausaespecíficadesuproblemaconelejército—sutransgresiónoinfracción,supasoenfalso—nuncahabíallegadoalosregistros,pero

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lacausageneraldelmismoestababastanteclara.Elcoronelsabíamandarperonoseguirórdenes.Por lo que tenía entendido Skip, el coronel había pedido plaza en la CIA nada más formarla

Trumanen1947,perolaAgenciasepasóañossincogerlo,yentretantoélsirvióenvariasbasesdelafuerzaaéreaenelSur,unintervaloquedeformósuacentodeBostonhastaconvertirloenalgoúnicoytambiénreforzósuhábitodebeber.LaAgencialoaceptóaprincipiosdeloscincuenta,demaneraqueseuniótardeaaquellaprimerageneración,encalidaddealguiendefueraquenohabíapasadoporlaOSSperoqueteníamuchaexperienciaenelSudesteAsiático,sobreelcualacechabalaChinaRoja.DeallífuealasFilipinas,Laos,Vietnam,yaveces,alprincipio,aMalayaconAndersPitchforkylosScoutsMalayos,solamenteparadivertirse:siempreconunrolcuasimilitar,porlogenerallejosdelasupervisióndeLangley,queconcentrabatodasuatenciónenEuropadelEsteylossoviéticos.

EnLuzóntrabajóbastantetiempoconEdwardG.Lansdalecombatiendoalaamenazacomunistadeallí,lasguerrillasHukbalahap.Loscamposdeprisioneroshabíanmoldeadosucarácter:feensímismo,aprendersobrelamarcha,lucharsinpensarenrendirse,lamateriadelaqueestánhechosloshéroes.FueLansdalequiendioformaasusmétodos:confíaenlosnativos,aprendesuscancionesehistorias, lucha por sus corazones y sus mentes. Resultaba curioso, y tal vez misterioso, que elcoronelnoparecierahabertenidocontactoconelgeneralLansdalemientrasestabaenVietnam.

Vietnamhabíasidolacúspidedelcoronel,ytambiénsuperdición.Silohubierandejadoallíasusanchas podría haber ganado la campaña sin esfuerzo, pero ahora que la amenaza asiática estabasiendotomadaenserio,LangleyempezóaprestaratenciónyelCongresometiómano.Élmanifestósu amargura porque se cancelaran las elecciones prometidas y se pospusiera la reunificaciónprometida. Cuando llegó el ejército americano con toda su fuerza, se encontraron al coronelesperando.PerolosBoinasVerdesnosucumbieronaél:talvezsusmetasfuerandemasiadoampliasy las fuentes de su autoridad demasiado brumosas. Se hizo indispensable para ciertos grupos dehelicópterosdeasaltoy luego,en1965,paraelVigesimoquintodeInfantería.ElReydeCaoPhuc.OperacionesPsicológicas.Laberinto.YelÁrboldeHumo.

Másqueningunaotracosa,loquehabíadeterminadolavisióndelcoroneleraeltiempopasadoconLansdaleenlasFilipinas.Conquistadoporelpoderdelosmitos,élmismoseconvirtióenuno,yaenciertamedidamientrasestabavivoperosobre todoalmorir.Con lacomplicidaddeNguyenMinh,el jovenpilotoaquienel coronel llamabaLucky,el coronel teníaunaesposaenocercadeBinhDai, una aldeadel deltadelMekong.Despuésdeque el coronel fuera capturadoymuriera amanosdelVietcong,sucuerpohabíasidodevueltoalaaldeabiencomoejemploparalosdemásobienenhonoralaformaenquehabíasoportadosustormentosfinales,yselohabíanentregadoasumujer con los dedos, ojos y lengua arrancados y con todos los huesos rotos. La gente de aquellaaldea,queenotros tiemposhabía sidounaparroquiacatólica,enterróelcadáveren la tierrade laparceladelacapilla—lacapillahabíasidosobretododebambú,oseaqueyanoquedabanadadelamisma—,enunataúddemaderadecaobagruesaysinpulir,selladoconalquitrán.Yacontinuación,antesdequesepudieraponerlalosadecementoparaanclarlo, llegaronlaslluvias,díasydíassinparar, un fenómeno muy raro en aquella época del año. Bajo los chaparrones, sin raíces paraestabilizarla,latierrarojareciénremovidadelhoyodelatumbasevolviólobastantelíquidacomoparaquetressemanasdespuésdesersepultadoenlatierraelataúdsalieraalasuperficieyelcoronelregresara del submundo. Los aldeanos levantaron la tapa y se encontraron a un hermoso pilotoamericanodepelooscuroconlosdedosdelasmanosylospiesintactos,unjovenydesnudocoronelFrancisinmaculadoeintacto.Lorodearondepiedras,agujerearonsuféretroparadejarqueentrara

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el agua y lo volvieron a depositar en la tumba. Pero tampoco entonces esta lo consiguió retener.Siguió lloviendo, el canal cercano desbordó sus márgenes, se adentró en la parcela baldía de laiglesia y se llevó en volandas al coronel en su ataúd. Lamarcha delmismo por el río Hau tuvomuchos testigos; el ataúd fue visto en An Hao, Cao Quan y Ca Goi, hasta que salió por ladesembocaduradelDinhAnalmardelaChinameridional.

JimmyStorm,nadamásoír este rumor, habíaviajado a aquella aldea.Había encontrado aunamujer que parecía haber sido la esposa de un americano, y los aldeanos lo acompañaron al sitiodonde estaba enterrado aquel americano. La tumba parecía intacta. Pero en cuanto a quién habíaenterradoallí,cuántotiempollevabaytodolodemás—Stormhabíaidosolo,nadiedeaquellagentehablabainglés,sufrancéseramaloyeldeStormpeortodavía—,semarchósinsabernada.YSkipoyóaquellahistoriaatravésdevelosymásvelos,pormediodeHao,procedentedeMinh,queeraquienlehabíadichoaStormcómollegaralaaldeadondeestabalatumba.

ASkip, sinembargo, lehabíacomunicadosu tíaGrace,apartedehaberlovistoconfirmadoenNewsweek, que al coronel lohabían enterrado enMassachusetts, sinhonoresmilitares, de acuerdoconlosdeseosdesuesposa.Skippreferíaelmito.Contabalaverdad.Enaquelmundosutíohabíasido una figura imponente, ymás todavía con el paisaje de fondo de su propia imaginación. Skiplamentaba el papel que su tío le había adjudicado al final, el de traidor a la rebelión. Al final elcoronelhabíabuscadorazonesnosolamenteparaelhechodequeunaoperaciónhubierasalidomal,sino también para su propio corazón roto, y había buscado la traición en el centromismo de lascosasenformadealgunaenormidadclásica,¿yquépodríahabersidomásenorme,mástétricamenteromano,quesertraicionadoporalguiendelapropiafamilia,porsusobrino,porsupropiasangre?Sehabíanegadoaver sucaídacomoalgo típico,había rechazadocualquiercolaboraciónal igualquepersonajes comoMarcoAurelio: «Puedeque te rompas el corazón—había escrito el ancianoemperador—,peroloshombresseguiránconsusvidascomosiempre».Sehabíaescritoasímismoalo grande, había seguido embelesado la sagade su propioviaje, había perseguido supropiomitobajandoaunlaberintodetúnelesyadentrándoseenlatierradelashadasdeloscuentosdeniñosysubiendoporunárboldehumo.

La convocatoria llegó en un sobre interdepartamental reutilizable dirigido a él a la atención deOperaciones Psicológicas, ocho semanas después de que muriera el coronel. Almuerzo otra vez,Vossotravez.SandsesperabaquetambiénestuvieraCrodelle.

LepidióaHaoquelodejaraenlarotondaquehabíacercadelrío,caminóvariasmanzanashastaelContinentalyentrósudandocopiosamente.EnelvestíbuloseencontróaRickVoss,sentadoenunabutacaelaboradamentelabradaylacadaennegro.Ysolo.

VosssepusodepieyleestrechólamanoaSkipconciertafatiga,comosihubierallegadohastaallícruzandoapieríosymontañas.

—Sientolodelcoronel—dijo.—Eratremendo.—Joder,sí.Ylosiento.—Yotambién.—Todoslosentimos.Últimamenteestamosllenosdelamentaciones.Soloeranlasoncedelamañana.—¿Tieneshambreya?—dijoSands.

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—Llamémosloprealmuerzo.Queríaadelantarunascuantascosasaquí.—¿Adelantarcosas?¿Porquéseráquenomegustacómosuenaeso?—Metocacomermeunrapapolvo.—Nohacefalta.¿Nossentamos?—Espera.Tenemosunoscincominutos.—¿Adóndevamos?—Déjamehablar,¿quieres?—Claro.Faltaríamás.—Gracias.Gracias.Mira—dijoVoss—,aquíestáeldiscurso.Desdeelmismomomentoenque

meenterédequeelcoronelnoshabíadejado,meheestadosintiendocomouncabróndecuidado.Hayquienpiensaqueeraunaventurero,unNeanderthal.Notodoelmundocomparteesaopinióndeél.Algunosdelosnuestroscreenqueeraunhombremagnífico.Yonoempecépensandocomoellos,peroheacabadoestandodeacuerdo.Yestoesunadisculpa,aunquenosirvademucho.Meequivoquéalfiltraraquelborradordelartículo.Paraempezar,noerarealmentesuyo.Yoescribíelnoventaporciento,ynomeimportabadejarloenmallugar.Ycreoquelofiltrésoloparaganarmeelfavordeciertagenteaquienesnolescaíabienelcoronelyqueahoracreoquesonunosgilipollasderemate.Yhostia,losiento,Skip.

—Seaceptanlasdisculpas.—Bueno,mira—dijoVoss—,elproblemaeselsiguiente.Aquelartículopusolamaquinariaen

movimiento.O seaqueahoraélyanoestá…yconfiemosenqueconesobaste, ¿verdad?Pero lamaquinaria tieneque triturarunpocoantesdeque sumecanismo sedetenga.Las cosas tienenquecompletarsuciclo.Nosepuedeinterrumpir.OseaquetevanahaceriraLangley.

—¿Tengoqueinterpretaresocomounaorden?—Correcto.Temandamosacasa.—Deacuerdo.¿VaaquererhablarconmigolaCentralprimero?—Sospechoquetevanadarunpequeñorepaso.—EnrealidadnoestoyadjuntoalaCentral.SoydeOperacionesPsicológicas.—Estássobreelterreno,esoestodo.Estásenesteteatrodeoperaciones.Vanaquererqueselo

cuentestodoantesdequevayasacontarloaLangley.—¿Quiénessonellos?—TerryCrodelle.—Parecequenosvamosadivertir.—Quiereunpolígrafo.—Faltaríamás.Loqueseacontaldeayudar—dijoSkip.

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Skipsupusoquelamayorpartedelequipoquehabíasobrelamesadeconferenciasformabapartedelamáquinadelpolígrafo.Justodelantedeélhabíaunmicrófonosobreunpedestal,situadojuntoaunagrabadoradegran tamaño.Skipobservó las revolucionesdesusbobinas,una rápiday laotralenta.AlladodelagrabadoraestabalaboinaverdedeCrodelle.CrodellellevabapuestoeluniformedegaladebatalladelasFuerzasEspeciales,conlosgalonesdecapitánenelcuello.

—Bueno,estoes,creo,es…Noséquées.—¿Esqué?—Hedichoquenolosé.—Hadichoqueteníaciertaidea.—¿Ciertaidea?—Hadichoqueteníaciertaideadequéera.—¿Cuándohedichoeso?Crodellepulsóconelpulgarunapalanquitadelagrabadorayencontróelsitiodondelavozde

Skipdecía:«Bueno,estoes,creo,es».—Ahí—dijo.—Ahísolo…estoybalbuceando.ElcapitánCrodellehizounapausayseloquedómirandounossegundosantesdedecir:—Deacuerdo.Muybien.Eraunasimplecomprobación.Mantuvounbotónapretadomientrasbajabaunapalanquitaylasbobinassevolvieronaponeren

marcha.—¿EsverdadqueesusteddelasFuerzasEspeciales?¿Oesundisfraz?—Esununiforme.—¿Aquiénperteneceestelocal?—EstamosconSeguridadRegional,másomenos.—YocreíaqueSeguridadRegionaleraManila.—Esteesunlocaltemporal.—Yustedesunsoldadoencarneyhueso.—Vengaya.—Yahevenido.Hevenidoyaquíestoy.Lapreguntaes:¿dóndeestáusted?—Avecesunoestáenundespachoyavecesestásobreelterreno.Peroeserollo,eseÁrbolde

Humo, no es ni trabajo de despacho ni de terreno. Es algo que se encuentra en las selvas de loscuentosylaspsicosis.—Crodelledetuvolagrabadoraydijo—:Eserollodeustedesesuncaos.

Ylavolvióaponerenmarcha.—Noeramásqueunejerciciohipotético.Unasituaciónimaginaria.Guerrapsicológica.—Yaestájugandoconlaspalabras.Asínovaaayudarseaustedmismo.—Capitán,noestoyaquíparaayudarmeamímismo.Estoyaquíparaayudarloausted.—¿BajoquéidentidadfalsaestáustedaquíenlosCincoCuerpos?¿Cómosehacellamar?—Estoyusandomisdocumentos.—Notieneidentidadfalsa.—Soyauténtico,colegas.—Quieroquemeaclareustedunoscuantos términosdeesteartículo titulado…bueno,notiene

título.Peroacláremeunoscuantostérminos.

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—Porsupuesto,enlamedidademisposibilidades.Contaldeayudar.—«Aislamiento.»Esoquieredecirsimplementemeterselosdedosenlosoídoscuandoalguiendé

unaorden,¿no?—Esoesunasimplificación,peroenesencia,sí.—Básicamentesepararseunodelacadenademando.—Esoesotrasimplificación.—Sin cadena demando, lo que tenemos es feudalismo. A ver, por supuesto que hablamos de

formafiguradadelosfeudosburocráticos.Peroenesteejemplocreemosqueelfeudopuedehabersidoreal.Creemosquesutío,elcoronel,hasidoelseñorfeudal.

—Creoquehemosllegadoaunpuntomuertolingüístico.—Loqueleestoysugiriendoesactividadrenegada.—Creoqueestamoscontemplandounabismolingüístico.—Cosas«quenocorrespondever».—¿Cómo?—Laanotación«Qu.nocor.v.».—¡Oh!PorelamordeDios.«Quiennocorre,vuela.»Esalgoqueéldicetodoeltiempo.Bueno,

decía.—Sin cadena de mando lo que hay son señores de la guerra. Él estaba dirigiendo su propia

agencia.—Ylaexpresión«Quiennocorre,vuela»,¿quédemuestra?—Elartículodemuestraqueélloconsiderabasudeber.Queestabadirigiendosupropiaramade

operaciones:asesinatosenMindanao,porejemplo.Ysupropioagentedobleprivadoypersonalaquímismo.

—¿Dónde?—Aquí…yasabe…EstepequeñolugarllamadoVietnamdelSur…—¿Quéagentedoble?—Skip…¡nomerefieroausted!—Ahorameestáponiendoustedenfermo.Enfermodeverdad.—Noleestamosacusandoausteddetraición.—Entonces,¿qué?Sitienealgunaacusación,dígamecuáles.Nomedigacuálnoes.—Solamente queremos un nombre. Si es el nombre que ya tenemos, entonces usted lo habrá

verificado.—Demeelnombrequetienenustedesyyolesdarélaverificaciónsipuedo.—Skip.Trabajaustedparanosotros.—Puessí.Yorgullosodeello,pero…—Buenopues,Skip…—Yapuedeentenderustedmireticencia.—No,Skip.Nopuedo.—Desdemiperspectiva,lazonaenlaqueestáhurgandousted,losparámetros,siesqueloshay,

todomepareceunpocoamorfo.Sientolaobligacióndereclamargarantíasporpartedeustedesdequevamosamantenerlascosas…enelterrenodelarelevancia.

—¿Garantías?¿Cómo?Mínoentiende.—Digamosquenoquieroponerenjaqueinteresessuperpuestos.

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Crodellevolvióapararlasbobinas.—¿Quéintereses?—Siesqueloshay.—Menudomontóndemorralla.—Esomismopiensoyo.—Muybien.Alamierda.—Crodellefruncióelceño,sequedómirandoelsuelodurantemedio

minutolargoyporfinvolvióalevantarlacabeza—.Estoydispuestoadejarestalínea.Simplementeasegúreme,asegúreme,quenohayningunaoperaciónnoautorizadaenmarcha.

—No eramás que un ejercicio hipotético. Si fuera de verdad, ya se habría acabado.Eso se lopuedoasegurar.

—Oseaquesehaacabado.—Estátanacabadocomosinuncahubieraempezado.—Muybien.Dejemosdeprovocarnosmigrañaelunoalotro.—Crodellevolvióaencender la

grabadora—.HablemosdeeseejerciciohipotéticodeguerrapsicológicacuyonombreencódigoesÁrboldeHumo.Ennuestraúltimaconversación,ustedyyohablamosdeunosficheros.

—¿Ficheros?—¿Dóndeestánlosficherosdelcoronel?—Ficheros…—ElaparatodeinformacióndeÁrboldeHumo.—¿Dedóndeestásacandoustedtodoesto?—Quétonteríadepregunta.—Nosénadadeningúnfichero.—Quétonteríaderespuesta.—Describaaquéserefiere.Estoyaquíparaayudar.—Quémontóndepatrañas.—Yodiríaqueesustedquienandaconpatrañas.—Sucoleccióndetarjetas.—Ah.Sí.Eransusarchivos.Noséquéhasidodeellos.—¿Cuándovioustedporúltimavezelmaterial?—En lasFilipinasmedediqué a catalogarunaparte, luego él se lo llevó.Compruébelo con el

CentrodeSeguridadRegionaldeallí.Talvezalguienlosepa.PregunteenlabasedeClark.Ahíesdondeloviporúltimavez.

—Vossvio losbaúles aquí.EnSaigón.En el bungalowde laCIA justodespuésdeque llegarausted.

—Esonopuedeserverdad.Obienesmuydudoso.MelosquitarondelasmanosenClark.—Estabanaquí.—Entoncesfueronmandadosaquídespuésdequemelosquitarandelasmanos.—Skip.¿Quéclasedetrayectoriaprofesionalcreeustedestarsiguiendo?—Unaquevabastanteenespiral.Yhaciaabajo. ¿Puedohablarlede los ficheros?Los ficheros

erandenaturalezaarchivística,muyanticuados,sininterésenlaactualidad.Siestuvieranenmipoder,notendríaningunarazónparaesconderlos,ningunamotivación.Silostuvierayo,selosdevolveríaaustedinmediatamente.

—¿Sabe qué es lo que me gusta de su estilo? Que lo pillamos mintiendo y usted se limita a

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continuarinventandocosas.—Conécteme.Voyapasarlaprueba.—Oh,nosepreocupe,loconectaremos.—Pasarélaprueba.Adelante.—YunAO.Skipnodijonada.—Unanálisisdeorina.—Ah.Deacuerdo.—SeconsumenmuchosnarcóticosenlosCincoCuerpos.Nuncasesabequiénpuedecaerenesa

trampa.—Tráigameunajarraymearéenella.Crodelledetuvolagrabadora,sepusodepieparainclinarseencimadelamisma,agarróelcable

yarrancóel enchufede lapared.Elenchufe levinovolandoa lacarayél loesquivóyvacilóunmomento,parpadeando,antesdevolverasentarseydecir:

—Skip,nomepuedocreeresto.Nuncahevistoanadiemeterseasímismoenunmarróntantotalyabsoluto.Ysinrazónalguna.¿Quésentidotieneesto?

—Nolosé,colega,hayalgoenustedquemecabrea.—Seledamuybienesto.Ojaláestuvieraustedennuestrobando.—Nopiensocontestaraesamierda.—Excelente.Conozcamosalamáquina.Ahoravuelvo.Salió,dejandosoloaSands.Al cabo de unos segundos, Sands oyó actividad en el pasillo. Escoltado por un civil negro,

NguyenHaopasópordelantedelapuertaabierta.Sands se pasó diez minutos sentado a solas a la mesa de conferencias, con sus pensamientos

dandoporrazoscontranadaenparticular.Crodelle regresó con un hombre de mediana edad, en apariencia civil, y lo presentó como

Chambers,técnico.—Chambers lleva más tiempo haciendo esto del que llevamos ninguno de nosotros contando

mentiras.—¿Esesocierto?—Másdeveinteaños—dijoChambers.—Estaréaquíal lado simenecesitan—dijoCrodelle,y saliómientrasChambers se sentabaal

ladodeSandsyechabaunvistazodebajodelamesa.Cuandoseincorporódijo:—Lehanhechoaustedanteselpolígrafo,¿no?—Sí.Unavez.¿Quéhaydebajodelamesa?—Solomeestabaasegurandodequeestádesenchufado.—Ah.—Estoeselsimulacro.—Ah.—Asíquelehanhechoelpolígrafoantes.¿Solounavez?—Sí.Paraadmitirme.—Muybien,pues.Encuantoalpresenteexamen,probablementelovamosallevaraustedporlos

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mismospasosporlosquepasócuandolehicieronsuprimerpolígrafoparaelcontroldeseguridaddesuadmisión.Loquebuscamoseselestrésmínimoquegeneraelexamen.Enotraspalabras,ja,ja,relájese,amigo.

—Estoyrelajado.—Claroquesí.Veamospues.Unpardepreguntas.—Vale.—¿Lo han entrenado en los métodos para eludir la verdad mientras le están haciendo un

polígrafo?—Meloshancontado.Nomehanentrenado.Solo…meloshanmencionado.—¿Nuncalehanentrenadousandolamáquina?—No.Nunca.—Despuésdelasesiónleharánunexamenfísico.Lemiraremoslalenguaaversiselahaestado

mordiendo,laspalmasdelasmanosenbuscademarcasdeuñas,etcétera.—Heoídohablardeesascosas,peronorecuerdocuándosesuponequehayqueusarlas.Sies

cuandoestásmintiendo,ocuandoestásdiciendolaverdad,o…—¿Lehanentrenadoenlastécnicasdecómoralentizarsurespiración,permanecertranquiloen

situacionesdeestrés,esaclasedecosas?—Noparaestospropósitos.Ynomehanentrenado.Solo…«Manténelculobienprietocuando

empiecenlosdisparos,hazrespiraciónsuperficialcuandoelcorazóntevayademasiadodeprisa»,esaclasedecosas.

—Asípues,primerpaso:estapruebaconstadeveintepreguntas.Tengolaspreguntasaquíyustedlasvaaleerensilencioparasímismo.Estolohacemosparaeliminarcualquierreaccióndesorpresaenlagráfica.¿Entiendeelpropósitodeverlaspreguntasconantelaciónalaprueba?

—Sí.Estamoseliminandoreaccionesdesorpresa.Chambers abrió la carpeta de papel manila y se la entregó. Las preguntas estaban

mecanografiadasenunasolapáginadepapelsujetaa lacubierta interiorconunclipsujetapapeles.Sandslaexaminó.

—Enestepunto,¿hayalgoquenecesitequeleaclaresobreelproceso?—¿Vaahabermáspruebas,despuésdeesta?—Ah, sí, bien. El examen consta de cuatro pruebas, cada una con preguntas distintas, aunque

algunaspreguntaspuedenrepetirseenpruebasposterioresobienenlascuatropruebas.Losiento.Meheolvidadodedecirlo.¿Algomásquenecesitequeleaclareenestemomento?

—Creoqueno.—Sinecesitaque leaclarecualquiercosaencualquiermomento,pregunte.Bienpues.A finde

familiarizarlo de antemano con el procedimiento, lo voy a conectar sin encender la máquina. Lamáquinanovaaestarfuncionando.¿Entiendeustedquelamáquinanovaaestarfuncionando?

—Lamáquinaestáapagada.Sí.—Cuando la máquina esté encendida, este rollo de papel irá avanzando y estas tres agujas se

moveránarribayabajoparacrearlíneasatravésdelagráfica.—Loentiendo.—Letengoquepedirquesequitelacamisa,porfavor.Sandsobedecióydejólacamisasobreelbrazodelasilla.—Yelreloj.Déjeloencimadelamesa.¿Esusteddiestroozurdo?

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—Diestro.—¿Puedecolocarelbrazoderechoaquísobrelamesa,porfavor?Déjeloplano.—Chambersle

cerróaSandsunapulseraparamedir lapresiónsanguíneaen tornoalbíceps—.Registraremossupresión sanguínea, su respiración y la respuesta galvánica de su piel. Si quiere inclinarse haciadelante,porfavor…—SandsseinclinóhaciadelanteyChamberslerodeóelpechoconuntubodegoma de color beige y juntó sus extremos con una pequeña pinza de metal—. ¿Está demasiadoprieto?

—No.Nolosé.Eltécnicoesusted.—Estas pinzas van aquí en las yemas de sus dedos. Eso nos da la temperatura de la piel.—

Despuésdelaspinzasparalosdedos,Chamberstocóconsuavidadlospuntosdecontacto,lapulsera,el tubo y las pinzas, hizo una serie de pequeños ajustes y se volvió a sentar en su silla—. ¿Estácómodo?

—Paranada.—Bueno,nadieloestá.Haleídoustedlaspreguntas,¿correcto?—Sí.—Es probable que algunas le parezcan tonterías, y que otras le resulten irrelevantes. Algunas

parecenverdadesobviasuobviamentefalsas.Asíescomoobtenemosunalecturadesureacciónalasdiferentescategorías.Solamenteleestoygarantizandoquetodotienesulógica.

—Loentiendo.—Muybien.Llegado estepuntodenuestro simulacro, le voy a leer laspreguntasparaque las

oigaenmivozyasíeliminamoselestrésaleatorioquepuedaproducirlasorpresa.Nocontestelaspreguntas.Solamentelasvoyaleer.Puedeustedinterrumpirmeencualquiermomentoparadiscutircualquierpregunta.—Chamberscogió sucarpetadepapelmanilay se laabrió sobreel regazo—.¿Listo?

—Empiece.—¿SellamaustedWilliamSands?¿NacióustedenMiami,Florida?¿Conoceelparaderodelos

baúles que contienen los ficheros del coronel Francis Xavier Sands? ¿Es usted licenciado por laUniversidaddeIndiana?

—Perdone.—¿Sí?—Tengodostítulos,unalicenciaturaporIndianayunmásterporlaGeorgeWashington.Asíque

noséexactamente…—Deacuerdo.LicenciadoenhumanidadesporlaUniversidaddeIndiana,¿correcto?—Correcto.—Muybien.Lapreguntaseleerádelaformasiguiente:¿Esustedlicenciadoenhumanidadespor

laUniversidaddeIndiana?—Deacuerdo.—Deacuerdo.Elcuestionariocontinúadelasiguientemanera:¿ConoceustedaTrungThan?¿Es

usted sobrino del coronel FrancisXavier Sands? ¿Llevo una camisa demanga corta? ¿Le gusta austedcontarmentiras?

—Espere.—¿Sí?—Lapreguntadesisoyelsobrino…Supongoqueunoessobrinodealguiensinimportarsiese

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alguienestávivoomuerto.—Hum.¿Sabequé?Lotengoquecomprobar.Discúlpeme.Chamberssepusodepieysaliódelahabitación,llevándoseconéllacarpetadepapelmanila.Sandsesperóysepusoamirarlapuertaabierta,pordelantedelacualahoratuvolasensaciónde

quepodíaverpasaracualquieradesusconocidos,aMinh,aStorm,aTrung,asumadre,sutío,supadre,unejércitodefantasmas.

CuandoChambersvolvióledijo:—Hemoscambiadodospreguntas.Voyacontinuarconmipequeñorecitalyluegopuedevolvera

leerlastodasensilencio,¿deacuerdo?—Sí.Deacuerdo.—¿ConoceustedelparaderodeTrungThan?¿Nacióustedenelmesdediciembre?¿Tieneusted

subaseenCaoPhuc,VietnamdelSur?¿Conoceustedelparaderodelosficheroscompiladosporelcoronel Francis Xavier Sands? ¿Ha conocido usted alguna vez en persona a un hombre llamadoTrungThan?¿TieneustedunhijoquesellamaJohn?¿Estánencendidaslaslucesdeestasala?¿HasidoalgunavezTrungThanmiembroactivodelVietcong?¿HapresenciadoustedalgunavezcómoTrungThanteníacontactodirectoconelcoronelFrancisXavierSands?¿TieneustedunmásterporlaUniversidadGeorgeWashington?¿Conoceustedelparaderoprobabledelosficherosdelcoronel?

»Esoestodo.Yalopodemosdesenchufar.—YmientraslequitabalapulserayeltubodelpechoylaspinzasdelosdedosySandsmetíalosbrazosenlasmangasdelacamisa,Chambersañadió—:Voyadejarlahojadelaspreguntasconustedunmomento.Vuelvaaexaminarlaspreguntasmientrasyomeausentootravez.

Sandsvolvióamirarlaspreguntassinverlas.—Siseabotonausted—dijoalguien—,podemosiraalmorzar.Crodelle yVoss estaban en la puerta con cierto aire de hermanosmayores que le acababan de

pagarunavisitaaunburdel.—¿Cómo?—Horadealmorzar.—¿Almorzar?—Sonlasdosycuarto—dijoCrodelle—.¿Tienehambre?—¿Quieredecirsalir?—Sí.AlRexoalgúnsitioasí.VayamosalRex.—Puesvale.—¿Puesvale?—Pormíbien.—Esunapausa.Daráustedmejoresrespuestassioyelaspreguntasyluegoseolvidaunratode

ellas.Él los siguió por el pasillo, dejando atrás al sargento de marines y el panel numérico y la

cerraduraeléctrica,yluegoescalerasarriba.Antesdebajarlasescalerasdefuera,Crodellesedetuvoparaponerselaboinaverdeenlacabeza

yacomodársela.EldistintivodelaboinaeraunoqueSandsnohabíavistonunca,negroyblancoygrisycon losbordesamarillos.Caminaronhacia lasbarricadasdecementoparavehículosySkipdijo:

—Llevaustedelpelounpocolargoparaeluniforme,¿no?

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—Nollevouniformeamenudo.—¿Quéesesainsigniaquellevaahí?—preguntóSkip,señalandoeldistintivodesuboina.—CentroBélicoEspecialJFK—dijoCrodelle.—¿Dóndeestáubicado?—preguntóSkip,yencuantosalieronalotroladodelasbarricadasechó

acorrer,esprintandoatodogashastallegaraunatravesía,entoncesdoblóaladerechaycontinuóporelcaminoqueleofrecíamenosresistencia.

Cuandoseencontróaunamujerqueestabaguiandoadosniñosatravésdeltráfico,aminorólamarcha hasta caminar y se unió a ellos, y los tres se infiltraron por entre el desquiciado flujo depequeñosvehículoshastaelotrolado,dondeechóacorrerotravez,trazandounaseriedezigzagsenángulorectoatravésdelaciudaddurantemásdemediokilómetro,sinmiraratrásniunasolavez.EnLouisPasteurentróenelparquebajolosárbolesinmensosyadoptóunritoquehabíaaprendidoconlosBoyScoutsofAmerica,cincuentapasosandandoycincuentapasosaltrote.

Contemplólaactividaddelaaceraquehabíaalotroladodelosárbolesynovioanadiemásquea los habitantes de Saigón, enfrascados en su ansia de supervivencia, avanzando a través de losdistintosmomentos. Para llegar hasta allí tenía que haber saltado por encima de sacos de arena yhaberentradoysalidodelacalle,teníaquehabersedetenido,giradosobresustalones,esquivadoaderecha e izquierda como un defensa de fútbol americano y derribado a alguna de aquella buenagentesobrelaacera,ysinembargonorecordabahaberhechoningunadeaquellascosas.

Cuando salió del parque paró un taxi, se desplomó sudando en el asiento de atrás y le dijo altaxistaquelollevaraalaestacióndeChoLon.Yaeratantardequeprobablementenosaldríanmásautobuses.Hastaquevolvieranasalirporlamañanaserefugiaríaenunbar.Oenuntemploounaiglesia.Enunacasadeputas,unfumaderodeopio.Unfugitivo,untraidor.

Loszapatosdepieldecaballoleapestabanalasalcantarillasporlasquehabíacorrido.Bajólaventanilla.

Lamentabahabertenidoqueperderseelexamen.Delaspreguntasquelehabíanpreparado,habíaunaqueleparecíarelevante:«¿Legustaaustedcontarmentiras?».

«Sí»,habríacontestadosiendofielalaverdad.

***

Porlogeneral,DietrichFestalmorzabaenunrestaurantedesopassituadoenelotroextremodelacalle TuDo, la amplia avenida que había a un par demanzanas delContinental. Para cenar habíaencontradositiosmejores,nadaconuntoquealemánperosílobastantebuenoscomoparaqueélsepreocuparaporsupeso.Aestasalturasyaconocíatodoslosrestaurantesalosquepodíairandando.Nolegustabanlostaxis.Semanejabamásfácilmenteconloschicosqueconducíanlosciclos.

Usó el punto de entrega demensajes de los lavabos delGreenParrot solamente una vez: paracambiarlaubicacióndelaentregasiguiente.EligióunrestaurantequehabíaalotroladodelaplazadelContinental,desdedondepodíamiraralagentequeentrabaysalía.ElmayorKengeraelúnicoqueusabaelpunto.

Ledijoalaadministracióndelhotelquesuhabitaciónerademasiadopequeñaylotrasladaronaotraenelladooestedondedabademasiadoelsolporlastardes.Aquellamismanochepusoelaireacondicionadoalmáximoyalllegarlamañanasufuncionamientoseveíaapagadoysusconductosobstruidosporlaescarcha.Llegarondosoperariosyledijeronquesiponíaeldialdelcontrolenla

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posición intermedia el hielo se fundiría y el aparato funcionaría mejor. Luego se marcharonhablandoentreellosenunidiomaqueaéllepareciógangoso,estridenteychirriante,unaespeciedegimoteozumbante.

HabíaplaneadopasarunpardesemanasenSaigón.Yyallevabaaquícasidosmeses.Cada pocos días acudía a la administración del hotel con una nueva razón para cambiarse de

habitación.

SuobjetivosealojabaenunahabitaciónenunvecindariomixtochinoyvietnamitaquehabíaenellímitedeldistritodeChoLon.

Enlaaceradeenfrentedelpuntodeejecución,unatiendasolitariavendíatelasytalveztambiénhacíavestidosdemujer.Enaquellaaceraelrestodelamanzanapresentabapuertascerradasyunpardecallejonesdondeparecíanpasarlamayorpartedesusvidasdiurnasvariosgruposdemujeresyniñosescandalosos:cajoneshaciendodemesasycajasenvezdesillas,hibachishumeantes,bañerasdemaderallenasdegoterasycuerdasconropatendida.Festtuvoocasióndecuriosearunpoco,peronohabíaningúncaféenlacalleytampoconingunaexcusaparasupresencia.Sequedódepieunratojuntoalatiendadetelascomosiestuvieraesperandoaalguien.

Laentradadelhoteleraigualquetodaslasdemáspuertasdemaderadelamanzana.Enlapuertasiguiente al nivel de la calle, el propietario llevaba su negocio en una oficina con las ventanasacristaladasysehacíacargodelashabitacionesdearriba.ElmayorKengsehabíareferidoaaquelhombrecomo«unelementoproblemático».Solo, fumandouncigarrilloconairede introspecciónlánguida, el agente problemático permanecía sentado entre dos ventiladores eléctricos, apostadoexpertamente sobre el mostrador para no desordenar sus papeles. Fest solo se podía imaginar suprofesión—agentedeseguros,abogado,prestamista—,yaqueestabadescritaencaractereschinospintados en las ventanas. Mientras Fest se dedicaba a mirar desde la acera de enfrente, llegó unhombreconunportafoliodecartóndebajodelbrazo,sesentóenunasilladelantedelmostradorconlasrodillas juntasysupaqueteenelregazo,ysededicóaentregarleunaseriededocumentosunoporuno.

Alcabodediezminutos,Festsintióqueestaballamandolaatenciónysemarchódelvecindario.

Alaalturadesucuartareunión,Festhabíadeterminadoquelacomunicaciónconlosamericanosyasolamentediscurríaenunadirección.Eraposiblequehubieracesadodeltodo.Encualquiercaso,elmayorKengnoteníaningunaformadetransmitirlesalosamericanoslaspreocupacionesdeFest.Oeso,obienaKengsimplementenoleimportabalaoperación.

—Nomegustanuestroplan.Tienedemasiadascontingencias.—Siemprehayproblemas.—Heidoaexaminarellugar.Esdifícil.Nopuedomantenervigilancia.Enlacallenohaycafésni

tampoco habitaciones de alquiler donde yo pueda poner un puesto de vigilancia. No puedo estarsegurodemiterreno.

Elmayorfruncióelceño.—SeñorReinhardt.Parlez-vousfrançais?—No.—Suinglésnomeresultamuyclaro.—Cuandoyoentreenlahabitación,necesitoestarsegurodequeelhombreestásolo.

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—Estásolo.—Elmayorestabasonriendo—.Novaarmado.Lollevóhastaellugaruncontactoenquienconfía.Novaamoversedeallíhastaqueselodigan.Esecontactonoshadadolasllaves.Ladelapuertadelacalleyladelahabitación.

—Entoncesdemelasllaves,porfavor.—Esmejorqueselasdemosdentrodecuatrodías.—¿Tieneustedlasllaves?—Tendrélasllavesdentrodecuatrodías.—¿Cuándoeselmomentodelaejecución?—Dentrodeunasemana.—¿Puedeustedponeraalguienavigilarellugar?Tenemosqueestarsegurosdenuestroterreno.—¿Quéquieredecir?Élnopuedesalir.Eselúnicolugardondeestáseguro.Esoesloqueélcree.

Puedeconfiarustedenello.Pequeñopayasomoreno,pensóFest.Meestásdiciendoqueabraunapuertacerradayentrecon

unapistolaenlamanoyqueestéconfiado.—¿Puedohacerleunasugerencia?—Porsupuesto,señorReinhardt.—Déjenmellevarloafuera,lejosdesuhabitación.—¿Llevarlo?¿Tieneintencióndesecuestrarlo?—Convóquenloparauna reuniónenun lugarquepodamos tenervigilado.Talvez sucontacto

puedaarreglarlo.Pondremosvigilanciaantesdelareunión.Entonceselterrenoseránuestro.Elmayorfruncióloslabioscomosiestuvierateniendoenconsideraciónlosdetalles.—Esotalvezdificultelalimpieza.—¿Hayquelimpiarellugar?—¡Nousted,señorReinhardt!Yaestápreparado.Todoestápreparado,señorReinhardt.—¿Estádiciendoqueesdemasiadotardeparacambiarelplan?—Tenemosquecontinuarconconfianza.En el camino de vuelta a su habitación se detuvo en un tenderete de la plaza y sin regatear el

precio compró un enorme diccionario inglés de unas dos mil páginas. En el mostrador delContinentalpidiósusobjetosdevalordelacajafuerteyelempleadole trajosubolsadevuelodeVietnamAirLines.Unavezarribasacóelequipodelabolsa,encendiólaradioysubióelvolumen.Eranlasdosdelatarde.LaemisoradelejércitoamericanotransmitiólanoticiadeunviajeinminentealaLuna.Metióeldiccionarioensubañera,acoplóelsilenciadoralapistolaylepegócuatrotirosdesdeunadistanciadeunmetro.

La primera página intacta era la mil ochocientos treinta y tres. Tal como había esperado, abocajarro,elarmaproduciríaunaheridadesalida.Otroactodeidiotez.Pidounarmadelveintidósymetraenunobús,pensó.NopuedollamaraBerlín,mientrasqueyahayastronautasrumboalaLuna.

Losteléfonosyafuncionaban,habíaconseguidohacerlallamada,supadrehabíamuerto.Llevabadosañosesperandooírlo,ysinembargolanoticia lodejócompletamenteaturdido.El

ancianohabíaconseguidosaliradelanterespiraciónarespiraciónatravésdetantasenfermedadesqueyanoparecíaposiblequedejaradehacerlonunca.Nolohabíaderrotadonadaenparticular.Sehabíamuertoensuhabitacióndehospitalmientrasechabaunasiestadespuésdeldesayuno.Porteléfono,sumadrelehabíaparecidocansadaperoporlodemásnodabalaimpresióndeestarafectada.

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Después había llamado aDora, y se había derrumbado y se había echado a llorarmientras lainformabadelamuertedesupadre.

—Volveréallamarpronto.Losteléfonosyafuncionan.Debióde dar la impresiónde que era la buenanoticia de los teléfonos lo que le había roto el

corazón.

***

Debidoaqueeraunagentedeviajeschinoelquedirigíaaquelhoteldecuatrohabitaciones,Trungdioporsentadoqueelestablecimientolousabanhombresdenegocioschinos.

De día la calle era ruidosa, y después de las nueve o las diez de la noche, bastante silenciosa:tráficolejano,cazaslejanos,helicópterosmuchomáscerca,sobrelamismaciudad.Eralaprimeravezquesealojabaenunahabitacióndehotelenlaciudad.Estabaenposesióndeunallavequeabríalapuertadelacalleyotradesuhabitación,lasdossujetasconuncordelauntrozodemaderaconelnúmero1grabadoacuchillo.

Lapuertadelacalledabaaunaescaleraestrechaquesubíaaunpasilloestrechoconeltechoaltoyparedesdeyeso,doshabitacionesacadaladoyunbañoalfondo:unlavabo,unabañerayunretretecuya cisterna se vaciaba al tirar de una cadena. Por lasmañanas oía pasos que retumbaban por elpasilloyasusvecinosqueabríanlosgrifosycarraspeabanyescupíanenelbañoyporlanocheoíaalhombredelapuertadealladotoserycaminardesdesucamahastalaventanaparaescupirsobreelcallejón.

Ellugarteníainstalacióneléctrica.Enloaltodelaescaleraytambiénenel techodelcuartodebañocolgabantubosfluorescentesquesepasabantodalanocheencendidos,peroensuhabitaciónnohabía ninguno. Tenía un fanal de butano, un colchón delgado con el somier de bambú, unamosquiteraredondayenformadecúpulaparalacamayunamesillacuadradasobrelaqueestabanelfanal,unacajadecerillasdemaderayunaconchadealmejagrandeparausarladecenicero.

Todas las noches cenaba en un café que había a una calle de allí y se traía de vuelta comidasuficiente para el día siguiente. Hao le había dado dinero y le había dicho que saliera lo menosposible hasta que los americanos, probablemente al cabo de una semanamás omenos, llevaran acabosusgestiones.Peroélteníaquehaceraquellasalidadiaria.Nosequeríaprivardeello.LlevabacuatrodíasenSaigón.

Nohacíafaltaqueledijeranquenosedejaraver.Sialguienlereconocíatodosehabíaacabado.Alas células les había dicho que iba a visitar a unos familiares en Ben Tre con motivo de lascelebracionesdelTet,solamenteunosdías.Yyallevabacasidosmesessindarseñalesdevida.Nohabíajustificaciónparasemejanteausencia,ningunamentiraloibaalibrardeuna«sesión»:horasymáshorasdediscusiónengrupo,hastaqueunomismoeraelprimeroqueestabaconvencidodequesehabíapasadoalotro ladoyexigíasercastigado.Seaseguraríadeque losamericanosentendíanaquelproblema.Talvez losamericanosconocíanaalgúnotro renegadodelVietcongquepudierainventarse una historia—no se imaginaba cuál, un brote de enfermedad, una herida— y dar unacoartadadesuparaderoduranteaquellaausencia.

Hoynovoyacomerarrozotravez.Fideos,sitodavíalesquedasalsahoisin.Lateníanayer,peromelaacabéyo.

Lasúltimas semanas, primero en lahabitaciónde encimadel café en elMekongy ahora en la

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habitacióndeencimadelaagenciadeviajes,habíansidounaformadeencarcelamiento,aunquebajocondiciones felizmentemuy distintas de lo que él había aprendido a entender comoprisión.En laceldadeConDauhabíadormidoenunsuelodepiedracondocehombresmás,avecessobreunalosadecementoalaqueleencadenabanlostobilloscongrilletes.Losguardiaspatrullabanenpasarelasporencimadesuscabezas,avecesmeabansobreellosyotrasveceslesechabanbasuradeuncubo.La celda en sí no era lo bastante larga para dos hombres tendidos uno detrás de otro, yaproximadamentelamitaddeancha.Losprisioneroscuidabantodoslosunosdelosotros,nadamásquelamuertepodíasepararlosdelacausa.Luegoelfinaldelosfranceses,laliberación,elviajeenbarcoalnorte,yporfinelkoljós,lagranjacomunitaria:losciudadanosdelFuturoColectivo,porlogeneral tensos, a veces estallando, siempre desesperados, viviendo en la estupidez, la furia y lasumisión.Los ciudadanos del futuro habían tenido poco que decirle. Eramayor que ellos y habíaentradoporlasTresPuertas—prisión,sangreynegacióndesímismo—,cadaunadeellasunpasomás adentro de la mentira que los tenía atrapados a todos. Y la última puerta, la que no estabanumerada: renunciar a amigos y parientes, la puerta que llevaba a la verdadera prisión.En cuantometestupropiasangre,tufuerzaytusdíasenlamezcla,entoncespertenecesalacausa.Perolomásimportanteeslatraición.

Losdíasmás felicesde suvida eran losquehabíapasadobajandode lasmontañasdeTruongSon, caminando tranquilamente de vuelta a casa con buen tiempo, después de pasar semanasascendiendo la ladera norte bajo la lluvia, después de la epidemia que había estado a punto dematarlo,despuésdeloscampamentosdedesertoresdondetodoelmundotemblabadefiebre,despuésdelostúmulosfunerariosderocasamontonadasdelasquesobresalíanvaritasdeincienso,obiendeloscadáveresdesenterrados,dispersosyhechospedazosporlostigreshambrientos:despuésdetodoaquello,elfáciltrayectodebajadaendirecciónaBenTre,elalientodelsurensuspulmones,laluzdelsolquecaíanenformadehacesatravésdeldoseldelaselva,ylasfloresquellevabanelnombrede sumadre. Pero entonces entré en una tierra dondemimadre estabamuerta y todos los demásfingíannoestarlo,pensó.Mispiernasmeayudaronacruzarlamontaña,peronuncalleguéacasa.

Latraiciónhabíaalimentadoelviajedesalida.Ylatraiciónlollevaríadevuelta.

***

Con su bañador de color verde oliva, desnudo de cintura para arriba, Sands estaba sentado en labutacademimbredelpequeñoporchedeatrás tomandoelairequeveníadelarroyoysaboreandounabebidahechadeazúcar,lechedecocoycosasqueprobablementenoqueríasaberquéeran.Todoestaballenodehumodebasura,elhedordelarroyolerevolvíaelestómago,losbichosloestabanvolviendoloco.Elchirridodelascigarras.Diminutascriaturasconalasleazotabanlacara.

Oyóunvehículoqueseacercabaporelcaminoyreconocióelsonidodeunjeepdelejército.Ya hacía cuatro días de su huida y demomento no había venido nadie. Los dioses avanzaban

despacio.Obiensehabíandadocuentadequeélhabíahuidosintenerningúnplan,sindinero,quehabía saltado por la ventana a la noche agreste, ¿y qué había hecho?Deambular en la oscuridad,esperandoaqueloarrestaran.

Cuandooyólosfrenosdeljeepdelantedelacasaselevantódelabutacayentró.Aaquellahoradeldía,contodoelcalorquehacía,Skipcolgabaunatelamosquiteraporencima

de la puerta principal y la dejaba abierta. Miró a través del umbral mientras Jimmy Storm, con

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uniformeycamisetamarrón,cruzabaelportónbajoysubíalaescalera.Sandsechóaunladolamosquiteraydejóquesecerraradetrásdesuinvitado.Stormllevabaunfajodecartasagarradocontraelpecho.Nolosaludóalllegar.—Vossyanoparticipaenesto.—¿Perdón?—Nohasobrevividoalamisión.—Meestásdiciendoqueestá…¿qué?—Etiquetadoyenlabolsa.Lahadiñado.Con lamano libre, Storm le propinó un gancho hasta el fondo del plexo solar.A Sands se le

vaciaronlospulmones,seleagarrotóeldiafragmaylocególanáusea.Sedesplomóhaciadelantehastaquedarderodillasyporfinelcostadodesucabezaimpactóenelsuelodebaldosas.

Recobróalgunaformadeconciencia,respirandodenuevo,mientrasStormledabagolpecitosenlaorejaconlapunteradesubotadelona.

—Podríaatravesartelacabezadeunapatadasiquisiera,¿sabes?—Losé—consiguiódecirSands.FuetirándolelascosasdeunaenunaaSandsalacara,leyéndolastodasprimero:—AquítienestuNewsweek.AquítienestuTime.¿Quéesesto…?ElputoSportsIllustrated.—Storm…—Noshasmetidoenunbuenmarrón.Noshasmetidoenunmontónenormedemierda.—Storm…hablemos.—¿Qué te hacepensar quequiero hablar contigo? ¿Qué te hacepensar quequiero discutir del

juegoconuncagadoqueestáencogidoenelsueloenposiciónfetal?¿Esesoloqueteenseñaronenlainstruccióndecombatesinarmas?

Dehecho,alalumnoseleaconsejabaquecuandoteacorralabaungrupoencogieraselesqueletoalrededordelosórganosvitalesy«rezarasporquevinieralacaballería».No,sinembargo,cuandotederribabaunsoloatacante.Unhombrebiensituadoenelsuelopodíasacarleventajaaotrohombreque estuviera en equilibrio sobre una sola pierna mientras daba la patada, o eso se había dichosiempre.ASandsnoleapetecíaprobarlo.

—Ynodigasquehicisteloqueteníasquehacer.Esosonpatrañas.Disolamentequehicisteloquehiciste,colega.Disolamentequelohiciste.

—Yonohedichonuncaquehicieranada—dijoSkip.—Tú y yo tenemos que hablar a algún otro nivel, colega, porque tú no te escapas. Tú no te

escapas.Estoesloquetenemosentremanos.Oseaquealamierda.Mientrashablaba,leibadandopatadasenlacabezaaSands.—¿Hasterminado?Megustaríaqueterminaras.—Sí.Heterminado.No,noheterminado.LediodospatadasaSandsenlascostillas.Segiróparamarcharse,llegóhastalapuertayvolvió.—¿Tútecreesquemeimportaunamierda?—dijo—.Vamosaperderestaguerra,vale,¿yqué?

¿AcasolosniñitosdeAméricavanairalaEscuelaSecundariadeltíoHoyamemorizarelDiscursodeGettysburgdelputoLenin?¿AcasoCharlievaairporlascallesviolandoanuestrasmujeres?No,joder.Todoesunaputapatraña,tío.Ganemosoperdamos,nonosvaapasarnada.Peroestamosaquí.Túyyoy estosotros capullos.Esnuestro rollo loque tenemos entremanos.O seaque ¿por qué

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cojonesno?Larazónsubyacenteprincipales:«Alamierda,hagámoslo».Obienloentiendesobienno.

—Sí.Esaeramásomenoslateoríademitío.—Elcoronelestávivo.—¿Sí?—¿Ono?—No.—Sí,capullo.—Yunamierda.—Claroqueno.Peronolopillas.Esoesexactamenteloquemantieneenmarchalosreactores.La

fraganciadelaspatrañas.—¿Vasadejarquemelevante?Stormsesentóeneldiván,jadeando.—Vale,puesmequedarétumbado.Estoycansado.—Tehascargadoloqueestamoshaciendo.Parati,OperacionesPsicológicasespapilladebebé.

Te lo digo, colega, es ahí donde se gana o se pierde. En el reino de las patrañas. No importa laenormepalizaquelesdemosenelcampodebatallaoviceversa,hostia.

—Elcoronelhamuerto.—Sí—dijoStorm—.Eresuncagado.Tequedasahítodoencogidocomounapalomitademaíz

dentrodetupequeñoútero.Pedazodetraidordeincubadora.Por fases doloridas, Sands consiguió ponerse de pie, se dirigió a una butaca y se volvió a

desplomar.—¿Cómotesientes,Skipper?Comounamierda,espero.—Jimmy.—¿Sí?—¿RickVossestámuerto?—Muyperoquemuymuerto.—¿Has…hasmatadotúaRickVoss?—No,capullo.ARickVosslohamatadoelVietcong.Alguienhaderribadosuhelicóptero.Oeso

creen.Encualquiercaso,eltrastocayó.—¿YRickVossestámuerto?—Todoslosqueibanabordo.Pum.—¿Quéestabahaciendoenunhelicóptero?—Mangoneandocomouncapullo,igualquesiempre.—Diosbendito.Teníamujerehijos.—Bueno,puesyanolostiene,socio.Muyprontolostendráotrotipo.Asíeslaputavida.Voss teníaunaniña, recordóSkip.Se inclinóhaciadelantey recuperó subebidadecocode la

mesaysepegóelcristalfríoalpómulodolorido.—Aver,pequeñoSkippy.¿Dóndeestabaseljuevespasado?—EnSaigón.—¿Ydóndemás?—Haciendolapruebadelpolígrafo.—Ya.Claro.

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Sandsseinclinóhaciadelanteensusilla.GuardabasuBerettadel25enuncajóndeltocadordelpiso de arriba, y ahora tuvo un impulso momentáneo pero casi irresistible de subir a cogerla ypegarleaJimmyStormuntiroenlacara.Cuandolaolahubopasado,sesintiódébilhastaunextremodeparálisis.Setapólacaraconlasmanos.

—Escucha—dijo—.¿Temarchasono?—Sí,memarcho.Solamentehevenidoparadecirtequeelkarmahaconvertidoatugranamigo

ensopa.—Diosbendito.PobreVoss.—Sí, pobreVoss.Ojalá pudiera ser yo quien se lo dijera a sumujer. Espero que tuviera unos

niñitospreciosos.Esperoquepensaraenellosmientrasloderribaban.DeprontoSandsagarróunoscubitosdehielodesucopayselostiróalacara.—Aah,mierda—dijo Jimmy—. Lo siento. Venga, tíramemás.—Sus ojos lo pedían a gritos,

pedíancastigo—.Laprimeravezquetevipensé:Estetíotienepintadechungo.Buscandounacolillaamediofumarentrelosceniceros.Tieneesaexpresiónde«¿Cómotepuedoagarrar labilletera?».Ha venido en un crucero infantil. Ha venido a jugar a agentes secretos y chimpas. Has venido apavonearteporlacallemayoryaexhibirtuputocochetrucado.

—Sihasterminadodepisotearme,megustaríaquetefueras.—¿Pisotearte?Alamierda.Ahoramismoalcoronel loestántorturando.Ahoramismoleestán

rompiendotodosloshuesos.—Jimmy.Malditasea.Vengaya.—¿Teacuerdasdecómoengañóalosjaposenlasegundaguerramundial, tío?Sehizoelputo

muerto.—Bienporti.Manténvivalaleyenda.—Yonosoylaputavozdelarazón.Absorbolascosas,lasprocesoysientoloshechos.Esalgo

visceral.Deesonohaymuchoporaquí.—Jimmy,elcoronelhamuerto.Ytodosehavenidoabajo.—¿Qué decía él? ¿Qué dijo él un millar de veces? «¿Cómo ponemos material falso que sea

creíbleenmanosdelenemigo?Ymásconcretamente,enmanosdeltíoHo.»Planuno:atravésdeunagentedoblequesupuestamenterobedocumentosfalsos.Plandos:usandoaunamericanovivo,uninfiltrado que se deje capturar. Pero su idea favorita era usar ambos. Si la cosa viene de fuentesdistintas,aumentaselniveldecredibilidad.

—Jimmy.Concéntrate.—No,tío.Estoresultademasiadológico.Estádemasiadobienhechoyesdemasiadopulcro.Ha

fingidotodoelrolloynonoslohadicho.Sehaidodemisiónyestamosjodidos.Nolopodemosayudar.Algochungoestápasando,extremadamentechungo.Ynosotrossomoslospringados.

—¿Porquéibaamontarunaartimañasinponernosalcorriente?—¿Porqué?Porqueeresunsoplón.Yuncagado.Yunmarica.Tendríaquefollarteporelculo.—Concéntrate,¿quieres?¿Quiéntedijoquemehabíanelegidoamí?—Sécosas.—TelodijoHao.—Vetealamierda.—Storm…esHao.EsHao.—Alamierda.Buenintento.

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—Jimmy,esHao.—Vigilatukarma.Contemplatukarma.Observacómosetecomeacámaralentaempezandopor

laspuntasdelospies,capullo.—MehicieronelpolígrafoenlaAcademiadeIdiomas.Haoestabaallí.—Y unamierda.—Storm se tomó un segundo para pensar en la afirmación—. ¿En lamisma

fiesta?—No,perolovienelpasillo.—Talvezestétomandoclases.—Tienenunlocalenelsótano.SeguridadRegionaloalguienparecido.Haopasópordelantede

lapuertamientrasyoestabasentadoallí.Queríanqueyoloviera.Stormpensóenaquelloduranteunossegundos.Elpolígrafohumano.—¿Quétedijeyo?—dijo—.Estaesunaguerraderockandroll.Loscabronesnoentiendenese

rollo.—Se puso de pie y se secó la cara con el dobladillo de la camisa, dejando ver las piernasrojizas y la falda verde de una bailarina de hula que tenía tatuada en el pecho—.Mierda,mierda,mierda.

—DejaaHaoenpaz.Soloestásalvandoelpellejo.—Sí. Mierda. Este sitio es Disneylandia colocada de ácido. ¿Has tomado esa mierda ya? ¿El

ácido?—Nohetenidoelplacer.—Niseteocurra,Skipper.Notienesloquehayquetener.

***

Teníaunalocalización.Teníaaccesoalamismaenformadedosllaves.Teníaunarma,unhorarioyunpuntodeúltimorecurso.Ylefaltabaloquemásnecesitaba.

Noteníaequipo.Lehabíanpuestodemasiadascosasenlasmanos.Teníaquevigilarelpuntodeentregaporquenosefiabadesuspropioscontactos,yteníaquehacerloquepudieraparamantenervigiladoellugardeejecución.Aunquefueratrespersonasenlugardeuna,lomásprobableeraquesusomeraformaciónenmateriadevigilancianolesirviera.Era,enlenguajevulgar,un«pistolero».Elquemanejabaelarma.

Elobjetivo llevabacasiuna semanaenaquella localización.Fest calculabaqueamenosquealobjetivo le llevaran la comida, tardeo temprano tendría que salir a comer, probablemente cuandooscureciera.En todo caso, la noche era el únicomomento para la observación.Una sombra entresombras.Lanocheanteriornohabíavistonada,porlomenoshastalasdiezaproximadamente,queeracuandohabíaabandonadosupuesto.Estanochehabíallegadounpocoantes,alponerseelsol,yechóaandaralrededordelamanzanaesperandolaoscuridadqueescondieraunafiguraestática.

Elcrepúsculoteníamuypocoefectoenlavidadeloscallejones.Siacaso,losniñosvociferabanmásalto,yloshombres,sombríosoevasivos,deregresodedondefueraquepasabaneldía,parecíanvolveralasmujerestodavíamásestridentesconsupresencia.Festechabademenosasufamilia,quepor comparación le parecía silenciosa. Dora hablaba demasiado, y tal vez Claude decía tonterías,peronoenun tonoquerivalizaraconel ruidodel tráficode laciudad.Festechabademenosasufamilia en general. ¿Por qué no? Lamuerte del viejo lo había puesto sensiblero y filosófico. Alprincipiolanoticialohabíaconmocionado,peroenseguidahabíaasimiladounapérdidaquellevaba

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tantotiempoesperando.Pocosdíasmástardelapenalovolvióaatacarcuandosediocuentadequeelviejoseguíamuerto.Comosiunapartedeélhubieracreídoquesupadrepodíamoriryquemástardeunopodíavisitarloyhablardeltema.

Habíadecididonoconsideraraquellaoperacióncomounaespeciedemonumentosentimentalalanticomunismo de su padre. Una operación estructurada de forma tan poco profesional einnecesariamentellenaderiesgosresultaríaunmemorialridículoparaunhombrequehabíavistosudeberconclaridadyhabíavividoenhonoralmismo.

Mientrasdabalavueltaalamanzanaporcuartavezyvolvíaporlaesquinavioaunhombrequesalíaporlapuertadelacalledelacasadehuéspedes.

Aquelhombreteníaqueser.Otrosquehabíavistosalirllevabanpantalonesycamisasdetraje,o,enelcasodeunpardeancianos,aquelloscamisoneslargosybombachosholgadosquellevabanloschinosdelos tebeos,y lomásimportanteeraqueloshabíavistomoverseconlibertad,quehabíancruzadolacalleasuantojo,nadamássalirdeledificio.Elhombrealqueestabaviendoahorallevabavaquerosycamisetaysemantuvopegadoa lasparedes,en lassombras,hasta llegaral finalde lamanzana.Mientrasestabacruzandoporlaesquina,Festechóaandar.Elobjetivocontinuósubiendola travesíaperpendicularyFestdoblóel recodoa tiempodeverlogiraral finalde lamisma.Festaligeró el paso,manteniéndose también pegado a las paredes. Cuando giró también a la derecha,aminorólamarcha.Teníaalhombreasoloveintemetros.Ahoraestabancaminandolosdosporunacalleparalelaalacalledondevivíaelhombre.Estesemetióporunaentradailuminada.Festpasódelargofrentealamismayloviosentadoaunamesadeuncaféhablandoconelpapasan.CuandoFestllegóalatravesíasiguientediomediavueltayvolvióapasarfrentealcafé.Elhombreestabasentadodentroconuncuencoypalillosyunatetera.

Fest volvió con paso ligero hasta la esquina, giró a la izquierda y se puso a correr de nuevo.Llevabalasllavesenelbolsillo.

Alfinaldelamanzanacruzólacalle,sequedóalasombrayobservólasventanasdelsegundopisodelacasadehuéspedes.Ningunadelasdeaquelladoestabailuminada.Enelcielolejanoqueseextendía más allá, los haces anaranjados de las balas trazadoras apuntaban hacia arriba. Elespectáculo se producía cada noche, una especie de parodia de la aurora boreal. El ruido de loshelicópterosydelosmotoresdeloscazasibayvenía.Elestruendogeneraldelaciudadseelevabaflotando desde las callesmás concurridas. Pasaron un par de ciclos y varios transeúntes, pero lamanzana,aexcepcióndelosescabrososcallejones,estabamásensilencioaaquellahoradelanochequelamayorpartedeSaigón.

Sesacóelarmaquellevabaenlapistoleradelvientre,bajolacamisa,yelsilenciadordelbolsillodelpantalónylosacopló.Ahoranonecesitabaarma,perolanochesiguientelallevaríaenlamanoapartir de ese punto. Estaba sudando copiosamente. La noche siguiente llevaría dos pañuelos y sesecaríabienlaspalmasdelasmanosantesdemanejarelequipo.

Frentealapuertadelacallesostuvounallaveenlamanoizquierdaylapistolaenladerechayprobólallaveenlacerradura.Habíaelegidolacorrecta.Selaguardóenelbolsillotraseroizquierdoyentró.Dejólapuertaabierta.Bajountubofluorescentedesnudosalpicadodeinsectos,unaescaleraestrechaibaalpisodearriba.Probóuninterruptorquehabíaenlaparedasuizquierda,produjounpardesegundosdeoscuridad totalyvolvióapulsarel interruptor.La luzvolvióa lavidaconunparpadeo.Sesacólasegundallavedelbolsillodelantero,subiólaescalerasinamortiguarsuspasos,comosifueraunhuéspedmás,eintrodujolallaveenlacerraduradelaprimerapuertadeladerecha.

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Lapuertaseabríahaciadentroyaladerecha.Laempujódeltodoyseechóatrásyaunlado,conlapistolalista.Elinteriorestabatanoscurocomohabíaesperado.Nooyóningúnruidoprocedentededentro.Alotroladodelahabitación,unasolaventanadabaalapareddeledificiocontiguo.

Abrióycerrólapuertavariasveces.Cuandopasabalossesentagradosdeapertura,labisagradearriba chirriaba. A la cerradura tampoco le iría mal un poco de lubricante, pero no se le habíaocurridotraerlo.¿Acasonosabíanqueélerasolamenteelpistolero?

Dejandolapuertaabierta,entróenlahabitación.Sinlaluzdelpasillo,laoscuridadseríaabsoluta,ysinembargo,afindecompletarlaoperación,tendríaqueapagarlaluzdelpasilloantesdeentrar.Palpólaparedaambosladosdelapuertaenbuscadeuninterruptorperonoloencontró.Sedevolvióel arma a la pistolera y sacó su linternita del bolsillo de la camisa para enviar su círculo de luzdiminutoalrededordelahabitación.Nohabíainterruptorenlaparednilámparaeneltecho.

Una cama estrecha con unamosquitera anudada encima, unamesa con un fanal y una conchagrandeencima.Enelsuelojuntoalamisma,unospantalonesdobladosyunacamiseta,ytambiénunamochila,cuyoscontenidosinspeccionódeprisa:doslibros,unpardecalzoncilloslargos.Levantóeldelgadocolchónyatravésdelasláminasampliamenteespaciadasdelsomiercertificóqueelsuelodedebajodelacamaestabavacío.Setumbódecostadoyenfocólapartededebajodelas láminasconsulinterna:nohabíanadasujetoenningunadeellas.Sepusodepie.

Recorriólahabitaciónconlalinternita,palpandolasparedesdeyeso,examinandoenespeciallostablonesdelsuelo,enbuscadealgunoqueestuvierasuelto.

Elcristaldelaúnicaventanaestabalevantado,yeledificioquehabíaalotroladoestabatancercaquepodíatocarlo.Diossabíaquévivíaenelestrechoespacioquequedabaentreambasparedes.Sacólamanoypalpó lapartededebajode lacornisa.Nohabíanadasujetoa lapareddefuera,ningúnalijodeningunaclase.

Nohabíaabsolutamenteningúnotrolugarparaguardarunarma.Obienelhombrellevabaunaencima o bien no tenía ninguna, tal como había prometido el mayor Keng. En cuanto a objetosimprovisados, sielhombresedespertabapodíausar lamesilla,o laconcha,queparecíahacer lasvecesdecenicero.

Lehabíanaseguradoenfáticamentequeelhombrenoibaarmado.Perocualquierapodíacompraruncuchillo.Ollevarencimauntrozodecuerdaparausarlocomogarrote.

A la luz de la linternita llevó a cabo un examen minucioso del colchón. Descolorido en unextremo,probablementedondeseapoyabalacabeza.

Elproblema,enopinióndeFest,eraqueunhombreprudente,yporañadiduraunhombreaquienel estrés y la tensión agudizaban los sentidos, se despertaría al oír el más pequeño sonido y selevantaríadelacamayestaríalistoparacualquiercosa.

Erauna locura limitarse a entrar por la puerta.Suponiendoquepudiera subir las escaleras sinhacerruido,aunasídemasiadascosasdependíandequeelhombresiguieradurmiendomientrasFestledabalavueltaalallave.

¿Porquénomatarloahora?Dentrodediezoquinceminutoselhombreentraríaporlapuerta,despuésdeterminarsesucena.

PodíamatarloeirdirectamentealaAcademiadeIdiomasdelasFuerzasArmadasparaexplicarlesquesehabíavistoobligadoaimprovisar.Adaptarseeimprovisar,lasmarcasdelacasadelramo.

Perosalvoencasodefuerzamayor,unotienequeserfielalplandeoperaciones,oaloquepasapor plan, o a lo que queda delmismo. Él siempre había sido fiel al plan.Y ningún plan le había

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falladonunca.ElmayorKenghabíainsistidoenqueseteníaquehacerlanochesiguiente,yexactamentealas

dosdelamadrugada.Unahoramástarde,ellugarseríalimpiadoyelcuerpoeliminado.Alpareceraquella parte estaba arreglada. Él tenía que adaptarse. A Fest le molestaba que el plan parecieracentrarsemásenlaoperacióndelimpiezaqueenlaejecuciónensí.

Pero suponiendo que esta noche el hombre coma deprisa, pensó, suponiendo que ya hayaterminado,suponiendoquesubalasescaleras,poniendoporcasoqueahoraaparezcaenlapuerta…lomato.¿Ysidecidoesperaraquíquinceminutos,yesomismoesloquepasa?¿Quémásdasielmomentolohaelegidolaprudenciaolohanforzadolascircunstancias?

Volvióarepasarlasparedesylostablonesdelsuelo,conscientedeestartardandomástiempodelnecesario,abriendolapuertaauncambiodeplan,desafiandoaldestino,aldestinodelobjetivo.Peroeltiposetomósutiempo,disfrutandoalparecerdesuexcursión—¿quiénnoloharía?—,yalcabode cincominutosmásFest cerró la puerta con llave detrás de sí, bajó las escaleras con la pistolapegadaa lapiernaderecha, igualqueharía lanochesiguiente,ysalióa lacalle.Guardóelarmaycerró la puerta con llave detrás de sí sin mirar a su alrededor para nada, a continuación cruzódirectamentelacalleysequedóaesperaralasombradelaentradadeltratantedetelas.

Llevabaquinceminutosesperandocuandoelobjetivoregresóporlaaceraopuestayentróporlapuertadelacalledeledificio.

Fest volvió a cruzar la calle y se introdujo por el estrecho espacio entre los edificios paracontemplarlasventanasqueahoraquedabanporencimadeél.Menosdeunminutodespuésdequeelhombrecilloentrara,unpequeñoresplandorenlaventanamáscercanaprecedióaotromásintensocuandoelhombreencendiósufanal.

Eralaventanacorrecta.Habíaencontradoalhombre.¿Ysilanochesiguienteelhombresalieraacenarymurieranadamásregresar,enlugardealas

dosdelamañana?¿Ysielcuerposepasabavariashorastiradoenlahabitación,enlugardesesentaminutos?Elrigormortispodíaplantearunproblemaalequipodelimpieza,peroFestlodudaba.Elbeneficioenmateriadegarantíasdeejecuciónhacíaqueelcambiovalieralapena:ladiferenciaentreentrar en una habitación completamente a oscuras en la que podía estar pasando cualquier cosa, yesperarenunahabitacióncompletamenteaoscurasaunhombrequepensabaqueestabavacía.

Volvería la noche siguiente a aquella misma hora. Si el hombre salía, Fest lo recibiría a suregreso.

***

TrungThansesentóenlacamaterminándoseunaCoca-Colatibia.Sinrelojenlahabitaciónnirelojdepulsera, loúnicoque sabíaesqueeranpocomásde las tresde la tarde.Todavíaquedabandoshorasparaqueelcrepúsculollegaraaliberarlo.

Probóasentarseconlaespaldarectaenlacamayaprestaratenciónúnicamenteasurespiración,soloasurespiración.

Quedarmequietocuandoquieroactuar,ydejarquemiimpacienciaseadestruida,esunaemociónqueresultacasiilícitadebidoalaligeranáuseaquelaacompaña.Comocoñacrobado.ComocuandoHaorobólabotelladelachozadelanciano.Elancianolaescondíaenlascenizasdelfogónporquesumujerestabamuertayélnuncacocinabaparasímismo.Quedabacasilamitadenlabotella,ynos

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labebimossinlimpiarsiquieraelhollín,yconlasmanosnegrasylascarasnegrasnosadentramosen una nube y cantamos cancionesmaravillosas.El amo se rio. Siempreme llamaba elMonje.Elmaestropensabaqueyomequedaríaconél.

Enaquellaépocasabíaquedarsesentadoquieto.Habíaaprendidoavivirunabuenapartedecadadía enel silenciodedebajodelmundo.Ahora elmundovivía en sumente, colonizaba su soledadcomo si fuera un virus, los pensamientos se infiltraban en sumeditación, la atravesaban, caían encascadaatravésdelamisma,ycadaunodeellosseclavabaenél.

Probóameditarderodillasenelsuelo,peroúnicamenteconsiguióqueeltiempopasaratodavíamás despacio. Todavía había luz, aún faltaba bastante para las cinco de la tarde, cuando oyó quealguien subía las escaleras y llamaba a la puerta, y fue a abrir primero la cerradura y después lapuertaparaencontrarseconelsargentoamericanofelinoyderasgosafilados,depiedelantedeél.

—¡Cerocerosiete!¿Teacuerdasdemí?Semovióhaciadelantemientras hablabayTrung se apartó a un lado, perono cerró la puerta

hastaqueelamericanoleindicóconungestoquelohiciera.—¿Cómovatodo,hermano?¿Dejuerga?TrungrecordóquesellamabaseñorJimmy.—Ya lo creo—dijo el señor Jimmy—.Es como saltar sobre unmontón demierda de arañas

enfermas,ymeencanta.LavergüenzahizosonreíraTrung.—¿DóndeestáHao?—Elamericanosemiróelrelojdepulsera—.Elcabrónnohavenido,¿es

eseelmensajedehoy?—El señor Jimmydiocuatropasoshasta laventana,puso lasmanosen larepisayasomólacabezafueraparacontemplaratravésdelestrechoespacioeltrozodecallequesedivisabadesdeallí.SevolvióhaciaTrung—.Bueno,odioinyectarunacepanegativa.Perolovoyadecir: ese cabroncetenova avenir.Lo cual quieredecir que estamosparcialmente jodidosobiencompletamentejodidos.¿TienesotraCoca-Cola?

—No,gracias.ElseñorJimmyvolvióacruzarlahabitaciónysesentójuntoalapuertaconlaespaldapegadaa

laparedyunapiernarectaylaotrarodillalevantada.Alparecerteníaintencióndequedarse.—¿Fumas?—Yogustacigarrillo.SemetiólamanoenelbolsillodelacamisayencendióuncigarrilloyletiróaTrungelpaquete

yelencendedor.—Marlboro.—Sí.Estoyintentandopensar.Oseaquecallémonos.Trungselevantó,cerrólapuertaconllaveysesentóenlacamaafumar,tirandolacenizaporel

cuellodesubotellavacíadeCoca-Cola.—Cuandoledélaúltimacaladaaestecabrón,seacabó.Meabro,obienmequedoaquíhastaque

pase.—Elsargentodiounaprofundacaladaasucigarrillo—.Alamierda.Mequedohastaquepase.SeterminaronsuscigarrillosensilencioyTrungtiróelsuyoalinteriordelabotellamientrasel

sargentoponíaelsuyodebajodeltacónyloaplastabaenelsuelo.Llegadoaquelpunto,Trungsediocuentadequenolehabíaofrecidoelcenicero,nitampocolohabíausadoélmismo.

—Escucha,colega.¿Haoesamigotuyo?—Haoesamigomío.

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—¿Buenamigo?—Buenamigo.—¿Amigodeverdad?—ElseñorJimmyjuntólasmanosconfuerza—.¿Amigodeverdaddelos

dehastaelfinalypaseloquepase?ATrunglediolaimpresióndequetalvezentendíalapregunta.Fruncióloslabiosyenseñólas

palmasdelasmanosyseencogiódehombros,talcomohabíavistohaceralosfranceses.Elsargentoselevantódeunsalto,peronosemarchó.SeacercóaTrungofreciéndoleelpaquete

decigarrillosyconlaenfermedaddelterrorenlamirada.—¿Agentedoble?Menudaputachorrada.EnestecubodemierdaqueesVietnamdelSur,todolo

quesemueveesunagentedoble.Trungaceptóotrocigarrillo,perolevantólapalmadelamanoynegóconlacabezacuandoel

sargentoleofrecióelencendedor.Dejóelcigarrillosobrelamesa.—Probablemente piensas que se me ha ido la chaveta. Estoy de acuerdo contigo. Tengo que

admitirlo.Perosigoescuchandomipropiorollo,camarada,porqueesloúnicoquehayentremanos.—SeñorJimmy.Porfavor,habledespacio.—¿Hablasinglés?—Unpoquito.Númerodiez.—Nonosestamosentendiendo.Nohaycomunicación,capici?Noconozco losnombresde las

entidadesentuidioma.Túsabestodoslosnombres.Tienesconcienciadetuparaderobásico.Loquenoentiendesesquetodoesoestáflotandoenunazonaqueestácompletaybásicamentedislocadadelas leyesnaturales.Esdecir, todas las leyes rigendentrodeVietnam.Pero lasdel restodelplanetaTierra,esasleyesnoseaplicanaVietnam.Estamosrodeadosporunazonaoestadodedislocación,ytúmásomenosasciendesdeconocerlosnombresdeporaquíasercapazdeabsorbercosasdeesazona.Túabsorbesdeesazonaquenosrodeaynotepuedentocar.

Trungescuchabaconatención,intentandosentiralhombre.Notabapánicoyfuria.—¿Qué,porfavor?—dijo.—¿Quiénesnotepuedentocar?—¿Cómo?—Todoesoquehadejadosushuellasdactilaresmierdosasqueyopuedoverquetecubrenpor

completoyquebrillancomosifuerasunputoobjetivoquerelucecomoBozoelPayaso.Todasesascosasmalas.Asíqueabsorbedelazona,agente99.Estáapuntodecaerteunmarronazo.

Sintiómiedoybravuconería.—Y…elcoronel…elproceso,vale,lopillo…eresunparticipante.Eresuncolaborador.Estoes

algo.Somospartedeello.Elcoronel,tío.Elcoronel.—ColonelSand.—Colonel-san mucho bucú. Él está moviendo los hilos y nosotros estamos bailando como

mujerescojas.—Vale—dijoTrung,completamenteperdido.El sargentohizoque sumanoparecieraunabocaque se abríay se cerraba rápidamente.Se la

pusoeneloído.—Haomelohadicho.Hao.UnhombrevaamataraTrung.Unhomme.Assassiner.SilohabíadichoHao,habíaquecreerlo.—¿Estanoche?—dijoTrung.

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ElsargentosepusodepieylepusobruscamentelamuñecadelantedelacaraaTrungyseñalólasagujasdesureloj.

—Alasdosa.m.—dijo.—Lasdos.—Lascerodoscerocero.—Dosdemañana.—Amenosqueesepequeñocabroncetedoblenoshayatendidounatrampaalosdosparaquenos

extermineunequipoenterooalgoparecido.Peronopiensoponermeadarvueltascomolococomosi fuera una ardilla en una rueda por eso… O bueno, joder, sí, sí que lo voy a hacer, no nosengañemoselunoalotro.Peronomemarcho.Nomepiensoescaquear.Loquevieneesloqueviene.Yomelimitoaconsiderarquecadalocuraquesemecagaencimadebedeserunalección,tío,unalecciónquealgúnDios-Hitlersádicoyarbitrariomequierehaceraprender.Yesporesoporloquenomegusta.Porquenomegustaaprender,nomegusta laescuela,nomegustan las lecciones.Laidea de discipliname acojona yme cabrea enormemente. PeroHaome dijo que se reuniría aquíconmigo trayendodinero a las cuatrode la tarde, y estabamintiendo comounbellaco.Hao esunhijoputaquebrillaporsuausencia.Haonoesamigodenadie.Esepequeñochimpaesunverdaderodemonio.Lehabríapartidoelcuelloymehabríafolladosucadáversisumujernohubieraestadoencasa.Yéllosabía.Peroeraunasituaciónsemipública.Joder,tendríaquehabérmelacargadotambiénaella…Sí.Asíqueaquítengounarma.

Selevantóeldobladillodelacamisaysesacóunapistolaautomáticadelcinturón.—EntregaespecialparamonsieursignoreTrung.Trungdiounpasoatrásylevantóunpocolasmanos.—No,tío,no.¡Hostia!Aprendeinglés,¿vale?Sostuvolapistoladecostadoylagiróaunladoyalotro.EraunaVz50,fabricadaenEuropadel

Este.Volvióairalaventanaparaasomarlacabeza.Semetiólapistolaenelcinturón,encendióotro

cigarrilloytirólacenizamásalládelacornisa.—Muybien,joder,sí,vale—dijoelsargento—.Mira.Megustaríatenderleunaemboscadaaese

cabrónabajoen lacalle,peronoséquépinta tiene.Nosabremosunamierdahastaque llamea lapuerta.Estamos trabajando a ciegas. Situación normal.—Fumóy examinó la habitación sinmirarnadaenparticular—.Nohayunaputaalmohada.Yomeimaginabaunaalmohada.¡Joder!¿Notienesalmohadasoqué?

—SeñorJimmy.Porfavor,habledespacio.—Tenemosquehacerestoensilencio.Almohadas.Silencio.—Imitó lassacudidasde lapistola

conlamanomientrassellevabaundedoaloslabiosyhacíaunruido—:Chsss…Uncuchillo,pues.Trungcerróelpuñoylomovióendirecciónalhombre.—¿Dóndeestátupuñal,colega?Enséñamelo.Trungseencogiódehombros.Elsargentosemetiólamanoenelbolsilloysacóuncortaplumas.—Esto debe de tener una hoja de ocho centímetros. —Lo abrió—. También tiene cuchara y

tenedor.Despuésnoslopodemoscomer.Trungextendiólamanoparacogerlo.Trungdejóelcuchilloabiertoasuladosobreelcolchón.Extendiólamanootravez.

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—Arma—dijo.El sargento se sacó la pistola del cinturón y se la dio con cierto aire de alivio.Trung sacó el

cargador, vació la recámara y fue sacando las balas con el pulgar y dejándolas sobre el colchón:nuevebalasde7,65milímetros,incluyendoladelarecámara.

—Esunarmacomunistadelomásfiable.DelasqueusaelVietcong.Valebucúpavos.¿Estaba indicandoquequeríadineroa cambiodeella?Trungdecidióqueeramejorpasarpor

alto cualquier afirmación que no estuviera del todo clara. Sentado en la cama, volvió a llenar elcargadorylointrodujo,metióunabalaenlarecámarayquitóelseguro.Cuandocayóelpercutor,elpequeñosargentodiounrespingoygritó:

—¡Laputa!Al parecer, el americanono sabía lo que era unapalancade desamartillado.Por tanto, aquella

armanoerasuya.Trungsacóelcargadorycolocóelarma,elcargadorylabaladelarecámarasobrelamesa.—Excelente.Lossecretosdelamáquina.—Silencio—dijoTrung,yluegoenfrancés—:Silence.—Lohaspillado.Joder,somosbilingües.Ledioalsargentolabotellavacía.—Esanoeslaclasedetratoqueyohago.Demasiadodesigual.Trungdejóelarmasobrelacama,cogióelcuchilloyrasgóunaaberturademediometroenel

colchón. Dejó el cuchillo a un lado y se puso a sacar pellizcos de algodón de ceiba del tajo y aembutirlosdentrodelcuellodelabotellaconlosdedosmientraselsargentolasostenía.

—Silence.Sepasaroncuarentaycincominutosapañandounsilenciadorparalapistola,acoplandolabotella

rellenaalcañóndelapistolaconlaayudadecuatrotablillasdebambúdelsomieryvariosjironesdesábanaydetelamosquitera.Eljovensargentosudabaaraudales.Sequitólacamisaconestampadodeflores.Undibujotatuadoenormeeincreíbledeunamujerconfaldadehojaslecubríaelpechodesnudo.

Colocaron la pistola con silenciador sobre el colchón. Parecía un enorme capullo del queemergía,haciaatrás,unapistolitaenlugardeunapolilla.

Trungprobóvariasformasdetransmitirlaidea.—Unosilencio.Uno.Seulement.Unosolo.—Yalopillo.Trungdecidiócómoibaausarelarma,conelsilenciadorapoyadoenunamanoenrolladaensu

propiacamiseta.Ibaatenerquehacerloconlamanoizquierda.Secolocóalaizquierdadelapuertaconlaespalda

pegadaalaparedypracticósusmovimientos.—Eresuncabroncetelamardechungo.Diosbendito.ElseñorJimmyparecíaexcitadoyfeliz.Trungconocíalasensación,lahabíaexperimentadocon

intensidaden lasoperacionesde losviejos tiempos. Inclusoenunmomentocomoelpresente,unapequeñachispadelamismaseencendióensuinterior.

Trungpermanecióalaizquierdadelapuertaconlaespaldapegadaalaparedylamanoizquierdalevantada,yseñalóconelíndice.

—Yo.Mí.

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Diounpasoadelante,bajóeldedohastalaalturadondetendríaqueestarlacabezadelhombre,loflexionóunavezy retrocedió tres pasos.A continuación repitió losmovimientos, señalándose lospies y asegurándose en particular de que el sargento entendía exactamente dónde lo llevarían susmovimientos.

—Usted. Señor Jimmy.—Trung semovió hasta pegar la espalda a la pared a la derecha de lapuerta,extendió lamano izquierdayabrió lapuerta,mientrasdabaunpasoa laderecha; luegosequedócompletamenteinmóvil—.Arrêtez.Alto.

Pusoalsargentocontralaparedenlamismaposiciónylehizorepetirlosmovimientosdeabrirlapuertadeltodo,apartarsedelatrayectoriadeldisparoyquedarsequieto.

—Jodeeer—dijoelsargento—.Voyatenerqueponermeciegodespuésdeesto.Trungseencogiódehombros.—Soyunpensador,nounasesino.Antesdeempezarelensayoentándem,Trungseaseguróunavezmás.—Yo…—Sellevóundedoalasien—.Latête.Uno.—Sí.Latête.Undisparo.—Usted…Abriólapuerta.—C’estsibon.ATrung le parecía posible que si serrabande través la punta de la bala, tal vez no saliera del

cráneoyasíevitaríanmancharlotodo.¿Acasoelsargentonoqueríadejarhuellas?Lapreguntaerademasiado complicada para hacérsela con señas y gruñidos. Si se lo permitían sus fortunas, yalimpiaríanellugarcuandollegaraelmomento.

¿Puedofiarmedeestehombre?En el fondo, Trung dudaba del sargento. Si no conseguía controlar sus movimientos, sería

imposiblequeTrunglepudierameterunabalaalhombrequeibaavenirasalvarlo.Seaseguródequeelsargentosupieraqueteníaquedarunpasoalabrirlapuertayluegoyanomás.

Lo ensayaron juntos. Storm abrió la puerta, se apartó de en medio y se quedó absolutamentequieto.Trungdiounpasoadelante,apretóelgatilloydiotrespasosatrás.

Oyeroncómoseabríalapuertadelacalle.AlseñorJimmytambiénseleabriólaboca.Trungintentósonreírparatranquilizarloysalióalpasillo.

Al pie de la escalera, el agente de viajes y propietario del edificio estaba de pie con lamanoextendida para pulsar el interruptor de la pared. Las luces del pasillo se encendieron de formaentrecortada.

—Buenas noches—dijo Trung, y el hombre levantó lamano amodo de saludo y también dedespedida,salióycerrólapuerta.

Habíallegadoelcrepúsculo.Trungdejólavoluminosapistolasobreloquequedabadelcolchónyencendióelfanalydespuéselgassiseante,quehizoquelamechaemitieraundestellocandente.

—SeñorJimmy.Yovoy.Laideapareciódesconcertarprofundamentealsargento.—Yosalgo.—¿Vasasalir?—Yovoy.Sí.—Vaya, ¿qué pasa esta noche, colega? ¿Hay algún torneo de mahjong que no nos podemos

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perder?Porquenoesmuybuenmomentoparahacerexcursiones.—SeñorJimmy.Yocomida.Hambre.—Quédatetú.Yavoyyo.—Quédatetú.Yovoy.—Diosbendito.—Yovuelvo.—Trung señaló concuidadoel relojdepulseradel sargento.Movió layemadel

dedoporsuesferaparaindicartreintaminutos—.Yovuelvo.—Estoesunagilipollez.—No,Jimmy.—Unaenormetormentadefrustraciónseestabagestandodentrodeél.Yañadióen

vietnamita—:Necesitosalir.Necesitopensar.Necesitorespirar.Necesitoirme.Necesitomoverme.Agarró lavoluminosapistolayvolvióa insertarelcargador, tiróde lapalancaparameteruna

balaen la recámara, sacóel cargador, cargóenél labalaextrayvolvióameterlo.Con lapistoladescansandoenambasmanos,selaofrecióalseñorJimmy,queladejósobrelacamamutiladaantesdeseñalarseelreloj.

—¿Treintaminutos?—Túespera.Elamericanosacóunabilleteradelbolsillodelpantalónylediovariosbilletes.—Compracigarrillos.Marlboro.Marlborodeverdad.—Túespera.—Marlborodeverdad.NometraigasMarlborofalso.—Marlboro—leaseguróTrung.

Enlacalle,Trungsemantuvocercadelosedificios,perodespuésdecruzarlaesquinayacaminóconnormalidad.¿Paraquéserprecavido?

Haolehabíatraicionado.O bienHao le había salvado.O ambas cosas.Dadas las circunstancias, no se podía saber con

mayorclaridad.CuandollegóalacalleAnhDungparóaunvendedorambulanteparacomprarleunpaquetede

Marlboro,delbueno.Elamericanoloqueríadelbueno,esolohabíaentendido.Enelcafésesentóasumesadecostumbre.Aquellanochenoestabaelancianochino.Ensulugar

habíaunamujer,igualdeanciana,talvezsumujer.—Fideos,porfavor—dijoél,peroellanegóconlacabeza.Laanciananohablabavietnamita.Muybien:noveía fideosporningunaparte.Pues arrozotravez.Fue almostradory señaló el

hervidor de arroz que había al fuego y después señaló las teteras del estante. Ella asintió con lacabezaparamostrarsuconformidadyélregresóasusilla.

Contempló a la gente que pasaba por la calle. Rodeado de almas a las que no conocía, fueconscientedelmundoensuverdaderamagnitud,yanounahabitaciónconunaventanaquedabaaunapared, sino un mundo entero en el que estaba perdido. Fueran cuales fueran los detalles de lasituación,fueracualfueralanaturalezadelproblema,fueraquienfueraelquelohabíaabandonado,estabaperdido.

Ypensarenelcuidadoquehabíallevado,yenquenohabíaservidodenada.Noesquelamentarasuerror.Lamentabalavacilación.Ladudaeraunacosaylavacilaciónotramuydistinta.Esperétres

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años para decidirme, pensó. Tendría que haber saltado. La duda es la verdad, la vacilación unamentira.

Elancianoentróalcafé.—¿QuieredosCoca-Colas?—dijo—.¿Yelpan?Suracióndiariadecostumbre.Nocreíaquelafueraanecesitar,siestabaapuntodeescaparse.

¿Escaparseadónde?¿Adóndepodíair?Yunavezallí,¿quéibaahacer?¿Yporquéesperaratenderleunaemboscadaalasesino?¿Porquénodesaparecerrápidamenteylucharotrodía?ElseñorJimmyrecomiendalucharahora,insisteenello.¿YquiéneselseñorJimmy?Porloqueparece,unaliado.¿Ysobrequébasepodíaactuarahora,salvosobrelabasedelasapariencias?

PeroHao…¿enemigooaliado?Trungdudabaquellegaraasaberlonunca.Puedequeelsargentolosupiera,peroellosdosnopodíancomunicarse.Aquellolehizopensar

enSkipSands,consupronunciaciónterrible,suslibrosdefrasesysusdiccionarios,unamericanoconquiensípodíahablar.Peroporloqueélsabía,eraSkipSandsquienhabíaorganizadoaquello.Elcoronel estaba muerto. Tal vez sus contactos se habían convertido en lastres y estaban siendoeliminados.BuscaraSkipSandsnoeraaconsejable.Confiarencualquieraeramalaidea.

Sintióelpesodeinnumerablespenas,aunquehabíamuchagentequecargabacontantascomoél,oinclusomás.Peroaquella…Aquellalehacíasentirsemuysolo.

Laancianaletrajoelcuencoyunateterayregresóalcabodepococonunatazaydossalsas.Éloliólasdosjarritas.Unaerasalsahoisin.Laechóporencimadelarroz.Nohabíapalillos.Lehizounaseñalcon lamanoa lamujery se frotódosdedosentre sí.Buenasuerte,mala suerte,peroelhambrenosvisitatodoslosdías.Inclinólacabeza,seacercóelcuencoalacaraysepusoaello.

***

Aunqueperfectamentevisiblebajo lasúltimas luces,Fest estabadepieen lapuertade la tiendadetelassinningúnpretexto.Dabaigualquelagentesepreguntaraporqué.Pasaraloquepasara,aquellaerasuúltimanocheenelpuesto.

Sielobjetivonosalesobrelasdiez,pensó,queescuandocierranloscafés,siestoysegurodequenovaasalir,ysinopuedoentrarparaesperarloadentro,entoncesseacabó.Nopiensoentrar.

LoqueharíaenesecasoseríairdirectamentealaAcademiadeIdiomasdelasFuerzasArmadas,informardesufracasoyexigirquelosacarandeallí.Ysilaacademiaestabacerradaporqueeradenoche—siesqueaquellacontingencia,comotantasotras,nohabíasidoprevista—,entoncesiríaalaembajada americana y le presentaría almarine de guardia la tarjeta deKenneth Johnson. Si no lorecibían cogería un taxi paraTanSonNhut y allí esperaría el primer avión que fuera a cualquierparte.

Se hizo oscuro, lamujer que llevaba la tienda cerró la puerta desde dentro y encendió la luz.Debíadepasarlasnochesenalgúnrincónmíserodelosrecovecosdeledificio.Élseadentrómásenelumbralhastaquedaroculto.

Lapuertadelacalledelacasadehuéspedesseabrióquinceminutosdespuésdequeoscureciera,yelobjetivocruzó lacalleendiagonal sinbuscarel amparode las sombras.Fest esperóaqueelhombre hubiera doblado el recodo y lo siguió al trote igual que había hecho la noche antes, acontinuación hizo lo mismo en la siguiente esquina, cuando el hombre giró a la derecha paradirigirsequizáalmismocafé.Alfinaldelamanzana,Festnopudodoblarelrecodoparaseguirlo:el

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hombresehabíadetenidoyestabahablandoconunmuchachodelacalle.Festcontinuórectoycruzólacalle,adentrándoseenlamareademotocicletasybocinassindetenerse,talcomohabíaaprendidoahacer.Losmotoristassabíancómoevitaratropellaralospeatones.

Desdeelotrolado,Festmiróhaciaatrás.Elhombreestabacomprandocigarrillosobienchicle.Luegocontinuóhastaelcafé.

Festdiomediavueltayregresóalacalledelacasadehuéspedes.Cuandollegóalprimersitioaoscurassedetuvoarecobrarelaliento.Sacóunpañueloysesecólasmanos,selovolvióameterenelbolsillodeatrásyrepitióelprocesoconunsegundopañuelo.Setiródelapecheradelacamisaparasacárseladedentrodelospantalones,sesacóelarmadelapistolerayelsilenciadordelbolsillodelantero y los acopló, a continuación sacó la llave que llevaba en el bolsillo izquierdo, fue deinmediatoalapuertadeledificioylaabrió.Despuésdecerrarconllavedetrásdesí,semetiólallaveenelbolsillo,sesacólaotradelbolsillodeladerechayprocedióasubirlasescaleras.

Sumanoenvueltaenunafundahúmedadecalorintrodujolallave.Abriólapuertayeliminóelúltimosupuestoquequedaba:queentreintaytantosañosdevidahabíaaprendidoalgoqueleibaaserdeayudaenaquellaregióndondelosadultosestabantodosmuertos.

Dentro, el fanal estaba encendido. Había un hombre sin camisa, un hombre blanco,inconfundiblementeamericano,depiejuntoalacamaconunpaqueteredondeadoyvoluminosoenlamano.

Sehabíaapartadodesusinstrucciones.¿Quéhabíahecho?—Perdone—dijoFesteninglés.Simultáneamente,todoeledificiosepusopatasarriba.Eltechodelpasillolepasóporencima,las

escalerasseelevaronbruscamentedetrásdeélylogolpearonenlaespalda,lapuertadelacallesedetuvoporfinvueltadelrevésyflotandoencimadeél.

Unaseriedegolpesleimpactóenelpecho.Teníaunapreguntaquehacer,peronoteníaalientoparahacerla.Porencimadeéllapuertadelacalleseabriódegolpe,yunapersonafueabsorbidaporlamismahacialaenormeoscuridaddelotrolado.Algoincreíbleempezóaperfilarse.

***

Alacercarsealaesquinadesucalle,Trungvioaunhombreparadoallíenunamotocicleta,conunpieenlaacerayconelmotoralralentímientrasmirabaalgoporencimadelhombro,enladirecciónenqueelmismoTrungseestabadirigiendo.Trungdoblóelrecodoconcautela.

Delantedesuedificiohabíavarioshombresgritandotodosalavezenchino.Élsequedóenlaaceraopuesta.Enelprimercallejón frente alquepasóunoscuantoshombresdel lugar atendíanapequeñastareasconpreocupaciónminuciosa.Novioniñosentreellos.Calleabajo,másmotocicletasdetenidasygentemirandoconlascabezasgiradashacialapuertadesuedificio,queestabaabierta.Entreloshombrescongregadosreconocióalpropietariodeledificio.

Pasópordelanteconrapidezyechóunsolovistazoalotroladodelacalleparaveraunhombretiradoenlasescalerascomosihubieracaídodeespaldas,conunbrazoretorcidodebajodelcuerpoyelotroextendidohaciaatrás.Trunghabíavistocadáveres.Aquelhombreestabamuerto.

Elhombrellevabaunacamisablancaotalvezazul,ahoraempapadadesangre.Por lo que él recordaba, el señor Jimmy llevaba una camisa floreada de colores vivos y en

cualquiercasoestabadesnudodecinturaparaarribacuandoTrunglohabíadejado.

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No podía arriesgarse a aminorar lamarcha para vermejor. Siguió caminando, absolutamentecarentederumbo.

***

Sandsestabasentadoalamesadelcomedordeunamansióndelaqueprobablementesedebíanvariosmesesdealquiler,terminándoseunbuenalmuerzopreparadoporcriadosalosquenopodíapagar,ypensando que si todavía tuviera trabajo su salario nunca lo encontraría allí.Y que ojalá todos susproblemasfuerancomoaquellos.

Cuando oyó un vehículo detenerse delante de la casa se puso de pie rápidamente. Había unChevroletImpalaparadodelante,conTerryCrodellealvolante.

Crodellebajó lasventanillasdelanterasdelcocheunosquincecentímetros,probablementeparaqueserefrescaraelinterior,ysalió.Hoyllevabaatuendodecivil,queincluíaunachaquetadepuntoamarilla,yunmaletínquesepasódeunamanoalaotramientrassequitabaeljersey,lotirabasobreelasientodelanteroycerrabaconelpielaportezueladelconductor.SandsmirócómoseacercabasolocruzandoelportónyseleocurrióqueCaoQuyenhabíadejadodeserelpuestodeavanzadamássolitariodelmundoparaconvertirseenlaEncrucijadadelLejanoOriente.Ensuestilodeascenderlaescalera de mármol del porche, agarrando su maletín con fuerza y echando vistazos a la casa,Crodelleproyectóalgodeladudaylaesperanzadeunvendedordeseguros.

Mientras Sands apartaba la tela mosquitera para dejarlo pasar, todo rastro de inseguridaddesapareciódelacaradeCrodelle.Encuantoestuvodentrosedetuvo.

—Lapresaensuguarida—dijo.—¿Quiereustedunacopaoalgo?—Póngamedondecorraelaire.—Hayunaterrazaenlapartedeatrás,perocreoqueahoramismoleestácayendoelsolencima.—Aquímismoestamosbien.En la sala de estar,Crodelle dejó sumaletín sobre lamesilla de café y se sentó en una de las

enormesbutacasdemimbre.—Talvezunvasograndedeaguafría.Noquieroperderlacalma.—Unanoticiatranquilizadora.SandsfuealacocinayencontróalaseñoraDiusentadaenuntabureteconlospiesapoyadosen

lostravesañosdelmismo,desvainandotirabequessobreelregazodesufaldaytirandolascáscarasenunapiletagalvanizada.Aquellaeralaclasedetrabajoqueélquería.

—¿Quiereprepararnosuntéyunosbocadillos,porfavor?EllarecogiólostirabequesdesuregazoylosdejósobrelaencimeramientrasSandsservíaun

vasobiengrandedeaguadeunajarraquehabíaenlanevera.Eltemorlehizotemblarlasmanos.Elaguasalpicólasbaldosas.

Crodelle no miró por encima del hombro mientras Sands regresaba a la sala de estar parasentarsedelantedeél.

—¿Quéhayenelmaletín,Terry?¿Unagrabadora?—Mejorqueeso.—¿Unpolígrafoensuperminiatura?Crodelleleenseñóeldedoengestoobsceno.

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—Mehaencontrado.Excelentetrabajo.—Tieneustedamigoschivatos.—Nohacefaltaquemelodiga.—Bonitolugar.—Tieneunfantasma.—Daesaimpresión.Sí.Unpoco…Joder,Skip,¿quélehapasadoenlaoreja?—Mehandadounatunda.Crodellereclinólaespaldaensuasientoycruzóeltobillosobrelarodilla.—Esustedunpersonajeinteresante.Tendríaquehaberlovisitadomuchomásamenudo.Yaquíse

respirapaz.—Intentonomovermemuchoparanosudar.Notenemosaireacondicionado.—RickVossfuederribadoenunhelicóptero.Estámuerto.—Yalosé.Esterrible.—Seagradeceelsentimiento.Bastanteencontradesuvoluntad,Sandsdejóescaparunsuspirotembloroso.—¿QuémedicedeHao?¿Tambiénmuerto?—¿NguyenHao?Noprecisamente.—Escúcheme,porfavor.Siélessuhombre,serámejorquecuidendeél.—Haosecuidaasímismodemaravilla.Demaravilla.—Élnoestáasalvo,Terry,lodigoenserio.—Haoysumujeryaestánsaliendodelpaís.—Caray.No.¿Lodiceenserio?—LoquesíesserioesqueRickVosshayamuerto.IbadecaminoaCaoPhucparaverloausted.

Yahoraestámuerto.Sandsnoteníani ideadequédecir.El latidodelasangreensuorejaheridaloatormentaba.El

hervidorempezóasilbarenlacocina.—Asíquerecojomiscosasynosvamos,¿no?—Másomenos.—¿Porquénohatraídoaunpardemarinesdelaembajadaconusted?—Estonoesuna recogida.Si tuvierausted teléfono,podríahaberlo llamadosimplementepara

invitarloavenir.Mire,Skip—dijoCrodelle—.Megustaríaquemandaraustedaloscriadosacasa.—Sucasaestáaunosveintemetros.—Esparaquepodamoshablarenprivado.—Vivenenunacasitaquehaysegúnsesaleporlapuertadeatrás.Crodelleselimitóaquedárselomirando.—¿Podemostomarprimerounpocodetéyunosbocadillos?Noslosestáhaciendoahoramismo.

¿Tienehambre?—Claro.—Loshacebuenos.Lesquitalacorteza.—ComoenelContinental.—Esomismo.Puedepedirlosconcortezasiquiere…—No,gracias.LaseñoraDiuyaestaba trayendoelplatode losbocadillos.Skipse levantódeunsaltoyfuea

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buscarelté.CuandolaseñoraDiuseleunióenlacocina,élledijo:—Ahoramegustaríaquesetomaraelrestodelatardelibre.—¿Libre?—Sí,porfavor.Necesitamoslacasaparanosotrossolos.—¿Quierequemevaya?—Sí,solamente…alacasa.Losiento,váyaseacasa.—¿Noquierequerecojaelalmuerzo?—Talvezmástarde.—Sí,señor.—Yarecogeréyo.—Muybien.—Estabamuybueno.Ellasalióporlapuertadeatrás.Sandscolocóelcuencodelazúcar,lascucharillas,dostazasyla

teteraenunabandejaconunasasasqueerandemasiadopequeñasparasusmanosylollevótodoalasaladeestar,dondeseencontróaCrodellecontemplandosuplatodebocadillossincorteza.Noloshabíatocado.

—Noesmásqueeltédellugar—dijoSkip—.Hoynohayleche.—¿Notieneustedleche?—Quierodecirqueesdelflojo…yasabe.Aguado.Talcomolohacenellos.SirvióeltéymirócómoCrodelledevorabavariosbocadillosdedosbocadoscadauno.Sedio

cuentadequeestabasentadoconlaespaldainclinadahaciadelanteytensa,asíquereclinólaespaldaen el asiento y fingió que se relajaba. Fue consciente de un impulso típico del Medio Oeste depresionar a su invitado para que comiera más y más bocadillos: pollo, embutido, un poco demantequilla.

—Elpanesbueno—comentósuinvitado.Ninguno de los dos volvió a hablar hasta que Crodelle se hubo limpiado las manos en una

servilletadetelaazul.—Tengoentendido—dijoCrodelle—quelasúltimaspalabrasquemedirigióustedfueronpara

preguntarmedóndeestabalaacademiamilitarJFK.—EnFortBragg.Sí.Luegomeacordé.—EstoyconelCuartoBatallón.InstruccióndeEOM.—¿YquéesEOM?—EspecialidadOcupacionalMilitar.—Puesbueno.¿Yaquiéninstruye?—Atipos.Hombres.—Ah,¿sí?¿Ycuálessuespecialidad?—OperacionesPsicológicas.—CapitánCrodelle,pareceustedunpocomolestoconmigo.Crodellesonrió,perosolounpoco.—Oseaquenopodemosconvencerledequehagaunpolígrafo,¿verdad?—No.Encualquiercaso,habríamentidoenlaspreguntasdecontrol.—¿Yporquéibaustedahacereso?—Soloparaestropearlosresultadosdelaprimeraronda.

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—Skip,no se esperadeustedque cuando lo estemos interrogandonosotros se comportede lamaneraenquelehanenseñadoquetienequecomportarsecuandoloestáinterrogandoelenemigo.

—«Enemigo»esuntérminoqueyoyanouso,entodocaso.Nunca.—¿Porquéno?—Porqueesunaestupidez.¿Hamiradoustedúltimamenteasualrededor?Estonoesunaguerra.

Esunaenfermedad.Unaepidemia.Ylodelotrodíaconelpolígrafofalsofuemiprimeraronda.Yestaeslasegundaronda.¿Correcto?

—No. Incorrecto.Esto esuna recogida.Másomenos.O sea, ya eshoradequehagausted lasmaletasaquí,esoestodo,oseaquehevenidoabuscarle.

—Entonces,¿porquéestamosaquísentados?—Curiosidadintelectual.Siemprehasidomiperdición.¿Quiéneraelcoronel?Osea,supequeño

artículofueunactodesuicidioprofesional,perosusafirmacionessondifícilesderefutar.—Vossmedijoqueélhabíaescritolamayorparte.—Lasideasveníandelcoronel.Oporlomenos,lasqueconstituíansemi-traición.—Eraungranhombre—dijoSkip—,ynoerauntraidorenningúnsentido.—Todosqueremoscreereso,Skip.—Era una fuerza de la naturaleza, Terry, y ahora ya no está. Yo estoy confuso y usted está

confuso.Deprontoyanoestá.Produceunadesorientacióndecojones.—Entoncesorientémonos,Skip,yarreglemosloqueelcoronelcagó.—Ustednoloentendíaaélenabsoluto.—¡Oh,no,nohagaeso!NoconviertaestoenunapelículasobreWaltWhitmanoalgoparecido:

losbobosciegosyestrechosdemirasquelinchanalniñoprodigiovisionario.Noconviertaestoenunacrucifixión.Yoleestoypreguntandoquiéneraesetipoyustedestácantandolabandasonoradeunapelículallenadepatrañas.

—Unmomento, unmomento. Solo estoy intentando decirle algo que usted no entiende.Yo loconocítodamivida,ylejuro,Crodelle,queelcoroneleraexactamenteloqueparecía.Erarealmenteun locoquepilotabaunaviónconunala arrancaday fumandounpuroy riéndosede lamuerteydemás. Pero tenía una segunda faceta. Quería ser inteligente, quería ser un erudito, quería ser eleleganteburócrata.Mesorprendequenosepusieraafumarenpipa.Queríaintelectualizarlascosas,queríamonitorizar sistemas de información, en realidad…En alguna parte dentro de él había unbibliotecario,escondido.

—Yesaeslapartequejodiólascosasparanosotros,Skip.Trabajemosconesaparte.—¿Trabajemos?—Venga, Skip, venga, trabaje conmigo. Necesitamos ponerlo todo de nuevo bajo la luz. El

coronelnocompartíanada.Nointentabaprestarsusesfuerzosalempeñogeneral.—¿Yqué?Crodellevertiólospososdelateteraensutaza.—Mire,Terry,¿sesuponequetengoqueestarentendiendoalgoenestosmomentos?Porquenoes

elcaso.—Quieropreguntarleporesosarchivos.—Estánarriba.Cójalos.—¿Enserio?—Sí,cójalos.Sonunamemez.

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—Esustedconscientedequellegadoestepuntonolehacefaltamentir,¿verdad?—Soyconsciente.Losarchivosestánarriba.Notienenningúnvalor.Esaeslaverdadabsoluta.Crodelleserelajó,comositalvezselocreyera.—Eltipoeratremendo.Tremendodeverdad.—Ya.Ya.Eramuchascosas.—¿CómodescribíaélsurelaciónconJohnBrewster?—¿ConBrewster?—Sí.Tengocuriosidad.¿Quérelacióntenían?—Tensa.Brewsterteníaciertosrecelosylopusoatrabajarenunaoficina.—¡Ja!¿Recelos?—Sobrelasaluddeél.—¿Susalud?¿Serefiereasucorazónysuaficiónalabebidaysutendenciaaarrearlealagente

deprontounmamporroenlamandíbula?—¿Sucorazón?—dijoSkip.—¿Noesesoloquelomató?—Notengoniideadecómomurió.Heoídoqueloasesinaron.—Yotambiénheoídotodasesastonterías.ElcoroneltuvouninfartoenelpisodearribadelRex.

Enlapiscina.Oenelrestauranteonosédónde.Entodocaso,nocayódefendiendoElÁlamo.—Oh…oh,caray.—¿Qué?—UstedesesbirrodeBrewster.—Esonomehagustado.—Ya,perolorepito:ustedesesbirrodeBrewster.YBrewsterquiereverlosarchivosantesdeque

nadiemássepadeellos.¿Aquesí?Crodellesonrió.—Nomeecheunamiraditacomosiyofueraidiota,Terry.—Nolopuedoevitar.—Estonotienenadaqueverconningunaoperacióndescabelladaysinautorización—dijoSands

—. Esto tiene que ver solo con un puñado de tarjetas de apuntes que podrían hacer quedarmal aalguien.Aalguienqueprobablementenohahechonadaporloquetengaquepreocuparse.

—Esosonmemeces.—Sí,loson.Estáclaroqueloson.Osea,considerandolanaturalezajodidadelosarchivos.Pero

esesoloqueestápasandoaquí,¿no?Diosbendito.Venga,vamosamirarlos.—¿Sí?—Venga.Crodelle losiguiópor laangostaescalera.Aaquellahoradeldía lasregionessuperioresde la

mansión retenían el calor como si fueranunabuhardilla.Sands señaló la habitacióndesocupadayabriólapuertadesudormitorioparaquecorrieratodoelaireposible.Crodellesequedóplantadocontemplandolahabitacióndesocupada.

—¿Dóndeestán?Sandsloapartóparapasarylevantólatapadeunodelosbaúles:—Astutamenteescondidos—dijo.—¿Soneso?

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—Estántodosenordenalfabético.Yconreferenciascruzadas.Adelante,busqueaBrewster.—Vengaya.Sielviejoeraserio,estaránencódigo.—Noestánencódigo.BusquecualquiercosaquepuedatenerreferenciascruzadasconBrewster.

Nombresdelugares,cosasporelestilo.Crodellelevantólatapadeotroycontemplóelinterior.—¿Estádispuestoustedaentregarnosesto?—dijo.—¿Acasotengoelección?—Carguemos estos armatostes en el buga. Si lo amontonamos todo bien, podemos llevarlos

todosalaciudadenunsoloviaje.—¿AlaAcademiadeIdiomas,oadónde?—AlcomplejodelMandodeAsistenciaMilitar.EnTanSonNhut.—ElMandoyanoestáallí.—Siguehabiendounapequeñainstalación.—Oh,alamierda—dijoSkip.—¿Qué?—Nopiensoiraningunaparteconusted.Crodelle se lo quedó mirando con las cejas enarcadas y Sands calibró la envergadura del

pelirrojo, planteándose actuar tal como lo haría Jimmy Storm y lanzarle un gancho al tipo en elabdomen, justo por debajo del esternón, pero luego cambió de idea. Hacía muy poco que habíaperdidounapeleaynoleapetecíaempezarotra.

—Unmomento—dijoSkip—.Voyavestirme.Cruzóelpasilloyentróensushabitaciones,yCrodelle losiguióyobservócómosecambiaba

los pantalones cortos por unos largos, se ponía calcetines, zapatos y camisa. ¿Quémás?No iba avolver.Ensucajón,unmontóndefotosdelasFilipinas.Semetiómediadocenaenelbolsillo.

Delcajóndesucómodasacósureloj,supasaporteysuBerettadel25.—Mierda—dijoCrodelle—.Nilosueñe.Sandssemetióelpasaporteenelbolsillo,sepusoelrelojenlamuñecayacontinuacióndioun

pasoadelanteylepusolapistolaenlafrenteaCrodelle.—Vale,vale,vale.¿Estápuestoelseguro?—No.—Sandsintentópensar—.Ahoraescuandolacosasecomplica.—Limíteseaponerelseguro,apárteseyhablemos.—Aquíelúnicoquevaahablarsoyyo.Ustedhagaloqueyoledigo.Notengoquedispararsi

hacemosestobien.—Estoyconusted—dijoCrodelle.—Quédeseaquí.—Nomehemovido.—Crodelleestabamuyquietoconlasmanoslevantadasalaalturadelpecho

ylosdedosextendidos—.Solopongaelseguro,esloúnicoquelepido.—Niunapalabramás.—Vale.—Lodigoenserio.Siénteseenesasilla.Crodelle acercó una silla de la mesilla del té y se sentó. Sands abrió el cajón superior de su

cómoda, sacó con una mano varios calcetines y calzoncillos y buscó a tientas sus materiales deprimerosauxilios.Dejóvariosrollosdevendasdegasaencimadelacajonera.

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—Póngasedepie.Sinhablar.Crodellesepusodepie.Encañonándoloconlapistolaenelespinazo,Sandsseacercólasilla.—Siéntese—dijo,yCrodellesesentó—.Crucelosbrazosdetrásdelasilla.Abralaboca.Más.LeembutióuncalcetínenlabocaaCrodelle.Acontinuaciónarrancóelcierredelrollodevenda

conlosdientesyhaciéndololomejorquepodíaconunasolamano,envolviólacarayelcuellodeCrodelleconlagasayluegoselaenrollóentornoalpecho,rodeándolovariasveceshastallegaralfinaldelrolloeinmovilizándolelosbrazospordetrásdelaespaldaysujetándoselosalrespaldodela silla. Con una sola mano, únicamente pudo hacer un nudo rudimentario. Lamentaba no tenermejoresmateriales.Elcableeléctricodeunalámparahabríasidoideal.Peroimposibleenunacasaalaquenollegabanlaslíneaseléctricas.

Pareció que Crodelle, a juzgar por el ritmo de su respiración agitada, intentaba hacer algúncomentario sobre el proceso, que Sands repitió con dos rollos más a fin de atar cada pierna deCrodelleaunapatadelasilla,haciendoélmismoloscomentarios:¿Quéestáshaciendo?¿Quévasahaceracontinuación?¿CómoatasaunBoinaVerdeaunasillaconvendasysincintaadhesiva?Vasatenerquehacerunnudo.¿Nohacenfaltadosmanosparahacerunnudo?

—Voyameterelarmaenelcajónmientrasleatofuerte—dijo—.Puedeustedintentaralgoyvercómosale,obienpuedequedarsequieto.

Crodelle no hizo ningúnmovimientomientras Sands usaba dos rollos para atarle lasmuñecasjuntasysujetarlebienlosbrazosalrespaldodelasillaconunnudodecamionerobienhecho.Sandssearrodillódelantedeélconloscuatrorollosrestantesyleatóambaspiernasconfirmezaparaquenopudieramoverlas,tanfuertecomopudo,sinningunaconsideraciónporlacirculaciónsanguíneadesuprisionero.

SindecirlenadaaCrodelle,saliódelahabitaciónenbuscadeunrollodecintaadhesivaquehabíaalotroladodelpasillo.Cuandovolvió,Crodellenohabíahechoningunamaniobraparaescaparqueél pudiera percibir. Sands le desplegó variosmetros de cinta alrededor de la boca, el pecho y laspiernas,cubriendolosnudosquehabíahechopreviamente.

—Mellevolosarchivosabajo—dijo—.Voyaestarsubiendoybajandolaescaleraypasandodevezencuandoaecharleunvistazo.Simeparecequehaestadoustedtonteandoparaintentarsoltarse,lejuroporDiosqueseacabó.Lomato.

Ensuúltimoviajeescalerasarriba seacercómuchoaloídodeCrodelle, jadeandopor todoelejercicioqueestabahaciendo,yledijo:

—Voy a quemar los archivos del coronel. ¿Y sabe por qué? —Hizo una pausa, como si elpelirrojo pudiera respirar a través de tres centímetros asfixiantes de venda. Crodelle se limitó amantenerlosojoscerradosyaconcentrarseenrespirarporlanariz—.¿No?Bueno,pienseenello.

El discurso lo decepcionó.Abandonó la habitación sintiéndose avergonzado y salió de la casaparairalapiradebasuradeTho,dondehabíajuntadounmontóndetarjetasypapelesdemetroymediodediámetro,talvez,ydemediometrodealturaensupuntomásalto,unmíseromonumento,pensó,adosañosdesuvidayaDiossabecuántotiempomásdelavidadelcoronelFrancisXavierSands.Soplabaunafuertebrisa,yalgunasdelastarjetasdenotassefueronvolandoyaterrizaronenelarroyo.

Seleacabaronlascerillasantesdequeelmontónprendiera.EntróenlacocinaparabuscaralgomásincendiarioyoyóaCrodelleenelpisodearribadandotumbosenelsuelo,avanzandopor lahabitación,talvez,alestilodeunmonoquesaltasobresuculo.Noimportaba.

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Llevóunacajallenadecerillasafuera,pasójuntoalapiradebasuraysepusoallamaragritosaTho,quesaliódesucasadescalzo,enpantaloneslargosycamiseta.

—SeñorTho—dijo—.¿Dóndeestáelqueroseno?—¿Queroseno?Sí,yotengo.—Traigaelqueroseno,porfavor,yquemeestospapeles.—¿Ahora?—Sí,porfavor,ahora.Thofueauncostadodelacasa,volvióconsulataabolladadeocholitrosdequerosenoyrocióel

montón mientras Skip permanecía de rodillas y encendía cerillas en su base. El fuego soltó unallamaradayélretrocedió.SequedóunminutoconTho,contemplandoelespectáculo.Alotroladodelarroyoyunpococorrienteabajo,porencimadeloscocoterosylospapayos,tambiénseelevabahumogrisymarróndelapiradebasuradealgúnvecino.

PorDios,pensó,quétontoeraelviejo.Thofueaporsurastrillo.Skipregresóalacasa.LeasombróencontraraCrodelleenlacocina,todavíaenlasilla, inclinadohaciadelanteycon

lasmanoslibres,cortandoconuncuchillodepanlasvueltasdevendaquetodavíaleatabanlapiernaizquierda.

SandsbuscólaBerettaensubolsilloyencañonóaCrodellemientrasesteseponíadepie.Crodellesesentódeinmediato.—¡Nohacefaltaquemedispare!—dijo—.¡Nohacefaltaquemedispare!—¿Sabeustedquéestoyhaciendo?¿Puedeoleresehumo?Estoyquemandolosarchivos.—¡Estonotienenadaqueverconlosarchivos!Malditasea,hombre.Nohacefaltaquedisparea

nadie.—¿Quépasasinolohago?—Lepuedoasegurarplenamentequenohabráconsecuencias.Quieromoverlasmanos.Quiero

frotarmelaspiernas.Lastengodormidas,mehacortadolacirculación.Dios,menudoputogilipollasesusted.Adelante,dispáreme.Tengoseismildólaresparausted.Alamierda.

—¿Tienequé?Crodelleseinclinóhaciadelanteyescupióbabassanguinolentasenelsuelo.—Hapasadoalgomuychungo,Skip.ElotrodíasecargaronaunagentedelBNDenSaigón.Aun

hombrellamadoFest.—Diosbendito—dijoSands—.Yoloconozco.—¿ADietrichFest?—Nosunombre,peroloconocíenlasFilipinas.YestoybastantesegurodequelovienelGreen

Parrot.Elmismodíaqueloconocíausted.—Bueno—dijo Crodelle—. Es una metida de pata. La cosa nos ha explotado en las manos.

Tendríamosquehaberloparado,perolascosastienenciertainercia.EibaaporunobjetivolegítimodelVietcong.

—Oh,mierda.¿TrungThan?Nohuborespuesta.—¿Trunghamatadoalalemán?—Suagentedoblenoautorizado.—¿Ydóndeestáahora?

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—¿Quién?—TrungThan,malditasea.—Deambulandoporesosmundos.—Vivo.—Esosuponemos.—Dios.Unhombresinpaís.¿Cómodebedesentirse?—Dígamelousted.Comousted,másomenos.—¿EiraporTrungfuecosadeustedes?¿Responsabilidadsuya?¿Quiéndirigíalaoperación?—Esonosesabránunca.Loúnicoquesesabráesquelocausaronustedes.—¿Dedóndevinolaautorización?—Laautorizaciónesunconcepto.Nosiempreseconcreta.—Oseaquevolvemosalasoperacionesnoautorizadas.Ladeustedesylamíaylasdetodos.—Este asunto lo hemospifiado todos.Pero es usted a quien le espera la cárcel.La cárcel y el

deshonor.Nolequepadudadeeso,Sands.Cuandoalguienempieceuna investigación,seráustedaquien todos estemos dispuestos a señalar con el dedo.Así que le voy a dar una idea a ver qué leparece:váyase.

Dedetrásdelacasavinoelruidodeunanimalquegimoteaba.SandsintentónohacercasodelmismoyretomarelcontroldelasituaciónhaciendoungestoconelcañónendirecciónaCrodelle,perosesentíaimpotente.

—¿Mevaisasacarvosotros,hijosdeputa?—No.Tieneustedunpasaporte.Yyoledoyeldinero.Cojaunavión.—¡Hostiaputa!¿Unaviónadónde?—Eldineroestáenmimaletín.Losgimoteosdedetrásdelacasasehabíanconvertidoenaullidos,ysonabancadavezmáscerca.

Al otro lado delmarco de la puertamosquitera apareció la figura delpère Patrice arrastrando alperrodocteurBouquetdelaorejaygritandoparahacerseoírporencimadelasprotestasdelperro:

—¡Skip!¡Superro!¡Superro,porfavor!Abriólapuertayarrastróalperroadentroconsigo.—DéseloaTho.—Thodicequelometaenlacasa.—Alverlacocinaengalanadaconserpentinasdevendablanca

yalosdosamericanos,unodeellosempuñandounapistola,elsacerdoterespiróhondo—.Thodicequelometadentrodelacasa.—Soltóalperro,queechóacorrerysubióatrompiconeslasescaleras.Elpequeñosacerdotetodavíanohabíasoltadoelaire.Extendiólamanohaciaatráscomosifueraaabrirlapuertamosquiteraqueteníadetrásdesí,perosumanonollegóaestablecercontactoconsuobjeto, y se quedó simplemente con el brazo extendido como si le estuviera manteniendo enequilibrio—.Noesningúnproblema,peropodríaatacaramispollos.Esmejorquesequedeaquí.—Talvezporquesuvozparecíahaberdetenidoeldesarrollodeunatragedia,continuó—:Hetenidounsueñoconusted,Skip.Ustednoestabaenelsueño,peroeraunsueñosobreelpresidentedeEstadosUnidos.Porlogeneral,losfranceses,losamericanos,loscomunistas…noentranenelmundodelossueños.Vanaél,peronocreenenél,oseaquesonsimplesfantasmas.—Algunaformadehisteriaparecíahaberseadueñadodeélmientrashablaba—.Levoyacontarloquelepasóaunhombredemialdea que se llamaba Chinh. Se marchó de nuestra aldea al morir su padre y los acreedores sequedaron con sus tierras. Chinh empobreció en aquella época, se volvió un indigente. Tuvo que

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marcharseparaviajarpor la costay aprender apescar si le eraposible.Fueunviajedesesperadoporquenoteníadinero.Eneltrayectodormíaenelbosque.Unanoche,Chinhtuvounsueñoqueledijoquedurmiera en el patiode la iglesia católicade ciertopueblo.Allí estaban los franceses.Elcomandantedelpuestomilitar lo encontróy lo entregóa las autoridades.PeroChinhdijo: «Estoydurmiendoaquíporqueunsueñomehadichoqueviniera».«Eresuntontoporcreerenunsueño»,eslo que le dijo el comandante francés. «¿Acaso no sabes que todos soñamos todas las noches?Dehecho,anocheunsueñomedijoquehaysietepiezasdeoroenterradasdebajodelbayánmásgrandeque hay junto al río. ¿Y crees que he ido a cavar ahí?Nome hagas reír.»Y expulsó aChinh delpueblo.Decaminoríoabajo,Chinhencontróelbayánmásgrande,sepasóeldíacavandoalrededorde su base y encontró exactamente siete monedas de oro. Regresó a mi aldea y allí vivió conprosperidad.Esunahistoriaverdadera.Yose la contéaun sacerdote francésyélmedijoqueeramentira.Me dijo que Chinh había robado el dinero y que lo había justificado con un sueño. Sinembargo,yoseñaléqueChinhtuvounavidalargaypróspera.Unladrónquemienteyrobanopuedeprosperarconeldineroqueharobado.Lahistoriaesmuycierta.HaceunosañosChinhmurió,porcierto.Losenfermosvanasutumbaparacurarse,sobretodolagentequetienemalaria.

—ThongNhat.—Sí.—Basta.Hubounsilencio,elprimeroquelasaladisfrutabadesdequehabíaentradoelsacerdote.—Skip—dijoelsacerdote,comosiestuvieratocandounasuntodefragilidadexplosiva—.Pasa

algomalo.—Jesús,MaríayJosé—dijoCrodelle,yseechóareír.—Sientoelalboroto,Nhat.¿Quierehacermeunfavor?Elsacerdoteparecióreticenteacontestar.—Hayunmaletínenlamesilladecafédeahí.¿Meloquieretraer,porfavor?—Porsupuesto.Perohoymepreocupausted.—¿Dóndeestoy?—dijoCrodelle—.¿Dóndedemoniosestoy?—Nhat,¿quieredarmeesemaletín?Skipobservócómoelsacerdoteibaconcautelaalasaladeestarysequedabaplantadodelantede

lamesilladecaféconlasmanosjuntasdelantedelpecho,ysepreguntósiestaríarezando.Crodelle,todavíariendo,volvióaescupirenelsuelo.—¿Seencuentraustedbien?—Mínimamentevapuleado.Solomínimamente.—Dígamealgo.Silodesea.¿Cómohabajadoustedlasescalerassinromperseelcuello?—Hellegadoalaescaleradandobrincosymoviendolascaderasymehecaídodeladoymehe

deslizadohastaabajo.Másomenos.—Yniunamagulladura.NadadeCorazónPúrpura.—Creoqueelhombroderechosemehadislocadounmomento.—Bien.—NecesitoasegurarmedequeentiendeustedeseasuntodelasesinatodelhombredelBND.¿Lo

entiende?—Claro.Yosoyelcabezadeturco.—EsustedLeeHarveyOswald,colega.

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ElpèrePatricehabíarecobradolasfuerzas.EstabadepiejuntoaSkipsosteniendoelmaletínconambasmanos.Skip lodejó sobre laencimera,pulsóelbotónconelpulgaryelcierrede latónseabrióconunasacudida.

—¿Dequiénesestemaletín?—Todosuyo.Deregalo.Dentrodelmaletínsolohabíaunacarpetavacíadepapelmanilayunfajodebilletesamericanos

sujetoconunagomaelásticaroja.Deprontoloposeyeronladudayelmiedo.—Osea,¿qué?¿Semeteustedlamanoenelbolsilloysacaunfajodedineroparalahuida,asísin

más?—Esomismo.Pimpam.Somosmuyeficaces.—A menudo no, Crodelle. La mayoría de las veces son ustedes increíblemente ineptos. Y

estúpidos. ¿Por qué no ha entrado sinmás yme ha dicho «Esto es lo que hay» yme ha dado eldinero?

—Bueno,parecíaustedcompletamenteenamoradodeesaideadequesusestúpidosarchivossonlarazóndeserdetodoelmundo.Yoconfiabaenquepudiéramosdejarloasí.

Sandsextendiólamano.—Demelasllavesdesucoche—dijo.—Nihablar,hijo.Nolevamosadarunvehículo.Yalollevoyo.SkipseacercóaCrodellelobastantecomoparasoltarleelalientoenlacaraylepusolabocadel

cañóndelapistolacontralarodilla.—Tres…—dijo—.Dos…Uno…Crodellesepalpólospantalones.—Ahíestán—dijo.—Puesdémelas.Crodellelediounasolallavedearranqueunidaconunalambreaunaetiquetadepapeldelparque

decochesdelaembajada.Con la mano libre, Sands buscó dentro del maletín, pellizcó con los dedos media docena de

billetesdeveinte,losseparódelfajoylosdejósobrelaencimera.—EstoesparaThoylaseñoraDiu—ledijoalsacerdote.YaCrodelleledijo—:Voyasalirpor

lapuerta.Si se leocurremoverundedoporaquíantesdequeyoestéen lacarretera,vuelvoy lepegountiro.Congusto.Lodigoenserio,Crodelle.Meharíafeliz.

SalióporlapuertadeatrásmientrasCrodellelegritaba:—Nomeinteresasuputafelicidad.Mientrasestabaarrancandoelmotor,elpèrePatricesalióporlapuertadedelante.Sandssacóla

manoporlaventanillayelsacerdoteselacogióyledijo:—Esdemasiado tarde para viajar.Cerca de laRutaVeintidós hay una zona crítica.Ya lo sabe,

¿no?—ThonNhat,mealegrodehaberleconocido.—¿Volveráusted?—No.—Sí.Talvez.Nadielosabe.—Deacuerdo,nadielosabe.

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—SeñorSkip,hastaquevuelvaaverlo,rezaréporustedtodoslosdías.—Seloagradezco.Hasidoustedunamigomaravilloso.Ledioalembragueyarrancódandotumbosporlacarreterallenadebaches.Porelretrovisorvio

queCrodelle se reunía con el sacerdote, los dos de pie delante del portón de lamansión con losbrazoscruzadossobreelpechoylaspiernasenposicióndedescanso,proyectandounairededesafíoydespreocupación.

A su lado en el asiento encontró la chaqueta de punto amarilla de Crodelle. La tiró fuera delcoche,subiólasventanillasyencendióelaireacondicionado.

***

WorldChildren’sServicesteníareglas,procedimientos,requisitos,yentreellosunavisitacadadosmesesalaoficinadeInformesyRecomendacionesdeSaigón.EnsupensióndelacalleDongDu,sino ladespertaba la juergade lamadrugada entonces lo conseguía el lamentode lasoracionesdelamanecerenlamezquita.Estanochelasbocinasdeloscochesylamúsicafunklasacarondelacama.

En aquellas noches húmedas que tenían la temperatura del aliento humano sentía una penademoledoraysoñolienta,nacida,estabasegura,delaindulgenciahaciasímisma:unaautocompasiónlenta, calurosa y tropical. Necesitaba salir de sí misma, encontrar a otra gente, necesitaba susresponsabilidadesenelcampo.Obiensehundiría.Sepudriríabajolasuperficie.Seríadevoradaporaquellatierra.Floreceríaenformadenuevaviolenciaydesesperación.

Allíenlaciudadlosesfuerzosvacuossecomprimíanasímismoshastaformaralgosólido,yellaansiaba entregarse a un sufrimiento monstruoso, quería ser hecha pedazos por todos los doloresimaginables.

EmpezóacruzarlacalleperoretrocedióparadejarpasaraunapequeñaHondaquetirabadeunremolquededosmetrosymediollenodeverdurasyfrutasfrescasamontonadasycoloridas.Enlaciudaddemasiadosvehículos iban con los faros apagados.Procedente deunapuerta detrás de ellaretumbabalamúsicafunk.Aellalehacíafaltabeberalgofrío,peroallídentroestabanadiezgradosmásy todoeranhombresdeveinteañosconfuegoenelalma.Entróde todasmaneras.La tabernaapestabaacervezayasudoryabambú.Seaferróasubolsoconfuerzaygiróendirecciónalabarraporentrelamultituddehombres.

Habíaunpardemujeresbailandosobreunescenarioqueapenaseramásgrandequedoscajonesdejabón.

—¿Qué le apetece?—le dijo un soldado americano en la barra.Con la luz roja del escenariodetrásdeél,noseleveíalacara—.Eh,usted,hermosura.

Eraunavozdejovencito,peroteníalacoronillacalva.—¿Perdone?—¿Quéleapetece?Porqueyolainvito.—Nomeimportaríaunacerveza.¿QuétalunaTiger?—Yaselatraigo.Nosevaya.AvanzódeladopordetrásdeloshombresqueestabanenlabarraenpersecucióndelaTiger.Kathymiró a la izquierda y vio a una fulana bajita que tenía el codo apoyado en la barra de

bambú,lacaderaladeadayunchorrodehumoplateadosaliéndoledeentreloslabios.Pero…¿noeraLan?Eraimposible.Perosíloera.

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—Lan—lallamóKathy,peroLannolaoyó.Llevándoseelcigarrilloa lacara,Lanse trasladóaun taburetequeacababadevaciarse.Había

ayudado a Kathy durante sus dos primeros meses en el país, en Sa Dec, luego había tenido quevolversea casapor ciertosproblemas, la reubicaciónde sualdea,y ahoraestaba sentadamirandofijamente,conloslabiospintadosylaspiernasaldescubiertohastalaentrepiernadelasbragas.

—¿Cómoestás,Lan?¿Teacuerdasdemí?Lachicasegiróhaciaelcamareroyledijoalgoenvozbaja.—¿Quéquiere?—ledijoelcamarero.Kathynosupoquécontestar.Lachica—¿acasoeraotrapersonaylaestabaconfundiendoconLan?—sediolavuelta,volvióa

apoyar los codos en la barra y se quedómirando a los soldados americanos que bailaban bajo elresplandorcarmesíconmujeresfrágiles,agarrándolasconfuerzacontrasuspechosysinmoverseapenas.

ElsoldadoamericanodeKathyacababadevolver.—Cariño,yoinvitoalascervezas—dijo—.¿Noconfíasenmí?—Vuelvoenseguida.Agarrandosubolsoconlasdosmanos,ellaesquivóalagentequebailabaysalió.Ahoraelhedor

húmedodelacalleleparecíafresco.Caminóunoscuantospasosyentróenuncaféysesentó.Bebiódoscervezasseguidasy ledio lavueltaa lasillaponiendoel respaldocontra laparedypidióunatercera.Sacósucuadernodelbolso, lodejóencimade todas lasmanchasy lagrasayencontróunbolígrafo.Sentadadeladoalamesa,conunamanoapoyadaenlapágina,escribió:

QueridoSkip:Jujú-yujujú. Eso es lo que solía decirmi padre cuando estaba borracho, o achispado. No se emborrachaba. Ni siquiera se ponía

achispado,solo

Lamamasanseacercódeslizándosesobresuschanclasyledijo:—¿Estáesperandoustedautobús?—Aestahoradelanochenohayautobús.—Noautobúsahoranoche.Cojauntaxi.—¿Nomepuedoquedar?¿Puedotomarunté,porfavor?—¡Claro!¡Claro!Cojataximástarde,¿deacuerdo?—Gracias.

contento.Sociable,yasabes.Menudahistoriafamiliar.Acontinuacióntengoalgunasopinionesparati.

Opiniones acercade la corteza adrenal dilatadadeAméricay sumentira sacramental.QueridoSkip:mejorseráqueahoratecuidesdetucorazónhumanoocorrespeligroderomperlodeformapermanente.Alsumartusesfuerzosalacruelylocadevastacióndeaquí.

Puedequenoencuentres lugarparaelarrepentimientoaunque lobusquescuidadosamenteycon lágrimas.¿Dedóndeeseso?DealgúnpasajedelaBiblia.¡Yaestoyotravez!Cuidadosamenteyconlágrimas.

EldíaquememarchédeDamulogconlosrestosdeTimothytevienelestanquetomandounbaño.

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…Ellahabía idoadespedirsecuandopartiórumboaDavaoCityydespuésaManila.Desdeelcaminode tierra lohabíavisto salirdelhotelde tresplantasdeFreddyCastro,cruzarel jardínenzoris y calzoncillos a cuadros, llevando una toalla echada al hombro y un platillo. Ella lo habíadejadoquesebañara,sehabíadirigidoalaentradadelhotelparadespedirsedelafamilia,perohabíaoídolasvocesrisueñasdelosniñosyalfinalsehabíametidoenlapequeñacañadaparavercómoSkipSands sebañabadelantedeunamultituddegolfillos.La tubería salíadeuna rocayvertía suagua dentro de una piscina natural de gran tamaño, y los niños, tal vez tres docenas, se habíancolocado a su alrededor como si estuvieran en un pequeño estadio, en cuyo centro el jovenamericano se dedicaba a enjabonarse y a echarse agua con el platillo por encima de la cabeza,cantandoacoroconsualocadopúblico:

¿CUÁLESVUESTROPROGRAMAFAVORITO?¡ELPROGRAMADESKIPSANDS!¿CUÁLESVUESTROPROGRAMAFAVORITO?¡ELPROGRAMADESKIPSANDS!

Niñosrodeándoteportodoslados,ytúhaciéndolesreír.Aquellafueunaespeciedeedaddeoro.

Guardóelbolígrafoyelpapelyvaciólabotellayregresóaladiscoteca.Con tres cervezas en la cabeza, el jaleo parecía todavía más uniformemente ininteligible y

absurdo. Lamujer que tal vez fuera Lan ya no estaba, solo quedaban la voz sesgada y pasada derevoluciones deNancy Sinatra y aquellas putas con su parloteo agudo y aquellos fantasmones desoldados de infantería, todos con cogorzas comparables a la de ella: igual de achispados, decontentos.

—¡Hasestadofueraunbuenrato!Eraelmismosoldadoamericanocalvo.—Heestadoaquítodoeltiempo.—¿Enserio?¡Nidecoña!Ellafueaponerseasuladodemaneraquelacaradeélquedarabajolaluz.Puedequefueraun

suboficial,pero llevaba ropadecivil,yellanopodíaestarsegura.Élnoqueríanadadeella.Siélquisieraunamujer,estabarodeadodemujeres.Esoesloqueelhombreledijo.TeníaunamujerenPleiku. Le pagaba unamensualidad. No era una prostituta. Era su novia. Habíanmatado a toda lafamilia de ella salvo a un sobrinoque se había quedado solamente conmedia cara.El chico teníadañosenelcerebro.Detrásdesucasahabíaundepósitoquealmacenabaelaguadelluvia.Aveceselchaval trepaba al depósito, sin quenadie supiera por qué, y se caía y se hacía daño.Vivíanvariasfamilias en el edificio, una choza con pretensiones, pero tenía dos plantas, y había una escaleraexterior que llevaba arriba, una escalera demadera sin pulir y sin barandilla, pocomás que unaescalerillademanogrande.Denochealchicohabíaqueatarlelapiernaaunclavoenelsueloporquese iba deambulando, era sonámbulo, y se podía caer por el costado de la escalera y romperse elcuello.Yenfin,tepasabasunatemporadatristeporaquellosniños,unmes,dosmeses,tresmeses.Estabas triste por los niños, triste por los animales, no te ibas con lasmujeres, nomatabas a losanimales,peroalcabodeunatemporadatedabascuentadequeaquelloeraunazonadeguerrayquetodoelmundovivíaenella.Quenoteimportabasiaquellagentevivíaomoríaaldíasiguiente,queno te importaba si túmismo vivías omorías al día siguiente, y entonces apartabas a los niños a

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patadas,teibasconlasmujeresydisparabasalosanimales.

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1970

Se puso en cuclillas junto a la ventana y escuchó temblando el ruido de los cables de alto voltajepartidos que toqueteaban la oscuridad de fuera, zumbando más cerca y más lejos, palpando laoscuridadquequedabadespuésdelmiedo.El voltaje avanzaba reptandopor el pozodelmiedo endirecciónacualquiercorazónqueloemanarayquemabaelalmaquehubieradentro.AquellaeralaVerdaderaMuerte.Después de aquello ya nada vivía en aquel corazón, ya nada veía con aquellosojos.Elhedordeaquellacombustiónllevabatodalanocheentrandoysaliendodelahabitación.

En cuanto entróunpocode luzdel sol, lasmoscas empezaron a despegar y a aterrizar por lahabitación.Laradioquehabíaenlarepisadelaventanadijo:

—Hoy tengoaquía loschicosdeKitchenCinq.Yahabéisoído lamúsicade losKitchenCinq,conocidaprincipalmenteporsu«sonidofeliz».Muchachos,¿quémedecísdelnombre?¿Dedóndevinoesenombre?

—Bueno,Kenny,elnombreloinventóparanosotrosnuestromanager,TravNelson.Yanosotrosnonospareciómal,asíque…

—¿Yquémedecísdelaformaenqueloescribís?C-I-N-Q,espocohabitual.—Esa formade escribirlo significa el número cinco en francés.Ynosotros somos cinco, y la

pronunciaciónenfrancéses«sank».YnosotrossomostodosdeTexas,asíquelopronunciamosunpocoasí,también:«KitchenSank».

—Ysoisconocidosporvuestro«sonidofeliz».—Yodiríaqueeselresultadodenuestrasdiversaspersonalidades,Kenny,porqueporlogeneral

somostiposbastantefelices.—Yamímeharíafelizpasarmeeldíaenterohablandoconvosotros,perovamosadespedirnos

ya,seguidigualdefelicesygracias:LosKitchenCinq.Cincotiposfelices.LeshablaKennyHall,delprograma«InSound»,paralaReddeEmisorasdelEjército.

—Hastaluego,Kenny,ygraciasatitambién.—Volvamosalamúsica.Ydejóquesonaralamúsica.—¿Quéseestáquemando?—preguntóél,aunquelosabía.—Noquieroquemevuelvasahablardenadaquesequema.Tepasasveinticuatrohorasaldíacon

eserollo.—Muybien.—Esesaputabasura,tío,elMustique.Yasabesquenoesmásqueeso.—Lopillo.ElMustique.—Esasputasespiralesverdesqueenciendenparalosmosquitos…Alguienhaencendidounaenel

pisodeabajo.¿Deacuerdo?—Deacuerdo.—¿Deacuerdo,James?—Estásprovocandomiedo—leavisóJames—.¿Oyeselzumbido?—Oh,tío.—Derrotaalmiedo.Jokersesentóasuladoenlacama.

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—Creoquetengoquedecirunacosa:estásjodidamentejodido,colega.—Enormedescubrimiento.—Bueno,bien…¿nopuedesdejarlounpoco?James se encogió de hombros. No había ningún provecho en continuar aquella tontería de

conversación.Mingentróprocedentedeotrouniversoydijo:—¿Vosotrosquierefideos?—No,noquieroputosfideos.—¿Podemosirsitiofideos?—No,hedichoqueno.¿Tecreesquequieromiraraunapandadechimpascomiendoconlacara?—Necesitodinero,Vaquero.—Putosfideosviscososdelaputamierdapringosa—dijoJames.Lamiradadeellaeracomoladeunlagarto.—Damedinero,Vaquero.Dilequemedadinero—ledijoaJoker—.Mihermana,muchohambre,

ledueleestómago.Jokersesentóalaniñaenunarodillaydijo:—Eresmásguapaquedosasesnuevos.LaniñadijoalgoenchimpayMingcontestóeninglés:—Élmataralgunagente.Jamesledijoquehicieracallaralaniña.—Quetejodanbucú—dijoMing,ysellevóalaniñaafuera.—Esanoessuhermana—dijoJoker.—Elladicequeessuhermana.—Lomásprobableesqueseasuhija.—Dalomismoloquesea.Sepusodepieycaminóunpocoyseabriólabraguetaehizoaguasmenoresenunorinalazul

confloresrojasquehabíaenunrincón.Nohabíaretrete.Élnoveíadóndehacíaaguasmenoresella.Cuandoqueríamear,seibaabajo.

—Vámonos—dijoJoker—.Escúchame,tío.¿Vaquero?¿Vaquero?Yosécómovaesterollo.—Tengoquecreerte.—Noeslomismoelcentrodelaciudadquelaselva.—Ningunodelosdoseslavidareal.—Yonohedicho eso. ¿Quieres escuchar loque te estoydiciendo?Yanopuedesvenirmás al

centro.Jamessedirigióalapuerta.—¡Cogeelvolante,cariño!¡Yonotengomanos!Estabaoscuro,peronoeramuytarde.Jokerloestuvovigilandomientrascaminabanunbuenrato

hastalaCruzRojaysepasabanotroratolargohaciendocola.CuandolellegóaJameselturnodeusarelteléfono,Jokerlodejósoloparaquehablaraconsumadre.Apenashabíadichoholacuandosearrepintiódehaberllamado.Sumadresollozabaatormentada.

—Nosécuántotiempohacequenosabemosnadadeti.¡Nosésiestásvivoomuerto!—Yotampoco.Nolosabenadie.—¡BillJuniorestáenlacárcel!

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—¿Quéhahecho?—Nolosé.Unpocodetodo.Llevaallícasiunaño,desdeelveintedefebreropasado.—¿Enquémesestamos?—¿Nosabesenquémesvives?Esfebrero.—Parecíafuriosa—.¿Dequéteestásriendo?—Nomeestoyriendo.—¿Puesaquiénacabodeoírreírseenmioído?—Menudagilipollez.Nomehereído.—Nouseseselenguajeinmundoenmiteléfono.—¿Nopone«mierda»enalgúnpasajedelaBiblia?—Sacalalenguadelretrete.Estumadrequientelodice.¡Tumadrequenisiquierasabedónde

estás!—EnNhaTrang.—Bueno,graciasaDios—dijoella—,porhabertesacadodeVietnam.Ahorasíquealguienserio.Talvezélmismo,aunquenohabíanadagracioso.

***

A primera hora de la mañana del 20 de febrero de 1970, Bill Houston viajaba en una furgonetapropiedaddelestadoencompañíadedosagentespenitenciariosyotrostresmalhechoresporlaRuta89 en dirección a Phoenix, después de servir docemeses de una sentencia de uno a tres años deprisiónenlacárceldeFlorence,sinquelequedaraclaroenabsolutoporquéexactamentelohabíanmetidoenlacárcelnitampocoporquélohabíansoltado.Alparecerdesdeelmismodíaenquehabíavueltodelamarinahabíaidoacumulandounmontóndecargos:unalibertadcondicionalporrobaruncoche,unasentenciasuspendidaporasalto,locualqueríadecirmeterteenunapeleacuandohabíapoliscercaparadetenerte,yunaordendebúsquedapornocomparecerporunaacusacióndehurto.Yentoncesel robodeunasimplecajadecerveza,veinticuatro latas,se lehabíadesplomadosobre lacabeza.Undíaqueestababebiendo,ypaseandoporuncallejóndelosquedanalaCuartaavenida,habíavisto lapuerta traseradeuna tabernaabiertaycalzadaconunaentregadeLuckyLager,ysehabía llevado la caja de encima.Se suponía que aquella era su cerveza de la suerte, pero le habíatraído un destino espantoso. Solamente se había alejado un par de manzanas, y estaba esperandodelante de un semáforo en rojo como hacen los buenos ciudadanos —cambiándose la caja delhombroizquierdoalderechoyplaneandodóndepodíaencontrarrefrigeraciónparaaquellaslatas—cuando lo alcanzó el coche patrulla. Un par de vistas judiciales, un mes en la penitenciaría delcondadoyluegoavivirentremurosdecincometrosdealtura.

Decaminoalacárcelunañoatrás,transportadoquizáenestamismafurgonetaconestosmismosagentes hacia la justa recompensa que su madre y sus profesores le habían prometido, se habíasentido emocionado y adulto. ¿Acaso era cierto que en el trullo te intentaban apuñalar y violar?Entonces,¿porquéélnohabíavistoaquellascosasenlaPenitenciaríadelCondadodeMaricopa?Noes que le preocupara.Nohabía perdido una sola pelea en su vida y le apetecía vapulear a todo elmundoque intentara faltarle al respeto. Por otro lado, había asesinos y gente así, y allí dentro noteníannadamejorquehacerqueentrenarseyejercitarse, si eraeso loque les apetecía.Eramejormantener la cabeza gacha. Aprender un oficio valioso. Tal vez escogería artesanía del cuero,cinturones,mocasines y pitilleras.Al fin y al cabo, en las calles lo conocían comoBill elCuero.

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¿Quizáledejaríanhacerfundasparacuchillos?Dudabaquefueraposible.Asignadoalosbarraconesdeseguridadmedia,descubrióquesuscompañerosnoerantiposmás

durosqueaquellosconlosquehabíacompartidoliterasenelcalabozodelsheriff,yquelacomidaera un poco mejor. Había una pista de cuatrocientos metros para correr y también una extensaseleccióndepesas.Ensusegundodíaallíjugódejardineroizquierdoenunpartidodebéisbolysemarcó dos carreras y una cuadrangular. Nueve entradas completas: cada equipo contaba solo conochohombres,peroteníantodoelequipamiento,incluyendocascosparalosbateadoresyproteccióncompletaparaelreceptor.

Altercermesdeinternamientoyasesentíacomoencasa.Desdeaquelladistancia,lascosasquepensabaqueibaaechardemenosleparecíaninsignificantes.Lostrabajosquehabíatenidolehabíanexigidosualmayacambiolehabíandadopobreza,ylasmujeresconlasquehabíatratadoenseguidasehabíanconvertidoenmolestias.Elalcohol lehabíaproporcionadomomentosdeeuforia,peroamenudo lo había catapultado a manos de la policía. Entre los ciudadanos libres le había dolidoconstantementeelestómago.Nuncaleapetecíatragarnadaquenofuerabebida.Perodesdeeldíaenque había llegado allí tenía buen apetito y se había concentrado como un perro de caza en cadacomidaquesepresentaba.Habíaganadosietekilosdepeso,todomúsculo:abdominalesyflexionesdebrazostodaslasmañanas,cincuentadecada.Cuatrodíasporsemanalevantabapesas.Lossábadosporlatardeboxeaba,yunpardeantiguosprofesionaleslehabíanenseñadoquepelearseeraunarte.Teníabuena resistenciay recibíabien lospuñetazos.Era elmejorBillHoustonquehabía existidodesdequedejólamarina.

Ahora rumbo al oeste, a su hogar en Phoenix, de vuelta por donde había venido. Con el solnacienteasuespalda,navegabahaciaunavidaquenosepodíaimaginar.Lehabíandadoelnúmerodeteléfonodesuagentedelacondicional,unchequedeveintedólaresylaropaconquelohabíandetenidohacíatrecemeses.Examinólacarreteraqueteníanpordelante,eldesiertoheladobajolaluzmatinal, llanoyverdedespuésde las lluvias invernales, lacarreteranegrayperfectamente recta,através del parabrisas de la furgoneta, y sintió que bajo sus pies semovía una aventura, igual quecuandohabíacontempladocómoseibaalejandolacostadeCaliforniadelSurdesdelabarandilladesuprimercruceroalosdiecisieteaños.

EnPhoenixentróenelprimerbarqueencontróysepusoahablarconlaprimeramujerquefuemedioamableconél.Ellaledijoqueeraepiléptica,yaélnoleimportó.Cadadoshorassetomabaunapastilla,untranquilizante,Seconal.Teníavariosfrascosllenosyasegurabaqueselosrecetabaunmédico.Sololecostódoscervezasponerseachispada.Billtuvoquehablarmuchoratoconella.

Deambularon por las calles. Ella quería que él caminara por el lado de fuera, por el lado delbordillo,porque, talcomoinsistió,siponíaa lamujerenel ladodefuera,esoqueríadecirque laestabachuleando.Ellaparecíasaberlotodosobreeltema,peronolepidiódinero.CuandosubieronalahabitacióndelamujerenunhoteldesdeelqueseveíanLosDoses,elvecindarioquerodeabalacalleDos,resultóqueelSeconalnofuncionababien.Enplenanochelacamaempezóatemblar.

—¿Quépasa?—dijoél.—Hetenidounataque—dijoella.LamujerparecíaconfusaacercadequiéneraBill.—¿Quedacerveza?—dijoél.Solamentehabíancompradounpaquetedeseis.Billencontróelenvoltoriodecartóndelmismo

todoarrugadodebajodesuculodesnudo.

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—Tengoqueiraveramifamilia—dijo—.Acabodesalirdelacárcel.La noche había refrescado.CaminóporLosDoses. Se había sentadopara echar una cabezada,

peroyafaltabapocoparaelamanecer,elpavimentoestabamuyfríoylosvagabundosquedormíanenlaaceraconlacabezaapoyadaenelbrazoyaseestabanempezandoadespertaryacaminarsinrumboporlascallessilenciosas.BillHoustonsesumóaldesfiledealmasqueesperabanelsol.

CaminóhastaqueselepasólaborracheraypermaneciósobriohastalaprimeravezquesereunióconsuagentedelacondicionalenunedificiocéntricodelacalleJefferson,yaquelaabstinenciadelalcoholeraunacondiciónparaquelosoltaranantes.Nadielocomprobaba,sinembargo,ynotardóenrecaerensusviejoshábitos,recobrandolacomposturalosmartesparaelenfrentamientosemanalconelhombrequepodíamandarlodevueltaalacárcelconunasolallamadatelefónica.Suagente,SamWebb,unjovenyfondónrancheroadoptadoporlaciudad,quellamabaaHouston«vaquerodelcentro de la ciudad», le consiguió trabajo de aprendiz. A los dos meses de libertad, Houston sepresentó a su reunión con el aliento oliendo awhisky, pero la infracción solamente hizo soltar aWebbunsoplidodeburla.

—Tepodríamandarunfindesemanaalapenitenciaría—dijo—,perotevolveríanasoltar.LasceldasdeFlorencelasnecesitanparalostiposmásduros.

Houston terminó su aprendizaje y empezó a ganar sueldo completo. Conducía una carretillaelevadoraenunalmacénmaderero,elmásgrandequehabíaentodoelsudoeste,oesosedecía,sincontarCalifornia.Eldíaenteroselopasabatrasladandotoneladasymástoneladasdetablonesreciéncortadosyconoloravómitodesdecamionesgigantescoshastanavesgigantescas,ynuncaconstruíanadaquenofueranmontonesperfectamenterectos,queluegodesmantelabapocoapoco.Otragenteusaba aquella madera. Él solo la veía pasar. Sin apenas relacionarse socialmente pero bebiendobastante, evitando meterse en líos, reticente por alguna razón a volver a ser él mismo, estuvotrabajandoenelalmacénmadererohastabienentrada laprimavera,cuandosusausenciascadavezmáslargaslovolvieronprácticamenteinservible,yporfinloecharon.

***

La misión había tenido sentido hasta que la cumplieron. No obtuvieron nada. Buscaron un sitiosegurodondepasarlanoche.UncampamentodelasFuerzasEspecialesleshabíanegadolaentrada.Lo más probable era que la simple presencia de las Fuerzas Especiales vaciara la zona de todaactividad, pero nadie había sido informado de su presencia. Justificándose en información deinteligencia obsoleta, los seis LURP se habían zampado una dosis y habían puesto rumbo al nortecuando lo que tendrían que haber hecho era quedarse a dormir enNhaTrang.Lamisión no teníaningúnsentido.

Elincidentefuemásunasesinatoqueunaemboscada.Duranteelúltimomediokilómetro,Jameshabíaidoenpunta.Eraunanochesinestrellas,perolaoscuridaderasabia.Éllasiguió.Alcabodeunoscentenaresdepasos,laoscuridadseensancharíayelloshabríanllegadoaunsitioqueconocíandondepodíanpararyesperarelamanecer,yposiblementepedirquelossacarandeallí.

Unarmaabriófuegodetrásdeélenformadetresestallidossecos.Élsetiróalsueloyreptódevueltapordondehabíavenido,perosedetuvoalcabodepocosmetrosporquesuvidasebifurcababruscamentea la izquierdaenaquelpuntoexacto.Lecayóuna lluviadehojasencimamientras los

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demásdevolvíanelfuego.Retumbaronpasosenelcamino.Unagranadaestallóentrelosárbolesyélhundió la cabeza en la tierra mientras detonaba. Nada. El fuego había cesado. El chirrido de losinsectos se había detenido. El momento era intenso y pacífico. El aire tenía una profundidad quepitabaenlosoídos.Hastalaúltimapartículadepatrañahabíaquedadoincinerada.

Avanzódeslizándose a través de los excitantes desgarros de la espesurahasta oír a unode lossuyosquereptabaporelcamino,ychasqueólalengua.Oyóungemido.Oliómierda.Elgemidoseelevóhastauncanturreo,peronoatrajofuego.

—¡Hombreabatido!¡Hombreabatido!—¡Enelcamino!¡Enelcamino!EralavozdeDirty.Jamesoyóbotasenelcamino,disparótresráfagasdecoberturaysedetuvo.

Habíaunhombreencuclillasjuntoalherido.—Agarrauntobillo.Vamos.—Nidecoña.Nohaycobertura.Jokerapareciópaseandoporelcaminocomosiestuvieraenunparquepúblico.—Sehaacabado.—Seapostóenelarcéndelcaminoconelarmaapunto—.Erauncabrónsoloy

yaestá.—Yunamierda.—Vitodaslasdescargas.Nobajélamiradaniunmomento.Dirtyledijoalqueestabaherido:—¡Miraaquí,mírame!—Noveonadamásquepatrañas.—¡Bakers!—¿Quiéneres?—SoyDirty.Soyyo.¡Nocierreslosojos!—Joder,noestoyenelmundo,tío.Noloestoy.—Estásaquí.Estásbien.—Nolosiento.Menudapatraña.—Estásaquí.—Nosientoelmundo,tío.—¿Quiénhatiradolagranada?—Yo—dijoJoker—.Elcabrónhaapretadoelgatillotresvecesysehaabierto.—Tienelosojosvacíos.—Dirtyseacercómásparahusmearenbuscadealiento—.Jodido—dijo

—.Jodidodeltodo.Ahoraestabanreunidosloscinco.Jamesvolvióaponerseenpuntaycadaunodelosotroscogió

unbrazoounapiernayasí llevaronelcadáverdeBakershastaelclaroqueconocíanasolamentetrescientosmetrosporelcamino.

—Quítalelaplaca.—Sehaidomuriendoporpartes.Sehaidovaciando.—Peromegustaloquehahecho.Haseguidosiendoélmismo.—¿Sí?—Nosehachifladoysehavueltounniñopequeño,tío—dijoDirty.Estaballorando.JamesnohabíaconocidomuchoaBakers.SesentíallenodegratitudydeamorporqueBakersse

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hubieracomidoelbalazoenlugardealgúnotro.Sobretodoenlugardeél.—Yapillaremosaalguiendealgunadeestasaldeasymandaremoselmensaje.—AlamierdalossoldadosdelNorte.HansidolosBoinasVerdes.¿Ospodéiscreerestamierda?—No,yono.—Sinoshubierandejadoentrarensuperímetro,estehombredeaquíestaríavivo.Estehombrese

estaríariendo.—Llamemosysaquémoslo.—Todavíano.—Dirty,tío,seacabó,tío.—Dejaesaradioenpaz.Dirtypulsóestridentementeelselectordelarmaconelpulgar.—Oui,monsieur!Nopiensotocaralamuyputa.—¿Quiénvieneconmigo?DirtyyConradfuerondecazaylosotroscuatrosequedaronconelmuerto.—Estetipohamuertoporqueesoscabronesnonoshandejadoentrarensuperímetro.—Alsiguienteboineroqueveaporahí lovoyaseguirhastaquelepuedameterunaentodala

putaespalda.—Lancemosunataquecontraesoscagadosdemierda.Jamesseacuclillóconlaespaldaapoyadaeneltroncodeunárbolyseliouncigarrilloconun

pocodehierba.Allamerelpapelnotóelsabordelbroncedecañónenlosdedos.Se puso de pie y lo encendiómientras los demás se apiñaban a su alrededor para esconder el

resplandor.—¿Hasoídoloquehadichodelaspatrañas?Sehadadocuenta.Sehadadocuenta.—Lehanvoladolaespalda,entodocaso.—Bienporél.Sino,lehabríatocadocadenaperpetuaenlasillaeléctrica.Esaeslasentencia,tío.

Temuevessoplandoporuntubo.—Nolehandadotanarriba.Tendríalosbrazos.—Yonousaríasilladeruedas.Yomebalancearíaconunarnésdeltecho.James los dejó y se volvió a sentar apoyado en el árbol. No quería hablar de aquellas cosas

mientrassucerebroseelevabacomoungloboyluegoseenfriaba.Echólacabezahaciaatrásymiróelcielo.Oscuridad,nada,lanadaabsoluta,nadamásqueelectricidadsilenciosa.Elalmadetodaslascosas.

—Nomecreoesamierda—dijo.—Esosboinerosdemierdatienenmontadodenariceshastaelúltimorincóndesuprograma.—Nopegannigolpe.Nopintanunamierdaaquí.—Lancemosunataquesobreesoscagadosdemierda.—Venidaquí—dijoJames,ylosdemásseacercaronyseacuclillaronasualrededor—.Necesito

una granada china. En cuanto pille una granada china voy a coger a esos cabrones y los voy aconvertirenpulparoja.

—¿Estanoche?—Encuantopilleuna.—Conradtieneuna.—Yalosé.

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—Pongamosalgodehumoensunoche.Carguémonosaunosveintedeesosmaricones.Conradaparecióentreellostansilenciosamentecomounpensamiento.—¿Yahasvuelto?—Solamenteyo.—¿DóndeestáDirty?—Hacogidoaunamujer.Jamessepusodepie.—Dameesagranadademano—dijo.—¿Cómo?—Yasabesdequéteestoyhablando.Esetrastochino.—Melallevoacasa.—¿Aquécasa?—Acasacasa.—Alamierdatucasa.—Derecuerdo.—Notepuedesllevarunagranadademanoalmundo.—Bueno,acagardetodasmaneras.—Teconseguiréotra.Conrad la llevabaenelbolsillode lapechera. James lemetió lamanoenelmismoy forcejeó

hastasacársela.—¿Vienesconmigo?—¿Adónde?—Devueltaadondelosboinerosestánroncando.—¿Enserio?—Enserio.—Voysitequedasaesperarelinterrogatorio.Dirty volvió a aparecer acompañado de una pequeña criatura desnuda en el campo de visión

nocturnadeJames,comosiacabaradeentrarenuncírculodeluzdefuego.Lachicateníaunlabioinferior reluciente que sobresalía como si alguien le acabara de decir una palabrota. Parecía lobastanteenfadadacomoparamatar,sihubieratenidounarmaenlasmanos.Elloslasujetaroncontraelsueloyseturnaronconella,peroDirtyyahabíaterminadoyJamesqueríaguardarselarabiaparasuHoraCeropersonal con losBoinasVerdes.Cuando losdemáshubieron terminadoyanohacíafaltasujetaralachicacontraelsuelo.Jamessedejócaersobrelasrodillas,pusosucuchillodecazacontralabarrigadelamujerydijo:

—¿Cuálesturango,soldado?¿Tehanenseñadoalgunavezausarunodeestos,soldado?¿Habíasvistoalgunoantes,soldado?¿Cuálesturango,soldadete?¿Quéestásmirando?¿Tecreesqueeresmimadre?Eresmimadre,pero¿quiéncoñoesmipadre?

Ylaestuvo interrogandohastaque tuvo lamanodemasiadodébilparaaguantar laempuñaduradelcuchillo.

***

Últimamente a Bill Houston le parecía que Phoenix había crecido mucho. Las urbanizaciones

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periféricas sehabían idoextendiendoporeldesierto.El tráficoera furibundo.Muchasmañanaselhorizonteyacíasepultadobajovariascapasdeniebladepoluciónmarrón.SiemprequetodoaquelloloagobiabaélcogíaunhilodepescaryunpardeanzuelosysesentabajuntoaunodelosamplioscanalesderiegodondelossilurosesperabanenelestadodepacíficaignoranciapropiodelsigloXX.LehabíandichoqueveníandelríoColorado,ylehabíanaconsejadoqueusaratrozosdesalchichacomoceboyunaboyadeplásticoparamantenerelanzuelojustotocandoelfondo,peroélnoteníaningunaboya,nisiquieracañanicarrete,ynuncapescabanada.Noleimportaba.Esperaryconfiar,aquelloeraloquecontaba,mirarcómopasabaelaguaporelvetustodesierto,reflexionarsobresusviajes.AmenudoHoustonsequedabahastatardeespiandoalagentequellegabayseadentrabaenaquel lugar solitario, hasta que una noche tuvo ocasión de sorprender a tres hippies que estabanhaciendounaventadedrogayderobarlestrescientoscincuentadólaresenmetálicoyunladrillodemaríamexicanaenvueltoencelofán rojo.Sindejardemirar sumachete tembloroso, loschicos ledijeronqueerahierbamexicanamediocre,debajacalidad,nadaespecial,peroqueclaroquese lapodíallevar.Éllesdejóqueselaquedaran,aunquepodríahaberencontradounaformadevenderla.Habíaunlímite.Podíaintimidarachavalesyrobarles,yhastapodríahaberapuñaladoaunosinolehubieraquedadootroremedio.Peronuncatraficaríacondrogas.

Cercadelahoradecierreestabadepiedelantedelapuertaabiertadeunbar,bañadoensucálidoaliento a alcohol, mientras la música country que venía de dentro lo envolvía y le cortaba. Unhombrecillo salió diciendo palabrotas e intentando cerrar las rasgaduras que le había hecho en lacamisetaunasaltante.Unarataflaca,demasiadoviejoparapelear,consangreenlabocayunojotanhinchadoquenolopodíaabrir.Sonriócomounniñocastigado.

—Estomecurará—dijo—.Estoeselfinal.Muchas,muchasveces,BillHoustonsehabíaprometidolomismo.

***

ElcapitánGalassiexpresóciertapreocupaciónporlaautoestimadeJames,aunqueéllopronunciaba«autostrima».Noeraunniñatodecapitán,eradelosdeverdad,llevabaallídesdeelsesentaytres,ascendido por méritos en el terreno y todo eso, pero ahora se permitía desarrollar ciertapreocupaciónpor laautoestimadeJames,yasí loexpresó,mientrasel sargentoLorinpermanecíasentadocercaconlospuñossobrelosmuslos,sinexpresarnada.

—¿Cuálessunombredepila,cabo?—James.—TevoyallamarJamesenlugardecabo,porquemuyprontovasasercivil.Yademás,amis

ojos,noeresunsoldado.¿Tienesalgoquedeciraeso?—No.—Tehandadounabuenapaliza,¿verdad?Tehanvapuleadodelolindo.¿Creesquetevanadar

unCorazónPúrpuraporeso?—Yatengouno.Ytambiénfueunapatraña.—Mira,James,esossonsoldados.Sonhombrescomoesdebido.Dehecho,mihermanasecasó

conunBoinaVerde.Sabenquéesloquehanvenidoahacer,yloestánhaciendo.Sabenquiéneselenemigoynovanaponerseamataralossuyos.Songentequesisupropiagentelosintentajoder,siunamericanolosintentajoder,yhastasilestiraunagranadaalregazo,ellosnomatanalamericano,

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porqueeseamericanonoessuenemigo.Selimitanajoderlounpoco,porqueeseamericanoesunputohijodelagranputa.

Jamesnohizoningúncomentario.—Tepegancomotemereces.¿Todavíameassangre?—No,señor.—¿Puedestomaralimentossólidos?—Nonecesitoalimentos.—¿Ymevasadecirquenotirasteeseobjeto?—Yonotiréningunagranada.—Lamuyputacayósimplementedelcielo.—Yonoséuncarajodeningunagranada.PerounacosasíledirédelosBoinasVerdes:prefieren

dejar a su gente en la selva para que losmaten cuandouno les pregunta si se puedequedar en superímetro.Yaunodelosnuestroslomataron.¿Sedivorciódeél?

—¿Quién?—Suhermana.—Esonoesasuntotuyo.—¿Cuálessunombredepila?—Esotampocoesasuntotuyo.—Muybien,Jack.Tútampocoeresunsoldadoparamí.Nositeponesdelladodeesosmaricas

deFuerzasEspecialesyencontradetuspropiosLURP.Quetedenporelculo,Jack.—¿Sabesquécreo?Creoqueelsargentoyyotevamosasacarporlapuertadeatrásytevamosa

darunatundaigualquelosBoinasVerdes.—UnrolloestiloBoinaVerde—dijoelsargentoLorin.—Meencantaría.Vamos.—Discúlpateconelcapitán.—Medisculpo,señor.—Se acepta la disculpa, James, creo que has perdido el control y la capacidad de razonar en

mediodeestadifícilatmósferaqueproducelapresióndelaguerra.¿Túnolocrees?—Meparecemuyposible.ElcapitánGalassiencendióunKool.Elaireacondicionadodelbarracónmetáliconoconseguía

filtrar del todo los olores de fuera, olores americanos decentes: grasa, patatas fritas, carne frita,letrinasdeolorrazonable,noletrinasllenasdemierdadechimpachinorrodeloshuevos.ElcapitánGalassiexpulsóunanubecilladehumoehizoquesesuperpusieranlosolores.

ElTenienteMetepataslehabríaofrecidounKool.JamesdeseóregresaralostiemposdelviejoTenienteMetepatas,cuandolosúnicosqueestabanlocoseranlosoficiales.

—¿Puedofumar,señor?—Adelante.—Nomequedanpitillos.—Entoncesnocreoquevayaaserposible.—Puesnofumaré.—¿Quétehachiflado?¿Hastomadomuchoele-ese-de,chico?—Noconsumodrogas.Salvocuandoestáindicado.—¿Indicadoporquién?¿Portucamello?

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—Porlosrequisitosdelamisión,señor.—Quieredeciranfetas.—Quierodecirloquehedichoyyaestá.—QuieresdecirqueeresunpequeñoSpeedyGonzales.¿Eresconscientedelojodidoqueestás?

Hashechoreconocimientoalargadistanciahastasalirtedeloslímitesdelacordura.Tetienesqueiracasa.

—Meacabodereenganchar.—Puesnotevasaquedar.Notequieroenmiguerra.Jamesnodijonada.—Tieneslasrodillasdelospantaloneshechaspolvo.—Heestadocavando,señor.—OcaminandoderodillasborrachoporlacalleTrangKhehacecuatronoches.—¿Hacecuatronoches?Nolosé,señor.—¿CómoesqueyanovasconlosmuchachosalMidnightMassage?Nohuborespuesta.—Tenías algo fijo.Unamujercita fija en la calle Tranqui. ¿Estuviste hace cuatro noches en la

calleTrangKhe?—Creoquesí.Nolosé.—¿Estabasallí?—Creoquesí.—¿Oestabasdepatrulla?—Nolosé.—¿Quépasó?—¿Cuándo?¿EnlacalleTranqui?—Enlapatrulladondeseasesinóaunamujer,putoasesino.DeprontoJamesodióaaquellosdoshijoputas,porquesiibanaponerladirectayhaceraquello,

leteníanquedarporlomenosunasillayuncigarrillo.—¿Quélepasóaaquellanativa,James?—Siseliquidóaalguienesqueerahostil,yyaestá.—¿Estabastúenesapatrulla?—No.—¿Hacecuatronoches?—No.—¿No?Tehasdedirigiramícomo«señor».—¿Quiénsehachivadodenosotros?—Noesasuntotuyo—dijoelsargentoLorin.—Alguienestámintiendo.—¿Alguienestámintiendosobrequé?—dijoelsargento.Jamesesperóaquehablaraelcapitán.—¿Lohicistetú?—Nolosé.—¿Nolosabes?Mecagoenlaputa,hombre,tehasdedirigiramícomo«señor».—Nolosé,señor.

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—¿Lohicisteono?—No me acuerdo de qué noche fue esa, señor. Creo que la semana pasada bebí demasiada

cerveza.—Llevabaunatajatremenda—dijoelsargento.—¿Tegustalacerveza,James?Bueno,puesenLeavenworthnohaycerveza.—¿Haestadoustedallí?—Notepasesconmigo.—Tengoamigosallí.—Notepasesconmigo.—Discúlpateconelcapitán.—Medisculpo,señor.—¿Quélehicisteaaquellamujer?—EradelVietcong.—Yunamierda.—EraunaputadelVietcong.—Yunamierda.—Lomismodigo.—Nomedigasquéesesto.Yaséloquees.Mepareceamí.—Eraunaputayestoesunaguerra.Señor.—¿Tienesintencióndereengancharteporcuartoaño?—Sí,señor.—No,señor.Seacabóparati.—Señor,tengopatrullaalasdiecisietecerocero.—¿Patrulla?Diosbendito.Enprimerlugar,nomandamosatiposconlascostillasvendadasyel

brazoescayoladodepatrulla.—Esuncabestrillo,nounaescayola.Sepuedequitar.—Ensegundolugar,nomandamosacivilesapatrullar.—Yonosoyuncivil.—Bueno—dijoelcapitán,yleentróunarabiatangrandequeempezóaarrastrarlaspalabras—.

¿Te importa si tedigoque si no eres civil esporque todavíanohemos terminadocontigo?Voyahacerbalancedeesto,voyavolveraporti,todavíanohemosterminadocontigo.Voyavolveraporti.Talvezvaavolveraportiunmontóndegente.Talvezvaavolveraportielejércitoentero.

—Nolocreo.—¿Nolocrees?¿Teestásinsubordinando?—Lodigo,nadamás.—¿Quédices?—Nolosé.—¿Quédices?—Queustedcreequevaavolverapormí,peroyonocreoquevayaavolverapormí,porque

eraunaputayestoesunaguerra.Yesoesloquepasa,porqueestoesunaguerra,porqueestoesmásqueunaguerra.

—¿Enquéquedamos?¿Esunaguerraoesmásqueunaguerra?—Lodigo,nadamás.

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—Mariconcillodemierda.Yoyaestabaenestaguerraantesdeque túaprendierasacascártela.¿Deacuerdo?

—Deacuerdo.—Deacuerdo—dijoelcapitán.Sepasarontreintasegundosallídepiesinhacernada.—Señor,capitán—dijoJames—.Metengoqueir.Metengoqueabrir.—No,James,tedigoqueno.Diosbendito.¿Depatrulla?—Sí,señor.El capitánGalassi se puso de pie.Caminó con aplomohacia la puerta del barracón, agarró el

pomoylaabriódeparenpar.Alotrolado,elpolvo,elruidodeloscamionesydeloshelicópteros:undíagrisypesado.

—Sargento—dijo—.Hableconestehombre.Salióycerrólapuertadetrásdesí,dejándolotodosumidoenunacalmarelativabajoelzumbido

delaireacondicionado.ElsargentosesentóalamesadelcapitányleofrecióunasillaaJames.Peronouncigarrillo.—Podríashabertecargadohastaacuatrodeesoscabrones—dijoLorin—.Bueno,yasé,elúnico

quehasalidoheridoerestú.—AlcabodeunmomentoLorinañadió—:Peroelasuntodelamujer…—Esosrollospasantodoeltiempo.Lorinseloquedómirando.Fijamente.Ydijo:—James.—¿Qué?—No.Dimetúqué.—Osea—dijoJames—,¿dedóndevieneeserollodelamujer?¿Quéestáhaciendoeserolloen

mipelícula?—¿Tegustatupelícula?—Es un rollo como de que tengo unos sensores. Y en cuanto empieza la acciónmimente se

enciendeenTechnicolor.Comosituvieraunossensores.—Yentoncessoloquieresseguiryseguir,¿no?—Sí.—MirandotupelículaenTechnicolor,¿no?—Sí.—Hastaquecomasmierdaytematen.—Sí.—Enesoestoymásomenosdeacuerdocontigo,James.Nomeparecequeseamuyaconsejable

soltarteenEstadosUnidos.Yodiríaqueteaguantemosaquíhastaquetematen.Perosinolohicierantodoconelculo,noseríaelejércitoamericano,¿verdad?

—Lohacemostodoaciegas,sargento.Secometenerrores.—Sí,esverdad.Peroestepequeñoerrordelamujerestáyendoaparardirectamentealculodel

capitán.Yluegoconelchismedeladispersión,estásllamandolaatenciónasaco.—¿Mepuededarunacalada?—Unmomento.Teestoyhablando.—Vale.—Oseaquecreoqueestavezvaenserio,Vaquero.Creoquevasatenerqueirteacasa.

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—¿Acasa?—Alacasadedondeviniste.—Noséquédecir.—Diqueeresundesastre.—Soyundesastre.—Si no quieres un billete para salir del infierno, entonces es que no estás del todo bien de la

cabeza,¿verdad,soldado?—Sihablausted,letengoqueescuchar.Ustedsiemprehallevadorazónentodo,colega.—EltíoHohamuerto,socio.Hasganadolaguerra.Seacabó.—¿Sí?—Hazlasmaletas.Veteacasa.Yamismo.—¿Ya?—Porsupuesto.VeaTenSonNhutycogeunvuelode transportemilitary lárgate.Lárgatesin

más. Yo te doy el permiso, y una vez que estés allí ya haremos todo el papeleo para que seapermanente.

Elsargentosacóuncigarrillo.LeofrecióotroaJamesyencendiólosdosconunacajadecerillasdelMidnightMassage.

—Seráhonorable—dijo.—¿Elqué?—Labaja.—Ah…sí.¿Honorable?—SeráBajaHonorable.—Siustedlodice…—YodigoHonorable.Ylodirésiempre.

***

Amediadosdejunio,BillHoustonpagólafianzaparasacardelacárcelasuhermanoJames.JameshabíallegadohacíaunpardesemanasaPhoenixperonosehabíapuestoencontactoconnadiehastaque lodetuvieronporasaltomenor,yentonceshabía llamadoasumadre.CuandoJamespasópordelantedelamesadelalguacil,ibasonriendo.Porlodemásselenotabaciertaincertidumbre,comosialgolepudieracazardesdedetrás.

—Enprimerlugar,nosonríoporqueestéorgulloso.Sonríoporquemealegrocomounlocodeestarfueradeahí.

—Tienessuertedequeyotuvieraunospavos.—Sientoqueteloshayastenidoquegastarasí.—Por lo general, estoy sin blanca, pero últimamente las cosasme han estado yendo un poco

distinto.—Parecequehasganadounpocodepeso.—Bueno…estuveenFlorence.Yaenlacalle,Jamesagachólacabezayfrunciólosojosparaprotegersedelaluz.—Teagradezcoesto,BillJunior.Notemiento.—Lafamiliatienequecontarparaalgo.Porquenadamáscuenta.

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—Enesotienesrazón.—¿Teapeteceunahamburguesa?—¿LlevavestidoelPapadeRoma?—Jamesescupióunpuñadodetabacoqueteníaenlabocay

querebotósobrelaaceracomounpequeñocagarro—.¿Cuántolehaspagadoalfiador?—Cien.Ysitecuelgasynotepresentasanteeltribunal,ledeberémil.—Nomecolgaré.—Esoespero.—Ytedevolveréloscien.—Nohayprisa.Cuandopuedas.BillHoustoncruzólamanoderechaparahurgarseenelbolsilloizquierdodelosvaquerosysacó

unasllaves.—¿Tienescoche?—Sí.EsunRolls.—¿Enserio?EraunviejoLincolnconunacapotaqueparecíalacubiertadeunportaaviones.—Ya,noesunRolls.Perotienecuatroruedasigual.LlevóaJamesaunMcDonald’sylecomprótreshamburguesasdelasmásgrandesqueteníany

dosbatidosdechocolate.Jamescomiódeprisayluegosequedósentadoallíconlosbrazoscruzadossobreelpecho,clavandomiradashostilesentodoelmundo.

—Eh.Jamessoltóunfuerteeructo.Hablarondesumadre.—¿Cuántosañostiene,atodoesto?—dijoJames.—Cincuentayochopor lomenos—dijoBill—.Talvezcincuentaynueve.Pero tienepintade

tenermásdecien.—Losé.Sí.Esverdad.Hacetiempoquetienepinta.—Entonces…—dijoBill—, yome llamoBill Junior. Pero ¿alguna vez se te ha ocurrido una

cosa?Amísemeocurrióhacemuchotiempo.—¿Qué?—QuenohayningúnBillSenior.Unviejoquehabíaenlamesadealladolespreguntó:—¿Cuántosañostenéis,chicos?Ellossemiraronelunoalotro.—Yo tengo sesenta y seis —dijo el viejo—. ¿Sabéis la Ruta Sesenta y seis? Pues lo mismo.

Sesentayseis.—Veteatomarporelculo—dijoJames.BillHoustonse fijóenque Jamesestabamascando tabaco.Agarróunpellizcode la lata, se lo

metiódentrodelamejilla,cerrólatapayselimpiólosdedosenlapartededebajodelaperneradelpantalón.

—Elfiadorhadichoqueeslacuartavezendossemanasquelospolisteagarrabanporpelearte,asíquealfinalhantenidoquepresentarcargos.

—¿Esohadicho?ABillHoustonlecabreó,leirritómásalládelorazonable,elqueJamesrepresentaraelpapelde

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viejo soldado, como si hubiera estado explorando alguna misteriosa región y allí lo hubierantorturado.

—¿Quieresotrahamburguesa?—Yaestoybien.—¿Enserio?¿Estásbien?—Sí.—Laspruebasindicanlocontrario.

***

Eldíadespuésdesalirdelacárcel,Jamesfueaunpequeñodespachodondeunhombregordoytristele ayudó a rellenar unos impresos.Ledijoque los cheques empezarían a llegar al cabode cuatrosemanasamenosquetodofueramuymal.Elhombrelehablódeunsitioenelcentrodondepodíandarlemásprestaciones,yJamesfueaecharunvistazo,peroqueríanquehicieracolayrellenaramásimpresosestúpidos.

DurantevariosdíasselepermitióalojarseenunalberguedelEastSide,enlacalleVanBuren,lacalledelosforajidosylasputas,atreintamanzanasdedondehabíavividosumadreantesdequeélsemarcharaalSudesteAsiático.Talveztodavíavivieraallí.

Por lasmañanasechabaaandarhaciaelnorte, el suroel este,nuncaaloeste,ycasinunca sedetenía.Aloestehabíafábricasyalmacenes.Enotrasdireccioneslaciudaddabapasoaextensionesdesuburbios,desiertovacíoogranjasirrigadasporcanales.Estabaempezandoelveranodeldesiertoy hacía calor, pero calor seco. Él llevaba sombrero de vaquero de paja, mantenía el sol todo eltiempoasuespaldaysededicabaapediraguaenlosrestaurantes.Cuandoteníaelsoljustoencima,dabamediavueltayseibaendireccióncontraria.Sololamitaddeélestabaenchufada.Elrestoestabaaoscuras.Notabacómosussensoressemorían.

NosepusoencontactoconStevie.Ellafueaverlojustoantesdequesemarcharadefinitivamentedel albergue y salieron juntos de copas, pero él se dedicó a despotricar contra ella con tantainsistenciaenlaAcesTavernqueelcamarerolegritóqueselargara,ySteviesequedó,diciendoqueya había visto lo que él quería enseñarle y que había captado el mensaje y que se negaba a ir aninguna parte con un hombre que recompensaba la amabilidad de ella con palabrotas e insultos.Mientraselcamarero losacabaa la fuerzadel local, Jamesmiróatrásy lavio llorar,meciéndosebajo la luz de la máquina de discos. Treinta minutos más tarde, Stevie lo encontró delante delmanicomioestataldelacalleVeinticuatro,mirandoatravésdelosbarrotesdelaverjalosampliosjardines del interior, que bajo la luz de las lámparas de arco voltaico se veían uniformementeplateadosymágicos.Ellayahabíaterminadodellorar.Ledijoquenopodíadejardequererlo.Éllejuróqueencontraríatrabajo.

Habíavueltodelaguerraconapenascuatrocientosdólaresenmetálico.AlquilóunapartamentoenunaespeciedeedificiodecontrachapadoquesellamabaSuitesRobRoyysecompróunaHarleyen muchas piezas que empezó a ensamblar en la sala de estar sabiendo que nunca la terminaría.Odiaba a la vecinadedelante, una lesbianamachorraque siempredecíapalabrotas.Senotabaquehabía sido sexy pero que siempre había odiado a los hombres. James no sabía qué hacer. ¿Quéqueríanaquellasbuenasalmasquehicieras?Lamayoríadelastardesseibaaunbarquehabíaenlamisma calle a pocasmanzanas y donde casi siempre uno se podíameter en una pelea, o bien se

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dedicaba a beber oporto en vaso de plástico en sitios llenos de viejos alcohólicos hechos polvo.Esperóaqueempezaranallegarsuscheques.Ycuandoempezaron,secompróunrevólverColtdel45,unapistoladeseistirosdeverdad.Estababastantesegurodequeacabaríapegándoleuntiroalamujerquevivíadelante,perosentíaquenohabíapoderhumanoenlaTierraquelopudieraimpedir.

AlcabodeunmesenlasSuitesRobRoy,setrasladóalosapartamentosMajesticPalmsdelacalleTreintaydos,amediamanzanaporencimadeVanBuren.Todaslasmañanassesentabajuntoa laventana sin persianas desnudo, sacudiendo las rodillas, y contemplaba a un hombre negrotremendamentegordoyvestidoconunacamisetaparecidaaunacarpadecircoquecruzabalacalleprocedentededondefueraquevivíayabríaelCircleKdelaesquina.

Jamespaseabaporelvecindario,pasabafrentealasputasperezosasquehabíaenlosbancosdelasparadasdeautobús,seabríapasoacodazosporentrelasviejasbrujasqueavanzabandandopasosminúsculosporloscrucesyobservabaalasmujeresmexicanasconsuszapatosdetacónaltoysusmallasajustadasdecolorrosa,queparecíanputasperonoloeran.

Se sentó en una parada de autobús.Dio una calada a unKool.Escupió entre sus pies.Con losdedossosteníaelcuellodeunamediapintadevodkaPopov,conlacabezagachabajolairrelevanciaaplastantedeaquellosmillonesdemonstruosysusjuegos.

Un tipomayor que él quehabía sentado a su lado conunperiódico abierto sobre las rodillas,leyendo bajo la intensa luz del sol, empezó a maldecir a la gente que desautorizaba la campañamilitarenVietnam.

—Esoschavalesestánhaciendolocorrecto.Sonnuestroschavales.Estánhaciendolocorrecto—dijo.A James le apeteció bastante un cigarrillo, y así lo dijo—.No fumo—dijo el hombre—.Nisiquierabebocafé.Mecriaroncomomormón.Sí,señor.Mecriaroncomomormón.Peroyanocreoenello.¿Ysabeporqué?Porqueesfalso.

Jamesrepitióqueleapetecíauncigarrilloyelhombreselevantóysefue.Acontinuaciónvinounperroysedetuvoamirarlo,yJamesledijo:

—Menudacaratienes,colega.—Lerascólasorejasyledijo—:Sí,colega,menudacaratienes.Unanocheen laAcesTavernseencontróporcasualidadconsuhermanomayorBillyconun

viejo amigo de Bill, Pat Patterson. Patterson acababa de salir de la Prisión Estatal de Arizona enFlorence,queeradondelosdossehabíanconocido.Eraunjovenesbeltoydeespaldarectaqueteníapinta de haber aterrizado allí intacto procedente de los años cincuenta del rockabilly, con peinadoestiloElvis,lacamisaremangadaporencimadelostrícepsyelcuellotambiénsubido.

Billleexplicóunpococómoeralacárcel.—Tútienesalostuyosyellostienenalossuyos,dependiendodelcolordetupiel.Nosetratade

lo que está bien omal. Es solo quién es quién, quién es la gente que está contigo.Y tú les debesrespeto.

—Yasécómova.—Yaséquesabescómova.Estáclaro.Hastenidoexperienciasaambosladosdelapistola.—Esonohapasadonunca.—Loquequierodecir…debesdehabertenidomuchasexperiencias.—Nohapasadonunca.Nohapasadonunca.BillJuniorlediolavueltaasuvasoconlasmanosyfruncióelceño.—Me molesta un poco cómo actúas, James.—Carraspeó, se aseguró de que el camarero no

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estuvieramirandoyescupióenel suelo—.Escomo:Jameshavueltoalmundo.Yelmundoesuncapullo integral, así que James quieremearse en su cara. ¿Cuánto tiempo vas a seguir siendo ungilipollas?

—Hastaquealguienmeconvenzaparacambiar.Billvaciósuvaso,selevantóysalióporlapuerta.PattersonledijoaJames:—Aquívaunapreguntaparati:¿estesitiosellamaAcesTavernporlosasesdelabaraja?¿Ose

llamaAcesTavernporqueeldueñoesunpolloquesellamaAce?—Señalóalacamareraydijo—:Esapequeñajovencitaestácomountren.

Jamessemostródeacuerdoenqueerapequeña,perohacíamuchotiempoquehabíadejadodeser una jovencita.La carnededebajode los brazos se le bamboleabamientrasmetía las jarras decervezaenelfregadero,lessacudíalasgotasylascolocabasobreunatoalla.Jamesleseñalóaqueldetalle.

—Noleestoymirandolosbrazos—dijoPatterson—.Estoymirandocómomeneaelculo.—MejorseráquevayaaverquéhaceJunior.—Alamierdaconesechaval.Nolepasaránada.Jamessalióalaacera,peroBillsehabíaido.Solohabíaunjovenfrentealaentradamolestandoa

lostranseúntesquepasabanytratandodevenderlacamisaquellevabapuesta.JamesvolvióaentrarenelAcesyregresóconPatterson,quienlepreguntósiteníaunapistola,aloqueJamescontestóquesí.

—¿TúnoestabasconlosLURPenVietnam?Jamesdijoquesí.Pattersonteníaintenciónderobaruncasinoqueunostiposteníanenuncaserónsolitariocercade

GilaBend y le preguntó a James si le apetecía ganar un poco de dinero. Patterson le explicó queasaltaruncasinoenmediodeldesiertoydenocheseparecíaunpocoaestarenlaguerra.

—Puesvale—dijoJames.

***

Leshabíandichoqueelpacienteeraunniño,peroeraunadultodetreintaytantos,probablementedelVietcong.Llegadoaquelpunto, loshombresque loshabían traídohastaelpaciente lodescribieroncomo un granjero que había desenterrado una carga de artillería sin explotar. A juzgar por lanaturalezade susheridas—unbrazomutilado, el resto aparentemente a salvo—,parecíaprobableque hubiera intentado recuperar el artefacto para devolvérselo a sus fabricantes americanos. LaformaenqueelpacientehubierarecibidosusheridasleresultabaindiferentealdoctorMainichikoh,y estaba claro que aKathy tampoco le importaba. En compañía del doctor, y a bordo de suLandRover,ibaporlasaldeasconmuchamáslibertadquesihubieraesperadoairconcualquieradelosequiposdeWorldChildren’sServices,ypagabasutransporteayudandoencalidaddeenfermera.Enlas aldeas, el doctorMainichikoh era conocido como «doctorMai», lo cual, con cierta inflexiónascendente, podía querer decir «médico americano», y hoy esto había generado cierta confusión:Kathy,queeraclaramentelaanglosajona,fuetomadaporladoctora,ylosaldeanospensaronqueelhombrecillo japonés que la acompañaba era su enfermero.Mai no hizo nada para sacarlos de suerrormásquetomarelcontroldelasituaciónydarórdenes.Aellalegustabatrabajarconél.Eraun

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hombrellenoderecursos—locualeranecesario,dadalafaltaderecursosgeneral—,yalegrehastaelpuntodeparecerbastanteinsensiblealoshorrores.EllateníaentendidoqueeraricoyqueveníadeunafamiliadeimportadoresyexportadoresdeTokio.NosabíasiteníanalgúnnegocioenVietnam.

Losdoshombresqueloshabíanconducidohastaallíhabíanestablecidounaespeciedetendereteprotegido por una lona. Tenían al paciente acostado sobre unamesa ensangrentada de tablones yredondeles de madera y le dijeron a Kathy que estaban listos para esterilizar el instrumental deinmediato. Cuando el doctor Mai empezó su examen, ellos comenzaron a entender cuál era suverdaderopapelylepreguntaronsipodíanencenderyaelfuego.Éllesdijoquesí,enseguida.

La amputación había sido ejecutada de forma bastante eficaz por la misma herida, pero elantebrazoseguíaconectadomedianteuntrozodehueso,músculoycarnepordebajodelcodo.Enundía tan caluroso y sin instrumentos para calibrar en qué punto del brazo había empezado ladeficiencia arterial, determinar qué cortar y qué dejar era simple materia de conjeturas, pero eldoctorMaiteníaunagranfeensucapacidadparajuzgarlaextensióndeltejidomuerto.

—Puede conservar el codo —dijo—. Es un explosivo pequeño. Si fuera una mina de tierra,bueno,esmejorquitarelmiembroentero,¿verdad?Porquesevaamorir.

Ellapodríahaberargumentadoquedadoqueaquellaeralaúnicaoportunidadqueibaatenerelpacientedeseroperado,eramejorempezarmásarribaytalvezhubieraquecortarleelbrazoentero,pero el doctorMai no se estaba dirigiendo a ella. Tenía la costumbre de hablar consigomismo,siempreeninglés.

—Estehombreesbastantefuerte—dijo—.Delosbuenos.Nisiquieraestáenestadodeshock.Elpacientemirabafijamentehaciaarribaendirecciónalalonaquelosprotegíadelsolyparecía

decididoanoperderelconocimiento.Unadocenaaproximadadedesgarrosdemetrallaensucaraypechoya lehabíansidoextraídosysuturadosconhilodecoser.Unodeellos,enelpómulo,no lehabíasacadoelojopormuypoco.

Solamenteteníanxilocaína,peroelmédicoefectuójovialmenteunbloqueodelplexobraquialyse puso a trabajar mientras Kathy le secaba el sudor de la cara con un pañuelo para el peloesterilizadoconalcoholdefriegas.

Losdoscamaradasdelpacientesequedaronencuclillasjuntoaunárbolcercano,listosparairabuscarcualquiercosaquesenecesitara,comosituvieranalgoqueirabuscar.Lafamiliadelhombrepermanecióenunadelaschozasparanoestorbar,todosaexcepcióndeunamamasansindientesquellevóacabounritualdesignificadoprivadoaescasosmetrosdedistancia,bajoelsoldejusticia,enmediodelhumodelfuegodecarbónydelvapordelaolladondehervíanlosinstrumentos:unbailedevacilacionesominosasy repentinossaltosyarabescos.EldoctorMaipermitióaqueldesplieguesinhacercomentarioalguno,yKathyloagradecióporserunbuenpresagioparaelpaciente.Laideadequeentrelosmaltrechos,loslocos,losqueponíanlosojosdelrevés,losquesacabanespumaporlaboca,entre los raros, losquefarfullaban, losquesearrastrabanysoltabanrisotadas,apareceríaalgúndíaelbenditopobredeespíritu,elvisionarioquemado,elvagabundosagrado…ellasiemprehabíaacariciadoaquellaidearomántica.

EldoctorMaisacósumachetedelcaldero,leechóporencimamediolitrodealcoholydijo:—Banzai.Kathyserioyretirólapielendirecciónalcodo.—Enlos tiemposde laguerracivildeustedes—dijoeldoctorMai,haciendoelcorte inicialy

empezando a trabajar en una circunferencia a través de la primera capa de carne y hacia el tejido

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fascialdemásadentro—,laamputacióneraunasuntohorripilante.Hoypodemosseroptimistas.—¿Nuestraguerracivil?—dijoella—.¿Serefierealaguerracivilamericana?—Sí.—YosoydeCanadá—dijoella—.Soycanadiense.—Yaveo.EntrelaUniónylosConfederados.—Loscanadiensesnotomaronparteenaquellaguerra.—Yaveo…Canadá.—YasabeustedquesoydeCanadá.—Sí.PeroyopensabaqueCanadáerapartedeEstadosUnidos.—Estamosalnortedeellos.—Amenudoeselnortecontraelsur.Casinuncahayguerrascivilesentreelesteyeloeste.Ella soltó la piel y cuando esta se retrajo el doctorMai, presionando el dorso de la hoja del

cuchilloconlapalmadelamanoymeneandoelmangohaciaarribayhaciaabajo,atravesóeltejidofascial y la primera capa demúsculo, y amedida que cada capa se iba retrayendo él empezaba acortarlasiguiente.Cadavezqueencontrabaunvasosanguíneo,Kathylocerrabaconhilo.Conlasmanosellaibaaplicandopresiónascendentesobreelmuñóndelmúsculoproximal.Despuésdequese retrajeran losmúsculosprofundoselmédicocogiósusierradelcalderoyprocedióacortarelhuesomientrasellairrigabalazonaconunajeringaenormedesoluciónsalina.

Elmédicotiróelbrazoamputadodelamesaalatierradeentresuspies,cogióelpañueloysesecó lacara,mientrasunoporunoKathy tirabade losnerviosprincipalesy loscortaba tanarribacomopodíallegar.Unadelasarteriastodavíasangraba,yellalavolvióaatar.

KathylimpióyvolvióaguardarelinstrumentalmientraseldoctorMaicogíaalamujerlocadelamanoybailabaconellaunapequeñajiga.Habíahechounbuenmuñóncóncavo—teníaunatécnicaexcelenteyungenuinosextosentidomédico—,peroKathysepreguntósitendríanquehaberdejadotantobrazo.Envietnamitafluido,elmédicolesdioinstruccionesaloscompañerosdelpacienteparaquecuidarandelmuñónyevitaranlaretraccióndelapielusandocintaadhesivayunavendaAce.Élnoibaequipadoparaenyesarloquequedabadelbrazoniparafabricarunatablillaescalonadayunamedia y el retractor de alambrey todo lo demás, perono importaba.Una solamirada al pacientebastabaparaverqueibaasobrevivir.Kathyteníasieteampollitasdequincemiligramosdemorfinaensukitmédicoyselasdejótodas,porqueseveíaqueaquelhombreibaasobrevivir.

EldoctorMaifuehastaelLandRover,cogiósucantimploradelasientodelantero,diountragolargoyselallevóaKathy.Ellarechazólaoferta.

—Noteveobeberbastanteagua,Kathy.—Bebomucha.—Estásmuyadaptadaalostrópicos.¿Cuántotiempotardasteenadaptarte?—VivíenlasFilipinasunpardeañosantesdeveniraquí.—Llevasaquícincoaños,¿verdad?—Cincoaños.Casi.—Sí.¿Ycuántotevasaquedar?—Hastaqueseacabe.

***

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Unamañanasoleadadenoviembre,solamentedossemanasantesdevolveralacárcel,JamessecasóconStevieenlosjuzgados.

Lafamiliadeélvinoamirar.Conunvestidodeiralaiglesiaprovistodehombreras,sumadreteníatodalapintadeserdeOklahoma.ElhermanoBillllevabaunacazadorablancaporencimadeunacamisetablanca,ymientraslafamiliaenterapermanecíadepiedelantedelmagistradoélsepusoasudarcomosiloestuvieranjuzgando,mientrasqueeljovenBurrissededicabaaponerunasonrisaburlonayasoltarrisitascomosifueraunaniña,queesloqueparecía,conelpelolargocasihastaloshombros.

Los padres de Stevie creían que su hija se estaba casando con un criminal. Al principioprometieronqueasistirían,peroalfinalnofueron.

Mientras los recién casados salían del juzgado, el novio pudo ver Los Doses, la parte de laavenidaDos donde los vagabundos se revolcaban en las alcantarillas, ymás allá deLosDoses elvecindariodondeélvivía.

DespuéshicieronunabarbacoaabasedepequeñosfiletesdesolomilloenSouthMountainPark.BillJuniorsepusocomounacuba,yBurris,quepuedequetuvieracatorceañosperonoaparentabamásdeonce, estuvo fumandocigarrillosabiertamente.Sumadre sequedóenun rincón, listaparapredicaracualquieraquequisieraescuchar,obienparaensayarlastragediasfamiliares.

Labodanotrajomuchoscambios.JamessiguióviviendoensuapartamentoySteviesequedóenel de sus padres mientras James lidiaba con los cargos de asalto con agravante y robo a manoarmada.Sehabíadeclaradoinocenteyhabíapedidofianza,peroprontoapareceríadenuevofrentealjuez y cambiaría su historia y recibiría la sentencia. No había mucha duda acerca de lo que leesperaba.Peseatodo,suabogadoasignadoporeltribunalinsistióenllevarelprocesoportodossuspasosafindeconseguirunmejortratoconelfiscal.AJamesyalrockabillyPatPattersonleshabíanido bien las cosas al principio, pero después se les había acabado la suerte y la policía los habíaarrestado sin incidentes delante de una taberna, aproximadamente una hora después de su cuartoatraco.Patterson,queestabaconlacondicional,habíaregresadodirectamenteaFlorence.

Alsersuprimerdelitograve,ygraciasasuhistorialbélico,Jamespodíaesperarunacondenadetresañoscomomáximo,queprobablementeacabaríasiendodedos.Stevielejuróqueloesperaría.JamespodríahaberseescapadoaMéxico,peroestabacansado,muycansado.

Acuatrodíasdelasentencia,acuatrodíasdelacomidadelacárcel,despuésdediezdíasdecasadoysin haber probado todavía ni una sola comida preparada por sumujer, James se fue en busca dedesayuno a la avenidaSouthCentral. Se sentó enuna cafetería enmediode unpuñadode clientesdementes, un hombre que hacía muecas y otro que decía palabrotas, y se pidió un huevo. Lapropietariaregordetayprobablementechinaestabadepiejuntoalacajaregistradoradesayunando,comiéndose su avena en un tazón para el café. Lamujer arrancómedia rebanada de pan con losdientesylamasticórechinandoyparloteandoconlabocaabiertaenloqueelladebíadepensarqueerainglés,aunqueJamesnoentendióniunapalabra:teníaaquellamismaformanasalygimoteantedehablar.DeprontoélrecordócongrannitidezeloloryelsabordeNhaTrang.

Lodistrajoelhombrequeocupabaelreservadodealladodesumesa,queestabasentadodeladoyconlaspiernasextendidasatravésdelpasillo.

—Estoytodocolocadodeanfetas.Sí—dijoenvozmuybaja—.Soyundiablilloanfetamínico.—Noestoydehumorparaqueesomeresulteinteresante—dijoJames.

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—¿Sabedóndeestabayohacesietehorasyveinteminutos?Estabaencasa.¿Sabedóndeestámicasa? En SanDiego. ¿Sabe lo que estaba haciendo yo?De pie delante de un espejo, un espejo decuerpoentero,¿vale?,enpelotapicada,conunapistoladeltrescientoscincuentaysieteenestamano,apuntándomealacabezatalqueasí.Meibaapegaruntiro.¿Mecree?

Jamesdejóeltenedorenlamesa.—Sí.Tuveunpequeñoproblemaconeljuego.¿Pequeño?Joder.Sellevóhastalaúltimaputacosa

queyotenía.Mimujer.Losniños.Lacasa.Estoyenbancarrota.Ellasequedólacasa.Yunmillóndeañosdepagosdelahipoteca.Alamierda.Estabalistoparavolarmelossesoseneldormitoriodemihermana.Ya lo creo. Joder, sí. Pero no quería quemi hermana llegara a casa y se encontrara unespectáculo semejante.O tal vez no tenía cojones para pegarmeun tiro, admitámoslo.Así quemepuseapensarquemehacíafaltaunamaneradeterminarconestapelide terrorquefuerarápidaeindolorayde talmaneraquenadiesupieraqueerayoelquemehabíamatado.Asíquemevestíydecidílamaneraenquemequeríair,memeteríaenaquelpequeñotrastoextranjero,aquelpequeñoescarabajoVolkswagen, el cochecito, que era el demi hermana, no elmío. Así que lo cogí y loarranquéypuserumboalesteporlaInterestatalOcho,amigomío,saliendodeSanDiego,ypuselosfaros largos y me dije que a la primera camioneta que me hiciera una señal con los faros meestamparíacontraelladefrente,mequitaríadeenmedioestilokamikaze.Ytuvelasdosmanosenelvolantedurantetodoeltiempo,colega,nolequitélasmanosdeencimamásquepararascarmelaspelotasoparaquitarleel tapónaunfrascodeanfetasyzamparmeunparmás.Y lediréunacosa.Durante todo ese trayecto, casi seiscientos kilómetros, nadiemehizoninguna señal con los faros,señor,niunasolapersona,noseprodujoniunasolaincidenciadealguienquemehicieraunaseñalcon las luces.Locualesunmilagro.Esunmilagroqueyoestéaquísentadoyvivo.Nosé loquequieredecir.Peroestoyvivo.Esloúnicoquesé.Ynosénadamásenelmundosalvoeso.Queestoyvivo.

Noparecíacolocadoconningunaclasedeanfetas.Parecíamuytranquiloysequedómuyquieto,con la pierna derecha cruzada sobre la rodilla izquierda y lasmanos unidas de forma distendidasobreelmuslo.Tenía losojos rojos,pero rezumaban la luzdelamor.Sepidióuna tostadadepanblanco sin mantequilla y fue arrancando trocitos de la misma y metiéndoselos entre los labios.Encendióunacerillayluegouncigarrilloytiróellibrillodecerillassobreelplato.

—Teechasteunacarrerasuicida—dijoJames.—Sí.Esohice.—Yoheestadoenunpardeesas.—Sí.—Eh.¿Todavíatieneslapistola?¿Quieresquetedispare?Alhombreseloveíatodopulcroconunacazadoradealgoparecidoaltweedporencimadeun

jersey fino de color beige, pantalones de pijamade color azul claro y unas endebles zapatillas deestarporcasadetela.Diounacaladameditabundaasucigarrillo.

—Mehedejadolapistolaencasa—dijo.

***

Bill Houston se llevó a su hermano James para tener una charla con él el día antes de su últimacomparecenciaeneljuzgado.Loinvitóaunacafeteríaenvezdeaunataberna.AJamesleconvenía

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entenderqueelasuntoeraserio.—Mira,nuncasesabe.Loúnicoqueséesqueteconvieneevitarlamáximaseguridad,porqueallí

dentrosiemprehayalguienquedaalgunapuñaladaysiempreteacabanencerrando.Asíquemientraste tenganesperandoparaclasificarte,habla todoel tiempode tueducación.Acualquierabogadoogente parecida que hable contigo, tú le dices «educación, educación». Que quieres terminar elinstituto,quequieresaprenderunoficio.Túhabladeesaclasedecosasy tepondránenseguridadmedia.Mediaesloqueteconviene.Esmásrelajado.Lagentenoestátanloca.Tepasasenelpatiotodoeltiempoquequieras.Estábien.Créeme,noteconvienelamáxima.

—¿Quiénhayallí?—¿Dónde?¿Enmedia?—EnFlorence.Dondesea,mediaomáxima.—Bueno,muchagente.—¿Elviejoestá?¿Tupadre?—Noesmipadre.Estupadre.—Elpadredequiensea.¿Estáahí?—Sí.Estáenmáxima.No.Creoquesalió.—¿Estásdeltodosegurodeeso?—Sí.Creoquesalió.Oporlomenos,elladejódevisitarlo.—¿Ellayanova?—Desdequeyosalíno.Porloquesé.Asíquesumaridodebedeestarenalgunaparte.—¿Dónde?—Nolosé.Enalgunaotraparte.Billsedespidiódesuhermanopequeñoconunapretóndemanos,nomuyconvencidodehaber

dado a entender sumensaje, y se dirigió al centro para ver si había algo en la oficina de trabajotemporal,obienparaholgazanearporelparque.Habíallegadoelotoñodeldesierto,laépocaenquese podaban los jardines.Vio a unos hombres podando los olivos de las avenidas conmotosierraschirriantesysintióquetodoestabateniendolugardentrodeél.

Deseótenerunamotocicleta.Sepreguntósiseríadifícilrobaruna.Sepaseóenbuscadeunamotopordelantedelas tabernasyluegopordentrodelasmismasenbuscadelahorafelizyoportodeoferta. Por calidad, el oporto no era el vino favorito de nadie, pero la gente forzada a pensar enaquellas cosas, como él, había calculado que era lo que ofrecía mayor gradación por el menorprecio.

—Espesoydulzón—ledijounamujerdemedianaedad,brindandoconairetriste—.¡Nousted!—dijoella—.Merefieroaloporto.Esdulce.Yustedpareceamargo.Yotambiénlosoy.

Elproblemadelamujer,lecontó,eraquesuyernohabíamuertoenVietnam.Houstonledijoqueteníaunhermanoqueacababadevolverdeallí.

—No.¿Enserio?Venga—dijoella—.Letengoquepresentaraalguien.Y lo llevó de la mano a un reservado para que conociera a su hija, que era viuda de guerra

despuésdeunlargoañodeseparacióndelchicoconelquesehabíacasadosolounasemanaantesdequeélseembarcara.Lohabíanmatadohaciaelfinaldesuservicio.Houstonestuvomirandofotosdeboda.Noeraprecisamentesuideadeunafiesta.Lasmujeresloinvitaronaunaronda.Lajovenviudase bebió demasiadas cervezas, pero en vez de derrumbarse y llorar contó que había llorado en elfuneral de su jovenmarido, que se alegraba de haberlo hecho, que había tenidomiedo de no ser

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capazdellorar.Aquellosdiezúltimosdíasdespuésdequelellegaralanoticialehabíanproducidociertoestadodealivio.Ahorayanotendríaquedarle labienvenidaacasaydedicarseaconocerlootravez.Enausenciadesumarido,ellahabíacambiadomucho.Nohabíasabidomuybienquéhaceralrespecto.Enelfunerallehabíanentregadounabanderadobladaenformadetriángulo.

—Nomejodas.¿Unabandera?Ah,quieresdecirunabanderaamericana.UnaOldGlory.Houstonteníalapiernapegadaatodoelmuslodeella.—Bueno,nolallamanOldGlory,¿verdad?Tieneotronombre.—Tieneotronombre,creo.Sí.—LasBarrasyEstrellasoalgoasí.—Mihermanopequeñoestuvoallí.Eninfantería.SeganóunCorazónPúrpura.—¿Enserio?¿ElCorazónPúrpura?—Esomismo.—¿Yquélepasó?—Quepisóunatrampaenuntúnel.Unaestacadebambú.Osetropezóconellaoalgoparecido.—Uau.Caray.—Podríahabersidopeor.EsoscabroncetesdelVietcongponenunas trampaschunguísimas.La

suyaenrealidadnoeramásqueunaastilladebambú.Perofueunaherida.YesovaleunCorazónPúrpura.

—Caray,pues.¿Eraunaratatunelera?—Noséloqueera.TerminóconlosLURP.Tío,yojugabaasujetarlocontraelsueloysoltarle

escupitajosenlacara.Yasabes,soltarlababayvolverlaasorber.—¡Ajj!—dijeronlasdosmujeresalmismotiempo.—AsíescomolosmarinerostratamosalosLURP.—¡Ajj!—Sí.Tremendo,¿verdad?—Mimaridosedivorciódemí—dijolamadre—.Lasensaciónescomosisehubieramuerto.

Salvoquenotedanningunabanderayqueyotodavíapiensotodoslosdíasenmatarlo.—¿Estupadredequienestáhablando?—lepreguntóHoustonalachica.—Esodicenlosmédicos—dijoella.Tanprontocomosumadreselevantóparavisitarelbaño,Houstondijo:—¿Quieresiraunmoteldemalamuerteyverunpocolateleoalgo?—Sitútieneslapasta,cariño,yotengotiempo.—Miraesto.¿Vesloquees?—EsmediodólardeKennedy.—Esomismo,losahorrosdemivida.Porotroscincuentacéntimosmelometoporelculo.Me

rompounabotellacontralacabeza.—Yotengolapasta,cariño.Medanunapólizadeguerra.La chica se le acercó y le tocó suavemente el pelo del pecho con los dedos. Las noches del

desierto se ponían amenos de diez grados, peroBillHouston no llevaba nada por debajo de unachaquetadecueronegra.SuapodoenlascalleseraBillelCuero.Elrestodesuroperoeranvaquerosybotasmaltrechosporlosrasguñosdelavida.

—Mejorencuentralasalidaantesdequevuelvamimadre—dijolachica.Cuandoabrió losojospor lamañana, resultóqueeraellaquienhabíaencontrado la salidadel

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motel en algún momento previo. Un hombre provisto de una misión se habría levantado antes yhabríahurgadoenelbolsodeella.Yencambioélsehabíaacurrucadoenunossueñosquenopodíarecordar.

Había vivido casi veinticinco años, sus apuros los había coloreado mentalmente comoaventurillasdejuventud,quealgúndíaseríanreemplazadasporunperíododeintensamejoradesímismo,seguidadelogrosydesahogo.Peroaquellamañanaenconcretosesentíacomounhombrealque hubieran tirado por la borda lejos de cualquier puerto, y que solamente se mantenía a floteporquesí,esperandoaqueseleagotaranlasfuerzas.

¿Cuándosedirigiríaalaorilla?¿Cuándorecibiríaeldondeladesesperación?Sequedóbajolasmantasenlahabitaciónheladayconoloradesinfectantehastaqueelencargadolellamóalapuerta.Pidiódiezminutos,seduchóyregresóalacamaaesperarqueelhombrevolvieraallamarparaquedejaraelcuarto.

***

Jamesteníauncompañerodehabitación,otroveterano,unmoterollamadoFred,ylaHarleydeFredocupaba lamayorpartede la salade estar.Undía James sedio cuentadequenohabíavisto a suamigodesdehacíatiempo,talvezhacíayaunmesohastados,yafindeinvocarlodevuelta,siesqueseguíavivo,JamesperpetróelsacrilegiomísticodemontarseenlaHarleydeFredydarlealallavedeencendido.Trespatadasylamotoarrancóentreexplosionesysepusoagruñiryatemblardebajodeél.Soltóelembrague, lamotosaliódisparadacontra laparedyseencontróasímismotiradodebajodelamismaenelsuelodelasaladeestar.Apenaspudolevantar lamáquinaélsolo:demasiada bebida y nada de ejercicio. Estaba hecho un desastre. No era de extrañar que perdieratantaspeleas.Pero legustabaperder, legustabaaquella especiede letargopagadode símismodecuandoseencogíaenposiciónfetalyalguienledabapatadasenlacabezaylaespaldaylaspiernas,legustabaestartumbadoconlacaracubiertadesupropiasangremientrasoíavocesquegritaban:

—¡Basta!¡Yabasta!¡Loestásmatando!¡Loestásmatando!Porqueseequivocaban.Nuncanadiesehabíaacercadosiquieraamatarlo.

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1983

HaollevóelNewStraitsTimesalamesadelacocinayapagóelpequeñoventiladoreléctricoparaleer. Por lo queKim entendía, lo que lomolestaba no era el ruido del ventilador, sino el que lemovieralaspáginas.TodaslastardessumaridosesentabaallíenropainteriorconlaediciónmatinaldelNewStraitsTimesdeldoctorBourgoisytratabadeentenderlasnoticiaseninglés,ylosjuevesyviernestambiénconelAsiaweekdelmédico.¿Quésentidoteníaleertodoslosdíaselperiódicoenunsitioquenoera tupaís,pormuchoquevivierasenél?Aellano le importabaqueél la informarasobre acontecimientos variados, pero le tenía prohibido que le mencionara noticias de ningunaobscenacelebraciónmalaya.AKim la incomodaban las influencias islámicasque los rodeaban, elgimoteodelasmezquitasy lasceremoniaspúblicasdecircuncisióndepríncipesde treceaños.Sinembargo, aquel lugar le sentaba bien. Su vigor había regresado, como si le viniera de suadolescencia.EldoctorBourgois la tratabaconmedicinasgratuitasde suhospitalyademásKualaLumpur estaba lleno de herbolarios chinos que la mantenían bien de salud. Varios de ellos leprometían inmunidada todo.Ellano laquería.Sino tematabaunaenfermedad, temataba lamalasuerte.

Sumaridodejódeleerylevantólacaraparamirarla.Extendiólamanohaciasutazavacíaymiróel interior de la misma, como si fuera la repentina necesidad de examinarla lo que habíainterrumpidosulectura.

—¿Quépasa?—dijoKim.—Nada.—Algopasa.Nodigasquenoesnada.—AlguiendeSaigón.Ellasepusodetrásdeél.Élteníapartedelapáginacubiertaconlamanoyellaselaapartódeun

manotazoporencimadelhombro.—¿Elcanadiense?—Esamericano.—No.Dice«canadiense».Puedoleer«canadiense».Y«Benét».—Noescanadiense.Ynosellamaasí.Peromeacuerdodeél.Yoloconocí.—¿Dónde?¿AquíenKualaLumpur?—Ennuestropaís.—Entoncesnopiensesenello.

***

¿Quenopensaraenello?Perosípienso.Piensoenlasuerte…lapena…lagratitud…todomezcladoenunsoloveneno.Ynosotroslobebemos.

LasuerteyelsacrificioajenoloshabíanllevadoavivirallíenlosaposentosdeloscriadosdetrásdelacasadelmédicodeMarsella.Kimlavabalaropayavecesrecorríalacasadelmédicoquitandoelpolvo,talcomohabíahechotodasuvida,aunqueelmédicoteníaotrascriadasparaeso.YHaoerasuchófer.Llevabaalasniñasalaescuelaylastraía,ytambiénalasclasesdepianoydebaile.LasniñasibanalaEscuelaAmericanayhablabaninglésmuybien.Consuspadres,Haosecomunicabaen

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francés. El doctor Bourgois caminaba unas cuantas manzanas todos los días para ir y venir delhospitaldondetrabajabadeadministrador.Haollevabaasumujerdecompras,alclubdebridgeydelibrerías.Todoellograciasalasuerteyalsacrificiodeotros.Peroalgunosdeesosotrosnohabíanelegidosacrificarse.Eraélquienlohabíaelegidoporellos.Yahíaparecíalapena.Latrampaenquehabía metido a Trung Than era lo más vil que había hecho en su vida. Y sin embargo no habíaresultadomuydifícil.Losamericanoslohabíanpuestofácil.Elcrimenmáshorribledesuvida,¿yadóndehabíaconducido?LosamericanoshabíanmetidoaTrungenuncampodeprisionerosdelquehabía salido convertido enhéroede la causa, con casapropia enSaigóny carnet demiembrodelpartido. Ibanhistoriadoresaentrevistarlo.BienporTrung.Habíaesquivadoelviento.YSaigónsehabíaconvertidoenCiudadHoChiMinh.

Algunos de aquellos otros, sin embargo, habían elegido sacrificarse voluntariamente, con lafuerzadesuscorazones;yallíentrabalagratitud.Haciaelcoronel.Haciaelsoldadodeinfanteríaquehabía tirado su casco encima de la granada y luego se había tirado encima del casco.Y hacia losdemás americanos que los habían ayudado a escapar. Los americanos habían recordado, habíanmantenidosuspromesashaciaélytambiénhaciasupaís.Noesquehubieranfaltadoasupromesa.Simplementehabíanperdidolaguerra.

Ymañana, al día siguiente, tenía planeado decirle a Kim que le habían llegado noticias de susobrino Minh, a través de una familia vietnamita que regentaba un restaurante en Singapur,inmigrantes desde hacía mucho tiempo que habían creado una red mundial para establecerconexionesentreclanesdispersos.Minhhabíasobrevivido—¿quiénsabíaaquétribulacioneshabríasobrevivido?—yahoravivíacercadeBoston,Massachusetts.MinhhabíalocalizadoaunaseriedeparientesenTexasquesededicabanalapescaenelgolfodeMéxico,yaquienessepodíaconvencerparaqueayudaranasuprimoHaoyasumujerallegaraAmérica.Yahí,nuevamente,lasuerte.Élhabíaacertadoalelegirbando.¡Lasuertelesonreía!

Sumujerhabíaencendidoelgasyahoraelhervidortemblabasobreelfogón.Élnosehabíadadocuenta.Habíacreídoquetodavíalateníadetrás,examinandolacaradelperiódico.

Ellalellevólatetera.—¿Quédice?—Quetienemuchosproblemas.—¿Hayalgoquetúpuedashaceralrespecto?—No,yoloconocí,esoestodo.

8deenerode1983

QueridoEduardoAguinaldo:Puedequeyahayarecibidoustedunacartamía,peroencasodequeno:Me llamoWilliamBenét.Me llaman«Skip».Usted, dehecho,me llamaba«Skip». ¿Se acuerdapor casualidaddemí?Digamos

simplementequeyanosoylapersonaqueeraporentonces,ydejémosloasí.Pero¿seacuerdausteddemí?VivounabuenapartedeltiempoenCebúCity.Ovivía.Hacedosañosquenovoyporallí,másomenos.Porallímeconocencomo

«WilliamBenételcanadiense».TengofamiliaenCebúCity,mujeresposay treshijos.Noesunauniónlegal.¿Podríaustedhacersecargodeellos?Miesposase

llamaCoraNg.Suprima es propietaria de laBoutiqueNgquehay cercade losmuelles.Laprimapuede encontrarla parausted.Loúltimoqueséesqueyoerapropietariodedosedificiosenelvecindario.Coralepuededecircuáles.Ellaentiendeeldineroenmetálicomejorquelaspropiedadesinmuebles,asíquetalveztendríaustedlaamabilidaddellevaracabolaventaparaellayasegurarsedequelellegaeldinero.

Séquehapasadomucho tiempo,Eddie.Séque estoypidiendomucho, perono sé a quiénmáspedírselo.Todo elmundo aquienconozcosonmaleantescomoyo.

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Siestaeslasegundacartaquetellega,perdónameporponermeencontactocontigodosveces,peronoestoysegurodecuáltevaallegar.Amínomesuponeningúnproblemaescribirunacartademás,esoteloaseguro.Aquímepasoeltiempoescribiendocartasquenoséaquiéndirigir.Lascondicionessontolerables,telavasconuncubocomunitario,comesarrozcontrocitosdepescado,singusanos,elaguasabebastantebien.NoesexactamenteuncampodeprisionerosjaponésenBirmania.¿Teacuerdasdelcoronel?Comparadoconsushistoriasdel«40Kilo»,estelugarescomopasarlatardeenelClubdePolo.

Si te encuentras con alguno de nuestra pandilla de aquella época, quiero que les digas que el coronel nomurió, sino que sigueviviendoenmí.EncuantoalostiposlagentequedicequeélnuncamuriófísicamenteyquetodavíacorreporelSudesteAsiáticoconunadagaentrelosdientesyblandiendounalfanjeensangrentadooalgoasí,seequivocan.Esseguroquefalleció.Vasatenerquecreerenmipalabra.

Loscargosquehaycontramívanaprosperar.Daigualquedecidancolgarmeomantenermeencerrado,loqueestáclaroesquemevoyapasarunabuenatemporadasinandarsueltoporelSudesteAsiatico.Asíqueencárgatedemifamilia,¿quieres,viejoamigo?

Tuviejoamigo,

Skip(WilliamFrenchBenét)

¡MiraquemencionarelClubdePolo!Lacartahabía llegadoenunmontónqueEddiesehabíallevado al club para leer detenidamentemientras almorzaba: un aerograma escrito con letra muypequeñayconsellodeKualaLumpur,Malaisia.¿Cargos?¿Colgarlo?¿Porqué?Eddienohabíaoídoni una palabra al respecto. Tenía un amigo en elManila Times que tal vez pudiera encargarse deaquello.¿Yelcoronel,vivo?Élnuncahabíaoídoningúninformedelocontrario,nuncahabíaoídodecirqueelcoronelhubierafallecido.Noestabaencontactoconnadiedela«pandilla»deentonces,peroseguramentesehabríaenteradosielcoronelhubieramuerto.

ConcuántafrecuenciahabíapensandoenSkipSands.Yquépocohabíahechoalrespecto.Nuncahabíaintentadolocalizarlo.ÉlrelacionabaaSkipconelasesinatodeaquelsacerdoteenelríoPulangien1965,lopeorquehabíahechoensuvidacondiferencia,ylascircunstancias,laguerra,eldeberylasbuenasintenciones,nolomitigabanenabsoluto.

Eddie dejó la mesa que estaba ocupando bajo el toldo junto a la piscina y cruzó paseando elrestaurantehasta labolera.Elempleadoconocíasutalladezapatossinnecesidaddepreguntárselo.Había un par de chavales jugando en la pista central, y sin obtener muy buen resultado con losbolillosaquellos,queerandelamitaddeltamañodelosbolosnormales,yademáslabolanoteníaagujerosparalosdedos,cabíaenlamano,costabadedirigiryejercíapocoefectosobrelosbolos.Despuésdecadaturno,unniñobajabadelaoscuridaddeencimadelosboloscaídospararecogerlosy volverlos a colocar.De adolescente,Eddie había lanzado la bola con fuerza y había hecho salirdisparadoslosbolosentodasdireccionesconlaesperanzadedarleconunoenlacabezaaalgunodeaquellosniños,peroellosconocíaneljuegoysemanteníanadistancia.

Eddiesacóunapuntuacióndenoventaypocos,quenoestabamalparalosbolillos,ybebióSevenUpcongranadina igualque cuandoera chaval.Hacía seis semanas, despuésdeunaNocheviejadedescontrol,habíajuradodejarlabebida.

Subiólasescaleras,cruzóelvestíbulohastaelintercomunicador,llamóporelmismoaErnesto,queestabaenlacabañadeloschóferes,ysequedódelanteaesperarlo.LosterrenosyelcaminoparacochesdelClubdePolollevabandécadassincambiar,ymásalládelosterrenos,enlasubdivisióndelForbesPark,todoseguíaestandobien;sinembargo,másalládeForbesParkacechabaelcaos.Lacuarentenadehermososjardinesycasasseñorialesseapiñabaenelmediodelaciudadasfixiada.Élteníaplanesparamudarsedeallí.Erarico,podíairdondequisiera.Loúnicoquelefaltabaerasaberadónde.

Imogene no estaba en casa. Los niños ya debían de haber salido de la escuela, pero estarían

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visitandoaalguien,obienmetiéndoseenlíos.Se sentóa sumesaen sudespachodelpisodearriba, con la sillavueltahacia laventana,y se

dedicóasostenerunatazadecaféenlasmanosduranteunrato.Nolegustabaelcafé.Simplementelobebía.

—Hallegadounacarta.—¿Qué?Carlos,elsirviente.LaantañohermosaImogenepreferíaqueéldijerael«criado».Carlosledejóelsobreencimadelamesa.—VienedelseñorKingston.Lahatraídosuchóferconelcoche.Kingstoneraunamericanoquevivíacerca.VioquelacartaveníadelaPrisióndePudúyqueiba

dirigidaaEddie,alaatencióndelcónsulcanadienseenManila.Kingstonlehabíaadjuntadounanotaquedecía:«EstomelohadadoJohnLiese,delaembajadacanadiense.Creoqueesparati.Hank».Laconexión, supuso Eddie, era queKingston hacíamuchos negocios con Imperial Oil of Canada, ySandsseestabahaciendopasarporcanadiense.

18dediciembrede1982

QueridoEduardoAguinaldo:SeñorAguinaldo,mellamoWilliamBenét.EnlaactualidadestoyenlacárcelenKualaLumpur,esperandosentenciaporuncargo

detráficodearmas.Misabogadosmedicenquemeesperaseguramentelahorca.Señor Aguinaldo, voy a morir y me alegro. Lo imagino a usted frente al ventanal de un rascacielos por encima de la nube de

polución, contemplando cómo la ciudad de Manila flota como un sueño en medio del vapor y la humareda, seguramente con loscarrilloscolgantes,barrigón,untipoaquiennoconozcoyquetalveznoseacuerdademí.

Pero leescriboporqueesusted laúnicapersonaquepuedepasarleunmensajedemipartealEddieAguinaldodehacedieciochoaños,aaqueljovenmayorquecombatíaalosHukyquesalíaconmestizasricasyjóvenes,queinterpretóaHenryHigginsen«MyFairLady»—¿seacuerdausted?—yquefuelomejordetodalaobra.Notengonadaquecontarlesalosmoradoresdeestaépoca,alosherederos de nuestrasmentiras.Así que le escribo aEddieAguinaldo.Al amableEddieAguinaldo que semolestó enmandarme unavisodelpeligroenelqueyoyamehabíametidoenCaoQuyen,Vietnam,eneseácidoquedisuelveelalmayenquelostiposcomoyonossumergimosmientrasnostapábamoseducadamentelabocaconpañuelosynosquejábamosdelDDTydelosherbicidaspeseaquenuestrasalmasseestabandisolviendoenalgomuchomásvenenosoqueelveneno.

ConfíoenquelesorprendaausteddescubrirquevivíenCebúCitydesdeel73hastael81.DesdeentoncesnohepasadomuchotiempoenningúnsitiohastaquehaceunosmesesmedetuvieronenelvalledeBelum,enelladomalayodelafronteraconTailandia.Elpeorladoparaquetedetengan,créame.

Actualmente me encuentro en la Prisión de Pudú en Kuala Lumpur. Si sus viajes lo traen por casualidad cerca de aquí en lospróximosmeses, pase a saludar. Sería agradable ver una cara familiar. Ya puede ver usted que he ido a acabar mis días de formasombría.Hasidounavergüenza.Odeberíahaberlosido.Peronomesientoparticularmenteavergonzado.

Sinceramente,

SkipWilliamFrenchBenét

Volvióamirarlaprimeracarta:

Mellaman«Skip».Usted,dehecho,mellamaba«Skip».¿Seacuerdaporcasualidaddemí?Digamossimplementequeyanosoylapersonaqueeraporentonces,ydejémosloasí.Pero¿seacuerdausteddemí?

AquellaibadirigidaaEduardoAguinaldo,ForbesPark,Makati,Rizal,IslasFilipinas.Sinnúmerodepuertaninombrede calle, y sin embargo lohabía encontrado.Yélno se llamabaEduardo.SellamabaEdward.Amododebromaentreamigotes,SkipsolíallamarloEduardo.Skiptambiénsolíaburlarsedesímismo.Talvezbajolainfluencialatina,enaquellasislasquetomabansunombredeunreydeEspaña,EddiesolíallamarloZorro.Ciertamenteseacordabadeljovenamericanoconsupelo

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alrapeysubigote.Estabadepie juntoa laventanadesudespacho,contemplando lapiscina, lacasadebañosy la

acaciacuyasflorecillascaíantrazandoremolinossobrelahierba,ysepreguntósilaépocamásfelizde su vida no habría sido la adolescencia, cuando venía aquí aManila a pasar las vacaciones delInstitutoMilitardeBaguió,ysededicabaahacerelsalvajeenunaciudadsinlímites.Yamediadosdelaveintena,aquellaspatrullasporlaselvaencompañíadeSkipSands,elhombredelaCIA.

Suventanadabaaunaseriederascacielosdeaspectonomuyvoluminoso,envueltos, talcomoSkip decía que se imaginaba, en humo.Antaño los sitios conmejores vistas habían dominado loscamposdecarrizosaltosygruesos,loscaminossinasfaltarylosespaciosabiertosconunospocosedificiosaltos.ElteatrodeRizalhabíasidovisibledesdetreskilómetrosdedistancia.ÉlhabíavividotodalavidaenForbesPark.Enelbordedeuncampoenllamashabíaencontradoaunaperramuertacon cachorros recién nacidosmamandode sus tetillas, se había llevado a las bestiasminúsculas acasayhabíatratadodealimentarlasconunadministradordegotasparalosojos.Aqueleraelhombrequehabíasidoantaño.

HacíapocoselehabíaocurridounaideaparaunasátiramalvadadeMyFairLady:unapiezaenun solo acto, La noche de bodas de Liza Doolittle y Henry Higgins, con letras subidas de tonoadaptadasalasmelodíasfamiliaresde«TheStreetWhereYouLive»y«I’veGrownAccustomedtoHerFace».

Elproblemaeraqueenaquelambienteculturalunespectáculoasísería,igualqueLizaDoolittle(tal como él la imaginaba con aquel entretenimiento en mente), imposible de montar. Y por lasmismas razones: conformismo,mojigatería y cobardía femenina. Élmismo se sentía inapropiadoparaelespíritudelostiemposquecorrían.Loúnicoquepodíahacereramantenerseaparteyreírsede losde su clase, los emuladores educadosde losmodalesbritánicosy americanos: sumujer, susuegroelbuensenadorytodaaquellagente,unaligeracapaderefinamientoqueflotabasobreunaciénaga.

Y todos los demás, todos sus compatriotas filipinos: un montón de maníacos supersticiosos,buscadores de milagros, adoradores de estatuas, poseedores de estigmas sangrantes, flagelantesenloquecidosqueelViernesSantosepaseabanportodaslasprovinciasllenosdeheridasgoteantesyautoinfligidasmientras otros venían a azotarlos con palos o a aliviar sus cortes con agua lanzadadesdeviejaslatasdesopa,yunhombreenlaprovinciadeCotabatoquesehacíacrucificarcadaañoantesusvecinosllorososenunaiglesia.

SkipSandsenlahorca.Yyotambién.¿Porquédemoniosno?Ypensó:Soyuntíolamardemajo,yunhombreinfeliz.

***

AlacercarsealaescalinatadelAntiguoAltoTribunaldeKualaLumpureldíadelasentencia,JimmyStormlevantólavistahaciaelsegundopisoyvioaunaseriedemujeresconvestidoscoloridos—secretarias, tal vez—haciendounpicnic en elbalcón, almorzandocon sus cuencosde arroz enelregazo de sus vistosos vestidos. Mientras comían mantenían los cuencos muy cerca de la cara,conversabanyreían,ycasidabanlaimpresióndequeseestabancantandolasunasalasotras.

Sedetuvoenelúltimoescalón.Nosabíaadóndeir.Consultólaagendaimpresadeldíaquehabía

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dentrodeunavitrinadecristalmientrastirabaalsuelosucigarrilloyloaplastababajoelzapato,ypor fin atravesó las enormes puertas de madera del Antiguo Alto Tribunal: morisco en suarquitectura, colonial del trópico en sus espaciosos interiores, resonante y lleno de sombras,haciendoquelaspreocupacionesdequienesentrabanenélseenfriaranyparecieranpequeñas.

TomóasientoenelbancodeatrásdetododelJuzgadoNúmeroSiete,dondealaunadelatardeibana sentenciar aun tratantedearmaschino llamadoLau.Luego, a lasdos, alprisioneroque sehacíallamarWilliamFrenchBenét.

Unsoloextintoramarillo.Docetubosfluorescenteseneltecho.Unletreroenmalayooenloquefuera que aquella gente hablaba —«DI-LARANG MEROKOK»—, que él supuso que quería decir«Prohibidofumar».Onceventiladoreseléctricosinstaladosenlasparedes,porsifallabaelsistemaderefrigeracióncentral.Stormnocreíaqueaquellopasaranunca.EnKualaLumpurtodofuncionabaalaperfección.Lagenteparecíacompetenteyagradable.

Al frente del juzgado, un abogado con traje gris estaba sentado a la mesa del acusado yexaminabalaspruebascontrasucliente,haciendogirarelcilindrodeloqueparecíaserunaSmith&Wesson Detective Special, amartillando el percutor y apuntando, durante un momento vacío ymeditabundo,elbancoelevadodesdeelcual,deacuerdocon laagendaquehabíaen laentrada,elseñorjuezSheikDaudHadiPonusammyestabaapuntodepresidirlasala.

ConlaexcepcióndeStorm,elabogadoestabaasolasen lasala.Apuntócon lapistola lamesavacía del secretario del tribunal, y en concreto el letrero de la misma que decía «DI-LARANGMEROKOK».Apretóelgatilloyelpercutorchasqueó.

Seacabólapausadelalmuerzo.Stormoyópisadasquecruzabaneledificio.Sepusodepieyfuea una ventana desde la que veía la entrada para coches, por la cual estaba llegando ahora unafurgoneta azul procedente de la Prisión de Pudú. Las letras de su costado decían: «POLIS RAJA DIMALAYSIA». Entre lamedia docena de prisioneros chinos ymalayos no le costó distinguir al falsocanadiense Benét, con su cara que se veía blanca y pequeña a través del parabrisas trasero de lafurgoneta.

Stormvolvióasentarse.Paraentoncesyasehabíandiseminadounascuantaspersonasentrelosbancos, media docena de periodistas y un par de espectadores. El secretario del tribunal llegó,acompañadodeunguardiade seguridad.Y luegoel abogadodeBenét,Ahmed Ismail, entró en eltribunal.Parecíauntipoblandoyconsentido,conlosojosenormesyhúmedosdeunacriatura,ysededicóacolocarsuspapelesantesíalasombradelbancoimponentedeljuez.Unascortinasdecolorpúrpuramuysuntuosascubríanlaparedtraserayleconferíanaltribunalelairedeunviejoteatro,yporunmomentoIsmailtuvoaspectodeniñodeescuela,absurdamentevestidoconuntrajenegrodetrespiezas,queibaaverunapelícula.

UnaescalerasubíadesdeelpisoinferiordirectamentealbanquillodelosprisionerosenmediodelAntiguoAltoTribunal,demaneraquealsubirpor lasmismaselacusado,Lau,unchicochinoque se puso amirar a su alrededor con los ojos desorbitados, emergiódepronto enmediode sudilema.

Todos se pusieron de pie al entrar el señor juez Ponusammy, que se posicionó detrás de unenormemazoceremonialquehabíasobresumesa.Elprisioneroseinclinósobrelabarandilladesubanco,apoyándoseenellaconambasmanosesposadas.

Todoelmundosesentó.Los juicios se llevaban a cabo en inglés. El abogado del prisionero explicó que su cliente no

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hablabaaquelidiomayqueibaausarunintérprete.Alchicolohabíandeclaradoculpabledetraficarconarmasydeposeerunagrancantidaddemunición.Eljuezrepasólosalegatos,losprecedentesytodolodemás.Elhombrecilloquehacíadeintérpreteparaelprisioneroparecíanervioso,sentadoensusillademaderadetrásdelabogadoysacudiendoambasrodillasconviolencia.Cuandoeljuezsedirigióaélselevantódeunsalto,yelprisionerotambiénseincorporó,aunquenoselohabíapedidonadie.

Alenterarsedesudetención,lamadredelchicochinosehabíamatadotragandoinsecticida.—Élnolosabetodavía—ledijosuabogadoaljuezeninglés.Elchicochinoestabaallídepiesin

enterarsedenada.Su intérpretenose lo tradujo—.Losabrápronto,y talvez seaelmayorde suscastigos.

EljuezPonusammynomiróniunasolavezalprisionero.Losentencióaseisañosyseisazotesconlavarademimbre,ytresañosmásporlamunición.

Durantelapausa,mientrasesperabanaquesubieranalprisioneroBenét,StormfuealfrentedelasalayseacercóalabogadoIsmail.

—MellamoStorm.—SeñorStorm.¿Sí?—Sucliente,Benét.—¿Sí?—¿Vaasubir?—Sí,dentrodecincominutos.—¿Puededarleunmensajedemiparte?—Creoquepuedo,sí.—DígaleaBenétquesoycompletamentecapazdetodoloqueélteme.—¡PorelamordeDios,hombre!—¿Haoídoloquelehedicho?—Sí,señorStorm.Diceustedqueescapazdetodoloqueélteme.—Dígalequeiréalacárcelmañana.DígalequesoyelseñorStorm.—¿Esunametáfora?—Dígaselo.CuandoStormvolvió a encontrar su asiento en la parte de atrás, el abogado todavía lo estaba

mirando.Ismail se dio la vuelta cuando su clienteBenét subió la escalera que venía de abajo con pasos

pesados y lasmanos esposadas por delante. Por supuesto que eraWilliam Sands, Storm nunca lohabíadudado.

Igualqueelprisioneroanterior,Sandsseapoyóenlabarandilladelbanquillodelosprisionerosmientraseljuezentrabaytodoelmundoseponíadepie.

Sandsseguía llevandoelpelocortoy tambiénsubigote,queyano resultaba tontoniafectado,sinoqueseveíalargoyabandonadoymajestuoso,yacentuabasutristeza.Lehacíafaltaafeitarselacara. Llevaba un jersey azul raído para protegerse del frío del aire acondicionado centralizado yparecíasentirseamediocaminoentreelmalhumorylacatatonia.Estabaflacoyteníalasmejillashundidasyparecíaqueinclusopodríateneralma.

Encuantotodossesentarondenuevo,elprisionerovolvióabajarlamiradaconexpresiónvacía.

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Con la cabeza gacha.Completamente inmóvil. Los hombros encorvados.Mirando el reflejo de supropiacaraenunatazadekarmaamargo.

Durantetrescuartosdehoraeljuezsededicóaleerunmontóndedocumentos,repasandotodoslospormenores,deliberandoenvozaltaparasímismo,oesaera la impresiónquedaba.El jovenchinoalqueacababandesentenciarhabíatraficadoconarmasparaWilliamFrenchBenét,igualqueotrosmuchos.El juez repasó la listadecargosde losqueBenéthabía sidodeclaradoculpable.Serefirióalprisionerocomo«un importante traficantedearmas ilegales;unazotedenuestrasvidas;alguienquetraficaconnuestrasangre».

Stormsediocuentadequeelbancodeatráseraunmalsitio.Nadaleimpedíalevantarseypasarconsigiloentrelashilerashastasentarsejustodetrásdelprisionero.

Sandssegiróaloírelruido.VioaStorm.Loreconoció.Ysevolvióagirar.El juez parecía pequeño detrás de su mesa gigantesca. Llamó al prisionero «impostor y

psicópata».Ordenóqueelprisioneroselevantaraylosentencióaseratadoconcuerdas,azotadoconunavaraycolgadodelcuellohastamorir.

TeníanelAntiguoAltoTribunalengalanadocomosifuerauncapitolioestatal.PeroadosmanzanasdedistanciaestabaLittleIndia,dondeStormhabíaalquiladounahabitación.Caminómuyerguidoporentremultitudesquesepostrabanasuspiesporlacallemientraslossistemasdemegafoníaemitíanlas oraciones chirriantes de la tarde. Comercio frenético en las aceras: un adivino tumbado deespaldas sobre el asfalto y con la cara tapada por un pañuelo negro, balbuceando profecías. Sucompañerorecitabasalmodias juntoaunacoleccióndehuesoshumanosdelcolordelóxido,entreellos un cráneo, colocados sobre un pañuelo rojo y alrededor de un huevo blanco de gallina. Sededicabanavenderamuletosdiminutoshechosabasedecordelessuciosypapeldealuminiodoradosacadodepaquetesde cigarrillos555.El compañero levantó la tapadeuna cajayde lamisma selevantóunacobrademetroymedio, ensanchandosu sombrerete.Élhizodescenderdenuevoa lacobraconunodesuspoderososamuletos,meciéndolodelantedelacarasiseantedelreptil.Cercadeallíunhombreexhibíaunmontón,depor lomenosdoskilos,dedientesquehabíaarrancadoconéxito.Todoshabíanvenidode los rinconesmásdementesdelLejanoOriente,consusesterillasdepajay suspíldorasde la inmortalidad.Consuselixiresdiversosparaagrandarelpenehumano.Ytambién para el mismo propósito, un aparato algo inquietante hecho de cinturones y anillas. Yálbumes de fotos que mostraban casos que habían respondido al tratamiento. Hierbas, ungüentos.Brebajes de todas clases. Raíces medicinales conservadas en frascos de cristal, flotando comomiembrosamputados.

Entróenunatiendecitaderopa.Laatmósferacasiirrespirableporculpadelincienso.Imposiblemoverse allí dentro sin rozar la seda y las alfombras. Fuera, la mezquita seguía chillando. Lasmujeres hindúes muy quietas y mirándolo. Hermosas. Tres de ellas. Había una que miraba conexpresiónseverayquedebíadeserlamadre.

—VengoaveraRajik.—Señorestáesperando—dijoella.—¿Poraquí?—Sí.Otravez.Igualayer.¿Ayer?Sucarafantásticamenteencantadorayunaprofundafrialdaddetrásdelamisma.Ayerél

nolahabíavisto.

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Élatravesóunacortinadecuentaspintadas,consudibujodeldiosKrishnarodeadodevírgenesquesebañabanenunacascada,yseadentróenlaoscuridad.

—Vengaporaquí…nopasanada…aquí.—Noveonada.—Espereasusojos.StormavanzóconcautelahacialavozdelseñorRajikysesentóenuntaburetesobreelquehabía

uncojín.El señorRajik levantó lamanopara tirardeunacuerdayencenderunaconstelaciónde tenues

luces deNavidad que tenía detrás. Era un hombre hindú de aspecto ordinario sentado a unamesadondehabíaunjuegodeté,sinningunaexpresiónenlacara.

—Solovoyahacerunaspreguntas—dijo—.¿Querráustedcontestar?—Pregúntemeaver.—Enelperíododelasemanapasada,oantesincluso…¿algunavezhamiradoenalgúnmomento

ellugardondetendríaqueestarsusombraysinembargonohavistoningunasombra?—No.—¿Havistoustedunpájaronegro?—Miles.Elmundoestállenodepájarosnegros.—¿Yalgunoenconcretoenelquesehayafijadousted?Porqueestabadondenoteníaqueestar…

Podríaponerleelejemplodeunpájarodentrodeunacasa,odeunpájaronegroposadoenlarepisadesuventana.Algoparecidoaeso.

—No.Nadaparecido.—¿Havistoustedalgo…algunaclasedeobjetoode…?Voyausarnuevamenteunejemplo:usted

arrugaunpapelyseparecealacabezadealguien.Obienunamanchadescoloridaenelsuelo…algoqueseparezcaalacaradealguien,lacaradealguienquetuvounarelaciónestrechaconustedenelpasado…¿Havistoalgoparecidoen lasúltimasdossemanas?¿Algoquedepronto lemostrara lacaradealguiencercanoausted?

—No.—Voyadecirunaoraciónparausted.¿Cuálserálaoración?—Dígamelousted.—No,nopuedoseryoquienlodiga.Nomecorrespondeamí.Lecorrespondeausteddecirmelo

quediríasiestuvierahablandoconDios.—«BreakonThrough.»AcontinuaciónelseñorRajiksepusoahaceralgoensilencio.Comosinohablarainglés.—Selapuedoescribir.El señorRajik levantó el brazo y apagó las lucecitas.Hurgó con lasmanos en sus bolsillos y

encendió una cerilla y con ella una barrita de incienso. La oscuridad se curvó alrededor de elloscomosifuerauntúnel,comounasparedessólidas.AStormloinvadieronelsudorylasnáuseas.

—Mevoyatenerquelargar,tío,sitevasaponerajodermeasí—dijo.ElseñorRajikapagólacerilladeunsoplido.Yanoseveíanada.—Susojos—dijo.Al cabo de veinte segundos la brasa diminuta del incienso se hizo visible, y el ojillo que

acompañabaalavoz,obienlanariz,aquelloseconvirtióenlacara,enloúnicoqueélpodíaver,ysepusoahablar:

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—«TobreakonThrough»,atravesarrompiendo…¿serefiereacruzarunabarrera?—«BreakonThrough»,esunacanción.Esmifilosofía,milema.Ustedmehapedidolaletray

esaeslaletraquelevoyadar.«BreakonThrough.»—Vuelvamañana.—Esomedijoustedlavezpasada.ElseñorRajikhablósinapremio,muysuavemente.—¿Lehepedidoalgodedinero?¿Sienteustedquenosoydeconfianza?Puesledigoquevuelva

mañana.Hoynopuedodarleloquehoynotengo.—Ya,ya.Hagaloquetengaquehacer.Ya.

MientrasStormseacercabaamenosdeunpardemetrosdelagigantescacanceladeláminadehierrodelaPrisióndePudú,sintióqueelcalordelsolmatinalrebotabaenlamismayledabaentodalacara.Elguardiade laentradacorrióunpanelhaciaun ladoy leechóunvistazoaStormdesde lapenumbradesucubículo,acontinuaciónsequedómirandosucartadepresentación,queestabaeninglés,ehizouna llamada telefónica.Stormesperóvariosminutosen lacallehastaqueelguardiaabriólapuertametálicadeltamañodeunhombrequehabíaenlapareddecemento.

Un joven alto y vestido de civil condujo a Storm a través del patio, donde dos docenas deguardiasensayabanparaundesfileconuniformesdecolorverdeypúrpura.Quéfeosloscabrones.PeroprontoibanacolgaraSkipSands,asíquebienporellos.

Stormesperófrentea laoficinadelalcaldecon lacartaque lo identificabacomounperiodistallamado Hollis, que era el nombre que figuraba en su pasaporte australiano. Una carta que loidentificabacomoperiodistanoloibaaayudarmucho,esoloentendía.Asíquehabíaadjuntadoalamisma una nota de su puño y letra donde le explicaba al alcaide que también representaba a unaorganizacióndecaridadyquequeríavisitaralprisioneroporrazoneshumanitarias,noencalidaddereportero.

ManaulShaffee,directoryalcaidedelaPrisióndePudú,saludócordialmenteaStorm.—Mevuelvoadisculparprofusamente—dijo—pornuestrapolíticaquemeimpidedejarleentrar

enlaprisión.PeroStormya estaba dentro, en el despacho deShaffee con sus retratos de los nueve sultanes

atiborrandolaparedyconelaireiluminadoentonosverdesporuntubodeneóncircularquehabíaeneltecho.

Shaffe era un hombrecillo gordo descendiente de indios con una cara redonda y bigotuda deroedordedibujosanimadosyunachaquetaconalamaresdecordóntrenzadodorado,asícomocincomedallonesdistintosencadacharreteraparecidaaunesparavel.Ademásdecintasenlapechera.Laimpresiónquetransmitíaeradedulzuraidiota.

—¿Esustedmusulmán?—preguntóStorm.—No.—Yosoycristiano,señor—dijoStorm.—¡Yyotambién!—dijoelalcaide—.Soyconverso.Créame,nomegustaahorcaralagente.—Por favor,dele estanota al señorBenét, ¿deacuerdo?Hoyyahehabladocon suabogadoy

creoquehevistoqueelprisioneromehacíaunaseñalconlacabezadurantelasentencia.—Estoycompletamenteencontradetodaslasregulaciones.—Hevenidoenmisiónhumanitaria.Seloestoypidiendodecristianoacristiano.

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ElalcaideinsistióenquedetodasmanerasBenétsenegaríaaverlo.Pronunciabaelnombredelprisionerocomo«Benny».

—Bennynoquierevisitas—ledijoaStorm—.BennyinclusofuemaleducadoconelcónsuldeCanadá.

—¿Yquémedicedesufamilia?—Novienenadie.Canadáestádemasiadolejos.—Asegúrese de que entienda que soy el tipo que habló con su abogado.Creo que amí síme

querráver.—PeroBennynoquerráverlo.Selodigoyselorepito.Bennyescupióalacaradelcónsulde

Canadá.¿NolehaceesoaustedsacarciertasconclusionessobreBenny?—Estoybastantesegurodequemequerráver.—Harechazadoatodaslasvisitas.Sino,yolopodríaayudar.Perodespuésdehaberfijadosuestrategia,ydehaberestablecidoqueeraBenétquiensenegabaa

verloynoélquienloimpedía,ahoraelalcaidesesintióobligadoahacerqueBenétlocorroborara.—Siquiereesperar,porfavor—dijo,ymandóaunguardiaahablarconelprisionero.El alcaide encendió un cigarrillo mientras Storm oía a los guardias ensayar en el patio,

golpeandoelcementoagrietadoalunísonoconlasculatasdesusrifles.Sandsyelguardiaaparecieronjuntosalotroladodelapuerta.Shaffeeleshizounaseñalparaque

entraran,conexpresióntorturada.Sands-Benétentródescalzo,enpantalonescortosycamiseta.Yresultabaagradableverlocontan

malaspecto,conlamiradamaltrechayflaco,eraagradableverloconaspectodeprisionero.—¿Puedohablarconélasolas?—No.—Cincominutos.ElalcaidepusomalacarayStormlodejóestar.—¿Cómovalavida?—dijoStorm.—Aburrida,sobretodo.—¿Fumausted?—Hedecididoempezar.—¿Tienecigarrillos?EstosmalayosfumanTresCincos,creo.—Sí—dijoSands.—Ledaréunpardecartonesalabogado.—Gracias.—¿Eslobastantebueno?—Lobastantebuenocomoparacobrarmientrasyocuelgo.—Entiendalanaturalezadeesto.Soyuntrabajadorhumanitario,alguienquehablaingléscomo

usted.—Yalopillo.—ABennyvinoaverlosucónsul—dijoelalcaide—yélleescupióenlacara.—Esustedmiprimeravisita.—Intenteescupirmeamí.Sandssequedómirandosuspiesdescalzos.—ElalcaideShaffeeesunhombreamable—dijoStorm—.Poresomeestádejandoquehable

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conusted.Quiereasegurarsedequeestéustedcómodo.—Meharíasentirmemáscómodolaideadesalirdeaquí.—Imposible, amigo. Ha sido usted declarado culpable y sentenciado, y contra eso no hay

artimañaposible.Bajolasnuevasleyesdearmamento,sehaencerradoaochentaytrespersonas,yaochentaydosdeellasselashacolgado.

—Yaconozcolascifras.—¿Ycómolehacesentirseelquelovayanaahorcar?—dijoStorm.—¡Sincomentarios!—dijoShaffee,aunquenadielehabíapreguntadonada.Benétseencogiódehombros.—Bueno—dijo—,llegadoestepunto,meparecebien.—Sin comentarios —dijo Shaffee—, pero yo soy cristiano. Creo que ya conoce usted mi

respuesta.StormseacercóunpasoaBenét.—Eshoradepensarensualma—dijo.—¡Noseasmemo!—Leestoyofreciendolaposibilidaddelimpiarsuconciencia.—Yonotengoconciencia—dijoSands.—¿Oseaqueelqueteahorquennotehacecagarte?—Yahevividodemasiado.—¿YquémedicesdelInfierno,capullo?—Yatendremostiempodehablardeeso,túyyo.Mucho,muchotiempo.—Bennytienelibros.Tienetodaclasedematerialdelectura.TieneunaBiblia—dijoelalcaide.Sandssequedómirandosusfeospiesdesnudosyhablóenvozmuybaja.—¿Quéhadicho?Noloheoído—dijoelalcaide.—Dimeaquiénhayquever.—¿Paraqué?—ParaencontraralViejoTío.—Estámuerto,colega.Muerto.—Ah,¿sí?Tambiénsesuponíaqueloestabastú.AhoralaincomodidaddeShaffeeerapalpable.Señalóalguardia.—Tengo un testigo. Me toca jubilarme dentro de unos meses. Me podría meter en muchos

problemas.Peronohizonadaparadeteneraquello.Parecíanocontarconelmínimodedescortesíaquese

necesitabaenaquellosmomentosparahacercumplirconlapolíticadelaprisión.Stormseacercóunpaso.—¿Quieres rezar?—Inclinó la cabeza—.Diosbendito—dijoenvozmuyalta,y luegoenvoz

másbaja—:SéquetienesfamiliaenlasFilipinas.Ylospuedoencontrar.Diounpasoatrásymirócómoelprisionerotemblabacomounflanhastaqueinclusoeltontodel

alcaidesediocuenta.—¿Noseencuentrabien?¿Quépasa?—Eselpoderdesuconciencia—dijoStorm.—Venga—dijoelalcaide—.Siéntese.Sí.Eslaluchainterior.AhoraeranelalcaideShaffeeyStormquienesestabandepiecomounpardeprisionerosySands

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elqueestabasentadoenlasilladelalcaide.Sandsseagarróalbordedelamesaconambasmanosysemiróalternativamenteunamanoyla

otra.—Ju-shuan,oalgoparecido.DirigeuncentrodeventadedrogaenGerik.LollamanseñorJohn,

oJohnny.—Dameladirección.—Nohacefaltadirección.Eltíoagarraacualquiereuropeoquesebajadelautobús.—Yéleseltipoalquehayquever.—Sicreesquetienesquehacerlo…—¿Hayqueverparaqué?—dijoelalcaide.Noesquenoloentendiera.Loentendía,loentendíatodo,simplementenoqueríaadmitirantesí

mismoelerrorquehabíacometido.Shaffee ya había permitido que tuviera lugar aquella conversación.Ahora lomejor que podía

hacereraintentarcontrolarla.—A los dos australianos a los que ejecutaron no los ayudó su embajada—recordó ahora—.

Hemos tenidomuchos presos extranjeros: traficantes de droga y gente de esa—dijo—.Nunca hevistoqueunaembajadase tometanto interés.LoscanadiensessonmuysolícitosconBenny.Bennytienelibrosycosasdeesas.

—Atitevanacolgar—ledijoStormalprisionero—.Perolavidacontinúaytodocompletasucurso.Dentrodecadaciclohayotrociclo.¿Meentiendes?

—Oigoloquedices,colega.Peronoteentiendo.StormacercósusillaaladeSandsyseinclinóhaciadelanteydijo:—Noesmásqueunamáquina.Relájate.—Siempreycuandodejestranquilaamifamilia.—Somos funcionarios —dijo Shaffee—. Por favor. Tenemos nuestros cuencos de arroz y

queremosmantenerlosllenos.—Noeresquiencreesqueeres—dijoStorm—.Estásmuertopordentro.—Mira—dijoSands—.Noséquévenganzaandasbuscando,peronolavasaencontrar.—Lascosastienenqueagotarsuciclo.—Nohemosrezado—dijoSands.Lehizounaseñalparaqueseacercara.—Yo también soy cristiano —dijo el alcaide—. Anglicano. Rezo por Benny. Está un poco

psicótico.Ydeprimido.Peroenlasúltimassemanasselohavistomásanimado.SandsagachólacabezahastacasitocarlafrentedeStormconlasuyayleasestóunganchopor

debajodelesternón.AStormlefallaronlaspiernasyunmontónderenacuajossepusieronacorrerlepordelantedelosojos.

—Caray,colega—dijo.Shaffeeloayudóamantenerseerguido.—¿Seencuentrabien?¿Cuáleselproblema?Nielprisioneronielvisitantesemolestaronencontestar.LapausaenlaconversaciónpareciópesarsobreShaffee.Sesintióobligadoahablar:—LaCruzRojanoshizo laclasede informequeamímepareceútil.Sí, tenemoszonasen la

cárcel que se puedenmejorar.Lahigiene, la dieta, agradecí sus recomendaciones. ¡Perono las de

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AmnistíaInternacional!Porejemplo,tenemosabandaschinas.Sinoencerramosasusmiembrossinfianza, estarán fuera y tendrán amano a los testigos.La gente que hizo el informe paraAmnistíaInternacional no entendía esto. Nos hicieron un informe muy malo. Así que ya ve por qué noqueremos informes. ¿Por qué íbamos a permitirlo? Si es usted trabajador humanitario no loqueremos—dijo—. Y si es periodista tampoco lo queremos. Y usted no es cristiano. Yo sé quéaspecto tienen los cristianos porque soy uno de ellos.—Aquel discurso le había dado fuerzas—.¡Fueradeaquí!—gritó.Sevolvióhaciaelguardia—.¡Sí!¡Estehombrenotienepermisoparaestaraquí!

Treintaminutosmástarde,Stormseestabacomiendounchuletónenunsitioqueteníadecoracióndebambú pero nombre en inglés —el Planter ’s Inn Pub—, escuchando una lamentacióndesgarradoramente hermosa interpretada con flautas nativas que poco a poco se fue volviendoreconocibleentodasutristezacomounaviejamelodíadeMoodyBlues:«NightsinWhiteSatin».

YahabíaprobadoenPhangan,elcentroturísticoinsularbaratoyllenodedrogasquehabíaalestede Tailandia, pero había sido un fracaso. Un montón de hippies retrógrados de ojos fundidos,colgadosdelaganjaqueselasdabandeindios,detritosdiversosdelapsicodeliaeuropea.Cabezashuecas.Descerebrados.Nolossoportaba.

Aquello había sido después de escaparse de la Penitenciaría del Condado de Barnstable enMassachusetts:undíasimplementesehabíaencontradounapuertaabierta—seguramenteobradelaAgencia,yprobablementedelcoronel—ysehabíamarchado.

Aquello había sido después de la gran batalla naval, el único tiroteo de su vida, en el que laguardiacosterahabíahundido subarca juntoconmuchas toneladasdeganja colombiana, le habíapegadountiroaunodelostrescolombianosdesutripulaciónyhabíaahogadoaotro.

EnBangkokhabíaoídoqueelcoronelpodíaestarcomprandoyprocesandoopiosintratarenlazona.Se trasladódesdeBangkok,donde lasputaseranamablesyvolabanconsustanciasquímicas,hastaKualaLumpur, donde las putas hacían su trabajo con la eficacia desapasionada demáquinasautomáticasdeabrillantarzapatos.KualaLumpur,unnombreconconnotacionesdefaltadevidaydecalidez, que sonaba como cold lump, «terrón frío». Una ciudad descafeinada, cerebros claros yacrílicos, justo lo contrario de Phangan. Un aire acondicionado que se podía describirrazonablemente como brutal, todo el mundo parecía tener alguna enfermedad respiratoria. Muyoccidental,muymoderno, una especie de versión asiática deAkron,Ohio, con precios rebajados,frutatropicalytodoelmundoconduciendoporlaizquierda…HabíavistolafotodeWilliamBenétenelMalaysiaStraitTimesysehabíadadocuentadequehastaentoncesunaespeciedegravitaciónpsíquica y espiritual había guiado cada uno de sus pasos, y de que había vencido al Asesino,sobrevividoalosContrabandistas,trascendidolaPrisión,deambuladoentrelosLocosyqueahoraseibaaenfrentarobienalAhorcadoobienalTraidor—Sandsquedaríareveladocomoloqueera—yqueporfinelcoroneleraposible.

StormsequedóenKualaLumpureltiemposuficientecomoparahacerseuntatuajeyasegurarsedeque a Sands lo colgaban. Se alojaba en una escupidera de humanidad de Little India llamado elBombay, justoencimadeuncambista.Ledieronunpequeñoventilador eléctricoazulyuna toallablanca pero nada de jabón. A través de las paredes de contrachapado de medio centímetro podíaescucharsieteradiosalavez.

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Loshotelesbaratoseranbajos.Enellosunosiempreestabacercadelacalle,casienmediodelamisma.Lossilbidosyexclamaciones,lasbocinasquesonabancomobebés.

Los pasillos delBombay tenían unolor fuerte pero nodesagradable a curry y a inciensoNagChampa.Despuésde lasoracionesdelamanecer,elaire inmóvilolíaapanreciénhecho.Luegoelhumodeldiéselseelevabajuntoconlosruidosurbanosyseimponíasobretodolodemás.Dentrodetodosloscicloshabíaotrosciclos.Unonopodíaescaparsedelamáquina.

Sepasaba lasmañanas leyendounaBibliaprofanadapor algúnmusulmánconun rotulador.Obien escuchando la radio. En sus discursos el primer ministro recalcaba la importancia de laserenidademocional.

Obienescribíaensucuaderno.Obrasenverso.AdmirabaalpoetaGregoryCorso,unhombreque rezumaba genialidad a raudales. En cuanto a símismo, algún verso de vez en cuando.No sepodíaextorsionaralasmusas.

ObienleíasuejemplardelZohar:elLibrodelEsplendor.LohabíacompradohacíaañosenunalibreríainglesadeSaigón,antesdequeeldestinolecambiaraelnombreporCiudadHoChiMinh:

YdijoelrabinoYesa:Adánsepresentadelantedetodohombreenelmomentoenqueestáapuntodeabandonarestavida,afindedeclararqueesehombrenoestámuriendoporelpecadodeAdán,sinoporlossuyospropios.

Leía hasta que ya no podía concentrarse y las líneas del texto se dividían en duplicados de símismasyflotabansobrelaspáginas.

Mediodespierto,soñabaqueacababayendoconelcoronel.Yqueelcoronelledecía:Sabesqueexisteunciclodeimaginaciónydeseo,dedeseoymuerte,demuerteynacimiento,denacimientoeimaginación.Yanosotrosnoshantentadoparaqueentremosensuboca.Yesabocanoshatragado.

Se imaginaba la mirada que tendría el coronel al presenciar cómo Storm rompía un ciclosolamenteporlacuriosidadderomperlo.

EnsucuartavisitaaRajik,elhindúledioaStormsurespuesta,hablandodenuevoconinmensagentileza.

—Ustednopuedesercurado.Leestáprohibidoteneresperanzasenello.Nopuedesersalvado.

Cuatro días después del ahorcamiento, Storm cogió un autobús de lujo con aire acondicionado eincluso televisión hasta el final de la línea, que era el final de lamisma carretera, enGerik, unaciudaddetamañoconsiderableybastantecomplicadadeestructurasdemaderaycallessinasfaltar.Era de noche cuando desembarcó.Caminó por entre lasmesas de los vendedores callejeros de laplazadondeparabanlosautobuses.

Sandshabía tenidorazón:Ju-shuan loabordóde inmediato.Unhombrebajoypesado.Llevabapantalonescortosyunacamisetadegrantamaño.Caminabarenqueanteconsuszoris.

—Eh,mealegrodequehayavenido.LlámemeseñorJohn,¿vale?—SeñorJohn,vale.—¿Quieremasaje?¿Quieremujer?—¿Tienesmasajedechico?—¿Masajedechico?¡Ja!Sí.¿Quierechico?—¿Acasoesdemasiadoretorcidoparati,Johnny?—Chico,chica,bien.Loquesea.—Chicayamevabien.

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—Masajedechica,bien.Vaaquedarseenmihotel,¿deacuerdo?Estáadosmanzanas.¿Esustedamericano?¿Alemania?¿Canadá?Todoelmundosealojaenmihotel.

—Déjamecomerprimero.—Tengocomidaenmicafé.—Voyacompraralgodefruta.Storm fue entre las mesas de los vendedores callejeros. Compró un par de carambolas. Un

mango.Johnnylosiguió.—¿Quierecoco?—Yaestoybien.—Entoncespuedeustedcenaryluegoloquequiera.Yoleconsigolaseñoritaparaelmasaje.—Lacenadespués.Lamujerprimero—dijoStorm.MientrasentrabanenellocaldeJohnny,esteleseñalóaStormelestablecimientodeallado.—Nosealojeeneselugar—dijo—.Novayaahí.Esunmallugar.TeníamásomenoselmismoaspectoqueellocaldeJohnny.Johnnylopusoenunahabitaciónqueteníauntatamidepajasobreelsuelodemaderayunretrete

musulmánconmanguerametálica.—Esperemediahora—dijoJohnny.—Nometraigasunaquenosonría.Johnnytrajoalachicaalcabodeveinteminutos.—Sonríe—ledijoeninglés.—Creoqueconozcoatuamigo—ledijoélalachicacuandoJohnnysemarchó—ElseñorJohnesmiamigo.—CreoquesellamaJu-shuan.—NoconozcoJu-shuan.NuncaheoídoJu-shuan.Ellatambiénerachina.Decarnesgenerosasyamable.Olíaatemplo,aincienso.Posiblementede

caminoallísehabíadetenidoarezar,oadarunalimosna.Confiabaenquenosehubieraparadoaconsultaralosmonjessobrealgunaenfermedad.

—Parecestriste—dijoél.—¿Triste?No.Notriste.—¿Puesporquénosonríes?Ellalededicóunasonrisabreveytriste.Mástarde,StormcomiódelantedelhoteldeJohnny,enunamesapequeñademaderadebajodeun

toldo, en lamismacalle, a la luzdeun farolillodepapel, enmediodeuna tormentadepolillasytermitasaladas.

Compartiólamesaconunhombremalayoqueintentóhablarconéleninglés.—Ahoranomemolestes,maestro.—Loqueusteddiga.¡Soytodosuyo!Salvo por el farolillo que tenían sobre las cabezas y unos cuantos umbrales tenuemente

iluminados,laoscuridadlosrodeabaporcompleto:húmeda,cálidayapestosacomoelmalaliento.De la misma emergió repentinamente un europeo flaco, un joven con una angulosidad que

resultabaalmismotiempoadolescenteysimplementebritánica,yselesacercócomounamomiadepelículadeterror,conelcinturónapretadoylospantalonesmilitaresarrugadosenlacintura,conlacoronillaenvueltaenvendajessucios.

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Sesentóalamesaydijo:—Buenasnoches.¿Cómopuedohacerquemesirvan?Johnny se unió a ellos y se presentó y pidió comida para el viajero y estuvo conversando en

malayoconelotrohombrehastaquealcabodeunratoelotrohombreseterminósutéysemarchó.—No sabe inglés.Es unpariente demimujer—explicó Johnny. Insistió enque comieranmás

cuencosdearrozmezcladoconunahierbaverdeyconsaboralimónycontrozosdemarisco,otalvezfueracerdocrujiente,Stormnoestabaseguro—.¿Quélehapasadoenlacabeza?—lepreguntóJohnnyasunuevocliente—.Esperoqueyaestébien.

Eljovenhabíaestadocomiendosucenaconahínco,rodeadodebichosquedabanvueltas.Ahorasedetuvoeltiempojustoparadecir:

—LasemanapasadaestabaenBangkok,depasonadamás,ymetíelpieenunacloacaabierta.Regresóasucomida.Selocomiótodo.Siemprelohacían.EnlasmontañasdeColombia,Storm

había visto una vez a un británico comer callos de vaca ablandados con queroseno, y comérseloscomosilefueralavidaenello.

—Estaba negro como un tizón.Yo iba andando.Yme caí en una zanja de cemento.No habíamuchascosasagradablesallídentro,seloaseguro.Desdeentoncesheestadovigilandomissíntomas.—HablabasobretodoconStorm—.Medesmayéenmediodelmejunje,conunaheridaabiertaenlacabeza.Enestemomentomeimaginounahordainvasorademicrobiosquemeasaltanelcráneo.Mefui a la clínica más cercana en taxi y la joven enfermera me dijo: Tendría que llevar usted unalinternitacuandosaleapasear.Unalinternita.Melodijocuandolleguéyotravezcuandomefuiconlacabeza llenadepuntos.Cuandosalgaapasear, lleveuna linternita.Pareceunversodeunaobramusical.

—Puedollevarloacurandera—dijoJohnny—.Unamujer.Masaje.Paracurarlo.—Megustanlosasiáticos—dijoelbritánico—.Porlogeneral,encuentroquemegustanbastante.

Noseandanconjuegoscomohacemosnosotros.Porsupuesto,quierodecir,hacenlasmismascosasquenosotros,peronosonjuegos.Sonloquehay.Sonacciones,sinmás.

—¿Estaessuprimeravisita?—Peronolaúltima.¿Yusted?—Llevoyendoyviniendodesdelossesenta.—¿Enserio?Impresionante.¿EnMalaisia,dice?—Sí.Entodaestapartedelmundo.—¿QuémedicedeBorneo?¿Haestadousted?—Borneonoesbueno—dijoJohnny—.Novayaallí.Esridículo.—Ahoratengounalinterna,yaselopuedeimaginar.Ynoespequeñaprecisamente.Mire.—Se

sacóunalinternapequeñaperodeaspectopesadodelbolsillodelospantalones—.Teabreunagujeroenlacarne.—Apuntóconellajuguetonamenteaunniñoquemerodeabaenelmargendelaoscuridad—.¡Teabreunagujeroenlacarne,estechisme!

—Porfavor,noledenmonedas—dijoJohnny.—Notengointencióndehacerlo—leaseguróelbritánico—.Yatengodemasiadosamigoseneste

pueblo.—¿Tieneustedmuchosamigosaquí?—dijoJohnny.—Solamenteestoyjugando—dijoeljoven.YlecomentóaStorm—:¿Love?ElseñorJohnnose

andaconjuegos.

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—¿Esustedturista?—preguntóJohnny.—Losoycuandonotengotreintapuntosenlacabeza.—Esustedturista.Lepuedoconseguirunguíaparalaselvamañana.—Déjemerecobrarfuerzas.EndosdíasestarélistoparaelKilimanjaro.—¿Quémedicesdeti?—lepreguntóStormaJohnny—.¿Setepuedecontratarcomoguía?—Claro,siustedquiere—dijoJohnny—.Peroiremosdespacio,yyonopuedosubirlamontaña.

SololepuedollevaralascuevasdelríoJelai.Yoleenseñolascuevasyesoestodo.—Esopuedeestarbien.—Hayquecruzarunamontañapequeña.—Melopensaré.—Lamontaña no es nada. Es todo lomismo: arriba, arriba, arriba. ¿Es usted turista? Tal vez

veremosunelefante.—Yahedichoquemelopensaré.Eljovenconpuntosenlacabezadijo:—EnBangkokconocíaunmisionero.MedijoquesiguieraelSalmo121:«Alzomisojosalos

montes».Ledijequeyoerapagano.Él insistióenqueleyeraelSalmo121todoslosdíasmientrasestuvieradeviaje.Asípues,¿seestabaandandoaquelhombrecon juegos?¿Porqué ibaadecirmealgoasí?

Sevolvióallenarelcuenco.Stormmirócómocomía.—Porqueeraunmensaje.—Unmensaje,yalocreo.Pero¿paraquiéneraelmensaje?Stormnoledijoparaquiéneraelmensaje.—Nomegustahablardecosasreligiosas—dijoJohnny—.Hacequedospersonassellevenmal.—No, señor John—dijo el británico—.Novamos a discutir, no sobre religión.Esdemasiado

aburrido.—¿Quélepareceunamujerparaustedestanoche?¿Quélepareceunmasaje?Elbritánicopareciótrastornadoporaquellasugerenciaydijo:—Yahablaremosdeellomástarde,¿deacuerdo?

Al día siguiente, Storm hizo que Johnny lo guiara a la selva de propiedad gubernamental. A tresmanzanasdelhoteldeJohnnysesubieronaunalanchaamotorabiertadeseismetrosydejaronqueunhombreenfundadoenvariasbolsasdeplásticolospilotaracorrientearribaporelríoJelaibajolallovizna.

—Estehombrevienedeentrelosprimitivos—dijoJohnny—.Peroahoraviveenlaciudad,connosotros.Vamosaconocerasusparientes,asuclan.Elgobiernolosmantiene.Vivencomohacemilaños.

Viajaron río arriba. El río era llano, brioso, marrón. Nadie dijo nada. El traqueteo suave delmotor fuera borda.El hedor de su humo.El pueblo se alejó.Al principio, un puñadodemoradasesporádicasflanquearonsuavance,luegoyanohuboninguna.

Amuchoskilómetros río arriba, losdospasajeros saltarondesde labarcaaunamarraderodemaderaquenoparecíaserviraningunaaldeacercananianingúnsitiohabitado.

—¿Adóndecoñoseva?Miraroncómolabarcaseadentrabaenaguasprofundasygirabaríoabajo.

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—Quiereverasugente.Volverá.Cuandovengamosalahoradelacena,estaráaquí.Stormseatóunpañuelosobrelafrente.Cargaronconsusmochilasytomaronelsenderomuy

hollado,conJohnnyencabeza,sorteandolosfrecuentesyenormesmontonesdecagadasdeelefantesobre los que crecían hongos diminutos. Allí vivía alguien: los árboles del caucho silvestrespresentabanhendidurasenespiralylasaviagoteabadentrodeunaseriedecuencosdemaderaquehabíaatadosalostroncosalaalturadelasrodillas.

En la tapa de la mochila de gran tamaño de Johnny había estampada una bandera americana.Stormlamirómoverseporlaselva,flotandosobreelsendero.Ensumochilaloúnicoqueélllevabaerancigarrillos,cerillas,sucuaderno,calcetinesypañuelosparalacabeza,tododentrodeunabolsadeplástico,y tambiénuna linterna.Ypilas.Denada servía llevarpistola.Siempre te superabanennúmero.

Lalluviacesó.Noimportaba:fueraporelsudoroporlalluvia,élibaaestarigualdemojado.—TellamasJu-shuan.—¿Ju-shuan?—Esomehandicho.—¿Ju-shuan?Esoesunruidosinsentido.Ju-shuannoesunnombrechino.Estaban ascendiendo, y también jadeando, pero Johnny se detuvo para fumar un cigarrillo

deprisa.Elsenderoascendíaporelcostadodeunacantilado.Ellospermanecierondepie,mirandohacia

abajoendirecciónalásperodoselverdeyalríoJelaidecolormarrónqueloatravesaba.—¿Cómosellamausted?—preguntóJohnny.—Hollis.—¿Cuántosañostiene?—Cuarentaytantos.—Cuarenta y tantos —dijo Johnny—. Cuarenta y tantos. —Y un poco más tarde, repitió—:

Cuarentaytantos.—Quieredecirquetengomásdecuarenta.—Cuarentayuno.Cuarentaydos.Cuarentaytres.—Cuarentaytres.—Cuarentaytresaños.—Sí.Johnnyaplastósucigarrilloenlatierraconeltacóndesusandalianegra.—Yoloconozcoausted.—Claroquesí.YtúconocisteaBenét.LamiradadeJohnnybuscóunamentira.Probóasersincero.—Loconocí,yalocreo.—Estámuerto.Lohancolgado.—Claro,yalosé,esuncasofamoso.Aesomerefiero.Meenterédesucasoporlosperiódicos,

esoestodo.Empezóelascenso,conStormsiguiéndolodecerca.—¿Porquénohabla?Tengomuchainformaciónsobrelaregión.¿Porquénomepregunta?—Cuandoestélisto,teharépreguntas.Alcabodemediokilómetrosevolvieronapararparadescansar.Allíelsenderoeraestrechoyse

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vieronobligadosaapoyarseenlapareddelacantilado.—Ahíestálacima.Luegobajaremosyenelfondoencontraremoslascuevas.Stormencendióuncigarrillo.—Dijealassieteyhavenidoustedalassiete—dijoJohnny—.Esustedmuypuntual.Sucaranoeradeltipoinescrutable.Parecíaperplejoydesesperado.—Asísoyyo.—No he dormido adecuadamente —le dijo Johnny a su cliente—. En medio de la noche he

sentidoquemialmameabandonaba.¿Sabíaustedqueyorezo?Peroenlosúltimosdías,nadahaidocorrectamente.Cuandorezo,noveoningunasombraenlapared…peronosoysupersticioso.

—Estásfarfullando.Johnnyseñalóunsalienteenunriscoalotroladodelagarganta:—Enesarocaveolacarademimadre.Stormnocontestóycontinuaronconsuexcursión,Johnnytodavíaencabeza,conlacaraahora

giradatrescuartostodoeltiempohaciaatrásparamiraraStorm.—Mire,leestoydiciendodoscosas—dijomientrascaminaba—.NoconozcoaBenétytampoco

mellamoJu-shuan.Cuandocoronaronlacima,Johnnydejósumochilaysesentóalladodelamisma.—Pesa demasiado. Dentro tengo una tienda pequeña. Después de las cuevas podemos aparcar.

Tengolacomida.¿Quiereunpocodefruta?Stormdevoróunmangoyroyóelhuesoconlosdientes.Lasnubeshabíanescampado.Laluzdel

solcaíaaplomoypesadamentesobreellos,volvíaeldoseldemásabajodeunverdevivoylatienteyarrancabadestellosafiladosdelríodemuchomásabajo.Eralaprimeravezqueestabaenunaselvadeverdad.Durantelaguerranuncahabíavistola junglasalvodesdehelicópterosquevolabanalto.Esponjosa y de muchos tonos del verde, igual que aquella, aunque a veces con haces de balastrazadoraselevándosedelamisma,oiluminadaporlasbengalasdenoche.

—Tenemosquecogerunpalo.Siestádemasiadomojado,podemosresbalarenlabajada.Cadaunodeellossehizoconunbastónydescendierona lascuevas.Unavezabajo,Johnnyle

enseñóunagujerodeunmetrocuadradoquehabíaenlabasedelacantilado.—Losnativostraíanaquíaloschicosparaqueseconvirtieranenhombres.Paraentrarhayque

nacer por segunda vez. Ya lo verá. Por eso lo eligieron. Ya lo verá. Pero primero, ¿tiene ustedhambre?

Sesentaronsobreuntroncoycomieronarrozdeunasbolsitasdeplásticoconlosdedosmientrasunmonoenfadadolestirabatierraycortezadeárboldesdeelacantiladoqueteníanencima.

—Siempreesbuenocomer—dijoJohnny—.Ahoravamosadentro.Tenemosquedejarnuestraspertenencias.

Stormseacuclillódelantedelagujero.Delantedesucaracayóunalloviznadeguijarros:elmonoseguíaensustreceenloaltodelacantilado.Dirigiósulinterna:laaperturaseestrechabamásenelinterior.

—Yunamierda.—Eslobastanteseguro.Aquínohaynadiepararobarnos.—Esunputotubito,colega.—Podemoshacerlo fácilmente.Yo iré.El túnelgiraa la izquierda.Cuandodejedevermi luz,

entre,¿deacuerdo?

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Sepusodecuatropatas conungruñidoy avanzógateandoy rozandoel suelocon su linterna.Storm se puso en cuclillas frente a la entrada y lo vio adentrarse en el agujero. En cuestión desegundos,laluzdeJohnnydesaparecióaldoblarunbruscorecodo.Stormlosiguióacuatropatas.Elhazdelalinternaquellevabaenlamanosaltósobrelasparedesyleiluminólacara.AlotroladodelrecodoviolaluzdeJohnnyenfocándoloaél.Alcabodeunosmetrostuvoqueestirarseyserpentearporelpasadizo,con losbrazospegadosa loscostados, la linternadirigidahaciaatrásy lacabezapegadaalsuelo.Johnnyhablóparasímismoenchino.Stormtuvoquevaciarelairedelospulmonesparacontinuar,peronoveíamaneraderetroceder,yademásaquelgordocabrónyahabíallegadoalfinal, y no le quedaba más remedio que quedarse con él: iba a hacer lo que hiciera falta paraalcanzarlo,yserecordóasímismoquenoleimportabaviviromorir.Sedeslizóaoscurasconlacabeza por delante, increíblemente deprisa. A su alrededor se hizo la luz. Johnny estaba en unacámaracuyasparedesnoseveíandetanlejosqueestaban.ConlaayudadeJohnny,Stormselevantóconcuidadodelsueloresbaladizoaunquelaspiernasapenasloaguantaban.

—Silencio,porfavor—susurróJohnny.Enfocó su linternahacia arriba.Los altos techosestabancubiertosdeunacapademurciélagos

queparecíaunaalfombramullidadehojascolgantes.Habíadecenasdemillares.Johnnychasqueóunavezlosdedosycadaunodelosmurciélagostemblóunpocosinsoltarse,

conunruidocolectivocomoeldeunalocomotorapasandoatodavelocidad.Elestallidoseapagóenseguida,peroahoraparecióqueresonabaciertogradodevidaenlaoscuridad.

—Mirecómohanhechorayonesenlasrocas.Losnativos.Stormexaminóunascuantasmarcasapenasdiscerniblesenelcírculodeluzdelalinterna,nada

queélpudieraentender.Johnnymoviósuluzentrelostenuessímbolosypreguntó:—¿Quédice?—¿Cómo?Nolosé.—Pensabaquelosabíausted.Quetalvezhabíaaprendidocosassobreesagenteenlauniversidad

deustedes.Stormsoltóunarisotada.Lesaliócomoundisparo,ylosmurciélagosvolvieronarugir.Agarrólalinternaconlaaxilaysesecóunpringueresbaladizodelaspalmasdelasmanosenla

partedeatrásdelaspernerasdelospantalones.—¿Quéesestamierda?—Sí.Eselguano.Delosmurciélagos.—Maldición.¿Hastadóndelleganestascuevas?—Estaeslaúnicacueva.Podemossalirporelotrolado.—Nomejodas.¿Quieresdecirquehayunaentradamásfácil?—Solamentepara salir.Tenemosquemeternosporunagujeropequeño,peroesmás fácilque

volver.Muyfácilsalirporahí.Peronosepuedeentrarporesecamino.Esdemasiadoresbaladizo.—Bueno,alamierda,tío.Vamos.—Poraquí.Johnnyavanzómuydespaciopordelantedeélendirecciónaunvacíoqueprontoextrajodesu

senounapared,ydespuésunagujeroenlaparedunpocomásgrandequeelquehabíanusadoparaentrar.

—Yoprimero—dijoStorm.

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Ahoraparaavanzarsoloteníanqueagacharlacabeza,perocaminareracasiimposible.Stormnoviomurciélagosenaquelpasadizo,perosumierdalocubríatodo.

AJohnnyletemblólaluzyselecayóalsuelo.Stormdiodospasosconcuidadohaciaatrásylarecogió, a continuación encontró a Johnny tumbado de espaldas en el suelo y dejó caer elinstrumentoasulado.

—Nolepuedover—dijoJohnny.Stormsesacóelcuchillodelcinturónyenfocósulinternahaciaelmismo.—¿Puedesveresto,cabrón?SeagachóylevantóeldobladillodelacamisetadeJohnnyconlapuntadelcuchillo.—¿Quéestáhaciendo?DirigióelhazdeluzalacaradeJohnnyyesteguiñólosojosyapartólavista.—¿Sepuedesaberquéestáhaciendo?—Tevoyaextirparunpocodegrasadelabarriga.—¡Quéestáhaciendo!¡Seestáportandocomounloco!Enlacámaraquehabíaalfinaldeltúnel,losmurciélagosrugieron.—Tevoyadesollarpocoapoco.Voya tirar lospedazosahí enunmontónyvas apoderver

cómoseloscomenlosmonos.Mientrasatisetecomenlashormigas.—¡Estáloco!—Mejorsupónqueno.—¡Dinero!¡Dinero!¡Selopuedoconseguir!—HasdichoqueconocíasaBenét.—Sí,esmaloqueteejecuten.Perotieneustedqueentenderquefueunamaldaddeldestinolaque

lopusoahí.Fueunasituaciónterrible.—Bienvenidoaesasituación.—¡Peroyonotengonadaqueverconeso!—Volvamosatusituaciónpresente.Johnnyhablóunpocoenchinoyluegodiolaimpresióndequeseestabacontestandoasímismo.—Vale.Yalosé.Yaséloqueustedquiere.—Puesdámelo.—Esto,escuche,porfavor…estonohasidopormiculpa,señor.Porfavor,entienda.—Vasahablarconmigo.—Déjemeusarmilinterna.—Alejaesacosademí.—Soloaunlado.Johnny enfocó la pared con su linterna.Levantó la cabeza y buscó conmucho cuidado alguna

señaldeunfuturoenlacaradeStorm.—¿Puedoporfavordecirleunacosa?Somostodosunamismafamilia.—Johnny.¿Dóndeestáelcoronel?—Oh,porelamordeDios,elcoronel.Sí.Dígameloquequiere.Noestálejos.EnTailandia,al

otroladodelafrontera.Puedeirdirectohastaallíporloscaminos.Volvamosalpuebloyyoledaréloquenecesite.SolohayqueseguirelcaminodelcauchohastaaquellasaldeasdelvalledeBelumyunoencuentraalcoronelconfacilidad.Losabetodoelmundo.

Stormretrocediódospasosyenvainósucuchillo.

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—Levanta—dijo.—Puedolevantarme.¡Puedohacerloconfacilidad!SelevantóconunaalegríaqueStormreconociódecuandoélhabíasalidovivodespuésdecreer

que lo ibaaasesinar laguardiacostera. Johnny fuepordelantedeéldurantecuarentametrosmáshastaunagujerobrillantequehabíaenelsuelo.

Stormdejócaersulinternaporlaabertura,semetióenellaconlospiespordelanteysedejócaerdosmetroshastalaluzdeldía.DelantedeélaparecieroncolgandolospiesdeJohnnyyélleagarrólaperneradelospantalonesalgordomientrasestesedescolgabahastatenerlosbrazosextendidosdeltodoporencimadelacabeza,agarradoalarocaconlasmanos,ysedejabacaer.Despuéssonrióconexpresiónestúpidaynegóconlacabeza.

—Vamos—dijoStorm.Permaneció cerca de Johnnymientras rodeaban lamontañay regresaban al sitio dondehabían

almorzado.—¡Aquí estamos! —dijo Johnny—. ¿Lo ve? —dijo como si estuviera demostrando una

importanteverdad.—Necesitounmapa.—¡Porsupuesto!¡Porsupuesto!Enmihoteltenemosmapas.—¿Quéllevasentumochila?—¡Porsupuesto!¡Mehabíaolvidadodequellevounmapaenlamochila!Sepusoencuclillasyabriólatapaysacósusbolsitasdecomida,unponchoazul,unamuestrade

tresmetrosdetelacoloridaquedesplegóasualrededoryqueexplicóqueerasumanta,yporfinleentregóaStormunmapaandrajosoymaldoblado.

—Pordesgracia, laescrituraesenmalayo.Pero loúnicoque tienequehacerustedescogerelcaminodelcauchoyhablarconloscaciquesporelcamino.Alguienloguiará.

Stormextendióelmapasobreelsuelo.—Enséñamelo—dijo.—Vamosaregresaralpueblo.Mañanapuedeustedalquilaruncochehastaaquí.Despuésyano

haycarretera.Puedellevarlolamotocicleta.—¿Estoeslafronteratailandesa?—Sí,peroaquíestálaaldeaalaquevaair.—Noveoningunaaldea.—Estáahí.Nopuedomarcársela.Nohaybolígrafo.Stormhizoloquepudoparareducirlasdimensionesdelmapayselometióensumochila.—Vamos—dijo.Se echaron sus mochilas a la espalda y se pusieron a andar. Mientras subían la colina se

mantuvieron en silencio.El ascenso a la colina no fue tan largo como les había parecido al salir.Stormlesiguiólospasosmientraspasabanporlacimaysepusopordelantecuandobajaronporelotrolado.HastadebajadaJohnnyibajadeandoynoteníanadaquedecir.

Cuandollegaronalsenderoqueseguíaelrío,pareciómássegurodesusituación.—¡Mehapreocupadousted!Peroahorayanosestamosllevandobien.—Nosimehasjodido.—Porsupuestoquenohagoeso.Somosamigos.—Yunamierda.

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—¡Yolocreo!¡Somosamigos!Enunlugardondeelríofangosodiscurríaalamismaalturaquesusorillassedetuvieronpara

lavarseelguano.—No se quita —dijo Johnny, caminando por el agua—. O sea que puede confiar en mí. En

cualquiercaso,elotroladoestádemasiadolejos.Yahí…veouncocodrilo.Yechóacorrer.Stormviocómorecorríadandotumboslostreintametrosqueteníadeanchoel

río.Metióelpieenunsitioprofundoyagitó losbrazosenmediode lacorriente,dandosaltosdeladoyríoabajoparasaliraflote,hastaqueencontródóndeponerlospiesyseagarróalavegetaciónde lamargenysealzóparadescansaracuatropatas,empapadoyencogido, levantando lacabeza,luchandoporrespirarybajándoladenuevo.NovolviólacabezaparamiraraStorm.

Stormlocontemplósolamenteunossegundos,despuésdiomediavueltayechóacorrerporelcaminoparareunirseconelbarqueroantesqueJohnny.

Ymientrasseencaminabaríoabajonoparabadepreguntarse:¿Porquéhetenidoquemencionaralcoronelantesdequeéllohiciera?Lehedadolaclave.Puedequemehayamandadoacualquierparte.

SesentósobreeltatamidepajadelhoteldeJohnnyysequitóuncalcetínconmanchasmarronesdesu propia sangre. Se había frotado lasmordeduras de las sanguijuelas con barro del río, pero sehabíadejadouna.

LaviejamujerdeJohnnyapareciódoblandoelrecododelpasilloyremoviendoelpolvoconunaescoba.

—¡Ah!¡Yahavuelto!—Quégranverdad.—¿Dóndeestámimarido?—Sehaquedadoconsusamigosenlaselva.—¿OseaqueJohnnysequedamástiempoquizá?—Sí.Esomismo.—¿Quiereté?—No.Quierouncochealafrontera.—¿Tienedinero?—Soylapersonamásricaquevasaconocernunca.—Yoleconsigocochemañanaporlamañana.¿TieneustedamigoenTailandia?—Yalocreo.—Suamigoestáesperando.—Esunaposibilidadclara.—Selaquedómirandoyexaminósucara.Perotodavíanolosentía.

Estabamuchomáscercaynolosentía—.Creoquemevoyacambiardehotel—dijo.

DurantecasiveintekilómetrosdeacuerdoconelcuentarrevolucionesemborronadofuedepasajeroenunMorrisMinor.Enunpuentequecruzabaunríocuyonombreélnoconocía,suchóferlepidióquelepagarayquesebajara,negándoseacorrermásriesgos.Lostablonesdelpuenteroídosporloselementosparecíanpodridos.Stormleofreciómásdineroperoelhombredijo:

—¿Puedeustedcomprarmeuncochenuevo?—Cobarde.Mecagoentumadre—dijoStorm.

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Consiguió que lo llevaran encima de unmontón de leña a bordo de un ciclotaxi modificado,conducidoporunancianoyarrastradoporunanimalquetalvezfueraunburroytalvezfuerauncaballo raquítico. Storm llevaba vaqueros cortados y la leña le rozaba la parte de debajo de losmuslos.Nollevabanadamejorensumochila,nadaderopaparacambiarse,solamentesulinterna,elcuchilloyelponchodeplástico,ademásdesucuadernoyelmapadeJohnny.Separaronenunaaldeaunostreskilómetrosmásadelante,yallíStormtratóderegatearconelancianoleñadorparaquelosiguieraayudando,peronoloconsiguió.Másadelantelacarreteraestabainvadidadeárbolesnuevosdelcaucho,ysucarronopodríapasar.Losnativossalieronalaspuertasdelaschozasamirar.UnhombreseacercóaStorm,vacilóaciertadistanciayporfinseacercóosadamenteunpasomásparatocarelbrazodelforastero.Lagentegritó.Elhombresealejóriendo.

Storm no sabía cuánto más tendría que caminar hasta llegar a la frontera. Menos de veintekilómetros,siestabaleyendocorrectamenteelmapa.

Elviejoleñadorsaliódedetrásdeunadelaschozasencompañíadeunjovenconlacarachataylosojosmuyabiertosquecaminaballevandounamotocicleta.ElchicopisóelpedaldearranqueysesubióyarrancótandeprisaqueStormdudódequeesperarallevarunpasajero,peroéllesaltódetrásdetodasmanerasylegritó:

—¿Adóndevas?¿Adóndevas?Leparecióqueelchicodecía«Larue».Mientrassedirigíanalmargendelaaldea,unaanciana

conlacaradesencajada,gritandoygimiendo,setiróalsuelodetierrajustodelantedelamoto.Losfrenoschirriaron,Stormsaliódespedidohaciadelanteysuslabiostocaronelpelodelmotorista.Elchico extendió las piernas y trató de eludir a la anciana, pero ella se puso a dar vueltas como unnadadoryadarpatadasenelpolvoparacerrarleelpaso.Stormexperimentóunasacudidadeunladoaotromientrasellos lepasabanporencimaconuna ruedaprimeroy laotradespuésyelladecía:«¡Hum!¡Hum!».Lagentequeestabaenlaspuertassepusoagritarles—habíagenteriendo—yunniño se acercó a escupirles. Storm sintió que el viento extendía la saliva sobre sumuslo desnudomientrasaceleraban.Agarrólashojasdeunaplantadetéysesecóelescupitajomientrasdoblabanunrecodo para salir del pueblo. La carretera era de barro rojo y estaba llena de hoyos. A veces uncharcoenorme loshacía aminorar lamarchamientras el chico lo esquivaba, estirando laspiernasparanoperderelequilibrio.

Por delante de ellos crecían sobre todo árboles del caucho. Una alfombra de hojas cubría elcaminoenaquellaparte.Laluzsederramabaentrelosárboles.Lamotodiounpardetumbossobreunagruesaserpientecon lapiela rayasbrillantes.Lacarreteraseestrechóhastaconvertirseenunsenderoyahorasepasabantodoeltiempodandotumbosporencimaderaíces,conelpequeñomotorquezumbabacomounabocinaysonabaigualdeinsignificante,ahogándoseenmediodetodaaquellavidaorgánica.Pasarontreshoras,cuatrohoras,peronosedetuvieronaalmorzar,nisiquieraabeberagua.Stormsemantuvoagachadodetrásdeloshombrosdelchicomientraselsenderoseestrechabay las delgadas ramas de los árboles le azotaban la cara a este. El chico no paraba de intentarprotegerse lacaraconlamanoysubrazocadavezsalíamásensangrentado.Perosiguióadelante,gritandoyllorando.Avanzabancomopodíanycasi todoel tiempoenprimeramarcha.Stormolióquesusueladegomaseestabaquemandosobreeltubodeescapeyrecolocólospiesenlosestribos,peronoconsiguióquedejaranderesbalarle.

Hacialascuatrodelatardeyasehabíapuestoelsolcasiporcompletosobreelbosquedeárbolesaltosylacarreterayaestabatodainvadidaporlavegetación,noeramásqueunsenderoparairapie,

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cuando salieron de repente a la luz del día, a una serie de espacios abiertos, carrizos grises yarrozalesdecoloresmeralda.Ahoraelsenderocruzabaellechosecodeunarroyoconunasparedesabruptasdemetroymediodealto.Lamotocicletanopodíapasar.

Desmontaronyelchicollevólamotoavariosmetrosdelcamino,entrelashierbasaltas,ladejócaerallídecostadoysecayóconlamisma.Selevantódeunsaltoysealejósecándoselacara.Lecaíasangreenespiraldelantebrazo,dondelacaídalehabíacausadouncorteprofundo.ViosuheridaysonrióaStormydeprontoseechóallorarderabia.Stormlecogióelbrazo.

—Quítalelasarrugasatualma,colega.Noestásmuerto.Joder—dijo—.Esprofundo.Sedesatóelpañuelode la frenteparavendar laheridayapenashabía terminadodeanudarsus

extremoscuandoelchavaldiomediavueltaparaponerseotravezencabeza.Bajarontrepandoporunladodelarroyoysubieronporelotro.Stormprobóahablarconél:

—Chico.Chico.Quierodartedinero.Dinero.Peroelchiconorespondiónisedetuvo,ylosdoscontinuaronporlosdiquesdelosarrozalesy

llegaronaunaaldeadondetodosemecíabajoelvientovespertino.Enelporchedeunacasademaderahabíaunhombredepievestidoconpantalonesmarronesy

camisaazul,comosiestuvieraenunaesquinadecualquierciudaddelmundo.—¡Bienvenidos!Entrenatomareltéyleenseñaréalgunosdemisespecímenes.—Necesitamosagua.—Entrenenmimuseo.Porfavor.Venga.Él losacompañóal interiordealgoqueparecíauncafé sin sillas, solamentevariasmesascon

frascosgrandesencima.Levantóunodelosmásgrandesydentrodelmismohabíauninsectomarrónquetalvezhabríasidotanlargocomosuantebrazo,denohaberestadoenrolladocomounapulserayflotandodentrodealgoqueparecíapisrancio.

—Tengounabuenacoleccióndeinsectos.Esteciempiésmatóaunchicodetreceaños.—¿Quémedicedelagua?—¿Quierequelahiervaprimero?Lodigoporserustedamericano.Mientras hablaba, las cejas se le separaban bruscamente y luego colisionaban entre ellas.Ojos

saltones y labios gruesos. Frente enorme. Salvo por los labios, tenía pinta de ser uno de susespecímenes.

—Llénemelacantimplora.Osea,porfavor.Lanecesitoasaco,joder.ElextrañosellevólacantimploradeStormalotroladodelapuertadesucocina,dondeseveían

unfogónyuncamastro,lasumergióenunabañeragalvanizadaylasostuvobajoelagua.Stormlosiguió,learrancólacantimploragoteantedelamanoyechódentrodostabletas.Volvióaenroscarlatapaylaagitó.

—Joder,tengosed—dijo.—Melocreo,sí—dijoelhombre.Regresaron entre los especímenes, Storm se bebió la mitad del agua con una serie de tragos

violentosyse lapasóalchico,quese tragóel resto, soltóelaire,volvióacogerairemientras lacantimplorasealejabadesubocaehizounamuecadesorpresa.

—Esyodo.—Sí—dijoelhombre,yhablóconelchicoenmalayo.—No me quiere decir su nombre. Está en su derecho. Yo soy el doctor Mahathir. ¿Y puedo

preguntarlecómosellamausted?

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—Jimmy.—Jimmy. Sí. Dice usted mucho una palabrota, Jimmy. Dice usted «joder». ¿Eso no es una

palabrota?—Soyunputomalhabladodemierda.¿Dedóndesacasestosfrascos,colega?—Soycientífico.Entomólogo.—¿Oseaquecagasfrascosporelculo?—¡Oh! Estos frascos. Tengo veintiséis. La gente me los vende. Se dan cuenta de que un

entomólogonecesitafrascosparasusespecímenes.Enestehayunescorpión.—Sí.¿Acuántoschicosdetreceañosmató?—Lapicaduranoes fatal.Solamenteentumeceun rato.Sehincha la zonade lapicadura.Esel

escorpiónmásgrandequeseencuentraenestaregión.Portanto,sí,lotengoguardado.—Enformaldehído,¿no?—Formaldehído,sí.—¿Esamierdaesantiséptica?—Porsupuesto.—¿Tienesunfrascosinusar?Estechicosehahechountajoentodoelbrazo.—Sí,lohevistoclaramente.—Hablóconelchico,queextendióelbrazomientraselcientíficole

desataba el pañuelo de la herida con delicadeza—. Muy sencillo. Limpiaremos los daños ypondremosunassuturas.Lopuedohacer.

—¿Suturasmédicas?¿Tienes?—No.Agujaehilo.—¿Ytienesxilocaína?—No.—Puesmejorexplíqueselo,doc.Hablaronyelchicosiguiópareciendomuydisgustado.—Dicequetienequeocultarlaherida.Quesucuerponodebetenermarcas.—¿Marcas?Mírale lacara.Se laha llenadodecortesyendoa todahostiapor laselvacomosi

tuvieraunagranadaenelculo.—Nosé.Esideasuya.—Tevaacoser—leexplicóStormalchicomientraselmédicoencontrabasusmaterialesenla

cocina—.Vaaserdesagradable.ElmédicollegóarrastrandounbancoconunamanoyllevandounabotelladePepsienlaotra.

Entreloslabiosllevabaunaaguja,conelhilocolgandodelamisma.—Siéntateaquí,porfavor.—Élyelchicosesentaronenelsuelodetierrayélapoyóelbrazodel

chico sobre el banco y sumergió sus materiales de sutura en el cuello de la botella—. Voy aesterilizar—dijo,ypescólaagujaporelhiloeinmediatamentecerrólaheridaconlosdedosyclavólaagujaenlacarne.Elchicocogióaireconlosdientescerradosybufó,nadamás—.Esunestoico—dijoelcientífico.

—¿Puedeshablarconestechico?Traducirparamí,colega.—Claro.—Enprimerlugar,¿quiéneraesaviejaalaquehaatropelladoconlamotocicleta?Hablaronunmomentoyelcientíficodijo:—Erasuabuela.

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—Nomejodas.¿Quiénesestetipo?—Noselepermitedecirnossunombrereal.Yoséquiénes.Heoídohablardeél.Vadeviajea

unaaldeaquehaymásadelante.En silencio, salvo por el bufido que soltaba el chico con cada sutura, el científico terminó su

trabajo.Laheridayanosangrabayhabíaquedadocerradaconcinconudosazulesbienprietos.—Tehaquedadountrabajodeprimeraclase.EresElvis.—Sí.Esbueno.Gracias.Elchicosepusodepieydijounaspalabras.—Dicequeapartirdeaquítenemosquecaminar.—¿Vaenserio?Yallevamosunahoraandando.—Mañana hay una importante ceremonia. Este hombre ha hecho un pacto muy serio para

participar.—¿Ydóndetienelugar?Mehadicho«Larue».—Sí.Yoseloescribo.Sepuedeescribirasí.—Coneldedodibujóenlacapadepolvoendurecido

quecubríasumesa,enmediodelasmonstruosidadesflotantes:«LaRu»—.Yotambiénvoy.—¿Podemosirencoche?—Solamente podemos andar. Está a unas cuantas horas de aquí, pero el camino esmuy fácil.

Fíjese,estamosenunllano.Yluegobajamosalvalle.—Muybien,alamierda,andemos.—¿Vaustedaacompañarnos?—No,colega.Túereselqueseune,joder.Yoyaibaenestaexcursión.Elcientíficosefrotólasmanosyfruncióelceño.—¡Muybien!Puedeacompañarnosusteduntrecho,Jimmy,¿deacuerdo?El chicoyahabía salidopor lapuerta.Storm le siguió, y el doctorMahathir los alcanzóen el

senderocuandoesteyadejabapasoalosarrozalesdemásalládelaaldea.—¿Tienesaguaentucantimplora?—Voymediolleno.—Conesobasta.El chico no giró la cabeza paramirarlos. Se puso la camisa por la cabeza sin detenerse y sin

siquieraaminorarlamarcha.Lostresseabrieronpasoaunritmoquenolesdejóalientoparahablarhastaqueretomaronelsenderodespuésdemediokilómetrodediquesyzanjas.Mahathirlollamóenmalayocontonodesúplica.

—Le he dicho que en el siguiente lugar tenemos que pararnos a descansar. Creo que lo va apermitir.

—Monsieur,¿quéseproponeestechaval?Pídalequemecuenteloqueestáhaciendo.—No lepuede responder.Desdedondeestamoshastaque llegueaese lugar, tienequeguardar

silencio.—¿Paraque?—Tienequellevaracabounafunción.Vaahaberunaceremonia.—¿Quéclasedeceremoniavaaser,señorBichos?—Esmuypocohabitual.Nopasaamenudo.Yolavoyacontemplar.

En la siguiente aldea se pararon delante de una casita demadera, se sentaron en dos bancos a la

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sombraybebierontéheladosinhielo.—Hoyhacecalor—dijoelentomólogo.—Joder,yalocreo.—Esteesunbuensitio.Yaeslobastantelejosparausted.¿Puededescansar?—Nidecoñamequedoaquí.Yovoymáslejosquevosotros.—MáslejosyaesTailandia.—PuesentoncesaTailandia.Mahathirencorvóloshombros,diounsorbodetédesuvasodeplásticoypusocaradequeno

teníabuensabor.Fruncióelceño,carraspeó,echó lasúltimasgotasal sueloy secóelvasoconeldobladillodelacamiseta,asegurándosedenomancharselacamisadevestir.

Lostresselevantaronyecharonaandar.Cuandollegaronalaúltimacasadelaaldea,Mahathirsedetuvo,cruzólosbrazosydijo:

—Perdóneme, Jimmy. Creo que usted no tiene que continuar. No, no puede venir ya. Sientomuchohaberletraídohastaaquí.

Elchicoseestabaalejando.—Vamos,doc.Tengoquehablarconunagente.—Noeseldíaadecuadoparaquelohagausted.Hágalootrodía,¿quiere?Habíandejadoatráslosárbolesdesombradelaaldeayahorapasabanentrematorralesveteados

depolvoarrastradoporlalluvia.—Estoesmalo,eshastaterrible.Sí,esterrible—dijoMahathir.Stormnoleprestóatención.EmpezaroneldescensoalvalledeBelum.—Ahíestá—dijoStorm—.Ahíestáél.—¿Quién?Ante ellos se extendía el dosel de la selva, bajo el cual, en un sustrato invisible a los ojos de

Disneylandia,seestabatorturandoadesaparecidosdeguerrahastahacerlospolvo.—¿Quiénhayahí?—Vamos.Elchavalnoespera.Elcaminodescendíadeformagradual,adentrándoseenlaladeradelacolina,odelamontaña,

Stormno sabíaquéera, porquehasta enplenodescensoabrupto los árboles eran lobastante altosparaescondertantoelcielocomoellechodelvalle.Alcabodeotrokilómetrollegaronaunllanocubiertodehierba.Elsendero los llevóaunclaroyaungrupodecasitas,chozasdepaja tejidaylistones,contejadogalvanizado.Oyóelríocercadeallíytambiénpájaros,otalvezfueragente.

—Elchicosequedaaquí.Yyotambiénmequedo.—¿Dóndeestánlosdemás?—Vamosaacercarnosmásalrío.Auncentenardemetros,juntoalrío,encontraronaunpardedocenasdealdeanosyunapirade

casi cinco metros de altura y el doble de ancho en la base. Parecía que los preparativos estabancompletos.Tresmujeresenfundadasensarongsdecolornaranja rodeaban laedificacióncargandobrazadasderamassecaseintroduciendoramitasdondepodían.Detrásdeaquellasmujeres,habíaunaseriedehombrescontaparrabossumergidosenelríohastalostobillos,bañándose,echándoseaguaconunasolamanoalasaxilas,mojándoselacabezaymeciéndosedeunladoaotro,inclinadoshaciadelante,parasacudirseelaguadellargopelo.

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—Elloshanconstruidolapira.—Vanapegarlefuego…—¿Aestechico?No.—Entonces,¿aquién?Stormsepreguntósiibaaseraél.—Conestefuegolevanadestruirelalma.Otroscuatrohombrescontaparrabospermanecíanaunlado,sinprestaratenciónanadie,como

si esperaran a que alguien los fotografiara, igual que lamisma pira, que se erguía como un diosconstruidoabasede ramasyhuesosmientraselchico levantaba lavistaparacontemplarlaconsucarachata.

Mahathirsedirigióaaquelloscuatro.Comosihubierarotounhechizodeparálisis,ellosse leacercaron,haciendoseñalesyhablando.

—Hayunproblema—dijoMahathir—.Unaplaga.Unamaldiciónenformadeplagalosagobiaylos atormenta.Dice que simiramos veremos lasmarcas de dientes en sus posesiones. ¿Cuál es laplaga?Unodicemonosyotrosdicenroedores.Noquierendecir.Estánfuriososporelmiedo.Lovanaperdertodo.Sevanamorirdehambre.

UnhombreseacercóyhablósolamenteconMahathir.—Dicequeelsacerdoteestáesperandoenunlugarespecial.Podemosiraverlo.Storm,Mahathiryelchicopasaronporentrelacoleccióndecasitasyelentomólogolosguiopor

un sendero que llevaba a un pequeño claro, donde encontraron tres chozasmuy pequeñas y a unhombrecontaparrabosdepieysolo.

—Otrocabrónsinropa.—Eselsacerdote,contratadoespecialmenteparaestaimportanteceremonia.Peronosepreocupe.

Esunfalsosacerdote.Uncharlatán.Elchicodetuvosuspasosaunosmetrosdelpequeñosalvaje,queseagachócomosiseestuviera

preparandoparadarunsaltoviolentoenelaireyloexaminó.MahathirlepusolamanoenelbrazoaStorm.—Quédeseaquí.Estonoesparanosotros.Alcabodeunossegundoselsacerdoteserelajó,seincorporódenuevoyseacercóaStormya

Mahathir,evitandoalchico.AStormleofreció lasdosmanoscomosiesperaraquese las fueraacoger,perolasteníatodasuntadasdebarro.

—Dígalequesiquierequeledélamano,selalaveprimero.—Tienenquecavarenbuscadelarvas.Nosealarme.Sonproteínasbuenas.Mejoresqueelarroz.

Elarrozdaenergía,peronofuerza.Aunqueesunabuenafuentedehidratosdecarbono.Loshombresqueestabanjuntoalríollevabantaparrabosdearpillera,peroeldelsacerdoteestaba

tejidoenuncomplicadopatrónderojos,verdesymarrones.Mahathirestuvohablandounbuenratoconél,interrumpiéndolefrecuentemente.Eraobvioqueelcientíficoestabaexcitado.

—Hayuntipodeanimal—lecontóaStorm—.Unmono.Estagentelollamaelsanan.Noséquésignifica.Eselidiomadeellos.Elloscreenqueesunhombrepequeñito,unserhumano.Yahoraestesananlesestáhaciendolaguerraaellos.Haceunmes,creoquehacedosmesescomomínimo,casiunmillardesananllegaronaestesitioyseestáncomiendotodaslasplantascomestibles,ylagentesehaquedadosincomerysolamentetienenunpocodearroz.Yéldicetambiénquehaceunmesesemillardesananatacólaaldeayrobóelarrozydestruyósusposesiones.Tambiéndicequelossanan

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mordieronamuchagenteyabrieronavariosbebésencanal.—Elhombrehablódenuevo—.Nosésimurióalguien.Dicequevinieroncomountifón.Por todos los lados.Nohuboescapatoria.—Elhombreseñalóendirecciónalvallesindejardehablar—.Dicequedesaparecióunacriatura.Selallevaronlossanan.Sellevaronaotraniña,perolaencontraronvivaalamañanasiguiente.Creoqueestáexagerando.Cuandohayvisitanteslesgustahacerquetodoparezcaemocionante.¿Cómoibanavivirjuntosunmillardesanan?Notendríanbastantesustento.Yoconozcoaesosmonos.Subsistenengruposdedosdocenasdecriaturas.Eseessulímite.Esunmonoquetienelacarablancaymuypeluda,conpeloblanco.Parecemuyinteligenteytieneunaexpresiónmuycrueltodoeltiempo.Noesunapersona.Elloscreenqueelsananesunhumanopequeño.Bueno,estehombrenecesitadeciresaclasedecosas.Escomoseganalavida.Estagenteessupersticiosa.Levanapagar.Yal joventodavíalepagaránmás.

Entretantoelchicosemanteníadepieaciertadistancia.Elsacerdotehablósinquitarlelavistadeencima.

—Dicequenotenemosquehablarconestechicoporquehahechounpactomuyserio.Tambiénquiere saber quién es usted—le dijoMahathir a Storm—.Pregunta si es usted amigo del hombreblancoquevivealotrolado.

—¿Aquéotrolado?—Alotroladodelvalle.—Yonosoyamigodenadie.—Sivaustedahí,estaráenTailandia.—¿Yesoesunproblema?—Esunsitiodistinto,nadamás.—Estanochemevoyaquedaraquí.—La ceremonia es mañana. Tiene que hacerse mientras se está poniendo el sol y terminar a

oscuras.—¿Dóndeduermeelchico?—Enunadeestascabañas.Nosotrostambiénpodemosquedarnos.—Megustaríacomeralgo.—Ellosnotienennada.Perohayunatienda.Regresaron a la aldea.El sol se habíapuestopordetrás de las colinasdedelante.El vendedor

ambulantedelaaldeahabíalevantadosutoldoyhabíaencendidounfanalyestabadepieperfiladoporsuluz,convertidoenpresidentedeunascuantaslatasypaquetesdecomidacolocadossobredosestantes sinpulir.Stormcompróunpaquetede cigarrillos555yunabotellade cervezaTigerqueprobablementetuvieraaños,conlacalcomaníaapenaslegible.Peronosabíapeorqueunanueva.

—Hanreunidotodossusadornosysuspiedraspreciosasylohanjuntadocontodoelcauchoquehanestadorecogiendoduranteunañoylohanvendidotodoenmialdea,dondeyoloconocíausted.Yoviasucaciquecuandovinoavenderlo.Asíescomooíhablardeestechico.Levanapagar.Estechicovaaganarmuchodinero.Perovaadestruirsualma.

—Esoesloquepasasiempre,colega.Stormsebebiósucervezaatodaprisaybajolaúltimaluzdeldíalostresregresaronaldominio

del sacerdotey se retiraron a las chozas,Mahathir y el sacerdote cadaunopor su cuentayStormcompartiendo la terceraconelchico.Seacostaronenhamacasmientrasunasbrasasdecoloracrehumeabanenunhibachidepiedradebajodeellosparamanteneralejadalamalaria.Stormempapósu

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pañueloenaguaderíoysecubriólacaraconelmismoparafiltrarelhumo.Elllantodelchicodurantelanocheenteraleestropeósudescanso.Alamanecerpartióhaciael

otrolado.

Treshombresleenseñarondóndepodíacruzarelríoporunpasoestrecho.Unodeellossesumergióhastalacintura,riendoyconlosbrazosenalto,parademostrarsuprofundidad.AStormleparecióquelosotrosdostambiénlequeríanenseñarunpasoalternativo,perocomoelcaminoquesubíalamontañadeenfrenteyaeravisibledesdeallí,éllossaludóconlamano,leshizounareverencia,lesenseñóeldedoengestoobsceno,sedescalzóycruzólacorrientepocofuertesosteniendoenaltoloszapatosyloscalcetinesconunamanoylamochilaconlaotra.Enlaorillaopuestatirósuscosasalsuelodetierra,seagarróparasalirdetrásdeellasyseexaminólaspiernasenbuscadesanguijuelas,peronoencontróninguna.Loshombressededicaronasoltargrititosdeapoyomientrasélseatabalos cordones y luegomientras subía por el sendero, y después lo estuvieronmirando con actitudposesiva hasta que desapareció de su vista, como si ellos lo hubieran fabricado y lo hubieranmandadoaaquelviaje.

Cúmulosaltosenuninfrecuentecieloazul.Todavíacontabaconlasombramatinaldelamontaña.Avanzódeprisa.Alcabodeunahoraelsolcoronólacimadelotroladodelvalle.Elresplandorbajódeprisa arrastrándose por el terreno que le quedaba por delante y finalmente lo atacó a él,aturdiéndolocontodosupeso.Elsenderoseguíalafaldadelacolina,trazandounapendientesuave,perolaladeraensíerademasiadoabruptaparaquehubieraárboles.Cadavezqueunmatorralmásaltoqueelrestoproyectabaunpocodesombra,élsedeteníaenellaparaabsorberlabrisaqueveníasinpausadelvalledeBelum.

El sendero locondujoalnortehastaqueen lasalturasdioun rodeoygiróhaciael sur,de talmaneraqueahoralaladeradelamontañaquedabaalesteyledabasombra,asíquesesentóybebió.Habíallegadoaunenormesalientedetierraalotroladodelcualpodíaverelcaminoquelequedabaporrecorrer:elsenderosecurvabahaciaeloesteydespuéshaciaelnorte,manteniéndosellanohastaqueenfilabarectoendirecciónnorteporencimadelacimadelamontaña.Yalotrolado,Tailandia.

En ausencia de más dificultades, pudo llegar a la conclusión de que los encuentros ynegociacionesdelosdíasanterioresyahabíansidosuficientes,queahorasolamenteteníapordelanteterrenofísicoyqueyahabíaentradoenlaprovinciadeldiosquefueraqueahoraloteníaensupoder.Seleocurrióquetodoaquellopodríahabersidomásfácil—unacarretera,hastatráfico—viniendodelladotailandés.Peroentoncesélnohabríapagadosuentrada.

Alcabodeveinteminutoshabíarodeadoelbordeyhabíacoronadolacimanorte,desdedondesedominabauncolladodedosacressituadoentreunpardecolinaspequeñas.Montañasmásaltasalolejos.Más abajo, una casa demadera con tejado de hojalata y un pequeño establo o granero. Unarroyoangostodescendíadelpromontoriodeloesteyseadentrabadetrásdelacasayporelrebordedel collado. Los pollos raquíticos se agitaban por entre los postes de la casa, picoteando comida.Stormoyóelbalidocercanodeunacabra.

Puso rumbo al arroyo.En busca de un sitio donde pudiera dejarse caer y acercar la boca a lacorriente,siguióelaguabordeandoelclaro.Sedetuvoaveintemetrosdelosdosedificios.Delantedel más grande, bajo su toldo de enramado, y en medio de una brisa capaz de ahuyentar a losmosquitos, había un hombre blanco sentado en un banco y con la espalda apoyada en la pared demadera.

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Stormseleacercóyelhombrelevantóunamanosinmuchoaplomoparasaludarlo.Llevabaunacamisadedeportedecolorazulclaro,pantalonesgrisesreciénlavadosyplanchadosyunassandaliasdecáñamo.Delgadoyconunflecodepelocanosorodeandounacalvaquemadaporelsol.Conunapiernacruzadasobrelarodilla.

—Eh,bwana.—Buenastardes.Todalabienvenidadequedisponemosesparausted.—¿Eresbritánico?—Puessí,losoy.—Tehacefaltaunodeesoscascosbritánicosdebwana.—¿Unsalacot?Tengodos.¿Lepuedoofreceruno?—¿Porquénollevasunotú?—Nomehacefalta.Estoydisfrutandodeunpocodesombra.—¿Yquémásestáshaciendo?Elhombreseencogiódehombros.—VengocaminandodesdeLaRu.—Ah,sí.Genteamable.—¿Quién?—LosRu.—Sí.Asaco.—Nosecomenasusvecinos.Nilesencogenlacabeza.—Nolohacen.Esomegustadeellos.¿Estáustedsolo?—Ahoramismo,sí.—¿Quiénmásviveaquí?Elhombredescruzó laspiernas,sepuso lasmanosa loscostadosyse incorporóensuasiento

conlosbrazosrígidosyloshombrosencorvados.—Yoyahealmorzado,perousteddebedetenerhambre.—Estoyayunando.—Enesecasomeimaginoquequerráustedunatazadeté.—¿Tienehielo?—No.Estáa la temperaturadelarroyo.Queesbastante fresco.Vienede los terrenosmásaltos

quehayalnoroeste.—¿Nomevaapreguntarquiénsoy?—¿Quiénesusted?—Esoestáporver.Elhombresonrió.Susojosparecíancansados.SepusodepieyStormlosiguióhastaelarroyo,dondeelhombreseinclinóparaagarrarelcabo

de una cuerda y tiró del mismo hasta sacar un frasco grande de cristal dentro de una funda demacramé.

—Puedequenuestrotétengaunsaborunpocoapagado.Lohiervodurantemediahora.Entreenlacasayloatenderemos.

Stormllegósolamentealporche.Sequedóplantadoenlapuerta,mirando.Ellugarteníaunsuelodemaderabienpulido.Losenormespostigossujetoscontornapuntasenambosextremosdelasaladejabanentrarlabrisaylaluz.Viounacocinaabiertadondeelhombreestabasirviendoeltéendos

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vasosgrandes,yunapuertaquedabaaloquedebíadehabersidoundormitorio.Encuantooyóelruidodellíquido,aStormlollevaronsuspiesadentro.

—Buenosvasos—dijoelhombre—.Nadadefrascosviejos.Stormselobebiótododeprisa.Sindecirpalabra,suanfitriónlequitóelvasodedelanteyselo

volvióallenar.Diounsorboalsuyoypusolamanosobreunpequeñorefrigeradorquehabíajuntoalfregadero.

—Hoynohaypropano.Alguienlotienequetraeracaballodelpueblo.—¿Dóndeestáelpueblo?—Aunosdiezkilómetrosalnorte.—EstamosenTailandia.—Sí,porsupuesto.Porpoco.Stormsehabíaterminadoelté.—Serámejorqueledejemoselfrascoamano.—¿Cuáleslafuncióndeustedaquí?¿Cuálessurol?Izóelfrascotirandodelacuerda.—Memantengodondenoestorbo.—Sequedódepiealotroladodelapuertaconelvasoyel

frasco—.Saqueunasillaalporche,¿quiere?EsperóaqueStormsalieradenuevopordelantedeély luegosesentóenelbancoycruzó la

piernaporencimadelarodillamientrasStormcolocabalasilladetalmaneraquesuspatasquedaranapoyadasentablonesynoenrendijasysacabasumochilaysesentabaahurgarenlamismaenbuscadesusmaterialesparafumar.Stormestabadecididoaesperarmásqueelotro.Sefumóuncigarrillomaltrechoycontemplócómolospollospicoteabandeformamecánica.

—Creoquelevoyavolverapreguntarsunombre,sinoleimporta.—SargentoJ.S.Storm.Sargentodeprimera.Oloera.—¿Prefierequelollamesargento?—No.¿Prefiereustedquelollameespía?—Notrabajoparaelserviciodeinteligencia.Stormesperó.—Talvezantaño.—¿Paraquéorganizacióntrabaja?—SolucionesQuímicasAliadas.Estoyfelizmentejubilado.—¿Con«soluciones»serefiereasolucionarproblemas?¿Oadisolvercosasenácido?—Solucionesaproblemas,sí.Perosiemprenosgustóeljuegodepalabras,sargento,notema.—¿TrabajabaustedparalaAgencia?—¿LaCIA?No.Aliadasescompletamenteprivada.—¿Cuándovinoustedaquí?—Haceunpardeañosporlomenos.Déjemever.Talvezenjunio.Justoalempezarlaslluvias.

Sí.Sobreelprimerodejunio.—¿CómoestáSaigón?—Noheviajadotantocomootros.Megustaríavisitaresaciudadalgúndía.—Patrañas,hijodeputa.—HeoídoquevanaabrirunaplantadeCoca-Colaenelnorte.EnHanoi.Stormtirósucolillaaljardín.

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—¿MeestádiciendoquedirigíaustedalgunaclasedeoperaciónenVietnamdelNorte?Elhombreseloquedómirandoconlosojosentornadosydiounsorbodesuvaso.—¿Qué podía haber estado haciendo en el norte?—dijo Storm—. Alguna clase de puesto de

escucha.¿Esesoloquetieneahoraaquítambién?¿Lamismaoperaciónperoalcabodeequisaños?—Hum—dijoelhombre.—¿Cuáleslasituación,colega?El hombre se inclinó hacia delante con los hombros encorvados. No parecía exactamente

incómodo,másbienpensativo.—Yasabeaquiénhevenidoabuscar.—Metemoqueno.—Alcoronel.Elhombrereclinólaespaldaensuasientoytorciólacabeza.—¿Aquécoronel?—AlcoronelF.X.,viejoamigo.AlcoronelSands.Suanfitriónbebió.Ensusmovimientos,enladelgadezdelosdedosquesosteníanelvasoyenla

fragilidaddelapielquecubríasunuezmientrassubíaybajabaalbeber,yaparecíabastanteanciano.—Sargento,yanomeacuerdodelaúltimavezquetuveunvisitanteblanco.Asíqueresultausted

bastantepeculiaraquí.Perocreoquelosmodalesconquesepresentaustedpareceríanfueradelugarencualquierparte.Déjemequelepregunte:¿eraustedamigodelcoronel?

—Éramosmuyíntimos.—Amigo,hedicho,noenemigo.—Entendido.«¿Quiénvive?»«Unamigo.»—Chinchin,pues.—¿Dóndeestá?—Pordesgracia,elcoronelfalleció.—Nomelocreo.—Sí,escierto.Hacemucho.Alguienselotendríaquehaberdichoantesdequesepegarausted

estapaliza.—Nomelocreo.—Nomepuedoofrecerparahacerlecambiardeidea.Peroesciertoqueelcoronelmurió.—Esodijeronhaceaños.Sumujerestabarecibiendosubsidiodeviudaymientrastantosesabía

queélestabaviviendoaquí,operandoporestazona.—Yonolosabía.—Yosílosabía.Yséqueelcoronelnomurió.—Yaveo.Nomurió.—Queno,ostia.—¿Ylosabeseguro?—No,ostia.Peroconozcoalcoronel.EstállevandoacaboelplanB.—¿YcuáleselplanB?—Sedejócapturarenelsesentaynueve,sedejó,colega,comopartedeunplandeOperaciones

Psicológicas,y loquepasóentoncessiguesiendouna incógnita,peroyo lepuedodaraustedunapíldoraduracomolapiedra:élsiguehaciendoqueresulteunpoquitomásdifícilsercomunista.

—YeseeselplanB.

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—Conmúsicaytodo.—¿Yeseplanselocontóausted?—Lascosasnofuncionansiunolascuenta.Esunrolloindividual.—Unrolloindividual.—Elhombresonrió—.Ahíestáelcoronelexplicadoentrespalabras.—¿Quétieneustedenelcobertizo?—¿Sabe? —dijo el hombre—, cuando yo lo conocí, era capitán. Aunque no oficialmente.

Oficialmenteestabaapartadodelservicio.StormencendióotrocigarrilloycerrósuZippoconunruidometálico.—Ah,¿sí?—dijo.—Asíeracomofuncionabaentonces.Suunidadsepresentócomogrupodevoluntariosciviles.

América no se había llegado a unir a la guerra contra Japón. Pero el capitán sí.Algunos yanquisllevabanmuchotiempobombardeandoalosjaposantesdequeelloslesatacaranenPearlHarbor.

—Lasegundaguerramundial.LaDos.—Paralosyanquisfuelamejordelasguerras.Paramílamejordelasguerrasfueaquímismoen

Malaya desde el cincuenta y uno hasta el cincuenta y tres. Luchamos contra los comunistas y losderrotamos. El coronel estuvo con nosotros a intervalos durante todo el conflicto, incluyendo laOperaciónHelsby aquí en el valle deBelum.Es posible que él y yo cruzáramos a pie juntos estemismo claro. Puede que los dos pateáramosmi sala de estar antes de que existiera. Puede que lohiciéramosmásdeunavez.Nomeacuerdo.ÉlyyofuimosjuntosenlaPatrulladeLargaDistanciaquesaliódeIpoh:cientotresdíasdefangoydemás.Cientotresdíascorriendo.Asíescomosellegaaconoceraunhombre.Siélestuvieravivo,yolosabríaconcerteza.Nisiquieramelotendríaquedecirél.Esloquepasacuandoseconoceaunhombre.

Stormestabaapuntodecreerle.—Bueno,¿yquélepasó?—¿Buscaustedlaleyendaoeldatohistórico?—Buscolaverdad,colega.—Yomeatreveríaadecirquelaverdadresideenlaleyenda.—¿Yquépasaconlosdatoshistóricos?—Quenoestándisponibles.Loseclipsalaleyenda.—¿Cuántascancionestesabes,hijoputa?Porquesemeestánacabandolasmonedas.Elhombresepusodepie.—Déjemequelolleveaunsitio.Vengaconmigo,porfavor.Elhombrelollevósiguiendoelríoycolinaarribahastaunabrevaderosituadoenmediodeuna

arboledadetroncosaltosymuchaotravegetación,dondelaluzdescendíaentrelaspalmeraspersas,frescayhúmeda.Enelabrevaderohabíasumergidounbúfalodelquesolamenteasomabalanariz.Stormysuanfitriónmiraroncómounpardeniñosllenabancuatrocubosyselosechabanalhombrousandosendospalos.Parecíanaterrados.Elhombrehablóconellosyellosterminaronsutareaantesdemarcharse.

—Poraquí.Justo después de la arboleda, dominando el largo paisaje demontañas, el hombre puso el pie

sobreuntúmuloylamanosobreuntablóndediezpordiezcentímetrosquehabíaclavadoenelsuelofrentealmismo.

—Ahíestáelrolloindividual.

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Stormcerrólosojosytratódesentirlaverdad.Nosintiónada.—Nidecoña.—Lacoñaestáaquí.—¿Sabescuántaspuñeterastumbasllevovistas?—Notengoniidea.—Esos cabrones me han enseñado sus huesos. He probado sus supuestas cenizas, colega. He

cocinado sugrasa enuna cucharayme lahemetidoen el brazo.Son todopatrañas, colega.Cadalatidodemisangremedicequesiguevivo.

—Amímehandichoqueestáenterradoenestehoyo.—Siestaessutumba,esquenomurióenVietnam.—Ciertamente.Siestaessutumba.—Bueno,¿loes?¿Cuándoloenterraron?¿Quiénloenterró?¿Loenterróusted?—Yono.—¿Quiénloenterró?—No lo sé.Me han dicho quemurió de repente y sin explicación. Lamento decir que alguien

podríahaberledadoveneno.Esaesunaposibilidad.Unafalsedadmonstruosa.Pero¿quiéneslahabíanperpetrado?—YoloconocíaustedunavezenSaigón.Enelsesentaysieteoelsesentayocho.—Veamos.Enelsesentaysieteoelsesentayocho.Esdeltodoposible.—UstedesPitchfork.—Tengomuchosnombres.—Noseandeconjuegos.YoloconocíenSaigón.Ustedeselviejoamiguetedelcoronel.Elque

lediounhuevo.—¿Unhuevo?—Enelcampodeprisioneros,cuandoélteníahambre.Ustedlediounhuevo.—Ah,¿sí?—Éldecíaquesí.—Bueno,puesentoncesesquedebídehacerlo.—Tiene usted elmismo aspecto. ¿Tiene siempre elmismo aspecto? ¿Es que no envejece? ¿Es

ustedSatanás?—Ahoraesustedelqueseestáandandoconjuegos.—Nomeenseñetumbas.—¿Quépuedoenseñarleentonces?Loúnicoquebastaría era el coronelvivo.El coronel fumandopuroscubanosymetidoen sus

rollosdeantes.—Aquídescansaelcoronel.—Entonces,¿quéestáustedhaciendoaquí?—Yocuidodesutumba—dijoPitchfork.Yasirvieraaquellacomotumbadelcoronelodeotrapersona,yaestuvieraélvivoopodrido,su

zonapermanecía.YStormacababadeentrarenella.—Quieroverquéhaydentrodeesecobertizo.Sealejarondelatumbaysubieronotravezlacolina.Elsollesdabaenlacara,peroaleste,detrás

deellos,seestabanformandonubes.

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—Parecequevaallover—dijoStorm.—Estemesno.Nuncaenelmesdeabril.—Enséñemeloquehaydentrodeesecobertizo.Untablóncruzadosobrepuntalesdemaderamanteníacerradalapuertadelcobertizo.Pitchfork

echó el pasador hacia abajo y corrió la puerta a un lado. Stormdio un paso adelante.Bajo la luzlistadavio algo alargadoydegran tamaño echado en el suelo.No se imaginabaqué sería.Tragósalivadeformainvoluntariayaudible.Unmonstruosinbrazosnipiernas.Mirócómosucaraseibarevelando como una fotografía y pasaba a toda prisa por las innumerables fisionomías falsas delcoronel.

Pitchforkdescorriótodavíamáslapuerta.—¿Quéeseso?—Unleñodecaoba.—¿Unleño?—Un leñodecaoba.Aquíguardounmontónde leña.Yesoes loúltimoquequeda.Hastaque

consigamás.Otroprofetafalsoytramposo.Otroautorderevelacioneschungas.Stormdesenvainósucuchilloyagarróalancianoestrangulándolodesdedetrásylepusolapunta

delcuchilloenelcostado,entrelascostillasyporencimadelhígado.—¿Dóndeestáelcoronel?—Muertoenacción.—Desaparecido.—No.Fallecido.Apretómássupresa.—Cabrón,melovasadecir,otevoyajoderbien.¿Quiéncavóesatumba?—Nolosé.—Lesalióunavozcomoderana.—Dimequiénotemandoalotrobarrio.—Noséquiénloenterró.Ycuandomemandesalotrobarrio,comodices,seguirésinsaberlo.—¿Quéestáshaciendotúaquí?—Mecansédelmundo.—¿Quiéneres?—AndersPitchfork.—Hubounpuntohacemuchotiempoenqueningunodevosotrosyamepodíaismentir,cabrones,

porqueerayoelquedistribuíalasmentiras.Lamitaddevuestramierdasalíademiculo.—Estámuerto.—Mira—dijoStorm,mientrasselerompíaelcorazón—.Tengoquesalirdeestamáquina.Storm lo soltó. Pitchfork se sentó pesadamente en el suelo de tierra, abriendo y cerrando las

manosysintocarseelcuello.—Sospechoquefuistetúquienselocargó—dijoStorm.—Yosospecharíalomismosiestuvieraentuposición.—¿Ycuálesmiposición?—Desconocida.AlcabodeunminutointentóponersedepieyStormguardósucuchilloyloayudóalevantarse.—¿Tienesalgunaideadecuánprofundamenteesapersonanosquemó,colega?¿Deloprofunda

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quefuelaquemadura?—No.—Tanprofundacomocalurosoyoscuroeselinfierno,hermano.—Nomellameshermano.—Nomeniegues,hermano.PitchforksedirigióalacasayStormloviomarcharse.Regresóllevandoenlasmanosunrifle

decerrojoconelcargadorcortoyunaculataesqueléticademetalquedesdoblódesdelaempuñaduradelanteramientrascaminaba.Adiezpasosdedistanciasedetuvo.

—Creoqueesoesunadeaquellasmáquinasdelasegundaguerramundial.—YocreoqueesunM1Garand.Laversiónparaparacaidistas.Matóamuchagente.—Heoídoquesetirabausteddelosaviones.—¿Sabes?, durante la guerra, solamenteme tiré de uno. Lo pilotaba el capitán Sands. Fuemi

primeryúltimosaltoenaquellaguerra.Aunquehiceunoscuantoscon losScoutsporaquí en loscincuenta.—LevantóelrifleyaccionóelcerrojoyapuntóconcuidadoaStormdesdetresmetrosdedistancia—.Ahoratevasamarchar.

Stormsedio lavueltay se alejóhacia el surpor el sendero,por elmismocaminopordondehabíavenido.

Había pensado en seguir hastaTailandia, pero el destino le acababa de dar la vuelta. En algúnmomentodeaquellaodiseademuchosañoshabíacruzadounpasosin reconocera suguardiánnipagarel tributonecesario.Unonoreconoceaesasentidadescomoloquesonhastaquehadejadoatráselpaso.Hastaquesedisuelventodaslasfisionomíasfalsas.

¿Quépodíaquedar,quéquedabaporhacer?Desdelacabeceradelsenderoexaminóladistanciaquehabíaascendidoaqueldíaycontemplólo

lejosquehabíallegado.Mientrassesumergíaentrelasnubes,elsoldelatardeexplotóvalleabajo.Nosentíafatiga.Solamentefuerzaycalor.Estabaconvencidodequepodíaregresarabajoantes

dequesepusieraelsol.Seapresuró.Igualdedeprisaqueéldescendía,asídedeprisaseretirabalaluzdeldíadelamontaña,yélviosudestinoenredadoconeldelsol.

Seadentróenlassombras.Elvalledescansabaenunmomentoquenoeraniluznioscuridad.Conelcambio,losanimalessecallaron.Habíanempezadootravez,elprimercorodeinsectosnocturnosyllamadascrepuscularesdeaves,paracuandoalcanzóelnivelde la tierra.SeguíasinverningunacolumnadehumoniningúnfuegoqueascendieradesdeLaRu.

Llegó al punto del río donde los Falsos Guías lo habían mandado al otro lado con el felizconocimiento de que se había perdido lo más importante. Sin quitarse los zapatos se levantó lamochilamuyporencimadelacabezayseparólasaguas.

Nohabíaempezadonada irrevocable.Enel suelode las inmediacionesde laaltapiraveintenasdevelas parpadeaban dentro de tantas otras mitades vueltas hacia arriba de cáscaras de coco. Losaldeanos llevaban atuendos limpios y coloridos y parecían ocupados en tareas no esenciales,entrandoysaliendodelaschozas,manteniendofrescoslosmomentos,dandopalmadasaritmolento,perono todosalmismo tiempo, sinopasándoseel ritmodeunpardemanosal siguiente, sinquenadietodavíasecomprometiera,lacosasolamenteseestabaempezandoaconstruir.Talvezloveíana él. Tal vez habían decidido que no lo veían. El sacerdote estaba al lado de la pira llevando untocado,conelpelollenodemoñosyplumas,sosteniendounabotelladerefrescoconambasmanosy

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hablandoconMahathir.Elchicoestabadepie,almismotiempoconellosyseparadodeellos.MahathirobservócómoStormseacercabaporelbordedelríoylevantólamano.Elsacerdote

parecióimpertérrito,peroaMahathirnolegustóaquello.—Laceremoniaempiezabastantepronto—dijo.—Yalonoto—dijoStorm.—NohaidoustedaTailandia.¿Porqué?¿Porquénosehaquedadoconsuamigo?—Sinolosabes,notelopuedodecir.—Pero,Jimmy,noesbuenaideaparausted.Estehombretienealgoquehacer.Yosoycientífico,

asíqueesobvioquepuedoobservar.Peroparaustednoesbuenaidea.El chicoestabamuy rígido, con la cara tensa, respirandocondificultad.Ningunode losRu lo

estabamirando.Lasmujereshabíanempezadoacongregarse,lasmásjóvenesylasniñaspequeñasenfundadasen

sarongs,conpintalabiosycarmín,yconcuentasentrelazadasenelpelo.Detrásdeellasestabanlosniños,conlospiesplantadosenelsueloperomoviendoloshombros,vibrandodearribaabajoporlaemoción y la infancia. Encantados de estar vivos en sus cuerpos, dando saltos en sus trajes deesclavos.SodomizadoresdelaCosaVerdadera.

—¿Notieneuntrajeespecial?¿Dóndeestásudisfraz?—Novaallevarropa.Estarádesnudo.—Nihablar.Storm cogió el ritmo, primero en su interior, a continuación dando palmadas fuertes, y luego

todavía más fuertes. Todos lo contemplaron, sin aprobación ni desaprobación. Mahathir hizo ungestocomoparahacerlecallar.

Stormsepusoalladodelchicoyelevósudesafío.—¡YOSOYELVERDADEROCOMPENSADOR!Laspalmadascontinuaron,peroahoraélteníalaatencióndetodos.—¡YOSOYELVERDADEROCOMPENSADOR!Sellevólasmanosaloscostadosyagachólacabeza.ElsacerdotehablóconMahathir.Stormlevantólacara.—Dígalequeyosoyelelegido—dijo—.Estechavalesunimpostor.—Noselopiensodecir.—Puesdígaseloalchico.—Nopuedo.—Colega,nosirvequelohagapordinero.Hayquehacerloporlacosaensí,colega,porlacosa.

Hacefaltaunarazón,hacefaltaqueteenvíenlasseñalesylosmensajes.ElsacerdotehablóentonourgenteconMahathir,peroMahathirguardósilencio.—¿Quiereustedocuparelsitiodeestechico?—Noes el sitio del chico.Esmío.He sido enviado.—Hablódirectamente con el sacerdote—.

Estehijoputanosabeloqueestáhaciendo.Yoséloqueestoyhaciendo.Sédóndeencaja,séloqueesreal.

—Nolepuedodecireso.Noséquépasaría.Puedequenosmataran.—Songenteamable,colega.Amable,¿vale?—¿Entiendeustedloqueestáhaciendo?No.—Estoysacandoaestepobrechicodelatolladero.

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—No.Noentiendeustedesto.—Creíaqueeraustedmusulmán.¿Creeustedenestaparida?—Aquíenestazona,dondelosárbolessontanaltos,dondenovienenadie,lascosassonbastante

distintas.Diosestátratandoconellosdeformadistintaenestazona.—Sí…esoyalopillo,colega.Simplementenoestabasegurodesilopillabastú.El sacerdote habló de manera muy enfática. AhoraMahathir se extendió en la respuesta, y el

sacerdoteescuchóconlacabezagacha,asintiendoconlacabeza,interrumpiéndolodevezencuando.Elsacerdotehablóbrevementeconelchico,queescuchósinprotestar,yStormcomprendióque

lafarsaibaasaliralaluz.—Chaval—ledijo—,tehasmetidoenesteasuntosinarreglarciertascosasdentrodetimismo.—Estáhaciendoestoparasalvarasufamilia.—Él se lleva el dinero. Dile eso. Que se lleva el dinero. Eh, tío, el dinero es tuyo. No estoy

intentandopifiarlelapartidaanadie.Mahathirhablóconelchico.Elchicoretrocedióvariospasos,sediolavueltayseabriópasopor

entreelcírculodemujeresyelcírculodeniñosysequedódetrásdelosmismos.—Lo sabía —dijo Mahathir—. No soy supersticioso. Pero es bastante habitual ver el futuro.

Muchagentelove.Eshabitual.Yyovielfuturodeusted.Intentéavisarlo.Elsacerdotesecolocóasulado,sepusoaberrearenunidiomaestranguladoyleplantólamano

aStormenlafrente.Laspalmadascesaron.Unaancianagimió.Stormlevantólosbrazosenaltoygritó:—YOSOYELCOMPENSADOR,CABRONAZOS.YOSOYELCOMPENSADOR.El sacerdote volvió a dar una palmada. Dos. Y el ritmo volvió a reanudarse. Los demás lo

siguieron.Loshombressecongregaronenuntercercírculoalrededordeellos.Elsacerdotehizounaseñal

aalguienyelcaciqueseadentróenelcírculoconStorm,elsacerdoteyMahathir.Llevabaunhacha.Loquehayaquehacer,sehará,lesprometióStormalosPoderes.Elsacerdotesedirigióenvozmuyaltaalcacique.—Leestádiciendoquereúnaalosdiosesdelaaldea.Elcaciquelevantólamanoyloscírculosseabrieronparadejarpasarauncuartetodemujeres,

cadaunadelascualesagarrabalaesquinadeunamanta.Ladejarondelantedelsacerdote:unmontóndeestatuillasdemadera,lamayoríanomásgrandesqueunamano,yunascuantasdehastalamitaddeltamañodecualquieradesusadoradoresRu.Lascuatromujeresecharonlascabezashaciaatrásyberrearoncomocriaturasmientraselcaciqueatacabalasfigurasconsuhacha.Mientrassededicabaahacerlaspedazos,ymientraslasmujeressearrodillabanpararecogerlostrozosyañadirlosalapira,Mahathirdijo:

—Rompenasusdiosescaserosylostiranalfuegoporquelosdiosesnoloshanayudado.Estosdiosestienenquemorir.Puedequeelmundotermineconlamuertedeestosdioses.Elsacrificiodelalmadeldesconocidopuedeevitarelfindelmundo.Yentoncessurgirándiosesnuevos.

Stormobservóaquienes loobservaban.Apenasse lesveía lacaraa la luzdelasmuchasvelasque tenían esparcidas al azar entre sus pies. No parecían alegres, ni tampoco solemnes—con lasbocas entreabiertas, asintiendo con las cabezas mientras daban palmadas y más palmadas y máspalmadas—,parecíanpreparadosensusalmas.

Luegoelsacerdoteseplantójuntoalcaciqueyhablóenvozmuyalta.

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—Vayaahí—ledijoMahathiraStorm—.Ahoralovanadesnudar.—StormfueconelsacerdotemientrasMahathirdecía—:¡QueDiosloayude!

El sacerdote tenía en las manos las esquirlas de los iconos. El cacique hizo una reverencia yseñalóloszapatosempapadosdeStorm.Stormselosquitóconlospies.ElcaciqueseagachómástodavíaytocóelpiedeStormypellizcólateladesucalcetín.Apoyandolamanoenelhombrodelcacique,Stormsequitóloscalcetinesyseincorporódenuevo.Dosmujeresjóvenesseadelantaronyledesabotonarony leabrieron labragueta.Élpensóenhacerunchiste,perosehabíaquedadosinhabla.Lequitaronlamochiladelaespaldayluegolacamisayloayudaronasalirdelospantalonescortos y los calzoncillos y luego se retiraron al interior del círculo. Las palmadas rítmicascontinuaron.Ahoraestabanenellotodoslosparesdemanos.Stormestabadepiedesnudo.

DelantedeStorm,elsacerdotemetiólamanoenelbolsillodesutaparrabosenbuscadeunahojade papel doblado que desdobló y sostuvo cerca de su cara—Storm no vio nada en el mismo—,despuéshablóenvozmuyaltaconlosRuylevolvióamostrar lapáginaaStorm.Yhablóconelcacique.

Elcaciquegritóunaorden.Unhombreletrajounalanza.Elsacerdotehabló.Elcacique ledio la lanza.Elsacerdoteensartó lapáginacon lapuntade la

misma, desfiló hasta la pira y, extendiendo la lanza tan alto como pudo, poniéndose de puntillas,encajóelpapelentrelosleñosylosoltódelapuntadelalanza.

—Espera—dijoStorm.Sepusodecuclillasjuntoasumochilaysacósucuadernodentrodesubolsadeplástico.Arrancó

laúltimapáginaydevolvióelcuadernoasusitioypermaneciódepieconlapáginaenlamano.—Esunpequeñopoema,colega.ElsacerdoteseacercóaStormconlapuntadelalanzaextendidayaceptólaofrendaylallevóa

lapiraylaconvirtióenpartedelcombustiblesagrado.Storminformóatodoelmundo:—COMPENSACIÓN,NENA,COMPENSACIÓNESTANOCHE.

Elsacerdotehablóenvozmuyaltaytirósuarmaalsuelo.Stormagachólacabeza.Lamanta,queyaestabareducidaajirones,seencontrabacasivacíadelosrestosdelosdioses.El

sacerdoterecogiólasúltimasastillasconlasmanos.Elcaciquearrastrólamantahastadejarlaaunosmetros de la pira y entonces los Ru ensancharon sus círculos. Se puso a alisar sus bordes conmeticulosidady tomándoseunaseriedepausaspara levantar lavistaalcielo,comosiseestuvieraguiandoporunaseriedeestrellasinvisibles.

Elsacerdotesostuvolasesquirlasdeiconoscontraelpecho.SeplantódelantedeStorm.VolvióahablaryStormoyólavozdeMahathirprocedentededetrásdeloscírculosdelosRu:—Arrodíllese.Yasílohizo.Elsacerdotetambiénsearrodillóyhablóenvozbaja,yelcaciqueayudóaStorma

tumbarsedeespaldassobrelamantamutilada.SobrelabarrigadeStormelsacerdotedejócaerlasesquirlasehizounmontoncitoconlasmismas.

Habló,yacontinuaciónStormoyóaMahathir:—Quierequesepaustedqueestoessolounsímbolo.Esunfuegosobresucarne,peronolovan

aencender.Noloquemaránfísicamente.Elegidoparasufrirpenitenciaporquenoquedabanadiemás.Atravesandozonasdesmesuradas,la

luzdemasiadointensaodemasiadodébil,nuncalabastanteluz,nadaquedecirleaél,sinsabercómo

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volveracasa.Todavíaquedabaunafiguraporrevelarseensuverdad.Stormgirólacabezaparaseguiralsacerdotemientrasesteregresabaalapira,dondesedetuvo

pararecogersubotelladerefrescoyroció labasecon lamisma.Unoloradiéselseelevóporelaire.El cacique trajo dosmitades de coco resplandecientes y cada uno de ellos usó una vela paraencenderelfuego.

El resplandorempezódespacio.Amedidaqueascendíapor lapira, laspalmadasacelerabansuritmo.Lamadera húmeda estallaba y salía disparada entre las llamas. La conflagración devoró lacúspide.Ungritoseelevó.Amedidaqueel fuegoempezabaa rugir,Stormsintióunabrisaque leacariciabaelpechodesnudoyoyóaunamujerquechillabacomosifueraunciclón.Elsacerdoteibahaciadelanteyhaciaatrásporentreel intensocalorarrojandolíquidoa las llamasanaranjadas.Elfuegosiseabaysoltabahumoyelhombresemovíadeunladoaotro,proyectandounasombraazulsobrelosvapores.

Delosárbolesdealrededorveníaunruidoparecidoaunacascada,eldelaszarpasquearañabanylasmaldicionesdelosdemoniosexpulsadosalvacío.

Másmujeresgritaron.Loshombresaullaban.Laselvamismagritabacomosifueraunamezquita.Stormestabatumbadodeespaldasdesnudoycontemplólanieblayelhumoqueseelevabanenmediodelacolosalluzdelfuegoyesperólaluzblanca,lasdeidadespacíficas,lacaradelpadre-madre,laluzdelosseismundos,elamanecerdelaluzhumeantedelinfiernoylaluzblancadelsegundodios,losfantasmashambrientosquemerodeabanllenosdedeseovoraz,losdiosesdelconocimientoylosdioses de la cólera, el juicio del señor de lamuerte ante el espejo del karma, los castigos de losdemonios,ylahuidapararefugiarseenlacuevadelúteroqueloportaríadevueltaaaquelmundo.

Supoemasubiótrazandoremolinosenformadeceniza.Decía:

VIETNAM

LecompréunasgafasRay-BanalDiabloYunencendedorquedecíabarTuDo69CervezafríachicapotenteperdonacolegaTíoeseZippoloexplicatodo

TíocuandoestéenlatumbanoquieroiralCieloSoloquieroestartiradomirandoelCieloLoúnicoquemehacefaltaesverloalmuycabrónNohacefaltaquemepongáisenélEnciendeelgasdemijaulaMebeboelvenenoMándameunasesinoMebeboelvenenoDemoniosmuertosenmistripasMebeboelvenenoMebeboelvenenoMebeboelvenenoYnodejodereírme

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***

El viento era cortante y el sol de la tarde bastante cálido, almenos para ser finales de abril, y almenos para ser Minneapolis. En un buen día seco, ella podía caminar cuatrocientos metros sinmolestias,sentarseydescansarsolamenteunminuto,ycaminarotravezlamismadistanciaantesdevolver adescansar.Dejó su coche enun aparcamientoy subastóndentrodel cochey caminó tresmanzanas hasta el Mississippi y cruzó por el puente para peatones. Su movimiento al pasar losvehículospordebajo le subió conun temblorpor las espinillas.Ledolían lasdos rodillas.Estabacaminandodemasiadodeprisa.

ConelhotelRadissonalavistaempezóacruzarlacalleKellogg,yunacamioneta,unadeesasfurgonetasdealquilerparamudanzas,estuvoapuntodeembestirla,pisóelfrenoafondo,perosinpoder parar, y la esquivó por tan poco que las letras rojas de su costado fueron durante mediosegundoloúnicoqueexistió.Elladiounsaltoatrás,lasangrechispeóensusvenas:aquellavezhabíaestadoapuntodemorir.

Selehabíacaídoelbolsoenlaalcantarilla.Alagacharsesuavementesobreunarodillaenfundadaensupantalóndetrajedepoliéster,deprontoseacordódeunaépocaenquelacuestióndesupropiasupervivencianolehabíainteresadolomásmínimo.Aquellaépocagloriosa.

Gingerlaestabaesperandoenlamismaentradadelacafetería,entremacetasdehelechos.Unadeaquellasmujeresa lasque todoelmundo llamamamá,peseano sermayorqueel resto. ¿Cuántotiempohacíaquenoseveían?Quinceaños,dieciséis.DesdequeTimothysehabíamarchadoa lasFilipinas y Kathy lo había seguido. Lo más probable era que Ginger ya llevara media décadaviviendoen lazonadeMinneapolis, igualqueellamisma,peroningunade lasdoshabíahechoelesfuerzodeponerseencontacto.

—¿Todavíapuedollamartemamá?—¡Kathy!—Metengoquesentar.—¿Teencuentrasbien?—Haestadoapuntodeatropellarmeunacamioneta.Semehacaídoelbolso.—¿Ahoramismo?Peroestásbien,¿no?—Solomehequedadosinaire.Gingermiróasualrededor,esperandoaquealguienledijeradóndesentarse.Sehabíaengordado

quincekilos.—Tehabríareconocidoencualquierparte—dijoKathy.—Oh…—dijoGinger.—Perotúnopuedesdecirlomismo.—Bueno,todosenvejecemos.¡Peroquéestoydiciendo!Simplementemealegrodeverte,y…Eltrabajodementirleretorciólosrasgos.Lodejóestar.—Yoestoyunpocomáshechapolvo.—Noestádemasiadolleno.Esdomingo.—¿Quétepareceahí?—¡Juntoalaventana!Nohayvistas,peroporlomenos…—Tengounostreintaminutos.—Porlomenoshayluz.Osea,síquehayvistas—dijoGinger—,peroloúnicoqueseveesel

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tráfico.—Sesuponequetengoquedarundiscurso.—¿Undiscurso?¿Dónde?—Oalgunoscomentarios.Hayunaespeciederecitalaquíallado.—¿Aquíallado,dónde?—EnelRadisson.Enunadelassalasparaconvenciones.—Unrecital…¿Quieresdecirconpianosyesascosas?—Esperoquetengandescafeinado.—Hoyendíatodoelmundotienedescafeinado.Pidierondescafeinado,yGingerpidióunbollodecanelaydeinmediatollamóalacamarerapara

cancelarlo.Lacamarerasacóelcafédeuntermoylesllevódostazas.—Sinoleimportamucho—dijoKathy—,¿mepuedetraerlechedeverdad?—Ahoravengo—dijolacamarera,acontinuaciónsealejóyyanolavolvieronaver.—¿Quéclasederecitales?—Nolosé.EsdebeneficenciaparalasMacMillanHouses.Parahuérfanosvietnamitas.Asíqueyo

estoyeneltajo.—Ah,ya.¿Hasescritoundiscurso?—Puesno.Meimaginéque…osea,solamenteesunpococomo:«Graciasporeldinero,ahora

dennosmás».—ElEternoDiscurso.—Asíquesientoquenopodamosalmorzarcomoesdebido.—Nohayproblema.YovoyaverunaobradeteatroalotroladodelríoconJohn.Unmusical.

Sonrisasylágrimas.—Ah,eseesbueno.—Loes,loes.—Yohevistolapelícula.—Pero siempre me ha parecido que el título era un poco tonto—dijo Ginger—. Porque las

sonrisassonlocontrarioquelaslágrimas,¿no?DeberíanllamarloSonrisasolágrimas.—¡Nuncasemehabíaocurrido!ElbolsodeGinger,queerapequeñoydecueroblandoygris,estabasobrelamesajuntoasutaza

decafé.EllaloabrióylediolacartaaKathy.—Sientomuchoesto,Kathy.—Puesnolosientas.¿Porqué?Noentiendoporqué.—LlegóalaoficinadeOttawaysepasóunasemanatiradaallí.LaencontróColinRappaport…—OseaquesiguesconWCS.—¿Sigo?Parasiempre.—¿CómoestáColin?—Supongoqueestábien,perolaverdadesquenotenemosningúncontacto.Élseacordódeque

túhabíasvueltoaMinneapolisysinllamarninadalamandóanuestraoficina.Supongoqueintentóencontrar tu número de teléfono y no lo consiguió.HaymuchasKathy Jones, pero él no sabía tunombredecasada.¿Siguescasada?

—Sigocasada.Conunmédico.—¿Médicoprivado?

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—No.TrabajaenurgenciasdelSaintLuke’s.—SupongoqueesmejorqueCanadá.—¿Porqué?—Nolosé.Osea,porlamedicinasocializada,peroquéséyo.¡Nosédequéestoyhablando…!

¿Cómoteapellidas?—Benvenuto.¿Ytúqué?¿SiguesconJohn?—Sí.Esonohayquienlocambie,supongo.—¡Esterrible!Preguntarleaalguienporsumaridoydecir:«¿Seguísjuntos?».—TumaridonoesdelSéptimoDía,¿no?—¿Carlos?No.Élestodociencia.—Oh,Carlos.Benvenuto.—Esargentino.—¿Quéinclinacionestiene?Religiosas,digo.—Estodociencia.Carecedeespiritualidad.—Nuncatehevistoenlaiglesia.¿Acuálvas?Osea…—Yanovoy.Silenciotorturado.Kathysefijóenlagrancantidaddecuadrosquehabíaenlasparedes.Arteno

figurativo.Aquelerauncaféparaintelectuales.—¿Hasperdidolafe?—Supongoquesí.Ginger todavía teníaaquellaexpresiónperpetuamentealtivaen lacara,consombrasdemiedo;

siempre había tenido un aspecto preocupado y a la defensiva, a punto de romper en un llantoculpable,siempreparecíaapuntodeconfesarqueseodiabaasímisma:unaimpresiónfalsa,yaquesiemprehabíasidoamigadetodoelmundo.

—Tal vez no hayas perdido la fe, Kathy. Tal vez no exactamente. Nuestro pastor dice que elespíritumás sano es aquel quehapasadopor los lugares secos.Pero aun en los lugares secos, laiglesiapuedeayudar.Enloslugaressecosmásqueenningúnotro,¿noteparece?¿Porquénovamoselsábadoqueviene?Venconmigo.

Laverdaderaqueteníaunacaramaravillosa,queascendíaysesumergíaytellevabaconella.—Yahaceaños,Ginger.Yanosientoelimpulso.—Vendetodasmaneras.—Creoquenuncalosentí.CreoqueibaporTimothy.—¡Está claro que Timothy lo sentía! Le hacía resplandecer. Envolvía a todo el mundo que lo

rodeabaynoselevabaatodoscomosifueraunamarea.—Yalosé—dijoKathy—.Perobueno…Enlamesadeal ladoestabansentadasunaancianayunamujerdemedianaedad,madreehija,

supusoKathy, laancianahablandoconvozmonótonay lahijaescuchandoenun silencio llenodeodio.Kathydistinguiólaspalabras«y…pero…osea…».

—Bueno—dijoGinger—,enfin.—SeñalólacartaquehabíajuntoalplatodeKathy—.AsíqueColinlamandóaSaintPaul.YyosigoenSaintPaul.

—YyoestoyenMinneapolis.—¿Cuántotiempollevasdandoclasesenlafacultaddeenfermería?—Cuatro…no,cinco,desdeelsetentaysiete.Hizocincoañosenoctubre.

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—¿Eraamigotuyo?—¿Quién?—Benét…—¡Oh!Elsobreblanco,abultadoporelbuenfajodepáginasquedebíadehaberdentro,conlaesquina

derechacubiertadesellosdemuchoscolores,estabaremitidoporWmBenét,PrisióndePudú,KualaLumpur,Malaisia.Ellaloabrióconcuidado.Unrecortedeperiódico:lafotodeunhombreesposado.¿Acaso no era el canadiense, William French Benét, a quien los tribunales malayos habíansentenciado a muerte hacía poco? ¿Sentenciado a la horca por traficar con armas? Canadá habíaprotestadoporlasentencia.Yluegolohabíanahorcado.Elpresolehabíaescritoaella,elhombrecondenado,yaquellaerasucarta.Lospresosdisponíandetodaclasededirecciones,cualquierclasedeorganizaciónbenéfica,cualquierplayaerabuenaparaunhombrequeseahogaba,pero¿dedóndehabría sacado aquel el nombre de Kathy Jones? La carta contenía varias —muchas— hojas decuadernoescritasamanoydobladasentornoaunainstantáneadediezporquince:variasdocenasdepersonasysuequipajedescabelladamentemisceláneorodeandounyipnifilipinoalquelefaltabaunarueda.Todaslascarassonrientes,todoslospechoshinchadosdeorgullo,comosiacabarandecazarelvehículoconlanzas.

«Hacemuchotiempo»,empezabalacarta…

QueridaKathyJones,

QueridaKathy.

QueridísimaKathy,

Lasangreseleagolpóenlasextremidadesyenlacaracomosiacabaradesumergirlasenaguacaliente:lamismasensaciónquehabíatenidoveinteminutosantescuandolafurgonetahabíaestadoapuntodeaplastarla.

Hacemuchotiempohubounaguerra.

Elladejólacarta.Echóunvistazoalrestaurante.—¿Teencuentrasbien?Ellacogiólaspáginasylasdoblóentornoalafoto.—¿Esalgomalo?—Mamá.—¿Sí?—¿TeacuerdasdeTimothy?—¿Cómo?—QuesiteacuerdasdeTimothy,osea,siteacuerdasmuybien.—Sí,claro—dijoGinger—.Piensoenélamenudo.Conocerlemecambió.Mehizounapersona

distinta.Esoesloqueestabadiciendoantes.Quemecambiódeverdad.—Yanomeencuentroconnadiequeloconociera.Nunca.—Quería decirte que siento lo deTimothy.Te escribí justo después, pero ahora nos vemos en

persona,y…hacemuchotiempo,yalosé,hacemuchosaños,pero…

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—Gracias.—Erauntipoextraordinario.—Notengorecuerdosdeél.—Oh.—Anteslosrecuerdosmeveníancomopicadurasdeabeja,pum,salíandelanada,peroyanome

llegan.Peroavecesmevieneunacosaurgente,muyurgente…unasensación.—Yaveo…Bueno,no,nodeltodo.—Unpuñomeagarraelcorazónytirademícomounperroquemedice:«Vamos,vamos…».—Bueno,supongoquees…quees…bueno…comprensible,enciertamanera.Y…—Noteconozcolobastantecomoparahablarteasí,¿verdad?—¡Kathy,no!Osea,sí…—Perdóname—dijoKathy.—Claro.Claro.Claro.Sedirigióallavabodemujeresyallídejóelbolsojuntoaunodeloslavabosyseechóaguaenla

cara.LediograciasaDiospornousarmaquillaje.Semiróenelespejo.Alguienhabíahechounapintadaenlasbaldosasdealladodelmismoconrotuladorindeleble:

niñaeléctricaselopasabiensiendomala

Elcuartodebañoapestaba.EnVietnamsiemprehabíasangreybasura tiradaspor todos lados,pero todo había pertenecido a Dios, era la inmundicia impersonal de Dios. Aquí en los bañospúblicosellaolíalosasuntosdeotrasmujeres,yleresultabaalgoextranjero.

Seencerróenuncubículoy se sentócon lacartaenel regazo.Leerlaera lomenosquepodíahacer.Conunnudoenlagarganta,desdoblólaspáginas.

QueridaKathyJones,

QueridaKathy.

QueridísimaKathy,Hacemuchotiempohubounaguerra.

Hubo una vez una guerra enAsia que tuvo entre sus tragedias el hecho de que vino después de la segunda guerramundial, unaguerramoderna que sin embargo había conseguido conservar o revivir algunas de las glorias y romances de las guerras anteriores.AquellaguerraenAsia,sinembargo,nogenerómásromancesqueunaseriedemitosinfernales.

Entrelosmoradoresdeaquellaguerraqueibanaquedardesfiguradosporella—incluso,osobretodo,desfiguradosantesímismos—,habíaunajovenviudacanadienseyunjovenamericanoquesegúnelmomentoseconsiderabaasímismoelAmericanoImpasibleoelAmericanoFeo,peroquenodeseabaserningunodeambos,sinoqueloquequeríaeraserelAmericanoSabiooelBuenAmericano,aunqueacabóviéndoseasímismocomoelAmericanoRealyalfinalsimplementecomoelPutoAmericano.

Ese soy yo.Me llamoWilliam Benét. Túme conociste como Skip. Nos vimos por última vez en Cao Quyen, Vietnam del Sur.Todavíallevobigote.

DespuésdeirmedeVietnamdejédetrabajarparalosgigantescoscriminalesparalosquetrabajabaalosqueservíacuandoteconocíyempecéatrabajarparaotrosdetamañomedio.Unhorariodemierdaysincomplementossalariales,perolaéticaeramásclara.Ylosriesgoseransencillos.Prosperabashastaquetepillaban.Entoncesloperdíastodo.

¿Ydequétrabajo?Unpocodetodo.Contrabando.Tráficodearmasyesascosas.Unavezrobéuncargueroenterounavezy lovendí en China. Un carguero. (No te puedo decir en qué ciudad lo vendí porque alguienNuestro querido e ilustre Alcaide Shaffeeprobablementeleamicorreoantesdemandarlo.)Sobretodotráficodearmas.

EsoesloquemehatraídoalcalabozoaquíenKualaLumpur.EsuncrimenquesecastigaconlapenacapitalenMalaisia,asíloha

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establecidoelmismogobiernoquecompraarmasaAmérica.Somostodoslomismo,perocomohedicho,desdemiladodeltelescopiola ética esmás clara. O tal como x le dijo a x, yo tengo un solo barco yme llaman pirata. Tú tienes una flota entera y te llamanemperador.Nomeacuerdodequiénlodijo.

Paranoextendermedemasiado,desdelaépocaenquetúmeconocistecomoBenéthevividobajounadocenadealias,niunodeloscualesfueemitidoporningúngobierno.Hellevadounavidadediversiónycaprichos,unaverdaderavidadeaventuras,ynuncaesperéqueduraramucho.Cuandomevaya,queserápronto,nolosentiré,nomeiréarrepentido.Yentodocaso,comosolíadecirmitío,lasaventurasnoempiezanaserdivertidashastaquesehanterminado.¿Ofuistetúquiénmedijoeso?Entodocaso,estasehaterminado.Unapartedeestoqueteestoydiciendoesunpocofachada,unpocodebravuconería,peroensumayorparteesverdad.Dehecho,siestanotatellegaalgunavez,lamentoinformartedequeyamehabránahorcadoajusticiado.¿Ejecutado?Alguiendeberíadecidircuáleslamejormaneradedecirlo.

Tengounaesposa concubina y tres hijos enCebúCity, Filipinas.Es algo que pasó sin comerlo ni beberlo.Creo que ella diría lomismo.Perocreoquemecaenbien loschicos.Sonadolescentes,muymajos.Hace tiempoquenolosveo.CiudadCebúsevolvióunpocodemasiadocalurosaparamí,enmateriadefuerzasdelaley,yellanoquisomudarseaManila.Leencantasuclanytodoeso,nopodíaabandonarlos.SellamaCoraNg.

Sitequedaalgodesentidocomún,tusdíasdeviajaryasehabránterminado,perosiresultaquepasasporallí,paraenlaBoutiqueNgcercadelosmuelles,preguntaporCoraysalúdalademiparte.

Elalcaidemedicequeelcónsulcanadiensevienehoyyquelepuedopasartodaslascartasquequieramandar.Elcónsulyyonosodiamosyyono ledejoquemevisite, peroél tienequevenirde todasmaneras, sobre todoen«LosÚltimosDías»quepasoaquí,solamenteparaguardarlasaparienciasdelantedelaprensa.Asíquesupongoqueestacartasaldrámañana,yqueestoesunholayunadiósdepartede(confíoconfío)unviejoamigo.

Me han tenido aquí desde el 12 de agosto.Hoy es 1 de abril, el día de los Santos Inocentes, que sería un día apropiado paraterminarel largofiasco,ysinembargomiejecuciónnoestáprogramadahastael6deabril.Heesperado tantoparaescribirteparanotenerquepasarmemuchotiemposentadopreguntándomesilacartateibaallegarysimeibasaresponder.

Acabodecenar.Ahoraempezaréunayunodeseisdíaseiréalahorcanutridosolamenteenelalma.¿Ycuálhasidomilaúltimacenadelcondenado?Lomismodesiempre,arrozenunaespeciedecaldodepescado,ydospanecillos.Bonappétit.

Kathy,creoquetequise.Nuncamepasóconnadiemás.Mellevoturecuerdoconmigo.Ytedoylasgraciasacambio.Tequiere,

Skip2deabril

El alcaide vino anoche a convertirme a Jesucristo y recoger mis cartas, pero esta no se la di. Supongo que esperaré unos días.Supongoqueodio

Alguienentróenelbaño.Ellareconociólavozdelaancianaquehabíaestadosentadaalamesadeallado.

—¿DijoEugenedequéhabíamuertosuhijo?—Eugenenuncatuvoningúnhijo.—¿Deunataquealcorazón?Lasdospuertasdellavaboseabrieronycerraron.Kathymiróel reloj.Era tarde.Guardó laspáginas en subolso, se incorporópara salir ypasó

juntoalaanciana,queestabafrentealespejoconlacabezagachaymirandoelsuelo.EllaregresóyencontróaGinger,sedisculpóysemarchó.Se dirigió al hotel Radisson Riverfront, la primera puerta al doblar la esquina, y en el lobby

buscóconlamiradaeleventodeMacMillanHouses.Supusoquelafunciónincluíaalgoparamujeresjóvenes,osobremujeresjóvenes,ohechoporellas,yaquehabíamuchaspresentesenellobby,muyjóvenes,dedoceotreceaños,todasellasguapas,explosivasyatolondradas,muymaquilladas,comosifueranarepresentarunaobrateatral,consusimperfeccionesresaltadasporaquellaacentuacióndesubelleza:patizambas,cinturasbajas,muslosamoratadoscon faldascortas,probablementeporqueteníanfrío.

Siguiendolasinstruccionesquedabaunaplacadehojalatasituadajuntoalosascensores,cruzóellobbyyrecorrióunlargopasilloencuyofinal,sentadaaunamesa,habíaunamujercondoscajasde

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zapatos. De las puertas dobles abiertas del auditorio venía el ronroneo amable y amplificado dealguienqueleíaundiscursodeunahojadepapel.

—¿VieneustedparaeldesfiledemodadeMacMillan?—Bien.Nomeheequivocadodesitio.—¿EstádelaAalaL,odelaMalaZ?—CreoqueestoybuscandoalaseñoraRand.Tengoqueintervenir.—Bueno…laseñoraKeoghestáabajo.—MetemoquenoconozcoalaseñoraKeogh.CreoquehetratadoconlaseñoraRand.—LaseñoraRandestáinterviniendoahora.—¿Creeustedquepuedoentrarysentarme?—Oh—dijolamujer.Parecióquelaidealeentrabamal—.Vaahaberunintermedio.—Opuedobuscarlaenelintermedio.Mesentaréaquí.—Salvoporlasillaylamesadelamujer,

lazonaestabadesnudademobiliario—.Oiréallobby.Probaréavolverdentrodeunosminutos.—Sinoesproblema…Sinoleimporta…Losiento…—No—dijoella,completamenteavergonzada—.Llegotarde.Losientomucho.Enelvestíbulosesentóenunasillacontapizadodecueromarrónyremachesdehojalatayabrió

subolso.

2deabril

El alcaide vino anoche a convertirme a Jesucristo y recoger mis cartas, pero esta no se la di. Supongo que esperaré unos días.Supongoqueodiodeciradiós.YtampocomeconvertíaJesucristo.

UnavezpenséqueyoeraJudas.Peronoesasícomosoy,paranada.SoyeljovendeGetsemaní,eldelanochequearrestaronaJesucristo,eltíoguarroquesequitólaropacuandolamultitudloagarróy«huyódeellosdesnudo».

CreoqueatiteinteresaelconceptodelInfierno.Recuerdoqueerasbastanteexpertaeneltema.ElNovenoCírculodel«Infierno»deDanteestáreservadoalostraidores…

AlossuyosAsupaísysucausaAsusinvitadosAsusseñoresybenefactoresYohetraicionadoAlosmíosporlealtadamisseñoresAmisseñoresporlealtadamipaísAmipaísporlealtadalosmíos

Micrimenfuepensarentodasesascosas.Convencermeamímismodequepodíahacerdeárbitrodemispropiaslealtades.Alfinal,contantocambiodelealtades,heconseguidohetraicionadotodoaquelloenloquecreía.

Tengo que contenerme para no escribir todo lo que se me ocurre. Tengo la sensación de que podría apuntar hasta el últimopensamientoydescribirhastalaúltimamoléculadeestaceldayhastaelúltimomomentodemivida.Ytengotiempodesobra.Tengotodoeldía.Perounacantidadlimitadadepapel,ytalveztuPeronomuchopapel,nitampocomuchafeentupaciencia,asíquevoyarefrenarmispensamientos.

3deabril

Estamañana han ajusticiado, ejecutado, o en otras palabras han colgado a un tipo, a un líder de una banda china.Lo hacen aquímismo en el patio de la prisión, la Prisión de Pudú, bastante cerca del centro deKualaLumpur, a unos cienmetros de donde estoysentado, aunque desde esta celda no puedo ver la horca. Las celdas del otro lado del pasillo tienen la vista completa. Pero loscondenadosno.Nosmantienenalotroladodeledificio.Simecuelgoconlasmanosdelosbarrotesdemiventanapuedoylevantolacabezapuedoverlostejadosdelascasasquehayalotroladodelacalle.Laprimeravezqueecheunvistazoalpatíbuloserálaúltima.

Hayunoscuantosazotesconunavara,eseeselcastigopreliminar,peronooímosningúngrito.Oporlomenosyonoloheoído.Eltipodeestamañanaeselcuartoquesecargandesdequeyo lleguéenagosto.Supongoquese lomerecía, incluso losazotes.Estas

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bandaschinassonchungas,chungasymalvadas.Talvezestétapandomimiedo.Noesmiintencióndarlaimpresióndequemeburlo.Otalvezsílohago,porpuronerviosismo,pero

noquieroquepiensesquemevoyalahorcaconunaactitudburlona.Dentrodetresdías,todoseacabó,voyamorir.Conelestómagovacío.Sinmásúltimacenaquelaoracióndeunnocreyente.Sitútodavíatienesfe,Kathy,rezapormí.Rezapormísitodavíatienesfe.

4deabril

EnVietnamdelSuryopensabaquemehabíandejadofueradelequipo.Quemehabíanapartadoaunsitiodondepudierapensarenlaguerra.Peroenunaguerranotepuedenapartardelequipo,yenunaguerranosepuedepensar,nohayquepensarnunca.Laguerraesacciónomuerte.Laguerraesacciónocobardía.Laguerraesacciónodeserción.¿Entiendeslaidea?Laguerraesacción.Pensarllevaalatraición.

Mitíomedijoqueunavezhabíavistoaunsoldadoquesetirabaencimadeunagranadademano.¿Túcreesqueeltiposelopensóprimero?No.Elvaloresacción.Pensarescobardía.

Elsoldadosobrevivió.ElbichoLagranadaeradefectuosa.Apuestoaquepensóenellodespués,sinembargo,ymucho.Entre lagentealaqueintentabasalvar,aquieneshabríasalvadodehaberexplotadolagranada,estabamitío.MitíoFrancissobrevivióaquellanoche,aunquelaguerraacabóporcobrarsesuvida.Alolargodelosañosheoídorumoresdelocontrario,peroéleradeesagentequegenerarumores,elviejotíoFrancis.Untipoconporlomenostrestumbasdelasqueheoídohablar,yprobablementemás,simehubieramolestadoenpreguntarporahí.PeroyoséqueestámuertoyenterradoenMassachusetts.

Yosoyellegadodemitío.Despuésdequeélmuriera,suespírituentróenmí.Élmuriópocodespuésdequeyotevieraporúltimavez,Kathy.Solamenteunosmesesdespués,creo.

Creoqueloconocisteunavez.Lollamastepícaro.Eraunodeesostiposqueparecenhechosabasederocaspequeñas,conlamásgrande en el medio. Llevaba el pelo gris a cepillo. ¿Te acuerdas de los peinados a cepillo? ¿Te acuerdas demi tío? Era bastanteinolvidable.Solíadecirqueesmásfácilconseguirperdónquepermiso,quenocuestionestusoportunidades,quenoesloquehacesloquelamentas,sinoloquenohaces,cosasporelestilo.Semurióysuespírituentróenmí.Hubociertasdudasacercadedóndehabíamuertoenrealidad,peronopormiparte.Siporalgunacasualidadestuvieravivo,suespíritunopodríahaberentradoenmí.

Por favor, no creas queme estoy poniendomístico. Cuando semuere alguien cercano a ti creo que es una experiencia bastantegeneral,bastantevulgar,empezarafijarseenquecómotehaninfluidoytalvezempezaracultivaresasfomentaresasinfluenciasparaqueflorezcan.Paraquesiganviviendonuestrosmentoressiganviviendodentrodenosotros.Esoesloúnicoqueestoydiciendo.Nadadeposesiónamanosdeespíritusancestralesninadadeeso.

5deabril

EsodejaaDios.Estoy peligrosamente cerca de rechazar el perdón.Demorir impenitente, por culpa de la rabia contramímismo.Morir sin haber

rezado.Llevocatorceañosviviendosinrezar.Catorceañoscruzandolacallecadavezquemeparecíaquemisombraestabaapuntodecaersobrelapareddeunaiglesia.

SéquesirezaspormíTusoracionesllegaránaDiosYDiostocarámicorazónYyomearrepentiré

Creoquemesentíatraídoportiporqueerasviuda,comomimadre.Hijodeunaviudayamantedeotra.Túmeasustaste.Tudolorytutragedia.Mimadretambiénteníaesascosas,peroocultastrasunvelodecortesía.Asíquemeescapédevosotrasdos.Ydespuésnocontestétuscartas.Yahoramira,unamíaquetúnuncapodráscontestar.

Vale…

Vale,KathyJones.Nuestropequeñoygraciosoalcaideestáaquídepieesperadoestacarta.Últimaoportunidaddeque lleguealtrendelcorreo.Mañanaporlamañanapartiré.

Alcaide,siestáleyendoustedesto,aurevoir.

Yatitambién.Aurevoir,KathyJones.

Situvieraquehacerlootravez,nomeescaparía.

Muchoamor,

Skip

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Sí, ella se acordaba de su tío. Era un hombre impresionante a primera vista. «Proezas», unapalabraqueellanousabanunca,levinoalamentedeinmediato.Unhombrepeligroso,peronoparalasmujeresylosniños.Aquellaclasedehombre.

ASkipnolorecordabatanbien.Másmuchachoquehombre.Bromeaba,seocultaba,disimulaba,mentía,noledabaaunanadaquerecordar.Aquellarepresentaciónactualdesímismo…pormuchoqueladesgarrara,noestabaseguradecreérsela.

Ella volvió amirar la fotografía, docenas de filipinos rodeandoun yipni averiado, y se sintiómuyconmovida:másquenadaporlafotodeprensadeSkip,consucaramanchadaydesvaídaysuarroganciaysuautocompasiónatrofiadas,aúnmásquesilehubieramandadounafotodesímismodeaquellaépocadeDamulog,odeella,odelosdosjuntos.

Ella lovolvióaguardar todoenelbolsoypermaneció sentadacon losojoscerrados.ApenasrecordabahabersedespedidodeGinger.¿Habíasidomaleducada?

—¿EsustedlaseñoraBenvenuto?Eralamujerquerepartíalostíquets,ynoeramásaltadepiedeloquehabíasidosentada.—Sí.—Losiento…nomedicuenta.—Nopasanada.—Ahora es el intermedio. Lo más probable es que la señora Rand esté en el sótano. En los

camerinos.—Ahoramismovoy.Kathylasiguióporelpasilloconbaldosasdepizarrayllenodeecos,pensandoenpelículasde

gángsteres y enSilla eléctrica para ocho hombres, y a continuación lamujer la condujo por unapuertaquenoquedabalejosdelaspuertasenormesdelauditorioyporunaescaleraquebajaba.Lasparedescotorreaban,ypor todaspartescorríanmodelosmuy jóvenesconsuscuerposorgullosos,haciendooídossordosasumatrona,quelasperseguíallamando«¿Chicas…?¿Chicas…?¿Chicas…?¿Chicas…?»,mientrasKathyentrabaenunacámaraenormeydetechobajo.Modelosencantadorasen pose. Estallido de flashes. Las chicas entraban y salían de cubículos hechos demamparas conruedecitas.

—SeñoraKeogh—lallamósuacompañante,ylamatronalasaludóconlamanoyseacercó—.EstaeslaseñoraBenvenuto.

—Sientollegartarde.—¡Todasllegamostarde!Mealegrodequehayallegado.SelodiréalaseñoraRand.Siquiere

sentarse entre el público, ¿no le importa, verdad?, si quiere esperar sentada, ella la llamará y lapresentarádespuésdehablarsobreelVuelodelosHuérfanos.Aquítenemosaunpardechicasdelmismovuelo,delmismo…delvuelodeusted.Atreschicas.

SereferíaalvuelodeevacuaciónquehabíasalidodeSaigón,eldelaccidenteaéreodondeKathysehabíarotolaspiernas.Cuarentadelossupervivienteshabíancogidounvueloposterior.SolamenteunoscuantoshabíansidoadoptadosenEstadosUnidos,yunpar,porlovisto,allíenMinneapolis.

—¿Tresdelaschicas?—¡Sí!Esunaespeciedereunión.Li…¿dóndeestáLi?¡Noestávestida!¡Chicas!—gritólaseñora

Keogh.Kathy se marchó sin despedirse, porque acababa de pasar junto a ellas una chica eurasiática

rumboa lapuertade«Salida»quehabíaalotro ladode laenormesala,yellasesintióobligadaa

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echarleunvistazo.Siguióalachicaafuerayporlaescaleradecemento,enloaltodelacuallachicaseapoyóenlapareddeuncallejón,sola.SeapartóunpocoparadejarpasaraKathy.Kathyfuedospasosmásalládedondeestabalachica,hastaquepudoverelríoporunextremodelcallejón,ylacalleporelotro.AKathyleparecióreconoceraaquellaniñaeurasiática,oamerasiática,quedebíadehabertenidocuatroocincoañosdeedadlamañanadelaccidente,aunquelarecordabadepieensuasientodelavión,seacordabadesuspiernaspeculiarmentelargasydesusojosredondosydeltonocastañodesupelo.Kathyhabíasentadoaunadelassuyasjustoalladodeellaenlacabinasuperiordelavión, lacabinadelasuerte.Muchosdelossuyoshabíanestadoenlacabinasuperioryhabíansobrevivido.Ellahabíasubidoasusniñosabordo,habíaayudadoasubiralosdemásyhabíasalidodelaviónpararegresaraSaigón,peroenelúltimominutolehabíaofrecidosuasientounconocidodelaembajadaquehabíadecididonoir;ellanoseacordabadelnombredeltipo,nosehabíanvueltoavernuncayélprobablementepensabaqueellahabíamuertoensulugar.Yellahabíaaprovechadolaoportunidadsinpensarlo,noparaescapardelacaídadelaciudad,sinoparaayudar,paraserútil,para aliviar los terrores de aquellos pequeños peregrinos. Ni siquiera había sabido adónde iba elavión.AAustralia, lomásprobable.Peronohabían llegado.Y al final aquel viaje de niños habíaacabadoenSaintPaul.Consus taconesdecincocentímetrosysufaldaazulysucamisetaamarillaajustadaporencimadesusujetadordedeporte,conpintalabiosyrímel,lachicaparecíaunapequeñaputa,arroganteyhuraña,conelpelodecolorcaobaagitadoporunvientoqueveníaporelcallejónprocedente de la calle y seguía por el Mississippi. Abrió su bolso y encontró un paquete decigarrillos y un encendedor. Susmejillas se hundieronmientras protegía la llama con lamano yencendíauncigarrilloconfiltro.Soltóelhumoylabrisalearrebatólanubecilladelaboca.

Kathyvolvióapasarjuntoalachicaparabajarlasescaleras.Seabriópasoporentreelcaosdelsótano y fue al auditorio de arriba, un espacio nada desdeñable para actos públicos, con asientossólidosyacolchadosyunasubidaabrupta,aunquelasparedesledabanunligeroecoalamegafoníay el micrófono emitía unas sibilantes estridentes y unas pes explosivas. Acababa de empezar lasegundamitaddelevento.Elpatiodebutacasestabaaoscuras,peroelescenarioestabailuminadoyella pudo ver por dónde iba. Había muchos asientos vacíos. Para no molestar a nadie, ocupó elprimerasientovacíodelpasillo.Enelestrado,unamujermajestuosaconlamandíbulagrandeyunpeinadogrisyrecogido,probablementelaseñoraRand,vestidaconunconjuntodecolorrosa,estabahablandodeloshuérfanos.Alparecer,laseñoraRandestabalidiandoconciertoretraso,quelahacíasaltarsepartesdesutextoeimprovisarvalerosamente.Hablódelas«fugasdehuérfanos»quehabíanllevadoatantosniñosenaviónaempezarnuevasvidasenlasúltimashorasdeaquellaguerratanytanterrible;delvuelo75,enelquehabíaidoKathyyqueeldestinohabíaabatidocomoaundragón.Y Kathy reflexionó, ciertamente no por primera vez, que la guerra no había sido sola yexclusivamente terrible. También había producido la sensación, al principio espantosa y al finalembriagadora,dequealgosalvaje,mágicoycontundentepodíallegaralmomentosiguiente,dequelamuertemismapodíaemergerdelateladeaquelmismoaliento,ocultatrasundisfrazdeamiga;yella lamentaba el fin de una época en que, sentada en un C-5A Galaxy que rebotaba sobre unosarrozales repentinamente tan sólidos como la roca, oyendo cómo el fuselaje de aluminio sedesgarrabaenformadedientesyespadas,solosehabíacompadecidodelosniñosquelarodeabanysolohabíalamentadoelnoconseguirsacarlosdeaquellaguerra;enquelafracturadesuspiernasnole había producido shock ni dolor, sino únicamente amargura por no poder ayudar a los demás.Ahora la señoraRandpresentóa las tres chicasdelvuelo75, entre ellasLi, la amerasiática, todas

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vestidasconelaodai,elvestidoanchoporencimadelospantalonesdesatén,quecaminaronunatrasotra hasta la izquierda del escenario y luego de vuelta a la derecha del mismo, atractivamenteafectadas y en pose, con los espíritus temblando en la carne, y se sentaron en sillas plegables demaneraquesevieransuszapatos,zapatosdesalónnegroscontaconesdeagujadecincocentímetros.LaseñoraRanddescribióelaccidente,delquehacíacasiexactamenteochoaños,dijo—aunqueseequivocabaporunmes—,unodelospeoresdesastresaéreosdelahistoria,dijocontristeza,enquemásdelamitaddelostrescientosniñosyadultosqueibanabordo,casitodoelmundoenlacabinainferiordecarga,lamayoríacriaturasdemenosdedosañosdeedad,habíasidollevadaalCielo.Unfallomecánico.Durantevariosañosdespuésdequesucediera,Kathyhabíaestadoconvencidadequeloshabíaabatidounmisil.LaseñoraRandsabíamásdelpercancequelapropiaKathyydescribiólossegundos finales, el avión partiéndose en secciones en llamas que hirvieron en los arrozaleshúmedos,lasnubesdegasolinaincendiada.Alimpactar,Kathydebiódehabercerradolosojos.Solorecordabasonidos,predominantementedemetalrasgándose,unidiomamuyparecidoaunavoz,conmuchasvocalesyconsonanteschirriantes,guturalesásperas,vocalesmagníficas,todaslasvocales,A,E, I, O, U, urgente, perplejo y gigantesco. Luego un silencio negro generalizado, desgarrado porsúplicasyprotestasyllanto,incluidoeldeella.Yunniñoodosquesereían.

Laschicasdejaronel escenarioenmediodeunpequeñoaplauso.La señoraRandhablóde lasMacMillanHousesydesumagníficotrabajo,desuexcelenterelaciónconelgobiernodeVietnam.Enlugardeescuchar,Kathypreparósuscomentarios,esmaravillosoveratantagente,estaclasedetrabajorequierealgomásquedonantesprivados,portantosubsidiosdelgobiernoylegislación,portantovuestrocongresista,vuestrossenadores,porencimadetodovuestroscorazones,vidasnuevasquerecibenesperanza,gratitudtremenda,no,recalcarlodelosdonantesprivados,elgastoanualensellos de una sola oficina puede representar, alimentos para una sola boca durante un año puedesobrepasar, no, no una boca, una sola criatura, los buenos alimentos para una sola de estasmaravillosas criaturas pueden costar más o menos, los edificios e instalaciones, la educación, lagenerosidaddeustedes,omásbienlaeducaciónparasalirdelapobreza,lasentidagenerosidaddeustedes,omásbienrefugio,comidaycalorparacuerposjóvenes,educaciónparasalirdelapobreza,esperanza verdadera para unas vidas que justo empiezan, todo depende de la generosidad firme ysentidadeustedes.Osolamentesentida.Yno,desusacrificio.Hurgaenellos.Dealgomásque lasimple y amable generosidad de la gente como ustedes y yo, señoras y caballeros: de su firmesacrificio. Hurga bien. A su derecha en la penumbra brilló el anillo que llevaba en el dedo uncaballeroqueteníalamejillaapoyadaenlamano.Teníalosojoscerrados.Algunosdeloshombres,afindesoportaraquello,talvezhubieranrenunciadoalaprimeratardedegolfdelatemporada.Enlasmujeresqueteníacercavioesascarasluminosaseinteresadasdelagentequeintentanoquedarsedormida.Unniñitoconeldedofirmementehundidoenlanariz,sinhacernadaconél,simplementeaparcado allí. La escena que tenía delante se aplanó, perdió una de sus dimensiones, y el ruido legoteódeformairrelevanteporlafachada.Algoseacercaba.Aquelmomento,aquellaexperienciadelmismo,parecíaúnicamenteunagasa finísima.Ellapermaneció sentadaentre elpúblico,pensando:Aquíhayalguienquetienecáncer,alguienquetieneelcorazónroto,alguienquehaperdidosualma,alguien que se siente desnudo y extranjero, que cree que una vez supo el camino pero que no seacuerdadelmismo,quesesientedesprovistodearmaduraysolo,enestepúblicohaygentequetienehuesosrotos,otracuyoshuesosseromperántardeotemprano,gentequesehaestropeadolasalud,quehaveneradosuspropiasmentiras,quelehadadolaespaldaasuspropiascreencias,sí,sí,ytodos

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seránsalvados.Todosseránsalvados.Todosseránsalvados.

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AGRADECIMIENTOS

Esunplacerdarlasgraciasalagenteyalasorganizacionescuyoalientoyamableayudahicieronposibleestaescritura.

A las Fundaciones Lannan, Whiting y Guggenheim; al Bellagio Center de la FundaciónRockefeller; alDepartamentode Inglésde laTexasStateUniversity-SanMarcos;aBobCornfield,RobertJonesyWillBlythe;aRobHollister;aIdaMiller,NickHoover,Margaret,MichaelyFrenchFry;aWilliamF.X.BandIIIyalahermosaCindyLee.

Para los detalles de la carreramilitar de juventuddel personaje del coronelSands, el autor sesirvió del libro dememoriasWarriorsWho Ride theWind deWilliam F. X. Band (Castle Books,1993).