Relato: Sirvienta desquintada por su patrn

Me llamo Edith tengo 27 aos mido 1.74 m peso 66 kg soy morena clara tengo pelo negro largo hasta media espalda y ojos negros. Soy de un pueblo de Hidalgo llamado Presas. Bueno voy a contarles que cierto da estaba buscando trabajo de sirvienta por internet, vi un anuncio donde un seor de la tercera edad que viva solo con domicilio en Ecatepec solicitaba a una muchacha joven de entre 25 y 30 aos para trabajo domstico y asistencia personal, peda llamar por telfono para hacer cita. Marqu el nmero que apareca en el anuncio y llam, el seor me contest y acordamos vernos un viernes a las 6 de la tarde en el metro indios verdes donde est la oficina de boletos de ADO, me especific muy claramente que para poder indentificarme sin problemas y a la primera me vistiera como lo que yo era (una mujer joven), me dijo que me vistiera con una minifalda a medio muslo, una blusa de botones al frente, unas sandalias de tacn alto de aguja de 10 cm y me dejara las piernas sin medias, adems me pidi que llevara mi pelo suelto. Yo acat al pie de la letra sus instrucciones y me vest tal como me dijo para la cita. Ese viernes al llegar a la oficina de ADO en Indios Verdes vi a un seor ya mayor parado justo en la entrada, al verme me recorri con la mirada y me pregunt t eres Edith? yo le contest que si y el me dijo "soy Paco el del anuncio", entonces me salud con un beso en la mejilla y me tom por la cintura para llevarme hasta su coche, ste era un auto grande de modelo antiguo con los cristales oscurecidos que no dejaban ver el interior. Sub al coche y nos dirigimos a la casa de Paco. Al llegar entramos a una casa de dos plantas cerrada por todos lados y con las cortinas corridas, aunque an era de da adentro haba penumbra. Paco me sent en la sala en un silln y l se sent enfrente de mi, puso sus manos en mis piernas mientras me deca que era un hombre de 72 aos, solo y que estaba muy necesitado de una muchacha joven como yo que se hiciera cargo de su casa y de l, me dijo que el trabajo de la casa era poco ya que viva solo y que me necesitaba ms como compaa y como cuidadora personal. Despus de discutir los detalles del trabajo acordamos que yo iba a trabajar de pie, es decir, iba a vivir en la casa con Paco y cuanto me iba a pagar, despus de esto me levant y tomndome por atrs me llev a conocer la casa, en cada habitacin que entrbamos Paco me rodeaba por la cintura y me recargaba su verga entre mis nalgas, sta al primer contacto se le par y se puso muy gruesa y muy dura, yo no protest y dej que se me recargara, de hecho se mantena recargado en mi mientras me explicaba que era cada habitacin, as recorrimos toda la casa, cuando terminamos de verla me llev a la cocina y ah l se par frente a un gabinete y me dijo "ven Edith prate adelante de mi para que veas lo que se guarda aqu", yo obedec y me par adelante de Paco, l me recarg de nuevo su verga entre mis nalgas y me dijo "abre el gabinete y empnate para que veas lo que ahi se guarda", obedec y al empinarme sent como la verga de Paco se apretaba fuertemente entre mis nalgas, adems sent como sus manos se metan por debajo de mi falda y acariciaban mis piernas, sus manos levantaron mi falda hasta que sus dedos frotaron mi concha, no pude evitarlo pero gem y me estremec, entonces Paco me enderez y me llev al patio de servicio, ahi me mostr una escalera que haba para subir a la azotea, me dijo "sube t primero para cuidarte", obedec y sub, not como Paco miraba atentamente por debajo de mi falda, saba que estaba mirando mis pantaletas pues l estaba justo debajo de mi, adems sent como sus manos recorran mis piernas acaricindolas, cuando llegamos arriba a la azotea ya haba oscurecido, la azotea estaba cerrada por todos lados, as es que nadie poda mirar hacia dentro de la casa, Paco se apoy en el tanque estacionario y me tom de nuevo por atrs colocndome de modo que su verga se apret entre mis nalgas y sus manos me acariciaron las piernas hasta sobarme mi concha. Yo le dije, "perdn patrn pero porque me acaricia tanto" y l me contest "porque ests muy bonita, bien buena, jovencita y quiero que seas mi hembra", me dio vuelta y me rasp mi vientre con su verga, me bes en la boca introduciendo su lengua hasta mi garganta, me meti las manos por debajo de mi falda y me acarici las piernas por detrs hasta agarrarme las nalgas, despus me bes el cuello chupetandomelo. Yo me apart de l y le dije "no seor yo no me contrat para ser su mueca de placer, si no ve va a respetar me voy" y entonces Paco me pidi que bajramos al patio, l baj primero y cuando yo empec a bajar observ como de nuevo miraba atentamente por debajo de mi falda, le dije "seor ya sabe de que color son mis pantaletas, me las vi al subir", a lo cual l me dijo "me gusta tanto mirar por debajo de tu falda que no me canso de mirar tus pantaletas" y cuando baj a la altura necesaria sent como sus manos se deslizaban por mis piernas acaricindolas mientras levantaban mi falda hasta arriba y sus dedos frotaban mi concha y picaban mis nalgas. Cuando llegu al piso Paco me recarg de nuevo su verga entre mis nalgas y me abraz muy fuerte, me dijo "Edith mamacita no te vayas, mira que me haces mucha falta, te pago lo que quieras pero qudate conmigo y djate hacer todo lo que yo quiera". Yo me di la vuelta para mirarlo y sent como su boca se posaba en la mia y su lengua se introduca hasta mi garganta mientras sus manos de nuevo acariciaban mis piernas y picaban mis nalgas, me tuvo as largo rato y yo la verdad no pude evitar excitarme muchsimo, senta su vergota pegada a mi vientre y sus manos acariciando mis piernas y picando mi culo mientras su lengua se mova dentro de mi boca y me depositaba en mi lengua y en mi garganta sus babas. Cuando me solt yo le dije "bueno est bien acepto quedarme pero con una condicin", Paco me dijo "la que t quieras con tal de que seas mi hembra". Yo le dije, "si voy a ser tu hembra - porque lo que t quieres es cogerme cada vez que se te antoje - entonces no me vas a tener como tu sirvienta sino como tu mujer, as es que a partir de ahora voy a ser la seora de la casa, yo te prometo que te voy a obedecer y a complacer absolutamente en todo y que t vas a ser mi dueo absoluto, pero t me vas a prometer que me vas a tratar y a mostrar ante todos como tu mujer y que yo voy a ser la duea de esta casa y de todo lo que hay en ella y eso incluye tu verga porque desde ahora slo me la vas a meter a mi" entendiste? Paco me mir y me sonri y luego me rode por la cintura y me dijo "totalmente de acuerdo mamacita y en este preciso instante te voy a hacer mi hembra", me llev a su recmara, me tendi en la cama, me levant la falda y me baj las pantaletas, l se sac su verga y acomodndose entre mis piernas coloc la cabeza de su verga en la entrada de mi concha, me embisti y meti la cabeza en mi agujero y entonces me mir y me dijo "Edith esto es increble, eres virgen", yo le dije "si Paco aunque tengo 27 aos soy virgen, anda desquntame, mteme toda tu verga que la quiero dentro de mi" y Paco me embisti con fuerza, la cabeza de su verga rompi mi telita que sellaba mi panocha y me la meti hasta adentro, yo grit cuando su verga se enterr toda en mi agujero, sent como Paco se frotaba frenticamente dentro de mi y como paulatinamente el dolor daba paso al placer, empec a sentir delicioso como ese rgano largo, grueso y duro se mova dentro de mi concha, hasta que despus de un largo rato de ver y escuchar a Paco gemir, bufar y jadear, ste arroj sus chorros de semen blanco, espeso y caliente dentro de mi concha inundndola y hacindome sentir mujer, enteramente su mujer, su hembra.