Al tercer día de lluvia habían matado

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cangrejos dentro de la casa, que Pelayo tuvo que atravesar su patio anegado para tirarlos en el mar, pues el niño recién nacido había pasado la noche con calenturas y se pensaba que era a causa de la pestilencia. El mundo estaba triste desde el martes. El cielo y el mar eran una misma cosa de ceniza, y las arenas de la playa, que en marzo fulguraban como polvo de lumbre, se habían convertido en un caldo de lodo y mariscos podridos. La luz era tan mansa al mediodía, que cuando Pelayo regresaba a la casa después de haber tirado los cangrejos, le costó trabajo ver qué era lo que se movía y se quejaba en el fondo del patio. Tuvo que acercarse mucho para descubrir que era un hombre viejo, que estaba tumbado boca abajo en el lodazal, y a pesar de sus grandes esfuerzos no podía levantarse, porque se lo impedían sus enormes alas.” Gabriel García Márquez, “Un señor muy viejo con unas alas enormes”. (fragmento)

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“Al tercer día de lluvia habían matado tantos cangrejos dentro de la casa, que Pelayo tuvo que atravesar su patio anegado para tirarlos en el mar, pues el niño recién nacidohabía pasado la noche con calenturas y se pensaba que era a causa de la pestilencia. El mundo estaba triste desde el martes. El cielo y el mar eran una misma cosa de ceniza, y las arenas de la playa, que en marzo fulguraban como polvo de lumbre, se habían convertido en un caldo de lodo y mariscos podridos. La luz era tan mansa al mediodía, que cuando Pelayo regresaba a la casa después de haber tirado loscangrejos, le costó trabajo ver qué era lo que se movía y se quejaba en el fondo del patio. Tuvo que acercarse mucho para descubrir que era un hombre viejo, que estabatumbado boca abajo en el lodazal, y a pesar de sus grandes esfuerzos no podía levantarse, porque se lo impedían sus enormes alas.”

Gabriel García Márquez, “Un señor muy viejo con unas alas enormes”. (fragmento)

MUNDO REAL MARAVILLOSO

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“Alcanzó a cerrar otra vez los párpados, aunque ahora sabía que no iba a despertarse, que estaba despierto, que el sueño maravilloso había sido el otro, absurdo como todos los sueños; un sueño en el que había andado por extrañas avenidas de una ciudad asombrosa, con luces verdes y rojas que ardían sin llama ni humo, con un enorme insecto de metal que zumbaba bajo sus piernas. En la mentira infinita de ese sueño también lo habían alzado del suelo, también alguien se le había acercado con un cuchillo en la mano, a él tendido boca arriba, a él boca arriba con los ojos cerradosentre las hogueras.”

Julio Cortázar, La noche boca arriba. (fragmento)

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"Es de noche y nos hallamos en el interior de la casa. La casa... el refugio contra todo lo que espanta: la sombra, la noche, el miedo, lo desconocido. Nada hostil podría cruzar sus umbrales... Llamea el fuego en el hogar y gira suavemente en el asador un ganso de dorada carne que embalsama la habitación con olor delicioso. ¡Alegría de comer, dicha incomparable, entusiasmo religioso, estremecimiento de júbilo! La digestión sumerge en una especie de éxtasis en que, la sombra, las caras, la pantalla del quinqué, las lenguas de llamas que bailan en la negra chimenea, toman aspecto regocijado y mágico. Cristóbal apoya la cabeza en el brazo para gozar de semejante felicidad. Ya está en su cama, tibio, abrumado de cansancio y sin saber cómo ha ido a ella. En su cerebro se mezclan las voces que suenan en la habitación y las imágenes del día. Su padre toma el violín y vibran en la calma de la noche sonidos dulces y agudos, que parecen lamentos. Pero la suprema dicha de Cristóbal es cuando se acerca su madre, coge la mano del niño casi adormecido e, inclinada sobre él, a petición suya, canta a media voz una antigua canción cuya letra nada significa.“

CINEMATOGRAFICA