Apuntes sobre LOS ORIGENES DEL PUEBLO VASCO 2002

apuntes sobre el ORIGEN

DE Los

PUEBLOs VASCOs

Escrito por Jos Mara Macarlla Catedrtico de la Universidad del Pas Vasco

y otros autores.

Lejona a 24 de diciembre de 1999

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apuntes sobre lOS ORIGENES

DEL PUEBLO VASCO

(Mil enigmas histricos o prehistricos con una explicacin lgica)

Los orgenes histricos o prehistricos de la Lengua y del Pueblo Vasco, han apasionado en los ltimos tiempos a mltiples investigadores e incluso al mismsimo hombre de la calle. De dnde procedemos?. Somos de verdad, como se viene repitiendo, los primeros pobladores de Europa, anteriores a los indoeuropeos o arios?, o bien constituimos un pueblo invasor procedente de lejanos e ignotos pases?. En primer lugar, la lengua vasca, al igual que otras pocas excepciones: hngaro, fins, lapn, ... es un islote en un mar de idiomas indoeuropeos: latn, griego, germnico, eslavo, celta, ... y todos sus innumerables derivados dialcticos. En segundo lugar, una poblacin o un idioma arrinconado por invasiones ulteriores, debera ubicarse en valles inaccesibles, o en islas o pennsulas apartadas de lugares de paso, (por ejemplo, Bretaa, Cornualles, Malta, Escocia, Escandinavia, ...) O bien pertenecer a una poblacin perfectamente definida (los casos de Hungra y Laponia). En cambio, el eusquera est centrado precisamente entre un paso pirenaico, (Roncesvalles) y la costa atlntica, hablndose - como se habla - en parte de tres regiones francesas: Baja Navarra, Lapurdi y Suberoa, y cuatro espaolas: Guipzcoa, el este de Vizcaya y una porcin del norte de Navarra y de lava. En tercer lugar, se han descrito coincidencias del eusquera o vascuence con lenguas antiguas, escritas pero hoy desaparecidas, como el ibero y el etrusco. Por cierto que el eusquera est sirviendo de piedra rosetta para descifrarlas. Hoy se va conociendo, gracias al eusquera, el sentido de muchos textos ibricos, ledos, pero no descifrados, con anterioridad. Recientemente, se ha comprobado, que el anlisis bioqumico, (los grupos sanguneos, el Rh, los anticuerpos LTH, etc, ...) Permiten establecerla paternidad o el parentesco, sin error de las personas o de los pueblos o raza entre s. Existe adems una joven ciencia, - la glotocronologa -, que comparando las races de las cien o de las ciento cincuenta palabras ms usuales de dos idiomas diferentes y aplicando a una sencilla formula matemtica, (Profesor Gabriel Carreti), permite averiguar el tiempo que ha transcurrido desde que se separaron de un tronco comn. En Bioqumica,

Los Orgenes del Pueblo Vasco Rev.1 - Enero de 2002

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tambin se utiliza un mtodo en que una especie animal o vegetal se desdobl en dos diferentes (por ejemplo: los mamferos entre s o los distintos primates ; para ello se elige el marcador o reloj biolgico adecuado). Otras paradojas inexplicadas, (no explicables), son la carencia en eusquera de nombres para el rbol ms ubicuo y cuasi-nacional: el haya. Pagoa, es claramente latino, (Fagus selvtica). Tambin resulta cuanto menos chocante, que pesebre en vascuence sea Gambel y camello Gambelu. (Ser que para que abreve, un camello hay que verter el agua en un pesebre?). Y que perro Txakur, resulta casi identico al vocablo africano Txakal, de igual significado. Otro enigma: el Pas Vasco, - aunque mejor refirmonos a su entidad mejor como Vascongadas o Vasconia, al constituir el trmino Pas Vasco un galicismo -, es la nica regin espaola que no se romaniz, aunque los romanos iban libremente a tomar las aguas de Cestona, o embarcaban mrmoles desde Plencia. Es ms, las tribus celtas vecinas - los vrdulos y los caristios - en vez de latinizarse con el Imperio Romano, se vasconizaron. (?) Otras preguntas incontestadas son: Por qu los pastores vascos, en sus numerosas migraciones durante mediados del s.XIX y el s.XX, a Norte Amrica o a Australia, cuidan siempre ovejas en vez de vacas?. Y por qu las brujas de Zugarramurdi rinden culto precisamente al macho cabro?. Nuestro Rh es negativo en un 17% de los individuos, slo superado en todo el mundo por los berberes de Tnez que lo tienen negativo en un 18%. (Martn Ugalde). La tesis que desarroll Gabriel Carreti despus de ms de 20 aos de estudios y que se va confirmando, paso a paso, con investigaciones posteriores, dispares en su origen pero concordantes en los resultados, es la vasco-berber. Segn sta, los euskaros (en berber, euskaro significa militar o soldado), constituiran las tropas auxiliares que acompaaron a Anbal y a Asdrbal en la Segunda Guerra Pnica. En efecto: despus de sitiar y destruir Sagunto (ciudad aliada de Roma) y de cruzar el ro Ebro con sus numerosos elefantes, el caudillo cartagins decidi atacar a Roma y para ello cruz los pirineos y los Alpes. Como las tribus hispanas del norte del Ebro eran adictas al reciente Imperio Romano, se trajo a los pobladores berberes de Tnez, como


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tropas auxiliares, y les dio armas de hierro que aun no conocan. Los dej guardando los pasos pirenaicos, (desde el Atlntico hasta Roncesvalles por el oeste y probablemente en Le Perths por el este). Esto ocurri en el ao 208 antes de Cristo. Segn la Historia, los pobladores primitivos de la Pennsula fueron los iberos y luego los celtas; los vascones seran por tanto invasores posteriores, no la poblacin autctona invadida, como se viene reiterando machaconamente. Su gran problema, que ha coleado hasta el s.XIX, es que no se latinizaron, ni alfabetizaron, por lo que nunca llegaron a adaptarse del todo al mundo cultural romano. Los iberos y los etruscos de Italia son tambin pueblos camito-semticos, parientes de los actuales berberes.Y de los vascones!. Como deca antes, los escritos ibricos y etruscos, ledos hace bastantes aos, se empiezan a descifrar utilizando el eusquera como referencia. Arn o nava (valle), borda (cabaa), ur (agua), ama (madre), erri (pueblo) anai (hermano), basa (salvaje) y otros mil vocablos son idnticos en eusquera y en ibero. Y tambin en etrusco!. Mediante los estudios de glotocronologa, aplicando a dos idiomas las analogas estudiadas por Antonio Tovar, se puede establecer el tiempo transcurrido desde que se diversificaron a partir de un idioma comn. Y, con las cifras obtenidas por Carreti, para el eusquera y el berber, se calcula que son unos 2200 aos. Esto coincide plenamente con la Segunda Guerra Pnica. Adems - segn Tovar - la analoga del eusquera es mayor con el berber de Tnez , que con el de Marruecos !. Esto confirmara que la emigracin vasca - euskara - fue directamente desde Cartago a Cartago Nova, sin entretenerse en Marruecos, ni pasar forzosamente por Gibraltar. La tesis expuesta - susceptible de afianzamiento ulterior - explicara perfectamente que el idioma vasco tenga nombre especfico para el camello (gambelu) y que el pesebre sea el recipiente donde bebe el camello (gambel), puesto que el agua extrada de un pozo, si se vierte en la arena, es absorbida por el terreno y para evitarlo hay que retenerla con un recipiente adecuado. Carece de nombre para el haya, porque en Tnez no hay hayas. Como pueblo pastor y adems pastor de cabras y ovejas, rinde culto al macho cabro (Zugarramurdi) y tiene nombre para el perro (Tzakur), y no para el gato, propio de los pueblos agrcolas. Gato (katua), es nombre latino. La compenetracin y el adiestramiento perfecto del perro sigue siendo una prctica constante entre nuestros pastores.


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Perdida la guerra por los cartagineses, stos dejaron abandonadas las tropas auxiliares entre Roncesvalles y el mar, viviendo en precario y siendo odiadas por las tribus autctonas, de origen celta. Los euskaros resolvieron su situacin y su futuro jurando entonces fidelidad a Roma y alindose con los vencedores, quienes les dieron armas (y sueldos) (Precisamente su amor a Roma les llev a odiar y a resistir siempre a los visigodos, porque haban destruido el Imperio Romano). Los colonizadores romanos se ahorraron el establecer legiones desde Estella hasta el mar Cantbrico. Por eso no se latiniz el saltus vasconum y hasta los celtas dominados (vrdulos y caristios), tuvieron que vasconizarse. Digo esto, porque el valle del Ebro est lleno de villas y puentes romanos, entre otras cosas. Por ejemplo, el ultimo de esos puentes acaba de ser descubierto justamente sobre el Ega, muy cerca de Estella. Y ms arriba no hay restos estables de colonizacin romana. Prcticamente todas las culturas mediterrneas prelatinas tienen su origen en el Africa subsahariana. Con la progresiva desertizacin de aquel territorio fueron ascendiendo hasta Marruecos o Tnez y de all saltaron a Europa. En tiempos histricos registramos en Espaa procedentes del sur, las invasiones de los rabes, los almorvides, los almohades, y los benimerines. Y hoy mismo, porque la desertizacin contina, oleadas de marroques, argelinos, senegaleses, etc, ... cruzan en pateras el estrecho todos los das. Los grupos de anticuerpos LTH, tan enormemente variados, permiten - segn trabajos recientes - deducir que hay un parentesco mayor entre San Sebastin y Madrid. Para precisar ms, convendra estudiar el parentesco entre los vascones (Pirineo navarro) y los berberes tunecinos. El irrintzi, grito festivo de los vascos, es idntico al grito de las mujeres de Tnez,... Los rasgos faciales (Tez oscura, nariz aguilea, ...) Son similares a los pobladores del Mogrep, hasta incluso los saharauis, por los que sentimos autntica veneracin fraterna. Y no preguntemos a Cervantes o a otros prisioneros del norte de frica (canjeados por un rescate, despus de largo cautiverio), como se pudo propagar a otros tiempos y pases esa horrible tcnica para obtener fondos econmicos. Las reflexiones que podran desencadenar los conocimientos actuales seran el animarnos a profundizar en el estudio de los temas multidisciplinares (bioqumicos, lingsticos , sociales, histricos, etc, ...) Para llegar al conocimiento de la verdad plena que no debe asustarnos. Aunque se demostrase irrefutablemente que los vascos no fueron los invadidos sino los invasores de nuestro pas, no por ello debera disminuir el amor a su


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lengua, tradiciones y costumbres, pero nos permitira dejar vivir en paz a los celtas, griegos, latinos o germnicos - tambin orgullosos de sus propias culturas - sin necesidad de obligarles a transculturarse cuando habitan entre nosotros. Coaccionar para que se abandone el espaol (el segundo idioma internacional del mundo) para hablar solamente eusquera - tal como se va haciendo en la enseanza pblica y se pretende en todos los centros oficiales del Pas Vasco - es una barbarie que va contra la Historia y contra el sentido comn. Si triunfase esa poltica se bloqueara nuestro progreso y nos aislaramos del resto de la humanidad. Una postura sensata sobre el aprendizaje de ese idioma, arcaico, complejo y venerable, podra resumirse en las siguientes proposiciones: Protegerlo: Un deber Aprenderlo: Un derecho Expandirlo: Un lujo Imponerlo: Un crimen Jos Mara Macarlla Lejona a 24 de diciembre de 1999 Catedrtico de la Universidad del Pas Vasco Bibliografa: Profesor Gabriel Carreti LA GLOTOCRONOLOGIA? Martn Ugalde El Rh Vasco Manuel Tovar Jos Mara Macarlla Catedrtico de la Universidad del Pas Vasco


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LOS BASCURNES Ningn investigador cree hoy en el supuesto origen misterioso de la lengua y etnia vasca y todas las crnicas de la historia demuestran que aquellos hombres a quienes los celtas pusieron el nombre de vascones (barscunes que en lengua celta significa los de lo alto o los de la cima) y a quienes los romanos describieron como guerreros salvajes de razas varias y de lengua y costumbres diferentes en todo a los pueblos celtas de la zona (180 ac), no eran pobladores autctonos del lugar donde los celtas les dieron el nombre sino que provenan de las tropas bereberes que abandonaron a Anbal (219 ac),cuando, a punto de atravesar los Pirineos, se enteraron que marchaban a luchar contra Roma. Es inexplicable que los nacionalistas vascos, que han dedicado tanto tiempo y esfuerzo a desentraar su pasado y a reconstruir su historia, no hayan dado ninguna explicacin sobre el destino de aquellas tropas que huyeron en desbandada precisamente en el lugar donde aos despus los romanos localizaron a los vascones. La ignorancia del suceso resulta especialmente sospechosa teniendo en cuenta que es la nica explicacin de la presencia de los vascones en aquella zona, de los saqueos continuos que a partir de entonces empezaron a sufrir los moradores celtas de aquellos solares hasta bien entrado el s.XIV y de la invariable colaboracin posterior de los vascones con todas las tropas bereberes que llegaron hasta all, como las sarracenas de Muza. El rastro descrito a partir de las crnicas de Tito Livio (XXI 1,2,3,4-24), Polibio (III,33,34,35) y Estrabn citando las de Ptolomeo, as como las restantes crnicas y restos arqueolgicos, hace coincidente la lengua hablada por aquellos hombres que los celtas llamaron vascos y la presencia en Hispania de los bereberes libiofenicios y tingitanos de Mauritania que solan incorporar los ejrcitos beros primero y cartagineses despus. En el caso concreto de los vascones, su instalacin en las cumbres navarras, coincide con el itinerario de la marcha de Anbal contra Roma desde Cartago, de cuyas tropas huyeron al menos 20.000 hombres poco despus de pasar el Ebro y antes de cruzar los Pirineos en el ao 219 a.c., al correrse la voz entre las tropas de que Anbal los diriga contra Roma. Fue precisamente all donde unos 40 aos ms tarde encontraron los romanos a aquella tribu de razas varias diferentes en todo a los pueblos celtas de la zona y a quienes estos llamaron barscunes. Anbal haba partido con 90.000 hombres ms la caballera y al cruzar los Alpes quedaban 60.000 y la caballera. La lengua vasca y berebere, en particular la hablada en la regin de los montes Atlas de la antigua Mauritania y los territorios de la antigua Persia, sigue mostrando evidente similitud a pesar del tiempo transcurrido y de las distintas influencias recibidas;


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esta similitud actual, era identidad en las fechas en las que aparecieron los vascones en la montaa navarra, como confirman los nombres, toponimia y vestigios arqueolgicos encontrados en la pennsula. Los almohades procedentes del Atlas marroqu que invadieron la pennsula ibrica rezaban, se comunicaban y hacan sus discursos en la lengua berebere amazigh. De esta lengua ha quedado abundante toponimia tambin en las islas Canarias donde las tribus bereberes all asentadas entraron en un proceso de tribalizacin similar al de los vascones en la montaa navarra; de raiz berebere son las palabras guanches (gu, nosotros), gomera (komera-), adeje (adegi), tacoronte, (toki-gorontz), tegueste (tegi-geste), agulo (agun-lo) etc. Tambin son de lengua amazigh los nombres amaya y areitio comunes entre los tingitanos de Mauritania que entraron con Abderraman III en el 912; erio, derramamiento, manantial, exaltacin, areitio; palabra que anunciaba el final de la ceremonia de desvirgar a la novia los tingitanos, que al igual que los vascos encuentran tambin sus races en Egipto. Posteriormente, la identidad de la lengua vasca y berebere sigue manifestndose en los manuscritos del s.XVI de los archivos coloniales galos de Aix-en-Provence escritos en la lengua amazigh. Al igual que las lenguas indoeuropeas, que son dialectos de la lengua celta, la diversidad en el panorama de la lengua berebere tiene un nico sustrato bsico - camtico que es el libio antiguo, y al igual que las indoeuropeas, la berebere es una nica lengua fragmentada en dialectos. Los primeros Indo-Europeos en alcanzar Europa fueron los celtas. Desde el primer milenio a.c., los pueblos de la Europa Occidental conocan y utilizaban la escritura. Los textos que han sobrevivido, que datan de unos 500 a.c., establecen el mapa lingstico europeo de la poca y de ellos se desprende que la gran mayora de las lenguas modernas europeas pertenecen a una nica gran familia llamada Indo-Europea. Todas estas lenguas descienden de un ancestro comn, o lo que es lo mismo, todas surgieron de lo que no era otra cosa que dialectos regionales de una misma lengua. En el siglo 500 a.c. las lenguas celtas se hablaban en la mayor parte de Espaa y Francia, Austria, Suiza, Sur de Alemania, Norte de Italia, Bretaa e Irlanda. La lengua celta ya se hablaba en la Pennsula ibrica un siglo antes de que los celtas poblaran el norte de Italia. Las primeras manifestaciones culturales que se conocen en la Pennsula, como la cultura de Argar y la cultura de los Campos de Urnas mantienen una sintona plena con demostraciones culturales centroeuropeas y dan cuenta de la profundidad y calado de la cultura celta en la Espaa prerromana.


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Nada sabemos de las lenguas que podan haberse hablado con anterioridad. La indoeuropeizacin de la pennsula por los celtas se produjo en dos oleadas, protoceltas 900-850 a.C. y celtas entre 650-500 a.c. En esta poca el este y el sur de la pennsula eran poblaciones iberizadas. Los celtas usaban la escritura y dejaron legados escritos, entre los que destaca la tabla de Botorrita. Los Iberos que entraron a partir del 600 a.c. por la costa levantina llegando hasta la costa de Francia, tambin desarrollaron escritura y dejaron abundante legado escrito. Los vascones, no guardan relacin tnica, lingstica o cultural con los celtas ni con los iberos. De las fuentes de Estrabn, referidas seguramente a los protoceltas (ilirios), se deduce que los celtas cntabros habitaban toda la costa hasta el Pirineo. Adems del Norte de Espaa, los celtas ocupaban gran parte del centro. Mas tarde, las crnicas histricas del ao 456 d.C sitan en Navarra a los celtas berones y autrigones, en el solar junto al Cantbrico que hoy se denomina Pas Vasco, a los Caristios en Vizcaya y lava hasta el Sur de Vitoria, los Autrigones en Vizcaya y los Vrdulos en Guipzcoa y Norte de lava, todos ellos celtas, tnica y lingsticamente afines y del mismo tronco cntabro.

A pesar del escaso inters que los vascones suscitaron en la historia, donde nicamente son mencionados para describir su salvajismo y los saqueos y matanzas que perpetraban sobre los pueblos celtas de la zona, los datos aportados por las fuentes y vestigios arqueolgicos son suficientemente esclarecedores como para deducir que el mito que han elaborado los nacionalistas vascos sobre su supuesto origen enigmtico y su


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supuesta condicin de pueblo autctono e incluso anterior a los celtas que poblaban el solar navarro, pirenaico y cantbrico, no es ms que un planteamiento voluntarista carente de toda base cientfica y contradictorio con los datos y testimonios existentes: 1 Los vascos no tenan nombre para denominarse a si mismos, lo cual quiere decir que carecan de identidad como tribu o grupo tnico (hasta que Sabino Arana invent el trmino eusk para denominar a la nacin vasca que propugnaba), lo que es claro indicio de que su presencia en las montaas navarras fue consecuencia de un hecho sobrevenido y no de su evolucin natural como pueblo, tribu o grupo tnico de aquellos solares. El nombre vascones que los celtas les dieron tambin lo indica as, ya que no responde ni a una denominacin de familia o cum (clanes), ni tampoco a una identidad racial o cultura del grupo humano o tribu, como era la costumbre celta, sino que aluda nicamente a su localizacin en un punto determinado, la parte mas alta de la montaa navarra, por lo que el trmino vasconum no puede referirse o aplicarse genricamente a una etnia o cultura determinada tal como sostienen los historiadores vascos, sino solo a los de arriba que es el significado de barscunes en la lengua celta, de lo que se desprende que no podan ser vascones los pobladores de los valles y solares de Navarra, como suponen los historiadores vascos, porque existe constancia de que eran celtas, aunque posteriormente se fueran instalando los vascos tambin en estas y otras zonas. Por la misma razn la lengua que hablaban aquellos hombres no poda ser la propia de los vascos, sino la del grupo tnico al que perteneca ese grupo humano que los celtas llamaron vascos, porque la misma lengua que ellos hablaban aparece en las monedas acuadas por los beros en la zona de levante, en la que ni haba ni poda haber vascos, ya que no haba celtas que pudieran llamarlos de ese modo, pero en la que s haba habido bereberes que hablaban la misma lengua que los vascos, ya que tanto los beros como ms tarde los cartagineses empleaban bereberes normalmente en sus ejrcitos. No es extrao sin embargo que aquellas frases acuadas en las monedas beras y en otros restos, vasos, plomos e inscripciones en tierras iberas se hayan considerado de lengua vasca porque vasco y berebere en aquella poca eran la misma lengua hablada por las tropas norteafricanas. 2 Los romanos describen a los vasconum como hombres de razas varias y de ah que los celtas al apodarlos se refirieran solo a su situacin en la parte alta y no a una caracterstica o tipo tnico uniforme que los describiera. Pero esta descripcin choca tambin con las hiptesis de los investigadores vascos, para quienes la conservacin de su lengua en un medio celta era consecuencia de su aislamiento secular de las influencias externas, lo que contradice la variedad racial del grupo, que queda plenamente explicada


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en cambio, admitiendo que los vascones no eran otros que las tropas que haban abandonado en aquel mismo lugar al ejrcito de Anbal unos 40 aos antes de la llegada de los romanos a esa zona, pues tratndose de hombres solos era lgico que en los saqueos, que eran segn las crnicas era su forma habitual de subsistencia, adems del botn usual robaran tambin las mujeres de los poblados celtas, lo que corroboran las crnicas romanas cuando relata que los vascones se desposaron con las mujeres de los Vrdulos y Autrigones y de ah tambin, la repentina explosin demogrfica acaecida en la zona vascona (que tampoco aciertan a explicar los historiadores vascos) y la incorporacin de palabras y nombres celtas en la lengua de aquellos hombres. 3 La lengua y la etnia vasca y berebere: Antropologa: El vasco es mesocfalo. En los celtas indoeuropeos los nrdicos son dolicocfalos y en las reas ms meridionales braquicfalos. Se sabe que el cruce entre braquicfalos y dolicocfalos no da mesocfalos, por lo que la procedencia vasca desde el punto de vista antropolgico es extraa en la pennsula ibrica y comn en el norte de frica, donde en los pueblos del cercano oriente (desde Beirut) es comn el crneo mesoceflico, la frente angosta al igual que los mrgenes internos de los ojos, e inclinada del tipo armenoide, la cara es ancha y larga, al igual que la nariz. Los que tienen ojos marrones oscuros son ms araboides mediterrneos; mientras que los que tienen ojos ms claros son ms braquiceflicos. Los actuales bereberes que quedan en las montaas del Atlas presentan una frecuencia de Rh negativo en su sangre del 40, en Espaa los vascos mantiene hoy un 32 de Rh negativo. Las investigaciones de los doctores Francisco Leyva y Pablo Snchez Velasco, del Departamento de Inmunologa de Valdecilla, han dado como resultado que el componente gentico de los cntabros (cntabralos pasiegos o cntabros), ofrece similitud con otras poblaciones del Norte de Europa, en concreto con las escandinavas, las del norte de Francia e Irlanda, con las que comparten un haplotipo desconocido y unos genes que ya haba en los antepasados de Atapuerca, y en cuanto a su origen, lo cifran en un milln de aos, mientras que en los vascos el componente gentico es fundamentalmente coincidente con el norteafricano actual. En cuanto a la lengua, los vascos destacan como significativo que palabras que se encuentran en los jeroglficos de las pirmides de Egipto y en el habla de los tuaregs (bereberes saharianos) puedan escucharse diariamente en el habla de cualquier vascoparlante, como nikk (ninik, yo), akir(aker, macho cabro), aa (ania, anai, hermano), aste (asto, burro) etc.etc., pero sin embargo no se reconocen de esa cultura sino autctonos de las tierras del norte de Espaa, a pesar de que la total ausencia de vestigios, huellas o legado de una cultura vasca anterior al s.XIII, indica que el vasco no es pueblo autctono de esos asentamientos y por el contrario, los objetos que se conservan (arcas o


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kutxa y tiles de pastor), los adornos y figuras revelan su cultura magrebi. En vasco se dice: xah (a la lengua de Persia), Karbala (ciudad persa), Karva ( rastrillo para purificar el lino), Artajerjes (330ac),(artajorra, maiz), Sapor (300dC): (sapor, residuo de cera en las colmenas), Abarq (sitio de Persia, vasco abarkadum aldeano), Kheykho(srou): (vasco indeciso-nombre de un persa en una lpida de la antigedad), Dami: (dami arrepentirse), Kateh (kate cadena), Khan (kana vara), Ahura (akura contribucin, pago), Zarathustra o Zoroastro (628 ac Afganistan): (vasco zoroetxe manicomio, zoroastro demencia, locura), Ahura (Ajola), Azar (Azar). El berebere se llama a si mismo Imazighen, o Imaziren, (Imaz, emaitza, ziren, ziraun en euskera); ait es el prefijo de las tribus bereberes de los montes del Atlas (aita es padre en vasco), Azazga poblacin de la Cabilia argelina, Oreta era el nombre del emisario berebere de Abdherraman (Orreta, oretza, Oretsu, Horreta), Tizi-Uzu (hitz, hitza, uzu, izu), abarraka (abarraki, abarrakitu, abarrakitzen, Adeje (adegi, sien) adwar (adar), amer (emerdi, mujer recien parida), barroka, borroka, borrokatzen), akir (aker, cabrn), amezwar (ametz, ametzkia, ametztoi, amezti, amezaga), ania (ania, hermano), arregi (arregi, arregin), ari (ari, hari), arremman (arremana, arreme, arrem, arrendu), ar?u (artzu, artzulo, artzubi, artzi), aste (asto, burro), aza (aza, berza, col), aze?if (azegi), baraka (baraka), batu (batu), errai (harrai), watan (baztan), gara (gara),?uz (guz), amar (amar), amanan ( amana), anaz (anaz), aggur (agur), auzia ( auzia), azel (azel), azul (azul), batuta (batuta), bakka (baka), bakra (bakara), bamu (bama), banu (banu), bat (bati), baya (baya), bejaia (begaya), bere (bere), bessa, besza (beza), bittu (bitu), damya, dama (dama), gaitiza era el nombre de los hijos de bereberes que llegaron con Tarik- (gai-tu gaitzen), gava, gawa (gaba), ghaysun (gizon),ghurak (gurak), goya (goya), gourara (gurari), gouraya (guraya), gouraya (garaya), gueyala (ayala),hartala (artola), herri (herri), herru (herru), hetta (eta), hezzu (hezu), huda (uda), ikharri ( ekarri), irigai (irigai), Irhun (irun), iszzu (izazu), iszza (isaza), ittuna (ituna), izza, izya, iza (iza, itza), izeiaq (izeiak), izid (iziz), izya (izaya), kassu (kasu), kella (kela), kenna (kena), kettu (ketu), khalaq (kalak), ksu (kasu), khetara (ketara), kulla (kuia), ladda (lada), lahna (lejona), Iak (Iak), lalla (laia) mazzi (mazi), muda (muda), muna (muna), nik (nik, yo), ouzou (uzu), qura (kura), nek (nek), saboula (sabala), sama (sama), sammer (seme), selhaq (selak), seti (sati), sirga (zirga, cuerda, cordel), sefsaf (sahats, sauce, mimosa) sura (sura), tadda (tada), tama (tama), tamazagha, (amazaga), Tamesri (tamariz), tamu (tamu), targui (targo) tarik (tarik), tauscher (takera), thablalt (zabalaz), thala (zala), thamazga (amazaga, amezaga), themuth,(zemuz), tizi (titzi), -?uzar? (txiral-brezo), tarat (darat-ulu), tamezak (damnatzaile), toker (toke), uaddan (uhalde,torrente), ud (uda, verano), ukil (uki, tocar), ult (ulitu) ur?an (urtza, urzain), yarra (yarra), zabala (zabala),zagari (zahagi) , zidan (zidan), zidar, thidir (zidar), zula, thula (zula), thurda (zurda), thureghth, (zuregaz), zamar (zamar, lana esquilada), zana (zana), zeda ( zut, pino) zegna (zea), zergha (zerga), zibba (ziba), zwira (subir, subir), zayar, (


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zahar), zidan (zidan), zigza (zugaza), zigza (zitza), zugai (zudai), zetu (izetu), zeggan (zegan), zoua (zohar), zriba, zeriba ( zoribeltz), zuaia (zuail, zuaitz, rbol) . Valgan estos como ejemplo suficiente de la identidad de vocablos entre el vasco y berebere, porque continuar resultara desproporcionado en este trabajo. 4 Tampoco se ha dado explicacin (salvo la rayana en el desvaro de que todos procedemos de los vascos) sobre los numerosos nombres y toponimia vasca presentes en grandes zonas de Espaa: Andaluca, Levante, el Ebro, la meseta, no slo del nombre ili o iri = ciudad, sino de otra variada serie de topnimosah estn, entre otros muchos, Arriaca, la Guadalajara de hoy y el pico abulense llamado Gorra por el solar de expansin de los almerienses, desde Ro Tinto hasta el Garona y el hallazgo de palabras y aun de frases en inscripciones ibricas, plomos y vasos y de nombres en inscripciones romanas que registran habitantes de lengua igual a la vasca en tierras iberas por ejemplo en el bronce de Ascoli. En el terreno de los nombres, valga como ejemplo el apellido vasco Ibarra mucho ms frecuente en el resto de Espaa que en el propio Pas Vasco; Ibarra deriva de ibar(r)-a, la vega, la ribera. La variante grfica Ybarra, se registra sobre todo en Andaluca. Esto demuestra que lejos de ser vasco el origen que se le supone, se trata de los apellidos procedentes de los asentamientos bereberes del sur y este de la pennsula ibrica, ya que no existe ningn antecedente ni indicio de que en esas reas hubiera sido alguna vez poblada por vascones, (ya hemos dicho que no poda haber vascones donde no haba celtas que los llamaran as), pero s que hubo presencia de bereberes libiofenicios y tingitanos, cuya lengua, el amazigh, era sin duda la misma que hablaban los vascones. 5 Otra cuestin tampoco explicada es como un pueblo hipotticamente tan aislado segn la teora de los investigadores vascos, adems de ser de razas varias, fuera tan salvaje y expansionista como los describen los romanos, hasta el punto de desplazar de sus asentamientos a todos los poblados celtas que las primeras crnicas romanas situaban en las zonas luego vasconizadas de los suesetanos, iacetanos, vrdulos, berones, lusones, edetanos y cerretanos. Los vascones son el nico grupo humano cuya localizacin vara de una crnica a la siguiente, otro indicio ms de que carecan de solares de asentamiento y de infraestructura propios. Todas las crnicas coinciden en que el medio de subsistencia de los vascones era el saqueo de ciudades y haciendas, que perpetraban en bandadas (baudiones), regresando a continuacin a sus refugios de montaa. Siglos despus de las primeras crnicas en las que fueron citados, los romanos continuaban describindolos como hombres, aislados,


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rudos y salvajes que adoraban el fuego y realizaban sacrificios humanos en sus rituales. Su rudeza y salvajismo no se deben slo a sus costumbres guerreras, sino tambin a su alejamiento; (...). Sin embargo, hoy el mal es menor gracias a la paz y a la presencia de los rhomaoi "Estrabn, Geografa II,3. El salvajismo de los vascones era tal que los pobladores celtas y celtberos de las actuales provincias vascas, reciban siempre con agrado a todos los ejrcitos civilizados, ya fueran romanos, beros o visigodos, prefiriendo perder buena parte de sus posesiones como tributo, a arriesgarlo todo a la amenaza de los continuos saqueos de las bandas vasconas. Los investigadores vascos tratan de explicar el salvajismo por un sbito cambio en el carcter de los vascones, pero lo cierto es que desde los primeros indicios de la presencia de ese grupo humano, el comportamiento salvaje de los vascones es su descripcin constante en todas las crnicas existentes. La desenfrenada actividad de saqueo, matanzas y ocupacin de haciendas y solares celtas desde que fueron localizados por primera vez el ao 189 a.C. es un claro indicio de que su presencia en la zona no tena su origen en el crecimiento vegetativo de una poblacin autctona con solar propio, sino en la llegada masiva y simultnea de visitantes extranjeros de esas concretas costumbres a la zona y de ah su imperiosa necesidad de saquear para sobrevivir y de emparejarse con las mujeres de los poblados saqueados, lo que conduce una vez ms a lo acaecido en ese punto durante el paso de las tropas de Anbal para establecer el origen de los vascos.


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La lgica explosin demogrfica sobrevenida como consecuencia de las circunstancias de su instalacin en el saltus vasconum (la montaa navarra), les llev a ocupar, tras saqueos y matanzas el vasconum ager (el valle navarro), los solares de los celtas suesetanos en el 184 a.C., que a partir de esa fecha ya no volvieron a ser citados en su solar de origen, los solares iacetanos, situados en la zona de Jaca en las fuentes de Timgenes (poca de Augusto) citadas por Estrabn, y en las posteriores ya no se mencionan apareciendo en su lugar los vascones, que tambin fueron localizados posteriormente en Calaqurris (Calahorra- Logroo) en la poca de Sertorius (77 y 74 a.C.), y finalmente en los solares del Cantbrico y la Aquitania. 6 La ausencia total de vestigios de una cultura o religin vasca en esa zona o en cualquier otra, es claro indicio de que no se trata de un pueblo indgena, y menos an, anterior a los celtas, quienes, al contrario que los vascos, han dejado un importante legado que ha tenido su continuidad en las actuales instituciones como las merindades y el roble de Guernica, smbolo de su ancestral cultura celta, bajo el cual los merinos adoptaban sus acuerdos y sobre todo de su lengua, el castellano, lengua indoeuropea derivada directamente del celta en la que escribieron sus ms antiguos cdices e instituciones, como los fueros. No existe legado histrico alguno que ponga de manifiesto el cultivo de arte u oficio antiguo por los vascos. De su religin tampoco existe el ms mnimo legado y en cuanto a la adopcin del cristianismo, se sabe que fue muy tarda. En la zona habitada por vascones no se ha hallado vestigio arquitectnico ni monumento cristiano ni otro que acuse la prctica de alguna religin. En cuanto a los sepulcros de Elorrio (Arguieta), del s.VIII, que los nacionalistas atribuyen a los vascones, pertenecen a los moradores de la Espaa central, que se refugiaron all de los musulmanes. Las crnicas de la historia tan slo sealan que en el s.IX San Len fue martirizado hasta la muerte en los territorios vascones (Bayona), mientras que en la localidad guipuzcoana de Lezo, en esas mismas fechas la poblacin era de cultura castellana y cristiana y atribuyen a ese mismo santo la trada de su venerado Santo Cristo Alguna de las ciudades celtas como Ilurcis, sobre la que Tiberio Sempronio Graco fund Gracurcis en el 179 a.C. haba estado poblada por los celtas desde antes del s.V a.C. como atestiguan los restos encontrados de la primera edad del hierro. Por Gracurcis (Urriz), pas ms tarde Musa, aliado de los vascones, arrasando la ciudad y cambiando su nombre por el de Alfaro. De los escasos objetos fundamentalmente mobiliario que pueden considerarse vascos (arcas o kutxa y tiles de pastor), los adornos y figuras indican la cultura magrebi en la utilizacin de los mismos smbolos geomtricos, fundamentalmente el eguzkilore y la estela. El lauburu, convertido en el smbolo de la nacin vasca propugnada por Arana, no tiene la antigedad milenaria que se le quiere atribuir, es un smbolo


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moderno (s.XVI). 7 Otro aspecto tampoco explicado es el de la tribalizacin en la que cay el pueblo vascn y la degradacin, pobreza y desorden a la que arrastraban tambin a los pueblos ocupados, que previamente eran sociedades muy ricas y organizadas segn la cultura celta, fenmeno del que las crnicas han dejado testimonio abundante. Tal fue el caso de Caristia, Vardlia y Autrigonia, y en concreto de Tulonio ciudad de la llanada de lava. Lo mismo sigui ocurriendo en pleno ao 548 en el valle del Ebro (542-548), y en el ao 587 en Aquitania (San Gregorio de Tours en su Historia de los Francos y refirindose a ese ao dice: los vascones se precipitaron desde las montaas a las llanuras, talando vias y campos, quemando casas y llevndose prisioneros a muchos habitantes con sus rebaos). En ese ao en Espaa ya se haba celebrado el III Concilio de Toledo por el que catlicos y arrianos se integraron en la Iglesia Catlica. Por lo que respecta a los vascos, las crnicas siguen dando cuenta de sus saqueos por todo el norte en el ao 652, en el que dejaron la regin sembrada de cadveres, sin respetar clrigos, Iglesias ni altares. Las crnicas posteriores siguen relatando los saqueos de los vascones a las poblaciones de Autrigonia o Nueva Vardlia y Cantabria en el ao 672. Hacia el ao 700 comenzaba a adquirir cierta importancia entre los vascones el oficio de carbonero y de pastor, pero todava en el ao 1140, el viajero Aimeric Picaud que escribi el Cdice Calixtino dej escrita una descripcin muy poco halagea sobre los vascos, acerca de su salvajismo. En esa misma crnica Picaud dej una extensa lista de palabras en vasco, tales como Urtzi (Dios) y belaterra (cura). 8 Las instituciones de los celtas de los solares hoy incluidos en el Pais Vasco: Las merindades fueron fundadas en el s.VII por el rey Ervigio. En esas fechas los celtberos castellanos haban recuperado sus solares y ciudades y comenzaban a fundar otras nuevas y a imponerse el orden social a travs de las instituciones de los merinos que administraban la justicia y adoptaban sus acuerdos bajo el roble de Guernica, rbol sagrado de los celtas. Simbologa celta: En la cultura celta el druida es un personaje esencial, se apoya sobre un bculo de roble y utiliza el murdago en pcimas como cura para todo, fecundidad para animales estriles, smbolo de inmortalidad y regeneracin fsica. El panten celta acoga casi a cien divinidades, entre las que destacaba Neto (dios del Sol), Endovlico (dios de la bondad) y Atecina (que los Iberos llamaban Proserpina), el dios de la guerra, asimilado a Ares-Marte y el dios de la montaa identificado con Jpiter (no olvidemos que los romanos tambin eran celtas indoeuropeos y por tanto de la misma cultura y lengua); tambin haba otras divinidades menores vinculadas a los caminos y encrucijadas, espritus de fuentes y ros, bosques, plantas o animales.


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De las numerosas estelas discoidales celtas, las ms antiguas encontradas datan del s.II a.C., destacan los nudos que delimitan las propiedades de los cum o clanes. Una de las ms caractersticas estelas es la que representa al hroe ecuestre en el interior del disco solar. En Navarra los asentamientos celtas se encuentran en los cerros de Leguin, Leguin Chiqui y San Quiraco (hoy Echvarri), Santo Tomas en Ibero, el Castellar de Javier, Edorre de Artajona, la necrpolis de la Torraza de Valtierra y el poblado de la Pea del Saco en Fitero (por su emplazamiento estratgico, parece un asentamiento militar en la tradicin ibrica) y una necrpolis en Echauri. En lava y Vizcaya, las ciudades de los caristios eran Suessatium (Zuazo), el mismo nombre de los suessiones de Soissons en la Galia) en la parte occidental de Vitoria, Tullica (Tuyo en la ribera del Zadorra) y Veleia (Irua). Adems de estas ciudades, Ptolomeo extiende los asentamientos caristios hasta la desembocadura del Deva, por el Sur las sierras que cierran el valle de Miranda, por el Norte hasta la sierra de Tuyo. Hacan frontera con los Vardulos en la parte occidental de Vitoria, marcada por la cuenca del rio Zadorra hasta los montes del condado de Trevio. En Guipzcoa y la mitad oriental de la llanura de Vitoria las ciudades de los celtas vardulos, eran entre otras mencionadas por Ptolomeo imposibles de identificar, las de Tritium Tuboricum (Motrico), Tullonium (Alegra), Alba (Albniz, cerca de Salvatierra). Sus asentamientos llegaban por la costa hasta el valle del Deva, al que dieron el nombre (ro de los dioses en celta) y en cuya desembocadura se halla Motrico. En Vizcaya habitaban los celtas autrigones, presentes en esas tierras desde la Edad del Hierro, a quienes se deben las ciudades de Pancorbo, Deobriga (Devobriga que en celta significa castillo de los dioses, de l es un diminutivo Deobrigula la ciudad de los turmdigos vecinos de los autrigones), Puentelarr, Vindelia (vindelo que aparece en el nombre de la tribu cltica de los vindelicios de Wurtemberg, Baviera deriva del adjetivo cltico vindo que significa blanco, bueno, feliz, es hoy Santa Mara de Ribarredonda), Segisamuncu lum (diminutivo de Segisamum, tambin ciudad de los turmdigos y a su vez derivado de Segisama formado con el tema cltico sego que significa acto de alcanzar un objetivo, de triunfar o vencer y con el final cltico ama, es hoy Cerezo de ro Tirn); Segontia Paramica (formada con el mismo sufijo ama, es hoy Cigenza del Paramo en la regin de Villarcayo), Uxama Barca (Osma de Valdegovia) y Flaviobriga en la costa autrigona (el sufijo cltico briga significa fortaleza). El nombre del condado de Trevio, Trifinium, se refiere sin duda a que all se situaba el punto de encuentro de las tres tribus celtas, autrigones, caristios y vrdulos, formando la sierra de Cantabria la barrera montaosa que limita los vrdulos y con los berones de Navarra y Rioja por la parte meridional de dicha barrera. Vrdulos, caristios y autrigones, (es decir a los que hoy son llamados vascos), son miembros de la gran familia cntabra que habit el solar geogrfico del reino de Asturias en la poca romana. Los gegrafos, la arqueologa y la historia, marcan entre ellos y los vascones una


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completa diferencia. Un texto de Csar establece la vecindad de Cantabria y Aquitania y Estrabn, sita Cantabria hasta la posicin de los vascones y el Pirineo, y destac la semejanza de costumbres de todas las gentes cantbricas que habitaban en la zona hasta el Pirineo. Los romanos distinguieron con nitidez a los vascones de los vrdulos y los caristios y los incluyeron con los otros pueblos del Ebro, en el Conventus juridicus caesaragustanus, cuya capital era Zaragoza, y a los segundos, con los cntabros, en el Conventus cluniensis, cuya capital, Clnia, estaba en el Duero. Los lingistas han documentado que cntabros, autrigones, caristios y vrdulos hablaban una misma lengua y que era segura su unidad cultural y vital. En las crnicas histricas de Ptolomeo ninguno de los pueblos del territorio vrdulo o caristio tiene nombre de tipo vasco. Los textos histricos reunidos por Schulten hace muchos aos aseguran la perduracin de las diferencias histricas entre los vascones y los celtas del cantbrico hasta el ao 808. 9 La Historia de Navarra, lava, Guipzcoa y Vizcaya desde los primeros caudillos conocidos: El primer seor de Vizcaya en el ao 870-909 fue Lpez Fortn cuyo aspecto fsico llamaba la atencin de los vascos que le llamaban Jaun Zuria que en vasco quiere decir blanco y rubio. En esas fechas el nmero de vascos ya era muy elevado en esa zona. Lpez Fortn fue quin venci a Ordoo en Padura (lugar que los vascos llamaron Arrigiaga), y junto a los castellanos expuls a los moros de Lara en 905. A Lpez Fortn le sucedi como Seor de Vizcaya su hijo Manso Lpez (de apodo Munio) que se cas con Doa Velazquita, hija de Sancho Garcs rey de Navarra. Su hijo Iigo Lpez, conocido como Ezquerra, porque era zurdo, fue el tercer seor de Vizcaya, muy amado por los vizcanos. A este le sucedi su hijo Lope Iiguez (tambin conocido por Lope Daz o Lope Nez), por sobrenombre el Lindo, que cas con Doa Elvira Bermdez, nieta de Lan Calvo , Juez de Castilla, que prest grandes servicios al conde Fernn Gonzlez y al rey de Navarra en sus guerras contra los moros. Lope Iiguez, cuarto Seor de Vizcaya, muri poco despus en Subijana (lava), y debido a la corta edad de sus hijos (Iigo y Garca) se proclam sucesor a su hermano Iigo Lpez de Ezquerra (1040 -1077), y a los hijos de Lope Iiguez, se les concedi los valles de Orozco y de Llodio. Iigo Lpez de Ezquerra (1040/1077), quinto Seor de Vizcaya, se titul asimismo Lope Iiguez como el cuarto Seor, (su otro hermano era Sancho Lpez), cas con Doa Toda Ortiz y ejerci importantes cargos en Castilla y Navarra. A Iigo Lpez de Ezquerra (o Lope Iiguez como se intitul), le sucedi Lope Daz, sexto Seor de Vizcaya, que sirvi a Alfonso VI y cas con la castellana Doa Tido Daz y que fue tambin Seor de lava y Guipzcoa. A la muerte de ste, su hijo Diego Lpez I, (apodado el Blanco), octavo Seor de Vizcaya. De


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su castillo de Haro tom el apellido su hijo Lope Daz de Haro (apodado cabeza brava), noveno Seor de Vizcaya, que en 1160, defendi valerosamente Vizcaya del ataque perpetrado por el rey de Navarra Sancho el Sabio y de las feroces huestes de los Lara que hasta all llegaron. En los aos 1181 y 1182, gobernaba lava, Guipzcoa y Vitoria, Diego Lpez de Haro II, bajo el reinado de Alfonso El Sabio, enfrentndose con este y posteriormente con los de Aragn y Navarra. Tras reconciliarse con Alfonso, particip en el triunfo de las Navas de Tolosa formando la vanguardia del ejercito cristiano contra los moros. A la muerte de Diego Lpez de Haro II, los Seoros de lava, Guipuzcoa y Vitoria pasaron a Lope Daz de Haro (cabeza brava), noveno Seor de Vizcaya. A Lope Daz de Haro(cabeza brava) le sucedi su hijo Diego Lpez de Haro, dcimo Seor de Vizcaya, lava y Guipzcoa, que se enfrent con el monarca castellano (Alfonso El Sabio) y pas al servicio del de Aragn. A este le sucedi Lope Daz de Haro, que continu al servicio del rey de Aragn. A este Diego Lpez de Haro, y a este su to, del mismo nombre, con el consentimiento de Doa Mara Daz de Haro, que le hered tras su muerte. A este decimoquinto Seor de Vizcaya se debe la fundacin de Bilbao, previa aprobacin real en 1300. Su sucesora Doa Mara (La Buena, muy querida de los vizcanos) se retir en 1327 al convento de Perales y la hered en vida su hijo Juan (El Tuerto) asesinado en Toro por orden de Alfonso XI. Le hered su hija Doa Mara, casada con Juan Nez de Lara, que gobern en nombre de su mujer, enfrentndose al rey Don Alfonso y obteniendo despus su perdn, lleg a adquirir tal autoridad que en peligro de vida del rey Don Pedro, que acababa de heredar el reino se pens en Don Juan para sucederle en el reino de castilla. Cuando muri en 1352 su hijo Nuo de Lara tena dos aos, por lo que le hered su hermana mayor Doa Juana de Lara que se cas con Don Tello, hermano del rey Don Pedro. Muerto Don Tello el seoro pas a la Corona de Castilla por recaer en Doa Juana Manuel, mujer del rey Don Enrique, la sucesin de las casas de Haro, Lara y Villena, y aunque esta seora renunci a favor de su primognito, el infante Don Juan , se incorpor definitivamente a la monarqua cuando ste ascendi al trono de Castilla, gestionando el seoro de Vizcaya Doa Mara Daz de Lara, tercera hermana de Juan Nez, casada en Francia con el conde de Etampes. Entonces se estableci en Vizcaya el Corregimiento, que ha llegado hasta el s.XIX, siendo el primer corregidor Juan Alfonso de Castro. A partir de estas fechas dieron comienzo cruentas luchas de linjes, crmenes y horrores entre bandos encabezados por Berroetas, Zugastis, Leguizamones, Urquizus, Suzunagas, y cuantos tenan poder alguno o gentes que les siguieran. Mucho se trabaj para restablecer el orden para cuyo fin los alcaldes de la Hermandad propusieron al corregidor Juan Garca, que no consigui poner orden y a quien sucedi Lpez de Burgos


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en 1465 y continuaron los combates sangrientos. Tuvo que ir Fernando el Catlico posteriormente para restablecer la paz definitivamente otorgando a Bilbao las mismas ordenanzas otorgadas poco antes a Vitoria y en 1483 acudi la reina catlica a jurar los fueros bajo el rbol de Guernica. En 1501 los Reyes catlicos otorgaron la carta real a las Encartaciones de Vizcaya, y extendindose esta misma ley al reino de Galicia, principado de Asturias y villas y tierras de lava y Guipzcoa. Los habitantes de Bayona y Biarritz sujetos al monarca ingls enviaron en 1351 a Juan Lpez de Salcedo, Diego Snchez de Lupard y Martn Prez de Garitano, representantes de las marinas de Santander, Vizcaya y Guipzcoa para formar el 1 de agosto un tratado de treguas. Los fueros vizcanos se escribieron por primera vez en 1342 con las Ordenanzas de la hermandad aprobadas en Guernica con objeto de vigorizar los resortes de la autoridad frente a los desafueros de los banderizos, ya que seguan producindose los saqueos de las bandas de vascos. Tambin est fuera de toda duda que el 15 de Julio de 1300 cuando Don Diego Lpez de Haro fund Bilbao, la zona estaba deshabitada; que los privilegios de los fueros no fueron otorgados ni a los vascones, ni por los vascones, sino por Fernando IV de Castilla y Alfonso XI y Don Pedro I sucesivamente, a los seores vizcanos Don Diego Lpez de Haro, y Don Juan Nez de Lara en los aos 1300, 1335, 1341 y 1350. Que en 1181, fue el rey Sancho de Navarra quin fund la ciudad de Vitoria, ciudad que conserva desde entonces en sus calles sus nombres medievales castellanos de los gremios Zapatera, Tintorera, Herrera, los de sus iglesias, Santa Mara, San Pedro, San Miguel, San Vicente, el de la patrona de Vitoria, la Virgen Blanca, los de sus palacios renacentistas, Escoriaza, Esquivel, Bendaa, Montehermoso o Villa Suso, El Portaln, la Casa del Cordn, estos ltimos del s.XV, todo ello profundamente castellano y sin el menor vestigio de cultura o participacin vasca. lava: la denominacin de lava es conocida desde el s.VII. En el s.IX el primer seor de lava conocido fue el conde Eigln a quien sucedi Vela Jimnez, Conde de lava en el ao 866, que libr batalla y venci a los moros en el ao 882 defendiendo su castillo en la batalla de Cellorigo. En el s.X aparece como seor de lava el Conde de Castilla, Fernn Gonzlez. En el SXI fueron los seores de lava Nuo Gonzlez, Iiguez, Fortuniones Iigo, Munnio Muoz, Lope Iiguez, Lope Daz y Sancho y hasta 1332, entre otros, Don Diego Lpez de Haro, don Nuo Gonzlez de Lara, el infante Don Fernando de la Cerda, don Lope Daz de Haro y don Diego Lpez de Salcedo, ste fue el ltimo de los seores de lava que altern su dependencia con el reino de Castilla (s.X), y el de Navarra (s.XI). Vitoria fue fundada en el ao 1118 por el rey Don Sancho el Sabio de Navarra. En 1134 se produjo la restauracin del reino de Navarra en la persona de Garca Ramrez (1134-1150), que tratar de dar al reino las fronteras que haba alcanzado a la muerte de


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Sancho III el Mayor. En los ltimos aos de su reinado, Garca Ramrez es rey de Pamplona, lava, Vizcaya y Guipzcoa, correspondiendo la tenencia de estos tres ltimos territorios al magnate navarro don Ladrn, que tena ttulo de conde. Un hijo de este, Vela Ladrn, figura como conde de lava en 1158. En 1332 la cofrada de lava solicit del rey Alfonso XI la incorporacin a Castilla con el fin de ser mejor protegida por los reyes contra los saqueos y disturbios, establecindose al efecto por el rey que se rigiesen a partir de entonces por el fuero de Sopartilla en materia de exenciones y en los dems el Fuero Real (o Fuero de las Leyes), Este convenio consta de 23 artculos y su original se conserva en los archivos de lava. La autoridad superior era el diputado general, cargo creado por las Cortes de Madrigal en 1476 para cada una de las provincias de lava, Vizcaya y Guipzcoa, el primero en lava fue Lope Lpez de Ayala, al que sucedi en 1505, Diego Martnez de lava, hasta entonces el elegido para el cargo deba ser vecino de Vitoria pero a partir de 1804 el Consejo Real estableci que fuera elegido cada vez un vecino de una hermandad distinta. Guipzcoa: En Navarra en el ao 419 se fund el reino visigodo de Tolosa, despus de que a los visigodos les dotara en Aquitania de dos tercios de la tierra en calidad de bienes libres de impuestos. Hacia el ao 600, el primer patricio conocido fue el tolosano Flix en el ao 660. A Flix le sucedi Lupo y luego otro del mismo nombre que gobern hasta el ao 778. En el s.X Guipzcoa estuvo unida al reino de Navarra, cuyo rey dio a San Salvador de Leire el monasterio de San Sebastin en el ao 1014, que exista en el trmino de Hernani, y en 1025 el seor de Guipzcoa era Garca Aznarez (hijo de Aznar), bajo la autoridad del Rey de Navarra. Tras la muerte de Sancho el de Pealen, los guipuzcoanos eligieron por seor a Alfonso VI rey de Castilla. Despus se unieron al rey Alfonso I de Aragn con Navarra y a continuacin eligieron tambin con Navarra a Garca Ramrez. En el ao 1200 Guipuzcoa se uni definitivamente a la corona de Castilla cuyo Rey Alfonso VIII confirm los fueros de San Sebastin y de Fuenterraba. A principios de s.XVI la reina Doa Juana otorg al consulado y Casa de Contratacin los privilegios y ordenanzas de la ciudad de Burgos. Finalmente, las guerras carlistas del s.XIX, presentadas por los nacionalistas como el genuino litigio vascn, no fueron otra cosa que una guerra de intereses dinsticos de la familia real espaola. Tal como recogen las crnicas, en 1820 la villa de Bilbao proclam la Constitucin de Cdiz de 1812 y a la muerte de Fernando VII en 1833, se inici la guerra carlista por los partidarios del hermano de Fernando VII, el infante Carlos l, frente a los partidarios de su viuda, Doa Cristina.


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EL FUERO DE GUERNICA La fundacin de las primeras instituciones: Las instituciones que hoy se presentan como vascas fueron fundadas por los celtas en su lengua espaola, idioma indoeuropeo derivado directamente del celta y el nico en el que escribieron las ms viejas leyes constitucionales de esas tierras: sus fueros, en cuya elaboracin no hubo participacin alguna de los vascos, cuya incorporacin tuvo lugar de forma conflictiva e incompleta y muy tarda en el s.XIV, como prueban la siguientes transcripciones:

9 Marzo 1384, mircoles. Los alcaldes del fuero de Vizcaya se pronuncian a favor de la villa de Lequeitio en el pleito con los vecinos de la merindad de Marquina sobre lmites y aprovechamiento de montes. 9 Marzo 1384, mircoles. GUERNICA. Sentencia dada por Juan Furtado de Mendoza, Prestamero mayor, Juan Alfonso de Castro Donato Behedor y Corregidor, y los cinco Alcaldes del fuero de Vizcaya en junta general de so el rbol de Guernica a 9 de Marzo del ao de 1384 por testimonio de Pero Snchez de Fras escribano publico, para que al Concejo de la Villa de Lequeitio se le amparase en la posesin de sus trminos y montes conforme su privilegio; declarando no haber probado los de Amallo Parroquianos de Berriatua la pretensin de querer gozar los montazgos comprendidos en el Privilegiado de Lequeitio, como si fuesen Usas, o Egidos comunes.


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En el exordio de dicha sentencia se relaciona haberse juntado dichos Jueces en Amallo a 30 de Febrero, y en Villaviciosa de Ybita (que es Marquina), en 2 de Marzo y haber asignado el plazo para la Junta general para que alegasen de su Derecho los de Amallo. Sguese en el reverso de la citada sentencia, que esta escrita en pergamino, un Mandamiento del Corregidor Gonzalo Moro, expedido en 22 de Febrero del ao de 1399, para que se guardase la Sentencia relacionada, y fuese amparado el Concejo de Lequeitio en sus trminos. Como los anteriores son todos los acuerdos del rbol de Guernica desde su ms remota fundacin, todos en lengua castellana y adoptados por personas castellanas descendientes directos de los celtas de esos solares que hoy se han dado en llamar vascos. El progreso econmico de las provincias con presencia vasca. Tambin el progreso econmico de las provincias lo atribuyen los nacionalistas a la laboriosidad de los descendientes de la etnia vascona, olvidando otra vez a los pobladores autctonos de esas tierras a quienes, tal como hemos visto, se debe toda la organizacin poltica, social y econmica y a las franquicias y exenciones otorgadas por los monarcas castellanos, para estimular la actividad econmica y el comercio. Esta circunstancia no slo viene avalada por los nombres castellanos de la totalidad de los caudillos y dirigentes de la antigedad que acabamos de ver, sino tambin por otros hechos histricos que tuvieron lugar en pocas muy tempranas, As, en 1480, las Cortes de Toledo acordaron la creacin de los astilleros(atarazanas) de Sevilla y de Bilbao, as como primar la construccin en dichos astilleros, de buques de ms de 200 toneladas. Se trata por lo tanto de unos orgenes histricos repletos de Garcas, Snchez, Lpez, Jimnez, Aznares, Garcs, etc. todos de cultura y ascendiente celta-castellano y donde no hay la menor participacin vasca. Resulta irnico que estos Garcas, Lpez, Jimnez, etc. pobladores autctonos y fundadores de todas las instituciones que hoy se presentan como vascas, sean llamados extranjeros en su propia tierra. El saqueo de antao no ha desaparecido y hoy se orienta a despojar a los ciudadanos oriundos de esas tierras de las instituciones creadas por sus antepasados. 10 Nombres y toponimia celta que los nacionalistas presentan como vascos: Adems de las instituciones ancestrales de los celtas castellanos, los nacionalistas presentan tambin como vascas numerosas palabras celtas, como el numeral hogei, el toponmico Deba, mando o teg (sitio, lugar), Maite (amado), Gori (Incandescente), Erbi (Liebre), Mendi (Monte), Orein (Ciervo), Orkatz (Corzo), etc..


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Son tambin muy numerosos los nombres de los pobladores celtas de las zonas vasconizadas que los nacionalistas hacen pasar por vascos, entre ellos Zuazo (Suessatium), Lezama-Leguizamon (Segisamum, tambin ciudad de los turmdigos y a su vez derivado de Segisama formado con el tema cltico sego que significa acto de alcanzar un objetivo, de triunfar o vencer y con el final cltico ama) y otros muchos nombres y toponimia de los ancestros celtas de los castellanos. No son precisamente las crnicas de la historia un relato que agrade oir a los nacionalistas vascos, pero todos debemos conocerlas porque Veritas Liberavit Vos solo la verdad nos hace libres -


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MUNDO ROMANO En el ao 196 a.C. llegaron los romanos a tierras del Pas Vasco, con los que los antiguos vascos vivieron en paz y en cooperacin. Tanto los romanos como las tribus vascas posean los mismos enemigos comunes, lo que dara lugar a un buen entendimiento. Mientras los romanos colaboraron con las tribus vascas en expulsar a los celtas (llegados a tierras pirenaicas a partir del siglo VIII a.C.), las tribus vascas colaboraron con los romanos en sus guerras contra los cntabros y astures de origen celta. Fue tal el grado de sintona debido al respeto de los romanos a las diferentes tribus vascas y sus territorios, que incluso, hubo autrigones, vascones, caristios, vrdulos y aquitanos enrolados en las legiones romanas en sus guerras contra los britanos. Unas guerras acaecidas en lo que hoy en da es conocido con el nombre de Gran Bretaa. Habiendo sido encontradas lpidas mortuorias de la poca romana, con nombres e inscripciones eusquricas, cerca de Londres, antigua Londinum romana.

A travs de esta buena relacin, se asentaran colonos romanos al sur de las tierras de estas tribus y en zonas mineras como las de Somorrostro en Autrigonia (Vizcaya) o en las llanadas de Aquitania, lo que dara lugar a la colonias romanas de la Novempopulania (nueve pueblos), Aquitania Prima y Aquitania Secunda, en lo que hoy en da se conoce como Aquitania o Gascua. Unos asentamientos que daran lugar siglos despus al surgimiento de las lenguas y culturas pirenaicas de origen latino fruto del mestizaje de vascos y latinos (castellana, navarra, aragonesa, dialecto occidental del cataln y dialecto gascn del provenzal u occitano).


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En la decadencia del Imperio Romano, surge el vaco de poder y las razzias de los pueblos germanos. En el 481 dc los visigodos ocupan Pamplona y otras ciudades vasconas y de la provincia Tarraconense. En las ciudades vasconas dominan esencialmente la poltica los vasco-romanos ms o menos romanizados. En esta poca encontramos en las zonas montaosas de Navarra y al oeste hasta parte de Catalua, a vascones de estructura tribal y carcter primitivo, que viven del saqueo, y que en buena parte se estn desplazando hacia las zonas ms occidentales, ocupadas por los pueblos vrdulo, caristio y autrign, medianamente romanizados. Estos vascones eran paganos en su totalidad y toda la zona que poblaban viva, adems del saqueo, de la pequea ganadera y de una agricultura de subsistencia. Las aldeas, valles y caseros vascones disponan de un jefe de guerra (en algunos casos deban gobernarse por medio de Consejos de Ancianos). Los visigodos trataran individualmente con los diversos dirigentes su sumisin. Puesto que los visigodos no pensaban establecerse en las tierras del norte, esta sumisin deba implicar solamente una alianza militar y una vinculacin jurdica al dominio real visigodo, y evidentemente, un convenio de no agresin. En esta poca (hacia el 482) que en el valle del Ebro y probablemente tambin en la zona de Pamplona se establecieron los primeros propietarios visigodos, los cuales iran acompaados de sus familias, de sus esclavos y de sus servidores. Esta afluencia haca imposible la supervivencia normal en las montaas, y esta presin demogrfica forz el desplazamiento de los nuevos llegados, o de vascones asentados de antiguo en las montaas, hacia Vascongadas (desde el 456 hasta el 481), donde, a causa de los saqueos que ya duraban varios aos, se haba producido un despoblamiento acusado de sus poblaciones autctonas, y donde ya se haban asentado algunos vascones y vasconizados.


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Este desplazamiento supuso una catstrofe para Vardlia (Guipuzcoa y parte de lava) y Caristia (Vizcaya y parte de lava), cuya reducida poblacin no pudo hacer frente a los nuevos llegados, quienes ahora no solo saqueaban y se retiraban, sino que ocupaban las posesiones de los que moran en la lucha o de los que escapaban hacia zonas ms seguras. Vrdulos y caristios huyeron hacia los territorios de los autrigones, cntabros, berones y turmogos. Los que no huyeron fueron asesinados, esclavizados o acabaron fundindose entre los invasores. Hacia el oeste los vascones de las montaas haban prcticamente concluido en el ao 507 la conquista de Vardlia y Caristia. Miles de vascones montaeses se haban asentado en las nuevas zonas conquistadas. La poblacin local que haba sobrevivido a los ataques y saqueos, se haba mezclado con los grupos de recin llegados, y se iniciaba un proceso rpido de vasconizacin, seguramente favorecido por la tendencia a nuevas llegadas de vascones, a la emigracin de los indgenas, y a que la poblacin que permaneci en la zona estaba formada en mayora por mujeres, mientras que buena parte de los hombres que siguieron sobre el terreno no eran tnicamente vrdulos o caristios: parte de ellos eran esclavos o colonos de diversos orgenes (incluso algunos vascones).

Apuntes sobre LOS ORIGENES DEL PUEBLO VASCO 2002

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