Alabanza y Adoración - escuelateologicamisional … · DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez Alabanza y...

59
DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez Alabanza y Adoración 1 VIII.- ALABANZA Y ADORACION Hablar de A.A. es referirnos a la mejor arma que el carismatismo ha usado para infectar a todas las demás iglesias. Es la característica externa y visible del movimiento. Es la praxis de su teología. Es el punto de controversia en el que “pastores y líderes de iglesias quedan como si hubieran sido molidos por la avalancha de nuevos procedimiento de alabanza impuestos a sus iglesias, y acaban teniendo que ceder sin poder expresar siquiera sus propias convicciones” (1) Expresiones ajenas a nuestro contexto, a nuestra identidad, a nuestra teología, sin saber cómo ni cuándo, se han anidado en algún rincón de nuestra liturgia, sin siquiera habernos puesto a analizar a conciencia tal situación, obligación nuestra y no de otros. El culto ha perdido el sentido de proporción y su esencia misma ha sido socavada a gran escala. Al paso que vamos, dentro de unos cuantos años, los cultos habrán degenerado tanto, que lo que heredarán nuestros hijos no sabemos cómo se le pueda llamar. Esta época pasará a la historia como la más pobre y estéril, en cuanto a producción musical se refiere, pues incluso superamos las “Thalías”, debido a la exagerada cantidad de herejías que se están cantando en la iglesia cristiana de la actualidad. (2) La fuerza del carismatismo ha sido tal que han impuesto moda en el culto cristiano. la A.A. es ya un estilo de música definido y aceptado dentro de la liturgia. A.A. COMO ESTILO DE MUSICA Debemos aclarar que al mencionar A.A., no nos referimos a la enseñanza bíblica de la Adoración, sino a la moda que ha impuesto el carismatismo como estilo de música, debido a que la verdadera adoración es tan antigua como la misma creación, pero que difiere absolutamente de la A.A. Por “estilo de música” queremos decir una forma particular de estructurar el ritmo, la melodía y la armonía de determinada música. Así por ejemplo hay estilos de música como el rock, tropical, cumbia, bolero, ranchero, balada, clásico, etc. etc. Bueno, pues la A.A. ya ha venido a ser un nuevo estilo de música, aunque solo dentro de la iglesia cristiana. 1. Ferreira, Damy en “Crisis en la Alabanza”. CBP. 1995, p. 5. 2. Se le llamaban “Thalías” a las canciones heréticas de la Iglesia Imperial. Ver mi libro de Música y Teología”.

Transcript of Alabanza y Adoración - escuelateologicamisional … · DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez Alabanza y...

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 1

VIII.- ALABANZA Y ADORACION

Hablar de A.A. es referirnos a la mejor arma que el carismatismo ha usado para

infectar a todas las demás iglesias. Es la característica externa y visible del

movimiento. Es la praxis de su teología. Es el punto de controversia en el que

“pastores y líderes de iglesias quedan como si hubieran sido molidos por la avalancha

de nuevos procedimiento de alabanza impuestos a sus iglesias, y acaban teniendo que

ceder sin poder expresar siquiera sus propias convicciones” (1)

Expresiones ajenas a nuestro contexto, a nuestra identidad, a nuestra teología, sin

saber cómo ni cuándo, se han anidado en algún rincón de nuestra liturgia, sin siquiera

habernos puesto a analizar a conciencia tal situación, obligación nuestra y no de otros.

El culto ha perdido el sentido de proporción y su esencia misma ha sido socavada a

gran escala. Al paso que vamos, dentro de unos cuantos años, los cultos habrán

degenerado tanto, que lo que heredarán nuestros hijos no sabemos cómo se le pueda

llamar.

Esta época pasará a la historia como la más pobre y estéril, en cuanto a producción

musical se refiere, pues incluso superamos las “Thalías”, debido a la exagerada

cantidad de herejías que se están cantando en la iglesia cristiana de la actualidad. (2)

La fuerza del carismatismo ha sido tal que han impuesto moda en el culto cristiano. la

A.A. es ya un estilo de música definido y aceptado dentro de la liturgia.

A.A. COMO ESTILO DE MUSICA

Debemos aclarar que al mencionar A.A., no nos referimos a la enseñanza bíblica de la

Adoración, sino a la moda que ha impuesto el carismatismo como estilo de música,

debido a que la verdadera adoración es tan antigua como la misma creación, pero que

difiere absolutamente de la A.A.

Por “estilo de música” queremos decir una forma particular de estructurar el ritmo, la

melodía y la armonía de determinada música. Así por ejemplo hay estilos de música

como el rock, tropical, cumbia, bolero, ranchero, balada, clásico, etc. etc. Bueno, pues

la A.A. ya ha venido a ser un nuevo estilo de música, aunque solo dentro de la iglesia

cristiana.

1. Ferreira, Damy en “Crisis en la Alabanza”. CBP. 1995, p. 5.

2. Se le llamaban “Thalías” a las canciones heréticas de la Iglesia Imperial. Ver mi libro de Música y Teología”.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 2

¿Cómo es el estilo de A.A.? Ellos dicen que “Alabanza” es rápido y “Adoración” es lento.

Alabanza generalmente es un compás de 4/4 a un “tempo” de andante hacia arriba o

rápido, como el moderato, allegro, allegreto, , presto, prestissimo, etc. En la Adoración

parten del andante hacia abajo o lento, como el andantino, adagio, adagio sostenuto,

etc. (3) Si el músico es bueno, para cambiar de “Alabanza” a la “Adoración”, hace un

“ritardando”. Pero por lo general, como la mayoría son música líricos o aficionados,

paran en seco la ejecución y entran de lleno en un “adagio” u otro tempo más lento. (4)

Comúnmente logran su objetivo de calmar o tranquilizar a la gente con el sólo hecho

de cortar o parar en seco la música, aunque en algunas ocasiones, cuando están

demasiado eufóricos, no dejan de brincar aún cuando ya no haya música de por medio,

tal como le pasó una vez a Marcos Witt en el gimnasio “Juan de la Barrera”, aquí en la

Cd. de Mëxico.

Entonces por “Alabanza” ellos entienden los coros que son rápidos, alegres, rítmicos,

cadenciosos, que generalmente incitan a mover el cuerpo hasta provocar éxtasis y

paroxismo. Es la moda. Muchos grupos y cantantes han tenido que abandonar su estilo

de música para entrar a la A.A., pues esto es lo que se vende.

Si alguna iglesia o grupo musical no entra a esta moda, se le ve con extrañeza, se le

acusa de que no ha sido “restaurado”, que no tiene el “mover del Espíritu”, que no

“tiene Avivamiento”, de que es tradicionalista, etc. Sobre todo al principio del

carismatismo en México ellos mostraron una marcada hostilidad a las iglesias

históricas y todo lo tradicional, por lo que era fácil de detectar cuando una iglesia

ingresaba al movimiento: renunciaban a los himnos para cantar únicamente A.A. En la

segunda mitad de la década de los 90’s Marcos Witt pidió “perdón” a la iglesia por todo

lo que había ocurrido en un Congreso de Comunicadores en Acapulco y todos

quedaron felices y contentos. La tendencia no ha cambiado mucho y la A.A. sigue

siendo la señal de que una iglesia ya ha sido “restaurada”.

Por la otra parte, si en un concierto hay 1000 personas, al cantar música rápida,

automáticamente se tienen 1000 alabadores, y si se les baja la velocidad, se tienen

1000 adoradores. Pero ¿será esto así tan fácil? ¿será cierto?. Pasemos ahora a lo que

denominamos falacias de la A.A.

3. Los términos para describir la velocidad o tiempo del compás, son italianos, debido a la gran influencia que tuvo la música

italiana en el panorama musical en los siglos XVII y XVIII. “Andante” literalmente significa andando y equivale al pulso

normal del ser humano, entre 70 y 80 pulsaciones por minuto; es un tiempo intermedio. Los tiempos más vivos que el andante son el “allegro”, que significa de prisa y “presto” que significa corriendo. Los tiempos más lentos que el andante son el

“adagio” que significa cómodo y el “largo” que significa ancho; el “lento” y el “grave” son pesantes o más largos. Estas

palabras pueden modificarse para indicar las respectivas alteraciones del “tempo” fundamental de una parte o de una pieza. Por ejemplo “andantino” indica cierta inclinación hacia el “adagio”, “allegreto” es más amable y afectuoso que el “allegro”. Se

usan también los tempos “adagio sostenuto”, “larghetto”, “adagio molto”, “allegro vivace”, y muchos más. Para determinar

con mayor exactitud la velocidad del tempo se recomienda usar el metrónomo. 4. En música se utilizan otras palabras para indicar cambios pasajeros durante una ejecución, como “Accelerando”,

“Stringiendo” (incitando, “Ritardando” (retardando), “morendo” (muriendo), “smorzando” (acabándose), “Ritenuto”

(retenido), y otras más.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 3

FALACIAS DE LA A.A.

1.- EL RITMO DETERMINA SI ES “ALABANZA” O “ADORACION”.

Lo primero que nos han vendido, y que muchos cristianos se lo han creído, es que si

una canción es rápida es Alabanza y si lenta es Adoración. Preguntémonos ¿dónde dice

la Biblia que el ritmo determina la Alabanza o Adoración? La respuesta es: ¡Nunca dice

la Biblia semejante barbaridad!

El que una melodía sea rápida o lenta no tiene nada que ver con que sea Alabanza o

Adoración. El tempo o velocidad solo tiene que ver con la ejecución de la pieza no con

una cuestión doctrinal, ni mucho menos espiritual. Musicalmente hablando, la forma

de determinar el tempo tiene que ver con la intención del autor de transmitir sus

sentimientos en dicha obra. Es decir, es una cuestión de comunicación, de estética, de

estructura, no de teología.

Sin embargo, muchos cristianos se han tragado la píldora y creen sinceramente que

cuando cantan rápido están alabando, o si cantan lento están adorando. De hecho

todos los cassettes o Cd de A.A. así vienen configurados. La primera vez que un no

creyente ve A.A. piensa que se refiere a Alcohólicos Anónimos.

EL asunto es que a la mayoría de creyentes no les gusta pensar y como su líder de

“Alabanza” o su pastor les dijo que el ritmo determina su adoración o alabanza a Dios,

ellos lo aceptan sin cuestionar.

Pero el mismo sentido común nos dice que esto es un disparate. Si esto fuera cierto

habría muchos que nunca adorarían u otros que nunca alabarían. Por ejemplo. La

música anglosajona es fría, solemne, triste, lenta, ¿eso quiere decir que los cristianos

de los países bajos de Europa nunca alaban a Dios? o qué me dice de la música

caribeña, africana? ¿a caso ellos nunca adoran a Dios? Usted sabe que la música

tropical nunca va a ser solemne, sino más bien guapachosa, bullanguera, rítmica, etc.

de lo contrario no sería lo que es.

Doctrinalmente hablando esto es más delicado de lo que se puede pensar a simple

vista. Si una persona con el simple hecho de cantar un coro rápido o lento ya logra

alabar o adorar a Dios, entonces no sería necesario que se arrepintiera, que tuviera un

encuentro con Dios, que llevara una vida limpia y santa, que fuera un cristiano

auténtico, ya que eso saldría sobrando. No tendría por qué preocuparse de su relación

con Dios si todo lo resuelve el estilo de música que interprete.

Es así como el carismatismo engaña a muchos ingenuos. El mensaje tácito es: “no

importa cómo vivas”, “no importa que seas salvo o no”, lo que importa es que te goces,

que te emociones, que grites, que brinques, que dances, que te destornilles, que te

despabiles, pues como dice uno de sus coros “Así se alaba a Dios”.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 4

2.- “ALABANZA” ES SINONIMO DE MUSICA O CANTO.

Como el carismatismo ya nos ha programado nuestro cerebro, y hemos dejado que

ellos piensen y decidan por nosotros, ya es común que cuando un cristiano oye

alabanza, automáticamente entiende que esta palabra se refiere a cantos, o a música.

Algunas iglesias históricas llegan a tener cultos híbridos, mitad convencional y mitad

A.A. En sus programas dicen: Preludio, Oración de Invocación, Lectura Bíblica, Himnos,

Testimonios, etc. y “momentos de Alabanza”. Por momentos de alabanza quieren decir

coros o estribillos modernos. Las preguntas son ¿la alabanza a Dios fueron únicamente

los coros modernos? ¿entonces lo demás qué es?

Un pastor dio apertura al servicio nocturno en su iglesia, y anunció: “Vamos a tener

nuestro tiempo de alabanza”. Entonces, la juventud tomó la dirección del servicio y

durante una hora entonaron “coritos” tocando sus instrumentos electrónicos a todo

volumen, batiendo las manos mientras hacían ciertos movimientos con el cuerpo. En

frente de ellos, se encontraba una joven al estilo de los animadores de televisión,

incentivando al pueblo a alabar al Señor. Después de aquel “tiempo de alabanza”, el

pastor se paró otra vez y anunció: “Ahora vamos a oír el preludio y propiamente

comenzar nuestro servicio”. Se tuvo el preludio musical y nuevamente se anunció un

himno del himnario oficial de su denominación.

Algunas preguntas son: 1.- ¿cuál es la diferencia de alabar a Dios con “coritos” y alabar

a Dios con “himnos del himnario”? 2.- ¿Cuándo comienza el servicio, con el cántico de

“coritos”, o con el preludio, los himnos tradicionales, el mensaje o la lectura de la

Biblia? 3.- ¿Quién alaba a Dios, los jóvenes solamente o toda la iglesia? (5)

Lamentablemente el carismatismo ha asociado la Alabanza y la Adoración únicamente

con la música o el canto, que olvidan, ignoran o niegan la enseñanza bíblica integral

sobre el tema, por eso los cristianos en su mayoría lo creen y lo practican de ese

mismo modo.

Marcos Witt escribe un libro titulado “Adoremos”, que con el solo título pareciera

indicar que abordará el tema, si no con una exégesis profunda, al menos de una

manera completa. El libro resulta un fraude porque nunca menciona ni por

equivocación las diferentes formas de adorar a Dios y el libro contiene, según algunos

expertos, más de 100 errores teológicos.

Mire la forma en que Witt descubre la Alabanza:

“En 1986, México fue país sede de los juegos de la Copa Mundial de

Fútbol Soccer... No recuerdo los detalles del partido en sí, sólo que grité

mucho para alentar a la selección mexicana esperando que anotaran el

primer gol y lo hicieron.

5. Ferreira, Ibid, p. 8,9.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 5

En un instante inolvidable, se vio entrar el balón a la portería y se

escuchó la voz del locutor, que locamente comenzó a gritar a voz en cuello

“goooooool”, “goooooool”, “México anota el primer gol de la Copa

Mundial de 1986”...

Me acuerdo que me encontraba de pie gritando, bailando y

festejando este gran acontecimiento, pero como yo no soy tan aficionado

al fútbol como lo eran los miles que estaban presentes en el Estadio

Azteca, mi euforia terminó mucho antes que la de ellos.

Al suceder esto, me impactó la escena que enseguida vi: TODAS

aquellas personas estaban de pie, con las manos levantadas al cielo,

gritando y celebrando a este equipo de hombres que acababan de anotar

el gol. Vi como se tomaban de las manos, se abrazaban, muchos

derramaban lágrimas, otros tiraban sombreros, gorras, o cualquier cosa

que tenían a la mano.

Un ambiente de total celebración y festejo reinó en el estadio –y de

seguro en miles de hogares a través de México y el mundo entero- por

más de 5 o 10 minutos.

La realidad de lo que sucedía me sacudió casi como si me hubiesen

golpeado. ¡Esta gente estaba alabando! Llamé a mi esposa y le dije:

“Observa esto, están alabando, tienen las manos levantadas en alto, están

bailando, gritando (jubilosos) y celebrando lo que estos hombres acaban

de hacer”...

En muy pocas y contadas ocasiones he visto gente prorrumpir en

alabanza y celebración a Dios de la manera como lo hicieron esos miles en

el Estadio Azteca. Al contrario. Muchísimas veces he escuchado todas las

razones habidas y por haber del porqué NO se le debe dar esa clase de

alabanza al Dios del cielo, quien por cierto metió el gol más grande de las

edades en la cruz del Calvario a través de Su Hijo Jesucristo...” (6)

Siguiendo la línea de pensamiento de Witt, decir que lo que hacía la gente en Estadio

Azteca era “Alabar” solo porque ellos hacen los mismo en sus cultos, es un absurdo.

Pero decir que la muerte de Jesús en el Calvario fue “el gol más grande de las edades”,

no sólo es una tontería sino una blasfemia. La muerte de Cristo, y todo el Plan de

Redención, no fue algo circunstancial como lo es un gol. No fue algo que a Dios se le

ocurrió después de que el hombre pecó. No fue algo que se lo “sacó de la manga” en

un momento que ya no sabía qué hacer. ¡No! La Biblia enseña que el Plan de Redención

fue determinado por Dios desde antes de la fundación del mundo:

“A este, -hablando de Jesús-, entregado por determinado consejo y

anticipado conocimiento de Dios, prendisteis y matasteis por manos de los

inicuos, crucificándole”. Hech. 2:23.

“Habiendo sido rescatados... con la sangre preciosa de Cristo, como

un cordero sin mancha y sin contaminación, ya destinado desde antes de

la fundación del mundo, pero manifestado en los postreros tiempos por

amor de vosotros...” 1 Ped. 1:19,20. 6. Witt, Marco en “Adoremos”, Editorial BETANIA, 1993, p. 41-43. Énfasis añadido.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 6

La enseñanza bíblica tanto de la Adoración como de la Alabanza, no se limita

únicamente a la música, y ¡que bueno que así sea! Por otro lado, la adoración no la

inventaron los carismáticos, no la inventó, Marcos Witt, ni Danilo Montero, ni Jaime

Murrel, ni Hosana Music, ¡No! Fue Dios en la eternidad quien lo determinó por su

sabia y soberana voluntad.

¡Por favor, que no salgan ellos con que han descubierto el hilo negro de la adoración!

¡No nacimos ayer! Tenemos 2000 años de historia como Iglesia.

“Tenemos la obligación de respetar y honrar el pasado, y no desperdiciar ni tratar con

ligereza el legado recibido. Después de todo, nosotros no somos la primera

generación de creyentes sobre la tierra, ni nos es propio actuar como si imagináramos

que somos los de más experiencia e información teológica. El desechar los credos por

haber creído más que las verdades que ellos abrigan, o el tratar ligeramente el

depósito que nos dejaron nuestros antepasados es una señal de irresponsabilidad y

mala mayordomía”. (7)

Lo que la Biblia, la Teología, los Credos, la Liturgia y Ritual, nos dicen sobre la

adoración es que abarca otros aspectos además de la música, tales como la Lectura de

las Escrituras, la Predicación, el Testificar o Kerigma de las Buenas Nuevas, la Oración,

las Ofrendas –incluyendo diezmos y primicias-, el Testimonio o Buena Conducta del

creyente, los Medios de Gracia o administración de los Sacramentos, los Credos o

Confesiones de Fe, etc. Lea por favor cualquier libro de Teología y se dará cuenta que

el carismatismo le ha dicho verdades a medias a cerca de la adoración.

“El Catecismo de Heidelberg (1566) dijo que no habíamos de adorar a Dios ‘en ninguna

otra forma que la que El ha mandado en su Palabra’. La Confesión Belga (1566) dijo

que las Escrituras ‘contienen plenamente la voluntad de Dios...toda forma de

adoración que Dios requiere de nosotros está escrita en ellas’. La Confesión de Fe de

Westminster (1646) dijo: ‘La manera aceptable de adorar al verdadero Dios está

instituída por El mismo’ y que Dios no puede ser adorado según las imaginaciones y

artificios de los hombres.. o de cualquier otra manera no prescrita en la Santa

Escritura”. La Confesión de Fe Bautista (1689) dijo que ‘la única manera aceptable de

adorar al verdadero Dios está designada por El mismo de acuerdo con su propia

voluntad... y todas las formas de adoración no prescritas en la Santa Escritura son

expresamente prohibidas”. (8)

“Sea cual fuere lo que pensamos, estas declaraciones no fueron redactadas por

extremistas o maniáticos, sino por nuestros padres en la fe, aquellos a quienes, bajo

Dios, debemos nuestra herencia cristiana actual”. (9)

Por lo tanto creemos que es incorrecto que al referirnos a los cantos o a la música

dentro del culto cristiano, le llamamos “Alabanza”.

7. Martin, Ralph P. En “Teología de la Adoración, Editorial VIDA, p. 99.

8. Blanchard, J. En “EL Rock invade la Iglesia”. Editorial CLIE, p. 171. 9. Ibid.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 7

Lo más acertado es decir “Música Congregacional”, para indicar los cantos, coros o

estribillos que los creyentes entonarán; “Música Instrumental” para aquella música en

que los congregantes no participarán, sino únicamente escucharán y disfrutarán,

ejecutada por los músicos o instrumentistas, y “Música Especial” aquella que es

interpretada por cantantes, ya sean solistas, grupos o coros. (10)

3.- DIRECTOR DE “ALABANZA”.-

La moda de la A.A. ha creado otro fenómeno, el “Director de Alabanza”. Bajo este

concepto, cualquier persona que se sepa los coritos de moda, no importando que sea

o no músico, o bien que sea un músico “chuntatero,” de “chuntata”, es elevado y

reverenciado como “Director de Alabanza”.

Este “Director de Alabanza” es más bien un animador al estilo de los conductores de

programas de televisión, sólo que con un marco cristiano. No hace mucho, Adal

Ramones, en su programa de “Otro Rollo”, presentó una sátira de un culto cristiano de

índole carismático, y créanme que lo hizo muy bien. ¡Que vergüenza que ahora somos

ridiculizados! Ya que anteriormente este “privilegio” lo tenían solamente los curas

católicos.

¿Porqué el título de “Director de Alabanza” es una incongruencia?

En primer lugar porque el término “Alabanza” dentro del carismatismo está mal

empleado, reducido y limitado a la música o canto, como lo analizamos anteriormente.

Bíblicamente hablando un director de Alabanza debería incluir todos los aspectos de la

misma; si fuera de una sola parte de la alabanza el título debería ser otro, pues sería

engañarlos o engañarse a si mismo al presumirse que es director de algo que no es

cierto.

En segundo lugar porque el término no aparece en la Biblia, ni tampoco la función. Lo

de menos sería que no apareciera el término o título, pero si apareciera dicha función

estaría justificada tal actividad aunque se le hubiera cambiado o inventado el nombre.

Pero la misma naturaleza de la Alabanza indica que no puede haber directores de

Alabanza. En el Antiguo Testamento aparecen los directores del Coro o de la Orquesta,

como el tiempo de la monarquía. En el Nuevo Testamento aparecen los diáconos,

pastores, obispos, presbíteros, líderes, etc. pero no “Directores de Alabanza”.

Sería muy presuntuoso de alguien “Dirigir la Alabanza” en todo lo que ésta implica. En

este caso únicamente podría ser el Espíritu Santo para dirigir los Sacramentos, la

Predicación, la Proclamación del Evangelio, etc. etc. ¿no le parece? Cuando alguien se

autonombra “líder de alabanza”, uno se pregunta si sabe realmente lo que está

diciendo.

10. Para una información más detallada sobre el tema, ver mi libro de “Música y Teología”.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 8

En tercer lugar porque el “Director de Alabanza” no es director sino animador.

Realmente no dirige, sólo motiva. En estas iglesias ya saben qué coro sigue después de

otro, -las famosas cadenas de coros-, y aunque en repetidas ocasiones estos coros

parecen trabalenguas, que solo entienden aquellos que los cantan, el “Director de

Alabanza” es una figura decorativa en lo que a dirección se refiere. En otras ocasiones,

quien realmente dirige es el pianista, o guitarrista, o la hermana o el hermano que

canta más fuerte, a quien todos esperan que inicie para poder seguirle.

En cuarto lugar la moda de la A.A. ha impuesto que el “Director de Alabanza” sea

cantante e instrumentista simultáneamente. Hemos visto con mucha admiración como

Marcos Witt, Miguel Casina, Marcos Vidal, etc. cantan y tocan el piano al mismo

tiempo. Debemos reconocer que para ello se requiere cierto grado de virtuosismo,

pero no todos tienen la misma capacidad y los remedos que vemos en la mayoría de

iglesias carismáticas distan mucho de lo que ellos pretenden imitar. De ahí que a

algunos les llamen “Wititos” por hacer “covers” de Marcos Witt.

Α veces tocan muy bien, pero cantan muy mal, o viceversa. Es difícil encontrar a

alguien que haga las dos cosas bien. Para consuelo de ellos debemos decir que no hay

una ley que obligue a hacer ambas cosas. Si usted toca bien pero canta mal, ¡por favor

no cante! solamente toque. Considere sus propias aptitudes, o bien prepárese para

superarse en una o ambas tareas. Si ninguna de las dos cosas puede hacer, tal vez esté

equivocado en cuanto a su ministerio.

Lo correcto sería nombrar “Director de Música” o “Ministro de Música”, si es que la

responsabilidad de tal persona será dirigir el Departamento de Música de su iglesia.

Para ello tiene que ser músico, profesional o autodidacta, de modo que entienda qué

es lo que debe hacer. La formación ideal sería que fuera Músico y Teólogo.

Si alguien no es “Director de Música”, pero le toca dirigir el culto, el nombre sería

“Director de Culto”, entendiéndose que debe tener la capacidad de dirigir los cantos a

la congregación.

Si dicha persona no tiene la capacidad de dirigir los himnos o coros, entonces su título

sería “Director de Programa”, equivalente a un maestro de ceremonia, que indicará a la

gente qué es lo se debe hacer en cada una de las partes del ritual, como orar, leer,

cantar, hincarse, pararse, etc. invitando a otra persona que sí sepa dirigir los cantos, y

que cuando menos sea entonada y sepa llevar el ritmo, para hacer la parte musical, su

nombre y función sería “Director de Canto Congregacional”.

Alguien tal vez dirá que son problemas de semántica y por lo tanto insignificantes,

pero es mejor que usted comprenda lo que está diciendo y haciendo y no que se meta

en problemas con Dios y su congregación.

Ahora bien, si comparamos las funciones de un “Director de Alabanza” con un

“Director de Música”, encontraremos un mundo de diferencia. Vea usted lo siguiente.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 9

Funciones de un “Director de Música”: (11)

Enseñar música e himnología.

Ayudar a proveer música y músicos para los cultos congregacionales y demás

actividades de la iglesia.

Llevar la iniciativa para conseguir la participación de todos en el canto .

Adiestrar a los que sea posible en la dirección de canto y Coro, así como la

ejecución de diversos instrumentos.

Proveer organización y dirección para proyectos relacionados con la música que la

iglesia necesite o designe.

Informar a sus miembros de la vida y obra de la iglesia y denominación.

Aprendizaje de sana doctrina y enseñanzas de las Escrituras por medio de la

música.

Elaborar la liturgia y el ritual de la iglesia.

Fomentar la composición himnológica.

Desarrollar las actividades corales para cada sector de la iglesia, niños,

intermedios, jóvenes, adultos, hombres, mujeres.

Descubrir nuevos valores como solistas, conjuntos, rondallas, tríos, etc.

Escribir partituras de arreglos para voces, instrumentos, canciones nuevas, etc.

Coordinar las actividades de su departamento con el de evangelismo

Etc. etc.

Por otro lado, dirigir no significa pararse al frente y gritar “¡A su Nombre!” para que

todos contesten “¡Gloria!”. Dirigir no es echar porras. Por “DIRECCION DEL CANTO

CONGREGACIONAL” se entiende “Impartir las ideas de una persona a otras, según las

normas de correcta ejecución de alguna composición musical”. (12)

Para lograr este propósito se necesitan cuando menos dos cosas:

1. El concepto intelectual o comprensión de la composición, -canto, obra, partitura-

por parte del director, y

2. El uso de las manos y de movimientos faciales o corporales en la comunicación o

expresión e las ideas musicales que se deseen interpretar.

Existe toda una metodología para aprender a dirigir la música congregacional, porque

si la congregación va a cantar lo que ella quiere, cuando ella quiera y como ella quiera,

entonces usted es inútil como director.

Es de vital importancia aprender dicha metodología, para salir avante en todos los

escollos que existen en el camino de la dirección de culto, tales como anacrusas,

tonalidad, armonías, compases, etc. (13)

11. Adaptado de la Enciclopedia de Ministerio Musical, Vol. 1, CBP, p. 1-4. 12. Ibid, Vol. 2, p. 5.

13. Para una explicación más detallada del tema ver mi libro “MUSICA Y TEOLOGIA”, los capítulos “El Desarrollo de la

Música en la Iglesia Local” y “Dirección del Canto Congregacional”.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 10

4.- GRUPOS DE ALABANZA.-

Otro fenómeno más raro que el anterior, producto igualmente de la A.A. son los

“Grupos de Alabanza”, que se integran por los músicos o instrumentistas –pianista,

guitarrista, bajista, baterista, etc.- y por varios cantantes, jóvenes y señoritas, cada

uno con su micrófono, que juntamente con el “Director de Alabanza” suponen que

dirigen la misma. Cantan al “montonete” o unísono y junto con las panderistas son las

estrellas del espectáculo.

Aún recuerdo el rostro de muchos de ellos, que con cierto orgullo y satisfacción, los

hemos oído comentar: “nos toca dirigir la alabanza”.

Bueno, ¿y qué de malo tienen los grupos de Alabanza?

En primer lugar es que no son grupos de Alabanza, si acaso grupos de música. Lo

mismo que dijimos en la falacia anterior sobre la alabanza vale para este punto.

Segundo, es incongruente que en una orquesta haya 5 o 10 directores dirigiendo al

mismo tiempo, ¿a cuál de todos le harían caso los músicos? Por eso decir que el “grupo

de alabanza” o que cada uno de ellos crea que dirige la “alabanza” es ilógico.

En la realidad solamente uno de todos ellos puede ser el director, y no siempre el que

ostenta el título de “director”. Los demás hacen otras cosas, pero no dirigir, aunque se

sugestionen que lo hacen.

Lo que sí hacen es “hacer bola” o “echar montón”. Tampoco quiero decir que apoyar al

director sea malo o pecado, sino que la única diferencia entre ellos y la congregación

es que se oyen más fuerte, porque tienen micrófonos. Eso es todo. No se preocupan

por hacer armonías vocales, -sopranos, contraltos, tenores y bajos como mínimo-. Ya

sea por intención u omisión, lo cierto es que todo lo cantan al unísono.

Tercero.- Lo que si es preocupante y peligroso es que en todas las iglesias

carismáticas los “Grupos de Alabanza” monopolizan la dirección del culto, y entre más

tiempo transcurre, se hace más difícil e imposible que los demás congregantes lleguen

siquiera a soñar que algún día les toque dirigir un culto.

Imagínese que usted se integra a una iglesia carismática que tiene 10,000 miembros.

Delante de usted hay 10,000 personas esperando turno por ver si en algún futuro

remoto les toca parte del pastel de ese liderazgo. Por el otro lado, el “Grupo de

Alabanza” cada vez lo hace mejor, cada vez se “profesionaliza” y entonces cada vez se

reducen sus posibilidades de por si extintas.

¿Sabe cuando le va a tocar participar en dirigir alguna reunión? ¡NUNCA!

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 11

Esta es la paradoja de la A.A. su éxito y su fracaso, su atractivo y su trampa. La calidad

de su espectáculo es inmejorable, lo que atraerá a multitudes, principalmente ex

evangélicos, que quedarán impresionados por lo que nunca vieron en su iglesia y que

aquí les ofrecen con una naturalidad que parece un sueño irrealizable, pero que están

viviendo en carne propia: el ambiente de música y “alabanza” que los envuelve hasta lo

más profundo de sus entrañas, que los hace reír, llorar, brincar, danzar, moverse,

liberarse, como jamás lo habían experimentado. ¡Quedan embrujados, hipnotizados,

embelesados! No desearán regresar a su iglesia.

Considere a un creyente de una iglesia histórica con una fría ortodoxia, con un

ceremonial rígido y con una liturgia solemne, que llegue a presenciar un concierto de

música de Marcos Witt o Hossana Music. No resistirá el impacto, sucumbirá para

siempre.

Sin embargo, esto también es la trampa, el cebo del anzuelo. Esos creyentes se

convertirán en dependientes de sus emociones, no podrán madurar en el ministerio,

pues sus líderes nunca van a ceder el “poder”. El control lo tienen sólo los que

pertenecen a la élite. Los líderes no van a informar siquiera a la congregación como se

gasta el dinero de las ofrendas y diezmos.

Recuerdo a una cristiana miembro de una de estas iglesias. Un día se le ocurrió

preguntar a los líderes qué hacían con todo el dinero que se recogía de ofrendas y

diezmos, y que era mucho, mas o menos de 5,000 miembros. Simplemente la

corrieron.

Entonces ¿porqué permanecen ahí? Porque además del chantaje y manipulación de los

que son objetos, ellos calman sus conciencias creyendo que siguen buscando a Dios

en esa iglesia que se llama “cristiana”. Han sido seducidos por el engaño.

Cuarto.- La proliferación de “Grupos de Alabanza” ha hecho que desaparezcan los

Coros de las iglesias. Antes que el carismatismo floreciera en nuestro país, era normal

que cada iglesia evangélica tuviera su Coro. Hoy eso es historia, recuerdos y añoranza.

Para nuestro Congreso de “Nuevo Horizonte 94” que realizamos en la Iglesia Metodista

“La Santísima Trinidad”, en Gante No. 5, de esta ciudad de México, hicimos algunas

encuestas sobre los Coros. Los resultados fueron desalentadores: De las principales

denominaciones sólo un uno por ciento de sus iglesias tenían Coros. Por ejemplo, una

denominación que alcanzó mayor porcentaje, fue de 1,000 iglesias 19 tenían un Coro,

esto es el 1.9 %

Del porqué los coros desaparecen y los “Grupos de Alabanza” florecen, podemos

señalar varias causas:

El carismatismo cada día avanza con velocidad vertiginosa.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 12

La juventud prefiere los G.A. que los Coros por el estilo de música. Les llama más

la atención la música moderna, considerando además que el 70 % de la población

es menor de 18 años.

Porque se tiene una mala imagen del Coro. Se cree que es para viejitos aburridos y

que el estilo de música es muy antigua y pasada de moda. Lo que no saben es que

en un Coro se pueden cantar diferentes estilos de música, incluidos los actuales.

El mexicano es pasivo por naturaleza. Cantar en un G.A. es más cómodo, no

requiere de tanto ensayo y exigencia como en un Coro.

El nivel musical del pueblo mexicano es muy bajo. Tenemos 40 años de retraso en

educación en comparación con los países del primer mundo.

En contraposición del G.A. un Coro es incluyente. Todos caben, Puede haber coro de

niños, de jóvenes, adultos, o combinados. Tal vez no todos puedan tocar un

instrumento, pero todos pueden cantar.

Quinto.- Aceptar que un grupo reducido tenga el control de los ministerios en una

iglesia es ir en contra del sentido bíblico de la mayordomía.

Lo correcto es que todos prediquen, todos dirijan, todos evangelicen, todos participen.

Todos los creyentes deben tener la capacidad de iniciar una nueva congregación.

Los monopolios más que beneficiar perjudican a la mayoría en cualquier ámbito de la

vida, comercial, cultural, político, etc. En el religioso o espiritual los monopolios hacen

a los creyentes débiles, dependientes, inmaduros. Al no participar no crecen, no

progresan en su desarrollo espiritual.

5.- LOS MUSICOS Y GRUPOS DE A.A. SE CONSIDERAN LOS LEVITAS DEL A.

TESTAMENTO.-

En un intento desesperado por justificar su autenticidad, la doctrina de la A.A. ha

hecho creer a los músicos y cantantes que ellos son los Levitas del A. Testamento.

Al igual que otros posibles “sustentos bíblicos”, este carece igualmente de toda lógica

y fundamento. Para empezar no estamos en el Antiguo Testamento, sino en el Nuevo

Testamento. No vivimos en la Ley sino en la Gracia.

La comparación resulta inútil pues si bien es cierto que los Levitas tenían a su cargo la

música en el templo, no era porque fueran los únicos que sabían tocar o cantar, sino

porque era el mandato de Dios que específicamente los descendientes de Leví fueran

los responsables no sólo de la música, sino de todos los menesteres del templo. No les

tocó propiedad alguna en la repartición de las Tribus después de la Conquista de Caná,

debiéndose esparcir por todo el territorio para hacerse cargo del área espiritual del

pueblo. No tenían trabajo o ingreso extra, sosteniéndose de las ofrendas, diezmos y

primicias del templo. Ellos sí tenían el monopolio de la música por orden divina.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 13

Esta situación no era exclusiva del pueblo hebreo, en todas las culturas antiguas la

música fue controlada por la casta sacerdotal, el pueblo no participaba, ni podía

participar en la música. Esto se debía a que junto con la danza representaban para

ellos cierto poder mágico y eran utilizadas en ceremonias religiosas y actos de

exorcismos, como un arte sobrenatural, por lo que no estaba dispuestos a compartir

estos secretos.

Este no es el caso de los músicos de las iglesias. Ellos tocan en la iglesia no porque

sean una casta sacerdotal sino porque no hay más músicos. Usted sabe que los

músicos son una especie en extinción, hay mucha necesidad de músicos y que sean

buenos.

En la dispensación de la Gracia que nos ha tocado vivir, todos los creyentes somos

sacerdotes, ya no hay ni debe haber castas en el pueblo de Dios, a pesar de que en el

carismatismo es muy marcada la diferencia entre el clero y el laicado, creemos que es

incorrecto, atienta contra la dignidad del creyente en Cristo y resulta una postura

alienable para el pueblo de Dios.

En la iglesia cada creyente debería ser un ministro de Cristo, es decir un servidor de

Cristo. De aquí que reclamar para sí un título como “Levitas” es ignorar las Escrituras,

forzar su interpretación y fomentar la división dentro del cuerpo de Cristo. Existe

abundante literatura en la que enfatizan que ellos, los músicos, son los Levitas, y por

ende, una clase muy especial para Dios. Oigamos a Marcos Witt:

“Y, ¿porqué estaré pasando tanto tiempo hablando a cerca de los levitas?

Por una sencilla razón:... En este fresco mover del Espíritu en los últimos

años, en la A.A. se ha comparado en muchas ocasiones a los músicos de

hoy con los levitas del Antiguo Testamento...Nuestro sacerdocio es de

muchísima más responsabilidad que el de los levitas...”. (14)

Sin embargo existen algunas cosas de los levitas que sí les haría bien imitar:

Eran 288 voces del Coro, no un Grupo de Alabanza.

La orquesta se componía de 4,000 músicos.

Estudiaban 10 años música para poder ingresar a la orquesta u coro.

Empezaban a ministrar a los 30 años de edad.

Sobresalen como Directores Asaf, Jedutúm y Hemán. (1 Cron. 23,25)

6.- LA A.A. ES LA UNICA FORMA CORRECTA DE ALABAR α DIOS.-

Ha sido tan aplastante la moda de A.A. que niegan, se burlan, ridiculizan, otras

formas de liturgia, reclamando ellos su propia autenticidad como única y verdadera.

Vea usted la forma irónica en la que Witt se refiere a otros tipos de liturgia, diferentes

a la de él, tomando como pretexto el paso del Mar Rojo del pueblo de Israel:

14. Witt, Marcos en “¿Qué hacemos con estos músicos?, Editorial BETANIA, 1991, p. 81.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 14

“Delante de los ojos de todo el pueblo, Dios cerró las paredes de

agua en el mar y sepultó al faraón con todo su ejército... ¿Se puede

imaginar lo que sintieron todos, de repente? Me imagino que por unos tres

minutos hubo un silencio total de incredulidad, seguido por un sonido

insoportable de regocijo, celebración y gritos de júbilo. Podemos creer que

hubiera sido muy similar a los ‘estruendos de muchas aguas’ que escuchó

Juan en el cielo.

Ahora bien, ¿cómo cree que Moisés reaccionó? Debe haber subido

sobre una roca grande, levantado la vara para callar a todo mundo y haber

dicho: ‘Hermanos, con ese mismo espíritu de regocijo, cantemos al Señor

por esta gran victoria. Abran sus himnarios en la página número 233 y

cantemos juntos en la primera y tercera estrofa, ¿Listos?’

Discúlpeme, pero no creo que fuera así. Al contrario. Creo que

Moisés, junto con el pueblo, estuvo gritando de gozo...” (15)

No sé si recuerde los mensajes de Jimmy Suagar en su época de éxito: “Si su iglesia

está muerta, sálgase de ella”, etc. Estas posturas representan una falta de respeto para

los demás e indican una mente estrecha e intolerante. Transcribo aquí algunos

fragmentos de mi libro de “Música y Teología”:

“Ninguna forma, estilo o tipo de música es más o menos importante que

otra...

Decir que mi música, o mi forma de alabanza, o mi estilo de música, o

ritmo de música, es mejor que otra, significa ignorancia y falta de comprensión

a la gran riqueza y variedad que nos ofrece la misma música...

Tratar de imponer una determinada forma de música, es falta de ética y

principios de autoritarismo, que sólo pueden llevar al chantaje, manipulación y

coerción. Roma mostró su despotismo por 1,000 años, incluyendo la música,

con lo que sumió al mundo en la más cruel oscuridad. Después de 2,000 años

de historia cristiana, deberíamos aprender a respetarnos y a entender que no

todos son “como yo soy”, y que no todos “cantan como yo canto”. Que si una

iglesia no tiene la misma forma de culto que la mía, no significa que sean

mejores o perores, por el simple hecho de ser diferentes...

Que la calidad buena o mala de la música, no determina la espiritualidad

del adorador, o que por estar a la moda sea una señal de buen cristianismo...

Que Dios se agrada de la música y adoración autóctona, sin importar el

lugar o procedencia del adorador, pues El no hace acepción de personas, por

lo que no estamos obligados a importar modelos estereotipados de música

que nada tienen que ver con nuestro contexto, geografía, cultura y realidad

social...

Donde sobrevive el más fuerte y oprimimos al débil, cuando millones y

millones mueren sin Dios y sin esperanza, debiéramos alzar la voz, cuando la

verdad y doctrina se están diluyendo por los fuertes vientos de apostasía al

final del período de la Gracia y del retorno de nuestro Salvador”... (16)

15. Witt, Marcos en “Adoremos, p. 213, 214. 16. Jiménez, Joel en “Música y Teología”, INAIT, 1998, p. 18-20.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 15

Por lo tanto se hacen necesarias dos observaciones:

1º.- No cuestionamos la A.A. del carismatismo por ser diferentes a nosotros, o porque

no nos guste su estilo de música, o porque creamos que es de deficiente calidad

artística. No, sino que creemos que no se ajusta a la Palabra de Dios, que niega los

principios eternos y pervierte la sana doctrina.

2º.- La A.A. que ha implantado el carismatismo es una música “agringada”,

“americanizada” que no representa el sentir del pueblo mexicano y no porque sea

“estadounidense” signifique que es la mejor. Tal vez aún padezcamos el síndrome de

conquistados y no de conquistadores.

Es interesante la descripción que hace de la cultura latina el Dr. Juan A. Mckay,

interesante por venir no de un sociólogo o antropólogo, sino de un teólogo, entre la

larga lista de características, una de ellas es que somos:

“Una raza eternamente virgen.

Se le puede conquistar. Cuando otro ideal suficientemente arda en

sus almas, nuevamente se les hallará con toda su potencia y esplendor...

Se convierte en un juguete de los bajos apetitos del placer. Vive para

los impulsos inferiores del momento.

Como decía Unamuno: “EL pan, y la corrida de toros, y mañana será

otro día. Cuando podamos, saquemos el mejor partido del mal año.

Después de eso... ¡bah! Nada importa”. (17)

Si esto es cierto, entonces somos una raza 100 % vulnerables, fáciles de dominar. Witt

y compañía han sabido explotar esta debilidad nuestra.

El mexicano es muy peculiar en este aspecto. ¿Qué es lo que nos hace diferentes a los

norteamericanos? Algunos piensan que las diferencias son económicas, o de

democracia, de capitalismo, de industrialización, etc. Sin embargo, Octavio Paz,

célebre poeta mexicano va más allá al señalar que en Estados Unidos tienen una

sociedad que quiere realizar sus ideales, que no desea cambiarlos por otros y que, por

más amenazador que le parezca el futuro, tienen confianza en la supervivencia. Para

los mexicanos un realista siempre es un pesimista. Por eso mismo el mexicano rinde

culto a la muerte, que para él significa un culto a la vida; ahorra todo el año para

gastarse todo su dinero en la fiesta del “santo patrono”, no porque sea fiestero, sino

porque es la única forma de mitigar su miseria. (18)

Incluyendo a los mexicanos que radican en Estados Unidos, dice Paz, que tenemos

problemas de origen y raza, sentimientos de inferioridad y de soledad. El mexicano es

una contradicción, quiere pero no puede.

17. Juan A. McKay en “El Otro Cristo Español”. 18. Octavio Paz en el “Laberinto de la Soledad”.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 16

Aquí otra lista comparativa que hace Octavio Paz: (19)

Norteamericano Mexicano

Crédulo. Creyente.

Aman los cuentos e historias de Adas. Aman los mitos y las leyendas.

No miente, sustituye la verdad verdadera por la Mienten por fantasía, desesperación y

verdad social. desgracia.

Se emborracha para olvidarse. Se emborracha para confesarse.

Es optimista. Es nihilista.

Es abierto. Es desconfiado.

Alegres y humoristas. Tristes y sarcásticos

Quiere aprender. Quiere contemplar.

Activos. Quietos, muy quietos.

Disfrutan sus inventos. Disfrutan sus llagas.

Creen en la higiene, en la salud, el trabajo y la Creen en la alegría de una noche de

embriaguez.

felicidad.

Creen que el mundo es algo que se puede perfeccionar. Creen que el mundo es algo que se

puede redimir.

Modernos. Puritanos.

Indiferentes a lo religioso. Religiosidad profunda.

Abundancia y prosperidad. Inmensa miseria y desamparo.

Tienen el “sueño americano”. No tienen ningún sueño.

Gran parte de la problemática de nuestra liturgia se debe precisamente a nuestras

raíces culturales. Otro teólogo, Miguel Angel Darino, hace la siguiente reflexión:

“El conquistador y el fraile fueron dos personajes dispares pero se unieron

en el común afán de conquista... La espada y la cruz estuvieron asociadas para

someter a los indios. En la mentalidad latinoamericana quedó marcada a fuego

el ‘te arrodillas ante la cruz o te mato con la espada’...

Se impuso un catolicismo que se afincó como institución y que generó una

angustiante situación de cultura dependiente. Allí nace el criterio de la Iglesia

Católica Romana de pretender ser la dueña de la fe única y verdadera de la

América Latina...

Con la inmigración europea llega el protestantismo... en su mayoría

Luteranos, Anglicanos y Valdenses... Pero pretender ser alguien que responde

a la fe cristiana de manera diferente a lo tradicional, tan defendido e impuesto

con el correr de los años, fue marginarse de la corriente normal para

pertenecer a lo que llamamos sub-cultura evangélica...

Un aspecto resultante de la alienación entre la vida y práctica religiosa es,

precisamente, la ausencia de expresión de lo autóctono en los cultos hispanos.

En su gran mayoría muestran fuertes tendencias extranjeras...

Reconocemos que necesitamos apuntar hacia una renovación en el culto y

hacia expresiones que tengan un significado más autóctono y cultural y por

ende más auténtico”. (20)

19. Paz, Ibid, 20. Darino, Miguel Angel en “La Adoración, Primera Prioridad”, CBP, p.16-21.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 17

7.- NO IMPORTA LA LITURGIA Y EL RITUAL.

Si usted ha asistido alguna ocasión a un culto carismático, habrá notado algunas

características muy singulares en contraste a los cultos de otras iglesias. Al momento

de iniciar, un grupo de músicos y cantantes aparecen en el escenario, el famoso “grupo

de alabanza”, y empiezan a entonar melodías muy rítmicas y pegajosas, contorneando

todo el cuerpo, a un volumen estridente, repitiendo la misma canción varias veces,

continuando coro tras coro sin hacer ningún descanso.

Así lo hacen por un tiempo mínimo de una hora, donde todo el público permanece de

pie, terminando empapados en sudor, -la mayoría de veces- después de tanto brincar,

saltar y danzar. ¡Esto es “alabanza” según ellos! A la que le dedican en promedio del 70

% del tiempo que permanecen en la reunión

Inmediatamente después le bajan la velocidad al ritmo de las canciones, para entrar a

la “adoración”, ahora dedicándole menor tiempo, pues ya están cansados de tanta

“alabanza”.

No hay programa de culto, no se le dedica tiempo a la oración, a la lectura de la Biblia,

al preludio, etc. Aunque lo que no se les olvida son las ofrendas, pero de ahí en fuera

hasta la predicación puede suspenderse para darle lugar al canto. Esto significa una

ausencia total de liturgia y ritual, o bien, sería una liturgia de cantar, cantar, cantar y

cantar.

Los coros que se entonan no tienen nada que ver con el mensaje de dicho culto, pues

como decíamos anteriormente, la A.A. ha ignorado u omitido cualquier otro tema, sólo

hallará letras de coros que hablen de que Dios es bello, bonito, hermoso, que nos ama,

le amamos, que debemos levantar las manos, danzar, etc. Sin importar el título de la

predicación siempre escuchará las mismas canciones, las que están de moda, o las de

la última grabación “en vivo” de Marcos Barrientos, Marcos Witt, etc. etc.

Al no haber programa, tampoco existe un director de culto o de programa, la gente ya

sabe que corito sigue después de otro. Algún líder despistado incluirá algún himno

tradicional, pero generalmente los himnos ni los conocen. Es raro ver un himnario.

Α pesar de que a todo esto ellos le llaman la “restauración de la iglesia”, creemos que

es una forma irresponsable de realizar los cultos cristianos, pues desde el punto de

vista histórico, el culto tiene sus orígenes en la sinagoga desde los tiempos de la

Diáspora, en el 586 a.c. cuando los judíos fueron llevados a Babilonia, cautivos por el

Rey Nabucodonosor, en donde no tenían templo y sintiendo la necesidad de adorar a

Dios se empezaron a reunir en salones o “capillas”.

Los primeros cristianos toman el mismo modelo del culto de la sinagoga, añadiéndole

los elementos cristianos, pero sin perder de vista la reverencia, la lectura de las

Escrituras, la oración, etc.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 18

Es hermoso saber que Jesús asistía al culto de la sinagoga. Fue en una de estas

ocasiones que El leyó el pasaje de Isaías: “El Espíritu del Señor está sobre mi, por

cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres...” (Lc.4:18-19). Igualmente

el apóstol Pablo acudía primeramente a la Sinagoga, durante sus viajes misioneros,

antes de predicar a los gentiles.

Esto nos indica, que cada una de las partes del culto tiene un porqué, una razón de

ser. Por eso se le llama Liturgia y Ritual. Una manera fácil de entender es: Ritual es

todo “lo que se hace” en el culto, Liturgia es “lo que se dice” en el ritual, y que aunque

son términos que a muchos no les gustan, no lo inventamos nosotros, sino que es la

forma en que la iglesia cristiana por 2000 años le ha llamado a todo lo que se hace y

dice en el culto.

Es por ello que el concepto carismático de A.A. choca con el sentido de las Escrituras,

diremos que es totalmente contrario a la Biblia. “El llamado no es tanto: Sonríe, Dios te

ama, como ¡Arrepiéntete, llora y tiembla! Por la razón exacta que se dio: El amor

expresado en la cruz, en el sufrimiento y victoria de Cristo, no es un concepto

insignificante ni un sentimiento débil. Solo se puede celebrar con reverencia y

maravilla”. (21)

“Mucho de lo que pasa por ‘alabanza’ cristiana moderna, no obstante, lleva consigo

todas las señales de lo efímero y frívolo; parece destinado a pasar al olvido, cuando

énfasis nuevos vayan ocupando su lugar”. (22)

“Acompáñenos en la adoración, ¡usted se sentirá mejor! Proclama el tablero de avisos

de una iglesia”. (23)

“La adoración comprende una actividad emprendida no para satisfacer las necesidades

del adorador, ni para hacer que se sienta mucho mejor como consecuencia directa, ni

para ministrar a su gusto estético ni bienestar social. Todas éstas nociones han

penetrado al entendimiento moderno de la adoración y han tendido en grados variados

a corromperla”. (24)

La A.A. ha hecho del culto cristiano un espectáculo, un show, un verdadero

entretenimiento, y a veces un circo, donde la gente pasa un buen rato, se divierte a lo

lindo y salen muy motivados. Por eso debemos señalar que “la adoración, si se hace

como reacción a cualquier cosa diferente del misterio de Dios en Cristo, es idolatría”.

(25)

21. Martin, Ralph P. “Teología de la Adoración”, Editorial VIDA, p. 12.

22. Ibid, p. 71. 23. Ibid, p. 202.

24. Ibid, p. 219, 220.

25. Neuhaus, J.R. “Freedom”, p. 122.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 19

8.- LO MAS IMPORTANTE SON LAS EMOCIONES.- (Que el adorador se sienta a gusto)

La A.A. ha hecho del culto cristiano un juego de emociones peligrosísimo, en donde el

chantaje, la manipulación, la coerción, la presión, la represión, etc. son una constante

invariable. Hemos oído decir al que dirige la “alabanza”: “el que no danza no está lleno

del Espíritu Santo”, “si no levantas tus manos tienes ataduras”, etc.

Para ellos lo más importante es que la gente asista a sus reuniones, de ahí que existen

iglesias que deben tener una cartelera atractiva permanente, porque si no hay un

cantante famoso, o un orador reconocido, o una buena película, etc. la gente no asiste.

Ellos insisten en que lo más importante es que uno se goce, que viene a ser sinónimo

de “emociónate”, por lo que parecen “revolucionados”, “hiperactivos”. Esto es lo que

dice Marcos Witt:

“El sionista es fiestero. Tiene ambiente. Sabe gozar... es escandaloso.

Cada vez que usted y yo levantamos nuestras manos y nuestra voz para

aclamar y bendecier el nombre de nuestro Señor, en ese lugar estamos

construyendo un Sion... un lugar donde El pueda descender en toda Su

gloria sobre nosotros y traernos todas las cosas... pan, vino, aceite,

prosperidad, frescura y liberación”. (26)

¡Qué rara hermenéutica! Según Witt el verdadero “adorador” es un sionista, el sionista

es escandaloso y con su escándalo logra obtener todas las cosas.

Las emociones, al igual que las drogas y todo lo que tenga que ver con sensaciones

que el cuerpo experimente, cada vez se necesita mayor dosis. Prueba de ello es que el

carismatismo ahora promueve la “Risa Santa” y la “Borrachera Espiritual”. En un futuro

cuando esto ya no les satisfaga seguramente inventarán otras modas, más locas aún.

Para el carismatismo todas las demás iglesias han llegado a la atrofia espiritual, pero

ellos se han colocado en el otro extremo, en el mundo de lo subjetivo, de lo emotivo y

lo metafísico. En la práctica van más allá de lo imaginable: gritos, porras, danza,

remolineo, brincos, aplausos, patadas, tumbados o caídos, vomitados, ataques de

risa, borrachos espirituales, chicas cargadas en hombros jóvenes, baile en parejas,

etc. etc. Este énfasis en las emociones dan por resultado varios problemas que

analizaremos a continuación:

a).- Conversiones Psicológicas.-

Las conversiones psicológicas son abundantes, pero no genuinas. Si usted entra a

cualquier –-

26. Mitt, Marcos en “Adoremos”, Editorial BETANIA, p. 179, 184.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 20

reunión, cristiana o no, donde manejen las emociones a la perfección, usted será

vulnerable a cualquier cosa que le pidan que haga. Todo su ser estará enajenado.

Tendrá si, una experiencia; pero como resultado de las técnicas del orador, no

precisamente por el Espíritu de Dios.

Es sin lugar a dudas, triste y peligroso darse cuenta del cómo se puede manejar,

manipular, a la gente. De hecho, cualquier pastor, líder o director de culto, está

propenso a ello.

¿Sabía usted que cuando China impuso el comunismo a sus habitantes utilizó abierta y

deliberadamente las técnicas de algunos evangelistas? Coritos comunistas, testimonios

comunistas, predicaciones comunistas, llamamiento comunista y conversiones

comunistas. (27)

“Nuestras mentes están sujetas a ciertas leyes y por ello mismo,

hasta cierto punto, es posible manipularlas.

Si estoy en medio de una gran multitud, y me haces reír, luego llorar,

luego reír, luego llorar otra vez; si además repites ciertas frases con

insistencia y alternativamente me respondes y me consuelas; entonces, si

no estoy prevenido, mi mente se va poniendo como arcilla en tus manos.

Así llega el momento en que hagas lo que quieras conmigo. Mi juicio

está deteriorado, mi conciencia inflamada, mis emociones hacen que todo

me parezca diferente. Si en tales condiciones tomo la decisión que quieres

que tome, cualquiera que sea esa “decisión”, probablemente

experimentaré una sensación de alivio, gozo y paz.

Este es un fenómeno psicológico muy conocido. Las técnicas que lo

demuestran son igualmente conocidas. Y es probable que, aunque esté

prevenido, me resulte difícil sustraerme a la acción de éstas, por lo menos

temporalmente”. (28)

Muchos predicadores carismáticos, líderes de “alabanza” y famosos tele-evangelistas

son expertos en el uso de artimañas para hacer que un hombre cambie su manera de

pensar.

Estas “conversiones” como no son obras del Espíritu de Dios, sino de un lavado

cerebral, no pasan de ser emociones. “La verdadera conversión, en cambio, es algo

mucho más profundo. Tiene una dimensión no material, no psicológica. Produce más

que gozo y paz temporales. Hace que surja la bondad, el hambre y sed de rectitud, la

pobreza en espíritu, y todos los frutos de justicia.” (29) 27. Citado por John White en “Evangelización o lavado cerebral? Ediciones CERTEZA, p. 10.

28. Ibid, p.10-11. ¿Esto quiere decir que todas las técnicas son malas? No, no lo creo. Es imposible hacer cualquier cosa sin cierto

grado de técnica. Necesitamos técnicas para comunicar la verdad con claridad. Las técnicas se vuelven inmorales cuando 1).- Consciente o inconscientemente las usamos para intentar manejar la voluntad, las emociones o la conciencia de otro ser

humano. 2).- Cuando en nuestra mente se hacen más importantes que el Espíritu de Dios, y 3).- Cuando más que las personas

nos importan los resultados. 29. Ibid, p. 11.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 21

β).- Pierden la visión clara y objetiva del Evangelio de Dios.-

Estos “convertidos” rara vez llegan a tener una visión clara de lo que significa el

Evangelio. De lo que siempre les predican, de lo que siempre experimentan, es a cerca

de los demonios, de la “guerra espiritual”, del “rhema”, de la danza, de “confesar

positivamente”, etc. que llegan a creer que eso es la totalidad del evangelio, ah, y

mucha música.

Su teología, no sólo pobre, sino además equivocada, les hace creer que todas las

demás iglesias son iguales a ellos, como “el león que cree que todos son de su

condición”. Tal vez sean muy sinceros, pero están sinceramente equivocados, pues la

sinceridad no es sinónimo de verdadero.

Estos “creyentes” siempre están buscando espectacularidad, multitudes,

“avivamientos”, “mover del espíritu”, señales inequívocas de una profunda pobreza

espiritual. Cuando no encuentran eso que les atrae, simplemente se cambian de

iglesia, y así vemos un fenómeno de “rotación de miembros”, que afecta no sólo a las

iglesias carismáticas, sino a todas en general, cristianos que nunca encuentran la

iglesia perfecta, y que si la encontraran, con su llegada, dejaría de serlo.

“Hay un cierto peligro exactamente tan grande hoy como en los tiempos de Pablo, de

producir un cristianismo sin cruz, cuyo halagador atractivo crea fans, pero no

discípulos”. (30) “La escena del Evangelio pop, es hoy una industria poderosa,

multiforme, atractivamente empaquetada y fuertemente promovida. Pero cuando la

música deja de sonar, el aplauso de desvanece, las luces se apagan, el dinero se

cuenta y el espectáculo se traslada, lo que queda es sólo una fracción microscópica de

lo que parecía ser”. (31)

Hay una parte negativa del carismatismo que hasta aquí no hemos señalado: los

cientos y miles de personas que habiéndose dado cuenta de que habían sido

engañados se han apartado de Dios, de todo lo que se parezca a cristianismo, en

abierta oposición a la Palabra de Dios. Evidentemente nunca entendieron lo que

significaba “Buscar el Reino de Dios y su Justicia”. El concepto que les dieron del

evangelio era muy distorsionado y en su intento de regresar al mundo de la

normalidad creyeron que lo mejor era renunciar a cualquier forma de religión.

“Como el Espíritu Santo no obró en la persona, entonces no nació de nuevo. Su “fe” no

fue la fe salvadora. Tenían una falsa esperanza. Posteriormente reaccionan contra su

“conversión”. Su “resistencia a que le vendan” va a aumentar en alto grado como

resistencia al evangelio. Hay por todo el mundo muchísima gente que está en una

actitud doblemente adversa al evangelio porque han pasado por una experiencia

espuria de conversión”. (32) 30. Pau Basset en 31. Blanchard, J. Ibid.

32. John White, Ibid, p. 17.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 22

9.- LA A.A. ES SEÑAL DE LA “RESTAURACION DE LA IGLESIA”.-

En el aspecto externo o visible del cambio de liturgia, cuando una iglesia ingresa al

carismatismo, adoptan la A.A. renunciando a los himnos tradicionales. Sin embargo no

se trata de un simple cambio de forma o costumbre, sino de una manipulación

grotesca que ellos han hecho creer a muchos incautos, que al aceptar la A.A., además

de estar a la moda, representaba que ya estaban “restaurados”.

Primero.- Aceptar eso de “restauración” significa aceptar que la iglesia está en ruinas,

o en desgracia, o en abandono. Si bien es cierto que hay muchas cosas en la iglesia

que necesitan arreglarse, tales como métodos, estrategias, organización, programas,

etc. esto no se aplica a la doctrina, porque la A.A. atienta no contra la forma

únicamente, sino contra la doctrina, la teología, la ideología, e incluso a la cosmovisión

en su conjunto.

En otras palabras, el que acepta la A.A. no solo cambia la forma, sino la esencia. Toda

su mentalidad, su forma de pensar y entender la vida, es trastornada; que si fuera

buena y agradable a Dios, no habría problema. Lamentablemente no es así, la realidad

carismática es metafísica, subjetiva, ajena a las Escrituras.

No es correcto que por estar a la moda una iglesia sacrifique su doctrina. La música

debe ser sierva de la Teología y no lo contrario.

Segundo.- Las supuestas “bases bíblicas” que ellos emplean para apoyar su doctrina

de “restauración” es resultado de una hermenéutica tendenciosa y con un método de

interpretación “alegórico” para lograr que el texto diga lo que ellos quieren que diga.

Basándose en Hebreos 12:22-23 ellos alegorizan el significado para postular que “el

Monte Sion es sinónimo de la Iglesia.

Esto es lo que dice el texto:

“Sino que os habéis acercado al monte de Sion, a la ciudad del Dios vivo, a

la ciudad del Dios vivo, Jerusalén la celestial, a la compañía de muchos

millares de ángeles, a la congregación de los primogénitos que están

inscritos en los cielos, a Dios el Juez de todos, a los espíritus de los justos

hechos perfectos”. (Hb. 12:22-24)

Esta es la interpretación que ellos le dan:

“El escritor a los Hebreos declara que el monte de Sion y la Iglesia del

primogénito son sinónimos.

No se puede disputar que todos estos términos hablan de la Iglesia, que es

un cuerpo; pero los escritores del Nuevo Testamento nos dicen que el

monte de Sion del Antiguo Testamento señala hacia la asamblea de los

Santos del Nuevo

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 23

Testamento. El monte de Sion del Antiguo Testamento señala hacia la

Iglesia del Nuevo Testamento.

Note lo que Dios tiene que decir acerca del Sion del Antiguo Testamento”. (33)

Preguntémonos ¿realmente enseña este texto que la Iglesia y el monte de Sion son

sinónimos? Ellos sacan el texto del contexto, desde el versículo 18, como lo explica

William Blarclay:

“Este pasaje es un contraste entre lo viejo y lo nuevo, entre la ley del Sinaí

y el nuevo pacto del que Jesús es mediador”. (34)

Este es el contexto:

“Porque no os habéis acercado al monte que se podía palpar, y que ardía

en fuego, a la oscuridad, a las tinieblas y a la tempestad, al sonido de la

trompeta, y a la voz que hablaba, la cual los que la oyeron rogaron que no

se les hablase más, porque no podían soportar lo que se ordenaba: Si aun

una bestia tocara el monte, será apedreada, o pasada con dardo; y tan

terrible era lo que se veía, que Moisés dijo: Estoy espantado y temblando;

sino os habéis acercado al...” (Hb. 12:18-21).

William Barclay titula a este pasaje “EL TERROR DE LO VIEJO Y LA GLORIA DE LO

NUEVO”, y continúa diciendo:

“En la entrega de la Ley en el monte Sinaí se subrayan tres cosas: 1).- La

absoluta majestad de Dios, 2).- La absoluta inaccesibilidad de Dios, y 3).-

El terror absoluto a Dios.

Luego en el versículo 22 viene algo diferente. La primera sección trata

todo lo que el hombre puede esperar bajo el antiguo pacto y la antigua

Ley; en ella no hay en Dios otra cosa que majestad solitaria, completa

separación del hombre y temor que postra.

Pero para el cristiano vino el nuevo pacto, una nueva relación con Dios. (A

partir del versículo 22), el autor de los Hebreos hace una especia de lista

de las nuevas glorias que el cristiano espera y a las que tiene acceso”. (35)

Por lo tanto, tomar este pasaje para alegorizar todos las referencias de Sión del

Antiguo Testamento a la Iglesia el Nuevo Testamento, es forzar la interpretación. El

texto de Hebreos enseña el contraste entre la Ley y la Gracia, así como sus ventajas de

esta última sobre la Ley.

Si usted lee la literatura carismática sobre la “restauración”, le van a decir que: “Ama

Jehová las puertas de Sion más que todas las moradas de Jacob” (Sal. 87: 2-3); que

“Jehová ha elegido a Sion” ( Sal. 132:13-17), y así por el estilo.

33. “Manual de Restauración” del Movimiento Carismático, p. 14. 34. Barclay, William en “Comentario del Nuevo Testamento”, Ediciones Aurora, Vol. 13, p. 191.

35. Ibid, p. 191-192.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 24

Luego le van a decir que hay 7 áreas para restaurar: (36)

Restauración de la verdad.- Jesús va a ser revelado a través de un proceso de

restauración.

Restauración de los ministerios.- Por eso la proliferación de apóstoles.

Restauración del pueblo.- La iglesia como los huesos secos de Ezquiel.

Restauración de la adoración.- Dios está edificando Sion y el Tabernáculo de David.

Restauración de caminos en qué caminar.- “Toda recreación, juego o comunión,

para los jóvenes y los ancianos, debe venir de la iglesia, bajo la cubierta de la

gloria de Dios y de la vara del pastor.

Restauración de los años.- Restauración de los años que han sido comidos por la

apostasía y falta de progreso.

Restauración del reino.- Tal como lo explicamos en las páginas 128-132.

También le van a enfatizar en la promesas de Dios de “Restauración” para luego

hacerle una lista de “restauraciones” a través de la historia empezando con Martín

Lutero. Esto es lo que dicen: (37)

Que Martín Lutero recibió la “revelación” de Justificación en 1517.

Que la “restauración” del bautismo en Agua fue en 1524 con los “anabaptistas”

después “bautistas”.

Que la “restauración de Santidad fue en 1738.

Que la “restauración” de la Sanidad fue en 1874.

Y que la “restauración” del Bautismo del Espíritu Santo fue en 1901 y 1906.

Si usted observa, en este punto coinciden con la “Nueva Era”. Morris Cerullo, Marcos

Witt, y compañía, siempre le van a hablar sobre la “nueva” revelación, la “nueva”

verdad, la “nueva” unción, el “nuevo” mover del Espíritu de Dios, la “nueva” visión, para

de esta manera destruir las bases sólidas de la fe. Todo es “nuevo”, Todo debe ser

“restaurado”. La Biblia simplemente va a ser un parapeto para que los cristianos sean

seducidos por el engaño, porque la Palabra de Dios dice enfáticamente que no

estamos en tiempos de restauración, sino en tiempos de Apostasía, en tiempos de

doctrinas de demonios, en tiempos peligrosos. (1 Tim. 4; 2 Tes. 2).

Tercero.- Porque la sustentación de la A.A. como la “señal” de “Restauración” para la

iglesia igualmente adolece de toda fundamentación bíblica. Ellos todavía tienen otros

ases debajo de la manga:

a).- Restauración del “Tabernáculo de David”.

Tomando como base Amós 9:11 que dice “En aquellos días yo levantaré el tabernáculo

caído de David...” ellos creen que la A.A. es el cumplimiento de dicha profecía. Esto es

lo que dicen:

“El Tabernáculo de David es un tema poco conocido... La razón es que Dios

ha reservado el entendimiento de este Tabernáculo para la iglesia de los

postreros días... 36. Manual de Restauración del Movimiento Carismático, p. 47-51

37. Ibid, p. 54-64.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 25

En Hechos 15 fue Jacobo quien, bajo la inspiración del Espíritu Santo,

decidió el asunto al abrir la profecía que se encuentra en Amós. Dios iba a

traer a los gentiles y levantar el tabernáculo de David. El aplica el

tabernáculo de David a la Iglesia. Así la Iglesia del Nuevo Testamento es el

tabernáculo del David reedificado”. (38)

No ha ce falta ser muy inteligente para descubrir que la reunión de los apóstoles en

Hechos 15, a la que se le conoce como el primer Concilio Ecuménico, no fue para

restaurar el Tabernáculo de David, sino para solucionar el problema de los judaizantes.

Por otro lado, decir que en 2000 años de cristianismo ningún teólogo descubrió este

secreto, sino que Dios se los ha revelado a ellos únicamente, es ser demasiado

presumidos.

Bueno, la cuestión es que cuando una iglesia adopta la A.A. restaura el tabernáculo de

David, pudiendo ahora sí, hacer cosas que antes, en 2000 años nadie había

descubierto, como “danzar” que es según ellos “adoración en un nivel muy alto y

siempre debe considerarse y tratarse así”. (39)

β).- La “Reconstrucción de Jerusalén” significa la “Restauración de la Iglesia”.

Siguiendo el mismo estilo de interpretación, ellos enseñan que todo lo que la Biblia en

el Antiguo Testamento menciona sobre la reconstrucción de Jerusalén, al regreso de la

cautividad de Babilonia, es para la Iglesia.

Mire usted qué ingenio e imaginación para torcer los textos sagrados:

El Texto dice: “Cuando Jehová hiciere volver la cautividad de Dios, seremos como los

que sueñan. Entonces nuestra boca se llenará de risa. Y nuestra lengua de alabanza;

entonces dirán entre las naciones: Grandes cosas ha hecho Jehová con éstos”. (Sal.

126:1-2). Esto quiere decir que la “Risa Santa”, es la “Restauración de la Iglesia”,

¿cómo ve?

Otros textos: Isa. 51:11; “Ciertamente volverán los redimidos de Jehová; volverán a

Sion cantando, y gozo perpetuo habrá sobre sus cabezas; tendrán gozo y alegría, y el

dolor y el gemido huirán”. Jer. 31:13.- “Entonces la virgen se alegrará en la danza, lo

jóvenes y los viejos juntamente...”

Esto es lo que ellos interpretan:

“En estos días Dios está volviendo la cautividad. Por eso, no es raro que

sean días de cánticos gozosos. Con grande visitación dio nacimiento a

muchos cantos nuevos con voz de gozo y alegría. Hoy en día lo mismo

está sucediendo. EL pueblo de Dios está comenzando a traer acción de

gracias a la casa del Señor...” (40) 38. Ibid, p. 123. 39. Ibid, p. 140. Además de la danza, otras cosas de esta “nueva” revelación incluyen los gritos de júbilo, aplausos, etc.

40. Ibid, p. 134.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 26

c).- El Tabernáculo de Moisés señala la “restauración de la iglesia”.

Aquí es donde les cuesta más trabajo, pero se las ingenian para decir que el

Tabernáculo que Moisés construyó en el desierto señala la “restauración de la iglesia”:

Esto es lo que enseñan:

“El Altar de Bronce fue restaurado en el tiempo de Martín Lutero,

cuando él recibió la verdad de la salvación...

Algunas iglesias están acampadas alrededor del Altar de Bronce; otras

alrededor del Lavacro... pero Dios quiere que nos movamos hasta la

plenitud de lo que él tiene para nosotros...

Dios está esperando hasta que todos los enemigos de Cristo sean

puestos bajo sus pies, el último enemigo que será destruido es la muerte.

Esto significa que habrá una generación de personas en los últimos

días, que romperá su cita con la muerte (Sal. 102:18). Este pueblo será un

pueblo, no solo suficientemente afortunado de estar vivo en su venida, sino

un pueblo que estará dispuesto a actuar en fe y responder en una manera

positiva a todo lo que Dios ha establecido. Será un pueblo de alabanza...

Dios nos ha dado la alabanza para pelear contra el enemigo...

Hay muchas iglesias que todavía no han tomado el fruto de esta

tierra... Por eso dondequiera que estemos, todavía necesitamos de mayor

revelación y visitación.

Hay ciertas claves para la visitación de Dios: La ALABANZA (que suelta

el poder y la presencia de Dios), la ORACION (para que El establezca Sion

como una alabanza en la tierra) y la UNIDAD (la revelación progresiva de la

A.A. será el instrumento usado para traer unidad al Cuerpo de Cristo)”. (41)

No le suena esto como a los “Testigos de Jehová”, que Jesús fue entronizado como Rey

en los cielos en 1914, que esta fecha determina el inicio del “reino”, etc.?

Sin embargo llama la atención varios postulados de este párrafo, como el hecho de

que ellos creen que serán capaces de romper su cita con la muerte, que responderán

de una manera positiva, que ellos ya han tomado el fruto de esta tierra, que la

revelación progresiva de la A.A. será el instrumento usado para traer unidad a la

iglesia. Por favor lea las páginas 128-132 de este estudio para el comentario a este

respecto.

Concluimos que pretender afirmar que la A.A. es una señal de la “Restauración de la

Iglesia”, es una verdadera patraña del carismatismo, que no tiene sustento bíblico, que

es una estrategia de Satanás para que las iglesias pierdan su identidad y sean

seducidas por el engaño.

41. Ibid, p. 149-153. En el caso de Marcos Witt, en su libro “Adoremos”, parte de estas premisas, que lo llevan a la conclusión

lógica de comparar a la iglesia con la “Restauración” de Sión, de Jerusalén, del Tabernáculo de David etc, metiéndose en

graves líos de interpretación bíblica, como el decir que el verdadero adorador es un Sionista, que la adoración tiene que ver

con los perros, etc. etc.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 27

10.- LA A.A. TRAE AVIVAMIENTO.-

Chuy Olivares, en una predicación con este tema “La A.A. trae Avivamiento” toma

como base bíblica los siguientes pasajes: (42)

Exodo 14:30,31. El paso del Mar Rojo.

1 Crón. 13 para probar que la alabanza magnífica trae a Jerusalén el Arca de

Jehová, entendiendo que el Arca es la presencia de Dios o Avivamiento.

2 Crón. 29 para establecer que la A.A. trajeron el avivamiento de Ezequías.

2 Crón. 5:12-14 para probar que la presencia de Dios se manifiesta en la plenitud

de su fuerza como respuesta a la alabanza, pues a la medida que el coro alzaba su

alabanza Dios se hizo presente por medio de su nube.

Sin embargo, Olivares no se da cuenta o no quiere darse cuenta, que el texto

contradice su tesis. Veamos pasaje por pasaje:

En Exodo 14 y 15, el cántico que entonó Moisés y el Pueblo de Israel no fue para

que Dios manifestara su presencia o poder. El pueblo y su líder Moisés cantaron a

Dios después de haber cruzado el Mar Rojo, llenos de gratitud, admiración y

regocijo. En otras palabras, la manifestación del poder de Dios causó la alabanza y

no a la inversa.

En 1 Crón. 13 indica claramente que David decidió traer el Arca a Jerusalén y pone

manos a la obra, no como resultado de un culto de alabanza. Fue el traslado del

Arca lo que provocó el gozo y la alegría tanto en David como en el pueblo.

En 2 Crón. 29 se establece claramente que la música y la alabanza (vv. 27-28) se

dan como consecuencia del arrepentimiento de Ezequías, del sacerdocio, del

pueblo y de la restauración del culto a Dios (vv. 5-24).

En 2 Crón. 5:12-14 si bien es cierto que la nube desciende cuando canta el coro,

Dios no está respondiendo a la alabanza, decide manifestar su presencia en el

momento de la alabanza para que el acto sea mucho más impactante; pero Dios

está respondiendo al Pacto establecido con David y con Salomón con anterioridad

(1 Crón. 17), en el sentido de que cuando Salomón terminara el templo, El pondría

su presencia allí y confirmaría el trono de David para siempre. El pueblo alaba

porque Dios ha hecho pacto con él y con el descenso de su presencia en el templo,

ese pacto queda confirmado. Además, el mismo contexto (2 Crón. 7:1-4) lo

vuelve a demostrar: Cuando Salomón concluye su larga oración de dedicación, otra

vez la presencia de Dios desciende de la misma manera, pero ahora ya no es en

medio de la “alabanza” o canto del coro. (43)

El verdadero avivamiento no es cantar más fuerte, o cantar los cantos de moda, o

tener un grupo de panderistas. “El verdadero avivamiento es el arrepentimiento de

nuestros pecados y la entrega a la obediencia de la voluntad de Dios” (44)

42. Olivares, Chuy en “La Alabanza trae avivamiento”, cinta grabada. 43. Comentario por Miqueas Bustos en “EL Movimiento de la FE en nuestro contexto”, p. 61, 62.

44. Ibid, p. 62.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 28

11.- LA A.A. REPRESENTA EL “MOVER DEL ESPIIRUT SANTO”.-

Es interesante saber que para ellos “El mover del Espíritu Santo” significa que una

iglesia debe tener visiones, rhemas, profecías, profetas, lenguas, danza, gritos de

júbilo, mucho volumen en su equipo de audio, panderistas, dones espectaculares, etc.

Lo contrario para ellos también es cierto. Una iglesia que no tenga eso está muerta, no

tiene el “Mover del Espíritu”; se le considera carnal, tradicionalista, apagada.

Recuerdo a una hermana neo-pentecostal que pidió oración para que su hija no se

casara con un joven de una iglesia bautista, pues “como ustedes saben, ellos no tienen

el mover del Espíritu”.

Los problemas que representa esta postura son:

a).- “Orgullo Espiritual”.-

El creer que ellos sí tienen el “Mover del Espíritu” y los otros no, los hace ser

arrogantes, presumidos, con un “orgullo espiritual” demasiado alto. Para ellos todos

los demás cristianos son de segunda categoría.

Es en la A.A. donde pueden presumir que tienen ese “Mover del Espíritu”. Con un dejo

de ironía y sarcasmo los hemos oído preguntar: ¿en tu iglesia cantan A.A. o aún no

han sido “restaurados”?

Un joven me decía: “En el mismo instante que el guitarrista le pone el ‘distor’ yo siento

la presencia de Dios”.

Lo absurdo es que cuando el “Grupo de Alabanza” les llega a fallar, ese “Mover del

Espíritu” también les falla. “La alabanza no estuvo buena”, se quejan.

β).- Tendencia a concentrarse doctrinalmente.-

Oigamos al Dr. Salatiel Palomino:

“Desde el punto de vista doctrinal, el neo-pentecostalismo

manifiesta una marcada tendencia a concentrarse casi exclusivamente en

la doctrina del Espíritu Santo. Más todavía, tiende a una concentración

específica en los elementos espectaculares de la manifestación del Espíritu

Santo. Al hacerlo así, se elimina una riquísima porción de la verdad bíblica

en torno a lo que es el evangelio. Porque no se trata, como en el caso de

otros movimientos religiosos a través de la historia de la iglesia, de un

énfasis peculiar y distintivo, “además de” las prácticas y creencias -

generales de la fe cristiana, sino de una real tendencia a reducirla a unas

pocas enseñanzas y prácticas.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 29

Ni siquiera se trata de una concentración en la enseñanza general

acerca del Espíritu Santo, sino que la práctica general del carismatismo

parece reducirse a los dones espirituales y aún en estos deja de lado o

menosprecia algunos que no son tan espectaculares, como la

administración, la enseñanza, el don de presidir, etc.

Parece haber en esta tendencia una búsqueda o afán por lo

portentoso o sobrenatural y no una búsqueda de Dios mismo. Se buscan

los dones por sí mismos, pero no al Señor de los dones, lo cual exhibe ya

una comprensión inadecuada del evangelio”. (45)

c).- Tendencia a experimentar lo divino en forma directa.-

Oigamos una vez más al Dr. Palomino:

“Esta tendencia a exaltar lo sobrenatural y procurar una experiencia

viva y trepidante del poder divino, coloca al carismatismo al lado de otras

religiones que manifiestan la misma tendencia... llamadas religiones de

‘epifanía’... que significa ‘aparición’ o ‘manifestación’ y se emplea en este

contexto para clasificar aquellos intentos religiosos que tratan de lograr

una aparición evidente de lo divino con todas sus consecuencias

portentosas, sobrenaturales, milagrosas.

Es decir, estas religiones tratan de hacer que se haga presente, que

se revela y que demuestre su carácter divino por medio de alguna

exhibición de su poder, ya que los dioses –en el paganismo- debían

mostrarse dioses precisamente por sus acciones maravillosas que

asombran, sobrecogen y avasallan al adorador”. (46)

En contraposición a esto, el cristianismo es una religión de “mediación”, donde el

hombre debe descubrir y reconocer a Dios a través de Jesucristo (Jn. 14:9), pues a

Dios ninguno de los hombres ha visto ni puede ver, ya que habita en luz inaccesible.

(Jn. 1:18; 1 Tim. 6:16).

d).- Tendencia a transforma el culto en técnica mística.-

“Mucho de o que se da en el culto carismático, a pesar de su

exaltado entusiasmo y de las frecuentes exclamaciones adoratorias, en

realidad su punto de concentración se halla no en Dios, sino en el hombre.

El último fin de estas reuniones no es que Dios sea ensalzado, sino

que los hombres experimenten en formar ostensiblemente la presencia del

poder divino. Se procura que los asistentes ‘reciban’ el Espíritu Santo o

alguna manifestación poderosa de Dios, ya sea el hablar en lenguas, la

sanidad corporal, una revelación divina, etc.

45. Palomino, Salatiel en “El Movimiento Carismático, una confrontación crítica”, Colección Teólogos Protestantes de México

No. 1. Publicaciones EL FARO, p. 37-39.

46. Ibid, p. 39-41.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 30

En todo esto se advierte que la finalidad parece ser,

indefectiblemente, el beneficio espiritual, físico o emocional del creyente.

Este carácter antropocéntrico, que desplaza el carácter teocéntrico del

culto tal como se enseña en las Escrituras, entraña una distorsión

importante de la adoración evangélica.

El culto así ha llegado a ser un ejercicio o una calistecnia religiosa

que pretende inducir determinadas sensaciones, emociones o estados

mentales y psicológicos que derivan hacia experiencias de orden místico,

formas de éxtasis o arrobamiento contemplativo en que el ser humano

suspende sus funciones conscientes y racionales, y es inundado por una

emoción enorme y fuertemente avasalladora, volcánica, trepidante, que

una vez concluida deja una agradable e inolvidable sensación de paz y

plenitud que anhela vivir nuevamente.

Toda esta experiencia, sin duda, es grata y hermosa, pero es, a todas

luces, una búsqueda de gratificación personal más que una entrega

sacrificada al Señor. Produce enorme placer, pero a costa de desplazar el

culto “agradable a Dios” por la experiencia ‘agradable a nuestros sentidos’.

En todo este modelo litúrgico hay un paralelo con las acciones

cultuales de otras religiones que pretenden tener acceso a poderes

espirituales que, por medio de técnicas adecuadas, son controlados y

puestos en servicio a favor de los adoradores.

Lo divino queda entonces conceptuado como un enorme poder pero

que es manipulable, útil, que puede canalizarse en beneficio nuestro. La

magia, la hechicería, las prácticas espiritistas y el ocultismo en general

pertenecen a este ámbito.

La historia carismática está llena de ejemplos en que se ha llegado a

extremos superticiosos y aún a prácticas que rayan en el límite sutil que

separa a lo espiritualmente sano de lo que es nocivo y aún contrario a la

Palabra de Dios y al culto verdadero que El demanda por sí solo”. (47)

e).- Tendencia a pasar por alto los aspectos morales del evangelio.

Aunque este asunto ya lo tratamos en el penúltimo párrafo de la página 135 de este

estudio, añadamos aquí el comentario del Dr. Palomino:

“Se corre el riesgo de caer en errores de orden moral, cuando

algunas tendencias pecaminosas humanas quedan encubiertas bajo el velo

de un emocionalismo exagerado o de un pietismo falso o superficial...

Por supuesto que muchas de estas predisposiciones no son

conscientes; es decir, no se pretende ser intencionalmente inmoral; lo que

sucede, sin embargo, es que en algunas ocasiones no se perciben las

consecuencias éticamente erróneas de algunas ideas, decisiones o

actitudes asumidas por las personas bajo el influjo de una emoción

intensa. 47. Ibid, p. 41-46

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 31

La intensificación de una emoción o de un estado mental

permanente, especialmente de orden religioso, pueden bloquear la

capacidad de raciocinio crítico. Esto explica por qué pueden olvidarse los

requerimiento éticos del evangelio en algunas formas de neo-

pentecostalismo o en algunos tipos de personalidad”. (48)

Esto fue precisamente lo que le pasó a la Iglesia de Corinto, que tenía digamos ese

“Mover del Espíritu”, resultó ser la más carnal del Nuevo Testamento. (49)

12.- LA A.A. LIBERA Y TRANSFORMA AL HOMBRE.-

Es probable que usted ya haya escuchado ese slogan del “poder de la alabanza”. Α los

carismáticos realmente les encanta predicar sobre el “poder de la alabanza”, que

terminan por exaltar más a la “alabanza” que al Dios a quien dicen alabar. Bajo esta

premisa hay otra falacia que nos han hecho creer, que la A.A. libera y transforma al

hombre.

Obviamente el caso que les gusta citar es al Rey Saúl cuando era atormentado por el

espíritu malo, David tocaba su arpa y era liberado.

Jorge Lozano utiliza el caso de la unción de Saúl (1 Sm. 10) para darle base bíblica a

este concepto al afirmar que fue la música y la alabanza en la compañía de los

profetas lo que causó que el poder de Dios transformara a Saúl en otro hombre. Al

respecto tenemos que decir:

a).- Dios no está enviando su poder transformador como una respuesta a la alabanza

de los profetas.

β).- La alabanza entre los profetas tenía como objeto sensibilizarlos y prepararlos a

ellos para escuchar mejor la voz de Dios.

c).- Dios bendice a Saúl como respuesta a la promesa hecha por Dios a Saúl por medio

del profeta Samuel.

d).- Cuando el espíritu malo se iba de la vida de Saúl, la música era el instrumento

que Dios le placía usar, pero no era la música sino el poder de Dios el que lo liberaba.

48. Ibid, p. 47-48.

49. En Corinto tenían fuertes rivalidades (1 Cor. 1:11, 12; 3:3,4); extremos casos de relaciones incestuosas que ellos toleraban (1

Cor. 5:1,2); fuerte tendencia a la fornicación (1 Cor. 6:12,17; al libertinaje ( 1 Cor. 6:12,13), a los fraudes económicos y sus consecuentes litigios judiciales y escandalosos (1 Cor. 6:1-11), falta de decoro femenino en el culto (1 Cor. 11:5,6);

menosprecio y discriminación hacia los más pobres ( 1Cor. 11:22); borracheras en la celebración de la Santa Cena (1 Cor.

11:21). Α pesar de su notoria inmoralidad eran muy religiosos y entusiastas ( 1 Cor. 12 y 14) Había los super-espirituales que hasta rechazaban las relaciones sexuales entre los esposos y consideraban que debían aún concluir su experiencia conyugal y

matrimonial ( 1 Cor. 7:3-5, 10, 11).

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 32

e).- Lo mismo se puede decir de Josué en la conquista de Jericó, fue el poder de Dios

que derribó la muralla, no los gritos o la música.

“Creer que el hombre es transformado y liberado por medio de la “alabanza” es creer

que el hombre tiene la capacidad para cambiarse así mismo”. (50)

En resumen, creemos firmemente que quien libera y transforma al hombre es Dios, y

que El usa cualquier medio, la música puede ser uno de estos medios, pero no el

único, porque cerrarnos a creer que sea el único sería ignorar o negar otros tan

importantes como la oración, la predicación, etc.

13.- LA A.A. ES LA PANACEA PARA TODOS LOS MALES HABIDOS Y POR HABER.-

Uno de los primeros libros carismáticos que llegaron a México en la década de los

70’s, ya traducidos al español, fue el de Don Gossett, titulado “AVENIDA ALABANZA”,

publicado por Editorial VIDA, por lo que suponíamos en aquellos años que debería ser

bueno. El prefacio escrito por Andraé Crouch, autor de “MI tributo”, un bello himno de

aquella época, le daba cierta respetabilidad, penetrando rápidamente en miles de

iglesias evangélicas de México.

La tesis que presentaban era muy seductiva, podemos resumirla así: “No importa la

situación o problema que estés viviendo, simplemente alaba –canta- y todos tus

problemas se arreglarán”. Todo el libro contiene una serie de testimonios en los que

supuestamente las personas que “alabaron” se les resolvieron sus líos.

Si usted compara el libro de “Avenida Alabanza” de Don Gossett de hace 30 años con

el de “Adoremos” de Marcos Witt se dará cuenta que es prácticamente lo mismo, hasta

el estilo de redacción; aunque el libro de Gossett que más daño ha hecho en México es

otro que se titula “Lo que Dices Recibes”.

Regresando al de “Avenida Alabanza” el autor invita a todos a rentar una casa en la

avenida “Alabanza” porque no se puede comprar una propiedad; y solo se puede

permanecer allí mientras se mantenga en “alabanza”. (51)

Esto es algo de lo que dice Don Gossett:

“¡No tengas pánico, Alaba!

El temor puede ser derrotado por medio de la alabanza.

Si solamente alabáramos a Dios y nos mantuviéramos felices en Jesús, él

nos traería todas las bendiciones que necesitamos”.

50. Bustos, Miqueas, Ibid. 51. Gossett, Don en “Avenida Alabanza”, Editorial VIDA, 1978, p. 31.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 33

Aún recuerdo a cientos de pastores que empezaron a predicar “todo lo que tienes que

hacer es alabar”, “la alabanza tiene poder”, “la alabanza es la solución a tus

problemas”. En congresos, convenciones esta era la nueva mística de los cristianos.

Era el inicio del carismatismo en México. Lo que a estos pastores nunca se les ocurrió

investigar era si realmente la Biblia enseñaba esos postulados novedosos.

Lo que nunca se imaginaban era que estaban predicando un paganismo disfrazado de

cristianismo. Como ya lo hemos señalado anteriormente, Kenyon, el padre ideológico

del carismatismo, tomó conceptos de otras religiones y les puso terminología

cristiana.

Esta falacia es otra prueba de ello. Creer que la “alabanza” o “cantar” es la solución

para todos los males habidos y por haber, tiene su origen en el “Nirvana” del

Hinduísmo.

El “Nirvana” es el grado máximo de espiritualidad en el Hinduísmo, alcanzado a través

de la meditación hasta llegar a un estado de éxtasis en la que se supone traspasa las

barreras de las limitaciones físicas, entrando a un nivel que solo los iluminados

pueden obtener, y que es la solución a todos los males de esta vida.

Estos conceptos tan halagadores, utópicos en la vida real, son ajenos a las Escrituras.

No hay un solo versículo en la Biblia que enseñe tal cosa, al menos que se tuerza su

interpretación.

Por otro lado, “permanecer felices en Jesús”, significa poner la carreta delante de los

caballos. Es decir, la enseñanza de Jesús en las Bienaventuranzas es la antítesis de las

creencias carismáticas. Comparémoslas por unos momentos.

La A.A. propone que si tu “alabas” o “cantas” como resultado serás liberado, obtendrás

avivamiento, resolverás tus problemas, serás feliz, etc.

Jesús enseña en el Sermón del Monte que un cristiano no debe hacer algo para ser

feliz, sino al revés, en este caso cantaríamos porque ya somos felices, no para ser

felices. Esto es como el Bautismo en Agua. Una persona no se debe bautizar para ser

salvo, sino que se bautiza porque ya es salvo. ¿Qué pasaría si ocurre lo contrario? ¿qué

pasaría si alguien se bautizara sin ser salvo?. Bueno, sólo sería un diablo remojado.

Entonces la enseñanza carismática de la A.A. es totalmente pagana, decir que “alaba y

obtendrás lo que quieras”, “alaba y todo se arreglará”, es un enfoque 100 % egoísta .

Si le preguntáramos a la gente ¿quiénes son realmente felices? Nos darían respuestas

tales como:

Felices los que tienen mucho dinero.

Felices los que tienen poder o influencia, prestigio, fama.

Felices los que son guapos o guapas; los feos ¡claro que no!

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 34

Felices los que conquistan a la chica más bonita de la colonia o de la escuela.

Felices lo que logran terminar una carrera, o una formación académica brillante.

Felices los que tienen éxito, los triunfadores, los que nunca pierden.

Felices los que provienen de una familia de abolengo, de alta alcurnia.

Felices los que tienen buena salud y nunca se enferman.

Felices, la chica que pesca un marido rico.

Todas estas nociones son mundanas, increíblemente también carismáticas, porque

Jesús no enseña eso.

En el Sermón del Monte, en el griego, no aparece la cópula que une, como en el

castellano, las dos parte de cada bienaventuranza, no son simples afirmaciones sino

exclamaciones enfáticas; quedaría así: ”¡Qué feliz es el pobre en espíritu!”

Esto nos indica que no son piadosas exclamaciones de esperanza de lo que podría

llegar a ser, o simples profecías brillantes con una halo de gloria futura en algún cielo

distante. ¡No! Por el contrario, son exclamaciones de alegría o gozo por lo que ya es,

algo que ya existe. Son felicitaciones de algo ya presente y real, como dijera Fox:

¡HOY!

Α esta presencia real Jesús le llama “Bienaventuranza” que significa tres veces feliz,

muy dichoso, enormemente feliz o felicidad en grado sumo.

El término “makários” de donde se traduce bienaventuranza describe un gozo

autosuficiente, que posee en sí mismo el secreto de su propia irradiación, un gozo

sereno, intocable, autónomo, que no es afectado por las diversas circunstancias de la

vida, como ocurre con la felicidad humana de los ejemplos descritos anteriormente.

La bienaventuranza cristiana está libre de cualquier riesgo o acechanza. Nada ni nadie

puede tocarla o atacarla (Jn. 16:20-22), pero que no es consecuencia de acciones

corporales o litúrgicas, ni de concentración mental o meditación yoga. (52)

Abordaremos este punto más adelante, cuando veamos la Teología de la Adoración.

52. William Barclay dice que las bienaventuranzas nos hablan de ese gozo que sale a nuestro encuentro aún en medio del dolor,

aquel gozo que no pueden manchar ni el sufrimiento, ni la tristeza, ni el desamparo, ni la pérdida de algo o alguien que

queremos mucho. Es el gozo que brilla a través de las lágrimas y que nada, ni en la vida ni en la muerte, puede arrebatar. El

cristiano posee ese gozo intocable que proviene de andar siempre con Jesús, de obedecer su Palabra y de estar en su presencia.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 35

14.- LA A.A. REPRESENTA LA GUERRA ESPIRITUAL DEL CRISTIANO.

Levántate, levántate Señor.

Levántate, levántate Señor.

Se dispersen delante de ti

Todos aquellos que aborrecen

Tu presencia.

CORO

Tu presencia reinará

Sobre todo imperio

Tu presencia reinará

Gobernará sobre todo principado.

Un grito de guerra, ¡uh!

¡Cuántos están listos,

para nombrar uno de estos espíritus

y decirles que huyan en el nombre de Jesús!

Después de mencionar el nombre de ese espíritu,

ustedes van a gritar: ¡Huye!

Están listos?

Espíritu de Temor: ¡Huye!

Espíritu de Maldad: ¡Huye!

Espíritu de Rencor: ¡Huye!

Espíritu de División: ¡Huye

Espíritu de Enfermedad: ¡Huye!

Espíritu de Rebelión: ¡Huye!

Espíritu Inmoral: ¡Huye!

Espíritu de Oscuridad: ¡Huye!

Espíritu de Persecución: ¡Huye!

Espíritu de Ambición: ¡Huye!

Espíritu Profanador: ¡Huye!

Espíritu de Vanidad: ¡Huye!

Espíritu de Murmuración: ¡Huye!

Espíritu de Contención: ¡Huye!

Espíritu de Hechicería: ¡Huye!

Espíritu de Mortandad: ¡Huye!

(Se repite una vez más estrofa y coro) (53)

53. Título: “Levántate Señor”. Autor: Marcos Witt. Canzión Producciones, 1994.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 36

Si usted no ha escuchado con atención los coros carismáticos de A.A., este es uno que

ha tenido bastante arraigo. Estas son las herejías que están cantando nuestros

jóvenes. Esta es la forma en que infectan a las iglesias. Para un análisis del tema de la

“Guerra Espiritual”, por favor lea las páginas 79-101 de este estudio. Solo añadiremos

algunos comentarios al respecto.

La doctrina errada de la “Guerra Espiritual” es de vital importancia para ellos que en

toda su literatura, música, predicaciones, pláticas o comentarios, oraciones, etc. la

propagan. Los músicos carismáticos realmente creen que en el instante de que

empiezan a ejecutar su instrumento o a cantar, están haciendo G.E. y ponen “nervioso”

al diablo. En su libro “¿Qué hacemos con estos músicos?” Marcos Witt dice lo

siguiente:

“Le doy gracias a Dios por haber levantado hombres como Carlos

Anacondia, Victor Richards, Peter Wagner, John Dawson, Héctor Torres y

muchos otros que El ha usado para hablarnos sobre este tema tan

necesario en el Cuerpo de Cristo. (Se refiere a la G.E.).

Gracias a Dios por una mujer como Cindy Jacobs que ha enseñado y

escrito cosas tan profundas con respecto al tema... Todos los que he

mencionado anteriormente reconocen que la música es un arma poderosa

en esta guerra...

Cada vez que tomamos en nuestras manos nuestro instrumento para

tocarlo en la presencia del Señor, hay una resultado poderoso en el reino

de las tinieblas... Cada vez que tocamos los panderos o aplaudimos o

levantamos nuestra voz para declarar la grandeza de nuestro Señor, ¡hay

guerra!...

¿Qué tal si alguien inventara un aparato que midiera la entrada o

salida de demonios? Llamémoslo un ‘demoniómetro’, ¿cuántos demonios

en huída registraría este aparato al tocar nuestra música?...

Querámoslo o no, como músicos, somos guerreros. Aceptémoslo y

empecemos a vivir como ‘hombres y mujeres de guerra’”. (54)

Obviamente la lista de personas a las que Witt hace referencia para avalar su postura

son líderes carismáticos que mucho mal han causado a la iglesia de Dios. La

manipulación ha sido tal que muchos cristianos hoy creen esta falacia, que la A.A.

representa la “Guerra Espiritual”.

Por esto mismo se hace peligrosa la A.A. La mayoría de cristianos compran los

cassettes que están de moda, ya sea porque les interese la novedad, o porque deseen

ampliar su repertorio de coros, o algún músico que desee sacar algunos ritmos o

acordes nuevos. Lo cierto es que se contaminan sin darse cuenta. Al cantar la sarta de

blasfemias que llevan implícitas estos coros, el creyente corrompe su doctrina. Si en

su iglesia no aceptan la A.A. terminará dejando su iglesia para integrarse a una

carismática o en la apostasía. 54. Witt, Marcos en “Qué hacemos con estos músicos”, Editorial BETANIA, 1995, p. 63-68.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 37

15.- LA A.A. HACE NECESARIO LOS “GRUPOS DE PANDERISTAS”.

He platicado con un sin número de pastores que entran en una batalla campal con sus

jóvenes porque estos quieren su “grupo de panderistas”. Casi siempre terminan

cediendo porque no encuentran argumentos para hacerlos desistir.

Estos jóvenes han asistido a alguna iglesia carismática o a uno de tantos congresos

donde han visto a un grupo de señoritas contorneándose al ritmo de la música, con un

pandero en sus manos, en el escenario o plataforma, haciendo “Guerra Espiritual”.

Generalmente los jóvenes no investigan si eso es correcto o bíblico, simplemente se

les antoja tener su propio “grupo de panderistas”. Suponen que debe ser correcto

porque lo vieron en una iglesia “cristiana”.

Lo que no se imaginan es que los “grupos de panderistas” es otra de las trampas del

carismatismo. Por favor lea las páginas 89 y 90 de este estudio para el análisis de

este tema.

16.- EL “CANTICO NUEVO” O “CANTAR EN EL ESPIRITU” ES EL CLIMAX DE LA A.A.

Cuando uno asiste a un culto carismático, algo que llama fuertemente la atención,

además de todo lo que ya hemos descrito, es el final o culminación de la A.A. Después

de haber invertido suficiente tiempo en ello, cuando menos una hora, después de

haber danzado, brincado, saltado, cantar rápido y cantar lento, etc. para corroborar

que todo esto “fue de Dios” se debe llegar a un clímax o éxtasis, degenerando a veces

en paroxismo. Tanto el “grupo de alabanza” como los asistentes se esfuerzan para

que esto ocurra.

Supuestamente bajo la inspiración del Espíritu Santo, a quien le atribuyen todas sus

innovaciones, cada uno de los presentes empiezan a cantar o tocar una melodía que

nadie conoce, que en ese mismo instante inventan, diferente una de la otra, por un

espacio relativamente corto, aproximadamente de 15 minutos.

Estos momentos son los más sublimes, los más anhelados. Las personas levantan sus

manos, salen de sus lugares, deambulan por los pasillos, levitan si están danzando, a

veces cantando en “lenguas”, con una expresión en el rostro de contemplación y de

total misticismo.

Musicalmente hablando esto se oye espantoso. Imagínese 1,000 personas cantando

cada quien por su lado, o en el caso de los músicos, el del piano toca una cosa, el de

la guitarra otra, el del bajo otra, el sonido que producen es macabro, tétrico,

espeluznante; tal vez sea muy espiritual, sin embargo se escucha terrorífico.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 38

Ahora la pregunta ¿este fenómeno será realmente espiritual? ¿cuál es la base bíblica?

Bueno pues al igual que en todas sus otras posturas, aquí también el sustento bíblico

es muy tergiversado.

Ellos se basan para el “cántico nuevo” en los textos de Apocalipsis 5:9; 14:3; 15:3; y

en Efesios 5:19 y Colosenses 3:16 donde aparece “cánticos espirituales”. Esto es lo

que dice Marcos Witt:

“Dios puso una carga en mi corazón, hace algunos años, acerca de

compartir más sobre el cántico nuevo, porque creo que debemos haber

más personas cantándolo... Es hermoso ver en estos tiempos, donde el

Señor está restaurando la alabanza y la adoración a muchos de

nosotros...cantarle un canto espontáneamente un canto nunca antes

cantado o aprendido.. tenemos la oportunidad de aprender a entonar

cantos ‘espontáneos’, no aprendidos para expresar nuestro corazón al

Señor.

El cantar un cántico espontáneo es similar a las tarjetas de

felicitación... Quizá estén descuadrados y desafinados, pero son una

‘tarjetita’ personalizada que le podamos ofrecer al Señor, para describir en

ese momento lo que estamos sintiendo por El en nuestro corazón...

Así también los ‘cánticos espirituales’ nos permiten entonar cánticos

espontáneos, no aprendidos, para expresarle lo que ninguna otra canción

o himno puede expresar. Hagamos ‘tarjetitas’ personalizadas al Señor por

medio de los cánticos nuevos que permitamos salir de nuestro corazón.

Déle lugar a esta expresión en su vida personal y congregacional.

Cantemos los cánticos espontáneos. (55)

Lo que Witt no ve o no quiere ver es que el “cántico nuevo” que se menciona en

Apocalipsis es lo que entonaremos todos los redimidos en el cielo. No se refiere al

culto de una iglesia aquí en la tierra.

Decir que los textos de Apocalipsis son la base para este “cántico nuevo” de la

“restauración de la alabanza y adoración” es hacer una interpretación ligera y

tendenciosa. Creer que los “cantos espirituales” a los que se refiere San Pablo en

Efesios y Colosenses son los mismos del carismatismo es estar muy lejos de la

realidad y desconocer la historia y el contexto del Nuevo Testamento.

En mi libro de “Música y Teología” hago un análisis profundo de cuál y cómo era la

música en el Nuevo Testamento. Aquí solo anotaremos que los “cánticos espirituales”

eran las composiciones de creyentes en todo el Imperio Romano, que sin ser músicos

profesionales también se inspiraban y componían una canción para el Señor. Es lo

equivalente a lo que hoy conocemos como coros o “estribillos”, pero no tiene la

connotación de éxtasis o misticismo que el carismatismo le quiere dar.

55. Witt, Marcos en “Adoremos”, p. 201-214.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 39

Componer una canción o hacer un canto nuevo no es cuestión de cantar lo que caiga y

lo primero que se me ocurra sin importar que se oiga mal. Sólo aquellos músicos que

son virtuosos y con experiencia pueden improvisar de una manera excepcional. Los

demás mortales tenemos que invertir un buen tiempo y esfuerzo para componer una

nueva canción.

En la historia del cristianismo vale la pena mencionar a Ira D. Sankey, pianista y

cantante del evangelista W. Moody quien llegó a componer un himno al instante que el

Dr. Moody terminó de predicar. La historia de este hecho insólito la puede ver en la

referencia (56).

Tampoco quiere decir que estamos en contra de cantar o componer nuevas melodías,

al contrario animamos a todos los que puedan hacerlo, debido a que estamos

saturados de música americana, como lo comentamos en las páginas 147 y 148 de

este estudio.

17.- LA TECNICA ES IGUAL A CONSAGRACION.-

Esta es la última falacia de la A.A. que estudiaremos, la podemos resumir de esta

manera: el cantante o “grupo de alabanza” que se desenvuelva profesionalmente en el

escenario significa para ellos que “son consagrados o buenos cristianos”.

Lo curioso es que cuando alguien canta mal el “aplauso para Cristo” no es entusiasta.

Pero si el cantante lo hizo muy bien entonces el “aplauso para Cristo” es muy notorio.

Tristemente el “aplauso para Cristo” no es para Cristo sino para el cantante o

conferencista y dependiendo de su actuación es la magnitud del aplauso. Dicho de

otro modo, el “aplauso para Cristo” está directamente con la técnica del artista.

56. En el año de 1886 la Srta. Elizabeth Cececlia Clephana envió a la revista “La Hora de los Niños” de Escocia algo que había

escrito sobre la parábola de la oveja perdida. Se publicó anónimamente, fue copiado por otra revista, y más tarde apareció en un periódico. La Srta. Elizabeth murió una año después sin idea alguna de que su poesía pudiera llegar a ser un himno

famoso. El gran músico y cantor Ira D. Sankey, vio el poema un día en un periódico, y pensando que algún día podría

componerle música apropiada, lo recortó y lo guardó en su cartera. Estando con Dwight L. Moody celebrando cultos de avivamiento en Escocia, una noche éste predicó sobre “El Buen Pastor”. Al terminar, Moody se dirigió a Sankey, diciendo

“cante algo”. Lo que mejor se adaptaba a la atmósfera del momento era la poesía que Sankey llevaba en su cartera. Pero

¿cómo podría cantar este poema sin antes prepararle la música? Pidiendo a Dios su auxilio divino, el gran solista sacó el recorte de la poesía de la Srta. Clephane, lo colocó sobre el órgano y comenzó a tocar y a cantar. “Por supuesto, tuvo la

necesidad de realizar un tremendo esfuerzo, pues tenía que ir leyendo las palabras, que le eran poco familiares, a la vez que ir

preparando la música. La inspiración le vino y fue tocando hasta que terminó la primera estrofa; recordó el tono suficientemente para tocar la segunda estrofa, y luego le fue relativamente fácil terminar el himno. “No sabía Sankey quién

había escrito la letra”. Una hermana de la Srta. Clephane estaba en el servicio y reconoció la poesía, y desde entonces

Sankey la honraba cada vez que la cantaba. Unas 500 personas oyeron el canto del himno aquella noche, y muchas de ellas lloraban debido a la solemnidad de la letra, y la solemne dulzura de la voz maravillosa de Sankey. Este dijo más tarde: “Fue

el momento más intenso de mi vida”. Realizó en esta ocasión un prodigio de invención, de memoria y de concentración. No

se sabe de otro himno cuya melodía fuera compuesta, nota por nota, exactamente como la tenemos ahora, mientras el compositor la cantaba por primera vez. Este himno es: “NOVENTA Y NUEVE OVEJAS SON”.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 40

Ahora bien, es normal que muchos cristianos confundan una cosa con otra. Cuando

alguien predica bien, o canta bien, o dirige bien, muchos se pueden quedar con la

impresión de que esa persona es muy santa, muy consagrada, muy cristiana, porque

su canción “me llegó”, su mensaje me “conmovió”.

Esta también es la tentación para muchos predicadores, cantantes y músicos, que la

técnica suplante su consagración, llegando a creer que no importa cómo vivan delante

de Dios si a la hora de estar en frente al público se manejan como “pez en el agua”.

Pero no necesariamente una cosa va relacionada con la otra. Cuando alguien domina

su técnica, su instrumento, independientemente que sea cristiano o no, lo hará muy

bien. Vea usted a los artistas del mundo, que de cristianos no tienen nada, sin

embargo llenan auditorios y atraen multitudes porque son profesionales en lo que

hacen.

Tampoco quiere decir que demeritamos la calidad artística de un cantante, cristiano o

no, sino que dentro de la iglesia no se trata únicamente de hacerlo bien, ¡No! En la

vida cristiana es de vital trascendencia nuestra relación con Dios. El arte, la técnica, la

actuación, pueden ser puro teatro, hipocresía, ante la mirada de Dios. (Mt. 15:8).

SI usted quiere saber si un hermano en Cristo es realmente cristiano, no lo juzgue por

su manera de predicar, de cantar o dirigir, ¡No! Puede ser que lo haga excelentemente

bien. ¡No! Por favor pregúntele a su familia, a su esposa, a sus hijos, a sus

compañeros de trabajo, a sus vecinos. Ellos le van a decir que tan cristiano es.

Desgraciadamente la A.A. ha sabido explotar la debilidad humana resultando en

mesianismos y cacicazgos que el mismo pueblo ha aceptado. Es común ver jóvenes

cristianos que idolatran a sus cantantes perdiendo su capacidad de discernimiento,

por lo que acepten todo lo que ellos les enseñen aunque sea contrario a la Palabra de

Dios.

Esta es la causa por lo que no estamos de acuerdo con Alberto Mottesi, quien escribe

de Marcos Witt:

“Cuando se escriba la historia de la evangelización del mundo hispano, en

los registros del Espíritu Santo en el Reino de los Cielos, se verá la

relevante influencia de Marcos en el gran avivamiento entre los pueblos de

habla castellana”. (57)

Nosotros creemos que esa “relevante influencia” ha sido mas bien nociva para la

iglesia.

57. Contraportada de “Adoremos, Ibid.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 41

¿CUALES SON LAS RAZONES TEOLOGICAS PARA DESECHAR LA A.A.?

Hasta ahora hemos analizado las falacias de la A.A., es decir las mentiras que muchos

cristianos han creído con respecto a esa “restauración de la alabanza”. Ahora

preguntemos ¿cuáles son las razones teológicas por las que no aceptamos las A.A.?

con la aclaración que como cristianos estamos plenamente convencidos de que

debemos adorar a Dios, pero no bajo los lineamientos carismáticos.

1.- La A.A. es paganismo abominable a Jehová.-

Lo que hemos oído hasta el cansancio en los cultos carismáticos es que “la A.A. trae

avivamiento”, que “la A.A. atrae el poder y la presencia de Dios”, que “la A.A. libera y

transforma al hombre”, que “la A.A. resuelve todos los problemas”, y así por el estilo.

Desgraciadamente esta postura es un paganismo descarado que ya se infiltró en la

iglesia y la esta corroyendo como un cáncer.

Tal vez muchos ni se imaginan que la A.A. es paganismo puro, pero si usted compara

la teología de las religiones paganas con la A.A. verá claramente cómo esta blasfemia

se está predicando desde los púlpitos de muchas iglesias llamadas cristianas.

En la teología de todas las religiones paganas se establece que a Dios se le adora para

moverlo a hacer cosas a favor nuestro. Así lo explica Miqueas Bustos:

“La teología pagana de la adoración de los pueblos vecinos de Israel

enseñaba que los sacrificios y ofrendas que el hombre ofrece a su Dios

satisface una necesidad esencial en ese dios y que tal satisfacción mueve y

conmueve a ese dios haciéndolo propicio, misericordioso, bondadoso y

dispuesto a bendecir, perdonar y satisfacer las necesidades de aquel que

le adora.

Esta adoración es obra humana, diseñada para ganar el favor y el

afecto de un dios frío y distante que por naturaleza está enojado con el

hombre.

Debido a que todos los pueblos paganos observaban sistemas de

sacrificios y ofrendas a sus dioses bajo este concepto, Israel fácilmente se

podía confundir y adoptar estas doctrinas paganas y abominables a los

ojos de Dios”. (58)

Increíblemente esta es la misma teología de la A.A. Ellos proclaman a los 4 vientos que

de no alabar y adorar a Dios en ese estilo carismático, pues los demás no valen, Dios

no puede actuar, no puede descender su presencia. ¡Si esto no es paganismo

¿entonces qué es?! Esto es una blasfemia, un insulto a la naturaleza de Dios.

Ellos tuercen arteramente la interpretación del texto del Salmo 22:3 “Pero tú eres

santo, Tú que habitas entre las alabanzas de Israel”. Esto es lo que dicen:

58. Bustos Miqueas, Ibib, p. 60.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 42

“La alabanza y la adoración ‘sueltan’ la presencia de Dios, en otras

palabras, Dios habita en medio de la alabanza”. (59)

¡Qué astucia, el texto dice que Dios habita en medio de la alabanza, no que la A.A. sea

la fórmula mágica para soltar la presencia de Dios. Marcos Witt dice sobre este texto:

“¡Ahí está! ¡Esto es Sion! Cada vez que usted y yo levantamos nuestras

manos y nuestra voz para aclamar y bendecir el nombre de nuestro Señor,

es ese lugar estamos construyendo un Sión, donde El puede venir a

morar... estamos creando en ese lugar un Sion donde El puede descender

en toda su gloria sobre nosotros”. (60)

¿Cuál es el veneno de la declaración de Witt? Que si lo que dice él es cierto, entonces

lo contrario también es real, que si usted no realiza A.A. Dios no puede descender con

toda su gloria; pero lo más absurdo es que según Witt, hacer A.A. es construir un Sion.

Vea las puntadas a que llega Witt en el afán por defender su tesis:

“Puedo imaginarme al Señor sentado sobre su trono. Miguel a su

izquierda y Gabriel a su derecha. Están arriba en el cielo haciendo lo que

hacen todos los días, mandando una sanidad para allá, un milagro para

acá y muchas otras cosas más.

Cuando de repente el Señor hace un movimiento con la mano, que

todos ya saben que quiere decir ‘silencio'. El coro angelical deja de cantar,

los músicos celestiales dejan de tocar y todo se torna en un silencio total.

Se levanta el Señor de Su trono y se asoma por el balcón de los cielos

para ver qué es lo que sucede. Se nota que escucha algo. Gabriel y Miguel

se dan una miradas de reojo, sabiendo lo que está pasando porque ya les

ha pasado muchas veces en el tiempo que llevan con el Señor. Apenas se

alcanza a escuchar el sonido de un canto: ‘Me gozaré. Me alegraré. Y

cantaré al Señor: Porque han llegado las bodas, del Cordero de Dios’.

El Señor se acerca con Miguel y le dice: ‘¿Escuchas eso?’ Miguel le

contesta: ‘Sí, Señor, que precioso se oye’. El Señor le dice: ‘¿Sabías que son

mis hijos?’ Miguel le responde: ‘Sí Señor, los que compraste con tu sangre

preciosa’.

Se retira otra vez el Señor para seguir escuchando el cántico que ha

subido delante de El: ‘Y a su esposa se la concedido, que se vista de lino

fino, lino limpio y resplandeciente, para recibir al Rey’. Se acerca con

Gabriel y le dice: ‘Gabriel, ¿sabes que es mi esposa la que me está

cantando, verdad?’ Gabriel contesta: ‘Sí Señor. Y qué bella se está

volviendo. Casi no podemos esperar hasta que la traigas contigo para estar

acá por toda la eternidad a tu lado y que podamos festejar esas grandiosas

bodas que has estado planeando por todo este tiempo’.

59. Manual de Restauración del Movimiento Carismático, p. 131. 60. Wit, Marcos en “Adoremos” p. 179. Enfasis añadido.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 43

El Señor le dice: ‘Sé, ya casi estamos listos, pero escucha eso. ¿No se

oye maravilloso?’ Gabriel le dice: ‘Sí Señor, Se escucha hermoso’. En ese

instante el volumen de la canción ha subido y ha cambiado un poco: ‘Hijo

de Dios, recibe hoy, toda la gloria, la honra y honor’ vez tras vez lo repite

la iglesia, la novia, la amada del Señor.

En ese instante ya no se puede detener las ganas el Señor y voltea

con Gabriel y Miguel y les dice: ‘Con permiso, muchachos, pero yo tengo

que estar en ese lugar donde me están cantando y adorando. He

prometido que cada vez que lo hicieran yo descendería en medio de ellos y

les daría pan, vino, aceite, prosperidad y prometí que les quitaría todos

sus dolores y regaría su alma con frescura y con mi Espíritu. Nos vemos

después. Sigan adelante’.

Y en ese momento El desciende al Sion que usted y yo hemos

construido para El”. (61)

Claro que toda esta diatriba es entretenida y divertida, pero es “paganismo”

desvergonzado. Lo primero que le diríamos a Witt es si no sabe que Jesús es

Omnipresente, que para estar presente con sus creyentes en la tierra no significa que

deba dejar el cielo. Otra pregunta sería, ¿dónde dice la Biblia que por el hecho de

cantar se obtiene prosperidad? Lo que el texto del Sal. 22:3 enseña es que Dios está

de acuerdo, se complace, que usted le alabe. Y usted puede alabarlo sin necesidad de

cantar, puede hacerlo a través de la oración, y de otros medios. (Vea la pág. 138 de

este estudio).

La paráfrasis dice: “Pero tú eres santo. Las alabanzas de nuestros padres rodearon tu

trono”. Igualmente no se entiende que la alabanza “desate el poder de Dios”. La Biblia

de Jerusalén traduce el texto: “¡Mas tú eres el Santo, que moras en las laudes de

Israel!”. En el comentario encontramos: “Tú que moras en el santuario”. Pero tampoco

se da la idea de que la “alabanza” sea la llave para hacer descender la presencia de

Dios. En la versión “Dios habla hoy” encontramos: “Pero tú eres santo; tú reinas,

alabado por Israel” no admite la forma del paganismo señalado.

Haciendo exégesis del texto encontramos que además de que no acepta la posibilidad

de hacer de la alabanza el medio para atraer la presencia de Dios, el significado

realmente contradice la tesis del carismatismo. En Hebreo leemos: ve (tú) atá (eres)

qadós (santo, apartado) yosheu (habitado, entronizado) tejilot (cantar) Israel.

En el original no existe la preposición ni el artículo, “en” (entre) y “las” como ocurre en

nuestra versión: “Tú que habitas entre las alabanzas de Israel”. Los judíos traducen

yosheu como entronizado, en lugar de habitado. Entonces por inferencia debería

decir: “sobre las alabanzas”, quedando de esta manera: “Pero tú eres santo,

entronizado, por arriba o superior, de los cantos de Israel”. En otras palabras, el canto

o los cantos de Israel no preceden o están por encima del Trono de Dios. Nada que ver

con atraer la presencia de Dios o de construir un Sion. 61. Ibid, p. 180-181.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 44

Siendo honestos debemos admitir que los pentecostales clásicos ya mostraban cierto

atisbo hacia este paganismo que aquí reprobamos. Creemos que era más por

ignorancia que por intención, pero ya había un dejo de esta tendencia en varios de sus

coritos. Este es el comentario del Dr. Salatiel Palomino al respecto:

“Por ejemplo, en algunos de ellos se canta: ‘Vamos orando hasta que

baje el poder de Dios’; aquí se supone que mediante el uso prolongado e

intenso de esta alabanza lograremos hacer que baje el poder de Dios.

En otro dice: ‘Va bajando ya, va bajando ya, va bajando la gloria

celestial’, lo cual revela ese sentido descendente en el culto que hace de él

una actividad en que el hombre es el centro y beneficiario. Dios es el

servidor.

Igual idea se halla en este otro estribillo: ‘¡oh poder pentecostés, ven

hoy a mi!’, o en aquel que enseña: ‘Envía tu poder, envía tu poder, envía tu

poder, Señor’”. (62)

Sin embargo el carismatismo abiertamente paganizó la A.A. Un comentario del Dr.

Jack Matlick sobre el coro de Miguel Casina: “Dame más de Ti”.-

“Es necesario reiterar que el Espíritu Santo vive en nosotros. Por

ejemplo, si estoy hospedado en casa de un amigo y él me dice: ‘Ven a mi

casa’. Tengo que responderle que ya estoy en ella y no puedo volver a

entrar dos veces.

En ocasiones pedimos más del Espíritu Santo, pero El no es una

fuerza; es una persona. Es como si mi amigo me dijera: ‘Quiero más de ti’.

Esto no es posible, ya estoy totalmente en su casa.

Por eso es necesario fijarnos en lo que dicen estos coros. Si uno

quiere cantar ‘Espíritu de Dios controla mi vida’ es correcto, pero si canta

‘ven sobre mi’, cuando ya mora en nosotros, es imposible”. (63)

Reiteramos, el enfoque antropocéntrico de la A.A. es paganismo abierto dentro de la

iglesia; y tan abominable es a los ojos de Dios que El mismo determinó cómo era la

adoración agradable a su presencia, no dejando ningún cabo suelto en el que el

hombre pudiera desviarse en alguna otra manera de adorarle contraria a su

naturaleza, que si las religiones paganas lo han hecho, se debió a que les faltó la luz

de la revelación, pues Dios no solo es inmanente, sino también trascendente.

Por lo tanto es de mayor condenación para quienes llamándose cristianos le adoren en

la forma completamente contraria a la que Dios mismo estableció. Un estudio del libro

de Levíticos nos dará las pautas de qué es lo que Dios quiere y no lo que nosotros nos

imaginamos o nos guste o parezca mejor.

62. Palomino Salatiel en “El Movimiento Carismático, una confrontación crítica” p. 45. Lo mismo puede decirse de otros coros

como : “El fuego cae, cae; los males salen, salen; y los creyentes alaban al Señor”.

63. Matlick Jack en “Entendiendo el Movimiento Carismático, un análisis crítico a la luz de la Biblia”, p. 60.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 45

La adoración bíblica no puede ni debe ser a gusto del adorador, sino exactamente lo

contrario, debe ser al gusto de Dios que es a quien se le adora. Si el adorador olvida o

ignora que la adoración correcta es le que el mismo Dios ha estipulado, ofrecerá

“fuego extraño” que le acarreará las inevitables consecuencias.

Todo el lío estriba en que los líderes carismáticos, desde Kenyon hasta Marcos Witt, no

hacen exégesis sino eixégesis, es decir, en lugar de sacar la interpretación del texto

meten su propia interpretación. Dicho de otra manera, en lugar que la Biblia apoye sus

ideas, sus idean tratan de apoyarlas con la Biblia. Craso error que cada día los llevará

a mayor divergencia de la Palabra de Dios.

2.- La A.A. es la cubierta de una metafísica practicante.-

Al desviarse teológicamente de la adoración bíblica, aceptando una teología pagana, la

adoración carismática cayó precisamente donde el diablo quería: en la metafísica.

Si usted ya lo notó, el carismatismo en su totalidad se compone de “fórmulas de fe”

para manipular a Dios, para lograr que Dios haga lo que el adorador quiere, para

hacer de Dios su sirviente, para manejar a Dios a su antojo, como si Dios fuera un

genio dispuesto a satisfacer los deseos de su amo el adorador.

Como ya lo hemos dicho a lo largo de este estudio “este enfoque tiene sus raíces en la

idea de la impersonalidad y destronamiento de Dios que Satanás ha manejado y

ofrecido al hombre desde el mero principio como su fantasía en la que Dios puede ser

destronado y reducido a algo sin personalidad y manipulable por medio de fórmulas

ocultas, llaves secretas que solo los iluminados tienen. Rom. 1:21-25. Esta idea ha

sido la semilla de todas las teologías naturales y consecuentemente, la madre de todas

las religiones paganas”. (64)

La A.A. es paganismo al creer que se debe adorar a Dios para llamar su atención, pero

se hace metafísica al creer que es la fórmula mágica para hacerlo funcionar a nuestro

favor.

Ahora le invito a que compare la metafísica con el carismatismo y verá que es lo

mismo. Transcribo algunas partes de “Metafísica 4 en 1” de Conny Méndez, la

autoridad más alta sobre el tema:

“Jesucristo dijo: ‘En la casa de mi padre hay muchas mansiones”. La

Metafísica es una de estas mansiones, o sea el estudio de las leyes mental-

espirituales. No se mete con el ‘espiritismo’ aunque este es también una

mansión en la casa del Padre.

64. Bustos Miqueas, Ibid, p. 58.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 46

Tu vida, lo que te ocurre, obedece a tus creencias y a lo que

expreses en palabras. Es una ley. Un principio. ¿Sabes lo qué es un

Principio? Es una ley invariable que no falla jamás. Esta ley se llama ‘El

principio de mentalismo’

Cada palabra que se pronuncia es un decreto que se manifiesta en lo

exterior. La palabra es el pensamiento hablado... Ahora recuerda y no

olvides jamás, cada palabra que pronuncias es un decreto. Positivo o

negativo. Si es positivo se te manifiesta en bien. Si es negativo se te

manifiesta en mal.

Frente a una enfermedad: Niego la apariencia de toda afección física.

No la acepto ni para mi ni para nadie. La única verdad radica en el espíritu

y todo lo inferior se amolda a mi palabra, al yo reconocer la Verdad. En

nombre de Jesucristo que nos autorizó, decreto que yo y todos somos

Vida. La Vida es salud, fuerza y alegría. Gracias Padre que me has oído”. (65)

Vea usted como utilizan el mismo método de interpretación. Para Conny Méndez la

Metafísica y el Espiritismo son las mansiones que Jesús dijo que había en la casa de su

Padre. ¿Eso es lo que realmente dijo Jesús? ¡No! Eso es lo que ellos quieren que diga.

Exactamente igual que el carismatismo. Por otro lado llama la atención que Marcos

Witt en su libro Adoremos cambia el término decretar por declarar, pero sigue el

mismo tenor de Conny Méndez:, Veamos qué dice Witt:

“Declaraciones es otra de las áreas interesantes en alabanza que

podemos ver en el Apocalipsis. Es importante aprender a utilizar la boca,

la lengua y la garganta que el Señor nos ha dado para poder declarar...

Apoc. 4:8, 11; 5:12; 7:10 son sólo algunos de los muchos versículos que

hablan de declaraciones que se estarán haciendo durante toda la

revelación del Apocalipsis.

Muchas veces hemos escuchado sermones y mensajes acerca del

poder que hay en la lengua, para destruir o también de edificar... Cada vez

que abrimos nuestra boca debe estar saliendo una declaración poderosa...

Si usted quiere vivir en la victoria que Jesús ya le compró, comience a

declararlo, ponga esa victoria en su boca, para que de ahí se pueda dirigir

al resto de su cuerpo... Es bueno, inclusive que lo hablemos en voz

audible, para que todo nuestro ser escuche lo que estamos declarando”. (66)

Con todo respeto a Witt su postura es Metafísica, parienta cercana del espiritismo.

Decir que el Apocalipsis es una prueba para hacer declaraciones es una burla a la

Majestad de Dios. La A.A. no es otra cosa que paganismo y metafísica.

65. Méndez Conny “Metafísica 4 en 1”, Colección Metafísica, editado por Bienes Lacónica, pp. 8,10, 11, 55.

66. Witt Marcos en “Adoremos”, Ibid, p.193-195. Enfasis añadido.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 47

ENFOQUE BIBLICO DE LA ADORACION

(TEOLOGIA DE LA ADORACION)

Creo que se ha escrito, si no mucho lo suficiente, sobre este tema, como usted verá en

la bibliografía al final de este libro, ya que grandes hombres como San Ambrosio de

Milán, San Agustín, Juan Calvino, Martín Lutero, Juan Wesley, Carlos Spurgeon, etc.

tienen algo que decirnos al respecto.

Por lo tanto no es la intención agotar el tema de la adoración, imposible en un espacio

tan reducido, ni repetir lo que todo mundo ha dicho, sino enriquecer o aportar

algunas ideas destinadas a la reflexión sobre este asunto tan desvirtuado en la

actualidad.

La aclaración pertinente es que al referirnos a la adoración no estamos hablando

únicamente de la música o canto congregacional, tal como lo hacen los carismáticos,

sino a la adoración integral como la encontramos en la Palabra de Dios y que incluyen

aspectos como la oración, la predicación, las ofrendas, diezmos y primicias, los

medios de gracia, los credos, el testimonio, la kerigma, la confesión, la lectura de la

Biblia.

De todas las definiciones que hay sobre la adoración, la más significativa es la de Paul

W. Hoon: “La adoración cristiana es la revelación de Dios en Jesucristo y la respuesta

del hombre; es el diálogo entre el hombre y Dios a través de las Escrituras”. (67)

Para Evelyn Underhill la adoración es “la respuesta de la criatura al Eterno o el

reconocimiento de Dios como trascendente”. (68)

Para Rudolf Otto es “un sentimiento de criatura en la presencia de la Deidad”. (69)

Ralph P. Martin lo explica asi: “La adoración es la respuesta humana a la revelación

divina, puesta en forma de diálogo. Es el ritmo de dos tiempos: el acercamiento de

Dios a nosotros que encuentra y evoca la reacción de la ofenda de nosotros mismos a

El. Toda la adoración de Dios encuentra su origen en el “momento” objetivo cuando

Dios actúa y viene a este mundo con amor gratuito. Lo que nosotros hacemos en

respuesta a esa “venida” concierne a nuestro papel de participantes comprometidos,

pues la adoración tiene la función subordinada de preparar al creyente para aceptar su

papel de siervo y mayordomo de Cristo durante toda su existencia humana”. (70)

67. Honn, Paul W. “The Integrity of Worship”, Nashville: Abingdon Press, 1971, p. 77.

68. Underhill Evelyn “Worship, Londres: Nisbet, 1937, cap. 1.

69. Otto, Rudolf “The Idea of the Holy” Londres: Oxford University Prees, 1923. 70. Martin, Ralph P. “Teología de la Adoración”, Editorial VIDA, p. 17-22.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 48

Lo que varios teólogos están tratando de decirnos es que la adoración no tiene que

ver con elementos externos, como el cantar lento. Esto es lo que dice Hugo McElrath:

“La adoración genuina se basa sobre el hecho histórico de la creación por

parte de Dios del universo y la encarnación de Su Hijo Jesús. Y cuando

decimos la encarnación, queremos decir todo el hecho total de Cristo,

incluyendo el nacimiento, su vida, sus obras poderosas, su muerte

expiatoria, su resurrección y ascensión y su presencia continua en

nuestras vidas como creyentes. La teología entonces, no es nada más ni

nada menos que el modo por el cual nosotros los mortales pensamos y

tratamos de expresar los actos de Dios en la historia. Por lo tanto, una

adoración que no esté fundamentada en el conocimiento de Dios en

Cristo, no es verdadera adoración cristiana”. (71)

Considere por un momento los grandes himnos que han sido cantados y amados.

Carlos Wesley (1700) escribió lleno de maravilla y admiración:

“¿Murió El por mí, que su dolor causé?

¿Por mí, que a El a muerte perseguí?

¡Amor sin par!

¡Cómo pudo ser que Tú, mi Dios,

murieras por mi!”.

Isaas Watts (1700) escribía:

“La cruz excelsa al contemplar,

do Cristo allí por mi murió,

nada se puede comparar,

a las riquezas de su amor”.

John Newton:

“Sublime gracia del Señor,

que un infeliz salvó;

Fui ciego mas hoy miro yo,

Perdido y El me halló

Su gracia me enseñó a temer,

Mis dudas ahuyentó

Oh cuan precioso fue a mi ser

AL dar mi corazón.

En estos autores se cumplía fielmente lo que Pablo decía: “Porque el amor de Cristo

nos constriñe, pensando esto: que si uno murió por todos, luego todos murieron; y

por todos murió para que los que viven, ya no vivan para sí, sino para aquél que murió

y resucitó por ellos”. 2 Cor. 5:14,15.

71. McElrath Hugo. Mencionado por Ralp Martin en Teología de la Adoración.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 49

Como lo reconoce Martin, la plena comprensión de lo que es la adoración libra al

creyente de la tiranía del subjetivismo, es decir, si falta esa comprensión correcta el

adorador tiende a corromper esa adoración incluyendo elementos extraños a lo que

debería ser su correcta relación con el Creador resultando en una repugnante idolatría

y en secularismo flagrante. Por ejemplo, muchos creyentes suponen que el culto les

va a “levantar el ánimo”, “les hará sentir bien”, que “van a pasar un buen rato”, etc.

razonamientos erróneos que el carismatismo ha fomentado. Aquí vale la pena

recordar lo que dijo John Richard Neuhaus: “La actividad llamada adoración no es

verdadera adoración si se puede hacer de manera válida en cualquier otro contexto. La

adoración, si se hace como reacción a cualquier cosa diferente del misterio de Dios en

Cristo, es idolatría”. (72)

Lo que muchos no saben, o no quieren saber, es el que encuentro con Dios no

siempre va a ser gratificante, halagador o placentero. Por lo general es todo lo

contrario, llegando a ser doloroso, difícil e incomprensible. Recordemos el caso de

Isaías cuando se vio en la presencia de Dios, su primera reacción no fue de júbilo, o de

algarabía o desparpajo, sino de indignidad, de temor y reconocimiento: “Entonces dije:

¡Ay de mi! Que soy muerto; porque siendo hombre inmundo de labios, y habitando en

medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los

ejércitos”. (Is. 6:5)

Ese fue el caso de Pedro, cuando se dio cuenta que Jesús no era cualquier hombre le

dijo: “Retírate de mi Señor, porque soy hombre pecador” (Lc. 5:8). Esas fueron las

palabras de Dios a Moisés cuando se acercó a la Zarza: “Viendo Jehová que él iba a

ver, lo llamó Dios de en medio de la zarza, y dijo: ¡Moisés, Moisés¡ Y él respondió:

Heme aquí. Y dijo: No te acerques; quita tu calzado de tus pies, porque el lugar en

que tú estás, tierra santa es...” (Ex. 3:4,5). Esta misma experiencia de pecaminosidad e

indignidad, dependencia y flaqueza de ser creado, incomodidad e inquietud iniciales,

igualmente ocurrió con Abraham en su coloquio con Jehová (Gn. 18:27); Manoa

cuando confronta el misterio de la vida (Jue. 13:17-18,22); Job abrumado por una

teofanía inexplicable (Job 42:5-6); Josué ante la teofanía del Salvador (Jos. 5:13-15);

Saulo de Tarso detenido por la luz brillante y la voz del cielo (Hech. 9:4); y Juan al

sentir la presencia de otro en Patmos (Rev. 1:17). La secuela puede variar, pero lo que

es uniforme es la insistencia en que ningún mortal puede permanecer inconmovible ni

inmutable ante aquel que es Creador de los Cielos y todo lo que existe. (73)

Ese “sentimiento de criatura ante la deidad”, ese temor de Dios, ese sentido de

respeto, es lo que hoy se ha perdido. Muchos creen que pueden hablarle a Dios “al tú

por tú sin ningún sentimiento de inferioridad, pues hasta se creen dioses”. “La

naturaleza santa de Dios establece que el patrón para la adoración cristiana, que es

diferente de la intimidad cómoda con Dios como socio o “cuatacho”. La “sociabilidad”

con el Dios de la Biblia es la última relación que se esperaría con el que es ‘fuego

consumidor’”. (74)

72. Neuhaus, J.R. “Freedon”, p. 122.

73. Adaptado de Ralph Martin, Ibid, p. 25, 26. 74. Ibid, p. 26.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 50

“Todo encuentro con Dios va incluir un llamado al sacrificio, a la consagración y la

abnegación que dará a la adoración cristiana su carácter distintivo especial y su razón

de ser, exige una decisión con examen de conciencia para compartir su agonía y

conflicto”. (75)

Por otro lado, en esta época las personas ya no viven “temerosas” de Dios, no hay el

reconocimiento del Dios Eterno, Santo y Majestuoso. Vivimos en una sociedad

secularizada, cuyo mundo real es exactamente lo que puede ver, tocar y usar. Hoy el

hombre es pragmático, por lo que se pregunta si funciona, si da resultado, no si es

correcto, ético o bíblico. Por esto muchos pastores han aceptado la A.A. porque si les

conviene a sus intereses, no les importa sacrificar la teología.

Al fin de cuentas lo que al hombre le importa es la gratificación del yo, no la

glorificación de Dios; lo importante es que le guste a él, no si le gusta a Dios; hace

toda una serie de razonamientos para justificar su postura sin importarle la Palabra de

Dios, pues se ha vuelto astuto para invalidar la ley de Dios, el “Rhema” es una prueba

de ello. Entre más le satisfaga su “adoración”, entre más la condimenta, más le

emociona, pero al mismo tiempo más se aparta de Dios. Es su pasión y su perdición.

Es conveniente mencionar dos postulados que hace Miqueas Bustos a propósito de la

adoración:

1.- La adoración es don de Dios al hombre, no don del hombre a Dios.

Contrario a los que el carismatismo ha propagado, la Biblia enseña que la adoración

no es un don que el hombre ofrece a Dios, sino todo lo opuesto, es un don que Dios le

dio al hombre, es una distinción, un privilegio que Dios quiso otorgarle al ser humano,

porque pudiera no haberlo hecho en su soberana voluntad.

La forma de acercarse a Dios y reconciliarse con El, es obra de Dios y no del hombre.

El análisis de Levíticos nos demostrará que fue Dios quien diseñó el tipo correcto de

sacrificios y ofrendas, así como la forma correcta de ofrecerlos. Levíticos es un manual

detallado de instrucciones sobre cómo ofrecer las demandas hechas por Dios, desde

la edificación del tabernáculo, la ordenación del sacerdocio aarónico, etc. Es Dios

quien diseña todo el sistema de adoración, el hombre no tuvo ni tiene participación en

ello, aunque nos hubiese gustado que nos preguntara: ¿cómo te gustaría a ti

adorarme?

Es Dios quien toma la iniciativa, el que comienza todo el proceso, desde la selección

de Israel, el llamamiento de Abraham, la implantación de los sacrificios, etc. Es Dios el

que determina cómo sería la relación del hombre con Dios, esa relación es su

adoración, no a gusto del hombre, sino al de Dios. La aparición del elemento litúrgico

debe venir después de la comunión

75. Martin Ralph P. Ibid, p. 12.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 51

con Dios, de la participación de la vida de Dios. “Esta es la ‘reflexión de la gloria de

Dios en nosotros’, es decir, el quebrantamiento permanente de espíritu ante Dios, la

práctica del amor, de la justicia y santidad en todas las cosas que se hacen en la vida

diaria. Por eso tiene que venir primero y ser el fundamento de todo lo demás. Luego

entrarán los elementos de servicio, (Liturgia y Ritual) por medio de los cuales

expresamos y proclamamos la gloria de Dios que ya es una realidad y que ya está

reflejada en nosotros, tales como la convocación de la asamblea al pueblo, cantos y

música, testimonio oral, oración, etc.” (76)

“Si se altera este orden, se ofende a Dios, se pervierte su justicia. Si falta el primero, el

segundo se convierte en abominación delante de Dios. Si se da el primero, el segundo

será siempre consecuencia natural, espontánea, viva, poderosa, edificante y ofrenda

grata al Señor”. (77)

Israel continuamente alteró este orden y de ahí el llamado constante de los profetas:

“¡Con qué me presentaré ante Jehová y adoraré al Dios Altísimo? ¿Me presentaré ante

él con holocausto, con becerros de un año? ¿Se agradará Jehová de millares de

carneros, o de diez mil arroyos de aceite? ¿Daré mi primogénito por mi rebelión, el

fruto de mis entrañas por el pecado de mi alma? Oh hombre, él te ha declarado lo que

es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y

humillarte ante tu Dios”. (Miq. &.6-8).

Es fácil perderse ante esta perspectiva, creer que mi adoración es un don que yo le

doy a Dios es caer en el principio de todas las religiones paganas. Es muy fácil creer

que con mi adoración voy a lograr conmover a Dios para que haga lo que yo quiero,

lo que nos lleva al siguiente punto.

2.- El hombre adora a Dios, no para que lo bendiga, sino porque ya lo ha bendecido.

Si leemos los mismos textos bíblicos que los carismáticos han empleado para decir lo

contrario, (que la A.A. hace que Dios suelte su poder), nos daremos cuenta que el

hombre adora a Dios, no para que lo bendiga, sino porque ya lo ha bendecido. (ver

página 159).

Otros pasajes como Rev. 5:8-10; Sal. 95, 96, confirman que no debemos adorar a

Dios para manipularlo, convencerlo, conmoverlo o explotarlo a fin de que haga algo

por nosotros, o que “desate” su poder, ya que, como lo hemos explicado

anteriormente, esto sería paganismo abominable a los ojos de Dios.

Esta es la parte débil, oscura y blasfema del carismatismo, “creer que la A.A. es una

fórmula de fe, el secreto, la llave que abre el corazón de Dios y las compuertas de su

poder proveedor y liberador”. (78) 76. Bustos, Miqueas, Ibid, p. 59. 77. Ibid, p. 59

78. Ibid, p. 58.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 52

El primer texto dice que en el cielo adoraban a Jesús “porque tú fuiste inmolado y...

nos has redimido...” refiriéndose a eventos ya ocurridos, no para que ocurrieran. En

los salmos se adora a Dios por su grandeza, por su creación y sus poderosos hechos,

no para que haga otros milagros en un futuro determinado o incierto.

Esto nos lleva a la conclusión que “la adoración es una ofrenda que ya le debemos a

Dios, para agradecerle y alabarlo por sus maravillas. Para esto hemos sido creado y

recreados, y en este reconocimiento está nuestra disposición para que El haga con

nosotros lo que bien le plazca. Este es el enfoque bíblico de la adoración. No es un

enfoque muy atractivo o comercial, pero es la actitud con la que debemos adorar”. (79)

Teológicamente hablando estamos en deuda con Dios por todo lo que El ha hecho, es

por eso que debemos adorarlo. La adoración no satisface una necesidad en Dios, sino

en el adorador, a quien le hace falta hacerlo, la necesidad de reconocer, reconciliarse

con el único y sabio Dios. “La adoración es importantísima, no porque mueva a Dios,

sino porque nos mueve a nosotros, preparándonos para escuchar la voz de Dios, que

es lo único que nos cambia”. (80)

3.- Diferencia entre Alabanza y Adoración.-

Lo primero que tenemos que decir es que la alabanza y la adoración tienen una

dimensión espiritual, que de no tener este ingrediente sólo serían palabrerías sin

sentido para Dios. ¿Porqué decimos esto? Porque afirmar como Marcos Witt que las

personas en el estadio Azteca en el partido de México contra Bélgica, estaban

“alabando” por el hecho de que “tenían las manos levantadas en alto, bailaban,

gritaban, lloraban, tiraban sombreros o gorras, se abrazaban, etc. es una terrible

equivocación. (ver p. 136 y 137)

Es cierto que estas personas celebraban el gol de la selección mexicana, pero es muy

impropio calificar esto como alabanza. Recordemos que el elemento litúrgico viene

después de la participación de la vida de Dios, invertir este orden es abominación

delante de Dios.

Segundo.- Una misma canción puede ser alabanza o adoración o ninguna de las dos.

Es decir, no por el hecho de que una persona cante una melodía que hable de Dios

quiere decir que ya está alabando o adorando. Permítame explicarle esto.

La alabanza tiene que ver con el proceso mental de la persona, lo que la persona

entienda o comprenda de Dios. Ahora bien, para que esa persona pueda alabar a Dios

tiene que conocer a Dios, lo contrario también es cierto, no podrá alabar a Dios, o

decir cosas buenas o ciertas de Dios, si no lo conoce.

79. Bustos Miqueas, Ibid, p. 60. 80. Ibid, p. 60.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 53

El conocer a Dios tampoco quiere decir tener mayor información de Dios, o simple

estudio o conocimiento de Dios, como en el caso de la Teología, -que es la ciencia

que trata de Dios y sus relaciones con el universo-, pues se da el caso paradójico que

hay teólogos que son ateos. “Conocer” en las Escrituras no se refiere a “saber más”,

sino a tener intimidad, relación.

Cuando usted lee en la Biblia que “Adán conoció a su mujer” (Gn 4:1) quiere decir que

tuvo intimidad o relaciones sexuales con su mujer. Es lo que podrá ver en Gén. 4:17,

25; 19:5,8; 24:16; etc. “Conocer” es más que la capacidad cognocitiva que un ser

humano pudiera tener. Entonces conocer a Dios es esa “participación de la vida de

Dios” o como lo decía Kierkegaard la “distinción cualitativa infinita”.

¿Qué ocurre si una persona trata de alabar sin “ser participante de la naturaleza

divina”? (81) Bueno, en el mejor de los casos será un buen actor, tendrá una magnífica

careta, pero no pasará de ser una falsedad disfrazada de piedad. En el peor de los

casos será hipocresía, desfachatez, cinismo, con la inevitable reprobación de parte de

Dios. (82)

Esto es más peligroso de lo que se pueda observar a simple vista, porque si usted dice

cosas buenas de una persona con tal de alabarla, pero usted no conoce a dicha

persona, sólo se meterá en dificultades. Por ejemplo, usted dice: “Carlitos es un

excelente violinista que ha dado conciertos en Londres, París y Nueva York”, pero

resulta que Carlitos ni siquiera sabe música, usted estará diciendo mentiras; o si

Carlitos apenas inicia sus estudios de violín y nunca ha salido de México, su alabanza,

además de las mentiras implícitas, se convierte en adulación, lisonja, servilismo,

torpeza, ofensa, afrenta.

¡Imagínese hacerle esto a Dios! Muchos de los coros carismáticos no pueden

catalogarse como alabanza a Dios. Analice el siguiente coro:

//“Remolineando, Remolineado, yo cantaré a Jehová//...

//Por causa de Él, yo me haré más vil//

Lo que repiten hasta el cansancio es que se “harán más viles” de lo que ya son. Por un

lado qué bueno que lo admitan, solo que uno se pregunta si se darán cuenta lo que

están cantando. Lo increíble es que crean que con esto alaban a Dios.

Esto es lo que Dios dice al respecto:

“Para qué me sirve, dice Jehová, la multitud de vuestros sacrificios?

Hastiado estoy de holocaustos de carneros y de sebo de animales gordos;

no quiero sangre de bueyes, de ovejas, ni de machos cabríos.

¡Quién demanda esto de vuestras manos, cuando venís a presentaros

delante de mí para hollar mis atrios?

81. 2 Ped. 1:4. 82. Mat. 23; 1 Cor. 11.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 54

No me traigáis más vana ofrenda; el incienso me es abominación;

luna nueva y día de reposo, el convocar asambleas, no lo puedo sufrir; son

iniquidad vuestras fiestas solemnes.

Vuestras lunas nuevas y vuestras fiestas solemnes las tiene

aborrecidas mi alma; me son gravosas; cansado estoy de soportarlas.

Cuando entendáis vuestras manos, yo esconderé de vosotros mis

ojos; asimismo cuando multipliquéis la oración, yo no oiré; llenas están de

sangre vuestras manos.

Lavaos y limpíaos; quitad la iniquidad de vuestras obras de delante

de mis ojos; dejad de hacer lo malo;

Aprended a hacer el bien; buscad el juicio, restituid al agraviado,

haced justicia al huérfano, amparad a la viuda. Venid luego, dice Jehová, y

estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la

nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a

ser como blanca lana”. Isa. 1:11-18.

Hablar de la adoración es entrar a la dimensión espiritual, debido a que no siempre

una persona que alaba llega a la adoración, porque aquí no solo abarca el aspecto

mental, sino que va más allá, va al encuentro con el creador. Una de las definiciones

del diccionario, que nos dan más luz sobre este particular es la siguiente: Adorar es

rendir pleitesía; rendir pleitesía es reconocer como Dios a quien o a lo que se adora,

puede ser Dios con “D” mayúscula o con “d” minúscula, es decir, puede referirse al

Dios verdadero o a cualquier otro dios falso o ídolo.

Etimológicamente adorar es postrarse o hincarse (del gr. proskyneo), por lo que

cuando una persona se hinca ante un ídolo, lo está adorando, es decir lo está

reconociendo como dios, y debido a que este dios no es el verdadero, la Biblia lo

considera como idolatría. Esta postración no necesariamente debe ser física, por lo

que todo aquello que ocupe el primer lugar en nuestro corazón y que no sea Dios, se

convierte en un dios para esa persona, siendo otra forma de idolatría.

Muchas veces lo que ocurre es que la persona participa en la actividad comunitaria del

ritual y la liturgia, o sea que puede cantar, orar, leer la Biblia, ofrendar, etc. pero no

necesariamente alabar, o tal vez alabe pero no adore. Si la persona llegó a

experimentar la adoración quiere decir que tuvo con tuvo ese contacto con el Infinito,

ese punto de encuentro con el Creador, que hará la transformación en su vida,

resultado de la verdadera adoración, aclarando que “la adoración es un fin en si

mismo; no es un medio para otra cosa, por lo que si tratamos de adorar para sólo

recibir beneficios, cesamos de adorar. No hay adoración cuando intentamos adorar a

Dios para otro fin. Adoramos a Dios por el sólo hecho de adorarle, aunque como

consecuencia de la verdadera adoración hay bendición y crecimiento espiritual. Α Dios

no le adoramos para beneficiarnos, sino para tributarle la honra y honor que El

merece”. (83)

83. Darino, Miguel Angel “La Adoración primera prioridad”, CBP, p. 99. (Sal. 96:7-8).

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 55

La adoración genuina es más fácil de vivir que de explicar, pero solo ocurre cuando la

persona se rinde total e incondicionalmente a Dios, cuando acepta Su soberanía para

hacer Su voluntad, independientemente del estado de ánimo en que se encuentre, o

de los factores externos que le rodeen, tales como el tipo de liturgia, estilo de música

o énfasis doctrinal.

Pongamos como ejemplo a algunos “grupos de alabanza” que cuando están al frente

“dirigiendo” la música a la iglesia pareciera que están alabando a Dios; lo hacen con

mucho entusiasmo, tal vez con profesionalismo, motivan a la gente a que participe en

dicha actividad y se esfuerzan en todo lo que pueden para salir airosos del

compromiso. Lo raro es que cuando dejan el escenario se les acaba la espiritualidad. Α

la hora del mensaje los vemos salir del templo, se van a lo oscurito para echar novio,

otros se la pasan cotorreando, o si se quedan dentro del recinto sagrado, se dan la

aburrida del mundo. ¿Qué pasó? Que cuando dirigieron no adoraron y tal vez ni

alabaron, situación desafortunada que se repite en muchos creyentes que asisten al

culto.

Toda la confusión se debe a que los términos de alabanza y adoración generalmente

se usan indistintamente aunque incorrectamente, sin embargo los Salmos,

especialmente los litúrgicos, (95-100) hacen tal distinción que se hace fácil entender.

Darino la resume así: En la alabanza el ser humano habla a Dios. En la adoración Dios

habla al ser humano”. (84)

“El peligro con la alabanza es que pretendemos hacerlo sin que haya en realidad,

mucha conciencia de Su presencia... Podemos pretender alabar cantando, danzando,

saltando y manifestando cualquier manera nuestro sentimiento. Podemos hacer todo

eso y permanecer en el terreno de lo físico y psíquico simplemente. Podemos expresar

una fuerte expresión religiosa, y vivir alejados por completo del carácter y propósitos

de Dios, quien es el objeto de nuestra alabanza. Por eso afirmamos que en muchos

casos la alabanza se constituye en el escondite de muchos cristianos que viven lejos

de Dios. Se alegran, se emocionan, cantan, lloran, pero permanecen desobedientes a

Aquel a quien pretender alabar. Abrir nuestra boca y expresar todas estas cosas, no

garantizan verdadero culto”. (85)

En la adoración, a diferencia de la alabanza, Dios nos habla y actúa en nosotros,

reconociendo que la alabanza es el camino para llegar a la adoración. Veamos el

Salmo 95, lo primero que pide es que “lleguemos ante su presencia con alabanza” (v.2)

en los siguientes versos explica las razones por las cuales alabar. Luego en el v. 6

comienza a hablar de la adoración: “Venid, adoremos y postrémonos; arrodillémonos

delante de Jehová nuestro Hacedor: Porque El es nuestro Dios...” Si usted examina las

oraciones de los grandes hombres de Dios que registra la Biblia, igualmente empiezan

con alabanza para luego entrar a otros aspectos como la intercesión, etc. ¿por qué?

Porque la oración no es un monólogo, sino un diálogo donde Dios también interviene.

84. Darino, Ibid, p. 100-101 85. Ibid, p. 100-101

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 56

SI LA A.A. NO ES BIBLICA ¿POR QUÉ HA TRIUNFADO?

Esta es una pregunta frecuente en las conferencias y seminarios que damos sobre el

carismatismo. La respuesta es que ha triunfado precisamente porque no es bíblica. Si

lo fuera no habría triunfado. En otras palabras, la A.A. es lo que la gente, en especial

los jóvenes, quieren escuchar, como dice San Pablo que tendrían “comezón de oír” (2

Tim. 4:3).

Otros jóvenes me preguntan ¿Si Marcos Witt ha triunfado, no significa que es de Dios?

o bien, “Si es de Dios permanecerá”. También preguntan ¿No es una evidencia que

haya multitudes para saber que debe ser bueno? Les contestamos: “Luis Miguel ha

triunfado, ¿eso quiere decir que sea de Dios?" “La iglesia católica ha permanecido,

¿eso significa que sea de Dios?” o “Los Testigos de Jehová tienen multitudes, ¿por eso

deben estar en lo correcto?”.

Algunos son más inteligentes y emplean subterfugios como “Dios me hará sentir si la

A.A. es buena o mala”. Lo cierto es que el ser humano es manipulable y le gusta

manipular. La A.A. fue diseñada para ello. Hay que ser muy ingenuo para aceptar que

Dios se la reveló a K. Hagin pues no concuerda con lo que dice Dios en la Biblia.

La mejor explicación la dan los Drs. Daniel y Bernadette Skubik:

“Los ritmos para los que la batería provee o genera la percusión básica

producen respuestas mensurables en el sistema muscular del cuerpo, los

patrones de ondas cerebrales y los niveles hormonales:

1.- La coordinación y el control muscular se sincronizan con la percusión

básica.

2.- La actividad misma de las ondas cerebrales se alinea con el ritmo así

generado, y

3.- Diversas hormonas (especialmente las opiáceas y sexuales) se liberan

como resultado de la sincronización electrofisiológica con el ritmo.

Cuando la percusión genera niveles altos de excitación sensorial, esto es,

cuando debido a la velocidad del ritmo y el alto volumen de la música, el

impacto auditivo se aproxima a la recepción máxima, el cerebro se pone en un

estado de tensión. Este estado de tensión se puede medir en la actividad

conductora de la ondas cerebrales.

Esta actividad conductora ocurre en todas las personas que están

altamente estimuladas; la evaluación subjetiva de la percepción –tal como si a

alguien le gusta la música o no- no es un factor.

Para forzar la baja de sus niveles de actividad y conseguir la homeóstasis,

el cerebro libera las opiatas naturales del cuerpo. Estas opiatas son opiáceos

producidos naturalmente, y químicamente son similares a drogas como la

morfina. Se utilizan para controlar la sensibilidad del cuerpo al dolor,

(elevando los umbrales del dolor) y para contrarrestar emociones negativas

relacionadas sentidas subjetivamente (sustituyendo la depresión) .

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 57

Esta respuesta puede, de por si, conducir a una verdadera estimulación y

llegar a ser adictiva.

Los ritmos rápidos tienden a romper el espacio auditivo (separación de

tiempo entre la recepción del sonido por los oídos derecho e izquierdo) y

conduce a una conducta reaccionaria. El cerebro orienta o traza el plano de la

percepción sensorial con referencia al “espacio” con el propósito de integrar la

percepción y coordinar las reacciones del cuerpo a esa percepción.

Se han documentado verdaderos cambios de conciencia, con cambios

relacionados con apegos emocionales y valoraciones morales. Así, lo que antes

no se deseaba, ahora está apegado a lo deseable; y a menudo, a la inversa.

El significado, tanto de las palabras como de nuestro entendimiento del

contexto social, se relaciona entonces directamente con un sentido estado

emocional sin meditación”. (86)

Si usted ha notado toda la música de “alabanza” es bailable; y si una persona se

somete a este tipo de música por un tiempo prolongado seguramente terminará

moviéndose al ritmo de la misma, pero esto no es obra del Espíritu Santo,

simplemente el sistema psico-motriz responde a los estímulos a los que está siendo

expuesto. Pruebe usted con un bebé de un año, deje que escuche una música muy

rítmica y además fuerte, el bebé se moverá ese ritmo, él no sabe si es bueno o malo,

si alaba o no alaba, o si la “danza es adoración sublime”, ¡No! únicamente su cuerpo

está respondiendo de una forma normal. Lo anormal sería que no respondiera.

Por lo tanto, decir que se “danza en el espíritu” es otra falacia del carismatismo pues

el que danza es el cuerpo, no el espíritu. Sería más correcto decir que se “danza en la

carne” aunque suene ofensivo, es la realidad. Dicho de otro modo, para que una

persona dance no se necesita que sea espiritual, ni siquiera que sea cristiano. Vaya a

cualquier discoteca y verá con qué ganas se mueven y contorsionan. Tal vez por eso

ya tengamos en México discotecas cristianas y en el culto se dance de parejitas o con

las chicas en los hombros de los caballeros. ¡Cómo no va a triunfar la A.A.! ¡claro que

va a tener éxito! A la gente le gusta creer en el error y si con ello logran calmar sus

conciencias, mejor. Otros estudios que se han hecho sobre el carismatismo han

llegado a la conclusión que este ha triunfado porque se adapta a la forma de ser del

latino, que es bullanguero, guapachoso, fiestero, jacarandoso, a diferencia del

anglosajón que es frío, solemne, flemático.

Hay que reconocer que los misioneros que trajeron el evangelio a nuestras tierras

también trajeron su cultura y su liturgia. Toda la himnología de las iglesias históricas

no tienen nada que ver con nuestro contexto, como es el caso de la imposición del

uso del piano y órgano para los cultos. Lo que nos caracteriza son las guitarras,

quenas, bombos, etc. Como mexicanos deberíamos cantar con mariachi, corridos,

rancheras, etc. Ahora bien, una cosa es manifestar nuestra propia cultura dentro de

culto y otra es adulterar la doctrina como lo ha hecho el carismatismo.

86. Skubik, Daniel y Bernadette. En “La música rock”.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 58

CONCLUSIONES DE LA A.A.

Creo que los errores más grandes de la A.A. son dos:

1.- Reducir la adoración únicamente a la música o al canto.- Con esto se vuelve

herética, pues como dice el Dr. Jorge A. León “posan la lupa” sobre esta parte de la

verdad e ignoran o niegan el resto de la misma.

Al limitar la adoración los carismáticos hacen una polarización, pasando de lo racional

a lo subjetivo y de aquí al paganismo es inevitable. Miguel Angel Darino lo explica así:

“Se ha caído en el extremo de considerar que un culto en el cual no hay un desborde

emocional, es un culto muerto, que no tiene valor. En cierto modo se ha perdido el

rumbo dejando de lado el aspecto racional y adoptando el otro extremo del péndulo,

lo subjetivo, emocionalista y con un toque especial de misterio. Tenemos necesidad

de responder a nuestra cultura, pero responder a ella, es decir a nuestras

características naturales hispanas, no es caer en el extremo del emocionalismo y

desorden”. (87)

2.- Retroceder en el sentido de comunidad.- La A.A. marca un retroceso en el avance

que la iglesia había logrado sobre el sentido de comunidad en la adoración, que hacía

del cristianismo diferente y superior a las demás religiones.

La A.A. volvió a los stándares convencionales de las religiones paganas, incluida el

catolicismo romano, donde el adorador está solo frente al altar u objeto de veneración

sin dar énfasis a la relación con los demás adoradores.

Es cierto que “hay un momento en la experiencia humana cuando se está

completamente solo ante Dios y es cuando le hallamos. Nadie puede tomar nuestro

lugar allí, ya que es el momento de tomar la decisión de nuestra respuesta al llamado

de Dios” (88), pero la adoración no fue diseñada por Dios para ello. Si hiciéramos una

exégesis de la iglesia en el Nuevo Testamento, veríamos que no puede haber un

creyente aislado, separado del cuerpo. Ahora compare la enseñanza bíblica de la

iglesia con la A.A. y notará que así como faltan las grandes doctrinas de la fe cristiana,

igualmente adolece de la exhortación de la responsabilidad del creyente con otros

creyentes.

El carismatismo olvidó los principios bíblicos y adoptó otros, algunos no tan

peligrosos como el multinivel, pero igualmente ajenos a la Escrituras. El caso de las

famosas células tiene mucho de bueno, como el hecho de reunirse en casas, que la

Biblia apoya, el peligro es cuando se pierde el sentido de iglesia y todo se convierte en

un negocio de multinivel como “Amway”, “Nutrition”, “Herba Life” y similares.

87. Darino, Ibid, p. 87. 88. Ibid, p. 113.

DIVERGENCIAS Por Joel Jiménez

Alabanza y Adoración 59

Todas las iglesias de miles de asistentes tienen que batallar con la atención pastoral

personalizada, aunque tengan 10 o 20 pastores asistentes, la atención pastoral

personalizada es imposible. Creemos que 500 miembros bautizados en una iglesia

local es más que suficiente para estar ocupados. Sólo un supermán podrá ser pastor

de 10,000 miembros y aprenderse los nombres de cada uno de ellos. Hay historias

crueles que se han dado en estas congregaciones, como el caso de un creyente que

habló a la oficina de su pastor para pedirle una cita, la secretaria le contestó: “el

apóstol le puede recibir dentro de tres meses, pues ya tiene su agenda llena”.

La única razón por la que conviene tener una congregación de miles de miembros es

por la económica, entre más gente más dinero. Es curioso observar en esas iglesias

que ni entre los miembros se conocen, ¡claro, es imposible!

Lo más sensato es formar nuevas congregaciones para que estos creyentes pueden

desarrollar una vida cúltica sana y nunca pierdan el sentido de comunidad.

Estos errores de la A.A. son el producto de una teología pobre y errada que ya hemos

analizado a lo largo de este estudio.

Dios quiera que estas reflexiones sirvan de alguna manera a hacernos pensar en

medio de esta terrible calamidad teológica que nos tocó vivir. En el siguiente capítulo

haremos algunas propuestas para tratar de formar algún criterio sobre qué hacer con

el problema del carismatismo.