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DIOCESIS DE SANTA ROSA DE OSOS

“Estamos evangelizando para que el pueblo de Dios acreciente y

anuncie su fe en cristo, Rostro Misericordioso del Padre, Quien nos llama a ser misericordiosos, socorriendo a los presos

HACIA EL CENTENARIO DE NUESTRA DIÓCESIS

Misión con el adulto mayor

ENCUNENTRO DE VICARÍA FORÁNEA_____________ ABRIL _____ DE 2016- __________________

1. MOMENTO INICIAL DEL ENCUENTRO

a) Saludo de acogida a los participantes: El vicario foráneo da la bienvenida a los

participantes y cada sacerdote se presenta y presenta a los laicos que lo acompañan.

b) Momento de oración

Lectura orante de la Palabra de Dios

Invocación del Espíritu Santo

Ven, Espíritu Santo, Llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor. Envía tu Espíritu Señor y se renovará la faz de la tierra. Oh Dios, que llenaste los corazones de tus fieles con la luz del Espíritu Santo; concédenos que, guiados por el mismo Espíritu, sintamos con rectitud y gocemos siempre de tu consuelo. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.

Proclamación del Texto bíblico (Rm. 10, 14- 17) “¿Cómo invocarán al Señor sin haber creído en él? Y ¿cómo podrán creer si no han oído hablar de él? Y ¿cómo oirán si no hay quién lo proclame? Y ¿cómo lo proclamarán si no son enviados? Como dice la Escritura ¡Cuán hermosos los pies de los que anuncian la Buena Nueva! Pero no todos obedecieron. Porque Isaías dice: Señor ¿Quién ha creído a nuestra predicación? Por tanto la fe viene de la proclamación y la proclamación por la Palabra de Cristo”

Eco de la Palabra de Dios: - Decimos en voz alta la expresión que más nos gusta y los participantes responden

“la fe viene de la proclamación de la Palabra” - Qué es lo que más te llama la atención de este texto - ¿Cuál es la realidad que nos presenta la Palabra? - Qué nos pide hoy el Señor

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Meditando y contemplando Contemplemos la misión para la que Jesús nos ha elegido y enviado “anunciar la Buena Nueva a todos”

¿Cómo proclamo la Palabra de Dios?

¿La proclamación de la Palabra de Dios ha suscitado la fe en las personas que la escuchan, la oran, la celebran?

¿Cuáles son los signos de fe en ellos y en mí?

¿Qué he hecho por los que están alejados?

Orando Invitamos a algunos de los participantes a presentar oraciones breves al Señor, ya sea de acción de gracias, de perdón o de petición, los participantes responden “Aquí estoy Señor Envíame”.

a) Canto: yo tengo fe

Yo tengo fe que todo cambiará, que triunfara por siempre el amor, yo tengo fe que siempre brillará, la luz de la esperanza no se apagara jamás.

Yo tengo fe, yo creo en el amor, yo tengo fe también mucha ilusión, porque yo sé, será una realidad, el mundo de justicia que ya empieza a despertar.

Yo tengo fe porque yo creo en Dios, yo tengo fe será todo mejor, se callarán el odio y el dolor, la gente nuevamente hablará de su ilusión.

Yo tengo fe los hombres cantarán, una canción de amor universal, yo tengo fe será una realidad, el mundo de justicia que ya empieza a despertar.

b) Objetivo del encuentro de Vicaría

En ambiente de oración, comunión y participación sacerdotes, religiosas y laicos nos encontramos para:

Fortalecer la espiritualidad de comunión, savia que mueve la acción evangelizadora

Compartir logros y dificultades en la acción evangelizadora realizada en esta primera parte del año de la misericordia y de la fe anunciada.

Proponer algunas acciones pertinentes que fortalezcan la acción evangelizadora en la Vicaría Foránea.

1.2. EVALUANDO LA ACCIÓN EVANGELIZADORA

1. VER

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Vamos a compartir en ambiente de comunión y participación algunos logros y dificultades en la acción evangelizadora. Cada parroquia presenta un logro y una dificultad de cada uno de los siguientes aspectos

ACCIÓN EVANGELIZADORA LOGROS UNA DIFICULTADES

1. Acciones significativas

2. Pequeños grupos de familia

3. Acción evangelizadora en el sector rural

4. Misión de la Misericordia

5. Semana Vocacional

6. ¿De qué manera la acción evangelizadora propicia el anuncio de la fe?

7. El proceso de paz

¿Cómo le ve la gente? Inquietudes que surgen

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1.2. MIRANDO EL CAMINAR EVANGELIZADOR DE NUESTRA DIÓCESIS EN 100 AÑOS DE VIDA Y MISIÓN Nota: Se propone que este documento del ver se trabaje por grupos, después de un tiempo suficiente para su lectura se abre un compartir grupal. La prospectiva es uno de los aspectos que caracteriza la acción evangelizadora que realizamos en nuestra Diócesis a través del PDRE, resaltamos pues algunas claves de la prospectiva:

1) La esperanza en el cumplimiento de las promesas de Dios que sigue actuando hoy en nuestra historia.

2) La acción evangelizadora está enmarcada dentro del plan salvífico de Dios, por tanto

reconocemos su acción y nuestra responsabilidad. 3) La dinámica del tiempo la cual se mueve en las actitudes de fe, gratitud y memoria por lo

que Dios ha realizado con nuestra Iglesia particular; se mueve en la certeza de un presente cambiante que exige asumir conversiones y nuevos desafíos y por la visión de futuro a largo plazo, el cual construimos desde la esperanza con acciones que respondan de manera efectiva al querer de Dios para su pueblo amado.

En clave de prospectiva demos una mirada rápida al caminar evangelizador de nuestra Diócesis que se prepara para celebrar 100 años de vida y misión.

a) ¿De dónde venimos?

Reconocemos una audaz y constante acción evangelizadora realizada con entrega y sacrificio por obispos, sacerdotes, religiosos(as) y laicos dentro y fuera de la diócesis, lo que ha dejado ver algunos frutos como: la identidad cristiana, el sentido de pertenencia a la Iglesia y el compromiso con el mundo de un grupo significativo de bautizados, familias e instituciones; la abundancia de vocaciones sacerdotales, religiosas y misioneras y una incidencia de la evangelización en bien de la promoción de la persona humana y su desarrollo. Damos gracias al Señor por todo lo que Él ha hecho en su pueblo que peregrina en nuestra Diócesis, pero no podemos desconocer que la acción evangelizadora en muchas ocasiones ha tenido obstáculos, debido en ocasiones a factores externos y en otras a nuestras resistencias y debilidades.

Reconocemos que no hemos podido llegar a la gran mayoría con el anuncio de la Buena Nueva.

Nos ha costado evangelizar con más dedicación en algunos espacios como la educación, la familia, los jóvenes…

Hemos tenido la tendencia de sacramentalizar, sin suficiente evangelización, por ello encontramos que muchos bautizados e inclusive algunos de nuestros evangelizadores

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no han recibido el primer anuncio de Jesucristo, no han tenido una experiencia con ÉL, viven su fe de manera incoherente, otros aunque creen, han abandonado la Iglesia.

Los otros grupos religiosos crecen rápidamente.

Muchos bautizados y evangelizadores han perdido el amor primero, la alegría para anunciar el Evangelio.

Hay una crisis de fe en muchas familias e instituciones.

La tendencia consumista/materialista ha ahogado la fe, pues las personas quieren fundamentar su felicidad en el tener para asegurar su bienestar, dejando a Dios de lado, porque el amor que Jesús nos manda es un camino que implica renuncia y sacrificio.

b) ¿En dónde estamos?

En los últimos años nos hemos venido preguntando ¿Iglesia de Santa Rosa de Osos qué dices de ti misma frente a los nuevos fenómenos que a nivel religioso, social, económico, cultural, político y ecológico, afectan la vida de nuestras comunidades? Como hace 51 años la Iglesia Católica entró en aggiornamento (revisión/renovación) mediante el Concilio Vaticano II) en los últimos años nuestra Iglesia diocesana entró en proceso de renovación pastoral.

Hace ya casi 20 años nuestra Diócesis asumió en comunión y participación el Plan Diocesano de Renovación y evangelización, como un instrumento valioso que nos ayuda a realizar de manera organizada, global y procesual la evangelización. Ya recorrimos la primera etapa de convocación e iniciación cristiana (kerigmática), reconociendo que el anuncio kerigmático en la evangelización no es solo de una etapa, sino que es proceso permanente.

Pasamos a la segunda etapa (llamada pre-catecumenal, de crecimiento) en la que toda la acción evangelizadora está orientada para que el pueblo de Dios viva un crecimiento en su vida cristiana, mediante el reencuentro con la Palabra de Dios (primera fase), la renovación de la fe recibida, vida y anunciada (segunda fase) y la experiencia con Cristo que vivirá todo el pueblo bautizado, con el fin de conocerlo, amarlo y seguirlo para anunciarlo con alegría a quienes no lo conocen o se han alejado de Él.

Este año 2016 orientaremos nuestra acción evangelizadora para fortalecer nuestra Fe en Jesús, Rostro Misericordioso del Padre, anunciando nuestra experiencia de fe mediante el testimonio de acogida y perdón y las obras de misericordia en todos los espacios de formación y evangelización.

También durante este año estamos preparando la celebración del centenario de vida y misión de nuestra amada diócesis, la cual hemos venido preparando con el novenario que año a año ha venido convocando y realizando la misión con grupos específicos para que renueven su compromiso misionero, porque nuestra Iglesia particular se encuentra en estado permanente de misión, en sintonía con toda la Iglesia latinoamericana y del Caribe. Este año 2016 están convocados los adultos mayores.

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c) ¿Hacia dónde vamos? Con la guía del Espíritu Santo, la presencia de Jesús resucitado y la protección de Nuestra Señora de las Misericordias vamos avanzando hacia el ideal que nos hemos propuesto, el cual expresa la Iglesia que Dios quiere y el pueblo de Dios necesita. En nuestro proceso de evangelización avanzamos con el ritmo que nos hemos propuesto, sin prisa, pero sin pausa, sin la inmediatez que nos hace pensar en resultados inmediatos; un proceso construido con elementos de la planificación estratégica prospectiva. Avanzamos hacia el ideal el cual alcanzaremos si todos trabajamos en comunión y participación. En este momento llevamos más de la mitad de la segunda fase de la segunda etapa, lo que quiere decir que tenemos que visualizar con proyección de futuro nuestra hoja de ruta evangelizadora, al finalizar la segunda etapa, debemos tener formados y fortalecidos los pequeños grupos de familia, para que durante la tercera etapa se vayan formando y consolidando las Comunidades Eclesiales de Base (CEB). En el tiempo que nos queda de la segunda etapa, debemos también fortalecer las estructuras de animación y participación, poseer en pleno la Palabra de Dios, vivir de manera más comprometida nuestra fe y tener ya una experiencia de Cristo. AL terminar la etapa nuestra Iglesia diocesana entrará en estado sinodal, para preparar el Sínodo Diocesano, en un itinerario de unos dos o tres años. Lectura de fe: interpretar desde la fe lo que hemos vivido en la acción evangelizadora de nuestra Diócesis

Los aspectos que compartimos en la evaluación inicial

Los elementos del caminar evangelizador en casi 100 años

¿Cuáles actitudes surgen en nosotros? 3.1. FE RECIBIDA, VIVIDA Y ANUNCIADA (para este tema, ver diapositivas) NOTA: El vicario foráneo comparte este tema de manera ágil en este momento de formación. Diálogo inicial con todos los participantes

¿Por qué creemos hoy en Dios?

¿Para qué anunciar nuestra fe?

¿Cómo anunciamos la fa en nuestra acción evangelizadora?

2. DISCERNIR

3. ILUMINAR

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3.2. LA FE QUE RECIBIMOS Y VIVIMOS Debido a nuestra condición humana, limitada y frágil todos hemos vivido la experiencia de fe, confiamos en algo o alguien: nuestros padres, un amigo(a), un médico, un medicamento, etc., pero gracias al amor que Dios nos tiene, quiso darse a conocer a todos los hombres. “En diversas ocasiones y bajo diferentes formas Dios habló a nuestros padres por medio de los profetas, hasta que en estos días, que son los últimos, nos habló a nosotros por medio del Hijo, a quien hizo destinatario de todo, ya que por él dispuso las edades del mundo”. (Hb. 1, 1-2) Gracias al anuncio del mensaje de salvación que Cristo nos comunicó a través de la Buena Nueva, nosotros hemos respondido a Dios con la fe que es un don gratuito de su amor. La fe que profesamos implica tanto comprender y asumir con obediencia y sencillez los contenidos recibidos por Revelación, la Sagrada Escritura y la Tradición de la Iglesia, que se encuentran resumidos en el Credo que recitamos cada domingo, como la entrega libre y amorosa a Dios en quien confiamos, que nos lleva a vivir como Él quiere que vivíamos en el mundo. “La sagrada Escritura llama ‘obediencia de la fe’ a esta respuesta del hombre a Dios que se da a conocer. De esta obediencia, Abraham es el modelo que nos propone la Sagrada Escritura. La carta a los Hebreos, hace un elogio de la fe de los antepasados,: “Por la fe, Abraham obedeció y salió para el lugar que había de recibir en herencia, y salió sin saber a dónde iba” (Hb. 11,8; Gn. 12, 1-4). Por la fe, vivió como extranjero y peregrino en la Tierra prometida (Gn. 23,4). Por la fe, a Sara se le otorgó el concebir al hijo de la promesa. La Virgen María es la realización más perfecta de la misma, porque acogió el anuncio y la promesa que le traía el ángel Gabriel, creyendo que ‘nada es imposible para Dios’ (Lc. 1,37; Gn. 18,14) y dando su asentimiento: ‘He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra’. (Lc. 1, 38). (Catecismo de la Iglesia Católica-CEC. # 142-144, 148) Todos hemos recibido la fe transmitida por nuestros padres en el hogar, por los sacerdotes y catequistas en la parroquia y por los educadores en la escuela; debido a ello encontramos en nuestras parroquias, familias, laicos y evangelizadores que han madurado la fe mediante experiencias de formación y movimientos de espiritualidad. Ellos viven su fe no solo de palabra, sino como estilo de vida que se refleja en el actuar de cada día donde se desarrolla su vida: en el comercio, en la política, en el liderazgo, en la educación, etc. Diariamente vemos personas fieles, constantes que con su testimonio de vida mueven a otros a creer. Sin embargo encontramos en nuestras comunidades parroquiales muchos bautizados que se quedaron con la formación inicial, que en muchos casos fue la trasmisión de conceptos, tradiciones y prácticas de piedad popular. A diario nos encontramos con personas que creen, pero que abandonaron la Iglesia; otras viven su fe de manera incoherente mezclándola con la corrupción, la violencia, los vicios, la injusticia, etc. “La puerta de la fe (Hch. 14, 27), que introduce en la vida de comunión con Dios y permite la entrada en su Iglesia, está siempre abierta para nosotros. Se cruza cuando la Palabra de Dios se anuncia y el corazón se deja plasmar por la gracia que transforma. La fe es un camino que

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conduce al encuentro con Cristo salvador, el único capaz de sacar al hombre del desierto y conducirlo a la vida en plenitud”. (Porta Fidei n.1) 3.3. FE Y ANUNCIO

Hablar sobre la fe y el anuncio, realidades íntimamente ligadas en la vida del Discípulo Misionero, implica reflexionar por un lado sobre la naturaleza misma de la fe y por otro, sobre cómo el fiel cristiano tiene la alegre responsabilidad de compartirla al mundo. “Es el amor de Cristo el que llena nuestros corazones y nos impulsa a evangelizar. Hoy como ayer, él nos envía por los caminos del mundo para proclamar su Evangelio a todos los pueblos de la tierra (Mt. 28, 19). Por eso, también hoy es necesario un compromiso eclesial más convencido en favor de una nueva evangelización para redescubrir la alegría de creer y volver a encontrar el entusiasmo de comunicar la fe” (Porta Fidei # 7) “En efecto, la misión renueva la Iglesia, refuerza la fe y la identidad cristiana, da nuevo entusiasmo y nuevas motivaciones. ¡La fe se fortalece dándola! La nueva evangelización de los pueblos cristianos hallará inspiración y apoyo en el compromiso por la misión universal”. (Carta Encíclica Redemptoris Missio, # 2 § 3- San Juan Pablo II) Reconocemos que hay una crisis de fe, tal fenómeno exige a los evangelizadores asumir retos y nuevos desafíos a la hora de evangelizar. “La crisis de fe no es necesariamente un obstáculo para anunciar a toda creatura el Evangelio. “No podemos dejar que la sal se vuelva sosa y la luz permanezca oculta (Mt. 5, 13-16). Como la samaritana, también el hombre actual puede sentir de nuevo la necesidad de acercarse al pozo para escuchar a Jesús, que invita a creer en él y a extraer el agua viva que mana de su fuente (Jn. 4, 14)” (Porta Fidei 2). “La fe es un don que se nos ha dado para compartirlo; es un talento recibido para que dé fruto; es una luz que no debe quedar escondida, sino iluminar toda la casa. Se dice que nadie da lo que no tiene, por lo que toda persona que ha recibido la fe puede también compartirla, anunciarla. No se trata de transmitir conocimientos puramente de memoria con el fin de recitarlos ante un auditorio; se trata, más bien, de transmitir la experiencia de fe, una experiencia de vida que, ante todo, se ha configurado con el Evangelio que “no es solamente una comunicación de cosas que se pueden saber, sino una comunicación que comporta hechos y cambia la vida” 3.4. COMPARTIR LA FE IMPLICA Conversión, “Nadie puede venir a mí, si el Padre que me ha enviado no lo atrae” (Jn. 6, 44). La conversión se expresa desde el principio con una fe total y radical, que no pone límites ni obstáculos al don de Dios. "El tiempo se ha cumplido y el Reino de Dios está cerca; convertíos y creed en la Buena Nueva”. (Mc. 1, 14-15) Interiorizarla, esto se logra cuidándola, acrecentándola y alimentándola con la escucha de la Palabra de Dios, las enseñanzas de la Iglesia, la oración y la vivencia de los sacramentos, especialmente la Eucaristía.

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Anunciarla, que quiere decir compartirla eclesialmente, no desde la propia interpretación subjetiva, sino desde la Fe de la Iglesia y en orden a la salvación de los hombres. Testimoniarla, el testimonio de vida cristiana es la primera e insustituible forma de la misión: Cristo, de cuya misión somos continuadores, es el Testigo por excelencia (Ap. 1, 5; 3, 14) y el modelo del testimonio cristiano.

Es necesario renovar el entusiasmo de comunicar la fe, para promover una nueva evangelización de las comunidades y de los países que están perdiendo la referencia de Dios, de forma que se pueda redescubrir la alegría de creer. Toda nuestra acción evangelizadora debe ser proclamación gozosa de la Buena Nueva de Salvación, experiencia de fe y encuentro con Jesucristo resucitado. Anuncio de Salvación que despierta la esperanza, suscita la fe y despierta a la caridad. El Kerigma se da al Inicio y es hilo conductor de todos los procesos evangelizadores que nos inician en la fe, dinamiza el crecimiento y maduración en la mima. Esta fase nuestra acción evangelizadora está orientada a redescubrir la fe que recibimos, vivimos, anunciamos…Al finalizar este año la gran mayoría del pueblo de Dios ha redescubierto la experiencia de haber anunciado su fe. ¿Dónde, quiénes, cómo anunciamos la fe? En todos los espacios de evangelización que tiene la parroquia: la catequesis, los pequeños grupos de familia, los sectores y los espacios de formación: los encuentros de vicaría, las ejercitaciones de espiritualidad comunitaria; la pastoral de multitudes: las acciones significativas, la fiestas patronales, la Semana Santa, la Misión Diocesana de la Misericordia, la Semana Vocacional. Todos los evangelizadores que con nuevo ardor y alegría anunciamos la Buena Nueva, despertando la fe, la conversión y el seguimiento a Jesucristo. NOTA: ver anexos

4. ACTUAR

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DIOCESIS DE SANTA ROSA DE OSOS

“Estamos evangelizando para que el pueblo de Dios acreciente y

anuncie su fe en cristo, Rostro Misericordioso del Padre, Quien nos llama a ser misericordiosos, socorriendo a los presos

HACIA EL CENTENARIO DE NUESTRA DIÓCESIS

Misión con el adulto mayor

ENCUNENTRO DE VICARÍA FORÁNEA______________________ ABRIL ______ DE 2016- ______________________________

AGENDA

ACTIVIDAD HORA

Acogida a los participantes 09:00 a.m.

Momento de oración- Lectura orante de la Palabra de Dios 09:15

VER: Evaluando la acción evangelizadora- ejercicio grupal 10:00

Plenario 10:30

Refrigerio descanso 11:00

VER: mirando el caminar evangelizador de nuestra Diócesis en su 100 años de vida y misión- trabajo en pequeños grupos

11:30

DISCERNIR: Plenario 12:00 m.

Almuerzo 12:30 p.m.

ILUMINAR: fe recibida, vivida y anunciada 1:30

Asuntos de la vicaría foránea: procedimiento para asesoría en posibles casos de nulidad matrimonial, definir fecha para el tercer tiempo de las ejercitaciones de espiritualidad comunitaria…Varios

2:15

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DIOCESIS DE SANTA ROSA DE OSOS

“Estamos evangelizando para que el pueblo de Dios acreciente

y anuncie su fe en cristo, Rostro Misericordioso del Padre, Quien nos llama a ser misericordiosos, socorriendo a los presos

HACIA EL CENTENARIO DE NUESTRA DIÓCESIS

Misión con el adulto mayor

ENCUNENTRO DE VICARÍA FORÁNEA_________________________ ABRIL _________ DE 2016- ___________________________

OBJETIVO DEL ENCUENTRO DE VICARÍA En ambiente de oración, comunión y participación sacerdotes, religiosas y laicos nos encontramos para:

Fortalecer la espiritualidad de comunión, savia que mueve la acción evangelizadora

Compartir logros y dificultades en la acción evangelizadora realizada en esta primera parte del año de la misericordia y de la fe anunciada.

Proponer algunas acciones pertinentes que fortalezcan la acción evangelizadora en la Vicaría Foránea.

LECTURA ORANTE DE LA PALABRA DE DIOS

Invocación del Espíritu Santo

Ven, Espíritu Santo, Llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor. Envía tu Espíritu Señor y se renovará la faz de la tierra. Oh Dios, que llenaste los corazones de tus fieles con la luz del Espíritu Santo; concédenos que, guiados por el mismo Espíritu, sintamos con rectitud y gocemos siempre de tu consuelo. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.

Proclamación del Texto bíblico (Rm. 10, 14- 17) “¿Cómo invocarán al Señor sin haber creído en él? Y ¿cómo podrán creer si no han oído hablar de él? Y ¿cómo oirán si no hay quién lo proclame? Y ¿cómo lo proclamarán si no son enviados? Como dice la Escritura ¡Cuán hermosos los pies de los que anuncian la Buena Nueva! Pero no todos obedecieron. Porque Isaías dice: Señor ¿Quién ha creído a nuestra predicación? Por tanto la fe viene de la proclamación y la proclamación por la Palabra de Cristo”

DOCUMENTO # 1 PARA CADA PARTICIPANTE

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CANTO: YO TENGO FE

Yo tengo fe que todo cambiará, que triunfara por siempre el amor, yo tengo fe que siempre brillará, la luz de la esperanza no se apagara jamás.

Yo tengo fe, yo creo en el amor, yo tengo fe también mucha ilusión, porque yo sé, será una realidad, el mundo de justicia que ya empieza a despertar.

Yo tengo fe porque yo creo en Dios, yo tengo fe será todo mejor, se callarán el odio y el dolor, la gente nuevamente hablará de su ilusión.

Yo tengo fe los hombres cantarán, una canción de amor universal, yo tengo fe será una realidad, el mundo de justicia que ya empieza a despertar.

EVALUANDO LA ACCIÓN EVANGELIZADORA

ACCIÓN EVANGELIZADORA LOGROS UNA DIFICULTADES

1. Acciones significativas

2. Pequeños grupos de familia

3. Acción evangelizadora en el sector rural

4. Misión de la Misericordia

5. Semana Vocacional

6. ¿De qué manera la acción evangelizadora propicia el anuncio de la fe?

7. El proceso de paz

¿Cómo le ve la gente? Inquietudes que surgen

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MIRANDO A GRANDES RASGOS EL CAMINAR EVANGELIZADOR DE NUESTRA DIÓCESIS EN 100 AÑOS DE VIDA Y MISIÓN

Nota: Se propone que este documento del ver se trabaje por grupos, después de un tiempo suficiente para su lectura se abre un compartir grupal (ver pautas para el diálogo al final de este documento). LA PROSPECTIVA es uno de los aspectos que caracteriza la acción evangelizadora que realizamos en nuestra Diócesis a través del PDRE, resaltamos pues algunas claves de la prospectiva: a) La esperanza en el cumplimiento de las promesas de Dios que sigue actuando hoy en

nuestra historia. b) La acción evangelizadora está enmarcada dentro del plan salvífico de Dios, por tanto

reconocemos su acción y nuestra responsabilidad. c) La dinámica del tiempo la cual se mueve en las actitudes de fe, gratitud y memoria por lo

que Dios ha realizado con nuestra Iglesia particular; se mueve en la certeza de un presente cambiante que exige asumir conversiones y nuevos desafíos y por la visión de futuro a largo plazo, el cual construimos desde la esperanza con acciones que respondan de manera efectiva al querer de Dios para su pueblo amado.

En clave de prospectiva demos una mirada rápida al caminar evangelizador de nuestra Diócesis que se prepara para celebrar 100 años de vida y misión.

1) ¿De dónde venimos?

Reconocemos una audaz y constante acción evangelizadora realizada con entrega y sacrificio por obispos, sacerdotes, religiosos(as) y laicos dentro y fuera de la diócesis, lo que ha dejado ver algunos frutos como: la identidad cristiana, el sentido de pertenencia a la Iglesia y el compromiso con el mundo de un grupo significativo de bautizados, familias e instituciones; la abundancia de vocaciones sacerdotales, religiosas y misioneras y una incidencia de la evangelización en bien de la promoción de la persona humana y su desarrollo. Damos gracias al Señor por todo lo que Él ha hecho en su pueblo que peregrina en nuestra Diócesis, pero no podemos desconocer que la acción evangelizadora en muchas ocasiones ha tenido obstáculos, debido en ocasiones a factores externos y en otras a nuestras resistencias y debilidades.

Reconocemos que no hemos podido llegar a la gran mayoría con el anuncio de la Buena Nueva.

DOCUMENTO # 2- PARA LECTURA EN PEQUEÑOS GRUPOS (una copia por grupo)

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Nos ha costado evangelizar con más dedicación en algunos espacios como la educación, la familia, los jóvenes…

Hemos tenido la tendencia de sacramentalizar, sin suficiente evangelización, por ello encontramos que muchos bautizados e inclusive algunos de nuestros evangelizadores no han recibido el primer anuncio de Jesucristo, no han tenido una experiencia con ÉL, viven su fe de manera incoherente, otros aunque creen, han abandonado la Iglesia.

Los otros grupos religiosos crecen rápidamente.

Muchos bautizados y evangelizadores han perdido el amor primero, la alegría para anunciar el Evangelio.

Hay una crisis de fe en muchas familias e instituciones.

La tendencia consumista/materialista ha ahogado la fe, pues las personas quieren fundamentar su felicidad en el tener para asegurar su bienestar, dejando a Dios de lado, porque el amor que Jesús nos manda es un camino que implica renuncia y sacrificio.

2) ¿En dónde estamos?

En los últimos años nos hemos venido preguntando ¿Iglesia de Santa Rosa de Osos qué dices de ti misma frente a los nuevos fenómenos que a nivel religioso, social, económico, cultural, político y ecológico, afectan la vida de nuestras comunidades? Como hace 51 años la Iglesia Católica entró en aggiornamento (revisión/renovación) mediante el Concilio Vaticano II) en los últimos años nuestra Iglesia diocesana entró en proceso de renovación pastoral.

Hace ya casi 20 años nuestra Diócesis asumió en comunión y participación el Plan Diocesano de Renovación y evangelización, como un instrumento valioso que nos ayuda a realizar de manera organizada, global y procesual la evangelización. Ya recorrimos la primera etapa de convocación e iniciación cristiana (kerigmática), reconociendo que el anuncio kerigmático en la evangelización no es solo de una etapa, sino que es proceso permanente.

Pasamos a la segunda etapa (llamada pre-catecumenal, de crecimiento) en la que toda la acción evangelizadora está orientada para que el pueblo de Dios viva un crecimiento en su vida cristiana, mediante el reencuentro con la Palabra de Dios (primera fase), la renovación de la fe recibida, vida y anunciada (segunda fase) y la experiencia con Cristo que vivirá todo el pueblo bautizado, con el fin de conocerlo, amarlo y seguirlo para anunciarlo con alegría a quienes no lo conocen o se han alejado de Él.

Este año 2016 orientaremos nuestra acción evangelizadora para fortalecer nuestra Fe en Jesús, Rostro Misericordioso del Padre, anunciando nuestra experiencia de fe mediante el testimonio de acogida y perdón y las obras de misericordia en todos los espacios de formación y evangelización.

También durante este año estamos preparando la celebración del centenario de vida y misión de nuestra amada diócesis, la cual hemos venido preparando con el novenario que año a año ha venido convocando y realizando la misión con grupos específicos para que renueven su compromiso misionero, porque nuestra Iglesia particular se encuentra

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en estado permanente de misión, en sintonía con toda la Iglesia latinoamericana y del Caribe. Este año 2016 están convocados los adultos mayores.

3) ¿Hacia dónde vamos? Con la guía del Espíritu Santo, la presencia de Jesús resucitado y la protección de Nuestra Señora de las Misericordias vamos avanzando hacia el ideal que nos hemos propuesto, el cual expresa la Iglesia que Dios quiere y el pueblo de Dios necesita. En nuestro proceso de evangelización avanzamos con el ritmo que nos hemos propuesto, sin prisa, pero sin pausa, sin la inmediatez que nos hace pensar en resultados inmediatos; un proceso construido con elementos de la planificación estratégica prospectiva. Avanzamos hacia el ideal el cual alcanzaremos si todos trabajamos en comunión y participación. En este momento llevamos más de la mitad de la segunda fase de la segunda etapa, lo que quiere decir que tenemos que visualizar con proyección de futuro nuestra hoja de ruta evangelizadora, al finalizar la segunda etapa, debemos tener formados y fortalecidos los pequeños grupos de familia, para que durante la tercera etapa se vayan formando y consolidando las Comunidades Eclesiales de Base (CEB). En el tiempo que nos queda de la segunda etapa, debemos también fortalecer las estructuras de animación y participación, poseer en pleno la Palabra de Dios, vivir de manera más comprometida nuestra fe y tener ya una experiencia de Cristo. AL terminar la etapa nuestra Iglesia diocesana entrará en estado sinodal, para preparar el Sínodo Diocesano, en un itinerario de unos dos o tres años.

NOTA: Después de compartir de manera breve la evaluación de la acción evangelizadora y de la lectura de este documento, viene el momento de discernimiento con esta pauta:

Lectura de fe: interpretar desde la fe lo que hemos vivido en la acción evangelizadora de nuestra Diócesis

Los aspectos que compartimos en la evaluación inicial

Los elementos del caminar evangelizador en casi 100 años

¿Cuáles actitudes surgen en nosotros?