ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

24
1. Museología y museografía precedido en el tieriipo y eri Ia práctica rnuseo- gráfica a Ia propia jiistificacióii !. existencia de iina cieiicia iiiiiwoI<igica. Asi lo coiifirma cl pririier tratado coiiocido so- bre estairiateria. cluç no aparece, sili erribargo, tiasta priiicipios de1 siglo xviii. Redactada eii latíii -con lo qiic eiitonccs se asegiiraba sii difiisicíii in- ternacional- ), putdicada eii 1727 por el riiarclian- te de Haniburgo Caspar Friedrich Neickel, Ia 114u- .iic?yl~ip:ii~l iici~hc~idild r> LIII~ ot)i-d expresiva riei atáii clasiticador y enciclopedista de Ia Lliistración. Tit li lada A.1 ~is~,~yrophia odcr- A~I/L>~[L~IL~ zun7 ~L'C~~L'II BC- LJI.~/~LIII'~ ~lii[;liiliii il/il'>~~it~y~ JSI. ~~ILISCVI.UIII, ùd~'t- RLI- ritatenkammert7 ( Museoyrafia u orientación para e1 ade- cuado concepro y conveniente colocación de 10s museus o cárnaras de c~riosidades),~ su autor obsequió en ella a los aficionados aniantes de1 coleccionismo con un disetio de1 rnuseo ideal que preconizaba el cien- tifisrno y didactisiiio públicos de su tiernpo, además de ofrecer una serie de consejos inuy prácticos so- bre la eleccion de los lugares más adecuados para acoger los objetos y Ia mejor manera de clasificar- los y conservarlos, tanto los provenientes de Ia na- turaleza como los producidos por Ias ciencias y Ias artes. Afronta por priniera vez probleinas genera- les, sin depcnder para ello en particular de un pro- yecto o de iiiia colección concreta. Para Adalgisa Lugli, (cen el tratado el término mnseographia resunie todo a 10 que se refiere en En el principio fiie el deseo y Ia voluntad de to- este momento el rnuseo. Se examina Ia estructura dos los piieblos en todas Ias ciilt~iras y civilizacio- de lo recolectado y se compila iin inventario de lo nes por conservar hacia el futuro su patrimonio. existente y de sus características, ci~idad por ciiidad, Inmediatainente después fue Ia museografía, ali- por toda Europa. Aqiiello que aparece en prirner tes incluso que el inuseo propiainente dicho. Ló- plano es el miiseo en sus eleinentos constitutivos gicarnente, Ia realidad patrimonial )I rniiseable lia y en si1 contenido. Esto es cuanto interesa al autor. Caspar Friedrich Neickel, Museographia, Leipzig, 1727. (Frontispicio de1 tratado, mostrando un ainterior de museo ideala, según grabado de Strahoaesky)

description

Texto de Fernandez sobre Museologia e Museografia

Transcript of ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

Page 1: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

1. Museología y museografía

precedido en el tieriipo y eri Ia práctica rnuseo- gráfica a Ia propia jiistificacióii !. existencia de iina cieiicia iiiiiwoI<igica.

Asi lo coiifirma cl pririier tratado coiiocido so- bre estairiateria. cluç no aparece, sili erribargo, tiasta priiicipios de1 siglo xviii. Redactada eii latíii -con lo qiic eiitonccs se asegiiraba sii difiisicíii in- ternacional- ), putdicada eii 1727 por el riiarclian- te de Haniburgo Caspar Friedrich Neickel, Ia 114u- . i i c ? y l ~ i p : i i ~ l i ici~hc~idild r> L I I I ~ ot)i-d expresiva riei atáii clasiticador y enciclopedista de Ia Lliistración. Tit l i lada A.1 ~ i s~ ,~yroph ia odcr- A ~ I / L > ~ [ L ~ I L ~ zun7 ~ L ' C ~ ~ L ' I I BC- L J I . ~ / ~ L I I I ' ~ ~lii[;liiliii i l / i l '>~~i t~y~ JSI. ~ ~ I L I S C V I . U I I I , ùd~'t- RLI- ritatenkammert7 ( Museoyrafia u orientación para e1 ade- cuado concepro y conveniente colocación de 10s museus o cárnaras de c~r io s idades ) ,~ su autor obsequió e n ella a los aficionados aniantes de1 coleccionismo con un disetio de1 rnuseo ideal que preconizaba el cien- tifisrno y didactisiiio públicos de su tiernpo, además de ofrecer una serie de consejos inuy prácticos so- bre la eleccion de los lugares más adecuados para acoger los objetos y Ia mejor manera de clasificar- los y conservarlos, tanto los provenientes de Ia na- turaleza como los producidos por Ias ciencias y Ias artes. Afronta por priniera vez probleinas genera- les, sin depcnder para ello en particular de un pro- yecto o de iiiia colección concreta.

Para Adalgisa Lugli, (cen el tratado el término mnseographia resunie todo a 10 que se refiere e n

En el principio fiie el deseo y Ia voluntad de to- este momento el rnuseo. Se examina Ia estructura dos los piieblos en todas Ias ciilt~iras y civilizacio- de lo recolectado y se compila iin inventario de lo nes por conservar hacia el futuro su patrimonio. existente y de sus características, ci~idad por ciiidad, Inmediatainente después fue Ia museografía, ali- por toda Europa. Aqiiello que aparece e n prirner tes incluso que el inuseo propiainente dicho. Ló- plano es el miiseo en sus eleinentos constitutivos gicarnente, Ia realidad patrimonial )I rniiseable lia y en si1 contenido. Esto es cuanto interesa al autor.

Caspar Friedrich Neickel, Museographia, Leipzig, 1727. (Frontispicio de1 tratado, mostrando un ainterior de museo ideala, según grabado de Strahoaesky)

Page 2: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

Gabinete de Historia Natural (1599) de/ hurnanista napolitano Ferrante Imperato (Fuente: Bazin, 1967).

De cuando en cuando se decide a aclaramos Ia apa- riencia de Ia colección de Ia que habla, si se trata de una institución eclesiástica, privada, de soberanos o príncipes. Los repertorios son abiertos a aq~iellos que quieran visitarlos. Lo ensaya con el florecer de una literatura a cuyo género pertepece también Ia obra de Neickel, que comienza a describir e in- ventariar Ias principales colecciones europeas, a menudo en el contexto de1 recuento de1 viaje. Aquí podemos encontrar una característica de1 trata- miento museológico que puede tener u n aspecto proyectado en forma de consejos, ideas para reali- zar un museo, incluso también presentarse como una literatura museística que no proyecta, sino que realza y dasifica situaciones existentes. En este sen- tido, Ia neickeliana es verdaderamente una mu- seografía, es decir, un viaje en torno a 10s rpuseos de1 tiempo. El término está profundamente cam- biado en el uso moderno.

)*Es una distinción muy fuerte Ia que separa al museo entre el siglo xmrr y e1 xx, y está, después de Ia Revolución Francesa (pero con amplia anticipa- ción ya en tiempos de Ia Ilustración), en su propio ser público en iin sentido completamente nuevo, es decir, abierto por utilidad pública. Pero en el momento en el que Neickel escribe su Museographia

no ha entrado aún ninguna preocupación de uso en el museo. La colección semiprivada, abierta a iin flujo muy limitado de visitantes más que cualifica- dos. huéspedes ilustres o amantes y estiiclicisos, tie- ne sus sistemas de autoconservación, qiie reglilati un tnocieslu acceso de público.

1)Ello se ve bien en Ias rarísimas iniágenes aii- tiguas que rniiestran interiores de rnuseos de nia- ravillas, galerias o cabinets de curiosiré. La estancia que contiene Ia colección está a merilido vacía. A 1.e- ces puede verse a uno o dos visitantes. Aparece en solitario el colecaonista o una figura equivalente, que es Ia antiápación de1 coriser\.ador de1 museo nio- derno. En Ias colecciones enciclopédicas de Ias ma- raviilas, como el museo bolotiés de Fernando Cos- pi (1677), puede haber una rareza viviente, un enano en este caso, para mostrar Ia co l e~c ión , ) .~

En todo caso, el nombre y 10s contenidos de1 tratado3 reflejan con clandad Ia intención de1 mar- chante aienián de orientar didác~icaiiiciite a 1"s co- leccionistas de objetos naturalia y crrr-iosa ar-ti/icia- lia en Ias funciones específica~nente rnuseográficas, como podemos ~ o m p r o b a r . ~ Recomendacioiies y consejos para ordenar colecciones concebidas y orientadas más como cámaras de curiosidades que como gabinete de arte. En éste se apreciaba sobre todo su rareza por encima d e su calidad estética. Pese a 10 cual, e n e1 tratado de Neickel se asien- tan históricamente también unas bases de con- cepto y aplicaàón que se integrarán en el siguiente proceso de definición de la museología como cien- cia de 10s museos y, consecuentemente, en Ia téc- nica que Ia aplica, Ia museografía.

1. Museo, museología y museografía

Por tanto, hace más de u n siglo que Ia museología se esfuerza por consolidar su concepto y naturale- za. Un largo proceso que describe el establecimiento de 10s principios que fundamentan sus funciones y aplicaáón, Ia dimensión real que estas últimas re- presentan y Ias vicisitudes para su reconocimien- to como disciplina independiente. Durante este tiempo, Ia museología, que atiende en todos sus as-

Page 3: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

pectos a una de Ias instituciones más controverti- das e influyentes en e1 ámbito cultural, en general, y patrimonial, en particular, como es el museo, contempla y alimenta todavía cercano el fragor de1 debate y Ia polémica entre 10s diversos y diferen- tes especialistas y profesionales de su área.

Las discusiones se centran a veces. no sólo en el análisis y Ia definición científica de su objeto, ob- jetivos y metodología (o en Ia existencia o no de un sistema específicamente museológico), sino también en su capacidad para justificar o no Ia realidad cambiante de1 museo desde Ia vertiente de Ia miiseología tradicional, en contraposición con Ia ((nueva mciseología)~, y desde Ia perspecti- va de adecuarse o no a Ias exigencias de esta so- ciedad finisecular y postindustrial de nuestros días, etcétera.

Se mueve en ocasiones este debate en el te- rreno incluso de las contradicciones que surgen to- davía a causa de la diversa interpretación y ter- miiiología utilizadas por diferentes especialistas en temas prioritarios, tales como es Ia definición

Interior de1 Museum Wormianum (1655)

de iiiciseología y museografía, que piiedeii Ilegar a confundir.

Se Iiace necesario, por ello, reflexionar sobre éstas y otras cuestiones y fijar aquellos conceptos que, como 10s citados, resultan básicos e impres- cindibles para el estudio de esta disciplina. La im- precisión o Ia ambiguedad en su definición y uti- lización no pueden presidir, como ocurre a veces con artículos en revistas especializadas y progra- mas museológicos, el fondo de los numerosos pro- blemas y asuntos que atatien a una ciencia joven y e n continuo desarrollo como es Ia museología, y a si1 objeto propio, e1 museo. Una disciplina que asienta y reatirrna incluso su propio nonibre des- pciés de Ia Segunda Gcierra Mcindial, apoyándo- se en Ia general renovación d e Ia probleniática existente e n torno a1 museo. Y una institución ésta que comienza a ser e interpretarse como algo rnucho más que un lugar donde se guardan y con- servan obras y objetos. hayan sido recolectados con aceptación y simpatía general, o hayan entrado en é1 sin Lin acuerdo unánime.

Page 4: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

2 . La museoiogía y la museografía BA en ei tiempo y hora de! miiseo -. - - - - - - - - - - -- - --

Charler Towneley en ru gabinete de Park Street en Westrninster. 1781 - 1783 (Johariri Zo/fariyJ

La riiii~c.ologia. aieritiieiido a lo qiie e sp r r sa c.1 iériiiiiio eii j r i dolile origc.11 eti i i ioló~ico grieso, c-, Li cieiici,i dei iiiiiseo. St. ocLipa (I ( . tudo lo c.011- ~ ~ ' r ~ i i e i i i c . a c'\Ic?\ st.ctil,ire\ iiistitticioiies. Y aiiiiqiic s r esit. coiisriiu).c~iido \. tlesarrollaiido conio dis- cipliiia cieririlica práciicaiiienre r n iiLiestros dia\. sus origerics fiiiidaiiieiiios p~iederi eiicciiiirarsc3 eii Ias niisiiias o eii paralelas sitiiacioiies Iiistciri- cas ). cri causas aiiálogas a aquella5 q t i r prociiijr- roi1 rl iiaciriiirnro \. Ia e\,ol~icicín de1 rri ~ i s e o .

Hisrciricariieiitt.. Ia realidad rnust.ológic,i des- cribe i i i i desarrollo crecieiite desde el qltüItrciPii~ I(? iialiario, exteridi6iidose Iiiego por otros países, entre ellr)s Fraricia. Aleniariia, Holarida. A~istr ia y Bolieiiiia. Tres siglos iiiás tarde, su propagaci<iii es coiisrarable tlesde Ia península ib6rica Iiasta el iiuiic j. cI i.<;( c~iropco:; , Ilegsndo a Ias <)rillaz d r l Neva, eii Saii Peiersbiirgo, doride Catalina I1 co- loca siis c.olcccioiies eii ei Peq~ie i io Erriiirage, qii(.

Charler Robert Cockerell. Mureo de lord Elgin en Park Lane, 1808.

Page 5: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

liabía Iiecho constriiir eii 1765. La\ investigacio- iies rigurosas y rrietcídicac de1 $1310 u\ i i i solire de- terniiiiadoc aspectos iniiteolí,gico\ iiicliiida la ["I-

blicacioii de1 tratado de Neickel I)rel)araroii el alise clrl iiiiiseo ! si1 e\tiiclio ciirgitlo desl>iie\ cle

Rrvolii( i(íii Fraricr\a E1 \iylo \ i \ consagio Ia realiclad de lerioriietio

eiirol)eo tlel iiiiiceo iiioderiio. recogieiido Ia tra- dición, e1 debarr ir Ia expeririieritación anteriore$ Se produjo iin avance sensible eii [as 16ciiica) niii- seograticas y eii Ia conlorinacióii de Ia riiiiseolo- gía, sobre todo ri1 Aleniaiiia E\píritiic cencibles a Ia rt-alidad patriiiioiiial \ riiiieiol(iyica, cciiiio I o - Iiaiiii Wollgari~ voii Goztlie, \eiiiaii ejercieiido desde el sigla aiiterior una contribiicióri nada des- deiiable a Ia cieiicia Ia ttcnica de los riiiiseos Sii inlliieiicia wría deciçiva, por rleniplo \obre Luis I de Bavieia, con cliiien ~ i i~ in ten ía çorrei- poiideiicia, ciiaiido coiilií, eii 18 16 al arqiiirecto Lco *:(!ii Kleii~e Ia C O I I \ I ~ L I C C I O I ~ 11il !A fai1iu*i1 giip toteca de Miinich Posteriormente, e1 rey le eri- caigaiia taiiihii-ii Ievaiitai iiiia copia de Io\ Piopi- Icos ci i t re aqu6lla ). cl editicio opi icsto (c1 Antikensaniniliiiigeii. reaIi7adu eii 1846 por el arquitecto Ziobland) en Ia I<onigsplatz de Ia capi- tal bávara.

En 1786 visitó Goethe por prirnera vez Ia Ga- lería de Arte de Dresde, uno de los rnuseos rnejor instalados entorices eii Alemania. El poeta plasmó el recuerdo de Ias emociones que recibió en esa vi- sita en SLI obra Dichrllt?c~ und W~hrhe i r (Poesía y ver- dad), historia de su juventiid, piiblicada eii 18 1 1. La elocuencia de sus palabras no deja lugar a dii- das: «La Iiora de Ia apertura de Ia galería, espera- da con tanta irnpaciencia, Ilegó al fin, y q~ i edé so- brecogido de admiración, porque todo aquello estaba niiiy por ciiciiiia de ciiaiiio yo Iiabia podi- d o imaginar En Ia sala circi~lar. ii~agiiílica y i i i i i y hien dispuesta, con los iiiarcos deslumbrantes, re- cientemente dorados, y su piso de niadera ence- rada, reiiiaba un profundo silencio; iriás parecía un espectáculo qiie 1111 taller de trabajo, y ca~isaba una iiiipresión solemne, única eii su géiiero, y tanto más parectda a Ia eniocicín que se siente al eiitrar eii Ia casa de Dios, por ciianto los oriia-

nicnto\ de iiiá3 cle iin teiiiplo, olqrto de adora- ción. esraban de iiuevo eupLie\roc eii este Iiigar para el tanto destino de1 arte)?

A Goetlie. coino a iaiito\ ciiroj \ele\ senji- bles y rcliiiados de sii iiriiilio. i l l iiiii';co lz pro- ~)urcioiiaba Ia opurtiiniclad de protesai- 10 qiie a iiieiiiido se lia deiiorninado Ia (~religitiii de1 arte.,: esl)eriiiientar iin seiiriniiciitc) qiie le solirccogia por creer eii s ~ i \.alar trascendeiital. Pei-o eii est. ciilto y adoracicíii que se ejercía en e1 iiiiiseo s o - bre las obras de arte -al ser público, el iiiiiseo se convierte, coriio se lia diclio taiiihi6n. en ( ( i i i i

t t- i i i~~lo de1 yeiiio Iiiiiiiaiio~~-, 10 qiiC \ ~ ~ r c l a t l c ~ r ~ ~ - iiieiite ~)rotlucía a artistas, aristócratas, iiiielec- trial$s y público iiria aiittiitica con\*iilsión iiite- riur era precisaiiiente esa piiesta en esceiia de los objetos, el espectáciilo de sii orgaiiizacicíii, dis~>osicicin y represeiitacicíii espacial; el aiira de sacralidad y context~ializacióri ritual que envol- \..ia csa cscciiilic~cióil. Es dciir , Ia iiitcrpi-ciaiióii riiiiseográfica.

La iiiiprciiciii recihida rii sii 1)riniei-a visita a Ia Galcría de Arte de Dresdc cicj<í riiarcado para siciii- pre al gran escritor aleiiiáii, q~ i i en no aliorró es- fiierzos para contribuir positivamente a Ia niejo- ra de estos templos de Ia cultura, inip~ilsando su desarrollo científico y técnico.

Preocupado por Ia disposición y presentacióii de Ias obras, Goethe piiblic6 su teoría sobre Ia do- ble articulación de1 museo -agrupar Ias coleccio- nes en dos zonas, una sintética y eseiicial para el público y Ia otra mas desarrollada para los ya ini- ciados o expertos- e n 182 1, en uii artículo de Kunst urzd Altrrtum (Artr y untiguedad). Desarrolla- rían después este eiifoque otros escritores niu- seólogos, como Ruskiii e11 1853 desde Ias páginas de The Tiinrs, coiiipartiendo Ia opinióii de su ariii- go y director de Ia National Gallcry de Londres, el pintor Eastlake; lo defendería más tarde Louis Agassiz en Francia; y lo recomendaría en 1903 el doctor Wilhelni von Bode -el museólogo creador en Rerlín de Miiseumsiiisel (Isla de los Museos), entre 1897 y 1930- desde el semanario aleniári Die Woche (La setiiana). La piiesta en escena de los objetos, sii ordenacióii e iriterpretacitín consti-

Page 6: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

tiiíari ya, de algún modo, el eje central dc siis preoc~ipacioiies rntiseogr a ' f ' icas.

La doble articiilación goetliiaiia de1 iniiseo Ia aplicai-ia parcialiiiente eii 1886 el Natural History il.luseiiiii de Loiidres, y se realizaria pleiiaiiiciite, eii 1907, ri1 orras dos iiistitciciones iiii~seisticas: el Ba- !~erisclies Nati~ii~il h4tiseiiiii de iLluiiicli 1. el MLI- seiiiii ol Fine Arts de Bostoii. Segúii este iiiisiiio priiicipio de1 niiiseo doLile se construiria taiiibieii, entre 1920 y 192s. el Pliiladelpliia k~luse~irii. de- noniinado desde 1938 Peniisylvariia Miise~itii of Art, e n los Estados Unidos de América.

EI desarrollo niuseol6gico y niiiseográfico ale- rnáii eiicoiitró iiria graii deIiriicii>ii e iniporiùiicia en el Berlíii fiiiisecular deciriioiióiiico )* eii 10s pri- meros anos de nuestro siglo. Más qiie en ningúii otro país eiiropeo, fue eri Ia Alernania de1 S. xix donde se estirdiaroii de fornia racional los pro- blemas planteados por Ia sitiiacióri de los rriuseos en !a sociedad y por s ~ i (irgani7acicín. Se realiza- ron numerosos trabajos e investigaciones orien- tados a1 establecirniento de los principias de Ia ciencia de Ia rnuseología, principalniente en tor- no y bajo el iiiipiilso de dos destacadas persoiia- lidades: Gustav Waagen ( 1794- 1868), el sabio y fa- moso director de la pinacoteca de Berlín, quieii innovó parcelas importantes de Ia crítica de arte y Ia metodología museológica; y su coiitinuador, el ya citado museólogo doctor Wilhelm von Bode.

Director de 10s museos reales desde 1897 has- ta 1920 e n Ia capital alemana, Ia labor de1 doctor Bode fue ingente en la reorganización de todas Ias colecciones enriquecidas por Federico Gui- Ilermo I11 y sus consejeros, y en Ia construcción de nuevos edificios para albergarias. A é1 se deben Ia edificación (1897 a 1903) e iiistalación reno- vadora de1 Kaiser Friedricli Miiseiim (Ilarnado hoy Bode Musecirn), donde prescindi6 de Ia or- denación tradiciorial de las piezas por técnicas y mezcló todo tipo de obras para realzar el estilo propio de una misma época; y e1 triple conjunto rnuseístico construido entre 1907 y 1930 de1 Per- gamon Museum (para Ias riquezas acumitladas de esta ciudad helenística), de1 dedicado a Ias co- leccio~ies de1 cercano Oriente (Vorderasiatisches

htuseiini) y el q ~ i e iiiostrara el arte aleniári desde Ias invasiones de los pueblos bárbaros hasta el Ro- coe6 (e1 Deutsclies Museuni), iibicado eii la ini- presioiiaiiie isla de los iiiiiseos (~\Iuseuiiisiiisel) cle Berliri.

El desarrollo de Ias in\.estigacioiies rii~iseoló- Sicas !' el estableciriiiento defiiiición de Ios prin- cipio, dc Ia iiiiiseolugia coiiio cieiicia aciqiiieren eii el siglo ui: su total coiisolidacicín 1. creciiiiiento. Ei i ello \'an a conciirrir 10s esfiierzo, de persona- lidades e instituciones de los diversos países occi- tlentales europeos -Francia, Italia Espana, entre ellos-, sobre todo de los anglosajones coii los Es- tacios Uriidos y Caiiadá, y especialiiieiite despui.s dc Ia Pririiera Guerra M~iiidial.

Pem iio sólo los occideiitales liaii desarrolla- cto y consolidado Lina ciencia tan relevante de iiiiestro tieinpo corrio es Ia niuseologia. Miiseólo- gos de países de1 Este europeo (de Poloiiia, Ia an - tiyua Cliecoslovaquia, Ia desaparecida República Deniocrática Alemaria, Hungría o Ia hoy dividida ~i igoslavia) , de varios latinoamericanos (Argen- iiiia, Brasil, Cliile o Mkxico, entre ellos), y de otras latitcidcs, coriio Japóii o Australia, lia11 destacado tarnbien en Ia innovación e iinpcilso de Ia rnu- seología en Ia segunda parte de1 siglo xx.

Antes de 1914 Ia situación era u n tanto con- fusa:

La iniiseología era solamente práctica; los coriserva- dores Ia realizaban de Ia misma rnaiiera que M. Jour- dain hacía Ia prosa. Se convierte en teórica y dogniá- tica. En eiiero de 1926, u n profesor de historia de1 arte de Ia Sorbona, qiie será uno de los escritores inás penetrantes de su tieinpo, M. Henri Focillon, preseii- taba un informe en el Institiito de Cooperación Iiite- lectiial, organismo de Ia reciente Sociedad dc Nacio- ries. coti iiiiras a fundar una institución internacional qiie asegiiraw iiria cuol)craci5ii I)criiiaiieiiir tle iodos los inuseos de los países niieinhros; tal será Ia Oficiiia Iiiternacioiial de Museos. Coti i i i i plaii niiiy vasto se proseguirá así Ia obra de estudio y aiiálisis que ha- bíari comenzado Ias grandes asociaciones nacionales de 10s niuseos, Ia británica. fiindada en 1889 en York (The Museum's Associatiori) Ia americana (Arnerican Associatiori of Museiim) y Ia aleinaiia (Deutsches Mii- seuin Buiide), fundada eri 1917. Mediarite publica- ciories, corigresos y reiiniories dc expertos, Ias aso-

Page 7: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

ciaiii>iies !iac.ic,i!alec 1. Ia Oficiiia Iiiiernacional de Mii- sei)) d<isarrcillaii una irirensa actividacl in\,esrigadora para elahorar Ias rnejorrs foriiias de organizazióri. dr adiiiiiiiciraiitiii. de coiiservacicin y de presentacicin. La iicriica inrrodiice Ia cieiicia- cada Sran rnuseo ieii-

drá sii laboraiorio dr esiudio: hliiiiicli y el Loir\.re lia- biari dado c1 rjriiiplo.'

La Sociedad de Naciones publicó regiilarniente desde 1926 hasta 1946. a través de Ia Oficina, Ia iiotable revista íVlousr.ion. Y produjo los dos volú- nienes de Aluséo~rapl?ie, prirnera publicacióri i r i - ternacional sobre esta niateria, resultado de Ias actas de iiiia Conferencia de estudios organizada por Ia propia Sociedad de Naciones y celebrada en Madrid6 t.11 1934.

Despiiés de Ia Segunda Guerra Mundial, de- saparecida la Sociedad de Naciones, tanipoco so- hrevivió la Oficina Internacional de los Museos. E1 director de1 museo de ciencias de Buffalo, Estados Unidos, ?:'.r. J. Cliaucey Harnlim cre6 en 1946 e inipulsó bajo el patrociriio de UNESCO otra so- ciedad de profesionales de los museos, el Iiiter- iiatiorial Coiiricil of Museunis (ICOM), Consejo Internacional de los Museos, qcie tuvo su prinie- ra reunión en París en 1947 y luego fijó allí SLI

sede, sustituyendo a Ia anterior. Su órgano de ex- presión es Ia revista trimestral M u s e u m , conti- nuadora de Mouseion, que se publica desde 1948. E1 ICOM difunde Ias informaciones que le coii- ciernen de interés museológico y museográfico por medo de1 boletín ICOM N w s , Noticias de1 ICOM, que también se publica en espaiiol.

La institución de1 ICOM viene siendo Lin au- téntico motor de inipulso de la rnuseología y 10s museos. Constituida por 10s diferentes comités nacionales, su creciente actividad se pone de ma- nifiestc. en la organiza<-i<íii de reunioncs y con- gresos internacionales. en 10s estudios y trabajos técnicos realizados por comisiones especiales, en Ia aportación de repertorios bibliográficos y en Ia publicacióri de obras especializadas, además de Ia revista y el boletín de noticias citados. La brillaii- te serie de sus Conferencias o Reuniones Generales se inició en 1948. En e1 caso concreto de nuestra disciplina, hay que destacar Ia importante ayuda

de1 Cornitb Iiiternacional de1 LCOM para Ia MLI- seología (ICOFOM), qcie a tra\.t!s de los d o c ~ i - rrientos que prodirce tirirlados i\.~I~(~2010giial I.liir- kily Popers (MuWoP) se ocupa de sus orígenes y de1 probleiiia furidarneriral de su csistencia.

En otro seritido, hasta Ia seg~inda postgiierra mundial el ti.rriiino que venia eriipleándose desde el siglo s~iii para deiioniiiiar Ia riaciente ciencia de 10s iiiuseos era -por infliieiicia Iraiicesa, sohre todo- el de iiiiiseografía. Despiiés de 1945, por ~irúficación de criterios y, especialrnente. por ajuste rigiiroso a Ias coiiclusiones y concel>tualización de Ia discipli- na por los gi-~ipos de trabajo, se inipiiso cl de rnLi- seología, cnincidiendo con el qiie veriiaii iitilizaii- do los países anglosajories. Ello tia propiciado, junto a los titubeos iiaturales de una disciplina en coris- tante crecimieiito y corisolidaciciri como ciencia, alg~inas iriiprecisiones eii Ia iiiterpretacióri )I en el uso de Ia terininología, corno lieiiios indicado.

Por coiisiguierite, aunqcie Ia actividad museo- lógica -teoría y práctica- Iiacía tieiiipo qiie venía desarrollándose, ranto el t6rniino como el carácter científico de esta disciplina rio han adq~iirido re- conociniicnto unániiiie ciriiversal ni siqiiiera des- pués de Ia primera rnitad de nuestro siglo xx. Mu- chos son 10s factores que en ello han concurrido, entre otros Ia falta de fijación o confusión de1 con- cepto y naturaleza d e Ia rnuseología debido a 10s rapidísirnos cambios producidos en su objeto pro- pio, el museo, especialmente en 10s veintici,nco o treinta últinios anos. Un problema de crecirnien- to y transformación natural de estas instituciones que parece haber desbordado a veces a su disciplina. La definicihn y consolidación de ambos han co- rrido parejas, en influencia recíproca, y en sinto- nía con Ia propia evolcición sociocult~iral.

En este proceso, resulta imp'resciiidible y de- cisiva la aportación continuada de la rniiseograiía. Ensancliando el horizonte tradicional de 10s rnu- seos y Ia rnuseología. Ias innovaciones museo- gráficas han conseguido integrar Ia cornplejidad y crecirniento de aquéllos en el propio dinamismo de una sociedad que ha terniiiiado por apasio- narse con proyectos o concepciones integrales como Ias de1 ecomiiseo o Ia patrinioniología.

Page 8: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

I N S T I T U T A A S H M O L E A N A .

,X~&J-%E.*& i i = E p , " . i b i Y C k ."-ri*--AL-- r-*-& hu r r m * p l r + . ~ * b ~ i r ~ d i

Ir h - - L b - C - . L 1 1 ' -*-'*-- . cz---d=~2s&m ~ + Z L c Z z = ~ & " + k d

IJ' -.=---- 'I-

E1 Museum Tradescantianum (1656) fue e1 origen de1 Ashmolean Museum (1683) de Oxford, cuyo regl lamentou de 1714 aparece redactado en latin (Fuente: Bazin, 1967).

Esto ha sido posible, fundari~entalmente, gra- cias al desarrollo producido después de Ia segun- da contienda mundial, protagonizado e impulsado por personalidades y escuelas que han consolida- do rigurosa e incarisableiiie~ite su carácter moder- no. Entre ellas, Ia francesa de1 grupo de I'Ecole du Loiivre, con Ia figura excepcional de Georges Hen- ri Rivicrt.' eii Ia i-csl>oitsabilidad de dirigir enire 1930 y 1950 10s cursos de rnuseología allí impar- tidos. Una actividad que se hizo permanente des- de 1941, y en Ia que tarnbién era directo respon- sable Germain Bazin, conservador jefe de1 museo y autor de Ia ya citada y clásica visión histórica de 10s museos. Junto a Ia personalidad de G. H. Riviere, que file director de1 ICOM desde 1948 hasta 1966. destaca, entre otras, Ia de Hugues de Varine-Bohan

E1 museo fundado hace más de tresáentos anos por Elias Ashmol en Oxford, alberga una de Ias colecciones de Historia Natural más importantes de1 mundo. Erigido en 1683 en Ia Universidad de Oxford, es hoy Ia sede de1 Museum of History of Science.

por su actividad e innovación teórica, quien suce- dió a Rivière en Ia dirección de1 ICOM, cargo que ocupó de 1966 a 1975.

Pero en e1 impulso de Ia museología y 10s mu- seos durante ese amplio período que va desde la creacicín y afiliación de1 ICOM a Ia UNESCO en 1946 hasta, prácticamente, los primeros anos de Ia década de 10s oclienta, no só10 han intluido como determinantes Ias innovaciories técnicas en 'Ias áreas de Ia conservación, Ia presentación o Ia investigacicín de Ias colecciones. Tampoco han sido exclusivas a este fin, aunque sí muy impor- tantes, Ias realizadas )r exportadas por 10s museos norteamencanos y canadienses en materia de nue- vos modelos, instalaciones o funciones sociocul- tiirales y didácticas; o Ia renovación teórica y prác-

Page 9: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

i i ~ a dc I ~ J > 11~1t 'vo~ iiiiiseoi aleiiiaii~s. hritáiiicos, franceses, holandeses o italianos: o Ias ii1dagacic1- nes en toriio a niievos eiifoques ). f~inciones de1 rnuseo realizadas -teí,ricaiiiente. sobre rodo- por escuelas iiiusetilogicas de 10s desaparecidos pai- ses socialistas de1 Este europeu, etct!tera.

Con toclo. aiin s iei~do decisi\,as estas ). otras aportacioiiez qiie podríaiiios citar, coiiio Ias pro- venientes de Ia docencia e investigacióii de Ia rnii- seologia cri iiniversidades de los más variados pai- ses -tanto eii occiderite corno en oriente, eri los iiidustrializados y eii los que están eii período de desarrollo-,s en el ~irogi-eso d t Ia in~isrología !. 10s museos iiaii sido detertniiiaiites asiiiiisiiio Ia propia ((crisis de Ia iiistitucióii rnuseística~~ y SLI

cuestionaniieiito como entidad e instr~iiiiento ciil- tiiral. Estos factores han producido, paradójica - rnente, avances si11 precedentes en Ia ciencia de1 museo.

3. La nueva museología - --

A lo largo de nueqtro siglo se hari prod~icido cíclicas invectivas contra Ia realidad y funciorialidad de los museos, en sincronía con los acontecimieritos culturales, especialmente los artísticos Una de Ias últimas ha coincidido con la cnsis de Ia institu- ción y con Ia ilamada «revolución romántica)) de mayo de 1968. Situación que ha durado hasta prácticarnente 1982, con una inflexión muy sig- nificativa en torno a 1977, afio en que se abre al público el Centro Nacional Georges Pompidou, en París

En esta crisis, el rnuseo ha tocado e1 fondo de alguno de los problemas planteados y lia servido, paradójicarnente como decimos, de acicate a Ia renovacióii y aplicación de Ia ciencia niiiseológi- ca. Junto a Lin auténtico florecimiento de nuevos museos, Ia museología ha universalizado sus prin- c ip io~ y convicciones, ha afianzado sus métodos y lia m~iltiplicado sin solución de continuidad el abanico de corrientes revitalizadoras en poco más de década y media Entre ellas, Ias conocidas como nueva museología.

L!ti!iz~:nos I J I O C L I C I Ó I ~ i i ~ ~ e \ ~ a iiiiiseologia [>ara rcferirnor a uiia coiicepción contrapiiesta a Ia tra- dicional. peru específicamente para denomiiiar a todo esc irio\~iriiieiiro iiiterriacional qiie tia coiise- siiido rciiiover ciesdc. siis ciniiriitos iin sec~ilai- ((so- sieyo)). tanro rir Ia iiiciiriic-ióii iiiiiseistica c'viiio drl patriiiionio cult~iral. En busca de i i i i i i ~ i c i~o leii- ziiaje 1. expresión, 1, de Lina nia!*or aliertiira, di- riainicidad y participación sociocultural. Ia t< riiie\,a iiiiiseología)~ precoiiiza t- iiiil~ulsa iiiia tipologia dis- tirita de mciseo, conio podreinos coiiiprohar a lo largo de1 preselite traiado. Apareci6 Ia denoiiiina- cicíii de (lriueva iniisrologia 1) al principio de los aiios ochcrita, y desde eritoiices lia veriido sierido eiiil>leada con significacioiies variables y piiiitos de definición diferentes, según los diversos autores.

Para alguiios especialistas," Ias nuevas ten- dencias en los riiiiseos (y, por ello, e n Ia museo- logía) está11 íiitiiiiameiite relacionadas con el im- p:ilso recibido, 3 partir de1 trabajo de Gevrges H. Rivière, por Ia tercera geiieración de los ecomu- seos y el suefio popiilar ri1 los setenta. Y por otras coiicel>ciones o experieiic.ias análogas, como Ias de1 museo de Níger en Niariiey, organizado entre 1958 y 1970; los niuseos de vecindad de los Estados Uiiidos (e1 de Anacostia, en particular); o Ia Casa Museo en México, inspirado en lo qiie fue definido corno ((museo integral)) en Ia mesa redonda de Santiago de Chile, eii 1972. Se despejaron estas teiidencias e n el primer Atelier inrernarional des éco- musées et nouvelles muséologies, celebrado en Qué- hec en el otofio de 1984, que desembocó un afio después e n Ia creación de1 MINOM (Movirniento Iiiternacional para una Nueva Museología, Lis- boa, 1985), presidido por Pierre Mayrand.

Otros autores, defendiendo también que el riioviiiiieiito de Ia <ciiueva iiiuseología~# coinicnza en Franciaio después de 1982, así como en otros países -en Quebec en particular-, con una cohor- te de nuevos m~iseólogos, precisan que ((inten- tan reflexionar sobre e1 futiiro de una institiición Ilarnada a ser el centro de Ia vida cultural de1 ma- iiana, a partir de la conservación de Lin patrimo- nio vuelto a ser vivo y no enfermo e n maiisoleos inaccesibles para Ia rnayoría ... ) ) . I i

Page 10: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

Especialista\ eii el teiiia. cc)iiiil Aiidré Desva- Ilt.e>," dectacan los aspectos de irinci\ación en Ia iiivestigación de i111 lengiiaje iiiiiseogrcífico para Ias presentaciones, serialando conio pioneros a Jeaii Gabus" en e1 blusev de Etriosrafía de Neucliâiel (Ciii7a), ai teórico Diincari F Caineroiil ' cri Ia Art Gallery de Ontario (Canada) y a Georges Heiiri Ri\,ière, a Ia vez tecíricu ! practico, que file res- ponsable de1 Musée Natioiial des Arts er Tradi- tions Popiilaires de París 1 director de1 ICOM, conio ya hemos mencionado

La unueva niiiseología~~ ha sido propiciada e inipulsada, en realidad, por lina serie de circiins- tancias de carácter técnico \ r niuscogralico y por ciiia e\lolucióri de apertiira en Ia i-rientalidad de 10s niuseólogos Ésta se corresponde con Ia coris- tatable en Ia demanda sociocultural de1 público o de comunidades concretas, que ha tenido uii con- tiiiuo creciniierito desde e1 fin de Ia Segunda Gue- rra Mundial Entre estas causa? o circunstancias, es necesario citar Ia apertura proveniente de Lina inayor investigación científica y sus consiguientes aplicacioiies tec~iológicas sobre 10s objetos de Ia cul- tura matcriai, sobrc ia coiiservdci6ii de1 patriiiio- 1110 en suma

Junto a Ia apertura y Ia previa puesta en cues- tión de1 museo y sus funciones patrimoniales en nuestra sociedad, destacan Ia búsqueda e investi- gación de un nuevo lenguaje, e1 esfuerzo por con- seguir una nueva tipología viva y participativa para Ia comunidad, e n consonancia con su naturaleza de institución privilegiada que es, de Ia conserva- ción, análisis y difusión de testimonios naturales y culturales originales. Por ello, y según si1 especia- Iidad, tiene Ia obligaaón de ser al propio tiempo que un conservatorio de especies o un banco de bienes, iiri instriimento ecpecial para Ia ediicación prime- ra y permanente mediante el acercamiento a 10 concreto, e, incluso -herencia sin duda de1 espíri- tu de1 68-, un instrumento de desarrollo contro- lado de la economía y un hogar cultural accesible a todos. La animación y participación culturales están íntirnameiite unidas a Ia idea de revelación de1 patrimonio, a Ia concienciación comunitaria y e1 ecomuseo, a Ia superación de Ia posible dicoto-

iriia o contradicción existente en el rnuseo entre Ia necesidad de Ia conservación y Ia utdización de1 pa- trimonio conio un banco de bienes rentables En todo ello, se aprecia iina más cercana e infliiyen- te visión antropologica

((No es iina cacualiciad -resalta Des~allée5- que sea Ia disciplina etriográfica Ia que iiiás tia1.a ayudado a 10s inuseógralos a encontrar su len- 311aje 110 puede coriteritarse cor1 exponer obras maestras de arte y debe aprehender los testinio- nios culturales y lo mismo 10s naturales más va- riados. 11 '' Y afiade ((Sus expuestos (por definición todo lo que piiede exporierse) son susceptibles de ser seleccionados entre toda siierte de cosas rea- les, o docunientos pritnarios Pueden ser tarnbién doc~inieiitos secundarios: iniágenes (originales, fotográficas, cinematográficas o magnetoscópicas, gráficos notables o ~iiapas; vaciados y niaqiietas, diagramas o modelos abstractos, etc.), grabaciones sinoras, audio-vicuales Pldemás, Ia ernografía no puede utilizar estos expuestos más que en el in- terior de un discurso museográfico, como signos El discurso puede ser analítico o sintético, dia- cróriico o sincróiiico, tipológico o ecológico (cuan- do se trata de una conservación en e1 lugar, una restitución por traslado, incluso una reconstruc- ción tendente a presentar un conjunto complejo idéntico a Ia realidad); puede desarrollar procesos operativos o, excepcionalmente, utilizar expues- tos e n presentaciones simbólicas <orno en Ias an- tiguas presentaciones esteticistas. l 6

E1 museólogo croata Tomislav Sola reconoce Ia crisis y falta de consolidación, entre otros pro- blemas, e n Ia disciplina museológica. Pero adrni- te sin embargo como evidente su indiscutible pro- greto después de Ia Segunda Guerra Mundial gracias a Francia ((que ha puesto 10s fundamcn- tos de Ia museología moderna) , y, particular- mente, a 10s trabajos teóricos y prácticos de G. H. Rivière y de H. de Varine-Bohan, además d e otros pensadores, como Marcel Evrard.I7 Y afir- ma expresamente: «La nueva museología consis- te sobre todo e n una extensión de parámetros de Ia museología tradicional y toma Ia forma de una nueva puesta en cuestión. Hoy e n día se puede

Page 11: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

cctiijiderar que csta etapa est5 arclii\,ada, en Ia iiiedida eri qiie iio existeri ya iiiedios eficaces para siipriniir Ia 'solucióii de rccariibio'. Durante Ia ceiitena de anos de su proceso. Ia miisrología àii- res qiie nada sc Iiù ccinsagrado a sí riiisiiia, e5for- /.áiidose eii encontrar cii si15 ambiciones tio so- lariieiite sci iiispiraciciri. sirio iiicluso sii r~zo i i de svr , , . l~

N o se trata, por çonsigiiieiite. tan sVIo de iiiia actitiid reno\,adora Irente a iiiódulos de coricep- to y actiiación opuestos, los de lina posición tra- ciicional. La niieva riiiiseologia es, coiiio clefieiide Marc Maiirc,"' iin ~~frii(íiiieiio hiitcirico~~ \. iin ((sistenia de \ / a lores~~; uiia <( iiiuseolugía d r ac- ciónkl, qiie piiede ser esqiieiiiáticanieiire clefiiiida por los parái~ietros sigciicntes:

1 , Por el de .Ia deiiiocracia cciltiiral~~. Ningii- ria cultura doiiiinaiite debe ser eiisalzada coiiio «Ia cultura), en detririiento de Ia variedad de cul- tiiras rxisreiire, o que [ I ~ I I c ~ i b i i ~ [ c ~ c11 C'] rerritu- rio nacional; liay que preservar, valorar, iitibzar y ditundir Ia provia ctiltiira tle cada grupo.

2. Poi cl dc « l i r i iiiicvo y triple par;ldigriiab> (en que se constata claranieiite su diferencia tan- to con Ia museología como coii el niiiseo tradi- cionales), enunciado de este modo: ((de Ia ino- nodiscipliíiaridad a Ia pluridisciplinaridad, de1 público a Ia comunidad y de1 edificiò al territorio)).

3. Por el de «Ia concienciacióri )) (de Ia comu- iiidad respecto de Ia existencia y valor de su pro- pia cultura).

4. Por el de ((iin sistema abierto e interactivo)). Un nuevo modelo de trabajo museístico, e n e1 que el proceso u operaciones lineales de colectar, preservar y difundir en el rnuseo tradicional -com- tituyendo un mundo en parte aislado de Ia socie- dad- se transforma e iiitegra eii el iiuevo iiiuseo. dinámicarnente, en otro circular y abierto, te- niendo por objeto el patrirnonio donado por la coniiinidad.

5 . Por el de1 ((diálogo entre sujetos)). El fun- cionainiento de1 nuevo niuseo está basado en Ia participación activa de 10s rniernbros de Ia comu- nidad. El rnuseólogo deja de contemplarse como el experto encargado de dirimir Ia verdad, para

convertirce t.n iin ~~ca ra l i z ado r~~ al ser\icio ele Ias necesidades de Ia curriiinidad.

En este sentido, -Ia exposiciVii~~ de1 niievo inuseo res~ilra ser i i i i iiiétodo, tino de los inás ir i i-

portaiiies íitilcs de diálogo 1. cuiicieiiciacitiii dt. qiie dislwiie el riiiisticil~.)go. qiiv acli16lla. <<ciiii- sideracia coiiio iiiia puesta eii escena de Ios oL)je- tos, cotistiiii).e i111 leii_~iiaje \risiia1 iitilizado y prac- ticado por iodos cn Ia vida cotidiana 11 .

Sea coiiio fuerc. 10 ciertu es qiie a lg~i i ic)~ r i i c i -

seos construidos o reriiozados en Ias dtcadas de los ocheiita )- rioventa, iiiscritos o no eii Ia Ilaiiiada M niie\,a iii~iseologia~~,"' se haii constitiiido eii [)a- radigriias de la reiiovacióri niuseológica, eri aii- t6riticos Iiitos de Ia coiisagracióii de Ias técnicas rnuseográficas y de Lina teciiologia aplicada casi revolucioiiaria. Y, sobre todo, de uri diiiainisino y proyecci6ii socioculturales igualmente imita- bles. Alternativos, inriovadores, heterodoxos i i i -

cliiso, 10; nueV;»: niLi:eos resulta11 Lina conse- cueiicia de1 desari.ollo y revitalización recíprocas clc qirc son dciidores ellos 1. Ia niuscografíalrnu- seología, t.n e te viajr .;i secular que vienen coin- partiendo, por niás que, corno podrá conipro- barse eri Ias páginas que sigueri, este r-riaridaje no haya estado exento de problemas y alguna que otra vacilación, ni aunque a ú n no se hayan disi- pado todas Ias contradiccioiies -aparentes o rea- les- que entraiían estas instituciones y Ia ciencia que de ellas se ocupa, tanto desde su perspecti- va tradicional corno nueva.

El carácter eminentemente orientador, con- sultivo y didáctico que pretende este manual d e Museología y museografía nos obliga en conse- cuencia -y como requisito previo para cualqiiiera otra cuestión de si1 contenido-, en primer lugar. al análisis dcl término y el concepto de miiseo, coriio objeto propio y específico que es de Ia ciericia de Ia museología y de Ia tbcnica de Ia museografía. En se- gundo térinino, se imponen como imprescindibles la definición de estas dos disciplinas, el esclareci- riiiento de sus objetivos y Ia consideración de su irietodología y aplicaciones. Después, se analiza- rán 10s deniás aspectos concernientes a Ia memo- ria e tiistoria, a los tipos y categorías, a lus usos y

Page 12: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

alternati\!as. etc.. ele Ios riiii~eo.;, así cctrrio rl dc. sii vinciilación al parriiiionio IiisrOrico. segúii el es- qiienia irarado que lipura al iiiicio de rstc est~idio.

4. El término, e l c o n c e p t o y Ia d e f i n i c i ó n d e ( ( rnuseo , ) - -- - - - - - - . -- - . -

La palahra iiiiiseo (~iro\.enieiiie de Ia latina ~iz~rs~~irrii y a sii vez de Ia sriega ~ n ~ ? ~ i s t ~ i ~ ~ i , *Iiisar de con- teiiiplacióii~~ o ((casa cle Ias fvliisas~~ en Ateiias> lia tciiido a Io largo tlr I,? tiictoria iiiiiiirroza\ al)lic-a- cioiies !+ sigriiíicacioiirs I ias t~ sii serirido actiial. Roriia iirilizd el ikriiiiiio pai-a descril>ir i i i i ~ ~ I i i ~ a i - de discusicíii liloscilica~~. Definida por Giiillaiiriie BiidP eii sii L - ~ x ~ ~ ( ~ I I - ~ ~ ~ ~ ~ ~ ' c o - I ~ ~ ~ ~ I z L I ~ ~ ~ ( 1554) coi~io ((iin lugar dedicado a Ias Miisas ); al estiidio, don- de se ociipa de cada una de Ias nobles disçil)li- nas),, cuaiido el getigrafo Estrabóii eriiplca, eii e1 siglo i a . C., el tériiiiiio ~ ~ i i i u s e o ~ ~ , estabaii ya acu- iiados no sõ1o el voc.ahlo ), el seliticlo griieral y ,justificado si1 origeii etinioic'kjco, sino taiiibiéil un cierto desarrollo significativo, ~)olivaleiite en cierto inodo. Con ello, describiendo el mouseioti de Tolomeo Soter o Tolonieo Filadelfo en sus pa- lacios reales de Alejandría, adelantaba Estrabón veinte siglos antes algunos enfoques y aspectos inuseológicos iiiterdisciplinales.

El rnuseo foriiia taiiibién parte de estos palacios rea- les: tiene uii paseo ~)írblico, una exedra coii asientos y iiiia especic de sala coiiiúii de los hoiiibres de estii - dio que forrnaii el Miiseo. Este grupo de hoinbres no solameiite iiiaiitiriie Ia propiedad en coiiiUri, sitio qiie tariihibn tieiie 1111 sacerdote a cargo dcl Miisro. qiie pri- iiiero era iioiiibrado por los reyes, pero aliora lo es por CCsar. El asi IIariiad~i Scnia, taiiihit.ii es Liiia p J r - te de los ~)alacicis reales, era el reciiiro cliie coiiieiiia Ios lugares de ciitcrrariiieiito de Icis reyes y el de Ale ja i i - dro Magno: ya que Tolomeo. el Iiijo de Lagos. aiitici- páridose a Pérdicas, se Ilev6 el ciierpo ciiaiido estaba tray6iidolo desde Babiloi~ia y se des\,iaba Iiacia Egip- to. iiiovid« por Ia codicia y rl deseo de Iiacer de ese pais el siiyo.?'

El museo descrito era, en realidad, un coniplejo de1 siglo I I I a.C. qiie iiicluía, adeiiiás de Ia famosa

Biblioteca. i i i i ohscr\.atorio airronci:::ieo, c i r i jar- díii horánico, iiila colección 7oolOgica. Ias sala5 de tratiajo y estudio y el anfiteatro citados.

Aiiriqcie rio se trataba de i i i i niiiceo eri t.1 seri- tielo dctiial, el tCriiiiiio iisado eii Aiejaiiciria pro- \.ciiía de ~rlotrít*itirr -e1 teinlilo declicaclo eri Aterias a Ias itliisas- !. se liahia eni-ie~iiecido \.a ciiariclo lo iiiiliz0 EsrrabGii para relerii-st. a i i i i rigiirc)so cen- tro iriterdiscipliiidI tle Ia c~iltiira y el pairinioiiio. coriio era el de Toloiiieo Filadelfo, i i i i i y de acuer- d o con Ia pretensióri Iieleriística de1 saber uni- versal. Pesaba eii ello, corrio rs Iõgic-u. ranihiéii Ia coiigi-iieiicia c.oii el tlecarrollo de1 ciilro a aqiie- Ilas deiciacies que l~riiseiiaroii a Hesíodo iin bello canto iiiieiitras al~aceiiiaba sus ovejas al pie del divino Helic6ii ..., Ias Musas, que Iiabitari Ias riian- siones olíriiliicas, Ias iiiieve liijas (lel poderoso Zeris: Clío, Eiitei.pe. Talía, Melpóiiieiie, Terpsíco- re, Erato, Poliinnia, Urariia )i Calíope)b.2' «Las aiiiiiibr6 cii Pit.iid>> ~ d i i i i i C : i.ic'jo p i ) c t ~ C:] otro 111-

gar de sri Tc.c~.qo17íil, ~(aiiiaiicebada con el padre Li-tii~ida, hlrieriicísiiie, scnora de Ias colinas de Eleiiter coiiio olvido de riiales y reniedios de preo- c i i l )ac i~ i ies~~ .ll

Nada niejor que itn iioriibre derivado de1 sa- cro contexto de las Musas para denoniinar una institución que ha devenido en el rnuseo actual. AI fin y al cabo -ingredientes y concornitancias históricas aparte-, Ias nueve hijas de Zeus y Mne- rnósine patrocinan con el flechador Apolo Ias ar- tes y Ias letras eri Ia initología clásica.

((La palabra museo -precisaban 10s estatutos de1 ICOM aprobados en 196 1 (que a su vez mo- dilicabaii lus de 195 1 ) y vigentes liasta 1968- de- signa a todo establecirniento permanente, admi- nistrado e n beneficio de1 interés general para conservar, estiidiar. Iiacer valer ~)oi- iiieciios cli- versos y, sobre todo, exponer por deleire y edu- cación de1 público uii conjunto de elementos d e valor cultural: colecciones de objetos artísticos, histcíricos, científicos y téc~iicos, jardines botáni- cos y zoológicos y acuarios. Las bibliotecas públi- cas y los centros de archivos que niantienen salas de exposicióri de manera permanente serán asi- inilados a los niuseos. )B

Page 13: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

Una detiiiicitin que, coriio casi iocias ias C O I I - reiiidas )I desai rolladas en Ias di \ ,ers~s reclaccioiies de los Esratiiios de1 ICOkI -10s íiliiiiios (laia11 de1 'iiio 1974. r~tilicados coii iiiotiilic~cioiir\ ~)ostc.- riores cn Ia :\.i .Asariiblca Geiicral de La Hay.2, vil 1989-, Ilc\-a Ia riiarca de Geoi-pes Heiiri Iii\.i&-e. Ke- \,isacios \. riiodil'icados cii siis dilereiites Acariihle- as gciirralcs, 1'1 deiiiiicióii de iiiiisco (taiiiliieii Ia\ tie iiiiiseología 1. iiiiiseografía) lia sufrido rctoc1Lies !, a nipliacioiiec siicesivas, coino iPrrenioc. Los es- tatutos de 196 1 se cambiaron en Ia VI1 Asarnhlea, çelebracla cii Aiciiiaiiia eii 1968. Esios diiiiios cs- tii\.iei-oii i-igciitcs I i , i s~~ Ia ~)iiblic~~ci<iii vn 1075 dv Ios aprohados rl alio aiiterior. Y Ia X I V Asaniliiea guict-al, que t ~ i \ ~ o Iiigar eii Londres en 1983. aíia- dió tanibiéii algiiiios piiritos a Ia cirliiiiciOii de i i i i i - seo cle los c s t a~ i i~os de 1968, cliie conieritareiiios por SLI relr\..aiicia.

Antes, seiialaremos de entre Ias miiclias defi- iiiçiones apai-eciclas a lo largo de casi i i i i siglo re- dactadas por diversos autores, algiinas especial - iiieriie sigiiilica~ivas. Adcniás dc rellc'.jar diferentes posiciones y nieiitalidades ante Ia realidaii iiiiisei5- tica y patriiiioriial, hati influido sin diida en Ias decididas por el ICOM; y en todo caso riiiiestran Ia evoiución de Ia imagen y de1 concepto de rnu- seo a través de1 tiernpo.

Así, por ejeinplo, Georges Brown Goode de- finió e n 1895 el museo como cccina institución para Ia preservación de aquellos objetos que nie- jor explican los fenómeiios de Ia naturaleza y Ia obra de1 hoinbre, y Ia civilización de éstos para el atirnento de1 saber y para Ia cultiira y Ia ilustración de1 p ~ e b l o ) ) ~ ~ . En 1889, G. B. Goode se rxpresó de esta otra forma: «Un eficiente inuseo educador debe ser descrito como una colección de rótiilos instriictivos, cada tino de ellos ilustrado por ~ i r i

m uy bien seleccioiiado ejeniplar)) .15 M. Foyles, por sii parte, definía en 1929 el

iniiseo como una ccinstitucicín en Ia que Ia iiieta es Ia conservación de 10s objetos que iliistran 10s fenómeiios de Ia naturaleza y los trabajos de1 hom- hre, y Ia iitilizacitjn de los objetos para el desa- rrollo de los cc)nociniientos hunianos y Ia ilustra- ci<íii de1 p i i e l i l o ~ ~ . ~ W n a descripción rriiiy afin a

ia ~)riiiicra ilc* Gooc!c, 1- ;i Ia iiiciitalidad cIeci!iio- iiciiiica de1 iiitisc.~. pro\.eiiieiite cir Ia llustr,~ciciii, y sieriipi-e preseiite en Ia coiiforiiiacitln de1 iiiiiseo iiioderiio. Siiele encc)rirrar sii coiiiplerneiiro cri e1 aspecto iiiiisc~o~i-áficu -c.\ taiiihiQii el caco tlc Goo- de ( 1889)- ts i i coiice~iciones coiiio Ia csl)rcsada por P. Crep eii 1934, a1 defrntier q ~ i e el riiiiteo tlehr ser ~~ctiii iodo yf bc.llo, itiiicioiial !. c'sirtico. arqiiiteciciiiico plástico^^."

Las definiciories propiiestas ), cielendidas por Georges H. RiviCre, riiu y iiiiiiierosas, están refe- rrnciadas en el libro ciiado clc LLI m~rs i~>l l~gi r rt7- 1t.11. 'V~rivo iiiiiclia.; ocasionvs liara clelialirlas v de- sarrollarlas eii sii larga labor tioccntc ). rii las iiiiiiierosas asaiii[ileas. coilgi-esos seiiiiiiario5 de1 ICOM. Ya en I958 liabía heclio coincidir Ias de iniiseo, iiiiiseología y iiiiiseografía por é1 redacta- das'" c011 Ias coiitcriiclas ri1 los estaiiitos enioiices vigentcs. Esto ocurrió tanibi6ii eii 1975.

Eri geiieral. Ias dilcreiites asociacioiie> i i i i r i -

nacioiiales de los iiiuseos hari elaborado definicio- ries o descripcioiiei sohre iiiiisco, i i i i~se~logid \. iiiciseografia (taiiiliii.ii, sol)re olros concepios clave), que tio siempre suelen identificarse, auiiqcie si coincidir esencialinente coii Ias defendidas por el ICOM. Otro tanto ocurre c011 Ias ofrecidas por Ias enciclopedias de reconocimiento universal.

En Ia edición de 1954, Ia Bolshnia Sovietska En- ciklopedia, publicada e11 Moscú (t. 28, pág. 493) afirinaba: «Los museos son iiistituciones que reú- nen, conservan y exhiben documentos históri- cos, relíquias de Ia cultura espiritual y material, obras de arte, colecciones, ejemplares de 10s ob- jetos naturales)) .'O

Desde 1962 e n qiie así lo adoptó, The Aiiieri- can Association of Museuitis vieiie definierido e1 iiiiiseo coiiio ( ( i i i i estableciiiiieii~o pei'niaiientc no lucrativo, que existe 110 con el propósito prinior- dia1 de gestionar exposiciones tetnporales, exeii- to de impuestos sobre Ia renta federales y estata- les, abierto al público y administrado en interés de1 público, para fines de conservación y preserva- ción, estudio, interpretaciói-i. reunión y exhibi- ción a1 público para si1 iiistriicción y deleite de objetos y especírnenes de valor educativo y ciil-

Page 14: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

tiiral, incliiyeiido iiiaierial aiii\tico. ciriililico ciaii- to ariimado coiiio iriariiriiado) Iiistórico tecno lógico Los niiiseos así defiiiidvs piieden incliiir jardines boiáiiicos, parqiieç z«oirí#icos, aciiarios planetarios, sociedades hist~ricas. y casas hi\ióri- cas y lugares qiie reúiian aderiiás lo\ rcsqiicii- iiiientos prescritos en Ia cláiisiila ~) recedcnre)~ Suele modificar le\eriieiite csta definición para retlejai lu5 cainhiv\ cle 10s riiLiseo\ 1 de Ias cii- cunstancias, acompanadas estas defiriiciones de breves comentarioq, conio ocurricí en los anos 1970 al proponer sii esqiieiiia de ~Museun i Ac- creditationt) Eri 1973, por cjcnililn, definia cl niii- seo conio «lina instirucicín organizada Lierma- nente, no lucrativa, esencialniente educadora o estética eri su propósito, con iin equipo profesio- na1 que util i~a siir tangibles objetos y ciiidados para ello, y los niiiestra al público según iin plaii regulado)) "

La Encyclopaedra Univer-salis dedica desde si1 edicicíri de 1968 algiinas págiiias al desarrollo de1 concepto de rnuseo y dc riiiiseología Desa- rrollados por Germain Bai-in," Ia act~ialización aparecida en 1989 dedica amplios comentarios de Gilbert Lascault a r n ~ s é e , ~ ' de1 propio Bazin a rnusées, rnuséologre y crises de l'institution muséolo- g ~ q u e ~ ~ y de André Desvallées a nouvelle muséo- l og~e . '~

La Encyclopedia Britannica, en su edición de 1974, definía al rnuseo de hoy con palabras de Hugues de Varine-Bohan -entonces director de1 ICOM, y que se identifican con su propia defini- ción, como veremos- como ccuna institución que reúne, estudia y conserva objetos representativos de Ia naturaleza y de1 hombre con el fin de mos- trarlos después a1 público para su informaciói-i, educación y deleite En esta detinición, el térmi- no museo incluye no sólo aqiiellas institiiciones conocidas como tal sino tarnbién Ias galerias de arte ( n o comerciales), Ias galerías de imágenes, 10s se- culares tesoros eclesiásticos, ciertos monumentos históricos, Ias exposiciones permamentes a1 aire Ii-

bre, 10s jardines botánicos y zoológicos, 10s acua- rios, y Ias bibliotecas y archivos siempre que es- tén abiertas al público), 36

Ei i oiiu ~ i i t i d u . Edwin H Colbrit. defiiiía eii I96 1 el niiiseo de1 modo siguiente ((Siirrianamente i111 museo es lina institiición para Ia custodia de ol)j~ctos \. para Ia interpretación dc- ,icliiellos ol>jetos ta rira i i i \ e,tiçad«s conin exliihido\~~ '- V Eliseeff, por su parte.. dcscribia a comieii7os de Ia década de los seteiita e1 niiiseo coiiio ( ( i i i i corijiinto t'5pe- cializado o cli\.c.rso, en el que Ias fiiiiciones son mcilti1>le\ FI punto coiiiúii de todos 10s i i iu~eo\ trc el iiiter& que reporta al patrirnonio natural y cul- tural de Ia hunianidad~~ '"riterio cercano al de Crispolti, cuando afirrnaba qiie el iiiciwo debe ser ~ ~ \ e r ~ ~ i c i o ciiliiiral ~)íihlico, relacioiiado con Ia t i o -

cuinentacicín 1. Ia experiencia de Ias inqiiietudes figciratitd\, \risiiales y objetiialei de nuestro siglo, serviciu activo y no sólo centro de conservacióii de obras, aiiriqiie sólo sea 1111 sentido no estadistico~~ '"

Eii todo caw, siri duda que tiari 5iclo los està- tiitos de1 ICOM (10s primeros fcieron redacrados en 1'347, y eii sci d i ~ 3 ya se dc'fir~c' c1 ini~sco) , i110

dificados eii Ia citada VI1 Asarnblea de Aleiiiaiiia de 1968,"' los cliie han desarrollado y precisado eii sii wntido más amplio e1 concepto y Ia conipreri- sión de museo' en e1 Títiilo I1 (asurniendo Ia de- finición de 1947), que transcribirnos textualmente

Título I1 Definición de museo Artículo 3 El ICOM reconoce como rnuseo a toda ins- titución permanente, que conserva y expone colec- ciones de objetos de carácter cultural o científico, para fines de estudio, educación y deleite Artículo 4 Entran en esta definición. a ) Ias salas de exposición que con carácter perina- iiente niantienen Ias bibliotecas p~iblicas y l a í colec- ciones de archivos, b ) los monumentos históricos. siiz partes o depeii- dencias, tales como los tesoros de Ias catedrales, lugares histdricos. arqueológicos o naturales, si están ahiertoz oficulrncnrc a1 público, c) jardiries botánicos y zool6gicos. acliarios viveros ) otraí instituciones que muestraii ejeiiiplarez LIVOF. d ) los parques naturales

[La UNESCO. por medi» de D.A. Allari. lo había deliriido eri 1960: sq Uri iiiiiseo eii sii loriiia más ciiiiple corisisic. cii i i i i cdi- licio como casa de Ias coleccioiies de objeios para Ia coiiieiii-

placián. esrridio y deleirc**, The orgatiiznricn (>JIIIIIS~UIIIS. Paris. 1960. pág. I 31.

Page 15: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

En los estatutos retfaciadu~ rii Ia XI A$znihle~ General de Coperihagiie en 1974 puririiali7a el ICOM

Ariiciilo 3 . E1 iiiiisco t-5 iiiia iiisiiriicitin [irriiiaiieiiic.

siri finalidad Iiicrati\.a. a1 ser\-icio dc Ia socircldil !. dt- 311 desarrollo. ahiçrrci al público. que adqiiirri. con- wr\-a. irli-estiga. c . c ~ i i ~ i i i i i c a y eshibz para firics de rs- i ~ id io , ediic~aciOii !. de ~lzlriie. iesriiiioriiuç iiiaierialci de1 hoiiibre y sii e i i r o r i i o

Arriccilo 4: El 1COhl recorioce qiie re3poiidcii a csra defiiiicióii. aderiias de los iiiiiseos designados coino [ales:

a ) Lo\ iiisiirrircis dr ioiiservacióri y salcria> oer- iiiaiieiiicb cit- t - i l ) o b i c . i t i i i iiiarirciiidai 110r Ia<; Hil)licirr- cas y Arclii\.os.

b) Lo5 liarajrs y rnoiiiiirieiitc~s iiatiirales. arqiieo- 16gicos t-tiiograficos. los nioniinicriios Iiistóricos y 10s sitios qiie iençaii Ia iiariiraleza de iiiiiseo por sus ac~ividadcs de adqiiisicivii, coiiseruaci<in y coi~i i in i -

cacióii. C) Las instiruciones que presenten especiiiienes vi-

\ uj, la!~:; C O I : : ~ j j rd i !??~ I ~ ~ i t a n i n > z y 7nológicos. aciia- rios, viveros. etc.'"

La XIV Asarnblea General (Loiidi-es, 1-2 dc agosto de 1983) afiadió a este artículo 10s puntos siguientes:

d ) Parques naturales. e) Centros científicos y planetarios.

En posteriores asambleas generales, congresos y reuniones, 10s distintos comités de1 ICOM han continuado matizando y enriqueciendo esta defi- nición, como ocurrió en Ia XVI Asamblea Gene- ral (La Haya, 1989). que ratificó Ia de 10s estatu- tos de 1974 y 1987. Es decir: «E1 museo es una institución permanente, sin fines lucrativos, a1 servicio de Ia sociedad y de su desarrollo, abierto al público, que adquiere, conserva, investiga, co- munica y exhibe para fines de estudio, de educa- ción y de deleite, testimonios materiales de1 hom- bre y de su entorno)). En esta actualización han sido decisivas diferentes posiciones de Ia nueva rnuseología y Ia cada vez más clara infli~encia de disciplinas como Ia antropología o Ia etnografía. Se insiste, sobre todo, en que 10s rnuseos son insti- tuciones (cal servicio de Ia sociedad y su desarro-

Ilo*> ! r ['ara transformar Ia sociedad 11 o cuando 5e trata de rnuseos peqiienos « rnuseos regiona- leí. eri que esráii ((formados por s ~ i s comunidades respecti\,as para preservar sii herencia ciiltiiral es- ~)ecifica* (eri palahras de1 programa prcliiiiiiiar de1 coniit6 orgaiiizador dc Ia u\ ' i i Coriferericia de1 lCOh1'95 (Stavan~er , Noriiega, 1-7 de j~ilio) ( (El iiiiiseo y Ia\ coniiiiiidades~~ ), o en qiie ((exisreri para el beneficio de todo5, y en especial para el de Ia riieiiioria colectiva de iiria regi<íii~$ (Conferen- cia de1 ICR, comité interiiaciorial de1 [COM para los niii5co\ regionales, 1993)

Una definición con Ia que, lógicamente. coin- c ide~i eseiicialiiieiite otrac iiistitiiciorie,. coriio The British Museunis Associatiori, que e n si1 a\aniblea ariiial de 1984 adoptó Ia siguiente ((Un rniiseci es iina institución qiie colecciona, docii- rnenta, preserva, expone e interpreta testirlionios materiales e inforniacióii asociada para benefi- cio de1 p ú t ? ! i c ~ ~ ~ Definición que. a su vez, asiirnio Ia Coinisión de h,liiseos y Galerías hritánicas e n 1988.

Tambiéii ce han fijado en Ia detendida por el ICOM y en otras propiciadas por Ia UNESCO los diversos autores. Así, Francesco Poli, refiriéndo- se en concreto a 10s rnuseos de arte, y después de afirmar que ficonstituyen e1 patrimonio artístico público)^, (y de puntualizar: ((Se pueden definir metafóricamente (en su conjunto) como e1 'dic- cionario de 10s valores artísticos', en e1 sentido de que lo que no está presente e n ellos no es arte, o todavía no 10 es ~ f i c i a l r n e n t e ) ) ) , ~ ~ cita ((unas de- finiciones genéricas de museo: E1 museo, un me- dio de comunicación, e1 único dependiente de1 lenguaje no verbal, de objetos y de fenómenos dernostrables E1 museo, iina institución al servi- cio de Ia sociedad que adquiere, comiinica y, so- bre todo, expone con la finalidad de1 estudio y de1 ahorro, de Ia educación y de Ia cultura, testi- rnonios representativos de Ia evolución de Ia na- turaleza y de1 hombre. (Definiciones sacadas de Ia revista de Ia UNESCO, Culrures, vol. xvr, núm. 1 , Editions de Ia Baconière) .43

Por su parte, Hans Heinz Holz, refiriéndose también a1 rnuseo de arte, y dentro de Ias preocu-

Page 16: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

paciones sociociiltiirales de I J dt2cada dc. los se- terita al respecto -iiicliiidos lo( iiirevos coiiiporra- niientos artísticos 1. el coiice'ptiial-, si no 10 define. al irieiios lo califica coriio {(cáiiiara tlel tesoro 11 I i i -

gar dc c.sposicióii~~. Uri cx~)i-t.si\-o !. doble tít~ilo para di5tirigiiir ciitrr Ia iiiisitii~ drl iiiiiseo (reiinir ): rxlioiicr ohjt,rt?s de aric) y Ia ororsada a Ia i<l,t~sr- Iiallc -sala de arte- (siiio ciel iiiolztet-tl- de1 arte).-'-'

Desde otro ~)iiiito tlc 1,istn. casi i i i r siglo antes incluso de Ia creacitiii dcl ICOhl s r ha veiiiilo coii- solidaiido una duble teiidencia de teorizacióri so- bre el iiiciseo, a favor 1: e i ~ coiiti-a, eii que pensa- dores, escritores, iiitelrctuale\ v arriitas. etc.. lia11 Ilegado a consiriiir toda iiiia espeçic de prope- déiitica particiilar sobre Ia cieiicia \; el objeto iiiii- seísiicos, de cuyo debaie be ha ocupado recieiite- i-iieiite J. L. Déotte."' Los priiiieros, los Jcferisores de1 niuseo, parten de Ia coiicepciúii tilantr4pica. encicloliedista y didáctica de Ia Iliistracióii, y de1 Rornariticismo irnperaiite en Ia tpoca de definición de1 iiiiiseo píiblico 11 irioderiio. Los ~eg~ii idos, los detractoi-es, arrancari cic Liiia cr-ítica iiiiliiaiiie por Ia privación de aiitononiía e iiidepeiideiicia de Ias obras al entrar en e1 inuseo, y por su coiiversión final en iin mausoleo o panteún anq~iilosado e irregenerable. Ambas tendencias coexisten en Ia actiialidad, y han protagonizado resonantes in- cursiones a 10 largo de1 siglo xx, corno veremos.46

Pese a todo, Ia definición de museo más uni- versalmente aceptada sigue siendo Ia proporcionada y desarrollada en 10s estatutos de1 ICOM. Asunto distinto es, como veremos, Ia reiiovación concep- tua1 y funcional que se le exige actualmente al museo y, por tanto, Ias nuevas acuiiaciones que aparecen para expresar movirnientos alternativos a Ia institución museística «ortodoxa)).47

Pcro tanibiCri ha); quc selialar qiie Iioy, i i i -

sistiii-ios, aun persistiendo e1 reconocirniento a Ias definiciones de1 ICOM, lo cierto es que Ia evo- lución de1 propio museo, de Ia museología y de Ia práctica museográfica han producido otros en- foqcies y análisis en el panorama actual de1 fe- nóineno patrimonial y niiiseístico. Y, conse- cuenteniente otras denoniinaciones, calificaciones o definiciones, niás qiie esencialrnente distintas,

si al rnenus coiicept~ialriicntc iiiatiz;idas cn fiin- citiii de posicioiies iiiás innovadora\ o alteriiati- \.as. iiacidas despiiés de Ia recoriocitfa ~(crisis de1 riiiiseoll a fi~iales de Ios 6 0 , cori~o Iiiego analiza- i-~iiios. Pero, sobrc todo. ~)ro\,eiiieiites clc Ia niie- \.a iiiiisrologia.

5. Museología y museografía: definición, objeto y objetivos en un nuevo paradigma de acción

La iiitiirolo~ía. de activrtlo cor1 rl ririiiirio \. tal corno Iieiiio\ adelaiitado, es Ia ciencia de1 niirseo. Una defiiiicicin etiinol6gica que reqiiiere Ia ade- cilada coiifiriiiación coiiceptiial i-iiediaritc e1 opor- tiino análisis y desarrollo, Lina vez se Iiaii coiio- cido eri síntesis Ia evoliición y el establrciinierito de los priiicipios de esta disciplina.

La juveiit~id de ia iiiiiseología coiiio c.ieiiçia -e11 parte, todavía c n proceso constiriiyeiite-, a Ia qiie lia precedido eri el tiernpo 5, eii e1 espacio Ia rnuseografía, corno ranibiéii se lia iiidicado, es iino de los rriotivos para que antes de 1945 iio apareciera sii definición o descripción ni en 10s diccionarios ni en Ias enciclopedias al uso. Sólo después de aquella década, comienzan a incluir- Ia muy tímidaniente, designándola unas veces corno ~especialidad,, y otras como ccciencia )) .48

La consolidación de Ia museología como cien- cia y su definición han propiciado en 10s cinco o seis últimos decenios un largo debate, todavía no cerrado. No exento de posiciones encontradas y, sobre todo, de una coiifusión evidente al tratar los conceptos de museología y museografía, esta situación obligó a1 ICOM a aconieter el estudio y ld i-edacciúii dt. st.iidas definiciories, pciblicárido- Ias en iiiglés y francés en 1970. La de niuseología, eii concreto, con estas palabras:

Miiseologia es Ia cieiicia de1 museo; estudia Ia histo- ria y razcín de ser de 10s iiiiiseos. sii función en Ia so- ciedad. siis peciiliares sisteiiias de investigación. edu- cacitin y orgaiiizacicíii, relación qiie gua rda c011 el iiiedio aiiibiente físico y clasificación de los diferentes tipos d e ~iiiiseos.~'

Page 17: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

Xlgiii;os aiitores. eiitre ellos L Saleriio, ha- bíaii expresado algiino\ a6os antec \ L I coiicepto de Ia iniiceología y Ia rniiseografía En 1963 e$- cribia

€ 1 ~ > \ i i i ( i i o C I L ~ I i i i t i \ r o c.11 >i, c11 \ L I csirLicitirLi, L.\ c1 O ~ I -

jcio ~ l t s I,1 iiiti\cc~;ralia aiiipliada rii 1.1 I Ia i i ia t l~ i i i t i -

>cc)logíCi. iliie rio \I. l i i i i ~ r ~ i a Io\ l>rolilciiiai arqtiireciii- iiicoi; o c \~ic~i i i i \ .o \ . <iiio qiir ticiie iiiicrcsc.; ni'iz aniplios cciiiio con Ia exreiisiGii de Ia vida de1 iiiiisco.

\ L I f~iiiçioi~aiiiiciiiii !. fiiialiti,id."!

Para Georges Heiiri Riviere ( 198 1 ), 1 5 rnu- seologia es:

iiiia cit.iic.ia alilicada, Ia cieiizi.1 drl riiti\ro. E\iiiciia 1'1 Iiisroria y Ia fiiiiciciii cii Ia s~~ciedaci. Ias foriiias esl)e- cíficas de iii\,rsii~acivii y coiiservaci<iii I'ísica. de pre- ~entacióii. aiiiiiiaci<iii y cliftisicíii. <Ir organizaciOii y fiiiicioiiaiiiieiiro, Ia arqtiirecrtira rit1ei.a o rehahiliiada*, 10s eiiiplazaiiiiriiros adiiiiridos o seleccioiiados. Ia i i -

~>ologia, Ia deciiitologia."

Una detiiiicióii qiie veiiia a coiiiçidir scibstan- cialrneiite coii Ia forriiiilada por c1 ICOhl, cii Ia qiie Iiabíaii quedado claritiados ya tanto el ot>jeto «)riio los objetivos de ia museología, así como su califi- cación científica, y sus coiricideiicias y diferencias con Ia museografía, que luego analizarenios.

En una formulación académica, suele decirse que Ias ciencias se especifican por su objeto for- mal. Desde esta perspectiva, el museo es e1 obje- to propio y específico de Ia museología y de Ia museografía. Y mientras que para Ia primera es taiito objeto formal como material, sobre cuya to- talidad de aspectos y cuestiones debe construir un sistema específico de principios y aplicaciones de valor ciniversal -es decir, proporcionar e1 co- nocimiento científico de la realidad miiseística-, para Ia inuscogialía, como verenios. el mtiseo eç 1111 objeto físico en e1 que aplica ciiantos principios y normativas sistematiza Ia museología median- te unas técnica5 cada vez inás especializadas en Ias diversas áreas en que interviene.

+ G.H. Riviert. tiiiliza el i6riiiiiio fraiicCs t?~rrsiínliséc. niiiiiscali-

zadan. (N. cicl A.)

El ioiiociiiiieriio ciciiiilico es aqiiel qiie coii- sigiie Ia coiiipreiisitiii objetiva raciciiiai cic i i i i

sector de Ia i-ealidatf. \; coiiio cada zona de Ia rea- lidad exige i i i i dcteriiliiiado 1. específico iiiodo d r c~iio~irii ieiiro, para cliie iiria disciplina piieda i r r coiisidcradd cieiiiilica debe coiitar con siilicieiite aii1oiioiiii~ /)ara Ia rlaboracicíii sisteriiática de esos priiicipios !' teoria de \.alar iiiii\~rrsales. Sii çarác- rer cieiitit'ico tio coiisistth taiito en Ia natciralcza clel ohjeio de esi~iifio i i i en Ia metodolo,' <lia erii- pleada considerados aisladanieiite, corno eii qiie Ia acleciiacicíii eiitre sii ohjrto y los inétodos dt' iiivestigaciciii consigati Iiacer avaiizar iiiediaiire el coiiociiiiiriito olijciivo ). coiiiprobablc csc .;ri- toi. de Ia realidad iiivestigada.

E i i esta coniprensicín de iin sector de Ia reali- clacl estriba Ia vocacicín y coiisisteiicia cieiitílica de iiiia disciplina, ciialquiera qiie sea si1 clasifica- cicíii (Iiiiiiiaiia y social, o natural y experirneii- tal! " I n iirilizaci6ii v consolidacióri de esa iiieto- dología adeciiada a sci objeto, y Ia provisi6n y acreceiitariiieiito tle Linas fuentes propias de in- vestipacióii y acriiacióii iaiito ol~jctiiales, como dociinieiiiales literarias. completaii sii carácrer científico.

La riiuseología cumple con éstos y otros re- quisitos que Ia acreditan como ciencia, a pesar de Ias dudas y controversias que plantea su cons- tante crecimiento y sus matizaciones interdisci- plinales. De heclio, puede comprobarse q u e Ias numerosas generaciones de museólogos y museó- grafos han conseguido en poco más d e u n siglo hacer avanzar de manera sorprendente no sólo Ia realidad viva de Ia institución en sí, sino también el conocimiento objetivo de Ia historia, estructura y organización, f~ i~ ic iones y perfeccionamieiito técnico v sociociiltiiral de1 niiiseo. Tanto e1 carii- po l i objeto de estiidio, como 10s o1,jetivos 11 m6- todos que Ia museología utiliza en si1 desarrollo investigador, Ia caracteriza11 como ciencia autó- norna, capaz de convertir mediante enfoques inu- seolí>gicolmuseográficos debidamente orienta- dos el objeto museístico en e1 niuseo real, el sustrato material museográfico en el fen6rnerio niuseol<ígico.

Page 18: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

Por coii.;iyuieiire. debeiiios sitiiar Ia iiiiiseolo- gía entre Ias cieiicias huiiiarias )I socialt.~, );a que se difereiicia por si1 área de conociiiiieiiro y ohje- t o de estiidio -Ia realidad patrinioriial ). ciiliiiral de1 n1i1,t.o- de Ia, deiioiiiinadas cieiicias espcri- iiientales (conio Ia Liiología o Ia física), cii!.a 6rc.;i y ol~jetos de coiiociiiiiento son los Iieclius iiatiira- Ies. Las cliidas qiir surgeri acerca de sii cviidiçión cieii~ifica, sobre iodo eiirre algiiiios especialistac,

-, d e rnliseos y ciertos tratadistas de Ia riiareria," constata11 eii todo caso coiicepcioiies ex~t.si\~aiiienre restriiigidas de ~~ciericia)~, iiiiiy cercanas a wces al erróneo coiicepto de ~~cieiicia exactalf. Pero tariibiéri inl'liiyt. ri1 esta apreciacidn Ia circiiristancia coiiiún a \larias ciciiçias rccieritçs, que tiari nacido o ciii- pezado a desarrollarse coirio disciplina irideperi- diente a partir de1 siglo x\,iii y aún hoy, r-iiás de ciii

siglo despiiés, sigueii consolidando y ensaiicliaiido si1 condicióii rig~irosamente científica.'"

Respc;tc> dc Ia in~iscografia, ia E I ~ - ; * . ' - - , ~ - ' ~ ~ l L L C L Y p ' L . L I ,

Ut1iversal [I~lstrada Elr ropeo Atnericat?a, ali rmaba textiialrriente eii su cdicicín d r 1923:

(Eiiiiioltigicaiiic~~i~'.- Dcl giiegu tri,>~r.widti. i~iiist.o, y :jrupl7eit1. describii-: caiálogo o de,cripcióri de urio o niás rn~iseos.~~

Es evidente que esta descripción etiinológica carece de1 rigor linguístico y conceptual inheren- te a Ias definiciones de1 ICOM. Pero es perfecta- mente válida a Ia hora de ilustrar de una forma más gráfica los rnatices diferenciales existentes en t re Ia rnuseología y Ia rnuseografía. Es decir, entre Ia ciencia de 10s museos y Ia técnica que ex- presa y aplica todos sus conocirnientos.

De Ia museografía, hasta Ia edición de 1970 no se ocupa de ella, el Dicionario de ia Real Acadenzia Esyatiola de ia Leng~la, dice: ~Es tudio de Ia cons- trucci<íii, organización. catalogación, instalación e liistoria de 10s museosn. Es decir, rnezcla en una sola definición funciones de Ia rnuseología y Ia museografía, pero de manera incompleta.

Ese niismo afio el ICOM define Ia rnuseogra- fía de1 niodo siguiente: aEs Ia técnica que expre- sa 10s conociniientos museológicos en el rnuseo. Trata especialinente sobre Ia arquitectura y orde-

iiariiiei~to de Ias instalacioiies científicas de Io< i i i~ i s eos~~ Una definicióri que venia precedida 1"" Ia disrincicíii que Georges Henri Rivière liabía Iircho en 1 9 5 8 entre Ia inuseología (<(es Ia cien- cia qiir tieiie por ohjcto estiiciiar Ias fiinciones y I'i t)rg~iiización de lus riiiiseos~~) 1. Ia iiiuseografía: 14 Es el corij~iiito de Ias iC.ciiiras relac-ioriadas coii Ia

- - iiiuseología)~ . ' En 198 1 riiatizaria el concepto a tirniando qiie Ia niiiseografia es ( t ~ i i i cori~iintu de t6cnicas ): de prácticas, aplicadas al r n ~ i s e o j ~ . ~ ~

Es decir, Ia museografía trata diversos aspec- ios. desde e1 planteaniiento arqciirectónico de 10s edificios a los aspectos adiiiinistrati\:os. pasaiido por Ia iiistalacióri cliinática ). eléctrica, de Ias colec- ciones. Las actividades propias de Ia riiuseografía soii de carácter evidenteiiierite técnico, afectando de iiiodo fundamental al continente de los niuseos; y al çoiiteiiido desde el punto de vista niás lire- raliiiente físico y material.

Ine:litables tanto I-. contraposici6ri rni.irenlo- gía/rniiseografía, como Ia deliniitación de Ias fun- ciones que competeti a una ciencia y a Ia disciplina (técnica) que aplica sus postulados y directrices, Ios tratadistas 11 estudiosos nos proporcionan, cada vez coii mayor claridad, suficientes elementos de definición y especificación. Muchas veces, arn- pliando aquellas que e1 ICOM ha emitido con Ia autoridad que le corresponde. Porque, desde Ia afinidad etimológica a Ia analógica identificación de1 objeto y objetivos, museología y museografía adquieren a veces fuera de rigor Ia utilización si- nónirna, por ello mismo se hace más necesaria Ia deliniitación de sus coincidencias, diferencias y analogías. Incluida Ia definición etimológica.

Existe Ia diferenciación real. La museografía se mueve en el plano de lo práctico y concreto de 10s hechos; Ia niuseoloçía, como ciencia teórica, nor- mativa y planificadora, en el de1 análisis de 10s fe- nómenos museísticos, que conviene tener pre- sente para evitar irnprecisiones y equívocos. Es lo que evitan Ias buenas descripciones y definiciones al calificar a Ia museografía como:

Ia teoria y práctica de Ia coiistrucción de los rniiseos, iiicliiyerido tos aspectos arquitectónicos, de circula- ción y Ias iristalaciones técnicas. Pero todo ello, más

Page 19: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

10s piuhlciii~.; de ;itlcliiisizi<~rie~i. riit;iodos de prrseri- iacidri. aliiiaceiianiirrito d e rzseri-as. riiedidas de se- g~iridad !; de ~onsc.rvacióii, resiauraciGii ). acii\;ida- Jrs ciilt~iralt*.; i)ro\.cc.radas tlzxlt. los iii~isços. roiisiiiiiye Liiia i i ~ i ç \ . ~ ili\cipliiia i1155 ,iiiililia qiic rrcihr el i i on i -

brs de riii~~iologia."'

Ciiaiido \e cori5idera e1 origen liistórico de Ia iiiuseografía dc Ia niiiseolo~ía aparece11 rnás i i i -

triiicadas Ias relaciorier de ariibas en si1 géiiesis inicial Y esto porque, aurique Ia actividad museo- Iógico/museográfica de retrotraerse a los rerno- tos principici4 de los niuseos, Ia dilereiiciacióri pro- piai i iente dicha coriiieii7a de lieclio con el desarrollo de1 museo nioderno. el decirrionóiiico AI deshacerse los aiitigiios coleccionisriios aristo- cráticos eii favor de unos niuseos de carácter so- cial, la consecuencia más inrnediata file el acre- cen ta rn ie i i to d e estas inst i t i ic iones y Ia rnultiplicacií>ii de los problemas técnicos -alina- cenamiento, conservacióii, i i i>~dla~ihn . cxhibi ción, circulación de los visitantes, iluminación de Ias salas, ventilacióii. seguridad .- que de ellos devienen Así nació, por iiece\idad, Ia rnciseogra- fía, que terriiiiió ampliándose y reafirrnándose eii Ia ciencia de Ia museología. De ahí, su intensa y complementaria hermandad

Con independencia de quienes piensan, como hemos indicado, que el término museología es de adopción anglosajona (museology), y que vino a sustituir a Ia antigua y neickeliana museografía, 10 cierto es que ambos vocablos expresan etimológica, técnica y funcionalmente conceptos diferencia- bles y complementarios.

En concreto, Adalgisa Lugli se refiere a Ia mu- seología y a la museografía, entre otras, con estas palabras: ccLa afirmación de1 término museología se apoya en una general renovacióii de Ia probleriiá- tica en torno al rnuseo. Por primera vez en Ia Iiis- toria de esta institución, a partir de Ia inmediata postguerra se crea un organismo internacional, e1 ICOM (International Council of Museums), afilia- da a Ia UNESCO, que inicia en 1948 sus trabajos de coordinación entre 10s museos de todo el mundo Es en este contexto en el que se afirma ante todo el término museology, de adopción anglosajona, que

viene a sustituir gradiialmente aiinqiie se iiiari tengan cc)iifucioiies. a Ia antigua museografia ( J

La museología 5e apoya en Ia Iiistoria de Ia colec «Gn, y así se ha afimiado en niuclias partes y de mo- dos muy dixenos pero siemprc coii uria cohereri IP deterniiiiacii,ii el conociniierito es coiidicioii inciispen~able para cada pro),ecto EI conocimieri to es Ia clave de Ia tiitela

La niuseografía coiiiu sisteriia de indicacioriç~ de funciorianiiento coiiio aiiálisis de sttiiaciones prácticas y propuesta de soliiciones es a su vez eniineiite v asépiicariiente t6ciiica ( ) Una dis- ciplina cogrioscitiva por rnaiitriierse estrictariien- te ligada a Ia niii\eologia coiiio uiia cara de Ia rniç iiia r-iiedalla N o se da Ia una siri Ia otrab,

En algunos casos, debido $obre todo a Ia con- cepción de Ia niuseografía como teoría y práctica de Ia coiistruccióri de riiiiseo5, incluyendo eri ella tanto 10s aspectos arqiiitectóriicos como los rela- tivos a I;ic difererites instalacioiies técnicas, se ha conformado especialinente en Italia iina acepción de1 término miiwografía identificado con Ia res- tauraci6ii de nionurnentos, conio lo deniuestraii tanto el enfoqiie de escuela\ especializadas conio Ia aparición de publicaciones que vinculan estre- chamente estos dos conceptos 6 1

Finalmente, en el contexto de 10s nuevos mu- seólogos, la (cmuseología es una ciencia que tie- ne por objeto el estudio de1 papel de1 museo en los fenómenos de fabricación de u n patrimonio )), como la define Marc M a ~ r e . ~ ~ Y afiade. «Es una definición basada sobre una perspectiva teórica colocando el acento sobre e1 rol de1 museo como expresión e instrumento d e un proceso d e iden- tificación Existen evidentemente otras formas de definir Ia museología, pero no es objetivo mío dis- ciitirlas La idea principal a retener es que Ia r n i i -

seología es lina ciericia social)) 6 3

Una ciencia social y d e acción, cuyo método más eficaz para sus fines se concreta e n Ia expo- sición. que es a Ia postre e1 método museográfi- co por excelencia para Ia puesta e n escena de 10s objetos, y para Ia difusión, comunicación y diá- logo con Ia comunidad. Una ciencia, la niieva museología, que se nos presenta como iin fenó-

Page 20: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

nieno I i i s t t i r i co e x i s t e n t e o b j e t i ~ . a r n e n t e ): c o n i o el d i á l o ~ o t . n t r e s u j e t o s ): sri c ic te r i ia al)it.rttr e i i i -

u n s i s t e r i i a d e \ . ~ l o r e s ; i i n a cieiicia p u r a y a p l i c a - t e r a c i i v o Ia consagran con el p e r f i l i r i a s idtiiieo d a . cor1 d i f e r e n t e s for r i ias de p r á c t i c a s , en Ias q u e d e n i r o d e u n iiiievo p a r a d i g r i i a de a c c i c i n y d e -

e1 t r a t a i n i e i i t o y 10s conteriidos pluridiscii~lina- i i i o c r a c i a s o c i « c i i l t i i r a l p a r a el n i u s e o d e n i i r s t r o

les , así como Ia coiicit.riciacii,ri dt. Ia c o m ~ i r i i d a d . i i e r i i l io .

I Fuc cdiiada lior 1itit)en. Leilirig 1. Brc>- lau. en 1727. iori itii ioial de 464 págs.

2 LUGLI. A-. .~ l i i~ ,~~l tyr i i . Alil'in. E~i i io rialc Jaca Book S.p.A.. 1992. ~ r i g s . I'L2 1 .

3 A l ~ i ~ ~ i o s aiitiircs coii\illcraii qiiC c1 aiitigiio r6riiiiiili ~trus~~~~~r; iplr i . i lia \ido

niii\eologia. d e adopcicíri anglosajo- na (nruseol-~?.). Pcro. tle iodo5 rito-

dos. ia rcalidad es qiic el ~igiiificado etiriroli,gico y dc coiiiciiid<i de cada

rios ). difereiici~hles 4 La ordriiacicín cla\iSicacióri de Ias

C O I L C C I U I I ~ ~ i ~ i \ ~ o iaiirbieri (111 rcprc- senrarite deiiacatlo cii cl iiùriiral~~ia sueco Carlos de Liiirico ( 1707- 1778) Clasificó todas Ias esl~ecie, vegetale, introdiijo ia iiornericlatiira binaria y adelantó Ia clasificaci(ín d e Ias plan- tas basadas cri el parentesco natural Son clásicas sus publicaciones sobre los ires reinos de Ia naiuraleza Sysiema Nafurar ( 1735) y Ia lista de Ias espeaes d e plantas conocidas e n Specres Plan- tarum ( 1753). Uii aspecto éste d e Ia clasificación de Ias colecciones qiie re- sulta imprescindible para Ia pubiica- aón d e catálogos. Peter WOODHEAD y Geoffrey STANSFIELD citaii e n su obra Keyguidc to Informarrnn Sourccs in Museum Strrdir.c (Lnnclres y Nite\,a York. Mansell, 1989, págs. 5-6) los madrugadores caiálogoc ~fitseutri Wor- mianuin (Worm. 1655). catálogo d e Ia colección de1 físico danés Olaf Worrn ( 1588- 1654). iin surtido d e especí- nienes d e historia riat~iral y arqueo- logía prehistórica: Museuni Tradescnn- fiarrurn (Trade5cant. 1656). una lista d e los contenidos de Ia fairiosa colec-

reiiiiido~ por Tradcxcarii 1iaJrr c liijo, cu~iicr rcsiiliado J e sits c\tciisos ira bajos \ que Ilcgtr J ser cl niiilco dcl Ashniolean Alii~ciiiii (1c Oklord. \ f i t -

\ C . L ~ I ~ I P c ~ r ~ t i r t r t ~ r r t i i i I'cii\ ~r 1695- 1703). caialogo iiz Ia c~~lccciciii Jcl L><) ráiiico Jaiiie\ Pciiser (c 1665-17 15)

5 BAZIN. G Lz r~.rnps '10 nrri>~.cs. Lie- jdlBriiscias. Etliiioiis Drsoer I967 Vl.r\i<;ii V i l ecliafi0l Fl ~ir'l?l\Jc> c?,. /i'\ mustar>c. Bar~rl<iiia Daiiii~iri pag L67

6 La Coriferriicia dchario c! icriia Ar thlrCtlur<' YI urnt'wci~~cnrrnr dt.3 17ru\zt's Lf'L~rr Lox \oliiiiieiics I~ieroii ptibli cadoc cor1 cl iíiiil~i ~ ~ l i < \ ~ , ~ ~ ~ r ~ i ~ l r i t Ar chrftl~f~tre er amt-nri~~cmenr dt.c tr7u,e~s d l i t r Corifcrciicr Iiiieriiniioiial de \ Musec\ I i ~ c i i i ~ i i Iiiteriiaiional dc C o - operaiioii Iiitelecruelle Societe cfes Natrons, Madrid, 1934 (París. 1935)

7 La personalidad. los rtabajos, Ias pu- blicaciones y la influencia determi- nante de G H Rivière no sólo eii el tema de1 ecomuseo, sino rainbién e n otros muchos canipos d e Ia teoría y Ia práctica museológicolmuseográ fica, han sido estudiados. recogidos y pon- derados por 32 especialistas. e n niii- chos sentidos discípulos y herederos d e su obra, eii e1 espléndido volu- meti ya citado d e 402 págs y iiiime- rosas il , La Muséologre selon Georges Henrr R~i.rèrc Cciin dc ,Ilucr,~!~~i~: Ta- res c1 Iémn~qnages, Paris. Dunod. Bor- das, 1989 Versióii en espano1 La Afu- seología Curso de muswlugi~i/Te~rtos y resrrmonros, Madrid, Akal. 1993

8 La expansibn e iiiiensificación de los estudios d e Ia niiiseología funda- mentalmente iiniversiiari«s han ad- quirido en los 35 o 40 últiinos anos niveles y calidades sorprendentes Sii

plo. en piiLilicacioiie\ coiiio i\lirwiori Srudics Ir~f~~rtf~iri,~n,il, qiit. \.icilr apa- recieiido ~~eri t idicamrrirc hajo Ia rú- brica de Ia Sniiili\i>niari In\iirtiiioii d e Wa.;liiiigioit. La cdir-i(iii (lc I'>SS I < ~ u c tia sido r e a l i r ~ t l ~ bajo Ia rr~~roiisal i i - lidad J e Jaiic R. GL.ASER. Dirccior. Office of Alusciiiii Prograiiis. hlòrcia AI. ANDERSEN. Edi ior . !. Hotrin FOGG, Rccoliilador. y ~~ubl icada 11ur Office of Musctiiii Prograiiis. Siiiiili- suiiiari Iiisritiiiioii, Washiiigroii. D.C.1 Inieriialiorial Couricil 01 Miisriiiiis. Coiiiriiriicc Sor ilie Trairiiiiç of Pcr- \oniiel, Leicc\rer Ençland). iiiSorriia coii detrriiiiiieiito >obre 460 ceriiros que iinl)arrcri curso, dc iiiuscolugia en diversas i i i i i~er~ idadcs ) iiiu\eos d e 10s E E UU y d e unos 40 p i s e s de todos 10s continentes En otro senti- do, Ia irnponancia creciente d e Ia mu- seología se evidencia e n e1 repertorio ofrecido por Ia obra ya citada de Pe- ter WOODHEAD y Geoffrey STANS- FIELD, Keyyurde ro Infornlufron rn Mu- seum Srudres ( 1989. 2" e d . 1994). una giiía muy completa

9 HUBERT, F., «Histonque des écoiiiii- sées*). La Muséologre selon Georges Henrt Rtvièrc, op cri ( 1989). págs 146- 154

10 Es necesario destacar a1 respecto e n Francia Ia Assonarron Mrrséoloyie Norr- ccik dr E A ~ I : ~ rnrenrririon Sccmle. IMNES). c ~ i y o s trabajos. cursos formativos y publicaciones vienen aparec iendo desde Ia década d e los 8 0 Un con- jun to d e textos Iiie retinido hajci el tí;iilo Nouvelles mrtséoloyres y Ia direc- ción de A. MCOLAS, Marsella. Muséo- logre nuurelle ei expérrrnoirniion sonnle, 1956. de 190 págs La pi~blicación de Ias acias dc Ios cursos cobre ternas es-

Page 21: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

pvcializadcii, coii\iiiii\~c \ieiiipre iiia- teria atraciiva Por cjein1>11~ rrlcri CIO\ a1 arie ioriteriil~orarieo. \on ~ i i i i ~

ir11 cre\aiiicS% L ~rrr , t3rlit-trrFt1r~riti L)!/ fil>t,~tl ~ltiltI1,lrt~~rI /,v ~l l . l i l ,~ l r #\lu\t~e de Saiiii Etik,iiiie hISt5 IQlS6 91 pap>

T ~ c ~ ~ ~ , y r . ~ ~ / ~ ~ ~ ~ r ! .ir! ,.vir'.trrp,r~rttr 5.3

\ isri) -lc. Tciriple XlSES IVS8 I I LEROU\-UHiS 1.k ~S131c \ ( i r iliici

qiics iiiiicee~ d alirr\ IWO-. eri L.1

, ~ J ~ t s ~ ~ o l ~ ~ q ~ ~ ~ ~ ~ ~ l , ~ t ~ ,y L I [ 1 1 ~ 1 p 66 6 - 12 Veanse espçcialniçritc loi, arriciilo~

t' Les eci>iiiii\éc\.. c-ri I i r r r i ,~rc.rlr,r Sll I)agi, 42 1-12? r . \ rriic\ I)rciiiirre\ ilc i i i i i~ i i~g ra~ i l~ i c et .ilc i i i i i \ c~ i I~ C,IC-. S , c ~ n o g r ~ ~ ~ ~ / i ~ c ~ ~ I II I I ~ ~ ~ r ~ i t . r r i i ~ ~ ~ t ~ r t ~ i

Sa \ igii) -Iç-Teiiil>lc hlNtS I VSS

págs 25-10 '< N~riivelle iiiii\eologic *O,

cri Etrrr~ilopordrri iInrio,.ilr~. pari^.

biip dç 1989. pag\ 92 I '924. ) 1''r 'JLl<.\ U t l t 'ltrr<ll,?~yi< ,!c. /LI t l2tll <-!/c- t t lL1\Ci1~

logre. Iclácon. Éd W. MNES. vol I . lc>L?2, ; ,.c:! 2 1')')s c oa>rtIiiiada por A Dc\\alllc\

13 Veace ~~Prii ici l ic~ c\tliCiicliic\ ei [ire- paraticin dcs t*xl>cisitioii\ <Iida~tiqiic\l Arstetic ~iriricil>les aiid $crirr,il ~ ~ l d i i -

riing o f educational c~liibirtoiis-. cn Musertm. núin. 18 ( 1 ). 1965. págc 2- 59, ii IMuserrm 18 ( 1 ). 1965. págs 65-97.

14 Entre sus numerosos artículos, de- bemos recordar ~Problrrns in the lan- guage of rnuseuiii interpretarionn, e n Le musée au sewice des hommes d'au- jnurd'hur er dematn, Aclar de Ia 9'. Conferencia de1 ICOM. Paríc. ICOM. 1972, págs 89-90; ul'organisation et I'admin~stration des inuséesn. en Colloqrre sur les musie.~ dan Ir monde d'aujourdlitr, París. UNESCO. 1969. publicado en Nouvellec de I'ICOM (2). 1970. págc 2-6. v ~ T h c 'langiiage' of miiseiim iriterpreiatioii~~. cn Chiers d'hrstotre mondinle, t~Mucées. cocieié, connaisarices I Museunis. society, knowiedge*~. 14 (1). 1972. págs 48-57.

I5 Art cir ~Noiivelle iiiiisi.oiogie~*, cn Ens>clopacdia Uttrirrsalic. Paríc, sup d e 1989, pág 922

I6 Ibícietn 17 Su pciisarnieriio piicdc apreaarse eii

artíciilos corno "Le Creusol-Mont-

ceaii-les hlines: Ia \.ie d'uii ccciiiiii\cc.

<c qtie ~'esi'v,. I( OFO.\l ~ ~ t t t ~ ~ ~ ~ r t ~ r t r

. \l!i\,,uti~ ~ i t 1 ~ 1 L ~ V I I I I ~ ~ I I ~ I ! \ li Stat JII.

ger Nort\,av. JiiIt 1995. ISS L5 ICO FOhl StucI\ S~!~IL,\. t.dit.ido por h1.ir tin R Scliarer .4liriieiitariiini Focid hliiseiini. VevevlSiiiza. 1996 pay\ 127-132

5c1lo lo\ grupo\ ciiados Eiiire lu\ hri- tániros. ~ d r n i á r de1 iiiirlco de Lci- cr\ter. ec iieceiario dc.çiacar ciitrc otros, a 105 aiirore\ Jt. Tht. Nni r\l~t. seology. Londres. editado por Prrer Veryo. Reaktion Book,. 1989

21 E S T K A R ~ N . C;royriifin, Ittir<i \ \ I , 1 5

y si,. Londres. Loeh Clascical Library, lirirv~rd Uiiiversit) Prew ) Williani Ilciiiciiiaiin Lcit . 1932 c<lrcicíri a t a r -

go de H J Jories 22 HESÍODO, Obrusy Fragmetlros .Te+

yoníao, Madrtd, ed Credo?. S A . 1978, págs. 63 y sigs

2 5 Ibídem. 24 ar. por BURCAW, G E., en Introduc-

tion ro Museum M8ork, Nashville, The American Association for State and Local History. 1975 (2'. ed 1984). pág 9. (En el cap. Museum defiiied (págs. I - 13) ofrece numerosas definiciones de rnuseo y otras: objeto. objeto de museo, espécirnen, artefacto, objeto artístico. obra de arte. colecciones. co- leccián, acrecentaniietito. registro. ca- talogación. clasificacióri de las colec- ciones, exhibición, ri>rulo. exposici0ri. rnuestra artkiica, galeria de arte. mu- seo de arte. muieo geiieral. rnuseo enciclopédico. edifiao o lugar hisió- nco. proyecto de presen*acióti. jardín botánico, arbolario. herbolario, jar- dín zoológico. acuario. museo de ni - tios. planetario, centro de Ia natura- leza, centro de visitantes. centro de ciencia. centro de anc: I 2 puntos so-

ioic IA \IL- .. i i i u 5 ~ . i : ::?:!\r~*!<y(.? . .- \ . <+ iiiiiceoyralia - 5 i

2 5 ll~i.i<,ttl. ?h FOILES. ,\I.. cii T/1<. :il;i,<.rr?t! .\'<.i?,.

\ \ * ~ \ I I I ~ I ~ I ~ 111. I')?') 2 : CREP, i',. cri s . l . ' , i r<li i[~~~~ti~rc de\ 3111-

sCv; coiiiiiic plairiqiie-. .if.~irj,~rsrr. Pa- ris. 1934. pág5. 7- I7

2s \'eaiicc r\~>eci~liiiciirr Ia\- lMyiia\ SI

nu 2') RIVIÈR E. G.H . cri .Sz~trtri;rri,~ Rírrt.,riLr/

,i< Li (!i\'ESCO s,?l?ri io fii~icr,;n c.'i!rL,tii- in de 10s nrusz~s (dcl 7 a1 30 de sep- tieriihre J c 19581. Estiidii~i, !. t lo~i i - iriciitos dc. Ediii~i.iciii. iiiirii. )S. P,iri>. UNESCO. I96 1 I x* Ucliiii<i<~iic~ Iiiii. daiiirriralrs~~. pág. 15)

3 0 VCa>c NEUSTUPNY. .I. . hlirs~'iott ,itr,i Resc2urí/r. Praga, Tlic Oflicc of Regioiial arid Museuin Work of tlie Natioiial h~tiiseuin i r i Pragiit.. 1968. q~iicii cita esta defiiiiciiiii dç Ia criziçlo~>edia so- viética cri las l>$$~. 1 5 3 - 1 54.

1 I Asi aparece cii A,f~rsirtm nt.rc.d~rririori prLiJ'eifi.ssi~~tiol sriiridilrds. Washirigtoii, Thç Airicricaii Assl~ciatioii of hlii- sriiiric. ~ 0 1 . V1I. 1973. ~ á g . 8

32 Adeiiiás de cii sii lihro citado I.zrinirs des musizs ( 1967).

33 Torno 15, págs 914-917 de Ia edi- ción de 1989 (Publicada por Ericy- clopaedia Universalis Fraiice, S.A., París).

34 Págs. 447-450 de Ia edición de 1968. Y págs. 919-92 1, t. 15. de Ia publicada en 1989.

35 Tomo 15, págs. 921-924, 1989. 36. Edición de 1974, pág. 649 (todo el art. pp. 649-662).

36 En The New Enryclopedia Britanttica, 15' edición. 1988, el artículo Mu- seurnsB1 fue redactado (págs. 478- 490) por Geodffrey D. Lcwis.

37 ~Ct'liat is a inuscuiii?~~. C~lratcr 4 (2). Nueva Y»rk, 1961, págs. 138-146.

38 En ~Miisées et ordiriateurs~~. eii Mu- seum, vol. XXIII. riúni. I . 1970- 1971. págs. 2-3.

39 CRISPOLTI. S.. *Conservazi«ne. in- formazione. arte e potere ntllla ga- Ileria pubhlican. L'~tomo e I'nrre, Mi- Ián. núrn. 405. agosto-septienibre 1971. pág. 16.

Page 22: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

40 P~ihlicados eri Espana piir Ia Dircc- citiii General de Bellac Artrs. 1115-

peccion de iziiiseos. hladrid 1969 4 1 Tradiicción al espariol (Ic lonsiiclo

SXNZ PASTOR en i\lrc>t,t, i c~~l2riic~ nis dz Exparia. hladrid. hliiiisierio~dc Culiiira. 1980. rrediciiin rcvisada i. ariipliada. p+s. 6-7 INiicva rdiciiiri, 19901.

42 POLI. F.. Pr,-driiri,~ri urr~sri;.i J. rrr,.r-;,i. tíd. Barcelona. G. GiIi. 1976 ( 1975 I, [)dg 40.

43 idrm. riota 10 de1 capitulo .eII. MLI- seos. salas de exposicioiie,, acade- niias-. páp. 1 3 1

44 HOLZ. H.H.. De lu ohrii tlcn ~rrrc ,i /ir

nwr;n~ic.in. Barceloiia. G . Gili, 1979 ( 1972 I. pág. 90.

45 Especialnierite en su obra Le music. l'onqini. de l.esrheiiqi(z. Paris. L' Hamiat - tari, 1993 Y anteriorinente eii BAKY, M O de - WASS WEMAN. liiqr~zs llnr. o n r h i ~ l n ! ~ ~ ~ i l ~ In nnil~rllr. niur~nln~ie Mã~oi i . 1992. Édiiioiis W M N E S (~~Preseritation*~, págs 15-391

46 Enrre los defensorec resrrlia ohlrgatlo recordar a Goethe y a ianios pensa- dores ). escritores que. basáiidose eii Leibiiiz. Kaiii, o los roniánricoc ale- rnanes Schlegel, Hegel y Navalois, etc.. encuentran en el niuseo el asan- tuariou ideal para el arte. Marcel PROUST [En busca de1 tiempo perdido] o André MALRAUX [Le museé ima- ginaire (1947). traducido en espafiol por Las voces de1 srlencio (Buenos Ai- res, 1956). y en inglés Museum without Walls The Voices of Stlence], pueden considerarse seguidores. Entre 10s detractores, se tiene por pionero a QUATREMÈRE DE QUINCY [Consi- dérai~ons morales sur Ia desiirzatron des ouvra.qes de lárt (1 8 15). reeditado, Pa- rís, Éd. Fayard, 19891. pudiendo in- cluir en Ia nórnina a personalidades tan representativas como Burke. Nietzsche, Paul VALÉRY ['(Piéces sur I'art problemes des muséesw, Oeu- wes coniplètes I. págs 1290- 1294. Pa- rís. Pléiade. 19601, E. Junger. Mer- leau-Ponty . C. Duthui t . o Th. ADORNO [Pnsmas, Barcelona. 19621. etc

47 tntrc 10s autores espariole, tlehenio, citar por ejeinplo a Coiisiiclo SANZ PASlOR que ianio cri Ia\ siicrsivas cdicioiies de1 Iibro ciiadci \Ii~\~.ss i <,I-

l t L c i L ~ ~ ~ ~ ~ <ir. E>jiCiti~i (c11 Ia ree~11~1<11i C I

rada de 1980 pagc 6 7 \ cri Ia [ir- ncilrima apareada. hladntl hliiii~reno de Cultura 1986. pagr 7 10 [><ir ejcrnplv), conio en cl articcilo ~ h l t i \ to \ iiiu\eologia~~ de Ia Grriri Fri,i r1olvdi.r Rinlp [GERI rdicion de 1984 i'ags 490-492 continua siendo fiel a Ias deíiniciones de1 ICOM Oiros corno Fernaiido Salas Lopez. al act.1)- iar reproducir esta defiiiicion cri siis puhlicaciories rec<1iioceii incluso que (cri aciunl ronceprd de tnr(sco i i r i i

\,ersalineiite acepiado es el definido eii los Estatutos de1 ICObl eri 19743, [SALAS LOPEZ. F de E1 museo [ul- iirrn para rodo, Madrid Miiiistrrio de Ciilt~ira. col Cultura ) Comunica- cioii 13 1980 pars 34 3 5 ) Aurora Leori eri canibio. conociendo Ia acti v i d ~ d de Ia UNESCO eii e\ie ccniido, prefiere d e t e n e ~ e con ocna anipliiiici eri Ia eteoría de1 niuseov desde va- nados puriios de vista, ) aiializar jiin- to a definiciones diversas de (Crnu- seou 10s aspectos mas preocupantes de Ia museología, Ia niuseografía y Ia propia institución en sí desde Ia pers- pectiva de Ia década de 10s setenta [ L E ~ N , A . E1 museo Teoria, praxrs y utopia, Madrid. Cuadernos de Arte Cátedra, 1978 Ver especialmente al respecto «La teoría de1 inuseol*, en el cap 11, págs 67-9 1 3 Existen definiciones restrictivas y hasta sorprendentes, como Ias que nos propone José FERNÁNDEZ ARE- NAS [lntroducción a ia conservacion de1 patrimonro técnicas artrsficas. Barce- lona. Ariel. 1996) ~~mrdseo lugar pú- blico donde se guardan y niuestran obras d e arte. museografín ciencia práctica de conservación de1 patri- monio que consiste en ordenar el arte dentro de1 rnuseo, museología ciencia general de 10s rnuseos y de1 patrirnonio anístico, t~zuseólogo rnu- seógrafo o persona dedicada a 10s rnuseosbl (Págs 190- 191 )

Por o i ra par te . e1 Keal Uecreto 6201 1987. de 10 de abril. por el qiie se apriieba el Reglanienro de hlu- seos de Titularidad Esiaral y de1 Sis- irnia Espano1 de M~iceos. r n s ~ i ar- iiciil<i I " delirie asi los riiiiseos <'De acuerdo con 10 dispuesto en cl arti- culo 59.3. de Ia Ley 16/I985. de 25 de juiiio. de1 Patriinonio Histórico Espanol. son Museos Ias In~tiri tn~~ries de. carácter permanente que adquie- reli. coriser\,ari, investigan. cornuni- can y exhiben. para fines de estudio, educación conteniplacióri. con- jiiiitoc y colecciones de valor tiisró- rico. ~nísrico. cieniilico y tkciiico o de cualqiiier urra riaruraleza culruraltt. Uria definicibn roialnrente fiel a Ia de1 ICOM.

48 Así. auiique el Diccionario de Ia Real Acadeinia Espariola de Ia Leiigiia rio Ia incluye eri sus ediciones de 1956

1970 -si figiira en Ia de esre ultimo ano una defiiiición de riliiseografia, r n 1957 el Dicrionario Espasa descri- he Ia inuscologia conio .especiali- dad que trata d e Ia organización y reginieii de los rnuseos. Se dice par- ticularmente de los que giiardan an- tiguedades arqueológico-artísticas,). Enciclopedias como Ia Universalis ya citada o Ia Gran Enciclopedia Larousse (publicada e n espano1 por Editorial Planeta, Barcelona) le dedican, e n cambio. un amplio tratamiento des- de 1968, denominando ciencia a Ia rnuseología: La Nueva Enciclopedia Larousse (Li- brairie Larousse, París, edición espa- fiola de Plaza & Janés, Barcelona, 1981, pág. 6821) define Ia mwseolo- gía como Ia t<ciencia que trata de Ia organización e instalación de 10s rnu- seos. (Sin. rnuseografía)~. Lo que no contribuye a u n esclarecirniento ri- guroso. al identificar ia rnuseología con Ia rnuseografía. En parte lo co- rrige al ampliar a continuación: ((La rnuseología se ocupa de 10s proble- mas referentes a Ia conservación y presentación de 10s fondos rnuseísti- COSI#. En cualquier caso, puede crear lina àena confusión al n o diferenciar

Page 23: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

hieii Ias qiie son I~iiiciiiiie> prupias de Ia niiiseologia de lu qiir r5 Ia apli- cacitiii J e Ia> iécnica\ iiiii>cti~r3fieas. Desilc Ias ~ ) á ~ i i i a \ tic Ia I ~ r , ~ i I ~ ~ ~ ; r ~ ~ . l I ~ i L ~ I I ~ I ~ ~ ~ I ~ ~ I ~ I J , Lerrii'iiii Baziri iii~iirie- rie iiariro eri Ia ediciciii de 1968. 11ag. 447. coiiio en Ia de 1989. pás. 9 181 qur +*Ia riiiiseciliipia ciciicia qiic \ r aplic-a a todci 10 qiie coiicicrric a 10s iiiiiwvs. a si1 hisioria \ J sii orparii- zacióii. nació en el siglo u\.iii~~.

49 /COA1 Afrivs, Paris. r.01. 2 3 . iitini. I. 1970. liás. 28.

50 SALERNO. L. y oiriis. -Aliisri e co- Ilezioiii~. e11 b'~r~.~~-i~~~i~, ' i i lr L~I~II. , ,~.~LI/~, dell'nrrr. vol. IX. Floreiicia. Sarisoni. 1963

5 1 Ln Afusiologii. sclnn. . qr c".. pág. 84. 52 Karl R. POPPER drfieride a este res-

pectu que rodas Ias cieticias "pracri- cari el iiiétodo de resolver lirohlc- mas, el riieiodo d e conjeiiiras y rel~iracioiies. qiic es ri iiiiiitaJu i d i i -

io para recunstriiir ii!i iesro deterio- rado cuiiio para c<~iisiiitir iiiia reo- ria acerca d e Ia radioact iv idat l~~ (Conocirnierrio ol>jrriv~', hladrid. Tec- nos, 1982 119721. pág. 175). La inuseología. cuiiiple también, en este sentido, con Ia práctica de nié- todos para resolver problemas de ca- rácter conceptual, procedimental y técnico, tanto desde iin plantea- miento de conjeturas (alternativas y postbilidades) como desde el punto de vista de refutaciones (rentabili- dad y proyeccidn sociocultural. .),

además de Ia objetiva realización mu- seográfica.

53 Debates en torno a este tema se pro- ducen habitualniente en Ias reunio- ries aiiuales de1 Comité para Ia Mu- seología (ICOI-OhI). como qiieda indicado. La década pasada de los 80 ha enriquecido docunieiitalmente -no só10 por medio de 10s MuWoP ci- tados, o con Ias actas de1 MINOM de Ia anueva museo1ogía~~- Ia situación real de esta cienoa. Niimerosos ex- pertos participaqtes en estas reunio- nes (véase e1 arr. de T. Sola, rir. en Ia nota 18). aun discrepando no pueden iiegar 10s avances reales de iiiia cien-

cia y de sii téciiica cri cciriciariic cre- ciiiiienio: o Ia exparisiiiii cada vr7 mayor de i i t citijero lirol>iti. e1 i i i i i -

ceo. Tanipnco. Ia calidati cieiirilica de los cciiiieiiidos !- Ia iiieri~tiulogia eiii- plcada eii el esiiidici e iii~~e.;tipaci<)ii de 10s Jifereiite\ ciir\ci\. dil~loiiiarura\ ! dei1162 titiilaciniier i i i i i \ cr.;iraria\ t.11

esta iiiaieria. inipariidi~c Iicir cciirrtix de garaiitia interiiacioiial. qiic '>\.a- lan iiiás si cabe ios t~bjclivos cciiise- giiidos por ese avance (iç6rico !- pric-- ticol de Ia niiisecilogia.

54 SEI carácter raii rccieiiie ~ o i i qtiv irriiii~pc lLi ci~~iici ,~ ~ i ~ i i ~ ~ ~ ~ l ~ ~ ~ ~ i c ~ i e11 Ia acriialidad -rscribia Aui-ora Leiiii cii 1978- iiiotiva Ia aclaiacitiii de cicrro\ rrrores conceptiiales \, Ia rircesiitad de elaborar i i i i ccidigo içriiiiiioldgico qiie clarifiqiir el briiritlo de esta i i i -

cipienir discipliiia. Discipliiia que hasta Iiace pocos aiiw se ha iiiovido (i: iii:; pric:c2 2::5!y!??jr!r3 nrl? ofrr. cia t i r i cúiiiiilo de datos y hrchos i i i i ~ -

seográficos ciii iiiia cirria ordeiiaciiiii coherenre, sin directricci valorarivai y siri i i i i iiiéiodo de aiialitis cliic 1'1-

nalizara los post~ilados iiiiiseológi- cos. >)Lu museográfico y lo iniiseológico, 10s primeros términos causantes de 10s primeros planteamienros erró- neos de Ia ciencia de1 museo, aiin formando pane de un eje coinúti Iiis- rcírico-artístico. comportar1 en siis respectivas raíces etimológicas sigrii- ficados y funciones diferentes. Nu obstante, Ias similitudes y diferen- cias que en SLI campo de acción Ias hacen converger y diverger al tiein- po. representan uii exponente váli- do para Ia deliniitacióii de siis fuii- cinrieq y para Ia asipiiación de siis inétodos operativos. oCiertameiite, Ias afiiiidades etitre Ia labor museológica y niiiseográfica se concentran en que Ia meta fiiiida- mental de ainbas radica en actliar sobre e1 museo a todos los riiveles. - ( L E ~ N , Aurora. op. cir.. pág. 9 1 ). wLa Museología -insisre en otro as- pecto Aurora León- es cie~liios<lcjfl/ ilo sólo porque e1 niismo conteriido de1

inuseci -e1 ohjeio- rs i i i i elciiicrii~i esericialiiienie soc-ializado. Es iircir. que e1 riiarerial básico de aiiálisiç pro- cede de Ia realidad Iiisi0ricc1-social. lo ilur siilxindria i i i i dçiciiido r\ t i i~iio de Ia \ciciedad aniial qiit.. ~ io r Ia i < b i i i -

plejidad de feiidniriios qiie prezcii. Ia. dr.;lv>rdaria 10s liiiiiir\ de1 rcriia 1 . I TambiGn ecii~ici ~ I C ~ I ~ C I ~ Z I~i~r,~r-~c,i lia iiacido de 1111 nr~cjari i) . i ~ i { i \ < i 'i I" cultiira. a Ia qiir dyiicia 3 Liiiscar riiie- vos planteamienros. y clc comportar

10s iiicdios iiiás eficacri d r di\.iilsa- cii>ii J e los euii~iciiiiiriiro\-I 1. dr c-rca- ci<iti ilc IJ sensihilidad ,irrí.sric.i y cicii- iifica I . . . ] La fiiialidad clt. Ia cicricia iriiisicilógica -c<~iiio Ia clr roda dis- cipliiia cieriiil'ica- radica cii 1'1 cib. ieiicióii de resitliados qiie siiiiiiriis- rreii datos realrc y eficaces para Ia liisioria. [ . . . I La hluseolugia coiii- porta todos los caracieres -sujetcr, ohicto. seritido. iiicdios y fiiialidad- qiie Ia c«nstiriiyeii aui6iioiiia y ciia- litarivaiiieiile se coiifiriiia COITIO cicii- cia J I contar cor1 irei cleiiiriitos Liá- S 1 i 0 \ .

I" Ser cxprrsiva de algo real (ele- iiieiito histórico). 2" Ser explicativa de forma global de coriteiiidos y comportaniieiitos par- ciales (elemento teórico). 3" Ser emisora de m6todos empíricos (elemento práctico). #)Por tatito, 10s hechos, los priiici- pios. 10s juicios estimativos y nor- mas fundanienian el carácter cien- tífico de Ia Museología.~~ (idem, págs. 93-95).

55 Espasa-Calpe, Barcelona. 1923. 56 ICOM Nem cif., vol. 23. iiúrri. 1. 1970.

pág. 28. 57 Srmitiario rcgior~nl de Ia UNESCO sci-

Drt. 10 fur7crórl educarii.a de /tis rrru.\rftn. CII., 1958, pág. 1 5.

58 La inuséologir srlon ... cir , pás. 84. 59 ROJAS. R. y CRESPAN, J.L.ITRA-

LLERO, M.. Lns t~luseos c11 c1 nirr~liin. Barcelona. Salvat. 1973. págs. 4 1 - 42. En este sentido, además de los au- tores y grupos renovadores de la i i i i i -

seología citados [iricluidos 10s siiii-

Page 24: ALONSO FERNÁNDEZ, L. Capítulo 1. Museología e Museografía

[i<filo\ \' < ~ O ~ ~ l 1 l ~ ~ l i l O ~ ((C. $ftl~(;if ('tfl l- w,~/,~IL-~I/ I \ , ~ ~ ~ k i i ~ , q ? ' t / ~ r > I . /(~OFO,l l

Sr[r,iiL., S<,r icriI. i i i ro \ t i i i ic l i<i\ I i ~ n i11 -

\ I \ I I ~ O r ~ c i v i i i e ~ i ~ e t i r c i ~ t i i t i c11 1'7 c \ - I~~LII'I rclaeioti cliLrc 1.1 i i ~ t ~ > t ~ o I < i g i ~

IJ t i i i t ~ ~ ~ ) g v ~ i l i C i , L~ I I I IO c11 VI c ' i r ' í ~ ~

ti.[ c ~ r r i i i l t c ~ o i lc Ici I~r i tnr r ,? 1\ '2a%c litbr c ~ e ~ i ~ i ~ i l ~ i . \III>,.~II~I S~II,/I~,> 111 . \ IL f~ I~.IJ.~/ c-II/I~I~~*. c i11r~i~ l11 litir Sii\ ' i l i h1

Pt.ARCE. Loi i<lre\ I.~.ii'esir~r Uii i \ .rr- SIIV Vrc\\. IYSY. ~. \VI ia l I\ ~ \ l i i \ c i i ~ i i Siiidic\.. . c r i Ia : ! r . de P. iVOOD- H E A D (;. ST.ANSFIELD (1989. L" 4211. 19941. [I~FS. I 1 - 1 3 es[~ccial i i ic i i - ii-. Oi . i~ i i t CUI<TI. Iliirc<il<~;i.i c (li- daii ica dc i iiiiiiri iIcll,i \cicrira c d c - Ila irciiita-n. rii AA.\ ' \ ' . / /~t r io i i i iciirr;* '11 I-I~.<J-c-LI. ~ ~ k l i i ~ c i c Gallcric c l ' l ~ ~ l i a , ~ . NLI<I\-a \cr ie I.'R<iiiia. De Liica Edi - I 1982 . ~ ~ . i g \ 2 4 - 2 6 . 1 Frariçci MINISSI c k ~ r r s a as; sii p t i i i - i o de vi\ia: 4,Los d(i \ ~Cri i i i i ios " i i i t i - sciilog~a.' y "ii i i i\cii$raiia J io, q i i c c-c>rrieii~criiciiic zc ~ i r i l ~ i i y c tili idCnri- co sigiiilicacio. Iior ci iat i io c i i c l !>asa- do Ias CIO\ tliscil)liiias vci i iai i i ior ir ial- i i ~ ~ ~ i i r c ~ si(*il(Io irarada< por i111 <iii ico

(~crsoriaje. el c.oiciser ador o d i rec i i~ r de1 i i i t i ~eo . \ se C ~ I I ~ ~ I I I ~ ~ ~ I I [)<Ir c110 Ia itna cc~i i Ia orra. \ a l i a s ~ i i i i i r i i ~ l o \ a c ~ i r ~ ~ c ~ t e r ~ s i t c ~ ~ s p r t~ j ) ia \ dv c \ p c ~ i f i c i -

~ l ~ i ~ l , ~ ~ i i i ~ i i r c I I I~I I~L~I I IL~I I~~O c < i r c c I ~ ~ ~

I~ICIIIC l i g ~ d ~ \ \LI r c c . i l ~ r ~ ~ c - ~ i ~ ~ ~ 1 1 1 1 i l ~ -

it ic1ti~irit~if.1~1 c ~ t i l ~ ~ r , i ~ ~ j ~ c t ~ ~ I c i i c r ~ ~ ~ ~ IL.II

/ i 1 t 1 1 1 ~ ~ ~ ~ ~ J I ~ ' ~ / ~ ~ t i ~ i ~ : SI) t<iitli,l ~ c l t ~ 7 4 1 -

i11 K'ippa, I V S 3 . [ i i ~ I 31 60 i){' .ir . ))'i?\. 16- l d ! 40 61 ;\\i. Fraiicii h1lNISSIrSaiiclr~i H.iNE-

LUCCI VII si1 libra . \ / I I$~*~~~, I /~~ I SafL>- 1'1 '11 >ptn<~t,tii~:(~:i~~tt,~ /,,.r i,? ilfi'i12 sd 11 ~ - C X ~ ~ I ~ I I ~ C ~ .kt ~~t,vtttttt,.~~ft LIni~-~,rjtffl LIc.- .i!; ,!!i.!i .;; ;<.,:ii,: : ,; <.;;,f<r::.; Rr>iii.i Bc~i i \ ig i i i i r i Edi i<irc. 1992

TaiiitiiCii. Saiitlrci Rr\NELUCCI. R<.>- ti1111-~> ~> t t f~ -~ . , y r i ~J ; t~ (.-,.II~I-~I/II~ ~ i ~ ~ l l SI<>- rtu. Koiii.i. h l i i l t i g i a l i c a Ediir ic-c. 1990. Et i liiroi. c~sos . c t ~ i i i o AA.V\:.. Fctt;.

un ciirrsdu. C',-ttlr ioiitirtirc. i o i ~ ~ p ~ ~ i n z t ~ ~ r t i ~ IJILI><.L,:,ILJ~~L'~~. G\8it,giiü, PF<;~c::<: !-C::

i iardo. Socieiá Edi i r ice Esciilal)io. 1990. e1 e i i fo( l t r (~ \, 10s co i i l c i i i do \

SOII c t i i i i ~ c ~ ~ ~ c i i t c i i i c coit ici~lct i tc> c011 Ia\ ctiticclicioiic\ t l e l i i i i c io i i~ \ (Ic Ia

i i i i ~ \ c o ~ r ~ i I í a ~ i i ~ i s LI i i t \ ~ e r \ a l i i ienre

acepiada\ D e i i i ~ ~ c l o a i i a l o g o . I r i i i a . A R E S - TIZAB.AI-IAI~~OIIIO P I V A . c11 ,AILIS~I i11

~ ~ . ~ i > f , ~ r ~ i i ~ i i ' i t ~ ~ t < ~ Pr,i\il,~irri~i ifc.l/it iii~~.it.i~-

/<~!/;'; <, , t L ~ I / , : l l r11~~~~~~1~. : /~,1. l ~ l l l i t l . ,\Ia?. 7111i. i , I 9 9 I . t ~ l a 0 c i r ~ i i r11 do5 p r o - ~iui ' \ i .>\ l).iralelat i .. t a n i i i i eo los ia aiilicat1,i a c i i i r i i i t ieo t le arrc t i i od r r -

i i c i = / .$ La i i i i i>co~r, i l ia ali1icad.i a t i r l

i i i i i ~ c i i i Ic arir. i i i i i dc r i i u - . re\pecii- \.atiiciiiv) titia rroria ?- ~>la i i i ra i i i iento ~ i r i i i i l c i ~ o ~ s ~ i l i r c e1 i r i i i a . e i i pa r i c i l t is irai io coi i Ia cxpcr i r i ic ia dr Ia rç- ~ r t i i ~ ~ r ~ ~ i i c I 1 r i c

h lo i ler i i< i i l c Rio J i Jaiieiro. El c-n- l o q i i r r i i i i \c i~grá l ico arqi i i i rct i>ri ico cs 111 cluc .\ii ioriio PIVA l ia d r w r r o - IIJJ<I ~~o\wr i< i r t i ie i i ic . c i i LJ s p ~ i z i ~ de1 I ?~~ I>CV PI~~[I,*.\.IC, {*<,r l ' d r L~~III<~II~~~~~II?~s~ t r i Eiir,!pii. Veiiecia. Saggi hlarsiglio. 199 3

52 !i! JLIPE. h l ~ r l - n j - r ,-!I U I ;I iii~ii\,rllr ~ri i isColi iyie - q i i ' c s t - c e - ~ i i c c'esi?,*, I C O FOM. .Si~nipi12;iirrt1 h l ~ i s ~ u t t t ~ i w d (.;vc~t!rlinin. 11. 1990. )i.iy, 2s.

h 3 //iiiiot~r