PALABRAS DE DESPEDIDA PARA MARTHA ADRIANA

Querida Familia, Compañeros/as y amigos/as de Martha Adriana

“...El que siembra con mezquindad, con mezquindad cosechará, y el que siembra generosamente, generosamente recogerá” 2co.9,6

Hoy mi hermana, Marta Adriana está recogiendo generosamente el reconocimiento de su pueblo, porque a lo largo de su vida ha venido sembrando con suma generosidad.

Hoy, que es la hora de partida de Martha Adriana quiero hacer una semblanza a grandes rasgos de lo que fue su vida :

Nació con un espíritu lleno de fortaleza y de alegría. Fue una niña llena de encanto y travesura

Sus familiares todavía sonríen cuando recuerdan las travesuras de Martha Adriana, no era de extrañarse que un buen día les amanecieran a todos los de casa cambiados sus zapatos.

Desde pequeña se perfiló como líder natural rebosante de energía, creativa. A ella no la iban a ver en juegos reposados, ella era partidaria de los juegos en la calle, de los juegos en grupo, de los juegos riesgosos. Ella no se estaba quieta, saltaba, corría, era toda actividad, y como era de esperarse gastaba con gran rapidez los zapatos. En una ocasión don Modesto del Valle, familiar, poeta y zapatero quien era el que remendaba los zapatos de la familia, al devolver unos zapatos de Marta Adriana les adjuntó este poema:

A Martha Adriana:muchacha de andar tan durono habrá otra en el lugarpues solo de cuero crudote podrían aguantar

Cuando te casesentre ratosvan a tener reposopues sólo para zapatosva a trabajar tu esposo

valen 8 pesos Martha Adrianate quedaron de brincarpues se que la otra semanalos volveré a remendar.

Su secundaria la cursó en Honduras, en donde, a pesar de no ser Hondureña, alcanzó el cargo de presidenta tanto de su sección como del colegio, su energía y vigor le permitía, como decimos en Nicaragua, ser “achote de toda comida”, pertenecía a la Banda de Guerra, a equipos deportivos, al coro, redactora del periódico, etc y estaba metida en toda protesta grande o chiquita que se diera, era la eterna conspiradora, la que alzaba toda bandera reinvindicativa.

Ya graduada regresó a Ocotal, y trabajó como maestra de 1er grado en la Central Mixta Aurora González y fue este contacto el que despertó su amor por los niños, también trabajó en el Instituto “Segovias” impartiendo clases de sicología, Dibujo y Molde y aquí le nace su interés permanente por la juventud.

Trabaja en la Normal de Señoritas de San Marcos de Inspectora y por su juventud se identifica con las alumnas normalistas, quienes encuentran en ella una amiga que comprende sus inquietudes de adolescentes.

Mientras estudia en la Universidad Nacional la carrera de Trabajo Social, trabaja medio tiempo en la Escuela Guatemala, en Managua.Siempre destacándose como líder ocupa el cargo de Presidenta de la Facultad de Trabajo Social durante 3 años. Se incorpora a las luchas estudiantiles y ocupa el cargo de Secretaria del CUUN.

En 1973 se casa con Don José Vergelli, un ciudadano español, padre de sus dos hijas Rebeca y Martha Adriana y que ha sido un compañero lleno de comprensión a su trabajo abnegado, cave decir que detrás de esta gran mujer hay un gran hombre.

Trabajó como tesorera de la Cruz Roja por muchos años, haciendo trabajo voluntario.

En 1979 a 1990 trabaja para el INSSBI, primero como delegada de Nva. Segovia y después como Regional, en donde se partió de cero y en 10 años, a pesar de lo crudo de la guerra logró dejar instalados- 54 Comedores Infantiles Rurales ubicados en los más remotos lugares de los 3

Dptos de la Región I,- 5 CDI, - 2 Hogares de Ancianos,- 3 Centros Preventivos- Extensión de la Seguridad Social al Campo.- Pensiones para Madres, viudas, huérfanos de guerra y lisiados de guerraLe toca manejar 600 personas de personal del INSSBI y formar excelentes cuadros que dieron sostenibilidad a los proyectos.

En esta epoca,durante la guerra, las montañas de Las Segovias dieron cuenta de la presencia de Martha Adriana en el terreno, a la cabeza de las brigadas, dando ejemplo, levantándoles la moral, infundiéndoles valor, hablando con la gente para entender mejor su problemática, llevando soluciones a los campesinos/as, sembrando esperanza en sus corazones, llevándoles consuelo, ofreciéndoles lo más valioso que tenía: su tiempo y su vida.

Marta Adriana, para todo tenía tiempo, recuerdo que bajábamos de la montaña, de San Juan del Rio Coco, de Jalapa, Murra, El Coco, San Bartolo o Quilalí y aún llena de polvo o de lodo tenía el ánimo de asistir a la fiesta de coronación de la Tencha Paguaga ,Reina del Hogar de Ancianos o a la piñata de los cumpleañeros del CDI, o de los Quinchos, al recibimiento o despedida de brigadas solidarias de extranjeros, o pasar comprando un pastel para el compañero de trabajo o para la amiga que estaba de cumpleaños. De donde sacaba fuerzas? yo no sé, porque era la rutina diaria, llegar a media noche y salir de madrugada y lo más extraordinario es que hacía que 600 trabajadores camináramos a este ritmo con entusiasmo y sin chistar, porque nos daba vergüenza caminar de otra manera que no fuera el de su ejemplo.

Una anécdota personal que marcó nuestra relación de amistad fue la siguiente: mi hijo Luis Alberto era ahijado de Martha Adriana y un día que ella nos visitaba y se quedo a almorzar con nosotros, él llegó tarde y yo le reclamé por su retraso, el se justificó diciendo que se había quedado a comer con su amigo Eduardito, yo le recordé que él me había dicho que se habían peleado y que no era ya su amigo a lo que él me aclaró que habían conversado y llegado a la conclusión de que por asuntos políticos no se debía perder una amistad. Esta explicación, de un niño de seis años, le pareció a Martha Adriana extraordinaria y me dijo: esta es una gran lección y aquí ante mi ahijado me comprometo a que nuestra amistad, si se diera el caso, estará por encima de cualquier afiliación política.

En 1990 funda la Delegación de INPRHU en Ocotal en donde se desempeña con gran éxito hasta 1996, fecha en que asume la Alcaldía de Ocotal. Como Alcaldesa hizo un sinnúmero de obras que colocó a Ocotal a la vanguardia de las ciudades de Las Segovias.-

Al terminar su periodo de gobierno regresó a INPRHU a seguir en la lucha por conseguir los recursos necesarios para llevar el desarrollo a las comunidades y grupos más vulnerables de Nueva Segovia.

34 años de trabajar junto a Martha Adriana no fueron suficientes para aprender todo de una mujer tan extraordinaria como ella.

Todos los que trabajamos con ella tuvimos la oportunidad de crecer en valores, técnicas y conocimientos, ella fue ajena a los celos de poder, a la envidia, a la doble moral, fue firme en sus decisiones, fraterna y humana.

Muchos fueron los valores que atesoró Marta Adriana, pero hay algunos en especial que me asombran, por ejemplo:

1. Su coherencia de discurso con la acción. 2. Su capacidad de convocatoria, su capacidad de consenso, su paciencia infinita3. Me llena de admiración que Martha Adriana no perdió su capacidad de asombro ante la

tragedia , siempre se conmovió ante el sufrimiento de la gente, le aterrorizaba la destrucción

de vidas humanas, le preocupa la pérdida de la biodiversidad, le enardece la explotación de hombres y mujeres, niños y niñas, la violación a los derechos humanos, le enfurecía la corrupción, la injusticia la ponía en pie de guerra, nunca perdió la fe y la esperanza, era incansable, soñó y luchó por un mundo verdaderamente humano, fecundo, solidario y equitativo.

4. Me admiró su olfato de la amistad, de la lealtad y de la conservación de la vida, pues fue ella quien encontró los hogares que fueron nuestro refugio perfecto en las zonas de guerra, una Lucita Artiaga en San Juan del Rio Coco, una Paquita en Jalapa, Carmelita Medina en Quilalí o Dorita Rubio en Telpaneca

5. Ella se mantuvo fiel a su fe. Durante la guerra a cada uno nos daba una magnífica, que eran benditas por el Padre Toranzo, en su dedo anular cargaba un anillo que era rosario y que en nuestras giras por las zonas de guerra en silencio lo rezaba , siempre acompañándonos la Biblia y repasando una y otra vez el salmo 91

"Si el hombre crea para sí mismo podrá ser un gran sabio, un excelente poeta, pero jamás será realmente un ser Grande y Perfecto".

MARTA ADRIANA HA CREADO PARA LOS DEMAS, POR ESO SE MERECE SER LA HIJA DILECTA DE OCOTAL, LA MUJER EJEMPLAR DE DE TODOS LOS TIEMPOS.

A su partida nos deja el legado de su ejemplo, y el compromiso de seguir sus pasos. No la lloremos, imitémosla...

A su esposo Dn José, a sus hijas Rebeca y Marta Adriana, a sus nietas y nietos. a sus hermanas y hermanos y demás familiares que les quede el consuelo de haber sido parte de la vida de una extraordinaria mujer y que a cada paso se encontrarán con el testimonio de su obra que la inmortaliza en la memoria histórica de su pueblo.

Gladys Cáceres LeyvaHomenaje póstume que INPRHU Ocotal

le rindió 24 de julio 2013

* Martha Adriana perdió la batalla ante la muerte el día martes 23 de julio de 2013 a las 2.00 AM.-