Marta Caballero, Andrea Galiano y Laura Huerga

Análisis de una película: “El show de Truman”

INTRODUCCIÓN:

El Show de Truman (Una vida en directo), tiene origen en el estadounidense Philip K. Dick (1928-1982), escritor de novelas de ciencia ficción como ‘Laberinto de muerte’, escribió en 1959 ‘Tiempo desarticulado’, una de sus primeras novelas. Esta obra inspiró el guion que Andrew Niccol hizo de ‘El show de Truman’, la película protagonizada por Jim Carrey que dirigió en 1998 el australiano Peter Weir y producida por Paramount Pictures, creando una tragi-comedia con mucha sátira y crítica a la sociedad consumidora de medios de comunicación de masas, todo ello bajo la inconfundible banda sonora de Burkhard Dallwitz y los planos fotográficos de Peter Biziou.

La trama se centra en Truman Burbank, un hombre corriente y algo ingenuo que ha vivido toda su vida en uno de esos pueblos donde nunca pasa nada. Sin embargo, de repente, unos extraños sucesos le hacen sospechar que algo anormal está ocurriendo. Todos sus amigos son actores, toda su ciudad es un plató, toda su vida está siendo filmada y emitida como el reality más ambicioso de la historia. (FILMAFFINITY)

Algunas de las críticas que obtuvo:

"Muy de vez en cuando, se da el milagro de que a un guionista de raza se le ocurra un argumento insólito, cae en manos de un director de altura y los espectadores podemos disfrutar de lo nunca visto y oido"

Carlos Boyero: Diario El Mundo

"Brillante"

Ángel Fdez. Santos: Diario El País

ANÁLISIS DEL CONTENIDO Y PERSONAJES PRINCIPALES:

El Show de Truman es una película que contiene numerosas alusiones filosóficas y académicas, en lo relacionado a la Comunicación y su recepción. La película comienza con el catalizador de esta situación, Christoff, el creador del programa que dice así: “Estamos hartos de actores con emocione falsas. Hartos de ver pirotecnia y efectos

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especiales. Mientras el mundo que le rodea es, en cierto sentido, falso, no hay nada de falso en Truman. Sin guiones. Sin tarjetas indicadoras. No siempre es Shakespeare, pero es genuino. Es una vida”. Truman es un niño no deseado dado en adopción y “acogido” por una sociedad corporativa, como es indicado en un momento de la película, siendo así el primer niño en ser adoptado de este modo. El programa comienza cuando este niño es criado entre actores, en una isla falsa, en un inmenso plató televisivo situado bajo una cúpula tras el famoso cártel de Hollywood. Las ganancias se dispararon con el uso de la publicidad encubierta y constante en el show, estando todo lo que aparece en pantalla incluso a la venta por catálogo. El individuo no sirve al sistema únicamente como observador pasivo, sino que también es convertido en un potencial consumidor. Las estrategias de publicidad encubierta son muy bien representadas, puesto que los televidentes, enganchados al show, están recibiendo continuamente mensajes que les incitan a comprar productos que, en realidad, no necesitan.

Todas sus experiencias, sus interacciones están marcadas por el guion de los otros actores y la creación de una vida totalmente guiada y concretada para el disfrute del público. La audiencia es mundial con el paso de los años mientras Truman sigue con lo que él cree que es su vida normal. Aun así es muy difícil mantener todos sus pasos controlados, sobre todo si son impulsados por sus sentimientos. Por ejemplo vemos cómo aunque se enamora de una chica, el guion no se lo permiten y se acaba casando con una mujer que en realidad no amaba.

El culmen se encuentra en Truman dándose cuenta de los extraños sucesos que han ocurrido, siendo la chispa la aparición de su “padre”, el cuál Truman cree ver morir tras una tormenta, creada para que éste tome miedo al mar y no quiera salir de la isla. Los productores y realizadores del programa hacen lo posible para que Truman vuelva a ser el que era, pero Truman quiere salir a conocer otros lugares, principalmente motivado por encontrar aquella chica de la que se enamoró en la Universidad.

En El Show de Truman este es el tema central, pero la idea de que existen dos mundos y de que vivimos en el mundo artificial, sin conocer el verdadero mundo real, se ha utilizado en muchas otras ocasiones por pensadores y filósofos, y la encontramos también en otras películas. Para

encubrir una mentira de treinta años necesitaron todo un escenario que costó millones; para decir la verdad a Truman, sólo unos cuantos minutos aire y unas pocas palabras. En El Show de Truman observamos dos sociedades. La película se centra en el

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mundo en el que vive Truman, el “falso mundo”. Pero además del falso mundo de Truman, la trama tiene lugar de alguna manera también fuera del programa de televisión, es decir, en el mundo real. Así, a parte de la sociedad que rodea a Truman en su vida diaria, podemos analizar a la sociedad que está viendo el show.

Esta caricaturización de la sociedad enganchada al televisor se lleva al extremo, pero en ocasiones solo se puede llegar a comprender la realidad analizando los puntos más extremos. Esta representación de una sociedad embobada y totalmente dependiente de los programas de televisión nos puede ayudar a identificar varios síntomas de una patología que se está extendiendo en el S.XXI. Una sociedad enganchada al televisor, que sigue el show de Truman como si sus propias vidas estuvieran ligadas al destino del personaje Truman. Son personas que en la película aparecen siempre mirando la pantalla de la televisión, y que ríen, sufren y lloran siguiendo a Truman.

¿Hasta qué punto son personas estos espectadores? ¿Ejercen su papel de ciudadanos activos, o por el contrario son simples espectadores sentados en un sofá? En la película se muestran una serie de personas que viven para y por el show de Truman. Es lo más importante que hacen cada día: ver ese programa de televisión. Vemos dos guardias de seguridad que se olvidan de su trabajo, una madre que no presta atención a su bebé, una pareja de abuelas que no tienen nada más que hacer… todos ellos han dejado a un lado el mundo real y se centran en seguir la vida de un personaje ficticio.

Personajes:

Truman Burbank: personaje principal de la película. Representa a un hombre apuesto de unos treinta años con un trabajo en una agencia de seguros. Se observa una progresión en la personalidad del mencionado. De ser un tipo crédulo, casi estúpido, al principio pasa a ser un tipo desconfiado y bastante avispado que realiza acciones espontáneas e inesperadas para no poder ser controlado y poder escapar así de ese montaje y programado universo. Su nombre es una combinación de dos palabras: Bur, como abreviación de Bureau, que significa agencia, departamento en inglés y bank, que es el banco o bancario/a, por lo tanto su nombre significa agencia bancaria, porque su imagen produce millones de dólares al día. Fue legalmente adoptado por una corporación. Su vida es un mero producto ofertado a los consumidores de los medios, por mucho que el productor del show le haga entender al final que lo hacía para protegerle del mundo exterior. Aprende a superar sus miedos y es

constante en perseguir lo que quiere y a salir del estado inducido por su vida diaria y monótona creada de forma artificial

Christof: Creador del programa The Truman Show. Era el director de todo ese gran montaje cinematográfico. Se cree como un padre para Truman y le conoce muy buen. Dirige y programa además,

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todos los movimientos y hechos en la vida de Truman. Viene con su programa a redimir al mundo del aburrimiento y de los actores falsos. al ser preguntado por qué Truman nunca se ha planteado la naturaleza del mundo en el que vive, responde: “Aceptamos la realidad tal y como nos la presentan”. Una sencilla frase que recoge una gran carga filosófica y sociológica. Dirige el programa desde la sala lunar del piso 221 de la Ecosfera Omnicam.

Hannah Gill: realiza el papel de Meryl, la esposa de Truman. Ayuda a mantener la tapadera controlando a Truman desde cerca. Su trabajo en la isla falsa es de enfermera ayudante de quirófano.

Kirk Burbank: padre (falso) de Truman; sacado del escenario cuando era joven, se infiltró en el Show como un vagabundo. La producción debió incluirlo de nuevo en el show para calmar a Truman. Después de 22 años de ausencia se apareció de nuevo en el show aduciendo amnesia.

Louis Coltrane: hace el papel de Marlon, el amigo de Truman que lo invita constantemente tomar una cerveza como excusa para poder observar lo que hace y sobre todo lo que siente, haciéndole creer que su

amistad es verdadera e intentando que Truman aprecie la vida de la isla.

Sylvia: actúa como Lauren Garland. El primer y verdadero interés romántico de Truman. Expulsada del show por entrometerse en la historia. Es la promotora de la libertad de Truman. Tiene su cuarto empapelado de su deseo de libertad, pero por ser minoría, es acallada. Cuenta con material de todo tipo para liberar a Truman (fotos, documentos, etc.). Ella vive en Hollywood, California. Tiene un cartel en el cuarto que dice Liberen a Truman y otros carteles de protesta que se quejan por la falta de límites del programa. Dice uno de ellos: ¿Qué sigue? ¿Reclutar chicos?

Lawrence: es el compañero de trabajo de Truman y quien le aconseja que tome el trabajo de ir a firmar un contrato de seguro en Wells Park, en Harbor Island, y para ello tendría que ir en barco. Le advierte que despedirán gente al final de mes por una racionalización de los recursos. Recuerda a Truman su

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miedo al mar y que debe quedarse para tener estabilidad.

Mike Michaelson: director del programa True Talk, quien le hace la entrevista a Christof, el creador del programa. Mantiene a la audiencia informada.

Simeón: programador de los efectos especiales del programa, desde la Luna artificial.

ANÁLISIS DE LA ESTRUCTURA NARRATIVA:

La estructura dividida en actos, se puede separar en:

Presentación: Conocemos la vida diaria de Truman, nos la hacen ver como algo monótono y sencillo a lo que él ya está muy acostumbrado. Tiene su trabajo, su esposa y su mejor amigo, es amable con los vecinos y suelta muchos chascarrillos que lo convierten en un personaje carismático para la audiencia. Su día a día pasa por una coordinación metódica mediante la cual los actores consiguen seguir sus pasos y continuar con lo planeado por los que llevan el programa. Comienzan aparecer ángulos y tomas que nos recuerdan al Gran Hermano de George Orwell en su obra 1984, nos sentimos espectadores del show y vemos como la audiencia ha seguido toda la vida de Truman y se siente identificada con ese simpático personaje que simplemente está siendo él mismo.

Es muy importante como se desarrolla por otro lado la mente de Truman, él sabe que le falta algo, aunque no sepa qué exactamente, se siente atado, sobre todo desde que no pudo perseguir a su primer amor. Todo lo que Truman ha vivido está orientado a la audiencia y él, aunque no sepa lo que pasa, quiere salir a conocer otros lugares, sobre todo Fiji, donde cree que se encuentra Sylvia, ese primer y verdadero amor. Mientras tanto siguen los días, y vemos como aborrece a su mujer, y cómo esta, siendo actriz sigue con él por la fama y estaría incluso dispuesta a tener hijos con él, por mucho que no le soporte. El trabajo de Truman en una aseguradora le mantiene ocupado y es

entonces cuando le mandan un encargo para coger el ferri. Ahí vemos el pánico que Truman tiene al mar, empezando así a desarrollarse el nudo de la película.

El actor que crió a Truman, y por lo tanto al que él conoce como padre, reaparece de manera inesperada,

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incluso para los realizadores del show, siendo llevado entonces en un camión y así despertando en Truman la duda.

Nudo: Cosas extrañas pasan desde entonces, la radio de su coche hace interferencias y oye lo que se cuece en la sala de control, siguiendo sus pasos. Entonces comienza a intentar actuar de forma ultra espontánea descubriendo tras un panel a los actores disfrutando de un catering y siendo expulsado del lugar inmediatamente. Truman intenta hablar con su mejor amigo para buscar ayuda pero este le dice que todo es normal, al igual que su mujer en casa. La producción del programa decide traer a su padre de vuelta para intentar tranquilizarlo y distraerlo. Tras estos eventos Truman decide dejarlo estar por el momento hasta que se harta de situaciones extrañas como la numerosa publicidad encubierta en frases de su esposa, o seguirla al trabajo para descubrir que todo es falso. Es entonces cuando Truman comienza a investigar y actuar de forma totalmente desquiciada intentando conducir más allá de la isla, sin éxito, o descubrir todas las series de secuencias que sus vecinos adoptan todo el tiempo. Es entonces cuando logra poner una trampa a las cámaras, desatando el final.

Desenlace:Truman consigue despistar a las cámaras, vencer sus miedos de la infancia y hacerse a la mar con un barco para conseguir llegar más allá del horizonte que conoce. La audiencia está expectante tras el primer parón de la transmisión del

show desde que empezó cuando este consigue desaparecer ante las cámaras tendiéndoles una trampa. La siguiente escena que aparece en televisión es Truman en una tormenta en medio del océano provocada por los directores del

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programa en un intento de asustarle casi hasta matarle. Pero Truman se aferra al barco y consigue sobrevivir a la marea, siendo llevado por la brisa y las corrientes hasta el límite de la cúpula dónde podemos presenciar una de las escenas más icónicas de la historia del cine. Truman topa con un cielo pintado, un atrezo que marca los límites de lo que conoce. Siente rabia por no poder continuar pero quiere saber a verdad, ya sabe que no estaba loco, que algo pasaba. Es entonces cuando comienza a caminar por el borde hasta alcanzar unas escaleras, la audiencia le sigue, pero sobre todo los realizadores del programa, Cristoff el creador espera hasta el momento en el que Truman está frente a la puerta de salida para dar un discurso desde su puesto de mando en la falsa luna, e intentar persuadirle para que vuelva. Le dice que todo ha sido por su bien, que el mundo exterior es una mentira también, pero una mentira horrible y sobre todo que hace feliz a millones de personas. A lo que Truman responde con un saludo final y diciendo una de sus frases más repetidas para posteriormente salir por la puerta y dejar el show, la isla y todo lo que conoce atrás, tras mostrar una escena de cómo Lauren (Sylvia) corre a su encuentro desde su casa.

(*) Pese a que la estructura de la película está muy marcada y es lineal, vemos numerosos flashbacks durante toda su duración, los cuales arrojan luz sobre aspectos pasados de la vida de Truman que él no recordaba o que no creía que eran importantes, aportando giros a la narración hacia nuevos acontecimientos planeados, como la supuesta muerte de su padre o el día en el cual conoce a Sylvia, su verdadero amor, También al final de la película un flashback nos muestra cómo se preparó a Truman desde que nació para ser el protagonista del show, haciendo que toda amenaza externa desapareciese.

OPINIÓN PERSONAL:

Nos ha encantado volver a ver este clásico cinematográfico con esencia filosófica que nos aporta varios puntos de vista sobre la comunicación y sobre hasta dónde los

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comunicadores masivos pueden llegar para hacer un producto que se compre aunque para ello se tenga que aislar y manipular a una persona durante toda su vida. La superación de los miedos, a pesar de haber tenido tanto miedo al mar, decide coger el barco y aguantar la tormenta, la voluntad despertada en su interior con el ánimo de ver más allá. Poder observar la reacción pasiva del público nos da que pensar en quién pone el límite, la audiencia o los que crean este tipo de programas morbosos.

La actuación de Jim Carrey es impecable, haciendo otra vez gala de su adaptación al cine de cualquier tipo, no solo la comedia. La fotografía y las escenas, los ángulos de cámara, todo hace que te sumerjas en la historia y entres, por lo tanto, en el mismísimo Show de Truman.

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Fuentes usadas:

Ficha técnica: http://www.filmaffinity.com/es/film504889.htmlAnálisis del Contenido

http://www.leemisterio.com/sabias-que-el-show-de-truman-esta-inspirado-en- una-novela/

http://filosofiaencineyliteratura.blogspot.com.es/2010/04/analisis-de-truman- show.html

http://elordenmundial.com/critica/el-show-de-truman-individuo-espectador/ http://elordenmundial.com/ensayo-y-opinion/el-show-de-truman-falso-

mundo-real/

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