8/19/2019 Apuntes - Teresa Oteiza, Cómo Es Presentada La Historia

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Darle una concepción temporal a los sucesos, estableciendo relaciones explicativas que nos

permitan un entendimiento de la interacción entre pasado y presente.

Seleccionar y sintetizas experiencias pasadas con la finalidad de hacerlas significativas y

comprensibles para las personas en el presente.

El problema es que el discurso histórico maximiza la distancia entre el pasado y el presente.

Los análisis de los textos deben superar la revisión contenidista y se debe ponderar el rol que

 juega el lenguaje en su construcción.

Los textos escolares en Historia buscan el consenso sobre los hechos históricos, dejando a un lado

la educación nacionalista, despolitizada y anti-marxista. Sin embargo, el curriculum actual

evidencia una notoria falta de problematización del período dictatorial en la enseñanza escolar.

Carecen de explicación y relaciones lógico-semánticas de elaboración “o sea”, “es decir”, “en otras

palabras”. No aparecen expresiones como “por ejemplo”, “en particular”  ni “de hecho”, “en

realidad”, existe una falta de explicitación de argumentos.

Tesis: los textos hablan de dos grupos sociales irreconciliables, minimización de los logros de

Allende y su perfil como presidente sin poder, y el golpe militar, como una necesidad debido al

“desorden generalizado”  y la “crisis política y económica de la época”. Expresiones como “no

había obtenido”, “no dio los resultados esperados”, “no fue logrado”, “no obedeció”, “no aceptó”,

frases que reiteradamente pretenden expresar una cierta inhabilidad de Allende; carente de

poder.

Los textos escolares reconstruyen un mundo, artificial y controlado. Se suelen utilizar el conector

copulativo “y”  junto a las consecuencias negativas, de modo que naturalizan y normalizan el

discurso /// “El Presidente perdió el control sobre las transformaciones graduales y  se

multiplicaron las “tomas” de predios rurales, sitios urbanos e industriales”///

Se persigue un afán objetivista, tratando de contar a los estudiantes “qué paso”. Pareciera que no

es necesario evidenciar quién está expresando una opinión específica, “estos son los hechos y

ustedes no tienen que discutirlos”. Los textos nominalizan o cosifican, son abstractos, en tercera

persona plural, no hay actores sociales individuales (actores sociales generales y monolíticos),

organización cronológica, descriptiva y carente de explicación.

El autor asume la aceptación del lector. Los autores de textos se esfuerzan por parecer objetivos

pero ofrecen un gran número de juicios explícitos e implícitos.

Con estas clases de textos, el conocimiento está en circulación sin ser analizado en profundidad o

comprendido completamente y se produce y reproduce una política ideológica específica que

 justifica la intervención militar. Los textos son artefactos culturales que representan la voz oficial

dentro del sistema educativo chileno, haciendo su impacto ideológico todavía más fuerte y más

peligroso.